MI DON: La divina tragedia.

Versión extendida y completa de mi primera historia, la vida y búsqueda del amor de Raúl en un mundo tan cruel como despiadado, y de su conversión de un chico no del todo normal siendo ignorado por las mujeres, a volverlas literalmente locas.

MI DON.

Introducción.

Hola, este es mi 1º libro y como tal pido disculpas anticipadas por todos lo errores cometidos. Estos hechos son mezcla de realidad y ficción, no voy a mentir diciendo que esto es 100% real. Lo primero es contar mi historia, intentaré ser lo más breve posible.

Mi nombre es Raúl, tengo 25 años y lo ocurrido empezó en mis últimos años de Instituto, 17-18 años, considero mi infancia como algo normal en cualquier crió, familia normal con padre, chapado a la antigua y alma bohemia, madre devota y algo bruja en el buen sentido, y hermana mayor, mandona y efervescente pero de buen corazón, todos de buen comer y algo pasados de peso, sin cosas raras. Vivía a las afueras de Madrid, aunque crecí en la gran ciudad hasta los 12 años en que nos mudamos, mi infancia fue normal, con las connotaciones que eso lleva, sabemos de sobra lo crueles que son los críos, y mientras unos son los gafotas, otros los empollones, las feas, los enanos, los guarros, las zorras....etc. Todos encasillados y etiquetados en un rol, pues a mi me tocó ser el gordo, y la verdad es que lo era. Nunca me privé de nada al comer, pero fue con 13 años cuando empecé a coger peso, tampoco es que a la hora de hacer deporte huyera, jugaba mucho al fútbol con los amigos y estaba apuntado a muchas actividades extra escolares a las que mi madre me hacia ir para hacerme perder peso, ya fuera natación, esgrima, baile, yudo, taekwondo o karate, pero no me ayudaban a perder peso, solo me dotaron de conocimientos y habilidades más o menos útiles en mi historia. Lo bueno era que seguía creciendo, llegué muy rápido a coger gran altura y corpulencia, eso disimulaba algo mi barriga, todavía no lo sabia pero esto seria muy importante en adelante, siempre me decían que era cosa de genes o familia, y así lo acepté.

Como casi todo gordo, o pongamos cualquier complejo, en un colegio o instituto al final o lo afrontas o te hundes, y como tal siempre lo llevé bien, el estigma del “gordo gracioso” me ayudó ha hacer amigos, una actitud simpática y algo socarrona me llevó a tener una vida social muy buena, tenia grupos de amigos en el colegio, y luego otro en un parque al que solía acudir con mi madre por las tardes y los fines de semana. Eso si, con las chicas ni hablar, todas me querían como su amigo, algo que me sacaba de quicio, pues no paraba de ver como caían una y otra vez en los brazos de amigos o compañeros y luego salían escaldadas por las tonterías de los críos de la edad, siempre pensando que yo seria mucho mejor que ellos como pareja, pero nunca atreviéndome por mi aspecto a dar ese paso que se necesitaba. Un tío que con 17 años ya rondaba el 1,85 y los 120 kilos no atraía demasiado, cierto es que era moreno, de ojos negros y buenas espaldas, pero no compensaba, a esas edades el aspecto exterior es muy importante.

Además, tengo algo de educación clásica, por mi padre, algo mayor que mi madre y chapado a la antigua, algo que en el fondo me gustaba ya que me enseñó a pensar por mi mismo y obrar con responsabilidad sin miedo a los demás, pero también a tratar con demasiado celo a las damas, y lo mezclaba con una sinceridad brutal, heredada de mi madre, "las verdades solo hacen daño a los que las temen, y hacen fuertes a quienes las afrontan", solía decirme. Una mezcla peligrosa, no tienes miedo a la verdad ni a lo que piensen los demás, actuando sin pensar. También, o en consecuencia, algo bocazas, pero sin mala intención, solo por hacer la gracia puedo ser algo cabrón. Nunca he sido un lumbreras, me gusta la historia pero no estudiar, soy listo, muy vago eso si, si estudiara sacaría un 10, pero con solo atender un poco en clase sacaba de media un 6, ¿por que molestarme?, al fin y al cabo la mayoría es información inútil que pasado el examen no volveré a necesitar.

Con el paso de mi infancia y la llegada de mi pubertad empecé a sufrir jaquecas, achacadas a las horas de tv, ordenador o a querer faltar a la escuela, ciertamente algunas lo serian, pero otras no, me diagnosticaron migrañas, cuando me daban ningún medicamento era capaz de calmarme, solo pasarme 1 o 2 días a oscuras y sin ver a nadie hacia que se me pasaran, así que cansados de aquella rutina en mi familia decidieron hacerme un escáner y saltó la sorpresa, Con 17 años, apunto de hacer los 18 e iniciar mi último curso de instituto, un tumor benigno alojado cerca da la pituitaria, no era grande ni peligroso pero me provocaba los dolores de cabeza y al estar cerca del controlador de las hormonas, suponían que mi crecimiento adelantado y volumen corporal se debía a ello. Se decidió operar, no recuerdo haber pasado tanto miedo en mi vida como las horas previas a la operación, gracias a dios todo salió bien, y con el apoyo de mi familia y amigos, todo avanzó hacia delante, y es aquí donde realmente comienza mi historia.

Raquel - El despertar con la enfermera.

Después de la operación, y unos cuantos días en la UCI de los que recuerdo bien poco ya que me tenían sedado con un aparatoso vendaje en la cabeza, e intubado hasta poder verificar que no había daños cerebrales, me subieron a planta, y pasada una semana empecé ha hacer rehabilitación. Primero ejercicios de habla, coordinación y razonamiento, después físicamente, mi cuerpo era un trapo, no tenia fuerzas y había mucho que mover, pero pasaron los días y casi sin esfuerzo empecé a perder kilos, cogí fuerzas, en mi casa alucinaban de como me estaba quedando y ante esa celeridad muchos médicos me pedían calma, obviamente yo no quería, me encantaba aquello, tenia que llegar el momento en que mi tozudez cayó ante mi físico. A pocos días del alta, en unos ejercicios de rutina, decidí forzar y mi pie cedió, cisura en el empeine y otra semana de reposo total. Aquí ocurrió la magia, debido a mi necesidad de descansar me asignaron un cuarto individual y una enfermera en especial para mis cuidados, se llamaba Raquel, la llevaba viendo muchos días y había cierta amistad, me suele pasar en cuanto me conocen, caigo bien, hasta el punto en que en situaciones donde mi familia no podía estar, era ella quien me ayudaba a.....la higiene personal, solía solicitar la ayuda de algún celador fuerte, pero andaban escasos de personal, y yo, hinchado de orgullo trataba de hacerme el duro moviéndome con la otra pierna.

Raquel no era una top model, pero el rollo enfermera, mi pubertad y el tiempo sin “desahogarme” la hacían preciosa, tenia 28 años y en realidad era una chica normal, quizá hasta algo escuálida, sin muchas curvas, de 1,70, rubia teñida con raíces morenas, media melena que siempre llevaba recogida. El uniforme no le hacia justicia la verdad, siempre de blanco impoluto, muy tapadita, salvo algún día caluroso que no llevaba camisa debajo, y con el movimiento, dejaba ver algo de su sujetador, y con esas sandalias con agujeros, muy cómodas pero poco estilizadoras. se le adivinaba buen culo, más de una vez al agacharse a coger algo se le notaba, iba corta en pechos, no llegaría ni a una 80, tenia gafas de cerca, unos preciosos ojos marrones y una boca enorme, de esas sonrisas que enseñan encía por todos lados. Era muy graciosa, y tenia muchas tablas con los pacientes. Ella misma fue la que, en una de tantas visitas que me hacia, en que yo ya casi me movía solo, me comentó.

-RAQUEL: ¡mírale que chulo!, que bien te mueves ya.

-YO: gracias, me encuentro mucho mejor y cada día me cuesta menos moverme.

-RAQUEL: ya te veo, en nada estarás rompiendo corazones por ahí – creo que le gustaba hacerme sonrojar.

-YO: jajaja seguro – su presencia era agradable y eso me ponía nervioso.

-RAQUEL: anda, quédate quieto que voy a tomarte unas medidas para el seguimiento

A lo que cogió unas cintas métricas y un cuaderno de notas con los que iba a todos sitios, la verdad es que era increíble, el crecimiento acelerado había parado, seguía por el 1,86 de altura, pero lo importante era que había bajando de peso, en 94 kilos estaba, unos 30 kilos perdidos en 1 mes y medio, donde ya había cumplido los 18 en el hospital, con fiesta y tarta en la 3º planta, había perdido muchísimo volumen en el estomago y gracias a la rehabilitación aquello no colgaba demasiado, estaba lejos de una buena forma física y de marcar tableta pero el cambio era impresionante en todos los aspectos, hasta que......en un descuido al bajar los brazos, y con Raquel terminado de tomarme las medidas de la cintura, se me cayó la bata al suelo quedándome desnudo. Muriéndome de vergüenza me tapé como más rápido pude y me di la vuelta, esperaba alguna sonora carcajada, y deseaba alguna actitud profesional restándole importancia al asunto, pero no hubo nada, solo silencio y mi cara roja, me disculpé y con más miedo que otra cosa me di la vuelta y lo que vi me asustó, Raquel totalmente pálida con la boca abierta y tapándosela con una mano, no lo entendía, “¿acaso ha visto algo raro, algo médico?”, tan absorta la vi que decidí preguntarla

-YO. ¿Estás bien? Raquel, si me pasa...... algo............ dímelo - tras un par de segundos volvió en si

-RAQUEL: si......perdona.......nada, no he visto nada.........malo.

Me la tomé a risa, esa última palabra me lo pareció, pero terminó de recoger y se fue. Los siguientes últimos días fueron algo extraño, Raquel seguía con sus rutinas pero la notaba algo más distante, incluso oí que había pedido algún cambio de turno, pero en mi higiene diaria se tomaba más tiempo del habitual y ya no me gastaba bromas ni me las respondía, el penúltimo día, preocupado por el tema, la pregunté.

-YO: oye, no se si he hecho algo malo, o si te he ofendido, pero llevas unos días muy rara y distante, y no se por que - algo sorprendida me miró.

-RAQUEL: si bueno, siento que lo hayas notado, pero ando algo cansada ......- al sonarme a excusa, insistí.

-YO: ¿esta es de las veces en que las mujeres decís nada, pero es algo? - algo hastiada y pensando mucho lo que iba a decir, sopló.

-RAQUEL: oye mira, no es que me importe, pero no te hagas tanto el loco, se que te diste cuenta…..- totalmente perdido respondí

-YO: ¿de que? te juro que no se de que me hablas - después de pensarse seriamente si responder de nuevo, suspiró.

-RAQUEL el otro día, cuando se te cayo la….bata – lo recordé el instante y me puse como un tomate.

-YO si ¿que ocurrió?

-RAQUEL: pues que te puede ver........todo y.......mira soy enfermera, he visto de todo……. pero eso no es normal… – pasaron unos segundos que me parecieron horas, y viendo mi cara de bochorno, leyendo en mi vergüenza que no sabia de que hablaba, ella siguió -….¡¡¡¿¿no digas que no te has dado cuenta o no eres consciente de lo que tienes ahí?? Es enorme!!! - algo confuso balbuceé.

-YO: pues la verdad es que....no, vamos no sé….. no me he parado a pensar, siempre he ido con mucha vergüenza por mi aspecto y la verdad es que no he ido por ahí comparando, nunca me pareció nada raro - siendo cierto, siempre me pareció un pene normal.

Pero después de la operación y la perdida de peso, mi pene había sufrido las consecuencias de las hormonas y en comparación a mi cuerpo actual, no el de antes, se veía grande, algo que tenia que haber visto yo mismo, pero que por algún motivo, hasta que ella no lo dijo, no le di importancia.

-YO: ¿de verdad crees eso? por que la verdad es que nunca la........ usé - viendo mi cara de incomodidad, retomo el hilo.

-RAQUEL: pues eso, ya lo sabes, y desde que lo vi, se me han pasado por la cabeza cosas, no sé, vas con muleta incorporada jaajjajajja - y allí estaba de nuevo la Raquel dicharachera y graciosa que me había cuidado tanto tiempo.

Empezamos a hablar, y la comenté que por mi físico, mis escaramuzas sexuales eran casi nulas, más que algún beso robado o algún baile caliente, y si, obviamente era virgen. El tono de la conversación era caliente, pero fue un descubrimiento para mí, ella no paraba de hablarme de novios, parejas y de cosas de mujeres que para mí eran un misterio hasta entonces, y de como ella había tenido sexo con hombres que no gastaban la mía ni de lejos, la conversación dio un vuelco cuando me preguntó.

-RAQUEL: ¿tú nunca te has medido el pene o has comparado con amigos, o vídeos?

-YO: si, bueno no, nunca le di importancia, mi aspecto no me deja llegar a más, me da vergüenza ir a vestuarios con los demás chicos, realmente nunca me importó, lo veía como una herramienta que algún día usaría, pero que no sabía cuando.

-RAQUEL: ¿pero habrás, no se, sacudido el pájaro no?

-YO: jajajaja si, es cierto que todo adolescente lo hace y más los hombres, pero ese tipo de juegos, no sé, no me servían de nada, cuando empece con 13 años a tocarme andaba muy corto, no se si 7-8 cm de largo..... - me sorprendí a mi mismo al hablar con tanta naturalidad de ello.

-RAQUEL: pues eso ha cambiado, ya eres todo un hombre.....

Se levantó, cogió la cinta métrica y me pidió que me pusiera en pie, yo sin entenderla del todo, aún, empezó a tomarme las medidas de control, todo igual, por algo que no entendía el casi metro de hombro a hombro de espalda me hacia enorgullecerme, de peso andaba ya por los 87 kilos, la masa corporal había bajado mucho pero tenia carne flácida. Cuando se disponía a medirme las piernas, se agachó, y sin más tiró de la bata, aquello me descolocó, sujeté como pude la prenda, no sabia que hacer, me tenia muy confuso, era un novato y aquella cara que me puso, me congeló

-RAQUEL: venga déjame, suelta la bata y vamos a ver que tenemos - lo hice con calma, solté la bata despacio y cuando cayó, mi polla empezó a retraerse, si, maldita, mi 1º experiencia y la jodida se empequeñecía, ella se dio cuenta, y con una sonrisa tonta me dijo que así no se podía hacer, que tenia que medirla en reposo y en excitación para ser...........rigurosa

Os juro por dios que no hubo, hay, ni habrá nunca manera de decir la palabra "rigurosa" con más entonación sexual. Solo con eso se me pasó el susto, me relajé lo que pude, mientras ella se fue a asegurarse de cerrar la puerta de la habitación, contoneando aquel trasero que más de una vez me pilló mirándole, cuando se dio la vuelta, se soltó el pelo de forma muy sensual, jugueteando con la cinta métrica en las manos, se acercó con tanta calma que no soporté más y me lancé a por ella, la medio estampé contra la pared como si fuera un lobo ante carne fresca, y sin saber muy bien que hacer me queda a 1 milímetro de sus labios y dejé que ella decidiera.

-RAQUEL: antes hay recabar datos.....- sonreía entendiendo lo inexperto que era, se acercó a mi oído y soltó un delicioso y exquisito - ….te voy a medir la polla.

Se deslizó contra la pared de espaldas y quedó a la altura de mi miembro, sin estar en erección, cogió con su mano la punta del capullo, con prisa y sin miedo, casi como admirando, me espetó algo que me dejo frió

-RAQUEL tienes bastante bello, e incluso así parece enorme, deberías depilártelo y seria mayor la impresión.

Nunca le presté mayor importancia al pelo en mis partes hasta ese momento, ella sabia lo que hacia, o a mis ojos parecía una experta, se echó la cinta a la boca y con ambas manos me sostuvo el pene lo mejor que pudo, cogió la cinta, con la mano derecha puso el 0 en la base de mi miembro y empezó a estirar con la mano izquierda la cinta por todo el largo, sentí cada centímetro, hasta que con cuidado llegó a la punta y suspiró.

-RAQUEL joder, y aún esta en reposo, calzas unos..........19 centímetros de largo, a ver de ancho…..

Yo la miraba pasmado por como, en comparación con ella y no con mi físico, el único con el que había tenido visión directa en la comparación, realmente parecía enorme y sus palabras me llenaban de algo, no se de que, pero de algún sentimiento que aún no sabia que era. Cogió la cinta y la puso de lado para medir el ancho.

-RAQUEL: en el lado más grande esta en unos 4 centímetros de ancho - la cosa se complicó, yo ya más que relajado estaba empezando a notar sus "caricias médicas", y aquello empezó a levantarse, le dio tiempo a Raquel a alzarse de nuevo, aprisionada entre mis brazos apoyados en la pared, me miró a los ojos y preguntó que tal estaba.

-YO bi...bien hu...huh...uhu...hu - ella sonrió, y yo asentía con la cabeza como un cachorro ante un juguete, la pregunté que venia a continuación, deseando un arranque pasional, pero nada más lejos, ahora tocaba medir con el "miembro en estado erecto", y se volvió a deslizar hacia abajo. Que pese a lo erótico de todo, siguiera usando palabras tan técnicas, me encandilaba

Esta vez sin miramientos cogió con ambas manos y empezó a pajearme muy lentamente, aquello me parecía la gloria, inocente de mi, sin demasiado meneo se me empezó a poner como una piedra, si no lo estaba ya era de milagro, no si cabe era la 1º persona que me estaba haciendo una paja que no era yo. Durante el corto proceso de endurecimiento no paraba de escuchar a Raquel bufar, como no dando crédito, y al final cuando estaba como una estaca se paralizó medio segundo y como recordando para que estaba allí, cogió la cinta métrica y de nuevo cogió medidas, algo más acelerada esta vez.

-RAQUEL: largo.......... ¡¡¡¡¡¡¡¡joder 25 cm, y de ancho casi 7, la virgen!!!!

Casi no me lo creía, ¿como era posible que no me hubiera dado cuenta? al ver el pene erecto a poco espacio de su cara no parecía real, “¡¿de donde ha salido esto?, ¿las putas hormonas? ¿La perdida de peso? ¿Herencia? ¿Pubertad?!”. La verdad es que me daba igual, cuando me quise dar cuenta tenia a Raquel de nuevo de pie entre mis brazos, y con algo de guasa me soltó.

-RAQUEL: ten cuidado, con eso vas a asustar a más de alguna, no te digo ya jovencitas de tu edad que no estén preparadas, las vas a destrozar.

Todo aquello me parecía perfecto, era como un sueño, como si un genio de lámpara me hubiera concedido un deseo, y si no fuera por ella hubiera tardado mucho tiempo en darme cuenta, quise agradecérselo, quería que fuera la 1º mujer, MI 1º mujer, pensado rápido y mal para insinuarme solté una insinuación demasiado obvia.

-YO: ¿tienes razón .....pero...........que puedo hacer ahora? no tengo ni idea....... ni experiencia.........

He de reconocer que en esa frase había más suplica y deseo de lo que quiero pensar. Ella torneó los ojos y por unas décimas vi duda en su mirada, pero se quitó las gafas y me besó, un simple beso, sin más, un pico mal llamado, corto, suave y delicioso, el 1º que alguien me daban sin verse obligadas por el juego de la botella. Aquello me electrificó la espalda, y cuando ella se retiró avance en búsqueda de sus labios de nuevo, de inicio apartó la cabeza, pero entre mis brazos, apoyados en la pared desde hacia tiempo, no había mucho margen de movimiento, nuestros labios se volvieron a juntar con una ternura que me pareció inocente, ella sonrió.

-YO: ¿que pasa?

-RAQUEL nada, es que besas como un periquito, jajajaja no mueves los labios, ni nada, eres como mi 1º beso.

Molesto con su insinuación la reprendí sobre mi poca experiencia, y arremetí de nuevo esta vez intentando recordar besos en películas, muy grotesco debió parecer, ella me separó y se hizo cargo de la situación, me cogió la cabeza.

-RAQUEL: así.....

Acercó lentamente sus labios a lo míos, cerrando los ojos, y empezó un beso, normal al inicio, yo la iba siguiendo en sus movimientos, pero fue acelerando y terminó en un beso de tornillo que casi me deja seco, abrió la boca y guiado por ella hice lo mismo, empezó a meter la lengua y se chocó con la mía, un poco torpe pero empecé a cogerle el ritmo. A cada beso me acercaba con mi cuerpo al suyo, hasta que llegó el punto en que no había más sitio y “ensarté” mi enorme polla recién descubierta en su vientre, ella aprovechó, y con una mano la colocó de tal manera que iba desde su pelvis hacia su pecho, y terminó de pegar mi cuerpo al suyo, empezó un sube y baja muy leve con el cuerpo, mi altura la ayudaba, después de un rato glorioso me separó y me llevó a la cama de la mano aún cojeando de mi lesión en el empeine, podría estar muriéndome sin piernas que ni un ejercito armado hubiera evitado que la siguiera, un dolor en el pie no seria un impedimento para seguir aquella maravilla de culo.

Me sentó al borde de la cama, ella empezó a quitarse la parte de arriba del uniforme, dejándose el sujetador, era gránate, sin florituras, y que realmente adornaba, ya que no tenia demasiado pecho ni tampoco necesitaba de sujeción, bien plantados sus senos, no tenían peso para que la gravedad los hubiera afectado, los vi mejor al bajarse el pantalón. Unas bragas de dibujos, cómodas pero no muy sexys, se plantaron ante mí, me fijé en sus torneadas piernas. Pero a mi me daba igual todo, era una diosa, en ese momento lo era, para mi.

Se acercó mordiéndose un dedo con lujuria y me volvió a besar con pasión, como alumno aventajo ya sabia como funcionaba aquello, entre besos, la atraje hacia mi cogiéndola de la cintura, y con una mano la acariciaba la mejilla y la otra arqueaba su espalda hacia mi, mientras ella, con una mano sujetaba mi cabeza y se enredaba en mi pelo, ya libre de vendas de la operación, la otra mano de ella bajó hasta mi miembro palpitante y empezó a masturbarme con calma y acompasando sus movimientos, cada embestida entre nuestros cuerpos era correspondida con un movimiento de su mano, me puso a mil, una de mis manos cogió vida propia y fue cayendo por su espalda hasta que acabó en su espectacular trasero, realmente estaba terso, las horas de pie por las rondas en el hospital la tenían en forma, empecé a sobar sus glúteos con ansia por encima de las bragas, y viendo la celeridad de la situación, probé a meter mi mano por dentro de ellas acariciando con cierta dosis de fuerza su culo, ya piel con piel, sin dejar de besarnos, y con tanto tiempo sin evacuar, y ante una primera experiencia de ese tipo, tan centrado en recordar aquel momento en mi cabeza, no me percaté de mis propias reacciones, eyaculé como un animal, sin avisar ni nada, ella apenas se apartó y esparcí todo mi semen por mi vientre, la cama y parte de su pecho, casi hasta la barbilla.

-YO: lo.....lo siento, no puede........... ohh dios......... es que.........- ella me cortó, mirándose a si misma pringada de mi semilla, con una sonrisa enorme entre la lujuria y la lastima, creo que se sentía poderosa ante un chico inexperto.

-RAQUEL: no pasa nada, tranquilo, es normal, bueno………. no, tanta cantidad no, llevabas tiempo sin tocarte ¿no? …- algo avergonzado respondí que si, a mi entender desde la operación, tenia otras cosas en que pensar y centrarme - …. pues esto no va a quedar así.

Dijo mientras miraba mi pene que se volvía a retraer ante mi precocidad, se limpió lo que pudo con unas servilletas, igual que a mi, me tumbó boca arriba y se subió encima mía, a horcajadas, se quitó el sujetador y me dio a ver sus preciosos, aunque pequeños, senos, me lancé a ellos, eso se veía en vídeos porno y sentía un debe para con ella, le gustó y continué hasta que mi pene volvió a estar en reposo, mezclaba sus senos con su cuello y labios, ella empezó a notar entre sus piernas que mi nuevo mejor amigo estaba a tono de nuevo, y empezó a bajar, suavemente me iba besando desde mi frente hasta el ombligo y una vez allí me miró, sonrió y adivinando que iba hacer, aguanté la respiración, no se por que, pero lo hice, y cogiendo mi polla morcillona con ambas manos empezó a darle besitos, cortos y suaves, a la punta de mi pene, si antes me parecía el paraíso, ahora estaba desando que el mundo se parara, que aquello no acabase.

Empezó a lamer, pajear, succionar e introducir mi falo en su boca, todo a la vez, por separado o combinando varias a la vez. Estaba de nuevo con toda mi sangre concentrada en un solo punto y a ella le empezó a costar introducírselo en su boca, cada cierto tiempo paraba, separando algo su cara, y mientras seguía masturbándome cogía aire y se lanzaba de nuevo al ataque. La imagen era tremenda, yo tumbado con el respaldo algo subido de la cama, con las piernas abiertas y una mujer con solo unas bragas chupándome la polla como nunca creí posible, vi su espalda al aire arqueada hacia sus piernas, que tenia flexionadas, lo que le hacia tener el culo en pompa. Esa imagen jamás se borrará de mi cabeza.

Yo ponía mis manos en su cabeza, más que por querer guiarla, ya que no lo necesitaba, es que me sentía estúpido con ellas, no sabia que hacer y no llegaba a acariciarle nada. Mientras que ella se cansó de la postura, se tumbó boca abajo con las piernas levantadas, como una colegiala escribiendo en su diario, ya que la cama no daba más de si, por 1º vez entendí que lo que se ve en los vídeos no siempre es tan hermoso y hecho a guión, “es difícil, pero es maravilloso”.

Esta vez me vi venir y logré avisarle antes de que me diera un latigazo la espalda, electricidad pura, ella alejó algo su cabeza y siguió acelerando el ritmo de su mano con más fuerza hasta que de nuevo exploté, manché casi todo lo que había cerca, Raquel hasta se tapó la cara con la otra mano mientras sonreía. Cuando acabé, agotado, ella se volvió a poner a mi altura a horcajadas, y me besó, algo que por estúpido que sea, me daba apuro que me besara una mujer manchada de mi semen después de comerme la polla, era algo me hubiera parecido asqueroso hacia 30 minutos, pero en ese momento me pareció lo mejor del mundo, se colocó de lado mientras seguíamos besándonos y literalmente la restregaba contra mi.

-YO ha sido...........no sé.......pufffffffff - atinaba a decir entre besos.

Al final ella se sentó de espaldas a mi, recostando su espalda sobre mi pecho, la rodeé con mis brazos, teniendo que colocar mi pene, flácido, para no hacerme daño, nos quedamos así unos minutos, lo que me pareció la posición más romántica y sexy que pueda existir, dándole besos en el cuello, la mejilla o su oreja, de vez en cuando, mientras olía su pelo, repitiendo la palabra gracias demasiadas veces, mientras mi mente volaba, ya pensando en que había encontrado al amor de mi vida, las citas que tendiéramos, como la presentaría a mi familia, las noches de sexo, en una vida juntos, tenia 18 años y había tenido mi 1º experiencia sexual, tan perdido estaba que no me di cuenta de que ella también estaba pensando, pero su cara no era de felicidad. Se levantó, nos duchamos por turnos en el baño de la habitación, nos vestimos, arregló la habitación, y todo lo hizo en silencio, con cierta pena en sus ojos, yo no sabia como proceder, así que pregunté.

-YO: ¿que te pasa? estás rara otra vez.

-RAQUEL: no es nada, es solo que…..- dejó de moverse un instante para acariciar mi cara con su mano -.....mira, no quiero hacerte daño, eres un buen chico, pero tengo novio, eres mi paciente, te saco 10 años, esto...............esto no está bien.

Aquello me partió en dos, durante todo el tiempo nunca la había preguntado, ni me había importando la verdad, si tenia o no pareja, temas de médicos o la moralidad de la situación, después de la pasión llega la reflexión y la calma, donde caes en la cuenta de estas cosas.

-YO: lo siento, no sabia.... joder, pero .... ¿y ahora........que? - pregunté con miedo a la respuesta, ella se sentó en el sillón de la habitación cogiéndome la mano, levantó su cabeza y me miró fijamente

  • RAQUEL ahora nada, tú te irás pasado mañana, y yo volveré a mi vida, esto no puede salir de aquí, ¿me entiendes?

De nuevo una mujer me daba plantón, me dejaba de lado, se iba con otro y de nuevo tenia la sensación de que yo podría ser mejor que él para ella, hundido, me senté en el mismo sitio donde minutos antes aquella mujer me estaba masturbando, y ella lo notó, se acercó, se puso de rodillas delante de mi, y me suplicó por el bien de su trabajo y de su vida, que no podía saberse, yo entendí que era correcto, pero no por ello dolía menos, casi a la desesperada pregunté.

-YO: ¡pues si estas tan bien con tu vida, ¿por que ha pasado esto?!

-RAQUEL: lo siento, se que no es justo, pero por eso te andaba evitando, desde que te vi con…….eso colgando, se me ha pasado por la cabeza mil cosas, y en casa no estoy bien, se ha mezclado todo, y lo siento por ti, pero créeme, soy mujer y eres un encanto de hombre, chicas de tu edad se pelearan por ti en cuanto salgas de aquí, tu vida va a cambiar a partir de hoy.

-YO ¿si? supongo, no sé….- contesté con rabia- ….pero has sido tú, tú me has hecho feliz, ¿de que me sirve ser delgado o tenerla de caballo si no tengo lo que quiero?.... - se hizo un silencio de los que se hacen cuando no hay más que decir, solo comprender, asentí con la cabeza -………tranquila, por mi parte esto no ha pasado, y aunque lo diga, nadie me va creer - quería darle algo de sorna, pero allí estaba de nuevo mi yo del pasado, el que usaba las bromas para enmascarar un complejo claro.

-RAQUEL: tranquilo, eres joven y no sabes lo que quieres, créeme, como te digo, soy mujer y esta… - agarró mi polla de nuevo a través de la bata - …. esta te va a traer muchas alegrías, solo tienes que ........dejarla notar.........mira como yo caí como una boba, solo al verla.

Se puso en pie, me besó una última vez, con sabor a despedida, y se fue, “¿seria verdad?”, la rabia no me dejó pensar en esas palabras hasta que salí del hospital.

Elisabeth - Corroborando la teoría.

Lo de Raquel me dejó roto, había tenido mi 1º situación sexual con una mujer, y la ruptura, en menos de 1 hora, el hecho de que ella decidiera no repetir o continuar conmigo me tenia perdido, siempre me creí un buen tío y según parece ahora era atractivo para las mujeres, o eso me dijo ella, quizá para zafarse de mi, pero con la vuelta a mi casa y mi rutina, los días fueron pasando y poco a poco fue disminuyendo mi rabia por lo injusto que me pareció aquello, y empecé a darle vueltas a sus palabras. "tranquilo, eres joven y no sabes lo que quieres, créeme, como te digo, soy mujer y esta te va a traer muchas alegrías, solo tienes que........dejarla notar.........mira como yo caí como una boba, solo al verla".

Aquellas palabras empezaron a taladrarme el cerebro, ¿Era tan fácil? ¿Bastaba con salir a la calle con el rabo al aire y las mujeres caerían a mis pies? Esa idea que empezó pareciéndome absurda fue cogiendo forma en mi mente, mientras me recuperaba en mi casa, ideaba formas sutiles, o no tan sutiles, de hacer que las mujeres vieran, notaran o intuyeran el tamaño de mi herramienta, y que fuera ella la que actuara por mi, al fin y al cabo, una mujer con novio y de lo más profesional, solo con verme la polla en un descuido me había ofrecido una mamada de campeonato.

La verdad es que de imaginación iba sobrado para recrear en mi mente situaciones propicias, pero entonces, viendo una serie, no recuerdo muy bien cual, me recordó un momento que pasé con Raquel, la incomodidad, la inexperiencia que tenia, si, la tenia enorme, pero era un novato sexual. La deducción era simple, Raquel me abrió los ojos, pero tenia que ser yo quien aprendiera a moverme y desenvolverme con las mujeres antes, durante y después, si quería mantener varias relaciones con una misma mujer. Lo que pasó en el hospital no podía volverme a pasar, no era un trozo de carne solamente, así que la solución era encontrar a una mujer, que tuviera experiencia, me enseñara a moverme en el sexo, a tratar con las mujeres y usar mi miembro.

Mi aspecto físico actual era un paradigma del cambio, 1.87 de altura, unos 84 kilos, espaldas enormes y con algo de carne flácida, había perdido mucho peso en poco tiempo. Tardé algunas semanas en recuperarme del todo y que no hubiera secuelas físicas para poder reincorporarme al instituto. En casa las cosas iban bien, después de un trance así, volví al colegio con bastante atraso, el curso ya había comenzado, me costó bastante adaptarme, a estas alturas había perdido casi 40 kilos de peso y un reluciente nuevo rabo de 25 cm de largo y 7 de ancho. Toda la ropa me quedaba enorme y holgada, algo que me ayudó a disimular mi pene, el problema principal es que ahora no me entraba en los calzoncillos, pese a estar casi todos dados de si por mi aspecto anterior, no había manera de meter aquello en unos calzoncillos, así que me compré unos bóxer de tela, casi como pantalones cortos, pero casi fue peor situación, eso no sujetaba nada y me colgaba como el péndulo de un campanario, haciendo obvio cada movimiento al andar, terminé con unos bóxer de licra tipo slip, que se ajustaban mucho mejor a la piel y mantenían a mi nuevo amigo bien colocado.

La situación en el colegio no podía ser mas hipócrita, esto ya es reflexión personal, todo el mundo, que durante años me había insultado, obviado o degradado por mi aspecto, empezaron a acercarse a mi, diciéndome lo bien que estaba y lo bien que había superado el trance, me convertí en una figura mediática de superación, algo absurdo, yo solo había sido operado, no había hecho nada especial. Ciertos grupos de los chicos populares empezaron a invitarme a fiestas, ya les conocía, habíamos crecido juntos pero no era de su círculo de confianza. Las mujeres que siempre me habían tenido como amigo empezaron a acercarse a mí más de lo que a un amigo debe permitirse. Me pareció falso y populista, que solo por un cambio físico pasara de ser el gordo gracioso a una figura de renombre en el instituto.

Aparte de aquello, mi fijación era encontrar una mujer experimentada, yo ya no veía mujeres, si no posibles objetivos, ¿La profesora de ingles? buen aspecto físico y con 30 años pero si salía mal podía saltarme en la cara. ¿La señora de la limpieza de casa? era demasiado mayor y me conocía demasiado bien de años en mi casa, además de una posible denuncia por acoso. Incluso me planteé volver al hospital y pedírselo a Raquel, pero aquella no era una opción.

En una da tantas clases, nos tocó hacer un ejercicio de apoyo en grupo o alguna mierda así, y lo que pasó es que mi empeine se resintió. Me mandaron unas sesiones con un fisioterapeuta, por motivos escolares solo podía ir por la tarde así que al final logramos encontrar a una mujer, Elisabeth, Eli, tenia 36 años y llevaba casi 13 como entrenadora personal y fisioterapeuta, la 1º vez que fui a su gym nada más verla sabia que era ella, un espectáculo de mujer, de 1,67 de altura, y no llegaría a los 66 kilos, morena, pelo largo y con coleta, debido a su profesión vestía con una chaqueta de chándal y unos pantalones elásticos ajustados, nos presentaron y pude notar firmeza en su mirada, se asombró de lo grande que era y me comentó que era normal que me hubiera resentido, le habían comentado que no había parado desde la operación. Mientras me explicaba los ejercicios que tenia pensados para mi yo no paraba de mirarla a los ojos, algo que siempre me gusta al hablar con las mujeres, tenia unos ojos color miel que con la luz fuerte del gym le quedaban preciosos, tenia la cara curtida por los años y la forma de sentarse y cruzar las piernas denotaba una buena forma física. Casi no atendía a sus palabras.

-ELI: la verdad es que no puedo empezar con nada muy fuerte, hay que fortalecer la zona primero así que vamos a iniciar una clase para gente algo mayor, de mantenimiento, para que nos veas movernos y así cuando empieces sepas como va a funcionar.

-YO: me parece bien, aunque yo creo que se está exagerando, solo me molesta al girar el tobillo.

-ELI: eso es que no se ha recuperado del todo la zona y tienes que hacer ejercicios leves para que los músculos carguen más peso y liberen al hueso. Vamos a empezar la clase, ya es hora, tú quédate aquí y fíjate bien en los gestos y mis indicaciones para que mañana estés preparado.

Aquello me encantó, me dio barra libre para admirarla, ella empezó con ejercicios clásicos de calentamiento, y poco a poco fue subiendo el ritmo, la mayoría de gente de la clase era abuelos o gente que estaba a punto de serlo, pero la verdad es que la seguían el ritmo, los movimientos empezaron a ser contundentes, y no podía parar de mirar las piernas de mi instructora, no se si llevaría ropa interior o no pero no se notaba nada, era como una segunda piel y en los giros empezó a enseñar el culo más de lo habitual, enseguida todos los hombres de la sala se quedaron perplejos, muchos perdían el paso con tal de no perder de vista su trasero. En algunos ejercicios Eli se agachaba con repeticiones hacia sus pies sin doblar las rodillas, primero una pierna, luego la otra y luego al centro, giro y repetición, cuando le tocó de espaldas a mi por poco estallo, no solo se le marcaba el culo si no que al agacharse la zona más baja se le marcaba directamente la vulva, allí noté que llevaría tanga por lo menos, no se le notaba los labios mayores, si no el bulto abombado de la tela intima.

Entendí por que había más hombres que mujeres en la clase, era un espectáculo, y tanto elevó el ritmo que alguno se tuvo que apear del ejercicio y sentarse, cansados o queriendo disimular erecciones, lo entendía perfectamente, a mi me estaba calentando mucho, lo mejor llegó a la media hora cuando debido al ejercicio empezó a sudar y se quitó la chaqueta del chándal, aquella prenda no me había dejado ver sus pechos hasta ahora y lo que vi me dejó como una piedra, no solo es que tuviera unos pechos de considerable tamaño, de una 95 para arriba, es que estaban perfectamente colocados gracias a un top, y cuando digo top, no me refiero a una prenda que se le ajustaba, era más un sujetador deportivo, no le llegaba ni al ombligo, bien formado de gimnasio, sin mangas y con un pronunciado escote. Le ponía las tetas a una altura y colocación perfectas, casi esculpidas, y con la consecución de los movimientos, las partes visibles de sus pechos no dejaba de temblar, vibrar y votar ante mis ojos.

Yo, ya fuera de mi, me tuve que medio cruzar de piernas y colocármela ya totalmente erecta para evitar su evidencia, algunos ejercicios que la veía hacer ya no eran simplemente por moverse, era obscenos, de striper de barra en un bar, arqueamientos de espalda, movimientos de cintura, incluso hubo uno en que consistía en tocarse con los codos en el ombligo, algo que no había visto nunca en tablas de ejercicios pero que le hacia apretarse los pechos contra si misma, eso terminó por "agotar" a los hombres de la sala y solo quedaron un par de ellos y las mujeres al final de la clase, terminó con un sonado aplauso, vítores y las mujeres empezaron a gritar e increpar de forma cómica a los hombres por no poder aguantar el ritmo.

Ella empezó a saludar y felicitarse con determinadas personas, y despedirse, eso me dio tiempo a calmarme e ir al baño, no me masturbé de milagro, me la coloqué de nuevo, salí y mientras terminaban de recoger todos, ella se acercó a mi y secándose con una toalla, me preguntó que le había parecido.

-YO: la verdad es que esperaba menos ritmo viendo a los de la clase, no creo que tenga problemas para seguirla pero alguno casi muere aquí - dije señalando a alguno de los hombres.

-ELI: si, es cierto que para ellos quizá sea demasiado pero me pagan para mantenerlos en forma y para eso hay que forzarles un poco, bien, creo que por hoy hemos acabado, es la última clase y ya toca ir a descansar, ¿mañana vienes entonces?

-YO: claro, no me perdería este espectáculo por nada - ella sonrió levemente sin querer entender mi comentario.

El día pasó rápido y antes de ir a clase pasamos mi padre y yo por una tienda a comprar algo de ropa deportiva, todo lo que tenia de antes me quedaba enorme. Al final compré un par de camisetas y pantalones de chándal no muy ajustados por que me intuía lo que ocurriría, ¿pero quería o no que se me notara en la clase? tenia que dar el paso si quería saber si de verdad tenia ese poder sobre las mujeres. No arriesgué y fui a la clase, nada más llegar ella me colocó en una posición para tenerme vigilado a través de los espejos del gym, andaba algo nervioso y mientras esperábamos al resto, inicié alguna conversación con los demás de la clase, no se por qué, pero siempre se me ha dado bien llevarme con las personas de más edad que yo. Entre alguna risa y broma sobre la presencia de un joven como yo en esa clase, todos llegaron y se empezó la clase.

Eli empezó un poco como el día anterior, ejercicios suaves de calentamiento, los seguía con más atención a su cuerpo que a los movimientos, hoy venia con un pantalón largo negro más suelto pero que no disimilaba su trasero, tenia botones a los lados de las piernas, seria de esos que se abrían, tipo baloncesto, otra vez con chaqueta de chándal arriba y se puso una gorra., era increíble pero empezaba a notarme cansado, y algún giro con el pie me dolió pero aguanté como pude, empezaron lo ejercicios de mayor nivel y los que eran muy eróticos, la repetición con el culo en pompa fue una gozada, y con el paso del tiempo los hombres empezaron a decaer, yo llegué con el objetivo de terminar la clase como fuera, y con el paso del tiempo Eli empezó a sudar y se quitó la chaqueta, “por dios eso no es accidental”, otro top/sujetador deportivo igual que ayer, de otro color pero igual de estilizador y sugerente, usando los espejos admiré su delantera y más de una, y de dos veces, pilló a alguno de los hombres, yo incluido, mirándola con ojos en órbita. Yo me di cuenta pero seguía el ritmo, pasaron los minutos y el último cuarto de hora, no se por que, ella aceleró el ritmo, quedaba alguna señora, que me dejaba impresionado, y yo, apenas podía, creo que Eli se picó y de un tirón se quitó el pantalón a través de los botones, me dejó atónito hasta que me percaté de que en realidad debajo tenia otro pantalón, un short bastante corto, amarillo chillón, se le pegaba a la piel de nuevo y no se le marcaba la ropa interior de nuevo, solo se le separaba algo de la piel en la zona de las cartucheras con unas oberturas.

Eso ya fue demasiado y pasé de estar rojo por el ejercicio a estarlo por que mi polla empezó a crecer a gran ritmo, y siendo ya tan pocos los que quedábamos, y siendo el nuevo, las miradas de ella y mía se cruzaron más de una vez, yo mirando su cuerpo y ella mis movimientos, o eso creía. Terminó por fin la clase y mientras todos aplaudían y silbaban ella se dio la vuelta aplaudiendo a todos, nos felicitó, yo entre cansado y temiendo una mirada directa a mi miembro me tiré boca abajo fingiendo claramente un desmayo, sacando la carcajada de los presentes. Emitía sonidos de agotamiento, y si, lo estaba. Ella se acercó ente risas, se agachó y me felicitó preguntándome si estaba bien, yo asentí entre respiraciones y se fue a hablar con los demás, me pidió que me quedara después para hablar de como me había sentido con el pie. Aquello me sonó a excusa de película o relato porno, y no me calmó en absoluto, a lo mejor solo eran imaginaciones mías, siguiendo con la coña me moví a 4 patas hacia mi bolsa entre risas y felicitaciones del resto, cuando llegué me senté y con una toalla me sequé y tapé lo más rápido que puse mientras retomaba el aire. Cuando se me pasó el empalme me dirigí a las duchas y me lavé, hasta me cambié de ropa, estaba totalmente encharcada en sudor, y el slip de licra no ayudaba a la ventilación, así que me duché y cuando salí lo hice solo con los pantalones, sin nada debajo. Al salir Eli me estaba esperando con la chaqueta ya puesta pero sin los pantalones largos, bebiendo alguna bebida isotónica quedando ya solos en el gym.

-ELI: ¿que tal? ¿como lo has llevado todo?

-YO: puffff me ha costado mucho más de lo que creía, no parecen ejercicios difíciles, pero el ritmo me ha matado.

-ELI: jajajja es normal, es tu 1º clase, con le paso de los días irás cogiendo forma y notarás menos los esfuerzos ¿como va el tobillo?

-YO bien, me ha dolido algún giro al inicio pero aguanté bien, ojalá mejore, por que si no mi orgullo se verá hundido.

-ELI: ¿por que lo dices?

-YO: estas señoras que me triplican la edad y aguantan sin problemas, casi todos los hombres se acaban bajando del barco, eres terrible jajajaja

-ELI: bueno, es lo que tiene la experiencia..................

Ella siguió hablando pero cuando dijo esa palabra, experiencia, recordé mis objetivos actuales, y ella la mejor opción, no la conocía casi nada, tenia buena 1º impresión de mi y si se lo tomaba a mal solo tenia que buscarme a otro fisio, era preciosa y seguro que tendría mucha experiencia sexual, pero debía asegurarme, y como había que tirar el anzuelo me llené de orgullo y pregunté.

-YO oye, ¿y como crees que es posible que aguanten las mujeres y no los hombres? - se quedó algo petrificada por la pregunta.

-ELI: pues....no sé, la verdad, los ejercicios son igual para todos, y tú has llegado al final.

-YO: pero casi no lo hago, eso si, tengo una teoría pero no te va a gustar.

-ELI: pues dímela, a ver si me convence - era el todo o nada, “allá voy”, me santigüé mentalmente.

-YO: verás, hay muchos más hombres en la clase que mujeres, y me da que es por ti.

-ELI: um, sigue.

-YO: eres..... joder, estás buenísima y no creo que les importe pagar por verte 1 hora moviéndote.

ELI jajaja muchas gracias, me halaga, pero no entiendo que eso les haga rendirse.

-YO: bueno, más que rendirse, la idea que tengo es que llega un momento en que a todo hombre....no puede.....mantener la verticalidad......sin que...

-ELI: ¿se le note la espalmada? – “joder, me está constando un mundo decírselo”, y me dio con ello en la cara.

-YO; bueno si, no quería ser tan directo, pero es lo que creo.

-ELI; ¿y crees que yo no me doy cuenta de eso? - dijo mientras se secaba las piernas con la toalla.

-YO: no, más bien al revés, creo que lo sabes……y te aprovechas de ello.

-ELI: ah si..... ¿ y como?

-YO: pues la verdad, muchos de tus ejercicios son normales pero hay algunos en que.....vamos que pondrías caliente hasta a un esquimal - soltó una sonora carcajada que compartimos y mientras bebía un trago de agua ella me repasó de arriba a abajo.

-ELI: si lo sé, y la verdad es que esos ejercicios los planteo así, hay mucha competencia y tengo que ofrecer algo a mis clientes para que vengan aquí y no falten o se vayan, no es muy profesional pero esto es lo que se hacer y de lo que vivo.

-YO: bueno, pues la verdad es que dicho así parece menos emocionante de lo que sonaba en mi cabeza, pero me alegro de haber acabado aquí.

-ELI: se te ha notado.

-YO: ¡¿que?!

-ELI: digo que si, a ti también se te ha notado, y me siento muy orgullosa de que aun así, hayas acabado los ejercicios – me dejó como un tomate, aunque ya lo intuía, o deseaba, esperaba ese momento desde que salí del hospital.

-YO: bueno....no soy de piedra.

-ELI: ni las señoras de aquí

-YO: ¿como?

-ELI: no seas bobo, tú me has estado mirando a mi, pero yo miraba a todos, y más de una señora que no falla nunca se ha perdido por estar mirándote - ¿como no había caído?, es una ley física que si puedes ver a alguien también pueden verte a ti, había obviado al resto de la clase, “¿sabían que mis bromas solo pretendían disimular mi erección?”, mientras pensaba todo aquello.

-ELI: la verdad es que he incluido algún ejercicio sobre la marcha de pelvis, solo para lucirte ante ellas, ha sido muy divertido - realmente era un inocente de cuidado, ¿como no darme cuenta de eso?

-YO: pues me las has jugado bien, no he caído, pero me alegro de haberlas divertido............ ¿y a ti?

-ELI: ¿a mi, que?

-YO: ....................que si a ti……..te ha divertido ver mi empalme - había que jugársela ya, esos segundos esperando su reacción me devolvieron a aquella habitación de hospital.

-ELI: la verdad es que me he divertido al hacerlo.

-YO: no me refiero al acto, si no, ¿que te pareció……..verme con el enorme bulto? - si era cierto lo que Raquel me dijo había que empezar a insinuar su volumen, algo difuso por con el adjetivo añadido

-ELI: bueno, grande, grande…….lo suficiente para que se notara, no te vengas arriba - me hirió en el orgullo y agarrándome la polla y poniendo cara de duro la solté una chorrada.

-YO: esta, esta parte yunques - visto ahora era un imbécil, soltó una carcajada sonora, hasta que agachó la cabeza para mirar mi mano, el pantalón algo suelto y el hecho de no llevar ropa interior hacia que se notara bien el contorno y tamaño de mi miembro, se le cortó la risa de golpe.

-ELI: pero..... ¡Dios, en la clase no parecía tan enorme!

YO y más que se puede poner, solo esta morcillona.

-ELI: ¿.... eso......pero como....?

-YO: no sé, después de la operación he perdido mucho peso y volumen, pero esta se ha quedado así de grande........- veía su cara de asombro sin despegar la mirada de mi polla - …… ¿quieres....... verla?

-ELI: joder claro..........no, espera, no puedes.......- antes de que siguiera la interrumpí, me puse de golpe de pie y me bajé el pantalón a los tobillos, mi polla saltó como un resorte a escasos centímetros de su cara, se hechó para atrás de impresión y si antes estaba impresionada, su cara ahora era de susto, seguido de una sonrisa boba, aquello me lo aseguró, la tenia enorme, 2 mujeres como ellas no podían estas equivocadas.

-ELI: ¡¡¡dios mío, pero es enorme!!!! ¿y dices que esta solo morcillona?

-YO: si - dije firme y con orgullo, era cierto que la conversación me puso a tono pero no estaba al 100%.

-ELI: madre mía, ¿puedo....tocar? - me miró con suplica señalando mi colgante amigo, que apuntaba hacia ella.

-YO: toda tuya – daba saltos de alegría en mi cabeza.

Eli empezó a cogerla con una mano mientras se tapaba la boca con la otra, un gesto que ya vi antes, en el hospital, la levantó y ladeó para mirar mejor, me miró a los ojos y me comentó.

-ELI: y con tanto bello, ¡madre mía, que pedazo de polla! - otra vez ese comentario, decidido, me tendría que rasurar, pero otro día, ahora tenia a una monitora preciosa agarrándome la polla.

-ELI: ¿pero cuanto mide esta preciosidad?

-YO: la verdad es que no estoy seguro, cuando salí del hospital andaba en reposo con 19 cm de largo y 4 de ancho, en erección unos 25 y 7 de ancho.

Se quedó de piedra, volvió a mirar mi polla y con la otra mano me la puso mirando al techo, a su vez con el brazo libre, puso su codo en la base del miembro y dejó caer mi polla sobre el largo de su antebrazo, le llegaba más allá de su muñeca, y de nuevo, al verla en comparación con otra persona me di cuenta de lo grande que la tenia, pero aún había sorpresa,

-ELI: esto no son 25, ¿cuanto ha pasado desde que saliste del hospital?

-YO: pues un mes largo, casi 2, mi cuerpo se ha ido adaptando a su nueva situación, pero es lo que media, lo juro.

-ELI: no, no, si no es por que...... es que yo conozco mi cuerpo, de antebrazo tengo unos 25 cm

-YO: pues eso.

-ELI: no, no, del codo a la muñeca, pero tú capullo pasa de largo mi muñeca.

Me extrañó tanto que la situación se fue un poco de las manos, se me relajó, ella se levantó, cogió su bolsa, sacó una cinta métrica, “¿que pasa, todas las mujeres llevan una?” empezó a medírmela de nuevo.

-ELI: lo sabia, esta monada está en 24 de largo, y de ancho esta en unos...... ¡¡¡6 CM, no puede ser!!!

Lo corroboró varias veces mientras yo alucinaba, “¿la muy jodida de mi polla sigue creciendo?” pero estaba centrado, tenia que ponérmela erecta y la mejor opción era ella

-YO: en erección será más, échame una mano, ¿no?

Me miró a sabiendas de mi argucia, pero no por ello me la soltó, se puso de rodillas y sin más se la metió en la boca, ¡dios!, allí estaba de nuevo esa sensación maravillosa, notaba cada succión en mi pene y me quité la camiseta, me abrasaba, ello hizo lo mismo y se quitó la chaqueta, la visión de esa mujer de rodillas comiéndomela, con el top y los short tan cortos, ayudaron a una erección de campeonato. Eli empezó metiéndose gran parte en la boca, mucho más de lo que logró Raquel, pero con la erección apenas le entraba el capullo en la boca y lamía como una condenada cada centímetro de mi falo, con las venas hinchadas.

-YO: creo que ya está, no creo que esto se pueda poner más grande.

-ELI: cofff cofff, pues menos mal, por que casi me partes la mandíbula…. - dijo mientras chorreaba baba por la comisura de sus labios, cogió el metro y midió el largo, se cercioró de nuevo, volvió a medir, y callaba, pregunté y sonrió -…. nene, esto no es normal, 33 de largo, esto es inhumano.

-YO: ¿y de ancho? - había leído que era tan importante, o más, el ancho que el largo, se agachó de nuevo, midió.

-ELI: ¡¡¡casi llega a los 9!!!

-YO: ¡¡¡madre mía!!! Ha crecido muchísimo en estos meses – me asusté, siendo sincero.

-ELI: puede que ahora que no tienes el tumor en la cabeza las hormonas se tranquilicen y estén desarrollando tu cuerpo de forma normal, como no pare habrá que hablar con alguien.

-YO: ¡¡¡¡lo mismo bato un récord!!!!

Aquella chorrada nos sacó una sonrisa a ambos, cuando la miré de nuevo recordé a Raquel y me lancé a besarla, casi la tenia que levantar a pulso para que me llegara a los labios, le sacaba más de una cabeza. No se separó ni forcejeó, solo se dejó hacer como una muñeca de trapo, me costó al inicio, era otra mujer y otra forma de besar, pero logré adaptarme y sin más empecé a restregar su cuerpo contra el mío, siempre le sujetaba la cabeza con una mano, con miedo a que se separara de mi, y con la otra empecé a acariciar de forma torpe todo su cuerpo, su espalda, sus brazos, su cadera, llegué a su trasero y estaba como una piedra, del ejercicio y de tenerla de puntillas, en un arranque de pasión levantó una pierna que sujeté con el brazo y metí la mano por la obertura del pantalón por debajo, estaba muy suave y duro, llevaba tanga por que no haba impedimento en el masaje de su trasero pero si lo noté al llegar a la separación de sus nalgas. Ella no paraba de agarrarme la cabeza, casi colgando de mi, mi erección estaba a reventar y con la fricción de nuestros cuerpos, no paraba de darla entre el vientre y sus pechos.

En un movimiento mi glande chocó con su top y me hizo daño, me separé de inmediato, se rió como hizo Raquel, reconociendo mi inexperiencia, me sentó, se quitó el sostén con algo de sufrimiento, realmente la sujetaba bien, cuando acabó, sus preciosas tetas colgaban ante mí, habían cedido un poco a la gravedad pero tenía unos pezones enormes.

-ELI: no eres muy hábil, pero sabes como calentarme.

-YO: bueno, mucha experiencia no tengo, ¿recuerdas? - mencioné sus palabras para indicarla que en ese caso tampoco era un experto.

Sonrío de nuevo y se subió encima de mí, de nuevo me lancé a por los pechos de mi compañera, mientras masajeaba uno, chupaba el otro, mi otra mano se fue directa a su trasero, ella se dejaba hacer mientras acariciaba mi pelo. Cuando consideró oportuno, separó un poco su cuerpo y me volvió a besar, bajó la mano y colocó mi estaca hacia arriba, se subió encima de forma que mi pene era una barra sobre la que ella se frotaba, y empezó a acompasar sus besos con movimientos de pelvis suaves pero evidentes, mi mano en su trasero más de un vez tocó la punta de mi glande, la atravesaba de lado a lado, aquello se prolongó una eternidad, pero no me corrí, aguanté como pude y recordando cantidad de vídeos, decidí que era hora de tomar el mando.

La levanté a pulso y la senté con el culo al borde de la silla, me arrodillé entre sus piernas y empecé a intentar desabrochar el pantalón, al cabo de un minuto ella se reía de mi inoperancia, me apartó, se puso de pie y con un simple gesto desabrochó todo, se puso de espaldas a mi y se bajó el pantalón como solo saben hacerlo las mujeres cuando quieren presumir. Efectivamente había un tanga allí, uno de hilo, casi ni se notaba, color amarillo chillón también, me acerqué con seguridad a su espalda, mientras me pajeaba suavemente, ella me miraba de reojo mientras se levantaba de haberse quitado los shorts, me acomodé a su trasero, coloqué mi verga entre sus nalgas, quería que la notara, teniendo que agachar mi cuerpo un poco, empecé a besarle el cuello y la espalda mientras su pelo, aún con la coleta, me hacia cosquillas en el hombro, empecé a rodearla con mis brazos y masajear de nuevo sus pechos, bajé suavemente, hasta tener su retaguardia en mi cara. Me tiré como un poseso a morder y besar su trasero, casi la tiró y se tuvo que apoyar en la silla agachándose. Levanté los brazos y mientras le comía sus glúteos bien formados, acariciaba sus pechos, ella bajó una de sus manos, mientras se apoyaba con la otra en la silla, y comenzó a frotarse por encima de la tela entre las peirnas. Me percaté de ello y bajé una de mis manos de sus pechos a su mano, no aparté la suya, dejé que ella se tocara mientras la seguía los movimientos con la mía, “tengo que aprender”.

Al cabo de unos minutos ella apartó su mano y empezó a suspirar con energía, agarrándose con fuerza para no caerse, mientras con una mano atraía su culo hacia mi cara, con la otra la masturbaba como me acababa de enseñar, y noté como empezaba a empaparse mi mano.

-ELI: ahh........si... ufffffff...........dios........

Yo apenas decía nada, tenia la boca llena de carne de un culo que partiría nueces, me cansé un poco de la posición y la di la vuelta, la senté de nuevo y abriéndola bien de piernas empecé a darle besos en la cara interior de los muslos, poco a poco me acercaba a su pubis, la mancha de fluidos en la tela de su tanga era evidente, y mientras con una mano se pellizcaba los pezones, poniéndoselos como clavos, la otra agarró mi cabeza y me hundió en su intimidad. Al principio lamía sobre la tela, el sabor era algo amargo, y olía a sudor, a hembra, pero aquello no me iba a parar, ella misma echó a un lado su tanga y por 1º vez en mi vida vi un coño de cerca, su aspecto no me era desconocido, había visto muchos vídeos, le tenia rasurado salvo por una especie de triángulo invertido, como una flecha en dirección a su vagina, pelo muy corto.

Me paré a admirar, recordé muchos ideas y empecé a lamer sus labios vaginales, como si fuera un helado al inicio, intentando llegar a todas partes, ella se abrió con la mano los labios y vi el clítoris, todo era nuevo, maravilloso y no podía parar, sabia por Internet que era delicado y había que tratarlo con cuidado, así lo hice y con un arrebato de pasión, acerqué mi mano, mientras frotaba una zona lamía otra, ella se volvía loca, metió su mano de por medio, no sabia por que hasta que la vi intentando meterse un dedo por su ranura, era obvio, mucha excitación pero no había hecho más que sobarla por encima, era la hora, aparté su mano y poco a poco fui metiendo mi dedo corazón en su mojado interior, no sabia que hacer, así que metía hasta un punto donde hiciera presión, lo sacaba un poco y volvía a empezar mientras seguía lamiendo el clítoris, ella se agarró con las dos manos al respaldo de la silla que tenia en la cabeza, abría y cerraba las piernas con cierta asiduidad, los usaba como barómetro, cuando hacia algo y cerraba, es que le gustaba, y cuando se abría, o no le gustaba o no le generaba reacción alguna.

Llegó el momento en que tenía mi dedo corazón penetrándola a buena velocidad sin parar de lamer y chupar su clítoris, tenia claro que antes de nada tenía que lograr aprender a hacerse correr a una mujer sin ayuda de mi amigo. Leí lo del punto G por algún lugar, a la altura del dedo corazón hacia arriba, con la mujer puesta boca arriba, me atreví a más y empecé a meter 2 dedos y darle la vuelta a la mano, buscaba algo pero no sabia que, encontré una zona pero no había reacción, ella cogió mi mano y me guió, con mis dedos metidos en ella, la movió un poco hasta que noté una zona muy suave, ella paró en seco, “decidido, es eso”, froté con suavidad pero si parar.

-ELI: ¡¡¡OHHHH DIOSSSSSSS NO PARES, ES AHÍ!!!!!!

Cerraba mucho sus piernas por momentos y casi me apartaba la cabeza, pero no paraba, ni me alejaba, puso sus brazos apoyando los codos en la silla y se elevó, cuando la miré no había rastro de aquella hembra segura y traviesa del día anterior, era una hembra en celo deseosa de explotar, casi había momentos que en que parecía que iba a echar a llorar cuando me centraba en la zona suave, localizada, sin duda había dado en el clavo.

-ELI: ¡¡¡¡¡DIOS!!!!

Con algún lamento ahogado por la pasión , explotó, se movía como una epiléptica, casi no podía contenerla pero no paraba, era como ensillar un caballo salvaje, empezó a expulsar fluidos por el coño, literalmente me pareció que se estaba meando pero aquello no era orín, me empapó toda la cara pero seguía, estaba allí para eso. En un movimiento propio de una gimnasta olímpica, casi sin apoyo, se levantó en la silla, para separarse de mi, ella respiraba profundamente mientras se recogía las piernas, se hacia una especie de bola mientras se tapaba el coño con una mano y volvía a expandirse, repitió la situación un par de veces.

-YO: ¿para no tener experiencia como ha ido? – no era jugar, quería un análisis.

-ELI: madre..... madre mía.... llevaba mucho tiempo sin correrme así, eres un animal, tienes que ir más despacio.

-YO: no me ha parecido que te disgustara

-ELI: no, para nada, jajajajaja, pero esto mismo hecho con más calma y cariño es una gloria, esta rudeza solo le gusta a unas pocas, y en determinados momentos - anotaba todo aquello en mi cabeza, me estaba dando justo lo que quería.

-YO: bueno, yo he cumplido, te toca - me puse de pie, mi pene no había sufrido el paso del tiempo, como para bajarse después del espectáculo que le había montado, ella la miró de nuevo mientras se tapaba su orificio, “¿de verdad la ha he hecho daño?”

-ELI: es cierto, pero se hace tarde - pasó casi 1 hora desde que se acabó la clase, se puso de pie, me besó de una manera obscena, incluso lamía de mi cara sus propios jugos, temiéndome otra espantada a lo Raquel, me apresuré, la cogí por los brazos con firmeza y la aprisioné contra mi, dejando que mi polla casi la ensartara por el vientre, me pareció un argumento valido, me agaché a su oído y la dije

-YO: esto no va a acabar aquí, ¿tienes novio o pareja?

-ELI: no, he dejado a mi novio hace unos meses, me.......... me engañaba.

-YO: vete a la mierda, eso no hay quien se lo crea, ¿que especie de asno dejaría a una mujer como tú?

-ELI: le dedicaba muchas horas al gym, quizá por eso estoy algo caliente en las clases, quiero sentirme atractiva, de ahí los ejercicios, la ropa, mis movimientos.....

-YO: pues eso acaba hoy, me vas a enseñar todo, TODO - no estaba dispuesto a perder a esa joya.

Cuando me separé de ella, la dureza y firmeza de mis palabras le puso las cosas claras, ante su perplejidad y mi seguridad. Recogimos, nos duchamos a la vez, pero no juntos, la imagen de su cuerpo, totalmente empapada en la ducha entre el vapor de agua, me enloqueció, me costó dios y ayuda no atacarla, en cambio me hice un paja con su visión, yo creo que ella lo notó y se frotaba de forma provocativa, supongo que se sentía en deuda. No me costó demasiado después de lo visto eyacular bastante.

Salimos de allí, la ayudé a limpiar y cerrar, me acercó en su coche a mi casa para evitar preguntas si hubiera tardado más en volver. Se despidió de mí con un beso de tornillo que casi me empalma de nuevo, se separó medio centímetro y me susurro.....

-ELI: hasta mañana.

Elisabeth Y Amigas – El aprendizaje.

Al dejarme en casa Eli, me dejó con una sonrisa que no se me quitó en todo el día, mi madre al verme la cara me preguntó y yo casi evadiendo el tema la hablé de lo bien que me había ido en la clase, no tenia dolor en el pie y estaba feliz por ello, me abrazó y me dijo que se alegraba mucho, no me creyó. Fui a mi cuarto a intentar hacer algo de unos trabajos atrasados que debía, pero no se me iba de la cabeza la situación, ¿como podría?

Tenia una sensación de pánico momentánea recurrente, no sabia si le tenia más miedo a que aquello continuara, o se acabara. Ambas sensaciones me preocupaban y alegraban a la vez, o por separado. El día siguiente en el instituto me pasó fugaz, apenas recuerdo nada de aquellas clases, no había dormido, solo recuerdo una ensoñación constante, una serie de momentos borrosos, de la última clase solo recuerdo lo lento que iba el reloj, esos momentos en que miras tantas veces el minutero, que más de una vez al mirar no se había movido.

Cuando sonó la campana de fin de clase no es que estuviera ansioso, tenia un nudo en el estomago que no dejaba de crecer. Volé a casa, hice algunas tareas encargadas de la casa y los ejercicios de matemáticas, ecuaciones de 3º grado creo recordar, jamás despejar una x me resultó tan tedioso. Al acabar me quedaba casi una hora para ir al gym de Eli, me fui a duchar, con la imagen en la retina de Eli y el agua cayendo en la ducha del gym sobre cada una de sus curvas, ni se si llegué a tener una erección, mi cabeza estaba volando más allá de mi cuerpo, casi como un viaje astral, el cuerpo iba en automático.

Cuando salí empecé a secarme y al repasar mis piernas vi mi bello, entré de golpe en conciencia, ya habían sido 2 de 2 las mujeres que al verme desnudo me dijeron que con menos bello seria más impresionante, tenia que estar preparado ante cualquier eventualidad, busqué entre los cajones del baño las cuchillas de afeitar, pero al ver el metal afilado me asusté, preferí usar la maquinilla eléctrica, tenia una extensión para patillas y perfilar que me pareció una opción menos.....arriesgada.

(Aquí una de las situaciones de mi vida más hilarantes, puede que en el relato no se capte el nivel cómico).

Empecé recortado las zonas más condensadas, era cierto, cuando terminé el 1º trasquilón, la diferencia entre la altura de mi pelo y la piel era obvia, seguí recortando lo más que pude pero tenía sus límites, es pelo mucho más denso. Cuando acabé tenia bastante menos, pero quería impresionar si se daba el caso, tenia que rasurarme, me pareció asqueroso empezar con la zona de afeitar de mi maquinilla personal, y que además mi padre usaba de vez en cuando, y era difícil de explicar cualquier inventiva sobre por qué no se podía volver a usarla. En un arranque de “genialidad” visualicé la maquinilla depilatoria de mi hermana mayor, tonto de mi me pareció una opción viable, al fin y al cabo era diseñada para pelo de piernas, más duro, ¿no?, al encenderla no noté diferencia, todo parecía normal, (nota mental y consejo, siempre, SIEMPRE, que vayáis a hacer algo así, probar 1º con zonas pequeñas, seguras y de forma rápida), la puse en línea recta, bajo mi obligo, y de golpe empujé hacia abajo, como solía hacer con mi maquinilla, El grito de dolor alertó a toda la casa, aparte del volumen, las palabras salidas de mi boca no tenían parangón, no hay mayúsculas, negritas y modificaciones del tamaño de la letra para expresarlo.

La primera en llegar fue la señora de la limpieza de casa, llamó a la puerta alarmada, seguida de mi padre, que de milagro no echó la puerta abajo, logré calmarme lo suficiente para balbucear, con algunos gallos.....

-YO: Traaaaaanquiiiiiiiiilos, puffffffffffffffffff estoooy bien solo me diiii con el dedo meñique con el mueeeeeble del lavaboooo….. – lo que se me ocurrió en una elevada escala de dolor.

-PADRE: ¿SEGURO HIJO?, ¿ESTÁS BIEN?, ¿NO HABRÁ SIDO EL TOBILLO MALO? - la voz realmente preocupada de mi padre me obligó a calmarme.

-YO: no, no, el otro pie, ha sido una tontería ufffffff como duele jajajajajaja

Valgo para actor, me estaba escociendo la pelvis como si me estuvieran echando lava encima, al mirar abajo, era una línea roja sin pelo, con bello a los lados, como una carretera en medio de un bosque. Me daba aire con la mano y me iba echando agua poca a poco, me pareció ver hasta alguna gota de sangre. Obviamente paré el intento de rasuración, me alivié un poco con unas cremas hidratantes de mi madre. A los 20 minutos salí lo más arreglado posible cojeando un poco por si alguien me veía, la señora de casa, Laila, me vio y preguntó amablemente mientras recogía por el pasillo.

-YO: si, si, es que soy muy burro, me tienen echado un mal de ojo o algo.

-LOLA: no cariño, es que eres muy torpe.

Me tenia mucha confianza para esas palabras, sonreí, y entré en mi cuarto, preparé mi bolsa deporte con ropa limpia y me vestí con la ropa del gym para ahorrar tiempo, con más cuidado que otra cosa intenté ponerme los slips de licra, pero me rozaban la zona demasiado, probé los de tela y me iban mejor, sabia que me dejaban el pene colgando como un péndulo pero en ese momento era más el escozor que la razón. Mi padre se pasó por mi cuarto y me dijo que me acercaría con el coche a gym para que no me atropellaran o algo, dijo de forma socarrona, sin duda había oído mis palabras a Laila, se lo agradecí, la verdad, no estaba para ir andando y coger el transporte publico. No era raro que él me llevara a algunos sitios si tenía tiempo, aunque le gustaba que me buscara la vida, decía que me fortalecería el carácter. Durante el trayecto hablamos de como me iba todo por las clases, con mi vida y si había notado algún cambio físico más, aparte del peso. Sin atreverme a comentárselo no le dije nada de mi nuevo mejor amigo. Noté culpa en los ojos de mi padre, algo que no era habitual, no solía hacer nada para sentirse así. Se despidió de mi desde el coche y me dijo si luego me venia a buscar, obviamente le dije que no, “Eli puede querer continuar las aventuras”.

Me paré en la entrada del gym, respiré profundamente, todo lo de la depilación me había hecho perder la concentración, me preparé para todo y entré. Estaban ya algunos de mis compañeros charlando entre si, no veía a Eli, así que me fui a una de las sillas, cerca de donde el día anterior había pasado un gran momento. Mientras miraba a mil sitios noté como un grupo de señoras hablaban en corrillo, de vez en cuando miraban hacia mi y reían, sin duda estarían hablando de mi y de como se me marcó el paquete el día anterior, como dijo Eli. Llegó la hora y Eli apareció de una de las puertas del gym, se la veía cara de disgusto, empecé a tener pánico controlado.

-ELI: venga gente, que hoy andamos mal de tiempo, ejercicios suaves y seguimos hasta donde podamos, ¡VAMOS!

Dio 2 palmadas grandes y la gente se puso rápido en posición con algún cuchicheo de fondo, no parecía normal aquella rudeza. Puso la música y comenzó ejercicios, yo me puse a observarla, como siempre, venia con chaqueta de chándal puesta, coleta, y unos pantalones de deporte, pero nada estridente, no se le pegaban demasiado a la piel. “¿Acaso hoy no quiere animar a sus clientes?”. Eso no me permitió fijarme en su cuerpo, así que empecé a mirarla a la cara, solo la había visto como un trozo de carne hasta ahora, lo que ella buscaba con su indumentaria, realmente era muy guapa, por su cara se notaba su edad, 0 maquillaje, lo que me dio mejor impresión, algunas mujeres van más pintadas que un cuadro y no estaban ni la mitad de hermosas, algunos grupos de pecas en las mejillas, pómulos altos, la coleta le hacia una frente muy pronunciada, la nariz era fina y aguileña, sus labios eran bastante finos, arreglada tenia que ser una diosa, pero sin pote en la cara podría hacer algún anuncio y todo. La cara, como puede comprobar del resto de su cuerpo el día anterior, no tenia un gramo de grasa, incluso se podría decir que se le marcaba bien la mandíbula.

Durante toda la hora de la clase no hubo nada raro, incluso los ejercicios eróticos habían desaparecido, y hasta me descubrí mirando al resto de señoras de la sala, ese día casi todos acabaron los ejercidos, hombre incluidos. Teniéndome un enfado o algún tema raro, al sentarme después de la clase me froté el tobillo malo con fuerza para que me preguntaran y así tener una excusa para no irme inmediatamente, necesitaba hablar con ella. Muchos se acercaron a Eli a preguntarle que le pasaba, no era solo yo, era evidente su enfado, formando un grupo a su alrededor pude oír perfectamente la conversación.

-CLIENTE1: pues la verdad que hoy has sido muy suave

-CLIENTE2: ¿que te pasa bonita? - Eli se lo pensó un momento como eligiendo con cuidado que iba a decir.

-ELI: nada, solo que me ha venido a ver el imbécil de una cadena de gimnasios, sabe que la situación aquí es delicada, el alquiler del edificio ha subido y se quieren quedar con el local.

Entre muchos murmullos, los clientes clamaban y preguntaban como ayudar, sin duda Eli se había ganado a aquella gente.

-ELI: tranquilos, siempre encuentro la manera, no os preocupéis, pero ya sabéis, si tenéis amigos o familiares me los mandáis y les meto caña jajajajaja

La sonrisa sonó lo forzada que era, se fueron despidiendo hasta que solo quedamos ella y yo, y una clienta en las duchas. Se sentó a mi lado dejándose caer y me preguntó por el tobillo.

-YO: tranquila, no es nada, cosas peores he sufrido - la di un toquecito con el pie en su rodilla, sonrío levemente, creyendo que me refería a la operación, tonto de mi, yo pensaba en la tortura sufrida con la maquina depilatoria de los cojones.

-YO: que es lo que pasa, ¿las cosas no van bien?

-ELI: no es solo eso, me estoy dejando la vida en este sitio, mi novio me engaña, casi vendo mi cuerpo a unos mirones por sacar unos duros más al mes, y no me vale.

-YO: es una pena que la vida sea así de injusta, pero ya sabemos como funciona el mundo............si tuvieras a un negro de 2 metros marcando músculos ya tendrías a todo tipo de publico, y no solo a hombres, tenias cubiertos heteros y gays jejejejejejje - Eli sonrió otra vez nuevamente como dándome la razón, y se quedó mirando a si misma en el espejo de enfrente. Miré en su dirección y solo estábamos los 2, nada raro.

-YO: ¿que pasa?

-ELI: lo he pensado, pero no puedo contratar a nadie, y de ese tipo son caros.......- abrió los ojos y me miró - .......pero te tengo a ti.

-YO: ¿yo? no me hagas reír Eli, soy un saco de patatas ahora mismo...........

-ELI: bueno, pero eso se puede arreglar

-YO: lo siento, me niego, no quiero empezar a ser ESE tío

-ELI: ¿quien?

-YO: el capullo matado de gimnasio, que solo va a marcar músculo y presumir, que miran al resto con desdén y que me miraban con asco hasta hace nada…….antes me meto en un KFC y me muero comiendo pollo rebozado.

-ELI: jajajajajajja ¿de verdad piensas así? está bien, de todas formas solo te han recomendado un mes aquí y no tenemos margen para ponerte en forma, en cambio, ayer tenias a todas las mujeres encandiladas con tu…….amigo.

-YO: bueno pero no era consciente, ¡¿a ver si ahora me quieres poner en una vitrina como una barra de salchichón?!

-ELI: mira, se que es injusto que te lo pida, y lo que piensas es la misma decisión que tuve que tomar yo al empezar a desmadrarme aquí, no te puedo pagar, pero sé que no es dinero lo que deseas.

-YO: no, tampoco quiero ser eso, una barra de carne para ti.

-ELI: ayer me pediste que te enseñara todo, TODO, está claro lo que quieres.

-YO: si, pero no lo quiero así, como una transacción comercial, quiero que sea real.

-ELI: y lo es, ayer lo que pasó no tiene nada que ver con esto, y aún así, pasó.

Me quedé dudando, era cierto, lo deseaba, y llegados a este punto, mi objetivo era que ocurriera eso. Mientras, salió la mujer de las duchas se acercó a despedirse de Eli y de forma sorprendente, de mi

-CLIENTA1: adiós moreno, mañana nos vemos de nuevo.

Eli me miró fijamente, de forma contundente y obvia, se estaba dando la razón a si misma, yo respondí con algún halago leve que hizo ir sonriendo a la mujer. Estaba claro, tenia que ser así, o buscarme otra.

-YO: está bien, lo haremos, ¿que quieres de mi?.

-ELI: nada raro, solo que ahora serás mi ayudante y compañero en las clases de última hora, lo mismo que ahora, solo con que se te note como hoy, valdrá.

-YO: joder, ¿otra vez hoy?

-ELI: nene, no es que se te notara como ayer, es que parecía una serpiente viva…….con eso aumentará seguro el numero de mujeres con el boca a boca.

Me percaté del cambio obligado en mi ropa interior y me eche a reír, Eli no entendía el por qué, la miré colorado de la risa y por lo que iba a hacer.

-YO: Eli, ¿quieres reírte?

-ELI: puff no veas la falta que me hace, llevo un día asqueroso.

Sin más me bajé el pantalón y calzoncillo a la vez, mirando hacia otro sitio esperando su reacción, no fue otra que una sonora carcajada.

-ELI: ¡¡¡¿pero que has hecho pedazo de animal?!!! JAJAJAJAJJAJAJJAJAJA.

-YO: yo que sé, recordé lo que dijiste del bello, y...........bueno, está claro que no es lo mío - ella se acercó con cuidado y puso la mano con suavidad sobre la zona enrojecida, el ejercicio no había ayudado y estaba irritado.

-YO: sssh, ten cuidado que escuece.

Le expliqué como sucedió, y a cada paso ella sonreía más, llegaba el punto de que casi se ahogaba, yo viendo su mejoría de ánimo empecé a repetir los gestos en el baño. Soy un poco payaso y me encanta hacer reír.

-ELI: anda, súbete eso que me va a dar algo…. - lo hice con tanto cuidado que ella seguía riendo a cada movimiento mío –…. bien, ya está claro lo que yo quiero, ¿y tú? - me senté con cuidado, me la quedé mirando a los ojos color miel que vi el 1º día, suspiré.

-YO: mira, ayer lo notaste, no soy ningún experto y me encuentro con esto entre las piernas que no sé manejar, soy totalmente inexperto en casi todo y necesito ayuda, con prácticamente cualquier cosa sobre las mujeres y el sexo que puedas enseñarme.

-ELI: la verdad es que me da que has tenido suerte conmigo, he tenido quizá hasta demasiada experiencia, y va a ser un placer enseñarte ……- lo dijo mientras agarraba mi pelvis dolorida, pegué un salto hacia atrás – …..HUY, PERDONA, PERDONA JAJAJA…….me olvidé.

-YO: pues empezamos bien

-ELI: hoy vete a casa, mañana empezamos ¿Trato hecho? - extendió la mano

-YO: hecho - sellamos el pacto con las manos.

Me fui a casa convencido de haber hecho lo correcto, el día pasó volando, y el estropicio en mi pelvis parecía menos, mi padre me acercó de nuevo al gym, y de nuevo preguntó por mis cambios físicos.

Al entrar al gym vi a Eli de espaldas a mi, charlando con los demás, estaba de vuelta, su culo embutido al vació en unos leggins de escándalo, sin chaqueta de chándal, un top algo más grande que los sujetadores previos, pero que se le pegaba como su propia piel, se le marcaba hasta la goma del tanga y los aros del sujetador interior, pelo recogido con coleta. Me miró de reojo, fue hacia mí, me saludó con un abrazo, y durante esos segundos me dijo al oído.

-ELI: no veas lo que te tengo preparado, y para que no te sientas mal y veas que yo vengo dispuesta, hoy no acaba el ejercicio ni un solo hombre, ¿cuantas mujeres crees tú poder tirar? - se separó levemente con una sonrisa de oreja a oreja, la correspondí, el resto nos miraba, me di cuenta, grité.

-YO: ¡¡vamos chavales, estas carnes no se van a ir solas, A MOVER EL CULO!!

Nos preparamos, ejercidos de calentamiento y empezaron los ejercidos eróticos, muchos destinados a lucir el culo de Eli, era evidente para mi, no llevábamos ni 30 minutos y 3 tíos ya estaban fuera, el ritmo cambió, empezó una serie de ejercicios nuevos, sacando la pelvis hacia adelante, esos era para mi, hoy llevaba los slip de licra, sujetó pero notorio. Tenia que ponerme como una piedra si quiera empezar a tirar a alguna mujer, no fue difícil, con mirar fijamente a Eli más de 3 minutos se me puso que partía cocos, lo estaba dando todo la muy lista, yo no iba a ser menos, aquel juego lo tenia que ganar, paré en seco, me fui al baño, me quité el slip directamente y salí en plan comando, “¿quieres guerra? te la voy a dar”. Cuando volví quedaban 3 tíos de unos 20, y había 4 señoras de las 7.

Si con los de tela mi miembro baila, suelto no os podéis ni imaginar, cargaba de izquierdas así que cualquier ejercicio donde estirara esa pierna hacia mi bulto una evidencia grotesca, algún sonido de admiración salió del resto de la clase. En menos de 10 minutos la mitad de las mujeres habían perdido el paso, al cuarto de hora 3 se fueron y no solo eso, se sentaron juntas y como tomates no paraban de señalar y reír, algún comentario llegué a oír pero no prestaba atención. Al terminar la clase quedaron 2 hombres de los 20, y solo 1 mujer, Les aplaudimos Eli y yo con fervor, y la jodida de la mujer se fue corriendo contra mí para abrazarme, con los espejos pude notar sus risas dirigidas a las demás mujeres y como ellas soltaban sus risas y sonidos de alegría. Yo estaba muerto físicamente, el ritmo había sido brutal, me senté un poco a descansar, tapándome como pude, de nuevo el truco de masajear el tobillo malo.

Fueron despidiéndose de Eli todos los tíos y de mis todas las mujeres, más coloradas de lo habitual, con risas de fondo. Al final solo quedamos los 2, Eli cerró la puerta, se aseguró de que no quedara nadie en los baños y bajó persianas. Según hizo eso, la pregunté.

-YO: bueno ¿he pasado la prueba?

-ELI: ¡¿que si la has pasado?!

Echó a correr hacia mi, dio un brinco y se me montó encima como si fuera una amazona, menos mal que cargaba hacia la pernera izquierda, si no la empalo, casi me arrancó la cabeza cuando comenzó a besarme, allí no había ni calma ni cariño, era pura adrenalina, yo aproveché restregué cada parte de su cuerpo. Pasado cierto tiempo, se sentó a mi lado y me dio las gracias.

-ELI: no sé como has podido, yo estaba muy nerviosa el día que se me ocurrió hacerlo

-YO: me has puesto un reto, di mi palabra y un hombre de verdad jamás la rompe.

-ELI: bravo, en serio, esto me va a traer más gente, antes del fin de semana tendré 10 mujeres aquí.

-YO: me alegro de ayudar, y más si me recompensas así, casi me ahogas.

-ELI: jajaja no has ni empezado pequeñín….- se fue a su bolsa trajo un bloc de notas y otro neceser de mano - …. escúchame esto va a ir así, soy tu entrenadora personal, me harás caso en todo lo que te diga, seguiremos un planning y tú no tendrás ni voz ni voto.

-YO: hombre, eso puede ser un prob...........

-ELI: ehhh yo te he planteado un reto, y tú a mi otro, ¿que tipo de mujer seria si después de esto, no te correspondo?

-YO: está bien.

-ELI: tenemos algo menos de un mes, así que son 4 semanas contando esta, la 1º va a ser la teoría, la 2º la puesta en practica, la 3º el teórico y la 4º hardcore.

-YO: que profesional….

-ELI: así trabajo, hoy para empezar voy a arreglar lo de ayer.

Sacó del neceser espuma de afeitar, varias cuchillas y una navaja de barbero, entendí su propósito, pero no por ello me asusté menos.

ELI: tranquilo, lo he hecho muchas veces, ve, date un ducha, y ahora voy yo.

Obedecí, mientras me duchaba, ella entró y fue preparando los utensilios, trajo unas sillas y esperó, cuando acabé me pidió que saliera desnudo y me sentara en la silla con la piernas bien abiertas. Se llenó las manos de espuma y empezó a frotarla por toda mi pelvis, con algún amago de masturbación incluido.

-ELI: quédate muy, muy quieto.

Empezó con cuidado a afeitarme la pelvis, y con gran maestría movía mi falo y los testículos de forma ágil para dejarme totalmente rasurado. La visión del acero y su concentración me helaron, mientras me iba comentado como poder hacerlo yo solo y que utensilios usar. Terminó con rapidez, me examinó el resto del cuerpo y siguió afeitándome zonas diferentes, la espalda, los hombros, los laterales del torso, incluso el culo, me hacia mover y girar como una peonza, y me seguía aleccionando sobre por qué esa zonas.

-ELI: de verdad, tenias mucho pelo, ¿no te has afeitado nunca nada que no fuera la barba? - asentía avergonzado.

Me llegó a poner con una pierna encima del lavabo y afeitarme la zona entre los huevos y el ano. Todo con su debida explicación, cuando acabó se quitó la ropa, cosa a la que ayudé encantado, sus pechos eran deliciosos pero su culo era espectacular, cada movimiento que hacia le retumbaba en toda la nalga, como gelatina, pero bien firme. Me agarró de la polla sin más y me llevó como a un perro a la ducha. Allí me duchó de arriba abajo con sus debidas explicaciones de por que zonas dedicar más tiempo. “y yo que pensaba que me sabia duchar”, era una esponja y absorbía toda la información, higiene tanto masculina como femenina, me quedé a cuadros ante los rituales que me dijo que hacen las mujeres en una ducha.

-ELI: durante estos días voy a explicarte cosas así, y luego te pondré a prueba, si lo haces bien, pringo yo, y si lo haces mal pringas tú.

-YO: ¿y que seria pringar?

-ELI: yo te la chupo, y tú me comes el coño, justo, ¿no? - me pareció ideal.

Recogimos y nos fuimos sin más a casa. Las siguientes semanas las resumiré un poco, se resumen en que el colegio no era relevante y cada día después de clase nos quedábamos solos, a “aprender”.

Elisabeth - 1º Semana: Teoría.

Empezó por medir mi pene, lo haría todos los días por control, en reposo 23 largo 5 ancho, erección 32 largo 9 ancho.

Al siguiente día del afeitado, Eli me sentó y se puso a hablar, de las mujeres, de sus ideas y su psicología, de lo que quieren decir cuando no dicen nada o de lo que quieren decir cuando dicen algo, pero no es eso. De lo que significaban los gestos de una mujer, ya fuera sola o en grupos, de los sentimientos encontrados que tiene una mujer en determinadas situaciones, de como aprovecharme de la regla y esos días malos, yo alucinaba, aprendí más en 1 hora con Eli de lo que hubiera hecho en un año de psicología. El paradigma de la mujer, sus 4 escenarios.

  • dice no y es no.

  • dice no y es si.

  • dice si y es no.

  • dice si y es si.

Aluciné con esa complejidad, después me preguntó con situaciones ficticias y fallé la mayoría, me tocó pringar y repetí la comida de coño que conocía de hace unos días, ella sonreía y me iba dando indicaciones, se abrió de piernas y me hundió la cabeza, lamí, chupé y froté como un poseso hasta llevarla al orgasmo, no hubo fuente esta vez, pero si un agradecido beso tórrido después.

El siguiente día Eli se presentó con una maleta enorme, al acabar la clase me explicó que había traído todo tipo de ropa de mujer, desde fina lencería hasta pijamas de abuela, pasando por ropa de fiesta o vaqueros, me hizo un pretty woman, pero delante de mi, se bestia y desvestía explicándome como se ponía y quitaba, algunas aclaraciones del significado, como la diferencia entre llevar bragas de colores llamativos o no. Si, la hay al parecer.

Cuando salió con el corpiño, las medias hasta los muslos y un tanga de encaje con unos ligueros, todo conjunto en negro, directamente me saqué la polla y me empecé a masturbar enérgicamente, ella sonrío.

-ELI: vale, pero no pierdas detalle.

“Los cojones voy a perder detalle”, este tema se me dio mejor, se ponía una ropa y tenia que desnudarla en un tiempo limite sin ayuda de ella, los sujetadores costaron, usó deportivos, que se desabrochaban por delante o por detrás, de encaje o simple, como sacarlos con determina prenda o sin usar las manos, su significado..... etc. les pillé el truco, pringó ella, me regaló una mamada increíble, al inicio solo masturbaba con fuerza, hasta que se me puso dura, la admiró de nuevo

-ELI: joder, cada día me parece más grande, el afeitado surtió efecto.

Pasó el fin de semana, nada reseñable, aún 1º semana del planning, el lunes ella se desnudó, acercándose a mi, me explicó todos los puntos erógenos de la mujer, los hombres solo tienen uno, y ellas 7, aluciné, me enseñó a ubicarlos, como acariciarlos, y como detectar los que tienen ocultos cada mujer por separo, “tócate los huevos, encima de tener más, algunas tienen otras zonas aleatorias”.

-ELI: a algunas les pone acariciarles el contorno de los brazos, otras el de las piernas, a otras ninguna de la dos pero un beso en la oreja las derrite, pueden ser cosas obvias como tener los pezones muy sensibles, o que las cosquillas en el cuello las pongan a 100, acariciarla el pelo o sentir una mano firme en la cadera, puede ser cualquier cosa.....a ver si descubres el mío.

Se tumbó en el suelo, empecé a seguir sus lecciones, pero no di con él, me tocó pringar y comida de coño virtuosa, me daba algún consejo, me estaba empezando a convertir en un experto en ello. Cuando finalicé la pregunté curioso cual era, y me dijo que en si, no era un punto, era una acción, el hecho de separarle las nalgas la ponía como una moto, coger una con cada mano y separarlas tanto que la piel de los pliegues naturales quedaran estirados. Lo hizo delante de mí, se agarraba los glúteos, los levantaba, separaba a más no poder y los soltaba de golpe, aquello era flan de 1º calidad, botaban un par de veces y volvían a su lugar, repitió la operación hasta que la oí jadear. Caí en la cuenta que en nuestro primer encuentro, al frotar su trasero hice algo similar al meter la mano a través de la obertura de su pantalón. No me contuve y empecé a hacérselo yo, incluyendo alguna lamida de coño por detrás metiendo mi cabeza entre sus nalgas. Terminó corriéndose con chorros de fluidos incluidos.

-ELI: esto no vale, llevas 2 hoy, mañana me tocará pringar a mí.

Contento por ello al día siguiente me relajé, craso error. No hubo nada sexual, solo ejercicios de pelvis, me explicó que tenia que coger fuerza en la cadera, y capacidad de aguante en el ritmo, con unos ejercicios que tenia que hacer a diario, me recordaron mucho a mis clases de baile en las actividades extra escolares. Al acabar pringó como una campeona, mamada en la que aquella pequeña gimnasta se metía media polla enorme en la boca, arcadas incluidas, era un espectáculo verla succionar con todas aquellas babas goteando de su cara, con la lengua lamía desde la base de mi miembro hasta la punta del glande, con calma, y cuando llegaba arriba cogía un ritmo chupando que me costaba creer, me regaló incluso alguna mordida suave en la punta, no hacia fuerza pero rozaba sus dientes por mi glande.

Elisabeth - 2º Semana: Práctica.

Mi polla seguía igual de tamaño, al hacerle un seguimiento me tranquilicé, parecía que no seguiría creciendo, reposo 24 largo y 4 anche, erecto 33 ancho 9.

Eli siguió con sus doctrinas pero ya era todo mucho más sensual, el primero fue como usar o hacer notar mi miembro a las mujeres a través de la ropa, o como insinuarlo sin parecer un imbécil. Luego durante varios días nos desnudábamos los dos, y me masturbaba de mil maneras, con las manos, la boca, entre sus pechos con la famosa cubana, me la ponía tan gorda que no tenia ni que agachar la cabeza para que mientras friccionaba entre sus pechos pudiera lamer mi glande, más de un golpe le daba en la barbilla.

Un día que le tocó pringar a ella, después de una deliciosa mamada, la avisé de mi corrida, ella hizo oídos sordos y siguió, la fui a apartar pero se negó con gestos y me lanzó una mirada de loba, aquello ya no era enseñanza, lo estaba disfrutando, cuando me llegó el latigazo de mi espalda, lo notó, se separó lo justo para que dentro de su boca mi glande tuviera espacio y eyaculé bestialmente, casi la ahoga, pero no se separaba de mi, se le empezó a salir por la comisura de sus labios, cuando dejé de embadurnar su lengua de mi semen, se separó ligeramente, con un dedo se recogió lo que se le había salido, con una sonrisa evidente, la boca abierta y echada hacia atrás, podía ver claramente mi corrida en su boca, como si se estuviera enjuagando con un enjuague bucal, se chupó el dedo manchado, a modo de felación, y tragó, sonó como cuando te tragas una pastilla de las grandes. Al acabar abrió la boca y me la enseñó vacía y orgullosa, a modo de prueba.

Continuó tragándose mi semen desde ese día, con caras de viciosa, y luego jugueteaba con él, me cambió algo la dieta, decía que el tomate ayudaba al sabor del semen. Me hizo hacer lo mismo con sus fluidos, a como masturbar mejor, con los dedos corazón y anular juntos, no el índice, que debía hacer forma de triángulo con el meñique apunando al ano al introducir los dedos, gracias a la forma de las piernas de ellas boca arriba, así siempre frotarías el punto G. Me mostraba una cantidad de juegos preliminares que conocía, y otros que no, el sabor de sus jugos o mi semen, o de como ella se lo tragaba, lo mejor llegó el viernes de esa semana.

-ELI: nene cada día te mueves mejor y ya duras muchísimo, antes eyaculabas en menos de 10 minutos y ahora casi tardas una media hora, me empieza a costar sacarte esa leche deliciosa.

-YO: la práctica lleva a la perfección

-ELI: quiero que sepas que esto me esta encantando y encima ha aumentado el número de clientas, ya casi estamos a la par, 22 hombres y 19 mujeres, como siga así, este mes y el que viene lo tengo cubierto.

-YO: tengo que alabar tu imaginación, no creo que allá mas movimientos sueltos para lucir nuestros cuerpos, bueno........tu cuerpo y mi polla.

-ELI: ...............coño, pues tienes razón, habrá que incluir ejercicios por parejas, no se me había ocurrido.

-YO: pero somos impares

-ELI: eso lo soluciono yo fácil, además....................puede ser parte de la 3º semana

Aquello me dejó algo intrigado, pero había acabado la clase y tocaba culo, el de ella en contrato. Empezamos, totalmente desnudos, con preliminares simples, solo para ir subiendo la temperatura, llegado el momento ella se puso a cuatro patas, ya la había visto así en algún ejercicio de masturbación.

-ELI: bien, es hora de empezar a usar a tu amigo - casi se me salen los ojos, ¡¿estaría hablando de penetración?!, la verdad es que le tenia ganas pero estaba aprendiendo, ella mandaba.

-YO: tú dirás.

-ELI: quiero que cojas tu polla, te pongas de rodillas detrás de mí y la plantes en la raja de mi culo.

Lo hice rápido con miedo que cambiara de idea, solo con eso ya la tenia durísima, la dejé caer a plomo haciendo rebotar la onda de choque por todo su despampanante trasero.

ELI: ahora, separarme las nalgas bien, mete tu polla de forma lateral y cierra, como una cubana, pero con los glúteos.

Me desilusioné un poco, pero se me pasó en cuanto lo hice, que barbaridad de trasero tenia, era como frotarse contra 2 nubes de algodón, suaves, pero tersas. Se le empezaba a notar la calentura, y era culpa mía, lo sabia, no por lo que hacia sino por que a cada arremetida que le hacia, separaba sus nalgas de forma clara, haciendo círculos con mis manos, lo que me dijo que le ponía a 100.

-ELI: uffff empieza.....empieza a masturbarme....ohhh uffffffffff con una mano por delante de mis......joder..........piernas. - dio un golpe con el puño en el suelo.

Aquella sensación debía de subirla al paraíso, pero quería enseñarme, seguí con una mano haciendo círculos en se culo y con la otra le frotaba con vehemencia el clítoris, no pasaron ni 5 minutos cuando se corrió ampliamente, me dejó la mano manchada, ella miró hacia atrás, a cuatro patas y consciente de su mirada, chupé aquella mano empapada de sus jugos, dedo a dedo, si parar de mirarla a los ojos.

-ELI: hoy ganas tú

Sin más se dio la vuelta, me empujó para quedarme de rodillas apoyando los brazos hacia atrás, se tumbó boca arriba, cogió una de las bolsas que traía y se la puso a la altura de la espalda, se giró de manera en que su frente estaba pegada a mis huevos, y su cuerpo en línea recta, ya se había puesto así antes, en masturbación y sexo oral en especial, pero eso era diferente se tumbó sobre la bolsa, así lograba que le quedara la espalda arqueada dando con la coronilla en el suelo y la garganta estirada.

-ELI: sube un poco la cintura…- así lo hice -… acercarte con cuidado.

Lo fui haciendo hasta que ella cogió mi polla y la fue dirigiendo con calma hacia su boca, empezó una mamada invertida, ya lo había hecho una vez pero estaba sentado en una silla, ¿por que el cambio? No tardé en averiguarlo, empezó un suave ida y vuelta agarrando mi pelvis, yo era un monigote y ella me hacia moverme, a cada envestida aumentaba el ritmo y lo sorprendente es que empezó a entrarle más cantidad de lo que había visto nunca, pero seguía con el ritmo y me quedé pálido al ver como, por pura física, la cantidad de carne que entraba tenia que sobrepasar su campanilla, pero no había arcadas, llegó a preocuparme pero ella seguía con mis caderas amarradas haciéndome mover.

Yo estaba disfrutando muchísimo, pero no paraba de mirarla a la espera de cualquier señal, nunca había pasado de la mitad de mi falo y ahora le faltaba poco para llegar a rozar mis huevos con la nariz. Llegó un momento en el que se empezó a notar en su garganta, totalmente extendida, el bulto de mi polla a través de su piel. Estaba literalmente tragándose mi polla, mi enorme polla. No pudo avanzar más llegando a un punto, se la metía en la boca y llegaba casi a su nuez y se quedaba así unos segundos, yo notaba los movimientos de su lengua y como mi glande estaba rodeado de su garganta. Era lo más cerca a una penetración que había estado, a los pocos minutos sentí que me corría La avisé con un gesto y del tirón se sacó mi polla, pude notar de forma clara como iba saliendo a través de la piel de su garganta, cuando la saqué, empezó a lamerme los huevos y pajearme a la vez, la corrida fue épica, llevaba corriéndome 2 semanas seguidas a diario y aquello fue la mayor cantidad sacada desde que Raquel me abrió los ojos en el hospital. La manché toda la cara, el pelo, el cuello, los pechos, el vientre, alguna gota llegó hasta sus piernas, caí rendido a su lado, con nuestras cabezas a la misma altura pero invertidas.

-YO: ¡dios mío! Eli, esto es lo mejor que me ha pasado nunca, ¿como narices.............?

-ELI: es un truco que me enseñó una chica, Checa creo recordar, de mi época de gimnasta nacional.

-YO: no quiero ni pensar como te lo enseñó…….

-ELI jajaja la verdad es que me lo contó, me dijo que su madre había sido una famosa artista circense del norte de Europa, una traga sables, y le había enseñado el oficio jejejeje

-YO: la madre que te parió, no pude elegir mejor……… ¿por que ahora?

-ELI: eres un bribón, me has puesto a mil con esa manera de separarme las nalgas y tener tu miembro entremedias haciendo de barricada, me ha puesto como en mi vida, te lo mereces.

Elisabeth - 3º SEMANA: Teórico.

Polla estancada en las medidas iniciales. La comparación más simple es que en reposo era algo más grande que un vaso de cubata, y en erección era como una botella de refresco de 1,5 litros si le quitarás el tapón.

El fin de semana voló, había fútbol y se me pasó rapidísimo, cuando entré al gym no me percaté, pero al fondo había un par de chicas, más jóvenes que nuestros acompañantes habituales, de la edad de Eli diría yo. Nada más ver a Eli me lancé a preguntar.

-ELI: son clientas y amigas mías, normalmente vienen por las mañanas pero las he convencido para que vengan ahora para ser pares e iniciar ejercicios de parejas y bailes.

-YO: ¿bailes?

-ELI: eso siempre ayuda a la agente a soltarse un poco y moverse

-YO: tú sabrás, pero ellas saben de mí............ vamos, de nuestro "acuerdo"

-ELI: ya lo verás......- me miró con cara lascivia y poniéndome un dedo en le pecho se fue con actitud chulesca hacia su zona.

-ELI: bien, escuchen todos, hoy tenemos chicas nuevas en la ciudad, son Carla y Tara, un aplauso fuerte para ellas y no las tratéis mal ehhhhh.

Eli puso algo de música suave como siempre, y se empezó con la rutina, las chicas no lo hacían mal, era cierto que eran clientas, conocían la rutina de ejercicios, durante media hora de ejercicios me dio tiempo a observarlas a fondo, como todos los hombres de la sala, alguno no llegó ni a los 10 minutos antes de sentarse.

Carla era un mico, propiamente dicho, no se si llegaría al 1,60, iba vestida con un chándal bastante holgado pero se podía notar que le sobraban algunos kilos, era pelirroja, con dos coletas, una a cada lado de la cabeza, llevaba gafas amplias y la cara bastante redonda. Si bien su figura no era fácil de intuir, en varios ejercicios de repetición el suéter amplio que llevaba se le metía por debajo de la tetas, y se le notaban, debían de ser enormes.

Tara era el polo opuesto, era rubia, alta, casi 1,75 pude deducir, figura esbelta, los brazos eran muy delgados, se le veía bien la parte de arriba ya que llevaba un top ceñido, nada provocativo pero no dejaba lugar a engaños, pechos normales, quizá algo más pequeños que Eli, eso si, en las piernas llevaba una especie de pantalones bombachos que no permitían más divagaciones.

La clase fue como siempre la primera media hora, yo ya directamente salía sin nada debajo del pantalón, no tardaron en venirse abajo los hombres y mujeres de siempre. Los hombres se hartaron de admirar a las nuevas, que estúpidos, Eli iba tan ceñida y ajustada como siempre. Algunos ejercicios me levantaron el ánimo y las nuevas no tardaron en fijarse en mí, alguna se paraba de vez en cuando fingiendo colocarse la ropa mientras comentaba algo a la otra. A la media hora de clase, Eli paró.

-ELI: está bien, veo que nos quedamos muy pocos ya…- apenas 10 hombres y 12 mujeres - ….vamos a probar algo nuevo, ¡ejercicio por parejas!..... - eso levantó la mirada de todos, como suricatas en el desierto -…..he preparado una ristra de canciones, duran 30 minutos, cada x tiempo habrá un cambio de canción, cuando ocurra, quiero que las mujeres paséis al hombre de la derecha, y cuando lleguéis al último hombre de la fila, empezáis con la fila de detrás, así todos bailaremos con todos, movimientos simples, y nada raro eh don Manuel........- sabia ganarse al publico -....¡¿ESTAMOS?!

Todos corrieron a posiciones iniciales. Eli se fue acercando a cada uno y fue haciendo parejas por filas para que fuera sencillo. Obviamente yo empezaba con ella.

-ELI: ¡uno, dos y tres!

Empezó la música y me dejé guiar por ella, muchas risas de fondo y torpes movimientos.

YO: ¿y ahora que?

-ELI: si queremos que funcione vamos a tener que ceder, nos van a frotar y restregar, procura hacerlas felices, voy a ayudarlas - me guiño un ojo, se me frotó como una perra en celo, me la puso como un mástil y tocó cambio de canción, solo pude sonreír

Sobra decir que hubo pelea sobre a que mujer le tocaba conmigo y que hombre se quedaba con alguna de las 3 "jóvenes", los 3 primeros turnos fueron algo caóticos pero se fue cogiendo velocidad, y la verdad, nos lo pasamos bomba, más obvio era que a Eli, Carla y Tara las metieron mano hasta en el carne de identidad. Y a mi, bueno, no iba a ser menos, no era ningún galán pero era alto, joven y sabían de sobra que iban ha hacer, no creo que haya un récord pero sin duda anduve cerca del tío al que más veces le han restregado el culo, la cadera o directamente la mano en la polla. Aquello me divertía, y a ellas, siempre que se iban de mi turno se iban haciendo aspavientos al resto.

Llegó el momento en que me tocó a Tara, me hice el cortés regalando un saludo clásico de baile y la ofrecí mi mano, ella se sonrojó y se acercó mordiéndose el dedo índice de su mano derecha, dándome la otra, y con la vista baja clavada en mi más que obvio pene. De tanto baile se me había salido de la pernera y casi era una tienda de campaña, ella al inicio no pegaba mucho su cuerpo y miraba hacia todos lados sonriendo, pero pasado unos segundos, me harté de llevarla como un pegote y la pegué a mi de un tirón, mi polla, aplastada entre nuestros cuerpos, la llegaba de lado a lado de la cintura, ella se sonrojó más si cabe, pero ahora me miró a la cara, e intercalaba con vistazos rápidos a su vientre, con la boca abierta, soltó pequeños golpes de aire, totalmente impresionada, “está avisada, pero no lo suficiente”, la hice dar un par de giros sobre su propio eje pero sin separarme mucho dejado que mi barra golpeara casi toda su circunferencia por su cintura, esto ya era practica de las enseñanzas de Eli, la llegué a poner de espaldas a mi pero cuando fui a acercarme cambió de canción. La oí mascullar.

-TARA: ................jo.

-YO: te has librado por poco, otro día no fallo - la miré a los ojos y la repetí el saludo de baile clásico, la besé la mano, y la pasé a al siguiente. ¿De donde había salido esa auto confianza y seguridad al tratarla? “Eli es buena profesora”.

Mi sorpresa fue que nada más darme la vuelta para ver a mi siguiente dama, no vi a nadie, andaba pendiente de Eli, la vi agarrada de un hombre por cada brazo, se la estaban rifando. De nuevo miré y a mi derecha, vi a Carla, se acercó como un obús, y casi sin reacción me preparé para el impacto, se me tiró encima como si fuera Papá Noé y ella un crió de 6 años.

-YO: ¡¡bueno!! ¿Vienes con ganas o que?

-CARLA: no te hagas el tonto, Eli me ha dicho que la tienes enorme y quiero constatarlo.- su honestidad y firmeza me descolocó.

-YO: venga…- me tuve que agachar -…. pues si te portas bien, soy todo tuyo.

Ella no paraba de intentar pegarse a mí, y yo de alejarla con el baile, no la iba a dejar el premio tan fácil, se lo tenía que ganar. Entendió mi propósito y se empezó a mover como no creía posible, le sobrarían kilos pero tenia ritmo. Al final la dejé acercarse, no perdió el tiempo y se pegó como una lapa, directamente me cogió la polla y la palpó de arriba abajo a través de la tela.

-CARLA: ¡¡¡¡madre de dios!!!!! que suerte tiene la muy guerra - supuse que se refería a Eli.

Me la colocó de tal manera que era vertical pero hacia abajo, me la volvió a meter en la pernera del pantalón, cosa que le agradecí, se colocó del lado a esa pierna y se me pegó de nuevo, ni me miraba a mi, solo constataba distancias, Yo no veía nada, sus 2 prominentes pechos hacían un ángulo ciego en su estomago, pero haciendo gala de mi capacidad de deducción espacial, mi cintura le llegaba a la altura de sus pechos, y más de un movimiento noté su muslo en mi punta del glande. No se molestó en decir nada, solo se restregaba contra mi, eso me ayudaba a cerciorarme, cada vez que se movía de arriba a bajo sus pechos hacían efecto brocha en mi cadera, debía de pasar de la talla 100, seguro.

De nuevo cambio de canción, Eli salió despavorida del fondo de la sala y se me echó a los brazos, ya habíamos dado una vuelta entera, todos con todos, y se acababa la hora final. Eli era lista y puso el último turno largo y pausado.

-YO: ¿que tal, profesora? - levantó algo la mirada, pero no me miraba a mi, si no a mi pecho.

-ELI: ha ...ha sido más duro de lo que creía, no se si podré repetir, me siento...... me siento mal - incluso la noté temblar.

YO: hey, hey, tranquila morena mía, ya estás a salvo conmigo, aquí no te va a pasar nada malo….. - traté de calmarla -…. si no quieres, no se repite esto - de la impresión se me bajó el empalme que llevaba 30 minutos sin bajar.

-ELI: ha sido duro, ¿para ti?

-YO: no te voy a mentir Eli, me lo he pasado genial, y que sepas que tus amigas van bien servidas - le saqué una medio sonrisa.

-ELI: siento si te molestó, pero, tenía que convencerlas de venir a esta clase y eras el mejor argumento.

-YO: no pasa nada, ahora cálmate y prepárate para terminar la clase, si no quieres, hoy descansamos, no hace falta que te quedes - alzó la mirada de nuevo, ahora si a mis ojos, la sentí débil así que le trasmití la mayor seguridad posible, sonrió ampliamente.

Acabó la música, volvió a ser ella de repente, pidiendo aplausos y felicitaciones, se fue y preguntó por todos lados que les había parecido. Mientras ella lo hacia yo cogí mis cosas y ni corto ni perezoso me fui directo a donde estaban Carla y Tara. Puse mis cosas al lado y sin decir nada me senté a esperar. Ellas cuchicheaban, bueno, Tara lo hacia, a Carla se le oían las burradas que decía claramente. Estaba claro que Carla era todo un carácter.

Eli terminó de despedir a todos y se fue a nuestra zona, su rutina antes, cerró todo y comprobó los baños, se me acercó directamente como la misma cara pálida y asustada de la última canción, la miré fijamente, miró a sus amigos y estalló señalándome con el dedo y saltando de alegría.

-ELI: ¡¡JAJAJAJA HAS PICADO, IDIOTA!!

-CARLA Y TARA: jajajjaajjaja te la acaban de meter hasta el fondo.

-YO: ¡¡¡¿PERO QUE COJONES PASA?!!!!

-ELI: nada tonto, que estaba todo preparado.

-YO: ¿todo que?

-ELI: pues todo, mi debilidad al final de la clase......

-CARLA: .......la timidez de esta pava - señalando a Tara

TARA: ......y tu atrevimiento, cerda - dijo algo molesta con Carla.

Las tres se echaron a reír, yo me quedé a cuadros, como si me robaran en casa conmigo dentro y no me enteraba, las miraba atónito, y alguna palabra mal sonante se me fue a la cabeza, pero guardé calma.

-ELI: ¡¡¡¡ayyyyyyy mírale que cara de mustio se le ha quedado!!!!.............. jijijiji, ¿te crees que una mujer como yo no puede soportar que la metan mano un poco?, eso me pasa a diario - mientras decía eso agarró mi mejilla con una mano, a lo abuela, se la quité de mala manera, estaba cabreado, me la habían jugado, ¿por que? ¿que ganaban?.

Eli se acercó con ternura, se puso de espaldas y se me sentó encima de forma lateral, de cara a sus amigas, yo miraba hacia su espalda, no quería saber nada.

-ELI: oye, siento el numerito, pero esta es ya la 3º semana, tocaba practica, y que mejor que probar si se te ha quedado algo en ese melón, si lo hacia yo sola no quedaría creíble - empecé a entender por donde iba, se hizo un silencio largo.

-YO: bueno.............. ¿y la nota?

-ELI: conmigo te has salido del mapa, has sabido llevarme perfectamente, has entendido mi necesidad, la has priorizado y me has hecho sentir segura ¿vosotras?

-CARLA: el muy cabrón me ha hecho sudar, me he tirado como una leona en celo aplastando a estas dos… - se agarró los pechos - …y el jodio me ha hecho merecérmelo, me ha puesto a mil.

-TARA: bueno, no sé, a mi me ha encantado el baile, me ha costado pero al final.............joder me la ha pasado por todos lados.

  • ELI: bien, parece que tenemos un 10 de mi parte, un...........- miró a Carla.

-CARLA: un 9 de mi parte, después de ganármelo no ha hecho nada, solo me estrujaba, si me lo tengo que ganar, ha de merecer la pena.

-TARA: yo un 7, esperaba que me acercara a él nada más verme, me estaba mordiendo el dedo, como dijiste Eli, y tardó un poco en reaccionar, pero la despedida me ha dejado con ganas de más.

-YO: me cago en todo – “lo del dedo, o morderse el labio inferior”, eran cosas obvias, lo tenía en algún lado de la cabeza, al igual que lo de Carla, una vez encima debía haber movido más la cintura.

-ELI: yo creo que ha salido bastante bien, y como tal te tengo un regalito................

Tendiéndola encima me cogió de la cara y empezó a darme besitos a lo largo de mi mejilla, suaves, intensos, sonoros, de los que se notan los labios pegándose a la piel, cediendo poco a poco y cambiando mi enfado por excitación, fue girando mi cabeza hasta que nuestros labios se juntaron, en ese último beso se detuvo, me miró fijamente como pidiendo perdón, la observé con cierto desaire pero asintiendo, acéptalo lo ocurrido.

-YO: eres cruel.

-ELI: lo soy, pero valdrá la pena.

Me besó de nuevo, al inicio con clama pero fue subiendo el ritmo, y tal como me había enseñado a lo largo de las clases, empezó el movimiento de leguas en nuestras bocas. Acerqué su cuerpo al mío, con una mano rodeé su cintura y con la otra sujetaba su nuca por la zona del cuello. Ella empezó su ritual habitual, agarrándome la cabeza por detrás de las orejas, jugueteando con sus dedos en mi pelo, era una experta en besar, movía su lengua con pasión, y su forma de abrir y cerrar la boca me calentaba. Mientras ocurría aquello, oí un sonido, me percaté, Carla y Tara seguían allí, abrí un ojo y las vi, observando con atención cada uno de nuestros movimientos, Tara tenia una mano sobre la rodilla de Carla y apretaba, acompasando ese movimiento con cada embestida de nuestros labios, no le veía la otra mano ya que Carla estaba en medio, y al mirarla vi como se relamía, y repetidamente se mordía el labio inferior. Eli se percató de ello también, dejó de besarme para mirarlas con cara de lujuria, mientras yo atacaba la parte de cuello expuesta a mi.

-ELI: ¿que os pasa, queréis participar?- paré en seco, e intercalé miradas con Eli y ellas, esperando alguna reacción positiva o negativa.

-TARA: no...........vamos no podría.......... - dudaba, Eli miró a Carla y la hizo una señal.

-CARLA: a mi me esta poniendo burra, y quiero mi parte del pastel, me lo he ganado en el baile.- se giró hacia Tara y vi claramente como tenia la otra mano metida entre sus piernas, se estaba frotando de forma evidente.

Carla se puso en pie de frente a Tara, debido a su diferencia de altura, los pechos de Carla quedaron a la altura de la cara de Tara, y sin ningún miramiento se quitó el suéter, me quedé como toda mujer que había visto mi miembro, boquiabierto, llevaba un sujetador color carne, poco erótico, pero es que debía ser difícil encontrar sujetadores bonitos de esa talla, tenia unos pechos enormes, obscenos, le rebosaban por encima de la copa del sostén, para remate, se agachó para bajarse le pantalón, la descripción más adecuada es que penséis en ubres de vaca colgando, debajo del pantalón llevaba unas bragas bastante clásicas, pero estaban empapada en sudor, se le pegaban mucho a sus pronunciadas curvas, al erguirse, pude comprobar que, si, le sobraban unos kilos, si fuera medico, siendo hombre era gloriosa, un monumento a las curvas, a la imagen de las diosas antiguas.

Se acercó a Tara, que no le perdía detalle Carla, ni Eli y yo a ellas, cogió la cabeza de Tara y la hundió entre sus pechos, literalmente parecía que había 3 cabezas. Eli me miró con cierta sorpresa, y la devolví la mirada con agradecimiento. La levanté casi a pulso, en un buen movimiento, casi ensayado, y pasó de estar sentada sobre mi de forma lateral, a estar montándome a horcajadas, se arrancó a besarme de nuevo, yo ya sabia lo que hacia, lancé mis manos a su culo y empecé a masajear en círculos sus glúteos, separando todo lo que me dejaba y soltándolos de golpe. No tardó en reaccionar, levantó la mirada al cielo suspirando profundamente, aproveché la situación y con cierta maestría le quite el top deportivo dejando sus pechos a mi alcance, sin parar mi masaje en sus tersos glúteos, empecé a besar cada pecho, dedicándole un tiempo prudencial a cada pezón, las aureolas de Eli eran grandes y sus pezones empezaron a crecer, metí mis manos por debajo de sus pantalón ajustado, y seguí mi masaje. De vez en cuando miraba hacia nuestras 2 amigas, en la 1º mirada vi a Carla, ya se había quitado el sujetador, la gravedad en este caso afectó, no quedaba otra, sus pechos decayeron algo, pero seguían enormes, y si las aureolas de Eli era grandes, las de Carla me recordaban galletas campurrianas, algo granuladas pero coronaban un par de pechos que estaba siendo devorados por Tara, tenia que irse turnando, no era capaz de abarcar los 2 pechos a la vez. La 2º vez que miré Tara estaba ya de pie, sin el top pero aun con un sujetador negro puesto, debía ser un PUSS UP por que se las levantaba bastante, Carla le estaba quitando los pantalones bombachos, por fin vi las piernas de Tara, no eran tan torneadas como las de Eli, estaba menos formada, pero pese a ello se le notaban bien definidas, llevaba un culote negro a juego con su sostén. La 3º mirada ya me puso a reventar, Tara estaba sentada abierta de piernas con Carla entre ellas, besándose como autenticas posesas, Carla se quitó hasta las gafas, observé que ambas ya estaban totalmente desnudas, los pechos de Tara quedaban ridículamente tapados por los de Carla, atisbé un pezón, diminutos en comparación con las otras dos, pero la fricción entre ellos me hipnotizó.

No aguanté mucho más y me quité a Eli de encima, me puse en pie y me desnudé, con una erección de caballo, Eli hizo lo propio y quedamos desnudos, me senté y la atraje hacia mi, cuando se acercaba la di la vuelta y la senté encima mía, de espaldas a mi, cuando lo hizo me acomodé la polla y la puse de forma que atravesara a Eli por debajo, frotando su coño con el borde de mi barra de carne, me centré en darle besos en su cuello, mientras lancé mis manos a sus pechos, a lo que Eli reaccionó empezando un leve movimiento de caderas, frotándose contra mi miembro, abriendo sus labios mayores, con una mano ella buscó mi cabeza y con la otra guiaba mi polla entre sus muslos. Miré de nuevo a nuestras acompañantes, y no puede parar de hacerlo, Carla le estaba comiendo el coño de una manera brutal a Tara, le veía introducir su lengua como un micro pene en el coño de Tara, lo tenía totalmente rasurado, sin rastro de pelo. Tara no estaba, tenia lo ojos entre abiertos y en blanco, lo estaba disfrutando, empezó a convulsionar y se corrió en toda la cara de Carla, que empezó a subir por el cuerpo de Lara, besando y lamiendo cada centímetro, centrándose en los pechos de Tara.

-CARLA: te toca - Tara volvió en si, sonrió de forma definitiva, se dio la vuelta y quedó de rodillas a las sillas, Carla la rodeó, se sentó, y se abrió de piernas de forma poco atractiva pero dejaba bien a la vista todo. Tenia mucho bello, lo tenia cuidado, pero abundante. Fuera de su propia timidez Tara se lanzó, sin preliminares ni nada, a zamparse el monte de venos de su amiga. Yo seguía abriendo camino con mi polla entre los labios de Eli que jadeaba repetidamente, inicié una masturbación rápida que llevó a Eli a un orgasmo intenso. Con el movimiento de su explosión cayó al suelo, y tras tomar algo de aire, se arrodilló, y miró la escena de al lado.

-ELI: hey chicas ¿queréis probar esto? - y diciendo esa agarró mi miembro, algo mojado de sus propios fluidos, me miró pidiendo aprobación, y se la concedí encantado.

Rápidamente las dos mujeres se pusieron junto a Eli en el suelo, quedó Eli entre mis piernas, a su izquierda se arrodilló Tara, en la silla, al otro lado, se sentó Carla.

-ELI: juguemos, esto va a funcionar así, yo mando y los 3 obedecéis. ¿de acuerdo? - los 3 asentimos, y se dirigió 1º a mi - tú quédate quieto, no hagas nada, no te muevas, ni toques hasta que te lo ordene.

-YO: como gustes. - me recosté con lo brazos apoyados en los respaldos de las sillas.

-ELI: Tara ponte aquí, entre sus piernas, yo te iré guiando - así lo hizo y nada más ponerse allí clavó sus ojos en mi miembro, sin parpadear, con la boca entre abierta. Eli se puso al lado y me agarró la polla como si fuera un elemento de entrenamiento - bien Tara, quiero que la cojas, sin hacer nada más, aquí, de la base..... venga - a Tara le costaba decidirse se movía despacio sin parar de mirármela, con algún gesto en busca de aprobación de Eli, al final se hartó - joder que mojigata eres - la agarró la mano y me la plantó en la polla - vale ahora la otra - no espero, le cogió la otra mano y se la puso encima de la otra.Era tremenda la diferencia entre que fuera yo quien agarrara mi pene y fueran ellas, la diferencia por comparación era abrumadora, con una mano en la base y la otra encima aun me sobrara más del 35% del miembro, y ni siquiera la circunferencia de sus manos rodeaba mi falo.

-ELI: ahora acerca tu cabeza con cuidado y empieza a darle besitos y lametones a esta preciosidad de polla. - ante la cansina y repetida timidez de Tara, le agarró la cabeza y se la echó a mi pelvis - joder nena, que te he visto con Carla, empieza a tomarte esto en serio.

Carla seguía sentada sin perder detalle, yo solo miraba hacia ellas, Tara se decidió ante el tono de Eli, empezó a dar suaves y cortos besos a mi glande, intercalando algún lametón delicioso.......

-ELI: así, ve cogido ritmo, sin parar, y cuando estés lista empieza a subir y bajar la piel, con cuidado pero sin parar, subiendo el ritmo.

Tara ya obedecía como una autómata, hasta se permitió el lujo de meterse parte de mi glande es su boca, no jugueteaba con la lengua ni succionaba, solo la metía. La tenía bastante a tono, pero el aumento de ritmo de sus manos terminó por sacar lo mejor de mis vasos sanguíneos.

-ELI: quiero que muevas la lengua cuando metas el capullo en la boca, frótalo con las paredes interiores de tus mejillas y al chupar. - sin decir ni nada lo hizo, de forma algo torpe, Eli era mucho mejor en eso.

Aun así, esa imagen era provocadora, y no pasó desapercibida para Carla que empezó a frotarse el coño a mi lado, nuestras miradas se cruzaron un par de veces y cada vez ella intercalaba comentarios obscenos sobre mi polla

-CARLA: ¡¡¡¡¡¡¡¡como la tienes cabrón............la vas a partir la boca...........vaya pedazo de polla dios!!!!! - cada comentario indicaba una subida de revoluciones en su fricción intima. Eli la vio y ya viendo cierta maestría en los gestos de Tara, la apartó, y le dijo a Carla que era su turno.

Ni dudó, se colocó boca abajo sobre las sillas y plantó sus enormes pechos en mi muslo dejando mi miembro a la altura de su cabeza, la agarró con firmeza y la ladeó, admirándola, nada nuevo

-CARLA: ¡¡¡¡¡¡¡madre de dios esto no es humano!!!!!!

Empezó un leve sube y baja con la mano y de un movimiento engulló más de media polla, su habilidad chupándolo era equiparable a la de Eli, incluso uso el truco de pasar suavemente los dientes por la punta del glande, e incorporó pasar su lengua por un ligero pliegue entre el glande y el tronco. Me empecé a enervar demasiado, el froté de sus tetas en muslo, la imagen tragándosela como una posesa y ver a Eli y Tara comentando experiencias y diciéndole que prestara atención a los movimientos de su compañera, me puso a mil, me contuve por poco de liarme a magrear lo que pillara a mano.

-ELI: vamos a subir el listón, Tara, ponte en la misma postura que ella pero del otro lado - así lo hizo - y mientras una me comía la punta la otra trabajaba el tallo.

Con un poco de lió al inicio, lo hicieron a la perfección, Carla trabajaba el tallo de manera ejemplar y jugueteaba con mis huevos, y Tara seguía con lo aprendido en el glande, 2 mujeres chupándomela a la vez ¡¡¡¡¡brutal!!!!!!, Eli las iba dirigiendo y llegó a hacer que me pajearan a la vez con la boca, una por cada lado. No aguanté más y me corrí de forma generosa

-YO: ¡¡¡¡¡¡¡¡ DIOS……..como esto siga así no respondo de mis actos!!!!!!!!

Sonrieron al unísono, mientras Tara se me apartó un poco de encima con cara de orgullo propio, Eli se despistó y de un saltó se me puso encima Carla, ha horcajadas empezó besarme, y con una mano dirigió mi pene hacia su entrada de la vagina, por poco la penetro, pero Eli la saltó al cuello, la hizo un llave en el cuello, y la arrancó de encima de mí.

-ELI: ¡¡¡¡¡¡¡chica mala, este semental lo domino solo yo!!!!! - le dijo increpándola cuando cayó al suelo, no fue nada violento, pero si contundente.

-CARLA: joder, como te pones tronca, me he calentado, no pasa nada.

-ELI: ¿y tu que? ¿te ibas a dejar violar? - me dijo de forma directa.

-YO: me has dicho que no haga nada, que no me mueva, eso he hecho, y gracias a dios, por que si no es por mi control de aquí salís todas con el coño ardiendo.

Sonó gracioso y eso le pareció a las novatas, pero Eli me miraba a los ojos y supo que no bromeaba, estaba listo para el siguiente nivel. Eli mandó recoger, con la tontería casi llevábamos 1 hora, nos duchamos fugazmente y Carla se ofreció a acercarme a mi casa en coche, al parecer le pillaba mejor que a Eli. Yo acepté sin pensar, y vi en los ojos a Eli que no le hizo demasiada gracia, pero Tara la distrajo hablando de lo ocurrido. Nos despedimos y en el trayecto a casa paso lo que Eli temía, Carla no paró de acosarme, metiéndome mano de forma descarada e insinuando repetidamente que podíamos ir a su casa a rematar la faena. La visión de sus mamadas me cruzó por la mente pero tenia mi código, no sabia cual era aun, y rehusé todo el tiempo. Cuando llegamos a mi casa aparcó un poco más lejos, en una zona oscura y se me abalanzó encima.

-CARLA: venga tonto, esa pájara lleva 3 semanas mareándote, yo te daré lo que quieres- llevó mi mano a su coño.

-YO: tengo la sensación de que tú quieres más esto - dije agarrándome la polla - de lo que yo quiero esto - dije apretando mi mano entre sus piernas.

Me la quité de encima, me despedí cortésmente y me fui a mi casa con orgullo, dios sabrá por que, había tirado a la basura mi primer polvo. Durante todo el día pensé, el por que hice aquello, y que seria si Eli se entraba, ¿se enfadaría conmigo o con ella?, hasta pensé en si seria otro engaño. Cuando llegó la hora de ir al gym mi padre se ofreció de nuevo a acercarme, y me volvió a insistir en mis cambios físicos, me mosqueaba pero tenia la cabeza en otro sitio. Al entrar no vi a ninguna de las 3 jóvenes, y cuando me senté se me acercaron muchas mujeres a felicitarme por el baile del día anterior. Entre tanto vi entrar a Tara y Eli, pero no a Carla. Me fui a hablar con ella.

-YO: oye deberíamos hablar, a solas.

-ELI: pues si, deberíamos. - intuí enfado en su voz, nos separamos a una esquina.

-YO: mira siento lo de ayer, no se que me pasó, o que hice bien o mal, se me tiró encima y no supe..........

-ELI. ¿de que hablas? - me miró atónita.

-YO: esto yo.....de Carla.....de lo que paso al volver a casa, ¿no te ha dicho nada?

-ELI: ¡¡¿¿que esa puta se te tiro encima??!!! yo la mato, es más puta que las gallinas, pero ya se la jugare, ya......

-YO: entonces.......¿por que querías hablar a solas?

-ELI: ahh si.........será zorra – masculló haciendo memoria - ...................mira, vas muy bien con lo nuestro y ya iba siendo hora de que empecemos con las penetraciones vaginales.........

-YO: ¿iba......?

-ELI: si, la verdad es que ayer después de lo que dijiste me di cuenta y venia preparada, pero me ha venido a visitar el primo rojo.........el del atleti..........el tomate..........- yo la miraba sin comprenderla……- joder que me ha venido la regla, que todo hay que decirlo.

-YO: ¿no me jodas?

-ELI: precisamente......

Me hizo gracia el comentario pero no la idea, comenzó la clase, ya habían llegado todos, Carla incluida, en algunos ejercicios se le notó cierto dolor en el estomago a Eli, y como ayer a la media hora, los bailes, y de nuevo a empezar con Eli.

-YO: oye no pasa nada, se deja para otro día.

-ELI: no es eso, es que, pufff nos queda una semana larga y unos pocos días más y aun queda bastante, no podemos permitirnos perder días.

-YO: bueno, pues se hacen clases aparte, puedo ingeniármelas para sacar tiempo.

-ELI: creo...... creo que seria mas cómodo si.........que te parece Tara, o .......la zorra de Carla.........

-YO: ¿que me parecen de que?

-ELI: pues que si quieres, puedo guiarte, y que en vez de conmigo empieces tener sexo con ellas - lo dijo algo apesadumbrada, yo no sabia si eso era un truco más, un engaño o la realidad - mira, piénsatelo y me respondes al final de clase.

Tocó cambio de música y entre juegos, bailes y frotamientos, una idea rondaba por mi cabeza, ¿de verdad podía follarme a alguna de sus amigas con ella delante? ¿Quería hacerlo? quería follar, eso estaba claro, pero tenia que decidir. La 1º esta vez en llegar a mis brazos fue Carla.

-CARLA: oye mira, perdona lo de ayer, se que no estuvo bien pero es que me tenias loca, no se lo digas a Eli, por que se cabreará, me dijo claramente que no lo hiciera - yo guardé silencio y a los pocos turnos llegó Tara, muy sonriente y con más alegría que ayer.

-TARA: me encantó lo de ayer y esto no ha hecho más que empezar

-YO: me alegro de que te gustara, yo lo pasé como un enano - al oírlo ella se puso de puntillas.

-TARA: tú, enano, no tienes nada - tan simple que me puso a tono

Siguió la rueda de cambios hasta que volvió Eli conmigo, último baile de nuevo.

-ELI: tienes una respuesta - dijo con miedo, pero firmeza, en la voz, no se si era un engaño, pero mi respuesta era clara, la apreté contra mi con fuerza, agaché la cabeza a su oído y la susurré.

-YO: pude empezar ayer y decidí que no, nada a cambiado, tú serás mi 1º vez, eres la única a quien quiero darle ese regalo - la repuesta seguro que podía haber sido mas bonita o lucida, pero no más sincera. Eli se separó un poco y me miró a lo ojos con ternura.

-ELI: gracias, lo necesitaba - y se echó sobre mi pecho.

Acabó la clase con el jolgorio habitual, rituales de siempre y nos quedamos los 3 solos.

-ELI: esta bien, empezaremos con las penetraciones hoy, pero por lo visto el único pene presente a elegido dama – me guiñó un ojo- por el momento habrá que esperar, teniéndome algo así, he traído esto.

Sacó una bolsa de la nada y la abrió, la volcó en el suelo, una cantidad elevada de consoladores cayeron al suelo, de todo tipo, tamaño, color y forma. 2 llamaban la atención, había uno negro que seria de mi talla o incluso mayor, y otro rosado que era de unos 60 cm de largo con forma de pene en ambos lados. Empezamos a desnudarnos e iniciamos un juego por el que comparábamos y hablamos sobre usos y disfrutes. No se tardó demasiado en que Carla empezara a meterse alguno de talla media, Tara agarró uno más pequeño pero que vibraba, se frotaba con ritmo, Eli y yo mirábamos y ella me iba comentando las formas de usarlos, iba intercalando y empezamos a usar los consoladores nosotros sobre ellas, un momento mágico fue coger el rosado meterlo en Carla por el coño en un extremo y por el otro a Tara, empezaron a hacer la famosa tijera pero con un consolador enrome metido en sus orificios.

En un momento dado, yo estaba con Tara regalándole una comida de coño marca de la casa mientras que con un dildo especial le frotaba el punto G, no paraba de correrse, la daba aire y volvía a empezar. Miré a Eli y la vi intercalando dildos en Carla, aumentado en tamaño, y cambiándola de posición, comentándome en todo momento por que hacia lo que hacia.

-ELI: ves, este es mas fino, pero con estrías y este tiene una saliente para frotar el clítoris, así....- y lo aplicaba en Carla, la puso a 4 patas para enseñarme la mejor posición para recibir el mastodonte negro, lo lubricó bien y lo fue metiendo a poco, haciendo hueco en el interior de Carla, que por momentos se desvanecía de placer.

-CARLA: ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡ohhhhhhh diosssssssss, no pares, NO PARES!!!!!!!!!

Sin mucha espera Eli empezó un mete saca rapidísimo, apenas le metía la mitad del consolador pero ya era un logro. Empezó a chuparse un dedo y lo llevó al ano de Carla, frotando suavemente, y con algo de presión, introdujo el dedo.

-CARLA: anissssssssss,. ten cuidado, sabes que no me gusta mucho por detrás.

-ELI: tranquila, claro que lo se......- sonó a 2º intención, poco a poco hizo el agujero de Carla en su culo más grande metiendo 2 o 3 dedos.

-CARLA: ¡¡¡¡¡¡OHHHHHH SI SIII, SI, SI, ASI SI CON CALMA, UFFFFFFFFFFFFF DIOS COMO ME PONES!!!!!!!

-ELI: te pongo mucho ehhh zorra, te vuelves loca, y no haces caso................ te dije que no le tocaras sin mi permiso - se les cambio el rictus de la cara a las 2, Eli pasó de concentración a intimidar y Carla de disfrute a pánico - ahora sabrás las consecuencias de meterte donde no te llaman - de golpe sacó el mastodonte negro del coño de Carla, totalmente empapado y se lo clavó en el ano, bueno, lo intentó, hacia mucha fuerza y se dobló, pero la punta había entrado.

-CARLA: ¡¡¡¡¡¡DIOS…………. PARA………..LO SIENTO………….PERO NO ME HAGAS ESTO…………… NO POR DIOS, QUE DUELE!!!!!!! - intentó moverse pero Eli no la dejó, la agarró con una mano mientras con la otra seguía haciendo fuerza con el consolador enorme sobre su ano.

Eli tenia los ojos inyectados en sangre, poco a poco el pene fue entrando, los gritos de Carla era terribles, pero Eli me miró con mirada segura, no quería que hiciera nada. Tara se sobresaltó al verlo, pero mientras yo seguía con su masturbación, no se movió del sitio. La fuerza que debía ejercer era enorme sobre aquel pobre ano, se introducía centímetro a centímetro, y lo que quedaba aun fuera se doblaba de la presión. Yo logré la 3º o 4º corrida de Tara y me coloqué de forma que pudiera chuparme la polla sin problema alguno, recostado sobre una silla, con una visión perfecta de la tortura que allí había, Tara se había soltado y me estaba regalando una mamada de cine y la imagen que tenia enfrente me tenia la polla como una piedra.

-CARLA: ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡DIOS PARA, POR FAVOR…………..ME ESTAS PARTIENDO………AYÚDAME………. DUELE…………… DIOS!!!!!!!!! - gritaba como un gorrino mientras caían lagrimas por sus mejillas.

Llegó un punto en que el consolador no entraba más, y dejándolo allí Eli se levantó, se hizo el silencio, solo interrumpido por el chapoteo de la boca de Tara en mi entrepierna. Carla permaneció inmóvil, con la cara roja a reventar, lagrimas del color del maquillaje de sus ojos, con la boca abierta y con aquel enorme falo de plástico clavado en sus intestinos.

-ELI: ¡¡¡¡¡quédate así un rato, por puta!!!!!

Me quedó claro, y es la 1º lección de vida que os doy, jamás enfadéis a una mujer con la regla, y yo nunca debía enfadar a Eli. Ella se acercó a mi posición, se me subió encima a horcajadas plantándola el culo en la cara a Tara, que no por ello dejó de chupármela por debajo, Eli se lanzó a besarme con pasión y fuerza, terminando cada arrancada con un beso pequeño y suave. Entré eso, la mamada de Tara y la estatua sado que era Carla, reventé sin avisar sobre la boca de Tara, no podía avisarle, tenía la lengua de Eli metida hasta la garganta.

Cuando acabé apareció Tara por un lado totalmente empapada de mi semen, dentro de la boca y fuera, por su cara, cuello y pecho, como si la hubieran tirado un litro de leche encima. Eli se apartó de mí y le dijo a Tara que ayudara a Carla a quitarse aquello y la llevara a las duchas a reponerse. Así lo hizo, de refilón vi como le sacaba el consolador del culo poco a poco, y según lo hacia, Carla parecía reaccionar, soltando leves gemidos de liberación. Mientras pasaba, Eli agarró mi cara y me miro fijamente.

-ELI: tú lo has querido así, serás mío - esas palabras, su seguridad y los lamentos de Carla de fondo.

Me desmontó y se fue a recoger, poco o nada más supe de Carla desde ese día, la vi un par de veces por el gym pero no volvió a acercarse.

Elisabeth – 3º Semana: Mi 1º vez.

Entre tanto pasó el fin de semana, me quedaba una semana más y el lunes siguiente. Al llegar al gym, algo tarde, no me dio tiempo ha hablar con nadie, rutinas de siempre, ejercicios eróticos y bailes obscenos entre todos. Acabó la clase y nos quedamos Eli y yo.

-ELI: bien, Carla ha decido no seguir con nosotros, ella se lo pierde, aquí y ahora vamos a empezar a follar.

YO: ¿y Tara?

-ELI: seguirá pero hoy no, además en una mojigata, ha hecho el amor con 1 novio que se metió a clérigo después, no ha follado como dios manda.

-YO: ¿ahora son clases conjuntas?

-ELI: no, tú eres avanzado y ella pro, pero me vale como ayudante jejejeje yo ya estoy bien de la regla y te voy a destrozar, empieza a desnudarte, ya sabes todo lo que haya que saber para llegar a este punto, ahora toca follar.

-YO: ¡¡¡¡ENCANTANDO!!!! – no eran las palabras de un romance juvenil ni la forma en que sueñas que sea tu 1º vez, pero por fin había llegado el momento.

-ELI: esto no es un juego, es difícil, tienes que tener mucho cuidado, la tienes enorme y muchas de tu edad, o hasta de la mía, no estarán acostumbradas, alguna virgen incluso con el himen, notarás su sangre, ya te dije como lidiar con ello - todo esto lo dijo desnudándose como si yo no estuviera allí mirándola y comiéndomela con los ojos.

-YO: ¿que hago?

-ELI: bien, lo 1º es que conozcas la sensación, te adecues y no te corras enseguida.

-YO: hombre, ya pasado todo este tiempo, mi aguante es considerable.

-ELI: nada que ver, esto es diferente, túmbate boca arriba en el suelo - lo hice mientras la veía con un bote de lubricante embadurnase bien el coño. Se sentó en mis piernas mirando hacia mí, y con una mano pringó mi polla de arriba a abajo de igual forma, la tensión de lo que sabía que iba a ocurrir y sus caricias me la pusieron como una estaca - bien esta postura es la más sencilla para un hombre, tú solo tienes que estar tumbado y dejarte hacer, así la mujer domina la velocidad y profundidad de la penetración, en algunas es mayor o menor, pero es posible que tu herramienta llegué a rozar la pared del útero, es no es bueno, no te engañes, duele muchísimo y no genera ningún placer. ¿preparado?

-YO: como en mi vida creí posible.

Levantó la cadera y gateó sobre mi hasta colocar pelvis con pelvis, con ambas rodillas en el suelo, intentó orientar la cabeza de mi polla a su entrada, pero no había sitio material para eso, tenia que alzar sus caderas al máximo y ni así, tuvo que levantar una pierna y apoyar el pie en el suelo para generar espacio, ahora si, colocó mi miembro en su entrada y poco a poco fue bajando, con la otra mano abría sus labios mayores y empezó a notar el calor que emanaba de su interior en mi glande, bajaba muy despacio, noté presión sobre mi glande, la cara de Eli pasó de concentración mirando al infinito a cerrar los ojos y morderse el labio inferior entre respiraciones agitadas, consciente o no de eso, yo entendí las palabras de Eli, no había ni empezado y la paredes de su coño adaptándose a mi polla me subieron al cielo, en un gesto torpe se le fue el pie apoyado y cayó con la rodilla de golpe, bajo varios centímetros deprisa a lo que soltó un gemido ahogado.

-ELI: ahhahahahahahahha - se quedó quieta dejando que se acoplaran nuestros sexos, me miró, y la cara que me vio la hizo sonreír, debía estar alucinando y se me notaba. Llevé mis manos a sus muslos, acariciándolos con dulzura.

Tras un minuto así me pidió que levantara mis manos hacia ella, al hacerlo las cogió una con cada mano para apoyarse y empezó a descender de nuevo sobre mi, empujaba un poco hasta notar resistencia y paraba, dejaba acoplarse a las paredes de su interior y seguía de nuevo. Miré abajo y ya llevaba más de media polla dentro, era gloria, entendí al instante por que la gente mataba, vivía y pagaba por aquello, el calor, las sensación de tenerla totalmente rodeada, la humedad..........dios. Continuó bajando hasta que llegó un punto en que Eli inicio un temblor.

-YO: ¿es…..estas bien? ¿la sa…..saco?

-ELI: no, no, tranquilo ,ahhhhhh es solo que uffffffff hacia mucho que no me llegaban tan ........dentro, uffffff uffff ufffff, voy a intentar …..ohhhhhh........el movimiento, pero por dios, no te muevas.

Se quedó inmóvil un buen rato y cuando se notó segura, empezó a subir con tanta calma como había bajado, sentí la fricción y como la piel de mi miembro se movía, llegó casi a sacarla entera dejando el glande dentro, se palpó con una mano notando el tremendo socavón que le había dejado, volvió a agárrame las manos y bajó, esta vez más deprisa, pero no mucho más, llegó al punto previo de penetración, se quedó un par de segundos y volvió a subir, una gozada, una explosión de sensaciones me recorrió el cuerpo.

-ELI: tranquilo semental, que aun queda 1 hora.- era cierto, no habían pasado ni 6 minutos y yo ya estaba a punto de reventar.

El ritmo de Eli no dejó de subir, ya no esperaba en determinados puntos, bajaba y subía, acelerando, yo me puse a pensar en cosas poco eróticas, como me dijo ella cuando estuviera a punto, tenia que retrasarme, pero todo lo que se me ocurría eran las 3 semanas que llevaba disfrutando de aquella hembra.

-YO: ¡¡¡¡ELI....ELI....ME VOY...DIOS!!!!!! - la muy loba aceleró aun más el ritmo y la velocidad, la oía gemir, sus pechos comenzaron botar ante mi y me soltó las manos para apoyarlas en el suelo y coger impulso, no aguanté y estallé como un animal, un latigazo nervioso recorrió todo mi cuerpo.

YO: ¡¡¡¡¡¡DIOS SANTO ................LO SIENTO.........................NO PUDE .....OHHHHHHHHHHHHHHHH!!!!!!!! - hablaba entre la sensación de cada chorro de esperma con la que la inundaba.

Eli se agachó hacia mí y me besó con mucha ternura, notaba como mi eyaculación latía en su interior, un calor abrasador recorría mi miembro. Se incorporó y echó su cuerpo hacia atrás, yo me incorporé un poco y miré hacia ella, la imagen era sucia, asfixiante, caliente, no solo por el acto, el cuerpo de Eli estaba embadurnado de sudor, y los focos de la luz sobre su cuerpo la hacían brillar, jadeaba de esfuerzo y notaba su pecho subir y bajar violentamente, y lo mejor fue al mirar la entrepierna, ver que Eli se había metido mi tranca entera, hasta la base, la sensación era increíble pero duró poco, mi polla empezó a decrecer, ella lo notó, con calma se la sacó con cuidado, sin soltarla, se echó a mi lado, en el suelo, y siguió pajeando con suavidad mientras perdía firmeza entre sus dedos.

-ELI: no esta nada mal eh....

-YO: es la cosa más maravillosa que puede imaginarse, las canciones, los poemas, la gente, habla de ello constantemente pero nunca creí que seria así, nada tan bueno puede serlo sin pegas - de repente pensé............ semen..............sexo..............mujer...................¡¡¡¡¡CONDÓN!!!!!! la miré asustado - Eli, que pasa con el tema del... ya sabes……..mi semen en tu coño.

-ELI: jajajaja tranquilo, desde que empezamos estoy siguiendo un tratamiento esterilizaste - lo dijo mientras se llevó su mano a su coño, que chorreaba semen, cogió alguna gota que se llevó a la boca mientras lo chupaba con lujuria.

-YO: ¿desde que empezamos? no te he hecho nada hasta hoy - ella se incorporó de nuevo, sin soltar mi polla, se subió de nuevo a su posición anterior, mientras se agachó a besarme mientras seguía con su masaje, soltó su pelo, la 1º vez creo recordar que la vi quitarse la coleta, su pelo cayó a un lado de su cara y sobre la mía.

-ELI: era por si no era capaz de controlarme, y has estado a punto un par de veces, cabrón de mierda - aquello me llenó de orgullo, y entre eso y su masaje, mi polla reaccionó de nuevo - no esta mal, tu primer polvo a durado casi 10 minutos, y no han pasado ni 2 y ya esta tu amigo de vuelta, ¿listo para un 2º round?

-YO: listo

Me alcé y la agarré por la espalda, la recosté sobre mí, pegando su pecho al mío, le arranqué los besos más sádicos y bestias que me había enseñado y mientras con una mano acariciaba su cabello con la otra fui directo a su trasero, su punto débil. Ella lo intuyó y se puso erguida de nuevo, tensa, con mi polla creciendo, aplastada entre sus piernas, rápidamente me puso las manos en el pecho y yo me centré en acariciar su trasero, como sabia que le gustaba, inició un movimiento pélvico frotándose contra mi barra de carne que ya estaba más que lista.

-ELI: ahora te pediré de inicio lo mismo que antes, pero llegado un punto me alzaré y tendrás que levantar tú la pelvis, allí dominemos ambos el ritmo, pero te dejaré hacer.- asentí con la mirada con seguridad.

Comenzó como anteriormente, pero más deprisa, a los 5 minutos ya la tenia cabalgando como una amazona, se echó hacia atrás apoyando los brazos por detrás de si misma y seguía con un movimiento, más que de arriba a abajo, de adelante hacia atrás, en círculos, o más bien de forma ovalada. Jadeaba de forma grosera, yo agarré sus piernas y la atraje más hacia mi cuerpo, la tenia totalmente empalada, y llegó a temblar de nuevo, pero no paró, y esta vez fue ella la que me encharcó la polla con sus fluidos, pero tampoco paró, siguió, el ritmo era muy fuerte, yo me tensé, voluntariamente, como preparándome para aguantar un vendaval. Realmente lo que tenia encima era una fuerza de la naturaleza, intercalaba 1 o 2 minutos de ritmo infernal de sube y baja, con 1 minuto de descanso en que con mi polla totalmente introducida, hacia movimientos de cadera laterales. Se arrancó con otro momento de frenesí pero no paró durante 4 minutos, se corrió de nuevo encharcándome, y no solo mi pelvis.

Cayó agotada sobre mi pecho, ensartada, empapada en sudor y jadeando, tardaba más en soltar el aire que en cogerlo. Llevábamos casi 15 minutos y no me noté nada cerca de la eyaculación, sabía por lo que ella me enseño que cada vez seguida es más difícil.

-YO: pequeña, este caballo aun tiene ganas de correr - se separó el pelo de la cara, con cara de serio agotamiento

-ELI: te toca, empieza suave pero aumenta el ritmo y no pares hasta que te corras, y no en menos de 5 minutos - me besó en la barbilla, hizo fuerza con los brazos contra el suelo y levantó su pelvis hasta casi sacarse mi polla de dentro.

Planté mis pies en el suelo, firmes, la atraje hacia mi un poco, y agarré con fuerza sus caderas, me preparé, levanté mi pelvis del tirón, la penetré hasta la mitad y bajé, hice ese movimiento varias veces, y cada uno iba seguido de un gemido casi inaudible de Eli. Seguí haciéndolo hasta que encontré un ritmo mayor, la metas eran sencillas, encontrar zonas cómodas, con ritmo, y aguantar, cuando me acostumbraba a uno, subía el nivel de nuevo. Los gemidos de Eli pasaron a ser audibles hasta para los de la estación espacial, de hecho no eran varios, era uno continuado, que se cortaba cada vez que hacia una acometida. Yo ya no solo la sujetaba, la levantaba y bajaba a ella con fuerza en dirección contraria a mi pelvis, ella subía yo bajaba, yo subía ella bajaba, se oía el golpear de mis huevos en su coño, no medí bien y empecé a perder fuerza, casi agotado por la posición, pero seguía subiendo y bajándola a mi antojo con los brazos, la descripción acertada es que me estaba pajeando con una muñeca de carne y hueso. Noté la electricidad abriendo paso por mi polla, no tardaría en correrme y quería que ella lo hiciera de nuevo.

Solté su cadera y agarré sus glúteos y con cada arremetida le separaba todo lo que se podía físicamente sus nalgas. Eli era silencio durante mis acometidas y aprovechaba para respirar cuando bajaba el ritmo un poco, como cogiendo aire antes de zambullirse en el agua. La noté temblar y mi polla a punto de reventar, ella me ganó la carrera y salió una fuente disparada en todas direcciones, pero no por ello deje de moverme, y seguí algunos segundos más hasta que reventé en ella. Esos segundos demás fueron como domar a un potro salvaje, se movía violentamente sobre mi.

Cuando los dos acabamos caímos rendidos al suelo, ella terminó de medio de lado y aun con parte mi polla dentro, decreciendo pero dentro. Yo respiraba a duras penas, sentía dolor en mis glúteos y pantorrillas del esfuerzo. Cuerpo con cuerpo, sudados y cansados, Eli logró a decir unas palabras.

-ELI: vaya.....joyita.....tengo, ¿y este es tu 1º polvo dices?

-YO: tengo buena maestra.

-ELI: y un polla de elefante……en mi vida me había sentido tan.......tan....llena. - se llevó la mano a su coño y metía la mano, palpando la obertura hecha.

-YO: además he pasado de los 6 minutos jajajajaja

-ELI: que minutos ni que narices, me has dejado rota y queda media hora........

Por acelerar el tema, Eli me mostró un par de pociones más, sus ventajas y desventajas, y con que tipo de mujeres vienen mejor o peor, el misionero fue la 1º, y el acceso a sus pechos me convenció bastante, la 2º fue una en que ella levantaba una pierna solo y yo la penetraba de forma lateral. Perdí la cuenta de la cantidad de veces que nos corrimos ella y yo. Allí había gozo, diversión, y encima aprendizaje, a la hora terminamos, nos duchamos juntos y no pude evitar lanzarme contra ella, no quería que acabara nunca, la puse contra la pared de espaldas a mi.

-ELI: dios ¿es que nunca te cansas?

-YO: ¿de ti? ¿que loco lo haría? además, verte como te frotas la entre pierna ha despertado de nuevo a mi amigo - y empecé a frotar mi glande por toda la raja de su culo.

Me llevó al suelo y allí repetimos la 1º postura, con el agua cayéndonos encima, pero esta vez ella se recostaba sobe mi y no paramos de besarnos desde el inicio hasta la eyaculación final mía. Ella no se iba a quedar sin y la regalé otra comida de coño que se me empezó a dar de cine, en poco tiempo la hice correrse. Nos duchamos de nuevo y hasta el día siguiente.

Elisabeth - 4º Semana: Hardcore.

Mi vida había dando un vuelvo y me encantaba, me quedaba 1 semana entera para aprender y ya había echado más polvos que muchos de mis compañeros, en un solo día. Solo recuerdo felicidad, no se ni si pase por casa o fui al colegio, solo tenia ganas de volver a ver a Eli. Los días siguientes Tara se quedó con nosotros, solo a mirar y masturbarse cuando la situación se nos iba de las manos.

Me enseñó ya posturas más complejas y sus explicaciones, entre muchas destaco 2.

1º El cuelgue.

-ELI: eres grande y fuerte, eso hay que aprovecharlo.

-YO: tú dirás.

-ELI: bien quiero que me cojas en el aire a pulso, como cuando me subo encima de ti y te monto, pero de pie.

-YO: adelante.

Totalmente desnudos ella se agarró a mi cuello con fuerza y de un salto me rodeó algo por encima de la cintura con las piernas, cuando se sintió férrea, separó un poco su cuerpo y bajó una mano para agarrar mi polla, la dirigió a su coño, y haciendo fuerza con la piernas se separó lo suficiente para que entrara de golpe más de media barra, ya estaba acostumbrada a su tamaño. Una vez dentro, fue bajando soltándose de mi cuello poco a poco hasta que la ensarté entera, siempre que sentía esa sensación otra vez me recorría un hormigueo por la espalda, ella se mordía el labio inferior haciendo arcos amplios con la cadera y los ojos cerrados hasta acoplarse bien.

-ELI: pasa lo brazos por debajo de mis piernas y cógeme del culo - así lo hice encantado, todo lo que fuera magrear su trasero era una gozada de posición, realmente se volvía loca.

Comenzó haciendo fuerza con piernas y brazos para subir y bajar, al poco, con gran ritmo, yo solo la agarraba el culo para que no se me cayera pero con sus gestos era inevitable la tensión de su trasero, y gemía descosida. Al poco tiempo se abrió de piernas completamente, sin apoyo de de ellas en mi cuerpo, solo con sus brazos en mi cuello empezó a balancearse de adelante hacia atrás como un péndulo, si, como un trozo de carne siendo atravesado, aprovechaba la inercia del rebote para coger más distancia y llegaba a sacarse la polla entera y volver a metérsela de golpe. Yo no aguantaba mucho más y en vez de quedarme quieto empecé a chocarme contra su pelvis, provocando un orgasmo brutal a ella, de los fluidos salidos hasta se medio resbaló, si no la tengo agarrada se va al suelo. La dejé con cuidado en el suelo mientras terminaba de convulsionar y sin darme cuenta Tara salió de la nada y se lió a chupármela de forma agresiva, ya la habíamos dejado más de un vez intervenir en amagos de tríos, pero la escena debió ser tan fuerte que no se pudo contener. Selo agradecí como Eli me enseñó, la cogí en volandas y la di la vuelta en el aire, su cabeza quedó en mi rabo y su coño en mi cara, aun de pie, hundí mis labios y lengua en su preciado monte, toqueteando zonas que sabia que la volvían loca, cerca del ano, ella solo tragaba como una diosa, al inicio, los primeros días, solo podía con el glande pero ya tragaba la mitad sin problemas. El poco tiempo eyaculé en su boca.

2º El perrito.

Si, lo sé, no es nada innovador, pero no os podéis ni imaginar lo que era tener a esa hembra, diosa, amazona, da igual, a cuatro patas pidiéndote que le des por detrás, por el coño, pero por detrás. Ni me lo pensé, me puse detrás de ella, cogí fluidos de su coño, de una postura anterior, y me pringué la polla, la dirigí a su ranura y de golpe la embestí, me quedé quieto ante un sonido de queja más que de placer.

-YO: ¿estas bien?

-ELI: si, si, joder, es que me has pillado de sopetón, dale......

Aumenté el ritmo como me habían enseñado, poco a poco pero sin parar, llevaba 3 días follándomela, y aun así me la seguía poniendo como una piedra su trasero. Cada golpe de mi cintura retumbaba en sus glúteos, los agarré y empecé a hacer círculos, no duró demasiado y se corrió abundantemente, pero yo no había acabado, así que seguí haciéndolo, Eli pasó de estar a cuatro patas a vencer su cuerpo hacia delante, ahora simplemente tenia el culo en pompa, con su cabeza y pecho pegados al suelo, la destrozaba con fiereza, Eli siguió corriéndose cada cierto tiempo, incluso pensé en el multi orgasmo del que ella me habló, pero tras un cuarto de hora bombeando sin parar terminé como un campeón en la arena, eyaculé dentro de ella, se la saqué, la dejé caer de lado empujándola con una mano, con cierto aire de desafió, y me puse en pie de forma altiva. Parecía un gladiador romano después de sobrevivir en el circo romano, estaba preparado para lo que fuera.

Los últimos 2 días eran bacanales, eran repeticiones de posiciones, sin más, no se aprendía, se practicaba y se gozaba, incluso Tara empezó a formar parte, no me parecía importante, me la follé por el coño unas cuantas veces, sin sentir nada especial salvo ver su cara desencajada al ser abierta por semejante miembro, en posturas muy simples, siempre con Eli al lado y más pendiente de ella y de que yo no la hiciera daño en su coño, siempre que la penetraba Eli cogía con una mano la base de mi polla para hacer de tope. Llegó el viernes previo a mi último día, el lunes siguiente, Eli se acercó y masculló.

-ELI: solo te queda una cosa por aprender que yo sepa, te enseñaré, pero esta señorita te hará un maestro - señalo a Tara.

Me quedé extrañado, no podía haber nada en que Tara supiera más que Eli, me equivocaba. Después de la clase me comentó que empezaríamos con una iniciación al sexo anal, Eli me explicó todo con calma de forma previa. Cuando nos arrancamos me pidió que fuera dilatando su ano, poco a poco y con mucho lubricante, llevaba mucho sin practicarlo, así lo hice, aquellos ejercidos anales ya los habíamos practicado, pero no la penetración. Se puso como en el misionero pero con la cintura más hacia delante

-ELI: esta bien , ya esta, ahora pon la polla mirando a mi ano, piel con piel pero no empujes.

-YO: ya esta

Empezó a acercarse moviendo su cuerpo hasta que mi glande hacia presión, me dolía un poco pero aguanté, cuando ya casi no podía ...........blup........ se metió de golpe mi glande, ya estaba dentro, bajo fuerte presión pero dentro. El ano de Eli se expandía y según lo hacia ella me atraía sobre ella, cuando ya llevaba media polla dentro, me pidió que empezara con el mete saca. Así lo hice y cada cometida iba metiendo más mi polla en su interior, note más presión que por una vagina, poco más, al cabo de un rato ya tenia toda dentro y la sacaba de golpe para volverla a meter. Eli se tocaba el coño e introducía algún dedo en su vagina, de nuevo se corrió antes que yo, repetidas veces, a estas alturas ya podía estar bombeando casi 30 minutos sin correrme.

-ELI: vale, vale, para, dios no aguanto más, me rompes por dentro. ufffffff te toca Tara, de aquí no se seguir.

La miré desafiante, ¿que podía hacer esa mojigata?, cuando me giré al verla me quedé petrificado, Tara estaba en el suelo, a cuatro patas dando la espalda a la pared, en la que estaba,........ ¡¡no podía ser!!............, era el mastodonte negro, el consolador gigante que “mató” a Carla, tenia un enganche para ponerlo en la pared y Tara se lo estaba follando tranquilamente, “¡¡¡¡¡¡¡si con mi polla debía andar con cuidado y esa era más grande!!!!!”, me acerqué con curiosidad, y la mojigata, la monjita que no "había follado de verdad" se estaba metiendo aquella barra de plástico, por el culo, sin una mueca en su rostro, como quien come un yogur. Al acercarme se erguió un poco y empezó a chuparme la polla con docencia. Eli se me acercó por detrás.

-ELI: esta monada de niña solo ha tenido un novio, un negro de 2 metros que gastaba una como la tuya, su religión le prohibía tener sexo antes del matrimonio, pero.........

-YO: el anal no se considera sexo en algunas zonas, si no sodomía, y esta permitido - lo entendí al instante, su forma de ser era especial y su inexperiencia en casi todos los ámbitos sexuales, pero allí estaba, montando una polla que desafiaba las leyes de la física. En línea recta la polla tal como se la metió le debía de llegar al estómago.

Mientras ella seguía montando a su amigo negro y me pajeaba, empezó a hablarme de todo, momentos, detalles, como y de que forma poder tener sexo anal con cualquiera, incluso las que se nieguen en rotundo. Era sexo muy útil para mi, si por el coño no podía llenarlas por que no entraba, o no entraba toda, el sexo anal es perfecto, el ano se puede dilatar tanto que da igual el tamaño, la imagen ante mi así lo atestiguaba.

Paró en seco, se la sacó, se dio la vuelta y me ofreció su culo, un agujero enorme entre sus nalgas que iba perdiendo tamaño, no me retrasé y me puse de rodillas, metí mi polla sin muchos apuros en su culo, y dejé que la piel de su ano acogiera mi miembro. Una vez hecho empecé a follármela sin miramientos, la había tratado de princesa y era un guarra de campeonato, de tanta fuerza le daba que empezó a darse con la cabeza en la pared donde estaba el amigo de plástico, se tuvo que poner de rodillas recta en la pared, y Eli me aconsejó cogerla de los brazos y ponérselos detrás, como esposada, mientras seguía embistiendo. En todo el proceso Tara no emitió sonido alguno, ni gemidos, ni lamentos, me puso tan furioso que aceleré el ritmo tanto que más de una vez se me salió de su culo, Tara gemía muy levemente, no sabia si por el placer o los golpes que la daba contra la perdí eran bestiales, Eli me paró después de estar 20 minutos haciéndola levantar las rodillas del suelo de la inercia.

-ELI: déjalo, no vas a lograr nada de eso con ella, la he visto meterse consoladores en el culo, de esos que van con mando a distancia, encenderlo, dejar el mando en casa e irse a pasear, lo que le hizo aquel negro no se puede arreglar, por eso quiero ayudarla con el resto.

Aun así, insistí, con menos fuerza hasta que me corrí en su interior, ella ni se inmutó, volvió a darse la vuelta, se ensartó de nuevo al mastodonte de plástico y así siguió, como anhelando, o en busca de alguna sensación perdida. Me dio lastima.

Nos fuimos a duchar, dejándola allí entretenida, me follé de nuevo a Eli en las duchas, la visión de su cuerpo empapado era irresistible, además de haberme quedado con alguna sensación insatisfactoria con lo pasado con Tara. Pegué a Eli contra la pared de espaldas a mí, y la ensarté por el coño, solo la mitad en un arrebato, la cogí por los brazos y la levanté contra la pared, como medio metro y seguí follándomela con ella colgada del aire apoyada de cara en los azulejos. No lograba meterla del todo mi miembro, así que la bajé, la di la vuelta y la volví a levantar contra la pared, ella se agarró a mi cuello con los ojos como platos, apenas era una muñeca de trapo en mis manos, se dejaba hacer ante mi fogosidad. La abrí de piernas hasta que sus pies tocaron la pared y la penetré de forma violenta, se corrió a las pocas embestidas, yo estaba fuera de mi, le quité los brazos de mi cuello y cayó de golpe unos centímetros al apoyarse contra la pared, quedó empalada al 100% no se si era cierto pero fue la vez que más profundo creí llegar. La tenía en volandas, yo no la sujetaba ni ella a mí, solo la fuerza de ella contra la pared y mis embestidas, la levantaba con cada golpe de cadera y ella caía por la gravedad hasta quedar ensartada de nuevo. (uso mucho el verbo ensartar, pero es el más acertado), me tiré más de 20 minutos así, sin parar, los ojos de Eli se perdían en el infinito con cada orgasmo que tenia, amenazó con bajarse, no podía mantener más las piernas arriba y las bajaba, pero no la dejé, apoyé sus piernas en mis hombros quedando sus pies a la altura de mi cabeza, sus gemelos y parte de atrás de los muslos recorrían todo mi cuerpo hasta su cadera, allí la penetraba salvajemente, colgada del aire, con sus propias rodillas golpeando sus tetas. Era un posición ensayada pero con ella tumbada en el suelo, no volando por los aires tan doblada sobre si misma, con sus propios pies a menos de 30 centímetros de su cara, era la mejor para llegar lo más dentro posible, y se notaba, Eli pareció desfallecer entre gemidos y gritos obscenos, pero no paraba de pedirme más. Noté el espasmo previo de su corrida y sus flujos cayendo por mis piernas muchas veces, Eli entró en un estado de semi inconsciencia, se la notaba en algunos gestos, se movía pero estaba en automático.

-ELI: para……….para por dios……………. que me voy, ............me voy........me mareo.....

-YO: queda poco ¡¡¡¡aguanta!!!!!

-ELI: para ya, por dios, yo te la saco toda...... pero para.

La vi hastiada, así que decidí parar, la bajé con cuidado al suelo, me senté en forma de Buda en el suelo y la puse encima de mi, pecho con pecho y sus piernas rodeándome, estaba flácida, sin fuerzas, más allá del agotamiento. Tardó unos minutos en volver en si, y a mi la erección me seguía pidiendo guerra, la cercanía de su coño a mi polla no ayudaba.

-ELI: dios mío, nadie me ha llevado a ese punto, me he sentido morir, me iba, has logrado.................que me rinda.

-YO: lo siento amor, no me pude controlar, y esto aun esta tieso - la dije mientras señalé a mi rabo duro como una piedra entre nuestros 2 cuerpos.

La agarró con una mano y empezó a besarme como solo ella sabía, su masturbación fue rápida y eficaz, notó mi tensión y se separó de mí, se hundió la polla en la boca y recibió toda mi corrida, no cayó ni una gota, chupó y dejó limpio mi pene. Estaba aturdida pero seguía siendo ella, tragó y me pidió que me duchara solo y me fuera, ella lo haría después. No era mala idea, si volvía a verla ducharse no respondía de mi mismo. Salí y ya no vi a Tara, había recogido todo lo suyo y se había marchado, al rato salió Eli, algo confusa, se sentó a mi lado.

-ELI: esto que ha pasado no se lo hagas a ninguna que no esté preparada, ¿me oyes?, puede pasar algo malo, llevo 1 semana follando contigo sin parar y casi me rompes, si se lo haces a una novata no acostumbrada puedes tener problemas, ¿ME ENTIENDES?

-YO: te entiendo, lo siento…….de nuevo.

-ELI: esta bien, no pasa nada, pero hazme caso…….. - dejó pasar un tiempo prudencial para que calara el mensaje, y cambió de animo - te traigo noticias frescas, nos queda un solo día de clases antes del lunes, este fin de semana te toca examen.

-YO: tú mandas profe.

-ELI: me han invitado a una fiesta, de estas de alto copete, la invitación en con +1 y vas a ser tú.

Elisabeth - El traje.

Después de casi hacer desvanecer en el baño a Eli, salió a charlar conmigo.

-ELI: ¿recuerdas que te dije que formé parte del equipo nacional de gimnasia? pues bien, tengo a una compañera de aquella época, que es seleccionadora actual, y va a mucho a fiestas de alto copete para pedir y recaudar fondos para sus chicas, me invita con la esperanza de que la ayude, pero no suelo hacerla caso, esta vez es perfecto, vendrás conmigo y haremos tu examen final.

-YO: ¿y en que consistirá?

-ELI: aun estoy perfilando, es el domingo, es de alto nivel ¿tienes algún traje?

-YO: si, bueno, el de mi graduación de hace 2 años, me quedará enrome, como toda mi ropa.

-ELI: pues eso no puede ser..............- pensó unos segundos -...............hacemos esto, tengo un viejo conocido que es sastre y diseñador, mañana sábado quedamos y te traes el traje, a ver si lo puede arreglar, si no, te dejará alguno solo con que lo lleves en la fiesta y luego se lo devuelvas.

Me pareció correcto y me acercó a casa en el coche comentándome como seria más o menos la fiesta y que cosas no hacer para quedar como un imbécil. Se despidió de mí con un beso y una sonrisa.

-ELI: mañana las 11 de la mañana te recojo aquí. - y se marchó.

Entré en casa y vi a mi padre sentado en su sillón del salón con la TV apagada, me acerqué a preguntarle.

-YO: papá llevas unos días muy raros, ¿que te pasa?

-PAPA: hijo siéntate, tenemos que hablar - así hice.

-YO: ¿por que estas tan raro, por que me preguntas eso de mis cambios físicos todo el tiempo?

-PADRE: miram no quiero mentirte más y eres mayorcito, de joven tuve un problema en................mis partes – “¡¡¡adiós, que lo mío es hereditario!!!!!! pensé - en la revisión de la Mili, me detectaron fimosis, ya sabes, piel excedente del capullo, y ya puestos me lo operaron.

-YO joder papá, ¿y a que viene esto?

-PADRE: viene a que cuando me operé, el tema .......me creció, no mucho pero si notorio, pasado el tiempo no volví a pensar en ello, hasta el día de tu operación.

-YO: ¿¿¿¿perdona???

-PADRE: si, no se por que, pero se me clavó en la cabeza la idea, y ya que estabamos a operar, decidimos..........

-YO: ¡¡¡¡¡¡¿DECIDIMOS?, ¿¿¿como que en plural???!!!

-PADRE: si, a tu madre se lo expliqué, hablamos con los médicos y durante la operación firmamos un consentimiento, todavía eras menor así que no necesitábamos tu permiso, te operamos de fimosis también.

-YO: ¡¡¡¡¿no me jodas?!!!!

-PADRE: pasé mucha vergüenza de joven con el tema y después mofas de mis compañeros, me dijeron que lo mismo tú lo tenias, y es una cirugía leve, cuando saliste de la UCI nos dijeron que ya no se te notaria, ni te darías cuenta.

-YO: ¡¡¡¡¡me voy a cagar en todo lo que se menea ¿es por eso que me ha crecido tanto?!!!!!

-PADRE: vamos, que si ha cambiado……..

-YO: ¡¡¡¡joder que si ha cambiado papá!!! que me voy dando con las rodillas, hostias..............

Mi padre se echó a reír, me lo explicó con más calma, tenia esa capacidad de explicar las cosas de forma simple y lógica, hasta el punto en que te convencía. Yo no sabia si era mi propio cuerpo, el dichoso tumor, las hormonas que encima ahora, esto. Me calmé un poco y recriminé no haberme avisado, pero terminé claudicando, mentalmente pensé que en realidad me habían hecho el favor de mi vida. Avisé en la cena de mis planes del día siguiente y mi madre se volvió loca buscando el traje de la gradación, al encontrarlo en un armario se puso a repasar, recoger y limpiar los estantes, típico de madre, ¿no?.

Dormí como un lirón con sueños en los que solo estabamos Eli y yo, desperté, me duché, preparé el traje y salí a la hora acordada, Eli ya estaba esperando con el móvil en la mano para llamarme, lo sé por que me vibró el móvil y era ella, no lo cogí, solté un buen silbido para llamar su atención. Me subí al coche con ánimos renovados y sin mediar palabra la besé en los labios, sin pasión ni cariño, como un gesto de costumbre, como si fuera un saludo normal, eso la hizo sonreír. Arrancó el coche y me llevó a una zona industrial, al almacén de su amigo el sastre, mientras nos acercábamos a la puerta me habló de él y de sus rarezas.

-ELI: no se si es gay o no, es modista, y raramente le he oído hablando de otra cosa que no sea moda, ha tenido líos con las grandes marcas por su………manera de trabajar, pero es muy bueno.

-YO: a ver si es cierto, lo mismo me palpa el rabo a través de la tela y se emociona jajajajajja

-ELI: eso te quería comentar.....los problemas que tenia...eran..... bueno, el trabaja sobre el terreno y para eso debe ver............... el terreno.

-YO: vamos, que me tiene que ver desnudo.

-ELI: exacto, ¿algún problema?

-YO: mientras sea profesional, no veo ninguno.

Entramos y nos presentó, se llamaba Eric, no era su nombre real, me contó que se llamaba Herciano, nacido en Badajoz, pero que no quedaba muy comercial en la jet set, me cayó bien de inicio. Nos pasó a una sala con un pedestal en medio, y miles de utensilios y telas al rededor, sentó a Eli en un silla, me subió al pedestal y me cogió el traje de las manos y llamó a gritos a una tal Paula.

-ERIC: Paula querida, estamos listos aquí abajo........Pauuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuu, perdonan chicos es sorda como un tapia pero es la mejor arreglando ropa que he visto - se oyeron pasos rápidos.

-PAU: voy, voy, tranquilo- se oyó de lejos, Eric miró mi traje con cara da asco.

-ERIC: mira nena - miró a Eli - traes una hamburguesa de cadena rápida a un restaurante francés, ¿que quieres que hagamos con esta basura fabricada a granel?.........- Eli no respondió y sonrío, me miró y Eric hizo lo mismo - tú no sonrías mocetón, y empieza a desnudarte - miré a Eli en busca de aprobación, y ella asintió - vamos que no tenemos todo el día.

Me desnudé con rapidez y me dejé el calzoncillo, mi polla era evidente, pero ni la miró, solo miraba mi cuerpo analíticamente. Se acercó y me levantó los brazos, me giró y me hacia agacharme o moverme.

-ERIC: vamos, slip fuera también, necesito medir bien la pernera.

Algo cortado accedí, mi pene estaba lo más pequeño que había sentido en semanas, aun así era grande, pero el seguía sin percatarse de ella, o no le parecía relevante. Me relajé un poco a ver su actitud profesional y mi mirada se clavó en Eli, eso me levantó el ánimo un poco. De golpe se abrió una puerta y apareció una cabeza de mujer por allí, era Pau.

-PAU: dime pesado ¿que coño quie.............- y plantó sus ojos en mi polla unas décimas de segundo - ...........res? - Eric sin mirarla siquiera.

-ERIC: toma este trapo prefabricado y mira que puedes hacer con él para que le quede decente a este joven - se lo tiró a los pies de mala manera.

La chica reaccionó sacudiendo su cabeza, abrió la puerta y entró a recoger el vestido, llevaba una cinta métrica en el cuello, empecé a notar un recurrente paralelismo con ese objeto en mi vida. Pau era una chica de 26-27 años calculé, alta, andaría por el 1,73, y sobrada de kilos, más de lo que estaba Carla pero mucho menos de lo que era yo hacia 4 meses, la altura la hacia más esbelta, y se podían reconocer unos pechos enormes, morena de ojos negros y pelo muy corto y rizado, vestía de forma poco elegante, más practica supongo, con unos pantalones de tela y una camisa blanca creo, no me fijé mucho en el color por que al agacharse a coger el traje la camisa se abrió un poco y aseguré que sus pechos eran considerables, atisbé parte de un sujetador enorme color carne. Al levantarse se dio la vuelta mientras miraba la ropa en su manos y se fue hacia la puerta, su trasero era amplio, con 10 kilos menos pasaría por un bombón, a lo Carla (coste que este tipo de descripciones las hago por recrear la situación y ayudar a visualizar, no critico nada y menos siendo nadie, como era hacia unos meses, para criticar a nadie.).Las formas redondeas de esa mujer me llamaron la atención lo suficiente para quedarme mirando el contoneo de su trasero.

Mientas Eric se separó, y se puso a anotar unas medidas que paso a Pau antes de irse, casi cerrando la puerta pude notar un vistazo rápido a mi polla de Pau, antes de cerrar. Yo lo noté pero Eli se percató de todo y se levantó hacia mí.

-ELI: ¿que has visto que te ha puesto tan feliz? - era cierto, sin darme cuenta me la había puesto algo morcillona.

-YO: curvas, muchas jajajajajaja

-ELI: ¿y de lo otro?, hazme un análisis - la entendí, recordé y cerré los ojos.

-YO: no estaba nada arreglada, su pelo estaba sin peinar y la ropa no es nada provocativa en si, llevaba demasiados botones abrochados para querer enseñar sus pechos, su mejor arma, y se le notaban de forma clara las bragas a través de la tela del pantalón, amplias, seguramente con algo de altura en forma de faja reductora, se le notaba un cambio brusco en su figura en la cintura, calzado cómodo.

-ELI: muy bien ¿conclusiones?

-YO: no estaba preparada ni se ha arreglado para nada, no tiene intención de salir con nadie o quedar en breve, obviamente ha venido al trabajo cómoda sin importarle el aspecto, pero el hecho de que aun así use las braga/faja indica que quiere esculpir su figura, no se encuentra cómoda con su físico, y pese a estar muchos botones abrochados, la camisa es ceñida, quiere que la gente sea consciente de sus pechos.

-ELI: ¡¡¡¡¡¡BRAVO!!!!! ni yo lo hubiera dicho mejor. ¿Entonces tienes posibilidades de follártela hoy? ¿Ahora?

-YO: en si, no creo, no viene predispuesta, pero tiene ciertas debilidades que puedo aprovechar, y las miradas a mi polla la han debido de generar pensamientos que ahora mismo vuelan por su cabeza.

-ELI: estoy jodidamente orgullosa de ti, veo con no eres tan tonto como parecías - me lo dijo mientras me ponía la mano en el estomago.

-ERIC: si, si, muy bien, pero aquí uno tiene que trabajar, aparta bonita - el siguió admirando mi cuerpo, no mi polla, muy profesional empezó en una mesa, colocó una tela amplia y comenzó a dibujar en ella un contorno de traje, al hacer los pantalones si se dio la vuelta y miró mi polla.

-ERIC: oye bonita, ¿esta preciosidad de aquí, cuanto crece? - pregunta seria, y respuesta seria.

-ELI: las últimas mediciones están en 33-34 de largo y unos 9 de ancho en erección, en reposo unos 24 y 5 de ancho.

Eric abrió los ojos como platos y sin cambiar la mueca se giró a la tela y dibujó una pernera algo más grande.

-ERIC: bien, queremos que se note - cogió la tela y nos la enseño señalando una pernera igual a la otra - o que no - señalo la otra línea dibujada con una ligera curva en la zona de la pernera izquierda, el tío era bueno, con verme desnudo ya sabia hacia donde cargaba. Miré preguntando a Eli.

-ELI: que si, es un día especial - le guiñó un ojo.

-ERIC: me parece que este traje te lo vas a quedar...........- dijo mientras se giraba para poder poner la tela en la mesa - ya te puedes poner los slips, pero nada más.

Así lo hice y me quedé allí, de pie, de vez en cuando venia y ponía mi tela encima, haciendo un calco y volviendo a la mesa, piernas, brazos, torso, espaldas......

-ERIC: joder, vaya macho, va a ser un milagro cuadrar estas espaldas.

Era cierto y además, mi cuerpo había cambiado algo, la hora de ejercicio diaria con Eli y luego nuestras últimas semanas de "ejercicio intenso" me habían tonificado el cuerpo, no estaba ni mucho menos marcando músculo, pero si toda la piel de naranja que me colgaba se había ido, y gracias a unas cremas recomendadas por Eli, las estrías ni se notaban ya en mi estomago. Al paso de 1 hora o así, Eric llamó Pau, ya tendría que haber hecho ajustes iniciales. Bajó con rapidez, entró y miró directamente a mi polla ahora encerrada bajo la licra. Le dio el traje casi sin mirar a Eric y este le dio las telas marcadas.

-ERIC: toma boba, corta y pega como sabes - se fue sin dejar de mirar mi paquete y antes de irse pude notar que se había desabrochado un botón de la camisa, algo que Eli me enseñó a fijarme. "cada cambio significa algo, si no, no cambiaría" ¿por que había abierto un botón su camisa? - toma esta......cosa y mira a ver que tal - me dio el traje y me lo puse, me quedaba bastante mejor, se notaba las puntadas nuevas, pero en cuando me movía se arrugaba y doblaba de forma fea - ¡¡¡¡¿¿esto???'!!!! Ni para tomar por culo sirve - y se lió a intentar hacer ajustes con la ropa puesta, no hubo manera y en un gesto se rompió de la entrepierna. Eric se desesperó y me dijo que me quitara eso antes de que me quemara con ello puesto.

-ERIC: ¡¡¡¡¡¡¡¡¡PAU!!!!!!!!! - se lió a repasar notas en la mesa, Eli se acercó y me habló de pau, le comente el cambio del botón.

-ELI: ¿que crees que significa?

-YO: esta claro, quiere lucir su mejor arma, bueno, las 2, esta mostrándose disponible conscientemente, o no, sus continuas miradas a mi rabo no son casuales.

-ELI: ¿¿te has fijado en sus labios?? se ha mordido el labio inferior.

-YO: joder, ¿como se me pasan los labios siempre?

-ELI: por que hasta a mi me ha costado quitar la mirada de sus tetas.

-YO: ¿eso muestra deseo entonces?

-ELI: si y me va a venir bien, con Carla.......... fuera de combate, no pude enseñarte a manejar a una mujer de curvas y ella puede ser perfecta.

-YO: ¿que hago?

-ELI: ¿tú sabrás? - me miró con sorna y me besó el pecho - yo me voy Eric, que tengo cita con Zinthia, para el traje que la pedí, mañana peluquería y sesión de belleza antes de la fiesta.

-YO: ¿¿me vas a dejar aquí??

-ELI: si, tranquilo, cuando Eric acabe, Pau te puede acercar en su coche........si lo logras……………..te llamo para que mañana quedemos a las puertas de la fiesta - y sin más se fue dándose un saludo muy chic con Eric.

-ERIC: dile a la zorra de Zinthia que mañana voy a arrasar yo con este - y me señaló.

Me dejó allí tirado con ese pirado de la moda y una moza bien dotada de curvas a la que tener que amansar. Al rato de irse Eli, volvió a la sala Pau, con partes del traje recién salidas de la maquina de coser, como un puzzle muy simple.

-ERIC: vamos bonita, ayúdame, que con este morlaco yo solo no puedo.

Se pusieron uno a cada lado y empezaron a vestirme, la sensación del traje hecho a medida es increíble, y más si un tía de tetas enormes que se ha desabrochado un botón por ti, o eso crees, te esta metiendo mano claramente, y restregando sus voluptuosos senos por el brazo.

Me quedé anonadado al contemplar mi imagen en el espejo, casi parecía un sueño, que hace 5 meses fuera el gordo gracioso que casi siempre iba en chandal, y ahora, a mis ojos estuviera aquel joven alto, apuesto y bien estilizado. Solo faltaba unir las piezas.......creía.

-ERIC: con esto ya se puede trabajar........

-YO: ¿trabajar? ¡¡¡¡¡¡¡Si estoy hecho un pincel!!!!!!

-ERIC: querido, ahora pareces un ser humano, pero para mañana tienes que salirte del mapa, anda vamos a quitárselo con cuidado y me lo llevo.

No entendía nada, pero me dejé desvestir con cuidado para no dañar las telas, mientras Eric me quitaba el chaleco, por ahora, ya que seria la parte central de la chaqueta por la espalda, Pau, se agachó ante mi y me pidió que fuera levantado las piernas para sacarme las perneras del pantalón. Ni que decir tiene que mientras llevaba la pierna hacia delante, ella cogía con sus manos ambos extremos de la tela e iba dando pequeños tirones para sacarla sin arrugar, y para ello debía de poner los brazos estirados y muy juntos, apretando sus enormes tetas entre ellas, y a cada tirón, desde mi privilegiada posición, podía ver sus pechos vibrar, no le perdía detalle, y no se si se dio cuenta o no, pero mientras estiraba la 1º pernera, ya fuera, se medio tapo el escote, y se lió con la 2º, su amago quedó inútil y al segundo tirón su camisa se volvió a abrir lo suficiente para ver sus senos rebotar contra si mismos. Era una imagen simple pero que me puso a tono, se empezó a hacer más evidente mi bulto en los slips, y vi como, después de cada gesto para sacar la tela, ya no había ritmo, hacia un par y se paraba a mirar de reojo, seguía un poco y lo volvía a hacer, hasta que sacó la prenda del todo. Al levantarse volvió mirar y mientras preparaba las ropas en la mesa y hablaban con Eric, se volvió repetidamente.

-ERIC: bien, aquí te quedas un rato, voy a mi taller ha hacer magia con esto, vístete si quieres, tardaré un rato - cogió las piezas de tela y se marchó por una puerta.

La oportunidad era clara, y si no quería volverme en transporte publico tenia que estar vivo. Lo inicial era no alejarme mucho de Pau para no dejarla razonar en frió, amagó con salir por la puerta....

-YO: oye, muchas gracias por todo, no se ni si podré pagar.

-PAU: ¿que? ah si, no pasa nada, no tienes que pagar ¿no te lo ha explicado Eli?

-YO: no - mentí, no solo no se fue, si no que se acercó un poco desviando la mirada hacia cualquier sitio pero siempre terminaba en mi rabo.

-PAU: veras, en la alta costura, es habitual que la gente vaya a fiestas con ropa regalada o prestada de modistas, así ellos tienen ropa de calidad sin pagar y nosotros publicidad gratis.

-YO: que si voy a la fiesta con su traje no tendré que pagar, pues vaya "enorme" chollo - trucos de recordatorio mental.

-PAU: ......si ya, las cosas funcionan así..........oye....tienes tu ropa por allí, ¿no? - señaló a la silla donde estaba, quería que me vistiera, evitar la visión directa o que la pillara haciéndolo.

-YO: ah si gracias, no me molesta estar así, llevo casi 2 horas jejeje, ¿y tu que? ¿eres modista? - desvié su intención.

-PAU: bueno, en ello estoy, aprendo un montón con Eric, aunque a veces le mataría jejeje es tan.....suyo.

-YO: pues te ha puesto por las nubes antes, cuando intentabas arreglar mi ...........¿traje? ¿es herejía llamarlo así? - sonreí mientras le di un pequeño codazo al bajarme del pedestal.

-PAU: jajaja la verdad es que si lo es, al menos para nosotros, es ropa prefabricada, y era enorme, no se como podía ser tuyo - sin querer había usado mi misma palabra.

-YO: bueno he tenido algunos cambios últimamente en mi vida, si quieres me visto y te lo cuento tomando un café - asintió con la cabeza, quería que me vistiera, y yo lo sabia, usé eso para que aceptara el café de forma implícita, “joder, Eli me ha enseñado bien”.

-PAU: voy a por los cafés, ahora vengo - y salió despedida de allí.

Momento critico, ¿que debía hacer?, si me vestía podía hacerla pensar en frió y si no me vestía quedaría como un mentiroso y un poco vanidoso. Tomé el camino del medio, me quite el slip y me puse solo el pantalón del gym algo ajustado. Me la acomodé de forma que fuera notoria si se miraba pero no evidente la intención de ello y guardé los slips. Cambié de posición el cuerpo un par de veces intentando buscar una pose natural, Pau regresó un par de minutos después con los cafés, y al verme así, se quedó algo paralizada, pero complacida. Se sentó a mi lado y me pidió que le contara mi historia. Le hablé de la operación, de mi vida antes y de los cambios físicos que me habían producido. Incluso el enseñé algunas fotos en el móvil de mi yo previo, intentaba dar algo de pena.

-PAU: lo siento mucho, lo has debido de pasar mal, pero si todo fue bien, la verdad es que te va genial, estas muy bien físicamente....- y cayó en la cuenta de que la frase era algo ambigua -....vamos que estas mucho mejor que antes quiero decir............vamos que no es que antes estuvieras mal......a mi también me sobran kilos.... - se había liado, y lo provocara yo, o no, debía aprovecharme.

-YO: si tienes razón, era un adefesio......y las chicas ni me miran, tú estas bien, no puedes comparar

-PAU: claro que si, siempre me dicen que me sobran kilos, se como te sientes, pero eso va a cambiar, te lo aseguro. - había reconocido que se sentía rechazada o poco atractiva y que yo estaba muy bien físicamente. Antes ni me hubiera percatado de ello, supondría que era condescendiente, pero ahora no, y ataqué.

-YO: ¿que dices? pero si eres una delicia de mujer.......

-PAU: mira tú que galán, no seas bueno conmigo solo por que sepas como me siento.

-YO: no es por halagarte, realmente me pareces una pedazo de mujer, de hecho.......- dejé la duda en el aire y fingí callar.

-PAU: ¿que?

-YO: bueno, que....durante la prueba del traje... jo que vergüenza....- se la puse botando

-PAU: ¿que paso? - estaba expectante y yo me tensé para enrojecerme más de lo que ya estaba, era mi 1º prueba con fuego real, sin trucos.

-YO: ......no....es que... ha habido roces...y cuando te has agachado.....¿no has notado.....que crecía ......mi........... cosa? - estaba bordando el papel de pobre incomprendido.

-PAU: jajajajaja ¿en serio?, no lo había notado……… - los cojones que no, se puso algo roja y dirigió la mirada al bulto de mi pantalón levemente - …… me halagas.

Me lance a la piscina, o había agua y nadaba o me estrellaba contra el suelo, fingí rabia

-YO: el frote de tus pechos era una imagen demasiado fuerte, ¿¡vale?! - me giré un poco y esperé su reacción, tardó algunos segundos en emitir palabra, y cuando lo hizo, con una mano en mi hombro, me giró un poco hacia ella.

-PAU: oye, tontorrón, no pasa nada, no eres el 1º que se sube a ese pedestal y lo pasa mal con estas - se llevó las manos al pecho.

-YO: es que vaya mar de preciosidades, ..........¿creo?......- añadir duda sobre sus mejor arma, nunca fallaba, o eso me habían dicho.

-PAU: ¿creo? ¿como que crees?

-YO: bueno, las he intuido por encima de la blusa y he visto algo por el escote, pero poco más....y solo con eso ya me he calentado, supongo que tendrá que ver que vieras la polla colgando la 1º vez que entraste - noté cierto asombro en su cara, abrió la boca como no creyéndose lo que había dicho.

-PAU: bueno, si, la vi por accidente, pero no dudes de mi delantera majo, he empalmado a más de un modelo ahí subido - señaló al pedestal.

-YO: pues a mi no, pese a desabrocharte un botón.

-PAU: ¿como que no, si acabas de decir que....... ? ¿te has fijado?

-YO: me la has hinchado, pero no me la has empalmado del todo - se quedó de nuevo perpleja por mi comentario, y se notó que recordó la imagen el momento, ¿seria cierto?

-PAU: pero si era enorme , ¿todavía crece más? que jodía Eli, ya se por que te quiere a su lado.

-YO: pues si, la verdad es que ella si me la ha puesto como una piedra muchas veces - generar competitividad- pero no tiene tus curvas - usar su complejo como halago.

-PAU: ¿te gustan las curvas?

-YO: mucho, y tú eres el ejemplo de mujer de verdad, no esas escuálidas de las pasarelas - se hizo un silencio, yo no sabia ya por donde tirar, ella sacó la artillería.

-PAU: ¡¡verdad que si!!, esas zorras vienen aquí cada día a restregar sus esqueléticas piernas y su brazos huesudos luciéndose como amas del mundo.

-YO: tienes razón ........y ........ y.........

-PAU: dime....

-YO: quiero besarte - ”allá vamos”

-PAU: ¿de verdad?

-YO: ¿te crees que alguien con mis complejos se lo va diciendo a todas? - sopesó lo dicho y se calló. Dudaba algo en su cabeza, así que aproveché, y le tiré un pico sin avisar, un beso corto y rápido, para acercarme a ella y ver su reacción de cerca.

-PAU: yo......... - lancé otro beso, algo más largo, ella ni se retraía ni aparta - ……..no se…..

Esta vez fui con todo, me puse de rodillas delante de ella y la besé con dulzura, con ternura, durante unos segundos no se movía, pero con cada gesto de mis labios ella empezó a seguirlos, al minuto ya me agarraba la cabeza y yo su cintura, nuestras lenguas se cruzaron y llegó un frenesí de pasión.

-YO: quiero verte las tetas, por favor, sin camisa ni sostén, solo admirarte.

Pau dudó y miró a la puerta de Eric, me miró de nuevo y sin pensárselo se puso de pie, se quitó los botones de la camisa, me dejó su vientre a la altura de mi cara y mientras la iba besando el ombligo, bajé mis manos de su cadera a su enorme trasero, buscando el punto débil de Eli, por probar.....

-PAU: ummmmm

Se terminó de quitar la camisa y miré hacia arriba, no la veía la cara, solo un par de tetas enormes entre nosotros, se llevó la mano a la espalda y se quitó el sostén, cayeron de golpe un par de centímetros, lo justo para rozarlas yo con el pelo de la cabeza, me separé un poco y la admire, como prometían, eran tremendas, le colgaban un poco pero aun estaban firmes y con unos aureolas rosadas.

-YO: vaya espectáculo de pechos, me moriría si me dejaras tocarlos y chuparlos - miró de nuevo a la puerta de Eric.

-PAU: todas tuyas.

Me abalancé como un perro rabioso, pegué mi cara a una de ellas mientras chupaba y lamía con fuerza su pezón, mientras la otra mano no abarcaba tanta enormidad, masajeaba con calma pero sin parar. No tardaron en aparecer gemidos en Pau, mientras me agarraba, o aplastaba la cabeza contras sus pechos mirando al techo, la abundancia de aquella mujer me la puso como un mástil, me puse en pie, y con un gesto hábil deje mi pantalón en los tobillos, repasando con mis labios cada milímetro de piel hasta que volví a sus labios.

-YO: ahora, si - pegué mi cuerpo al suyo mientras mantenía mi polla erecta hacia arriba, para que la notara bien.

Bajó la mirada de golpe, sonriendo con la boca abierta, me miró a los ojos incrédula y bajó la mirada entre nosotros, no veía nada, había 2 enormes masas de carne aplastadas en medio, se sentó, o se tiró mejor dicho, de espaldas sobre la silla y mi polla cayó a plomo sobre su cara, se balanceó un poco ante la mirada de asombro de Pau.

-YO: ¿se las has puesto así a algún modelo guaperas?

-PAU: ¡¡¡ni de coña, vaya pedazo de polla nene!!!!!! ¿la puedo tocar?

-YO: toda tuya. – “¡¡logrado!!” la tenia en el bote.

Empezó a tocar la punta con cuidado, y su atrevimiento fue subiendo hasta que tenía mi polla agarrada con ambas manos y me masajeaba la piel de arriba abajo, en su vida vio algo así.

-YO: si me acercas luego a casa te dejo hasta que me la chupes. - eso me sonaría egocéntrico o contra sentido hace tiempo, se suponía que era un favor que ella me hacia a mi al chupármela, no al revés.

-PAU: claro encanto, y más que te haré.

Agachó su cabeza y se arrancó a comerme la punta del glande, chupando con ansia y luego lamiendo con pasión, sin dejar de masajear la tranca ante ella. La sensación de éxito era mayúscula y excitante, pasado un buen rato, me pidió que me tumbara en el suelo, así lo hice y ella se quitó el pantalón, allí estaba la braga/faja comprimiendo su cintura, se tumbó encima mía pero más por debajo, dejando sus tetas a la altura de mi polla y se frotaba de delante a atrás sobre mi cuerpo, con sus senos engullendo mi rabo por momentos, ¡¡¡¡que delicia!!! Se puso de rodillas encima de mí y metiendo su polla entre las tetas me hizo una cubana deliciosa, la mejor hasta la fecha, sus pechos hacían desaparecer mi miembro, y el aumento de ritmo me mató, eyaculé rápidamente sobre ella, y se echó a reír

-PAU: joder, como me has puesto.

-YO: me toca. - me incorporé y la cogí con mucha fuerza, la senté en el pedestal y saqué su trasero hacia el borde, levanté sus piernas y de un fuerte tirón arranque su prenda intima.

La abrí de piernas y vi un coño delicioso, cuidado de bello, y una mancha brillante entre sus labios vaginales. Hundí mi cara en su entrepierna y no paré de lamer, separar, chupar y succionar, los gemidos de Pau eran claros y cuando empecé a meter mis dedos en su coño, buscando el punto G, se corrió la 1º vez, sentí su cuerpo tensarse y recaer sobre el pedestal, pero sin fluidos, había que ordeñar, seguí con la masturbación y jugueteando con mi lengua en su enrome e hinchado clítoris. El ritmo de mi mano subió, frotando sus entrañas, los fluidos empezaron a encharcar mi mano, Pau ya no gemía, se retorcía sobre si misma

-PAU: ¡¡¡¡¡¡¡no pares...no pares…..OHHHHH……….NO PARES!!!!!!!

Aumenté más el ritmo, hasta que un gran silencio llenó la sala, solo se oía el chapoteo de mi mano en su intimidad, después una explosión de jubilo de ella, echando un chorro de su interior. La dejé descansar y me vencí sobre su cuerpo hasta llegar de nuevo a sus pechos, me pase un buen rato jugueteando con ellos, hasta que ella volvió un poco en si.

-PAU: Eli los elige bien.

Se levantó de mi lado y me llevó a una zona con unas duchas, nos restregamos un poco allí juntos, pero sin pasar nada relevante. Salimos, nos vestimos, ella, yo solo me puse los slip, y nos quedamos esperando a Eric. Tardó algunos minutos y se me pasó la idea de volver a por Pau, pero me calmé y simplemente agradecí su comprensión y la experiencia.

-PAU: a mi no me la juegas, nadie logra que una mujer se corra así, siendo un papanatas - se había dado cuenta pero me daba igual, el logro estaba ahí.

-YO: jejeje me has pillado, pero que conste que todo lo dicho era cierto, eres una mujer de bandera.

Salió Eric con el traje ya listo, me puso en la pasarela, recién secada de nuestros fluidos, me dio la ropa y se sentó junto a Pau. Me vestí, Eric había terminado su obra, uso algún tipo de tela que reflejaba la luz para las solapas de la chaqueta, un ribete rojo encima del bolsillo del pecho de la misma y atisbé una filigrana de color gris en las juntas del pantalón, casi imperceptible pero allí estaban. Cuando acabé de vestirme, Pau se levantó atónita, Eric hizo un gesto de aprovición propia con los labios y se fue dando un sonoro portazo.

-ERIC: ¡¡¡joder!!! ¡¡¡¡¡¡si es que soy la puta hostia!!!!!!!.......- no lo volví a ver.

Me miré en el espejo, y si antes me parecía un galán ahora era un espectáculo, me sentaba como guante, y me quedaba de cine, me moví haciendo gestos pero no se arrugaba, ni me tiraba de ninguna zona, salvó la pelvis claro, así lo había decidido Eli. Entendí al instante la diferencia entre parecer un camarero de restaurante caro e ir bien vestido. Pau solo admiró, y me pidió que me moviera de cierta forma para asegurar el buen trabajo, estaba rozando la perfección.

-PAU: venga, vamos a quitártelo, lo metemos en un porta tarjes y te acerco a casa.... te lo has ganado.

Feliz por todo en general, accedí y avisé a Eli de mi éxito con un mensaje, ella me felicitó y me dijo donde y cuando quedar al día siguiente. Iríamos por separado ya que ella debía ir al salón de belleza antes. Al llegar a mi casa, me besé apasionadamente con Pau, ella me frotaba la polla por encima del pantalón y yo sus pechos a través de su camisa. Y así nos despedimos, cogí el traje y fui a mi casa. La tarde la pasé con algunos amigos, que ya os presentaré, y por la noche mi madre me obligó a hacerle un pase de modelos con el traje puesto, me aseguré de ponerme los slip mas ajustados para disimular y al salir se quedó blanca.

-MADRE: ¡¡¡¡¡¡ay, mira que preciosidad de hijo tengo!!!! - me tocaba por todos lados asegurando la ropa - ¿pero de donde has sacado este traje? es a medida.

-YO: ¿joder como lo sabes?

-MADRE: por que soy madre, ¿de donde ha salido?

-YO: de un amigo de Eli, me lo deja si voy a la fiesta con él.

-MADRE: pues ya te lo estas quitando, no vaya a ser que lo manches, de esta monada me ocupo yo.

Me cambié en mi cuarto y le di el traje, mi madre sabia de moda y como tratarlo, trabajó de costurera algunos años. Dormí plácidamente, consciente de que Eli no me había hecho perder el tiempo, Pau me lo había asegurado. Pasó el día y yo era un pelele ante mi madre, totalmente maniática sobre como moverme, que hacer en la fiesta, que ese traje era genial y que no lo rompiera ni manchara por que me caparía, madres....

Me vestí bajo su adoctrinamiento casi militar, le dio un golpe de plancha final al traje, y sacó unos zapatos de vestir que me regaló, elegimos entre unas corbatas a juego que Pau me había dado y al salir de mi cuarto casi se echa a llorar de la emoción. Supongo que se le juntó todo de golpe al ver a su hijo tan mejorado, después de haberlo pasado muy mal. Me puso algo de gomina en el pelo, y me bañó en una colonia de olor bastante fuerte, con una sesión de fotos para “vacilar” ante sus amigas. Obligó a mi padre a acercarme, y a mí a ir casi tumbado en el coche, para no arrugar nada.

Era una fiesta de alto copete, se hizo en una sala de reuniones de un hotel de gran nivel en Madrid capital, al llegar mi padre se despidió consciente de la importancia de aquello.

-PADRE: a por ellas, avísame si no tengo que recogerte luego – guiñó un ojo y se marchó.

Elisabeth - La fiesta.

Me acerqué hacia el hotel y aguardé en la puerta la llegada de Eli, ya que no la veía, noté que muchos ojos se plantaron en mi, llamé para saber si estaba dentro ya Eli, pero me dijo que no, que estaba justo bajando unos escalones para llegar allí. Me giré hacia las únicas escaleras que por allí había y entre el río de gente, la vi.

A estas alturas pensaba que en un mes viéndola desnuda, masturbándonos, haciendo sexo oral y follando como animales los últimos días, seria extraño, mucho, que pudiera sobresaltarme verla de cualquier forma, bien, me equivoqué de nuevo, siempre la había visto sin arreglar excesivamente y en chandal o ropa ajustada deportiva, con zapatillas. Como en las películas malas, el tiempo se ralentizó mientras bajaba los escalones, algo torpe, supuse que por que llevaba unos tacones de vértigo, zapatos color azul marino con guirnaldas brillantes, nada grotesco, llevaba el pelo totalmente liso, y todo con un peinado que hacia que su cabello estuviera caído del lado derecho de su cabeza, como una cortina, del lado izquierdo llevaba algún tipo de pinza para el pelo, o no se como llamarla, muy elegante, con unos pendientes que colgaban un poco de sus lóbulos, plateados, una especie de consecución de bolas creciente. Vestía un traje que me hizo verla como una diosa, un vestido azul zafiro, con un solo hombro, en el izquierdo, coronado por un broche brillante, caía por delante hasta cubrirla más abajo de las rodillas, en forma de espiral que rodeaba su cuerpo, del hombro bajaba hasta sus pechos y seguía rodeándola por detrás, tapándola el trasero, para volver a salir por delante y taparle lo justo la zona vaginal, con una gran obertura en la pierna izquierda para ver unas medias de encaje, dejando gran parte de su espalda al aire, y de sus costillas, hasta se atisbaba el nacimiento de sus pechos pegados al cuerpo, maquillaje ligero, no necesitaba más, algo de efecto ahumado que me comentó en nuestras clases, para realzar sus preciosos ojos color miel, y unos labios cuidados con un color rojo gránate. La pobre se iba agarrando con una mano en una barandilla y con la otra, al la vez, sujetaba un pequeño bolso y se levantaba algo el vestido para no pisarlo.

Rápidamente corrí hacia ella para ayudarla a bajar los últimos escalones, entre varios pretendientes que ya la habían echado el ojo, ella bailó un poco en el aire cuando la agarré con firmeza la mano de la barandilla.

-YO: tranquilos chicos, ya la llevo yo - el resto de pretendientes se apartaron, ella sonrío ampliamente al levantar la mirada y reconocerme.

Agradeció con la mirada mi apoyo y la bajé con el más sentido respeto y admiración los escalones finales, bajando de espaldas a las escaleras, no paraba de comentarme lo difícil que era andar con eso en los pies. No obstante en el último, donde ya te confías, se medio tropezó y cayó de golpe sobre mi pecho, la sujeté con fuerza, teniéndola casi suspendida en el aire.

-YO: hey, cuidado princesa....no me querrás estropear la noche.

-ELI: perdona, ¡¡¡dios!!, como duelen los pies.

-YO: ya te lo dije, la explicación que me diste sobre el hecho de sufrir con los tacones no me convenció jejejejeje

-ELI: ahora mismo no estoy convencida ni yo.

-YO: no hace falta que lo diga, pero si no lo hago reviento, te has perdido, el Olimpo no esta por aquí - sonrío gratamente levantando la cabeza, se apoyó en mí y recuperó su propia verticalidad, se plantó sola y me separó de ella, haciéndome dar una vuelta sobre mi mismo, que hice con cierta gracia.

-ELI: vaya con el viejo Eric, todavía sabe lo que se hace, estas arrebatador - se acercó a mi oído - y lo vas a necesitar.

-YO: a su entera disposición.

Me puse a su lado izquierdo, y ofrecí mi brazo para que ella se apoyara, así lo hizo y sin soltar la parte baja de su vestido con la otra mano rodeó mi brazo e iniciamos el camino a la entrada. Eli se encargó de todo el tema de presentaciones, y protocolos. Una vez dentro me suplicó que le acercara a la barra para poder sentarse y descansar sus pies. Desde allí, observamos toda la sala, un par de barras de bar pequeñas y dispersas, una grande, en la que nos encontrábamos, un montón de mesas desperdigadas por todo el espacio y una gran pista de baile en medio, con un DJ en una mesa de mezclas, poniendo música chill out.

En cuando la vio, Eli saludó con la mano a alguien, y de un grupo de mujeres se acercó una, vestida de arriba abajo de chandal, me sorprendió así vestida allí. Al acercarse vi que llevaba una chapa identificadora, Mariana no se que, no recuerdo bien, pero ponía, "seleccionadora española de gimnasia". Tenia que ser la amiga/compañera de Eli.

-MARIANA: vaya, por fin te has atrevido a aceptar una invitación - y se saludaron con un abrazo fuerte, lejos de protocolos.

-ELI: así es, me apetecía un poco de jarana, ¿que tal te va?

-MARIANA: bueno, como siempre, intentando sacar dinero a esta gentuza para poder entrenar en un pabellón propio, no alquilado y con goteras

-ELI: mira, te presento a mi amigo, Raúl, esta es Mariana, la vieja compañera de la que te hablé.

-YO: encantado. - la saludé, y me abrazó con algo más de cordialidad.

-MARIANA: oye, de vieja nada, todavía soy capaz de ganar a esta petarda.- se echaron a reír las 2.

-ELI: bien, por que este hombretón te va a ayudar - lo dijo mientras colocaba su mano sobre mi hombro, me quedé extrañado.

-MARIANA: es mono, pero va a estar difícil, además esta la Matahari, hoy de bandera patria..

-YO: gracias, pero vengo preparado para lo que sea, estoy de examen ¿que debo hacer? - ellas se miraron de forma cómplice unos segundos.

-MARIANA: ¿tu como te crees que les sacamos pasta estos mierdas?

-YO: pues no sé, pidiéndola.

-MARIANA: ya claro, muy efectivo.

-ELI: esto no va así, si no, darían dinero a cualquiera, montan estas fiestas para inhibirse de sus vidas y darán dinero a quien mejor se lo haga pasar.

-YO: no jodas, y yo que creía en el altruismo......

-MARIANA: que inocente, esto esta lleno de tíos buenos, modelos, actores y deportistas que quieren abrirse paso, y pasa ello hacen lo que sea, aquí se trabaja de todo, sexo, influencias, chantajes, vamos lo mejor de cada casa.

-YO: ¿y yo soy vuestra apuesta de hoy?

-ELI: exacto, Marina suele tratar con tíos de la federación para conseguir fondos, pero el problema es que hay partes claves, y casi todas son mujeres, tenemos que influir en ellas.

-YO: de puta madre, encima con presión.

-MARIANA: nada de eso, pero si se agradece cualquier ayuda externa, Eli me ha hablado muy bien de ti y creo que das el perfil.

-YO: bueno, un reto es un reto, ¿no? - miré a mi acompañante y noté que captó mi indirecta, le dije lo mismo cuando empezó el aprendizaje, sonrió muchísimo y me abrazó.

-MARIANA: bien, os dejo, voy a comerle la oreja al presidente de la federación de hockey - y se marchó, el cuerpo de Mariana era curtido, de gimnasta retirada, pero no aprecié nada en ella, el chandal no dejaba, Eli se incorporó, me atrajo hacia la mesa de la barra y me comentó la situación.

-ELI: mira, esto esta lleno de gente desando fiesta y otros desando darla para sus beneficios, tenemos personas clave a las que intentar llegar.

1º tenemos a la duquesa, es aquella del moño con un flor amarilla, es la mujer del presidente de la federación de fútbol, el que más dinero tiene, y si cede puede dirigirlo a otra federación.

2º tenemos a la hija del alcalde, es aquella del vestido negro, sentada en la mesa central, dicen que su padre destina dinero al ejercicio que su pequeña admire.

3º la presidenta de la federación de tenis femenino, aquella embutida en un vestido verde pistacho 2 tallas más pequeño que su talla real, tiene mucho poder en las asignaciones anuales.

4º la entrenadora de fútbol femenino, ex jugadora, se dice que se zumba al presidente de la federación masculina y por ello recibe más dinero, si cae, lo hará el presidente por efecto dominó, y podemos pillarle con la duquesa

5º, la joya de la corona - buscaba con la mirada - mira, a aquella mujer, la del vestido rojo.

Era una preciosidad, despampanante, con una coleta altísima que dejaba caer su largo pelo en la espalda, un traje palabra de honor con la silueta de sus buenos pechos, de color rojo chillón, un cinturón amarillo y un vuelo en la falda del vestido dejando una raja que iba desde más arriba de su cintura, habiéndose sin parar hasta el final del vestido, en sus pies. Con unas medias de rejilla que se veían terminar a la altura de su pelvis y cuando se movía se llegaba a atisbar su ropa interior, roja a juego. Rubia de ojos azules y con unos tacones altos, se movía de forma clamada y con clase mientras se contoneaba sexualmente, dejando que la raja de su vestido luciera.

-ELI: esa, es la mayor amenaza.

-YO: ¿y quien es? ¿la Matahari?

-ELI: si, una puta de alto nivel, solo la contratan para estos eventos, le dan unos objetivos, como a ti, y se los termina follando en una noche a casi todos, nadie se le resiste, y como tal, consigue ganarse o mantener a todos los hombres importantes de las federaciones, no te exagero, hay pocos hombres en esta sala que no la hayan catado, y por lo oído, es puta con ganas.

-YO: ¿una profesional y yo un novato? ¿como lo haré?

-ELI: ve a por ella de inicio, no te conoce y te rechazará mientras ajusta su mira en algún objetivo, tu insistente, hasta que te rechace de forma evidente, eso nos hará ganar tiempo. Son las 22:00 y esto acaba a las 5-6 de la mañana.

-YO: ser rechazado, eso se hacerlo – planté un beso en los labios de Eli para ganar confianza y me lancé.

Me coloqué cerca de la pista de baile, en el tumulto de gente de pie, que miraba bailar al resto, donde estaba mi objetivo, me fui acercando, olía a hembra, un perfume de olor a cerezas, quería insinuar o crear la asociación de ideas, que estaba para comérsela, y era cierto, antaño solo con verla me hubiera empalmado. Vi que su copa andaba algo vacía, y que le prestaba mucha atención a un hombre de bastante edad que tenia enfrente suya, de espaldas a la pista de baile, cada vez que el hombree torcía la mirada para mirarla, ella se movía más obscenamente, con su reluciente copa vacía poniéndola cerca de su cara.

-YO: ¿hola guapa, que haces aquí tan sola? - frase que había repetido mil veces en mis escarceos en fiestas adolescentes y un seguro para ser rechazado. Me miró de arriba abajo, y puso la cara de asco más grande del mundo, me ignoró, “vamos bien” - ¿perdona te molesto?

-MATAHARI: apártate de mi, insecto.

-YO: oye, perdone usted señorita, pero no creo que se muera solo por contestarme - se empezó a poner nerviosa mirando al hombre y a mí.

-MATAHARI: que te apartes te he dicho.

-YO: mira, solo he visto tu copa vacía, y he pensado, bueno, ¿por que no ayudarla?, no creo que sea grave.

-MATAHARI: estoy bien, gracias, ahora vete - dijo de forma secante.

-YO: no pasa nada mujer yo me voy, perdona que te molestara, déjame que te vaya a buscar otra copa - y lancé mi brazo a su copa, forcejeamos un poco……..subiendo el volumen de nuestras palabras

-MATAHARI: aparta joder, que no quiero copa - el forcejeo y sus palabras centraron la atención de los cercanos, incluido el hombre/objetivo.

YO: pero déjame, que no es molestia. - giré la muñeca y el poco liquido que quedaba en la copa le cayó encima, se hizo el silencio.

MATAHARI: ¡¡¡¡¿¿pero tu eres imbécil?!! - dijo gritando mientras se trataba de secar.

-YO: huy, perdona, deja que te ayude......

-MATAHARI: APÁRTATE DE MI, ya has hecho bastante - y con un enfado monumental se fue al baño, yo fingí seguirla confundido, mientras se oían risas a mi alrededor.

Busqué con la mirada a Eli en la barra, la vi tronchándose de risa, se levantó y caminó hacia mí con calma, la gente no paraba de darme la “enhorabuena” por mi intento de captura o sornas similares, noté que Mariana pasó por mi espalda

-MARIANA: buen trabajo.

Cuando Eli llegó a mi lado me abrazó, rota de risa, con un pañuelo secándose alguna lagrimilla para no correr el rímel.

-ELI: has estado de cine, en serio.

-YO: ha sido fácil, algo así me pasó en mi 1º cita, pero le tiré un cubata entero a Marina xxxxxxxxxx, de 3º curso.

-ELI: ¿no me digas? jajajaja eres todo un caso, anda sácame a bailar......- extendió su brazo con orgullo, yo recogí su ofrecimiento y la saqué con gusto, al verme con ella más de una sonrisa cercana se apagó.

Iniciamos un baile lento, nada sexual, solo nos movíamos dando vueltas por la pista.

-ELI: esta bien, 1º objetivo hecho, esa zorra estará en el baño al menos 1 hora y tardará al menos otra en que un tío se le acerque.

-YO: hacer el tonto se me da bien, pero ahora llega lo difícil.

-ELI: si, ¿que ves? - ”Pensar, razonar y analizar”

-YO: veo a muchas mujeres esperando a que las saquen a bailar, mucha pareja ya consolidada y unos cuantos tíos desesperados por llevarse a alguna a la cama. Vamos, lo que es una fiesta.

-ELI: ¿y de los objetivos? - dimos una par de vueltas más.

-YO: la duquesa esta sola allí, de pie, su marido estará muy ocupado, supongo que con la entrenadora de fútbol, también veo a la hija del alcalde, sentada en la mesa central, o no puede o no quiere moverse de allí, quizá no la dejen, de la del tenis no tengo noticias.

-ELI: creo que ha subido a las habitaciones a cambiarse, casi no podía ni respirar con ese vestido. ¿Que toca ahora?

Me quedé en blanco, de pronto todo se me había ido de la cabeza, incluso casi piso a Eli, me retraje, pensar en todo de golpe y luego en nada. Ella me agarró y me zarandeó un poco.

-ELI: eeee, no te vayas, tranquilo, razona usa la cabeza, no es difícil y estas preparado.

-YO: si, si, es solo, el 1º paso, no se a donde darlo.

-ELI: yo iría a por la hija del alcalde, es de tu edad, y hay que saber si se puede acceder a ella o no, si no funciona, a por la duquesa, ¡¡¡¡ANIMO, TU PUEDES!!!! - y dando un par de giros sobre si misma salió de la pista de baile.

Me llené el pecho de aire un par de veces, templé los nervios, y fijé con la mirada a la hija del alcalde. Me acerqué con cuidado por un lateral, y me paré a unos metros. Sentada era difícil saber su físico, llevaba una blusa algo abombada por estar sentada, estaba casi sola en la mesa, un par de adultos lejos de ella, estaba siendo ignorada. Cualquier tipo de conversación seria mejor que eso, me acerqué más de lo debido y la saludé.....

YO: hola, me llamo Raúl, y veo que eres de las pocas de mi edad, ¿podemos charlar? - ella alzó la mirada algo confusa, se señalo a si misma como preguntando si me dirigía a ella - claro, ¿a quien más me voy a.....

De la nada salió un armario empotrado vestido con un traje negro, se me plantó en medio y me "sugirió" que me fuera de allí, yo, ni corto ni perezoso, le rodeé con la cabeza y la pregunté.

-YO: ¿Qué, amigo tuyo?- sonrió, atenta a mi situación.

El tipo se movió volviendo a taparme la vista directa, alcé un poco la vista, yo era grande y el también, pero seguramente ese tío fuera policía o escolta privada, no era cuestión de montar un numero. Me alejé un poco hasta que se apartó y cuando la vi buscarme con la mirada nuevamente, la grité

-YO: ¡¡¡en otro momento será!!

El tipo se volvió a poner en medio, y medio avanzó hacia mí con cara de pocos amigos alzando el brazo. Me fui al trote mirando a la chiquilla que se reía de mi cobardía, allí era imposible.

Elisabeth - la Duquesa.

Tocaba ir a por la Duquesa. Me fui a su posición, seguía de pie, sola, apoyada en una mesa alta de bar, bebiendo algún tipo de bebida con sombrilla. De vez en cuando alguien la saludaba pero muy fugazmente, y se iban. Nuestras miradas se cruzaron un par de veces, y cuando ya era obvio me acerqué.

-YO: buenas tardes señora, me deja que la acompañe, parece un sitio tranquilo.

-DUQUESA: no, para nada joven, no me vendrá mal compañía.

-YO: sepa que soy muy buen conversador, y necesito escondite.

-DUQUESA: ¿que habrá hecho un joven como usted.....? ¿se llama?

-YO: me llamo Raúl.

-DUQUESA: encantada, soy la Duquesa de Benavente, Julia Agustina De la tierra y Mingote.

-YO: contundente nombre.

-DUQUESA: y muy tedioso, llámame Duquesa por ahora………todos lo hacen……… ¿y de que te quieres esconder?

-YO: en mi primer intento de la noche, al parecer, le he tirado los tratos a una señorita que resultó ser prostituta de alto nivel, y la cosa ha terminado mal.

-DUQUESA: ahhhh, ¿has sido tú el valiente que ha ido a por Matahari?

-YO: el mismo que viste y calza.

-DUQUESA: pues vaya ojo tienes majo.

-YO: uno, que no esta acostumbrado a una fiesta de tanta alcurnia, que tal si usted, una señora hecha y derecha, tiene la amabilidad de darme unos consejos para no hacer más el ridículo.

Se giró a mirarme sorprendida, sonrío muy feliz y me invitó a colocarme a su lado, yo puse mis manos hacia delante cogidas delante de mi estomago y cara de atención, ella metió una mano a través de uno de mis brazos, como en forma de paseo, y empezó.

-DUQUESA: mira, allí tienes al grupo de empresarios, babosos que dejan a sus mujeres en casa para venir a ver que cazan, allí las mujeres acompañantes de sus maridos, que cuando se cansan de ser floreros a su lado se reúnen a cuchichear del resto, la mayoría de parejas estables están bailando o en las barras del bar, allí, un grupo de viejas como yo, que nos creemos las más listas del mundo, pero solo somos mayores............

Siguió dándome indicaciones mientras yo le prestaba atención a ella, era cierto, era mayor, rondaría los 55 años, y se le notaba en la cara, llevaba un moño llamativo y un traje del mismo color amarillo, se le pegaba bastante al cuerpo, en sus tiempos fue una buena moza, pero ahora solo quedaban rescoldos.

-DUQUESA: ............y luego estoy yo, harta de todos ellos, vengo por mi marido, pero anda de picos pardos con sus ligues.

-YO: y sabiéndolo, ¿viene aquí?

-DUQUESA: es más por sobrellevar la imagen publica de mi marido, pero cada día me cansa más, creo que anda liado con la entrenadora de fútbol femenino - aquella mujer no era tonta, ni una borracha, era una mujer para mantener las apariencias, curtida en la vida.

-YO: no me parece nada justo.

-DUQUESA: últimamente nada lo es, me paso los días viéndole ir y venir, sin apenas hablar, y aquí, sola, todos saben de sus escarnios y me tratan de evitar.

-YO: pues hoy no - me moví hacia la pista de baile, me agaché haciéndole un gesto de saludo antiguo, y le ofrecí mi mano.

-DUQUESA: ¿que haces muchacho?

-YO: invitar a una señora de verdad a bailar, como se merece usted.

Dudó, dudó muchísimo, miraba al rededor, pensando en el que dirán, era un joven fornido y bien plantado. Me miró y le debí trasmitir seguridad con alguna mueca, alargó su mano y me la cogió, la llevé del brazo a la pista de baile, justo antes de entrar, se paró.

-DUQUESA: antes, dime algo.

-YO: lo que quiera.

-DUQUESA: ¿ese traje es de……...Eric? - sonreí reconfortado.

-YO: del mismísimo, es un artista ese loco - sonrío orgullosa de su acierto y se lanzó a la pista de baile conmigo de la mano.

El baile empezó un poco tosco, le podía la vergüenza, pero me reafirmé recordando mis clases extra escolares, cogí postura y la llevé por toda la pista, con calma, dejándonos ver, de vez en cuando le regalaba algún giro sobre si misma, y poníamos poses raras, como si fuera una competición de baile, luego nos juntábamos y reíamos

-DUQUESA: jajja de verdad que te agradezco el gesto, ¿como es que nunca te había visto por aquí?

-YO: en realidad soy un novato en este mundillo, soy amigo de Eli y Mariana, de .....

-DUQUESA: ahhhh Mariana, la chica de la gimnasia, me gusta su forma de ser, no se arruga y dice las cosas a la cara.

-YO: es cierto, y por lo visto gran entrenadora, si tuviera algo más de apoyo....

-DUQUESA: así que es eso, me has traído a bailar por eso. - me quedé pillado.

-YO: bueno, soy amigo suyo y no me duelen prendas en decir que le vendría bien el apoyo de una mujer tan poderosa como usted.

-DUQUESA: siempre hay algo detrás, supongo.

-YO: eso no cambia que todo ese grupo de mujeres estén hablando de usted y estén verdes de envidia - la giré para que viera que el grupo de casadas abandonadas se moría de envidia al verla a ella con un hombre como yo.

Al recogerla del giro se quedó de espaldas a mi, agarrados de las manos la rodeaba ampliamente, en esa postura no pudo si no notar mi miembro, en reposo, sobre su cadera, se alejó de golpe dándose la vuelta. No la dejé irse más lejos y me acerqué bailando.

-YO: ¿que ocurre?

-DUQUESA: ¿lo que he notado.....?

-YO: si, eso era.

-DUQUESA: virgen del cielo, ¿y te la he puesto yo así? - sopesé la respuesta, creía que la tenia empalmada, y no era cierto, si decía que no, que aun estaba en reposo, se podría llegar a asustar y/o sentir ofendida, pero si decía que si, la podía llenar de orgullo, me pareció mejor opción.

-YO: bueno Duquesa, un hombre tiene sus limites, y usted se mueve muy bien en la pista jejejeje

Se me abrazó enrojecida, y seguimos bailando, con continuos toques "accidentales" de ella con mi polla, pasado un buen rato, la acompañé a la barra, y la pedí algo de beber, estaba muy acalorada.

-DUQUESA: muchas gracias por todo amor, me he divertido mucho, pero ya es tarde y quisiera pedirte un favor.

-YO: el que usted me pida.

-DUQUESA: he visto como nos siguen mirando esas cotorras de "mis amigas", sin duda irán con el chisme a mi marido y ya que lo van a hacer, quiero llevarme algo a cambio.

Hinqué una rodilla al suelo, apoyándome en ella, bajé la cabeza como para ser hecho sir.

-YO: dígame lo que quiera y removeré cielo y tierra para lograrlo - se rió a carcajadas y me pidió que no hiciera más el tonto y me levantara, así lo hice.

-DUQUESA: quiero un beso, tuyo, aquí y ahora, nada de en la mejilla o un piquito de furcia, un señor beso, que me vean y cuando vayan a mi marido hierva por dentro de vergüenza.

-YO: hecho.

Se quitó el moño con la flor amarilla, se soltó un poco el pelo y me agarró la cara, yo me dejé hacer, plantó sus labios en los míos, noté las arrugas de su piel y empezó a mover su boca con gracia y salero, yo la seguí el juego, y justo antes de separarse de mi, hasta intuí su lengua en mis labios. Me desmayé, o eso hice parecer, caí al suelo un poco a broma mientras ella no paraba de reír, llegó a agacharse y fingir un RCP. Al 2 intento fue a hacerme el boca a boca y yo fingí despertarme de golpe, como para evitar sus "mortíferos" labios.(soy muy payaso para estas cosas, me gusta hacer el ridículo y sacar sonrisas con ello). Casi se cae al suelo de la risa, la sujeté para que no ocurriera, y los de alrededor no paraban de reír, lo mejor fue al levantarnos ver al grupo de cotorras fuera de si, no dando crédito a lo ocurrido. Se despidió de mí.

-DUQUESA: muchas gracias, ojalá hubiera más gente como tú en este mundo.

-YO: ha sido un autentico placer, ojalá hubiera más mujeres como usted en el gym de Eli. - nos sonreímos una ultima vez, la besé la mano de forma gentil, y se marchó, pasando por delante de sus "amigas" con una actitud altiva y desafiada, con la flor amarilla en la mano.

Elisabeth - la hija del alcalde en la fiesta.

Tuve una sonrisa tonta en la cara mientras la veía marcharse que no se me quitó hasta que aparecieron Eli y Mariana rotas de risa, felicitándome por mi actuación.

-ELI: te las has encandilado como pocos podrían, y no me has hecho caso en nada de lo hablado en todo el mes.

-YO: es que para tratar con damas de esa edad, no necesito ayuda, siempre se me han dado bien, mi problema es con las jóvenes.

-MARIANA: pues de cine, por que así la tendremos de nuestro lado cuando lo de su marido estalle, algún día le pillaran con la entrenadora.

-YO: y hablando de jóvenes, la hija del alcalde sigue allí, en un torreón, asilada del mundo.

-ELI: si, y el dragón que la custodia no deja acercarse ni a las moscas.

-YO: por poco me calza una hostia solo por saludarla.

-MARIANA: habrá que ingeniárselas, Matahari saldrá en breve del baño, la he visto arreglarse allí, y ya hemos cumplido con la Duquesa, con la presidenta de la federación de tenis perdida, solo queda ella por ahora.

-YO: creo que ella desea quitárselo de encima, no puede estar más aburrida.

-ELI: pues por el baño de mujeres hay una salida de emergencia, si la metemos por allí, la podemos sacar.

-YO: pero eso, si ella quiere.

-MARIANA: ya se, montamos un numerito Eli y yo para que te acerques a ella, y lo confirmes.

Así acordamos, me fui dando un rodeo por el lado donde no estaba el mostrenco de seguridad, y Eli se paseó por delante de él, haciendo tropezarse y cayendo a sus pies enseñando pierna a través de la ranura del vestido. Ningún hombre hetero perdería tiempo en mirar las torneadas piernas de aquella preciosa mujer.

-ELI: ¡¡ay me hecho daño, malditos tacones!!, ¿me ayuda? - y levantó las manos a modo de suplica, el tipo accedió sin dejar de repasar sus piernas, al ponerse en pie siguió la actuación, no podía apoyar la pierna “la pobre”, y Mariana entró en acción trayendo un silla y actuando como medico, pidiendo continuamente al guardaespaldas que la sostuviera.

Aquello me dio un margen, corto, de tiempo, y me acerqué por detrás a la muchacha.

-YO: parece que ha llegado nuestro momento, me llamo Raúl, y es un placer conocerte al fin ¿como te llamas? - se sobresaltó un poco pero al reconocerme del intento previo sonrió mirando a su protector distraído, me agaché a su lado rodeándola entre mis brazos apoyándolos en la mesa y el respaldo de su silla a la vez.

-ELLA: ¿que haces?, ¿estas loco? como te vea te parte en 2.

-YO: merece la pena si logro saber tu nombre. - sonrió de nuevo.

-ELLA: me llamo Laura, aunque mis amigos siempre usan Lau.

-YO: ¿y yo como puedo llamarte? - volvió a mirar al armario empotrado que andaba embobado con los muslos de Eli.

-LAU: llámame como quieras, pero vete, si se da cuenta........

-YO: pues debes de estar muy aburrida si ese mono no deja que nadie se acerque a charlar - ella no paraba de intercalar miradas, a mi y a él, esperando el momento que se diera cuenta.

-LAU: bueno si, pero no es un mono, es mi amigo, es por mi seguridad.......... o eso dicen.......

-YO: y que te parecería si salimos fuera a charlar un rato, yo estoy algo cansado de tanta pomposidad - me miró "ojiplática", dudó de si debía, o no, se le notó que quería pero tenia miedo, podía ser un perturbado, pero creo que finalmente la emoción del momento la pudo.

-LAU: esta bien, ¿como?

-YO: ve al baño de aquí a 5 minutos.

-LAU: los revisará antes de entrar yo.

-YO: tranquila, ya me ocupo yo.

El guardaespaldas ya se olió la tostada y se giró a mirar a su protegida, me vio agachado a su lado, y yo le vi a él mirarme, salió corriendo hacia nosotros, me dio tiempo a coger la mano de Lau mirándola a los ojos.......

-YO: te espero.

Salí por patas antes de que el tipo llegara a mí, y se quedó preguntándola a Lau que quien era o que quería, debió darle evasivas, ya que le montó un pollo de cuidado. La 1º parte del plan ya estaba, ella quería salir de allí, tener una aventura, darle emoción a una noche aburrida, la 2º parte del plan debía ser rápida, como habíamos quedado, Eli y yo nos citamos en la entrada del baño de mujeres.

-ELI: ¿que tal? ¿esta dispuesta?

-YO: si, en 5 minutos estará aquí, seguro.

-ELI: pues a lo nuestro.

Se abalanzó contra mí empotrándose contra la pared y me besó de forma pasional, evidente, me sorprendió, pero no por ello no la correspondí, empezamos a restregarnos uno contra otro, a los pocos minutos se alejó de mí agarrándome por la corbata y me arrastró hacia el baño, nos colamos delante de la cola de mujeres. Entramos en el baño como adolescentes, yo lo era, y me llevó con fuerza a uno de los cubículos. Allí debía parar el truco, pero no lo hizo, seguimos unos segundos de más, en los que su arranque me había puesto a tono, notaba mi polla palpitando en los slips, apretando contra el cuerpo de Eli, que debía de sentirla, poco a poco bajó el ritmo de sus besos terminado con uno, entre risas, en mi barbilla.

-ELI: joder, como te he puesto

-YO: como no pares me va a reventar el pantalón.

-ELI: jaajjaja no tonto, me refiero a la cara, de pintalabios - sacó una toallitas húmedas del bolso y me limpió como una madre a su hijo, hasta que no se notaba nada - vendrá en breve.

-YO: el grandullón revisara antes.

-ELI: súbete al inodoro.

Así lo hice y ella, con cierta maestría, se levantó el vestido y bajó sus bragas, cuando entró el hombre se oyó el asombro en las demás mujeres del baño, le dio igual, revisó de arriba a abajo y al ver nuestro cubículo cerrado, se agachó para mirar, debió de ver los pies y bragas de Eli, no le pareció nada raro y le oímos darle permiso a Laura, entró y se dio la vuelta.

-LAU: ¡¿puedes por un segundo dejarme mear tranquila?! - oímos como a regañadientes su perro salió del baño, Laura dejó pasar un tiempo prudencial - ¿hola? ........¿estas aquí? - salí yo solo, mientras Eli se arreglaba el vestido, cerré rápido para que no la viera Laura.

-YO: aquí estoy princesa, he venido a rescataros. - rió confusa, con una mano en la cara.

La ofrecí mi mano, ella la agarró y la abrí la puerta de emergencia para que saliera, de reojo vi a la Matahari todavía secándose el vestido, la guiñé un ojo con sorna, y seguí a Laura, la dejé guiar para que sintiera control sobre la situación y la huida. Miró en busca de una salida rápida y subimos por unas escaleras, no paraba de farfullar y reír por lo que estaba haciendo. Iba delante de mí, hasta llegar a una terraza del hotel.

Durante la “fuga” pude ver su ropa e intuir su figura, hasta ahora las prisas no habían ayudado. Laura era joven, tendría 19 años, pelo moreno y liso un con el flequillo a modo de tazón, pero el resto del pelo le caía en una medio melena alrededor de la cara, era delgada, y con unas cuencas de los ojos profundas y oscurecidas por el maquillaje, labios finos pintados, o mejor dicho, perfilados con un color rosa chicle, el aspecto de su cara era algo calavérico, iba con una blusa grande, bastante sencilla y clásica, ceñida al pecho, de manga corta en los brazos, nada estridente, sin escote ni enseñando carne, aunque la fina tela dejaba calcar su sujetador. La blusa le llegaba a la altura del trasero, donde nacía un pantalón vaquero gris, con uno de esos cinturones que no lo son, finos y brillantes, solo ocupan ese espacio en la prenda, su trasero era algo escaso, se le notaba al subir las escaleras que no llenaba los vaqueros ni de lejos, terminando sus piernas en unos botines negros con algo de tacón, no mucho.

Cuando llegamos a la parte de la terraza hubo algo más de luz y mientras ella respiraba rápidamente entre la huida y la emoción, reía sin parar, llevándose la mano al pecho.

-LAU: ¡¡dios, Mario me va a matar cuando se entere!!

-YO: ¿el guardaespaldas? no le dejare.

-LAU: ¿a ti? a ti como te vea no se sabrá más de ti, es un ex del ejercito, guardaespaldas profesional, lleva casi 5 años con mi familia como mi escolta personal.

-YO: vaya bestia, y no me asusto fácilmente, pero su cara cuando me acerqué a ti acojonaba.

-LAU: le gusta intimidar pero es buena gente, me ha cuidado mucho, por ejemplo en unas vacaciones a Canarias, por mis 18 cumpleaños, llegó a romperle la cámara a unos paparazzi que me pillaron en la playa en biquini.

-YO: si es mejor no enfadarle, ¿por que me has seguido entonces? - se quedó pensativa.

-LAU: no lo sé, estaba cansada, llevo 2 horas sentada siendo ignorada por esa panda de ególatras, estaba harta, mi padre me arrastra a estas fiestas cada fin de semana.

-YO: te entiendo perfectamente, esta siendo un poco decepcionante, pero oye, hay que saber divertirse.

-LAU: es difícil siendo quien es mi padre - la miraba con atención, buscando alguna ranura en ella, “quizá su relación con su padre”, estaba de brazos cruzados, frotándose los brazos con las manos, me di cuenta de que ya eran más de las 12 y en la terraza, de noche, hacia algo de frió.

-YO: toma, ponte esto - me quité la chaqueta y la rodeé con mis brazos para ponérsela, cuando se la puse no quité mis brazos de ella, y noté como ella olía profundamente, la colonia en que me inundó mi madre apareció en escena.

-LAU: gracias, hace frío aquí, ¿tu no lo sientes?

-YO: tranquila, yo estoy curtido, lo importante eres tú. - y froté su espalda y uno de sus brazos con energía, para hacerla entrar en calor - ¿y quien se supone que es tu padre para tal vigilancia? - me miró sorprendida.

-LAU: ¿no lo sabes? es el alcalde.

-YO: ¡¡¡hostia!!!!, ¿no fastidies? ahora si que estoy jodido jajajajajja

-LAU: pues un poco, el último chico con el que salí un día, le cambiaron hasta de comunidad autónoma.

-YO: solución efectiva, desde luego, pero ya eres toda un mujer, debe entender que has crecido.

-LAU: ya, si eso le digo siempre, pero me pone a Mario encima como una lapa, ¿que creerías si te digo que nunca he besado a nadie?

-YO: pues me costaría pensarlo, eres muy guapa, y no me creo que nadie lo haya intentado - coloqué mis dedos en su barbilla y levanté su cara un poco, ella se quedó un segundo así, y luego apartó la cabeza.

-LAU: no es que no lo hayan intentado, pero muy pocos chicos, casi nadie se acerca a mi y quien lo hace sufre alguna reprimenda, ya sea del colegio o instituto, de Mario o de mi padre..............- se le notó en la mirada la tristeza y que quería cambiar de tema- ¿y tú que haces aquí?

-YO: pues me ha invitado una amiga, no se si la conoces, Elisabeth, me ha estado ayudando ah.....mejorar mi físico, y como premio me ha querido traer

-LAU: ¿premio? - me miró de arriba abajo - ni que te pasara nada - saqué el móvil con mis fotos de antes, y se quedó atónita - no puede ser, pero si estabas gordisimo.........- se dio cuenta de lo dicho -........perdona, pero es que……..vaya cambio.

-YO: ya ves, y todo gracias a ella y su gym, deberías probar, la gimnasia es casi adictiva - lancé la sonda.

-LAU: lo he pensado un par de veces, pero no se si me gustaría. - tenia que empezar a tirar de las riendas, aquella no era una experimentada señora, era un cría con profundos traumas afectivos.

-YO: que tal si te enseño un poco de lo que hacemos, y tú ya decides.

-LAU: no se.......me da vergüenza.

-YO: sin sacrificio no hay victoria, puedes seguir como estas o mejorar, tú decides. - me la jugué, la insinuaba que estaba mal físicamente, pero Eli me enseñó el efecto de las preguntas guiadas.

Extendí de nuevo mi mano y ella accedió encantada, nos metimos por una puerta hasta llegar a otra sala adjunta vacía. Allí la quité mi chaqueta y la coloqué con cuidado en un mueble, la invité a quitarse los zapatos para los ejercicios, lo hizo algo nerviosa, mientras me remangaba las mangas de la camisa me coloqué a su lado.

-YO: tú sígueme y haz lo que yo haga.

-LAU: vale.

Comenzó la rutina de calentamiento, tobillos, brazos, giros de cadera, al inicio le daba vergüenza pero al ver mi insistencia y seguridad me seguía, de vez en cuando me acerba a ella y corregía con mis manos en su cintura o los brazos, alguna posición, y volvía a mi zona, a su derecha. En uno de los ejercicios de agacharse hacia delante, fingí enfadarme.

-YO: no, no, así no, con atajos no vale, tienes que agacharte sin doblar las rodillas, con las piernas bien separadas y la espalda recta, hasta que toques el suelo - me coloqué a su lado, me llegaba su cabeza a la altura del cuello, la puse sus brazos rectos hacia arriba y planté una mano en su vientre y otra en su espalda - y ahora ve bajando, recuerda, separa bien las piernas, no dobles ni las rodillas ni la espalda.

Así lo hizo un par de veces, realmente lo hacia bien, pero yo no estaba allí para hacerla una buena gimnasta.

-YO: mejor, pero tienes que hacerlo más lento, para que los músculos se tensen - me pegué a su espalda, con las manos la doblé con cuidado pero haciendo el ejercicio completo, la posición era excitante, con su trasero totalmente ofrecido a mi pelvis, la hice bajar y subir 20 veces, en 4 tandas de 5, sin separar mi cuerpo del suyo ni dejar de poner mis manos en ella, cada vez que bajaba la hacia rebotar un poco contra el suelo, antes de levantarla. Esto, sumado a que su blusa, en cada bajada se le caía hacia su cara, dejando gran parte de su vientre y espalda al aire, no hizo más que hacer reaccionar mi virilidad.

Ahora era ella la que al subir y quedarse en pie con los brazos levantados, rebotaba contra mi cuerpo, y tardaba alguna décima de segundo de más en volver a bajar, su movimiento empezó a ser rítmico en la 3º tanda, y sus glúteos atrapaban mi polla con cada subida y bajada. Estaba siendo excitante, y decidí parar de golpe.

-YO: y veinte, para y descansa. - me separé de Lau y la aplaudía felicitándola, ella se quedó cortada, clavada en la posición, con cara de disgusto por su finalización - ¿lo has notado no? - doble sentido, ella se dio la vuelta mirándome roja y acalorada.

-LAU: si, bueno... es que, te has acercado mucho, me has puesto las manos encima, y con el movimiento.............- la corté.

-YO: exacto, has notado tus músculos reaccionar. - se quedó de nuevo paralizada

-LAU: ah .....si........... eso ......... - la hice pensar mal a propósito, para que pensara que era culpa suya y de su mente, no mía.

-YO: ¿y te sientes mejor?

-LAU: bueno...........la verdad ...............es que me he................. desahogado......... un poco. - estaba confusa, sin duda mi argucia le pasaba por la cabeza.

-YO: creo que con esto te puedes hacer una idea de lo que se trabaja en el gym, te aseguro que en esto que sientes ahora, no es nada comparado con lo divertido que es - jugaba a 2 bandas, lo que el decía era perfectamente lógico y normal, pero sabia que ella no estaba pensando en el ejercicio y si en mi bulto creciendo en su trasero, y que mis palabras también eran aplicables.

-LAU: pues si que os lo debéis pasar bien.

-YO: mira, te doy el numero de Eli, que es quien me enseñó todo, y tú ya decides si vas o no - se lo di, pero haciéndome el duro - luego no vayas a ir y no trabajes "duro" ehh, que te he mandado yo.

-LAU: y siempre hacéis este tipo de......ejercicios. - parecía, al menos, curiosa.

-YO: no siempre, hemos implementado bailes, por parejas, ¿te atreves?

-LAU: ¡¡¡¡claro!!! - y se me acercó ansiosa, la manejaba como un títere, era arcilla y yo moldeaba sus acciones.

-YO: 1º terminemos algún ejercicio más para no hacernos daño luego - vi desilusión en sus ojos pero se le pasó cuando los ejercicios eran de los ideados para lucir mi herramienta, se me marcaba bastante a través de la tela, y yo no disimulaba nada, su mirada se clavó en mi y perdió el paso de los ejercicios, pero me dio igual, su mirada clavada en mi miembro era lo que buscaba, detecté que se mordía el labio cuando creía que no la miraba, estaba hecha puro deseo.

Cuando terminé de lucirme, me acerqué a ella despacio, sin parar de hablar.

-YO: mira, yo empecé con bailes suaves para gente mayor, pero tú y yo no somos ancianos decrépitos, somos jóvenes con fuerza, por ello el baile que haremos será movido, yo te guiaré para ver si puedes seguirme, ¿estas de acuerdo? - toda la frase eran pequeños retos disfrazados.

-LAU: claro, claro, tengo que saber a que nivel estoy.

-YO: ¿preparada?

-LAU: si

-YO: ¿SEGURO?

-LAU: ¡¡¡¡que si!!

-YO: mira que yo no me controlo eh.........- la hice desearlo

-LAU: que si, hostias - se colocó furiosa en posición de baile a escasos centímetros de mi.

-YO: recuerda que tú lo has querido.

Sin dejar acabar de salir las palabras de mí vi boca, la agarré con firmeza, nuestras manos se unieron en el aire y ella pasó la otra por encima de mi hombro, yo la rodeé por la cintura, pegando su cuerpo al mío, dejando mi pierna izquierda, la huésped de mi mejor amigo, entre sus piernas. Se sorprendió de la rudeza, pero respondió con firmeza.

-LAU: empieza.

Al inicio era suaves, la música del DJ se colaba por la puerta, solo girábamos sobre nosotros mismos, poco a poco fui aumentado el ritmo, y moviéndonos por toda la sala, dejaba que sus piernas chocaran contra mi cuerpo, también algunos giros sobre el eje de ella, la separaba un metro la sostenía la mano en el cielo para que diera el giro, y la volvía a pegar a mi, acortando cada vez la distancia llegando el punto en que al girar se frotaba con mi entrepierna. Cuando ya noté que le había cogido el truco al baile, lancé mi ataque, la hacia volar por el aire con movimientos de baile clásicos, no me costaba y la indicaba como colocarse, después de unos cuantos haciéndola ganar confianza, me la jugué de nuevo, un movimiento clásico de baile es poner a la bailarina de rodillas sobre el muslo del bailarín, le indiqué como debía hacerlo y probamos un par de veces en la pierna sin abultar, hasta que le salía perfecta.

-YO: bien ahora toca bajar, dos giros sobre ti misma, delante mía, hasta que llegues a al otro lado y allí te agarro y repetimos - sin dejarla pensar lo hice, dio los 2 giros y saltó en el aire dispuesta a ser agarrada, lo hice con seguridad y como era inevitable, al colocar sus rodillas en mi muslo, golpeó la punta de mi glande. Sabia que dolería, pero seria efectivo y no fue tan duro como pensé.

-YO: ¡¡¡¡¡arhrgggggggg……. JODER!!! - la hice bajar despacio, cuando ya estaba en el suelo, puse rodilla en tierra.

-LAU: ¡¡¡perdona, perdona!!!! ¡¡¡He ido muy fuerte, me he girado, dios ¿estas bien?!!!!!

-YO: si, si, tranquila, ya me ha pasado alguna vez, dame un segundo y retomo aire....

-LAU: ¡¡¡dios!! lo siento, de veras, si es que es normal que te vayas dando golpes con............. - se dio cuenta de lo que iba a decir, pero ya era tarde y evidente, no quise avergonzarla más, pero era el camino.

-YO: ufff, si, tienes razón, más de una vez, eso me pasa por hacerlo sin venir preparado. - quería darle normalidad a la situación.

-LAU: ¿como que preparado?

-YO: si, no llevo la ropa adecuada, normalmente lo hago algo “más sujeto” - se hizo el silencio, ella no sabia que decir, había picado el anzuelo y no sabía quitárselo.

Me levanté exagerando el dolor un poco, agarrándome la entrepierna, la sonreía mientras la veía con ambas manos en la boca, rogando disculpas con los ojos, me fijé en ellos por 1º vez, eran negros, mirada profunda y sentida. Amagué con volver a estar preparado para seguir pero me senté de nuevo.

-YO: no, todavía no estoy bien - hacia como que me mareaba.

-LAU: ¿aviso a alguien?

-YO: no mujer, como te digo ya estoy acostumbrado..........pero un masaje en el muslo ayudaría - me apreté con los dedos la zona del muslo, justo por debajo del bulto de mi polla.

-LAU: ¿eso ayuda? – desconfiada, era joven, no estúpida.

-YO: si, relaja los vasos sanguíneos y deja que la sangre fluya de nuevo - me lo inventé - es lo máximo que puedes hacer sin..........

-LAU: ¿sin que?

-YO: bueno, sin dar un masaje directo a la zona afectada - se quedó helada, pensativa, “¿realmente lo está sopesando?”

-LAU: no, no, es culpa mía, yo lo arreglo.

Acercó sus manos con cuidado y posó una encima de mi bulto, yo gemí exageradamente de dolor, eso la aceleró sus movimientos, y posó la otra mano, abarcaba a penas toda mi extensión.

-LAU: ¿y ahora?

-YO: ufff, con cuidado, apriétala y suéltala, como amasando harina.

No dudó y lo hizó, con calma, y abriendo los ojos bastante, siguió el masaje unos minutos donde con su aumento de ritmo yo gemía menos de dolor. Aguanté lo que pude pero aquello me estaba poniendo a tono y se me empezó a hinchar, sus agarres eran más fuertes ante el crecimiento de mi polla, y la mirada de ella no perdía detalle, se mordía los labios repetidamente, mientras dejaba la boca entreabierta.

-YO: puffff mucho mejor, creo que deberías ir parando.

-LAU: no, no, esto se esta hinchando, tengo que seguir o se inflamara - se lo acababa de inventar, “quiere seguir”.

-YO: no, no, por dios, para ...........o no respondo, eso ya no es del golpe.

-LAU: ah............AHHHHHHHHHHHHHHHHH - tardó algunos segundos en soltármela.

Me puse un poco de lado para hacer que disimulaba.

-YO: muchas gracias, ya no me duele nada pero creo que debemos dejar la clase, por que no creo que aguante más tiempo sin lanzarme a tus labios - la frase era certera, directa, y buscaba una reacción en ella.

-LAU: ¿en serio?...............por que me esta gustando la clase – “es mía”, me incorporé un poco, la miré a los ojos y me cercioré de sus palabras.

-YO: esto no es un juego, no quiero hacerte daño.

-LAU: no lo harás.

Se lanzó sobre mí, se arrodilló a mi lado y me besó, de la misma forma asquerosamente inocente y tierna con la que besé yo por 1º vez a Raquel en el hospital. La agarré la cabeza y la separé un poco de mi.

-YO: ¿estas segura?

-LAU: más que nunca - y volvió a mis labios.

Me incorporé un poco más y la senté sobre mis piernas de forma lateral, rodeándola con mis brazos, ella colocó los suyos a modo de pared entre nuestros pechos, pero no dejaba de besarme, besos cortos y suaves, inocencia pura. Quise acelerar, poco a poco, el ritmo de los labios y como tal abría la boca, ella hacia de espejo y repetía los gestos con su boca. Bajé una de mis manos a sus piernas y masajeaba uno de sus muslos por encima del vaquero, inicié el movimiento de mi lengua introduciéndola en su boca, ella se apartó medio milímetro y sonrío, volvió al ataque haciendo lo mismo, de forma torpe pero segura, fue acompañado los movimientos, y sus manos pasaron a acariciar mi cabeza y espalda, dejando acceso libre a sus pechos. Después de unos minutos de ardiente deseo, moví su cuerpo de forma que quedamos enfrentados, la subí en mis piernas y acariciaba su vientre y la cintura por debajo de la tela de la blusa, sin dejar de besar, Laura le estaba cogiendo el gusto, pasó sus brazos por encima de mis hombros.

-YO: Laura, o paramos o esto va a acabar mal.

-LAU: que sea lo que tenga que ser - se tiró a mi cuello.

Aproveché la posición y subí mis manos a su sostén, por la espalda, lo desabroche rápido – “gracias Eli” - y se lo saqué por debajo de la blusa dejándolo en el suelo, la separé de mi un poco y con las manos metidas debajo de su blusa solo tuve que tirar hacia arriba, y la blusa salió casi sola, ella ayudó terminando de sacarla de sus brazos, y quedaron ante mi un par de tetas de gran nivel para una adolescente, con unos pequeños y erectos pezones, a los que me lancé a chupar y masajear, comenzó a gemir suavemente, agarrándome la cabeza con pasión apretándomela contra su pecho. Con la boca trabajaba uno de sus pechos y con una mano en su espalda la estrujaba contra mi, mi polla estaba a reventar y me dolía debajo del slip, el bulto golpeaba la pelvis de Laura, bajé la mano libre a su trasero, más que por disfrutarlo, para meter mi mano por debajo de su culo, y colocarme la polla de forma que no me doliera, pero después dejándola allí, frotando por encima del vaquero la zona de su coño.

-LAU: madre mía, la tienes enorme, la siento en mi piel, ¿eso es normal?

-YO: no, la verdad es que tengo un problema con ella, es demasiado grande y asusta a más de alguna que la ha visto - mentira.

-LAU: yo quiero verla.

-YO: no se, no quiero estropearlo y que huyas.

-LAU: te prometo que no lo haré.

-YO: esta bien.

La levanté casi a pulso y la puse de pie, yo hice lo mismo, y me quedé solo con los slips, apenas aguantaban con todo dentro de ellos.

-YO: si tú ves, yo quiero ver, fuera los pantalones, los 2, o no hay trato.

Ni contestó, se quitó el pantalón a la vez que yo, dándome un poco la espalda, por vergüenza pero regalándome la imagen de su trasero siendo desnudado mientras se agachaba. Coloqué el pantalón de forma doblaba en el suelo y fui a por ella cuando aun estaba sacándose las perneras de los pies. La agarré por detrás y mientras besaba su cuello, pegué mi pelvis a punto de reventar dentro del slip a su trasero, solo protegido por unas bragas, nada soberbio, solo iban a juego con el sostén, eran negras y parecían juveniles.

La sensación de mi polla en su piel la hizo erizarse, se tensó muchísimo, yo no dejaba de apretar con mis manos en su cadera contra mi, iniciando un movimiento circular con nuestros cuerpos acompasados. Llevé una mano a sus pechos, ”dios, sus pezones podían rayar diamantes”, la cogí de la mano, la di una vuelta de baile para dejarla de cara a mi.

-YO: no te asustes, vale, no pasara nada que tú no quieras, pero me lo has pedido, y aquí esta.

De un tirón me baja el slip, más bien de 2 tirones, el 1º quedó varado por mi abultada masculinidad. Por poco se cae de espaldas, se alejó de mi varios pasos mientras mi polla aun buscaba su posición natural en erección.

-LAU: ma.........madre..........mi......mia............pero si es más grande de lo que......- no razonaba bien, si gente como Raquel o Eli quedaron impresionadas, una joven a la que acababan de besar por 1º vez tendría que estar horrorizada.

-YO: ya lo se, y lo paso fatal, las chicas lo notan y se apartan de mi - “generar pena, empatía”.

-LAU: bueno, es que vaya tranca, he visto algunos vídeos con amigas pero, nada así.- me sorprendió, “¿las chicas también ven vídeos porno?”

-YO: pues es culpa tuya, yo solo quería charlar y enseñarte gimnasia, y me la has puesto así, no es justo, lo que se empieza se acaba.

Me fui de nuevo a por ella, la arrasé cogiéndola en volandas hasta llegar a una pared y allí nos besamos de nuevo, yo frotaba todo su cuerpo y ella se dejaba hacer, mientras mi verga estaba aplastaba en su vientre, rozando alguna vez sus pechos. Metí mi mano por su trasero, por debajo de sus bragas, y masajeaba la zona a conciencia, la otra mano fue a por la otra pierna, y acariciando su terso muslo la levanté un poco, doblándola la rodilla, así, mi polla se frotaba directamente contra su pelvis.

-LAU: dios,...............ufffff ...........que calor........ no pares........

No solo no paré si no que mi mano dentro de sus bragas se abrió paso hasta que empezó a frotar su intimidad, lo hacia por encima y con cuidado, estaba empapada, no tardó mucho en correrse, dio un pequeño grito sordo y se tensó todo su cuerpo. Bajé el ritmo de mis caricias, dejándola respirar pero sin dejar de restregarle mi miembro por su cuerpo.

-LAU: eres maravilloso, ni tocándome yo he logrado esta excitación, me has puesto muy caliente, gracias - decía con la respiración entrecortada.

-YO: tú ya estas, me toca a mi.- me separé algún metro de ella, casi se desvanecé contra la pared, pero miró mi polla palpitante señalándola - una buena paja no estaría nada mal para acabar ¿no crees?

-LAU: nunca.....he hecho.....una.

-YO: yo te enseño, ven acércate y ponte de rodillas - lo hizo con paso lento y dubitativo, algo cansada, la ofrecí mi mano de apoyo y cayó ante mí, mirando mi falo, que no aguantaba más. Le expliqué como se hacia con palabras y gestos haciéndolo a la vez - mira, no es nada del otro mundo, bueno, solo por el tamaño, pero tienes que agarrar con una mano y tirar de la piel de adelante a atrás - yo lo hacia pero con una mano tapaba gran parte de mi polla, ella se acercó y puso la mano sobre la mía, siguiendo el gesto un par de veces, hasta que yo retiré mi mano y quedó ella sola pajeándome con cuidado.

-LAU: guau, que sensación más……..rara, pesa, ¿te hago daño?

YO: que va princesa, si quieres usa las dos manos - así lo hizo, de nuevo esa imagen, mi polla en manos de otra persona, siempre era igual, la comparación entre que la cogiera yo o ellas me la hacia gigantesca - ve aumentado el ritmo poco a poco, pero sin perder velocidad, y si te atreves hasta puedes darle algún besito a la punta, es el glande y la zona mas sensible.

-LAU: no, no, por dios, ¡¡que asco!!.

-YO: esta bien, si no quieres, nada, pero date prisa por que tus caricias me van a hacer efecto.

No paraba de admirar lo que estaba haciendo, su ritmo se volvió alto y ya tiraba de toda la piel hacia atrás con ambas manos, no tenia todo el día así que empecé a recordar imágenes de Eli, de Tara, de Pau y sus enormes tetas y de las últimas semanas, me tensé.

YO: pequeña, esto a reventar, ten cuidado a donde apuntas.

Se apartó un poco pero sin bajar el ritmo y llegó mi corrida, grande y hacia todos lados, la manchó un poco las tetas pero la mayoría acabó en el suelo y sus manos.

-LAU: vaya, ha sido……….mucha más cantidad de la que creía.

-YO: no hay victoria sin sacrificio - recordé nuestras palabras previas.

La ayudé a levantarse, nos aseamos como pudimos en un baño lateral, y nos vestimos, al salir de la habitación volvimos a la terraza, y allí estaba el guardaespaldas, al verlo me asusté, su cara era de odio absoluto, me había llevado a su pequeña más de una hora y media. Laura se puso en medio rápidamente, intento calmarle.

-LAU: tranquilo Mario, me he fugado del baño sola, estaba harta de la fiesta y me he quedado aquí charlando con el - Mario la miró cabreado, la cogió del brazo.

-MARIO: ¿A que coño te crees que estas jugando? ¿Podía haberte pasado algo? ¿Y si no llego a estar yo?

-YO: yo la hubiera ayudado yo - craso error meterme.

-MARIO: tú, pedazo de mierda, cierra lo boca antes de que te la parta.

-LAU: déjale, solo me ha hecho compañía, ¿para una vez que me divierto tienes que estropearlo? - las palabras apaciguaron algo su animo.

-MARIO: tu padre a preguntado por ti, no sabia donde estabas, le he tenido que mentir, ¡sabes que odio hacerlo!, esto se ha acabado, nos vamos a casa.- tiró de ella y la arrastró por la escalera increpando su actitud.

Elisabeth - El cambiazo.

Me tranquilicé un poco al ver que se iba sin partirme algo gracias a Laura, me temblaban las piernas de la adrenalina de imaginarme teniendo que zafarme de aquella mole, dejé pasar un rato para que se marcharan sin tener que cruzarme con él, no fuera a ser que cambiara de idea. Cuando lo hice pase por el baño de señoras, ante mi insolencia alguna palabra fuerte, pero lo que no vi fue a Matahari, sin duda había vuelto a la fiesta hacia tiempo. Salí al gran salón buscando a Eli o Mariana, encontré a la 2º dándole la chapa a un hombre, me acerqué y la di un toque en el brazo para llamar su atención, se percató y despidiéndose amablemente del caballero me acercó.

-MARIANA: ¿donde narices estabas?

-YO: pasando un rato con la hija del alcalde ¿por?

-MARIANA: ¿habrá quedado satisfecha? por que si no, estamos jodidas.

-YO: ¿pero que pasa?

-MARIANA: al rato de irte con esa niñata ha entrado el musculitos a por ella, ha sacado a todas del baño, se ha vuelto un poco loco, pero lo importante es que no salió Matahari, debía estar dentro pero cuando hemos ido a entrar no estaba, y no había vuelto al salón, hemos estado investigando y parece ser que la muy zorra ha subido a la zona de las habitaciones a buscar al de la federación de fútbol.

-YO: ¿el marido de la Duquesa?

-MARIANA: si, y es el premio gordo de la noche, he mandado a Eli a ver si descubre algo, pero lleva un rato sin aparecer, y no me coge el teléfono.

-YO: ¿y el resto de objetivos? no he visto a ninguno aquí, son las 2 casi, se acaba el tiempo y solo llevamos 2.

-MARIANA: la entrenadora femenina de fútbol esta perdida, nadie la ha visto aquí, suponemos que junto al de la federación de fútbol al que ha ido a buscar Matahri, la de tenis no ha bajado desde que subió al inicio de la noche .................- suspiro agobiada y me miró- ......oye te agradezco todo esto, la verdad es que es más de lo que esperaba de ti pero si no hacemos nada tendrán un año de subvenciones y ayudas las de fútbol femenino, y como la maldita puta se haga con el de fútbol estamos en la ruina, no sabemos para quien trabaja, puede unirse a la fiesta para sus beneficios o chantajearles si les pilla.

-YO: esta claro que aquí ya no hay nada que hacer, tenemos que subir a las habitaciones, toma mi número y nos escribimos mensajes, quédate aquí por si hay noticias.

Salí corriendo hacia los ascensores, según el panfleto de la fiesta el 3º piso estaba totalmente reservado para los asistentes a la fiesta. Al llegar llamé a Eli, daba señal pero no me lo cogía, busqué por los pasillos y habitaciones, se oían murmullos y ruidos de sexo por muchas de ellas, me vibró el móvil, era un mensaje de Eli.

-ELI: "no puedo hablar ni hacer ruido, tengo el móvil en silencio, estoy escondida en un armario empotrado con el de la federación follando delante de mi" - ¿como había acabado allí?.

-YO: "¿que habitación?"

-ELI: "la 203"

Me puse a buscarla, tardé un tiempo, putos pasillos de hotel, encontré la fila de los 200, estaba algo apartada, me acerqué con cuidado a la puerta, se oían gritos de sexo dentro, con un hombre jadeando como un cerdo.

-YO: "estoy en la puerta, ¿que hago?"

-ELI: en varios mensajes, "¿y yo que coño se? llevo media hora aquí encerrada, seguí al de la federación de fútbol y se metió aquí, salió al poco y me metí a ver que pasaba, pero solo atiné a ver a una mujer en la ducha antes de que él volviera a la habitación, sin tiempo de salir me escondí, l e esta metiendo caña a la que supongo entrenadora de fútbol femenino"

-YO: "¿entro a sacarte?"

-ELI: "no, no, aléjate un poco, creo que han acabado, y el se va"

Así lo hice, me escondí en una esquina y le vi salir, no se quien se había follado pero le había dejado cara de felicidad para un mes. Cuando pasó de largo corrí hacia la puerta de la habitación, cuando iba a abrir, salió de golpe Matahari con una cámara en la mano, se sorprendió al verme.

MATAHARI: llegas tarde encanto - y se fue.

Con cuidado abrí, estaba oscuro, entré, vi los pies de una mujer en la cama, se movió, me quedé inmóvil, quien fuera se levantó y fue a abrir el grifo de la ducha, intenté acercarme a la puerta del único armario empotrado que había, pero la mujer volvió del baño, casi me ve, se agachó y vi como recogía algo de la cama, se adivinaba su silueta, era baja y poco esbelta. Esperé unos segundos a que se oyera como se duchaba, y fui al armario, al abrir me encontré a Eli hecha una bola, medio tapada por unas sabanas, susurramos

-YO: ¿que coño haces aquí?, sal rápido.

-ELI: ayúdame joder, me duele todo de estar aquí metida - la ayudé a salir y cuando me iba a la puerta Eli tiró de mi - tenemos que saber quien es.

-YO: ¿estas loca, y si vuelve el otro?

ELI: shhhhh – me ignoró.

Se acercó con cuidado, asomando la cabeza por la puerta del baño, había bastante vapor de agua, pero debió ver algo, se dio lo vuelta y salió correteando de puntillas con cara de subidón. Me agarró la mano y me sacó de la habitación, nos alejamos lo suficiente

-YO: ¿quien coño era?, no era la puta, la he visto salir después.....

-ELI: ya, no era Matahari, pero si era puta………¡¡¡¡¡¡¡¡era la de tenis!!!!!!

-YO: ¡¡¡¡ NO JODAS!!!!

-ELI: yo no, pero no veas ella jajajajajajajja y ahora Matahari lo tiene todo en vídeo.

