Mi dulce Viviana (06)

Como quedamos ella y yo.

MI DULCE VIVIANA (VI)

Hoy domingo terminó la Convención Anual de Diseño Gráfico, estamos viajando de regreso y sentada a mi lado está Vivi dormida, sus delicados dedos han estado jugueteando con mi pene hasta que el cansancio la venció, tiene aun mi erecto pene dentro de su mano, le gusta quedarse dormida tocándolo. Ahora, con un poco más de calma, puedo asegurar que estos tres días han sido increíbles, lo que he vivido ha superado todo lo imaginable, Viviana ha resultado una verdadera caja de sorpresas, su forma de ser esta resumida en el refrán:

"En la calle una dama y una puta en la cama", hasta podría asegurar que lo escribieron pensando en ella.

Ella me ha llevado a experimentado las más calenturientas variaciones posibles dentro de lo que es sexo entre dos personas.

La exigencia a la que me ha sometido fue tanta que sino fuese por los suplementos vitamínicos que he tomado y las infusiones de hierbas selváticas que ella me ha dado, hoy estaría en la sala de cuidados intensivos de algún hospital.

En la selva peruana, de donde ella proviene, se conocen las propiedades reconstituyentes de muchas plantas, aun desconocidas en el resto del mundo.

Ella me anima a que complemente la Maca Andina con las infusiones de ciertas hierbas, pues según ella, más efectivas. Después de probarlas puedo dar fe de ello. Estas benditas hierbas me han permitido mantener y hasta superar el ritmo sexual que ella impuso desde el principio, a la vez que aumentaban mi capacidad de raciocinio y agilidad mental.

Les contaré que probé una que es lo máximo, el famoso Viagra queda como una pócima de charlatán ante los efectos de la infusión del Shapareco, me ha permitido mantener una erección plena durante más de dos horas, sin llegar a eyacular ni una sola vez, ya que no solo mejora la erección, sino que también permite controlar el reflejo eyaculatorio lo que permite evitar lo que es eyaculación precoz. Después de beber la infusión de esta hierba he tenido a Vivi cerca de una hora ensartada por el culo, casi una hora por la vagina y mas de treinta minutos por la boca, sin derramar una sola gota de semen ni sentir molestia alguna, y lo más increible, es que despues de eyacular permite que el miembro se relaje y libere tension, pero lo pone listo otra vez a los pocos minutos, si el estimulo se reanuda.

¡Fantástica hierba resultó el Shapareco!.

También hay una hierba especial para la mujer, pero no para la libido, sino para recuperar la estreches vaginal o anal. Ella nunca la había utilizado pero se animó con fines de prueba y en verdad funciona, con la infusión tibia se hizo un ligero lavado vaginal y esta quedo tan estrecha que parecía virgen, llevado por el afán de prueba la animé a usarla en su ano y funcionó igual, se podría decir que lo dejó a cero kilómetros, creo que está demás decir que posteriormente tuve el honor de reabrir sus queridos agujeros. Fue increible la sensación de una vagina y ano virginales, ambos sentíamos como si fuese su primera vez.

Cosas que tiene nuestra amazonía y que el hombre occidental no conoce, ni conocerá.

Gracias a que las sesiones del Congreso empezaban pasadas las 5.00 PM, todas nuestras mañanas las hemos dedicado a broncearnos, desde temprano salíamos a la playa y nos dejábamos acariciar por el inclemente sol, a la vez que aprovechábamos para conversar sobre nosotros y nuestra relación. En la tardes, aprovechando el descanso posterior a un buen almuerzo, teníamos sexo y más sexo.

Después de pensarlo detenidamente, le he propuesto que vivamos juntos aquí en Mancora. Mi matrimonio se podría decir que ya terminó, solo me faltaría finiquitarlo.

