Mi hermanito tercera parte

La continuación de mi historia con mi hermanito Fer.

Antes que nada gracias por los comentarios tan gratificantes que han realizado a mis escritos, tengan la plena certeza de que los he tomado en cuenta para seguir  describiendo mi historia. Espero que este último sea de su agrado y no les decepcione….

Pues como les había relatado en mis dos participaciones anteriores, habíamos regresado mi hermano y una servidora a casa después de una excursión el fin de semana, el trayecto fue de lo más normal, mi hermano me hablaba de las cosas que había aprendido, desde saberes útiles de sobrevivencia , pasando por aspectos de geografía, botánica, astronomía, biodiversidad, evolución, adaptación y selección natural, etc. era increíble que mi hermano hubiera aprendido y puesto en práctica tantos conocimientos en un par de días. En ese sentido, la excursión había sido todo un éxito, pero aún faltaba, lo principal: Sexualidad y anatomía….

Durante el regreso a casa, mi hermano hablaba y hablaba y yo sólo evitaba mirarlo a los ojos, de momento me había asaltado un sentimiento de culpa que no podía quitarme de mi cabeza, tal sensación contrastaba perfectamente con la tranquilidad y serenidad de mi hermano. Mientras él hablaba de la vegetación del bosque templado del Valle de México y su relación con la biodiversidad, mi cerebro iba construyendo la manera idónea de hablar con mi hermano de lo acontecido la noche anterior. Recuerdo ya en la ciudad de México, un semáforo nos marco el alto, en eso, no sé cómo, yo estaba concentrada en el volante y mordiéndome las uñas (nunca había hecho algo parecido, días atrás eso me hubiera parecido algo repugnante), estaba metida en mis pensamientos sobre el momento de comenzar la plática, si era mejor comenzar desde la noche del sábado o quizá simplemente lo ocurrido ayer, en eso estaba cuando mi hermano me espetó: - Andrea avanza que nos están tocando el claxon- ,tarde en reaccionar y ya no supe nada hasta que llegamos a casa.

Llegamos y ahí estaban esperándonos nuestros padres para comer, ese era un día extraño en que todos estábamos en casa, ya que al ser día festivo, todos estábamos en  la mesa compartiendo nuestras compañías. Platicamos mucho y no paso ya nada en particular. Me fui a mi cuarto a cambiarme. Acto seguido, empecé a organizar mis pensamientos, pero sobre todo a decidir qué haría al respecto, aunque tenía un gran sentimiento de culpa no me arrepentía en nada de lo acontecido, ya que en verdad no había pasado nada, eso en verdad no era nada comparada con las muchas aventuras sexuales que había tenido hasta entonces (ya habrá oportunidad de platicarles en otro momento, aquellas aventuras que he tenido a lo largo de mi vida y que me han definido lo que soy hoy en día en relación a ese tema),  sólo había masturbado a mi hermanito y lo había besado pero nada más, así que no debía sentirme preocupada. En eso estaba cuando sonó mi celular (o el  móvil como dicen los españoles) era mi novio, comencé a sentirme un poco mal, algo así como si lo hubiera traicionado, pero a la marcha de platica se me olvido por completo.

Ya cerca de las 9 de la noche, mi mamá me llamó a la puerta al tiempo que gritaba -a cenar-, baje de lo más tranquila y vi a mí querido fer,  era su actitud lo más normal, así que pensé asunto olvidado.  Nos sentamos todos juntos en la sala a ver televisión, si no me equivoco los Simpson, mi madre ya se estaba durmiendo cerca de las 10 de la noche, por lo que mi padre le instó a que subieran a dormir, se despidieron de nosotros y se subieron a sus habitaciones. Yo me quede con mi hermano viendo tele.  Como era de esperarse, no tarde mucho en quedarme dormida, y de hecho mi hermano tampoco,  habrán pasado quizá una o dos horas, ahí estaba con mi hermano acostados en el sofá. Mi madre habría evitado despertarnos y nos puso un cobertor grande para los dos. Cuando desperté y tomo conciencia de donde me encontraba, pensé de momento subirme a mi cuarto a cambiarme y a dormir en forma, me levanté y me dispuse a ir a mi cama. Allí me dirigía como una autómata, cuando de momento volteo y veo a mi hermanito recostado en el sofá, no sé si fue mejor que no hubiera volteado, si no lo hubiera hecho, hoy no tendríamos historia….

Ahí estaba inmóvil, entregado profundamente a un largo letargo, cuando de repente paso por mi mente una idea audaz, algo impensable para mí pero que no dejaba de seducirme, me tocaba mi venganza. Así me acerque lenta y cuidadosamente a mi hermano que no se inmuto cuando me senté a un lado suyo, ya se había acomodado a lo largo del sofá, el cobertor lo cubría completamente y caía sobre el costado del sofá, así que me escabullí lentamente debajo del cobertor, y me dirigía peligrosamente a su pene, el cual me parecía una presa invaluable, deseaba poder tocarlo con mis manos, sentir la suavidad de su glande, y sobre todo, esa sensación de palpitación en mi mano que da la impresión de estar vivo. Estaba decidido, esa noche no se me escaparía….