Nos echamos a reír, y le conté mis escarceos con Laura, me felicitó de nuevo, mientras noté mi móvil vibrar, era Mariana, avisando que el de la federación de fútbol había vuelto a la sala, y pidiendo explicaciones. La llamamos para contarle los hechos.

-MARIANA: ¡¡¡pero será mala guarra!!!!, la del tenis me dijo que ella nunca se rebajaría a estas cosas, deben estar quitando fondos al tenis y no quiere perdonarlos.

-YO: bueno, eso resuelve varias dudas, la cuestión es, ¿donde esta al entrenadora de fútbol femenino?, ¿por que no esta aquí cumpliendo con su querido?, ¿y para que quiere el vídeo Matahari?

-ELI: por lo poco que han hablado, creo que la entrenadora se ha hartado y ha cortado por lo sano, Matahari ha grabado desde la puerta que daba a otra habitación, el no se ha enterado de nada pero estaban "compinchadas", supongo que para chantaje y no tener que seguir follándoselo, no es un hombre agradable.

-YO: ahora puede hacer con ese vídeo lo que quiera, chantaje o destruir su reputación, nos ha ganado la batalla.

-MARIANA: no si nos hacemos con el vídeo.

-ELI: ¿como? lo tiene esa guarra.

-YO: tenía la cámara, pero yo no vi la cinta - corrí de nuevo a la habitación, ¿como no había caído?, si estaban "compinchadas" Matahari solo sostenía la cámara, la cinta se la quedaría la de tenis para el chantaje, era de esas antiguas con VHS y había visto la carcasa abierta al salir Matahari, no seria difícil encontrarla.

Entré de nuevo con algo de rapidez, no debía de tardar en salir de la ducha, busqué por encima, no la veía, recordé, cuando entré se agacho a coger algo a la cama, ¡¡¡¡LA CINTA!!!. Tenia que entrar al baño, me asomé, la vi de espaldas, intenté ser rápido y mirar por el baño, vi una cinta encima de un neceser, fui a cogerla...........

-PRESIDENTA DE LA FEDERACIÓN DE TENIS ESPAÑOL: ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡AHHHHHHHHH FUERA DE AQUÍ, PERVERTIDO, SOCORRO, ME VIOLAN, SOCORRO!!!!!!!!!!!!!!!

Me asustó el grito, pero racioné rápido.

-YO: calla mala zorra o lo de esta cinta aparecerá, pixelado el hombre, y quedarás como una puta barata - me arranqué a irme pero regresé - por cierto, gracias por ducharte y destruir todas las pruebas físicas - cogí la cinta y salí corriendo.

Ella salió corriendo detrás, empapada y desnuda con jabón en el cuerpo por el pasillo, me dirigí corriendo hacia Eli, que estaba como loca al lado de un ascensor dándole al botón y animándome a llegar a ella, yo la enseñé la cinta en la mano. El ascensor llegó antes que yo, Eli entró y trató de aguantar las puertas abiertas, fue de película de acción, según entré en el ascensor cogí a Eli al vuelo y la di la vuelta en el aire, reboté con fuerza contra la pared del propio ascensor con mi espalda para amortiguar el golpe y a Eli, ella se volvió loca pulsando el botón del vestíbulo, la puerta se llegó cerrar antes de que aquella masa abstracta de mujer, carne, desnudez maldiciones, insultos, agua y jabón nos alcanzara. Asfixiado caí al suelo con Eli partiéndose el pecho de risa.

-ELI: ¿que carajo ha pasado allí arriba?.

-YO: la tengo, tengo la cinta, ¡¡la madre que la parió…….esa zorra esta loca!! - entre respiraciones.

Se agachó y me recostó sobre un lateral del ascensor, se acercó y me dio un beso de cine, que yo correspondí como pude.

-ELI: vaya examen llevas.

-YO: para suficiente me da, ¿no? jajajaja

Llegamos al vestíbulo, me levanté del suelo con Eli del brazo y salimos triunfantes de allí, como a cámara lenta, orgullosos, se debió ver ridículo por que nadie más allí sabia lo ocurrido, pero a mi me pareció genial. Apareció Mariana preguntando.

-MARIANA: ¿tienes la cinta?

-YO aquí mismo - la enseñé.

-MARIANA: guarda eso, lo que tienes es oro puro, una mina de diamantes, tenemos que ver que tiene, venid.........

Nos llevó a una sala anexa, parecía un cuarto de trastos pero había un mueble con un TV con vídeo, lo pusimos y nos quedamos a cuadros, estaba...........

-YO: ¿vacía?, ¡¡no hay nada!!, no es posible, yo mismo la he cogido de su neceser, tenia que ser esta.

-ELI: ¿se abra estropeado?

-MARIANA: no creo, Matahari suele usar material de calidad - caí de golpe.

YO: ¡¡¡¡¡¡¡¡la puta que la parió, Matahari cambió las cintas, le ha dado una vacía a ella, la grabación era para otra persona!!!!!

Se me cayó el alma a los pies, tanto esfuerzo para nada.

-MARIANA: esa zorra siempre ha estado trabajando para otro, ¿quien será?

-ELI: da igual, ya no se puede hacer nada, en breve le entregará la cinta al que la pagaba, si no lo hizo ya.

-YO: ¿quien puede ser Mariana? ¿Quien haría esto?

-MARIANA: tenemos muchos candidatos, el presidente de fútbol es muy importante, tenerle pillado es alcanzar el cielo.

-YO: joder, alguno habrá muy enfadado para hacer esto

-MARIANA: mi apuesta son los de atletismo, estaban muy jodidos últimamente, les quitó una cesión de parte de las ayudas hace unos meses.

-YO: ¿tienes el móvil de Matahari?

-MARIANA: si, ¿pero para que?

-YO: esto puede funcionar, mándala un mensaje, dile que eres de atletismo y que se cambia la zona de entrega, pon alguna habitación de arriba.

-ELI: ¿y de que sirve?, lo mismo ya la entregó, o no son lo de atletismo, o puede que no se fié.

-YO: en todos esos casos ya hemos perdido la cinta, como ahora, pero………¿y si cuela?

-MARIANA: daría igual aunque la pillemos, esa loca no soltará la cinta, y puede que ni la lleve encima.

-ELI: bueno............tenemos a Raúl.

-MARIANA: ¿y que va ha hacer, darla una paliza? seguro que alguno ya lo ha hecho, esa no soltará prenda.

-ELI: créeme, podemos intentarlo, con él, si la metemos en una habitación aislada, cantará.

Elisabeth - La trampa.

Matahari se la había jugado a la presidenta de la federación de tenis, y a nosotros sin saberlo, cambió las cintas, suponíamos que ella tenía aun las cintas y debía entregársela a sus jefes, suponíamos también que eran los de atletismo. Todo eran suposiciones, pero no teníamos nada, sugerí tenderle una trampa a Matahari, citarla con un mensaje como si fuéramos ellos para llevarla a alguna habitación donde obligarla a darnos la cinta, Mariana, Eli y yo lo hablamos.

-ELI: es jugársela, pero no tenemos otra Mariana, por probar no perdemos nada.

-MARIANA: se lo olerá, además de que conoce mi número.

-YO: le mandamos el mensaje desde el mío, no lo tendrá.

-ELI: en serio, confía en nosotros, puede funcionar.

-MARIANA: esta bien, toma el número.

-YO: bien, las palabras deben ser ambiguas, pero el mensaje claro.

-ELI: date prisa, son las 2 y media de la mañana, no podemos dejar pasar más tiempo – le mandamos el mensaje.

"Cambio de planes, ha surgido un problema en la federación de atletismo, quedamos para la entrega en la habitación 132, en 1 hora." Me pareció convincente y lo mandamos.

-YO: ya esta, solo queda esperar, a ver si pica.

-MARIANA: ¿y como sabremos sin funcionó?.

-ELI: vayamos a la zona de la barra, delante de los ascensores, son el único acceso a las habitaciones, si aparece y sube, ha caído.

-YO: pero si llega a la habitación y no hay nadie, se irá.

-MARIANA: subir vosotros a la habitación, la tengo reservada, y esta algo apartada, nadie os molestará, yo me quedo aquí y si la veo subir os aviso. ¡¡¡¡Por favor, necesitamos esto!!!

Pareció cuadrar, despidiéndonos subimos a la habitación, apagamos luces y mientras Eli se sentaba en la cama con los pies doloridos por los tacones, yo esperaba en la habitación, en una esquina que daba a la puerta de la habitación, para que según entrara, quedara encerrada dentro.

-ELI: has tenido un gran idea, pero no se si funcionara.

-YO: no es cuestión de que funcione o no, ya habíamos perdido, esto es a la desesperada.

-ELI: aun así, te lo agradezco, te la juegas por mí.

-YO: ¿por ti? siento decírtelo, no, no estoy aquí por ti, te agradezco tu ayuda estas semanas, pero esto es solo un paso en el camino que yo elegí, además, me lo estoy pasando bomba, parecemos espías jajajja

-ELI: eres de los pocos que harían algo así, pero si esto funciona y aparece, no va a ser fácil hacerla hablar.

-YO: no pienso ponerla la mano encima, odio a los maltratadores, ya te lo dije, pero tú me has ofrecido como arma contra ella, y presupongo como.

-ELI: es cierto, además no creo que la violencia solucione nada aquí, pero quizá con un poco de ayuda de nuestro “gran amigo” la hagamos hablar.

-YO: si es tan "profesional" en lo suyo, mi polla no será efectiva, habrá hecho de todo y de todos los tamaños, no se asustara.

-ELI: yo tampoco soy ninguna estrecha y ..............- era cierto, era una mujer avezada en el sexo, y la había hecho vibrar, durante 3 días me la follé, la hice correrse y hasta casi desvanecer en el baño del gym.

-YO: supongo que tienes razón, lo dejo a tus manos.

Pasamos una hora a la espera, hablando de tonterías, y mandándonos mensajes con Mariana, tensos por momentos y con bajón de ánimo en otros. Habíamos perdido la esperanza, eran las 3:30 de la madrugada, recibíamos menos información de Mariana, y me cansé, me senté al lado de Eli, y mientras la comentaba mis experiencias de la noche, pasaba mi mano por uno de sus brazos que tenia apoyado sobre la cama, de arriba a abajo, más que sensual, como gesto de cariño.

-YO: creo que nos hemos quedado sin opciones, no va a venir.

-ELI: ya sabíamos que era difícil, pero te he visto tratar con las mujeres, conmigo incluso, te has desenvuelto bien y creo que ya no puedes sacar nada más de mi - sus palabra me hirieron levemente, aguanté la cara de póker unos segundos.

-YO: ¿esto es una despedida?

-ELI: no, no tiene que serlo, seguiremos en contacto y quedaremos, pero esto ha de parar, tienes de mi lo que querías y lo que te podía ofrecer.

-YO: si eso es cierto, y es lo que piensas, lo acepto, pero no por ello me gusta, me encantaría que siguiéramos con nuestras clases, aunque no aprenda estaría contigo, yo pienso que eso es bueno para ambos.

-ELI: cariño, no esta bien, te saco mucha edad, y debes iniciar una vida normal, tu propia historia, y yo con mí vida, no es solo por ti, estamos estancados, ¿como crees que serán nuestras vidas si seguimos así? duraremos que….. 3-4 años, tú, tarde o temprano encontrarás a otra, aunque solo por que sea de tu edad, o te canses de mi…….

-YO: ¡¡¡¡nunca!!! – sonrío y me acarició la cara.

-ELI: eso piensas ahora, pero ni tú puedes tener una vida conmigo, ni yo una contigo.

Otra vez, rechazado por una mujer, después de todo lo pasado, no era justo, me inflé de rabia, no se como hubiera reaccionado si Mariana no nos hubiera mandado un mensaje.

-MARIANA: “creo que esa maldita zorra esta subiendo”- “joder ¿como que creo?”, la llamamos.

-ELI: ¿Qué pasa? ¿Por que crees?

-MARIANA: estaba hablando con unas compañeras, no se, me ha parecido verla subir a un ascensor, al menos vi un vestido rojo.

-YO: muchas gracias por la ayuda- la ironía quedó mejor cuando la colgué - ¿que hacemos?

-ELI: tú ponte en posición, si era ella, vendrá, si lo hace, déjame hablar a mi…….

-YO: ¿Y si intenta huir?

-ELI: ponte en medio de la puerta, no podrá moverte, ni salir, cuando empiece la acción la pondré en una situación de elección, podrá irse si quiere, pero si se queda es nuestra.

Se hizo un silencio sepulcral, me tensé entero, ¿seria ella o no?, mandé un mensaje a mi padre para que no viniera a buscarme, cubriendo todas las opciones. Los segundos pasaron a ser horas, oímos pasos de gente pero nadie entraba. Cuando empece a relajarme algo, sonó lo puerta, con una serie de golpes muy específicos como para ser aleatorios. Mire a Eli cuestionando que hacer.

-ELI: pasa, no tenemos tiempo para tonterías - lo dijo con una voz varonil bastante cutre, pero efectiva, se abrió la puerta y entró.

No se veía mucho, así que entró hasta la zona central, allí Eli encendió la luz, como una madre esperando a su hijo de vuelta en una noche de fiesta, la luz iluminó la habitación, ¡¡¡era Matahari!!!.

-ELI: hola guarra, ¿esperabas a otros? - se sobresaltó al verla, pero reaccionó, y analizo, “¿otros?” eso es plural, se dio la vuelta y me vio, entendió la trampa.

-MATAHARI: ¿Qué coño queréis de mí?

-ELI: la cinta, como no…….

-MATAHARI: pues buena suerte, ya se la entregué a su dueña, esa loca del tenis - según decía eso avanzó hacia la puerta, yo me puse en medio y cerré la puerta con pestillo, era físicamente imposible que ella me moviera y abriera la puerta, y aunque no la pondría una mano encima, ella no lo sabia.

-ELI: tú no te vas a ningún lado, putón berbenero, sabemos de sobra que cambiaste las cintas, le diste una vacía y te quedaste la original, esa es la que queremos.

-MATAHARI: ya claro ¿y como lo sabéis?

-ELI: por que tenemos la cinta que le diste – Eli la sacó del bolso y la estampó con fuerza contra la pared rompiéndola en mil pedazos, quería intimidarla y nada mejor que pillándola en una mentira.

-MATAHARI: ¿Cómo la habéis logrado?

-ELI: por que mientras ellos follaban y tú filmabas, yo estaba en el armario empotrado – se quedó blanca- y ahora ven aquí, siéntete a mi lado como una niña buena y déjame cachearte ¿o prefieres que te obligue él? – me señaló.

Se vio cazada, de pie, supongo que pensado en sus opciones, no era bueno dejarla pensar, así que di un paso hacia ella.

-MATAHARI: vale, vale, ya me siento – con gesto altivo se sentó al lado de Eli en la cama, repasó su cuerpo como una policía, de arriba a abajo y le miró en el bolso, la cinta no estaba.

-ELI: ¿donde la tienes?

-MATAHARI: la entregué ya.

-ELI: ¿y si la has entregado por que has venido aquí? De nuevo mintiendo, ¿voy a tener que hacerle venir? – yo entendí que se dirigía a mi y me acerqué unos pasos, poniendo cara de malo - si ya la has entregado no entenderías el mensaje, y no tendrías por que venir aquí - tardó unos segundos en responder.

-MATAHARI: quería saber quien………………

-ELI: ojo, no vuelvas a mentirnos, o no respondo de lo que te pueda llegar ha hacer él.

-MATAHARI: deja ya ese rollo de amenazas, no sacaras nada de mí aunque me parta las piernas.

-ELI: pues dinos donde esta la cinta y podrás irte caminando.

-MATAHARI: ¡¡¡JAMAS!!!

-ELI: tú lo has querido - Eli se puso de rodillas sobre la cama, acariciando el perfil de los brazos de aquella zorra - veras, normalmente le dejaría que te destrozara a golpes hasta que te dejáramos en el hospital un tiempo, es muy capaz, pero creo que para una puta loca como tú seremos algo más delicados – me miró - ve quitándote la ropa.

-MATAHARI: ¿esa es tu jugada?, ¿este memo con cara de pánfilo me va a violar? Por favor, he pasado por hombres peores, algunas veces en grupo, y hasta he sido actriz porno, no me hagas reír, me da igual que me folle, se le nota el bulto, hasta puede que lo disfrute.

-ELI: te digo yo que vas a pasar de pedir que te folle, a rogar que pare.

De repente caí, con la fiesta, su ropa puesta y el maquillaje, no la había reconocido, era Mamanda Hot de unos 29 años, de mis noches de onanismo algún vídeo suyo había caído, lo último que supe es que paso por el mercado USA sin mucho éxito. Eso me excitó bastante, mientras me desvestía, la visión de Eli colocándose detrás de ella e iniciando un masaje en sus hombros, con gestos amplios y lentos ayudaba, me quedé solo con los slips y mi polla un tanto morcillona por la situación, me miró la entrepierna.

-MATAHARI: vaya con el tontorrón que me ha tirado la copa…….aun así, una buena polla dura no me va a hacer cambiar de idea. – Eli sonrío a su espalda, se acercó a su oído y susurró.

-ELI: es que aun no la tiene dura.

Esas palabras pusieron tensa la piel de aquella reputada mujer, se le erizó un poco la espalda entre el masaje de Eli y la visión de mi polla retenida bajo la licra. Eli llevó una de sus manos a la cremallera de uno de los costados del vestido rojo y se lo fue bajando mientras daba ligeros besos en el cuello de aquella profesional, le bajó la parte de arriba del vestido y dejó al aire un muy buen par de tetas, operadas, apenas contenidas por un sostén sin tirantes, que salió disparado cuando Eli se lo desabrochó, con habilidad, por el botón que tenia delante. Eli llevó sus dos manos a aquellas tetas remodeladas médicamente y las masacraba con gestos amplios y lentos de nuevo. Aquella visión me la estaba poniendo gordisima, mientras que seguía besándola el cuello, vi como Matahari se agarraba de forma continuada parte de la falda de su vestido.

-ELI: que dices, ¿se la vemos? - se dejó al descubierto, mi posición había cambiado, ella podía salir de la habitación si quería.

-MATAHARI: ummmmm ¿por que no? – estaba cogiendo el papel de actriz porno, era nuestra.

-ELI: venga, sácate la polla. – me ordenó, y yo obedecí encantado, cuando mi polla se terminó de bambolear delante de su mirada quedó alucinada.

-MATAHARI: no esta mal, nada, nada mal.

-ELI: y aun le falta.

-MATAHARI: ¡¡¡¿que?!!! eso tengo que verlo, ven aquí campeón.- me acerqué lo justo para dejarle acceso libre a mi miembro.

-ELI: frota la lampara y sacarás al genio.

Sin duda en su mirada y gestos cogió mi polla con ambas manos, la dobló, más que admirándola, inspeccionando, inició un sube y baja que ya me la puso a reventar.

-ELI: ahora si esta al 100%.

-MATAHARI: ¡¡¡Pero si es……….casi como la de Jonah Falcon!!! - (Dato real y curioso, Jonah Falcon es el hombre con el pene más grande del mundo, reconocido, el cual mide 24 cms en reposo y 34 cms erecto, no es actor porno, si no periodista y actor, pero si ha dejado que hagan moldes con su polla para consoladores. Según mis últimas mediciones más exactas, me sacaba algo de ventaja, 2-3 centímetros, pero no mucha.)

-ELI: y no veas como folla, lleva un mes partiéndome por la mitad – lo decía mientras se ponía al lado de su nueva amiga.

-MATAHARI: normal, vaya pedazo de polla, yo en USA he hecho videos con actores con pollas bastante grandes, incluso con Nacho Vidal aquí, pero este cabrón les deja de lado - mientras comentaba todo aquello y más cosas con Eli, yo no la escuchaba, seguía pajeándome sin parar desde que había llegado al empalme, estaba absorto.

-ELI: a mi ya casi me desencajaba la mandíbula cuando me la trago, es un espectáculo, un ejercicio de superación, ¿tú hasta donde te crees que le llegas?

-MATAHARI: pues no se, habrá que probar.- se escupió en la mano, masajeó mi capullo, y sin más, empezó a meter mi glande en su boca, a chupar como toda una profesional que era, en menos de un minuto ya casi me sentía que me corría pero logré calmarme.

Poco a poco fue babeando toda la parte delantera de mi falo, goteaba, se tragaba una buena porción cada vez que engullía, con cada embestida tragaba un poco más, tuvo amagos de arcadas pero siguió engullendo, se metía media polla con bastante trabajo ya, bajaba todo lo que podía, y aguantaba, casi notaba su campanilla en mi glande, se mantenía allí unos segundos y se la sacaba para respirar, un poco ahogada. Me estaba encantando, vi como Eli había metido una mano por la raja del vestido de Matahari, y como su mano se movía por la zona de la pelvis, y con la otra guiaba la cabeza de aquella mujer que se introducía mi miembro con ansia en la boca. En una de las veces que se separó.

-MATAHARI: ¡¡¡¡dios, ufff cof cof,!!!, creo que de ahí no paso.- lo comentó mientras un hilo de baba iba de sus labios a mi capullo, pero sin dejar de masturbarme con las manos.

-ELI: vaya, esperaba mas de ti y tu fama - se debió sentir ofendida en su orgullo o algo, por que miró a Eli con celos, y volvió al ataque, se metía polla de nuevo hasta más de la mitad, y ya con arcadas evidentes.

-YO: párala que me la vomita entera.

La cogió de la cabeza y tiró de ella fuertemente hasta dejarla recostaba en la cama, le pasó una pierna por encima quedando de rodillas mirando hacia mi, con la otra mujer entre sus piernas.

-ELI: esto se hace así. – cogió mi polla de la base, llevó la otra mano a la entrepierna de Matahari, y tragó como venia haciendo desde hacia semanas.

No seria actriz porno profesional, pero la chupaba muchísimo mejor, no solo engullía si no que dentro de su boca su lengua hacia maravillas, volvió a usar el truco de pasar los dientes por el glande mientras Matahari asomaba la cabeza por uno de los lados de Eli, no me había dado cuenta pero había apartado parte del vestido de Eli, y estaba masajeando sus glúteos, algo que sabia que ponía como una burra en celo a la mujer que chupaba mi miembro. Aguanté lo que pude pero tras unos minutos así avisé de mi corrida.

-YO: ¡¡¡agua va!!! – me tensé como pocas veces hasta ese momento, un escalofrío recorrió todo mi cuerpo, a duras penas pudo Eli sacársela de la boca y apuntar hacia otro lado, pero sin dejar de mover su mano sobre mi polla.

-MATAHARI: vaya un espectáculo, tú que ya estas acostumbrada a él - Eli torció el gesto a su espalda y le guiño un ojo, se movieron casi como ensayado, para quedar una a cada lado de la cama y un hueco en medio.

-ELI: nada ven aquí y siéntate que aun no hemos acabado

-MATAHARI: no, no, aquí no se acaba - golpeó repetidamente en colchón con la mano.

Me di la vuelta y me senté, Eli no tardó en ponerse a mi lado, agarrarme la hombría algo flácida después de expulsar mi semen, y mientras iniciaba un leve subí y baja me besaba con pasión, notaba a Matahari acariciándome también por el otro lado, su trabajo y el paso de algunos minutos me puso de nuevo la lanza en ristre. Me tumbaron sobre la cama y con 4 manos sobre mi polla empezaron hablar.

-MATAHARI: por favor, déjame cabalgarlo.

-ELI: estas loca, no sabes lo que pides.

-MATAHARI: si lo se, ¿cuantas veces se tiene una oportunidad así?

-ELI: bueno, tú quieres algo, y nosotros también – recordó la cinta.

-MATAHARI: no puedo, no es mía, si os la doy perderé mi crédito.

-ELI: pues es una pena, pero al menos te dejaré mirar, para que veas lo que te pierdes - se levantó de la cama y se puso en pie, dejando a la otra pajeándome.

Se llevó una mano al broche, lo abrió y su vestido cayó de golpe hasta su cintura, dejando sus preciosas tetas al aire, se dio la vuelta contoneándose y se fue bajando el vestido por la cintura hasta rebelar su espectacular trasero, con un tanga, pero que era algo más grande que los normales, casi bragas, de color azul zafiro como su traje, unas medias de encaje, las reconocí, fueron las que se puso cuando me enseñaba como desnudar a una mujer y que provocaron una masturbación en directo, y alguna más en mi casa tirando de memoria. Se sacó las medias colocado un pie sobre la cama y bajándoselas de forma evocadora, primero una y luego otra, el remate final fue darse la vuelta y bajarse el tanga poniendo el culo en pompa, por poco me levanto a por ella, pero tenia a Matahari pajeándome hábilmente. Se agachó y se puso a gatear sobre la cama, escalando mi cuerpo, dándole un buen lametón a mi polla cuando paso su cara por allí, hasta llegar a mi altura, me besó con todo su pelo cayendo por un lado de su cabeza, y frotando su cuerpo contra mi y mi pene.

-ELI: no hay nada como la 1º vez ¿recuerdas? – era una indicación clara de cómo debía comportarme.

-YO: la 2º fue mejor – le subí la apuesta, rió, me besó de nuevo y se puso a horcajadas encima mía, con una pierna a cada lado.

Matahari hizo lo propio y sin que la prestarla mucha atención se quitó la ropa, realmente sus tetas eran muy llamativas, la operación se las dejó perfectas, pero al quitarse el vestido la vi un tanga minúsculo, de color carne, especialmente indicado para llevarlo con vestidos atrevidos y así parecer que no lleva nada. Al agacharse para quitárselo pude ver algo de celulitis en su trasero, y quedándose medio tumbada a nuestro lado, sin perder detalle, se tocaba su parte intima, por lo que veía, totalmente rasurada, y me acariciaba el pecho a mi.

Eli llevó su mano a mi polla, levantó la cadera con experiencia, abrió su coño con la otra mano, y se la metió poco a poco en el coño, ya estaba acostumbrada así que no hubo alteraciones importantes, bajó sin parar lentamente hasta que la mitad de mi polla desapareció en su interior.

-ELI: ummmmmmmm - volvió a subir un poco y continuó la bajada, esta vez ¾ de polla dentro, repitió movimiento hasta que casi estaba totalmente empalada, se paró en esa posición unos segundos - ohhhhhhh siiiiiiiiiiiiii - puso sus brazos en mi vientre, apretando con fuerza, yo estaba en la gloria.

-MATAHARI: joder tronca, vaya animalada, menos mal que tienes el coño acostumbrado.

-ELI: y solo……….acaba…………. de empezar.

Inició un leve movimiento circular de cadera, sin subir ni bajar, solo moviéndose con casi toda mi extensión dentro, fue aumentando el ritmo y cuando ya se vio preparada, puso las mano en el colchón e hizo fuerza, subía con rapidez y bajaba con calma, un par de veces así y aumentó el ritmo de nuevo, subía y bajaba a gran velocidad.

-ELI: ¡¡¡¡dios, ya empieza, dios, que gusta, me parte, dios!!!! – era raro oírla así tan pronto, supuse que quería darle celos a mi acompañante, que aumentaba el ritmo de su masturbación con el de Eli.

El sonido de los golpes de cadera de Eli llegaron a un punto de velocidad que me llevó al cielo, cuando noté que empezaba a descender, lancé mis manos a su trasero y lo apretaba y separaba como sabia que le hacia correrse, también movía mi cadera y cogiendo fuerza con los pies nuestras pelvis empezaron a ir en direcciones contrarias y opuestas, provocando el sonido de mis huevos en su coño, del que brotaban fluidos, mi masaje en sus glúteos surtió efecto y Eli cayó sobre mi para besarme de forma animal, ella ya casi no se movía pero yo estaba en pleno desenfreno, bombeaba su obertura totalmente empapada mientras separaba sus nalgas, la respiración se le entre cortaba, y cuando la noté vibrar aumenté un tercio la velocidad, Eli solo callaba y recibía como una campeona.

-ELI: ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡dios!!!!!!!- explotó de forma obvia, corriéndose abundantemente sobre mi polla, y moviendo la cadera de forma descontrolada, como queriendo sacarse mi miembro de dentro, pero sin lograrlo.

Cayó mi pelvis a la cama, estaba agotado, pero con un erección de caballo, una diosa que se acaba de correr aun ensartada y una ex actriz porno frotándose de forma obscena a mi lado, supongo que no aguantó más, se incorporó, paso una pierna por encima de mi, de rodillas mirando hacia Eli, enfrentadas, bajó su cadera y me plantó el coño en la cara, lo tenia ardiente y húmedo,

-MATAHARI: ¡cómemelo, por favor!- ni lo pensé y empecé a chupara sus labios mayores, jugueteando con mi lengua, llevé una mano a su coño y se lo abrí, y mientras metía un dedo por su vagina con mi lengua lamía con calma su clítoris, totalmente hinchado.

Desde mi posición no podía ver mucho, pero oía como debían de estar besándose, y recorriendo todas las partes de sus cuerpos, pensé que hasta estarían chupándose las tetas una a la otra. Pasados unos minutos ya tenia de nuevo a Eli cabalgándome y a Matahari a punto de caramelo, estaba muy excitada, y mis hábiles dedos entrenados sacaron jugo de aquella hembra, su corrida no fue tan húmeda como pensé, pero si efectiva, cayó de lado, y vi la cara de Eli, estaba fuera de si, me cabalgaba como nunca, me incorporé para besarla, pegué mi cuerpo al suyo y entre una mano en su culo y otra en sus pechos, siguió bombeándose contra mi, Matahari se puso detrás de mi, acariciándonos a los 2, yo bajé mi cabeza para chupar uno de los pezones de Eli que estaba duro como una piedra, mientras ellas se besaban por encima de mi hombro. Noté el calambre en mis riñones, Eli también, y se separó un poco de mi, para mirarme fijamente a los ojos, sin parpadear, mientras seguía con un alocado movimiento de cadera. Me corrí sobradamente dentro de ella, pero no paró sus movimientos, siguió algún minuto más hasta que se volvió a correr ella, nuestros fluidos se mezclaron, caían de su interior por mi verga, y nos volvimos a besar de forma ya más calmada, como fin de una gran sesión de sexo que había sido.

-YO: no creo que esto se pueda superar. – quería ser un halago para Eli, pero al parecer era un reto para Matahari.

-MATAHARI: de eso nada, yo no me voy de aquí sin follarme a este semental. – Eli la miró por encima de mí, con cara de logro conseguido.

-ELI: ya sabes lo que tienes que hacer.

-MATAHARI: la cinta esta en mi abrigo, en el ropero, ahora quítate de encima que le voy a dar la follada de su vida.

-ELI: antes nos aseguramos, pero puedes ir divirtiéndote con él un rato mientras lo confirmo.- Eli se desencajó de mi, y mi polla flácida cayó por el peso, totalmente empapada, fue a coger el móvil y llamar a Mariana.

Mientras Matahari se me subió encima, con una mano me pajeaba y me besaba por todo el cuello, correspondí con caricias por su cuerpo, pegando su cadera a mí con mi polla en medio de nosotros.

-ELI: he he, con condón, a saber que mierdas tienes tú, “so´ puta.” – y sacó del bolso una especie de caja de condones, XXL ponía.

Se los tiró a Matahari que se separó de mi y me puso sentado al borde de la cama con ella arrodillada entre mis piernas, con cierta habilidad, sacó un condón, lo abrió y lo puso en la punta de mi polla, que debido a su caricias andaba creciendo.

-ELI: ¿seguro?, ¿ya la tienes? ¿Mira a ver que contiene? - confirmaba con Mariana por teléfono.

Aquella mujer que tenia rogándome sexo, puso sus dedos con el condón pillado en mi polla, luego sujetó por el borde, quito la otra mano y bajó su boca hasta la punta, con una habilidad pasmosa, fue bajando la boca, a la vez engullendo mi polla y la vez poniéndome el condón, cuando no pudo bajar más, siguió con la mano. Una vez puesto se me subió a horcajadas, se chupó la mano de forma grosera y se la llevó al coño para lubricarlo, abrió sus labios mayores y cuando estaba a punto de ensartarse………..

-ELI: ¿la tienes? ¿Seguro? Perfecto, justo a tiempo, escóndela, nos quedaremos por aquí –Colgó – ¡¡¡¡tú, zorra quítate de encima de mi chico!!!!!!- se acercó y la apartó de mala manera, haciéndola caer al suelo.

-MATAHARI: mala puta, me has dicho………

-ELI: te he dicho lo que querías oír, no voy a dejar que te lo folles, con condón y todo le puedes pegar algo, o eres tan mala zorra que lo mismo te quedas embarazada a propósito solo por dar por saco, vístete y sal de aquí, ya has acabado - y se dio la vuelta buscando su ropa, de forma orgullosa.

-YO: joder Eli, ¿me vas a dejar así?

-MATAHARI: eso, deja que pruebe, por favor, solo hasta que se corra - Eli se paró en seco, puso cara pensativa, esa frase de Matahari la hizo darse cuenta de algo que yo no entendí, y me miró.

-ELI: ¿quieres follártela?

-YO: hombre, no es por ser ella, pero la tengo dura de nuevo.

-ELI: ven al baño. – me cogió de la mano y me llevó al servicio, allí me quitó el condón con cuidado y abrió le grifo de la pila, puso el condón debajo como para inflarlo de agua, y cuando se llenó un poco aparecieron unos chorrillos en la punta de condón - no tengas lastima por ella, esta puta ha pinchado el condón mientras te lo ponía, como te he dicho es capaz de dejarse embarazar solo por joderte la vida, o salir de aquí con tu semen y ADN dentro y denúnciate por violación.

-YO: ¡¡¡¡ será zorra!!! , ¡¡¡¡¿¿Pero como se puede ser tan retorcida??!!! - lo dije mientras salía del baño a buscarla encolerizado, pero ya estaba medio vestida y saliendo de la habitación.

-MATAHARI: si quieres ganar dinero, llama este numero - lanzó una tarjeta al suelo, y se fue, Eli me sujetó por detrás, agarrándome la polla.

-ELI: déjala, ya tenemos lo que querríamos de ella, duchémonos y te ayudo con esta – y empezó a masturbarme, me fui clamando poco a poco hasta que las caricias de Eli me parecieron más importantes que el enfado que tenia.

-YO: esta bien, pero solo si nos duchamos juntos. – yo no había dicho mi ultima palabra esa noche.

-ELI: esta bien, vamos.

Nos metimos los dos, no sin problemas por mi tamaño, en la ducha, pero también gracias a él, nuestros cuerpos estaban muy juntos, abrimos el grifo de la ducha y lo colocamos en el soporte por encima de nosotros, Eli estaba de cara a la pared y yo detrás de ella, acariciando su cuerpo con lujuria y restregando mi polla dura en su trasero, entre el calor del agua cayendo sobre nosotros y nuestras caricias no pasó mucho tiempo hasta que la situación pedía sexo a gritos, Eli se dio la vuelta, echó la espalda sobre la pared, apoyándose y sujetándome por el culo atrayéndome hacia ella, con el agua recorriendo todo sus pecho, su torso, cayendo a los lados y bajando hasta su obertura.

-ELI: ¡follame!, como el día de las duchas, no pares hasta que te lo ruegue - y se abrió los labios con una mano dejándome su coño totalmente ofrecido.

Un regalo por mi trabajo de esa noche supongo, me cogí la polla y se la forté por todo el vientre, mojándomela con el agua, después la coloqué en sus labios mayores y la movía de forma circular, tal como me había enseñado.

-YO: ¿en serio quieres eso?

-ELI: ¡¡¡¡si por favor, párteme en dos, lo deseo!!!! – se izó rodeándome con las piernas la cintura.

-YO: pues prepárate.

Di un golpe de cadera y metí mi miembro en sus entrañas, de inicio dando pequeñas embestidas y dejando que sus paredes vaginales se expandieran, cuando la tenía gran parte dentro, agarré con una mano su hombro y con otra su cadera, planté bien los pies y empecé a bombear, con calma, sin parar.

-ELI: ¡¡¡¡¡ohhhhhhh siiiiiiiiii diossssssss estoy llena!!! - lo decía entre dientes pero según aumentaba mi ritmo lo hacia de forma más elevada.

-YO: ¿es lo que querías? ¡¡Toma, Toma, TOMA!!- repetía entre otras obscenidades, con cada golpe de cadera.

Ya no solo la embestía, sino que pegaba y separaba su cadera de mi con violencia, sus tetas empapadas rebotaban con cada arremetida, sin dejar de subir la velocidad, buscando ritmos cómodos que pudiera mantener durante unos minutos, cuando me cansaba bajaba la velocidad pero no cesaba en el movimiento, y retomaba con violencia, noté que Eli vibrara todo el tiempo, ya no gritaba, solo aguantaba como una pared los martillazos que le daba, en silencio, soltando algún gemido entre respiraciones, noté en repetidas ocasiones como su cuerpo se tensaba y debía de correrse, entre el agua y mi fuerza no lo percibía. La llevé a un orgasmo tras otro, durante mas de 15 minutos no paré y eso me llevó a correrme de forma brutal en su interior, descendiendo el ritmo hasta que paré del todo.

-YO: ¡¡eres increíble, una diosa, no puede haber mujer mejor!!

-ELI: ¡¡¡no te he pedido que pares, dame por el culo, bestia mía!!!- bajó sus piernas, se sacó mi miembro, me besó con pasión mientras se daba la vuelta, echó su cuerpo hacia delante apoyando su cara y sus tetas contra la pared y llevándose las manos al trasero separando sus nalgas- ¡¡DAME FUERTE!!

La obedecí, empapé de nuevo mi polla con el agua que caía por su espalda, también mojé una mano e inicié unas leves caricias por encima de su ano, llegando a introducir con calma un dedo, con firmeza, y haciendo un poco de hueco, para tenerlo lubricado. Cuando la noté preparado acerqué mi polla a su ano y empecé a hacer presión, costó un poco pero había trabajado bien la zona y empujando sus tetas empapadas contra la pared, metí el glande en su culo.

-ELI: ¡¡dios, me partes!! - pero no se movía un ápice de su posición.

Con clama fui empujando mi tranca, que ya estaba dura de nuevo sobre su culo, notando cada centímetro que le introducía, por momentos Eli parecía perder la consciencia y su cuerpo caía, yo la sujetaba para mantenerla en esa posición, cuando ya había metido más de la mitad, la saqué un poco y volví a hacer fuerza, eso arrancó un grito ahogado en ella, lo hice de forma repetida hasta que notaba la piel del ano hundirse y sobre salir con mis movimientos, aceleré de nuevo cuando noté algo menos de fricción, Eli se llevó una mano al coño y se lo masturbaba, introduciendo algún dedo en su agujero, yo llevé mis manos a su trasero y le separé los glúteos con fuerza, como le gustaba, sin dejar de percutir en ella. De repente……. Paré.

-ELI: ¡¡¡¿Qué haces? Por dios no pares ahora!!! – lo decía mientras se seguía masturbando.

-YO: no hasta que me lo ruegues.

-ELI: ¡¡¡¡no seas carbón, yo te enseñe eso!!! - no solo llevar a ese punto a una mujer, si no hacerla reconocer que lo deseaba, eso aseguraba dominación sobre esa mujer.

-YO: solo aplico lo que me enseñas.

-ELI: eres un cabrón de mierda, párteme el culo por favor, te lo ruego. ¡¡SIGUE!!

Contento con mi logro, empecé las embestidas más bestias que recordé, cada golpe de cadera la hacia levantarse un poco, haciendo que sus tetas se frotaran contra los azulejos, eso la hizo correrse de nuevo, allí estaba de nuevo un caballo salvaje, moviéndose alocadamente, deseando ser liberada, pero sin lograrlo

-ELI: ¡¡¡¡para, para, por favor!!! La ignoré, la estaba metiendo toda de golpe sin compasión, seguí bobeando de forma dura, sujetándola para que no se moviera tanto, no se si se corrió de nuevo o era la continuación de la anterior- ¡¡PARA!!! - yo seguí hasta que mi polla dijo basta y revénte sobre ella, la corrida debió llegarla a los intestinos, jadeaba y me vencía sobre ella, que tenia la espalda arqueada y me buscaba con sus labios. La bajé con cuidado, sacando mi polla desinflada de su interior, estaba muy floja de fuerzas, pero se sostenía.

-ELI: no te quedas corto, me he corrido como una fuente, estoy agotada, duchémonos y descansemos, por favor - lo dijo mientras se llevaba las manos a su coño y ano, notando el socavón abierto en su trasero, algo temblorosa.

La imagen de ella duchándose era lo que más me ponía, pero después de una gran sesión de sexo duro estaba cansado, nos frotamos uno a otro y salimos desnudos del baño, nos tumbamos en la cama, algo deshecha, yo boca arriba y Eli de lado pasando uno de mis brazos por debajo de su cabeza, recostándola en mi pecho, pegando su cuerpo a mi, abrazándome por el pecho con un brazo. Nos quedamos así un par de horas, con ella sintiendo con fuerza mi respiración y latidos, yo la acariciaba a ratos el contorno de su piel, y otras su pelo, húmedo de la ducha, pegado a su cuerpo.

-YO: por favor, no acabes con esto.

-ELI: tiene que ser así, créeme yo tampoco quiero, pero nada ha cambiado, debemos hacer nuestras vidas, esto ha sido un…..maravilloso y divino “impasse”, pero ha de acabar mañana, es nuestro último día, estaremos en contacto, te lo juro, no quiero perderte. – me pareció injusto que no quisiera perderme pero no siguiéramos la relación, pero era la única forma de seguir viéndola.

Mire el reloj, más de las 5 de la mañana, sonó la puerta.

-MARIANA: ¿estáis aquí?

-ELI: si, si, pasa.

-MARIANA: no se como narices lo habéis hecho pero os debo la vida….- mientras mascullaba preguntado como lo habíamos logrado hasta que nos vio desnudos en la cama, su visión era normal hasta que de forma obvia clavó su mirada en mi relajada polla -……..entiendo, vaya, como te lo tenias calladito, has debido de hacerla disfrutar mucho para hacerla hablar, la he visto irse muy enfadada con la ropa mal colocada.

-YO: en realidad ni me la he tirado, Eli no me ha dejado jajajjaja

-MARIANA: pues como os las gastáis, anda, vestiros y salgamos de aquí, tenemos que ir recogiendo.

Mientras lo hacíamos nos cuestionamos que hacer con la cinta, Eli quería destruirla para que nadie al usara a su favor, Mariana quería quedársela y sacar tajada, a mi no me parecía que fuera una decisión nuestra.

-YO: Mariana, ¿puedes averiguar el número de habitación de una persona?

-MARANA: claro - me levanté y le susurré al oído un nombre.

Se marchó con el recado mientras nos vestíamos, ayudé a Eli con su vestido, y por poco me la vuelvo a tirar si no hubiera vuelto Mariana tan deprisa.

-MARIANA: la tengo, es la 143, esta aquí cerca., tengo la cinta.

Nos arreglamos bien y con Eli cogida del brazo y ella con sus zapatos en la mano, nos acercamos a aquella habitación, con Mariana siguiéndonos, no contenta del todo. Llamé a la puerta con Eli cogiéndome de forma cariñosa el brazo. La puerta se abrió y salude.

-YO: buenas noches, o ya casi mañanas, Duquesa.- estaba sorprendida, ya sin la chaqueta del traje y con el maquillaje corrido y los ojos enrojecidos, había llorado.

-DUQUESA: aahhh hola encanto, ¿que haces aquí?

-YO: solo me pasaba a saludar, ¿que la ha pasado a usted?

-DUQUESA: nada, cosas de mi marido, no le ha sentado bien nuestro beso cuando se lo han dicho - se secó alguna lágrima y trataba de quitarse el maquillaje con la mano.

-YO: ese carbón no se merece a una mujer como usted, vale mucho más que el.

-DUQUESA: gracias cariño, ¿pero que puedo hacer?, es mi marido - miré a Eli, noté aprobación y orgullo en su mirada, miré a Mariana detrás de nosotros, nos miré seria un par de segundos…..

-MARIANA: esta bien…….joder esto es una basura - se acercó enfadada y me dio la cinta de mala manera antes de irse - esto es perder una oportunidad única.- se fue.

-YO: aquí tiene mi señora.- le di la cinta a ella.

-DUQUESA: ¿Qué es esto?

-YO: una cinta, en la que se ve a su honorable marido teniendo una aventura con la presidenta de la federación de tenis - puso gesto de disgusto, temiéndose un chantaje - no por dios, me ha entendido mal, lo hemos pasado muy “mal” para recuperarla de las manos de Matahari, es la única copia, y no quiero que acabe en manos equivocadas, aquí la tiene, usted decide que hacer.

-DUQUESA: esto es….. muy poco ordinario, podrías haber hecho mucho daño a mi marido con esto.

-YO: y usted de rebote, y eso no me parece bien.

-DUQUESA: muchas gracias - alargó la mano y cogió la cinta, agaché mi cabeza y besé su mano antes de soltarla.

-YO: mucha suerte, confío en que hará lo que crea mejor - Eli me cogió de nuevo del brazo y nos marchamos.

Lo ultimo que supe es que su marido inició un par de años de “locura económica” ayudando a muchos deportes minoritarios, incluyendo la gimnasia, antes de anunciar que a final de su tiempo de cargo electo, no se presentaría de nuevo y se retiraba de la vida publica, sospeché los motivos de todo aquello.

Eli me acercó con el coche a mi casa, y se despidió con algo de pena.

-ELI: mañana el ultimo día, ahora duerme un poco antes de ir al instituto - eran las 6 de la mañana y yo entraba a las 9, de no ser así hubiéramos ido a su casa a terminar la fiesta.

La di un beso tierno mientras acariciaba su rostro y me bajé del coche, la despedí con la mano antes de que se fuera. Subí a mi casa, y al pasar por el pasillo vi a mi padre con una luz encendida, esperándome.

-PADRE: ¿Qué tal hijo mío? ¿Lo has pasado bien?

-YO: no lo sabes tú bien papá, no lo sabes, anda vamos a la cama - nos sonreímos, le ayudé a levantarse del sillón donde estaba y le abracé antes de irnos a dormir.

Dormí bien un par de horas, estaba agotado, había vivido mucho en una sola noche, desperté de milagro, llamando a mi madre, fui al instituto como un zombi, no recuerdo nada de aquel ida, llegué a casa y me eché la siente hasta la hora de volver al gym. Mi padre me acercó y fui comentando los detalles más livianos de mi diversión en la noche previa. Llegamos y entré al gym, con una sensación agridulce, era nuestro último día. Al entrar me sorprendí, Eli estaba hablando con Laura, la hija del alcalde, y con la Duquesa, vestidas de chándal. Me acerqué a preguntar, Eli me vio 1º.

-ELI: hombre, aquí esta nuestro héroe jajajaja - inició un aplauso que siguió toda la clase.

-YO: ¿que pasa?

-ELI: aquí nuestras nuevas clientas del gym, Laura me ha llamado y se ha apuntado, por allí anda un amigo tuyo- señaló a una esquina donde estaba Mario con ojos inyectados en sangre, pero sin moverse.- La Duquesa se ha puesto en contacto conmigo a través de Mariana, y cambien se ha unido a nosotros.

-YO: es un placer ¿pero por que lo de héroe?

-ELI: les hemos contado a todos tus proezas de ayer, la Duquesa se ha comprometido a pagarme 1 año de alquiler del gym, y con los ingresos de más de este mes he contratado nuevos monitores, has salvado al negocio.

-YO: joder, ¿quienes son los nuevos monitores?

-ELI: allí están sentados para ver la clase y empezar mañana.

Miré y había 3 hombres y 2 mujeres, un rubio, un moreno y un negro enorme, todos mazados de gimnasio y con ropa ajustada, la chicas eran también carne moldeaba de ejercicios, una preciosidad de muñeca rubia y la otra que tenia aspecto cubano.

-ELI. Venga, demostrémosles de lo que somos capaces, ¡¡¡en posición!!!

Así lo hicimos, 30 minutos de ejercicios para lucirnos y otros 30 de bailes, la Duquesa y Laura estaban atrás y trataban de seguir el ritmo con Tara, mientras miraban, y reían, llegó nuestros bailes y mientras la Duquesa se mostraba más calmada, Laura se restregaba como una stripper en una barra americana.

Terminó la clase, y nos despedimos entre saludos, agradecimientos, deseos de suerte y risas, hasta que nos quedamos solos Eli y yo.

-ELI: bueno creo que ya hemos acabado, ¿que te ha parecido la experiencia?

-YO: increíble, no pude elegir mejor mujer…………pero tengo que decirte que ver a esos rudos gimnastas me ha puesto algo celoso.

-ELI: debí decírtelo, llevo unos días mirando personal, se acaba tu mes y el gym no para de crecer, me has salvado la vida y el negocio.

-YO: y me lo pagas apartándome de ti.

-ELI: ya lo hemos hablado, y para cortarlo ya, quiero que sepas que lo de ayer fue el final, no habrá nada hoy. Solo me queda darte unos consejos finales.

1º Ten cuidado, no todas son como yo y puedes hacer mucho daño, no solo con tu pene, si no por como te mueves, eres un animal.

2º Pasa de las menores, ya tienes 18 años y te puedes meter en líos, no te van a aportar nada que no pueda una de 18.

3º Lo que te he enseñado ya, queda en ti, tú sabrás como usarlo, pero por favor, te pido que no te vuelvas un imbécil como mi ex novio, se tú, el chico maravilloso que me ha dado esperanzas, tampoco seas un pelele, ya has visto que hay mujeres muy crueles y que usarán el sexo contra ti.

4º Y para acabar, para evitar disgustos, deberías hacerte una vasectomía, podrás follar a pelo, es reversible y así evitaras líos de embarazos hasta que tu decidas tener hijos, pero ten cuidado con quien, ya te he hablado de las ETS. Es cirugía menor, en 2 días estarás tan tranquilo y yo pediría algún certificado para llevar encima siempre, te podría ayudar.

Me dolió no poder tener una última vez su cuerpo entre mis brazos siendo consciente de ello. La ayudé a recoger y me despedí de ella con un beso de cariño, largo y caliente, pero sin querer ir a más, dándole un sonoro azote en el trasero.

-YO: hasta luego, maestra – me fui con tristeza pero creyendo comprender el motivo, Eli no dijo nada, solo le brillaban los ojos al despedirse.

Salí del gym, y decidí irme andando a casa, para pensar por el camino, atajé por un camino de un parque, era tarde y estaba anocheciendo pero aun había rayos naranjas del sol en el cielo incidiendo en un estanque, en el que niños corrían, parejas paseaban de la mano o perros se perseguían unos a otros. Era una imagen preciosa que calmó mis pensamientos, de nuevo, me habían rechazado, pero esta vez mi sensación no fue de odio, rabia o desolación, como sentí con Raquel, si no de que había acabado una etapa en mi vida, ya no era un niño novicio, había sido una etapa preciosa y que no olvidaría, pero no era el fin, solo un nuevo comienzo que daba paso al resto de mi vida, y mientras caminaba esa sensación me fue pareciendo mejor idea, dejando atrás el gym, con Eli en su interior, y avanzando hacia lo desconocido, a la incertidumbre, y no tenia miedo. Habían pasado 5 meses largos desde mi operación y ya no era un gordo gracioso que caía bien pero era un cero a la izquierda para las mujeres, ese chico estaba enterrado ya, dentro de mi, sin olvidar quien era y de donde venia, pero abriendo las puertas al amanecer de un chico seguro, preparado, moralmente recto y con el mundo a mi disposición. Allí, en el final del camino del parque, noté al universo llamarme, invitarme a una aventura, a vivir, y sentía que estaba listo.

Ana: La visita en Navidad.

Habían pasado un par de semanas desde que abandoné aquel gimnasio con mi amada Eli dentro, y de aquel paseo por el parque que resultó ser un momento trascendental en mi vida, se acabaron las pruebas, el aprendizaje y redes de seguridad, ya solo estabamos en la partida el mundo y yo, y me tocaba mover.

Una de esas semanas, logré convencer a un amigo de que me encubriera un fin de semana entero, con la excusa de quedarme a dormir en su casa y, siendo ya mayor de edad, ir a hacerme la vasectomía sin consentimiento paterno, pero dada la orden de que si me pasaba algo les llamaran. Me estuve informado y haciendo pruebas durante la semana previa, resultó que no era reversible en si, solo en algunos casos y que podía sufrir de dolor crónico de mayor o menor intensidad en un 30% de los casos. Aun así había una nuevo técnica basada en el ”pinzamiento”, y no en el corte de los conductos, que era mucho menos invasivo, generaba menos sangrado y tenia un alto porcentaje de recuperación en la capacidad reproductora. Lo sopesé unos días, pero sabiendo que aun fallando, podía donar esperma y congelar parte, como hice, o más adelante extraer espermatozoides de mis testículos y usarlos para fecundaciones in vitro, me convencí de hacerlo. El viernes después del instituto, ya estaba liberado de obligaciones familiares y quedé para la operación, a ultima hora del viernes ya me habían operado, pasé el sábado en observaciones, con alguna carantoña de más por parte de las enfermeras al revisar la zona de la operación, y el domingo por la tarde ya tenia el alta y unos medicamentos contra la inflamación o infección, así como instrucciones de unos cuidados mínimos. Me sentí raro durante unos días pero a la semana siguiente estaba como si nada hubiera pasado. Ya me sentía preparado y comencé la búsqueda de mi 1º objetivo, ya era hora de pasármelo bien.

La historia se remonta a unos 6 años atrás en el tiempo, y se enreda un poco, en una semana santa, mi madre insistió y montó un viaje a Granada, de donde era parte de su familia, allí teníamos parientes y nos quedamos a dormir en una casa grande propiedad de una de mis tías/abuelas, con motivo de nuestra visita se organizó que todos los familiares se quedaran unos días en aquella casa y montáramos fiestas, barbacoas y los críos hicimos una especie de casa del terror para los adultos, había muchos niños de todo tipo, sobrinos, nietos, primos, hijos, amigos de todos ellos…..y jugamos como críos que éramos, aun inocentes en lo sexual, dormíamos juntos en grupos en las habitaciones ya que éramos muchos, a mi, con algo de desgana ya que quería hacer travesuras con los chicos, me había tocado una de las camas grandes y compartirla con la prima Ana, lo 1º es decirnos que técnicamente no era prima mía, era la nieta de una amiga de toda la vida de mi tía/abuela, tanto que formaba parte de la familia, sin ser de lazos de sangre, era una niña normal, de unos 11-12 años, y por aquel entonces un misterio que no entendía, ni me apetecía descubrir. Hicimos algo de migas por la obligación de mi madre, sabia de mi facilidad para hacer amigos, y ella era muy tímida, resultó ser medio gitana por parte de padre, pero que nunca se había preocupado por ella, solo le había dejado en herencia una piel ligeramente oscurecida, con el paso de los días establecimos una relación de cariño, llegando a montar bailes en pareja como espectáculo con la temática de Grease, y una amistad especial de forma constante pero espaciada por el tiempo hasta mi época actual, viajes de ida y vuelta, vacaciones, fiestas, lo típico en familiares lejanos.

Volvemos a mi actualidad en ese momento, ya habían pasado 6-7 meses desde mi operación del tumor en la cabeza en verano, ya tenia 18 años, vasectomía hecha sin complicaciones, se acercaron ya las fiestas de Navidades, y mi madre le llegaron noticias de que parte de la familia de Granada quería acercarse a Madrid para celebrar las fiestas allí, obviamente les invitó ansiosa de demostrar su hospitalidad, teniéndonos a todos por casa en modo batallón de limpieza, recogiendo y dejando la casa como si fuera a venir el Rey, preparada para acoger a todos los que vinieran.

Llegaron las vacaciones por las fiestas navideñas que nos concedían a los estudiantes, unas 2-3 semanas de descanso. Mi madre me informó de los que vendrían, un par de tías, sus maridos y algunos nietos de entre 6 a 12 años, y junto con las tías, la amiga de mi tía/abuela y su nieta, Ana, eso me alegró un poco, era una de las chicas que mejor me había tratado antes de mi cambio, supongo que por que ella también se sentía algo rechazada y sola, o por que yo fui de los pocos que la traté bien, tenia ganas de verla, y saber de su vida. Debido a que era la única de mi edad, tenia 18 recién cumplidos, mi madre me encargó que cuidara de ella y la sacara a enseñare la gran ciudad.

Cuando llegaron se produjo la presentación, mi madre nos plantó de punta en blanco en la entrada de la casa, casi me hizo ponerme el traje de Eric, colocados de mayor a menor en edades y con instrucciones de que hacer, llamaron a la puerta y fueron entrando, nos iban saludando y presentando, con las frases típicas de esas ocasiones, y felicitándome por mi estado actual después de la operación, yo buscaba con ansia a Ana para darla un fuerte abrazo, me había ilusionado mucho su visita, pero no la veía.

-YO: ¿y Ana no venia?

-TIA/ABUELA: si, esta abajo en el coche, cogiendo las ultimas bolsas.

-MADRE: ¿sola? De eso nada – me cogió del brazo mientras me dirigía a la puerta de salida – ¡¿que haces aquí parado?, tira “pa´abajo” y ayúdala, vago!

Apenas me pudieron decir leves indicaciones de donde estaba el coche antes de que mi madre me sacara de mi casa a rastras. Bajé a buscarla y vi un coche que encajaba con la descripción, me acerqué y vi a una señorita, bastante mona, sacando unas bolsas.

-YO: ¿hola? ¿Te ayudo? - pregunté esperando que me reconociera, sin estar seguro de si era ella.

-DESCONOCIDA: no, gracias, ya puedo sola, muchas gracias caballero. – me lo dijo con tal seguridad en que no me conocía que seguí buscando el coche con Ana.

Al no encontrarlo llamé a mi casa por el telefonillo y me volvieron a dar las mismas indicaciones, regresé y solo había aquel coche, me volví a acercar.

-YO: ¿Ana, eres tú? – se quedó pillada.

-ANA: si……soy yo, ¿quien eres? – “su puta madre”, era ella y ni me reconocía, pero tampoco yo a ella.

-YO: no jodas Ana, que soy yo…….., Raúl.- haciendo gestos de evidencia.

-ANA: ¡¡¡madre de amor hermoso!!! ¿pero que has hecho con tu………? – se sorprendió tanto que casi se le escapa la grosería.

-YO: ¿barriga?, he pegado el estirón jajajajaja – ya caímos en la cuenta y ella soltó las bolas riéndose, estiró los brazos pidiendo un abrazo poniendo la misma cara de dulzura que recordaba, esperando aquel abrazo que solía darla de críos elevándola por los aires, era ella sin duda, me acerqué con fuerza y la di un gran abrazo de oso, de esos que la levantas del suelo y todo, dándola media vuelta en el aire mientras nos saludábamos. Al separarnos.

-ANA: ¡pero estas hecho un pincel, ¿como los has hecho?!

-YO: ¿no sabias lo de la operación?

-ANA: si, ya los comentamos por casa, pero……….¿que tiene que ver?

-YO: pues por lo visto mi barriga no era por las barbacoas de tu madre, si no con un tumor cabroncete jajaja -

me volvió a abrazar con cariño, y correspondí, allí no había tensión sexual, solo ternura inocente.

La ayudé a coger las bolsas mientras cerraba el coche y subimos a casa mientras no parábamos de comentarnos lo bien que estábamos el uno al otro.

Ana había cambiado físicamente, ya no era aquel renacuajo de piel morena, torpe y escuálida, supongo que como toda mujer que no ves desde los 12 años y se presenta ante ti con 18. Era alta, casi rondaría el 1,77, pelo negro azabache, largo, muy largo y liso, le llegaba casi a la cintura, suelto y con un flequillo andaluz tapándola media cara, iba vestida con un abrigo amplio, ya que era diciembre y hacia frío, pero se veían parte de sus piernas, con un pantalón negro de tela gruesa y unas botas. De momento lo más llamativo era su rostro, lo único que había visto con claridad, era una preciosidad de cara, esculpida en una tez algo oscura, debido a su origen y el sol de Andalucía, resaltaba mucho el blanco de sus ojos, coronados por unos ojos marrones, que advertían trazas verde azuladas, una mujer guapa, solo se podría ser quisquilloso con la nariz, la tenia algo afilada.

Al subir a casa mi madre ya tenía a todos organizados en sus habitaciones y en el salón tomando un café preguntado por el viaje y las circunstancias de la vida. Pregunté donde colocábamos las cosas de Ana, ya se habían repartido y entre que querían dejar a los críos juntos y las parejas adultas unidas, solo quedaba 1 cama libre, el sofá/cama de mi cuarto.

-YO: pero mama, ese sofá es horrible, todos mis amigos que han dormido allí se han jodido la espalda, ¿como se la vamos a dar a Ana?

-MADRE: por que no es para ella, es para ti, ella duerme en tu cama, ¿que especie de anfitriones te crees que somos?, anda, tira para tu cuarto y ayúdala, melón. – sacó una sonora carcajada a los presentes, mi madre y yo tenemos ese tipo de relación en que en publico nos tirábamos puyas todo el tiempo para sacar las sonrisas de los presentes, sabíamos seguirnos el juego. Pero eso no cambiaba que lo que decía era una orden directa, el sofá/cama era para mí y ya estaba decidido.

-YO: así tratas a tu pobre hijo, después de lo que he sufrido, como osas profanar mi débil cuerpo - fingía pena obscenamente.

-MADRE: mira niño, no me calientes que te llevas un sopapo que te quito el sentido, ahora a joderse unas semanitas rico - se levantó y me empujó, haciendo bromas y siguiendo el juego, yo la protestaba pero dio igual, Ana se reía mientras me seguía avergonzada.

Mi casa se puede describir como un pueblo de carretera, era un pasillo muy largo, en un extremo el salón comedor amplio, y según avanzabas por el pasillo tenias 4 habitaciones, con un baño entre medias, a mitad del pasillo la entrada, y luego más pasillo, daba a una terraza a un lado, un cuarto de trastos y al otro extremo la cocina, por algún motivo desconocido, nuestra casa se había adueñado de una habitación extra al lado de la cocina perteneciente a otra casa en su inicio, 2º baño incluido, por mis noches de friki con el ordenador, viendo películas, series o NBA, fui desterrado a aquella habitación para no molestar al resto, era grande, tenia espacio para mi cama, un escritorio, un armario empotrado, el mueve con la TV y los videojuegos, y un sofá cama enfrentado a ella, a los pies de la mía, usada en las noches de frikis con mis amigos.

La enseñé la habitación medio disculpándome por la broma con mi madre y que no se preocupara por mí, dejamos las cosas encima de la cama para volver con los familiares. Ella se quitó el abrigo para dejarlo allí. Mis sospechas iniciales era correctas, ya era una mujer, ¡y que mujer!, llevaba un jersey grueso de lana blanca, pero se le marcaba la figura, tenia las tetas bien colocadas, muy arriba, al quitarse el abrigo se le subió un poco y pude ver la piel de su ombligo, esa tez morena me estaba empezando a gustar, seguido de un pantalón de tela vaquera negro, grueso pero con el tiro bajo, dejando ver un pequeño tatuaje en la zona del apéndice, una media luna, al agacharse a dejar el abrigo en la cama se intuyó un trasero redondo y llenando la prenda, pero iba muy tapada.

Volvimos y charlamos amistosamente hasta la hora de cenar, se iban a quedar más de 12 idas con nosotros, cubriendo Navidad y fin de año, para volverse para reyes a su casa. Me sorprendí ver como Ana estaba muy curiosa por mi y mi vida, normalmente las chicas de esa edad se atontabana con el móvil a mandarse mensajitos con las amigas, o chicos, pero no era el caso, conversamos ampliamente, le conté un poco mi vida y mis cambios físicos, no todos claro esta, y yo me enteré de su vida también , por lo visto estaba un poco aburrida del pueblo, y en el colegio fue una paria, los gitanos la consideraban paya, y los payos gitana, me dijo que no tenia muchos amigos, solo una, Lara, y todos del instituto ya estaban con pareja, que estaba casi todo el día en casa con su familia. La noté algo de pena al decírmelo, pero se la notaba feliz por poder comentarlo con alguien.

-YO: pues déjame decirte que esos de tu pueblo son unos retrasados de cuidado, tendrías que tener una cola de tíos babeando por ti, y las mujeres deseando ser como tú – quise mejorar su ánimo.

-ANA: muchas gracias primo, jo, te he echado mucho de menos, todavía recuerdo aquella vez que vinisteis a Granada, me lo pasé genial contigo.

-YO: y yo contigo, ahora me toca a mi hacerte de guía en Madrid, mañana he quedado con unos amigos, vamos a dar una vuelta, vente, si quieres, pero me haría mucha ilusión - dudó un poco pero supongo que pensaba que ya que había salido de su pueblo, quien mejor que yo.

-ANA: vale, pero ten cuidado conmigo, no quiero meterte en líos con tus amigos, ni estar de más.

-YO: tú no te preocupes por ellos, si hace falta, les tiro a la basura por quedarme charlando contigo - la guiñé un ojo.

Mis palabras eran como rayos de esperanza en sus ojos, me dio otro abrazo, de nuevo de cariño, estaba encantada con estar allí conmigo. Terminamos de cenar y la llevé a mi cuarto mientras el resto se quedó charlando, vimos un rato la tele y la enseñé con orgullo mi colección de vídeo juegos, aunque la dije que hacia tiempo que no los tocaba y preguntó.

-YO: es verdad que desde la operación he andado…….ocupado, no sé, supongo que no me parecen tan importantes ahora, me gusta más charlar con la gente.

-ANA: ya, y a mi, siempre que salgo se ponen con lo móviles y es muy raro - encima de guapa y cariñosa, la chica pensaba como yo.

Nos sentamos en el sofá mientras veíamos alguna película estúpida sobre salvar la Navidad, sacando más risas de mis comentarios sobre lo tonta que era determinada situación, que de la propia película, yo estaba sentado recostado con una mano en posa brazos y otra en el respaldo, ella empezó igual pero se fue cambiando de posición, se había quitado las botas y estaba hecha una bola. Me di cuenta, a mi no me afectaba y en verano me gustaba, pero aquella habitación estaba apartada y daba a un húmedo patio, hacia algo de frío en la habitación pese a la calefacción que yo bajaba al mínimo, soy muy caluroso por mi grasa corporal, o lo era.

-YO: peque, ¿tiene frío? Te saco una manta, espera.- ella no contestó pero su posición y su mirada de agradecimiento eran evidentes.

Saqué del armario una manta, miré y decidí que no, mejor seria una funda nórdica bien gorda, me acerqué y se la puse con cariño como un padre arropando a su hija, y me senté de nuevo, la echaba un ojo de vez en cuando, y se notaba tiritar bajo la funda.

-ANA: jope, ¿¿hace frío aquí, tú no lo tienes????

-YO: si que lo hace, pero me he pasado toda mi vida con una capa de calorías encima, y ya me he acostumbrado, soy una estufa andante jejeje anda ven aquí pégate a mi - juro por dios que allí no había intención alguna.

Lo hizo, puso su cabeza en mi hombro, y la rodeé con los brazos, frotando su espalda y uno de sus brazos. Pasados unos minutos.

-ANA: pues es verdad estas calentito jejejee - se colocaba para pegarse y adaptarse mejor a mí.

-YO: ya te lo he dicho, salvo las manos el resto soy una estufa.

-ANA: ¿¿las manos??

-YO: si, no se por que, será la circulación, pero es la única parte que se me quedan algo frías.

-ANA: pues eso no puede ser, como te pilles un resfriado por mi culpa no me lo perdono, y tu madre me mata, toma tápate - me ofreció el amplio excedente de funda nórdica, yo sin malicia la cogí y me la pasé por encima un poco, colocando mis manos en la misma posición previa, pero ya directamente sobre ella, al colocarme la funda por encima se abrió un hueco y dejó pasar algo de aire….

-ANA: uy ¡¡¡tapa, tapa, que frío!!! – y se acurrucó un poco más sobre mi, pegando uno de sus pechos en mi costado.

La situación ya me pareció algo erótica, y empecé a ver a Ana como mujer, y no como familiar. Mi cabeza empezó a volar, a recordar a Eli, y mi polla a hincharse, no podía permitir que ella se diera cuenta, aquello no estaba preparado ni planeado, la aparté con suavidad y fingí sentarme más cómodo, me la acomodé para que no hubiera accidentes. Lo pase realmente mal hasta el final de la película. Terminó y Ana se había quedado adormilada sobre mí.

-YO: oye prima, toca irse a dormir a la cama, que no soy tan blando ahora – se despertó un poco, frotándose lo ojos.

-ANA: jo perdona, estaba tan calentita y a gusto, que me dormí – lo dijo de forma inocente y natural.

-YO: nada bonita, pero es tarde y mañana tenemos un gran día, vete a descansar, cámbiate mientras me voy al baño y luego al revés, así evitamos accidentes jejeje

Esperé a que se levantara y se fuera hacia sus cosas dándome la espalda, me levanté como un rayo y salí de allí para evitar que viera la tienda de campaña que portaba en mi pelvis. En el baño oriné como pude, me lavé los dientes, hice toda la rutina pero seguía empalmado, la solución era fácil, tocaba paja rápida, tirando de recuerdos en mi cabeza, tardé como un cuarto de hora, para disimular me metí en la ducha y abrí el grifo mientras me duchaba. Me extrañó que entre todo lo acumulado en mi mente, Eli enseñándome, Tara y su ano, o la fiesta al completo, algunas imágenes de Ana se colaran, su trasero agachado, su ombligo, ese tatuaje o su pecho en mi costado. Me sacudía la cabeza, “ella no es un objetivo, ¿o si?”

Aquella pregunta me rondaba por la cabeza, cuando me desahogué y se me bajó el empalme, volví a mi cuarto más relajado, en la puerta de mi cuarto estaba Ana apoyada contra al pared, llevaba un pijama, con la parte de arriba de lunares, muy amplio, y un pantalón también de gasa, que disimulaba algo su figura, pero al cruzarnos y verla de espaldas sus andares retumbaban por toda la tela, al llegar a mi cuarto casi se me había empalmado de nuevo, me cambié lo más rápido que pude y me dejé los slips ajustados, siempre dormía solo con el pantalón de pijama ya que me sentía liberado después de tener a “la bestia” encerrada todo el día, tenia miedo a que ella se despertara y me la viera tiesa de noche. Cuando ella regresó tuvo que pasar por encima de mi, que ya estaba con el sofá/cama sacado, tumbado y con 4 mantas encima tapado hasta la barbilla. La visión de su trasero pasando encima de mí me dejó con una erección que me duró toda la noche.

Ella sea acercó, me besó en la mejilla dándome las gracias, se acostó y me dio las buenas noches, pase la noche como un muerto, boca arriba, sin atreverme a moverme, con la tienda de campaña negada por los slips pero con un mal estar constante por mi inflamación. Al despertar al día siguiente era un trapo, me dolía la espalda, no había dormido nada y me había pasado toda la noche sopesando si Ana podía, o no, ser un objetivo, ¿Podía? ¿Debía? ¿Y si ella no quería y metía la pata? Pase así un par de días más, luego durante el día, la actitud cariñosa y agradecida de Ana conmigo al enseñarla la cuidad y salir a pasear con los amigos y estar de risas, no ayudaba, era un encanto de niña, y se llevó de cine con mis amigos, siempre conmigo a mi lado, no se separaba de mi, yo la trataba como a una reina, al inicio por cariño, pero luego por pensamientos impuros.

La 3º noche llegamos algo tarde de salir y fuimos directamente a mi cuarto para no despertar a nadie, ya había cierta confianza y nos cambiamos delante uno del otro, pero siempre dándonos la vuelta, ella por vergüenza y yo por miedo a no controlarme. Ella acabó antes y me vio caminar hacia la cama quejándome.

-ANA: pobre, te estas dejando la espalda ahí, por mi.

-YO: no pasa nada, ya soy mayor – me recosté esperando que la noche fuera mejor que las anteriores.

-ANA: me da pena, no es justo y es tu casa, anda cambiemos, déjame a mi ahí esta noche y tú descansa bien en tu cama - se puso en pie.

-YO: ni de coña, como mi madre se entere me parte la cara si te dejo aquí, además te harías daño tú y eso no puedo permitirlo.

-ANA: pues ahí no vas a seguir - sopesó opciones- venga, vente y duerme conmigo en la cama - lo dijo decidida y con cierta inocencia en el mando, era una locura, lo estaba pasando fatal con ella en otra cama, en la misma no sabría si controlaría la situación.

-ANA: o eso, me voy yo allí contigo, que encima hace mucho frío y me vendrás bien, tu decides – la posibilidad empezaba a gustarme - como en el pueblo de pequeños, venga, por fi, será divertido - se lanzó a meterse en mi cama, no había opción, y ya me había comentado que por más mantas que se echara, se helaba, incluso subí la calefacción de mi cuarto solo por ella, me levantaba empapado en sudor.

-YO: esta bien, joder, pero déjame que baña al baño primero……..- ya había ido antes necesitaba una excusa- …….a tomarme un somnífero para pasar mejor la noche - me pareció lo más sencillo de creer debido a la situación y me daría margen a que lo ocurriera en la cama, no era de forma consciente.

-ANA: vale, aquí te espero - sonrío orgullosa de su logro.

Fui al baño para fingir mi medicación, la idea de pasar la noche con su cuerpo a mi lado me enloquecía, tenía que calmarme, a partir de aquí, ya no era mi prima, si no una situación que controlar. Volví a mi cuarto fingiendo mal sabor de boca, la di las buenas noches y apagué la luz, me acosté al lado donde ella no estaba y me quedé de nuevo como un muerto, boca arriba sin moverme, ella se dio la vuelta, me besó la mejilla de nuevo.

-ANA: buenas noches, primo - y se volvió a su posición con el cuerpo de lado, hacia el otro lado de la cama, “se mueve como la cría de 12 años que recuerdo”

-YO: buenas noches prima - lo dije resignado con una erección considerable entre mis manos que querían disimularla y temiendo la larga noche.

Pasaron algunas horas en que la noté moverse y dormirse, yo me apartaba lo más que podía, casi al borde de la cama, pero al final “Morfeo” me venció, en mitad de la noche noté un peso y desperté, yo estaba con la posición boca arriba algo más relajada, y mi polla “tontorrona”, tenia a Ana recostada a mi lado, había pasado un brazo por encima de mi, pero por debajo de las mantas, supuse que, subconscientemente, buscaba calor. De inmediato me empalmé duramente, ¿Qué debía hacer? ¿Apartarla?, ¿despertarla?, ¿irme?……..todo pasó por mi cabeza, pero no me moví, me quedé inmóvil, la sensación era excitante y cómoda. Entré en automático, con cuidado pase mi brazo por el hueco de su cabeza en la almohada, ella reaccionó pegándose a mí y recostando su cabeza en mi pecho, quedamos abrazados de forma lateral, a mi en este momento me daba todo igual, me encantaba la situación, estaba tan feliz que me dormí.

Me despertó mi madre de un grito, yo sobresaltado me asusté, me había pillado en mi cama, miré a mi lado y Ana no estaba, entre alaridos de mi madre Ana apareció por la puerta con el cepillo de dientes en la boca, y cubierta por una enorme toalla.

-ANA: nop niof por fasvor, nos sen enfasde - era gracioso, se le entendía apenas.

-MADRE: tu calla, no defiendas a este mendrugo.- Ana se sacó el cepillo de dientes pero siguió con pasta en la boca.

-ANA: no nos, cuof, coff, me he levantado y le he dicho que se tumbe mientras iba al baño, para que descansara un rato en su cama - a mi madre se le bajó el enfado de repente.

-MADRE: ahhh, vale - se enfadó de nuevo- ¡¡¡pero levántate ya, pedazo de vago, que no haces más que dormir!!! - madres……

Se fue rumiando por el pasillo con Ana mirándome sonriendo de nervios, yo me medio levanté sentado en la cama y le di las gracias con la mirada, se volvió al baño a terminar lo que hacia. Me sentía infinitamente mejor que los últimos días, había descansado bien, pero ella se había levantado antes que yo, joder, estaba como un tronco, ni me había enterado, mi polla ahora estaba normal pero cuando me dormí estaba empalmado, “¿lo estaría cuando ella se levantó? ¿se percató?”, andaba yo con esas ideas en la cabeza cuando Ana volvió la habitación.

-ANA: siento la bronca de tu madre, pero podemos decir eso para que no nos vuelvan a reñir los próximos días – “¿próximos días?” Tenía la intención de repetir.

-YO: creo que será mejor poner alguna alarma y antes de que se despierte volveré al sofá/cama.- me miró desanimada.

-ANA: jo he dormido genial contigo, no he pasado nada de frío……y……. - no lo dijo, ni lo llegó a disimular, pero juré que tenia algo más que decir, y no dijo -……. Bueno, que si quieres podemos hacerlo más días.

Y mientas decía eso atiné a enfocar mis ojos después de dormir, allí estaba ella, con una pequeña toalla en la cabeza a modo de moño, y una enorme toalla en las manos, secando partes de su cuerpo que veía desnudas, me forté los ojos de nuevo, y me fijé, no estaba desnuda si no en ropa interior, con un culotte rojo y un sujetador a juego, secándose los brazos delante de mi, me tapé los ojos y me di a vuelta.

-YO: joder Ana, avisa y me salgo, perdona - los cojones, acababa de ver a una adolescente turgente de piel tostada en ropa interior, brillando por el agua o alguna crema corporal, frotándose delante de mí.

-ANA: calla tonto, si ya hemos dormido juntos jajajajaja - reía como un cría de 7 años, “¿había llegado a ese nivel de confianza en solo unos días?” – venga, ve preparándote, que hoy es viernes ya y tenemos un día largo, quiero ver Madrid, vamos ve al baño que tengo que volver a secarme el pelo - y diciendo esto me tiró la toalla grande a la cara, “dios”, olía a humedad, cremas, limpieza y a hembra quise pensar, cuando me quité la toalla de la cara ella se había quitado la toalla del pelo y lo tenia todo echado hacia un lado, húmedo, estaba cepillándolo, desenredando nudos de su larga melena,

Esa imagen unida a su cuerpo semi desnudo a mi lado, y su inocencia, me la pusieron a reventar de nuevo.

-YO: hoss……..tias, paso yo me quedo a dormir un rato más - me tumbé haciéndome bola para disimular- vete a secarte el pelo anda.

-ANA: vale primo, pero ten cuidado con tu madre jajaja – y se fue.

Lo tenía claro, cerré el pestillo de la puerta y con la toalla empapada del agua que había recorrido su piel me hice una señora paja, si no, me reventaba allí mismo. Cuando volvió me llevé la toalla al cesto de la ropa y me di una ducha relajante, tenia que calmarme, desde ese momento ya no había dudas, Ana debía ser mía, me daba igual aspectos morales o familiares, aquella niña pizpireta e inocente me la ponía dura.

Habíamos planeado un viernes de paseo, guía por Madrid, ir al museo del prado, comer por la Gran Vía, ir de compras por la tarde, seguido de un paseo por el Templo de Debod al anochecer y cenar en un restaurante chino que conocía en Moncloa, nos lo pasamos genial, nos hicimos fotos y le enseñé gran parte de la ciudad.

-ANA: joder, esto es enorme, esta lleno de gente, son las 12 de la noche y la ciudad sigue llena, ¿aquí no duerme nadie?

-YO: hombre, ten en cuenta que esto no es un pueblo en Granada, es una gran ciudad, de hecho, muchos locales abren ahora para que la gente vaya de copas y a bailar.- se le iluminó la cara.

-ANA: ¿muchos? En el pueblo solo hay 1 a las afueras y ponen música de abuelos - me sonó a sorna.

-YO: oye ¿me estas vacilando? Que te estas haciendo pasar por una pobre paleta, y sé que no lo eres.

-ANA: jajjaaj pues claro que te estoy tomando el pelo, pero quiero que me lleves a bailar………..y me hacia de rogar.

-YO: que manipuladora estas echa, no hace falta que insinúes, si quieres algo, solo has de pedirlo.

-ANA: pues quiero ir a bailar.

-YO: pues a bailar iremos, tengo un amigo que lleva un local y abren ahora a las 00:00, nos deja las copas gratis si ando por allí echándole un ojo como seguridad.

-ANA: normal, si es que vaya espaldas tienes, impones mucho, pero de mi no te libras, un baile conmigo te llevas.

-YO: no existe una fuerza en el universo que me lo pueda impedir - y me lancé con un beso en la mejilla, no se si fue ella o yo, pero dudamos un instante casi rozamos nuestros labios, me quedé media décima de segundo en el aire -…. vamos.

La chica era felicidad andante, se me pegaba por el aire que hacia, protegiéndose del viento conmigo, llegamos y le presenté al dueño y a los camareros, nos sentamos en una zona un poco más tranquila a charlar hasta que se animara la noche. Mientras entraba gente, el dueño del local se me acercó, pidiéndome que me metiera en el baño a echar un ojo por que creía que había alguien drogándose y a él le conocían, no era raro que me pidiera esos favores. A Ana se le cambio la cara de diversión a susto.

-YO: tranquila pequeña, no pasa nada - me levanté y le pedí que se quedara con ella, y que no la dejara sola.

Me metí en el baño como para mear, y vi a varios haciendo el tonto en el baño, me metí en uno de los cubículos y pegué la oreja, se oía claramente el “tac tac” de una tarjeta de crédito en la loza. Salí de golpe y había varios alrededor de una pila, y en la loza algo que supuse cocaína.

-YO: chavales, no es cosa mía, así que no os enfadéis, pero anda la policía secreta por ahí fuera, preguntando por el dueño.

De inmediato tiraron parte de la droga por la pila y se guardaron el resto, salieron del local en fila india delante de mí, cogiendo los abrigos para no volver. Tengo cara de buena gente y siempre suponen de mí que soy bueno. Cuando salieron todos fui a saludar y comentar al dueño el tema y me senté junto a Ana.

-ANA: ¿que ha pasado?

-YO: nada peque, que la gente no sabe divertirse si no se descontrola, pero ya se han salido todos.

-ANA: ¿y que les has dicho?

-YO: que si no se iban les partiría las piernas - aguanté unos segundos, y me eché a reír.

-ANA: jo siempre estas igual gastándome bromas - y me dio un golpe con la mano en el hombro.

Pasadas unas horas el local ya andaba medio lleno y a petición de mi acompañante pusieron un par de sevillanas que me arrastró a bailar con ella, era una delicia verla moverse, se había puesto unos pantalones rojos, de tiro bajo, botines negros y una blusa medio transparente que trasparentaba su sujetador y no tapaba su preciosidad de ombligo, tatuaje incluido, con su melena suelta y tan larga que cada giro era para foto de portada. Yo siempre había sido muy patoso para bailar, creo que por eso mi madre me apuntó a clases pero una cosa es el baile clásico con pareja y otra muy diferente una discoteca, y el hecho de perder peso no cambió que me moviera de forma estúpida, seguía igual de torpe, pero existe diferencia entre ser torpe, y ser torpe y gordo, siendo obeso cualquier cosa que hagas resulta cómica y atrae miradas de sorna, siendo normal, no.

Los bailes fueron varios con ella rodándome y sin parar de reír y moverse, el último que dimos fue uno lento y pegamos nuestros cuerpos, yo la susurraba tonterías al oído y me seguía el ritmo en la pista, ahora si me sentía cómodo al bailar pegados, dejando que la guiara. Ella quiso beber alguna copa de más y no la dejé, yo no bebo, fuera por mi físico o no, emborrachare es imposible o muy caro, y no me gusta el sabor. Se enfadó algo por que no la dejaba divertirse, pero la convencí de que para divertirse no era necesario, o condición indispensable, emborracharse.

Dadas las 4 de la mañana, nos volvimos al extrarradio, donde vivía, los autobuses nocturnos duran 45 minutos en llegar así que jugábamos a inventarnos la historia de los pasajeros, los últimos 10 minutos ella cayó rendida y se durmió sobre mi hombro. La desperté al llegar y caminamos unas calles hasta llegar a casa, nos cruzamos con cierta flora y fauna de esas horas, ella se asustó un poco pero yo la tranquilizaba.

-YO: conmigo no tengas miedo, jamas te pasará nada - pareció reconfortarla.

Llegamos sin hacer ruido, y la dejé en mi cuarto desvistiéndose, yo me fui directo al baño me di una ducha rápida con paja incluida, sus bailes habían hecho mella en mi mente. Salí y tocó su turno, mientras estaba en el baño yo me iba a poner el pijama, pero era el momento de jugármela con Ana, me puse el pantalón sin los slips para sujetar a la fiera, y me acosté en la cama de lado, ella llegó vestida con su pijama y se alegró de que estuviera en la cama y no en el sofá.

-YO: echa el pestillo o mañana será mi último día en la tierra, pondré la alarma para abrir antes de que vengan a despertarnos - así lo hice y se tumbó a mi lado.

-ANA: me lo he pasado como en mi vida, te agradezco mucho que cuides de mí.

-YO: para eso esta la familia - quería ver si reaccionaba.

-ANA: tu y yo somos más que familia - se acercó y me besó la mejilla de nuevo, esta vez no fue rápido e inocente, sino lento y sonoro, al separarse me miró a los ojos - anda ven aquí, y dame tu calor, que ayer dormí en la gloria.- “si supieras como dormí yo”.

Se acurrucó otra vez abrazándome y pasé mi brazo de nuevo por debajo de su cabeza. No se si lo había notado antes, pero ahora en mi costado notaba claramente su dos pechos, “¡sin sujetador!”.

-YO: pues a dormir, que ya me tomé el somnífero y estoy que me caigo……..buenas noches prima - tenia coartada, la besé en la frene.

-ANA: ummm buenas noches primo.

Al cabo de 1 hora la noté dormirse, la moví un poco y la llamaba, no respondía, su respiración era calmada pero con cada bocanada pegaba sus pechos a mi, solo separados por la tela de su pijama y mi camiseta. Estaba que reventaba, en la 2º hora ella se giró y quedó de espaldas a mí, yo hice lo mismo, pero dejando un amplio espacio entre nosotros, mi tienda de campaña era evidente, la apuntaba como un francotirador al trasero. En un momento dado noté como ella, tiritaba algo, y pasados unos minutos se dio la vuelta, yo la miraba entre pestañas fingiendo dormir.

-ANA: primo, ¿estas despierto? Hola - susurraba, se quedó pensativa unos segundos - jo, tengo frío - me agarró un brazo y se lo pasó por encima, como una manta, y pegó su cuerpo un poco hacia mi. Yo estaba muy nervioso, no tenia que estar nada lejos de tocar la punta de mi polla en su trasero.

Fue repitiendo la operación, serpenteando mientras se acercaba su espalda a mi pecho, hasta que pasó lo inevitable, sus riñones tocaron con mi polla. Yo quedé inmóvil, fingiendo dormir profundamente cuando estaba hecho un manojo de nervios. Ella se apartó rápidamente, pero a los pocos segundos lo volvió a intentar, lo hizo un par de veces más, y ronqué un poco más fuerte, más que nada para que parara de hacerlo, me hacia daño. La chica se enfadó por no poder pegarse a mí, y mi calor corporal, se dio la vuelta y levantó las sabanas un poco para ver que era lo que se lo prohibía. Su cara fue como para echar a correr, tapó de nuevo y se volvió, inmóvil, durante una hora se quedó así, tiritando.

Yo no sabía que tenia que hacer, repasaba en mi cabeza cada indicación de Eli, “piensa, razona, deduce y actúa en consecuencia”. Ella tenía frío, quería calor y yo era su opción, tenía que lograr que ella se pegara a mí sin que mi polla la mantuviera alejada, bajé medio metro mi cuerpo de forma clamada en el tiempo para que pareciera natural, sin cambiar la postura. Ahora apuntaba entre sus muslos, no a sus riñones. Como gesto “involuntario” mi brazo la acercó, similar a abrazar un peluche, ella de inicio torcía la espalda timorata, pero llegó el punto en que notó mi glande en sus muslos y se relajó. Pasó otra hora y ella empezó a acomodarse hacia mí, parte de su pijama se había quedado pillado por mi polla, había dejado de tiritar.

La sorpresa llegó cuando yo, creyendo estar en el máximo, ella llevó la mano a su espalda y empezó a palpar, en búsqueda de algo, de mi miembro. Palpó hasta llegar a la base de mi polla, tocaba con cuidado de no despertarme, y su mano reconoció de arriba abajo mi polla tomando medidas mentales y en un movimiento levantó una de sus piernas, como haciendo yoga, bajó mi polla y echó su culo hacia atrás, atravesando limpiamente de lado a lado, para después bajar la pierna. ¡¡¡La tenia aprisionada entre sus muslos!!! y ya, resuelta la situación, pegó su espalda con mi pecho, arropándose con mi brazo.

Yo estaba dichoso, ella era consciente de mi polla, y lejos de asustarse, salir corriendo o esperar a mañana y pedir que volviera al sofá/cama, hacia decidido que era mejor opción rodear mi enorme polla entre sus piernas y pubis. No hubo movimientos por parte de ella, ni míos, solo aguantamos la posición, basta decir que mi empalme no bajó en toda la noche y me costó dormirme, pero caí.

Sonó la alarma de mi móvil, desperté un poco, vi que seguíamos en la misma posición, ella dormida y yo seguía empalmado, no sabia si moverme y arriesgarme a que notara ese movimiento, o no hacerlo y que se despertara con mi polla sobresaliendo por su ombligo. Tenía que abrir la puerta y acostarme en el sofá si no quería levantar sospechas, así que reprogramé el despertador 5 minutos y ronqué, muy fuerte, pera despertarla a ella.

Surtió efecto y se fue desperezando, miró la hora y pensaría lo mismo que yo, pero ella decidió, echó su cadera hacia delante hasta casi sacarse toda mi polla de sus muslos y al final se giró sobre si misma para sacarla del todo, yo murmuré algo como a punto de despertarme, la miraba entre legañas, estaba de pie, al lado de la cama, tocándose la entre pierna, viendo la marca que mi erección había hecho en su pijama después de horas allí alojada. Levantó las sabanas y me volvió a mirar, ya con luz, la prominencia de mi pantalón tenía tal forma que hasta separaba la goma del pijama de la cintura de mí, apenas unos centímetros. Ella alucinaba, y amagó con acercar la mano, pero sonó mi despertador, “joder, tenia que haber puesto 10 minutos”. Ana se contrajo y bajando las sabanas me sacudió un poco.

-ANA: venga primo, arriba, que si no, nos matan, venga………

-YO: um 5 minutos más mama…….- frase típica, paré unos 4 segundos y luego abrí los ojos de forma sorpresiva – hostia, corre, abre la puerta mientras me tumbo en el sofá.

Así lo hicimos, como un juego de niños, para cuando mi madre llegó a despertarnos, ya me había quedado dormido de nuevo, la noche había sido larga, pero fructífera.

Desayunamos con los demás y hablaron de salir en familia al zoo, nos pareció buena idea y fuimos, Ana no se separaba de mi y no dejaba de comentar todo, comiendo nos pusimos en una mesa aparte. Aceleré mi plan.

-YO: ¿que tal has dormido peque?, ¿ no te habré pegado sin querer o algo? jajajaja- se quedó pensativa.

-ANA: no tonto, jajaja he pasado algo de frío pero luego, me he……..pegado un poco y se me pasó, eres una estufa andante, sabes como calentar a un mujer en la cama jajajajja – paró la risa de golpe dándose cuenta de lo dicho.

Yo me empecé a reír por lo mismo, hasta que ella me siguió, supongo que el cabrón del subconsciente nos pasa factura de vez en cuando. Por la tarde volvimos a casa, nos dimos una buena ducha y nos vestimos para volver a salir. Era la noche de Navidad, y casi ni me había dado cuenta, cenamos con la familia y nos dejaron salir a ella y a mi.

-ANA: hoy hay que arrasar primo, es Navidad y ayer no bailamos casi nada.

-YO: como quieras, pero te aviso que estoy entrenando en bailes.

-ANA: con una monitora de gym, que me lo han dicho, eso no es bailar, yo te enseño a bailar……..de verdad – al decirlo hizo un circulo con sus dedos índice y pulgar realizando un gesto contundente de arriba a abajo con la mano.

Nos fuimos a vestir, y yo me puse el traje de Eric, estaba perfecto, y ella al verme se picó.

-ANA: ¿quieres jugar duro ehh?, pues no seré menos - cogió una bolsa y se fue al baño.

Al volver apareció una semi diosa ante mi, peinada con el pelo totalmente liso, creo que hasta planchando, le caía hasta la cintura, unas botas negras de tacón bastante altas, medias térmicas trasparentes y unos mini shorts blancos con unas cadenas diminutas doradas haciendo de cinturón, lo que me mató fue la blusa, era rosa clara, y la descripción más acertada es que penséis en la parte de arriba de un biquini pero con un par de trozos de tela cayendo por su vientre, dejando su ombligo bien a la vista, con un par de tiras anudadas a la espalda, sin sujetador. Era una joya, no se le habían caído ni un milímetro sin sujeción, las tenia bien arriba. Me debí de quedar echo un imbécil.

-ANA: ¿que pasa primo?, ¿que no te gusta que iguale las fuerzas? - diciéndolo se dio un vuelta sobre si mima permitiéndome ver todo su cuerpo, los shorts le hacían un culo de campeonato, rivalizando con Eli, pero mientras ella tenia ese cuerpo por el ejercicio, esa chiquilla lo tenia así por su juventud. Tardé en reaccionar

-YO: esto….¿que has que igualar?

-ANA: ¿te crees que soy tonta?, tú te has puesto así de mono para ligar, y yo también - era cierto, pero mi objetivo era ella, no otras.

-YO: pues tú misma, pero te tendré vigilada.

-ANA: al que inviten antes a una copa gana, ¿vale? – daba palmas emocionada, “es una cría”

-YO: como quieras.

Nos pusimos los abrigos para que no le dijeran nada por la ropa al salir, la mirada de mi padre fue definitiva “como le pase algo malo a la muchacha, mueres”. Nos fuimos al local de mi amigo, un colega nos acercó en coche al bar de la noche pasada. Estaba a reventar desde el inicio de la noche, lleno de gente, dejamos los abrigos y como perros en celo, 4 tíos se fijaron en ella.

-YO: lo voy a tener difícil.

-ANA: no te creas, alguna ya te ha echado el ojo a ti, y en cuanto me aleje, irán como lobas.

-YO: oye, ten cuidado vale, aquí no todos son buena gente, puede haber imbéciles, si pasa cualquier cosa, avísame.

-ANA: anda que si, tonto, ¿que me va a pasar?, lo que quieres es asustarme para ganar la apuesta - salió directa a la pista de baile.

La seguí y desde la vitrina del DJ, charlaba y saludaba a la gente conocida, mientras la echaba un ojo, no le faltaban pretendientes, cada poco tiempo se le acercaba uno y bailaba un par de canciones, pero ella les rechazaba, y me miraba señalándose el reloj, “te queda poco tiempo” quería decirme.

Pasaron las horas y uno de los chicos logró quedarse con ella más de un baile, la cosa se estaba poniendo fina y pusieron ritmos latinos para arrimar cebolleta. Me había despistado con algún conato de pelea que acabó en nada. Cuando volví, los bailes eran ya follar con ropa puesta, verla así me puso celoso, así que fiché a la chica más guapa del local sin pareja, con su corte de amigas, me acerqué bailoteando, ya me habían visto venir, me acerqué a ella y cuando estaba ya cerca de todas, pregunté.

-YO: perdona guapa – se dio la vuelta con algo de desidia

-GUAPA1: ¿que quieres?

-YO: esto……..me……. preguntaba……..si …….bueno si no molesta………si podrías…….o tendrías el enorme placer de……..presentarme a tu amiga - y me giré hacia una de sus amigas, menos agraciada pero que vestida de fiesta tenia su morbo, era de piel blanca y pelo negro, largo y rizado, con gafas grandes que le daban un aire alegre y un pintalabios rojo pasión, con un vestido blanco elástico ceñido al mililitro a su piel, con un escote animal enseñando las copas de su sujetador que sostenía un par de pechos demasiado desarrollados para la edad que aparentaba, con la minifalda del vestido apenas tapándola las piernas y unos zapatos de tacón a juego que hacían que solo la sacara una cabeza de altura.

La guapa se quedó blanca, la chica en cuestión petrificada, y el resto reían - “Eli: si en un grupo de mujeres hay una que resalta, es la líder, la mas difícil y creída, ve a por alguna amiga, esas, solo por fijarte en ellas con la otra al lado, caerán rendidas”

No falló, salió encantada mientras las amigas se reían y la guapa se quedaba mustia, “que se joda”, pensé. Nos pusimos cerca de Ana, quería que me viera con otra, así pasó, y cruzando nuestras miradas mientras bailábamos con terceras personas, empezamos un pique, movimientos bruscos, un giro lento, un gesto lascivo……nuestras parejas alucinaban, y más cuando mi compañera notó en su pelvis mi miembro en reposo que la llegaba hasta el muslo. Por poco se me tira al cuello, pero yo no quería eso, estaba a otra cosa, el chico de Ana la dijo algo al oído, ella pensó unos segundos mirándome, y asintió, se besaron, el chico volvió a susurrar, y Ana le decía que no, pero cedió y cayó un segundo beso, repitió la operación un par de veces, con cada beso se quedaba más tiempo en sus labios, pero notaba como Ana se echaba para atrás y empezó a no gustarle el juego, el chico la sujetaba con fuerza de los brazos y no la dejaba separarse, buscado con los labios, ella le hacia la cobra y en una de ellas clavó sus ojos en mi, la pregunté con la mirada y vi suplica en la suya, casi me quité de encima a aquella mujer y me lancé a por mi doncella en apuros.

-YO: oye perdona, no quiero molestar, pero creo que esta chica no quiere más.

-CHICO1: ¿y a ti que te importa?, anda y vete a restregarte con esa fea.

-YO: te repito que no quiere más, ¿verdad?

-ANA: si, si, para.

El chico se enfadó, la soltó de mala manera y se fue insultando y haciéndome gestos groseros, lo ignoré y abrace a Ana

-YO: hey peque, tranquila, ya estoy aquí.

-ANA: jo, soy boba - dijo sollozando.

-YO: hey, hey, tranquila, aquí ya no pasará nada, ya estoy aquí, y ¿que te dije ayer? - se quedó pensando.

-ANA: que contigo no me pasaría nada.

-YO: exacto, ahora clámate y seca esos preciosos ojos - levanté su barbilla para mirarla directamente - la di un beso en la mejilla y la saqué de la pista de baile, pregunté que había pasado

-ANA: ese imbécil, era mono, no sé, quería ganar la apuesta, me dijo que si le daba un beso me invitaba, y después de dárselo me dijo que no valía, que eran besos muy cortitos, que le diera otro, a empezado a meterme mano, y no paraba y se lo decía, dios, soy tonta.

-YO: no eres tonta, eres inocente, un encanto de mujer que no sabe que esto es el mar y hay tiburones que solo piensan en carnaza – “yo uno de ellos”.

Traté de calmarla, se sentía sucia, avergonzada, tonta, y todo por aquel payaso, logré desviar sus pensamientos y la llevé a bailar conmigo un par de horas, se alegró un poco y yo con ella. Lo mejor fue al ir a cerrar, a las 6 y pico, ya con autobuses, estabamos en la salida despidiéndonos del dueño y agradeciéndole la fiesta. El guaperas de Ana pasó por nuestro lado farfullando, supongo que herido en su orgullo, y susurrando algo a sus amigos. Al salir del local, con el dueño detrás, estaban allí y empezaron a llamar calienta pollas y cosas parecidas a Ana, que comenzó a venirse abajo, no aguanté, localice al guaperas y sin mediar palabra le partí la cara de un puñetazo, cayó al suelo redondo, el resto se agacharon a mirarle.

-CHICO1: eh tío, que era broma, clámate…….- uno casi se pone en pie para encararse, pero iba demasiado borracho, me di la vuelta y pedí disculpas al dueño.

-DUEÑO: por lo que a mi respecta ese chico se ha dado con el pomo de la puerta del baño - le di la mano agradeciéndoselo, y pasé mi chaqueta por encima de Ana, que tiritaba entre el frío y la situación, la pasé el brazo por encima y nos fuimos a la parada del bus.

-ANA: muchas gracias Raúl, ¿no se que pasaría si no estuvieras aquí conmigo?

-YO: odio a esos imbéciles, tú vales mil veces más que esa gentuza, que se mete con los demás solo por la presión de grupo, te digo una cosa, no dejes que ellos, o gente como ellos, te afecten, solo tienen el poder que tú les des - era una buena lección de vida, que aprendí de gordo, pero yo era un carbón, había montado el numerito del héroe, ¿el guaperas? Un colega mío que se ofreció a ayudarme. 2º lección de Eli.

No se habló más hasta llegar a casa, noté en su cara confort, pero estaba agotada y un poco abochornada por su comportamiento. Llegamos a casa y ya a salvo de todo le cambió un poco el humor, habíamos parado a comprar unos churros y los comimos en la cocina con alguno de los parientes que aun andaba de fiesta por casa.

Nos fuimos al cuarto con orden expresa de no levantarnos antes de las 4-5 de la tarde, queríamos descansar, el premio fue saber que habían reservado mesa y se iban a comer todos, dejando la casa sola hasta las 5. Ana se fue a duchar, supongo que se sentía impura, yo no, la colonia me había dejado buen olor y quería que fuera un recordatorio. De nuevo dormí con los pantalones sin slip y una camiseta vieja, pero ella volvió a la habitación, y ya no llevaba aquel pijama desgastado, si no un mini short amarillo ajustado, casi un culotte, y una camiseta usada. Cerró el pestillo, y se tumbó en al cama, yo estaba sentado en el sofá, tenia que tener cuidado de no meter la pata esa noche, estaba sensible.

-ANA: ¿que pasa que te tengo que obligar de nuevo?, ven aquí, que hoy si que te necesito conmigo, ¡¡¡mi héroe!!! jajajajajaja – me sentí aliviado, seguía siendo ella y me quería en la cama, apagué la luz y me metí en la cama con ella.

-ANA: ¿te has tomado el somnífero?

-YO: si, 2 además, me esta viniendo genial, duermo dulcemente - tenia curiosidad por que haría con esa información, ¿preocupada por mi estado físico, o quería saber si tenia carta blanca esa noche?

Al tumbarse directamente se recostó sobre mi, buscando mi cariño o mi calor corporal, noté de nuevo sus pechos sin sujetador apretados contra mi, y la estrujé, dejando que mi colonia la recordara lo pasado en esa noche, que penetrara en su mente. No pasó mucho tiempo hasta que se quedó dormida, y tan profundamente que parecía que no pasaría nada. Gracias a dios a las 2 horas de sentir su respiración en mi piel, son su móvil muy bajito, levantó la cabeza y me miró, yo abrí algo el ojo.

-ANA: ¿primo? ¿Estás?- se cercioró meneándome un poco, no reaccioné - eres el mejor - y sin más me plantó un beso de cría en los labios, apagó el móvil y se volvió a acurrucar contra mi, “¿se ha puesto una alarma para darme un beso?” incluso puso su pierna encima de la mía, suerte que era la de ese lado, en la otra estaba mi polla crecido rápidamente.

Paso un buen rato en que puede notar que Ana no estaba dormida y se mordía una de las uñas de sus dedos en mi pecho, eso era deseo, con mezcla de duda, o nerviosismo, finalmente se decidió y separándose con cuidado, se colocó de nuevo de espaldas a mi, cogiéndome el brazo y rodeándose con el, lo hizo de forma que pareciera natural que yo también me pusiera de lado mirando hacia su espalda, colaboré, lo que no contó era con mi erección, con el giro y su peso cayó de golpe encima de su cintura, se quedó así unos segundos esperando mi reacción, al no haberla, se separó un poco de mi y llevó su mano a mi polla de nuevo, palpando y reconociendo, de nuevo, se abrió de piernas se la metió entre los muslos, entendí en ese momento el cambio de vestuario, el pijama se había quedado pillado la noche anterior, un short tan corto y ajustado no daría ese problema, bajó la pierna y se pegó a mi, se me fue un poco la mano y la apreté demás, pero no pareció darse cuenta, o importarle.

Pasamos así un par de horas en que noté que seguía despierta, y lo noté básicamente por que no paró quieta, no hacia movimientos rítmicos pero aquello le incomodaba un poco entre sus piernas, bajó la mano hacia su pelvis y cogió la punta de la polla que sobresalía bastante, y moviéndola, buscó una posición cómoda hasta que la encontró, con toda mi circunferencia rozando su pubis, podía sentir su calor y el roce, así se quedó, la mar de feliz. Ya eran casi las 9 de la mañana y no podía más, me dormí.

Ana - Derribando un muro.

Uno de lo mejores despertares de mi vida llegó, así como a las 2 de la tarde, no se como, cuando, ni por que, pero al despertarme, tenia a Ana de cara a mi, a escasos centímetros de mi cara, dormida, pero lo divertido era que ella estaba en mi lado de la cama y yo en el suyo, “¿como y cuando narices hemos cambiado de posición?”, me dio igual cuando noté que no solo seguía empalmado si no que mi polla seguía atravesándola de lado a lado, pero en vez de entrar por su culo y sobresalir por su ombligo, entraba por su pelvis y sobresalía por su trasero. Aluciné con lo que debía de haber pasado, teníamos los vientres tocándose, ¡¡y yo me lo había perdido!!. Aquella situación, y ver su precioso rostro a escasos centímetros del mío, con su larga cabellera cubriéndola de forma angelical, y sus llamativos labios con algo de pintalabios, no me frené y la planté un buen beso en la boca, no se despertó pero me dio igual, sabia a fresa y a inocencia. Tenía una de mis manos en su cintura, con la camiseta algo subida, era piel con piel, y ella rodeaba mi cabeza con sus manos. Aparté un poco el pelo de su cara, se lo pase por detrás de la oreja. Fue suficiente para que abriera los ojos, me miró dulcemente, para justo después sonreír feliz.

-ANA: hola primo, buenos días - sorprendido por su normalidad, tenía que recordarla la situación.

-YO: buenos días peque, te juro por dios que me encantaría seguir aquí, contigo, en esta posición, pero necesito ir al baño.

-ANA: jajaja pues ve.

-YO: ya, verás, es que para poder orinar, necesito…………eso - señalé abajo, se le abrieron los ojos de golpe, observó mi falo atravesando sus muslos, vio la situación y me miró apabullada, pero no se movía.- si no es molestia, ¿podrías…….?

Se abrió de piernas en seguida y se sentó en el borde de la cama tapándose la cara.

-ANA: ¡¡¡¡dios, dios, perdona, los siento, que vergüenza!!!!

-YO: tranquila, no pasa nada, ya te he dicho que me quedaría así de por vida, pero tengo que ir al baño y desayunar - no respondía, me levanté y fui hacia la puerta….

-ANA: llama antes de volver, por favor.- asentí.

El plan fue a la perfección, mientras meaba y me echaba algo de agua en la cara, y colonia de ayer para recordarla lo que ocurrió, pensaba en mi cabeza mil maneras de volver a la habitación para dejarla pillada, al descubierto y que no tuviera más remedio que admitir su deseo. “¿Llamar antes de volver? Una mierda”, lo 1º era no dejarla pensar, fui decidido, revisé al casa, no había nadie, y no volverían hasta las 5, cogí el pomo de la puerta, respiré y entré de golpe.

El que se quedó pillado fui yo, allí estaba ella, a cuatro patas, metiendo su mano por debajo del short acariciándose, de espaldas a mí, la visión era un pecado, yo comiéndome la cabeza y ella me lo ofreció en bandeja, gracias a dios la puerta no hizo ruido, y puede acercarme a ella en silencio.

-YO: esta claro que te lo pasaste bien esta noche - pegó un brinco que a la vez se dio la vuelta.

-ANA: ¡¡¡joder te he dicho que avisaras, imbécil!!!- estaba frustrada, se pegó las piernas al pecho y bajó la cabeza a las rodillas, se tapó de vergüenza pura. Tenia que sacarla de ese estado.

-YO: ¿y perderme este espectáculo? Oye, tranquila que yo te entiendo perfectamente, todos nos tenemos que desahogar de vez en cuando.

-ANA: no, tú no lo entiendes……………es que ……….yo……………tú…...no se que me pasa, me haces sentir……bien……y me gusta, y tú eres mi primo…… y no me quieres………. y yo no ………..- casi rompía a llorar.

-YO: ¿como que no te quiero?, si eres el amor de mi vida, llevas 5 días volviéndome loco…...

-ANA: no juegues, vale esto es importante para mi, por favor no digas nada a la familia.

-YO: ¿te parece que estoy jugando? - la puse una mano en la pierna - ¿si te digo una cosa, no saldrá de aquí? Así estaremos igualados.

-ANA: claro.

-YO: me da un poco de vergüenza así que no te rías vale - asintió seria - no tenia que ir a mear, me he ido a masturbarme, o reventaba.

-ANA: ¿que? ¿Por que? – estaba totalmente confusa.

-YO: ¿como que por que? ¿Cuantas veces crees que yo me levanto con una preciosidad andaluza como tú con la………cosa, pillada entre sus piernas?

-ANA: pues ya llevas un par de días……- se tapó la boca, reaccioné “sorprendiéndome”.

-YO: no jodas………y yo sin saberlo.

-ANA: dios, perdona, no es aposta - empezó a ser ella y no una bola retraída - es que, joder al principio hacia frío, tú das calor, pero te pusiste de lado, no llegaba, y me la pongo así para pegarme a ti, y no sé, con la fiesta, lo que ocurrió, sentir….. eso…..entre mis piernas, su roce sobre mi………..me…..me…………

-YO: te excitabas - me miró como habiendo dado en el clavo, cayó de lado sollozando - mira, a nuestra edad normal, somos jóvenes inexpertos y estas cosas pasan.

-ANA: ya, pero no me han pasado a mi, y quiero que pasen, pero …………

-YO: ¿pero?

-ANA: hasta ahora me daba igual, casi con quien fuera, pero ahora, ahora solo pienso en ti, por eso pasa esto, no esta bien.

-YO: me siento muy halagado, pero somos familia………..- la deje caer, dependiendo de su repuesta.

-ANA: bueno………. en realidad………. no somos primos………… de sangre. – “¡LINEA¡ ¡ BINGO! ¡LOTERIA! ¡EL GORDO!, ¡EL NIÑO! ¡EL EUROMILLON! ¡PERRITO PILOTO PARA EL CABALLERO!”.

-YO: eso es cierto, pero aun así, existen inconvenientes.

-ANA: ya ……….es una pena.- torció el gesto.

-YO: pero en realidad, estamos solos hasta las 5, y aunque como dices, no somos familia, ¿quien mejor que nosotros?, si quieres podemos jugar un rato - se le iluminó un poco la cara.

-ANA: no sé, ¿y sin nos pillan? – perfecto, su preocupación no era moral, ni ética, si no que la pillaran.

-YO: hombre, hay que ser muy tonto para que te pillen, ¿y somos tontos?

-ANA: no, ………..podemos echar el pestillo, así aunque vengan no nos verán - estaba rendida - ¿a que jugamos?

-YO: pues a lo que tú quieras, no haremos nada que no estés lista, ¿de acuerdo?- asintió segura.

-ANA: en mi instituto juegan a un juego de beber, ponen las manos unos delante de otros, como haciendo palmitas y se les vendan los ojos, luego por turnos deben tocar una parte del cuerpo del otro, si la adivinan ganan y si pierden beben, y el que se emborracha pierde.

-YO: me parece bien, pero yo no quiero beber ahora, que tal si el que falle, se quita una prenda, y el que quede desnudo, pierde - perdería de todas formas, yo solo llevaba el pantalón y la camiseta.

-ANA: vale - aplaudió y se puso en posición en la cama, delante de mi, yo hice lo mismo, pusimos nuestras palmas de las manos un contra otra y nos vendamos los ojos con mis viejos cinturones de artes marciales.

-YO: empieza tú, que lo conoces.

-ANA bueno, yo solo lo he visto jugar, pero vale, no mires eh….- cogió mi mano y la movió un poco por toda la zona, para marearme - ya esta, ahora mueve la mano hacia delante y toca, ¿que es?

Lo hice, y toque parte blanda, suave, y estrecha.

-YO: ¿un antebrazo?

-ANA: ¡¡¡siiiiiii!!! jo, te toca.

Me quité la venda y me asegure de que la tuviera puesta, no podía arriesgar con la zona, demasiado atrevido y podría echarse atrás, pero quería perder, la cogí la mano y la moví lo suficiente, después se la llevé a mi pecho.

-YO: ya

-ANA: que fácil, es el pecho jajaja

-YO: premio, te toca - mismo ritual, toqué y palpé claramente un hombro, pero…… - ummmmm no se, ¿la rodilla?

-ANA: jajaja no bobo, es el hombro, has perdido, así que prenda fuera - cumplí rigurosamente y me quité la camiseta, estaba a 1 ronda de quedarme en pelotas delante de ella.

-YO: voy - la cogí la mano y llevé a mi boca, para ver como reaccionaba.

-ANA: esta húmedo, es, es….- seguía palpando y llegó a introducir un dedo en mi boca - ah, ¿la nariz? – “los cojones”, esa gitana también quería perder.

-YO: no tonta, era la boca - y aun con sus dedos en mis labios, le chupé uno con delicadeza.

-ANA: ahgggg que guarro - pero había perdido, se quitó la camiseta, sin movimientos eróticos, como si estuviera sola, sus pechos eran preciosos, piel levemente tostada con unos preciosos pezones oscuros.

La siguiente me daba igual, aunque me la pusiera en la cabeza y notara su pelo diría un pie, pero me jodió el invento, me puso la mano en una teta, no podía ser tan desconsiderado.

-YO: esto…….diría que es un .pecho - y apreté un poco cerciorando, las tenia bien duras y firmes.

-ANA: ¡¡¡siiiiii!!! me toca.- “que naturalidad para haberla sobado un seno” al taparse los ojos me acomodé la polla, la tenia como una piedra, me di la vuelta y la hice tocarme el culo, lo adivinó, muy a mi pesar. Seguimos un rato así.

La genialidad llegó cuando me tocó el turno, el puse la mano en la base de mi polla, sin pensármelo mucho.

-ANA: vaya, diría que es una……………… ¿pierna?.- me eché a reír, cuando se quitó la prenda se río también, pero no soltó.

-YO: has perdido y te toca pringar.

-ANA: jo, me da vergüenza

-YO: ¿no eres una mujer de palabra? – herí su orgullo.

-ANA: vale, pero mira para otro lado.

-YO: no, eso no entraba en el juego, haberlo pensado antes - y me senté cómodamente a disfrutar- venga.- no entendía su reticencia, eran los shorts y aun le quedaban las bragas.

Se puso en pie rogándome que no con la mirada, remoloneando, pero yo la apremiaba, hasta que lo hizo, empezó con cuidado, metiendo la mano por dentro del short, fue haciendo hueco y del tirón, se los bajó.

-ANA: ya esta - reía nerviosa, era normal,¡¡¡¡¡no llevaba bragas!!! ante mi, una joven de 18 años de piel tostada, con unas tetas firmes y bien colocadas, nada excesivas y un buen trasero, totalmente desnuda con su coño al aire, lo tenia cuidado con una línea de pelo corto.

-YO: ¿pero como que no llevas bragas hija mía?

-ANA: joder, no se, pensé que así, sentiría mejor tu…….cosa, con el pijama no podía - se medio tapaba como podía.

-YO: jajaja pobrecilla, bien, he ganado entonces el juego, ¿no?

-ANA si, jajaja jo que mala soy.

-YO si, malisima – la dije con doble o triple sentido.

-ANA: ¿por que lo dices?

-YO: Ana, no somos tontos, ha quedado claro, has perdido aposta, y quiero saber ¿por que?

-ANA: jo, es que…. los que pierden jugando, tienen que besarse, y ….quiero me beses.

-YO: ¿todo esto por que deseas besarme? No necesitabas desnudarte para eso, llevo 4 días deseando tenerte entre mis brazos - se tensó entera y me miró, atónita - ¿como te crees que tengo esas erecciones que tu aprovechas? - me levanté y caminé con calma hacia ella - me las provocas tú.

Llegué a su altura, me miró hacia arriba, rogando que diera el paso, y lo di, la rodeé con mis brazos, la pegué a mi y la besé, de forma suave y calmada.

-ANA: ummmm, que rico.

-YO: recuerda que iremos hasta donde tú quieras, ¿vale?

-ANA: si – volví a besarla.

La atraje hacia la cama y me senté, ella se colocó entre mis piernas y se dejó caer sobre mi, quedando los dos tumbados, con ella encima mío, comenzamos a besarnos como colegiales, mis manos repasaban cada centímetro de su espalda, y ella se apoyaba contra la cama, meneaba las piernas que le quedaban colgando, y eso hacia que su parte inferior se frotara contra mi, la erección se aplastaba contra ella. Fui implementado algunos besos básicos, paraba a sonreír con cada nuevo elemento, y ella me fue cogiendo el ritmo, la agarré la cabeza, y comencé a meter mi lengua en su boca, de inicio no sabia que hacer pero, como buen maestro, aprendió rápido, sus pechos aplastados contra mi estaban a punto de reventar, los noté duros, con los pezones erectos.

-YO: para por favor, que no aguanto más con los pantalones - dejé caer a un lado de la cama, me incorporé y me bajé los pantalones, la tenia hinchadisima, me di la vuelta para que pudiera admirar, se quedó asustada, llevó su mano a la boca.

-ANA: ¡¡¿pero que es………….eso?!!

-YO: para empezar, deja de decir “eso”, esto es un pene, en realidad un buena polla, grande.

-ANA: joder que si es grande, es más de lo que había palpado.

-YO: pues comprueba, ven aquí - la acerqué al borde de la cama y ella misma llevó sus manos a mi polla, que la apuntaba.

La cogió admirando todo detalle, e inicio un sube y baja, casi por comprobar como funcionaba.

-ANA: es normal que la tuviera que meterla entre las piernas, es que si no casi me echas de la cama jjajja, ¿puedo……?

-YO: lo que tú quieras - sonrío, comenzó una paja bastante torpe con una mano, yo la ayudé a poner las dos manos y hacerla bien, con ritmo.

Casi no podía con ella, la comparativa de sus manos con mi polla era ridícula, me harté de la masturbación.

-YO: ahora voy yo - la recosté sobre la cama y esta vez fui yo quien me dejé caer sobre ella, con cuidado de no aplastarla, ella seguía agarrada a mi polla con una mano y yo me fui a por sus pezones, lamía su contorno, estaban realmente duros sus pechos, firmes, de jóvenes que eran, fui bajando mis besos por su ombligo, que me había vuelto loco estos días, y noté cierto resorte al pasar por allí, diría que era su “zona especial”. Guardé eso para mas adelante y seguí bajando, hasta llegar a su coño, besando sus muslos admiré y olí aquella entrada jovial, lo vi francamente más estrecho que los vistos hasta ahora - ¿eres virgen? dime la verdad, por que así sabré como tratarte.

Un poco avergonzada, pero llevada por la pasión, lo admitió.

-ANA: pero no me pasa nada malo, es solo que…nadie……..bueno……..es que…….. – estaba muy nerviosa, así que mis besos en la cara interna de sus muslos la hicieron olvidar que estaba hablando.

Inicié un forte con mi mano por su zona más alta, la había visto acariciarse, no seria nada especial, seguía dando pequeños besos por toda la zona, pequeños pero lentos, la oí empezar a gemir suavemente, aceleré mi mano un poco y llegué a separar sus labios vaginales, allí estaba el clítoris hinchado, lo lamí como si fuera un helado delicado, sin mucho tardar, la noté revolverse sobre la cama, ya metía un poco mi dedo corazón en su vagina que rebosaba fluidos, e me hundía la cara en ella con las manos llevada por la marea de sensaciones, otras veces cogía una almohada y se tapaba la cara.

-ANA: ¡¡¡OHHH DIOSSSSSSSS SIGUEEE, NO PARESSSSSSS, NO PARESSSSS, NO PARESSSSSSSSS!!!!

Se corrió embadurnando mi mano de fluidos, había estallado de placer, seguí acariciando con mi mano en su entrepierna mientras volvía a subir por su cuerpo, besando cada célula de su piel, noté de nuevo un respingo al pasar por su ombligo, volví a sus senos, los trabajé de nuevo hasta volver a tenerla a tono, retorciéndose bajo mi cuerpo, con mi polla golpeando en su vientre, subí por el cuello y me quede allí, aumentado el ritmo de mi mano hasta lograr una 2º corrida, los espasmos que tenia eran brutales, retorcía su espalda mientras se agarraba a las sabanas como si fuera a echar a volar.

-ANA; ¡¡¡¡¡DIOS, BASTA, NO AGAUNTO MÁS!!!- cayó rendida, con todo su peso a la cama, yo me tumbé a su lado, mientras seguía besándola el cuello, bajando mi mano a su vientre y acariciándolo con suavidad.

Mi polla estaba para usarla de puente entre 2 acantilados, estando yo de lado y pegado a ella, descansaba encima de sus piernas.

-YO: ¿estas bien? - no contestaba, solo cogía aire, y se mordía el labio mirando mi falo palpitando en sus muslos.

-ANA: tú no te puedes quedar así……….

-YO: ¿y que se te ocurre?- se quedó mirando un par de segundos y reaccionó.

Se puso de lado, como cuando dormíamos, y la entendí, me puse detrás y levantando su pierna puse mi polla directamente frotándose contra su coño, bajo las piernas, quedó prisionera, pero ya piel con piel.

-ANA: es una sensación genial, mejor de lo que creía.

Llevé mi mano a uno de sus pechos y ella giró la cabeza, primero viendo como mi enorme polla sobresalía de su pelvis, luego buscando mis besos.

-YO: voy, puede que me acelere mucho, si quieres que pare dímelo, ¿vale?

-ANA: dale sin miedo, me encanta la sensación de tener…….eso…..tu polla………ahí.

De forma calmada y sin arriesgar, lleve mi pelvis hacia atrás y embestí de forma brusca una sola vez.

-ANA: ains……. sigue.

Otro golpe de cadera, y otro, no soltaba una de sus tetas, pellizcaba el pezón con cierta rudeza, y fui aumentado el ritmo, sintiendo como abría los labios mayores, y como mi polla se abría paso entre sus piernas, empezó a sonar el ruido característico de mi pelvis chocando con su trasero, la fuerza era ya bastante contundente, tuve que agarrarla del vientre ya que su pecho se me escapaba, o de cada embestida tiraba demasiado del pezón, si ya notaba mi polla mojada de sus fluidos, sujetarla por el ombligo la terminó de sacar lo mejor, sin parar durante diez minutos bombeaba sin descanso, cogiendo ritmos fáciles de aguantar, sin parar, ella miraba abajo y veía como mi aparecía y desaparecía entre sus muslos, yo, recordando, no solo sujetaba, si no jugueteaba con su ombligo mientras ya solo podía besar su espalda, su cara se retorcía con el resto de su cuerpo, se tensó de nuevo y sin parar de golpearla con mi cadera noté otra corrida de ella, abrió un poco las piernas pero se las cerré de golpe para continuar mis acometidas. Otra vez no sabia si la chica tenia un orgasmo tras otro o era uno continuado, solo había gemidos y respiraciones fuertes por su parte, me daba igual, después de otros 20 minutos estaba reventando semen, salió disparado, y seguí golpeando bajando el ritmo hasta que noté un último charco entre las peinas de ella, allí paré.

Recosté un poco a Ana para ver su rostro, estaba roja, hinchada, con la boca abierta bebiendo el aire, llevó su mano a mi cara y me atrajo a la suya, nos besamos muy lentamente, con lengua, haciendo gestos claros con la boca.

-YO: mi pequeña, o paramos o vas a tener que hacer algo más para saciar a mi amigo - se sorprendió de mi comentario.

-ANA: ¡¡¡pero por dios, ¿aun tienes ganas?!!! yo estoy muerta, jamas había sentido nada así, no he parado de………echar fluidos - se llevó las manos a su intimidad totalmente manchada. Me acerqué a su oído y susurrando

-YO: con una mujer como tú podría estar horas - besé su cuello de nuevo.

-ANA: dios, y aun queda más de una semana contigo.

-YO: en la que te voy a hacer derretir los polos, si me dejas - seguía trabajando el cuello.

-ANA: dios, ¿que me vas ha hacer? - era mía.

-YO: siempre te lo he dicho, lo que tú quieras.

Seguimos abrazados una hora más, besándonos a ratos con cuidado de no excitarme demasiado o no respondía de mi mismo, se acercaban las 5. así que nos vestimos, arreglamos la habitación, echamos a lavar la ropa manchada de semen y preparamos algo de comer, durante ese tiempo no había palabras, en las idas y venidas por el pasillo de la cocina al salón, solo carantoñas, me acercaba a ella por detrás y la restregaba mi polla por su culo, buscando sus besos, o ella me empujaba contra la pared aprovechando mi manos ocupadas, y mientras con una mano me arrancaba casi el pelo con cada beso que me daba, la otra frotaba mi polla por encima de la ropa, yo aprovechaba sus manos ocupadas y su indefensión, y le ”magreaba” el culo, no había tenido oportunidad aun, atrayendo su cadera a mi miembro. Aquel juego estúpido casi nos cuesta un disgusto, en mitad del pasillo con ella contra la pared y yo atacándola por detrás, entró la familia, no dio el tiempo justo de colocarnos la ropa y sentarnos a comer.

-MADRE: ¡¡míralos. aquí están!! Vaya panda de aburrido sois, ¿salís una noche y ya tenéis que descansar hasta estas horas? Al menos os habréis divertido………..- nos miramos cómplices.

-ANA: si, lo hemos pasado genial - me guiñó un ojo.

-YO: y lo que nos queda, madre, y lo que nos queda.

Ana - Desvirgando a mi “prima”.

Habíamos pasado una mañana ajetreada, la sesión con Ana nos había sacado un poco de nuestras casillas, y después de comer nos quedamos con la familia, charlando y dándonos algunos regalos, ya que era Navidad. Nos dieron algún sobre con dinero, en Navidad no solíamos regalar, si no en reyes, aprovechamos ese dinero y salimos un par de días, aprovechábamos cuando ellos se quedaban, para salir y cuando ellos salían, para quedarnos en casa.

Las noches siguientes fueron una delicia caliente, cerrábamos con pestillo y solo nos restregábamos uno contra el otro, siempre dormíamos igual, con mi polla entre sus muslos, abrazados, ya fuera de cara o en cuchara, ella se movía un poco, pidiendo guerra, y yo se la daba encantando, el roce de mi miembro en su zona genital la volvió un poco loca, repasé su cuerpo de arriba abajo, y sin duda, jugar con su ombligo la erizaba la piel, pasaba un dedo, casi sin tocar, rozando, hacinado círculos en su vientre, a su tatuaje, cuando la tenia a tono nos masturbábamos mutuamente para acabar casi siempre con mi polla percutiendo entre sus muslos, con o sin ropa, y nos quedábamos así dormidos, siempre poniendo la alarma para despertarnos antes, pero ni hacia falta, con cualquier movimiento alguno se despertaba y se ponía caliente de nuevo. Cuando salíamos, tuve la cabeza de decir que era amiga mía, y no familiar, si no mis amigos me hubieran delatado, salíamos con ellos a tomar unas cervezas o quedábamos a jugar, pero yo pasaba de ellos, solo tenía ojos y manos para ella, y era reciproco.

Se acercaba fin de año y quedamos para ir de compras, quería regalarla algún vestido de fiesta para la ocasión, entramos en varias tiendas, ella elegía varios vestidos, y me hacia pases de modelos en los probadores, la cosa se nos descontroló algo de las manos, o a mi, cuando se agachó para quitarse un vestido, la imagen de su trasero a milímetros de mi cara, en una fina prenda intima de encaje, era demasiado, de mala manera la empujé contra la pared de espaldas a mi, le bajé las bragas, me desnudé y metí mi polla entre sus nalgas, pajeándome con ella, era un trozo de carne, mientras acariciaba todo lo que pillaba a mano, ella pasaba sus manos por detrás para acariciarme la cabeza.

-ANA: para, que nos van a ver.

-YO: me da igual, te deseo, me quedaría mi vida entera contigo, me vuelves loco.

-ANA: no podemos seguir así, con estos calentones.

-YO: solo hay una forma de apagar mi fuego, no haremos el amor si no quieres, pero si no lo hacemos no puedo evitar esta sensación de ahogo.

-ANA; no es que no……….. quiera, es que tengo miedo.

-YO: ¿de mí?

-ANA: de ti no, de tu……..pene, soy virgen, y es enorme, me da pánico.

-YO: te juro que seré cuidadoso, pero si no puede ser, no podemos seguir con esto, me vas a matar, la sola visión de tu cuerpo me enloquece, ¿y me traes a ver como te cambias de ropa poniéndote vestidos? Eres cruel - no había parado de pajearme con su trasero, y mis caricias empezaron a hacer efecto en ella, sopesó tensamente.

-ANA: esta bien …….si te portas bien, en fin de año, quiero ser tuya - ya tenia lo que quería, y deseaba, lo que empecé como un juego, o deseo, era ya pura lujuria y necesidad apremiante, aquella chiquilla y su cuerpo adolescente me tenia la mente turbada.

-YO: dime lo que quieres que haga y lo haré.

-ANA: quiero que sea especial, no un calentón, que sea cariñoso y que lo deseemos los 2, en un momento mágico - no pedía nada la niña.

Se dio la vuelta y se agachó para pajearme y dar algún besito a mi polla, no sabía chuparla pero le gustaba la sensación y la había enseñado algunos trucos. Alguien tocó a la puerta, era la dependienta preguntando por que vestido se quedaría, conteste yo, ya que ella tenia la boca algo ocupada, pidiendo un momento. El justo para correrme, por no liarla mucho me apreté la base de la polla, como me enseñó Eli, para no eyacular hacia fuera, eso me cortaba un poco el rollo, pero no podíamos dejar aquello manchado de semen, o manchar los vestidos.

-ANA: anda salte, o si no, no acabamos nunca - así lo hice, y entre varios vestidos que le fueron pasando se quedó con uno, pero no me dejo verlo.

Pasaron los días y cada calentón mío no era correspondido, me alejaba y me citaba para fin de año, eso si, las noches seguían con mi polla entre sus piernas, ya dormíamos desnudos directamente. Fui preparando la noche de fin de año, tenia que ser especial, por ella, lo primero fue ir al ensayo de las campanadas el día anterior, las campanadas en si de fin de año las haríamos en casa con la familia, debido a la acumulación de gente no nos separamos en absoluto, y me costó controlarme, pero lo pasamos bien, salimos de fiesta después, bailamos y reímos. El día de fin de año la preparé un paseo por carruaje por un parque, debido al frío ella se pegaba a mi, pero se la veía feliz, fuimos a unos puestos feriantes y dejando un buen dinero logré un peluche que ella cogió como un hijo. Cenamos en familia, y esperamos las campanadas, pasadas las 00:15 teníamos que ir preparándonos, nos pasarían a recoger a la 1:00 para ir a una fiesta de fin de año a la que la invité. Yo era más rápido así que me duché primero y me puse, como no, el traje de Eric, era increíble como podía convertir a un tipo normal en un galán. Ana cogió la bolsa del vestido, un neceser y no volvió hasta pasada la 1:00, casi sin tiempo, cuando la vi aparecer mereció la pena el retraso.

Llevaba un vestido negro, ceñido, muy ceñido, elástico, se le marcaba cada curva, con un pronunciado escote, y más que escote, era un abismo, tenia dos tirantes por los hombros y la tela caía tapándole los pechos, pero toda la zona central hasta el ombligo era sin tela, el vestido luego bajaba un poco haciendo una minifalda que no dejaba de subírsele y ella de bajársela, con toda la espalda al aire, no había sujetador, ni lo necesitaba, unos tacones altos y medias casi imperceptibles, el pelo lo seguía llevando liso, recién planchado llegándole a la cintura, mejor, me encantaba así, con un bolso de mano y bastante más maquillaje del que me hubiera gustado, o necesitaba, coloretes en las mejillas y unos labios rojo oscuro que le quedaban de cine con el tono de su piel, su visión era perfecta, sin cerrar la puerta ni nada me lancé a sus labios y la regalé un beso que la dejó sin aire..

-ANA: para, tonto, que te vas a manchar de carmín

-YO: me da igual, eres un titán entre hormigas, te deseo y te voy a hacer pasar la mejor noche de tu vida - lo dije con los ojos inyectados de deseo y sinceridad.

Ella me besó con cariño y nos pusimos los abrigos, andaban ya llamándome los del coche, se oía el claxon desde mi casa, entre algún que otro petardo. El viaje fue divertido charlando, pero mis ojos se clavaron en la piernas de Ana, que no dejaba de bajarse el vestido, a cada movimiento se le subía, puse mi mano en su pierna para que dejara de hacerlo o la trinchaba allí mismo, dejé la mano allí y la movía con cariño subiendo y bajándola por su pantorrilla. Al llegar a la fiesta y aparcar, la ofrecí mi ayuda para salir del coche y como un caballero la ofrecí mi brazo para acompañarla. El lugar era enrome pero estaba lleno, la música era electrónica. Mientras llevé los abrigos al ropero al volver no menos de 10 tíos rodeaban a Ana, ella me miró y extendió su mano hacia mi, pidiendo un rescate, acudí en su auxilio, aparté a los moscones y la llevé a la barra, pedimos algo de beber, pero la dejé claro que solo unas copas, no quería a una borracha, la quería a ella.

Nos fuimos a bailar y noté como la mirada de muchos hombres se clavaban en ella y su arriesgado escote, muchos de esos hombres, o críos, con pareja bailando con ellos, alguna mujer también la miraba, con cara de asco o envidia, por verse superadas por aquella adolescente Granadina, empecé a lucirla, y hacerla girar para hacer rabiar al resto, pero los movimientos bruscos no ayudaban a su vestido, de vez en cuando la pegaba a mi y la cubría para que se lo bajara disimuladamente, nos besábamos apasionadamente en las lentas y nos frotábamos en las rápidas, pasaron las horas y no paramos de divertiremos, fuimos al baño y ella tardó más que yo, normal, la cola del baño de chicas era enorme, yo le veía esperando, cruzándose de piernas, al final pudo entrar y al salir unos cuantos la acechaban, casi tengo que liarme a golpes con unos para que la dejaran llegar a mi.

Con el paso de las canciones los movimientos ya no era de baile, si no de sexo, con ella dada la espalda y yo pegado a su cuerpo juvenil, con una mano en su vientre, subíamos y bajábamos de forma lenta, se contoneaba con exageración y me tenia como una piedra con su refriega contra mi, con cada subida y bajada, mi estaca la pillaba el bajo, y su vestido se subía, varias veces se le llegó a ver las bragas, al principio se lo bajaba, pero llegó un momento en que a los 2 nos daba igual, solo disfrutamos el momento. Yo andaba muy escaso de control, todo sea dicho.

-YO: o paras o no llegas a salir de la pista de baile sin que te tome - la grité al oído debido a la música alta, ella se dio la vuelta sin separarse un solo centímetro, rodando todo su cuerpo, hasta quedar uno frente al otro, sin parar de contonearse.

-ANA: lo estoy deseando - me agarró del cuello y bajó mi cabeza para iniciar un beso obsceno, fuera de lugar, no apto para públicos sensibles, pero me dio igual, la seguiría al infierno si hiciera falta, agarré su trasero y la medio levanté en volandas contra mi, no aguantaba más.

-YO: o nos vamos ya o aquí mismo, tú decides.

-ANA: vámonos – se reía nerviosa, acarició mi mentón con un dedo mientras levantaba una pierna ya que la sostenía en el aire.

La cogí y de la mano e inicié una estampida apartando a la gente de mi camino como un rinoceronte, cuerno duro incluido. Me metí directamente en el ropero y saqué los abrigos, sin soltarla de la mano, como con miedo a que se la fueran a llevar, la ayudé a ponérselo, y de lo que tardaba casi la cojo como una bolsa de patatas al hombro para salir de allí. Había reservado habitación en un hotel cerca de la fiesta, no de esos cutres de carretera, si no uno de esas cadenas especializadas, con habitaciones por franjas horarias, comida afrodisiaca, cama, jacuzzi grande y de más tonterías que encargaras, si había que ser especial, no se podía hacer en mi cuarto con la familia cerca.

El frío de la calle me calmó un poco, lo necesitaba, tenia que tener cuidado con ella, era virgen y era impensable meterle mi enorme falo sin más. Paseando hasta llegar al hotel, comenzaron unos fuegos artificiales que nos quedamos mirando un rato, ella delante de mi y la rodeaba con mi brazos, protegiéndola del aire y dándole mi calor.

Llegamos al hotel y me dieron habitación, todo muy discreto, sin contacto directo con nadie, (esos hoteles están diseñados para ser infiel y que no haya pruebas ni testigos), al entrar en la habitación, ella salió disparada a reconocer toda la habitación, yo solo la miraba y disfrutaba de su felicidad.

-ANA. ¿Podemos usar todo esto?

-YO: es nuestro por unas 6 horas.

-ANA: ¿incluso el jacuzzi? – se agachó sobre él para ver como funcionaba.

-YO: claro - me acerqué por detrás y pegando hábilmente mi cuerpo al suyo me puse a toquetear botones - lo que no se es como funciona - le di a algo y aquello empezó a echar burbujas, ella aplaudió riendo de la emoción.

Se fijó en la mesa y vio la fondee de chocolate con fresas y de más frutas, se lanzó a por ella, cogió un fresa y la mojó en el chocolate caliente.

-ANA: ¡¡¡¡dios que delicia!!!, siempre he querido probar esto - y mordió con fuerza tratando de no mancharse.

Mientras ella degustaba un poco de fruta, yo busqué bajo la mesa, y encontré un bolsa que había pedido, la dejé en la cama y me senté disfrutando del cuerpo de Ana ladeado sobre la mesa de la comida. Pasados unos segundo ella me buscó por la habitación con la mirada, me vio sentado en la cama con cara de imbécil, admirando su espalda la aire y su trasero embutido en aquel vestido elástico, adivinó que ya era tiempo de empezar, aun con comida en su boca, se dio la vuelta y caminó hacia mi con calma y cierta torpeza erótica.

-ANA: pues sin duda, te has portado, has sido un galán y me has tratado bien, creo que es hora…de…..ya sabes……….- se puso entre mis piernas dejando mi cabeza en su cintura- …follar.

-YO: no me gusta usar esa palabra contigo - la cogí por la cintura - ni quiero que lo sientas así - di un beso en su ombligo - no quiero follarte – di otro beso más largo en su vientre - quiero hacer el amor contigo - metí mi cara en el escote abisal de aquella hembra, con ternura besé y jugué con la lengua en su ombligo, llevé mis manos a su trasero y la apreté contra mi, ella agarró mi cabeza por el pelo y echó la cabeza hacia atrás.

Poco a poco fui dejando caer mi cuerpo hacia atrás, dejando que ella se venciera conmigo, hasta quedar de nuevo encima mía, cara con cara, ella con la piernas juntas, “dios, me encantaba esa sensación”, de tener el peso de una mujer encima mía, aplastando sus pechos contra mi y pegando mi polla creciente entre sus piernas. Nos besamos como habíamos hecho en la pista de baile, se forma grosera, con mucha lengua y saliva intercambiando en nuestras bocas, me sujetaba la cara con ambas manos, y yo solo acariciaba la piel de su espalda al aire, con su largo pelo cayendo sobre nuestras cabezas. Sabia a hembra, a mujer, a carmín y a……..chocolate, incluso noté trozos de fruta en su boca, llevé mis manos a su trasero y la apreté tanto contra mi que se abrió de piernas quedando como una amazona sobre mi, aun pecho con pecho, aguanté así unos minutos, se me pasó un idea por la cabeza, y tan impulsivo era que la realicé, acerqué mi boca su cuello y fui besándolo hasta llegar a su iodo.

-YO: eres un bombón, y como tal, tienes que estar cubierta de chocolate - diciendo esto ella se separó un poco y sonrío sin entenderme, la di un beso corto y la agarré de la cintura, la recosté con cuidado sobre la cama y me fui a por la fondee.

Dejé la fuente al lado de la cama, la coloqué con el culo bien al borde de la cama, aun tumbada, llevándose un dedo a la boca de deseo, con una cuchara, saqué un poco de chocolate, soplé para templarlo, y lo extendí sobre uno de sus brazos, luego el otro, coloqué más en su vientre y fui subiendo un camino de chocolate por su torso, en la abertura de su escote, pasando por su pecho, su cuello y llevándolo a su boca, dejándola chupar la cuchara con lujuria, coloqué una pieza de fruta en cada final del camino, una en cada brazo, otra en su ombligo y una fresa en sus labios.

Comencé a comérmela, literalmente, lamía uno de sus brazos y chupaba hasta dejara sin chocolate y entonces me comía mi premio, la fruta, luego el otro brazo, la notaba nerviosa, pero movía sus piernas con placer, cuando ataqué su ombligo, lleno de cacao, soltó un gemido de placer, metí mi lengua bien dentro de él y limpié lo mejor que pude, chupando y no dejando nada, fui subiendo, con calma, disfrutando de la situación, unas gotas habían caído muy cerca de sus pechos, las trabajé bien, para cuando llegué a su cuello su respiración era acelerada, se había abierto de piernas y me rodeaban con ellas, sujetándome la cabeza con las manos de nuevo, notar sus dedos entre mis cabellos me hacia sentir que iba bien, Se acabó el chocolate y solo quedaba la fresa, la mordí la punta que sobresalía, y tragué, amagué con morder de nuevo, pero quería que empezara a moverse ella, la piqué y levantó su cabeza hasta hundir nuestros labios, con la fresa de por medio.

-YO: eres el mejor postre de mi vida.

-ANA: ummmmm calla tonto – dijo melosa – estoy ardiendo - me besó con pasión de nuevo, ambos sabíamos a fruta y chocolate, y era delicioso - me has puesto perdida de babas jajaja estoy pringosa, ¿y si nos vamos al jacuzzi?

Me pareció buena idea, aparte de por higiene, para empezar a quitarnos ropa, yo me desnudé y me quedé solo con los slips, y cuidando la temperatura del agua, me metí.

-YO: joder con las burbujas, se te meten por todos lados, jajajajaja anda ven, peque.

A continuación se produjo una paradoja temporal, Ana aun seguía tumbada en la cama, chupándose los dedos y terminando de tragar algo de fruta, me miraba con deseo y lujuria. Se decidió y se incorporó, pero me iba a regalar unos 10 segundos que me parecieron ser 10 años. Se quitó los zapatos con los pies, metió su mano por debajo de la mini falda y sacó la parte superior de sus medias, luego levantó una pierna sobre la cama, y con mucho celo de no romperlas se las fue quitando, lentamente, luego la otra pierna, y caminó hacia el jacuzzi, por el camino subió sus manos a sus hombros y cogiendo de los tirantes los apartó de si, dejándolos caer para darme la visión de sus pechos, al llegar al borde de la bañera, dejó caer el resto de su vestido al suelo, llevaba unas bragas negras, te tela muy fina, tanto que se notó de lejos la forma de su pubis, marcado por la humedad de su interior, estaba empapada.

Alcé mis brazos para ayudarla a bajar sin caerse, metió lo pies y fue bajando conmigo hasta acabar metidos enteros salvo la cabeza, era profunda y hasta podías bucear, más piscina que bañera.

-ANA: que sensación más rara.

-YO: si, es cierto, voy a ver si la apago.

-ANA: no, no, déjalo así - me puso la mano en el hombro para pararme.

-YO: esta bien, vamos a limpiar ese cuerpo, que vaya ocurrencia la mía.

-ANA: me ha encantado……… me has puesto al rojo vivo…………por poco me corro – lo dijo susurrándome al a oído y acariciando mi pecho..

-YO: pues no te digo como me he puesto yo.

-ANA: pero tú no has mojado las bragas como yo jajajaja

-YO: bueno, ahora estamos en el agua, ¿que más da?

-ANA: pues tienes razón - y haciendo un movimiento bajo el agua se sacó las bragas y las tiró fuera de la bañera - venga ahora tú.

Estaba medio de pie, ella se acercó andando hasta mi y metió la mano por encima del calzoncillo, tirando hacia abajo, mi polla saltó como un resorte golpeando su frente.

-YO: hostias perdona.

-ANA: jajajajajajajjajajaja siempre se me olvida que es enorme……………jo ¿me aseguraras que no me va doler?

-YO: no puedo decirte que no te va a doler, no quiero mentirte, pero te juro que lo haré con mucho cuidado y si quieres parar, se para, y si quieres dejarlo, se deja, pero es un trago que toda mujer ha de pasar la 1º vez.

Mis palabras parecieron convencerla y llevó sus manos a mi polla mojada por el agua, fue pajeando y dando algún besito que otro, yo me senté y dejé medio cuerpo fuera del agua, ella seguía pajeando bajo el agua con sus manos y levantó su cabeza buscando mis labios, yo la correspondí con pasión, nos hundimos un poco más en el agua, pero yo la mantenía firme con mi espalda pegada a la pared de la bañera, la levanté un poco y la puse a horcajadas sobre mi con mi virilidad y sus manos entre medias jugando un partido diferente al nuestro, en esa poción era difícil besarse pero dejó sus pechos mojados y pezones erectos a mi disposición, los lamí con paciencia, sin ninguna prisa, para dejarlos secos, es reiterarme pero tenia unas tetas de quinceañera, firmes, tersas, bien colocadas y con unos pezones duros, ella gemía y yo no lo hacia por tener sus pechos ocupados. Ella inicio un acercamiento constante hasta dejar mi polla aplastada entre ambos cuerpos, y de ahí, un sube y baja, frotando su pelvis con todo el dorso de mi miembro, llevé mis manos a su cadera para ayudarla a subir y bajar, aceleré su ritmo exponencialmente hasta que la noté tensarse, se corrió y eché su cuerpo hacia atrás, quedó casi colgando, la sujeté con una mano en la espalda, pero no dejaba de subirla y bajarla, buscando mi eyaculación, pero lo que llegó fue su 2º orgasmo, grito como loca.

-ANA: ¡¡¡NO PARES, CABRON DE MIERDA, NO PARES!!!!

No lo hacia pero no llegaba mi eyaculación, y dios, la necesitaba, llevaba mucho acumulado, decidí darla la vuelta, ponerla de espaldas y levantando un poco su pierna, meter mi barra candente entre sus muslos, como cuando dormíamos, la acerqué al borde del otro lado de la bañera para que se sujetara, agarrándola del vientre y de un hombro comencé a bombearla por debajo del agua, notando como me abría paso por los labios de su intimidad, los separaba, cogía velocidad y se me escurría, llevé sus brazos atrás y los use de asideros, y con cada golpe de cadera la levantaba por el agua, el ritmo era tan fuerte que ya ni le daba tiempo a bajar, solo se mantenía en el agua flotando y yo percutía sobre ella, se corrió más de una vez moviendo las piernas alocadamente y salpicando en todas direcciones con mis movimientos de cadera, por fin noté el latigazo en mi ingle y me corrí con un placer delicado, regalando un par de embestidas más sobre su trasero.

Al soltarla casi se cae a plomo hacia el fondo de la bañera, se sostuvo a duras penas andando hacia el borde para intentar salir, pero no tenia fuerzas. ”y ni acabo de empezar” pensé. Salí primero y la ayudé a salir, cogí unas toallas y nos sequé a los dos, mientras ella farfullaba que me odiaba por hacérselo pasar tan bien.

-ANA: eres un mamón, me tienes loca, notar como me abre me enloquece, y ni siquiera me has penetrado aun, ¿Como es?

-YO: no se decírtelo, soy un tío, y no lo se - secaba su piel desnuda con un toalla, con la polla relajada.

-ANA: ¿y si me duele mucho?

-YO: pues paramos - secando sus pechos se me despertó.

-ANA: pero ¿y si no quiero parar?

-YO: pues seguimos - secando sus piernas ya la tenia dura de nuevo.

La conversación fue por esos términos mientras ella soltaba miradas de pánico a mi entrepierna, realmente estaba asustada, pero gracias a los consejos de Eli la había ido preparado. Sacando la bolsa que había encargado la enseñé 3 consoladores.

-YO: mira, es impensable que de inicio te metas mi miembro, es demasiado grande, no estas acostumbrada y eres virgen, vamos a empezar con este, es fino y vibra, lo meteremos como un dedo, y lo activamos, excitamos la zona y ayudamos a relajarte, cuando estés ya bien lubricada, lo cambiamos por este, es igual de corto y fino al inicio, pero va aumentado su tamaño hasta la base, vamos metiendo poco a poco, y dejando que te acostumbres, que dilates y abramos despacito. Cuando estés preparada vamos con este, es un tamaño de polla normal, más grande que los otros 2 y con estrías de forma natural, lo vamos probando hasta que estés segura y dilatada, y si estas lista y te fías de mi, probamos con la mía. ¿de acuerdo? – ella miraba atenta a toda mi explicación.

-ANA: vale, me gusta, pero por favor, no me hagas daño.

-YO: te repito, no te puedo decir que no te duela un poco al principio, pero lo haré con cuidado para que no sufras mucho y así pasas el mal trago lo mejor posible. Sabes lo que es el himen, ¿no?

-ANA: si, y me da un poco de apuro, se tiene que romper y dicen que se sangra y duele.

-YO: exacto, pero es algo que se ha de pasar para poder llegar a más, tu………..¿sabes montar en bici?

-ANA: claro.

-YO: y al aprender ¿no te caíste y te hacías daño?

-ANA: claro, como todos.

.-YO: pues esto es un poco igual, se sufre un poco al aprender, pero cuando ya sabes, es una gozada ir por la carretera con el sol a tu espalda y el viento en la cara, ¿verdad?

-ANA: jo que fácil lo haces ver todo - di las gracias mentales a Eli de nuevo, todo aquello me lo había explicado ella.

De inicio la tumbé boca arriba y la regalé unas caricias suaves con mis labios en su interior, metiendo algún dedo y poniéndola a tono, cuando empezó a rezumar fluidos la avisé que iba con el 1º, y esperé su confirmación, una vez lograda metí el pequeño consolador poco a poco, no era más grande que el dedo que le estaba metiendo así que no paso nada raro, la avisé y lo activé.

-ANA; alaaa que………..ufff……..vibra mucho………lo noto - llevó su mano a palpar como iba el avance.

Inicié un leve mete saca que la llevó al cielo, iba haciendo un circulo buscando hacer hueco en ella, y funcionaba, ya que estaba entrando sin problemas, estaba muy mojada, objetivo logrado. Avisé del 2º consolador y esperé confirmación de nuevo, dudó unos segundos, o más bien cogió aire, y me concedió permiso. Entró fácil, era igual de fino que el otro al inicio, y lo dejé así unos segundos para después, empujar un centímetro, noté como se había tensado un poco su cuerpo y esperé, cuando se relajó, empujé más, y misma situación, al 4º empujón.

-ANA: para, para, uffff lo noto muy dentro, no lo saques déjame……….deja que me acomode - buscó una postura pero no la encontraba, no era la postura lo que la incomodaba sino el consolador metido en su interior, aun así insistía en no sacarlo, pasados unos minutos se tranquilizó y se pusó en posición de nuevo -……sigue.

Empujé, enroscando para buscar menos dificultades, un gemido suyo aumentaba con cada milímetro introducido, casi la tenia toda dentro.

-YO: ya esta.

-ANA: anisssss anisssssssss….- se revolvía un poco, pero aguantaba - puffff, joder, como se nota, me llena, noto como me hace tope, debe estar rozando el himen, uff uf….- la acariciaba y buscaba relajarla, pasados unos minutos volvió entrar en si - vale, creo que ya esta, pero déjame a mi hacer el mete saca.

Se llevó la mano a coger la base del consolador, y respirando un poco, se lo sacó un poco, se notó distensión, pero volvió a ponerlo como estaba dando un respingo, repitió la operación varias veces separadas en el tiempo, dejando acostumbrarse, forzó un poco más de la cuenta y rozó su himen, su cara se desencajó, lo sacó bastante, pero pensándolo mejor se lo volvió a meter casi entero.

-ANA: dios……….cuando noto el tope me…………..me duele mucho.

-YO: pero ya lo metes y lo sacas sin problemas, si quieres vamos con el 3º - se quedó pensativa, mientras calculó, sacando y metiendo de nuevo el consolador en su vagina.

-ANA: vale……….. te dejo al mando, seguro que voy a pedir que lo saques enseguida…….

-YO: esta bien, pero si quieres parar me lo dices - asintió sacando el consolador de su interior.

Me coloqué entre sus piernas de nuevo y mojé el dildo que quedaba en vaselina, fui metiendo milímetro a milímetro, midiendo en la cara de Ana las sensaciones, paraba en consecuencia y cuando notaba relajación penetraba un poco más, llegué al tope del himen y lo dejé quieto, la cara de Ana era de aguante, sin ser mi falo, era de considerable grosor y tenia gran parte dentro, incluso noté como si la pelvis de ella hubiera crecido, o se hubiera expandido, Eli me habló de ello. La dejé unos minutos así, sacándolo un poco y haciendo giros para ir creando espacio.

-YO: tú me dirás, ¿lo dejamos, paramos, seguimos con el consolador o lo intentamos conmigo?

-ANA: no lo sé………..solo noto….molestia e incomodidad……. quiero seguir pero me da miedo, no voy a ser capaz sola.

-YO: ¿te ayudo?

-ANA: SI, SI………. – jadeaba vibrando entera - …….. PERO QUIERO QUE SEAS TU, no la mierda esta de plástico.

-YO: ¿estas segura? no es grande pero si suficiente, yo puedo hacerte daño si………..- me cortó con sus dedos en mis labios.

-ANA: no, por favor……..date prisa, no quiero que mi 1º vez sea con plástico, quiero a un hombre……..te quiero a ti, rápido, no se canto aguantaré………solo quiero que pare – suplicaba dulcemente.

-YO: esta bien, déjate ese dentro unos segundos - saqué la vaselina y me embadurné de arriba abajo el miembro.

Saqué el cuerpo de Ana al borde de la cama, boca arriba y me puse de rodillas entre sus piernas abiertas, la altura era ideal para una penetración.

-YO: voy, dime lo que sea, y paramos, o lo dejamos.

-ANA: vale……….pero rápido, quiero que me rompas el himen ya, me duele – estaba roja y sofocada.

Ante su insistencia embadurne también su interior y saqué el consolador, se relajó un poco, pero no la dejé, metí un par de dedos mojados en vaselina, había aumentado su capacidad y espacio, sin duda, pero no lo suficiente para mi, empapé por dentro de ella, y coloqué la punta de mi glande, directamente a la entrada a su vagina.

-YO: voy, peque……...

Ella aguantó la respiración e inició el movimiento sujetando mi polla firme, abrí sus labios mayores, y el glande entró limpio, había trabajado bien previamente, me quedé así unos segundos, de nuevo mirando las reacciones de Ana, estaba tensa pero preparada, aun no había llegado lo peor, y lo sabia, empujé un poco más y me abrí camino, separando sus paredes vaginales.

-ANA; ¡¡¡¡¡¡¡madre de dios, es enorme, no pares, ufffff me noto……noto como llena, como se expande dentro de mi, dios………no pares!!!!!!!

Ya tenia el glande entero dentro y parte del inicio del tronco, la sensación de humedad y calor me era familiar, de Eli, pero la presión era mayor, mucho mayor aunque deliciosa, diferente en un sentido dulce, me tuve que ganar cada centímetro hasta toparme con el himen, vi lagrimas en los ojos de Ana, pero callaba, la saqué medio milímetro para descansar.

-YO: ya esta, estamos donde tenias el consolador - apenas la había penetrado más allá del glande, pero notaba palpitaciones en él, como sus paredes se abrían para hacer sitio.

-ANA: uf dios, es enorme……….. me encanta, la noto llenarme……… pero cuando rozas el himen……..veo las estrellas.

-YO: tu decides, estas lo suficientemente abierta para un golpe de cadera, y romperlo, será como arrancar una tirita - dudó, su cabeza le rogaba que no, mientras su cuerpo, sus sensaciones, le pedían que si.

-ANA: hazlo rápido – se hizo una bola con la esperanza de que eso la ayudara.

Sin dejar tiempo a la duda la agarré fuerte y embestí una sola vez, pasando un tercio de mi extensión, y allí me quedé. Noté, claramente, como algo había cedido en su interior, sus uñas se clavaron en mi, la miré y tenia la cara roja, con la boca abierta con gesto de gritar pero no emitía sonidos de sus labios. Me quedé allí, sin moverme, esperando que hablara, se moviera o que respirara acaso, trataba de pensar en las enseñanzas pero Eli ya me dijo que desvirgar a una mujer siempre es difícil, diferente y que mi caso era especial. Tras unos segundos de angustia por ella, logró hablar.

-ANA: ¡¡¡dios!! Me has roto algo, lo he notado, me ha dolido, pero se esta pasando, no te muevas por favor, no te muevas……

-YO: tranquila peque, no me moveré.

Nos quedamos no menos de 2 minutos así, quietos, mirándonos fijamente, ella sabiendo que yo sentía presión, que poco a poco me hacia sitio en su interior.

-ANA: creo que…….ya……ya puedes moverte…………..me vas a reventar, lo noto tirante, pero ya no me duele.

Fui separando mi cadera lentamente notando como se cerraba su piel a mi paso, volví a embestir una sola vez, esta vez si gritó, como mi estocada, una sola vez, fuerte y paró en seco.

-ANA: sigue………- suplicaba por una explosión de emociones nuevas.

Repetí operación y volvió a gritar, pero ya sin esperar lo volví a hacer, una y otra vez, cada golpe era un gemido y notaba cada centímetro de mi verga presionada, cuando salía sentía como se cerraba el paso y cuando penetraba como se volvía abrir. Aceleré lentamente, hasta el punto en que ella gemía constantemente, tomaba aire y seguía gimiendo, roja, llena, acalorada, excitada y algo dolorida, pero sin decir ni una palabra de queja. Mi ritmo llegó a tal punto que ya no notaba que se cerraran sus paredes al retirarme, ni presión asfixiante al penetrar, la fricción empezaba a ser fluida, y los gemidos de aguante y tensión de Ana fueron cambiando de tonalidad, algunas veces volvía a tensarse pero luego se relajaba.

Al mirar ya entraba casi la mitad dentro, y ese era mi logro del día, no podía pasar de ese punto o la haría daño, eso si, cuando la sacaba veía sangre en la punta, sin duda del himen. La sujetaba las piernas, bien abiertas y estiradas, la noté tensarse pero ya de placer, agarrando las sabanas y mordiéndose el puño de la mano, pasó de roja por la presión a rojo acalorado, sus fluidos empezaron a emanar y facilitaban mis penetraciones, estalló en un grito que debieron oír en otras habitaciones.

-ANA: ¡¡¡¡DIOOOOOOOOOOOS!!!- lo siguió gritando hasta que se quedó sin aire y se desplomó sobre la cama, yo paré en seco mis embestidas.

-YO: ¿estas bien, Ana? Respóndeme por favor, ¡¿ANA?! - pasaron unos segundos de indecisión pero se me pasó cuando la oí reír, de forma lacónica, con los ojos y la boca abiertos, como al ver un golpe fuerte de otra persona.

-ANA: ¡¡¡¡¡madre mía, es……….es……….horrible, pasional, me siento sucia y llena, pero feliz, me ……… me encanta, por dios, nos pares, sigue!!!!!!

Obedecí, seguí bombeando con el mismo ritmo y profundidad controlada, al sacar mi polla salía liquido de su corrida, incluso llegué a pensar que la metía algo más de la mitad, pero no quise arriesgar, su cuerpo se electrificó, yo ya no aguantaba más de ver sus tetas rebotado y agaché el cuerpo sobre ella, para lanzarme a besarlos y chuparlos, se corrió nuevamente, y esta vez no paré, seguí bombeando mientras lamía sus duros pezones, ella no sabia donde poner las manos, me las clavaba en la espalda con cada sacudida de su cuerpo, luego a mi cabeza, después a las sabanas, se agarraba como si fuera a despegar y hasta cogía la almohada y se tapaba la cara, la mordía para acallar sus gritos y luego me pegaba con ella en la cabeza cuando se corría, y no paraba de arremeter contra su cuerpo.

-ANA: ¡¡¡dios dios dios dios, no pares, por tu vida, no pares!!!!

No tenia intención alguna de hacerlo, mi truco final fue llevar una de mis manos a su ombligo y sujetarla desde allí, eso arrancó al poco tiempo una fuente en su entrepierna, era un potro salvaje y me había empapado entero, pasamos así media hora en que se corrió innumerables veces, pero sin pedir que parara, yo ya no aguantaba más y se lo avisé, me incorpore un poco.

-YO: voy a reventar, déjame que la saque…….- ella se incorporó cogiéndome de cuello, aun empalada, con su culo en el borde de la cama haciendo de tope para que no la metiera más en ella.

-ANA: ¡¡¡¡y una mierda, tu te corres dentro, como dios manda!!!!!! - y se pegó a mi besándome como una loca, lamiéndome la cara incluso.

Ante su deseo, y mi conocimiento de la vasectomía, di un par de golpes de cadera más y exploté como nunca antes, ni con Raquel o Tara, ni siquiera con Eli.

-YO: ¡¡¡¡la hostia puta que……..pasada, dios ¿como puede ser?, que cojones!!!!!!, ¡¡¡¡eres una joya!!!, ¿donde has estado toda mi vida.? - lo dije bajando el ritmo pero sin parar, aunque estaba perdiendo fuelle logré una última corrida de ella llevando mi mano a su clítoris.

Nos tumbamos en la cama, agotados, sudando y llenos de fluidos por todas partes, con ella echada sobe mi pecho, mirando mi falo manchado de sangre, fluidos vaginales y semen, se llevó la mano entre los muslos y notó lo abierto que lo tenia y que lo tenia manchado igual. Nos quedamos así un rato, cogiendo aire.

-YO: bueno, al final no ha sido para tanto, ¿no?

-ANA: ¿el dolor? No, una vez que se rompió el himen, descendió hasta desaparecer………….¿pero el sexo?, el sexo ha sido mil veces mejor de lo que creía, yo como tonta creyendo que nuestros frotamientos nocturnos eran geniales, normal que estuvieras fuera de ti, deseándolo.

-YO: eh, que los frotamientos nocturnos son geniales, pero eso no es por el sexo, es por ti - la besé en la frente, levantó su mirada con dicha en sus ojos.

-ANA: ¿de verdad?

-YO: no te mentiré diciéndote que has sido la única, ni la mejor, pero si que eres la 1º que se ha ganado mi corazón, no he follado contigo, he hecho el amor, justo lo que quería.

Se alzó para besarme de nuevo y se acurrucó a mi lado, como habíamos empezado, con ella echada de lado sobre mi, boca arriba, sus tetas pegadas a mi costado, ahora sin telas de por medio y mi hombría morcillona libre de ropas o sabanas, rodeando su cuerpo con mis brazos y acariciando su espalda.

Ella se quiso ir a la ducha, me pidió que lo hiciera también, supuse que había acabado la fiesta por hoy, error. Me agarró del brazo y me metió en la ducha con ella, nos limpiamos mutuamente, y sobó mi cuerpo hasta tener limpio todo, y duro, yo hice lo mismo con toda su piel, hasta metí mi mano en ella, aun abierta, para limpiar bien todos los restos. Allí le comenté lo de la vasectomía, pera que no se preocupara, lejos de eso se emocionó, y dándose la vuelta se pegó a mi sacando mi espada por su pelvis, de nuevo aquella posición, y sin pensarlo mucho la besé el hombro a modo de petición, ella inicio el moviendo con sus caderas, aprisionado entre sus muslos me restregué abriendo sus labios mayores otra vez, pero pasados unos minutos Ana llevó su mano hacia su vagina, puso el culo más en pompa y apretó mi glande contra su entrada, entre golpes de cadera de forma hábil, al golpear de nuevo se la metí, con algo de facilidad debo añadir, al meterla la dejé quieta, Ana casi se cae hacia delante, pero la tenia bien sujeta por los pechos.

-ANA: pufff, ahora no duele nada, solo noto…………..placer.

-YO: pues habrá que aprovecharlo - y agarrándola la cintura la penetré profundamente, la mitad dentro, ella se iba levantando en el aire y se quedé de puntillas, la saqué y metí de golpe, repetía operación, siempre dejando mi polla dentro unos segundos.

Cuando ya noté que no había dolor ni impedimento, aceleré de golpe el ritmo, como una maquina a la que le habían subido la velocidad. Empezó a gritar improperios que ni entendía, incoherentes entre si en genero y sexo, palabras sueltas, ya se había apoyado contra la pared por que a cada embestida la empujaba hacia ella, levantó una pierna como los perros al mear, la agarré por la parte posterior de de la rodilla y seguí bombeando sin parar, no tardó su primer orgasmo, sabia que en esa posición incidía directamente en su punto G, que ya había sido trabajado en las masturbaciones de días previos. Notaba como la piel que rodeaba su entrada se estiraba y contraía según mis gestos, esta vez eyaculé yo primero, la situaron era morbo puro, y ella se sintió halagada y algo confortada de poder descansar. Llevaba mucho trote para su 1º y 2º vez.

Nos tuvimos que volver a duchar para salir con la sensación de limpieza que correspondía, y nos pusimos las prendas intimas, mas que por decoro, por seguridad, no nos fiábamos el uno del otro de que si seguíamos desnudos no repitiéramos, nos echarnos unas horas a dormir. Nos dio igual, pasadas unas horas en que nos avisaron que nos quedaba 1 hora solo. La posición de cuchara me la ponía a reventar en el slip, así que me lo quité y planté todo mi largo en su trasero, desde sus glúteos hasta su espalda, ella se giró sorprendida.

-ANA: ¿todavía tienes ganas de más?

-YO: es culpa tuya por ser tan preciosa - la besé, ella correspondió, y una cosa llevé a la otra ………. terminé estirada encima de mi, cara a cara, besándonos y con mi polla sobresaliendo por su culo ente sus piernas, se arrodilló cabalgándome y pajeando a mi amigo con una mano en su espalda .

-ANA: dios, eres insaciable ¿que va a pasar en tu casa?

-YO: que tendrás que aprender a correrte en silencio o tendré que amordazarte, por que no pienso dejar de hacerte el amor - palabras que dieron en el clavo.

Se echó para atrás, y sacó mi polla por delante de su pelvis, cogió el lubricante y se empapó el coño, hizo lo mismo con mi monstruosidad, en sus manos era indecente la diferencia de tamaños, y fue agachándose hasta tener mi glande en su entrada, bajó fuerte y se empaló ella sola, fue un alivio notar que no se le había cerrado demasiado, cogió postura de nuevo y poniendo una mano de tope empezó a follárme, si, si, ella a mi, yo alucinaba pero mi mano en su vientre jugaba, la puso a 100 y se corrió goteando sobre mi en menos de 5 minutos, me incorporé y me senté a lo Buda con ella rodeándome con las piernas por encima de las mías, aun ensartada, y así comencé a moverla encima de mi, llevando mis manos a su trasero y magreando como un animal, ella, con una mano en el colchón y otra en mi cuello como chancho, botaba sobre mi, sus pechos eran demasiado apetecibles como para dejarlos sin ser cuidados y hundí uno de ellos en mi boca, mordisqueando el pezón, se corrió nuevamente cayendo hacia atrás, apenas la pude sujetar por los riñones para seguir bombeándola. Ella era un trapo en mis manos, su largo pelo colgaba de su cabeza hacia atrás, lo notaba en mi pies, de vez en cuando se echaba hacia delante para besarme, y no se por que, pero llegó a darme una bofetada, pero siempre volvía a echar el cuerpo hacia atrás, dejando caer sus brazos a los lados mientras yo la sujetaba. Se corrió varias veces y la ultima era una fuente, demasiadas veces seguidas, me empapó las piernas pero me dio igual, seguía trabajando con mi boca sus pechos y seguía empalándola hasta que yo me corriera, casi maldije el buen entrenamiento de Eli, tuve que estar así 20 minutos hasta que me corrí dentro de ella.

Caí rendido sobre la cama y ella sobre mi, aun encima, y aun ensartada, pero notando ambos como mi inflamación se desvanecía, me besó de forma cariñosa y de agradecimiento.

-YO: si no quieres que nos echen de aquí los GEOS será mejor que te quites de encima, por que como sigas así me empalmo de nuevo y no salimos de aquí en 1 hora ni de coña.

-ANA: jajaja eres malo, me quedaría así siempre.

-YO: joder ¿quien no?, pero tenemos que ducharnos otra vez y vestirnos, por favor, por el bien de todos, dúchate sola, luego voy yo.

Tardó algún segundo en hacerlo, pero lo hizo, gracias a dios, pude serenarme, salió de la ducha ya totalmente vestida y lo agradecí, me duché y recogimos para irnos, le costaba andar un poco. Eran ya las 10 de la mañana y cogimos uno de los autobuses para volver a casa, el camino me pareció genial, mi cabeza solo pensaba en ella y su cuerpo, en como lo había disfrutado, el cariño y la dulzura, no solo la pasión, ella cayó rendida, dormida sobre mi. Al llegar compramos unos churros, y subimos a casa a desayunar con la familia, ella se fue a mi cuarto y se puso ropa cómoda, más que nada para que no la abroncaran por ir tan “suelta”. Desayunamos y compartimos alguna de las cosas que habían pasado en la fiesta, y con gesto de cansancio nos fimos a dormir pidiendo que no nos despertaran.

Al llegar al cuarto me desvestí delante de ella, pero cuando fui al baño y volví estaba ya dormida, agotada pero con una sonrisa de oreja a oreja, me coloqué detrás de ella y la abracé, ella correspondió sin abrir los ojos, atrapándome entre sus brazos y piernas, y nos dormimos así.

Ana – Despedida dulce.

Me despertaron los ruidos en la cocina, estaban recogiendo la mesa después de comer, eran las 5 de la tarde, tenia en la cara su pelo, lo olí, era una delicia, mi mano rodeaba su cuerpo y caía por su cintura, empecé a acariciar con un dedo su vientre, hasta que se despertara, estaba en la gloria, era una mezcla de sensaciones, amor, cariño y sensualidad, todo se juntaba en mi mente. Ella reaccionó pasados unos minutos, movió su cuerpo pegándose más a mi.

-ANA: hola amor, ¿que tal? - lo dijo sin abrir los ojos ni girarse.

-YO: siendo el hombre más feliz de la tierra ahora mismo - rió.

-ANA: pues que suerte tienes, por que estas al lado de la mujer más feliz el mundo, eres un cielo, me lo has hecho pasar genial, ha sido maravilloso, dulce, apasionado y casi no me dolió nada, justo como había deseado, pero mucho mejor - llevó sus manos a las mías, jugueteaba a entrelazar lo dedos.

Nos levantamos reteniendo nuestras ganas a duras penas, al menos yo, había mucha gente en la casa y cerca de la cocina, nos levantamos al baño y comimos algo, luego nos duchamos y salimos con la familia a pasear. A la hora de cenar ellos se volvieron pero nosotros habíamos quedado en casa de un amigo que se había quedado sola, cenamos y vimos algunas películas charlando en grupo, pero pegado a Ana, abrazados y con gestos de cariño continuos. La gente se fue marchando y quedamos solo ella y yo en el salón, con algunas personas desperdigadas por la casa.

Ana ya estaba a horcajadas sobre mi, besándonos, metiéndonos mano como podíamos entre embestidas de nuestras lenguas, ella elevaba su cuerpo y me besaba desde arriba, con mi cabeza echada hacia atrás, a mi ya me reventaba el pantalón y ella lo notó, sacó mi polla por la bragueta de mi pantalón, no sin dificultados, pero ya una vez fuera pajeaba suavemente mientras yo meta mano por debajo de la falta que llevaba, nos pusimos una manta rodeándonos, para tapar un poco aunque fuera evidente lo que ocurría. Bajé las medias térmicas hasta medio muslo y metía mis dedos en su interior, con habilidad logré que se mojara rápidamente.

-ANA: sabes, ¿ayer me quedé con ganas?

-YO: no creo, estabas muy agitada.

-ANA: lo estaba, pero ayer me dijiste que hicimos el amor, pero ahora quiero……..quiero que me folles.

-YO: ¿y cual se supone que es la diferencia?

-ANA: no lo sé, por eso quiero hacerlo - y sin mucho dudar alzó su cuerpo y colocó mi glande en su entrada, apartando la tela de sus bragas.

-YO: ten cuidado.

Fue bajando lentamente sus piernas hasta hacer presión, abrió sus labios mayores para facilitar la penetración y poco a poco noté de nuevo la fuerte presión en la punta de mi polla, ella abrió la boca de dolor, pero metí mi lengua en ella para acallar posibles gritos, siguió bajando hasta notar como se iba abriendo de nuevo su interior, haciendo hueco, metió todo lo que la posición con la ropa permitía, la misma mitad que aquella mañana, se quedó así unos segundos, dejando acostumbrarse a la física de los espacios, sin parar de besarnos y agarrándola contra mi notaba como temblaba un poco, metí mis manos por debajo de la blusa y busqué sus pechos, en su espalda desabroché el sujetador y llevé mis dedos a sus pezones, agaché la cabeza para levantarle la blusa y chupar uno de ellos, apretándolo con fuerza. Ella se sintió más cómoda y empezó a subir y bajar sobre mi, acelerando algo el ritmo, y mojando mi extensión con sus fluidos, que ya eran abundantes, el ritmo se aceleró de nuevo, ya la sentía vibrar, y tomé el control, agarré de su cintura y era yo quien la hacia subir y bajar aguantando el ritmo, su respiración era agitada y por momentos dejaba de besarme para coger aire por la boca después de haber trabajado sus pezones.

-ANA: ¡¡¡¡dios, ya lo noto de nuevo, me voy a correr, umm no pares, sigue, sigue!!!!! - se movía fuertemente, queriendo caer a plomo contra mi.

Sentí un calor abrasador y un líquido tibio entre las piernas, Ana se quedó parada, clavada por la mitad de mi estaca de carne, totalmente dura.

-YO: no ha costado tanto como esta mañana.

-ANA: dios, es verdad, me estas taladrando y lo mejor es que no he sentido nada de dolor, solo presión, noto coda centímetro de partiéndome, me encanta - lo dijo entre respiraciones aceleradas.

-YO: pues no pasamos de la mitad, es mejor ir poco a poco.

-ANA: pero no tenemos tiempo, me voy en 5 días.

-YO: lo se, y no sabes cuanto lamento tu marcha - la acaricie la cara.

-ANA: ¿y si no fuera así?

-YO: ¿que dices? ¿No irte?

-ANA: bueno, eso no, tengo que irme y acabar el instituto hasta verano, pero lo he estado pensando, después tengo algo de dinero ahorrado para la universidad, tengo buenas notas, no sé, al llegar las inscripciones, a finales del verano, podría pedir plaza en alguna universidad……….aquí – lo dijo con más dudas que seguridad, temiendo alguna reacción negativa de mi parte.

-YO: pero esa es una decisión muy importante, no puedes tomarla por mí.

-ANA: ¿no te gustaría que estuviera contigo? - la besé con seguridad.

-YO: ahora mismo nada me haría más feliz, pero es una decisión que has de tomar de forma calmada, razonada con la familia, ¿donde vivirías? ¿Vendrías sola? No conocerías a nadie salvo yo, y somos muy jóvenes para depender uno exclusivamente del otro.

-ANA: jo, supongo que tienes razón, pero….…¿si se pudiera, me esperarais?

-YO: mientras tu estés a mi lado no deseo a nadie más……. – una burda falsedad que demostró el tiempo, pero que en ese momento era un sentimiento real - ……..pero si estas lejos no voy a decirte que esperaré como un monje tu llegada.

-ANA: es verdad, seria injusto para ambos.

-YO: mira, hacemos esto, tú te marchas y sigues con tu vida, yo haré lo mismo, y si para septiembre quieres y logras venir a Madrid a estudiar, yo te prometo que te ayudaré en todo lo que pueda, y si aun queremos los 2, seguiremos con lo nuestro, ¿de acuerdo? - sonrió de felicidad, era una decisión salomónica, pero la daba algún rayo de esperanza.

-ANA: primo, como te quiero, ¡¡¡eres el mejor!!!- y acercó sus labios a lo míos, dando pequeños besos por toda la boca, como agradeciendo mi solución.

No habíamos olvidado que ella seguía empalada por mi y yo seguía tieso, la medio recosté sobre el sofá y le quité las medias, subiendo la falda, sin desmontarla, la subí la blusa y ataqué su ombligo, sabia que la volvía loca, y sin parar de lamer su vientre comencé a meter y sacar mi polla con calma, pero sin parar, ya no era un ligero movimiento, sino sacarla casi entera y meterla hasta la mitad, no paré hasta que me corrí en ella, fueron mas de 40 minutos en los que no aumenté el ritmo, solo la metía y la sacaba con calma, ella se tocaba el clítoris en ocasiones y se corrió múltiples veces, rogando que acelerara, pero no lo hice, quise que fuera así, que rogara, para que fuera totalmente mía los últimos días con ella.

Al acabar nos fuimos al baño y nos adecentamos, al salir por la puerta alguno de los de la casa, que andaban por las habitaciones, salió a hacerme gestos de sorna y bendición por lo que habían oído, era una casa grande pero hubo cosas que tuvieron que oír.

Los siguientes días pasaron fugaces, entre achuchones y “magreos”, nos inventábamos cualquier excusa para salir de casa y follar en cualquier parte, o cualquier motivo para quedarnos en casa cuando todos salían, y hacerlo en casa, más que nada por los gritos de ambos, sobretodo de ella, cuando se corría múltiples veces no había forma de hacerla callar. Cuando no se podía ninguna de ambas nos encerrábamos en mi cuarto y practicábamos el sexo oral, ella, siendo novata se fue con un master class, la enseñé trucos con la legua sobre el glande, que me habían enseñado a mi, y que volverían loco a cualquier hombre, también me aseguré de no haber perdido mi toque, no se por que, pero las comidas de coño se me daban genial, o al menos eso había demostrado mi experiencia con mujeres de todo tipo. Llegué a juguetear con mis dedos en su ano, pero ni de lejos estaba preparada para sexo anal, bastante habíamos avanzado ya. Mi rabo ya no era un misterio los días previos a su marcha, se la metía sin demasiada dificultad, pero siempre hasta la mitad, no me atrevía a más, pese a que alguna vez me lo pidió, casi más por miedo a que le doliera a ella, tenia miedo a confirmar si se podía o no, y que aquella chiquilla se sintiera mal por ello, o que me atara a una mujer que no me cubría entero.

El ultimo día pasábamos de media polla, poco, pero algo más, ella se iba abriendo y su pelvis ensanchando con cada sesión de sexo, eran dulces, mágicas e inocentes, otras era pasionales, una arrancada de excitación, probamos algunas cosas como las cubanas o posiciones más complejas pero la realidad es que embestirla por detrás era lo que sacaba lo mejor de los 2, ella se dejaba hacer a mi ritmo, que era demasiado elevado, y me dejaba las manos libres para jugar con sus tiernos pechos, o su vientre.

Tristemente llegó el día de reyes, su ultimo día, nos dimos unos regalos entre todos, ella me dio un sobre cerrado que no me dejó abrir hasta su marcha, yo la regalé una fondee y sobres de chocolate. Reímos como idiotas ante la sorpresa de los presentes, sin entender el por que. Nos despedimos con un paseo por el parque antes de que se fuera, pese al frío pegaba un sol radiante, y nos despedimos deseándonos un pronto reencuentro, cogidos de la mano y besándonos como enamorados. Recogieron sus cosas y se marcharon, reconozco que su marcha me hizo sentir vacío, pero la promesa de volverla a ver pronto, y que hasta entonces tenia barra libre, me alegró el día, y pensaba pasármelo muy bien hasta su vuelta.

-MADRE: pues mira lo que me han dicho, que la niña anda muy pesada, dice su abuela que se ha puesto a decir que ahora quiere venirse a Madrid, a la universidad, que le encanta estar aquí, con nosotros.

-YO: ¿eso ha dicho?

-MADRE: si, no se que la habrás hecho pero dice su abuela que esta contenta contigo, y con la ciudad, que no la había visto así de abierta y extrovertida nunca.

-YO: pues no sé, supongo que le he dado justo lo que necesitaba - abrí el sobre, y había una pequeña anotación.

ANA: “Se que no tomabas somníferos, hasta pronto”

Sonreí.

Pasaron los días y tocó volver al instituto después de las fiestas navideñas, las primeras semanas las pasé lacónico y mustio, la vuelta de Ana a Granada y el fin de nuestras sesiones de sexo me tenían triste, no era por el sexo, si no por la sensación de tener una mujer a tu lado, que te desea tanto como tú a ella, y que te reconforta, que calmaba la fiera que llevaba dentro, y no me refiero a mi pene.

Mis notas en el curso eran algo pobres, nunca fui un “listillo” pero siempre sacaba notas fáciles, 6-7 sin demasiado estudiar, la media la sacaba seguro, pero mis padres me dieron un toque, ya no colaba la historia del pobre crío operado, ya estaba más cerca de los 19 que de los 18 y de la operación, “tenia que prestar más atención en el instituto”, y a fe que lo hice, esas palabras retumbaron en mi cabeza unos días, ¿Qué me pasaba?, era un chico joven de 18 años, moreno, de 1,88 de alto, de espaldas grandes y fuertes, apuesto, de unos 85 kilos, con cierta tonificación, sin llegar a marcar músculo, había tenido sexo con penetración con 3 mujeres diferentes, repetidas veces con cada una, había hecho de casi todo en el sexo sin penetración con otras 4 diferentes, alguna de ellas ex actriz porno, entrenado y con cierta experiencia, con una miembro enorme y una legión de colegialas adolescentes con las hormonas alteradas ante mi.

Según pasaron los días, la sensación de que estaba perdiendo el tiempo crecía en mi interior, llegué a quedar con Eli, que le iba de cine con su forma de llevar el gym, deseando sexo con ella, pero no me dejó, me incitó a lanzarme a por las del instituto. Todo indicaba una sola dirección, y fui a por ello, convencido de que era lo que se tenía que hacer.

Os diré que durante los siguientes 5 meses follé no menos de 40 veces, con más de 12 alumnas distintas, os sorprendería el numero tan corto de alumnas que ya no eran vírgenes a esas alturas, a mi me sorprendió al menos, me costó encontrar alguna y siempre de escalas menores en las clases sociales de los institutos, siempre de último curso y mayores de edad, por mi y las palabra de Eli, se me insinuaron igual chicas de 17, de 16 y me chocó profundamente una de 15 que afirmaba no ser virgen ya y que quería guerra, las ignoré a todas.

Sin contar las que lo intentaron y no se pudo por que literalmente no les entraba mi pene, pero si sexo oral o masturbaciones mutuas, otras salían corriendo al verme desnudo y la polla colgando, una incluso salió corriendo solo con sentarse encima de mi con la ropa puesta aun, el rumor de mi polla corría como la pólvora y noté como, pasadas unas semanas desde que empecé, las chicas que no conocía, no me miraban a la cara, si no a la entrepierna directamente, y las que si me conocían, cambiaron su actitud hacia mi diametralmente, se salvaron algunas de las más populares y más morbosas por estar ya con novio y ser amigos míos, y lo digo así por que mas de 3 de ese tipo se me insinuaron claramente, y no digo insinuar si no cogerme la polla y arrastrarme al baño, pero me negué en casi todos los casos, en otros la chica o situación era demasiado excitante, o el amigo no era tan cercano. Los compañeros no ayudaban, pasé de ser el gordo, y toda la enciclopedia de insultos y bromas que lleva detrás, a ser el trípode, el tres piernas o el hombre del bastón, al principio me molestaban sus comentarios, pero me di cuenta que lejos de avergonzarme a mi, (que estaba acostumbrado a usar el humor como mecanismo de defensa ante esos ataques cuando estaba gordo, una gran polla no seria problema) o a la chicas, esas palabras me fijaban como objetivo, era un reto para ellas, en el 60% de los polvos que eché, solo tenia que bajarme el pantalón, y otros con usar una trampa sencilla de presumir y hacerlas caer en el “no te creo”.

Echaba de menos mucho los juegos y la conquista que Eli me prometió, buscaba un reto, pero realmente no lo encontré en esas alumnas.

Marina – Mi 1º amor.

Tengo que empezar por una, y no existe mejor comienzo que el principio, si habéis seguido la historia, Marina fue la 1º chica con la que salí, la menciono un poco de pasada, pero en realidad fue mi 1º amor, desde el colegio me había quedado enamorado de ella, era una de las pocas que me trataba bien y no con asco por mi aspecto orondo, fue la mujer que vio a través de toda aquella grasa y vio a un buen chico, me dio la oportunidad de salir con ella un par de veces, la única que me concedió ese honor, y como tal, quise que fuera ella la del pistoletazo de salida, quería regalarle eso al menos, se lo había merecido.

Las primeras citas fueron con unos 16 años, ella era la empollona de clase, algo pija y adinerada, pero una dulzura de niña, una muñequilla rubia de ojos azules, con cara de ángel, aun sin desarrollar su físico debido a nuestra edad, pero me parecía lo más bello del mundo por entonces. Para mi era como la historia de la bella y la bestia, la había protegido en el colegio de los que querían meterse con ella, pero las citas no fueron bien, aparte de tirarle una copa entera encima por ponerme nervioso en la 1º, en la 2º no acerté con el plan o algo, se debió de aburrir tanto que me dio las gracias pero me pidió, amablemente, que lo dejáramos allí, dándome un beso en la mejilla.

Aquel diamante en bruto se había convertido en una mujer de bandera, sus pechos habían crecido de manera veloz y sus curvas eran claras, pero disimuladas por su forma de vestir, siempre elegante y poco provocadora, tenia una madre muy estricta en ese aspecto, que la había educado para ser una señorita, ¿sabéis?, de esas que flotan al caminar y de las que con un gesto al apartarse el pelo del rostro son capaces de robarte el corazón. Su media melena rubia y su forma de moverse, colocárselo todo sobre un hombro, de forma elegante, me habían tenido embobado durante cursos enteros, le pusieron unas gafas para leer de cerca, pero eso en vez de empeorarla le daba un aire a secretaria que ponía 100 a más de uno, y su belleza no pasó desapercibida, salió con chicos y aunque sus medias de 10 en los exámenes bajaron algo, seguía siendo de las mejores de clase. Se echó un novio que le duró varios cursos, tuvo sexo con él, lo sé por que el tipo era un bocazas y un imbécil, lo fue pregonando, al inicio del ultimo curso le echaron por mala conducta y ella le dejó por ir divulgando sus relaciones sexuales, me enteré en el hospital y me pareció genial, era un capullo.

Era mi oportunidad, estaba en mi clase y fue de las chicas que más se había preocupado por mi durante la operación, y se había molestado en reanudar nuestra amistad desde mi vuelta, sin que se supiera aun de mi fama, y sin ver en sus ojos azules más que cariño y ternura. No sabia como atacarla, no quería que fuera un acto mecanizado, o manipularla, si no un regalo, pasé días ideando como lograr su atención y llegar a un punto en que ella volviera a aceptar salir conmigo de nuevo. Por suerte nos tocó hacer un trabajo de Grecia en grupos de 2, no tanta ya que a mí me tocó con un pesado que iba de anti-sistema pero con consolas y móviles de ultima generación con el dinero de sus padres, a ella le tocó con otro chico, maniobré con la profesora para indicarla que éramos una mala pareja ya que los 2 éramos muy vagos, que si me pusiera con alguien más listo rendiría mejor, supongo que por mi fama de la operación, y cierto cariño debido a los años en que nos conocíamos, cedió y me puso con Marina, más adelante os contaré como se lo agradecí a esa profesora.

-YO: bueno parece que nos volvemos a encontrar, jejeje

-MARINA: menos mal, estaba harta de ese crío que me habían puesto, no hacia más que tirarme los trastos – “vale, esto no va a ser sencillo”

Temiendo cualquier represalia por su alerta, solo hablamos del trabajo, y como os decía, no soy tonto, si me pongo entiendo perfectamente casi cualquier cosa, y la historia antigua me encanta, atendiendo a sus directrices aportaba ideas, ella era lista pero le faltaba creatividad, yo le daba ese plus a la hora de cómo presentar determinado tema, o que cosas eran las más normales y que otras podíamos trabajar mejor para salirnos del trabajo convencional. La charla fue animada, se sentía cómoda conmigo, eso nunca había cambiado, y de vez en cuando aprovechaba para rozar la piel de su mano con cualquier excusa, como centrar su mirada a una pareja que estaba haciendo el tonto, o gastarla alguna broma, nada pecaminoso. Terminó la clase y casi habíamos encuadrado la idea general de lo que queríamos presentar y como, me dio su nuevo teléfono ya que lo había cambiado, para estar en contacto por si se nos ocurría algo nuevo para el trabajo.

YO: perfecto, ¿así que borro el viejo número?

-MARINA: si….ese bórralo, ya no sirve para nada.

-YO: ¿y por que el cambio? - agachó algo la mirada, le incomodaba el tema, reaccioné – seguro que te ha llamado alguna pesada de esas de venta telefónica ofreciéndote el oro y el moro si cambiabas de compañía, y has picado ¿no?- la di una salida.

-MARINA: si,… eso, es que me encantaba este modelo y me lo dejaban bien de precio jajajaja, oye ha sido un placer verte y hablar contigo de nuevo, nos vemos mañana y tráete los apuntes de lo que saques para así empezar el trabajo - se levantó y paso por detrás de mi, se agachó y me dio un beso en la mejilla, aquel gesto tonto e inocente que había repetido en muchos de nuestros encuentros, me parecía lo mejor del mundo, no solo por que antaño era lo mas erótico en mi vida, si no por que noté que salvo a sus novios, no lo hacia con nadie más.

Trabajé en casa como un vendedor a final de mes, buscaba y recopilaba la información necesaria que ella me había asignado y a la vez trataba de usar todo aquello para insinuarla que era un varón apto, y colarme en su mente. Se me pasaron ideas rocambolescas, como hacer la presentación semi desnudos o como las estatuas de la antigua Grecia, pero era demasiado para ella, aunque no para mi y mi desvergüenza, quizá vestidos con túnicas, si, aquello podía funcionar. Al día siguiente la presenté toda la información, había más que de sobra para el trabajo, y mientras lo organizábamos le ofrecí mi idea, le encantó, le parecía atrevido y que nadie más lo haría, y eso subiría nota, quedamos en que cada cual se haría su ropa, siguiendo unas especificaciones para ir iguales en color y forma, yo iría de senador, para explicar la política de la época y ella de oráculo, hablando de la religión y los mitos, todo como si fuéramos de la antigua Grecia y nos hubieran transportado allí para contarles lo que hacíamos de 1º mano. La idea le pareció tan buena que no paraba de sonreír imaginándoselo, sin duda sacaría un 10, y era gracias a mí. Con el trabajo ya casi acabado, ya solo nos quedaba trabajar la presentación, enlazar los diálogos y que quedara bien. No nos daba tiempo en clase así que quedamos en el descanso, era una hora y pedimos la sala de actuaciones.

Llevamos el trabajo y lo pulimos, nos organizamos para contar la historia, seria como una charla, o una discusión más energética en algunas fases, entre política y religión de un determinado año que elegimos de forma meditada, para no dejarnos a nadie importante fuera del marco temporal, usando a filósofos y teólogos de la época, hablando de ellos en presente si estaban vivos, o pasado si no, rebatiendo los argumentos de ambos con ataques a sus famosas debilidades, nos quedó muy bien el dialogo y lo representamos, íbamos añadiendo partes con cosas que se nos ocurrían de lo estudiado y cogí unas mantas del trastero para movernos como si fueran túnicas. Nos lo pasamos genial y en nuestras cabezas se quedó la idea de que el 10 no se nos escapaba.

Al acabar nos aplaudimos y de forma inconsciente me llegó a abrazar, la gracia de la situación y la sensación de trabajo bien hecho eran evidentes en ella, pero yo me descoloqué, de repente entré en conciencia de su cuerpo pegado al mío, de sus tetas contra mi pecho y de mi cabeza al lado de la suya, oliendo el pelo, mi abrazo pasó de jovial a querer retenerla contra mi, ella lo entendió como más diversión y se alzó doblando las rodillas hacia atrás, colgando de mi, la sensación me encantaba pero no podía dar el paso aun, así que la bajé con cuidado de no hacerla daño y al poner lo pies en el suelo, me besó de nuevo en la mejilla.

-MARINA: estoy segura, el 10 cae, no puede haber nada mejor preparado, no se como se te ocurren estas cosas, siempre has logrado hacerme reír jajajjaja

-YO: un don que tengo, se hacer el tonto.

-MARINA: pero no lo eres…. – ladeó la cabeza, ”¿empieza a mirarme con otros ojos?”- ….solo me molesta dejar un poco de lado los JJOO, los mencionamos muy de pasada, al final deberíamos dedicarle algún comentario - era cierto, decidimos hacer coincidir con unos de JJOO añadiendo algún comentario sutil durante las charlas.

-YO: sigue quedando muy liviano, al final hay que hacer algo………

-MARINA: ¿el que?

-YO: tú déjame a mí, algo se me ocurrirá - puso cara de confiar en mí, no obstante la idea de esa presentación era mía y le encantaba.

Maquiné en mi casa, mientras, con mi madre, ideábamos la túnica, ya os dije que fue costurera, no le costó demasiado hacerse a una idea viendo unas fotos por Internet, mientras ella terminaba de arreglar un par de sabanas blancas y azules, yo me encerré en mi cuarto y me dispuse a idear algo al final de la presentación, algo tenia que sacar de mi fabrica de ideas, pensé en los JJOO de nuevo, podía hacer algún tipo de ejercicio, pero correr era difícil y quedaría fatal en la clase, lanzamiento de peso podía romper algo, y de repente repasé en mi mente, una imagen se clavó en mi cerebro, ya lo tenia y aparte de ser un genial final, podía llevarme a mi objetivo con Marina. Metí mano en el cajón de los calzoncillos y busqué mi viejo bote de acuarelas. Cuando acabé le mandé un mensaje.

YO: “lo tengo, el final, va a ser la leche.”

MARINA: “¿si? ¡¡¡¡Que bien!!! ¿Que es?”

YO: ”mañana lo verás, no te preocupes, lo tengo todo controlado. ;-) ”

Fui al instituto con un hormigueo en el estomago, era un gran día, y no solo era la presentación o el trabajo, era el final, ese final, y era ella. Al llegar a clase me acerqué y charlamos sobre temas finales, ambos con unas bolsas cerca, con las túnicas preparadas. Se dieron las horas y a cada clase nos poníamos más nerviosos, en el descanso no nos separamos, sin parar de repetir el dialogo, tenia que quedar a fuego en la mente, ella metió palabras clave, para que si alguno se quedaba pillado el otro entrara con ellas para recordarle el guión al otro, “es lista, y guapa, ¿que coño habría visto esa mujer en mi hacia unos años?”. Al terminar me separé de ella y busqué a un buen amigo mío que estaba en nuestra clase, le comenté algo, y volví con ella.

-MARINA: ¿que pasa?

-YO: nada, que me va a echar una mano con el final.

-MARINA: ¿y me lo vas a decir?

-YO: jajajja no, es sorpresa y tiene que ser así - esta vez fui yo quien la besé en su mejilla, y me alejé correteando como un crío tonto.

Marina – El trabajo de Grecia.

Pasaron las clases y llegó la ultima hora, la hora de la verdad, fueron pasando los trabajos y ninguno nos llegaba a la suela del zapato, todo presentaciones en que 1 del grupo leía en voz alta una retahíla de datos mientras el resto señalaba en las cartulinas, muy soso, alguno se había traído una sabana vieja y se la ponía por encima de la ropa. Pedimos ser los últimos para así darnos tiempo a ir a cambiarnos, cogimos las bolsas y nos fuimos a nuestros respectivos baños, no tardé nada en vestirme y salir, ella tardó un poco más y me dio pánico que se nos pasara el turno final, así que fui a la clase, esperé que los que estaban exponiendo acabaran y entré, la carcajada fue sonora, burlas y sornas de todo tipo, algún silbido y comentario de mis amigos, la sabana blanca era bastante grande, me tapaba un hombro y de mi pecho hasta mis rodillas, cuidé llevar unas sandalias viejas, para hacer el efecto creíble, la sabana azul me rodeaba el otro hombro, mas pequeña y cosida a la banca, me colgaba para poder rodear mi brazo, tal y como habíamos visto en las fotos, mi madre se había salido del mapa, no se podía mejorar, o eso creía, era nuestro turno y ella aun no aparecía, así que me marqué un arranque improvisado “quejándome de lo amargo de la tardanza de las mujeres y de que Aristóteles ya me había comentado el otro día que la mujeres del oráculo siempre tardaban tanto”, tenia imaginación y “sinvergonzoneria” de sobra para eso y más, la gente se reía sin saber del todo si estaba preparado o no. Se abrió la puerta y por el rabillo del ojo atisbé una túnica, debía ser ella, así que solté una presentación leve para meterla en el papel, quería dejar espacio y tiempo para que las bromas y sornas de mis compañeros no afectaran al ritmo, pero me sorprendí a mi mismo parloteando solo, cuando me di la vuelta adiviné por que.

Bien, no se si conoces el término “belleza clásica”, es el que se usa para definir un objeto, o persona, que entra en los cánones perfectos de belleza estipulados, la mujer que tenia delante lo era, había cerrado la boca a todos los presentes con su belleza, incluido yo, llevaba un peinado estudiado al milímetro, con ondas y broches pequeños que pegaban su cabello a la cabeza pero dejando caer unos mechones por los lados de su cara, iba con el rostro lavado, y aun así su aspecto era impecable, esculpida de manos de Miguel ángel, sus ojos azules eran imponentes, y la forma de su cuello era la perfección, llevaba un vestido blanco nuclear, nada obsceno y algo abultado, con un ligero escote, sin llegar a percibir su sostén, amplias mangas en los hombros, y largo, le caía hasta los pies, llevaba una sabana blanca en uno de sus brazos y su cintura estaba rodeada de una cinta roja, con una cadena dorada que la rodeaba por varias partes del vestido. Si mi madre se había salido, la suya había contratado a un equipo de vestuario entero y estarían encerrados en el baño.

No reaccioné, estaba paralizado, fue ella la que se metió en el papel, disculpándose ante los presentes pero que “había tenido unas revelaciones de Hera, y no se podía hacer esperar a la mujer de Zeus”. Yo seguía atónito, ella reaccionó de nuevo metiendo la 1º palabra de control en una frase sobre lo lento que era siempre todo en la política con gente como yo.

Entré en mí de golpe, recordé el ensayo y arranqué con alguna mención al “cuidado que deben tener las mortales si no quieren generar envidias en el lado femenino del Olimpo”. Ella la cazó al bueno, como algún otro de la sala que comento alguna grosería siendo callado por la profesora, iniciamos el dialogo ensayado, todo fue perfecto, incluso en las zonas donde debíamos enfadarnos, nos enfadamos, nos habíamos metido en el papel, había química entre nosotros.

Ibamos a terminar ya, la clase aplaudía por partes, cada vez que nos tirábamos alguna puya, como planeamos, ella lanzaba la ultima, y llegaba el final, era mi momento.

-YO: pues sepa usted, oráculo inservible, que si no fuera por los políticos y nuestra capacidad de razonamiento, no se podría llegar a disfrutar de la belleza y el jolgorio de lo JJOO, ya que paramos las guerras cada 4 años para su realización, es más, ¿le comento una cosa? – se quedó pillada, eso estaba fuera del guión, pero era lista.

-MARINA: pues díganos, oh gran senador, que inicia esas guerras que luego pararlas, con intenciones de su disputa, ¿que ha de comentar?.

-YO: que yo participaré en los JJOO que están por llegar, y no adivinaría usted, con todo el poder del oráculo, cual es mi especialidad.

-MARINA: la supongo, pero no creo que beber vino y comer uvas sea deporte.

-YO no mi señora, ¡¡¡¡yo hago lucha!!! - diciendo esto me arranqué las túnicas de encima, ella se quedó roja riéndose y el resto de la clase rompió en aplausos, profesora incluida.

Estaba solo con unos calzoncillos largos que me quedaban sueltos, bien me aseguré debajo con unos slip de los más ajustados para que no se notara mucho mi polla, los había pintado de color carne, y en la zona de la ingle una hoja de planta, tal y como eran representados los luchadores en la época, pese a que iban desnudos y embadurnados en aceite para evitar agarres.

-YO: ¿existe aquí algún osado que quiera enfrentarse a mi por la corona de laurel? - mi amigo con el que hablé en el descanso, saltó.

-AMIGO1: yo mismo.

Nos lanzamos uno contra el otro, haciendo gestos de agarres y posturas de lucha grecorromanas, el lo había practicado de crío, y se lo pedí. Me rendí ante una de sus llaves clamando mi derrota y felicitando a aquel “hijo de Hercúles”, la clase rompió entre aplausos, vítores y sorna, con la profesora felicitándonos. Fuimos a nuestro sitio y la profesora fue llamando por orden de presentación dando sus notas y conclusiones, Marina me miraba riendo y yo no podía apartar mi mirada de sus ojos, eran preciosos. Ya había pasado la hora así que según acaban de ser examinados la gente iba saliendo hasta que al final nos quedamos solos. Nos pusimos al lado de la mesa de la profesora, yo aun medio desnudo con las sabanas tapándome, pero sin ponérmelas.

-PROFESORA: sin palabras, ni rodeos, un 10, y por que no puedo poner más – Marina saltó dando palmadas de felicidad - no solo el trabajo, que es perfecto y se nota la mano de Marina, si no la presentación, la idea de las discusiones y como meter información en ellas, un placer haberlo visto , ¿Cómo se os ha ocurrido?.

-MARINA: en realidad la presentación ha sido cosa de Raúl, yo solo he organizado la información, no hay nadie que se le ocurriera algo así, y menos hacerlo - me puso la mano en el hombro, no podía dejar de mirarla, me preguntaba que coño habría visto en mi antes para poder reproducirlo, y en ese momento lo vi, se abrió una ventana en mi cabeza.

Ella era una chica rígida, estricta, educada en la rectitud y las formas, donde no había sitio para la improvisación, la diversión absurda, el llevar las situaciones a momentos incómodos para sacar una sonrisa, atrevimiento…….justo todo lo que era yo. Le atraía esa sensación de no estar haciendo lo correcto, o de salirse del plan establecido.

-YO: no seas modesta, has trabajado como una campeona, yo solo he hecho el tonto, que es lo que mejor se hacer - la di un toque con el codo.

-PROFESORA: pues me alegro de que lo hicierais juntos, lo habéis hecho de cine y os va a repercutir positivamente en al nota de final de curso - Marina se abrazó a mi llena de alegría.

Recogimos y nos fuimos a los baños a cambiarnos, el instituto ya estaba vacío, me paré antes de separarnos y lancé el anzuelo.

-YO: oye, estoy de subidon por lo bien que nos ha salido, déjame que te invite a tomar algo ahora y así charlamos – vi duda en su mirada, sopesaba si estaba bien o mal y no podía dejar que lo hiciera – venga, por lo viejos tiempos.

-MARINA: esta bien, pero vístete que vas a pillar una pulmonía - y se lanzó a darme otro beso en la mejilla.

Cuando se dio la vuelta y se metió en el baño, vi su cintura contoneándose debajo del vestido, dando saltos de traviesa, “joder, como ha cambiado la empollona”, di saltos de alegría cuando ya no me veía y me cambié a la velocidad del rayo, cuando salí todavía no lo había hecho ella y pasados unos minutos temí una espantada dejándome plantado, llamé a la puerta.

-MARINA: ¿si?....

-YO: ah nada, solo quería saber si estabas ahí, ¿todo bien?

-MARINA: si,……bueno, espera…….- la oía moverse-……..no, no va bien, esto no sale……………. anda entra y échame una mano.

Lo hice según terminaron sus palabras, y medio mirando de reojo deseando encontrar su cuerpo desnudo, pero nada más lejos, seguía igual llevándose las manos a la espalda.

-MARINA: échame una mano, que se ha quedado enganchado un imperdible con mi…..sujetador, y no llego - me acerqué a ella y era cierto, esperaba que fuera alguna excusa.

Noté que se le había clavado de mala manera el imperdible y por miedo a dañarla al sacarlo, tiré y doblé del sujetador para sacarlo limpio, pidiéndola disculpas, cuando lo saqué, el vestido se abrió por detrás lo suficiente para ver su espalda y su sujetador, incluso uno de los hombros del vestido cayó por su brazo, pero era lista, y ya se había asegurado apretando el vestido contra su pecho, para que no cayera.

-YO: uyyy, perdona, ya me salgo - ande despacio esperando una interrupción.

-MARINA: bueno……..ya…….quédate aquí, no vaya a ser que necesite más ayuda, siéntete aquí y me cambio dentro de uno de los baños.

Asentí, y vi como se metía en uno de ellos, mientras ella charlaba de algo que ni me importa recordar, veía la parte baja de sus piernas moverse, y luego su vestido caer al suelo, para luego colgarlo del marco de la puerta, y ver sus sombras mientras se vestía, aquella puerta en mi mente tenia una diana de 1 metro de ancho, tenia a un diablillo a un lado de la oreja rogándome que echara la puerta abajo, y un angelito al otro lado dándole la razón e insultándome por no hacerlo. Resistí, más que por miedo al rechazo, por miedo a que me diera igual y no controlarme. Salió vestida como siempre, con clase y simpleza, sin enseñar ni insinuar nada, pero preciosa, se dejó el peinado, y la realidad es que la favorecía.

Nos fuimos a una famosa cadena de cafeterías cercana y charlamos un par de horas, sobre su vida, la mía, la operación, el trabajo, los cursos, el pasado…..etc. Ella había mandado un mensaje avisando que llegaría tarde a casa, pero aun así no paraba de mirar el móvil esperando una llamada reprobatoria.

-MARINA: pues tengo que decirte que el cambio te ha venido genial, estas echo un “hombretón” jajajaja.

-YO: ya, aunque es triste.

-MARINA: ¿el que?

-YO: pues la falsedad de la gente, soy el mismo, no he cambiado, sigo haciendo el tonto igual y sigo comportándome igual, pero ahora, solo por perder 40 kilos, la gente me mira diferente, me trata diferente, incluso las chicas, antes me aborrecían y ahora noto como me tratan diferente.

-MARINA: bueno, no todas, yo te veo igual.

-YO: pero tu eres especial, no se que diablos pudiste ver en mi, tengo que agradecerte las 2 citas que me concediste, siento que salieran tan mal.

-MARINA: no salieron tan mal, me divertí, siempre lo haces, solo que mi madre se enteró y tuve que dejar de salir un tiempo.

-YO: pero has tenido novios después, algunos muy……

-MARINA: ¿imbéciles?, ya, no sé, tengo mal ojo, me dejo llevar por malos chicos, no se si te enteraste de lo que me hizo el último.

-YO: pues no, andaba en el hospital – mentí.

-MARINA: pues el muy cerdo fue diciendo por ahí las cosas que hacíamos, y algunas que no como si hubieran pasado, me hizo mucho daño, mi madre se enteró……. - volví a notar tristeza en su mirada-…… sabes, lo del móvil no fue nada raro, fue él , al dejarle, no para de mandarme mensajes, pidiendo, o exigiendo, que vuelva con él, incluso ronda por mi casa o el colegio, mi madre quiere ponerle una denuncia o alguna orden de alejamiento, pero dicen que no hay base.

-YO: Que carbón afortunado

-MARINA: ¿afortunado?

-YO: si, por 2 cosas, primero por haberte tenido como novia, no se como los tíos no se matan a navajazos por ti, hoy has cerrado la boca a toda la clase, parecías Helena de Troya – reía halagada - no en serio, veo a un ejército sitiando una ciudad por ti....

-MARINA: jajja no seas tonto, me he sentido rara, pero me ha gustado la sensación…- torció la cabeza con sensualidad - … ¿y cual es la 2º cosa por la que mi ex es afortunado?

-YO: por que te hizo daño estando yo en el hospital, si lo llega a hacer conmigo aquí le parto la mandíbula, para que cada vez que hablara de más, recordara las consecuencias.

-MARINA: jajaja eres un bruto………pero se que lo harías, me has protegido muchos años, aun recuerdo como te pegaste con Jesús en 3º de primaria por que me había quitado la fiambrera jajajja, le partiste la muñeca, ¿no? – asentí sin alardear de aquello, técnicamente no lo hice por ella, ya os diré el por que.

-YO: pero he de decir que le entiendo, perderte debe de doler demasiado.

-MARINA: pues que hubiera cerrado la boca……….. no hablemos más de esto, que me pongo tonta y lloro.

Cambié de tema haciéndola reír y olvidar aquella conversación, su móvil sonó, era su madre, se la oía gritar a través del teléfono.

-MARINA: era mi madre, preocupada, se ha hecho tarde, tengo que volver ya a casa.

-YO: pues te acompaño, no pienso dejarte ir……… sola a casa - pagué la cuenta y la llevé las bolsas, cogí el papel del mal llamado pagafantas, pero no tenía ninguna intención de serlo.

La fui acompañando todo el camino, charlando y recordando viejos tiempos, de vez en cuando ella me iba dando sus mágicos besos en la mejilla, cada vez que le hacia un halago o la ayudaba a subir y bajar escalones donde íbamos, o la llevara las bolsas, la fui cogiendo distancias, a cada beso giraba un poco más la cabeza, para cuando llegamos al destino nos bajamos del bus y había que caminar un kilometro, la ayudé a bajar y fue a darme un beso, me la jugué y giré la cara, me dio un suave beso en los labios, la vi que los daba con los ojos cerrados, eso significaba algo, Eli me lo dijo, pero no recordaba que.

-MARINA: uy, no seas bobo – su risa era celestial, y se sonrojó haciendola parecer más dulce aun.

-YO: lo siento, no he podi……- fingí pensar-…..no, en realidad no, no lo siento, me ha encantado, y lucharía con 100 hombres por otro beso, engañaría al diablo por otro más, e iría al sol y traería un pedazo en mis manos desnudas por otro regalo de tus labios, para que sepas que solo una estrella rivaliza con tu belleza – llevaba trabajando la frase todo el camino, no se si era perfecta o no, pero me pareció bien en aquel momento y si quería avanzar, no podía seguir siendo un panoli.

-MARINA: esto…. yo …….- se separó un poco, confusa.

-YO: lo sé, estas dolida y crees que no esta bien, pero no puedo seguir siendo ese hombre que es tu paño de lagrimas, te quiero, me tienes embobado desde preescolar y no quiero perder más el tiempo, la operación me ha hecho pensar de manera diferente, no voy a dejarte escapar sin al menos haber intentado de nuevo conquistarte, ahora depende de ti, si quieres, voy al autobús y me largo, entenderé que no quieres nada, que no me ves más que como un viejo amigo que te hace reír, y eso siempre lo tendrás, pero si no, al menos déjame soñar, déjame que te acerque a casa, y sabré que en mi vida hay un rayo de esperanza - otra frase trabajada en mi cabeza desde hacia días, me pareció muy ñoña, pero definitiva, me daría una respuesta. Ella callaba pensativa.

-MARINA: no es justo, no quiero perderte, no sé, estoy confundida, mi madre no esta nada contenta conmigo, no se si esto esta bien.

-YO: yo lo tengo claro y si tengo que convencer a tu madre, o a dios, de que soy bueno para ti, lo haré, pero solo si tú quieres - no se movía, decepcionado me giré caminando a la parada del bus, pero me agarró del brazo.

-MARINA: espera……- “¿ha colado?”- esta bien, dios…….. si quieres puedes acompañarme a casa - era menos que nada.

Al llegar a la puerta de su casa, me fue a dar otro beso en la mejilla pero me aparté, ella me entendió, no quería más carantoñas si no sus labios, y girando la cara, me dio otro suave beso en la boca, se fue correteando a su casa, no sabia si había calado o no, pero era un paso adelante. Los siguientes días fueron como de película de dibujos animados, buscábamos alguna excusa para estar juntos y jugábamos a besarnos a escondidas del resto, eso a ella le emocionaba, desde luego no se si tendría zona erógena mágica, pero el atrevimiento y la emoción la ponían a 100.Yo lo aprovechaba y hasta la sacaba de clase con excusas falsas, como que tenia que ir a ver a la directora, y cuando salía la llevaba a un baño y allí la besaba, nada tórrido, pequeños besos de críos.

-MARINA: estas loco, nos van a pillar.

-YO: iría al sol y te traería un pedazo por un beso, ¿recuerdas? Sacarte unos minutos de clase esta chupado.

Sus besos con el paso del tiempo fueron más profundos, y dulces, como era ella, que ojos tenia, incluso me quedaba a milímetros de su cara, rozando su nariz, a punto de besarla sin hacerlo, solo para que abriera los ojos a ver que pasaba y poder admirarlos, su azul era de mar, del caribe, de un azul brillante y eléctrico. La acompañaba a casa todos los días, íbamos besándonos como tontos en el autobús, empezamos a meternos mano y con el juego de algunas posturas ella notó mi bulto a reventar alguna vez, pero no lo mencionaba.

Marina – Amenazas.

Un día de estos, ella llegó muy disgustada al instituto, al preguntarla, me dijo que su ex se había pasado por delante de su casa, no sabia como pero tenia su nuevo número y la mandó mensajes anónimos, muy violentos, al leerlos me enfadé, mucho, hablaba de hacerla daño, de usar ácidos o cuchillos para quitarla su belleza, fueran reales o solo bromas de mal gusto, era demasiado, el último dijo que hoy la esperaría en su casa y que ella vería lo que tenia que hacer.

Tardé un par de horas en calmarla, hasta hicimos pellas y charlamos en un banco de un parque cercano, lloró delante de mi, juré que no le perdonaría, y mientras trataba de calmarla rogué a dios que el muy imbécil cumpliera su amenaza y apareciera por su casa, conmigo allí. Pensé mil cosas que hacer y como plantear la situación si se daba, pensé de todo, desde violencia pura hasta llamar a la policía antes, pero nada me parecía definitivo, o que pudiera no acarrear consecuencias cuando yo no pudiera defenderla. Una idea se gestaba en mi cabeza, aunque no sabía exactamente cual.

La calmé diciendo que yo la acompañaría y que no la pasaría nada mientras estuviera a su lado, entramos al instituto y más calmada fue pasando el día, pero llegando a su casa en el bus se puso muy nerviosa, preguntado que podía pasar.

-MARINA: ¿y si no esta? ¿Y si esta? ¿Y si cumple alguna de las amenazas?

-YO: tú déjame a mi, se que estarás nerviosa, pero si te pido algo, hazlo, aunque no sepas por que, yo si, ¿confías en mi?

-MARINA: con mi vida.

-YO: perfecto, tu vida no estará en juego, no lo permitiré, pero la mía si, si aparece hazme caso en todo sin preguntar, no te ofusques, ni te enfades, ni hagas nada que no te pida, ¿de acuerdo?

Mis piernas empezaron a temblar, de adrenalina supongo, como os dije había practicado muchos deportes de contacto y artes marciales, si, recuerdo llaves y golpes, pero sobretodo te enseñan a pensar, a usar la cabeza de forma fría en momentos tensos, aquella no era una situación preparada como me paso en Navidad con Ana, era real, pero estaba dispuesto a todo por ella, mi padre me educó en unos valores y rectitud moral muy clásicas, y el maltrato a la mujer esta a la cabeza de las cosas, no que no se deban hacer, si no que se han de evitar a toda costa. ( “un hombre que no hace nada ante el mal ajeno no es un hombre, si no un cobarde, y yo no he educado a un cobarde”, esa frase de mi padre se marcó a fuego en mi cabeza cuando me lo dijo de pequeño, eso me llevó a más de 1 problema en mi vida, pero nunca me he arrepentido de nada.)

Retomemos, nos bajamos del bus y con ella del brazo nos fuimos acercando a su casa dando un rodeo para llegar por la zona menos esperada, nos apostamos en una marquesina y estuvimos 10 minutos esperando ver a alguien. No vi a nadie, parecía que era una amenaza en vano, aun así avisé a emergencias de que unos críos andaban tirando piedras a un coche delante de la casa de Marina, para tener a la policía cerca, por si acaso. Me lamenté, quería cruzarme con aquel tipo cara a cara, aun así la acerqué a la puerta de su casa, siempre protegiéndola, siempre conmigo en medio, ella del lado seguro, pegada a la pared, y yo del lado débil, seguí acercándola hasta llegar a su portal, no había peligro.

-YO: pues nada, al final solo era un bocazas, aun así repetiremos táctica unos días………..joder, quería tenerle a mano.

-MARINA: muchas gracias, me has ayudado mucho - me dio un beso de los que ya era habituales, y me distrajo unas décimas.

EXNOVIO: ¡¡¡así que me has dejado por este mierda, ERES UNA PUTA!!! - miré rápido y solo vi a un tío con un cubo en la mano que nos arrojó encima, Marina grito un “¡¡¡NO!!!! ” que se oyó por toda la calle mientras se agachaba, supuse lo peor así que la tapé con mi cuerpo y ropa, temiendo que fuera ácido, logré que no la tocara ni una gota, pero yo estaba empapado, reaccioné rápido quitándome la ropa, pero tenia la cabeza mojada, al llevarme la camiseta a la cabeza para quitármelo rápidamente, me di cuenta, el desgraciado nos había tirado agua, fría en pleno invierno, pero solo agua.

La cara que puso ella le hacia gracia a él, no paraba de señalarnos y reírse, cuando vio la mía se le pasó de golpe.

EXNOVIO: ¡¡¡¡ ¿y tú que quieres? payaso, que te parto la cara, esta golfa es mía, apártate antes de que te haga daño!!!!

Entré en modo comando, si, muy de película pero os juro que fue así, me di la vuelta y pregunté a Marina si estaba bien, ella me miró constatándolo, la levanté mientras ella me miraba preocupada.

-YO: tranquila, es solo agua, estoy bien, coge las llaves y metete en tu portal, quédate dentro con la puerta cerrada, llama a emergencias y diles que has vuelto a casa y has visto a alguien entrar por la ventana a de tu casa cuando volvías del colegio, si te ves en peligro súbete a casa – reaccionó recordando mis palabras en el bus, y así lo hizo.

El ex novio seguí increpando mientras Marina entraba en casa y yo me ponía en medio para asegurarme que quedara dentro y segura.

-YO: ¿Qué que quiero? Ven aquí.

-EXNOVIO: ¡¡¡¿que pasa? ¿Quieres bronca?!!! - sacó una navaja, demasiado pequeña como para hacer daño, yo planté bien mi poción al suelo, su amenaza parecía más de boca que de acción, esperaba que me asustara, y no lo iba a hacer.

-YO: te he dicho……….QUE VENGAS AQUI - miré confiado a Marina que tenia el teléfono en la oreja hablado con emergencias.

Pasara lo que pasara tenia que retenerlo hasta su llegada como mínimo, y así tendría asistencia médica rápida si lo necesitaba. Se lanzó con el cuchillo de forma evidente, torpe, me recordaba a los ensayos en karate con cuchillos de goma espuma, lo tenia todo en la cabeza, giré mi cuerpo y atrapé su mano izquierda con el cuchillo con mis manos, una vez asegurado el agarre le aparté de mi manteniéndole cogido con mi mano derecha, el tío empezó a pegarme con todo lo que tenia, la otra mano o patadas, pero la posición no le permitía hacerme daño real, aunque alguna patada a las costillas o el costado me dolió, pero yo controlaba el cuchillo, le dejé enfadarse, desahogarse, que gastara energías y golpeara cada vez más cerca de mi, hasta que le tenia dentro de mi radio de acción, le sacaba una cabeza y mas de 20 kilos, era mío, con su mano cogida, di un tirón que le dejé de espaldas a mi y lancé una patada feroz directa a sus gemelos, se derrumbó en el suelo a plomo cayendo de espaldas, no solté su mano con el cuchillo, un vez en el suelo, puse mi rodilla en su pecho y le retorcí el brazo hasta que lo soltó, solté un terrible puñetazo a la mandíbula y quedó KO, me aseguré de que no estuviera fingiendo y de que el cuchillo no se contaminara, tenia planes para él.

Me levanté temblando, notaba mis piernas flaquear por el peso de mi cuerpo, respiraba de forma rápida y entre cortada así que ande en círculos, cogiendo el mayor aire que pudiera por la nariz y soltándolo por la boca, técnicas de respiración simples, el corazón me botaba en el pecho y los pulmones me ardían, tenia la sensación en el estomago de que me iba a reventar, pero mi cabeza seguía fría, había salido a la perfección todo, ni ensayado. Se abrió la puerta del portal y salió Marina corriendo a abrazarme, con su madre detrás, el grito de Marina la había hecho bajar a mirar.

-MARINA: dios, ¿estas bien? ¡¡¡Dime que lo estas, por favor, ¿te ha hecho daño?!!!! - acelerada, notaba su cabeza subir y bajar rápido al ritmo de mi pecho.

-YO: taquilla, estoy bien, pero hay que darse prisa.

-MADREDEMARINA: muchas gracias, este imbécil lleva atosigándonos desde que le dejó, ¿como puedo agradecértelo?

-YO: este es un mierda, y no parará aquí, volverá si no se lleva un escarmiento de verdad, si quiere hacerme un favor dense prisa y hagan todo lo que yo diga - buscó la mirada de su hija, anexionada a mi cuerpo, buscando aprobación, la vio.

-MADREDEMARINA: ¿que necesitas? - dijo segura.

-YO: de inicio abran las puertas, voy a meter a este idiota en su casa, y vamos a fingir un allanamiento, con eso tendrán de sobra para una orden de alejamiento y si lo hacemos bien le va a caer un puro, si tiene antecedentes se va a cagar encima.

Lo levanté a pulso y cargándolo como una bolsa de patatas lo subí con cuidado a su casa.

-YO: ¿tenéis alguna ventana que de a una escalera o un patio desde el que se pueda entrar?

-MARINA: si, la de la cocina, hay un tubería, él subía por ella cuando venia a verme - su madre la miró sorprendida de ese hecho.

Sin tiempo ya, se oían las sirenas de fondo, “joder como se nota un barrio rico, en menos de 5 minutos estaban allí, en mi barrio avisas de algo así y te da tiempo a recuperarte solo de una puñalada”, aunque era cierto que habíamos llamado con antelación. Coloqué al payaso boca abajo, y puse un silla en el suelo volcada del lado de donde le había golpeado, con un trapo y cogiendo de las puntas su navaja, hice un leve corte en la zona y saqué un gotas de sangre, las puse en un borde de la silla, luego cogí el cuchillo y le corté en la mano, nada grave pero si para crear el efecto, manchando de sangre el suelo debajo de la ventana y cogiendo su zapato hacer una marca en ella, luego rompí el cuchillo contra el marco de la ventana, como si se hubiera roto al abrir la ventana desde fuera. Ambas mujeres me miraban atónitas, con Marina calmando a su madre para que me dejara hacer, y así lo hice, con cuidado de no dejar huellas mías ni en la ventana, ni en la sillas, ni en el tipo del suelo.

-YO: bien, podéis decir lo que queráis pero si queréis quitamos a este payaso de encima vuestra, todo esta montado, vosotras decid que tu madre ha ido a recogerte a la parada del bus, y allí nos encontramos los 3, yo te acompañaba a casa y cuando hemos venido aquí nos hemos encontrado todo así, Marina, tu baja a recibir a la policía, reconócelo como tu ex mientras les subes, una vez aquí muéstrales los mensajes y las amenazas, cuéntale toda la verdad hasta bajarte del bus, a partir de ahí, lo que te he dicho. ¿DE ACUERDO? - asintieron un poco asustadas.

Me pareció creíble y dándole un beso tranquilizador a Marina, y sorprendiendo de nuevo a su madre, la incité a esperar a la policía abajo, no podía ser yo el que fuera a buscar a la policía y dejarlas allí con ese “loco”, ni bajarnos los 3 y que escapara, y viéndolo desde el tema del miedo, su madre era más madura para soportar la tensión, además pensé que la imagen de nervios y miedo que Marina tenia ayudaría a convencer a la policía.

Cuando llegaron les contamos la misma historia, yo cuidé no decir las mismas palabras para no parecer ensayado, había visto muchas series y películas de este tipo como para caer en eso, cuando vieron los mensajes les pareció cuadrar, y la escena parecía creíble, llamaron al samur para tratar al herido, que seguía inconsciente en el suelo. Todo salió a la perfección, ese desgraciado nos había dado todo lo necesario para meterle en un buen lío, parecería que ante no doblegarse a sus amenas, el intentaría colarse en su casa para hacerla daño, el cuchillo era un indicativo, pero había tenido mala suerte y al usar el cuchillo para abrir la ventana se le rompió cortándose la mano, y la entrar resbalaría y se golpeara con la silla, así lo explicaron viendo las pruebas que había dejado, había colado.

Con el paso de los días, al tipo no solo le cayeron ordenes de alejamiento sobre Marina, su madre o su casa, si no el instituto, no podía estar a menos de 5 kilómetros de ellas y debido al buen abogado de pagó de su madre le cayó un buen puro, no de cárcel pero si se volvía a meter en líos se jugaba una condena mayor.(así funciona la justicia, supongo) Por lo que se a día de hoy, el tipo no se volvió a cercar ni a poner en contacto con ella, se esfumó, se oyeron historias de que se metió a camello y murrio por meterse la mierda que vendía, nunca lo confirmé pero no se volvió a saber de él.

Para asegurarme, Marina y yo íbamos juntos a todos lados y su madre me aceptó en su casa gustosa, me presentó como su novio, y por lo que había hecho parecí el 1º en caerle bien, no le gustaba que su pequeña fuera por el mundo con novio, pero Marina la habló maravillas de mi y supongo que al final cedió, como todas las madres.

Marina - Dulzura.

Llevábamos ya más de 2 semanas saliendo después del incidente en su casa, a ella ya se le habían pasado todos los miedos y males, y no solo era la de siempre si no que se atrevía a más conmigo, hacíamos alguna locura de vez en cuando como colarnos en el metro o el zoo, aquellas aventuras la hacían reír y calentarse sobremanera, yo aprovechaba y recorría su cuerpo con mis manos, era una delicia, un joya, podría tener al tío que quisiera babeando por ella si aprovechara mejor el físico que tenia, pero allí estaba, conmigo. Su madre no se fiaba mucho de mi y no nos dejaba mucho a solas, y bien que hacia.

Un día, estabamos en su casa, “haciendo deberes” y su madre se pasó para decir que salía unas horas, y que no me quería allí cuando volviera. Me pareció genial, teníamos al menos una hora para retozar como hacíamos cuando ella se iba.

-YO: creo que ya se ha ido.

-MARINA: ¿Y que?

-YO: pues que me encantaría llevarte a la cama y hacerte mía.

-MARINA: jajaja estas loco ¿y si vuelve?

-YO: ya la has odio, tardará un buen rato, me encanta besarte y más desde que empezamos con la lengua y a acariciarnos, pero tengo mis límites.

-MARINA: ya lo se, ¿te crees que no lo noto?, cada vez que te excitas me pongo mala solo de pensar en ella, nos hemos tocado por encima, pero aun sin verla, ya se que es más grande que cualquiera que he visto.

-YO: no lo sabes tú bien, llevo unos slip tan ajustados para que tu madre no me mate según la vea, que no la dejan crecer como debiera, y eres muy mala, la haces crecer mucho - la besé en el cuello, repetidas veces de forma tierna, sabia que la ponía tontorrrona.- dime que no lo deseas y paro, ahora mismo.

-MARINA: no quiero que pares ummmmmmm llévame a la cama.

Me levanté y la agarré en brazos, como recién casados, la dejé con dulzura sobre la cama y me recosté sobre ella, besándonos apasionadamente, sin cargar todo mi peso, fui bajando por su cuello mientras veía sus labios morderse de pasión, deseaba aquello, pero me paró en seco.

-MARINA: espera, quiero regalarte algo - se levantó nerviosa, cogió una bufanda y me tapó los ojos- no mires, espera 5 minutos.

-YO: no se si seré capaz - la oía buscar por la habitación, encontró lo que buscaba y oía como se movía, deseé quitarme la bufanda pero algo me decía que seria mejor esperar.

-MARINA: ya esta, puedes mirar.

Lentamente me fui quitando la bufanda hasta que cayó al suelo, la imagen me provocó una erección instantánea, allí estaba ella, mi oráculo, con su vestido blanco nuclear, el pelo recogido y la cinta roja en la cintura, no se había puesto los imperdibles así que sujetaba el vestido con sus manos en el pecho.

-MARINA: ¿que te parece?, oh senador mío.

-YO: que si de verdad existirá el Olimpo no deberíais caminar entre mortales, no somos dignos de admirar tu belleza.

-MARINA: eres un bobo - lo dijo mientras mordía su labio inferior mirando mi abultada entrepierna.

-YO: y tu una diosa - el comentario era bonito, pero lo dije acomodándome la polla, grosero, pero es que me la estaba clavando con el slip.

-MARINA: pues esta diosa va a ser tuya.- se acercó a mi colocándose entre mi piernas y agachando la cabeza para besarme, yo alzaba la mía para buscar sus labios, los besos fueron subiendo la intensidad y humedad, nuestras lenguas jugaban en la boca del otro, se dio la vuelta pegando su culo a mi vientre - ¿me ayudas con el vestido?, es que soy muy patosa……..

Me levanté sin sepárame un solo milímetro de ella, levantándola parte de la falda del vestido con mi robustez, que iba a saltar los botones de mi pantalón, pero no lo hicieron por que al ponerme en pie apreté mi cintura contra su trasero, rodeándola con los brazos, aprisionándola y besando su cuello por detrás.

-MARINA: ummmmmmmmmmm creo que hoy lo que se me ha clavado no es el imperdible, aun así, no llevo sujetador, para evitar……… complicaciones – “joder con la niña empollona”, sus palabras activaron el automático en mis manos y se fueron a sus pechos, corroboré que no había nada más que la tela del vestido y los apretaba y masacraba con firmeza, con cada apretón me hundía más entre sus nalgas, la debía de sentir toda y le gustaba.

-YO: no es asunto mío, pero dímelo, por el bien de ambos, aquel payaso dijo muchas cosas, pero por favor, dime que al menos no eres virgen.

-MARINA: no, no lo soy, me acosté con el varias veces, pero no hice las barbaridades que el decía sobre mi, ¿por que te importa?

-YO: por que me has puesto demasiado caliente, no tengo tiempo ni ganas de tomarme esto con calma y cuidado, tengo ganas de hacerte el amor, fuerte y hacerte correr hasta que te desmayes - lo hice llevando mi mano a sus hombros y con cuidado apartando el vestido, dando besos a las zonas que se iban quedando al aire en su piel.

-MARINA: pues eres un chico afortunado - su vestido cayó hasta su cintura dejando sus senos al aire.

-YO: ¿afortunado? - llevé mis manos a sus pechos, era normales en tamaño pero con unos preciosos pezones diminutos, rosados y erectos.

-MARINA si, por que yo quiero lo mismo - se dio la vuelta y me empujé para sentarme, yo me lancé a sus pechos, los chupaba y lamía con maestría, ella al inicio quiso apartarme, tendría otros planes pero mi fuerza al inicio, y mis caricias después, le hicieron dejar que continuara, agarrándome la cabeza por el pelo y apretando contra ella.

Pase allí unos minutos, mordisqueando sus duros pezones, ella estaba roja, le quemaba algo por dentro, y era logro mío, me empujó y caí algo recostado sobre la cama, se arrodilló ante mi, como si fuera a rezar a algún dios griego, pero lo que hizo fue intentar sacar el tótem de mi entrepierna, desabrochó el vaquero y metiendo la mano, acarició por encima del slip un poco, buscando donde acababa, y con cada palmo que metía y no acababa su boca crecía de impresión.

-YO: así no va a salir, ya te lo digo yo, esta diseñado para disimularlo y esta muy prieto, échate un poco para atrás - lo hizo dejándome algo de hueco para ponerme de pie, desabroche el pantalón y lo bajé, sus manos fueron a su boca tapándosela y riendo sin apartar los preciosos ojos azules de mi bulto en los slips – tranquila, y veas lo que veas no te asustes, solo haremos lo que quieras y estés dispuesta………….

-MARINA: cállate tonto, y enséñamela - vi tensión y curiosidad en su mirada.

-YO: tú misma.

Me la saqué y quedó a su visión, tras unos segundos en que siguió su bamboleo en el aire con la cabeza, se pararon ambas, su cabeza y mi miembro apuntándola, totalmente hinchado.

-YO: si, ya lo sé, es enorme, no sabes………

Se tiró a por mi cintura, me empujó contra la cama para sentarme y cogió mi polla con ambas manos, su dulce mirada cambio, y pese a que la comparación con ella la hacia enorme, sus ojos pasaron de ternura a lujuria, se había convertido en una loba, y empezó a pajearme, con ambas manos y la maestría que entrenaría con sus ex, que la tenían mucho más pequeña que yo, lo deduje por su movimientos cortos, llevé mi mano a las suyas, y eché para atrás del todo mi piel, para que viera donde estaba el limite y de nuevo hacia arriba, ella entendió y aceleró el ritmo con fuerza y movimientos amplios, la imagen era bestial, con aquella diosa griega medio desnuda con sus ojos azules brillando mientras admiraban mi falo, y sus tetas se movían al ritmo que su cuerpo le imponía a la masturbación. La sorpresa llegó cuando pasados unos minutos en que dejé de mirarla a los ojos por no correrme ya, noté su lengua recorriendo todo el tronco de mi miembro, llegando en engullir en sus labios mi glande, sin duda no era su 1º vez, lo hacia de forma inocente pero hábil, sus labios paseaban por mi largo y seguía pajeándome sin parar, desde luego sabia usar sus armas, en todo momento me miraba a los ojos, aunque se metiera el glande entero en la boca, o lamiera de lado el tronco, sus ojos azul eléctrico no se apartaban de los míos, era una visión celestial.

-YO: dios………como sigas así te vas a llevar el premio antes de empezar.

-MARINA: pues llega tu turno - se levantó y se puso a horcajadas sobre mi, echando sus tetas contra mi pecho, besándome con pasión, yo levanté algo su torso para masajear su pechos, mi polla palpitaba entre las piernas de su vestido, di gracias por que si seguía chupándomela con esos ojazos clavados en mi no daría la talla, y eso no podía pasar.

La levanté del todo el torso y cogiendo de las piernas la hice andar de rodillas sobre la cama hasta ponerme el vestido en la cara, con su ayuda lo abrí y la visión fue aun mejor, ¡no llevaba bragas!, vi un coño perfectamente cuidado, con bello muy corito, pegué mis manos a su culo y bajé su cadera hasta meter mi cabeza en su interior, lamía su clítoris, que andaba hinchado, y de ella goteaban fluidos que tragaba, no se como, se giró, no lo veía por que tenia el vestido tapándome, y con una mano seguía pajeándome, yo me centré en mi tarea lingüística, logré meter una mano en su entrepierna mientras otra la tenia apegaba a uno de sus pechos.

Cuando estaba lo suficientemente húmedo, metí uno de mis dedos en su interior, buscando masturbación, sin dejar de lamer su clítoris, abriendo sus labios mayores, entró fácil así que use 2 dedos, que tampoco es que fueran un gran impedimento, me alegró pensar que no seria difícil penetrarla cuando con 3 dedos lo hacia sin dificultad, abría su coño sin resistencia, aun así saqué un dedo y busqué su punto G con el gesto de la mano aprendido en el gym, ya no goteaba, de su vagina caía un hilo de fluido en mi cuello. La fricción en su interior era desmedida y la oía gritar de placer, hasta que se venció de golpe y se corrió, una fuente sobe mi cara, cayó de inicio hacia delante apoyándose en la pared, pero luego hacia atrás pegando su espalda a mi vientre y golpeándose en su nuca con mi gran amigo, echó la cabeza hacía un lado y girándola daba besos a mi polla, como aquellos besos en la mejilla.

-MARINA: ¡¡¡joder con el puto Raúl!!!! - fue la 1º vez que la oía decir tacos.

-YO: y aun no has empezado - remonté mi cuerpo para sentarme en la cama y ella quedó a horcajadas sobre mí, levanté el vestido y sabiendo de la humedad y obertura de su coño en ese momento, dirigí mi polla a su entrada - todavía nos queda un buen rato. ¿No?- la pregunta buscaba una doble respuesta de si.

-MARINA; por dios, si.

La mitad de golpe, el glande entró limpio y parte del tronco, soltó un grito suave, la volví a levantar para sacarla un poco y embestí otra vez, media polla dentro, y otro grito algo más tenso. No forcé, la levanté y la hice bajar con calma y cuidado hasta ese punto, una vez, dos, tres, le metí un ritmo pausado pero ascendente, sus gritos se fueron ahogando con cada penetración, yo no había sorpresa, si no disfrutar de esa sensación tan increíble.

-MARINA: ¡¡¡¡¡¡¡¡¡madre mía, es enorme la noto abrirme!!!!! - era cierto, ya pasábamos de media polla sin dificultad, debería de tener dentro unos 18 centímetros, y cada minuto que pasaba iba penetrando más.

Ella ya no era un muñeca en mis manos, agarrándome la cabeza hacia fuerza para subir y bajar con las piernas al ritmo que marcaban mis manos en su trasero, dejando sus pechos botando a merced de mis labios, y no lo desaproveché, lamí un pezón y jugueteaba con mi lengua sobre él, haciendo círculos para luego chuparlo fuertemente. El ritmo ya se me fue de las manos, las embestidas ya metían más carne en su interior, y pareció ser el tope, lo noté por que se me desvanecía su cuerpo en las manos cayendo hacia atrás, la sujetaba como podía.

-MARINA: ¡¡¡me abres, dios, noto……..noto como me abres, no pares, me corro, me abres y me corro!!!!

Sentí como sus paredes vaginales se contraían y ella explotaba de placer sobre mi, cayendo agotada, la abracé mientas le daba besos en el brazos.

-YO: esto aun no ha acabado, yo sigo en liza.- se separó de mí con los ojos como platos, su mirada azulada no creía eso posible.

-MARINA: vamos a tener que usar más energía.

Se descabalgó de mi, se quitó el vestido entero, dejando su culo a mi visión, era más plano de lo que sus ropas dejaban adivinar, pero cuando se acercó a mi de espaldas me dio igual, llevó sus manos a sus nalgas y se las separó, dejando caer su cintura sobe pelvis, cuando notó la punta de mi glande llevó una mano a ella y la dirigió a su entrada, metió el glande dando un respingo y una vez dentro llevó sus brazos atrás, buscando mi torso como apoyo, para iniciar un descenso suave, lento, pero continuo, se empaló ella sola hasta el punto previo, incluso un poco más, y aun me sobraba, pero ella no daba más de si. Llegado a ese punto subió de nuevo y volvió a bajar, lo hico repetidas veces hasta que se sintió cómoda y lo empezó a hacer de forma más rápida, y fuerte, se echó hacia delante sin apoyo y ya era ella sola la que se metía y sacaba con sus golpes de cadera, en una de ellas, penetré de más y noté que rozaba algo con mi glande, sabia por Eli que podía ser la pared de su útero y que aquello hacia daño, así que antes de llegar a eso tomé el control, la cogí de la piernas y la levanté por lo aires, recostando su espalda en mi pecho, sin sacar mi miembro de ella, la cogí de los muslos hasta que se encogió las piernas, haciéndose un poco de bola, y apoyando su cabeza en mi hombro, no me era difícil en esa posición levantar su cuerpo y bajarlo a pulso, no pesaba casi nada o en ese momento no me lo parecía, aumenté el ritmo y ella me besaba en la mejilla todo el rato, yo buscaba sus labios pero estaba centrado en el movimiento, me estaba volviendo loco, siempre media hasta un punto con las manos para no llegar a hacerla daño pero las penetraciones ya eran animaladas, la levantaba mucho y la dejaba caer de golpe, notando como mi polla se abría paso en su interior, me iba a correr en breve y esa loca no quedaría insatisfecha. Me acerqué a su oído.

-YO: ¿que crees que pasaría si tu madre abriera hora la puerta? - clavó su mirada a la puerta mientras no dejaba de recibir golpe tras golpe.

Esas palabras la erizaron la piel, el pavor de que la pillaran y la excitación por ello hicieron reacción en su cuerpo, noté como me mojaba, y su espalda se arqueó, corriéndose de nuevo, queriendo bajarse de mi pero como estaba en el aire era mía, así que seguí un minuto más, logrando un 3º orgasmo, creo, o gritó como si lo fuera, antes de correrme dentro de ella y explotar de tensión, fue una barbaridad, llevaba días sin evacuar. Pasaron unos segundos hasta que la dejé tocar con los pies el suelo, sin sacarla aun pero notando como se desinflaba, ella rendida sobre mi de espaldas.

-MARINA: eres malo, me has puesto como una loca con ese comentario.

-YO: eres tú la que te excita esta situación, a mí me excitas tú.

-MARINA: pues según pasa el tiempo más se acerca la posibilidad de que nos pillen - movió su cadera de forma circular.

-YO: para, o no respondo.

-MARINA: solo digo que aun hay margen – dio otro golpe de cadera.

-YO: a mi me da igual, como me la pongas dura de nuevo de aquí no salgo hasta volver a correrme dentro de ti, esté tu madre delante o no.

-MARINA: ¡¡¡¿¿los condones???!!!- cayó en ello de golpe.

-YO: tengo la vasectomía hecha.

-MARINA: ¿en serio?

-YO: si, tengo un papel en la cartera que así lo certifica - llevé mis manos al pantalón en el suelo para buscar la cartera, pero antes de que pudiera, ella se salió de mí, me empujó de nuevo contra la cama y se puso a chupármela de nuevo, fuera de si.

Clavando sus ojos en los míos, ni un minuto pasó hasta que estaba dura de nuevo, ella subió por mi cuerpo hasta besarme y poniéndose a horcajadas se ensartó sola, y apoyando sus manos en mi pecho fue llevando el ritmo hasta volver a correrse un par de veces, yo necesitaba más así que me incorporé y pasé sus piernas por detrás de mi, para que me rodeara con ellas, y cogiéndola de la cintura la penetré duramente sin bajar el ritmo durante un cuarto de hora, la oía gritar de placer y rogar alternativamente que no parara, o que si lo hiciera, no paré obviamente. Logré notar el latigazo previo, y me volví a correr en ella, aguantado la postura, ella era un trozo de carne sin vida, apenas respiraba, yo estaba agotado pero satisfecho. Nos quedamos así unos minutos, pero ya no me atreví a más, una 3º ronda podría pillarnos su madre y no se si ella aguantaría hasta el final, estaba casi ida cuando la descabalgué de mi, y la incité a recoger y limpiar.

Tan mal lo hizo que su madre entró por la puerta, vio el cuarto mal recogido, y pese a que no había evidencias claras, el cuarto apestaba a sexo, me sacó de la casa a rastras prohibiéndome volver a acercarme a su hija, amenazando con contarle a la policía lo que hice con su ex, pero pasados unos días Marina me tranquilizó diciéndome que era solo de boca y que no haría nada si no volvía por su casa. Pasamos un mes follando a escondidas por el Instituto, hasta que su madre le acortó la correa e iba y venia a buscarla, decidimos dejarlo allí, había sido maravilloso pero no podía ser. El polvo de despedida fue épico, casi se desmaya.

Salvo algún encuentro más esporádico, nuestra relación íntima paró allí, jamas hablé del tema con nadie, ni se lo mencioné a amigos, no hablé ni bien ni mal de ella, y continuamos con la relación de viejos amigos que éramos.

Rocío - La golfa.

La primera fue Marina, tuvimos 3 semanas largas de pasión, antes de que su madre cortara de raíz, y pese a que alguna vez volvimos a hacer el amor a escondidas, no había lazos entre nosotros, así que dejándola de lado, inicié una maratón, durante el siguiente mes, llegando ya a la primavera, logré mantener relaciones con, al menos, una mujer cada semana, al inicio solo eran de sexo oral o masturbaciones, pero fui cogiendo confianza y cada vez me resultaba más sencillo lograr situaciones en que mi polla fuera la que hablara por mi, fui aumentando el numero, una chica durante una semana en su casa después del colegio y echábamos varios polvos, otras, eran varias chicas en una semana una sola vez, llegué a tener relaciones con 3 chicas diferentes en la misma semana y día, de forma alternativa, yo no ofrecía ni engañaba a nadie, ni amor, ni cariño, ni ser novios o pareja, solo quería sexo, y era lo único que buscaba en ellas así que lo dejaba claro desde el principio, alguna rechazó ese tipo de relación esporádica y lejos de la monogamia. Una volvió pasado el tiempo rectificando su postura, con todas era más o menos igual, trabajaba sus jóvenes cuerpos con masturbaciones previas y las dilataba, cuando estaban listas y ya se habían lubricado bien con sus propios fluidos, hundía parte de mi en ellas, casi ninguna logró pasar de más de la mitad y solo 1 logró metérsela entera. De vez en cuando usaba condón por que no me fiaba mucho de la chica en concreto, otras eran vírgenes y las trataba con más cuidado.

Mi fama entre las mujeres aumentaba, yo hablaba con Marina, como infiltrada, y me contaba que se emplazaba a hablar mucho de mí y de mi miembro, que se retaban unas a otras y las que no se atrevían eran dejadas de lado o tomadas por mojigatas.

Vaya por delante mi respeto por las mujeres, pero siendo sinceros, todos hemos tenido en el instituto, o clase, una mujer, digamos…….”sueltecilla”, la que lleva un cartel con letras de neón de puta o zorra, que era detestada por las mujeres por la imagen que daba de la mujer, y envidiada por las mismas por su libertinaje. Obviamente deseada por todos los tíos, si, esa mujer que no tendría ningún problema por su físico en lograr mantener a cualquier hombre, pero que por algún motivo decidió compartirlo con más, con muchos más. Esta es la historia de mi relación con la que me tocó en mi último año, Rocío.

Era la zorra oficial de último curso, de ella se había dicho de todo, que se dejaba hacer de todo, que se tiraba al profesor de francés, que se follaba a cualquiera solo pidiéndoselo, yo constaté a lo largo de los cursos que era una falsedad, desesperado me acercaba a ella y la trataba bien con la esperanza de que fuera cierta su fama, nunca pensó en mi de esa manera, pero si que jugaba conmigo, lo hacia con todos, yo la dejaba por que me sentía cerca de ella, se sentaba en mi regazo, me daba abrazos demasiado largos, pegaba su cintura a mi pelvis, la acompañaba a su casa, siempre jugaba y lograba lo que quería de mi. Hasta la operación, cuando volví, supe que tenia un novio o una especie de folla/amigo, un “cani poligonero” con un coche de bajo presupuesto tuneado de forma cutre, que la venia a buscar todos los días después de clase, si ella jugaba conmigo, con el hacia lo que quería, supongo que a cambio de sexo, era su chofer personal.

Rocío era una mujer atractiva, morena de melena larga, delgada, pómulos altos y sonrisa pícara, siempre iba con camisetas y tops ceñidos que resaltaban sus pechos, nada anormal pero los exhibía y sacaba partido, se le marcaban muy bien y llevaba escotes pronunciados, pantalones de tiro bajo que se le pegaban a la cintura y no dejaban nada a la imaginación, algo de caderas anchas pero no exagerado, lo que llamamos en España un culo carpeta, siempre con tanga, y no era difícil adivinarlo, siempre que se sentaba se le veía claramente el tanga y medio culo, casi hasta donde la tela se metía entre sus glúteos, era imposible que ella no lo supiera y un así siempre iba vestida igual, a algunas otras les pasaba, se puso de moda ir enseñando el tanga, pero se medio tapaban o se subían el pantalón por el cinturón, ella no. Mediría 1,70, siempre en zapatillas y con el pelo suelto, me fije que de forma natural, o no, ella siempre echaba los hombros hacia atrás, ofreciendo y pronunciando su pecho. Tenía 2 piercings, uno en el ombligo y otro en la lengua, con el que no paraba quieta, jugueteaba con su lengua y lo movía contra los dientes, haciendo ruidos evidentes.

Como os he dicho, la conocía y hasta la defendía en ocasiones de sus zorrerías ante los demás cuando la acusaban falsamente de haberme follado a mi, “ojalá”, quizá con la esperanza de que se sintiera en deuda y me la follara de verdad yo también, muchos chicos que habían estado con ella decían que era una loba en la cama, y otros muchos decían habérsela tirado sin ser cierto, pero ella no lo desmentía nunca, le gustaba ese juego de dejar la duda en el aire.

Los primeros rumores sobre mi debieron llegar a su oído, y noté como con el paso de los días se fue acercando más a mi, saludándome al inicio, luego quedándose conmigo en la hora del descanso, y esperándome luego para salir del instituto, charlábamos mientras su folla/amigo esperaba a su lado con el coche como un panoli. Hablábamos de las cosas de siempre, tonterías, ella solo tenia, o demostró, el recurso del sexo para hacer bromas o el sexo para tratar de hacerme reír, ya fuera menospreciando su cuerpo, “joder como me gustaría tener las tetas de esa y no estas birrias” y se las agarraba levantándoselas o me hacia a mi hacerlo delante de su pelele, o “esa es mas fea que la polla de este” señaló al panoli. La seguía el rollo pero la calé enseguida, hace 7 meses me tendría comiendo de la mano como un Chihuahua salido, pero yo ya no lo era, era un Rottweiler entrenado. Llegaba a hacerme acompañarla a su casa, mientras nosotros íbamos en la parte de atrás del coche, el panoli nos llevaba, era su taxi, me pareció ridículo y denigrante por él, pero así era yo no hacia demasiado. Nos subíamos a su casa y mientras él se queda en el salón ella me llevaba a su cuarto y se cambiaba delante de mi, ya lo había hecho alguna vez antes de la operación, pero ahora se recreaba, se quedaba en sujetador y tanga, no tenia ninguna prisa por volverse a vestir, me hacia darle masajes o me mostraba como le quedaba la ropa intima.

Tenia un cuerpo de cine, como casi todas a su edad, la piel suave y tersa, el sujetador le levantaba las tetas un poco, casi le rebosaban, se notaba que eran alguna talla menos de la que debía de usar, la imagen de ella agachándose con el tanga la tendré en mi cabeza para siempre, claro que me empalmaba, pero lo disimulaba bastante bien, no quería que notara la facilidad de mi reacción ante ella. Luego me desahogaba con alguna de las chicas que caían en mi juego, no quería que fuera rápido, quería que se esforzara, que lo deseara, que se enfadara por no lograr el premio, hacerla llegar a la frustración, como me había hecho a mi, y seguí haciendo como los demás, el papel de mojigato lo clavaba, había sido uno de ellos mucho tiempo.

Con el paso de una semana estaba loca, ya no sabia que hacer para desatarme, me buscaba con su cuerpo, se pegaba a mí y se frotaba como un oso contra un árbol, subía el nivel de zorra hasta el infinito, al principio a escondidas, luego con su payaso de “cani” delante, más adelante delante de toda la clase, diciendo frases ambiguas, tirándome los trastos públicamente. Ya me invitaba a su casa todos los días sin su chico delante, aun así le hacia llevarnos a su casa y luego le mandaba irse, era patético. En su casa parecía que solo vivía ella, jamas vi a nadie que no fuéramos los 3 nombrados, y ya no solo se cambiaba delante de mi si no que me pedía ayuda, la desvestía con ella poniendo poses, pero no de modelo, si no de actriz porno mala, hasta dejarla en sujetador y tanga, que cada día eran más minúsculos, andaba así por toda la casa, se me tiraba encima “jugando”, me pedía ayuda para coger algo alto y sin dejarme tiempo a cogerlo se metía en medio pegando su culo semidesnudo en mi cintura.

Debo decir que me sentía como Gandhi, el aguante, la paciencia, la resistencia pasiva que tuve que soportar era titánica, luego quedaba con alguna otra chica y la destrozaba de ganas, para rematar la faena le pedí la casa para tirarme a una, ya que siempre estaba vacía, y además, para ponerla desquiciada, le dije que era a su mejor amiga, una aprendiz de zorra que tenia como mascota, una chica pequeña, rubia, de ojos negros, con unas buenas tetas, y así lo hice, me follé a la aprendiz, en su cuarto, con ella en la habitación de al lado, y la hice gritar como una oveja en peligro, no solo por mi enormidad abriéndola, si no que paré en seco y la dije que si no gritaba a pleno pulmón que la siguiera partiendo, no lo haría, y a fe que lo hizo. Eso logró que saliera de si misma, en su casa ya iba solo con el tanga, le quitaba yo los sujetadores y me hacia tocarla por todos lados, con excusas baratas, me hacia sujetarle las tetas, preciosas y tersas con pezones oscuros, mientras se ponía crema corporal, cosas de ese tipo, pero me daba igual, sabia lo que buscaba y no se lo daría hasta que rogara como una posesa por ello, había momentos en que no aguantaba más y me iba al baño ha hacerme una señora paja o reventaría allí mismo, ella se percató y dejaba sus bragas por el suelo del baño nada más llegar a casa, yo las usaba, en parte por excitación y en parte por que las dejaba allí manchadas de semen para que supiera que prefería pajearme con sus bragas que tirármela a ella. Nos ponía a ver películas, algunas porno, y ella se acurrucaba contra mi, solo con el tanga, metiéndome mano, pegando sus pechos desnudos a mi, se metía una mano en el tanga y se tocaba, comentando lo que veíamos con palabras obscenas, pero siempre que intentaba pasar de allí conmigo, la paraba los pies.

Llegó un viernes en que habíamos quedado, de nuevo su panoli nos acercó a su casa pero ni se bajó del coche, se fue como un taxi, ya hasta ella le insultaba por ser tan pelele, a la cara y delante de mi, pero el tío no reaccionaba, “¡¡¡¡¡lo que le tenia que haber hecho en el pasado para tenerle así de controlado!!!!”, lo digo en pasado por que desde hacia una semana que no le tocaba según sus propias palabras. Subimos a su casa, y empezó el ritual, contoneándose dejando mochila y abrigos por el pasillo.

-ROCIO: anda, ayúdame con la ropa – se desabrochaba el sujetador aun con la ropa puesta metiéndose en su cuarto.

Entré y ella ya estaba de espaldas con el culo ofrecido, el pecho hacia fuera y girada mirando mientras se mordía un dedo, me acerqué y como de costumbre se echó para atrás para dejarse reposar sobre mi, pegando su trasero a mi ya abultado miembro, llevé mis manos a la cremallera de su pantalón y lo abrí, metiendo mis manos por la obertura y desliando sus apretados jeans por las piernas hasta dejarlos caer al suelo, solo con un tanga minúsculo, luego cogí su top ceñido de la parte del estomago y lo fui sacando con calma, en sus pechos se frenaba por sus obstáculos femeninos, pero tiré fuerte apretando sus tetas, medio sueltas entre el sujetador, hasta que pasaban de golpe y las notaba botar por la gravedad, levantó sus brazos para terminar de sacarla el top, y luego le quité el sujetador fácilmente, ella contoneaba su trasero frotándose contra mi pelvis.

-ROCIO: vamos, no tengo todo el dia, sujétamelas para poder echarme la crema.- se agachó, sin separar su cintura un solo centímetro, a coger la crema, al levantarse de nuevo se volvió a recostar sobre mi y me extendió en la mano un buena cantidad - estoy cansada, hoy hazlo tú, y recuerda no dejarte ninguna parte sin pasar.

Sin saber como soportaba aquello sin follármela hacia días, supongo que el ansia de venganza podía más que la lujuria, extendí toda la crema por su vientre, y fui masajeando y subiendo mis manos hasta llegar a sus pechos, los maltrataba un poco, ella gemía muy ligeramente, repasé todo su torso, sus costados notando sus costillas, su cuello y espalda, me cogió de la manos y se las llevó a los muslos.

-ROCIO: estas también necesitan se cuidados - y se pringó las piernas con el bote.

Repetí operación y recorrí todas sus piernas, muslos interiores incluidos, la di la vuelta y también repasé su trasero, con ella buscando mis labios pero yo me hacia el distraído, mientas pringaba la raja de su culo de crema hasta acabar.

-YO: ya esta, ¿nos vamos a ver una peli? - y sin más me di la vuelta y me fui, tan recostada sobre mi estaba que casi se va al suelo, mirándome atónita.

-ROCIO: vale……ahora voy…….tengo que…… ir al baño, ya sabes, cosas de mujeres jajaja - estaba perdida, a estas alturas cualquier tío ya se la habría tirado 10 veces.

Tardó unos minutos en salir, pensé que estaría dándole vueltas a al cabeza para saber que más hacer, cuando volvió estaba solo con el tanga pero era otro, se había cambiado y si el otro era diminuto esta era apenas perceptible, le tapaba lo justo como para denominarse ropa interior y no hilo dental.

-ROCIO: ¿que te parece?, me lo acabo de comprar - no se podía referir a otra cosa que a aquel trapo diminuto.

-YO: ¡¡WOW!! Lo luces genial - se vio halagada por 1º vez, y se dio una vuelta sobre si misma luciéndose, dejándose caer sobre mi como si hubiera tropezado, riendo, pero con gestos obscenos - bueno ¿que película toca hoy? - la aparté de encima mío, descolocada de nuevo.

-ROCIO: pues tengo algo especial, algo que hice hace unos días, una peli subidita de tono, una versión de una película de niños, la llamamos “MY TOY´S STORY”.- “¿¿acaso ha hecho pinitos en el porno??”

-YO: pues me muero de verla.

La puso y efectivamente era una versión cutre española de la peli de dibujos animados, tan cutre que me pareció que la había grabado el panoli hacia unos días, solo salía ella, con consoladores disfrazados de los juguetes de la película, y de cómo se los iba metiendo en el coño. Ella toda orgullosa se pegaba a mi y me daba los comentarios del director en vivo, hablando del tamaño de los consoladores, de su aguante, de su velocidad, de como lo hacia, acompañando con gestos, yo no podía dejar de mirar, alguno de esos consoladores eran grandes, no como yo, pero grandes. Ella se frotaba contra mí, la dejé creer que había logrado caer, sus manos bajaron a mi entrepierna, que estaba por independizarse de mí y salir a mirar ella sola, me levanté de golpe y me fui.

-ROCIO: ¡¿pero donde vas?!

-YO: me tengo que desahogar en el baño, ahora vengo - ya era inútil fingir que se lo ocultaba.

-ROCIO: huy, muchas gracias…….. es el mejor halago para una mujer……… es mejor que te sientes y lo hagas aquí, delante de mi,………así te puedo ayudar……..- se la veía como un corredor de maratón llegando a la meta, contesté rápido sin vacilar.

-YO: no gracias, no hace falta - y me fui con viento fresco al baño dejándola perturbada en el sillón, su cara era de corredor de maratón llegando a la meta y le hubieran puesto de nuevo al principio.

Según llegué al baño miré al suelo y vi el tanga que llevaba cuando la puse la crema, lo cogí y lo llevé a mi nariz, olía a hembra en celo, estaba empapado en sus fluidos, me saqué la polla dura como granito y puse la prenda en ella para pajearme, era más un fetiche grotesco que una acción realmente útil, aquel diminuto tanga no me cubría nada del pene. Me había puesto a mil, verla de piernas abiertas metiéndose un consolador enorme con la forma de un guardián intergaláctico sin ningún tipo de piedad, así que me corrí rápido y me aseguré de manchar bien su prenda, para dejarla de nuevo en el mismo sitio en el suelo.

Si la imagen al irme era bestial, al volver era una animalada, allí estaba Rocío, ya sin el tanga, abierta de piernas y hundiendo un consolador en su coño mientras frotaba su clítoris, me miraba fijamente, con desesperación en su mirada, era su ultima bala.

-YO: perdona, no sabia que estabas……… ya me voy.- su cara, sin dejar de sacar y meter aquel consolador en ella, era de incomprensión absoluta.

-ROCIO: no…… por favor, quédate………….me has puesto cachonda sabiendo que te pajeabas en el baño por mi vídeo, y necesitaba desahogarme…..pero no te vayas.

-YO: mira, no se si es tema mío, no me concierne, tienes chico y no me parece bien que te vea así.

-ROCIO: ¡¿que chico?!, ese es un payaso que no es ni la mitad que hombre que tú, dame un teléfono y le mando a la mierda ahora mismo - se lo di, y certificando la llamada, le mandó a paseo en menos de 1 minuto, pero sin dejar de penetrarse sola, colgó - !¿ves?¡ es un paria que no merece la pena, pero tú, tú eres otra cosa, quiero que me folles aquí y ahora.

-YO: pero acabas de romper con él, estas dolida, pobrecilla, mejor te dejo sola para que te tranquilices - recogí y me fui, necesité la fuerza de voluntad del imperio egipcio para salir de allí, pero la iba a dejar sin novio, caliente como una perra y desahuciada todo el fin de semana.

El lunes siguiente su actitud cambió, según me dijo Marina iba soltando pestes de mi, que era un maricón que no la había complacido al follarla, que la tenia enana y que todo lo dicho eran falsedades, lo que no sabia es que al 50% de las que se lo decía, ya me las había tirado o me la habían chupado y pajeado, directamente o alguna de sus amigas, así que cayó en desgracia por mentirosa y rabiosa, por no saber aceptar que no quería nada con ella. Con el paso de la semana la volvieron a llegar noticias, me había ha vuelto a tirar a su aprendiz, se le veía rabia en la mirada, decepción, odio, para el siguiente viernes, al acercarme a ella.

-YO: oye, ¿que te pasa?, llevas unos días muy raros y distantes conmigo- pregunté inocentemente.

-ROCIO: ¿que me pasa? Tú eres lo que me pasa, eres un imbécil y un marica de mierda, te vas foliando a todas, me tenias a mi, allí, abierta de piernas ¿y te largas?, eso no lo hace un tío normal, capullo - se desahogó, agachó la cabeza y medio lloró.

-YO: siento que te sepa mal, pero eres mi amiga desde hace tiempo, y siempre te has portado así conmigo, ¿no se por que ahora te enfadas? - la tiré el comentario de forma fina y estudiada, era cierto, ella solo quería follarme por la fama que tenia, no por que yo, o ella, hubiéramos cambiado, y quería que lo reconociera.

-ROCIO: ya, pero las cosas cambian, ahora eres más guapo y……- la corté.

-YO: no soy más guapo, no soy más divertido, no soy más nada, me he comportado igual que antes de la operación, has sido tú la que has cambiado ¿por que? he estado 2 años persiguiéndote y no querías nada conmigo, creía que había quedado claro – había que apretarla, y estalló en lágrimas ante mi.

-ROCIO: pues por que todas empiezan a hablar de ti, de cómo follas, de lo bien que las tratas, y de que la tienes enorme, y yo quiero eso, ¿me entiendes ahora?

-YO: pero eso mismo lo podías haber tenido desde hace 2 años, soy el mismo, ¿por que el cambio ahora? ¿Por que las demás tienen algo que tú no tienes? ¿Tan simple eres? Eres patética – me miró alucinando, cortando su falso llanto - si te follo será por que me lo ruegues, llores y supliques como la perra que estas demostrando ser, no por que te creas que con un poco de crema puedes tener a cualquiera……..- esperé una respuesta, pero no la tenia, di en el clavo, me fui lo más orgulloso de su lado que recordaba en mi vida.-…….. das pena.

