Mi hermana y su cuarto‏

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Hola  mi nombre es Aldo y tengo una historia verídica que contarles, esto sucedió hace tiempo ya hace ya varios años y vivía en casa de mi papá Javier, mi mamá hace mucho tiempo ya que se había ido a formar otra familia y mi hermana Laura que contaba con 21 años ya tenia 1 año viviendo en un departamento en otra parte de la ciudad, a mí sinceramente me había dolido que mi hermana se saliera y me dejara aquí solo ya que pues me llevaba muy bien con ella, siempre nos divertíamos cuando estábamos juntos y siempre la consideré una persona muy linda por su forma de ser y por su gran belleza de tez blanca, pelo castaño claro, ojos verde claro, bien formada de curvas, y es por eso que ella había logrado que encontrara un trabajo bastante tranquilo en una gran empresa internacional como recepcionista de medio turno en las mañanas y en las tardes trabajaba en el centro de convenciones como hostess en los eventos que hubieran (debo reconocer que cuando se arreglaba para ir a trabajar al centro de convenciones y se enfundaba en esos vestiditos con un escote que hacía ver sus tetas firmes, hermosas, carnosas, seguramente duras ya que al verlas en movimiento no se iban hacia arriba y abajo sino que se quedaban quietas signo inequívoco de que estaban bien maduras, y luego también con esas blusas donde se le veía el ombliguito y pues una cinturita de avispa y mas abajo unas caderas bien formadas, con unas piernas lisas y potentes y un trasero respingado apuntando hacia arriba redondo y contorneado y al caminar también se hacía notar que estaba duro y hermoso), por eso y con esa solvencia económica que ahora ella tenía a pesar de que aquí  en la casa tenía prácticamente todo ella decidió buscarse su independencia y comprarse sus propias cosas. Varias veces yo la había ido a visitar a su departamento y en verdad que le gustaban las cosas finas tanto que seguramente todo su dinero se iba en comprarlas y en pagar la renta del departamento.

Todo marchaba con normalidad hasta que sobrevino una de las crisis económicas más impresionantes de las que se tenga memoria en el país, la empresa internacional donde trabajaba mi hermana recortó mucho personal incluyéndola a ella y los eventos en el centro de convenciones eran pocos y mal  pagados, por lo que mi hermana se tuvo que salir muy pronto de donde estaba  así como rematar con sus amigar las cosas que había comprado.

Para ese tiempo en nuestra casa en la parte de arriba que era el cuarto de mi hermana mi papá lo había acondicionado para rentarlo a estudiantes de una muy prestigiosa universidad privada que se encuentra a solo 10 minutos de la casa y pues eso representaba para nosotros un ingreso bastante importante ya que esas personas no reparaban en dinero a la hora de pagar la renta del cuarto.

Sin embargo, debido a la necesidad imperiosa de mi hermana de regresar a casa, pero su cuarto ocupado por un estudiante bastante espléndido en cuestión económica mi papá se negaba a entregarle nuevamente su cuarto y el por lo que ví también estaba dolido con el hecho de que mi hermana se hubiera ido, supongo que lo tomó muy personal, Laura como era lógico imploró al amor de padre y rogó  para que se le cancelara contrato a esta persona claro explicándole los motivos y esperando que no interpusiera una demanda o algo así, el estudiante adinerado lejos de enojarse solo pidió que se le devolviera lo que había pagado por adelantado y que entendía la situación y  el seguramente encontraría otro lugar donde quedarse.

Mi papá no tomó muy bien esto porque era un dinero incluso ya invertido en algún equipo que él había comprado para el negocio y solventar un poco mejor la crisis económica que a él también le estaba pegando fuertísimo, pero reconocía que el estudiante tenía razón y no sin muchos apuros consiguió el dinero y lo regresó y con esto mi hermana pudo nuevamente instalarse en su cuarto.

Yo estaba feliz de que Laura regresara, pero me duró muy poco la felicidad porque casi de inmediato mi papa y mi hermana tenían discusiones bastante fuertes sobre el cuarto de ella ya que mi papa alegaba que al menos debería de aportar algo ya que estábamos económicamente bastante mal y el hecho de que el cuarto ya no se estuviera rentando representaba una ingreso  menos muy importante, por lo que era necesario que ella aportara aunque sea algo para poder así solventar mejor los gastos y la crisis.

Las peleas eran tan insoportables que o me encerraba en mi cuarto a cal y canto o tenía que salirme a dar una vuelta a la manzana o irme con algún amigo.