En un momento sentí que sería mejor dejar esa loca fantasía para otro día y retirarme inmediatamente, pero ya estaba en eso, ya no había marcha atrás. Debajo del cobertor, con mi mano temblorosa me acerque a su bulto y lo comencé a masajear lentamente, en ese momento se encontraba en un  estado completo de flacidez así que decidí que sería mejor bajarle de un golpe su pants y ver aquella verga que me tenía loca de placer en ese momento, pero no, debía ser algo más sutil, más enloquecedor para mi hermano, que me deseara tanto a mí como yo a él en ese momento.   Y ahí estaba yo debajo del cobertor acariciándole la verga a mi hermano, de repente sin más se levanto como si alguien le hubiera echado una cubeta de agua fría, por el movimiento brusco me tiro hacia atrás, -Andrea-, -fer-, -¿Qué pasa?-,  no dije más y con mi dedo índice lo lleve a sus labios, mientras le decía –shiit- entendió completamente el mensaje y no dijo más, lo recosté empujándolo suavemente hacía atrás. Me senté a su lado y busque sus labios. Fue maravilloso meter una vez más mi lengua en lo más profundo de su boca, sentía que casi lo asfixiaba de la pasión con la que le entregaba ese beso de lujuria total. Mi hermano se dejaba hacer, hasta que de repente su mano se encontraba ya una vez más en mi pecho, y le dije en su oído lo más bajito posible y con toda la sensualidad de la que soy capaz: -tranquilo, esta noche será especial para ti, tú disfruta tu regalo-, no dijo más. El control era mío completamente…..

Lo seguí besando con tanta pasión que mi vagina comenzó a humedecerse de una manera hasta entonces conocida, estaba tan caliente que podía seguir lamiendo su lengua toda la noche, cuando saqué mi lengua de su boca, él saco la suya y así estuvimos jugando un rato, es impresionante la cantidad de lujuria que hay cuando una pareja saca la lengua y fuera  se entretiene con otra, la cual lame y chupa, me hubiera encantado ver esa imagen, seguramente sería digna de una película porno. Había llegado el momento, su verga tenía que estar en mis manos, dirigí mi mano y sin dejar de besarlo pose mi mano en su verga que ya estaba más que caliente y palpitante, acaricie toda su hombría (obviamente para su edad no era muy grande, mentiría completamente si les dijera que eran dieciocho  centímetros, según mis cálculos debería andar en los dieciséis) y en un momento sin más le baje su pants y su bóxer dejando al descubierto su hermoso pene, era la tercera vez que nos encontrábamos y la segunda que lo tocaba con mis manos, sin embargo, aún no había podido verla a la Luz, mi mano comenzó a tocar con la punta de los dedos su hermoso glande, me encantaba sentir esa sensación cálida, esa piel tan aterciopelada me enloquece, después mi mano, comenzó a tocar su tronco y comenzar con el movimiento de una chaqueta.

Era el momento, deje de besar a mi hermano y me arrodille frente a sus piernas de un solo golpe le baje su pants y su bóxer,  y  ya el sentado, lo despoje de dichas prendas,  quería ver de cerca a mi adorado amigo, lo tuve frente a mí y lo masturbe un rato mientras mi hermano intentaba agudizar su visión y ver lo que le estaba haciendo.  Se lo estuve chaqueteando lentamente por un par de minutos, hasta que me levante y le dije al oído –quieres que te la mame, fer- inmediatamente movió la cabeza asintiendo. Una vez más me arrodille ante mi hermano y saque la lengua y se la pase por el frenillo, era evidente que por la excitación mi hermano había comenzado a soltar los líquidos pre eyaculatorios, los cuales sin vacilar lamí y saboree con tanta lujuria, acto seguido, puse la punta de la lengua en el ojito de su verga, -casi se me muere el pobre-, así que comencé a presionarlo un poco más, y utilice mi estrategia, lamer únicamente el glande. Así que como una paleta, le comencé a lamer toda su verga, me concentre en su glande. Mi lengua daba círculos en toda su cabeza, era maravilloso tener esa verga sola para mí, se la estuve lamiendo a mi antojo. Una vez más me acerque a mi hermano y su oído le dije, -quieres que la bese-, una vez más recibí una afirmación.