La dejé allí, llorando, ahora de verdad, habiéndola dicho la cruda realidad, que era una zorra ansiosa, egoísta, manipuladora y que si me quería tendría que arrastrase, con todo otro fin de semana por delante para pensar en ello. Me volví a zumbar a su aprendiz, a la que Rocío ya estaba dejando de lado por tenerme a mi y ella no, pero sabia que le llegaría la información igual, de hecho a la aprendiz la llevé de fiesta con mis amigos y me la follé repetidas veces todo el fin de semana, no la penetraba tan profundo como Rocío se metía consoladores, pero el plan no era ella, si no que Rocío supiera de aquello, aun así, aquella ”mujercita” sabia moverse y la disfruté. Una vez fue en el baño de mujeres de unaa discoteca, la metí casi en brazos y sin dejarla tocar el suelo, la subí la falda, y la senté en la pila del baño, en el lava manos, delante de otras 4 mujeres, la bajé las bragas, me saqué la polla y la hundí en ella, follándomela de forma controlada con más de la mitad, logrando espasmos y gritos, y que las otras mujeres se quedaran mirando, alguna hasta sacó el móvil para hacer fotos y videos, a la que, sin dejar de penetrar a la aprendiz, le pedí que me las mandara a mi móvil. Después de un buen rato así, la di la vuelta, la puse de rodillas encima de la pila de espaldas mi, desde esa posición me la follé logrando orgasmo tras orgasmo, la sentía desfallecer ante mi, pero no paré hasta que me corrí, se venció fulminada al suelo, llevándose las manos a la vagina retrayéndose de dolor y placer, al darme la vuelta las 4 mujeres estaban besándose y masturbándose, a si mismas o entre si, mirando mi falo flaqueando después del polvo, les había regalado un espectáculo.

La chica del móvil, me dijo, mordiéndose el labio, que me mandaría todo si me la follaba también, ni lo dudé, la arranque el vestido dejándola solo con unas bragas que le bajé sin piedad, la aplasté de espaldas contra la pared, la abrí de piernas, masturbé su interior hasta tenerlo húmedo y abierto, me puse un condón y entonces la masacré, golpeaba con mi cadera hundiendo mi barra dura en ella, la penetraba más profundamente que a la aprendiz, también era más alta, logré que se corriera en menos de 10 minutos, torturándola contra la pared, pero seguí de forma fuerte otros 10 hasta que casi me corro, ella con los ojos en blanco, y entre corridas, me pidió que dentro no, así que la saqué mi lanza y cayó a plomo al suelo, pero se lanzó a chuparme la punta de la polla apartando el condón hasta que eyaculé encima de ella, la había quitado el móvil y había sacado fotos y algún vídeo más, los mandé a mi móvil y salí del baño como un gladiador romano después de una dura sesión en la arena.

Rocío – Desesperación.

Todo lo del móvil, se lo mandé a Rocío, todo, con comentarios de “esta podrías ser tu chupándomela” o “cuando quieras podrías ser embestida así” mandándola un vídeo. Ella contestó una vez llamándome de todo. Para el lunes siguiente me invitó de nuevo a su casa. Al llegar no hubo ritual, nos sentamos a hablar en el sillón.

-YO: bien ¿para que me has traído?

-ROCIO: ya lo sabes, me tienes loca y esas cosas que me mandaste, ¿de verdad eres tú?

-YO: el mismo que viste y calza.

-ROCIO: quiero follarte.

-YO: eso ya me lo has dicho, pero no veo que haya cambiado nada.

-ROCIO: ¿y que quieres que haga?, no puedo hacer más para excitarte.

-YO: no quiero que me excites, quiero que sufras, lo que has hecho sufrir a muchos chicos, como yo, usar tu cuerpo como imán para peleles para tenerlos a tus órdenes, hasta el pobre pelele al que dejaste en menos de 1 minuto solo por un rumor de que la tenia grande. ¿Que puedes ofrecerme para compensar eso? - se quedó callada, no había respuesta de nuevo.

-ROCIO: mira, lo siento, se que soy una zorra, pero no tiene nada de malo disfrutar de tu cuerpo.

-YO: tú no disfrutas de tu cuerpo, lo exhibes atrayendo abejas, y haciéndolas trabajar para ti, te estuve haciendo los trabajos del año pasado solo por que de vez en cuando me ponías las tetas en la cara o frotabas tu cintura contra mi, y a ahora estas aquí, suplicando que te folle……. ¿solo por unas fotos?

-ROCIO: ya te he pedido disculpas, soy así, mi familia no esta, les da igual lo que haga, tengo que buscarme la vida sola y lo único que tengo es mi cuerpo, ¿vale? Es lo quieres oír, que soy una desgraciada que cuando no tenga físico lo perderá todo.

-YO: eso es un comienzo, has admitido un problema, eres guapa, si, pero no solo eso, puedes ser mejor, puedes llegar a algo en la vida sin tener que venderte.

-ROCIO: eso dicen todos.

-YO: será por que muchos lo pensamos, y como las palabras se las lleva el viento, prometo ayudarte, te voy a apoyar, ayudar en el instituto, para que entres en la universidad, si quieres, sabiendo que hacer con tu vida.

-ROCIO: ya claro, y solo tendría que acostarme contigo, ¿no? – supongo que es a lo que estaba acostumbrada, favores a cambio de sexo.

-YO: no, si no quieres, te ofrezco mi ayuda, que no mi servidumbre, a cambio de nada, no tienes que darme nada que no quieras, y si tiene que pasar algo, pasará, pero por que los 2 queremos y lo deseamos, no por que quieras algo de mí. ¿De acuerdo? - lo pensó unos segundos, me miraba preguntándose si era cierto, si de verdad había alguien en el mundo que estuviera allí para ayudarla sin meter su cuerpo, o el sexo, de por medio.

-ROCIO: esta bien, pero tengo un problema.

-YO: ¿cual?

-ROCIO: que yo quiero ahora, quiero follarte y se que tú me deseas también, podemos hacerlo, solo por el placer de hacerlo, ¿sin trampas, ni engaños, ni dobles intenciones? Solo diversión, por que los videos me han hecho correrme más de una vez al verlos.

-YO: solo si lo quieres tú, no la golfa que busca imbéciles por los pasillos, te aviso, que si lo hacemos y me fallas, cortare de raíz, y ahora sabes que te puedo hacer la vida muy difícil, no me obligues.

-ROCIO: trato hecho - extendió su mano para firmar el trato, yo dudé, ya la había castigado lo suficiente, había logrado que fuera un cambio en su vida para que no hiciera daño a más chicos o a ella misma, pero podía ser un truco, y al día siguiente ir divulgando su logro, pero mi objetivo no era ser un Mesías salvador, si no follármela salvajemente después de haberla hecho suplicar, y eso había pasado.

Me puse en pie y me desnudé de forma rápida y sin tonteras, dejando mi polla al aire, en reposo.

-YO: aquí tienes tu premio por ser buena chica, no por ser una zorra - su mirada era fija, no se sorprendió tanto, había visto las fotos, pero mi polla en vivo ganaba.

Me puse a su lado y la levanté para ponerla de pie, ella no apartaba la vista de mi miembro, la pegué contra mi y la besé el cuello, metiendo mi mano por debajo de su camiseta, acariciando su espalda, ella permanecía quieta, se dejaba hacer. Desabroché su sujetador y le quité la camiseta, atacando sus pezones con mis labios, mientras la ponía de puntillas debido al agarre de mis manos en su trasero, por fin reaccionó y bajó una mano a mi miembro, cogiéndolo de la punta y dando un suave masaje al glande, mientas se me iba poniendo dura, alcé mi cabeza para besarla en los labios, el primero fue bonito y dulce, el segundo ya fue pasional, con legua, noté el trozo de metal de su piercing en la lengua, ambos sabíamos movernos, mi fuerza en el torso hizo que ella echara su espalda hacia atrás, pero no dejaba que su cintura se alejara, apretándola contra mi pelvis y separando sus nalgas a través de la ropa con las manos.

-YO: ¿si es lo que quieres?, pídelo.

-ROCIO: lo quiero

-YO: ¿el que?

-ROCIO: ¡¡¡quiero que me folles!!!

-YO: ¿ah si? ¿A cambio de que?

-ROCIO: por nada, a cambio de nada, solo quiero sexo.

-YO: así me gusta, ahora lo tendrás por que eres buena y lo has pedido con educación, pero te advierto que me has puesto muy caliente y no respondo de mi, lo que le hice a las del vídeo va a ser una chorrada con lo que voy a hacer a ti - lo dije cerca de su oído, para cuando acabara lamerla el lóbulo de su oreja, por lo que había visto, le ponía tontorrrona.

La di la vuelta cuando ya la tenia como un piedra, y metí mi verga por debajo del tiro de su pantalón, atravesándola hasta dejar mi glande a su vista cuando miraba hacia abajo, llevé mis manos a su cremallera y repetí procedimientos previos para bajárselos, ella ayudó doblando el torso para terminar de quitárselo, pero sin doblar las rodillas, al levantarla recorrí su cuerpo, mis manos pasaron pos sus muslos, su cintura, el vientre, sus pechos y allí quedaron apretando sus tetas, mientras, con mi polla palpitando entre su piernas, comencé un mete saca suave, frotándola toda la tela del tanga, lo hice durante un rato, hasta asegurarme de que estaba mojada.

-YO: ¿te crees muy dura por meterte esos consoladores? Veremos si aguantas sin correrte antes de que te penetre - se le erizó la piel, no estaba acostumbrada a ese tono o palabras.

La senté en el mismo sillón donde hacia unas 2 semanas le tenia abierta de piernas perforándose con un gran consolador, la abrí de piernas y me puse en medio atacando sus pechos, con una mano frotando por encima de su tanga, fui bajando con deseo repasando cada zona, jugando con mi lengua en el piercing del ombligo, tirando un poco de el con los dientes, para cerrar dándole un chupetón en una da la cara interna de uno de sus muslos, muy cerca de su vagina, ella se masajeaba las tetas mientras respiraba profundamente, más que por lo hecho, por lo que intuía que pasaría. La levanté la cintura y de un tirón le arranqué el tanga, mirándola a los ojos lo olí delante de ella.

-YO: hueles a gata en celo, y se como tratarte - inspiré profundamente y las metí en mi pantalón, eran mi regalo.

Sin preámbulos ya que no era ninguna damisela, abrí sus labios mayores y chupé la zona, estaba bastante mojada, pero quería más, cuando estaba bien lubricada, fui metiendo un dedo tras otro, metiéndolos y sacándolos con rapidez, la oía gemir con cada ida y venida de mi mano, me puse en pie pero doblado hacia ella, con la mano en modo masturbación del punto G, que ya había localizado, y mientras la besaba, mi mano se movía lentamente en su interior, acelerando con cada gesto, ella al inicio no se le notaba, me besaba como si no pasara nada, pero según iba aumentando el ritmo, también lo hizo los fluidos que salían de su interior, y la pasión en su lengua, repasando cada rincón de mi boca, hasta que no pudo más y echó la cabeza hacia atrás gritando de placer, para después, ante mi incansable movimiento, me miraba a los ojos poniendo morritos. Metí mi cabeza entre sus tetas y sin parar de acelerar el ritmo de mi mano en su interior, lamía y chupaba sus pechos, jugueteando con sus pezones, era difícil, se movía de forma agitada, cerraba y abría las piernas muchas veces, hasta que reventó en un orgasmo brutal, bañándome la mano, el sonido de chapoteo era evidente pero seguí con la mano a buena velocidad, sin que ella mascullara una sola palabra, solo abría la boca de frenesí, logré una 2º explosión, y ya mi brazo se cansó, acariciaba por fuera su empapado coño, mientras seguía comiéndole un pecho. Subí la mano empapada y me la limpié con la piel de sus tetas, ella automáticamente se llevó las tetas a la boca lamiendo por encima sus propios fluidos de sus pezones.

Me senté enfrente en el sillón, mientras ella cogía con su mano más fluidos y luego se chupaba la mano de forma obscena, estaba ya totalmente empalmado mirando la escena.

-YO: vaya, me has decepcionado un poco, ya voy 2-0 y aun no te he ensartado - su mirada aceptó el reto, se dejó caer al suelo, y andando a gatas hacia mi contoneado el culo, me decía guarradas.

-ROCIO: ¿sabes que es lo me más me ha jodido de la fotos?, que esa puta no sabia chupártela, apenas se metía el glande – tenia razón.

-YO: ¿y tú lo harás mejor?

La respuesta no fueron palabras, se colocó entre mis piernas donde estaba mi polla tiesa siendo masturbada ligeramente por mi, me quitó la mano y la agarró con ambas manos, me pajeó suavemente midiendo los tiempos y las distancias, cuando notó los limites, abrió la boca como desencajándola, sacó la lengua y de un tirón se metió 1/3, la noté toser pero no moverse, sentía su lengua estirada moviéndose por mi tronco, cerró sus labios y comenzó a sacársela de la boca sin dejar un solo ápice de piel sin embadurnar de saliva y rodear con sus labios, al llegar a la punta jugó con su lengua en mi glande, mientras con ambas manos seguía pajeándome, sabia lo que sea hacia, subía el ritmo y repasaba mi tranca con su lengua a ratos, mientras que en otros se metía el tercio en la boca, y no solo metía, como muchas de la chiquillas que habían pasado por allí, aquella loba chupaba y sorbía las babas para volver a untarme la polla con ellas y volver a chuparla.

Ladeó la cabeza repasando con sus labios todo mi tronco y se la volvió a meter en la boca, dando mi glande con el dorso interior de sus mejillas, lo subía a y bajaba, o lo dejaba allí, haciendo presión mientras con una mano por fuera se golpeaba la mejilla y por ende mi capullo. Me tenia a mil, y me mató cuando después de golpearse la cara con mi polla, y seguía pajeando, metió en su boca mis huevos, los lamía y metía en su boca de forma alternativa, con dulzura pero firmeza, lamiendo y besando la base de mi polla, dios, aquel trozo de metal de su boca era una delicia. No aguanté más y me corrí allí mismo, fue tan fuerte que la paso el semen por encima casi sin tocarla.

-ROCIO: 2-1 – sonreía mientras seguía masturbando pausadamente con unos ojos llenos de lujuria.

-YO: tendré que sacar a los titulares.

Metí mis manos por dejado de sus brazos y de un tirón la subí encima mía, no soltó mi polla que estaba algo flácida, y la masajeaba para recuperarla para la causa, mientras nos besamos de nuevo, ya sin tonterías, de forma grosera y sexual, la apretaba tanto que mi falo ya endurecido pasó por debajo de ella, quedando aplastada por su peso, la levanté del culo hasta tener sus tetas a mi alcance bucal de nuevo, y mientras ella llevaba sus manos atrás, a mi lanza, buscando que se endureciera, cuando ya estaba al 100% bajo su cadera.

-YO: ten cuidado, no se como de abierto lo tendrás

-ROCIO: mucho.

Dirigió a la entrada de su coño, metió el glande sin dificultad, estaba mojada, giró la cadera buscando impulso y de golpe se dejó caer, de largo 20 centímetros a la 1º, “está bien entrenada”, aunque el grosor la dejó quieta unos segundos, mientras sus paredes vaginales se acostumbraban al tamaño.

-ROCIO: ¡¡¡dios!!!, es más grande que cualquier chico o consolador que haya metido, todavía queda mucha fuera y me siento a reventar.

-YO: pues ten cuidado por que esto acaba de empezar - bajé mi cuerpo hasta sacar el culo del sofá, planté las piernas al suelo, y la agarré de la cadera - preparaste para gozar.

Sin ningún ápice de cuidado, ni piedad, comencé a follármela, de forma bestia, cogí ritmo rápido y cómodo, fácil de aguantar, y no paré, ella pasó por todos los estados, tranquilo, excitado, me vas a partir, dios que grande y volvía a empezar, pasaba eso por que cada ciertas embestidas, mi polla penetraba más, notaba como su pelvis se abría y me dejaba llegar más a su interior, no se la metía entera pero casi, y el ritmo era elevado, tras 15 minutos de golpes fuertes y descansos, logré que emanaran fluidos de su coño bañándome, pero como era costumbre no paré, seguí, a los pocos minutos otro orgasmo, ella se quería bajar, yo la sujetaba y seguía, ya no me gritaba, solo salían gemidos rítmicos con cada embestida, cayó hacia delante sobre mi, sin fuerzas, notando como su espalda se retorcía con cada espasmo que nacía entre sus mulos. A los 20 minutos ya estaba a punto de reventar de nuevo, ella estaba asfixiada pero había entrado en un estado de aceptación de la situación y solo disfrutaba, di un par de golpes más fuerte para terminar eyaculando sin control.

-YO: ¡¡¡¡¡¡¡¡joder, así si se folla!!!!!!!! vaya delicia de coño que tienes, casi te la metes toda - la saqué de mi y la dejé medio de lado sobre el sofá, cogiendo bocanadas de aire y llevándose la mano al coño para comprobar lo abierto que lo tenia, era recurrente aquello.

-ROCIO: ¡¡¡¡¡JESUS!!!! me acabas de hacer la mejor follada de mi vida, no me he corrido tanto nunca, dios, no es solo larga, es que es ancha, me parte, siento como cede mi interior……- jadeaba mientras se retorcía sobre si misma - ……… normal que tengas a todas locas.

-YO: pues si quieres es toda tuya, solo tienes que comportarte y ser buena chica.

-ROCIO: jajajaja que malo eres, pero esto no ha acabado, llevas mucha ventaja en tu casilllero, déjame el del honor.

Se me montó encima de espaldas, llevando una mano a mi polla para levantar de nuevo el animo, cuando estaba dura de nuevo, fue a un cajón y sacó lubricante, se tumbó a mi lado y se pringó un dedo, luego se lo llevó al ano, y lo acarició hasta meterse el dedo, me lancé a ayudarla, me mojé dos dedos y la sustituí, luego tres, “que maravilla”, como se abría, ya estaba lista y con los pezones duros, me coloqué en la posición del misionero, pero apuntando a su ano, y haciendo presión mientras ella se tensionaba bajo mi cuerpo, mi glande entró, dejé un minuto para que se le quitara la cara de susto y su ano se expandiera, luego iba penetrando sin parar, abriéndome paso, cuando llegué lejos, la saqué, vi el agujero hecho y la volví a meter de golpe, repetidamente lo hice hasta que entraba y salía sin dificultad, entonces ya no tuve compasión, cogí posición y arranqué un ritmo que hacia que ella rebotara contra el sofá con cada golpe, a los pocos minutos ya la penetraba totalmente, chocando mi pelvis con su trasero, su cara era de asombro total, no paraba de moverse hacia cualquier lado, buscando algo que no encontraba. Llevó una mano a su coño para masturbarse y eso solo hizo que se corriera de nuevo, la situación se descontrolo y se me salió, ella casi lo agradeció.

-ROCIO: ¡¡¡¡¡¡¡¡me partes, que sensación, veo estrellas, si sigues así me vas a matar!!!!! - algún espasmos muscular pasó de largo - déjame a mi llevar el ritmo

Me sentó y ella se puso de espaldas, apuntó a su ano con mi polla y una vez ensartada, se recostó sobre mi, levantando las piernas apoyándose en las mías, así ella hacia fuerza y se levanta y bajaba a su ritmo, con el paso de lo minutos la volvía a tener toda dentro de ella, que gritaba improperios incoherentes, mientras se masturbaba, se corría nuevamente, no paró de soltar fluidos, yo ya estaba harto de aquello y agarrándola de la cadera tomé el mando y el ritmo, bombeando de forma brutal, coda golpe la levantaba un palmo en el aire y la hacia caer a plomo para recibir otro golpe, se llegó a caer hacia delante poniéndose a 4 patas saliendo de mi, al verla en esa posición, con un tremendo agujero en medio de su culo, me puse de rodillas detrás de ella y la volví a empalar, haciendo que nuestros cuerpos fueran fuerzas opuestas, el sonido de mi pelvis golpeadora era rotundo y a cada golpe ella andaba un poco para adelante, queriendo alejarse y dejar de gritar de gusto, pero no la dejaba, la volvía a atraer sobre mi, sin piedad. Estaba rendida en el suelo, apoyando la cara y el pecho en el parqué, se había convertido en un culo en pompa inerte que era perforado sin compasión, ya ni se corría, ni se movía, solo recibía. Me mantuve así los últimos 5 minutos hasta que me corrí por 3º vez, desde Eli nadie me había puesto tan al límite.

Me senté el sofá, roto de cansancio, empapado en sudor y mirando aquel mueble decorativo en que se había convertido Rocío, no se movía, seguía en la misma poción con el agujero de su culo cerrándose poco a poco.

-YO: esto es para que sepas que si me fallas no tendré piedad de ti, lo sabré, no te diré nada y te llevare a este punto una y otra vez hasta que supliques perdón - su cuerpo cayó de lado, dando por fin indicios de vida en ella.

-ROCIO: me has roto el culo carbón, ¡¡¡¡me lo has roto!!! – carcajadas ahogadas salían de su garganta.

-YO: y más que te romperé, esto es solo el inicio.

Durante los últimos 3-4 meses de instituto la ayudé como prometí y ella se comportó mucho mejor con los chicos, cosa que no les gustó a ellos, hasta logré que vistiera de forma más recatada, todo a cambio de no dejar las sesiones de sexo salvajes en su casa casi todos lo viernes, y entre semana en el instituto, o hacíamos pellas un día y nos íbamos a su casa para follar de nuevo, se convirtió en una habitual, aunque no la única.

Las mejores sesiones fueron cuando empezó a invitar los viernes a su casa a la aprendiz, no fue mi 1º experiencia con tríos, pero si la 1º real sin ensayos, ni Eli cerca, al principio solo follamos Rocío y yo con ella masturbándose, pero la invitamos a jugar, era pequeña pero sabia lo que se hacia, la comía el coño mientras la otra me cabalgaba como una amazona, luego me chupaban la polla entre las dos, alguna vez cogí a la aprendiz y la hacia un 69 en el aire, mientras ella me comía la polla por arriba Rocío lo hacia por abajo, me sentaba en esa misma posición sin dejar de hacerse correr a la aprendiz y sin que ellas pararan de sacarme semen, Rocío hasta se lo tragaba ya. Las ponía a horcajadas una sentada encima de la otra, se besaban y acariciaban, yo desde atrás las iba penetrado alternativamente, metía mi polla en el coño de la aprendiz hasta que se corría, y luego en el de Rocío, y hacia lo mismo, Rocío tenia mucho más aguante pero yo tenia mucho más que ambas, cuando la pobre aprendiz se bajaba del carro por agotamiento, empezaban las sesiones anales con Rocío, siempre terminaban igual, con ella “muerta” sin reacción, tardaba unos segundos en volver en si, y para cuando terminaba con ella, la aprendiz ya se había recuperado e iba a por ella. En un viernes logré echar 10 polvos con ellas en el margen desde la vuelta del colegio hasta la madrugada, mientras una se iba al baño, descansar o comer, me follaba a la otra, cuando era yo el que me iba eran ellas las que seguían jugando. Acabamos a las 6 de la mañana rotos, dormidos como críos los 3 desnudos en la misma cama, abrazados, ni que decir tiene que al levantarme me las volví a follar hasta la hora de comer, a Rocío ya le entraba toda por el coño y el ano, y a la aprendiz más de media polla en el coño y empezamos a disfrutar de su ano, era tan pequeña que la comparación con mi enorme estaca era gigante, aun así logró meterse ¾ de polla por el culo, gemía como un cochinillo al que estuvieran matando, pero no se bajaba ni dejaba de rebotar sobre mi.

No era una relación, no quedábamos a tomar cañas o salir a pasear, y en el instituto solo nos mirábamos para secuestrarnos unos a otros para sesiones de sexo improvisadas, llegó un momento en que me harté de aquellas 2, como había cambiado el tema, de matar por estar con una a follarmelas tantas veces que me sentí hastiado, no daban más de si. A Rocío la dejé de lado en las sesiones de sexo, aunque la ayudaba en todo lo demás, consiguió sacarse matricula y entrar en la universidad, hoy en día es asistente social y ayuda a la mujer maltratada. La aprendiz fue al revés, era una estudiante normal y con el paso de las sesiones se le fue a la mierda el curso, tuvo que repetir, pero a ella me la seguí follando hasta final de curso, me daba más morbo a esas alturas.

Quedaba 1 mes para el final del curso, y a estas alturas era difícil encontrar una alumna mayor de 18 soltera que no hubiera pasado por mi de alguna manera, yo ya no le hacia ascos a nada, pensé que todas merecieran disfrutar así que bajé el listón queriendo regalarme a las chicas menos populares, más “feillas” o con kilos, aquí lo pasé mejor, algunas aun eran vírgenes y desvirgué a 2, mientras que a otras no les entraba mi polla así que disfrutábamos de sexo oral y masturbaciones, siempre podría desahogarme con Rocío o la aprendiz, como os dije, sorprendido me encontré cuando me harte de ellas, así que siempre lograba que alguna de las que ya me había tirado cayera de nuevo, no eran tan fogosas ni tan profundas pero en la variedad esta el gozo.

Yo me convertí en un carbón, en ese chico que no quería ser, un capullo arrogante que se creía superior, y aunque objetivamente pienso que lo era, al comentármelo Marina en una de las pocas veces que me la volví a zumbar, me dejó pensativo, Eli me había avisado, yo no quería ser así, pero tenia a la mitad de las chicas del instituto persiguiéndome, mi mentalidad de adolescente me volcaba en esa dirección. Estaba retomando el tiempo perdido, por así decirlo, gané un barbaridad de experiencia y aprendí a tratar a una mujer según su forma o tipo, hasta ese momento era, en el sexo, un empollón sin experiencia en el tiempo, al salir del instituto era una maquina de follar que buscaba retos, salvo Rocío, ninguna se metía mi polla entera, y la mayoría no pasaba de la mitad.

Me ha costado mucho elegir quien seria la alumna que os relato, como os he dicho las sesiones con todas eran bastante iguales y solo algunas merecían la pena ser relatadas. Al final me he quedado con 2, no podía dejar pasar ninguna.

Pamela - La diosa de ébano.

Andaba algo absorto, las sesiones de sexo con Rocío y aprendiz eran salvajes pero llegó un punto en que no avanzábamos, me cansé de ver sus cuerpos desnudos, ya no me excitaba nada más verlas, tenían que trabajar mi pene un buen rato para lograr que me empalmara. Así que fui apartándome de ellas, más a Rocío que a la aprendiz, volví a la caza, buscando……..algo diferente.

Lo encontré en Pamela, una chica de mi curso pero de otra clase, era un poco tímida y callada, sin muchas amigas, llevaba solo 2 años en España, sus padres eran de costa de marfil y habían venido en busca de trabajo, hablaba y entendida bien el español pero lo hacia con un toque francés, que hablaba perfectamente. Me fijé en ella por su piel, esa chica era negra, no morena ni tostada, era de un negro brillante, liso y atractivo. Media 1,75, tenia el pelo negro, suelto, media melena cayendo hacia un lado de su cara y siempre liso, supuse que debía alisárselo todos los días por que si no lo hacia se le encrespaba, pero eso le daba aun más morbo a una cara espectacular, sus ojos eran marrones, la piel de su cara no tenia imperfecciones, era muy guapa, lo mejor es que tenia unos labios enormes, hinchados, se ponía algo de lápiz de labios rosa que contrastaba con su oscuridad, como el blanco de sus ojos, el físico era fácil de adivinar, llevaba siempre camisetas con botones bien ceñidas, abrochadas por encima de sus pechos, eran prominentes y el sujetador le daba una figura deliciosa. Como casi todas las chicas de la época llevaba un pantalón ajustado desde su cintura hasta las rodillas, allí cambiaba algo y se abrían un poco en forma de campana, ya fuera vaquero o de tela. Lo que no tenían las demás era su espectacular trasero, parecía que le fuera a reventar la tela, se le marcaban bien las bragas, y cuando andaba le retumbaban las nalgas de forma que todos los tíos clavábamos nuestras miradas en ella, no los buscaba ni se contoneaba, le salía de forma natural, más de uno no pudo resistirse y al pasar ella por su lado la daba un cachete en el culo, al principio ella se enfadaba mucho, pero con el paso del tiempo llegó a aceptar que su culo provocaba aquello pese que no esta bien, era un culo de negra, de esos que generan envidia, bien colocado, grande y redondo.

No me fue difícil iniciar una relación de amigos con ella, como digo, era una solitaria, así que cualquier muestra de cariño o afecto era bien recibida, durante una semana me trabajé su amistad, hasta la defendí de un chico que como os digo no se resistió y la dio un cachete en el culo, ella casi ni reaccionó, ya lo veía normal, pero le abronqué. Después charló conmigo, su acento francés me derretía, pero como no se como escribirlo, siempre que ella hable, lo podéis imaginar.

-YO: no deberías dejarte manosear.

-PAMELA: te agradezco tus palabras, pero casi ni me importa.

-YO: no esta bien que te dejes, mereces un respeto - la acariciaba un brazo, ya la tenia en ese punto de confianza.

-PAMELA: si yo no les dejaba, pero es que no me hacían caso, y no quiero ir a las profesoras y ganarme enemigos, así que ya me da igual, les dejo y así todos contentos.

-YO: ¿todos?, no creo que tu estés contenta.- no podía, ¿o si?

-PAMELA: bueno, no me gusta, pero……….

-YO: ¿que?

-PAMELA: pues que…….sabes, no tengo muchos amigas, ni menos chicos, no hay más africanos o descendientes, y por ser…..negra, los chicos no se acercan a mi, así al menos me siento……..

-YO: ¿ …….deseada? - asintió un poco avergonzada por reconocerlo.

-PAMELA: no esta bien, supongo, pero me vale.

-YO: bueno, eso es por que tú quieres.

-PAMELA: ¿por que?

-YO: hombre, no te creas que los chicos lo hacen con todas, solo contigo, y es normal………- la dejé botando para que preguntara.

-PAMELA: ¿normal por que? - hice como si me costara responder.

-YO: pues por que tienes un trasero espectacular, el mejor culo del instituto de largo, yo también me he fijado, y tú lo sabes, si quisieras podrías ponente unos pantalones más sueltos y así disimular, pero vienes siempre tan ……..apretada, que a tu paso vas dejando a todos tiesos, ¿Cómo resistirse a golpearlo? - se abrumó, era una verdad como un templo.

-PAMELA: bueno, si, un poco, pero también es que todos me quedan así, me cuesta un mundo ponerme los pantalones, en las tiendas me pruebo muchos, pero……..

-YO: ……..los llenas, joder, es que lo tienes enorme, pero no en el mal sentido, es precioso y verte caminar de espadas es un pecado.

-PAMELA: jajjajaja muchas gracias, la verdad es que tenia algo de complejo pero empieza a gustarme, tendré que sacarle partido si quiero salir con chicos de aquí.

-YO: ¿de aquí?

-PAMELA: claro, yo ya salía con chicos en mi país - se indignó un poco -¡a ver que te crees!, si ni soy virgen.- se dio cuenta de que su comodidad en la conversación la había soltado la lengua de más, pero normalicé la situación.

-YO: ni lo pongo en duda, desde luego tenías que arrasar allí, y es una pena que aquí no te vean así, como te veo yo, una mujer espectacular - puse mi mano sobre una de sus piernas.

Mis palabras calaron en su cabeza, y me miraba como si hubiera dado en el clavo de un impedimento en su cabeza, hasta el punto de que debió recordar algo, ¿las conversaciones de chicas en el baño sobre mi?, así que sonriendo y tratando de disimular me miró a la polla.

-YO: si, yo también tengo mis problemas - me agarré la esstaca por encima de la ropa, se sobresaltó.

-PAMELA: perdona, no quería decir……- se ruborizó - ….¿que problemas?, ¡si eres el más popular y cada semana andas con una distinta colgada del cuello!

-YO: pues si, pero no…..vamos, que busco……pero ninguna me………..llena, por así decirlo - volví a apretarme la entrepierna con la mano - es difícil encontrar a una mujer que sea capaz de………aguantar.

Se le notaba en la mirada que aquellas palabras resonaron en su cabeza mientras le comentaba alguna otra cosa como si lo que hubiera dicho no tuviera relevancia.

Al ser viernes quedé con Rocío y la aprendiz para ir a su casa, pero antes invité a Pamela a tomar un helado, ya era primavera y el calor aumentaba, seguimos charlando de su vida allí, de su adaptación…….Después acompañándola al metro para que se fuera a casa entró en una tienda y salió con un par de bebidas, se esas en vasos de cartón y tapa de plástico, se bebía una ofreciéndome la otra, bebí, y la hizo mucha gracia, dándome 2 besos en la mejilla, se fue.

-PAMELA: ya me contarás el lunes.

No entendí el comentario, y me fui para casa de Rocío, (las siguientes 3 horas podría dedicarle 1 o 2 relatos largos, pero no lo haré, entre otras cosas por que no me gusto quien fui, como me comporté y lo que ocurrió, se puede decir que es lo más cerca que he estado nunca de la violación.) La casa no estaba lejos y fui andando, según avanzaba noté un calor creciente en mi, un calor que empezó como un hormigueo y fue aumentando hasta abrasarme bajo la piel, no sudaba, no era el tiempo, ni la ropa, era yo. Llegado un momento se me puso dura, sin motivos ni provocaciones, la gente me miraba por la calle pero me daba igual, estaba ido, para cuando llegué con Rocío estaba ahogado, abrasado y con una erección de caballo, sin mediar palabra cogí a la aprendiz y me la llevé al cuarto, nos desnudé, la abrí de piernas y sin más la penetré, estaba rebosando de lujuria, en 10 minutos ya la tenia corriéndose y en 20 comencé a penetrarla más profundamente de lo que solía, sin cuidado, como era normal, la destrozaba, golpeaba la pared de su útero con mi glande, pero en vez de parar o frenarme, seguí golpeando, sus gritos ya no eran de placer si no de dolor pidiendo ayuda, entró Rocío y me tuvo que parar, le costó, cuando me di cuenta de lo que pasaba me quité de encima a la aprendiz y le arranqué la ropa a Rocío, en un cuarto de hora la tenia en la misma situación que con la aprendiz, pero metiéndosela toda, después de 40 minutos sin parar, sin correrme y sin notar que me calmara, sus gemidos de placer pasaron al silencio y del silencio a la suplica de que parara, se había corrido unas 6 veces y yo no paraba, no podía, se derrumbó en la cama medio ida, yo me enfadé por que no se movía, me quedé de pie, quemándome la piel, con un fuego interno, una erección bestial después de haberme follado durante mas de 1 hora a 2 chicas sin correrme, no entendía nada, miré a la aprendiz y su cara era de pánico, de miedo por que la volviera a tocar. Tomé conciencia y salí de allí pitando, cogí un taxi y fui derecho al gym de Eli, la llamé diciéndola que me daba igual que estuviera haciendo, que desalojara el gym por que iba para allí, a reventarla.

El dolor en mi polla empezó, seguía tiesa, sin bajar y sin que mi cuerpo pudiera hacer nada, y mi mente no entendía, cuando llegué al gym y subí, estaba Eli y la monitora cubana, pregunté que hacia allí, no le había dado tiempo de recoger, razoné por 1º vez en hora y media, pedí que se quedara, le dije que en ese momento no confiaba en mi mismo y en que pudiera hacerla daño. Le conté lo que pasaba mientras me desnudaba, la cubana alucinó al ver mi polla, y Eli al verme desesperado, sabia que aquel no era yo, estaba ardiendo, solo quería que alguien apagara mi fuego, y los gestos de cariño preocupados de Eli no ayudaron, me abrazó y no aguanté la sensación de mi falo chocando con su cuerpo, la rompí la ropa, la tiré al suelo y me la follé salvajemente, ella se dejaba hacer, no quedaba otra ante mi abrumadora fuerza, de refilón veía a la cubana desnuda y abierta de piernas masturbándose con energía, pero me daba igual, hasta ni miraba a la diosa que tenia empalada debajo de mi, durante otra hora me la follé sin parar y sin correrme, de vez en cuando ella se corría y pedía cambio de posición, o que ella llevara el ritmo, para que no le doliera, pero no tardaba mucho en que la volvía a hacer daño, estaba fuera de mi, era un potro desbocado, se la metí por el culo, y otros 20 minutos así, Eli ya estaba agotada, hastiada y sin fuerzas.

La cubana se ofreció orgullosa a continuar el testigo, mal hecho, no estaba en mis cabales, la reventé tan fuerte que en menos de 30 minutos ya la tenia gritando de dolor pero no paraba, creo que se llegó desmayar, varias veces, su cuerpo era inerte. Eli volvió en si y me separó de ella, me sentó y me hizo una mamada de tal forma que de cualquier otra manera ya estaría eyaculando, pero nada, llevaba 2 horas largas, me había follado a 4 mujeres distintas, sin eyacular, ni la erección bajaba, sin que se me pasara el calor. A la desesperada Eli se chupó un dedo y me lo metió por el culo, buscando el punto G del hombre, ya lo habíamos ensayado en mi aprendizaje, no me había gustado, ahora me daba igual, solo quería que aquello parara. No se donde tocó pero por fin, casi después de 3 horas y con el numero de emergencias marcado en el móvil, eyaculé, reventé como un animal, se me pasó el dolor pero seguía abrasado y con la polla dura. Ya con la ayuda de la cubana, vuelta a la consciencia, siguieron chupándome la polla con un dedo metido por el culo, en 20 minutos eyaculé unas 4 veces, con cada una de ellas, mi polla perdía fuelle y mi cuerpo se relajaba.

-ELI: dios mío, menos mal, esto ya esta casi normal, ¿Qué coño has tomado?

-YO: nada, estaba tomando algo con una chica, luego he ido a ver a unas amigas y me sentía ya así, me las he tirado pero las he reventado, he venido aquí y ya me has visto.

-ELI: ¿has tomado viagra o algo?

-YO: ¡¡que va, ni que me hiciera falta!! Ya los sabes.

-CUBANA: esto no es viagra, esto es una mierda africana, he oído hablar de ella, se la dan a los guerreros antes de las batallas y antes de casarse para empezar la noche de bodas y asegurar virilidad.

-ELI: esa chica, con la que has tomado algo, ¿Te ha dado a probar algo?

-YO: no, nos hemos tomado unos helados, yo mismo los compré, luego solo unas………- “MALDITA ZORRRA, LAS BEBIDAS”.- ………..¡¡que guarra, me ha metido algo en la bebida!!

Pasé una hora más con ellas dos, tranquilizándonos y retomando un estado natural, las había partido, la cubana efectivamente se había desmayado un par de veces y Eli estaba totalmente escocida, nos duchamos con cuidado de no volver a levantar el ánimo y me volviera el efecto. Pasé el fin de semana tranquillo en casa, Rocío me llamaba por que le había encantado y quería repetir, pero decidí vengarme de Pamela, ¿porque lo habrá hecho? Llegó el lunes y en el descanso fui directo a ella.

-PAMELA: ¿que pasa?, ¿que tal lo has pasado? – una sonrisa maliciosa hacia destacar sus grandes y limpios dientes blancos.

-YO: pues abastaste mal, puta loca, ¿que coño me diste?

-PAMELA: unas gotas de una cosa que guarda mi padre antes de tirarse a mi madre, no veas como gritan jajaja.

-YO: muy gracioso ¿y las has probado?

-PAMELA: ¿yo? Que va, me pareció divertido dártelas.

-YO: ¿por que lo has hecho?

-PAMELA: por que se que vas detrás de mi, no soy boba, me ha llegado el turno, ¿no?, pues si me quieres tenias que sufrir un poco, que fuera diferente conmigo, que me demostraras estar a la altura.

-YO: pues lo has logrado, casi parto a 2 compañeras tuyas y he destrozado a otras 2 mujeres adultas., ¿te parece suficiente?

-PAMELA: ¿había 2 en casa de Rocío? te seguí, escuchaba los gritos de Rocío a través de la puerta y luego en el gym, lo vi todo por una ventana del callejón - me quedé asombrado - que sepas que me hiciste correrme un par de veces, me hacia un dedo cada vez que veía como las tomabas sin piedad.

-YO: muy bien, las cartas están sobre la mesa, ¿y ahora? - se acercó a mi acariciando mi pecho, le levantó poniéndose de puntillas y quedándose a milímetros de mi cara.

-PAMELA: ¿ahora?, ahora me vas a follar como lo hacías con ellas, mañana mis padres salen por la tarde, después de clase, vamos allí y me vas a hacer sentir mujer - me besó, de forma caliente, con sus labios jugosos y grandes, cuando la pillé el ritmo metió su lengua en mi boca, de forma obscena con movimientos lentos pero pasionales, la frené un poco por que si no le ensartaba allí mismo, entre el enfado y la fogosidad. Se dio la vuelta y poniéndome el culo en la polla se restregaba - mañana te veo - y dando un golpe de cintura final se fue, ahora si, contoneándose sexualmente.

El plan era claro, llamé a Eli para pedir consejo y me imploró que reventara a aquella furcia, una idea se gestaba en mi cabeza. Llegó el día siguiente, y ella venia preparada para la guerra, una camisa tan asustada que no dejaba lugar a la imaginación, con más botones descorchados de lo normal, se la veían bien las tetas y el comienzo de su sujetador, con el resto de botones aguantado de forma titánica, lo que me mató a mi, y a todos lo tíos, fue su falda, la 1º vez que la vi así, era azul marino, de tubo, elástica, le llegaba por las rodillas, sin medias, ni señales de ropa interior. Mi mirada, y la de todos, se calvó en su culo, la parte de la tela de había entre sus nalgas estaba tensa, tanto que la costura estaba al máximo, se notaba la separación entre las telas y los hilos soportando a duras penas. Al descaso la llevé al baño y nos besamos apasionadamente, como el día anterior, pero esta vez la levanté la falda y le abrí la camisa, tenia un cuerpo perfecto, un vientre liso y unas tetas preciosas debajo del sujetador, al meter mi mano por su falda y levantarla un poco, cosa que me costó debido a la tirantez de la ropa, certifiqué que allí no había bragas, ni tanga, masajeaba por encima de su coño y con la humedad creciente metí un dedo y luego 2 en ella mientras seguíamos besándonos como animales en celo.

-PAMELA: para, o no llegamos a mi casa, esta todo preparado allí.

-YO: te voy a destrozar, vas a arrepentirte toda tu vida de lo que me has hecho.

-PAMELA: ya veremos, yo no soy una de estas niñatas, yo me he follado ya a muchos que la tenían grande en mi país.

Lleve mi boca a sus tetas, pero por desgracia sonó la campana de vuelta a clase, llevé mis dedos manchados de sus flujos a su boca, los chupó, antes de medio vestirse y salir de allí. Llegué tarde a clase, me tuve que hacer una paja rápida en el baño. Las horas se me hicieron eternas, mi cabeza pensaba en como poder tirármela, de forma que le gustara al inicio pero luego rogara perdón. Al salir de clase fuimos por el metro a su casa, durante todo el viaje nos besábamos y la metía mano, acababan siempre mis dedos en un trasero, la tela estaba tirante pero se notaba a leguas que tenia el culo como una pierda, mientras nos comíamos la boca el uno al otro, había sitio para sentarse pero ella se sentó encima mía, nos daban igual el resto, estabamos ella y yo solos en el universo. Al salir del metro ella iba delante y yo detrás, dándola con el bulto duro en su trasero, andábamos mal, de forma torpe pero sin separarnos.

Subimos a su casa, la visión de ella subiendo las escaleras delante de mi era evocadora, no me reprimí y le daba cachetes, con cada golpe aumentaba la fuerza, su culo era mármol, casi ni se movía al golpearlo, al pararse para sacar las llaves me pegué a su trasero y besándola por el cuello daba pequeños golpes con la cintura en su culo. Le costó una eternidad abrir la puerta, se le cerraban los ojos mientras mis caricias la calentaban, no atinaba con las llaves, me harté y la estampé contra la puerta, cargando todo mi peso sobre ella, le cogí las llaves y sin dejar de frotarme contra ella, abrí la puerta de golpe, eso lo tenia pensado, al hacerlo cayó de bruces hacia delante, casi no le dio tiempo a poner la manos y quedar a 4 patas, debido a la fuerza y la rapidez de la caída se le rompió parte de las costuras de la falda, dejándome ver parte de su ano, la tela cedió y con ella sus nalgas aprisionadas que se iban abriendo, intentó levantarse pero no la dejé, la di una patadita en el culo para que fuera a gatas, mientras me desnudaba, no tendría piedad, no habría compasión, no era una mujer a la que dar cariño, si no un trozo de carne que iba a masacrar.

Debido a su andar a gatas con cada paso se el rompía un poco más la tela, para cuando llegó al sofá la tenia rota del todo, aun aguantaba en la parte más alta en los riñones, pero se le había rajado por toda la línea de su culo hasta su pubis, Se quiso levantar de nuevo pero no la dejé, ya totalmente desnudo, me puse de rodillas detrás de ella y metí mi polla por la raja de su falda, entre sus piernas, sobresaliendo claramente, la imagen podía confundirse de la de un travestí, con falda y sin ropa interior, con una erección, pero era yo desde atrás, agaché mi cuerpo y le rompí los botones de la camisa tirando de la tela, levanté su torso para quedar de rodillas los dos, conmigo pegado a ella por detrás, mientras besaba su espalda y hombros, llevé mis manos a sus tetas y de un tirón le saqué el sujetador, sin desabrochar ni nada.

-PAMELA: ¿me vas romper toda la ropa?

-YO: te voy a romper todo - llevé mis manos de sus tetas a la parte más baja de su falda y tiré hasta que las costuras cedieron, mientras ella giraba su cabeza para besarle con su lengua y sus labios carnosos, sabía usarlos.

La rompí la falda en totalidad quedando solo la parte de la cintura, entonces la desabroché la cremallera y se lo quité, ya con los 2 desnudos frotaba mi tronco por su culo, abriendo sus labios vaginales, me estaba empapando la polla, miró había abajo y entonces la sobresaliendo con cada movimiento.

-PAMELA: ¡¡dios!! era cierto, calzas una buena tranca, va a ser divertido.

-YO: puede que al principio, pero ya te lo he dicho, vas a desear morir.

Bajé una mano a su intimidad por delante, dirigí mi glande a su coño y una vez colocado, embestí, dio un salto en el mismo sitio abriendo la boca con un grito corto, devolví mis mano a sus tetas, las tenia duras como todo el cuerpo, terso, con cierta aspereza en la piel, con unos pezones enromes y negros, erectos, agarrándoselos con fuerza comencé a mover la pelvis, con cuidado al inicio, pero con cada embestida la llegaba más adentro, ella soltaba un grito corto en cada una de ellas, hasta que la velocidad era tan alta que solo había un grito continuo, cogía aire y seguía, no podía penetrarla más por que su enorme y duro culo era una pared sobre la que rebotaba, el sonido era hipnótico, estuve así 20 minutos con ella buscando con sus labios y manos mi cara, de la fuerza caía hacia delante pero la volvía a levantar. Su interior era como ella, duro y terso, sentía como me presionaba la piel, no todo el tiempo, si no por fases, controlaba sus músculos vaginales, tenia aguante, la puse a cuatro patas y allí si la penetré más profundamente, ya no gritaba, respiraba entre golpes a su trasero, llevé mis manos a sus nalgas y las separaba bien, era difícil, estaban muy duras, pero logré penetrar casi del todo, en esa posición y frotando su punto G llegó su primera corrida, fue una fuente y cayó tumbada gritando algo en francés, no la dejé respirar, me adelanté, la coloqué las piernas juntas pasando por encima de ellas, totalmente tumbada boca abajo, dirigí mi falo a su coño separando bien sus nalgas de nuevo y la volví a ensartar, coloqué los brazos en posición dejando caer mi pelvis para luego levantarla, percutía sobre su trasero, el ritmo ya era tan rápido que su culo era gelatina en un terremoto, lo tenia terso pero ya no le daba tiempo a su piel a colocarse antes del la siguiente embestida. Esa posición incide directamente en el punto G, así que en menos de 15 minutos se corrió otras dos veces, arrastrándose por el suelo para alejarse de mí, gritando, ya en algo africano, pero la seguía, sin perdón.

Pasó la 1º hora y entre combustiones me corrí sin parar dentro de su cuerpo, me senté en el sofá, satisfecho, ella se dio la vuelta rápidamente y de rodillas agarró mi polla algo flácida, y con ambas manos pajeaba mientras se la metía en la boca.

-PAMELA: esto no ha acabado.

-YO: claro que no, no ha estado mal como calentamiento - mi rabo se puso duro de nuevo al ver su ansia.

Me la miró, la 1º vez que la tenia delante totalmente erecta, el blanco de sus ojos se hizo evidente, pero reaccionando siguió a lo suyo, con energía, movía su lengua como una profesional y sus labios carnosos rodeaban mi polla, se metía gran cantidad sin noticias de arcadas o malestar. Lo estaba haciendo bien.

-YO: así no vas a lograr que me corra - la piqué, y cayó, sorprendida por mis palabras falsas, quiso aumentar el ritmo y la velocidad, pero se le salió la cadena varias veces – anda, déjame a mí.

La levanté y la puse de espaldas en el sofá, la abrí de piernas y vi como goteaba de fluidos y semen, con algo de reparo separé sus labios mayores, eran negros y contrastaban con su interior, era rosado y el clítoris estaba enorme, me comí su coño como todo un experto, la masturbaba con los dedos, mientras trabajaba su monte de Venus con la lengua, estaba totalmente rasurada, metía mi lengua en su interior, se volvió a correr, continué haciendo lo mismo hasta la 2º corrida, ella gritaba groserías y se frotaba las tetas fuera de si, se mordía los labios de forma violenta, mordiéndolos para aguantar mejor, después de la 3º estaba hecha una fiera.

-PAMELA: dame polla carbón, ¡¡DAME POLLA!!

-YO: no se, ando algo desanimado, quizá si me dieras unas gotas de lo del otro día……...

Me miró extrañada, pero mirándome comerle el coño, la tenia loca, se fue corriendo a un cuarto y volvió con un frasco que me dio, tirándose sobre el sofá masturbándose.

-PAMELA: solo unas gotas y me podrás follar durante un buen rato - me la jugué, cogí el frasco y le di un sorbo, no mucha cantidad, pero si más de unas gotas, ella puso cara de pánico.

-YO: así sabrás lo que sintieron exactamente - me lancé a sus tetas, a lamer su pezones mientras jugaba con ella, se dejaba hacer a la espera, noté el calor incipiente, y pasados 10 minutos ya estaba como el otro día, la pegué a mi y la penetré, del todo, rocé mi glande con su útero, dio un grito de dolor agudo, la saqué un poco, dejé que se acomodara con un ardor en mi interior enorme - esto es lo que querías, ¡¡aquí lo tienes!!.

Me la follé, en todo el termino y usos de la palabra, durante una hora en esa misma posición, se corrió no menos de 5 veces pero aguantaba, la cambié de posición y la penetré por detrás a lo perrito, otra hora, otras 4-5 corridas, y sus gritos era desatados, la siguiente media hora la pasó en silencio, se movía pero callada.

-PAMELA: para……..por favor………..me voy, me partes………. me duele - la ignoré.

Llevaba ya 2 horas desde que me tomé las gotas, y ella estaba rendida, ya ni rogaba que parara, estaba justo en el punto donde la quería. Paré, ella cogía aire a duras penas, me recosté sobre ella.

-YO: me he cansado ya de tu coño - respiró aliviada - ahora te voy a dar por el culo - se removió como poseída por mis palabras, la sujeté - ¿querías que te destrozara como a ellas?, ¡¡pues a ellas las di por el culo, es tu turno!!

Cogí un poco de todos los fluidos que de ella emanaban y unté su ano, metí un dedo y comprobé que no era virgen por allí, era demasiado fácil, metí dos, todo esto sin dejar de follármela por el coño, metí 3, se volvió a correr, metí 4 dedos, estaba fuera de mi, cuando la vi abierta lo suficiente, saqué mi polla de su coño y la clavé en su ano, gritó fuerte, tenia la cara desencajada, cayó a plomo sin moverse sobre el sofá, pero yo solo había empezado, agarrando su cintura me la follé por el culo otra hora más, ya ni se corría, no tenia más o no lo disfrutaba, solo sufría el castigo que se había ganado.

Llevada ya casi 4 horas follándomela desde que tomé las gotas, llamé a Eli para que viniera, tardó media hora en la que seguí destrozando su coño, se desmayó una vez, paré, dejé que se recuperara, y cuando volvía en si, la volvía a penetrar por el culo, hasta que se volvía a desmayar, y repetía la operación. En unos de los “descansos” con ella desmayada y el culo en pompa, llamaron la puerta, abrí con cuidado de que no fuera su familia, ¿que hubiera sido de mi si su padre entra y ve a su hija desnuda, medio muerta, con un agujero como un puño cerrado en su culo?, era Eli, al entrar mi miró, estaba rojo, con la polla dura, palpitando en el aire, miró a la chica y vi compasión en sus ojos.

-ELI: ¡¡¿que la has hecho? por dios!!

-YO: la he reventado durante una hora, como me dijiste, luego he tomado un sorbo de lo que me dio y llevo 4 horas sin dejar de penetrarla, y sigo ileso………..o me ayudas o la mato.

-ELI: ¡¡¡madre de dios!!! mírala a la cara, esta como Carla cuando le metí el consolador enorme por el culo.

Me sentó en el sofá, y revisando que la chica estuviera bien, me dedicó una mamada perfecta, metió un dedo por el culo, no me gustaba pero era necesario, de forma que me corrí al poco tiempo. Ya desahogado, Eli se desnudó, y se puso encima de mí, ensartándose, pasé otra hora tirándome a aquella diosa de gym con Pamela hecha un cojín en el sofá, sin moverse, recobró la consciencia, parpadeaba al menos, pero no se movía.

Eli logró sacarme follando las 3-4 corridas necesarias para apagar mi fuego, yo la saqué por lo memos 10, las ultimas por el culo, sin cambiar de posición, me lo pidió así por que tenia el coño escocido del otro día, y le estaba poniendo la piel en carne viva.

Pasada hora y media y ya agotados de follar, nos duchamos, llevamos el cuerpo casi inerte de Pamela al baño y la bañamos de arriba a abajo, las pusimos algo de ropa y la dejamos acostada en la cama. No dijo ni una palabra, ni hizo gesto alguno, me había pasado con ella. Salimos de su casa.

-ELI: oye, no puedes ir llamándome cuando te pasen estas cosas, tengo cosas que hacer, estamos siguiendo las clases de sexo después con algunas alumnas nuevas y los monitores.

-YO: lo siento, pero sabía que eras la única que podía ayudarme.

-ELI: no puedes volver a dejar a una chica así, ¿me oyes? Te lo advertí, a saber lo que hará cuando se recupere.

-YO: tranquila, no pienso volver a tomarme nada de esa mierda, pero tiene lo que quería de mí, otra cosa es que la sobrepasara.

-ELI: ¿y como no lo ibas ha hacer? tu pedazo de polla y esta mierda no deben volver a coincidir- sacó el frasco de su bolsillo.

-YO: ¿que haces con eso?

-ELI: me vendrá bien para las prácticas, quien sabe.

Me dejó en casa con el coche y se fue.

De Pamela no se supo nada en toda una semana, no fue al colegio, llamó para decir que estaba enferma, a la siguiente semana apareció, mucho más recatada y con ropa ancha de deporte, andaba como si hubiera venido a colegio a caballo, totalmente escocida, dolorida, al sentarse lo hacia despacio, se llevó hasta un cojín para la silla. Su actitud fue de fantasma, la había bajado los humos, hablé con ella pero ni me miraba a la cara, se protegía el cuerpo con los brazos, me dijo que su padre andaba enfadado, se creyó lo de que estaba enferma hasta que no vio el frasco del elixir, se inventó una historia de que lo usó con un chico, no le dijo quien, y la castigaron severamente, pero vieron que estaba hecha un cromo, su madre la había ayudado con unas pomadas y masajes.

-YO: pues siento tu dolor, pero eso te pasa por ir de lista, la próxima vez que quieras divertirte ve con cuidado, o te volverás a encontrar a un pez más grande que tú - la levanté la mirada y la besé fuertemente, ella no quería, no volvimos a hablar

No se como, el rumor de lo ocurrido llegó a la gente, yo no abrí la boca y no entendía por que lo haría ella, supongo que ataron cabos, al verme con ella unos días antes, no se decía nada del frasco pero si de que la había reventado, eso no ayudó a su vida social, ya que muchas chicas habían pasado por mi y no se tiraron una semana en casa de reposo, pobres ingenuas, si supieran lo que había sufrido realmente.

Karin - La estudiante de intercambio.

Esta historia es bastante corta, el último año se unió a nosotros una estudiante de intercambio, de Suecia, se llamaba Karin, con un apellido largo, tanto que nadie sabio pronunciarlo, y menos escribirlo. Más que hablar, escupía el castellano, palabras sueltas, sin consonancia en sexo, genero y numero, como Tarzán, había estudiado español en su país, y lo perfeccionó bastante, aunque a final de curso se le escapara alguna palabra mal colocada o se quedara pillada 3 segundos buscando una palabra rumiándola en su idioma.

Físicamente os lo podéis imaginar, una sueca de las películas de Pajares y Esteso, alta, pasaba del 1,82, rubia platino con media melena, lo suficiente para ponerse una coleta corta, espigada, siempre iba con mayas térmicas o leggins oscuros, y algún jersey o vestido que le baja hasta taparla a duras penas la cintura, solía ir al principio con zapatos de tacón medio, pero le recomendaron que se pusiera algo menos llamativo, era increíble el poder de atracción que tenían sus andares con el sonido de sus tacones en el suelo, y más con un par de tetas enormes que tenia, y rebotaban con sus andares, no se por que, seria cuestión de convencionalismos de su país, pero no parecía darse cuenta, o no le importaba, ir con generosos escotes que hacían ver a la perfección como sus tetas vibraban al andar o moverse, o ropa ceñida que hiciera notar cada uno de sus movimientos, y por ende, atraer la mirada de todo macho sobre la zona. Cuando se agacha a coger algo, casi se podía oír el sonido de las pollas de mis compañeros sentados golpear la mesa debido a una erección instantánea, se hacia el silencio, cuando hubo más confianza alguna chica le decía que se tapara un poco, que las dejaba en ridículo, pero no hacia caso o no entendía el por que.

La cosa empeoró cuando se fue pasando el frío, aun en primavera, las chicas solían ir sin el abrigo pero bien tapadas, ella era del norte de Europa, llegaba vestida como siempre pero cuando le daba calor se quitaba el jersey o el vestido, dejando su cuerpo al descubierto, con los leggins ajustados y una camiseta interior pegada a su piel, su pechos que eran prominentes, se hacían evidentes, con su sujetador enorme debajo, los tirantes del sostén y de su camiseta interior soportaban el peso estoicamente, pero tan estirados que dejaban un hueco entre ellos y la piel de sus hombros y tetas, dejando ver gran parte de sus pechos, aun así, ella parecía tan normal, sin darle importancia a que mis compañeros babearan mirándola, y las chicas la observaran con odio. Tengo que decir que los profesores masculinos la sacaban a la pizarra continuamente mirándola, tan embobados como el resto, andaba escasa de culo, o al menos la comparación entre el pecho y su culo era muy desigual, no ayudaba a que sus piernas estaban bien formadas, muslos anchos y gemelos duros del uso de zapatos.

Era de actitud jovial y alegre, no parecía consciente del poder que ejercía sobre los hombres y se abraza con todo el mundo, abrazos largos y fuertes, lo único más sensual que ver como ella se abraza a un tío y el tenia que girar la cadera para que no notara su erección, era verla abrazar a una mujer y aplastar sus tetas contra las suyas, eso las altas, las mas bajas se tenían que hacer hueco con la cabeza entre sus senos. Su pelo era rubio platino, pero con el paso de las semanas fue poniéndose mechas de colores pastel, un mes de cada color diferente, cuando ya tenia todo el pelo de colores se ponía todo el pelo de un solo color, rusa fucsia o azul relámpago.

Retomemos en el tiempo, creo recordar que esto pasó después de iniciar mis sesiones con Rocío y la aprendiz, pero bastante antes de Pamela, el rumor sobre mi era una grosería evidente, la gente me bromeaba en la cara y las chicas me gastaban bromas, las que me tiré, las que no se pudo aunque querían, y las que no, todas me tomaron por un monstruo de feria, era el centro de todas las miradas y me gustaba aquel papel. Las charlas en los baños de chicas, el foro oficial femenino y megáfono de rumores por lo visto, según me dijo Marina, era ya un desenfreno, hablaban de cómo me había follado y la grande que la tenía, de las experiencias, algunas que ni me había tirado aun, o que no llegué a hacerlo, o ni me habían visto desnudo.

Aquellas palabras debieron llegar al oído de Karin, esa semana tocaba rubio platino con mechas rosas en el pelo, un día, al inicio del descanso, se me acercó a preguntarme si podía ayudarla con el castellano en los descansos quedándome con ella en clase mientras todos salían, me ofrecí encantado, sobretodo al oírla hablar, no pondré mucha conversación, 1º por que no la hubo y 2º por que su acento es difícil de escribir, pero os basta con saber que yo ya la había oído hablar y no se le daba tan mal como en ese momento me quería hacer oír. Hablaba como si acabara de llegar, excusa barata para quedarse a solas conmigo, me lo dijo sentado en unas escaleras, agachándose y apoyándose con su brazos estirados en el escalón donde estaba, apretando su monumental escote a poca distancia de mi cara.

Ningún hombre hetero se lo hubiera negado, y no lo hice, clavando mi mirada entre sus tetas, chocando una contra otra, sin cambiar de posición, totalmente agachada hacia mi, se puso a dar saltitos y a aplaudir de emoción dándome las gracias, la visión de sus pechos abriéndose y cerrándose dejándome ver la junta del sostén, y parte de su vientre, me la empalmaron de inmediato, el remate fue que lanzó su cuerpo contra mi para abrazarme, pero de tal forma que sus tetas me daban en la barbilla, y se quedó así unos segundos, se volvió hacia atrás y me pidió que la abrazara yo también, me decidí allí mismo, me la follaría, me fui a poner en pie para abrazarla y dejar que notara mi pene palpitando, pero no me dejó y fue ella la que se recostó sobre mi tumbándose encima mía literalmente, mientras me decía lo agradecida que estaba, con sus tetas cortándome la respiración, una estaba tan arriba que la estaba hundiendo mi mentón en ella, no solo se abrazaba si no que se contoneaba o se movía, no se cual seria el verbo apropiado, no era estrictamente sensual, si no buscando un apostura cómoda, lo hizo hasta que yo también quedé estirado del todo y nuestras pelvis se juntaron, dejándose notar el miembro tieso entre ambos, con las brazos aun sin tocarla. Se paró en seco, levantó la cabeza y mirándome de cerca me recalcó, con inocencia falsa, que no le estaba abrazando, que si no le gustaba le haría un feo, encantado de la vida la rodeé con mis brazos y me apreté con ella rodeando su espalda y sus riñones, moviéndose de nuevo sobre mi, como estabamos en unos escalones, al estar rectos sobre ellos su cuerpo empezó a descender sobre mi, gracias a dios sus tetas hicieron tope con mi pecho y se quedó allí, no menos de un minuto.

-YO: que te caes - llevé mis manos a su culo y agarrando una nalga con cada una tiré de ella hacia arriba, restregando desde su vientre hasta su cintura mi polla enjaulada, hasta volver a darme con sus tetas en la mandíbula, eso la agradó y me volvió a abrazar de forma ya más sensual, con sus brazos recogidos dejando que la gravedad y su peso me aplastaran,

KARIN: gratias, no saber cuanto yo quiero aprender con usted.- hablaba mal a posta, pero como no se movía me daba igual, seguía con una diosa nórdica con tetas enormes comprimiéndose encima de mí con su culo agarrado firmemente “para que no se cayera”.

Decidí que, estando en la gloria, no me movería de esa posición hasta que ella quisiera, supongo que ella pensó lo mismo y con todos los compañeros fuera del edificio en el descanso, estuvimos así más de un cuarto de hora, mis manos ya no solo agarraba, sino apretaban levemente, subiendo su cuerpo un poco para volver a dejarlo caer, oía como sus boca se hacia agua al lado de mi oído, como se mordía el labio.

KARIN: ¿y si empezar ahorra? - lo dijo levantado la cabeza y dejándomela a distancia de beso.

-YO: como tú quieras, pero yo me quedaría así el resto de mi vida - mentira, me estaba clamando los escalones por toda la espalda, pero la saqué una sonrisa, sonreí yo, la frase era algo compleja y la había entendido, entendí que no necesitaba esas clases.

Me tiró un pico, un beso dulce a los labios, sonoro, de esos que se dan las chicas de hoy todo el tiempo, se levantó apoyando su mano en mi pierna, peligrosamente cerca de mi bulto, extendió la mano para ayudarme a levantarme pero sin echarse para atrás, como no podía ser de otra forma por las leyes de la física, al levantarme, la tenia encima, con sus tetas pegadas al cuerpo, y al ser tan alta, casi cara con cara, con mi polla clavándose en su vientre bajo, quedamos así unos segundos, miró hacia arriba, y yo hacia abajo, vi una cara de niña pequeña, de no romper un plato, pero mordiéndose el labio inferior de lujuria,(era increíble que hasta que no me lo dijo Eli lo de morderse el labio no lo viera), clavé mis ojos en los suyos y aguanté, eran de un color antinatural, mezcla de marrón y gris, atisbé trazas verdes, debido a la luz de un ventana tenia los iris totalmente expandidos, no se cuanto estuvimos así, para mi se paró el tiempo, noté como llevó su mano a la mía de forma lenta, entrelazando los dedos, cuando la tenia bien agarrada se levantó un poco hacia mi y de golpe se dio la vuelta y echó a correr por un pasillo, conmigo siguiendo su afán, como un perro fiel, riendo, ella se llevó la mano agarrada a su costado dejando que el dorso de mi mano notara su pecho botar, me puse a su altura, era glorioso ver como saltaban aquellas tetas, y me di cuenta de que ella hacia lo mismo, me miraba la polla rebotando en mis pantalones y pensaría algo parecido.

Llegamos a una clase que estaba vacía desde hacia meses, ella paró de correr y se dejó apoyar de espaldas contra la puerta, respirando de forma agitada, ligeramente agachada, con su pecho subiendo y bajado fuertemente, yo dejé de correr unos pasos antes para admirar a aquella hembra, aquella pose, aquellas tetas.

-YO: ¿quieres estudiar aquí? Esta algo apartado.

-KARIN: ¿studie? studera kön Jajajajajajjajaja – supuse que era sueco, ni la entendí, ni me molesté en preguntar.

Abrió la puerta pero no se apartó, de modo que al entrar nuestros cuerpos se frotaron, ella sus tetas y yo mi pene, me senté en un lado de una mesa y ella al lado. Quise empezar a hablar pero su pose me calló, al sentarse sus pechos le botaron, acercó la silla con golpes de cadera que le hacían rebotar y cuando estaba a nivel, estiró la espalda y apoyo las tetas encima de la mesa, poniendo cara de chica buena, atendiendo. Tenia los ojos clavados en aquellas dos montañas, la pregunté que íbamos ha hacer, ella solo quiera hablar, nivel conversación, iniciamos una de desconocidos, presentándonos, mientras ella fingía equivocarse yo fingía corregirla, sin demasiado disimulo ella metía palabras mal sonantes, pene en vez de pero, o coño en vez de moño, yo me reía por que lo decía el papel, y por que me daba cuenta de su burdo truco.

La corregía diciendo que eso no estaba bien dicho y que eran palabras mal usadas, podían meterla en un lío. Ella se centró en saber que palabras no podía decir para no liarse, así que saqué un diccionario y lo abrí, ella se acercó a mi y me rodeó con un brazo por la espalda, mientras fingía atender al libro, y las indicaciones, sacaba pecho no tan disimuladamente como se creía. Yo ya estaba cachondo perdido y quedaba media hora para que volvieran los compañeros así que dejé el diccionario de pie en la esquina de la mesa, no se que me inventé para levantarme y con la polla lo tiré al suelo, dejando mi bulto a la vista, clavó la vista en el, luego disimuló agachándose para coger la diccionario, lo dejó en la mesa sin dejar de mirármela, el trabajo estaba hecho, ella decidía.

-KARIN: det stora, det kommer att göra ont. – señaló mi polla mirándome, como queriendo preguntar.

-YO: si eso se llama pene, rabo, polla, cipote, nabo, miembro viril….etc y te la voy a meter hasta que hables castellano antiguo.

Soltó una sonora carcajada, pero cuando acabó me miraba mojándose los labios con la lengua, ladeando la cabeza. Extendí mi mano y la cogió, la levanté y la empujé contra la mesa, cara con cara, me pegué a ella con mis manos en su cintura, y me quedé a medio milímetro de besarla.

-YO: pídelo, di que quieres mi polla, que quieres follar ahora mismo, en español y te daré el polvo de tu vida - noté que se le erizó la piel, buscó mis labios pero los apartaba lo suficiente para hacerme rogar.

-KARIN: fóllame, por favor, quiero que me cubras - no era un yegua o una vaca, pero su dicción mejoró bastante.

La besé, lentamente, dejando que nuestros labios se pegaran, acercando mi pelvis a su cuerpo, ella se apoyaba contra la mesa con el cuerpo vencido, sin escapatoria, el segundo beso fue más lento aun, saboreé sus labios, el tercero ya fue con lengua directamente, con una de sus manos agarrándome del pelo atrayéndola hacia ella, yo subía mis manos por su espalda, por dentro de la ropa, acariciándola, levantando un poco la camiseta, “dios, como beba”, era lo más delicioso que había probado, abría la boca y la cerraba con una finura digna de una reina, pero movía la lengua como la más guarra del reino, la terminé recostando sobre la mesa, quedando sus piernas colgando en el aire, y echándola sobre ella, continuaba besándola, llevando mi mano a su ombligo, mientras la acariciaba bajé mi mano hasta meterla por dentro de los leggins, dejé de besarla para pedirla permiso, tardó unos segundos en abrir los ojos, cuando lo hizo me pidió en el idioma del sexo que continuara, y así lo hice, levanté con los dedos la parte de la prenda y metí mi mano por dentro, mientras la besaba el cuello, ella tenia una mano encima de mi bulto y lo medio acariciaba, metí la mano por dentro de su ropa interior y llegué a un poco de bello, jugué con él un poco para luego bajar, ella ayudó separando las piernas y comencé a frotar la parte superior de su clítoris, su respiración se agitó, notando que estaba empapada, metí un dedo en ella sin dificultad, “otra que no es virgen”. La seguí acariciando, lo sacaba poco a poco y lo volvía a meter, sus besos pasaron de dulces a pasionales, me levantaba la cabeza de su cuello para ello.

Mi mano ya se movía con soltura en su entrepierna, e vibrara y gemía en mis manos, el remate fue cuando metí mi cara en su escote besando la carne rebosante de cada pecho, eso la mató y se corrió como una loca en mi mano, no me lo creí, a aquella belleza nórdica no le ponía el cuello, el ombligo o sus lóbulos de la oreja, aquella especie de regalo del cielo, de pechos enormes, ¡¡¡le ponía burra que le trabajara las tetas!!! No perdería el tiempo, me senté en una silla y me la puse montada encima de mi, le saqué el top, “que pedazo de pechos”, el sujetador era rojo, enorme, ya se intuía, encima era de los que se desabrochaba por delante, con un truco que me enseñó Rocío, lo desabroché con la boca, metiendo mi cara entre sus tetas, al hacerlo salió despedido y sus senos cayeron un poco, pero seguían en su sitio. Aquellas tetas era un regalo por algo que había hecho, eran enormes pero bien colocadas, suaves, coronadas por unos pezones diminutos que estaba para rayar diamantes, con una mano en cada teta, sujetándolas y apretándolas mi boca se volvió independiente, lamía, besaba, chupaba, babeaba y mordía indiscriminadamente, se frotaba con el bulto de mi pantalón, pero cuando me centré en uno de sus pezones un par de minutos, la chica estalló hacia atrás, si no la tengo sujeta de los pechos se me va al suelo, se corrió otra vez gritando algo, la fui ayudando a quedar sentada en el suelo, y encones me levanté y me bajé el pantalón y el slip de golpe para volver a sentarme.

-YO: tu turno.

Su mirada era de asombro, con sus ojos abiertos, se acercó y la agarró con una mano, intentó ponerse entre mis piernas pero su tetas no le dejaban, así que ni corta ni perezosa se las agarró, las pasó por encima de mis piernas, y las dejo caer rodeándome los huevos, apoyándolas en mis piernas, allí si tenia acceso pleno, y lo usó, con ambas manos recorría todo el tronco, y le daba besitos suaves y calientes al capullo, fue cogiendo ritmo hasta que se metía buena parte de la polla en la boca, no podía bajar más por que sus propias protuberancias le hacían tope, verlas siendo estrujadas por el peso de una mujer por en ansia de chupármela fue una maravilla. Me corrí, fue demasiado, y la muy sueca no solo no se asqueó si no que se lo tragó. Me agradó de tal manera que me levanté, la cogí en volandas y la senté en la mesa, me puse de rodillas y levantándola la cadera le saqué los leggins y las bragas a la vez, levanté sus piernas y vi su coño blanco, con bello rubio corto y rubio, sin dejarla abrir ni doblar la piernas, metí mi boca entre sus muslos, la lamí de arriba a abajo y de vez en cuando la penetraba con la lengua, chupando sus labios mayores con fuerza para separarlos de su piel. Llevé una mano allí y la penetré con un dedo, subiendo el nivel con 2 dedos al poco tiempo, y logrando acariciar su punto G, una nueva corrida.

Quedaban ya solo 10 minutos para volver a clase pero esa no se escapaba sin su ración de polla, la abrí de piernas, estaba roja de pasión, atraje su cadera hacia fuera, dirigí mi miembro a su vagina y la mojé con parte de sus jugos internos, apunté y de un golpe de cadera metí media tranca, aquello no fallaba nunca, gritó corto de sorpresa y emoción, luego iba metiendo y sacando con calma hasta que notaba una profundidad y comodidad necesarias, y comenzaba a bombear sin parar, tenia que darme prisa así que agarré sus tetas como apoyo, y así, cogí ritmo de crucero, logré que se corriera un par de veces solo con acariciar sus pezones, no lograba penétrala del todo, no tenia tiempo para prepararla, así que la di la vuelta, sin dejar de ensartarla, apoyó los pies en el suelo, quedando recostada sobre la mesa, con sus pechos aplastados contra ella, di gracias a dios por una mesa clavada al suelo, y regalé una follada como dios manda, a un ritmo bestial, se oía a la vez a mis huevos chocar con sus muslos y a sus tetas restregarse por la mesa, la agarré por el vientre y la levanté pegando mi pecho a su espalda, llevando mis manos a sus tetas y besándola la espalda, no dejé de golpear, si se hacia daño con las piernas apoyadas en la mesa no lo dijo, solo gemía y susurraba en sueco. Sonando la campana del regreso a clase noté como se corría y pegando un leve acelerón final me corrí con ella, quedamos un par de minutos pegados por el sudor y el cansancio, sonriendo como bobos.

Nos tuvimos que vestir a toda prisa, la acompañé al baño aun sin nadie por allí, nos aseamos y de ver como se limpiaba las tetas de babas casi me la tiro de nuevo, para cuando salimos los 2 del baño ya empezaban a llegar alumnos, la acompañé a su clase y en la puerta nos fundimos en un beso pasional, la cogí del culo y la levanté apretándola contra mi.

-YO: siempre que quieras “repasar”, avísame en los descansos - la di una sonora palmada en el culo y se fue, feliz, satisfecha, no menos que yo.

Al día siguiente repetimos, era increíble, solo 20 minutos para besarnos, conmigo tumbado en la mesa y ella encima de mi, con el cuerpo estirado, con ropa, besándonos y acariciándonos, yo logré que se estremeciera solo con magrear bien sus senos, que quedaban a la altura de mi cara, el resto de la hora solo follábamos como si no lo hubiéremos hecho nunca, cuando la penetraba estando boca arriba sus tetas eran entes independientes, se movían de forma alborotada, ella se las quería sujetar pero yo no la dejaba, me tumbaba sobre ella o hacia que se incorpora hasta pegar nuestros torsos, y seguía gozándola, cuando quería que se corriera solo tenia que lamer sus pezones unos minutos, cuando me quería correr yo solo aceleraba ritmo hasta sacarla improperios en sueco, no la conseguía introducir toda, pero si más que a la mayoría, la chupaba de miedo, tenían una lengua de infarto y se lo tragaba, joder, ¿que más se podía pedir?.

Estuvimos una semana jugando, hasta que un día ella dijo que vio a alguien mirar, yo lo comprobé pero ya no se fiaba, nos acostamos un par de veces más, pero ya esporádicos, solo cuando ella estaba segura de que nadie miraba. La imagen de sus tetas, de aquel abrazo íntimo en las escaleras o ella encima mía desnuda con sus pechos apretados contra mi, jamas se me olvidara y aun hoy lo uso mentalmente para lograr erecciones, la pena es que a fin de curso volvió a Suecia y no supe más de ella.

Mercedes - La profesora.

Vamos a jugar con el marco temporal un poco, entre otras cosas por que ya ni recuerdo en que orden ocurrió.

Si, con las alumnas era una casanova, y gané mucha experiencia, lo pase bien, pero me llegó a resultar demasiado……fácil, era un depredador al que le ponían la carne despedazada y deshuesada en la cara, y yo quería cazar piezas vivas. Eli me enseñó a hacerlo, echaba de menos la emoción, así que en determinados momentos fijé objetivos de mayor edad, más complejos. Obviamente no fue tan fácil ni logré, por mucho, el numero de alumnas, pero ellas eran hamburguesas industriales, yo quería restaurantes de 5 tenedores, y allí solo se va cuando la ocasión lo merece. Puedo mencionar que fueron 4 las que me follé antes de la graduación, de las cuales extraigo las mejores historias, y otras 3 con las que tuve sexo sin penetración, y por miedo a represalias, no encontrareis el relato de mi directora de 62 años, que hacia el final de curso me chantajeó, y para no avisar a mis padres de mis andanzas mujeriegas me obligó a dejarme hacerme una mamada, se quitó la dentadura postiza para ello. Asqueroso, si, pero una de las más memorables. O la historia de la profesora de ciencias sociales, una feminista de pro con la que había discutido durante años por su intención de reeducar en la superioridad de la mujer sobre el hombre, y me la terminé zumbando solo por hacerla rabiar.

Esta es la historia de algunos de esas damas.

Creo que esta 1º historia la vamos a ubicar a principios de primavera, Marina ya había caído y las 3 primeras chicas después, nada a reseñar en ellas, aun no había empezado a conocerse mi fama, yo era un radar en busca de cualquier cosa que se pusiera a tiro, pero tuve una semana floja en cuanto a chicas, la que salió corriendo cuando se me sentó encima, así que mi mente amplió automáticamente el margen de error. Esta 1º no me resultó muy complicada, tuve suerte, la relato por que me sirvió para abrirme los ojos de cara a mujeres de más edad y su cierta relevancia en el futuro.

Pasó una semana sin que cayera ninguna, así que comencé a mirar con otros ojos a ciertas mujeres, una fue la profesora de historia, Mercedes, de 34 años, la conocía desde que tenía 27 años y yo 11, me vio convertirme de niño a adolescente, de eso a hombre, y de hombre a galán después de la operación. Siempre se había preocupado por mi, quedaba mucho con mi madre para hablar de mis estudios, y siempre cerraba las charlas con un “vamos a hacer de ti un gran hombre”, era severa con todos, pero pese a ello conmigo siempre tuvimos un rollo especial, le sacaba sonrisas que nadie más lograba con mis tonterías y teníamos confianza, fue la que me ayudó en parte con Marina.

Mercedes como mujer no había cambiado nada en mi cabeza, era una mujer normal, siempre iba con pantalón y chaqueta de traje, que se remangaba constantemente, disimulando su figura, camiseta de botones, con zapatos de vestir cómodos, era morena y llevaba el pelo con coleta siempre, pero al soltárselo siempre me había llamado la atención, lo tenia rizado y si lo estiraba era largo, pero le hacia un melena frondosa, su cara pasó de jovencita a mujer madura pero no perdió una belleza nacida de la sencillez, sin maquillar casi nunca, no le hacia falta, tenia unos ojos color miel de infarto. De su físico era difícil hablar, nunca iba demasiado descocada pero más de una vez al agacharse a hablar con alguien se le veía el sujetador a través de los pliegues de la camisa o los botones, se les veía unos senos de tamaño decente, sin exagerar, y un culo redondito, con las caderas anchas.

El hecho de que me fijara en ella, no fue ningún cambio, si no ver en ella algo habitual pero que no le di importancia hasta ese momento, tenia la manía de moverse por clase mientras explicaba, y se iba sentando o apoyando con el culo en los marcos de las ventanas, las puertas, la pizarra, o las mesas de los alumnos cuando quería hablar con alguno en particular, se sentaba en la mesa del de al lado. Lo llevaba haciendo toda la vida, pero un día se recostó sobre la pizarra con su traje azul oscuro, y después se fue pasando, los chicos a su paso se reían y la señalaban, no entendía por que hasta que se dio la vuelta, se había llenado el culo de tiza blanca, la recorría de lado a lado del trasero, pero nadie la decía nada, siguió dando la clase, pero yo ya no atendía, solo la miraba el culo y veía como con la tiza, el traje oscuro ya no le disimulada nada, aquella señora tenia un señor culo. Terminado la clase nos dejaba unos minutos para pasar apuntes y solucionar dudas, al imbécil de mi lado no se que le pasaba pero no entendía nada, y de tanto llamarla, ella se sentó en mi mesa y se agachó para explicárselo a él en persona de nuevo, su forma de sentarse era normal, dejando que su nalgas descansaran, pero vi toda aquella tiza y si hubiera sido una alumna la hubiera azotado allí mismo, con la excusa de limpiarla, pero el pudor me ganó la batalla. Al finalizar la clase, me acerqué a ella dejando que todos salieran, se había sentado en su mesa.

-YO: perdona Mercedes.

-MERCEDES: ¿dime? y no me llames Mercedes, por dios que me siento vieja, nos conocemos de hace 7 años, Merche.

-YO: esta bien, solo quería ser respetuoso para que supieras que lo que te voy a decir es con cariño y sin maldad.

-MERCHE: dime.

-YO: que…….vamos…..te has manchado de tiza el traje - se miró la parte de delante del traje buscando.

-MERCHE: ¿donde?

-YO: bueno….cuando te has puesto en la pizarra…..te has……..sentado, y….- abrió los ojos de sorpresa.

-MERCHE: ahhhhh, por eso andaban riéndose estos golfos, que malos son, y no me avisan, menos mal que te tengo a ti - se levantó y se retorció sobre si misma mirándose el culo, cuando localizó la mancha comenzó a pegarse azotes y pasar la mano por su trasero frotado con energía, cuando creyó terminar me miró - ¿ya está?

Me debió ver la cara de tonto mirándola el culo después del trasiego que se había metido ella sola, y se dio cuenta de que acababa de limpiarse el culo adelante de un alumno y le había dicho que le mirara el trasero para ver si había terminado de limpiarse. Reaccioné al levantar la mirada de sus posaderas y ver su cara de congestión.

-YO: si, si, vamos no ha quedado nada que vea - reaccionó ella de nuevo al ver mi tranquilidad.

-MERCHE: pues deja de mirar y vete a estudiar, ¡vago! - y me dio un golpecito de agradecimiento para sacarme de allí.

Los 2 días siguientes la acosé, la perseguía por los pasillos mirándola el culo, acercándome a hablar con ella con excusas baratas y deleitándome con sus apoyos en las mesas de los compañeros, no fui el único pero si el más atrevido, me pilló una docena de veces mirándoselo, ya me miraba con cara de “ya vale”, pero hubo una más tras otra. Al finalizar la clase se acercó y me dijo que me quedara.

-MERCHE: oye, siento lo del otro día, no debí hacerlo delante de ti.

-YO: ¿el que? - quería disimular pero también que lo reconociera.

-MERCHE: ya sabes, lo de la mancha de tiza.

-YO: ah si, no pasa nada.

-MERCHE: no, si pasa, llevas unos días más tonto de lo habitual, tienes que dejar de mirarme todo el tiempo - me había cazado, pero fingí una vergüenza que en realidad no sentía.

-YO: bueno, lo siento………es que ya sabes……las hormonas, todo en mi vida va cambiando y no sé, llamaste mi atención.

-MERCHE: pues tienes que parar, no es sano que te fijes en alguien como yo, tienes a muchas chicas de tu edad.

-YO: ya, pero ninguna tan guapa como tu - lo dije con el tono de broma que solía usar con ella, pero iba directa a su línea de flotación.

-MERCHE: anda tonto, no seas mentiroso, que aun recuerdo como te quedaste embobado con Marina durante el trabajo – “se acuerda”, no perdería oportunidad.

-YO: jajajja pues si, pero era más por su parecido a alguna diosa griega, eso tiene su morbo, fue una surte que no…..- y me paré.

-MERCHE: que no……. ¿que?

-YO: nada, tienes razón, déjalo, siento haberte molestado - amagué irme sin ninguna intención de hacerlo.

-MERCHE: que no es molestia tontorrón, si más que molestarme hasta me has subido el animo, jajajajaja, pero dime, ¿que fue una suerte?

-YO: bueno, verás, sabes como acabó el trabajo, conmigo….

-MERCHE: si, desnudo……..vamos en calzoncillos.

-YO: pues imagínate si….viendo a Marina me hubiera…….puesto tonto, jajaja tendría que haber acabado con un empalme de narices jajajajajjajajajaja – elegí las palabras con cuidado, quería que pareciera un broma más, pero ella sabia que yo era capaz de hacerlo, y el hecho de que estuviéramos hablando abiertamente de ello, que recordara aquel momento, que pensara en aquel cuerpo jovial y medio desnudo, en el bulto escondido. Todo en una sola frase, tardó un segundo en responder.

-MERCHE: ya claro, ¿y te hubieras quedado así delante de toda la clase?

-YO: ya me conoces, podría hacerlo ahora mismo.

-MERCHE: lo que me faltaba, que me vieran con un alumno desnudo en clase, anda tira, y piensa en eso.

-YO: ¿en que?

-MERCHE: en dejar de mirarme así, que me siento un trozo de carne.

-YO: es que ahora que lo hemos hablado, no se si podré, si ya me he hecho alguna paja pensado en ti frotándote la tiza - otra frase a la línea de flotación pero esta vez no reí, dejé unos segundo de margen esperando su respuesta.

-MERCHE: ¡oye!, no digas guarradas - se puso en pie enfadada.

-YO: jajajjja será una guarrada, pero es la pura verdad y te digo más, algún chico más también me han dicho que lo ha hecho - mentira y gorda, pero quería que se sintiera atractiva.

-MERCHE: ¿más? No si ahora voy a tener club de fans……- se frotaba las sienes con aquella naturalidad tan adorable.

-YO: pues te lo mereces, eres una mujer de bandera y nosotros no somos críos ya - di un paso hacia ella, eso la puso nerviosa.

-MERCHE: te lo agradezco…….. y no sabes cuanto……. pero no esta bien…….- comenzó rascarse la cabeza.

-YO: ¿te crees que a nosotros nos importa que este bien? Somos adolescentes, nos movemos por impulsos - di otro paso hacia ella.

-MERCHE: si, vosotros, pero yo no, tengo que mantener unas distancias……- dio un paso hacia atrás pero no había sitio.

-YO: pues es una pena, por que por mi cabeza se pasan muchas cosas que podría hacerte para disfrutar - otro paso, ya estaba cerca.

-MERCHE: ¿si?................ pues no va a poder ser, los demás…..

-YO: me dan igual lo demás, aquí solo estamos tú y yo, llevas 3 días rondado por mi cabeza, no hay fuerza en el universo que me aleje de ti - se la veía muy nerviosa, pero no enfadada, le atraía lo que oía, su barrera moral le gritaba peligro.

-MERCHE: por favor……. no me hagas esto…….. en casa no van bien las cosas…….. mi novio…

-YO: tu novio es un mierda que tiene una mujer que no merece - di otro paso, estaba encima de ella, mis palabras fueron una lotería, pero acerté de pleno.

-MERCHE: no lo sabes, por favor, para - lo hice cuando agachaba la cabeza hacia ella, puso una mano en mi pecho para frenarme.

-YO: esta bien, si es lo que quieres, te respetaré, me iré y mañana esto será un mal recuerdo, pero solo si es lo que quieres tú, aquí y ahora, antes, déjame besarte y me harás feliz - mis palabras calaron, supuso que si se dejaba besar me calmaría y me iría.

Fui haciendo fuerza contra ella, su mano en mi pecho también era firme, pero gracias a mi corpulencia no me hacia falta acercarme tanto y con agachar la cabeza fui acercándome a sus labios.

-MERCHE: esto….no esta bien….no se……- balbuceaba con cada centímetro que me acercaba, la otra mano la tenia pegada a ella, doblada sobre su cuerpo, debajo de su boca.

-YO: sabes lo que quieres al igual que yo, pero yo estoy dispuesto a jugármela por un solo beso tuyo, y se que desde que me viste desnudo después del trabajo me deseas - me lo inventé, pero cuadraba, su mano en mi pecho cedió.

Junté mis labios a los suyos, con cariño y ternura, ella no se movía pero cerró los ojos, disfrutando, yo no me separé de ella y me mantuve unos segundos, para separarme un poco de sus labios dejando que se despegaran de los suyos.

-YO: dios, sabes mejor que en mis sueños - ella se relamió y abrió los ojos.

-MERCHE: y tú que en los míos - aluciné, de chiripa había dado con la profesora que soñaba conmigo.

Sin dudar, ni dejarla pensar, lancé otro beso, esta vez ella llevó su mano a mi cara acariciándola, sin apartar la otra de mi pecho, pero ya sin oposición, con cariño. Este fue más largo y ella participó abriendo la boca, me derritió al acabar, mordió mi labio inferior tirando un poco de él.

-YO: ay - lo dije para hacerla saber que lo había notado, pero sin dolor.

-MERCHE: perdona…es una manía que tengo….

-YO: no hay nada que perdonar - tiré el 3º beso este ya fue pura pasión, con leguas luchando en terreno enemigo, y mientras ella me sujetaba la cara yo metía mis manos por dentro de su chaqueta.

-MERCHE: aquí no, nos pueden ver - era mía, ya no le importaba el hecho, si no que lo supieran, la pasión era mayor que la moral - dame unos días - me besó de nuevo y volvió a morderme el labio inferior, “dios, vaya tontería y que sensación más agradable acabo de descubrir”.

Me hice con todo mi control para alejarme de ella, y salimos de allí, los 3 días siguientes siempre me quedaba a última hora, la buscaba en la clase que fuera, y nos besábamos mientras charlábamos. Por lo visto tenia un novio desde hace 4 años, vivían solos pero el tío era un vago redomado, en paro, que vivía de ella, y con el paso del tiempo no le soportaba, le daba asco tocarle. Por lo que entendí, en esos días le echó de casa, no es que yo fuera la causa, pero si el detonante, supuse que no le gustaría sentirse sola y por eso mantenía la relación, pero conmigo a sus pies eso había cambiado.

Durante las clases nos tirábamos miradas el uno al otro, y gracias al inepto de mi compañero, ella me regala la visión de su culo sentada en mi mesa, al inicio era como siempre pero después arqueaba la espalda, o no apoyaba las nalgas, si no que lo ponía en pompa ante mis narices. Al acabar una de esas clases, siendo ultima hora, me aseguré de que nadie nos viera, y me lancé a por ella, estaba de espaldas agachada recogiendo unos papeles, le planté mi polla, cuyo tamaño ella ya intuía, en medio de su trasero haciéndola ponerse en pie.

-MERCHE: ey, ten cuidado, que me tiras – sonreía dándose la vuelta, pasándose la melena suelta y rizada tras una oreja.

-YO: eso querría yo, tirarme encima de ti y hacerte el amor hasta el amanecer, pero no me dejas, como sigas jugando conmigo en clase en una de estas que pongas el culo como lo pones te violo delante de todos - la metía mano por encima de la camisa.

-MERCHE: que bruto eres jajajja quieto que nos van a ver - lo decía pero no se apartaba, acariciaba mi cuello y mi pecho.

-YO: ya te dije que a mi me da igual lo que piensen los demás, tengo mis limites y estas jugando con ellos - la besé rabiosamente, doblando su espalda hacia atrás, apretando su cadera contra mi, al separar los labios esta vez fui yo el que tiró de su labio inferior con los dientes.

-MERCHE: no sabes como me pones, tengo clavada tu imagen en calzoncillos, la gente no se dio cuenta pero cuando te peleabas con el otro chico se te marcó, desde entonces me tienes loca pensando en ti.

-YO: sabia que ese final te había gustado, pero no entiendo por que seguir esperando, puedo ser tuyo cuando quieras, me tienes alelado, te deseo como un naufrago desea una orilla, o un sediento en mitad del desierto un oasis - la volví a besar, ya no solo la doblaba la espalda, la movía de lado a lado. Ella se reía entre besos por que casi se caía, pero la tenia bien sujeta - has encendido un fuego y tienes que apagarlo.

-MERCHE: esta bien, dios, como te pones, este fin de semana vente a mi casa, el viernes al salir de aquí, tráete algo de ropa, a ver si apagamos ese fuego.

-YO: más nos vale a los 2 o esto va a acabar muy mal, no aguanto más sentado viendo como te paseas por clase.

Faltaban un par de días aun para el viernes, me desahogué para poder aguantar con una chiquilla que la chupaba bastante bien, pero tenia la imagen del culo de Merche en la cabeza, más que de su culo, de su cintura, de sus anchas caderas. El propio viernes en el descaso la fui a buscar y estuvimos retozando como críos en un cuarto de limpieza con la llave echada, fue la 1º vez que la pude desnudar parcialmente, la abrí la camisa y admiré sus tetas, como parecían, nada desmesurado pero con un sujetador que las realzaban, me lancé a besarlos y mordisquearlos, por lo visto el tema dientes y morder le volvía loca, mientras mis manos se posaron en su trasero, era bando, y una delicia para masajear.

-YO: me la has puesto a romper, o me corro ahora o no llegamos a final del día sin que te salte al cuello.

-MERCHE: yo estoy igual, necesito cariño, sácatela que estoy deseando verla.

Me ayudó a desabrocharme el pantalón sentándose en un cubo, cuando metió la mano para sacarla abrió la boca como si fuera a morirse allí mismo, al sacarla reía, de forma rara, como si acabara de darse cuenta del lío que se le venia encima.

-MERCHE: pero…….¿que es esta burrada?

-YO: lo que tú me provocas.

-MERCHE: esto no es calentura, esto es ir bien armado - miró mi polla acercando su cara, mientras hacia un suave masaje – ¡¡¡madre mía, esto no es natural!!!

Siguió masajeando pero le dije que así de calmada no pasaría nada, así que aumento el ritmo, con ambas manos, sus tetas se movían debajo del sujetador al son.

-YO: o me la chupas o vamos a estar aquí hasta año nuevo - me miró ofendida.

-MERCHE: joder con el niño, si que ha crecido.

Cogió de la base y lamió mi glande, con suavidad, luego se metía en la boca la punta y jugaba con la lengua en mi capullo, para ir sacándoselo dejando que sus labios friccionaran, lo hizo un par de veces, hasta que sus babas rodeaban toda la punta, allí comenzó una masturbación feroz lamiendo todo el tronco mirándome a la cara, mi pene era más grande que su rostro, era una delicia verla esforzarse, trataba de engullir pero no pasaba de 1/3, se ahogaba, sus manos no paraban, me volvió loco, la avisé y eyaculé en un cubo de basura que había allí.

-MERCHE: ¡¡y esta ha sido la 1º!!, me vas a joder el fin de semana.

-YO: esa es la idea, TODO el fin de semana - me lancé a besarla para agradecérselo.

-MERCHE: dios, cálmate que tú ya estas, pero falto yo y quedan 10 minutos - acepté el reto, la puse de espaldas y bajé a su trasero, desabroché su pantalón y de lo baje, ¡¡que pedazo de culo, que cadera, que piernas!!, solo una bragas de encaje a juego con el sujetador separaban aquella obra maestra de mi.

-YO: haré que te corras antes de 10 minutos - no resistí y apretando, mordí una de sus nalgas a través de la tela, eso la puso a 100 por que se retorció en el aire.

-MERCHE: ¡¡¡¡¡¡fóllame aquí mismo!!!!!! por dios, que me vas a matar de placer.

-YO: aun no, te he dicho que haré que te corras pero vas a tener que aguantarte, no tendrás mi polla hasta las 12 de esta noche - no se por que se me ocurrió pero me pareció justo hacerla esperar como ella hizo conmigo.

Metí mi boca en su entrepierna, sin más, desde atrás, levanté su culo para tener mejor llegada, lamía su coño empapado por encima de la tela de su ropa interior, cuando necesitaba respirar, ya que la carne de su culo me ahogaba, sacaba la cabeza, besaba una zona y después mordía, cada vez que lo hacia se retorcía su espalda, y volvía a atacar el pubis, metí mi mano por dentro y acariciaba el clítoris, cuando lo noté abierto metí mis dedos en posición para masturbarla rápidamente el punto G, sacando mi cabeza y pegándola a sus nalgas, mordisqueando si parar, metía mi mano con fuerza, acariciaba y la sacaba, aumentado el ritmo , ella gemía tratando de ahogar sus gritos, pero se le escapaban con cada mordisco, eso la volvía loca y lo iba a aprovechar todo el fin de semana. Antes de que tocara la campana ya se había corrido 2 veces, me empapó la mano, me levanté mientras ella se apoyaba en un estante asfixiada. Llevé mis dedos mojados a su boca y ella los chupo encantada, el último dedo, adivinar, lo mordió un poco, haciéndome el daño justo, sin pasarse.

-YO: veo que te gusta morder, eres mi leona y este fin de semana te voy a marcar como tal – ella misma nos había explicado en clase que los machos leones al aparearse marcan a sus hembras de un mordisco. Eso la derritió en mis manos, tenía el culo lleno de marcas de mis dientes, me besó llena de pasión, pero la obligué a vestirse, teníamos que volver y quería que estuviera desatada de deseo.

Pasaron las ultimas horas y salí en su busca al acabar las clases, ella ya estaba en la puerta esperándome, salimos como almas que lleva el diablo, me subí al coche con ella, me contó que ni había dado clases, mando repasar y nada de ejercicios ni deberes para tener el fin de semana entero libre, me daba igual, yo solo la miraba con deseo y ella se daba cuenta, en cada semáforo nos besábamos hasta que el de detrás nos pitaba por que ya estaba en verde. Cuando logramos aparcar se me subió encima del asiento del copiloto y nos quedamos allí, besándonos y metiéndonos mano un buen rato, por fin subimos a su casa, era un piso sencillo de 1 sola habitación y un salón amplio, algo vacío, supongo que por que faltaban las cosas de su novio, o de su ex ahora, me dijo que me sentara un rato mientras se cambiaba y se ponía algo mas cómodo, su definición fue salir a los pocos minutos con una camiseta amplia que le caía por un hombro, sin sujetador y en bragas, nada más, estuve muy cerca de levantarme y tirármela allí mismo, pero ella me ayudó a dejarme más cómodo a mi, me quitó toda la ropa y me dejó en calzoncillos, no me volví a vestir más en todo el fin de semana. Nos sentamos en el sofá, uno al lado del otro, seguimos el juego de los besos y caricias, mientras yo la rodeaba con un brazo, acariciaba su cuerpo con la otra, sobretodo sus piernas desnudas, que iba apretando, ella se apoyaba en el sofá con una mano, restregando uno de sus pechos contra mi, y la otra me acariciaba desde la cara hasta el pecho, el veinte o las piernas. Cuando la cosa se calentó de más, ya tenía su mano masajeando mi polla por encima de la tela, totalmente dura, sus besos ya eran fuertes y húmedos, con mis manos perdidas por debajo de su camiseta.

-MERCHE: bueno, ya que estamos aquí, ¿por que no me follas de una vez? – daba pequeños y cortos besos mordiendo mis labios sin parar.

-YO: ya te dije que hasta al 12 no la tendrás.

-MERCHE: aun quedan unas horas, ¿que quieres que hagamos mientras? - la solté el pelo, y cayó sobre su rostro, aquellos rizos le hacían una cara aun más deseable, casi salvaje.

-YO: te voy a comer entera - diciendo esto la levanté para montarla encima de mí, cara con cara, mientras la besaba le quité la camiseta, fue precioso ver como aparecían sus tetas ante mí y al quintársela su pelo cayó sobre sus hombros.

Llevó sus manos a mi cara y yo a su espalda, mientras nuestras pelvis se frotaban, sus movimientos con la boca se volvían más fuertes y amplios, con su lengua llegándome a la campanilla siempre que se separaba de mí mordía mi labio inferior. Bajé la cabeza para ir a por su cuello y cada ciertos besos y lametones tiraba a morder, pero sin pillar nada, para cuando llegué a sus pechos ella gemía de gusto, los trabajé como me adiestraron, masajeando, apretando y lamiendo cada pezón hasta que estaban duros y entonces los chupaba, me sujetaba la cabeza con fuerza disfrutando de mis caricias. Llevé mis manos por dentro de sus bragas, pero no por la zona de los riñones, las metí por debajo, por sus nalgas, juntando y separando a ritmo, de vez en cuando mordía un pezón duro, con cuidado y tiraba de él hasta que por fuerza se soltaba, eso la hacia revolverse de placer. Mis manos profundizaron y ya acariciaba sus labios mayores con la punta de los dedos, estaba encharcada, un par de caricias más y reventó con un orgasmo sobre mi, vibraba sin control, cayendo rendida hacia mi.

-MERCHE: ¡¡dios!!!, me vas a matar y no hemos ni empezado.

-YO: ¿que tal algo de matemáticas? ¿Un 69?

-MERCHE: no sé, nuca lo he hecho.

-YO: pues por una vez te voy a enseñar algo a ti - me levanté con ella colgada de mi, la puse de pie y con suaves caricias y besos pasionales, le fui bajando las bragas, agachando mi cabeza, besando cada parte de su cuerpo, y estando ya agachado me quité los slips, dejando mi polla apuntándola.

-MERCHE: joder, todavía no me lo creo, quería hacer de ti un hombre y vaya hombre te has convertido - vi su pubis de cara por 1º vez, estaba totalmente rasurado, con la piel roja.

-YO: vaya, parece que alguien se ha afeitado para la ocasión - se puso roja al verse descubierta.

-MERCHE: es que llevaba mucho bello, hacia mucho que no me…..tocaban - me pegué a ella, con mi polla de lado en su vientre.

-YO: pues hasta ahora, por que te voy ha hacer mía - la volví a besar tan fuerte que se arqueaba la espalda hacia atrás, agarrándola de uno de sus muslos hasta levantarle la pierna contra mi, bajé la cadera para meter mi rabo en el hueco creado, y quedar así unos minutos.

La sentía caliente de nuevo, con su coño empapándome el miembro, así que me separé y me tumbé boca arriba, ella se quiso poner encima mirando a mi, pero la di la vuelta y quedamos invertidos, el 69, pegué su cadera a mi cabeza y comencé a comérselo, de forma dulce y persistente, separando sus labios vaginales para llegar mejor, ella entre espasmos que la producía agarraba mi miembro, más que para masajear, como punto de apoyo, pero tal era mi trabajo que su cuerpo y su mano subía y bajaban sin parar. Se dio cuenta y llevando sus dos manos a la base de mi pene, daba besos y lametones sádicos, me encantaba como chupaba el glande, se lo metía entero y luego se lo iba sacando dejando que sus labios fueran a contra piel, como era de esperar, llegó un punto en que daba pequeños mordiscos a la punta, por el tronco y el glande, eso me volvía loco y estaba apunto de correrme, pero no podía ser yo solo, así que coloqué mis dedos, que estaban penetrándola, en posición, dando rienda suelta a sus movimientos, acariciando su punto G. Mercedes solo se sacaba mi polla de la boca para gemir y gritar, la avisé de que me corría, esperando ver cual era su reacción, no fue otra que metérsela en la boca de nuevo, ella ganó la carrera, y me empapó la cara de sus fluidos, del temblor que le entró logró que me corriera, la manché toda la boca, la oí toser, y luego tragar, “dios, que suerte tengo”. Miré el reloj, aun quedaban un par de horas para las 12.

-YO: ¿y si comemos algo sólido? por que estoy harto de almeja - se río a carcajadas, se levantó y se fue al baño desnuda, yo la seguí, y mientas se lavaba un poco la cara y enjuagaba la boca con agua agachada, me planté detrás de ella - o te vistes un poco o no nos va a dar tiempo - me miró la erección en el reflejo del espejo, que ya estaba cogiendo cuerpo.

-MERCHE: ¿ya estas otra vez? ¡¡¡Que vigor!!!

Me puse los slips, ella las bragas y la camiseta, si íbamos a cocinar al menos tener precaución de que no nos saltara aceite en ciertas zonas, ella estaba en la encimera de la cocina troceando para una ensalada, jugueteaba con un pie rascándose el otro, yo puse la mesa, pero al verla así, me puse detrás de ella, rodeándola y ”ayudándola”, cogió un espárrago y me lo daba a comer por encima de su hombro, reíamos, una situación simple, sensual, excitante. Comimos sin dejar de mirarnos y reír, pero sin decir una palabra, no hacía falta. Al recoger la cena, nos sentamos en el sofá a ver la TV, al inicio a mi lado, abrazándome, pero luego me eché para atrás y ella se sentó en el hueco de mis piernas abiertas, pegando su culo a mi verga creciente, rodeándola por el vientre como mis brazos, mientras ella los sujetaba, esa mujer no solo quería sexo, realmente necesitaba cariño, y se acercaban las 12.

Mercedes – Descubriendo a la fiera.

-MERCHE: ya queda poco, y no puedo pensar en otra cosa, te necesito, como nunca necesite a nadie - movía su cadera.

-YO: no te preocupes, no te fallaré, seré tuyo mientras quieras - la apreté contra mí.

-MERCHE: llévame a la cama.

La puse en pie, y la di la vuelta, besándola con ternura, ella se agarró de mi cuello y se me subió encima rodeándome con las piernas, yo la sujetaba por en trasero y sin dejar de besarnos la llevé al cuarto, como no me conocía muy bien la casa nos dimos algún golpecito, ella reía pero seguía besándome, descolgó una mano encendiendo una luz, di gracias por que no veía nada, localicé la cama y poniéndome en el borde, la dejé caer con cuidado de espaldas, mientras caía sobre ella, sin cambiar de posición, con ella rodeándome con las piernas, pero ya con su espalda recostada sobre la cama sin agarrarse a mi, con la cadera levantada, esa visión con ella quitándose la camiseta y sus tetas cayendo hacia su cara, con su pelo expandido alrededor de su cabeza mientras se mordía un dedo, me la puso dura al momento, y acariciando sus pechos con una mano, estando de rodillas en la camam la cogí con la otra mano de la espalda y la volví a levantar hasta tenerla en volandas encima mía, besándonos apasionadamente de nuevo, ella no tocaba la cama, solo mis piernas, y mi cuello, aguantaba todo su peso de rodillas en la cama, con sus muslos clavándose en los míos. La acariciaba toda la espalda, notaba como se estiraba y doblaba en sus acometidas a mis labios, como de costumbre después de cada beso largo, mordía, ya al notar mi polla frotándose en su sus bragas se pegó a mi echando la espalda hacia atrás de placer, ataqué sus pechos, eran una gozada con sus pezones duros, sonó el reloj, las 00:00.

-YO: es la hora, ¿estas lista?

-MERCHE: si, pero con cuidado, la tienes muy grande y no quiero estropear el momento.

-YO: te trataré como una princesa, hasta que me pidas que lo haga como a una zorra, y créeme, llegarás a desearlo - mordí uno de sus pezones antes de dejarla recostarse de nuevo sobre la cama con la espalda.

La separé las piernas de mis riñones y las apoyé sobre mis hombros, aun con la cadera levantada, llevé mi mano al elástico de sus bragas y dando besos a sus gemelos, fui tirando hasta sacárselas, al pasar por mi cara vi y olí que estaban mojadas de nuevo, la abrí de piernas, la moví hacia arriba en la cama, quería tener sitio para meter mi cabeza en su interior. Mientras ella me agarraba del pelo, separaba sus labios mayores y lamía como un poseso su clítoris, mientras metía mis dedos en ella, estaba muy mojada, muy excitada, se corrió rápido, pellizcándose los pezones. Tiré de sus pliegues vaginales con mis labios hasta sacarla gemidos, allí me puse en pie y me quité los slips, ella se fue derecha a chupármela, pero no la dejé, la levanté y la puse de pie, besándola de nuevo.

-YO: no, por ahora solo quiero que disfrutes tu - y abrazándola me di la vuelta y me dejé caer de golpe en la cama con ella estirada encima de mi, me encantaba esa sensación, mi hombría aplastada por su peso, sus tetas en mi pecho y su pelo haciéndome cosquillas en la cara.

Ella me besaba el cuello mientras yo acariciaba todo su cuerpo, se excitó tanto que se abrió de piernas en busca de ser penetrada, la tenia tan grande que tubo que levantar mucho sus caderas para apuntar bien, y una vez estudiado, bajó lentamente, notando como la piel se tensaba y se abría paso mi miembro dentro de ella, era cierto que llevaba mucho sin ser penetrada, costó bastante meterla, cada pocos segundos daba un respingo, se levantaba un poco para coger aire y seguía bajando, compungida, yo solo la dejaba hacer, bajó, y bajó mucho, mas de ¾ de mi pene estaban dentro ya, y se quedo así, mordiéndose el labio con los ojos cerrados, dejando que mi polla se adaptara a su interior, y viceversa. Noté mucha presión pero que iba disminuyendo. Cuando se sintió segura, subió bastante para volver a bajar, hasta ese punto soltando un grito largo según bajaba, se paró unos instantes y volvió ha hacerlo, esta vez su grito fue más corto.

-MECHE: ¡¡¡¡me abre, noto como se me abre el puto coño!!!!! - me hizo algo de gracia su frase malsonante.

Repitió operación hasta que ya entraba y salía de mí con facilidad, gritando, ya no de impresión si no de lujuria, de vez en cuando se echaba sobre mí para besarme sin dejar de moverse, su ritmo era fuerte y en una de esos giros de cadera se corrió, noté claramente el flujo sobre mi polla dentro de ella, cayó rendida sobre mi.

-MERCHE: ¡¡¡dios!!!, como lo necesitaba, ha sido mejor de lo que pensaba.

-YO: ¿por que hablas en pasado? Esto no ha hecho más que empezar - me incorporé dejándola pegada a mi pecho y agarrando de su cadera la subí y bajé fuertemente durante un rato, ella se calentó, me besaba el cuello y jugaba con su lengua en mi oído, mordiendo el lóbulo de la oreja mientras recibía golpe tras golpe, no lograba metérsela toda pero no hacia falta, estaba disfrutando con la sensación de tirarme a aquella profesora que durante 7 años cuidó de mi, y ahora era yo quien cuidaba de ella.

Mantuve el ritmo, incluso aumentado por fases durante un minuto, se volvió a correr pero ya no la di descanso, la subía del todo y la dejaba caer de golpe, gritaba con cada sacudida hasta que sentí que me contraía.

-YO: me voy a correr……..pero no te preocupes, tengo la vasectomía hecha - eso la puso a 1000, era ella quien rebotaba contra mí, exploté de nervios, dando 2 o 3 golpes finales con cada eyaculación.

Caí de espaldas a la cama con ella pegada a mi pecho y nos quedamos así una media hora, ella besaba mi torso, y yo olía su pelo, mientras la abrazaba, sin sacársela de dentro, flácida, pero con una sensación de gusto indescriptible, era la 01:30 y agotado me dormí con ella encima y ensartada, supuse que ella también, por que al despertar estabamos igual, pero yo con una erección enorme y ella moviendo su cadera de forma circular, tanto mi rabo como ella se habían despertado antes que yo, y ya estaban de fiesta.

-YO: ¿que pasa? ¿No me vas a invitar?

-MERCHE: dios, me he despertado notando como me llenabas, como se inflaba dentro de mi.

-YO: mi cuerpo reaccionó solo, pero de forma lógica, como no ponérseme dura con una mujer tan preciosa como tú dentro de ti.

-MERCHE: ya me has tratado como una princesa, ahora quiero que me folles, que me hagas gritar y me marques como tu leona - me mordió el pecho.

-YO: prepárate - llevé mis manos en su culo, la levanté con la cadera y planté bien los pies en la cama, la sujeté para que mantuviera la posición con las manos, sin mediar palabra bombeé su interior, al inicio buscando velocidad, acababa de despertarme, pero con el paso de los minutos, ya tenia un ritmo considerable, notaba como se mojaba por dentro y como caía fluidos de ella por el tronco, eso solo facilitó mis penetraciones, que sin ser totales, eran muy profundas.

La postura era inclinada hacia mi con su pelo cayendo sobre nuestras cabezas sin dejarme de besar y mordisquear, en media hora se corrió una, dos y hasta tres veces, cada una con menos intervalo de tiempo con la anterior, hasta que fui yo quien reventé sobre ella, cayendo agitado y con las piernas agarrotadas del escuerzo, mi pecho subía y bajaba con cada respiración, y con él, el torso de ella, que se me abrazaba, con miedo a que me fuera a ir.

-YO: como desayuno no ha estado nada mal, deja que vaya al baño y continuamos.

-MERCHE: vayamos los 2.

Nos metimos en la bañera que tenia, juntos, acariciándonos y pringados de fluidos corporales, yo oriné antes de entrar, (si, la gente mea nada más levantare, yo al menos), me puse detrás de ella, de pie, pegándome a su cuerpo, mientras ella nos mojaba a los dos, nos dimos un buen repaso, más bien se lo di yo a ella, pasé mis manos húmedas y una esponja enjabonada por toda su piel y me centré en dejar impolutos sus pechos, luego metí mi mano por delante en su entrepierna, con la esponja frotaba la parte exterior de su vagina, y estuve así un rato hasta que me calenté, ella también, mi virilidad ya sobresalía entre sus muslos, la pringué de jabón también , pero la aparté para profundizar más, con la alcachofa del agua apuntaba a su vientre y metía mis dedos lo más profundo que podía, medio limpiando, medio acariciándola.

-YO: déjame que te folle aquí mismo, o no respondo de mí.

-MERCHE: ¡¡métemela, métemela toda!!

Apreté mi glande contra ella y la introduje, fue más fácil que por la noche, ya estaba abierta y estaba muy húmeda con el agua y supongo que fluidos que provocaban mis caricias, una vez dentro me sujeté a las paredes, percutiendo de forma pausada en su trasero, con cada penetración se ponía de puntillas para volver a bajar cuando la sacaba, lo hizo mientras el ritmo era suave, cuando la agarré de las caderas y aceleré ya solo aguantaba, gemía y se apoyaba en la pared por miedo a caerse. Yo la sujetaba con una mano en la cadera y con la otra quería atraerla hacia mi , así, busqué pecho o vientre pero se me resbalaba, le llevé a su cuello, en el pelo tirando de él o en su cara directamente, ella aprovechaba y me mordía los dedos, eso me recordó mi promesa, seguí bombeando hasta sacarla el 1º orgasmo, entonces roce mis dientes en su hombro derecho, no paré de penetrar a buen ritmo hasta sacarla el 2º orgasmo, esta vez mordí la misma zona suavemente, continué sin parar hasta llegar al 3º, ella ya hacia fuerza contra mi, cuando le llegó el 4º sentí una fuente bañándome la pelvis entre gritos suyos y míos, no paró de gritar y moverse de forma alocada, llegué al punto de no saber si parar o no, pero decidí seguir hasta correrme, a los 45 minutos de meternos en el baño noté mis huevos encoger, estaba cerca, tenia que hacer fuerza con los brazos pues ella casi no se sostenía, la eché para atrás apoyándose en mi y yo en la pared de enfrente con una mano, con la otra rodeaba su vientre. En la misma zona de antes, ya marcada por los dientes, mordí, pero esta vez no fue ni suave ni con cuidado, mordí agarrando, apretando la mandíbula, sin dejar de aumentar el ritmo en el ultimo minuto de mi cadera y notando en mis dientes cada sacudida, ella comenzó a gritar mezcla de placer y dolor, pero seguía haciendo fuerza contra mi, gritando que no parara, eyaculé casi sin darme cuenta, pues seguía penetrándola salvajemente hasta que se corrió de nuevo cayendo casi muerta sobre mi pecho, yo aflojé la mandíbula, me dolía un poco, vi la marca, los dientes bien profundos, la zona estaba roja y morada, de una de las zonas vi que alguna gota de sangre brotaba, me acerqué a su oído.

-YO: eres una leona…………eres mí leona - se le erizó piel al mirar la marca echa en su hombro, sentí en su espalda el escalofrío que la subía hasta la nuca.

-MERCHE: soy tu leona, me da igual que te tires a otras, donde piso, jamas deja huella una gata, YO SOY TU LEONA. - lo dijo mientras disminuía el ritmo de las embestidas, pero no paraba.

-YO: lo eres, pero no puedes imponer normas a tu macho, puedes enfadarme.

-MERCHE: pues te calmaría…...- su cintura se movía sin cesar.

-YO: no se si lo aguantaras.

-MERCHE: ponme a prueba………. ya notó como me llenas de nuevo.

Volví a acelerar el ritmo, durante una media hora sin parar, gritaba cada vez que ella se tensaba en mis brazos, fue salvaje, animal, impropio de seres humanos, Mercedes ya soportaba más y se puso de rodillas a chupármela en la bañera, no paró hasta que me sacó su ración de semen, sus dientes, y como los usaba, eran una gozada, pero tenia que dar una lección a mi leona, me puse de rodillas y la levanté hasta volverla a ensartar de cara, rodeándome con sus piernas. Sin compasión, la volví a penetrar, al inicio ella se agarraba a mi cuello, pero ya le fallaban las fuerzas, se recostó sobre el suelo de la bañera con el agua cayendo sobre nosotros, la tenia cogida de los riñones tirando de su cadera para sujetarla y así mi pelvis la percutía sin parar, era mi 3º corrida, así que se hizo desear hasta por mi, casi 1 hora estuve haciéndola estallar de placer, sus ojos se ponían en blanco, se movía como un peso muerto pero de forma consciente, dejando que la sujetara por la espalda, arqueando la espalda, hasta apoyar la cabeza en la bañera, perdí la cuenta de las veces que se corrió, alguna me llenaba de flujos y otras no, pero sentí todas en los calambres de su estomago. Estaba por reventar así que la levanté contra mi pecho, ella era fuego puro, y hacia fuerza invertida contra mi pelvis, besándola, aceleré el ritmo final hasta que noté que me vaciaba, volví a hincar los dientes en la zona de su hombro y apreté, tanto y tan fuerte como pude, hasta sacarla un grito de dolor puro, pero seguía moviéndose contra mi, unas últimas sacudidas más y me quedé quieto, aflojando despacio mis dientes, notando como se separaban de su carne, ya lo tenia realmente morado, con marcas bastante profundas, vi de nuevo sangre, así que chupé la zona hasta que dejó de sangrar. Rugí, tal como recordaba a los leones de los documentales.

-YO: yo soy TÚ león, y YO decidiré si te ganas ser mi leona, y CUANDO lo serás - asintió agotada, derrumbada sobre el suelo de su bañera.

Salí triunfal, queriendo disimular mi agotamiento ante mi leona, y por que ella no estaba segura conmigo en la misma bañera desnuda, podía volver al ataque y aun quedaba fin de semana, no quería asustarla, tampoco sabia si yo podía.

Mercedes – Mi leona.

Me puse los slips y me fui a la cocina a desayunar, estaba famélico, la preparé algo, y pensé, mirando la puerta oyendo como se movía en el baño, si me habría pasado con ella o no, desde luego se comportaba como si fuera una leona, y no sabia si mi lección seria bien o mal recibida. Salió del baño y al ver su cara supe que acerté, tenía una sonrisa de oreja a oreja, solo con las bragas puestas, vio la mesa puesta y se acercó corriendo, se me sentó encima de forma lateral y me besó pasionalmente.

-YO: veo que te ha sentado bien el baño.

-MERCHE: ¡¡¡es el mejor polvo que me han echado nunca!!!!! Vamos a disfrutar mucho, siempre que tú quieras, MI LEÓN - casi me arranca la cabeza con sus besos, no solo no lo había estropeado, si no que había dado en el clavo.

Cogí trozos de fruta y se los acercaba a la boca, ella mordía con ganas, tenía hambre, y quería que su macho la alimentara, intercalaba dárselo con la mano o dejarlo en mi boca y que ella me besara para comer, se le cayó un poco de zumo en un pecho, ni me lo creía, lamí aquellas gotas, por limpiarlas, pero la cosa se me fue de la manos y trabajé su pezón como sabia que le gustaba, antes de que la cosa fuera a más la dejé comer tranquila, pero sin bajarse de mis piernas, ideando en mi cabeza el siguiente paso. Observé la marca en su hombro, estaba morado y congestionado, los dientes ya no se marcaban tanto pero estaban bien visibles en su piel, besé la zona.

-YO: ¿te duele?

-MERCHE: nada que una buena leona no aguante – era extraño ver a un mujer adulta y madura hablar de esa forma, pero le gustaba verse a si misma de esa forma.

-YO: no eres buena, eres la mejor, pienso hacerte mía cuando y donde quiera.

-MERCHE: claro, menos en el inst……- no la dejé acabar, mordí la zona de nuevo con suavidad, entendió la idea mientras sentía el leve dolor- ……donde y cuando quieras.

-YO: así me gusta, lamer tu pezón me la ha puesto dura, quiero hacerte mía ahora.

-MERCHE: ¿ahora? ¡Pero si acabamos de salir de la ducha!, ¡¡¡y me has follado durante 2 horas en el baño!!! - volví a morder, esta vez con algo de fuerza, sacándola un gemido de dolor ahogado con cierta excitación, esta vez asimiló la idea.- soy toda tuya.

La levanté y mi cuerpo con ella, nos quité a los dos la ropa interior, me senté en el sofá arrastrándola de la mano, me senté, la coloqué a horcajadas encima mía, sin masturbaciones previas ni nada, ya notaba su coño mojado, dirigí mi polla a su interior y se la metí hasta lo más que dio, ella gritó de pasión, estaba sumisa pero disfrutándolo, trabajé sus tetas para tenerlas totalmente excitada, ella sola comenzó a subir y bajar por mi barra de carne.

-YO: quieta, no te he dado permiso para que te muevas - se quedó confusa, pero con una sonrisa en la cara.

-MERCHE: perdona.

-YO: esta bien, pero me has faltado al respeto, eso exigirá un castigo a partir de ahora.- yo no se que basura me entró en la cabeza, me comportaba como un autentico imbécil, como un jefe de tribu déspota y egocéntrico, pero a ella le encantaba, lo se por que aun asintiendo, volvió ha hacerlo.

-MERCHE: ups, perdona, fue sin querer – su tono y como se mordió el labio, “los cojones, ¿quiere el castigo?” pues se lo iba a dar.

-YO: eres una leona rebelde, voy a tener que enseñarte como comportarte ante tu macho - en mi puta vida creí que diciéndole eso a un chica se le iluminaría la cara, pero allí estaba, pasando delante de mi.

Agarré firmemente su cintura y haciendo hueco para mi pelvis, la subía y la bajaba con calma hasta dejar que su interior hiciera espacio, cuando noté que vibraba de pura pasión subí y baje mi cadera, para coger ritmo, a contra dirección con ella, no tocaba el fondo de su útero pero tampoco la penetraba del todo, la hacia volar por los aires y se acariciaba entera perdida en la pasión que sentía en sus muslos, deliraba diciendo barbaridades, estuve así una hora, se corrió varias veces, cambiaba de posición el cuerpo buscando una comodidad que no le concedía, gritando como una loca, cuando se echaba sobre mi yo la lamía y chupaba la zona amoratada en su hombro mientras ella se derretía, hasta que me corrí en ella, del mordisco que la di en el hombro sollozó de dolor, pero me apretaba la cabeza contra ella.

-YO: no ha estado mal como calentamiento, ahora date la vuelta - se fue a poner el pie - no, te he dicho que te des la vuelta, no que te la saques de dentro - la eché hacia atrás y la sujeté la piernas, paseé una por encima de mi, levantando su cuerpo, girándolo sobre el eje de mi miembro dentro de ella, ayudó que después de la eyaculación estaba algo floja, hasta quedar de espaldas a mi - recuéstate sobre mi y mueve las caderas sin ayuda de las manos, hasta que se me ponga dura otra vez.

A estas alturas ella no hacia nada que yo no le pidiera, era agotador tener que pensar en todos sus movimientos pero era excitante verla seguirlos al pie de la letra. Movía su cadera de forma circular, sin apoyarse en nada y sin que yo la ayudara lo más mínimo, buscando con su cara mis labios pero sin hacer nada, solo cuando yo giraba la cara y la besaba ella correspondía y se movía, cuando acababa me regalaba su mordisco en mi labio inferior y se quedaba en esa posición hasta que yo volvía a por ella. Mi pene estaba ya duro, la ordené que subiera y bajara su cintura, solo apoyándose en sus piernas, así que se puso medio en pie, sin sacársela, obedeciéndome, subía y bajada su cadera, al inicio solo eso, pero fue acelerando el ritmo hasta que la piel, los músculos y su carne iban en contra dirección a sus movimientos, se corrió un par de veces en la siguiente hora, pero yo no decía nada así que ella no paraba ni descansa, la notaba flaquear pero en mi mente estaba clavado el numero 3, hasta que no llegara no la ordenaría parar, ya no tenia fuerzas para aguantar ella sola así que se dejaba caer y aprovechaba la inercia para volver a levantarse, eso solo hacia que la llegara tan dentro que emitía un gemido leve con cada golpe, llegó su 3º corrida, y cuando notó sus ultimas fuerzas la ordenó parar y caer sobre mi.

-YO: bien, vas mejorando, pero ahora te voy a follar fuerte, no como antes – no sabia si podría siquiera, pero quería que su mente pensara que lo de antes no era mi tope, y para tenerla totalmente sumisa - y además deseo que sea por el culo.

-MERCHE: pero yo nunca me he dejado por….- era la 1º vez desde que empezamos que rechistaba, y me tenia que asegurar de que seria la ultima, mordí de forma fuerte su hombro, hasta volver a sacarla sangre y se retorciera sobre mi, su grito fue sonoro, pero no de dolor, si no de excitación, la empujé y cayó hacia delante para quedarse en el suelo a 4 patas, pensó unos segundos y poniendo el culo lo más erguido y en pompa posible, ya por su cuenta, se giró para mírame a la cara – …..hazlo.

-YO: no se si te mereces ese honor…….- puse cara de no estar del todo conforme., ella se apoyó en la mesa y se llevó las manos a las nalgas abriéndose lo máximo posible.

-MERCHE: ábreme el culo, concédeme ese honor, MI LEÓN. – “¿honor?” ¡¡¡Estaba ofreciendo su culo virgen a una polla descomunal y aun así me las ingenié para que rogara por ese honor!!!

-YO: esta bien, pero como me vuelvas a faltar al respeto, me respondas de mala manera o me desobedezcas, me busco a otra leona, una que merezca la pena. ¿Asiente si lo has entendido? - lo hizo con gesto amplios y rápidos.- esta bien, voy a ser benevolente contigo, lo haré con cuidado, y en el instituto harás lo que yo te diga, me ocupare de que no te perjudique en nada, ¿me oyes? Que tipo de macho no cuida de su hembra - no quería que perdiera su trabajo ni mucho menos que yo perdiera a aquella joya, y sobretodo, que ella lo supiera.

Me puse de rodillas detrás de ella, y llevando mi mano a su coño, empapé bien de sus fluidos abundantes mis dedos, los restregué por su ano, la sensación la hizo dar un espasmo, con cada caricia daba un respingo, pero callada, sin dejar de separarse las nalgas, cuando la sentí preparada hice presión con el dedo meñique, ella se iba hacia adelante según empujaba así que gruñí, como un perro enfadado, lo entendió y se quedó quieta, al final entró el meñique y dio un golpe en la mesa.

-YO: para que veas que te quiero, te dejo que grites - era increíble que aquellas palabras lograran aquellos objetivos.

-MERCHE: ¡¡¡dios!!!! ¡¡¡¡¡¡¡¡Muchas gracias mi león, joder, ufffffff!!!!!!.- respiraba de forma animal, por la boca, haciendo un ruido sordo al salir el aire.

Continué haciendo presión con el dedo hasta meterlo entero, ella seguía gritando, y dejé allí el dedo hasta que noté como su ano se dilataba, ella se tranquilizó un poco, pero no la deje demasiado, movía mi dedo dentro de ella, haciendo espacio, no se si la dolía pero la hacia retorcerse sin gritar, cuando vi que ya entraba fácil cambié de dedo y metí el corazón, otro golpe en la mesa y otra obscenidad gritada, mismo proceso, movimiento, dilatación y luego comencé a sacarlo y meterlo de su interior, del todo, para que fuera abriendo su ano lo más fácilmente posible, sus gritos de dolor se fueron apagando, ya su piel no estaba tirante, si no relajada y se movía al ritmo de mi dedo, estuve así 10 minutos en los que ella ya era quien llevaba el ritmo, chorreaba por sus muslos, medí con pausa y en un gesto metí el índice también, no hubo golpe en la mesa pero si improperios, los dejé así, los 2 parados en seco, dejando que se adaptara, cuando veía menos presión seguí perforando con los dedos el culo de mi leona, el procediendo igual, 10 minutos en que paso de gritar a metérselos ella sola, disfrutándolo, yo rozaba con mi dura tranca su coño, embadurnándolo bien.

-YO: te doy permiso para pedir que te la meta por el culo cuando estés lista - fue una forma barroca de pedirle permiso sin que lo pareciera.

-MERCHE: déjame así un rato, ¡¡¡dios!!!, como lo disfruto, no pensé que seria tan……excitante, tan divertido, tan placentero………… me estas abriendo el culo………. y me encanta.

-YO: ves como tienes que hacer caso a tu León - asentía mientras se percudía ella sola con mis dedos, estaba bastante dilatada y si no me daba permiso seria yo quien diera el paso.

-MERCHE: esta bien, creo que ya puedes………..- la corte de raíz.

-YO: ¿me estas dando permiso? – no podía dejar que retomara una relación de iguales.

-MERCHE: disculpa mi león, le ruego perdón, y como tal, no te pido, te imploro que me folles el ano con tu enorme polla.

-YO: no me vuelvas a fallar - saqué mis dedos y dirigí mi glande a su entrada trasera - ahora, por no saber comportarte, no te voy a dejar que grites hasta que no me corra dentro de ti, así que si te duele, no grites, acelera el ritmo para que eyaculé y así puedas gritar ¿ME HAS OÍDO?- asintió con pena en los ojos, aceptando su castigo.

Apreté fuerte y el glande entró limpio, había trabajado bien la zona, y no sentí más que un espasmo en ella, lo volví a sacar y lo volví a meter, mismo resultado, repetí hasta que salía y entraba sin fricción ni reacción alguna, entonces al meterla apreté más y le metí medio nabo de golpe, casi se le escapa un grito pero se tapó la boca con la mano, su piernas temblaban pero no se movía, agarré su cadera y fui sacándola de mi hasta el glande para volver a forzar hasta meterla ¾ , podía oírla sollozar, pero no gritar, se había metido el puño cerrado en la boca. Desde esa posición inicié un movimiento circular, esperando que su ano se expandiera y dejara de abrasarme la polla en su interior, estuve así 20 minutos, ella se sacó el puño de la boca, se tranquilizó y empezó a disfrutarlo, su entrepierna se mojó de nuevo, lo noté en los huevos, así que con todo preparado la avisé y saqué la polla de golpe, para arremeter una sola vez, fuerte, se tuvo que volver a meter el puño en la boca, lo hice otra vez y se le oyó un gemido de dolor, a la 3º ella mordía con fuerza su mano, pero no me paré por ello, con cada ida y venida aceleraba el ritmo, su ano se fue relajando y la fricción se iba haciendo más fluida, llegó un momento en que se la estaba metiendo toda por el culo y de ella solo se oían respiraciones fuertes y gimoteos de pasión, sacó su mano de la boca para apoyarse en la mesa ante mis acometidas, vi la marca de sus dientes y sangre en la mano, me sentí orgulloso de ella y le regalé un ritmo bestial, quería correrme rápido como recompensa, y así ocurrió, 15 minutos después con ella corriéndose con un orgasmo tras otro eyaculé en su interior, dándola una cachetada fuerte en su culo, y agachándome a morder suavemente su hombro de forma brutal.

-YO: ya está, así se comporta una leona normal, has logrado que me corra, así que ya puedes gritar - esperaba una reacción similar a las anteriores. Giró su cabeza mirándome, con los ojos rojos de haber llorado pero llenos de lujuria.

-MERCHE: ahora ya no me hace falta mi león, te ruego que me vuelvas a follar por el culo hasta poder sacarme los gritos a golpes - me sentí el hombre más afortunado sobre la faz de la tierra.

-YO: así habla una leona de verdad, una que merezca llamarse mía - vi orgullo y amor propio en su mirada.

-MERCHE: párteme el culo otra vez., por favor.

Se lo volví a partir, y esta vez llevaba mis manos a su coño, frotando, masturbando y metiendo mis dedos en ella, durante otra hora estuvimos así, se corrió tanates veces que desfalleció sobre la mesa, gritando que no parara, que quería mi semen en su interior, los vecinos tenia que estar oyendo todo aquello, pero yo no deja de arremeter hasta correrme otra vez en su interior, la levanté contra mi pecho sujetándola de la tetas, sin parar de rebotar en su trasero, y al eyacular mordí de nuevo su hombro, esta vez de forma más leve, pero logré arrancarla un grito de locura. Quedamos de rodillas los 2, empapados en sudor, y con un olor fuerte a sexo salvaje, ella era un peso muerto que se mantenía erguida por que la tenia sujeta, pero sonreía lamiéndome el cuello como una gata a su cachorro.

-YO: así es como follan los animales que somos, así no te dejaba tu ex ¿verdad?

-MERCHE: no mi león, ni de lejos, le ruego que me dejes descansar o no podré seguir complaciéndote sin quedar inconsciente.

-YO: te lo has ganado de sobra…… mi leona - esas palabras la llenaron de dicha, se había ganado ese nombre, y lo suyo le había costado.

Su cuerpo era inerte, estaba consciente pero no se movía, así que le saqué mi polla, con machas de sangre en la punta, y algunas gotas de sangre y semen cayendo del tremendo agujero que tenia en el culo, la cogí en brazos y la llevé al baño, la limpié con cuidado y cariño, la duché de nuevo y la limpié bien por dentro, salió sangre, bastante, de su culo, temí haberla desgarrado algo, la saqué de la bañera, la sequé con cuidado, cogí una pomada vaginal que me indicó con la mirada, la extendí por todas las zonas enrojecidas, de forma cuidadosa, luego le puse unas bragas y la camiseta, curé la herida de su mano que se había hecho por obedecerme, y luego una pomada en el hombro, la llevé en brazos a la cama y allí la tumbé, ella me miraba a los ojos, vi como su cara de desesperado agotamiento cambiaba por amor tierno ante mis cuidados, la dejé allí sola, descansando.

Mercedes – Domador de leonas.

Me fui a la ducha, abrí el grifo y me quedé allí bajo el agua un buen rato, repasando todo lo ocurrido, dios, estaba al limite de mis fuerzas, pero no quería que ella lo supiera, estaba agotado, con la traca dolorida, calambres por todas partes, temblores en mis músculos, llegué a tiritar pese estar debajo de agua caliente, salí por miedo a que me mareara en la bañera, me sequé rápidamente y me puse los slips, sentándome en el sofá, estaba todo perdido de manchas, flujos vaginales, semen, sangre, babas y sudor, recogí un poco todo aquello sacando fuerzas de donde no había, y comí algo, ya había pasado la hora de comer, habíamos estado toda la mañana, desde las 10:00 que nos despertamos hasta las 17:00 que la dejé en la cama, follando casi sin parar, me preparé un bocadillo y me lo comí con voracidad, bebí un montón de agua, me recosté en el sofá y quedé dormido por agotamiento. Me despertó un ruido, abrí los ojos, eran las 22:00, vi la puerta del baño cerrada, me levanté y miré en el cuarto, ella no estaba, se había ido al baño derecha según se levantó, preparé algo de comer y beber, mi cabeza le daba vueltas a como seria la reacción de ella al salir, ya era en frío, sin sexo de por medio, ¿se abría molestado? Salió del baño y me vio preparando la mesa, corrió a abrazarme por detrás.

-YO: hey, ten cuidado, ¿como estas? - pregunté querido adivinar sus ideas.

-MERCHE: llena de vida, mi león, me has hecho la hembra más feliz de la selva - sonreí, la partida continuaba, le gustaba ese rollo, así que tomé el papel de macho dominante de nuevo.

-YO: venga, siéntate a comer tranquila, la reina de la selva se lo merece - ella entendió que yo también quería seguir el juego, y río de felicidad, se sentó y devoró la cena, igual que yo bebió mucha agua - sabes, te he dejado descansar por que te lo has ganado, pero no esta bien que un león duerma solo, esta noche dormiremos juntos - ella quiso aceptar, pero recordando la mañana que le había dado, y el tono de mi frase, sabia que aquello no era una petición, si no un aviso de lo que iba a ocurrir.

-MERCHE: será un placer, siento que no hayas dormido conmigo ahora, me has dejado muerta y no he podido rogarte que te quedaras, me siento mal por no poder colmarte durante más tiempo, pero te juro que con el paso del tiempo aguantare más, si decides seguir honrándome - sus ojos decían la verdad, yo mantuve la cara de póker, realmente se tragó que yo había quedado insatisfecho cuando en realidad estaba casi tan muerto como ella.

-YO: eso no lo dudes, te has ganado el derecho, tú sola, de ser cubierta por mí - sabia que eso la gustaba oírlo, al inicio de la mañana iba de leona dominante y prepotente, durante el sexo se había dado cuenta de su inferioridad ante mi, y termino a esas alturas de la noche totalmente dominada y mojándose las bragas por oír que se había ganado ser follada así de nuevo.

Las siguientes 2 horas fue una marioneta, un robot guiado por voz, me seguía, y hacia todo lo que yo le ordenaba, al principio jugaba haciéndola saltar o cantar o bailar, reíamos pero luego la ordenaba cosas subidas de todo, la 1º desnudarse, y la 2º chupármela hasta que me corriera, volver a chupármela con el semen en la boca hasta volverme a correr y entonces, que se lo tragara., luego que se masturbara ella sola hasta correrse, yo hacia que no la miraba pero como no hacerlo, seria un juguete sexual obediente pero era una pedazo de mujer. No aguanté más y la cogí en brazos para llevarla a su cuarto, allí la tiré de mala manera la abrí de piernas y me la follé durante una hora.

-YO: ahora vete a ducharte, ven oliendo a flores e impoluta y me vas ha hacer un pase de modelos con toda tu ropa,

Lo hizo volando, volvió con el pelo mojado, totalmente desnuda, se puso unas bragas y mientras yo me sentaba en la cama masturbándome, apareció vestida de mil maneras, la que me la terminó de poner dura, aparte del disfraz de gata, fue vestida como iba al instituto.

-YO: ponte solo la ropa interior más sexy que tengas.

Pensó unos segundos y rebuscando sacó una caja del fondo del armario, salió, al volver se presentó una diosa de los años 20 ante mi, blanco color hueso, de arriba a abajo, corpiño ajustado que caía por debajo de su culo, había visto a mujeres por la calle, de fiesta, con vestidos que tapaban menos, le hacían unas tetas y una cintura de escándalo, medias altas con ligeros y un tanga por encima de ellos.

-YO: ponte los tacones más altos e incómodos que tengas, hazme un baile, sensual, despacio, que me de tiempo a deleitarme con mi leona, oblígame a saltarte al cuello.

Así lo hizo, se puso unos zapatos con unos tacones de aguja enormes, se le doblaban los tobillos al andar pero no por ello dejó de bailotear, la imagen de su culo valía para paja, el corpiño le tapaba parte de su trasero, pero se lo hacia aun más deseable y opulento, la sensación constante de que en cualquier movimiento se le vería el culo me calentó, y más cuando lo notó y lo usó a su favor, aun así no quería entrar en batalla con el arma media cargada ya, seguí admirándola hasta que me corrí. Ahora si, aproveché una de su vueltas para atacarla dejándola de espaldas a mi, contra la pared, me lancé su hombro y mordí con pasión.

-YO: aquí esta tu león - gimió de gusto pese a que el mordisco era tan fuerte que debió dolerle el hueso, todos eran así ya.

Le quité el tanga, que al estar por encima de los ligeros no fue difícil, llevé sus manos atrás, y la esposé atándola con el tanga, tal como estaba se la metí por el coño, estaba empapado y no fue difícil, estuve media hora, sacándola 2 orgasmos, sus piernas sobre sus tacones flaqueaban y decidí usarlo, sin sacarla de ella me senté en la cama, y tiré de su cuerpo para atrás, lo justo para que se venciera pero no lo suficiente para caer, mojé bien mi polla y la llevé a su ano, apretando un poco metí el glande, ella temblaba, la ordené que subiera y bajara, lo hizo sin queja alguna, estuvo haciéndolo con cuidado mientras alguna lagrimilla caía de sus ojos peor sin gritar, gimiendo de gloria, de vez en cuando le fallaba un pie, pero la tenia sostenida, cuando su flaqueza ya era evidente quité mi apoyo y a la 2º intentona al bajar pasó lo que tenia que pasar, le fallaron los dos tobillos, y cayó a plomo empalándose ella sola toda mi polla por el culo, soltó un grito de desesperación, intentando levantarse, pero teniendo las manos atadas por detrás y sin un apoyo firme en los pies, al poco de levantarse volvió a caer a plomo, decidió que era mejor quedarse así, yo no.

-YO: a que esperas, sácatela - lo volvió a intentar un par de veces, pero el resultado siempre era el mismo, cada poco desistía, pero yo gruñía y lo volvía a hacer, lo hizo tantas veces que se corrió, y eso no ayudó a poder levantarse.

-MERCHE: quiero obedecerte mi león, pero me es imposible, si es lo que quieres ayúdame, lo suplico, pero imploro que me folles así.

-YO: lo mejor para mi leona.

Agarré su cintura y la levanté lo suficiente para que se pusiera en pie, le quité los zapatos, más que nada por que no se doblara un tobillo, y la volví a ensartar por el culo dejándola caer a plomo, agarrando de sus cartucheras la levantaba y bajaba arrancándola gritos de placer, orgasmos y alguna corrida con fluidos salió disparada de ella, yo seguía dándola lo más fuerte que podía, ya solo la mantenía la dirección con las manos, la fuerza de levantarla la hacia con la cintura, perforándola con toda mi polla, 40 minutos después me corrí salvajemente, los botes finales de ella la hacían salir y entrar completamente de mi, del ultimo quedó en pie directamente, la cogí la mano y dándola la vuelta la tumbé sobre mi, restregando mi miembro flácido entre sus piernas y ligeros, besando encarecidamente sus labios jugosos y saboreando la sal de las lagrimas que el sexo anal la habían producido. Después la mordí la marca del hombro, asumí que para mantenerla controlada cada eyaculación mía debía ir seguida de una mordedura allí, así que siempre lo hacia.

-YO: como mi leona has de saber que esta posición que tenemos ahora es la que más me excita, recuérdalo, y me harás feliz.

-MERCHE: vivo para servirte, te ruego que me vuelvas a follar otra vez mi león - mordía mi mentón al hacerlo, la agarré por la cintura y la restregué contra mí, hasta que mi polla se volvió a poner dura.

-YO: ábrete de piernas, y métetela tú misma - lo hizo, sin moverse de esa posición.

Agarré su trasero y sin despegarla un ápice de mi, la subía y bajaba por mi cuerpo acelerando cada vez, besándonos y mordiéndonos el uno al otro, pronto llegó una oleada de sacudidas en su cuerpo, y con ellas le di una bofetada en el culo, seguí tirándomela hasta la 2º vez que se puso a temblar y ahora otra bofetada en el otro lado, con cada golpe ella se estremecía, le iba el sexo duro, la levanté con la cadera y allí tomé el mando del ritmo, perforándola sin piedad, con unos orgasmos continuos, gritaba sin parar, empezaba bajo, e iba subiendo hasta que no podía más, con las venas del cuello hinchadas y totalmente roja, cogía aire y volvía a empezar, otra hora así, con ella rendida a mi, me corrí de nuevo, y mordí de nuevo, solo con ese gesto final se corrió otra vez.

-YO: vamos mi leona, aun queda mucha noche.

La coloqué de lado metiendo mi polla flácida entre sus muslos, besando el hombro castigado, no tardé en empalmarme, la levanté la peina y metía mi rabo por detrás, a lo cuchara, bajé su pierna y agarrándola las tetas la bombeé, alternativamente su coño y su ano, aquí ya perdí la noción del tiempo y de las corridas, lo hice hasta desfallecer, calculé después que fueron unas 2 horas y media, sin parar, me corrí unas dos o tres veces y ella ni lo sabia ni me importaba, pasé de disfrutar a rogar que parara y a callar y recibir como una campeona. Caí boca arriba, respirando a duras penas, ella hizo lo mismo, me miró.

-MERCHE: hoy no te vas a quedar con ganas de más - arrastrándose como pudo se puso encima de mí de nuevo, como le había dicho que me ponía, besándome de forma torpe, no coordinaba, pero su insistencia me la puso gorda de nuevo.

-YO: como quieras, pero ya te he dicho que esta noche dormimos juntos, esto no acabará con un polvo más.

-MERCHE: lo sé - con gran habilidad para seguir atada con las manos en la espalda se dio la vuelta sobre si misma sin bajarse de mi, se abrió de piernas y se llevó mi polla a su ano, apretó y se le metió, yo fuera de mi por sus ganas de complacer, no podía ser menos.

Levantado su cuerpo, inicié un vaivén rapidísimo, tan calientes estabamos que en 10 minutos se corrió ella y yo en el 20, pero no paré hasta volverme a correr 30 minutos después, ella ya no se sostenía, subía y bajaba por que mi cuerpo lo hacia, estaba inerte de nuevo, pero no pedía clemencia, si no más ritmo, y yo se lo daba. Terminé una hora más tarde sin fuerzas, eyaculé otra vez y como en todas, la mordía, con las energías que me quedaban, el hombro.

-YO: te felicito, casi colmas a tu león.- “¿casi?” Estaba por vomitar del esfuerzo, cayó rodando hasta acabar tumbada boca abajo.

-MERCHE: más……….dame………..más, dame hasta que estés satisfecho…………no te preocupes por mi…….- aluciné, esa leona pedía más y yo no tenia de donde sacarlo, pero no podía quedar como un mentiroso.

Me giré quedando encima suya, coloqué mi verga entre sus nalgas y empujé hasta metérsela, estuve una hora, penetrándola, de forma lenta y cansada, se volvió a correr, pero ya ni gritaba ni se movía, solo se notaba por que me mojaba la piel, yo me corrí otra vez, aunque no sentí semen salir, solo una corriente eléctrica leve, y caí sobre ella, estaba medio morada, así que con últimos gestos la desabroché el corpiño quitándoselo, la solté las manos y mordí sin fuerza su hombro, la abrace, quedé así dormido, eran cerca de las 6 de la mañana y esta vez no hubo interrupciones por comer o ir al baños, fueron 6-7 horas seguidas, mi récord hasta la fecha.

Cuando abrí un ojo eras las 13:00, y allí estaba Merche, a mi lado, en la misma posición que la había dejado, me fui al baño a orinar y lavarme un poco, tenia agujetas por todas partes, pero una sonrisa que no se me quitaba, aquella leona me llevaba al limite del bien o del mal, y me traía de vuelta. Comí algo para meter en el estomago con un litro de agua del tirón, hice un emparedado y con otra botella de agua se lo llevé al cuarto, lo dejé en la mesa, y la desperté con caricias en su espalda.

-YO: mi leona, es hora de despertarse - abrió un ojo y me miró entre la maraña de pelo rizado y alborotado, cuando lo hizo debió de recordar la noche, y se despertó de golpe, con una sonrisa igual de imborrable que la mía.

-MERCHE: dame agua, por favor - se incorporó y se bebió media botella del tirón, luego me observó, me dio un beso de tornillo, y cogiendo el emparedado se fue al baño.

Tardó casi una hora en salir, la ducha corría y yo estaba impaciente por su salida, aun quedaba toda la tarde del domingo. Al salir ya lo hizo totalmente desnuda, se me acercó, me bajó los slips y poniéndose de rodillas me la chupó hasta correrme.

-YO: esto si es despertarse con animo.

-MERCHE: eres una bestia, eres mi bestia, eres mi macho y mi león, ¿sabes?, anoche me dejaste ida un par de veces pero la última ni la recuerdo, se que te pusiste encima por detrás pero me desmayé a la mitad, recuerdo soñar contigo follándome pero no se si era real o no. Eres mi león, y te pido que me folles ahora mismo.

-YO: como mi leona tienes ese honor de pedir que te folle, así que lo haré, pero recuerda que es domingo y a la cena tengo que irme.

-MERCHE: ¡¡no te vayas!!, quédate aquí conmigo, no volvamos al instituto, fóllame entre estas paredes hasta que muramos de viejos, te lo ruego - mordí su hombro fuerte, para que se dejara de jilipolleces, y asumiera de nuevo su papel.

-YO: te dije que donde y cuando yo quiera, no me obligues a quitarte el rol que te has ganado como mía - agachó la cabeza y asintió - ahora vuelve a chupármela hasta que se ponga dura y te voy a follar sin parar hasta las 21:00, son las 15:00, te será suficiente, mañana volveremos al instituto y haremos vida normal, no te insinuaras ni me pedirás nada, será como si esto no hubiera pasado, pero cuando me acerque y te muerda, volverás a ser mi leona, y harás todo lo que yo te diga, o te degradaré, ¿me has entendido? – volvió a asentir, esta vez más feliz, sabiendo que el juego continuaría - ya me aseguraré de que no se sepa ni de que te veas comprometida, cuidaré de ti como parte de mi manada, como dijiste, me follaré a otras, y no te enfadarás, ni tendrás celos, por que ellas no son mis leonas, son diversión, solo tú tienes ese honor, a menos que lo pierdas por tu comportamiento. Seguirás con tu vida, buscaras novio, mejorarás tu posición social, tendrás hijos, pero cuando te muerda, serás mía. Ahora a chupármela. – el brillo de sus ojos era difícil de descifrar, parecía conformarse pero a la vez le gustaba la idea.

Mientras hacia mi voluntad como una salvaje, mi cabeza era fría, había dejado zanjado el asunto, tendría sexo duro siempre que quisiera y ella se comportaría como la chica dulce que era, haría su vida independientemente de mi.

Por no alargarlo más, durante las horas siguientes hasta las 21:00 tuvimos sexo animal, de todas las formas y posiciones degradantes que se me ocurrieron, casi no cruzábamos palabras, y asumimos el papel de felinos grandes, gruñendo, andando a gatas y rugiendo, su ano ya no era ningún misterio, gritó a dios por ser tan cabezona de no haberlo probado antes mientras era empalaba por mi, los gritos eran tan fuertes que los vecinos llamaron a la puerta, ella abrió desnuda la ventanillo del marco y les convenció de que no ocurría nada, pese a que era evidente, más que nada por que mientras hablaba con ellos me la estaba follando por detrás. Con cada corrida suya ella me marcaba un hombro, pero era ridículo comparado con el moretón enorme, marcado de dientes y que supuraba sangre que tenia ella, con cada corrida mía la marcaba, al acabar el tiempo, me sentí orgulloso de mi, y de ella, yo estaba molido pero con tal orgullo que no lo notaba, y ella pese a tener mareos, estaba consciente y satisfecha.

-YO: me voy, recuerda mis palabras, haz tu vida, pero cuando te muerda….- se levantó a abrazarme.

-MERCHE: seré tuya, donde, cuando y como quieras, el día o la hora que sea, esté con quien esté, seré tuya por siempre, MI LEÓN - me besó pasionalmente mientras mordía mis labios, yo metí mi mano en su culo y la levanté contra mi hasta dejar su hombro a mi altura, mordí, la más fuerte y bestia que le di, gimió de placer cuando aquello debía de ser una tortura, y con sangre suya en mi boca, la bajé para besarle con lengua.

-YO: hasta pronto, MI LEONA - salí cerrando la puerta de golpe, en parte por darle la salida adecuada a la acción y por que ese último beso casi me hace atacarla de nuevo.

Llegué a mi casa, cené, despacio, me dolía la mandíbula, mi madre me preguntó que me había pasado en la cara, la tenia llena de marcas de dientes, le dije que los sobrinos del amigo donde me había quedado a dormir eran muy traviesos, y me fui a la cama a dormir, las mejores 8 horas de sueño en mucho tiempo.

Los siguientes meses hasta mi graduación lo pasamos como lo pactado, parecía que ni nos conocíamos, pero en los descansos iba a por ella, y como un gesto hipnótico, al morderla el hombro se convertía en mía, follábamos con cuidado de no ser pillados, y luego la volvía a morder, para “desactivarla”, o al salir de clase íbamos a su casa y teníamos sesiones duras, muy duras, pero sin llegar al sado, de 4-5 horas, después pasaron las chicas más jóvenes y la dejaba de lado, pero siempre que andaba ofuscado, atascado o necesitaba desahogare, iba a por ella.

Aun hoy en día, casi 9 años después, seguimos con esta relación, ella esta casada ya y tiene un crío de 7 años, pero siempre que la llamo responde a mi rugido, cuando la muerdo es como volver a ese fin de semana, me la seguí follando repetidas veces los primeros años, ya os contaré, luego menos. La mejor fue en la despedida de soltera que hizo, follarte a aquella mujer de aquella forma salvaje, el día antes de su boda, me sacó de mis casillas. Como os dije, no fue la más difícil de lograr, tuve mucha suerte de encontrarme con una autentica loba insatisfecha en la cama, pero fue la que me abrió el abanico de un mundo de posibilidades, y desde luego la mujer que más al limite me ha llevado jamás.

Dios, que coño, cuando termine de escribir la voy a volver a llamar, ha perdido algo de físico y aguante, pero sigue siendo MI LEONA.

Marta - La monja.

Avancemos unos meses en el tiempo de comenzar a domar a mi leona, y sigamos jugando con él calendario, a estas alturas mi fama ya era notoria, y pasó en paralelo con los días de quedar con Karin, la pechugona nórdica, en los descansos. Unos días antes de que la sueca se me tirara encima, y a 2 meses del final del curso. Yo estaba un poco hastiado ya de las relaciones sencillas con mujeres jóvenes, no me cansaba de follar pero si de lo fácil que era, necesitaba un reto, un objetivo difícil, algo que en mi cabeza supusiera un logro, y gracias a una de las profesoras más mayores, la oportunidad se presentó ante mi. Nos avisó que en unos días, vendría a vernos una ex alumna del colegio, Marta, que estaba de misionera en Sierra Leona, hacia 4 años que estaba allí, antes estuvo casi 5 en el Congo, donde había ido con 21 años, así que tenia 30 y se había dedicado esos 9 años a ayudar y cuidar a enfermos y niños. Nos contó algunas historias bastante feas y horrendas de sus experiencias, y que estaba encantada con que viniera a descansar unos meses, la habían contratado hasta final de curso para explicarnos la teología y vida en Africa. La sorpresa fue el día que nos la presentaron, no era una misionera sin más.

Si, aquella joven que llevaba casi una década por Africa era una monja, con su hábito y su cofia, solo se le veía la cara y las manos, ni el pelo, ni un triste pie. Al principio no me fijé en ella, y estuvimos una hora oyéndola, historias de superación y ayuda, de cómo los militares y las facciones armadas del gobierno violaban derechos humanos y oprimían al pueblo, de su trabajo, realmente incomible, pasada casi la hora, aquella monja estaba empapada en sudor, iba con toda la ropa de monja a finales de mayo, y en Madrid ya apretaba el calor, y no estaba el aire acondicionado puesto.

-MARTA: chicos, me vais a disculpar pero me tengo que quitar la cofia, o me muero aquí jajajajaja

Al hacerlo su pelo cayó de golpe, era rubio y largo, tardó una eternidad en deshacer el nudo del moño, y le llegó hasta por debajo de su cintura, con una coleta. Ya con el conjunto de su cara y el pelo, advertí que el sol y el trabajo de África no la habían afectado, era realmente atractiva, de ojos negros, guapa, con una boca diminuta y hoyuelos en las mejillas, el pelo tan tirante por la coleta le estilizaba la cara. Siguió charlando hasta el final de hora, contándonos algunas cosas más de su trabajo y que estaba encantada por darnos algunas clases antes del final de curso, salió de clase con la profesora y charlaron un buen rato en la puerta, quise adivinar el resto del cuerpo de aquella mujer, pero la ropa era demasiado amplia y la disimulaba la figura, aparte de un chaquetilla, iba con un jersey de lana enorme, se notaba una camiseta o camisa blanca debajo y una falda con vuelo desde su cintura hasta los tobillos, todo azul marino.

Me quedé con ganas de saber más de aquella mujer, y por alguna razón la imagen de su pelo cayendo se pasó por mi cabeza mientras una de las alumnas me la chupaba, mi mente echó a volar intentado imaginarme su vida, ¿por que a los 21 decidió irse a África?, ¿que había pasado antes? ¿y que habría pasado después?, una chica tan guapa y delicada en una zona tan difícil. Llegó el día siguiente, y fue clase por clase, dando charlas, daba la misma a todas las clases durante unos días y luego pasaba a otra.

La 1º fue su vida hasta los 21 años, por lo que nos dijo, fue una alumna ejemplar hasta los 15-16 años, una chica normal, sin problemas, ni nada raro, pero al llegar a esa edad, sus padres se separaron, quiso llamar la atención, empezó a salir con chicos, de fiesta, a beber y pronto a drogarse con malas compañías. Al principio eran porros o marihuana, pero fue subiendo el nivel, con 18 años era una “yonqui” que no acabó el instituto, se quedaba en casa de un amigo a vivir y allí se metían cocaína o cristal, inhalada o inyectada, la detuvieron un par de veces por escándalo publico y tenencia de drogas, el remate fue a los 19, la detuvieron por agresión con arma blanca, estaba con un noviete que tenía un mono descomunal intentado robarle a un camello, y ante su negativa le apuñaló, pasó 4 meses entre un centro de desintoxicación y los juzgados, la condenaron a 2 años y 3 meses de cárcel, fue allí donde conoció a las monjas de un convento cercano a la cárcel, que se pasaban por allí a prestar ayuda y apoyo, charlando, haciendo de puente con las familias, tratándolas bien……..A ella, ese gesto le pareció tan bonito, que cuidaran de ellas pese a sus fechorías, que decidió rehacer su vida. No se metió a monja, si no que según salió se acogió a un programa de misioneros y se fue. Era ahora, cuando al volver de África se metió en el seminario para coger los hábitos, y se le notaba, no hablaba ni actuaba como una monja, si no como una mujer directa, atrevida, con palabras que no usaría una seguidora de Jesús, hablando de temas poco convencionales, como cuando se drogaba como se sentía, o de cómo perdió la virginidad de mala manera, medio ida por las drogas, y en esa misma noche de fiesta paso por varias manos. Eso generaba risas en los compañeros, pero ella lo hablaba como medio para llegar a un fin, no como centro de la trama.

La 2º charla fue sobre sus primeros años en el Congo, de su adaptación a su nueva vida, de cómo la llenaba de gozo ayudar, terminó haciéndose muy amiga de un tribu, que era en parte degradada por el resto del país, no se adaptaban a la era moderna pero eran felices, y ella se erigió como su defensora y como enfermera casi. Sin titulación, pero se aseguraba de que les llegaran su parte de ayudas, alimentos y medicinas. Era desesperante como a los pocos días, u horas, de recibir la ayuda, venia el ejército y le quitaba casi todo, para luego venir facciones armadas o revolucionarios, para quitarles lo que les dejaban. De cómo maquinaba y engañaba para que eso no ocurriera jugándose la vida en muchos casos. Cada lección terminaba con una moraleja, con un sonoro aplauso y con una prenda menos, iba apretando el calor, ya no solo se quitó la cofia, si no la chaquetilla, luego el jersey, y ya, en camisa blanca, se abría algún botón de arriba del todo, y se remangaba.

-MARTA: dios mío, como no pongan en aire pronto lo voy a pasar peor aquí que en África jajajaja.

La 3º y la 4º nos explicó la ideología y la teología de aquella zona, nada relevante, salvo verla hacer un “striptease laico”. Ya de forma inconsciente se levantaba la falda un poco, dejando ver sus pies y sus tobillos.

Para ayudar a ubicarnos durante esas primeras semanas ocurrió mi tórrido romance con Karin, la sueca de tetas enormes, relación que se cortó casi de raíz cuando se asustó al ver a alguien mirándonos, según me dijo, yo no vi a nadie.

En la 5º charla se puso seria, era ya la 3º semana, y avisó que la gente sensible saliera de la clase, nadie lo hizo y se arrepintieron. Nos habló del ultimo año en el Congo, de cómo estalló una guerra civil, de cómo la gente se volvía loca, no daban a basto para ayudar a todos, de noches en hospitales eternas, llegando gente herida e historias aterradoras, su cara se fue torciendo, triste, abrumada, recordando. El final hizo salir a vomitar a varias chicas y otras salir de allí llorando, algún chico también, (si sois sensibles podéis saltar esta parte hasta el final del párrafo, suponer lo peor), los últimos meses decidió refugiarse en la apabile aldea de la tribu amiga, allí no había guerra, estaba al margen de todo, pero el resto del país ardía en llamas, nos relató con un lujo de detalles excesivo algo que no debía ser así contado. De cómo una noche se enteraron de que facciones armadas rebeldes iban a ir a masacrar a esa tribu, les culpaban del mal del país, pero aun así decidieron no huir y quedarse, era su tierra, ella logró sacar a los niños de allí, escondidos en los arboles. Vio como aquel poblado fue quemado, como los hombres eran asesinados y descuartizados, no siempre por ese orden, de cómo interrogaban a las mujeres sobre los niños, de cómo las violaban en grupos para luego mutilarlas cortándoles los pechos para que no pudieran alimentar a los hijos, o los brazos para que no pudieran sobrevivir, luego a algunas las mataban igual o seguían violándolas después, de cómo la imagen de aquellos machetes se metió en su retina mientras calmaba a los niños para que no salieran en auxilio de sus padres o se les oyera llorar y fueran descubiertos. Para cuando llegó el ejercito no quedó nadie vivo, o sin mutilar, la tribu había sido borrada de la faz de la tierra, solo quedaron los niños que fueron rescatados, pero ante el horror de su mirada, fueron reclutados como niños soldado para el ejercito, a ella la encerraron 4 meses en un zulo, “por su seguridad”, puesto que los rebeldes andaban persiguiendo, secuestrando y matando a extranjeros. Nos contó que una noche un soldado entró a darla la comida, pero no se la daba, se sacaba el miembro, ella se negó y durante 1 semana no la dieron nada de comer por que no aceptaba venderse, pero le pudo el hambre, cayó, al inicio solo con él, luego con el resto de los guardias, se resistía inútilmente, al final los soldados del ejercito la violaron tantas veces que ya no se resistía, tuvo 2 embarazos y con sendos abortos debido a los golpes y la mal nutrición, cuando ya deseaba morir, soldados de la ONU la sacaron de allí, estuvo 6 meses en un hospital de campaña. Nos contó todo aquello serena, sin que le temblara la voz, pero con lágrimas cayendo por sus ojos, durante la narración buscó con la mirada seguridad para continuar pese a que la profesora le pedía que no hacia falta que continuara, sus ojos se clavaron en mi, que era de los pocos que aun aguantaba entero.

Aquella escena se repitió por cada clase donde lo fue contando, chicas que salían llorando o iban al baño a vomitar, chicos que ante aquello salían despedidos de las clases con las caras desencajadas, si ibas por un pasillo notabas que clase salía de esa charla en la mirada de los alumnos, fue una de semana jodida para mucha gente, al final decidieron que aquellas clases no fueran para todos, y si opcionales, 1 hora después de acabar las clases los que quisieran podían quedarse con ella a escucharla. Entre todos los cursos, solo unos 20 aceptamos seguir, y después de la siguiente charla donde nos explico sus 6 meses en el hospital y las historias que le llegaban de la guerra, se llegó a reducir casi a la mitad. A la siguiente clase solo acudimos 4-5, todos chicos. Era una falsedad, luego los demás compañeros te rogaban que le contaras lo que te había relatado.

En esa última clase al final nos quedamos solos ella y yo, como me gusta, la aguantaba la mirada, pero ya no era sexual, sentía que era tierra firme para ella, y que necesitaba contárselo a alguien. La cosa se suavizó cuando me contó que se recuperó, y que en Sierra Leona le fue mucho mejor, como antes de la guerra civil en el Congo, difícil pero aguantable, que soportó todo aquello por el amor de aquellas monjas, que si no se habría vuelto loca o se hubiera suicidado con el machete de alguno de los guardias mientras la violaban. Terminó de relatar su historia, hastiada del mundo, decidido regresar y tomar el camino de los hábitos, había visto suficiente dolor para varias vidas.

-MARTA: te agradezco que te hayas quedado, necesitaba sacarlo de mí - lo dijo secándose las lágrimas, me puse en pie y la aplaudí.

-YO: eres un heroína, no se como lograste aguantar todo aquello.

-MARTA: al final te acostumbras a todo, quiero decir, que ojalá fuera mi amor a dios o a la humanidad lo que me dio fuerzas, pero solo quería sobrevivir, para contar mi vida, mi historia, por que se supiera lo que pasó.

-YO: es una pena que tengas que ir dando charlas a alumnos en clases, esto tendría que salir en TV.

-MARTA: es verdad, pero ya ves como ha reaccionado el “publico”, no puedes salir por la TV diciendo esto, la gente lo rechaza.

-YO: me parece una hipocresía mayúscula, un adoctrinamiento social, ¿esta bien que ocurra pero no que se cuente? Se castiga que te den el conocimiento del hecho, no el hecho en si, mientras ocurra y no te enteres seguirás en tu burbuja de felicidad, es el gran logro de la humanidad, deshumanizarse - me miró sorprendida, no esperaba una reacción moralista en un chico tan joven.

-MARTA: se puede decir más alto, pero no más claro.- se levantó a abrazarme, hasta ese momento no había sentido nada por ella, salvo admirar como se quitaba alguna prendas sin enseñar nada, pero al tenerla entre mis brazos, sabiendo lo que sufrió, lo dolida que estaba, la sentí frágil, necesitada de cariño, vulnerable, y aun siendo una vergüenza reconocerlo, un objetivo deseable, así que se convirtió en mi próxima víctima.

Al oler su pelo en mi cara apreté más contra mi y sin darme cuenta tuve una erección, quise disimular doblando la cadera y volviéndome a sentar rápido, ella hizo lo mismo, habiendo quedado colgada, como si aun faltaran un par de segundos por protocolo en el abrazo, o como si quisiera haberse quedado así unos segundos más, deseé que no se hubiera dado cuenta, no tenia ninguna plan ni tenia nada planeado, pero fue tarde, mientras me preguntaba mi nombre y me pedía que la contara un poco de mi vida, noté como sus ojos bajaban a mi entrepierna un par de veces, en la 3º se relamió los labios, podía ser que tuviera la boca seca, pero después se mordió el labio, “ya lo sabe”, pero juraría que no la había tocado con ella. Traté de ganar tiempo hablándola de mi operación y de mis cambios en la escuela.

-MARTA: algo he iodo por ahí de ti - ¿a que se refería?

-YO: bueno, siempre he sido bastante conocido, soy bastante páyasete y me gusta llamar la atención, pero desde la operación no se que pasa que soy como un faraón, la gente me trata como si hubiera hecho algo, y solo he salido bien parado de una operación, no como tú, una super-heroína jajajajjaa - por 1º vez en las charlas, se rió, había alejado su cabeza lo suficiente de África, su risa, valga el recurso literario, me pareció divina, se llevaba una mano a la boca, medio cerrada y con el dorso de la mano se sujetaba la nariz.

-MARTA: pues no me queda nada para poder volar o levantar coches - seguía riéndose, pero yo tenía que pasar al ataque – anda ayúdame a recoger las sillas - lo hacíamos sin parar de charlar, centrados en recoger.

-YO: pocas mujeres hubieran aguantado como tú en aquel zulo, créeme, se de lo que hablo - se le cortó de golpe la risa y me miro intrigada.

-MARTA: ¿Por qué dices que sabes de lo que hablas?

-YO: pues veras, no se si…. sabes, tengo cierta fama en el instituto………..

-MARTA: ya me han dicho……..que vas de galán con las chicas………- ya sabia como conocía mi polla, las charlas de chicas en el foro oficial, el baño.-….. y más te vale tratarlas bien o me enfadaré contigo.

-YO: una cosa es que vaya de galán y otra que las trate mal, solo les doy lo que vienen a buscar de mi - esa frase se me escapó, no estaba bien pensada, fruto de mi orgullo herido.

-MARTA: ya lo vi…….- “¿que?” si la mía estaba mal pensada la suya fue un monumental error. Se le notó en la cara y en la voz, cortó la frase de golpe, pero no la iba dejar escapar, su lenguaje corporal era claro para mí, sentía vergüenza por lo que estaba rondando por su cabeza.

-YO: ¿como que ya lo viste? - insistí parando de recoger.

-MARTA: nada, ………que te vi con una chica………hace poco………..por los pasillos, así, muy acaramelados.- sonó a tangente, como si acabará de encontrar esa respuesta en su cabeza.

-YO: ¿si? ¿ y quien era? - realmente podían ser varias las candidatas, pero quise saber cuando se había fijado en mí.

-MARTA: pues no se, un alta rubia, con unas…………enormes….tetas - hizo el gesto de grandilocuencia sobre su pecho, “Tiene que ser Karin”

-YO: si, la sueca, es muy……..“cariñosa”- me extrañó, salvo en los descansos donde follábamos no solía acercarme a ella.

-MARTA: ya te digo, no veas como el botaban ante tus caricias – se dio cuenta de que aquella frase no era apropiada en una monja, le salió la misionera, o quizá la adolescente rebelde, pero entonces caí, nunca la había acariciado en publico, era muy mojigata en cuento a que se supiera, de golpe pensé, y mientras ella seguía recogiendo, yo estaba parado, mirándola, intentando leerla la mente, apoyado en una silla, ¿seria ella la famosa sombra que vio Karin y apartó sus enormes tetas norteñas de mi?.

Quise indagar más, pero pensé que era apretar demasiado, ella me huía la mirada, así que lo dejé correr por ahora, la ayudé y terminamos de recoger las sillas.

-MARTA: esta bien, ya hemos terminado las charlas, no creo que nadie más quiera venir a oírme.

-YO: ¿y ahora que harás?, por que aun queda 1 mes de clases.

-MARTA: pues tenia pensado algo, pero siendo ya solo tú, no se si saldrá adelante.

-YO: ¿que es?, quizá pueda ayudar.

-MARTA: pues tenía pensado montar una actuación de los alumnos, un día en el patio en el descanso, como tribus, hacer cantos y bailes rituales, vestidos con las ropas típicas, pero solo estas tú - vi frustración.

-YO: ¿y tu?

-MARTA: yo no puedo, me moriría de vergüenza y además soy la profesora - muy resuelta ella

-YO: tú déjame a mí, ¿cuanta gente necesitas?

-MARTA: pues unos 6, sobretodo que sean parejas de chico y chica.

-YO: ¿y si te los traigo, lo harías con nosotros? eres la que vio hacerlo en vivo, nadie los conoce mejor - argumento valido y lógico, pero buscaba otra cosa.

-MARTA: si nos falta alguna chica, si.- sonrió al ver una ventana abierta, una posibilidad.

-YO: mañana después de clase ven aquí - la di un abrazo rápido y salí corriendo.

Me fui contento, un plan se erigía en mi mente, tenia que tener cuidado, no solo era, o iba a ser monja, si no que podría meter la pata hasta el fondo si no tenia los pies de plomo, aquella chica lo había pasado muy mal en África, pero mi moralidad estaba más distraída de lo que puedo admitir. Al día siguiente empecé el casting, no lograba a ningún chico así que me centré en las mujeres, sin rodeos, fueron Marina, a la que convencí de que aquello subiría nota, y Rocío, para ayudarla en la mejoría de su personalidad usando de ejemplo a Marta. Una vez logrado, al 1º panoli seguidor incondicional de Rocío que pillé le metí diciéndole que así le metería mano, y me costó un vídeo juego de los buenos meter a un buen amigo mío, me dio igual, ya no los usaba. Estoy convencido de que si me hubiera puesto, hubiera logrado meter a alguna de las alumnas que me trajinaba en el lote, pero no quería, teníamos que ser impares para que Marta se pusiera conmigo de pareja.

Al aparecer Marta por el aula a última hora, se le iluminó la cara al ver mi logro, me recordó que faltaba una, pero la dije que ella supliera su puesto mientras buscaba a otra, ni loco lo iba ha hacer, es más, pensaba tirar para atrás a aquella que se atreviera, pero no hizo falta, ninguna en su sano juicio, sin manipulaciones, aceptó. Decidimos quedar un par de martes para ensayar, ya que a nadie le venia mal, siempre nos quedábamos un rato más todos charlando y riéndonos, ella dirigía la obra, pero el teatro era mío, eran muñecos a mis ordenes sin saberlo, ella se daba cuenta.

En esas charlas sentí como ella se acercaba más a mi, y yo a ella, no en lo físico, aunque también noté ciertos roces fuera de lugar, si no en la compenetración, la forma de pensar y actuar, incluso después de salir del ensayo, íbamos a un café cercano y tomábamos algo mientras charlábamos de su vida y de la mía, la gente alucinaba al verla con la cofia y a un chico joven con ella, pensarían que seria un fanático de la religión o un mojigato adoctrinado, ni mucho menos intuían que mi intención era ganarme el coño de esa monja. Descubrí en aquellas charlas posteriores a una mujer divertida, graciosa y con una fuerte intuición, cada intento de mi parte por llevar el tema a algo subido de tono, era desviado rápidamente, aun así logré sonsacarla de su vida de adolescente, de cómo se había echado a perder por un mal chico, de que ciertas cosas malas que nos había contado, no le parecían tan mal aun hoy en día, y que sin bien no le gustaba hablar de ello, disfrutó aquella época de sexo, pero que desde lo del Congo ya no deseaba nada más de todo eso, su tono sonó reafirmado en su idea, como si necesitara creérselo ella, más que decírmelo a mi.

El 1º ensaño fue divertido, ella nos enseñó con el ordenador fotos de las tribus y un vídeo sobre una danza de la lluvia y prosperidad de la tierra, nos comentó su idea de la función y como llevarla acabo. Me cogió como su ayudante y en paralelo me hacia poner las poses iniciales, yo la seguía mientras el resto reía y ella más al verme haciendo el tonto. En la 2º ya nos puso por parejas y ensayábamos movimientos tribales, por separado, luego algunos más pegados, en los videos se veían realmente gente fuera de si, con mujeres subidas encima de hombres, no llegamos a imitarles pero si para que Rocío se riera del empalme de su compañero pelele, los bailes eran lentos pero sin parar de moverse, así que sudábamos bastante, nosotros nos quitábamos ropa, pero ella no, se quedaba con la camiseta casi totalmente abrochada, sudaba igual y se le pegaba a la piel, por 1º vez puede adivinar su torso, y su pecho, tenia una cintura diminuta, la presión de la falda alta ayudaba a verlo, y debía tener buenas tetas, por que la camisa se le metía todo el rato por debajo de ellas, se la tenia que sacar de allí todo el tiempo, igual que despegaba de su piel por el vientre, los costados o la espalda, se le marcaba el sujetador claramente. Al acabar la clase, como de costumbre, nos quedamos un rato charlando, para tomar aire, pero tirando de labia los saqué a todos de allí para quedarnos solos a recoger.

-MARTA: ¿ya te ha desecho de todos?, vaya líder estas hecho jajajaja.

-YO: es que no quiero que esto se “alargue” más de lo necesario - metía palabras así en las conversaciones todo el tiempo - además estabamos sudando mucho y aquí ya huele un poco mal jajajaja.

-MARTA: ya te digo, estoy empapada, esta ropa no es muy transpirable, ¿verdad?

-YO: tú sabrás que eres la que la llevas, podrías venir más cómoda.

-MARTA: si me voy a pasar así el resto de mi vida, tendré que acostumbrarme, que por cierto, no sudaría si tuviéremos a otra chica ¿como va la búsqueda de mi suplente?

-YO: nada, no se atreven, son todas unas señoritas muy recatadas y no pueden jugarse su “estatus” social por hacer esto, por más que lo intento…………. - me lo inventaba a cada palabra.

-MARTA: ¿Qué hay de tu “estatus”?

-YO: tengo el “estatus” tan grande que podría hacer esto el resto de mi vida y seguiría siendo el más popular, es más, hasta puede que lo ponga de moda – la frase iba hilada muy fina.

-MARTA: pues me va a tocar hacer a mí el baile final contigo.

-YO: será que al final tendrás que bailar conmigo.

-MARTA: no, si eso esta claro ya, hablo de que al final de esta danza tribal, el jefe y la jefa hacen una ofrenda final, un baile que complazca a los dioses, pero no se si hacerlo……….- no se por que, pero la vi venir de lejos, quizá ella también metía palabras ambiguas.

-YO: no queremos ofender a los dioses africanos, o lo hacemos bien o no se hace - sonrío como logrando su objetivo.

-MARTA: pues podemos ensayarlo ahora, si no te importa, no quiero que los demás lo vean, prefiero ver como queda antes.

Me puso un vídeo que tenia bien guardado en el PC, efectivamente se veía ya el final de la danza general, y llegando un momento, se separaban para dejar paso a un hombre y una mujer engalanados, serian los lideres de la tribu, al principio bailaban como el resto, pero en un momento, se saludaban, y la mujer entraba en un estado de trance, se le blanqueaban los ojos, y temblaba, convulsionaba más bien, mientras era agarrada por el líder, giraba sobre si misma, casi se caía hacia adelante y hacia atrás de los gestos que hacia, en el momento de mayor intensidad el hombre se agachaba y cogiéndola de las piernas la levantaba como ofreciéndola al cielo, apoyando en su hombro el culo de la mujer, aguantaba así lo que pudiera, el negro se tiró mas de 30 minutos con los brazos extendidos, entrando en trance también, hasta que los brazos le fallaban y dejaba caer a la mujer de espaldas a él, por delante.

-YO: ¿y quieres que yo haga eso?, joder, si casi se le paren los brazos al mamón.

-MARTA: oye, no uses ese lenguaje, es un momento divino para ellos y tienes que tener respeto.

-YO: lo siento, pero no creo que sin muchos ensayos eso vaya a salir así de bien.

-MARTA: no intento que salga así, pero si una muestra, un ejemplo, podemos hacerlo en menos tiempo, solo como final.

-YO: esta bien, si es lo que quieres.

Vimos el vídeo un par de veces más, rebobinando y adelantando, hasta que se nos quedó a fuego, ella analizaba las posiciones rituales, y yo en que posiciones podía aprovecharme. Nos pusimos en posición, clavamos la presentación, los saludos iniciales y mientras yo hacia el ritmo y las palmadas ella se iba tomando el papel, botaba y convulsionaba y se reía parando cada vez que me veía la cara a carcajada limpia, ella creía que por sus movimientos, pero yo reía por que sus tetas, con la tela de la camisa pegada por el sudor, le botaban que era gloria bendita.

-MARTA: no te rías y ven a sujetarme que ahora tengo que hacer los giros del cuerpo y no quiero caerme.

Me acerqué con la polla algo morcillona, y la rodeé con los brazos tal y como hacia el del vídeo, ella seguía girando y saltando, conmigo cerca de ella, podía divisar parte de su sujetador asomándose por la camisa, se le había desabrochado un botón del movimiento, ¿o lo había hecho ella?, me daba igual, solo disfrutaba, ella ya tenia el tren inferior quieto y giraba el torso como en el vídeo, casi se caía, para la tenia agarrada de los brazos, completado el ritual hasta el momento, solo quedaba elevarla a los cielos, se paró para coger aire.

-MARTA: bien, ya esta todo, solo falta que me ofrezcas a los dioses - clavé mi mirada a una gota de sudor que caía por su cuello, perdiéndose debajo de la camisa, entre sus pechos, disimulé.

-YO: tu tranquila, no te vas a caer, no se como pero te agarraré antes de que toques el suelo, como sea, pero tengo mis reticencias.

-MARTA: tranquilo, lo probamos un par de veces, si no sale, pues nada - asentí deseoso.

Se puso de espaldas a mi, y yo me agaché tal como hacían en el vídeo, llevé mis manos a las zonas donde el líder sujetaba, una a la pierna y otra a la cintura, metí el hombro en su muslo y empujé para arriba, del 1º intento su falda hizo que se resbalara mi hombro y cayó de pie a un metro de mi, yo sin soltarla de la cintura, se acercó a mi de nuevo, volví a intentarlo, mismo resultado, pero ahora cayó resbalando sobre mi, contento por ello se lo dije.

-YO: no es posible, no al menos así, la ropa resbala y no te apoyas bien.

-MARTA: venga, a ver si sale - yo encantado, la estaba metiendo mano y con cada resbalón mi hombro se restregaba por todo su muslo y trasero, un par de veces más y nada, pero a la 4º, esa vez la cogí fuerte con la manos, y la levanté solo con ellas - ¡¡¡¿ves? si sale!!! - pero en cuento la recosté sobre el hombro resbaló de nuevo cayendo hacia atrás pegada a mi, debió notar mi polla semi erecta en su trasero, pero todavía no estaba listo así que desvíe.

-YO: ¿ves?, la tela no deja, míralo en el vídeo - me fui al PC, y mientras buscaba la parte del vídeo, de reojo veía como se ponía roja y se abanicaba la cara con la mano mientras despegaba a camisa de sus pechos, del calor, seguro…- mira, ¿ves?, ella esta solo con el traje tribal, tiene las piernas desnudas, y así, al ponerse en el hombro no resbala.

-MARTA: ¿y que quieres que haga, que me ponga desnuda? - la miré sin saber si lo decía en serio o si era una broma, no atiné a distinguir, estaba pensativa - espérate, ahora vengo.

No se a donde fue, pero regresó igual, se aseguró de que nadie quedaba ya por allí y cerró la puerta.

-MARTA: venga, vamos a probar otra vez - lo hice pero asegurándome del mismo resultado y de que mi polla ya erecta fuera notada, en la última, ya al bajarla lentamente, su falda se pilló con mi bulto y se le levantó, no se veía nada al ser tan grande la tela pero tirando de ella claramente, la desenganché rápidamente.

-YO: perdona, se ha enganchado con el cinturón- tonto de mí, ni llevaba cinturón, pero ella se apartó un par de pasos con los brazos en jarra sin darse cuenta de ese detalle.

-MARTA: esta bien, si ha de ser, que sea, vamos otra vez pero esta vez al agacharte no empujes.

Así lo hice, cuando me agaché ella levantó su falda, sin dejarme más que intuir entre sombras sus piernas, apoyó la piel de su muslo en mi hombro, así empujé así subió perfecta, ella reía y aplaudía de felicidad por el logro, mientras yo la mantenía fácilmente en esa posición, girando sobre mi mismo y moviéndome por el aula. Temiéndome que se acabara la diversión, maniobré para que la tela volviera a resbalar, y tanto lo hice que se cayó sin control. Logré, de chiripa, agarrarla al caer quedando en mis brazos, la pose era de cuento de hadas, cuando el príncipe recuesta a la princesa sobre el aire después de un baile y la besa, tirando de fuerza de brazos la di la vuelta y la puse en pie, pero sin separarla de mi.

-MARTA: uff que susto, ¡¡¡pero nos ha salido!!!

-YO: no, casi te matas, no pienso seguir así, hemos tenido suerte, si te llegas a dar con la cabeza en el suelo no me lo perdonaría nunca, o te quitas la falda o no sigo - mis palabras eran furiosas, tenían que serlo para que mi petición no pareciera sexual.

-MARTA: esta bien, pero no se lo digas a nadie, ya he ido a prepararme por si pasaba - se apartó de mi unos pasos y abriendo la cremallera de la falda la dejó caer al suelo.

¡¡Vaya pedazo de piernas!!, me quedé atónito, formadas y torneadas, parecían las de Eli, pero ella no hacia gimnasia, supuse que de tanto andar por África, llevaba unos mini shorts de deporte, de tela, de los que se ponían las crías para hacer deporte en verano, los llenaba de sobra, “que muslos”, normalmente llevan una abertura lateral para dejar pasar el aire, pero ella los llenaba también, no eran de su talla, los habría encontrado por el almacén al salir antes, le marcaban el pliegue de sus piernas con la pelvis, estaba por reventar la tela.

-MARTA: señor mío, que gusto sentir aire por mis piernas, yo no voy a aguantar esa falda el resto de mi vida………. anda ven y vamos a probar así.

-YO: encantado - sonreí de forma boba.

-MARTA: anda calla, y no se lo digas a nadie - la camisa en una situación normal le taparía más, pero estando empapada en sudor y pegada a su cuerpo dejaba adivinar la línea del vientre y los riñones, entre las telas de la camisa y el mini shorts, hasta me pareció ver tinta en su piel, ¿un tatuaje?.

No me dio tiempo a ver más, se puso de espaldas, y de refilón pude ver como la tela de su trasero estaba tensa, le quedaban de cine pero debían de cortarle la circulación, nos pusimos en posición, agarré con una mano su muslo, piel con piel, luego una mano a su cadera, sujetándola de la cintura y metiendo el hombro, la levante sin ningún problema, esta vez si, la tenia bien agarrada, no había peligro, o eso creía, la tela del hombro de mi camiseta se movió, así que la bajé de inmediato temiéndome un golpe, pero dando gracias a dios por aquel regalo.

-YO: espera, que ahora soy yo - y me quité la camiseta, aparentando que se me atascaba en la cabeza, poniendo el estomago duro, deleitándola, como os he dicho alguna vez, mi cuerpo era normal, no marcaba tableta aunque si buenos pectorales, estaba tonificado para que con el brillo de la luz y mi sudor fuera atractivo, acerté de pleno, por que al quitármela de la cara, vi sus ojos de pasión y como se mordía el labio con su mirada clavada en mi - ahora si, ven aquí.

Acudió encantada cuando la extendí el brazo, tan energéticamente que al darse la vuelta chocó su espalda contra mi, empapando de sudor toda su camisa, cogimos posiciones y la alcé, ya sin impedimento alguno, era sencillo, y no me pareció tanto esfuerzo la media hora de aquel líder tribal, ella ya gritaba de emoción dando palmas y bromeando con que los dioses la cogieran, hasta daba pequeños saltos que hacían que su culo rebotara en mi hombro y cuello.

-MARTA: esta va a quedar genial al final, anda bájame.

-YO: espérate ahí, quiero probarme a ver cuanto duro, jajajaja pero piensa, esto no lo puedo hacer con otra, tienes que ser tú, ya lo hemos ensayado y no podemos hacerlo con ropa - me miró entendiendo que era cierto.

-MARTA: pues va ser divertido, una monja con las piernas al aire encima de un joven alumno con el torso desnudo………..como se sepa en mi seminario me echan jajajajajaja.

-YO: podemos no hacerlo, pero es una lastima, mírate en el reflejo de la ventana, queda precioso.

Seguimos debatiendo mientras yo la paseaba, a los 7-8 minutos mis brazos empezaron a flaquear, y entendí que realmente era un esfuerzo muy grande.

-MARTA: anda bájame ya que te noto los brazos débiles, pero ya que estamos, hazlo como en el vídeo - me encantó la idea de restregar su trasero embutido en aquellos shorts diminutos, apunto de reventar por la presión de su carne, por mi pecho hasta que mi polla chocara con el, teniendo que agarrarla del torso para seguir bajándola lentamente, “aquellos de la tribu saben como disfrutar y encima que parezca una ofrenda a los dioses”.

Colocándome la polla bien saliente con una mano la avisé y la fui bajando según lo comentado, notaba como su trasero hacia de freno, al inicio en mi barbilla, luego por mi pecho, bajando por el estomago, allí la tuve que meter la mano en su vientre para mantenerla en el aire, y la seguí bajando hasta que mi polla se hundió entre sus nalgas y mi brazo hizo tope con sus tetas, dejándola de puntillas en el duelo, y quedándome así unos segundos.

-YO: ¿y dices que esta ofrenda es para la lluvia y la fertilidad de la tierra? - ella no se movía y tardó algo en responder.

-MARTA: bueno……(ummm la oía suspirar y susurrar)…..en realidad esto era el baile nupcial, lo de los lideres…..(ufff), era una petición de fertilidad a la mujer, ofreciéndolaaaaa…..a los dioses para que la bendigan….(dios)….y así en la noche quedar embarazada de su líder…(madre de Jesucristo)…cuando entran en su cabaña el pueblo entero queda en silencio……. (ahhhh)……solo se oye a la líder gritar durante horas……- sentía su respiración agitada en mi brazo y el olor de su cabello en mi nariz, sin mencionar mi erección apretando entre sus nalgas, y sin duda ella sentía mi brazo fuerte al que se agarraba en su estomago, mi torso duro en su espalda y mi verga presionada - ………¿puedes ……puedes soltarme ya?

-YO: anda que son tontos, eso cuadra mucho más…………..si, si, anda descansa - la solté el brazo lentamente dejando que su cuerpo bajara, sus pechos cayeran rozándome la mano, y su culo se hundiera un poco más en mi polla, no veía su cara pero me la imaginaba, se quedó así ella sola una par de segundos - ¿recogemos ya? Tengo ganas locas de salir de aquí – vale, esta frase no fue tan sutil.

-MARTA: si, vistámonos y ya hablamos mañana - yo me moví pero no hacia atrás, sino de forma lateral, tirando de una de sus nalgas con mi bulto hasta que me separé del todo y la deje allí, rebotando, debajo del short.

-YO: estoy desando ensayar esto más a profundidad, hasta el martes que viene……. – y me fui de allí con un empalme de narices.

Llamé a Rocío para desahogarme, lo necesitaba, pero no me cogió el teléfono, a si que decidí que el universo me hablaba, llamé a mi Leona, su macho iba para allá con ganas de hacerla desfallecer, ella ni contestó, rugió por el teléfono. Como no es su relato no lo describiré, aunque lo mereciera, pero llamé a mi casa para decir que esa noche no iba, y entube 7 horas follándome a mi Leona, al inicio con la imagen de Marta quitándose la ropa de monja, sus shorts y con la camisa empapada, en la cabeza, pero después mi Leona ocupó su lugar, como no, la llevé a desmayarse y yo caí rendido, pensando en si todo aquello serviría para que Marta fuera mía, no sin darle su ración de semen y mordiscos a mi felina acompañante.

Marta - Las danzas tribales.

Al día siguiente me crucé con ella y me abrazó encantada, había pensado en ello y decidió que nos quedáramos después del ensayo a perfeccionar la ofrenda final, puesto que iba a hacerla, le daba igual lo que dijeran. No recuerdo una semana más larga en mi vida, y mira que me tiré a Rocío, a la aprendiz y el fin de semana a mi Leona, pero no había manera de calmar el fuego que aquella monja me producía, no podía ser ni por físico ni por sexo, la Leona cubrió todos esos aspectos, era el morbo, el haberla llevado a ese punto en un mes, de quedarse empalaba por el culo por mi polla, solo separada por unos mini shorts, y no moverse hasta que fui yo quien la sacó de allí, era el morbo, y si ella estaba pensando en aquello la mitad que yo durante esos 6 días, seria imposible que no me la zumbara ese martes.

El ensayo salió a la perfección, y ya solo nos dio unas fotos de las ropas a imitar para que el jueves lo hiciéramos en el descanso. Saqué de mala manera a los demás al acabar, para quedarnos a solas, estaba de nuevo empapada en sudor, con la camiseta pegada, yo creo que aun más ceñida, y abanicándose con unos papeles.

-YO: ya puedes quitarte la falda y respirar un poco, que estas roja de congestión - fui directo al grano.

-MARTA: esta bien, pero asegura cerrar la puerta - era una tontería cerrarla, si solo íbamos a ensayar lo que íbamos ha hacer lo vería todo el mundo en unos días, igual que su vestimenta, ¿por que querría que la cerrara?

-YO: pues si lo vamos ha hacer en publico, ¿que temes?

-MARTA: es que vamos a probar más danzas tribales, y esas no quiero que se vean todavía, no son muy……decorosas - diciendo esto dejó caer la falda y de nuevo a la vista los shorts del día anterior, me acerqué a ella quitándome la camiseta, estaba tan empapada en sudor que se me pegaba a la piel, y la pedí ayuda, encantada metió las manos en mi vientre y fue subiendo por mi torso, separando la camiseta de la piel, embadurnándose los dedos de mi sudor, cuando me la quité la tenia recostada sobre mi con sus manos en mi pecho, sin separarlas.

-YO: pues vamos a ver esas ofrendas tan secretas - ella reaccionó riendo mientras se mordía el labio, estaba a punto de caramelo, y yo sabía que posturas me iba a enseñar, o al menos lo intuía.

Nos pusimos de rodillas delante del PC, y me mostró varias danzas de varias tribus distintas, a cada cual más provocativa que la anterior, en algunas hasta me parecía que había penetración pero la grabación no era muy buena, lo notaba más por como se movían y las caras de “trance”, ella me iba explicando que todas eran danzas para la fertilidad y los hijos, no hacia falta que lo jurara, practicamos en frío algunas muy suaves, pero fui de listo.

-YO: mira, a mí no me importa probarlas, pero esto no se puede hacer el jueves, nos echan.

-MARTA: ya lo se tonto, solo quiero revivir un poco aquellas experiencias.

-YO: pero tú solo grababas.

-MARTA: que va, le enseñé a unos niños a grabar, mira - me enseñó un vídeo donde era ella quien hacia una de las danzas, de las más sensuales.

-YO: mira a la misionera, que alegre esta.

-MARTA: calla tonto, solo participaba en las danzas.

-YO: ¿y es cierto?

-MARTA: ¿el que?

-YO: ya sabes, que los negros….la tienen enorme - estaba en zona de peligro pero no aguantaría otra semana sin tirármela, o intentarlo.

-MARTA: que bestia eres, jajaja ya sabes que no me gusta tocar ese tema, pero……- hizo un gesto de distancia grande entre sus dedos índices mientras jugaba con su lengua en la boca.

-YO: vaya con los africanos, con razón son tan felices jajajjajjaa

-MARTA: para ellos no es nada sexual, son rituales antiguos y tienen más de religión que de erótico, son posiciones sagradas y me costó mucho que las compartieran con una extranjera, fue un honor.

-YO: pero es que en algunas que hemos visto son demasiado explícitas, tú si pensabas en ello de forma sexual.

-MARTA: claro, y me ponía roja, pero con el paso del tiempo entendí su significado, logré entrar en un estado de inconsciencia en grupo difícil de explicar, las mentes y los cuerpos se mezclaban, todo era un único ser vivo, fue una sensación increíble.

-YO: mientras te lo pasaste bien jajajaja.

-MARTA: anda deja de pensar así…..- se cayó algo- ….. y vamos a practicar las más difíciles - ponía un vídeo de una, y lo hacíamos.

Sobra decir que en la mayoría había un frote continuo de nuestros cuerpos, la realidad era que en muchas ocasiones estabamos follando con la ropa puesta, en unas yo arremetía contra ella y en otras era ella la que se restregaba contra mi, siempre evitando el contacto directo con mi polla empalmada, pero no siempre lográndolo, de tanto moverse le debió doler algo, o clavarse en su espalda, con habilidad y naturalidad se sacó el sujetador, dejándose solo con la camisa y los shorts. Su actitud de adulta se fue desvaneciendo, regresó a África, a aquella nube de sensaciones que la habían transportado a un lugar mágico y agradable, poco o nada le importaba que la metiera mano de forma grosera y evidente, la cogía del culo o de los senos sin pudor mientras cabalgábamos el uno al otro, se acariciaba entera o me repasaba el cuerpo con sus manos, fue brutalmente erótico verla soltarse la melena rubia y descubrir lo hermosa que era, mientras sentía como se mordía el labio al notar mi verga tiesa frotándose en la cara interna de sus mulos

Puso una en que ella tenia que quedar de espaldas a mi, yo la sostenía en el aire y ella me rodeaba con las piernas hacia atrás, quedando colgada, como las figuras de las puntas de los barcos.

-YO: así no me atrevo.

-MARTA: venga, pero si es muy sencilla, ya me has cargado encima antes – no se separaba de mi, me pasaba los dedos pro la espalda y el pecho hipnotizada.

-YO: no es cuestión de fuerza, mira como la tiene agarrada, no puedo asegurar tu cuerpo, no con la camisa puesta - siendo cierto que podía existir riesgo, me importaba una mierda la seguridad, quería verle las tetas de una vez, ya se le calcaban a través de la camisa empapada, unas buenas tetas con los pezones duros, y le hacia una figura en su espalda de pecado, terminaba en una cintura muy estrecha, en cada gesto era una delicia ver como, ya sin intentar sepárasela de la piel, su camisa era una 2º piel.

-MARTA: pero no puedo, si me pongo el sujetador…- no la dejé acabar.

-YO: mira bien el vídeo, ella no lleva sujetador, es más, él la agarra de un pecho para evitar que se le escape, no quiero que te caigas como el otro día - era una burda mentira y se me notaba, pero dio igual.

-MARTA: esta bien - se llevó las manos a los botones.

-YO: así no va a salir, tienes mucho sudor, déjame que te ayude - me coloqué detrás de ella, pegando mi polla a su trasero de forma firme, inclinando léventeme su cuerpo hacia adelante, pero sin rechistar, se dejó hacer con una media sonrisa abrumada.

Pasé mis brazos por debajo de los suyos y la hice levantarlos, ¡¡que visión de su escote desde arriba por detrás!!, estaba lleno de gotas de sudor, cogí la parte más baja, me costó separar de la piel, y cogiendo con fuerza fui subido, metiendo mis dedos como separadores desde sus riñones a su ombligo y de nuevo atrás, de forma circular, levantando la camisa, se despegaba como el papel de una Magdalena o un bollo aceitoso de la bolsa de papel, notaba su calor corporal y la humedad del sudor en mis dedos, con cada movimiento su cuerpo se balanceaba de adelante a atrás, hundiendo más o menos mi polla en sus shorts, pero sin decir palabra, cuando llegué a su pecho ella terminó de estirar los brazos, y noté cada milímetro de tela separándose de la piel de su senos, para cuando ya estuvieron fuera, dar el tirón final, dejando su melena rubia moviéndose en mi cara, oliendo su pelo.

-YO: ya esta, así si puedo agarrar bien, aunque estas muy sudada - llevé mi mano a su vientre y me mojé la mano con su sudor.

-MARTA: si, ahora podemos hacerlo sin peligro - respiraba profundamente, si tuviera 10 millones los apostaría a que tenia el coño empapado de flujos, a que estaba excitada como una perra en celo, se mordía el labio sin parar, se frotaba las piernas una contra otra y tenia unos pezones bien erectos, duros y grandes, cuando bajó los brazos cayeron un poco, pero sin duda tenia unas buenas tetas, pasaría de la talla 90 por poco.

La cogí de una mano, y di una vuelta a su alrededor para admirarla y jugar un poco.

-YO: así al menos vistes como una mujer africana - sonrío sin terminar de mirarme a los ojos.

-MARTA: venga, empieza ya, antes de que alguien nos vea - no podía ser, estaba la puerta cerrada en un aula sin ventanas.

Me puse detrás de ella, la cogí por la cintura y la levanté, para con la inercia de bajar soltarla un poco y que pasara sus piernas por detrás, no lo logró a la 1º ni a la 2º, pero me estaba restregando toda mi polla por su culo, me daba igual, a la 5º logró firmeza, y ya me rodeó con las piernas entrelazando los pies, mirando la pose del vídeo, agarré de su vientre con firmeza y de su hombro con la otra, y comencé a balancearla, al inicio la postura solo rozaba mi polla cuando la bajaba, pero ella echó los brazos hacia atrás y me dijo que la cogiera por ellos, cuando lo hice quedó colgada totalmente, con los brazos hacia atrás, el pecho saliendo en dirección al suelo y la espalda arqueada, ahora ya mi polla estaba en contacto permanente con su culo o pubis en todo momento, subía y bajaba frotándolo claramente, pero ella solo gemía, al inicio de la posición, pero ya vi que por donde mi polla pasaba al apretar la tela contra su vagina, el short se oscurecía debido a la humedad.

-YO: parece que dominamos la posición.

-MARTA: si………que bien…….- respiraba jadeando.

-YO: si quieres paramos a descansar.

-MARTA: !!NO¡¡ …….dios……..que…..bien………uffff……no pares..….es como…… cuando te tiraste……… a la sueca.- paré de golpe. “¡¡lo sabia, la sombra que vio Karin era ella!!”, La separé las piernas y la dejé caer de rodillas.

-YO: ¿que has dicho?

-MARTA: nada, que se me han cruzado las palabras - se tapaba la cara.

-YO: de eso nada, fuiste tú ¿verdad? La que vio en las sombras, ¿que pasa? ¿te gustó mirar mientras me la follaba? - la daba con un dedo en la cabeza.

-MARTA: basta, no es eso, solo oí de ti en el baño, de cómo hablaban de ti y de tu polla, de cómo las hacías vibrar, yo solo……quería verlo….llevo mucho sin desahogarme, lo pase mal, no se….por favor no se los digas a nadie, pueden echarme.

-YO: ¿y que pasa con lo que ocurre aquí ahora?, ¿tampoco se puede saber que estas aquí casi desnuca frotándote como una osa en celo contra un alumno al que sacas 11 años?

-MARTA: no lo se, yo solo…..quería comprobar, quería ver, lo siento de verdad - rompió a llorar

-YO: pues por tu indiscreción ella ya casi no quiere que la toque, me has jodido a una diosa nórdica que me estaba tirando, y ahora me traes aquí, me dejas que te sobe y te monté como un yegua dejándomela tiesa como una estaca ¿y te crees que pidiendo perdón me vas a calmar?, joder, si el otro día casi parto a una en dos del calentón que me diste – sus ojos eran rojos, caían lagrimas de ella, y vi que aquello no llevaba a nada, cambié de táctica.

Me senté a su lado en el suelo, y la acariciaba la espalda mientras terminaba de llorar, se fue clamando, retomando el control de su serenidad.

-MARTA: oye, lo siento de verdad, sé que no estuvo bien, y si me dejas te compensaré, te haré el amor siempre que quieras, todas las veces que te parezcan, por las veces que no puedas con la sueca - me miró rogando que aceptara, la muy puritana quería pedirme perdón y para ello ofreció que me la tirara, justo lo que ella quería, no se lo pondría tal fácil.

-YO: no es cuestión de que ahora nos follémos, eres monja.

-MARTA: aun no, no cojo los hábitos hasta el año que viene, el seminario es largo - se erigió por la espalda acercándose a mi.

-YO: ya, pero lo serás, te debes a dios.

-MARTA: no le debo nada a dios, se lo debo a las monjas, fue su cariño lo que me sacó de la cárcel y me llevó a una vida mejor, no el dios que permitió aquella matanza, ni el que dejó que me violaran 100 hombres durante 4 meses, me lo debe él a mi - dio otro paso de rodillas para besarme la mejilla.

-YO: pero ellas tiene un código, y no aceptarían esto.

-MARTA: tampoco querían que os contara mi historia entera, y solo tú me regalaste el placer de oírla entera - volvió a besarme pero ahora en los labios, yo no me movía, me hacia el duro y resentido cuando estaba deseando calzármela.

-YO: ¿y como nos viste a Karin y a mí? - me hacia de rogar.

-MARTA: os vi en la escalera, vi como se te tiró encima, vi como os quedasteis así un rato, desde entonces en los descansos os seguí, hasta que vi donde os metíais, y ese día fui directa al aula, para entrar antes que vosotros - todo esto lo decía besándome en los labios cada pocas palabras.

-YO: ¿y que viste?

-MARTA: vi como la besabas, como os desnudabais, como la tratabas, como la acariciabas, como la excitabas, vi como la partías con tu polla, como la abrías el coño y como gritaba de placer - ya no solo me besaba, si no que contoneaba su cuerpo, y se llevaba la mano a sus shorts, frotando por encima.

-YO: ¿y que te pareció? - estaba por arrancarle la poca ropa que la quedaba.

-MARTA: me excitó, noté como me mojaba, como hacia mucho que no pasaba, me recordó a mi época en el instituto, cuando aquel mal chico me hacia vibrar, me masturbé tan fuerte que ella me vio, me escondí detrás de un mueble para que no me vieras, me quedé allí hasta que acabasteis y os marchasteis, tuve que masturbarme hasta correrme, el sonido de tu polla abriéndola lo tengo grabado en la cabeza.

-YO: ¿y que te gustaría que hiciera ahora?- empecé a mover mi boca con ella, acariciándola la espalda.

-MARTA: quiero que me trates igual, con amor, con cariño, quiero que me hagas el amor de forma calmada y con pasión - ya metía su lengua en mi boca.

-YO: solo si esta segura, no quiero hacerte daño.

-MARTA: ya nada puede hacerme daño - se me echó encima tumbándome boca arriba, con ella encima, eso me mató, sentir su cuerpo sudoroso encima del mío, con mi polla aplastada por sus shorts.

Sin dejar de besarnos, ya los 2 con lengua, ella acariciaba mi pecho y yo su espalda, desde luego seria monja o misionera, pero sabia moverse, encogía su cuerpo para luego estirarlo, de forma lenta, así lograba frotar ni bulto y restregar su tetas contra mi, con su pelo cayendo sobre nuestras caras, aquella posición me sacaba de mis casillas. Me la saqué de encima, la senté en el suelo y la di la vuelta metiendo su culo entre mis piernas hasta hundir mi polla en su trasero, mi pecho contra su espalda, como una muñeca de trapo, besando su espalda y su cuello, llevé mis manos a su vientre y fui subiendo mis caricias hasta llegar a sus pechos, estaba realmente excitada, arqueaba su espalda para volver a ponerla recta, repasando mi polla con sus nalgas, sus pezones estaban duro y los masajeaba, con cuidado, pero sin dejar de acariciarlos, ella se agarraba las rodillas, así que solo tuve que torcer el cuerpo hacia atrás para tener vía libre, bajé mi mano por todo su vientre hasta llegar al shorts, me costó un mundo levantar la tela, estaba realmente tirante, pero una vez dentro, bajé mi mano a su coño, no lleva bragas ni nada, noté bello, pero muy corto y bien cuidado, no esperaba eso, aun así mis dedos se mojaron rápidamente cuando comencé a masturbarla lentamente, por encima, jugando con las yemas de los dedos, abriendo y cerrando sus labios mayores, con ella gimiendo claramente, metí mi dedo corazón en su interior, no me costó nada, pero ella echó su culo hacia atrás, apretando más contra mi, lo sacaba, jugueteaba y lo volví a meter, y de nuevo se echaba hacia mi, lo hice tantas veces que ya había ritmo de penetración, mientras mi dedo la penetraba por delante, ella me masturbaba con su culo por encima de la ropa, aguantando un poco logré que se corriera de forma brutal, manchó los shorts y mi mano, gritando de placer, seguí haciéndolo a menos ritmo, besando su cuello.

-MARTA: eres una maravilla, déjame que te compense - se tiró para atrás hasta tumbarme para luego incorporarse y andando a gatas hacia atrás, para ponerse haciendo un 69 pero estirados, sin pensarlo mucho besaba y apretaba con la boca mi polla, por encima de la ropa, mientras yo besaba sus muslos y apretaba su culo con las manos.

Si a ella le costó sacarme el pantalón y los calzoncillos por la erección que tenia no os cuento el sufrimiento de sacarle los shorts en esa posición, al tirar ella se deslizaba por mi cuerpo pero la ropa no se movía, al final, medio metiendo mi cara entre sus piernas y que ella se agarraba a mi polla con las manos, ya liberada en su cara, usándolo de barra firme, logré que la tela cediera hasta los muslos, de allí ya fue fácil seguir tirando hasta quedar totalmente desnudos, ella encima de mi pero invertidos, para cuando fui a abrirla las piernas y acercar su cadera a mi cabeza ella ya masturbaba y chupaba mi miembro con gran habilidad, le abrí las nalgas separando su coño y hundí mi lengua en ella, besando como su fuera una boca, tirando con mis labios de sus pliegues mayores, estaba empapada, casi goteaba sobre mi cara, y cuando jugueteaba con la lengua en su interior arqueaba la espalda sin dejar de pajearme gritando alabanzas al señor, para después seguir engullendo media polla, era jodidamente hábil, y su forma de mover la lengua no era normal, casi logra que me corra antes que ella, pero notando ya que se acercaban mi semen, metí mis dedos en posición, rozando su punto G, en 2 minutos se volvió a correr, casi coincidiendo con mi semilla en su boca, para mi sorpresa se lo tragó y siguió chupando una vez flácida, hasta volver a ponerla dura, ¿quería más fiesta? se la iba a dar.

-YO: levántate, te la voy a meter hasta donde te entre - le di una cachetada en el culo.

-MARTA: no tengo condones, ¡dime que tu si!

-YO: me hice la vasectomía a inicio de año, no habrá problemas de mi parte, pero tú……has pasado mucho en África - se puso en pie para sentarse en una mesa mirando hacia mí, abriéndose de piernas con cara de lujuria, y se separó los labios mayores.

-MARTA: me hice unos análisis al volver, estoy limpia, así que fóllame de una puta vez.

-YO: a sus órdenes, hermana – “si todas las mojas fueran así, no habría crisis de fe”.

Me levanté y me puse entre sus piernas, dirigiendo mi glande a su entrada, mientras ella me agarraba por el cuello con una mano y con la otra se apoyaba para mantenerse erguida, jugué frotando la punta de mi polla en su exterior, hasta que vi suplica en sus ojos, entonces la empalé de un fuerte golpe de cadera, entro casi ¾ del tirón, y no noté demasiada dificultad así que aceleré rápido apoyándome sobre la mesa, ella me abrazaba ya sin sujetarse a la mesa, yo era su apoyo y a la vez la fuerza que la hacia moverse, me rodeó con las piernas como una profesional y movía su cadera facilitando más la penetración, llevando así 10 minutos ya la penetraba totalmente, golpeando pelvis con pelvis, mis huevos rebotaban en su culo mientras mi estaca la abría sin parar, cuando me harté de su aguante 10 minutos después, la cogí del culo y la levantaba de la mesa con cada embestida dando golpes con sus nalgas al caer en la mesa, pero sin dejarla reposar en ella, nuestras frentes estaban pegadas, no nos besábamos, solo nos mirábamos a los ojos inyectados en pasión. Así no aguantó más y llegó su corrida, pero yo no estaba listo aun, así que pasé una de sus piernas por en medio, y la dejé de espaldas a mi, sin sacarla de ella, agradeciendo de nuevo por que al arquitecto se le ocurriera atornillar todas las mesas al suelo, la agarré de las tetas y aceleré al máximo mis movimientos hasta correrme, por el camino ella lo hizo otro par de veces, gritando que era como lo había soñado y como me vio con la sueca, que no parara. Debo reconocer que sin llegar a ser mi leona, me costó más de hora y media que rogara que parara, y otros 10 minutos al correrme, no había sido buena idea haberme hecho eyacular antes con la mamada, eso alargaba mi 2º corrida bastante.

Para cuando acabé y saqué mi polla flácida de ella, se quedó colgada de la mesa, con las piernas flaqueando y el culo totalmente rojo de los golpes que mi pelvis habían dado allí. Me senté en el suelo algo agotado admirando mi obra.

-YO: vaya con la monja, me has dejado seco.

-MARTA: ¡¡dios de mi vida!! - se santiguó - pero que bien follas, me has dejado rota, eres un regalo del cielo - me hacia gracia aquella mezcla de alabanzas divinas y palabras sucias – ¡¡¡como no vas tener al instituto entero detrás de ti!!!

-YO: el mundo no sabe lo que se pierde contigo en un convento, tienes más capacidad y aguante que casi todas con las que he estado - ella torció el gesto, y dejándose caer al suelo de rodillas, echó a llorar - perdona, no quería ser insensible…….

-MARTA: no es culpa tuya, es que tienes razón, y lloro por ese motivo, hasta que atacaron el poblado era un mujer sexualmente normal, llegué a hacer el amor con algún chico de África o algún jefe tribal para que me dejara quedarme, esas danzas tribales eran mi iniciación, y disfrutaba con ello dios me perdone, pero después, después de que me violaran………..no os he contado toda la verdad…… al principio si, sufría y me resistía pero era por comida, luego ya me violaban sin nada a cambio y llegó un punto en que…….mi mente……..cambió……pensaba en que no estaba mal, no me violaban, les deseaba, echaba de menos sus caricias y el placer que me daban, y si tardaban mucho me volvía loca masturbándome, pensé que podía aprovecharme, en que si era participe me darían cosas………que yo era parte de ellos, y ellos de mi.

-YO: ¿Síndrome de Estocolmo?

-MARTA: algo así me diagnosticaron en el hospital, se dieron cuenta, me resistí a que me sacaran de aquella celda, y las primeras semanas pedía que me devolvieran allí, me tuvieron que sedar y atar cuando trate de escapar, y me acosté con varios médicos y pacientes……buscaba ese calor humano que me habían enseñado a amar…..…después recibí ayuda, entre psicólogos, sacerdotes y monjas me hicieron ver que estaba equivocada, que aquello no estaba bien, y me decidí apartar de esa vida cogiendo los hábitos, pero……al oír de ti, al verte con la sueca, al ver como aguantaste mi historia y como me acariciabas en los bailes, se me ha ido la cabeza, he vuelto a aquella celda - me di cuenta de que aquella mujer estaba más jodida de la cabeza de lo que había supuesto.

-YO: te pido disculpas, no pensé que fuera tan grave, si quieres me visto y me……

-MARTA: no, fóllame otra vez, eres el único que me ha hecho sentir algo desde aquella vez - se me tiró encima masturbándome - la tienes más grande que ellos, me lo abrieron tanto que apenas siento nada, pero a ti si, noto como me llenas - me la quité de encima, estaba medio poseída, me dio mal rollo.

-YO: mira, vamos a dejarlo aquí, mañana con más clama charlamos - me vestí y salí pitando de allí.

La tarde y noche pasaron lentas, mi cabeza le daba vueltas, ¿que había hecho?, ¿me estaba aprovechando?, ¿no era justo?, decidí cortar de raíz, al día siguiente en cuanto la viera la pediría disculpas y no volveríamos a vernos en esa situación. El problema fue que el descanso al buscarla, me encontró a ella a mi y me metió en un cuarto a solas, se levantó la falda y me llevó su mano a su coño, sin bragas y encharcado.

-MARTA: hoy después de clase ven a verme al aula - se bajó la falda y se fue de allí - sopesé si ir o no, pero tenia algo de miedo a que se fuera de la lengua.

Al acabar las clases me aseguré de que nadie me siguiera y entré en el aula, allí estaba Marta con el conjunto de monja puesto de arriba a bajo, cofia y rosario en las manos incluidas, de rodillas, rezando.

-YO: hola, ya estoy aquí - saludé revisando que no huera nadie más.

-MARTA: pasa déjame acabar - así lo hice, acabó y se sentó a mi lado en una silla – mira siento si te asusté ayer, como te dije, has sido el 1º que me ha hecho sentir algo, me volví un poco loca.

-YO: un poco, si, pero no pasa nada, podemos considerarlo tu despedida de soltera, jajaja ahora te casarás con dios - suspiré aliviado por que parecía más clamada y serena.

-MARTA: pues la verdad es que me lo estoy replanteando, no solo por ti, puedo seguir ayudando a la gente sin ser monja, pero se que es el camino que quería seguir hasta conocerte.

-YO: por mi no tomes decisiones, esto has sido un error de………….- me cortó para sentase encima mía.

-MARTA: yo no voy a tomar la decisión, no se que hacer, así que decidirá dios y tú me vas a ayudar, eres su herramienta - me temí lo peor – verás, quiero que me folles aquí y ahora - se levantó la falda y su culo desnudo se apretó contra mi polla - yo rezaré a dios mientras me la hundes, y si él me quiere a su lado, no me correré, y si lo hago, sabré que el quiere que siga con mi vida sin coger los hábitos.

¡¡Joder, está loca de verdad, pero no un poco, si no ida de la cabeza!! Aquello no era un pensamiento racional, pensé en sacármela de encima como loca que era, pero os voy a ser sinceros, todos mis reparos morales eran pocos, una pedazo de mujer restregaba su culo desnudo en mi paquete, vestida de monja, pidiendo que la ensartara mientras ella rezaba, para entablar una disputa con dios por su futuro, mi mente era adolescente, y le pareció perfecto.

La levanté, me desnudé, masturbándome para coger tono, mientras ella me miraba juntando las palmas de sus manos rezando, se dio la vuelta y se sentó sobre mí levantando la falda de nuevo, palpando dirigí mi polla, y se la metí. Ella, muy digna, se dejó meter hasta el fondo mi tranca aun morcillona, y sin cambiar el rictus ni separar las palmas de sus manos empezó a subir y bajar follándome ella sola, murmurando cánticos a dios, yo ni me movía, era ella quien hacia todo, pero ver a esa mujer de punta en blanco de monja rezando y ensartándose mi miembro me la puso dura, su cara era de congestión, disfrutándolo pero hacia esfuerzos en hacer ver que no, de vez en cuando cambiaba le ritmo y la velocidad gimiendo mientras pedía a dios que la concediera su sabiduría, una hora estuvimos así, cualquier intento de mi parte por cambiar de postura o acariciarla fue en balde, aquello era entre dios y ella, yo solo era una barra de carne, me sorprendí a mi mismo pensando en Rocío, o mi Leona, hasta pensé en el clásico de fútbol que vendría en unos días, mientras aquella hembra se metía mi falo sin parar. La física no dejó que pasara, pero si hubiera parado de moverse seguro que se me hubiera bajado la erección. Media hora más tarde pasó lo inevitable por mi grosor y la fricción, con ella botando salvajemente, se corrió gritando como una posesa, quedó rendida hacia delante, aun sin salir de mí.

-MARTA: esta bien señor, si es lo que quieres, así será, ayudaré a la gente pero no cogeré los hábitos - se puso en pie, se desnudó completamente y se volvió a empalar, esta vez de cara a mi, besándome, “llegó la fiesta”.

Probamos todas las posturas africanas de danza pero sin ropa y penetrándola, con ella en brazos colgando de mi, estando de pie, ella se alejaba de mi balanceándose y se empalaba, como el péndulo que me enseñó Eli, pero sin separar las piernas, cogía carrerilla, se corrió más de 5 veces en la siguiente hora, y yo 2, la 2º fue al darla por el culo, si, los soldados también le habían destrozado el ano, y mi polla gozó con su trabajo, después de cada corrida ella me la chupaba de nuevo hasta volver a ponerla dura y volvíamos a follar, a las 3 horas terminamos muertos, ella rememorando aquella celda y yo las sesiones con mi Leona.

-MARTA: venga, una última vez, ofréceme a los dioses y cuando me bajes métemela por el culo, no me dejes tocar el suelo hasta que te corras - así lo hice, bajando su culo sudoroso por todo mi pecho y mi vientre, dejándola allí suspendida mientras se la metía por el culo, agarrándola de los brazos, la inclinaba hacia adelante apoyándola contra mi y me la tiré así más de 30 minutos hasta correrme, tuve agujetas en los brazos 2 semanas por aquello.

Al día siguiente hicimos la presentación, los chicos con las ropas africanas encima de las suyas, pero ella y yo con las ropas africanas solo, o casi, ella se dejó la ropa interior, y yo me tuve que dejar los slips mientras me vestía, por que en cuanto me movía, se me salía la polla. Ella al verla colgando me la chupó sin parar hasta correrme, a 10 minutos de la actuación. La representación quedó de cine y el ofrecimiento final arrancó los aplausos de todos, al bajarla notó mi empalme de nuevo y al ir a cambiarnos me la tuve que volver a tirar, casi delante de los compañeros, tuvo lo decencia de meternos en un cuarto del vestuario, pero sus alaridos y el ruido de sexo era muy claro, y contra mi voluntad me tuvo allí 1 hora masacrándola sin parar, contra mi voluntad al principio, luego la dejé tan abierta que pasó 2 días sin poder sentarse bien.

Después de aquello la vi un par de veces más por el edificio, no volvimos a follar, y antes de acabar el curso nos informaron de que había dejado el seminario y se volvió a África, dijo que a buscar a dios, yo pensaba que a buscar una buena polla que le llenara.

Iris - La profesora particular.

Rebobinemos hasta el principio, hasta la vuelta de vacaciones con Ana, mi “prima”, aun en la cabeza después de su vuelta a casa y su promesa de regreso, en esas primeras semanas en que no sabia muy bien que hacer y todavía no enfilé a las alumnas del instituto, os dije que mis padres me dieron un toque por los estudios, era el ultimo curso y pese a que mis notas no eran malas querían que acabara con buena nota, pero entones llegó Marina, Rocío y las demás, mi cabeza no daba para todo, más aun al conocer a mi Leona, en casi todas las asignaturas iba de 7 para arriba, en historia casi llegaba al 9, pero las putas matemáticas y las ciencias me bajaban la media, así que mis padres decidieron ponerme un profesor particular de refuerzo, una hora los lunes y otra los jueves, buscaron pero muchas eran muy caros o ya estaban ocupadas. Al final encontraron a una profesora libre, que no cobrara mucho, quedamos en mi casa, ella se presentó, era una universitaria de 24 años, se llamaba Iris.

Mientras ella comentaba sus referencias y su forma de trabajar a mis padres, o lo que cobraba, yo la miraba abstraído, mi mente no estaba allí, de inicio no me fije en ella, vestía con ropas amplias y era de lo más normal que te podías echar a la cara, solo me fije al mirarla a la cara al despedirnos, llevaba bufanda y gorro amplio con unas gafa/pastas grandes, pero se adivinaban unos preciosos ojos verdes, yo tenia la cabeza perdida en unas cuantas mujeres así que no le di más importancia. Concertamos el horario y los días, yo desestimé algunos días que tenia como fijos con algunas chicas, como los viernes con Rocío, así que ella vendría a nuestra casa a ayudarme. Las primeras clases fueron de adaptación y de pruebas, quería ver mi nivel y salvo quitarse el abrigo y el gorro, se dejaba toda la ropa amplia puesta, y no dejaba nada a la vista. Iris tenia el pelo corto, los suficiente para hacerse una coleta corta, pero que no le pasaba de los hombros, era morena con el pelo lacio y ondulado.

Se sorprendió mucho al ver mi buen nivel, y de como seguía bien sus explicaciones y aprendía, se esperaría a un grandullón bobalicón, un cazurro, y se encontró a un chico listo, que simplemente era muy vago, hacia los ejercicios que me enseñaba con su ayuda, luego hacia un par solo, y como ya me salían remoloneaba, ella se cabreaba un poco, de buen rollo, por que no seguía haciéndolos hasta que me salían sin equivocarme, (seriamente, no sé vosotros, pero visto con el tiempo, las ecuaciones de 3º grado o los enlaces químicos no me han servido para una mierda en mi vida, y lo intuía por entonces), así que no me molestaba demasiado, y gracias a mi afabilidad lograba terminar casi todas las clases charlando con ella de la universidad. Me comentó que necesitaba el dinero para terminar de pagarse la carrera de magisterio, y que venir hasta mi casa se le hacia muy pesado, así que quedamos en que yo fuera a su casa, me pillaba de camino a la mía, vivía en un piso de estudiantes con otras 3 chicas, a las que casi no vi, universitarias cachondas que se pasaban la tarde fuera de cañas. El primer día que las vi, o mejor dicho, ellas me vieron, se presentaron muy atrevidas y juguetonas, apoyando sus manos sobre mis hombros y preguntando quien era aquel “yugurin”, mientras se sentaban en la mesa del comedor donde estudiábamos, Iris me las quitaba de encima y las sacaba de allí cada vez que salían de sus cuartos y se agregaban a nosotros, como una madre protegiendo a sus cachorros de los depredadores, inocentes ellas, no sabían que el autentico peligro de esa habitación, era yo.

Eran el opuesto una de la otra, una alta, esbelta y rubia, la otra baja, con curvas y morena, su actitud me llamó la atención y preguntaba por ellas a Iris, que se mostraba molestaba por que prestaba más atención a aquel par de lobas que a ella, refiriéndose a los estudios. Durante el primer mes y medio de clases no me fijé en ella de manera sexual, no me dio pie, y si sus amigas, pero más allá del juego, yo estaba más que colmado.

No fue hasta que me harté de Rocío, y perdí a Karin por culpa de la loca de Marta, la monja entrometida, que mis miradas pasaron de cariño y diversión, como si fuera una hermana que me ayudaba con los deberes, a verla con los ojos de la fiera que llevaba dentro, supongo que fue algo que pasó con el roce y el tiempo, realmente me caía bien, era un ángel de mujer, pero yo recuerdo claramente el día en que decidí tirármela.

Ya la relación era de amigos, y ella me pedía que la subiera cosas de la calle a su casa, como bolsas de patatas o refrescos, cuando subía me las pagaba pero yo no aceptaba y jugábamos a que ella me metía el dinero en la ropa sin darme cuenta, y yo al darme cuenta, devolvérselo sin que se diera cuenta. El calor ya apretaba en Madrid y era un piso sin aire acondicionado, de forma progresiva ella cada semana iba más cómoda y fresca, y por lo tanto enseñando más piel, en mi cabeza ya pasaban imágenes de ella vestida, adivinando antes de que me abriera la puerta como iría hoy, llevaba casi siempre pantalones bombachos anchos y se los remangaba de forma poco erótica pero que me gustaba, y de sus blusas y jerseys kilométricos no volví a saber, camisetas, casi de hombre, pero recortadas o con agujeros, que le quedaban holgadas, se le veía el sujetador por uno de sus hombros, o cuando se movía a través de las mangas se adivinan su costillas.

Llegó el día en cuestión, me pidió que subiera algo de beber para ella y para mi, ya que se habían bebido todo en casa debido al calor, era cierto, su casa era un horno, yo iba en camiseta holgada y en pantalón de chándal con cremalleras a los lados, ligeramente abiertas para refrescar las piernas, las 3, pero no ayudaba y llegando a volver a casa un par de días con escozor por el sudor y la licra, decidí de forma inocente ir sin sujeción, solo en el pantalón. Fue una mala idea, ¿o buena?, pero no fue intencionada, lo supe nada más abrir la puerta, Iris estaba agachada apretando su bolso contra su estomago buscando el monedero para darme el dinero, pero lo que yo vi fueron sus tetas por el agujero de la cabeza de la camiseta, aprisionadas bajo el sujetador, moviéndose con ella, nada exagerado, pero si bonitas

-IRIS: no me mires así, no llevas bolso, no sabes los que cuesta encontrar algo aquí jajajajajaja - debió de darse cuenta de cómo la miraba por que, haciéndome pasar, dejó de hacerlo - luego te lo doy, no me dejarás el dinero en la cazadora como el otro día, hoy no llevo jajajja.

-YO: ya veo, vas muy ligera.

-IRIS: ¿y que quieres?, ya sabes el horno que es esto, es como vivir en una estufa………..en fin, dame algo de beber antes de dejarlo en la nevera - abrió la bolsa y me miró como todos los días, ella me pedía latas sueltas y yo traía varias botellas grandes - eres incorregible, vivimos de ti, no puedo consentir que nos compres la bebida todas las semanas - dio un trago largo.

-YO: ya lo compensan tus amigas con sus juegos jajaja, ¿están hoy? - pregunté como casi siempre, pero esta vez no era por jugar con ellas, si no por saber si estabamos solos.

-IRIS: mira al tontorrón como le gusta que le adulen, pues no, hoy estamos solos, anda bebe un poco - lo dijo ofreciéndome de la botella que acababa de abrir y de la que había separado sus labios hacia nada.

Le di un trago queriendo saborear aquella boca. Al devolvérsela la cerró y se puso la botella fría en el cuello para refrescase mientras iba a la cocina a dejarlas, mi cabeza se puso en automático y pensó que aquella botella en su cuello seria un símil a mi polla al lado de su cara.

Nos pusimos a repasar deberes que me mandaban, ya no me enseñaba, solo se aseguraba de que hiciera los deberes bien, y en media hora tenia todo acabado. Ella se sujetaba el pelo con una mano por detrás mientras se abanicaba con mis apuntes, de vez en cuando se incorporaba a mirar como los hacia, yo miraba de reojo su cuerpo, realmente le disimulaba mucho la ropa de invierno, y me di cuenta de golpe, que aquella mujer era guapa y estaba buena, no es que no lo supiera, pero no caí en ello hasta ese momento, tenia un cuello espigado, un hombro suave y una cara preciosa, coronada por 2 ojazos verdes. Me sacó el trance llamándome por que me había quedado tonto mirándola a los ojos.

-IRIS: ¡¡hey!!, ¿donde estas?, venga termina - me daba en el hombro con la mano.

-YO: esto……si……..perdona……me he perdido…………..joder vaya ojazos tienes ¿no? - lo solté sin más, realmente me lo parecían

-IRIS: jajajajja muchas gracias Raúl, pero adulándome no te vas a librar de acabar las integrales, venga, sigue, que voy a por algo de beber, ¿quieres algo?

-YO: si anda, tráeme algo que me estoy abrasando aquí - el calor ya no solo era la habitación, era yo y mi polla reaccionando.

Cuando se fue traté de colocármela disimuladamente, por si se decidía despertar del todo, pero sin slips, era como poner diques al mar, intenté cruzarme de piernas pero nunca lo he logrado así que me puse una pierna encima de otra, de forma disimulada pero incomoda. Ella no ayudó nada, trajo la botella de refresco apoyada en su cuello, y mientras nos servia en un par de vasos, vi gotas que supuraron de la botella caer sobre su cuello, me bebí el vaso del tirón esperando que apagara algo dentro de mi, pero la muy………lista, se había traído un bolsa de guisantes congelados y se la ponía en la nuca, en el cuello o llegaba a metérsela en el pecho por debajo de la camiseta. A duras penas me concentraba en los ejercicios, y por ende cometía algún error y ella se pegaba a mi para corregiremos, se ponía en pie detrás de mi señalándome los errores y yo solo podía pensar en la camiseta que me rozaba la espalda y en esos pechos a escasos centímetros, acabé los ejercicios dando gracias a dios, aquella tortura finalizó, su hubiera sido espía hacia minutos que hubiera cantado, sudaba de calor y de sofoco, mi polla estaba medio tiesa y no podía moverme para que no se notara, en una posición incomoda.

Se calmó todo al terminar los ejercicios y nos quedamos charlando como siempre, suspiré de alivio, y cuando creía que había pasado el peligro, llegaron las compañeras de piso con 2 tíos pegados a su culo, gritando y montando fiesta, como habíamos acabado Iris dejó que estuvieran allí y riéramos con sus tonterías, parecían algo borrachas, y las frases que decían eran subidas de tono, un mal menor si no se hubieran puesto a besarse y acariciarse entre ellas, mientras los 2 tíos las admiraban. Iris las llamaba de guarras para arriba, que solo hacían eso por excitar a aquellos tontos, y siendo cierto, a mi también me la pusieron dura, pero como las miradas iban en dirección a ellas, estaba tranquilo. Las palabras de Iris las enfadaron, la acusaron de frígida y de que yo también estaba empalmado, yo en silencio reía disimuladamente, como no queriendo formar parte de aquello, pero se me notó demasiado y las compañeras se reían mientras se daban la razón a si mismas, la más alta se dirigió a mi y me dijo que me pusiera en pie para que lo viéramos todos, yo me negué de plano, si lo hacia se vería la tienda de campaña que gastaba, la muy zorra me metía mano para aseverarse, mi posición incomoda la mantenía oculta, pero en uno de los amagos se me desdoblaron las piernas y quedé expuesto a la mirada de ella, su cara se quedó blanca mientras yo me tapaba con la mochila recogiendo a 1000 por hora, por que lejos de callarse, empezó a gritar “¡la tiene enorme, vaya pedazo de polla!”, ante el silencio de todos, o casi, ya que la otra compañera pedía verla también. Iris estaba roja de risa creyendo que era una broma, y yo de vergüenza, fue la 1º vez desde hacia mucho que me veía vulnerable, que aquello no estaba planificado ni pensado, que se habían dado cuenta sin que yo quisiera, de la furia terminé de recoger entre risas y al levantarme di con la polla en la botella abierta, tirándola sobre la mesa, me dio igual que se hiciera el absoluto silencio y la mirada de todos se clavara en mi mástil, incluyendo los ojos verdes de Iris, salí de allí a la velocidad de la luz.

Iris – Las 3 universitarias.

Recibí un par de mensajes de Iris pidiéndome disculpas y que volviera al siguiente día, lo recibí mientras me estaba follando a mi Leona, lleno de frustración, le regalé una de las mejores folladas que recuerdo, estaba ofuscado, casi ni parecía yo, pero mi cabeza estaba clavada en que no quería que eso hubiera pasado, querría viajar en el tiempo y ponerme unos putos slips, pero no podía, y con el paso de unos días mi cabeza se calmó, y mi Leona lo agradeció. Decidí volver, orgulloso de mi, al fin y al cabo, solo sabían que la tenia grande. Durante las siguientes clases ella se quería mostrar amable pero mantuvo una rigidez muy profesional como los primeros días, dejándome claro que sus amigas no se pasarían, pidiendo disculpas por su comportamiento. Todo parecía normal, pero no lo era, obviamente me puse los slips por seguridad pero su mirada, sus preciosos ojos verdes inocentes y llenos de cariño se desviaban a mi entre pierna. Ya estaba perdida, le picaba la curiosidad, más aun cuando alguna vez al salir de su casa me cruzaba con las compañeras de piso y me decían, gritando obscenidades, que tenia a Iris chorreando por las esquinas, y que necesitaba un polvo mío con urgencia. Si tenia que ser, que fuera, ya se había roto la magia, el chaval bueno e inocente que quería ser con ella se difuminó, ahora me la quería follar, y si era posible a sus compañeras de piso también, tenia para todas, quería hacerse desmayar a pollazos a aquella rubia que arrancó la poca inocencia y bondad que quedaba en mi vida en ese momento.

A la siguiente clase acudí sin mochila, con pantalones cortos y sin slips, cuando abrió la puerta clavó su mirada en mi, y yo en ella, mi mirada era segura y pasional.

-IRIS: ¿y los libros?

-YO: no vengo a que me des clases, vengo a darte lecciones - cerré la puerta y la cogí en brazos llevándola al sofá, dejando que mi polla creciente fuera percibida por su piel a través de la ropa.

-IRIS: ¡¡¡¡¡¿pero que haces?!!!!!- lo dijo alucinada.

-YO: te deseo, quiero hacerte el amor aquí y ahora, y se que tú también quieres, dime que no, mírame a los ojos y si me dices que no quieres, me daré la vuelta y me iré, esto no habrá pasado, pero se que no lo harás.

-IRIS: ¿y por que lo sabes? - lo dijo mordiéndose el labio, gesto por el que sonreí, dejando pasar unos 20 segundos.

-YO: por que estas agarrando mi polla desde que te he cogido – había llevado su mano a mi pene desde el inicio, más como para frenarme que como admiración, pero no la había soltado en ningún momento, ni cuando movía mi cadera suavemente.

-IRIS: ¡¡fóllame!! - me lancé a besarla, y ella correspondió (Fue casi el polvo más sencillo que me gané, casi).

Ella agarró mi cara mientras cogíamos el ritmo de los besos del otro, mientras yo metía mis manos por debajo de su cuerpo, acariciando sus riñones y tirando de ella hacia mi, estaba de espaldas tumbada en el sofá, conmigo entre sus piernas cargando mi peso sobre ella, mi polla dura palpitaba entre nuestros cuerpos, era una maravilla besarla, no por que hiciera nada especial, si no por que lo hacia con los ojos abiertos, y el verde de sus pupilas me volvía loco, así que fui bajando mis besos por su cuello, allí se retorció de placer, era una chica normal y los besos en el cuello la derretían, así que trabajé esa zona hasta que ella comenzó a acariciar mi miembro por encima de la ropa, ya no solo la sujetaba si no que jugaba con ella, y estaba ya como una estaca.

Bajé mis manos hasta los pantalones anchos que tenia y levantando con un brazo su cadera, los fui sacando a tirones, sin dejar de jugar con mi boca en su cuello, cuando salieron la levanté de la piernas y le saqué los pantalones, me quité la camiseta y se la quité a ella, ante mi quedó una belleza de mujer, con unas bragas moradas oscurecidas en la zona de su vagina por la humedad de mis caricias y un sostén a juego, morado con adornos blancos por encima, me lancé de nuevo a su cuello mientras mi mano se metía por dentro de las bragas, estaba rasurada al 0, así que sin impedimentos llegué a su coño, y lo acariciaba por encima, mientras ella me abrazaba y apretaba la cabeza por el pelo, tirando de él cuando metí mis dedos en su interior, estaba tan mojada que no hubo problema alguno, y colocando los dedos en posición ensayada, aceleré el ritmo de mi mano, sus gemidos aparecieron, acompasados con el compás de mi mano, a los 10 minutos, cuando mi mano ya sonaba a chapoteo, rompió en un orgasmo que casi la parte por la mitad, se movió como loca debajo de mi, pero seguí de nuevo en la misma posición, quería sacarla el 2º antes de empezar la fiesta de verdad, se desabrochó el sujetador dejando sus tetas al aire, como me las había imaginado, nada exageradas pero bien colocadas, dejé su cuello un rato por trabajar sus pezones con mi lengua, estaba duros y tiraba de ellos como mis labios, cuando no estaba lamiéndolos o chupándolos. A los 5 minutos se volvió a correr cayendo del sofá al suelo de las sacudidas, pudo hacerlo al quitarme yo de encima para bajarme los pantalones y sentarme en el sofá masturbándome, viendo como aquella universitaria retomaba el aliento, cuando se repuso, casi se le salen los ojos verdes al verme la tranca, gateó para ponerse a mi altura y cogerla con las manos.

-IRIS: dios mío, mi compañera no mentía, ¡¡es una bestialidad!! - lo dijo mientas masajeaba suavemente.

-YO: pues más vale que me la chupes hasta que me corra, por que como te folle ahora te rompo por la mitad - mis palabras era diseccionadas, y ciertas.

Se lamió la mano y escupió mi polla, cosa que me sorprendió, eso era de categoría alta, y mientras comenzó a masturbarme lamía mi miembro de la base a la punta, haciendo chancho con la lengua al terminar en mi glande, cuando estaba bien mojada se la metió en la boca, sin dificultadas, más de la mitad, aquello ya era nivel superior, se lo había pasado bien de más joven, di las gracias a dios dejando mis manos en su cabeza, estuvo chupándomela mas de 20 minutos, de vez en cuando paraba a coger aire, las babas eran abundantes, lamía mi tronco como un posesa y se la volvía a engullir, la trabajó bien hasta lograr mi corrida, la avisé y con unas servilletas evité manchar pero no evitó que alguna gota de semen fuera a su cara.

-IRIS: casi me desencajo la boca aquí, venga, vamos a mi cuarto, que van a venir estas y allí tengo condones - se levantó cogiéndome de la mano, pero yo tiré de ella hasta sentarla encima mía, de espaldas con mi polla sobresaliendo entre las suyas.

-YO: tranquila, me operé de vasectomía, te voy a follar a pelo aquí mismo, quiero que ellas vengan y lo vean - lo dije mientas volvía a su cuello, quiera tenerla de mi lado

-IRIS: no seas animal, no quiero que me vean así, anda vamos al cuarto.

Me pareció normal pero mi cabeza ya maquinaba, la levanté sin sacar mi rabo de entre sus piernas, la seguí hasta su cuarto, la tiré en la cama y la abrí de piernas, me tumbé a la altura de su ingle para comerle el coño, dios, se me daba genial, trabajaba el clítoris de forma segura mientas mis dedos buscaban su punto G, con ella retorciéndose me aseguré de que se corriera para tenerla lubricada, y una vez logrado y con mi barra ya tiesa de nuevo, me puse de rodillas y acerqué su cadera a la mía, mojé la punta del glande con sus fluidos y haciendo presión metí mi polla en ella, noté como se iba abriendo, llevaría tiempo si follar, pero con un par de embestidas más se la metía ¾. Ella al inicio solo abría la boca agarrando la sabanas de la cama con fuerza, cuando comencé a embestirla con rapidez gritaba de lujuria, la tuve así, durante más de 20 minutos, ya había pasado la hora y sus compañeras estarían por llegar, así que cogí la postura en que más soltura tenia, me tumbé y la puse a horcajadas sobre mi, la levanté la cadera y apoyando los pies en la cama me la folle, de forma bestial, sin dejar de acelerar el ritmo, aquella postura me hacia lucirme, podía aguantar mas de 30 minutos sin bajar el ritmo, y eso arrancaba orgasmos seguidos a las más expertas, a aquella universitaria necesitada le sacó 3 en poco tiempo.

Se oyó la puerta de fuera, y a las compañeras berreando, ella se cayó, no quería que lo hiciera así que subí el ritmo aun más, pero cogió una almohada para taparse la boca, aquello no funcionaba quería que supieran lo que pasaba en esa habitación, la quité la almohada la di la vuelta y seguí percutiendo, con ella mirando a la puerta dándome la espalda a mi, cuando ya percibí su siguiente corrida paré en seco.

-IRIS: ¡¡¡por dios, ¿que haces?, sigue, no pares!!!!

-YO: no voy a seguir, quiero que grites.

-IRIS: no puedo gritar más, me oirán.

-YO: eso pretendo, o gritas que quieres que te siga follando, o no sigo.

-IRIS: ¡¡no me hagas esto por favor!! muévete, te haré lo que quieras pero sigue…….- lo decía moviendo su cadera, le agarré el culo y la paré.

-YO: o gritas o te la saco y me largo - pasaron unos segundos.

-IRIS: ¡¡¡¡SIGUE FOLLÁNDOME PUTO CABRÓN, ÁBREME EL COÑO CON TU PEDAZO DE POLLA, DESGRACIADO, MAL NACIDO!!!- sujetándola de la cadera volví a acelerar de 0 a 100.

-YO: sigue gritando o vuelvo a parar.

Lo hizo, durante más de 5 minutos, el silencio de fuera contrastaba con las obscenidades que ella gritaba, sin coherencia, se corrió pero no paraba, seguí con mi pelvis encharcada de sus emanaciones, con el chapoteo claro, y viendo en un espejo la cara de desesperada lujuria en su rostro, roja, congestionada, cerrando la boca apretando los labios y con cara de estar pariendo, con sus preciosos ojos abiertos sin parpadear, pidiendo clemencia con la mirada. No se la di, el silencio pasó a nuestra habitación, salvo por los golpes de mi pelvis, ahora oía claramente como las compañeras estaban al otro lado de la puerta.

-YO: ¡¡¡¡podéis entrar a mirar!!!

Se hizo el silencio, a los pocos segundos se abrió la puerta, lentamente y se cerraba de golpe, como si 2 fuerzas incidieran sobre ella, una quería entrar y la otra no, al final entró de golpe la rubia, y detrás la morena, se quedaron atónitas, al ver como mi polla enorme salía y entraba de su compañera, de mis movimientos fuertes y veloces, de la cara de ella, desencajada, mirándolas con cara de suplica, con la tetas sin llegar a botar debido a la velocidad que le imprimía, se quedaron allí mirando un minuto, la morena se fue, la rubia se acercó, se desnudó y se puso a la altura de Iris, besando y bajando por su cuello, eso solo aceleró el proceso y se corrió de nuevo cayendo agotada a un lado de la cama, hecha una bola, entonces vi el cuerpo de la rubia, era lo que se conoce una tabla, no tenia curvas, más que tetas, picaduras de avispa y sin cintura, me daba igual, estaba allí para castigarle por arruinarme la magia, me puse en pie, la cogí en volandas y la aplasté contra la pared, besándonos, la abrí de piernas y metí mi mano allí, hasta hacerla correrse, entonces la puse colgada del aire abierta y dirigiendo mi polla se la enchufé sin piedad, estaba mucho más abierta, y dejándola caer contra mi la empalé, subiendo y bajándola sin descanso, haciéndola gritar barbaridades mientras Iris se recuperaba a duras penas, a los 20 minutos ya tenia a la rubia de orgasmo en orgasmo, estaba un poco fuera de mi acostumbrado a mi leona, la bajé, la di la vuelta y volví a empalar por detrás, con cada golpe la hacia rebotar contra la pared y al volver hacia mi la volvía a empujar, al cabo de una hora, me corrí dentro de ella sin avisar, queriéndola castigar. Al descabalgarla cayó redonda al suelo, ida, al darme la vuelta Iris seguía echa un bola y allí estaba la morena abierta de piernas, desnuda metiéndose un consolador por el coño como una posesa, no sabia ni cuando había entrado.

-YO: anda quítate esa mierda, que te va a follar un hombre de verdad, aquí hay para todas - me obedeció.

Me puse entre sus piernas, y admiré a aquel retaco con curvas, tenia un par de tetas grandes que agarré, y metiendo mi polla de golpe, la fui embistiendo hasta casi meterla del todo, con cada golpe ella iba elevándose sobre la cama, lo hice hasta que su cabeza daba con la cabecera de la cama, pero sin parar, aguantó 30 minutos hasta correrse, allí la di la vuelta y la puse a 4 patas, para volver a hundirme en ella, no aguantó ni 20 minutos hasta rendirse, su torso cayó a la cama y seguí penetrándola hasta volver a correrme, de ella perdí la cuenta. La empujé hacia un lado, me senté recostado sobre la cabecera, roto de sudor y cansancio, lleno de fluidos que no eran míos en la pelvis.

La imagen era aterradora, había pasado un huracán por allí, Iris seguía hecha un bola tratando de consolar a la morena que estaba llorando, llevándose la manos a los muslos, la rubia andaba a gatas por la habitación buscando donde apoyarse, me ofusqué de nuevo y fui a por ella, la subí a la cama y mojando mi polla en su boca, la di la vuelta y apreté contra su ano, sin preguntar, no debía de ser virgen por allí por que mi polla entró sin dificultad pero cuando volvió mi ritmo infernal, sacaba gritos ahogados, llevando una de mis manos a su coño, y masturbando a la vez, estuve así otra hora, hasta volver a correrme dentro de su culo, habiéndola hecho desmayarse casi al final.

Lo había logrado, me fui a la cocina y traje una botella de refresco, que me bebí sentado en una silla, mirando a aquellas 3 universitarias rotas y llenas, la morena lloraba mientras que Iris la consolaba con gestos torpes y la rubia permanecía inconsciente con el culo en pompa, abierto.

-YO: pues así va a ser todos los lunes y jueves, a la mujer que me encuentre aquí, recibirá su parte.

Me duché, me vestí y me fui oyendo como la morena lloraba, me había pasado, pero estaba enfadado con lo que me hicieron pasar, casi no llegó a 3 horas y había “partido” a 3 mujeres, me di cuenta del esfuerzo titánico de mi Leona, ella aguantaba 5, 6 o 7 horas hasta llegar a ese punto, es más, me llevaba a mi a ese punto. Pensé en que ante tal brutalidad solo una, o ninguna, volvería a presentarse allí, pero era su casa y yo tenia que ir a “dar clases”, cuando llegué al día siguiente vi que solo estaba Iris, me sentó y charló conmigo.

-IRIS: oye, se que el otro día se nos fue un poco de las manos, te pedimos disculpas - ¿ellas a mi? - no estabamos preparadas y……..dios, eres un animal, follas como una bestia y tienes la polla más grande que hayamos visto. Como yo, la rubia quiere seguir, esta en mi cuarto, pero la morena no puede, lleva en trance desde que te la tiraste, ha ido al medico y le han dicho que tiene un leve desgarro vaginal.

-YO: lo siento, me calenté demasiado, ¿esta bien?

-IRIS: si, no es nada, reposo y en un par de días estará bien, pero, entiende que no quiera seguir.

-YO: lo hago - me levanté, la cogí de la mano y la llevé a su cuarto, la tiré en la cama donde ya estaba la rubia, y me desnudé – venga, fuera ropa y vamos a follar en serio.

Se les iluminó la cara, la primera media hora me la chuparon entre las dos, “que lujuria”, los ojos verdes de Iris llamaban la atención sobre todo, estando ya como un piedra me tumbé boca arriba en la cama y me puse a la rubia con el coño en la cara, masturbándola y comiéndoselo como un genio, mientras que Iris se empaló ella sola mi polla, estaban cara con cara y se besaban o acariciaban mientas yo las penetraba con mi falo a una y mi lengua a la otra. A los 20 minutos, Iris se corrió 1º, al poco, la rubia lo hizo en mi cara, a esas altura le metía un dedo por el ano mientras chupaba su interior, cayó rendido hacia delante chupándome la polla según se la sacó Iris, la dejé así chupándomela mientras Iris se dio la vuelta y buscaba mi cara con sus labios, yo atacaba con la boca su cuello mientras una mano buscaba su clítoris, seguimos así un buen rato hasta que las caricias de su lengua me sacaron una corrida fuerte, esta vez no se la sacó y se tragó mi semen, para darse la vuelta y quedar una mujer a cada lado reposando sobre mi pecho.

-YO: ya hemos calentado, ahora a follar.

Me puse a Iris encima y cogiendo mi pose más lucida me tiré media hora arremetiendo sin parar hasta sacarla 3 orgasmos, el último una fuente que me bañó, no fue problema por que la rubia me lamió entero hasta dejarme limpio, la puse a 4 patas y se la metí por el coño, hasta el fondo con el paso de los minutos, metiendo mis dedos en su ano y con Iris debajo de ella, besando y chupándola por todo el cuerpo, me cansé de su gimoteos y volví a castigar su ano, le metí de golpe y la arranqué un grito de dolor, pero sin parar los fui convirtiendo en placer, para después en silencio, volver a quedar ida, era un cuerpo inerte así que se la saqué, atraje la cadera de Iris y la volví a penetrar, cargando todo mi peso sobre ella y sin dejar de trabajarla el cuello mientas me rodeaba con sus piernas, agarraba su tetas como apoyo, estaba fuera de mi de nuevo, la arranqué varios orgasmos más hasta que volvió su cara de desesperación.

Me pasé las siguientes 2 horas intercambiándolas por turnos y llegué a montar a una encima de la otra e ir penetrando alternativamente, de una a la otra, la rubia volvió en si, así que la perforé el ano de nuevo hasta volver a dejarla ida. Iris aguantó una corrida más y se fue al país de las maravillas con su amiga cuando golpeaba las últimas veces de mi 3º corrida.

Salí a beber algo en pelotas y me encontré a la morena tumbada en el sofá masturbándose, no se cuanto llevaría allí pero debía de haber oído los gritos de los 3 en el cuarto.

-YO: es bueno que hagas eso con lo que te pasó - me miró con lujuria, se puso de rodillas y me la chupó allí mismo, me controlé y dejé que siguiera hasta correrme en su boca, no quería volver a desgarrarla.

Al volver al cuarto estaban las tres ya allí, desnudas, retozando unas con otras, me metí en medio, y entre caricias, Iris me rogó que estrenara su culo, lo hice con el cuidado y las enseñanzas que me habían sido concedidas, y sacándola lagrimas al inicio, logré que en una hora se moviera como una gata en celo, mientras la rubia y la morena se daban un festín lésbico a nuestro lado, cuando Iris se rindió, ataqué a la rubia por el coño, la daba con toda mi fuerza penetrándola casi toda, mientras ella intentaba seguir chupando el coño de la morena, era difícil con las embestidas que le deba, mis acometidas hicieron que se fuera al país de nunca jamas, así que la aparté y ocupé su lugar entre la piernas de la morena hasta sacarla varias corridas con mis dedos. Estaba tieso y solo quedaba la morena en condiciones, pero con su desgarro no era una opción, me puse encima de ella y cogiendo sus buenas tetas me hice una cubana con ellas de campeonato, rozaba mi glande con sus pezones, le golpeaba las tetas con mi rabo mientras ella jugueteaba con ellas, cuando se metía entre sus tetas, aun perdiéndose entre sus pechos, cuando hacia el vaivén mi polla la daba en la boca, así que chupaba el glande cuando pasaba por allí, pasado un tiempo me corrí en su cara y por todo su pecho. Me tumbé rendido y las 3 se me abrazaron, no se muy bien como, nos quedamos así unas horas, antes de irme me volví a tirar a las 2 y masturbé a la 3º hasta lograr una ultima corrida de todas y la final mía, follándome como un animal salvaje el culo de Iris, pero de cara a mi, con sus ojos verdes abiertos como platos.

Durante las siguientes clases nuestras orgías fueran iguales, solo cambio que, curada ya, me tiraba a la morena también, la abrí el culo como a las demás, y que ellas se compraron una especie de doble polla, un consolador enorme que con un arnés que se ajustaba, una quedaba con un lado de la polla dentro y por el otro como una polla de tío colgando, así podían penetrar entre ellas mientras yo me centraba en una, lo mejor era que tenia un agujero por detrás, así que hicimos un tren, yo me tiraba a la del arnés por detrás, mientras ella se tiraba a una, y esta le comía el coño a la última, con ayuda de otro consolador, las sesiones no era ni cariñosas ni con amor, era follar sin más, sin detalles, era sexo solo por el placer de hacerlo, me ayudó que generaran cierta resistencia a mi acometidas y no tener que ir intercambiado según se iban a un plano astral diferente.

Para el final del curso me había convertido en una maquina de follar, los lunes y jueves con las 3 universitarias, los martes cayeron Marta la monja y alguna chiquilla de las que se dejaban follar, lo miércoles se los dedicaba a las que la chupaban, siempre que no me tocaran Karin o Marina, los viernes a Rocío y la aprendiz, y los fines de semana me iba con mi Leona. Durante el último mes y medio del curso no dejé de follar ni un solo día, y raro era el día que no caían varias mujeres.

Yo era un cabrón, me daba cuenta, y me encantaba, tenia a todas comiendo de mi mano, hasta como os digo, hice que una profesora feminista convencida de la superioridad de la mujer me la chupara como una cualquiera solo con decirla que me la ponía dura y llevarla la mano a mi paquete después de una discusión en clase, tenia ese poder y lo estaba disfrutando.

Llegué a tener la sensación de haber cubierto el cupo, de haber compensado de sobra mi años de onanismo, de estar harto de que las mujeres solo estuvieran conmigo para follar, ninguna me demostró nada aparte de eso, quizá Marina, y salvo mi Leona, más allá del bien y del mal, eran juguetes para mi. Acabé hastiado de dormir acompañado pero solo, de saber que cuando se vistieran se irían y me dejarían allí, como un trozo de carne a usar, y aquello, que antes me hubiera parecido genial, llegó a quemarme por dentro, estaba harto, no quería sexo, no quería una mujer, o 10, quería una novia, una relación estable, en la que podríamos disfrutar del sexo, pero que no fuera la premisa inicial, el sexo ya no tenia secretos para mi, pero si las relaciones estables.

Terminó el curso con la graduación, siento decir que, o no se, o no quiero explicar lo que allí sucedió, fue una de las noches más memorables de mi vida y siento que si lo cuento perdería su magia, así que aquí cierro mi época del Instituto, quizá más adelante encuentre el valor y las palabras para definir esa graduación, pero hoy, no las tengo.

Irene – Mi 1º novia.

Terminó la graduación y decidí que aquellas chicas no me llenaban, que eran carga, corté de raíz con todas ellas, solo mantuve el contacto sin sexo con Marina, y solo continúe con mi Leona, ella era especial. Estaba harto, si pero no soy tonto, ese tipo de sexo no se encuentra todos los días. Las primeras semanas iba a su casa y fingía tener una relación con ella, pero no era así, no éramos iguales, ella era dulce y cariñosa pero sumisa, lo hacia por dominación, y aquello no me bastaba. Buscaba una mujer que me diera una relación real, una pareja, Ana me había regalado unas 2 semanas de aquello, y salvo Marina, que me dio 1 mes de algo similar, se podía decir que yo no había tenido pareja estable nunca, solo chicas con las que follaba mucho.

En mis idas y venidas de Madrid a mi casa, en el extrarradio, cuando iba a visitar a Merche o cuando quedaba con los amigos fuera del instituto, de más pequeños quedábamos en un parque, de esa época en la que no había que quedar ni llamar antes, tu ibas a jugar con los amigos, y si no estaban ya, solo tenias que ir y esperar a que alguna apareciera, como era normal nuestras madres nos acompañaban de pequeños y con la fuerza del roce se formó un grupo de amigas entre ellas, seguían quedando en el parque entre ellas incluso cuando nosotros ya no pasábamos tanto por allí, como os he dicho mi vida social era muy activa, y tenia un gran grupo de amigos y colegas fuera del instituto, pero ya iremos a eso mas adelante.

La cuestión es que yo antes vivía cerca de aquel parque, y después nos mudamos al extrarradio, pero aun así seguí metiéndome 45 minutos de autobús de ida y de vuelta por estar con ellos, cuando salía de fiesta cogía el autobús nocturno que salían a determinadas horas, con la repetición y las coincidencias, al final me hice amigo de determinados conductores o de personas sueltas con las que coincidías repetidamente, una de ellas era una chica de mi edad, que siempre era acompañada hasta la parada por algún chico, con intención de ganársela, pero allí se separaban y se volvía sola, era un escándalo de mujer, y mi facilidad de labia me había hecho hacernos ”colegillas”, nos volvíamos charlando y hablando de cómo nos había ido la noche de fiesta, o de nuestras vidas, alguna vez ella algo borracha, incluso nos bajábamos en la misma parada y coincidamos unas calles andando, hasta llegaba a acompañarla a la puerta de su casa, todo esto aun antes de la operación, como con casi todas, yo era amable, bueno y bromista, la halagaba esperando que fuera ella la que me diera pie a algo, pero nunca pasó. Llegué a conocerla bien, me contó que había tenido un novio durante 2 años y que acabó mal, el tío la engañó por otra más atrevida en la cama, yo alucinaba con esas historias, de mujeres que podrían tener a chicos dulces, buenos, fieles y amables, como podía ser yo, adorándolas, sin fallarlas jamás, y ellas siempre terminaban con un imbécil que las trataba mal o las engañaban, no entendía sus parámetros de selección ni a aquellos hombres que tenían esos tesoros en casa y se iban a buscar a otras. Después de aquello muchos chicos se la acercaban pero ella los rechazaba de plano, estaba dolida con el genero masculino y me decía que era el único hombre decente que conocía, que ojalá hubiera más como yo, mi mente gritaba que yo era como yo, y si le gustaba mi forma de ser, ¿por que no me consideraba para el puesto?, se llama Irene, y esta es la historia de mi 1º novia.

Desde la operación no la había vuelto a ver, no coincidimos en ningún momento en los autobuses y si la vi ni me di cuenta, mi cabeza estaba a mil cosas, pero una vez dado carpetazo al curso y a todas aquellas vampiresas que se alimentaban del sexo que yo les ofrecía sin darme nada a cambio, a mediados de Junio volví a verla, un par de días en que la saludaba y ella casi ni se dignaba a mirarme, no entendía por que, hasta que al 3º día de cruzarnos, volvíamos a la 1 de la mañana de un jueves, yo del parque de ver a mis amigos, ella se subió detrás de mi y al darme la vuelta me quedé a su lado a preguntarla, se sobresaltó ante mi atrevido proceder, hasta que me miró a la cara, se cercioraba de algo.

-IRENE: ¿perdona? ¿Eres……..Raúl? - lo preguntó sabiendo que cualquier respuesta, tanto positiva como negativa, la dejaba al descubierto.

-YO: anda la otra, ¿Qué pasa? ¿No me reconoces? ¡¡Claro que soy yo!!- y me abrí de brazos ante la evidencia, a ella se le abrieron de ojos repasándome de arriba a abajo, y yo caí, la última vez que me vio fue hacia más de 8 meses, yo ocupaba el doble de volumen, por lo menos, y tenia unos 50 kilos más, hasta la cara pasó de ser una hogaza de pan de pueblo a una cara bonita y estilizada.

-IRENE: ¡no me jodas! ¿Pero que te has hecho? Estas espectacular - se lanzó a abrazarme entendiendo mal mi abrir de brazos, pero me dio igual, olí su pelo y sentí su cuerpo pegado al mio.

-YO: pues nada, un percance medico, mira, sentémonos en esos sitios libre y te cuento por el camino.

Ella pasó delante de mi y se sentó en el lado del cristal y yo a su lado en el pasillo, me dio tiempo a admirar su cuerpo de nuevo, era una pedazo de hembra, una amazona, tenia el cabello castaño, con alguna mecha rubia, largo, le caía hasta la cintura, con la raya en el medio de su cabeza y recogido de tal forma que le hacia una corona con flequillo y luego el resto le caía por la espalda, tenia muy buenas tetas, entre la 90 y la 100, unas curvas de impresión en su cintura, que terminaban en unas caderas anchas y amplias, su cuerpo lo había ido escudriñando con los años, mediría 1,79 de altura, y pasaría de los 73 kilos, pero no había un solo gramo de grasa, todo estaba colocado en su sitio, como os digo, era una mujer fuerte, evocadora, voluptuosa, una amazona moderna. Ese día llevaba la ropa típica en ella, una cazadora vaquera corta, con un top ajustado con escote amplio, pero no obsceno, una falda larga y ligera, con mucho vuelo, que me habían tenido embobado con su contoneo más de una ocasión, (no se vosotros pero a mi uno de los looks mas sexys es ese, top ceñido y falda larga vaporosa), cuando se quitaba la cazadora y se ponía de pie, una delicia ver la curvatura de sus senos hacia el torso, la marca del sujetador debajo del top, y como su culo se erguía lo suficiente para que la falda cayera desde él, y no en sus piernas. Su cara era fina, con una sonrisa hipnótica y unas pecas discretas en los pómulos

Le expliqué el tema de la operación y rehabilitación, sin entrar en detalles, era algo ya aburrido para mi, me quedaba ya muy lejos en el tiempo, ella se sorprendía y preguntaba intrigada mientras me repasaba con su mirada, si verme sin conocerme de antes, ya era bastante ”resultón”, la comparación con antes debía estar perturbando su cabeza. Una vez hablado de mi la pregunté por ella, y que hacia por allí, me dijo que había quedado con unas amigas pero se fue antes, le habían preparado una “encerrona” con un primo, o algo así, de uno de lo novios de ellas.

-YO: que pasa ¿te sigues sin fiar de los tíos?

-IRENE: no es eso, es que no me gustaba, era muy pesado, te lo creas o no estos meses me he vuelto un poco loca.

-YO: que habrás hecho….- ponía gesto de madre mojigata.

-IRENE: nada, pero me he vuelto juguetona, ahora bailo y salgo un poco más, pero nada, siempre que me gusta un chico y le doy un poco de pista, enseguida me quieren meter mano y se me pasa, son todos unos niñatos salidos, en cuanto les paro los pies se van a buscar a otra que se deje.

-YO: ¡hombres! Son todos unos cerdos. – lo dije como siempre se lo decía cuando tocaba el tema, con algo de voz afeminada, era una broma que nunca fallaba.

-IRENE: jajja si todos, mira que no se libra ni uno jajajja eres un bobo - se río mientras se abrazó a mi como gesto de cariño, y no quitó las manos hasta el final del trayecto.

-YO: aunque no puedo culparles, ya te he dicho mil veces que se iniciarían guerras por ti, que un chaval se pase de la raya es una minucia.- era cierto, ese tipo de frases se las había dicho durante mucho tiempo, y ella me lo agradecía, pero mi tono siempre fue a modo de halago inocente, con miedo a decírselo de verdad y que me interpretara una petición de algo más, no me daba miedo preguntárselo, me daba miedo su respuesta, y así tener una escapatoria en caso de negativa, pero esa no lo fue, era seria y mirándola a los ojos sin echarme a reír ante su silencio, ella reaccionó tarde, pero como siempre, riéndose y agradeciéndolo.