Felizmente que el trabajo de Vivi y el mío se pueden realizar en cualquier lado, gracias a Internet, solo es necesario una línea telefónica, ella ha aceptado y me dice que tenia pensado dejar su trabajo en la IBM por lo que decide dejarlo ya, al igual que el de Call-girl, todo para dedicarse 99% a mi y el resto a la confección de ropa en escala industrial, para aprovechar los contactos que hemos hecho entre varios de mis colegas, que han propuesto ser los representantes de sus líneas de ropa de baño y lencería erótica en sus diferentes lugares de origen.

Nos damos cuenta que el taller fácilmente lo podemos instalar aquí, adquiriendo nuevas maquinarias, para lograr la calidad que exige la exportación. Los insumos lo podemos importar por Ecuador, a escasas dos horas de camino, por la facilidad del puerto libre de Machala.

Además he pensado poner un negocio de Cabina de Internet, ya que en Mancora no hay y es un servicio que los turistas extranjeros y nacionales extrañan.

Ella mejora mi idea, ha sugerido que podría ser una multi-tienda: cabina Internet, tienda de ropa (sport, ropas de baño, etc.) y sex shop.

Este último lo agrega por algo que nos paso el sábado en la noche y que se los contaré otro día.

Inclusive ya tenemos el nombre de la tienda, se llamará: LA LUCIERNAGA, en clara alusión a Vivi, pues su culo me ha iluminado el futuro y me ha sacado de la noche oscura que he estado viviendo.

Pensando en todo esto nuestro vuelo llega a Lima, despues de recoger nuestro equipaje, nos despedimos con un cariñoso beso, quedando en llamarnos en la noche para saber como se van presentando las cosas.

Debemos poner en orden varias asuntos antes de mudarnos a Mancora, lo deseamos hacer lo más pronto posible.

Llego a casa y soy recibido por Beatriz, la hermana de Vivi que está reemplazándola en el trabajo, no me acordaba que ella está en casa, pero fue motivo para presentarnos y conocernos un poco, a la vez que me va contando las novedades de casa, mientras intento relajarme y descansar un poco.

Mientras me habla, me doy cuenta del enorme parecido que hay entre Beati y Vivi, pero quedo sorprendiendo gratamente con el bello físico de Beati, recién reparo en que tampoco usa el feo uniforme de asistenta que compró mi esposa, le pregunto por qué y me dice que no le gusta nada y que solo se lo queda puesto hasta que la señora sale al trabajo, una vez que se queda sola se coloca el de su gusto.

Por ejemplo, hoy eligió un coqueto conjunto color lila pastel: tiene puestos unos zapatos negros de charol de taco aguja, con hebilla al tobillo, estos adornan sus pequeños pies enfundados en un par de medias de red color lila, que abrazan unas largas y hermosas piernas; sus muslos son plenos pero no se ven gruesos por lo largos que son; en el extremo superior de ellos resaltan dos montañas de carne que son retenidas a duras penas por la falda de lycra lila, que como una segunda piel se pega a ellas, marcándolas tanto que permite ver el contorno del mínimo hilo dental que tiene entre sus nalgas así como las ligas del corsellet que sostienen las medias. Su breve cintura es abrazada por un corselett con copa balconet, de seda lila y encaje blanco, apresándola suavemente. Pero donde casi es superado su capacidad es cuando intenta sujetar sus portentosos senos, que rebalsan por sobre las copas del corsellet y dejan visible la mitad de sus aureolas, que rodean a sus rebeldes pezones que quieren perforar el encaje del corsellet.

Su hermoso cuerpo no seria nada sino estuviese acompañado de una dulzura al hablar y expresarse que resulta un gusto escucharla, los gestos de su cara y manos son tan suaves y delicados que solo escucharla es un placer para el alma. Ella y Vivi tiene la virtud de acariciar con las palabras, creo que es una cualidad de familia.

Me saca de mis reflexiones, cuando me pregunta si deseo tomar un baño en la tina, para irlo preparando.

Acepto la sugerencia y levantándome voy a dejar mi equipaje a mi dormitorio.

Al entrar al cuarto de baño, me encuentro a Beati de espaldas a la puerta y agachada, dejando correr el agua caliente y echando las sales de baño.

Me quedo parado en el vano de la puerta gozando de la hermosa visión de su culo fabuloso, estoy en esto cuando ella voltea y sorprende mi mirada de deseo.