Sin embargo sucedió algo que yo consideré maravilloso como de repente las peleas cesaron Laura y mi papa ya no peleaban, yo me alegré muchísimo, pero también percibí algo extraño un comportamiento inusual en los dos pero sobretodo en Laura desde que habían dejado de pelear ella siempre se le veía ojerosa, cansada, decía que le dolía el cuerpo y entonces se levantaba más tarde que de costumbre o se dormía más temprano que lo usual, al principio pensé que se iba de fiesta a escondidas de papá, pero lo consideré poco probable, pensé entonces que estaba enferma, pero al contrario de no ser por lo que he mencionado con anterioridad su cuerpo estaba rebosante y cuando bajaba a desayunar con poca ropa se le veía una figura despampanante que debo reconocer que me sonrojaba cada vez que la veía en pequeños shorts y playeritas muy delgadas y pegadas y admitir que como hombre reconocía a mi hermana Laura como todo un forrazo de mujer.

Una noche en la que no podía dormir pensé que podría conciliar el sueño viendo una película, pero la que me interesaba ver era una que mi hermana había comprado así que igual y si se la pedía podía prestármela aunque imaginé que a lo mejor estaba dormida yo bien sabía que la película estaba a la mano en su escritorio así que no tendría ni que molestarla para conseguirla,  por lo que salí de mi cuarto en la obscuridad sin embargo, desde que salí se advertía una atmósfera extraña, diferente, se sentía algo en el ambiente yo percibía que no era normal, pero no le di importancia ya que pensé que era mi estado insomne a sí que me dirigí al cuarto de mi hermana subiendo las escaleras, a medida de que las subía casi a los primeros escalones empecé a notar un ruido extraño algo así como un ñiqui, ñiqui, ñiqui, ñiqui, me extrañé y antes de seguir subiendo empecé a dilucidar que podría ser porque el ruido era igual y constante, lo único que se me ocurría era que mi hermana Laura estuviera saltando sobre la cama ya que el ruido lo relacioné con los resortes de ese mueble cosa que a esa hora y con la edad de Laura descarté ya que era algo de niños, seguí subiendo los escalones y poco a  poco el ruido de lo que yo suponía que eran los resortes se empezó a mezclar con otro ruido ese si más claro, identificable e inconfundible en la voz de Laura ahhh, ahhh, mmm, ahhh, ahhh, me volvía a detener pero ahora sumamente impactado, era clarísimo lo que estaba ocurriendo, por más que yo tuviera 14 años sabía perfectamente lo que estaba pasando en el cuarto de mi hermana, ¿pero cómo?, a qué hora entró alguien?, quien sería? Ya que yo no le conozco ningún novio formal desde hacía ya tiempo, solo que sea alguien reciente que ella haya conocido, pero ¿cómo entró? Si yo que no he podido dormir perfectamente me hubiera dado cuenta por el ruido, por la ventana? No tampoco, era el segundo piso imposible, el techo? menos y entonces??, me quedé quieto escuchando el sonido de los resorte y de  los gemidos de Laura, pensé que era algo que no me  importaba y que mejor debería regresarme a mi cuarto, pero para eso la erección imponente que yo tenía y la curiosidad que mató  al gato me hicieron no solo no regresarme si no seguir avanzando paso a paso y poco a poco, ¿pero quién sería el suertudo que estaba gozando del cuerpo de mi hermana? que envidia la verdad.

Al llegar al borde donde se veía la puerta los ruidos aumentaban y los gemidos ya eran notoriamente elevados, era obvio que a Laura le estaban dando placer de forma impresionante, me alegré infinitamente de ver su puerta abierta y la luz encendida porque sabía por como estaba conformado su cuarto que podría asomarme con cautela sin ser visto, mi corazón latía precipitadamente, mi pene estaba paradísimo, mi respiración aceleró porque sabía que era lo que estaba a punto de presenciar, estaba solo a unos poco metros de ver a mi hermana en plena intimidad sexual y en eso lo oí tan  claro que no dejaba lugar a dudas:

-Uff Laura no puedo creer lo estrecha que estas…..

-Laura te gusta?, te gusta que esté adentro de ti?.

Mi corazón dio un vuelco, creo que hasta me puse blanco de la impresión de oír la nítida voz de mi papa saliendo del cuarto de mi hermana.

Apuré los pasos que me faltaban para llegar al borde de la puerta y asomarme con cautela para observar la escena que mas me impresionaría en toda mi vida…..

