Mi esclava personal

MI ESCLAVA PERSONAL

Gracias ha todas las personas que han querido leer mi relato, esta es una historia que ni siquiera mis mejores amigos conocen. Para empezar mi nombre es Kenderson, tengo 20 años y a la par mía tengo a mi prima Melissa, se preguntaran que hace mi prima mientras digito esta historia, pues ella es la protagonista de este relato y necesito sus impresiones para que la historia sea más interesante, por supuesto ella no quiere participar, pero comprenderán que no tiene elección.

Pero primero lo primero, tengo una erección que parece una roca y para aprovechar que mi primita está aquíííí… tendrían que ver la cara que puso cuando escribí esto, tiene una expresión de indispuesta pero no puede oponerse, mi querida prima viene con una minifalda blanca muy provocativa por supuesto yo le sugerí que siempre que me visitara, usara ropa así, por lo que solo le he pedido que se baje los calzones, ya que tengo que concentrarme en redactar, bueno ya que le pedía que se sentará en mis regazos viendo hacia el monitor, siento como su caliente y suave cavidad vaginal aprisionan a mi pene, le he pedido que no se mueva, hasta que termine de escribir.

Disculpen mi retraso al tratar de empezar la historia pero, los negocios están antes del placer, en este caso llegan al mismo tiempo. Para comenzar quiero decirles que mi primita nunca me había llamado la atención hasta que entre al Liceo de Cartago, mi educación era buena, mis padres me enseñaron buenos principios, pero los compañeros pueden volcarlos. En ese momento estaba en quinto grado y mis amigos eran de lo peor, cada vez que podían descargaban de Internet fotos, sonidos, relatos y videos de cualquier caricatura o ser humano teniendo relaciones sexuales, yo estaba demasiado influenciado, pero no sabía cuanto hasta el día en que vi a Melissa.

Ya no puedo aguantar más, mientras bombeo a mí prima, ella les contará como es físicamente… adelante Melissa.

Bueno, no soy la gran cosa, tengo 15 años, mido 1,65m, peso 60 kilos, soy de contextura delgada, cabello y ojos café claro, mis medidas son 75, 65, 75, como les dije soy como cualquier otra adolescente, pero no tan listas como la mayoría, sino no hubiera caído en las garras de este CERDO DESPRECIABLE.

Disculpen a Melissa, a veces no mide sus palabras, y por eso ahora esta de rodillas con algo que le tapa la boca. Pero en cierta manera tiene razón, yo recibí la educación sexual cuando tenía 12 años y en la escuela me previnieron de los posibles acosos que hacen los mayores, pero mi prima es diferente, viene de un pueblo muy lejano donde la educación no es tan buena, eso me ayudo para tenerla en mi poder.

Todo comenzó un día en el que mis padres me dejaron donde mi abuela y mi tío dejo a Melissa jugando conmigo, para ese entonces ella tenía 11 años y yo 16, mi primita estaba desarrollando rápidamente, la gran cantidad de escenas sexuales que salían de Internet me habían cocinado el cerebro y hacían que cada vez que la veía mis hormonas, pusieran mi pene como un alfiler, listo para actuar, pero yo tenía miedo, por la educación que ella recibió en la escuela, por eso la lleve a un cuarto donde guardaban las herramientas y nadie nos viera, le empecé a contar sobre los diferentes calzones que existían y le pregunte como eran los de ella, sin pensarlo mucho, ella me dijo que eran blancos con florcitas, mi bulto se remarcaba en mis pantalones, yo quería ver esos calzones pero… Mejor dejo que Melissa les cuente vamos ponte de pie

Ese día cuando me llevó a solas al cuarto de herramientas, consideraba a mi primo como una persona atractiva no como lo veo ahora, como un ser despreciable, pero en ese entonces era tan ilusa que lo único que me dio fue vergüenza y por ningún motivo le permití ver mis calzones, nunca lo amenace como debería haber hecho para que se calmará, pero eso no terminó ahí, después de ese día cada vez que me encontraba con él, buscaba la forma de darme un beso a la fuerza, en ese entonces las primeras veces me gustó, pero después lo comenzó a hacer tan seguido que me comencé a sentir incomoda con la situación, después me enseño por televisión un programa de lucha, en la cual el luchador le hacía como un perrito por detrás a otro, esa fue la excusa perfecta para que el me agarrara por la cintura y empezara a restregarme el miembro por mi trasero, en esos momentos con cada envestida que me daba sentía como su asquerosa cosa, se ponía más dura.