Me sonríe y dice que ya va estar listo, que puedo ir preparándome.

Cuando voy a empezar a desabotonar la camisa, ella detiene mis manos y lo empieza a hacer por mí, la detengo y le digo:

  • Beati, no te preocupes, lo hago yo solo.

  • Lo siento -dice mientras me mira con un gesto adusto- pero Vivi me ha llamado hace un rato, recomendándome que te trate lo mejor posible, me ha ordenado que te dé un Servicio VIP. Así que relájate y déjame hacer.

Quiero seguir protestando, pero su actitud es decidida por lo que me relajo y la dejo hacer.

Me despoja de camisa y short, dejándome solamente en hilo dental, no me he acordado de que lo tenia puesto, pero ya es tarde, ella da un paso atrás y tomándome de la mano me hace dar una vuelta, apreciando mi cuerpo totalmente bronceado, que contrasta con mi hilo dental blanco.

  • De verdad que hay buen sol en Mancora, ¿no?- dice.

  • No te lo puedes imaginar, es realmente fabuloso, la playa, el mar y el sol es una eterna invitación al relax. Cuando vivamos allá, puedes visitarnos cuando quieras- digo.

  • ¿Vivir allá?, ¿cómo es eso?, cuéntame mientras te baño -me toma de la mano y me hace entrar a la tina, donde me siento, sumergiéndome en la tibia agua perfumada.

Le cuento rápidamente lo acontecido en Mancora, claro que sin entrar en muchos detalles; mientras avanza mi relato ella a empezado a desnudarse delante mío, mostrando su hermoso cuerpo a mis atónitos ojos, cada vez que se retiraba una de sus prendas, debo de retomar el cuento pues me pierdo ante la contundencia de tan bello cuerpo.

Una vez desnuda, pero quedándose con su diminuto hilo dental lila, entra en la tina, ya lista para acompañarme en mi (¿nuestro?) baño de inmersión.

Ahora que la tengo tan cerca de mí puedo apreciar su bello cuerpo desnudo, sus senos son increíbles, plenos de juventud y lozanía, mantiene su forma y posición por si solos, sus pezones están erectos, rodeados por sus rosadas aureolas. Su delgada cintura sirve de antesala a dos nalgas fabulosas, que superan ampliamente las de Vivi, son firmes a la presión y delicadamente suaves al tacto, su pubis está depilado a la brasileña y teñido de un suave tono rojizo, puedo afirmar que el solo verla ya es un gozo.

Me pide que me mantenga sentado y tomando una pequeña esponja empieza a enjabonar delicadamente mi espalda y pecho, concluido esto aplica un poco de crema facial sobre mi rostro y cuello. Me dice que es para hidratarlo y que recobre su lozanía.

Mientras actúa la mascara facial, toma mis manos y empieza un masaje ascendente desde la yema de los dedos así el hombro, hablando quedamente de cosas triviales y sin importancia.

Siento como la tension y cansancio va saliendo de mis extremidades superiores, cuando su masaje llega a los hombros se detiene un momento en la nuca, la que en verdad estaba dura por la tensión.

Me deja solo un momento, mientras va a traer algunas cosas que se ha olvidado en la sala, aprovecho en cerrar los ojos y dejarme llevar por la paz del momento. Me quedo gozando del agradable sopor que me ha invadido.

Me despierto cuando siento que un cuerpo entra a la tina, coloca sus piernas a mis costados y se sienta sobre mis piernas. Abro los ojos sorprendido y me da una delicado beso en los labios, reinicia su suave masaje de brazos, hombros y cuello.

Su caliente vagina, aun enfundada en su hilo dental, está sobre mi erecto pene, aun cubierto por la fina tela del mío. Una vez que termina con el cuello, me indica que me de vuelta, para dedicarse a la espalda.

Me levanto con un poco de vergüenza pues va a notar mi erección. Ella la mira sin disimulo y sonríe maliciosamente, diciéndome:

  • Ahora creo entender a Vivi.

