Mi hermana me seduce

Mi hermana se me insinuaba para cogérmela

Estábamos en la sala viendo televisor.

Nuestra relación solía ser como cualquier otra, jugábamos, peleábamos y hablando como cualquier par de hermanos, no sabría decir cuando cambio al ser ella la que lo inicio. Nunca la había visto como mujer, siempre fue mi hermanita sin ninguna idea pervertida.

Estábamos viendo un final de temporada, la parte donde los protagonistas estaban a punto de coger, pero se detuvieron porque alguien llamo a la puerta, ella pausa el video y me dice, mira como dejo a la chica.  Las escenas de sexo las solíamos ver con un poco de incomodad cuando salían, pero lo ignorábamos hasta la siguiente escena sin más. No entendí sus intenciones y observé a la chica.

  • ¿La dejo a punto de sacarle el brasier?-realmente no sabía que responder.

-La dejo con las ganas, eso es horrible-ella cruzo los brazos de tal forma en que su busto se levantaba más.

Me le quede viendo sin saber que responder, no hablábamos de coger nunca, no me interesaba saber quién era el que le metía mano a mi hermanita…antes.

Ella me vio a los ojos y solo los giros como si no supiese de lo que ella hablaba, puso play y la escena continua, solo volteé y sigue viendo la escena. Cuando el chico salía de su casa y se ponía hablar con sus visitantes y parecía que se iría con ellos, ella volvió a pausar.

  • ¿Ves? - ella se me acerco un poco-el chico se va ir sin cogerla.

-Debe ser horrible-dije volteando la vista y levantándome del sillón.

-Espera- Ella se levantó gritando- ¿A dónde vas?

Volteé a verla sorprendido de su reacción, ella quería hablar de eso, en ese momento me di cuenta de su ropa, traía un top que le hacía resaltar sus tetas, nunca había notado que tenían un buen tamaño y traía una minifalda que casi no tapaba nada, no pude evitar quedarme viéndola, fue la primera vez que la veía como una mujer.

  • ¿Me estás viendo las tetas hermanito? -dijo con una voz picara, me voltee rápido y caminando a la cocina, me avergonzaba lo que acaba de hacer.

Ella me siguió a la cocina. - ¿Vine por algún postre, tu no quieres algo?

-No sé si de verdad eres idiota o solo te burlas de mí.

Me quede callado.

Se acercó a mí por atrás- mírame y dime que no me deseas, voltea y dime que no quieres cogerme- se me había puesto duro el pene- voltea y dime que no quieres que sea tu perra.

Contra mi voluntad voltee a verla, sabía que notaria mi erección y más aún que la deseaba, pero ya no pensaba, quería cogérmela.

-Parece que te gustaría cogerme- me agarro el pene mientras me beso, al principio me resistí, pero luego no pude contenerme y le seguí el juego.

Ella me saco el pene y empezó a masturbe.

-Her..ma..na que bien lo haces- elle me miro con una sonrisa.

-No me imagina que estuviese tan grande- ella se agacho- ¿Me entrara todo en la boca?

Me empezó a mamar el pene, lo hacía como una profesional, no tenía dudas algunas de que ella era una gran putita por como lo hacía, me pregunto cuántos penes les habrá mamado.

-Xio…ma…ra, dios…no pares por favor, no pares.

Ella me vio a los ojos con unos ojos picaros, no pude evitar agarrar su cabeza para aumentar el ritmo de su mamada, me estaba follando la cabeza de mi hermana, ella parecía disfrutar los movimientos. -Me voy a venir hermana, me detuve y bajé el ritmo, pero ella nos detuvo y empezó a usar su lengua para estimular. Me corrí en toda su boca y ella se quedó lamiendo todo el semen.

-Santo dios Xiomara, debí haberme dado cuenta lo putita que eras.

Ella se limpió a boca y me vio- aun no sabes nada hermanito, soy toda una perrita, ¡¡¡azótame, golpéame ahórcame!!!!, follame , te necesito dentro de mí. ¡Vamos!!!-ella se puso apoyando la mesa, subiendo su faldita pude notar que no traía nada abajo y estaba mojada.

-Eres una zorra hermanita, me encantas-le tire una nalgada y ella gimió, le empecé a besar el cuello mientras empezaba a penetrarla

-Oh si hermano, métemela, no pares, no tengas piedad-la empezó a meter con más rapidez mientras la azotaba.

Empecé aumentar el ritmo mientras mi mano empezó a jugar con sus tetas-grita que eres mi puta- la azote- quiero que toda la cuadra te escuche.

-¡¡Soy tu puta!!-ella empezó a temblar más su voz parecía que iba a venirse-Soy tu perra, pégame, vamos, ahórcame.

Empecé ahorcarla- me estoy a punto de venir Xiomara-

No la saques, yo también me vengo, déjala, déjala- ella se vino en ese momento y yo con ella.

Nos separamos un momento del cansancio, ella me vio a los ojos viendo las marcas que le deje. Se abalanzó sobre mi besándome. - Sabia que me follarias como nadie más hermanito.

Yo empecé a jugar con sus tetas- son enormes- le di un golpe en el trasero.

-Son todas tuyas hermanito, quiero que me sigas cogiendo.

-Vamos al cuarto hermanita, vamos a recuperar el tiempo perdido