La segunda parte de mi estrategia es comenzar a besar la punta de la verga, de sólo recordarlo me dan ganas de volver a hacerlo. En mi experiencia esta parte es fundamental, ya que a los hombres les encanta que después de lamerles la verga, comencemos a besárselo, es como llevarlos a la punta de la excitación  y después  bajarle un poco la presión. Para mí es un momento maravilloso, ya que en él, le demuestras a su verga lo feliz que eres con ella. Así que para las chicas, tomen nota, los besos deben comenzar con uno tierno en la punta, abarcando la mitad de su glande, me quito el nombre si su macho no se los agradece, después comencé a besarle un poco más su punta, después a los lados, en su frenillo y poco a poco ir bajando a sus huevos, igual hay que darles un par de besos.  Para terminar esta fase, a mi hermano una vez más le di un beso con mucho amor en su cabecita. Chicas este es el momento de comenzar a meter la verga en su boca, pero igual, les aconsejo no entrar rápido y con brusquedad, aún no es el momento. Regresando a mi relato, ahora comencé a darle una vez más un beso en la punta a mi hermano que quiso poner sus manos en mi cabeza, quite inmediatamente sus manos, eso si no me gusta, él entendió y se dejo hacer, así que fui metiendo poco a poco su verga en mi boca, primero la cabeza, luego otro poco y así tratando de que entrara cada vez más, ahora si empecé a aumentar mi ritmo de entrada y salida de mi boca, para ese momento mi vagina estaba sumamente mojada, no dejaba de soltar mis jugos vaginales en respuesta al grado de calentura que ya tenía.

En mi mano escurrían cantidades industriales de mi saliva, la cual se había entremezclado con los juguitos que salían de su verga, sus huevotes escurrían también esa combinación y yo con mis mano los espacia en sus vellos, y algunos otros en su pubis y su estomago, el cual acariciaba a placer. No podía dejar de pasar desde luego la oportunidad de tocar sus muslos, así como sus nalgas las cuales me encantaban, y en algún momento, uno de mis dedos traviesos se abría detrás de sus testículos y se acercaba peligrosamente a su anito. Pobre hermanito trataba con todas sus fuerzas de no venirse, pero es de reconocer el gran esfuerzo que hizo para no gritar, únicamente gemía lo más silenciosamente que le era posible.

Tenía todo a mi favor, si le hubiera pedido que me diera todos sus bienes, no les quede duda que me los hubiera dado sin explicación alguna, así que en ese momento mis manos se encargaron de sobarle sus huevos que ya estaban listos para la eyaculación en cualquier momento, así que para extender un poco más su placer, me lo saqué de la boca y lo escupí con fuerza, -no sé por qué y no me lo pregunten-, pero en mi experiencia a los hombres les encanta que se los hagas, es una excusa excelente para romperle un poco el ritmo y comenzar una vez más. Recuerdo que le dije muy despacio, -amo tu verga papi, es preciosa tu macana, dame tu leche, la quiero toda para mí, vente en mi boca quiero comerme todos tus mocos-

En unos minutos por las palpitaciones de su miembro en mi boca, y la contracción de sus testículos, su venida no tardaría en llegar, así que me prepare para recibir aquel preciado trofeo que mucho me había costado, y así uno chorro potente  de esperma sentí en mi garganta, luego otro y otro hasta que quedó desmadejado en el sillón, mientras yo recibía aquel manjar.  Mi vagina me pedía a gritos sexo, mi pantaleta seguramente estaría escurriendo por la tremenda excitación que me cargaba, así que en un momento sin darme cuenta, me estaba masajeando vigorosamente mi clítoris que lo agradecía, estaba ahí yo gimiendo como profesional del sexo.  Aunque no me habían penetrado, estaba experimentando un enorme placer …..

En lo personal me encanta saborear el esperma, me gusta esa textura, en el caso de mi hermano fue una eyaculación importante, era muy espesa, calientita, con un fuerte sabor salado. El primer chorro me lo pase entero, los últimos dos los deje un rato en mi boca para saborearlos y pasármelos.  Me hubiera gustado que mi hermano me viera ahí arrodillada frente a él entregada completamente a su disposición, abriendo la boca y enseñándole sus mocos en mi boca, jugar con ellos y después pasármelos, desafortunadamente, por la falta de luz no lo pudo hacer. A mí también me hubiera gustado verlo en todo momento a los ojos, ver esa cara de perdición producto de mis artes orales, producto de tantas experiencias que ya les contare más adelante. Sus mocos eran riquísimos….

Me saque la verga de la boca, le pase la lengua por todos los rincones posibles, bese por última ocasión sus hermosos huevos que me habían regalado su rica leche,   le di un par de lametones en su glande y casi como acto de magia, se encogió considerablemente, me levante y puse mi nariz en su nariz, y le dije –te gusto chaparro-, -me encanto Andrea, te amo-, me quiso dar un beso como los míos, me adelante y le di un beso rápido y tierno en la mejilla, y le dije: –yo también te amo-,- Ahora, acomódate y duerme que mañana tienes clase-.  Me levante y me fui a mi cuarto, obviamente me masturbe como una desesperada,  mi cabeza no dejaba de pensar en aquella hermosa verga. Sin duda –amo la verga de mi hermano y creo que me volveré adicta a su semen….

Continuará si usted así lo solicitan……..