Mi fantasía ¿imposible?

Antes de nada decir que soy un asiduo lector de todorelatos.com y que suelo visitar esta pagina con bastante frecuencia. Este es el primer relato que escribo y espero que sea recibido de buen agrado.

Supongo que estaría bien que me describiera: Soy un chico de España; tengo 21 años, soy alto, delgado, moreno, ojos marrones... de lo mas normal supongo. Todo el que me conoce me dice que soy ancho de espaldas y bueno, voy al gimnasio desde hace varios meses mas que por objetivo estético, por motivos profesionales.

Después de meditarlo un tiempo me anime a confesar mis sentimientos con este relato. Digo que lo medite un tiempo quizás por vergüenza o por indecisión por mi parte, pero no creo que pierda nada al hacerlo.

Reconozco que en la actualidad me suelo masturbar bastante; y cada masturbación, como es normal, conlleva una fantasía erótica. A mi edad he mantenido tres relaciones formales y la verdad es que no puedo presumir de haber tenido una vida sexual especialmente activa... tres relaciones, tres chicas distintas, algunos momentos íntimos con ellas, pero nada de lo que pueda presumir abiertamente. De modo que nunca he llevado a cabo mi gran fantasía y no se si alguna vez la viviré. Mi gran deseo sexual (en líneas generales el mismo que el de la mayoría de los varones) es estar con dos chicas a la vez. Sé que puede ser en parte machista este deseo, pero en mi humilde opinión, no hay nada mas excitante y hermoso que observar a dos mujeres compartiéndose todo, acariciándose cada milímetro de piel, frotándose los pezones de una con los de la otra...

La mayoría de mis masturbaciones tienen como escena una habitación amplia, con una cama grande en el centro, la estancia iluminada únicamente por un gran numero de velas colocadas por las paredes... y dos hermosas chicas en la cama, una al lado de la otra, besándose, entrelazando sus lenguas, acariciándose los senos... los pezones... el vientre... los muslos; entonces yo me arrodillo al pie de la cama e inclino mi cara sobre sus caderas, beso sus muslos, sus caderas, mientras mis besos asedian a una de ellas, mis manos complacen a la otra en las mismas zonas corporales. Dejo que ellas acaricien el clítoris de la otra mientras que mi lengua comienza a acariciar sus labios vaginales, deseo beber los fluidos de las dos a igual como deseo que ellas después hagan lo mismo conmigo. Comienzo a introducirles poco a poco los dedos de mis manos, primero uno a cada una... después un segundo y finalmente un tercero. Gimiendo de placer y moviéndose las dos al unísono con mis dedos en su interior (debe de se un espectáculo grandioso). Quiero que se corran con mis dedos enloqueciéndolas hasta que explotan en un grandioso orgasmo las dos.

Después de relajarse hacen que me tumbe en la cama bocarriba, mi pene ya esta a reventar, una de ellas lo coge, comienza a acariciarlo arriba y abajo, echando la piel hacia atrás, dejando el enorme glande ya rojo y brillante a la vista. La otra chica acerca su cara hacia él y me hace enloquecer cuando se lo introduce en la boca, lo lame, lo chupa, lo succiona... y comienzan a turnase las dos para hacerlo mientras que no dejan de masturbarme; besan sus bocas con mi pene entre ellas; hasta que una de ellas se incorpora y dándome la espalda se sienta lentamente sobre mi, introduciéndose mi miembro despacio pero firmemente. Comienza un bombeo continuo y cada vez mas fuerte; la otra chica se coloca delante de la que me esta cabalgando, agacha su cara y comienza a chuparle el clítoris a mi jinete; de vez en cuando saca mi pene y deja de chuparle el coñito a la que esta sobre mi para hacerme una breve pero intensa mamada, lo vuelve a introducir en la vagina y me besa dulcemente los testículos, me los muerde y al cabo de un rato quiere ser ella la que quiere saltar sobre mi, se turnan y yo sigo cada vez mas loco.

Les hago sabes que estoy apunto de explotar, ellas se incorporan y colocan sus caras a la altura de mi pene; comienzan a besarse con mi glande entre sus bocas y ahí es cuando ya no puedo mas. Expulso todo mi semen y va a parar al interior de las bocas de ambas; no se lo tragan, siguen besándose y comienzan a chuparse los pezones, dejando sobre ellos y sobre sus senos en general todo mi semen mezclado ya con su saliva. Me incorporo junto a ellas y les acaricio sus senos brillantes, les reparto mi semen por todo su cuerpo y nos fundimos los tres en un gran beso compartiéndonos todo. Nos quedamos los tres dormidos en la cama con el deseo de a la mañana siguiente seguir dándonos placer.

Supongo que es un sueño bastante general entre muchos hombres como ya dije antes, pero para mi seria la mayor y mejor satisfacción sexual que pudiera tener.

Espero que alguien me envíe su opinión a mi e-mail (sobre todo deseo las opiniones femeninas) – josbescol@hotmail.com - . Un saludo.