Gracias esclava, ahora continuaré yo, durante todo el año seguí robándole besos y restregándole mi pene por las nalgas, hasta que un día se quedo a dormir en la casa de mi abuela, como todo un desesperado les pedí a mis padres que por favor que me dejarán ir a dormir, ellos aceptaron y como conocía bien la casa, sabía que dormiría en el mismo cuarto, aunque en camas diferentes. En la noche, mi pene se paró desde el momento en que apagaron las luces y con el reloj en la mano esperé hasta que pasarán tres horas y estuviera bien dormida. Cuando la hora llegó, me deslicé muy despacio hasta llegar a la cama, empecé a tocarle las manos, los pies, las piernas, por miedo a que se despertará y por ultimó le di un beso en la boca y no reaccionó, por lo que me dio más confianza y comencé mi labor.

Con toda la calme del mundo le quite la cobija, después con la misma calma fui quitándole poco a poco, la parte de debajo de su pijama, hasta dejar a la vista su calzoncito de tela blanca, metí mi mano entre el calzón y su piel, su piel era suave y calida, como un desesperado fui buscando sus labios vaginales hasta que sentí una pequeña mata de pelos, eso me emocionó más y al encontrar su agujero lo empiezo a acariciar con ternura, poco a poco siento como de lo calido empieza a salir un líquido entre aceitoso y viscoso pero tibio, comprendí que se estaba excitando, y como no se le veía nada por encima de la camisa, metí mi otra mano por debajo de su camisón, el contacto de la piel tierna del estomago y el delicioso líquido hicieron que estuviera a punto de eyacular, pero logre controlarlo, hasta que me lleve una gran sorpresa, debajo de su camisón había dos pequeños abultamientos de carne, eran sus pequeños y delicado pechos que comenzaban a salir. Conteniendo el aire logre bajarme con costos el pantalón y toda mi leche quedo derramada entre el camisón y su calzón …. ya saben quién sigue con el relato.

En ese entonces estaba empezando el año lectivo y el primer tema en ciencias fue la sexualidad, uno de los temas que más me llamaba la atención eran los "Sueños mojados", la profesora dice que cuando empezamos a desarrollar hay adolescentes que pueden masturbarse dormidos mientras tienen uno de estos sueño. Esa noche me dormí con el tema en mi cabeza, cuando empiezo a tener un sueño, donde el más guapo de mi clase empieza a besarme entonces pone su mano en mi muslo y comienza a subirla, acariciándome delicadamente, cuando llegó a mi conejito, empezó a sobarlo, entonces el hizo a un lado las braguitas y empezó a meterme un dedo en la vagina, yo sentía cosas que aun recuerdo pero que entonces no entendía, el movía su dedo dentro de mi, y cada vez lo metía mas al fondo, lo sacaba y lo metía, de pronto metió dos dedos y cuando estaban dentro de mi vagina los separaba, los sacaba, los volvía a meter, siguió así hasta que de repente yo sentí un escalofrió que me recorrió la espina dorsal y una especie de cosquillas en el vientre, estaba teniendo mi primer orgasmo, pero yo no lo sabía de repente siento como me vuelve a besar, ahí es donde desperté, media adormecida abrí mis ojos todo estaba oscuro tenía la cobija de un lado y vi un líquido que estaba entre mi vientre y mis braguitas, estaba sorprendida toda mi braguita estaba mojada, con mucha vergüenza me cobije pensando que me había masturbado y hasta ahora se que fue este Hijo de Puta que me había excitado.

Después del susto que me lleve cuando se despertó, esperé hasta el día siguiente para que ella se quejara, pero como nunca hizo nada solo me dio más esperanzas de que volviera a pasar. Ese año paso despacio, parecía que ella sospechaba algo ya que en todo el año, no volvió a dormir ahí, cada mes que pasaba se veía más hermosa, sus cualidades ocultas se empezaban a notar, esos pechos se apreciaban como dos grandes naranjas, lo cual hacía que me excitará más pensando en nuestro próximo encuentro.