Nos solíamos bajar en la misma parada, una de las últimas casi al final de la línea, vivíamos bastante retirados pero en la misma dirección así que coincidíamos unas calles, paseábamos charlando y gastando bromas pero al ser de noche refrescaba, así que ella pasó sus brazos de nuevo por debajo del mío que estaba metido en un bolsillo de mi cazadora, y se pegaba a mi en búsqueda de protección del aire, eso ya lo hacia antes, cuando la podía tapar de un huracán con mi cuerpo, esa sensación de hombría y caballerosidad me ha gustado siempre. Caminamos hasta donde la lógica dictaba que debíamos separarnos cada uno a su casa.

-IRENE: jo, ha sido un placer volver a verte, me has alegrado el día - se tiró a darme dos besos y abrazarme, yo la dejé, y, como me gustaba hacer, apretaba su cuerpo contra mi para sentir su pecho oprimiéndome y la vez dar sensación de firmeza a la dama en cuestión - a ver si coincidimos más en el bus.

-YO: desde luego, y ahora, después de este gesto espontaneo de cariño, te voy a acompañar a casa, como en los viejos tiempos.

-IRENE: no seas tonto, es en dirección contraria a tu casa, vete y ya llegare bien - me dieron igual sus palabras e inicié la marcha hacia su casa.

-YO: estas como una cabra si crees que voy a dejar a una preciosidad como tú irse sola a casa a las 2 de la mañana por estas calles oscuras.

Fueron los mismos gestos, los mismos hechos y las mismas palabras que la había repetido durante años, la educación clásica de mi padre no me permitía otra opción, lo 1º era la seguridad de ellas y pese a que más de una vez he tenido que irme de punta a punta de la ciudad para dejar a una chica en su portal y volverme a mi casa, o acompañarlas a cajeros automáticos, lo había hecho, tendría fama de pagafantas o de calzonazos, pero me habían educado así y me parecía mi deber, aunque sabia que nunca me había servido para nada con mis avances amorosos.

-IRENE: eres todo un caballero, ¿por que no habrá más como tú? - diciendo eso pegó una carrera hasta mí y se volvió a abrazar a mi, esta vez frotando con una palma mi antebrazo, en señal de agradecimiento y riendo.

A mi normalmente eso me hubiera gustado pero su frase me percutió la cabeza de nuevo, me trasladó de nuevo 1 año atrás “por que no habrá más como tú”, joder, ¿que me pasaba ahora?, era joven, guapo, atractivo y ahora delgado, ¿que tenia de malo?, que pese a ser todo lo que ella podía buscar, seguía diciendo esa frase para poner una barrera entre nosotros? Me enfadé un poco, y tomé el valor para decírselo de una vez mientras llegábamos a su casa.

-YO: oye, quiero que sepas que yo también estoy encantado de habernos vuelto a ver, pero tengo que preguntarte algo seriamente y no quiero que te lo tomes a mal.

-IRENE: claro, dime.

-YO: ¿que tengo de malo?, ¿por que siempre dices esas frase de que ojalá fueran como yo?, no sé, ¿por que buscar esas cualidades mías en otros y no fijarte en mi? - ella se paró de golpe, mirándome a la cara extrañada.

-IRENE: ¿a que viene esa pregunta?

-YO: pues por que se que quieres ser amable conmigo, pero esas frases me parten el alma, las dices como agradecimiento, lo sé, pero me desconciertan, y no eres solo tú, otras me lo han dicho, y siempre se van con otros chicos que no tienen nada por lo que me halagan. Solo ha coincido que ahora la has dicho tú, y tengo curiosidad, ¿acaso ser buen tío con las mujeres es malo?

-IRENE: pues no sé….me dejas descolocada…no puedo hablar por todas…..es una frase hecha, no sé, eres agradable, dulce y me haces reír, me haces sentir bien, supongo que solo queremos que lo sepas. Y no, ser buen tío no es malo, pero ya nos conoces, somos mujeres, nos desvivimos por buscar un príncipe y nos volvemos locas por el malo del cuento, ya sabes mi caso.

-YO: pues no lo entiendo.

-IRENE: supongo que no puedes, somos así, pero me dejas intrigada, ¿que pasa? ¿Es que te gusto? - torció la cabeza mirándome con verdadera curiosidad.

-YO: pues claro que si, o no, no lo sé, ¿como podrías gustarme?, solo eres guapa, estas tremenda, eres lista, agradable, cariñosa, un cielo de mujer, ¿Cómo se me ocurriría? –ironizaba - pero no lo digo por eso, solo quiero saber si para tener una pareja estable, tengo que convertirme en un carbón, por que te seré sincero, cada día que pasa lo soy un poco más, y no se si me gusta - se vio sorprendida, al inicio por mi declaración velada de amor, pero luego por mi dilema moral, era cierto, después de arrasar el instituto, mi mente asociaba ser un carbón con follar y ser bueno con no rascar bola con las mujeres.

-IRENE: pues no lo pienses, no cambies, sigue siendo como eres y algún día encontraras a esa chica que te hará sentir especial.

-YO: ya, eso me dicen los demás, y me lo decía a mi mismo hasta la operación, pero después me di cuenta, mis cambios físicos me han llevado a tirarme a medio colegio, y a muchas ni las había dirigido la palabra hasta entonces, me dices que todos los tíos somos iguales, y lo que he visto hasta ahora es que todas sois iguales, solo os importa el físico - me di la vuelta ofuscado, aquellas palabras las tenia en la garganta desde hacia semanas, y explotaron delante de ella.

-IRENE: yo… no se que decirte….puede que tengas razón, quizá sea la edad, ahora tenemos las hormonas locas y solo queremos divertirnos.- se acercó acariciándome la espalda, para tranquilizarme, yo me di la vuelta mirándola a los ojos, dios, estaban brillantes, de color miel, alumbrados por una farola.

-YO: pues yo ya me he divertido bastante, estoy harto de relaciones cortas, de sexo y despedidas, de andar a escondidas por que temen que alguien las vean besándome con ellas, de no poder pasar una tarde con una chica en su casa sin que se me suba encima, ni de poder abrazar a una mujer teniendo que girar la cadera para que no note mi polla y se vuelva loca, o de tener que esconderme del mundo otra vez, quiero amar y sufrir, jugármela todo a una carta, y ganar o perder, pero sentir que mi vida se completa con alguien.

Ella me miraba atónita, realmente no había palabras que decir, mi discurso era sincero, sentido, pasional. Me sequé una lágrima que caía por mi mejilla, me serené un poco, quería rebajar la situación.

-YO: joder que pensaras de mi, un grandullón como yo llorando como un crío jejejeje - ella sonrió, pero su cara no era de vergüenza ajena o de compasión, si no de comprensión, de empatía - anda vamos a tu casa que se hace tarde - la ofrecí mi brazo y se agarró a él, caminamos en silencio hasta su portal.

-IRENE: no te lo tomes a mal, pero esto ya no es una frase hecha, ojalá hubiera más gente como tú en el mundo, no conozco a nadie que se pueda abrir así a otra persona, sin casi conocerla, te pido que tengas paciencia y que no cambies nunca, eres una persona maravillosa - se abrazó a mi, pero dejando sus brazos pegados a su cuerpo, la rodeé con ternura,

-YO: seré una persona maravillosa, pero esta noche aunque me acueste con alguna, volveré a dormir solo, y me despertaré igual de solo…..- la besé en la frente mientas la separaba de mí - Anda entra en casa que se hace tarde.

Ella se puso de puntillas para darme un buen beso en la mejilla, y despidiéndose con la mano entró en su casa, vi sus ojos vidriosos, ¿realmente le habría llegado mi mensaje? No entendáis mal, era sincero, pero no lo solté a la ligera, quería que supiera de mis sentimientos y de la similitud entre nosotros. Me fui a casa dejando que mi furia volviera al cofre de mi interior, de donde había salido, dormí mejor que en mucho tiempo, mi cuerpo se había quitado un yunque de encima.

Nos cruzamos un par de veces más a partir de ese día, me dio su teléfono y charlábamos por Internet, ya casi me aprendí sus horarios, esperaba 1 o 2 autobuses para ver si venia, o cuando llegaba la buscaba con la mirada viva, y si tuviera que apostar diría que ella hacia lo mismo, cuando coincidamos nos sentábamos juntos o nos quedábamos de pie hablando, siguiendo con nuestra amistad, pero yo noté que su actitud cambió, reaccionaba igual pero iba un paso más adelante, hablábamos de más cosas, se reía igual, pero se apoyaba en mi brazo o mi pecho de forma sutil, no se bien como explicarlo, sus abrazos y besos de despedida me eran diferentes, ya no me rodeaba con los brazos para separase rápidamente, si no que se dejaba caer sobre mi, con los brazos encogidos, y era yo quien la rodeaba, se mantenía allí más de lo estipulado en los contratos sociales, cuando me daba 2 besos el 2º siempre era largo y sonoro, no sé, me tocaba la cara cuando ponía caras haciendo el tonto, o se arreglaba la ropa, colocándose el escote o la falda sabiendo que yo la estaba mirando fijamente. El remate fue un día en que entre antes que ella al bus, y me senté en el lado del pasillo para esperarla, iba tan lleno que cuando llegó, yo no podía salir para que ella pasara mi lado, y no quise cambiarme al lado del cristal, si lo hacia algún otro listo podía intentar quitarla el sitio, así que solo me puse en pie inclinado mi cuerpo hacia atrás, haciendo palanca con los gemelos en el asiento, ella me entendió rápido y pasó por delante mía dándome la espalda, la posición, mi corpulencia, la suya, y su buen trasero unido a mi gran polla hicieron lo inevitable, al pasar, mi bulto la golpeó claramente el culo a través de la fina tela de la falda.

-IRENE: huy perdona- se sentó sin más dejando su bolso, sin restos de pudor o vergüenza, ni clavando su mirada en mi entrepierna, me había pedido perdón por darme con el culo, tenia que ser consciente, me dejó clavado en la posición, de pie, inclinado y mirándola a la cara - no me mires así anda, ya te he pedido perdón, ni que nunca te hubieran dado con el culo en una pierna.

Me senté de golpe partiéndome el culo de risa, aquella ingenua chica se pensó que debido al tamaño y grosor que debió sentir, aquel golpe que recibió en su trasero era de una de mis piernas. Me miraba ella y medio autobús, sin entenderlo.

-IRENE: ¿pero que te pasa? - de verme así, arrancaba a reír por momentos, sin saber por que, solo por contagio, dudé en si decírselo o no, pero me pareció tan gracioso que no podía reírme yo solo.

-YO: verás, jajajja, es que…..lo que has notado jajjajaja no era una pierna jajajajajaja - descrito y dicho así no tiene gracia, pero yo me ahogaba, tosía con fuerza por cortar aquella risa y dejar entrar aire a mis pulmones. Ella al inicio no lo entendió, por se le notó en la cara cuando lo hizo.

-IRENE: ¿¿¡¡ NO!!?? ¿Eso era….?- lo decía habiendo la boca enseñando su dentadura perfectamente cuidada entre los dedos de la mano que se llevó para tapársela.

-YO: la misma jajajajajajaja rompimos a reír los dos de nuevo, ella se tapaba la cara de vergüenza por su confusión y por que cada vez que ella paraba de reírse me oía a mi y volvía a empezar, entramos en uno de esos bucles de risas en que nos costaba un mundo retomar la compostura, y en cuanto nos mirábamos o alguno lo recordaba y se le escapaba alguna risa nasal o un gemido, el otro volvía a empezar y contagiaba al otro. Estabamos ya a mitad de camino y aun no éramos capaces de articular palabra alguna, rojos, congestionados y balbuceando palabras inaudibles en idiomas inventados queriendo relatar lo ocurrido. Ella se secaba las lágrimas temiendo que se le corriera el poco rímel que solía llevar.

-IRENE: para ya por dios, … (snif)….que me da algo antes de llegar a casa - se frotaba con el dedo índice los párpados.

-YO: no, si ya te ha dado algo……...- volvíamos a empezar, me encantan esos momentos con los amigos o la familia, coger algo insignificante y hacerlo una bola enorme de felicidad, si reír 5 minutos alarga la vida un año, salimos de aquel autobús siendo inmortales.

Por el camino a su casa quiso desviar el tema para poder dejar aquella sensación atrás, y no se le ocurrió mejor tema que yo y mis andanzas sexuales, le expliqué un poco por encima lo de algunas chicas y como casi había cerrado ese capitulo de mi vida.

-IRENE: ¿casi?, o se cierra o no se cierra.

-YO: bueno, es que hay una mujer que no puedo dejar, se llama Mercedes.

-IRENE: ¿estas con ella? - noté que había algo de decepción en su pregunta.

-YO: no exactamente, no tenemos ese tipo de relación estable, simplemente…no sé, sexo, solo eso.

-IRENE: pero algo te dará para que no la dejes como a las demás.

-YO: bueno…..no quiero ser descortés con ella, la quiero, pero solo me da eso, el mejor sexo, el más duro y duradero que me ha dado nadie, pero no me aporta nada, es una relación aparte del bien y del mal.

-IRENE: ¿no sales con ella por ahí?

-YO: no, se puede decir que nuestra relación es de…….interior jajajaja.

-IRENE: pues es una pena, por que podrías tener una relación de verdad con otra mujer……..- su tono era de que podría ser con ella.

-YO: y puedo tenerla, ella no es un impedimento, es solo un desahogo, un juguete con el que me divierto, no es una relación dominante, ella tiene su vida y yo la mía.

-IRENE: pues a mi no me gustaría que estuvieras conmigo y luego te fueras con otra - hablaba en hipotético caso pero me estaba diciendo claramente que eso era un impedimento para ella.

-YO: pues entonces si, es una pena, por que te haría la mujer más feliz del mundo, pero no pienso dejarla tirada, es una…… mascota, a la que le tengo demasiado cariño - la descripción no era lo más acertada, pero no sabia como explicárselo mejor.

Llegamos a su portal y de nuevo un abrazo, pero esta vez se pegó más a mi su cadera, hasta notar mi paquete, me dio dos besos y antes de meterse en su casa se giró.

-IRENE: pues si, un autentica pena…….- se metió en su portal con un golpe de cadera final, dejando que el vuelo de su falda luciera.

Me fui derecho a la casa de mi Leona, y me la tiré más de 4 horas para corroborar en mi mente que mis palabras eran ciertas, aquella fiera merecía que fuera su león, y decidí que en cualquier caso, en mis relaciones estables dejaría claro siempre desde el inicio que ella existía, y la relación que teníamos, si lo aceptaban perfecto, y si no, no merecía la pena una relación con ellas si me costaba tener que dejarla a ella.

Los días fueron pasando y nuestras charlas en las idas y venidas, aquello era un cortejo claro, yo quería y ella también pero su mente quería hacerme rendirme, decirla que dejaría a mi Leona por ella, me hablaba de la monogamia y de forma sutil siempre llevaba la conversación a ello, sus caricias y sus gestos sensuales eran evidentes, al igual que los míos, ya hablaba de lo que me haría si estabamos juntos, pero no cedí, un jueves se enfurruñó tanto por mi negativa que se enfadó y no me dejó acompañarla a casa, era tarde así que la seguí a cierta distancia hasta asegurarme de que entraba sin peligro. Sus intentos eran tan insistentes que me generaban dudas en la cabeza, pero se me pasaban en cuento iba a ver a Mercedes.

Pasaron un par de días hasta que, el sábado, volví a salir de fiesta y al entrar en el bus a las 4:55 de la mañana, me la volví a encontrar, a través del espejo la vi con un chico, iba muy ligera de ropa, con claros síntomas de borrachera y el tío encima de ella acariciándola y besándola, mientras ella le esquivaba, pero sin demasiada oposición, en uno de sus amagos su mirada se clavó en mi, y sin apartarla, dejó hacer al chico, que se dio un festín durante los minutos que faltaban para arrancar el vehículo a las 5 en punto, ella seguía con su mirada clavada en mi con el tío metiendo su cara ya entre sus tetas, dejándose hacer, quería darme una lección de cómo se sentía. Sonó la señal de que íbamos a arrancar, entonces ella se quiso despegar del tío para entrar, pero el acompañante estaba caliente como el palo de un churrero, la agarraba de la cintura para volver a atraerla hacia él, cada intento más rudo de ella, era respondido por otro gesto de más fuerza de él, ya discutían con el tío llamándola de calienta pollas para arriba, sin soltarla de la mano, mientras ella le pedía que la soltara tratando de quitárselo de encima. La escena llegó a tal punto que mi cuerpo reaccionó solo, me levanté y salí del bus pidiendo al conductor, colega mío, que esperara un minuto, me bajé y de un tirón la solté la mano de él.

-YO: perdona, creo que la señorita lo ha dejado claro, lárgate.

-IRENE: si, por favor.

-CHICO1: quédatela, es toda tuya, pero no le vas a sacar ni un polvo, es una a puta calienta pollas - se me tensó el cuerpo de tal manera que Irene lo notó y me agarró temiéndose lo que iba a pasar.

-YO: ¿como la has llamado?

-IRENE: déjalo, no pasa nada, vamos a casa - tiraba de mi.

-CHICO1: lo que se merece, lleva toda la noche vestida como una guarra pidiéndome guerra y ahora se quiere ir, no es más que una furcia bara……- no le dejé acabar, le cogí por la pechera le puse un pie detrás de los tobillos y empujé fuerte para que cayera de espaldas al suelo, al ir algo borracho cayó sin problemas.

-YO: cierra la boca antes de que te la parta - cogí a Irene y la ayudé a subir y sentarse en el bus, entre algunos vítores de alabanzas y otras de criticas por que la chica “se lo iba buscando así vestida”, cerré todos de golpe.

-YO: ¡¡a cerrar la boca todo dios, no os importa una mierda, así que seguid con vuestras vidas!!

Me senté a su lado y ella se echó sobre mi hombro a llorar durante un buen rato, en ese tiempo puede admirar su cuerpo, ya hacia bastante calor aunque por las noches refrescaba, salió con un bolso negro pequeño con una cadena dorada, un corsé, dejando sus hombros y gran parte de sus pechos y espalda al aire, era negro con los cordones y adornos blancos, una falda no muy larga, negra y con vuelo que se tenia tieso, en cualquier otra mujer le quedaría por las rodillas pero a ella y su espectacular cuerpo, con las caderas anchas y el trasero tan levantado, le quedaban por medio muslo, con medias de encaje y ligeros a plena vista, dejando ver piernas, acabando en unas botas altas de cuero, con mucho tacón, que por detrás era mas bajas que por delante, terminando en pico por sus rodillas, la imagen viva de una “Pin-up”, con el pelo totalmente suelto, liso y con pinta de haber empezado la noche mejor peinado. Con una sombra de ojos negra y un pinta labios rojo oscuro, tirando al gránate. Estaba espectacular y sin duda se podía entender que aquel chico estuviera enfadado, pero no por ello excusar su comportamiento.

Siguió llorando en mi hombro mientras la consolaba, estaba notablemente borracha, se le cruzaban las palabras y no terminaba las frases. Logré entenderla entre balbuceos que venia de una fiesta temática, de ahí su vestimenta, y conoció a aquel chico, que la trataba bien y que le gustó su comportamiento, le dejó excederse un poco pero cuando le dejó meterla mano le cambió el carácter, se volvió arisco y áspero, solo quería lo que querían todos los chavales.

-YO: ¿pero por que has hecho esto?, tu no eres así.

-IRENE: no lo se, estaba dolida, quiera sentirme bien y ahora me siento mal, y ………..es por tu culpa.

-YO: ¿y que se supone que he hecho?

-IRENE: pues que me tienes loca perdida, me gustas, te quiero, y no quieres estar conmigo - era la 1º vez que alguien me decía que me quería, sin añadir “te quiero………follar”, fue de pasada y lo dijo mirándome a los ojos, con gotas de lagrimas negras cayendo por sus mejillas debido al rímel.

-YO: ¿Cómo que no quiero? Me harías el hombre más feliz del mundo - sequé sus lágrimas con mi dedo.

-IRENE: no, no me quieres, quieres quedarte con tu Leona, antes que conmigo.

-YO: ya te dije que no pienso dejar de verla, pero que para mí no es un impedimento, yo también te quiero, como nunca podré quererla a ella.

-IRENE: ¿y por que no la dejas? ¿Acaso no soy suficiente mujer para ti? - diciendo esto me besó, en los labios, de forma tierna y pasional, queriendo ser un argumento.

-YO: eres todo lo que un hombre podría desear - me volvió a besar.

-IRENE: pues déjala y quédate conmigo - se recostó sobre mi pecho y se serenó, tanto que medio se quedó dormida.

Con aquella joya de mujer recostada sobre mi, dormida y tranquiliza por los latidos fuertes de mi pecho, razoné, ¿quería o no a aquella chica?, ¿cuanto me debía costar?, ¿acaso era un precio que debía de pagar? No era momento ni lugar para decidir aquello así que me centré en ella y sus necesidades actuales. Medio dormida tiritaba, era ya muy tarde y hacia frío, sumándole lo poco tapada que iba, me quité la chaqueta que llevaba y se la puse, me quedé con solo una camisa de vestir en el torso, nunca he sido friolero y como os dije anteriormente soy una estufa andante. Mientras frotaba su espalda para hacerla entrar en calor, me costó despertarla y hacerla bajar del bus cuando llegamos al destino, no ayudaba nada, estaba bebida, medio dormida y con unos tacones de vértigo, casi se cae al bajar el escalón del bus, y aunque la sujetaba y se apoyaba en mi, era un suplicio caminar, así que decidí llevarla en brazos, la acomodé la chaqueta para taparla bien y a pulso la cogí en brazos, asegurando meter bien la mano por debajo de su culo, pillando la falda y la chaqueta para que no se le viera nada, y pasando la otra mano por su espalda, haciendo que su cuerpo se inclinara hacia mi y me rodeara el cuello con los brazos, apoyando su cabeza en mi pecho, pese a que ella no era poca cosa, yo era más grande y fuerte así que la llevé sin problemas mientras ella se acurrucaba sobre mi pecho, no soy un titán así que tuve que bajarla y descansar a mitad de camino, la volví a subir encima, apartándola antes el pelo de su cara, “madre mía”, pese a que debía concentrarme en el esfuerzo, en sujetarla bien y mirar por donde pisaba, que imagen tan dulce y provocadora, su absoluta confianza en mi y mi chaqueta enorme cubriendo su delicado cuerpo me hacían no poder apartar los ojos de ella, de sus carnosos labios.

Llegamos a la intersección donde debíamos separarnos cada uno a su casa, y me paré, no por cansancio, si no por que tenia que pensar, traté de hablar con ella pero estaba ya con Morfeo, ¿que tenia que hacer con ella? Tenia que llevarla a su casa, ¿pero que pasaría si no llegaba a subir? no podía dejarla tirada en el portal o el la puerta de su casa e irme, no podía llevarla en ese estado, llamar y que su familia la viera así, o me culparan a mi, tampoco podía entrar en su casa a acostarla, si su padre se despierta y me ve acostando a su hija en la cama podía salir mal parado, no había opción, tenia que llevarla a mi casa, allí al menos tendría la situación controlada. Caminé con ella en brazos hasta llegar a mi casa, era difícil con su cuerpo semi-inerte lograr meterla en mi casa y más aun en mi cuarto sin hacer ruido de despertar a nadie, pero fue imposible, las madres tienen un sentido arácnido o algo, al menos la mía, nada más entrar por la puerta apareció por allí mi madre en las sombras.

-MADRE: ¿hola hijo que tal? ¿A quien llevas ahí?

-YO: pues bien madre, yo al menos, aquí traigo a una amiga mía, no ha tenido un buen día, no quiero que la vean así en su casa así que dormirá aquí esta noche.

-MADRE: dormir, ya……….

-YO: joder, no tengo tiempo para juegos madre, ¿no ves como va la pobre?, casi no puedo con ella, dormir, si, solo eso - como matriarca de la familia ya se olía que su hijo era un don Juan y andaba saliendo mucho con chicas, y pese a alguna frase aleccionadora se la veía orgullosa o feliz por el cambio.

-MADRE: anda, déjame que te ayude a acostarla, no vas a desnudarla tú.

-YO: ¿desnudarla?

-MADRE: claro melón, no ves el corsé que lleva, eso esta muy ajustado, no puede dormir con él, tú llévala al baño y ya me ocupo yo de todo.

Así lo hice, como toda gran señora, cuando mi madre se pone en plan militar solo queda obedecer, por que en el fondo, sientes que saben lo que se ha de hacer. La llevé al baño y la senté en un silla que tenemos allí, mi madre me sacó de allí y me pidió que me fuera a cambiar y le trajera alguna camiseta mía vieja, de las de 4XL de mis viejos tiempos, obedecí, cuando volvió a abrir la puerta del baño para que entrara a llevarla al cuarto parecía otra, seguía adormilada, pero la habían lavado la cara, desmaquillado y desvestido, mi madre se llevó la ropa de ella y la dejó preparada para limpiarla y tenerla lista para el día siguiente, entre lo que veía y la ropa que mi madre se llevó deduje que Irene iba en bragas y con una camiseta mía enorme que le quedaba como un camisón largo, la volví a coger en brazos, y noté como la camiseta estaba algo húmeda, olía a colonia, mi madre se la había echado, pero era colonia mía, no de mujer, ¿acaso mi madre quería que aquella muchacha durmiera con el constante recordatorio de mi olor sobre ella?, me centré en no golpearla la cabeza contra el marco de la puerta y la acosté en mi cama, nada más dejarla se hizo una bolita con las sabanas, agarró mi brazo y tiró de mi para que quedara acostado, abrazado a ella, supongo que por acto reflejo, yo me quedé con una rodilla en la cama dilucidando si seria correcto o no tumbarme con ella, aparté un mechón de pelo de su cara y la di un dulce beso en la mejilla, hasta que una voz me dijo que no lo pensara y que me acostara en el sofá, me gustaría decir que era mi conciencia, pero era mi madre en la puerta de la habitación.

-MADRE: ni se te ocurra o te corto las pelotas, a dormir al sofá/cama, y como la toques un pelo esta noche te capo, ¿me has odio?

-YO: que si mama, que no soy ninguna aprovechado, lo sabes.

-MADRE: bueno, pues por si acaso…. tápala y acuéstate que es muy tarde.

La tapé con las sabanas y el edredón, agaché mi cabeza y la di otro tierno beso en la mejilla ante los ojos vigilantes de mi madre que se fue dejando la puerta abierta y mirándome con el gesto claro de que esa puerta se quedaría así. De nuevo me vi en aquel horrible sofá/cama dando vueltas por su incomodidad y con una chica espectacular ocupando mi cama y mi mente. Si realmente tenía que aparcar a mi Leona por ella, o no, seria un debate que se mantuvo en mi cabeza toda la madrugada, hasta que caí rendido ante el cansancio y las altas horas. Cuando me desperté tarde unos segundos en darme cuenta que mi cama estaba vacía, eran casi las 12:30 de la mañana del domingo, y oía claramente el típico sonido de cucharillas de desayuno en la cocina, pensé que se habría despertado, se habría vestido y marchado a su casa, así que fui al baño como siempre, bostezando y berreando haciendo ver al resto de mi casa que me había despertado, oriné como lo hacemos los tíos en nuestras casas con la familia y confianza, sin cerrar la puerta, haciendo ruido contra el agua del water y relajando los músculos hasta que salía alguna ventosidad, si, por poco glamur o excitante que quede, yo lo hago así y seguro que no soy el único.

Cuando salí del baño secándome las manos con una toalla apareció mi madre con la ropa de Irene en la mano.

-MADRE: anda que te cortas un poquito, ni con invitada cierras la puerta.

-YO: ¿que invitada? ¿Que haces con la ropa de Irene? - caí de golpe - ¿sigue aquí?

-MADRE: claro que si, guarro, esta en la cocina siendo sometida a un tercer grado por tu padre y hermana mientras desayuna, se habrá levantado no hará ni 20 minutos.

-YO: joder ¿y no podías avisarme?

-MADRE: ¿y que hago? ¿Te grito que no te tires pedos mientras meas por que tu novia esta en casa?

-YO: …………………..no es mi novia mama.

-MADRE: pues no pierdas el tiempo, que es un encanto de niña, no ha parado de dar las gracias, de pedir disculpas y de alabarte por lo de ayer, es más mona que las pesetas, no como las pendones esas con las que sales últimamente, así que despierta, voy a plancharle esto - y se fue hacia el salón donde tenia la plancha con la ropa de Irene.

Era lo mismo que ya sabia yo, que ella era diferente, pero hasta que no me lo dijo mi madre no me convencí de aquello, si se había ganado a mi madre en tan poco tiempo y con la mala 1º imagen de la noche anterior, tenia que ser un cielo de mujer. Acudí a la cocina con miedo a lo que me iba a encontrar, y no era otra cosa que a mi padre y mi hermana atosigándola a preguntas, era la 1º chica que me llevaba casa, o que ellos veían, mi padre me vio el entrar.

-PADRE: hombre, aquí esta el señorito, vaya horas de despertar - lo decía siempre con tono elevado, le gustaba que su voz me despertara.

-YO: ¿se puede saber que estáis hacinado aquí?

-HERMANA: desayunar como personas de bien, charlando y conociendo a tu amiga………..Irene ¿verdad?

-IRENE: jajajaj si - me fije en su cara, estaba abrumada y un poco fuera de lugar pero reía mientras tomaba algo de desayuno.

-YO: ha sido una noche movidita, necesitaba descansar - mi frase no estaba bien pensada, así que mi padre la aprovechó dirigiéndose a Irene.

-PADRE: ¿no te habrá molestado?, como no se haya comportado dímelo y le limpio los mocos de un guantazo - le gustaba ser contundente en su tono, y aun siendo en modo de broma, se captaba su mensaje de autoridad.

-IRENE: no por dios, ha sido todo un caballero conmigo, muy pocos harían lo que hizo anoche por mi - me miró a mi pese a contestar a mi padre, y relató sin muchos detalles lo ocurrido la noche previa mientras yo tomaba un buen vaso de leche fría.

-PADRE: que menos que cuidar de una chica tan maja como tú, ¿verdad bonita? – mi padre queriendo ser amable se excedía con las insinuaciones.

-HERMANA: anda, déjalos comer algo tranquilos - me echó un cable llevándose a papa de allí, era demasiado afable con la gente, quizá heredé eso de él. Aun así al pasar a mi lado mi padre me dio un fuete manotazo en el pecho, entre el punto del dolor y el orgullo, sabia que los aguantaba, quiera decirme que estaba feliz por mí actuar.

-PADRE: he criado a un buen hombre - me apretó el hombro con su mano, más fuerte aun, y con mi hermana se fueron cuchicheando hacia donde estaba mi madre, sin duda para hablar de aquella novedad en mi vida, de aquella 1º chica que apareció en mi casa.

Quedamos solos en la cocina y me senté en la mesa delante de ella, con una sonrisa de mi parte pidiendo disculpas y con otra por parte de ella diciendo que no pasaba nada.

-YO: lo siento, que te hayan acosado así, no están muy acostumbrados a que traiga chicas a casa.

-IRENE: no pasa nada, tienes una familia maravillosa, me han tratado genial - extendió su mano para acariciar la mía.

-YO: ¿y tu que tal estas?, ¿te encuentras mejor? - la agarré de la mano.

-IRENE: si, mucho mejor, te pido perdón por lo que pasó y te doy las gracias por tratarme tan bien, a ti y tu madre, ya me ha dicho que fue ella quien me desvistió y que como me trataste, estaba esperando en la puerta cuando me he despertado y me ha dado cosa despertarte, así que me he levantado y he estado charlando con ella.

-YO: haberme despertado, no pasa nada.

-IRENE: ya, no sé, te vi tan dormido y te has portado tan bien que no quería molestarte - nuestras miradas se clavaron en los ojos del otro.

-YO: mira, se que a lo mejor no estoy siendo justo contigo con el tema de Mercedes, pero soy sincero, no quiero hacerte daño, si esto te esta afectando, lo mejor es que dejemos de vernos y tú hagas tu vida, seguro que tendrás a 100 chicos detrás de ti - mis palabras no la sentaban bien.

-IRENE: no puedes pedirme eso, ningún chico que conozco me habría tratado como tú ayer, más de la mitad se hubieran aprovechado de mi o me hubieran dejado tirada en cualquier sitio, ¿te crees que quiero renunciar a alguien como tú?

-YO: no es que quieras, es el hecho de que yo no voy a cambiar de idea, lo he pensado mucho, deseo estar contigo, pero no perder lo que tengo con ella.

-IRENE: lo sé, yo también he estado pensando, pero ya sabes como soy, no soportaría que me engañaras con otra.

-YO: pero no te engaño, te lo he dicho desde el 1º día.

-IRENE: lo sé, pero no se si será suficiente.

-YO: es lo máximo que te puedo ofrecer sin mentirte.

Apareció mi madre con la ropa ya limpia y planchada, y la acompañó a mi cuarto para ayudarla a vestirse, “dios”, dicen que no hay nada mas sexy en una mujer que ir solo con la camiseta o camisa de un hombre, y en ese momento lo entendí, mi camiseta le hacia una figura disimulada pero unas piernas de pecado, con medio hombro al aire y la tela contoneándose ampliamente. Cuando salieron allí estaba la pin-up de anoche, pero mucho más mejorada en el aspecto, la puse una cazadora por encima y la acompañé a su casa, con ella bien agarrada a mi brazo.

-YO: pues aquí nos separamos, supongo que no quieres continuar con este juego - se puso delante de mí y pegada a mí cuerpo, cogiéndome de una mano, se puso de puntillas para darme un beso en la mejilla.

-IRENE: no supongas tanto - y con la otra mano en mi cara me la giró para volver a besarme, esta vez en los labios, yo aguanté quieto el 1º, el 2º ya la abracé y le correspondí, la sujetaba la cabeza con miedo a que aquel momento llegara a su final, mi lengua cogió vida propia y buscó la suya, que lejos de rechazarla la acogió con gusto.

-YO: no estoy seguro de poder pararme si continuamos así - lo dije al separar nuestros labios para coger aire, mientras le colocaba el pelo detrás de la oreja.

-IRENE: yo tampoco, será mejor que suba, mi familia estará preguntándose donde estoy - se dio la vuelta después de darme un último beso con sabor dulce, entrando en su portal.

-YO: oye, ¿y mi cazadora?

-IRENE: ya te la devolveré, ahora se donde vives, me pasare algún día….. - me guiño un ojo y cerró la puerta.

Aquello no había hecho más que empezar. Volví a mi casa y durante la comida los comentarios sobre mí e Irene eran continuos, nos gustaba chincharnos unos a otros, y mi madre parecía encantada con aquella muchacha que llevé en brazos a casa, medio borracha y ligera de vestimenta. Del calentón de la situación quedé con mi Leona en su casa y la destrocé a polvos toda la tarde, quería asegurarme de nuevo que aquello merecía la pena retenerlo, y desde luego que lo merecía, pero también me cercioré de que no había más, no me aportaba nada, solo me saciaba momentáneamente, no había esa sensación de completarme que me generaba aquella conocida del bus a la que solo había besado, tenia que decidirme, con mi leona tumbada a mi lado con la piel brillando del sudor y un fuerte olor a sexo animal llenándolo todo, y aun así no podía dejar de pensar en Irene, en sus labios, en su sonrisa y en esas largas y fornidas piernas.

Pasaron 4 días hasta que me mandó un mensaje, quería pasarse por mi casa a devolver la cazadora, quise que fuera sin nadie en casa pero no pudo ser, así que quedé con ella, llegó a mi casa y subió, iba como siempre, preciosa, con su top ceñido y sus faldas largas y de tela fina, saludó a mi madre que andaba por allí con las orejas tiesas, y se dedicaron unas palabras amables, cuando nos dirigíamos a mi cuarto, me miró con cara de advertencia. Entramos y cerré la puerta, dejando la cazadora que traía en las manos por allí tirada.

-YO: muchas gracias, aunque no tenias que haberte molestado en venir hasta aquí.

-IRENE: era una excusa, ya lo sabes, solo quería verte - se sentó en el sofá ofreciéndome sentarme a su lado con una mano.

-YO: pues bendita cazadora, mira he estado pensado…………- iba convencido a comentar que había decidido aparcar, que no dejar, a mi Leona mientras estuviera con ella, pero me cortó.

-IRENE: yo también lo he pensado mejor, déjame decirlo 1º por que si no lo digo del tirón no seria capaz. No quiero que andes por ahí con otras, pero estoy decidida a salir contigo, eres el mejor hombre que he conocido hasta ahora, y si para estar a tu lado tengo que compartirte, lo haré - me dejó clavado en el sitio.

-YO: no es compartirme, si salimos, seré tuyo, no habrá nada más, ella es solo como ese oso de peluche que tango en el estante - se lo señale- un juguete del que me cuesta desprenderme por cariño.

-IRENE: ¿y bien? ¿Que me dices? - puso rígida la espalda y se puso seria.

-YO: ¿decirte de que? no me has preguntado nada - la hice sufrir un poco.

-IRENE: no seas bobo, ya sabes, quieres………..

-YO: ¿que?- quería que lo dijera y ganar tiempo para una buena respuesta.

-IRENE: ¿me vas hacer decirlo?.......- remoloneaba mientras se ponía roja.-............ ¿Qué si quieres……….salir conmigo?, tonto.

-YO: no hay nada en el mundo que me hiciera más feliz que salir contigo, ¿Qué si quiero? No, no quiero, LO IMPLORO.

Saltó de alegría y me abrazó como si la hubiera concedido un deseo cuando era yo el que tenia la sensación de estar agradecido, el silencio solo fue roto por un grito “¡¡bien!!”, que salió detrás de la puerta de mi cuarto, entró mi madre y la abrazó, yo alucinaba.

-MADRE: ¡¡dios, que felicidad más grande!!, y tú comporte como un cabello, o te mato.

-YO: ¡¡mama!! ¡¡Lárgate de aquí!!- se fue sollozando de alegría, Irene se reía y me cogió de la cara para que olvidara aquella intromisión, le costó un par de besos dulces desenfadarme.

Pasamos la siguiente hora abrazados y acariciándonos como colegiales, besándonos de forma cariñosa de vez en cuando, yo tenia claro que no podía extralimitarme lo más mínimo, no con ella, quería saborear cada instante de aquel…………...romance, iríamos a su ritmo y no había más que hablar. Con cualquier otra solo tendría que ponerla encima de mi o recostarla lo suficiente para que notara mi bulto creciente y me la hubiera tirado como a las demás, pero decidí que no, que esa vez seria distinto.

-YO: ¿y si salimos a dar una vuelta? Ya hace calor, ¿te invito a un helado?

-IRENE: me encantaría - se puso en pie para colocarse un poco la ropa.

Salimos de allí cogidos de la mano y fui las salón para informar oficialmente de nuestro noviazgo, y que saldríamos a dar una vuelta. Me costó decir las palabras “mi novia”, pero una vez dicha me sonaba genial en la cabeza, nos despedimos y salimos así, sin sepáranos de las manos, a mi me sudaba algo la palma y temía algún gesto de asco de ella, pero no se produjo, le daba igual, era feliz así, y yo más aun. Dimos un paseo por el parque, aquel por el que una vez pasé, fue al salir del gim de Eli, y volví a sentir aquella sensación, un cambio en mi vida, un cambio brusco, que daba miedo, pero que estaba dispuesto a dar acompañado por ella. Descubrí en la heladería que le gustaba más la vainilla o el yoghurt que el chocolate, como a mi, y charlamos, horas, mientras compartíamos nuestros helados, y jugábamos a mancharnos la nariz o las mejillas, intercalando besos dulces, sus labios sabían a vainilla, estaba viviendo esa situación, delante de todos, sin importarla a ella o a mi que nos vieran, esa situación que había detestado ver en otros durante años, esas situaciones que me daban dentera de lo empalagosas que eran, que me daban asco, en el fondo, por envidia. Quise invitarla a cenar pese a estar tieso de dinero, por suerte ella rehusó, la acompañé a su casa, despidiéndonos con otro de esos besos, que subían de intensidad pero no sexuales, si no de cariño y ternura. Me despedí haciendo el tonto un poco, dando saltos, cantando y gritando frases de felicidad por haber logrado el corazón de aquella doncella. Ella se tapaba la cara riendo de vergüenza, pero me encantaban extrapolar y exagerar mis sentimientos reales, hacerlos públicos y notorios.

Irene - Fugaz.

Las siguientes semanas las pasamos igual, quedando por las tardes, viendo películas en mi cuarto o paseando, saliendo con mis amigos unas veces y otras con los suyos, la sensación era maravillosa, todo era nuevo ante mi, que todas las situaciones era novedosas, excitantes y buenas, con ella a mi lado me sentía lleno, completo, en paz, la sensación de ahogo y de desesperación que me llenaba desapareció, su espacio fue ocupado por felicidad, confianza y seguridad. Llegué a no volver a ver a mi Leona en todo ese tiempo, no lo necesitaba, ni me masturbaba. Lo mejor fue cuando salimos un día de fiesta, ella estaba espectacular y pasamos horas bailando y besándonos, temía el día en que la notara o palpara mi enorme polla de nuevo, y como había pasado con todas, cambiara su actitud, pero pese a mis intentos, ese día llegó, estabamos bailando, o no, más bien moviéndonos abrazados en la pista de baile, yo la tenia a agarrada por detrás mientras la rodeaban con los brazos por el vientre, mientras la besaba el cuello y ella acariciaba mis brazos. El movimiento, y la situación me la puso dura como una piedra, pese a querer retirar mi pelvis de ella por pánico a estropear aquello tan bonito, la pista estaba llena de gente, no se podía tener muchos sitio y los golpes eran frecuentes con la gente que estaba, iba y venia. En uno de esos golpes mi pelvis se pegó a su trasero, y con sus faldas finas, debió notar todo mi esplendor, quise despegarme rápido pero una cría pasaba por detrás de mi y no me dejó, temía algún cambio de actitud, pero no ocurrió nada, seguía igual, es más, se dio la vuelta y se quedó abrazada siguiendo el ritmo de mis pasos, sin pegarse más a mi, recostando su cara en mi pecho, y sin ofrecer ningún gesto diferente. Aquello fue el mejor regalo que me pudo hacer una mujer en esa época.

Me presentó a su familia, y comí en su casa un par de veces, me comentaron que tenían un viaje familiar preparado, de 3 semanas para inicios de verano, pero que lo habían cambiado a petición de Irene, se había convertido en unas bodas de plata, un viaje de aniversario para sus padres y que ella se quedaría conmigo en Madrid. Así que me fui con algo de ropa a su casa, a vivir con ella esas semanas, a modo de prueba, la cosa se iba calentado a cada día, la primera semana íbamos vestidos, pero con el paso de los dais ella se iba dejando ir, y me hacia a mi hacer lo mismo, yo ya iba solo con unos pantalones sin slips por la casa, como me gustaba ir en verano, fresco, y ella con mis camisetas o camisas y en bragas, nos cambiamos unos delante del otro, era una delicia verla quitarse la ropa, dejar caer su falda y quitarse el top, luego el sujetador, “dios, que hembra”, era perfecta, ni esculpida por Miguel ángel, una tetas preciosas, tersas y con un lunar encima de uno de sus pezones, que eran rosados y amplios, siempre iba con bragas más o menos grandes pero que en la comparativa con su cuerpo rebosante eran irrisorias. Como me solía pasar, la 1º vez que me vio la polla colgando se le abrió la boca de forma desmesurada, se quedó clavada mirándomela y riéndose, pero ya más o menos sabia su tamaño, nuestras caricias ya no eran tan inocentes, yo repasaba su trasero y sus senos con cariño, y ella mi pecho desnudo, le encantaba mi pecho, no se por que, se recostaba y se quedaba en él durante horas, en momentos de pasión ya llevaba su mano a mi bulto y acariciaba mi miembro semi/erecto sobre la ropa, pero jamás hizo mención del tamaño, pese a que lo pensaría.

Ya jugábamos por la casa, persiguiéndonos y nos tendíamos trampas para asustarnos, siempre terminábamos igual, recostados sobre la cama o un sofá, con ella encima de mí, esa sensación siempre me ha vuelto loco, sus pechos sin sujetador solo cubiertos por una camiseta que le quedaba grande era increíble. Mis manos ya se adentraban por dentro de su bragas en su trasero, pero siempre que llegábamos a más ella ponía el freno, y yo me tenia que aguantar, pero no lo hacia a desgana, solo estaba ansioso por que me decía que pronto estaría preparada.

Ese día llegó a mediados de la 2º semana, ella había terminado de ducharse después de que lo hiciera yo, se ponía una crema corporal, tenia una toalla en la cabeza y otra en el cuerpo, pero se la iba abriendo para llegar a todo su cuerpo, la cuestión es que se dejó la puerta del baño abierta y al pasar por allí me quedé mirando, era una visión demasiado sensual para no quedarse allí de pie. Ella lo sabia por que me vio de primeras pero sin decir nada y sin amagar con cerrar la puerta siguió haciéndolo, mi polla reaccionó cuando se acaricio los pechos con aquella crema, pero se puso a reventar cuando se quitó la toalla y vi su cuerpo desnudo, mientras ponía un pierna encima del borde de la ducha, y se extendía la crema por sus muslos.

-IRENE: anda, no te quedes ahí mirando y ayúdame, entra y échame en la espalda.

-YO: no es buena idea que entre ahora mismo contigo así, no estoy seguro de poder controlarme.

-IRENE: lo se - y se dio la vuelta quedando de pie, desnuda ante mi, ofreciéndome el bote, solo recuerdo que su piel brillaba, que era tersa, firme y generosa, con una fina línea de bello en su pelvis.

-YO: ¿estas segura? – me aseguré de que en la pregunta quedara claro que no me refería a la crema.

-IRENE: si - me miró fijamente a los ojos mientras se quitaba la toalla de la cabeza y todo su pelo húmedo caía por su hombro, la espalda y uno de sus pechos, sobre un solo pie, dejando el otro ligeramente apoyado, en el aire.

Entré con calma, mucha más de la que sentía en mi interior, y con solo el pantalón sin slips, mi polla estaba haciendo de mástil central de una preciosa y enorme carpa, me acerqué a ella mientras se daba la vuelta dándome la espalda y se recogía el pelo hacia delante para dejar su espalda libre, la besé el hombro cuando al rodearla cogía el bote. Sin llegar a rozarla, mi falo estaba apuntándola de forma amenazadora, me eché crema en las manos, y comencé a extenderla por sus hombros, con gestos suaves y amplios, bajando por sus omoplatos, con gestos circulares, fui bajando todo el contorno de su espalda, llegando a su cadera, no dejé un solo ápice de su piel sin ser pasado por mis manos, cuando llegué a la curvatura de su cintura estaba lo más excitado que recordaba desde la graduación, pegué mi miembro a su desnudo trasero, solo separado por la tela del pantalón, y mis manos la rodearon por el vientre, acariciándola, subiendo mis manos por su torso, bajando su cuerpo un poco, y besando su cuello, mis dedos llegaron a sus pechos, casi ni me abarcaban aquellas preciosidades de senos, ella bajó sus brazos sobre sus caderas buscando con sus manos mi cintura, la oía y notaba respirar profundamente, se dio la vuelta y se pegó a mi, clavándose mi miembro en su vientre, agarrándome del cuello, arrancándome un beso pasional , sensual, ya no era cariño, era deseo, sus manos bajaron hasta quedar en mi pecho mientras la fuerza de mi cuello echaba su cuerpo hacia atrás, pero la tenia bien sujeta por la espalda.

-IRENE: llévame a la cama, pero esta vez, quédate conmigo.

La cogí en brazos, como aquel día en el bus, pero ella estaba completamente desnuda, y con solo con aquellos pantalones y una erección enorme, al rodearme el cuello con los brazos levantó su cara hasta volver a besarme y haciendo gran acopio de fuerza logré llevarla a su cama, sin golpearla con nada más que mi bulto en su cadera, donde habíamos dormido juntos y abrazados la ultima semana, la dejé recostada boca arriba suavemente y cayendo sobre ella sin cargar mi peso en su totalidad, besándonos con cariño pero con nuestras lenguas bailando un vals, una de mis manos fue acariciado su cara, y bajaba por su cuello y su brazo, hasta llegar a uno de su pechos, y allí se quedó, apretando con suavidad mientras ella me sujetaba la cara, mi cuerpo me pedía un impulso, o arrebato sexual, pero mi mente le frenó, tenia que tener cuidado, trabajarla bien para no hacerla daño, así que mi mano siguió bajando a su vientre y dejando de besarla busqué aprobación en su mirada, me la concedió con otro beso largo y abriéndose de piernas, mi mano bajó y acariciaba con cariño por encima de la piel, ella se retorció en cuanto notó mis dedos.

-IRENE: ten cuidado por favor, hace mucho que no….

-YO: tranquila, te voy a tratar como la reina que eres.

Bajé mi boca por su cuello hasta quedarme en uno de sus pechos, lamiendo su pezón, apretó mi cabeza con sus dedos jugueteando con mi pelo, mi mano se iba moviendo con más facilidad cuando noté como se iba lubricando, su estomago se estiraba e encogía con cada una de las pasadas de mi mano, y cuando la oí gemir metí uno de mi dedos en su interior, ella se sobresaltó con un suave grito de lujuria, tirándome del pelo, lo saqué para volver a acariciarla por fuera, para luego volver a meterlo, lo hice hasta que su cuerpo ya no reaccionaba al introducirlo, y para entonces ya entraba y salía con gran velocidad, se retorcía con fuerza, amagaba con besarme pero se arrepentía enseguida, su boca solo estaba para ayudarla a respirar entre gemidos, aceleré el ritmo cuando metí el 2º dedo, y ya cuando los metía los dejaba dentro, moviéndose y acariciando, lo tenia ya muy abierto y mojado, la situación optima para mi gran miembro, así que me separé cuando ya acompañaba el ritmo de mi mano con su cadera, y me quité el pantalón, no estaba seguro de si era la 1º vez que me la vio totalmente tiesa, pero sus ojos se abrieron como platos mirándola mientras se mordía el labio, aun moviendo las caderas pese a que yo ya no la tocaba, era ella quien se masturbaba sola, me subí a la cama de rodillas y me puse entre sus piernas, cuando junte nuestras caderas mi polla descansa desde la pelvis hacia su vientre, la pasaba el ombligo, esa visión la hizo estremecerse, caí sobre ella y la besaba mientras ella se movía frotándose contra mi, mi rabo notaba su cuerpo.

-YO: ¿estas preparada?

-IRENE: si, por dios, hazlo de una vez - su cara lo pedía a gritos, y su cuerpo lo reclamaba.

Me incorporé y la abrí bien de piernas, mojé mi mano en los fluidos de su vagina y la punta de mi polla, bajé la cadera y me puse a su altura, dejando caer mi glande hasta su entrada, y haciendo hueco, apreté, suavemente pero sin parar, ella se dolía echando el cuerpo hacia atrás hasta que entró de golpe, otro grito corto pero intenso, una vez dentro el glande la dejé acostumbrarse, notaba como se abría su interior y mi estaca notaba menos presión, su pecho respiraba de forma desenfrenada , su tetas subían y bajaban sin parar, me coloqué y empujé de nuevo, metiendo milímetro a mililitro, ella se agarraba a lo que pillara, sabanas, almohadas, sus tetas o mi pecho, estaba notando tan bien como yo como se iba abriendo claramente, a mitad de mi tronco paré, y dejé acostumbrar de nuevo a nuestros cuerpos, la presión en su interior era bestial pero ninguno de los dos hacia nada por sacarla.

-.IRENE: ¡¡no pares ahora, sigue por dios!!

-YO: deja que te acostumbres, es demasiado….

-IRENE: sigue, ¡¡te lo ruego!!

Aguanté unos segundos más y seguí presionando, cuando le metía más de ¾ me dolía a mi el glande de la presión pero lo mantuve allí, aquella chica no había follado en mucho tiempo, estaba roja y congestionada, sin parar de moverse de los nervios, la saqué un poco para volver a ese mismo punto una a vez, y un rayo la atravesó, se arqueó su espalda levantándola de la cama para dejarla caer de nuevo, lo volví a repetir un minuto más tarde con el mismo éxito, mi polla ya no estaba en constante presión, decidí no profundizar más y comenzar a disfrutar de aquello, agarrándola de las piernas la sacaba despacio y la volvía a meter, la fricción ya no era impedimento pasadas unas penetraciones y ella gritaba con cada embestida, y solo había empezado, fui acelerando el ritmo hasta que sus pechos rebotaban de la inercia, y agarrándose a las sabanas se corrió sobre mi, estaba muy desenterrada, paré que seco, pero sin sacarla.

-IRENE: ¡¡madre mía, como me llenas, me siento completa, dios, no pares mamonazo sigue!!- se encorvaba intentado metérsela ella sola, pero mi posición era dominante, así que ante su petición volví a embestir y esta vez no paré, no quería hasta que me corriera.

El ritmo la hacia levitar sobre la cama, ya se sujetaba las tetas por no oír como se movían y chocaban entre si, cogía aire con cada golpe y se mordía el labio sin parar, metí la 5º marcha al notar como se mojaba por dentro de nuevo y su cuerpo vibraba con la 2º corrida, en la 3º se salió de mi frotándose y bañando las sabanas con sus fluidos, pero no la di descanso, en cuanto acabó, la volví a abrir de piernas y ahora se la metí sin piedad, yo apretaba mi mandíbula en busca de aguante, llevaba casi media hora sin parar cuando noté el latigazo, y quería que fuera bonito así que mi dedo se fue a su clítoris para frotarlo y así corrernos a la vez, la bañé entera por dentro, llevaba mucho sin eyacular y notaba como sus paredes vaginales se iban llenando con cada sacudida, ella explotó en otro orgasmo que la hizo darse la vuelta sobre la cama. Caí rendido y feliz, había ido mejor de lo que hubiera pensado, y acariciaba a aquella mujer en la espalda, se retorcía por el placer recibido, con pequeñas convulsiones, se sujetaba el coño como si se le fuera a caer.

-YO: ¿estas bien?

-IRENE: ¡¡si, por dios!! ¿que si estoy bien? , mi puto ex no me hizo correrme ni una sola vez y tú en media hora casi me desmayas a orgasmos, eres una bestia.

-YO: jajaja pues te he tratado mejor que a muchas, a mi Leona me la tiro más fuerte aun, durante 4 horas o más.

-IRENE: ¡¿QUE?! No me lo creo, ¿como narices la ibas a querer dejar? - se dio la vuelta recostándose sobre mi pecho- eres un regalo del cielo, eres un buen hombre y follas como un animal.

-YO: ¿otro asalto?- se incorporó mirándome atónita, y la hice ver que mi polla aun quería guerra.

-IRENE: déjame a mí, esta no se queda así.

Se alzó agarrando la polla con las manos, la masturbó con cuidado al inicio y ferocidad después, para mi sorpresa, y sin decir nada, se metió media miembro en la boca, lamía como una posesa el tronco y se la engullía sin problemas, estaba poco entrenada, pero no era una novicia, la dejé hacer hasta que me sacó una corrida, otra bestial, una cantidad que nunca había visto en mi, cuando notó que me corría se la sacó de la boca y la manche todo el vientre, ella se había calentado demasiado y se me tumbo encima besándome el pecho, se abrió de piernas dejando la vara en sus manos y la acariciaba hasta volver a ponerla dura.

-IRENE: ahora quiero que seas malo, que me folles como te follas a las demás.

-YO: ten cuidado con lo que deseas.

La levanté la cintura, le metí mi falo con fuerza, y apoyando bien los pies le di rienda suelta a mi cadera, en esa posición era una ametralladora, me tiré otra media hora sin bajar el ritmo tirándomela como bien podía ser Mercedes o Rocío, sin piedad, la arranqué varios orgasmos antes de volver a sentir que me iba y allí le regalé un último minuto al máximo haciéndola rebotar contra mi, se quedaba suspendida media décima de segundo hasta caer y volver a ser embestida, gritaba como una loca y cuando me corrí dijo alguna que otra guarrada fuera de lugar y de su personalidad, estaba un poco ida, la descabalgué y la tumbé a mi lado, tiritaba un poco así que la acerqué a mi cuerpo y la rodeé para darla calor.

-YO: ¿ves?, es malo recibir lo que deseas - que razón tenía.

Ella no estaba, había caído rendida y dormía a mi lado, así que la seguí en sus sueños, me desperté por que me la encontré chupándomela y con la polla ya tiesa.

-YO: hey, ¿no esperas?

-IRENE: necesito que me vuelas a follar, quiero que me abras, que me la metas toda.

-YO: no me has oído antes con lo de los deseos, ¿no?

Se me volvió a subir encima y se ensartó sola, ya sin dificultad, era ella quien me cabalgaba, la doblé la cintura para que cayera hacia mi mientras giraba su cadera y así la besé, iniciado yo el movimiento, esta vez no me puse freno y desde el inicio la bombeaba sin piedad, no le entraría toda pero la estaba desquiciando, la agarré del culo fuerte y apreté el ritmo hasta volver a sacar de ella gritos y fluidos, llegó a suplicarme que parara pero no lo hice hasta correrme, quería que supiera donde tenia su limite y que era diferente al mío. Aguantó como pudo el chaparrón y al terminar cayó retorciéndose sobre la cama, agarrándose la vagina mientras su espalda temblaba.

-IRENE: eres un animal, me has destrozado, jajajajajaj dios, como follas, esto es demencial, me vas a seguir follando así hasta que me muera.

-YO: siempre que tú quieras, pero yo no quiero follarte, quiero hacerte el amor.

-IRENE: eso es imposible, no puedo comportarme como una novia normal sabiendo que me abres con esa barra de carne, ¡¡y como te mueves!!

Temí que sus palabras fueran en serio, pero las achaqué a aquel momento de lujuria, me levanté dándola un buen beso con lengua y me fui a duchar de nuevo, estaba lleno de jugos suyos y míos, estando en la ducha ella entró conmigo y nos duchamos juntos, no se que buscaba pero casi me la calzo allí otra vez, pero me quería contener, y salí de allí, habíamos quedado, la tuve que casi obligar a salir de casa, salimos de fiesta pero su comportamiento era diferente, ahora se restregaba contra mi como habían hecho todas, al volver a casa fui al baño, al regresar con ella estaba desnuda, a 4 patas pidiendo que me la tirara, supuse que era el momento así que me desnudé y colocándome detrás de ella la empalé, seguimos en esa posición una hora larga hasta que cayó rendida de tanto correrse y yo eyaculé.

Lo que restó de vacaciones de sus padres lo pasamos casi encerrados en su cuarto, solo pedía sexo, y yo estaba encantado, pero me di cuenta que con el paso de los días era más una chica del montón que aquella mujer que me completaba. Gracias a dios acabaron las vacaciones familiares y quedábamos menos, eso relajó sus ansias, pero no había día en que quedáramos para salir, y no me la terminara follando, era exasperaste querer levantarse de la cama y que se me tirara encima de nuevo. La relación cambió, el paso del tiempo afectaba, se perdía la magia, era culpa suya, o mía, por darla lo que pedía.

A los 3 meses me vi viajando en el tiempo, no tenia una novia, no quedamos a salir ni a pasear, ella solo quería follar y cuando tenia su ración de mi, se iba a su casa, se lo advertí repetidamente, que aquello no me gustaba, y ella entendiendo mal el mensaje quiso que me la tirara más y más duro, pero no era eso lo que buscaba. Cuando llegó mi cumpleaños, los 19 a mitad del verano, ella ni se presento a la fiesta y luego me llamó para que fuera a su casa a tirármela, rompí a llorar y mi madre, que ya se lo olía, me preguntó, se lo expliqué y me calmó, como solo ella sabia, me despejó la mente, me aclaré y me dolió tanto que fui a su casa, y la dejé allí mismo, vestida con un picardías que me la puso dura solo al verla, ella se desesperaba por no entenderlo, hasta me ofreció su ano virgen, me besaba y me agarraba la polla por encima de la ropa, como incentivo, me di cuenta que se había perdido, estaba desesperada, colgada por mi, y no entendía que yo no quería sexo, quería una pareja.

-YO: mira, llegado a este punto, no merece la pena seguir, solo me ofreces sexo y para eso vuelvo con mi Leona, ha sido bonito mientras duró, pero no necesito nada de lo que me ofreces.

-IRENE: eres un carbón, seguro que te la estas triando ya y me dejas por que no te hago cosas que ella haría, otra vez me dejan por otra, ¡sois todos iguales!- amagaba con pegarme mientras lloraba.

-YO: piensa lo que quieras, no te he engañado nunca, y por eso vengo aquí hoy, corto contigo, te he querido mientras eras mi novia, ahora no te quiero………….ADIOS.

Me fui sin llorar pero con un dolor en mi interior, no se si había sido ella o yo pero me había cargado la 1º relación de verdad que había tenido, lleno de rabia me fui derecho a casa de mi Leona, sin avisar ni nada, ella me abrió la puerta y se le iluminó la cara, hacia meses que no la veía, ataqué su hombro y la mordí de ofuscación, entendió a lo que venia al mirarme a los ojos, se fue directa a la habitación conmigo detrás, estuve 4 horas follando si parar hasta agotarme y pensar en otras cosas, pero al descansar la imagen de Irene en aquel bus, y la comparativa con la actual, me hizo romper a llorar, me vestí y salí de allí, eran cerca de las 4 de la mañana, dejé a mi Leona allí tirada con cara de preocupación por si era culpa suya, la besé con pasión y la dije que no había hecho nada malo.

Salí a pasear y terminé en aquel parque otra vez, era un imán para atraerme cuando me sentía mi vida a punto de cambiar de idea en mis relaciones, ¿acaso no podía tener una relación normal? ¿Aquella polla enorme no me dejaría? ¿Estaba condenado a ser un trozo de carne para las mujeres? Le di vueltas a aquello hasta que recibí un mensaje en el móvil, era Ana, ”mi prima”, nos mandábamos mensajes contándonos nuestras vidas, me decía que estaba de fiesta, que la habían aceptado en una universidad en Madrid, y que se venia a vivir con nosotros cuando empezara la universidad, eso me cambió el animo de golpe, ella me había dado lo que estaba buscando, fueron 14 días, pero fueron 14 días de los cueles me la tiré la mitad y su actitud fue siempre de novia, de mujer que me completaba. Fue un rayo de esperanza, solo tenia que pasar el verano y a finales de septiembre la tendría a mi lado, me di media vuelta y me fui de nuevo a casa de mi Leona, me abrió triste pero me vio la cara y se alegró de golpe, esta vez me la tiré más de 6 horas y de la energía positiva que me había dado aquel mensaje, la hice desmayarse, y casi yo con ella, me quedé recostado con una sonrisa enorme, agotado y con los sentimientos alocados, pero feliz, tenia un objetivo y un par de meses de diversión antes de llegar.

Alex - La dependienta.

El día de mi 19 cumpleaños fue un momento agridulce, por un lado lo empecé con tristeza por la forma de actuar de Irene, a la que dejé ese día, y luego mejoró por saber que Ana regresaría a la ciudad , esta vez para quedarse, después de la sesión con mi Leona volví a mi casa y hablé con mi madre por la mañana, me dijo que si, que se lo habían comentado hacia un par de días, que estaban pendientes de si la aceptaban, a finales de septiembre se vendría a vivir con nosotros, hasta que encontraran un piso de estudiantes compartido, me llenó de alegría saberlo.

Me libré de un peso de encima, sabía que tenia mi oportunidad con Ana dentro de 2 meses y hasta entonces tenia toda la intención de divertirme, 1º y siempre que quería tenia sesiones duras con mi Leona, pero llevaba meses encerrado en pleno verano por culpa de Irene, pasaron unos días en que ella me llamaba y hablábamos pero mi decisión era irrevocable, y más aun sabiendo lo de Ana, Irene me había absorbido de tal manera que iniciado agosto aun no había pisado una piscina, ni con la familia ni con los amigos, llevaba como 2 meses sin ver a ninguno de ellos, y retomé relaciones, acompañé de nuevo a mi madre a aquel parque en el que solíamos quedar y dejándola con el grupo de madres me fui a la zona donde solíamos quedar, allí estaban, los echaba de menos, me recibieron como uno que volvía de la guerra, se habían enterado de mi romance y mi ruptura, me trataban como a un crío recién destetado, pese a que había sido duro y me trataban con más cariño del habitual, pronto volví a ser yo, aquel joven desvergonzado y alegre, tenia que aprovechar el tiempo. Quería nuevas piezas de caza, y activé el modo depredador, hubo varias en poco tiempo, así que tratare de resumir

Lo 1º que hice fue salir con mi familia a la piscina publica, necesitaba aquello, evadirme y refrescar mi cuerpo, andábamos ya por 43º en Madrid capital, y era domingo, así que preparamos el macuto como hacíamos siempre, temprano para coger sitio ya que se llenaba de gente, con nuestras neveras y bolsas llenas de comida en tupperwares, cubiertos desechables y botellas de refrescos con hielos y aquellas gelatinas azules especiales, para pasar allí todo el día. El 1º problema fue al intentar ponerme los bañadores míos, de antes de la operación, tipo bermudas, mira que son elásticos pero era ridículo, entraban casi 2 como yo, no creía que antes ocupara tanto volumen, aun así, apretándolo con los cordones parecía que aguantaba, el 2º problema fue que no había forma humana de que mi polla y mis huevos quedaran sujetos por aquella redecilla blanca interior, era más una molestia, así que lo arranqué, tenia buena pinta en el espejo y la ser tan amplios me la disimulaban bien, así que fui convencido de que me serviría.

Fuimos solo la familia, pero mi madre invitó a algunas amigas suyas, y por ende a sus hijos e hijas de más a menos edad, algunas chicas de la edad mía, otras menores, hasta niñas de 7 años, y otras mayores que no llegaban a los 25, ya lo había hecho antes, estando gordo ir a la piscina parecía un éxodo, así que no me importaba, quería ver sus caras ante mi nueva figura, al quitarme la camiseta pude notar como todas las miradas de aquellas mujeres se clavaron en mi, y las de mi madre y hermana en ellas, sonriendo sabiendo lo que todas pensaban, “joder, que cambio”.

A mi me gustaba según llegar a las 10-11 irme al agua mientras montaban el campamento base cogiendo sillas y mesas de por allí, así que así lo hice, gracias a mis clases extra escolares era un buen nadador antes, y sin tanto peso encima ahora era aun mejor, aunque debo decir que perdí flotabilidad, fueron llegando las demás, siempre con sus trajes de baño o biquinis según su físico se lo permitiera, me fijé en varias de mi edad o mayores, algunas estaban realmente buenas y enseñaban bastante carne, antes solo eran apreciaciones, ahora eran análisis objetivos de posibilidades, pero andaba peleado con el bañador, había mucha tela sobrante y se inflaba con el agua, se me salía el rabo por las perneras, eso no lo tenia pensado, pude colocármelo y estando mi cintura por debajo del agua no se notaria nunca. Como siempre empezábamos con un paseo en grupo, riéndonos de las mayores que se acercaban y los críos le tiraban agua desde la piscina y de cómo se metían por las escaleras despacio, templando el cuerpo y no del tirón como hacíamos los jóvenes, la cantidad de veces que estando como una bola me tiraba en plan bomba a su lado para empaparlas, luego en grupo paseábamos mientras los niños jugaban alrededor y las más pequeñas eran sujetadas por sus madres en zonas más profundas, era aun domingo, aquello estaba desierto al llegar pero al pasar 2 horas era un río de gente, a estas alturas ya muchas se habían salido para ir a cuidar las cosas y otras , las más cercanas a mi edad, salían a secarse al sol en las toallas, bajándose los tirantes de los biquinis y remangando la parte de abajo, dejando más cantidad de piel al sol y a la vista.

Yo las miraba y luego miraba a las típicas tías buenas que siempre pululan por allí, y notaba como algunas me miraban a mi en el agua, era una sensación nueva, hasta ahora me miraban si querían reírse o se asombraban de lo gordo que estaba, ahora me miraban como cuando yo las miraba a ellas hacia 1 año largo, decidiendo cuan mono o apetecible era. Llegó la hora de comer y pese a que andábamos aun unos chicos y una chica en el agua, nos llamaron a filas, estabamos jugando con una pelota, según se iban saliendo nos las iban tirando y la ultima quedó entre la chica y yo, cuando fui a por ella apareció buceando y la cogió, peleé con ella por cogerla, de forma realmente inocente, pero estaba muy buena y el frote hizo que se me hinchara un poco la polla, debió notarlo por que se le cortó la risa de golpe, me miro dejando de pelear y haciendo un giro leve de cadera sintiendo mi verga endureciéndose en su piel, tiró la pelota lejos, yo la solté pensando que se había rendido o algo, fui a por la pelota mientras ella salía. Llegó mi madre con una cuchara para servir en la mano llamándome la atención delante de todos para que saliera ya, como era ella y como era yo , nos gustaba montar numeritos, con todo el grupo mirándonos y riendo, media piscina igual, salí del agua del tirón, se cortó el bullicio, oí hasta algún suspiro de asombro, me quedé pensando, ya me habían visto sin camiseta, ahora solo estaba mojado, todas las tías de la zona me miraban llevándose la mano a la boca, y las que no, eran avisadas por otras y todos los tíos miraban disimuladamente, aquello solo podría significar una cosa.

-MADRE: anda quédate quieto y deja que te traiga tu hermana una toalla - se puso en medio tapándome e hizo gestos a mi hermana, que leyéndola la mente, ya venia con una - toma, sécate y tápate el bañador.

Miré hacia abajo y caí de golpe, aquellos bañadores eran de tela fina e impermeables, pero cuando se mojaban se pegaban a la piel, como si fueras envasado al vacío, y yo no llevaba la redecilla blanca, se me marcaba la polla algo morcillona en toda la pernera izquierda, traté de estirar la tela pero eso solo llamaba más la atención sobre el hecho. Llegó mi hermana toda roja y riéndose, me tapé y me la puse atada a la cintura muerto de vergüenza, pero con un poco de humor y orgullo tiré hacia delante, haciendo el saludo final de una actuación de teatro. El tema de la comida no fue otro que yo y mi operación, con mis cambios físicos incluidos, no nombraban directamente mi polla pero si hacían alusiones a ella, sobretodo la chica con la que me había peleado en el agua, se generó una atmósfera rara pero divertida, de esas en las que me desenvolvía bien. Al terminar de comer ya estaba seco, yo solía meterme en el agua para cortarme la digestión, pero mi madre me dio mi monedero y me dijo que me fuera a la entrada de la piscina, que había una tienda de bañadores y me cogiera algo más……discreto. Iba a salir en dirección a la puerta, con el bañador y la camiseta puesta, pero estaba llena de gente, algunas me miraban, y otras me saludaban cariñosamente, oía al grupo reírse por ello de fondo, me cansé de esperar y para hacer la gracia ya que soy un payasete, cogí el camino corto, me tiré al agua y crucé por la piscina con el monedero y una toalla en alto para que no se mojaran, con el grupo tronchándose de fondo, mi madre roja y mi hermana casi sin poder respirar de la risa, al salir del agua se repitió la escena, algún tío me vitoreaba, otros me llamaban chulo, y algún grupo de mujeres también, me di una vuelta para dejar que todos me vieran, y salí orgulloso colocándome la toalla en la cintura. Es lo mismo que hacia con mi barriga antes, usarla como objeto cómico para sobrellevar el complejo, pero ahora era mi pene.

Dejé atrás la piscina hasta llegar a la entrada, allí había una tienda de ropa de baño, objetos y juguetes para la piscina, a esas alturas de agosto yo debía ser el único que necesitaba algo de allí por que estaba sin gente y totalmente abandonada, pero abierta, entré preguntando sin recibir respuesta, mirando que podía ponerme, hasta que apareció al rato una muchacha, vestida con el polo de la piscina, con su chapa de identificación, y una caja en las manos, debía pesar y me ofrecí a llevársela.

-YO: hola buenas, deja que te eche una mano…..- miré la chapa-…..Alejandra, ¿no?

-ALEX: si, Alex si quieres, pero no hace falta….. - no la dejé responder y se la quité de las manos.

-YO: ¿donde te la dejo?

-ALEX: allí, en ese estante de arriba, muchas gracias - la dejé allí.

-YO: de nada mujer, es más, no hace falta que me las des, necesito tu ayuda - noté como me comía con los ojos, gran parte de la camiseta se me había mojado y se me pegaba al cuerpo, “joder, ya soy un tío mono”, me gustó.

-ALEX: ¿pues dígame en que puedo ayudarle? - repasé su cuerpo, era joven, de unos 24 años, algo baja, de 1,65, coleta rubia que le caía hasta los hombros, el polo de la piscina le quedaba algo ajustado y le hacia buenas tetas, de hecho al chapa le colgaba como si fuera un piercing en el pezón, y llevaba unos shorts cortos, marrones, enseñando bastante pierna, en zapatillas, estaba buena.

-YO: verás Alex, lo primero es que me llames Raúl, y no me trates de usted, por dios, que me sacas 4 años - asintió sonriendo - he venido hoy por 1º vez a la piscina desde hace mucho y había perdido bastante peso, aun así me he atrevido a venir con un bañador viejo, pero…….

-ALEX: pero se te cae, pasa mucho al inicio de verano, ¿pero a estas alturas?

-YO: bueno, digamos que mi ex me tenia algo ocupado, pero no, no es que se me caiga, aunque ahora que lo dices también , verás……….- no sabia si contárselo, pero si quiera ayuda tenia que decírselo, y me estaba gustando como me miraba aquella mujer así que…- me he metido en el agua y al salir…..

Me quité la toalla, su mirada fue la misma que la de todas, clavada en mi polla, totalmente marcada bajo la tela, se mordió el labio de inmediato, sus ojos casi se le salen de las órbitas y estuvo un minuto así.

-YO: Alex, a mi me da igual, de hecho ya me ha visto así media piscina, pero resulta que le da reparos a mi familia, me preguntaba si podrías echarme una mano para evitar esto.

-ALEX: bueno…esto…tenemos…dios…..varias tipos, digo varios tipos de bañadores……pero no se…..no se me ocurre nada especial para……ocultar……eso.

-YO: pues por eso necesito tu ayuda, tengo que probarme cosas y comprobar que en mojado no se me marque tanto.

-ALEX: eso no hay problema, tenemos ahí detrás un probador con desagüe y manguera, pero, no me refería a poder ayudarte, es que no creo que tengamos nada para poder…..tapártela - su mirada no se elevó en ningún momento, le hablaba a mi entrepierna, quería jugar con ella y ya la tenia ganada.

-YO: mira, yo me voy para allí atrás, y me voy desnudando, tu tráeme bañadores y me los voy probando, me mojas y me vas diciendo que tal, ¿de acuerdo?- asintió encantada.

-ALEX: voy a cerrar, no vaya a ser que entre otro cliente y te vea – “jajajaa si, claro”

Lo hice tal cual, me fui a la parte de atrás mientras ella echaba el cierre, la oía coger prendas mientras yo me desnudaba entero, no se si ella esperaría que me hubiera dejado la toalla y me fuera cambiando con ella puesta, pero al volver cargada de bañadores, se el cayeron al suelo al verme de pie en pelota picada delante de ella, se puso roja al agacharse a recogerlos, mirando de reojo, me los medio tiró y se iba a salir de allí.

-YO: ¿Dónde vas?, quédate aquí y coge la manguera, así me los voy probando mientras me mojas y no andas entrando y saliendo todo el rato, si ya no puedes ver más, ¿no? jajaja - dudó, pero haciendo como que no miraba mientras cogía la manguera, miraba obscenamente.- ¿por donde empezamos?

-ALEX: no sé, tú verás.

Me puse un calco del que tenia puesto pero más de mi talla, me agarraba la polla mientras me los ponía y luego la colocaba.

-YO: nada, se me sale por los lados, es igual que el mío, por eso le quité la redecilla. A ver, mójame por probar - encendió la manguera y me enchufo gustosa, aparte de no sujetármela se me marcaba casi igual.

-ALEX: si es que como para que no se te salga –murmuró - no hemos avanzado mucho, venga, quítatelo y prueba otro.- entraba al trapo, lo estaba disfrutando.

Me lo quité y me probé otros, iguales, en todos pasaba lo mismo.

-ALEX: a ver, si con esto sujetamos un poco más, son los turbo paquete - eran casi slips.

Me lo puso y era obsceno, sujetar sujetaba, pero se me marcaba una barbaridad y cuando me mojó ya era un evidencia.

-YO: pues no creo que eso ayude mucho.

-ALEX: no, no, pero te quedan genial jajajajajjaja.- reía de nervios, y ya jugaba mojándome cuando no tenia por que hacerlo, incluso se acercó colocándome la prenda, sentir sus manos ajustando la licra y su mirada perdida en mi entrepierna me estaba calentando y se notaba a la legua, rozaba cuidadosamente mi abultado paquete - a ver, pruébate uno de los normales con ese puesto.

-YO: ¿como?- sabia lo que quería decir, pero pretendía atraerla.

-ALEX: si, que te pongas uno encima del otro, anda déjame…… - resuelta ante mi incompetencia, supongo que sabia que era una trampa, pero cayó de todas formas.

De forma clara y evidente me puso la mano encima de la polla y fingía colocarme bien el bañador, cuando se cansó del paripé, se agachó ante mi y cogiendo una de las bermudas me la fue poniendo, yo no tenían la más mínima intención de ayudarla, lo estaba haciendo muy bien sola, pegándose a mi cuerpo mientras me los ponía, terminó volviendo a recolocar lo que ya estaba colocado. Se separó y miró orgullosa de su trabajo, cogió la manguera y me empapó entero.

-ALEX: ¡¡eureka!! Mira, la llevas bien sujeta y no se te nota nada empalmado, digo empapado……. es una lastima a mi entender, pero lo hemos logrado - levantó la mano para chocar los 5, no la iba a dejar colgada pero al chocar las manos la abracé con fuerza pegándola a mi agradeciéndoselo, estaba empapado y mi pelvis se rozó con su vientre, la dejé allí lo suficiente como para al separarse tuviera el polo empapado y pegado al cuerpo.

-YO: huy perdona, no me di cuenta.

-ALEX: no pasa nada, ahora me cambio, tengo más aquí - y sin más se quitó el polo delante de mi, dejándome ver su torso, y sus tetas, con la parte de arriba de un biquini.

-YO: vaya, ¿tú también llevas biquini aquí?

-ALEX: claro, así cuando no hay trabajo y aprieta el calor nos damos un chapuzón – se aseguró de que mirara mientras se amasaba los senos debajo del biquini - ainnns, mira me he mojado también el pantalón - y diciendo eso se lo quitó de espaldas a mi sin doblar las rodillas, regalándome una visión de su trasero espectacular, el biquini era azul y tapaba lo justo, lo mejor fue ver como al agacharse la parte de su coño del biquini ya estaba mojada, y no era agua,

-YO: vaya, no estas nada mal, eres una preciosidad, lo sabes ¿no?

-ALEX: muchas gracias, aunque tengo algo de complejo en las tetas – se dio la vuelta apretándoselas -, ¿tú que opinas?

-YO: que como no dejes de hacer eso no existe bañador que me disimule la erección.

-ALEX: JAJAJAJAJJA que majo eres, jajaja, ¿así que aun no estaba erecta?

-YO: que va, esto crece aun más.- sabia por donde iba desde hacia tiempo.

-ALEX: ¿y que puedo hacer para ayudar a comprobar si estando tiesa se te nota? – “dios, vaya joyita me he encontrado”, se acercó a mi dejado que su tetas me rozaran.

-YO: no sé, yo te he hecho de modelo, ¿que tal si tu haces lo mismo? - la rodeé con la cintura pegando su cuerpo al mío, mirándola hacia abajo, hacia sus ojos.

-ALEX: que buena idea.

-YO: pero hay que ser justos, las condiciones serán las mismas, te desnudarás por completo, y te irás probando biquinis delante de mí mientras te voy mojando. ¿De acuerdo?- asintió y salió disparada a por biquinis.

Volvió cargada, y con algún reparo se quitó el que llevaba puesto, las tetas era cierto que se le habían caído un poco, pero tenía un polvo de la leche, no tenia nada de bello y unos pezones pequeños que estaban durísimos y erectos. Se fue probando un montón, bañadores, triquinis, biquinis y otros solo la parte de abajo, cada vez de formas más sugerentes o pidiéndome ayuda para atarse algunos, luego la mojaba, cada uno más pequeño que el anterior, el último ya no era un biquini, eran hilo con pedazos de tela sueltos en los pezones y en el puvis, tipo tanga.

-ALEX: bueno, si ya con este no te la pongo dura no se que más hacer.

-YO: me la has puesto dura desde el 1º.

-ALEX: que malo ¿y por que me has dejado seguir?

-YO: por que tienes una preciosidad de cuerpo, te voy a folla aquí y ahora - se sorprendió de la rudeza pero era lo que quería oír- ¿pero dime se me nota o no? Por que la noto a reventar.

-ALEX: pues en realidad no, soy buena dependienta. Jejejejeje - se le borró la sonrisa cuando me quitó los 2 bañadores y vio mi polla en erección apuntándola, así impresionaba más.

Me acerqué a ella y cuando la alcancé doblé mi polla para no atravesarla el estomago, seguí avanzando hasta dejarla de espaldas a una pared y allí la besé, el 1º de tanteo, y el 2º ya fue arranque de pasión, mientras ella se sujetaba contra la pared la rompí el tanga y la masajeaba las tetas, la calenté tanto que llevó su mano a mi falo y se deslizó hacia abajo, quedando su cara a su altura, y moviéndola, con los ojos fuera de si, comenzó a masturbarla con fuerza, para después llevársela a la boca, la chupaba de cine, lamía el glande como una experta, me encendió y pasé al ataque, la cogí de los brazos y de un tirón la levanté por los aires apoyándola contra la pared, ella se agarró a una barra del techo y quedó con su pelvis a la altura de mi cabeza, conmigo de pie, la pasé las piernas por mis hombros y le comí el coño como mejor sabia hacerlo, cuando estaba empapada metí mis dedos buscando su interior, ya gemía poseída, la bajé con cuidado y la puse de espaldas, bajé mi cintura y busqué su coño con la punta de mi miembro, cuando localicé la entrada apreté y entró fácil, estaba mojadísima, pero eso no evitó que se pusiera de puntillas al ir clavándole toda mi estaca, di gracias a dios por que a la 2º embestida le entraba toda, y allí aceleré la marcha, acariciaba su cuerpo aplastado contra la pared mientras no paraba de bombear, a los 15 minutos me regaló su 1º corrida pero seguí, con cada golpe de cadera ella se elevaba del suelo y volvía a caer, notaba como sus fluidos caían por mi pelvis y facilitaban aun más la entrada en ella, cuando busqué su cuello para besarla se derritió y cayó el 2º orgasmo, esta vez paré el ritmo, y la dejé descansar, se la saqué y la di la vuelta, besándola, la volví a subir por los aires, a medio cuerpo y dejándola apoyada contra la pared, la volví a hundir, ahora de cara, me rodeó con la piernas y yo la agarraba de las tetas, pellizcando sus pezones, me hipnotizaban como botaban delante de mi, y mientras me agachaba para besarla ella gemía de placer, mis embestidas ya eran totales y profundas, la golpeaba contra la pared haciéndola rebotar, a la hora ya sentía correrme y ella flaqueaba debido a los múltiples orgasmos, aceleré el último minuto para acabar pronto y la saqué de ella dejándola caer, medio ida me la chupó mientras me corría en su cara.

-YO: vaya, tendré que pasarme por aquí más a menudo, el trato es exquisito.

-ALEX: cuando quieras, búscame, ya te ayudaré como pueda.

La levanté del suelo y nos mojé a los 2 para quedar aseados, me costó no volver a trincármela cuando se metió la manguera entre los muslos para limpiarse por dentro, pero andaba diciéndola lo de la vasectomía.

-YO: bueno, al final me tendré que llevar los 2, ¿no?, y el que he roto tuyo, ¿por cuanto me va a salir?

-ALEX: nada, llévatelos, has hecho que el día me cunda jajajaja.

-YO: ¿seguro, no te meterás en líos?

-ALEX: los jefes ya ni se pasan a estas altura de verano, se la suda, ya han hecho caja, tú tranquilo, y ya sabes, ven a verme - me dio otro beso de escándalo antes de volver a vestirnos y abrir para salir.

Salí de allí con los 2 bañadores puestos y en una bolsa todos mis enseres, regresé cuando estaban ya terminado la partida de cartas típica antes de volver al agua.

-MADRE: ¡vaya, mira quien se digna!, ¿donde estabas?

-YO: pues comprándome el bañador que me has dicho, mira como me queda - me quité la toalla y aparte de no notarse nada, quedaba bien.- yo me voy al agua ya, ¿quien se apunta? - todas las tías en edad de procrear, incluida alguna madre, me siguió, también algunos chicos, pero una vez en el agua ellos se desperdigaron y me vi rodeado por al menso 5 mujeres queriendo “jugar” a ahogarme, me cuesta recordar un momento en mi vida en el que tantas mujeres me estuvieran metiendo mano a la vez.

Era grande y fuerte y no era fácil tirarme, ya jugábamos a eso antes, pero ahora los agarres y los intentos eran diferentes, ya no buscaban meterme debajo del agua, si no frotarse contra mi, una de las madres me puso las tetas en la polla directamente agarrándose a mi culo como si le fuera la vida en ello, yo me dejaba ahogar hasta ese momento, otras 3 se aprovecharon y me metieron debajo del agua, una vez allí noté como al menos 5 manos me sobaron la polla, cuando salí me tuve que recolocar el bañador, mientras ellas reían.

-YO: ahora es mi turno – las palabras provocaron algún gemido ahogado de las 5 mujeres que me rodeaban a menos de 1 metro de mí, alguna hasta sacaba pecho de forma sensual.

Me lancé a por todas ellas, si querían jugar, íbamos a jugar todos, al inicio solo de una en una, las cogía de la cintura y haciendo fuerza con la pelvis las hundía repetidas veces, metiéndolas mano de forma clara, mi polla entre sus nalgas se hacia sentir y ellas se dejaban magrear como vulgares putas de carretera, no me creía que una madre, delante de su hija de 12 años, a la que conocía desde hacia 10 años, de golpe me dejara meter la mano en su coño por dentro de la tela y no solo no se molestara si no que se abría de piernas para dejarme meterla un dedo, o que una universitaria que había pasado de mi como la mierda toda mi vida ahora me cogiera de la mano y me la pusiera en sus tetas.

Luego quisieron hacer fuerza entre varias, pero yo estaba desatado, tenia a una colgada de cada brazo y otra intentando tirarme y aun así las hundía a todas sin compasión, agarrando tetas, culos y coños a 2 manos, a una de las de 25 años le quité la parte de arriba, y lejos de taparse luchó por recuperar la prenda pegando sus tetas desnudas a mi, la hice darme 4 besos largos con lengua y dejarme acariciar y lamer sus pequeños senos hasta devolvérselo, me di cuenta de que podía hacer lo que quisiera con la mujer que me diera la gana, tenia a todas en mi poder, aquello lo demostraba.

Pasaron los minutos y ya solo quedábamos una chica y yo, casualmente la de la pelota de la mañana, ella estaba agotada pero no se rendía, lanzaba ataques blandos, siempre la daba la vuelta y la apretaba el culo contra mi polla, que estaba como una piedra, la metía mano en las tetas, ya no de forma accidental, sino agarraba y apretaba, pellizcaba sus pezones y ella se quejaba diciendo que si no me daba vergüenza, yo la contestaba que era ella la que estaba restregándose desde hace una hora contra mi, se “enfadó” y sus ataques eran feroces, saltaba encima mía de cara, para quedar colgada del aire cuando la cogía de la cintura o el culo, dando besitos a sus tetas o su ombligo, sin dejar de amasarla el trasero, reía disimulando que bajo el agua mis dedos acariciaban su clítoris. Los ataques cesaron y la fui llevando a la zona más alejada y profunda, donde no nos veían los demás, allí ya directamente pegué contra la pared de la piscina y la besé, ella al inicio no quería, pero me rodeaba con las piernas para sujetarse ya que no hacia pie, y yo si, notaba mi bulto palpitando en su pelvis, la metía mano por debajo del biquini y dios la libró de que hubiera más gente allí, si no la hubiera quitado el biquini y me la hubiera tirado en el agua, y según se movía ella, lo estaba deseando. Nos separamos un poco cuando vi que se acercaba el grupo de nuevo, la metí las tetas de nuevo en el biquini y me fijé en un par de mirones que babeaban por allí, mujeres incluidas.

Al regresar a casa éramos tantos que alguna debía ir sentada encima mía, casi se matan por hacerlo, pero ganó aquella joven de la pelota, al llegar a casa la invité a salir a dar una vuelta, y la llevé a casa de mi Leona, que andaba fuera, allí me desnudé por completo nada más entrar, me di la vuelta para que me la viera, y la invité al dormitorio, entró desnuda y se me abalanzó encima, la regalé unas 2 buenas horas de sexo animal, hasta que se medio iba, lo tenia muy cerrado y no le entraba ni la mitad, pero fue suficiente. Llegó mi Leona y viendo a aquella muchacha abierta, rota e ida, se me tiró encima también, jaleando como la leona que era y bramando sobre que solo ella podía colmar a su león. A ella le di sus 4 horas de sexo duro con la otra durmiendo al lado.

El depredador había vuelto, en menos de 12 horas había pasado 7 follándome a 3 mujeres distintas.

Yasmine – La colombiana.

De aquel amplio grupo del parque, quedaban pocas chicas sin pareja, una de ellas era Yasmine, una joven de nuestra edad, que habíamos arrancado de las garras de las bandas latinas, ella era colombiana aunque llevaba toda su vida aquí, tenia algo de acento, se lo pegaba su madre, decía palabras raras o les cambia la entonación sin darse cuenta, a los 15 se enamoró perdidamente de un chico 3 años mayor, que era de una banda, salió con él un tiempo, pero la dejó al no meterse en la banda. Mi madre y la suya eran amigas, la conocíamos desde críos así que a duras penas logramos hacer que no se metiera en ese mundo, se llegó a enganchar a los porros pero también lo había dejado, aunque seguía loca por aquel tío, pese a saber que era un maleante.

Físicamente era una bomba sexual latina, su forma de vestir era diseñada para provocar, pelo largo, negro y ondulado, pero se lo teñía de rubia para dar contraste con su tez morena, piel de caramelo, se ponía coletas y trenzas dejando caer algún mechón sobre su flequillo, pero cuando se lo dejaba sin sujetar era una espectáculo, ojos negros y labios carnosos, guapa a rabiar, con pómulos altos y una boca enorme, era delgada y con un cuerpo fino, pero resaltaban sus curvas, ella presumía de un 90-60-90, pero yo le calculaba que andaría por el 90-55-95, era un ocho, tetas bien colocadas y una cadera de infarto, unidas por una cintura diminuta, con un vientre plano y trabajado, solía llevar alguna chaquetilla o blusa corta abierta, con un top corto o incluso en verano sujetadores deportivos, dejando que sus senos rebosaran y su vientre al aire, llevó un piercing en el ombligo un tiempo pero se lo había quitado, además de un tatuaje de una flor en un hombro. Sus caderas eran de cine, además sabia lucirlas, siempre llevaba pantalones vaqueros, o de tela, de tiro bajo, se le marcaba el puente entre las piernas y hasta el camel toe claramente, y la cintura de aquellas prendas casi no subía de su pelvis, su huesos de la cadera sobresalían un poco, haciendo de puente con la cintura del pantalón, eso por delante, por detrás era peor, ya que tenia un culo de 1º nivel, y con el tiro tan bajo, no es que se le venían claramente esas dos marcas al final de los riñones, es que hasta le gustaba que se le viera el nacimiento de sus glúteos y el comienzo de la separación de sus nalgas, no se como lo hacia, pero por mucho que se moviera o agachara, nunca se le veía ropa interior, o no llevaba o era diminuta. Llenaba de sobra la ropa que se pusiera, y cuando se ponía los vaqueros semi elásticos iba empalmando gente. Su poción corporal no ayudaba, vivía echada hacia atrás, su torso siempre era como si estuviera mirándose el ombligo, eso disimulaba sus buenas tetas pero cuando se cuadraba y se ponía recta con los dos pies en el suelo y la cintura recta, le hacia un culo de campeonato, con todo el arco entre sus peinas bien marcado.

Los tíos la huían un poco por su relación con las bandas pese a que en realidad, salvo a aquel chico, no tenia ninguna relación, nos llevábamos de cine, le encantaba usarme como bobo para sentirse bien, la halagaba siempre, pidiéndome que la mirara como le quedaba la ropa o que mi fijara en ella bailando, se movía como la famosa cantante colombiana que todos tenéis en mente, y se parecía en realidad, creo que la imitaba para atraer al personal. La relación cambió después de mi operación, ella se mostraba más cariñosa, antes me llamaba amor o tesoro, y ahora ”papasito” o papi, era de los pocos que no le tenia miedo a las bandas así que era de los que mejor me llevaba con ella, antes incluso de la operación.

Cuando tratábamos de que no se metiera en la banda, vinieron un grupo de ellos a buscarla, como ella no se quería ir con ellos, la insultaban y tenia a un crío de 10 años que la daba patadas, yo no me aguanté y me encaré con ellos, tenia a mis colegas detrás pero solo yo me puse en pie, con más acojone que otra cosa les increpé su actitud y que no debían dejar que aquel crío la pegara, por suerte no se lo tomaron muy mal y todo se quedó en una conversión amistosa y unos cachetes en mi cara, que el bulo del boca a boca hizo crecer hasta que se decía que me habían dado una paliza. Ella me lo agradeció sincera, no era sencillo huir de ellos.

En fin que me alargo, fue la 1º que al verme se lanzó a mis brazos, estaba muy feliz de volverme a ver, sin mi, el resto no la hacia tanto caso, y mientras no estabamos todos juntos ella se pegaba a mi para reír y hablar, ya me había contado que su padre era un magnate de negocios que nunca estaba en casa, pero que la mantenía a ella y a su madre en una gran posición económica, tenían un piso enorme de esos como cerradura por tarjeta electrónica, con terraza gigante y piscina propia, de su madre ya os hablaré, pero nosotros la llamábamos la Sofía Vergara del barrio. Pasaron los días y los lazos entre ella y yo se cerraban hasta el punto de que más de una vez la vi mordiéndose el labio mientras nos despedíamos al acompañarla a su casa, con mis famosos abrazos, mi mirada se fijó en ella y no pensé que hubiera un objetivo mejor al que tirarse.

La invité a un día de piscina con los amigos, sin la familia de por medio, ya llevaba el doble bañador por protección, y menos mal, si aquella chica era una bomba sexual latina vestida, en biquini le paraba el marcapasos a más de 1, no solo era que la parte de arriba era minúscula y encima se las levantaba un montón, si no que la parte de abajo era de tanga casi, en si no estaría ideado para serlo, era uno de esos de medio culo, pero con sus caderas y su trasero lo convertían en ello, inmediatamente todas las miradas del grupo y de la piscina se clavaron en ella, hoy era la diosa del lugar, y pese a algunos intentos de chulos de piscina y de algún colega, ella no se separaba de mi, casi la tuve que atar para que me dejara irme a tirarme a Alex a la tienda. Incluso me usaba como parapeto diciendo que estaba conmigo cuando estabamos tirados al sol, y me pedía que la echara crema en la espalda desabrochándose el biquini por la espalda, yo ni me lo pensé y me puse de rodillas en sus piernas, con mi polla roznado su terso trasero, y me esmeré en sus cuidados, tuve que fingir un calambre para alejarme un poco, el roce con mi polla me la había puesto durísima. Me tumbé a su lado conmigo boca abajo para disimular un poco.

-YO: como sigas diciendo eso de que estoy contigo, al final me lo voy a tener que creer.

-YASMINE: ay papasito, muchas gracias, no sabes lo cansado que es botar a hombre tras hombre.

-YO: nada mujer, pero vamos, que viniendo como vienes no se que esperabas….

-YASMINE: ¿a que se refiere?

-YO: no me jodas, eres un pivón y me vienes con ese mini biquini, que me la pones dura hasta mí.

-YASMINE: jajajaja que malo eres, que le pasa al biquini, ¿queda feo? - se miraba colocándose las tetas.

-YO: ¿feo? No es la palabra, llamativo, atrayente, pero no feo.

-YASMINE: bueno pero una tiene que coger color del sol, ¿si no ahora, cuando?

-YO: no, si razón llevas, pero no entiendo por que no sales con alguno de esos, si eres libre.

-YASMINE: ya papi, ya sabe que mi corazón le pertenece a otro.

-YO: pues es una pena, por que hombres como yo removerían cielo y tierra por una mujer como tú.

-YASMINE: no me diga eso que me pongo colorada - se abanicaba la cara.

-YO: tú verás pero estas perdiendo el tiempo por un tipo que no te merece - torneó sus ojos, no sabía si era por el sol o por que vio algo nuevo en mí.

La cuestión es que aparecieron mis amigos recién salidos del agua y nos llevaron a rastras a la piscina, queriendo tirarnos al agua, a la pobre Yasmine la hicieran volar, pero a mi no, es más, les tiraba yo al agua mientras ella nos echaba agua a nosotros desde la piscina, uno de ellos se picó conmigo y siempre que le tiraba al agua salía más cabreado, lo hizo unas 10 veces hasta que al final me dejé y abrazados caímos los 2 al agua, una vez allí quisieron jugar a poner a alguien encima del otro y a ver quien tiraba a quien, por compensar mi fuerza a mi me tocó Yasmine y jugamos sin problemas, yo me metía debajo del agua y ella se me subía a los hombros, al subir quedaba sentara en mi nuca, y la agarraba los muslos para sujetarla, no pesaba casi nada, así que solo tenia que dejar que el resto se fuera cansando para ganar, pero vinieron unos amigos, 2 chicos uno encima del otro, jugaron sucio y al final la tiraron a ella y por no hacerla daño, caí con ella, salimos riéndonos mientras ellos festejaban su victoria, y mientras Yasmine se quitaba el agua de la cara me fijé en que se la había salido una teta, tenia un pezón pequeño y oscuro, y antes de que lo viera alguien más me lancé a abrazarla, ella lo hizo igual sin entender el por que, la cogí de la cintura y en volandas tapándola la llevé contra una de las paredes, ella me rodeó con sus piernas, se sentía cómoda así, no sé, cuando llegué a la pared preguntó.

-YASMINE: papito, ¿a donde me llevas?

-YO: solo te alejo discretamente, para que los demás no noten que se te ha salido un pecho - me miró a los ojos sorprendida, y luego bajó la vista para cerciorase, se la colocó como toda una señora, con estilo y sin prisa, para volver a mirarme a los ojos.

-YASMINE: ay papito, muchas gracias, ya puedes soltarme.

-YO: es que ahora no me apetece, estoy muy a gusto así, ¿tú no? - mi tono de voz cambio.

-YASMINE: como no mi amor, que menos que quedar rodeada por los brazos de mi salvador – plantó sus manos en mis grandes brazos, no hacia nada de ejercicio pero se me empezaba a notar un cuerpo definido.

-YO: sabes, pese al agua y el cloro, hueles genial, como a flores silvestres.

-YASMINE: ¿si? Lo notaste, es un champú nuevo, ay cariño, como me gusta que te des cuenta de estas cosas - se apretó contra mi, yo a esas alturas ya tenia una erección considerable.

-YO: no entiendo a los hombres de este mundo, como una mujer como tú puede estar sola, ese imbécil del que andas ”encoñada” debería de dejar la banda por estar con alguien como tú.

-YASMINE: no siga por favor, me pone triste.

-YO: no lo digo para ponerte triste, quiero que sepas que eres una joya y que yo mataría a 100 hombres por pasar una noche contigo - me miró, observando la serenidad y calma de mis palabras

-YASMINE: ¿en serio usted cree eso?

-YO: lo creemos todos, y la única que lo impide eres tú, por tu tozudez con un hombre que como te he dicho, si aun no se ha dado cuenta de ti, es que no te merece - fui bajando mis labios a su cara.

-YASMINE: que cosas tan bonitas me dice - acercó sus carnosos labios a los míos.

-YO: si una mujer como usted me concediera el honor de su amor, la haría la mujer más feliz del mundo a cada minuto - la besé, un beso cortó y sincero, esperando ver su respuesta.

-YASMINE: papasote como me pone - ahora fue ella la que me besó, y sin mediar palabra me metió la lengua hasta la laringe, “dios, como besa”, la seguía el ritmo de su lengua a duras penas, mientras la acariciaba las piernas debajo del agua.

Estuvimos así unos minutos, con ella agarrándome del cuello, juntando nuestras bocas, notaba sus pechos en mi cuerpo, hasta sus pezones duros a través de la tela de su biquini, y ahora no solo me rodeaba con las piernas, sino que me apretaba contra ella, apretaba y soltaba, con un leve sube y baja sobre mi, notando mi polla tiesa encerrada bajo los 2 bañadores. Llevó una de sus manos a ella, y la acariciaba por encima de la tela.

-YASMINE: ¡mamasota, que pedazo de verga!

-YO: es toda tuya, aquí y ahora si quieres - la cogía de la cintura pegándola contra mí - solo dime que lo deseas - no decía nada, solo callaba y me besaba bajando la intensidad.

-YASMINE: aquí no mi amor, luego vamos a mi casa, me vas abrir la concha con tu pedazo de vergota – al susurrármelo en el oído casi hace que me corra.

Pasamos casi una hora en esa posición, besándola y acariciándola, la sujetaba del culo mientras se lo abría y se lo cerraba, ella metía su mano debajo del agua, por dentro del bañador, acariciando por encima la piel de mi tronco, que sensación más deliciosa, ese calor de sexo contrastaba con el agua fría, alguna madre aburrida hasta nos llamó la atención, la hicimos caso omiso. Al salir del agua nos tumbamos al sol, y nos mirábamos sin parar, yo la acariciaba la espalda con mis dedos, haciéndola tener escalofríos, se le marcaban los pezones claramente, duros bajo la tela húmeda, los vi al darse la vuelta y quedarse boca arriba, se colocó la parte de abajo del biquini separando la parte delantera y pude ver como iba completamente rasurada, lo hizo a posta. Nos incorporamos a juntarnos con los demás, mientras jugaban a las cartas, incluida ella, yo era un admirador de su cuerpo, aquel pelo largo y rubio teñido le goteaba en la espalda, y veía aquellas gotas caer por su piel, al ir a cambrianos me tuve que ir a ver a Alex y tirármela de nuevo un buen rato hasta correrme para no ir empalmado todo el camino en bus, ya que ninguno tenia coche aun, me quité el slip ya que me hacia mucha presión y solo iba con las bermudas, mientras no me volviera a mojar no pasaría nada. El viaje en bus fue sensual, me recordó a Irene, esas caricias inocentes pero dirigidas, apenas se había puesto una camiseta corta de no le tocaba la piel por debajo de las tetas, le colgaba, y unos shorts que ni se molestó en cerrar con los cordajes del biquini sobresaliendo pro encima, la metí mano por debajo de la camiseta, llegando a sus pechos, tirando de ella, de su culo, hasta que casi la tenia en vilo y no se apoyaba en el asiento, jugando con mi lengua en su cuello.

-YO: ¿y que vamos ha hacer en tu casa?

-YASMINE: podemos seguir con el juego en el agua, sabes que tengo piscina.

-YO: podemos hacerlo, pero no me contentaré con ello, quiero que seas mía, así que más vale que no esté nadie en casa.

-YASMINE: ay papi, no se preocupe, solo esta mi mama, no se altere.

Fuimos caminando con mi mano metido dentro de sus shorts, agarrando su trasero y apretándolo, con ella abrazada a mi torso, notaba como vibraba su culo con cada pisada, y en los semáforos nos besábamos, al llegar a su casa en el ascensor, para subir al ático donde vivía, la subí encima mía, a horcajadas, agarrando y magreando sus espectaculares posaderas, restregando su vientre con mi polla morcillona, noté como al agarrarme de los hombros me tiraba, me había quemado un poco con el sol, aquella hora con la espalda al aire contra ella me había pasado factura, pero no me importaba.

Al entrar lo hizo gritando, avisando a su madre de nuestra llegada, y de que íbamos a la piscina, vi como su madre bajaba por las escaleras, era una diosa, una señora embutida en un vestido corto de noche, con tacones y peinada a la perfección, según estaba podía entrar en cualquier club de campo o fiesta de noche. Era una mujer voluptuosa, siempre iba con amplios escotes enseñando la mercancía y vestidos, o elásticos pegados a su cuerpo o ligeros dándole vuelo a sus movimientos, ya la había visto muchas veces y era una autentica MILF, tendría unos 39 años, y casi mi altura, ayudada de los tacones claro, fue motivo de risas, comentarios y más de una paja en todos los chicos del grupo, que su actitud fuera jovial y más cercana a los adolescentes que a las madres no ayudaba. Tenia clase pero le gustaba que la miraran con lujuria así que sus movimientos y vestimenta estaban dirigidos a lograr eso. Al bajar las escaleras sus tetas elevadas por un sujetador apretado botaban mientras aceleraba el ritmo al verme a mi, se llevaba muy bien con mi madre, y por ende conmigo, se llamaba Eleonor.

-ELEONOR: hola amores, ¿como estáis, que tal el día de baño?

-YO: buenas tardes, muy bien, aunque nos hemos quedado con ganas de más.

-YASMINE: si mami, vamos a la piscina de casa, aun hace sol y queremos refrescarnos, ¿si? – vio como nos agarrábamos de la mano y adivinó que no solo queríamos mojarnos en la piscina, que había sensualidad en las intenciones.

-ELEONOR: claro, es una gran idea, toda vuestra, pero déjame que hable antes con Raúl, hace mucho que nos veíamos, ¡vaya galán estas hecho, cariño! - lo dijo mientras llegó a nosotros y me abrazó, de la forma inocente pero sensual que ella lograba, y yo ayudaba con mis abrazos del oso, frotándome los brazos y el pecho admirando el cambio que había dado.

-YO: pues eso me dicen, no vea usted como me miran ahora en la piscina, jajajaja.

-YASMINE: bueno mama, no nos entretengas, que se nos va a pasar el sol.

-YO: no seas brusca, solo esta siendo amable conmigo, aparte de la belleza innata tendrías que heredar algo más de esta señora - cogí de los hombros a Eleonor, mostrándola como ejemplo, mientras ella reía y me hacia gestos de que parara aquellas adulaciones.

-ELEONOR: no sea bobo, y váyanse al agua – y una idea se me cruzó en la cabeza, una idea que me iba a joder la vida de una forma inimaginable, pero que me pareció buena en ese momento.

-YO: tiene usted razón, pero es injusto que los disfrutemos solos, ¿por que no nos acompaña? - Yasmine me miró atónita.

-ELEONOR: ay amor, no sé, es mejor que se queden solos y disfruten de lo que queda de tarde, yo solo soy una vieja aburrida.

-YO: no me mienta, usted no tiene nada de vieja, y si esta aburrida que mejor que pasar una tarde calurosa en su piscina, no se que hace aquí en su casa, encerrada, teniendo ese regalo.

-ELEONOR: no sé, nunca la suelo usar, no se ni si tengo traje de baño siquiera.

-YASMINE: te puedo dejar alguno mío - me sorprendió que entrara al trapo.

-ELEONOR: cariño no bromeé, ¿como me va a entrar a mí un traje suyo?, miré que cuerpo tiene.

-YO: pues el suyo no le anda a la zaga, hágame ese favor, ¿que tipo de invitado seria si me divierto yo en su piscina y la anfitriona no? - la apreté los hombros para convencerla.

-ELEONOR: esta bien, pero no se le ocurra burlarse de mi, me voy a buscar que ponerme, ustedes adelántense - me quedé embobado mirando su trasero subir por las escaleras.

-YASMINE: ¿se puede saber que hace? ¿Para que la invita?

-YO: es tu madre, solo quería ser amable, tú sabrás, eres la que la ha dicho lo de tus biquinis.

-YASMINE: solo quería quitárnosla de encima, cuando vea como le quedan desistirá, ande vayamos al agua.

La seguí mientras se desvestía, deseando que se equivocara, aquellos días en la piscina me habían demostrado que podía tener a la mujer que quisiera, y un combo madre e hija seria ideal. Pero aunque fuera así y me equivocara, tenia a aquella bomba latina dispuesta a todo, se metió al agua y yo detrás de ella quitándome la mochila y la camiseta, al principio solo nadábamos pero ante la tardanza de su madre fui a por ella, como en la piscina publica, la pegué a una pared y entrelazamos nuestras lenguas, restregándonos, ahora con mi polla suelta bajo el bañador, sin el tipo slips, frotándola contra sus mulos, acariciando sus piernas bajo el agua y dándola un pequeño meneo contra mi, haciéndola ir de delante a atrás, sacándola un pecho y bajando mis labios hasta su pezón, eso hizo que sus movimientos de cadera fueran lentos y evidentes contra mi miembro semi erecto, estuve así hasta que me pidió que le diera todo, entonces metí mi mano por delante de su pelvis, bajo el bañador, y la agarré el coño con fuerza, se elevó sobre mi cuerpo, y mientras la acariciaba podía notar el calor en mi mano pese el agua fría, más aun cuando le separaba los labios mayores con las yemas de mis dedos, estaba empezando a gemir cuando oí a mi espalda que se abría la puerta, ante ese sonido ella se tapó el pecho libre metiéndolo en su sitio de nuevo, yo giré mi cabeza sin sacar la mano de su interior, era su madre, y pese a que tenia a una latina caliente agarrada la pelvis, fue la visión de su madre la que me la puso dura.

Iba con unas gafas de sol enormes y un sombrero, un pareo transparente a su cintura y en tacones, no se como, pero había logrado ponerse un biquini de su hija, y lo increíble es que hubiera salido así, le quedaba ridículamente pequeño en el pecho, se le salía la carne de sus tetas por todos lados, por debajo incluido, le tapaban los pezones lo justo, casi se le intuía las aureolas por encima, y le tenia la tetas aplastadas contra su cuerpo de la presión, con las líneas de las tiras marcados sobre su pecho y haciendo puente entre ellos, de aquella visión y de solo pensar como le quedaría la parte de abajo volví a mover la mano, bajo el agua, en la vagina de la hija de aquella diosa sureña. Yasmine ni la miraba directamente, solo se tapaba con mi cuerpo relamiéndose de placer por los movimientos de mi mano.

-ELEONOR: ¿que? ¿no me mire así? ¡Ya le dije que no se riera!, me queda un poco justo, ¿no? - se dio una vuelta para que la viera bien, terminando con un golpe de cadera dándose una palmada en el culo.

-YO: ¡que va!, ¿usted ve que me ría? le queda perfecto, casi mejor que a su hija - era mentira, era obsceno, desmesurado, casi guarro, sin duda ella lo sabía, y aun así decidido salir vestida de esa forma.

-ELEONOR: Ustedes sigan que yo voy a usar una de las hamaca para coger un poco de sol, que hace mucho que no me brilla la piel - parecía mentira pero su tono de piel era moreno, pero muy pálido.

Se tumbó de cara al sol mientras yo movía a su hija contra la pared, cerca de ella, tapando mis movimientos con el ángulo muerto de la piscina, ella solo podía ver la nuca de su hija y a mi de cara, hasta el pecho. Sin sacar la mano ni dejar de moverla en su interior de su bañador, la besaba con los ojos abiertos, mirando como su madre se pringaba de crema solar, los brazos, el vientre trabajado, el pecho, las piernas, se abrió el pareo un poco para llegar bien a sus muslos, “dios” , estaba dando golpes de cadera inconscientes contra su hija solo de aquella visión, me mató cuando se metió las manos dentro del pecho del biquini, colocándoselas como hacen las mujeres, primero una y luego otra, dejándoselas lo mejor colocadas posibles, allí no aguanté más y desaté el lateral del biquini de su hija, bajándome el bañador, ella callaba pero estaba gimoteando de ganas, la tenia al punto exacto así que dirigí mi enorme polla a su trabajado coño y apreté hasta penétrala, debido a sus amplias caderas y mis manualidades entró más de la mitad sin problemas, sacándola un gemido largo y continuado que acallé besándola, la dejé allí, quieta, empalada mientras la besaba y veía a su madre tirada al sol, brillando de la crema puesta, agarrando con una mano el culo tremendo de aquella chiquilla y con otra una de sus tetas, yo no me movía, pero fue ella la que empezó a apretarse y separase de mi, solo la cadera, por encima del agua no se notaba nada, lo hacia de forma calmada pero con movimientos amplios, me apoyé contra el borde de la piscina para ser un punto fijo sobre el que ella se movía, jadeaba de pasión mientras yo la tapaba la boca con mi lengua, pese a una leve marejada a nuestro alrededor no se notaba nada por encima del agua de la maravilla de follada que me estaba regalando aquella latina por debajo, agarrándola de un muslo con la mano, yo también quería moverme, así que hacia fuerza contra ella, no podía dejar de besarla o sus gritos de placer llamarían la atención de su madre, aceleró tanto el ritmo de sus caderas que a los 10 minutos de estar así se corrió, noté como una corriente eléctrica pasaba de ella a mi, y la dejé así, ensartada, y agotada, dejando que su boca cogiera aire sobre mi pecho.

-YO: dios, como te mueves.

-YASMINE: usted no ha visto nada aun, cuando no este mi mami delante, va a saber lo que es bueno - me mordía en el pecho.

-YO: bueno, pero por ahora yo no me puedo quedar así, sigamos hasta que me corra.

Sin movernos más que antes ahora era yo quien la penetraba, ella no podía moverse más sin llamar la atención, no lograba pasar de aquella mitad de mi miembro pero bastaba para arrancarla algún orgasmo ahogado, literalmente, la hundía para que gritara y la volvía a subir, sin parar de bombear aun debajo del agua, estuve media hora así, notando como clavaba sus uñas en mi quemada espalda, aguanté, tirándome a la hija, que se movía como una bailarina exótica y clavando mi mirada en el cuerpo de su madre. Cuando Eleonor se dio la vuelta para quedar boca abajo en la hamaca, se quitó el pareo y pude ver como llevaba el mismo tipo de braga/tanga/medio culo, pero si a su hija le quedaba pequeño, a ella directamente se le metía en el culo, se puso crema en las piernas y el culo, pero no se llegaba a la espalda, aun así el movimiento de sus carnes separadas por la tela siendo movidas por ella me llevó a un acelerón final, y ya, dada la vuelta su madre sin poder vernos, hacia que el cuerpo de su hija saliera del agua con cada envestida, la saqué un orgasmo más antes de correrme dentro de aquella bomba sexual.

La di un ultimo beso con lengua casi arrancándola la cabeza, si no hubiera estado tan bien sujeta, y la saqué mi lanza, perdiendo fuelle en el agua, me puse el bañador y até su biquini, con su coño al rojo vivo, que rezumaba mi semen.

-YASMINE: ¡vaya verga papasote, como me hace vibrar, ay mi señor, como me lo va ha hacer pasar!

-YO: no te asombres tanto que aun no me he puesto serio contigo - la levanté la mirada para dejar claro que aun había más - me voy a salir a hablar con tu madre, tú quédate aquí descansando, ¿ok? - asintió sumisa, ya seria mía cuando yo quisiera.

Eleonor – Seducción de mi perdición.

Me salí de agua con la polla flácida pero aun así se marcaba grande sin el 2º bañador puesto debajo, me acerqué a ella en silencio y colocándome a su lado me incorporé dejando que cayeron algunas gotas sobre su cuerpo, ella se sobresaltó por la sensación y se dio la vuelta mirándome.

-ELEONOR: ¡ay carajo, no sea malo, no me moje¡ - noté como el sol a mi espalda la cegaba pese a las gafas, se las quitó por que no veía bien, y entonces me vio mi torso desnudo - vaya, si que has cambiado cariño, estas increíble.

-YO: usted si que esta increíble, ha sido capaz de alejarme de los brazos de su hija por venir a ayudarla

-ELEONOR: ¿ayudarme en…….- repasó mi cuerpo y vio mi polla claramente envasada al 0 en mi pernera izquierda-…..que?

-YO: he visto que no se llegaba a la espalda con la crema, así que me ofrezco voluntario para ayudarla - sonrío sin apartar la vista de mi paquete.

-ELEONOR: muchas gracias amor, no quiero quemarme - con mucha lentitud volvió a poner la cabeza mirando hacia abajo, mirando de reojo mi polla.

Me puse encima de ella, a la altura de sus rodillas pasando una pierna por encima de ella quedando una a cada lado, me senté en sus muslos, pidiéndola que si la hacia daño me avisara, pero no dijo nada, ni cuando mi polla cayó por el peso sobre uno de sus muslos, cogí el bote y eché crema en mis manos, las froté y comencé un masaje inocente al inicio, repasando sus hombros y su parte alta de la espalda, luego fui bajando por su cuerpo, sin dejar una brizna de piel sin repasar, metí mis manos por detrás de los cordones del biquini, separándolos de su cuerpo, acariciando hasta la zona de sus costillas, para luego seguir en sus riñones, con gestos amplios y apretando su piel, llegando incluso a rozar sus glúteos con mis dedos, su respiración era agitada, y no paraba de recolocar su cuerpo, era una delicia ver su trasero temblar bajo mi cuerpo.

-YO: vaya, creo que ya esta, pero he notado que tiene usted la espalda muy dura, tienen unas bolas tremendas en los músculos.

-ELEONOR: amor, ya lo se, no sabe como me duele la espalda, cargo mucho peso.

-YO: ¿una señora como usted?, no la veo cargando cajas.

-ELEONOR: jajaja no es eso cariño, es que…..bueno, mi espalda se resiente, son muchos años con el peso de mi…..cuerpo y….

-YO: sus preciosos pechos, supongo, son grandes y bien colocados, eso debe generarla mucha tensión en la espalda – giró su cabeza ante mi atrevimiento, pero sonreía.

-ELEONOR: justo eso amor, me duele todo el tiempo.

-YO: ¿me deja que la haga un masaje?, dicen que tengo buenas manos.

-ELEONOR: no sé, no quiero molestarte….

-YO: no es molestia, se lo juro, ni mucho menos, seria un honor, para compensar su hospitalidad.

-ELEONOR: bueno, pero tenga cuidado - no me creía lo fácil que resultó.

-YO: tranquila, como le digo mis manos son una maravilla, pero necesito algo pero no quiero incomodarla.

-ELEONOR: dime amor.

-YO: para que sea efectivo necesito llegar bien a los músculos y para ello necesitaría que…. se desatara…. la parte de atrás….. del biquini, para poder llegar bien - ella se quedó quieta unos segundos, temí haberme propasado, pero llevó su mano atrás buscando uno de los cordones - déjeme a mi, si me da permiso.

-ELEONOR: claro cariño, muchas gracias.

Me embadurné las manos de nuevo, dejando el bote en una mesilla a la altura de su cabeza, así cada vez que tuviera que cogerlo y dejarlo, apretaría mi pelvis contra su trasero. Desaté el biquini de la espalda, lo hice dejando tensos los cordones, notando como sostenían sus enormes tetas, y soltándolos de golpe, sus pechos caían un poco, pero veía como quedaban aplastados por los lados, luego desaté los cordones de su cuello, apartando su pelo, subí mi cadera un poco, quedando mi polla creciente cerca de su trasero, y me dediqué a trabajarla la espalda, gracias al entrenamiento de Eli sabia como masajear los músculos que se le carga a las mujeres en la espalda, de forma profesional, y como relajarlos, noté como se iban deshaciendo los nudos de sus músculos entre mis dedos, y cuando lo hacían ella gemía de gusto.

-ELEONOR: ay papi….. si que tiene buena…. mano…. ummmmm.- era la 1º vez que pasó a llamarme papi o similar, gemía de gusto.

-YO: ya se lo dije, pero no se mueva que aun no hemos ni empezado, tiene usted un buen lío aquí atrás - me reía por que me refería a mi, no a su espalda.

Ella se relajó mucho, al punto que estiró sus brazos hacia atrás agarrándome de las rodillas, yo seguía trabajando su hombros y la escápula, apretando fuerte pero sin hacer daño, hasta que notaba la zona destentada y pasaba a otra zona, bajé a su riñones cuando sus dedos acariciaban mis rodillas y apretaba contra ella, hacia arriba, mientras apretaba su riñones, hundía mis puños en ellos como me habían enseñado, para curvarla la espalda, hasta que sonaran sus vértebras, cuando sonaron, suspiró de la impresión y luego de placer, casi no debía notar mi polla dura recostada sobre sus glúteos.

-ELEONOR: ¡¡ay amor mío, que gusto, por dios, me has dejado nueva!!!

-YO: me alegro de haber ayudado, de verdad que tenia usted un buen atasco, venga, póngase en pie y verá que diferencia - la cogí de una de las manos y tiré de ella fuerte hasta ponerla de pie, sabia de sobra que tenia el biquini sin atar así que al hacerlo quedó con las tetas al aire, mirándome, se las tapó con una sola mano puesto que no la soltaba la otra, dejándola en alto - ¿que? ¿Como se siente? – quería desviar la atención sobre el hecho de que se las había visto, y estaba semi desnuda delante de mi, “¡vaya par de tetas!”, serian operadas pero de clínica cara, que espectáculo, con unos pezones enormes y negros - ¿mejor verdad? - ella me miraba la polla tiesa y claramente notoria con el bañador aun húmedo.

-ELEONOR: ufff ….si que me noto……. mucho mejor, no noto nada de…… tensión, eres un ángel, pero déjeme…….- la interrumpí por que sabia lo que quería, taparse.

-YO: me alegro por que ahora necesito su ayuda, me he quemado la espalda esta tarde y me vendría bien que me devolviera el favor - pasé mi mano por encima de ella sin soltarla, dándola una vuelta de baile evitando que se agachara a coger la parte de arriba del biquini, y me tumbé donde estaba ella hacia segundos, me esmeré en que fuera evidente que tenia que torcerme la polla para poder tumbarme, y de dejar la parte de arriba de su biquini debajo de mi cuerpo, sin posibilidad de que lo pudiera coger sin pedirme que me incorporara - por favor, me empieza a doler un poco.

Ella dudó bastante, se había quedado en la posición en que la había dejado, con una mano en alto y con el otro brazo tapándose los pezones, no le daba para más, me miró la espalda y era cierto, estaba roja y quemada, con las marcas de uñas de su hija, pero nada malo, ella se fue a agachar para coger el bote pero no llegaba, estaba en una mesa al otro lado de la hamaca, tapándose con una mano y los tacones, era imposible.

-YO: no se preocupe, no se vaya a caer, póngase como yo y siéntese en mis piernas, que no me hará daño - debió parecerla buena idea, y mirándome para asegurarse de que yo no la veía, que si lo hacia en el reflejo de la puerta corredera del otro lado, y mirando al alrededor para cerciorase que no había nadie mirando, que siendo un ático y de un edifico alto no había ningún bloque por encima de nosotros cerca, se soltó la mano de sus pechos, no le cayeron casi nada, era claro que era operados pero era un trabajo de 1º nivel.

Se la oía andar, con sus tacones retumbando en el suelo, hasta mis pies, allí se abrió de piernas y fue caminando con dificultad hasta quedar a la altura de mi culo y se sentó dejándome bajo ella, bien abierta de piernas debido a mi corpulencia. Trató de alcanzar el bote de crema sin inclinarse mucho, no llegaba.

-ELEONOR: amor, acérqueme el bote que no alcanzo - fingí ayudarla pero al mover el brazo sesteaba con la boca exagerando que me dolía la espalda, - no, espérese, déjelo, que no le duela, ya me estiro.

Fue una delicia ver como se recostaba sobre mi hasta llegar a rozar con sus tetas mi espalda, al notarlo se retiró y se las agarró para levantarlas y volver a estirarse, me rozaba con el brazo pero aun así no llegaba, se tenia que apoyar con una mano y coger el bote con la otra, así que liberó su mano apoyándose en mi espalda, a lo que reaccione con sorpresa, “joder”, realmente me escocía.

-ELEONOR: perdóneme amor, ya acabo - llevó su mano a apoyarse en la hamaca, al lado de mi cabeza, y arqueando su espalda por no darse con una sombrilla cogió el bote, frotándome las tetas contra la espalda, eso me excitó sobre manera, pero no reaccioné.

Extendió crema en uno de los dorsos de su mano, y repitió operación frotándose los pezones conmigo cada vez que lo hacia, recogió con ambas manos la crema de su dorso y me hizo un buen masaje en los hombros y la parte alta de la espalda, la zona más afectada, al principio era inocente, como una madre, pero con el paso de los segundos sus dedos recorrían mi fuerte espalda con dedicación, yo admiraba sus gestos viendo el reflejo en el cristal, como su pecho sobresalía cuando juntaba sus brazos, la pinta era de 2 balones de rugby, de vez en cuando iba a por el bote y al ir y volver notaba sus tetas mojándose de la crema de mi espalda, me di cuenta de que podía perfectamente coger el bote y dejarlo en el suelo o en la hamaca para no tener que volver a estirarse, pero o no se dio cuenta ella o no quería, en ninguno de los casos seria yo quien la parara.

-ELEONOR: creo que ya terminé mi amor, ¿como se siente?

-YO: en la gloria, ahora un bañito y como en el cielo.

-ELEONOR: pero ahora no puede, espérese a que la piel absorba la crema, o no hará efecto.

-YO: cierto, ¿sabe? podría darme un masaje usted también, para hacer tiempo, mi espalda si que ha sufrido por el peso mucho tiempo jejejeje – aludí a mi viejo truco de reírme de mi peso.

-ELEONOR: jajajajja, claro mi amor, además mis manos también son buenas, o al menos eso decía mi marido - inició un masaje reparador, era cierto, sabia lo que se hacia.

-YO: ¿decía? ni que se hubiera muerto…

-ELEONOR: como si lo estuviera cariño, llevamos 2 meses sin verle y cuando viene solo habla de trabajo y de cómo le va a nuestra pequeña, pero ya no es el hombre del que me enamoré - su tono era de autentica pena.

-YO: pues déjeme decirle que para mi esta loco, no se que tipo de trabajo le lleva a alejarse de una mujer como usted, un mujer de verdad, yo lo dejaría todo por estar con usted 1 minuto.

-ELEONOR: ay amor, muchas gracias, pero no creo que sea solo el trabajo.

-YO: no me diga que….

-ELEONOR: si, o eso supongo, era un hombre muy….cariñoso, y ahora después de meses sin vernos, viene y ni me toca, se va sin que pueda casi besarlo, un hombre no se comporta así si no tiene sus líos por ahí, ¿no cree?

-YO: desde luego, pero ya no es que nos comportemos así, es que aunque tuviera un harén de super modelos y actrices porno para el solo, yo vuelvo a casa, la veo a usted y me faltaría tiempo para matarla a polvos.

-ELEONOR: jajajaja no sea bruto - sus caricias aumentaban en fuerza e intensidad en mi espalda.

-YO: le soy sincero, ya me conoce, si de verdad no la toca es un imbécil de campeonato - me la jugué por que era su marido.

-ELEONOR: ya lo sé cariño, pero es un buen hombre, poderoso y rico, me sacó de Colombia y me ha dado una buena vida a mi y a mi hija, no sé, vivo con la esperanza de que aquel hombre cariñoso vuelva algún día.

-YO: ¿y mientras?, ¿se marchita encerrada en esta prisión de lujo? Usted vale mucho más que eso.

Siguió en silencio con su masaje, que ya no era tal, solo me acariciaba la espalda con sus dedos y tardaba mucho en coger el maldito bote, restregando sus tetas de forma clara, hasta el punto en que notaba como se separaban al apretarlas contra mi.

-ELEONOR: ya esta amor, creo que ya puedes ir al agua, uffff estas ardiendo, hace mucho calor ¿verdad? yo lo tengo - se puso en pie apoyándose en mi culo, y noté como lo hacia para meter mano y no de apoyo real.

-YO: pues si, me ha dejado caliente con su masaje, debería cóbrame jajaja – sonreía, me puse en pie con mi erección notoria pero con el bañador ya seco, ella me la miraba y se medio tapaba con las manos en los senos, pero sin mucho esmero. Quiso rodearme para ir a por la parte de arriba del biquini, no la debía dejar - ¿pero en vez de dinero por que no se viene al agua con nosotros?

-ELEONOR: ay no amor, no quiero molestarles - yo me había puesto en medio así que no podía acceder a la hamaca sin restregarse contra mi sus tetas desnudas y mi polla – déjeme que….- la volví a cortar.

-YO: no diga bobadas, ha dicho que tenia calor así que vamos al agua ahora mismo - la cogí en brazos como para meterla en una inauguración de una casa, ella reía pidiendo que la dejara en el suelo, pero yo la llevé al borde de la piscina, dándola con mi polla en su trasero, golpeando entre sus nalgas separadas por el tanga del bañador, de forma clara, al inicio se sujetó al cuello con una sola mano tapándose pero como se caía se tuvo que soltar los pechos y agarrarse con ambas manos en el cuello, dejándome la visión espectacular directa de su tetas apretadas por la posición.

-ELEONOR: por favor, no sea malo, no me haga esto – sus ojos le brillaban como nunca se los había visto.

-YO: dígame que no tiene calor ahora mismo de forma sincera y la dejaré irse, de lo contrario ya puede ir quitándose los zapatos y el sombrero, por que nos vamos al agua a la de 3………- lo dije mirándole a los ojos, eran de un negro carbón, profundos y rogándome con la mirada.

-ELEONOR: calor si tengo mi amor, pero…..

-YO: a la de 1……

-ELEONOR: ¡no por favor, déjeme! jajajajajja.- se quitó el sombrero mientras reía.

-YO: a la de 2…..- balanceaba su cuerpo para coger impulso frotándome contra ella.

-ELEONOR: ¡NO! JAJAJAJAJA ¡pare! jajaja - lo hubiera hecho si no se hubiera quitado los zapatos con los pies.

-YO: ¡y a la de 3!

-ELEONOR: ¡ahhhh!- se tapó la nariz con un mano dejando uno de sus pechos estirado ante mi.

Salté al agua midiendo bien los espacios para caer en la zona profunda para evitar accidentes, lejos de su hija que seguía en el agua recuperándose del polvo que la había metido hacia un rato, mientras reía por la situación. Apoyé los pies en el suelo y sin soltarla me puse en pie para quedar con ella en brazos igual pero ya en el agua, con medio cuerpo fuera, totalmente empapada, y el agua escurriéndose entre sus tetas mientras se apartaba el pelo de la cara, riéndose.

-ELEONOR: ay papasito que malo es usted, mire como estoy - mirándome a los ojos, con cara de pasión, si no estuviera su hija delante me habría besado, lo tenia claro.

-YO: esta usted preciosa, como una verdadera señora, sin complejos ni prejuicios - su mirada empezaba a denotar que le daba igual que su hija estuviera allí.

-ELEONOR: ande bájeme Raúl, y déjeme bañarme tranquila - lo hice, la solté las piernas, pero no su cintura, así que bajó sobre su eje hasta darse con las piernas con mi rabo tieso, solo entonces la solté, y se quedó así unos segundos, sonriendo mientras me miraba fijamente.

-YO: yo la bajo, pero ni loco la voy a dejar tranquila - la di un buen beso en la mejilla, pasando peligrosamente al lado de sus labios, ella hasta hizo el gesto de recibirlo en ellos, pero la haría suplicarme, lo tenía todo claro en la cabeza.

Me separé de ella, restregando todo mi miembro, para ir a por su hija, que pululaba por allí, la agarré de la cintura y la pegué a mi dándola un beso de tornillo, sonoro y evidente, para que su madre viera lo que se perdía, dejando que mi polla casi atravesara por el estomago a Yasmine.

-YO: mira a tu madre lo moderna y divertida que es, bañándose en 'top-less' y tu aquí tan tapadita, deberías de aprender de ella.

-YASMINE: ya te gustara a ti papi - la metí la mano en el culo, por debajo del bañador, acariciándola el coño por detrás, debajo del agua.

-YO: ¿que pasa?, ¿tienes miedo a que tenga mejor aspecto ella que tú? - Eleonor flotaba en el agua mirando con atención.

-YASMINE: no es eso tonto, ….uf….es que no se mi me siento…… cómoda - mis caricias subacuáticas la estaba encendiendo otra vez.

-YO: ¿Estas de broma?, eres un espectáculo de mujer, verás como no es para tanto, ¿verdad Eleonor?

-ELEONOR: claro que si boba, mire que yo nunca lo he hecho pero estoy encantada, anda no seas aguafiestas - ante la insistencia de su madre callaba.

-YO: venga, ya te ayudo yo - metí mi mano libre en su espalda y desaté el biquini, para sacarlo por su cabeza, sin dejar de acariciarla el coño por detrás, se mordía el labio de lujuria, “dios, vaya par de tetas”, eran diferentes, jóvenes y naturales, tersas, miré a las de su madre sin disimulo alguno – veis, no tenéis nada que envidiar una a la otra, soy un hombre afortunado.

Diciendo esto me subí encima a Yasmine , tan arriba que se veía mi mano en su trasero, y me dio por chuparle uno de sus pechos, como un beso corto, para después darla un azote en él, delante de los ojos abiertos de su madre, y si bien no lo veía, se intuía que se había metido la mano en el bañador y se frotaba, la visión de su hija semi desnuda montando a un hombre que le chupaba las tetas y tenia su mano metida por detrás del bañador y se movía en su interior, era demasiado para ella.

-YASMINE: no sea malo conmigo, que esta mi madre delante - se retorcía entre mis manos con mis caricias en su vagina.

-YO: no seas tú mala, ya la he dicho que es su casa y que no molesta a nadie.

-ELEONOR: claro que no, ustedes sigan que yo me refresco un poco.

Seguí metiéndole mano a su hija, besándola el pecho, la hacia un dedo delante de su madre, que se mojaba las tetas con una mano y se las apretaba disimulando sus miradas hacia nosotros, tenia los pezones tan duros y salientes que era obsceno, sin duda seguía masturbándose ella sola bajo el agua. Esa visión me aceleró la mano hasta arrancarla un orgasmo a Yasmine, gritó como una posesa llamando la atención de su madre.

-YO: bueno, ya que estamos los 3 ¿por que no jugamos a algo? - bajé a Yasmine de mi, casi ida, podía haberla dicho lo que fuera y ella aceptaría.

-ELEONOR: ay si por fa, yo también quiero divertirme.

-YO: vamos a jugar al marco polo, ya sabéis, uno cierra los ojos y da vueltas para desorientarse, el resto se dispersa y se queda quieto, el del centro grita marco, y el resto polo, y tiene que ir a ciegas siguiendo la voz hasta atrapar a alguien, si lo hace antes de 4 gritos, gana, y si no, pierde.

-ELEONOR: ay si, me encanta - daba palmas, supongo que dándose cuenta de que sus tetas chapoteaban en el agua.

-YASMINE: c-claro, ¿por que no? - seguía ida.

-YO: bien, pero ya no somos críos, ganar merece recompensa y perder castigo, jugaremos una vez todos, el que gane tiene derecho a una aguadilla a los demás, y a una petición de la que los otros 2 no pueden negarse, si pierde tiene que dejarse ahogar y tiene que hacer una petición conjunta de los otros 2, lo que le digan, sin poder negarse tampoco. Las peticiones al acabar. ¿Queda claro?

-ELEONOR: si, si, vamos, yo quiero ser la 1º en el medio - Yasmine colaboraba casi sin darse cuenta, Eleonor de ilusión y ya tenia a las 2 en mi mano.

-YO: esta bien, pero yo al conocer el juego ya, seré el 1º, luego Eleonor y después Yasmine, pero no podemos mirar, así que para no hacer trampas nos taparemos los ojos - pensé en quitarme el bañador y usarlo, pero estaba saliendo todo muy bien y no quería pasarme, así que salí del agua y cogí una toalla, dejando que a la vuelta mi polla tiesa fuera admirada por ambas bajo la tela húmeda.

Me tiré al agua de cabeza y buceé hasta emerger en el centro, allí enrollé la toalla húmeda, la escurrí y me la puse en los ojos atándola con algo de firmeza a escasos milímetros de Eleonor, de hecho juraría que la di con la cabeza en una teta, ella reía y le repetía las normas, mientras se aseguraba de que no veía nada, la hablaba, estaba tan cerca que le agarré el culo sin disimulo, a lo que ella reaccionó riendo, como si no pasara, al terminar le pedí que se colocaran, di unos segundos para dar tiempo, y empecé, al gritar marco, noté donde estaban claramente cada una, pero debía pensar, ¿quien quería que me debiera un favor? Yasmine comía de mi mano ya, así que me fui a por Eleonor, al 2º marco ya la tenia bien ubicada, en el 3º ya la rocé un hombro y tirando de ubicación espacial, la agarré decidido un pecho.

-ELEONOR: jajajaja me atrapaste - me cogía de la mano, pero no la apartaba de su seno, moví mis dedos hasta rozar unos de sus tiesos pezones.

-YO: ¡gané!, así que mientras me pienso que pedir, toca aguadilla, ¡¡allá voy!!

Agarré de un brazo a Eleonor y la di la vuelta, mientras no paraba de reír, rodeé su cintura con un brazo pegando mi polla tiesa en su trasero, luego bajé mi mano a su culo, pasando claramente por él, y agarré por su muslo, tiré de ella hacia arriba y mientras se tapaba la nariz, la hundí sin soltarla, de forma suave y segura, al subirla mis manos fueron solas, la de cintura a uno de sus pechos y la otra de su muslo a una de sus nalgas, apretaba. Al dejarla de pie mi polla quedó pillada entre sus piernas, la besé la espalda.

-YO: ahora la hija - me lancé buceando hasta donde estaba Yasmine, casi ni se había movido, e hice exactamente lo mismo.

-ELEONOR: ¡¡ahora yo!!- se puso en medio, yo me acerqué.

La besé en la mejilla, y la puse la toalla, ella se quedó esperando otro beso, girando la cara, buscando con sus labios, pero la quería ardiente de deseo, no le regalaría nada. Me separé besándola en el hombro, ya sin ver nada

-ELEONOR: prepárense que allá voy. ¡MARCO! – respondimos los dos.

Eleonor localizó a su hija rápido, casi no se había movido otra vez, dio un paso hacia ella y repitió la operación, en la 2º la cogió sin más, era muy sencillo.

-ELEONOR: jo que fácil – se quitó la toalla mientras besaba a su hija en la cara, y la ladeaba hasta hundirla en el agua, y si mi polla no estaba ya dura, la mirada que puso al darse la vuelta y mirarme fue el golpe final, se lanzó y buceó hasta mi, amaneció en mi pecho echándose el pelo hacia atrás y con sus tetas en mi cara, encorvándose hacia atrás - tu turno.

Me dejé hacer, levanté los brazos ofreciéndome a ella, se pegó a mi, sin más, apoyó sus tetas en mi pecho y dio un salto para escalarme, sin los tacones era mucho más baja, llegó a meterse mi polla entre sus muslos, y una vez arriba recayó sobre mi, cayendo los dos hacia mi espalda, quedamos así, debajo del agua unos segundos, mirándonos a los ojos entre burbujas, sonriendo, con su mano en mis hombros y las mías en su culo, haciendo aun más grande la separación de sus nalgas ya existente por el tanga, aguantó así hasta que se quedó sin aire, fueron al menos 90 segundos, y subió, aprecié su gran capacidad pulmonar pese a esas tetas, mientras emergía, esto me traería felicidad más adelante.

Le tocó a su hija, pero estaba ida, era un pelele, mi mano la había dejado en estado de shock, ¿o fue el hacerlo delante de su madre?, ¿o que ella reaccionara de esa forma? La puse la toalla mientras la besaba un pecho y luego se lo azotaba de nuevo, “dios”, eran deliciosos. Intentó jugar pero no dio ni una, así que llegó el 4º marco sin atrapar a nadie. Fuimos su madre y yo a la vez y la hundimos una sola vez por no martirizarla, pero en vez de hundirla a ella sola, una vez apretadas una contra la otra, con sus tetas luchando por el espacio, abracé a las dos por detrás de Yasmine, y las hundí, abarcándolas a las dos, mi polla atravesara los muslos de su la hija y tocaba la pelvis de la madre. Al emerger ambas reían, Yasmine había vuelto en si y su madre me acusaba de tramposo.

-ELEONOR: eso no es justo, eres un huevón, has hecho trampa y ahora te castigare con una agudilla extra.

-YO: ¿si te ves capaz………? - se lanzó ofendida, trató de tirarme escalándome de nuevo, pero solo logró pasarme un pecho por la cara, por poco se lo arranco de un mordisco, ella no podía, era demasiado fuerte.

-ELEONOR: ¿que hace ahí parada?, ¡¡ayúdeme que este animal salvaje!! - se dirigía a su hija que se reía sin parar.

Acudió a la llamada de su madre, que cambió de estrategia, y se bajó de mis hombros, pasando sus brazos por dentro de mis piernas intentando tirar hacia arriba, solo logró rozarse con mi polla en el brazo, (quizá era su objetivo), mientras su hija se me tiraba encima como hacia su madre antes, la metí la mano entre sus piernas por detrás, y tiraba hacia arriba casi sacándola del agua, la imagen era arrebatadora, aquellas 2 hembras tratando de moverme sin lograrlo, con la cría colgada en el aire por mi brazo y con su coño atacado por mis dedos, allí pegada y con sus tetas a la altura de mi boca. La situación de la madre no era mejor, frotándose contra mi pierna, apretando contra mi, y separándose sus tetas contra mi cintura, decidí volver a chuparle las tetas a la hija y con la otra mano ahogar a la madre bajo el agua y apretar su cara contra mi polla, las dos se resistan al inicio, pero luego se dejaban, una por el placer que le daba mi lengua y mis dedos, la otra por que la dejaba salir a respirar y luego la volvía a hundir contra mi polla, su cara al salir era de asombro absoluto, y la 3º o 4º hundida, ya no hacia falta que hiciera fuerza, ella sola se sumergía, besando y mordisqueando mi barra de carne a través de la tela. Cuando intentó bajarme el bañador paré, por que no quería eso, aun no, solté a ambas y me fui buceando al borde de la piscina sentándome en el bordillo, con los pies colgando bajo el agua, ellas me siguieron con sus tetas fuera del agua, una colorada de excitación y la otra con los ojos inyectados en lujuria, o las 2 cosas, yo solo veía 2 sirenas sureñas y 4 tetas dirigiéndose a mi.

-YO: bien, repasemos el marcador, Eleonor y yo hemos ganado, así que tenemos un deseo que el resto debe cumplir, y Yasmine ha perdido, así que tiene que aceptar un deseo de Eleonor y mío conjunto, podemos decidirlo ya o guardárnoslo para más adelante.

-YASMINE: espera, los que habéis ganado tenéis un deseo, o un deseo por con cada persona, es decir Raúl ha ganado, ¿tiene un solo deseo para las 2, o un deseo para mi y otro para mi mama?

-ELEONOR: es verdad, en eso no habíamos caído.

-YO: pues como queráis, aunque no es lo mismo tener 1 deseo que 2. ¿lo que vosotras queráis? Por ahora podemos Eleonor y yo decidir que castigo poner a Yasmine.

-ELEONOR: eso, que ya lo tenemos claro, ¿que podemos hacer con mi desamparada hijita? - lo decía mordiéndose el dedo, con sorna y malicia, mientras se ponía entre mis piernas de espaldas, yo la agarré por las costillas, y tirando de brazos la levanté hasta sentarla en una de mis piernas, dejándola allí, agarrada por la cintura, sintiendo como sus nalgas se separaban sobre mi muslo debido al peso, en busca de acomodo.

-YO: pues la verdad es que no ha jugado nada bien, deberíamos ser malos con ella - acariciaba el estomago de la madre mientras veía suplica y cara de niña buena en la hija.

-ELEONOR: es verdad, pero no se me ocurre nada malo que poder hacerle a mi pequeña - echó una mano haca atrás, acariciándome el pelo.

-YASMINE: no seas malos pájaros, no me hagan sufrir – nos quedamos unos segundos pensado mientras yo besaba la espalda y el hombro de Ele.

-YO: yo os aviso de que solo se me ocurren guarradas, así que como Eleonor no tenga una idea pronto no vas a salir bien parada de esta.

-YASMINE: por favor mami, diga algo o me tendré que someter a lo que el diga – hacia bien en suplicar, por que a mi se me estaba pasando por la cabeza el bote de crema solar o cosas así.

-ELEONOR: ay no sé, no me agobie, déjeme…...- buscaba en su mente.

-YO: con prisa, por que mi mente es muy retorcida.

-ELEONOR: ¡esta bien!, ¿que tal si nos hace la cena?, quédese a cenar y dormir aquí esta noche Raúl, y ella será nuestra sirvienta, ¿que le parece?

-YO: bien, es justo, un buen castigo - me lamenté porque estaba apunto de hacer que la hija le hundiera el bote de crema a su madre por la vagina, pero me pareció buen plan - eso si, debe ir vestida como tal, una sirvienta, nos hará la cena y nos la servirá, y será nuestra criada haciendo todo lo que queramos hasta mañana, ¿ok?

-ELEONOR: ¡si!, que buena idea.

-YASMINE: esta bien, pero les digo que no se cocinar muy bien – me partía el culo por dentro, la muy inocente se había ofrecido ser mi esclava toda la noche y le preocupan sus habilidades culinarias.

-ELEONOR: eso da igual, tenemos comida ya preparada, y además la ropa de la mujer que viene a limpiar, oh que bonita vas a estar con el traje típico de limpiadora.

-YO: esta bien, ahora toda decidir si son 2 o 1 deseos para esta señora y para mi - la cogí de la cintura y con un buen movimiento de mis manos y su colaboración la di la vuelta y quedó sentada a horcajadas sobre mi, agarrándome del cuello, con mi polla tiesa entre los dos, ella clavó su mirada allí, mientras se relamía.- ¿que prefieres, tener un deseo que los demás cumplamos o un deseo para tu hija y otro para mi?

-ELEONOR: no lo se papi, me estas volviendo loca - comenzó a mover su cintura de delante a atrás, frotase con mi polla, mordiéndose el labio.

-YO: yo creo que es mejor tener ambas opciones, puedes pedir uno que los 2 cumplan, o puedes pedir que cada cual cumpla uno por separado.

-ELEONOR: si, es mejor, así podré pensármelo más tiempo, ¿tu deseas ahora algo? - me besaba en la cara queriendo sacarme de quicio, y lo hubiera logrado si no fuera por mi adiestramiento.

-YO: voy a pedirlos por separado, quiero que tú, después de la cena, me enseñes a bailar la Cumbia, tengo entendido que eres un experta - se le iluminó la cara como un árbol de Navidad - pero quiero que lo hagas con los 2 completamente desnudos, que solo lleves unos tacones - ahora se le iluminó la cara como si fuera el mismísimo sol que ya nos abandonaba en el horizonte.

-ELEONOR: que grandísima idea, eres un bribón, pero me encanta - se abrazó pegándome su tetas al pecho, casi deja sin respiración.

-YO: me alegro de que te guste, el de Yasmine me lo guardo para otro día, no obstante, va a ser nuestra criada hoy y no puede negarse a nada que le digamos…..- me miraron asombradas, Eleonor dándose cuente del hecho y Yasmine del lío en el que se había metido - ¿y tu Eleonor, no tienes nada en mente?

-ELEONOR: tengo muchas cosas papito, pero me las guardo para más tarde - su tono era evidente, así que le subí la apuesta.

-YO: recuerda que es un deseo al que no puedo negarme, seria estúpido pedirme algo que estoy deseando hacer - se dio cuenta de por donde iba - empezamos a jugar, tú, criada, haz el favor de ir y ponerte el uniforme, pero recuerda ir bien atrevida, como a mi me gusta, la señora y yo nos quedaremos aquí disfrutando de lo que queda de tarde mientras preparas la cena, ven solo cuando cumplas esos requisitos y esté la cena lista.

Eleonor me miró atónita ante mi severidad, Yasmine se reía.

-YO: no me ha parecido gracioso, le estoy dando una orden - se puso tiesa en el agua, entendió que no iba a ser un juego sencillo, y obedeciendo sin más salió del agua y se fue dentro de la casa.

-ELEONOR: no la trate mal amor mío, es mi hija - me dio un 1º beso en los labios, lento y humedo.

-YO: su hija es más fuerte de lo que parece, me la he follado 2 veces en el agua mientras usted tomaba el sol, y no ha gritado ni una sola vez.- se le abrieron los ojos, no sabia eso.

-ELEONOR: ¡no puede ser!, ¡mi pobre hijita, si la tienes enorme!- lo dijo agarrándome el pene por encima de la tela.

-YO: y aun no la ha visto desnuda, pero eso va a cambiar a partir de ahora - me lancé a besarla, no esperé ni reacción, metí mi lengua hasta la campanilla, ella tardó unos segundos pero se movió sin posibilidad de escapar, detrás solo tenía agua, y delante un macho embrutecido por ella.

La agarré de las tetas, que maravilla de la cirugía, eran como dos balones bien inflados a punto de reventar, la dejé irse un poco hacia atrás, para ir bajando por su cuello, y terminar en sus pezones, estaban de nuevo tan duros y salientes que eran demasiada provocación, los ataqué sin piedad, lamiendo y chupándolos hasta dejarlos secos, juntando aquellas obras de ingeniaría, mordisqueando incluso, indistintamente una y la otra, ella se retorcía ante mis caricias, y metió la mano por encima del bañador, buscando mi polla, la medio sacó y masturbaba, al menos la parte visible, me estaba poniendo malo de la congestión que arrastraba desde hacia una hora y media que me follé a Yasmine por 2º vez. No aguantaba más así que la cogí de las caderas y la levanté para desmontarla de mi y dejarla caer suavemente en el agua, era zona profunda y no hacia pie, me saqué el bañador y quedé desnudo sentado en el borde con mi polla reventando, mirando al cielo, ella se quedó absorta, tan quieta que casi se hunde.

-ELEONOR: ¡¡¡cucha madre, que pedazo de verga!!!

-YO: pues ya esta chupándola o me vais a tener que llevar a urgencias.

Ni se lo pensó, se metió entre mis piernas y agarró con ambas manos mi miembro, la usó como barra para poder elevarse en el agua, y una vez allí, colocó sus tetas en mis piernas, haciendo de ancla, la masturbaba lentamente con ambas manos, mirándola incrédula.

-ELEONOR: ¡¡higue puta, es por lo menos 2 veces más grande que la de mi marido!!

-YO: ¿y la suya te la tragabas? - era un reto velado, lo aceptó.

Volvió a izarse usándome como apoyo, se colocó bien y comenzó a darle besitos a mi glande, pequeños lametones, mientras se le escapaba la risa al ver el tamaño, se serenó un poco y tomó actitud de loba, su ritmo en las manos subió y ya engullía media polla, no era difícil si su marido la tenia así, aunque no la tendría tan ancha, notaba como su boca casi se desencajaba, pero aun así movía su lengua como una experta, la sacaba para tomar aire, pero lamía todo el tronco mientras seguía masturbando con una mano, quería llevar mi mano a su cabeza para llevar el ritmo, pero no hacia falta, era una mamadora consumada.

-ELEONOR: ¡¡dios mío que pedazo de verga!! déjeme cumplir una fantasía - asentí al ver como se relamía las babas en su boca, tiró de mi cuerpo hasta hundirme en el agua, al salir - apóyese en la pared pero deje la verga debajo del agua - la vi venir, y no me creía que suerte tenia.

Me di la vuelta y me agarré al bordillo con ambas manos, dejado un hueco entre mi pecho y la pared, hueco que fue rápidamente cubierto por Eleonor, que mientras se agarraba a mi polla, me besaba.

-ELEONOR: siempre quise hacer esto pero el picha floja de mi marido nunca se dejó - cogió aire y bajó, llegando a tocar con los pies en el suelo de la piscina, y cogiéndome la polla por la base, me la chupaba bajo el agua, que maravilla de sensación, por poco me corro en el 1º minuto, por suerte tuvo que salir a tomar el aire.

-YO: eres un regalo divino, que espectáculo, ese imbécil no sabe lo que se pierde - sonreía mientras volvía a coger una bocanada aire y se hundió de nuevo.

Era una sensación fría y caliente a la vez, difícil de explicar, su boca se movía y su lengua, pero la humedad del agua y la lentitud con la que se tenia que mover me sacaban de quicio, esta vez estuvo casi 2 minutos bajo el agua, a la 3º hundida lo mismo y no aguanté más, me corrí en su boca, ella lejos de separarse dejó que ocurriera, notaba cada latigazo en mi miembro, sacudiéndola dentro de la boca, se fue separando sin separar los labios de mi piel hasta terminar de sacarla del todo haciendo el vacío, subió, me miró a lo ojos, abrió la boca y la vi toda llena de semen, la cerró, y sin pestañear, se lo tragó, noté claramente como la bola bajaba por su garganta.

-YO: eres más guarra de lo que había deseado – la aplasté contra la pared - eso va hacer que no te trate como a una damisela como hasta ahora, de inicio te voy a regalar lo mismo.

Me hundí para cogerla de las piernas, tiré del bañador, me costó sacarlo, le quedaba muy pequeño, al final vi su coño, con algo de bello bien cuidado, la monté en mis hombros de un tirón logré sacarla del agua, pero subida a mis hombros con mi cara hundida en su puvis, yo si hacia pie, así que metí mi lengua en su interior, jugué con sus labios mayores mientras se sujetaba con mi pelo, la daba vueltas sobre si misma, encontré con mi lengua su clítoris hinchado, la trabajé hasta lograr que ella me apretara con su concha, gritaba algunas cosas que no entendía bien, tenia las orejas tapadas por sus muslos por que pateaba, y las cerraba, un par de minutos después logré que un rayo la partiera, casi se me cae, se corrió como hacia mucho que no lo hacia, la tuve que dejar sentada en el bordillo por que había perdido todas las fuerzas de golpe.

-ELEONOR: ay mi amor, papasote, que bien me come, nadie me lo había comido antes.

-YO: de verdad que su marido es retrasado, vamos a por el 2º asalto, para compensarla.

Me acerqué entre su piernas y metí mi cara de nuevo en su intimidad, pero con la manos ya libres, la masturbaba ferozmente, gemía de gusto, cuando metí mis dedos en su interior dio un salto, localicé el punto G y lo trabajé penetrándola con 2 dedos, se cerraba y abría de piernas peleando por su vida, mientras mi lengua la separaba los labios aun más para frotarle el clítoris con suavidad, tiré de ella hasta que quedó recostada sobre el borde pero con la cintura hundida, mi pelo quedaba fuera del agua pero mi boca no, seguí haciendo lo mismo pero debajo del agua, percutiendo con mi mano en su interior sujetándola para no hundirme yo y para que no se moviera tanto, cuando la vi venirse apreté el ritmo para sacarla el 2º orgasmo, esta vez bajo el agua. Para cuando paró de convulsionar, me quedé besándole el coño, de forma cariñosa, para luego subirla al bordillo y dejarla allí, descansando, con su respiración agitada y sus tetas subiendo y bajando, mi trabajo bajo el agua unido a esa visión me la tenían dura de nuevo, salí del agua por donde ella estaba y me senté en su vientre dejando mi polla dura caer entre sus tetas.

-YO: me va a permitir que me folle estas dos preciosidades, ¿verdad? - su respuesta fue apretarlas y juntarlas para hacer presión sobre mi pene.

Comencé el movimiento pélvico, mientras ella apretaba sus senos y pellizcaba sus pezones, la tenia tan grande que tenia que girar la cara para no darla con la punta del glande en la barbilla. Aceleré tanto el ritmo que mi pelvis golpeaba sus tetas y la hacían menear todo su cuerpo al compás, pase así 10 minutos deseando follármela, pero quería esperar a después de cenar, quise acelerar más para correrme de una vez pero no era posible, no sin hacerla daño a ella, que ya había comenzado a abrir la boca y recibir mi glande, dándole lametones cada vez que llegaba hasta su boca, entonces se abrió la puerta, era Yasmine, vestida de criada guarra, con el traje negro y blanco, con mini falda, mirándome a la cara.

-YASMINE: la cena ya esta lista señores - su mirada era de pesadumbre, me estaba follando las tetas de su madre delante de ella, supuso que ya no la querría a ella o algo así, pero a mi esa visión me terminó de calentar y eyaculé de nuevo en la boca de Eleonor, que una vez acabado, se volvió a tragar.

-YO: más vale que sea rica la cena, la señora ya ha comido algo - Eleonor se río avergonzada - vamos querida, tal como estamos, vamos a cenar y después me enseñas a bailar la cumbia, ¿te parece?

-ELEONOR: si amado mío - me puse de pie y la ayudé a levantarse, se puso los tacones y totalmente desnuda ando delante de mi, con actitud altiva pasó por delante de su hija casi sin mirarla, yo me puse al lado de ella.

-YO: no temas, os voy a reventar a las dos por igual - metí mi mano por debajo de la mini falda, advirtiendo que no llegaba ropa interior, metí mis dedos en ella, sonrío sabiendo de mis intenciones.

-YASMINE: claro señor, para eso es usted el dueño.

Yasmine y Eleonor – Amaestrándolas.

Hice a Yasmine caminar delante de mi dándola con mi polla en su trasero, levantándola la falda con mi pene, nos sentamos a comer desnudos, mientras ella nos servia, y nosotros hacíamos que la ignorábamos, Eleonor se puso de frente a mi y jugaba con su pie descalzo entre mis 3 piernas, mientras comíamos de forma lasciva, es increíble lo sexy que puede llegar a ser comerse una ensalada si lo haces con una diosa latina desnuda masturbándote con el pie.

-YO: ¿sabes querida?, tus caricias me están poniendo como una piedra, ¿que tal si la criada remata tu trabajo?

-ELEONOR: como no, para eso esta.

-YO: bien criada, ponte debajo de la mesa y chúpame la polla hasta que me corra mientras termino de cenar - se quedó parada mirándome - ¿acaso no me he explicado bien?

Reaccionó obedeciendo, mirando a su madre, se puso a gatas y se metió entre mis piernas, al inicio solo masturbaba hasta que se puso dura, luego chupaba el glande, por lo visto no le daba la posición para más, hasta alguna vez se daba con la cabeza en la mesa, haciendo saltar los cubiertos ante la mirada atónita de su madre.

-ELEONOR: sabes querido, le he preparado un 2º palto, almeja al natural - quitó el plato de delante de mí, se sentó en la mesa y paso un pierna por encima de mí dejándome su coño al alcance - ¿le gusta?

-YO: que bien me tratas, no me merezco esta mujer - hundí mi cara en un coño de nuevo, ahora sin piedad, metiendo mis dedos en su interior.

La sensación era electrizante, la hija vestida de sirvienta putón chupándome la polla debajo de la mesa y la madre desnuda abierta de piernas pidiéndome que la comiera el coño a más velocidad, se inició una carrera entre madre e hija por bien quien lograba llegar a la meta antes, si la madre se corría por mi o yo por la hija, me alejé un poco de la mesa para que Yasmine pudiera sacar la cabeza un poco y tener más movilidad, mientras le comía el monte a la otra a escasos palmos de su nuca, mis manos eran más hábiles y Eleonor se corrió como una fuente, manchando la mesa y el pelo de su hija, pero esta no paró hasta sacarme una corrida que se dejó llenar la boca, se puso en pie saliendo de allí debajo y con la boca llena me preguntó que hacia con mi semen.

-YO: ¿no has visto a la señora? hay que tragárselo - rió de nervios, pero cerró la boca, y como una medicina mala, se lo trago.- ¿ve querida? , hoy en día es difícil encontrar un buen servicio.

-ELEONOR: y que lo digas amor, pero ella es muy buena.

-YO: ahora lo veremos, ande déjenos solos, mientras, vaya al salón y te preparas para bailar la cumbia – asentía mientras se acariciaba entre los mulos, miré con desdén a Yasmine - criada, cuando termine de recoger aquí al irme, quítese todo menos la mini falda, y vaya al salón, pero póngase unos tacones, que esto es un casa con clase - bajé a Eleonor de la mesa y la hice andar dándola un fuerte cachete en el culo, “dios, como se mueve”, exageraba el contoneo de su cuerpo y con el sonido de los tacones casi me lanzo a por ella, me contuve dándola un azote aun más fuerte, que retumbó por toda la casa y la sacó un grito - adelántese y vaya preparándose, ah, y deja la puerta abierta, querida.

-YASMINE: ¿quiere algo más el señor antes de que prosiga recogiendo la cena? – intuía que le tocaba el turno.

-YO: recuéstese sobre la mesa y levantase la falda, la voy a follar ahora mismo - sonrío y obedeciendo, se tumbó sobre la mesa, y levantó su falda, dejándome el culo totalmente ofrecido.

Me agaché chupándola su concha, húmeda, y la trabajé hasta tenerla a punto, se ponía de puntillas con cada movimiento de mi lengua, entonces me puse en pie y la ensarté de golpe el coño, el grito sonó por toda la casa, pero eso no evitó que la embistiera de nuevo, una y otra vez hasta que ya no gritaba, gemía, sus fluidos aceleraron y profundizaron mis penetraciones, se metía más de media polla y ya hacia fuerza contra mi, separándose las nalgas con las manos, la arranqué el 1º orgasmo a los 15 minutos, entonces me puse serio, en posición y aceleré al máximo sin parar durante media hora más, su gritos eran de suplica, pero por que no parara, la saqué 3 orgasmos más hasta hacerla gritar como una loca queriendo salirse de mi, yo quería justo eso, que su madre oyera como sufría su hija, cuando llegó mi corrida ella era un trapo con el que había limpiado la mesa, la saqué y la metí de nuevo un par de veces, la di un sonoro cachete, como a su madre, dejando la marca de mi mano.

-YO: ahora puede recoger, y recuerde mis indicaciones previas.

Me fui al salón con la polla flácida y colgando de lado a lado, orgullosos de mí, me encontré a Eleonor haciéndose una paja fuera de si, con sus ojos clavados en la puerta de la que provenían los gritos de su hija no hacia mucho.

-YO: por favor, no seas ansiosa, espérese a enseñarme a bailar y ya me ocuparé yo de su cuerpo - la saque los dedos de si misma, y lamí desde su coño hasta sus labios, pasando y recreándome en sus tetas, la cogí de la cintura y la puse en pie, con tacones era otra cosa.

-ELEONOR: esta bien, lo 1º es que usted se quede en el centro, y deje el pie izquierdo pegado al suelo, el derecho lo levanta y me da palmas con el ritmo de la música que he preparado, tome esta vela, el resto déjemelo a mi.

Se fue a una cadena de música y puso una canción, ella comenzó a bailar y moverse alrededor de mi, me rodeaba mientras hacia gestos sensuales y otros no tanto, más rituales, se acercaba y me frotaba, pero luego se separaba, aquel juego tonto me la puso dura.

-ELEONOR: ahora es cuando usted debe cortejarme, ofreciéndome la vela, y yo debo resistirme.

-YO: hombre, es que con una vela, cualquiera es el listo que va seduciendo, ¿y si le ofrezco mejor mi cirio? - señalé mi polla tiesa, ella rompió a reír dejando de bailar.

-ELEONOR: jajajajajja pero que brutote eres - se acercó a mi cambiando la risa por pasión, me agarró el falo y se pego a mi - aunque como ve, es efectiva su oferta, por favor, ábrame de una vez, no lo aguanto más - su mano se movía masturbando.

-YO: antes déjeme que el enseñe yo como se baila hoy en día, ahora esta pegando algo nuevo, llamado reggaeton, me parece un poco basura pero es muy divertido bailarlo.

-ELEONOR: claro mi papito.

Puse cualquier cadena de radio, lo ponían a todas horas, cuando sonaba me acerqué a ella, que movía sus caderas de forma sensual de lado a lado, de frente, y tal y como dicta el baile, la agarré y la apreté contra mi, la metí mi polla entre sus mulos y la levanté una de ellas frotando todo mi torso del miembro contra su coño humedecido, al principio seguimos el ritmo de la cadera del otro, mientras la acariciaba una de sus tetas, luego la puse de espaldas repitiendo la operación, pero según cambiaba la música ella se movía de forma diferente, llegando a ir en contra a mis movimientos.

-ELEONOR: ¿así que…… así …uf…bailan hoy……ay.….. los jóvenes? - suspiraba de lujuria.

-YO: igual pero con ropa.

-ELEONOR: no me extraña…. que anden todos…..salidos perdidos……esto es casi follar - sus suspiros aumentaban.

-YO: que va, por ahora estoy siendo suave, ellos lo hacen más fuerte.

-ELEONOR: : pues déme, déme duro, como si fuera una cría - acepté su petición, agarré de sus tetas y de su cadera con fuerza, comencé a darla golpes muy fuertes y amplios, con cada uno sacaba mi polla de sus muslos y la golpeaba en el trasero, hasta el punto de que la hacia daño - ay papi espérese, así no, me hace daño, ummmmmmmm - le gustaba.

Yo seguí por que había divisado a Yasmine con solo la mini falda y unos tacones de vértigo, mirándonos atónita viendo como “bailaba” con su madre.

-ELEONOR: ay espérese, déjeme que me coloque – se soltó y se agachó, abriéndose el culo ante mi, dejando que mi polla golpeara en la vertical de sus nalgas- uff así……así si….que rico papi……..déme duro.

-YASMINE: ¡¡¡pero mama!!! - la fulminé con la mirada.

-YO: usted cállese y no se mueva hasta que se lo ordenemos.

Así lo hizo, se tiro 20 minutos viendo como su madre buscaba pociones cómodas para que yo la golpeara con mi polla por todo el cuerpo, llegó a meter mi polla entre sus nalgas y apretar subiendo y bajando sus caderas a un ritmo bestial durante más de 10 minutos, si así bailaba, ¡como tenia que follar!

-ELEONOR: ay mi macho, no aguanto más por favor, le ruego, métamela, ábrame por dentro, lo necesito - aquella frase de “mi macho” me atravesó la cabeza, tenia claro lo que debía hacer, y se iban a arrepentir.

-YO: esta bien, pero que venga la criada ayudar, tu ponte agachada sobre el sofá ofreciéndome el culo, pero no dobles las rodillas - así lo hizo.

Cuando se acercó Yasmine la metí la mano por debajo de la falda y noté que estaba húmeda de nuevo, la acariciaba mientras la acercaba al culo en pompa de su madre, besándola mientras la introducía algún dedo en el coño.

-YO: quiero que me sujetes la polla mientras me tiro a mi señora, chúpamela hasta que este bien mojada, luego dirígela a su coño, deja la mano en la base hasta que me asegure de que si se la meto toda no la reviento, como a ti.

Obedeció como un robot, era jugar con mis dedos en su coño y se le pasaban todos los reparos, me regaló una buena mamada hasta llenármela de babas, entonces me giré hacia su madre que se frotaba por encima el clítoris ansiosa, y dirigiendo mi polla, ensartó a su madre conmigo, Eleonor casi se cae hacia delante del grito que pegó.

-ELEONOR: ¡madre de dios, no me entra, pare por favor!

-YO: no me fastidie, la criada se mete más de la mitad ¿y la señora de la casa se rinde a la 1º?- esas palabras alegraron a Yasmine que estaba pegada a mi cuerpo siendo penetrada por mis dedos por detrás de su culo, y enrabiaron a Eleonor que se abrió las nalgas con las manos.

-ELEONOR: métemela del tirón, ábrame que hace mucho que me entran.

-YO: ya ha odio a la señora, del tirón.

Volvió a dirigir mi polla a su entrada y esta vez empujó fuerte hasta lograr meterme el glande, era cierto estaba cerradísima, Eleonor subió el tono de su grito hasta quedar muda, la dejé unos minutos para acostumbrarse mientas me trabajaba a su hija con mis manos y mi lengua, cuando notaba menos presión golpeaba con la cadera hasta repetir la situación, logré que Yasmine se corriera en mis manos antes de meterla media polla a Eleonor, comencé mi plan, la di un buen azote por correrse sin avisar, pero no cambió de posición ni soltó mi base, yo seguí percutiendo cuando notaba menos presión mientras Eleonor se inclinaba hacia delante para cuando se acostumbraba, dejarse ir hacia atrás, se repitió el proceso hasta que la mano de la hija hizo contacto con el coño de su madre, se la solté y seguí perforando, hasta que casi la tenia dentro del todo. Me quedé así, notando como se abrían las paredes en su interior. Subí a Yasmine encima mía a horcajadas, dejando culo con culo a las dos y estuve no menos de 10 minutos con la hija en brazos besándola y sacándola otro orgasmo con mis manos, mientras la madre se iba acostumbrando a mi, bajando el nivel de sus lamentos, le flaqueaban las piernas pero aguantaba, llegó el momento en que Eleonor se movía con ritmo, así que bajé a la hija al suelo.

-YO: vaya, parece que por fin esto avanza.

-ELEONOR: ¡¡ay mi macho, como me llena, en mi vida me sentí tan hinchada!!, ¡me llenan de verga y me encanta!

-YO: pues ahora voy a darla como a la criada, a ver si aguanta como ella.

La agarré las caderas dándole un buen par de azotes para dejarla marcada mi mano, empezaban a entender que mis azotes no eran en balde, eran cuando no estaba feliz, quería que asociaran esa idea, casi como los mordiscos de mi Leona. Entonces la saqué gran parte de mi polla para volverla a ensartar, no gritó pero noté como se abría de nuevo, lo hice despacio unas cuantas veces hasta que sus fluidos emanaron, entonces la fricción ya no era un problema, la di con todo, sin acelerones paulatinos, la metía entera y ella gritaba sin parar, ordené a la criada que se pusiera debajo y no parara de chuparle las tetas a la señora, obedeció sin rechistar, cuando se corrió la 1º vez otro azote, y el 2º igual, me cansé de darle azotes al entender que era multi-orgásmica, “joder, que regalo”, la penetraba tan fuerte que se le doblaban los brazos apoyados en el sillón, tuve que agarrarla de las peinas haciendo fuerza contra mi, pero aguantó sin desfallecer hasta que me corrí 40 minutos después, la di otro golpe en el cachete, tan fuerte que se le quedó la mano marcada más de 1 día, y como tal, cayó redonda al sofá, agarrándose el coño, encima de su hija, que había quedado aplastada por su madre, la saqué la cadera, la abrí de piernas sin quitarla a su madre de encima, y ahora, preparándola con mi mano, me la tiré también de forma animal, obligándola a comerse el coño de su madre que rezumaba mi semen, la pobre no aguantó ni 20 minutos antes de medio desfallecer, ida aun logró sacarle más orgasmos su madre, otro azote fuerte a las 2 hasta que me corrí.

-YO: así es como se debe comportar el macho de esta casa, y a partir de ahora lo seré yo, ¿me habéis entendido? - me acerque azotándolas en el culo a las dos.

-YASMINE: si mi señor, ¿verdad mi señora?

-ELEONOR: ¡dios que si!, ¡me vas a partir en dos, eres un macho de verdad, maldito carbón!

-YO: lo 1º es que no se me falta al respeto, ni se me insulta, ni se me cuestiona – azote - si eso ocurre habrá castigos – azote - y no os gustaría verme enfadado - azotes varios - ahora os besareis entre vosotras, masturbar si es necesario, quiero que os corráis por las caricias de la otra hasta que se me vuela a poner dura, y entonces veré a quien doy por el culo.

Se le cambió la cara a Yasmine, pero no a Eleonor, supuse que ella no era virgen por el ano, pero hacia mucho que no lo hacia, eso seguro. Como no se movían, azote el culo de Eleonor de nuevo, el otro cachete, dejando marca. Eso la hizo reaccionar, y besar los pechos de su hija, me acerqué y la arranqué la falda, dándola otro azote a ella, “dios, me duele la mano ya”, pero quería tenerlas dominadas para siempre. Sus caricias ya eran más que lésbicas, la madre masturbaba a la hija sin parar, por que cuando lo hacia le daba otro cachete, la metía los dedos aceleradamente, cuando veía que la hija no acariciaba, la azotaba también, Yasmine cedió a las caricias de su madre, se corrió pero no pararon de besarse, ahora era Eleonor la que recibía las caricias de su hija, debido al multi-orgamo que le provoqué se corrió en breve.

-YO: así me gusta, buenas chicas, ahora la criada le va a comer el ano a la señora, se lo va a abrir hasta que quede tan abierto que mi polla entre sin tocarla el ano, y como ocurra me enfadaré, y entonces la criada será la que reciba mi polla por detrás, y seguro que por la cara que pones eres virgen por allí, ¿verdad?

-YASMINE: si, mi señor.

-YO: bien, por que mientras lo haces, te voy a estar follando el coño hasta que revientes de nuevo como en la cocina, y como no hagas bien tu trabajo, te voy ha hacer daño de verdad.

-ELEONOR: ay mi papi, déjela…- la corte de raíz con un azote que me dejó la mano medio dormida un rato y la sacó un alarido.

-YO: aquí ni papi, ni papasote, ni amor, ni cariño, ahora soy vuestro macho y como os dirijáis a mi en otros términos os reviento el ano sin preliminares, ¿me habéis oído?

-ELEONOR: ¡dios, si! - otro azote bestial, tenia el culo rojo con la marca de mis manos.

-YO: ¿si ….que? - levanté la mano casi sin sentirla.

-LAS DOS: si, mi macho.

La madre se puso a cuatro patas y su hija igual pero metiendo una mano y su boca en el ano de su madre, debía de trabajarlo bien por que la sacaba gemidos de placer, debió ver el culo de su madre, mucho más castigado por mi que el suyo, y no quería sufrir aquel horror, me puse de rodillas detrás de ella, y la ensarté sin mucho cuidado, quería gemir pero estaba concentrada en meterle el 2º dedo por el culo a su madre, para cuando la arranqué el 1º orgasmo ya la tenia el culo abierto, pero con mis palabras y azotes en su cabeza, siguió, sin parar hasta llegar a meterla el puño cerrado por el culo a su propia madre que gritaba de lujuria.

-YASMINE: ya esta, mi macho.

-YO: ¿esta segura? Si voy y la rozo el ano serás tu quien sufra - metió y saco su puño un par de veces.

-YASEMINE: esto no se abre más, dése prisa y métasela antes de que se cierre.

-ELEONOR: ¡¡si por dios, métamela toda mi macho!! - abrí de piernas a la hija y la empujé hasta dejarla a 4 patas encima de su madre, la di un buen azote a la madre

-YO: aquí el que da órdenes soy yo - según me saqué la polla del coño joven la metí limpia en el ano de su madre, acaricié con cariño el culo de Yasmine.

-YO: muy buen trabajo, así me haréis feliz y no tendré que enfadarme - solté un azote a la madre que la hizo llorar de dolor - aprenda de la sirvienta y muévase, no voy a hacerlo yo todo.

-ELEONOR: si, mi macho.

Se volvió loca, se la metía entera en el culo y se la sacaba, intercalando tramos en que movía la cadera como una actriz porno profesional, con su hija recostada encima, llegó al multi-orgamo pero de un azote la ordené no parar hasta que se desmayara, y a su hija magrear los pechos de la señora, estuvo así una hora en la que no moví un solo músculo, solo daba indicaciones, hasta que Eleonor desfalleció y cayó al suelo, entonces le di un azote a la hija.

-YO: ha dejado el listón muy alto, a ver que haces tú.

Se dio la vuelta y usando a su madre desmayada como respaldo, se abrió de piernas y con una mano se abrió el coño al máximo, la penetré ayudándola un poco y agarrándola con firmeza me la follé sin parar media hora más, estaba desatado, la dejé medio ida al correrme. Estaban la dos tumbadas una encima de la otra, se movían a duras penas, aquellas 2 diosas latinas apenas habían aguantado 4 horas de sexo seguido entre las 2, me di cuenta de nuevo del regalo que tenia en mi Leona, pero no iba a dejar escapar a aquella madre y su hija.

-YO: así me gusta que se comporten las hembras de esta casa, y así va a ser de ahora en adelante, vais a hacer vuestra vida, pero conmigo en esta casa yo seré el macho y se hará lo que yo quiera, según entre os quiero desnudas y en tacones, ¿queda claro o tengo que azotar más?

YASMINE: haz lo que quieras con nosotras, somos tuyas, macho mío – se retorcía acariciando mi vientre con poses sensuales y abrumadas.

-ELEONOR: solo déje que nos recuperemos…….- quise tener compasión, pero no podía si quería que quedara claro que no había discusión en esto, no podía dejar que me diera una orden, me puse a su altura, la azoté el culo y la saqué de debajo de su hija.

-YO: aquí nadie descansa ni se recupera hasta que yo lo diga - la empalé del tirón el coño y la llevé a un solo orgasmo, el resto de la hora que me la tiré lo pasó semi inconsciente, con su hija queriendo decir algo, pero temiendo la represalia guardó silencio. Cuando me corrí dentro de ella la cogí la cara, la tenia que despertar para que me mirara - ahora tienes mi permiso, puedes recuperarte mientras me llevo a la criada a la ducha, y allí la voy a estrenar por el culo, por tu osadía de darme una orden.

Se le abrieron los ojos de golpe a las 2, pero no dijeron nada, Eleonor lloraba mirando a su hija mientras ella se ponía en pie y se dirigía a uno de los cuartos con ducha tirando de mí, con los ojos vidriosos. Miré a Eleonor a los ojos, ella pedía piedad.

-YO: que sepas que pensaba hacerlo con cuidado y cariño, pero ahora la haré sangrar por tu atrevimiento, así aprenderás a no replicar a tu macho - quiso hablar, pero se temió algo peor.

Seguí al baño a Yasmine, que sollozaba, la metí en la ducha y la di un buen lavado, estaba llena de sudor y fluidos, la obligué a dármelo a mi también, y una vez dentro los dos, la puse de cara a la pared, tuve cuidado, no estaba loco, pero quería que Eleonor no lo supiera, tenia a Yasmine en mi mano pero su madre no aprendía, la trabajé con mimo el culo, hasta que se lo noté abierto, claro que le iba a doler, era la 1º vez, pero ella no sabia cuanto era dolor normal y cuando dolor exagerado, se la metí por el coño un rato para excitarla y cuando la tenia punto la empalé por el culo, fue duro y notaba como se abría a cada milímetro, ella gritaba como un cochinillo, sin duda su madre estaría oyéndolo, eso pretendía, pero dejando que se acostumbra, fue ella la que se movía penetrándose mi polla por el culo, los gritos pasaron a pasión pura, la levanté de la bañera agarrándola de las piernas y percutiéndola en el aire, la dejaba caer hasta casi empalar por completo, mientras una mano la sacaba orgasmos en su coño, casi llegó a ser multi-orgasmo como su madre, y a la hora y media me corrí dentro de su culo. Dejándola satisfecha y sin tan mal rato como se preveía, su espectacular trasero fue el más sencillo de abrir de mi vida, tenia tales caderas que eran asideros de los que poder aferrarse, parecía diseñada para el sexo anal. Me fui al salón donde Eleonor lloraban sentada, desconsolada en el sillón.

-YO: mi señora, su hija se ha comportado y no solo no ha sangrado si no que ha disfrutado….. – le cambió la cara a felicidad instantánea - pero no se alegre, le ha dejado el listón muy alto y vengo a ver si lo iguala, o me enfadaré.

Reaccionó al instante poniéndose a 4 patas y abriéndose el culo, me coloqué detrás de ella y me la tiré más de 1 hora por el culo, desmayándola y recuperándola, pero ella solo pedía más al volver de sus desvanecimientos, sus gritos hacían ladrar a perros del barrio, cuando estaba consciente se movía como una bailarina profesional, la pegué a mi pecho para tener controlado cuando pasaba y así magrear su tetas, mientras bombeaba sin descanso su ano. Terminé corriéndome dentro de su culo de nuevo, y la ordené que fuera a ducharse con su hija, que seguía en el baño, que ahora iría a terminar la faena.

Al verla salir del salón caí exhausto, ellas no podían verme así, llevaba casi 7 horas tirándomelas, solo mi Leona me había llevado a ese punto, pero ella era una sola, no 2, que mientras una descansaba la otra era castigada, me fui a beberme como 2 litros de agua, cogí compostura y me fui al el baño, gracias a la visión de la madre frotando el culo de la hija y de la hija enjabonando los pechos de su madre, se me puso dura de nuevo y me metí en la ducha con las dos, mientras me follaba el culo de la hija tenia a la espalda a su madre admirando el valor de su pequeña, acariciándome y enjabonando mi espalda con sus tetas de escándalo, mis golpes de cadera eran acompasados por Eleonor, mientras que abría el ano de su hija, de tal fuerza eran las embestidas que mi pelvis golpeándola la hacia templar la carnes de su cadera, la di un ultimo agua al correrse y la dejé salirse, ordenado que se acostara en una cama, desnuda, me quedé otra hora más tirándome de mil maneras a la madre, la levantaba solo de una pierna y la perforaba sin piedad, la agarraba de tal manera que ella solo se sostenía con las manos en la pared, tenia el pie de abajo en el aire, yo la levantaba de la otra pierna, mientras atacaba sus pechos para que dejaran de moverse, eran hipnóticos, me distraían, la visión del agua cayendo sobre unas tetas me ponía siempre como un animal, y aquella mujer lo pagó, la tumbé en la bañera y le daba golpes de cadera tales que la hacían elevarse por la cerámica y volver a bajar ensartándose todo mi miembro, tenia que poner mis manos en el borde para hacer de tope con sus hombros. La dejé desmayaba con el agua cayendo sobre su vientre al correrme, salí buscando a Yasmine por los cuartos, me la encontré desnuda encima de una de las camas dormida como un ángel, me acosté usándola de peluche, eran más de las 8 de la mañana y llevaba casi 14 horas follando sin parar, desde que me tiré a Alex en la piscina hasta ese momento, a aquellos 2 caramelos colombianos casi 9 horas, caí dormido al sentir como Eleonor venia del baño y se tumbaba desnuda a mi lado, abrazándolas cogiéndolas de la tetas a una con cada brazo, me dormí.

Yasmine y Eleonor – Sumisas.

Me desperté 9 horas después, y fue por que noté movimiento, si no seguiría durmiendo, lo que sentí era en mi polla, se movía, abrí los ojos y vi a la madre chupándomela, con la hija bien atenta, le iba dando indicaciones de cómo mamarla bien y luego lo hacia Yasmine, me quedé inmóvil disfrutando de aquello unos minutos, hasta que recordé que ese no era el plan, yo era el macho.

-YO: ¿se puede saber que estáis haciendo?

-ELEONOR: nada macho mío, solo le estaba enseñando a como tenerle feliz.

-YASMINE: si, se lo pedí yo, la tienes enorme, solo quería aprender a complacerle - lo decían con tono suave y sin dejar de chupármela,

-YO: ¿y quien os ha dado permiso para chupármela? - se miraron intrigadas - ¿es que aun no os ha quedado claro?, me vais a enfadar y no os va a gustar, ahora mismo me vais a poner a Yasmine encima, de espaldas a mi y la voy a dar por el culo sin preliminares, la voy a dar hasta que se desmaye, mientras Eleonor no parará de comerla el coño y meterla los dedos hasta el fondo - me incorporé y las azoté a las 2, me ardía la mano, se dieron cuenta que lo de anoche no era un juego, iba a ser su macho con todas las consecuencias, Yasmine asintió, pero Eleonor quiso dominar.

-ELEONOR: óigame, no le consiento que nos hable así, me estoy cansando de………..- la solté un sonoro tortazo en la cara, nada violento, odio que se pegue a las mujeres, pero si lo suficiente para girarla la cara y callarla, me puse de rodillas y agarrándola del pelo llevé su boca a mi polla tiesa y se la metí de golpe, tan profundo y tan dentro que le daban arcadas. Elevé mi tono de voz fuerte y seguro.

-YO: ¡¿de que se están cansando?! – la oía hacer gárgaras en mi glande - ¿de quedarse en casa esperando un macho? Su marido no lo es, y aquí esta uno, ¿de tener este cuerpo perfecto, follar como una diosa y aun así haber perdido a su marido por la 1º furcia que se encuentra? ¿Eh? ¿De eso se ha cansado? Por que él será un cabrón retrasado, pero lo ha perdido usted, después de tirármela puedo asegurar que ningún hombre cuerdo la tendría tan descuidada si le diera lo que un hombre necesita, es culpa suya, ¿o quizá se ha cansado de marchitarse aburrida en casa siendo un florero más, un cuadro bonito de la casa? ¿O de que su hija pierda su juventud estancada por un imbécil de una banda que ni la mira después de habérsela tirado?- Eleonor comenzó a llorar, en parte por mi polla ahogándola y en parte por que mis palabras, aun siendo hirientes, eran ciertas.

Yasmine quiso hablar pero la lancé una mirada que la hizo caer de espaldas mirando incrédula cuanta polla le había metido en la boca a su madre.

-YO: ¡díganmelo!, si se han cansado de eso seré su macho y me harán caso en todo, las castigaré cuando considere que se me falta al respeto, dentro de esta casa seré vuestro dios y actuareis como almas devotas - la solté el pelo dejándola libre - de lo contrario, sácatela de la boca, me vestiré y me iré, no volveré a pisar esta casa, y no os preocupéis, esto jamás habrá pasado, pero no volveré a tocarlas. ¡Vosotras decidís!

Pasaron unos segundos en que vi los ojos vidriosos en Yasmine, y como Eleonor lloraba sin sacarse la polla de la boca. La amenaza era real, pero un farol, no estaba dispuesto a llegar a más con ellas, no me iba el sado y si ellas no me daban completa sumisión, tendría a 20 fuera que me la darían. Eleonor entre sollozos se fue serenando, y cuando se vio segura, comenzó a mover su lengua y a meterse media polla del tirón, lentamente, sin parar de moverse, di gracias al cielo, por que no quería perder aquello.

-YO: ahora me chuparas la polla hasta que me corra y sin derramar una sola gota te besarás con tu hija, con lengua y jugareis con mi semen hasta que os lo traguéis todo - aumentó el ritmo, su mamada ya no era de cariño, si no de obediencia, había demostrado que mi polla entraba mucho más en su garganta y ella lo aprovechó, notaba sus labios friccionándose y sus babas hacían brillar mi miembro cuando se retiraba, debían de llevar una hora chupándomela dormido, por que me corrí demasiado rápido.

Obedeció al dedillo, cuando terminé de eyacular se aguantó las arcadas y fue saliendo a contra pelo de mi piel con sus labios, hasta cerrarlos sin derramar una sola gota, atrajo a su hija y la besó, 1º escupiéndola en la boca abierta, para luego sacar la lengua de forma clara, y penetrar la boca de su hija con ella, luego separarse unos centímetros y dejarme ver sus lengua peleándose por ver quien se quedaba más semen, estuvieron así unos minutos hasta que el semen pasó por sus gargantas.

-YO: quédense aquí - me fui a la cocina, se me ocurrió un arma nuclear, un arma que disuade, que haría que no me doliera la mano y tenerlas sumisas. Regresé tirando un objeto a la mesa de noche, haciendo caerse un despertador que había allí, ellas miraron el objeto mientras se abrazaban, en parte excitadas y en parte temerosas. Era una de esas tablas de madera con mango, de esas en las cocinas para cortar verduras si rayar la mesa - bien, no quiero hacerme más daño en la mano, a partir de ahora si me enfado no habrá azotes, os golpearé con la tabla en el culo, con todas mis fuerzas, no quiero usarla, pero depende de vosotras.

Funcionó a la perfección, jamás la tuve que usar contra ellas, aunque siempre la ponía cerca, y mejor, jamás volví a azotarlas por castigo, solo de recordatorio y como premio.

-YO: bien, ¿por donde íbamos? Ah si, ahora me vais a poner a Yasmine encima, me tumbaré boca arriba, con ella de espaldas a mi y la voy a dar por el culo sin preliminares, la voy a dar hasta que se desmaye, mientras Eleonor no parará de meterla los dedos hasta el fondo - cogí la tabla - ¿esta claro? - las 2 asintieron, dejé la tabla en la mesa y me tumbé.

Eleonor se hizo dueña de la situación, subió a su hija a mi estomago, sentada y dándome la espalda, me pidió permiso para chuparme la polla un poco, se lo concedí, dejando claro que no tocara el ano de su hija, así lo hizo, se aseguró de llenármela de babas, y luego la llevó al ano de su hija, que se abría las nalgas a más no poder, presionó fuerte, no entraba, así que presiono más, notando como su hija se quejaba, pero no paró hasta que se metió mi glande con un sonido de vacío.

-YO: muy bien , yo no me voy a mover, ella tampoco puede moverse, solo tú puedes hacer el movimiento Eleonor así que cógela de la piernas y cárgala sobre tus brazos, ve bajándola hasta que le entre toda, como en la bañera, déjala empalada unos segundos y luego haz que me folle - se quedó quieta, y cogí la tabla, reaccionó rápido metiendo los brazos por debajo de la piernas de Yasmine , haciéndola que se agarrara a ella, la cogió a pulso, la fue bajando mientras ella gritaba de dolor.

Fue haciéndolo despacio, dejando que se acostumbrara su pobre hija, pero no era tan fuerte y le fallaban los brazos así que de vez en cuando caía 4-5 centímetros de golpe, sacándola alaridos acallados por la boca de su madre, a los 10 minutos ya la tenia totalmente empalada, sin gritar, solo abría la boca y sacudía las manos de dolor, esperó hasta que se calmó y volvió a cogerla para elevarla y volver a bajarla, sacándola más alaridos, al principio lo hacia con fuerza y con calma, pero sus brazos no tenían mas energía, solo podía hacer fuerza para levantarla y luego la dejaba caer, cada vez más rápido, ya se oían los golpes de nuestras pelvis cuando se corrió la 1º vez, ahora comenzó a masturbar a su hija metiéndole los dedos sin compasión, entendieron que si se corría los fluidos caerían a su ano y eso facilitaría todo, no se equivocaban pero durante 20 minutos su hija sufrió, mucho, para cuando se corrió por 3º vez hasta noté alguna gota de sangre en su ano.

-YO: esto ya me gusta más, apártete, deja que me levante y túmbate boca arriba Eleonor - así ocurrió, al levantarme agarré de la cintura a Yasmine y me puse de pie al lado de la cama con ella en el aire, no tocaba el suelo, solo sujetada por mi brazo en su vierte y mi polla en su culo, ella hacia fuerza para intentar elevarse sobre mi, pero solo lograba caer más a plomo quedándose aun más ensartada.

Cuando se tumbó boca arriba Eleonor, me puse de rodillas en la cama dejando a Yasmine a 4 patas sobre su madre, las ordené que se besaran y acariciaran, mientras lograba desmayar a pollazos a aquella cadera joven y ancha que me había vuelto loco muchos años, al inicio lo hacia con cariño, y ella gemía entre mis acometidas y las caricias de su madre, jugaban con sus bocas mientras magreaba las tetas, esa visión me aceleró el ritmo, quería dar una ultima lección, agarré con fuerza y llevé mi cadera a velocidad de la luz, cada embestida la hacia retorcerse sobre su madre, era casi incontrolable, a la media hora, y después de correrse al menos 4 veces, cayó desmayada sobre su madre, como un peso muerto, pero no paré de follármela durante otros 20 minutos, veía como su madre suplicaba piedad con la mirada mientras el joven cuerpo inerte de su hija la aplastaba, solo se movía debido a mis envestidas, pero la aguanté la mirada de rabia, aquella loba seria sometida, en esos 20 minutos acariciaba a su hija buscando vida en ella, sin encontrarla, y su mirada de petición de piedad fue cambiando, poco a poco, con cada restriegue del cuerpo de su hija inmóvil sobre ella, los ultimo 5 minutos vi aceptación, sabia que no podía escapar y no había salida ni opciones, era mía por completo, cuando me corrí dejé de bombear paulatinamente, al ritmo que iba era una locura parar de golpe, se me hubiera salido la cadera. Miré a lo ojos sumisos de Eleonor.

-YO: a ver si así aprendes de una puta vez quien manda en esta casa - le di un pequeño azote de gratitud a su hija.

-ELEONOR: si mi macho, ha quedado claro.

-YO: me alegro por que en 2 minutos me voy a follar tu coño, con tu hija inconsciente encima - la miré buscando cualquier rastro de rabia, incomodidad o suplica, no lo hubo, solo aceptación de nuevo.

La saqué la cadera un poco y me comí su coño hasta sacarla un orgasmo, me costó, la situación no era agradable pero mis manos eran hábiles, ya la tenia como un piedra ya, así que me la penetré del tirón, estaba tan húmeda que desde el inicio me entró toda, noté como se abría un poco al final de su cueva, pero se puso roja, estaba disfrutando como una loca y no le gustaba, pero no podía evitarlo, me sorprendí cuando se puso a besar y acariciar obscenamente a su hija ida, chupándola las tetas, vi como el cuerpo de la joven, aun ido, se mojaba por aquello, la partí por la mitad una hora más sin tener compasión, y de sus orgasmos múltiples y continuados, ahora era ella quien le abría el culo a su hija, metiendo un dedo en el ano, la daba cachetadas, estaba poseída, para cuando me corrí dio un salto masturbándose fuerte el coño, posesa, hasta correrse como una fuente con su hija aun encima. Fue la follada más bestia que las di, aleccionadora, a partir de ese momento eran corderitos amaestrados, ya no hacia falta darlas lecciones, solo disfrutar.

-YO: me voy a la piscina, id con solo la parte de debajo de algún bañador, que os abra las nalgas, cuando estéis listas, y lleva algún bote de aceite corporal de los que vi en el baño.

Salí en pelotas a la terraza y me di un buen baño relajante, dejando destensar mis músculos, estaba agotado, asfixiado y agarrotado, pero contento, había logrado ganarme a aquellas 2 pedazo de hembras, a la bomba latina y a la MILF de su madre, y no solo eso, me eran completamente sumisas, el hecho de que Eleonor se mostrara tan reticente y aun así lo hubiera logrado, me llenó de orgullo, pese a que las formas no me habían gustado, pero estaba allí flotando, feliz, y no por lo que había ocurrido si no por que me lo estaba pasando pipa, y tenia a Ana en el horizonte cada vez más cercano, era lo único que necesitaba.

Me pase más de 2 horas en el agua, sin hacer nada, solo flotaba boca arriba, abstraído, con los oídos debajo del agua, suspensión sensorial o algo así, hasta que oí la puerta de la terraza, miré de reojo sin moverme demasiado, y allí estaban las 2, recién duchadas y limpias, con solo unos ridículamente pequeños bañadores de tanga, las tetas aire y el pelo húmedo, con unos tacones de infarto las 2, estaban de pie junto al borde de la piscina, mirándome como 2 esclavas, Eleonor me miraba la polla, mordiéndose el labio, “¡dios que hembra!”, tenia aun ganas de más pese a haberlas tenido hacia 2 horas a una desmayada y a la otra ida. Me hundí, bajo el agua volví a mi estado de macho dominante, y buceé hasta el bordillo saliendo del agua casi del tirón con la fuerza de mis brazos, (desde mi perdida de peso me notaba como un superhéroe, la fuerza que antes era necesaria para moverme era igual, pero el peso a mover era mucho menos, tenia un excedente de energía en todo momento), quedé de pie, desnudo y con todo el agua cayendo por mi cuerpo, las 2 me miraron la polla, a plena luz del día mi cuerpo y mi tranca debía ser un espectáculo.

-YO: esta bien mis señoras, ahora seré bueno con ustedes mientras sigan las reglas, ¿donde esta mi tabla?

-YASMINE: ¡aquí esta! - se la sacó de las manos a su espalda

-YO: ohh así me gusta, eres una buena chica y te voy a follar a ti 1º - me lancé a besarla metiéndole la mano entre las nalgas separado aquel hilo de su culo, para luego ir bajando por su cuello hasta sus tetas, donde mi otra mano ya las trabajaba.

-ELEONOR: pero fue idea mía traerla - lo dijo con tono de cría pedigüeña.

-YO: ¿es eso cierto?- asintieron las 2- esta bien, ven aquí.

Se pegó a mi otro costado poniendo las tetas en el costado, bien separadas por mis costillas, sin soltar a la hija hice lo mismo con la madre, metí mis dedos por la raja de su culo, y la besé con pasión bajando hasta lamerle los pezones un par de veces antes de chuparlos, sus pezones era una maravilla, eran duros, largos y exagerados, como pitorros para inflar colchonetas o balones de playa, cuando oí quejas de la hija entendí que yo solo tenia un boca pero 2 manos así que las ordené besarse delante de mi, así lo hicieron de forma visceral y pasional, con lengua, mientras mis dedos bajaban por sus hilos y acariciaban sus coños por encima, con una a cada lado, se me puso dura al momento, aquello ya no era dominación, sino placer, notaba como a propósito juntaban sus piernas para rozarme el miembro, y como se restregaban las tetas contra mi, eso me llevó a agárralas con fuerza de sus coños y levantarlas contra mi, sin que los tacones tocaran el suelo, reían de impresión ante mi fuerza, pero las ordené que no pararan de besarse, mientras con mi boca me comía aquellas 4 tetas que me golpeaban la cara, y mis dedos jugaban en sus muslos, con mis brazos aceptando el reto, no se cuanto duró pero del esfuerzo me parecieron días, al final las tuve que dejar posar los pies en el suelo, pero agarré de los hilos de sus prendas y tiraba de ellos hacia arriba, como botando una pelota, con cada tirón las sacaba un gemido y se ponían de puntillas, ahora era yo quien intercalaba mi lengua, una con la otra, y la que no estaba ocupada le comía las tetas a la de al lado, fue casi con guión, me propuse arrancarlas un orgasmo antes de empezar así que hundí mis dedos en ellas, empapadas, y las trabajé hasta lograrlo, Yasemine cayó primero, y la ordené tumbarse en la hamaca, así pude meter ambas manso en Eleonor, mi mano era frenesí entrando y saliendo de ella, mientras gemía le comía sus pezones, “dios, que locura”, los mordía incluso, arrancándola algún suspiro de placer, se corrió como un animal en celo, la solté y casi cae al suelo pero la agarré de culo y me la monte encima, entre risas y palabras de gloria.

-ELEONOR: ¡dios santo, mi macho! ¡Así se trata a unas damas!- la di un suave cachete.

-YO: si siempre se comportan así de bien las trataré como a princesas, pero si no, ya saben…..- la tiré encima de su hija, y quedaron entre risas, mordiéndose un dedo o acariciándose sin dejar de mirarme a mi - ¿donde esta el bote de aceite corporal que pedí?

-YASMINE: ahí, en la mesa se lo dejamos.

-YO: esta bien, que una con una toalla me seque, déjeme impoluto, después me va a embadurnar con ese aceite - vi picardía y complicidad en sus ojos - ¿o quieren hacerlo las 2?

Ni respondieron, se levantaron y con una toalla me secaron a conciencia, centrándose en mi pecho, mis amplias espaldas y sobre todo mi polla.

-YO: bien, ahora me van a embadurnar en aceite, pero como son las 2, no usaran sus manos, échense una gran cantidad en las tetas y me van a repasar con ellas todo el cuerpo.- era increíble la imaginación que tenía en aquel entonces, había visto demasiadas pelis porno para no tener ideas, supongo.

Lo hicieron, se embadurnaron las tetas una a la otra, eso casi me hace asaltarlas, pero después fue peor, Yasmine se centraba en ayudar, pero lo de su madre era un espectáculo, aquellas tetas operadas, hinchadas y con aquellos pezones brillantes por el sol y el aceite, me repasaban como unos rodillos de carne, se las agarraba para tener más tracción, y las usó para hacerme una cubana, mojándome la polla entera. Al acabar estaba por partirlas a la mitad, pero las arranqué los tangas y las pegué a mi, como antes, abrí el bote, no la boquilla si no que saqué la tapa y dejé caer todo el aceite entre nuestros cuerpos pegados, para después masajear, magrear y empapar sus tetas, su cintura, sus traseros y sus coños, sus muslos, no dejé un trozo de piel sien pasar, y hasta se me escurrían al apretarlas, finalizado, estabamos los 3 goteando aceite, desnudos y excitados.

-YO: Yasmine, túmbate en la hamaca boca abajo, pero no separes las piernas, solo ábrete las nalgas.

-YASMINE: si, macho mío.

Lo hizo encantada, yo me senté en su trasero metiendo mi polla entre sus nalgas, estaba tan grasienta que me resbalaba, repase toda su aceitosa espalda y su trasero, jugando con mi verga, al final apreté mi glande contra su coño y la penetré, con tanto aceite y excitación a la 3º embestida ya le entraba toda, y gemía como loca de gusto.

-YO: Eleonor, ven aquí y ponte a horcajadas sobre mí, quiero comerte las tetas esas tan maravillosas mientas me follo a tu hija.

Lo hizo tal cual, la agarré y la pegué a mi, se me resbalaba igual pero la mantenía en el aire con el peso cargado en mis piernas y comencé a golpear con la pelvis a las 2, mi polla se introducía en Yasmine pero Eleonor recibía el impacto igual, la eché para atrás y le comí las tetas como un crío hambriento, mordisqueaba sus pezones, eso la hacia erizarse la piel y a mi acelerar el ritmo, su madre rebotaba contra mi como si fuera ella quien me recibía pero era su hija que gemía de placer ante mis acelerones, no tardó en correrse la 1º vez, menos de 20 minutos, pero no paraba de separarse las nalgas con la dificultad del aceite, y de pedir más, así que se lo di, estuve una hora dándola sin parar y comiéndome el aceite de la tetas de la madre, hasta que me llegó la corrida, allí desmonté a la Eleonor y apoyándome bien le pegué unos últimos 5 minutos bestiales a Yasmine, arrancándola varios orgasmos incidiendo directamente en su punto G, sin parar apretando y separando sus nalgas, la golpeaba tan fuerte que retumbaba la hamaca, la madre se había tirado al suelo y se estaba haciendo un dedo de locura mientras se pellizcaba un pezón, sin apartar la vista de la follada de cine que tenia delante, me corrí al fin con unas ganas y un placer que no había sentido desde la tarde previa, acariciando su trasero sin parar antes de sacarla mi pene, algo flácido, de ella.

-YO: ven como si colaboran se puede disfrutar sin dolor, ahora mientras ella se recupera me voy a follar a Eleonor en el agua - extendí mi mano mirándola a los ojos mientras se hundía un dedo en ella, la cogí en brazos como el ida anterior, pero esta vez a horcajadas, y se la metí sin problemas, me fui al borde de la piscina, y así, salté al agua, quedamos unos segundos bajo el agua, la fuerza de la gravedad y la inercia hicieron que mi polla la ensartara al completo, sabia que aguantaba bien la respiración así que me la comencé a follar allí mismo, mientras nuestros cuerpos ascendían.

Al salir la llevé contra una pared de la piscina y agarrándome al bordillo la ordené que se moviera, que girara aquella cadera como la diosa que sabia que era, obedeció con el halago, me rodeó con las piernas, y mientras nos besábamos podía notar sus gestos amplios y dulces con la cadera, sacándose la polla casi del todo y volviéndosela a meter, media los espacios, fue subiendo la velocidad pero haciendo todo el gesto amplio, su boca se separaba de mi lo justo para gemir y coger aire antes de volver a meterme la lengua hasta la nuez, cada vez que se separaba lamía sus tetas, estuvimos así no menos de 40 minutos hasta que rompo en un multi-orgasmo, se movió como poseída por el demonio, de forma poco elegante y sin ritmo, pero sin dejar de empalarse sola.

-ELEONOR: ¡ay mi macho, que pedazo de vergota tiene, me hace perder la cabeza, por dios, ¿no se cansa nunca?!

-YO: mientras tu aguantes yo aguantaré más, ahora vete hacia la zona profunda e intenta salir del agua por la escalerilla, pero no lo hagas.

Obedeció sin saber de que iba aquello, vi como se apoyaba en los peldaños de la pared para intentar salir y cuando ya tenia su culo fuera la ataqué, me apoyé los pies en los escalones, y tiré de ella, apoyando en las abrazaderas de la escalera mis manos, le metí la mano en el ano y con el agua se lo trabajé hasta meterle un par de dedos, luego la ensarté con cuidado, totalmente llena y dentro de ella, bajé nuestras cinturas hasta dejarlas justo por debajo del nivel del agua, y cogiendo firmeza en la posición, inicié un bombeo, literal, con cada embestida evacuaba agua con fuerza en su trasero, ella al inicio me seguía en los movimientos alejándose de mi cintura, pero cuando gemía de gusto ya hacia fuerza contra mi, haciendo movimientos en dirección contraria, mientras mordía y besaba su espalda, seguía acelerando y salpicando agua por todos lados, la arranqué un 2º multi-orgasmo que la hizo gritar de placer como no la había oído hasta ahora, aun así no paré hasta que me corrí, me gustaba que yo fuera el final, el último minuto era demoledor, mis golpes la elevaban y casi la sacaban de la piscina pero volvía a caer contra mi y yo aprovechaba para volver a golpear, estallé en un orgasmo que me atravesó la espalda, notando cada eyaculación en su ano, y como ella apretaba su esfínter, para que notara que ella también lo sentía.

-YO: así se comporta un buen macho ¿verdad?

-ELEONOR: claro que si, y aquí sus hembras estarán siempre a su disposición, usted es nuestro dios y lo adoraremos siempre que este en esta casa, y fuera de ella si llegara el caso, con esa pedazo de verga me va a partir siempre que quiera ¿me oyó?, ¡siempre!.

-YO: como sabe complacerme, pero he de volver a casa.

-ELEONOR: por dios, no me diga eso, quédese a vivir aquí, se lo ruego - le di un buen azote recordatorio.

-YO: ya sabe que yo decido siempre, usted solo esta aquí para complacerme y si me hace feliz seguiré haciéndola feliz a usted, ese es el trato.

-YASMINE: claro macho mío, lo que usted diga, aquí estamos las 2 para siempre, suyas, aunque no este en la casa será nuestro macho.

-YO: me gusta oírlo, por que quiero que aunque no esté en la casa, ustedes se diviertan sin mi, y se hagan fotos o videos y me los manden al móvil, ¿quien sabe?, quizá si me calientan venga a visitaras enseguida.

Salí del agua después de ver como el culo de Eleonor salió en mis narices, mojado, lleno de semen, abierto y con las nalgas rojas, la metí un dedo por el culo hasta llevarla con su hija y dándola un buen beso de tornillo la lancé contra su hija, la cual la recibió con otro beso caliente, metiéndola mano sin parar.

-YO: ya saben, sigan aquí divirtiéndose y mándeme alguna foto antes de la cena - ellas sonreían despidiéndose mientras jugaban entre ellas, la última imagen era de las dos metiéndose un dedo a la otra mientas Yasmine le comía las tetas a su madre, eran tan espectaculares que hasta su hija no se podía a resistir.

Al abandonar el edifico tuve una sensación de plenitud, estaba siendo el depredador de antaño, antes de Irene, pero no tenia esa sensación de ahogo o frustración, el hecho de tener a Ana como objetivo me permitía tener esa sensación supongo, ya solo quedaba un mes y medio para que llegara, se me estaba haciendo eterno el verano y ya solo buscaba coños con los que pasar el rato, y a fe que pase muchas partes del verano en la casa de las colombianas, según llegaba a su casa se ponían desnudas, solo con los tacones en la entrada, las hacia desnudarme y les regalaba una primera corrida mía a cada una, luego jugábamos y vivíamos tardes enteras de preliminares para acabar follando como locos en la piscina, ya fuera de día o de noche, las hacia retorcerse, al principio Eleonor duraba casi 3 horas y Yasmine 1 y media cuando me ponía serio, pero con el paso de las tardes de verano, Eleonor aguantaba casi 4 horas y media, mientras que Yasmine llegó a las 4, siempre intercambiándolas cuando una desfallecía. Su relación cambió, no eran madre e hija, si no amantes, y yo su factor en común, de vez en cuando me mandaban videos de ellas metiéndose consoladores, llamándome a su casa, más de una vez dejé tirada a alguna muchacha a medio polvo por ir a zumbármelas durante horas, llegaron a ocupar el espacio de mi Leona cuando quería marcha dura, pero siempre encontraba una tarde para ir y recordarla que era la única que me sacaba de quicio, que era capaz de llevarme al limite, y era ella sola, sin ayuda.

A Yasmine me la seguí tirando en el tiempo, era una de mis recurrentes y siempre que salimos con los amigos era mi juguete, no salíamos juntos, simplemente era mía y la disfrutaba, con el paso del tiempo se olvidó del chico de la banda y cuando inició una relación seria con un buen chico, dejamos ir lo nuestro, con la promesa de que si quedaba libre seria mía de nuevo. A Eleonor me la he seguido tirando siempre, incluso tengo una historia más con ella que llegará con el tiempo, comenzó a salir de nuevo de su casa y pasarse por el parque a charlar con mi madre y sus amigas, la odiaban todas por dentro, era un espectáculo de mujer y se afanaba en dejarlo claro con su ropa y su actitud jovial, pero se llevaban bien. Como os digo, aun tengo alguna historia más con ella, así que no os adelantaré nada.

Susana - La socorrista.

Como os venia contando, estaba disfrutando del verano como un crío, iba la piscina publica casi a diario, entre semana con los amigos, llevándonos mochilas con bocadillos y bebidas congeladas para aguantar el día, y los fines de semana con la familia, con todo el campamento encima, algunas veces coincidían los 2, iba con la familia y los amigos a la vez, siempre que iba me pasaba por la tienda y me trajinaba a Alex, era como una rutina más después de comer, pero a finales de agosto cerraron la tienda y no la volví a ver, así que tenia que llevarme a Yasmine, la hija colombiana, como juguete, éramos como un árbol y una flor nacida de su tronco, había cierta simbiosis, ella vivía socialmente de mi y yo me la beneficiaba, lo cierto es que en publico era más recatada que en su casa con su madre, al irnos de la piscina casi siempre me iba a su casa y me las tiraba durante horas. Pero el marido y padre de aquellas sudamericanas volvió de vacaciones durante un mes a casa, así que dejamos de vernos un tiempo y Yasmine salía menos, así que busqué nuevos objetivos.

Me tiré a la del puesto de helados, pero era una niñata pija que no se movía nada así que fui buscando hasta que me fijé en la socorrista, era una mujer joven de unos 24-25 años, se pasaba horas en un puesto al borde de la piscina, sentada en un silla de plástico y una mesa con sombrilla, a 40 grados, iba con gorra y gafas de sol, una camiseta blanca con el logo de socorro, siempre andaba con un silbato llamando la atención de la gente cuando se tiraban en zonas poco profundas o los juegos de piscina se desmadraban, más de una vez nos llamaba la atención a nosotros cuando iba con los amigos, y de tanto hacerlo, mi afabilidad me llevó a charlar con ella más de un vez usando de excusa que no nos diera tanto la tabarra y nos dejara divertirnos. La saqué el nombre, Susana, a cambio de que no la distrajera más, al inicio no me fijé en ella, y salvo una coleta de pelo moreno que le pasaba de los hombros a duras penas, no veía más que sus piernas, muy torneadas, casi musculosas, al principio llevaba unos short abiertos y se los iba quitando y poniendo según tuviera calor, al final optó por ir sin ellos y solo la camiseta, de vez en cuando se le veía la parte de abajo del bañador, solo era rojo, no me dio para más la intuición.

Un día estaba aburrido viendo como jugaban mis amigos y me fijé en ella, en su cara, durante una hora vi como se le acercaban los típicos chulos de playa y se los quitaba de encima, pero siempre charlaba con ellos, supongo que eran una distracción de esas horas tediosas, el calor era tan asfixiante que se abanicaba con una revista que tenia, vi como se terminó una botella de agua y jugaba con ella. Tanto calor hacia que al final se levantó, se quitó la gorra, las gafas, y se sacó la camiseta, lo hizo sin exagerar ni nada, pero eso atrajo la mirada de muchos, entre otros de mi y mis amigos, charlamos viendo lo buena que estaba, llevaba un bañador rojo de cuerpo entero, pero gran parte de la espalda al aire, tenia un culo de 1º nivel, muy trabajado, como sus piernas, sin duda hacia mucho ejercicio, un cuerpo rudo pero femenino con un pecho que hacían inflarse su bañador, de hecho se le veía el nacimiento de sus senos pegados al cuerpo, y al agacharse para quitarse las zapatillas nos regaló un canalillo enorme, era un espectáculo, y de remate se colocó al borde del agua y se lanzó, lo hizo con tanta clase y estilo que tenia que haber sido nadadora profesional, sobretodo por la posición de sus manos, buceó bastante antes de emerger y darse un par de largos en la piscina, con mucho estilo y realmente rápido, al salir se apoyó en el borde de la piscina apretando sus tetas una contra la otra y quedándose sentada con los pies dentro del agua, de inmediato acudieron tíos como pirañas, tanta atención atraía que se tuvo que poner de pie y ponerse la camiseta, después de repasar su cuerpo con una toalla, eso alejó a los animales de carroña, pero me había entrado por el ojo a mi, algo mucho peor. Mis amigos ya me notaban en la mirada cuando veía un objetivo y se reían, me retaban a ir a por ella, aposté con ellos a que antes de irnos ese día, la besaría, y ellos se reían de mi, no hacia falta pero eso me animó a ir a por ella.

No podía ir sin más, me espantaría como un moscón de tantos, así que planeé una idea, me salí de la piscina y me dejé secar, para luego ponerme la camiseta, tenia que diferenciarme del resto de payasos con tableta marcada, me fui a comprar un par de bebidas frías, estaba con una toalla encima pero sin ponerse la camiseta ni la gorra, solo las gafas de sol, me acerqué a ella por sorpresa dejando una botella en la mesa.

-YO: toma, que tienes que estar seca - me miró sorprendida, casi asustada por mi aparición.

-SUSANA: no…..gracias ya tengo yo una botella - me la enseño, pero estaba vacía como yo sabia.

-YO: ya, pero te la has acabado, y no vas a ir ahora con todo este calor a rellenarla o a por otra, anda cógela que hoy te invito yo, no me hagas el feo que la he comprado para ti - me abrí mi bebida y le di un trago, de pie, a su lado.

-SUSANA: bueno, muchas gracias, la verdad es que hace mucho calor.

-YO: ya te digo, y más tú que llevarás aquí……. ¿horas?

-SUSANA: pues unas 6, y ahora aprieta, me he tenido que dar un chapuzón para refrescarme un poco.

-YO: no te lo tomes a mal, pero ya te vi….- me miró tapándose con las manos de forma inconsciente - ……….jajaja no, me refiero a que te he visto lanzarte al agua y nadar, lo has hecho genial, ¿has dado clases o algo?

-SUSANA: ahhhhhhh eso, si, bueno más que clases, era nadadora de cría, casi llego a ser profesional, he competido a nivel nacional.

-YO: se te nota, sobretodo en la posición de las manos y como estiras los tobillos al nadar.

-SUSANA: vaya, si que te has fijado bien jajajajaa pues si, muchas gracias, mis horas me costó de aprendizaje - cogió la botella que le traje y le dio un trago, comenzaba a fiarse de mi.

-YO: y si no es mucha molestia, ¿por que no seguiste?, eres bastante rápida.

-SUSANA: por la dictadura de mi entrenadora, me dijo que había…..crecido mucho, y que ya no daba el perfil.

-YO: ¿como?

-SUSANA: si, me dijo que me había desarrollado mucho y que mi cuerpo no era apto para la alta competición - viendo mi cara de confusión hizo el gesto de bulto sobre sus pechos.

-YO: ahhhhhhhhhhh, ¿no me digas que por eso se echa a gente?

-SUSANA: pues ya ves, me dijo que generaba resistencia en el agua y me dificultaba los movimientos, pese a que seguía haciendo los mismos tiempos.

-YO: pues que mala suerte para el deporte nacional jajajaja – reímos los 2 levemente, ella más por cortesía - oye, me puedo sentar aquí a tu lado, es la única sombra libre que queda.

-SUSANA: si, si, claro, deja que quite las cosas - estaba encantada con poder charlar un rato, la había demostrado ser amable y que me había fijado en ella de otra forma.

-YO: muchas gracias - me senté en una silla de plástico como la de ella, al otro lado de la mesa - ¿y como es que has acabado aquí?

-SUSANA: pues como todo, he terminado ahora la formación de monitora de campamento y ya estaban todas las plazas ocupadas, así que me tocó hacer el cursillo de socorrista y buscar algo para pagarme el piso sola.

-YO: ¿como que sola?, ¿no tienes amigas o compañeras de piso?

-SUSANA: que va, ahora vivo sola, estaba con un chico pero se largó este verano, no quería pasarse aquí aburrido todas las vacaciones conmigo, así que le mandé a paseo - noté cierto resentimiento así que cambié de tema, ya conocía el dato relevante, estaba soltera y llevaría por lo menos 2 meses sin pareja.

-YO: ¿y te ha tocado ir a salvar a algún vejete o algún niño en apuros?

-SUSANA: que va, algún crío que se ha perdido y poco más, el resto es estar aquí con el silbato, vigilando.

-YO: joder, pues vaya aburrimiento, como se caen los mitos, y yo que te imaginaba a cámara lenta con uno de esos cacharros de plástico que flotan, tirándote al agua para salvar vidas, como en la TV jajajaja.

-SUSANA: jajaja si ya supongo, pero no, tengo un corcho/pan que le doy a los niños pequeños para que aprendan a nadar, poco más jajajaja. – se fijo en el agua y vio a mis amigos mirándonos fijamente y haciendo bromas - ¿y esos que, amigos tuyos? - le era una situación familiar.

-YO: claro, si ya nos has visto juntos, andan picándome para que te pida algo pero después de lo que me has dicho no me atrevo - puso cara de entender por donde iba y de estar cansada de aquello.

-SUSANA: a ver……. ¿ que te han dicho que hagas? - estaba cansada de eso, que chavales le tiraran los trastos.

-YO: no han sido ellos, es que……..al verte nadar….hemos pensado que eras muy rápida pero yo he vacilado un poco, y he dicho que te podía ganar en una carrera….. – le cambio la cara, no se lo esperaba –….. pero ahora ni loco, no quiero quedar en ridículo.

-SUSANA: jajajaja eso te pasa por vacilón, ¿y por que creáis que podías ganarme?

-YO: bueno, de pequeño también he hecho natación, un par de años no como tú, y se me da bien - era cierto, no se si por estar gordo o no pero siempre he flotado con facilidad y en el agua me movía genial, sin hacer carreras los monitores me decían que era el más rápido de la clase, y ahora sin tanto peso y bien tonificado el cuerpo, era una bala - no sé, quise impresionar y ahora me tendré que comer mis palabras. ¿No?

-SUSANA: hombre, tú verás, por mi encantada de darte una paliza jajajaja

-YO: hombre, una cosa es que me ganes y otra que me des una paliza, ya te digo yo que a 2 largos de la olímpica no me sacas más de un cuerpo - me miró sorprendida por mi terminología.

-SUSANA: jajaja mírale, y sigue vacilón, ten cuidado por que te puedo llegar a deprimir.

-YO: ¿quién vacila ahora? ¡Me has picado en el orgullo y esto no va a quedar así!, ahora mismo nos vamos para allí y vamos a echar esa carrera - me miraba un poco abrumada.

-SUSANA: mira que no quiero abusar…….

.-YO: no, no, como caballero que soy no permitiré esta afrenta a mi persona sin ser juzgado, mi señora, la reto a un duelo - me puse en pie y extendí mi mano para sellar la apuesta.

-SUSANA: jajajaja pues nada, así será - se quitó las gafas y se puso en pie cogiéndome de la mano y sonriendo, por 1º vez pude verle los ojos, eran de un verde esmeralda chillón, la luz del sol le tenia los iris enormes, casi ni me percaté de que la sellar con la mano la apuesta se le movió un teta, casi.

-YO: esta bien, pero habrá reglas de competición, los dos saldremos a la orden de un tercero del bordillo, ida y vuelta, si ganas tú y me sacas más de un cuerpo, te invito a algo todos los días que este aquí - sin soltar su mano.

-SUSANA: muy bien, me parece justo, ¿y si se da el caso improbable de que ganes tú, o no te saque más de un cuerpo?

-YO: un beso, no pido más, un beso de tus labios en los míos, y quedará cumplida – me miró abriendo la boca medio ofendida, medio halagada - el esfuerzo debe merecerme la pena, pero, ¿como has dicho?, eso seria solo si se da el caso improbable, ¿no? - sonrío viéndose pillada.

Sellamos el pacto y por fin soltamos nuestras manos, nos fuimos andando rodeando la piscina hasta llegar a la zona de la olímpica, siempre había poca gente, aun así charlamos con el socorrista de ese lado y con los silbatos despejaron la zona central, él haría de juez, se generó cierta expectación, mis amigos hacían correr el bulo y con los silbatos, casi parecía un competición real, la piscina era de dimensiones olímpicas pero sin las borlas separando las calles, nos pusimos uno al lado del otro, a suficiente distancia para no chocarnos en el agua, y ella empezó unos ejercicios de calentamiento, muy profesional, y yo, como payaso que soy, la intentaba imitar de forma torpe, sacando las risas de todos, incluyendo la suya, me asusté cuando con los dos pies bien plantados y juntos se agachó tocando los pies con las manos, sin doblar ni separar las piernas, si no hubiera tenido ese par de tetas se podría dar con la nariz en las espinillas sin problemas, “joder, me va a costar un dineral esta tontería”, me puse un poco serio y calenté bien mi espalda, me di cuenta como ella miraba mi cuerpo al quitarme la camiseta, y alguna chica más, ya os he dicho que mi cuerpo era normal, con el pecho algo más trabajado que el resto, pero no marcaba tableta ni brazos, no sin hacer fuerza, y cuando la hacia tampoco es que se viera mucho, pero se empezaban a notar en mi las horas de ejercicio, sexo y natación, algún amigo soltó alguna grosería sobre mi espalda haciéndose el gay.

-SUSANA: ¡a ver! date la vuelta, quiero ver esos deltoides y trapecios, me levantó los brazos en línea recta en varias posiciones, palpando con sus manos mi piel - vaya, no va a ser tan fácil como creía.

-YO: ¿estas de coña? - me di la vuelta cogiéndola de un brazo y estirando hacia arriba, haciéndola girarse un poco sobre su cadera, la agarré de las costillas - ¿tu has visto estos dorsales? ¡Me vas a follar! - la lancé con toda la poca 2º intención que pude.

Nos preparamos ante el silbato del socorrista, yo copiaba sus movimientos para no perder ventaja, en esos 20 segundos se pasó todo mi entrenamiento en la piscina por la cabeza, y la 1º ley, era que para ser rápido, tenias que generar poca fricción, y yo llegaba 2 bañadores, el 2º ancho con tela sobrante, no iba a permitir que aquello me frenara y me los quité, dejándome solo con el mal llamado marca paquete, las risas y los suspiros de asombro sonaron por toda la piscina junto con silbidos de animo a los dos, me coloqué en el borde con ella mirándome bien la marcada polla, se me notaba un montón, pero me daba igual, lo llevaba por los reparos de mi madre, ella no estaba allí, y pese a que su mirada me hubiera excitado, estaba concentrado, no podía permitirme que se me hinchara y ganar fricción en el agua, además nos pusieron unas gafas de agua para darnos aun más aspecto de profesionalidad.

Me cuadré bien en posición, mientras el socorrista silbaba a Susana para que saliera del trance en que había quedado, y yo gritaba las normas tal cual eran para que aunque perdiera por menos de un cuerpo supieran que ganaba, dio la cuenta atrás y dejando unos segundos tensos en que casi me lanzo al agua varias veces, pitó, salimos los 2 como balas pero ella me ganó al entrar en el agua, tenia más técnica, sabia de sobra que al inicio tendría que bucear bastante, cuanto más tiempo por debajo menos tiempo por arriba me decía un profesor de pequeño, con mis manos bien juntas rompiendo el agua hacia delante movía mi pelvis y los pies bien estirados, clavé mi mirada en la pared, era mi objetivo, ni veía ni quería ver por donde iba ella, salí a mitad de piscina a la superficie y con gran estilo daba brazada tras brazada, al llegar a la pared quise hacer lo de dar la vuelta y empujarme con los pies, pero no me sentí seguro así que según la toqué con la mano me di la vuelta y empujé tirando de mis gruesas piernas, esas que habían soportando tanto peso años atrás y que ahora eran 2 jamones llenos de energía, pude atisbar al iniciar la 2º vuelta que ella aun no había llegado a la pared, no me lo creía, pero no quería distraerme y seguí dando brazadas de vuelta, al emerger después de bucear ¼ de piscina, para mi horror vi de reojo como Susana se me había echado encima, su técnica al dar la vuelta en la pared debió ser casi profesional, así que inicié un acelerón para evitar que me superara, pero por más fuerte que iba, notaba como me iba comiendo terreno, oía entre hundidas de mi cabeza los gritos de los espectadores, y notaba claramente como con cada brazada ya no avanzaba tanto, había gastado mucha energía en la 1º vuelta y me estaba pasando factura, me recortaba distancias poco a poco, hasta que me adelantó quedando aun unos metros, apreté sacando de donde no tenia para que no se me fuera más de 1 cuerpo, pero casi no lo lograba, llegó a la pared primero y yo unas décimas más tarde, ante el aplauso de los demás, con ella riéndose mientras se quitaba las gafas de agua, yo aguanté debajo del agua, retomando fuerzas sin saber si me había sacado un cuerpo o no, emergí y me quité las gafas buscando al socorrista, que nos miraba confuso, no podía decir cuanto me había sacado, pero alguien tuvo la idea de grabarlo en el móvil, así que nos lo ofreció como ”foto finish”, salimos de la piscina, ella como una rosa y yo medio muerto, se tapó y secó con un toalla mientras miraba mi polla marcada ahora bajo el bañador húmedo, no me molestaba en taparme ni secarme, dejaba que el agua escurriera por mi cuerpo con el otro bañador grande en la mano, siendo consciente de eso, me acerqué a darla la mano.

-YO: muy buena carrera, se merece usted mi respeto, me ha ganado - ni me miraba a la cara, tenía los ojos clavados en mi miembro, y yo en sus pezones que se dejaban notar.

-SUSANA: nada…….es mas…….te felicito yo, has aguantado una enormidad……- ¿iba con doble intención o fue un cruce de palabras en su mente? -…. pero no se si he ganado.

-YO: ¿como que no? Has llegado 1º.

-SUSANA: pero no se si te he sacado un cuerpo o no, no saben, ha sido muy justo, aquel esta con el móvil, dice que lo tiene grabado - lo sabia de sobra, pero quería que ella lo dijera, que no escurriera el bulto para no besarme.

Nos acercamos a él mientras buscaba la parte final y trataba de parar el vídeo en el momento que ella tocaba la pared, ella estaba muy atenta pero yo me pegaba a ella fingiendo por el poco espacio de la pantalla, rozando mi pecho con su brazo y algún roce extra de mi polla con su cadera, el vídeo era bastante bueno, pero no lográbamos dilucidar cuando pararlo, en la ultima brazada estaba a menos de un cuerpo pero al tocar la pared debajo del agua no se podía saber con exactitud.

-YO: mira, no se ve, y como no se puede saber, has ganado tú.

-SUSANA: ¿y por que yo?, si no se sabe, se anula y punto.

-YO: ¿después del lío que hemos montado?, no, tiene que haber un ganador.

-SUSANA: pues entonces ganas tú, en la última imagen clara estas a menos de un cuerpo - estaba haciéndola rogar por perder la apuesta.

-YO: no puedo permitir que una mujer pierda una apuesta sin estar seguro - la tiré con efecto, y cayó.

-SUSANA: mira al machista este, ¿y si me vas a dejar ganar como a una niña? Si no se puede anular, ¡pagamos los 2!

No se como lo había logrado pero la tenia discutiendo fervientemente por aceptar tener que besarme, como era mi objetivo, remoloneé un poco hasta aceptar su conclusión, nos dimos la mano y la abracé, notando sus pechos bajo la toalla con la que se tapaba, y ella mi polla rozando sus piernas. La gente se fue disolviendo, mientras nos trataban como a estrellas, querían hacerse fotos y darnos la mano, de forma incomprensible, (nótese la ironía), a mi se me pegaban las chicas y a ella los chicos. Me di cuenta que mi paquete era un imán para las mujeres llevando solo el slip, vamos, no es que me diera cuenta, ya lo podía intuir o pensar, pero fue la sensación de que ocurriera la que me convenció de que si no estaba mi madre ni la familia delante, podía ir solo con ese bañador. Me fui de allí con varios números de teléfono de algunas chicas, de mi edad o mayores, los de las menores los rechacé de plano, pero me gustaba verme toqueteado y acariciado por tanta mujer en ropa de baño.

Cuando acabamos la ronda de entrevistas casi media hora después, agarré de la cintura a Susana y volvimos a su puesto, ella al inicio hacia como que quería que quitara mi mano de su cintura, pero desistió un poco entre mis comentarios y risas de lo ocurrido. Nos sentamos como antes, nada más hacerlo ella se puso las gafas de sol, y esa premura unida a mi imaginación dedujo que lo hacia para poder mirarme sin disimulo, intuyendo aquello se lo facilité, cogí la silla de plástico y la puse a su lado, alegando que allí haba más sombra ahora.

-YO: joder, me lo he pasado genial.

-SUSANA: y yo, va a ser una suerte que tengas que invitarme a algo siempre que vengas, así podemos charlar y pasárnoslo bien jajaja hasta podemos repetir la carrera - no lo podría asegurar pero me jugaría un dedo a que no apartaba sus ojos verdes de mi polla, aquellas gafas le tapaban bien la mirada.

-YO: ya, que graciosa, me vas a arruinar, ¿sabes como están los precios aquí?

-SUSANA: pues no haber apostado si no querías perder - me sacó la lengua de forma cariñosa.

-YO: ya, pero la recompensa era demasiado apetecible….– se me había casi olvidado-…. ¡Espera, pagamos los 2!, ¿donde esta mi beso?

-SUSANA: jajaja no se te olvidará, no - era delicioso ver su pecho vibrar con su risa, aparte de que eran de gelatina, su tórax hacia temblar su cuerpo.

-YO: como se me va a olvidar si casi me saco los hombros del sitio, he acabado muerto - hacia claro y amplios gestos con los brazos, moviendo los hombros, eso solo facilitaba su visión de mí.

-SUSANA: ¿no te habrás hecho daño? - calculé mucho la respuesta, si decía que si, podía dar paso o a un contacto directo con ella que terminara en más, o a que me llevara al puesto medico de la piscina y que se acabara todo, ya había jugado suficiente por hoy.

-YO: que va, y aunque me lo hubiera hecho, merecería la pena - rebajé el tono cómico, quería que eso calara en ella.

-SUSANA: ya claro, como sois los tíos, daríais la vuelta al mundo por un polvo con una cualquiera.

-YO: es posible que otros si, pero yo no, y tú no eres ninguna cualquiera, si el calculo que hago de un beso me ha costado 2 largos de piscina a tu ritmo, para un polvo no se que tendría que hacer……..pero lo haría - sonreí, quería que el comentario fuera gracioso, pero no demasiado.

-SUSANA: mira que galán me has salido ahora, podrías irte con cualquiera de esas niñatas que te ha dado su número mientras se restregaban contra ti, que han aumentado el nivel de agua de la piscina de lo que chorrean por ti jajajjja podrías tirártelas sin ningún esfuerzo - se reía, pero aquello era un prueba.

-YO: sin duda, pero aquí estoy, contigo, rogando por un simple beso que me he ganado con esfuerzo – guardó silencio, sonreía sin decir nada, jugando con sus dedos con el borde de la toalla que rodeaba su cuerpo, y su lengua inquieta en la boca, algo pasaba por su cabeza, y no se atrevía a decirlo - ¿que pasa?

-SUSANA: nada…….es que me da un poco de cosa.

-YO: ¿el que? ¿Besarme?

-SUSANA: no, tonto, no soy ninguna frígida.

-YO: ¿entonces?

-SUSANA: pues nada, es solo, vamos que se quien eres.

-YO: ¿y quien soy? - me sorprendí por sus palabras.

-SUSANA: pues, verás, son rumores, ya sabes, cosas de compañeros de trabajo, se oyen historias, y me da que tú eres uno de esos rumores.

-YO: ¿y cuales son?

-SUSANA: pues ya sabes, cosas que se dicen, de un día que alguien se le marcó demasiado el bañador, o de por que Alex cerraba la tienda de la entrada, cosas así….

-YO: ¿y que relación tengo yo con eso? - la sabia de sobra.

-SUSANA: pues eso, que ahí un tío por aquí últimamente que ..….va bien armado, y que se tiraba a Alex en la tienda siempre que venia, y de tantos rumores pues chico…- me señaló mi polla como algo evidente.

-YO: ¿y por que supones que soy yo?

-SUSANA: joder……- se ponía roja- …..pues por que…tú ya sabes…..- fingía no entenderla, lo tenia que decir -…….joder, que la tienes……grande, que no es que me fije, ojo –“no, que va” - pero al quitarte el bañador…..vamos casi le tengo que hacer un RCP a un par de señoras jajajja - quería meterle humor para rebajar la tensión y no lo iba a permitir.

-YO: vaya, gracias, pero solo por que la tenga grande no tengo por que ser ese rumor - era una chorrada pero quería llevarla más en esa dirección hasta que explotara con algún comentario que la pusiera vulnerable a mí.

-SUSANA: ya, pero una cosa es grande, como la de mi ex, y otra esa barbaridad.

-YO: ¿eso te parece?

-SUSANA: joder, como si no lo supieras, no te hagas el tonto, que la vas enseñando.

-YO: pues si, es enorme, pero no por ello tengo que ser yo.

-SUSANA: si, solo esa pedazo de……..podría hacerla gritar de esa manera - se le escapó, estaba cansada de andarse con remilgos.

-YO: ¿gritar?

-SUSANA: si, vamos, que la tienda da por detrás a los vestuarios nuestros, y más de una vez hemos oído como gritaba, y asociando los días que te he visto con esos dais y ahora verte así……pues tienes que ser tú.

-YO: pues mira, si, era yo, me la he estado tirando en la tienda siempre que venia, no sabia que nos oíais, y ahora que los sabes ¿podrías decirme que ha pasado con Alex?

-SUSANA: pues nada, que la tienda no daba para más, no hacia caja, así que la echaron.

-YO: vaya, una lastima, nos divertíamos.

-SUSANA: ya, pero no te falta diversión, te he visto con la sudamericana esa que os acompaña.

-YO: si, pero es solo una chiquilla, una cría más como esas de antes - pensé que me había pasado de largo el tren con ella si sabia de mis líos - pero vamos, que me tienes bien vigilado.

-SUSANA: no hombre, ya sabes, hemos hablado antes, últimamente te pasas mucho, no se, eres una cara familiar - se puso roja aun más.

-YO: pues que divertido, ahora tenemos que besarnos sabiendo té de mis andanzas sexuales y yo de tu acoso hacia mi jajajaja

Se hizo un silencio sepulcral, estuvimos así unos 10 minutos, ya se hacia tarde y habíamos quedado después de la piscina así que aceleré los tempos.

-YO: pues nada, en breve me tendré que ir, y tú terminar aquí, así que toca despedirse, y que mejor que con un beso.

-SUSANA: ¿pero ahora?

-YO: aquí y ahora, un solo beso y tú quedaras libre.

-SUSANA: esta bien - se inclinó hacia mí, poniendo morritos de abuela.

-YO: ¿que haces? No me he partido el espinazo por un piquito de mierda.

-SUSANA: ¿y que quieres, que me abra de piernas? - lo dijo enfadada.

-YO: no, quiero un beso de verdad …..– me puse en pie ofreciéndole mi mano -…. de esos de película, contigo en mis brazos, de un par de segundos, me has dicho que no eras ninguna frígida, demuéstralo - se calmó un poco, estaba algo avergonzada, me miraba fijamente así que le quité las gafas con cuidado, dejándome a la vista aquellas piedras preciosas verdes que tenia por ojos.

La seguridad de mi mirada y la firmeza de mi mano la hicieron ponerse el pie cogiéndome por ella, según lo hizo de un movimiento le quité la toalla dejándola caer al suelo y sin dejarla reaccionar la agarré por la cintura pegándola a mi, pasando sus manos por mis hombros, clavándole mi mirada en sus ojos y mi polla en su vientre, era algo más bajita que yo, nada raro debido a mi corpulencia, así que se tenia que poner de puntillas para alcanzarme, notaba sus pechos en mis pectorales, eran grandes, y estaban aplastados por la fuerza de nuestros cuerpos, los notaba subir y bajar debido a su respiración, y fui acercando mi cara a la suya, lentamente, ella hacia ademán de ir retirándose, sin girar la cara, riendo, hasta que la curvatura de su espalda no le permitió más y mis labios la alcanzaron, hubo un 1º beso tierno y sin malicia, con los ojos abiertos, movía un poco la boca sin que ella reaccionara así que apreté su cintura contra mi, eso la activó, y movió su boca, entonces empezó un 2º beso largo y pasional, allí vi que nuestros ojos se cerraban, y nuestros cuerpos disfrutaban de aquello, casi podía percibir sus pezones duros sobre mi, un 3º beso comenzó al notar su lengua moverse en sus labios y yo correspondía, nuestras cabezas cambiaban de dirección rozando nuestras narices, hasta terminar en un 4º beso mío y un 5º suyo, cortos y suaves, como colofón.

-YO: vaya, sabes mejor de lo que hubiera podido desear.

-SUSANA: gracias, tú no lo haces nada mal tampoco, pero no ha sido uno, yo por lo menos he contado 4…..

-YO: tendré que dar otros 8 largos el próximo día - sonrío sin apartarse de mí, relamiéndose y clavando sus ojos en los míos.

-SUSANA: pues estaré deseando que vuelvas - me separé de ella amagando con otro beso sin que ella se retirara, pero sin dárselo y me fui orgulloso hacia donde estaban mis amigos, los muy cabrones no estaban mirando así que cuando les dije que me había besado no me creyeron, volví con Susana, la toqué la cintura estando de espaldas, dándose la vuelta

-YO: perdona, que sean 10 largos…. - y la pegué otro beso de tornillo, esta vez al separarme noté como ella reía pero se mordida el labio -……hasta la próxima.

Y ahora si, regresé con mis amigos, ellos alucinaban y me vitoreaban, terminamos de recoger, mientras yo no podía apartar los ojos del cuerpo de aquella socorrista mientras despejaba la piscina a la hora del cierre, habíamos quedado para salir a dar una vuelta, así que lo hicimos, pero al terminar me fui derecho a casa de mi Leona, aquel juego con Susana me había dejado trastocado, y las sesiones de sexo duro con ella me tranquilizaban. Los siguientes días que volví a la piscina siempre la llevaba algo, un refresco, agua o un helado, y charlábamos durante horas, ya fuera con amigos o con la familia, siempre me pasaba por allí un rato, con el slip o los 2 bañadores dependiendo de mi compañía, siempre echábamos a nadar un rato, haciendo largos, si mantenía el ritmo nos besábamos una vez, y si no le tenia que invitar a algo más, los besos ya eran sensuales, con lengua y acariciándonos la espalda, o la cara, no es que fuera una experta pero el hecho de ver sus ojos antes y después me volvía loco, su verde en arropaba, y notaba como ella movía su cuerpo, su cadera, para restregarse contra mi, y más cuando solo iba con los slips, yo aprovechaba algún descuido y la metía mano en el trasero, era mármol, el ejercicio se lo tenia como una piedra.

Susana – Decepción.

Pasó una semana y andaba más caliente que un pollo en un horno, las colombianas seguían con su padre y marido en casa, mi Leona se fue al pueblo de vacaciones y yo necesitaba desahogo, en una de nuestras charlas tiré a ver si caía.

-YO: oye, tengo que preguntarte algo.

-SUSANA: ¿dime?

-YO: ¿tú nos oíste a Alex y a mí, o solo el rumor? - se acaloró de golpe.

-SUSANA: bueno……al principio no, solo el rumor, pero luego, por curiosidad, me avisaron y fui para allá, pobrecilla como gritaba jajajja

-YO: jajaja la verdad que si, no la metía nada de caña y la pobre sollozaba.

-SUSANA: no vaciles, si retumbaba la pared.

-YO: pues eso, si pillo a una mujer de verdad, como tú, derribo el edificio - se le abrió la boca ante mi comentario, mitad sorpresa mitad excitación, sin gafas ni nada ya me miraba la polla sin cuidado alguno.

-SUSANA: ¿te estas declarando?

-YO: solo te digo que si lo hiciéramos retumbaría medio planeta.

-SUSANA: pues…….en mi casa tengo una pared que me sobra…………..- me miró a la cara.

-YO: pues hoy la tiramos - me incliné para besarla y ella se dejó, mientras acariciaba su cintura y la atraía hacia mí, nuestras lenguas jugaban su propio partido.

-SUSANA: anda vamos al agua - se levantó quitándose la camiseta y esperando que mi cuerpo la rozara al levantarme.

Nos tiramos los 2 al agua, y jugamos un poco a ver si la pillaba, pero no se esforzaba, la agarraba y la atraía hacia mi pero se escabullía jugando, a la 3º me cansé y la agarré por la espalda pegándola a mi, haciéndome notar en su trasero, y mientras la iba besando por el hombro la llevé a una zona más profunda donde solo se veían nuestras cabezas por encima del agua, allí mis manos repasaron su cuerpo por encima del bañador, pasándome en sus pechos, no nos besábamos, solo repasaba su hombro con mis labios, ella movía su cintura acariciándome con su culo de mármol, allí me mató, y por la zona de sus costillas metí mis manos, acariciando ya directamente sus pechos, y palpando los duros pezones que ya había notado antes por encima del bañador, la respiración se le agitó tanto que casi me reventaban las manos cuando se le hinchaba el pecho, ella se dio la vuelta y puso una mano en mi paquete, dejándome su cara a milímetros y mirándome a los ojos, aquella mirada de mujer lujuriosa, ansiosa, mojada y esos ojos verdes me la pusieron dura al momento, y ella sintió ese cambio de tamaño en su mano, si antes ya le parecía grande ahora su cara era de incredulidad, pero su mano y su cuerpo reaccionaron con excitación, de hecho metió la mano por el hueco que mi erección había provocado en la cintura, y masturbaba lévente mientras hundió su lengua en mi boca, yo metí mis manos en su trasero, por debajo de la tela del bañador, separando y juntado aquellas maravillas formadas a golpe de ejercicio. Estuvimos así un buen rato, con algún crío con gafas de agua dándonos vueltas como tiburones hambrientos, sin duda apreciando lo que pasaba debajo del agua, pero estaba disfrutando demasiado como para abrir los ojos y darse cuenta. Mis manos al final la elevaron subiéndola sobre mi, a horcajadas, y si en el aire me era fácil en el agua ni os digo, mis dedos penetraron a duras penas hasta llegar a su coño, el bañador y sus glúteos torneados me lo pusieron difícil, pero al llegar mereció la pena, apenas la rocé, la oí suspirar, para cuando llegué y la metí un dedo ella me masturbaba con tanta energía que me sacó el miembro del bañador y lo hacia por fuera, me besaba como si le fuera la vida en ello, juro que podría habérmela tirado allí mismo y no se hubiera negado, pero solo la penetré con un dedo, y luego con dos, estaba muy caliente, se subía a mi retorciendo su espalda para ponerme sus tetas en la cara y luego bajaba dejándolas ir a contra piel contra mi pecho, mi mano no daba más de si, le metí el bañador entre las nalgas, para que fuera como un tanga y tiré de él con fuerza para dejar sitio, eso la volvió loca, su mano era un rayo masturbándome, y con esa configuración mi mano ya podía penetrar sin problemas y con el pulgar acariciaba su clítoris, no aguantó mucho antes de querer gritar por la explosión del orgasmo que sintió, pero mi boca la frustró, cuando terminó de temblar se bajó de mi y ahora con las dos manos terminó de pajear, hasta que me corrí en el agua, sus gestos eran claros, sus hombros aparecían y desaparecían en el agua, pero le dio igual, hasta que no notó mi falo flaquear no paró, y se lo agradecí con un gran beso doblándola la espalda hasta casi hundirla en el agua.

-YO: te voy a reventar en tu casa.

-SUSANA: lo sé.

Fuimos dando un paseo a su puesto por el agua, dejando que nos enfriara los ánimos, nos colocamos bien los bañadores y salimos a tumbarnos al sol un rato, sin dejar de mirarnos y sonreír, pensando en el futuro cercano. Ya avisé a mis amigos que se fueran sin mi, la ayudé a recoger y echar a la gente del agua, a la hora del cierre nos fuimos a duchar los últimos para estar solos, y en la duchas repetimos lo del agua, pero ya desnudos, con mi estaca libre y su cuerpo escultural a mi entera disposición, masacré sus tetas con mi lengua, eran tan grandes e infladas que las dabas un toque y temblaban unos segundos, le trabajé los pezones hasta tenerlos duros sin dejar de penetrarla con mi mano, y ella de masturbarme, al correrse ella primero se bajó y recorriendo mi cuerpo con su boca, llegó a mi polla, de nuevo la comparativa con las manos de otra persona era insultante, aun así con ambas manos empezó a masajear y chupar el glande, con sus enormes ojos esmeralda clavados en mi, trató de tragar más pero no tenia la boca tan grande, eso me genero cierto gusto, sus labios tirantes intentando engullir lo que no podían, pero eso le dio movilidad a su lengua que hacia maravillas en mi capullo, como iba para mi 2º corrida se tuvo que trabajar bien la mamada, de hecho me cansé de tener las manos vacías y cogiendo de forma invertida de la cintura la di la vuelta en el aire y me la cargué encima, dejándome su coño en la cara y sus pechos en mi vientre, con su boca aun lamiendo mi tranca, hundí mi cara en su vagina, penetrándola con la lengua y dándole pequeños lametones al clítoris, para luego chuparlo, sus risas iniciales ante la posición fueron cambiando con mis caricias, y se le notó en el ritmo de sus manos, aun así la saqué el 2º orgasmo antes de que ella recibiera mi corrida en su boca, casi se atraganta, al ponerla de pie tenia toda la casa manchada de semen y lo escupía.

-SUSANA: ¡que mamón!, la próxima avísame.

-YO: la próxima será dentro de ti - agarré entre sus muslos metiendo mis dedos en ella, a lo que casi cae al suelo, tenia ganas de follármela así que en vez de seguir jugando le di un buen azote en el culo y la pedí que se diera prisa, casi me parto la mano, “que nalgas tiene”, eran de acero, y casi ni se movieron ante mi golpe, todo lo contrario que sus pechos.

Salí de allí por que si la veía mojándose el cuerpo no llegaba a casa sin empalar, nos fuimos al final vestidos con las ropas amplias y ligeras debido al calor, ese final de agosto fue criminal, llegábamos a los 45º o 47º grados en una ciudad sin mar, de hormigón y piedra como Madrid. Nos subimos a su coche, sin aire acondicionado, y sin ningún pudor, o tenia una mano en el cambio de marchas o en mi paquete, ahora solo llevaba el bañador grande así que metió la mano por la pernera y me sacó parte de la polla para acariciarla por el trayecto, yo no fui menos y metí mi mano por debajo de aquella mini falda blanca con vuelo que llevaba, de mujer tenista, la sorpresa fue descubrir que tampoco llevaba ropa interior, así que mis dedos jugaron en la entrada hasta notar como se iba humedeciendo, los semáforos en rojo se convertían en bacanales, y si no fuera por los cinturones de seguridad, que no ayudaban al apretar sus pechos y dejarlos bien marcados, y el claxon de los de detrás, hubiéramos hecho el amor allí mismo, el calor era sofocante, y como era hora de salir había cierto atasco que no dejaba que cogiéramos velocidad para que entrara aire por las ventanillas, yo me quité la camiseta y ella se la remangó dejando su ombligo al aire, con la falda también doblada dejando lucir carne, carne húmeda, del sudor, del calor que nos abrasaba por fuera y por dentro, lo pasé realmente mal, pero la visión de ella con medio cuerpo al aire sudoroso me decía que merecería la pena.

Al fin salimos del atasco y por suerte fuimos sin más inconvenientes a su casa, de chiripa aparcó a la 1º, ella se recolocó la ropa pero yo solo me bajé la pernera, y me dejé la camiseta colgada de mi mochila, no había suerte, vivía en un 3º sin ascensor, pero eso me regaló 2 pisos de ver como su culo se contoneaba delante de mi, y digo 2 por que el 3º lo subió con mi mano metida entre sus nalgas y sus pechos, estaba ardiendo de pasión, llevaba como 4 días sin follar debido a las circunstancias de mis amantes. Como siempre, tardaban un mudo en abrir la puerta de su casa, en parte por que yo no paraba de jugar con ellas por detrás, al meter mi mano debajo de su camiseta me quedé alucinado, no llevaba sostén tampoco, pero no era posible, no me había dado cuenta por que estaban tan bien colocadas y redondas que no pensé que fuera natural, eso hizo bajar mi mano hasta la falda y levantándosela hundir mi mano en su intimidad, ella se dejaba hacer, intentaba abrir la puerta pero mis caricias no se lo permitían, se le cerraban los ojos, para cuando abrió la enganché del estomago y la levanté metiéndola en su casa, mientras reía iba dejando caer las cosas, llegué a un salón donde la tiré al sofá, me quité el bañador y vi su cara, era de pánico y excitación, ya me la había chupado pero mi cara ahora no era de jugar, era de asesino, caí sobre ella abierta de piernas, y mientras mi polla golpeaba su vientre le arranqué la camiseta, le comí las tetas como nunca había podido, eran tan grandes y bien colocadas que no me daban abasto mis enormes manos, busqué sus labios mientras mis dedos la penetraron otra vez, estaba empapada de sudor y de sus propios fluidos, la metí tanto ritmo que apenas en 5 minutos se corrió de nuevo, de remate la hice chuparme los dedos manchados por ella mientras iba bajando, degustado su cuerpo, con mi boca, hasta levantarla la falda y meter mi cara allí, estaba desatado, la busqué el punto G mientras le abría los labios mayores y le chupaba un clítoris enorme, a los 10 minutos la hice correrse como una fuente, empezó con espasmos pero no dejé de mover mi mano persiguiendo su inquieto cuerpo hasta que terminó de echarlos.

-YO: ahora estas lista par ser follada por mi, y si te crees que tendré compasión como con la de la tienda, lo llevas claro.

-SUSANA: ¡por dios, fóllame de una vez, haz que retumbe la casa!

La obedecí como palabras de mi señor, la quité la falda, la saqué la cadera al borde del sillón, poniéndome de rodillas la abrí bien de piernas mientras jugaba con mi glande en sus labios mayores, al final encontré la posición y apreté hasta meter mi polla en ella, me costo mucho, estaba bastante cerrada, así que según iba metiéndola dejaba que se acostumbrara, como todas, hacia aspavientos en el aire, se agarraba a lo que podía mientras notaba como me iba abriendo paso, cuando le metí la mitad noté demasiada presión así que dejé de penetrar y comencé el bombardeo, eran golpes fríos y secos, pero que la hacían retorcerse de placer, se agarraba las tetas para que no se movieran tanto, pellizcándose los pezones, por lo visto esto le ponía a muchas, aun así la di sin parar, queriendo penetrar más, pero no me dejaba, en media hora se corrió unas cuantas veces rogándome que parara o que siguiera, aquello me estaba cansando, la levanté sin sacarla de ella.

-YO: ¿donde esta esa pared que quieres tirar? - me miró riéndose y señalo una.

La pobre se vio empotraba contra ella de espaldas, y eso provocó que mi rabo la abriera un poco más, gimió, con cierto dolor, pero mis besos la ahogaron, en esa posición solo tenia que levantarla y dejarla caer para coger buen ritmo, entre mis besos notaba sus gestos de dolor, muecas apenas perceptibles, pero iban aumentando según lo hacia mi ritmo.

-SUSANA: ¡para, para, por dios, me haces daño, bájame! - se dio la vuelta y se abrió las nalgas - métemela así, a ver si duele menos.

Encantado de la vida la obedecí, la ensarté sin piedad y la hacia rebotar contra la pared, estaba un poco fuera de mi, la hacia dar saltos con cada embestida para que no la penetrara tanto, sus muecas de dolor volvieron, si, la hice correrse, pero la dolía, ponía las manos hacia atrás para hacer de tope, pero eran un par de veleros contra la fuerza de un océano, no fue buena idea, ver su duro trasero temblar, abriéndose ante mis acometidas, solo pensaba en golpearla con la pelvis en ellos, pero ni así las penetraciones no eran tan profundas, sus gritos eran alaridos ya, pero de dolor, estuve casi media hora así, esperando que se acostumbrara, pero no lo hacia.

-SUSANA: ¡para por favor, me estas partiendo, me duele mucho, no lo aguanto, sácala, te la chuparé, PERO SÁCALA! - ofuscado lo hice, pese a mi excitación noté suplica real, la di un buen azote por no aguantar, pero ella no era una de las colombianas.

Se agachó agarrándose el coño, sesteando con la boca, le escocía, aun así me agarró la polla y la chupó como una profesional hasta sacarme el semen, después me pidió que me vistiera y me fuera, que otro día quizá. Salí de allí ofuscado y muy poco feliz, no era la 1º que se rendía pero estaba muy buena, y tenía unos ojazos verdes que me volvían loco.

Volviendo a mi casa solo pensaba en si esa del bus me la podría follar o si esa mujer del cruce se la metería toda, llegando a mi casa recibí una llamada de Yasmine, su padre había salido con su madre unas horas y estaba sola en casa, di gracias al señor de los cielos y me fui derecho a su casa, la pobre recibió como si fuera mi leona, sin el apoyo de su madre se terminó desmayando, estaba fuera de mi y lo pagué con ella, apenas me duró 2 horas antes de irse, aun así aguantó lo suficiente para apagar mi fuego, y al volver en si, terminar una follada por el culo de más de 1 hora antes de tener que irme por el regreso de sus padres.

Lo malo fue que pese a seguir jugado y tener relaciones de masturbación y sexo oral con Susana, jamás me dejó volver a penetrar su cuerpo, era muy frustraste, me tuve que hacer a una de las chicas del grupo para saciarme ante la escasez de coños que tenia en aquel momento, una bajita con gafas con la que no había mucha relación, era una borde, pero al menos ella se dejaba follar como dios manda. La relación con Susana acabó antes incluso de cerrar la piscina a inicios de septiembre, la mandé a paseo, para chupármela había 20 mejores que ella y la mitad se dejarían follar, al inicio solo pensaba en la perdida de tiempo y esfuerzo que me había supuesto aquella socorrista, pero mi mente ya no estaba centrada en aquello, si no en que quedaba 1 mes para el regreso de Ana.

Zeus – Álter ego.

Por fin llegó septiembre, dejé atrás las piscinas y algo ofuscado por mi experiencia con Susana afronté mi nueva realidad, tenia 19 años, era una maquina de follar con una polla enorme y en el horizonte me quedaba 1 mes para que Ana volviera a Madrid para quedarse, tenia que decidir mi futuro. Pese a los denodados esfuerzos de mi familia y de que mi nota, raspando, daba para pedir sitio, me negué a ir a la universidad, no estaba dispuesto a pasarme otros 4, 5 o 6 años estudiando, viviendo de mi familia y casi arruinándolos por pagarme esos estudios, mi familia no era acomodada, ayudaba que en el fondo no me gustaba estudiar, soy vago y sabia que cuando algo no me gusta no le pongo interés, no iba a obligar a mi familia, o a mi mismo, a ir a tocarme los huevos o de fiestas, como hacen muchos. Además de tener muchos ejemplos cercanos de gente que no tenia estudios y si buenos trabajos, o de gente con muchos estudios pero que no les contrataban para lo que estudiaron, supongo que fue una mala decisión, o eso me decían todos, pero en aquel momento me pareció lo correcto, me buscaría un trabajo, ayudaría en mi casa y haría mi vida desde ese momento.

Sin duda, en lo amoroso, mi plan era que según llegara Ana, salir juntos, era mi prima, pero en el fondo no lo era, solo era una denominación, era una mujer perfectamente aceptable como pareja estable, era lista, cariñosa, tenia un cuerazo de cine con una piel color caramelo que me volvía loco y lo más importante para mi, que pese a que la desvirgué, y luego me la había tirado con esmero, había seguido siendo igual de dulce y amable, no se había vuelto una adicta al sexo como me pasó con Irene, la había idealizado un poco, lo sabia, pero era la mujer con la que podría uno pasar el resto de su vida siendo tan joven, y no arrepentirse jamás. Pero solo fueron unos días, apenas pude disfrutar de ella ante su regreso al hogar en Granada, mantuvimos el contacto, me dijo que estaba saliendo o tonteando con un chico pero que no era nada serio, que lo dejaría en cuanto viniera a Madrid, de hecho las noticias que me llegaban es que desde las fiesta navideñas que pasamos juntos su familia estaba encantada, había pegado un pequeño cambio, ya no era aquella muchacha tímida y aburrida que se quedaba en casa, ahora salía y había hecho varias amigas, todo sin repercutir en sus notas. Una de esas llamadas llegó al inicio de septiembre.

-ANA: ¡hola primo!, ¿que tal te va todo?

-YO: pues perfecto ricura, deseando verte por aquí, no sabes cuanto……….

-ANA: pues igual que yo, se que no ha sido justo pero me encantaría que retomáramos lo que dejamos a medias.

-YO: eso ya te he dicho que ni se tiene que mencionar, dalo por supuesto.

-ANA: bien, me alegro de que pienses así, por que tenemos un problema.

-YO: dime.

-ANA: verás, el plan era que yo me fuera a vivir con tu familia….

-YO: ¿era? - me dio un vuelco el corazón, lleva todo el verano con la esperanza de su regreso.

-ANA: y lo sigue siendo, yo quiero ir allí y estar contigo, pero las cosas se han complicado un poco.

-YO: dios, dime, no me tengas así que me da algo.

-ANA: es que, veras, he hecho una amiga estos meses, Lara, es mi mejor amiga, y también quiere irse a Madrid a estudiar, nos han aceptado a las 2 en la misma, y como nos llevamos genial, queremos vivir un poco toda la experiencia juntas para no sentirnos tan solas allí.

-YO: bueno, pero eso no es un problema.

-ANA: si, bueno, lo es, no conoce a nadie allí, no puedo dejarla sola, y seria demasiado abusar vivir las 2 en vuestra casa, aparte de que….bueno, tú y yo no podríamos estar tanto tiempo juntos.

-YO: pues ahora que lo dices, es verdad, pero entonces ¿como lo queréis hacer?

-ANA: pues no sé, hemos pensado en ir y alquilar un piso de estudiantes, para tener un cuarto para nosotros, otro para ella o más gente, como hacen los estudiantes normalmente, así tendríamos……….privacidad ¿A ti te gustaría?

-YO: bueno, así de sopetón es un gran cambio, claro que me encantaría, pero eso cuesta dinero, y según creo ya vais bastante justas pagando las matriculas de la Universidad.

-ANA: pues si, ese es el problema, no sabemos como hacerlo, por eso te llamo, no sé, tú puedes moverte por allí, ayudarnos a encontrar piso, a ver como salen de precio, pero que nosotras no podemos pasar de 450€ cada una al mes.

-YO: pues eso es un problema, casas o residencias con varias habitaciones cercanas a la Universidad, a estas alturas están todas pilladas, y las que no es por los precios, son altos, preguntaré y te iré informando pero es difícil.

-ANA: por favor primo, seria genial que lo lograras.

La conversación siguió por otros derroteros, pero al colgar me quedé pensando, ¿de verdad quería irme a vivir con ellas? ¿Quería abandonar el nido de mis padres tan joven?, estaría su casa a más 1 hora en bus del piso, y ya no tendría a mi madre y mi padre cuidándome, pero también seria un gasto menos para ellos, aun así les tenia que ayudar con dinero, ¿y como se tomarían que me fuera a vivir con ellas sin ser universitario? quizá se lo tomarían bien y pensarían que cuidaría de ellas, claro que lo haría, pero saliendo con Ana. Era una decisión muy importante y lo hablé con mi familia, como preveía no entendían por que irme con ellas si no iba a la universidad, pero se lo vendí bien, como que era un piso compartido y ellas podrían vivir allí para tener su libertad, lo hablaron entre familias y ante nuestra insistencia al final nos dejaron prepararlo, y si se encontraba algo, se haría, pero si no, siempre quedaba el plan inicial.

Yo comencé a mover hilos, 1º necesitaba a varios compañeros de piso, solos o en pareja, para que ayudaran en los gastos, no me fue difícil convencer a alguno, de hecho mi mejor amigo y su novia se apuntaron sin tener que decirles yo nada, llevaban saliendo desde los 15 años, les había presentado yo, y estaban cansados de tener que jugar al ratón y al gato con sus familias en las casas, eran lo que se llama la pareja ideal, ella inteligente y divertida, de hecho hasta se había matriculado en la misma Universidad que Ana, pero con becas, él era casi todo lo contrario, listo pero dejado, como yo, una cabra loca y buena gente, se compenetraban genial, y convenciendo a otro chico del grupo ya tenia a los personajes, una pareja, 1 habitación, otro chico, otra habitación, la amiga de Ana, Lara, otra, y la de Ana y yo, tenían que ser mínimo 4 habitaciones, y por lo menos 2 baños, hablando entre todos quedamos en unas condiciones establecidas, como calefacción, aire acondicionado o que tipo de cocina. Y empezamos a buscar, ya no solo pisos de estudiantes, ninguno de esas características estaría libre a 1 mes de empezar las clases, si no pisos a alquilar, donde había mucho más donde buscar. Vi varios con mis futuros compañeros de piso, pero en todos había alguna pega, salones demasiado pequeños, cocinas de gas, habitaciones muy juntas, 1 solo baño…..etc.

Pasó la 1º semana sin resultados, hasta que vi un anuncio, me llamó la atención su foto, era un salón bastante grande, así que quedé en ir a ver el piso con el dueño, nadie más podía, fui solo, al llegar me esperaba el dueño y su mujer, nada reseñable en ellos salvo que la mujer iba algo descocada por el calor aun reinante, tenia su polvo pero no me fijé en ella, me enseñaron el piso y quedé enamorado, llevaba un lista con todas las peticiones, y las cumplía, era un 4º piso, un ático, encima con terraza grande, era el único 4º de la zona, así que no habría molestias por los vecinos y la música, de hecho el suelo estaba con aislante térmico y de ruido, habían construido ese ático después del edificio, tenia 4 habitaciones, bien distanciadas para no molestarnos entre nosotros con ruidos nocturnos, y aparte de los espacios en si, es que 2 de las habitaciones tenían baño propio, y luego otro aparte que conectaba con las 2 habitaciones que no tenían, calefacción central en el suelo, aire acondicionado, algo indispensable para mi y mis calores, un salón amplio y espacioso para montar fiestas, todo semi amueblado con una TV de plasma enorme en el salón, me quedé atónito, y pregunté como aquella maravilla estaba libre, me dijeron que había estado alquilado a un grupo de inmigrantes africanos pero que les habían dado problemas, tuvieron que echarlos y reformar un poco el piso, pero que les resultaba difícil alquilarlo después de la fama cogida, también por el precio, casi pedían 1800€ al mes, y las formas de pago eran estrictas, 3 meses con el corriente por adelantado, y contrato de 5 años, renovable o a cancelar por ambas partes cada año. Les comenté que de inicio solo pretendíamos 1 año para probar, y pese a que les costó, tenían el piso vacío y éramos la mejor opción, de hecho al enseñarles el piso a mis amigos, renegociamos y bajamos a 1600€ al mes, con los 3 por adelantado, y pasado el año ya veríamos.