Ahí estaba mi hermana completamente desnuda su cuerpo sudado de quien sabe ya cuanto tiempo se la habían estado cogiendo, sus piernas abiertas y enroscadas en la cintura de mi padre, sus dos manos meciéndose los cabellos, su cara completamente colorada, sus ojos volteando para todos lados, con una mirada perdida en el placer, sus tetas ufff que tetas, redondas  grandes, hermosas, moviéndose al compas de los empujes de  mi papa, sus pezones rozados, grandes y parados por la excitación, su aureola bastante grande y marcada y por el otro lado mi papa encima de ella hombrón alto , enorme y cargado de espaldas, con su cadera fundida a la cadera de Laura moviéndose para adelante y para atrás en un ritmo cadencioso e hipnótico que por la sincronía con la que también se movía Laura era obvio que no era la primera vez que hacían esto, los dos tenían  un ritmo constante y unísono hipnotizante, que imagen ver a mi papa cogiéndose monumentalmente a mi hermana a su propia hija, duro y duro el bombeo y Laura lejos muy lejos de rechazarlo abría mas sus piernas y los brazos los ponía en las caderas de mi papa para empujarlas más hacia adentro, el rostro de mi papa no lo veía directo si no atraves del espejo  se veía que estaba disfrutando como nunca de poder penetrar a la muñequita barbie que era mi hermana.

Mientras Laura solo profería gemidos y gemidos mi papa solo decía lo bien que se sentía entrar en ella, en lo estrecha que estaba y en lo caliente que sentía su vagina.

No sé cuanto tiempo estuvieron así con ese vaivén de caderas juntas, de movimientos rítmicos y acompasados por el crujir de los resortes de la cama, mi hermana estaba ya bañada en sudor seguramente con varios orgasmos a cuestas y de repente sin decir nada mas mi papa se detuvo y sustituyó su vaivén rítmico por un mete y saca más profundo más prolongado ya no era tan rápido si no eran ya empellones que hacían seguramente que la cabeza de su pene llegara y tocara el cuellito de su matriz, con lo que Laura cada vez que sentía eso su boquita hermosa se abría inmensamente y apretaba los ojos y hacia muecas señal inequívoca de que estaba sintiendo la verga de mi papa en toda su extensión y potencia. Fueron varios los empellones que recibió de esa forma Laura pero ella firme siempre aguantando el embate y recibiendo el pene de mi papa con valentía.

Mi papá fue el que se cansó y sin sacar su pene erecto de la acuosa vagina de mi hermana dejó de moverse para descansar un rato, se inclinó hacia el frente y empezó a besarla en la boca, se veía como sus lenguas entraban en una batalla, que ricos han de saber los labios de mi hermana pensé, su lengua se ve también deliciosa, digna del cuerpazo que se carga.

Después de un rato de estarse besando mi papa al fin salió del cuerpo de Laura  lo que vi fue todavía más impresionante, su pene de mi papa yo pues lo veía enorme largo y duro completamente mojado por los orgasmos de Laura que lo habían inundado, pero lo mejor fue ver a Laura totalmente abierta de piernas, sin un solo pelo en su depilada puchita totalmente escurrida en jugo vaginal gracias al imponente falo de mi padre que la había hecho gozar, su conchita por dios que era hermosa, efectivamente se veía pequeña, se veía estrecha, de seguro mi papá ha de haberse sentido en la gloria de estar adentro de ahí.

Mi hermana no despegaba los ojos de la verga parada de mi papá, el bombeo al que la habían sometido fue sin duda impresionante y seguramente ella quería ver que le había causado todo ese placer.

Mi papa se acostó boca arriba en la cama, su pene estaba tan parado que apuntaba hacia el techo,  ven Laurita es hora de que me cabalgues, Laura solo pasó saliva, pero sin decir nada se puso de pie, con esto ahora sí que la vi en enteramente de cuerpo desnudo por diossss pero que pechos, que no se caían aun por estar ella de pie, que cola, que piernas, que pucha, que muslos, cuerpo todo sudado y reluciente, fueron unos segundos por que mi hermana se subió a la cama y se encaramó sobre mi papa,

Laura en realidad vas a meterte todo eso?? Pensé,

Ella se levantó lo suficiente para poner la entrada de su vagina en la cabeza del pene de mi papá,  poco a poco se fue haciendo hacia abajo, pude ver como desaparecía primero su cabeza que no fue fácil ya que fue algo lento para que le entrara y luego poco a poco su tronco fue desapareciendo adentro de la vagina de mi hermana, que nalgotas tenía, que raya de cola, no podía ver su cara pero por los gemidos que se oían debía de estar sufriendo un poco por lo que se estaba introduciendo y faltando unos pocos centímetros para que se la introdujera toda yo creo que otra vez la punta de la cabeza de la verga de mi papa llegó al cuellito de Laura por lo que ella detuvo su descenso.

Hasta ahí Laura?

Si papa ya no puedo bajar más, lo tengo ya bien adentro.

Entonces cabálgame.

Y Laura con lentitud empezó ahora a subir y yo pude notar como mientras subía dejaba el tronco lleno de jugo vaginal, después Laura bajo y luego subió y empezó con un ritmo cadencioso a cabalgarlo, que imagen, viendo las nalgotas y la cola de Laura subiendo y bajando, mientras los gemidos eran enormes.

