Mi esposa cristina tuvo su orgifiesta 2

En el anterior relato recordaran que cristina había llevado a casa a cuatro fornidos tipos y que dos de ellos la habían cojido fuertemente, pues bien ahora solo faltaban dos mas,

Después de un rato de estar bebiendo y charlando cristina ya se veía un poco mas recuperada y aquellos hombres también ya estaban mas que listos para continuar con la fiesta, así que después de unos minutos, cristina se levanto para ir al baño, situación que los cuatro tipos aprovecharon y los dos que faltaban de cojersela se levantaron y acomodaron el sillón individual dejándolo justo frente a la cámara y se dispusieron a esperar a cristina, no me imaginaba cuales eran sus intenciones, así que le adelante un poco a la cinta hasta que apareció de nuevo cristina quien al ver que habían movido el sillón alcance a escuchar que les preguntaba,

• que pretenden muchachos..?

y de inmediato uno de ellos le dijo,

• no preguntes y empínate sobre el respaldo..!!

Cristina se les quedo viendo, camino hasta el sillón y flexiono su cuerpo hasta quedar como le habían dicho, una vez así, los dos tipos se pusieron detrás de ella, uno de cada lado y sin decir mas, uno le soltó una fuerte nalgada, cristina al sentir el golpe grito e intento enderezarse. pero el otro tipo le soltó también otra nalgada mientras le decía,

• ni se te ocurra enderezarte..!!

ella solo contesto que si, que iba a hacer lo que le dijeran, acto seguido ambos hombres se comenzaron a turnar para nalguearla, cristina al sentir los azotes se sujeto del respaldo del sillón, cerro sus ojos y mordía sus labios para evitar gritar, mientras que aquellos dos tipos se divertían con su trasero, pero no solo la azotaban. de vez en cuando le preguntaban si le había gustado la cojida y que si quería verga en el culo, ella claro solo respondía que si y los cuatro tipos reían sin parar, jamás había visto a cristina dejarse usar de esa manera, pero se veía que le estaba gustando y para serles sincero a mi también, después de unos minutos de estar castigando las nalgas de mi esposa uno de los tipos le dijo,

• quieres verga en el culo cristina..!!

Cristina tragando saliva le respondió con un si,

• bueno, pues entonces vamos a divertirnos un rato

Aquel fornido sujeto se paro detrás de ella, poso ambas manos sobre sus nalgas y comenzó a acariciárselas, cristina se quedo lo mas quieta posible, y yo para ese momento, tenia ya una fuerte erección ansiaba ver como la iban a coger, después de unos minutos, aquel hombre comenzó a separar las nalgas de cristina, tomo su verga con una mano, la sacudió un par de veces hasta que la tuvo completamente erecta, la poso justo entre las nalgas de ella y lentamente comenzó a metérsela, cristina al sentir la penetración se sujeto fuertemente del respaldo del sillón y pude ver como sus ojos se iban abriendo lentamente al igual que su boca, hasta que lanzo un fuerte grito, era obvio, aquel tipo tenia una verga demasiado grande y cristina no podía aguantarla, pero aquel hombre no le intereso que cristina gritara y en segundos su cara se puso completamente roja, aquel hombre se la había metido por completo, espero unos segundos y después comenzó a mover sus caderas de atrás hacia delante de una forma bastante rápida, provocando que ella lanzara fuertes gemidos, pero el no se detenía, podía escuchar como sus caderas golpeaban contra las nalgas de cristina, poso sus manos en su espalda y comenzó a bajarlas lentamente hasta que llegaba a sus nalgas y comenzó de nuevo con las nalgadas, cristina levantaba sus piernas y movía sus caderas de un lado a otro, pero todo era inútil, al contrario, con cada movimiento que hacia, parecía que se ensartaba cada vez mas y mas, aquel hombre reía con sus amigos, el muy cabron la estaba gozando a tope, las embestidas de aquel tipo eran tan fuertes, que podía escuchar como sus caderas chocaban contra las nalgas de ella, provocándole un gran dolor, hasta que después de unos minutos la sujeto fuertemente por las caderas y comenzó a convulsionarse, había terminado dentro de ella, y antes de separarse, todavía le dio dos fuertes nalgadas mas y después se aparto de ella, cristina descanso durante unos instantes, pero de inmediato otro de los muchachos se acomodo tras de ella y comenzó de nuevo a acariciarla, ella bien sabia lo que venia, así que se volvió a sujetar del sillón y solo alcanzo a decir,

• despacio…despacio...por favor…!!

Pero de nada le sirvió, este otro tipo separo bruscamente sus nalgas, poso su verga en su entrada anal y de un solo golpe la penetro completamente, cristina no se pudo contener ante tal invasión y lanzo un fuerte gemido, los cuatro rieron y aquel tipo a diferencia del otro, comenzó a penetrarla lentamente, sin duda el cabron quería gozarla a mas no poder, su verga entraba y salía de una forma lenta y pausada, haciendo que cristina lanzara pequeños gritos de dolor, su rostro estaba ya completamente enrojecido y sus ojos bastante llorosos,

• te esta gustando mi verga cristina…??

• si..siii..sii..papito..asiii..metemela..despacitooo..

a estas alturas no me sorprendía lo que cristina decía, mi esposa se había convertido ya en una tremenda puta y aquellos tipos no la iba a desaprovechar,

• quieres que te la meta mas duro cristina…quieres que te haga gritar…!!

• noonoonooo…despacio por favorrr..!!

pero aquel hombre no hizo caso a las suplicas de cristina y de un momento a otro, comenzó a acelerar sus movimientos, cristina no pudo resistir las embestidas y comenzó a mover sus caderas y sus piernas, pero todo era inútil y aquel hombre siguió penetrándola fuertemente, mientras que los otros tres reían y continuaban bebiendo, aquel hombre estaba empeñado en hacer gritar a mi esposa y después de varios minutos acelero aun mas sus movimientos hasta que cristina no pudo resistir mas y comenzó a gritar que se detuviera, que la estaba rompiendo, aquel hombre al escucharla comenzó a reír, había logrado su objetivo, pero no conforme, continuo castigando el culo de mi esposa durante varios minutos mas, metiendo y sacando su verga, hasta que de un momento a otro, sujeto a cristina por las caderas y lanzo un fuerte gemido, por segunda vez se habían venido en el culo de mi esposa, aquel hombre después de haberse vaciado se retiro lentamente de ella y continuo bebiendo con sus amigos, cristina al sentirse liberada, recupero el aliento y lentamente se enderezo, para después irse directo al baño,

en ese instante decidí para la cinta, sabia lo que venia y no tenia caso martirizarme mas, mi esposa era ya una tremenda puta y lo peor es que no sabia ni donde estaba, que mas podía pasar..??

fin...