  • ¿A que te refieres? - digo yo.

  • ¡Claro!, ¡con tremendo paquete que te manejas!, ¿como no va a quererte para sí?.

  • Gracias por el elogio, ¿pero tu crees que solo sea por eso?

Diciendo esto termino de colocarme dándole la espalda, ahora estoy con el culo al aire y bajo su atenta mirada.

  • Tienes razón. No es solo por eso, sino también por este rico pompis que te manejas- acompaña esto con un beso con dientes sobre una de mis nalgas que me hace gritar de dolor.

  • ¡Oye que eso duele! - grito, mientras sobo mi adolorida nalga.

  • ¡Perdona!, es que no me pude contener. No pasará otra vez. Me perdonas ¿no?

  • No te peocupes, ¡pero no lo repitas!.

Sin decir más empieza a recorrer mi espalda suavemente, mientras masajea ella empieza a sobar su pubis contra mi culo, al principio disimuladamente, pero poco a poco se anima más hasta que lo hace desvergonzadamente.

Más parece que me esta haciendo el amor, su pubis se desliza suavemente por mis nalgas, presionándolas y buscando colocarse entre ellas.

Termina con la espalda y baja sus manos a mis nalgas, las masajea delicadamente, recorriéndolas con la esponja, me dice que seria bueno darles un ligero peelling , al decir esto toma unos polvos de un tarro para aplicarlos sobre mis nalgas, procediendo a sobarlos en círculos, se siente como si fuese arena, pero la dejo hacer, pienso que ella sabe lo que hace. Al poco rato me enjuaga el culo, y me invita a tocarlo, se siente en verdad muchísimo más suave.

Sin esperar más me quita el hilo dental y me hace dar vuelta nuevamente, indicándome que me siente en el borde de la tina, con los pies dentro del agua, ahora le toca a mis piernas dice.

Ella toma uno de mis pies y masajeándolo suavemente empieza a subir por la pierna masajeando y pasando esponja delicadamente, sus manos suben hasta el muslo y cuando creo que ya llega a la parte interesante deja esa pierna y pasa a la otra, empezando su recorrido ascendente que ahora si lleva hasta la ingle, donde sobresale mi erecto pene, que ya deja gotear liquido preseminal.

Sin decir nada toma un poco de su polvo para hacer peelling y me lo aplica sobre mi pubis y pene, procediendo a masajearlos con ellos.

Se entretiene más de lo necesario en mi pene, lo recorre de arriba abajo con sus manos embadurnadas de ese polvo, me lastima un poco pero lo aguanto, mi erección lejos de disminuir está tomando proporciones megalíticas, mi glande está morado de tanta sangre acumulada, ella ha terminado con su tarea y procede a enjuagarme todo el cuerpo, apreciando su obra.

Una vez satisfecha con el trabajo echo, coloca mi pene entre sus manos y lo dirige a su abierta boca, rodeándolo con sus rojos labios, empezando una lenta y suave mamada. Después de un par de intentos, lograr introducir todo el largo de mi tranca hasta lo más profundo de su boca, mi glande llega hasta el fondo de su garganta, que complaciente lo recibe cálidamente.

Veo su cabeza subir y bajar sobre mi pene, mientras se va metiendo tres de sus dedos en su vagina, ella no demora en llegar a su primer orgasmo, a la vez que empiezo a derramar mi semen dentro de su cálida garganta. Ella traga toda mi lechada, sin dejar escapar ni una gota. Termina por limpiar con su lengua toda mi verga y echándose junto a mi, reposa su orgasmo, relajándose dentro de la tibia agua.

Al poco tiempo me animo a hablar:

  • Beati, creo que tu hermana se va a molestar un poco si se entera de lo que hemos hecho.

Me mira directamente a los ojos y afirma:

  • Ella me ha pedido que lo haga y me ha gustado hacerlo. No tienes porque preocuparte o sentir pena, ella y yo tenemos la suficiente confianza como para compartir un buen pene, ...eh perdón, un buen amigo.

  • Bueno si es de esa manera, que puedo decir.