Mis amigos quedaron encantados como yo con el piso, nada más entrar se les notaba en la mirada que era lo que buscaban, hice un vídeo recorriendo toda la casa y se lo mandé a Ana que reaccionó igual, y las condiciones de pago no eran malas, 400€ por habitación, las parejas con 200 cada uno, era más que factible, el único problema era soltar los 4800€ de inicio, ninguno tenia esa cantidad, ni locos podíamos juntarlo entre todos, y menos aun en el tiempo que quedaba. Me deslomé pensando que tanto esfuerzo e ilusión no servirían para nada, me estrujé la cabeza, pensando en como ganar dinero, pensé en pedírselo a Eli, que le iba bien con el gim, o a Mariana, que la ayudé con sus subvenciones, a la Duquesa que me debía una por lo de la cinta, o hasta a mis colombianas, eran muy adineradas gracias a su padre y me lo hubieran dado con solo ordenárselo, pero tenia que ser yo, de mi esfuerzo.

Pero cualquier trabajo supondría cobrar pasado el plazo, mi mente rebuscaba en el pasado, ¿como?, no sabia donde, ni que buscar, le pedí a mi padre que me diera el numero del club de putas en el que trabajó como chofer, a ver si allí conocían a alguien para aprovechar lo único que (creía) me hacia especial para poder ganar tanto dinero, pero se negó en redondo, aparte de que aquel club cerró hacia 14 años. Pero eso me refrescó la memoria, ¿que putas conocía?, la única oficial fue Matahari, la de la fiesta de Eli, de hecho, recordé, cuando salió corriendo de la habitación, juraría que entre mi enfado por su jugarreta, dijo algo, algo de ganar dinero, y una tarjeta que dejó caer al suelo, me fui derecho a mi traje de Eric, el que llevé en la fiesta, esperando encontrarme una tarjeta allí, sabia que no, había llevado el traje más veces y no estaba, llamé a Eli y la pregunté, ella no se acordaba de nada de aquello, de hecho me dijo que ni había abierto el bolso de fiesta que llevó, pero aun así le supliqué que buscara, me llamó uno días más tarde para que fuera a verla.

-ELI: hola amor, ¿que tal?

-YO: pues desesperado, necesito aquella tarjeta.

-ELI: pues la he encontrado, debí de recogerla del suelo al limpiar la habitación, ¿para que la quieres?

-YO: por que necesito dinero, mucho y rápidamente.

-ELI: no se yo si es buena idea, nada de esa furcia puede ser bueno.

-YO: yo no quiero nada de ella, lo quiero de sus jefes.

-ELI: ¿seguro que quieres meterte en ese mundo?

-YO: no quiero, ni pienso vivir de ello, solo necesito algo de dinero rápidamente y no se me ocurre nada más.

-ELI: esta bien, te daré la tarjeta pero con la condición de que les llames ahora mismo, delante de mi.

-YO: de acuerdo - se fue a una bolsa y me dio la tarjeta, no había nada en ella, solo un nº de teléfono, llamé.

TELÉFONO: Hola, buenos días, bienvenido a servicios para empresas Now Servies, ¿en que podemos ayudarle? - colgué.

-YO: que raro, me habré equivocado al marcar - volví a llamar.

TELÉFONO: Hola, buenos días, bienvenido a servicios para empresas Now Servies, ¿en que podemos ayudarle?

-YO: si…hola….buenos días……mire, llamaba….- me temblaba la voz, y la locutora lo notó.

-TELÉFONO: ¿llamaba para un servicio….”especial”? - la forma de decirlo era demasiado clara, era el numero.

-YO: no, mire, no quiero ningún servicio especial, es más, estaría interesado en………¿una entrevista de trabajo?

-TELÉFONO: esta bien, dígame, ¿como consiguió este número?

-YO: me lo dio una mujer en una fiesta, me dijo que si buscaba trabajo os llamara, Matahari la llamaban.

-TELÉFONO: ahh si, la conocemos ¿y en que fiesta dice que la conoció?

-YO: en una del deporte, de alto copete, allá por noviembre del año pasado, si habla con ella dígale que soy el de la cinta de vídeo.

-TELÉFONO: ahhhhhh perfecto, con eso será suficiente, déjeme que haga unas llamadas y nos pondremos en contacto, déjeme un nº de teléfono al que poder localizarle, le llamaremos en unas horas – se lo di, me colgaron y quedé un poco fuera de lugar, ese “ahhhhh” final me dejó entender que sabia a lo que me refería.

-YO: pues ya esta, creo que van a preguntar a Matahari por mí, tenemos un par de horas.

ELI: pues me va a venir genial, tengo a mis chiquillas aprendiendo a mamar pollas grandes después de las clases, y el monitor negro se me ha ido de vacaciones, ¿podrías echarme una mano?

-YO: hombre, un placer - le debía demasiado a aquella mujer, acepté ser su acompañante en los ejercicios.

Dio una clase en la que no había pocos vejetes, como cuando estaba yo, aquello era un hervidero de crías que me comían con los ojos, y chavales, que se deleitaban con Eli, cuando llegaron los bailes fue una locura, un río de chavales con las hormonas alteradas metiéndose mano unos a otros, y al terminar la clase se fueron todos menos Eli, unas 5 chicas, y yo. Haciendo las presentaciones debidas las ordenó a todas desnudarse, incluida ella, sus ordenes era seguidas con ritmo militar, las tenia bien adiestradas, las daba paso para tratar de seducirme, las quería o las había enseñado ya a ponérsela dura a un hombre, pero yo jugaba con ventaja, era notar mi polla y se les caía el mundo al suelo, al final Eli cogió las riendas y me desnudó, las chicas casi salen despavoridas de allí, y Eli se me quedó mirando.

-ELI: joder, casi se me había olvidado lo grande que era, sabia que era más grande que la del cubano, y mira que la suya no esta mal…………….tú estas cada día mejor físicamente, ¿haces ejercido?

-YO: algo así.

Me entendió a la perfección, y enseñando a las crías a moverse, se puso a hacer gestos y movimientos, hasta que la final me la puso dura, una cría al verla así directamente se masturbaba delante de mi, mientras otras dos se besaban, las llamó la atención y se puso de rodillas, las atrajo hacia si a todas, y las puso a su alrededor, yo tenia a 6 mujeres, desnudas de rodillas, con Eli cogiéndome la polla y dándolas indicaciones a las otras, que se relamían y mordían el labio mientras se frotaban el coño disimuladamente, de inicio me hizo una mamada de cine, parando a enseñarlas, luego las iba poniendo a repetir, y cada chiquilla quedaba aturdida por mi, la querían trabajar pero era demasiado para ellas, no tendrían ni más ni menos que los 18 años, pero estaban abrumadas, alguna logró seguir alguna indicación pero el resto no le entraba en la boca, trabajaban bien con su lengua mi tronco y los huevos, las tenia bien enseñadas, pasó la hora y al final se fueron las crías, en cuanto se fueron Eli se me tiró encima besándome.

-ELI: dios, había olvidado esta sensación, como me pones, fóllame ahora mismo.

Me tumbé en el suelo, y recordando el adiestramiento, metí mi mano en su culo y separaba sus nalgas, sabia que eso la volvía loca, mientras me masturbaba y me la chupaba, cuando los 2 estabamos bien calientes se dio la vuelta y se ensartó, entró bien pero no como antes, lo tenia abierto del cubano, seguro, pero él no era yo, decidí dejarla hacer y fue ella la que me cabalgó más de una hora, al final ya le entraba toda como antaño, y se movía descontrolada, corriéndose cada pocos minutos, yo no me moví, quería darla una sorpresa de mis alcances logrados más adelante, si hubiera sido mi Leona o Eleonor las hubiera mordido o azotado por poca efusividad, pero Eli era de otra pasta, al final cayó rendida sobre mi, y pasamos así unos minutos. Sonó mi teléfono, del susto me puse en pie y me senté en una silla con Eli aun encima empalada.

-YO: ¿si?

-TELÉFONO: hola, muy buenas tardes, le llamo de Now Servies… –la voz era diferente, de una mujer, madura y sensual -…… nos han informado de que quizá quiera tener una entrevista con nosotros.

-YO: si, bueno, me gustaría ver si puedo lograr ganar algo de dinero rápido.

-TELÉFONO: bien, somos una empresa seria así que antes de contratarle le haremos un “examen”, dígame un lugar y una hora y allí estaré.

-YO: bueno, hay un local en esta dirección……….¿el viernes podemos vernos allí sobre las 00:00?

-TELÉFONO: perfecto, allí estaré, iré con una amiga en común para que haga las presentaciones - colgó bruscamente.

-ELI: ¿que ha dicho?

-YO: que me van a poner a prueba.

-ELI: normal, procura que sea en un ambiente controlado.

-YO: ya lo se, me ensañaste bien, le he dicho un local de un colega - me miró orgullosa.

-ELI: muy bien, pero con eso no bastará, sabes que las pruebas que te harán serán sexuales, tienes que ir bien preparado.

-YO: lo sé, pero es difícil pensar contigo encima ensartada, ¿por que no terminas lo que has empezado y haces que me corra? - la besé aquellas tetas de gim que me volvían loco mientras le apretaba el culo, ella reaccionó moviéndose con locura hasta que una hora más tarde nos corrimos como animales los 2.

-ELI: madre mía, si que has practicado, me ha costado un mundo que te corras………. - me dio un beso -……… quiero ir a la prueba, acompañarte.

-YO: desde luego, me vendrá bien tenerte por allí.

Nos duchamos y me la volví a tirar, su imagen en el agua era demasiado, esta vez le di algo de caña, y la dejé un poco fundida, aparte de mi mejoría, ella estaba desentrenada de mi.

Pasaron los días y llegó el viernes, quedé con Eli en la puerta del local, yo iba con el traje de Eric, y estaba arrebatador, Eli fue con vaqueros y blusa, me sorprendió no verla en chándal, aun así la saludé y entramos, busqué con la mirada y no veía a nadie reconocible hasta que Eli me señaló la barra, allí estaba Matahari, me costó reconocerla sin el maquillaje ni el vestido de fiesta, iba de lo más normal, a su lado eso si, había una señora sentada en un taburete, me cuesta hacer una descripción detallada, era madura pero no lo aparentaba, tendría entre 40 y 50 años, pero podía pasar por una de 35, con un pelo largo y liso, que le caía por debajo de la cintura, una cara de porcelana debido al maquillaje, pero bastante guapa, embutida en un vestido azul palabra de honor que se el pegaba al cuerpo, cruzada de piernas, se le notaba cierta redondez, algún kilo de más, pero tenia un polvo de campeonato y su forma de moverse era pausada y sensual, estudiada. Nos acercamos y saludé.

-YO: hola muy buenas noches, creo que soy el de la entrevista……..- la mujer extendió su mano con mucha clase y me saludó, repasándome de arriba a abajo en esos segundos de apretón de manos.

-SEÑORA: ¿es este?

-MATAHARI: si, es él.

-SEÑORA: ¿y este mierdecilla es por el que tú perdiste la cinta?, anda vete de aquí, ya no tienes nada que hacer - Matahari obedeció, sin rechistar ni poner mala cara, la tenia cierto miedo - hola guapo, me llamo Madamme Labubie, aunque todos me llaman Madamme.

-YO: encantado, yo soy….- me cortó.

-MADAMME: lo 1º es que ese no es mi nombre real, al igual que el de esa imbécil no es Matahari, piensa un nombre de guerra y dímelo.

-YO: Zeus, ¿que te parece? – me salió solo, no se de donde, pero era como si lo hubiera tenido en mi cabeza ya pensado.

-MADAMME: un poco pretencioso, ¿no?

-YO: puede que lo parezca, pero así me siento.- la entrevista había comenzado y no iba a andarme con remilgos.

-MADAMME: muy bien, tu acompañante no me importa lo más mínimo, me hará compañía mientras te probamos, si das la talla estas dentro y si no te quedas fuera - me abrió la camisa y miró mi pecho y mis bolsillos, luego a Eli - bien, tenemos que asegurarnos de que no seáis polis, y tenéis que saber que aunque lo parezca, no estoy sola aquí.

-YO: no se preocupe, estamos aquí de voluntad propia, yo necesito dinero rápido, y mucho.

-MADAMME: esta bien, como sabrás, somos una empresa de acompañantes, pero no somos una vulgar casa de putas, somos la elite del país, trabajamos en toda España y parte del extranjero, nuestros clientes pagan mucho, y muy bien, por la seguridad, la calidad, y la discreción, tanto los clientes como los trabajadores se someten a controles exhaustivos y periódicos de sangre y orina, somos una empresa real, de hecho al contratar os damos de alta en la seguridad social, usamos de tapadera varias empresas de servicios, así justificamos ingresos y hasta que coticéis en la seguridad social, siempre por obra y servicio. Ofrecemos de todo, desde simple compañía atractiva para una noche de fiesta a sesiones salvajes de sexo duro, nosotros no tenemos límites, los ponen los clientes y buscamos gente que los cumpla. Aquí no se obliga a nada, pero si quieres ganar mucho dinero rápidamente has de pasar por el aro en algunas cosas, y si me fallas, ya sea que trabajes bebido o drogado, trates mal a los clientes o me entere de que vas por libre con mi clientela, habrá consecuencias graves. ¿Me entiendes? Si respetas eso, y a mi, todo ira bien.

-YO: conforme, ¿cuando empieza el examen?

-MADAMME: deja que el local se llene un poco más de mujeres y te voy a ir dando pequeños retos, si los logras pasarás al examen final, si lo pasas, estas dentro, mañana mismo iremos al despacho y firmaras unos contratos para luego ir a la clínica privada a hacer un chequeo medico y extracciones para pruebas. Después solo tendrás que esperar a que te llamemos, recibirás el 50% de lo que pague el cliente, eso si eres tú solo, si sois varios chicos o chicas os lleváis más porcentaje y lo repartís, todo irá por transferencia bancaria, no habrá intercambio de dinero entre cliente y trabajador, ellos nos pagan a nosotros y nosotros a ti, no habrá clientes especiales a los que te trabajes gratis, por mucho que ellos pidan, o tú quieras, si quieren la mercancía, que paguen. Todo legal a los ojos de la ley, bien nos aseguramos de tener controlados a los que podrían hundirnos - que me diera toda esa información sin más me daba una seguridad en ella que daba miedo.

Pasó una hora y aquello se llenó, fue llegando mucha gente, incluyendo una buena hornada de mujeres, de todo tipo y condición, mientras charlábamos de algunos detalles más sobre el trabajo, la actitud de aquella Madamme era altiva, superior, su forma de hablar era calmada y sosegada, y pese a ello infundia respeto, sus palabras me hicieron buscar a sus acompañantes, y pronto me percaté de 2 moles repartidas por la discoteca, que no bailaban ni bebían, solo estaban de pie mirándonos no tan disimuladamente como se creían.

-MADAMME: esta bien, creo que podemos empezar……..¿Zeus pues?

-YO: si.

-MADAMME: esta bien……. Zeus, nosotras nos vamos a quedar aquí charlando, y tú vas a irte a la pista, ¿ves aquella señora mayor, la de la chaqueta amarilla?, en menos de 20 minutos quiero que la des un beso - me miró esperando que me quedara timorato o dubitativo, lo que se encontró fue una sonrisa picara y decisión en la mirada.

Me fui derecho a la pista de baile y me fui acercando a la señora señalada, la rodeé como chocando sin querer, paro charlar con ella, y así quedarme bailando, a los 10 minutos la daba besitos por la cara, hasta que en uno de ellos, nos besamos en los labios, la dejé meterme un poco de mano unos minutos más antes de despedirme cortésmente y volver a la barra.

-YO: demasiado fácil - miré a Eli que me miraba con gesto cómplice, sabia algo, y yo sabia el que, pero Madamme no.

-MADAMME: bueno, no has empezado mal, muchas tablas para lo joven que eres, pero eso solo era calentamiento, vamos a buscar algo más difícil, ummmmmm esa, la pequeñita que va con esa otra con cara de zorra, sácala a bailar y logra que te invite a una copa - me volvió a mirar buscando duda y solo recibió otra sonrisa picara,

Me fui derecho, y sin mucho disimulo me incrusté entre las dos, charlábamos de tonterías hasta que invité a bailar a las 2, aceptaron gustosas, y con hábiles movimientos iba repasando sus cuerpos, la susurré algo la oído a la pequeña que río y se fue derecha a la barra, al lado de Madamme, pidió un par de copas, las pagó de su bolsillo y volvió a nosotros, yo le di mi copa a la otra chica, y dándolas un par de besos a cada una volví a la barra.

-YO: esto empieza a ser aburrido, vas a tener que ponerte dura.

-MADAMME: vaya, me sorprendes, y no es fácil, ¿seguro que la copa era para ti?

-YO: ya ha visto como las ha pagado y me la ha dado.

-MADAMME: ¿y por que no te las has quedado?

-YO: no bebo alcohol, no me gusta el sabor.

-MADAMME: umm eso es bueno, así nunca tendrías problemas de ir borracho, pero ¿y si se da una cliente que te invita o quiere que bebas? y si bebes ¿como te afectaría?

-YO: no me gusta, por lo tanto no lo bebo si puedo evitarlo, pero he tenido mis momentos de querer emborracharme y mi corpulencia no me ha dejado, puedo beber, como si fueran medicinas, no lo disfruto, pero no me afectan.

-MADAMME: excelente, eso es un gran punto a tu favor, bien, prosigamos, esta vez vamos a dar un paso más allá - buscó con la mirada - esa mujer, la que va en el grupo de amigas, la del vestido llamativo, parece una buena pieza, en una hora te quiero en la pista agarrándola las tetas durante más de un minuto - me volvió a mirar ya sin saber que esperar, y recibió otra sonrisa picara.

-YO: ¿a esa? En media hora tengo sus tetas en las manos y cierro con un cachete en el culo.

Me fui derecho, y sin mediar muchas palabras me incliné invitándola a bailar, eso sonrojó a sus amigas pero la dama en cuestión aceptó encantada, era un espectáculo latino embutido en un vestido ajustadísimo y provocador, la música era pegadiza y movidita así que no tardé mucho en hacerme notar en ella, que se puso de espaldas, restregándose contra mi, mis manos repasaban su contorno y a los 20 minutos mis manos rozaban sus pechos, para poco después agarrárselos sin remilgos, mientras ella agarraba mis manos en ellos, más para que no la soltara que para que lo hiciera, al cambiar la música me despedí y cuando se iba la solté un buen azote juguetón, volviendo a la barra con cierta chulería.

-MADAMME: excelente, debo decirte que en mi vida había visto esa facilidad, como las desinhibes del entorno, me encanta, esta vez te dejo elegir a ti, quiero que elijas a una chica, cualquiera que lleve falda, y metas tu mano por debajo, tienes una hora para hacer que le vea las bragas a una mujer - me miró reconociendo la dificultad del reto, respondí con una sonrisa de nuevo, Eli me miraba aguantándose la risa, me di la vuelta, y localicé a una chica con falda.

-YO: esa, la que va enseñando el ombligo, con la falda azul, las vas a ver bien, te las voy a traer en la mano.

-MADAMME: ¿esa? ¿La de la mini falda azul?, tu mismo pero no se va a dejar, corre el riesgo de que se le vea todo, tiene las caderas muy anchas.

-YO: si fuera fácil lo podría hacer cualquiera, no estoy aquí para perder el tiempo, si lo logro estoy dentro - la reté queriendo ganar tiempo

-MADAMME: si lo haces solo te quedará una prueba más, y al ritmo que vas tendré que ir avisando ya para el examen final - no era lo que quería, pero acorté aquellas tonterías.

Me fui de nuevo, enfilé a la chica y según llegué me pegué a su espalda, estaba con un grupo de chicos, que se reían incomprensiblemente para Madamme, dándola un par de besos por el cuello la arrastré a la pista mientras la comía la oreja, susurrándole al oído, las canciones era muy calientes así que los movimientos eran igual, las caderas bajaban tanto que se le veían las bragas bien, y yo me ocupaba de que se la viera bien desde la barra, quería constatar que eran las que le iba a llevar y eran las que tenia puestas, levantado parte de la mini falda con mi mano, al paso de los minutos era como se baila ahora, follábamos con ropa, la besaba sin compasión retorciendo su cuerpo con mis manos, metiéndolas por debajo de la falda y sacándole las bragas poco a poco, hasta que al fina di un tirón y se las saqué por lo pies, me las guardé en el bolsillo y dando un par de azotes a través de la tela me despedí de esa mujer, que se fue con un sofoco, directa al baño. Mi cara al volver a la barra era de desafío, pidiéndola un reto difícil a esa Madamme que cada vez perdía superioridad en la mirada y ganaba asombro.

-YO: estoy harto de esto, es como comerme un yoghurt, ¿no te he demostrado ya ser capaz de ganarme a una mujer? Que no le haré a una clienta………

-MADAMME: me tienes alucinada, pero ya solo falta una prueba más, y viéndote como te desenvuelves no será difícil, y me dejará claro que no es suerte, elige a otra, y esta vez quiero que te la chupe, en la pista, quiero que la lleves a un punto de excitación que le de igual el resto de la sala, pero a la vez no quiero que se entere nadie más, discreción y calidad, no hace falta que te corras, con que le de unos lametones estarás en el examen final - me volvió a mirar atónita, expectante a mi reacción que fue la misma durante toda la noche, confianza al 100%.Me di la vuelta y busqué unos minutos, localicé mi presa.

-YO: esa, la del traje remangado.

-MADAME: ¿estas seguro? Tiene pinta de profesora y es algo mayor, no quiero que metas la pata.

-YO: esa - miré a Madamme con fiereza.

Me fui a por ella, estaba un poco sola así que no me fue difícil hablar con ella, y pasados 20 minutos ya nos estabamos besando, mis manos trabajaban su culo, bajo la tela, piel con piel, cuando la noté caliente bese su cuello, y su hombro, eso la éxito tanto que ante mi petición y sus dudas, aceptó ir bajando cuando apoyé mi mano en su hombro y apreté, la llevé a un rincón discreto y pegándola contra la pared, la tapé con mi cuerpo, casi no se la veía, pero me sacó la polla algo morcillona y se lió a chupármela sin descanso, yo miraba a la barra y buscando línea de visión directa, me apartaba un poco para dejar ver a aquella mujer de cuclillas chupándomela, al hacerme el gesto del ok Madame, me dio pena pero saqué mi falo de la boca de esa mujer y me la guardé, casi logra que me empalme del todo, y dándola un buena abrazo, apretando su hombro con mi barbilla, la dejé irse, para volver a la barra.

-MADAMME: ¡eres increíble, ¿no se como lo has hecho en menos de 30 minutos?!

-YO: tengo mis trucos, ¿estoy dentro o me voy?, no voy a estar aquí todo el día.

-MADAMME: te has ganado el derecho al examen, así que cálmate un poco, toma esta dirección y esta llave, son de un hotel de aquí cerca, ve allí en 1 hora, te estaré esperando con compañía, trátete a …….tu amiga, si quieres.

La despedí besando su mano ofrecida y se fue contoneando su opulento cuerpo debajo del vestido ceñido, haciendo un gesto las 2 moles, y una 3º que no había visto, con su abrigo, salieron detrás de ella, me quedé apoyado en la barra sonriendo y mirando como Eli se callaba hasta asegurarse de que nadie nos oía.

-ELI: eres un carbón de mierda.

-YO: lo sé.

-ELI: la 1º señora era la Duquesa, ¿a cuantas de las chicas con las que te has “probado” conoces?

-YO: a todas, de hecho, solo hay 2 o 3 mujeres en el local que no me haya tirado, tú incluida - rompimos a reír los dos.

No soy ningún lumbreras, pero no soy tonto y tengo imaginación de sobra, si sabia como iban a ser las pruebas y era un ambiente controlado, ¿por que no controlar también las pruebas?, no podía saber cuales serian pero si a quien, y llamé a todas, y cuando digo todas, es a todas las mujeres que me haba tirado, había tenido sexo oral o nos habíamos masturbado desde que empecé mi desenfreno, solo fallaron Raquel, la enfermera del hospital, las amigas de Eli, Pamela, la que me la jugó en el Instituto y que después destrocé en su casa, Karin que se había vuelto a su país, Marta, la monja que estaba perdida por África, y Ana que aun estaba en Granada ajena a todo eso, del resto acudieron todas a mi llamada, y les expliqué el plan.

La mujer mayor era la Duquesa, la zorra y la pequeña eran Rocío y su aprendiz, la señora latina del vestido era Eleonor, y a la que le saqué las bragas su hija, Yasmine, que había ido con los que íbamos a alquilar el piso, y de cierre mi Leona fue la que me la chupó. Todo estaba controlado, de hecho apareció Laura, la hija del alcalde con su eterno guardaespaldas de fondo, mis refuerzos en caso de que hubiera problemas, Eli alucinaba. Sabia que las pruebas eran sexuales así que les pedí a todos que actuaran, que no me conocieran durante esa noche, y luego cuando me acercaba a ellas, les susurraba lo que deban de hacer, montado un numerito, me la jugué, podía haber elegido a alguna de las que no me había tirado, pero era un porcentaje mínimo y encima me regaló elegir a las 2 ultimas.

-ELI: ¿pero por que no me has dicho nada? Podría haber sido una más.

-YO: Matahari te conocía, de hecho a la Duquesa la he dejado fuera hasta asegurarme de que no la podía reconocer, temía que estuviera aquí, como ha sido, y que al reconocer a alguna se oliera algo.

-ELI: muy bien jugado, si señor, y esto ya es cosa tuya, se la has jugado otra vez, ¿y ahora que?

-YO: pues supongo que si es en una habitación y con compañía, ya viendo mis “excepcionales dotes de conquista” querrá ver como follo.

-ELI: y eso no lo tienes preparado, ¿no?

-YO: no me hace falta, aquí estaba confiado por la preparación, allí lo estoy gracias a ti, ¡¡¡¡¡¡¡¡Y A TODAS ESTAS PRECIOSAS MUJERES QUE ME HAN AYUDADO, GRACIAS A TODAS!!!!!! - lo grité subiéndome a la barra, se acabó la actuación, todos aplaudían y reían, las mujeres se miraban unas a otras, con la cómplice mirada de saber que yo era su nexo en común.

Asegurándonos de que no hubiera espías nos reunimos y charlamos, le devolví las bragas a la pobre Yasmine que volvió al baño roja de vergüenza acompañada de su madre, hice las presentaciones, y pese a que normalmente seria poco recomendable juntar a mujeres que te has tirado y que lo sepan, mi forma de ser y como las había tratado a todas las hacia comportarse, incluso Irene, mi 1º novia y mi única ex hasta el momento, que pese al disgusto inicial al cortar la relación, volvimos a ser amigos con derechos, abracé a mi Leona entre vítores y demás comentarios, besándola la mejilla y mordiendo su hombro, de forma agradecida, no había que perder la compostura, yo era su León, y se había portado, como era evidente, todos disimuladamente me habían seguido la pista aquellas horas, y habían visto todo, pero lejos de avergonzarse se reían, había sido una actuación y ahora disfrutábamos de los comentarios. Me quedé charlando con los que íbamos a alquilar el piso, y pese a la bromas se notaba que estaban tenos y eso me tensó a mi. Se acercaba la hora de irnos, y me separé un poco del gentío, Eli se acercó.

-ELI: ¿que te pasa amor?

-YO: pufff estoy un poco abrumado, empieza a darme vueltas la cabeza, ¿y si no doy la talla?

-ELI: no seas bobo, solo con que te la vea tiesa estarás dentro, te he enseñado yo y te he visto follar, y lo que me hiciste el otro día en la ducha fue un escándalo.

-YO: no es eso, o si, no lo sé, esto ya no es diversión, me la estoy jugando, mis amigos se lo están jugando todo a que yo sea capaz de lucirme delante de prostitutas de alto nivel, ¿y si no soy más que cabeza de ratón? ¿y al llegar a esa habitación descubro que todo lo que soy es insuficiente? – se agachó delante de mi y me cogió la cara, mirándome con su tranquilizadores ojos color miel.

-ELI: he, no te vayas, tranquilo, razona, usa la cabeza, no es difícil y estas preparado - fueron exactamente las mismas palabras, las mismas miradas que me calmaron el alma en la fiesta cuando me quedé en blanco, esa mujer sabia templarme el animo, colocó una mano sobre mi pecho y una mano mía en el suyo, no en las tetas, sino en el pecho, y me obligó a seguirla el ritmo, mi respiración era muy agitada, casi tenia un ataque de pánico, Irene se percató, y se acercó.

-IRENE: ¿que te pasa?

-ELI: esta un poco agobiado, tiene mucho peso sobre los hombros - apartó a Eli y se me puso delante.

-IRENE: pobre………….sabes, estoy pensando en como tranquilizarte, ¿quien te calma?.- razoné un poco.

-YO: mi madre, ya la conoces, sabe que decir en cada momento.

-IRENE: es una gran mujer, ¿y que crees que haría ahora?

-YO: ¿ella?, me daría un guantazo, me diría que me dejara de jilipolleces, y que fuera a por lo que quiero………..- lo dije en tono de broma, pero era ella así. Me cogió de la mano y me sacó del local, llamando a mi madre, con Eli detrás, Irene y mi madre se llevaban bien, de hecho mi madre me picaba en casa por haberla dejado, hablaban a menudo, la explicó un poco la situación, sin detalles, la dijo que estaba teniendo un bajón y que necesitaba su consejo, me pasó el teléfono.

-MADRE: ¿que te pasa hijo?

-YO: no es nada madre.

-MADRE: no me tomes el pelo, ahora mismo me dices que te pasa o voy allí y te lo saco a golpes - ya lo decía de broma, hacía más de 6 años que no me ponía la mano encima como reprimenda, en parte por que no le daba motivos, las sacudidas previas me habían mantenido como una vela.

-YO: no es nada, es solo que me siento agobiado, frustrado, mis amigos dependen de mí y no quiero fallarles.

-MADRE: pues no lo hagas - su lógica aplastante me enfadaba.

-YO: no es tan sencillo, hay problemas que no se si puedo solucionar.

-MADRE: hijo, no se de que va esto, pero tu padre y yo no hemos educado a un tonto que se ofusca ante los problemas, tu padre te lo ha dicho, siempre habrá problemas a los que debas enfrentarte según crezcas, si no tienen solución, no te preocupes, y si tienen solución, no te preocupes igual, solo tienes que resolver como hacerlo - era una frase manida, mi padre la oyó en algún lado y me la repitió toda mi vida, su sencillez me pareció muchos años una tontería, pero en ese momento me di cuenta de su significado real.

-YO: ¿y que hago si fallo?

-MADRE: no lo hagas, afronta la situación, piensa que solución hay y ten los huevos de hacer lo que se tiene que hacer - si me hubiera tenido delante me hubiera dado esas bofetadas.

-YO: ¿y si aun así……. fallo?

-MADRE: no habrás fallado, lo diste todo, nadie que importe te reprochará nada y quien lo haga es que nunca debió importarte a ti - esas palabras fueron un bálsamo, como casi siempre, tenia razón, me estaba comiendo la cabeza yo solo, ni mi familia ni mis amigos me reprocharían nada, estabamos en un tris de lograr el objetivo, y estamos allí gracias a mi, ¿que tipo de cerdo egotista se acobardaría ahora? El miedo a fallar que tenía desaparecía, y ahora crecía el medio a no intentarlo, a dejarles en la estacada a todos, creé una bola en mi garganta, llenándola de dudas, de miedos y de inseguridades, cerré los ojos y me la trague.

-YO: gracias mama, te quiero.

-MADRE: yo más, solo recuerda, que pase lo que pase, hay gente que te quiere a tu lado - me dio un beso y me colgó.

Una lagrimilla cayó por mi mejilla, ante la mirada de Irene y Eli, quisieron decir algo, incluso noté un dedo secándome esa lagrima, allí decidí cambiar, me había pasado toda mi vida con miedo, con miedo a soñar, con miedo a arriesgarme, con miedo de ser rechazado, incluso después de la operación fue una sensación que me acompañaba, como una piedra en el zapato, decidí que eso no era lo que quería, ahora era mi vida, mis decisiones, mis consecuencias y mis responsabilidades, y si quería ser un hombre de verdad, y no un imbécil, tenia que hacerme cargo de la situación. Había un problema, necesitábamos el dinero, y había una solución, ganar dinero con Madamme, iba a ir a por ello.

Al abrir los ojos mi mirada cambió, una parte de mi infancia sentí que murió en ese momento, bastó ese instante para convertirme de un crío asustado a un hombre decidido, ellas lo notaron en la mirada. Le di un beso de cariño en los labios a Irene, me había entendido y supe por que la elegí como mi 1º novia, tenía algo distinto, y pese a que se portó mal a mí entender, era una buena chica, agarre a Eli de la mano y me dirigí al hotel despidiéndome. Eli no habló en todo el camino, es más, iba a remolque de mi ímpetu, no la soltaba la mano y de vez en cuando daba tirones de su brazo, estaba convencido de lo que se tenía que hacer. Llegamos a la entrada el hotel.

-YO: no se que me espera allí arriba, solo se que te quiero a mi lado, me centras, y necesito estar centrado.

-ELI: de acuerdo, pero recuerda que tú tienes el control, no ella, da igual lo que pase en la habitación, tu puedes dominar siempre que quieras, solo piensa, razona, busca una solución y hazlo. Tienes el físico, tienes la mirada decidida y no eres de los que fallan a su gente, por dios, si tienes la polla más grande que haya visto en mi vida, vas a entrar ahí y vas a ser Zeus - sus palabras me orientaron, su mirada me convenció y sus labios me llamaban, la besé, con cariño y pasión, de forma larga, como queriendo cargar la batería con ello.

-ZEUS: vamos a acabar con esto de una vez.

ZEUS - La aparición de la bestia.

Subimos a la habitación, al llegar al pasillo vi a las 2 moles en la puerta, nos abrieron y entramos los 2, con Madamme dando el visto bueno a las moles, dentro estaba Madamme sentada en la cama, la 3º mole de pie y a su lado una chica, de apenas 18 años le calculé.

-ZEUS: vamos rápido que no tengo todo el día.

-MADAMME: veo que vienes decidido, Zeus, eso es bueno, me ha gustado mucho como te has desenvuelto en el local, pero eso era solo para probar si sabias moverte con una mujer, aquí es el examen final, tengo que ver que tipo de hombre eres en la cama para saber si sirves, o si te puede la presión, así que con todos los presentes delante, te vas a follar aquí a esta muchacha, se llama Púrpura, aunque no sea muy relevante, es una de mis nuevas adquisiciones, apenas lleva unos trabajos con nosotros y me servirá para calibrarte.

-ZEUS: ¿y cuando la haga desmayarse? - me miró sorprendida, no por las palabras, podían estar bravuconeando, si no por que mi mirada no era de sorna, si no de seguridad en ello.

-MADAMME: si te ves capaz, pues quizá te deje que me folles a mí.

-ZEUS: ¿y cuando te haga desmayarte a ti? - abrió la boca ofendida.

-MADAMME: ten cuidado con lo que dices, no soy ninguna imbécil que al verte la polla enrome esa que decía Matahari se va a poner a chorrear.

-ZEUS: esta bien, pero quiero saber cuanto puedo pasarme, no soy tampoco ningún imbécil que se va a correr con un par de lametones.

-MADAMME: veo que el nombre te viene al pelo, Zeus, realmente te comportas como si fueras el dios del Olimpo, 1º empieza con esta sacerdotisa novicia.

-ZEUS: y acabaré con mi reina de los dioses que tengo aquí a mi lado - me refería a Eli - pero de acuerdo, ¿no tengo que andarme con cortejos ni preliminares, solo sexo, no?

-MADAMMEN: efectivamente.

-ZEUS: ¿Púrpura, verdad?, vete quitando la ropa y ponte sobre la cama, que te voy a reventar - buscó aprobación en la mirada de Madamme, una vez obtenida se desnudó a la vez que yo, con algo de reparos se tumbó en la cama desnuda, era una petite, como se las llaman, había pasado los 18 hacia nada, casi no tenia tetas, aunque tenia buenas caderas, era bastante guapa, morena con el pelo largo, y al ser tan bajita cuando me dejé caer sobre ella la aplastaba sin piedad, me dejé los slips, no quería que la vieran sin estar tiesa.

Comenzamos a besarnos mientras repasaba su cuerpo, la abrí de piernas para ponerme en medio, y así tenerla a mi disposición, tenia cara de niña buena pero movía su lengua como una autentica zorra, eso me llevó a meter mi mano en su coño, estaba rasurada al 0, y mientras acariciaba su parte exterior, iba bajando por su cuello, sus pechos, su vientre, iba buscando el punto débil de esa mujer, no lo encontré por esas zonas, así que hundí mi cara en sus muslos, la abrí y la coloqué bien de cara a Madmme que miraba analíticamente, le abrí los labios mayores y chupando su clítoris la sacaba alguna respiración más fuerte que otra, mientras mis dedos la masturbaban por encima, mi lengua la trabajaba sin descanso, logré que se humedeciera un poco, entonces le metí un dedo, del tirón, no fue difícil, seria una cría con cara de no romper un plato pero lo tenia bien abierto, tanto que las pocas penetraciones le metí el 2º, buscando su punto G, me pareció oír un suspiro de aprobación de Madamme al verme ese gesto, y de refilón la mirada de Eli, repasando en su cabeza las lecciones y viendo como las llevaba acabo. Mi mano aceleró al notar sus primeros gemidos, la agarré bien la cintura para que no se moviera y mientras chupaba su clítoris inflado, la “violé” con mi mano, paso cierto tiempo en que muchas de mis mujeres ya se habrían corrido, pero estaba claro que ella no era como las demás, así que notándome ya empalmado, la coloqué bien abierta de piernas y me quité el slip, dejando caer a plomo mi falo en su vientre, la comparación me aseguré de que fuera escandalosa, ella era algo pequeña y mi rabo enorme.

-MADAMME: vaya, vaya, al parecer Matahari no metía, la tienes bien grande, de las más grandes que he visto, y sabes como comerle el coño a una mujer, pero toca ver como follas, pero ten cuidado no la partas en 2, que es nueva – sonrió con malicia.

La mirada de Púrpura era mezcla de pánico y suplica de perdón, pero una sola mirada de Madamme se la arrancó, mojé un poco mi glande con algunos fluidos que la había sacado, y apreté con fuerza hasta penetrar, entró bien hasta la mitad, allí el grosor, más que la longitud, empezaron a sacarla gemidos de impresión, aun así quería saber hasta donde llegaba y seguí, seguí penetrando pese a que su cuerpo se elevaba en la misma dirección, tuve que sujetarla las piernas para poder proseguir y descubrir que aquella muñequilla que si veía en la calle pensaría de porcelana le entraba más de 3/4 de polla del tirón, su cara era de completo ardor, de sentirse llena, se retorcía mientras los 2 notábamos como se iba abriendo paso mi miembro dentro de ella, palpitando, cuando noté cierta comodidad la saqué lentamente y la volví a meter igual de lento, sacándola un gemido ahogado, ataqué uno de sus pezones a mi alcance, lo tenia tieso, y notando comodidad de nuevo la volví a sacar y meter, pero ahora no paraba, siendo lentamente, salía y entraba de ella, con cada entrada la sacaba un gemido que se iba apagando cuando la sacaba y volvía a crecer al meterla, sentía como sus labios menores rozaban a contra piel con mi tronco, tanto al ir como al volver, pero la pobre se mojó tanto que la fricción se evaporó, allí ya me desaté, hasta ahora era como al inicio, aprendiendo con Eli, ahora saqué a mi bestia interior, aunque me guardé un poco, aceleré de golpe la cintura al penetrar, la sacaba despacio, eso volvía loca a algunas, darle ese tiempo de recuperación corto entre acometidas, hasta que me pidió que me la follara fuerte de una vez, me lo suplicó más bien, eso hizo activar mis brazos, la levanté la cadera apoyándola en mis rodillas y tirando de ella la arqueé la espalda, y bien sujeta le di con buen ritmo, uno cómodo pero vibrante, se volvió loca, y a los 20 minutos se corrió, como una fuente, pero tenia que desmayarla, “cumple tus amenazas”, me repetía, así que aceleré de nuevo, tenia varias velocidades cómodas y no iba ni por la 2º, eso la retorcía entre mis brazos, otros 20 minutos y la saqué varios orgasmos, al siguiente la puse a 4 patas y la ensarté por detrás, casi le entraba entera a aquel diminuto cuerpo, pero no por ello la perdoné, llegando casi a la hora la pobre pidió que parara, no aguantaba que la seguiría percutiendo mientras se corría, aun así, lo hacia, hasta que cayó agotada, sus brazos no la sostenían a 4 patas, seguí penetrándola hasta correrme, por si acaso la saqué de ella y me terminé masturbando sobre su culo en pompa, manchándola de semen con gran cantidad. Al darme la vuelta vi a Eli y a la 3º mole tocándose por encima de la ropa y a Madmme con cara de bastante aprobación.

-ZEUS: esta no va a dar más de si, ahora vas tú - refiriéndome a Madamme, me puse en pie dejando mi polla algo flácida a la altura de su cabeza.

-MADAMME: eres un caja de sorpresas, las has dejado ida en una hora, y a estos 2 les has puesto cachondos perdidos, ¡esta bien!, te has ganado echarme un buen polvo, pero yo no soy como ella, tenlo claro, he sido la puta de más caché de esta ciudad y la especialista en rabos grandes, te va a costar sacarme un gemido.

-ZEUS: te va a costar a ti no pedirme que pare.

La ayudé a ponerse de pie, y abriéndola el vestido por detrás, besaba su cuello, olía a hembra, dejé caer el vestido para descubrir que no llevaba sostén y aun así tenia una tetas enormes y bien colocadas, para su edad era increíble, supuse quirófano, me lancé a ellos, y se los comí con dedicación, mientras mis manos recorrían su cuerpo, el vestido cayó del todo y dejó ante mi a una mujer de bandera, curtida por los años y con algo de peso de más, pero eso en vez de restarla, la sumaba, con un tanga diminuto, lo supe al llevar mis manos a su trasero, y pegarla a mi cuerpo, le separa las nalgas como a Eli, “por probar”, pero salvo un endurecimiento en sus pezones no sacaba nada, así que le retiré la goma del tanga y metí mis dedos a jugar con su coño, ella se agarró a mi cuello y se me subió encima, con los tacones puestos rodeándome con las piernas, besándome la boca, sin duda su peso era mayor que muchas, pero me pareció la más ligera del mundo, sobretodo por lo que hacia su boca, no bromeaba, esa mujer había vivido de su lengua, jugaba en mi boca de una manera que me la puso dura al instante, golpeando como un caballo sus nalgas, metía un dedo en su interior, estaba algo mojada.

-ZEUS: vaya, por lo visto a ti también te afecta, estas muy mojada.

-MADAMME: una será experta, pero sigue siendo humana, anda túmbate que te voy ha hacer la mamada de tu vida - se bajó de mi y me empujó, caí de espaldas a la cama donde yacía Púrpura medio ida, y ella cayó entre mis piernas, admirando la polla tiesa entre sus 2 manos – hacia mucho que no tenia una de estas.

Pareció mentira, se escupió la manos y comenzó una masturbación frenética, con las pulseras en sus muñecas sonando a ritmo, giré la cabeza y vi a Eli chupándosela a la mole, no se cuando se habían desnudado, el tipo calzaba buena polla, seria el juguete de Madamme, pero Eli se la comía de cine, sin apartar la vista de mi y sin dejar de hacerse un dedo, esa imagen y lo que aquella mujer empezó ha hacer con su lengua en mi rabo casi me hacen correrme en menos de 10 minutos, era una locura, me la habían chupado muchas, pero esta era la 1º que me estaba matando, separaba con su lengua la punta de mi glande, el agujero por donde sale la orina y el semen, era una maravilla, se metía ¾ de polla en la boca y sin arcadas, su lengua tenia vida propia, hacia movimientos antinaturales, temí correrme, perder la oportunidad, así que me incorporé y la cogí de los brazos, de un tirón la puse de rodillas sobe mi pecho, y colocándome, metí mi cara entre sus muslos, la quité el tanga de un tirón, se lo rompí pero le dio igual, estaba bastante mojada y sabia que era una experta así que seguí el manual, separar, chupar, lamer, penetrar con los dedos y buscar su punto G, encontrarlo y trabajarlo, mientras mi boca hacia maravillas con su clítoris. Si Púrpura me pareció abierta a esta mujer le entraba un tren de mercancías, tuve que usar 3 dedos para generar fricción, pero logré el resultado que quería, no me había corrido, tenia a esa mujer saciada comiéndola su monte, y su cintura sobre mi cara, mordiéndose el labio y pellizcándose los pezones, estaba justo donde quería, había pasado el trago, y la oí gemir, eso me dio la señal era hora de sacar la artillería pesada, llevaba mucho tiempo comiendo el coño, más de lo que se lo había comido a nadie sin correrse, si quería hacer que se excitara no podía tratarla con suavidad, tenia que darlo todo, la levanté la cadera para elevar mi cuerpo hasta darla con mi falo tieso en el culo.

-ZEUS: me has puesto muy caliente, y lo vas a pagar.

-MADAMME: veremos quien lo paga.

Se elevó entendiendo mi intención y agarrándome la polla con una mano que se escupió antes, la repasó bien, se separó los labios de su interior y con la otra mano dirigió mi glande a su entrada, una vez con dirección, cayó a plomo, nos sacó un gemido de gusto tremendo a los 2, se había empalado toda de golpe, la presión era grande pero no la que más había sentido, se dejó caer para besarme.

-MADAMME: ¡¡¡dios!!!, echaba de menos a alguien que me llenara así, quiero que sepas que ya estas dentro, desde antes de que desmayaras a esa pobre cría, pero ahora vas a sufrir por tu soberbia.

-ZEUS: veremos quien sufre - acepté el reto y subí la apuesta a ciegas, sin saber que cartas llevaba, solo sabia que tenia 2 buenas manos, las colombianas me tenían a tono, y mi Leona era mi ultima opción, si aquella mujer aguantaba el ritmo de mi Leona no sabia que hacer.

La dejé trabajarme con su cadera, estaba haciéndose sitio en su interior, se acostumbraba pero a la vez se movía, dando pequeños golpes de cadera hacia arriba, que la hacían estremecerse y yo veía sus tetas vibrar, se tiraba un minuto haciendo giros de cadera para luego levantarse una décima y volver a dejarse caer, se mordía el labio cerrando los ojos, estaba disfrutando aquella tanto o más que yo, llegó un momento en que sus golpes de cadera ya eran más rítmicos, y se sacaba media polla antes de volver a caer, fue acelerando sin que yo me moviera, quería reservarme, aceleró tanto que ya no había giros de cadera, solo me cabalgaba, sus senos eran grandes e hipnóticos, con cada bajada rebotaban y subían, cogió tal ritmo y velocidad que sus pezones hacían círculos en el aire, se echaba para atrás para sentirla más dentro, y luego se dejaba caer buscando apoyo y dejando que su cadera fuera un ente libre, moviéndose sin parar de arriba a abajo, la imagen desde detrás debía ser gloriosa, por que Eli se puso allí, sentó a la mole y se empaló, todo sin perder la vista de nosotros.

Se tiró no menos de 30 minutos con esa postura gimiendo y arrancado placer a puñados, cuando su lengua se hundía en mi boca perdíamos hasta el compás de su cintura, mis manos aprovechaban al acercarla para pellizcar los pezones, noté que al hacerlo daba pequeños resortes, estaba a punto de correrme y esa asquerosa ni se había inmutado, me levanté para trabajarla los pezones, ahora veía que eso le ponía, así que no la dejaría escapar, pero dio un último acelerón de su cintura, eso fue gloria bendita, una danza del vientre conmigo dentro de ella, reventé en una corrida que sentí, mi polla debía estar tan dentro que los chorros de semen rebotaban en la pared de su útero y caían en mi glande, caí rendido, me había echado un polvo de 1º nivel, y vi en su cara orgullo y soberbia, mientras mi miraba altiva y seguía moviendo su cadera lentamente.

-MADAMME: no esta mal, has aguantado más que nadie desde hace unos años, pero he ganado.

-ZEUS: de eso nada, solo me has demostrado de lo que tú eres capaz, ahora es mi turno - la había dejado demostrarme todo lo que tenia sin yo moverme,

Me levanté para besarla, ella se sorprendió un poco, presuponía que estaría derrumbado, pero superponiendo niveles, eso solo era una Yasmine inspirada, aun me quedaba la madre, y mi Leona. Jugamos con nuestras lenguas hasta que mi polla se volvió a inflar en su interior, se sobresaltó de mi rápida recuperación, era joven y no me costaba mucho volver a empalmarme, ella quiso tomar el mando de nuevo, pero ahora no la dejé, la sujeté las caderas y di un fuerte golpe para penetrarla hasta el fondo, así, saqué la cadera de la cama, planté los pies, y cogí mi postura más lucida, ahora ella era un cuerpo fijo y era yo quien la percutía, como me enseñó Eli, que se estaba corriendo detrás de nosotros ante lo que allí ocurría y la polla que la martirizaba desde atrás, comencé despacio, metiéndola y sacando toda, para ir aumentando el ritmo paulatinamente, encontraba un buen ritmo a mantener y lo hacia, luego subía un poco más hasta encontrar otro llano, eso ya era 1º nivel, la sacaba gemidos de placer y el sonido de petardeo de mi pelvis contra ella inundó la habitación, me guardé lo mejor por si acaso y llevaba su cadera en la misma dirección que mis embestidas, eso ya la cayó, no le daba para respirar y gemir a la vez, solo tenia la boca abierta, consumía toneladas de aire con cada bocanada, me estaba costando, aquella hembra recibía sin compasión y no solo aguantaba si no que lo disfrutaba. Después del polvo previo y la media hora que estuve perforándola yo, la noté curvarse, un rayo la partió, sentí claramente como una corriente eléctrica le subía desde la cintura por la espalda hasta el cuello, con un gemido casi de opera, notaba los músculos de su vagina apretar y contraerse, calmé el ritmo de mis embestidas, entre otras cosas por que estaba dandome un calambre.

-MADAMME: ¡¡¡¡¡¡la madre que te parió, maldito carbón!!!!, hacia mucho que nadie me sacaba un orgasmo así, uffffffff y sin ayuda de vibradores.

-ZEUS: pues aun queda trecho, no voy a parar hasta correrme dentro de tu culo - me besó apasionadamente, con los ojos abiertos, sabiendo que mis palabras no eran en balde.

-MADAMME: ábreme el culo, dios, con esa polla me vas a destrozar.

Gateó sobre mi para empujar a Púrpura de la cama y tirarla al suelo, seguía ida, me fui de rodillas persiguiendo aquella maravilla de trasero voluptuoso, la atrapé dejándola de cara a Eli, que estaba de nuevo siendo empalada por la mole, y mirándola a los ojos metí mis manos en el coño de Madamma, busqué fluidos y acariciaba con ellos el ano, se abría las nalgas con una mano, no fue difícil meter ni el 1º ni el 2º dedo, pero para asegurarme metí un 3º, me rogaba que la diera por el culo, pero me hice suplicar, en parte, Eli y sus tetas bombeadas por el movimiento que tenia a su espalda me distraían, cuando me dio la gana, apunté a su ano y le metí media polla del tirón, sacándola un alarido, pero a al vez empujó hacia atrás, a la 3 º embestida le había entrado toda, le dolía pero supongo que por experiencia sabia que cuanto antes entrara antes dejaría de dolerle, la levanté el torso para acariciar su tetas y pellizcar sus pezones, era su punto débil, pegando su espalda a mi pecho, dejando que su culo se abriera lo suficiente, yo no apartaba la vista de Eli, que había seguido ejemplo y estaba 4 patas en el suelo siendo percutida por el culo por aquella mole, que iba de comparsa y estaba follándose “a mi diosa”, eso me generó cierta rabia, así que castigué a la que tenia ensartada, la volvía a poner a 4 patas y sin piedad aceleré, arremetiendo contra su trasero como una pared, ella tomó el mando de nuevo, pese a mi fuerza ella controlaba las acometidas, notaba como la piel de su ano se estiraba y se contraía con cada arremetida, hasta que dejó de hacerlo al abrirse, allí pegué el acelerón final, metiendo mi mano en su coño jugando con el clítoris en mis yemas de los dedos y otra mano en sus tetas pellizcando, aceleré hasta lo más que pude, no guardé nada, era como con mi Leona pero durante más tiempo continuado, fue como evolucionar, se abrió un nuevo mundo ante mi, yo podría mantenerme 3 o 4 horas follando seguidas, siempre que fuera yo quien llevara la batuta, pero ese no era el caso, de hecho ella se movía en dirección contraria a mis ataques, y con cada estoque la sacaba un gemido, no se cuanto estuve la verdad, pero me pareció un mundo, eso si, la saqué el 2º y el 3º orgasmo a Madamme, después del 1º fueron muy rápidos, y sin dejar de bombear entre ellos, la oí rogar, pero yo estaba desatado, como nunca, de mi interior salió una bestia, una que apenas salía, un ser de instinto animal, voraz e insaciable.

-MADAMME: ¡¡¡¡¡para, para de una vez cabrón, que me partes en dos!!!! - la seguid dando, Eli había quedado ya parada, el hombre a su espalda se derrumbó agotado y la veía con ojos de querer más, la excitaba mucho verme follárme a esa mujer y quería que supiera que si en vez de a ese, estuviera en mis manos, estaría ida de placer - ¡¡¡¡¡QUE PARES JODER, PARAAAAAAA, ENTRAD POR DIOS, SACANDE DE ENCIMA A ESTE ANIMAL!!!!

Lo gritó de tal manera que las dos moles de fuera entraron quedándose medio segundo perplejos, me abordaron sacándome de ella, tenia un agujero en el culo del tamaño de una naranja, las nalgas rojas y un río de fluidos que la goteaban por su interior.

-ZEUS: ¡¡¡¡TE LO DIJE, OS DIJE QUE OS REVENTARIA!!! ¡Ahora quiero más, diles que me suelten y me tiraré a mi diosa como es debido, no como ese mierda que se ha quedado dormido! - estaba fuera de mi, iba a dominar aquello hasta el final, y la cara de Eli de……… ¿ilusión? ante mis palabras, me excitó aun más.

-MADAMME: esta bien, soltarle y salid - obedecieron como robots.

Me fui derecho a por Eli, la levanté del suelo con mis brazos, me la subí encima a horcajadas, me rodeó con sus piernas y me besó casi arrancándome la cabeza, verme follar así, en mi estado “sobre natural”, notándose el cambio desde la última vez que nos acostamos en el gim hacia casi 1 año, la había puesto como nunca, la agarré de las nalgas y se las separé lo más que pude mientras la levantaba y la ensartaba, entró casi limpia, la mole la tenia grande pero cuando la aplasté contra la pared la metí entera, y ahí noté que no la había abierto del todo, lo hice yo, y manoseando sus pechos, percutía sobre ella, como hacia últimamente, las daba tan fuerte que rebotaban contra la pared y yo aprovechaba el impulso para volver a meterla de golpe, ella no sabia donde agarrar o poner sus manos, o como besar, estaba casi nerviosa, mis movimientos eran firmes, seguros y profundos, sentía perfectamente como mi polla entraba y salía entera de ella y la hacia vibrar, cuando la agarraba de las nalgas y se separaban tiritaba de placer, estuve así hasta que me corrí, no se cuentas, me daba igual, ni conté sus orgasmos, quería calmar mi fiera interior y era ella la que lo logró, las últimas embestidas la hacían elevarse por la pared y caer a plomo, con su brazos inertes, solo se dejaba hacer, había desistido de todo, solo disfrutaba. Me tensé al eyacular, Madamme y la pobre Eli habían aguantado apenas 2 horas, más la otra de Púrpura, “dios que suerte tengo con mi Leona”, no era una super modelo, pero era capaz no solo de saciarme si no de llevarme al éxtasis, al punto en que había dejado a esas 3 mujeres en la habitación pero esta vez no había sido yo el que había llevado la batuta, estaba agotado de la resistencia de esas 3 hembras, me había costado desfallecer a Púrpura y un esfuerzo sobre humano llevar al limite a Madamme, me llevó a tal punto que no era un ser humano, si no un monstruo, algo que no me gustaba ser, pero que podía llegar a serlo, y terminar con Eli, para volver a meter a ese ser a su lugar de origen.

Cogiendo el cuerpo de Eli, que me abrazaba sonriendo y feliz, encharcada en sudor frío, la recosté con suavidad y cariño sobre la cama, donde estaba Madamme agarrándose el culo como si se le fuera a caer, mirándome atónita.

-MADAMME bienvenido al equipo, Zeus, mereces de sobra ese nombre.

-ZEUS: ¿cuando empezamos?

-MADAMME: mañana mismo iras a la oficina a las 12:00, te estaré esperando, te quiero llevar personalmente, ya no solo la empresa, eres un diamante en bruto y te voy ha hacer ganar mucho dinero si sabemos moverte, dios, van a pagar una burrada por una noche contigo, que narices, será por horas, y pagarán, vaya que si pagaran.

-ZEUS: esta bien, voy a ducharnos a mi amiga y a mi, tensemos que seguir la fiesta, deja la dirección apuntada, vosotros recoger y salid de aquí, y por dios, ayudar a Púrpura que sigue ida ahí tirada - bravuconeaba, no podía con mi alma y según se fueran iba a descansar, pero ellos no lo sabían, así que lo dejé en el aire.

Entraron las moles y medio despertaron al 3º, estaba con una sonrisa por el polvo con Eli, ni se había enterado del resto, ayudaron a vestirse a Madamme que me dio un beso y un azote.

-MADAMME: ere un chico travieso, no me voy poder sentar bien en unos días - y salió andando con el mayor orgullo y clase que pudo, que era poco, se le notaba escocida.

Una mole vistió a Púrpura sin dejar de aprovecharse un poco y se la llevó como un saco de patatas al hombro, había recuperado algo de conciencia pero no se tenía en pie. Cerraron la puerta y pasó un tiempo prudencial, sentí que la bestia regresaba a su cueva y un ardor decreciente hacia que Zeus desapareciera.

-ELI: mi amor, te quiero, y me vuelves loca, pero no puedo más, por favor.

-YO: ¿estas loca? ¡¡¡Estoy muerto!!! , dios, solo lo he dicho para vacilar y dejarme aun más arriba, no se ni si podría aunque quisiera.

-ELI: menos, mal, por que me has roto, me has llevado a las puertas del infierno y me has traído de vuelta, ya no eres aquel aprendiz mío, follas como un animal salvaje, pero mantienes mis conocimientos, ¿quien te ha enseñado a follar así?

-YO: tú, me lo diste todo para empezar, esto es solo el resultado, varias, en realidad muchas mujeres, de todas he aprendido algo, y tengo un par que esto de hoy lo considerarían un día en la oficina. Pero solo tú me sacas de quicio, siempre serás mi preferida, te debo mucho.

La di un buen beso, y en brazos la llevé al baño, estaba consciente pero muy débil, la di un buen baño procurando no excitarme, luego la puse algo de ropa y la dejé tumbada descansando, yo me duché después, dejando la alcachofa pegada al soporte y que el agua caliente bajara por mi cabeza, debía retomar el hilo, guardar a la fiera en su cofre hasta que la volviera a necesitar, despejar mi mente y centrarme en el objetivo, era Ana y el piso, quedaban 3 semanas y aun no teníamos el dinero, pero yo tenia la oportunidad que me había ganado con mi esfuerzo.

Madamme – Mi inicio en la prostitución.

Retomemos la historia, estaba secándome con unas toallas mugrientas en el baño de la habitación del hotel, esa habitación en la que acababa de ganarme la entrada en el selecto club de compañía de Madamme Bubie, mi objetivo era ganar dinero rápidamente para un piso, y así poder tener un sitio para mi y Ana, mi prima que no era tal, y pese a algunas dudas y miedos, terminé desatando una bestia de mi interior para ganarme ese puesto, Zeus era mi seudónimo pero descubrí que dentro de esa vorágine de sexo, tenia un punto animal que ninguna mujer podía soportar, ni la pobre Púrpura, que se vio engullida, ni Madamme que terminó pidiendo auxilio, y ni siquiera Eli, que me había enseñado todo, no se si fue el coraje de no fallar a mi gente, la excitación del momento, el hecho de mi frustración con Susana, la socorrista, o quizá simplemente había rozado mi techo, a estas alturas, con 19 años, me había tirado a más mujeres y durante más tiempo que muchos hombres en toda su vida, y lo había hecho en apenas en 1 año. La ducha cumplió su función, aquel engendro de mi interior volvió a su cueva y volví a ser yo, Raúl, el buen tipo, afable, desvergonzado y cariñoso, el tipo que siendo gordo aprendió a ser buena gente, y que no quería perder una vez transformado en un chico atractivo.

Volví a la habitación donde estaba Eli en la cama, dormida, recuperándose con una sonrisa de oreja a oreja, me tumbé a su lado, sin tocarla, solo quería descansar, Madamme me había obligado a un esfuerzo al que no estaba acostumbrado, cerré los ojos, no se cuanto pasó en realidad, me despertaron unos nudillos en la puerta, era el conserje, se había acabado el tiempo y teníamos que irnos, desperté a Eli y nos vestimos, recogí el papel con la dirección y la hora acordada por Madamme, con indicaciones de llevar el documento de identidad y algunos papeles legales . Eli se apoyaba en mí, estaba débil pero encantada. Era ya de madrugada cerrada, nos pasamos por el bar donde había tenido que “pasar la pruebas”, ya no había nadie, así que acompañé a su casa a Eli, me aseguré de dejarla en la puerta.

-ELI: esa chica no sabe la suerte que tiene.

-YO: no se por que, pero su llegada me hace sentir que el afortunado soy yo.

-ELI: jajajajaa pues entonces aprovéchalo cada instante, esa sensación es lo mejor del mundo.

-YO: mañana tengo que cerrarlo todo aun, y te lo debo todo a ti - la di un suave beso en los labios seguido de otro en la mejilla y la abracé, como me gustaba despedirme de mis chicas, luego cuando se dio la vuelta para subir las escaleras de su casa no me pude resistir y la di un cachete en el culo, más que por lo sexy o bonito que era, fue por como se movía, totalmente abierta, escocida, reventada.

Me fui a mi casa paseando, eran un par de kilómetros, según llegué me acosté, tenia unas 5 horas para descansar si quería llegar puntual, me sonó el despertador y lo apagué, pero mi madre lo oyó desde la otra punta de la casa, debía estar atenta por mi llamada de ayer, y entró como siempre, abriendo cortinas, pegando gritos y recogiendo la ropa sucia.

-MADRE: venga para arriba “so´ vago”, que así no vas a encontrar piso.

-YO: 5 minutitos más….

-MADRE: ni 5 ni 2, ya te estas despertando y contándome de que iba lo de anoche…….- remoloneaba, para despertarme y contestarle sin mentirla, pero sin decirla la verdad.

-YO: nada, que me dio un bajón por lo del piso, pero creo que ya lo tengo solucionado, me tengo que ir, anda elígeme algo de ropa decente mientras me ducho.

Refunfuñó mientras recogía y yo me fui derecho al baño, me di una ducha rápida y al salir tenia la ropa en la cama, al ponérmela me quedaba bien, yo no tengo ni idea de moda, pero mi madre sabia a ojo como conjuntar las cosas, me vestí para luego ir a la cita con Madamme, era en pleno centro, no se que me esperaba al llegar, pero no un edificio de oficinas, subí por el ascensor hasta la ultima planta, Now Servies S.A, mientras en cada planta que subía leía nombres de importantes empresas de seguros, bolsa o marketing, al llegar nada más abrir el ascensor había una recepcionista detrás de una mesa enorme con el nombre de la empresa y un logo, con flores, plantas, sillones para hacer una sala de espera, tv con imágenes de trabajadores de limpieza, o seguridad, y una mesa con revistas de medicina o economía de al menos 5 años, vamos, una oficia en toda regla, como una de tantas que había ido para buscar trabajo.

-RECEPCIONISTA: hola, muy buenas tardes, bienvenido a Now Servies, ¿en que puedo ayudarle?

-YO: verás, me llamo…….¿Zeus?, tenia una cita con la señora Bubie - no sabia muy bien como actuar, la voz era la misma que me cogió el teléfono al llamar a la tarjeta, pero su actitud era demasiado profesional.

-RECEPCIONISTA: ah si, claro, teníamos cita en 10 minutos, espera aquí unos minutos y aviso de tu llegada, encantada de saludarte, soy la recepcionista - me miró de arriba a abajo, con cara de no creerse que yo hubiera llegado a entrar, le parecía poca cosa.

-YO: hombre, eso ya lo veo.

-RECEPCIONISTA: jajjaja no, te digo que mi nombre es “La Recepcionista” - entendí que era su sobrenombre, ¿también trabajaría sexualmente o solo daba la cara?

-YO: pues encantado, aquí espero.

Me fijé en ella, no se como describirla así que pensar en una secretaria mona, una con la que os hayáis cruzado en una entrevista, era perfecta, encajaba en el papel. Pasaron unos minutos y sonó el ascensor, aparecieron las moles de la noche previa, y detrás Madamme, quitándose las gafas de sol y el abrigo, tirándoselos a la cara a la recepcionista que se puso tensa ante su llegada.

-MADAMME: toma bonita de cara, a ver si haces algo útil, ¿donde esta mi nueva estrella? - me había visto de sobra, pero ya no era aquella mujer semi humillada de hacia unas horas, había vuelto a su papel de dominatriz, de jefa implacable. Me levanté de la silla donde la estaba esperando – ah, aquí esta, anda sígueme, y vosotros aquí - las moles se cuadraron en la puerta del ascensor, pero solo había 2, ¿y el 3º? No estaba el que se tiró a Eli.

Me dirigió por dentro a una sala de reuniones en los despachos, con una carpeta en la mano, las mesas, la impresora, los ordenadores, todo daba el pego de una empresa de servicios, pero allí no había nadie. Entramos en la sala y allí encontré a un tipo, muy arreglado y formal, con traje.

-MADAMME: siéntate ricura, te presento a Jaime, es nuestro……. director de recursos humanos, el te explicará un poco todo lo que te comente ayer.

-YO: buenas, soy…Zeus.- se rió en mi cara.

-JAIME: jajaja tranquilo, yo seré el único que sepa tu verdadero nombre, ¿has traído los documentos que te pidieron?

-YO: si, aquí los tengo, pero me gustaría saber un poco como funciona esto.

-JAIME: es justo, mira, como entenderás, esto es una empresa, de 1º nivel en el sexo, pero una empresa, lo hemos montado de tal manera que nuestros empleados queden contratados, de forma legal, vas a cotizar, y si cobras lo suficiente, tendrás paro cuando lo dejes, en cada caso es distinto, pero viéndote creo que darás el pego como seguridad privada, así tendrás excusa real para cualquiera que te pregunte. Como tal, se te pagará en función del “riesgo” que corras, por lo tanto se te puede pagar directamente por banco, más o menos cantidad, y justificarla legalmente. Normalmente no trabajamos así, solemos dar un teléfono de empresa y es el único contacto que se tiene contigo, se te da hora, foto del objetivo a “defender”, con indicaciones claras de tus deberes, pero por lo visto le has entrado por el ojo a Madamme ……… – se me escapó una risa que él no entendió, pero Madamme si - ….y quiere llevarte ella personalmente, así que harás lo que ella te diga, no estas obligado a nada, pero cuanto más hagas, más ganarás ……– frase casi calcada a la de Madamme ayer, seguramente estaría preparada –……. en ti queda si aceptar o no determinados encargos. Tendrás que firmarme estos papeles y dejarme esos documentos, puedes mandárselos a un abogado para que los revise antes pero ya te digo que te dirá que sin ser fraudulentos, tiene lagunas, tienen que ser así.- pensé unos segundos mientras fingía leer, era una sola hoja con bastante pinta legal, podía meterme en un lío, y no era lo que yo quería, pero lo necesitaba.

-YO: quiero que quede claro una cosa, esto es momentáneo, necesito dinero ya, y cuando tenga lo que necesito, me iré.

-MADAMME: así empezamos todos, cariño.

-YO: pero yo no soy como los demás, si aceptáis eso, no habrá problemas.

-JAIME: no lo habrá, como ves es por obra y servicio, por lo tanto no te podemos obligar a nada legalmente si tú no quieres, puedes dejarlo cuando querías, y quedarás en la base de datos, así si quieres volver puedes hacerlo, no queremos más problemas con gente descontenta que se va de la lengua - no estaba del todo seguro, pero no estaba pensando en mi si no en el piso. Cogí los papeles y los firmé, entregándoselos con los documentos pedidos, los metió todos en una carpeta, dándome la mano y dejándome una copia del contrato, se fue.

-MADAMME: tú quédate tranquilo, otros han tenido peores inicios de los que vas a tener tú, te voy a llevar de la mano personalmente. Lo 1º es explicarte como solemos proceder, normalmente vamos progresivamente, el 1º mes solo compañía, sin sexo, para que vayas conociendo a la clientela más normal, luego algún encargo esporádico para asegurarnos de que des la talla ahí fuera, y en 6 meses estarás a pleno rendimiento aceptando lo que tú quieras hacer.

-YO: pero yo necesito mucho dinero, y ya.

-MADAMME: ¿cuanto es mucho dinero y cuando es ya?

-YO: puffff………. – me puse a sumar mentalmente, unos 5.000€ para el piso, quería tener un par de meses más de margen hasta encontrar trabajo, sumándole gastos de mudanza, dinero que quería dar a mis padres, o para tener dinero en mano por si había mala suerte, y ya puestos a ganar dinero…….. -….. 20.000€ antes de 3 semanas.

-MADAMME: jajajajajajajajjajja amor, eso solo lo ganan los mejores y pese a lo de anoche, dar la talla con los clientes es otra cosa.

-YO: puedo ganármelos, y lo sabes, era solo una cifra, seria idóneo para mí.

-MADAMME: ¿y que seria aceptable? - si bien todo eso eran cábalas, para arrancar solo necesitaba los 5.000€ de la entrada del piso, era lo más urgente.

-YO: si no saco al menos 5.000€ en esas 3 semanas, me largo de aquí ya.

-MADAMME: eso ya es mucho mas factible, aunque lo otro……no sé, si me haces caso en todo lo que te diga, podemos llegar a los 20.000€.

-YO: este bien, dime como lo haremos.

-MADAMME: voy a enseñarte “el catalogo”, con fotos, descripción y gustos, una especie de muestrario que le damos a los clientes, luego pasaremos atrás y haremos el tuyo, nos vamos a una clínica de aquí cerca para que te hagan el chequeo. Ve mirando el catalogo.

Lo hice y entendí el nivel de la empresa, era muy profesional, fotos de todo tipo, descripción detallada del trabajador y observaciones sobre lo que esta dispuesto a hacer o gustos personales, mujeres y hombres, desde los que van de acompañantes, a solo sexo oral, los que follan, los que le dan al sexo anal, las especialidades como tetas o culos, los fetichismos, travestíes operados o sin operar, transexuales, sado, orgías, maduras, jovencitas, roles……..etc etc allí vi las fichas de Matahari, la Recepcionista, así titulada, y la de Púrpura.

-YO: vaya, Púrpura esta, y la recepcionista, muy….detallado.

-MADAMME: ofrecemos de todo, menos menores, y si te pillan con una menor estas fuera y te denunciaremos, he pasado por eso de pequeña y no lo acepto a mis órdenes. A púrpura la tengo que quitar unos días, la has dejado ida, de hecho esta en la clínica.

-YO: lo siento, no pretendía….

-MADAMME: nada, ella se lo buscó, oyó a Matahari hablar de ti y me suplicó ser ella la que te probara, pobrecilla. Como verás, dentro de todo, té eres de los chicos más……normales, tenemos a ex modelos y gente de mucha calidad, realmente mucho más agradable a la vista que tú, que engañas mucho vestido, eres mono pero mira a este…… – señaló el catalogo - ……Yuri, un ruso cachas que parece bajado del cielo, rubio, ojos azules, guapo a rabiar y folla de maravilla.

-YO: entiendo, y para acompañante puedo perder, pero tengo labia con las mujeres, aun más con las maduras y si toca follar me atrevo a decir que les dejo en ridículo a todos.

-MADAMME: pues casi, lo de anoche no lo pueden hacer más de 2 o 3 de esta lista, y cobran 10.000 la noche, para ellos, 20.000 se le cobra a los clientes, pero eso es especial, si llegas ya te diré como. Por ahora ya tengo a 3 de mis mejores y más viejas clientes, las encanta probar a los novatos, solo acompañante en fiestas y bailes, serán 500€ cada una, si las tratas bien harán correr el bulo de ti entre los clientes, y ya me encargaré yo de que tengas trabajos de sexo pronto, allí puedo ponerte a 1.000€ para ti la noche, algo caro para un novato, pero en cuanto te vean la polla pagarán encantadas, de ahí en adelante ya depende de ti, de lo rápido que corra el rumor y de lo que estés dispuesto a hacer.

-YO: pues empecemos

-MADAMME: como ves los listados incluyen foto en 1º plano, foto de cuerpo entero, vestido y desnudo, y en el caso de los chicos, foto del pene, flácido y erecto, tengo al fotógrafo allí detrás si estas listo, vienes lo suficientemente mono como para hacerlas - se lo agradecí a mi madre mentalmente.

Me acercó a una zona con un fondo blanco, había un fotógrafo preparado, me saludó y mientras Madamme se sentaba, trasteando con el móvil, el fotógrafo me iba poniendo en situación, me arregló un poco el pelo y me dio algo de colorete en la cara, foto de 1º plano y luego de pie, me iba diciendo posturas, a mi me hacia gracia parecía un profesional, un modelo, hizo unas 20 para asegurarse tener alguna buena y luego me pidió que me desnudara, yo estaba en modo payasete así que lo hice sin más, miraba a Madamme que al ver algo colgando dejó el móvil un segundo, admirándome, sin duda recordando el polvo de la noche anterior, casi ni oí el “joder” del fotógrafo, cambió de lente la cámara y se me puso tan cerca que notaba el calor de la luz del flash al hacer las fotos. Llegó el momento de la foto de mi miembro tieso, y a mi no se me ponía, ya no era un niño al que con pensar en tetas se le ponía dura. Miré a Madamme.

-YO: ¿me echas una mano? - sonreí pícaramente.

-MADAMME: a mi no me mires cabrón, aun me duele el culo - pensé una solución, y en mi cabeza se pasó la Recepcionista, si de inicio no me llamó mucho la atención, al verla en el catalogo desnuda se me ocurrió una idea.

-YO: ¿y si me traes a la chica de fuera? La recepcionista…..- sonrió, y llamó por teléfono a una de sus moles.

-MADAMME: traédme a la recepcionista - a los pocos segundos apareció una mole con la chica colgando, agarrada de un brazo aun con los cascos puestos -…… tú, ayúdale a empalmarse - la mirada de la chica se clavó en mi polla.

-RECEPCIONISTA: pero….- una mirada fulmínate de Madamme la cayó, y un empujón de la mole la hizo andar hacia mí.- ¡¡virgen santa!!

-YO: ¿Qué, ahora no te parezco tan poca cosa?, anda chúpamela un rato a ver si se endurece…….- según lo dije la pegué a mí apretando su culo -……. he leído que eres especialista en eso……..- miró a Madamme de nuevo -…… no la mires a ella, aquí ahora mando yo - la di un azote que la hizo reaccionar.

Se dobló de piernas quedando de cuclillas, se quitó los cascos y al ir a quitarse las gafas la paré, entendió que me daban morbo, agarró mi polla con firmeza y sabiduría, pero su cara era de asombro, y aun no estaba tiesa, la manoseo hasta ver sus proporciones y una vez medidas, chupó el glande como la profesional que era, echando hacia atrás toda la piel y engullendo lentamente, estando flácido le entraba bastante y sin arcadas, realmente no mentía, se le daba muy bien, tanto que las miradas de todos se posaron en su trabajo, Madamme, el fotógrafo y la mole estaban deleitándose, me concentré en no ponerme muy caliente, para no ponérselo fácil, tuvo que tirar de repertorio, lametones en los huevos incluidos, se metía uno mientras chupaba mi escroto, para luego repasar la polla desde la base a la punta y allí engullir rabo repetidamente, en una de esas ya no podía más y mi estaca creció a su tamaño natural, pero me aseguré de que no pudiera sacársela apretándola la nuca, y notó como progresivamente mi flácida amiga iba creciendo hasta convertirse en una barra que casi la parte la mandíbula.

-YO: déjala limpia para la foto.

Se esmeró en ello una vez que la solté, había hecho su función, así que la empujé hasta dejarla de culo en el suelo, y el fotógrafo, con medio rabo fuera de haberse estado masturbando, hacia las fotos, al acabar se fue a preparar el álbum.

-YO: ¿y ahora que hago yo con esto tieso?

-MADAMME: ¿tu sabrás?, ya te he dicho que a mi no me mires, que ya me tienes caliente.

-YO: ¿me puedo follar a esta? - señalé a la recepcionista que se encajaba la mandíbula, miro el álbum y vio que si.

-MADAMME: toda tuya - eso horrorizó a la Recepcionista, no la di tiempo ni de suplicar.

-ZEUS: anda, sigue chupándola y si mi corro rápido no te follaré, pero date prisa, Zeus es muy ansioso - Madamme se reía de mi comportamiento, de golpe apareció de la nada aquella actitud chulesca, altiva y grosera.

La chica quiso esmerarse, entendiendo que se podía librar de mi, se arrodilló y retomó donde lo había dejado, si antes se esmeraba ahora estaba desesperada, realmente estaba muy concentrada, sus 2 manos no pararon de pajearme en todo el tiempo que estuvo trabajando el glande con la boca, no le entraba mucho más, a los 15 minutos me harté.

-ZEUS: has tenido tu oportunidad, ahora te voy a abrir el coño - quiso aferrare a mi rabo para ganar tiempo en su mamada, pero la levanté de los brazos y la desnudé, no me acuerdo ni de lo que llevaba, chaqueta de traje y vestido hasta las rodillas creo, se lo quité todo, bragas incluidas ante su afán de seguir pajeándome rápido por si me corría de una vez, podía haber estado 1 hora, no lo lograría.

Para más humillación, la puse de espaldas y la levanté una pierna apoyándola en la mesa que estaba al lado de Madamme, colocándome detrás de ella y llevando mi mano a su coño, se lo abrí y metí un dedo, me llevé una sorpresa, no estaba nada mojada, pero la abrí bien de piernas y la masturbé hasta que lo estuvo, con su concha mirando a Madamme, que fingía ver el móvil, pero sus miradas iban a aquella chica abierta de piernas siendo “violada” por mi mano, la mole quiso sacarse el rabo y pajarease, pero Madamme le interrumpió diciéndole algo de la 3º mole de ayer, y le mandó fuera. No atendí por que la mujer de mis brazos estaba ya muy caliente, pasó de intentar evitarlo a desearlo, mis dedos mojados así lo atestiguaban, su respiración se agitó hasta sacarla gemidos, mis ahora 2 dedos la estaban matando mientras jugaba con su cuello con la boca, estaba totalmente desnuda, solo con unos tacones y las gafas de pasta, mi otra mano iba a sus pechos de tamaño mediano, con sus pezones ya duros, cuando la noté preparada la empujé contra la mesa, de forma que su cara quedara a unos 20 centímetros de Madamme, con el torso vencido sobre la mesa y el culo ofrecido, pensé en comerle el coño pero ya estaba muy mojada y yo solo quería desahogarme, así que la empalé con algo de cuidado, oyendo sus gritos de presión, allí me sorprendí de nuevo, pese a su terror inicial le entraba bastante cantidad de carne, así que sin mucha presión comencé a follar, a un ritmo normal para mi, con cada estocada la hacia vibrar el cuerpo entero, terminando en un aullido de dolor placentero, Madamme miraba la cara de la muchacha a pocos centímetros de la suya, y luego a mi, sonriendo. Eso me motivo más y le aumenté el ritmo, tanto que a los 10 minutos la empalaba entera, mis golpes de cadera sonaban en su trasero por toda la oficina, la agarré de la coleta y de un de sus tetas para mayor sujeción en el tris final la sentí curvarse antes de correrse y eso me aceleró más el ritmo, cuando la noté que iba a bañarme, paré en seco. Todo, desde abrirla de piernas y tirarla en su dirección estaba destinado a excitar a Madamme, quería jugar con ella, medir el nivel de poder que tenia realmente.

-RECEPCIONISTA: ¡¡¿pero que haces, sigue?!!

-ZEUS: ruégalo.

-RECEPCIONISTA: ¿que? - Madamme me miraba sorprendida.

-ZEUS: que lo ruegues, grita a pleno pulmón que deseas que te siga abriendo el coño con mi enorme polla, y quizá entonces siga.

-RECEPCIONISTA: ¡¡mamón de mierda, no me dejes así!! - comenzó a moverse ella contra mi, la paré levantándola y agarrándola por la cintura, susurrándola al oído mientras miraba a los ojos a Madamme.

-ZEUS: o haces lo que te digo o te dejo tal como estas y me largo, grítalo y di mi nombre.

-RECEPCIONISTA: “FOLLAME EL PUTO COÑO ZEUS, ÁBREME CON TU GIGANTESCA POLLA, TE LO RUEGO, PERFÓRAME HASTA QUE ME REVIENTES, HAZLO YA, ZEUS”- Madamme rompió a reír.

Según como estaba, con ella erguida, la di un minuto a lo bestia, todo lo que Raúl podía dar, eso la hizo retorcerse y dar patadas de cabra con una pierna mientras mi pelvis no paraba de golpearla, su corrida fue abismal, llevaría tiempo sin follar de verdad, la saqué de ella y la dejé caer rendida en la mesa. Me coloqué de pie delante de Madamme apuntándola con la polla.

-ZEUS: ¿y tú crees que no soy de 1º nivel?, como no tengas a otra del catalogo por aquí vas a tener que terminar su trabajo - sonrío mordiéndose el labio, más que por mi, por como había dejado a aquella chica en menos de 30 minutos.

-MADAMME: esta bien, pero solo te la chupo, tengo el coño irritado y el ano escocido.

-ZEUS: si haces que me corra y te lo tragas, te perdono - me sonrío moviendo su lengua en la boca.

-MADAMME: eres el novato, no deberías de hablarme así.

-ZEUS: soy Zeus, y haré lo que me de la gana, si no quieres no lo hagas, me seguiré tirando a esta hasta que me corra y me dará igual que se desmaye como Púrpura, tú verás cuantas chicas quieres perder por mi culpa.

Fui convincente, dejó el móvil y me atrajo hacia ella, agarrándomela con ambas manos y chupándola sin parar, aun llena de los fluidos de la Recepcionista, hasta que me la dejó limpia, para luego llenarla de babas y carmín, eso era una mamada de verdad, en sus tiempos debió de ser la más caras del país, en 10 minutos de maravillas con su lengua logró sacarme una corrida de campeonato, al notar mis huevos duros cerró la boca y dejó que eyaculara dentro de sus labios, alguna arcada, sin dejar caer una sola gota, y sin dejar de masturbar, cuando se aseguró se la sacó, me miró abriendo la boca dejándome ver la abundante corrida en su paladar, sacó un bote y dejo caer cierta parte de semen, y cerrándolo se lo guardó, luego cerró la boca y tragó, para volver a abrir y demostrar que no quedaba nada.

-MADAMME: ¿así le gusta a mi dios griego preferido? – la sorna sonó demasiado condescendiente.

-ZEUS: no esta nada mal - no se si lo tenia planeado, pero la di la sensación de que solo ella podía conmigo, era mentira, pero me gustaba que pensara así, para tenerla feliz, y en el fondo, a mis pies.

-MADAMME: jajaja eres duro de roer, dios, si no estuviera tan dolida te echaba el 2º asalto, pero tenemos que ir a la clínica, ya llegamos tarde.

Nos fuimos a un baño cercano a adecentarnos, y al salir de pasada vi como el fotógrafo se lo estaba montado con aquella mujer rendida sobre la mesa. Me cogió del brazo como si fuéramos pareja, y ordenó a las moles que nos siguieran, bajamos en el ascensor, y fuimos andando hasta la clínica, hablando de alguna tontería, me gustó esa sensación de poder, de tener a esas moles cubriéndonos, de ver a la gente mirándonos como si fuéramos alguien importante, al llegar se quedaron las moles en la sala de espera mientras nos hicieron pasar a una sala, allí un par de médicos y una enfermera me hicieron el chequeo, pude notar deseo en los ojos de la enfermera al verme desnudo. Yo fui precavido y le llevé una copia del informe del hospital de mi operación, y de la vasectomía, lo archivaron y me extrajeron sangre para luego pedirme el semen, Madamme sacó el bote y les explicó el proceso de “extracción”, no pusieron pegas.

-MADAMME: bien, ahora mientras esperamos los análisis nos vamos a ir a comer, allí te haré una entrevista, rellenaré un formulario de tus gustos y roles.

Igual que antes, agarrados del brazo y las moles siguiéndonos, fuimos caminado a un restaurante cercano, por el camino pregunté por la 3º mole, me dijo que le había echado por no estar atento a su protección y si más a mi amiga, me pregunto si ella estaría interesada en trabajar para ella, pero la dije que no, tenia su propia empresa y le iba bien, solo era una de mis tantas amantes. Quiso sonsacarme más sobre mi vida privada pero mantuve cautela y no le dije nada para que pudiera usar contra mí. Llegamos al restaurante, de esos caros en que hay que pedir reserva, pero según la vieron un camarero nos acompañó a una mesa reservada.

-ZEUS: nunca he estado en un sitio tan elegante.

-MADAMME: déjame pedir a mi, camarero, lo de siempre, pero para 2…………. bien, mientras comemos vamos a hablar de ti, de tus gustos, de lo que te gusta hacer y de lo que crees que se te da bien, de que roles o papeles puedes interpretar, vamos, todo lo que se nos ocurra. Ya vi que el sexo oral no es tu punto débil, sabes trabajarte a las mujeres, sexo anal sin reparos, ese punto de soberbia puede ser algo a sumar si no te pasas, y me di cuenta de que follas a diferentes velocidades y fuerzas, puedes pasar de sexo normal a sexo fuerte, a sexo duro y luego ya, lo del final, pufff eso no lo había visto casi nunca.

-ZEUS: estoy bien adiestrado.

-MADAMME: ¿te va el sado?

-ZEUS: no, vamos, no me pone, tampoco es que lo haya intentado, tengo varias relaciones de dominación, no esclavas pero si relaciones donde mando yo y ellas obedecen por placer, eso me gusta, más el trayecto, que el logro en si, pero no soy violento, no me gusta pegar a las mujeres, aunque sea sexual y con su consentimiento.

-MADAMME: esta bien, ¿y sexo gay?

-ZEUS: no, ni de coña, vamos, que no es que tenga nada en contra, pero no soy gay, he probado lo del dedo en el culo y si bien me he corrido no es una sensación que me agrade, menos que me follen.

-MADAMME: orgías no te veo mal, aunque aun no te he visto con varias a la vez, pero me da que se te dan bien, la cuestión es que hasta ahora te he visto con chicas guapas, ¿que pasara si toca un vieja, arrugada y fea?

-ZEUS: pues sinceramente no lo sé, supongo que tendré que averiguarlo.

-MADAMME: eres sincero, eso me gusta, aun así entenderás que las mujeres normalmente si son guapas y jóvenes no necesitan de nuestros servicios, a no ser que tengan necesidades especiales. En fin, creo que me hago a la idea, pero necesito saberlo, ¿puedes parar de follar sin correrte? Es decir, si a 2 de mis chicas las has dejado idas y luego he tenido que terminar yo, una clienta que se corra lo mismo no desea continuar, tendrás que parar.

-ZEUS: puedo hacerlo, ya lo he hecho antes, hace poco en realidad, una chica que la dolía mucho y me sacó de sus casa a patadas, si luego puedo desahogarme en casa con alguien no habrá problemas, al menos para la clienta jejeejeje

-MADAMME: y tienes la vasectomía hecha, ummm eso puede ser muy útil, muchas clientas odian los condones y no quieren tomar pastillas, eres un joya.

La comida siguió por esos derroteros, indagando en mis gustos, si bailaba, si haría streptease, si me disfrazaría de policía o bombero, o de muñeco de peluche, ¡¡o de bebé!! , alucinaba. Comimos, bueno, ingerimos algo, yo me quedé tieso de hambre con la mierda de comida que nos pusieron y luego la cobraron casi 2000€, nada más salir de allí me metí en una hamburguesería de estas de cadena rápida, y por 8€ me pedí un menú como dios manda, me hacia gracia ver a las 2 moles vigilando sin parar aquel local y a Madamme totalmente fuera de lugar. Regresamos a la clínica varias horas después, no paraba de recibir llamadas de clientes o de trabajadores consultándola problemas, era un hacha, directa, concisa, resolutiva.

Al darnos los resultados certificaron que estaba hecho un toro, hablaban de un ligero excedente de grasa corporal, pero que era normal después de la operación que sufrí, por el resto di sobresaliente en pruebas de esfuerzo, analítica perfecta salvo que notaron la mierda Africana que me metió Pamela hacia ya 5 meses, expliqué el caso, no bebía, no fundaba, no tomaba drogas.

-MADAMME: esta bien, esta semana empiezas, toma, este móvil, es desechable e ilocalizable, solo yo tengo su numero, llévalo siempre encima y cargado, pero ya te digo que el 1º trabajo será pasado mañana, acompañarás a una vieja amiga a un cóctel, no me falles, simplemente haz que se sienta bien y se divierta, se amable, cortés y educado, si alguien te pregunta eres su chofer o su seguridad personal. Me llamará para decirme como fue, así que no hagas tonterías, por favor, no arruines esto, si todo va bien al día siguiente tendrás el dinero en tu cuenta. Ahora me marcho…. - me dio un beso en los labios -…….. y a por ellas, Zeus, te mandaré un mensaje con el lugar y las indicaciones.

Se subió a un coche con las moles y se fue, yo me fui contento a casa, tanto que quedé con mi Leona, había vuelto de vacaciones y me recibió encantada, follar con ella era diferente, se dejaba hacer, no dominaba la situación, lo noté claramente al compararlo con los polvos de la noche anterior, por eso duraba tanto, no había fuerza opositora, era yo y mi ritmo, aun así me encantaba estar horas perforándola, y más cuando llevaba tiempo sin ella y sin las colombianas, que se habían ido con el marido/padre a dar una vuelta a Sudamérica.

Por no alargar esto más, la 1º cita fue genial, la señora era un encanto, acudí a la dirección del mensaje, un bar, con el traje de Eric y con un pañuelo gris en la solapa, indicativo para ser reconocido, en el mensaje iba la foto, y pese a que no era fea, era una señora mayor de unos 59 o 60 años, Sonsoles, muy educada pero se fue soltando toda la noche, como siempre, me era fácil tratar con mujeres de esas edades, la saqué a bailar y gastaba bromas inocentes sin pasarme de la raya, nos despedimos unas horas después con una sonrisa cómplice.

Al día siguiente recibí la llamada de Madamme, encantada con mi trabajo, el dinero ya estaba ingresado, 500€ menos para el objetivo, a los pocos días otro mensaje, dirección y foto, Milagrosa, era una señora mayor, fea y arrugada, aun así fue una fiesta en casa de un ricachón, y se reprodujo exactamente igual a la 1º, fue de cine, era incluso más atrevida en sus comentarios y gestos que Sonsoles, aun así me lo pase bien y cuando me lo pasaba bien contagiaba al resto a mi alrededor. Me volvió a llamar Madamme contenta de nuevo, otros 500€ menos, 1000€ ya en 4 días, pero era muy poco, la 3º fue un calco, Antonia, esta vez era más joven, de unos 49 años, más lucida, pero nada atractiva para mi, era un baile en una discoteca, era muy mandona, yo solo seguí órdenes, era educado y amable, ella me arrastró a bailar durante horas, cuando notó mi polla se calentó, intento meterme mano, yo la dejé un poco por no cortarla, pero cuando metió la mano y me la agarró, me separé, pidiéndola calma, y que si quería algo más, hablara con Madamme. Eso la enfadó un poco, pero paró sus manos, temí al día siguiente que hubiera hablado mal de mi a Madamme, pero al llamarme se sintió orgullosa, era una pequeña prueba, quería ver si había entendido que tenia que pararle los pies a las que se pasaran sin pagar, y lo había hecho, y por ese extra me dio los 1000€, ya tenia 2.000€ en menos de una semana, en 3 podía tener 6.000€ más que suficiente para la entrada del piso.

Azucena – Arreglando un desastre.

Me llamó Madamme a la 2º semana, quería quedar en un sitio en concreto, un piso cerca de mi casa en la zona de los chalets, me pidió que fuera preparado para todo, y rápido, allí fui, me estaban esperando fuera, Madamme, las 2 moles y un chico, me sonaba su cara del catalogo.

-ZEUS: ya estoy aquí, he venido lo más rápido posible.

-MADAMME: bien, por que te necesito, este imbécil ha venido a hacer un trabajo, para ello ha tenido que beber y se ha puesto borracho, ahora no se le levanta y tengo a una buena clienta dentro, muy enfadada, quería ir más despacio contigo pero es una urgencia y eres el que esta más cerca, necesito que entres y arregles esto.

-ZEUS: ¿y como sugieres que lo haga?

-MADAMME: no lo sé, prueba con algún truco de los tuyos en la discoteca, logra calmarla, y después regálale una buena follada, son 3.000€ limpios sin el 50%, para ti, si lo arreglas en 1 hora – “joder”, era mucha pasta, pero mis trucos en la discoteca me costaron horas, días o semanas con aquellas mujeres, no 1 hora.

-ZEUS: esta bien, ¿que puedes decirme de ella?

-MADAMME: es una clienta asidua, Azucena, tiene mucho dinero e influencias, es joven, de unos 35 años, y no es fea, pero esta gorda, morena de ojos azules, algo baja y acomplejada a más no poder - me calmé, era más o menos mi descripción de hacia 1 año, y eso sabia manejarlo – anda, entra a ver que puedes hacer, tranquilo si no logras nada, no es culpa tuya, es de este cabrón al que voy a echar a la puta calle - le dio una colleja fuerte - pero si lo logras, te deberé una.

-ZEUS: ¿y no se asustará al entrar solo yo? - se dio cuenta de que eso podría ser, así que me acompañó.

Llamó a la puerta, estaba entre abierta, y se oía a una mujer dentro llorando y rompiendo todo.

-MADAMME: ¿Azuzena?, ¿estas aquí?

-AZUCENA: ¡¿que coño quieres?, ¿vienes a reírte tú también de mi?!

-MADAMME: no por dios, mujer, que ya me conoces, solo vengo a arreglar esto.

-AZUCENA: ¡¿que vas a arreglar? ¿A esta gorda de mierda que no logra que se le ponga dura ni a gígolo?! ¡¡¡Pégame un tiro en la cabeza y acabamos antes!!! - estaba muy cabreada, la vimos detrás de un sofá entre cristales de una mesa rota, semi desnuda, arañando un cojín con un cristal en la mano, con un templo muy similar a si lo hiciera sobre su brazo. Eso me tensó, “vaya estreno”, Madamme al verlo me agarró del brazo y me apretó de tensión.

Lo 1º era clamarla, y decirla que se tranquilizara solo la enfurecería más, eso lo aprendí bien de pequeño de mi hermana mayor, en realidad, según la veía, se parecía bastante aunque mi hermana era más delgada, alta y joven, el enfado también era similar a alguno de los suyos, desmesurado, desproporcionado al agravio cometido, y sabia manejarlo, no tenia que calmar, si no desahogar.

-ZEUS: hola, ¿Azucena, verdad? - me miró levantando su vista del cojín rasgado, ojos preciosos azules, pero bañados en lagrimas - me llamo Ra….Zeus – “puto lapsus” - estoy aquí para saber que ha pasado, ¿me lo cuentas? - me fui agachando dejando atrás a Madamme, poniéndome a su nivel.

-AZUCENA: ¿que que ha pasado? ¡¡¡Que llevo toda la puta semena trabajando como una negra, con los proveedores dándome por saco y con los de hacienda fastidiando con inspecciones, llega el puto viernes y lo único que quiero es relajarme, un poco de compañía, pago un puto dineral ….- miró a mi espalda - …. si Madamme, un dineral…. - se centró en mi de nuevo-…… por tener un buen tío al que follárme, para destensarme, hacerme olvidar el estrés y sentirme bien y deseada, le invito a un par de copas y cuando me desnudo a ese capullo no se le levanta, me dice que se la chupe para probar, se la como media hora y nada, ¡¡¡soy una gorda fracasada que no sabe ni chuparla, eso es lo que pasa, Zeus!! - después de eso, su respiración fue cayendo, había soltado su rabia y yo ya sabia que ocurría.

-ZEUS:: siento que haya ocurrido esto, te juro que no has hecho nada malo y que la culpa al 100% es nuestra, somos personas, como tú o yo, cometemos errores, solo podemos intentar solucionarlos y seguir adelante.

-AZUCENA: si, pero no solo es eso - su tono bajó varios peldaños - ¿por que no puedo tener una relación normal?, ¿por que tengo que acudir a vosotros?, no soy fea, y se que soy buena mujer, no me quieren por mi aspecto, por que estoy gorda, pero cuando hay problemas acuden a mi la 1º.

-ZEUS: esta bien, te entiendo perfectamente, estas harta de que te traten como un objeto, que solo te llamen o te presten atención cuando hay problemas y dependan de ti, para que después te dejen de lado cuando las coses van bien - me escuchaba atenta, sin duda estaba dando en el clavo, que era mi clavo hacia no mucho - estas harta de todo, sabes que vales más que eso y solo esperas que alguien se de cuenta, que te llame y quedé contigo solo por el placer de tu compañía, no por que te necesiten.

-AZUCENA: exacto, ¿por que no puedo tenerlo? - me senté enfrente suya, con Madamme mirando muda con miedo a interrumpir.

-ZEUS: bueno, sin duda eres la jefa en tu trabajo, eso genera sus beneficios y sus desventajas, sabes, leí en algún sitio que no se puede tener éxito en el trabajo sin desmerecer al amor, que si quieres algo, para poder mantenerlo, tienes que prescindir de otras cosas, ¿no crees? ¿Tú eres feliz con tu trabajo?

-AZUCENA: cada día menos……..

-ZEUS: replanteo la pregunta, si todos acuden a ti cuando hay problemas es por que eres un gran mujer, y has llegado a serlo gracias al trabajo que te ha llevado a este momento, ¿renunciarais a todo eso?

-AZUCENA: no, ni loca, me ha costado un mundo llegar aquí, es mi vida.

-ZEUS: pues te diré algo, un día de estos, llegará un hombre, te mirará, verá lo especial y lo dulce que eres, y tú lo notarás en su mirada, entonces no habrá impedimentos, los 2 lo sabréis en ese instante, da igual que estés enterrada bajo miles de folios, despeinada, sudando y manchada de tinta de un boli medio gastado, el te verá, y le dará igual que seas alta, baja, gorda, delgada o de otro planeta. Hasta ese momento no puedes renunciar a tu vida por ir prestándole más atención a hombres que solo se fijaran en ti por tu esfuerzo, y no por tu interior, cuantas horas malgastadas, y cuanto esfuerzo derrochado para algo tan pequeño como el sexo esporádico - me miraba estupefacta, yo no sabia de donde me salían las palabras, solo trataba de trasmitir seguridad.

-AZUCENA: ¿y que puedo hacer hasta entonces?

-ZEUS: haz tu vida, decide que quieres hacer, puedes malgastar tu trabajo y tu vida en intentar atraer a hombres que no saben apreciarte, o seguir siendo la mujer todo terreno que eres, una mujer que se ha hecho a si misma y que no necesita de halagos ni de tonterías de críos para sentirse bien, disfruta con tu trabajo y cuando lo necesites aquí estaremos, no para hacerte feliz y no para darte una falsa sensación de bienestar, si no para divertirnos y pasarlo bien hasta que llegue ese hombre, y no se lo dirás pero por dentro te reirás de lo inútil que habría sido ir rebajándote ante otros hombres, cuando él llegue, recordarás este momento con nostalgia, y pensarás lo tonta que fuiste al pensar que cualquier hombre merecía tu cariño, cualquier idiota puede fijarse en un cuerpo bonito, pero solo los mejores ven más allá del físico.

-AZUCENA: ¿y que sabrás tú?, eres delgado y guapo.

-ZEUS: ¿lo soy? Ahora puede, mira, saco el móvil, y te enseño una foto mía de hace 1 año, a cambio del cristal que tienes en la mano - extendí mi mano con firmeza mientras buscaba la foto.

-AZUCENA: ¿y que me vas a enseñar, una foto tuya con unos granos o un peinado raro?

-ZEUS: solo lo sabrás si me das el cristal, eres una mujer de negocios, no se da nada a cambio de nada - se quedó pensativa, miró su mano y se dio cuenta de golpe de lo que estaba haciendo.

-AZUCENA: esta bien, toma, pero no me engañes.

-ZEUS: aquí tienes la foto, a la de 3 te doy el móvil, y tú el cristal, una, dos y tres - lo hice rápido para que no pensara, me dio el cristal con prisa por agarrar el móvil.

-AZUZENA: ¡NO, este no puedes ser tú!

-ZEUS: el mismo soy, ¿ves la peca de la mejilla?, aquí la tienes- señalé mi cara.

-AZUZECA: ¡¡¿pero si estas enrome?!!

-ZEUS: exacto, y ahora mira el cambio jejejeje, por eso se de lo que hablo, por que me he tirado muchos años pensado como tú, el por que no me ven tal como soy, ¿por que no son capaces de ver más allá de la superficie?

-AZUZENA: ¿y cual es la respuesta?

-ZEUS: no hay respuesta, o si la hay no la conozco, solo que ahora me da igual lo que vean o no en mi, lo que importa no es lo que opinen los demás de ti, si no lo que opines tú de ti misma, yo soy el mismo que hace 1 año y ahora se me tiran encima mujeres que antes ni me tocarían con un palo, ¿y sabes lo que siento?, lastima, lastima por ellas, por que podrían haberme tenido, cualquiera de ellas, podrían haber sido felices conmigo, y no, quisieron ser infelices con otros solo por eran más monos o delgados que yo, ahora que afronten su decisión, que sean infelices el resto de su vida cargando con esa decisión. Bien, ¿Tú que decides, quieres ser feliz o no? La decisión empieza aquí.

-AZUCENA: quiero ser feliz, ¿que hago?

-ZEUS: para empezar déjame que te ayude a levantarte y te saque de ahí, esta lleno de cristales - me puse en pie y estiré mi mano, ella la cogió y de un tirón me la cargué encima, pesaba, estaría por los 90 kilos, pero yo era muy fuerte y no se me tenía que notar. La llevé a una silla y acaricié sus piernas, asegurándome que no quedaran cristales - bien, ahora vete a poner algo de ropa encima, que estas muy descocada para nuestra 1º cita jejejejeje, ponte algo en los pies y vamos a recoger esta casa, no se puede quedar así. Madamme, gracias por venir, creo que ya se puede ir, me ocupo yo de todo - estaba con la boca abierta.

-MADAMME: esto…… si, vale……..gracias, hablamos Azu…..

-AZUCENA: si, si, vete tranquila, ¡dios!, los siento, que boba soy………- Madamme la miraba perpleja, no solo la había clamado si no que se estaba disculpando, me miró feliz, yo la hice un gesto para que se fuera de aquí.

-ZEUS: adiós, y cuando eches a ese mierdecilla, dile que da lastima, y que se vaya a hacer infeliz a gente más débil que nosotros.

-AZUCENA: eso - levantó la mano para chocarla al irse a un cuarto a ponerse algo encima, estaba en sujetador y bragas, y le sobraban bastantes kilos, pero por algún motivo, me atraía bastante, sus pechos era muy llamativos y supongo que ella lo notó.

Madamme se fue, y quedamos los 2 en la casa, yo empecé a recoger los cristales de la mesa, para cuando volvió iba con unas zapatillas y un camisón, sexy y escotado, me quedé deliberadamente mirándole las tetas un par de segundos, antes de seguir recogiendo, y mascullé un “mira que hay que ser tonto para no empalmarse”, de nuevo, deliberadamente alto, para que lo oyera. Eso la puso una sonrisa amplia y trajo trastos para limpiar, bayetas, cubos de basura, fregonas, recogedores, había montado un buen circo en casa, y lo aproveché, empecé a hacer bromas por la TV de plasma de 50 pulgadas con unas tijeras de costura clavadas.

-ZEUS: ¿pero como ha llegado esto ahí?

-AZUCENA: yo que sé, quería clavar algo jajajajaja

-ZEUS: joder, pues un cojín, no un TV de 50 pulgadas, hija mía, con lo que se tenia que ver de bien……..- ponía cierto tono de madre, eso siempre funcionaba con mi hermana para rebajarla los enfados o desviar su atención a mi y no al problema.

La limpieza iba rápida, en realidad no era limpiar, sino recoger basura y tirarla, yo aprovechaba y me la comía con los ojos, de forma clara y evidente, pidiéndola ayuda para coger cosas que no necesitaban de ayuda solo para ver como sus tetas se movían ante mi, ella no era tonta y lo sabia, pero se dejaba, le gustaba el juego. Alguna vez me rozaba con ella, de lado o de espaldas, aposta, haciendo el torpe, y pregúntala por su trabajo y a que se dedicaba, todo para que no fuera evidente el juego, pero sin dejar de jugar. Al final todo quedó más o menos recogido, solo faltaba la TV, podía de sobra con ella yo solo, pero la pedí que la lleváramos juntos a la basura, ella de un lado y yo del otro, como si fuera una camilla, paralela al suelo, ella de espaldas y yo de cara, maquiné para que fuera ella la que quedara de espaldas a la basura.

-ZEUS: anda levántala, es alto el cubo de basura de la calle, levantamos los 2 a la vez y la ponemos por encima de la cabeza y así yo voy empujando para tirarla y tú la mantienes para que no se me caiga - lo entendió, pero vio el fallo del plan, fallo que no era tal. Lo levantamos y según ella iba pasando las manos por todo el plasma, yo me acercaba a ella, casi rozándonos.

-AZUCENA: deja, que me quito y ya la tiras.

-ZEUS: no, no, por dios aguanta que se me cae - mentira llevaba medio plasma aguantado yo solo.

Cuando me pegué a ella bajé el plasma despacio, atrapándola en el hueco de mis brazos y bajando la mirada a su cara y su escote, estaba tan pegado que su respiración se notaba en mi pecho.

-YO: vale, ya esta dentro, pero no termina de entrar, déjame que la mueva - había una caja o lago y hacia tope así que meneé el plasma y a ella con mis brazos, ella reía pidiéndome, sin énfasis, que parara, yo disfrutaba de sus tetas pegándose una con otra. Eso fue suficiente para que me empalmara, y entonces di un golpe final y cayó el plasma en la basura y yo sobre ella, pegándome bien y dejando que se notara mi erección en su vientre.

-AZUCENA: uffff, parece que a ti si te la he puesto dura.

-ZEUS: yo que sé, solo quería clavar algo…..- al ser sus mismas palabras rompió a reír, medio excitada, medio avergonzada - ¿ves como no era culpa tuya?, esas tetas se la pondrían dura a cualquiera.

-AZUCENA: calla por dios, que me vas a poner la cara roja - se ocultaba la cara sin poderse mover atrapada entre mis brazos.

-ZEUS: mírame - se resistía - por favor, mírame - levantó la mirada ante mi insistencia - te pondría rojo el cuerpo entero si tú me dejaras - la besé, la situación lo pedía a gritos, se relamía a escasos milímetros de mi boca – dios, que bien sabes.

-AZUCENA: ¿y que sabor es ese?

-ZEUS: ¿ahora mismo?

-AZUCENA: si

-ZEUS: a basura, que peste, huele fatal el cubo jajajajaja - ella rió ante la ocurrencia.

-AZUCENA: pues alejémonos.

-ZEUS: por mi no hay problema, me quedaría así todo el día, prefiero oler mal y tenerte así atrapada, que no tenerte y oler a rosas.

-AZUCENA: jajaja calla tonto, vamos dentro.

-ZEUS: solo si me prometes que te seguiré teniendo en mis brazos, déjame que te compense, una mujer como tú se merece lo mejor, y para eso estoy yo aquí - la volví a besar, y ahora ella correspondió, estaba muy excitada, se lo notaba.

.AZUCENA: vamos dentro y hazme tuya - bajé a su cuello y lo trabajaba entre suspiros, la metí mano en el culo, era grande, aun así logré alcanzar el punto de apoyo y me la subí encima, tan arriba que mi cabeza era una teta más.

Mientras reía y pedía que la bajara, que podían vernos, me di la vuelta y la metí de nuevo en sus casa, llegué cansado pero ella no lo notó, al entrar la dejé resbalar sobre mi, con sus tetas apretadas contra mi cara, siendo besadas suavemente por mis labios, ya no reía, anhelaba al sentir mi polla levantarla el camisón. Al dejarla en el suelo la besé otra vez, ahora ya de forma pasional, abriendo la boca y metiendo mi lengua en la suya, mientras le levantaba y quitaba el camisón, me quedé admirando sus tetas y sus ojos, ambos eran llamativos, la quité el sostén entre besos a su hombro y su pecho, para después llevar mis manos a sus senos, eran enormes y caídos pero los trabajé gustoso, lamiendo sus pezones, grandes y erizados entre mis manos, metí mi cara en ellos, me amasaba la cara con sus tetas, para ir atacando indistintamente un pezón u otro, eso la hizo empezar a gemir, eso y el roce de mi paquete debajo de la ropa en su vientre, me levantó la cara para besarme de nuevo, ahora ella era quien me perforaba con la lengua, me quitó la camiseta que llevaba, y se separó lo justo para acariciar con sus manos mi bulto en los pantalones, sin dejar de besarme, se separaba un poco y me miraba fijamente abriendo la boca y mordiéndose el labio de forma lasciva, al notar lo grande y dura que estaba, la di la vuelta y me pegué a su espalda, mientras la besaba el cuello puse mis dedos en su boca para que los chupara, mientras mi otra mano se aseguraba de no sepárala lo más mínimo de mi, apretando uno de sus pechos, cuando lamía mis dedos bajé mi mano a su entrepierna, metiendo mis dedos debajo de sus bragas, hasta llegar a su coño, estaba muy, muy mojada, no me fue difícil acariciar e iniciar una penetración con mis dedos, mientras a ella se le cerraban los ojos, buscaba con sus manos mi miembro aplastado en su trasero.

-AZUCENA: vas ha hacer que me corra.

-ZEUS: voy a hacer que te corras varias veces - aceleré mi mano en su interior sacándola lamentos de gusto, mientras caminábamos hacia un cuarto.

Al llegar la tumbé quitándola las bragas con delicadeza, besando sus piernas, y admirando su cuerpo, estaría gorda pero me ponía a 100, tenia algo de bello, la abrí bien de piernas para dejar que mi cabeza se colocara entre sus muslos, y allí lamer sus labios mayores, chupando y jugueteando con la lengua mientras ella me agarraba y me apretaba la cabeza contra si, estuve un buen rato comiéndoselo sin parar, sacándola gemidos continuos al elevar el ritmo de mis labios y al introducir mis dedos en ella, terminó corriéndose con gritos sobre humanos, cerró tanto las piernas que me presionaba la cabeza.

-AZUCENA: ¡¡joder, que bien lo comes!!

-ZEUS: pues ahora tú decides, puedes chupármela o te follo ahora mismo, me tienes loco - subí por su cuerpo centrándome en un pecho.

-AZUCENA fóllame ya, ya se la he chupado al otro, ahora quiero que me penetres como un animal, haz que me olvide de todo.

Me puse en pie mientras ella se seguía masturbando rebajando la explosión de sensaciones que la había provocado, mirándome mientras se chupaba un dedo, me desnudé dejando mi rabo tieso ante sus ojos azules totalmente abiertos.

-ZEUS: tú lo has querido.

Me coloqué entre sus piernas, jugueteando con mi glande, abriendo los labios y frotándome, sin penetrarla, localicé la entrada limpia y de un hábil gesto se la metí hasta la mitad, un alarido sacudió la habitación, era mía, no se por que pero me estaba poniendo muy cachondo, noté como se abría un poco pero estaba tan mojada que seguí empujando hasta meterla entera, allí gritó ella, pero ni rastro de dolor o impresión, solo placer, me puso tan nervioso esa sensación de plenitud que agarrándola con firmeza arranqué la perforación, quería darle pausa al inicio, pero ella no me dio pie, sus tetas y el bamboneo de sus carnes sobrantes me estaban calentado demasiado, y le metí ritmo a la cadera, presionando tan fuerte que su vibrar se clamaba con cada golpe de mi pelvis, me dejaba caer sobre ella apoyándome en la cama y allí hacia flexiones, sacándola entera y volviendo a percutir, nunca había penetrado toda con tanta facilidad a una mujer, eso me enloqueció un poco y aceleré bastante, sacándola otro orgasmo sin parar de pedirme más, de vez en cuando relajaba el ritmo para coger aire mientras le lamía un pezón, para al minuto volver a arrancar embestidas sin parar, al 3º orgasmo estaba cansado de la postura, la tumbé de lado y me puse detrás, abriéndola de una pierna y penetrándola con fuerza, haciendo un movimientos de culebra continuo que la sacó el 4º orgasmo y de su tesón y aguante noté que me corría.

-ZEUS: estoy por reventar preciosa, me tienes loco perdido, dime donde quieres que acabe.

-AZUCENA: sácala, dios, déjame que me la trague toda.

Dejé de percutirla y ella se salió de mi, tumbándome boca arriba y agarrando mi polla con tal desenfreno que casi no le da tiempo a meterse el glande en la boca antes de que me corriera, la manché toda la cara, la boca y parte del cuerpo, ella masturbaba con mucha energía y eso hacia difícil dirigir mis últimos chorros, cuando ya no salía más fue clamado el ritmo según se me desinflaba, dándole un par de lametones finales, mirándome con sus ojos azules, y riendo.

-ZEUS: espero que te haya gustado, por que a mi me ha encantado.

-AZUCENA: no me has gustado, me has matado, me has calentado como a una perra - se tumbó boca arriba dejando que su cuerpo descansara, repasándose la cara con los dedos, buscando las gotas de semen y chupándoselos para tragarlos.

-ZEUS: para eso estoy, ahora ya sabes que siempre que quieras podrás disfrutar de un buen polvo, sin necesidad de perder el tiempo.

-AZUCENA: joder así da gusto, ahora dúchate si quieres y vete, como sigas aquí voy a tener que pagar otra sesión jajajajaja - me recosté dándola un beso magreando uno de sus pechos como despedida, me levanté y salí de allí sonriente, había cumplido con creces, había levantando la situación y le había sacado un polvo de calidad, tanto que hasta yo lo había disfrutado.

-ZEUS: esta bien, pero háblale bien de mi a Madamme si quieres que vuelva.

-AZUCENA: por descontado - me dio un último beso de despedida.

Me di una ducha rápida para quitarme el sudor más que nada, y volver a ser yo, abandonando el papel, me había costado y me había encantado aquel cuerpo obeso que recibió mi enorme polla sin problemas, me vestí y me volví a casa feliz y orgulloso. Al día siguiente me llamó Madamme, encantada, quería quedar para hablar, así que fuimos a una cafetería.

-MADAMME: eres increíble, no me creo aun como llevaste la situación, delante de mí.

-ZEUS: no ha sido tan difícil, y además me la folle encantado, lo disfruté.

-MADAMME: ya me dijo, me llamó esta mañana encantada, disculpándose por la bronca que montó, me preguntó por ti y cuando estarías disponible de nuevo.

-ZEUS: pues si pagas tan bien, cuando quiera, ya he visto el ingreso de los 3.000€, ya tengo los 5.000€ que quería como mínimo, pero ya que estoy, vamos a por los 20.000€.

-MADAMME: deja que pasen un par de días, no es bueno que sepa que estas disponible siempre, y eso la hará desear aun más, aparte de que pudo negociar el precio viendo como la dejaste de contenta.

-ZEUS: esta bien, tú mandas.

-MADAMME: la verdad es que no solo quería hablar contigo por lo de ayer, los rumores de ti empiezan a llegar a oídos importantes, y tengo un trabajo para ti, pero no se si te gustará, eso si, es un cliente que si dejas contento, puede darte el paso al 1º nivel, a ganar dinero de verdad, ya te diré, pero antes de eso, tengo otro trabajo para ti esta tarde, y ya es sexo, no acompañante, verás, por culpa del imbécil de ayer, que esta en la calle ya, ahora tengo un agujero en la agenda, y hoy le tocaba trabajar, es una pareja, lo típico, a él le encanta ver como se tiran a su mujer, y a ella el sexo, necesito que cubras su lugar, el resto de sus trabajos ya están cubiertos

-ZEUS: ¿y tengo que hacer algo especial?

-MADAMME: tú solo preséntate en esta dirección a esa hora - me dio un papel - y te recibirá el marido, no hables ni digas nada, les gusta ese rollo, te llevará a un cuarto donde estará su mujer, serás como un regalo, un juguete, cuando y como te digan, te follarás a la mujer, por lo que se le encanta el sexo, colócala siempre mirando al marido, y si quieres con sexo anal pagan mejor, son buenos clientes y les va un poco el sexo duro, el marido no participa, solo mira y se masturba, si lo haces bien son 6.000€, 3.000€ para ti. Ella es mona, creo que tengo un foto suya - me la enseñó, era guapa, algo mayor, de unos 43 años, pero lo que se veía era agradable.

-ZEUS: pues la voy a destrozar, y delante de su marido.

-MADAMME: recuerda echar el freno, no quiero perderlos.

-ZEUS: ya viste que ayer le dejé feliz, no rendida, puedo controlarme, solo tú me obligaste a sacar mi lado salvaje - quería que continuara sintiéndose especial, aunque no fuera cierto.

-MADAMME: cumple con esto y ya te hablaré de los siguientes pasos, recuerda que te debo una.

Nos despedimos con un beso caliente en los labios, me fui a casa a prepararme, me puse algo decente, siempre según los dictados de mi madre y me fui a la dirección a la ahora que el papel ponía. El camino fue raro, mi cabeza pensaba en que ya tenia el dinero, ¿por que seguir?, si, me vendría muy bien ese excedente de dinero, pero no quería cruzar la línea de quedarme enganchado, me ayudaba pensar en Ana, en mi objetivo, mi meta. “Una vez con ella todo habrá valido la pena”. Me presenté en la dirección, respiré profundamente, tomé el papel de Zeus que empezaba a ser un botón que podía activar y desactivar, llamé a la puerta, abrió el marido.

-MARIDO: hola, muy buenas ¿eres el…nuevo? - asentí con la cabeza - perfecto, pasa, esperaba algo más…. bueno da igual - pasé acompañado por él hasta un salón, sin hablar saludé con al cabeza a una señora muy bien vestida, con un vestido de flores, sentada en el sillón, el marido me puso de pie delante de ella y se sentó a su lado - mira lo que nos han mandado, tendrá que valer.

-ESPOSA: bueno, ya sabes que me gustan las sorpresas - se acariciaban las piernas el uno al otro, mirándome.

-MARIDO: esta bien, ¿por donde quieres empezar?

-ESPOSA: anda, desnúdate a ver que tenemos……….- lo hice como si ellos no estuvieran delante, me di la vuelta para que al quedar desnudo y girar me vieran la polla por 1º vez, por sorpresa, funcionó a al perfección, se les quedó la misma cara de bobos a los 2, el marido fue el 1º en reaccionar, metiendo la mano entre las piernas de su mujer, por debajo de la falda del vestido, frotando su pubis.

-MARIDO: vaya, eso si que es una sorpresa, ¿verdad querida? - su mano cogía ritmo mientras le sacaba suspiros a su mujer sin apartar la mierda de mi miembro.

-ESPOSA: madre mía, esta vez vamos a disfrutar de verdad.

-MARIDO: ¿por que no empiezas chupándosela? - se mordió el labio por la excitación de esa sugerencia, mi visión y los movimientos de la mano de su marido bajo la falda, el marido se recostó dejándose un 1º plano de la situación, la esposa me llamó con el dedo y me puse enfrente, me agarró la polla con una mano admirando y mirando a su marido.

-ESPOSA: no me merezco el marido que tengo - llevó sus dos manos a mi falo y la levantó, aun estaba en reposo.

Comenzó a darle besitos al glande cuando echaba la piel hacia atrás, sus manos era suaves y cariñosas, y su boca grande, metiéndose el glande del tirón y chupándolo hasta sacarlo, era muy guapa y lo hacia bien así que no tardó en coger cuerpo mi miembro, ella lo iba trabajando con calma notando como cada vez le costaba más metérsela en la boca, yo ya disfrutaba de sus labios, y de la situación , el marido se frotaba la polla por encima de la ropa mientras veía a su mujer tragarse una polla enorme, ella cogía aire lamiendo cada rincón y apretando con sus labios de forma lateral todo el mástil que tenia entre las manos, ya la tenia bien dura, en su esplendor, y ella dejaba su boca rozando el glande mientras masturbaba con pasión.

-MARIDO: creo que va siendo hora de que le devuelvas el favor, cómela el coño, desnúdala rompiéndola la ropa.

Obedecí, la puse en pie y le rompí con facilidad los tirantes del vestido, que cayó al suelo, no llevaba sujetador y si un tanga bastante provocativo, la agarré por detrás metiendo mi polla entre sus muslos y la masajeaba de cara a su marido, al palpar el tanga lo noté mojado, no había otra, gemía de gusto cuando la bajé la prenda y la di la vuelta para sentarla y bien abierta de piernas me di cuenta de su cuerpo, en su día había sido espectacular, pero tenia las tetas algo caídas y piel de naranja por todo el culo y el vientre, aun así tenia un buen polvo, con algo de ejercicio y cirugía podría ser una MILF de cuidado, me arrodillé entre sus piernas y la abrí bien para que el marido observara todo, le separé los labios y jugué con mi lengua repasando cada recoveco, tirando de los labios mayores con mi boca para penetrarla después con la lengua, buscando, encontrando y trabajando su clítoris, ella se retorcía con cada lametón, mientras mis dedos jugaban por su exterior, no los metí por que no era lo que habían pedido, así que le estuve comiendo el coño generosamente, el marido se sacó el rabo y se lo acariciaba, pese a mis prejuicios, no es que la tuviera pequeña y necesitaba que otro domara a su yegua, si no que le excitaba que otro lo hiciera, sin más.

-ESPOSA: fóllame ya mamón, que me voy a correr.

Era mi deber, así que la saqué la cadera un poco del sillón, la agarré jugos abundantes del coño y me mojé la polla en ellos, apunté y penetré, sacándola gritos de gozo, me costó un poco pasada la mitad, no entraba más por ahora, la dejé así acostumbrándose a mi, notando como se hacia sitio en su interior, mientras le comía la tetas, se las tenia que levantar un poco para quedar a mi altura, ella no dejaba de frotarse el clítoris mientras estaba dentro, noté menos presión en su interior y allí aceleré la pelvis, con movimientos amplios y rápidos, sacándola un gemido con cada penetración, la agarré y le aguanté la piernas por delante, estirándolas sin dejar de percutir, eso generó más fricción y a los pocos minutos la 1º corrida de aquella mujer, se agarró a la pierna de su marido , disfrutando de aquello, pero no me habían dicho que parara, así que volví a subir el ritmo, ¾ dentro ya, era un río de fluidos bañándome el miembro, el marido se masturbaba velozmente, buscando ángulo para ver claramente como la abría con cada embestida, se corrió por 2º vez un rato más tarde, se abrió de piernas para, entre suspiros, frotarse el clítoris de nuevo, esparciendo sus líquidos por todo el sofá.

-MARIDO: ¡joder como me pone!, métesela por el culo, dala la vuelta y pónmela encima mientras te la follas por detrás.

Así lo hice, la di la vuelta y la coloqué sobre las piernas de su marido, llevé mi mano a su coño y recogiendo fluidos me trabajé su culo, hasta meter un dedo, lo tenia abierto y no de hacia mucho, le metí el 2º y el 3º, ella temblaba de placer, tenia la polla de su marido en la cara pero no la tocaba, solo se miraban a los ojos. Estando ya preparada la penetré de un fuerte golpe el culo, eso la elevó, se quería salir pero el marido la empujó hasta que la empalé toda, notando como la fricción era enrome, la dejé así unos segundos, mientras la acariciaba el coño por delante de sus piernas, la saqué un poco para volver a meterla, ella se resistía mucho, así que la di un buen azote sonoro, que la sacó un gemido de gusto, al marido le gustó, y me ordenó seguir azotándola sin moverme, hasta que fuera ella la que se empalara. Fue como los primeros días con mis colombianas, la daba azotes más fuertes hasta que aprendió a moverse conmigo dentro, se corrió de tanto azote y caricias, eso la relajó un poco el ano y lo notó subiendo y bajándose de mi, usaba a su marido de apoyo mientras este se corrió en su cara debido a la paja que se hacia, creo más por la mirada de su mujer al ser penetrada que por la situación en si.

-MARIDO: anda, termina ya, y córrete dentro de su culo - le miré pidiendo permiso para acelerar, me entendió y asintió.

Cogí el mando, la agarré de las caderas y me la empecé a follar de verdad, dándola fuerte y duro por el culo, golpeando su pelvis y sus glúteos rojos de mis golpes, sacándola alaridos de placer, eso le volvió a poner dura la polla al marido, y esta vez su mujer se la engulló, aprovechaba mi inercia para chupársela, solo la sacaba para respirar al correrse, mi mano seguía acariciándola el clítoris, eso la ponía loca, y yo noté que me corría, aceleré aun más hasta que los 3 nos corrimos, ella en mi mano, yo en su culo y el marido en su boca., tuvo que bajarse un poco para que no se le escapara una gota de semen de su marido, mis embestidas la habían elevado sobre él.

-ESPOSA: ¡¡¡¡dios, como me gusta que me den por el culo fuerte!!!!, me ha abierto más que nadie.

-MARIDO: parece que siguen mandándonos buen material, tú puedes irte ya - me señaló.

Recogí y me fui dejando a la esposa levantando la polla de nuevo a su marido a base de mamadas, pensé en repetir pero no me habían dicho nada, me fui directo a casa de mi Leona, estaba caliente, y lo pagué con ella durante 3 horas. Al día siguiente me llamó Madamme, como siempre encantada de mis aciones.

-MADAMME: ya estas listo para ir más allá, es tontería estar teniéndote haciendo trabajos de poca monta, vamos a quedar en un sitio en unos días, te dejó descansar, ya te mandaré un mensaje.

Eso me dejó abstraído, pero al ir al banco vi los 8.000€, ya tenia de sobra y aun quedaba más de 1 semana y media para Ana y su llegada, si seguía así llegaría a los 20.000€ antes de tiempo y podría dejarlo, centrarme en ella, ¿pero que seria lo que quería Madamme?......

Zeus – Dominación.

Pasaron un par de días después de tirarme a la mujer delante del marido, me habían dado unos días libres, los pasé con mi Leona, con ella liberaba a la bestia de mi interior, esa parte de Zeus oscura y siniestra, quería saber como controlarla y ninguna otra mujer podía soportar lo suficiente como para darme experiencia en ello, me di cuenta de que una vez en ese estado era realmente peligroso, a mi pobre Leona la destrocé las primeras veces, y no era nada fácil, si bien follando como siempre podía estar 4, 5 o 6 horas disfrutando con subidas y bajadas de velocidad, cuando abría el cofre y salía aquel otro tipo de mis entrañas, en 2 horas la hacia desvanecerse, no era nada más que lo que solía hacer follando a alta velocidad, o con gran excitación, pero la diferencia es que lo hacia sin parar, sin descansos, sin bajar el ritmo ni atender a suplicas, era reventar lo que tuviera delante y no parar hasta darme por satisfecho. Eso, lejos de molestar a Mercedes, mi Leona se volvió aun más sumisa, las mordidas en su hombro eran ya casi hacerla entrar en un estado hipnótico, podía hacerle o pedirle lo que me diera la gana, lo hacia encantada, no es que no disfrutara del sexo, es que se pasaba gran parte de ese tiempo medio ida, de hecho se excitaba, se mojaba o se volvía loca más con mi satisfacción reconocida en mis mordeduras en el hombro de reconocer implícitamente que ella era la única que me llevaba a aquel estado, que del propio sexo. Ella estaba allí para satisfacerme a mi, y su placer radicaba en lograrlo y saber que era la única que lo hacia.

Me fue tremendamente útil, después de 2 días en que no salimos de su casa, ni de su cama, empecé a dominar a aquel animal, las primeras veces era un tornado de categoría 5, ella solo podía agarrarse y aguantar a que pasara, quería parar pero mi mente y mi cuerpo no me obedecían, después pude ir frenando y conteniéndome, solo al final, y cuando terminé la última vez, era como un botón, podía encenderlo y estar 40 minutos sin parar y luego volver a darle y parar, me costaba un mundo, pero paraba. Cuando salí de su casa al 3º día la había destrozado tanto que había anulado su voluntad, solo quería que me la tirara en ese estado para complacerme.

Yo salí de allí cansado y agarrotado, pero satisfecho, había sido un entreno muy bueno, y quería que eso fuera un arma más de mi repertorio de ahora en adelante. Madamme me llamó, Azucena requería de mis servicios, había negociado y me había subido a 4.000€ por 1 hora, no por noche, 2.000€ limpios para mi, accedí encantando y me fui derecho a su casa a la hora acordada. Desde el minuto 1 fui Zeus.

-AZUCENA: dios, menos mal, ya estas disponible, Madamme me daba largas, es normal, debes de trabajar un montón.

-ZEUS: si que he andado liado, pero siempre tendré tiempo para ti, esta vez no habrá preliminares ni juegos, ve a la cama y desnúdate, te voy a hacer estallar en una hora, hasta que ruegas por tu vida - me miró sabiendo que no iba en broma

-AZUCENA: para eso te he hecho venir, el otro día me gustó, pero me quedé con ganas de más.

-ZEUS: pues hoy no me pienso cortar contigo como el otro día - me acerqué a ella y le besé con lengua penetrándola hasta la laringe, dándole un buen azote en el culo - ve desnudándote y ponte a 4 patas en la cama, ábrete el coño con la mano y mastúrbate, cuando estés bien mojada avísame y entraré a destrozarte.

Obedecido como una colegiala tonta, yo me desnudé y me quedé en la puerta esperando, la oía masturbarse y gemir, saberlo, y mis ganas de probarme ante ella, me la pusieron dura recordando los últimos días con mi Leona.

-AZUCENA: puedes entrar ya, ven, ábreme.

Entré con mirada de asesino, estaba como la había dicho, a cuatro patas metiéndose 3 dedos en el coño, que emanaba fluidos, estaría gorda, si, pero en ese momento estaba preciosa, me coloqué detrás de ella de rodillas, la di un buen azote por su buen comportamiento y sin más la penetré del tirón, le entró toda y ella gritó de determinación, de ser justo lo que quería, o incluso mejor. Fui bueno y de inicio la trabajé con cuidado, metiéndola despacio y penetrando fuerte, esas sacudidas la hacían derretirse, fui aumentando el ritmo muy poco a poco, hasta ser continuadas sin parar, se corrió a los 10 minutos, más los 10 de la espera, me quedaban 40 minutos, le entraba toda sin dificultad, así que activé el botón, saqué a mi bestia y comencé un ritmo frenético, al principio ella reía y disfrutaba por la impresión, a los 20 minutos de no parar se corrió otras dos veces, ya no reía ni disfrutaba, gozaba como un cerdo en un barrizal, los últimos 10 minutos se le doblaron los brazos y solo recibía gimiendo como loca, provocando multi orgasmos, mi ritmo no la daba descanso entre ellos, estaba en un punto en el que solo con no parar la sacaba corridas como fuentes, se contraía y se estiraba buscado comodidad y aguante, pero no había salida, era un martillo neumático, empezó a pedir, rogar y suplicar que parara.

-AZUCENA: ¡¡¡¡PARA POR DIOS, PARA QUE ME VOY A DESMAYAR, JODER COMO ME FOLLAS, ESTO ES GLORIA, NO AGUANTO MÁS, SACALAAAAAA!!! - estiré unos segundos más por que me iba a estallar.

-ZEUS: me voy a correr en tu coño - no era una pregunta, si no una afirmación, rayando la orden

-AZUCENA: ¡¡¡DONDE TE DE LA PUTA GANA, PERO TERMINA DE UNA JODIDA VEZ!!! ¡¡¡AHHHHHHHHHH!!!! - se volvió a correr ante mis embestidas finales y eyaculé dentro de ella, bajando a pocos el ritmo paulatinamente hasta parar - ¡¡dios, me has destrozado, eres un hombre de palabra, me vas a salir hasta barato!!

-ZEUS: me pones como una moto, y por que solo es una hora y ya acabamos, que si no te echaba otro - la solté un azote más definitivo y la descabalgué, dejándola caer rendida en la cama, con la cara congestionada, lagrimas de gusto y pequeñas contracciones por todo el cuerpo - si te ves capaz, la próxima paga 2 horas y te dejaré que no podrás andar bien en una semana.

Me vestí saliendo de allí sintiéndome algo mal, pero era mi papel, y había cumplido, en menos de una hora la había dejado tan abierta y exhausta como antes me hubiera costado 2 o 3 horas, no me dio tiempo ni a llegar a mi casa, me llamó Madamme.

-MADAMME: ¿pero que has hecho a Azucena?, me acaba de llamar, que dice que mañana te quiere allí otra vez, que pagará lo que sea por una noche entera, nunca me había pedido algo así, tan seguido.

-ZEUS: solo le he dado a probar un poco de lo que te di a ti.

-MADAMME: pues normal que estuviera así de ida, casi no la entendía, esto tenemos que aprovecharlo, ¿puedes quedar?, necesito hablar contigo con urgencia.

-ZEUS: claro, aunque……Azucena me ha dejado a medias….ven a buscarme, y si me la chupas tendrás mi atención - yo seguía trabajándome a Madamme, mi intención era convertir a esa dominatriz, a esa mujer fuerte y orgullosa, la más segura de si misma que había conocido, en una de mis zorras sodomizadas, solo por ver si lo lograba, un reto tonto que me puse.

-MADAMME: ¿Cómo, que encima ni te has corrido con ella? - dudé en decir que no, pero Azucena podía habérselo dicho más adelante.

-ZEUS: no, si me he corrido, pero me ha dejado con ganas de más, y solo tú me haces sentirme vacío, venga, si no eres tú será otra la que pague el pato, pero yo no la disfrutaré tanto como a ti, encima tendrás que esperar para hablar conmigo - todo eran mentiras, halagos vacíos y argumentos dirigidos.

-MADAMME: esta bien, dime donde te recojo - su tono era de estar sonriendo aunque no lo quería hacer sentir, la di una dirección lejos de mi casa, sabia por donde vivía pero no quería que supiera donde exactamente.

Tardó unos 20 minutos en llegar a la zona de la cita, llegó con una limusina, reconocí a una de las moles al volante, con media calle mirándonos, no era habitual ver un coche así por ese barrio, me metí en la parte de atrás donde estaba Madamme sentada de piernas cruzadas sonriendo, con una pose de clase y elegancia. Entré en modo Zeus, la parte de mí que quería hacer sumisa a aquella mujer, nada más entrar la di un beso de tornillo con lengua.

-ZEUS: joder, si que has tardado, la próxima vez que tardes tanto me avisas y me tiro a una mientras espero.

-MADAMME: lo siento amor, andaba en la otra punta de la ciudad y …..- la corté, la limusina iba con lunas tintadas así que me bajé los pantalones y me saqué la polla.

-ZEUS: menos excusas y más chupar, que me ha dejado con un calentón de la leche - me miró con cierto aire de ofensa.

-MADAMME: oye, que yo no soy una cualquiera…- la volví a interrumpir.

-ZEUS: ¿me quieres aquí o no? - amagué con salir del coche.

-MADAMME: espera, si, te necesito aquí.

-ZEUS: pues a chupar, no quiero oír nada hasta que no te vea tragarte mi semen, y sácate la tetas, así tardarás menos - estaba en automático, decía palabras y la trataba como nadie se atrevía, lo notaba en su mirada.

Aun así se bajó el vestido dejándome sus tetas a la vista, se arrodilló en el suelo de la limusina ya en marcha, dio la orden de dar vueltas por el barrio, se puso entre mis piernas y con cierta admiración de nuevo, agarró con ambas manos y se la metió en la boca, estaba morcillona, así que le costó un poco, pero sus hábiles manos y su lengua, que era un ente diferente de nosotros, me la pusieron como una estaca, era una maravilla lo que hacia con su lengua en mi glande, en eso nadie la igualaba, y entre los meneos del coche y los suyos estaba por reventar a los 15 minutos, no quería que fuera tan fácil y si bien su lengua daba gusto, eran sus manos las que me estaban acelerando.

-ZEUS: mira que soy bueno, anda, pellízcate los pezones con las 2 manos, y sigue chupando solo con la boca - me miró algo abrumada, como pensando que si no era suficiente con la mamada que me hacia - venga, si es por ti, que sé que te gusta, ¿o acaso no eres capaz de sacarme una corrida sin las manos? - la piqué el orgullo.

Obedeció inconscientemente, solo para probarme que podía, pero me había obedecido una orden, se trabajó las tetas mientras su boca y mi polla tenían una pelea, era difícil metérsela bien sin tenerla sujeta y hacer esas maravillas con la lengua sin estar fija, eso ralentizó mi corrida media hora más, pero al final notaba su excitación, no solo el trabajo, en su cara, ella vio de lejos mi corrida, hundió su boca en la garganta y sin apenas arcadas recibió mi eyaculación, sorbió al sacársela de la boca y enseñándome mi semen se lo tragó.

-ZEUS: muy bien, así me gusta, eres única, nadie lo lograría así ……..- otra mentira aduladora - ……anda, límpiamela bien ya con las manos si quieres y me dices lo que quieres - era otra orden, pero ahora ya no tenia motivo para obedecerme, lo hizo, estaba muy excitada, me la dejó limpia de babas, se levantó sentándose a mi lado, sin soltar mi polla y se cruzó de piernas colocándomelas encima de las mías, yo abrí el brazo para acercarla sus tetas a mi pecho, y su cara a la mía.

-MADAMME: mira, esto te sonará fuerte, pero tenemos una oportunidad de meterte en la 1º división, son 10.000€ para ti, por una sola noche.

-ZEUS: ¿y que debo hacer?

-MADAMME: de momento es solo una oportunidad, así que no te daré detalles hasta que estés dentro, el problema es entrar.

-ZEUS: ¿y cual es el problema?

-MADAMME: el problema es David, es un cliente nuevo, le encanta montar fiestas de orgías para ricos, el problema es que solo contrata personal que haya visto en acción.

-ZEUS: eso no es problema, puedo reventar a cualquiera delante suya.

-MADAMME: el problema es que es un cliente nuevo, sus gustos son los hombres y lo que más le gusta es chupar pollas enormes, paga casi 5.000€ por una buena tranca que chupar, y solo te contratará si te la chupa antes - me quedé en blanco.

-ZEUS: ya te dije que no me molestan los gays, pero no soy uno.

-MADAMME: es la primera, y puede que única, oportunidad de meterte en esa liga en menos de la semana y media que te queda, es mucho dinero y una vez dentro serás de la elite, y solo echaras polvos que tú quieras.

-ZEUS: si me parece genial, pero no es por lo que pueda ganar, es que me temo que si me la chupa un tío, no se me levante.

-MADAMME: no digas tonterías, es como si lo hiciera yo, se le da bien chupar.

-ZEUS: perdóname, pero no, no es lo mismo verte a ti y tu belleza, que a un tío, a mi no me da vergüenza, pero temo no dar la talla - me quedé pensativo, no a posta, pero si dejé verlo.

-MADAMME: ¿que piensas?

-ZEUS. ¿Cuando seria la prueba?

-MADAMME: en 2 horas, de ahí mi premura, están buscando una buena polla para un espectáculo y alguien le habló de ti.

-ZEUS: estoy pensando que, si tuviera una motivación, una imagen mental reciente de sexo salvaje….. quizá si diera la talla, me podría concentrar en ella y no en que sea un tío.

-MADAMME: perfecto, llamaré a alguna de mis chicas y……..- la corté con un beso.

-ZEUS: ¿por que vas a llamar a nadie?, cuando lo que quiero es volver a follarte a ti - la metí mano en las tetas, pellizcándole un pezón.

-MADAMME: no por dios, la última vez casi me destrozas, mejor hago venir….- la corté de otro beso.

-ZEUS: ¿y cuanto tardará en venir, o cuanto me quedará para un polvo memorable? ¿Me lo podrá dar alguna de esas?, no como tú, y lo sabes - la pegué a mi, notando sus pechos en mis costillas y mi cara a milímetros de la suya, jugando a besarla sin hacerlo.

-MADAMME: si ya se que yo soy especial, pero yo ya dejé este mundo, ahora soy la jefa y no puedo ir abusando……- la corté con un cachete en una teta.

-ZEUS: ¿abusar? ¿tú?, de primeras que esto es solo una inversión, quieres tenerme en la 1º división y el camino para ello es dar la talla con un gay que me la chupe, la única opción es darme algo que me la ponga dura solo con recordarlo, si me traes a alguien en menos de 20 minutos que lo haga, lo asumiré, pero si no, tienes que ser tú, aquí y ahora, hacerme vibrar hasta que llegue la hora y entonces daré la talla, ¿abusar? ¿tú?, no olvides que hablas con Zeus, el que va a abusar soy yo.

-MADAMME: esta bien deja que…..- ni me molesté, la metí la mano por la falda del vestido y la masturbé fuertemente abriéndola mientras le comía el pezón trabajado, estaba tieso, de un tirón me la subí encima a horcajadas y la tenia ardiendo sobre mi.

La dejé caer de espaldas y le arranque el vestido y el tanga, la abrí de piernas y hundí mi cara en su coño, podía decir lo que quisiera, o no admitirlo, pero su cuerpo no mentía, estaba mojada, y apenas 10 minutos de comida y penetración con mis dedos la sacaron un orgasmo, la tenia cachonda perdida, me volví a sentar en el sillón y me la subí encima de nuevo, la tenia dura otra vez, ella la agarré acariciándola mientras nos besábamos, “dios, que lengua tiene”, era increíble como se entrelazaba con la mía, hacia que sacara mi lengua para luego chuparla como una polla, yo le acariciaba el coño por detrás de su enorme culo, era una hembra de bandera, se levantó un poco para dejarme sus tetas en la cara, las chupaba y mordía suavemente, sacándola algún gemido, cuando bajó su cuerpo se empaló entera, era una sensación plena, de completar un rompecabezas, y al contrario que muchas, su cara no cambió, estaba tan excitada que no tenia tiempo para juegos, movía su cadera de forma circular sin sacarla, solo se hacia hueco con ella dentro, mientras yo me afanaba en ponerle duros aquellos pezones que coronaban 2 tetas de campeonato, una vez acostumbrada me tumbó y apoyándose en el respaldo, se hizo dueña de la situación, yo no me movía, la dejé hacer, ¡¡y como se movía!!, era una locura, mezclaba minutos de metérsela y sacársela entera con movimientos amplios, con otros momentos en que casi no la sacaba ni la metía, solo movía la cadera, con gestos cortos y rápidos, podía notar sus nalgas botando en contra dirección a su pelvis, se volvió a correr a los 20 minutos pero me enteré por los fluidos que brotaban, ella no había hecho una sola mueca, y seguía moviéndose como una loba. Se cabreaba con el paso de los minutos, a estas alturas ella debía hacer reventar a un hombre, y yo esta allí, quieto, mirando pasmado, disfrutando de todo su poder, iba aumentado el ritmo hasta que se la sacaba, con gestos hábiles en la siguiente embestida se volvía a empalar.

-MADAMME: ¡madre de dios!, ¿es que tú no te cansas nunca? Ufff me estas poniendo a 1000.

-ZEUS: ¿de que me voy a cansar si aun no he hecho nada? - era cierto, no me había movido, solo me había dejado follar, pero eso la confundió, no entendía como podía estar tan fresco.

Cambió de táctica, se dio la vuelta y se volvió a ensartar, ahora de espaldas, agarrándose al techo y el resto de asientos, allí lo pasé peor, ver directamente su culo vibrando ante su ritmo me excitó bastante, ver como en momentos determinados subía todo su cuerpo y se dejaba caer rebotando contra mi, gimiendo sin parar, no me resistía y de vez en cuando daba un azote, pero era inevitable ante la visión de su culo haciendo desaparecer mi polla, me estaba hartando de no moverme pasados 40 minutos, así que la cogí en volandas sin sacarla de ella, la junté y estire la piernas, las levanté y bajé la cintura hasta tener margen y allí empezó mi polvo, me arranqué a buen ritmo, manteniendo zonas cómodas, la saqué el 3º orgasmo sin problemas, mi cadera fue cogiendo velocidad, tanta que se tuvo que abrir y doblarse de piernas para no dar en el techo con ellas, eso generaba menos fricción pero me daba mejor agarre, allí activé a mi bestia, y durante 30 minutos me la follé a un ritmo animal, sin parar, sacándola varias orgasmos más hasta oír como rogaba que parara.

-ZEUS: no esta nada mal, con esto puedo ir tirando, pero para asegurarnos me gustara abrirte el culo otra vez.

-MADAMME: NO, por dios, ya tengo el coño irritado de nuevo, no me vas a dejar sin poder sentarme bien otra semana.

-ZEUS: tú misma, pero aun queda media hora para la cita y yo aun no estoy contento, quiero follarte el culo ahora mismo, así que ábrete las nalgas - otra orden velada, aunque ya no lo era tanto.

-MADAMME: esta bien, ábreme el culo, pero si te pido que pares, para.

Se puso a 4 patas y se abrió de nalgas con una mano mientras con la otra recogía sus propios fluidos y se trabajaba el ano sola, yo la ayudé metiendo mi lengua allí, y luego un dedo, y otro, eso la hizo mover la cadera inconscientemente, me dio pie, y la ensarté, eso la hizo levantar su torso, así que llevé mis manos a sus pezones y en esa misma posición activé el botón de nuevo, si no le había entrado mi polla entera a la 1º, lo hizo después, sonaba cada golpe en su trasero, y teniéndola bien agarrada por la tetas aceleré hasta no parar, ella ya solo callaba, disfrutaba como una niña en silencio, no quería gritar para no admitir que le estaba encantado que la partiera el culo, se corrió varias veces más y me pidió que parara, me costó un minuto pero lo hice, sin sacarla de ella, la dejé coger aire, sin soltar sus tetas notaba como se le hinchaba el pecho, después me pidió que siguiera, y activé de nuevo, esta vez ya para acabar casi con la hora pegada de la cita, me corrí en su culo regalando un último minuto bestial, de animal, de fierra salvaje, que pese a que notaba como se retorcía en mis brazos, la encantó.

-ZEUS: joder, esto si merece la pena, si no se me pone dura solo con mirarte, es que no soy humano

-MADAMME: eres una bestia, y me encanta, nadie me parte como tú, nadie me trata como tú, vas a ser mío - no me gusto esa denominación, la di un azote y la susurré al oído.

-ZEUS: tú eres mía, yo soy Zeus y te voy a follar cuando me de la gana a mi, la próxima vez que lo hagamos te daré por el culo sin parar hasta reventarte y no pararé aunque me lo supliques, ninguno de tus chicos podrá pararme.

-MADAMME: no seas tonto, aquí mando yo, anda vamos a la cita y duchémonos antes, estamos hechos unos guarros.

-ZEUS: esta bien, como quieras, quedas advertida, no me vuelvas a decir eso de que “soy tuyo” - la miré fijamente - no estropees lo buena que eres follando.

-MADAMME: vale, pero ahora céntrate - lo pasó por alto sin darle importancia a mi amenaza, error garrafal.

Subimos a las oficinas de New Servies, dejó a las moles abajo, La Recepcionista tembló de solo verme entrar, la saludé educadamente, nos dijo que David ya había llegado y estaba esperando ansioso, en la parte de atrás había unas duchas, nos aseamos y salimos, atraje de la cintura hacia mi a Madamme dándola un buen morreo, apretando su culo.

-ZEUS: para el camino, me la pones dura solo con tu olor - sonrío agradecida.

Entramos a la sala y Madamme nos presentó, no se que esperaba ver, pero imaginar a un gay, con toda las ideas, clichés y pensamientos preconcebidos que tengáis, bien, ¿lo tenéis? pues lo que tenia delante no casaba con nada de eso. Era un chico alto, rubio, con el pelo corto, guapo, bien afeitado y con un traje de oficina, serio y formal, se le notaba un cuerpo musculoso.

-MADAMME: hola David, siento el retraso, estabamos…liados, te presento a Zeus, el chico nuevo.

-DAVID: encantado de conocerte - extendió su mano para saludar educadamente, yo fui esperando un apretón de manos suave y lo que me encontré fue hombría, siempre me ha gustado apretar fuerte las manos a los hombres, es como una señal de virilidad supongo, y él me agarró fuerte, tuve que subir el nivel de mi brazo rápidamente para no parecer un flojo.

-ZEUS: encantado igualmente, al parecer te han hablado de mí, ya estaban tardando…………- miró sorprendido a Madamme.

-MADAMME: si, es que el chico no solo tiene el nombre, si no la actitud, perdónale.

-DAVID: no hay nada que perdonar, por lo que he oído se merece eso, y más, bien sentaros y os explico - nos acomodamos, Madamme hizo esfuerzos titánicos para que al sentarse no se notara que iba abierta y dolorida - verás, monto fiestas para gente rica, rica y poderosa, de esas que no puedes saber quien son, y que nadie puede ver allí, monto espectáculos, esta vez entre un chico y una chica, que tienen que follar durante 2 horas, lo haréis en una cama, en una habitación cerrada rodeados de espejos tintados, en cada uno habrá un cliente con alguna puta o gígolo de poca monta para que se diviertan si ven que les gusta lo que pasa en el centro, por motivos que no vienen al caso el chico del centro al que suelo contratar me ha fallado, la fiesta es en 2 días y estoy desesperado, tengo varias opciones pero preguntado por ahí me han hablado de ti, así que vengo a ver que tal, y debo decir que de inicio, siendo sincero, que no veo nada atractivo.

-MADAMME: a mi me paso lo mismo, y a todos, el chico es mono pero no es un guaperas.

-DAVID: entonces supongo que al menos follará bien…..- se me escapó una risa al ver como Madamme se contenía la respuesta colocándose bien en la silla para que no le doliera en culo.

-MADAMME: más que follar bien, es una bestia, le he visto y sentido en acción, no he visto nada así desde Carlinhos - la cara de David se iluminó, yo no sabia a quien se referían - además la tiene enorme, se ha llevado por delante a todas las chicas con las que le he visto follar, lleva 2 semanas aquí y ya esta en 5.000€ la hora de sexo.

-DAVID: espectacular, ojalá sea cierto, y tú ¿que pasa?, ¿no tienes nada que decir? - me miraba ante mi pasividad.

-ZEUS: no he venido a charlar, vengo a que me la chupes de una puta vez para que cuando te saque la mandíbula del sitio me dejes participar en tu mierda de fiesta.

-DAVID: joder con el novato, mira que no soy ningún bocazas, la chupo de cine y te voy a poner a prueba, si aguantas más de 1 hora con la polla dura y sin correrte, estas dentro.

-ZEUS: perfecto, deja que Madamme se quede, para cuando te hartes de chupármela sin conseguir que me corra, lo haga una profesional como ella - estaba metido en el papel, pero en realidad estaba acojonado, “¡me la va a chupar un tío!”.

-DAVID: pues no hay más que hablar, fuera ropa.

Me puse algo nervioso, pero recordé a Eli y sus palabras, “céntrate, analiza y resuelve”, me desnudé dejándole pasmado con mi polla en reposo, Madamme se rió, yo también, era una actitud recurrente, David también se desnudó, y certificó mis sospechas, era carne de gimnasio, estaba cuadrado, sin duda, alguna mujer hetero se lamentaría al saber que era gay, y no iba mal armado, de unos 18 centímetros en reposo, me sentó en una silla y se puso de rodillas cogiéndome la polla, esa sensación me turbó la mente, pero dejé hacer, como todas las mujeres antes que él al tenerla en las manos 1º la admiró, y se mordió el labio, la masturbó un poco, la veía un poco retraída, y yo pensó lo mismo, la sensación no me gustaba, así que cerré los ojos fingiendo gusto, cuando en realidad la palabra era repelús, cuando noté sus labios rodeando mi glande los abrí, la imagen de un tío chupándomela me provocó un leve salto en la silla, pero no me moví mucho, el siguió chupando el glande y jugando con su lengua, la tenia grande pero no estaba ni de lejos tiesa, quise recordar algo en mi mente para calentarme, pero todo se borraba con cada lametón de aquel hombre, me fijé entonces en Madamme, que estaba mirando atenta, siguiendo la jugada, recordé sus tetas, su culo, su ano perforado, la sesión de sexo que acabamos de tener, y sin apartar la vista de ella, mi polla se empezó a hinchar, quiero pensar que fue por ese recuerdo, y no por las caricias en mi rabo de un hombre, pero no puedo negar que hubo un momento en que me empezó a gustar aquello, sin ser Madamme su lengua era rápida y sabia donde tocar o chupar para sacarme placer hasta ponérmela dura del todo.

-DAVID: joder, si que era cierto, ganas mucho sin la ropa, ahora solo relájate y disfruta.

Y eso hice, me daba igual que fuera un hombre, me la estaba chupando de cine, tanto que vi como Madamme se calentaba de aquella visión, a David se le puso dura y se masturbaba, podía intuirlo debajo de mis piernas, y con la otra mano pajeaba sin descanso, lamiendo todo mi tronco, y metiéndose más de media polla en la boca, jugando con su lengua, durante media hora lo disfruté con reparos, la siguiente media hora me dio igual, incluso la agarré la cabeza para guiarle en el ritmo, se dejaba el rabo en la boca mientras masturbaba violentamente, luego chupaba hasta sacar un sonido de “pop” al terminar en mi capullo, no llevo un ranking, pero estaba siendo la 2º o 3º mejor mamada de mi vida, y la 1º fue la que me hizo Raquel en el hospital por el simple hecho de ser la primera. Pasada la hora, pensé que estaría pidiéndole que parara por el objetivo ya cumplido, pero le dejé seguir hasta correrme, tardó otros 20 minutos y gran esfuerzo de sus manos y garganta, pero me corrí en su boca, y con bastante gusto, al ser hombre sabia como tocar una polla, cuando acabó de sacarme todo, se lo trago, “joder, que cantidad de gente se lo traga hoy en día”, pensé.

-ZEUS: joder, ya era hora, casi me duermo, estoy dentro ¿no?

-DAVID: de sobra, al principio te ha costado pero luego, vaya encanto que tienes aquí Madamme.

-MADAMME: ya te lo dije…….. - se arreglaba el vestido, durante la mamada se había estado tocando - y aun no le has visto follar.

-DAVID: bueno, si el quiere podemos hacerlo aquí y ahora – por 1º vez se le notó algo de pluma al moverse, se cuadró sobre un mesa ofreciéndome su trasero.

-ZEUS: lo siento, pero hoy mi polla es para ella, la quiero destrozar delante de ti - Madamme me miró atónita.

-MADAMME: cariño, me has follado 2 horas antes de venir y llevas una mamada de más de 1 hora con él, ¿todavía quieres más? Por que yo no estoy ya para tanto trote……..- esa afirmación y los tiempos asombraron a David.

-ZEUS: pues tráeme a la recepcionista, yo con este calentón no me quedo, y quiero que David lo vea, o tú o ella……..- se quedó pensativa, se había calentado mucho, pero llevaba mucho sexo de mi parte ese día. Cogió un teléfono de la sala y marcó el número de la recepción, la mandó venir.

-RECEPCIONISTA: dígame señora ¿que desea? - ella miraba mi cuerpo desnudo con la polla medio tiesa y el cuerpo perfecto de David.

-MADAMME: aquí Zeus, que por lo visto aun tiene ganas de marcha, ayúdale - su cara se volvió triste, pero acató, se fue a poner de rodillas ante mi para chupármela.

-ZEUS: ¿a donde vas?, ya me la han chupado mucho hoy, ahora quiero partirte en dos, y esta vez en serio, no como el otro día - David y Madamme se reían ante la cara de la Recepcionista, que se desnudó sabiendo lo que se le venia encima, quise tener cuidado y tratarla bien, pero estaba en mi papel de Zeus, no podría permitirme ese lujo - más vale que la chica que contrates sea un fiera como yo, o el espectáculo va a durar menos de 1 hora, si no me crees, mira lo que le hago a esta “profesional”.

La empotré contra la pared, dejándola de espaldas a mi, la solté un azote fuerte, la abrí de nalgas y con mi polla ya tiesa por la situación, busqué su coño mientras la susurra guarradas como que la iba a partir en 2, localicé su coño, me sorprendió encontrarlo húmedo, y eso ayudó a ensartarla, soltó un alarido que sonó por medio edificio cuando seguí penetrándola hasta el punto de meterla toda en ella, colgaba de la pared, sin tocar con los pies el suelo, la dejé así un minuto, hasta que dejó de gritar y moverse, poco la verdad, cada movimiento era un centímetro más que la penetraba, no noté la pared de su útero pero si más presión de la que había sentido nunca, fue decreciendo pero llegaba a ser insoportable. Cuando dejó de gritar la dejé posarse en el suelo, y dándola medio segundo, la saqué entera y la volví a hundir, repitiendo jugada dejando 5 segundos entre cada estoque, su coño ya se abría sin mucha resistencia y notaba fluido correrme por la pelvis, eso me hizo activar a mi bestia, la agarré de los brazos dejándoselos por detrás, como esposada, y sujetándola contra la pared ataqué, no hubo piedad ni amnistía, lo oí rogar por que parara pero me negué en redondo, lo decía de boca pero su cuerpo pedía más, no rebotaba contra la pared por que la tenia sujeta, y mi cadera percutía sin parar, a los 10 minutos se corrió, vi a Madamme chupándosela a David, “será bi-sexual, no gay, o lo que están viendo los 2 les excitó hasta ese punto”, eso empeoró las cosas para la Recepcionista, aumenté un punto la velocidad, y no paré hasta desmayarla 1 hora más tarde, paré unos minutos al notar su cuerpo inerte, pero cerciorando que solo estaba agotada, y no desmayada continué, dándola azotes para que se moviera, estaba un poco fuera de mi, vi de reojo como David se estaba follando a Madamme, ella me miraba con cara de disfrutarlo pero sin mucha pasión. Solté a la recepcionista que cayó al suelo redonda, me molestó que no me hubiera dejado y a él si, decidí castigarla.

-ZEUS: con que estabas muy cansada eh….- me acerqué y aparté a David de malas maneras - déjame a mi que tú no sabes montar a esta yegua salvaje - se la hundí en el culo del tirón sacándola un alarido casi como a la Recepcionista, que convulsionaba en su inconsciencia en el suelo – anda, cállala la boca, métele la polla, a ver si así se calma - David obedeció, se puso delante de ella y se la puso en la boca, ella chupó por acallar sus lamentos, odiaba que la hiciera gritar y gemir, odiaba que lo lograra, y que yo fuera consciente de ello.

Volví a activar la maquina, mi bestia había salido del infierno y no quería regresar hasta verse saciada, podría hacer una descripción larga y detallada, lo que importa es que la destrocé el culo como el 1º día, la hacia gritar que parara mientras trataba de coordinarse para seguir chupándole la polla a David, pero sin sus moles cerca cumplí mi amenaza, la abrí el culo tanto que mi polla apenas rozaba su ano, estuve más de 1 hora destrozándola el culo, literalmente, la primera parte exigía que parara, lo hacia a desgana, solo cuando sentía arder su culo, al correrse dejaba de protestar, lo soportaba, luego lo pedía, estaba abrumada, quería ponerme las manos en el pecho para redimir mis embestidas, pero solo durante 1 minuto, después se apartaba y se dejaba hacer, decía guarradas al correrse sobre mi mala educación jajajajja, luego lo rogaba, estaba exhausta y dolorida, quería que aquello parara realmente, no soportaba más, pero yo era una fuerza de la naturaleza ante la que no se podía hacer nada, solo tratar de sobrellevarlo, se corría y pedía más. Al final desistió de suplicar, solo disfrutaba de aquel dolor que le enseñé a desear, fue la sensación que dio, le dolería igual o más pero lo estaba disfrutando. David se corrió en la cara de Madamme, antes de mis últimas acometidas, se quedó sentado, admirando la escena, incrédulo ante mi brutalidad, yo ya no follaba, me hacia una paja con el cuerpo inerte de Madamme, sin bajar el ritmo ni un ápice, hasta correrme de nuevo en su culo, oyendo sus quejas de placer agotador, a mi me dolía la espalda y los riñones, tenia un calambre en una pierna desde hacia rato y estaba exhausto, pero terminé por rendir a aquella mujer, experta y forjada con caos de la calle y de alto nivel, yo, un niñato de 19 años recién cumplidos la había derrotado. David se vistió, saludándome encantado y llevándose a la Recepcionista, aun tirada en el suelo, salió citándome para la fiesta. Yo seguía empalando con la polla flácida a Madamme, la sujetaba con los brazos, estaba medio ida, la agarré del pelo y tiré de ella para despertarla.

-ZEUS: ¿quien soy yo?

-MADAMME: eres Zeus.

-ZEUS: ¿y que ocurre cuando Zeus te da un orden?

-MADAMME: no lo se….yo soy la jefa….- estaba agotada, medio ida, la di un fuerte golpe en una teta, para luego retorcerle el pezón.

-ZEUS: no me enfades mujer, ¿acaso quieres que te vuelva a follar durante otra hora?, sabes que soy capaz, eres la jefa de estos mierdas, pero yo soy tu dios ahora - tembló solo de oírlo, no era fiscalmente capaz, pero la amenaza le parecía real - ya te lo advertí en el coche y me tomaste a broma, ahora, dime, ¿quien soy?

-MADAMME: eres Zeus,…… mi…….mi dios – tiritaba y temblaba de algo, dolor, sufrimiento, pasión o cansancio.

-ZEUS: ¿y que ocurre cuando Zeus te da una orden?

-MADAMME: ………se………cumple.

-ZEUS: esta bien, ¿quieres que follémos más veces?

-MADAMME: ¡¡dios, si!! – lo que quería oír - y que me revientes – eso me descolocó, realmente le había gustado aquello, y era mi amenaza, tenia que cambiar de táctica, no tenia que amenazar con ello si no amenazar con quitárselo, pero podía ser una pose, una actuación y que en cuanto se recuperara hacerme la vida imposible, debía actuar con cabeza, y Madamme era demasiado.

-ZEUS: dime tu nombre, tu nombre real…….- se quedó pensativa, no podía permitirlo así que la levanté para volver a follármela como amenaza.

-MADAMME: Clara, me llamo Clara Esteban Pardillo – (Nombre falso, obviamente.)

-ZEUS: ¿seguro? ¿No me estarás mintiendo? - sacó el documento de identidad a tientas en su bolso mientras la tiraba de la cabeza hacia atrás por el pelo, me lo enseñó, le hice un foto con el móvil, luego otra a ella conmigo dentro, luego otras con los 2 y el logo de la empresa, le enseñé como lo mandé a un mail.

-ZEUS: ¿quieres que follémos y que te reviente como ahora? - asintió levemente.

-MADAMME: que follémos, y luego que me revientes, peor solo cuando yo quiera…..- eso era posesivo, no tolerable.

-ZEUS: entiendes que si no cumples mis órdenes, no te diré que me he enfadado, haré que follémos y de repente te reventaré como ahora, o peor, sin tu permiso, no entenderás el por qué al principio, pero cuando lleves 2 horas como ahora entenderás que hiciste algo que me enfadó. Podemos ser Madamme y Zeus, follar para pasarlo bien y cuanto YO quiera puedo reventarte como ahora, pero si me enfadas de más, se acabó, me largo, no volverás a verme y te quedarás anhelando a que otro llene el hueco que dejé en ti, pero nadie lo logrará, y lo sabes. ¿Has entendido?

-MADAMME: si - asintió con cierta desgana.

-ZEUS: si no estas de acuerdo dilo ahora, no volveremos a follar, seré tu mejor activo, pero no volverás a ser penetrada por mi. ¿Quieres eso?

-MADAMME: no.

-ZEUS: pues a partir de ahora eres mía, seguirás siendo mi contacto con la empresa, pero trabajaré cuando me de la gana, me buscarás las clientes que yo te diga y cuando me salga de los cojones te haré lo que me dé la gana, y tú obedecerás en todo, si me enfado puedo reventarte como ahora, a traición, y se acabó, quedaremos en paz y seguiremos jugando ………- cambié el tono, apreté mi polla en su interior y su pelo hacia atrás -……. pero si me la juegas, si tratas de hacer cualquier cosa que no sea lo que yo te pido, o intentas algo contra mi, alguien irá a la policía, a la prensa y los políticos, acudirá a todas las puertas para que se sepa lo que ocurre aquí con las fotos que acabo de hacer, los que estén en el ajo os repudiaran, se hablará de todo esto y que esta dirigido por…… Clara Esteban Pardillo….. - cogí el documento -……… con el nº de identidad *****, y arruinaré el negocio, a ti, y los jefes que están detrás de todo esto, si, los jefes que te dan a esas moles de países del este como protección, se enfadarán mucho contigo, y sabes que no son gente a la que enfadar sea buena idea, pero tú puedes evitar todo eso, estamos aquí solos tú y yo, nadie tiene por que enterarse, simplemente has de ser mía, completa e irrevocablemente, ¿estamos?

-MADAMME: si – no se si se le había pasado ya por la cabeza que según saliéramos de allí las moles me partieran las piernas o algo, así que corte de raíz, la tenia amenazada y pillada, y en ese “si” iba implícito que desistía cualquier ofensiva , su única opción era la completa y total sumisión a mi.

-ZEUS: esta bien, te creo, pero recuerda bien este momento, y piensa en esta sensación que te cubre, piensa si quieres perderlo todo antes de volver a faltarme al respeto de cualquier manera, palabra o acto - la saqué de ella, aquella situación me la había vuelto poner dura, “bendita juventud”, me senté y quise probar mi nuevo juéguete - ahora ven aquí y chúpala como bien sabes, haz que me corra en media hora o voy a follarte de nuevo y no seré tan delicado - palabras vacías, pero llenas de tensión.

Ella gateó hasta donde yo estaba, y me la chupaba de forma torpe, estaba agotada, humillada, pillada, sumisa y aun así se las arregló para sacarme el semen en 30 minutos, la situación realmente le gustaba, que alguien la dominara a ella, pensé que echaría de menos esa sensación de sus años en la calle, o sentir a alguien más fuerte que ella dominarla. Le ordené dejarse mi semilla en la boca un rato mientras yo me iba a las duchas y volvía, entonces la di permiso para tragárselo, la llevé a las duchas, necesitaba ayuda para moverse, pero una vez allí la obligué a ducharse sola, delante de mi, me reía en su cara cuando trataba de limpiarse el semen y los fluidos del coño o el culo, era rozarlos y se estremecía de dolor, pero se mordía el labio, recordaba lo que le había provocado ese dolor, y la excitaba. Mi mente quiso follármela de nuevo, pero ni ante la visión de esa hembra sumisa mojándose todo el cuerpo y temblando al frotarse el coño por el dolor de mis embestidas, se me empalmó. Era la 1º vez que mi mente quería y mi cuerpo dijo basta, pero no se me notó en absoluto, la ayudé a vestirse, no se podía agachar sin ladearse demasiado.

-ZEUS: esta bien, prepara todo con David y asegúrate de que no me la juegue, ahora quiero más de los 20.000€, vas a buscarme a tus mejores clientas, las que más paguen y las vas a subir el precio un poco para que me las tire, me da igual como, lógralo, ya me encargaré yo de que queden contentas y hasta les parecerá poco dinero, ah, y de regalo busca a la más guapa, a la que este más buena, si es famosa mejor, y haz lo mismo, súbela el precio, vas a crear una categoría especial solo para mi, por encima de los demás.

-MADAMME: como tú quieras, te llamaré cuando tenga las citas - me gustó su tono, mezcla de agradecimiento, excitación, sumisión y obediencia, la di un buen beso con lengua y me fui de allí.

Zeus – El error de David.

Directo a mi casa, dormí más de 10 horas, las suficientes para guardar a la bestia en su cueva, y al levantarme comí y bebí como un naufrago al entrar en un bufett libre, mi madre me pedía que lo hiciera despacio, que me iba a sentar mal. Tenia que quedar con mis amigos para decirles que lo del piso iba bien pero me fui a la cama de nuevo, tenia agujetas por toda la cintura y las piernas, tenia que relajarme. Me despertó una llamada de Madamme, ya tenia a la 1º clienta, me dio dirección y foto, eran 8.000€ para mi por 1 hora, me avisó de que era una anciana, rica y muy cachonda, la foto lo demostraba. Fui a la dirección y según abrió la puerta me recibió en pelotas, una señora de 68 años, arrugada y con la carne caída, con el coño lleno de bello, me dio igual , era Zeus, y la trabajé con mis manos hasta tenerla ardiendo para regalar la follada de su vida, casi la da un infarto cuando se corrió, luego bajé el ritmo, no necesita a la bestia, basto conmigo, y para ser tan mayor me demostró más aguante que algunas más jóvenes que había catado, salí de allí entre abrazos y alabanzas de la señora. Pensé en ir a visitar a mi Leona, llevaba más de 24 horas sin sexo de verdad y pese a que me la puso dura, aquella anciana no me hizo correrme, incluso pensé en llamar a Madamme pero quise guardarme, la fiesta de David era al día siguiente, mi Leona era capaz de mermarme y Madamme estaría dolorida, además quería hacerla desearme. Me fui casa y me lié a ver páginas y videos de posturas y trucos sexuales, quería ir bien preparado, Madamme me mandó un mensaje, con la hora y el lugar, no importaba que ropa llevara, la gente no me iba a ver vestido.

Pasé la mañana siguiente con los amigos y hablando con Ana, les enseñé la cuenta con 15.000€, estaban locos de contentos, les invité a comer para celebrarlo, me insistían en saber de donde había salido el dinero, les dije que estaba trabando para una empresa y que pagaban muy bien y por trabajos duros y de malos horarios, una media verdad, les convenció, más que mis palabras el hecho de tener ya el dinero, me fui a casa y me eché una buena siesta para cargar las pilas, me levanté con 3 horas para la cita, el camino era 1 hora así que durante ese tiempo hice ejercicio, había leído que así tonificaba y marcaba los músculos, quería verme atractivo, me di un buen baño, dejándome allí y notando como la suciedad se despegaba de mi, salí, me hice todo lo que la higiene personal obliga, me peine un poco, (creo que nunca os lo he dicho, pero mi pelo crece muy rápido, tengo que cortármelo muy a menudo por que si no me da calor, y odio el calor, desde antes de la operación me dejé la barba de 3 días famosa), me arreglé y me perfumé como para una boda, me dio lastima luego ponerme cualquier cosa encima, y fui a la cita en transporte publico, por el camino pensé que era una tontería, ahora tenia dinero suficiente para sacarme el carnet de conducir y algún coche de 2º mano, tenia al típico amigo flipado de las motos y los coches, un bala perdida que me caía bien y al que había ayudado con algún lío que otro, no le seria difícil encontrar un coche en condiciones y barato, en su defecto una moto, una scooter de esas para poder desplazarme rápido. Me estaba adelantando, me di una bofetada a mi mismo, me gusta darme algún toque físicamente cuando creo que lo necesito, como si mi conciencia se adueñara de mi mano. Me centré, iba a ser una noche movidita, serian 2 horas pero tenia que dar la talla, no pasarme, o si hacerlo, joder, me iba a tirar a una chica y no sabían quien era o como follaba, no fue ansiedad, pero si me llené de curiosidad, estaba claro que dar la talla lo iba a hacer.

Me bajé una parada antes de llegar al destino y me acerqué con cuidado desde lejos, era una casa grande, casi una mansión de 3 o 4 pisos, había luces y gente entrando vestida de fiesta de alto copete, había fotógrafos y paparazzis en la entrada y hasta una zona donde se les hacían fotos y se les entrevistaba, vi a varias de esas reporteras buenorras de programas de tv, y alguna famosa de alto nivel, actrices o modelos, me miré y no acerté con la ropa, si me acercaba más daría el cante y me seria difícil explicar que hacia por allí. Por suerte me llamó David, no sabia como tenia mi numero, supuse que Madamme ayudó.

-DAVID: oye, ¿donde andas?

-YO: estoy en la puerta, vaya fiestón, he venido sin arreglar no me puedo acercar sin que me vean y se hagan preguntas.

-DAVID: esta bien, da la vuelta al edificio, allí están descargando el catering, acércate y di que te mando yo para ayudar, mete cualquier cosa a la cocina, allí te espero en 10 minutos.

Di un amplio rodeo para no llamar la atención de nadie, me acerqué y vi los camiones descargándose, me ofrecí a ayudar de parte de David y me dieron unas bandejas, seguí a uno que iba delante mía y dejé las bandejas a su lado, allí David me abordó.

-DAVID: joder, ya creía que no venias, que susto, anda sígueme - me cogió de la mano y me arrastró por los pasillos hasta bajar a un sótano, bajamos otra planta más, casi por un pasillo oculto, y allí rodeó una pared circular, y me metió en una habitación adyacente, allí me sentó y me dijo que esperara, que iba a traerme a mi compañera en el centro de la sala.

La habitación era poco más que un cuarto de trastos, con una mesa y unas sillas, encima una nevera con agua y bebidas isotónicas, algo de fruta, y hasta reconocí la viagra, condones y algún juguete más, consoladores, vestidos de enfermera, sirvienta o secretaria y vestidos de bombero, policía, obrero……..era un pequeño santuario al fetiche, con su zona del sado especial, fustas, cuero, látex y cadenas. Solo había una puerta al otro lado de por donde yo había entrado, un puerta roja acolchada, muy porno, con una lucecita encima apagada. Se abrió la puerta y entró David con una mujer a su lado, nos presentó.

-DAVID: bien, por fin estáis los 2 y aun queda un rato, sentaros - a mi me lo dijo, a la chica se lo indicó – bien, este es Zeus - la gritaba como si estuviera sorda, me miró – ella es la Geisha, me ha costado traerla, es la puta con más nombre de París, es francesa y no entiende ni papa de español, le han explicado más o menos lo que vais a hacer, quedaros aquí, comed y beber lo que queráis, dentro de 1 hora o así bajaré a avisar para que os preparéis, no habrá nada especial, no quiero abrumarte aun más, nada de juguetes ni vestidos ni fetiches, aunque asegúrate de que se deja los tacones, os quedareis en ropa interior, yo me saldré a presentar, cuando se encienda la luz de la puerta, ahí arriba, entráis, deja a ella primero y da unos segundos de lucimiento, después entras tú, verás que solo es una sala circular, llena de espejos, y una cama redonda en medio que da vueltas, deja que ella lleve el ritmo, tiene más tablas, tenéis que aguantar 2 horas de sexo, no te preocupes por ella, es otra bestia, la puedes hacer de todo, esta limpia y según creo tú con la vasectomía, así que nada de condones, y si ves que no puedes usa la viagra de ahí, pase lo que pase no puedes fallar, puedes ser mejor o peor, pero no falles.

-ZEUS: esta bien, no te preocupes por mi, ya viste que no soy ningún enclenque, solo te pregunto si quieres que la destroce o no al final.

-DAVID: ¿y si te destroza ella antes?

-ZEUS: buena apreciación, supongo que solo queda probar para saberlo - David giró la cara, se le pasó una idea pero no me la comentó.

-DAVID: bueno, da igual, por ahora os vais a quedar aquí y luego bajo para avisar - le dijo algo en un francés españolizado a la mujer y se fue.

Allí nos quedamos los 2, en silencio, oyendo de fondo los ruidos de la fiesta que había por encima de nosotros, intenté hablar con ella un par de veces, pero solo me miraba y sonreía, no contestaba, es más, sacó un móvil y se puso a trastear con él, de su físico no puedo hablar aun por que no se apreciaba, iba vestida con ropa amplia y poco sugerente, pero si de su cara, seria francesa pero tenia ciertos rasgos asiáticos, de ahí su nombre, guapa a rabiar, piel suave y lisa, casi sin maquillar, con un poco de sombra de ojos que la hacían más bella aun, pómulos prominentes, ojos negros y cara fina, no llegaba a ser china o japonesa, solo tenia los ojos un poco rasgados, y eso le daba un morbo tremendo, con el pelo moreno, recogido en un moño con palillos enredados en él para sujetarlo. Me pasé media hora aburrido, me tomé algo de beber y le ofrecí, cogió una botella de agua, quise gastarle una broma con uno de los plátanos de la bandeja de la fruta, pero me miró como si estuviera loco, no hablaría mi idioma pero sus ojos decían mucho, entre otras cosas que yo era un imbécil y que si no podían haberse buscado a otro. Me harté de tratar de llamar su atención, me levanté a dar una vuelta por la habitación, mirando y jugueteando con las cosas de por allí, haciendo el tonto con una de las fustas de la zona del sado me di un golpe en la mano que realmente me dolió y solté un quejido sonoro, eso la provocó una risa que yo oí.

-ZEUS: hay que tener cuidado con estas cosas……….- me miró sin entenderme pero se reía, por fin reaccionó y se levantó acercándose a mi, me cogió la fusta, la dio la vuelta y me golpeó en la mano con ella, no me dolió casi nada - ahhhhhh que es al revés jajajjaja - nos reímos ante mi poca sabiduría, y ante eso comenzamos a ver y señalarnos lo que nos llamaba la atención.

Ella se probaba algún vestido con la percha puesta, poniéndoselo por encima, y como chaval que era me fui a ver el traje de policía, era realmente completo, con esposas, porra, placa y radio. Pasados unos minutos coincidimos donde los consoladores, me señalaba y luego a ellos, no entendía, hizo el gesto con ambos dedos índices separándose, como preguntando el tamaño, supuse que era el mío, ella iba cogiendo de menos a más y me los enseñaba, yo iba diciendo que no a todos, que más grande, ninguno de allí era como la mía, y al final me miraba incrédula, reía ante mi soberbia, me fui donde el traje de policía y saqué la porra, marqué con los dedos ¾ de ella y le indiqué que al menos así de larga aunque más ancha, ella se retorció, un poco de risa y otro poco de sorpresa, hacia gestos de que no la tomara el pelo, yo trataba de aguantar la seriedad pero al verla reír y soltar alguna frase susurrada en francés, se me escapaba una sonrisa boba. No se por qué, pero aquella inocencia mía, o tontería, le hacia gracia, estaría acostumbrada a gente “más profesional” no se, yo seguí el juego, y con la música de fondo le ofrecí mi mano para bailar, ella preguntaba en francés, como si estuviera mal de la cabeza, pero me reafirmé con la mirada, ella aceptó el reto, se fue a quitarse el abrigo que llevaba dejándolo cuidadosamente en la silla, fue la 1º vez que la veía de forma que pueda describir.

Era una mujer de bandera, obvio, de unos 25 o 27 años, llevaba una camiseta corta que apenas le tapaba los pechos, palabra de honor, y unos vaqueros ajustados, no de tela vaquera, si no elástica, con unos tacones de infarto, eso la ayudaba a no quedar muy descolgada de mi corpulencia, sin ellos debería ir por el 1,67, le sacaba más de una cabeza y media con los zapatos puestos, no le costaba andar con esas agujas por tacones pero sus pasos debían de ser cortos, me dio tiempo a admirar su cuerpo, tenia el vientre formado, de gim, pechos medianos, para mi gusto tirando a cortos, pero bien colocados, y un trasero de 1º, los pantalones se lo hacían, los llenaba, caderas anchas pero no desproporcionadas. Sus muslos al andar rebotaban dentro de las perneras del pantalón, y se le marcaba claramente el puente en la ingle. Iba a ser un polvazo y aun no la había visto desnuda, se acercó a mi, me cogió la mano, como cortesía y buscando apoyo firme, hice un saludo cortés a lo que ella respondió con otro, y pusimos la pose típica de baile, juntando las manos y ella agarrándose de mi hombro y yo de su cintura, fue inocente, no la pegué a mi, simplemente bailamos un vals, moviéndonos por el espacio de la habitación, de vez en cuando la hacia dar una vuelta sobre si misma agarrada de mi mano, nos reíamos de nuestro atrevimiento al acelerar el ritmo de los pies, ya le daba hasta 2 o 3 vueltas y poníamos poses, no se si notó mi polla, o no, en algún gesto, pero si que vi la cara de asombro y esa forma de relamerse o morderse le labio discretamente que tanto había visto últimamente, iluso de mi, preferí pensar que le estaba gustando el momento. Notando un poco la monotonía y el cansancio en su pies, decidí dar un ultimo pase recostándola sobre mis brazos, ella encogió una pierna como una bailarina profesional, agarrándose de mis brazos y riendo, mi cara se quedó a milímetros de la suya, mientras mis manos iban más debajo de lo necesario en su espalda, allí me percaté de sus ojos negros, casi me pierdo en ellos, me quedé 2 segundos mirándolos absorto antes de intentar cerrar el baile con un beso en la mejilla, pero no se si conscientemente o no, ella giró la cara y me besó los labios, lo que si se es que le gustó, por que se quedó allí y llevó una mano a mi cara, para separarse unas décimas después relamiéndose, con los ojos torneados y una sonrisa enorme. De golpe se abrió la puerta y entró David, con la tontería había pasado ya mucho rato, y del susto se me cayó la mujer al suelo, más que por mi, por ella, se sobresaltó tanto que el tacón apoyado en el suelo se le resbaló, no cayó redonda si no que se me escurrió sin soltarla, de inmediato la levanté casi a pulso, no pesaba nada, si llegaba a los 57 kilos seria un milagro.

-DAVID: vaya, espero no haber ininterrumpido nada……...- entró sin más como un elefante en una cristalería.

-ZEUS: no, solo calentábamos - la ayudé a recuperar la compostura.

-DAVID: bien, por que tenemos un problema………..- le dio un papel escrito en francés a ella - mira, iba a ser una sesión normal, he reunido a los 8 clientes que estarán detrás de los espejos, y estaban charlando antes de meterse en sus habitaciones, al decirles que la chica era la Geisha, muchos se han emocionado, tiene cierto renombre, y han querido apostar.

-ZEUS: ¿en que?

-DAVID: en cuanto iba hacer que te corrieras, tiene muy buena fama, y alguno decía que en menos de 30 minutos, más al decirle que eras nuevo y muy joven.

-ZEUS: pues se van a llevar un chasco, ya lo sabes.

-DAVID: yo lo se, pero ellos no me creían, de hecho no se iba a apostar puesto que nadie iba en tu favor, hasta que ha llegado Madamme…..

-ZEUS: ¿esta aquí?

-DAVID: si, ha querido insistir al ser tu 1º vez en estas cosas, les ha dejado fanfarronear, y luego ha dicho que aceptaba la apuesta, pero no a cuando te hacia correrte, si no que tu la ibas a dejar rota antes de las 2 horas - pensé en que me la estaba jugando o devolviendo por el roto que la hice, o quizá solo era consciente de mis habilidades, pero ella era una vieja ex prostituta desentrenada, allí tenia a una de 1º nivel, joven, en forma y con fama - como no se han puesto de acuerdo en el como, han decidido votarlo, vais a entrar ahí los dos, y vais a tener que follar a lo bestia, encima de cada espejo hay unas luces, verdes y rojas, el verde eres tú y el rojo es ella, si alguno de los 2 se rinde antes de 2 horas, pierde automáticamente, y si cuando pasen las 2 horas, seguís los 2 en pie, se contarán las luces, las vais a ir viendo todo el tiempo, pueden ir cambiando de opinión según crean conveniente, pero te digo que la apuesta esta cerrada ya. 8 a 1.

-ZEUS: ¿y el 1 es Madamme? - asintió.

-DAVID: así que lo vas a tener jodido para ganarte que voten en contra de su apuesta, eso si, el que gane, aparte de los 10.000€, se lleva un 25% de la apuesta, entre Madamme y yo les hemos sacado unos 50.000€, así que si entras y pierdes son 10.000€, pero si entras y ganas te vas con 22.500€, el resto es para el ganador, ósea Madamme, restándole mi porcentaje por organizarlo - miré a la mujer que leía las indicaciones en el papel, y al acabar nos miró con sonrisa picara, asintió antes nuestras miradas.

-ZEUS: …..¿y cuando empezamos?

-DAVID: ya, entro y os presento, entrad en ropa interior, como te dije, y deja que ella se luzca primero, luego entras tú, os presentaré como en un combate de boxeo, y estaré claramente del lado de ella, es una pose, pero tengo mis dudas, dejaste a Madamme rota delante de mi, pero esto es otra cosa, ella es otra cosa - la señaló - un vez presentados me meteré por uno de los espejos donde esta Madamme, al entrar y cerrar, comenzáis, ¿de acuerdo? - nos lo dijo a los 2, asentimos - bien, pues fuera ropa y voy entrando - me miró - suerte, la vas a necesitar.

Se puso con el pomo en la puerta, cogió aire, templó los nervios, y entró, abriendo la puerta y dejándome ver la cama en el centro, redonda y giratoria, con un espejo enfrente, andaba liado desvistiéndome, y no perdiendo ojo de cómo se desnudaba ella, yo me quedé en slips, que me marcaban bien, pero era ridículo al verla a ella, era una especie de princesa asiática, piel suave y cuidada, le venia perfecto con los rasgos físicos, unas tetas que temblaban dentro del sujetador, y un tanga de hilo fino, con elegancia pero muy excitante, la forma de quitarse el pantalón, enrollándolo para sacárselo y dejando el culo en pompa me descolocó, “vaya trasero, y vaya piernas, pura fibra”, le temblaban de tensión, no de flacidez, se soltó el pelo, quitando los palillos que llevaba puestos en el moño, dejando caer una larga melena que le llegaba hasta el culo, me miró y sin saber por que su imagen me recordó a la de Pocahontas, la protagonista de aquella película para críos, una versión adulta y erótica, y eso me excitó. Se oía de fondo a David hablando del enfrentamiento, mientras los 2 nos poníamos a la altura de la puerta, yo calentado músculos que sabia que iba a necesitar, y ella destentando el cuerpo, pero ni yo podía quitar la vista de ella ni ella de mi, en concreto de mis slips, ya la tenia morcillona y se notaba, fue uno de los momentos más eróticos y nerviosos que he tenido, como la 1º vez que vas a montar en una montaña rusa de crío, un hormigueo en el estomago me estaba hacinado morirme de ansias. Por fin David la presentó, le veía apareciendo y desapareciendo en el marco de la puerta, la llamó y ella fue a salir, la cogí del brazos y le extendí mi mano, para desearla suerte, ella me correspondió, y aproveché para besarla la mano con gesto gentil, no buscaba ser dulce con ella, si no que la pareciera ser un caballero educado, alguien que no la lastimaría, cosa que no era en absoluto, ¿por ese dineral?, iba a entrar allí a destrozarla como fuese.

Ella entró y se contoneó saludando, dando una vuelta de honor, podía notar muchos ojos clavándose en ella, incluso algún golpe en los cristales dado desde el otro lado. Se recostó sobre la cama, de forma sensual, andando a 4 patas despacio para regalarle una buena visión a todos los ángulos, echado el cuerpo hacia delante y hacia atrás apoyada solo sobre las rodillas, cuando le tocó mi zona, me llamó con un dedo, con cara de loba insaciable, “sin duda ella también quiere ese dinero”.

-DAVID: bien, ya tenemos a la chica, pero damas y caballeros, hoy tenemos a un nuevo concursante, un chico nuevo, joven y con aspecto de buena gente, pero no se confundan ni un ápice, es un animal, una bestia salvaje que viene dispuesto a convertirse en el dios de esta sala, ¡¡¡¡¡él………..es…………..Zeus!!!!!! - tardé un par de segundos en salir, dejando algo colgado a David, y al entrar, asomé solo la cabeza, con gesto de perro asustado, como si me hubiera equivocado de habitación, en ese momento era Raúl, el gordo, el páyasete que siempre tiene que hacer la gracia, pensé, que seria más divertido así, que no solo fuera follar si no que vieran ante sus ojos en esas 2 horas mi evolución en ese año largo desde la operación, que les sorprendería o asombraría más verme trasformarme de aquel acomplejado a la bestia que sabia que tenia dentro.

David me miraba atónito, entendía que lo hacia a propósito, pero no sabia por que, yo me colocaba el slips y el lo arregló un poco como buen orador que demostró ser, siguiendo la broma aunque no la entendía, achacándolo a los nervios, me daba indicaciones de las cosas que tenia que hacer, como girarme, o dar la vuelta por los espejos, y yo bromeaba, tropezando, arreglándome delante de uno de los espejos, o equivocarme en alguna indicación. No lo sabia, y David me estaba perdonando la vida con la mirada, pero casi podía oír las risas detrás de mi reflejo.

-DAVID: bien parece que ya nos hemos centrado, aquí, si, en el centro, la chica, ya me voy yo, sabéis lo que tenis que hacer - me miró rogándome que dejara la broma, y se fue por uno de los espejos que se abrió, pude ver de refilón a Madamme, que tenia la cara roja de risa, me miró apenas un suspiro, y clavé mi mirada en ella, no sabia si me la estaba jugando o no, pero la mirada era de que la castigaría más tarde o más temprano.

Por ahora me quise centrar, me acerqué a la cama donde la Geihsa estaba, también con cierta congestión por la risa, se compuso y gateando hasta donde estaba yo se arrodilló delante de mi, bajándose de la cama, y comenzó a acariciar mi cuerpo, la habitación se tensó de golpe, sus caricias eran expertas y eróticas, por mis piernas o mi estomago, rozaba de pasada mi bulto en el slip, dejando que me calentara, estuvo así un rato, un buen rato, en el que pude ver un marcador con una cuenta atrás de 2 horas, 8 luces rojas y una verde, por donde había salido David. Sus caricias se la hubieran puesto dura ya al más pintado, incluso comenzó a acariciar por encima de la tela del slip, pero aquello no crecía, llevó su boca a la tela, daba lametones y mordisqueaba suavemente el enorme bulto de mi ropa interior, pero nada, no crecía, a los 10 minutos se cabreó, y metió la mano por dentro, con cara de ansia, agarró y acarició, pero notó un tacto distinto al habitual, de hecho algo se movía sin estar pegado a mi cuerpo, tiró y sacó……un plátano, lo miró confundida, yo me tronchaba de mi broma, esos segundos de más que tardé en entrar los aproveché para meterme una banana en los slips, la situación no podía ser más cómica, oía unas carcajadas sonoras, y apostaría mi vida a que David estaba jurando en hebreo ante mi ocurrencia. Si, quise gastar la broma, pero no me hubiera atrevido si no fuera por 2 buenas ideas, 1º los clientes estaban detrás de unos espejos a oscuras y lejos, no podían admirar de cerca mi gran tamaño, así que pensé en darles una escala, una medida estándar familiar, y 2º, sacar a la Geisha del papel, hacer algo tan diferente que la descolocara y la pusiera en desventaja ante mi.

Me salió perfecto, Geisha estaba de rodillas mirando el plátano atontada, la levanté y la tumbé en la cama de un tirón, cayendo sobre ella con todo mi peso, aplastándola y comiéndome su boca como un animal, le costó un par de minutos cogerme el ritmo de la boca, para entonces yo ya le metía la lengua hasta el esófago, y la acariciaba el cuerpo entero, buscando quizá algún punto débil que explotar, no lo encontré, pero logré que se abriera bien de piernas y me rodeara con ellas, con los tacones puestos, trataba de acariciarme la espalda con los brazos, pero mi peso y corpulencia no le dejaban, atinó ante mis arremetidas a meter las manos hacia abajo y entonces si, acariciar mi polla sobre la tela, pero aun con el plátano en la mano. Bajé por su cuello con mi boca, mientras mis manos buscaban la apertura del sujetador, se abría por delante así que bajé la boca, y con los dientes acerté a sacárselo, sus tetas se movieron poco, como se intuía eran medianas, normales, pero muy bien colocadas y naturales, me lancé a chupar los pezones, hasta que no estaba duro uno no trabajaba el otro, eso la hizo meter la mano libre de fruta por dentro de mis slips, y ya pajear suavemente mi miembro creciente, estuvimos así otros 10 minutos hasta que al final se me puso dura, notaba su mano que casi no abarcaba mi enorme pene, la ayudé quitándole el plátano de la mano, poniéndome en pie, me saqué el slip y dejé que luciera su tamaño a plena vista, eso hizo cambiar 2 o 3 luces de golpe a verde, había ganado el 1º round, pero aun quedaba mucho. Ella quiso ponerse a chupármela, pero no iba a dejar que se luciera con una mamada de 1º nivel, podía haberme hecho pasar por tonto, bromista y buenazo, pero en mi cabeza era una partida de ajedrez con 22.500 motivos para ganar, así que me tumbé y dándola un azote la quite el tenga, de un tirón lo rompí, sacándola un gemido de lastima o de placer, me dio igual, la abrí de piernas y me la cargué encima mía, haciendo un 69 conmigo tumbado boca arriba, si ella se iba a lucir con la mamada yo lo haría con una comida de coño.

Como buena profesional, cogió de la base del tronco mi miembro ya tieso, y jugó con él, dándose golpes en la cara y haciendo comparativas con su cara, podía verlo en los espejos, quería dar a entender que era demasiado grande para ella, y justo después, se metió media polla del tirón, para luego rematar metiéndose otro cuarto, notaba su campanilla y aun así no había arcadas, se la sacó, la escupió y babeó, para volver a engullir ahora del tirón ¾ , sin duda su fama era merecida, la chupaba casi igual de bien que Madamme, debían de hacer un curso previo o algo, sus lenguas no se movían de forma natural, era una gloria gozar de aquello, tanto que sus engullidas y lamentos, sus golpes con el rabo tieso en la boca o las mejillas, me descentraron a mi, sus manos y su lengua lograban que me tensara, debía actuar rápido, así que le bajé la cadera y con una mano le separé los labios, totalmente rasurada, y con un pequeño tatuaje en la zona del pubis, una mariposa echa con unas letras en chino o japonés, no me molesté más en mirar y si en trabajar su coño, no estaba nada húmedo, así que comencé chupándolo bien y jugando a penetrarla con la lengua, buscando su clítoris, mientras le separaba las nalgas con fuerza y las soltaba, generando un efecto rebote, con algún cachete flojo, trabajé y chupé lo mejor que sabia, y noté como su cadera iba cogiendo ritmo y se lubricaba su interior, pero pese a empezar a jugar con mis dedos dentro de ella, no lograba que el ritmo de su mamada descendiera, me estaba matando y llevaba menos de 5 minutos, las luces se volvieron todas rojas, menos 1, necesitaba un consolador para estimularla más, pero no tenia ninguno a mano, ¿o si?, “joder, le puto plátano”, ¿por que no?, lo cogí, lo babeé un poco y abriéndola los labios mayores se lo metí de golpe, por sorpresa, no le costó nada aceptarlo dentro de si, pero la sorpresa de hacerlo le sacó la cadena del ritmo de la mamada, no se esperaba eso, echó todo su cuerpo hacia delante sacándola un gemido de placer puro, parando hasta sus expertas manos que pajeaban sin descanso desde hacia rato, me aseguré de repetir la penetración tantas veces como para sacarla de ritmo, tardó unos 5 minutos más en dejar de dar respingos con cada penetración “afrutada”, mientras mis dedos seguían trabajándola el clítoris, volviendo a ver luces verdes, asegurándome que la curvatura del plátano incidiera en su punto G, eso la hizo llenarse de fluidos, sin correrse, y el plátano ya no generaba fricción alguna, pese a notarla excitada su ritmo en la mamada volvió, 10 minutos después de aquellos su velocidad en las manos aumentó tanto que no aguanté más y reventé en su boca, lo vio venir y supo hacer que la corrida se viera por todos los ángulos sacándosela en el ultimo momento, sin parar sus manos. Cuando terminé ella reía victoriosa, al ver todo luces rojas, menos 1, la pobre se creía que había acabado, que como cualquier otro, al correrse 1 vez, ya no podía volver al ruedo, que equivocada estaba, era demasiado joven como para que después de 2 minutos comiéndola el coño, ya sin el plátano, notando su calor interior, no se me volviera a poner como una piedra, el 2º round lo ganó ella, pero esperaba ganar por KO en poco más de 30 minutos, y no lo logró.

Ella se enfadó ante mi recuperación, y volvió a lo suyo, pero esta vez yo tenia ventaja, trabajándola con el ABC de Eli, la saqué un orgasmo que la sacudió el cuerpo entero, obligándola a arquear la espalda y dejar su mamada, cuando se le pasaron los espasmos le di un buen azote para quitármela de encima, ya estaba bien de preliminares, quedaba 1 hora y 20 minutos, tocaba follar de verdad si quería darle margen a cansarse y después sacar a mi bestia. Ella entendió lo mismo, se dio la vuelta sobre mi y nos besamos mientras se colocaba a horcajadas sobre mi, con mi polla aun fuera cabeceando en su vientre, se pasó un par de minutos restregando su cuerpo sobre mi, su pecho en mi cara y pegando la pelvis para presionar mi rabo, agarró mi miembro y trató de elevarse para metérselo, pero era tan pequeña y yo tan grande que no le daban las piernas, así que se puso en pie y fue bajando hasta quedarse de cuclillas, allí se abrió los labios mayores, previamente habiéndose lamido la palma de la mano, y con asombroso equilibro con tacones puestos incluidos, se dirigió mi polla a su interior, dejándose caer poco a poco, mordiéndose el labio con fuerza, notando como cada centímetro de mi la iba abriendo, al inicio entró limpia, pero pasada media barra la tenia tan gorda que la hizo bajar el ritmo de su cadera, se echó un poco hacia atrás para apoyarse sobre la cama o mis piernas, y clavado los pies en el colchón, subía un poco para volver a ir bajando, decidí dejarla hacer, que se luciera, que diera todo, como hizo Madamme, y luego rematarla, siguió el guión, fue bajando hasta que por incompresible que fuera, se le metí toda, intentó ponerse de rodillas a horcajadas como antes pero al dejar caer el peso de su cuerpo la llenaba por dentro, tuvo que quedarse apoyada y gobernar el ritmo así, cansándose aun más, eso no evitó que cuando se sintió cómoda, pegó un acelerón paulatino en su cadera, yo disfrutaba, me dejaba hacer, no me cansaba y realmente era una delicia ver aquel cuerpecito ser penetrado en mi totalidad, cogió gran ritmo y se sacaba más de la mitad antes de volver a caer, pero la postura le era incomoda, no la dominaba, trató de nuevo de ponerse de rodillas, pero mi miembro no se lo permitía, no creo que por dolor si no que al ponerse en esa situación la penetración era tan profunda y caliente que no podía evitar excitarse de más. Cambió de táctica y se puso de cuclillas de nuevo, apoyándose en mi pecho y desde allí gobernar, le fue mejor en ritmo pero esa posición era si cabe más cansada para sus piernas, yo me aseguré que durante 20 minutos fuera ella la que me follara, sin mover un solo músculo, y al ser la 2º corrida sabia que tenia más aguante, no estaba ni de lejos cerca de correrme y ella tiritaba y paraba las embestidas ante su calentura, en una de esas la agarré el culo y la bombee suavemente, aun como si fuera Raúl, eso bastó para sacarla un 2º orgasmo que la hizo ponerse de pie y frotarse el clítoris hasta bañarme en sus fluidos, pero reaccionó bien volviendo a metérsela entera, y ahora si, una vez que se corrió, le dio igual, se puso de rodillas conmigo totalmente dentro, disfrutó de la sensación, la cara era de placer, y haciendo movimientos circulares dejó su cuerpo muerto hasta lograr una buena cadena de ritmo, una vez logrado y pasado los calambres de su interior por el orgasmo, me dio un bofetada suave en la cara, por ser malo con ella y hacerla correrse, mirándome con ojos de venganza. Su cadera cogió vida propia, se sacaba y se metía mi polla entera del tirón, pero pese a la amplitud necesaria para ello, su velocidad era endiablada, ahora si estaba follándome en serio, notaba sus nalgas rebotar, el sonido de un golpeo incesante llenó la sala, y la dejé desenfrenarse durante 20 minutos, quise ir a tomar en control yo, pero fue demasiado, su cadera me partió en dos y me corrí de nuevo en su interior, soltando un alarido de lujuria, ella lo notó, como me iba desinflando en ella, y sin parar de girar sus caderas se mordía un dedo mientras jugueteaba con la otra mano en mi pecho, me había cabalgado como había querido, se lució y me sacó de rueda, si había alguna luz verde se volvió roja, todas menos 1, estaba feliz, el 3º round fue suyo, pero cometió un error fatal, si hubiera parado allí, me hubiera costado sin su ayuda volver a tener una erección, pero su cuerpo le traicionó, estaba disfrutando realmente del sexo, y no dejó de mover sus caderas hasta que volvió a notar como se me podía dura, seria la 3º corrida, aun más duradera que la 2º y mucho más que la 1º, ella se había corrido 2 veces y estaba disfrutando tanto o más que yo de aquella sesión.

Saqué a Zeus, la levanté de la cadera y ahora fui yo quien atacó, planté bien los pies en mi postura más trabajada, y aceleré sin parar, sacándola gemidos y alaridos con cada aumento de revoluciones, notaba que mis huevos rebotaban en su culo con cada embestida y arremetí sin piedad hasta sacarla otro orgasmo que la descolocó, no se esperó ese arreón, pero no dejé que se recuperara, seguí a la misma velocidad hasta sacarla otro orgasmo pocos minutos después, miré el reloj, quedaba, 25 minutos y aquella hembra estaba gozando, no pidiendo suplica, aunque mis méritos estaban reflejados en 3 luces verdes, estaba claro que había que arriesgar, y no lo podía hacer con ella encima, apreté hasta sacarla el 4º orgasmo, estaba tan caliente de mi continuidad que eran casi seguidos, allí la saqué de mi, la puse a 4 patas y colocándome detrás la mojé un dedo en sus fluidos y la penetré con cierta violencia por el culo con él, estaba tan caliente que no me costó nada meterle el 2º, es más, se separaba las nalgas ella sola, estaba cansada y abrumada pero tenia aguante, no quise trabajarla mejor el ano, quedaban 20 minutos y no quería ponérselo sencillo, iba a destrozarla por el culo, la coloqué bien agarrada, mi glande apretando como un animal, evitando que se fuera para delante, la ensarté del golpe, toda, estremeciéndola, retorciéndola, haciéndola gritar y viendo su cara desmontada en los espejos, con la boca más abierta de lo que era posible, no di cuartel, invoqué a la bestia y sin dejar que se acostumbrara comencé a follármela como el animal indómito que en el fondo tenia dentro, la agarré de los brazos usándolos como riendas de caballo, y percutiendo a una velocidad infernal, ella quería dominar el ritmo con su cadera pero no se lo permitía, me convertí en un vendaval que la azotaba cuando la notaba que se corría, nada de cachetes, golpes que harían temblar a mis colombianas, no paré, no di esperanza ni cuartel, fui una maquina que solo aceleraba duramente los últimos 17 minutos de esos 20, todas las luces se volvieron verdes, menos 1, lo tenia ganado, la había matado con el spirnt final, quería salirse de mi pero no se lo permití en ningún momento, estaba desatado.

Quería mi pleno, la cogí del vientre, y en boladas la estampé contra el cristal de aquella luz roja, restregando las tetas en el cristal y con ella en el aire, cogida de las piernas, me la follé los últimos 3 minutos de forma grotesca y salvaje, sacándola otro orgasmo que baño el cristal, estaba ida, sobre la bocina, pero había logrado tenerla inerte, sin llegar a estar inconsciente pero no era capaz de hacer o decir nada, solo disfrutaba y recibía, para cuando el reloj llegó a cero todo eran luces verdes, aun así estuve otros 10 minutos así, levantándola por lo aires y dejándola caer a plomo abriéndola el culo, hasta que me corrí dentro de ella, aun así golpeé un par de veces más para dejarle toda mi semilla dentro, para entonces dejarla apoyada en el suelo, contra el cristal, tiritando, agarrándose el coño y el ano a la vez, como otras tantas mujeres antes que ella, no solo es que me duró menos que Madamme, mi Leona, o Eleonor, es que hasta Yasmine me hubiera dado más juego, aunque ellas estaban acostumbradas a mi pene, pero ellas apenas habían disfrutado de la bestia, ella aguantó 20 minutos de sexo anal descomunal, y estaba sollozando de gusto en el suelo, desnuda y sodomizada, ella, una puta de alto vuelos de París, por un crío 7 años menor del extrarradio de Madrid.

Entró David aplaudiendo con la ropa mal colocada, de refilón vi de nuevo a Madamme abierta de piernas con el coño rojo de haberse follado a David claramente, yo cogí el plátano lleno de fluidos de la cama, paseándome como un león guardián por delante de los espejos, lo pelé y me lo comí con cara de buscar una presa más decente. David se acercó y me declaró campeón y ganador por unanimidad, dando por finalizada la ceremonia y apagando las luces, me fui directo a la puerta donde estaba Madamme, la pillé de espaldas arreglándose el vestido, me pegué a ella dejándole mi polla flácida llena de fluidos, y creo que de sangre del culo de Geisha, en su trasero, y agarrándola las tetas.

-ZEUS: ¿por que coño has aceptado la apuesta? - mi tono era del dios que tenia que ser para ella.

-MADAMME: solo quería hacerte ganar más dinero, cuidar de mi dios, sabia de sobra que la ibas a reventar y aunque no lo hubieras hecho, los 10,000€ te los hubieras llevado igual, ahora tendrás mucho más dinero, ¿David te dijo que eran…….?

-ZEUS: eran 10.000€ más el 25% de la apuesta.

-MADAMME: el 25%, de 100.000 €, son 25.000€ + los 10.000€ por el trabajo, ¡son 35.000€! - se me infló la cara de enfado y ella lo notó, se giró agarrándome la cara con autentico pánico - ¿que pasa, no estas contento?

-ZEUS: David me ha dicho que la apuesta eran 50.000€, mi parte de la apuesta 12.500€ más mi parte de 10.000€ - me miró horrorizada.

-MADAMME: no, eso no es lo que hablamos todos arriba, la apuesta era de 100.000€ no de 50.000€, luego en privado me ha dicho que si cerraba la boca me daría una parte de los otros 50.000€, pero me he negado, sabes que no te miento, eres mi dios, y estoy de tu lado, dime que lo sabes, por favor - estaba fingiendo un enfado que en realidad era leve, para mi 35 o 22 no eran diferencia, para Raúl era un pastón de más, pero ahora que sabia del engaño, Zeus no se fiaba y tenia que asegúrame de quien me la estaba jugando, la agarré de la mano y tiré de ella hacia la sala central, allí a tientas vi a David agachado hablando con Geisha, le agarré del cuello y casi por el aire le saqué a la sala adyacente.

-ZEUS: ¿Cuánto era la apuesta? - le tiré al suelo, medio ahogado, mi personaje estaba muy enfadado.

-MADAMME: dile la verdad, dile que eran…….- la solté un bofetón sin demasiada fuerza.

-ZEUS: tu cierra la puta boca, dime David, ¿cuanto era la apuesta? Y ten en cuenta que de tu sinceridad dependerá que te joda la vida o no.

-DAVID: oye, tranquilizante, cof cof…..esto no es tan sencillo cof…mi comisión es variable……- le hundí mi pie en las costillas, me di cuenta que Zeus era una persona diferente a mi, alguien realmente peligroso al que no había que joder.

-ZEUS: ¿QUE CUANTO ERA LA APUESTA? ¿O QUIERES QUE TE HUNDA UNA COSTILLA EN EL PULMÓN? - se retorcía en el suelo del golpe.

-DAVID: ¡¡¡100.000!!! Joder, puto animal, eran 100.000, si solo eran 50.000, yo sacaba más tajada.

-ZEUS: eres una puta mierda asquerosa, una rata de alcantarilla, y encima un imbécil retrasado, ¿creías que Madamme no me lo iba decir?

-DAVID: oye, necesitaba el dinero, tengo líos de drogas y……- me agaché para darle una bofetada, le di parte en el oído, se lo dejé pitando por que se quedó tonto, le susurré algo al oído a Madamme que hizo encantada de obedecer para ganarse mi favor.

-ZEUS: me importa una mierda, me has intentado engañar a mi y a Madamme - cogí el papel en francés del suelo, el que el dio a Geisha, las cifras eran iguales que las mías - y ahora lo pagarás de una forma u otra, escúchame - le agarré la cara - te voy a dejar aquí, atado, desnudo y con 2 consoladores metidos por el culo, con alguna de esa mordazas puestas y te voy a dar con la fusta más grande hasta que te vea sangrar MI dinero, y te pienso dejar así e irme, eso por intentar engañarme a mi, ya te encontrará alguien aquí, después vas a coger todo el dinero de la apuesta y lo vas a repartir, quiero 50.000€ para mi, otros 30.000€ para Madamme, y págale 20.000€ a Geisha, y el resto de todo lo que han pagado esos ricachones por organizar la sesión sin la apuesta es tuyo, fíjate si soy bondadoso. O eso, o voy directo a la prensa a contar de tus fiestecitas con famosos, veremos quien se te acerca a ti cuando salgas en los programas rosas a diario. Que decides, ¿lo 1º o lo 2º?

-DAVID: lo 1º.

-ZEUS: desnúdate completamente y ponte sobre la mesa con el pecho sobre ella - obedeció dolorido.

Se veía la marca de mi golpe en las costillas, cogí unas cadenas y las esposas de la zona del sado, las pasé por la mesa y le até de tal forma que quedó inmóvil, atado con las manos a las patas por encima y los pies por abajo, uniéndolos con cadenas para que no pudiera sacar las esposas por las patas, le metí una mordaza de esas de pelota roja en la boca, cogí los 2 consoladores más grandes que había, le metí el más pequeño de los 2, que encima vibraba, lo encendí y se lo clavé, (ese es el verbo correcto), en el ano, costó relativamente poco, aunque le dolió, se lo metí entero, para luego coger el más grande y haciendo una fuerza bestial metérselo también por el culo, los tenia tan aprisionados que hacían V al salirse de su culo, si con el 1º hasta podía disfrutar ahora solo había dolor, cogí la fusta con la que me había hecho daño, la cogí mal adrede, y comencé a amartillar los consoladores sacando alaridos de dolor y suplica, lloraba, cuando noté que no le entraban más le di con fuerza desmedida por todo el cuerpo, las piernas, la espalda y el culo, dejando todas las zonas rojas, escocidas y en algunas hasta con hematomas o sangrando, le hice gritar su nombre completo y decir que aquello era sexo consentido y que le encantaba, se retorcía de tal manera que hubiera dicho lo que me diera la gana, de hecho me dijo el nombre y apellidos, con ocupaciones, de todos los asistentes a la fiesta, los ocultos tras los espejos. Superó el umbral del dolor pasados unos minutos, ese punto en que los nervios se desconectan para dejar de sufrir, ya no había motivos para seguir.

-ZEUS: con esto, y luego los ingresos de dinero, queda en paz, ahora mira a Madamme - lo hizo y la descubrió con el móvil grabando toda la escena, con los golpes ni se dio cuenta pero había cogido 1º plano de todo - ahora te tengo en vídeo siendo sodomizado, consintiéndolo legalmente, con tu verdadero nombre completo y el de tus clientes, me he asegurado de todas formas que no se vean nuestras caras y puedo editar el vídeo para distorsionar mi voz y mi imagen, eso es solo un seguro, como se te ocurra la más mínima trampa para mi o Madamme, te voy a joder la vida, ¿me oyes?, si haces lo que te digo podrás seguir con tu mísera vida, pero si vuelves a intentar jugárnosla esto te parecerá una broma. ¿Asiente si lo has entendido? - lo hizo llorando, a sabiendas, humillado, castigado y vendido, no tenia opción - venga Madamme, aquí hemos terminado - según paró de grabar, se me tiró encima besándome como poseída.

-MADAMME: me has puesto cachonda pérdida, fóllame ahora mismo, te lo imploro.

-ZEUS: creía que esta basura ya te había follado.

-MADAMME: este es un mierda que no sabe como tratarme, tú si – me agarró la polla para levantármela con su habilidad casi innata, gruñí de descontento, ella se arrodilló suplicando, con su mano masturbándose por debajo del vestido - por favor, te lo ruego dios mío, ábreme el culo otra vez, como has hecho con esa cría, párteme en 2, llevo días loca pensando en como me abriste el culo, como hacia mucho que nadie me lo abría.

-ZEUS: ya te dije que se hará lo que yo diga, y sabias que tus actos me enfadarían, y que conllevarían un castigo.

-MADAMME: lo sé, por eso lo he hecho.

-ZEUS: así que quieres ser castigada, pues el castigo es que dejes de tocarte, llama a tus moles y que vengan, nos vamos a ir de aquí cada uno a su casa, y tú te vas a encargar de que a Geisha se la cuide hasta que se recupere, y reciba su dinero, yo el mío, y tú el tuyo de parte de este mierda, y mientras prepárame más citas caras, y aun estoy esperando a la más guapa, no me vuelvas a fallar o sabes que de ti también tengo cosas.

-MADAMME: no hace falta que las uses ni me amenaces, no conmigo, y lo sabes, soy tuya, eres mi dios y haré lo que me ordenes - se puso en pie y se arregló el vestido mientras llamaba a sus moles, obedeció al dedillo, y se llevaron a Geisha, medio desnuda e ida. Antes de irse la dije que se había portado bien al decirme la verdad de la apuesta, que si seguía así quizá me la volviera a reventar pronto, y con ello la metí mi mano en el coño, besándola con lengua dejándola tiesa al meterle mi mano casi entera entre sus muslos, levantándola por el aire de un pie, estaba empapada como una colegiala ante su ídolo, su boca podía mentir, sus cuerpo no, le ponía aquel dominio que ejercía sobre ella.

-ZEUS: ahora vete y no me falles de nuevo, no quiero que vuelvas a apostar por mi, o no, sin mi consentimiento - yo tenia unas ganas locas de reventarla, todo aquello y aquel momento me tenia excitado, pero mi personaje Zeus era implacable.

Me vestí y me fui directo a casa de mi Leona, creo que fue la follada más bestia y animal que la di hasta el momento, eran casi las 12 de la noche y no paré hasta desmayarla 5 horas después, la 1º hora fui a mi ritmo, las otras fui la bestia, no paré de abrirla el coño, hasta que se rindió, y no era fácil, entonces la destrocé el ano como había hecho con Geihsa y quise hacer con Madamme, allí perdí a mi leona, con mi penúltima corrida la mordí tan fuerte de rabia y de estrés que la desperté de la inconsciencia con un gemido de placer y dolor que le encantaba, para seguir tirándomela otra hora más hasta apaciguar a la bestia, allí no desactivé nada, la desaté y la única mujer que conocía que podía soportar a duras penas hasta agotarme era ella. Al día siguiente llamó al colegio para decir que no iba, que se encontraba mal, la tuve que ayudar a ducharse y vestirse, ya era Raúl, de nuevo, la bestia había sido saciada, y pese a estar aun medio ida después de 7 horas de sueño, tenia una sonrisa de felicidad pura, de saber que a aquel animal solo lo calmaba ella. Según supe faltó un par de días más antes de regresar a su vida normal en el colegio.

Madamme me llamó unos días más tarde, se había asegurado de que David pagara todo, y de que Geisha no volviera a Francia, se quedó con “nosotros” en la empresa, dijo algo de que no había nada en Francia que la atara, y con un pequeño incentivo económico la captaron. También me avisó para otro trabajo gordo, al día siguiente otra vieja decrépita, me soltaron 8.000€ por 1 hora, aunque fue media hora, lo que me duró la vieja, para cuando acabé con casi todo rondaba los 80.000€ en menos de 4 semanas, y aun quedaba la sorpresa final antes de retirarme.

Zeus – La casa de Madamme.

Estaba enajenado, faltaba menos de una semana para el regreso de Ana, llevaba 1 mes follando sin parar, habiendo desatado y controlado a una bestia en mi interior y asustándome en momentos ante mi personaje, Zeus, me asustaba de lo que era capaz de hacer, no era yo, era otra personalidad dentro de mi, un tipo dominante, engreído, implacable, egoísta y peligroso si se le enfadaba, después de la fiesta de ricachones quise alejarme unos días de todo, serenarme, volver a sentirme un tipo normal y regresar a mis objetivos, mi mente se dividía, como Zeus quería seguir en la empresa de Madamme, quiera ganar dinero e ir reventando a mujeres por la ciudad, sodomizar aun más a Madamme, disfrutar de esa parte oscura y excitante de mi vida, pero él era solo un seudónimo, un personaje, o al menos empezó siéndolo, no tenia poder de decisión, ¿o si? yo era Raúl, y tenia que ganarle la batalla, todo me había llevado a esa situación, pero estaba allí por el dinero del piso, aquellos 6.000€ para asegurarnos un sitio donde irnos a vivir mis amigos y yo, con Ana, disfrutar de la compañía de una mujer, y no de forma sexual, si no en una relación de iguales, de respeto y amor, no de sumisión y deseo, pero Zeus era todo lo que un hombre podía soñar, una maquina de follar que además de tener una polla enorme había ganado algo más de 80.000€ en 3 semanas largas.

Me descubrí muchas veces teniendo diálogos mentales o hablando en voz alta, discutiendo Raúl y Zeus sobre mi futuro. Mi madre me miraba como si estuviera loco, pero tampoco es que antes fuera un chico muy normal, mi cabeza siempre fue a una velocidad distinta del resto, mi mente echaba a volar y desaparecía de la realidad minutos u horas. Quise hablar con alguien del tema, quizá Eli me entendiera pero sentía en mi interior que era tema mío, que lo debía solucionar yo, y no podría ser de otra forma. Leí artículos de desdoblamiento de personalidad, me tranquilicé un poco, no daba el perfil, se han de tener crisis de ausencia, errores en la apreciación del tiempo, lapsus mentales o generalmente oír a los demás hablar de cosas que tú no recuerdas haber hecho, así como dolores de cabeza, arritmias, respiraciones agitadas sin motivo o abuso de alcohol o drogas, nada de eso, yo tenia la mente lucida, recordaba todo, no tenia crisis, ni tomaba nada, simplemente mi cabeza era muy imaginativa, me había creído mi personaje, y mientras fuera solo eso, Raúl dominaría todo.

Me llamó Madamme, tenia mi trabajo final, quería quedar para comentarme los detalles, al parecer era un trabajo especial, pero temiendo mis reprimendas admitió por teléfono que también quería verme en persona, le dije que solo si era en su casa, tenia ganas de ver como seria, obedeció mandado a una de la moles con un coche a recogerme, llegué a su casa, un chalet en una urbanización de las afueras, de esas con nombre propio, vallas y seguridad privada. Me abrió la puerta de su casa donde se quedaron las 2 moles, me recibió con un camisón de satén y una bata de seda, con su actitud altiva, cuando cerró la puerta se le cambió el rictus, agachó la cabeza y junto las manos por delante, totalmente obediente y sumisa. Si ella adoptó sin reparos su papel, yo asumí el mío de Zeus, cambié mi mirada ante su rostro, miraba de reojo, y me fui acercando lentamente, hasta olerla el pelo, la notaba temblar, tiritaba ante mi presencia, esa diosa del sexo, una puta experta que era una mujer de bandera y follaba como los ángeles, se encogía al sentir mi respiración en su cuello, le castañeteaban los dientes y se tenia que morder el labio para evitar el sonido. Sin duda las duras sesiones de sexo que tuvimos, la visión de mí destrozando a Geisha y la imagen final de mí, humillando a David, totalmente desatado expresando mi furia, la excitaban y la hacían tenerme miedo, pánico de actuar de cualquier modo y provocarme.

-ZEUS: no tienes por que temerme, si puedo ser temible cuando me enfadan, si te portas bien puedo ser bondadoso y dulce - la acaricié por el brazo con una mano y la levanté la cara para admirar su mirada, sumisa y de adoración, con los ojos vidriosos.

-MADAMME: si es lo que deseas, ser dulce y bueno, y crees que es lo que merezco, lo acepto, pero no es lo que yo espero - una lagrima cayó por su mejilla ante esa revelación, ella no quería que fuera así, pero no podía evitar sentirse atraída por mi y mi forma de dominio, como si fuera algo de su pasado que deseaba no echar de menos, pero que ansiaba encontrar, y lo obtenía solo de mí.

-ZEUS: ¿quieres que te castigue por apostar por mi sin mi consentimiento, pese a que se que es lo que quieres y a que después, me avisaras del embuste de David? - asintió rompiendo a llorar - vaya, me dejas en un dilema, te mereces el castigo, pero se que lo deseas, mi impulso seria no dártelo para hacerte sufrir.

-MADAMME: pero mi señor, quizá no deba castigarme, y si premiarme por lo de David - negociaba de forma inteligente, sin que pareciera que lo hacia.

-ZEUS: es cierto, pero pese a que te portaste bien…. - cambié mi cara a enfado-…… era tu deber para con tu dios, no te portaste bien, hiciste lo que tenias que hacer, ¿o acaso me hubieras vendido? - la besé en el hombro para dar esa sensación de serenidad ante la acusación, eso la hizo temblar de horror.

-MADAMME: no………no, jamás, tienes razón, hice lo correcto y no me merezco premio por ello, siento si os he ofendido al decirlo.

-ZEUS: eso ya es otra cosa, si comprendes que no eres dueña de ti en mi presencia, que todo lo que hagas o digas debe ser lo que yo deseo, ira bien, y te follaré como se que deseas, pero tendrás que ganártelo……- la quité la bata, dejándola solo con el camisón que apenas le pasaba de los muslos, metí mi mano por debajo y agarré el coño por encima de la ropa interior, notándolo encharcado - ves como eres mi perra, aun no te he tocado y estas húmeda de deseo.

-MADAMME: dígame que desea y se lo concederé, haré lo que usted ordene por ganarme el derecho a ser castigada - su respiración se aceleraba ante los movimientos de mis dedos en su prenda intima.

-ZEUS: por ahora, desnúdate, déjate los tacones, y vete a ese sofá de allí, comienza a masturbarte, y mientras me vas diciendo los detalles del ultimo trabajo - obedeció como devota que era, se tumbó boca arriba y abrió de piernas, comenzando a masturbarse de forma rápida y caliente, como si yo no estuviera allí, sentado a su lado, mirándola atentamente.

-MADAMME: es una clienta nueva, es la mujer más guapa de toda la clientela……….uf…………, la conocí en la fiesta de David, es una modelo de 24 años………….ummmm………esta muy buena y paga muy bien, casi 20.000€ - se estaba calentando con sus dedos hábiles.

-ZEUS: ¿y por que una modelo guapa y rica necesitaría de nuestros servicios?, tendría a 40 hombres con solo chasquear los dedos, y menos tan caro.

-MADAMME: es por su forma de ser……..ummmmmmmm uf………..de joven abusaron de ella, empezó muy joven de modelo, a los 16 , y ese mundo es mucho más grotesco de lo que se piensa la gente, la drogaban y abusaban de ella desde el principio ……- se metía ya 3 dedos en el coño, acariciándose los senos -………. ahora dejó a su mánager y a su padre, que la desvirgó y violó desde los 14 años, es tan famosa y conocida en el mundo de la moda que fichó por una gran firma y ellos ahora son los que la llevan, sin abusar ni nada, taparon aquello para no dañar su imagen, pero ella ufffffff, ella ya no es una mujer normal, tiene necesidades especiales.

-ZEUS: ¿y que necesidades son esas?

-MADAMME: necesita ser violada, desde que se separó de esa gente ha estado con hombres pero todos la tratan como si fuera de cristal, es una muñeca rota, necesita sentirse humillada y sucia, abusada para poder disfrutar, esta desesperada y acudió a nosotros al verte follar en la fiesta, ¡¡¡DIOSSS!!! - se corrió, pero como no había dicho nada de que parara, siguió - ……..lo hemos montado para que este fin de semana este libre, y tú la violes todo el fin de semana.

-ZEUS: no soy ningún salvaje, no pienso follar si no es consentido.

-MADAMME: no es una violación en si, solo un juego, mira la carpeta de la mesa, hay un contrato firmado de consentimiento, con unas fotos suyas, esta todo atado y preparado para que parezca real, pero no lo será, en el móvil tienes un vídeo, como te gusta, con ella firmando el contrato y conmigo comentándoselo todo - lo hice, vi y leí el contrato, con cláusulas millonarias en caso de que se sepa por ambos lados, firmado por Madamme, nuestro abogado y ella, al ver las fotos no me lo creí, era una famosa modelo nacional, evidentemente no puedo decir quien era, pero la había visto durante semanas en los carteles de las paradas de autobús y en anuncios de TV, acababa de lanzar una campaña de unos grandes almacenes, era una belleza espectacular, rubia de ojos azules y cuerpo perfecto.

-ZEUS: vaya, como son las cosas, ¿esta dulzura y belleza necesita que la violen?

-MADAMME: más que eso, ella llegará el viernes a casa y has de asaltarla en el portal, luego una vez dentro de su casa has de hacer lo que te de la gana, átala, azótala, maltrátala, todo sin pasarte ni marcarla, vive de su cuerpo, ella actuará como si fuera real y has de hacer lo mismo, durante todo el fin de semana es tuya y puedes hacer lo que quieras, ella aceptó, solo impuso que cuando estés con ella, tendrás que ponerte la colonia de su padre, son las únicas condiciones - se volvió a correr en su mano pero estaba tan excitada que apenas se le notó - el domingo por la tarde solo has de liberarla e irte. ¿Si es que deseas hacerlo?

-ZEUS: pues así se hará, pero asegúrate de que no me afecte de ningún modo negativo.

-MADAMME: no es la 1º vez que hacemos algo así, no habrá problemas, me ocuparé personalmente.

-ZEUS: me gusta lo del vídeo, me lo voy a mandar a mi móvil para asegurarme, esto es portarse bien, me gusta como lo has llevado todo - sin dejar de masturbarse camino de su 3º corrida, levantó la mirada sonriente ante mis palabras.

-MADAMME. ¿estas contento? - preguntó ilusionada.

-ZEUS: mucho, has obedecido y me has hecho una buena ofrenda, y eso merece premio, por ahora súbete encima mía y fóllame, no quiero que me beses ni me toques a mi o a ti, solo ensártate y viólame tú a mi - yo ya me estaba masturbando con el rabo fuera ante su énfasis en el dedo que se hacia, de un bote me cabalgó y se ensartó toda, su mirada era de logro y satisfacción.

Obedeciéndome me violó, su cadera cogió ritmo de crucero apoyada en el respaldo del sofá, al poco de empezar se corrió, pero no dejó de moverse, alternaba movimientos, unas veces estaba subiendo y bajando todo el cuerpo y otras solo movía la cadera, quería ganarse el castigo así que no paró hasta verse agotada casi 1 hora más tarde, justo lo que quería, Zeus podría ser un dios pero yo era humano, si me arrancaba de 0 podría no llegar a matarla, si dejaba que se desfondara 1º seria sencillo, aun así la dejé un rato más cabalgándome exhausta hasta que me corrí dentro de ella, dejándola otro minuto subiendo y bajando por mi polla flácida hasta volver a ponérmela dura, había gritado mucho y la había abierto todo lo posible.

-ZEUS: así me gusta, eras un perra buena y obediente, te has ganado que te destroce como se que deseas - se le iluminó la cara, la besé dándola permiso para devolvérmelo, su lengua era una maravilla y no aguantaba más sin probarla, su forma de usar la boca era obscenamente atractiva, seguía sacándome la lengua y chupándomela como una felación, eso me encantaba y le daba azotes continuos en el culo cada vez que dejaba de penetrarse mi miembro, mis manos se fueron a su pecho, trabajándola los pezones, sabia que la volvía loca así que lo hice a conciencia, dejándolos duros y mordidos, eso la aceleraba el ritmo, y se corrió sobre mi otra vez - vaya, me has dejado bañado, antes de abrirte el culo déjamela limpia con la boca, y recuerda no usar las manos.

Me gustó como obedeció, como si le quitaran dinero cada décima de segundo que tardaba en reaccionar, se arrodilló ante mi y poniendo las manos a su espalda engulló hasta ¾, pera seguir apretando poco a poco, casi le saco la mandíbula del sitio, pero logró metérsela toda, con claros gestos de atragantarse, aguantó así unos segundos, dejó que su boca sintiera todo mi poder y que fuera babeada por ella, lo hizo varias veces para luego ir trabajando el tronco con sus labios y el glande con su lengua, era una gozada, y aun sin las manos me estaba llevando a mi 2º corrida, en vez de hacerla parar, la agarré la cabeza y me la follé por la boca, al inicio le dejaba la cabeza inmóvil pero después la movía en contra de mis embestidas sacándola una arcada con cada una de ellas, nunca antes me había follado a alguien por la boca, me la habían chupado de 1000 maneras y se lo habían tragado otras tantas, pero eso no era una mamada, era penetrar un agujero, aun así lograba jugar con su lengua, regurgitaba saliva y se le llenó la cara de babas, me corrí en su boca explotando en numerosos chorros que cayeron directos a su garganta, ella no paraba de tragar, le moqueaba la nariz, sollozaba pero aun soltándola la cabeza siguió chupándomela hasta volver a ponérmela dura.

-ZEUS: eres muy buena con la boca, pero ahora me toca a mi, y te voy a partir el culo, te voy a meter algún consolador por el coño para que no te relajes, ¿donde tienes?

-MADAMME: en mi cuarto, arriba.

-ZEUS: coño, pues vamos a tu cuarto - me la subí encima y la penetré, se cruzó de piernas rodeándome y besándonos como posesos, la subí, dándola fuerte en cada descanso contra una pared, y al llegar a su cuarto me la bajé de encima, se fue a un cajón a buscar el consolador, la muy animal volvió con uno tan grande como la mía, yo me fijé en el cuarto, era un cama normal pero toda la habitación estaba llena de cadenas, cuerdas, postes y esposas, con trajes de hombre de látex, hasta un columpio.

-MADAMME: ¿este le vale a mi señor?

-ZEUS: perfecto, vaya cuarto, te gusta ser una dominatriz por lo que veo.

-MADAMME: si, desde que dejé las calles la única forma de sentirme viva es dominando a hombres.

-ZEUS: y ahora estas a mis pies.

-MADAMME: pero es que tú no eres un hombre, eres un dios, eres mi dios - se hundió en consolador en el coño hasta metérselo entero.

-ZEUS: pues este dios te va a atar a ese columpio y te va a dar por el culo hasta que ruegues perdón. Se le erizó la piel y se echó a temblar de nuevo, hasta ahora me había contenido, pero me cansé de juegos.

Ella se puso en el columpio y se ató sola, quedó tumbada boca arriba, con las piernas bien abiertas a una altura perfecta de penetración, con el coño abrumado por el descomunal consolador allí alojado, me acerqué y no trabajé su ano, directamente apreté el glande hasta penetrarla, gritó descosida a la que le di un tortazo en una teta, cogí unas pinzas unidas con una cadenita, y se las puse en los pezones, quedaban tirantes y con cada movimiento de las cadenas tiraban más, eso la hizo chorrear, ayudó a que mi penetración fuera más rápida en el culo, pero cada centímetro que la abría era un movimiento de cadenas y un placer descomunal en ella, la dejé dentro hasta notar cierta comodidad, entonces la balanceé hacia delante y la ensarté con la vuelta, eso casi la hace desmayar al momento, de gusto, explotó en otro orgasmo haciéndola tirar de las cadenas y tirar de sus pezones, la sujeté un poco de las caderas y saqué a la bestia, ya no habría piedad, ¿quería el castigo?, lo iba a tener, aceleré sin parar hasta coger el ritmo de animal salvaje y no paré, se corrió tantas veces que perdí la cuenta y pasó más de 1 hora y media hasta que me volví a correr en su culo, el movimiento de las cadenas la ponían tan excitada que no se desvanecía, disfrutaba como una perra pidiendo más.

-ZEUS: déjate las cadenas de los pezones pero estoy viendo allí unas maderas, póntelas y túmbate sobre la cama boca abajo, a ver como se te ve así.

Disparada lo hizo, tardó unos segundos, el aparato era complejo, pero se tumbó sobre la cama y se lo terminó de colocar, era una especie de cepo para la cabeza y las manos, pero que al quedar atado, otro madero aprisionaba sus pechos, até la cadena a un gancho del artilugio, y con cada mínimo movimiento le tiraba de los pezones, luego puse la almohada en su vientre para levantar la cadera y até sus piernas con unas esposas, una a cada lado de la cama a unas varillas, dejándola totalmente abierta de piernas, le metí el consolador de nuevo en el coño, se le había medio salido, y admirando el agujero que se cerraba en su ano, la volví a arremeter, totalmente expuesta y estirada de piernas, como las gimnastas en el suelo, recibió mi ira en su culo, la azotaba sin parar cada vez que se corría, que era muy a menudo, sin soltarla, sin dejar de destrozarla el culo, empezó a no disfrútalo, a sufrirlo, a desear que acabara, pero era justo lo que quería, aguantar mi violencia, deseaba ese dolor, y yo se lo di, se lo reventé hasta que se desmayó, allí paré y la abofeteé la cara hasta despertarla, para seguir abriendo el culo, rogaba por su vida, lloraba y pedía clemencia, pero sus ojos y su cuerpo decían otra cosa, pedían más y su cuerpo se hacia fuerte contra mis penetraciones, goteando fluidos sobre la cama, para cundo me corrí en su culo de nuevo la mujer balbuceaba cosas sin sentido, estaba ida y rendida, destrozada, pero sonreía, era lo que quería, le gustaba sentirse arruinada, al sacarme la polla vi sangre mezclada con fluidos y semen.

-ZEUS: eres una buena mujer, y ahí tienes lo que has pedido, tu dios te ha reventado y suerte tienes de que deba irme, por que si no seguiría toda el día…… – mentira, estaba cansado -…..mándame todo de la modelo cuando lo tengas, y si todo va bien, esta será la última vez que me veas.

-MADAMME: no……yo quiero……….no………..no vayas…………..soy yo……..no……..- la quité unas ataduras, y la dejé en ese estado, ida y convulsionando lentamente, como pequeñas descargas eléctricas que la hacían doblarse sobre si misma.

Me di una rápida ducha y le dije a una de la moles que Madamme había ordenado que me llevaran a casa, así lo hicieron, una vez cerca de casa descansé todo lo que quedó de día, pensé en mis próximos días hasta el viernes, mi cita con la modelo, para el lunes Ana ya estaría aquí, y tenia muchas mujeres a las que saciar antes de retirarme. Llamé a mi Leona, y quedé en ir a verla por la tarde del día siguiente, por la mañana quedé con Yasmine, habían vuelto del eterno viaje con sus padres, igual que su madre, estaban ya en casa pero su padre se había quedado por temas de negocios en brasil, me dijo que no había ido nada bien y que discutieron mucho en el viaje. Se me ocurrió una buena despedida de mis colombianas, la acompañé a su casa donde estaba su madre, y según entré se desnudó avisando a su madre, buscando unos tacones grandes, su madre bajó sonriendo y desnuda, dios, hacia mucho que no las veía, estaban buenisimas, el culo de Yasmine pedía guerra y las tetas de Eleonor aun más, comentamos algo del viaje de pasada pero yo no tenia tiempo, las azoté un par de veces recordando que yo era su macho, me las llevé a la piscina y allí me ventilé a las 2, Yasmine estaba desentrenada y apenas me duró una hora por el coño, pero Eleonor venia de intentar recuperar a su marido, bien entrenada, la tuve que abrir el culo y activar a la bestia para sacarla gritos de dolor y pasión, en menos de 30 minutos cayó agotada e ida, era la 1º vez que sintió a la bestia en su interior, para entonces ataqué de nuevo a Yasmine, ya recuperada, y la di su parte de bestia por el culo, era una gozada reventar contra esas nalgas jóvenes, y la hice comerle las tetas a su madre hasta sacarla aquellos pezones enromes que me volvían locos, estuve toda la mañana follándomelas sin parar, sacando a la bestia de vez en cuando y haciéndolas rogar por piedad, pero siempre que terminaba con una la otra le cogía el relevo, me corrí comiéndole las tetas a la madre, estaba deliciosa, y gritaba guarradas sobre lo mierda de su marido y que yo era mucho más hombre que él. Terminamos los 3 en la cama de matrimonio, fornicando como conejos en celo, Yasmine fue la 1º en irse al país de nunca jamás, fue Eleonor la que recibió por las 2, sacándola orgasmos que la partían por dentro, y matándola al final sacando a mi bestia, salió una fuente de chorros y gritos que llenó la cama antes de caer ida junto a su hija, ambas inconscientes y medio dormidas, con espasmos musculares, y sonriendo de manera perversa. Yo aun tenía aguante, pese a disfrutarlas, mis últimas sesiones con Madamme me dieron unas ansias desorbitadas.

Comí en casa de las colombianas mientras dormían en la cama, y me fui sin despedirme, dejando una nota, ya sabrían de mi, me fui directo a casa de mi Leona, que me esperaba desnuda, se me subió encima y me pidió que la destrozara como las ultimas veces, no necesitaba pedirlo, iba para ello, su lengua y su boca me la pusieron dura y abriéndola por el culo la destrocé 3 horas, si con las colombianas me coartaba, no lo haría con ella, corté la cadena y dejé que la bestia se divirtiera con aquel trozo de carne que tenia delante, tuvo suerte de mi sesión matutina, si no, hubieran sido mucho más cruel con ella, aun así la terminé por dejar agotada y muerta en la cama, dormí con ella para volver a follármela de forma animal al día siguiente, no sabia si me iba a despedir de ella también pero me aseguré de que fuera la follada más animal que pude darla, la desgarré por dentro, y notaba como ella se derretía, la empotraba contra la pared y la clavaba mi polla hasta el fondo sacándola alaridos que los vecinos oían, fui la fuerza de la naturaleza que sabia que ella soportaba, a duras penas. Al acabar, se sostenía en pie de milagro, la dejé irse a trabajar al instituto, pero casi no podía ni con su alma, llamé a un par de chicas más que andaban detrás de mi y me las tiré en una orgía en casa de la Leona, con ellas no tuve ni que sacar a la bestia, no me duró ninguna más de 30 minutos a un ritmo normal, las que se dejaban por el culo las hundí hasta el fondo desgarrando y haciendo sangrar a más de una, tanto yo como ellas quedamos satisfechos, era una buena forma de acabar. Me fui dejándola una nota igual a las colombianas, y pidiéndola disculpas por las chicas de la habitación que se encontraría al volver a casa, y que seguiría siendo mi Leona, siempre que quisiera serlo.

Kira – Acecho.

Ya estaba en paz, despedido de todo, de mi vida de cazador, me preparé para una ultima fiesta, una ultima cacería, la modelo, busqué y leí en Internet videos y relatos de violaciones, (así descubrí esta pagina), quería información, trucos e ideas. Es asombroso lo fácil que resulta encontrar información de algo delictivo y que estaba tan socialmente repudiado, no es algo que me haya gustado ni haya planeado nunca pero supongo que como todos, he fantaseado con ello, sobretodo antes de la operación, coger a una chica mona, llevarla a un lugar apartado y obligarla a follar contra su voluntad, pero yo no soñaba con la violación, no me atraía forzarla, si no que al comenzar la mujer se diera cuenta de lo buen amante que era y terminara dejándose, la violación era solo para romper el hielo, ese hielo que por entonces me parecía infranqueable, pero jamás pasé de allí . Ahora tenía que hacerlo, y pese a que fuera consentido, un escalofrío de conciencia repasaba mi cuerpo. También busqué información sobre ella, la modelo, llamémosla…..Kira, había estado muy ocupada desde que fichó por una gran firma, antes había hecho trabajos esporádicos, pero también me sorprendió la facilidad con la que se puede saber un montón de cosas de gente con cierta fama, el rumor sobre los abusos de su padre y el manager no era tan secreto, aunque encontré referencias similares a casi todas las modelos que encontré, o todas pasaron por lo mismo o era un rumor extendido entre el gremio. Era una autentica belleza, un mujer despampanante, pasó de ser modelo infantil a una mujer de bandera, medidas perfectas 90-60-90, y en alguna web o paginas rosa vi fotos en top-less o descuidos con minifaldas, sesiones de fotos, cosas así, pero ninguna referencia a novios o pareja. Madamme me mandó la dirección y la hora del viernes, todo estaba listo.

Llevé una mochila, con algo de ropa y algunas cosas que podría necesitar, me presenté 3 horas antes de la indicada, estudié la zona, revisé cámaras, incluso llevé algo de propaganda para meterme en el portal sin llamar la atención, me fue inútil, era un chalet a las afueras, estudié la distribución, incluso me asomé por encima de la verja de su casa, pensé en que zona seria mejor atacarla y como hacerlo sin llamar la atención de nadie, no seria difícil, eran chalets muy alejados unos de otros, observé el dispositivo de seguridad, la alarma, tenia que esperar a que la desactivara para actuar pero debía hacerlo antes de que cerrara la puerta, pero si venia en coche tendría que meterme detrás de él al abrir la verja y atacarla al abrir la puerta del chalet, amagué e hice tiempos, de cuanto tardaba desde x lugar a la puerta o de x sitio a la verja del aparcamiento, lo tenia todo calculado, me quedé agazapado detrás de unos arbustos a la espera, la sorpresa llegó cuando se presentaron un par de coches y camionetas de agencias de noticias, paparazzis, eso me podía acarrear problemas, no podía abordarla con 10 periodistas en la puerta, pensé en llamar y cancelarlo todo, no podía hacerlo con ellos allí, pero Zeus volvió a escena, me coloqué una gorra hacia atrás, una cinta que llevaba para las llaves me la colgué al cuello y le puse un bono de transporte publico dado la vuelta, con una cámara de fotos que me llevé, salí y me dejé ver, daba el palo como fanático o admirador perturbado más que como periodista y me preguntaron de donde era, solté alguna de las web donde había visto fotos de Kira, y pareció colar, de hecho hasta me felicitaron por los logros de alguna de las fotos de la web de otros personajes, era todo muy falso, se notaba que me adulaban para soltarme la lengua por si tenia noticias frescas.

Por lo que yo sabia, esa no era la casa de Kira, si no un chalet de alguien que se lo prestó para ese fin de semana, devolviéndoles el favor les sonsaqué que alguien de la agencia de modelos les vendió la información del lugar, tácticas habituales, pero era información que solo sabían unos pocos, me preguntaron como la conocía yo, me vi algo pillado, gané tiempo preguntado si aquel coche del fondo era ella, se pusieron como locos a grabar y pedir paso en directo a las TV, falsa alarma, me lo había invitando, luego les respondí que tenia algo comprometedor contra la agencia de modelos, se me echaron encima como buitres acosándome para que les dijera el qué, aludiendo al compañerismo y al buen rollo, pero me negué fingiendo soberbia, me hizo mucha gracia como los tenia a todos comiendo de mi mano con solo decir palabras falsas. Por desgracia mi madre se tragaba esos programas de media tarde, programas rosas hablando horas de si a tal famoso se le cae un diente o si a tal famosa la duele un pie, de más joven lo miraba con ella o lo tenia de fondo haciendo deberes, siempre me parecieron escoria, y ahora que los tenia delante, más, eran basura que se tragaba cualquier bulo, y eso me dio una idea, comencé a inventarme historias como que a tal modelo le pasaba esto, o que tal agencia me había dicho no se que, y a los pocos minutos hacían conexiones en directo soltándolo como verdades inamovibles. Me separé fingiendo una llamada, y pese a que me dejaban de lado, notaba sus miradas clavadas en mí, suponían que si yo estaba allí, era la mejor conexión con la noticia. Me aparté lo suficiente para hacer una llamada.

-MADAMME: dime, ¿algún problema?

-ZEUS: unos 20 en realidad, esto esta lleno de periodistas, me he hecho pasar por uno de ellos pero nos los tenemos que quitar de encima si quiero actuar.

-MADAMME: mierda, ¿como se han enterado del lugar?

-ZEUS: por lo visto a alguien de la agencia le gusta más el dinero que la intimidad, eso ahora no importa, lo que interesa es que los tengo comiendo de mi mano, se creen que tengo hilo directo con alguien, y se tragan lo que les diga, tengo que darles algo para que se vayan de aquí.

-MADAMME: te escucho.

-ZEUS: busca en tu catalogo, una chica de las tuyas que de el pego como Kira, haz que se vista como una de esas famosas, con gafas grandes y bien tapada para que no de el cante, mándala a alguna cafetería lejos de aquí, sácala unas fotos de refilón, sin que se note el cambio, y mándalas a alguna agencia de noticias anónimamente, yo me los trabajaré aquí para que se lo traguen, y hazlo rápido, falta poco para la hora 0.

Según colgué, pensé fríamente, y volví al grupo, estaban atentos de mi llamada, puse cara de decepción, al instante me preguntaron, me hice de rogar pero al final les dije que lo del piso era información falsa, que nos la habían colado a todos, era un bulo para dejarla irse a su casa tranquila, y hasta que la habían visto en una cafetería de la otra punta, se rieron de mi, se mofaron por que me habían engañado y ellos tenían información de 1º mano de que ella acudiría a esa dirección. Aun así, llamaron por teléfono y preguntaron a sus fuentes, en realidad nadie la había visto desde hacia horas, se quedaron en su sitio, volviéndose locos con cada coche que pasaba siendo todos falsas alarmas. A la media hora les empezó a sonar el móvil a todos, mensajes y llamadas, las fotos de una mujer que se parecía a ella en una cafetería les estaban llegando a todos, eso, y mis palabras, bastaron, con una prisa descomunal empezaron a recoger e irse, quise subirme a alguno de los coches pero como ratas que son me decían que me buscara la vida y con sorna me agradecieron el soplo, se iban riéndose a carcajada limpia mientras yo fingía desesperación cuando me estaba tronchando de todo aquello por dentro. Llamé a Madamme.

-ZEUS: ha colado, gran trabajo.

-MADAMME: gracias, pero en cuanto lleguen y la vean sabrán que no es ella y volverán a la casa, no podemos dejar que estén fuera mientras montas el numerito.

-ZEUS: cierto, habla con tu chica, dila que cuando les vea llegar se tape la cara y se suba a un taxi, que no la vean la cara de cerca, una vez en el taxi mándala a la casa de verdad y que repita el proceso, entrando en la casa que se tape, después solo tiene que quitarse el disfraz y salir tranquilamente como una vecina más, se quedaran a las puertas de su casa vacía todo el fin de semana.

-MADAMME: dalo por hecho.

Di un par de vueltas a la finca, más lejos y más cerca para asegurarme que no quedaba nadie con una cámara con lente de gran alcance, si fuera cosa mía yo lo hubiera hecho, pero por lo visto esa escoria no tenia presupuesto para ir dejando gente por si acaso. Retomé la situación, guardé mis trastos, me coloqué un pasamontañas en la cabeza, y me escondí detrás del seto, mi corazón se aceleraba con el paso de los minutos, me sudaban las manos y estaba nervioso, cada coche que pasaba casi me daba un vuelco el corazón, hasta dudé de mi capacidad de resolución, pero eché rodilla a tierra, me calmé y dejé que Zeus se ocupara de esto, seria un cabrón peligroso, pero tenia los nervios de acero. Por fin, sobre la hora acordada, pasó un coche y se paró enfrente de la casa, se quedó allí, parado, unos segundos mientras la verja del aparcamiento se abría, y una vez abierta se quedó parado, no se si queriendo darme tiempo o si por que tenia dudas, no podía ver bien desde mi posición el interior del coche, parecía haber solo el conductor, al final aceleró despacio y entró, sabia que tardaría 7 segundos en colocarme en la puerta y que tendría que girar el coche hacia la derecha, eso le dejaba un ángulo muerto al aparcar que tendría que aprovechar antes de que saliera del coche, pasó el coche, y eché a correr bajando el pasamontañas, llegué apurado cuando se cerró la verja pero aun así me dio tiempo a pensar 1 segundo antes de entrar, ese segundo casi me cuesta un disgusto, por los pelos entré y me puse agachado detrás del coche, siguiendo su maniobra hasta que aparcó, aprecié mejor el interior, solo había el conductor y vi una melena rubia, “es ella”.

Se quedó unos segundos con el motor en marcha, luego otro minuto con el coche apagado, no quería que me viera así que no sabia si dudaba o me daba tiempo a actuar, no podía asomarme a ver, la puerta de su casa quedaba de su lado, así que según salió, y andó, yo me moví para quedar siempre en su ángulo muerto, podía adivinar su posición al verla los pies por debajo del coche, se bajó y se quedó parada, veía unos bonitos pies metidos en unos zapatos de tacón dignos de la inquisición, eso solo podía generar dolor, y el terreno de gravilla no ayudó a su andar, se dio la vuelta y fue a la puerta, hasta la zona de cemento, allí me asomé con cuidado y vi su caminar, era modelo, sin duda, “vaya manera de menear el culo”, que estilo y que elegancia, su cabello rubio caía hasta su cintura, liso, en un brazo doblado llevaba el bolso y una chaqueta, en la otra mano jugaba con las llaves, el torso lo cubría una camiseta de mujer, azul, de tela fina y reflectante, muy ajustada, y de remate una minifalda rosa, con algo de vuelo, que apenas la tapaba el culo, desde mi posición agachada pude admirar su ropa interior, la parte abultada de su coño y al subir 2 escalones de la entrada, un tanga rosado que la separaba las nalgas, sus andares casi me hacen olvidarme de por qué estaba allí, reaccioné a tiempo mientras intentaba abrir la puerta de su casa y me arrastré hasta la parte de los escalones, detrás de una planta, muy cerca de ella, casi la oía respirar, pero no me veía, yo a ella si por los huecos de la planta. Abría la puerta lentamente, lo hacia de forma torpe y adrede, esperando que pasara algo, abrió la puerta y sonó la alarma, me asusté un poco pero la vi abrir la tapa del teclado, marcar el numero, que anoté mentalmente, y esperar, recibió el aviso de la centralita pidiéndola la palabra clave.

-KIRA: pradera

-CENTRALITA: muy bien, disculpe la molestia y tenga usted un buen día - sonó el teclado y se puso todo en verde, ella se quedó parada con la puerta abierta, se dio la vuelta y se puso a mirar, me quedé inmóvil.

-KIRA: pues nada, otro que se raja, otra vez será, al menos tengo el finde tranquilo - estaba claro que creía que me había cagado, y no lo iba a hacer.

Se dio la vuelta y fue a entrar en la casa, yo pegué un salto y me puse detrás de ella, no me oyó, así que se dio la vuelta para cerrar y entonces vio mi corpulencia a menos de 1 metro de ella, se sobresaltó y su 1º instinto fue cerrar la puerta al verme con el pasamontañas, puse el pie mientras ella intentaba cerrarla, a la 3º le di una patada a la puerta que la abrió del todo golpeándola y tirándola al suelo, su cara era de autentico pánico, ya se había dado por rendida creyendo que no pasaría nada, y mi sorpresa la abrumó, trató de ponerse en pie pero los tacones no la dejaban, se dio la vuelta gateando, dejándome una visión de su culo al aire de primera, trataba de huir torpemente mientras cerré la puerta, caminé despacio hacia ella, dejando que el pánico entorpeciera más sus movimientos, la alcancé pasado medio pasillo, la agarré del pelo de la cabeza y tiré de él, se había sacado el móvil del bolso, pero de los nervios ni lo había desbloqueado, se lo cogí y lo estampé en mil pedazos contra la pared.

-ZEUS: ¿a quien querías llamar zorra estúpida?

-KIRA: por favor, yo no, déjeme…….- ponía las manos en posición defensiva, tratando de calmarme, pero sonreía.

-ZEUS: ¿donde esta el dinero? - se le cambió la mirada y se borró la sonrisa - ¿QUE DONDE ESTA EL PUTO DINERO? - quería confundirla, que pensara que era real, que no buscaba violarla, si no robar.

-KIRA: no…….no lo sé, no es mi casa, no se si tienen o no, por favor….- la levanté de los pelos poniéndola en pie, la hice caminar, sujetaba mi mano para que no la hiciera daño.

-ZEUS: vamos a dar una vuelta por la casa, me vas a decir donde esta el puto dinero……- lo hicimos, la zarandeaba y la amenaza con golpearla, pero ya estaba suficientemente horrorizada, el no saber si era real o no la tenia confundida, repasé cada habitación rompiendo teléfonos fijos, revisándola el bolso, y mirando por las habitaciones, suplicaba que la soltara, que me daría lo que llevaba en el bolso, pero no la hacia caso - ¡¡me cago en tu puta madre, aquí no hay nada!!

-KIRA: ya se lo dije, no es mi casa, me la han dejado el fin de semana, suélteme por favor, le daré lo que llevo encima y se podrá ir.

-ZEUS: ¿te parezco un ratero de poca monta?, ya he mirado tu bolso y 400€ no es botín suficiente, quiero joyas, TV, lo que se pueda sacar de esta casa de ricos.

-KIRA: aquí no hay nada de valor, solo estamos nosotros, por favor coja lo que quiera y se podrá ir………- estaba temblando y cada vez que tiraba de su pelo la veía suplica en su mirada, estaba muy confundida.

-ZEUS: mira, más te vale que saque una buena tajada por que si no me enfadaré, y no quieres verme enfadado, te voy a atar a ese radiador, y voy a poner esta casa patas arriba, como no encuentre nada vendré a por ti, y te haré daño, ¿entiendes?

-KIRA: si, pero por dios, no me haga daño, soy modelo, puedo pagarle mucho más, déjeme que salga y vaya a un cajero…- la solté un bofetón.

-ZEUS: puta de mierda, ¿te crees que soy imbécil?, no vas a salir de aquí, ya me has dicho que tenemos todo el fin de semana para nosotros solos, y me lo voy a cobrar de una forma……….- la metí la mano en el culo-……. o de otra, modelo - lamí su cara de forma grosera.

-KIRA: ¡no, no por dios, suéltame desgraciado, no me toques! - la solté otro bofetón.

-ZEUS: deja de gritar o te arranco el tanga y te lo meto en la boca para después cerrártela con cinta - se hizo el silencio al instante, sollozaba y me miraba tratando de adivinar, realmente no sabia si era el juego o no, había logrado eso, sus maravillosos ojos azules me penetraron.

Cogí unas bridas que llevaba en la mochila, la tiré al suelo y la até de pies y manos, dejándola atada al tubo del radiador, me moví por toda la casa, haciendo más ruido que rompiendo cosas, dejándola pensar, me eché una abundante cantidad de la colonia que me habían indicado, la que usaba su padre, ya había jugado lo suficiente, su mirada era de pánico absoluto, y quería tranquilizarla, hacerla saber sin decírselo que era un juego. Volví cabreado, enfadado moviendo los pesados muebles y sofás delante de ella, haciendo una exhibición de fuerza para amedrentarla, cuando le di la vuelta al sofá de 3 piezas de una brazada su cara era de horror, se encogió sobre si misma, se hizo un bola sin querer mirarme, totalmente sobrepasada. Me acerqué a ella lentamente notando como con cada paso se pegaba más al radiador, la quise levantar la mirada pero hacia fuerza para no hacerlo, temía ver algo para reconocerme, me pegué a ella y la agarré la cabeza para que me mirara, sus ojos azules estaban abiertos, cristalinos y húmedos, algo rojos de haber llorado, o de estar a punto de hacerlo, entonces lo notó, olió la colonia, inspiró fuertemente para reconocerla y cerró los ojos, se tranquilizó al entender que era yo y no otro cualquiera, y a la vez noté como su cuerpo se excitaba, fue un atisbo, su lenguaje corporal cambió ligeramente, sacó un poco la espalda del radiador, y dejó su cuerpo relajado sobre el suelo en vez de estar en tensión.

-ZEUS: aquí no hay nada de valor, nada, salvo tú…….- la agarré del pelo, una cosa es que supiera que era un juego y otra que dejara de jugar, abrió lo ojos de nuevo pero su mirada era de calentura, de hecho notaba como se frotaba los muslos uno contra otro - ….nos lo vamos a pasar bien este fin de semana, pero estoy harto del pasamontañas, y como no puedes reconocerme te voy a poner una cinta en los ojos, y no te la quitarás en todo el fin de semana, si lo haces te mato, ¿me entiendes? - asintió relamiéndose.

Saqué de la mochila una cinta preparada, la eché unas gotas de la colonia y se la puse, la até fuerte y me aseguré de que no viera nada, la solté del radiador y la cogí de la atadura de las manos, la levanté los brazos y la pegué contra una pared, de frente a mi, totalmente estirada sobre la pared, casi colgando, saqué un cuchillo, uno de estos de metal sin filo, de los que se usan para untar la mantequilla o cosas así, pero ella no lo sabia, y al notar el frío acero sobre su mejilla se estremeció.

-ZEUS: bien, ahora que he captado tu atención, voy a poner unas normas, si te portas bien, me iré el domingo, te dejaré libre y seguirías con tu vida, esto no habrá pasado, pero si no las sigues te cortaré esa bonita cara, y el cuerpo, de forma que no volverás a trabajar, ¿entiendes, modelo? – asintió - bien, la 1º es que no gritarás a no ser que yo te lo pida, si entiendo que pides ayuda de algún modo, te cortaré - jugaba con el filo del cuchillo por su cuello - la 2º es que vas a ser mi puta, harás y dirás lo que yo quiera y no tendrás opinión ni personalidad, eres mi zorra y harás lo que yo quiera que hagas, o te cortaré - le rompí el 1º primer botón de la camisa - si sigues esas 2 normas sencillas, todo ira bien, pero si tratas de huir, si tratas de pedir ayuda, si te quitas la cinta de los ojos, me desobedeces o simplemente no me obedeces inmediatamente, ¿adivina que te haré……..?

-KIRA: me cortarás……- le rompí el 2º botón de la camisa, atisbando ya su sujetador, su respiración se agitó, su precioso escote subía y bajaba de forma sensual.

-ZEUS: bien, puedes hablar y pedir cosas, te dirigirás a mi como “amo”, si quieres ir al servicio o si necesitas comer o descansar puedes pedírmelo, yo decidiré si te portas bien y mereces ser atendida, y ten en cuenta que te voy a violar y vas a saber lo que es un hombre de verdad - le pegué mi polla semi erecta en el muslo, eso la hizo morderse el labio, eso y oler la colonia en mi y en la cinta, podía notar como se contoneaba para frotarse los muslos - ¿probamos si lo entiendes?

-KIRA: si……..amo - la rompí otro botón dejando ya su sujetador rosado a la vista, quedando solo 2 uniendo la camisa en su vientre plano.

-ZEUS: bien, me gusta que las zorras como tú colaboren, por que vas a colaborar.

-KIRA: si, amo - la metí el cuchillo en la boca asustándola.

-ZEUS: no era una pregunta, vas a colaborar…………- le metí la mano debajo de la falda notando gotas de fluidos cayendo entre sus muslos -…….. y veo que te gusta jajajajjaa, eres una zorra como todas las demás - la rompí con las manos la camisa del todo, dejándola con el sujetador bien a la vista, como si fuera una chaqueta, “que preciosidad de tetas”, se merecía cada € que cobraba - dilo, admítelo, que eres una zorra y te gusta esto.

-ZIRA: lo soy, amo, soy una zorra, como todas y me gusta ser así - su cintura se contraía, sentir mis dedos en su coño la encendieron.

-ZEUS: así es, y yo se como tratar a las zorras, ahora mismo te voy a dar una ducha fría, no vas a disfrutar hasta mañana de mi rabo partiéndote, y lo vas a disfrutar no lo dudes, ahora te voy a dejar toda la noche atada a la barra de la ducha, y por tu osadía de contestar sin ser un pregunta, te voy a dejar con los tacones puestos, vestida, empapada y vas a estar toda la noche así, ¿estas conforme?

-KIRA: si, amo.

-ZEUS: genial, por que me da igual que no lo estés.

La bajé los brazos y como si fuera un perro, dando saltos por la brida de sus tobillos, la llevé a uno de los baños, la dejé orinar, delante de mi, su torpeza me ponía a 100, la metí en una ducha, resbalaba con los tacones, y la quité las bridas poniéndole unas esposas con terciopelo, para no dejarla marcas, en muñecas y tobillos, la levanté los brazos y se los pasé por la barra de la ducha, la esposé y me aseguré de que fuera seguro, encendí la ducha, dejé el agua tibia y coloqué la alcachofa en su soporte, mojándola la cabeza y todo el cuerpo, empapando su camiseta, su sujetador, la mini falda y sus piernas, destrozándola los zapatos, serian caros supongo, y me puse de pie a su lado, viendo como no paraba de escupir agua que le caía en la cara, la visión de una mujer mojada siempre me la ponía dura así que me hice una paja allí, delante de ella, sin que supiera si estaba o no, la veía tratando de forcejear, soltarse o moverse, pero estaba inmóvil de pies y manos, cada intento la costaba un resbalón y trataba de alzarse de nuevo…….no me siento orgulloso pero reconozco que me corrí como un animal ante esa visión tan desvalida, tan frágil y tan erótica.

Después me fui al salón, recogí mis cosas y me instalé en una habitación, me di una buena ducha, estaba empapado en sudor, me fui a vestir, pero pensé. ¿Por que?, así que me quedé en pelotas, y no me puse nada más en todo el fin de semana, se hacia tarde y me fui a acostar, echándola un vistazo antes y durante la noche, me llevé un portátil y pasé gran parte de la noche riendo y viendo películas o series, haciendo ruido para hacerme notar y que me oyera de lejos, o pasándome en silencio para ver que hacia. Con los tacones era bastante alta, así que le dio para darse la vuelta y sentarse en el borde de la ducha, pero con los brazos totalmente estirados, las últimas veces la vi dar cabezadas, se dormía de pie, se le cansaban las piernas, “no es mi problema”, así que me fui a dormir cerca de las 4 de la mañana, me desperté sobre de las 10, últimamente con 6 horas de sueño rendía todo el día y no quería tenerla más tiempo así, hice algo de ruido para que ella notara mi presencia con mi rutina higiénica y me fui a por ella, la visión era de película de miedo, ella estaba colgada de los brazos, doblada de las piernas y con el agua corriendo por todo su cuerpo, movía la cabeza así que estaba despierta, pero no podía ponerse de pie.

-ZEUS: buenos días zorra, te has portado bien, así que te voy a quitar las esposas, y te voy a dejar que te adecentes en el baño, pero estaré justo a tu lado ayudándote, no hagas tonterías por que tengo a mi amigo de metal a mano - se lo pasé por el escote.

Al soltarla las manos cayeron rendidas, la ayudé a levantarse, pese a estar el agua tibia estaba tiritando, la quité la ropa, despegándola de su cuerpo húmedo, la desnudé despacio, dejando que se apoyara en mi, de lo contrario se caía, al quitarle el sujetador vi sus tetas al natural, mucho mejor que en fotos, tersas, firmes y bien colocadas, con unos pezones pequeños pero tiesos del agua, la minifalda cayó a plomo al abrirla un poco la cremallera, estaba empapada, me dejó un cuerpo perfecto ante mi, solo con los zapatos, la venda y un tanga diminuto de color rosa, oscuro debido al agua, se lo fui quitando desenrollándolo por sus largas piernas, descubriendo un coño rasurado y un culo que rozaba la excelencia, era la provocación hecha mujer, aun así me pareció que le faltaban 2 o 3 kilos para ser idonea, al menos para mi, se le notaban demasiado las costillas o los huesos de la pelvis. Noté como se estremecía ante mis manos, la sensación de vulnerabilidad era total, y me eché gran parte de la colonia, ella lo olió y se volvió a estremecer, lo tenía que pasar muy mal cuando iba por la calle o en el trabajo y alguien más usaba esa colonia, seguro que con solo ese olor podías tirártela.