Laura no tan fuerte que te puede oír Aldo

Pero ella ya estaba en otro lugar disfrutando de la verga bien adentro de mi papa, moviendo sus caderas arriba y abajo.

Mi papa puso sus dos manos en las nalgas de Laura y les dio una palmada las manos de mi papa rebotaron y las nalgas de Laura apenas y se inmutaron, por dios que grandes y duras estaban luego las volvió a tomar con las dos manos y las abrió y las cerro y luego las volvió a abrir, que espectáculoooo cada vez que mi papa le abría las nalgas podía ver yo el esfínter de mi hermana rosadito pequeñito hermoso.

La cabalgata de Laura parecía no tener fin subía y bajaba como poseída, me hubiera gustado tanto verle la cara, los gestos que hacía, parecía que no tendría fin y mi papa no tenía indicio alguno de venirse si no solo disfrutaba del cuerpo de su hija, sin duda el mejor que se había cogido en toda su vida.

Podría pasarme horas contando y detallando todas las demás posiciones que hicieron fueron varias y de larga duración todas hacían temblar a Laura, pero la que yo estaba deseando la de perrito donde mi papa le abriera la cola a su hija como si fuera lo mejor para el final la dejó.

Laura se puso en cuatro, la vista me quedaba de lado, por lo que la penetración la vería de lado, era excelente por así además de verla también observaría su rostro, mi papa  puso su pene a unos centímetros de su cola.

-          Por dios si mi papa logra cogérsela hasta el fondo por la cola es mi nuevo ídolo, mi héroe, mi admiración y envidia para él.

Mi papa se acerco más hacia la cola de Laura y puso su cabeza en la entrada, empujó un poco, inmediatamente voltee a ver a Laura ella cerró los ojos y emitió un leve ayy, mi papa volvió a empujar y ahora si entro un poco, mi papa ya con ese poco que había entrado dio un empellón mas fuerte y entró la cabeza, Los ojos de Laura se fueron al techo y el gemido fue largo y prolongado, mientras mi papa la penetraba mas y mas.

Papa eres mi ídolo que bárbaro que cogidota le estas poniendo a tu propia hija, que penetradas, que envidia quisiera yo ser como tú y estarme cogiendo a Laura todas las noches.

El pene de mi padre seguía avanzando hasta que sus huevos tocaron las nalgas de ella,

Ahhh Papa me estas ahh partiendo en ahhh dosss, espera mmm ya no aguanto mas ahh creo que me va a salir por mmm la boca.

Aguanta mi verga Laura.

Papa no ya ahh ahh ahh en serio sácala que me partes ahh mmm ahh a la mitad.

Ya sabes que tengo que dejarla unos momentos para que te acostumbres

Ahhh sii, pero es que ahhh ahora no creo aguantarla.

Y sin decir nada mi papa empezó a bombearla por la cola otro movimiento de caderas hipnótico mi hermana creo que quería zafarse pero estaba tan empalada y mi papa la tenía tan agarrada de sus caderas que solo consiguió ensartarse mas y mas y mientras mi papa le daba una bombeada impresionante yo me concentraba en los pechos que colgaban de Laura que aun así se veían duros y en su lugar y luego su carita haciendo mil gestos con muecas desencajadas y babeando por que de seguro ya no sabía si todavía seguía en la tierra.

Ahhh , mmm ahrghhhh uffff, ayy ayyy, ahhh sii, mmm papa, papitoo mmm ahhh ahhh ahhh ahhh

El movimiento era frenético mi papa empezó a sudar a chorros, Laura ya no gemía solo tenía la boca abierta, el vaivén era muy rápido, mi papa empezó ahora él a gemir de placer gritando me vengo Laura me vengooooo arghhhhhhhhhhh arghhhhhh tomaaa tomalosss todossss,

Quiero suponer que sendos chorros de espermas inundaron la cola de Laura que solo cerró los ojos ante la oleada de ellos en su cola.

Mi papa se detuvo con la respiración todavía agitada sacó su pene todavía erectisimo de la cola de Laura y se acostó boca arriba ella totalmente cansada se acostó encima del diciéndole,

-          Papá otra vez me lo hiciste sin condón, que bueno en todo caso que te viniste en mi cola porque si sentí que fue bastante.

-          Lau ya sabes que me gusta sin condón que sea el contacto carne con carne.

-          Además debemos descansar un rato para el siguiente palo.

-          ¿Estas loco?, la última vez cuando me lo hiciste tres veces casi ni me pude levantar al día siguiente, yo creo que con uno está bien.

-          No, sabes que no será así si quieres seguir en esta casa sabes que de mínimo son varios palos cada vez que lo hacemos.

Y diciendo esto mi papa besó  a mi hermana en la boca mientras apagaba la luz de la lámpara que le había quedado a un metro de donde se acostó dejando todo el cuarto en penumbras.