  • No digas nada y relájate, todavía hay tiempo para algo más.

Mientras me dice esto, me empieza a dar el último enjuague, una vez que termina me pide que la enjuague yo, lo hago gustoso, mis manos recorren su suave cuerpo, sin pasar por alto ninguno de sus más recónditos rincones, estoy con mi mano sobre su vulva, que perfectamente depilada se siente muy suave y delicada al tacto, sin mediar palabra alguna cambio mi mano a su delicado ano, que muy cerca también pide su poco de atención.

Termino de enjuagar su hermoso cuerpo y salimos de la tina para secarnos mutuamente.

Una vez secos y aun totalmente desnudos, me toma de la mano y me dirige a mi habitación, donde me hace echar sobre la cama, ella toma de su bolso una delicada salida de baño, de un delicado tul lila, que si bien le cubre el cuerpo, deja traslucir todas sus hermosuras. Saca un enorme tarro de crema para el cuerpo y me pide que me ponga boca abajo, una vez que hago esto ella se coloca sobre mis muslos y echándose un poco de crema en las manos las dirige a mis nalgas, las abre y lubrica mi sorprendido ano, me crispo un poco por la confianza, pero ella me dice:

  • El Servicio VIP incluye un masaje total, parte de este es lo que estoy haciendo, por lo que te sugiero que te relajes y me dejes hacer.

No digo más y haciéndole caso me relajo, limitándome a sentir lo que hace.

Una vez que logra lubricar completamente mi agujero, siento que va introduciendo un objeto dentro de él, no es muy grueso por lo que pasa fácilmente, pero sí largo, una vez adentro me cierra las nalgas y se sienta sobre ellas. Es ahora cuando escucho un clic y siento que el artefacto dentro de mi va cobrando vida y empieza a moverse en círculos en lo más profundo de mi recto, al principio me causa algo de incomodidad pero voy sintiendo las sensaciones que se desprenden del estimulo de mi próstata, la está masajeando suavemente y de una manera muy agradable.

Ahora coloca sus manos lubricadas sobre mi espalda y empieza un sensual masaje con sus delicadas manos. La doble estimulación que siento es tal que mi miembro ha despertado y está erecto aprisionado por mi cuerpo.

Beati tiene magia en las manos, recorre todo milímetro de mi espalda, ejerciendo presión controlada sobre cada uno de los músculos, relajándolos y liberando tensión, tiene tal habilidad que me hace llegar a un punto muy alto de relax, que combinado con el estimulo anal me pone al borde de un orgasmo sin siquiera haber tocado mi pene.

Termina con la espalda y desciende a mis nalgas y piernas, mi culo es masajeado, magreado y comprimido como nunca antes, una agradable sensación de estar y no estar me invade todo el cuerpo, mi mente se desconecta de todo y me quedo dormido.

Me despierta con un beso anal, me pide que de me vuelta, echándome sobre la espalda. Le hago caso si acordarme de mi miembro que duro como piedra salta delante de sus ojos, ella se sorprende por el tamaño que ha tomado, creo que debe estar por los 26 centímetros, sus ojos despiden un destello de lujuria, mientras se relame los labios, yo estoy con los ojos entrecerrados, mirándola sin ser visto por lo que he visto claramente su gesto de deseo, decido darle un poco de privacidad y dejo mis ojos entrecerrados. Ella me coloca el control del vibrador anal en una de mis manos, dejándolo bajo mi responsabilidad.

Se embadurna un poco más de crema en sus menudas manos y resueltamente las dirige a mi pene, bañándolo totalmente, lo empieza a recorrer de arriba abajo masajeándolo y esparciendo la crema. Una vez que está bastante lubricado, se sienta sobre él, metiendosela toda de un solo golpe en su apretado ano, entra fácilmente, llegándole hasta lo más profundo. Se detiene un momento acomodándose sobre mí y empieza a masajear con sus lubricadas manos mi pecho y vientre. Se dedica a masajearme, manteniéndose quieta sobre mí, pero no por mucho tiempo.