La dejé sentada en el retrete, y mientras orinaba le quité los zapatos, estaban para tirarlos, ella suspiró de placer, no se si por el alivio en su vejiga o en sus pies. Al volver a ponerla de pie quedó sensiblemente más abajo que antes, con los zapatos casi era de mi altura, pero sin ellos le sacaba una cabeza, era alta pero yo era mucho más grande y corpulento, la dejé beber de un zumo que había en la nevera, tragó como si le fuera la vida en ello, la volví a meter en la ducha, pero esta vez yo con ella, la cogí por detrás dejando que mi rabo se notara entre sus piernas y encendí la ducha de nuevo, esta vez más caliente, y nos duché juntos, ya me había duchando pero puesto a sujetarla y sobarla ¿por que no otra?, se sostenía bien ya sin los zapatos, el zumo la dio energías, aun así la apretaba contra mi mientras enjabonaba los 2 cuerpos, me pasé 1º hora repasando todo su contorno, acariciando y frotando sin parar aquella belleza, cuando me centré entre sus muslos la oía gemir, y cuando le separaba las nalgas con mi mano enjabonada puede sentir como se corría en mi mano, llevé mis dedos a su boca obligándola a chupármelos, con el cuchillo en su nuca, los chupó temerosa, más que por lo que le clavaba en la nuca, por lo que sentía entre sus piernas, la tenia durísima, sobresalía y se había abierto paso entre sus largas piernas, jugaba, con miedo a reprimendas, a apretar los muslos, tuve la tentación de reventarla allí mismo, pero me contuve, dios sabrá como, me centré en el champú y su cabello, no ayudó, con cuidado se lo saqué todo dejándoselo por fuera de la venda de los ojos, era un rubio platino excitante, aun más mojado. Al salir de la ducha le acerqué su bolso y a tientas sacó algunos objetos de higiene personal que vi al registrarlo, delante de mi se secó de la ducha, se cepilló los dientes y se echó crema por todo el cuerpo, me pidió permiso para lavarse la cara quitándose la venda, se lo negué.

-ZEUS: vamos a ir abajo, he preparado un desayuno, unos zumos y cereales con tostadas, yo voy a desayunar eso, tú me la vas a chupar, si logras que me corra y te lo tragas antes de que termine, te dejaré desayunar - le puse el cuchillo en el cuello - pero como noté tus dientes no se volverá a saber de ti, ¿has entendido?

-KIRA: si, amo.

-ZEUS: bien, me gusta verte desnuda, no te volverás a poner nada de ropa si yo no te lo mando, me molesta no poder quitarte la venda, eres realmente guapa, no como esas modelos que viven de fotografías retocadas o maquillaje ostentoso - era cierto- pero por ahora bastará. Camina delante de mi, te iré dando indicaciones, y si fallas te azotaré en el culo.

Obedeció sin más, iba palpando las paredes, le iba dando indicaciones y cuando se equivocaba o tardaba en reaccionar la partía mi mano en sus nalgas, las primeras veces gimió de sorpresa, o dolor, pero después el calor y rojez de sus nalgas se elevó, y disfrutaba, incluso fallaba a propósito. La coloqué al lado de la mesa y la golpeé para dejarla de rodillas sobre la silla, tiré de su pelo hasta elevar el torso y me senté en esa misma silla, se apoyó en mis piernas.

-ZEUS: bien, que comiencen los juegos del hambre, te aviso, como muy deprisa, y si no haces que me corra, no solo no comerás si no que te volveré a poner los tacones y no te los quitaré.

Mordí una tostada para hacer el disparo de salida, ella palpó con sus manos hasta encontrar mi polla tiesa como una vela por culpa de la ducha, según la palpó se le abrió la boca de forma grotesca.

-KIRA: mi amo, tiene usted una polla enorme - me eché una gotas de colonia por el cuerpo.

-ZEUS: ya lo sé, no necesito de adulaciones de zorras como tú, empieza a chupar o ve pensando en unos zapatos dolorosos.

-KIRA: amo, no se si me entrará en la boca.

-ZEUS: no es mi problema, aunque si quieres, puedo ayudarte - le metí el cuchillo en la boca de nuevo, tirando de su mejilla, si fuera cortante seria hasta peligroso - ¿te ayudo?

-KIRA: no, muchas gracias amo, pero ya me las apañaré.

Y bien que lo hizo, comenzando una masturbación a 2 manos, besaba y chupaba la punta de mi polla, mientras yo desayunaba lentamente, la iba a dejar ganar esa carrera, y ciertamente la visión de una supermodelo con los ojos vendados agarrando con ambas manos y chupando mi rabo a duras penas, me estaba encantando. El ritmo de sus manos iba aumentando, y la cantidad de carne que engullía también, dejaba que mi miembro chocara de lado con su cara y le penetrara hasta inflarla los mofletes, luego trabajaba mi tronco con su lengua, y al oler las gotas de colonia se volvió loca, se abofeteaba la cara con mi rabo, y no de forma cariñosa, no se muy bien como su boca se abrió tanto, engullendo media polla entre arcadas y babas, estuvo 20 minutos fuera de si tragando falo como poseída hasta que me corrí en su boca, ella cerró los labios y dejó que la llenara de semen, cuando terminé se separó y tragó de forma clara, “me encanta ese sonido”.

-KIRA: ¿ya me dejas desayunar papa?........... - se dio cuenta de su lapsus -…….. digo amo.

-ZEUS: no, tranquila, me gusta esa palabra, mejor que amo, que es muy fría, llámame papa - sonrío ante mi ocurrencia.

-KIRA: este bien………..papa, después de haberte comido la polla hasta tragarme tu semen, ¿me dejas desayunar? – lo decía contoneándose de forma sensual.

-ZEUS: perfecto hija mía, ven y siéntate en el regazo de tu padre, para que te de de comer.

Sonreía mucho, esa mujer no necesitaba ser violada, ahora lo veía claro, no quería dominio de macho, quería que yo fuera su padre y que su padre abusara de ella, una vez entendí eso, solo era cuestión de manejarla, la senté sobre mi regazo pegando su coño húmedo y su culo enrojecido a mi polla flácida, dándola zumo y cereales, le ofrecía de comer como si fuera mi hija, jugando con ella, Hablábamos como padre e hija y bromeábamos, a mi me costó seguirle el hilo, tenia un jaleo en la cabeza de cuidado, era Raúl, siendo mi personaje Zeus, que hacia de violador anónimo, que fingía ser el padre de una supermodelo. Me centré en ella, en cuidarla, mimarla y alimentarla bien, jugar de forma inocente pese a que sus movimientos me la estaban poniendo dura y ella lo notaba, ¿como no podría?

-KIRA: oye papa, se que es mucho pedir, pero me gustaría quitarme la venda, se que tú no quieres pero me hace mucho ilusión, hace mucho que no te veo ……..- no sabia que hacer, ella era consciente del juego, y en el fondo era la clienta, si quería pasar de una violación a una relación con su padre, tenia su derecho, ¿pero me podía permitir dejar que me viera?

-ZEUS: hija, sabes que me incomoda, desde la operación estética parezco diferente…….- improvise y probé si seguía el juego.

-KIRA: ya lo sé papa – una sonrisa enorme se dibujó en su cara - y si no quieres no lo hagas, pero me encanta que me folles mirándome a los ojos, y quiero que me folles ahora mismo - su cuerpo se echó para atrás y se frotaba contra mi poniéndomela dura hasta el punto de salir disparada entre sus muslos, mientras me besaba la mejilla - venga papa, solo quiero que me abras el coño como antes de separarnos, te echo de menos dentro de mi - sin duda la balanza de poder había cambiado, no era una dulce cría de la que habían abusado, era una despiadada mujer que obtenía lo que quería gracias a su cuerpo, o si alguna vez fue esa niña, ya no quedaba nada de ella, me recordó a Rocío, la zorra del instituto, la mujer que todo lo que creía tener era su físico y se aprovechaba de los palurdos de los hombres que babeaban por ella, pensé en volver a mi papel de violador, de dominante, de quitarla esa idea de la cabeza, pero me llamó más la curiosidad ver hasta que punto su padre o su manager abusaron de ella, o ella abuso de ellos.

-ZEUS: mira que sabes que no te puedo negar nada cuando te pones así……- asumí el papel de padre calzonazos -….. pero te lo tienes que ganar, te llevo al sofá y si te corres antes que yo te la quito, pero si me corro antes yo, te la quedas puesta.

-KIRA: si papa, eres el mejor…….- aplaudía y reía mientras se levantaba, tanteó con las manos hasta llegar al sofá y gateó hacia él, moviendo su culo de forma provocativa, la iba dando azotes en él mientras ella echaba la cabeza hacia atrás recibiéndolos encantada, al llegar se tumbó boca arriba y se abrió de piernas frotándose el coño mojado de excitación, era una manipuladora nata - venga papa, ven a follarte a tu hija.

Si era lo que quería, se lo iba a dar, el papel y la lógica me dictaban ello, esa preciosidad de mujer, una modelo que provocaba infartos a su paso estaba desnuda abierta de piernas y masturbándose, pidiendo que la follara como si fuera su padre, hasta Zeus tiene sus limites, me fui a por ella poseído, me dejé caer sobre su cuerpo besándola, y jugando con sus tetas mientras mi polla cabeceaba en la entrada de su coño.

-ZEUS: joder hija mía, me la pones a reventar.

-KIRA: pues fóllame de una vez, no seas nenaza, papa.

Metí mi mano en su coño, mientras jugaba con mi lengua en sus pezones, la trabajé y penetré un poco para prepararla, y cuando lo estuvo, la empalé como un soldado ataca al enemigo, no me sorprendió que a la 1º le entró toda mi polla, de muñeca de cristal no tenia nada, era una autentica guarra de 1º nivel, y me la follé más de 1 hora así, besándola por el cuello o los pechos, sin dejar de acelerar el ritmo de mi cadera y sacándola gritos de pasión y lujuria, la sujeté la cadera y aguanté un buen ritmo hasta empezar a notar sus espasmos, se corrió sin parar, se frotaba el clítoris mientras seguía siendo percutida.

-KIRA: joder papa, en la operación te agrandaron la polla, me estas partiendo como nunca, sigue así papa. sigue así papa, me he corrido pero aun quiero más, antes de quitarme la venda.

-ZEUS: te gusta que tu padre te destroce el coño ¿verdad?, ¿tu padre se esta portando bien contigo?

-KIRA: si, no quiero que te alejes de mi, sigue follándome hasta que te vacíes dentro de mi, quiero sentir el semen de mi progenitor bañándome por dentro.

El sexo era más bien normalito, pero la situación era explosiva, sus palabras eran de delirio, realmente estaba trastornada con el tema de su padre, siendo precavido me llevé la colonia y cuando estaba por reventar nos bañé a ambos con ella, ese gesto en si la volvió a sacudir el cuerpo en otro orgasmo, esta vez con un chorro de fluidos que me bañó, la metí la 5º marcha casi sacando a la bestia para terminar llenándola de semen, caí sobre ella sudando y ahogando sus lamentos con mi lengua.

-KIRA: joder papa, así da gusto.

-ZEUS: tu padre ya no es ese mierda al que manipulabas, ahora es un hombre de verdad y te va a hacer temblar todo lo que queda de fin de semana. Quítate la venda - lo hizo, y le costó unos minutos enfocar y ver bien, tenia algo de rímel corrido, pero sus ojos azules era un espectáculo, para cuando me vio, sonrío, yo ya estaba tieso de nuevo y sentándome me la subí a horcajadas encima.

-KIRA: papa, la operación te ha sentado genial, pareces mucho más joven y vigoroso.

-ZEUS: lo soy, no lo parezco, y si no lo crees vas a ver ahora lo que es follar de verdad.

La ensarté entera sacándola un gemido de gloria, bajé la cadera y le hice sitio, se retorció como una serpiente, le regalé mi mejor posición y comenzando suave fui subiendo las embestidas, paulatinamente, cogiendo mesetas de ritmo en las que la hacia temblar, se corrió varias veces mientras se movía como loca encima mía, quería llevar ella el ritmo, dominar a su padre con el sexo, pero yo no era su padre, saqué a la bestia y dominé a aquella yegua, aceleré hasta el máximo, hasta que el sonido de las pelvis chocando llenaba la sala y eran tan seguidos que no sabias cual era el final y cual el inicio, una penetración constante a alta velocidad que la abría sin parar, ya no se movía a los 10 minutos, se agarró a mi y soportó el vendaval, con un gemido constante, solo cortado para coger aire, y para sus explosiones en cada orgasmo, pusimos frente con frente y su mirada de azul cielo, llena de pasión y lujuria, me calentó aun más, tenia que sujetarla para que no saliera despedida con cada embestida, y cuando la electricidad de cada corrida la cruzaba, sus piernas trataban de zafarse de mi, pero no di cuartel, estuve una hora hasta correrme otra vez e ir parando poco a poco hasta notarme vacío dentro de ella.

-ZEUS: así folla tu padre ahora, y más vale que me respetes, aquí ya no manipularas a nadie.

-KIRA: lo que tú digas papa, ¿si me follas así quien te puede cuestionar?, dios, estoy llena de ti, de tu semen, de tu sudor y tus babas, me siento sucia, guarra……………… y feliz.

-ZEUS: pues vamos a la ducha, y allí te pienso abrir el culo - la di un azote para que se saliera de mí.

-KIRA: papa, con esa polla enorme no se si me va a doler, te la chupo otra vez y…….- la aplasté contra mi besándola y metiendo mis dedos en sus nalgas.

-ZEUS: he dicho que te voy a abrir el culo, soy tu padre, obedece.

-KIRA: si papi, como antes, me abrirás y me harás gritar de placer jijijiji - se fue corriendo, no entendía muy bien la relación con su padre, estaba claro que ella manipulaba, pero no era una femme fatale, solo quería hacer feliz a su padre y solo sabia hacerlo follando.

Cuando subí la visión de su cuerpo desnudo siendo masajeado me la puso dura al momento, entré y me coloqué detrás de ella, besándola el cuello y dejando que mi tronco frotara su coño goteante de agua, semen y fluidos, acariciándola un pecho con una mano, llevé mis dedos de la otra a su ano, con el agua y la excitación se lo abrí sin problemas y le metí el glande sin dificultad, al ir penetrándola es cuando noté presión, gritos y tensión, paraba y dejaba que se acostumbrara, después volvía a penetrar, así hasta tenerla totalmente empalada, de puntillas, suspirado, la dejé así hasta que sus pies se colocaron en el suelo del baño, arqueando su espalda y disfrutando de la sensación de plenitud, la agarré por las nalgas y las separé, notando cierto espacio, la bombeaba lentamente sacándola gemidos de gozo, fui aumentando el ritmo hasta volver a sacar a la bestia cuando le entraba toda del tirón, eso la mató, se acariciaba el clítoris mientras yo la percutía, se movía en contra de mi cadera para sentirse aun más llena, la dominé del todo, pegándola a la pared del baño, y totalmente recta y estirada sobre ella, la violé el culo sin compasión, en varios momentos me pidió que parara o que su padre no la trataba así, pero no lo hice, fue un martillo neumático que terminó por rendirla al placer y a disfrutar de aquella sensación, Al ir a correrme apreté el ritmo y de la fuerza de las embestidas terminaba levantándola los pies de la bañera con cada una de ellas, me vacié en su ano dándola un buen azote en el culo.

-ZEUS: así me gusta ahora, hija mía, y voy a reventarte así toda la tarde y mañana hasta que me vaya, asúmelo ahora mientras me voy a ver la TV, cuando quieras más, solo has de bajar y pedírmelo educadamente - me di una agua rápida para dejarme limpio y me fui al salón, dejándola confusa, tirada en la ducha.

No sabia si eso la gustaría o no, si mi forma de actuar la excitaba o la enfriaba, si me había pasado o no, 1 hora estuve viendo la TV, esperando a que ella se decidiera, o se recuperara, la había dado bastante fuerte aunque sin pasarme, ya era por la tarde cuando la oí andar detrás de mi, se puso enfrente y con la cara compungida me miró a los ojos con cara de niña buena.

-KIRA: papa, me gusta que me folles así, me hace más feliz que me partas con tu enorme polla, y quiero que, por favor, me vuelvas a abrir el culo, ”por fi”- tenia preparado toda eventualidad en mi cabeza.

-ZEUS: esta bien, si es lo que quieres, lo haré, pero antes vas a tener que ganártelo, ya no basta con que lo pidas.

-KIRA: ¿que quieres que haga papi? – se mordía un dedo mientras balanceaba una de las piernas abriéndola y dejándome ver su desnudez.

-ZEUS: hazme un pase de modelos, de ropa interior, ponte unos buenos tacones y demuéstrale a tu padre que sigues siendo mi pequeña.

Salió disparada al coche, desnuda y todo, temí que se fuera a escapar, la miré desde la casa, sacó una maleta y la metió en la casa, me sentó en un sofá y dejó la maleta en la parte de la cocina, tenia 2 puertas así que iba, se ponía algo sexy y se hacia el paseo como modelo saliendo por una de las puertas, se paraba delante de mi y hacia poses y gestos excitantes, realmente conocía el oficio, luego se daba la vuelta y salía contoneando su culo, elevado por unos buenos tacones, por la otra puerta, me la puso dura desde el principio, los conjuntos eran de ropa interior fina y elegante, pero muy excitante, bragas de encaje, tangas minúsculos, sujetadores que iban decreciendo, ligueros, medias, corsés, camisones y corpiños, sumados a sus hábiles y estudiados gestos, me fui a por la cámara, que ya había usado con ella con los ojos cerrados, y la puse en modo grabación, era un espectáculo memorable, aun así me aseguré de no dejar de grabar y enfocar el sofá, pasado un rato me harté, la tenia muy dura y sabia que solo una mujer me calmaría, y esa supermodelo inestable con un complejo de Electra del tamaño del Himalaya, iba a ser mi víctima, me escondí detrás de la puerta, cuando ella salió a la siguiente, se quedó parada buscándome, la asalté por detrás, la metí mano de mil maneras masturbándome con su trasero.

-ZEUS: has calentado a papi, y ahora te va a hacer gozar - sonrío.

La aparté el tanga que llevaba, ni se lo bajé, simplemente se lo dejé a un lado y la penetré por el coño desde atrás, la sujete fuerte y la masacré, su posición aprisionada y sus tacones la tenían a una altura perfecta para desatarme y así lo hice, no paré de golpear hasta sacarla un orgasmo que casi la desvanece, empapó sus piernas con su fluidos mientras yo seguía percutiendo, sonando el “chop chop” de mi polla en su inundado coño, se apoyaba en mi brazo que la tenia agarrada y trataba de subirse a él, ganar espacio para que mis penetraciones no la llegaran tan dentro pero eso solo me calentó más, gemía gritando que su padre la estaba destrozando y que le encantaba, cuando le arranqué el 2º orgasmo se dejo ir, la tuve que sujetar y dejarla a 4 patas sobre el sofá, me eché gran parte de colonia y dejé que eso la reactivara de nuevo, entonces se la saqué del coño y la hundí en su ano, no me costó nada metérsela entera pero ella gritó de dolor, la di por el culo lo más fuerte que pude, sacando a la bestia de mi interior, azotándola sin descanso cuando notaba que me bañaba con su coño, estaba disfrutándolo como una perra, como la zorra que era, y yo también, empalar a aquella modelo me estaba volviendo loco, cada azote era un desahogo, cuando cayó su torso al sofá, exhausta y dejándose violar el ano, pegué el acelerón final corriéndome dentro de su ano de forma animal.

-KIRA: ¿estas contento papi? – hablaba entre suspiros, girando la cadera jugando a sacar y meter mi miembro flácido de ella.

-ZEUS: claro que si hija, eres un regalo del cielo, y te has ganado un buen descanso, pero esta noche te voy a volver a follar.

-KIRA: claro que si, quiero que mi padre sea feliz y se sienta orgulloso de mi.

Se dio la vuelta y gateando se me subió encima, estabamos agotados pero aun así nos besamos y chupamos por todo el cuerpo, notaba sus espasmos al notar mi falo creciente de nuevo en su vientre, y la volví a follar por el coño de cara, clavando nuestras miradas y viendo como disfrutábamos el uno del otro, el ritmo de sus caderas aceleró, su pelvis tomó vida propia, se sacaba casi entera mi rabo y se lo volvía insertar sin descanso, se corrió un par de veces ante el grueso de mi estaca y la fricción generada, mientras no dejábamos de besarnos con lengua cuando se paraba a descansar, al final ella no podía más y tomé yo el mando, la cogí en brazos y me levanté empotrándola en la pared, con ella en el aire, penetrándola hasta rendirla sobre mi, para terminar corriéndome en su coño, bañándola entera, ella me cogía la cara, se relamía de placer entre bocanadas de aire, le encantaba la sensación de que la llenara de leche.

Se nos había hecho tarde, comimos algo para retomar fuerzas y seguimos jugando como un padre y su hija, haciendo el tonto, estabamos agotados, nos dimos una ducha rápida juntos, casi la vuelvo a penetrar allí, pero ella jugaba a huir de mi, nos tumbamos en la cama juntos y se me echó encima, más que de forma sensual, de forma de niña, queriendo sentir el pecho de su padre, su olor, me hablaba, me decía que me echaba de menos pero que sus nuevos jefes no le querían cerca de mi, y que se sentía sola y poco querida, pero que conmigo allí todo cambiaría. Mientras jugaba con su pelo de seda, pensaba en lo rota que estaba la mente de aquella chica, la pena que me daba, no me creía que una cosa tan bella por fuera estuviera tan podrida por dentro. Creí que en algún momento follaríamos, pero se quedó dormida, por momentos se metía el dedo pulgar en la boca, era como un bebé, que al sentir el latido de mi corazón se tranquilizaba, se sentía segura, a salvo, se acurrucaba contra mi, nos tapé a los 2 con una sabana y mi calor corporal la sumió en un sueño dulce e inocente, tener a aquella modelo desnuda sobre mi no me calentó nada, es más, me generó cierta sensación de bienestar, el hecho de dormir con una mujer sin tener que tirármela me recordó a mis inicios con Irene, mi 1º novia, la que me dio lo que buscaba, esa paz interior que te da la confianza de otra persona en tu vida.

Casi me dormí siendo Raúl, eso se me pasó al despertar, tenia a Kira comiéndome la polla, haciéndome un 69, mi mala costumbre de empalmarme por las mañanas me demostró que todas las mujeres al verme así no podían resistirse a ello, ya me pasó con las colombianas o con mi Leona en varias ocasiones, la dejé hacer hasta que me corrí y se lo tragó, tuve la tentación de comerla el coño, ¿pero para que? sin decir nada se volvió a dar la vuelta y se recostó sobre mi pecho.

-ZEUS: así da gusto levantarse.

-KIRA: se que te gusta una buena mamada por las mañanas papa, y a mi me encanta chuparte esa pedazo de polla.

-ZEUS: sabes que esta tarde me he de marchar………- me abrazó muy fuerte.

-KIRA: si, pero no quiero, me siento feliz contigo a mi lado papa.

-ZEUS: pues aprovechemos el tiempo, hagamos lo que tú quieras, pásalo bien y así recordarás este momento cuando estés triste - yo pensaba en sexo.

-KIRA: claro papa, eres muy bueno conmigo, solo quedémonos así un rato más.

-ZEUS: esta bien…….- le concedí su petición, la verdad es que estaba cansado, llevaba 1 mes a todo ritmo, y la mamada me había dejado relajado, no me dormí pero si entré en ese estado de domingo por la mañana, de saber que no tienes que levantarte y por lo tanto, remolonear, de hecho los 2 lo hacíamos.

Estuvimos así un par de horas, fui al baño y me volví a la cama, y ella hizo lo mismo minutos después, la recibí con los brazos abiertos pegando su cabeza a mi pecho, acariciando su cabeza y su espalda, ella solo se dejaba hacer, estabamos disfrutando de esa tranquilidad, ella de mi tórax subiendo y bajando a cada respiración, y yo de la sensación de su cuerpo sobre el mío sin atisbo de erotismo. Me rugieron las tripas pasada otra hora, reímos por ello y me cogió de la mano llevándome a la cocina, allí comimos algo, mirándonos fijamente mientras nos alimentamos, casi no hacían falta palabras, de vez en cuando se echaba sobre mi para abrazarme, solo para sentir mis brazos rodeándola y mi olor. Al acabar de comer nos tumbamos en el sofá, yo detrás de ella, apoyando su cabeza en uno de mis brazos y agarrándome la otra mano con la suya, me la pasó por encima de ella, cubriéndola, protegiéndola, haciéndola sentir segura, al rato se dio la vuelta quedando cara a cara, dormitábamos, nos mirábamos a los ojos, y de vez en cuando nos dábamos algún beso en la nariz, la mejilla o la frente. Mis temores se hicieron realidad, no íbamos a follar más, pero eso, aunque me hubiera gustado un polvo de despedida, me gustó, era dulce, inocente y cariñoso, cosas que llevaba mucho sin sentir, y supongo que ella también. Al final llegó la hora de irme, ella fue un lapa pegada a mi, no se separaba y jugaba a deshacer mi mochila cuando la hacia, la azoté el culo por traviesa, pero su forma de ser había retrocedido en el tiempo, era una cría de 10 años, me vestí con dificultades, ella se propuso ponérmelo difícil, me puse rudo, serio, y entendió que aquello debía de acabar, se puso un camisón para no ir en pelotas, y me acompañó a la puerta.

-ZEUS: adiós, mi pequeña, espero volver a verte pronto.

-KIRA: adiós no, hasta luego,……….papa - se acercó y me dio un tierno, suave y largo beso en los labios, se dio la vuelta y cerró la puerta lentamente hasta que la perdí de vista, me quedé parado en la puerta, analizando aquel fin de semana tan raro, a aquella supermodelo que pasó de querer ser violada, a ser controlada por el sexo de su padre y terminó siendo una niña que echaba de menos a su padre.

El camino a casa fue extraño, le mandé un mensaje a Madamme, informándola de que todo fue bien y de los gustos especiales de Kira, despidiéndome con un hasta pronto, que no me volviera a mandar trabajos y que hasta que yo no lo hiciera, no se pusiera en contacto conmigo de forma alguna, no tenia intención de volver a trabajar con ella pero nunca se sabe.

Pensaba en ese ultimo día con Kira, en lo a gusto que estuve, no diría felicidad, todo era un juego, pero si una sensación de armonía me arropaba, de haber encontrado en aquella casa una parte de mi, olvidada o aparcada, y me gustó darme cuenta de ello, de que pese a que Zeus era divertido, excitante y peligroso, no lograba llenar ese vacío, o no me hacia alcanzar esa sensación de plenitud que rocé esas horas abrazado a aquella mujer, sin malicia ni oscuridad, una mujer por la que pagarían millones, caerían reinos y desatarían guerras. Estaba cansado, agotado, hastiado de todo de nuevo, volvió la sensación al salir del instituto, aquella sensación de vacío, pero esta vez seria diferente, Ana llegaría pronto, y eso me iluminó por dentro, recordar que todo lo acontecido ese mes, era solo el camino, y ahora, llegaba a la meta.

Ana – El regreso.

Terminé el dichoso viaje de vuelta a casa, me estaba hartando del transporte publico, de los autobuses que se van en tus narices y de los transbordos malditos, si ya era difícil ir de mi casa en el extrarradio al centro, ir a cualquier otra zona era un suplicio, eran 2 horas perdidas de mi vida, pero era tiempo suficiente para que mi mente se amueblara de nuevo y esa vez no fue diferente, volvía de la casa de Kira, la supermodelo atolondrada con su padre, tan perturbada tenia la cabeza que me regaló un domingo de cariño y ternura, sin sexo, y eso me hizo echar de menos esa sensación, supongo que no solo fue eso, si no saber que en unas horas mi amada prima, Ana, estaría de nuevo a mi alcance, y saber eso me devolvió a mi estado natural. No soy ningún tonto, sabia de sobra que lo había idealizado todo, Ana, su cuerpo, el sexo que tuvimos, el tabú, y las sensaciones que yo recordaba, no eran 100% reales, pero no podía evitar ilusionarme. Llegué por fin a mi casa, nervioso por lo que me esperaba al día siguiente, nada más llegar estaba mi familia preparando la cena, mi padre se acercó y me preguntó.

-PADRE: ¿que tal el fin de semana con los amigos? - su forma de preguntar denotaba que se refería a chicas

-YO: bien - guiñándole un ojo, él, sonriendo, me ordenó ayudar a mi madre con la mesa.

Me fui a mi cuarto para ponerme ropa más cómoda, y dejé la mochila en un armario, por alguna razón me imaginé un cofre, un cofre dorado con terciopelo rojo por dentro, cogí una imagen mental de Zeus, y lo metí con esfuerzo en aquel cofre, se resistía, pero mi proyección mental de Raúl le obligó a meterse en ese cofre,

-ZEUS: “lo lamentarás, ya me necesitarás”

Oí resonar en mi cabeza al cerrar ese maldito cofre, eché la llave, le envolví en cadenas que aseguré con un candado, y le metí en un agujero que rellené de cemento, para después levantarlo en el borde de un barco en medio del mar.

-YO: “tal vez, pero si te necesito, tendré que ir a buscarte al agujero más profundo de mí ser, del sitio del que no puedas salir sin mi ayuda” - arrojé aquel bloque de hormigón al océano. No me negué volver a ser aquella persona, simplemente lo guardé, donde a nadie pudiera hacer daño, con la esperanza de no volver a necesitarlo jamás, simbolicé aquella imagen mental en guardar la mochila en el armario, y cerrar la puerta del mismo, quedándome absorto mirado aquella puerta, con el espejo de cuerpo entero, y mi reflejo en él. Pasó mi hermana y me vio así.

-HERMANA: ¿que haces tato? - salí del trance y me quedé mirando a mi hermana que llevaba el pan y los vasos a la mesa, mirándome como si estuviera loco.

-YO: tomar las riendas de mi vida - lo dije en serio.

-HERMANA: pues empieza llevando los cubiertos a la mesa, ¡vago! - se fue llamándome de tonto para arriba por el pasillo, aquel gesto de hermana mayor mandona me sacó una sonrisa de normalidad, volví a mirar el reflejo de mi cara en la puerta del armario, allí estaba Raúl, y solo estaba él.

Salí del cuarto con la misma sensación de cuando separas 2 imanes, me fui a la cocina donde estaba mi madre terminando la cena, la di un beso en la mejilla y cogí la cubertería necesaria, gritando por el pasillo si faltaba algo más, mi padre y mi hermana decían cosas que luego el otro negaba, ya que ya estaban, mi madre me dio un trozo de madera que usaba para dejar ollas o sartenes calientes en la mesa sin estropearla y me dijo un “tira”, con palmada en el culo, al llegar a la mesa faltaba la bebida, “como no”, discutimos, reímos, nos gastamos bromas y hacíamos el tonto, en definitiva, una comida de familia, por 1º vez en bastante tiempo me sentí bien, normal, retrocedí a antes de la operación, a ser un miembro más de la familia, y no una persona que pasaba por esa casa. Después de cenar recogimos y nos quedamos viendo una película, ni recuerdo cual era, la verdad, nos pasamos todo el tiempo hablando los 4 de mi vida y la mudanza, de mi nueva independencia y de las responsabilidades, mi padre era severo y quería que me centrara, mi hermana bromeaba con que en 3 días estaría rogando por volver a casa comido por la mierda, y mi madre solo me abrazaba y me daba besos, diciendo que siempre estaría allí para ayudarme, para ayudar a su pequeño. Casi me hacen llorar, a lo tonto, iba a dar un paso muy importante en mi vida, me despedí y me fui a acostar, estaba cansado y tenia ganas de recargar las pilas, por la mañana íbamos a terminar el papeleo con los dueños del piso, y por la tarde empezar a mudarnos, llegando Ana, y su familia, por la tarde de Granada, todo estaba planeado y mecanizado por mi madre, y por mi experiencia, eso era seguro de efectividad.

Me fui tranquilo a dormir, pero me costó coger el sueño, pensaba, mi mente no dejaba de fluir, iba a irme a vivir lejos de mi familia, más de 1 hora en autobús, con 19 años y sin trabajo, con mi mejor amigo y su novia, otro gran amigo y la amiga de mi prima, todo por Ana, por volver a estar con ella, pese ha solo haber estado juntos apenas 2 semanas en Navidades, pagando el aval casi yo solo habiéndome tenido que prostituir para lograr una cantidad exagerada de dinero. De golpe me di cuenta de la locura que había hecho, ¿y si Ana ya no me quería?, ¿o si yo no la quería a ella?, o peor, ¿si queríamos pero la familias se enteraban?, no éramos primos de verdad pero era como si lo fuéramos, al menos a ojos de las familias, ¿y los compañeros de piso? Una cosa es quedar, salir de fiesta, ir de vacaciones o quedarte a dormir en su casa, y otra vivir juntos. Supongo que me comí la cabeza un poco, ¿ pero quien no lo haría ante un paso así?. Al final me dormí, nervios naturales, y que lejos de crearme dudas, me devolvieron al terreno mortal, “que gracia tendría lograr las cosas, si fueran fáciles y sencillas”.

Me despertó mi hermana tirándome mis zapatillas del nº 47 a la cama, gritando y berreando por toda la casa, era hora de levantarse, fui al baño y luego a la cocina, desayunamos todos juntos y después mi hermana y yo fuimos a la inmobiliaria que llevó todo el asunto, teníamos cita con los dueños, mi hermana había trabajado fugazmente de agente de pisos a alquiler, así que me ayudó con el tema, de camino saqué el dinero al contado, Madamme me hizo el ingreso final de la modelo, tenia más de 100.000€ en la cuenta, lo hice aparte, dejando a mi hermana fuera del despacho del director para no suscitar preguntas, los cajeros no te dan la cantidad de 5.000€, ya en la cartera, salí de allí, iba bastante tenso, era mucho dinero, llevaba la cartera agarrada todo el tiempo y si se me hubiera acercado alguien a pedir la hora le hubiera reventado a patadas antes de salir corriendo, hasta empecé a sudar de la tensión. Menos mal que lo hice cerca de la inmobiliaria, al llegar ya nos estaban esperando, nos saludamos y nos explicaron como funcionaba la transacción, 1.600€ para la empresa, y 2 meses de fianza para los dueños, serian unos 1600€ al mes, con gastos incluidos, agua, comunidad, calefacción……etc. Entre 4 habitaciones, a 400€ por habitación se pagaba de sobra, ya que en realidad éramos 6 personas, se había pensado en pagar todo a partes iguales pero se pensó mejor que cada habitación pagaría sus 400€, y en las que vivieran 2 personas, 200€ por cada una, aun así yo ya había hablado con mis amigos de todo, incluidas mis intenciones con Ana, no podían meter la pata comentando que pensaba vivir con ella en una habitación y no solo, delante de la familia, así que yo pagaría 400€ aunque viviera con Ana, y la amiga de Ana solo 200€, pese a vivir sola.

Mi hermana revisó todo del contrato, y me dio el OK, había una lista con muebles y electrodomésticos que había en la casa ya, y que al irnos debían de quedar en igual estado o nuevo, contrato por 5 años renovables y con cláusulas de rescisión a cada año, pero los dueños estaban encantados con nosotros y si todo iba bien no habría problemas. Me fijé de nuevo en la mujer de la pareja de dueños, estaba buena, rubia, algo baja y embutida en unos vaqueros más ajustados de lo recomendable, “con algo de maquillaje y más escote no me importaría reventarla”, me descubrí pensando así, ese no era Raúl, me golpeé la cabeza, y cuadriculé de nuevo, como siempre que se me pasaba por la mente algo que mi conciencia no aceptaba. Al salir de allí con las llaves llamé a todos y les dije que ya estaba y que les invitaba a todos a comer, me sobraron 200€ así que quedamos en un restaurante chino de buffet libre y nos pusimos morados, necesitábamos energías para las mudanzas de por la tarde, si, podríamos haberlo hecho de forma calmada y paulatina, hacer la mudanza de las cosas de 1 persona al día, pero éramos jóvenes, ¿por que esperar?, lo planeamos todo para hacerlo en una sola tarde.

Comenzamos mi familia y yo, ya que yo tenia las llaves, y con el coche mi padre nos acercaría, en casa tocó zafarrancho de combate con mi madre, recoger, limpiar, hacer las maletas y decidir que llevar y que dejarme, habíamos preparado todo por encima pero ahora era la hora de la verdad, fue difícil decidir, pero no había demasiado tiempo, toda la ropa en un par de maletas, toallas y zapatillas, más un par de muebles: mi sofá, la cama de matrimonio, (la necesitaba de ese tamaño por mi corpulencia), una mesa, una TV y el pc con la videoconsola del momento. Mi madre hizo una caja con sartenes, una olla, platos y cubiertos, en un par de viajes lo metimos todo, mi fuerza era muy útil, y que toda la familia ayudara, más. Lo monté todo en la habitación más grande y alejada, y pese a la cantidad de cosas que llevamos, quedó algo vacío, pero contaba con ello, necesitaba ese espacio para las cosas de Ana, aunque ellos no lo supieran. Después llamé al resto y que fueran viniendo ya que iba a ayudarles, uno por uno y en unos 5 viajes conseguimos llevar todo al piso, ayudados por las familias y sus coches, para subirlo hasta el ático donde íbamos a vivir, por suerte el ascensor era amplio. Yo tenia la única llave así que la íbamos pasando, fueron todos colocando las cosas, dejando la habitación libre para Ana y su amiga.

Hagamos un ejercicio de visualización, éramos 6 personas.

1º Estaba yo, Raúl con mis 19 años, mi 1,92 de altura y mis 87 kilos, con el cuerpo bastante fibrado, no había grasa, tampoco marcaba músculo si no me forzaba, aunque si notaba ya la tableta famosa, solo si hacia mucha fuerza, me hizo gracia vérmela, estando gordo siempre pensé que eso yo no lo tenia, que yo era un bombón relleno, no una tabla de cacao, pero de tanto follar se me estaba quedando un cuerpazo, y la comparación con antes lo hacia más escandaloso aun, mis espaldas eran grandes y fuertes, mis brazos y piernas eran jamones, acostumbrados a 18 años de peso extra ahora me daba crédito, mis muslos y gemelos eran de jugador de fútbol y mi pecho hinchado debido a mi gordura previa ahora sobresalía de más, como un pavo cortejando constantemente, casi como un super héroe, altivo y que alardeaba de ello. Con mi actitud desvergonzada, socarrona y un bocazas nato incapaz de callarme en un momento incomodo solo por hacer la gracia, con mi maldita actitud de decir siempre la verdad de forma descarnada, fría y cruel, y todo el que no fuera así, era un cobarde para mí.

2º Estaba Ana, retomo mis palabras. Era alta, casi rondaría el 1,77, pelo negro azabache, largo, muy largo y liso, le llegaba casi a la cintura, suelto y con un flequillo andaluz, tapándola media cara, su rostro era una preciosidad de cara, esculpida en una tez algo oscura, debido a su origen gitano y el sol de Andalucía, resaltaba mucho el blanco de sus ojos, coronados por unos ojos marrones, que advertían trazas verdes, una mujer guapa, solo se podría ser quisquilloso con la nariz, la tenia algo afilada, Ella ya era una mujer, y que mujer, tenia las tetas bien colocadas, muy arriba, una tez morena de piel que me gustaba, con un pequeño tatuaje en la zona del apéndice, una media luna, y un trasero de nivel, una joven de 18 años de piel tostada, con unas tetas firmes y bien colocadas, nada excesivas y un buen trasero. Hay una actriz ahora por España, Hiba Abouk, que me recuerda un montón a ella, Ana tenía el pelo más largo y los ojos más marrones, pero muy similares. Era una cría inocente, inteligente y algo retraída.

3º Estaban Teo, mi mejor amigo, era la descripción física de un chico normal, 19 años, 1,80 pelado de altura, 68 kilos, moreno, guapete y con algo de tendencia a tener tripa, pero hacia mucho deporte, le conocí de jugar al fútbol de críos en el parque donde nos solían llevar nuestras madres. Era gracioso, del tipo de gente que te contagia de buen humor, que te sigue las bromas y con el que me llevaba genial, vago y pasota como yo, tenía su pronto tonto cuando bebía o se enfadaba por alguna tontería sin sentido.

4º Alicia, la novia de Teo, Ella era todo lo contrario, su personalidad era dominante pero dulce, 1 año menor que nosotros, pero infinitamente más madura, casi como una madre, inteligente, lista, divertida, atrevida y un encanto de persona, la conocí en el colegio con unos 10 años, me pidió que la ayudara con las conjugaciones de los verbos y de esa tontería nació una fuerte amistad. Físicamente era baja, 1,72 si acaso, guapa, con la nariz algo aguileña, unos ojos pardos preciosos y una sonrisa amplia y cautivadora, antes tenia el pelo más largo, castaño aunque le cambiaba a rubio con el sol del verano, pero se lo cortó, pasó de llegarle a la cintura a pasarle del pecho a duras penas, y pese a tener unas tetas bonitas y bien colocadas, quedaban en ridículo ante su espectacular trasero, tenia un culo y unas caderas de 1º nivel, enormes y voluptuosas nalgas, no le sobraba ni un kilo, la comparación famosa que se me ocurre es Jennifer Garner, la actriz americana. La mezcla de todo ello me llevó a llamarla más de una vez mi imagen de la mujer perfecta, y pese a odiar, o envidiar, a Teo por su suerte de relación con ella y darme de cabezazos por presentarlos, el paso del tiempo me llevó a tratarla como a mi hermana pequeña, eran la “pareja perfecta” del grupo, llevaban como 5 años saliendo y desde el principio se vio que estaban hechos el uno para el otro.

5º Estaba Manolo, pero por joder le llamábamos Manu, tantas veces que al final era su nombre, era 3 años mayor que nosotros, pero siempre se había juntado más con nuestro grupo, era grande, 1,86 y unos 100 kilos, le sobraba peso, pero era mono, rubio con ojos azulados, usaba gafas y lentillas, era el tío más divertido y listo de todos, con una rapidez mental superior, siempre hablaba muy deprisa, con gustos muy similares a Teo o a Mi, deportes, juegos, series, películas………. era muy receloso de su vida privada y siempre bromeaba con el hecho de que su madre les abandonó a su padre y a él, haciendo de ello algo más de lo que reírse.

6º Y estaba Lara, la amiga de Ana, por lo poco que la conocía, fotos y comentarios de Ana, era una hippie, su aspecto lo denotaba en las fotos que me enseñó Ana, era morena con el pelo corto y un pañuelo atado en la cabeza, un percings en la nariz, y otros en las orejas, con ojos marrones oscuros, era algo fea, pero más que por serlo, era que parecía bastante más mayor de su edad, los 18 años, parecía que había vivido ya varias vidas, y sin duda, alguna droga era la causa, aun así su cuerpo no estaba nada mal, vestía con camisetas sin mangas enseñando el sujetador claramente, se apreciaban tetas grandes, un cuerpo esbelto, con su 1,74 de altura, su culo y cintura no eran nada del otro mundo, en parte por que siempre iba con pantalones abultados y una riñonera que le afeaban la figura. Su forma de ser me sorprendió, esperaba una “kin ki”, una ”malota” de barrio “chungo”, y en realidad era un calco mío según Ana, sincera y ruda pero con buen corazón, soltando burradas, hablando sin filtro con gente que apenas conocía, con una manía persistente de abrazar. De hecho, por las redes sociales iniciamos una relación fuerte durante ese mes, casi parecía que estabamos pendientes el uno del otro al publicar cosas. De nuevo una comparación física acertada, más o menos conocida, seria Roko, una cantante española de un talent show, pero sufriendo los estragos de los porros en la cara y una 110 de pecho.

Volvamos a la mudanza, entre tanto ejercicio, yo esta chorreando sudor, llevaba un pantalón fino de deporte y una camiseta vieja, con el calor que una hacia a finales de septiembre en Madrid, me quité la camiseta, los chicos de las familias me miraban admirando mi cambio y alguno con confianza llamándome chulo. Las chicas de igual manera se fijaron en mi, pero a diferencia de ellos, ellas comentaban a escondidas sobre mi, con mi madre atenta a sus palabras, con orgullo de lo que oía, eso a mi no me gustaba, no entendía el por que ahora merecía alabanzas de mujeres y el orgullo de mi madre, solo había perdido mucho peso, ¿acaso tanto importa eso hoy en día? No pensé que quizá hablarían de mi polla y de mis andanzas sexuales, pero tampoco me interesaba, ninguna merecía mi tiempo ahora, salvo alguna madre y sobre todo la hermana mayor de Alicia, Mara, una chica 5 años mayor y muy mandona, casi como mi hermana, con un cuerpo apetecible, ya habrá tiempo de hablar de ella.

Estabamos metiendo parte de las cosas de Alicia en el ascensor, mientras los familiares estaban arriba revisando la casa y ayudando una vez que subíamos los jóvenes las cosas, los chicos andaban peleándose por las escaleras con un somier que no entraba en el ascensor, se oían sus indicaciones y sus risas por todo el rellano, mientras que mi padre y algún otro familiar se quedó fuera con los coches y las cosas que faltaban por meter, sin saber por que, me fue concedido el honor de meter las cosas en el ascensor, subir con ellas y descargarlas, seria por mi fuerza o mi capacidad espacial, lograba meter muchas cosas en cada viaje, en uno de ellos al meter una mesa y un sillón, junto con bolsas, me quedé atrapado detrás, Alicia, que andaba por allí, se metió conmigo en el ascensor para desde el otro lado ayudarme a mover cosas para salir, pero algún vecino le dio al botón, y el ascensor subió, le pilló de pie encima del sillón y del tirón casi se cae, logré atraparla en el aire y se venció hacia mi pecho desnudo y sudoroso, riendo apoyándose en mi, iba con una camiseta vieja que enseñaba medio hombro y unos shorts amplios hasta medio muslo.

-ALICIA: upsss, perdona hijo, que susto.

-YO: tu ten cuidado y no nos chafes la inauguración.

-ALICIA: ya, claro, lo que nos faltaba jajaja, estas pringoso - se secó la mano en su propia camiseta después de tocarme el pecho.

-YO: jajaja lo siento, aquí el amo del ascensor sufre lo suyo - en estas se paró el ascensor, dando un bote que hizo que ella se venciera sobre mi otra vez, se abrió la puerta y apareció un señor del 3º, mirándonos, viendo a una joven vencida sobre el pecho desnudo y sudado de un joven entre muchos muebles y maletas,

-VECINO: perdón, no quería molestar - y cerró la puerta, Alicia y yo nos miramos pariéndonos la caja por la confusión.

-YO: ¿que se habrá pensado el hombre?

-ALICIA: pues esta claro………

-YO: jajaja ¿tú y yo?

-ALICIA: oye, ¿que me pasa algo malo o que? - frunció el ceño.

-YO: jajaja no mujer, si eres una preciosidad, pero eres mi hermanita pequeña……..- la abracé cariñosamente, para mí fue inocente, tenía mucha confianza con ella, aunque supongo que percibió el bulto de mis pantalones, pese a estar en reposo era tan grande que se notaba incluso así -……. además mi corazón ya tiene dueña.

-ALICIA: pues vaya afortunada esa tal Ana, más la vale portarse bien contigo o la haré la vida imposible.

-YO: te doy permiso para ello jejeje, pero tranquila, es un sol……….- la di un beso en la frente y la abracé de nuevo, un abrazo de nervios por el paso en mi vida de mi parte, y su abrazo de agradecimiento por mi esfuerzo para lograr el piso.

Llegamos a la 4º planta, por fin el ático, donde abrió la puerta mi madre, mirando y analizando más como sacar aquello, que a nosotros, Alicia se dio la vuelta dejándome su culo pegado a mi cintura, si no fuera yo y si no fuera ella diría que lo hizo a propósito, pero en mi cabeza no entraba esa opción, y ayudándola con mis manos la hice saltar el sillón y salir por la puerta ayudando a mi madre a despejar la salida mientras yo cargaba los muebles pesados con ayuda de algún familiar, una vez sacado todo, bajé un par de veces más a recoger el resto, ya no quedaba nada más, todo estaba arriba ya, así que todos subieron a colocar sus cosas, a charlar y reír, compramos unas cervezas y refrescos para picar y los dejé a todos arriba, quedándome abajo solo con mi padre, le encantaba quedarse siempre en un 2º plano, apartado del resto, en silencio, mirando al horizonte, y a mi me gustaba acompañarlo, queriendo aprender que placer sacaba de ello, aun hoy no lo sé, pero he seguido haciéndolo.

Estabamos esperando noticias de Ana y su familia, “estaban llegando”, me estaba mandando mensajes todo el viaje, ya estaban por Madrid, y los nervios me mataban, estabamos los 2 apoyados en el coche, en la calle, esperando ver en la lejanía el vehículo que atisbé en Navidades, mi padre se percató de mis ansias.

-PADRE: ¿que te pasa hijo, tienes dudas?

-YO: ninguna, estoy nervioso, pero no por que dude, si no por que quiero que esto empiece ya.

-PADRE: es un paso muy importante y eres muy joven, aprende a disfrutar.

-YO: eso intento.

-PADRE: mira, sabes que no soy muy dado a dar palabras de cariño, pero eres mi hijo y te quiero, no puedo mostrarte mayor orgullo que diciéndote esto,……… te has convertido en un hombre, un tipo del que me siento orgulloso, del que se que me puedo fiar y que no me decepcionarás, de lo contrario no dejaría que te fueras de casa tan pronto, se que no he podido darte una buena vida, con lujos, pero te he criado lo mejor que he podido - le miré, su cara era como si me estuviera contando una batalla de las suyas de joven, como si no tuviera importancia lo que me decía, pero sus ojos le delataban.

-YO: eso es por que me han educado bien, todo lo que soy, lo que he sido y lo que seré, os lo debo a mama y a ti, y pese a que no hayáis podido darme un vida ostentosa y opulenta, siento que no habría podido tener mejores padres, que me habéis dado cariño y me habéis enseñado a ser un buen hombre, tu me has enseñado a pensar por mismo y a ser quien yo quiero ser, a soñar y trabajarme esos sueños, y eso no se da con dinero, si no con amor ………- nos miramos como nunca antes lo habíamos hecho, y como jamás lo hemos vuelto a hacer, con una mirada profunda de amor, cariño, respeto y orgullo.

Nos abrazamos conteniendo las lagrimas, al menos yo, y no era fácil ponerme blando, dándonos esos golpes de macho en la espalda que decían mucho más que mil palabras, se me viene a la cabeza la palabra honor, pero no se como encuadrarla, son sentimientos, difíciles de explicar. Nos quedamos de nuevo apoyados en el coche, mirando calle abajo, esperando su llegada; vi de refilón como algunos familiares bajaban del piso y recogían sus coches, se despedían y se marchaban, mi madre y mi hermana bajaron y nos acompañaron, Ana me mandó un mensaje, ya estaban cerca, pidiendo indicaciones finales, doblaron la esquina, y vi el coche, por poco me da un vuelco el corazón, me puse en medio de la acera con los brazos extendidos para que me vieran, mi padre detrás, haciéndoles indicaciones de un hueco que había cerca para aparcar, llegaron a nuestra altura, el coche se paró buscando maniobrar, pero antes si quiera de iniciar la aproximación, se abrió una puerta del coche, apareció Ana saltado casi en marcha del vehículo, salió corriendo hacia mi, lo vi a cámara lenta y con un hormigueo que me hacia temblar las piernas, hasta saltarme encima colgándose de mi cuello, la recibí de brazos abiertos apretándola contra mi, sintiendo su cuerpo en mis brazos y su pelo en mi cara, dejándola colgada del aire con las piernas dobladas hacia atrás, comenzamos a dar vueltas sobre nosotros mismos.

-ANA: ¡¡¡¡PRIMOOOOOOOO!!! - gritaba mientras sonreía y se balanceaba con mis movimientos, “dios, que sensación tan maravillosa”, una oleada de sensaciones me tumbó, su largo pelo azabache me hacia cosquillas, su olor a coco, su cuerpo colgado de mi y sus pechos aprisionando el mío, fue de película.

-YO: hola peque, te he echado de menos………- la besé en la mejilla dejándola por fin en el suelo.

-ANA: y yo a ti más……………. Amor - me susurraba al oído, sin dejar de abrazarnos.

Iba vestida con una camiseta de tirantes, una camiseta abierta remangados los brazos y unos pantalones cortos, dejando sus piernas, parte de sus brazos y de su pecho al aire, con su piel morena, rozando una tez árabe, seguía perfecta, como en mi mente, y su actitud me tranquilizó, llevaba esperando ese momento tanto, o más, que yo.

-MADRE: pues anda que no te ha echado de menos, ¿y que pasa del los demás? - mi madre la espetó con sorna mientras se acercaba a saludar, y mi padre ayudaba a aparcar el coche.

-ANA: jo, es que os he echado mucho en falta, estoy encantada de estar aquí……..- se puso a abrazar y saludar a todos.

-HEMANA: ¿ya se te ve, que tal el viaje?

-ANA: ufff eterno………. - se separó un poco de mi, casi la tenia encima y no había que dar pistas a la familia, en estas salió Lara del coche, crucificando a Ana con la mirada por dejarla sola y salir despedida del coche - ahhhh por fin la conocéis, esta es Lara, mi mejor amiga, venimos las 2 a la universidad - era como en las fotos, morena, pelo corto y un pañuelo en la cabeza, camiseta de tirantes y camisa con algún botón abrochado, unos pantalones bombachos horribles y su sempiterna riñonera, se acercó un poco abrumada ante tanta felicidad de nuestra parte, convirtiéndose en la sombra de Ana.

-YO: anda ven aquí perroflauta…..- me acerqué a ella y el di unos de mis abrazos de oso, su aspecto, nuestras animadas charlas por Internet y la sinceridad brutal que nos caracterizaba a los 2 debía proliferar, rompí el hielo, me lo devolvió encantada de ser participe, y de hecho pude notar como me repasaba de arriba a abajo, y miraba a Ana, como diciendo “¿es este?”, una mirada que ya había visto varias veces antes, como en los ojos de la secretaria de la empresa de Madamme, pese a mi cuerpo y mi cambio físico, no debía de parecer gran cosa para las que sabían de mi ……….otro lado, o quizá es que las hablaron tan bien de mi que eran expectativas irreales, no se.

-LARA: ¿que pasa, ya vas de chulito sin camiseta? - si esas era sus primeras palabras en persona, me decían muy a las claras que nos íbamos a llevar bien, era tan abiertamente grosera como yo.

-YO: es solo para lucirme, no voy a venir vestido de fiesta como tú…… - mi tono irónico la sacó una sonrisa ante el silencio expectante, el resto sin entendernos del todo, nuestro rollo era diferente, vivíamos de faltarnos el uno al otro, y la 1º vez que nos viéramos no podía ser de otra forma.

-MADRE: anda, menos tonterías y quitaros de la calle, que nos van a pillar, yo voy subiéndome a estas y enseñadores la casa, tú sube las cosas……- mi madre no me pedía las cosas, no había opción a la negación o a discrepar, se hacia lo que ella decía, punto.

Mi madre se llevó a los familiares y a todos a la casa, me dejó solo con uno de mis tíos, que era el conductor, charlando con mi padre del viaje, mientras yo hacia de mula, al principio me molestaba que siempre me adjudicaran ese papel, pero al final te acostumbras, y en realidad de 1 solo viaje subí 4 maletas y 3 mochilas, era normal que me dejaran, podía cargar lo de 2 o 3 personas a la vez. Al dejar las cosas en la entrada vi a mi madre haciendo de anfitriona, presentado y enseñando la casa a Ana y Lara, con el resto de mis amigos trasteando en el fondo y acercándose a interrogarla, si bien mi cambio en el ultimo año había sido evidente para con las mujeres, ella era la 1º mujer que conocían que me había llegado al corazón, Yasmine no era asidua del grupo y sabían que solo eran juegos, y a Irene no la llegaron a ver demasiado, estaban intrigados por aquella belleza andaluza que me había robado el corazón y por la que había montado todo aquel tinglado. Podía oírlas alucinar con el piso, no solo era lo mínimo que necesitaban, o justo lo que requerían, era más, era lo que soñando mejor hubieran imaginado. Mi madre se giró terminando la presentación y viéndome descargar las maletas en la puerta del cuarto que, supuestamente, compartirían Ana y Lara.

-MADRE: bueno, pues todo esto lo tenéis gracias a ese hombretón de allí, que se lo ha trabajado este mes como un titán, sacando el dinero no se ni de donde, así que un aplauso……..- se giraron todos aplaudiéndome, silbando y riendo, poniéndome incomodo, como cuando toda tu familia te canta el cumpleaños feliz, sin saber que hacer, solo sonreía ante la verdad que mi madre había dicho sin conocerla, aunque en vez de titán, fue de dios griego.

Ana, roja de vergüenza, sabiendo en su interior que todo lo que hice, fue por ella, volvió a salir corriendo y me abrazó, esta vez de forma más efusiva, era agradecimiento puro, y así se entendió.

-MADRE: te quejarás de primo jajajaja - gritó.

-ANA: eres increíble - me susurró al oído, la separé la cara un poco para quedarme alelado con sus ojos marrones, y aquellas trazas apenas perceptibles de verde, pero allí estaban.

-YO: lo sé - lo dije con suficiencia exagerada, sacándola una sonrisa deliciosa, “dios, si no estuviera medio mundo mirándonos la besaría aquí mismo”, y sabia que ella sentía lo mismo, me cogió de la mano con una ilusión desmesurada en la cara.

-ANA: aun quedan unas cosas, vamos bajar a por ellas………- podía de sobra con lo que quedaba en 1 solo viaje, pero quise poder quedarme a solas con ella.

Fuimos al ascensor, tardó un mundo en volver a nuestro piso, nos mirábamos fugazmente sonriendo, abrí la puerta, ella entró, luego yo, cerré, le di al botón de bajar y al darme la vuelta se me echó encima Ana, una vez solos, me aplastó contra la pared del ascensor haciendo sonar los cables, y me besó dulcemente, sus labios carnosos y la alegría con que lo hizo me subió a una nube, fue sin lengua, sin caricias y sin pasión, fue un beso de amor, de esos que te electrifican la espalda, ella sabia a fresa por su ligero pinta labios, y olía a coco, yo debía apestar a sudor y suciedad de la mudanza, y aun así la tenia encima de puntillas, regalándome una sensación increíble, no era nada sexual, era cariño y complicidad, y eso me encantaba.

-ANA: eres el mejor, no se como lo has logrado, pero me da igual, soy la mujer más feliz del mundo…….- se acurrucó sobre mi pecho sin querer separase de mi, la rodeé con mis manos, fue la sensación más placentera y plena de mi vida hasta ese momento, con todo lo pasado y con todo lo que Zeus me había hecho divertirme, jamás me llenó el alma como tener a esa chiquilla entre mis brazos.

Supongo que conocéis, o habéis visto series, películas o comics de Hulk, aquella bestia verde enrome que destroza todo a su paso, incontrolable, y solo cuando ve saciada su rabia es cuando vuelve a su estado natural, eso, o cuando ve a esa mujer que le pone en orden con el universo, que hace que todo tenga sentido, que le da paz y armonía a tu mundo, que hace que la bestia desaparezca y se reduzca a un simple hombre. Pues eso es lo que sentía en mi interior, de echó me dejé caer de rodillas ante ella, abrazándola por la cintura, recostando mi cabeza en su vientre, mientras ella me agarraba del pelo. En ese preciso momento supe que todo había merecido la pena, no había sufrido, de hecho me lo había pasado bomba con Madamme, pero todo el camino recorrido me había llevado hasta ese momento, y una vez allí, comprendí que hay cosas por las que se tiene que luchar, por que una vez logradas, te das cuenta de que no quieres, ni necesitas, nada más, y aquella mujer era eso para mi.

-ANA: ¿que haces?, anda levántate y no hagas el bobo.

-YO: no quiero, quiero quedarme así el resto de mi vida……..- bromeaba apretando más su cintura contra mí.

-ANA: jajaja suelta tonto, que van a vernos al llegar abajo………- me puse en pie besándola el ombligo, luego la volví a besar en los labios de forma firme y fuerte arqueándola la espalda y quedándome rozando su cara, mirándola a los ojos con seguridad.

-YO: serás la mujer más feliz del mundo, de eso ya me ocuparé yo, pero tú me haces sentir el ser más afortunado del universo - sonrío de ternura ante la severidad de mis palabras.

Ese ascensor tardaba mucho en subir y bajar, daba tiempo a demasiadas cosas, llegamos abajo, la besé de nuevo con un pico, un beso corto y suave, para salir disparado del ascensor, corriendo, saltando y bailando, como siempre, me gustaba expresar mis emociones con muestras publicas y notorias, y esa ocasión no seria diferente, era feliz, más de lo que recordaba haberlo sido nunca, me subí a una nube de la que no bajé en meses, me fui al coche con la sensación de que si quería podía coger el vehículo entero a pulso y subirlo al piso del tirón. Ana me seguía como apartándose fingiendo no conocerme, reía y se ponía roja. Me cargué a pulso una mesa desmontada, una lampara, la funda con un PC portátil dentro, le quité una bolsa a mi padre de la mano con zapatillas y otra con papeles al tío, y canturreando me fui para el ascensor, con ellos siguiendo con las manos vacías, cerrando el coche. Llegué el 1º al ascensor, pero con las manos ocupadas no podía abrir la puerta, “¿y para que esperar a que me abrieran?”, me giré y me subí por las escaleras.

-PADRE: ¡¡¡¿pero donde vas animal?!!!

-YO: que no entramos todos en el ascensor.

-TIO: pues metete tú y ya subimos nosotros luego, borrico………- era palabras lejanas, ya iba por el rellano del 1º piso.

Dicen que cuando te enamoras haces el tonto y estas con una sensación constante de felicidad, como drogado, serotonina, dopamina, feniletilamina o noradrenalina, había oído hablar de ellas mil veces en estudios y la TV, pero ahora las estaba sintiendo en 1º persona, una sensación de invulnerabilidad total, de ser capaz de todo. Oí el ascensor subir por el 3º piso, y al llegar arriba vi a mi madre asomada, me miraba alucinada al verme llegar justo antes que el ascensor.

-MADRE: ¿pero que haces hijo mío? ¿Por que subes por las escaleras con todo eso? - amagaba con cogerme algo mientras se abría el ascensor.

-YO: no entrábamos………..- mi madre miró a mi padre con ojos de rabia cuando salió del ascensor.

-MADRE: ¡¡¿te parecerá bonito subir sin nada dejando al crío subirlo todo por las escaleras?!! - mi padre la miró alucinado por la acusación.

-PADRE: ¿a mi que me cuentas?, es cosa de tu hijo, que esta mal de la cabeza……….- soltó medio dolido por las palabras.

-MADRE: ¿pero tú no ves que te puedes hacer daño? - me miró ahora a mi, que contemplaba riendo la escena, en parte por que al final mi padre siempre se llevaba las broncas sin merecerlo, y en parte por la repentina preocupación de mi madre por mi estado físico, después de haberme hecho la mudanza de 6 personas casi yo solo, y de tenerme allí, de pie, parado, con todo eso cargado y sin dejarme pasar mientras discutían.

Ana lo entendió e hizo hueco para dejarme pasar, estaba en tal estado de euforia que solo al soltar las cosas en la habitación me di cuenta de su peso y del esfuerzo realizado, estaba sudando de nuevo, sucio, manchado, cansado, agotado y agitado, pero eran las 8 de la tarde pasadas, y habíamos acabado, pese a haber cajas y muebles desmontados por toda la casa, así como mochilas, maletas y bolsas por todas partes, pero estaba terminado. Me fui a la cocina, abrí la nevera que hacia unas horas estaba vacía, y ahora estaba hasta arriba de refrescos y tuppers con comida que las madres y familiares habían preparado para que “fuéramos tirando” los primeros días, cogí un refresco y me tiré en el suelo del salón, dejado que mi cuerpo descansara, con mi pecho subiendo y bajando de forma acelerada, observando las idas y venidas de todos, que me miraban sin resquicio de reproche por mi vaga pose, sabían que me había ganado ese descanso, y con creces. Organizaban al son de las órdenes de mi madre, tenia el respeto y el cariño de todos como para poder hacerlo, según terminaban o se cansaban se iban acercando al salón y se sentaban en los sillones o el sofá, cubiertos de telas o plásticos de la mudanza, o alguna silla de las que ya habían en el piso, charlando y bromeando. Ana y Lara se sentaron juntas en un sillón, Lara sobre un posa brazos, Teo y Alicia en el sofá, con Manu a su lado y yo sentado en el suelo, de espaldas a una pared, con algunos familiares de pie o alguna silla alrededor, y otros inspeccionado la casa, alguno preguntó por que yo tenia una habitaron más grande, y con baño propio, si solo era 1 y en cambio las chicas compartían una habitación algo más pequeña y sin baño, fue la propia Ana la que le argumentó, con cara tediosa como si ya hubieran hablado de eso antes, las explicaciones no gustaron, pero como todos a unísono la respaldaron, pareció bastar.

Mi madre salió de la cocina donde estaba metida desde hacia un rato ordenado todo, se sentó en un silla tan cansada como podía estarlo, salvo montar algún mueble y organizar cada uno su cuarto, ya estaba todo listo, seguimos charlando animadamente, cuando nos poníamos Teo, Manu y yo a charlar nos podíamos tirar horas riendo y bromeando, hablando de cualquier tema, haciendo participes al resto, teníamos una simbiosis especial, y gracias a ello pudimos abordar cierto interrogatorio o acusaciones de los familiares sobre nuestra nueva vida allí, con miradas cómplices para recordarles que no metieran la pata y comentaran lo de Ana conmigo. Lara nos cogió rápido el ritmo, y en esas horas ya se comportaba como una más, yo la daba juego, en parte por que me gustaba tener un clon mío en mujer, ya que era tan atrevida y bocazas como yo, y por otro lado saber que a Ana le gustaría que se integrara pronto. No podía parar de pensar en si Ana tenia a esa amiga desde siempre, o si fue después de nuestro romance fugaz en Navidades cuando buscó a alguien parecido a mi para sentirse bien, ¿o solo era casualidad?

Se hizo algo tarde, ya era la hora de cenar, y los familiares iban despidiéndose de Ana, mi madre les convenció para que no cogieran el coche de noche para volver a Granada, y se quedaran a dormir esa noche en casa de mis padres, y ya mañana más descansados volvieran. Me levanté a despedirlos junto con Ana, y así también despedir a mi madre, padre y hermana, ya era hora de que se fueran, y dejaran a sus crías volar solas, el abrazo con mi madre fue el más sentido, pero en el fondo era mi madre.

-MADRE: anda, quita, que das calor, y pégate una ducha que hueles a jabalí, aun no hay toallas en tu baño, así que ve al del pasillo, o saca toallas de esa caja, donde pone “cosas de baño”, y así sacas ya el champú y el gel, y coloca el neceser con todo, y no te duermas sin hacer la cama antes…..- cuando se ponía nerviosa quería recordarme como vivir en un minuto- …y cuídate, y no hagas tonterías, y busca trabajo y no seas malo con los demás, compórtate, ya no vives solo ni con gente que sea familia tuya, no tienen por que aguantar tus groserías, y llámame si necesitas algo……..- la corté por que no pararía, se iba marchando y cada vez se daba la vuelta y recordaba otra cosa que decirme mientras cerraba la puerta de la casa, ya lo hacia a broma, hasta al cerrar llamó al timbre para saber si funcionaba bien. Al cerrar la puerta no pude evitar una sensación de vértigo, al volver a salón todos me miraban y supuse que tendrían una sensación similar.

-YO: pues nada chicos, ya estamos aquí, solos, oficialmente, somos independientes.

-ALICIA: ¡¡¡bien!!! - la siguió Ana con el grito, Teo aplaudió.

-MANU: pues yo estoy reventado, y hambriento.

-LARA: y yo, el viaje a sido largo, ¿y si comemos algo y ya dejamos lo que queda para mañana?

-TEO: como queráis, ¿voy preparando la mesa aquí en el salón?

-MANU: si, sacamos algo de lo que nos han dejado y picamos un poco todos de todo.

-YO: perfecto, si alguno quiere ir al baño que vaya ahora, me voy a mi cuarto a coger algo de ropa para estar por casa y me doy una ducha rápida, que huelo a muerto……. - me olí el sobaco fingiendo un mareo después, aunque bien podía haber sido real.

Así quedamos, me fui a mi cuarto buscando en la maleta algún pantalón cómodo y alguna camiseta vieja, y me fui al baño del pasillo, a saber donde estaban ahora las toallas como para hacerlo en mi baño, bastante que encontré los botes de champú. La casa tenia 3 baños, 1 más pequeño en cada una de las 2 habitaciones grandes de matrimonio, donde iríamos Teo/Alicia y Ana/yo. El del pasillo, el más grande de todos, con bañera de hidro masaje y todo, que daba con una puerta a cada lado a las habitaciones más pequeñas, aparte de la entrada del pasillo, en el fondo ese seria para Manu y Lara, mientras que las parejas compartirían el de las habitaciones. Me di una buena ducha rápida, quitándome toda la suciedad, sudor y refrescándome el cuerpo, siempre terminaba mis duchas con un golpe de agua fría, Al salir me di cuenta que me había dejado la ropa en mi cuarto, y que, si, había toallas, pero muy pequeñas para mi, me sequé como pude y me puse una rodeándome la cintura, era larga pero estrecha, así que, o tapaba el largo dejándome un poco abierta la toalla en la cintura, o me rodeaba entero y dejaba mi polla sobresaliendo por debajo. Debido a que tenia que pasar por el salón donde estaban todos preparando la cena preferí la 1º opción, quise salir disparado para que no se notara la situación, pero al darme la vuelta al cerrar la puerta tenia a Lara y Manu encima, viendo como tenia que tener agarrada la toalla con ambas manos para que no se cayera.

-MANU: ¿que haces? ¿Y la ropa?

-YO: me la he dejado en el cuarto, aparta coño - dije con cierta vergüenza, pasé entre ellos, y al dejarlos atrás oí risas.

-LARA: anda campeón tápate un poco que vas enseñando todo - sin darle mucha importancia me metí en mi cuarto, y allí entendí el comentario.

En el espejo que aun no estaba colocado en la pared me vi reflejado, al rodearme por delante, la toalla no cerraba por atrás, y se me venia todo el culo.

-YO: joder vaya manera de empezar………..- me reí por la situación y por el comentario de Lara, sin duda era tan incapaz de callarse ante una situación vergonzosa de cómo lo era yo.

Me vestí con unos pantalones de chandal anchos que tenia a patadas de mi época previa a la operación, al igual que una camiseta vieja, era ropa enorme que me quedaba grande, pero excepcionalmente cómoda para ir por casa, debido al calor y comodidad mías, fui sin slip, solo con los pantalones, al darme la vuelta tenia a Ana de pie mirándome, me dio un pequeño susto - ¡¡JODER!! Os voy a tener que poner un cascabel a todos - sonrío sin entender muy bien mi comentario.

-ANA: que ya esta todo en la mesa, cuando quieras……- me acerqué a ella y la besé, sin más, estaba harto de andar a escondidas, con cuidado y con precauciones, había montado todo eso para poder estar con ella y ya no había familiares que pusieran pegas delante.

La pegué con dulzura a la pared y me devolvió el beso, riendo nerviosa, por la situación o por que echaba de menos mis labios, pese a la mudanza ella seguía oliendo a coco, y si no llega a aparecer Teo, la cosa hubiera ido a más.

-TEO: venga tortolitos, que ya esta la cena, ya tendréis tiempo…- me dio una colleja y volvió al salón.

-ANA: jajaja venga, vamos a cenar.

Al llegar estaban todos sentados alrededor de la mesa con 3 o 4 tuppers con comida, unos platos y cubiertos con vasos y refrescos, me pegué al culo de Ana dándola un besito en el cuello mientras la abrazaba por detrás, ante la mirada de complicidad del resto, lo sabían pero era la 1º muestra de cariño evidente que veían entre ambos, Ana se sentó en el suelo, y yo detrás de ella, y nos pusimos de nuevo a charlar y comer, probando la tortilla de la madre de uno y el arroz con pollo del padre de otro, fue divierto, novedoso, aun más cuando al acabar recogimos todos, discutiendo cómo funcionaba el lavavajillas, aquel “quita anda, que tú no sabes” palabras que se repitieron entre risas, al final atinamos con un libro de instrucciones que había perdido en un mueble. Al acabar volvimos al salón para seguir la charla, Lara se lió un porro de marihuana, era evidente que en la riñonera no iban lápices, eso llevó a Manu, que también fumaba de vez en cuando, a tomar más interés en ella, eso si, a fumárselo les mandamos al balcón o a una pequeña terraza que teníamos, ni yo ni Ana fumábamos y Alicia tampoco, y estaba intentando que Teo dejara de fumar tabaco, no queríamos que la casa oliera a humo y menos a marihuana. Nos quedamos charlando las 2 parejitas, entre ellos se veía mucha más complicidad que en nosotros, a Ana le daba un poco de reparo que la abrazara o la hiciera carantoñas, mientras la pobre sufría de un pequeño cuestionario de parte de Alicia, estaba intrigada por la mujer que había logrado sacar del caparazón a su “hermano mayor”, a sus ojos yo seguía siendo aquel gordito que tenia pánico de pedir salir a las chicas, pese a que esa persona ya no existía.

Volvimos al tajo, estabamos cansados y fuimos ayudando a montar las camas de los demás, Manu tenia que madrugar ya que era el único con trabajo, y las chicas pese a que aun tenían una semana hasta empezar la Universidad, quedaron para desayunar juntas e ir a ver como se llegaba y donde estaba. Yo, molido, tuve que recordar las palabras de mi madre para hacer la cama antes de acostarme directamente sobre el colchón sin una mísera funda, Ana me ayudó.

-ANA: ¿si te digo algo no te enfadas? - la miré extrañado.

-YO: claro que no, dime.

-ANA: verás, me da cosa que Lara duerma sola, y………esto esta siendo muy rápido………. no me siento aun cómoda con……..lo nuestro - lo decía con voz ahogada, mirando al suelo temiendo que eso me enfadara, y realmente podía tener motivos, visto desde fuera mi deseo era estar junto a ella, pero entendí sus necesidades, y si quería una relación de iguales que me llenara, debía respetar sus decisiones.

-YO: no pasa nada, quédate con ella el tiempo que necesites, las 2 camas las tenéis ya listas.

-ANA: jo, es que no quiero que pienses mal de mi……….- me fui a por ella levantándola la mirada.

-YO: jamás se me ocurriría, si tengo que volver a conquistarte cada día del resto de mi vida, lo haré - sonrió ante la rotundidad de mi frase, la tenia preparada, mi mente lógica me preparó para que al principio no todo fuera de color de rosa. Me dio un beso tierno y suave, y me abrazó feliz por mi reacción.

-ANA: eres el mejor.

-YO: pero recuerda………….- la señalé la mesilla de noche, un marco con una nota.

”Se que no tomabas somníferos. Hasta pronto”

Era la nota que me regaló en Navidades al irse, la había guardado sin saber por que, y la había enmarcado, me miró incrédula con la boca abierta.

-YO: hasta pronto……..- me volvió a besar, era el 1º paso hacia mi reconquista.

La acompañé a su cuarto, donde vi de refilón a Lara saliendo del baño, allí la volví a besar entre risas y al despedirse me dio una palmada en el culo, me fui a la cama, mi mente quería seguir jugando, pero mi cuerpo estaba al limite, me acosté pronto, 00:30, pese a querer estar un rato en el ordenador, pero tenia que montarlo, así que desistí y me tumbé quedándome frito casi al instante. Me desperté con los ruidos de mis compañeros por la casa, serian las 9:00, con una erección enorme que solo se me pasó al ir a orinar, me di una ducha rápida vistiéndome igual de cómodo, y fui a la cocina, allí estaban las 3 chicas con Manu, desayunado, nos dimos los buenos días, fue la propia Ana la que se acercó y me dio un beso, sabia a mermelada del desayuno,

-YO: bueno, ¿y que planes tenemos para hoy?

-MANU: yo ahora me voy a currar - trabajaba de vigilante en un museo - vendré sobre las 6, aun quiero pasarme por mi casa para ver si me dejé algo.

-ALICIA: tu ex casa, ahora vivimos aquí jajajajaja.

-YO: ¿y vosotras?

-LARA: Alicia nos va a llevar a la Universidad, para que veamos como es y como llegar, de hecho tenemos que entregar unos papeles a ver si atinamos donde.

-ANA: vendremos a comer pero luego por la tarde vamos a salir a pasear y de tiendas, queremos ir bien monas en la gran ciudad jajajaja.

-YO: ya sois preciosas, pero si insistís, ¿puedo acompañar?

-ALICIA: no, usted se queda aquí con Teo a montar muebles que faltan, ya me ocupo yo de cuidar de estas 2……….- miré a Ana buscando confirmación.

-YO: esta bien, esta bien, pero tened mucho ojo…….- abracé a Alicia, dándola las gracias por ser la anfitriona de la ciudad para ellas, yo ya había hecho algo similar con Ana en Navidad pero ahora eran 2 mujeres y nada mejor que otra mujer de confianza para enseñarlas a moverse o ha hacer cosas que yo no podía - ¿y Teo?

-ALICIA: ahí sigue, durmiendo

-LARA: que pasa, ¿os acostasteis tarde eh pillines? - me lo quitó de la boca.

-ALICIA: ¿que pasa?, había que estrenar la casa jajajajaja - reímos todos, me sentí bien, a gusto con esa comodidad y franqueza, era de adultos maduros, pero éramos jóvenes preparados para comernos el mundo, aparte de saber que se podía follar sin que se enteraran los demás de la casa, o al menos yo no me enteré.

Desayuné con ellos mientras Manu se fue a currar, y ellas se iban duchando para irse. Monté lo que quedaba de mi cuarto, el PC, una mesa y movía los muebles, buscando que posición me vendría mejor, siempre dejando sitio para las cosas de Ana, las vi irse, adulándolas de lo monas que iban y dándole un beso a Ana. Arreglando el cuarto, debí hacer bastante ruido por que Teo apareció por mi puerta con una cara de dormido impresionante.

-TEO: ¿que haces cabronazo?

-YO: aquí montando el cuarto, al parecer nos toca arreglar el piso, anda desayuna algo y nos ponemos.

Se adecentó, comió algo y nos pusimos a montar el mueble del salón donde iría la TV, el teléfono con el aparato de Internet, luego algún mueble en las habitaciones que teníamos que montar, gastamos toda la mañana, mientras hablábamos, ambos nos queríamos sacar el carnet de conducir, y necesitábamos trabajo, no podíamos vivir de nuestros padres ahora, ni de la caridad de los compañeros de piso, planificamos un poco los siguientes días y pasos, estabamos pelados de dinero así que le hablé del dinero que tenia en el banco de Madamme, con eso bastaría para ir tirando los primeros meses si no encontrábamos trabajo, y pagarnos el carnet, ellas entre becas y ayuda de sus padres, con Manu trabajando tenían los fondos asegurados, incluso podríamos mirar algún coche de 2º mano, a los 2 se nos vino a la cabeza Adrián, aquel amigo que os conté, un bala perdida pero que le chiflaban los coches y motos. Para cuando volvieron las chicas la casa estaba montada y perfecta, y los 2 teníamos las mismas ideas de como arrancar nuestras vidas lejos del nido de nuestros padres.

Ana – Nueva vida.

Los siguientes días transcurrieron igual, montando cenas y fiestas para más amigos, para el final de semana ya estabamos Teo y yo en una autoescuela y con trabajo, (que época aquella en que había trabajos decentes y bien pagados). Teo era muy bueno con los PC, así que le contrataron de informático en una empresa, solo por las mañanas, 900€ al mes, yo no buscaba nada tan serio y que me ocupara tanto tiempo, y debido a mi escaso curriculum, me contrataron en un supermercado cercano, 3 horas por las mañana, como reponedor y carretillero, me vieron corpulencia supongo, de 10:00 a 13:00, ocuparme de las estanterías, renovar producto que traían cada mañana, y organizar el almacén, cosas así, y debido a que era también en fin de semana, me pagaban casi 600€, eso nos daba a todos de sobra para pagar el piso, y nos sobraba para tener dinero en mano.

Las siguientes semanas fueron un poco caos, nos levantamos todos casi a la misma hora, ellas para ir a la Universidad y nosotros a trabajar, apenas nos veíamos por las mañanas, luego íbamos volviendo a casa, 1º yo al estar en casa entre semana me ocupaba de tenerla decente, luego volvía Teo, después las chicas para comer juntos, ellas volvían a la Universidad o salían a despejarse dependiendo del día y las clases, mientas Teo y yo estabamos en la autoescuela, al volver a casa sobre las 6, y Manu volvía de currar. Ellas estudiaban, nosotros hacíamos el tonto, o las molestábamos, estaban muy concienciadas con sus estudios y no perder comba, aun así siempre lográbamos relajarlas de tanta tensión, y lo mejor, con el paso de los días, fui ganándome a Ana de nuevo, era un reto maravilloso enamórala de nuevo sin tener que usar mi polla como argumento, y sin obligarnos a dormir juntos como en Navidad, unas flores un día, un masaje otro, salir a pasear, los fines de semana salir a bailar y divertirnos, como la cuidaba, como la trataba…..notaba que cada día estaba más cerca, y era evidente en su manera de tratarme, ya no le daba ningún pudor que nos besáramos o nos acariciáramos delante de los demás, y cuando salía de fiesta tuve que darle las gracias a Alicia por las compras que hicieron, iba preciosa en todo momento, su cuerpo joven y bien formado, mezclado con su tono de piel moreno, con un sin fin de ropa de tono pastel la quedaban de cine, enseñando muchas veces su ombligo y aquel tatuaje de media luna en su vientre.

Le gustaba a Ana contarme historias de tíos que la habían echado el ojo, supongo que quería ponerme celoso, usaba a Lara como parapeto, era un poco golfa la verdad, ya le había visto con algunos chicos en menos de 3 semanas, solo rollos y besos, nada de sexo, por lo que sabía de Ana, era virgen, una calienta pollas dicho mal y pronto. La convivencia fue mejorando, nos hicimos turnos para ir al baño por las mañanas, usando los 3 baños todos a la vez, y dividiendo tareas del hogar, como cocina, baños, barrer, fregar, lavar platos, lavadoras y de más, teníamos una pizarra en la nevera y unos turnos negociables, allí aprendes lo duro que trabaja tu familia, en concreto tu madre, cuando tienes que limpiar el baño por el que han pasado 6 personas. Pasado un mes ya nos habíamos visto medio en bolas todos a todos, y habíamos limpiado bragas, calzoncillos y sujetadores de todos, al principio da grima, pero entre Lara y yo que hacíamos bromas continuas sobre aquello terminó siendo una rutina más. Alguna visita a mis padres en domingo para comer y alguna otra de ellos a nuestra casa, teníamos que andar con mucho ojo Ana y yo de lo que decíamos y contábamos, ya prácticamente salíamos juntos.

De los descuidos en el baño, dejarse puertas abiertas o cosas así, ya había visto al menos en ropa interior a las 3 chicas, y a los otros 2 chicos, igual que ellos a mi, Ana seguía perfecta, era una belleza desorbitada, y su tono de piel me volvía loco, las primeras veces ella se tapaba al verme pero después hasta me pedía que la ayudara con cremas o masajes. Lara estaba bastante buena, su cara y su forma de vestir le afeaban mucho, sobretodo sobresalían su par de tetas, era la que mas tenia de las 3, fácil cuando lavas sus sujetadores averiguarlo, una 110 gastaba, mientras que Ana tenia una 92 y Alicia una 87, Lara de culo perdía bastante pero le pasaba como a Alicia a la inversa, tenia tan buen par de tetas que su culo quedaba atrás, Alicia era todo lo contrario, sus caderas y su trasero eran un espectáculo aun mayor en bragas, en cambio a ella no la miraba con ojos sexuales como a las otras 2, simplemente admiraba aquella maravilla de trasero, ya la había visto en biquini pero el día que la vi en tanga casi me da algo. La cosa fue a más, y la confianza da asco, o en este caso gusto, así que de tantos cruces involuntarios al final nos daba igual, íbamos en ropa interior por la casa, solo Manu se mostraba más receloso, por su ligera barriga, y yo al principio, por mi enorme polla, pero Ana ya sabia de ella, Lara me la vio un día que entró en el baño sin preguntar mientras me secaba, me encantó su reacción, todas al verla se quedaban mirándola con la boca abierta, ella se echó reír y señalándomela se fue gritando por el pasillo obscenidades, justo lo que hice yo al verla sin sujetador un día por el pasillo corriendo con sus tetas botando apenas cubiertas por sus manos. Alicia no la vio al natural durante los primeros meses, pero Lara ya se lo había comentado y se hablaba de ello sin ningún tapujo, las primeras veces que me vio en slip o con pantalones anchos sin ropa interior, la miró de reojo, pero no pasó de allí, éramos hermana y hermano, y creía que no había malicia.

Y si creéis que es duro convivir con una mujer, pensar en hacerlo con 3 mujeres a las que se les sincronizó la regla, durante 4 días al mes aquello eran 3 ogros a los que había que sobrellevar.

Fue llegando el frío, era Noviembre ya, y pese a poner las calderas durante el día, por la noche apagaban la calefacción y hacia cierto frío, se acabó la fiesta de la ropa interior, todos íbamos ya bien arropados con pijamas y albornoces, yo con mi camiseta y pantalón tiraba, si llevo calcetines gordos puestos es como si llevara un abrigo polar, soy inmune al frío. Eso le recordó a Ana la Navidad pasada, el frío que tuvo y como yo con mi calor corporal la tenia en la gloria, Lara no tanto, pero Ana era de Granada, no estaba acostumbrada al frío, y siempre andábamos sentados en un sofá abrazados, o con una manta encima. Aquellos acercamientos en busca de calor terminaban siempre en largos besos pasionales, con lengua, con caricias inocentes pero inevitables por todo el cuerpo, pero pese a todo ello, y notar como nos calentábamos los 2, siempre dormía en la habitación con Lara, hablábamos del tema pero ella decía que quería esperar, lo deseaba pero lo que empezó como una petición se volvió una apuesta, como un juego, quería ver cuanto podía aguantar, y no quedaba mucho en realidad, era verla un hombro desnudo o acariciar su culo por encima de la ropa y ya la tenia como una piedra, me di cuenta que desde la sesión con Kira, la modelo, no me había ni pajeado en 1 mes y medio, y tuve que volver a hacerme casi 2 masturbaciones al día para poder sobrellevar aquella relación con Ana. Yo la respetaba, pero iba a reventar cualquier día. En los momentos más calientes, llegábamos a acariciarnos o masturbarnos el uno al otro, pero era casi anecdótico, y pese a mi deseo, y el suyo, me hacia feliz aquel juego, el no tener a una mujer encima mía o que solo quería sexo.

Un buena noche de viernes, salimos a tomar algo todos, y volvimos a casa sobre las 3 de la mañana, Ana había estado más cariñosa de lo habitual y un tremendo escote acompañado de una blusa transparente blanca marcando su sujetador rosa y su marcado tono de piel, con una falda bastante corta, me habían llevado al cielo, con todo lo pasado no me podía creer que aquel bombón fuera mi……¿novia?, ni siquiera nos llamábamos así. Volviendo a casa se pegó a mi y mi brazo, hacia frío y aire, se cubría con mi cuerpo. Como siempre al llegar a casa la acompañaba a su cuarto y allí nos despedíamos con largos y apasionados besos delante de los ojos de Lara, que miraba con cierta envidia, ya hacia la coña de acostarla a ella también dándola un beso en la mejilla o jugando a pelearnos en la cama, y más de una vez lo hacia totalmente empalmado de las caricias de Ana, con lo que los roces eran claros, y hasta podía decir que eran buscados por parte de ella, sobretodo si Ana se iba al baño y nos quedábamos solos unos minutos. Lara me lanzaba retos, dudaba de mi hombría constantemente y bromeaba con que ella era mucho más mujer que Ana y que yo no sabría que hacer con ella. Su bocaza era castigada con mi corpulencia y varias veces la inmovilizaba quedando encima de ella o a escasos centímetros de su cara, entonces ella dejaba de jugar y se quedaba quieta mirándome, como esperando que yo diera el paso, pero para mi, pese a ser consciente de ello, era solo un juego, mi objetivo era Ana y aquella mujer, o cualquier otra, me daban igual. Ese día Ana salió del baño con Lara casi montada encima mía, conmigo sentado en la cama de Ana, si no era yo quien iba a por ella, ella misma se encargaba de ir a chincharme, y de plantarme sus tetas bien cerca de la cara, éramos tan bestias los 2 que para ganar el juego yo le mordía una teta o ella me pegaba en la polla, era eminentemente sexual, pero no para mi, es más, lo quería usar para dar celos a Ana, y ese debió de funcionar, Ana salió del baño con un pantalón de pijama y una camiseta mía vieja que le quedaba enorme, casi de camisón, y al ver la escena se enfadó, cogiendo de los pelos a Lara y sacándomela de encima.

-ANA: aparta golfa, este chico es mío - el tono era jocoso, pero sincero.

-LARA: anda boba, que solo jugábamos, si no se los das tú, alguien tendrá que dárselo jajajajaja

-ANA: pues menos juegos y a la cama, que hace frío…….- se me subió ella encima mirando de refilón a Lara, y me dio el beso más sensual y caliente desde su vuelta, marcando territorio.

-YO: más te vale irte a dormir ya por que no respondo como sigas así…- notó mi polla palpitando entre sus piernas.

-ANA: anda vete, hasta mañana amor - me dio un beso de despedida, y la arropé, después le di un azote a Lara en el culo, que se andaba acostando, como final al juego y salí corriendo para evitar represalias.

Me fui a mi cuarto derecho al PC, le había vuelto a coger el gusto a los videos porno, que remedio, llevaba casi 2 meses sin catar hembra, el máximo tiempo que estuve desde la operación, solo para desahogarme, sin reproches ni malos gestos. Mis pajas eran cansadas, mi brazo se castigaba ante tanta carne que masajear, y me costaba un mundo una erección en condiciones, me iba a correrme al baño y así ensuciar poco, me lavaba las manos y a dormir relajado. Me acosté caliente y sudando, así que me quedé solo con el pantalón sin slip, destapado, luego cuando cogía frío me tapaba, y teniendo que currar al día siguiente me dormí pronto. Me despertó el sonido de la puerta, chirriaba un poco al ser de madera por el frío, abrí un ojo entre legañas y divisé una figura femenina con una manta echada por encima.

-YO: ¿si?

-ANA: hola, ¿estas despierto?

-YO: ahora si…..¿necesitas algo?

-ANA: si, a ti……- me sobresalté por su comentario, estaba muy dormido, miré el reloj, habían pasado apenas 2 horas desde que me dormí.

-YO: ¡¿como?!

-ANA: jo, es que hace mucho frío y por más mantas que me echo no entro en calor, ¿puedo…. dormir contigo?, ya sabes………como en Navidad.

-YO: ah…….claro, anda vente - se me notó cierta desilusion.

-ANA: gracias - sonrió, o eso me pareció, estaba oscuro, cerró la puerta y corrió hasta mi cama, me eché hacia un lado abriendo mis sabanas para dejarla pasar - pero… ¿donde esta tu colcha?

-YO: en el armario, creo….

-ANA: ¿pero no tienes frío?

-YO: me caliento soñando contigo - rió, torneando los ojos, y echando su colcha sobre los dos, se metió entre mis sabanas, agarró mi mano y me pegó a su espalda, rodeándola con mi brazo, la besé el hombro mientras le apartaba su largo pelo para no tenerlo en mi cara, su olor a coco me parecía la mejor fragancia del universo.

Nos pegamos tanto que notaba su respiración agitada y su cuerpo tiritar, realmente tenia frío, pero entre la colcha y la estufa que soy yo, en pocos minutos dejó de temblar y emitía gemidos de sentirse confortada, antes de que pudiera hacer o decir nada se quedó dormida plácidamente, y pese a tener a esa mujer en mi cama la sensación era tan agradable y cálida que me dio igual, ni se me empalmó, solo disfruté del momento pegado a ella, con mi brazo rodeándola y ella agarrada de mi mano, estaba tan ensimismado que me dormí igual de rápido, no recuerdo muchos sueños reparadores pero aquel lo fue. Sonó mi despertador, media hora antes de tener que ir a trabajar, por suerte era cerca y con una ducha rápida llegaba de sobra, lo apagué tan rápido que Ana ni se despertó, ahora estabamos cara a cara, con ella usando uno de mis brazos de almohada, y su cintura echada para atrás, entre otras cosas por que mi erección mañanera no la permitía ponerse más cerca, la tenia clavada en su vientre. Me costó toda mi fuerza de voluntad no quedarme allí pasmado viéndola dormir, pero con una mano cogí su cabeza y se la levanté lo justo para sacar mi brazo, adormecido, y recostarla, levantándome con cuidado de no despertarla, la arropé bien con la colcha y la di un beso en la mejilla antes de darme una buena ducha fría. Me preparé para irme a trabajar en completo silencio, la dejé una nota cariñosa sobre la cama, con unas gotas de mi colonia, y me fui a trabajar como el hombre más feliz de la historia, las sensaciones de euforia que me generaba cada paso hacia Ana eran mejores que cualquier polvo que pudiera echar.

Los fines de semana era el único que trabajaba, o hacia algo, las 3 horas por la mañana simplemente, al volver a casa me extrañó no ver a todos ya en el salón preparando la comida, ya se nos habían acabado los tupper de las familias, y salvo algún caso aislado de reposición, vivíamos de cocer pasta, me fui a mi cuarto y al encender la luz me saltaron todos encima son un “¡¡¡SORPRESA!!!”, que me asuntó, no lo esperaba.

-YO: ¿pero que hacéis aquí? - miré a mi cuarto y me encontré más lleno de lo habitual, cosas que no eran mías, “cosas de Ana”.

-ALICIA: pues nada, que por lo visto querían darte una sorpresa y hemos ayudado a traer las cosas de Ana aquí.

-YO: ¿y eso? - miré a Ana.

-ANA: por que si voy a vivir y dormir aquí a partir de hoy, será mejor que estén mis cosas aquí - me guiño un ojo y me abrazó balanceándonos, con un matasuegras en la boca, yo la rodeé la cintura con mis manos.

-YO: ¿estas segura? - lo dije mirando sus intensos ojos marrones, adivinando aquellas trazas verdes que me encantaban.

-ANA: segura, esta noche me has recordado por que quise venir aquí, eres el mejor hombre que he conocido, no quiero esperar más……..…te…....te quiero - era la 1º vez que lo decía desde que volvió, mi mirada la confundió, no sabia si era sorpresa o duda, estaba concentrado en mis pensamientos de dicha - o acaso no quieres que….- la besé para disipar confusiones.

-YO: que sepas que no solo quiero, si no que llevo deseando esto desde que llegaste.

-ANA: lo sé - la mordí el matasuegras para quitárselo y escupirlo, quería sus labios.

Nos fundimos en un abrazo sentido y cariñoso, con besos constantes de felicidad mutua, ante las felicitaciones y bromas de los demás, Lara fue la que menos entusiasmo puso. Para celebrarlo hicimos una comida algo más especial y después nos fuimos cada uno a su cuarto, a echarnos un poco, queríamos salir de fiesta más tarde, Ana y yo nos acostamos de cara, mirándonos fijamente, y abrazados.

-ANA: y ahora……… ¿que?

-YO: ahora toca disfrutar supongo.

-ANA: ya lo sabes, pero quiero que sepas que he estado tonteando con un chico en Granada, nada serio, pero quiero ser sincera contigo.

-YO: no pasa nada, nos dimos tiempo hasta volver a encontrarnos, y aquí estamos, eso es lo que me importa.

-ANA: ¿y tú?

-YO: y yo… ¿que?

-ANA: ¿Qué si tú has estado con alguien desde Navidades? – “pufff vaya problema”, reí para ganar tiempo, no quería mentirla y decirle que no, o con unas pocas, pero temía que si le dijera la verdad se asustaría o se sentiría ofendida – venga, yo he sido sincera, tú tienes que serlo conmigo.

-YO: ¿y si te hago daño? No quiero perder esto…….- la coloqué el pelo detrás de la oreja viendo su amplia sonrisa.

-ANA: nada de lo que puedas decirme puede cambiar lo que sentimos el uno por el otro.

-YO: se que ahora lo dices, pero lo que puedo contarte, si soy 100% sincero, puede afectarnos, no he sido ningún santo.

-ANA: jo, pues ahora si que vas a tener que decírmelo, no me vas a dejar con la duda…...- se incorporó y se sentó, carraspeando con la voz y preparándose para lo peor, y aun así la asusté.

Si era lo que quería, le dije todo, y cuando es todo, es todo, desde mi paso por el instituto con las alumnas, Marina, Karin, Pamela, esa fue la 1º vez que torció el gesto, o Rocío y su aprendiz, pasando por mis escarceos con la monja o las universitarias, incluso de mi Leona, aquí me miró incrédula, casi asustada, después la hablé de Irene y nuestro noviazgo, comentando lo mal que me sentí al torcerse la relación, allí suavizó su mirada, pero le conté mi verano, mis escarceos con las mujeres en la piscina, y pese a que mi mente me lo prohibía, de Yasmine y Eleonor, mis colombianas, de nuestras sesiones madre e hija en su casa, de cómo las dominaba como su macho. Yo solo hablaba y ella escuchaba, lo peor llegó cuando le comenté lo de Madamme, de cómo logré el dinero del piso, de la aparición de Zeus y de la bestia, de forma automática se puso en pie, dando vueltas por la habitación, podía notar sus ojos vidriosos juzgándome de vez en cuando y como se rascaba la cabeza pensando mil cosas, terminé contándola como casi hice claudicar a Madamme, y de mis aventuras con Geisha, incluso de lo que le hice a David en la fiesta al descubrir el engaño, hasta la hablé de que el fin de semana previo a su llegada lo pasé con una supermodelo a la que le faltaba medio tornillo con el tema de su padre. Ana estaba desbordada, ya le había dicho que no había sido ningún santo, pero me miraba como si fuera una persona desconocida.

-YO: eso es todo, todo lo que ha pasado desde que te marchaste.

-ANA: joder……..

-YO: se que es mucho, y que no es comparable, pero te soy sincero, es lo que querías, ¿no?

-ANA: ya, pero no sé, es que son…………. más de 1……es que son….muchas……..joder, y algunas son una pasada, como si no fueras el chico del que me……….el que conocí en Navidades…….. – me levanté y la cogí de las manos, no quería mirarme, y me estaba poniendo nervioso de tantas vueltas.

-YO: no te voy a mentir, lo he pasado muy bien y ha habido partes de mi vida oscuras, tenebrosas, y me han gustado, pero es todo del pasado, no quiero volver a ello, no lo necesito, te tengo a ti.

-ANA: ¿así que renuncias a todo eso……… por mí?- me miró sin saber si sentirse orgullosa o triste por ello, sopesé mi respuesta.

-YO: no, no lo dejé por ti, me gustaría que fuera así pero no lo es, no es que tú seas mejor o peor que cualquiera de ellas o todas ellas juntas, no es una cuestión tuya, soy yo, no es por ti si no por lo que me haces sentir, me haces……feliz, y no cambiaría estos 2 meses a tu lado por volver a esa vida - levantó su mirada por 1º vez.

-ANA: no puedes hablar en serio, si ni siquiera hemos hecho….nada, y me has contado barbaridades, ¿no lo echas de menos?

-YO: eso es injusto, ¿si preguntas si lo echo de menos? claro, como echo de menos el cocido del domingo de mi madre, y no por ello salgo corriendo cada domingo a su casa - sonrió ante mi comparativa - prefiero comer comida pre cocinada y matarme a pajas que volver a una vida sin ti, sin lo que me haces sentir – nuestras miradas eran intensas, la buscaba con mis labios - ¿tú eres feliz conmigo?

-ANA: claro que si, pero, ¿como puedo saber que no me harás daño?

-YO: no lo sabrás, al igual que yo no se si tú me lo harás a mi, pero midiendo los riegos de que salga mal y la posible recompensa de que salga bien, merece la pena arriesgarse, supongo que es lo que llaman amor, sentirte tan bien y tan feliz con otra persona que no temer abrirte completamente a ella, que te conozca, que sepa lo mejor y peor de ti, y aun así este a tu lado. Tú eres eso para mi, déjame que lo sea yo para ti - nos fundimos en un apasionado beso, no era sexual ni excitante, era una corriente de sensaciones que recorría mi cuerpo, como caer de una cuerda muy alta sin saber si hay una red debajo. La separé un poco de mi, abriendo los ojos el tiempo justo para ver como ella se relamía, y como poco a poco volvía de algún lugar feliz en su mente.- Ana……………………. te quiero.

-ANA: y yo a ti, te quiero más de lo que nunca creí posible querer a alguien - nuestras ojos irradiaban peligro, como si fuéramos conscientes de que una bomba iba a estallar en cualquier momento, llamaron a la puerta, era Manu, abrió y nos vio de pie allí plantados, uno delante del otro.

-MANU: hey, vamos a salir a tomar algo, ¿os venís? - sin dejar de mirar los ojos hipnóticos de aquella mujer entre mis brazos, respondí.

-YO: id vosotros, nosotros saldremos en un rato, ya os llamaremos……- Ana asintió con sonrisa picara.

-MANU: esta bien, nos vamos, hasta luego…….- se fue cerrando la puerta y a poco listo que fueras se notó que allí iba a pasar algo.

Nos volvimos a besar, pero esta vez ya sin limitaciones, buscando con la lengua las caricias del otro, era ella la que me fue empujando hasta tropezar con el borde de la cama y caer tumbado sobre ella, quitándose la camiseta se tumbó sobre mi, buscando con una de sus manos mi mentón, y besándonos de nuevo, casi fundiendo nuestros labios, se tuvo que acomodar la cadera, abriéndose un poco de piernas para dejar paso a mi polla, que a estas alturas debido al nulo sexo que había tenido, con esas pocas caricias y besos, ya la tenia dura como granito, debido a mi manía de llevar pantalones anchos sin slip por comodidad, mi enorme miembro resaltaba como la carpa de un circo. Yo solo me deleitaba con su largo pelo acariciando mi cara, el peso de su cuerpo sobre mí, con sus tetas aplastadas, sus movimientos de cadera y su eterno olor a coco. La acariciaba su espalda, buscando reacciones, pero ella manejaba la situación, tenia miedo de coger yo las riendas y estropearlo todo. Pasamos así unos minutos, explorando nuestras bocas, hasta que sonó la puerta de la calle, se habían ido los compañeros de piso, supongo que segura de que nadie oiría nada, se dejó caer a un lado, se fue quitando el pantalón, para luego ponerse de rodillas y quitarse el sujetador, me quité la camiseta, admirando aquella belleza arábiga, aquella piel tostada y su cuerpo casi desnudo que clamaba sexo.

-ANA: vamos a ver a mi vieja amiga…….- llevó sus manos a mi tieso pene, sobre la ropa, pero era un mero velo, podía acariciar y palpar perfectamente toda su grandiosidad, se mordía el labio mientras mi mano jugaba en uno de sus muslos.

No pasó mucho hasta que tiró de la tela y me la sacó de su prisión, con algo de ayuda me quité el pantalón y la dejé embobada mirándola, como si fuera la 1º vez que veía aquella cosa, pero no lo era, la agarró con ambas manos y con más maestría de la que le recordaba comenzó a masturbarme de forma torpe y rápida, me lo parecía por mis experiencias previas con autenticas golfas de 1º nivel, pero en vez de no gustarme, aquella candidez me pareció adorable, sexualmente atractiva. Tan despistado estaba que no vi como agachó su cuerpo para lamerme el glande, sin dejar de masturbarme, repasando bien la zona, y terminado cada lamida con un beso dulce. Su nueva posición me dio vía libre para con una mano meterme por detrás de su culo en sus bragas, pude observar como estaba húmeda, y como con solo notar mis dedos abriéndose paso hasta su coño, aumentó la temperatura de su interior, al llegar a su puvis era una inundación, estaba tan mojada que se me pegaba la tela de su ropa interior, pero al alcanzar su monte y acariciarlo por encima la saqué un gemido apenas perceptible, que la obligó a dejar sus trabajos manuales, y a medida que mi mano aumentaba el ritmo ella se apartaba más de sus labores, llegando un momento en el que solo tenia agarrada mi polla con una mano y con la otra se sostenía a 4 patas. Con un giro de muñeca logré meter uno de mis dedos, notando presión y calor a partes iguales, viendo como todo su cuerpo se estremecía, y haciéndolo de nuevo, ver como su cintura cogía el ritmo de mi mano con cada penetración. Con uno de mis dedos localicé el clítoris y no dejaba de jugar con él mientras metía o sacaba otro dedo de ella, logrando que sus suspiros fueran aumentando hasta que mi mano tenia tanta velocidad que la llevó a un orgasmo fuerte y excitante, no se cuanto llevaría sin uno, pero del latigazo cayó de espaldas de rodillas sobre la cama, agarrándose la vagina por dentro de la ropa interior y acariciándose levemente mientras me miraba poseída.

-YO: vaya, estas muy poco entrenada.

-ANA: no seas malo, llevaba sin correrme desde Navidades, no así, no de esta forma, me he manchado toda.

-YO: ¿y el chico ese con el que tonteabas?

-ANA: nada, solo juegos, ni penetrándome, nada como esto, ni de lejos, eres malo, me has hecho alguna mierda nueva que has aprendido o algo.

-YO: jjajajaja nada, te lo juro, solo quiero hacerte disfrutar - me puse de rodillas delante de ella, todo lo que mi polla me dejó acercarme, la iba besando por la cara, el cuello y el pecho, mientras mis manos la masajeaban sus senos, era una joya del nilo, una especie de diosa egipcia, y cada momento a su lado me parecía más bella aun.

Mis besos y caricias la hicieron recostarse de espaldas, y con habilidad le junté las piernas para sacarle la ropa intima, volviendo a tener ante mi su precio coño, con aquella fina línea de bello bien cuidado que recordaba, ella se moría de vergüenza ante mis caricias, pero fui besando sus muslos acercándome a su clítoris, hasta que metí mi lengua en ella, allí se abrió de piernas y se dejó hacer, apretando mi cabeza o tirando de mi pelo, no estuve mucho jugando con mi lengua en su interior, estaba loco por penetarla, fui subiendo cuando la noté más caliente, trabajando sus pezones al paso por ellos, y terminando con mi polla apuntando a su interior, mientras la besaba el cuello, y jugaba con una de mis manos en su vientre, sabia que eso la derretía.

-ANA: por favor, ten cuidado, pero fóllame ya, no aguanto más.

Sus palabras de suplica me estremecieron, rasgaba con sus uñas en mi pecho, me mojé la polla bien de sus abundantes fluidos, la abrí de piernas asegurándome tenerla a buena distancia de mi, y viendo como ella misma se separaba los labios mayores mientras se pellizcaba un pezón, apunté y apreté suavemente, dio un sobresalto al notar el 1º contacto, fui buscando más comodidad con el 2º, y esta vez si la penetré con el glande solamente, eso la relajó el cuerpo entero, estaba demasiado tensa, y notar ese 1º paso la calmó. De forma muy lenta y pausada hice presión notando como de nuevo se le abría, era casi obsceno ver aquella barra de carne hundirse en ella, oyéndose el resbalar de mi piel empujando en su interior y viendo como con cada respiración se contraía y se relajaba al soltar el aire, ver como se retorcía sobre la cama buscando algo a lo que atenerse, solo encontraba consuelo cuando paraba a dejarla acostumbrase de nuevo a mi, al notar como sus paredes interiores cedían ante la invasión, y como mi falo sentía menos hinchazón, alcancé la mitad, quise parar, para no forzarla de más, pero recordé que ese poco más de la mitad era lo que había conseguido meter en Navidades, y me costó varios días de sexo acostúmbrala a esa cantidad dentro, y ahora a la 1º ya estaba allí, apuré un poco más y sin dejar de apretar, quise comprobar hasta donde le podía llegar, no me importaba pero seria un plus si lograba metérsela toda. A ¾ casi se me desvanece, dejé de penetrarla y quedé quieto dentro de ella, viendo como su pecho respiraba agitado y su boca se abría queriendo hacer más sitio en su cuerpo.

-ANA: ¡¡dios mío!!, me abres, noto como me abres.

-YO: ¿estas bien? ¿Quieres que pare o la saque?

-ANA: ni se te ocurra, quédate quieto, no te muevas, deja que me……dios, ¿es que no tienes fin? ¡¡Es enorme!! - reía ante las expresiones sin sentido y halagos inexpertos, era pura candidez e inocencia.

Poco a poco, se vio más confiada y sin dejarme que me moviera era ella la que comenzaba a mover su cadera, de formas circulares, creándose espacio y fricción, en una de esas se corrió de nuevo, estaba tan llena y tan plena que no se lo noté, su cuerpo si, al menos, su mente siguió con su bamboleo de caderas hasta que llegó a meterse y sacarse unos centímetros de mi tranca, cada vez se sacaba más y se metía más de golpe, agarrándose a la sabana, y al borde del colchón encontró facilidad para moverse y ejecutar sus bailes sobre mi erección, el movimiento de sus senos y su cara de gozo, con los ojos medio en blanco, me calentaron, notando como se corría de nuevo con algún espasmo leve, y un grito que llenó la habitación. La agarré de las caderas y tomé el mando, con cuidado de no pasar de esa distancia, la penetré con cierta fiereza que ella agradeció, salió de su estado semi inconsciente y disfrutó de la fricción de mis actos clavando sus uñas en mi espalda, haciéndola gemir y gritar de forma continuada, hasta me abofeteó una vez, supongo que como premio a otro de sus orgasmos, o a no parar pese a ello. Normalmente hubiera aguantado 1 hora larga así, pero estaba tan necesitado y me estaba poniendo tan caliente que a los 15 minutos reventé con una cantidad de semen como no recordaba, un calambre me recorrió la espalda y me devolvió al paraíso, y como costumbre que tenia al correrme, unas ultimas embestidas fuertes que la sacaron otro orgasmo, sonoro debido a su gritos descontrolados, que nos bañó a ambos al sacársela de su interior. Caí a su lado sudando y agradecido a los cielos por haber logrado consumar mi amor con aquella mujer que a mis ojos dejaría en ridículo a la mismísima Cleopatra. Dejado que nuestros cuerpos volvieran a un estado natural, me ardían los pulmones, y respiraba agotadamente, ese no era yo, o no el animal que había sido los meses antes de su llegada, Ana me devolvió al terreno mortal, y me gustó.

-YO: ¿estas bien? - la vi reír.

-ANA: dios, tengo la boca seca.

-YO: joder, y yo, voy a por agua - me levanté dándola un beso en el vientre, de un resorte salí de la habitación en pelotas encantando con el universo, como si tuviera una banda sonora de fondo, canturreaba de felicidad, fui a la cocina, abrí una botella de agua y le di medio trago, cerré la nevera y al darme la vuelta me encontré con Lara de bruces, mi 1º instinto hubiera sido taparme, pero solo tenia un botella de plástico transparente en la mano y ya era al 2º vez que me veía así, supongo que haberle hecho el amor a Ana hacia escasos minutos me tenia algo tonto, era Lara, mi doble desvergonzada.

-LARA: dios, lo siento, no quería molestar.

-YO: no es molestia tonta, si ya nos conocemos y me has visto así jajajajaja - seguía tarareando en mi cabeza, mientras le daba otro trago al agua y veía como sus ojos se clavaban en mi polla, estaba semi erecta, claramente más grande que la última vez que la vio en reposo total.

-LARA: ¡pero tápate carbón!

-YO: ¿para que? si soy feliz.

-LARA: ya…….. os he oído.

-YO: mírala que fisgona has salido jajja, ¿no se supone que habíais salido todos?

-LARA: si, bueno, han salido, pero estaba un poco cansada y me eché a dormir, me….habéis despertado.

-YO: ¡¡¡no jodas que nos has oído desde tu cuarto!!! - no quería que los demás supieran cuando follábamos, más por Ana que por mi.

-LARA: no, osea, yo……pasaba para ir al baño, y….os oí al ir a la cocina - seguía hablando pero mirando mi polla colgante, decidí darle normalidad y jugar con ella, al fin y al cabo era como yo.

-YO: pues nada, vuelvo al lío, y no andes a escondidas jajajaja - me acerqué a ella y la abrace bailando con su cuerpo que permanecía a mi merced, sin voluntad, sin comprender muy bien mi actitud desvergonzada, notando mi polla golpear con cada movimiento en su pierna, mientras yo tarareaba, me daba igual, mi mente estaba enajenada por lo ocurrido con Ana, y solo era una de mis muestras exteriorizadas de felicidad.

Me volví al cuarto donde Ana estaba sentada en el borde de la cama, con una sonrisa de oreja a oreja, le di el agua y se bebió varios tragos, alguna gota de agua cayó por su rostro, hasta gotear en su pecho, rápidamente me arrodillé para lamer su teta, y secarla, ante sus sonrisas.

-ANA: has tardado mucho.

-YO: es que me he cruzado con Lara - casi se atraganta con el agua.

-ANA: ¡¿que? ¿no se habían ido?!

-YO: al parecer ella no.

-ANA: jo, nos habrá oído, ¿y tú? ¡¡pero si vas desnudo con la polla medio tiesa!!!

-YO: sip.

-ANA: ¡¡pero te habrá visto!!

-YO: sip, y de hecho he hablado con ella mientras me miraba la polla, y luego he bailado de felicidad con ella antes de volver - me encantaba ser así de sincero, que las tonterías que decían parecerían chorradas o brabuconadas, pero que eran ciertas.

-ANA: ¡pero ¿tu estás mal de la cabeza?!

-YO: ¿y que más da? si ya sabía lo que hacíamos, nos ha oído al salir a la cocina antes.

-ANA: ya, pero una cosa es que lo intuyan y otra que sepan donde, cuando y que te coma con los ojos.

-YO: es tu amiga.

-ANA: precisamente por eso te lo digo, por que la conozco, es virgen pero una calienta pollas de 1º, no quiero que ande tirándote los trastos.

-YO: ¿tú te crees que después de lo que te he contado voy a perder la cabeza por una drogata necesitada de un buen polvo? Te tengo a ti, y no quiero, ni necesito más.

Volví a subir mi cabeza para besarla, estaba harto de hablar y de buscar argumentos, quería aprovechar el calentón, volver a hacerla el amor, de forma caliente y pasional, pero no follar, si no gozar el uno del otro, mis manos y mis labios hicieron su efecto, Ana pasó de cierto disgusto a apretarme contra ella, y mi polla en pie de nuevo pedía guerra, recordé nuestras sesiones por detrás en Navidad, aquella sensación de confortable calor que me proporcionaba, la tumbé de lado y me coloqué a su espalda, abriéndola de piernas lo justo para rodearla con mi mano y dirigir mi polla a su coño inundado de nuevo, para ensartarla sin tanto preámbulo previo, noté como se abría pero esta vez mocho más rápido y más profundo, agarrándola fuerte y bombear sin descanso hasta sacarla todos los orgasmos que la debía por haberse ido lejos, acariciando su vientre y sus pechos con mi mano libre y acelerando ligeramente con cada uno de sus espasmos, Ana quería contener sus gritos por Lara, pero era remar río arriba, había un punto en que dejó de hacer fuerza y se dejó llevar por la corriente que era mi fuerza en las embestidas. Desde atrás su maravilloso culo hacia de tope, así que no tenia que preocuparme de no penetrarla demasiado, sus glúteos hacían de barrera natural para esos 7-8 centímetros que aun me faltaban, pero más que suficientes para verla tensarse con cada embestida y notar como se abría y se cerraba con cada movimiento de mi cadera, la tenia tantas ganas que saqué lo mejor de Raúl, fue demasiado para ella y a la media hora se corrió tantas veces que pidió que parara, en mis últimos tiempos me hubiera dado igual, hubiera seguido hasta hacerla desmayarse o sacarla de rueda para tenerla dominada, pero ella no era una más, era Ana, paré con cierto acopio de fuerza de voluntad, y ella quiso agradecérmelo con una buena mamada, sin duda el chico con el que estuvo se benefició de mis enseñanzas en Navidad, sus mamadas eran buenas y su lengua nada torpe, eran sus manos las que parecían poco acostumbradas a una buena polla. La avisé cuando me iba a correr, sin saber como actuaría ella, no recordaba quien había sido la última que me la chupó, me corrí y no se lo tragó. Ana en cambio se la sacó de la boca, y acelerando sus manos puso dirección a mi polla en su pecho, corriéndome abundantemente sobre él, notando cada chorro de semen sobre su cuerpo con un beso pasional y desmedido. Cuando acabó de sacarme todo, notó flácida mi hombría, y se tumbó a mi lado, dándome pequeños besos en el cuello o el pecho.

-ANA: eres increíble, y en cuanto repitamos un par de veces me vas enseñar a ser tu chica - temí que esas palabras fuera incluida algún tipo de relación, como con mi Leona, mis hembras colombianas o mi abnegada Madamme.

-YO: no quiero que seas más que lo que eres tú, mi novia, la mujer en la que confío y que me hace feliz siendo quien eres.

-ANA: no te preocupes, eso siempre lo tendrás de mí, pero las buenas parejas hacen disfrutar a su compañero, y esta claro que tú sabes más que yo, solo quiero aprender a tu lado - se acurrucó contra mi, de forma dulce y acaramelada, me tranquilizó un poco aunque seguía temiendo alguna reacción sumisa los días siguientes - venga, vamos a darnos una ducha que hemos quedado, yo 1º y así salgo y hablo con Lara - se incorporó dándome un beso de ternura y se puso en pie apoyándose en mi pecho, la vi andar feliz hacia el baño.

Aquella 1º reacción de no querer quedarse o repetir más sexo, de inicio podría sentarme mal, pero todo lo contrario, es lo que me pasó con Irene, desde la 1º vez que follamos se quiso aislar del mundo para tenerme enjaulado solo para ella, y Ana no, reaccionó como una novia normal, habíamos quedado y se tenia que duchar y hablar con Lara, me gustó ampliamente su reacción y me tranquilizó bastante. Se duchó y yo después, fue buena idea hacerlo por separado, no soportaba ver el cuerpo húmedo de una mujer y no follármela, o se acordaba de Navidades o me conocía mejor de lo que creía, quizá fue solo casualidad y la estaba idolatrando excesivamente, pero me daba igual, al fin tenia lo que quería.

Salimos de fiesta quedando con los demás del piso, incluyendo una Lara algo abstraída, charlamos, bailamos bromeamos e hicimos el tonto, a eso de las 3:30 Ana y yo nos volvimos ya que yo trabajaba a las 9, no sabia ni lo que quería, tener sexo y disfrutar o dormir plácidamente abrazado a ella, cualquiera de las 2 opciones me hubiera gustado igual, pero que fuera ella la que me insistió en que descansara para ir a trabajar me convenció de mis pasos, Ana no era Irene, y pese a dormir con mi polla aprisionada entre sus muslos, como antaño, dormimos sin más, yo disfrutando del tacto de una buena mujer a mi lado y ella de mi calor, había acertado de pleno con Ana, me daba justo lo que nadie más me sabia dar, una sensación de ser un puzzle de 2 piezas que encajaban perfectamente.

Ana – Mi novia

Comencé la etapa más brillante de mi vida, si esos 2 meses desde la mudanza hasta lograr consumar mi amor con Ana, me habían parecido geniales, los siguientes 6 meses fueron la experiencia más agradable, feliz y exultante de mi vida hasta aquel momento. Vivía en un piso con mis mejores amigos, era independiente, con un trabajo que me daba para vivir pero no me afectaba mucho en mi vida, con una pequeña fortuna de colchón, y compartía mi vida con una mujer preciosa, que aparte de llenar mi días de la experiencia personal más plena, quería que la enseñara a follar de verdad, solo faltaba una playa cerca para ser perfecto.

Recibía llamadas y mensajes de multitud de mujeres con las que me había acostado, menos Madamme y mi Leona, todas pidiendo sexo, yo contestaba, delante de Ana, que ya tenia novia y no quería nada con ellas, algunas hasta les daba igual e insistían, o dejaba que respondiera Ana a los mensajes, dicen que hay cierto pánico en los hombres a que tu novia vea tu móvil o tu cuenta en redes sociales, supongo que es gente que tiene pánico a que su pareja descubra algo que no quiere que sepa, algo lógico, pero a mi no me pasaba, era completa y visceralmente sincero con Ana, y cuando se es así con alguien, no tienes miedo de nada, no puede descubrir nada oculto por que ya se lo has dicho. No soy quien para decir como vivir vuestras vidas, pero al menos os recomendaría que tuvierais a 1 persona así en vuestra vida, no tiene por que ser una pareja, pero la experiencia de confiar ciegamente en otra persona de tal manera que lo sepa todo de ti, es enriquecedor. De hecho Ana me pidió quedar con algunas de aquellas mujeres, quería conocerlas, sobretodo a Irene, mi 1º novia, supongo que quería averiguar que pasó para poder evitarlo, Ana me insistía incluso en querer conocer a mi Leona, a Mercedes, pese a ha haberla hablado de mis otras mujeres con las que hacia sexo duro, debió notar que con ella tenia algo más especial, me negué en redondo, lo consideraba humillante para mi Leona, y no se merecía eso. La fui presentando a algunas, y cuando Yasmine, la hija de mis colombianas, se echó novio, también quedamos para salir en plan parejas, y hablando con Yasmine, quedamos en una especie de pacto en que yo la liberaba de ser su macho, que fuera feliz con aquel chico, parecía buena gente y la trataba bien.

Ana se convirtió oficialmente en mi novia, y como tal quiso ir cambiándome y moldeándome a ella, quería que hiciera algo más productivo con mi vida y me hablaba de mi potencial, chorradas para mi, era tan feliz que me daba igual apilar cajas de tomates y latas en conserva durante 3 horas al día por un sueldo, eso me permitía volver a casa pronto y tenerla entre mis brazos, la quería tanto que algunas veces estabamos abrazados y solo quería apretar tanto con mi brazos como para partirla por la mitad. Con decir que gracias a ella aprendí a poner una lavadora, os digo todo, yo, un chico del boom de la tecnología, capaz de moverme sin cuidado por PC, videoconsolas y maquinitas, manejar videos y DVD, que podía hacer multitareas casi sin mirar, y era ver las 3 ruedas de aquella lavadora y me quedaba en blanco. Aparte, al ser el que más tiempo pasaba en casa, me convertí en un cocinillas, estaba cansado de pedir comida a domicilio y de cocer pasta, organizaba una comuna para hacer la compra y llenar la nevera de comida de verdad, sin darme cuenta pasé de tirarme horas delante de un PC pajeándome a buscar recetas fáciles y baratas para hacer en casa.

Las relaciones con mis compañeros de piso, en vez de empeorarse por el roce diario, fueron a mejor, por fin entendí muchas cosas de Teo y Alicia, visto desde el prisma de ser una pareja, cosa que no tenia hasta ese momento, era sencillo intuir cuando estaban de buenas y de malas, cuando se podía meter mano o no en la relación, un montón de detalles que hasta ese momento no me había dado cuenta de su existencia. Manu seguía con su vida un poco aparte del resto, era muy reservado para su vida privada, pero andaba haciendo muy buenas migas con Lara, a los pobres no les quedaba más remedio que juntarse a charlar y fumar cuando las otras 2 parejas se ponían cariñosas. La relación con Lara se volvió rara, eso si, seguíamos siendo los 2 locos del grupo, abiertos, sinceramente groseros e incapaces de cerrar la bocaza, pero noté como desde que Ana y yo nos acostábamos, su forma de mirarnos o de comportarse varió, estabamos hablado una hora Lara y yo en el sofá mientras los demás estaban fuera o en sus cuartos, y era genial, divertido y excitante charlar con un reflejo de ti mismo, pero era aparecer Ana y se le cambiaba el gesto, casi como aceptando un rol secundario, algo que a mi me sonaba de haber hecho muchas veces cuando estaba con Teo, y aparecía Alicia. No me gustaba que se sintiera desplazada así que delante de ella dejaba un poco de lado a Ana, que ya sabia por qué lo hacia, pero era imposible, se retraía, se iba a su cuarto o a fumarse un porro a la terraza, salía con amigos fumetas de la Universidad que había hecho aquí, pero más que amigos eran colegas o conocidos, no gente en la que se pudiera confiar, y hablando con Ana, eso no era nuevo, era así en Granada y en parte por esa soledad Ana se hizo amiga suya, las 2 eran socialmente repudiadas, Ana por su origen gitano y Lara por su actitud, podía llegar a ser muy cargante una mujer así, yo era igual, pero siendo chico gusta esa brabuconeria, siendo mujer genera cierto cinismo y rechazo.

Eso no cambiaba que Ana y yo follábamos casi constantemente, pero podíamos estar follando todo un día, y luego estar 1 semana sin tocarnos, esto último es una hipótesis, no llegó a pasar, salvo por su periodo, raro era el día en que no hacíamos el amor, pero la sensación era diferente que con Irene, mientras ella se obsesionó, y dejó de ser mi novia para ser mi amante, Ana lo combinaba, era las 2 cosas a la vez. Durante las primeras semanas era como follar en películas para menores, era más lo que se intuía y lo que se adivinaba que lo que ocurría, apenas había sexo oral, eran ligeras masturbaciones para luego iniciar el coito hasta que yo me corriera, ella iba bien servida gracias a mi enorme miembro, no me hacia falta mucho para sacarla orgasmos, y ya me daba rienda suelta, me colocaba detrás de ella y me hundía en su coño, pegado a su espalda, arrancaba y aceleraba mi cadera hasta que Ana aguantaba, generalmente tenia que sacarme el semen con una buena mamada final ya que no soportaba más embestidas, siempre dejaba que, en diferentes posturas, me corriera sobre sus tetas, era delicioso, tierno y excitante. Una vez que me corría, se acababa la fiesta, ella aun no podía ir más lejos hasta volver a acostumbrarse a mi, y al hecho de que ahora le metiera ¾ de polla sin demasiada dificultad, y no poco más de la mitad como en Navidades. Para mi era más que suficiente, podía echar de menos repetir polvo hasta volverme a correr una 2º vez pero me bastaba con eso. Si no había prisa o si era antes de dormir, nos quedábamos así, largos ratos, descansando, y siempre dormíamos en esa misma posición, una cuchara de lado a la otra, conmigo detrás de ella, sin decir nada ella iba abriéndose de piernas al inicio para dejar que mi polla se creara sitio en sus entrepierna y luego aprisionándola, siempre dormíamos así o con ella recostada boca abajo sobre mi pecho, dormida sobre uno de mis brazos o directamente en mi tórax.

Pasadas unas semanas así, ella se vio con fuerzas, de hecho yo mismo noté como aguantaba más de media hora de mis acometidas y como se movía más cuando me arrancaba a darla ritmo de forma continuada, ver como ya mi polla no era un suplicio al principio, si no puro placer, y como llegaba a correrme dentro de ella por que no me pedía que se la sacara antes de explotar, luego siempre le regalaba una orgasmo final con mis manos para no dejarla a medias. Se animó a comentármelo un día abrazados cara a cara después de una sesión en que me tuve que esforzar un poco más de lo habitual.

-ANA: ¿por que eres tan cuidadoso conmigo?

-YO: ¿acaso no te ha gustado?

-ANA: claro que si, pero noto como te reprimes, se ve cada vez que vamos ha hacerlo, dejas irte un poco más cada vez, más fuerte o más rápido, pero sigues coartándote.

-YO: quiero ir despico contigo, no quiero abrumarte.

-ANA: amor, no soy de cristal, me gusta que seas cariñoso y atento pero es que hasta en Navidades me dabas más fuerte que ahora.

-YO: entonces solo te metía la mitad, ahora cada día que pasa te entra más, y falta poco para que la meta entera y no quiero hacerte daño ni que……..no se……- pensaba en Irene, o en tantas otras que se vieron avasalladas y cambiaron su forma de ser conmigo, no quería ni de lejos perder lo que tenia con Ana en ese momento y me daba pánico extralimitarme.

-ANA: poco a poco mi cuerpo se adapta a ti, y ahora disfruto contigo, pero eso no va a cambiar nada, y seguirá sin cambiar si empiezas a disfrutarlo tú también.

-YO: lo disfruto mucho.

-ANA: no, eres feliz haciéndome feliz, y te conformas, y eso no esta bien, ¿como crees que me siento yo cuando pienso así? pienso que no doy la talla o no soy suficiente para ti.

-YO: no digas chorradas, eres perfecta y te quiero tal como eres, solo……no quiero………….estropearlo - la abracé con fuerza oliendo su cuerpo, mezcla de sudor y feminidad, con su largo cabello haciéndome cosquillas en las manos.

-ANA: ¿y que vas ha hacer? ¿Tratarme como a una damisela, débil y endeble? ¿Eso te parezco?

-YO: no, por dios, no lo líes más, no es por ti, no me conoces, si me pongo serio puedo desde hacerte daño físico, nublarte la mente o anular tu voluntad, no quiero eso, contigo no, no soportaría perder lo que tenemos.

-ANA: no lo vas a perder, voy a estar aquí, a tu lado, siempre, pero no puedes meterte en una jaula y reprimirte, no es bueno para ti y yo no quiero que seas así, te quiero a ti y todos tus aspectos.

-YO: por que no los conoces todos, si me ves como me he llegado a ver yo, no me querrías, o pensarais diferente

-ANA: eso déjame decidirlo a mí.

-YO: ¿y si lo hago y te pierdo? - la miraba con autentica preocupación, casi con los ojos vidriosos, mi mente lo imaginaba, y sus manos acariciaron mi cara.

-ANA: supongo que habrá que arriesgarse, como dijiste, en eso consiste el amor, en saltar sin saber si alguien te cogerá la mano.

Eran mis propias palabras y no podían ser más acertadas, pese a ligeros avances, casi nulos, el sexo era demasiado…simple, casi como si ya lleváramos 20 años casados y fuera por cumplir, una obligación medida y calculada, no diversión, al menos de mi parte. Seguimos hablando del tema, pero me llegó a convencer de que teníamos que ir un poco más allá, dando pequeños pasos sin parar, avanzando juntos de la mano y ver a donde nos llevaba aquello. Me había centrado tanto en lo que Ana me hacia sentir a mi, en lo feliz que era solo con su presencia en la misma habitación, que me había olvidado que era una mujer, no un figura de cerámica, una hembra necesitada y unas caricias y unos pocos orgasmos no eran suficiente, supongo que a cualquier otra mujer eso le podría bastar, o incluso a Ana misma, pero sabiendo que me contenía por ella, no deseaba otra cosa que verme a mi igual de colmado.

Por fin Teo y yo nos sacamos el carnet de conducir, Manu ya lo tenia de hacia unos años, y pese a tener un viejo coche de su madre, conducía una scooter. El teórico lo clavamos los 2 y el práctico Teo a la 1º y yo a la 2º, hay un puto cruce a la salida de las pruebas con 2 stop seguidos que por lo visto es el calvario de todo aquel que se ha sacado el carnet de conducir en Madrid, y yo me lo tragué con patatas. De inmediato llamamos a Adrián, y quedamos en que nos buscara un coche de 2º mano barato pero en buenas condiciones, uno de estos coches compactos para ciudad pero de 5 puertas, a los pocos días nos llamó y nos puso en contacto con un “amigo suyo” que tenia la urgente necesidad de vender su coche semi nuevo, y por lo que conocía a Adrián eran líos de drogas, seguro, el tío necesitaba 4.500€ ya y sin preguntas, firmó los papeles del coche con los ojos cerrados y salió disparado llamando a alguien diciéndole que ya “tenia lo suyo”. El coche no tenía ni 6 meses y estaba casi de fábrica, aun así me picó el gusanillo de las motos y le pedí a Adrián que me buscara alguna scooter de 2º mano, me convenció de que era mejor comprarla nueva, ya que no se fiaba del origen de cualquier moto que le vendieran, o de su estado, me respetaba y me conocía lo suficiente como para no querer que me estafaran.

Me sorprendí al ver lo baratas que eran, algunas de 700€, pero bien aconsejado por Adrián subí un poco el precio a una de 1.200€, con 2 cascos, uno especial con airbags, cadenas, cepo y chupa de cuero, incluidos. Fue una gozada conducir por 1º vez, esa sensación de libertad y poder al acelerar, nos fuimos los 3, Teo, Adrián y yo a una zona apartada de unas residencias donde se podía conducir sin peligro alguno y nos fuimos haciendo circuitos turnándonos al conducir para hacernos al coche y matar los nervios de las primeras veces, aparcando y haciendo ejercicios de aceleración y frenada. Al volver me dio por meterme por una carretera nacional, quería probarme del todo, era así de bestia, cuando empezaba algo que me gustaba iba hasta el final y probaba todo. No recordaba haber tenido tanto miedo desde la operación como al entrar en la autopista, me arrepentí al momento en el carril de incorporación, la velocidad y el pánico a chocar casi me dejan petrificado, logré meterme al fin después de crear un pequeño atasco y solté nervios, Adrián se reía, él ya había conducido bastante, aun sin carnet. Hice unos 10 kilómetros para coger una salida y allí Teo cogió el volante y se hizo la vuelta, aparcaba mejor que yo a si que dejamos a Adrián en su casa y nos fuimos a la salida de la Universidad, la chicas estaban por salir, y al ser tan rápido todo, sabían de nuestras intenciones pero no de que ya lo teníamos, jugamos con ellas mandándolas mensajes para que miraran hacia nosotros y nos vieron, haciendo sonar el claxon, con la música del buen equipo que le instalaron al coche a todo trapo, bailando Teo y yo como auténticos malotes de barrio, salieron corriendo gritando de felicidad, nos abrazamos, nos cuestionaron e interrogaron, inspeccionaron el vehículo a fondo, Lara hasta se puso al volante con las llaves puestas, se subieron al coche y nos fuimos a dar una vuelta mientras hacíamos tiempo para ir a buscar a Manu al museo donde trabajaba, casi idéntica reacción, pero no había sitio, y además iba con su scooter, así que volvimos haciendo una carrera ficticia e inocente contra él.

Como es costumbre las primeras semanas éramos el taxi particular de todos, y nos encantaba, queríamos cualquier excusa para ir a coger el coche, y lo mejor fue que mi familia pasó de estar a más de 1 hora en autobús, a poco más de 15 minutos, contaminará y será peor para el medio ambiente pero tener coche propio te da unas opciones que no se pueden comparar con el transporte publico. Mi padre casi me zurra por haberlo hecho todo sin su aprobación o consejo, el tema de coches lo había llevado siempre él en casa, mi madre fue la que cuestionó de donde había salido el dinero, sin llegar a mentirles, ellos pensaban que mi posición y mis horarios eran mejores en mi trabajo, por lo tanto me daba para evitar preguntas del tema y darles unos 200-300€ al mes a mi familia para evitar que a final de mes llegaran tan justos como siempre habíamos llegado. El tema de la scooter fue un tontería mía, supongo que una tontería que te da el tener dinero y poder gastarlo, era mucho mejor acercándose el invierno ir en el coche con calefacción y con casi todos, apenas tocaba la moto, aunque siempre había motivos, y a Ana le encantaba ir de paquete detrás de mi, siempre le daba el casco de los airbags, aunque ella no lo sabia. Gracias a mi corpulencia era sencillo manejarla y debido al excesivo celo que mi padre me había enseñado a tener de la carretera, conducía de forma cuidadosa y sin hacer el tonto.

El tiempo pasó, era ya casi diciembre y de mis mas de 100.000€ con los que empecé mi aventura, me habían volado ya mas de 20.000€, entre el piso, las compras, los detalles con Ana y los demás, el coche con la moto y gasolina………es cuando te das cuenta de lo duro que es llevar una casa, y lo que duele ver tu dinero evaporarse, aun así tenia un colchón de unos 80.000€, tenia una vida plena y perfecta. La vida con Ana era extraordinariamente sencilla y placentera, apenas discrepábamos en nada y cuando lo hacíamos terminábamos a bromas o follando, el día a día era aburrido, trabajar por las mañanas y dejarla descansar o estudiar por las tardes, de vez en cuando salía con Alicia o Lara y algunas amigos para despejarse, pero mi confianza era plena en ellas, de hecho Ana se molestaba si pasaba mucho tiempo sin verla, pero no quería quemar la relación, debía darla su espacio también, que no fuera su única opción de ocio, que no centrara su vida en mi, si no que la compartiera conmigo. Los fines de semana o los días libres éramos como uña y carne, salíamos a divertidos o yo planeaba días de fiesta y paseo por la ciudad, días en que planeaba al detalle para ella, pasando las mañanas de tiendas comprándonos ropa, saliendo de museos o con sesiones en centros de masajes e hidroterapias, comiendo fuera, para luego ir al cine o al teatro, cenar y salir luego a bailar y beber. Yo no bebo y ella aprendió a no pasarse, o no quería que la viera borracha, sabia que no me gustaba, no asocio beber a divertirse. Salíamos junto a mis compañeros de piso, o solos, lo pasábamos en grande y me hacia enormemente feliz verla sonreír de forma natural, sin bromear ni hacer nada, solo mirarla sin que se diera cuenta y verla con aquellas sonrisas sin motivo aparente, lograr que su cara se iluminara de satisfacción era mi objetivo y lograrlo me convertía en una persona completa.

Para mi ya no era importante, pero de noche teníamos nuestras sesiones de sexo, que cada día eran más tórridas y calientes, casi todas empezaban igual, conmigo tumbado boca arriba y ella acostada encima mía, eso por decir algo, otras empezamos en mitad de la pista de baile, Ana bailaba y se movía muy bien y me provocaba, ya no estaba tan salido como al inicio de volver a follar con ella, le costaba sacarme erecciones solo con insinuaciones y contoneos, pero cuando lo lograba no había opción, en mitad de la pista mis manos repasaban todo su cuerpo mientras ella se dejaba hacer, sin dejar de mover sus caderas, y si antes era bastante mojigata con las muestras de afecto en publico ahora era ella la que las demandaba, incluso podía meterla la mano por debajo de la falda o dentro del pantalón y acariciar su coño por encima de la tela de su ropa interior, si es que llevaba ese día, y cuando no podía más su mirada me lo hacia saber, al igual que sus labios y su lengua, salíamos disparados de allí directos a casa, nos costaba llegar a casa sin magrearnos en el coche, o la moto si no llovía o hacia mucho frío, mis manos se perdían entre sus piernas y las suyas eran ya expertas en acariciarme la polla encima de la ropa, había obtenido la habilidad especial de sacarme la polla sin quitarme el pantalón, bastante excitante, y alguna vez volvíamos a casa mientras ella me la chupaba. Un día, sus manos y su lengua fueran tan hábiles que no aguanté llegar a casa, paré en un parque cercano a casa en que de noche no había nadie y allí mismo la monté como un animal, recosté los asientos y apartándola las bragas empapadas por debajo de la falda la subí encima mía y la ensarté hasta lo máximo que le llegaba ya, que a esas alturas casi era toda, fundiéndonos en besos largos y pasionales con nuestras lenguas peleándose por invadir la boca del otro, sacándole las tetas de la blusa ligera que solía llevar y atacando sus pezones como mejor había aprendido a hacer, agarrando de sus caderas y cogiendo velocidad la subía y bajaba de mi falo con cuidado hasta que le sacaba el 1º orgasmo, allí aprendí que en ese punto, podía volverme algo más bruto con ella, su coño ya empapado y abierto, lograba recibirme sin hacerla daño y quise ir dándola más, como me pedía, eso llevó a que mis movimientos y los suyos se aceleraban tanto que la sacaba orgasmos y aun así me pedía más. La situación en el coche era tan incomoda que más de una vez dio al claxon del coche con el culo haciéndolo sonar, y alguna mirada curiosa podía pasar por allí, pero daba igual, solo disfrutaba de penetrar a mi novia como el semental que había casi olvidado ser, a la media hora la llené de mi semen dejándola medio ida, cuando terminaba mi cadera cogía vida propia y ella solo aguantaba mis acometidas como podía, cada vez era más tiempo. Desde que empecé a darle ritmo pasó de aguantar apenas 10 minutos a más de media hora, y de faltar 6 centímetros para metérsela toda, a faltar apenas unos 2 o 3.

Ese día, después de medio arreglarnos y llegar a casa, se fue a dar una ducha, decidí ir detrás de ella y ducharnos juntos, esta vez fue una gran idea, y empalándola por detrás la volví a follar apenas 20 minutos después de haberlo hecho en el coche, la vez que menos tiempo había pasado entre corridas de mi parte. La visión de su cuerpo húmedo me la puso dura tan de golpe que la golpeó en el trasero y se abrió paso entre sus muslos, al ser la 2º corrida seguida me llevó mas de 50 minutos correrme, en los cuales, notaba que Ana estaba exhausta, pero no dijo nada, quería aguantar lo que fuera, aquel pequeño vendaval a su espalda estaba matándola, abriéndola, notando como sus paredes vaginales se contrarían y tenían espasmos, pero era lo que había pedido y aunque lo hubiera exigido no estaba seguro de haber podido parar, sus continuos orgasmos simples o llenos de fluidos, que la hacían salirse de mi y frotarse exageradamente el clítoris bañándonos aun más los pies con sus emanaciones para volver a empalarse sola, y pedir a gritos que la diera más y fuerte, quería acariciarla sus senos y su vientre pero me resultaba imposible mantener ese ritmo y velocidad sin sujetarla bien de la cintura, con el ruido de los golpes secos de mi pelvis contra sus glúteos llenando la habitación todo el tiempo, hasta que sus piernas le fallaban, estaba en parte ida pero consciente y disfrutando como una perra de la follada, esta vez no era amor que le estaba regalando. Cuando me fui a correr la pobre se sentó en el borde del baño y me mamó la polla poseída, me corrí por toda su cara y su pecho mientras se sujetaba entre las piernas, dolorida pero conforme, incluso llevada por la pasión las sacudidas alcanzaron sus labios, y supongo que imbuida de lujuria se relamió probando por 1º vez mi semen bajo el agua caliente. La levanté casi en vilo teniéndola de pie a mi lado, solo con mis brazos, y la bañaba el cuerpo, para dejarla limpia y como agradecimiento a aquella follada tan animal que habíamos tenido, la más larga y fuerte desde que volvió, y casi al nivel de cuando se fue, pero ahora metiéndole casi toda mi verga, no solo la mitad, y habiendo pasado yo ya por mujeres ampliamente expertas. Nos quedamos unos segundos mirándonos a los ojos, su largo cabello mojado y sus preciosos ojos húmedos de agua y felicidad se clavaron en mi mientras sonreía y se mordía le labio, dándome pequeños toques con la nariz en el pecho o el cuello, buscando mis labios mientras repasaba su cuerpo con la alcachofa de la ducha.

-ANA: eres genial, no se como lo haces pero me llevas al paraíso cada día, te quiero.

-YO: yo a ti más, por que me llevas al mismo sitio solo con mirarme como lo haces por las mañanas, solo con sonreírme cuando me pillas mirándote absorto, o cuando me acaricias con tus manos la espalda en completo silencio, eres perfecta.

-ANA: eres tonto, yo hablo de sexo - me miró sin llegar a ofenderse.

-YO: lo sé, pero en eso ya cada día avanzamos, es solo una parte, tu haces que te quiera todo el día, y ahora vas y pruebas mi semilla jajjajaja no puede haber mejor mujer en el mundo - se dio cuenta del hecho, y se relamió de nuevo, probando del semen que aun tenia en su cara y recogiéndose un poco con el dedo.

-ANA: dios, ni me he dado cuenta, me tienes tan loca que ni me he enterado, ahora voy a probarlo de verdad - mirándome fijamente a los ojos introdujo aquel dedo en su boca, lo lamió y chupó obscenamente, saboreando aquel manjar - vaya, esta un poco amargo, pero caliente, no esta nada mal, ¿quieres probar? - se cogió un poco de la cara y me ofreció el dedo, segura de mi asco o repugnancia, pero no era la 1º vez que probaba mi semen, ya fuera en la boca o el cuerpo de una mujer en la que me había derramado. Engullí aquel dedo como su fuera un helado ante su mirada perpleja, chupando y relamiendo aquel dedo de forma obscena.

-YO: tengo que comer más tomate, esta más amargo de lo que recordaba - la vi sonreír atónita ante mi atrevimiento - sabes mejor tú - al agarré del coño palpitante, introduciendo mis dedos en ella, haciéndola cerrar los ojos momentáneamente, para volver a abrirlos y ver como estaba relamiendo esos mismos dedos, dándola a probar uno, que chupó gustosa - me salgo de aquí o voy a por el 3º y aun no estas preparada.

Torció el gesto, pero consciente de su cansancio, y de mi brío, entendió que era cierto, me di un agua rápida final con la polla medio empalmada por lo acontecido y me salí de allí encantado de la vida, me puse solo un pantalón de pijama y me fui al salón para alejarme lo más posible de la tentación del cuerpo de Ana duchándose. Me encontré a Manu viendo la NBA en la TV del salón, la que tenia de pago, arrancaba la temporada y me senté con él a charlar y verlo un rato, quise distraerme para que se me bajara el calentón de esos momentos finales en la ducha, pero no había manera, cuando se me encendía solo había una forma de apagarlo. Me volví a nuestro cuarto y entré como un animal en el baño, Ana estaba con una toalla secándose y se sorprendió al verme, me lancé a por ella y totalmente desnuda me la subí encima a horcajadas, besándola desesperadamente.

-ANA: jajaj ¿pero que haces?

-YO: me has puesto muy burro con eso de saborear mi semen, necesito otra ronda o no podré dormir.

-ANA: amor, mi pobre cuerpo no aguanta más, estoy magullada, y no se como poder una 3º vez.

-YO: pues tú veras, pero yo así no me puedo quedar, con la polla medio tiesa.

-ANA: esta bien, ¿que tal si te la chupo hasta que te vuelvas a correr? - me miró rogando que aceptara.

-YO: de acuerdo, pero, y si esta vez me dejas….ya sabes…en tu boca……- me miró sorprendida, pero excitada por mi petición –……. bueno, ya sabes, ya has probado, solo era una idea, me da igual, solo necesito desahogarme, haz lo que quieras.

-ANA: bueno, no sé, la verdad es que no ha sido tan desagradable como creía, pero era un poco, tú te corres mucho y gran cantidad, pero si es lo que tú quieres…- eso no podía ser, no quería que fuera una imposición que aceptara, “así empecé con Irene”.

-YO: no, no quiero que lo hagas por complacerme, solo te propongo la idea, tu decides si quieres o no, debes querer hacerlo, por ti.

-YO: esta bien, llévame a la cama - nos besamos y agarrándola bien la llevé a la cama dejándola recostada suavemente, besando su cuello y jugando con mi lengua en sus pezones, su cuerpo fresco y húmedo me la terminó de poner como una pierda, palpitando en su vientre, cosa que la volvía loca, rozar y acariciar su vientre era ponerla cachonda.

De inmediato me giró sobre la cama y me puso boca arriba, montándose en mi polla agarrándola con las 2 manos y lamiendo el glande como un yogur, su lengua repasaba cada rincón de la punta de mi enorme falo, metiéndoselo en la boca y chupándolo, dejando que sus labios fueran repasando todo su contorno mientras la sacaba de su interior, sin duda se había vuelto una gran mamadora, y sin meterme en su cabeza creo que disfrutaba de ello, se puso seria y se colocó entre mis piernas mirándome a los ojos mientras se sacaba la mandíbula del sitio para meter casi la mitad de mi miembro dentro de su garganta, era literalmente increíble ver aquella cara angelical meterse tal monstruosidad en su boca, con alguna lagrimilla en su mejilla y rozando las arcadas, pero sin parar sus manos ni su lengua, supongo que mi falta de entreno me llevó a correrme 20 minutos después, cuando sus labios trabajaban mi tronco de forma lateral y jugaba con su lengua en mis huevos, la avisé y tuve dudas de su actuación, pero sus rosadas mejillas denotaban excitación y se dejó llevar, siguió engullendo acelerando aun más sus 2 manos hasta sacarme el semen a chorros fuertes y calientes que fueron llenando su boca, notaba como cada impacto la hacia tener una arcada, ya fuera en su garganta o sus carrillos interiores, era la sensación de llenarse la boca con mi semen, aun así sus manos continuaron sus gestos hasta notarme flaquear, podía ver como seguía con las arcadas y alguna gota de semen caía por su mejilla, con la boca media abierta y la cabeza echada hacia atrás. Quise acercarme para hablar, pero me hizo un gesto para que me quedara quieto, se repasó con un dedo aquella gota de semen y se la metió en la boca cerrándola, nos mirábamos a los ojos, estaba expectante y preocupado, no se movía salvo por los espasmos de sus arcadas, de golpe cerró la boca y se puso la mano en ella cuando una de sus arcadas casi la hace vomitar, pero con la otra mano paró mi cuerpo que trató de asistirla. Me miró intensamente, y fuera lo que fuera lo que tenía en la boca, se lo tragó sonoramente, varias veces además, hasta que se le pasaron los espasmos y ante mi preocupación abrió la boca y sonrío enseñándome la lengua y guiñando un ojo, su boca estaba impoluta y limpia, me fui a abrazarla.

-YO: no tenias que haberlo hecho por mí, no si no querías, no debí pedírtelo……- me cortó agarrándome la cara.

-ANA: no lo he hecho por ti, me he calentado muchísimo al mamártela, quería hacerlo, sentir tu leche caliente en mi boca y tragármela - me reconfortó, aunque tenia la duda de si era cierto o solo lo decía para tranquilizarme.

-YO: ¿estas bien?

-ANA: si, ahora si, no ha sido tan malo, no era el sabor si no la sensación en si, supongo que con una par de veces más se me pasara.

-YO: ¿quieres repetirlo? ¡¡Pero si casi echas la cena!!

-ANA: bueno, si quiero aprender tendré que sacrificarme, es un momento malo, pero se me pasará, y……..me pone muy cachonda comerte la polla, me he mojado entera otra vez - su sonrisa era picara y su mirada, llena de lujuria.

-YO: ¿y cuanto más te has calentado? - acariciaba su brazo atreviéndome a adivinar si podía haber 4º ronda.

-ANA: dios, no sé, me dolía el……- todavía su pudor con ciertas palabras me parecía adorable -……...antes, pero ahora me quema, no se como pero ahora necesito desahogarme yo.

-YO: no quiero forzarte y que volvamos a follar y te haga más daño o pero, pero tengo un truquito para calmar tus ansias sin penetración - se le iluminó la cara pese a la rojez de sus mejillas, estaba frotándose el coño realmente necesitada.

La hice gatear por encima mía hasta tumbarme boca arriba y ponerla de rodillas en mi cara, abriéndola de piernas y con mis dedos y mi lengua comenzar a trabajar aquel congestionado interior, estaba rojo y saturado pero caliente y húmedo, pedía un alivio y mis olvidadas comidas de coño se lo iban a dar, abrí con los dedos los labios mayores, y con un cuidado exquisito fui lamiendo y chupando con cuidado cada recoveco de su interior, localizando su clítoris por momentos y lamiendo y jugando con él para calentarla más, no fue difícil ponerla a gemir como una condenada, notar como sus piernas se contraían y relajaban según mis movimientos y como se movía sin saber como poner sus manos o su cuerpo del gusto que sentía, si se ponía a 4 patas castigaba su clítoris y si se incorporaba la hacia vibrar con mi lengua en su interior, terminó echándose hacia atrás moviendo las caderas como si fuera una penetración con mis dedos y boca llevándola al paraíso al que llegó reventándome en la cara con una corrida que la quiso sacar de mi cara por los calambres en las piernas, pero agarrándola con fuerza seguí hasta que logré poco después una 2º corrida abundante y llena de fluidos, tan fuerte le traspasó la electricidad en su interior que paso de rodillas a caerse redonda de espaldas sobre mi pecho contrayendo sus piernas mientas no se dejaba de frotar el clítoris encharcado. Sus gritos eran audibles pero contenidos, estaba exaltada pero feliz, no le había comido el coño así desde su vuelta y mi maestría había mejorado con mis andanzas desde que la tocara en Navidades. Se me tiró encima relamiendo mi cara bañada de sus emanaciones, besándonos como seres no evolucionados, llevando el termino “beso húmedo” a un nuevo nivel.

La separé un poco y me fui desnudo al baño, allí me lavé bien la cara y Ana, detrás mía, se volvió dar una ducha rápida, gritándome que era imposible mantenerse limpia conmigo cerca, la di la razón, y por poco me meto en la ducha con ella, pero era demasiada provocación, apenas quedaban unas 4 horas para ir a trabajar, quería descansar un poco, me acosté completamente desnudo, y a los pocos minutos me dormí, noté como Ana se tumbaba a mi lado, de reojo viéndola con unas bragas y una de mis camisetas viejas, le encantaba vestirse con mi ropa, le quedaba grande y sexy. Tomando la rutina de siempre, me cogió de la mano y se rodeó con mi brazo y mi cuerpo, abriéndose de peinas, cogiendo mi polla y metiéndosela entre sus muslos, para poder dormir así de juntos y darla mi calor corporal, a mi me encantaba esa sensación y más aun desnudo, y a ella, sentirme pegado a su cuerpo y mi polla palpitando entre sus piernas, dormíamos así siempre, y así lo hicimos.

Ana – Aprendiendo.

A partir de ese día las noches con Ana fueron a más, era maravilloso enseñarla una nueva postura o algún truco nuevo y ver como los iba asimilando y aplicando con el paso de las semanas, de vez en cuando aun así, hacíamos el amor, sobretodo en días especiales en que tenia un mal día o estaba sensible, la trataba con todo el cariño y amor que podía, y con eso bastaba, pero esos días eran los menos, y de vez en cuando después de eso, terminábamos follando de nuevo como animales. Se descubrió Ana como una mamadora de pollas de 1º, ayudaba practicar conmigo, y ver como pasó de apenas poder con el glande a tragarse medio trabuco sin contemplaciones, y de casi vomitar al sentir mi semen a tragárselo y jugar con él en su boca, lo mejor era que eso la ponía a 1000, no se por que, cuando se supone que en una mamada solo disfrutaría yo, pero a ella la volvía loca sacarme la 1º corrida con su boca, para que luego la matara con la 2º. Su capacidad de aguanté aumentó de nuevo, era grotesco ver a esa niña con cara de inocencia y cuerpo adolescente, gemir, gritar, pedir más y retorcerse cuando la penetraba casi totalmente con mi enrome barra candente de carne, casi parecía imposible que le entrara, pero no solo le entraba si no que ya no había dolor de ningún tipo, gozaba con cada sacudida y los orgasmos continuados, en los que repetía “que gusto, que rico”, que la sacaba durante más de 1 hora, solía ser el momento en que yo me corría, si ella estaba mejorando yo volvía a ser una gran versión de mi. Para su cumpleaños, una semana antes de Navidades, planeé un escapada juntos rural durante todo el fin de semana, hicimos una fiesta previa en casa con los amigos y parte de mi familia, pero luego cogí el coche y nos fuimos a la sierra de Madrid, alquilé una habitación en un hotel de las montañas y entre saunas, masajes, clases de esquí, (que se le dio mejor a ella que a mi), y las noches tórridas a la lumbre de una chimenea, alejados de toda tecnología y de la vida ordinaria y convulsa de la juventud en la gran cuidad, no pudo salir mejor.

El domingo la dediqué el día entero, fui exageradamente atento y romántico, casi generaba diabetes de lo empalagoso que estaba, pero lo llevaba con mi sorna habitual, y a ella le encantada, desde hacerla el desayuno y llevárselo a la cama, a llevarla en brazos hasta la pista de esquí, lo preparé con el masajista del spa, para que en mitad del masaje se fuera y entrara yo, apenas notó la diferencia, mis manos eran hábiles y trabajaba las zonas indicadas por Eli hacia ya una eternidad para mi, en su cuerpo totalmente desnudo apenas cubierto por una toalla en su cintura, esas zonas en que a las mujeres se les tensan los músculos por el peso de sus senos o por el uso del sujetador. Repasé toda su espalda con aceites corporales sacándola suspiros de placer al notar como sus músculos se desenredaban entre mis dedos, poco a poco fui atreviéndome a más, a tocar sus costillas y cerca de sus pechos, o bajando hasta la corva de su espalda, sus piernas y muslos, peligrosamente cerca de su trasero, me asusté un poco ante su dejadez pero tras unos minutos su cuerpo se tensó hasta que reunió valor suficiente y se dio la vuelta tapándose asustada.

-ANA: ¡¡¡oiga ¿pero que ha….- me vio y se le paso de golpe el enfado, sonriendo ante los ojos atónitos de los demás clientes y masajistas, riendo al haber visto el cambio y ella no -…..¡¡Tonto, mira el susto que me has dado!! Jajajajja - se tapaba la cara de medio vergüenza mientras buscaba mi pecho para abrazarme queriendo ser engullida por la tierra.

-YO: shhhhh, tranquilícese, túmbese de nuevo y sigo con mi trabajo o me despedirán…….- se volvió a tumbar besándome y charlando con una señora cercana que nos miraba raro, advirtiéndola que yo era su novio para que no pensara cosas raras del spa.

Seguí mi sensual masaje sacando ya respiraciones aceleradas, pero viendo como sonreía y se mordía un dedo para mantenerse digna mientras su cuerpo se estremecía ante mis caricias, sonó el reloj del fin de hora de masaje, oyendo un lamentó de los labios de Ana, y con la señora de antes mirándome con ojos de querer ser la siguiente, Ana y yo nos percatamos.

-YO: lo siento señora, agradezco el honor pero mis manos, mi cuerpo y mi corazón ya son de esta joven - rodeé con una gran toalla el cuerpo de Ana, tapándola de miradas indiscretas al levantarse de la camilla, había muchos hombres, Ana y su cuerazo juvenil de tez morena brillante del acierte sobresalía del resto.

Al tenerla entre mis brazos nos miramos fijamente, veía sus mejillas sonrojadas, no sabia si por el calor de la habitación, la vergüenza de verse medio desnuda ante esa jauría de lobos, si por mi broma, o por que mis manos la habían calentado de más, quizá una mezcla de todo eso. Nos besamos tiernamente un par de veces, la cogí en brazos, me la llevé a la zona de la duchas para después ir a comer, mientras ella se duchaba yo me mantenía fuera en la puerta, no me había gustado nada como la miraban algunos de esos hombres y mi instinto de protección se activó, charlábamos sobre la broma y alguna tontería más.

-ANA: ¿al final cuando no tenemos que volver?

-YO: habitación tenemos hasta mañana por la mañana, pero si queremos estar en casa tenemos que salir de aquí a las 8 para dormir en casa e ir mañana a la Universidad pronto (era el taxi oficial de mis 3 compañeras de piso desde la adquisición del coche, para la universidad), ¿por que lo preguntas?

-ANA: jo, por que me lo estoy pasando genial, ojalá pudiéramos quedarnos aquí siempre.

-YO: ojalá, pero esto tiene que ser así, no podríamos vivir así siempre, tenemos que vivir nuestras míseras vidas para comprender lo idílico que son estos descansos y disfrutarlos.

-ANA: pues es un pena, todo el mundo debería vivir así siempre……- su tono era reafirmando su propia realidad, me encantaba la inocencia de aquella mujer, era como una princesa de cuento de hadas hecha mujer, y yo un troll que veía el mundo tal como era, y mientras yo la enseñaba a no ser tan cándida, ella me daba esa pizca de felicidad que creía que no estaba a mi alcance.

-YO: no aguantaríamos así, esto es demasiado empalagoso, y esta lleno de babosos, ¿te has fijado en como te miraban en la sala de masajes?

-ANA: claro, pero son gente mayor, no se, pobrecillos…..

-YO: de pobrecillos nada, por poco le salto con algo a más de uno, casi convierten la habitación en una piscina de tantas babas.

-ANA: jajajaja que bestia eres, déjales, ¿no estarás celoso? - su tono buscaba la broma.

-YO: si, estoy que me muero por dentro jajajaja mientas ellos miran el cuadro yo me lo follo.

-ANA: ¡¡alaaa!! Mira que eres bruto jajajajaja pues que sepas que yo si estoy celosa.

-YO: ¿de que mi reina? no será de la señora esa jajajajaja

-ANA: no, de esa no, pero si del resto, ¿no has notado como te comían con los ojos? si hasta la masajista buenorra y la de la recepción te ponen ojitos….- mi silencio era absoluto, no me había dado cuenta, “¿como se me había pasado?” Estaba entrenado para ver y detectar esas cosas, una cosa es que no las aprovechara por estar con Ana, pero no darme cuenta no entraba en mis planes.

-YO: pues ni me he enterado….

-ANA: pues yo si, y no me gusta nada que anden detrás de ti.

-YO: hombre, orgullosa tenias que estar de que te envidien, yo lo estoy contigo.

-ANA: ya, pero una cosa es que te miren golosas y otra lo de la recepcionista….

-YO: ¿que la pasa?

-ANA: ¿te crees que trabaja sola en el hotel?, es la de la recepción, la que trae las comidas, la que esta en la puerta de la habitación todo el tiempo, la que entra a recoger y limpiar y la que coge siempre el teléfono, hasta entró el otro día nada más irme yo, que te dejé durmiendo, esa golfa te esta rondando…..- de nuevo silencio, no me había percatado, y repasando mentalmente todo el fin de semana, me di cuenta de que salvo a alguna limpiadora por los pasillos o algún cocinero, era cierto, esa recepcionista nos trataba casi en exclusiva, joder, si hasta se había metido en mi habitación conmigo dormido y ni me enteré hasta que me desperté y la vi recogiendo la habitación, tumbado apenas cubierto por una sabana que no tapaba muy bien mis erecciones mañaneras, de nuevo me confundí por no darme cuenta.

-YO: ¿y que quieres que haga? ¿la digo algo? ¿O habló con sus jefes? - no sabia muy bien como reaccionar, era la 1º vez que alguien estaba celosa siendo mi pareja.

-ANA: jajaja no tonto, mientras sepas quien es tu chica…… no tengo ningún problema….- su tono sonó tan sensual que solo me pude dar la vuelta.

Al hacerlo vi a Ana completamente desnuda empapada de arriba a bajo goteando por el agua de la ducha, sujetándose la mata de pelo húmeda en un moño sobre la cabeza con una mano y apretando sus senos con los brazos, mientras se apoyaba en el marco de la puerta, solo con los reflejos de la luz sobre su cuerpo húmedo me la pusieron tan dura que me arranqué a por ella como un tren de mercancías, desnudándome en un microsegundo y levantándola por el aire subiéndomela a horcajadas, cerrando la puerta de la ducha detrás de mi, la aplasté con cierta violencia contra la pared de la ducha mientras mi polla daba saltos en su culo, me rodeó con sus piernas y nos besábamos de forma lujuriosa, sin duda mis manos la habían calentado y sabia que la visión de su cuerpo mojado era demasiada tentación para mi, pensando ahora fríamente creo que hasta me manipuló para marcar territorio, sus celos la llevaron a ese pequeño juego, pero en ese momento me dio igual, según estabamos la penetré con facilidad, aparte de entrenada ya estaba caliente como una perra, y dejando caer el peso de su cuerpo la fui ensartando, sacándola alaridos de placer, mientras mi boca alternaba sus labios, el cuello o sus pechos, la imagen de su cuerpo brillante y húmedo, de sus tetas moviéndose y de su vientre haciendo fuerza al ser penetrado me mataban. Se agarró firmemente a mi cuello, y mirándonos fijamente me ordenó que la follara allí mismo y que se la metiera toda, de la forma más animal que pudiera.

Obedecí, aunque también lo deseaba, la sujeté bien de las caderas y usando la pared como palanca la hacia subir y bajar de mi polla lentamente, restregando su espalda por los azulejos, mientras mis manos acariciaban y separaban sus glúteos, poco a poco fui acelerando mis embestidas, gemía poseída y su espalda ya no hacia recorrido, estaba inmóvil recibiendo su petición, mi pelvis golpeaba fuerte sus muslos y seguí haciendo presión hasta que logré metérsela toda en un par de embestidas fuertes, dejándola quieta y totalmente empalada, disfrutando de su cara desencajada y de su repentino silencio, dejando que su interior se acomodara ya a esa fase final, notando como por fin su coño estaba lleno de mi y casi a reventar, sin moverme pude sentir sus contracciones al correrse, solo con sentirla toda dentro se retorció encima de mi, hacia fuerza para tratar de elevarse sobre mi cuerpo, pero la humedad solo la hacia resbalar y volver a estar plenamente penetrada.

-ANA: ¡¡dios, me siento……plena, me va a reventar el coño, dios como me gusta, lléname de tu leche amor mío, fóllame hasta que mi cuerpo no aguante más!! - me besó desaforadamente, estaba fuera de si.

Pero como me pidió, volví a acelerar mis movimientos, esta vez haciendo fuerza para elevarla y dejándola caer de golpe para volver a ser invadida por completo, di gracias a dios por que aquella mujer que me llenaba mi vida, también podía llenarla con mi falo en su interior, y no solo no la dolía si no que estaba botando como una pelota encima de mi, berreando palabras sin sentido y golpeándome el pecho con cada sacudida que le producían los orgasmos, tantos fueron que sus piernas se descruzaron y se mantenían en vilo en el aire, totalmente abierta de piernas, sin ningún tipo de impedimento físico para recibir toda mi enormidad, arrancándola varias corridas seguidas que inundaron aun más la ducha con sus fluidos, de vez en cuando tenia que levantar su cuerpo con mis brazos contra la pared por que ella ya no se sujetaba de mi cuello, se dejaba caer por la abrumadora tuneladora que era yo, sus gritos se oían por todo el baño y siendo semi publico no es que fuera muy discreto, aun así le dio igual y pedía a gritos que la “abriera el coño con mi polla gigante”, sus palabras eran el resultado de la excitación y el placer, no de sesudos pensamientos, y yo me estaba poniendo a morir, estaba siendo el viejo Raúl, la maquina de follar, me estaba deleitado con aquella follada hasta que su físico dijo basta, sus piernas cayeron al suelo y me estaba follando una muñeca de trapo, la posición era incomoda para mi, y pese a haber llegado al máximo, lo más lejos de lo que había llegado nunca con Ana, ella estaba rogando más. La saqué de su interior, saliendo de ella un montón de fluidos que estaban taponados por mi verga, la di la vuelta y la aplasté contra la pared, cogiendo de las manos y poniéndolas por encima de su cabeza, con su cuerpo totalmente estirado y pegado a la pared y abriéndola un poco las nalgas la penetré de nuevo, con ella ya apoyada en el suelo me fue más fácil coger velocidad de crucero y terminar de correrme dentro de ella 5 minutos después, lo que me dio tiempo a crear una atmósfera animal, golpeando su trasero de forma violenta y sonora, notando como su cuerpo se contraía con algún que otro orgasmo menos evidente, su cuerpo estaba al limite. Reventé mi esperma dentro de ella con un último minuto casi digno de Zeus y la bestia, eso casi la mata, su cuerpo caía al suelo, pero mis acometidas no la dejaban, eran tan rápidas y contundentes que no la permitían bajar el cuerpo antes de que la siguiente llegara, en ese último minuto la acariciaba y agarraba del vientre, cosa que la ponía a 100, y logré eyacular dentro de ella mientras la sacaba el orgasmo final, con su cuerpo casi serpenteando por la pared, recorrido por una fuente eléctrica, moviéndose como una anguila y gritando como un cochinillo en una matanza.

-ANA: ¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡DIOS, QUE BIEN FOLLAS PEDAZO DE ANIMAL!!!!!!!!!!- lo gritaba mientras se hacia una pequeña bola en el suelo de la ducha, agarrándose su coño como podía, con ligeros temblores por sus músculos - dios, me duele todo, pero me encanta, eres una bestia, eres mi bestia particular jajajajajjaja.

-YO: ¿estas bien? no quería pasarme contigo pero me has puesto muy caliente……. - me senté a su lado dejando que mi cuerpo volviera a respirar de forma normal, casi me había obligado a sacar al mejor Raúl, al que dominó a la Leona o a las colombianas, claro está, apenas 30 minutos, y sin llegar a necesitar a la bestia, sentía que me había pasado con Ana, que la había dado más de golpe de lo que podía soportar, sin ir paulatinamente hasta ese punto, como si al final de una larga escalera la hubiera hecho saltar de golpe los últimos 5 escalones, me había dejado llevar y no fue nada cariñoso ni amable, fue una follada salvaje con todas las letras.

-ANA: estoy bien, solo déjame que me recupere un poco aquí sentada, dios, eres increíble, no me creo lo afortunada que soy, eres guapo, listo, atento, amable, divertido, buena persona, ¿y encima follas así cuando te pones serio?, jajajaj eres un mirlo blanco.

-YO: soy lo que quieras que sea, eres mía y yo soy tuyo - acerqué mis labios besándonos con gestos cortos y sonriendo mientras su cuerpo se relajaba, le costó más de 10 minutos dejar de temblar y que se le pasaran los espasmos en su vientre.

En esas estabamos cuando sonó la puerta de la ducha, Ana y yo nos miramos, sorprendidos, estabamos los 2 desnudos en el suelo, con ojos cómplices, entendiendo que quizá alguien hubiera oído todo aquello, no habíamos sido nada cuidadosos.

-YO: ¿si?

-RECEPCIONISTA: si, hola, soy la recepcionista del hotel, y…………verá…..algunos clientes se han….quejado de que había alguien gritando en este baño, solo quería comprobar que todo fuera bien - Ana me sonrío, sin yo entender muy bien el por qué, se me acercó al oído.

-ANA: es la golfa que anda detrás de ti - me susurró, le pregunté con la mirada si estaba segura, me lo afirmó de nuevo tapándose la cara de vergüenza, mirándome sin saber que hacer, esperando mi reacción, respondí.

-YO: si, si, era aquí, todo va bien.

-RECEPCIONISTA: verá, no es que no confíe en usted, pero me han dicho que sonaba como si estuvieran haciendo daño a una mujer, y me tengo que asegurar de que no hay ningún problema……..- ciertamente si no estabas muy atento, desde fuera algunos gritos de Ana daban para ser mal interpretados.

-ANA: si, era yo, toda va bien, es solo que…..- me miró sin saber como seguir la frase, yo la hacia gesto como desentendiéndome del lío en que se había metido, bromeando, de golpe se le pasó algo por la cabeza y rió juguetona - …..estoy con mi novio y acabamos de follar – me quedé blanco, no ya por sus palabras, no era dada a hablar así de sucia, si no por que mucho menos era de decirlo tan abiertamente a otros - si, y no vea como me ha puesto, siento las molestias pero es que su enorme polla me mata - traté de taparla la boca jugando, esa reacción era más típica de mi que de ella. Pasaron unos segundos de silencio.

-RECEPCIONISTA: lo siento, pero voy a tener que comprobarlo, abran la puerta por favor, por su seguridad.

-ANA: claro, pero estamos desnudos……..- Ana me miraba de forma picara, quería que me metiera en el papel, me picaba con sus gestos y su mirada, quería que fuera el Raúl más desvergonzado, pues lo iba a ser.

-RECEPCIONISTA: por favor, abran, tengo que asegurarme de que la chica esta bien……..- me ofendió su tono, realmente pensaba que la había hecho daño, y odio a los malbaratadores, del tal forma que si veía algo más allá de lo habitual por la calle me metía por medio, más aun que me tachen de tal cosa.

Me levanté enfadado ayudando a Ana a ponerse en pie, y con la polla colgando abrí la puerta de golpe quedando completamente desnudo delante de ella, de inmediato su mirada se clavó en mi miembro en reposo, se sacudió la cabeza recordando para que estaba allí y miró a Ana que estaba tapándose con las manos, roja de vergüenza, solo estaba la recepcionista en el baño - disculpe señorita, entonces ¿esta bien verdad?

-ANA: claro que si, nos ofende con su acusación, mi novio no es ningún capullo que me ponga la mano encima, es una bestia parda que me folla como jamás te han abierto, así que deja de mirarle la polla a mi chico y de andar detrás de él y lárgate de aquí - me sorprendí del tono, palabras y agresividad de Ana, era un personaje, la seguí el juego al ver la cara sorprendida de la recepcionista, que había vuelto a mirarme la polla sin tapujos y se vio pillada ante Ana.

-RECEPCIONISTA: si, perdone la confusión…….- volvió a mirármela de reojo - …..solo quiera asegurarme……- la corté cogiéndola del brazo y metiéndola en la ducha pegándola a mi cuerpo, era realmente mona, vestida de traje con falda corta ceñida, me extrañó ni haberme fijado en ella, menos no percatarme de sus miradas.

-YO: asegurarte ¿de que?, ¿de que la tengo tan grande como intuías el otro ida en la habitación? - se le abrieron los ojos al verse descubierta - ya me ha dicho mi chica que andas detrás de mi, ¿es esto lo que quieres?, “comprobar”, si, ….lo caliente que te pongo …….- la metí mano en el culo mientras me cogía la polla y le daba con ella en la parte del muslo de la falda.

Ana alucinaba de mi interpretación, la recepcionista trataba de separase de mi cuerpo desnudo sin tocarme pero sus tacones de trabajo resbalaban así que casi la tenia que sujetar yo por el culo, trataba de articular palabras pero entre la situación y ver sin apartar la mirada mi polla golpear su pierna con firmeza, no atinaba.

-RECEPCIONISTA: no por dios, perdóneme……..yo no pretendía…..solo déjeme……- sus palabras y gestos eran diferentes, mientras que se trataba de comportar, sus labios se relamían y se mordía deseándome, mi cuerpo desnudo y húmedo resaltaba mis músculos, cada día más apreciables a simple vista, y mi polla la estaba empapando la falda con tanto golpe.

-YO: ¿que dices, amor, la dejamos que se una a la fiesta? - pregunté a Ana como si aquello fuera normal para ambos, haciendo temblar a aquella mujer de unos 27 años, que apenas hacia fuerza ya, y casi pedía a gritos mis labios, Ana pilló mi intención.

-ANA; ¿esta golfa? que va, no te merece, tú eres mi hombre y esta es una cotilla a la que vamos a denunciar ante sus jefes si no tiene la boca cerrada y si no deja de mancharse las bragas cada vez que te ve…….- el tono era casi de gente de mal vivir, cogiéndolo de barrio peligroso, además era justo lo que hubiera dicho yo, algo que evitara una más que posible demanda por acoso si salía de allí - si, zorra, le diré a todo el mundo que nadas detrás de mi chico y que te cuelas en nuestra habitación cuando no estoy, no será muy difícil demostrado, ¿verdad? - se acercó a nosotros y le agarró de las tetas a la recepcionista, que estaba empezando a ponerse caliente como el palo de un churrero ante nuestra actuación, frotándose los muslos.

-RECEPCIONISTA: lo siento, no quiera molestar, si les he incomodado les pido disculpas y no volverá a pasar, pero no se lo digan a mis jefes, si se enteran de nuevo me echan…….- aluciné, no solo tendríamos su silencio, si no que no era la 1º vez que andaba detrás de algún mozo y la habían pillado.

-YO: pues tú misma, aquí mi novia y yo vamos a volver a follar y gritar, si quieres te quedas y te doy lo tuyo también o te largas y me dejas en paz, a mi me da igual.

-RECEPCIONISTA: me voy, lo siento, por dios, no digan nada pero déjenme que me vaya….. - tenia tal susto y excitación encima, que decía una cosa pero sus manos otra, repasaban mi pecho y espalda.

-ANA: pues lárgate, pedazo de guarra….. - la agarró de las manos y me la quitó de encima, la abrió la puerta y la sacó de allí dándole un cachete en el culo, fuerte y sonoro, que le dejó manos mojadas marcadas en la falda, saliendo de allí roja de vergüenza y del calentón.

Ana y yo empezamos a besarnos y acariciarnos haciendo más ruido que otra cosa, por si seguía por allí escuchando mientras nos reíamos de la actuación, ella gritaba de nuevo como poseída sin que apenas la tocara.

-YO: jajajaja dios, eres una caja de sorpresas, ¿como se te ocurre?

-ANA: ¿yo? tu que eres un pervertido jajaja ¿que pasa, te la querías follar?

-YO: que va, solo quería ponerla nerviosa, si la culpa es tuya….

-ANA: ¿como que mía? yo solo quería gastarla una broma y vas y montas un número.

-YO: ¿y que separabas que iba ha hacer?, soy yo…..- asintió aceptando su culpa.

-ANA: eso es cierto, te dan un dedo y te coges medio brazo, ¿no sabes parar en estas cosas, ni donde poner el limite?.

-YO: no, es parte de mi encanto natural jajajajajaja.

-ANA: jajaja eres malo, dios, no podría follar ni aunque lo necesitara, estoy exhausta.

-YO: tranquila, solo era para asustarla un poco más, estoy bajo de forma, no se si ahora podría con otra ronda…….- me miró sorprendida.

-ANA: ¿como? ¡¡¿que aun no estas al 100%?!!

-YO: no mi princesa, esto ha sido genial y si no quieres, o puedes más, no pasaremos de aquí, pero aun hay más.

Mientras miraba su cara, que sonreía entre la incredulidad y la excitación, yo pensaba, en realidad había bastante más, de hecho podía aguantar así mas de 5 o 6 horas con mi leona o Elenor, la madre de mis colombianas, aquello si acaso había sido Yasmine, la hija, en un mal día, y aun faltaba Zeus y la bestia, pero no sabia si quería o si podríamos llegar a ese nivel, y en realidad no me importaba, aquello era pasado, y Ana, pese a sus avances en lo sexual, me completaba de tal forma en la relación de pareja, que me daba igual al principio, ya no os digo ahora que habíamos llegado a ese nivel,

La dejé ducharse sola de nuevo mientras yo me di un agua rápida, jamás sabremos los hombres la ventaja que tenemos de darnos duchas rápidas y estar limpios, y lo complejo que es para las mujeres, más después de bañarla su interior de semen hasta lo más profundo de su ser. Yo no podía permanecer allí viéndola sin volver a follármela y ella ahora mismo no estaba en condiciones. Me salí a vestirme mientras hablábamos.

-YO: tengo hambre, me voy al restaurante, te espero allí.

-ANA: vale…… aunque puede que tarde…me quiero pasar antes por la tienda de ropa del hotel.

-YO: esta bien, nos vemos si no en la habitación.

Salí de allí contento y feliz, en una espiral ascendente desde que Ana volvió, todo era bueno y mejor con el paso del tiempo, ya hasta Ana y yo podíamos follar salvajemente o gastar bromas actuando desnudos, compenetración total, era mi novia, mi amiga y mi amante, y solo con unas pocas miradas y celos se convertía en una autentica loba defendiendo lo suyo, me pareció adorable ver a aquella mujer, que alguno hasta podían llamarla “mosquita muerta” en el pasado, ser así de agresiva.

Ana – Romance.

Me fui a comer algo y ante su tardanza, me volví a la habitación para preparar la tarde, le había comprado un colgante, un collar hecho con plata de ley, en forma de dragones azules, le encantaban aquellos animales, y más de una vez la había visto con bisutería de ese tipo, collares que no eran muy amplios ni grandes, si no finos y poco llamativos, que apenas le pasarían por la cabeza sin desabrochárselos, gargantillas me enseñó que se llamaban, sabia poco o nada de esas cosas, era su regalo de cumpleaños, que había medio fingido olvidar, o más bien la dejé pensar que mi regalo era la escapada a la sierra, que aun siendo cara, su presente era aquella joya que me valió más de 300€, un precio que a mi me parecía mucho hasta que vi en la tienda donde lo compré algunos de 1.000€ o 2.000€, muy ostentosos y llamativos, cosas que no pegaban con Ana. Me preocupé de dejar un camino de pétalos por el suelo hasta la cama, una fondue de chocolate, como en Navidades, y champan frío, ensayaba vestido o desnudo, tumbado en la cama o de pie, no sabia como hacerlo, se me pasó por la cabeza hasta quedarme en pelotas de pie delante de la puerta con la gargantilla colgada de mi miembro, pero me pareció excesivo hasta para mi. Ana estaba tardando mucho en volver a la habitación, habían pasado ya casi 3 horas desde que la dejé en las duchas, la mandé un mensaje preocupado, me respondió con una carita sonriente, “te tengo una sorpresa preparada”. Me ilusionó más que un niño al ver regalos en reyes, y no ayudó a mi eterna falta de paciencia, me resolví por esperarla vestido, sentado en un sillón giratorio, de espaldas junto a la puerta, como un malo de película, al entrar me daría la vuelta, se me hizo infinita la espera hasta que sonó la puerta, me fui girando lentamente.

-YO: pase, amada mía…… - me recosté al ver la puerta abrirse, observando a la señora de la limpieza con el carrito y los cascos de música puestos, mirando sorprendida…… - perdone, estaba esperando a mi novia, ya recogerá más tarde, fuera, rápido que esta al caer…… – me levanté y la cerré la puerta en las narices dándome cuenta de cómo miraba la habitación, estaba preciosa con velas y demás, pero seria un horror limpiarla.

Me volví a sentar de espaldas rápidamente, con el regalo en una mano debajo de un cojín que acariciaba como mi malvada mascota, esperando su llegada, pasados unos minutos, volvió a sonar la puerta.

-YO: pase, amada mía……….. - me recosté girándome lentamente para, esta vez si, encontrarme a Ana abriendo la puerta sorprendida.

-ANA: ¿como sabias que era yo?

-YO: intuición y perspicacia, mi señora – “que se lo digan a la de la limpieza……”

-ANA: ¡¿pero que has hecho aquí?! - dejando una bolsa en el suelo de la entrada, miraba anonadada la habitación, a media luz por las velas y la chimenea, con incienso encendido dando un aroma a vainilla y el suelo lleno de pétalos, hasta que observó la fondue, y se llevó las manos a la cara riendo de la sorpresa, saliendo corriendo con su cuerpo tapado por un enorme abrigo hasta el chocolate, haciendo sonar el suelo con unos tacones altos, no acostumbraba a llevarlos - ¡¡¿me has preparado todo esto para mi?!! - se agachó sobre el chocolate sacando un poco con una de las cucharas, y probándolo con cuidado de no mancharse el pelo - ¡¡UMMMM, DIOS!!, esta buenísimo, mira prueba….- me ofreció con la cuchara, me acerqué probándolo pero clavando mi mirada en ella, estaba espectacular, no era ningún fan de la moda pero si noté como se había alisado el pelo, se había hecho un pequeño recogido que le favorecía mucho, y se había puesto algo más de maquillaje de lo habitual, resaltando su preciosa cara y con un ahumado en el contorno de los ojos que provocaría algún infarto.

-YO: sabe mejor cuando lo echas encima de una bella mujer…..- aludí a las Navidades donde me comí su cuerpo bañado en cacao líquido.

-ANA: pues esta vez no, que me vas a chafar la sorpresa jajajaja - me rodeó con sus brazos el cuello dejándome probar de sus labios el chocolate y su ligero pinta labios rojo fuego.

-YO: ¿y cual es? - la rodeé ahora yo con mis brazos por su cintura, admirando de cerca la espectacular visión de su precioso rostro arreglado, sin duda había pasado por la peluquera del vestíbulo, y aunque no lo necesitaba para estar preciosa, iba un paso más allá.

-ANA: ¿me da un poco de vergüenza, me prometes que no te reirás de mi?

-YO: jamás, no pienso prometer a nadie que no me reiré, te prometo que no seré malo contigo……. – me miró con cierto enfado por mis palabras, pero me conocía para saber que bromeaba en parte, era virtualmente incapaz de callarme una risa si algo me parecía gracioso.

-ANA: ¿ah si………..? Pues ahora no te lo enseño……- se hacia la dura mientras se relamía el regusto del chocolate en la cuchara, dándome con ella luego en los labios, parando mi búsqueda de los suyos.

-YO: venga, no seas cruel conmigo, quiero mi sorpresa, o si no, yo no te daré la tuya………- le dejé ver la caja de terciopelo donde estaba la gargantilla, escondiéndosela por detrás de su cintura, sus ojos se abrieron por ver el regalo, no lo esperaba realmente, y se retorcía buscando, y jugando, frotándose contra mi para cogerlo, cuando lo puse a mi espalda mi corpulencia se lo impedía - no, aquí si no hay sorpresas, no hay para nadie, es una pena………tendré que devolverlo….con lo bonito……….. y lo caro que es……….- mi tono era de evidente manipulación, jugando con ella, su candidez era tal que hasta se puso de morritos, como cuando a un crío le quitas su juguete.

-ANA: jo, esta bien, pero yo quiero la mía, si no te gusta mi sorpresa la puedo cambiar……. - se reafirmó.

-YO: esta bien, tu 1º, así no me engañas.

-ANA: vale, siéntate en la cama y cierra los ojos….. - se puso seria, pasó su lengua por los labios recogiendo cualquier rastro de chocolate, girándome y sentándome, se fue a por la bolsa de la entrada y sacó un cinta de tela, parecía seda, me ató los ojos con ella y se aseguró de que no viera nada, toda ilusionada, amagando con su mano cerca de mi cara, podía notar el aire al desplazarse y dándome un suave beso que me sorprendió, la oí alejarse con su taconeo, intuía como se movía por la habitación y se colocaba enfrente de la chimenea, haciendo algo de ruido que no adiviné – ya esta, puedes mirar.

-YO: ¿seguro?

-ANA: si bobo, y recuerda no ser malo, por fi.- le temblaba un poco la voz.

Poco a poco, deleitándome con la situación me quité la venda con los ojos cerrados, abriéndolos de golpe, mis ojos tardaron unos segundos en acostumbrarse de nuevo a la luz tan tenue de la habitación, hasta que ajusté, y lo que vi casi me revienta los pantalones de la erección que tuve. Allí estaba Ana de pie, como sospechaba, enfrente de la chimenea, con el fuego a su espalda dándole más fuerza y vigor a la imagen y a su contorno, como había visto, el pelo liso y arreglado, con ese peinado que le despejaba la cara y le dejaba el cuello a la vista, pero que caía por sus hombros, igual que su cara y sus tacones, iba perfecta, pero el abrigo escondía mi regalo, un vestido negro de fiesta, ajustado al milímetro al cuerpo de Ana, que se pavoneaba y se daba la vuelta pidiendo opinión, la mía fue babear, si, me encantaba exteriorizar mis sentimientos, pero aquello me salió solo, abrí la boca tanto que me goteó la saliva, y no era para menos.

El vestido podía ser mejor o peor pero el cuerpo de Ana lo hacia perfecto, y no hablo de una descripción vaga, si no de algo hecho por Miguel Angel, la belleza en su estado más puro, ese punto en el que no se podía añadir ni modificar nada más, con la espalda al aire por completo, habiendo una gran V desde sus hombros, con 2 ligeros tirantes, hasta la corva, dejando ver esos hoyuelos que se le forman a algunas en la zona de los riñones, casi adivinando el inicio de sus nalgas, por delante era peor, o mejor según se mire, esos 2 tirantes hacían otra V más comedida, hasta su ombligo, con el pico de la V algo abombado, dejando ver su amplio escote sin sujetador, viendo claramente gran parte de sus senos, pero en ese punto entre la sensual y lo obsceno, esa delgada línea deliciosa. El resto del vestido se ajustaba a su cintura y piernas hasta que a medio muslo por uno de sus lados empezaba a decrecer, terminando en una pierna casi en el tobillo y en la otra muy por encima del muslo, dejando ver parte de su pelvis, otra V ahora invertida, con sus piernas cubiertas por unas suaves medias que me constó reconocer, puesto que no alteraban su tono de piel, con todo el borde de las V , tanto de espalda, escote y piernas, recorrido por una fina línea plateada y brillante. Mi cara debía de ser la de un quinceañero al ver su 1º teta, viendo con placer como al girarse el vuelo del vestido con el fuego de fondo la hacían parecer la mujer más bella del plantea, y para mi lo era, y supongo que para el 100% de los hombre que la hubieran visto, con todo lo que había follado, con todas las mueres desnudas o medio desnudas o incluso viendo a Eli en aquella fiesta, sin duda aquella Granadina de 19 años recién cumplidos era la visión más hermosa que jamás había contemplado. Mi mirada debió de confundirla.

-ANA: ¿lo ves?, ya sabía yo que era demasiado atrevido, ¿a que me queda mal? parezco una fulana, demasiado descocado ¿verdad? - me miraba después de repasar su cuerpo, esperando una respuesta, no la hubo de mi parte, estaba aun deleitándome con aquella visión divina - ¿Raúl?, ¿que pasa? ¿no te gusta verdad? - esta vez si reaccioné al notar desesperación en su voz, como yo era, sacudiendo la cabeza y quitándome aquella gota de saliva de mi barbilla.

-YO: ¿que qué?

-ANA: ainsss no hagas el tonto, dime la verdad, se que puedo confiar en ti, ¿este vestido no te gusta verdad? ¿Es demasiado atrevido?

-YO. Re-formula la pregunta, ¿que si es atrevido, o descocado? si, y posiblemente otras mujeres, envidiosas, lo piensen y comenten, ¿pero que si me gusta o te queda mal? Me cago el la puta de oros, no hay en la faz se la tierra una mujer más bella que tú ahora mismo, no hay palabras ni idiomas suficientes para describir lo hermosa que estás - mis palabras me negaron, su cara se iluminó dándola más belleza, dando ligeros saltos de alegría y una vez dada mi opinión, encantada con como le quedaba, ajustándose la tela del escote -…. pero pese a lo que diga nadie, incluso yo, a quien le debe de gustar, antes que a nadie, es a ti - estaba demasiado acelerada para darse cuenta de eso, me levanté con la polla reventando en los slips, hacia mucho que una mujer no me provocaba una erección así sin siquiera tocarme, me acerqué a ella ofreciéndole mi mano para sujetarse, tanto pétalo y sus tacones no eran buena combinación, trató de andar hacia mi pero no controlaba bien esos zapatos, lo que la dio un punto de ingenuidad e inocencia en la sonrisa que volvieron a subir el nivel de su belleza a mi ojos.

-ANA: lo sé, pero nunca he tenido un vestido así de……..

-YO: bonito, es irrelevante lo que piensen los demás, tú dime si te gusta a ti - la miré a los ojos transmitiendo seguridad.

-ANA: pues, la verdad, cada vez que me veo, me siento más segura, es que me queda de escándalo, pero es…… demasiado, no sé, me da apuro.

-YO: a quien dará apuro es a las demás mujeres, se morirán de envidia ante ti y los hombres querrán matarse por ser yo y estar a tu lado - sin llegar a abrazarla, la rodeaba con mis brazos.

-ANA: ¿de verdad?, muchas gracias, pero no se, no me gusta ser el centro de atención, ya lo sabes……..- recordé una frase de una película, la ayudé a ponerse enfrente de un gran espejo y que se mirara delante de él.

-YO: y que pueden hacer las estrellas, si no brillar, son estrellas, no deciden si sobresalen del resto, simplemente lo hacen - la cogí de la nuca, apartando su pelo, y acercando mis labios a su cuello, con un beso de cariño y amor, con su punto de sensualidad, queriendo convencerla.

-ANA: jo, que cosas más bonitas me dices, al final me vas a terminar enamorando……- reía ante su ironía, en ese lapso cruzamos miradas, ella recordó su regalo - oye, ¡¡¿y mi sorpresa?!!!

-YO: es verdad, pero ahora que te veo así en el espejo, espérate.

Me fui a por el estuche de terciopelo que se me había olvidado ante semejante belleza abrumadora, y al ver la cinta se me ocurrió la misma idea, volví con Ana que sonreía nerviosa, le puse la cinta en los ojos y ataqué sus labios con los míos para asegurar que no veía, con algo más de pasión de lo que lo había hecho ella, sonriendo nerviosa, saqué la joya del estuche y con mucho cuidado la pedí que se apartara el pelo del cuello, lo hizo y rodeándola con mis manos la coloqué la gargantilla, resistiéndose el diminuto cierre a mis gruesos dedos, supongo que ya sabia que era un collar, pero aun así temblaba de nervios ante mi tardanza, al fin se lo puse y lo retoqué dejándoselo como me pareció más bonito, me abstraje unos segundos mirándola a ella, “dios, es un ángel”, casi echo a llorar, sabéis esa sensación de que te pinza la nariz o el temblar en la barbilla antes de llorar, pues algo así, pero no había tristeza, no era desconsuelo, era felicidad, no creerme lo afortunado que era, ese nivel de saber que mi vida era grotescamente mejor a la del resto, hasta el punto de ser injusto. Ana me devolvió a la tierra.

-ANA: ¿ya puedo mirar? – preguntó casi rogando.

-YO: si, puedes.

Se quitó la venda fugazmente para observar su reflejo, su cara fue aumentando su sorpresa al verse, igual que su mano subió hasta su cuello palpando la gargantilla, intercalando miradas al reflejo y a mi, con una sonrisa tan amplia que era imposible serlo más, se acercó al espejo ya que la anchura no la dejaba verlo bien en su cuello, admirándolo de cerca.

-ANA: que preciosidad, ¿que son?…. ¿dragones?

-YO: si, me gustó en cuanto lo vi, me recordó a ti, simple, sencillo y discreto, pero arrebatadamente bello…….- me puse a su espalda, acariciándola con mis manos en la cintura - ¿te gusta?, s tengo el ticket si no…- se dio la vuelta de golpe sin controlar mucho su cuerpo debido a los tacones y me agarró la cara mirándome con aquellos ojazos que me volvían loco.

-ANA: me encanta, no pienso quitármelo jamás, será mi anillo de compromiso, mi signo de amor haca ti……….- su mirada irradiaba la misma felicidad exacerbada que la mía.

-YO: no exageres, no puedes ir con ello siempre, o si, vamos no se como va la moda ahora, lo que tú quieras, o si la plata se estropea en la ducha….- me miró aun más sorprendida.

-ANA: ¿es de palta? entonces es caro….

YO un poco, pero nada que no te merezcas.

-ANA: si es buena no pasa nada, y me encantará llevarlo……- sonrió dando un salto para besarme tibiamente, mientras sus dedos jugueteaban con su regalo.

-YO: dios, mírate, pareces una actriz famosa rompiendo las portadas de las revistas en una fiesta, llevándose los titulares, no me creo lo feliz que me haces y lo guapa que eres, podría pasarme el resto de mi vida contemplándote.

-ANA: jajajjaja ya claro, anda que no sabes tú adular - se contoneaba delante mía relamiéndose esos labios rojos mientras podía notar como su temperatura subía al notar mi polla en su vientre, estabamos tan pegados que mi erección no podía ser pasada por alto.

-YO: es posible, pero que quiera sonrojarte no cambia que mis palabras sean ciertas, ¿y si lo comprobamos? - su cara se giró curiosa.

-ANA: ¿como?

-YO: bueno, antes de irnos, ¿sabes que había una boda en el hotel?, supongo que habrá bailes, los he estado oyendo en el restaurante, podríamos pasarnos….

-ANA: colarnos más bien, jajaja que dices, si no vamos arreglados para una boda….

-YO: ¿perdona? - la cogí de una mano y la hice darse una vuelta sobre si misma dejándola de nuevo cara al espejo conmigo detrás - tú estás para romper la boda enamorando al novio, es un peligro llevarte así de preciosa.

-ANA: jajja vale, pero ¿y tú?

-YO: dame 10 minutos, una ducha rápida, me pongo un traje que tengo y bajamos a bailar un rato, ¿te apetece?- dudaba con la mirada picara, pero verse en el espejo era mucho más tentador, quería comprobar si ese efecto era general, sentirse el centro por 1º vez.

-ANA: vale, pero no tardes….- la di un sonoro y juguetón beso en el cuello, haciéndola cosquillas con mi barba de 3 días.

Salí disparado a la maleta, por algún motivo había llevado el traje de Eric, y me vendría de perlas, me metí en la ducha y en 15 minutos ya estaba listo, debe ser odioso para una mujer ver como un tío en 10 minutos esta listo y a ellas les llevaba horas, ducha rápida, repaso jabonoso a zonas importantes, champú, secarse, echarse 4 gotas de gomina para mantener el pelo despeinado con el efecto mojado, ponerme el traje y un poco de colonia, fin, hubiera tardado menos si no me hubiera tenido que hacer una paja descomunalmente rápida en la ducha, o iría con la barrera bajada todo el tiempo. Al salir del baño Ana me miró perdonándome la vida, mientras la pillé atacando la fondue.

-YO: ¿Qué, como estoy?

-ANA: ¡que carbón!, dais asco los tíos, estás perfecto, y yo me he tirado casi 3 horas de tiendas y en la peluquería, dios como os envidio….- me fui contoneándome de forma sexi y graciosa hasta ella – aunque ahora de cerca el traje te queda un poco estrecho, ¿es a medida?

-YO: si, y la verdad es que yo también lo he notado, hacia tiempo que no me lo ponía, y desde la última vez he ganado algo de masa muscular, tendré que llevarlo a que lo arreglen – me ajusté un poco del pecho, era de donde más me tiraba, pero al abrir la chaqueta quedaba perfecto.

Me cuadré en la puerta después de coger el móvil y la cartera, ofreciéndole mi brazo a Ana, que se repasó sus labios con un dedo de forma sensual, por si tenia cacao, cogió un bolso, uno que aun no había visto, metió sus cosas y agarrándose con una mano el vuelo del vestido, me cogió del brazo, más que para ir de parejita, por que realmente necesitaba apoyo, no era la 1º vez que usaba tacones pero si la 1º que la veía con unos tan grandes. Nos hicimos un par de fotos con algo de luz y bajamos riendo los 2, sonrojándose ella, al ver como alguno por el pasillo la miraba, era inevitable. En el ascensor su vergüenza aumentaba.

-ANA: ¿y si no podemos pasar?

-YO: es un baile de una boda, no el banco de España.

-ANA: ¿y si nos pillan? ¿O nos preguntan?

-YO: ningún hombre te cuestionará que haces allí, y si alguna mujer te pregunta di que eres el +1 de una amiga de Maite.

-ANA: ¿y quien es Maite?

-YO: la que se casa, mira el cartel……. - señalé una hoja pegada en el ascensor, anunciando la boda - ¿ves? Maite y Pedro.

-ANA: jo, que nervios, ¿y si…. - la cogí de los brazos clavando nuestras miradas.

-YO: tú tranquila, no va pasar nada, tú déjame hablar a mí, solo ve con la cabeza alta, y haz como si conoces a todos, saluda - se agarraba a mí brazo queriéndose inventar tela para cubrirse el escote ante todo

Según salimos al vestíbulo con bastante ajetreo, se notó un silencio momentáneo, como si se parara el tiempo, los ojos de todos se clavaron en nosotros, en ella, apretó sus manos en mi brazo, pero mi seguridad al andar era incontestable, llegamos a la puerta del salón del baile, con un armario en la entrada con forma de ser humano.

-YO: si, hola buenas, disculpe, queríamos volver a entrar, verá, he tenido que salir un momento con mi……..acompañante - hice indicaciones hacia Ana, que se metió en el papel con la cabeza erguida y saludando a un hombre dentro a través de la puerta, que anonadado le devolvió el saludo solo por cortesía a aquella bella joven, pero el armario aquel entendió como aceptación y al ver a Ana entendió mi necesidad de salir de la fiesta con ella.

Noté como al pasar se la comía con los ojos, pero es que lo hacían todos, al entrar Ana le dio las gracias a aquel desconocido que la devolvió el saludo, el hombre no entendió el por qué, pero sonrió, y nos paseamos por la pista hasta llegar al bar, allí nos pedimos algo de beber, Ana necesitaba templar los nervios con una copa, yo con mis refrescos y mi poca o nula vergüenza, iba sobrado. Aun así Ana estaba abrumada, era exagerado, pero en el fondo normal, la atención que suscitaba, pese a la luz algo baja, se podía ver casi puntos brillantes en la oscuridad de la mesa clavándose en ella, como lobos en la noche, alguna otra mirada femenina se fue a por mi, pero estaba muy centrado en Ana como para darlas importancia, seria el mayor retrasado de la historia fijarme en otras teniendo a la mujer a la que estaban envidiando todos, a mi lado.

-YO: bueno, ¿que tal?

-ANA: ¡dios!, me muero de vergüenza, me miran todos, pero no disimuladamente, como en el metro o la Universidad, es que me comen con la mirada…...- se quería cubrir conmigo, pero eso regalaba la visión de su esculpida espalda al resto.

-YO: jajaja es que es lo normal, mira a aquella mesa de solteronas, todas cotilleando con sus ojos clavados en ti, ¿notas la envidia? ¿ese cuchillo candente que te quieren clavar en la espalda ahora mismo?

-ANA: jo, pobres, es como si les hubiera quitado toda esperanza de ligar hoy, mira, si hay un chico que estaba con ellas que se la levantado y esta ahí, de pie, mirándome……..- le dio un gran sorbo a su copa, sus mejillas estaban tan rojas que denotaban su belleza natural.

-YO: pues si, vamos a dejar claro que tenemos pareja y estamos bien, para que vuelvan a sus cosas, ¿vamos a bailar? - me miró levantado su cabeza, casi estaba escondida entre la barra del bar y yo.

-ANA: ¿que dices? ¡¡¡¿Estás loco?!!!

-YO: venga, será divertido, tú olvídate de ellos, solo estamos tú y yo, quiero disfrutar de mi novia bailando…..- me separé de ella dejándola medio colgada, extendiendo mi brazo para que me cogiera la mano para arrastrarla a la pista, mirándola fijamente a los ojos, retándola, mientras ella se reía y se tapaba la cara con la mano y así el escote con el brazo.

-ANA: estás loco…..- con más pudor que determinación me dio la mano, respondí con un pequeño tirón que la obligó a moverse velozmente hasta mi y allí la di un vuelta de baile dejando que todos admiraran a mi acompañante, y su espectacular vestido.

Luego la pegué a mi y nos fuimos a la pista de baile, era obsceno la atención que suscitábamos, bueno, que ella suscitaba, por donde andábamos se apartaba la gente y al entrar en la pista nos dejaron nuestro propio hueco, la cogí la copa y la dejé en una mesa, luego volví rápidamente a los brazos de Ana que prácticamente era una estatua paralizada por la vergüenza, reclamaba mi vuelta con sus brazos, a los que acudí encantado, cogiendo la postura de baile clásico, (debido a mi obesidad infantil ya os he dicho que mi madre me apuntaba a todo tipo de clases extra escolares, natación, karate, judo, fútbol, baloncesto…..una de tantas fue danza, y allí aprendí a moverme correctamente en diferentes bailes, de hecho hasta pienso que cierta habilidad en el ritmo al follar que tengo se lo debo a aquella profesora vieja, gorda y que fumaba, pero que me hacia repetir 10000 veces cada paso, eso, y mi experiencia con Eli, me dieron las nociones para saber bailar, y no hacer el tonto o solo restregarme como hacen muchos hoy en día.), ella ,que ya me conocía, respondió tomando la postura y comenzando a movernos, con pasos amplios y lentos, con nuestros ojos clavados en los del otro, ella podía notar mi seguridad pero también que aquella situación me encantaba, con una sonrisa boba.

Mientras a ella le daba pavor ser el centro de atención, era cuando mejor me encontraba yo, dicen que en el amor no tienes que buscar a alguien igual que tú, si no a alguien que te complete, y eso hacíamos, nos deslizábamos por la pista mientras Ana se iba olvidando del resto y solo gozaba con el baile y con el momento, sus giros y movimientos fueron adquiriendo ritmo, ya se daba la vuelta y formaba giros y posturas, mis fuertes brazos la ayudaban y acompañaban. Para mi seguía siendo evidente como la desudaban con la mirada pero para ella fue algo que dejó atrás, se centró en mi y en lo bien que lo estabamos pasando, las canciones y estilos iban pasando , DJ de bodas, pasan del viva España de Manolo Escobar al ultimo hit latino, poco a poco ella me seguía el ritmo y hacíamos tonterías y movimientos super conocidos de los bailes más típicos, sacándola una sonrisa continua cuando me veía liderar los bailes que el resto de la pista seguía, era mi mayor regalo, verla reír y ser feliz, además que en el momento de las sevillanas, ella sacó su raza andaluza, de Granada, e hizo lo mismo, arrancándose por bulerias, sabia moverse, eso sin duda, luego tocó una lenta en la que nos pegamos para descansar y darnos algún que otro beso esporádico.

-ANA: no se como lo haces.

-YO: ¿el que?

-ANA: ser así, como eres, nunca me atrevería.

-YO: ¿por que lo dices? si acabas de iniciar el movimiento sevillanas jajajaja

-ANA: pero es por ti, por que haces sentir cómoda en situaciones que no lo son, no sé, como lo de la sorpresa del masaje, la gargantilla, colarte en una boda, hacer todo lo que hiciste para el piso, y luego abandonarlo todo, a hacer reír a los demás a toda cosa, a ser quien se lleve las miradas pero para hacer reír, no por vanidad, a reírte de ti mismo el 1º y de los demás, a ser tan abierto y sincero que contagias, es algo que me confunde y me gusta.

-YO: vaya, no sabia que hiciera tantas cosas….normalmente solo hago el tonto, y los tontos hacen tonterías.

-ANA: ya, eso puede parecer al resto, o a quien no te conozca bien, pero piensas más en los demás de lo que te gusta admitir, vas de duro, de bruto y eres el mejor hombre que he conocido, amable, cariñoso, tierno y romántico…….- me dejó sin palabras, aunque quisiera negarlo, era cierto, eso podía cambiar si en vez de recibirla vestido lo hubiera hecho desnudo con el colgante en mi polla como se me pasó, no lo se, supongo que elegir otra opción a esa, pero que se me ocurrieran, era a lo que se refería.

-YO: supongo que eres quien mejor me conoce últimamente, no soy quien para negarlo, solo se que soy como soy, y me gusta serlo, es más divertido, simplemente doy gracias a dios por encontrar a alguien como tú en mi vida.

Se hizo un leve silencio entre los 2, las palabras eran sinceras y sentidas por lo tanto no había nada que añadir, continuamos con nuestros bailes, acercándonos a la mesa con las copas de vez en cuando, viendo como algún mirón se pasaba de la raya al asomarse al escote de Ana, que estaba tan acelerada y acalorada por los movimientos que no se daba cuenta del efecto de su canalillo brillante en los demás.

Lo mejor de la noche llegó al sonar una canción de hacia unos años, una canción que nos era muy familiar, en la visita aquella que de crío hice a Granada, donde conocí e hice migas con Ana con casi 12 años, hubo una canción, más bien una película, Grease, que sonaba a todas horas y los críos imitábamos el baile final de la película para los padres, según sonaron los primeros acordes Ana y yo nos miramos, ella por que quería saber si me acordaba, pero yo por que mi cabeza me devolvió a los 12 años, la cogí de la mano según el resto adivinaba la canción, de hecho más de una pareja quiso amagar con empezar el baile, pero era demasiada vergüenza, incluso cuando arrastré a Ana a la pista, roja de vergüenza al entender mi intención de comenzar a bailar como en la película, ella se resistía, le podía sobre manera, pero a mi me dio igual, me arranqué con la parte del chico, cantando y bailando clavando el play back, tirando la chaqueta al suelo e imitando a la perfección la famosa película, sin saber si quiera si Ana me seguía, me di la vuelta esperando verla, ya había llamado la atención de todos y me habían dejado casi solo en la pista, pero no era Ana quien tenia delante, me encontré a la novia clavando la parte de la mujer, con Ana de fondo partiéndose de risa al verme, la novia me miraba para que la diera el paso, comenzaba la parte juntos y ni corto ni perezoso me fui a por ella, bailando juntos y pasando entre las mesas y la barra del bar como en la atracción de la película, la novia iba algo borracha, supongo que por eso se atrevió, la situación se me fue de las manos, o no, y era lo que buscaba, había gente que nos hacia los coros y nos seguía bailoteando como en la película, el resto aplaudía y cantaba partiéndose, yo era el barco rompehielos y el resto me seguía, según me acercaba a una mujer seguía donde la anterior lo había dejado, la novia fue apartada de aquel desenfreno, o no me pudo seguir, me dio igual, iba rebotando por toda la sala agarrando a algún hombre en vez de a una mujer, hasta al cámara de la boda, fue de esos momento de los que hablaba Ana, ese momento en que yo me desataba, podía coger un grupo de gente normal y a través de mi ridículo sacarles a todos de sus encasilladas vidas por unos instantes, el “que dirán” no fue algo que me preocupara nunca, ni antes ni después de la operación. Llegó la parte final a la que me fui a la pista, y no se si fueron celos o que se vio arrastrada por el tsunami que acaba de montar en la fiesta, Ana apareció de la nada liderando conmigo una clase de baile que el resto de parejas se habían animado a seguir detrás, Ana se acordaba perfectamente de aquellas tardes en Granada y de cómo lo ensañamos para nuestros padres, las partes juntos o separados, hasta que iba a terminar la canción, en la película no recuerdo bien como lo hacían, pero Ana y yo lo ensañamos para que ella saliera corriendo hacia mi y yo la elevara por los aires con mis brazos, totalmente estirada boca abajo, mi corpulencia y su escuálido cuerpo a los 11 años era como levantar una mochila, pero ahora llegó el final y como estipulaba el baile ella quedó a unos 6 metros de mi, mirándome con su eterna sonrisa sin saber si hacerlo o no, me coloque en posición apartando al resto que miraban expectantes, viendo mi predisposición, y tapándose la cara de una vergüenza que ya no podía existir, la animé, pidiendo aplausos de todos, colocándome en posición de nuevo, ella se quitó los zapatos y se recogió el vuelo del vestido, para salir corriendo hacia mi, como de críos me agaché para recibirla con mis manos en la cintura y elevarla con mis piernas a la vez que ella ponía el cuerpo rígido, como un ángel para echar a volar, gritando de pánico y miedo, salió perfecto, ni ensayado 1000 veces, arrancando el aplauso de toda la boda mientras yo daba vueltas sin dejar de mirarla como se estiraba de brazos delante de todos, asegurándome que no se le viera nada y más aun que no se me cayera.

Fue uno de esos momentos en mi vida que cada día que recuerdo me avergüenzo de mi mismo, en que me doy golpes en la cabeza castigándome por ser tan ridículo, pero sonriendo al pensar en ello, por que estoy seguro de que lo volvería a hacer. Entre aplausos y comentarios del DJ la bajé con cuidado haciéndola resbalar por mi pecho hasta que se quedó medio escondida entre mis brazos, apoyando su frente en mi tórax y tapándose con las manos por los laterales de la cabeza, pasado el subidón de adrenalina se daba cuenta de lo que había hecho y de cómo iba vestida, quería que el mundo se la tragara, la besé en la frente mientras la apretaba contra mi pecho, podía notar como se reía de nervios descontrolada, como su cara emanaba calor de lo roja que estaba y como se quería hundir en mi pecho para desvanecerse.

-YO: no ha salido tan mal sin ensañar….jajajaja - la oía balbucear, su cara estaba tan pegada a mí que no salían las palabras - venga, no puedes quedarte así, vamos a tener que ir a buscar tus zapatos - me miró de golpe, con su cara medio compungida y alguna lagrimilla de risa en sus ojos siendo secada por sus dedos.

-ANA: ¡¡¡dios, los zapatos!!! - se dio la vuelta para buscarlos entre el gentío, la novia con una de las damas de honor sujetándola, se los acercó, dándole las gracias.

-NOVIA: os tengo que felicitar, vaya momentazo, ¿vosotros quienes sois? – no se la podía engañar, sabría perfectamente los invitados.

-YO: somos……animadores del hotel, ¿no se creerá que nos hemos colado a montar este numerito gratis, no? - Ana me miraba aguantándose la carcajada, me encantan las ironías, las medias verdades o decir la verdad de tal forma que no lo pareciera.

-NOVIA: pues que detalle, me habéis hecho reír tanto que se me va el maquillaje jajajajja

-YO: pues mucho gusto, y felicidades por el compromiso, aquí tiene mi dirección de correo, me gustaría tener una copia del vídeo, si no le importa.

-DAMA DE HONOR: nada, descuide ya me ocupo yo de que le llegue, ¡¡¡¡que esta señora se nos va de luna de miel!!! - y gritando se la llevó con el novio, que andaba con el ritual de la corbata. Ana se dio la vuelta ahora si dando rienda suelta a sus risas.

-ANA: ¡¡¡¿pero como se te ocurre pedirle una copia?!!

-YO: jajaja yo quiero ver el baile repetido, ¿tú no?- entendió mi petición y me pegó en el pecho ante mi ocurrencia, se puso los zapatos con algo de dolor en sus gestos, recuperó un altura considerable de nuevo.

-ANA: vale, vamos ya a la habitación, que estoy cansada y me están matándome estos zapatos, ¿y tú chaqueta? - me miré dándome cuenta, la había tirado al empezar a bailar, me separé de Ana buscándola por el suelo, me costó encontrarla, hasta que por fin la vi en las manos de una mujer, me acerqué a ella para pedírsela.

-YO: si, perdone, creo que es mía la chaqueta.

-MUJER: ¿ah si?, la vi en el suelo y no se de quien es, ¿es tuya seguro?

-YO: si, miré el forro por dentro, pone Eric, el pantalón también lo tiene - le señalé el mío, pero estaba por dentro, la mujer ni lo miró, solo me comía con los ojos, me costó darme cuenta, pero ella sabia de sobra que esa chaqueta era mía.

-MUJER: y si subimos a mi habitación y así me enseñas lo del pantalón…. - se me acercó insinuante, agarrándome la corbata y frotando su buen par de tetas escotadas en mi pecho, buscando con sus labios los míos dándome topecitos con la punta de la nariz, estaba jodidamente buena, y sin duda, sin Ana allí, ella era el premio gordo, y supongo que quiso volver a serlo quitándole “su hombre” a Ana.

-YO: lo siento, pero tengo pareja y no tengo ningún interés en ti………- se sobresaltó ofendida.

-MUJER: ¿quien, esa fulana del vestido de puta? tranquilo yo soy mejor que ella…..- la agarré con fuerza de una de sus manos que se dirigió a mi polla, no me gustó nada su comentario.

-YO: miré, no la faltaré al respeto, pero que sepa que como mujer no le llega ni a la suela, pero eso si, como fulana, le tiene usted ganada la partida……..- se volvió a ofender, supongo que no estaba acostumbrada a ser tratada así por lo hombres, era una autentica belleza y su vestido denotaba que lo sabia y lo usaba a su favor, sin duda tendría a tíos babeando por ella continuamente.

-MUJER: pues que sepas que tu “amiga” esta allí con esos 4 tíos, y no se la ve muy comedida.

Me di la vuelta viendo como 4 buitres habían aprovechado mi ausencia para ir a cuchillo a por Ana, le arranqué mi chaqueta de las manos a aquella mujer, y me fui volando hasta ella, pese a lo que había dicho aquella mujer, Ana estaba siendo acosada, su mirada denotaba auxilio, y me buscaba con los ojos, me había perdido de vista, acariciándose la gargantilla en el cuello como llamándome, cuando me localizó, extendió su mano hacia mi, de inmediato la agarré y de un leve tirón la saqué de aquella trampa, ante las protestas de los demás hombres, una mirada firme mía les hizo agachar las orejas a todos.

-YO: tiene dueño caballeros, pero aquella mujer del vestido azul parece muy necesitada……- les indiqué a la mujer que me había tirado los trastos, a la que fueron como lobos.

-ANA: dios, menos mal que me has encontrado rápido, no paraban de hablar y querer subirme a sus habitaciones, pobrecilla mujer la que se le viene encima…..- se echó sobre mi pecho agradeciendo mi protección.

-YO: no me preocuparía por esa mujer, me había cogido la chaqueta, y casi me coge la polla, me quería subir a su habitación también……..- Ana me miró alterada.

-ANA: ¡será puta! - me hace gracia lo ofendidas que se ponen cuando un tío las llama así, pero la facilidad con la que se lo llaman ellas.

-YO: eso te ha llamado a ti….- Ana se abrió de boca ofuscada.

-ANA: ¡¡¿que? yo voy y la mato, le arranco el moño a tirones, so´ guarra!! - sacó su vena andaluza, la sujeté para que se quedara en eso.

-YO: tranquila, ya la he puesto en su sitio, estoy aquí contigo, anda subamos a la habitación aun nos quedan unas horas antes de irnos - con cierta dificultad logré que dejara de mirar cabreada a aquella mujer, que ahora si, siendo rodeada de hombres babosos, estaba en su salsa.

Ana – Pasión.

Salimos de la boda después de dar un par de tragos a las copas, Ana me acariciaba el brazo tratando de calmarse ella, mirando de reojo aun a aquella mujer, poco a poco y con algún beso furtivo la devolví a un estado natural, subimos al ascensor con todos los hombres envidiándome al salir de allí con ella y subir a las habitaciones, y pese a que su tono y su cuerpo estaban más relajados, la notaba tensa en sus gestos, pero me distraía enseguida, no podía dejar de admirar su escote como esos babosos, y ver como se agarraba y apartaba el vuelo del vestido la daba un aire a diva de los años 70 que me encantaba, sus caricias y besos fugaces eran más tórridos de lo habitual, al llegar a la puerta de la habitación se colocó entre la puerta, de espaldas a ella, y yo atrayéndome hacia ella cogiéndome de las solapas de la chaqueta, ahora si, besándonos de forma pasional, acariciando su cintura mientras ella me apretaba contra su cara, ya fuera agarrándome del pecho o de la nuca, su lengua se volvió atrevida y me perforaba la boca, me olvidé de la puerta y me centré en aquella hembra que demandaba mis caricias, mis manos no pudieron evitar dejar su cintura y repasar su cuerpo por completo, la agarré la pierna libre de la tela del vestido y la elevé frotando su muslo, doblándosela para restregarla contra mi, no era habitual que en publico, aunque no hubiera nadie en el pasillo, me dejara atacar su cuerpo de esa manera, supuse que quería marcar territorio de nuevo, y eso me la terminó de poner como el tronco de un árbol, palpitando en mis pantalones y haciéndome notar en su ombligo, eso la sacó la lengua de mi, necesitaba la boca para gemir ahogadamente, rozar su vientre era encenderla sobre manera, llevó sus manos a mi polla manoseándola por encima de la tela, yo no me corté menos y mi otra mano se buscó sitio a su espalda, introduciéndose por la V de su culo y llegando a su trasero, gracias a sus movimientos de cadera se separó de la puerta, me alejé de sus labios besándola el cuello mientras mi mano notaba el fino hilo de su tanga, no era una asidua de la prenda pese a que las tenia, le gustaban más las bragas, entre otras cosas por que decía que su cuerpo y sus caderas eran algo anchas y esa prenda la “violaba”, fui cruel y agarré del hilo del tanga tirando con fuerza, eso la estremeció echándola la cabeza hacia atrás, regalándome su escote, que ataqué con mis labios y mi otra mano ya libre, que pese a no sujetar su pierna, seguía doblada, rodeándome. Podía ver y palpar sus pezones a punto de rasgar la tela del vestido, estaba muy caliente, y yo no menos que ella, mis caricias la hacían temblar y cada vez que tiraba del tanga la podía notar contraerse de placer, pasados unos minutos me agarró la cara con sus manos mordiéndose el labio y clavándome su mirada.

-ANA: fóllame ahora mismo, vamos en la habitación y hazme tuya, lo necesito - se apoyó en la puerta y me rodeó con la otra pierna cruzándolas quedando ha horcajadas sobre mi, la sujeté de la cintura mientras nos fundíamos en otro beso caliente y húmedo, si ella lo necesitaba yo ardía por dentro de ganas.

Es difícil abrir una puerta de hotel aunque sea con una tarjeta magnética cuando no sabes que mano apartar de una hembra en celo que tienes agarrada por una teta y por el hilo del tanga, más que no saber, es que no quieres apártalas de allí, finalmente me decidí por la de su pecho, entré en la habitación con ella colgada de mi cuello, quitándome la chaqueta por los hombros, no hubo tiempo ni para la fondue ni para el champan con los hielos medio derretidos, de hecho tiró el cubo con al dejarla sobre la cama mientras las lenguas se divertían en la boca del otro, a duras penas me terminé de quitar la chaqueta y la corbata, no me dejaba separarme de sus labios, me sujetaba la cabeza con sus manos implorando que continuara aquel frenesí, mi cuerpo me pedía a gritos que le rompiera el vestido y la destrozara, sin ninguna duda con cualquiera lo hubiera hecho, pero no con ella, no ahora con esa relación que me llenaba y me elevaba por los cielos.

Perdí la noción del tiempo, de vez en cuando me separaba de su cara para coger aire, admirando sus ojos de cerca, reía al verme así de perdido en sus ojos, en uno de esos momentos sacó mi polla del pantalón, aun no sabia como pero su habilidad para sacármela con la ropa puesta era casi magia, pero siempre que lo hacia me importaba más el alivio que sentía al liberarme de los slips que preguntarla como lo hacia. Su habilidad con las manos había mejorado mucho y pajeaba suavemente sin dejar de hundir su lengua en mi boca, a mi me costaba seguir con ese juego bucal con sus hábiles manos sacándome pequeños suspiros, lo comprendió, así que me tumbó boca arriba y poniéndose de rodillas, con mis piernas entre las suyas, se contoneó para que me deleitara con su cuerpo antes de agacharse a chupármela, tan bien como había aprendido ha hacerlo, sujetando con ambas manos y trabajado el glande con su lengua de forma exquisita, engullendo solo el capullo para jugar con él a su antojo, cuando me sacaba alaridos con sus gestos pasaba a trabajar el tronco, lo repasaba lentamente con sus labios, bajando hasta la base de mi falo, siguiendo con sus manos masturbando la parte superior, estas fases las terminaba siempre igual, pasando su lengua desde la base hasta la punta, como si lamiera un sobre, pero de forma muchísimo más sensual y excitante, al terminar la infinita barra de carne daba un lametón final como a un helado, haciendo gancho con la lengua, para justo después perforarse hasta el gaznate media tranca sin esfuerzo alguno, se mantenía allí unos segundos hasta que la sacaba para poder respirar y repetía la operación, sus primeras veces solo se la metía, algo loable ya que casi se desencajaba la mandíbula, pero a estas alturas chupaba y relamía cada centímetro de barra que se introducía, sus labios no se despegaban de mi verga, pese a lo evidente del verbo, realmente chupaba, succionaba sin piedad, y comenzaba a jugar con su lengua cuando poco, o nada, de espacio debía de tener entre sus dientes.

Pese a la explosión de sensaciones que me hacia sentir, eso no me hacia correrme, no me aceleraba el pulso, eran las manos pajeando de forma continua desde la base hasta su boca las que me mataban, lo sabia así que siempre que paraba para respirar y secarse las babas que brotaban, sus manos aceleraban un poco, hasta volver a chupar como una aspiradora, quiero pensar que era mi falta de entrenamiento, pero la realidad es que sus avances me llevaron a correrme en menos de 15 minutos, antes la avisaba, y le costó no tener arcadas, pero ahora dejé de hacerlo, ella lo sentía y se preparaba, metía solo el glande haciendo el vacío con sus labios y machacándomela sin piedad hasta que explotaba en chorros de semen dentro de su boca, cada contracción era una cantidad enorme de leche caliente que la llenaba, se mantenía firme hasta asegurarse de que no quedaba nada, y sin ningún pudor echaba la cabeza hacia atrás y se le tragaba sonoramente, para volver a mi polla y repasarla de arriba a abajo para no dejar nada de su recompensa, y también por que así sabia que en pocos minutos me tendría tieso de nuevo.

-ANA: me pone como una moto tragarme tú semen, dios, no sabia lo que me perdía…….- no se por qué, pero o lo decía para halagar o realmente se excitaba mucho comiéndomela hasta lograr su ración de simiente caliente.

-YO: seamos justos, ¿no te parece? - me sonrió de forma obscena, leyéndome la mente.

Tomé partido, me incorporé y la cogí de la cintura, usando mi polla como eje, la giré hasta ponerla encima mía, con mi cabeza entre sus piernas, un 69 como era ya habitual, ella entendió de nuevo y con el gesto más sensual y provocativo que os podáis imaginar se agarró el vuelo del vestido echándoselo hacia un lado, dejándome acceso limpio a sus piernas, tenia marcado claramente un tanga fino y medio trasparente, aun más debido a los fluidos que chorreaban, literalmente, de su interior, me goteó en la cara al apartar la tela, olía a hembra desesperada, la subí un poco más el vestido y apenas al rozar convulsionó, de forma lenta oyéndola como tenia que dejar de tratar de levantar mi erección por que gemía de lujuria impaciente, una vez a mi disposición, la agarré y apreté la cadera hasta meter mi cabeza en su coño, iniciando una comida salvaje, había aprendido donde tocar, y como, para sacarla de si, abriendo bien sus labios mayores para atacar sin piedad el clítoris que parecía un melón de lo grande que estaba, eso, unido a los juegos de mi lengua en su interior la arrancó un orgasmo bestial a los pocos minutos. Estaba lo más cachonda que la recordaba, dejó sus trabajos manuales para incorporarse y mover su cintura de forma rítmica mientras mi boca seguía martirizándola, no hacia falta mamada para mi empalme, ver en el espejo como su cuerpo se retorcía en ese vestido, sabiendo que la causa era yo, me la puso hinchada de nuevo, ella ni se percató, estaba abstraída disfrutando, apoyándose en mi vientre mientras sus caderas alternaban movimientos rítmicos con parones en seco cuando mi boca atinaba con sus movimientos, no tardó en llegar la 2º corrida de mi chica, esta vez con premio en forma de fluidos, que me tragué sin pestañear, viendo como su cintura temblaba.

(Era lo que buscaba, y pido disculpas por el inciso, si algo había aprendido hasta ahora es que para hacer disfrutar a una mujer, de verdad, tenia que lograr que se corrieran así al principio del sexo, ya fuera masturbaciones, sexo oral o penetraciones, mi 1º objetivo era lograr que se corrieran como una fuente, una vez que tienes a una mujer en ese estado, volver a lograr que se corra es muy sencillo y rápido, la excitación es máxima, no es ni disimulado ni contenido, es gozar de la forma más pura, y entre emanaciones, el nivel de placer es alto y continuo, da igual como la tengas o lo bien que creas que follas, hasta que no ves ese patrón repetido en muchas mujeres no te das cuenta que es en ese punto en el que una mujer no puede fingir nada, solo disfrutar de ello como una perra, cada vez que la hagas temblar ella misma se frotará el coño, incluso sacándote la polla de dentro, hasta que termine, para después volver a por más. Una vez ahí, solo tienes que mantener un ritmo normal, la sacarás orgasmo tras orgasmo bañándote sin parar y haciéndola sentir estrellas entre ellos, a partir de eso, ya es una pelea por ver quien aguanta en igualdad de condiciones, mi teoría es que hasta que no logras eso, las mujeres parten con ventaja en el aguante y duración en el sexo, con lo que eso conlleva, puedes estar años con una mujer, follando, y creer que la haces vibrar, pero luego te deja por que no la llenabas en la cama, o ver como mujeres echan su vida por la borda y se someten a un hombre que las de eso, como era mi caso.)

Volviendo a la cama del hotel, en que Ana recuperaba a duras penas el aliento por la eclosión de su cuerpo sobre mi cara, cayó abrumada entre risas y suspiros de excitación a un lado de la cama, incorporándose mientras miraba mi polla apuntando al techo con firmeza amenazadora, relamiéndose, se puso en pie quitándose los zapatos que aun llevaba, soltando un gemido de placer con cada uno de ellos, quedando de pie junto a mi, y llevándose las manos a los hombros, se sacó lo tirantes del vestido y lo dejó caer hasta su cintura, dejando al aire sus preciosas tetas turgentes, juveniles, perfectas y en su sitio, con aquellos pezones oscuros totalmente erguidos, no me resistí y me puse de rodillas enfrente suya atacándolos con mis labios y manos, es una injusticia universal que una mujer tenga 2 tetas y el hombre solo 1 boca, pero mi experiencia era amplia y sabia como tratarla, ella agarró mi cabeza acariciando mi pelo dejándose dar placer, para asegurarme no perder lo ganado, mi otra mano acariciaba levemente su vientre, por encima del vestido que colgaba de su cintura apretada, negándose a ir al suelo, eso la aceleró aun más, y viendo lo tieso de sus pezones los mordisqueaba, vi el cubo del champan en el suelo, se me ocurrió coger un hielo medio desecho, y pasarlo por sus pezones, el frío la devolvió a la tierra de golpe, estaba algo ida, rió sintiendo como su cuerpo se estremecía y su piel de gallina afloraba en sus senos, lo pasaba con cuidado y lentitud, para luego lamer y chupar como un recién nacido, eso le estiró los pezones, los tenia lo más grandes que había visto nunca y lo aproveché a conciencia .Cuando se deshacía el hielo lo fui subiendo por su cuello repasando con mi lengua las zonas, acabando con unas pocas gotas frías en sus labios y perforando su boca con pasión, logrando que sus muslos se frotaran de forma incontrolada, estaba a punto de nuevo y aun no la había penetrado, pero eso se iba a acabar pronto.

Se sacó el vestido por arriba viendo que por abajo su cintura era demasiado amplia, dejando al descubierto su escultural cuerpo ejemplo de la belleza jovial, solo con un diminuto tanga que, andando hacia la chimenea, se agachó sensualmente para quitárselo, se apoyó en el marco junto al fuego, notando como el calor de las llamas la envolvía, ver su cuerpo desnudo brillando por el reflejo rojizo con su tono de piel tostado, me obligó a ir a por ella, la rodeé con calma aunque mi instinto me pedía violencia, dejando que mi polla se abriera paso entre sus muslos y abrazándola por la cintura, ella respondió echando su cabeza hacia atrás al notar mi boca en su cuello, acariciando mis brazos en su vientre.

-ANA: fóllame, por dios, te lo ruego, como estamos, por detrás.

-YO: ¿y por que?

-ANA: así mi culo hará de parapeto, no quiero que me la metas toda otra vez, aun me escuece de este medio día en las duchas, ¿te importa?

-YO: para nada, lo que tú desees, siento si he sido muy brusco.

-ANA: no pasa nada, solo dame tiempo, pero ahora te lo pido, métemela……….llévame al cielo.

Me desvestí completamente, y ella misma bajó su mano a mi falo, sacando un poco el culo abriéndose de piernas, y poniéndose de puntillas se la metió sin dificultad, los varios meses practicando su lubricado coño hacían que su cuerpo ya no se estremecía con solo notarme dentro, se dejó caer poco a poco hasta que ya no podía evitar notar como la abría de nuevo sus paredes interiores, aun así y con algún suspiro de dolor leve, no paró hasta tener dentro todo lo que la posición permitía, dejando fuera unos 5-6 centímetros, pero incidiendo directamente en su punto G desde ese ángulo, plantando bien los 2 pies en el suelo se quedó quieta dejando que su dolorido cuerpo se acostumbra de nuevo a ser invadido por aquella enorme nave, yo besaba su hombro y su cuello, mientras mis manos repasaban su cintura, sus pechos y su ombligo. Ya no era ninguna cría asustada, y sin dejar pasar mucho tiempo comenzó a mover sus caderas de forma circular, al inicio sobre mi, sin sacársela, pero luego sobre ella, sacando cada vez más, y metiendo más de golpe.

Me deleité con su trabajo y sus progresos, se había convertido en una buena amante hasta para mi, su ritmos y gestos eran aprendidos y mecánicos, logrando sacarme gemidos leves con su aceleración, sin duda así podría sacarle un orgasmo a más de 1, pero era yo, me divertía verla tan concentrada mientras se retorcía de placer por sus propios gestos, sin que yo aun me moviera, era como ver a tu hermano pequeño no haciéndolo mal en un deporte en el que tú eres profesional, decidí marcarme una meta, hasta que no se corriera ella sola usándome de herramienta no tomaría partido, la dejaría creer que va “ganando”, y así lo hice. Tardó unos minutos, pero como os he dicho, en ese estado se corren con poco trabajo, su ritmo antes de ello era bastante bueno, había cambiado los círculos amplios con solo un mete saca que hacia mi pelvis rebotar en su trasero provocando un sin fin de oleadas vibrantes en sus nalgas duras y tersas, al venirse volvió a los círculos amplios echándose de nuevo sobre mi pecho, riendo, sintiéndose la reina por un segundo, la dejé disfrutar, pero en cuanto noté que se le pasó el orgasmo y dejaba de chorrear, agarré sus caderas fuertemente y metí la 1º marcha, le pilló desprevenida y se agarró a mi nuca pasando sus brazos por encima de su cabeza, sonriendo por mi entrada en acción, pasé a la 2º marcha, su sonrisa se desvaneció cambiando por morderse el labio de forma agresiva, queriendo aguantar aquel arreón, al meter la 3º marcha comenzó gemir entrecortadamente con cada golpe de pelvis en su culo, apretaba los dientes queriendo mantener la compostura, pero le fue inútil y la saqué otro orgasmo que nos bañó las piernas a los dos, eso me dio igual y metí 4º marcha, para ello tuve que rodearla por el vientre para tenerla mejor sujetada, y ella igual, se aferraba a mis brazos, los golpes en su trasero ya eran rítmicos y continuos, secos y sonoros, Ana no quería rendirse, pero no pudo parar de gritar de placer obscenidades impropias de su carácter afable e inocente. La 5º marcha ya fue demasiado y se puso de puntillas pretendiendo así que no la matara tan rápido, pero se corrió de nuevo convulsionando, me costó dejarla empalada y seguir con mi ritmo, ella no aguantaba y se echó hacia delante apoyándose en la chimenea y siendo el objeto de mi deseo, dejó que el vendaval comenzara, haciendo fuerza contra la pared, resistió lo que pudo hasta que llegué a la 6º marcha, el máximo que siendo solo Raúl podía dar, un ritmo que había matado y encandilado a gente como mi leona y a las colombianas, Ana estaba aprendiendo a recibir en su interior aquella fuerza de la naturaleza, pero no aguantó ni 10 minutos así, se corrió 3 veces casi seguidas bañando las piernas, el suelo y hasta parte de la chimenea que crepitaba con las gotas de fluidos que la llegaban, Ana estaba poseída y se movía como un anguila percutiendo contra mi, dejándose arrasar sin piedad hasta que reventé de semen en un último minuto digno de la bestia, me encantaba correrme regalando el ritmo más animal al final, era como mi firma personal.

Ana gritaba tan fuerte y tan alto que tapaba los golpes aguados en su coño, pero no pedía que se la sacara, si no que siguiera hasta matarla, podría haberlo hecho, sacar a Zeus, o a la bestia y haberla destrozado durante otra hora más, de tal manera que se hubiera vuelto otra muñeca rota en mis manos, otro juguete, pero no quería eso, así que simplemente me dejé ir y acariciándola el vientre. forcé un orgasmo que coincidió con mi sacudida de semen, rebajando el ritmo de mis penetraciones hasta notar como Ana de desvanecía y caía de rodillas, saliendo de mi, tiritando ante el fuego de la chimenea, arrodillándome detrás de ella y sujetándola para que no cayera de golpe y se hiciera daño, dejando unos segundos para que retomáramos el aire los dos, ella estaba extasiada, con ligeros calambres de haberse pasado casi 1 hora siendo masacrada sin compasión, y yo en el momento de más cansancio por sexo del que había estado nunca desde el regreso de Ana, volvía a ser una gran versión de mi y Ana era mi compañera de viaje, había aguantado como una jabata aquel torrencial que le cayó encima, la acaricié el hombro, a lo que ella reaccionó como un perro asustado.

-YO: hey, preciosa, ¿como estas?

-ANA: me siento rara, estoy………cansadísima……….me duele todo……………y se me contrae la vagina, tengo como espasmos……..- me miraba asustada.

-YO: tranquila, es normal, se te irá pasando poco a poco, creo que me he vuelto a pasar, perdona.

-ANA: no, eres genial y ha sido increíble, dios, es solo, que es nuevo para mi, pero me encanta…….- se abrió como una flor y me abrazó en el suelo, dándome algún beso corto en los labios como agradecimiento, pero notando como su vientre tenia leves convulsiones que iban calmándose, su cuerpo seguía temblando y tiritando -……… estoy seca.

-YO: es normal, hemos sudado mucho, podemos probar el champan, ¿no? - sonrío separándose lo justo para sonreírme de manera deliciosa.

-ANA: vale, pero tráelo aquí, y lo tomamos al calor del fuego, tengo escalofríos.

Salté como un canguro y cogí el par de copas y la botella, también la funda nórdica de la cama y una sabana, que estiré en el suelo, serví las copas abriendo la botella con el corcho saliendo despedido, y sentándome enfrente de Ana nos rodeé con la colcha, pero ella no dejaba de tiritar mientras nos mirábamos a los ojos repasando mentalmente lo ocurrido, la di la vuelta y la senté en mis piernas rodeándola con mi cuerpo y acercándonos al fuego, dándola mi calor corporal y dejando descansar su cabeza en mi pecho, me encantaba la sensación de su pelo, y de que el ritmo fuerte y seguro de mis latidos la calmaran, sus reacciones corporales a la tremenda follada que acababa de sufrir fueron pasando, y ya solo se acurrucaba en mi cuerpo buscando posturas cómodas para adormecerse, mientras acariciaba su largo pelo.

-YO: se hace tarde, tenemos que volver a casa.

-ANA: no, yo quiero quedarme aquí, así, contigo.

-YO: no menos que yo, créeme……. – la besé en la frente al tener su cara de nuevo mirándome suplicando con morros de cría de 6 años -….. pero tenemos que volver.

-ANA: jo, la vida es un asco……- me miraba aceptando su destino, la agarré el mentón con mis dedos levantando su cara para cruzarse con mis ojos.

-YO: nada más lejos de la verdad, mi niña, no contigo a mi lado - la di un beso, de forma tierna y siendo recibido de igual forma, haciéndola ver que si bien no podíamos tener una vida idílica, no se podía ser más feliz, no a mis ojos.

Me levanté y la cogí en brazos rodeándola con la colcha, la dejé sobre la cama y me fui a dar una buena ducha caliente para, esta vez si, relajarme dejando que el agua tibia calmara mi cuerpo, realmente me había costado llegar a ese nivel y tenía una sonrisa boba que me salía al recordar como Ana había aguantado y disfrutado de aquello tanto como yo, temí salir y encontrármela dormida o aun dolorida, me la encontré atacando despiadadamente la fondue de chocolate cubierta por la colcha, era perfecta, al verme se quedó paralizada, como si la hubiera pillado haciendo algo malo, echándose a reír mientras relamía la cuchara cubierta de cacao y se apartaba un mechón de pelo negro del rostro.

-YO: venga, golosa, te toca la ducha…….- me fui a vestir dándola un beso rápido saboreando sus labios.

Se metió en la ducha dando un brinco y riendo, siendo el alma cándida y afable que conocía, estaba feliz, supongo que por haber aguantado bastante bien mis acometidas. Me vestí rápidamente con la poca ropa limpia que me quedaba en la maleta, y recogí la habitación un poco, estaba hecha un desastre y había una marca grotesca de fluidos en la moqueta delante de la chimenea, donde Ana había soportado de pie mis ataques. Terminé de recoger cuando Ana salió con una toalla tapándola el cuerpo a duras penas, desde sus senos hasta sus muslos, y con otra en las manos echándose todo el pelo hacia un lado secándoselo y cepillando, me quedé atontado viendo su cuerpo húmedo y sin mucho pudor se quitó la toalla y se secó delante de mi, completamente desnuda, para ponerse ropa interior limpia, en esos gestos me di cuenta de algo que puede que a muchos os parezca raro, pero a otros muy familiar, me ponía, o me gustaba, ver más a una mujer semi desnuda o provocativa con ropa puesta, que verla completamente desnuda, era el poder de la insinuación lo que me gustaba, mucho más que ver en si un cuerpo desnudo, por muy apetecible que fuera.

La vi vestirse con unos vaqueros ajustados y un par de capas de camisetas y blusas, era pleno diciembre y hacia frío fuera, la ayudé a recoger sus cosas, incluyendo el vestido con los zapatos, dándonos pequeños arrumacos de vez en cuando, besos y caricias inocentes de cariño, viéndola como se acariciaba la gargantilla, hasta que fuimos a devolver la llave a la entrada, la recepcionista nos miraba tensa y Ana se despidió haciéndole el gesto internacional del silencio, con su dedo índice en sus labios, guiñándole un ojo. El viaje de vuelta fue en completo silencio, pero por que no hacían falta palabras, con miradas y gestos era suficiente, los 2 felices, con sonrisas amplias y mi mano en su muslo cuando no tenia que cambiar de marcha, mientras ella jugaba con mis dedos con una mano y no dejaba de jugar con el collar con la otra.

Al regresar a casa no nos quedo más remedio que volver a nuestras vidas, menos estimulantes e idílicas, pero completas, desde ese fin de semana Ana y yo nos volvimos algo más que novios o pareja formal, éramos uña y carne, la relación evolucionó hasta ser casi 1 solo ente, nos entendíamos con las miradas y gestos, como me prometió, casi nunca se quitaba la gargantilla, y hasta lo usaba para comunicarse en secreto conmigo delante de todos, sin llegar a hablar de ello, entendí cuando se lo acariciaba sin más es que me echaba de menos y quería que la prestara más atención, cuando jugaba con él y se mordía el labio es que quería salir de donde estuviéramos para follar como animales, otras veces, simplemente lo acariciaba rememorando ese fin de semana. Las sesiones de sexo con Ana se elevaron, se volvió una amante de gran nivel, para Navidades aguantaba casi 1 hora y media de penetraciones completas a gran velocidad, no podía contener sus gritos y en la casa el resto de compañeros se reían y hacían bromas de ello, pese a que a Ana no le gustaba que se supiera, ahora le daba igual, cuando nos poníamos se desataba, gritando que la partiera en dos o que la abriera el coño, se acostumbró rápido a sentir y aguantar que se la metiera toda, en varias posiciones, ya sin escozores o dolores, aunque al principio la tenia que dejar descansar 1 o 2 días, después podíamos fornicar sin parar durante toda una tarde, parando cada 2 horas y retomándolo 15 o 20 minutos después.

Cada 3 o 4 días, la montaba una cita o algo especial para luego hacer el amor de forma suave y cariñosa, no quería una furcia, de esas me había cansado, era un premio ver como avanzaba en el sexo pero de vez en cuando también queríamos romanticismo, no solo sexo salvaje. Las miradas de Lara, y sobretodo de Alicia, cambiaron a raíz de oírnos, tratábamos de hacerlo cuando no estaban pero no siempre te puedes contener cuando Ana te despertaba con una mamada tragándose tu semen a diario, como si necesitara su ración, o cuando era yo quien al despertarme con mi polla dura entre sus muslos la penetraba despertándola a golpes de cadera, y para ahorrar tiempo dormíamos desnudos, eso era una provocación constante para ambos.

Como os decía Lara y Alicia nos miraban de forma diferente, Lara nos reconocía que se pajeaba al oírnos, que era superior a ella oír a Ana berrear poseída, incluso en privado me reconoció a mi que cuando lo oía se pegaba a la puerta para oír y sentir como golpeábamos nuestros cuerpos, y se tocaba, eso explicaba por que cada vez que salía del cuarto a por algo de beber Lara estaba por allí con poco o nada de ropa, me estaba acostumbrando a ir en bolas por la casa a altas horas de la noche, por lo tanto más de una vez nos cruzábamos desnudos. Su forma de hablarme a solas, o con Ana delante, eran diametralmente opuestas, me di cuenta de que Lara había cambiado algo su aspecto, menos hippie, y más arreglada, y cuando estabamos solos trataba de seducirme, era claro y evidente, pero para mi era un juego, no me interesaba en absoluto, aunque algunas veces no podía evitar una buena erección, soy un hombre de carne y hueso, se metía en mi cuarto con cualquier excusa en bragas y sujetador, hasta empezó a llevar tangas, y se me pegaba como una lapa, cuando me pasaba sus enormes tetas sin sujetador, o con escotes, y se rozaban o aplastaban contra mi, era demasiado, verla como una perra en celo encima mía, o como se las ingeniaba para verme desnudo, o que la viera a ella masturbándose en el salón, después de follar o ducharme, estaba cachonda perdida.

Lara lo sabía y hasta más de una vez quiso frotarse o llevar sus manos a mi polla, buscando mis labios, pero solo lograba que cuando llegara Ana, y se lo contaba, fuera ella la que sufriera el calentón. No se que pretendía Lara, o si se pensaba que no se lo diría a Ana y que poco a poco me iría seduciendo hasta que me la tirara a espaldas de Ana, cuando hasta alguna vez “jugando” con Lara montada encima entraba Ana y yo la sujetaba para que Ana nos viera y así encender el piloto de los celos, para follar como bestias después. Las miradas y conversaciones entre Ana y Lara se volvieron distantes y algo violentas, siempre con el marco de la amistad de fondo, pero Ana se moría de rabia y se lo hacia saber a Lara, que se desvivía por quitarle el novio. Ana me comentó que Lara se había llevado siempre a todos los chicos que le habían gustado y hasta el tío con el que tonteaba cuando volvió a Granada, se enrolló con Lara después, a mi me parecía literalmente increíble que fuera así, Ana era una supermodelo y Lara una calienta pollas con buenas tetas, pero supongo que, pese a ser virgen, se dejaba sobar y eso a esas edades era lo primordial.

Alicia fue todo lo contrario, pasó de ser mi hermana pequeña, a un ser distante y frío, cuando había más gente delante la relación era cordial pero casi nunca nos quedábamos solos, y cuando pasaba era un silencio abrumador, incomodo, y siempre se cuidaba de que no la volviera a ver semi desnuda o que lavara su ropa intima, no era normal, hasta discutía con Teo, se les oía y se les notaba, le pregunté muchas veces por esa actitud, y siempre me salía que el cambio a vivir juntos y con gente estaba siendo más difícil de lo que pensaba. Era una explicación sencilla y creíble si no fuera por que no tenia sentido que me tratara a mi diferente, el trato era igual que siempre, al menos de mi parte, pero la palabra correcta de sus reacciones era pavor, tenia miedo de que nos quedáramos a solas o de que tuviéramos cualquier tipo de interacción física. En cambio con Ana era un sol, se hicieron muy amigas, dejando de lado a Lara que andaba perdida en el mundo de los porros y drogas blandas, salían de fiesta juntas, iban de compras, y hacían planes.

Llegó Navidades y fuimos a pasar unas semanas con mi Familia, alejándonos de aquel ambiente algo cargado, ya que vinieron familiares de Ana también como el año pasado, nos controlamos mucho, podía intuir los deseos de Ana con el juego de sus dedos en la gargantilla, pero salvo alguna escapada fugaz donde follábamos, nos teníamos que cuidar de lo que decíamos y hacíamos, mi madre no era tonta, y se olía que yo tenia algo con alguna del piso, me ocupé de que pareciera que fuera Lara, pero las miradas y comentarios entre Ana y míos, a ojos de todos inocentes o normales, a sus ojos no lo fueron, me atosigó a interrogatorios hasta que me lanzó la pregunta directa, y aunque hubiera querido mentir, cosa que casi nunca hacia, hubiera dado igual, mi madre era un detector de mentiras andante, mi silencio la encolerizó, me soltó una charla de 1 hora en la que me culpaba de todo, y de cómo podía haberle hecho eso a su prima, traté de hacerla entender que no era mi prima y que no era un rollo sin más, realmente la quería, ella quería hacerme cortar con Ana y volver a casa para alejarme de ella, pero el poder que podía ejercer mi madre por entonces sobre mi no era el de antaño, ya no era un menor asustado de la vida, necesitado de su cariño y consejo, la respetaba y la quería pero la hice entender que eso no iba a pasar, lo mío con Ana iba para largo y ella no podía hacer nada. Se enfadó y echó a llorar viéndose impotente ante mi decisión, aun así mantuvo el secreto ante el resto de la familia, pero no perdía oportunidad de hablar con Ana y conmigo, separados o juntos, y pese a que a Ana casi le da algo cuando se enteró que mi madre lo sabia, sus respuestas fueron igual de sólidas y contundentes, al final de las vacaciones mi madre no le quedó más que aceptarlo, aunque no le gustara, llegando a cubrirnos o salir en auxilio cuando a mi o a Ana se nos escapaba alguna caricia o comentario delante del resto.

Para reyes regresamos a nuestra casa, estaba desierta, el resto de los compañeros de piso estaban con sus familias, las circunstancias eran idóneas, Ana y yo estabamos con un calentón por la falta de sexo en casa de mi madre que no podíamos aguantarnos, además ella tuvo el periodo los últimos días, casi no podía tocarla sin que me mordiera, le dolía mucho el vientre, pero me di cuenta de que justo después del periodo su lívido era mayor, por lo tanto ni esperamos a llegar al cuarto, según dejé algunos regalos en el suelo se me echó encima tirándome al sofá. Estuvimos como 10 minutos besándonos y metiéndonos mano, hasta que logró sacar mi polla y tragársela del tirón, con sus habilidades intactas, chupó mi verga con un apetito voraz, y deduzco que por los días sin sexo me corrí en 10 minutos en su boca, bañándola tanto que se le salía de los labios y se atragantaba, a duras penas contenía mi semen caliente según iba ingiriéndolo, cuando terminé se dedicó unos minutos a repasarla de arriba a abajo para dejarla limpia y devolverla su dureza, en cuanto lo logró, se quitó la ropa colocándome sentado en el sillón, abriéndose de piernas de rodillas sobre mi, y se empaló violentamente haciéndola gritar de dolor, hacia mucho que no me tenia dentro, al menos 5 días, aun así se la hundió hasta el fondo, dejando que se acostumbrara de nuevo su interior mientras me desvestía, yo atacaba sus labios con mi lengua, su largo cabello cayó sobre mi cara cuando se echó hacia delante dejándome oler ese perfume a coco que me derretía, se apoyó sobre mis hombros y mirándonos fijamente me cabalgó, su entrenamiento daba resultado, ya no tenia que ser yo quien atacara, era ella la que se martirizaba sola con gran velocidad durante 30 minutos, sin dejar de penetrarse pese a varios orgasmos que inclinaban su cuerpo hacia atrás y me permitían trabajar sus pezones y su vientre con mi boca y mis manos, eso alargaba sus orgasmos hasta hacerla venirse de nuevo repetidamente, a los 40 minutos su ritmo fue disminuyendo, era su tope por entonces, era cuando yo entraba en acción y comenzaba a follármela como mejor sabia, haciéndome hueco y agarrándola bien para acelerar mis caderas hasta llevarla al cielo, tardé casi 20 minutos en correrme en su interior llenándola de nuevo con una cantidad de semen impropia, llevaba mucho sin descargar, eso, calentó más a Ana que de un salto se puso a comerme la polla, para ingerir la cantidad de semen que aun quedara allí, relamiendo y saboreando cada tibia gota y metiéndose los dedos en su interior para sacar más y comérselo.

-YO: joder Ana, tenias ganas………

-ANA: no sabes lo que he echado de menos tragarme tu semen, y que me folles como sabes, vamos al cuarto que tengo un regalito de reyes para ti….- su actitud era traviesa por que me estaba masturbando buscando una nueva erección, cuando la obtuvo se puso en pie, ya nos habíamos dado algún detalle como regalos -……….ve al cuarto y espérame en la cama saldré del baño cuando este lista.

Obedecí sin dejarla irse sin un beso caliente y guarro, esperé ansioso oyéndola moverse en el baño, sin saber muy bien que pretendía, al rato me avisó y salió con un abrigo largo, del cuello hasta los gemelos, con tacones y con un sombrero de hombre de los años 40, poniendo una canción en el ordenador se plantó en mitad de la habitación, era tan grande que había como 3 metros cuadrados sin nada con lo que tropezarse, era música sensual, y esperando el ritmo comenzó a contonearse, entendí al momento que era un baile erótico, y aunque estaba roja de vergüenza, sus movimientos denotaban que lo había ensañado, no podía echarse atrás, sus gestos eran de autentica profesional de barra americana, de vez en cuando se acercaba a mi y se frotaba ligeramente para provocarme y cuando iba a meterla mano se iba, poco a poco y casi desesperándome se fue desabrochando el abrigo, de espaldas a mi, enseñando medio hombro y luego tapándose de nuevo, atisbé algo de color rojo, pero no sabia que era. Su contoneo era excitante y más aun la intriga, al final cuando ya no podía reprimirme y me estaba masturbando, se quitó el abrigo y me dejó pasmado, llevaba una especie como de camisón o corpiño, pero ninguna de las 2 cosas, era una prenda roja, el tamaño era de vestido de noche de fulana, unos tirantes en los hombros que iban hasta el pecho allí comenzaba la tela, con un ligero escote, y terminaba sobre la línea de su pelvis, dejando ver por debajo la prenda intima, la tela era elástica y obscenamente trasparente, como redecilla de bañador, más aun en las pronunciadas curvas de los senos y las caderas de Ana, sin sujetador dejando ver sus pezones claramente y su tatuaje de la media luna en la zona del apéndice, y con un tanga rojo del mismo tono.

Continuó su baile sensual dejándome ver su espalda, donde no había nada salvo 3 tirantes que unían los lados del vestido, la tela terminaba en el perfil del cuerpo, como si solo hubiera la parte delantera, y dejando bien a la vista sus poderosas nalgas separadas por el hilo rojo. El color era brillante, le quedaba de escándalo con su tono de piel y sus ojos, al principió se tapaba los pezones un poco vergonzosa, pese a que no tenia sentido, le acababa de follar en el sillón desnuda, pero Ana era así, le daba pudor hasta que empezaba la fiesta, volvió a rozarse conmigo, echándose de espaldas sobre mi pecho y dejando mi polla prisionera entre sus nalgas, esta vez si, dejándome acariciar su trasero y espalda, piel con piel y su torso por encima de aquella tela, no se de donde, sacó un bote de aceite corporal y me lo dio, la bañé en él, más de medio bote, para luego restregárselo por todo el cuerpo, desde el cuello a sus tobillos no hubo un solo ápice de piel sin embadurnar, eso hizo que el tejido de la tela se pegara a su piel como un bañador mojado.

-ANA: túmbate en el suelo.

Atolondrado obedecí, colocándome boca arriba, me echó gran parte de aceite por encima antes de tumbarse encima mía boca abajo, expandiendo todo aquel mejunje con su cuerpo, sin usar la manos, quería comérmela allí mismo, pero me sujetó las manos y no me dejó hasta que mi cuerpo estaba tan bañado como el suyo, la pobre ilusa quiso seguir con el juego un rato más, sujetándome las manos y pasándome sus tetas aceitosas aprisionadas por la prenda por la cara, incluso puso sus pies entre los míos y se deslizaba usando la cadera para frotarse contra mi pelvis. Pero no tenia nada que hacer ante mi fuerza física, cuando me dio la gana, o más bien cuando mi mente y mi cuerpo decidieron que no podían más, me liberé de una mano y la llevé a su trasero, cogí el hilo fino del tanga y de un tirón lo rompí como un salvaje sacándola un aullido de placer animal, no hubo ni que ayudar en la dirección, de una estocada se la clavé hasta el fondo, la rodeé como mi brazos pegando su cuerpo al mío, y agarrando con fuerza comencé a destrozarla como nunca antes, fui acelerado como siempre, poco a poco, sacándola orgasmos continuos y haciendo que nos bañara con sus fluidos, pero, llegado un punto de descontrol, no estoy seguro de si saqué a la bestia o no, me dio igual, solo la oía gemir y gritar como poseída por el diablo, durante una hora la estuve matando como a Eleonor, Madamme o mi Leona, con matices cariñosos, parando de vez en cuando la notaba correrse o convulsionaba de más, pero volviendo a arremeter en cuanto se pasaba. Me dolían las piernas del esfuerzo, y me puse en pie con ella aun ensartada, la di la vuelta y la empotré contra una pared agarrándola de los brazos hacia atrás, esposada, los necesita de apoyo para terminar el trabajo, desaté el infierno contra su trasero haciéndola temblar, moverse incomoda y levantar una pierna buscando consuelo que no obtuvo, en sus gritos solo había suplica por que no parara, jamás de dolor, queja o pidiendo que parara, pese a que podía quererlo, sus ganas de mejorar y aguantar cada día más me estaban volviendo el animal que había dejado atrás, para no decepcionarla. Llegó el momento en que Ana no aguantó y se dejo ir, ya ni hacia fuerza contra mi, ni movía sus caderas a ritmo, solo capeaba el temporal, ella misma había provocado esa situación y solo quedaba soportar como se pudiera,20 minutos sin un solo grito o gemido, algún suspiro al notar como se corrió de nuevo casi sin fluidos en su interior, hasta que pegué el acelerón final del último minuto, reventando su coño de semen nuevamente, teniendo que bajar la velocidad poco a poco, con cada espasmo de mi rabo llenándola por dentro.

Solo al parar mi cinética, me di cuenta de que Ana estaba tiritando como en el fin de semana en la sierra, estaba ida, convulsionando y con los ojos en blanco, moviendo las manos de forma aleatoria, me dio miendo soltarla por que estaba débil, la cogí en brazos dándome cuenta de mi salvajada, se contraía hasta que se relaja de golpe, temí haber roto a aquel ángel, aquella moral dulce y carácter afable de mi Granadina, la follada había sido digna de mis mejores polvos, Ana se había doctorado, en esa hora larga había superado a Yasmine que nunca aguantó tanto, no al menos ella sola sin ayuda de su madre, y aunque no estaba a su nivel, sobretodo por duración, el ritmo, la profundidad y las embestidas eran como las de mi Leona por ejemplo, ella aguantaba eso durante más de 4 horas y Eleonor menos de 3, bien entrenadas, pero para ser la 1º vez que me desataba con ella, 1 hora larga estaba muy bien, sumándole lo hecho en el sofá. La dejé suavemente en la cama temiendo alguna reacción negativa, pero estaba demasiado ida y temblando como para hacer nada, la tapé y la dejé tranquila dándome una ducha larga, sin saber como reaccionaria Ana al volver en si, tenia miedo de haberme pasado y que Ana se asustara de mi, pero aun más de que se convirtiera en otro juguete roto de mi colección, una amante que solo quería sexo y no buscaba nada más en mi. En esos pensamientos estaba, salí de la ducha y me estaba mirando al espejo del baño apoyado en la pila, teniendo pánico de salir y descubrir lo que fuera que tenia que pasar, de golpe se abrió la puerta y entró Ana sonriendo abrazándose a mi espalda.

-YO: hey princesa, ¿que tal estas? - pregunté extrañado y preocupado.

-ANA: bien, amor, deja de preocuparte por mi.

-YO: no puedo evitarlo, ¿seguro que te encuentras bien? te he dejado en la cama un poco ida…….

-ANA: jajajajaja un poco dice, me has matado, madre mía, todavía me tiemblan las piernas, y me escuece un poco pero ya no soy ninguna frígida, déjame darme una ducha relajante y salimos a cenar, ¿te apetece? - la miraba “ojiplatico”, estaba tan normal, agachándose para sacarse el cinturón en que había convertido su tanga.

-YO: esto…claro, como quieras….. - escudriñaba su mirada en el espejo, analizando sus gestos en busca de algún tipo de señal negativa, no la encontré, y ella me vio en mi cara el temor.

-ANA: deja de mirarme así, bobo, que no me pasa nada, bueno si…..- me dio la vuelta y se quedo mirándome fijamente - ……… ¡¡que tengo al mejor novio del mundo!! - se puso de puntillas para darme un beso tierno mientras mi reacción de alivio me llevó a apretar sus cuerpo entre mis brazos – anda, déjame que me quité esto y me de un baño que estoy pringosa de dios sabe que, y como estés por aquí, no salimos hasta año nuevo - se quitó como pudo el corpiño aquel empapado de aceite, como si fuera una 2º piel, y viendo mi posición estática, me cogió del brazo y me sacó del baño cerrando la puerta.

Me quedé sonriendo de forma tosca en la puerta del baño, totalmente desnudo y húmedo del baño, pensando lo estúpido que estaba siendo, tenia tanto pavor a hacerla daño que no me daba cuenta de lo bien acostumbrada que la tenia, llevaba 3 meses con ella y ya cabalgaba como una de las mejores, y lo más importante para mi, pese a estar bien físicamente después del sexo, no quería más aunque pudiera, si no que quería salir a dar una vuelta, tenia a la mujer perfecta jamás soñada, dulce, amable, cariñosa, tierna, inteligente y divertida, con su punto de timidez adorable, y a su vez estaba aprendiendo a ser una…….¿loba? en la cama, entendía mi necesidad de tener a ambas partes en una sola persona, la novia y la amante solo en una, no me quería por que follara como una animal salvaje, si no que disfrutaba de eso, pero me quería a mi.

Después de aquello los siguientes meses pasaron volando, no se muy bien como explicar lo que pasó ese tiempo, solo recuerdo felicidad, ternura, confianza y sexo brutal, Ana prefería dormir con aquel corpiño, y otros similares que se compró, en vez de desnuda, pero ya sin ropa interior, solo la gargantilla y el corpiño transparente, con sus pezones y coño al aire, no se por que pero se sentía más segura así, y nos dejaba vía libre para dormir como siempre y follar como nunca, cada día era más, más profundo, más rápido y más tiempo, para marzo o abril Ana era insaciable, me costaba hacerla correrse como antes y eso le ponía encendida a ella, sentirse poderosa ante mi, aun así la terminaba matando siempre, las 3 horas largas que ya aguantaba eran demasiado, estaba al nivel de Eleonor con facilidad, aunque a la madre de mis colombianas no me la había tirado durante más de 6 meses como para ser justo en la comparación, pero tanto Eleonor, como Yasmine, como Madamme como a mi Leona, igual que a Irene y a tantas otras, las había reventado desde el 1º día, asumí que fue eso lo que hizo que no tuviera relaciones normales y sanas, que las volviese sumisas y desesperadas por el sexo conmigo, con Ana fui paulatinamente, despacio, desde 0 hasta llegar al 100% de lo que Raúl, sin ayuda de Zeus o la bestia, podía dar, y eso solo había bastado para martirizar a cuanto coño se me hubiera puesto delante.

Disfruté de la compañía de Ana como mujer fuerte e inteligente, novia cariñosa, amante apasionada y amiga divertida, era todo lo que necesitaba, y gracias a que sus gritos ya no eran tan evidentes, Alicia volvía a ser la que era conmigo, eso suponía, aun no estaba seguro de por que ese pavor a mi presencia en Alicia, pero era cosa del pasado, Ana y Alicia eran inseparables, no se si lo hizo aposta Ana, pero me encantó recuperar a Alicia, a mi hermana pequeña.

Mientras que Lara seguía con su acoso personal hacia mi, sin querer menospreciarla, era como mi mascota, jugaba con ella cuando no estaba Ana, por que ella misma venia a jugar, sus armas de mujer eran tan evidentes y burdas como simples e inútiles, si, podía llegar a ponérmela dura, es lo que pasa cuando viene en ropa interior, eso como mucho, otras ni eso, y te dice que quiere ver una cosa contigo, y te pone un vídeo o películas enteras pornográficas, y se colocaba entre mis piernas, de cara o de espaldas, masturbándose claramente hasta correrse apoyándose en mi pecho, ya ni se molestaba en disimular, según oía que Ana se iba a la Universidad con Alicia, Lara había dejado de ir a algunas clases, y sabia que yo descansaba en la cama ese día, se venia a mi cuarto completamente desnudada y se metía en mi cama a dormir, queriendo suplantar a Ana, sabiendo de sobra que yo dormía también desnudo y me gustaba abrazar lo que tuviera a mano, me llamó la atención que se ponía y se colocaba igual que Ana, dejándome meterla la polla entre sus muslos, como si Ana se lo hubiera contado, cosa que me confirmó Ana.