Los días pasaron y el día llegó, Melissa se quedó en la casa de mí abuela y como tenía que hacer un mandado, me llamó para cuidar la casa. Yo estaba a mil por hora, estar solo y ver esas preciosas rebotando terminaban con mi paciencia, pero lo único que me detenía era la idea de que es mi prima es no es correcto y lo otro era que tenía miedo de dejarla embarazada. Pero algo inesperado ocurrió, le vino la regla y como no traía toallas entre en acción que lo diga mi prima

El muy desgraciado me preguntó que si mi mamá iba a tardar, y le respondí que no sabía, en eso yo estaba sentada y veo que tenía mis braguitas con una pequeña mancha roja en la zona de mi conejito, me empezó a salir mas sangre machando por completo mi calzoncito, lo cual el pervertido de mi primo se dio cuenta y me dijo que si me sentía bien, me levanto en sus brazos y me llevó al sanitario, me paró junto a un lava manos y me dijo que me quitara la tanguita para que no se me fuera a manchar más. El cabrón al ver que me las quite me dijo abre un poco tus piernitas para poder revisarte, le dije me daba mucha pena que me viera que ni mi mama me revisaba mi conejito a lo que el respondió abre las piernitas Melissa pues creo que te esta saliendo mas sangre.

vi que era cierto la sangre escurría hasta un poco mas arriba de mis rodillas, abrí mis piernas y le deje ver mi conejito sin pelitos y me empezó a limpiar con el algodón que tenía en su mano derecha y con la otra me detenía la falda según el maleante de mi primo, para no macharla, me estaba limpiando de abajo hacia arriba hasta que llegó a mi rajita, que me volteara de espaldas a él.

Me siguió limpiando, mi raja desde atrás, yo apoye mis manos en el lava manos, ósea que el muy malparido me veía bien, bien mi colita y mi rajita, me dijo listo ya no te sale más sangre, pero en tanto me decía esto él se había desnudado de la cintura para abajo, yo seguí apoyada en el lava manos, yo le veía por el espejo, cuando el muy desgraciado, me levanto mi falda hasta mi cintura y me tomo por mis caderas, me doy la vuelta para ver por qué me había agarrado así y veo su despreciable cosa toda dura llena de pelos apuntado para arriba. Me dio miedo y empecé a llorar.

De pronto sentí que algo caliente entre mis piernas rozaba mi conejito, a veces se restregaba entre mi rajita de arriba a abajo, sentía como sus pelos tocaban mis nalguitas, en eso sentí claramente como el desgraciado empujó hacía adentro de mi rajita su cosa dura y sentí como entro un poquito la punta ¡hhhhaaayyyy!¡hhhhaaaaayyyy! llorando dije. Me duele saquéeme su cosa. Y empujó más y más hasta que su cosa dura topó con algo en mi interior, no le importó lo que le dije y me tomo con más fuerza de mis caderas y empujo más fuerte rompiendo mi himen, metió toda su cosa dura dentro mi conejo.

Trate de quitarme de esa posición pero no pude el muy sin vergüenza me agarro muy fuerte y me jalaba hacia él, no me dejaba mover de esa posición y empezó meter y a sacar, meter y sacar, meter y sacar su cosa dura en mi conejito y llorando le decía que parara él no me oía, él estaba metiendo su cosa en mí como loco, a veces agarraba mis tetas con toda su mano pellizcando mis pezones y de pronto sentí como su miembro se ponía más duro y más duro en ese momento sentí como algo caliente me llenaba por dentro de mi conejito, me llenaba y llenaba de su líquido calientito, hasta que se detuvo, se quedo atrás de mi con su cosa metida en mi conejito hasta que dejo de estar dura y se le salió de mi rajita.

Muy bien hecho mi prima, pero ahora contaré mi versión la tuya ha estado muy ruda. Pues sí la lleve al baño y le empecé a limpiar su vagina comprenderán que al tener tan cerca de mi prima, mi conciencia entro a jugar un papel importante, la tenía a mi completa voluntad, pero no quería hacerle daño, luego de mis dudas y desconcierto por u instante más pudo mi instinto, el hecho es que previendo lo que iba a suceder, mientras limpiaba sus labios vaginales, me quité la faja y comencé a bajarme los pantalones, me coloque al costado de ella, con mis dedos pasando por su virginal orificio, la sensación que sentí en mi dedo al ir pasando fue sublime, cuando lo sentí suave y con menos presión, me coloque detrás de mi prima.

