Mi dulce Erika
Sentía una atracción fatal por la amiguita de su novia... sus fantasías seran realidad.
Ok, pues yo tengo a mi novia, tenemos actividad sexual regular, y pues no me quejo, pero tiene una amiguita, que esta buenerrima, tiene su carita inocente, de chiquita, sensualita, sexy, es un culazo con unos labios carnosos que se antojan, morena clara, de ojos de un verde impresionante pero lo destacable eran sus nalgas, abundantes y paradas con unas piernas torneadas con gruesos pero firmes muslos, tenia como 2 años de conocerla y lo único que quería era cogérmela, pero por el ano, no se por que tenia esa idea, pero es que tiene unas nalgas tan deliciosas, que se dejan entrever a través de sus pantalones o de sus faldas, exquisita.
Lo que paso fue que en el cumpleaños de mi novia, fuimos a bailar, y nos acompaño su amiguita con su novio, después de la diversión decidimos regresar pero ellas dos estaban hasta atrás, nos fuimos en mi carro y dejamos primero al chavo en su casa, después nos fuimos para dejar a su amiga, pero como estaba pedísima, pues nos pidió que no la lleváramos a su casa por que la podían regañar, entonces fuimos a mi casa (vivo solo), y allí estuvimos platicando en la cocina, hasta que mi novia se quiso ir a mi recamara.
La lleve y platicamos un ratito, cuando terminamos se quedo dormida.
Fui a ver a su amiga, estaba bien dormidota, y la cargue para llevarla a la sala, fui por una cobija, y cuando regrese le vi sus nalgas me impresionaron y dejó ver entre sus piernas un mechón de vellos oscuros, solo fue un instante pero fue una visión gloriosa. Redonditas y grandes; como traía minifalda, pues se la subí y le acaricie las nalgas, las tenia suaves como durazno, claro que no me perdí el gusto de besárselas y acariciárselas con la cabeza de mi pene, estaban tersas, riquísima.
No me pude contener y le hice a un lado la tanga y le lamí su concha, entonces medio reacciono y me detuve, se volvió a dormir y le seguí. Cuando empezó a gemir pensé que se iba a despertar, y si, se despertó, me vio a los ojos y yo pensé que iba a armar un escándalo, pero no, se limito a sonreír y se mordió los labios con ganas acariciándome el cabello, entonces seguí haciéndole sexo oral, a ella se le erizaba la piel y gemía dulcemente, solté el cierre de su faldita y esta se cayó por su propio peso, seguidamente le tocó el turno a tanga que por cierto la rompí, ella abrió sus piernas todo lo que el sillón le permitía, la imagen resultante era de lo mas erótico que imaginarse pueda, recorrí sus piernas con mis manos de abajo arriba, muy lentamente, acaricié sus muslos con suavidad, dándole al mismo tiempo besitos sobre su pubis, mientras con una mano seguía acariciando la cara interna de sus muslos con la otra inicié una caricia enervante del exterior de su vagina, le separé dulcemente los labios y con un dedo excité su clítoris, no le dejaba en paz su clítoris, se lo aprisionaba con los labios y luego succione suavemente, ella se retorcía y decía no se que tanta cosa, se frotaba los senos con fuerza para aumentar su excitación. Hasta que se empezó a quitar la blusa y el sostén, y le agarre sus senos no muy grandes pero firmes y bien formados con unos deliciosos pezones rosas, y como esta bajita y delgada, la cargue y la voltee, la puse en cuatro patas, ella cogió con su mano mi pene y lo situó en la entrada de su vagina, bastó empujar suavemente y comenzó a deslizarse por aquel túnel adaptándose a el cómo si fuese un guante, y la penetre hasta que sentí mis pelotas en sus nalgas ¡que rico aprieta la canija!, se sentía tibia, mojada, resbalosa y apretada ¡riquísima!, y metió su cabeza entre los cojines para gemir mas a gusto.
Yo también hacia ruidos parecidos a los que hacen los búfalos, por que de verdad es una delicia de mujer, y me la cogí rapidísimo, le embestía con tanta fuerza que su cabeza pegaba con el respaldo del sillón, y como a mi no se me quitaba la idea, la hice que me chupara los dedos índice y medio, y se los comencé a meter por su ano (las dos cosas al mismo tiempo), y así hasta que me hizo la seña de que se iba a vaciar y logre lo que nunca: los dos terminamos al mismo tiempo.