Lo sé, puede sonar a cuernos, o a estar fuera de lugar si estaba feliz con Ana, pero pasaban varias cosas, la 1º es que yo se lo decía a Ana siempre, no había secretos, de hecho Ana pillaba a Lara dormida en mi cama, conmigo o si mi allí, y la montaba pequeñas broncas de celos, tomándoselo a broma, Ana al principio de eso, se ponía mala de rabia, pero según pasó el tiempo sabia de sobra que de mi no tenia por que dudar, había constatado que yo tenia total control sobre a quien me follaba o no, y si yo no quería, que no quería ya que solo deseaba a Ana, ya podía ponerse como quisiera Lara, que no pasaría nada. La 2º era que me gustaba, como decía, no la menospreciaba pero era un juguete con el que me divertía hasta que Ana volvía conmigo, Lara estaba cachonda y pillada perdida por mi, y su personalidad sincera y brutal, tan similar a mi, viéndose casi humillada la hacían ser exageradamente bestia en su forma de hablar y comportarse, y eso me era tan familiar a mi que me hacia reír, cosas como estar 1 hora con ella intentándose empalar por mi, conmigo dormido, empujando con sus dedos mi polla, tiesa de las mañanas hacia su coño, y darla un azote en una teta o en el culo para que parara, y se pusiera a pegarme y gritarme que me la follara de una vez y le rompiera su inmaculado coño, aquello me entretenía. La 3º era que a Ana le gustaba también, me dijo que Lara le había estado chafando novios y ligues siempre, y ahora estaba viendo como se arrastraba como una culebra por su novio y este la calentaba pero nunca le permitía nada, disfrutaba sabiendo que la hacia lo mismo que ella llevaba siendo años, la calienta pollas titulada, era ahora derrotada en su propio juego, y eso a Ana la encantaba, empezó a disfrutar manipular a la gente, y yo la enseñaba.

Si no lo entendéis es normal, pero era excitante, hacía sentirse mal a Lara y a la vez Ana se reafirmaba como la hembra ALFA, Ana, como perfecta que era, entendió aquello, o entendió que nos gustaba y no quería quitárnoslo, me dejaba divertirme sabiendo que Lara no era nada para mi, y la vez Ana disfrutaba devolviéndole las ofensas, atormentando a su amiga, dejándole saborear un manjar que solo ella podía disfrutar.

Ana – Inocencia perdida.

Mi vida no podía ser mejor, habían pasado más de 8 meses desde la mudanza y unos 6 en los que Ana y yo hacíamos vida normal de pareja, estaba subido en una nube constante de alegría, Ana era todo lo que podía haber soñado, o mejor aun, no ya es que fuera una preciosidad de mujer, que lo era, ni que su forma de ser era tan bella como ella, que lo era, ni tan siquiera era que me completara y me hiciera feliz, que lo hacia, incluso el hecho de que fuera una autentica tigresa en la cama que me costaba domar a fuerza de tenerla 3 horas siendo castigada, no, es que ahora encima empezaba a disfrutar, la etapa de aprendizaje y adaptación de Ana había acabado, por ahora, me había costado trabajo, dinero, tiempo y paciencia, pero logré convertir a una mujer sexualmente inexperta, tímida, avergonzada e incomoda con su cuerpo y con el acto en si del sexo, una mujer que le daba vergüenza que la vieran besándonos juntos en su día, ahora era una loba insaciable, una femme fatale que se entregaba a mi con devoción casi militar, que no solo tomaba partido y soportaba mi vehemencia, si no que cogía la iniciativa en el sexo, que me pedía y me exigía sacar lo mejor de mi para complacerla y, cogiendo la comparativa anterior, ahora se me subía encima para calentarnos con largas sesiones de besos y caricias en sitios públicos.

Todo ello, siendo genial formar a tu propia amante desde 0, no me hacia ni la mitad de feliz que el hecho de que fuera de aquello, dejando de lado el sexo, éramos la pareja ideal, visto desde fuera debíamos dar asco de lo bien que congeniábamos, juntos o separados, Ana seguía con su candidez e inocencia innata, pero ya era resabida, no solo conmigo, si no que se hizo de ciudad, aprendió, de malas maneras, que el mundo es cruel y la gran ciudad una selva de cemento peligrosa para animales indefensos y confiados, no podía seguir siendo tan buena que parecía tonta, eso en una Universitaria bonita de un pueblo de Granada, en Madrid, se paga caro.

Como ejemplo extenso, os diré que uno de los profesores se fijó en ella, Ana me hablaba de él, de lo bien que la trataba y de cómo la prestaba más atención aludiendo a su inteligencia superior al resto, de las veces que la llamaba a su despacho o la hacia quedarse después de clases a charlar con ella, la forma en que Ana me lo contaba era tan dulce y amistosa que no le di importancia hasta que un día, para darla una sorpresa, fui a la Universidad antes de hora a buscarla, como tardaba en salir entré a preguntar por ella y la encontré charlando de pie con aquel profesor, me había enseñado fotos juntos y le reconocía, me acerqué tranquilo pensado que estarían hablando de cualquier cosa relativa a los estudios, pero según me iba acercando mi detector de problemas se encendió, no era por Ana, estaba sonriendo y charlando amigablemente de espaldas a las taquillas con unos libros abrazados en el pecho, jugueteando con mi gargantilla y cruzada de piernas. Era la pose de él, aparte de ser un hombre de unos 35 años, bastante apuesto, alto y bien arreglado, fueron las posturas las que me recordaron algo, estaba apoyado en las taquillas con el brazo ligeramente por encima de Ana, y con una mano en el bolsillo, la postura me sonaba, Eli me explicó en su día en mis entrenamientos con ella, que el lenguaje corporal del hombre es mil veces más sencillo que el de la mujer, estaba oxidado, pero recordaba las lecciones, el lenguaje inconsciente del cuerpo, como Ana, al cruzarse de piernas indica que no esta dispuesta o que no le gusta o quiere lo que se le propone, con los libros como barrera natural y cogiendo nuestro amuleto de amor entre los dedos, no podía ser más elocuente y contundente en su negativa, aun siendo inconsciente. Mientras que la pose de un hombre al acecho suele ser esa, pegarse lo más posible, cubrirla o rodearla con los brazos para hacerla sentir segura, dejando que el torso se acerqué lo suficiente para dejar que la colonia haga su efecto, y la mano en el bolsillo del pantalón es una simple flecha, le indica donde mirar a su presa. “Ese tío va detrás de Ana”, no necesitaba más para saberlo, hasta llegó a apretarla de un brazo y quitarle un pelo del hombro, pero me quise cerciorar. Si estaba siendo cortés o solo estaba siendo amable, en cuanto me viera y me presentara, el tío me saludaría cordial, sin cambiar la pose, o sin sobresaltos, así que me acerqué despacio para que Ana me viera antes que él, justo cuando estaba llegando, la mirada de Ana se iluminó ante la sorpresa, obligando al profesor a mirarme sin cambiar la pose, al verme echó su cabeza algo hacia atrás, lo habitual cuando la gente veía mi corpulencia, pero sin variar la pose.

-ANA: ¡¡¡hola amor!!! ¿que haces aquí? – no la di tiempo a que se moviera y la di un suave beso.

-YO: nada, quería darte una sorpresa, así te recojo y nos vamos a tomar algo…..- el profesor dio un salto y se cuadró como un hombre del ejército ante su general, su cuerpo se tensaba al reconocerme como su novio.

-ANA: ah, este el profesor del que te hable, Pablo, este es mi novio, Raúl…..- la pobre era tan educada y buena que no se percató de lo que sucedía, lancé mi mano firme para saludarle y el respondió cortésmente con un fuerte apretón de manos saludando.

-PABLO: ah hola, encantado, me han hablado muy bien de ti……- me miró a los ojos y de la forma en que nos miramos los tíos, supo que me había dado cuenta. Apreté mi mano con fuerza como me gustaba hacer, pero esta vez era una demostración de fuerza animal para dejar claras las cosas, él era alto, pero yo más.

-YO: pues no se quien…. - hice la broma pera destentar la situación un poco, o para que no se notara tanto, mientras rodeaba a Ana con mi brazo, rieron, Ana de broma conociéndome, él siguiendo la farsa que los 2 sabíamos que era.

-ANA: pues nada, Pablo, mañana hablamos de lo del fin de semana.

-PABLO: esto…si claro, piénsalo, puede ser importante para ti - por fin solté su mano, y sin mirar a Ana se despidió saliendo casi huyendo de allí, Ana se me abrazó y me dio otro tierno beso, pero notó que mi mirada se clavó en la espalda de aquel hombre.

-ANA: ¿que te pasa?

-YO: nada, es solo que……… bahg da igual, ¿vamos?

-ANA: vale - sonrió de nuevo con su inocencia intacta y se agarró de mi brazo, casi presumiendo de compañía por el pasillo hasta la salida.

Como ya apretaba el calor, y la gasolina esta cara, fui con la scooter, y nos llevé a un parque con una heladería que a ella le encantaba, para echar allí unas horas tirados en el césped, quería ser como siempre, pero si cuando soy feliz me gusta extrapolarlo físicamente, cuando algo me preocupa se me nota en la cara.

-ANA: amor, ¿que te pasa? estas muy raro.

-YO: nada, es solo que……….me he fijado en algo y no me ha gustado - se quedó petrificada, era la 1º vez que me veía así, y que la comentaba algo que no me había gustado, si, de forma casi imposible, la relación había sido así de idílica.

-ANA: dime.

-YO: verás, no quiero que pienses mal ni nada, pero ese profesor, Pablo, me parece que te tiene enfilada……..- se quedó tan quieta como estaba.

-ANA: ¿Pablo?, que va hombre, ¿como piensas eso?

-YO: por como os he visto en el pasillo, más bien como le he visto a él.

-ANA: no seas bobo, es solo un profesor que le caigo bien…….- mi cara era tal que se percató de que iba en serio, se sentó cerca de mi, me agarró la cara y me hizo mirarla a los ojos - me crees ¿verdad?, yo no te haría eso - la sujeté una mano suavizando mi mirada

-YO: no es por ti peque, pero eres demasiado buena, su pose y como se ha puesto al verme y decirle que era tu novio, ese tío va detrás de ti.

-ANA: pero no te pongas celoso, es solo que se ha sorprendido al verte, si es que eres muy grande jajaja solo me deja ayudarle con trabajos y exposiciones - quería rebajar la tensión con su dulzura, me dio un beso tierno que no respondí.

-YO: no son celos…..o si, pero no son imaginaciones mías - esta vez fui yo quien la sujetó la barbilla para mirarla a los ojos firmemente - sabes que te quiero, y que no haría nada en tu perjuicio, no es que quiera que no estés cerca de él y por eso quiera estropear tu posición en la Universidad, hasta ahora no me ha importado, ya lo sabes, pero hazme caso, en cuanto le he visto, lo he sabido, créeme, soy tío y sabes que tengo más en la cabeza que pájaros, se de lo que hablo.

-ANA: esta bien, te creo, pero aunque fuera cierto, no pasará nada, yo te quiero a ti, ¿confías en mí?

-YO: lo hago, de quien no me fío es de Pablo…… ¿que es eso del fin de semana? - me miró riendo ansiosa por contármelo, pero luego dándose cuenta de algo.

-ANA: bueno, en principio……… me pidió que le ayudara con una tesis que estaba haciendo, y como la quiere acabar antes de los exámenes, me pidió que le ayudara este fin de semana - sus ojos y gestos denotaban cierta tristeza, se había dado cuenta de algo gracias a mis palabras, pero no lo quería admitir.

-YO: y déjame adivinar, será en su casa………- Ana asintió echándose las manos a la cara.

-ANA: si, de hecho me quiere invitar a cenar y así trabajar hasta tarde, ¡dios!, ¿no creerás que………? no, no me lo creo.

-YO: mira, ni tu ni yo somos tontos, el tío lleva semanas trabajándote hasta que te ha convencido de que te necesita, y quiere que le ayudes por que sin ti no puede acabar una tesis quedando en su casa, para quedarte a cenar y trabajar hasta tarde……….es de guión de película de serie b.

-ANA: jo, pero no puede ser, me ha enseñado su trabajo, le he ayudado, me ha hecho caso en mis ideas, es demasiado elaborado como para que sea una trampa.

-YO: no lo se, tú eres más inteligente que yo, quizá lo tenga preparado o quizá sean imaginaciones mías, no lo sé, solo quiero que sepas que ese tío me da mala espina, si alguien es capaz de reconocer a un cazador, es otro cazador.

-ANA: ¿y que hago?, he trabajado duro en su tesis, si sale a la luz me ha dicho que la publicará con mi nombre junto al suyo, es una buena oportunidad de hacerme un nombre.

-YO: por eso no quiero que pierdas la oportunidad, pero ese tal Pablo……..se quiere meter entre tus piernas, y no me gusta.

La tardé pasó algo más animada, ahora que estaba hablado, olvidé un poco el tema con la promesa de que Ana tendría cuidado y preguntaría por ahí sobre Pablo.(Aquí hago otro inciso, es lo más difícil del mundo, pero en estos momentos aprendí, aunque no asimilé, la base de una relación sana de pareja, los hombres se hartan de decir que las mujeres son complicadas y no las entendemos, las mujeres que somos simples y brutos, en el fondo, lo que pasa es que no se habla, se quiere que el otro adiviné lo que quieres, y eso es un fallo de base, una mujer se enfada contigo y no sabes por qué, al preguntarle solo estas afirmando que no has entendido la ofensa y en vez de tratar de averiguarlo por ti mismo y solucionarlo, demostrando que le importas, vas y se lo preguntas como un tonto, eso las cabrea aun más, o el cambio, un hombre quiere algo y lo dice o hace sin más, dando por sentado que a ella también le gustará sin preguntar, cosas así. La confianza puede ser muy traicionera en una pareja, no siempre vas a saber que quiere el otro si no lo preguntas y no siempre van a darte justo lo que necesitas sin decirlo, por lo tanto solo queda hablar del tema, entender y ponerte en los pies del otro, pero sin adivinaciones, eso es imposible y jugártela siempre a que conoces a alguien mejor que ella misma, en este caso me viene a la cabeza por que Ana quería seguir con su tesis pese a mis insinuaciones, y yo no quería que ella siguiera pese a saber que era lo que ella quería, solo dios sabe que hubiera pasado si no lo hablamos.)

Los días pasaron y Ana me comentó que Pablo tenia cierta fama en la Universidad, las nuevas amigas y Alicia la ayudaron a descubrir que varias alumnas con el paso de los años habían tenido sus líos con él, o eso se rumoreaba, llegaron a contactar con una mujer de 24 años que les dijo que le había denunciado por acoso e intento de violación, pero que al final entre el juez y la Universidad enterraron aquello como un “malentendido”. Ana se mostraba retraída, no quería comentármelo, pero no tenia más remedio, estaba empezando a preocuparse, y yo ni os quiero contar, no se lo ordené por que no podía, pero le dejé claro que ni loco la iba a dejar meterse en la casa de aquel tipo, ella le exculpaba diciendo que solo eran rumores, que otros profesores los tenían igual y que no me preocupara tanto, pero veía como sus ojos no estaban tan convencidos, la pobre estaba tan ilusionada con aquella tesis y con las promesas de recomendaciones y grandes trabajos que le podían suponer en un futuro, que no quería ver nada más.

Llegó el viernes y la fui a recoger, quería hablar con ella, al salir me vio y se acercó segura pero preocupada, no se le notaba pero iba vestida de la forma menos sexy que podía, con unos pantalones anchos, una blusa de lana gorda que le cubría desde el cuello hasta las piernas, y unas botas planas, no era su forma de vestir habitual, no quería provocar nada.

-YO: hola amor, ¿como vas? - me abrazó y me besó saludándome, me di cuenta de que ni olía a coco, su cuerpo, su pelo, todo, estaba casi estudiado para no generar reacción sexual alguna.

-ANA: bien, preparada para esa tesis jejeje, tengo 1 hora para comer, quiere tenerlo todo preparado en casa para cuando llegue, ¿que haces por aquí?, ya te dije que iría en bus a casa de Pablo.

-YO: por que no te voy a dejar ir sola, te llevó - me dedicó una de sus amplias sonrisas y me besó de nuevo.

Creyendo que era un gesto de aceptación y de confianza hacia ella, y lo era, no quería estropear una oportunidad única ni que pensara que no confiaba en ella, pero mi 1º objetivo era saber donde vivía ese tío, me dio una dirección y allí fuimos, aparqué en la calle comiendo algo en un bar cercano, y me quedé charlando con Ana antes de que subiera, la regalé un bolígrafo y todo para que lo tuviera a mano.

-ANA: eres un sol, gracias por entenderme.

-YO: confío en ti, eso es todo, ¿cuando acabareis? así te llevo a casa - me besó de nuevo feliz como una princesa.

-ANA: pues puedes pasar a recogerme luego, ¿te llamo para que vengas? es que no sé a que hora será, lo mismo me vuelvo en bus.

-YO: tranquila, no hará falta, me voy a quedar aquí - me miró sorprendida.

-ANA: ¡pero que dices bobo!, si son las 4 de la tarde, lo mismo salgo a la 1 o 2 de la mañana.

-YO: pues las voy a pasar aquí - mis palabras no eran sugerencias, ni ideas, eran aclaraciones.

-ANA: que no va a pasar nada……….- ni la dejé terminar.

-YO: exacto, ya me encargaré yo de que no pase nada, tú dime el piso, subes y trabajas, de vez en cuando me mandas un mensaje diciéndome que todo va bien y listo, cuando acabes te llevo a casa.

-ANA: pero no vas a estar aquí 5, 6 o 10 horas sin que al final pase nada.

-YO: lo que no va a ocurrir es que pase algo y no este aquí, si se le ocurre cualquier cosa, te vas, te disculpas por que te encuentras mal y sales de allí.

-ANA: vale……..- mi tono no admitía discusión, y creo que se sentía mejor sabiendo que estaba por allí -….. es el piso 5º B, pero me da cosa que te quedes aquí solo….- ponía sus morritos de cría de 6 años.

-YO: por mi no te preocupes, así que ve subiendo y dale recuerdos de mi parte - trató de convencerme, pero no había argumento posible.

La di la vuelta y la di un azote para que fuera andando, su mirada era de pesadumbre por mi, por que estaba convencida de que iba a ser una perdida de tiempo que estuviera allí, hasta yo pensé que podía serlo, pero era demasiado lo que me jugaba si acertaba, valía la pena estar el resto de mi vida en esa calle, solo para asegurarme que Ana estaba bien. La 1º hora pasó sin noticias, luego Ana me mandó un mensaje tranquilizador, estaban trabajando en la tesis, muy ilusionada, con caritas sonrientes y de más, al igual que las siguientes 3 horas, de vez en cuando me mandaba un mensaje de las mismas características, pidiéndome que me fuera a casa a descansar, empecé a pensar que me había equivocado con aquel tío, ¿estaba oxidado o serian celos quizá?, pero estaba firme en mi posición, aunque no pasara nada, iba a estar allí, prefería quedar como un autentico imbécil tarado antes de que ocurriera algo. Por suerte, o pura estadística, había una tienda de alimentación, refrescos y patatas, cosas así, de vez en cuando iba al bar a mear y charlaba con Teo, Manu, Alicia o mi madre por teléfono, sentado en el bordillo de la acera. Se fue acercando la hora de cenar, y pasaron unas 2 horas sin noticias, al final me mandó un mensaje, diciendo que estaban muy concentrados y que Pablo estaba encantado con ella, que la tesis se escribía sola y que iban a tomarse un descanso para cenar, iban a pedir pizza, eso me dio una idea, esperé a que llegara el repartidor y al abrir la puerta me colé en el portal, con un papel de propaganda que doblé 5 veces, lo puse en el marco de la puerta en la cerradura, de forma que la puerta no se cerraba del todo, era un ligero truco que me enseñó mi padre, me sentía como un espía y repasaba en mi cabeza cada escenario posible, imaginando peleas al estilo asiático y todo, mi imaginación y el aburrimiento durante horas hacia su mundo aparte en mi mente, y ahora me sentía más seguro sabiendo que tenia acceso a la casa, sabia donde vivía, pero no subí, me salí a seguir trasteando con un brick pequeño de batido de chocolate vacío, que se había convertido en mi mejor amigo en la espera.

Al poco, Ana me mandaba mensajes muy seguidos, pasó de picarme por lo rica que estaba la pizza, pasando por decir que Pablo no paraba de llenarla la copa de vino, y de beber, hasta que me tensó con un mensaje diciendo que estaba empezando a ponerse nerviosa por que Pablo le quería quitar el móvil y estaba muy sobón por la bebida. Estaba nervioso, dando vueltas en la calle, mandándola mensajes sobre si estaba bien o que ocurría, pero no contestaba, eso era lo peor que podía pasarme, estuve a punto varias veces de subir pero podía meter la pata, por fin recibí un mensaje de Ana, “sube0”, no hacia falta más para ponerme a correr, sumándole, Ana era impecable a la hora de escribir, incluso en los mensajes, ese 0 mal puesto, la 1º sin mayúsculas y que no terminara con un punto……….. no había tenido tiempo y calma para escribirlo. Os podéis imaginar mi reacción, avasallé el portal con el hombro sabiendo del papel de la cerradura, y estoy seguro de que aunque hubiera estado cerrada no me hubiera detenido, el golpe que dio contra la pared fue bestial, ni miré el ascensor, subí por las escaleras de 4 en 4, acelerando el ritmo al oír y ver algo de jaleo por encima de mi, pasando por el 3º reconocí la voz de Ana pidiendo que la soltara, el último piso lo subí casi sin tocar las escaleras, dispuesto a echar la puerta abajo, me hubiera dado igual que fuera reforzada o blindada, hubiera hecho un agujero en la pared a cabezazos, por suerte antes de llegar vi a Ana en el rellano con la puerta del piso abierta, tratando de soltarse de Pablo que la tenia agarrada de un brazo.

-ANA: ¡¡suéltame Pablo, por favor!! ¡¡me tengo que ir!!

-PABLO: no seas así, lo siento, no quería ofenderte, no te vayas enfadada, pasa y………..- no le di tiempo a más, me vio de refilón y su mirada al verme subir los últimos 5 escalones de un salto fue de horror, aquella mole iba a por él, y lo sabia, soltó a Ana pero no evitó que mi puño en caída le reventara en la cara con tal fuerza por mi inercia e ira, que se estampó contra la pared, haciéndole rebotar, cayendo de espaldas en el marco de la puerta abierta de su casa.

-YO: ¡¡¡que haces maldito carbón!!! - me fui a por él en el suelo, le agarré de la camiseta dispuesto a matarlo, pero me pararon varias cosas.

La 1º fue mi educación en artes marciales, pegar a un tío en el suelo era de cobardes, la 2º era que Pablo estaba inconsciente ya, sangrando por una brecha en la ceja, la 3º fue que Ana me sujetó del brazo tirando de mí. Todo ello, y quizá algo de conciencia, me llevó a rebajar mi enfado poco a poco, aquel mierda no sabia la suerte que tenia de haberse desmayado a la primera, de hecho creo que, ahora, visto con el tiempo, el que tuve suerte fui yo, si no, lo mismo estaría en la cárcel, si me llega a responder mal o a intentar devolver algún golpe…………no se que hubiera pasado.

-ANA: ¡ya esta!, déjalo, vámonos………. - la pobre sollozaba, queriendo contenerme, más asustada y nerviosa de lo que parecía.

Tragué saliva y con ella recuperé mi cordura.

-YO: ¿tienes tus cosas?

-ANA: si, todo, vámonos……- imploraba.

-YO: ¿y el bolígrafo que te he dado?

-ANA: esta dentro, déjalo, da igual, vámonos por favor………- solté el cuerpo semi inerte de Pablo, sujeté a Ana por los brazos acariciando su pelo, dejándola ver que ya había pasado, que ya no era un volcán a punto de estallar, tranquilizándola.

-YO: entra y cógelo……...- asintió secándose unas lágrimas que me dolían en el alma.

Me quedé mirando como Pablo volvía un poco en si, debatiéndome entre querer rematarlo y alegrarme por que se movía y no lo había matado, Ana salió del piso enseñándome el bolígrafo y cogiéndome de la mano tiró de mi para bajar las escaleras, al llegar abajo, a la calle, quiso salir corriendo de allí, pero la abracé y la dejé que se tranquilizara, rompió a llorar desgarrándome por dentro, pero poco a poco mis fuertes latidos y mi respiración se calmaron, y su cabeza pegada a mi pecho fue asimilando y copiando aquello, hasta que normalizó y dejó de llorar.

-ANA: vámonos, por dios, no quiero seguir aquí, soy estúpida y tonta, soy una imbécil, mira que me lo dijiste, pero no, tengo que ser la tonta que todo se lo cree – era una metralleta de autoflagelación.

-YO: tranquila, no pasa nada, no has hecho nada malo, la culpa es de él, no tuya.

-ANA: no, es mía, no tenia que haberle creído, me lo dijiste.

-YO: tú tranquila, deja que me ocupe de todo, tú solo respira y sigue mi ritmo, respira profundo y suelta el aire, venga, conmigo, 1 y 2, 1 y 2 - se fue calmando poco a poco, cuando se estabilizó, cogí el móvil, y llamé a la policía.

-ANA: ¿que haces?

-YO: voy a denunciar y hacer que arresten a ese desgraciado - casi echa a llorar de nuevo.

-ANA: ¡NO! por dios, no hagas eso, se enterarán en la Universidad.

-YO: Ana, ese tío ha intentado forzarte o acostarse contigo, es tu profesor y no puede hacer eso, a saber con cuantas lo ha intentado ya, no volverá a pasar……..- intentó convencerme, pero de nuevo, no había opciones.

Hablé con la policía, era necesario, tenía que ser así, la 1º versión es la que cuenta y no dejaría que fuera la de él o la de algún vecino diciendo que yo agredí antes, al llegar, les explicamos lo ocurrido a la policía, nos tomaron declaración y subieron a buscar a Pablo, tuvieron que llamar a una ambulancia, seguía en el rellano sangrando, arrastrándose desorientado, pasó 1 hora hasta que pudieron hablar con él después de que los médicos le atendieran y le bajaran a la ambulancia, le tuvieron que dar 9 puntos en la ceja, tenia una ligera contusión en el pómulo y un golpe en la cabeza del rebote en la pared, no se que les dijo pero volvieron, diciendo que me acusaba de haberle agredido sin motivo, por celos, era su palabra contra la nuestra y él era un profesor reputado, nosotros 2 críos, casi me acusaban y me querían llevar a interrogar a comisaria. Pero era perro viejo, tenia 19 años pero no era ningún tonto, le pedí a Ana el bolígrafo, sollozaba viendo que podía salir mal todo aquello para nosotros, me lo dio, lo abrí y saqué de dentro una grabadora espía, lo había comprado hacia unos días, con más de 12 horas de grabación, lo activé antes de dárselo a Ana para que subiera, era la leche, solo si lo girabas de cierta manera se descubría y hacia copia automática en un PC que enlazaras, hasta escribía de verdad. Rebobiné unos minutos, y se lo puse a la policía, que lo escuchó durante media hora, delante de nosotros, Ana me miró entre sorprendida, agradecida y furiosa. Se oía perfectamente como Pablo iba pasándose y Ana le rechazaba, queriendo volver al trabajo, pero Pablo insistía pese a que Ana le decía que tenía novio y que dejara de tontear, en un momento, el vino de la comida entró en acción, Pablo la decía que le daba igual y que si estaba allí era por que era una golfa, afectado por el alcohol, decía que sabia que Ana en realidad quería liarse con él, que no podía ser tan tonta de creer que la tesis era real, era un copia pega de sus alumnos del año pasado, que un gran profesor como él no necesitaría la ayuda de una niñata de 1º año tan guapa como ella, Ana comenzó a llorar en mis brazos, rememorando aquello. Se oyó en la cinta como se echaba encima de Ana y esta le daba un bofetón queriendo salir de la casa, oyéndose como forcejeaban, con Ana gritando mi nombre con miedo, oír el proceso y los lloros de Ana, que me abrazaba fuerte, me iba enfureciendo más, cuando le vi que salía de la ambulancia, sonriente charlando con un medico, me fui a por él de cabeza, dispuesto a matarlo, sin piedad esta vez, me tuvieron que parar, a duras penas, entre 4 policías, ni ver como arrestaban a Pablo me tranquilizó, no le gritaba, no hacia movimientos bruscos, no amenazaba, solo le miraba a la cara con odio puro, no era un número, quería su puta cabeza para desayunar, y la cara de Pablo demostraba que lo sabia. Solo ver a Ana pidiéndome calma entre tanto policía, tapada con una manta, con su cara abrumada y sus dulces ojos llenos de tristeza, me devolvió a mi ser, de nuevo me vi como en el ascensor en la mudanza, siendo la bestia que solo ella podía calmar.

Al final, nos fuimos a casa, le pedí a Alicia que cuidara de Ana unos días, para alejarla de todo aquello, estaba tan tensa y asustada que no pude ni tocarla en 1 semana, mientras que con el padre de Teo, que era abogado, nos ayudó a tramitar la denuncia, quisimos ir a juicio, montar un escándalo que saliera en las noticias, pero de nuevo la Universidad medió con el juez, no se llegó a juicio, logramos que echaran a Pablo, o como lo llamaron “rescisión de contrato de mutuo acuerdo”, ocultando a la luz publica todo, incluyendo que lo inhabilitaron para la enseñanza, quedó con antecedentes de por vida y unas horas de trabajos sociales, ¿justicia?, eso fue una broma, justicia hubiera sido que me dejaran a solas con el 5 minutos en una habitación sin ventanas. A mi pobre ángel, Ana, le gustó más esa resolución, pese a los rumores en su contra, una vez más, todo quedó en eso y así Ana pudo seguir con su vida en la Universidad sin verse señalada del todo.

Se que no tiene nada que ver con un relato erótico, pero es una experiencia vital para entender el cambio de mentalidad de Ana, más que un ejemplo, fue la lanzadera del cambio en algunas cosas del carácter de Ana, desde ese día se volvió más espabilada y lista, era infinitamente más inteligente que yo, pero se dio cuenta de que en la escuela de la calle, yo la sacaba mucha ventaja, una cosa es ser listo y otra inteligente, y ella aprendió a ser ambas cosas, seguía siendo dulce y cariñosa, pero ese punto de candidez que rozaba la estupidez desapareció, no se lo podía permitir en una gran ciudad siendo tan bella. Ahora toreaba a los tíos que la entraban, se percató de que muchos de sus nuevos amigos iban detrás de ella, incluso mal metiendo contra mi, yo la daba algunas indicaciones básicas, ahora le parecía increíble no darse cuenta de determinados roces o conversaciones con ellos, somos hombres, se nos nota rápido cuando una mujer nos atrae, sobretodo si esta ya no piensa que todos los tíos somos así de buenos y amables sin esperar nada a cambio. La transformación real fue con sus nuevas amigas, había hecho muchas, pero a la hora de la verdad, cuando surgió lo de Pablo, algunas le dieron la espalda, o hasta se pusieron en su contra con los rumores, Ana se podía convertir en una abeja reina, tenia el físico y la inteligencia para ello, y el resto de abejas no lo podían permitir, se tuvo que hacer más fuerte, más contundente en sus respuestas, o al menos ahora las respondía. O otras muchas que la metían en el grupo de turno solo para usarla de mascota social, ese enjambre que es una Universidad, lleno de chavales que se creen el centro del mundo. A mis ojos ese cambio fue bueno, ahora era capaz de defenderse sola en la cruda realidad, te puede gustar ser el caballero blanco de una dama en apuros, pero tener a tu lado a una mujer fuerte y segura no tiene comparación. Su grupo de amigos se redujo bastante, pero eran de verdad.

Ana – Vuelta a la rutina.

Según fue pasando el final del curso, Ana y yo nos volvimos unos amantes de 1º nivel, verla vestida de primavera y verano era un provocación constante, faldas, mini faldas, shorts, blusas vaporosas, tirantes de top ceñido, hombros o espalda o vientre al aire, o todo a la vez. Siendo de Granada no lo pasaba tan mal con el calor que iba ganando terreno al frío, y se fue haciendo a la moda de Madrid, esa tan bella en que cuanto más enseñes, sin parecer una puta barata, más mona vas. Eso provocaba que salir con ella fuera un tormento, podía estar 2 horas follándomela sin parar a gran velocidad, ducharnos, salir a pasear y de ver como iba vestida, las caricias y los roces, ir empalmado toda la puta tarde, llegar a casa y volver a tirármela sin compasión alguna, ya apenas jugaba con la pobre Lara, que se vio obligada a pendonear con varios tíos y desistir de mi, no tenia tiempo material para ella, pero no le resultaba difícil con aquellas tetas que ahora sabia aprovechar tan bien, incluso creo que se lió con Manu, el otro compañero de piso, pero era tan reservado en sus cosas que no lo tengo claro.

Eso si, podría pasarme 1, 2 o 3 capítulos contando como Ana evolucionó hasta convertirse en mi nueva Leona, fue mejorando a pasos agigantados, el ritual era el mismo casi siempre, sexo oral hasta que me corriera y se tragara mi semen, eso era inamovible, yo le correspondía con masturbaciones o comidas de coño, a la vez o posteriormente, pero en cuanto sentía mi simiente en su garganta, pasaba a montarme, la dejaba llevar las riendas hasta que no podía más, cada vez era antes, ella disfrutaba al ver como su forma de moverse me excitaba tanto como para no poder contenerme, tomando el mando, allí ella ya no solo soportaba, respondía a mis acometidas como bien podía, y cada vez aumentaba el tiempo. Sus caderas se movían sin parar, no solo recibía, actuaba en consecuencia, daba igual cuantas veces se corriera y cuantas veces me bañara, gritaba alguna obscenidad y seguía pidiendo más. Probábamos todas las posturas posibles, tumbados, de pie, sentados o en el suelo, la que más me gustaba era dejándola contra la pared colgada en el aire por mis brazos y amartillarla de cara, mientras me rodeaba con los las piernas, hasta que me corría por 2º vez, normalmente era más o menos hora y media, dependiendo de cómo Ana reaccionara o se comportara. Si ya estabamos satisfechos, parábamos allí, pero Ana mejoraba, con el paso de las semanas su capacidad aumentaba, y yo no podía negarme, de vez en cuando pedía un 3º round, ya se encargaba ella de ponérmela dura de nuevo, entonces era cuando sus ojos brillaban de lujuria, se tumbaba de lado, como cuando dormíamos, me colocaba detrás y le penetraba lentamente desde esa posición, agarrándola fuertemente, y masacrándola lo mejor que sabia, era en este punto en el que ella, poseída por el ritmo frenético de mi falo en su coño incidiendo directamente en su punto G, abriéndola por la mitad, me pedía que sacara a la bestia, la había hablado de ella, y de Zeus, pero él no importaba, estaba bien oculto, solo la bestia, clamaba entre gritos y gimoteos que la llamara, y aunque me daba miedo, si quería seguir “entrenándola”, debía acudir a ella, sus ansias por avanzar, y las mías de comprobar hasta donde podíamos llegar, me exigían invocarla.

Con sus nuevas habilidades disfrutamos del inicio del verano y del fin de la Universidad, Ana había sacado la 3º mejor nota de su promoción, le costó dejarme de lado las últimas semanas por los exámenes, lo celebramos sin salir de la habitación durante una semana, me la había pedido de vacaciones en el trabajo para salir de Madrid con ella e ir a la playa o algo, pero fue acabar las clases, llegar a casa y le dieron por el culo a todo, disfrutamos como gorrinos en barro cada segundo de esa semana, hicimos lo que nos dio la gana el uno con el otro, apenas salimos a beber o comer algo, algunas horas nos quedamos tumbados de cara mirándonos sonriendo, sin tocarnos ni hablar, solo gozando del momento, o que pasáramos 10 horas durmiendo, descansando sin más, para luego volver a follar durante horas. En uno de esos días, no recuerdo muy bien cual la verdad, nos pasamos de la raya, normalmente cuando Ana pedía el 3º round, eso la mataba durante al menos una hora, no podía ni moverse entre espasmos y temblores, pero esa semana fue un curso acelerado, y ese día según terminamos la 3º ronda, fue Ana la que me sacó el semen a mi, y no yo matándola, sus caderas fueron las que hicieron la fuerza, no se si estaba cansado o que ella había mejorado tanto que podía hacerlo, pero cuando eyaculé, ella quedó a medias de su ronda de orgasmos, masturbándose de forma desenfrenada en pleno acto por que no podía seguir percudiendo, se volvía grosera en ese estado de excitación.

-ANA: no me vas a dejar así, ¿no?

-YO: joder Ana, no puedo más, me acabo de correr, dame un rato.

-ANA: cabrón, yo estoy caliente ahora.

-YO: anda, ponte encima y te como tu precioso coño……

-ANA: no, quiero que me folles, esto no se me pasa con unos lengüetazos, necesito tu polla partiéndome por dentro - se giró echándoseme encima masturbándome mientras su boca se mezclaba con la mía y su lengua, ahora experta, me hacia repasar su cuerpo ardiente con mis manos.

-YO: ya seria la 4º seguida, no puedo más…..- mi cuerpo me traicionaba, mi verga se ponía dura de nuevo ante sus caricias.

-ANA: si puedes, si ……ya sabes…..traes a tu amigo.

-YO: ¿quien?, ¿Zeus y la bestia? - sonrió juguetona asintiendo mientras mordisqueaba mi mentón - no, no puedo, no contigo, no hasta que sepa que estas preparada.

-ANA: ¿y que más preparada puedo estar? estoy encima tuya, ardiente de deseo, poniéndotela dura y pidiéndote que me abras por 3º vez y saques al animal que sé que llevas meses enjaulando, no es un calentón, estoy preparada - su mirada era segura, pero mi pánico, al conocerme, era mayor.

-YO: no lo sé, quizá sea así, pero una cosa es que ahora puedas y otra que cuando empiece seas capaz de acabarlo, si lo saco de su agujero no pararé, te quiero con locura, pero aunque te vea llorando y gritando que pare, aunque te desvanezcas, Zeus no tiene compasión, y seria la 4º corrida, puedo estar con la bestia mucho tiempo, o al menos podía antes, no eres capaz de aguantar eso…….- mis palabras más que argumentos en contra, lo eran a favor, de hecho Ana ya se había empalado con mi barra candente que estaba a reventar, y me estaba follando sin mi permiso.

-ANA: solo hay una forma de saberlo……- sus giros de caderas me estaban llevando al cielo, con su larga cabellera húmeda del sudor cayendo por uno de sus hombros - ….quizá conmigo si seas capaz de pararte.

-YO: no, para, no con Zeus, no hay piedad –tarde, ya la estaba acariciando sus senos.

-ANA: ¿y si solo sacas a la bestia, y no a Zeus? - me asombraba, no tanto ya, que su conversación fuera tan lógica teniendo en cuenta que se estaba follando una polla enorme tan tranquilamente.

Pero sus palabras me abrieron los ojos, siempre que había sacado a la bestia, fue por que Zeus lo demandaba, estaba en plena vorágine depravaba por aquel entonces, y encerrando a Zeus, pensé que la bestia se iba con él, pero nunca me había planteado, ¿y si Raúl, y no Zeus, era quien la traía? ¿Podía acaso? ¿solo era una 7º velocidad que cualquiera podía meter? ¿o solo la arrogancia y violencia de Zeus podía elevarme hasta ese nivel?, eran dudas importantes, por que Ana ya se estaba corriendo sobre mi, pero seguía siendo empalada de forma criminal por ella misma y llegaba al punto de tomar yo el control y si eso pasaba sin tenerlo claro, podía arruinar todo lo trabajado con Ana.

-YO: esta bien, pero júrame que no cambiará nada si no soy capaz de parar.

-ANA: te lo juro, pero destrózame de una vez, cabrón de mierda…..- se recostó sobre mí besándome de forma ofensiva, casi provocándome con sus movimientos pélvicos, era una acusación a mi hombría.

Fue como activar un motor a reacción, agarré de sus nalgas separándolas bien y fijándola en la posición, planté los pies con firmeza y comencé a ser yo quien la penetraba, lentamente, sacándola entera y metiéndola de nuevo, cada vez era más rápido, poco a poco volvió a un estado de excitación que la provocó algún orgasmo leve, la espera la estaba matando más que si hubiera empezado de golpe, pero no tardó en notar la diferencia a los 5 minutos. Ya no era fácil verla con los ojos abiertos por sorpresa, estaba muy bien acostumbrada ya a mi polla y mis ritmos rápidos, pero irregulares, ahora estaba siendo la bestia, claramente, o volviendo a serla. Como os dije, la bestia no es nada misterioso, no es que ahora se la metiera más, no era posible, ni que la abriera más el coño, otro imposible , era el ritmo, ese que pones cuando te pones a 100 con tu pareja, que algunos aguantan 1, 2 o 5 minutos, yo ya iba por 10, a esa velocidad no aprecias los matices, solo veía a Ana moverse incomoda, buscando apoyos en mi pecho, la cama o la pared, sin encontrar consuelo, con orgasmos intensos cada minuto que terminaban en fuente, normalmente ella cuando se venia de esa forma, salía de mi y cuando se le pasaba volvía a meterla pero la bestia no daba esa opción, seguí masacrándola hasta que sus ojos se pusieron en blanco y se desvaneció encima mía a los 15 minutos de haber comenzado con la bestia en serio, solo balbuceaba algunas palabras sueltas mientras movía los brazos de forma incoherente, tenia que parar aquello, el problema es que no era capaz, mi mente lo pedía, exigía y ordenaba, pero mi pelvis iba en automático. Tardé como 1 minuto en pausar un poco, el tsunami de sensaciones al recobrar a aquel animal salvaje e indómito, me obligaba a seguir, pero no hay mayor fuerza que el amor, fugazmente se me pasó por la cabeza la imagen de Madamme, aquella diosa de las calles experta en pollas grandes en sus mejores épocas de puta de lujo, que apenas probó 30 minutos de aquello, y se convirtió en mi esclava particular, Ana en 15 minutos ya estaba ida y si seguía podía ocurrir lo mismo, y no lo quería. Así que la saqué de Ana en uno de los gestos, haciendo brotar un manantial del interior, semen, fluidos y hasta puede que orina, soltó varios chorros largos, y alguno corto hasta que su cadera dejó de palpitar, mientras mi polla seguía moviéndose masturbándose con los muslos de Ana, tenia que correrme o corría serio peligro de volver a penetrarla, todo mi ser me lo exigía, pero apretando mi polla entre sus nalgas haciendo presión con mis manos me hice una paja follándome la raja de su trasero, no era la bestia pero si con un ritmo que me sacó la 4º corrida a los 10 minutos, en los que Ana había vuelto un poco en si y hasta me besaba. Me vacié de tal forma que los chorros de semen salían despedidos al aire y cían en las nalgas y los riñones de ella.

Yo sonreía de forma tonta, había ganado la batalla a la bestia, a duras penas, si, pero había logrado no seguir matando el cuerpo inerte de Ana, Zeus lo hubiera hecho, y ahora estaría de camino al 5º, y el muy animal seguramente aprovechando su inconsciencia la estrenaría el ano ahora que no podía negarse. Pero yo no, y pese a ser difícil había demostrado que podía con ella. Ana estaba recuperándose sin poder levantarse de mi pecho, al soltarla las nalgas y dejar su cuerpo suelto es cuando aprecié que temblaba como una hoja, pero reía, jugaba con mi barbilla, y se agarraba de forma casi hipnótica la gargantilla que le regalé, como si fuera una cadena que le ataba a la realidad, seguía siendo ella, me tranquilizó, la desmonté suavemente dejándola tumbada de cara a mi, durante un rato, hasta que su cuerpo dejó de temblar.

-YO: ¿estás bien?

-ANA: por 1º vez, me alegro de que lo preguntes, esta vez si me has sobrepasado, de verdad creía que estaba lista, pero no, esa puta bestia es imposible, me he perdido, no sabia donde estaba, si no llegas a parar me muero aquí mismo.

-YO: te lo dije, apenas han sido 15 minutos.

-ANA: ¿tan poco? ¡¡¡Pero si me ha parecido una eternidad!!! solo quería que parara, pero.... no deseaba que lo hicieras, jajajaja ha sido maravilloso, ¿y tú como te sientes? - me perturbó la pregunta, hasta ahora ninguna de mis amantes se había interesado por mi después de la bestia.

-YO: no lo sé, joder, me ha gustado volver a probar esa fuerza, pero casi te hago daño.

-ANA: no exageres, daño ninguno, solo me has sorprendido, creía que ya podía con todo, pero veo que no, aun me queda, pero de esta semana no pasa.

Se acurrucó a mi pecho y se durmió con una de sus grandes sonrisas, la abracé fuerte, casi sin creerme la suerte que tenia de tenerla a mi lado, me quise dormir pero mi cuerpo estaba demasiado acelerado, mi mente volaba y el tacto de la piel de Ana me estaba poniendo a tono de nuevo, no podía ser, no había con quién desfogarse, o eso creía. Ella cuando se ponía en mi pecho no lo notaba pero se giró semi inconsciente, y como solía, me agarraba la polla para metérsela entre las piernas y dormir así, solo que esta vez no se encontró con una gran polla en reposo si no con una erección colosal, se despertó de sopetón, mirando la polla agarrada.

-ANA: ¿pero como esta esto así otra vez? - estaba atónita.

-YO: lo siento, no puedo controlarlo, estoy muy acelerado, me has hecho revivir algo que esta fuera de mi control - estaba avergonzado por 1º vez delante de ella.

-ANA: pues nada, habrá que volver a sacar al animalito, la verdad es que yo también estoy caliente como una perra - y sin más se llevó la polla a la boca empezado una mamada de la suyas.

No me lo podía creer, Ana estaba desatada, tanto o más que yo, apenas 1 hora después de irse de viaje astral por culpa de la bestia, ya pedía más, pero dejó de chupármela.

-ANA: dios, esto esta asqueroso, sabe a….no quiero ni saberlo, vamos a la ducha…..- me guiñó un ojo mientras se incorporaba, sabiendo que su cuerpo húmedo era demencial para mi.

La seguí hipnotizado por una gota de sudor que recorría su espalda hasta la corva de su cintura, encendí el agua y dejó la alcachofa enganchada a la pared, comenzando ante mis ojos un sensual baño, no hacia falta, yo ya estaba metiéndome en la ducha colocándome detrás de ella, lo que aprovechó para ducharnos a los 2, llevó mis manos a sus senos y a su entrepierna, obligándome a repasar cada recoveco hasta dejarla limpia, lo que salía de su interior era un caudal de agua, semen y fluidos, antiguos y nuevos, con mi polla palpitado entre sus mulos. Mis caricias en su vientre no tardaron en ponerla a 100 y levantando su cadera se metiera del tirón mi falo hasta el fondo, apoyándose en la pared e iniciando un movimiento de sube y baja rápido, no duró ni 5 minutos, estaba físicamente muy mal, pero aun así se sacó sola un orgasmo delicioso.

-ANA: vuelve a sacar a la bestia, mátame de nuevo, y ahora no pares, aunque me muera, ¡¡¡no pares!!!

No hizo falta más, la sujeté con firmeza y esta vez sin preámbulos arrasé, saqué a la bestia que aun andaba por allí acechando, deseosa de acabar lo que no le habían quitado hacía un rato, y cuando vio la oportunidad, no perdonó. Ana soportó bastante bien los 15 minutos que antes habían sido suficientes, a partir de ahí, volvía a buscar acomodo donde fuera, mis acometidas eran tan animales que la hicieron elevarse en el aire de puntillas, apoyó un pie en cada borde de la bañera y asegurándola con mis manos, se elevó dejándola totalmente abierta y siendo masacrada en el aire, sus orgasmos la hacían retorcerse y hacer sonar sus emanaciones contra el suelo de la bañera, fui recordando como sacar lo mejor de aquel ser que ahora me poseía y pegué un acelerón final aguantando 20 minutos una sangría que rozaba la violación, pero ver su aguanté me prohibía bajar el ritmo, y aunque hubiera querido no estaba por hacerlo, hasta que se le resbaló un pie del borde de la bañera y se medio ladeó, la tenia bien sujeta por la cintura, abrazada desde atrás, y empalada, así que seguí arremetiendo, pero esa posición generaba fricción en su interior y se comenzó a quedar colgada de mi, levantaba las 2 piernas recogiéndolas o abriéndolas, buscando menos placer, pero sin encontrarlo, cuando parecía que aguantaba le venia otro orgasmo que la sacudía todo el cuerpo, al final se apoyó con lo pies en la pared de enfrente, haciendo fuerza con su espalda contra mi pecho, y teniendo cierta estabilidad se dejó machacar hasta que me corrí con ella ida casi en su totalidad, pero me fui como nunca con ella, bañándola con una rayo partiéndome la espalda y un volcán de sensaciones olvidadas, hasta llevé mi mano a su coño hirviendo y la masturbé con mis sacudidas para sacarla un orgasmo final que no pudo ni gritar, ni gemir, solo sentir.

Despacio, me fui sentando en la ducha, con ella bien agarrada, estaba como un títere aguantándose solo por mis brazos rodeando su cintura, sentándola entre mis piernas y abandonando su interior, la pobre estaba convulsionando, pero ahora de forma amplia, no eran tirones cortos, si no que sus piernas se abrían al máximo para cerrarse de golpe, mientras su pechos rebotaban de la respiración agitada y su cabeza luchaba por levantarse de mi hombro derecho. Quise hablar con Ana, pero no respondía, solo gemía, o gruñía más bien. Con cuidado de no tener otra erección, la duché, y poniéndole una camiseta mía vieja y unas bragas, la dejé en la cama durmiendo, me di una ducha rápida yo solo. Por algún motivo el miedo a haber destrozado a Ana hasta hacerla un juguete roto, mi mayor temor, no estaba presente, me había dado motivos suficientes para confiar en ella y en que eso no pasaría. Salí a beber algo, estaba tan seco que lo hice en bolas sin saber muy bien que hora era o si había alguien en casa, y al hacerlo me encontré a Lara desnuda, apoyada en la pared acariciándose con un dedo en el coño, mirándome a la cara, y luego a mi polla, su gesto era congestionado, y sin parar de hundir ese dedo en su clítoris. Hacia mucho que no la veía así, se había cansado de ser un don nadie para mí, pero esta vez estaba allí de nuevo.

-YO: hey, golfa, eso en tu cuarto.

-LARA: es que desde allí no oigo bien como te follas a Ana.

-YO: ¿otra vez con eso?

-LARA: si, no puedo evitarlo, no se que la has hecho pero hoy sus gritos me han puesto a mil…….- su mano solo aumentaba el ritmo.

-YO: pues nada reina, que te cunda……… - me giré y me fui a la cocina, me metí entre pecho y espalda media botella de agua fría, pese a las recomendaciones de que eso era malo, pero me ardía el cuerpo, solo quería calmarlo, regresé con un vaso grande para Ana, viendo como Lara seguía a lo suyo.

-LARA: ¿cuando me vas a follar a mi así? - se me echó encima restregando sus enromes y apetecibles tetas por el cuerpo, mientras me miraba implorando. La respuesta era nunca, pero no quise ser grosero con una mujer desnuda que se masturbaba con los ruidos que le llegaban de nuestra habitación.

-YO: ya te he dicho mil veces que soy de Ana, y nadie más, ahora aparta tu mano de mi polla y déjame volver con mi chica - si, su mano se había desplazado hasta mi miembro, algo que no era la 1º vez que hacia, pero siempre recibía la misma respuesta. Me metí en el cuarto y no se volvió a saber de nosotros hasta acabar esa semana.

Ana tuvo que usar un par de veces lubricante y vaselina, estaba al rojo vivo los último días, aun así nos fundíamos como uno solo, y llegamos a nuestro techo, Ana no podía más, no le era posible llegar más lejos conmigo a el ritmo de la bestia, 2 horas y media largas eran su limite, si en esa semana no había avanzado más, es que ya no podía. Yo estaba como en mis mejores momentos, físicamente estaba hecho un toro, mi cuerpo era casi esculpido de gimnasio, tableta, brazos, piernas, espalda, pecho…..etc, todo marcado y bien colocado, pero no había pisado un gimnasio para hacer ejercicio desde hacia de 1 año y medio, todo era de haber follado sin parar y con Ana los últimos meses, la constancia y no parar con ella me tenían en el estado físico perfecto, algo que había aborrecido durante mucho tiempo, un tío macizo que podía derretir el polo sur si fuera una mujer.

Era consciente de que con la bestia podía dar más de mi, pero la tenia controlada, según Ana me sacaba su ración de leche con una mamada, llamábamos a la bestia al ruedo, cuando terminaba la 3º o 4º corrida dentro de Ana, apagaba motores, se desmayara o estuviera a punto, me contenía por el propio bien físico de ella, a esas alturas de las sesiones de sexo animal, su cuerpo ya se había rendido, y dejado de intentar igualar las fuerzas hacia rato, era un cacho de carne atropellado por un tren de mercancías, pero a la hora o poco más , volvíamos a empezar, conté casi 9 horas seguidas una vez, descansando media hora entre sesiones, Ana salió titulada “cum laude” de esa habitación.

Pasados unos días de descanso, de follar y de nosotros mismos, en los que el 1º fue aprender a volver a andar para los 2, noté como sus caderas se habían desplazado, se compró ropa nueva por que había aumentado 1 o 2 tallas de cintura, dejándole aun mejor culo y una figura con curvas que provocaba erecciones con sus andares insinuantes, para el final del curso y las vacaciones de verano, Ana era, al menos, tan buena como Madamme, unas 2 horas, y no le andaba lejos a Eleonor, casi 3, ya con la bestia sobre el tablero. De nuevo la compararon era injusta, Ana había sido entenada poco a poco desde 0 durante 9 meses, el resto de mujeres no tuvo esa opción, Madamme y también Eleonor con anal, la última sumándole a su hija. Ana había sido la mujer que durante más tiempo seguido me había tirado, y eso se notaba, ahora, aguantaba 1 hora larga a la bestia ella sola, nada mal, pero se recuperaba en unos minutos y volvía a por más durante otra media hora, sumando desde que empezamos a follar quitando preliminares, unas 2 horas y media sin parar cuando nos poníamos serios, repito, eso ella sola, sin ayuda de su madre o hija, como mis colombianas, y sin “descansos” por el sexo anal como Madamme, masacraba su coño como a ninguna otra y era espectacular, volvió a gritar poseída al follar, no podía contenerse, pero esta vez con razón. Solo mi leona, Mercedes, había sido capaz de aguantar eso, pero es que más que aguantar, es que aquella mujer lo superaba, las ultimas veces con ella habían sido casi 4 horas de bestia antes de desmayarse, y se recuperaba igual de rápido para aguantar otras 2, joder, si no fuera por que era un pelele a mi ordenes, y no una novia, no se entendería por que no estaba cabalgándola día y noche y seguía con Ana, pero no era capaz de darme lo que me daba mi Granadina, el hecho de que cuando no estabamos follando me hacia igual, o más feliz, con su forma de ser y como me hacia sentir a su lado.

Después de aquello, se calmó un poco nuestra fogosidad, no lo hacíamos a todas horas, yo seguía trabajando, y el calor del verano siempre me ha dejado atontado y agobiado, teníamos nuestro polvo diario, incluso alguna vez solo era una mamada de su parte, por rutina, pero el día que nos poníamos tontos despertábamos a medio barrio, cumplíamos de sobra las 2 horas y media largas que Ana daba de si, y si estaba muy caliente repetíamos al rato aguantando 1 hora, con suerte, casi siempre con la bestia todo el tiempo, domada y domesticada aunque siempre había veces que se rompía la correa y tardaba unos minutos en contenerla, era su limite, pese a que con las repeticiones Ana oponía resistencia durante ese tiempo, al llegar a ese punto su cuerpo entraba en barrena. El sexo se convirtió en algo tan ritual y protocolario en aquel cuarto, que se volvía algo aburrido.

Ana – El error.

Los siguientes pasos eran el morbo y la excitación, Eli me comentó muchas veces que en mi adiestramiento que la rutina y la falta de emociones pueden matar las relaciones, y pese a que generalmente Ana se mostraba tímida y vergonzosa fuera de aquellas 4 paredes de nuestra habitación, su personalidad iba adaptándose, podía ser todo lo dulce y cariñosa que fuera, pero aceptó de buen grado ese juego emocionante, estaba aprendiendo de mi como manipular, y como obtener lo que deseaba.

Hacíamos locuras del tipo de follar en baños públicos, comenzamos en la Universidad el último día de sus clases, una fiesta de graduación, yo me puse el traje de Eric, que ya me quedaba hasta mal, el tiro del pantalón o los costados, mi cuerpo se había vuelto tan musculoso que las medidas de cuando me lo hicieron quedaron pequeñas y desajustadas, pese a ello estaba bastante atractivo, Ana pensó en ir con el vestido negro de las 3 V, pero era demasiado provocador, y ahora, con su aumento de caderas, su aspecto era demencial para cualquier varón adulto, de hecho, cuando se lo probó en casa, la embestí contra la pared y la destrocé de forma inhumana, con el vestido puesto, por delante y por detrás, Ana esa vez pasó de tontear al inicio, querer parar por miedo a romper el vestido, y a disfrutar y gozar con aquel vendaval. Como os decía, al final se compró un vestido………..menos descocado para la graduación, pasó de actriz porno en la entrega de premios al cine para adultos, a parecer una princesa de cuento, con un vestido verde palabra de honor, algo abombado y largo, con un tocado precioso en la cabeza, unos pendientes a juego con la gargantilla y un ahumado de ojos color esmeralda, que junto a su tono de piel la hacían dejar en ridículo al resto de mujeres. La piqué durante toda la fiesta y el baile con ello, llamándola princesita, o hada, se enfadaba por que no quería dar esa impresión de niña buena y formal, se estaba labrando un nombre en la Universidad alejándose de esa imagen que le había costado algún de un disgusto. Llegó uno de los bailes lentos, de esas que me gustaban bailar y hacer sobresalir del resto, cuando Ana se percató de que todos nos miraban y se morían de envidia, sonrió obteniendo lo que quería, le estaba cogiendo el gusto a ser el foco de atención.

-ANA: gracias.

-YO: ¿por que?

-ANA: por hacerme sentir la mujer más especial del mundo.

-YO: lo eres y te mereces eso, o más - sonrió mordiéndose el labio antes de besarme suavemente y pegar sus labios a mi oído.

-ANA: si, merezco que me hagas el amor aquí y ahora.

Me agarró la cabeza y sabiendo que todos miraban me dio un apasionado beso que correspondí encantado, nada de protocolo o formas, su lengua jugó cuanto quiso con la mía, hasta el punto de calentarme y querer tirarla al suelo para follar delante de todos. Ella lo notó y cogiéndome de la mano me arrastró al baño del piso de arriba, el de abajo estaba lleno, con una cola enorme y con 1 pareja ya follando dentro. Según entramos Ana revisó el baño entero, y sabiendo que no había nadie, cuidadosamente se quitó el vestido dejándolo doblando encima de una mesa, iba solo con un tanga minúsculo y los tacones, volviendo a echarse encima de mi y seguir con su juego en mi boca, pero sus manos me sacaron la polla masturbándola con habilidad, sonreía de forma picara y vergonzosa, la situación la ponía caliente, hasta que logró ponérmela como una piedra, se arrodilló y me la chupó de forma hábil pero ansiosa, mirando la puerta de reojo, le daba miedo que la pillaran, pero aun así no paró hasta que mi semen la llenó la boca y se lo tragó, con maestría se puso en pie bajándose el tanga y poniéndose de espaldas a mi, apoyada en la pared, se abrió las nalgas, pidiéndome que la bestia la matara, allí y ahora.

Ataqué sin piedad, me desnudé, su cuerpo era un pecado y tendría que ser confesado después de lo que iba a pasar, sus “nuevas caderas” unidas a la estilizada figura por los tacones altos, “madre mía”, lo que quería hacerle a ese trasero no debía ni de ser legal, la hundí en su coño sin mayor dificultad y arranqué a golpes sus gritos ahogados, seguía queriendo que no la pillaran, pero no podía contenerse a los 20 minutos, cada orgasmo que bañaba el suelo era demasiado para ella, los tacones no ayudaban a su estabilidad, así que recordé una postura, la subí de rodillas a la pila del lavamanos, dejándola con el culo ofrecido a mi ataque, y lo masacré una vez estabilizada, matándola 1 hora hasta correrme como un cerdo sacándola un grito que resonó por todo el baño y seguramente por todo el pasillo. Quizá hubiéramos seguido camino de otro, pero sonó la puerta del baño, Ana saltó como un resorte, cogió el vestido y se metió en un cubículo del baño cerrando la puerta con pestillo a tal velocidad que me dejó petrificado, quise hacer lo mismo pero mi ropa estaba muy desperdigada, entró al lavabo una señora de unos 40 años, supongo que profesora o de la fiesta y me vio en pelotas con la polla medio empalmada tratando de disimular cogiendo mi ropa, me preguntó quien estaba gritando, sin apartar la vista de mi, queriendo no ser tan evidente como estaba siendo, la di largas mientras Ana se desternillaba tras la puerta, la señora se dio cuenta del tanga tirado en el suelo y dedujo lo obvio.

SEÑORA: esta bien, cuando acabéis, recoger todo……- mirando a la puerta de Ana elevando la voz -……,y niña, felicidades.

Se fue admirando de reojo mi rabo por última vez, Ana salió con pánico, con la cara roja y el rímel corrido de risa, con el vestido puesto sin la cremallera, mirándome como me iba poniendo algo de la ropa.

-ANA: dios, que vergüenza he pasado.

-YO: ¿perdona? - me abrí de brazos haciendo evidente que el que peor lo había pasado era yo.

-ANA: ya, pero te conocen a ti, sabrán que era yo, jajajajaja.

-YO: ¿y por que te ríes?

-ANA: no lo sé, de nervios jajajaja

-YO: que graciosa eres, pues anda que no me ha comido con los ojos la señora.

-ANA: ¿y que esperabas? estas buenisimo y te plantas así, desnudo, delante de ella, con la polla enorme dando cabezazos después de follárme, sudando y brillando como un dios …..- se fue acercando acariciando mi pecho -……. ¿y sabes que?

-YO: ¿que? - la acariciaba con dulzura los brazos, que sujetaban el vestido sin cerrar.

-ANA: que me he vuelto a poner cachonda de pensar en que nos pillen jijijiji - reía sin comprender aun el por que.

-YO: ¿ahh si?...... ¿y que quieres que hagamos?

-ANA: podemos……..repetirlo, como tú quieras, pero a mi este rollo travieso me esta haciendo calentarme.

La cosa quedó así por que según lo dijo soltó el vestido y me montó de nuevo de cara, subiéndose encima mía y empalándola con sus movimientos de cadera, estuvimos follando hasta que me corrí de nuevo, Ana estaba lo más ardiente que había estado en semanas, y no me quedó otra que sacar a la bestia de nuevo para calmar aquella amazona que me estaba matando. Tuve que contenerme si quería que Ana saliera de allí por su propio pie, nos arreglamos pero le cogí el tanga a Ana y me lo guardé en el bolsillo, negándome a dárselo, volvimos a la fiesta como si no hubiera pasado nada, saludando a la mujer que se había metido en el baño, con Ana roja de vergüenza, como si la gente tuviera rayos x para darse cuenta de que iba sin nada más que el vestido, al regresar a casa se desató, se untó en aceite y me dejó aprovechare de ella cuanto me dio la gana, con la bestia o sin ella, durante 3 horas hasta que cayó rendida cuando la di por detrás tumbados de lado, eso siempre conseguía llevarla al paraíso cuando aguantaba bien mis acometidas.

A partir de ese día, los juegos se volvieron cada vez más atrevidos y excitantes, ejemplos a decenas, uno fue ella a mi trabajo, habíamos salido de fiesta y había estado follando con Ana hasta la hora de irme a trabajar, dejándola sin saciar supongo, algo bebida, a mi me dejaban trabajar en el almacén solo, me bastaba con mi físico para colocar todo el producto, según la vi sabia que no la había dejado saciada y que venia a terminarlo, aseguré las puertas y sin mediar una sola palabra nos desnudé y le penetré contra una estantería, rodeándome con sus piernas y aceptando aquel fin, tiré la mitad de las cosas de la estantería con los golpes que Ana recibía sin descanso, fue una maravilla como se agarraba al alto de la estantería, de espaldas y como se arqueaba su espalda gritando los orgasmos que la provocaba, tapándola la boca con mis labios hasta que por fin la hice desvanecerse cuando me corrí, al final la vestí, estaba muy cansada, agotada y seguía algo bebida, la dejé descansar en el despacho del jefe, siendo fin de semana no estaba, y tuve que partirme el pecho por acabar el trabajo con 1 hora menos de tiempo, estaba muerto y no se ni como lo hice, bueno si, dejando un par de cosas pendientes. Cuando regresé al despacho estaba Ana charlando con una encargada amiga, que ya la conocía, y otra de las trabajadoras de por la mañana. Nos quedamos así un rato, charlando entre todos después de mi turno, hasta que Ana se sintió con fuerzas para poder ir a casa, yo la disculpaba por que habíamos estado de fiesta y estaba de resaca, aunque no terminaron de creérselo, entre otras cosas por que Ana me dijo que estando medio ida no sabia si la habían sonsacado que habíamos estado follando en casa antes de ir y luego allí, o algún detalle sobre nuestra relación, como el tamaño de mi polla, algo que no era ningún secreto desde que el 2º mes de trabajar allí ayudé a una de las chicas en el almacén y los roces eran obvios, o de lo bien que follaba. El rumor se fue extendiendo por el trabajo hasta que todas las mujeres de todos los turnos pedían cambios en horarios para coincidir conmigo, tirándome los tejos de forma evidente, hasta pedían ir al almacén conmigo a “ayudarme”, cuando no había ninguna necesidad. Eso, lejos de enfadar a Ana, la ponía más cachonda aun, que la gente lo supiera y que solo ella era la afortunada la distinguía del resto, supongo, por que sus visitas a mi trabajo aumentaron en numero, 1º para ver la competencia, aunque era inútil, no había ninguna a su altura, una encargada rubia mona, y un par de jóvenes cajeras morenas con un buen polvo, pero no me interesaba nadie, nadie salvo Ana, me tenia para ella sola, ya se encargaba de que no me faltará sexo, ni de que la relación fuera de la cama cambiara, seguía siendo la mujer perfecta tanto en nuestro cuarto como fuera de él, y ahora sin la Universidad tenia mucho tiempo para nosotros. 2º por seguir con aquel juego, el morbo estaba en todo momento.

Nos provocándonos uno al otro y buscando formas de jugársela, entrando en una espiral vertiginosa, desde cosas sencillas como hacernos fotos o videos haciéndolo, una mamada en el cine, una masturbación en un restaurante, o sexo en los baños de algún local, pasando por ir con ropa interior sexy o sin ella, poniéndonos en situaciones incomodas, como en roperos con las/los dependientes de la tienda, más de una vez casi nos montamos un trío en un ropero, quedando en que alguien nos oyera follar masturbándose, o mirando de reojo, si mi físico y mi polla eran un imán para las mujeres, el cuerpo de Ana no lo era menos para los hombres. Hasta compramos esposas para atarnos, ella me esposó a la cama durante un día entero, follándome antes de irse y al volver horas después, esa me picó en el orgullo, así que se la devolví, la hice invitar a todas las personas que consideraba amigas o importantes a casa, estuve de lo más cordial y amigable con todos, pero los disculpé diciendo que tenia que hablar con Ana a solas, la metí en el cuarto arrancándola la ropa, y la medio violé contra la puerta de la entrada, no fue sin consentimiento, pero la situación no era la idónea para ella y no quería con todos allí, al menos al principio, pero a los 5 minutos ella misma me estaba follando, queriendo mantenerse muda, pretendiendo hacer que me corriera en silencio para que no se dieran cuenta, no lo permití, saqué a la bestia y la maté hasta llevarla al carrusel de orgasmos, en mitad de ello, paré, haciéndola gritar que continuara, implorando que siguiera, no lo hice hasta que gritó poseída que la partiera por la mitad con mi colosal polla, entonces la di la vuelta y la destrocé como mejor sabia por detrás hasta llenar su interior de semen, saliendo 1 hora después, con ella roja, riendo nerviosa al ver las miradas de todos, que había escuchado sin dificultades como habíamos follado.

Eso me costó más de lo que pensé, Ana siempre iba por detrás de mi, si a ella se le ocurría una jugarreta, a mi algo peor, y su respuesta siempre era menos contundente, pero llegó el día que Ana usó su intelecto de forma perversa, me invitó a dar un paseo por el parque al atardecer, pasamos muy buena tarde la verdad, merendando y paseando, pero llegando la noche buscó un sitio apartado y me dejó sobar hasta que me puse como un tronco, se dedicó a hacerme una buena mamada, sacándome su ración diaria de leche caliente, sacó las esposas, en mitad de la pasión me pegó a un árbol, me desnudó entero y me colocó las manos encima de una rama y me las puso, al ser tan apartado se aseguró de que nadie viera, y se levantó la falda, dándome su culo a penetrar, lo hice a conciencia, llegando a tirarla al suelo de los espasmos eléctricos que la provocaba sin poder sujetarla con mis manos, se volvía a poner en pie para seguir hasta que por fin me corrí, logrado el objetivo, pensé en ir a casa a acabar aquel juego, pero Ana se dio la vuelta, me besó con ternura y me miró a los ojos.

-ANA: con esto ya puedo aguantar hasta mañana, hasta luego amor……… - se puso a recoger las cosas, incluyendo mi ropa, me hizo una foto, y se fue corriendo, ante mi asombro, dejándome en pelotas en un parque, gritándola hasta que ya no me oía.

Eso me costó un lío con la policía, que acudió avisada por un grupo de chavales que iban a beber al parque buscando ese lugar tan apartado, tuve que aguantar sornas, burlas, fotos y videos, las quinceañeras sin apartar su mirada de mi rabo, llegando a frotarse entre ellas con disimulo, mi poca vergüenza me ayudó a sobrellevarlo con alegría, más cuando la policía acudió, al inicio solo una patrulla, pero algo debieron contar por la radio por que acudieron otras 2 patrullas y una lechera (furgoneta antidisturbios), todas con alguna mujer, todo un numerito atrayendo a más gente hasta que a alguno se le ocurrió usar las llaves de sus esposas para internar abrirlas, creo que era tan simple que no lo hicieron antes por darme un escarmiento, antes de llamar a los bomberos y tener que cortar la rama, que ya había intentado tirar yo, o romper, pero era muy gruesa. Al final pasé la noche en los calabozos con una manta, acusado de escándalo publico, pero me las ingenié para convencerles de que había sido una gamberrada de unos compañeros y que yo era la víctima de sus actos, eso y mi carita de lastima y de buenazo tontorrón innata, me sacaron de allí sin cargos, vestido con un chandál de la policía. Fui derecho a casa, alguno puede pensar que cabreado o enfadado con Ana, ¿pero por qué?, era parte del juego, y esa vez ella me había ganado. Según llegué la dejé claro que no estaba molesto, su actitud inicial era de miedo a haberse pasado, pero dándola un par de azotes sobre mis rodillas como a las crías malas, zanjé el asunto, ella me regaló una noche animal de sexo, quise castigarla un poco, y durante una comida de coño de cine jugué más de lo habitual con su ano, nada raro, ya lo hacia antes, la provocaba estremecerse de excitación, ese día no solo acaricié, apreté contra su agujero, esperando alguna reacción negativa, pero mi sorpresa fue ver como, lejos de reprobarlo, sus manos acariciaban mi cabeza hundida entre sus muslos gimiendo de gusto, no pasé de allí por miedo a extralimitarme y que se cerrara en redondo a más avances, podía ser el inicio para tener sexo anal con ella y no iba a estropearlo.

La jugarreta del parque se la devolví regalándole unas bragas con vibrador a control remoto, y se las puso encantada solo a condición de que ella tuviera el mando, había quedado con unas amigas de la Universidad para despedirse hasta el curso que viene, la fui siguiendo sin que me viera con el mando en la mano, el de verdad no un mando de garaje roto que le di, al principio di una ligera descarga momentánea en cuanto llegó y saludó a sus amigas, miró el mando de su bolso creyendo que se había pulsado sin querer, luego lo dejaba encendido un rato o daba ligeras descargas seguidas, luego me mandó un mensaje mientras tiritaba al caminar entre sus amigas, manteniendo la compostura, “¡¡¡cabrón, te has quedado el mando!!!” la di un descanso cuando llegaron a una cafetería con las amigas, viéndola desde fuera, cuando la miré y vi que se había clamado y creía que ya había pasado todo, lo encendí y lo puse al máximo, aguantó media hora, después montó un escándalo al romper en un orgasmo que hizo llamar a una ambulancia al encargado creyendo que era un ataque al corazón, quise parar al ver la ambulancia, pero…..oh oh……. me quedé sin pilas con el botón encendido, os lo digo todo.

Me fui a casa por si tenia pilas, no sabia si al quedarme sin ellas, las bragas seguían encendidas o no, y la verdad es que no sabia que era mejor, pero me cansé de buscar, Lara apareció como siempre de la nada, aprovechó ahora que Ana no estaba, estaba solo en bragas y como era habitual empezó su seducción inútil, me la llevé al cuarto a ver una película, y allí esperé a Ana mientras Lara hacia de oso de peluche, os juro que no me ponía cachondo, pero era inevitable sobar aquel par de tetas enormes, y sus pezones ultra sensibles, como rascarse una picadura. Según llegó a casa Ana se metió en el cuarto, se bajó las bragas levantándose la falda que llevaba y me las tiró a la cara aun vibrando, totalmente encharcadas, le dio igual que estuviera Lara en la cama, la apartó y sacándome la polla se perforó, aun sin que mi polla estuviera empalmada, ya se encargó ella de ponerla como un mástil con su cadera, para estar 2 horas matándose sin hacer yo ningún esfuerzo, salvo volver a jugar con su ano, la pobre Lara salió de allí como un perro con el rabo entre la piernas, apabullada. Cuando terminamos y Ana se quedó complacida, que no ida, me rechistaba sin mucha fuerza el hecho de haberla dejado con las bragas encendidas unas 5 horas.

-ANA: eres un carbonazo, ¿sabes lo que me has hecho pasar?

-YO: en realidad desde la ambulancia de la cafetería, no - me miró sorprendida, no sabía que la seguí.

-ANA: que mamón, ¿y que paso después? por que mis amigas se estaban preocupando, las he tenido que dejar para venir derecha aquí, ¿por que no lo apagaste?

-YO: me quedé sin pilas, he venido a buscar, pero al final desistí…..- se enfadó un poco.

-ANA: ¿me tienes por ahí chorreando mientras te vas a casa a estar con Lara bien abrazados?

-YO: no mujer, siento si te molesto, ya sabes como se pone Lara cuando estamos solos, y sin los demás que se han ido de escapada con el coche, esta más suelta que nunca - se puso de morros exagerando cómicamente la situación, cada día se parecía más a mi.

-ANA: pues que sepas que el de la ambulancia me ha metido mano.

-YO: ¿no jodas? ¿al final te atendieron?

-ANA: ¡si, idiota!, hasta me querían dar un calmante por que no sabían por estaba acelerado el corazón y los sudores fríos que tenia en pleno junio.

-YO: jajajaj pobrecilla mía – jugaba a abrazarla mientras ella se resistía - ¿y dices que te metía mano?

-ANA: si, jo, me han metido en la ambulancia y al quedarnos solos uno de ellos se ha puesto sobón.

-YO: lo mismo estaba preocupado….

-ANA: los cojones, me ha hecho quitarme el top quedando solo con la falda y en sujetador, me ha repasado con sus manos todo el pecho con la excusa de oír el corazón y los pulmones - se puso frente a mi cruzada de brazos.

-YO: no puedo culparle, estas muy buena - la di un beso en la mejilla

-ANA: ¡¡ah ¿y te da igual que me vayan metiendo mano?!!

-YO: no, ya sabes que no, pero es medico y tú una chica lista y fuerte, ¿que te iba ha hacer que no te dejaras tú?

-ANA: pues podía haberme liado con él, era mono……- su sonrisa se le escapaba, era delicioso verla tratar de ponerme celoso.

-YO: bueno, siendo así, lo mismo me tengo que enfadar contigo - me fui acercando dándola besitos por el brazo, subiendo hasta su cuello.

-ANA: calla bobo, ya sabes que soy solo tuya.

-YO: buena chica, quizá deba recordarte lo buen amante que soy para que no andes tonteando por ahí con otros…- mi mano se metió entre sus muslos masturbando y penetrándola con un dedo, haciéndola retorcerse, y dejar sus brazos cruzados para apoyarse en la cama echando su cuerpo un poco hacia atrás.

-ANA: ummm….por dios…para….me duele….ufffffff - gemía aunque su gesto era de dolor.

-YO: ¿estas bien?

-ANA: si, es solo que después de follar y con lo de las bragas, lo tengo irritado, dios, mis amigas, me han visto así, que vergüenza, alguna se ha tenido que dar cuenta.

-YO: joder, siento si me he pasado, estabamos en plena venganza de nuestros juegos y…..- me estaba preocupando pero Ana solo estaba siendo cuidadosa, se me echó encima besándome.

-ANA: no amor, me ha encantado en el fondo, esa sensación, delante de todos, solo de recordarlo me mojo, pero me duele, por favor no te lo tomes mal - pobre, la había hecho pasar un calvario y aun así me pedía disculpas ella a mi, decidí probar suerte de nuevo.

-YO: esta bien, pero si no podemos por tu dolor, podríamos probar con….el sexo anal - se sacudió la cabeza negándose mirándome a escasos centímetros de mi cara.

-ANA: no, ya te he dicho muchas veces que no, lo siento pero me da miedo, me vas a romper algo con tú cosita.

-YO: bueno, no tenemos por que hacerlo de golpe, podemos ir jugando, he hurgado un poco allí y no te ha molestado - se puso roja al darse cuenta de que yo me había percatado.

-ANA: ya…si…..pero no sé…no es lo mismo….me gusta como juegas por fuera, me hace temblar, ¿pero una penetración? madre mía, solo de pensarlo me tenso y se me cierra el culo - reía de forma leve.

-YO: bueno, casi meto un dedo, he estado apretando suavemente, y no te ha dolido ¿verdad?

-ANA: no, pero por que estaba muy caliente, lo mismo me hubieras metido un dedo entero y no me hubiera enterado.

-YO joder, eso se avisa, y te meto hasta el codo…..- me miró ofendida, sonriendo conociéndome.

-ANA: no seas animal, lo decía por decir, no sé, la verdad es que me ha gustado un poco…..- se mordía la uña del dedo pulgar, golosa al reconocerlo.

-YO: ves, solo es cuestión de ir probando, poco a poco, hasta donde veas que aguantas, caricias, luego con un dedo, luego varios, si llegamos a un punto en que te duele, lo dejamos, ya me conoces, no te haría daño jamás, pero si te gusta y lo soportas podemos intentarlo, ¿vale?

Me miraba pensativa, realmente le había gustado, no había sentido nada de dolor y confiaba en mi al 100%, podía haberla dicho que yo era santa claus y se lo hubiera creído, podía usar eso en su contra, pero no lo hacia y precisamente por eso confiaba en mi de esa manera.

Además llevaba tiempo pidiéndoselo, sabia de sobra que me moría por follárme ese culazo que había echado, antes era apetecible, ahora era una obsesión, el de Alicia, mi hermanita pequeña y novia de mi mejor amigo, seguía siendo mejor, a mi gusto, hablando objetivamente, Alicia tenia las posaderas de Jenifer López, era un escándalo de trasero, pero Ana, con su desplazamiento de caderas y aquellas prendas un par de tallas menores que se ponía de vez en cuando, estaba volviéndome loco, y ella lo sabia.

-ANA: prométeme que no me dolerá.

-YO: no puedo prometerte eso, peque, todas las veces que lo he hecho, más las primeras veces, ha dolido, no voy a engañarte, es parte del placer de hacerlo de esa forma, pero como cuando te desvirgué, dolerá un poco y mírate ahora, eres toda una campeona, si me dejas, lo haré de la forma dulce, cariñosa y tierna, si lo aguantas al principio, que viéndote como has soportado todo hasta ahora, lo vas a hacer, vas a disfrutar como nunca, pero si no, no pasa nada, yo te quiero igual y tú coño es el más delicioso que pueda soñar follárme el resto de mi vida – sonrió agradecida, pensativa, y acariciando mi pierna con su dedos.

-ANA: vale, esta bien, ábreme el culo mi amor.

Ana – La tentación vive al lado.

Esto era demasiado ya, Ana estaba a un nivel que no creí posible para una mujer, que lejos de la cama, era la niña más dulce y cariñosa que os podáis imaginar, una princesita adorable y risueña, una loba en la cama disfrazada de cordero ante la opinión publica, un regalo del cielo que disfrutaba en exclusiva para mi. El juego de ir provocándonos en publico tenia su punto, pero no era nada como cuando nos poníamos a follar en serio, eran una animalada, y ya no solo de mi parte, desde que acabó el curso Ana era capaz de follárme a mi, incluyendo a la bestia, casi 3 horas, era una barrera infranqueable, allí se desvanecía, pero ella sola, muchas veces sin que yo hiciera nada, o casi, pero cuando metía a aquel engendro del infierno en la partida, Ana y yo no podíamos aguantar ni 1 hora y media, que no lo soportara ella era normal, ¿pero yo? No se como, Ana, había superado a mi leona, aquella hembra que soportaba 4 horas de bestia, quedaba atrás ante Ana, que no solo era capaz de aguantar un tiempo considerable, aunque no tanto como mi leona, si no que se peleaba con la bestia, no solo soportaba el vendaval, había batalla.

Ana me hizo el mayor regalo de todos, me demostró que una mujer muy bien entrenada, adiestrada, con tiempo y practica, podía, no solo sobrellevar a la bestia, si no ganarle la partida, yo, o vosotros, que podéis pensar a estar alturas que ese animal descontrolado era el máximo que se puede dar, pues no, resulta que aquella Granadina, mi prima que no era tal, aquella mujer que desvirgué apenas hacia 1 año y medio, y que llevaba 9 meses amoldando, follándomela a diario, era capaz de domesticar aquella abominación. Obviamente, eso dependía de las circunstancias, no siempre pasaba, y cuando rompía la cadena Ana casi siempre solía salir mal parada, pero podía soltar la cadena sin miedo alguno, no os hacéis una idea de lo que era para mi, follar con la bestia desatada y ver a una mujer dando golpes de pelvis de igual o mayor intensidad, durante 20 minutos hasta que era yo el que tenia que rendirme ante ella, jamás me había pasado, con nadie, pero tampoco había estado tanto tiempo con nadie como para poder averiguarlo, a toda mujer con la que había estado no le había dado o tiempo o margen para hacerse con la situación, quizá, bueno, no, quizá no, seguro, que si durante 5 o 6 meses sin parar hubiera estado follando con mi leona, Madamme o Eleonor, ellas estarían a ese nivel o mejor, pero a todas las ventilé de forma desprevenida, algunas veces muy espaciada en el tiempo unas con otras, y siendo yo el dominante, incluso mi leona, la mujer que creía que no podía ser superada, me di cuenta de que en realidad, ella no hacia nada después de unas horas seguidas, era yo el que masacraba y ella la que se dejaba hacer, así lograba aguantar tanto, sin esfuerzo físico de su parte, sin presentarme lucha. Ana no era mi leona, como Mercedes, no era mi hembra sumisa como Eleonor, o Yasmine en su día, ni mi obediente devota como Madamme, Ana era mi igual, y desde ese estatus las había superado a todas, como siempre digo, no es una comparación justa, a ellas nos las di el tiempo que Ana tuvo, pero ninguna se mereció nunca que las tratara de otra forma, Ana si.

Solo había algo que quedaba por probar, y era el sexo anal, y tal como os escribí, Ana estaba preparada para ello. Después de aceptar hacerlo, y de llevar nuestros sexo a niveles que no concebía, fui preparándola cada día, marqué unos plazos, mi mente racional no iba a dejar que, aquel diamante en bruto del tamaño de un melón que había estado tallando con mimo durante 10 meses hasta convertirse en la joya más grande de todos los tiempos, que era Ana, se fuera a estropear por no hacer las cosas con cabeza. A lo largo de las semanas ya era complicado tener a Ana en un momento de excitación tal que su mente se evadía, y solo ahí me permitía jugar con su ano, siempre eran roces y caricias, pero aumentando el numero de minutos dedicados, jugando a penetrar sin llegar a hacerlo.

Lo digo a cada relato de esta fase de mi vida, pero no podía ser mejor y más feliz, la novia, amiga y amante perfecta todo en 1 sola mujer, vivía independizado con mis mejores amigos, tenia dinero ahorrado y un trabajo que me pagaba lo que necesitara pero que no absorbía mi vida. Con el extra de que Lara volvió a por mi, a Ana ya le daba igual cuando follábamos que nos oyeran, bastante teníamos con sobrellevarnos el uno al otro como para andar con remilgos, y eso Lara no lo soportaba, no se si era solo el oírnos, si estaba enamorada de mi, o solo quería lo que Ana tenia, o arrebatárselo solo por joder, (ahí personas así en el mundo), lo cierto es que después de acabar el curso de la Universidad, Lara estaba más tiempo en casa y aprovechaba cualquier resquicio de tiempo para ir a por mi, pero ya descaradamente, delante de Ana incluso, hacia comentarios llamándola mosquita muerta o la princesa pomposa, siempre a tono de broma, eran amigas, pero las miradas que se dedicaban y las respuestas de una a la otra eran de enemigas, de esas amistades entre mujeres que los tíos no entendemos. Yo solo me reía cuando se ponían así, Ana me entendía, era irrisorio que aquella mujer, por muy golfa y calienta pollas que fuera, siendo virgen, me aguantara un solo polvo, y que se creyera más preparada, o al nivel de Ana, era gracioso, por lo tanto muchas veces la discusión terminaba entre risas y llevándome a mi novia a follar como condenados para demostrar quien mandaba.

Eso no cambiaba nada, Lara era una coneja en celo, y buscaba mi zanahoria con desesperación, sabia cuando estabamos follando y que yo casi siempre salía a altas horas de la mañana desnudo a la cocina a reponer líquidos, esperaba en la cocina, en el salón por donde debía de pasar o directamente en la puerta, semi o completamente desnuda muchas veces haciéndose un dedo, me acosaba y me seguía pidiéndome que dejara a esa frígida y me acostara con ella. Yo no podía evitar fijarme en sus enormes tetas, eran una delicia para la vista, pero no pasé de eso, no me interesaba para nada, y sabía que a Ana le gustaba que diera portazos a sus intenciones. Lara volvió a meterse en mi cama cuando Ana salía y yo me quedaba durmiendo, más de una vez me desperté con Lara intentando meterse mi polla en su cerrado coño, alguna otra besándome con ella, la muy zorra aprovechaba que estaba medio dormido para hacerse pasar por Ana hasta que me daba cuenta, generalmente al ir a agarrar sus pechos para seguir con el calentón, y notar la abrupta diferencia.

Uno de esos días llegó, creo que era jueves, Ana había quedado temprano con Alicia para ir a comprarse biquinis para la temporada de piscina, Manu y Teo trabajaban por la mañana y nos quedamos Lara y yo solos en casa, Lara andaba despierta, no solía dormir mucho por la mañana, todo lo contrario a mi, que soy un ave nocturna, Ana y yo nos dimos algún achuchón antes de que se fuera, pero casi ni me enteré cuando se fue, estaba profundamente dormido, serian las 11:30, cuando un sueño húmedo me recorría el cuerpo hasta darme cuenta de que no era un sueño, abrí un ojo para encontrarme a Lara haciéndome una paja, con sus enormes tetas, era un espectáculo gigantesco ver mi tremendo rabo empalmado aprisionado entre aquellas 2 masas enormes de carne, debo reconocer que tardé unos segundos en reaccionar, y mi cabeza quería ceder a las peticiones y suplicas de mi cuerpo de que la dejara seguir, pero logré hablar.

-YO: Lara, para.

-LARA: ¿por que?, ¿no te gusta? – se esforzaba en amasar mi miembro con sus senos.

-YO: claro que si, pero para.

-LARA: no quiero, y tu polla me dice que tú tampoco quieres.

-YO: lo que quiero yo y lo que quiere mi polla son cosas diferentes, apártate, o te aparto yo….- mi tono se volvió tan rudo que Lara paró en seco poniendo cara de desesperación sin entender que un hombre fuera capaz de rechazar aquello, pero se negaba a abandonar, subió su cuerpo recostándose sobre mi aprisionando mi rabo entre las piernas poniéndome sus tetas casi en la cara, no puede evitar atacar uno de sus pezones, lamiéndolo y tirando de él con los dientes, a lo que ella se retorció de placer.

-LARA: ¿ves como en el fondo tú también quieres? – la muy zorra tenia razón, algo dentro de mi ser estaba queriendo follársela de forma criminal, mientras me comía a duras penas esas enormes tetas y notaba como sus pezones eran los más sensibles a los que nadie se los había comido, quizá por ello me quedé jugando con ellos unos minutos, no quería, o si, pero no podía evitarlo.

-YO: dios, que pedazo de tetas, me pasaría el día jugando con ellas……..- estaba enajenado, amasando con mis manos aquellos pechos ante los que no podía contenerme y dejar de chupar.

-LARA: son todas tuyas, solo tienes que hacer lo que yo te diga…… - estaba logrando doblegarme, ese día, no se por que, me tenia temblando ante la idea de tirármela, pero cometió un error, si se hubiera callado o no hubiera dicho esas palabras, quizá no hubiera parado, quizá, no lo sé, lo que sé es que al oírla decir eso me sentí usado, manipulado y dirigido por alguien que no era yo, de pronto me vi en 3º persona como si acabara de entrar en la habitación, viendo la escena por 1º vez, mi cabeza se sacudió y me di cuenta de lo que estaba haciendo.

-YO: quítate de encima……..- me incorporé un poco elevando mi cuerpo y el suyo a la vez, con fuerza.

-LARA: ¿que dices?, no seas tonto, venga sigue….- se contoneaba mientras jugueteaba con sus tetas cerca de mi cara.

-YO: apártate - mi expresividad facial es muy fácil de leer, y Lara leyó en mi cara que no habría otra advertencia, lo siguiente seria sacarla de mi habitación a la fuerza.

Se tumbó a mi lado mirándome sin entender nada, observándome a mi, incorporado, con la polla como una estaca y aquella mujer de tetas enormes rogando que la desvirgara, y aun así, me había contenido, dios sabrá como. Me fui al baño y me di una ducha de agua fría, pero mi empalme no se bajaba tan fácilmente, por 1º vez en meses me tuve que hacer una paja, para que aquello bajara, tirando de imágenes de Ana en mi mente, negando recuerdos de otras y cerrando la puerta a volver a salir y terminar lo empezado con Lara. Sin haber consumado nada me sentía mal por Ana, era la 1º vez que sentía que le había fallado y que no me había controlado, ¿pero acaso se me podía culpar? Era un chico de 19 años, mi mente aun estaba sin amueblar, supongo, quizá no debí dejar que Lara se tomara tantas confianzas, en vez de tener confianza ciega en mi auto control. Salí a buscar mi teléfono y llamar a Ana, me encontré con Lara masturbándose a mi espera, la cogí del brazo y la ordené salir de allí, a las bravas la saqué, de forma brusca, mientras marcaba los números en el móvil.

-ANA: dime amor.

-YO: hey peque ¿como estas?

-ANA: bien, aquí probándonos cositas, ¿tú eres más de verme con pareos o sin ellos?

-YO: por mi irías desnuda siempre, así que mejor haz caso en moda a Alicia.

-ANA: jajaja vale bobo, ¿querías algo?

-YO: si, verás…..no ha pasado nada, pero…..según te has ido, adivina….

-ANA: Lara se ha metido en la cama….

-YO: exacto.

-ANA: no me asustes Raúl.

-YO: no, tranquila, ya te digo, no ha pasado nada, pero ha estado a punto….

-ANA: ¿y te sientes tan mal que me tienes que llamar para decírmelo? ¡¿hasta donde has llegado?!

-YO: nada, me he despertado creyendo que estaba contigo y era Lara haciéndome una cubana, la he dicho que parara pero no se cuanto llevaría, la tenia dura ya….

-ANA: que mala puta…¡la habrás detenido!

-YO: si, pero se me ha echado encima y me ha puesto las tetas encima, no se que me ha pasado pero he jugado con ellas más de lo que quiero admitir.

-ANA: ¡¿y entonces?!

-YO: me la he quitado de encima y me he ido a la ducha, lo siento, no he podido evitarlo, al final entre el agua fría y una paja se me ha pasado y la acabo de echar del cuarto.

-ANA: ¿ya esta? - preguntó sorprendida.

-YO: joder que más quieres, si eso me la follo………- estaba indignado, a mi me parecía relevante, y por su reacción, a ella no.

-ANA: no amor, pero eso no es nada, te quiero más ahora.

-YO: chica, no hay quien te entienda………- le contaba que casi la pongo los cuernos ¿y me decía que me quería más?

-ANA: jajaja soy una mujer complicada, pero me alegro de que te la quites de encima pese a sus………grandes argumentos…… - no se si lo dijo con doble intención o no -….. y que me lo cuentes por malo que te parezca, eres el hombre perfecto, tú tranquilo, en un rato voy a casa y me dices como me quedan los biquinis, y ya si eso…….un besito muackk - y me colgó.

Me quedé atontado sentado en la cama, todo preocupado que estaba y ella logró minimízalo hasta el punto de convertirlo en algo bueno, con una llamada, de golpe no me parecía tan mal lo ocurrido, “joder, que suerte tengo con esta mujer”. Salí convencido de mi seguridad impenetrable de nuevo, en pelotas buscando a Lara, que estaba en la cocina de espaldas a la mesa, con una de sus protocolarias bragas y una camiseta interior amplia de tirantes, dejando ver su tetas al aire por los lados, ataqué pegando mi polla a su trasero y metiéndole las manos por detrás agarrando sus tetas, masajeando sin descanso, acercando mis labios a su oído.

-YO: eres una puta, casi lo logras esta vez…..- la solté tal azoté de tal manera en el trasero que soltó un grito de dolor y se le borró la cara de lasciva que tenía.

-LARA: lo haré, tú dame tiempo, uno de estos días serás mío y no querrás volver con Ana…….- se dio la vuelta agarrándome del cuello y tumbándose sobre la mesa obligándome a caer sobre ella, rodándome con las piernas, la miré a los ojos amagando besarla.

-YO: en tu puta vida, soy de Ana, y tú, mala zorra, no estás a su altura en ningún nivel, te follaré, después de lo de hoy estoy seguro, pero será cuando yo quiera, y te demostraré que no eres nadie a su lado.

Me incorporé para alejarme de ella pero Lara se quedó pegada a mi a horcajadas, agarrada de mi cuello y frotándose la pelvis contra mi polla, sin yo hacer esfuerzo alguno salvo estar de pie, mi fuerza, más que asustarla, la ponía cachonda, verme como sin esfuerzo la sostenía sin problemas, la separé las piernas queriendo sacármela de encima, me fui a la nevera con ella colgada de mi cuello, como una lapa, era casi denigrante para ella, ver como yo bebía algo para desayunar o me movía por la cocina como si ella no estuviera besándome el cuello, el pecho o se estuviera restregando contra mi, sin ningún resultado, me volví a la cama, seguía con sueño por su culpa, y ella detrás de mi, se acostó conmigo dejándome meterla mano entre sus tetas, para quedarme dormido mientras jugaba con uno de sus pezones.

Lo sé, no tiene sentido, jugar con ella de esa forma, permitirla tantas confianzas y luego no tirármela, era antinatural, pero a mi me gustaba dormir abrazado a una mujer, sentir su cuerpo y mi calor cubriéndonos a los 2, a Lara le hacia parecer que avanzaba, y a Ana más que no parcele mal, le encantaba ver así de humillada a su amiga.

No se cuantas horas pasaron, me despertó el sonido de Ana entrando en la habitación con unas bolsas, mirándonos en la cama como yo me despertaba y sacaba la mano de las tetas de Lara sin disimulo alguno. Casi en automático, Lara se ponía en pie y salía de la habitación, dedicándose ella y Ana alguna mirada asesina, si para mi era difícil entender la relación entre Lara y yo, la relación entre ellas ni lo intentaba comprender, amigas que se odiaban. Mientras se iba pude ver como las bragas de Lara estaba mojadas en su coño solo con el roce continuo de mis dedos en sus pezones. Según se fue me centré en Ana, que dejaba las bolsas en el suelo, de nuevo comprendí mi mundo, estaba vestida con unos jeans ajustadísimos, de esos de una talla o 2 menos, de antes de su ensanchamiento de caderas, su culo era demoniaco, con solo una blusa rosa vaporosa que dejaba ver su cuerpo a tras luz y su sujetador negro, me di un golpe en la cabeza por lo idiota que era, tenia a una diosa y casi pierdo la cabeza por un par de buenas tetas, me levanté y me fui a por su trasero, acariciándolo mientras Ana se incorporaba de dejar las bolsas, para ir rodeándola con mis brazos metiéndose por debajo de la blusa en su cintura, hasta abrazarla, y besar sus labios cuando giró su cara sonriente.

-ANA: hola amor, ¿y esto?

-YO: te he echado de menos.

-ANA: ya se ve, ¿estás bien?

-YO: ahora que te tengo entre mis brazos, si.

-ANA: mira que eres bobo - la di la vuelta besándonos, entre tierna y apasionadamente, de forma espontanea sacándola su sonrisa de ángel.

-YO: no soy bobo, no me ha gustado casi caer, y que no te importe, más.

-ANA: no es que no me importe, solo confío en ti, ciegamente.

-YO: pues casi te fallo.

-ANA: pero no lo has hecho, y me has llamado para contarme que no lo has hecho, jajaja eres un cielo - de nuevo rebajó el problema hasta no ser nada – anda, no te procures por esa fulana, ¿vale? - con tono de madre

-YO: vale, pero enséñame que has comprado - se ilusionó al verme animado, y me besó con dulzura antes de quitarse la ropa, con mi ayuda ya que los jeans la obligaban a solicitarlo, su cuerpo era pecado con aquel sujetador negro de encaje y un tanga minúsculo del mismo color, “espero que no la viera así algún dependiente mirón”, que los había, por que era provocación andante, más con Alicia, imaginaba ver a aquellas 2 en un pequeño ropero, desnudas, probándose biquinis, si había algún depravado con cámaras de vigilancia, sin duda esa cinta iría a sus favoritos, no se muy bien por qué, pero mirando como Ana iba sacando las prendas, pregunté.- ¿que tal con Alicia?

-ANA: genial, es un cielo de mujer, nos hemos estado ayudando con las prendas y probándonos juntas, jajaja ha sido muy divertido….. - lo que me imaginaba - …..así la distraigo un poco.

-YO: ¿de que?

-ANA: ¿no te lo ha dicho Teo? - no me había comentado nada, aunque si era cierto que la relación de mejores amigos no era tal desde hacia tiempo, trabaja muchas horas y luego en casa estaba muy desanimado, bebía de más y se ponía algo tonto con Alicia.

-YO: pues no, pero no he hablado mucho con él últimamente.

-ANA: ni tú ni nadie, ni Alicia, esta muy distante dice, esto de vivir juntos esta siendo muy duro para ellos.

-YO: joder, pues quien lo diría, eran la pareja perfecta.

-ANA: ya, pues eso se acabó, Alicia dice que están un poco hartos ya….

-YO: no van a irse de casa, ¿no? - me miró algo triste.

-ANA: ojalá fuera solo eso….han hablado de cortar y todo…….. - me pilló en fuera de juego, ya era raro que aquello ocurriera, eran ideales y felices juntos, o así les recordaba yo, más raro aun es que Teo no me hubiera dicho ni palabra, pero si él estaba distante, yo no menos que él, mi vida era Ana.

-YO: joder, pues tengo que hablar con él, puffff que mal, y yo sin darme cuenta.

-ANA: y con ella, también es tú amiga, o como dices, “tu hermanita pequeña” - pues tenia razón.

-YO: pues si……- no terminé de hablar cuando salió disparada de la habitación, para volver con ella de la mano.

Conmigo en pelota picada, algo de lo que no me di cuenta hasta que la vi clavar sus ojos en mi polla, no era la 1º vez que la veía, pero con ella delante solía tener cierto decoro, pero si ahora corría a ponerme algo solo evidenciaría mi vergüenza, y la verdad, es que no tenia nada de lo que avergonzarme. No se si a Ana le pareció igual o ni se percató al ser algo natural y ordinario ya para ella, así que allí estaba yo, desnudo con mi cuerpo moldeado de follar como animales y mi polla enorme en reposo colgando, de pie, ante mi novia con el sujetador y en tanga, ofreciéndome a Alicia para saludarla, que venia solo con unos shorts de pijama elásticos y en sujetador, la cosa, vista desde fuera, no podía ser más rocambolesca, pero para mi asombro, era natural, era consciente de lo que ocurría, pero me parecía peor opción evidenciarlo con algún gesto, así que actué como si nada.

-YO: hola hermanita, ¿que tal? - la abracé como me gustaba.(hago aclaración, no sé vosotros, pero a mi esto de saludar con 2 besos, bien para romper el hielo con desconocidas, pero a las mujeres que merecen la pena, se han ganado algo distinto, para mi, la mayor muestra de respeto y cariño hacia una mujer es que se ganara que la saludara con 1 solo beso y un abrazo, las distingo del resto)

-ALICIA: bien, aquí de compras que este trasto que tienes por novia.

-ANA: ya, claro, como que túu eres un angelito jajajaja - se dieron un abrazo cariñoso - verás, siento si te molesto pero….- la paré en seco, si alguien iba a meterse sin permiso en su vida, seria yo, y la culpable no seria Ana por decírmelo.

-YO: ven reina, siéntate…..- la dejé sentarse al borde de la cama, mientras que Ana lo hizo a su lado, y yo con algo de disimulo lo hice en el suelo para evitar una línea directa de visión a mi rabo -… verás, últimamente os veo a Teo y a ti muy enfadados, que ya no sois iguales a como erais antes, y he preguntado a Ana y sin querer decírmelo me ha dejado ver que no estáis bien - Ana me miró con una medio sonrisa entendiendo mi artimaña para dejarla bien a ella ante su amiga, Alicia en cambió cerró los ojos agachando la cabeza apesadumbrada.

-ALICIA: pues si, ¿que quieres que te diga Raúl?, lo estoy pasando mal, bueno, lo estamos pasando mal.

-YO: ¿pero que os pasa?, si sois la pareja perfecta

-ALICIA: lo éramos, nos hemos cansado de ello, al menos yo, no es por vivir juntos, es que llevamos mucho tiempo juntos, nos conocemos demasiado bien, y últimamente entre el trabajo y que solo está conmigo para salir de fiesta y beber, ya no es el mismo.

-YO: es el mismo, solo que ahora tiene responsabilidades mayores y no puede dedicarte el tiempo que te mereces.

-ALICIA: eso quiero pensar, pero tú no vives con él en el mismo cuarto todos los días, ni has visto como ha cambiado, o quizá he cambiado yo, y ahora le veo de forma diferente, no se, yo le quiero, y se que me quiere, pero ya no basta con decirlo.

-ANA: ya Ali, pero no podéis seguir así……- la miré crucificándola, estabamos allí para ayudar, no para disolver.

-YO: no es eso mujer, no vais a perder todo lo ganado este tiempo, solo hay que tratar de arreglarlo.

-ALICIA: eso intento, he hablado con él, pero solo se enfada por que él no se da cuenta del cambio que ha dado, me culpa a mi de todo…..- empezaba a llorar.

-YO: ¿de que te va a culpar? ¡¡¡Si eres un encanto!!!

-ALICIA: no lo sé, me dice que soy yo quien cambia y que no le entiendo y que soy una tremendista, que me creo mejor que él o que si ya no le veo como un novio……- calmé sus lagrimas como pude mientas Ana ayudaba, “joder, todo eso pasa bajo mi techo y yo sin enterarme”.

-YO: va, va, tranquila, será el estrés del trabajo o lo que sea, ya hablaré yo con él……..- me miró ilusionada.

-ALICIA: ¿en serio?, no quiero mal meter entre vosotros.

-YO: que vas a mal meter tonta, si es Teo, hablaré con él hasta que nos peguemos como cromañones y luego le invitaré a una cerveza, así hacer hombres de verdad uh uh - con tono de broma, para sacarla una sonrisilla que echaba de menos.

-ALICIA: muchas gracias, no sé que hacer, si hasta he ido a comprarme unos mini biquinis y ropa intima sexy, con Ana ayudando, a ver si le animo, eres un afortunado, no sabes el sol de mujer que tienes…… – se abrazaron entre ellas consolándose, me avergüenzo de decir que mi gozo era ver sus tetas chocar entre si.

-ANA: oye, ¿y si le ensañamos a este tonto lo que nos hemos comprado? Así vemos sin nos queda bien desde el punto de vista de un cerdo salido - me guiñó un ojo, Alicia la miró algo confundida.

-ALICIA: pero….es ropa íntima….- la mirada de Ana era de no comprenderla.

-ANA: pero si llevamos meses lavándonos las bragas y calzoncillos unos a otros, nos hemos visto medio en bolas ya, ¿que mas te da? - y cogiéndola de la mano la arrastró hasta su cuarto a coger las bolsas de las compras, para volver riendo las 2.

Ni mi mejor sueño o imaginación podían haber concebido que aquellas 2 mujeres me hieran un pase de biquinis y ropa inferior estando yo desnudo, cuando se fueron pensé en taparme, ¿pero para que? si ya estaba hecho, así me iba a quedar. Me senté en la cama y me preparé para disfrutar como un enano, volvieron y dejaron un montón de bolsas en el suelo, Ana se desnudó sin más, quedándose mirando a Alicia, esta fue a coger una bolsa e irse para el baño, pero Ana la sujetó del brazo.

-ANA: ¿donde vas?

-ALICIA: hija, no me voy a cambiar aquí delante de tu novio………

-ANA: si anda, y vas a estar dándote paseos todo el rato, no seas cría, que es Raúl….- no se si lo estaba haciendo a posta o no, pero la dejé seguir a su bola, estaba logrando que Alicia, mi mujer perfecta de antaño, aquella por la que odiaba alguna vez por envidia a mi mejor amigo, me hiciera un pase de modelos de ropa intima y que se desnudara delante de mi.

Se quedó unos segundos pensativa, mientras Ana sacaba el 1º bañador, era 1 pieza entera, un bañador normal, de azul oscuro, elástico y dejándola la espalda al aire con un ligero escote, nada llamativo si no fuera por la figura de la mujer que iba dentro, dándose una vuelta y colocándose bien las tetas y el culo.

-ANA: ¿que tal?

-YO: hombre, de inicio, bien, pero….no sé, es muy recatado.

-ALICIA: eso le he dicho yo, que es perder potencial, pero ha insistido y estaba de oferta.

-ANA: a mi me gusta, me hace ir segura, me recuerda a cuando iba a la playa de niña…..- allí estaba mi tierna y cariñosa novia - …venga ahora tú - azuzó a Alicia, que estaba roja.

Al final entre Ana y ella se quitó el sostén, dejándome su par de tetas a la vista, nada que no hubiera visto ya, sus pezones eran algo pequeños pero estaban tiesos, los shorts se los quitó ella sola, tan elásticos por su protuberante cadera que casi tuvo que desencajarlos, para mi sorpresa no llevaba nada debajo y medio tapándose se quiso poner un biquini de una bolsa, Ana la cogió de la mano y la dio un vuelta obligándola a perder la posición de sus manos y dejar de taparse.

-ANA: ¡mira que cuerpazo!, ya me gustaría a mi tener ese culo, ¿verdad amor? - la verdad era que si, pese a que Ana tenia un cuerpo 10, Alicia y su cadera, o esas nalgas, eran sobrehumanas.

-ALICIA: ya, claro, como tú andas tan corta ahora…..- bromeaba perdiendo el apuro que le daba, pero me constató que también se había dado cuenta del ensanche de Ana.

-YO: muy buen culo, de lo poco que tienes que envidiarla, peque……..- quise adular a las 2.

Alicia se vio querida y femenina, con algo de salero se probó un biquini blanco de lo más normal, de hecho se parecía la parte de arriba a un sujetador deportivo más que un biquini, y la parte de abajo grande, tapándole gran parte de su maravilloso culo, pinta de short y no unas bragas. Mi aprobación la tenia, Ana sacó una cámara de fotos y se lío a hacerse fotos juntas o por separado, era la época del boom del face y las redes sociales así, de mujeres colgando fotos en picado de su cara dejando ver escote, luego Ana se quitó el bañador y Alicia la siguió con algo de rubor, pero seria la última muestra de tal cosa, se fueron probado, ahora ya si, biquinis las 2, mucho más escuetos y atrevidos cada cual, de flores, rosas fucsia, amarillos chillones, con alguno que ya solo eran cuerdas con triángulos tapando las tetas, y luego solo cuerdas tapando los pezones y el pubis, eran una delicia, verlas ponérselos, quitárselos y hacerse fotos, hasta me dieron la cámara a mi para ir ganando tiempo. Ana sacó la artillería, 1º con un biquini negro que apenas contenía sus pechos y con la parte de atrás de la braga siendo un medio culo, en el trasero como el que tenia antes podía entenderse pero en el de ahora era un juego eterno, se tapaba una nalga y la otra quedaba al aire, mi polla empezaba a reaccionar, pero no llegó a ponerse dura hasta que no vi a Alicia en un minúsculo biquini, la parte de arriba eran solo cuerdas y unos diminutos triángulos que ni siquiera daban para taparla los pezones tan pequeños que tenia en comparación con Ana o Lara, pero el remate es que era un biquini de tanga de hilo, yo que estaba haciendo fotos y jugando con Ana, no pude evitar una erección al verla contonearse como una modelo, y agacharse con un paso de baile moviendo su melena, supuse que era parte del juego, Alicia era mi hermanita, pero mi hermanita me la estaba poniendo dura y se estaba dando cuenta, por 1º vez me vio la polla totalmente empalmada, y aunque quería disimular, no apartaba la vista.

Disimulé haciéndolas fotos de frente, de perfil y abrazadas mientras reían, Ana terminó con un biquini exacto al de Alicia, negro diminuto y de tanga de hilo, no le quedaba para nada peor que a Alicia, pero ella no tenia esas portentosas posaderas, pero si mejores tetas.

-ANA: ¿que, te gustan?

-YO: increíbles, vais a arrasar este verano.

-ALICIA: pues eso espero, y aun falta lo mejor……- sacó la última bolsa, de una famosísima marca de ropa interior que incluye secretos y ángeles.

Sin más se puso una serie de bragas, sujetadores y medias que no rebajaron mi calentura, ya sentado con Ana encima mía tapándome la erección, nos pidió que la fotografiaríamos así, para dárselas a Teo como regalo, luego se cambió y se puso un conjunto de encaje blanco con tanga que me volvió a poner a 100%, se agachaba y se separaba las nalgas de forma provocativa, no se con que intenciones pero me daba igual, su remate fue desnudarse y ponerse solo un corpiño elástico de tela transparente, de los de Ana, sin nada debajo, eso me permitió fijarme en su coño por 1º vez, con algo de bello cuidado.

-ANA: que dices amor, ¿como le queda?

-ALICIA: me ha dicho Ana que esto os pone a los tíos…..- no se la veía muy segura.

-YO: no lo hagas por él, hazlo por que te gusta a ti, y si, bueno, esta bien, pero a ti no te hace brillar.

-ALICIA: ¿como?

-YO: verás, a Ana le queda de cine, por su tono de piel y por sus pechos y su figura, pero a ti… no, tú mejor parte es las caderas y ese culo de escándalo, esa prenda no lo acentúa, debes aprovechar mejor tu trasero si quieres que Teo se vuelva loco.

-ANA: pues ahora que lo dices, es verdad, quizá unos leggins con tangas, o culotte con medias y tirantes…..- se puso a buscar como loca en nuestro armario, y sacó eso mismo.

Como a un maniquí la quitó el corpiño, la calzó un tanga y unos leggins ajustadísimos, sin preámbulos, me dieron ganas de follármela allí mismo y si no estuviera Ana delante lo hubiera hecho, a pesar de que se empezaba a poner de moda ir solo con leggins sin faldas o vestidos encima, (dios bendiga la moda), Alicia era mucho menos descarada, pero ante aquello no había discusión, era evocador, insuperable, o eso creía, Ana la desvistió de nuevo y la puso un conjunto con medias, una liga, y tirantes, para rematarla con una falda de vestir ajustada de medio muslo, “puffffff la madre que la parió”, sin disimulo alguno me fui a su trasero y lo “arreglé”, recibiendo un tortazo de parte de Ana con cariño, palpando por 1º vez el culo de Alicia, que se reía sin hacer mucho esfuerzo por apartarse de mi.

-ALICIA: jajaja casi no puedo ni moverme con esta falda pero mira que culo, esto es pecado.

-YO: ya te digo, si con esto Teo no reacciona, no lo hará con nada.

Me abrazó sin importarla que mi polla tiesa casi la atraviesa el estomago, dándonos las gracias, y recogiendo las cosas se fue la mar de feliz, según se marchó cerré la puerta y cogí en volandas a Ana que gritó de sorpresa, la tiré a la cama, y la desnudé, por decir algo ante el biquini tan minúsculo, a tal velocidad que ni le dio tiempo a decir nada antes de que la ensartara del tirón, vaya mañanita llevaba, necesitaba desfogarme y por fin tenia a mi extintor a mano. Tumbada boca arriba me recibió rodeándome con las piernas y besándonos apasionadamente.

-ANA: tranquilo toro, que me vas a matar.

-YO: lo voy a hacer, te deseo.

-ANA: a mi, ¿o a las teta de Lara?

-YO: a ti.

-ANA: ¿y a mi o al culo de Alicia? - sonreí al entender varias cosas, la 1º que Ana quería sentirse poderosa en la comparación, la 2º que quería que yo lo dijera para tratar de convencerme, y la 3º era que Ana había manipulado a Alicia para regalarme ese espectáculo, mi joven aprendiz estaba siendo una alumna aventajada y le había regalado a su maestro una de sus fantasías.

-YO: eres un peligro, casi la violo delante de ti.

-ANA: pues fóllame ahora a mi.

Ana – Estrenos.

Encantando, arremetí con todo, sacando a la bestia y soltándola, si era lo que quería se lo iba a dar, acelerando mis embestidas fui metiendo mi largo en su interior hasta penétrala por completo y una vez allí, notando como sus paredes vaginales cedían ante mi, fui percutiendo en su pelvis con una violencia mayor a cada paso de los minutos, buscando su boca, su oreja, su cuello y sus senos con mis labios, mientras mis manos se apoyaban en el colchón para dejar a mi cadera libre de presión y así matarla, sus gemidos fueron aumentando, escapándosele risas de emoción. Al ver venir un orgasmo, aprendí a tomarme descansos cuando se corría, paraba y con mis dedos la hacia venirse hasta que se pasaba, para volver a la penetración, debía tomar esos atajos si quería mantener el listón, Ana estaba a un nivel desproporcionado respecto a su inicio en el sexo. Después del 1º orgasmo la levanté una pierna para usarla de amarre, y así elevar el ritmo durante un buen rato, viendo como mi amada se pellizcaba los pezones y jugaba con sus senos mientras sus manos tenían control, las oleadas le hacían agarrarse a la colcha de la cama, y abrirse de piernas para tener menos fricción, ella también tenia sus trucos, pero no evitó un 2º orgasmo que la sacudió el cuerpo y me hizo caer sobre ella, buscando sus labios y su lengua de forma desenfrenada, sus uñas se clavaban en mi espalda al notar como mi pelvis continuaba con movimientos dulces y largos. Tomó el control y me giró tumbándome a mi boca arriba, era su turno, lo veía en su cara, en sus ojos y en su melena, se agachó para besarme, como cogiendo fuerzas para incorporarse apoyada en mi pecho, y mirando al techo, moviéndose al son de una música inexistente, se dejó acostumbrar a mi rabo en su interior, haciendo giros amplios de caderas, mientras mis manos acariciaban sus muslos e iba subiendo por su vientre, lo que la hacia morderse el labio de lujuria, hasta alcanzar sus pechos, duros y salientes, me incorporé para besarlos y chuparlos como un crío de teta, hasta que me empujó de nuevo contra la cama, se apoyó en mi pecho y empezó a subir y bajar su cadera, con mi polla entera dentro y sin sacar más de la mitad, aun así eran gestos grandes para ella, que fue aumentando el ritmo, por decirlo de alguna manera, ella también sacó a su bestia, y me cabalgó de forma brusca y agresiva media hora larga, no podía aguantar 5 minutos seguidos así, paraba por cansancio o por que se corría, para besarme y acariciarnos, hasta volver a empezar, cambiado apoyos de sus manos, en mi pecho, en el colchón, a los lados de mi cabeza, o bien echándose un poco hacia uno de los lados, dejándome atacar uno de sus pezones, pero ahora fui yo quien sin soportar el placer se vació en su interior, con una serie de espasmos brutales, que la hicieron estremecerse y sacar una sonrisa picarona de logro alcanzado, se rindió entre risas en mi pecho, jugando con la humedad del sudor de mi piel con los dedos

-ANA: ¿crees que ellos lo harán como nosotros? Teo y Alicia….

-YO: pues no lo creo, pero no lo sé.

-ANA: yo tampoco, según me ha contado ella Teo no la tiene tan grande como tú, dice que algo más de la mitad, y eso que solo te la había visto en reposo……- “joder, no sabia que se había fijado tanto”.

-YO: bueno, pero no solo es el tamaño peque, lo mismo se mueve como un diablo en la cama.

-ANA: ¿mejor que tú?, ni de broma

-YO: no hace falta ser yo para ser bueno en la cama…...- me empezaba a cabrear tener que defender al pobre Teo.

-ANA: ni eso, según dice Alicia……- la corté con un beso y un cachete en el culo.

-YO: deja que Alicia y Teo arreglen sus cosas, y no te metas, ahora termina lo que has empezado, por que ya la tengo dura de nuevo.

La saqué de encima poniéndola a 4 patas, viendo como se llevaba la mano al coño para acariciárselo y abrírselo, mientras yo me ponía detrás de rodillas, y la fui perforando con calma su cuerpo caliente, sacándola suspiros y gemidos de aguante hasta tenerla empalada de nuevo, la levanté poniéndola de rodillas también y comencé a follármela de forma animal agarrándola de las tetas mientras nos buscábamos con los labios, el sonido era atronador de mis golpes en su trasero, pero continué, la atravesé hasta sacarla un orgasmo que manchó toda la cama y sabanas con sus fluidos, pero no paré, ella aguantaba más, solo la dejé caer a 4 patas de nuevo, para verla hacer fuerza contra mis embestidas, conseguía moverse en dirección contraria mientras la mismísima bestia la estaba matando ya en su carrusel de orgasmos, 1 hora después, hasta que su cuerpo dijo basta y se dejó caer dando con el pecho en la cama siendo un culo me pompa castigado sin piedad, gritaba y gemía cada orgasmo, mordiendo las sabanas para no alertar a los vecinos, sollozando de gusto hasta que me fui a correr por 2º vez, como siempre regalé lo mejor para el final, un acelerón final que hizo que Ana volviera en si de su estado, manteniéndose en vilo en el aire solo con las piernas y la fuerza de su espalda y vientre, sin manos apoyadas ya que se estaba separando sus nalgas, estaba en el momento oportuno.

-YO: peque, te voy a meter un dedo en el ano.

-ANA: vale, pero amor, ten cuidado……- asintió con la poca cordura que le quedaba.

Me chupé el dedo pulgar de la mano izquierda, y lo pasé por el coño de mi amante hasta tenerlo bien mojado, luego hice lo mismo con su ano, jugando con él, apretando un poco sin llegar a entrar, sacándola gemidos, ahora previniendo mi corrida, fui bajando el ritmo un poco, necesitaba tiempo, fui amagando, apretando más en su ano, notando como de estar completamente cerrado a ir cediendo ante mi dedo, mi otra mano se fue a su clítoris y la masturbó para no perder ese nivel de placer, para que cuando hice el golpe final metí el principio del pulgar en su culo, soltó un alarido descomunal mientras mi mano aceleraba en su vulva, cuando se calmó volví a apretar para introducir ya con facilidad el resto del dedo, a pocos, sin forzar y sin hacer gestos raros, solo iba haciéndose sitio con calma, sin dejar de masturbarla a la vez que la penetraba, viendo como sus músculos del recto iban cediendo.

-ANA: ¡¡DIOS!! Duele, duele mucho.

-YO: ¿lo sacó?

-ANA: ¡¡¡NO!!! Déjalo, no te muevas, solo sigue, pero no muevas ese dedo.

Haciéndola caso aceleré de nuevo mis embestidas un minuto, usando mi dedo como agarre para terminar matándola en otro orgasmo que baño mis piernas, y puso su cuerpo a convulsionar, eso no ayudó a mantener mi dedo quieto, y como un pescadilla que se muerde la cola, la volvía a hacerse correr por la sensación de ser doblemente penetrada, bastó para que mi semen la inundara de nuevo, haciéndola notar como los chorros de esperma la iban alcanzando hasta la pared del útero.

-ANA: ¡¡madre de dios, no pares ahora, sigue!! - estaba poseída, roja y angustiada pero pedía más, una vez que empezaba algo no lo terminaba hasta dominarlo.

Fui sacando el dedo despacio, hasta que Ana se recuperó dándose la vuelta de rodillas, besando alocada, llevando una de sus manos a mi polla y masturbando en busca de su 3º ronda, mis manos iban directas a su trasero, jugando con él dedo corazón por encima del ano, provocando que Ana se petrificara, mirándome con la boca abierta y mirada lasciva, le daban pequeños espasmos al notar mi dedo pasar por allí, tratando de bajar su cadera para que la volviera a penetrar, a la 4º le llevé un dedo corazón a su boca, el cual chupó entendiendo la idea, lo dejó bañado para que cuando lo bajé a su ano estuviera listo, me abrazó y sacó la cadera facilitando que volviera a apretar y penetrar su ano con el dedo, nada más meter la punta volvió a temblar entre mis brazos, gimiendo, mirándome a los ojos, pegados frente con frente, abarcando todo el aire que podía con su boca, según mi dedo iba haciendo fuerza, saliendo para ganar empuje y volviendo a entrar profundamente, oyéndola gimotear cuando notaba como se iba abriendo.

-YO: ¿te duele?

-ANA: un poco, pero puedo soportarlo, sigue.

Con mucho cuidado seguí hasta meterle el dedo entero, obligándola a respirar con golpes de aire al expirar, jugando con en su interior, besándola de vez en cuando, me ladeé un poco para que mi otra mano fuera a su coño, penetrándola también y acariciando su clítoris con el pulgar mientras el resto de dedos se hundían en su interior hasta encontrar su punto G. Lo estaba soportando por mi, por que sabia que yo quería, pero solo con el ano no estaba disfrutando, aun no, así que aceleré el proceso llevándola a un orgasmo con mis manos trabajando su vagina sin descanso, mientras mi dedo salía y entraba con cuidado de su ano, notando como acompasaba su cadera cuando entraba y salía, me estaba poniendo malo al ver a Ana poseída y dejándose masacrar por ambas hendiduras, la agaché para dejarla a 4 patas y atacar sus coño con mis labios, comiéndoselo como bien sabia, pero ahora, mientras una mano jugaba con su clítoris y mi lengua repasaba cada rincón, mi otra mano estaba en su ano siendo cruelmente placentera en su culo, se agarró a la almohada, para soportar aquel vendaval de sensaciones que la estaban martirizando, se corrió varias veces, y en ese estado logré introducir otro dedo en su ano, sin piedad ya que, ahora si, estaba disfrutando del placer del sexo anal, volvía a hacer fuerza contra mi, pidiéndome que continuara hasta meterla ya 3 dedos por el culo, era un espectáculo grotesco. Totalmente empalmado, me arrodillé detrás de ella, pasando mi rabo por todo su culo.

-YO: ¿estas preparada?

-ANA: si, pero en mucho cuidado………- asintió casi sin mirarme.

Con mimo me coloqué, puse la punta del glande en su ano abierto, y gracias al trabajo previó, metí la punta de forma continua pero despacio, Ana hizo el silencio, su cara reflejada en el espejo de enfrente era de dolor angustioso, pero se mantenía firme soportando que cada milímetro de mi polla fuera haciéndole un agujero enorme en el culo, con fuerza fui entrando, la presión era brutal, pero según pasaba la barra de carne ella cedía, me dolía el rabo de la fuerza de sus músculos, pero al final metí media tranca, arrancándola gemidos de lastima, gritos escandalosos, que sin duda Lara y Alicia estarían oyendo, sollozaba que la estaba partiendo el culo, que la abría en dos, y que lo hiciera con cuidado, quise ser rápido, y sin dar mucho tiempo la saqué y volví a meter un par de veces de forma calmada, hasta lograr algo de fricción, que devolvió aquello más al sexo que a un castigo medieval que parecía por la mirada y los gestos de Ana. Siendo más fluido todo, reaccionó volviendo a mi dimensión según iba penetrándola a una velocidad ridículamente lenta, hasta que ya no había tanta presión, agarrándose a lo que podía, la almohada o las barras de la cabecera de la cama, mientras mis penetraciones aumentaban en ritmo muy pausadamente, pero su cuerpo se vencía a mi fuerza, notando como su piel del ano se contraía y se expandía con los movimientos de mi pelvis, llegando a gemir de gusto, mientras una de sus manos se fue a su coño para seguir aumentando el placer, pero lo tuvo que dejar, solo tenia fuerzas para aguantar mis acometidas en su culo, fue una maravilla estrenarlo y ver como se volvía cada vez más fácil y más estimulante para ella. No me había dado cuenta pero mi rabo ahora la penetraba totalmente, la tenia que doler horrores, chocando con sus nalgas de forma rítmica y sacándola un par de orgasmos anales con palabras obscenas impropias de una señorita, una gozada que solo pude mantener 20 minutos hasta reventar de semen su interior, la presión, fricción y verla tiritar cuando la sacaba cogiendo aire para aguantar la siguiente usurpación de su virginal culo no me dio para más, cuando Ana casi se desmayaba de hacer fuerza contra mi, los últimos golpes de cadera derivados de mis sacudidas me hicieron vencerme sobre la espalda de ella, quedando dentro y notando como mi polla volvía a un estado flácida mientras el agujero de su ano se mantenía enorme, respirando a su vez, acompasando mi pecho a su espalda.

Había pensado en llevármela a un fin de semana de viaje o a el hotel donde la desvirgué, para hacer el estreno anal de forma romántica, pero me había puesto muy caliente entre Lara, Alicia y que mi novia las manipulara de esa manera, no pude contenerme y a Ana no pareció molestarle. Había un silencio sepulcral en la habitación, pasamos unos segundos, tratando de hacer que Ana volviera a respirar de forma natural.

-YO: ¿como estas princesa?

-ANA: me escuece, no me duele pero lo tengo resentido, joder, que burrada.

-YO: ¿te ha gustado? - tardó unos segundos en contestar.

-ANA: si, no sé, me dolía al principio, me ardía el culo, pero lo deseaba, luego se ha ido disipando, no es que no me doliera, pero solo notaba placer, ¿es normal?

-YO: creo que si, la verdad es que no sé como te debes de sentir……..- estaba intentando incorporarse, la ayudé.

-ANA: es que, no sé, creí que me iba a doler todo el tiempo, y no, llegado un punto algo ha cambiado y me ha empezado a gustar, no podía casi moverme, pero en plan bien, al final no ha sido para tanto jejeje – “es increíble, perfecta en todos los aspectos”.

La saqué de su interior admirando el agujero hecho, tenia semen y alguna gota de sangre brotando de su ano, y al mirarme la polla vi lo mismo más algo de heces en mi polla, (si, chicos y chicas, cuando se folla por el culo en la vida real, sin una lavativa previa o experiencia, pasa alguna vez, el porno nos tiene mal acostumbrados.), Ana se dio la vuelta mirándomela con cierta cara de asco.

-ANA: dios, que guarrada, perdona.

-YO: tranquila, es normal la primera vez, no pasa nada…….- se giró avergonzada, viéndose en el espejo de espaldas.

-ANA: ¡¡MADRE MIA!! ¿Has visto mi pobre culo?, ¡¡¡Mira que agujero!!! - sonreí ante su expresión, tan sorprendida y sincera, mientras se llevaba la mano al culo y palpaba por encima, asombrada de cómo se iba cerrando poco a poco, y de como goteaba mi semen.

-YO: eso es culpa mía, jajaja, venga vamos a la ducha y nos limpiamos bien antes de que se te cierre y te pases cagando sangre y semen 2 días…- sonreímos y acaricié su sofocada cara -.... ¿estás bien entonces?

-ANA: si, tranquilo, ya me conoces, solo me ha pillado de sorpresa, pobre de mi, vaya socavón….- se miraba de refilón sin prestarme mucha atención pero colocando sus manos como los niños para que la cogiera.

Me puse en pie y la cogí en brazos como recién casados, viendo en su cara gestos de escozor, la metí en la bañera y me pidió que saliera, no estaba como para poder apagar mi fuego si me encendía al verla duchándose, en el bidé me lavé un poco la polla, cuando salió Ana, me metí yo y terminé de asearme mientras Ana se secaba su larga melena. Me dio tiempo a salir de la ducha, darla un beso por la espalda, notando su gesto torcido al rozarme con su trasero y notar algo de crema que se había puesto en su culo, salí a beber algo, de nuevo estaba seco, de nuevo iba en bolas, y de nuevo al salir estaba Lara en la puerta del pasillo, desnuda y masacrándose con una masturbación feroz, la ayudé llevando mis manos a sus tetas y dándola la vuelta para que notara mi polla en su trasero.

-YO: que sepas que acabo de desvirgar el culo a Ana, ¿aun te crees mejor que ella? - susurré a su oído y la solté un azote en un pecho antes de estrujárselas y jugar con sus aureolas, le hizo correrse al notar mis dedos en sus pezones, di por sentado que seria por su masturbación , no se cuento llevaría allí.

La sorpresa fue al soltarla e ir a la cocina por el salón, vi a Alicia haciendo exactamente lo mismo, masturbándose tirada en el sofá aun con el último modelo que la vi puesto, la falda ceñida medio suelta y su mano perdida entre sus piernas, estaba tan ensimismada que ni se dio cuenta de que yo estaba allí, así que pasé de largo, quedándome a mirar más de lo precavido, como se metía 3 dedos y su pubis totalmente brillante de fluidos. ”Pobres, ¿que les pasará?” pensaba sin darme cuenta que el problema, era yo, o mejor dicho, éramos Ana y yo follando, solo con oír como Ana era embestida por mi, ahora que ambas me habían visto desnudo con la polla tiesa, las volvía locas, Alicia no era así para nada, y por estúpido que pareciera, en ese momento no me di cuenta de ese detalle, o si lo hice, lo ignoré, mi vida era Ana. Al volver de la cocina ya estaba Ana en el sofá hablando con Alicia como si tal cosa, no se si la había visto o no, o si Alicia me había visto a mi o no, me dio igual, me fui a ponerme unos pantalones cortos amplios, empezaba a apretar el calor y solo iba con eso habitualmente, pero desde ese día, siempre que estaba solo en casa con ellas, iba desnudo, mezcla de comodidad y morbo, la idea de acabar follándome a todas se pasaba por mi cabeza, pero me golpeaba en el melón, era un idea estúpida de cerdo salido, tenia a Ana y ahora tenia también su ano, y lo iba a aprovechar.

Ana – Manipulando.

Sin ir más lejos esa misma noche volvimos a follar, y la volví a abrir el culo, con muchos menos problemas, y con Ana algo más activa, como siempre había hecho, con el paso de los días iba enseñando y practicando con ella hasta que dominaba bien el tema, para cuando empezamos a ir a la piscina Ana era una experta en el sexo anal, hasta buscó como hacerse las lavativas ella sola por Internet, para que no se repitiera lo de la 1º vez, ya casi no pasaba, y después de la 2º o 3º vez ya no sangró por el culo, todo ello llevó a que aumentaran de golpe las horas de sexo seguido con ella, esas apenas 3 horas de solo sexo vaginal aumentaron a casi 4 y media con su precioso culo, y pese a que lograba que se corriera con el sexo anal, un arte bastante difícil, (aclaración nueva, el sexo anal es diferente, algunos ya lo sabréis y otros no, pero mientras en la vagina las mujeres tienen las terminaciones nerviosas que generan el placer en los primeros 5-6 centímetros de su interior, en el ano no los hay, son terminaciones nerviosas normales, por lo tanto en él sexo anal el punto está en que, a la mujer, ese nivel de dolor al sentir la fricción, la excite, algunas no lo soportan por miedo al dolor y no por el dolor en si, pero están preparadas para parir y soltar un bebe con la cabeza de 19 centímetros de diámetro por el coño, están preparadas para soportar dolor, y a las que disfrutan del sexo anal lo saben bien, por eso muchas a la vez que son penetradas se masturban en clítoris.), siempre terminaba matándola con la bestia por el coño, era colosal vernos follar, y más de una sesión grabadas para confirmarlo. Si atacar su coño desde atrás era un escándalo, metérsela por el ano era aun mejor.

Creo recordar que fue el 1º día de piscina en que fuimos y pasamos el día allí, habíamos vuelto antes las chicas y yo en el coche, sobre las 7, Manu y Teo habían quedado para salir y charlar, a ver si Manu tenia más suerte por que mis intentos por hablar con Teo sobre su relación con Alicia no fueron nada bien, llegando a enfadarse conmigo y con Alicia, y ese día en la piscina no fue diferente, me las tuve que llevar para separarlos, pero la verdad es que fue una excusa, quería llevarme a Ana a casa y reventarla por culpa de su biquini escueto, era uno de los normales pero su cuerpo lo hacia demasiado excitante, jugueteando con la gargantilla, y tonteando con caricias y roces en el agua. Incluyendo ver a Alicia con uno de los bañadores atrevidos coqueteando con Teo, sin éxito, y con Lara, bueno, a ella os podéis imaginar, sus enormes tetas se le salían del biquini, sin importarla demasiado ni hacer nada por evitarlo, lo llevaba más suelto de lo normal y aprovechaba para restregarse conmigo jugando en el agua, o dándola crema, en una erección tuve que esquivarla al notar sus manos bajo el agua masturbándome, Ana se percataba y me la sacaba de encima. Yo con mi cuerpo formado, marcando músculos con tableta incluida, y mi doble bañador para evitar aun más miradas de mujeres sobre mí, Ana estaba encantada pero tensa por que todas esas chicas se fijaban en mi y más de una entabló conversación conmigo en la cola del puesto de helados o en el acceso a vestuarios, y mi actitud dicharachera las daba pie, por lo que Ana no tardaba en echárseme encima y agarrarse de mi cuello para dejar claro que aquel hombre estaba pillado, a mi me pasaba igual con ella, sin duda era de las más atractivas de la piscina, pero ninguno se arrimaba al verme junto a ella. Por eso al llegar a casa la destrocé en el 1º polvo, estando más de 1 hora follándome su culo con ella en vilo por los aires, cuando se repuso me miró lujuriosa, saqué un consolador corto pero ancho que teníamos, en forma de huevo, y se lo metí en el ano, dejándoselo allí mientras la desmayé por el coño al 2º polvo más de hora y media, haciendo gritar barbaridades y sacar de mi al animal que llevaba dentro, martirizándola contra la pared, era la 1º vez en varios meses que lograba que Ana se desvaneciera, pero apenas duró así unos minutos, logrando que terminara corriéndome en su boca con una de sus mamadas de cine, tragándose encantada todo mi semen acumulado de todo el día.

Salimos a cenar algo, charlamos con Lara y Alicia un rato para calmarla, llamé a Manu y me dijo que iban a salir de marcha y que volverían tarde, así que volvimos a nuestros respectivos dormitorios.

-ANA: bueno, vale ¿y ahora que? - quería consejo sobre cual seria la siguiente travesura una vez dominado el anal, pero estaba en banco, había leído y repasado mil cosas ya y casi todas estaban completadas, todas las que puedan cumplirse entre 2, y sin sado que no nos gustaba a ninguno, solo algún cachete o bofetada llevada por la pasión, pero nada raro.

-YO: pues la verdad es que no lo sé, me tienes agotando mi imaginación, queda poco o nada.

-ANA: la verdad es que a mi también, ¿no hay más en Internet?

-YO: nada legal jajaja, todo lo que queda es con más gente……..

-ANA: no sé, me da cosa, yo te quiero a ti.

-YO: mujer, y yo a ti, es solo probar, y ver si se disfruta o no, te juro que para mi no significa nada.

-ANA: que no, no te pongas pesado, algo más tiene que haber.

-YO: pues no se me ocurre nada, nada que no incluya a otra gente…..ya sabes, tríos, orgías o intercambios de pareja…..- se moría de celos con que me miraran más de 2 chicas por la calle, a Lara se lo permitía para castigarla, pero dar vía libre a eso creía que era su punto débil.

-ANA: ainsss, no sé, es que me da mucha vergüenza que me vean desnuda…… – aluciné al no oír una negación rotunda.

-YO: no seas boba, ya te ha visto más de una, y sabes que los tíos matarían por estar contigo, no sé, yo solo lo digo por que no hay más opciones.

-ANA: pero yo no quiero, ni necesito tíos, te tengo a ti, pero si tú quieres……..alguna mujer…..- incrédulo con su disposición -….podríamos……..- zanjé su idea.

-YO: yo tampoco quiero ni necesito más mujeres…… – me miró sin creérselo -…. en serio, pero si quieres que sigamos jugando, no hay opción……- no lo necesitaba, Ana me colmaba y ya podía desatarme con ella, con cierto autocontrol, pero no sabia hasta donde estaría dispuesta a llegar.

-ANA: ¿y donde conocemos gente………..así?- “¡¡joder que se lo está planteando de verdad!!”

-YO: bueno, no hay un número de envió de salidos a domicilio, ya viste como es de fácil encontrar gente que quiera lo que tú y yo tenemos, como la recepcionista del hotel en tu cumpleaños, los dependientes de las tiendas o cualquiera, son gente normal.

-ANA: ya, pero me muero solo de pensar que una persona desconocida me vea, no ya desnuda, sino……ya sabes……….follando.

-YO: ¿de que hablas? hemos estado follando en sitios públicos, y Lara esta todo el día pegada a la puerta cuando lo hacemos…. - se le iluminó la cara.

-ANA: ¡claro, Lara!, ¿como no se me había ocurrido?, lleva meses tirándote ficha y la conozco de sobra, es perfecta, podemos jugar con ella como queramos, esta loca contigo y tu polla, lleva semanas rogándome que la deje que te folle, la hablé de como me desvirgaste a mi y quiere que se lo hagas a ella…….- me abrumé por su ímpetu y la cantidad de información dada.

-YO: coño, ¿y por que a ti y no a mi?

-ANA: yo que se, se habrá cansado de intentar convencerte a ti y lo intentaba conmigo de nuevo - lo noté cierto tono raro.

-YO: ¿como que contigo……..de nuevo?- se puso roja como un tomate.

-ANA: bueno……….es que Lara y yo, bueno…antes de lo nuestro y luego al volver a Granada pues eso….

-YO: ¿que?

-ANA: pues que nos liábamos y eso, ya sabes, rollo lesbianas, pero sin serlo……..- me quedé patidifuso ante esa revelación.

-YO: joder que calladito te lo tenias, ¿y ahora la vas dejando que tire los trastos a tu novio?

-ANA: es una guarra pero era mi amiga y me sentía sola, no sé, por probar…eso no importa, lo que importa es que esta aquí con nosotros, y podemos hacer con ella lo que queramos……..- su cara era casi maquiavélica.

-YO: bueno podemos seguir jugando con ella…….- me cortó con un beso de nerviosismo.

-ANA: no, basta de juegos, va a ser nuestra………putilla jejeje - se me echó encima masturbándome, no se si la idea la estaba calentando o si quería excitarme para que me pareciera mejor idea, cuando la verdad, ya me lo parecía.

No me atraía la idea de follar con Lara, si no, eso ya hubiera pasado hacia meses, era que Ana quería que lo hiciera, y con su consentimiento, follárme aquel par de tetas de Lara no seria ningún problema, más aun desvirgarla, algo que me parecía increíble, si tenia rollos con Ana, era una calienta pollas y llevaba meses provocándome, que su coño aun no hubiera sido profanado era un milagro. Lara se había urbanizado un poco, ya no era un guarra hippie porrera, se preocupaba de su estilo, y se compró ropa ceñida y atrevida, se arreglaba el pelo y esas cosas, supongo que con lo ligera de casos que era, su monumental escote, ahora si siendo bien trabajado y expuesto con vértigo, tendría a unos cuantos babeando tras ella, pero mi cabeza sabia que lo hacia solo por mi, muchos de los modelos que se compraba se los veía a Ana, o los imitaba, quería ser ella, para tenerme a mi. Como no funcionó es cuando empezó a ir medio desnuda por la casa, luego desnuda y luego a meterse en mi cama e iniciar sus torpes y grotescos intentos por que me abalanzara sobre ella, para entonces tenia su cuerpo más que visto, su culo no era tan malo, al igual que el resto de su cuerpo, su cara algo estropeada y su pelo corto no me gustaban, pero simplemente todo quedaba afeado por sus enormes tetas, sin sujetador ni caían pese a su peso, tenia unos pezones enormes y altamente sensibles, y su coño pasó de ir con bastante bello a ir completamente rasurada, lo sé por que el día que se rasuró me lo fue a enseñar toda orgullosa.

-YO: esta bien, pero por que tú quieres, entiende que a mi esto me da igual, yo te quiero a ti.

-ANA: lo sé, confío en ti, si no, no te lo pediría, llevas meses aguantando a esa zorra desnuda en nuestra cama sin tirártela, pero ahora te pido que lo hagas, quiero que la próxima vez que te vea tiemble y no ande metiéndote mano – no lo decía, pero ansiaba manipular a Lara.

-YO: esta bien, ¿como quieres que lo hagamos?

-ANA: no lo sé, no tengo ni idea, ¿la llamo? - se refería a decirla que viniera al cuarto ahora.

-YO: jajajaja no, esa loca debe estar masturbándose en el pasillo o el salón, como hace siempre que sabe que estamos follando, así cuando salgo me busca para ver si tengo ganas de más y le toca a ella, o por si sales tú y se mete ella en la cama.

-ANA: que golfa es, pues lo va a pagar, me voy a salir a su cuarto, que tengo allí algo para ella, cuando se meta aquí contigo, haz como si no pasara nada, como siempre y cuando se despiste, usa las cuerdas y las esposas, átala y déjala bien abierta de piernas, como haces conmigo - me gustó su serenidad y me asombró su determinación.

-YO: ¿y si se resiste? - sonrió bajando su boca hasta mi polla poniéndomela dura con sus labios.

-ANA: esa zorra quiere tanto este enorme falo, que no te pondrá pegas en el como si le dices que la vas a follar, así que cuando este así, no sé, haz…… lo que sabes………… para tenerla de……..¿esclava? - sonreía malévolamente.

Le costó dejar de chupármela para irse de la habitación completamente desnuda, la oí hablar con Lara en el salón, y como de un portazo se metía en el cuarto de Lara. Al momento sentí como Lara se acercó corriendo, se metió en mi cuarto desnuda y viéndome boca arriba con la polla tiesa, se me echó encima como solía hacer cuando iba confiada.

-YO: hey, ¿que tal?

-LARA: aquí estoy, para lo que necesites.

-YO ¿y que se supone que necesito de ti?

-LARA: no te hagas el tonto, Ana me acaba de contar que no puede más contigo y se siente mal por que no es capaz de seguirte cuando la follas, que te quedas a medias, yo si soy capaz, déjame demostrarlo mientras ella llora en mi cuarto……. – que lista era Ana, se estaba volviendo una manipuladora nata, me la había servido en bandeja.

-YO: bueno, es cierto, Ana últimamente esta menos pendiente de mi, no como tú…….- la pobre ilusa creyó que iba en serio, y sonrió creyendo que su plan había funcionado, que por fin yo me había dado cuenta de que ella era mejor que Ana, así que se lo hice creer -….. y la verdad es que llevo unas semanas tirándomela pensando en ti y tus tetas - una mentira tan grande como sus senos, los cuales puso orgullosa en mi cara.

-LARA: ¿estos? - se los lamí gustoso, ahora si como había llegado a soñar hacerlo, agarrándolos con ambas manos y apretándolos entre ellos, chupando sus pezones, como había notado, eran tan sensibles que en pocos lametazos los tenia tiesos y el cuerpo le temblaba.

-YO: los mismos, necesito hacerte mía, pero me da miedo, eres virgen….

-LARA: da igual, no soy como la frígida de tu novia, a mi me puedes romper el coño a tu gusto sin miedo, aunque sea la 1º vez.

-YO: eso dicen todas, pero siempre salen huyendo….- puse la cara de tristeza más falsa que pude.

-LARA: yo no lo haré, déjame que te haga mío y me tendrás siempre……..- su cuerpo era de gelatina, estaba frotándose con mi polla palpitando entre sus piernas y sus tetas ahogándome en la cara.

-YO: esta bien, pero si empezamos ya no pararemos hasta que yo quiera, y para eso no puedo jugármela, déjame que te ate a la cama…...- la petición era extraña pero Ana dio en el clavo, estaba tan desesperada que le daba igual como, le brillaban los ojos de felicidad.

-LARA: hazme lo que quieras - por 1º vez probé sus labios, y su lengua, sin duda era habilidosa, su fama era merecida, y mis manos instintivamente se pusieron trabajar aquellas montañas que tenia por senos, a los que tenia ganas pese a haber jugado con ellos antes.

La di la vuelta tumbada boca arriba sobre la cama, y con mucho mimo fui colocándole las esposas en las barras de la cabecera de la cama, eso dejó sus pechos a mi entera disposición, los cuales castigué hasta sacarla un orgasmo no buscado, sus pezones eran puro fuego y con solo eso y frotarse los muslos, ya había cedido, me aguanté la risa, ya estaba así sin haberla tocado aun, y se las daba de hembra superior a Ana, “ilusa”. Fui bajando por sus piernas hasta atarlas a los laterales del somier, con unas cuerdas que Ana compró, asegurándolas bien fuerte y dejándola totalmente abierta y expuesta.

-LARA: fóllame ya cabrón, me tienes loca, párteme el coño de una vez, quiero ser tu puta - su palabras estaban dirigidas, serian las chorradas que les decía a los chicos para tenerlos comiendo de su mano como calienta pollas que era.

-YO: y lo vas a ser …..- subí de nuevo por su cuerpo con mis labios, parándome en sus pezones, sus aureolas eran tremendas y sus pezones erectos como conos de carretera, hasta que llegué a su oído-…… ¿vas a ser mi puta?

-LARA: si, haré lo que quieras y cuando quieras, pero métemela ya.

-YO: bien, por que vas a ser mi puta, y a partir de ahora eres mía, dilo.

-LARA: soy tuya.

-YO: no te creo.

-LARA: ¿que puedo hacer para que me creas?

-YO: ¿que tal una prueba?

-LARA: lo que sea.

-ANA: bien, Ana es mi chica y ahora esta triste por tu culpa, no logro disfrutar con ella por que te tengo en mi cabeza todo el tiempo - otra mentira - pero ella es mi novia, y tu eres mi…..

-LARA: soy tu puta.

-YO: correcto, ¿y que hace mi puta?

-LARA: lo que tú quieras.

-YO: perfecto, por que ahora quiero que seas mi puta…. y la de Ana - su cara se movió, estaba ida aceptando sin saber de que iba aquello, confusa.

-LARA: ¿como que de Ana?

-YO: mis putas no me discuten, asienten o dejan de serlo, ¿quieres ser mi puta o no? - mi boca bajo a sus pezones y mi mano a su coño, tenia que trabajármela bien para que relacionara el placer con mis órdenes, seria la puta de Ana y mía, pero si quería completa sumisión de su parte tenia que hacerlo antes de que Ana entrara en escena para un resultado perfecto, no sabia si Ana estaría a la altura de aquello.

-LARA: si, quiero ser tu puta, pero…..- mis dedos entraron en su coño provocando otro orgasmo demasiado fácil para mi.

-YO: no hay peros, aceptas o me voy a por Ana y te dejo aquí atada…….- mi lengua experta y mis hábiles falanges la estaban matando, así que tardó en responder.

-LARA: dios, si, vale, seré tu puta y la de Ana, haré lo que queráis y seré vuestra.

-YO: bien por que esa será la prueba, voy a ir a por Ana, y te ofreceré como presente, harás lo que te ordene y serás lo que ella diga que seas, todo lo que haga Ana es como si fuera yo, y si faltas a tu palabra con ella, lo harás conmigo y volverás a ser la compañera de piso que no quiero tirarme ¿lo has entendido?

-LARA: si, hazla venir cuando quieraaaaaaas - su cuerpo eclosionó en un 3º orgasmo, tan rápido y fácil como los otros, pero esta vez en parte su aceptación de la situación hizo mella, más que mis dedos y mi lengua.

-YO: no, quiero que la llames tú, grita a pleno pulmón, sabes cuanto para que se oiga desde tu habitación ¿verdad?

-LARA: si.

-YO: pues llámala y pídela que venga para que hagas lo que quiera contigo - obedeció gritando mis palabras, mientras yo abría la puerta del cuarto, fue una tontería, Ana estaba en la puerta escuchándolo todo - ves, ya estás aquí, sabía que volverías, y tengo un regalo.

-ANA: dime amor - me miró loca de pasión, si había oído todo entendía por donde iban los tiros y como la había domado, la cogí de la cintura, estaba desnuda y con una bolsa de plástico en la mano.

La coloqué a los pies de la cama viendo a su amiga temblado por los 3 orgasmos seguidos que le había sacado solo con acariciarla, totalmente expuesta y atada, me puse detrás de Ana y la forcé metiéndole mi polla del tirón en su coño por detrás, arrancándola un grito de pasión, sacándola lentamente y volviendo a meter con fuerza varias veces, nada que no aguantara, pero haciendo que Lara nos mirara excitada.

-YO: te traigo este regalo, para saldar cuentas, siento que pienses que no eres suficiente para mí, y por eso te traigo a nuestra….

-LARA: ……su puta, soy la puta de los 2, y soy lo que quieran que sea y haré lo que quieran que haga - su seguridad y firmeza hicieron que Ana se estremeciera, eso y que mi polla la seguía partiendo en dos y mis manos repasaban sus pechos y su vientre.

-ANA: muchas gracias amor, hacia mucho que quería tener a esta puta, es una puta virgen, eso vale mucho pero no es muy útil, quiero desvirgarla ya.

-YO: lo que tú quieras, pero lo veo complicado, ¿que opinas tú? Puta

-LARA: será un honor que me abran el coño por 1º vez.

-YO: ¿como lo hacemos peque?

-ANA: traigo esto - abrió la bolsa que traía dejando caer sobre Lara 3 consoladores, me resultaban familiares, y cuando los vi bien me di cuenta, eran los 3 con los que preparé a Ana para desvirgarla en fin de año, supuse que se habían quedado en la habitación, ¡pero se los había guardado y conservado hasta ahora!.

El 1º era fino y vibraba, el 2º era igual de corto y fino al inicio, pero iba aumentado su tamaño hasta la base, el 3º era un tamaño de polla normal, más grande que los otros 2 y con estrías de forma natural

-YO: vaya con mi pequeña, ¿los has guardado?

-ANA: eso y más, no veas lo bien que me venían en mis noches sola por culpa de esta puta que se llevaba a todos los chicos que se arrimaban a mi, ahora voy a abrirla el coño como me hiciste tú a mi, pero no vas a tirártela, aun no, la voy a desvirgar yo con el más grande, ¿te parece bien? puta.

-LARA: lo que usted quiera - tenía la cabeza libre y elevada por la almohada, así que sus ojos podían observar el tamaño de las trancas, temblando al ver como Ana jugaba y chupaba el más grande mientras yo ya me la follaba a buen ritmo, con su cara algo desanimada al oír que no me la iba a tirar por ahora.

Ana se fue agachando y gateando hasta ponerse entre las piernas de Lara, y comenzar a comérselo, según parecía no era la 1º vez, pero no por ello dejé de penetrarla al ponerse a 4 patas, si mi ritmo en el trasero de Ana iba aumentado, los de la lengua y los dedos de Ana en el coño de Lara no eran menores, logró que se corriera un par de veces más antes de correrse ella por mis arremetidas, eran tan fuertes que se puso encima de Lara, poniéndome de rodillas en la cama detrás de ella y acelerando el ritmo hasta matarla durante 30 minutos, en los que Ana y Lara tenían un festival lésbico de besos y caricias, Ana sabia que su pezones eran volcanes y lo aprovechaba mientras aun podía ser dueña de su cuerpo, cuando me puse serio, los gritos de Ana por mis acometidas en su interior era bestiales, estaba sintiendo como la abría y me bañaban con sus orgasmos mientras Lara castigaba los pezones de Ana con su lengua. Terminé cogiendo a Ana del vientre subiendo su cuerpo y poniéndola de rodillas sin dejar de masacrarla para que Lara viera bien como Ana aguantaba de sobra aquello y más, en aquel momento debió darse cuenta de la trampa, pero en el fondo lo deseaba tanto que le daba igual, solo disfrutaba de vernos follar sin puertas de por medio. Pasados 20 minutos, la situación me llevó a correrme dentro de Ana sacándola un orgasmo que la encendió, más que apagarla.

-ANA: así se folla, puta, no te creas que eres mejor que yo, por que este animal te destrozará, ya lo veras, pero ahora seré yo, ¿me ayudas amor? - se dobló para besarme alocadamente.

-YO: claro.

La saqué de su interior para dejarla sitio, se tumbaba sobre el coño de Lara que estaba rezumando fluidos, Ana cogió el pequeño de los dildos y lo puso a vibrar, para luego metérselo de golpe a Lara que casi se corre de nuevo solo con eso, no tuvo que moverlo dentro de ella mucho tiempo hasta que lo logró introducir sin problemas, aun así, con calma y sin prisa fue creando sitio, haciendo círculos, con mis indicaciones, al rato su coño aceptaba aquello, así que cambió al otro, que metió de forma violenta hasta al zona donde se ensanchaba, Lara gemía de placer pero se notó alguna mueca de dolor cuando fue sintiendo como se abría ante el empuje de Ana que estaba con cara sádica, la tuve que pedir que fuera con calma y cuidado, aceptó a regañadientes, pero logró otro orgasmo del interior de Lara, llegó a rozar el himen, el cuerpo de Lara se removió de dolor.

-LARA: ¡¡¡por el amor de dios, hacedlo de una vez, me voy a morir!!!

-ANA: tú calla puta, eres mi regalo y lo haré como y cuando quiera - esas palabras era impropias de mi dulce Ana, se había metido en el papel a conciencia, y estaba disfrutando.

Cambió de consolador y cogió el más grande, lo pringó de vaselina que guardábamos de antaño, cuando su coño se irritaba, lo untó y lo fue metiendo hasta volver a notar el himen, eso martirizó a la pobre Lara, que pese a chorrear de placer sentía morirse por dentro, Ana tuvo compasión y haciendo la cuenta atrás, dio la estocada final, empujó tan fuerte que le metió el consolador casi entero, obligando a Lara a gritar y moverse de tal forma que me preocupó.

-ANA: ¡¡dios, lo siento, déjame que lo saqué!! - la paré.

-YO: déjalo, ya esta dentro, se tiene que acostumbrar.

Lara imploraba clemencia, pero no lo tendría, sujetaba a Ana para que no acudiera en su ayuda, se movía como un perro la 1º vez que lo atan a un poste, con la cara roja y compungida, poco a poco fue adaptándose, su gritos y sollozos disminuyeron, hasta que se quedó quieta, suspirando.

-LARA: dios, no es tan bonito como lo pintan, me arde el puto coño, no lo aguanto.

-YO: tranquila puta, esto es solo la primera vez, ahora verás como gozas.

Quité a Ana, y me puse al mando, cogí lo poco del consolador que quedaba fuera, casi con las uñas, y lo fui sacando lentamente hasta dejarlo casi fuera, Ana miró horrorizada como brotaba sangre y goteaba alguna gota del consolador, le pedí que se centrara en comerle los pezones a Lara, la tenia que devolver al juego, Ana se había asustado. Mientras ella cumplía, apenas pudiendo con una teta a la vez, yo volví a hundir el consolador en su interior de forma más suave y circular, su gemido mostró escozor pero no dolor, llegando a un punto localizado de penetración optima, lo fui sacando y metiendo con un ritmo tranquilo y pausado, dando pequeños respiros, cambiando las muecas por suspiros y los quejidos por gemidos, el trabajo de Ana estaba ayudando y se volvió a correr, allí aceleré la mano y lamía su clítoris, arrancándola orgasmo tras orgasmo, estaba encantada y moviendo la cintura queriendo abarcar más de aquel consolador que la estaba matando, Ana acariciando y lamiendo sus enormes tetas con sus pezones sensibles, mi lengua recorría todo su hinchado clítoris mientras el consolador la follaba sin descanso, no aguantó y rompió a llorar con un orgasmo final que me pringó toda la cara con una fuente de fluidos, tirando de las cuerdas y las esposas que la inmovilizaban, culebreando extasiada. La dejé tranquila y descansando, recuperándose de un ligero temblor entre sus muslos, sacando el consolador bañado de fluidos, dándoselo a chupar y lamer a Ana, que lo cogió encantada y se le llevó a la boca, montándose encima de Lara, y jugando a besarse y chupar el falo las 2 a la vez, para probar sus jugos, hasta que quedó seco, Ana se incorporó riendo de forma endiablada. Lara nos miraba con los ojos abiertos y respirando con una celeridad desproporcionada, sus enormes tetas eran movidas con violencia.

-ANA: no ha estado nada mal para ser la 1º vez, puta, ¿quieres más? - Lara estaba roja y avergonzada, el calentón había pasado y se daba cuenta de su humillante situación, era un momento clave para saber si seria nuestra puta o no para siempre, así que mi mano volvió a su coño y haciéndola un dedo, buscando su punto G, la obligué a contestar.

-LARA: si - apartó la mirada cerrando los ojos, admitiendo que le gustaba aquello, aunque no era lo que esperaba.

-ANA: ¿quieres esta polla? - se retorció y me la agarró, tiesa de nuevo después de lo ocurrido.

-LARA: si - ahora sus ojos se clavaron en mí, pidiendo que cumpliera mi palabra, con lágrimas en los ojos.

-ANA: pues vas a tener que ganártelo, mira - cogió el consolador que había logrado llevar al paraíso a Lara y lo pegó a mi polla, era algo más de la mitad que la mía, eso ayudó a Lara a comprender el lío en el que se había metido, pero no pudo evitar relamerse - si quieres que mi hombre te posea, vas a entrenar muy duro y vas a ser mi puta particular, a partir de ahora no te acercarás a él, si yo no te lo ordeno, se ha acabado ir de espaldas a mi tonteando con él, soy tu ama, y me obedecerás ¿me has oído?

-LARA: si.

-ANA: si te portas bien te ayudaré a follártelo, pero si no me haces caso, se acabó…..- Lara asintió sin despegar sus ojos de mi polla tiesa.

-YO: ahora mira como se folla de verdad - Ana me entendió.

Se movió, yo con ella, colgándose de mi cuello y me rodeó la cintura con sus piernas, cruzándolas, la pegué sobre mi pecho colocándome al borde de la cama, con Ana flotando encima de la misma, dejando que Lara tuviera un 1º plano descomunal, y allí mismo la ensarté entera, el grito de Lara por ver como Ana se metía aquella bestialidad, sin inmutarse, fue casi tan potente como el de la propia ultrajada. Ana me miró con la boca abierta por mi poco cuidado, eso me llevó a follármela sin descanso 20 minutos así, sin dejar de bajar el ritmo haciendo que los fluidos de Ana cayeran sobre Lara, sus corridas cada día se volvían abundantes y eso facilitaba que mis penetraciones fueran largas, se la metía y se la sacaba prácticamente entera cada vez y a gran velocidad, Ana cedió, no soportaba esa fricción y aprendió trucos para aguantar, abriéndose de piernas y estirándolas hacia arriba, mis manos en su culo era suficiente apoyo como para terminar corriéndome, pero la maté, bajándola y poniéndola a 4 patas sobre Lara, ensartándola por el culo dejando que viera el 1º plano de nuevo, regalé unos 10 minutos finales en que saqué a la bestia, Ana enloqueció, mientras que Lara temblaba solo de pensar que yo me la tirara así algún día, gritando que parara y pidiendo clemencia, mientras Ana sonreía halagada moviendo la cintura como una autentica profesional, luciéndose. En esos apenas 10 minutos de la bestia Ana quedó en blanco, la bestia era controlada alguna vez, y Ana aguantaba, y otras veces se me rompía la cadena, esa fue una de esas veces, era un muñeco de trapo, se tuvo que tumbar sobre Lara al no hacer ninguna fuerza para mantenerse erguida, corriéndome como un animal en un frenesí final matándola sobre el cuerpo de Lara y cayendo fundido sobre las 2, me había quedado sin fuerzas, hacia mucho que no estaba así, pero me dio para comerle las tetas a Lara de nuevo, era un agravio comparativo, Ana las tenia de buen tamaño, normales y exquisitamente colocadas, pero las de Lara eran un prodigio de la anatomía femenina, un insulto a las leyes de la física. Mientras Ana se retorcía, tumbaba de lado sobre Lara, en un estado semi hipnótico, me quedé mirando a Lara y sus tetas, me puse de rodillas sobre su vientre y planté mi polla flácida y pringosa entre sus tetas, dándola en la barbilla con el glande.

-YO: dime, puta, ¿te crees que aguantarías esto que acaba de pasar?

-LARA: no - lo dijo clavándome su mirada a los ojos, moviendo la cabeza de forma nerviosa diciendo que no.

-YO: me alegro de que por fin lo entiendas, eres inferior en cualquier sentido a Ana,, y por lo tanto nuestra puta, solo podrás quitarte ese cartel si logras superarla.

-LARA: si, pero….quiero decir, no voy a poder hacerlo nunca.

-YO: eso queda en lo bien que te portes y lo rápido que aprendas.

Deshice los nudos y le quité las esposas, dejándola ir al baño, Ana supervisó su ducha, ya vuelta un poco en si, salieron desnudas y húmedas, por suerte estaba demasiado cansado para darme cuenta, me di una ducha fría, retomando sensaciones, volvía a tener un juguete roto, una mujer esclavizada para el sexo, pero ahora era compartida con Ana, mi verdadero amor, la mujer que siendo dulce y cariñosa, seguía mi ritmo sexual y se adaptaba o tomaba partido de aquellos juegos sexuales. Supuse que era la evolución lógica de una relación estable sin que se deteriorara, no podíamos seguir siendo la “pareja recién casada” siempre, estabamos madurando y aprendiendo juntos. En mis pensamientos estaba, cuando Ana entró en el baño mientras me secaba, no sabia cuanto tiempo había pasado desde que me metí en la ducha, Ana estaba preparada para dormir, con uno de sus corpiños fosforitos transparentes, solo con él y un tanga a los que les había cogido el gusto, dejándome ver sus tetas a través de la tela con su espalda al aire solo tapada por unos tirantes elásticos, cerró la puerta y se acercó abandonando el papel de ama, cayendo a mis brazos con una de sus maravillosas sonrisas.

-ANA: ¡dios, que gustazo!, me acabo de quitar un yunque de encima con esa cerda.

-YO: vamos, ¿que no te parece mal?

-ANA: ¿que dices? Me encanta, ha sido un acierto, sobretodo con ella, tienes que verla, la he preparado para ti, la he ordenado que duerma con nosotros esta noche, solo dormir, y ni me mira a la cara, obedece como un corderillo, nunca pensé que ver a alguien así me…..

-YO: ¿excitara? - asintió algo avergonzada.- es normal, pasas de ver a una persona a un objeto, a tener poder sobre ella, y eso atrae, tienes que tener cuidado de no pasarte pero también de no parecer débil, si quieres mantenerla en este estado.

-ANA: vale, tú guías – me besó tiernamente, recordando que seguía allí mi novia perfecta, era el hombre más afortunado de la tierra, no hablo de una frase hecha, si no que no podía ser más feliz, con una mujer así a mi lado.

Volvimos juntos al cuarto y entonces vi a Lara de pie, mirándonos atenta y solo vestida con uno de los corpiños elásticos transparentes de Ana y un tanga, de los que no era asidua y más que eso era en contra, siempre iba con grandes bragas discutiendo y alegando en contra de una prenda intima tan incomoda como el tanga, “ufffffff”, no os podéis hacer una idea, ver a Ana así era un pecado, y a Alicia no le quedaban bien, pero las tetas de Lara encerradas en esa tela eran un escándalo, se medio tapaba, le ordené que apartara las manos, era groseramente obsceno, me recordó a Eleonor, la madre colombiana, saliendo a la piscina el 1º día con el biquini de su hija, pero más grotesco aun, en Ana quedaba de frente como un vestido de noche algo descocado, casi ni se notaba que no había tela de los costados hacia atrás, pero en Lara la tela terminaba antes en el pecho, y se le salían las tetas por los lados y por encima, eran 2 balones de basket metidos en una de esas redes de medio kilo de naranjas o patatas. Estaba roja de vergüenza, y caliente, si tenía los pezones tan sensibles el roce de aquella tela en ellos debía ser continuo y fuerte. No es que no se le cayeran los pechos y la tela las sostuvieran, ya sabia que desnuda y de pie no se le movían pese a la gravedad, es que las tenia pegadas al cuerpo como si estuviera boca abajo en el suelo, casi le nacían al final del cuello, no puede evitar ir a por ella y acariciar sus pechos, metiendo mi lengua hasta su laringe, acto que devolvió encantada, apasionada cuando mis manos fueron a su trasero y se metieron entre sus nalgas dando pequeños tirones leves del hilo del tanga, provocándole una fricción entre sus muslos que la mojó al instante, lo noté en mi polla, al ponerme detrás de ella y atacar su cuello mientras mis manos se apoderaban de sus senos sin poder abarcarlos, al meterse mi barra entre sus muslos, como su calentura y su humedad iban aumentando, pero no se movía, solo se dejaba hacer, mirando en el espejo de enfrente toda la escena y mi estaca atravesándola de lado a lado. Ana se nos puso delante, y con suavidad me fue levantando la cara hasta hacerme mirarla.

-ANA: tranquilo amor, esta noche solo dormiremos…….- me paró en seco separándome de ella por que me conocía lo suficiente como para saber que si seguía, Lara no salía de allí sin ser ensartada, y ella quería enseñarla, poco a poco, como hice yo con ella.

Me acosté como siempre, metiendo mi polla entre las piernas de Ana y abrazándola dándola mi calor, aspirando su pelo y su olor a coco, dándole la espalda a Lara, pero no tardé mucho en darme la vuelta y hacer lo mismo con ella, era el juguete nuevo y quería probarlo, mis manos se centraron en sus tetas con los 2 salientes de los pezones, y su pelo corto, que no olía a nada, decidí probarla de nuevo, y ya de paso modificarla a mi gusto.

-YO: a partir de mañana quiero que tú y tu pelo oláis a vainilla, no eres una zorra barata, eres mía y yo solo tengo lo mejor. ¿Me has oído?

-LARA: dalo por hecho – me lo dijo cogiendo mi mano y enterrándosela en su intimidad.

Me estaba costando conciliar el sueño con ellas 2 en la cama, las fui intercalando hasta que me quedé dormido, con sueños de futuro para esa nueva relación formada.

Ana y Lara – El nuevo juguete.

Había llegado el verano, y vaya forma de hacerlo, mi relación con Ana estaba evolucionado y cambiando constantemente con el marco sexual de fondo, no supe cuanto hasta más tarde, era feliz descubriendo esos pequeños placeres de una relación larga y consolidada, no os equivoquéis, que ya hubiera terminado de formar a mi pareja, Ana, que ya era la mejor mujer en la cama con la que había estado, así de simple, no la cambió a mis ojos fuera del sexo, era una niña dulce, cariñosa, amable, gentil y romántica, seguía llenándome a nivel personal. Más de 11 meses de follar a diario y de entrenarla en todo lo que sabia, ya tenia a una igual en el terreno del sexo, si, yo dominaba pero era una cuestión puramente del tamaño de mi polla y poderío físico, lo que era follar, estabamos a la par, aquellos juegos inocentes del inicio habían dado paso, no solo a convertirla en una amante de calidad, sino a desvirgar su ano y trasformarla en una fanática del sexo anal, si no que su mente se había abierto de tal manera que no solo había consentido eso, si no que había manipulado para lograr que Lara, su mejor amiga y compañera de piso, se convirtiera en nuestra puta personal, después de meses de aguantar y regocijarse que aquella tetona salida fuera detrás de mi sin lograr nada, le había dado la vuelta y la había desvirgado ella misma con los mismos consoladores con los que la desvirgué a ella, anulando su voluntad ofreciéndola una follada entre nosotros que la hizo ver que no éramos 2 críos tontos a los que una niñata como ella pudiera controlar usando sus armas, y menos que yo cayera en sus redes pese a sus 2 poderosos argumentos, así que entendió que su única forma de llegar a mi, era someterse, y como tal, Ana tuvo lo que quiso, a su amiga del alma roba novios, esclavizada a su voluntad, mi regalo.

Me quedé en como dormí esa 1º noche con ellas 2 en la cama, y de cómo me costó dormirme, aun así lo hice, pero me desperté de nuevo, Lara estaba gimiendo por que mis manos estaban trabajando sus pezones en mis sueños, “joder, ni dormido puedo parar”, la dejé de manosear de golpe y me levanté dejando a Ana dormida y a Lara gimoteando, me fui al baño y luego a la cocina, me encontré a Alicia dormida en el sofá, no entendía el por qué hasta que la vi, con un consolador de gran tamaño en la mano, tapada por una suave manta que curioso levanté, y como adiviné, no llevaba nada debajo, desnuda y con un fuerte olor a fluidos de hembra desatada, me dio por pensar que se había matado sola con ese consolador mientras nos oía jugar con Lara, tenia su mérito, aquel rabo de plástico era como la mía en reposo, sabia que Teo no la tenia tan grande como esa, así que ella misma pensaba que aquellas caderas y aquel trasero merecían o necesitaban algo más, aparte de que por lo visto hacia semanas que no lo hacían, estaban enfadados, y estaría necesitada. Me sorprendió que 1º tuviera ese consolador, 2º que lo usara sola y 3º que lo hubiera hecho quedándose dormida en el salón, mal tapada con una manta y abierta de piernas como una cualquiera, ella era mejor que eso, la tapé con la manta y dándola un beso en la frente la cogí entre mis brazos para llevarla a su cuarto, se agarró adormecida a mi cuello de forma dulce y la dejé en su cama, tapándola con una manta, me agarró de una mano al irme, pidiéndome que no me fuera, aludiendo a Teo, creería que era él, y debo reconocer que dudé, pero me fui seguro de mi buena acción, ya tenia 2 coños en mi cama, uno de 1º nivel, Alicia era mi hermanita, y la novia de mi mejor amigo, la mente de un hombre es muy liberal cuando quiere.

Ahora si me fui a la cocina y repuse líquidos, cogí una botella de agua y volví a la habitación, le ofrecí agua a Lara que estaba despierta aun, bebió bastante, hasta se le cayeron una gotas en sus tetas, lo hizo a aposta, pero hábilmente para que no lo pareciera, seguía queriendo provocarme a pesar de todo. Me acosté boca arriba y Lara se giró pidiéndome permiso para recostarse sobre mi pecho, se lo concedí, y abrazado a ella me dormí, me volví a despertar casi de madrugada, Ana estaba moviéndome el brazo para ponerse sobre mi pecho igual, lamentó despertarme dándome un beso, y se colocó de forma idéntica a Lara pero del otro lado, así quedé, con ellas usando mis brazos y mi pecho de almohadas, una a cada lado, me volví a dormir ahora ya si hasta tarde, oí la puerta de la habitación y de reojo vi a Alicia mirándonos, alucinaba al ver a Lara a mi lado abrazada, y yo en medio con mi polla tiesa de mis empalmes mañaneros.

-YO: ¿que pasa?

-ALICIA: no, nada, es que estos aun no han vuelto……...- se refería a Manu y a su novio Teo, me incorporé sin despertarlas, dejándolas acostadas, y al instante reaccionaron ambas abrazándose una a la otra para seguir durmiendo, saliendo a hablar con ella fuera para no despertarlas.

-YO: dios, ¿que hora es?

-ALICIA: son las 12 de la mañana.

-YO: ¿y aun no han vuelto desde ayer?

-ALICIA: no, y estoy preocupada, me da cosa llamar o hablar con Teo tal y como esta conmigo, Manu no me coge el teléfono.

-YO: esta bien, déjame el móvil y llamo yo a Teo…… - así lo hizo, sin dejar de mirar mi polla empalmada, “tendrías que ponerte algo delante de ella” pensé, llamé

-TEO: ¿que coño quieres?, pesada.

-YO: hey tranquilo, que soy Raúl, ¿donde andáis?

-TEO: ¿y que narices haces tú con el móvil de Ali? - su tono era de enfado, no se le había pasado.

-YO: nada, que tengo el mío sin batería, y ando preocupado, ¿donde andáis?

-TEO ah……..vale, no nada, que al final nos encontramos con unos amigos de Manu, y nos hemos quedado a dormir en su casa, salimos muy tarde de un local y no íbamos bien para conducir.

-YO: ah, ok, pues nada, descansad, venís a comer o…..

-TEO: no se tío, luego os llamo, ahora solo quiero dormir……..- me colgó.

-ALICIA: ¿que tal? ¿les ha pasado algo?

-YO: nada, que iban muy “mamaos” como para coger el coche y venir, se han quedado en casa de unos amigos hasta que se les pase, ya vendrán cuando estén mejor.

-ALICIA: muchas gracias, así me quedo tranquila, joder, no sé que le pasa, pero esta muy raro…..- la cogí del brazo con mimo.

-YO: tranquila, ya se resolverá, dale tiempo.

-ALICIA: siento molestar, no quería interrumpir nada.

-YO: tú tranquila, siempre que necesites, algo avísame.

-ALICIA: no sabia que…….bueno, no es cosa mía, pero que Lara también……vamos que la había visto andar en tu cuarto y eso……. pero ahora estas……….. ¿con las 2?

-YO: jajaja nada, juegos tontos nuestros, vamos a darle un escarmiento a Lara por ser tal golfa jejeje, que andaba muy pesada detrás de mí, y Ana la quiere castigar.

-ALCIA: hijo mío, es que es normal, no puedes ir por ahí con el rabo fuera todo el día, que no somos de piedra….- se calló queriendo desdecirse, se le había escapado-…… quiero decir, que no me importa a mi, pero a ella, no sé, lo mismo la ha confundido o algo, es que la tienes tan gorda que….- ahora se tapó la boca, se había metido en un jardín y no sabia como salir de allí, normalmente haría bromas o simplemente me reiría dejándola seguir metiendo la pata, pero estaba muy sensible con lo de Teo.

-YO: esta bien, si tú quieres me pondré algo encima.

-ALICIA: no, si a mi me da igual, pero solo digo que a Lara le haya gustado lo que veía……- ahora si, segura en lo que decía, pero roja de vergüenza, queriendo inútilmente levantar la mirada de mi polla tiesa, apuntándola.

-YO: pues nada, si quieres vuelve a la cama y duerme un rato más, yo lo voy a hacer, estoy reventado.

-ALICIA: vale………..y gracias por lo de ayer.

-YO: ¿el que?

-ALICIA: si estos no han venido solo tú has podido llevarme a la cama, gracias - me guiñó un ojo y me fue a abrazar, pero no podía con mi estaca tiesa, así que sin rubor alguno la cogió con la mano y la puso de lado para alcanzarme, me pilló de sorpresa pero no le di importancia, respondí el abrazo con alguna palabra de animo y cariño, dándola un beso en la mejilla, al separarse soltó la polla y la golpeó en el brazo – ainss, hijo, de verdad como sois los tíos…..- y se fue contoneado su despampanante trasero, no se si fue buscado o no pero vi algo de provocación en su forma de andar.

Volví a la cama, a dormir un par de horas más, estaba Ana sola, de pie junto al baño, me tumbé en la cama.

-YO: ¿que haces?

-ANA: aquí nuestra puta, que tenía ganas de ir al baño y la he dado permiso, también necesitaba ir así que andamos esperando a que termine para volver a la cama.

-YO: deprisa, esta cama esta muy fría y solitaria sin vosotras.

-ANA: joder, ¿ya la tienes dura……… de donde vienes?

-YO nada, que estos aun no habían venido y Alicia estaba preocupada, pero ya esta todo hablado, luego vienen, y si, ya la tengo dura, de hecho no es mala idea que detrás de vosotras entre yo al baño.

Según salió Lara me metí yo dándola un cachete en el culo, oriné bastante y me aseé un poco, antes de volver a la cama, donde ya me esperaban, dejándome el sitio del medio de nuevo, ya con la polla algo menos tensa, pasé por encima de Ana dándola un buen beso y volviendo a acostarme con una en cada brazo, Lara me miró como pidiendo un beso para ella también.

-YO: tú aun no te lo has ganado - lo dije apretándola contra mi con toda la intención de besarla, pero sin hacerlo.

Ahora quedé dormido como un tronco, al ser entre semana, no trabajaba, ni ellas tenían ninguna obligación, así que nos despertábamos cuando nos salía de las narices, no se cuanto pasó, pero de nuevo me despertaron, esta vez eran caricias y lametones en mi polla, estaba boca arriba como me había quedado dormido pero ahora tenia a las 2 chicas de rodillas, una a cada lado, con Ana comiéndome la polla, dándola indicaciones a Lara “ahora juegas con la lengua en el glande así”, ”luego lames y chupas todo el tronco”, ”chupa y succiona, no solo te la metas en la boca”, ”ahora baja a los huevos y juega con ellos, pero no dejes de masturbar”, ”si no puedes más, coge con ambas manos y dale velocidad, escupe y babea sobre ella, mientras juegas con el glande” , le estaba dando una master class de comerme la polla.

-YO: buenos días.

-ANA: shh tu calla y no te muevas, estoy enseñando a esta puta a comerse un buen rabo, ahora lo hace ella y si te gusta, la dejo que la comas el coño como bien sabes, si no, la meto el consolador yo por el coño hasta que me canse - la mirada de Ana era perversa y la de Lara de pánico a no hacerlo bien. Mientras que yo la di placer, Ana la había destrozado el himen de forma brutal.

-YO: pues nada, seguid.

Y así lo hizo, Ana aguantó un rato hasta que se cansó, y dejó de chupármela para darla la orden de que lo hiciera ella, luego se tumbó a mi lado besándonos con pasión, llevando mi boca a repasar su cuello y sus senos, mientras una mano se metía entre sus nalgas y el hilo del tanga para jugar con su ano.

-ANA: venga puta, empieza, no tenemos todo el día……- se quedó mirando como Lara cogía con fuerza mi polla.

No era la 1º vez que la tenia en la mano tiesa y desnuda, pero si la 1º en que tenia permiso para hacerlo, se deleitó y rememorando los pasos, agachó la cabeza hasta besarme el glande, para ir bajando por toda la extensión dando pequeños lametones, era diferente y menos hábil, no era la 1º que se comía, pero no de ese tamaño, mientras mi dedo ya entraba y salía del ano de mi chica, los 2 admirábamos como intentaba tragarse 1/3 de carne, con arcadas incluidas, tuvo que retroceder y volver al manual de Ana, trabajó el glande con la lengua mientras sus 2 manos no paraban de masturbar, luego bajaba por el tronco dando largos lametones por todo mi miembro, y bajando a mi huevos para metérselos en la boca, sin parar sus manos, eso ya era más familiar, y me estaba matando, sin duda las manos de Lara habían hecho muchas pajas, su ritmo era infernal y me estaba calentando, lo pagaba el culo de Ana que ya con 3 dedos dentro estaba siendo sacrificado, ella misma se llevó una mano al coño y se masturbaba por encima del tanga, pasando su pierna por encima mía para facilitar ambos trabajos manuales, gimiendo entre suspiros y besos alocados.

-YO: esa guarra lo esta haciendo bien, me voy a correr.

Al instante Ana bajó hasta mi falo, apartando a Lara que estaba a punto de recibir mi semen, la cogió con ambas manos y se metió media polla en la boca acelerando sus manos hasta recibir todos los choros de mi simiente caliente en su garganta, no paró sus manos hasta que se aseguró su ración de esperma, no se lo tragó como era habitual en ella, agarró a Lara mientras iba con la cabeza levantada y la boca abierta, la tumbó boca arriba sobre mi, dejando su cabeza sobre mi cuello, y poniéndose encima de los dos, sujetó la boca de Lara y se la abrió, para justo después con un gesto veloz hundir su boca en la suya, y comenzar a besarse con lengua de forma violenta, Lara gemía asqueada, luego supe que era su 1º vez en tener semen en la boca, pero Ana controlaba la situación, atacó sus pezones, con las manos, muy enrojecidos y duros del corpiño elástico de Ana, eso acabó con cualquier resistencia y vi como iban pasándose mi semen una a la otra con la lengua durante unos segundos, y como se separaba Ana y dejaba caer un hilo blanco sobre la boca de Lara que recogía gustosa.

-ANA: ahora trágatelo puta - no se negó pero no obedecía, Ana llevó su mano al coño de Lara y le apartó el tanga para meterle 2 dedos de golpe en su irritado coño - ¡que te lo tragues! o voy a por el consolador y te abro de nuevo.

Vaya diosa de la dominación, Ana me miraba para reafirmarse si iba bien o no, pero estaba clavando el papel ella sola, Lara al sentir sus dedos se estremeció, pero seguía sin tragárselo, entonces llevé mis manos a sus tetas, metiéndolas por dentro del corpiño elástico que la estaba matando desde anoche, acercando su oído a mi boca.

-YO: vamos, trágatelo, tienes que acostumbrarte, a partir de ahora será tu desayuno, no vas a comer nada hasta que te tragues mi semen cada mañana – Ana me miró ilusionada y sorprendida por mi idea.

Lara cedió, no podía más, estaba siendo masturbada por Ana, y mis manos en sus tetas la estaban llevando al paraíso, tragó, y lo hizo varias veces, Ana le abrió la boca y la examinó de forma abusiva.

-ANA: muy bien puta, así se hace, te has ganado que mi hombre te coma el coño, o lo que él quiera hacerte.

Solo al oír eso cogí de las caderas a Lara y de un tirón la senté en mi cara, mirando hacia mi cuerpo, donde se colocó Ana y se ocupó de los besos y las caricias por los labios, cuello y tetas de Lara, como tenia el tanga ya echado hacia un lado lo tenia en mi cara, ajusté posición y metí mi lengua, separando las nalgas y jugando con un dedo en su clítoris, hinchado de manera colosal, no tardé ni 2 minutos en hacerla correrse, esa facilidad me la puso dura tan rápido que terminó golpeando en la espalda de Ana, montándome por la cintura, que sin pensarlo retrocedió un poco, se apartó el tanga y se la metió de forma pausada, haciéndome temblar al notar como la abría poco a poco. Sin dejar de besare con Lara, comenzó a cabalgarme como mejor sabia, eso le provocó un 2º orgasmo a Lara, ya que ahora, con Ana apoyada en mi pecho, tenia sus tetas a la altura perfecta para poder lamerlos, chuparlos y mordisquearlos, aun así mi lengua seguía su ritmo habitual, haciéndola gemir manteniendo la respiración, era un corderito e iba a lamentar haberse metido en la cama de 2 lobos.

-ANA: amor, si haces que esta puta se corra como una fuente, no te lo tragues, quiero que esta zorra se coma también su propia lujuria…...- “excelente idea”.

Apreté su cintura y aceleré mi lengua y mis dedos, provocándola orgasmos cada minuto que pasaba, me tenia que dar prisa, Ana me estaba follando como una campeona y quería darla lo suyo antes de correrme, metí un dedo en el coño de Lara y buqué su punto G, sencillo, nada más rozarlo un par de veces comenzó a convulsionar, como cuando te metes en agua helada, metí mi boca abierta en su coño y con un par de lametones más se corrió con una cantidad de fluidos que me costó contener, en parte por la cantidad y en parte por que la cadera de Lara se movía endiabladamente, tuve que sujetarla muy fuerte para que no saliera despedida, hasta que cayó fulminada sobre Ana, que la sujetó a duras penas, mientras terminaba de cabalgarme.

-ANA: venga puta, “la que se creía mejor que yo”, esto aun no ha acabado - la dio la vuelta poniéndola a horcajadas sobre mi cintura y la obligó, acostándose sobre ella, a besarme, la recibí con la boca abierta llena de sus emanaciones y con algo de asco empezó a meterme la lengua, mientras Ana apretaba con su mano en la nuca, gritándola que chupara y sorbiera cada gota.

Obedeció, fue perdiendo ataduras mentales y terminó disfrutando de sus propios jugos, cogiéndolo de mi boca, tragando si parar sus emanaciones, y jugando con ellas en mi boca, eso me motivó aun más, con Lara rendida sobre mi pecho besándome alocadamente y Ana cabalgándome justo detrás, decidí dar otro golpe sobre la mesa, levanté la cadera apoyando los pies, elevando a las 2, sujeté la cadera de Ana rodeando a Lara y comencé a follar yo, sacando a la bestia, la necesitaba para poder golpear con la pelvis a las 2, el resultado fue un espectáculo criminal, con Ana corriéndose poseída cada pocos minutos al notar a la bestia pariéndola en dos y ver a Lara en medio, siendo sometida a la misma fuerza sin penetración, una mera espectadora, pero sintiendo cada golpe, la energía, la velocidad y la continuidad, tenia los ojos abiertos como platos ante mi despliegue físico, las acometidas eran tales que las tetas de Lara terminaron en mi cara y por ende sus pezones sensibles que ataqué encantado, no se si Ana la estaba masturbando por detrás o no. o si fueron mis golpes de cadera, pero saqué otro orgasmo a Lara antes de que Ana cayera rendida sobre la espalda de su amiga, ya sin hacer fuerza contra mi. 30 minutos calculé, fue casi bíblico, tener a las 2 rendidas una encima de la otra, me llevó a correrme en Ana dando mis últimos 2 o 3 minutos de frenesí, donde Ana regresó en si y Lara vibraba de tensión, hasta que los espasmos de mi columna pararon al vaciarme, empapado en sudor, viendo como Ana sonreía y Lara me miraba con ojos de pánico.

-LARA: eres un animal, esto no es humano.

-ANA: te lo dije puta, este es mi hombre y tú eres una mierda a su lado, y al mío.

-YO: ¿te ha quedado claro?

-LARA: si.

-YO: ¿que es lo que deseas?

-LARA: quiero llegar a ser digna de que me partas en dos de esa manera, y no morir en el intento – sonrió.

-ANA: eso solo lo lograras si eres una buena puta, como hoy, recuerda, eres nuestra, o jamás probarás a mi hombre, ahora deja que te coma las tetas hasta que se la pongas dura de nuevo, aun quiero mi anal de la mañana - se incorporó hasta besarme ante la cara de horror de Lara, que no comprendía como eso no era suficiente para Ana, a la que tenia por mosquita muerta.

Ataqué de nuevo las tetas de Lara, ahora le quité los tirantes del corsé y las saqué para hacerlo piel con piel, tenia los pezones totalmente erectos e irritados, hipersensibles, no me costó nada ante su liviano cuerpo tembloroso sacarme otra erección, realmente eran una maravilla de tetas, Ana se incorporó, se tumbó a mi lado boca arriba y ordenó a Lara que se pusiera a 4 patas encima suya, quedando sus enormes ubres colgado a su disposición, yo me puse de rodillas detrás de ellas y sacando la cadera de Ana, dirigí mi polla a su ano, atravesándolo con fiereza, pero despacio, Ana normalmente gritaba un poco al principio de los anales, hoy tenia la boca ocupada por 2 masas ingentes de carne, la levanté las piernas de apoyo y fui acelerando el ritmo poco a poco hasta que la ensarté entera golpeando con mi pelvis el coño de Lara, haciendo que el ruido de golpes fuera en su trasero y no en el de Ana, eso duró hasta que me cansé de sujetarla las piernas, cambié el orden de piernas poniendo las de Ana por fuera y la de Lara por dentro, haciendo que Ana rodeara con sus piernas la cintura de Lara, como sujeción, y luego aferré mis manos a las tetas de Lara como sustento más cómodo, y saqué a la bestia de nuevo, masacrando el culo de Ana que colgaba de su amiga, mis manos no solo se agarraban sino que jugaban con los pezones de Lara sacándola algún orgasmo, entre eso y los roces en su coño de mi pelvis al perforar a Ana, que no pudo contenerse y se corrió como un globo de agua pinchado, bañándonos a todos, pero no paré, iba a por mi 3º corrida y duré 1 hora follándome el culo de mi novia usando a su amiga como anclaje para ambos, la cual se corrió tantas veces por ello que perdí la cuenta, todos gritando barbaridades, y de nuevo al ir a correrme solté la cadena de la bestia haciendo que Ana se desmayara ante los ojos atónitos de su amiga, antes de correrme la saqué del culo de Ana y cogiendo del pelo de la nuca a Lara la obligué a comerme la polla mientras me corría, hundiendo mi rabo entre sus labios llenando de semen hasta que se atragantaba, luego la levanté la cabeza poniéndola a mi altura mirándonos fijamente, entendió mi idea, cerró la boca y con algo de orgullo, se lo tragó todo de nuevo, abriendo luego la boca y moviendo la lengua para hacerme ver que no quedaba ni gota.

-YO: esto es lo mínimo que te espera cada día, si no eres capaz de soportarlo, dilo ahora.

-LARA: no es lo que yo quería, pero aguantaré esto, y mil más con tal de que me folles como a ella.

-YO: para eso queda mucho aun, ella tiene que dar su bendición y solo lo hará cuando estés preparada, pero para ser tu 1º día de puta, te lo reconozco, no has estado mal……- la solté del pelo y cayó agotada a la cama junto a Ana, que ya había vuelto en si, y estaba atenta a lo que ocurría.

-ANA: es cierto, eres una buena puta, ahora ve tal como estas a por algo de beber, a mi hombre después de follar le gusta beber, así que tu trabajo es ir a por ello siempre que terminemos - asintió y andando medio ida fue a salir - ah y cuando te encuentres con Alicia, y te pregunte cualquier cosa sobre nosotros, dila lo que ha pasado, todo, no te dejes detalles - volvió a asentir antes de irse.

-YO: ¿para que quieres que se lo diga a Alicia?

-ANA: es una sorpresa – su forma de decirlo fue perversa.

-YO: no juegues con Alicia, esta muy sensible con lo de Teo.

-ANA: vale, pero déjame a mi.

-YO: te estas convirtiendo en un peligro para todos, eres una jodida depredadora.

-ANA: jo, solo quiero divertirme, y esto de Lara va a ser la leche.

No se equivocaba, la 1º semana de “servicio”, por así llamarlo, pasó igual, durmiendo con las 2, no pasó un solo día sin rociarse de vainilla, como le pedí, con Ana humillándola constantemente, en privado y en publico, la hacia ir desnuda delante de Manu o Teo, masturbarse en mitad de la calle, la sacábamos a pasear como si fuera un perro, ordenándola ir a liarse un tío cualquiera de la calle, o atarla a una silla durante horas mientras nos veía follar como posesos, pero todas las mañanas eran igual, me levantaban las 2 comiéndome la polla, para luego jugar entre ellas a tragárselo, los días que no trabajaba me tiraba a Ana usando a Lara de mil formas, comiéndola el coño, las tetas o la boca, masturbándola y metiéndola los consoladores por turnos, los días que trabajaba las dejaba en la cama retozando entre ellas, hasta que su coño se volvió tan fácil y abierto que ya no sentía el más minino dolor, solo se corría sin parar. A veces sin Ana en casa me pedía que me la follara para entrenarse, pero la daba azotes en el culo por intentar desobedecer a su ama, a la cual se lo contaba y esta la castigaba, cogía el consolador más grande de los 3 y la follaba de forma animal, pero para cuando terminó la semana tuvo que coger prestado el grande de Alicia para hacerla sufrir.

Me acuerdo del 3º o 4º día de piscina, de inicio hice que Lara me la chupara en uno de los vestuarios hasta correrme y hacérselo llevar en la boca a Ana, que estaba fuera, para entregarla su ración, besándose alocadamente delante de todos. Luego Ana vio a una señora en top less y obligó a Lara a quitarse la parte de arriba del biquini, su actitud no fue molesta, de hecho se sintió bien, no seria la 1º vez, pero como Ana quería hacerla sufrir, la ordené que a todo el tío que yo la viera mirándoselas, se lo llevara al agua y lo masturbara hasta sacarle el semen. Ana me miró como si acabara de descubrir la cura del cáncer, y la de Lara de odio, sus descomunales tetas al aire no pasaban desapercibidas, más aun cuando éramos un grupo que llamaba la atención, Manu era alto, rubio de ojos azules, Teo un chico mono, yo un morenazo de 1,90 marcando músculos, Alicia y Ana fueron a juego con el biquini negro de tanga, todo muy “conservador”. Ana añadió que no podía decirles ni una palabra, no tardé en pillar a un grupo de chavales de unos 17 años mirándoselas babeando, lo mismo eran las primeras tetas que veían y vaya estreno, serian unos 4, así que la hice el gesto, Lara dudó, pero miró como Ana marcaba mi polla por encima del bañador, y mordiéndose el labio, se puso en pie y se fue hacia el grupo de chavales, mientras Ana y yo nos fijábamos en si abría la boca, no costó hacerse entender, y se llevó a los 4 al agua, la rodearon riéndose sin creerse que aquellas tetas desnudas estuvieran pegadas a una mujer que les masturbaba de 2 en 2 con ambas manos, sin saber de la orden, desde fuera solo parecía que jugaban a algo, pero sabiéndolo el movimiento del agua era delatador, a los 5 minutos volvió, los chavales se despidieron con un sonoro aplauso, los pobres no habían aguantado nada, salió del agua para venir hasta nosotros pero según lo hizo un tío que pasó por delante no pudo evitar mirárselas al estar goteando de agua, Lara me miró hastiada pero no la di cuartel, se fue corriendo detrás del hombre y con algo de trabajo se lo llevó al agua y tardó 10 minutos en volver a salir, se fue a sentar a nuestro lado y otros 2 chicos no solo se las miraron si no que hicieron algún comentario, ya sin mirarme se fue a por ellos y de nuevo al agua, esta vez unos 15 minutos, y tuvo que soportar que la metieran mano en las tetas, y uno de ellos en su coño, con las miradas lascivas de algún hombre atento. Al volver a salir ya la dejé sentarse, pese a que pillé a alguno mirándoselas, pero estaba cansada, la dejé tostarse un poco al sol, no sin antes ponerla cremas solar yo mismo por todo su pecho, “por su bien” , claro esta. Vi a Manu y a Teo mirándoselas sin disimulo, la pobre Alicia, lograba apartar su mirada de ella con su biquini y su trasero, Alicia y Teo andaban tranquilos últimamente entre ellos, pero le susurré al oído que Manu era el siguiente, como supuse, creía que había algo entre ellos, o lo hubo, pero esta vez su mirada de “bueno, al menos conozco a este” se delató, se lo llevó al agua y estuvo unos 20 minutos llegando a hundirse bajo el agua y chupársela, según me dijo después, a él le comentó algo, pero fui benévolo, además estaba liado con Ana, que se estaba poniendo cachonda de ver a Lara pajeando sin parar, no se como lo hizo pero nos tapó a ambos sentados con una toalla y apartando el tanga logró sacarme la polla de mi doble bañador y una vez tiesa metérsela entera por el culo, sentada de espaldas a mi, pero bien pegada, llevé mis manos a sus tetas, las cuales liberé al tirar con los dientes de la atadura del cuello, viendo como Lara trataba de salir del agua una y otra vez, y volvía la piscina ella misma con 1, 2, 3, o hasta 5 hombres, se pasó toda la tarde masturbando a media piscina, ya hasta se veía en el agua los restos de semen, hombres jóvenes, viejos salidos, casados, nerds, solitarios, chulo playas, los que iban con novia….ni uno se libró de sus manos y ninguno se negó a sus tetas, con más o menos reparos. Cuando iba por 17 tíos dejé de contar, alguno hasta repitió por que Lara no se acordaba de su cara, y me centré en follárme a Ana, que se estaba poniendo muy caliente con mi polla hundida en su ano, y con un disimulo antinatural, debajo de las toallas se movía su cadera como un ente propio, me recordó a Madamme, capaz de que fuera su cadera la que se moviera, y no ella, soltando gemidos ahogados al sentir un orgasmo anal que la sacudió la espalda, se puso en pie de golpe dándose la vuelta y ensartándose el coño volviéndose a tapar bajando, dejando a la vista su cuerpo semi desnudo una fracción de segundo para cualquiera que hubiera estado atento, pero de nuevo bajo la toalla pasaba algo que fuera de ella no aparentaba, la dejé dominar ese partido y se corrió varias veces hasta que me sacó el semen y la llené con él, si yo tomaba el mando no habría toalla posible que disimulara aquello. Ana se repuso y colocando el biquini, se fue al baño a asearse con Alicia. Lara volvió del agua con un dolor de brazos importante, se tumbó dándole igual quien la mirara.

-LARA ¿por que me haces esto?

-YO: por que eres nuestra, y podemos.

-LARA: pero esto no me prepara para nada.

-YO: ¿como que no?. verás el brazo que vas a echar, mejor que hacer pesas jajajajaja …… - me miró desafinaste, y eso no lo podía permitir, me fui a por ella y sentándome detrás de ella la cogí de los pezones y tiré de ellos con fuerza hasta hacerla retorcerse - …….. óyeme puta, te estamos tratando bien por que hasta ahora estas siendo buena, no quieras vernos enfadados, por que Ana puede tener un limite, pero yo no - la abrí de piernas y metí mi mano en su coño masturbándola delante de todos por dentro de la braga del bañador.

-LARA: por favor, para, aquí no……...- pero no cerró las piernas.

-YO: esto no te lo hago yo, te lo haces tú sola, al desafiarme y cuestionarme, ya sabes las reglas, si quieres mi polla tendrás que ser una buena puta, puedes dejar esto cuando quieras, solo dímelo, paro ahora mismo y eres libre, pero jamás me tendrás, tú decides - seguí masturbándola y acariciando una de sus tetas hasta notar como se humedecía su coño.

-LARA: no por favor, no quiero eso, quiero que me folles pero esto es demasiado, ¿por que?

-YO: por que has sido una zorra calienta pollas toda tu vida, has ido provocando a los tíos empalmándolos y luego les has dejado a medias. ¿verdad?

-LARA: si.

-YO: ¿a cuantos?

-LARA: a muchos.

-YO: ¿más o menos de los que has pajeado hoy aquí? – silencio - ¿MÁS O MENOS?

-LARA: a más, a muchos más, dios, para la mano, es cierto, soy una golfa y me gusta provocar y dejarles a medias, ¿es eso lo que quieres oír?

-YO: no, lo que quiero es que entiendas que esto es justicia, querías ser mejor que Ana, pues antes de empezar a ser como ella, debes saldar cuentas, esto es solo karma, y vas a seguir haciendo pajas hasta que la cuente quede a 0, vas a compensar a todos esos hombres a los que has manipulado, hoy, aquí y ahora. Es mi voluntad, ¿la aceptas o no?

-LARA: si, lo acepto……..- cayó una lágrima por su mejilla que recogí con un beso, dejando de masturbarla ante el pelotón de salidos que se habían puesto delante “disimuladamente”.

-YO: bien por que ahí tienes a 7 tíos que te están mirando desde que he empezado, todos tuyos……- la di un azote en una teta antes de soltarla y dejarla ir.

Ana volvió y no se enteró hasta que se lo dije, Lara pasó 2 horas seguidas en el agua haciendo pajas, pasó hasta uno de los socorristas por sus manos, algunos solo se dejaban, otros la metían mano y otros la masturbaban sacándola un orgasmo o varios los más osados, hasta que fue la hora de irnos. Me llevé a todos en mi coche, mientras que ordené a Lara que fuera con Manu y que, como castigo por su osadía, a partir de ese momento hiciera lo que Manu quisiera, esa noche era de él, se lo quise regalar, así que, menos follar, que hiciera lo que el quisiera con ella, y que se lo dijera así según se montara en el coche con él. No volví a saber de ellos 2, no pasaron por casa hasta las 5 de la tarde del día siguiente, Lara nos contó que nada más decírselo tuvo que chupársela mientras conducía, según me dijo, Manu iba bien armado, unos 19 centímetros tiesa, y que se fueron a un hotel, donde estuvieron toda la noche besándose, masturbándose y comiéndole la polla sin descanso, intento follar pero esta le dijo que no, pero tampoco le hizo falta, según la chupaba Lara por entonces era suficiente, se tragó tanto semen que hasta decía que le dolía la barriga, le dolían los brazos de las pajas, con agujetas y las tetas de la de cubanas que le tuvo que hacer a Manu, que venia con la cara de felicidad más grande que le recuerdo.

Una vez pasado eso, Lara no volvió a discutir ni cuestionar, ni si quiera a mí en privado donde se mostraba atrevida, entendió que era peor hacerlo, si no abandonaba el juego, y no quería hacerlo. Así que simplemente era una esclava buena y obediente que con el paso de las semanas iba dando pequeños pasos, se los estaba ganando, sus pajas, masturbaciones, cubanas, orales y penetraciones con consolador………..eran ya pan comido, para cuando pasó un mes ya estaba preparada y dispuesta a ser follada por mi, pero no dijo nada, dejando pasar los días, y la verdad, no se si Ana tenia ganas pero yo ya estaba que me moría por follármela de una vez. Lo hablé con Ana, o cortábamos ese juego o teníamos que hacerlo ya, más de una vez al follar con ella sacando a la bestia, Ana terminaba antes que yo y me quedaba un poco a medias con Lara allí al lado, o encima o por medio, y deseando atacarla, por suerte sus cubanas metiéndose glande era como follar, sus senos rodeaban mi polla por completo. Así que pareciéndonos muy cruel dejarla tirada, y en parte por seguir el juego, Ana accedió, pero bajo sus términos y con su supervisión exhaustiva. Lo preparó todo, le regaló un viaje de fin de semana a Teo y Alicia para que ”arreglaran” lo suyo de una vez, y a Manu no se que se inventó pero también lo sacó de casa el fin de semana entero, ocultándoselo a Lara, llegó el viernes y con todos fuera y yo libre por reformas en el trabajo, empezamos la sesión de la mañana de la forma más natural del mundo, y con Lara comiéndome el rabo a 4 patas y Ana su coño arrodillada detrás, empezó la fiesta.

-YO: me encanta como me la chupas puta, has mejorado mucho, ¿verdad peque? - Ana respondió sacando su lengua del interior de Lara.

-ANA: pues si amor, se ha convertido en una puta digna de ti - me asintió con la mirada dándome barra libre.

-YO: esta bien, ¿tú que dices puta?, ¿quieres aprender a follar? - sin dejar de chupármela dijo un si mudo para seguir trabajándome el glande con su lengua.

-ANA: esta bien, puta, tienes mi permiso, aquí y ahora mi hombre te va a follar hasta que te desmayes - al oír eso Lara dejó de chupar mirándome a lo ojos sin creérselo, secándose las babas de la boca con el dorso de la mano.

-YO: ya la has oído - bajé mi cuerpo hasta tumbarme del todo y puse a Lara a la altura de mi polla.

Ana ayudó colocándola una pierna en alto para hacer espacio y cogiendo mi rabo, meterlo sin dificultades en su coño hasta casi la mitad, no me sorprendió esa facilidad, ya estaba follando a diario con él consolador enorme de Alicia, pero mi polla no era tan fácil a partir de la mitad, es cuando notó como se ensanchaba un poco más, y ahí si, su mirada se puso blanca, apoyándose y arañándome el pecho, dando pequeños espasmos hacia arriba antes de seguir bajando, repitiendo la operación sin poder evitar correrse en la bajada, eso solo ayudó a lubricar la zona, Ana cogió la base de mi polla para hacer de tope, y hasta sus dedos llegué, teniendo a Lara temblando, quieta y dejándose acostumbrar, estaba bien enseñada, quiso bajar más pero su cadera no aceptaba, por ahora le quedaban unos 8-9 centímetros fuera, pero suficiente para follármela, puse a Ana sobre mi cara de rodillas para comerla el coño mientras su mano seguía de tope, entendiendo que seria mejor así, fue dando indicaciones de cómo y cuando tenia que subir y bajar sus caderas, subía rápido y bajaba muy despacio, pero de forma continuada, ya lo hacia sola y Ana dedicó unos minutos a su pezones para rematar la faena y que se volviera a correr, la presión en su interior fue disminuyendo y notando como su orificio cedía ante mi, pasados unos diez minutos ya me cabalgaba sola y poseída, gritando burradas ahogadas por los labios de Ana, que tuvo su orgasmo propio por culpa de mi lengua, cuando llegó a los 15 minutos Lara reventó en un orgasmo que manchó todo de fluidos y se desmayó cayendo encima de Ana que apenas pudo sostenerla, me hicieron algo de daño en la nariz al revolcarse por encima de mi cara, Lara había soportado bien pero sucumbido ante mi falo, apenas un cuarto de hora en que yo ni me había movido.

La dejamos dormida a un lado mientras Ana terminaba el trabajo, primero me puse en pie y la levanté a horcajadas follándomela por el coño en el aire 30 minutos, luego se bajó y poniéndose de cara a la pared, se separó las nalgas pidiendo su ración de anal, embestí como un toro bravo y se la ensarté del tirón sacándola un aullido, la hundí de golpe de nuevo, ahora que había sitio saqué a la bestia 20 minutos, después eyaculé groseramente dentro del culo de Ana que temblaba de gusto y se acariciaba el coño alocadamente, Lara había vuelto en si, al menos movía la cabeza y nos miraba mientras algún calambre le recorría las entrañas, me fui a por ella, dejando a Ana medio colgada en la pared, metí mi mano en su coño hasta encontrar su punto G y mis labios a sus tetas, en 2 minutos la tenia corriéndose de nuevo y yo empalmado, así que la abrí de piernas y con cuidado la fui penetrando hasta volver a tener unos 20 centímetros dentro de ella, se retorcida sin parar pero caí con ella atrapándola y rodeándome con sus piernas la follé de forma calmada y suave, sacándola despacio y metiendo de golpe, con suspiros de alivio y gemidos de control respectivamente, a los 10 minutos tuvo tantos orgasmos que se volvió a desmayar, Ana ya estaba en pie a mi lado lista para otra ronda, así que sin preámbulos la tumbé igual, al lado de Lara, la abrí de piernas y la hundí hasta el fondo de su ser, sacando a la bestia y matándola, estaba desatado ante aquellas 2 mujeres, una me calentaba por el morbo y la otra lo pagaba, Ana estuvo manteniendo el tipo 1 hora, hasta se dio la vuelta y me follé su coñito por detrás con ella aprovechando el rebote contra el colchón para ir contra mi, pero de nuevo mi velocidad y ritmo, o mejor dicho, las de la bestia, la mataron hasta que Ana cedió y se fue de paseo a la luna, me dio rabia por que estaba por correrme, pero era lo bueno de tener a 2, Lara había vuelto en si, con los ojos en órbita de ver como a su lado Ana había cedido, y al mirarme y leer mis intenciones quiso huir, no pudo, de hecho al hacerlo se quedó de espaldas a mi, y la ensarté el coño del tirón, con su culo haciendo de tope para no destrozarla, agarré sus tetas y de pie, tal como estabamos, acabé los 5 minutos finales de frenesí en ella, sacándola un orgasmo solo, pero continuo, gritando poseída y temblando, le fallaban las piernas pero la tenia tan fuertemente sujeta por los pechos que hasta levantaba los dos pies del suelo y seguía siendo masacrada en el aire, tuvo suerte de que solo fueran esos minutos finales por que si Ana cede antes hubiera estado 10 o 15 minutos así con ella, su cuerpo se volvió flácido y sin llegar a desmayarse se dejó reventar hasta que notó el semen bañándola por dentro, caliente y espeso, solo con eso se volvió a correr como una fuente, dando latigazos con las piernas. La solté sobre la cama donde cayó redonda, aun dando coces con los pies, y miré a Ana, que se mordía un dedo juguetona, ya recuperada.

-YO: podías haber avisado que ya estabas y hubiera terminado dentro de ti y no machacado a la puta.

-ANA: es que quería que lo hicieras……... - la miré con orgullo, había fingido el desvanecimiento sabiendo que me correría en breve, para que matara a Lara.

-YO: eso te va a costar caro, ahora mismo te voy a reventar el ano a ti sola hasta que me corra.

-ANA: ya suponía algo así…….- se tumbó boca abajo, me puse encima y esperando a que mi polla se endureciera, separé sus nalgas y apreté hasta meterle la polla entera por el culo.

Me encantaba esa posición, la mujer tumbada boca abajo totalmente estirada, me ponía como para hacer flexiones encima y ella se separaba las nalgas para aceptar la dentro toda, y me desataba taladrándola, sacando a la bestia haciendo que Ana rompería a llorar en orgasmos seguidos, aguantó los primeros sin moverse, o contoneándose levantado un poco la cadera, pero a partir del 4º o 5º se movió poseída perdiendo la posición, estaba atrapada ahora ella y tuvo que soportar 20 minutos de martirio, totalmente inmóvil y sollozando, soportando a la bestia desatada y dándola sonoros y fuertes manotazos en el culo, hasta que me corrí, regalando siempre mis 5 minutos finales de desenfreno en que lloró desconsolada mientras gritaba que la estaba matando, llenándola su culo de esperma de nuevo.

Caí rendido y me dormí, casi como si me leona acabara de pasar por allí, ahora si, había dado todo mi potencial, las había matado a ambas, y a Ana actualmente era muy complicado hacerlo, me costó un mundo y casi desvanecerme yo, pero por fin, con el ligero apoyo de Lara, me vi capaz de volver a ser yo sin ningún tipo de atadura ni cohibirme en nada. Me desperté pasada la tarde, Ana no estaba y Lara seguía en la misma posición en que la había dejado, mirándome con los ojos abiertos y sonriendo, al salir vi a Ana andando por el pasillo totalmente escocida, si hasta me dolía la polla a mi, me fui derecho a la nevera y me fundí una botella de 1 litro de agua entera ante la mirada de Ana, que a duras penas se podía agachar a coger un vaso de unos de los cajones.

-YO: ¿estas bien? - me miró con una sonrisa falsa.

-ANA: si, bueno, no, me duele el culo mucho, te has pasado, me arde como nunca……...- me fui a abrazarla con cuidado.

-YO: lo siento peque, pero me has sacado de mis casillas.

-ANA: lo sé, si es culpa mía, no debí dejar que esto pasara, aun no, no estaba preparada, te he tentado con mis juegos y he salido mal parada.

-YO: no te culpes, eres perfecta y un sol, soy yo que soy un burro…..- la fui dando besitos por la cara hasta llegar a sus labios.

-ANA: si, eres una bestia, jaja casi me partes de verdad, era como una barra de hierro candente que me atravesaba, me dolía hasta la tripa - se le pasó un poco el cabreo, y me respondió el abrazo.

-YO: ¿entonces todo bien?, ¿seguimos con Lara o lo dejamos?

-ANA: no, no, ahora esto hay que llevarlo hasta el final, a esa zorra se le ha puesto una sonrisa que hay que borrársela - la pobre estaba tan enfadada con Lara por algo de su pasado que quería seguir castigándola, pero a mi ese rollo no me terminaba de gustar.

-YO: no podemos evitar que disfrute de que la folle, ya ha sufrido un mes de vejaciones de nuestra parte, a aguantado lo peor que se te ha ocurrido, si hasta le pusiste las bragas que vibran un día entero sin apagarlas, ahora toca su recompensa y ponerla a nuestro nivel - Ana me miró comprendiendo que no se podía hacer nada peor con ella, aunque si se podía, pero como os dije el sado no nos iba a ninguno y yo no quería seguir con un juguete roto - aparentemente seguirá siendo nuestra puta, pero tiene que avanzar o se cansará y lo dejará, ya la he follado, era lo que buscaba, si no le sigue gustando, se buscará a otros.

-ANA: vale, pero me prometes que es solo por eso, no la quieres ¿verdad?

-YO: no digas tonterías, claro que no la quiero, tú eres mi novia, la mejor del mundo y nada cambiará eso mientras los 2 queramos seguir, yo quiero, ¿y tú?

-ANA: claro que si, te amo con locura, pero me da miedo que te guste más ella que yo.

-YO: por favor, eso son bobadas, eres mejor que ella en todo, y aunque algún día ella lograra superarte en algo, que a día de hoy no veo posible, tú me das algo que ella no me dará jamás, una persona fiel en la que confiar y a la que querer y amar, independientemente del sexo - sonreía ya de forma natural.

-ANA: vale, pero como pases de mi por ella te corto los huevos……- rompí a reír por su amenaza, era como si un conejillo amenazara a un oso.

-YO: esta bien, comamos algo antes de volver a la acción.

Ana y Lara – Buena alumna.

Pasaron un par de horas de descanso, Ana seguía renqueando de su culo, le costó sentarse a comer, Lara apareció medio ida, la ayudé a sentarse y comer algo, charlando un poco distendidos para devolvernos al mundo real, sobretodo a Lara que últimamente parecía una autómata más que aquella bocazas dicharachera de antaño, quería devolverla algo de su personalidad para que abandonara el juego y ya solo follar cuando ella quisiera, para ello pensé un juego mientras veíamos un rato la TV.

-YO: he pensado una cosa, podemos jugar todo el fin de semana a algo, os lo comento y vosotras decidís.

-ANA: ¿nosotras o yo? - me preguntó sabiendo de mis intenciones de devolver a Lara a un estatus de persona con opinión a tener en cuenta.

-YO: vosotras, ¿verdad Lara? si quieres puedes negarte - me miró sorprendida, era la 1º vez que desde que empezamos tenía voz.

-LARA: claro, dinos - ilusionada.

-YO: bien, mi idea es que pasemos todo el fin de semana desnudos y mudos, no podemos hablarnos ni darnos indicaciones, más allá de algún caso sangrante, cada uno va a dormir en una habitación distinta, y si quiere sexo solo tiene que ir a la habitación de la persona con quien quiera tenerlo, la persona que ocupa la habitación da su visto bueno, o puede negarse, ninguno puede masturbarse ni tocarse solo, si acepta no salen de la habitación hasta que los 2 queden satisfechos, y la 3º persona no puede intervenir ni entrar. ¿Queda claro el juego? - asintieron riéndose, por 1º vez en mucho tiempo, cómplices y risueñas.

-LARA: pero no es justo, yo sola no voy a poder contigo.

-ANA: pues vas atener que aprender, ya has follado con él, y tienes que……..- la miré calmándola los ánimos -……….bueno, tú misma, decide.

-YO: prometo ser bueno contigo.

-LARA: vale, ¿cuando empezamos?

-YO: pues cuando queráis, Ana puede quedarse en nuestra habitación, Lara en la suya - por la que casi no pasó durante ese mes - y yo me voy a la de Teo y Alicia, ¿conformes?

LARA Y ANA: ¡¡¡SI!!!

-YO: pues hasta el domingo por la noche que vuelvan estos, y termine el juego, os deseo suerte a ambas.

Me levanté haciendo el gesto de coserme los labios y me fui al cuarto de Teo y Alicia, tenia TV y algún vídeo juego, hacia siglos que no jugaba a eso, presupuse que vendrían corriendo a por mi las 2, pero pasó toda la tarde y nada, salí a cenar y escuché algo de jaleo en el cuarto de Lara, Ana no estaba en el suyo, así que estaban rememorando tiempos previos, me sentí bien al oírlas reír como chicas normales, como amigas de nuevo, de hecho hasta pensaba que no estaban haciendo nada sexual, solo volviendo a ser amigas, pero los gemidos iban a lo sexual. Me volví a la habitación con la sensación de celestina de amigas, si quería esclavas sexuales tenia a cualquier que me diera la gana, pero Lara se había ganado mi amistad y mi respeto, pero no mi amor. Las dejé siendo niñas de nuevo, mientras me viciaba a algún vídeo juego antes de acostarme, llamando a Manu y Teo para asegurarme de su regreso tardío, me alegró oír risas y bromas en Teo de nuevo con Alicia de fondo, me mandaba mensajes de que todo iba bien. Apagué luces y me dormí, lo necesitaba, la sesión de la mañana me había costado gran esfuerzo, y me dolían los gemelos y la cadera, como al salir de la casa de mi Leona en su época, que lejano parecía todo ya en mi mente. En mis sueños estaba, rememorando a oscuras a Eli, y dándola las gracias eternas por convertirme en lo que era, no se si era culpable o no de mi situación actual, pero tengo la sensación de que sin ella podría haber acabado muy mal en la vida, teniendo un hijo con la 1º o 2º a la que me tirara, o siendo un folla amigo al que nadie quería como pareja estable, solo deseado por mi polla.

De noche noté como un cuerpo se tumbaba a mi lado y me despertó, no sabia quien era hasta que palpé sus pechos, era Ana, que me agarró de la mano y me la llevó a su coño, totalmente húmedo y ardiendo de deseo, me tumbé de lado haciendo la cuchara con ella, repasando su espalda y su cuello con mis labios, mi mano levantó su pierna para dejar alojada mi polla entre sus muslos y cerrarlas, como en Navidades, echaba de menos algo de aquel romanticismo, de hacerla el amor, y no follar sin más, supongo que ella pensó igual, por que oía su risa, pasé no menos de 20 minutos acariciándola por todo el cuerpo, de forma dulce y cariñosa, hasta que mi rabo se puso tan duro que casi entraba solo en ella, moviendo la cadera los 2, facilitamos la penetración, lo hice de la forma mas lenta y dulce que pude, sin dejar de acariciar sus pechos y su ombligo, casi había olvidado que eso la encendía mucho, pero estabamos a otra cosa, allí no haba sexo, solo amor, los gestos eran suaves y amplios, la penetración profunda, sin violencia ni ningún tipo de ritmo, solo disfrutar de aquella sensibilidad olvidada los últimas meses, eran deliciosamente desesperante el ritmo tan lento y descompasado, pasó una hora así, sin que ninguno se corriera, pero gozando como condenados en libertad, oliendo su cabello a coco, y rociando con ternura sus pezones, por mi podía haber seguido así toda la noche.

-YO: solo tú puedes lograr que te haga el amor así.

-ANA: sshh no podemos hablar.

-YO: solo quiero que lo sepas, nadie podría lograr que me deshiciera de placer solo con esto, solo tú……..- sonrió girándose para darme un beso.

Ana no soportaba más, estaba ardiendo, y su cadera tomó el mando cortando con una sonrisa aquel momento, que me pareció mágico, moviendo su pelvis de forma rápida y rítmica hasta que pasados pocos minutos se corrió dulcemente sin gritos ni aspavientos, pero ya era tarde, me había encendido y ahora había que apagarme, me tumbé boca arriba con ella aun empalada, quedando sentada sobre mi dándome la espalda, y plantando los pies, saqué a la bestia que andaba adormecida de tanto empalagoso cariño, Ana se cuadró apoyándose bien con los pies y manos, yo, levantando la cadera, di vía libre al tren de mercancías, avasallé su coño con ritmos tan rápidos que se volvió a correr poco después, se la sacó y jugó con ella un rato hasta que su cuerpo se tensó para volver a penetrarla, a los 10 minutos no soportó y se corrió bañando toda la cama y cayendo rendida, pero se puso de rodillas, de espaldas aun y se la metió de nuevo en el coño, y ahora venciéndose hacia delante tomó el mando con sus caderas, ahora me estaba matando ella a mi y logró que reventara eyaculando en su interior, sin dejar de mover sus caderas hasta que volví a ponerme duro, se giró para chupármela unos 10 minutos para dejarla bien preparada, se montó encima ya de cara a mi, y dirigió a su ano mi falo, con algo de temor fue apretando para metérselo hasta la mitad y volver a tomar el mando con sus caderas, estaría algo dolorida por que no bajo más, pero disfrutaba ahora besándome y dejándome jugar con sus tetas, logrando con el paso de los minutos que sus corrientes emanaran con algún roce de mis dedos, me fui a correr, con cuidado la saqué de su culo y la hundí en su coño hasta el fondo y allí saqué de nuevo a la bestia, allí la martiricé haciéndola darme una bofetada entre gemidos de gusto, arqueando su espalda dejándome sus senos a mi disposición, lamiéndolos y chupando sus pezones, para sacarla otro orgasmo que la dejó tiritando antes de terminar corriéndome en su interior de nuevo, cayendo los dos fundidos a la cama.

-ANA: quiero dormir contigo.

-YO: ya conoces las reglas, así descansamos los 2 en una cama grande sin el cuerpo del otro molestando jajaja.

-ANA: pero yo te quiero en mi cama.

-YO: son solo unos días, aguanta por mí………. y por Lara - la di un beso a la vez que un azote en el culo, para dejarla irse.

Dormí como un lirón hasta la mañana siguiente, Lara estaba en la puerta y me miró lujuriosa, mi empalme mañanero la llamó desde la otra habitación, se tiró encima mía al verme asentir, tumbándose boca abajo encima mía, frotando mi miembro en su vientre mientras sus tetas eran trabajadas por mis manos y nos besábamos, su olor a vainilla me encendió y sin más la separé las piernas y la hundí en ella sin esfuerzo, la fui penetrando hasta el punto del día anterior, y temblando al notar de nuevo abriéndome camino, se tumbó dejándome comerla las tetas, la saqué un orgasmo solo con estar dentro y mis labios en sus pezones, comencé a follar, con gestos cortos y rápidos fui creando fricción hasta que ya solo habían gimoteos de gusto, ni 15 minutos aguantó, se corrió abundantemente, pero para mi sorpresa se salió y continuó haciéndome una cubana comiéndose el glande, su truco para ganar tiempo a recuperarse, para unos minutos después volver a embutirse mi polla y dejarme reventarla 20 minutos más, se corrió casi desvaneciéndose. aguantó bien hasta que me fui a correr, allí saqué a la bestia a pasear y agarrándola de las caderas me volví un martillo neumático, haciendo gemir y gritar quedando inmóvil esperando el desenlace, deseando que continuara y parara a la vez, entendió que me iba a correr y se la sacó para dedicarme un mamada de cine, jugado con su lengua y acelerando sus manos, para llenarla la boca de mi simiente, no dejó escapar una gota, succionó y tragó sin descanso hasta dejármela limpia, me miró sin saber si seria suficiente para mi, no lo era, pero la dije que si, se fue orgullosa, la verdad que para ser el “desayuno” no había estado mal.

Salí a beber algo y me encontré con las 2 en la cocina, con un silencio cómplice y risas, desayunamos algo, volviendo a nuestros cuartos, indagué en la habitación de Teo y Alicia, hasta encontrar un cajón con un consolador enorme, mayor aun incluso que el que le vi a Alicia en su día, muy escondido, era negro y casi de mi tamaño empalmado, la idea se cruzó en mi mente, con él, fui derecho al cuarto de Ana, que al verme se alegró montándose encima mía y a horcajadas en el aire se metió mi polla, la apoyé contra la pared y la masacré haciéndola gritar hasta correrme, pero Ana quería más, la tumbé en la cama y le enseñé el consolador, mirando sorprendida, sin entenderme, bajé a su coño y su ano y se lo comí hasta dejarlos bien preparados con mis deseos, fui metiendo el consolador en el coño de Ana dejándoselo dentro, no costó demasiado al estar acostumbrada a mi rabo, pero la sorpresa fue ponerla a 4 patas y empezar a meter también mi rabo por el ano, volvió a gritar poseída al ser penetrada por ambos agujeros por tan enormes miembros, apenas sobresalía el de plástico y desde esa posición, según fui aumentando mis penetraciones lo iba golpeando metiéndolo y sacando de su coño a la vez, Ana se corrió tan rápido y tan fuerte que casi no era ella, pero fui a por todas y saqué a la bestia, partiéndola el culo llevándola al éxtasis de orgasmos una y otra vez, agarrando la polla de plástico cuando se salía un poco y con ella follarla el coño a la vez que mi tranca la abría el ano, se desplomó para aguantar mejor con el culo en pompa, allí cambié de agujeros y metí mi polla en su coño y la de plástico en su ano, al ser más pequeño sintió alivio al notar su ano cerrarse un poco, pero su coño fue masacrado 30 minutos, hasta hacerla desvanecerse con el frenesí final de mi corrida, la pobre Ana estaba ida pero sonriendo, la dejé con el consolador en el ano, y me fui a por Lara, estaba aun cachondo, al abrir vi a Lara masturbándose al estar oyéndonos follar, al verme se le iluminó la cara y se abrió de piernas aceptando su destino y su castigo por estar tocándose sola, me tumbé encima de ella y poniéndomela dura con sus tetas, la empalé el coño hasta donde llegó, algo más de lo que había entrado las últimas veces, ella lo sintió pero se dejó masacrar 1 hora reventado en orgasmos cada pocos minutos, pero sin llegar a desmayarse, sin duda estaba mejorando mucho, su cadera se movió un poco para generar velocidad, al ir a correrme, me puse de rodillas en su vientre y con sus tetas terminé de pajearme para correrme en su boca, de nuevo no dejó escapar una gota y se lo tragó encantada, al estar medio ida ni se enteró de cuando me fui, estaba en plena vorágine y volví a por Ana, al verme en la puerta se asustó, pero sonriendo se pegó a la pared de cara a mi, y me dio permiso para montarla encima mía y empotrarla contra el yeso, me rodeó con las piernas la cintura y la hundí en su coño, vi que llevaba el consolador enorme en la mano, pero solo quería apagar mi fuego con ella, y así lo hice, sintiendo sus fluidos corriendo por mis piernas, aguantó 40 minutos presentando batalla y moviéndose sobre mi, pero luego se rindió y me dejó desatarme, era mi 4º corrida en poco tiempo y me costó llegar al punto de matarla, estaba agotado pero excitado a más no poder, saqué a la bestia que andaba ya cansada también, y los últimos 10 minutos hasta correrme fueron un ejercicio de superación, dando golpes de cintura tales que Ana se elevaba por los aires con su cuerpo semi inerte, llevándose las manos a la frente de forma desordenada. Al acabar me apoyé en la pared para retomar el aire, con Ana tirada sobre mí como una prenda en una silla, respirando a mi ritmo, me quemaba el pecho, y cogía aire por la boca de forma agónica. Me dio para dejar a Ana en la cama, con espasmos lentos y largos. Me volví a la cama de mi habitación, pase por delante de la puerta de Lara que al veme, aun abriera de piernas y sudorosa en la misma posición en que la había dejado, me negó con la cabeza, la dejé pensar que no me la tiré por que se negó, era lo que buscaba, darla cierta capacidad de decisión, pero es que en realidad no podía, llegando a mi cama me deje caer y me dormí unas 10 horas, al despertarme vi a Lara con una botella de agua que me bebí entera.

-YO: ya no eres mi esclava, no tienes por que hacer esto.

-LARA: no tengo, quiero hacerlo, y cállate, no hables.

Según dijo eso se tumbó entre mis piernas y comenzó una mamada, no paró hasta sacarme su ración de semen, pero no se lo tragó, s se levantó y se fue, la seguí viendo como se metía en la habitación de Ana, presupongo que le dio su parte de semen, y comenzaron a hacer el amor, por los gritos, y confirmación de después, Ana estaba usando el consolador enorme con Lara, hasta que llegó el punto en que la metió tan dentro que la rozo la pared del útero, sacándola un grito de dolor, “una lastima”, si esa polla llegaba hasta allí, la mía, ligeramente más larga, aunque igual de ancha, no la podría penetrar entera nunca, pero tampoco era un obligación para disfrutar.

Desayuné y preparé algo para ellas cuando salieran, luego me fui al cuarto y lo arreglé para que no se notara mi presencia, fui a mi cuarto a dejar las cosas pero no estaban ellas, se habían mudado a seguir follando ellas al cuarto de Lara, las oía martirizarse la una a la otra, me acosté en la cama de mi habitación para descansar, seguía con dolores y agujetas del día anterior, luego salí a la cocina a comer algo, allí estaban ellas jugueteando sin parar.

-YO: bueno chicas, son las 4, sobre las 7 estarán aquí estos, así que doy por concluido el juego.

-LARA: no, esto no se ha acabado, ahora nos vamos los 3 a vuestro cuarto y nos vas a follar como ayer.

-ANA: eso, pero a las 2 juntas, nada de habitaciones separadas.

-YO: como gustéis.

Ana se puso a cocinar, ver su culo moverse desnudo era un provocación que me la puso dura, más aun con Lara encima dejándome sobarla las tetas, la penetré delante de Ana, que mientras cocinaba miraba de reojo como me follaba a Lara y como sentado en la silla la hacia volar por los aires con cada golpe de cintura, saqué a la bestia, la cogí y la tumbé en la mesa, agarrando sus tetas comencé a casi violarla, se resistía a ser así de brutal pero a los pocos minutos gozaba encantada, sus series de orgasmos la llevaron a desvanecerse, era colosal follarte su cuerpo inerte viendo sus tetas moverse.

-ANA: déjala ya, pobrecilla que la estas matando……...- lo dijo de espaldas sin prestar mucha atención, me fui a por ella y mientras daba vueltas a una olla con pasta cociéndose, metí mi polla en su coño desde atrás.

-ANA: ainss para, tonto……...- ni caso, fui aumentando el ritmo de mis embestidas sin hacer caso de sus “no”, continuos, hasta que ya no había “no”, solo gozar y llegar a apoyarse en la encimara para hacer fuerza contra mi y pedirme que la follara como a una salvaje.

Saqué a la bestia de nuevo, la metí en su culo desatando toda mi furia hasta el punto de pegar a Ana a la encimara, calculé unos 20 minutos, lo que tardó el agua en empezar a hervir, cuando Ana se desvaneció en mis brazos ante el empuje final, partiéndola el culo, la pobre se había agarrado a un estante, y yo a la encimara, percutiendo en su cuerpo, los 4 minutos finales fueron demenciales, incluso para mi, no se por que me tenia loco aquella pose, me corrí con un espasmo que casi me dobla.

La comida la terminé de hacer yo mientras Lara se recuperaba encima de la mesa y Ana sentada en una silla pretendía dejar de tener convulsiones en su trasero, mirándome cariñosamente ofendida. Cogimos fuerzas comiendo, devolví el mega consolador a su sitio, y nos echamos una ligera siesta los 3 juntos pero duró lo que a mi se me puso dura, entonces tomé a Lara y me la puse encima de cara, la atravesé de golpe todo lo que podía, rocé claramente la pared de su útero, pero solo quería saber la medida para no hacerla daño, la entraba casi toda, unos 4 centímetros fuera, más que aceptable, la verdad es que siendo una gran satisfacción penetrar completamente a una mujer, y más mi caso, a la hora de follar no se la metía entera todo el tiempo. A partir de ahí, di rienda libre a mis caderas, sacándola tantos orgasmos que su cuerpo y sus tetas cayeron sobre mi cara, lo que la mató más dejándome sus sensibles pezones a mi alcance, para ser el 3º día en que me la follaba, aguantó hora y media ella sola, hasta me corrí y con sus tetas me la volvió a poner dura para seguir matándola, me pidió que se lo hiciera contra la pared, como con Ana, encantado de ver sus tetas luchando contra la gravedad y las leyes de la física ante mi fuerza, sin quitármela de encima me puse en pie besándonos y luchando con nuestras lenguas, me rodeó con las piernas y la empujé ferozmente contra la pared, no me equivocaba, Lara follaba muy bien y sus tetas botaban de maravilla, no solo aguantaba bien si no que sus caderas iban cogiendo confianza para moverse, cuando no dio de si y se desmayó, la dejé en el suelo y ataqué a Ana, que se había mantenido aparte, mirándonos excitada, me tumbé sobre ella rodeándome con sus piernas y la empalé el coño hasta el fondo comiéndome sus tetas, dejando que su cadera hiciera parte del trabajo 1 hora seguida, alternando sus labios y su cuello con sus tetas, y variando la posición un par de veces, juntándole las piernas o poniéndoselas por encima de mis hombros, hasta que me volví a correr, pero Ana quería seguir, siempre quería más, así que la puse a 4 patas y la follé por el culo, metiéndola de forma lenta y con cuidado, lo tenia algo irritado, pero empujando contra mi se la metió sola entera, se puso de rodillas pegando su espalda a mi pecho y así saqué a la bestia a divertirse, un martillo sin compasión que la hacia reventar de orgasmos, muchos de ellos continuos y con cantidades enormes de fluidos, mientras mi mano la masturbaba el clítoris y la otra la sujetaba de los pechos, acelerando el ritmo en varias ocasiones golpeando en las nalgas de Ana que se movía lujuriosa haciendo círculos sin parar, estaba gozando y medio ida pero mantenía la pelea, sabia que me encendía verla querer aguantar.

Eran casi las 6 de la tarde y aun quería otro asalto con Lara, así que aceleré la llegada de mi frenesí final de 5 minutos, fueron 15, Ana se desmayó un par de veces entre medias pero la oleada de sensaciones la hacia volver enseguida, golpeé con tal fuerza al sentir los espasmos en mi polla que en el último mandé a Ana medio metro lejos de mi en la cama, retorciéndose de placer residual, me di la vuelta buscando a Lara, que estaba de pie junto a la cama sonriendo mientras se masajeaba las tetas, sabia que yo no había terminado aun, y le tocaba, ocupó su lugar orgullosa y feliz, poniéndose de cara a mi, abierta de piernas, la comí el coño hasta volver a tenerla dura y empalarla hasta el nivel conocido como limite, cayendo sobre su tetas y follándomela sin parar otra hora, soportaba bien abierta de piernas o rodeándome con ellas pero luego se las juntaba y me las ponía las 2 en un hombro, eso generaba mucho roce y por ende, mucho más placer, o se las juntaba y la ponía de medio lado dándola algún azote, sin dejar de sacarla orgasmos al trabajar sus pezones de cualquier forma, chapándolos, lamiéndolos o tirando de ellos con fuerza, soportaba aquello gracias a su adiestramiento y logró que me vaciara.

Estaba muerto, me dolía y se me resentían los músculos, los últimos minutos los pasé rezando por correrme de una vez, no se como saqué a la bestia que ya hasta pedía clemencia, para terminar 20 minutos de locura haciendo que Lara gritara poseída azotándome la cara y clavándome la uñas en la espalda de tal manera que se me quedaron las marcas un par de días. Terminé cayendo y rondando hasta la mitad de la cama, con Lara riendo nerviosa al sentir como no controlaba sus piernas y estas se contraían de forma involuntaria, Ana medio recuperada se acurrucó en mi pecho dándome un largo beso húmedo y caliente.

-ANA: Lara ¿ves por que gritaba tanto?

-LARA: es una fuera de la naturaleza, nos folla como le da la puta gana, no se cansa y se recupera enseguida después de correrse, no me extraña que seas tan celosa, a este no lo podemos dejar escapar.

-YO: ¿yo puedo opinar?

-ANA: claro que si.

-LARA: que va, tú solo vas a follárme, como, cuando y donde te de la gana, las veces que quieras y durante el tiempo que quieras, soy tuya para siempre……..- miré a Ana, que me entendió, vio en Lara lo que me había pasado con decenas de mujeres, lo que le habría pasado a ella si no la hubiera entrenado de forma tan calmada y metódica.

-ANA: esa es la diferencia ente tú y yo, que follará contigo cuando él quiera, por solo hará el amor conmigo……. - y con esa frase nos dormimos los 3, con un olor asfixiante a sexo que emanaba de la habitación.

Ana y Lara – Honor.

A partir de ese día las sesiones de sexo fueron así, animaladas que me dejaban medio muerto, de vez en cuando Ana y yo hacíamos el amor, recuperábamos cierta parte privada y romántica de nuestra relación, pero era inevitable volver a estar 4 o 5 horas follando entre los 3, Ana era quien soportaba mi empuje, cuando me pasaba, Lara tomaba el relevo hasta donde aguantara, logrando mejorar rápidamente, pero al final siempre cedía entre orgasmos y se desvanecía, luego Ana volvía al poder. Según pasó el verano nos sobraba una habitación, Lara, Ana y yo dormíamos y vivíamos juntos, Ana era mi novia, eso estaba claro y era incuestionable, lejos del sexo Lara sobraba, no me aportaba nada, era un polvo más, no podía competir con Ana en eso, pero en la cama la cosa se puso tensa, Lara en un par de meses estaba siendo una loba insaciable, despertando alguna antipatía en Ana, sobretodo cuando Lara y yo follábamos sin Ana en casa, eran tonterías, piques entre ellas, pero Lara achantaba cuando me ponía serio a follar, no estaba a su altura, mientras que Ana ella sola podía aguantar a la bestia unas 3 horas y media, añadiendo el anal, Lara apenas llegaba a las 2 horas, eso sin anal y muchas veces sin ser la bestia, cuando la sacaba con ella no duraba ni 30 minutos seguidos, algo respetable si no fuera por el agravio comparativo con Ana.

La gente alucinaba cuando salía de fiesta con ellas colgadas de los brazos, si bien Ana por si sola merecía más atención que nadie, y yo igual para las mujeres, sumarle a Lara era ir empalmando a la gente sin querer. No pretendíamos hacerlo pero éramos muy desvergonzados y cachondos todo el tiempo, salíamos de marcha a bailar y tenia que prestarlas atención a las 2, Lara no mostró interés alguno en los demás hombres, pese a que tenia nuestra bendición o incluso consejo, si bien follando la hacia feliz, para mi estaba sola, se conformaba con las migajas de relación que le dejaba Ana, y eso no era sano para ella, aun así disfrutaba de su compañía, y del vinculo tan raro que se había formado, raro y maravilloso a la vez, estar bailando durante horas con las 2, metiéndolas mano y verlas jugar a ver quien me la ponía dura antes, sus olores a coco y vainilla me tenían en una nube de erotismo constante.

Mientas Ana seguía igual, Lara cambió, dejó los porros, sin ser una orden nuestra se lo pedimos por su bien, se dejó crecer el pelo y su forma de vestir evolucionó, paso de hippie a querer ser Ana y de ahí a convertirse en la típica pija de gran ciudad, vestidos ceñidos, tacones de aguja y escotes de vértigo, a menudo sin sostén, creo que todo guiado a querer superar a Ana, o provocarme sexualmente, esfuerzos inutilices, más de una vez la tuve que llamar la atención para que nos dejara a Ana y a mi salir solos al cine o follar tranquilos.

Lamentablemente le resto de mi vida no iba tan bien, me había pulido la mitad de los 100.000€ que gané con Madamme, aun había margen pero si comprobé que si mantener a una novia sale caro, mantener a 2 mujeres lo es más, mi sueldo cubría mi parte del piso y mis necesidades básicas, pero cualquier detallito o salida extra tiraba de aquel dinero, más el que daba todos los meses a la casa de mis padres. Esto, siendo importante, era un tema secundario, Teo y Alicia volvieron a las malas, más de una vez Alicia pidió permiso para dormir en la habitación de Lara, ahora casi desierta.

Charlando con Teo y Alicia después de sus muchas broncas, ya en publico, me di cuenta de algo, que con tiempo para pensar era evidente, Alicia se sentía atraída por mi, o mejor dicho, por mi forma de follar y mi polla, eso era claro desde el principio, no soy idiota, pero creía que era una fase o algo sin importancia, hasta que quedó claro que Teo lo sabia o se había dando cuenta, tampoco era idiota, un día de borrachera de su parte me confesó que estaba perdiendo a Alicia por mi culpa, por que la estaba poniendo tan cachonda que él no podía sofocarla y la trataba peor por ello, sabiendo que era mi culpa, pero sin poder decírmelo puesto que en el fondo, era él el que no podía competir conmigo. A mi me parecían chorradas, habían sido la pareja perfecta durante años, ¿y ahora por que yo follara bien tenia a Alicia tan perdidamente loca por mi que iba a dejar a Teo?, esto me lo confirmó la propia Alicia al hablarlo con Ana. La dijo que estaba pensado en dejarlo con Teo, que ya lo habían hablado, que él se iría a casa de sus padres y ella se quedaría en el piso, por la Universidad. Una excusa barata, o no, pero en el fondo Ana la estaba metiendo la idea de ser otro juguete a mi disposición, otro coño al que matar como Lara, ser una concubina más a mis órdenes, como alguno habrá intuido Ana quería formar una especie de aren a mi alrededor siendo ella la reina, pero aun siendo un viejo sueño, follárme a Alicia, la respetaba demasiado, sabia que valía mucho más que eso, y pese a que corté de raíz a Ana en esa dirección, la idea ya no era de Ana, si no de la propia Alicia, que viendo como acepté a Lara, pensó que ella podía ser la siguiente.

Alucinaba por esa cadena de acontecimientos, y de ver, para mi desgracia, como mi hermanita Alicia, la mujer más serena y con la cabeza mejor amueblada que conocía, se volvía una zorra descarada cuando nos quedábamos solos, sabia aprovechar su culo y los roces ”involuntarios”, y mi forma de tratarla, siempre tan gentil, amable, divertido y descarado, no ayudaba, pero me dolía en el alma, siempre había sido así con ella, siempre lo había sido con todas, pero solo ahora les atraía. Ahora tenía que coartarme, o cuando Teo se pasaba con ella y me ponía de su lado, ya no me daba la razón de forma inocente, si no que sus palabras iban un paso más allá, amenazando con dejarle si no tomaba ejemplo de mí, y eso repateaba más a Teo. Me estrujaba los sesos buscando soluciones para todos, Ana era mi novia pero estaba centrada en lograr que Alicia, su mejor amiga, fuera también cómplice de nuestro juego sexual, Lara era reacia a ello, ahora que tenia lo que buscaba de mi, no quería competencia pero tampoco seguir con su vida, así que aceptaría lo que fuera con tal de tenerme, y Alicia deseando entrar en esa tempestad, pensando en dejar a Teo, el amor de su vida, por echar unos polvos conmigo.

El día de mi cumpleaños, lo pasamos en la piscina, Ana se iba a ir junto a Lara a Granada a pasar parte del verano con sus familias así que aprovechamos bien los días, al volver a casa Teo y Manu volvieron a salir de fiesta a beber y las chicas se vinieron a casa conmigo, la actitud de ellas me dio mala espina, tramaban algo, pero siendo mi cumpleaños esperaba alguna sorpresa o regalo, según llegué a casa Lara me distrajo el tiempo suficiente como para que no me diera cuenta de su trampa, me cerró los ojos con una venda, atándome las manos también con un brida por delante y me llevó a mi habitación, allí noté como Ana se ponía del otro lado de Lara y comenzaba a acariciarme, metiéndome la mano en la polla, pajeando con inusitada suavidad, notando sus labios buscando los míos con un beso largo y tierno, me quedé quieto un segundo, su forma de besar y su olor, no olía a coco, ¡¡no era Ana!!. Me quité la venda al oír a Ana llamarme desde lejos, entonces vi como tenía a Alicia desnuda, pajeando, mirándome con pasión, yo atónito.

-ANA: no te asustes, es mi regalo de cumpleaños…..- sonrío mientras se me echaba encima junto a las otras 2.

-YO: ¡¿que haces Alicia?!

-ALICIA: lo que llevo deseando desde que te oí follar por 1º vez, desde que vi tu polla brillar y tu cuerpo sudoroso saliendo de tu cuarto cada noche…….- su mano pajeaba con gusto.

-LARA: tú tranquilo, y déjanos a nosotras complacerte……..- casi instruidas las 3 se pusieron de rodillas y Ana comenzó a chuparme la polla.

-YO: quietas, dejad que Alicia se vaya, no pinta nada aquí, tiene novio.

-ALICIA: no hables como si no estuviera aquí, quiero esto, lo necesito, a Teo no le soporto más, le voy a dejar y te voy a dejar hacerme lo que quieras………- quitó a Ana y se puso ella a dar pequeños lametones a mi polla, agarrándola con ambas manos, traté de apartarlas, pero eran perras de presa, cuando quitaba a una la otra tomaba el relevo, me la pusieron dura y la verdad, mi mente se relajó pidiendo a gritos que me dejara.

Ver a Alicia y Ana besándose usando mi polla como juguete, y a Lara comiéndome los huevos eran demasiado como para no dejarlas hacer, Ana instruía bien a Alicia en como meterse mi polla, pero ella ya tenia sus trucos, me derretí al ver que Alicia era de las que usaba los dientes, pasándolos de forma tibia por mi glande, las 3 hacían oídos sordos a mis peticiones de que pararan, que no lo quería, pero mi cuerpo si, la barrera mental de Alicia cedía, y un pequeño Teo en mi cabeza gritaba cada vez menos. Me llevaron a la cama y siguieron su duelo por ver quien comía más rabo, Alicia sin estar entrenada por mi lo estaba haciendo de escándalo, pero yo seguí resistiéndome sin saber como, quería levantarme pero Ana me conocía bien, puso a Alicia a 4 patas sobre mi cuerpo, dejándome su espectacular culo a mi alcance, aquel con el que había soñado años, totalmente desnuda y goteando de placer, mis manos hicieron caso del deseo, aquel que había aguantado años, clamando tener ese culo entre mis brazos, así que amasaron de forma suave y lenta aquel par de nalgas coronadas con una cintura de pecado, al notar eso Alicia se estremeció dejando de comerme la polla, dando vía libre a las otras 2 mujeres, se incorporó hasta quedar de rodillas con su coño metido en mi cara, olí su interior, saboreé sus fluidos y me extasié al verla frotarse con mi cara.

-ALICIA: vamos, no te resistas, se que me deseas, lo sé por tu mirada, me has querido desde la 1º vez que me viste, te has portado bien conmigo, has sido un buen amigo y ahora quiero compensarte, cómeme el coño, se que ansias follárme y te dejaré hacerlo, me follarás como el animal que eres y me abrirás en dos, tú lo quieres y yo lo necesito………..- se acariciaba el coño masturbándose ligeramente, pero pude detectar cierta dosis de lastima en su voz.

Todo lo que dijo era cierto, nada más conocerla traté de acercarme a ella usando la excusa de enseñarla las conjugaciones, pero precisamente por que andaba detrás de Teo era mi hermanita, de golpe rememoré cada instante en mi cabeza, desde que la conocí hasta ahora, pasando mi vida a su lado, los momentos buenos y malos, como siempre había sido dulce y amable conmigo, cuando nadie lo era al estar gordo, como me trataba, y lo bien que me hacia sentir, iba a follármela, lo tenia clarísimo, incluso abrí la boca besando su húmedo interior, pero algo hizo clic, en mi cabeza, por alguna razón vi a mi padre dándome una charla, era totalmente absurdo, tenia al amor de mi vida comiéndome la polla, con el permiso de poder tirarme a la mujer de tetas más increíbles que conocía y a la mejor mujer que había conocido, la novia de mi amigo, arrodillada en mi cara pidiendo que me la follara…………. ¿y yo pensé en mi padre? Estaba mal de la cabeza pero aquello era demasiado, me miraba decepcionado, y eso me dolió, mucho más de lo que podía estar disfrutando.

-YO: quitaros de encima.

-LARA: ¿que dices?, déjanos que te llevemos al paraíso.

-YO: apartaos por favor.

-ALICIA: venga, no me hagas esto, ahora no.

-YO: no lo advierto más, PARAD - las 3 se tensaron y dejaron de moverse, Alicia se apartó de mi cara, mirándome a mí y a Ana, sin comprender por que.

-ANA: venga amor, no seas así, solo estamos jugando…….- pero me vio la cara, sabia que estaba enfadado.

-YO: esto no es un juego, esto es la vida de la gente, puedo entender que Lara este así, pero no Alicia……..- la miré a los ojos -……… tú vales más que esto, no te mereces las migajas ni ser el 2º o 3º plato de nadie, eres la mejor persona que he conocido y te mereces ser feliz junto a un hombre que te quiera y te complete, y ese no soy yo, es Teo, yo estoy con Ana, y tú eras feliz con Teo, no cambies eso por mi, no merezco la pena, no si te cuesta tu relación - se echó a llorar al comprender que no iba a pasar nada, y la cruda verdad de mis palabras.

Me incorporé quitándome a Lara de encima que seguía masturbando, Ana se quedó de piedra sentada en la cama, me di la vuelta para ver a las 3 chicas mirándome incrédulas, ni yo me lo creía, tenia a 3 adolescentes con culos y tetas de campeonato, deseando follárme y yo iba a salir de la habitación por……….¿honor?, me enfadé tanto que al darme la vuelta le di un puñetazo a la puerta del armario, la cual se rompió dejando un agujero tremendo ante la cara de miedo o y asombro de las chicas, al sacar los puños con fuerza saqué la puerta del encuadre y se quedó colgando, con tal energía que se cortó la brida, y de paso, me hice un tajo en la mano, salí gritando algo que ni me acuerdo, con un enfado tan monumental que se me bajó el empalme. Me fui a la cocina a lavarme y desinfectarme la herida, a punto de echar a llorar, pasó un tiempo prudencial, y apareció Ana con más miedo que otra cosa.

-ANA: ¿estás bien amor?

-YO: no, no lo estoy.

-ANA: siento si te ha molestado, no pretendía……..- la corté con una mirada fugaz.

-YO: se que no pretendías nada malo, pero te has pasado, no tenias derecho a hacerme esto, no con Alicia, ni tienes derecho a hacerles esto a ellos.

-ANA: yo no les he hecho nada, solo me aproveché de que Alicia estaba colgada de ti.

-YO: pues como amiga tendrías que haberla apoyado y ayudado con Teo, no haberla llevado a esto, no esta bien y no lo quiero………- Ana se iba acercando con cuidado, pese a que no estaba tan enfadado, mi tono era tan contundente que la provocaba estupor.

-ANA: esta bien, no seguiré jugando con Alicia, ¿vale?, por favor, no te enfades con ella, es culpa mía, castígame a mi……. - se le humedecían los ojos,

-YO: no quiero castigarte, te quiero, has cometido un error, no pasa nada, todos los cometemos, nada va a cambiar entre nosotros, pero esto hay que solucionarlo, no podemos dejar que Alicia siga así con Teo.

-ANA: ¿que podemos hacer?, mientras vivamos juntos seguirá encoñada contigo y Teo seguirá cabreado por ello………- de golpe la miré, había dado en el clavo.

-YO: pues habrá que dejar de vivir con ellos.

Solo había una solución, sacarme a mi y a Ana de la ecuación y dejar que todos volvieran a ser ellos mismos, sin mi, teníamos que dejar de vivir juntos, Ana y yo éramos un peligro, yo era un peligro para cualquier mujer que viviera bajo mi techo.

Raúl – La solución.

No se que mierda me pasaba a mis cumpleaños, los 18 los cumplí en la cama de un hospital, los 19 dejando a mi 1º novia y los 20 habían empezado con un desastroso intento de Ana por regalarme a Alicia, rompiendo la pareja de mi mejor amigo y enfadándome de tal manera que abandoné la habitación con Ana, Lara y Alicia desnudas suplicando sexo, la sensación ahora, visto con espacio y tiempo de por medio, es que desaproveché una grandísima oportunidad, como la gente que aparece en los telediarios “un joven se encuentra un maletín con 1 millón de € y la devuelve a su dueño”, sin duda un ejemplo de honradez, carisma y sobriedad, pero os aseguro que ese chico se pasará el resto de su vida soñando con que hubiera hecho con ese dinero. Ese era mi caso, después de curarme la mano, (al romper el armario de un puñetazo me hice una herida más importante de lo que pensaba, en el ambulatorio me dieron 5 puntos en el dorso), y hablar con Ana, me di cuenta de que no podíamos seguir viviendo todos juntos, después del esfuerzo y el trabajo que me costó esa casa, sin llegar a hacer el año dentro, ya tenia que marcharme, era por el bien de Teo y Alicia, mi forma de vivir con Ana no era compatible con mujeres emparejadas, quería tanto a Alicia y respetaba tanto a Teo que estaba dispuesto a sacrificarme por ellos, e irme de esa casa. Ana y yo lo hablamos, largo y tendido, me quería convencer de que Alicia y Teo iban a dejarlo, ¿que más daba irnos?, pero para mi no había vuelta atrás, me creía culpable e iba a evitarlo a toda costa, y si yo me iba Ana dejó claro que me seguiría, pese a que el piso le venia perfecto para la universidad, ya fuera debajo de un puente o volver a casa de mis padres. Lo hablábamos solos, sin que Lara supiera nada, era otra a la que le debíamos devolver su vida, era un mero coño para mí, y quizá imponiendo mi criterio groseramente, decidí que ella también merecía tener una relación normal y debía dejarlo con ella, era demasiado joven para conformarse con las migajas. No se por que pensaba que mi forma de pensar era la correcta y daba igual la opinión de ellos, si Alicia quería dejar a Teo o si Lara quería seguir siendo el perro al que le das las sobras, ¿quien era yo para decidir por ellos?

Pues era el causante, el fallo de base de toda la estructura, mientras las mujeres pudieran verme, oírme o intuir como follaba y como la tenia de grande, era una provocación imposible de evitar, no quiero dármelas de chulo o prepotente, aunque por aquel entonces creo que lo era, pero había un hecho innegable, Alicia era la mujer más sensata, lista y recta que había conocido, amaba y quería con locura a Teo y le había sido fiel hasta cuando muchos tíos de mejor porte o físico la habían intentado separar de él, Teo era mono y muy divertido, pero físicamente no era nada del otro mundo, un tío normal, y si analizamos la belleza exterior de ambos, Alicia era un 8, y Teo un 6 raspado. Y si ella, después de todo eso, en menos de 11 meses viviendo juntos, había sucumbido, cualquiera lo haría.

El plan era claro, Ana y Lara se volvían a Granada en unos días a pasar el final del verano con sus familias antes de volver para el inicio de la universidad, para cuando volvieran yo debía encontrar algo donde vivir con Ana, a ser posible no muy lejos de allí por su cercanía a la universidad donde Ana iba a seguir estudiando, también quería seguir manteniendo a mis amigos cerca, evitar la tentación de vivir bajo el mismo techo, pero no cortar de raíz la relación con mis mejores amigos. Aparte debía buscar gente para ocupar la habitación vacía que íbamos a dejar, y así cubrir el piso, aunque de eso se podían ocupar ellos mismos, el piso se vendía solo y habría cientos de estudiantes desando pagar por esa habitación. Pero todo eso era prematuro, nadie sabia nada aun, y así debía ser, hasta que tuviera al menos un principio de idea de lo que demonios fuera ha hacer.

Estudié la 1º opción, volver a casa de mis padres, la idea original al saber que Ana vendría a estudiar a Madrid, pero era inviable, era a las afueras, hora y media en transporte publico a mis amigos y la universidad para Ana, y aunque ahora tenia coche y moto, era un gasto en combustible casi peor, sin nombrar que en casa de mis padre no podríamos follar como ya estabamos acostumbrados, rechazada esa idea, sopesé mirar pisos de 1 dormitorio o estudios por la zona, pero todo se iba de precio y las condiciones eran horribles, la verdad, acostumbrados ya a nuestra gran y cómoda casa, meternos en una caja de zapatos con goteras no nos atraía, Tenia los casi 50.000€ que me quedaban de Madamme, pero si tiraba de ello ¿cuanto duraríamos? ¿y que pasaría cuando terminara el dinero? Ni yo ni Ana queríamos eso, así que me puse a buscar ideas, ¿pisos compartidos solo de chicos?, ¿volver a la prostitución ?, ¿pedir dinero?, todo nos sonaba o muy mal, o rematadamente mal, hice llamadas, sacando la vieja agenda, pero nadie me daba soluciones, hasta mi leona, a la que después de tantos meses llamé para quedar, se presentó con un hombre a la cita, por aquel entonces su prometido, me pilló de sorpresa, tampoco esperaba que una mujer de unos 38 años estuviera en su casa encerrada esperándome de por vida, había hecho su vida como cualquier mujer y tenían planes de casarse pronto, bastante lío tenían como para ayudarnos. Eso si, en un momento a solas me susurró.

-MERCHE: tranquilo, sigo siendo tu leona, lo seré siempre, solo tú me dominas, él solo me hace el amor, tú me follas como jamás soñaría - nada que no supiera ya.

La sonreí por cortesía, su mirada echaba fuego al palpar mi polla por encima de la ropa, pero fue fugaz, y yo no estaba para fiestas, llevaba 1 semana follando a desgana, Ana me mataba y hasta Lara se sentía poderosa ante mi, no recuerdo ni si llegué a tirármelas de nuevo juntas. Mi última bala, la que seria el suicidio, era llamar a Madamme y que me ayudara en lo que fuera, pero eso conllevaría varias cosas, lo 1º volver a la prostitución, seguro, y lo 2º y peor, sacar a Zeus del abismo donde le dejé, y eso era lo último que quería.

Pero aun había un halo de esperanza, acudí a la única persona con dinero y recursos que nos podía ayudar, (algo que nunca fue una buena idea), Eleonor, la madre de mis colombianas, era la mujer florero de un magnate millonario, a la que me folle junto a su hija en su día, desde que me las tiré a ambas justo antes de la mudanza, dejándolas una nota, no había tenido contacto con ellas, si con Yasmine, que había encontrado un buen chico y según tenia entendido les iba bien. La llamada la pilló por sorpresa, y nos invitó encantada a su casa, a Ana y a mi, la comenté un poco de que iba la historia pero insistió en quedar para vernos, así que quedamos en ir a verla el viernes previo a que Ana se marchara a Granada el lunes, ni tuvimos que coger el coche, la casa de Eleonor estaba a 2 o 3 paradas de metro, no más de 20 minutos andando como comprobamos al ir. Al subir Ana alucinaba con el edificio, era de alto copete, y nos dirigíamos al ático donde Eleonor vivía, opulencia y clase por donde miraras, al abrir la puerta nos recibió con una sonrisa enorme y pidiéndome un abrazo dándome una serie de besos en la mejilla, totalmente ilusionada, Ana fingió cortesía saludando, al recibir también una serie de halagos protocolarios de Eleonor, Ana sabia mi historia con ella y al verla tenia motivos para andar celosa, seguía siendo una diosa latina, embutida en un vestido azul brillante, ceñidísimo, elástico, que no pasaba de medio muslo y poco escotado para lo que la recordaba, de cóctel casi, totalmente arreglada, incluso demasiado maquillada para mi gusto, y con unos buenos tacones, como si estuviera grabando un anuncio o una telenovela.

-ELEONOR: venga pasen, no se queden ahí como pasmarotes, por favor, que delicia de joven, mire que Yasmine me habló de usted, pero Ana, sois hermosa y venís preciosa…...- su forma de hablar y de tratar a la gente siempre era así de abierta y extrovertida

Tampoco mentía, sabiendo donde íbamos, Ana se puso un traje blanco, con pantalones algo ajustados en su culo pero de campana en las perneras, con un chaqueta abierta a juego, y una de sus blusas rosas chillonas escotadas, con unos buenos tacones, bien peinada, con un ligero maquillaje y un bolso de mano que le daban un aire a hija de famosa, no se si es que no quiso desentonar o pretendió no desmerecerse ante Eleonor, pese a no verla más que en alguna foto, mis palabras sobre ella siempre fueron de respeto hacia una mujer con clase, elegancia y bien arreglada, puede que hasta la sobre estimara, o que al hablar de ella me brillaran los ojos, Ana no quería ser menos. Las 2 eran un escándalo de bellezas, cada una a su manera, mientras que yo…..bueno, digamos que no iba preparado, en bermudas y una camiseta vieja y zapatillas, siempre he tenido mucho calor y en pleno verano no iba a arreglarme para sudar como un pollo, siempre he sido más practico que coqueto. Nos hizo pasar hasta el gran salón donde nos sentó ofreciéndonos algo fresco de beber que aceptamos gentilmente, sedientos de la caminata bajo el sol, y sentándose enfrente, cruzándose de piernas y cogiendo una postura tan elegante como sensual, empezamos ha hablar.

-ELEONOR: mírenlos, que parejita más bonita, agarrados de la mano como primerizos jajaja, ¿que tal les va todo?

-YO: bien, la verdad es que estamos en un momento precioso y la quiero con locura…. - mirando a Ana a los ojos queriendo hacerla ver que aunque estuviéramos allí, con Eleonor, en mi cabeza solo estaba ella -….. y quiero pensar que ella a mi también, aunque no se por qué, si soy un desastre - rieron ambas.

-ANA: es un bobo, pero es mi bobo, le quiero más cada día, cuando creo que no me puede enseñar más, me sorprende, y me hace mejor persona…..- me la quedé mirando, no parecía una frase hecha, si no algo que realmente sentía, la besé la mano con ternura.

-ELEONOR: ainns que gusto da ver que el amor sigue en este mundo.

-YO: ¿y tu que tal? no he hablado mucho con Yasmine, y no suelta prenda de tu vida jajajaja.

-ELEONOR: bien, muy contenta por que mi hija por fin tenga a un chico tan amable y tal dulce, es un cielo de hombre y la esta haciendo feliz…….. - se abrió de ojos mirándome -……..aunque no quiero decir que…….- me miró y a Ana, sin saber muy bien como seguir, yo la entendí.

-YO: tranquila, Ana sabe todo, y cuando digo todo, es todo lo que ocurrió entre nosotros…..- Ana asintió con una medio sonrisa mientras Eleonor tenia su risa de cara de póker, le sorprendería que le hubiera hablado de todo, de hecho estaba sentada en el sofá contra la que la folle por 1º vez.

-ELEONOR: bueno, pues sin querer parecer muy atrevida, tu hombre nos dio mucho cariño a las 2 cuando más lo necesitábamos, y la verdad es que lamentamos mucho su marcha…….- vaya forma más dulce y delicada de decir que me las había follado hasta reventarlas, que fueron sodomizadas hasta ser su macho, dominándolas con la mirada, y que echaba de menos mi polla abriéndola en 2.

-ANA: jajajaja ya supongo, es muy especial cuando se pone……..- se había dado cuenta perfectamente de lo que quería decir.

-YO: la verdad, ha sido un placer volver a verte, pero tengo que ser sincero contigo, no he venido por placer, tenemos una situación delicada donde vivo y necesitamos ayuda para encontrar piso, he intentado mil cosas pero no se a quien acudir - siendo en parte cierto, la acentué para dar algo de pena.

-ELEONOR: ¿y puedo saber el motivo?

-ANA: la verdad es que es Raúl el que insiste en irnos de donde estamos, vivimos bien pero han surgido algunos problemas de convivencia con las demás chicas del piso y quiere irse de allí.

-ELEONOR: entiendo.

-YO: no te molestaría si no lo creyera importante, me conoces, solo quiero tener un sitio donde poder hacer mi vida sin molestar a nadie por culpa de mi……….carácter - me salió esa palabra como podía haber salido cualquier otra, en realidad me refería a mi polla, y ambas lo sabían, pero manteníamos las apariencias.

-ELEONOR: ¿y que se supone que puedo hacer por ustedes?

-YO: no lo sé, se que eres una mujer rica y con influencias, quizá si fueras tú quien va buscando el piso y no 2 críos como nosotros, podrías encontrar algo mejor de precio o yo que se, la verdad es que he venido con las manos vacías, estoy desesperado.

-ELEONOR: ay cariño, ojalá pudiera ayudarte, pero estoy atada de manos, no soy rica ni tengo influencias, soy la esposa del hombre rico y con influencias, vivo en este palacio encerrada y atormentada por un esposo que ya ni pasa por casa.

-YO: lo siento, no sabia que hubiera ido a peor.

-ELEONOR: jajaja no se preocupe, son cosas de adultos que gracias a dios ustedes no conocen… - me levanté y me arrodillé frente a Eleonor, a quien se le humedecían los ojos, tratando de aguantar el tipo.

-YO: ¿sigue saliendo de juerga?