Sus caderas empiezan a tomar un suave movimiento de vaivén, cambiando a un sube y baja lento pero profundo, sin decir nada toma el control remoto del vibrador y lo coloca en velocidad media, aumentando el estimulo sobre mi próstata, las sensaciones van en aumento.

Ella goza con mi verga dentro de su suave ano, su rostro está relajado, solo rebela lo que siente cuando se coloca todo mi miembro viril dentro de sí, en una de esas se detiene y saca de su bolso una prótesis peneana, que sin más se la coloca en su caliente vagina, la lubricación es tal que permite el ingreso fácilmente, metiendosela hasta lo mas profundo, las correas que trae me las amarra a mi cintura, quedando ella llena por sus dos agujeros, ahora sí su rostro esta radiante, debe sentirse muy bien.

Reanuda sus movimientos de cadera, lentamente al principio y pero va aumentando el ritmo hasta que goza de su segundo y tercer orgasmo.

Me pide a gritos que la llene con mi leche, que le rebalse los intestinos de semen, ahora es cuando coloca el vibrador a su máxima velocidad, lo que me estimula de tal manera que empiezo a derramar torrentes incontenibles de semen en lo más profundo de su ser. Ella siente cada uno de mis chorros y goza de su cuarto y quinto orgasmo. Apago el vibrador que aun tengo ensartado en el culo, me ha llevado a un orgasmo tan intenso que me siento realmente agotado. Le hago gesto de sacar mi miembro de su ano, pero ella no desea dejarme salir, como no tengo escapatoria alguna, la aproximo a mí abrazandola mientras jugueteo con sus preciosos senos y mordisqueo sus duros pezones.

Una vez relajados, ella se dedica a aplicarme crema humectante en todo mi cuerpo, se esmera en atender mi pene y adolorido ano, les echa otras cremas adicionales, para mantenerlos tersos y suaves, dice.

Mientras termina, me voy perdiendo en el limbo al que lleva el cansancio extremo, pienso que esta semana que va pasando ha cambiado toda mi vida, he tenido la suerte de conocer dos mujeres que han resultado mi tan buscado prototipo de mujer anal. Ellas me han proporcionado experiencias nunca antes vividas, he tomado la decisión de no dejarlas ir de mi vida.

Debo hacer todo lo necesario para conseguirlo.

....

Han pasado dos meses desde que Viviana se cruzo en mi camino, ella llegó y mi vida no ha vuelto a ser la misma.

Estoy en proceso de divorcio, he adquirido una hermosa casa en Mancora, hoy inauguro el Centro de Multiservicios "LA_LUCIERNAG@.NET", con servicios de cabinas de Internet, tienda de ropa sport, de baño y lencería para damas y caballeros y Sex Shop.

Viviana ha resultado la perfecta socia en el negocio, ella ha dirigido la decoración de la tienda, a la vez que la instalación de su nuevo taller de confecciones.

Ella se encargará de la confección y venta de los productos de vestir.

Además me ha comprometido a que yo sea el modelo de la ropa interior de hombre y a Beati para la de mujer.

Beati está incluida en nuestros planes porque lo a querido así. Ella vivirá con nosotros, hemos decidido ser una pareja de tres, ellas son las mas felices por la decisión tomada.

Beati ha decidido encargarse del Sex-Shop, dice que también podría dedicarse a dar masajes.

Estamos felices por tenernos mutuamente, no tenemos ningún problema en compartirnos y la cosa va caminando bien hasta ahora.

Tengo que dejar de escribir pues mis bellas y queridas mujeres ya están listas para ir a la playa, hoy van a mostrarme unos nuevos modelos de hilo dental para el verano que se aproxima.

Ya he tomado mi infusión de shapareco y estoy listo a reventar lo que se ponga al alcance de mi verga.

Pienso que despues de todo, ¡Mejor...IMPOSIBLE!.

Adiós.

PD: Si van por Mancora, los espero en La Luciernaga y si mencionan esta pagina electronica, les daremos una sustancial rebaja en lo que es el Servicio VIP, si se atreven a solicitarlo.