Tomando con una mano mi pene y con la otra tratando de tantear el orificio de la vagina, me fui aproximando hasta colocar la cabeza en la entrada, entonces fui presionando un poco para lograr que penetrará, con mucha calma y paciencia y empujando poco a poco, retirándome y volviendo a presionar con un poco más de fuerza, logre que penetrara la cabeza, siento como se desliza la cabeza de mi pene por entre sus labios y la penetra unos centímetros, la sensaciones son indescriptibles, el deseo, el morbo, la lujuria, se apoderan de mí.

Inicialmente me digo no la penetraré totalmente, solo hasta donde su himen me lo permita e inicio movimientos de entrada y salida en la que sólo mi cabeza y algunos milímetros más de mi pene permiten ingresar, pero la lujuria pudo más, e intento ir más allá, hago un poco de presión, el himen cede y me hundo en el placer infinito, siento que mi pene recorre toda su cavidad hasta que desaparece cualquier separación entre yo y Melissa, a ella le salen algunas lágrimas, siento su intenso calor, como las paredes de su vagina rodean mi pene como si fuera un guante, las sensaciones de placer me invaden, nunca antes con nadie había sentido tanto placer en una penetración, quizás por que se trate de mi prima, quizás porque fue virgen hace unos instantes, quizás por el sabor a lo prohibido, lo cierto que cada vez que recuerdo ese instante me caliento de tal manera que mi pene reclama placer….. Disculpen la escena me excitó, terminaré la historia en unos momentos, véngase otra vez mi prima

Aquí estoy de nuevo como siempre tiene que ser forzado, nunca puede disfrutar del sexo, mi esclava tiene una cara de enojo como si me quisiera matar, pero continuemos con la historia. Empiezo a moverme dentro de ella, con lentitud, con ritmo, estoy conciente me correré dentro de ella, esa sensación de descargar dentro de mi propia prima me genera otro estímulo adicional, estoy a punto de hacerlo porque se no resistiré más, la penetró lo más profundo que puedo y sus flujo empiezan a salir, estoy totalmente extasiado, no puedo más sin poderlo evitar eyaculo, además del placer de hacerlo se suma, como parecen infinitos los chisguetazos de semen, el placer, el calor, lo ajustado, lo rico.

Cuado estime oportuno le subí la falda porque mi intención era ponerle el calzón y limpiarla de cualquier rastro dejado. Llorando le pedí que me perdonará que no lo volvería ha hacer, con mucha delicadeza logre limpiarla y ponerle su prenda, pero a la vez deseoso de volver a repetir la experiencia.

Los años pasaron, ella por dicha no quedo embarazada, pero el miedo me invadía, si se lo decía a mis padres y si mi tío se enteraba que pasaría. En los quince años que cumplió mi prima, me amenazó con decir todo si no tenía relaciones con ella, con tal de que no dijera nada acepte, pero teníamos que hacerlo en mi casa. Llegue a mi casa junto con ella, mis padres andaban en México por lo tanto no nos podían descubrir, con la excusa de que tenía desordenado el cuarto subí a mi habitación y escondí una cámara, pero la mejor parte la contará mi prima….

Después de que yo lo amenazará y el me llevará a su cuarto, no sé como el infeliz logró sacarme una confesión de que el sexo que íbamos a tener era bajo mi propia responsabilidad, con esas palabras y si mi padre se diera cuenta me mataría, por lo que yo le dije que haría lo que el me pidiera, pero que no le enseñara eso a mi padre, por supuesto que el resto no se lo tengo que contar. Conmigo en sus manos no podía hacer nada, excepto obedecer todas sus ordenes, hemos hecho el amor de mil formas, bueno las formas en que yo lo he dejado.

Eso es cierto, pero para terminar el relato solo quiero decirles que, la relación anal es la que me ha cautivado y me cautiva aún por encima de la vaginal. Deberían ver la cara de susto que tiene mi prima en este momento….. Chao

Por cierto el correo de mi prima es re_cmcr@yahoo.com , a ella le gusta que le manden fotos de chicas en posiciones sexuales.