Entonces se la saque y la hice que me lamiera la picha y cuando ya la tenia bien dura otra vez la acosté en el sillón y se la volví a meter, rapidísimo, incluso se escuchaba como se golpeaban nuestros cuerpos, sus muslos temblaban cuando yo tocaba el fondo de su ser mientras ella se mordía los labios y gemía apretando su vagina, pero cuando estaba bien mojada se la saque y se la metí por el ano, nada mas no grito por que sabia que nos iban a escuchar, pero hasta lloro, por que le dolía muchísimo entonces ella se agarro el clítoris con los dedos para masturbarse y ya no sabia si le dolía o le gustaba así hasta que me vine en su ano. Entonces ya me dijo que me subiera a mi cuarto y lo hice, al rato nos fuimos a dejarla a su casa, entonces cuando se despidió de mi me dio un papelito que decía "No tienes madre, en las narices de mi amiga, me cogiste como quisiste, por donde te dio la gana y ni siquiera te fijaste si me dolió, cabrón, me va a dolor un chingo para cagar, te pasaste....", ya parece que no le gusto ¿no?, yo no la obligue. ;)
Una semana después mi novia me dijo que llevara a su amiguita a comprar no se que cosa, y cuando quise platicar con ella sobre lo que había pasado(yo iba manejando) todavía pensando en que casi la había violado por que estaba peda, cuando sin mas me bajo la bragueta me la comenzó a jalonear y como se me paro de volada me la mamo, yo ni tardo ni perezoso busque como desesperado donde estacionarme, se subió la falda, y para colmo no traía calzones la muy perra, y se puso en cuatro patas, sin pensarlo se la metí por el ano, costo trabajo para que le entrara, pero me valió, decía que le dolía mucho, pero ella misma me jalaba (masoquista la escuincla), y no pare hasta que me vine en su ano.
Paso el tiempo, y resulto que se iba a casar, por lo que nos invito a su boda, lleve a mi novia a la casa de su amiga para que la viera con el vestido, y la ayudara a arreglarse y no que tanto.
Llegamos a su casa, mi novia y yo subimos a la recamara de su amiga, y se veía preciosa, en eso llego el novio y toda la atención de la gente se centro en el para impedir que viera a la novia antes de la boda, en lo que participo mi novia que se fue a la sala, yo aproveche para acercarme a ella y sin decir nada, cerré la puerta con seguro, me le acerqué y le bese las tetas, le agarre una y se la saque del escote, le subí el vestido, le metí la mano y le frote el clítoris, acto seguido le metí los dedos en la vagina y con la otra mano le frote el ano tratando de meterle los dedos, y lo hice mientras me sacaba el pene de la bragueta, después me metí abajo de su vestido, le succione rapidísimo su clítoris y se mojo de volada, me levanto me desabrocho el pantalón, agarro mi pene lo lamió un poco y se recargo en un mueble, me jalo para que la penetrara, yo claro esta no me resistí y me la cogí (¡horas antes de su boda, que despedida le di!), como siempre húmeda, tibia, resbalosa y apretadita, deliciosa.
Claro, no me quede con las ganas y la penetre por el ano y en esta ocasión ni pío dijo, la embestía con toda la fuerza que podía, en las otras dos ocasiones no se la metí completa por el ano pero en esta se la deje ir hasta el fondo, sentía mis pelos pegados con sus nalgas, se la sacaba y se la metía toda de un jalón, varias veces, así hasta que sentí que me venia. El orgasmo le llegó tanto que sentía sus contracciones, con una mano en mi cadera me jalaba para que entrara más profundo en su ano, yo también sentí la proximidad de mi leche, el clímax llegó a su punto mas alto mi semen salió disparado dentro de su intestino, vibré y se me erizaron los vellos por el impresionante polvazo, nunca imaginé esa emoción, chorros de semen agradecían el gusto que su trasero me había regalado. Cuando se la saqué se tiró boca arriba, mi verga goteaba leche, me la cogió con la mano y la exprimió se chupó los dedos saboreando mi semen
Nos hicimos tontos aparentado que solo platicábamos, regreso mi novia y la boda se realizo, aunque yo no podía aguantarme la sonrisa, por que ella caminaba gracioso, seña de que le dolía el ano un buen. Fue la ultima vez que la vi pero me vale, por lo menos me la cogí. :)