Mi encuentro con maritza 2

De como mi esposa Juliana abrió una puerta, gracias a las peticiones de mi amante Maritza. Esta es la tercera parte, espero les guste. Es entre fantasía e infidelidad, ya que lo que ocurrió fue porque así me lo pidió mi amante Maritza que fueran las cosas...

MI ENCUENTRO CON MARITZA II

Continúo narrando mi encuentro con Maritza en esta III Parte. De lo que siguió después de la ida al café. Donde me hizo “unos encargos” para mi esposa

Después de aquella ida al Café Maritza me pidió que iniciara algunos cambios en la relación con mi esposa, ella me estaba empujando a que mi esposa fuese de una mujer prejuiciosa y autocensurada, a ser una mujer sexualmente liberada; así lo entendía yo. Empezando por comprarle ropa mas insinuante, más sensual. Que le comprara tanguitas, cosa que ella no usaba. Usaba calzones cacheteros de encaje, pero tangas no, ya que decía le molestaban. También minifaldas, Juliana tiene un par de bellas piernas. Torneadas y  bien formadas. Que la verdad de las cosas, fueron de las primeras cosas que me llamaron la atención de ella cuando le conocí.

Así que aprovechando un viaje de compras que hicimos a USA, llegamos a un Mall. Y después de andar en varias tiendas, pasamos por una de las tiendas de Victoria Secret´s. Le dije:

Quieres entrar a ver algo?

No, respondió ella.

Anda vamos, vemos y si te gusta algo, lo compras, le insistí.

Entonces acepto y entramos. Anduvimos viendo la ropa interior y yo de manera insistente empecé a mostrarle diversos conjuntos, en verdad bellos, pero mucho muy sensuales. Ella me decía “Están padres, pero no... Me gusta, pero no... Se ven bien, pero no sé cómo me sentiré con ellos…” y así sucesivamente. Siempre tenía una razón para rechazar mis propuestas. Ella se inclinaba más por la ropa convencional. Linda sí, pero normal. Yo quería más, quería que comprará tanguitas y sostenes sensuales. Que le hicieran resaltar ese par de hermosos pechos que tiene. Normalmente y por su tamaño usaba brasier´s negro, blanco y beige. Pero esa ocasión quería comprará de otro tipo y colores sexy´s.

Así que después de mucho insistir, eligió 3 de diferentes colores rojo, negro y un rosa. Con sus respectivo conjunto de semi tangas, porque tangas, tangas no eran. Pero eran conjuntos muy sensuales. Que realzaban al extremo sus pechos. Yo estaba contento, estaba cumpliéndole los deseos a mi amante Maritza compramos ropa, entre esas cosas hice se comprará dos faldas cortas. Ella no quería, pero la convencí al final. Después fuimos a comprar zapatillas y le hice comprar dos tipos sandalias unas negras y otras plateadas.

Después de ese día, algo agotados fuimos a descansar al hotel. Ambos teníamos la necesidad de descansar, de andar de arriba abajo en las tiendas. Por lo que nos quedamos dormidos un par de horas.

Al despertarme, lo primero que hice fue irme a dar un baño, pensando en cómo iniciaría con la tarea encomendada en la cama. Cuando salí del baño ella estaba despierta, pero seguía en la cama. Me pregunto:

A donde vas?

A Ningún lado , le respondí. Solo quería bañarme, pero si quieres vamos a un sitio. La verdad no conozco lugares donde salir, pero acá en el Hotel hay un bar, quieres ir?

Lo que quiero es cenar , me respondió.

Pues mira te propongo, vamos a cenar y de ahí nos venimos al Bar, si no esta bien, nos venimos a dormir, como ves?

Sale , me dijo, deja me baño y vámonos a cenar .

Cuando ella se metió al baño, me fui sobre la ropa que ella había comprado. Y saque el conjunto negro, la falda de mezclilla y una blusa color plata con botones por el frente y por último las sandalias plateadas.

Cuando salió del baño y vio que sobre la cama estaba la ropa, me dijo:

Quieres que me ponga esto?

Si le respondí yo

Mmm no sé, no había pensando en esa ropa, la falda se me hace poco corta

Anda le dije si lo fuera, aquí nadie nos conoce, quien podría decir algo, por el contrario, creo que más de dos voltearían a ver esas piernas

Tu crees?

Si respondí tus piernas están bien buenas!!!

Cállate pesado!!! Respondió con una sonrisita

En serio volví a insistir, están bien ricas

Haber pues dijo, animándose a ponerse la ropa

Conforme se iba poniendo cada pieza, yo me excitaba al verla, se puso primero el sostén y me pregunto

Que tal se ve?

El brasier super bien dije, pero tus nenas mejor!!!

Me aventó una mirada picara y agarrándose las tetas con sus mano y en sentido de ofreciéndolas me dijo “Al rato las vas a tener en tus labios”

Se despojo de la toalla y se puso el calzón, se le veía muy bien el conjunto, aunque se quejaba de sus formas. Ya que el estomago, producto de los hijos y una cesárea, sentía se le veía terrible. La cicatriz, las estrías y la flacidez. Y me dijo “Se me ve bien fea la panza, si me operara y me hiciera la abdominoplastia”

Y todavía no terminaba le dije yo: “También los senos, me gustaría que te los operaras, que se te los pusieran mas levantados y si se pudiera un poco mas grandecitos” Como les he dicho anteriormente Juliana tiene unos pechos grandes, los sostenes que usa son talla 38D

Ella me dijo: Más grandes? Estás loco!!! Si me los levanto, pero no ponérmelos más grandes”

Vamos le dije, se verían bien, muy bien. Grandes y bien puestos….

No lo creo y siguió vistiéndose

Paso a ponerse la falda y cuando lo hizo, empezó a renegar de cómo le quedaba: “Esta muy corta, me voy a sentar y se me van a ver hasta las anginas, se me ve todo”

No le dije yo, te ves bien, me gusta cómo se te ven las piernas, anda déjatela, te ves bien

No, no voy a salir con esta falda, no se porque la compre, está muy corta

Vamos le dije, además aquí quien te va decir algo, nadie nos conoce!!!

Me da vergüenza, no se… dijo ella.

Vamos le dije, póntela y después de que regresemos, vemos que tal te sentiste

Se puso la blusa y las sandalias plateadas.

Se veía muy deseable, yo quería se desabotonara un poco más, pero no quería presionar las cosas. Se veía bien. El brasier realzaba sus senos, su falda corta mostraba un par de piernas bellas y de buen ver, de esas que dan ganas de acariciarlas

Ya listo los dos fuimos a cenar, fuimos a un restaurante de la cadena AppleBee´s. Al llegar, me percate que algunos comensales volteaban a verla, sobre todo las piernas, yo caminaba detrás de ella. Y podía observar como los hombres sentados se quedaban mirando hacia sus piernas, lo que no me percataba era lo que ocurría cuando pasábamos a esos hombres. No se, si alguno de ellos volteo a verle por detrás.

Nos sentamos pedimos el menú y notaba como tenía una lucha con su falda, jalándosela de vez en cuando hacía abajo. Yo en una de esas ocasiones le dije:

“Déjate de estar torturando, la falda no se te va subir a la cintura, además ni quien te diga nada, es otra ciudad, otra gente, mira a las chicas de aquí, ve como vienen vestidas, sueltas, sin preocupaciones”

No dijo nada, pero vi en sus ojos que algo deseaba decirme

Después de la cena, fuimos a un Club Night y que unos amigos me habían recomendado con música en vivo y buen ambiente. Le dije a Juliana que si le apetecía asistir un rato, para divertirnos y ech