-ELEONOR: si solo fuera eso, antes al menos disimulaba en casa, pero ya ni eso, bebe mucho y se pasa meses sin venir, y cuando viene………..déjenlo, son cosas de mayores - me dio tanta lastima que la fui a acariciar la cara con dulzura, pero ella reaccionó con un gesto reflejo apartando la cara con susto, había visto demasiadas películas y anuncios contra la violencia domestica, que lo reconocí al instante.

-YO: tranquila, no quería asustarte…...- me miró a los ojos a punto de echar a llorar, dándose cuenta de que yo me había dado cuenta.

-ELEONOR: no, por favor, perdónenme, ando muy tonta jajaja - quiso disimular, pero ya era tarde, hasta Ana se percató y se sentó a su lado abrazándola.

-YO: Eleonor, se que no es de mi incumbencia, pero dime, ¿te ha puesto la mano encima?

-ELEONOR: no……….. por dios……….¿como se le ocurre?, jajaja……… no es así - balbuceaba sin admitirlo, tenia que saber la verdad, saqué al macho que ella recordaba en mi tono de voz.

-YO: ¡¡ELEONOR, MÍRAME Y DIME LA VERDAD!! - me observó como un cachorro al que riñen.

-ELEONOR: no es culpa suya………….- le levanté mordiéndome el puño -……..no se enfade con él, es culpa mía, yo le provoco y le hago enojar…….. - sonaba demasiado irreal y típico como para ser cierto.

-ANA: no entiendo, es como cuando estabas con Raúl, ¿algún azote o cachete de más? - suspiré por que fuera eso.

-ELEONOR: no, bueno, no es esa forma, Raúl es fuerte y viril, mi marido no lo hace en la cama o para jugar, solo quiere que le respete, y le entiendo.

-YO: una cosa es respeto y otra que te pegue, ¿que te ha hecho?

-ELEONOR: nada, si casi no esta por casa, son solo broncas que tenemos, y yo le enfado por que quiero que este más conmigo y se comporte mejor, pero él me tacha de mantenida y de estúpida, que donde estaría yo sin él, cuantos hombres me estrían montando por unas monedas en Colombia, si no fuera gracias a él………… y tiene razón.

-YO: como vuelvas a justificarle el que te cruza la cara soy yo, ¿como permites que ese mierda te pegue? si se va de putas y todo.

-ELEONOR: es mi marido, no puedo hacer otra cosa.

-ANA: dejarle.

-ELEONOR: cielo, ya lo he pensado miles de veces, pero mi niña necesita tener una buena vida y solo la tendrá si yo sigo con él.

-YO: pero puedes divorciarte, y sacarle algo de dinero, ¿no?

-ELEONOR: ya lo miré, pero al casarnos me obligó a firmar un acuerdo prematrimonial muy estricto, si yo le dejo no veré un solo €, y todo esta a su nombre.

-YO: pero eso es una locura, si se va meses de casa, se va de fulanas y ahora llega a casa ¡¡y te pega!! ¿Me dices que no se puede hacer nada?

-ELEONOR: ya lo hablé con una abogada, pero todos le tiene mucho miedo a mi marido, es muy poderoso y controla transacciones de miles de millones, tiene un ejercito de abogados, y nadie se va a enfrentar a él sin tener algo sólido en la mano con lo que poder presentarse.

-YO: vaya mierda de justicia.

Ana fue la lista y desvió un poco la atención, rebajando la charla, usando el piso como objeto para que se lo enseñara y la distrajera, alucinando con él, la verdad, mientras ellas deambulaban por allí yo estaba sentado en el sofá mirando como Eleonor se mantenía entera, con su elegancia y su clase intacta pese a su situación. Eleonor se disculpó cortésmente para ir al baño a retocarse, unas pocas lagrimas habían hecho perder la posición a su rímel, se metió en unos de los baños, dándola algo de tiempo prudencial me metí a buscarla, estaba de pie frente al espejo retocándose con algún tipo de esponja con polvos, se dio prisa en terminar al verme, para que no me percatara de su morado, me acerqué y con cuidado ante su silencio me dejó desmaquillar todo el ojo, no me equivocaba, es increíble lo que logran las mujeres con esos botes y polvos, tenia todo el contorno del ojo morado y ligeramente hinchado, con el aspecto de haberlo estado mucho más grande, y a simple vista no se le notaba nada, al verlo Ana, que entró detrás de mi, lloró, y yo por poco no reviento otra puerta de armario, me calmé y fui fuerte por ellas.

Ahora, tan cerca de ella y siendo algo más baja que yo, vi su exiguo escote, ahora me preocupaba, así que sin mucho disimulo la bajé uno de los hombros del vestido hasta ver como desde su hombro hasta uno de sus pechos había una marca larga, con un dibujo claro, un cinturón de hombre. La tapé con cuidado y respeto, no se si tenia más marcas pero con eso era suficiente, mis problemas habían quedado en 2º plano, mi prioridad ahora era ayudar a Eleonor a quitarse a aquel hombre de encima, y con una simple mirada Ana no solo me entendió, si no que me dio su apoyo y consentimiento, le brillaban los ojos de rabia mientras acariciaba la gargantilla que le regalé. Puse a Eleonor mirando al espejo, para que se viera, con el ojo hinchado.

-YO: ¿que necesitas para hundir a ese cabrón? - se miraba en el espejo empezando a darse cuenta de lo que ocurría de verdad, ese golpe no era un accidente.

-ELEONOR: no lo sé, un abogado con valor…..

-YO: le tengo, el padre de Teo es abogado y de los buenos - nos había llevado el tema de Ana con su profesor y pertenecía a un bufete bastante respetable.

Nos quedamos unas horas más charlando animándola un poco, distrayéndola, me enteré que Yasmine casi no pisaba esa casa ya, harta de que su madre fuera tan pasiva ante su padre, no se había emancipado por no dejar sola a su madre, pero estaba con el novio todo el día, me contó que se enfada mucho con su padre y una vez tuvo que mediar, lo que entendí fue que recibir golpes, para que su padre no pegara a la hija, no se soportaban y discutían hasta irse de casa días seguidos mientras su padre estuviera viviendo allí. Eleonor se sentía sola y que el marido volviera en unas semanas a casa, no necesitaba más, nos despedimos con un saludo y la dije que sabría pronto de mí.

La verdad, ese fin de semana fue raro, hice el amor y follé con Ana, era la despedida antes de su marcha, fueron sesiones ambiguas, los 2 con la mente en Eleonor y su problema, hablando más que teniendo sexo. Incluso me desahogué con Lara un par de veces como despedida, iba a echar de menos aquellas tetas, y hasta Alicia volvió a intentar meterse por medio al oírme con Lara, entró en la habitación pero la saqué sin un ápice de duda. Pero siendo todo erótico, lo dejo pasar sin narrarlo, no era nada que no lleve 2 relatos contando, y me parece más entretenida la consiguiente trama.

Según me despedí de Ana en el coche del tío que las fue a buscar el lunes a ella y a Lara, con Ana dejándome claro que me quería y que sin ella no me acostara con nadie, incluso Eleonor estaba vetada por mal que estuviera, algo que pese a que me parecía ridículo recordármelo, me pareció correcto y un bonito detalle.

Comencé a maquinar, lo 1º fue hablar con Teo, el cual se vio menos enfadado al verme centrado en otras cosas, y con su padre, el cual conocía el nombre y vivencias del esposo de Eleonor, por seguridad y por lógica todos los nombres y detalles son ficticios e irreconocibles, pero por esos azares del destino, resultaba que el bufete del padre de Teo le tenia ganas al esposo de Eleonor, más que por otra cosa, por que él era principal activo de la empresa de exportaciones que estaba dejando molestos al resto de exportadores, clientes del bufete. No solo aceptaron llevar el caso, si no que contrataron a un par de asesores de divorcios incluyendo a la abogada que consultó Eleonor, ya que su bufete no llevaba esas cosas, le pedí una copia de todos los papeles firmados de Eleonor de su boda y los estuvieron trabajando durante días, el resultado era el esperado, no había por donde meterle mano, todo estaba atado y bien atado, Eleonor no podía dejarle sin tener nada en contra suya, y los abogados no se iban a meter en medio de una guerra de ese tamaño sin tener nada sólido, me trataban como si fuera un crío de 13 años, y si, tenia 20 y era un niñato a sus ojos, pero siempre he parecido más tonto o lento de lo que soy en realidad, así que pregunté, ”¿que necesitáis?”, “pruebas fehacientes de infidelidades o maltrato, el acuerdo prematrimonial esta tan bien cerrado de su lado, que no se preocuparon del lado de él, es tan simple que podemos usarlo en su contra, si le pillan con otras o pegándola, no solo puede divorciarse, si no que le podría arruinar y quedarse con todo su patrimonio y su dinero”. Me dejaron claro que hasta que no tuvieran esas pruebas no moverían un solo dedo. Todo lo llevé yo y a espaldas de Eleonor, no podían relacionarla directamente viéndola pasar por allí, alguien podía irse de la lengua, es un mal ejemplo, pero las horas de cine y series me habían llevado a aplicar conocimientos ficticios a la vida real, no quería que Eleonor “desapareciera” el día que encontramos pruebas y me llamara diciéndome que tenia algo gordo y al acudir no encontrarla. Lo iba a hacer bien y por lo visto, lo iba a hacer solo, los abogados no ayudarían a encontrar pruebas, y no podían contratar a detectives, podrían venderse a la primera de cambio o hacer ruido que llegara a los oídos de gente no deseada, prácticamente me insinuaron que me buscara la vida yo solo.

Pues así seria, me fui a la tienda donde compré el bolígrafo sepia de Ana cuando me temí que su profesor la tiraba los trastos, y me hice con todo un equipo, grabadoras de vídeo y audio disimuladas en bolígrafos, flores, osos de peluche, cajas de cigarrillos……me dejé una buena pasta pero todo merecía la pena, y la verdad, la sensación de 007 atrae bastante, fui a visitar a Eleonor con todo aquello, y sin explicarle demasiado fui colocando las cosas, no quería que supiera mucho, si no podía desmoronarse, sobreactuar o mirar a cámara, y eso, no solo podía echar al traste cualquier intento, si no que podía ponerla en peligro si su marido se daba cuenta. Lo dejé todo listo y preparado para la llegada de su marido al día siguiente, dejando en la habitación de matrimonio, el salón y la cocina, gran parte de los aparatos, pero al final tenia toda la casa cubierta de alguna u otra manera, sobretodo con las cámaras que aparte de grabar, emitían en directo a un PC portátil enlazado, no eran tan pequeñas como podía esperarse de cámaras espía, así que las ubiqué bien alto, el marido no llegaba al 1,78, no las vería encima de un armario o de la nevera. Esa era la parte del maltrato, si se daba quería tenerlo documentado, demasiado trabajo para algo que puede que no pasara, según decía Eleonor, pero un instructor de esgrima de ayudó en su día, me enseñó una frase de marketing que se me quedó grabada, “Ten en cuenta todos los escenarios, y una vez analizados empieza preparándote para el peor, así siempre estarás listo si se da.”, así lo hice.

Ahora tocaba la parte del adulterio, menos sufrida en caso de darse, pero mucho más complicado de probar, pensé e ideé como ponerle escuchas o videos encima todo el tiempo, pero eso no me aseguraba nada.

1º tendría que serla infiel, que podía no serlo, y estar 3 o 4 días detrás de él sin lograr nada.

2º tener aparatos de vigilancia encima, pensar en como ponérselos y que los llevara todo el tiempo.

3º tenía que recuperarlos sin que se diera cuenta, algo difícil si logras que lleve algo encima.

4º lo peor es que yo no podía saber donde y cuando pasaría como para poder reaccionar, tenia mucho tiempo libre y solo trabajaba los fines de semana por la mañana, pero no podía estar encima siempre, inicialmente por que soy un ser humano, necesito comer o dormir, y principalmente por que él podía reconocerme si me ve más de 3 o 4 veces.

Soluciones, la más obvia, darle algún regalo que llevara encima siempre, duplicado, así al darle el cambiazo no lo notaria, o bien meter vigilancia en algo que llevara siempre, aposté por los 2, compré 2 plumas bastante elegantes, a una la llevé a la tienda espía para que la modificaran y le pusieran una grabadora de larga duración con enlace a mi PC, la otra idéntica la guardé. Eleonor me contó que él siempre iba con traje, la ropa podía cambiársela, pero su maletín no, llevaría muchos documentos importantes y siempre llevaba el mismo, incluso esposado a la muñeca, tenia que hacerme con él las horas suficientes como para ponerle algo y devolverlo sin percatarse. Eso era lo “sencillo”, ahora tocaba pensar en como pillarle, el principal problema es que no podía saber cuando seria infiel, hasta que me di cuenta de que si podía, como cuando invité a mis chicas a la fiesta donde Madamme me hizo el examen, si bien no podía controlarle a él, si podía controlar con quien, o al menos tentarle en entornos controlados, solo necesitaba a una mujer dispuesta a ligárselo y tirárselo sin reparos.

Tenia claro que 1º obtendría las pruebas y se las llevaría a los abogados y ellos decidirían si eran suficientes antes de descubrirnos, no podía arriesgar a Eleonor antes de estar seguros, presentarnos en mitad del polvo o cosas así no era una opción. Tenia una larga lista de mujeres a las que podía llamar y pedirles que lo sedujeran, pero todas lo harían si me las follaba, o hasta podía formar a una cualquiera de la calle hasta tenerla tan sumisa que aceptara aquello, pero Ana me dejó claro que nada de sexo para mi, eso complicaba las cosas, necesitaba putas, y no había otra mejor que Madamme para ayudarme, de hecho, si era tan putero y adinerado apostaría un dedo a que ya se conocían .Me debatí internamente, mucho, si quería y precisaba de su ayuda debía de hacerlo como Zeus, ordenando, no pidiendo, pero no quería volver a ser él, así que probé con mensajes de texto, si la llamaba me notaria en la voz que no era Zeus.

-“Te necesito” - un mensaje corto y claro.

-“Soy tuya, ¿que puedo hacer?”- parecía que seguía a mi servicio, ni pregunto nada de mi adiós, ni mi tardanza, ni de mi regreso.

-“Tengo que pillar a un marido poniéndoselos a su mujer, necesito una puta que lo seduzca, se lo folle y se vaya, necesito saber donde y cuando con antelación, y él no debe enterarse de nada,”

-“alguna preferencia respecto a la chica”

-“no lo sé, ¿conoces a xxxxxxxx?” – le di el nombre del marido.

-“si, tengo a su chica preferida, de hecho nos ha llamado para decirnos que estaría por la ciudad y que la preparemos, te avisaré con los detalles”

No me extrañó que estuviera en la cartera de clientes de Madamme, pero si la facilidad con la que obtuve lo que buscaba, como era lo que pretendía, no le di más vueltas.

Preparando una maleta con todo, me fui a casa de Eleonor, y me instalé en la habitación de invitados, nunca la habían usado, y el marido jamás entraba allí, solo tenia que hacer poco ruido y ni se enteraría de que estaba allí, así tenia buena conexión con los dispositivos y me daba margen para intervenir si el marido se pasaba de la raya y llegaba a pegarla demasiado, de hecho Eleonor me dio la llave para que cerrara por dentro y evitar sustos, y otra del piso para poder salir y entrar. Conecté todo y me preparaba para el show advirtiendo a Eleonor de que no dijera ni actuara de ningún modo distinto, yo no estaba allí a todos los efectos, para bien o para mal, si queríamos que saliera bien no podía descubrirme, incluyendo Yasmine que no supo nada, que vendría con el novio a ver a su padre los días que estuviera allí.

Llegó la tarde y Yasmine entró en casa con su chico, yo, pertrechado en la habitación de invitados, veía y oía todo desde las cámaras y los micros, con unos grandes cascos puestos en el portátil que tenia todo conectado, después llegó su padre, con una actitud socarrona y de felicidad, la verdad, me sorprendió la farsa de actuación de Eleonor, saludándole como una esposa devota, a Yasmine le costó disimular, se sentaron a charlar de trivialidades con algún amago de bronca entre Yasmine y su padre, sofocada por su madre y el novio, las horas fueron pasando hasta la hora de cenar, todo iba bien, hasta que a Yasmine le dio por levantarse de la mesa antes de que terminara su padre, que habiendo bebido ya alguna copa de vino, elevaba la voz a cada frase, llevándolo a una discusión que no se pudo calmar, Eleonor trataba de sosegar a su marido y solo lograba enfurecerlo, dando golpes en la mesa sobre que él era el hombre y se le iba a respetar, me mordía la lengua y me contenía las ganas de salir y darle de hostias, mi padre me enseñó muchas cosas de la vieja escuela, una de ellas era que el respeto se ganaba, no se imponía, y su forma de tratarlas me ponía muy nervioso.

Al final Yasmine se fue al cuarto con el novio y no se supo de ellos hasta el día siguiente por la mañana, vi como retozaban en la cámara que puse en su cuarto, ver su trasero de nuevo desnudo me animó la noche, pero estaba centrado en Eleonor, seguía charlando acaloradamente con su marido, que estaba harto de llegar a casa y que le trataran así, sin dejar de beber, ahora ya pasando al whisky en el salón, se puso algo sobón con su mujer, la bebida y el hecho de que Eleonor era una belleza y su mujer, le daban completo derecho, pero su forma de tratarla era poco delicada y muy burda, la cogió de la mano y metiendo la otra por debajo de su vestido la subió al piso de arriba casi a la fuerza rebuznando palabras calientes que no encendían nada. Vi la 1º oportunidad, se había dejado el maletín abajo, pero dudé en salir, lo que le dio al marido a pedir a Eleonor que bajara a por él, ciertamente no se separaba nunca, ni antes de dormirse, al bajar Eleonor salí a hurtadillas.

-ELEONOR: ¿que haces?

-YO: necesito el maletín y un par de horas para meterle una cámara y un micro.

-ELEONOR: imposible, lo quiere en la habitación ya.

-YO: súbeselo, pero tienes que lograr distraerlo y que se duerma profundamente, me tienes que dejar margen.

-ELEONOR: ¿y como quiere que lo haga?, si se despierta y le ve, nos mata.

-YO: eres su mujer, algo se te ocurrirá, sube ya antes de que sospeche.

Se llevó el maletín andando con dudas, en el PC vi como lo dejaba en una silla cerca de la puerta, ante la mirada de su marido algo tambaleante ante el alcohol ingerido, Eleonor se rascaba la cabeza pensando, hasta que sin más se abrió el vestido y lo dejó caer ante la mirada atónita de su marido y la mía, se echó encima de su marido y comenzó a besarlo como parecía que no hacían hace tiempo, en la cara de su marido se notaba, pero poco le importó, se centró en acariciar y desvestir de ropa interior a su mujer y haciendo lo mismo comenzaron a follar, de inicio con una mamada de escándalo de ella que se la puso dura, era difícil con la posición y la cámara averiguar el tamaño, por las manos de ella deduje que serian entre 14 o 17 centímetros, me costaba ver el capullo ya que estaba siendo engullido con pasión, de eso pasaron a follar, y allí ya no había otra, era mi oportunidad, Yasmine y el novio dormían cansados de su amor y el maletín estaba sin vigilancia, subí como el rayo hasta pegarme al marco de la puerta, e intuyendo los mayores momentos de pasión en los gemidos que oía, abrí la puerta con cuidado, solo un poco, vi a Eleonor montando a su marido que estaba tumbado en la cama boca arriba disfrutando de su mujer mejor de lo que recordaría, estando la puerta de lado a la cama, no podía hacer nada sin que me vieran, así que esperé, Eleonor ayudó, su cadera era fuego y se recostó en la cama, echándose a su marido encima, ahora, dándome la espalda, llevando el ritmo de su cadera. En un instante abrí la puerta cogí el maletín y cerré despacio, creo que Eleonor me vio, pero me daba igual, aquel hombre estaría ocupado unos minutos al menos, bajé a mi habitación y allí comencé el bricolaje del maletín, haciendo un fondo falso imperceptible pegándole una especie de grabadora con membrana muy fina y atornillando en uno de los laterales una mini cámara espía diminuta, disimulada metida dentro del forro de piel, quise darme prisa, pero Eleonor llevó a su marido a correrse antes de lo previsto, y sabiendo que el maletín no estaba, se dedicó a chuparle la polla a su marido 40 minutos hasta volver a ponérsela dura, la bebida y su edad no ayudaban a rápidas recuperaciones, pero lo mantuvo distraído una hora, Eleonor lo mató, dejándolo destrozado en el final del 2º polvo, cayó dormido y ya no me preocupe, estaría así hasta el día siguiente, su cara me era familiar, de agotamiento al follar.

Para cuando pasaron unas horas y Eleonor bajó, se había dado una ducha energética y solo llevaba una bata de seda pegada a su cuerpo húmedo, ya tenia el maletín listo, en peso y forma no se notaba nada, había ensañado y visto muchos tutoriales, se lo di advirtiéndole que lo dejara igual y que no actuara de forma diferente, me dio un beso en la mejilla y luego otro en los labios, casi instintivo.

-YO: toma, regálale esto a tu marido mañana, es un pluma de buena factura, invéntate lo que sea pero logra que la lleve encima - asintió sin entender mucho, estaba algo avergonzada y perdida, pero confiaba en mí.

Nos fuimos a dormir, por ahora no pasaría nada, lo hice con los cascos puestos, así que con los primeros ruidos de la mañana, desperté con ellos, Eleonor y su esposo hablaban del espléndido sexo que habían tenido, allí aprovechó para regalarle la pluma, algo que le encantó a su marido, ella se inventó un historia bastante creíble de por que le quería tanto y de que esa pluma seria su amuleto, y que no se separara de ella, así al menos una parte de ella le acompañaría siempre. Una vez hecho, el día pasó largo, se fueron a comer fuera para celebrar el regreso del marido, aproveché para comprobar el vídeo y audio del maletín que se llevó consigo, perfecto, yo comí también y volví a mi cueva, por la tarde la verdad es que parecían una familia querida y cordial, pero a la hora de la cena otra discusión, mayor que la noche anterior, llegando a agarrar de malas maneras a Yasmine que gracias a su novio se liberó, siguieron gritándose hasta que Yasmine se fue arriba, pero su padre la siguió, empezando a beber otra vez, tanto la gritó que al final Yasmine y el novio se fueron de casa, llorando y llamándole de todo, eso dejó a Eleonor sola con su maltratador, el cual comenzó a gritarla a ella por no poder hacerlo con la hija, bebiendo e increpando a partes iguales, Eleonor esta vez no se cayó al ser su hija la acusada, elevando el tono también, eso chocó con un macho herido que quiso volver a dominar, de forma grosera y animal se echó encima de Eleonor en el sofá, forzándola a besarlo, Eleonor se resistía pero no poda más que ceder, yo me até mentalmente a la cama para no salir disparado a matarlo, la había bajado las bragas e intentaba follársela sin siquiera bajarse los pantalones, le costó un mundo poder tener una erección por la bebida y por que Eleonor no quería, pero estaba aprisionada, entonces levantó la mano con toda la intención de pegarla, ella reaccionó instintivamente, dejando de forcejear, sintiéndose poderoso gritaba que solo era una zorra a la que le gustaba que la pegaran para demostrarle quien mandaba, no podía quitarle razón, eso mismo había usado yo con ella, pero el encuadre era distinto, ella quería ser dominada por mi, ahora estaba siendo violada, bueno, no, forzada a follar o la pegaría-

Aceptando su destino y sabiendo que yo no podía acudir en su ayuda sin descubrirnos, se colocó y dejó hacer al hombre, que seguía intentando follar sin quitarse la ropa, al final logró penetrar y mal follar, puede que ni 10 minutos, antes de correrse, con gestos torpes y mal llevados, daba azotes en el culo pidiéndola que se moviera, preguntando que por qué no era la puta de la noche anterior y se la comía un rato, esta se negó increpándole groseramente, pero ahora no hubo amenaza, levantó su mano y la dejó caer sobre la cara de Eleonor, ahora si se quiso quitar de encima a ese hombre gritando pero este solo respondía con continuos amagos de bofetadas, tanto insistió que un manotazo la dio de lleno, mientras ella temblaba de miedo, el reía jocoso moviendo su polla flácida como si de verdad la tuviera tiesa. No se que hubierais hecho vosotros, pero a mi me estaba costando un mundo no salir, ni miraba ya a la pantalla, pero era peor oír a Eleonor suplicar que no la pegara al otro lado de la puerta y no salir, claro que podría haberlo hecho, pero eso desencadenaría muchas preguntas, y lo más probable, que hubiera sido peor para todos a la larga, a eso me aferraba como un clavo ardiendo.

Cuando volví a mirar el marido agarraba del pelo a Eleonor y tiraba de él con violencia, gritándola la zorra que era, muchos términos colombianos que no entendía pero el contexto era claro, la agarró el cuello y la soltó un puñetazo que la dejó medio ida, me arrepentiré toda mi vida de no salir en ese momento y descuartizarlos lentamente, tenia lo que había ido a buscar, nadie que viera esas imágenes podría opinar diferente pero hasta tener el si de los abogados no podía actuar sin generar represalias. El marido siguió jugando ahora con el cuerpo medio inerte de Eleonor hasta que se cansó una hora después, en la que no dejé de llorar de impotencia, él subió la escalera como pudo totalmente borracho y se quedó dormido en la habitación sin llegar a tumbarse del todo en la cama. Salí de inmediato y atendí a Eleonor, hasta que recobró el sentido, echándose a llorar, más que por lo ocurrido, por verme la cara a mi, no se que pinta tendría pero la mezcla de rabia, odio y vergüenza propia de mi cobardía, me llenaba. Fui a por algo de frío para la hinchazón de la cara, le había dado en el mismo ojo que la última vez, “que tino tiene el carbón”, la dejé descansada y serena en el sofá de abajo y volví a mi cueva.

Los siguientes 2 días pasaron igual, Yasmine no regresó y su madre pagaba las consecuencias, fueron los dais más duros de mi vida hasta ese día, discusiones continuas, golpes, sexo forzado y una violación, clara y contundente, no la voy a relatar, se que a alguno le gusta, hasta he leído varios relatos muy excitantes de “no consentido”, pero esta no es de esas violaciones, de esas en que la mujer no quiere, se ve forzada por la fuerza o la situación, pero con el paso de los minutos y la excitación ante lo desconocido, una buena polla, un excelente follador o la necesidad de sexo de ella, disfruta de el polvo, aunque se odie. No amigos, la verdad es mucho más cruda y brutal que eso. Lo que vi no me excitó, no hubo erotismo ni sensualidad por ningún sitio, era su marido pero no había afecto, amor y complicidad, fueron 90 minutos de una mujer pidiendo clemencia, rota de dolor y humillación, y eso cambió algo dentro de mi ser, algo murió, la decisión de no salir a socorrerla me costó tan poco, que me dolió más que lo que estaba presenciando.

Ya tenia material de sobra para el maltrato, e igual que me quito el sombrero ante la actitud sobria y serena de Eleonor durante aquello, soportando solo sabiendo que yo estaba con ella, confiando en mi ciegamente, me hierve la sangre de pensar cuanto tiempo podría haber aguantado eso si no llego a intervenir, quizá siempre, esto se puede extrapolar a todas esas mujeres que sufren abusos a diario, peores que estos, y aun así se mantienen calladas. Si odio al maltratador, jamás entenderé a la maltratada sumisa, no hablo de sexo ni de que a una le guste un tío con carácter que la haga sentir segura, o sucia, humillada y le ponga cachonda, hablo de mantener una relación en la que eres un saco de boxeo y poco más, pero contra toda lógica, lo defiendes.

Dejemos ese tema parte, no es el lugar, llegó la parte del adulterio, al 4º día Madamme me mandó un mensaje, les había llamado para concertar una cita, me dio fecha, hora, lugar y acceso, una conferencia de Latinoamérica en un hotel, una de la plantas totalmente reservada para putas, o comúnmente conocida “zona vip”, a la que tenia acceso, me coló como seguridad de las chicas, había 4 o 5 como yo, no era raro, aunque si el único que no era de Europa del este.

No quiero alardear ni alargar, así que simplemente os diré que salió de cine todo, ni hecho aposta, tan predecible como sencillo, según acabó la conferencia medio salón se subió a las habitaciones y casi como en un supermercado elegían chica y a follar a la habitación reservada. El marido había ido solo, tenia preferencia y eligió a la chica que Madamme me mostró en una foto, ya se conocían según noté en su forma de hablar, la chica cogió el maletín y guiñándome un ojo pasaron a la habitación, estaba en el ajo y se iba a ocupar de tener un buen 1º plano. Salí disparado a una habitación reservada a mí, y con el portátil lo vi todo.

La chica no podía ser más distinta de Eleonor, una rusa de 1,80, rubia platino y exageradamente delgada y sin curvas para mi gusto, aun así tenia su aquel, con 2 bonitos ojos azules y buenas piernas. Casi como de cine, sentó al esposo de cara a la cámara y se arrodilló delante a chuparle la polla con gestos tan hábiles como imperceptibles, lograba que se viera claramente la cara de él bebiendo, su polla y como se la comía, luego le tumbó boca arriba y se metió su miembro medio flácido por el alcohol, estuvo casi 50 minutos follándose una polla floja hasta que le hizo correrse casi por aburrimiento, entonces hábilmente le sacó unas cuantas frases, “eres mejor cada día” “la última vez lo hiciste más largo” ”con esta van 4 veces que lo hacemos” “eres la más guapa de las 3 que me he tirado el último año”, todas admitiendo infidelidades con muchas chicas. La sesión de sexo no duró, la chica se vistió preparándose para irse, no comprendía, ni lo hago ahora, como ese capullo podía ponerle los cuernos a la pedazo de diosa latina que tenia en casa, por mal follar 1 hora con un puta sin moverse, y sabiendo como follaba Eleonor, es más sangrante aun.

De vez en cuando dios, el universo o como querías llamarlo nos da un premio, merecido o no, nos da la oportunidad de reivindicarnos o nos da justo lo que necesitamos o queremos, esta fue una de esas veces, cuando la chica salía el marido se puso en pie y se fue a por ella como un poseso, con la mirada de atacar a Eleonor, usando las mis mismas armas y palabras, de nuevo estaba impotente ante aquello, viendo como la chica pasaba de quitárselo con clase a pedir ayuda, hasta que me di cuenta de que podía entrar a partirle la boca, era el gorila que vigila a las chicas ¡¡¡estaba para eso!!!. Me levanté como el diablo y corrí hasta abrir la puerta de golpe pillando a la chica suplicando ayuda ante aquel capullo que la estaba azotando, quizá un gorila normal lo hubiera hecho de otra manera, pero preocupándome de tirar el maletín al suelo para que no se me viera, los separé y con toda mi rabia contenida de varios días cerré el puño y lo estampé en su cara, sujetándole de la pechera, dejándole tonto, el 2º le dejó inconsciente, el 3º provocó que la chica me parara el brazo por miedo a que el 4º lo matara, le había abierto una brecha en la ceja, le partí el labio y le estallé 3 dientes, le rematé dándole una patada en los huevos que lo despertó, para luego hundir mi puño en la boca de su estomago, dejando que cayera al suelo sin aire, dándole el cambiazo de la pluma aprovechándome de su inconsciencia.

Toda mi educación y adiestramiento en artes marciales de crío, me habían enseñado a no empezar peleas, a no cebarme y a ser honorable con el rival, pero fallé, estrepitosamente, durante esos 30 segundos no hubo nada de aquello, solo hubo castigo, dejo en manos de ustedes si hice bien o no, lo que sé es que sentí como una losa enorme caía por mi pecho dejando de asfixiarme, una sensación que me acompañó esos días y que en ese momento se desvaneció.

Volví a su casa y recogí todo, tenia suficiente y su esposo saldría de viaje en un par de días, que pasó en el hospital, cuando se marchó, magullado con la cara hinchada y morada, con la boca mellada y heridas mal curadas, llevé todo a los abogados, me dijeron que me llamarían en unos días, les di lo principal, cortando horas de vacío o escenas innecesarias, como a Yasmine follando con el novio, a mi correteando por la casa o la paliza, Teo ayudó, era muy bueno con los PC.

Madamme me mandó un par de mensajes diciéndome que ya se ocuparía ella de que a su agencia no le afectara y de que a mi tampoco, por la paliza, por la cual me felicitó, no era la 1º vez que se ponía tonto con las chicas, pero si la última.

Lo mejor fue que se llevó el maletín tal que estaba, y si bien tenia un número de horas de grabado seguido limitadas, cuando se llenaba, me mandaban un mensaje el portátil, yo las veía y si no había nada reiniciaba de nuevo, a la 4º o 5º vez empezaron a aparecer putas, alcohol y drogas duras, algunas reuniones de alto copete con mandatarios de la zona de centro América, no todas muy licitas , todo copiado y pegado, enviado a los abogados, que a la semana me llamaron frotándose las manos, tenían todo lo necesario, maltratos, abusos, evidencia de infidelidades y delitos varios, incluyendo una sorpresa final, siendo consumidor de drogas duras, llevaba cierta cantidad siempre encima, y eso cambiando de país con la valija diplomática, le podían meter un puro por contrabando de drogas, se pasaron otras 2 semanas preparando el caso, no ya de divorcio, el cual hasta contrataron más personal especializado como recompensa y agradecimiento, es que tenían material para hundirlo en la miseria de por vida si le llevaban a juicio y se sabia todo aquello.

Pero como es la justicia, mucha de esa información, no referente a Eleonor, acabó en manos de la competencia, que le chantajeó y manipuló desde ese día en adelante como le dio la gana, le daba pánico acabar en una cárcel de algún país del 3º mundo como escarmiento. Así que no se llegó a saber nada de eso, ni hubo juicio ni denuncias, en parte me parecía horrible, pero la verdad, si le arruinaba la vida la competencia, no quedaría nada para Eleonor, así que cuando todo estaba por estallar, le plantó la demanda de divorcio, sonó bastante en medios latinos, con los videos y grabaciones el juicio duró 3 días, aun sin ser consentidas por él, al ser ella consciente, se aceptaron como pruebas.

(Algo que nunca entendí de los juicios, si te graban matado a alguien, ¿no es una prueba valida por que no sabes que te están grabando?, ”liberemos a ese asesino, pobrecillo, no sabia que había una cámara mientras acuchillaba 20 veces a ese hombre”…………….justicia.)

Eleonor – Libertad.

Resumiendo, para cuando volvieron Ana y Lara de Granada, regalándome un desahogo descomunal de 1 día entero sin salir de la habitación con ellas 2, después de 1 mes y medio sin follar dejando a Ana otro día completo sin poder moverse y a Lara 1 semana ida, Eleonor era la dueña de todo el patrimonio y dinero de su marido, nunca llegué a saber cuanto exactamente, no me importaba, algunos medios decían que cerca de 200 millones, otros que solo 50, algún medio le sumó el dinero negro escondido en suiza o en paraísos fiscales, algunas ciertas y otras falsas, y la cifra llegaba a los 900 millones. Eso solo en dinero, al “pobre” hombre le dieron una paga mínima al mes, lo que entendían ellos, casi 4.000€, un sueldazo vamos, pero acostumbrado a su mega vida, una miseria, se llegó a pedir 6 años de cárcel por abusos y lesiones, evitó la cárcel por que cedió todo su patrimonio y bienes a Eleonor.

El padre de Teo se esmeró, representándonos pero dejando al mando a la abogada despiadada de divorcios de Eleonor, en dejarle en la absoluta ruina, en quitárselo todo, casi hasta parecía disfrutar humillándolo en el estrado, a esa abogada le gustaba su trabajo. Al final le quedó al esposo una de las casas que tenían en España, en el norte, creo que en Asturias, lo suficientemente lejos como para obedecer la orden de alejamiento de 10 kilómetros, y otra de las casas en Colombia, donde creo que se fue a vivir, el resto fue a parar a Eleonor.

A saber:

3 casas en Madrid

10 casas en España.

6 casas repartidas por todo el mundo, la mayoría en Sudamérica, pero 1 en NY y otra en Japón.

8 coches de alta gama, 1 yate, una lancha motora, un pequeño avión, y ya por meterlo en medios de locomoción, un par de caballos pura sangre.

Obras de arte por valor de millones, hasta vendió los derechos de su historia a un canal Colombiano que hizo una película y una telenovela, más una serie de entrevistas y reportajes a prensa rosa latina.

Literalmente estaba podrida de dinero y lujo, pero todo era secundario, aunque parezca tonto, lo mejor fue volver a ver sonreír de forma sincera a Eleonor, cuando pasó un poco todo el boom, volvimos Ana y yo a su casa, nos recibió Yasmine que se me tiró al cuello abrazándome hasta casi ahogarme, llorando a moco tendido dándome las gracias por todo y dándome una bofetada suave por no decirla nada, sabiendo que iban mal en casa ella no sabia hasta que punto la maltrataba hasta ver los videos del juicio, Yasmine casi odiaba a su madre por aguantar a ese hombre sin saber por qué, pero viendo como mientras la forzaba, la sometía amenazando con dejar a su hija en la calle, comprendió su error y volvieron a ser uña y carne. Eleonor le había contado lo que sabia de mi actuación, que no era ni la mitad de lo que pasó, las dejé solo los detalles bonitos de la trama, ocultando mi trampa con Madamme, por ejemplo. Detrás de Yasmine su novio agradecido aunque comedido, y al entrar Eleonor se alejó de un par de abogados que reconocí del juicio, se plantó en mitad del salón con los brazos abiertos y los ojos humedecidos, acudí a su petición encantando rodeando su cuerpo con mis brazos, algo apabullado por su actitud, y unos aplausos fríos de los abogados que me ofrecieron suculentas ofertas para trabajar para ellos como detective, “Lo que has hecho por esta mujer no tiene palabras”, repetían como un slogan barato. Aun así la di un fuerte abrazo rodeando su trasero, la levanté del aire dando una media vuelta con ella sonriendo, para evitar lagrimas, ya no merecían la pena, ni aunque fueran de júbilo.

-ELEONOR: eres un ángel, me has salvado la vida y la de mi hija - la bajé al suelo con suavidad.

-YO: solo he ayudado - ahora se dirigió a Ana, que permanecía en silencio con su eterna sonrisa, agarrándola de la mano.

-ELEONOR: no sabes la suerte de hombre que tienes, ojalá os vaya todo bien siempre.

-ANA: se perfectamente la suerte que tengo - sonrió torciendo el gesto de forma dulce, al mirarme.

-ELEONOR: por favor, pasad y senstaos, estamos con los abogados terminando de aclarar las cosas, es un lío del carajo.

Nos pasamos un par de horas allí, charlando, hablando y distrayéndolas un poco, Yasmine y Ana hicieron buenas migas subiendo a las habitaciones o saliendo a la terraza a tomar el sol, Ana estaba negra, si de por si, su tono de piel era moreno, y en la piscina en verano se había tostado, en Granada se acentuó, el contraste con sus ropas de colores vivos y chillones la hacían hasta………..feo. Mientras Eleonor y yo charlábamos con los abogados de temas distendidos, por lo visto el proceso, aunque rápido en las decisiones, aun llevaría su tiempo, unos 6 o 7 meses hasta tener todo bien resuelto, en los cuales, Eleonor debería vivir en esa casa hasta tener el control de todo el patrimonio. Ya charlando todos juntos en el salón.

-ELEONOR: la verdad, no babes cuanto le aprecio, nos has sacado de un agujero, no sé como pagárselo.

-YO: no hace falta, solo hice lo correcto, solo espero que ahora que no tienes a tu marido encima, puedas echarnos una mano con el tema de ayudarnos a vivir juntos - pese a que mi motivación inicial era ayudar, tampoco quería perder la oportunidad de lograr mi objetivo de estar con Ana en una casa sin peligro de romper parejas. No ambicionaba más.

-YASMINE: no sea bobo, puede pedir lo que quiera, ahora somos millonarias jajajaja - que pronto se arrepentiría de esas palabras.

-YO: muchas gracias, pero solo con un poco de ayuda para encontrar piso nos vale.

-ANA: hombre……….tampoco vamos a conformarnos, has hecho mucho por ellas - me miró teniendo algo en la cabeza, la lejanía de ese tiempo separados no cortó el vinculo mental que nos unía, mirándola a sus grises y verdes ojos intuí que tramaba algo.

-ELEONOR: claro que si, no se ponga tímido ahora después de todo jajajaja, pidan - los abogados la miraban con risa estudiada pero sus ojos echaban fuego temiéndose lo peor.

-YO: en serio, no hace falta…..- Ana saltó y me cortó.

-ANA: quiero una de tus casas - la miré horrorizado por su atrevimiento.

-ELEONOR: hecho, ¿cual? - miré a Eleonor sorprendido de la facilidad con la que aceptó, a ciegas.

-YASMINE: ¡¡¿mama?!!

-YO: no, esperad….- volvió a cortarme Ana apretándome el brazo queriendo que la dejara hablar.

-ANA: no lo sé, solo conozco esta…………- su desvergüenza iba a más cada día.

-YO: calla por dios ………- la agarré la mano con fuerza, volviendo la cabeza al resto - ……que no hace falta, esto es una locura…..- ahora me interrumpió Eleonor.

-ELEONOR: pues es vuestra, si Raúl la quiere……- Ana casi da un brincó, a la vez que Yasmine, pero por motivos diametralmente opuestos.

-YO: no.

-ELONOR: si.

-YASMINE: que no.

-ANA: ¿por qué?

-ELEONOR: ¡que si! - esto empezaba a marearme, una sonrisa tonta se me escapaba, por la situación de teatro cómico, casi dirigido por guión, y por la fugaz idea de quedarme con esa casa.

No voy a ir de buenazo tontorrón, no lo era, y la idea de pedirle algo así se me había pasado por la cabeza, eran estrepitosamente ricas, un diablillo en mi interior quería pedir sin descanso, sabiendo que Eleonor, quizá, no se negaría a nada, por descabellado que fuera, y por lo tanto, un solo piso no seria problema. Uno de los abogados interrumpió el carrusel de afirmaciones y negaciones.

-ABOGADO1: no puedes.

-ELEONOR: ¿por que no?, ahora es mi dinero y mis propiedades, puedo hacer con ellas lo que quiera.

-ABOGADA1: en realidad, aun no es nada suyo, pese a que su marido renunciará a todo, las propiedades son del estado hasta que se tramiten todos los traspasos y el papeleo, por ahora, como vivíais aquí, solicitamos que este piso fuera “alquilado” por vosotras, para residir durante ese proceso.

-ABOGADO1: por lo tanto, aunque quieras, no puedes alquilar o vender el piso.

-ELOENOR: no voy a hacer ninguna de esas cosas, se lo voy a regalar.

-YO: por dios, pensa lo que dices, es demasiado……….- quería ser correcto, pero la idea me estaba empezando a gustar.

-YASMINE: si, ya pensaremos otra cosa.

-ELEONOR: ¡¡ se acabó!! - soltó con voz autoritaria poniéndose de pie- he estado soportando casi 20 años a ese cabrón y en los últimos 9 meses me ha follado, forzado, pegado y violado cuanto le ha dado la gana, amenazando a mi hija y llegando a hacerme plantearme el suicidio, solo lo evitó pensar en dejar sola a mi pobre hija con ese mal nacido…… este chico…….- me señaló con mirada firme - ….este hombre, me ha dado todo, y no hablo de burdo dinero o propiedades superfluas, me ha devuelto las ganas de vivir, de seguir soñando y la esperanza de un futuro mejor para mi y mi familia, aquí y ahora decido yo, se acabó ser la tonta y guapa que solo obedece, ahora mandamos nosotras, hija mía, y si lo 1º que hago, no es agradecérselo como es debido a quien nos ha concedido eso, ¿para que quiero esta libertad? Déjenme ser feliz, déjenme hacerlos felices.

(El discurso está mejor hilado y más compacto de lo que ella dijo, y aun así no lograré alcanzar el nivel de emotividad y sinceridad que ella alcanzó).

Se hizo un silencio definitivo en la sala, no había reproche alguno ni argumento posible para ninguno, ni siquiera yo encontré palabras, aunque fuera excesivo, ¿quien era yo para negarla su deseo?

-ELEONOR: ¿que puedo hacer? - mirando a los abogados con ojos altivos y resolutiva.

-ABOGADO1: tienes que vivir en esta casa hasta que se solucione todo, una vez que lo esté, puedes hacer con las propiedades lo que quieras.

-ELEONOR: pues id preparando todo para que cuando sea así, la casa pase a nombre de Raúl, ¿oyeron? - asintieron los abogados apuntándoselo bien claro - por descontado puedo invitar a mi casa durante ese tiempo a quien yo quiera, ¿no?

-ABOGADA1: claro, eso no tiene nada que ver - Eleonor se giró a nosotros, como una modelo de concurso de TV, se cuadró en mitad del salón extendiendo uno de su brazos mientras el otro se apoyaba en su cadera.

-ELEONOR: bien, pues bienvenidos a su casa, si Raúl quiere, solo él puede decidir, tampoco les voy a obligar.

Ana casi atraviesa el techo del saltó de alegría, conteniéndose al momento al verme sentado, mirando fijamente a Eleonor, con una sonrisa de……no se muy bien que, que no se me quitaba.

-YO: no está bien…….- chorrada que me salió sin sentido ni concordancia, no sabia que hacer.

-ELEONOR: no estaba bien que mi marido me pegara y solo tú lograste hacer que lo viera, déjame devolver el favor.

-ANA: vamos amor, piénsalo, es la solución a todo, seguiremos viviendo juntos en una casa, incluso mejor, no molestaremos a nadie de tus amigos y viviríamos muy cerca de ellos, de la Universidad y de tu trabajo.

-YO: pero están Eleonor, y Yasmine con su pareja.

-NOVIODEYASMINE: bueno, en realidad……- Yasmine lo mató con la mirada, que no tuviera argumentos en contra no significaba que le gustara la idea, él era un chico callado pero buena gente.

-ELEONOR: es cierto, han planeado un año sabático de viajes por todo el mundo, no pasarán por aquí mucho.

-YO: pero estas tú, no quiero molestarte……..- Yasmine y Eleonor me miraron con la misma cara desganada con que lo hizo Ana, las 3 conocían de mi pasado sexual con ellas, y que lo que acaba de decir era un tontería, si hasta era probable que Eleonor quisiera volver a mi cama. Agachando la cabeza sin más salida, Ana se arrodilló delante de mí, acariciando mi cabello.

-ANA: amor, no quiero empujarte en una dirección que no quieres, pero estamos aquí, y ahora, por que tú has decidido que no puedes mantenerte en esa casa, por Teo y Alicia.

-YO: pero esto no es real, estas cosas no le pasan a la gente, son sueños, aspiraciones inalcanzables, nunca me planteé esto, siempre supuse que trabajaría toda mi vida para mal vivir.

-ANA: todavía puede pasar eso, no te preocupes…..- levanté la cabeza sonriente ante su genuina sinceridad catastrofista- ……pero buscábamos una salida, la que fuera y se nos ha presentado esta gran oportunidad, tú decides.

No había más que decir, todo mi ser quería y deseaba saltar gritando que si, pero una barrera moral que no entendía me lo impedía, me la jugué, miré a Yasmine que me observaba ansiosa, nos entendimos rápidamente, la pregunté con los ojos, era la más reacia, había sido su casa mucho tiempo, me escudriñaba con la mirada, con cara de enfado y cruzada de brazos, moviendo una pierna de forma nerviosa y moviendo la lengua dentro de su boca de forma pensativa.

-YASMINE: está bien, toda tuya, a ver si así olvido lo que hizo el cerdo de mi padre aquí………- levantó los brazos con algo ánimo dándome su consentimiento con un abrazo, me levanté y la rodeé con los brazos dándola un suave beso en la mejilla, mientras Ana aplaudía ligeramente con las palmas de las manos pegadas a sus labios, mientras reía nerviosa dando pequeños botes de emoción.

-YO: pues ya está, joder, ahora otra mudanza……. ¿y como se lo explico a mis padres?

Ana y Lara – Intimidación.

Volvíamos a casa andando, Ana y yo, agarrados de la mano, con ella vibrando aun, atardecía sobre nuestras cabezas refrescando algo el cargado ambiente de final del verano en una cuidad como Madrid, un selva de cemento y acero que te ahogaba a 40 grados al sol. No podíamos evitar reírnos, sobretodo Ana, estaba como en un sueño, gracias a su desfachatez y manipulación había logrado algo increíble, que nos mudáramos a la casa, casi palacio, de Eleonor, viviríamos con ella unos meses hasta que todo el papeleo de abogados acabara y ella pudiera regalarme la casa, casi era irreal, pero una vez que Yasmine cedió comprensiva, Eleonor no solo quería, si no que deseaba compensarme por todo el esfuerzo y valentía que derroché en quitarle a su marido maltratador de encima y dejarla con una fortuna y propiedades casi inagotables, no solo era eso, aparte sentía en el fondo de mi ser que ella quería devolver esa casa a la vida, llenarla de jolgorio y juventud, para volver a ser feliz, convertir esa cárcel de oro que había sido durante años, en un hogar.

Al llegar a casa hablamos apenas unos minutos entre nosotros en nuestro cuarto hasta aclarar las cosas y salir a dar la noticia al resto, Lara se mostró indiferente, o ilusionada, hasta que la dijimos que ella no vendría con nosotros y se quedaría en el piso, se enfadó tanto que se levantó y se fue a su cuarto a llorar. Manu se mostraba feliz y hacia bromas de mal gusto, de las que me suelen gustar, sobre como habíamos conseguido convencerla, conocía a Eleonor, había sido el sueño erótico de toda la pandilla de críos que jugábamos en el parque. Teo no podía evitarlo, lamentaba que me fuera del piso, era mi amigo, pero en el fondo de su alma deseaba perderme de vista, o mejor dicho, que Alicia me perdiera de vista. Alicia se mostraba contrariada, casi culpable, de forzarme a irme, y en cierto modo lo era, pero quité hierro al asunto todo lo que pude, hablé de la pareja, de una evolución, de intimidad y de una convivencia compleja. Para pulir asperezas los invité a cenar a un restaurante, durante varias fases de la cena y el paseo de después, Alicia y sobretodo Lara quisieron hacerme cambiar de idea, una prometía que no se metería en mi vida y la otra que follaría mejor si la daba tiempo, como si ese fuera el problema, desde que volvieron de Granada Lara se había encargado de recuperar el tiempo perdido con ahínco y devoción, pero la decisión era irrevocable, así que se pusieron con Ana a tratar de convencerla a ella, pero su determinación era la misma que la mía, o mayor, la idea de vivir en esa casa la seducía demasiado, solo el hecho de dejar a Lara sola la hacia dudar, había abandonado a los pocos amigos que había hecho aquí por estar con nosotros, pero en el fondo era la que queríamos, que Lara tuviera que volver al mundo real y hacer su vida lejos de nosotros.

Luego charlé con Teo a solas durante 1 hora, me abrazó muy fuerte y me dio las gracias, no pregunté por qué, lo sabia, Teo era muchas cosas pero no era tonto y me conocía desde los 8 años, entendió que lo hacia por ellos, por él y por mantener su relación, no hizo falta decirlo. Eso si, le di una buena charla sobre lo que acaba de pasarme con Eleonor y su marido, no iba a permitir que les pasara eso, si me iba era para que, si había alguna oportunidad para que volvieran a ser la pareja feliz de antaño Alicia y él, lo volvieran a ser, debía dejar de beber, dejar de discutir con ella y dejarse de jilipolleces de niñato ahogado en celos, le dejé claro que si las cosas seguían mal, aunque ya no hubiera “otros problemas”, lo dejaran de una vez, por que ni Alicia ni él eran felices así, hasta le dejé leer entre líneas que si no rectificaba me llevaría a Alicia de su lado. De nuevo me daba cuenta de que no tenía derecho o jerarquía alguna para decirles como vivir su vida, pero de nuevo lo estaba haciendo, quería que mi “sacrificio” sirviera para algo.

Quise contenerme al llegar a casa, y logré que mi rabo se mantuviera durmiendo hasta altas horas de la mañana, Lara dormía en su habitación y yo lo hacia agarrado a la cintura de Ana pegando a mi pecho a su espalda con mi polla hibernando entre sus muslos, oliendo su larga melena con su aroma a coco, me reconfortaba y me tranquilizaba más que cualquier otra cosa del universo. El ruido de la puerta me alertó, levanté la cabeza para ver como la silueta de Lara se adentraba en la habitación y se tumbaba a mi espalda, poniéndome sus tetas desnudas en ella, acariciándome mi fuerte brazo, dando besos largos y lentos en mi nuca, de esos en que los labios se quedan pegados a la piel.

-LARA: si te vas a ir, quiero que follémos, quiero sentir tu fuerza y tu polla partiéndome hasta que muera.

-YO: lo hacemos por tu bien, no puedes venir.

-LARA: eso me queréis hacer pensar, pero yo solo te deseo a ti y que me quieras.

-YO: a mí nunca me podrás tener, ¿no lo entiendes aun? solo puedo ofrecerte sexo, Ana es la única a la que amo, siempre serás el 2º plato, y para follar, me caes bien pero no te amo, te mereces algo mejor que eso.

-LARA: ¿y no tengo yo derecho a decidir? - en el fondo la sensación de superioridad que desprendían mis palabras me pateaba el estomago, si ella quería, Ana me dejaba y yo deseaba sus tetas de vez en cuando, ¿por que cortarlo?

-YO: lo tienes, al igual que yo, y hemos decidió que no vengas con nosotros, tú decides, si quieres hacer una vida real, hacer amigos, tener novios que solo tengan ojos para ti y que te traten como debe ser, o si quieres seguir siendo un mero divertimento………

-LARA: lo haré, si no vivo contigo iré a diario, me tendrás a tu disposición - sus gestos buscando con la mano mi polla mentida entre las piernas de Ana terminaron de despertar a mi novia.

-ANA: ¿que hacéis?

-YO: Lara insiste en seguir con esto, incluso aunque ya vivíamos separados.

-LARA: déjame, es mi vida, quiero decidir.

-ANA: eres una zorra incansable, no sabes lo que te pierdes al tener una relación de verdad con un hombre, te conformas con las migajas que te dejo, das pena………- sopesó sus palabras -…………. si quieres seguir siendo nuestro juguete, adelante, ya bastante nos hemos quitado ya por lo buena gente que es Raúl.

Esas duras palabras no hicieron más que hacer brillar la cara de Lara que haciendo fuerza me puso boca arriba y agarrando mi polla, medio tiesa ya por sus caricias, masturbó chupando el glande de forma animada, no pude negarme a dejarla hacerlo, tenia un calentón desde que habían vuelto increíble, casi mes y medio sin follar después de todo lo pasado, en cuanto me enseñaban una teta estaba como una moto y las follaba sin parar durante horas, incluso cuando solo me tiraba a Lara, una vez tuvimos que llamar a Ana para que volviera de donde estuviera y terminara la faena, en 1 hora fundí a Lara con la bestia todo el tiempo, y necesita algo más que un chica inconsciente para acabar.

Esa vez no fue distinta, al instante de chupármela se puso enorme, más grande de lo que la había tenido desde hacia tiempo, notaba como me iba a reventar una vena o algo, ya no había vuelta atrás, cogí de la cintura a Ana y me la puse abierta de piernas en la cara, apartando el tanga y lamiendo su coño caliente, tirando con mi boca de sus labios mayores y sacándola el clítoris hinchado de su escondite, mientras uno de mis dedos volvía a hacer un agujero en su ano, que se había cerrado algo de no pasar por allí en un tiempo, haciendo que Ana, que estaba algo adormecida, se despertara de golpe con un orgasmo animal y brusco. Lara a su vez ya jugaba golosa engullendo rabo por doquier, sin dejar de mover sus manos y llegando a hacer una cubana deliciosa, era increíble sentir como sus tetas aprisionaban mi rabo y aun así le daba para besar y lamer el glande cuando salía a respirar de entre sus montañas. Antes de correrme, tumbé de lado a Ana y nos besamos con pasión, entrelazando las lenguas, y metiendo mi mano entre sus nalgas dando tirones del hilo del tanga para hacerla temblar, agaché mi mano hasta agarrar de la nuca a Lara y atraerla hacia mi pecho, tumbada al otro lado y repitiendo la operación de Ana, tirando tan fuerte que las dos prendas intimas, que se fueron elevando hasta dejarme sus tetas en la cara, mala comparación para Ana, pero me dediqué gustoso a aquellos 4 senos, besándolos y lamiéndolos, tirando con los dientes de los duros pezones de Lara, algo que la volvía loca.

Ambas se besaban por encima de mi, mientras sus manos iban a mi polla y la acariciaban al unísono, Ana fue la 1º en notar los espasmos previos a correrme y se fue a chupármela para recibir su dosis caliente, casi se atraganta, tenia tal acumulación que 2 semanas después de su vuelta seguía eyaculando cantidades industriales, pero se tragó todo dejándola limpia y continuando hasta tenerla tiesa de nuevo, como decía, no tardé ni un minuto debido a mi calentón, le había dedicado a los pezones de Lara todo ese tiempo y a meter mi mano en su coño que sin ropa interior rezumaba fluidos, metiendo un dedo en su interior. Casi ensayado, ambas pasaron una pierna por encima mía, casi queriendo ser penetradas a la vez, rememorando la 1º vez que tuve a Lara encima, Ana detrás y Lara delante. Sin más Ana se empaló hasta el fondo soltando un alarido que ahogó en el cuello de Lara, le amasa los pechos desde atrás sin poder sostenerlos en las manos y dejándome vía libre para atacar con la cadera, que aferrándome a sus muslos, comenzó a penetrar y salir sin descanso elevando el ritmo poco a poco, ya no había que tener cuidado con ellas, ya no, saqué la bestia y me folle a Ana tan ferozmente que las dos caían sobre mi pecho, temblando de orgasmos Ana y de impaciencia Lara, 30 minutos hasta que Ana pedía un respiro con los ojos, casi sin pensarlo en el gesto de sacarla la hundí en Lara por sorpresa, haciéndola arquear la espalda dejándome sus tetas en la cara, las agarré como premios y comiendo los pezones con ansia, mientras ahora era ella quien recibía mi ira, no pude evitar desatarme y en 20 minutos hacerla desmayarse al romper en un orgasmo que soltó tantos fluidos que me dio la sensación de que me meaba encima.

Se acabó ser bueno, la dejé a un lado medio ida y me lancé a por Ana que esperaba ansiosa su turno, la cuadré a 4 patas y la metí de golpe hasta la base, quiso gritar, pero la sensación le hizo un nudo en la garganta, la abracé con fuerza y volví a acelerar, notando su interior abrirse, dejando paso a una gloria que solo un hombre puede lograr follando desatado, sujeté de las caderas y golpeaba con la pelvis en su trasero sin descanso, llevándola a su serie de orgasmos. Cuando se corría como una fuente la dejaba 2 minutos de aire, mientras le acariciaba cada milímetro de piel, para volver a arremeter, seguimos ese juego 1 hora desahogando y corriéndome en su interior, dando lo mejor de mi al final como siempre, sintiendo como los espasmos en el pene daban cabezazos en su interior, encharcado en sudor me tumbé boca arriba, al instante Lara se me echó encima recuperada montándose en mi de nuevo, no tardó en sacarme la 3º erección, la puse boca abajo tumbada en la cama, estirada, y penetrándola, era una de las formas de no metérsela entera y no hacerla daño, desde atrás su trasero hacia de tope, me recosté sobre ella pegando mi pecho a su espalda y la metí lentamente haciendo vibrar y reír de nervios a la muchacha, arrodillándome dejándola entre mis piernas y moviendo mi cintura con descaro, Lara se agarraba a las sabanas mientras gimoteaba, soportando gustosa aquel pequeño ejemplo de lo que era capaz, me contuve un poco, y solo saqué a la bestia al final, cuando Lara se retorcía entre convulsiones. Ana se tumbaba de lado a nosotros mirando y sonriendo al ver a Lara soltar lagrimas de gozo, creo que disfrutaba al ver sufrir a Lara, abandoné a Lara cuando ya no me oponía resistencia, volviendo a Ana, que ya andaba jugando con su ano sabiendo que era lo siguiente. Tumbaba boca arriba se abrió de piernas, me posesioné entre ellas y apretando el glande, brillante de los fluidos de Lara en su ano, fui abriéndola poco a poco, notándolo, casi como al desvirgaba de nuevo, pero mucho más fácil, metiendo lo suficiente como para crear espacio y sacándola para darla un respiro. La repetición actúo sobre Ana que notaba claramente su piel contraerse al penetrar, moviendo su cintura a la vez que la mía, mordiéndose el labio con fuerza mientras se echaba la almohada a la cara para acallar sus gritos, no soporté demasiado aquella presión, me estaba corriendo antes de darme cuenta.

Agotado caí sobre Ana, besándola jadeante, mientras ella retomaba la compostura al notar mi polla decrecer en su interior hasta salirme, me dormí como hacia semanas que no dormía, unas 9 horas, al despertar no vi a Ana, pero si a Lara que estaba casi en la misma poción en que la había dejado, medio ida y con el culo enrojecido aun, con un empalme de narices que tenia, viendo como ella giraba la cara sonriente y mirándome lujuriosa, casi arrastrándose se me puso encima, besándome con pasión moviendo su lengua de forma rápida y húmeda, la di un buen azote en el culo antes de levantarme e irme al baño a asearme, pero después de orinar seguía empalmado, estaba caliente como las primeras veces que follaba con Eli en el gimnasio, sin pensarlo demasiado fui a la cama, vi a Lara relamiéndose al verme desnudo con la polla apuntándola, quería quitarme a Lara de encima pero ella quería seguir detrás de mi, pues la iba a dar un escarmiento.

La cogí, me la subí encima montándola a horcajadas sobre mi y pegándola a una pared, me rodeó con las piernas, sonriendo casi sin fuerzas, sabia que no se salvaría de mi, jugué con su tetas y sus sensibles pezones mientras daba golpes con mi rabo en su coño humedecido de saber lo que se le venia encima, aun sin saberlo de verdad, sin muchos problemas moví su cintura hasta meterla media polla de golpe, para luego seguir hundiendo de forma lenta y caliente mi verga en su interior, quería llegar hasta rozar la pared del útero haciéndola brincar de dolor, totalmente roja y congestionada.

-LARA: aimns, sácala un poco - comencé mi idea desesperada.

-YO: ¿como vas a seguir siendo un juéguete si no puedo disfrutar plenamente de ti?

-LARA: no puedo hacer nada para que puedas metérmela más adentro, por favor, hasta ahora no te ha importado…….- se erguía apoyándose contra mi.

-YO: hasta ahora te tenía algo de respeto, pero si vas a ser solo sexo, y con eso te conformas, no pienso darte cuartel, no eres una persona, eres carne con agujeros y si no me divierto dejarás de serlo……- tenía la firme intención de acabar con Lara, y si ella no quiera, la forzaría a dejarme.

-LARA: ¿y que puedo hacer? - se estremecía.

-YO: dame tu culo, quiero follarte por detrás, allí no hay pared que te haga daño si te la meto toda.

-LARA: ¡estás loco!, ni siquiera hemos empezado con tus dedos.

-YO: eso se arregla fácil - bajé mi mano a su ano y jugué con él un rato, viéndola como disfrutaba.

-LARA: por favor, no seas así, yo solo quiero……….

-YO: que te folle, lo dejaste claro anoche, y si solo es eso, lo harás como a mí me gusta, o se acabó - apreté contra su ano fuertemente haciéndola abrir los ojos y gritar al notar mi dedo índice entrando en su ano.

-LARA: ¡¡para, me duele, no seas bestia!! - cerraba los ojos mientras forcejeaba lentamente.

-YO: soy una bestia, te voy a abrir el culo ahora mismo y te la voy a meter hasta el fondo, si no me dejas, se terminó - no se por que estaba siendo tan agresivo con ella, pero la verdad me daba igual, según movía el dedo en su ano iba haciendo menos presión.

-LARA: no quiero.

-YO: no me importa que no quieras, eres tú la que se empeña en ser una zorra a mi servicio, así os trato a las zorras.

No hubo palabras, sus piernas se abrieron queriendo bajarse pero mi fuerza era demasiada y tampoco podía moverse, aun estando empalada por el coño, mi dedo hurgaba curioso mientras le comía su cuello y sus pezones, temblaba de notar como un 2º dedo buscaba acomodo en su ano y una lagrima cayó de su mejilla al sentirlo dentro, no la dejé gritar tapándole la boca con la mía, a la vez que mi cintura estaba follándosela con un ritmo lento y amplio que la obligó a levantar una pierna y rodearme con ella para sentir placer y así compensar el ardor de su ano. Para cuando metí el 3ºdedo ya no había dolor, o si lo había le daba igual, volvió a subir ambas piernas y rodearme con ellas, aceptando de buen grado ser follada animadamente por el coño mientras 3 dedos la violaban por detrás, estaba gozando ahora, y eso me calentaba, fui aumentando el ritmo de mi pelvis hasta amartillarla contra la pared y sacarla varios orgasmos, pero cuando mis dedos se movían en su ano se abrazaba a mi y gemía en silencio, soportando de forma estoica, viendo como sus tetas botaban a ritmo y ella ni se molestaba en agarrarse a mi cuello, se apoyaba contra la pared. A los 10 minutos rompió a llorar con un orgasmo que me obligó a sacarla de su coño por la presión de sus emanaciones al salir, sus piernas se abrieron del espasmo y cayó al suelo temblando, no la di cuartel, iba a descubrir cuanto de malo había en mi, quería asustarla para alejarla de mi, la levanté y la estampé contra la pared de cara a ella, saqué su cintura y sin preámbulos dirigí mi polla a su ano, quiso moverse pero no la di opción, de un fuerte golpe la ensarté haciéndola gritar del dolor 1 sola vez, de forma larga y que se fue apagando lentamente, la cogí de la nuca tirando de su cara hacia atrás besándola de forma descortés.

-YO: te voy a partir en dos - no era una amenaza ni una frase para calentar, solo un aviso de lo que iba a ocurrir.

Agarré su cintura, convencido de lo correcto que era, y si piedad ni compasión, recordando a Zeus, saqué a la bestia, comenzando con ritmo lento al notar como Lara se estremecía al notar el más leve roce, a los 2 minutos dejó de gritar, algo que hizo que Ana volviera a la habitación preocupada.

-ANA: ¡¿que la haces?!

-YO: estoy estrenado el culo a esta zorra, si va a ser mi juguete la quiero toda.

-LARA: ¡Ana por dios, dile que se quite de encima, sácala de mi, me arde, déjale que te la meta a ti por dios, para esto! - su suplica era conmovedora, pero la mierda de Ana era de consentimiento y complicidad, disfrutaba con eso, nunca supe cuanto disfrutaba de ver humillada y degradada a su mejor amiga.

-ANA: es lo que pediste anoche, si no lo puedes soportar ríndete, pero si te quedas soportarás esto y más, adelante amor, folla ese ano como si fuera el mío.

No necesitaba su consentimiento, pero lo hice, Ana sacó un móvil nada y grabó toda la escena, incluyendo una vez que me la saqué de su ano documentando el tremendo agujero hecho, como emanaba sangre de su ano y como mi polla, manchada de ella, volvía a entrar violentamente. El ritmo que sus gemidos de dolor y muecas se fueron volviendo ásperos, mi fuerza desmesurada ante ella la hacia rebotar contra la pared con sus tetas, y eso solo la hacía recibir de golpe mi rabo partiéndola, ahora si, metida entera, cada golpe era más atroz que el anterior, en algunos momentos se ponía de puntillas, pero estaba muy cansada, se mantenía en pie por que la inercia de mi cinética le impedía otra cosa, hasta que me fui a correr, allí me desaté, los golpes elevaban a Lara por el alto de la pared, rozando sus pezones por ella, provocado un orgasmo anal que probó por 1º vez, hacía minutos que ya no le dolía y si disfrutaba de aquello. Las últimas embestidas fueron largas y fuertes, al penetrarla la levantaba un palmo del suelo dejándola así un par de segundos hasta dejarla bajar al sacarla, coincidiendo con los chorros de esperma llenándola el ano. Al separarme de ella la sujeté para que se viera su culo rezumando sangre y semen, dándola un azote, o varios, hasta que la solté, con cuidado la ayudé por que descendió a plomo, con los ojos abiertos, la boca desencajada e ida, con espasmos en su ano que la hacían doblarse de dolor.

-ANA: vaya, y así sin más, podías haberme avisado y así lo tendría todo grabado - dejó el móvil.

-YO: lo siento, me he levantado animado y quería dejarle las cosas claras antes de irnos pasado mañana.

-ANA: pobre, la has dejado muerta, no lo va ha olvidar nunca.

-YO: esa es la idea, así se lo pensará mejor si quiere volver a tenerme entre sus piernas, vamos a desayunar, me ha entrado hambre.

Me puse algo y salimos de allí dejándola tirada en el suelo, Ana seguía queriendo ser la reina del enjambre, y le gustaba que yo fuera su azote, ya no solo de Lara, si no que sonrío al ver que Alicia entró detrás de nosotros a ver a Lara, estabamos los 4 solos, con Manu y Teo trabajando, los gritos de Lara habían llamado su atención.

-ANA: ¿por que lo has hecho? - ya desayunando yo con Ana jugueteando entre mis brazos.

-YO: ya te lo he dicho, quería dejar las cosas claras.

-ANA: a mi no me engañas, la has matado con toda la intención de asustarla, ¿no la quieres en la nueva casa? - me sentí como un libro abierto.

-YO: tiene que hacer su vida, y si tiene que odiarme para que lo haga, así sea.

-ANA: ¿y si le ha gustado?

-YO: pues me la seguiré tirando, era mi última bala, si después de esto sigue detrás de mí, se merece eso al menos.

Ana – Camino al paraíso.

Pasó una semana, en la que hicimos la mudanza, gracias al coche en un par de viajes todas nuestras cosas estaban ya en casa de Eleonor, al coche y a la inestimable ayuda de un Teo más ilusionado por verme salir de esa casa que Ana o yo por dejarla. A su familia fue fácil convencerla del cambio, no estaban muy contentos con que su niña estuviera en un piso de estudiantes, e irse a vivir a la casa de una amiga adinerada de mi madre, les pareció mejor idea, el problema fue mi familia, mi padre me daba la chapa de la responsabilidad después de haberme ido de casa, mi hermana me criticaba duramente por aprovecharme de la confianza de esa mujer, con lo mal que lo estaba pasando después de su divorcio, y mi madre, que ya sabia lo de Ana, y sospechaba de Lara, solo podía pensar en que la siguiente seria Eleonor, pobre, si supiera que ya había compartido más tiempo tumbado que de pie con ella…… se podía ocultar la verdad a mi madre, no mentirla, un consejo que me enseñó mi padre. Al final mantuvimos una charla entre mi madre, Eleonor y yo, o más bien una charla entre ellas a la que yo acudí. Eleonor supo exponerle todo de forma clara y sentimental, de madre a madre, alabando a su hijo, comentando lo bien educado, lo gran hombre, lo mucho que la había ayudado y el tremendo apoyo que le había dado durante el tiempo previo al divorcio y después. Con lo cual mi madre no pudo negarse, es sorprendente lo fácil que es convencer a una madre, solo tienes que convertir lo que quieres en un halago a la educación que le ha dado a sus hijos, y podrás hacer lo que quieras. Eso si, mi madre no era tonta, ni mucho menos, se dio cuenta del artificio, sabiendo que en el fondo, aunque fuera verdad, solo le regalaban el oído, pero de nuevo se vio ante una situación ante la que no podía hacer nada, le gustara, o no, era independiente y Ana también.

Para los que tengan mejor memoria y ubicación espacial, ya se harán una idea, para los que no, hago una ligera descripción del piso, tomando como referencia la ubicación inicial desde la que hablo, la entrada.

Era un ático de 2 pisos, la entrada era en la parte de abajo, un gran hall que daba al salón, amplio con una serie de sillones y mesas decorándolo de cara a la pared de la derecha donde estaba del mueble de la TV, equipos de música y libros, a cada lado del mueble una puerta que daba a la cocina, enorme también con comedor incluido. A la izquierda unas escaleras de estilo moderno que subían al 2º piso, debajo de las escaleras un cuarto de invitados con baño propio, y de frente a la entrada, al otro lado del salón, grandes puertas corredizas de cristal tapadas por altas cortinas, que daban a una terraza gigante con la piscina, ocupaba todo el ancho del piso, desde la pared más alejada de la cocina hasta la otra punta de la habitación de invitados, casi 25 metros de largo y 10 de ancho, en la zona más cercana a las puertas correderas había un espacio con hamacas, barbacoa, una mesa con varias sillas coronadas con unas sombrillas y demás utensilios de piscina, con el suelo de madera por toda la terraza, siempre con 2 metros de césped de margen respecto al borde de la piscina, y ocupando el espacio entre el agua y un gran muro de 3 metros que rodeaba toda la parte exterior. La parte de arriba eran otras 3 habitaciones, con la parte del techo del salón según subías las escaleras, siendo una sala de cine, esta vez con un equipo de home cinema de cara a la pared que daba a la piscina, a la derecha, encima de la cocina, un cuarto de matrimonio, enorme, a un lado con un armario más grande que nuestra habitación anterior, baño incluido con jacuzzi, y al otro lado un pequeño balcón que daba a la piscina, a la izquierda habían dividido una habitación idéntica en 2, una se quedó el baño y un armario más pequeño y la otra una habitación sencilla con el balcón.

Ana la pobre alucinaba al verla los primeros días, fueron de lo más cordiales, Eleonor dormía sola en la habitación grande de matrimonio de arriba, Yasmine y su novio, cuando estaban, en la de arriba a la izquierda que tenia baño, y Ana y yo dormíamos en la de invitados abajo, donde había estado espiando unas 3 semanas antes, todo era lujo, buenas palabras y cortesía, tenían un jardinero para el poco césped de la terraza, un limpiador de piscinas que venia a diario, una señora de la limpieza, que también era colombiana, de unos 55 años pequeña y arrugada, Luz María, Luz para todos, parecía muy amiga de Eleonor, no me sorprendía ya que probablemente seria la única con la que tenia contacto social, la señora al verme me abrazó como lo hizo Yasmine al enterarse de mi aportación en quitarse de encima al ya ex marido. Venia por las mañanas y a la hora de comer, hacia la comida y dejaba lista la cena, la compra la hacía ella y la enviaban a domicilio cada 2 o 3 días. Si querías podías vivir a todo tren sin salir de aquella casa ni mover un solo músculo por mantenerla.

Si bien no me gustaba quedarme encerrado todo el día, la piscina era un gran desahogo, las 2 parejas de jóvenes manteníamos a Eleonor distraída y feliz, volviendo a sentir vida en casa, sin la amenaza de su ex marido, y salíamos al parque o a dar vueltas, algo que a Eleonor la fascinaba, siempre había salido de casa en contadas ocasiones, todas como mucho al parque donde jugábamos de críos para hacer vida social con el resto de madres, cenas en grandes restaurantes, reuniones de padres en el colegio, y poco más. Salir al cine, comer comida basura, ir a un bar, tomar un helado en un atardecer sentados en el parque del retiro, ir al Zoo o al parque de atracciones………… era como llevar a una cría de 4 años que veía todo por 1º vez, pero era una señora que rozaba los 39 años, esbelta, elegante, vestida siempre de forma exquisita y con unas curvas de infarto, el hecho de no ir vestida con un traje, un vestido ajustado o una camisa con falda larga de vuelo, arreglada y con tacones, era inconcebible, aun así Ana y Yasmine la hicieron salir vestida con algo de sus ropas, mucho juveniles y alegres, y a decir verdad, muchas de las prendas le quedaban mejor a ella que a las jóvenes, unos leggins, un top ajustado que dejaba ver el ombligo, unos vaqueros ceñidos o alguna blusa escotada, en zapatillas y sin tacones ni zapatos altos, andaba raro sin ir de puntillas, pero todo le quedaba de cine, y eso solo teniendo en cuenta que salvo las tetas, todo era suyo, su cara madura no aparentaba ni 30 años y su cuerpo desnudo que ya conocía, lo recordé al verla en biquini de nuevo, ya fuera en casa o trayéndola a las visitas dominicales de la familia a la piscina municipal, casi la da un sock de felicidad al ver a tanta gente, mi madre la trataba casi como una hermana y cuidaba de ella, la primera vez fue a la piscina con un bañador grande, tacones y sombrero, rodeada de un pareo enorme, pero mi madre la animó a ir en biquini alegando que enseñara piel para encontrar marido pronto entre risas, su cuerpo podía pasar por una de 25, y sin pisar un gimnasio, alguno se quedaba tonto mirándola entrar o salir del agua, esa mujer estaba ideada por dios para el pecado, si las 3 iban vestidas de forma similar, había que fijarse mucho para ver que era la madre de Yasmine, y no su hermana mayor.

Si bien, algún que otro roce de más hubo entre Yasmine y yo, rememorando viejas épocas, era feliz con su novio, y a las semanas de instalarnos, salieron de viaje, no sabían por cuanto ni a donde, iban a ver mundo, eso nos dejó a Ana y a mi solos con Eleonor, a 1 mes de volver a la universidad, pero no por ello menos felices, disfrutaba siendo una buena anfitriona, Ana viviendo su propio cuento de hadas y yo follándomela de forma desatada, sin Lara de por medio, que decidió quedarse en la casa de estudiantes tras el bestial estreno anal que la di, Ana soportaba todo el peso de mi furia, y lo hacían muy bien, su forma de moverse era demencial y como suelo decir, presentaba batalla durante gran parte del sexo, bestia incluida, se puede decir que cuando follaba con ella, era más bestia que Raúl, y aun así me costaba casi 2 horas, y 2 o 3 eyaculaciones, dejarla mansa como un corderillo, y aguantaba mucho más, yo podía seguir follándomela a menor ritmo entre desvanecimientos o relajaciones de su parte, como hacia mi leona, pero no tenia la misma gracia o morbo, cuando ella se rendía en la pelea, era correrme y fin. ¿Me contenía?, si, llevaba 4 meses follándome a Ana y Lara juntas, y ahora solo tenia a Ana, si analizamos objetivamente, si, no vaciaba el deposito. ¿Lo necesitaba? Rotundamente no, pese a que alguna vez me quedaba con ganas de más, de una 4º vez, quedarme abrazado a su cuerpo sudoroso sincronizando las respiraciones, entre risas y besos, era tan placentero o más, que otro polvo.

Muy de vez en cuando, íbamos al piso de estudiantes, montaban una cena especial o una tarde de juegos y risas, salíamos a bailar con ellos, pero luego cada uno a su casa, no se si fue el irme o no, pero Manu me contaba que Teo y Alicia estaban mucho mejor pasadas 3 semanas de la mudanza, ya habían encontrado a otra estudiante encantada de pagar la miseria de 400€ por una habitación de buen nivel, Manu se pasó a la habitación que dejamos, por tener baño propio, así que un piso con baño compartido por solo otra chica, Lara, a 10 minutos de la universidad, por esa miseria, no fue demasiado difícil, era una chica bastante mona, rubia, de ojos claros, y buen físico, era de Canarias por su acento, se llamaba Naira, y la verdad, con Alicia hizo muy buenas migas, era muy fácil llevarse con ella, extrovertida y alegre queriendo hacer amigos rápido.

Yo la verdad es que me cansaba mucho de estar en casa sin hacer nada, así que me volví un poco manitas, con Luz la ayudaba con la casa y la comida, me sentía culpable, nunca había tenido criados, y de la cena directamente me ocupaba yo, al igual que del césped, no se, era mi forma de “pagar el alquiler”, aprendí a limpiar la piscina y todo, podíamos echar al jardinero y al de la piscina, pero solo quería aprender de ellos, si iba a ser mi casa querría saber como funcionaba. Con el paso de los días la emoción bajó un poco y nos tirábamos horas hablando con Eleonor, su historia era mucho peor de lo que pensaba.

Nació en un barrio muy pobre de una ciudad de Colombia, no recuerdo el nombre, su madre trabajaba en una fabrica por casi nada de dinero y su padre las abandonó siendo crías, a su madre, a ella, y a su hermana, 10 años menor, Liliana, la 1º noticia de ella que tenia, subsistían pidiendo en la calle y sin llegar a confirmármelo, decía que su madre ganaba dinero como podía, supuse que prostitución, a lo que iban abocadas ellas, cuando cumplió los 16 años ya parecía toda una mujer y había muchos hombres que ansiaban estrenarla, la situación era desesperada, no pasó por que su marido apareció en escena, un niño mayor que ella, que se bajaba del coche del rico de su padre al ver a niñas jugar, con el paso de las semanas esos niños se enamoraron y cuando cumplieron la mayoría de edad se casaron a hurtadillas, el padre del crío le hizo firmar muchos papeles que él ni miró, era un 1º amor que creían que quedaría para siempre, y después de unos años de felicidad allí, se mudaron a España para tener a su hija. Eleonor no quería dejar a su familia pero no la dejaron traérselas, prometiéndola que las darían una buena vida allí siempre que fuera una esposa fiel y devota, y con esa amenaza la tuvieron engañada casi 10 años, si, le daban algo de dinero a su Madre, pero ni casa ni cuidados, vivían en una choza y Liliana se había metido en líos al no poder tener una vida mejor, y meterse en líos en Colombia era peligroso. Cuando se enteró Eleonor y habló con ellas entró en cólera, pero su marido ya no era aquel joven enamorado, si no un incipiente hombre de negocias que se estaba labrando un nombre. No se si lo sabia o no lo quiso decir, pero nos comentó que dejó de tratar de contactar con su familia al saber que su madre murió de un tiro en un robo, nunca se atrevió a preguntar si fue su marido el que ordenó la muerte.

Y tú te quejas por que te va lento el wifi, que cosas, ¿no?

Los días iban pasando y el calor apretaba, fue inevitable vivir prácticamente en la piscina para los 3, y ver a Eleonor en biquinis minúsculos me recordaba por que me la había trabajado junto a su hija, Ana se percató y volvió a poner esa sonrisa picarona, se daba cuenta de que me la ponía dura ver a Eleonor en top less tomando el sol o en el agua, sus pechos hechos a golpe de bisturí, como balones de rugby erigidos y coronados por pezones del tamaño de pilas, eran una delicia, Ana pensó que seria verla las tetas así que igualó la apuesta quedándose en top less igual, eso le costó más de un disgusto a la hora de follar, la destrozaba el ano cuando me ponía demasiado caliente, allí donde la pillara. Al final me preguntó si me quería tirar a Eleonor de nuevo, no obtuvo respuesta, y eso en si, era una respuesta. Si, quería volver a follárme a esa MILF latina que me la ponía como el mármol, con su forma de hablar y comportarse, pero no quería que Ana comenzara a trabajarla como había hecho con Lara y con Alicia, ¿o si? Era diferente, con ella ya había pasado, pero hora la veía con otros ojos, conociendo su historia, no era solo sexo, era una mujer que me atraía, no la quería, pero me fascinaba.

-ANA: sabes, ya van un par de veces que Eleonor me insinúa cosas.

-YO: ¿el que?

-ANA: cosas, no sé, como que tal nos va en la cama, o que si lo llevo bien…….

-YO: solo quiere ser cortés, ya sabes como es.

-ANA: pues yo creo que quiere follarte - estaba cogiendo mi manía de hablar de forma grotesca.

-YO: ya estamos, ¿es que todas las mujeres quieren follar conmigo?

-ANA: pues si, y la que diga que no, miente o es tonta.

-YO: no quiero otra Lara dando lastima por un polvo, y menos ella, después de lo que ha pasado.

-ANA: es feliz contigo aquí.

-YO: con nosotros.

-ANA: no, a mi me trata con cariño y afecto, a ti te ama, lo veo en sus ojos, como te mira cuando cree que estáis solos, o como le brillan los ojos cuando te ve semidesnudo, la forma en que te acaricia o agarra de la mano mientras habláis.

-YO: es el carácter latino, se siente cómoda así.

-ANA: no eres tan bobo como para pensar eso - tenia razón, yo también había visto indicios o señales, las primeras eran repeticiones del 1º día que me la tiré, saliendo a provocar a la piscina, masajes, pasarme las tetas por la espalda, jugar y meter mano……..luego pasó a competir con Ana, vestían de forma similar, tomaban el sol en top less y tanga, iban por casa semi desnudas y el eterno truco de la mujer, mientras un tío esta apoyado contra la pared, ellas se recuestan sobre el hombre, su pecho u hombro, pegándose de lado la cintura al paquete del tío, ese me lo enseñó Eli, lo suelen usar las mujeres cuando quieren disimuladamente saber el tamaño de una polla, sin necesidad de tocar o palpar.

-YO: ¿y que quieres que le haga?, no se irá hasta dentro de unos meses.

-ANA: lo que tú quieras, por mi podemos meterla en nuestra cama…….- la miré con ojos hastiados mientras ella sonreía.

-YO: ¿es que no te cansas nunca?

-ANA: el que no te cansa eres tú, ya he notado que algunas veces te quedas a medias, y si yo no puedo completarte, puedo dejar que ella me ayude.

-YO: ¿quieres otra esclava?, eso no pasará, no con ella.

-ANA: no tiene por que ser otra esclava, solo te digo que a mi no me importaría.

-YO: eres una novia bastante rara.

-ANA: y por eso me quieres……. - tenia razón de nuevo, siendo dulce y cariñosa, tenia su punto oscuro que cada día crecía, notaba como hasta lograba manipularme alguna vez, era un libro abierto para ella, y ella para mi, sabia que más de una vez fingía desvanecerse antes de tiempo, ahora entendía el por que.

-YO: me vas a terminar dando un disgusto.

-ANA: ¿entonces quieres que te la preparare?, no me costará convencerla y así sabrá que yo estoy conforme……..- la idea de que ya lo tuviera pensado me gustó.

Pensé seriamente si hacerlo o no, estabamos en la piscina Ana y yo, flotando como 2 hojas, mirándonos a los ojos, con Eleonor metida dentro de casa, la veíamos pasar por el salón de vez en cuando, había aprendido a dejar de ir tan arreglada, iba casi siempre con un camisón, pero cuando hacia calor salía en biquini y después en top less, iba así por la casa, solo en bragas o en tanga, pero siempre con tacones y bien peinada y maquillada. De vez en cuando se asomaba a saludar o nos comentaba si queríamos algo, creo que quería pillarnos follando en el agua, más de una vez lo hizo, y quería repetir.

-YO: está bien, pero esta vez lo haremos a mi modo, ¿queda claro? - asintió echándose a mis brazos, no entendía como a una cría que se moría de celos si me miraban 4 o 5 chicas por la calle o alguna se acercaba a bailar o charlar conmigo, luego la hacia feliz que me follara a otras, creo que era el placer de sentirse poderosa antes otras mujeres.

-ANA: tú mandas, ¿como lo hacemos?.

-YO: te voy a follar aquí y ahora en la piscina, vas a gritar, y hacerla venir, cuando nos vea quiero que la mires a los ojos, no hables ni digas nada, solo mírala, gime, grita y pon cara de disfrutar sufriendo.

-ANA: eso no será nada difícil, lo haces cada vez……..- metió su mano en mi bañador.

-YO: vale, pero tú no dejes de mirarla, y me susurras al oído lo que hace.

Sin más le quité la parte de abajo del biquini a Ana, desenlazando los cordones y tirándolo contra la puerta de cristal haciendo ruido, hice lo mismo con mi bañador, solo llevaba el grande sin sujeción para la piscina de casa, ambas ya sabían del tamaño de mi polla y era una estupidez disimular e ir incomodo. Me subí a horcajadas en al agua a Ana y la dejé recostarse sobre la orilla contraria a la puerta, quedando de cara a ella y yo de espaldas, su mano ya tenia mi polla dura, me rodeó con la piernas encajándose toda mi verga, me apoyé contra el bordillo y fui sacando todo miembro y volviendo a meter de forma lenta, para durar más con Ana me pasaba así los primeros 10 minutos, haciendo el amor más que follar, luego desataba el infierno, esa vez fue igual. Ana al inicio gemía de forma falsa, exagerada y gritando a la puerta entre abierta, pero a los 20 minutos sus gemidos ya eran familiares, sentía mi cuerpo vibrar con el agua, y como la taladraba sin descanso a una velocidad reducida por la resistencia del agua, algo que la calentó, casi se podía notar el agua hervir a nuestro alrededor, buscaba los labios de Ana pero esta no se estaba quieta, buscando posiciones cómodas, pero la incomodidad se le estaba generando yo abriendo el coño bajo el agua, sus giros de cuello con su larga melena húmeda me encantaban. En uno de los descansos que la concedía gentilmente Ana me miró de reojo sonriendo.

-ANA: esta en al puerta, escondida detrás de la cortina.

-YO: ¿que hace?

-ANA: nada, apenas la veo la cabeza y una teta - mencionar sus pechos me enervó, saqué a la bestia.

Sacaba a Ana del agua con cada golpe de cintura haciéndola quedar como un muñeco de trapo, gritando obscenidades, reales pero dirigidas a los oídos de Eleonor, según me iba relatando Ana en algún descanso, se había asomado algo más y ahora su cabeza sobresalía por la puerta, estaba mirando relamiéndose y con una mano frotándose por encima del biquini. Allí me desaté, sacándola varios orgasmos a Ana que se revolvía ya sin dar indicación alguna, solo gozando de que la levantara medio metro del agua con cada embestida, mientras me comía sus tetas, 30 minutos después estallé con una corrida que hundí hasta el fondo del interior de Ana que gritó despavorida al sentir el semen caliente llenándola la pared del útero, rebajando la intensidad y dando ya solo algún leve giro de cadera mientras Ana volvía del cielo de Madrid, me besó tiernamente, susurrando al oído.

-ANA: Eleonor esta abierta de piernas en una hamaca metiéndose 4 dedos en el coño.

-YO: ¿la has mirado a lo ojos?

-ANA: ¿estás loco? Si por poco no me desmayo, como para andar fijándome, animal.

-YO: pues ahora hazlo.

Subí a Ana al bordillo y al abrí de piernas, metiendo mi cabeza en su coño, la pilló desprevenida, mientras succionaba mi propio semen y los fluidos de Ana metiéndole 2 dedos y rozando su clítoris y el punto G, la repetía que la mirara, Ana se despistaba con facilidad de su deber, abriendo y cerrándose de piernas, rodeando mi cabeza con sus piernas y agarrándome del cabello, gemía como si le estuvieran marcando como al ganado, aun así cumplía, la veía mirar a Eleonor lujuriosa, soportando mis caricias y mis besos en su vulva, sin decir nada, me iba informando.

-ANA: se ha corrido ya varias veces…………… sigue masturbándose………………joder, ha cogido el bote de crema y se lo esta metiendo entero,…………….dios ahora se mete 3 dedos en el ano si parar de follarse con el bote.

Hasta yo oía a Eleonor de fondo gemir poseída, pero no me di la vuelta nunca, cuando Ana no soportó, la dejé venirse en mi cara comiéndome todo lo que salió de ella, para luego subir por su cuerpo y besarla apasionadamente, quedándome encima de ella.

-ANA: se ha ido ya, me ha visto mirarla claramente.

-YO: quédate aquí, y no entres, pase lo que pase, hasta que no venga a buscarte.

-ANA: no podría aunque quisiera, estoy agotada……. - me acariciaba la cara feliz, dándome un suave y corto beso - …….a por ella, tigre.

Eleonor – Retomando a la madre.

Salí del agua con la polla a reventar, la descomunal comida de coño a Ana solo me había despertado las ansias, y ya había roto a Ana en la 1º tanda, me había desquitado con ella para que Eleonor se viera forzada a mostrarse, me metí en la casa desnudo, agachándome a recoger algo, con mi cuerpo húmedo de sudor y agua, brillante, marcando músculo, y la polla de 30 centímetros como un radar buscando un coño que follarse, dando cabezazos contra mi vientre, nunca lo había pensado pero mi polla desafiaba a la física, su peso era considerable, pero la sangre congestionada la hacia ponerse tan dura que siempre se quedaba como una barrera de paso bajada, cuando estaba a morirme estando yo de pie, apuntaba al cielo.

Eleonor pasó hacia la cocina algo abrumada sin darse cuenta de mi presencia, salía de nuestro cuarto, supongo que del baño para refrescarse, se paró en mitad del salón y se giró al verme, sus ojos casi se salen de las órbitas, conocía mi polla, pero ahora mi físico era diferente, antes solo era corpulento, ahora era una estatua de Miguel ángel, y el conjunto la hizo quedarse embobada mordiéndose el labio, reaccionó a los 20 segundos, sacudiéndola cabeza y corriendo a la cocina dando golpes en el suelo con los tacones, la seguí, al verme entrar detrás de ella se volvió dándome la espalda mirando hacia la encimera de la cocina.

-ELEONOR: perdone, no quería quedarme mirándolo así.

-YO: no te ruborices mujer, no es nada que no hayas visto ya, o sentido dentro de ti.

-ELEONOR: no hombre, ahora esta usted mucho más hombretón, mire que cuerpo.

-YO: gracias, la verdad es que no hago nada de ejercicio, bueno, salvo follar jajajaja - sonrió nerviosa negándose a girarse, di un par de pasos haca ella, cada uno la hacia mirar de reojo tiritando.

-ELEONOR: discúlpeme de nuevo, no debí quedarme mirándolo, y más desnudo, por favor, póngase algo.

-YO: no quiero, la verdad, siempre me ha gustado la sensación de ir desnudo en esta casa, me trae buenos recuerdos contigo - se estremeció al notar mi mano en su espalda.

-ELEONOR: por favor, no haga esto, es un hombre feliz con su mujer…….- se derritió al sentir mi polla recaer en su trasero separando aun sus nalgas.

-YO: soy feliz con ella, y aparte soy feliz con usted, eres una mujer hermosa que rivalizara con la mismísima Venus.

-ELEONOR: ay papi no me hable así, no tengo nada que hacer contra Ana, es mucho más joven y guapa que yo.

-YO: lo es, pero aun así no puedo evitar tener erecciones de solo pensar en volver a hacerte el amor - la rodeé con un brazo pegando su cintura a mi polla palpitante, con gesto reflejo llevó una de sus manos a mi nuca, que pegó mi cara a su cuello.

-ELEONOR: no sabe lo que dice, solo soy una vieja divorciada, yo ya no estoy para esos juegos……- estampé de un fuerte golpe en la encimara, delante de sus ojos, el bote de crema solar que hacia minutos se había estado metiendo en el coño, aun cálido de su interior, abrió los ojos llevándose una mano a la boca sorprendida.

-YO: creo que no, Ana te ha visto y tú a ella, ¿verdad?

-ELEONOR: si, lo lamento, no quise……….- la corte metiéndola la mano entre las piernas y palpando el biquini que emanaba calor y humedad.

-YO: no lo lamentes, saber que aun me deseas me ha hecho muy feliz, Ana esta convencida de que aun no das la talla, y yo la he dicho que si, que eres un loba en la cama y que volverías loco a cualquier hombre - frotaba mi mano notando como se abría una de sus piernas dándome paso.

-ELEONOR: por dios, pare, no lo soporto, llevo días masturbándome sin control solo de oírlos, al verlos casi me da un ataque, no sea malo - bajé mi pelvis hasta que mi polla saltó como un resorte entre sus mulos asomando por delante de ella, la apreté las piernas para cerrar sus muslos sobre ella y que sintiera mi tranca abriéndola los labios mayores a través de la tela impregnada en fluidos.

-YO: ¿es esto lo que deseas?

-ELEONOR: mamasota que linda verga, que gigantesca la tiene, si, deseo que me vuelva a llevar al cielo montada en usted, pero echo más aun de menos que un macho me haga suya, me haga feliz, sea fuerte y cuide de mi, que sea mi hombre, como lo fue mi marido en su día y como fuiste tú con mi hija y conmigo, eso no puede ser, usted ya tiene novia.

-YO: ¿y si ella quiere compartirme? ¿Usted se negaría?

-ELEONOR: ¿por que querría compartir a un macho como usted, con una vieja como yo?

-YO: ¿por que querría una hija como la suya? tú has compartido a tu hija conmigo, ahora Ana quiere compartirme contigo, y yo ardo en deseos de ser tu macho, tenerte entre mis brazos y hacerte temblar de placer - su cintura se movía instintivamente.

-ELEONOR: ay virgen santa, ¡¡QUE VERGA!! - bajó una mano a mi polla, con los ojos cerrados, sobresalía tanto que daba para acariciar el glande y parte del tronco y atravesarla de lado a lado, la sujetaba fuerte y su cintura se frotaba como si fuera una barra fija de metal contra ella - solo de pensar en usted abriéndome de nuevo se me nubla la mente, ¡¡SI, CARAJO, ÁBRAME, HÁGAME SUYA!!

No necesitaba más, le bajé con dificultad el tanga, tan pegajoso en su coño que hice fuerza, la empujé contra la encimera sacando la cintura y colocando el glande contra ella, el cual acariciaba y separaba labios con una mano, mientras la otra fue a una de sus operadas, duras y evocadoras tetas, una vez sujetada fui apretando, lentamente abriendo paso a paso, el 1/3 lo paso gimiendo de placer, el 2/3 abría la boca sonriendo, el último tramo gritó fuerte golpeando el suelo con uno de sus tacones.

-ELEONOR: ¡¡¡DIOS MIO, QUE PEDAZO DE VERGA, GRACIAS DIOS, MÁTENME, POR TODOS LOS ANGELES DEL CIELO, QUE DELICIA, COMO ME LLENA!!! - me sacó una sonrisa su alarido, ni que estuviera pensado.

La verdad es que si ella estaba disfrutando con ello, yo no lo estaba pasando peor, su calor interior y su fuego eran diferentes, no mejor o peores, diferentes, y eso me atraía, su forma de moverse, hablar y contonearse, como ejemplo, ahora mismo había encogido una pierna y la tenia de tal manera que hacia de acordeón contra mi cuerpo, apoyada en la encimera, queriendo así mantener ella cierto control sobre la penetración, generando resistencia.

Me dio igual, suave y lentamente la polla salía de ella, oyendo como crepitaban los fluidos al salir, para volverla a hundir igual de despacio, provocando un temblor interno en ella, repetí la operación 5 minutos, sacándola toda y metiéndola toda, a un ritmo pausado y desquiciante, pero no quería abrumarla ni dominarla, quería hacerlo de forma cariñosa y tierna. Ella aceptaba con gusto, rebajando sus gritos un poco, pero al sentir llenarla su mirada, reflejada en el microondas, la delataba, estaba gozando como una perra, mi mano acariciaba su clítoris mientras mis dedos pellizcaban unos pezones que se habían puesto duros y enormes, echaba de menos la sensación de tenerlos entre los dedos, Lara por ejemplo, tenia más de tetas, naturales y con alta sensibilidad, pero los pechos de Eleonor eran todavía más deseables, gran trabajo del cirujano. Fui subiendo el ritmo paulatinamente a partir de ahí, la sacaba tibiamente pero la hundía de golpe, haciéndola gemir de aguante y dar pequeños saltitos, hasta que el ritmo ya no le daba tiempo, se agarró a lo que pudo y sacó el culo hacia atrás queriendo soportar aquello, eso solo provocó que mis acometidas golpearan con fuerza, de forma certera, profunda y directamente sobre su punto G, a los 20 minutos rompió con un orgasmo que la hizo fallar las piernas, se sujetó al mármol de la encimera para no caerse, esto no había hecho más que empezar, volví al ataque, ahora levantándola y pegando su espalda a mi pecho, abrazándola fuerte y aumentando el ritmo hasta el máximo de Raúl, agarrándola de sus senos, oyendo los golpes secos y continuos de mi pelvis azotando sus nalgas que vibraban al son. Estalló en varios orgasmos seguidos durante los siguientes 15 minutos, maldiciendo y bendiciendo a la vez entre gemidos gritos y suspiros, palabras colombianas que no entendía pero que me sonaban calientes y excitantes. Paré de golpe, eso la hizo confundir, movía su cadera buscando más.

-YO: voy a correrme pronto, cuando lo haga, quiero que me la chupes, deja que mi semen llene tu boca, pero no te lo tragues, iras con Ana a la piscina y te besaras con ella, compartirás mi semen y jugaras con él, así sellareis el pacto.

-ELEONOR: si, lo que usted quiera, pero siga.

Me iba a correr así que la di un aperitivo, saqué a la bestia los 5 minutos finales, no se lo esperó, ya la conocía, pero le quedó grande, por poco se desmaya, tenia la boca abierta y los ojos cerrados, babeando sin control sobre la encimera gimiendo de forma continua, balbuceando palabras ininteligibles, la saqué de su interior en un ultimo orgasmo que la hizo caer al suelo, agarrando mi polla y llevándosela a la boca encantada, tragado medio rabo sin miramientos, con sus manos buscando su premio, que recibió en 5 latigazos en la boca, tan posesa estaba que se lo tragó.

-YO: eso no es lo que te había pedido.

-ELEONOR: lo siento, tendremos que volver a sacar más……- me miró a los ojos, mientras engullía mi polla flácida, y con fuego en ellos, sonreí ante su treta.

La dejé volver a ponérmela dura un par de minutos, comiendo rabo como en sus mejores tiempo, disfrutando como repasaba todo el tronco con su labios y como trabajaba mis huevos, chupándolos y besando la base de mi miembro mientras su mano era la expresión de la velocidad, masturbando el largo de mi falo. Una vez tiesa la ofrecí mi mano para ayudarla a levantarse, cuando se ponía de pie tiré de ella hasta subírmela encima, me rodeó con las piernas, besándonos con pasión, su torso se movía al ritmo que nuestras lenguas se cruzaban, la sujeté de las nalgas y me fui andando con ella subida hacia la piscina, donde Ana ya estaba recuperada, tomando el sol completamente desnuda, tirada en el césped, al vernos venir se puso en pie sonriendo, acercándose hasta acariciar la espalda de Eleonor, que me miraba a los ojos avergonzada, pero dispuesta a todo.

-YO: mira peque, al parecer Eleonor quiere seguir donde lo dejamos, ¿que te parece?

-ANA: una gran idea, es una gran mujer.

-ELEONOR: no sean malos, yo no quiero ser una molestia..…- la cerré la boca metiéndola la legua hasta el fondo.

-YO: tú deseas esto tanto como yo, y Ana esta convencida de que no aguantarás más que ella, ¿verdad peque? - la dejé botando para que Ana siguiera el hilo.

-ANA: es verdad, no quiero faltarte al respeto, pero Raúl es mucho para una mujer tan mayor como tú - si no tuviera a Eleonor por medio la hubiera dado un beso a Ana, me leía la mente, quería despertar su orgullo latino.

-ELEONOR: mi niña, usted ya sabe que yo fui suya antes que usted, no le extrañe que mi cuerpo soporte más de lo que se cree - había caído, y Ana seguía ganándose mi afecto.

-ANA: ¿tú?, jajaja no me hagas reír, seguro que era tu hija la que soportaba a mi hombre, y tú te deshacías como un azucarillo al sentir su polla abriéndote - podía notar la mano de Ana separando mi rabo se la vulva de Eleonor y como la acariciaba el coño desde atrás, Eleonor se mordió el labio cerrando los ojos al sentirlo.

-YO: ya la he dicho que no era así y que tú follas muy bien, pero no me cree, ¿se lo demostramos? , asintió sonriendo.

Me giré hacia las hamacas, donde pasé una pierna por encima de una de ellas y me senté, dejando a Eleonor recostarse sobre el largo de la hamaca, Ana se puso cerca, la atraje de un brazo y sin saber que hacer esperó a que la cogiera de la cintura, apenas pesaba 67 kilos, la levanté de la cintura solo con los brazos y la elevé por encima de mi colocándola encima de nosotros, se abrió de piernas entendiendo mi idea y la dejé caer lentamente hasta sentarse sobre la cintura de Eleonor, ante su atenta mirada, la acaricié y besé por donde pude, la di un largo beso y la pedí que fuera a por Eleonor.

Se recostó sobre ella, acariciándola, Eleonor temblaba al sentir sus manos tocarla, la miraba inquieta, poco a poco Ana fue besando su cara, su cuello y sus senos, alucinó, como era normal, con el tamaño de sus pezones, era casi antinatural, pero los chupó encantada mientras a Eleonor se le escapaban suspiros de placer, Ana hacia bien su trabajo, yo apenas metía y sacaba mi polla del interior de Eleonor, disfrutaba acariciando y azotando el culo de Ana, que se movía clamando una penetración, con cuidado la saqué de la colombiana y la hundí despacio en el coño de la granadina, se el cortó la respiración unos segundos, se aferró a la hamaca y besaba a Eleonor sin cesar, atrayéndola con la lengua a un juego perverso.

Me sujeté a las caderas de Ana y comencé a follarla de forma animal, esperé que sus gemidos la cortaran el juego con Eleonor, veía de refilón como ambas sostenían los ojos, mirándose fijamente cuando Ana solo era capaz de quedarse quieta y recibir, pero era solo una pose, cuando rompió el 1º orgasmos y retomo aliento, entró en modo batalla, girando su cintura de forma endiablada, podía estar 10 minutos marcando el ritmo ella sola, era maravilloso verla competir conmigo, y Eleonor quiso ser más que una espectadora, sujetó a Ana, besaba y repasa cada centímetro de piel de Ana, centrándose en sus pezones y sus senos. Tras varios orgasmos seguidos, Ana cedía el ritmo.

-ELEONOR: vamos ni niña, aguante……...- sonó a órdago y eso picó a Ana que retomó el control unos minutos más, pero de nuevo cedió y esta vez eclosionó en un orgasmo descomunal, se acariciaba el clítoris mientras todos sus fluidos caían sobre Eleonor, que se masturbaba levemente para no perder comba.

-ANA: serás cabrón, me vas a matar como sigas así.

Sin hacerlas caso, acaricie el coño de Eleonor para advertirla, era la siguiente, la hundí hasta el fondo sin lograr sacarla un mero gritó, estaba ocupada con los labios de Ana, agarré la hamaca, iba a por todas, saqué a la bestia. Es una frase hecha o repetida, pero podía sentir como la partía en dos, los primeros 10 minutos aguantó como pudo, pero yo no bajaba el ritmo, tenía la posición idónea y estaba bien plantado, aparte de lo más cachondo que recordaba nunca, no me hacían falta descansos, y eso era demoledor para ellas. Ana me miraba de reojo asombrada de mi brío, levantaba el culo cabalgando la hamaca, besaba su culo cuando podía. Eleonor volvía a tener la boca abierta y unos hilos de baba caía por los lados, miraba como Ana se retorcía sobre ella mirándola lujuriosa, de vez en cuando hablaba, decía algo que solo Ana oía. A la media hora de reventar su coño y ver como se corría sin parar, tuve que bajar el ritmo, más que nada, la hamaca iba dando botes por el suelo de la terraza y nos íbamos de cabeza al agua, logré clavar una pata de la hamaca en el césped para fijarnos un poco, para volver a arremeter con fuerza desmesura, estaba encendido, a punto de correrme, no se de donde saqué más velocidad, o solo intensidad, algo crujió, en un par de embestidas la pata clavada en el césped cedió y se astilló provocando que la hamaca cediera unos centímetros. Ana reía al notar como me iba a correr, tiró hacia atrás la cintura hasta sacármela y masturbar fuerte ante la mirada ida de Eleonor, su cara era de horror, con los músculos de la pelvis dando tirones bajo la piel, eyaculé como un caballo, salpicando el cuerpo de Eleonor, con Ana asegurándose de que no se desperdiciaba una sola gota.

Yo estaba bufando, roto de cansancio, sudando y ardiendo por dentro, me senté, mirando como Ana lamía el semen caliente del cuerpo de Eleonor y luego lo compartían en la boca, la misma idea que se me había ocurrido a mi lo estaba haciendo ella por que si, devolviendo a Eleonor al mundo, respondiendo con besos suaves y entrelazando lenguas con mi simiente brotando de un boca a la otra.

-ANA: pues si que tiene aguante, mis respetos…….- Eleonor sonreía levemente, aun reponiéndose de sofocón, respirando tan fuerte que la oía inspirar.

Sin decir una palabra me metí en el agua, me sentía como si fuera un hierro candente en agua fría, me quedé flotando, en una especie de relajación extra sensorial, tratando de recomponerme yo también, las veía de reojo, Ana seguía comiendo mi semen de su cuerpo, lamiendo como si fuera un helado el sudor de Eleonor, que la acariciaba lentamente la cabeza. Había vuelto a pasar, volvía a estar en esa casa con una madura y una joven, parecía inevitable que pasara, y en el fondo, me alegraba, iba a disfrutar como un condenado, no ya de 1, si no de 2 de mis mujeres preferidas.

Ana y Eleonor –

Todo cambió a partir de ese instante, conmigo tumbado flotando en el agua, mirando el atardecer en el cielo de Madrid, oyendo de fondo como Ana jugueteaba con una Eleonor que trataba de recomponerse aun del toro bravo que la acababa de destrozar, ambas reían, yo solo pensaba, estaba convencido de que me lo iba a pasar bien con esas 2 fieras, no había impedimento moral, ético o de respeto que lo impidiera o nos molestara en absoluto. Eleonor lo quería, lo había buscado desde que nos pidió que viviéramos juntos, estoy convencido, la idea de tenerla de nuevo, se me pasaba por la cabeza a diario y Ana al notarlo, me lo concedió, queriendo continuar con nuestros juegos.

Pero yo no quería eso, esta vez no, si Lara para mi merecía algo más, Eleonor por descontado, no era otra cría a la que iba a asuntar si me desbocaba, era un mujer adulta y madura, con un cuerpo de MILF, a la que me había follado durante meses con su hija, si bien era su macho, o así me gritó infinidad de veces durante el resurgimiento del sexo entre nosotros, la relación era diferente, quería que fuera diferente y deseaba que lo fuera, no tenia que ganarse un sitio en mi cama, ya lo tenia. Absorto en mis pensamientos, noté como el nivel del agua variaba, miré a un lado para ver a Ana en el agua, casi sujetando en vilo a Eleonor, ayudándola a caminar hacia la piscina, pese a estar desorientada y confusa, sus tobillos no cedieron nunca ante sus tacones, los cuales dejó a un lado antes de meterse lentamente en la piscina tambaleándose.

-YO: ¿que hacéis?

-ANA: Eleonor esta ardiendo, quiere darse un baño refrescante, y así calmarse un poco.

-ELEONOR: si mi papi, estoy ardiente y me quema todo……..- balbuceaba más que hablar, palabras y expresiones poco refinadas para lo que solía ser.

-YO: ¿y es buena idea meterse en el agua conmigo? - ambas sabían que sus cuerpos húmedos eran una provocación.

-ANA: se lo he dicho, pero dice que le da igual, de todas formas, yo quiero más - la miré atónito, pero luego comprendí,, había estado 1 hora asesinando figuradamente a Eleonor, sin tocar a Ana salvo algún beso fugaz en su trasero, por excitante que fuera, Ana tenia un apetito voraz que no se saciaba mirando.

-YO: me vais a llevar a la tumba, estoy muerto.

-ANA: haberlo pensado antes - tenia razón.

Antes de darme cuenta tenia a Ana acariciándome la espalda, me había agarrado de los hombros por detrás y me mantenía flotando, soportando mi liviano peso en el agua, ya que fuera de él no podría ni soñando, dándome algún beso en el hombro susurrándome lo caliente que estaba, y lo mucho que le había gustado verme así de “animal” con Eleonor, sabia por mis comentarios que Eleonor no era ninguna boba de coño cerrado, y aun así verme desquiciado abriéndola, admirando en 1º plano la cara de Eleonor le había hecho sentirse………¿orgullosa de mi?. Me dio varias vueltas mientras veía a Eleonor chapotear distraída, realmente su cara roja y congestionada clamaba por enfriar sus ánimos, Ana me arrastró hacia una zona menos profunda, notando como mi peso crecía al acercarnos, una vez allí no me quedó otra que ponerme en pie en el agua, quedando con la cintura aun sumergida, Ana también de pie detrás mía, acariciaba mi basta espalda y mis grandes brazos, desde allí Eleonor no podía verla, mi corpulencia la hacia desaparecer a sus ojos, los cuales se clavaron en mi, de nuevo no quiero presumir, pero la descripción correcta es que parecía, o me veía como un dios griego, esculpido por los amantes del físico perfecto, mi torso marcaba unos pectorales casi antinaturales y el vientre era firme y contundente marcando los músculos bajo la piel, con el agua resbalando por mi torso y mi mirada penetrante. Hechizó a Eleonor, si no lo estaba ya, que fue nadando hasta mi.

Ana pasó los brazos por mi cintura bajando sus manos a mi rabo, que permanecía a la espera, llevaba 3 horas y media follando con 3 corridas, un hombre tiene sus limites, pero aquel descanso de unos 20 minutos en el agua hizo milagros, mientras notaba sus dedos acariciar el largo de mi tronco, con la cara llena de lujuria y pasión de Eleonor, nadando despacio hacia mi, hizo magia, y más que eso, la sonrisa picarona de Ana tras de mi al verla venir, terminó de ponérmela de nuevo como una estaca, las caricias por debajo del nivel del agua tuvieron que subir hasta por encima de ella, mi polla se erguía orgullosa como un farro en mitad del océano.

-ANA: ves como aun puedes, te subestimas, ¿verdad Eleonor?

-ELEONOR: claro que si preciosa, este hombretón podría derivar edificios con su virilidad - de golpe no me pareció tan cansada e ida, su mirada brillaba como las de un gato en la noche, su media sonrisa me confirmó una idea en mi cabeza, la risa de Ana la hizo evidente.

No se cuanto ni se desde que momento, pero ambas estaba aliadas, no me atrevo a decir cual fue el instante de su acuerdo, ¿desde que las dejé en la hamaca?, ¿desde que Ana me concedió el ir a por Eleonor?, ¿desde que vivíamos allí? ¿O puede que antes?, incluso antes de mudarnos, que Ana a mis espaldas hubiera maquinado con Eleonor para quedarnos con esa casa a cambió de cederme a su hombre. No lo pregunté a ninguna de las 2, podría decir que me daba igual la respuesta, tenia lo que deseaba en ese momento, pero no era así, la realidad es que temía la respuesta, ¿en que fracción del tiempo me habían embaucado?, si es que lo habían hecho, quizá solo eran imaginaciones mías, prefería pensar eso, y lo más importante, dejar que lo pensaran ellas, por ahora.

La verdad sea dicha, cuando Eleonor se metió mi miembro en la boca, dejé de pensar, y solo acepté que durante un buen rato iba a estar ocupado. Ana acariciaba mi pecho y mi vientre, besando mi espalda con esmero, pero palidecía ante las acometidas del cuello de Eleonor, que se alojaba media polla en la boca aguantando las arcadas, haciendo que el agua a su alrededor vibrara a su ritmo, no usaba las manos, las tenia apoyadas en el fondo de la piscina, solo su boca, la cual movía con pasión, me provocaba placer, pero a estas alturas, sin un ritmo de manos continuo, eran solo preliminares, la dejé convencerse de que hacia un buen trabajo, que lo hacia, unos minutos de gloria, en que Ana recorría mi cuerpo con sus manos y sus senos, se fue ladeando hasta quedar a mi lado, allí mis manos invadieron su piel, la pegué a mi y hundí mis dedos en su trasero, buscando su coño ardiente, mientras la besaba con ira contenida, poco le duró la sonrisa en la cara, mis hábiles dedos hurgaron, buscaron y encontraron su clítoris y su punto G, era como buscar un botón en el mando a distancia con los números desgastados de tanto tiempo en la mano, ni lo miras, no hace falta , ya sabes donde están los botones.

Eso encendió a Ana que levantó una pierna y rodeó mi culo con ella, permitiendo que la follara con las falanges, mientras mi otra mano se divertía con uno de sus pechos, el otro apretado contra mi dorso, se frotaba haciéndome sentir el pezón clavándose en mi costado. Estuve así media hora, con Eleonor no logrando nada pese a sus esmeros con la boca, y haciendo que Ana se estremeciera, mirándome fijamente a los ojos, sonriendo con la boca abierta, suspirando al notar como oleadas de sensaciones la llenaban el cuerpo naciendo en su vulva. No paré hasta notarla contraerse para evitar una sacudida que la pariera la columna al correrse, la solté y la di un empujón cariñoso que la hizo hundirse en el agua. Para cuando salió del agua y fijó la vista ya tenia a Eleonor de pie, de espaldas a mi, contra la pared de la piscina, y buscando su coño para martirizarlo.

-ANA: hey, no es justo, me toca a mi……- reí al verla cruzarse de brazos como una niña consentida.

Ni la contesté, solo apreté mi glande hasta ver como se introducía en el coño de Eleonor que temblaba al notar como la iba abriendo de nuevo, aun tenia el coño en carne viva y allí estaba yo otra vez, pero ahora con rabia, ya no tenia que convencerla con palabras dulces y juegos mentales, ya era mía, y yo suyo, y ambos nos conocíamos demasiado bien como para andar con estrecheces. La hundí tan dentro de ella que hasta la separé las nalgas para seguir penetrándola esos centímetros finales, Eleonor se puso de puntillas y gritó.

-ELEONOR: ¡¡DIOS MIO, GRACIAS MI SEÑOR, GRACIAS POR ESTA VERGA TAN DESCOMUNAL!!! - me acerqué a su oído levemente, sabiendo de sus devotas palabras cuando follábamos.

-YO: dios no te va llenar tu coñito ardiente, el no te va a follar hasta que te desmayes, yo si, a quien debes estar agradecida, es a mi - mis palabras la hicieron vibrar, se encorvó para besarme, la piel se le enfrió y se puso de gallina ante mi atrevimiento.

-ELEONOR: hazlo.

La pobre se arrepintió enseguida, sin duda en mi determinación, saqué a la bestia, por poco se sale de la piscina los primeros 5 minutos de mis acometidas, al estar medio fuera del agua, no había resistencia, fue diabólico, tenia que agarrarla y volverla a meter en la piscina, no articulaba palabra, solo gemía con la boca abierta en forma de O, dando golpes al césped que rodeaba la piscina con la palma de la mano. Fui alternado sujetarme al bordillo con agarrarme a su tetas, pero el ritmo no bajó, nunca, a los 10 minutos rompió en un orgasmo colosal, se movía tanto que parecía epiléptica, pero aferrando bien los brazos a sus 2 lados no había escapatoria, estaba ligeramente enfadado, lo pagué con ella, al 3º orgasmo, pasados 20 minutos, se desvaneció, cayendo redonda medio cuerpo sobre el césped. Ana contemplaba tan gloriosa demostración, como seguía golpeando en su trasero aun en su cuerpo medio inerte, se movía algo pero solo pedía piedad, sin atreverse a decir nada.

Estaba encendido de nuevo y ya solo me clamaría correrme, en ese estado Raúl era tan peligroso como Zeus, salí del agua ardiendo, tendí mi mano a Ana que la cogió sonriendo, de un tirón no solo la saqué del agua si no que me la monté encima, hábilmente me rodeó con las piernas, besándonos desaforadamente, me di la vuelta y la estampé contra la fría pared de cemento que nos separaba del resto del mundo y de una caída de 60 metros a la calle, busqué con ansia su coño y la penetré violentamente, pero Ana solo se mordió el labio de gusto alzando la cabeza, me abrazó y sabiendo que no tenia nada que hacer me dejó atornillarla contra el muro, no es que sacara a la bestia, es que no la había guardado, golpeaba tan fuerte mi pelvis que oía a Ana quejarse del rebote contra la pared, pero no evitó que sus emanaciones me bañaran las piernas según su mente se nublaba, sus ojos se tornaban en blanco, apenas respirando, y yo aun no sentía ganas de correrme en absoluto.

Tuve compasión, y lo digo en serio, la bajé al suelo y la empujé de espaldas a mi, de cara a la pared, la cogí de las manos y las elevé por encima de la cabeza hasta tenerla casi colgando estirada contra la pared, busqué su ano con mi dedos, lo abrí un poco y a continuación la ensarté hasta el fondo, ahora si, sacando un grito que hizo ladrar a algún perro cercano, ¿compasión? Si, si hubiera seguido por el coño hubiera durado 1 hora más, la estrechez y el frote de su ano siempre me acortaban los plazos. Eso no me calmó, solo me volvió más loco, sentir como gritaba contra la pared mordiéndose el brazo para acallar un poco sus lamentos, gimiendo desconsolada al notar mi barra ardiente forzarla por detrás hasta derretirla. Sentí como un mordisco en la pierna, pero estaba por correrme y no iba a parar, no pude dedicarle mis 5 minutos finales de frenesí, me dolía la pierna y me encontraba mal, pero no paré hasta levantarla por la pared llenándola de semen, los chorros los sentía llegar al estomago de Ana, que hacia rato no emitía sonidos. Al sacarla vi sangre en mi pene, y a Ana hacerse una bola en el suelo, tiritando y agarrándose el culo como si se le fuera a caer.

Me fui corriendo al baño, cojeando más bien, y vomité varias veces, mareado y con un sudor frío, me calmé, me dio por vestir a las chicas, ambas idas, ponerme algo yo y llamar al samur, me encontraba fatal, y la pinta de ellas no era mejor. Diagnostico, Eleonor deshidratación severa y agotamiento, la que mejor parada salió, Ana igual, sumándole un desgarro anal leve, y yo ruptura en cuádriceps de 4 centímetros de la pierna izquierda y corte de digestión derivado de un esfuerzo físico extremo. Me eché a llorar al relatárselo a los médicos, dios sabe que no hay que mentirles nunca. Me sentía culpable, y lo era, pero no sabia hasta que punto, Eleonor se recuperó rápido y la dieron el alta el mismo día, me fue a ver y me dio un beso en la mejilla, comportándose como una madre preocupada, pero con una sonrisa de oreja a oreja. A mi con la radiografía y unos sueros, me mandaron masajes, cremas y un par de semanas de reposo hasta que se curara el músculo, con un fuerte vendaje de compresión, fuimos a ver a Ana, tumbada en la cama del hospital, volví a llorar, entré con miedo a su reacción, al verla con un pañal que le habían puesto casi me derrumbo, se giró levemente con la cara adormecida de un ligero sedante que le habían puesto.

-YO: ¿estas bien peque?

-ANA: si, me dicen que no es nada terrible, un par de días aquí y para casa, pero que ande con cuidado unas semanas y no fuerce jajaja - su actitud me tranquilizó.

-YO: os pido perdón, no me supe contener, debí pararlo.

-ELEONOR: no sea bobo, sabíamos donde nos metíamos.

-ANA: claro que si, es un accidente, no pasa nada, no es culpa tuya……- lo era, pero es lo que se suele decir.

-YO: de verdad que lo lamento, me odio a mi mismo, ojalá no tuviera esta monstruosidad de polla - la enfermera que andaba de fondo soltó una leve carcajada, al tratarme ya cuchicheaban entre ellas sobre mí.

-ANA: no te martirices, en un par de semanas como nuevos, y seguimos donde lo dejamos.

-YO: ¿estás loca?

-ANA: si, lo suficiente como para que me desgarres el culo, y seguir queriéndote - me pidió un abrazo que no pude negarle.

Volvimos a casa Eleonor y yo, dejando a Ana en observación un par de días, la relación era fría y distante, me costó una semana volver a ser yo, una vez que las veía a ambas normales y sonrientes andar por casa como si nada. Obviamente nada de sexo durante 3 semanas, y no es que no quisiéramos, contrataron a una fisio que venia a darme los masajes, pero al final me los daban ellas con sus indicaciones, y mi polla, inactiva varios días seguidos, era un volcán que al mínimo roce salía a pasear, la lesión era tan cerca de la ingle que la fisio insistía en que fuera sin ropa interior y más de una vez la toalla diminuta que ponía para taparme, iba subiendo según mi empalme y al final terminaba cediendo, caía y dejaba mi polla dura a su vista, la 1º vez que la vio no se contuvo y me la empezó a chupar, no le importo nada, ni que Ana estuviera delante riéndose de lo mal que la chupaba, casi no le entraba en la boca, era una mujer morena de unos 34 años, algo regordeta, con su 1,70 de altura andaría por los 79 kilos. Gracias a masturbaciones leves y comidas de polla lentas de parte de las 3 mujeres, Eleonor Ana y la fisio cuando no estaban las otras 2, o estando Ana, me mantenían cuerdo, la habían dado permiso para ello y yo se lo agradecí montándola como a una yegua el ultimo día, no duró ni media hora, con Ana masturbándola de lado mientras la hundía mi polla en su coño cerrado.

Ni nos cobró las últimas sesiones y se fue feliz dándome su número de teléfono, lo metí en el cajón del números de todas, las enfermeras que nos atendieron, la chica que traía la compra del super y me vio desnudo pasando por delante de ella, la vecina de enfrente que llamó a la puerta para saber que eran esos gritos y al abrir Eleonor, vio de fondo como me follaba a Ana y a la fisio, las chicas de mi trabajo, la encargada y las otras 2 chicas monas……etc. No se por que los guardaba, no los necesitaba, pero me parecía una falta de respeto hacia ellas no hacerlo, y así mantenía a Ana a raya con los celos.

Durante esas semanas me dio por pensar, sobretodo en la cama, aunque nuestras cosas estaban en la habitación de abajo, dormíamos los 3 en la cama de Eleonor, tiraron la vieja cama de su marido y compramos una cama enorme, de 3x3 metros, nos daba para dormir yo y mi corpulencia, Eleonor y sus curvas, el cuerpo de Ana más menudo, y aun nos sobraba cama por todos lados. Más de una noche le tuve que pedir a alguna que me la chupara, dormíamos desnudos por el calor, sin sabanas ni nada, y tener a esas 2 hembras al lado no era bueno para mi, llegaba a salirme de la habitación y darme una chapuzón en la piscina al aire libre a las 4 de la mañana. Como decía, pensaba mucho, al inicio en mi descontrol, Ana aun tenia magulladuras en el culo, la espalda y las tetas, de aplastarla contra aquella pared de cemento. ”Heridas de guerra” decía. Luego mi pensamiento fue cambiando, y volví a caer en que aquellas 2 mujeres se llevaban muy bien, exageradamente bien, y me recordó la sensación de que estaban aliadas, y ahora si me interesaba pensar en ¿desde cuando y con que fin? Podía ser desde hacia poco y con el único fin de follárme a las 2 sin problemas, pero mi instinto, ese que te inculcan las madres, de tener cuidado y andar con pies de plomo, me llamaba, aunque desechaba la idea, Ana era mi amor, mi vida, pero se había convertido en una chica peligrosa, le había enseñado demasiados trucos, Eleonor era candidez en persona, era dulce, amable y agradable, a la vista y al oído, tan buena gente que la idea de que Ana la manipulara a mis espaldas se me pasaba a menudo por la cabeza, ella sola no era nada, pero era muy maleable.

Fui abandonando ideas según me iba recuperando, y volvíamos a follar, 1º con Eleonor, la más entera, las primeras veces solo estaba quieto y la dejaba hacer, y os lo juro, esa mujer sabia mover las caderas, me sacaba la 1º corrida sin dificultad y la 2º ya era una temeridad, desmontaba exhausta y terminaba el trabajo con la boca, junto a Ana. Aguardamos un tiempo prudencial hasta volver a tener relaciones sexuales con Ana, pero una vez empezadas, su coño era lujuria, y con el paso de los días volvió a abrirse el culo ella sola ante mis reticencias, pero yo era un consolador, estaba quieto y las dejaba hacer. Volvían a estar en forma, y yo no podía con ambas, no en ese estado, di gracias a dios por que terminó el verano y Ana regresó a la universidad, al menos tenia las mañanas para ocuparme en exclusiva de Eleonor, lo cual aprovechaba para ir cogiendo tono, y bien que lo disfrutamos, sin llegar a ser como con Ana, debo reconocer que follar con Eleonor era una delicia, y no solo follábamos, más de un vez me descubrí haciéndola el amor, parece lo mismo pero no lo es, las formas, las palabras, las caricias y los ritmos eran diferentes, me gustaba, y a ella más.

En una de esas mañanas ella insistió en que la abriera el culo de nuevo, desde la última vez que me la follé antes de mudarme con Ana, no se lo había abierto nadie, así que se cuadró a 4 patas y la hundí en su ano, muy sencillo ante una hembra de ese calibre, pese a la inactividad sus caderas abiertas, del embarazo y nacimiento de su hija, no otorgaban menor resistencia, y si mucho placer, clavó las 20 uñas en la cama cuando mi 2º corrida la llenó hasta casi hacerla sacar semen por la boca, estaba recuperando el tono. Esa misma tarde nos acostamos los 3 en la cama, con el cuidado de esas fechas, ellas sin querer tocarme mucho, pero me sentía fuerte, me recosté de lado y acaricié a Ana hasta que mi rabo se perdió entre sus piernas, la estaba follando y a gran velocidad, sus alaridos despertaron a Eleonor, que sonreía ante el regreso de su macho, por 1º vez en un mes me atreví a sacar a la bestia sedienta de carne de su cueva, y acudió encantada a la cita, destrocé a Ana en menos de 40 minutos, lo di todo, del último empujón la saqué de la cama, y sin importarme mucho lo que la ocurría, ataqué a Eleonor, ya abierta de piernas masturbándose, la hundí hasta el fondo de su coño húmedo, y ya no gritaba o se sorprendía, tenia la misma cara de lujuria que ponía Ana, fui perforando sin descanso hasta notarla desvanecerse en un sin fin de orgasmos durante la hora que tardé en correrme en su interior, pero al tumbarme algo cansado deseando acabar, ya tenia a Ana encima de nuevo, frotándose hasta ponérmela dura de nuevo, lo que yo quería y lo que quería mi pene eran cosas diferentes. Sin mucho cuidado, me montó a horcajadas metiéndose mi miembro por el ano, era increíble, era como si haberse roto algún vaso sanguíneo del recto ahora su anal fuera más sencillo, y lo aprovechó, ella sola me sacó la 2º corrida en media hora, donde esta vez era yo al que le costaba mantener la batalla, tuve que llevar mis manos a su coño y acariciarla bien el clítoris para llevarla al éxtasis. Cuando me creía a salvo con Ana tumbada encima de mi sudando y riendo por igual, Eleonor sacó mi polla del culo de Ana y la engulló hasta ponérmela tiesa, “maldita traidora” le gritaba a mi entrepierna, estaba agotado y ella seguía levantándose de la lona. Eleonor empujó a Ana para hacerse sitio y metérsela por el coño, acariciando y tonteando con Ana mientras me follaba ella a mi, yo no podía moverme, solo estaba allí como espectador, toda mi energía se concentraba en mantener mi polla tiesa, y no se cuanto duró, me pareció una eternidad, hasta que Eleonor logró sacarme con gran esfuerzo el 3º de la tarde, me dio lo justo para girarme y tirarlas a la cama juntas, riendo y besándose, saboreando con sus dedos el sabor de los fluidos de sus vaginas, manchadas de emanaciones y semen.

Fue cuando me di cuenta de mi error garrafal y primario, ellas 2 eran demasiado, y si quería continuar con la relación de ambas, no podía volver a ser yo solo, ambas demandaban una capacidad física que yo no tenia, ni en ese momento, ni antes de la lesión, y solo de follar, aunque fuera fuerte y marcara músculo, no aguantaba, a 1 si, incluso a 1 de ellas y a otra no muy entrenada, Lara o Yasmine ¿pero a esas 2 bien entrenadas y fogosas?, imposible.

Pasados 3 meses follando juntos ambas querían tanto de mi que tuve que hacer lo que nunca quise, me odié a mi mismo para siempre y fui al lugar al que me juré que nunca iría…………..a un gimnasio. Ya había ido al de Eli, pero eso fue 1 mes y como recuperación para mi lesión en el pie, aunque entrené de todo menos el pie, ahora acudí a un gim cercano a casa y pagué porque me pusieran a tono, no quería ser una maquina musculosa artificial incapaz de girarse para limpiarse el culo, lo dejé claro, necesitaba resistencia física y ejercicios aeróbicos, centrados en la resistencia, la potencia y la fuerza ya las tenia. Lo 1º que me dijeron es que tocaba correr, odio correr, y más si es solo por el simple hecho de correr, si lo hacia jugando al fútbol o a algún deporte, me lo pasaba bien, ¿pero correr sin más? Aburrido y agobiante. Aun así con un grupo por las tardes salíamos a correr, luego hacíamos bici estática y clases de fortalecimiento del músculo, no para hincharlo si no para hacerlo fuerte y elástico, resistente. Cambié algo mi dieta descuidada, no mucho, solo mejoraba los nutrieres y consumía calorías de las buenas, las que te dan energía y no las que se pegan a tus venas, no me cuidaba en absoluto hasta ese momento.

Sorprendentemente, al mes y medio de estar allí, mi capacidad física no solo llegó al punto previo, si no que mejoró, era de los más en forma del gimnasio, con mejores capacidades en resistencia, fortaleza y duración, cuando me empeño en algo soy imparable, había gente mucho más preparada que llevaba años entrenando, pero no les andaba lejos. Como me advertían, el ejercicio se volvió adictivo, según sabia, el ejercicio físico continuado genera endorfinas, una de esas sustancias dopantes del cerebro, que te hace sentir feliz y contento. Por lo tanto, yo, el gordo que odiaba correr, que detestaba al capullo de las 6 de la mañana que salía a correr cuando yo volvía de fiesta y se había prometido no ser un payaso de gim nunca, ahora se sentía mal si un día no podía salir a correr o iba al gim. Dejé de ir pasados 3 meses, 1º por que me decían que allí no hacia nada, si no empezaba con trabajo de aparatos y ganar musculatura, lo cual un monitor se afanaba por convencerme, podía seguir con mis rutinas en casa, 2º , por que la ropa ajustada y ceñida del gim no favorecía en nada pasar desapercibido, pese a llevar los slips, era inevitable que se me marcara el pedazo carne con el movimiento, con mi facilidad de amistades, el monitor se reía conmigo, hacíamos bromas, el número de mujeres que salían a correr con nosotros había aumentado desde que iba con ellos, mujeres que cambiaron su horario para coincidir conmigo, era asombroso, incluso 2 monitoras esculpidas por el ejercicio andaban detrás de mi, Ana me acompañaba alguna vez, dejó de ir por que las miradas de todas la ponían encendida de celos, y eso solo envalentonó a unas cuantas que trataron de acostarse conmigo, la más tímidas me daban su número, derecho al cajón en casa, “necesito un cajón más grande” sonreía al meter cada día 2 o 3 papelitos. Las osadas se exhibían sin pudor delante de mi, se peleaban por hacer pareja de ejercicios conmigo en los calentamientos o tomar mejores posiciones ante mi mirada, me acompañaban luego en la salida, casi raptándome a tomar café, cuando odio el café, pero no las quería hacer el feo, alguna me caían bien, otras no, pero me regalaban tetas aprisionadas sudorosas o culos envasados al vacío, eran un aperitivo, había un par hasta a las que las metía mano en los ejercicios, claramente además, solo eran juegos para mi, juegos inevitables, por muy enamorado de Ana que estuviera, si te piden ayuda en un tirón en el glúteo de una mujer de 35 años que pasaría por una de 16, metida en una prenda elástica 2 tallas más pequeña, sin ropa interior, marcando el sudor, y lo que no es el sudor, pues vas y la ayudas. Nunca pasé de allí, y eso que ver a una de las monitoras duchándose a última hora, cuando iba yo solo, “equivocándose de baño” repetidamente, y seguir acariciando su cuerpo con el agua delante de mi, me daba para una infelicidad o dos, pero me resistía, sabia que lo que tenia en casa era mejor, y más aun cuando se lo contara, Eleonor se reía, Ana se ponía roja de rabia, y luego en la cama se reafirmaban.

Un monitor me dio una tabla de ejercicios y consejos para seguir en mi casa, salir a correr o en bici, me compré una maravilla de 500€, eso lo podía hacer por la calle, con unas simples series por la mañana de 20 minutos, mantenía el tono físico logrado de sobra. No es que ahora fuera una maquina, había cientos en el gim con más músculos que yo, alguno daba grima de lo grande y lo tonto que era. Como repetía, mi físico no cambió casi nada, menos grasa acumulada y músculos fibrados, pero de aspecto idéntico, era por dentro, me notaba ligero, ágil, rápido y veloz, todo ello hacia que mis esfuerzos me costaran mucho menos, antes al correr 10 minutos seguidos tenían que llamar a emergencias, ahora podía estar hora y media sin notar demasiado el esfuerzo, o hacer 30 kilómetros en bici, según me dijo el monitor, tenia el molde físico para hacer lo que me diera la gana, supongo que buscaba que me quedara pagando la cuota del gim, pero no podía evitar creérmelo, 1,92 de altura, 90 kilos y un índice de grasa corporal rozando el mínimo, ahora me importaban esas cosas, espaldas anchas y fuertes, grandes dorsales, vientre en relieve marcando la tableta como nunca pensé que era posible, unos pectorales descomunales, brazos fuertes y torneados, y lo mejor de todo, mis piernas, los gemelos los tenia que trabajar, pero los muslos, eran una obra de arte, grandes, fuertes, tensos y fibrados, de futbolista, de velocista, al andar o correr retumbaban como las tetas de Ana, pechos de adolescente, firmes y bien colocados, que ceden al movimiento lo justo para temblar y recuperar su posición inicial rápidamente. 17 años soportando mi gran peso, y otros 2 años follando sin parar apenas, en 3 meses estaba que podía presentarme a unas Olimpiadas y no hacer el ridículo, en bastantes disciplinas.

Eso si, me lo guardé, volvíamos a follar como antes, las seguía dejando pensar que me mataban las 2, y aunque era cierto, a partir de la 3º corrida yo me notaba aun con fuerzas, pero me contenía, iba a ser un regalo, ellas me notaban contento y feliz, las dudas y miedos si disiparon, había sido un trauma que para Navidades quedó como un recuerdo lejano. No puedo describir todas aquellas sesiones de sexo salvaje como merecen, seria demasiado largo, y tampoco una que resumiera todas, podíamos arrancarnos a follar en cualquier momento, cualquier día y entre cualquiera de los 3, Luz, la cocinera/limpiadora, nos pillaba la mitad de los días follando, en la piscina, las habitaciones o la cocina, me había visto el rabo más veces que mi madre, pero su actitud era jovial y divertida, gastándome bromas sobre mi “cacharro”. Eleonor disfrutaba de las mañanas, tenia ganado ese terreno ante Ana que tenia que irse con cara tediosa a la universidad, entre besos, roces, caricias y sexo podía estar 6 horas con ella en la cama hasta que Ana volvía, allí le dedicaba la tarde a ella mientras Eleonor salía a dar una vuelta, quedaba mucho con mi madre últimamente, le gustaba volver a tener vida social activa. Por las noches era demoledor, con las 2 en la cama, daba igual quien fuera, saltaba una chispa y los 3 cedíamos a la pasión, la bestia, aquel animal arrollador que sentía que podía matar a cualquiera, no era nada para ellas 2, la conocían de sobra y disfrutaban de ella, no recuerdo un día entero de noviembre en que no me follara sus 2 coños, sus 2 anos y sus 2 bocas, cada día.

Vivía en el paraíso, y ellas también, tenían a un hombre que las follaba como un dios, y las trataba con dulzura, amor y cariño, Ana era mi novia, pero miraba recelosa como Eleonor se ganaba mis carantoñas también, era incluso más dulce y amable que con Ana, su forma latina de hablar y moverse me atraía, era la novedad, supongo, y sentía en mi interior como algo crecía hacia ella, se lo comentaba a Ana, que no muy contenta, lo achacaba a imaginaciones mías y al saber hacer de Eleonor. En una de las noches frías de diciembre, acercándonos a Navidades, ya arropados y con prendas de abrigo de noche, después de estar casi 4 horas haciendo el amor con ambas, hablamos de las fiestas, de lo aburridas que serian con solo nosotros, o lo sola que estaría Eleonor en esa casa si nos íbamos a celebrarlo con amigos y familia, con Yasmine fuera dándose un festín de cultura con su novio por medio mundo, las últimas noticias eran que andaban cruzando China. Así que se me ocurrió, que en vez de celebrarlo cada cual en su casa, las cenas y demás podíamos hacerlo en familia, pero luego montar una fiesta en el ático, Ana accedió, a Eleonor casi le da algo de la ilusión, un fiesta en su casa, casi podía oír sus pensamientos en la cabeza organizándolo todo mientras sonreía.

La idea fue sencilla y fácil de llevar a puerto, Navidades la pasaríamos en casa de mi familia, venían la madre y la abuela de Ana a verla desde Granada, invité a Eleonor a nuestra fiesta familiar a la que acudió encantada, pero fin de año seria la gran noche, la fiesta seria en casa de Eleonor, o mi casa, no sabia como llamarla, la más grande y ostentosa, Eleonor insistió en que la dejáramos pagar a un servicio que nos asistiera toda la noche, y estos insistieron en que para tener la casa lista, la cena no se podía producir allí para darles tiempo a tenerlo preparado, así que con algo de ayuda decidimos hacer la cena de fin de año en la casa de estudiantes, era grande y tenia un salón enorme, allí cabríamos todos de sobra y con una gran cocina, mi madre y alguna otra se animaron a preparar la cena de todos, incluyendo familiares de cada uno de los presentes, mi familia y la de Ana, Eleonor, y los estudiantes, hasta invitamos a Luz, la sirvienta y a su marido e hijos. Después de la cena tocarían las campanas de fin de año y sus 12 uvas tradicionales en España, después un descanso con preparativos y a la 1 de la mañana empezaría la fiesta en casa de Eleonor, ¿que podía salir mal?

Ana y Eleonor – Las fiestas.

Llegó las Navidades y antes de salir hacia casa de mis padres le tuve que pedir a Eleonor que su pusiera algo recatado, ya que su escote de vértigo y sus caderas al aire con unas transparencias del vestido que eligió podrían provocar cosas indeseables, como que mi padre sufriera un ataque al corazón, o peor, que mi madre le pillará mirándola y los matara ella misma con sus manos, era capaz. Con ir como solía ir siempre, bastaba, pese a aprender a amar los placeres de la comodidad ante la belleza, su forma de vestirse era siempre como para ir a un cóctel de alta alcurnia.

La cena fue un escándalo de diversión, por 1º vez en mucho tiempo era Raúl y nada más, echaba de menos a mi familia, las riñas con mi hermana, las broncas de mi madre y el pasotismo severo de mi padre, lo recuperé en una sola noche, regresando a ser la persona que era antes de la operación, y me gustó la sensación, gastando bromas, riendo, hablando y rememorando. Mi madre se olía la tostada, desde el 1º día al irme a vivir al ático, sospechaba que me follaba a Eleonor, y no solo a Ana, y esa noche lo pudo confirmar, anteriormente os dije que mi madre, como todas, casi desarrolló un detector de mentiras, era tremendamente audaz a la hora de leer entre líneas y ver lo que nadie veía, y las miradas de cariño y afecto de Eleonor y mías no pasaron desapercibidas, en privado me rugió como una leona a su cachorro, solo la sonreía y le decía que era feliz, ¿que más podía querer para su hijo?. Desde ese día mi madre miró con otros ojos a Eleonor, pero de eso ya os hablaré. Cenamos, reímos, bailamos, jugamos e hicimos el tonto hasta altas horas de la mañana, fui a por churros con chocolate para todos al amanecer en el coche de Eleonor, bueno, en uno de ellos, ella no tenía carnet y tenia una flota de vehículos impresionante, usábamos un coche alemán grande, caro y forrado en piel. Nos acostamos a eso de las 8 de la mañana en mi viejo cuarto, mis cosas del piso de estudiantes se quedaron allí, entre otras mi vieja cama, por la propia seguridad de todos, dormí solo en el salón, alejándome de ellas. Por la mañana aparecieron un montón de regalos de la nada, nos gustaba esa sensación y jugábamos a colocarlos mientras el resto dormía, hubo de todo, mi familia me regaló sobretodo ropa, Ana un reloj y Eleonor me dio las llaves del coche con los papeles a mi nombre a falta de mi firma. Traté de negarme a recibirlo, pero ya estaba hecho, le habían concedido ya la propiedad de varias casas y coches y me lo regaló, un coche de unos 50.000€, el que me compré con Teo lo tenia él, ya que siempre usábamos el de Eleonor, así que, la di las gracias y la susurré al oído palabras de agradecimiento.

Quedé en ridículo, estaba tratando de no meter mano a los 40.000€ que me quedaban en el banco de Madamme, y mi sueldo no daba para lujos, detalles a mi familia, Ana recibió un juego de pulseras, collar y pendientes de plata, a Eleonor no sabia que darla, con mínimo 50 millones a su disposición, ¿que le das a una mujer así? no se me ocurrió nada mejor que una bonita foto de Ella y su hija, enmarcada en un bello marco, aquella tontería la hizo romper a llorar de felicidad.

Según llegamos a casa, después de comer con la familia, Eleonor se me echó encima y me besó con mayor pasión de la que jamás la había notado, “me has dado el mejor regalo de todos, una familia”, fueron sus últimas palabras en 4 horas en que me tuve que contener por no desatarme con ella, Ana casi ni participó, no aguantaba la ferocidad de ambos. Ya pasada la tarde y algo descansado, dejé a Eleonor en la cama sonriendo pero agotada, aun jadeaba horas después de acabar, retorciéndose entre las sabanas sudorosa. Ana estaba abajo con los morros largos, la di mimos y caricias hasta que sonrió un poco, no le gustaba nada que Eleonor la superara en la cama, pero objetivamente era así, como sospechaba, casi 6 meses de follar con Eleonor a diario la tenían bien entrenada, y siendo sinceros, era más mujer que Ana, sus caderas y su forma de moverse parecían naturales, no aprendidas como Ana, y su aguante era mejor, presentaba batalla más tiempo y me sacaba erecciones con mayor facilidad. Ana lo sabia y no le gustaba, muchos berrinches de celos me montó, pero tan cierto era que Eleonor era mejor en la cama, como que yo solamente amaba a Ana, lo de Eleonor era diferente, casi como fraternal, me sentía responsable de ella. Podría haber zanjado el asunto, pero el duelo de divas en la cama me estaba volviendo loco, y con 20 años no las iba a detener, solo gozar.

Fin de año, esa fecha mágica, la noche previa llevé a Ana y Eleonor a la puerta del sol de Madrid, donde cientos de personas se agolpan para hacer un ensayo de las campanadas del día siguiente, gente que estará con sus familias y no podrá hacerlo, ya había ido alguna vez con amigos así que las preparé bien, solo es un ensayo, pero muy peligroso, las risas, los festejos y el alcohol llenaban las calles antes de llegar a la plaza, la sidra corría por todos lados según llegaba la hora y adentrarse en la plaza era criminal, zapatos cómodos, bien abrigadas por el frío y con los objetos de valor metidos por dentro de las prendas. Jamás había visto brillar unos ojos como cuando vi a Eleonor disfrutar de aquel caos, con gente bebida o drogada apretujada una contra otra, controles policiales que no daban a basto, cánticos y gritos, chicas desmayadas sacadas a hombros……….Fuimos las 2 y yo, junto a Teo, Manu, Alicia, Lara y la compañera de piso nuevo, la canaria Naira, que alucina. Suelo coger el rol de guardaespaldas, no bebo y soy muy corpulento, además me gusta, así que saqué de encima algún borracho que se pasaba de la raya apretándose contra alguna de mis acompañantes, a uno le retorcí la muñeca, estaba metiéndole yo la mano en el culo a Ana cuando otra mano que no era mía se puso encima de mis dedos, un beso de Ana me templó los nervios al darse cuenta de cómo giraba la mano de aquel viejo verde, que se reía a la vez que se le endurecía el rostro del dolor, bebido pero listo al elegir un culo que palpar, pese a mis recomendaciones, Ana iba con un abrigo corto y una falda elástica ceñida a media pierna y unas medias térmicas, con el roce de la gente, y más de la gente resabida, se le subía constantemente la falda. Al llegar a casa pasada la media noche dejé a Eleonor abajo, se había pasado con el alcohol, el tramo del garaje a casa la llevé en brazos al no poder andar con sus tacones, ni sin ellos, al dejarla en el sofá se quedó frita a los pocos minutos.

Ana andaba juguetona, con su rival fuera de juego tendría toda la noche para ella, y así fue, me dedicó un leve baile erótico, verla quitarse esa falda me volcó el corazón, no se por qué, la había follado y visto desnuda más tiempo que vestida, pero verla desnudarse me excitaba. Me levanté a por ella, la cogí con firmeza pero ternura y la fui besando hasta arrinconarla contra una pared, mis manos recorrieron todo su cuerpo desnudándola la poco ropa que quedaba, besando la piel según aparecía, su vientre se erizó al sentir mis labios, casi ni recordaba el tiempo que no lo usaba con ella, me arrodillé entre sus muslos y ella levantó un pierna pasándomela por encima del hombro, dejándome su coño ofrecido, fue un placer sentir y oler su calor, apenas lo rocé tembló y rió nerviosa, según mi boca iba rozando y chupando sus labios mayores, su cuerpo se retorcía como una anguila, me agarró del pelo como si fueran las crines de un caballo y movía su cadera levemente para dejarme mejor posición, mi lengua curiosa rebuscó hasta encontrar el clítoris hinchándose, trabajé su piel con cuidado casi ceremonial, y eso solo encendía a Ana, que gemía de gusto, lo sabia, la veía revolverse el pelo de pasión y darme pequeños tirones de mi cabello cuando la excitaba demasiado cortándola la respiración, se repitió un par de veces hasta que mis dedos empezaron a hurgar en ella, eso la volvió loca y se corrió a los minutos. Me fui elevando por su cuerpo desnudo besando cada zona, cuando llegué a su pecho, mamé de sus pezones como si fuera un recién nacido, Ana se apoyó en la pared y me rodeó con las piernas cuando subí todo mi cuerpo para besar su labios jadeantes, quedando colgada de mi, como me gustaba, su mirada era deseo, sus ojos destellaban aquel verde escondido en ellos, suena tópico pero fue su mirada la que provocó mi erección, golpeando su trasero como pidiendo paso, fue ella misma la que hizo fuerza para elevarse y dejarla paso en su interior, tan abierto lo tenia que no hacia falta dirigir, se dejó caer levemente para sentir como la llenaba despacio, gemía mirando al cielo, besándome casi recordando que yo estaba allí también de vez en cuando. No me movía, su cintura y sus brazos lo hacían todo, alternaba cabalgar al mejor estilo, con giros de cadera, su 2º y 3º orgasmo casi me la sacan de encima. Ahora me apoyé yo contra la pared y moví mi cintura, pidiendo mi turno, Ana no cedía, reía burlona, volví a arremeter, sacándola un grito de placer, al 3º arreón Ana se quedó quieta con los ojos en blanco mordiéndose el labio.

Era mi señal, ataqué con todo, no tenia reparo alguno ya con sacar a la bestia y desatarla, muchas veces, antes de mi paso por el gim, la bestia salía escaldada de aquellas 2 mujeres, pero ahora solo estaba 1 y el animal era más fuerte que antes, su solo inicio hizo que Ana me abofeteara sonoramente sacándome una sonrisa ante su poco daño, mirando como Ana ponía la boca de forma extraña, sacando los labios haciendo el mono, mientras me miraba fijamente respirando al ritmo de mis acometidas. Yo apretaba los labios para generar más tracción y velocidad. Ana desistió de su ejercicio de aguante a los 10 minutos, y se dejó llevar al paraíso, se corrió de 5 veces, 2 de ellas como una fuente antes de desistir de aquello, podía notar su suplica en los ojos antes de correrme, pero le di la pequeña sorpresa, subí el listón al máximo con mis músculos trabajados y la rematé 5 minutos finales en que creo que se desmayó y volvió en si de la impresión, sus pechos ya no podían seguir la inercia de mi cadera, casa uno botaba al son que podía, los chorros de semen elevaron a Ana sobre los cielos, gritando y maldiciendo, abriéndose de brazos contra la pared arañando la pintura. Agarré a Ana que reía alterada, sin fuerzas, la dejé en la cama con suavidad, mirándome con los ojos abiertos, sorprendida, hasta yo lo estaba, en mi 1º corrida había destrozado a Ana, algo nada, nada, nada fácil. Su pelvis se contraía con espasmos que la hacían recordar mi verga en ella.

Eleonor entró en la habitación, totalmente borracha con solo un zapato en la mano y una teta fuera, pidiendo su turno, no quería, estaba muy borracha, hasta me dijo que no se me olvidara el condón, cuando llevaba meses follándomela a pelo de mil maneras, la di un par de besos mientras la desvestía, y la ponía uno de sus picardías, en invierno Ana volvió a sus corpiños elásticos, el edredón y yo era suficiente calor hasta para una friolera como ella, mientras que Eleonor y sus corpiños de alto encaje la hacían la competencia, generalmente por que solía llevar el corpiño solamente. Nos dormimos profundamente, por la mañana comimos algo y planeamos el día, me dijeron que después de media noche querían ir a casa antes que yo para darme una sorpresa, accedí antes de marcharme, me fui con mi traje, el de Eric, me lo había probado y me quedaba horriblemente mal ajustado, así que llamé a Eli que se alegró de oír mi voz y me dio el numero de Paula, la ayudante de Eric con grandes pechos, que se pasaría por el taller para echarle un ojo. Las avisé a ambas de mi flirteo previo con Pau, fue llegar, verla fuera del taller y saber que iba a pasar algo, estabamos a 4 grados en la capital, a las afueras donde estaba el taller a unos 0 grados con viento frío y sin rastro del sol, y aun así acudió al coche con un escote grotesco, embutidas las 2 tetas en un cuero que soportaba de milagro, y al andar detrás de ella un pantalón ceñido de piel, contoneándose gustosa, había perdido algún kilo sobrante, seguía quedando más que quitar pero estaba mejor de lo que la recordaba y sus enormes tetas me llamaban, la muy ”tímida” abría una puerta y se quedaba en mitad del marco para obligarme a pasar por delante de ella rozándola, a la 3º me quedé plantado notando sus pechos en mi vientre, levantó su mirada enrojecida mordiéndose el labio al notar mi polla flácida sin slips marcándose en su muslos.

-YO: ¿hemos venido a arreglarme el traje o a follar? - se sonrojó, su mirada brillaba en la oscuridad del taller.

-PAU: lo que tú quieras - muy lejos quedaba ya nuestro 1º encuentro, analizándola fríamente como me enseñó Eli, como seguía haciendo en mi mente aunque sin llevarlo a cabo, solo por diversión, ahora no tenia a un chiquillo avergonzado delante, si no un hombre capaz y viril.

-YO: solo he venido por el traje - me agaché a besar sus labios apretándola contra el marco de la puerta - y puede que me folle tus tetas, pero no pasaremos de ahí, soy un hombre comprometido - se le torció la vista desilusionada, podía pensar que quizá si me calentaba mucho, o usaba alguna treta………… pero mis ojos y mi voz no temblaban, era un témpano de hielo que la hizo comprender que no había oportunidad.

Me desnudé por completo, dejado mi esbelto y trabajado cuerpo ante ella, casi olía su coño rezumar al verme, me tomó las medidas siendo lo más profesional que pudo, aprendió de Eric a coger bien las medidas, Eric estaba de gira por medio mundo, desde que mi traje le devolvió al 1º plano en la fiesta de Eli, no paraba de trabajar. Pau, usó el viejo turco de pegarse las tetas juntando los brazos ante mí, botando, para calentarme, pero no hubo respuesta, solo una leve sonrisa de mi parte. Triste, cogió las medidas y se fue con el traje a arreglarlo, cuando volvió y me lo puso casi me caigo al suelo, era un guante otra vez, como el día que lo estrené, pero aun mejor, yo era mejor, tenia mejor cuerpo y más atractivo, el traje lo hacia ver, solo con verme sentí orgullo de mi y mi trabajo en el gim, tan agradecido estaba que cuando me lo quité empotré a Pau contra el suelo y la rompí la ropa para comerme las tetas, reía sin parar ante mi ferocidad, eran los pechos más grandes que había tenido nunca en las manos, eran más grandes aun que los de Lara, pero al ser mayores y ella menos joven, caían, pero tumbada no se notaba nada, metí mi polla tiesa entre ellos después de jugar unos minutos, y literalmente me follé sus tetas, le daba golpes con el glande en la barbilla, por mucho que apartara el rostro, seguí un buen rato acelerando hasta correrme, todo el semen fue a su cara, sentí poder sobre ella en su mirada, que suplicaba sexo, y me aproveché.

-YO: vas coger las medidas de hoy y vas a hacer unos cuantos trajes más para mí, diferentes pero del mismo estilo, dile a Eric que son para mí, o no le digas nada, tú sabrás, pero si no me cobras puede que cuando los recoja te folle como dios manda - asintió como un perro obediente.

Me vestí, cogí el traje y me fui dejando a Pau limpiándose la cara, me fui a comer a casa de mis padres, así al acabar les llevaría a la casa de estudiantes, llevando a la familia y las cosas que utilizaría mi madre para la cena. Además, yo no bebo, era mejor opción para retener a mi padre, que si bebía, y que no cogiera el coche, nunca bebió de más, pero los controles de alcoholemia son estrictos. Mi madre y mi hermana fueron vestidas normal, pero con bolsas y maletas con ropa y maquillajes para la fiesta, mi padre salió como siempre, la verdad, siempre ha estado arreglado con cualquier tontería que se pusiera encima, y marchamos hacia la casa de estudiantes, otro ático, pero esta vez menos lujoso, estaba lleno de gente, casi no se podía pasar, entre grupos de amigos y familiares, saludos risas y conversaciones, hasta las 7 de la tarde, allí mi madre, “como no”, cogió la batuta de la cocina y nos sacó a patadas de allí a todos menos a alguna madre que también quería colaborar, acatando sin saberlo el oficio de ayudante de cocina, la forma de hablar y comportarse de mi madre en esas cosas eran irrevocables, ella mandaba, sabia hacerlo de forma cómica y cariñosa, pero lograba que se hiciera lo que ella quería. Fue llegando gente aunque ni sabíamos donde los íbamos a meter, a la hora de la cena casi 40 personas, no se como entramos todos en el salón, creo que mi madre tiró un muro o algo, no era posible, pero así era, apretados como sardinas, pero la mesa puesta y todos sentados, Ana se fue con Alicia y Lara, yo con los chicos y Eleonor con el grupo de madres, casi ni nos cruzamos en toda la cena, más que alguna mirada fugaz, o algún beso robado a Ana lejos de miradas curiosas, su familia estaba allí y no sabían nada de lo nuestro.

La fue cena una bendición que sacó aplausos a las cocineras, aquello le hacia sentir tanto orgullo a mi madre de lo que hubiera sentido al verme sacarme un doctorado. Reímos, vibramos, charlamos, comimos hasta reventar, llegando a la hora final, las 12, con sus campanadas en la TV, tragando y atragantándose con las uvas, los gritos, los petardos y fuegos artificiales de las calles, sentí unas ganas enormes de romper una mesa y cruzar el salón para besar a Ana, que me miró sabiéndolo, y mi madre nos miró a ambos pidiendo cautela. Nos hicimos fotos, nos dimos saludos, algún beso de más y recogimos la cocina entre varios, charlé con Teo, las cosas iban mejor con Alicia, pero seguían sin ser como antes, la relación entre Alicia y él nunca volvería a ser igual, y ahora lo sabían.

Las mujeres desaparecieron, todas encerradas en grupos en los cuartos con baño, dándose duchas rápidas, vistiéndose y maquillándose, Ana y Eleonor se despidieron cortésmente antes de irse, las salí a despedir al ascensor, donde besé a Ana con ternura y a Eleonor con pasión, ambas se quejaron, les iba a estropear el maquillaje y el peinado que se habían ido a hacer a una esteticista aquella mañana. Al volver mi madre tuvo que limpiarme el carmín de la cara antes de generar preguntas, esperé con calma que un baño se quedara libre, queda feo, pero había comido demasiado y tenia unas ganas de ir al baño a hacer aguas mayores increíbles, evacué y me di una ducha limpiadora.

”Casualmente” 5 de las chicas más monas y solteras del grupo entraron descuidadamente cuando me duchaba o me estaba secando desnudo, la 1º me asusté, la 2º increpé, a partir de ahí solo me dejaba comer con los ojos, Mara la hermana mayor de Alicia, la estudiante de canarias, la madre de Teo, la hija de Luz la sirvienta y otra señora que no se quien era, alguna tía o cuñada de alguien que conocía, 3 me pillaron desnudo con el rabo fuera y las otras se quedaron mirando mi cuerpo mientras me tapaba, descaradamente, no recuerdo el orden. Solo se que al salir de allí tenia un par más de números y notitas en mi ropa, la que me sorprendió no fue la de la canaria, si no la de la hermana de Alicia, una chica que ya apareció en la mudanza, Mara, una mujer 5 años mayor que yo, habíamos tenido mucho trato en el pasado, pero era una persona seria, mandona, algo borde y desagradable de carácter, quizá por eso salía con nosotros, los amigos de su hermana pequeña, por que no tenia amigos de su edad, nuestra relación siempre había sido un desastre, yo era abierto, atrevido, grotesco y evidente, mientras que ella era una mujer cauta, vergonzosa e introvertida, eso chocaba contra mi forma de ver la vida, creo que nos caíamos bien, pero jamás pensé que se interesaría por mi. Ahora tenia una nota suya diciendo que la llamara cuando quisiera charlar, si, ya………….”charlar”. Guardé las notas para llevarlas al cajón rebosante de mi cuarto, y me vestí con el traje, volvió a sonar la puerta, me giré pensando en quien seria esta vez, pero al oír sonar la puerta me calmé, era mi madre preguntando cuanto tardaría, que estaban todos listos ya, “que cabrones, metiendo prisa”, apenas llevaba 10 minutos en el baño, y alguna se había tirado 50 minutos repeinandose. Mi madre me vio con el traje a medio poner y se quedó maravillada por como me quedaba, os comenté, creo, que había sido costurera.

-MADRE: avísame cuando vayas a salir, quiero hacerte unas fotos….- salió disparada riéndose, siempre hacia eso, quería tener documentado cada detalle relevante de nuestras vidas.

Avisé con tiempo, y sabiendo que mi madre ya habría dado la noticia, y estarían todos, o esperando mi salida o con cámaras en la mano, salí de golpe con pose de modelo, sacando las carcajadas de todos, comencé a andar exagerando los movimientos y poniendo poses afeminadas, abrochando y desabrochando la chaqueta del traje, había risas, si, pero 1, 2 o 3 mujeres aplaudían con la boca abierta y alguna se mordía el labio o se relamía, me fijé en Mara, la cogí la mano y la besé con caballerosidad ante los vítores de Manu y Teo, ella reía por fuera pero sus ojos castaños echaban chispas. Antaño tal ejemplo de desvergüenza y tontería, la hubiera hastiado, pero ahora le encantaba, “que falsa es la gente dios mío”.

Salimos a tropel a las calles, los petardos y los fuegos artificiales asustaban a la gente, los gritos y cánticos que salían de las casas llenaban el corazón de felicidad, que absurdo que un cambio de dígito en el calendario mueva tanto, las calles abarrotadas de gente vestida de fiesta acudiendo a citas y locales, algún coche pitando de jolgorio, mirando como alguna chica de nuestro grupo, o de otros, iba demasiado atractiva para ir por la calle cerca de la 1 de la mañana del 1 de enero, a 1 o 2 grados, con mini faldas, escotes y de más vestidos, que por no arrugar, iban sin abrigo, le cedí mi abrigo a la canaria, su cuerpo acostumbrado al calor tropical de su tierra y su vestido amarillo con la espalda al aire la estaban haciendo tiritar aunque no le faltaban 2 o 3 muchachos que la daban su calor. Hice lo propio con ni chaqueta, se la iba a dejar a Alicia que estaba en una situación similar, pero Teo respondió antes, creo que como correspondía, así que mi chaqueta fue a parar a Lara, la echaba de menos, más sus palabras afiladas que sus pechos, iba con un traje azul cielo sin sujetador y estaba por matar a alguien clavándole sus pezones. Mi madre iba bien arreglada y con su abrigo, pese a que muchas se pusieron a un lado de mi brazo para cogerme y ayudar a estabilizarse con sus tacones y protegiéndose del viento, mi madre no me soltó del otro brazo, me dio una colleja soltando un par de quejidos con sorna para sacar unas sonrisas al resto, diciéndome que me iba a coger un resfriado o algo, pero sabia que yo siempre he sido de sangre caliente, emanaba calor en mitad de aquella noche fría, con el abrigo ya sudaba, y aunque notaba el aire en mi cara y mis manos, sin la chaqueta aguantaba bien.

Éramos como unos 30 en el grupo, Ana y Eleonor se adelantaron, y varios familiares se fueron a casa después de las 12, entre ellos la familia de Ana, algo por lo que di gracias a los cielos, podría besarla cuanto quisiera en la fiesta. Al llegar a su casa nos esperaba una serie de mayordomos o algo así, se encargaron de recoger prendas y bolsos, organizándonos para subir en grupos al ático, los conocía, les había visto trabajar unos días antes por casa, los 4 ascensores grandes no daban abasto, yo me quedé el último cuidando de que todos entraran, guardando mi abrigo y recogiendo la chaqueta con las gracias de Lara, que la olfateaba mirando con ojos pícaros y sacando pecho, últimamente se le había pasado “el susto” de su estreno anal tan brutal, y me llamaba o se ponía cariñosa cuando iba al piso.

Al subir con mi madre y un par de personas en el grupo, mi madre me besó en la mejilla y me pidió que me comportara, era mi casa le repliqué, por eso mismo, sentenció ella. Al llegar arriba había un jaleo enorme en el pasillo, gente riendo y charlando mientras un camarero servia copas de champan o sidra, todos iban pasando por la puerta de la casa, abierta de par en par, con Eleonor a un lado saludando a todos y un gorila de 2 metros al otro, no sabia que hacia allí, ¿seguridad?, pero nos conocíamos todos, o eso creía, me asombré al ver como Eleonor mandaba sacar de allí a unos 4 o 5 chicos, que yo no conocía, y por lo visto nadie de allí, habían visto fiesta, gente pasar y no tendrían mejor plan que intentar colarse, al menos se llevaron una copa de sidra fría. Todos entraron ante los saludos de Eleonor con una sonrisa enorme, forzada o no, parecía real, estaba ilusionada con aquella multitud en su casa y la alegría se percibía en su mirada. Los últimos en entrar éramos mi madre y yo, al gorila le dijo que éramos tan jefes de la fiesta como ella y que nos hicieran caso en todo. Nos dio paso, con mi madre agradeciéndole el esfuerzo con la fiesta y ella agradeciendo por su hijo, entró por la puerta dejando a mi madre en manos de alguna amiga suya, y salió entornando la puerta, se giró sobre si misma y me miró.

-ELEONOR: ¿que? ¿te gusta? - se dio una vuelta sobre si misma sonriendo dejando que el vuelo hipnotizara al gorila, preguntaba por su vestido.

Cambié la pose rígida por mi yo real, la abracé y besé con pasión, me apartó rápido riendo, retocándose el borde de los labios, no era para menos, si normalmente iba vestida de fiesta de forma elegante y con clase, esa noche podría haber seducido a Zeus, su peinado y su maquillaje algo sobrecargado ya los había visto en la cena, un ligero recogido del pelo desde la frente hasta su nunca, con un broche fino y brillante, dejando caer todo el pelo alisado por lo hombros y su espalda, se lo estaba dejando largo, me gustaba así y ella lo sabia, con 2 hilos de cabellos cayendo por cada uno de sus lados de la cara, algo ondulados, un carmín rojo intenso, una sombra de ojos negra y más maquillaje del que necesitaba, parecía de porcelana. El vestido era un conjunto blanco, palabra de honor, no había tela hasta sus pechos, allí una línea recta marcaba todo el vestido hasta los brazos, una ligera curva en el escote, con una mangas recortadas dejando los hombros al aire que iban hasta sus muñecas, con unas alas uniendo las mangas con el vestido, que en si, era un tubo blanco que en la piernas se ensanchaba con una ligera obertura en la pierna izquierda, dejando ver la pantorrilla, un vuelo muy natural y algo de cola del vestido, con unas medias lunas de tela trasparente en las costillas dejando ver los costados, con la tela opaca tapando sus senos, la parte central de su vientre y volviendo a ensancharse en la cintura, con unos tacones blancos como la nieve virgen.

Entré a ver la casa detrás de ella, no pudiendo apartar la vista de su cintura, el vestido se ajustaba a su cadera que casi ponía notar la línea del hilo del tanga hundido en la carne, llevaba tanga, sin duda, se le ceñía al culo que no había otra opción, o se le marcarían las bragas de forma horrenda. Lo único que me apartó la vista de ella fue un saludo de Manu, atacando una mesa con canapés de gambas y aperitivos, sonreí y comenzó la música, fuerte y atronadora, la tuvieron que bajar para poder oírnos entre nosotros, recorrí la casa entera saludando y charlando con la gente, pero no veía a Ana, repasé todo las estancias de abajo, incluida la piscina, la habían techado y puesto una hoguera para calentar la zona siendo climatizada el agua, ni en la cocina, ni en el cuarto, donde pillé a una camarera tirándose a un muchacho que no reconocí. Solo me quedaba el piso de arriba, estaba cerrado con un hombre en lo alto de las escaleras, menos grande que él de la puerta pero con una mirada intimidante, subí con la firmeza que las palabras de Eleonor me dieron, pero cuando subía me frenó.

-GORILA: no se puede pasar arriba.

-YO: si, perdona, soy Raúl, vivo aquí y………- me miró extrañado.

-GORILA: ¿eres tu Raúl?, ¿el novio de Ana? - asentí.- lo siento, verás, la señorita Ana esta en el cuarto grande, y ha dicho que no pase nadie, incluido usted, sobretodo usted, recalcó - me sorprendí.

-YO: ¿ha dicho por que?, ¿se encuentra mal? - el tipo me sonrió.

-GORILA: tranquilo, esta bien, creo que quiere dar una sorpresa a todos - respiré aliviado.

Bajé mirando de reojo la puerta del dormitorio, tratando de adivinar que pretendía Ana, se me ocurrían ideas, quizá algún vestido nuevo, o a lo mejor un numerito con baile, tal vez hasta una canción dedicada….no, Ana era muy vergonzosa para eso, solo a mi se me ocurrirán tales cosas y más realizarlas, así que disipé las ideas y bajé a disfrutar de la compañía, encontré en Manu un buen apoyo para conversar y reír, veía a Lara, Alicia, Mara (su hermana), incluso a Naira o la hija de la sirvienta, todas juntas, vestidas con ropas elegantes y provocativas, y a un coro de chicos a los que a la mitad ni conocía, acechándolas, me extrañó no ver a Teo pero al rato apareció de la nada, algo tocado ya de la bebida, fui a charlar con él y se le notaba, quería disimular, inútil, con toda la ropa movida y despeinado, como si llevara días de fiesta, con el aliento apestando al alcohol con el habla lenta y ronca. Desistí por que en ese estado daba igual que le dijera, y le llevé con Alicia para que le echara un ojo, a su vez busqué a Eleonor que charlaba animadamente con un grupo de madres y padres, ellas sonreían, alguna por la bebida, la fiesta o por cortesía, otras con una sonrisa falsa que denotaba ira, sin duda la que provocaba que sus maridos se comieran con los ojos a Eleonor, aun con sus esposas delante, gracias a dios mi padre se fue a la piscina y encontró a un par de hombres adultos con los que charlar, si mi madre lo viera babeando le montaba un número, le importaba lo mismo que a mi que el resto mirara una escena, nada. Charlé con ellos distrayéndoles un rato, los mayores de 35 años se me dan genial desde siempre, y no se por que, pero es así, algún roce o caricia se me escapaba hacia Eleonor, pero poco más.

Eran ya casi las 2 de la mañana y la fiesta estaba en todo lo alto, me preocupaba la tardanza de Ana, que no bajaba, pero el DJ comenzó a poner músicas de baile y ante la soledad, casi todas las mujeres de la casa pedían bailes, en grupos como carne en el super, deseando que algún hombre las sacara a bailar, cualquiera, me di cuenta de mi torpeza, igual que muchos chicos allí, yo antes no me hubiera dado cuenta, las miraría sonrojado o disimuladamente apreciando su belleza, pero sin atreverme a decirlas nada por mero pánico, y ahora, mirándolas y analizándolas, me parecía violentamente obvio que aquellas mujeres iban en busca de un hombre, y que aceptarían a cualquiera con tal de dejar el banquillo, y separarlas del grupo de solteronas. Aun así la 1º a la que invité fue a mi madre, se lo debía, y andaba por la cocina mandando al organizador del catering como se debían hacer las cosas, mi señora madre nació con alma de general, sonrió y aceptó el baile encantada, haciendo el bobo a cada cual más, y llamando al resto de gente a animarse a bailar, solo hacen falta un par de locos haciendo el ridículo, para que el resto lo haga, en el fondo todos desean bailar, pero a mucha gente le da vergüenza que la vean haciendo el tonto, pero si ya lo están haciendo otros, como que se desinhiben. Al rato Eleonor pidió paso y mi madre se lo concedió, antes de alejarse la abracé y levanté medio palmo del suelo a mi madre dándola besos en la mejilla, es una señora algo rechoncha pero no me costó nada, se alejó roja de la risa y con mirada de orgullo terminó en los brazos de mi padre bailando.

El baile con Eleonor parecía igual de inocente que el de mi madre, pero no lo era, para nada, nuestros ojos conectaban y saltaban chispas, mi mano en su espalda en algún movimiento lento acariciaba, no solo se posaba, y bajaba peligrosamente cerca de su trasero, sus senos elevados como montañas se hundían en mi pecho, y más de una vez una de sus piernas se metía entre las mías rozándose con picardía sobre mi paquete.

-ELEONOR: jamás te podré agradecer tanto, mira la casa, esta viva.

-YO: como no te estés quieta me lo vas a agradecer antes de lo que piensas.

-ELEONOR: con mucho gusto sacaría a todos a empujones para que me hicieras tuya - su mirada era fuego, rocé su mejilla con mis labios en busca de su oído.

-YO: si sigues acariciado con tu pierna no habrá tiempo de sacarles antes de que te ensarte con mi verga - se estremeció cerrando los ojos, por algún motivo que dijera “verga”, palabra que me pegó, en vez de cualquier otra, la encendía muchísimo, eso unido a que mi amenaza no era en vano, o quizá si, pero ella realmente creía que me la follaría delante de todos y me daría igual.

Por suerte el baile acabó antes de que se me pusiera dura, ya la tenia despertándose y marcándose levemente en el traje, algo que no pasó desapercibido para muchas que hicieron cola para ir detrás de la otra mientras bailaba con ellas, no le negué a nadie el baile, solo a Alicia. El contoneo de Mara fue el más caliente de todos, se puso de espaldas y me pasó su buen culo por toda la polla, riendo asombrada, la chica seria y brusca estaba caliente como una gata en celo, casi podía oírla maullar pidiendo sexo, iba espectacular, siempre con su pelo corto y perfectamente maquillada, tenia unos ojos enormes que siempre me han gustado y poco pecho en relación a su buen culo, nada que ver con su hermana, que jugaba en otra liga, pero redondo y buen puesto. Mara, con su vestido negro ajustado sin escote pero con toda la espalda al aire y ceñido hasta el vacio en sus caderas, casi me saca de quicio. Las canciones se volvían juveniles y movidas, el horrible reggeton hizo aparición y con él los bailes subidos de tono.

Yo estaba harto de crías acaloradas, quería a mi novia, me eché a un lado y hablé con Alicia, para disculparme por no cederla el baile, me miró como si no la hubiera molestado, restándole al asunto, pero estaba triste, Teo estaba borracho de nuevo y pasaba de ella, o peor, cuando la hacia caso se ponía muy tonto, casi tenia lagrimas en los ojos, y la hice reír un poco con tonterías.

Charlando con ella la pista de baile se animó, Eleonor y otras chicas estaban dándolo todo, habían montado una especie de pasillo y desfilaban con gesto sexy y provocativas, los tíos aplaudían a la que le gustara, los senos de Lara y Eleonor fueron de los más aclamado, Mara se movía bien pero no tenia tantas curvas y la canaria dio un recital de belleza paseándose, todos reían y disfrutaban de ese espectáculo, había una porra o una especie de jurado que ponía notas, hasta que de repente se hizo el silencio, solo sonaba la música de fondo y todos se callaron salvo alguna risa o voz que se fue apagando, se daban la vuelta para mirar la escalera a mi espalda, me giré sin comprender nada hasta que vi a Ana en lo alto de la escalera, ayudada del gorila a bajar el 1º escalón, mientras con la otra mano se sujetaba a la barandilla. No era para menos, la imagen debió de aturdir a más de uno, a mí no, me resultó familiar.

Ana iba preciosa, como en la cena, un peinado completamente liso, con la raya a un lado dejándole un hombro al aire y un flequillo ligeramente ondulado que le cubría medio rostro hasta terminar con un leve recogido detrás de la oreja, un ligero maquillaje, sobretodo en los ojos, una sombra oscura con ligeros verdes esmeralda que resaltaban sus pupilas, y pintalabios rojo gránate, tan oscuro que solo de cerca apreciabas el rojo, iba con la pulsera, el collar y los pendientes de plata que le había regalado en Navidades, y pese a no pegar mucho, la gargantilla que no se quitaba nunca, unos tacones negros altos, de los que ella odiaba pero que la estilizaban de una manera insuperable, y lo mejor, el vestido, era el de las 3 V que se compró en el retiro de fin de semana a la sierra, aquel negro ceñido y ajustado, tan atrevido que rozaba lo estrambótico, pero solo lo rozaba. Un escote en forma de V que bajaba hasta el ombligo dejando ver sus pechos en gran parte, otra V de sus hombros al inicio de las caderas por la espada y otra V invertida desde la cintura izquierda que llegaba a medio muslo donde se abría con un vuelo hasta el tobillo derecho, aprecié unas ligeras medias, pero sin sujetador, ni lo necesitaba ni el vestido lo permitía, brillando los bordes de las V con destellos plateados.

Era la definición de la belleza, la sensualidad, el atrevimiento y la piel tersa y juvenil, la miraba atónito, desde el retiro a la sierra no se lo había vuelto a ver, le daba mucha vergüenza que la vieran así en publico, y casi me había olvidado de él, pero allí estaba, delante de todos, con él puesto y con algún sonoro “ohhh” de fondo, sabiendo que todos la miraban, saludó con la mano sonriendo tratando de que el rubor no se apoderara de ella, trató de bajar el 2º escalón pero casi se tropieza, soltó la mano del gorila y se cogió con clase el vuelo del vestido para seguir bajando aferrándose bien a la barandilla y con el sonido del golpe de los tacones retumbando por encima de la música, hasta parecía haber bajado el volumen hipnotizada por el movimiento de los senos de Ana botando dentro del vestido, amenazando fugarse del interior de la tela. Recuperé el sentido antes que nadie, mirándola y riéndome al observarla bajar y como todos la miraban como si fuera una alienígena, creo recordar que sonó un copa rompiéndose en el suelo, muy teatral. Acudí a recoger a mi dama en los escalones finales teniendo que apartar a algún mirón, Ana me localizó y sonrío abrumada, extendí mi mano para ayudarla a bajar al suelo y una vez allí hinqué una rodilla ante ella.

-YO: mi señora - sonrío ante mi gesto galante.

-ANA: mi señor - se inclinó levemente en una reverencia.

-YO: me temo que hoy vuestra belleza no es solo mía….. - me levanté clavándole los ojos en los suyos -….. no podría soportar tamaña carga - sonrío abriendo la boca.

-ANA: ambos sabemos que eso no es cierto, pero se agradece el cumplido.

-YO: ¿si tuvierais el honor de concederme este baile?

-ANA: como gustéis - ¿como podía ser tan perfecta de pillar al vuelo el tono de la edad media y continuar la broma?, aquella mujer era un regalo del cielo.

Levanté mi brazo para ofrecérselo de apoyo, agarró con firmeza y se sujetó la cola del vestido, acudimos al centro de la pista, donde todos aun nos miraban, silbé y el DJ, con el que ya había hablado antes, puso una canción, la del baile de la bella y la bestia, me parecía la más adecuada, y entre alguna voz de ternura y risas, bailamos lentamente bien agarrados como si fuéramos príncipe y princesa, el resto se nos fue uniendo perdiendo letalmente el estado de hipnosis en el que parecían haber entrado.

-YO: sabes, había un concurso de belleza entre las chicas.

-ANA: ¿si? ¿Y quien ha ganado?

-YO: no lo se, cuando has bajado tú se ha ido todo a la porra……...- sonreí ante lo irrisorio del asunto, y ella conmigo, daba igual que todas estuvieran arregladas y vestidas de formas finas elegantes y sensuales, Ana las había pasado por encima como un tren de mercancías a un coche de juegue - ¿por que has tardado tanto?

-ANA: llevo vestida así desde la 1, no me atrevía a salir, ¿que van a decir de mí? - se acurrucó sobre mi pecho.

-YO: los hombres entre si dirán que eras la más guapa de la fiesta, eso como poco y siendo educados, a sus mujeres les dirán que no eras para tanto si no quieren dormir en el sofá hoy, las mujeres te criticaran indistintamente, vas a darlas conversación durante días, y alguna te odia ahora mismo. ¿Te importa?

-ANA: ahora que estoy contigo, no - la besé tiernamente, olía a coco, como siempre, y sus labios sabían mejor que nunca.

Al separarme de ella se rió nerviosa perdiendo el paso, y me pasó los dedos por los labios limpiándome el carmín, la noche fue avanzando y ahora con Ana a mi lado, fuimos dando tumbos por toda la sala, hablando y charlando con todos, mi madre nos mataba con la mirada, a Ana con solo verla así, y a mi cada vez que la besaba o la acariciaba entre mis brazos, temía que alguien se fuera de la lengua. Las bebidas, la comida y los bailes fueron haciendo mella, la gente estaba a otros asuntos y una vez comprendido que yo esa noche no estaba disponible, las mujeres fueron cediendo antes los chicos que les parecían monos, casi todos se fueron de allí del brazo de alguien del sexo opuesto, algunos quisieron follar en la habitación pero ya estaba ocupada por otra pareja, incluso había una pareja follando en la cama y otra en el baño. Todas menos alguna, Lara entre ellas, que andaba danzando con Naira, la estudiante canaria, hasta que esta se fue con un amigo italiano de Manu, Lara se quedó allí, perdida, orbitando a mi alrededor, podía percibir el olor vainilla en ella, el que cuando era mi juegue la dije que se pusiera, sin duda Lara iba detrás mía de nuevo y ya le debía dar igual que la destrozara el culo la última vez. Hasta mi hermana, algo puritana, se fue con una especie de amigo/novio suyo al que invitó. La casa se vaciaba pasadas las 6 de la mañana, había un servicio de coches y choferes abajo contratados por Eleonor para llevar a la gente a sus casas y evitar problemas de multas o alguna gresca que se suelen producir por esas fechas de madrugada. Yo mismo llevé a mis padres a casa a las 4 y media o así, al despedirme mi madre me pidió que hablara con ella al día siguiente, no sabía por qué

Al regresar Eleonor andaba sentada en el sofá riendo al hablar con un hombre que iba detrás de ella, le tenia dándole un masaje en los pies, al verme mi guiñó un ojo, Ana estaba en la parte de arriba apoyada en la barandilla mirando como había quedado la casa y como un par de camareros recogían todo, subí con ella y la di un beso en el hombro para saludarla, estaba cruzada de brazos frotándose, en el piso de arriba hacia algo de frío, así que le puse mi chaqueta, la envolvió como un manto cálido y la olió como si la transportara a un lugar maravilloso, me apoyé con cuidado en la barandilla colocándome detrás de ella, mirando como limpiaban.

-YO: ha sido una buena fiesta.

-ANA: si, ojalá fuera así siempre.

-YO: ¿todos los días 31 de diciembre y 1 de enero?, seria divertido.

-ANA: no bobo, hablo de la gente, parece feliz, aunque no lo sean.

-YO: yo lo soy, contigo - sonrió levemente - ¿y tú?

-ANA: pues claro que si, pero pienso que es demasiado bonito, y que se va a romper en cualquier momento, Eleonor me dice que así era su marido antes, y mírala ahora, encamada con un chaval que podría ser su hijo.

-YO: no soy como su marido.

-ANA: nadie lo es………..al principio - se giró agarrándome la cara - te quiero, pero jamás me hagas daño así, por favor - su mirada era sincera, pero no entendía sus palabras, no comprendía por que ahora tenia esos pensamientos, jamás le había dado motivos.

-YO: nunca te haría daño, te quiero y si tu me quieres no tienes nada que temer de mi - sonrió aliviada.

-ANA: lo sé - me besó con ternura, nos interrumpió un camarero.

-CAMARERO: disculpe, al parecer hay una pareja en el cuarto de abajo aun y tenemos que limpiar, no queremos entrometernos, usted podría…….. - pedía clemencia, su cara estaba cansada y agotada, deseando irse a casa, accedí a bajar para solucionar aquello.

Al entrar vi a una pareja en la oscuridad follando, hablaba pero no me hacían caso, encendí la luz y vi a Teo, del susto apagué la luz gritando disculpas, cerré la puerta, al parecer Alicia no estaba tan triste como para no follarse a Teo de esa manera, sonreí aliviado cuando al ir a coger las escaleras vi aparecer a Alicia por la puerta de la entrada, me quedé helado, si venia de la calle Teo no se la estaba follando a ella, acudí a su encuentro blanco como la leche.

-ALICIA: hola, perdona que vuelva, pero es que no encuentro a Teo, me fui antes que él, no quería irse y todavía no ha vuelto, va muy borracho y temo que le pase algo, ¿le has visto? - se me rompía el corazón de oír su verdadera preocupación por su novio sabiendo que este estaba teniendo sexo con alguna en la habitación a unos metros.

-YO: si, creo que andaba por aquí, le he visto en alguna habitación, mira arriba - no la mentía, pero no quería decirla toda la verdad y necesitaba tiempo para pensar.

Subió y habló con Ana, revisando las habitaciones, yo respiré profundamente y entré en la habitación de abajo, una de las chicas de la fiesta se estaba colocando el vestido de pie, iba tan bebida que ni se dio cuenta de mi presencia al pasar a mi lado para irse, no la reconocí, creo que era la hija de alguna amiga de Eleonor, Teo se quedó tumbado boca arriba medio vestido y con la polla fuera manchada de semen, una ira contenida me llenaba, podía montarle un pollo, sacarle a rastras y evidenciar su infidelidad ante Alicia, pero eso solo causaría dolor, le vestí con algo de su ayuda, no mucha, mientras él me repetía que no dijera nada, al borde del coma etílico. Salí y me aseguré de que la muchacha se había ido, avisé a Alicia de que le había encontrado bien y a salvo, dormido abajo, respiró aliviada y viendo su estado le dejó allí dormir la mona, estaba enfadada con él. Se volvía a casa, la acompañé, no podía dejarla irse sola a esas horas y en coche no era nada, estaba muy enfadada y pese a beber, totalmente lucida. Dirigí la conversación un poco, para que viera que si no era feliz lo dejaran, con lagrimas en los ojos me dijo que tenia razón y que lo iban a hablar cuando se recuperara, la di un fuerte abrazo y la vi entrar en casa ante de volver, mi intención era ir directo a por Teo y darle de bofetadas hasta que se despertara, pero borracho no me haría caso alguno, cerré la puerta de abajo y le dejé dormir hasta el día siguiente, para que no se fuera sin hablar conmigo.

Con todo ya recogido y limpio, todos los trabajadores se fueron, dejando para el día siguiente lo que quedaba por colocar, Ana y Eleonor estaban en el piso de arriba sentadas en el sofá que había entre las habitaciones, Ana aun arropada por mi chaqueta y adormilada, Eleonor abrazándola como una madre, me sonrió al verme.

-ELEONOR: la niña esta muy dormida y cansada.

-YO: habrá que llevarla a la cama - la cogí de un brazo y la levanté sin mucho esfuerzo, se abrazó a mi cuello.

Con cuidado la llevé a una de las habitaciones pequeñas y la desvestí con delicadeza, tapándola con las sabanas, al ir a quitarle mi chaqueta se aferró a ella como si le fuera la vida en ello, algo tocada por la bebida, la dejé así, al salir Eleonor me miraba como si fuera un padre acostando a su hija.

-ELEONOR: ahora ya no queda nadie más que usted y yo……...- algo bebida pero mucho más lucida de lo que me quería hacer ver, puso sus manos en sus caderas en jarra, riendo mientras encorvaba le pecho de forma sensual.

-YO: si, es una pena, yo aun tengo energías para fiesta……- avanzaba hacia ella con paso firme y lento.

-ELEONOR: pues si usted aguanta, yo más, ¿que le parece si bajamos a proseguir el baile donde lo dejamos? - señaló el salón.

-YO: que es mucho trabajo bajar a bailar con usted, solo para volver a subir a meterte mi verga hasta las entrañas - la rodeé con mis brazos ante su cara de ofensa falsa.

-ELEONOR: oiga, que yo soy una señora, no soy tan fácil.

-YO: como usted quiera - besé su cuello lentamente, mientras ella me rodeaba el mío con los brazos, apretando nuestros cuerpos hasta sentir como sus pechos se elevaban sobre mi cuerpo y mi polla palpitaba en sus muslos.

-ELEONOR: no sea malo, concédame ese deseo.

-YO: solo por que eres tú, y por lo bien que follas…… - la susurré al oído - ….. solo pensar en ti me eriza la piel - halagos vacíos, no tanto, pero no los decía por que los sintiera, si no por calentarla.

De un giró la agarré y la subí encima mía en brazos, como había llevado a Ana a la cama, bajé las escaleras con ella así viéndola reír ante mi poderío, besándome con pasión. La dejé posarse levemente en el suelo y tarareando alguna canción comenzamos a movernos, sus dos manos encogidas entre nuestros pechos y su cabeza recostada contra mi barbilla, conmigo abrazándola por completo con mi cuerpo y mis brazos, acariciando su espalda con suavidad, pasamos no menos de 10 minutos así, hasta que levantó la vista y me miró con un brillo especial en los ojos.

-ELEONOR: ¿como puedo estar tan locamente enamorada de ti? - la pregunta me pilló desprevenido, nadie había hablado de amor entre nosotros.

-YO: ¿me quieres? - pregunté por ganar segundos.

-ELEORNOR: ¿no es evidente?

-YO: yo creía que solo eran juegos, pasión y lujuria - mentí.

-ELEONOR: para mi no, ya no, te quiero, estoy perdidamente enamorada, y me duele que no te hayas dado cuenta, pero más aun que me lo permita yo.

-YO: siento si esto se me ha ido de las manos, ¿pero por que no te no puedes permitir?

-ELEONOR: por que te saco mucha edad mi niño, soy una mujer adulta y madura, debería estar con hombres de mi edad, prepararme una vida larga con ellos, no ser tu perra.

-YO: no eres mi perra.

-ELEONOR: ya, eso dices, ¿pero me quieres? - me pilló sin respuesta de nuevo, si la tenia, pero no quería dársela.

-YO: claro que te quiero….- me miró sin creerme.

-ELEONOR: quizá me tengas aprecio o cariño, pero no me amas, no como a Ana, ¿verdad? - el silencio la dio la razón.

-YO: no puedo evitar sentirme atraído por ti, mi pequeña reina, pero mí corazón es de Ana, es suyo, y si bien puedo compartir mi cuerpo con las 2, no puedo hacer lo mismo con mi amor - sollozaba ante la sinceridad cruda de mis palabras.

-ELEONOR: y es por eso que me odio, por saber que nunca me amaras así, y seguir en este juego cruel - se alzó para besarme - ¿por que la amas así y a mi no?, hago el amor mejor que ella, lo sabes.

-YO: es cierto, pero tú eres más mujer que ella, apenas una veinteañera, y te ha costado mucho trabajo superarla.

-ELEONOR: pero soy mejor, me tomas de formas que me hacen enloquecer, y te ofrezco mi amor……..hasta compartiría mi imperio contigo ¿acaso eso no es suficiente?

-YO: no, mi colombiana, quizá si no la hubiera conocido a ella antes, quizá si en otra vida hubiéramos coincido, pero no estamos en un mundo perfecto, no puedo ofrecerte algo que no es tuyo, ni tú puedes pedirme que te lo de, sabiendo que no te pertenece.

Nos miramos a los ojos, quería trasmitir firmeza pero me dominaban las emociones, no quería perderla, pero tampoco darla esperanzas, la sequé una lagrima que corría su rímel, sonrió al sentirse vulnerable, de golpe me besó de nuevo, repetidas veces, tantas que ya eran besos largos y pasionales con lengua y agarrándonos las cabezas para no alejarnos mucho el uno del otro, las cremalleras sonaron, sus manos acariciaban mis slips por encima y las mías bajaban por su espalda junto al cierre del vestido, nos fuimos calentando hasta que de un tirón le rompí las alas del vestido blanco para bajárselo y comerme sus maravillosas tetas y sus pezones como postes de carretera, rompió a reír.

-ELEONOR: jajajajajaja que bruto eres, acabas de romper un vestido de 10.000€ - la miré con desidia mientras soltaba un pecho que succionaba con la boca.

-YO: ¿si quieres paro? - rió asintiendo que de parar nada, rasgué el vestido aun más ferozmente hasta arrancárselo de encima, quedó solo con un tanga diminuto color carne, los tacones, y el vestido hecho jirones en el suelo.

Ella me besó apasionadamente mientras me desvestía, mis manos se fueron directas a sus senos, los pellizcaba con agilidad, se separó lo justo para dejarme cierta libertad para desnudarme por completo.

-ELEONOR: ¿vamos a darnos un baño?

De forma erótica se giró y movió su culo ante mi mirada, con obscenidad se agachó para quitarse el tanga, solo llevar los slips por los tobillos evitó que la ensartara allí mismo, la tenia como una piedra y esta vez no me iba a contener en absoluto, se soltó el pelo dejándolo caer para que bamboleara con sus andares, se paró en el borde de la piscina y torció un poco la mirada llamándome a su encuentro. Sin dejar pasar un segundo la abracé por detrás, besando su cuello y sus hombros, mi polla ya sobresalía entre sus muslos como si fuera ella la que tenia pene, abriendo sus labios mayores y sacándola un gemido al notar mis manos en sus senos, la quise ensartar allí mismo, pero la di la vuelta, lamí sus pezones hasta que imploro sexo, la subí encima mía a horcajadas y la penetré con suavidad, pero sin cesar hasta hundirme en ella por completo, besándonos fui andando hasta la zona de la escalera y fui metiéndonos en el agua con cuidado, hasta tener medio cuerpo hundido, allí ella misma se movía follándome, girando sus caderas y agarrándome la cara para ganar apoyo, su ritmo era lo máximo que el agua le permitía, y bastó con 20 minutos para llegar al orgasmo que buscaba, uno dulce y cálido, mis manos repasaban todo su cuerpo, incluyendo meter mis dedos en su ano, a los 15 minutos el 2º orgasmo la hizo temblar y dejar de moverse, no podía seguir. Allí empecé yo, apoyándome contra la pared de la piscina, mi pelvis inició movimientos lentos y amplios que se tornaban rápidos con cada ida y vuelta, besando y mordiendo su cuello, ella solo clamaba a dios con cada eclosión de sensaciones en su interior, entre medias respiraba bocanadas de aire, clavándome las uñas largas y adornadas en la espalda, 10 minutos después me corrí sintiendo como me vaciaba. Eso solo había sido el principio, Eleonor se desmontó y besó mi pecho con clama, acariciando mis músculos, bajando su boca hasta hundirse en el agua y chupármela debajo del agua, no estaba muy por debajo así que salía de vez en cuando a coger aire para seguir un buen ritmo, una vez dura de nuevo, se volvió a montar encima mía de cara rodeándome con las piernas y ensartándose sola, volví a acelerar sacando a la bestia de forma simultanea, arrollé como un toro bravo, en media hora tuvo 5 orgasmos brutales cada uno más animal que el anterior, me hizo sangre en la espalda con sus uñas mientras bramaba obscenidades, se movía convulsa perdiendo el ritmo de las embestidas pero gozando como loca, echándose hacia atrás y volviendo a recaer sobre mi besándome de forma desordenada, 20 minutos así hasta volver a correrme haciéndola gritar como un cochinillo.

Se bajó y nadó con torpeza hasta el bordillo se sujetó tratando de salir elevándose, un error, me dejó su trasero totalmente ofrecido, según me acercaba estaba a una altura perfecta para follárme su ano, hundí mi cara entre sus nalgas, separándolas y lamiendo el ano metiendo 1,2,3 dedos consecutivamente hasta tenerla lista, ella quería pedir clemencia pero no la deseaba, al sentir mi rabo abriéndola el culo gritó tanto que me asustó, solo su cólera pidiendo que siguiera me sacó del susto, la fui metiendo tan lentamente por la presión que pensé que se desmayaba, pero mordiéndose el puño aguantó hasta tenerla dentro, luego solo fue arrancar la moto y darla con todo. Ya por la 3º corrida, antes estaría medio muerto, pero ahora estaba tan fresco, me follé su culo hasta hacerlo estar rojo de los golpes de mi pelvis y los azotes que la daba, el agua salpicaba, la acariciaba el coño metiéndola la mano entre las piernas, ella golpeaba el césped con rabia al sentirse superada por un animal indómito, tras 2 orgasmos anales se desvaneció cediendo terreno hasta ser un trozo de carne que suspiraba entre estocadas, al ir a correrme mi ira me llenó y la agarré de la tetas poniéndola de pie y acelerando hasta casi sacarnos de la piscina a golpes de cintura, Eleonor se reactivó ante aquello unos instantes lo justo para sentir como mi semen caliente se derramaba en su recto. Sus manos temblorosas buscaron mi nuca.

-ELEONOR: no hay mujer que pueda con usted, es la perfección hecha amante, me da igual que no me ames, mientras me haga el amor así.

-ANA: eso, puedo prometértelo siempre - tenía fuerzas y energías para continuar, lo sabia, y Eleonor lo notaba, su cuerpo y sus gestos eran de temor a otra ronda.

En brazos la saqué del agua, apenas podía caminar, la subí en brazos a la cama y allí la acosté, fui a mirar a Ana que dormía como un tronco, y bajé a beber algo y comer de las sobras de los canapés, al volver a la habitación Eleonor estaba de rodillas en la cama, mirándome lujuriosa.

-YO: ¿aun quieres más?

-ELEONOR: todo lo que mi hombre pueda darme - asentí ante tal gesto, ella se agachó quedando a 4 patas llamándome con el dedo - hacia menos de 10 minutos estaba rota y ya estaba en pie.

Me tumbé en la cama y la puse encima totalmente estirada, me encanta esa posición, sentir sus pechos aplastados contra mi y mi verga creciendo entre sus piernas, cuando estuvo tiesa se abrió de piernas cabalgándome y se elevó para meterse la polla hasta el fondo, casi se corre de nuevo solo al sentir eso, apoyada en mi pecho quiso moverse pero su cuerpo no le respondía 2 minutos seguidos, la tumbé sobre mi besándola, levanté la cadera plantando los pies, en la posición mil veces estudiada, Eleonor me miró acongojada, y desaté el infierno, entraba y salía en mi totalidad sin parar de acelerar, oía el sonido de mis testículos golpeando de forma constante, se le arqueó la espalda de tal forma que podía notar el pelo de su cabeza rozándome los muslos, luego caía rendida a mi pecho con todo el pelo a un lado, besando cuando su cuerpo se lo permitía, pero cada pocos minutos se corría de forma grosera, la posición inclinada hacia que sus fluidos cayeran por mi pelvis y pecho, apenas se rozaba el clítoris rompía en otro orgasmo, lo sabia y aun así repetía, era insaciable, llegó un punto en que pensé que no podría con ella, pero era la 4º corrida de la noche, tardé casi 1 hora en venirme y al notarlo di el resto, todo, quería probarme, ver hasta donde me daba el ejercicio del gim. Del espasmo que la dio casi sale disparada contra la pared de la cabeza de la cama, tuve que sujetar rodeándola con los bazos con fuerza para que no saliera rebotada, eso solo la mató aun más, recibiendo en estático un sin fin de penetraciones, el orgasmo que tuvo se dividió en varios seguidos y cayó redonda ante mi, solo sus ojos demostraban que aun estaba allí, eso y su boca abierta como para meter una bola de bolos. Al estallar en su interior el semen inundó su interior haciéndome notar como caía caliente por mi tronco. Al salirme de ella una fuente de semen y fluidos salió de ella, que parecía hacer fuerza para sacar todo aquello de dentó, a la 4º convulsión se venció de bruces a mi lado, respirando de milagro y durmiéndose al instante. La di un beso en la frente y me fui a la cama con Ana, acostándome a su lado abrazándome de forma subconsciente.

Me despertó el sonido de la puerta, Ana seguía dormida como una marmota, y al levantarme vi a Eleonor acostada igual de dormida, bajé a abrir, eran los de la fiesta que venían a recoger los últimos trastos, les abrí, subieron varios hombres y una mujer que se echó a reír al verme, estaba desnudo y con mi empalme mañanero, “joder, no me doy cuenta”, en esa casa ir desnudo era lo normal para mi, me fui a poner algo, y abrí la puerta de la habitación de abajo, donde estaba Teo aun dormido en la misma posición en que le dejamos Alicia y yo, me enfadé de golpe al recordar su infidelidad, le quise despertar pero si seguía borracho era inútil, le dejé allí y fui a la cocina a comer algo, cerca de la 1 de la tarde, mientras los operarios recogían los equipos de música y las mesas, la chica limpiaba y organizaba la cocina, me miraba de reojo, solo me había puesto unos pantalones cortos, mi cuerpo la atraía y haber visto mi polla que ahora se marcaba en la pernera de la prenda, flácida después de acudir al baño, la hacia sonrojarse, me animé a charlar un poco con ellos, hasta ayudándolos. Sacando una mesa vi a Teo salir de la habitación con una resaca enorme, me disculpé con los operarios y me fui a por él, le agarré del brazo y le arrastré a la piscina.

-YO: ¿se puede saber que coño haces? - me miró cegado por la luz del día, ubicándose.

-TEO: hola tío, ¿que pasa? - le sacudí del brazo.

-YO: ¿que pasa? que ayer te pillé follándose a una desconocida, mientras Alicia te buscaba preocupada……- se abrió de ojos sorprendido.

-TEO: dios, ¿que dices, volvió? Suéltame……….- ordenaba confuso.

-YO: ¿no te acuerdas? Lo mismo es eso, ibas tan borracho que no podías ni ponente en pie - tiró de su brazo apartándose de mí.

-TEO: ¡¿y a ti que coño te importa?!

-YO: me importa por que es mí casa, mi fiesta, eres mi amigo y ella tu novia, la tuve que engañar para que no te pillara.

-TEO: no te lo pedí.

-YO: no hacia falta, ¿o acaso querías que te pillara? - callaba enfurecido.- ¡te estoy hablando!, ¿es que no te acuerdas de lo que te dije cuando me mude aquí?

-TEO: si eres mi amigo ten la puta boca cerrada.

-YO: la tendré pero no por ti, si no por ella, esto la destrozaría, se acabó, vas a cortar con ella.

-TEO: déjame en paz, no te incumbe.

-YO: lo harás, o ella se enterará de todo, y no me causa placer, pero lo haré.

-TEO: ¿me harías eso a mí? - casi suplicó, sabia que mi determinación en estos asuntos era firme.

-YO: te lo has hecho tú solo, el Teo que yo conocía no es el borracho adultero y resacoso que tengo delante, jamás engañaría a Alicia con una cualquiera y menos me pediría que lo ocultara, no eres ni la sombra de quien eras…….- su mirada irradiaba odio.

-TEO: ¡mientes!, es solo una excusa, amas a Alicia y me la quieres arrebatar, siempre lo he sabido…….- se echó encima mía enfurecido, le solté una bofetada que le pilló desprevenido y le hizo tambalearse.

-YO: si hubiera querido hace meses que estaría tirándomela delante de tus narices, pero me fui de esa puta casa para alejarme de ti y de ella, por el respeto que te tenia, y que has perdido, me fui para que pudierais ser felices de nuevo ¿y así me lo pagas? ¡¿Acusándome?! – agachó la cabeza sabiendo lo cierto de mis palabras.

-TEO: tío, perdóname, no la digas nada, por favor, mejoraré, no se que me pasó……..- me agarró del brazo implorando.

-YO: te di la oportunidad cuando me fui del piso, te lo advertí, te dije que si no cambiabas me la llevaría, y no lo has hecho, sigues igual, no te entiendo, ¿que se supone que ha hecho ella para merecerse tu desdén?

-TEO: tú, tú eres lo que la pasó, maldito el día en que nos mudamos, desde entonces no puedo evitar los celos, ella te mira y te desea, lo sé, y yo no se que hacer, me odia y yo a ella, por que no lo hablamos, pero lo sabemos.

-YO: pues la solución es simple, déjala, si os sentís así es inútil prolongar la agonía, ya fuero yo, u otro, no podéis seguir así, por que os hacéis daño - nos sentamos en las tumbonas.

La conversación se calmó un poco, Teo lloró ante mí, la había querido mucho pero ya no sentía eso, incluso antes de la mudanza sabia que las cosas no iban bien, esperaban que irse a vivir juntos lo arreglaría, pero solo lo estropeó. Me vestí y le acompañé a casa, no se de donde, pero por toda la casa encontré papeles con números de teléfono y notas para mi, las 4 camareras, de casi todas las solteras de la fiesta, de algunas con novio y de 1 casada, hasta una del cocinero que se encargó del catering, todas al cajón. Me despedí de Teo con un fuerte abrazo, y me fui a casa de mis padres, con algo de resaca comimos algo y reímos por la fiesta, mi hermana llegó también sobre esa hora de donde fuera que pasó la noche, ya era mayorcita para saber lo que hacia, la tarde pasó con todos echándose una siesta, menos mi madre y yo, que nos quedamos charlando en el salón como me pidió la noche previa.

-YO: ¿y por que querías hablar conmigo?

-MADRE: nada, es solo que……….¿como te va con la nueva casa? - eso no parecía demasiado importante.

-YO: mama, ¿dime que quieres?

-MADRE: es solo que, ayer hablando con Eleonor y luego con Ana, en grupo o a solas, no sé, las vi raras…...- sacudí la cabeza.

-YO: ¿raras? ¿que quieres decir?

-MADRE: no lo sé, quizá no sea nada, es solo que me dio una sensación rara, no me fío de ellas.

-YO: pero si es Ana, mi novia y Eleonor tu amiga, no pueden ser más dulces y cariñosas.

-MADRE: lo sé, y por eso te lo digo ahora, algo las pasa, comentarios o ciertas miradas, he visto algo en sus ojos que no me gusta, traman alguna cosa - reí sonoramente.

-YO: no vas a lograr alejarlas de mi, mamá, no con esta tontería……….- me cogió de la mano y me miró fijamente.

-MADRE: no es eso cariño, no habla una madre frustrada por que su hijo no la hace caso, te habla una madre preocupada por su hijo, esas traman algo y tú eres demasiado bueno como para verlo.

La negué mil veces y ella se mostraba igual de preocupada, le resté al asunto antes de irme, me besó en la mejilla abrazándome con cariño, antes de despedirse recordando sus palabras. El viaje de vuelta lo pasé con el debate mental, mi madre se equivocaba, Ana era dulce y cariñosa, me amaba, y yo a ella, podía tener una picardía inculcada por mi, pero poco más, Eleonor era aun más mansa, un corderillo fácil de manipular, ninguna tenia motivos para ocultarme nada, casi me reía solo al negarme esa idea, pero algo en mi anterior se revolvía. A lo largo de toda mi infancia, mi madre nos ha advertido a todos, mi padre, mi hermana y a mí, sobre cosas o personas, y nunca, nunca jamás había fallado, su detector de mentiras y su radar protector me habían demostrado, palpablemente, que si ella decía peligro, tenias que estar atento.

Ana y Eleonor - Una nueva pieza en el tablero.

Regresé a casa con un millar de dudas en la cabeza, la sola idea de que Eleonor o Ana me ocultaran cosas me parecía estúpida, no tenían motivo alguno, no tenia sentido, ¿que podían querer que yo no las pudiera ayudar o que debieran de ocultarme?, no le encontraba la lógica a nada que mi ágil e imaginativa mente se le ocurriera, mi cumpleaños quedaba lejos para una fiesta sorpresa, o el papeleo del piso se alargaba como para montar una inauguración a mis espaldas, no las veía haciendo nada más allá, y menos aun que realizaran aquellas 2. Ana, una chiquilla forjada bajo mi martillo y Eleonor una mujer tan poderosa como manipulable, se suponía que tenia a las 2 comiendo de mi mano. Y pese a todo eso, la sola advertencia de mi madre me puso en guardia, tenso y pensativo, se habían ganado ese derecho las advertencias de mi madre con el paso de los años.

Entré en casa ya pasadas las 7 de la tarde, encontré a Eleonor y Ana charlando y riendo, mientras tomaban un poco de chocolate caliente en el sofá de abajo, las escudriñé desde la puerta, tratando de leer a través de su cráneo aquellas maléficas mentes que veía mi madre, de tal manera que Eleonor me miró sonriendo sin comprender nada. Eso llamó la atención de Ana, de espaldas a mí, que se giró y al verme salió corriendo a mi encuentro, con su sonrisa angelical, y su cuerpo juvenil, me besó con el sabor a cacao aun en los labios y me abrazó con firmeza.

-ANA: amor, siento haberme quedado dormida anoche, estaba muy cansada y algo borracha jajaja, lo siento, se que no te gusta que beba………….. ¿que tal? - alzó la cabeza con cara de cachorro.

-YO: bien…….todo…………bien - sonó a pregunta.

-ANA: ¿que te pasa? - frunció el ceño con cara de preocupación burlona.

-YO: nada peque, que tengo muchas cosas en la cabeza - la abracé con fuerza hasta levantarla del suelo con un ligero grito de felicidad.

-ELEONOR: mis niños, que linda imagen, ande y póngase algo que se van a resfriar - comentaba ella mientras se levantaba y llevaba las tazas a la cocina, dedicándome una ligera sonrisa.

Era cierto, Ana iba descalza en ropa interior con mi camisa de la noche de fiesta, abierta salvo los ultimas 2 botones de en la cintura, le quedaba grotesca y sensualmente enorme, yo venia con pantalón largo pero en camiseta con manga corta, besé a Ana con dulzura ates de azotarla con cariño para que fuera a ponerse algo abrigado, aunque su imagen era preciosa. Allí pasmado en la entrada, viendo como Ana me saludaba alegre antes de entrar al cuarto y como Eleonor se volvía a echar en el sofá levantado las piernas y pidiéndome que la diera un masaje en los pies doloridos de los tacones de la fiesta, contemplé lo que ya sabia, eran mi novia pizpireta y una mujer madura que solo demandaba afecto, no eran 2 diablas en busca de……….no se me ocurría que podían estar buscando en las sombras, no sentí que hubiera plan o maldad alguna. Así que simplemente calmé mis nervios y me dediqué a lo que mejor se me daba, vivir con ellas.

Esa misma noche cabalgamos juntos los 3, Eleonor cayó la 1º, estaba casi sin energías, la fiesta y el polvo a altas horas de la noche que la eché, la tenían aun en la reserva, sus senos me llamaban demasiado y con ella subida encima a horcajadas la fui penetrando sintiendo como hasta le escocía, su cintura aceleró de forma irrisoria, me dejó domarla a los pocos minutos, donde desaté a la bestia y en 1 hora acabó fulminada de 4 orgasmos seguidos, fue Ana la que recibió la grata sorpresa de mi mejoría física por el gim, aun no me había corrido y Eleonor ya no volvería, al menos en un buen rato. Se agachó a chupármela con suavidad, agarrándola con ambas manos y jugando con su lengua en la punta del glande, sintió en las manos esa rigidez previa al correrme, matar a Eleonor tenia sus consecuencias, apenas 10 minutos de lametones y succión me hicieron venirme en su boca, lo aprovechó para rememorar viejos tiempos y tragarse todo mi semen, continuando con sus manos y su boca un juego perverso hasta ponérmela como una piedra de nuevo, entonces gateó por mi cuerpo para ocupar la poción de Eleonor previamente, se introdujo el pene con lentitud casi desesperante, agarrando de la base con una mano mientras subía y bajaba un par de veces, girando su cabeza haciendo que su larga melena hiciera arcos, repitió gestos hasta que soltó la mano y se dejó caer para sentir como la llenaba, se retorció casi dibujando un circulo con su torso, hasta caer sobre mi pecho, besándome en él y el cuello, su cintura daba pequeños saltos, intercalados con giros amplios de sus muslos, fue aumentando el numero de saltos hasta que ya no había giros, solo entraba y salía de ella, utilizaba el propio impulso de la bajada con el ligero dolor agradable que la provocaba tenerla toda dentro para volver a subir, pero solo a la mitad, se dejaba mucha parte dentro para no obligarse a hacer esfuerzos grandes para sacársela toda.

Mis manos en sus senos jugaban con ellos y sus pezones, mientras que la diferencia de altura no me dejaba llegar a besarla, solo cuando se tomaba un respiro en sus movimientos y se elevaba unos centímetros podía probar sus labios y su lengua luchando contra la mía, sus orgasmos casi no parecían afectarla, eran evidentes en el cambio de sus gemidos y respiración, pero continuaba incansable, su velocidad disminuía pero aguantó lo suficiente como para sacarme la 2º corrida. Se elevó orgullosa echando el cuerpo hacia atrás mientras unos giros rápidos de cadera terminaban de recibir mi leche caliente en su interior, sudorosa y cansada, pero con una sonrisa de felicidad lasciva. Me picó en el orgullo, me incorporé con tal fuerza que su risa se volvió en asombro, y sin sacarla de su interior me puse de rodillas con ella encima recostándola de espaldas a la cama, con la cabeza al lado de la de Eleonor, que aun pasada una hora luchaba por recuperar una respiración rítmica. Ataqué los pechos de Ana y su ombligo con mis manos y mis labios, acariciando su clítoris con habilidad, y besándola con pasión, sus movimientos pélvicos fueron hinchado mi verga en ella que notaba como un monstruo crecía en su interior, sonreía levemente de nervios, intuía que ahora la mataría, pero no sabia hasta que punto, fui sacando y metiendo todo mi rabo con movimientos lentos, cogiendo las medidas para no sacarla de ella, y una vez hecho, solté al animal indómito que habitaba en mi, fue gradual y letal, tan rápido y continuo que Ana se corrió 3 veces en diez minutos, se reía, solo al principio, de la impresión, luego fue torciendo el gesto sabiendo que iba en serio y luego agarrando las sabanas para no echar a volar, aguantaba la respiración hasta que no podía más y soltaba un grito para coger aire. Agarrada de una de sus piernas como apoyo, fue demencial con el estruendo de los golpes, pelvis contra pelvis y como ella trataba de acariciarse el clítoris pero lo dejaba para poder seguir respirando, se aferraba a la cabeza como si fuera a salir disparada como el corcho de una botella, emanó fluidos en cantidades que solo descubría al sacarla un par de veces de ella, casi parecía que se orinaba encima, pero volvía a arremeter con toda ferocidad y ni atisbo de cansancio, 40 minutos pasaron antes de que la volví a llenar de leche, ya casi ponía las manos en mi estomago pidiendo que parara, pero sus ojos en blanco y sus labios carnosos me pedían continuar.

-ANA: estas enorme, recuperado, te veo con ganas de más y yo casi no puedo con mi alma…..- sonreí al agacharme a besarla.

-YO: aun queda que te folle tu precioso culo - abrió los ojos mordiéndose el labio, acariciándose los pechos.

Mientras mi polla se recuperaba me comí su coño, sabia a mil cosas y jugaba con su clítoris, la saqué otro orgasmo antes de empezar a trabajarle con los dedos el ano, al meter varios ya la tenia lista, en la misma posición bien abierta de piernas apreté contra su ano sacándola suspiros de la impresión, pero sin mucha dificultad la metí con fuerza, haciéndola resbalar por las sabanas de la cama, hasta que su cabeza sobresalía por el borde de abajo. Solo metí la mitad y allí volví a arremeter con la bestia, la cinética llevó a meterla entera y sacarla gritos de pasión que la hacían arquear la espalda, sujetaba bien por sus caderas, fue un frenesí de 20 minutos en que no pudo evitar 2 orgasmos anales, se frotaba en ellos el clítoris de forma abrupta, se agarraba de la piernas tirando de ellas con la esperanza de que lo disfrutara menos pero no podía, daba golpes con las piernas y se doblaba sobre si misma, se estaba poniendo roja y las venas del cuello parecían que iban a estallar en cualquier momento, su gritos largos y altos no me compadecieron y aceleré los minutos finales tirando de gestos entrenados, respiraba de forma estudiada con cada golpe de cintura y el sudor de mi frente goteaba encima de ella. Casi la saco de la cama de los espasmos internos que la dieron al sentir mi semen dentro de su culo, al salir de ella tenia un túnel y no un agujero en su ano, del que brotaba semen, se dio la vuelta quedando tumbada sobre la cama boca abajo con medio cuerpo fuera y un brazo colgando, azoté su travieso trasero provocándola un gemido leve, de golpe sentí unos pechos en la espalda, con unos pezones inconfundibles, Eleonor estaba de nuevo en juego.

-ELEONOR: ay papi, yo también quiero mi anal - me giré agarrando sus tetas y comiéndomelas.

-YO: ¿estás segura?

-ELEONOR: ¿y como no?, quiero sentir tu verga partiéndome mi culito y llenándome de tu leche caliente.

Sonreí ante sus palabras latinas, me volvían loco, metí mis manos en sus nalgas rodeando su cintura, abriéndola el culo con uno de mis dedos, solo oírla recitar versos de la Biblia me la puso como una estaca, seria devota pero su dios era yo, solo sentir mi polla creciendo hasta meterse entre sus mulos la erizó la piel, tiré de su pelvis hasta que me rodeó con las piernas, aun agarrada a mi cuello, montada encima de mi, pero yo de rodillas, busqué su coño que penetré con facilidad pasmosa y usando solo los brazos me la follé a buen ritmo, sus besos y sus uñas las sentía sobre la piel, su larga melena caía hasta sentirla hacerme costillas en los brazos, mientras uno de mi dedos permanecía dentro de su ano, como gancho. Oír el “chop chop” de su pelvis húmeda contra mi rabo abriéndola solo la llevó a gritar hasta correrse de nuevo, casi se desvanece, la solté y cayó a la cama, la tumbé boca abajo con cierta violencia, y la ordené que se abriera las nalgas, tontamente estirada, obedeció, me acuclillé encima de ella, y bajando mi empalme hasta su ano, apreté tan fuerte que al entrar se metió la mitad, soltando un alarido que se trasformó al final en placer, me apoyé en su espalda y comencé el vaivén de mis piernas, penetrándola de arriba a abajo, tirando de la piel de su ano hasta casi levantarla de la cama, ella mordía las sabanas entre gritos de lamento y lujuria, aguantó lo justo en la posición para sacarla su orgasmo anal, allí me arrodillé, azotando y agarrando de sus nalgas. Terminé el trabajo con la bestia, algo magullada ya, que 30 minutos después reventó en una cantidad de semen anti natural para ser la 5º corrida de la noche, llegué asfixiado, mareado y con los pulmones ardiendo, pero al terminar y ver a Eleonor llorando de algo más allá que el gozo, y a Ana aun temblado tratando de incorporarse, me sentí orgulloso de mi mismo, había podido con las 2, caí desplomado sobre la cama y me dormí profundamente.

Al despertar las vi tumbadas a mi lado, parecían no haberse movido desde que las dejé así, bajé a la habitación de invitados y cogí algunas cosas mías que necesitaba, preparé un fuerte desayuno para mis damas y subí sabiendo que aquellas 2 mujeres serian incapaces de jugármela, ¿que motivo tendrían para echar de su lado a un hombre como yo?, con la confianza que solo te da el creerte en mejor posición que “tu rival”.

Tardaron un par de días en recuperarse, a la mañana siguiente caminaban como si hubieran estando cabalgando por el oeste durante semanas, yo lo agradecí también, entre fiestas, sexo y el fin de semana trabajando por las mañanas, estaba fundido físicamente y mentalmente, poco a poco fui juntando mis rutinas, haciéndolas encajar como piezas de un puzzle. Según me levantaba me desfogaba con Eleonor, ya que Ana estaba en la universidad, eso si Ana no empezaba la fiesta antes de irse para que la continuáramos nosotros, luego desayunábamos algo juntos Eleonor y yo, antes de salir a correr o con a bici, dependiendo del clima, algo a lo que aficioné a Eleonor que me acompañaba cuando le apetecía, volvía, o volvíamos, y una ducha rápida o un baño relajante en la piscina climatizada. Muchas veces acompañaba a Luz a hacer la compra, y luego la ayudaba a cocinar, me estaba volviendo un cocinero osado, y antes de comer Eleonor me ayudaba a aprender ingles, ella lo manejaba de cine y yo lo escupía de lo poco que se me pegó en el instituto, nivel Tarzán me gustaba decir, la verdad no sé de ninguna profesora de ingles que te de clases mientras estáis follando, que era como terminaban casi todas las clases, pero aprendí más con ella en unos meses que 5 años de colegio.

Comíamos y nos echábamos una siesta, a menudo retomando las “clases”, hasta que llagaba Ana, si estaba animada y alegre quedábamos para salir ella y yo a solas, o ir a hablar y charlar con amigos, sobretodo con Alicia y Teo, ahora por separado, lo habían dejado de forma dolorosa pero amistosa, eran muchos años juntos como para montar un lío y sabían que lo suyo no tenia futuro, quedaron como amigos, pero esas primeras semanas se hacia duro y no quedábamos con ellos a la vez por precaución, Teo se volvió a casa de sus padres mientras que Alicia se quedó a vivir en el piso de estudiantes. Si Ana regresaba cansada o hastiada, teniendo que hacer trabajos y deberes de la universidad, la dejaba tranquila unas horas hasta que era ella la que, abrumada, venia a mis brazos, podía haber sexo, o no, pero solo sentir su cabello en mi barbilla al abrazarla me reconfortaba, Eleonor solía salir por las tardes, mi madre la había dejado un poco de lado e insistía con su paranoia, pero Eleonor había hecho un montón de amigas nuevas, nada raro con su carácter afable y amistoso, y el dinero que ahora tenia llamaba a muchas personas. Cenábamos a menudo sin Eleonor en casa, Ana y yo veíamos la TV, ella más que yo, que estaba con el PC, hasta que nos cansábamos y nos íbamos a la cama, para empezar a follar de verdad, a estas alturas Ana ya casi lo tenia medido, a partir de mi 2º corrida paraba, si se atrevía a comenzar la 3º era por que Eleonor ya andaba por casa, no aguantaba ni soportaba a partir de ese punto, no ella sola. Luego remataba Eleonor, con la 3º, 4º y hasta el 5º, terminábamos a altas horas de la noche, Ana a veces se unía al final, recompuesta, pero al final era inevitable que los 3 termináramos medio idos, agotados y felices.

Así eran mis días entre semana, en fin de semana solo cambiaba que el que se iba por las mañanas era yo, a trabajar, y para mi deleite y desgracia, ellas también jugaban sin mi en la cama, irme viendo como Eleonor le come las tetas a Ana o esta el coño a la madura, era un ejercicio de honradez obrera. Luego por las tardes y noches salíamos de fiesta con los amigos, ya fuera en el piso de estudiantes con cenas y juegos o salir a bailar a discotecas, Eleonor se solía venir a las discotecas, le encantaba ese ambiente, y como pagaba todo, a los demás no les importaba, o se aprovechaban de ella hasta el punto que yo les permitía, no se podía ir alquilando limusinas para ir a fiestas de alto copete todos los días. De hecho, Eleonor iba de caza, más de una vez se dejaba rozar y acariciar por los hombres maduros que la rondaban, me pedía permiso para tontear, hasta que la dije que no tenia por qué, era totalmente libre y capaz de tomar sus decisiones, hiciera lo que hiciera con otros hombres por propia voluntad, no me afectaba, mi novia era Ana, no ella, así que de vez en cuando alguno que lograba trabajarla, no muy difícil ante su forma de ser y 3 o 4 copas, disfrutaba de la compañía de un hombre de su edad o los llevaba a casa para gozar ella sola, ya tenia a 3 o 4 embobados detrás de ella, con los que solía quedar, aunque siempre trataba de que a mi no me pareciera mal, aunque la reiteré que no tenia por qué, siempre que se quedaba con ganas de sexo me tenia a su disposición, solo lo hacia con condón con otros hombres y ninguno la llenaba como yo, es más, con alguno ni tenia sexo, solo los usaba como mascotas sociales.

Esa fue mi vida durante los primeros 3-4 meses del año, alguna escapada de fin de semana con Ana, cuando Eleonor quería el piso para ella sola nos pagaba un viaje, las primeras veces a la sierra, luego por España, Bilbao, Barcelona, Galicia, Andalucía…………. para primavera cada fin de semana era un viaje al extranjero, París, Milán, Berlín, Londres…….ya nos pedía destinos, visitamos Venecia y Amsterdam a petición mía, y Egipto por parte de Ana, le fascinaban las pirámides y la historia de los faraones, allí, al ver a Ana vestida con ropas finas e insinuantes, varios mercaderes me escupían ofertas grotescas de camellos y cabras por ella, me reía al ver como Ana se enfadaba al verme negociar por más cabras, a ella ni la miraban cuando se quejaba, como si no estuviera allí, un par de guías nos protegían, incluso una oferta llegó por mi, de un hombre que quería regalarme a su esposa como si yo fuera un collar nuevo, nos reíamos hasta que nos llegó una oferta de un magnate de la zona, 3 millones de € limpios para mi si dejaba a Ana en la habitación y me iba sin hacer preguntas. Nos tuvieron que sacar a escondidas los guías del hotel cuando les dije que iba a rechazar la propuesta, me miraban como si estuviera loco.

-GUIA1: es una gran oferta - replicó con cara de asombro.

-YO: lo sé, pero la respuesta es no - asentía como si fuera una broma.

-GUIA2: no lo comprendéis, no es que sea una oferta cualquiera, es tanto dinero aquí, que es un insulto rechazarla, es tanto que por la mitad puede que la gente os liquide y llevársela a la fuerza.

Ana se agarró a mi brazo y no me lo soltó hasta entrar en el avión de vuelta, aparentaba tranquilidad por fuera, pero por dentro estaba aterrada, como yo, que miraba a mil sitios en busca de trampas y emboscadas, gracias a dios no pasó nada, es más, en la seguridad del avión en vuelo, pensé que habría sido una broma de los guías, típica a los turistas, pero jamás regresamos.

Al volver a casa lo hicimos a nuestras rutinas sosegadas, era habitual que algún hombre estuviera por casa, pero no más de 2 o 3 días seguidos, Ana era demasiada competencia y en cuanto la veían, Eleonor los echaba patadas, daba la sensación de que estaba buscando a algún hombre que al estar en esa casa la mirara solo a ella, y no se fijara en Ana, como una prueba a superar, pero no daba resultado. Quería rehacer algo de su vida una vez que sabia que nunca seria suyo, no de esa forma, eso no quitaba que el sexo fuera maravilloso, cada error y cada hombre que salía de allí, era una decepción que ahogaba conmigo en la cama, Ana muchas veces solo podía quedarse a mirar o jugar con sus senos mientras nos montábamos el uno al otro como podencos.

Los días fueron pasando y finalmente la primavera llegó, existe cierta teoría sobre que en otoño, un barco atraca en España, y se lleva a todas la mujeres guapas y sexys de viaje por el mundo, y que regresa en primavera para devolver la belleza a las calles, una broma estúpida pero que no hace menos cierto el hecho de que ver a mujeres con menos ropa y enseñando carne cada día que pasa, alegra la vista masculina. Lo mismo me pasaba a mi, pero en privado, compartir casa con Ana y Eleonor era un tormento, y supongo que para ellas también vivir conmigo, desde el 1º día que desperté sudando en la cama, iba desnudo por la casa, no tengo termino medio, así que ¿para que molestarse? La única a la que podía molestarle era a Luz, la sirvienta, y a ella más que molestarla le hacia gracia, y luego dejó de importarle, hasta me vendía a una de sus hijas, a la que se traía en “secreto” de vez en cuando, con el permiso de Eleonor, para ir a la piscina, sabiendo que a mi me importaba un bledo que ella me viera desnudo, no estaba nada mal su hija, todo sea dicho, no recuerdo su nombre, ¿Yasira? era como Yasmine, la hija de Eleonor, un bombón caribeño, con menos caderas pero una piel de tono del chocolate con leche fundido, guapa pero con la mandíbula algo pronunciada y dientes enormes que casi la impedían cerrar los labios carnosos. No pasó ni 3 semanas y 4 encuentros “casuales” desnudo o follando para que me diera su numero o se metiera detrás de mi en la piscina y se me echara encima, la rechazaba con galantería por el respeto a Luz, aunque estoy seguro de que ella quería encamarme con su hija.

Llegó el día en que se anunció una de las sorpresas más raras y que provocó una fase de confusión y descontrol en mi vida, Ana y yo estabamos en el sofá, tonteando con los pies, cuando Eleonor pasaba por nuestra espalda con el teléfono en mano, llevaba unos días muy pegada al “celular”, pero esta vez estaba nerviosa, se movía sin parar, y alternaba peticiones con voz dulce, con silencios al escuchar, para luego exigir con tono elevado, nunca gritaba, solo yo la hacia hacerlo al follarla, pero oíamos que pedía que lograran que lo aprobaran, nos mirábamos sin entenderla, cuando colgó soltó un pequeño bufido de felicidad con el gesto cerrando del puño dando alguna coz al suelo con el tacón, nos miró con una inusitada luz en los ojos, se acercó corriendo lo que los tacones la permitían y se dejó caer en el sofá para abrazarme como loca, no le importó lo más mínimo perder sus exquisitos modales o que el vestido ceñido se le subiera hasta la cintura dejando a la vista su tanga.

-ELEONOR: ¡¡SI!!, gracias al señor, al cielo, y a ti, ¡¡¡pero por fin lo logré!!!

-ANA: ¿que te pasa? - preguntó preocupada al oír sollozar a Eleonor.

-YO: tranquilízate mujer, y di que te ocurre - me incorporé hasta sentarla en medio del sofá, ella no se soltaba de mi cuello abrazándome.

-ELEONOR: ¡¡la encontré!! Es una pesadilla burocrática, ¡¡¡pero la encontré!!! - lo repetía incesantemente dando golpes en mi espalda que la reafirmaron.

-YO: ¿a quien? - se separó lo justo para agarrarme la cara, darme un beso tierno en los labios y volver a abrazarme.

-ELEONOR: ¡¡A MI HERMANA!!

Cuando se le pasó el subidón de adrenalina y consiguió dejar de repetir que “lo había logrado”, nos explicó todo, llevaba un par de meses buscando a su hermana, Liliana, ya nos contó que la habían separado de ella desde que se casó con su marido y no la habían dejado volver a verla, ni cuando su madre murió, cosa que la comentaron como amenaza, no tenia ni la menor remota idea de donde estaba, solo sabia que su marido la pasaba un dinero todos los meses, y ahora la cuenta estaba congelada por el juzgado mientras se la daban a Eleonor, no sabría nada de esto sin un mensaje de alguien desconocido que llegó a la cuenta para saber por qué habían dejado de ingresar el dinero, los abogados matrimoniales de Eleonor, un señor y una señora, bastante mona que ya conocíamos del divorcio, se pusieron a investigar, y resultaba que el marido pagaba casi 3.000€ a un hombre para que cuidara a Liliana, pero con el paso de los años y desde la muerte de su madre, aquel tipo se quedaba casi todo el dinero y le daba algo a Liliana, una miseria. Al ser cada vez menos, Liliana había mal vivido en los barrios bajos de Colombia, algo muy duro, pero por lo visto era una mujer de armas tomar, pasó por la cárcel de Colombia un par de veces por grescas en bares donde trabajaba como camarera desde los 16 años, se hizo una cuenta donde le ingresaban el dinero y recorrió media Sudamérica en busca de oportunidades, Bolivia, Pero, Argentina…….sin mucha suerte en ningún sitio, la solían detener por peleas y agresiones, pero así era fácil seguirla el rastro, en las últimas semanas se sabia que estaba en Brasil, pero sin los ingresos de dinero, y sus retiradas, no se podía saber donde exactamente, hasta que la localizaron, en una cárcel de mujeres de Río de Janeiro, acusada de agresión y prostitución, no era raro que una mujer sin ingresos y en la miseria, tomara ese camino, pese a ser algo malo, eso le dio a Eleonor pie para localizarla y tratar de sacarla de allí y traérsela a España, pero como nos dijo era una pesadilla burocrática, nadie cedía ni un milímetro, ni la dejaban hablar con ella, los abogados al final la dijeron que todo era cuestión de dinero, si daba con la gente adecuada y pagaba lo suficiente, saldría de allí sin problemas. Allí entró en acción el abogado del ex marido, que sabiendo de su situación apretó para lograr un par de los pisos y la mitad de los coches de Eleonor, los dio encantada a cambio de ciertos contactos de su ex, para pagar una cantidad indeterminada a cierta gente que “facilitó los tramites”, aquella llamada fue la confirmación de que en unas semanas estaría en España.

Lo 1º me asunté de que hubiera sido capaz de todo eso ella sola sin decirme nada, y más aun de que lo ocultara tan bien, no le di importancia por que Eleonor parecía tocada por dios, estaba como en una nube de felicidad, supongo que volver a tener a su hermana la hacia feliz, pero yo creo que poder haber resuelto aquello por si misma la daba tanta alegría como el hecho en si. La dije que si quería nos íbamos para dejarla con su hermana, no seria problema volver al piso de estudiantes sin el “miedo a romper” algo que ya se había roto entre Teo y Alicia. Me pidió que no, que me necesitaba a su lado en un momento tan duro, y que aquel piso era tan mío como suyo, además no sabíamos como iba a ser aquello. Cada día lo pasaba con más nervios que el anterior, en un día podía follarla 8 veces para dejarla exhausta como que otro no me dejaba tocarla, Ana estaba casi tan nerviosa como ella, y acudieron a un psicólogo para que las dijera que se lo tomaran con clama, que la diera tiempo y margen para acostumbrarse, “¿Para eso cobra usted 120€ la hora?, eso te lo dice mi madre mientras te plancha la ropa de una semana”, Ana se echó a reír al oírme decírselo la terminar la hora, Eleonor se disculpó amablemente con una sonrisa escondida bajo su aparente disgusto.

Para cuando llegó el día, Eleonor se pasó la noche vomitando mareada de nervios, el viaje en coche por la mañana la aeropuerto no ayudó, Ana estaba en la universidad así que nos deseó suerte antes de irse, acudimos a una especie de zona vip, no era el aeropuerto de Madrid, si no uno privado, Eleonor lo había pagado todo para que se hiciera con la mayor discreción posible, de hecho creo que no fue ni legal, de lejos vimos como bajaban varios guardas armados y con ropas de policía con una mujer, con un mono naranja enrollado en la cintura y una camiseta blanca en el torso, por la posición parecía esposada de pies y manos, la entregaron a una pareja de la policía municipal, firmando unos documentos, y dándose la mano la metieron en una furgoneta de la policía. Esperaron a que el avión volara de nuevo antes de acercarse a la valla donde nos encontrábamos con la abogada, al pararse la furgoneta se abrió la puerta y bajaron de allí, Eleonor salió corriendo a abrazarla, Liliana la miraba como extrañada, no parecía saber ni donde estaba ni quien era esa señora que iba tan arreglada a rodearla con los brazos.

*(No tengo ni remota idea de cómo hacer el acento de ella así que pido disculpas anticipadas, había pasado por demasiados países y nunca por zonas de habla exquisita).

-LILIANA: ¿quien carajo sos? - su voz sonó confundida.

-ELEONOR: soy yo Lili, soy tu hermana, Eleonor……- la agarró la cara queriendo forzar que la reconociera, pero era en vano, llevarían como 20 años sin verse y la última vez, Liliana tendría unos 10 años y ahora casi tenia 30.

Se miraron extrañadas, mientras compartían palabras de afecto y de desconfianza, nos metieron en una habitación donde la dieron algo de ropa decente y la quitaron las esposas, a mi me dejaron fuera y Eleonor salió a los pocos minutos, sollozando.

-YO: ¿que te pasa? - creía que era felicidad incontrolada.

-ELEONOR: no me reconoce, me dice que no me acerque, ¿que la ocurre? - me abrazó temblando.

-YO: tranquila, es normal, hace mucho que no os veis, ya oíste al psicólogo, darla tiempo y margen.

-ELELORNO: ¿ese del que te burlaste?

-YO: que cobre una burrada por decir obviedades, no cambia que sean obviedades.

La abogada nos comentó ciertos detalles, y la policía la hizo la tarjeta de residencia, Eleonor la contrataría como sirvienta con contrato y todo, para que se pudiera quedar en el país sin problemas, por lo demás, podíamos irnos de allí en cuanto ella saliera, al hacerlo, me costó reconocerla, había entrado un bola de pelo abombado, ropa sucia y polvo, salió una señorita de muy buen ver, con unos jeans ajustados y un top azul marino que dibujaba sus pechos, con una cazadora vaquera encima, se había duchado y peinado, tenia el pelo rubio con raíces negras, ondulando hasta casi ser rizos, largo por debajo de los hombros, si se los estiraba le llegaban al ombligo, con un tono de piel y rasgos en la cara muy parecidos a Eleonor, pero 10 años más joven, con buenos senos sin retocar por la cirugía y un culo de bastante nivel, sin llegar al de Alicia o si quiera al de Ana. Su forma de andar era tosca y encorvada, lanzando los pies arrastrándolos, ver a Eleonor y a ella andar juntas era ver la diferencia entre crecer con el dinero y sin él.

Nos metimos en el coche los 3, despidiéndonos de la abogada que se fue en un super deportivo descapotable que se compró con los honorarios de Eleonor por el divorcio, Eleonor y Liliana se sentaron atrás, y yo conduje, Eleonor parecía entusiasmada con iniciar conversaciones, pero todas, o no recibían respuesta, o si la recibían eran cortantes como una katana, simples monosílabos vomitados, no hablados, y con un tono serio y distante. Al llegar a casa la instalamos en una de las habitaciones libres de arriba, con los armarios listos para sus cosas, pero apenas nos dieron una mochila con algo de ropa y una cartera sin nada salvo varias fotos de ellas de pequeñas, eran las mismas de algunas fotos que ya nos había enseñado Eleonor en casa en un viejo álbum.

Los primeros días los pasó encerrada en el cuarto, durmiendo y descansando, apenas abría la puerta para pedir algo de comer de forma malhumorada, Eleonor salía corriendo a nada que pidiera, trataba de hablar con ella pero no hacia el menor caso. Un día la vi asomada al sol del incipiente verano, desde la piscina se veía el balcón de su habitación y la saludé sin recibir respuesta, anonadada por el aire fresco y el calor de los rayos de luz sobre su rostro, me llamó la atención que salió con un top sin sujetador y en bragas, y sabiendo que la miraba, no se inmutó, Eleonor estaba fuera y Ana en la universidad, así que allí tirado y triste, la saludé con alegría.

-YO: ¿que tal por ahí arriba?

-LILIANA: ¡¡¡a ti que carajo te importa, mecetrefe!!!

-YO: no seas grosera y baja a disfrutar del sol de Madrid como dios manda, aquí conmigo.

-LILIANA: déjeme en paz - se enfadó, era testaruda como una mula, así que saqué el libro de consejos mental de Eli, no me interesaba el sexo, solo llegar hasta ella, por el bien de Eleonor, que lloraba cada vez que era rechazada con Ana tratando de consolarla.

El 1º paso era ver y analizar, siempre lo era, era una mujer guapa y atractiva, lo sabia, estaba allí para dejarse ver y tan poca ropa no era casual, quería llamar la atención, pero si era así ¿por que se mostraba hostil?, la respuesta era evidente, una mujer así, maltratada por la vida, estaría con los escudos subidos todo el tiempo, la suavidad y el afecto serian trucos que ya habían usado mil veces con ella y más terminando de puta, en las leves ocasiones en que solíamos mantener conversaciones, en cuanto se nombraba el tema se enfada hasta el punto de sacar un cuchillo para defenderse, no se muy bien de donde los sacaba, pero siempre tenia uno encima. Por lo tanto era inútil seguir siendo buenos con ella, habían pasado 3 semanas y seguía igual de cerrada que el 1º día, la opción era pasar al ataque.

-YO: como usted quiera, creía que las colombianas tenían carácter - lancé como burla.

-LILIANA: ¿que quiere decir? - preguntó torciendo el gesto.

-YO: nada, solo que pensaba que tendrías valor, quedarse allí arriba, como una boba, por no bajar a esta estupenda terraza, solo por miedo a estar conmigo - tenia que medir bien mis palabras.

-LILIANA: no le tengo miedo alguno, ¿me oye? - se aferró fuerte a la barandilla del balcón.

-YO: ¿entonces por que no baja aquí?

-LILIANA: estoy muy bien aquí, pendejo.

-YO: ¿como va a estar bien, ahí de pie como una gárgola?, pudiendo estar aquí tumbada y relajada con una bebida fría en la mano…. - me miró enfurecida, queriendo replicar con rapidez, pero no había argumento posible, y antes de que encontrara alguno incidí -……. por eso le digo, si no es por la terraza, el único motivo por el que no baja es por que estoy yo, así que me tiene miedo.

-LILIANA: ya le dije que no tengo miedo de nada, y menos de un baboso como usted.

-YO: pues demuéstrelo y baje aquí a charlar un rato, seguro que la habitación es cómoda pero no tiene muy buena conversación, lleva semanas encerrada, unas palabras no pueden venirle mal, pero bueno, ya se que no bajará, no es tan valiente como su hermana…….- me di la vuelta sobre la hamaca en la que estaba, haciendo que me olvidaba de ella, pero con el órdago lanzado al aire.

No tardó ni 2 minutos en bajar a zancadas las escaleras y salir a la terraza con ira en sus ojos, se notaba en el aire, se plantó ante mi hamaca y se cruzó de brazos de forma violenta, seguía en bragas y con el top, divisé disimuladamente su silueta, “nada mal”, sin duda los genes Colombianos de su Hermana corrían por su sangre.

-LILIANA: ¿a ver?, ¿que quiere de mi? - levanté la cabeza un poco y la miré extrañado.

-YO: ¿que voy a querer de ti?, nada, solo algo de charla entre vecinos……- sonreí levemente.

-LILIANA: ¿nada más? - parecía extrañada de mi respuesta, sin duda muchos hombres la habían hecho llamar para algo más que charlar.

-YO: mira, no se que tan mal lo habrás pasado, pero esa vida se acabó.

-LILIANA: eso me dicen, pero siempre que un hombre llama a una mujer, el hombre solo quiere una cosa, y yo ya la he dado a demasiados, a si que déjame en paz.

-YO: como tú quieras, vete y enciérrate en tu torreón, aléjate de nosotros, haz como tu hermana aquí hasta hace nada, triste, sola y abandonada, ella tardó 15 años en comprender que eso no lleva a nada, ¿cuanto tardaras tú? - me miró confundida, parando de inmediato el camino de vuelta al interior que había iniciado.

-LILIANA: ¿y que pretende?, ¿que olvide mi pasado? ¿Que haga una vida nueva aquí? ¿Que sea “mejor persona” como dice mi hermana?, ¿esa que no se molestó en cuidarme siendo millonaria? - gesticulaba abiertamente.

-YO: yo solo te he pedido que bajes a charlar…..- me miró confundida, con desprecio, que un chaval de 20 años la hablara así la desconcertaba.

-LILIANA: usted no sabe por lo que he pasado, ¡no puede juzgarme!

-YO: y nadie lo sabrá jamás si sigues sin decírselo a nadie, yo no te juzgo, pero me da pena ver como te pudres en esa habitación día tras día, para eso haberte quedado en Brasil, pero es decisión tuya.

LILIANA: he vivido un infierno, y tú hablas con mucha ligereza.

-YO: pues cuéntame tu infierno, quizá así aligeres el peso…..- la vi contener los sollozos, al soltar un bufido de desidia.

-LILIANA: ya claro, ese truco ya me lo se, te contaré mi triste vida, tú me consolarás, y cuando me distraiga te tendré encima, y si me niego me mandaran de nuevo a la cárcel de Brasil, ¿no? ¡Hombres, sois todos unos cerdos!

-YO: ¿has estado con todos como para saberlo? - la pregunta la abofeteó la mente, y el orgullo.

-LILIANA: no soy ninguna fulana…….. pero si con muchos que ……..- la corté.

-YO: ¿pero no con todos?

-LILIANA: no, claro, pero……- la interrumpí de nuevo.

-YO: pues no me faltes al respeto, entiendo que cerdos ahí en todos lados, al igual que furcias, pero yo tengo la decencia de tratar de conocerte antes de llamarte zorra - se cuadró frustrada ante mi cadena de argumentos y mi tono acusador.

-LILIANA: lo ……lo siento…….. - titubeó, algo que me pareció un logro -….. pero como te atrevas a tocarme………- sacó un cuchillo de su espaldas, “¿Dónde se los mete si va en top y bragas?”-……….o te corto la hombría.

Me levanté cansado de sus amenazas, me jugué el tipo para rescatarla de su apatía, caminé lentamente hasta ella, que movía el cuchillo con cierta habilidad, me planté solo con el bañador ante ella tan cerca que notaba sus senos rozándome al respirar y el frío acero alojado en mi cuello, colocado de forma experta en mi yugular, aun así doblé el torso como para ir a besarla, el cuchillo se mantenía firme apretando contra mi pero ella dio un paso atrás encorvando la espalda un poco, abriendo la mirada atónita. Era más baja que su hermana, o el hecho de no llevar tacones lo hacia ver así, su melena rubia al viento y sus ojos negros como el carbón se clavaron en los míos.

-YO: te juro sobre mi honor que tendrás que amenazarme de nuevo con este cuchillo en el cuello, si quieres que te toque - sentencié, amagué un beso que ella siguió con la cabeza, y con un dedo puesto en la punta del cuchillo, lo aparté de mi cuello, me di la vuelta a la piscina, donde me metí de un salto, al salir vi a Liliana en la misma poción, con el cuchillo en alto, la espalda encorvada y la mirada perdida.

No se si había funcionado, pretendía dejarla ver que yo no era como los demás, y que podía controlarme de sobra, se giró pasados unos segundos, y me miró con algo parecido al alivio en los ojos.

-LILIANA: el honor es muy fácil de nombrar y difícil de mantener - se sentó en el borde metiendo los pies en el agua.

-YO: cierto, pero también es algo difícil de demostrar si no te dejan, ¿que puedo hacer para demostrarte que soy de palabra? - dejó el cuchillo en el suelo, no muy lejos.

-LILAIAN: pues no lo sé, así de golpe no creo que se pueda, eso se gana con el tiempo.

-YO: ya, si, pero eso es lento y poco divertido, mi padre suele decir que la verdad une mucho, así que quizá si te respondo con sinceridad a las preguntas que llevas días pensando, pueda comenzar a mostrarte quien soy.

-LILIANA: vamos ¿que te pregunte lo que sea y tu me dices la verdad? eso es casi tan difícil de demostrar como el honor - pensativa unos segundos, atinó con la 1º - ¿te follas a mi hermana?

-YO: si, desde hace casi un año - se sorprendió más de la rapidez y contundencia de mi respuesta, que de su significado.

-LILIANA: lo sabia, ¿y que sois? Por que la otra chica es tu novia ¿no?

-YO: si, Ana, mi chica, Eleonor es solo la madre de una de mis amigas, a la que he cogido mucho cariño y al parecer ella a mí.

-LILIANA: bien, parece que al menos tienes huevos…..- esas preguntas habían sido de control, eran cosas embarazosas que ella sabia, o intuía, claramente, y las había respondido sin titubear.

Pasamos unas horas en el agua o en las hamacas charlando, yo respondía con sinceridad y mi sorna eterna, mientras ella preguntaba un sin fin de cosas, sobre mi vida, la de Ana y la de Eleonor, muy interesada en saber por qué ella no la había ayudado en todo este tiempo, se lo expliqué sin muchos detalles, Eleonor tampoco me los había dado. El calor apretaba en pleno final de mayo, fui a por unos refrescos, al volver noté como sus ojos se clavaban en mi entrepierna, llevaba el bañador húmedo del agua de la piscina y solo el bañador tipo bermudas, sin los slip debajo, se me marcó bastante el rabo.

-LILIANA: a si que es por eso que tienes a mi hermana loca ¿no? - me guió un ojo.

-YO: si, bueno, no lo sé, puede que al principio, todas las que me la ven tiesa no pueden evitar querer follárme, incluso las que solo la intuyen o han oído hablar de su tamaño.

-LILIANA: es una buena herramienta, debes de hacerlas gozar mucho, las oigo gritar por la noches, ahora entiendo el por qué - jugueteaba con la lengua en sus dientes.

-YO: no me quejo, ellas a mí también me hacen gritar - la conversación, los recuerdos y la piel torneada por el sol de Liliana me la estaban poniendo morcillona.

-LILIANA: ¿y por que un chico tan joven, apuesto y con esa pedazo de verga, decide irse a vivir solo con una novia y una vieja?, podrías estar por las calles follando a cualquiera.

-YO: amo a Ana, y folla mejor que casi cualquiera, solo tu hermana la supera, el resto ya no me atrae tanto cuando tengo a esas 2 en la cama.

-LILIANA: eso es por que no has estado con suficientes mujeres, mujeres de verdad - sonreí al repasar la lista mentalmente.

-YO: unas cuantas han caído, no he estado quieto hasta encontrar a Ana - Eli, Madamme, mi leona o la propia Eleonor eran ejemplos claros.

La conversación fue por esos derroteros, llegando a sacarla alguna sonrisa y fragmentos de su vida en el pasado, nos encontró Eleonor en la piscina, la había visto 10 minutos antes pero estaba al otro lado de las puertas con miedo a estropear la escena, Liliana en un lado y yo en otro, charlando amigablemente.

-ELEONOR: hola chicos, ¿que tal? - a Liliana le cambió la cara, se puso rígida con ganas de irse.

-YO: nada, aquí, tomando el sol y charlando - me levanté para ir a saludarla.

-LILIANA: si, no quería molestar, enseguida me subo - la miré con pesadumbre por sus manía de retraerse.

-YO: no seas tonta, con lo bien que estamos aquí charlando, tú quédate aquí mientras yo hago la comida, y así habláis las hermanas - se le iluminó la cara a Eleonor.

-ELEONOR: si, así podremos charlar sobre tu pasado……….- de golpe la agarré la cabeza y la di un fuete beso para cerrarla la boca, al separarme me dio un tortazo instintivo, pero luego me volvió a besar con pasión, al abrazarla la susurré.

-YO: no la aprietes, solo charla con ella de tonterías, ella te irá diciendo lo que quiera decirte - sonrió al saber de mi estratagema, la di un fuerte cachete en el culo para darlas tema de conversación al irme.

Tardé mucho tiempo en hacer la comida junto a Luz, echándolas un vistazo de vez en cuando, oyéndolas charlar y hasta algún suave coro de risas, me sentí feliz por mi avance, logramos comer todos juntos sin que Liliana se fuera ni amenazara a nadie con un cuchillo, algo novedoso, comía como un animal abandonado, ingería mucho y muy rápido mirándonos de reojo, sus modales eran casi peores que los míos, que ya es decir, se sujetaba el pelo con una mano mientras con la otra cogía el tenedor como si fuera una escaladora, soltaba eructos y lamía los platos al acabar, aunque esto último lo hacia hasta yo.

Ana, Eleonor y Liliana – Vendaval Colombiano.

Desde ese día la situación fue dando lentos y firmes pasos, casi como de película, Liliana se abría poco a poco mientras nos acostumbrábamos a su forma de hablar y comportarse, era una fiera salvaje, que iba aprendiendo a comportarse de forma civilizada, confiaba ciegamente en mi, puesto que nunca la mentía por grotescas que fueran sus preguntas, y en Eleonor le costaba, pero sentía un afecto en ella que nadie le había dado. Ana era la más distante, una relación cordial pero con alguna tirantez, me daba que pensar aquella aversión casi natural entre ellas. Liliana, o “Lili” como ahora nos dejaba llamarla sin esgrimir filos cortantes, sugirió, o pidió mas bien, que la dejáramos salir, me reí tanto al ver como lo pedía que le sentó mal, no éramos sus carceleros, podía hacer lo que le diera la gana, pero en realidad lo que pedía era que la acompañáramos fuera, le daba pánico salir sola.

La 1º vez que salimos todos juntos fue como retroceder en el tiempo, a Eleonor admirando todo como por 1º vez, pero ahora era su hermana, se metía entre nosotros y le extrañaba que 3 mujeres pudieran andar solas por la calle solo acompañadas por un hombre, por donde se había movido aquello era una temeridad, a mi me hubieran dejado medio muerto y hubieran raptado, violado, vendido o matado a aquellas 3 bellezas que me acompañaban, en ese orden o todo a la vez. Eleonor le montó un especial “Pretty Woman” por la gran vía de Madrid y la compró casi 10.000€ en ropa, complementos, perfumes, lencería y demás enseres, nos cerraron una tienda para nosotros solos, allí era donde Eleonor se compraba casi todo, y la conocían bien, yo me aburría sentado en una esquina de oírlas reír, Eleonor era clase pura, elegancia natural, Ana era inocencia y belleza trabajada, Lili era…….bueno, como meterme a mi en un vestido de fina seda, aparentemente un buen cuerpo y un buen vestido, pero algo fallaba, la posición encorvada, el titubeo al caminar y la forma de colocarse los senos o las bragas por encima de la tela, todo era grotesco, abrupto y sin armonía ni estilo alguno. Eso no cambiaba que estuviera guapa, las raras veces que se quedaba quieta y dejaba de moverse hasta podías apreciar una mujer femenina y deseable, sus senos eran aun firmes y sus caderas pronunciadas, pero eso iba cambiando, comiendo a diario de forma saludable había cogido unos kilos que necesitaba, estaba muy escuálida al llegar, eso la dio un toque más exuberante y sensual. Era como mezclar la belleza hereda de Eleonor, la juventud de Ana, la lengua afilada de Lara y mi “talento” para vestir ropas de mujer, todo en uno.

Con la situación normalizada, volvíamos a nuestras rutinas, solo cambiaba que en vez de clases de ingles, que ya no necesitaba tanto, Eleonor se dedica su hermana, a enseñarla cosas, y a aprender otras, Lili no era tonta, simplemente nunca tuvo oportunidades, se apuntó a clases, y se buscó un trabajo de verdad, Eleonor la ayudó a encontrar trabajo en un restaurante de cierto nivel, dirigido y ambientado para Colombianos, no le resultó nada difícil y así nos la quitábamos de encima unas cuantas horas para nuestras sesiones de sexo salvaje. Ana se vio aliviada y retomó un poco su lugar en mi tiempo, yo le dedicaba muchas horas a Eleonor y Lili por culpa de la universidad de Ana, muchos días me preguntaba si me había follado ya a Lili, que no la importaba decía con cierto resentimiento, no se para que preguntaba si le daba igual mi respuesta cuando le decía la verdad, que no la había tocado, no me creía, y cuando bromeaba diciéndola que si, se lo tomaba peor por que no me lo tomaba en serio.

La verdad era que Eleonor y Lili eran las joyas de la corona de su, cada vez más amplio, circulo de amistades, un día bajé corriendo al salón ante los gritos que oí, vi a Eleonor sujetando del brazo a Lili, que trataba de trinchar a un hombre con los pantalones bajados que había entendido mal las palabras, “sube a casa y seguimos hablando”, le gritaba “no soy una furcia, desgraciado” repetía entre amenazas con un cuchillo. Se agradecía los intentos de los buitres, la verdad, cuando Lili pasaba varios días seguidos sin follar estaba de un humor de perros, cuando lo hacia se pasaba unos días de los más tranquila, era una cerilla con la que había que tener cuidado de no rozar con la lija.

El fin de curso en la universidad fue lo mejor que nos pasó a todos, Eleonor estaba cansada de tenernos por allí, quería una casa propia donde hacer su vida pero con los abogados dando largas por los pisos al juez, no tenia otro remedio, Lili era tan incendiaria que la convivencia era imposible, Ana estaba saturada y convencida de que yo no estaba seguro con ella allí, y yo harto de arreglar los desaires que provocaban aquellas 2 hermanas, tonteaban con tantos buitres a la busca de su dinero que la mitad de ellos tenían que ser achantados por mi. Como “regalo” para Ana, por la 4º mejor nota de la promoción, Eleonor nos pagó 2 semanas de viaje a NY, al piso que le acababan de conceder el juzgado de su marido. El viaje fue glorioso, visitar tantos lugares famosos, expresarse en ingles y entenderlo, aunque dejaba a Ana hablar, mucho más culta y preparada. Las noches de pasión eran irrefrenables con Eleonor lejos y todos los problemas a 4.000 kilómetros, los vecinos del loft de Eleonor llamaron a la policía un par de veces al oír a Ana gritar poseída por mi miembro abriéndola en dos durante horas, a la 1º llamada acudieron unos policías muy viriles que nos preguntaron por separado, riendo al irse, llegué a tener que enseñarles mi polla para que me creyeran que los gritos eran causados por eso, y no por mi mano. A la 2º acudieron 4 parejas de policías, todas mujeres, al verlas llamar a la puerta abrí desnudo con la tranca tiesa de estar aun follándome a Ana, que se reía tirada en la cama tapándose con una manta, la cara de las agentes fue para hacerlas una foto, respondí a 3 preguntas rápidas, más bien Ana lo hizo, sin que ninguna levantara la cabeza de mi rabo, invité a quedarse a alguna si quería participar, de broma con Ana riéndose al entender mi sorna, pero ellas no lo hicieron, una quiso quedarse, lo leía en sus ojos, pero las otras se la llevaron.

-ANA: ¡¡¡estás loco, ¿como se te ocurre?!!!

-YO: así ahorramos tiempo, no me van a cortar el rollo como la última vez……..- hundí mi cara en su coño haciéndola aferrarse a mi cabello.

Volvimos rememorando el amor que sentíamos el uno por el otro, sin juegos ni malabares morales, pero nada más llegar a casa se acabó, Lili había instalado a un hombre en su cuarto, un cerdo que rozaba el maltrato con cada palabra que escupía su boca, no me tragaba que un tío así hubiera logrado acercarse a Lili, Eleonor desesperada de ver como se fundían el dinero en beber y alguna droga blanda, la cortó el grifo, pero tenia su propio dinero por el trabajo y su hermana no la iba a dejar en la calle después de traerla. Era su camello y así le pagaba las drogas, con sexo y una vida de lujos, Eleonor me suplicó de rodillas que lograra que lo echara de allí, no era asunto mío, hasta que Ana no me lo pidió no moví un dedo, estaba tan harta de ese desgraciado como todos. Las avisé a ambas, la forma fácil es darla a Lili algo que desee sobre ese cerdo y sus drogas, y lo efectivo era yo, como con Lara, que dejó la marihuana solo por que yo se lo ordené. Coincidieron con mi idea y me dieron barra libre.

Me pasé 3 días mirando la relación entre aquellos personajes, Liliana era una mujer distinta, maleable y fácil, el camello ya se ocupaba de que no la faltara de nada para mantenerla así, él era tan zorro como previsible, se creía que mientras estuviera con ella no pasaría nada, no nos atreveríamos a tocarle, pero iba tan ciego de cosas como ella, quizá algo menos, solo lo justo para ser consciente y ella no. Lo 1º era sepárales lo suficiente como para que Lili volviera en si, fue tan sencillo como mandarle a comprar algo de cocaína a un viejo amigo mío de las afueras, ya me ocupé de que lo tuvieran distraído unas horas, lo siguiente fue desintoxicar a Lili, la tuve que bajar en brazos al salón de lo puesta que estaba, estabamos solos, la di agua, mucho agua y té especial, diurético, se resistía tan levemente que daba pena verla así, a las 3 horas pareció recobrar algo de sentido, preguntado donde estaba y que día era.

-LILI: ¿donde está?

-YO: ¿quien?

-LILI: el imbécil este, necesito material, me encuentro mal.

-YO: te encuentras mal por que ahora empiezas a ser consciente de lo mal que estabas, ¿que se supone que estás haciendo con ese payaso?

-LILI: es mi vida, no te metas.

-YO: y una mierda es tu vida, ¿esto hacías por allí? ¿Meterte drogas y dejar que te follaran por unos chutes? - se revolvió furiosa en el sofá todo lo que su físico la permitía.

-LILI: déjame, yo se controlarme.

-YO: si, una joya, han llamado del trabajo, o vas mañana o te echan, ¿es eso lo que quieres? - me miró cansada.

-LILI: que le jodan, solo he faltado el miércoles - la puse un reloj con calendario en las manos.

-YO: es lunes, drogata de mierda, llevas casi una semana sin ir a trabajar, y si a eso que hacías últimamente lo llamas trabajar - mi miró confundida.

-LILI: eso no puede ser, el me dijo que……..no, esto esta mal………- se rascaba el pelo queriendo despertarse.

-YO: a ver si despiertas, con todo lo que sabes de la calle y no aprendes, ese tío es una sanguijuela, se ha pegado a ti, te esta chupando la sangre, y te tiene atontada mientras nos sangra a todos, tú mereces más que a ese cerdo.

-LILI: claro, muy fácil desde tu pinche púlpito, es el único que me entiende.

-YO: no te enteras, no te entiende, se aprovecha de tu debilidad.

Sonó la puerta de golpe, entró el cerdo tambaleándose con una marca de polvo blanco en la nariz y una goma atada al brazo aun, sonreí al verle, justo como había medido, me habían avisado por mensaje que ya estaba de vuelta, al verlo Lili palideció.

-YO: mira, hablando del rey de Roma, mírale y dime que te gusta lo que ves, por que es lo mismo que vemos en ti cada día que pasas con él - una ligera exageración, licencia poética por así decirlo.

-CERDO: tú calla mamarracho, o te pego - trató de andar pero casi se cae de rodillas.

-LILI: oye ¿que día es?, ¿como es que no me avisaste para ir al trabajo?

-CERDO: y que importa guey, te follas al jefe otra vez y no te echa………. - eso me sorprendió, no lo sabia.

-YO: ¿eso haces?, ¿mantienes a este puerco a base de ir follándose a los jefes? - se sonrojó al verse pillada.

-LILI: tenías que avisarme, te lo dije.

-CERDO: pucha madre, zorra estúpida, ¿que se cree?, ¿soy su mayordomo? - eructó - dígale a su hermana que le de más dinero y arreglado - me llegó el olor de su boca.

-YO: ¿pero que coño has visto tú en este payaso? - Lili me miró sin respuesta al ver la cruda realidad.

-CERDO: tú, hombrecillo, cierra la boca…………- no parecía que supiera seguir la frase -…………. o te mato - sacó el cuchillo de Lili, al verlo ella se lo buscó encima y no lo vio, yo solo me reí al verle.

-YO: tú no matarais ni a una mosca tal como vas.

Se abalanzó sobre mi de forma torpe, me dio tiempo de sobra para cuadrarme, ni hacia falta, sus gestos lentos eran tan simples como los de un crío, trató de apuñalar con el mango en vez de con la hoja, mirando al suelo a mi derecha, fijándose en un punto vacío, le sujeté de la muñeca y de un brusco giro le retorcí el brazo hasta hacerle hincar la rodilla, y abrir la mano para dejar caer el cuchillo, al que di una patada para alejarlo de sus manos y de posibles sorpresas. Busqué las llaves en su bolsillo, lo levanté y lo saqué de allí a patadas, gritaba cosas inconexas, bajé con él hasta la calle donde el portero me vio tirarlo al asfalto, dejándolo tumbado de mala manera, le dije que si volvía a verlo, no le dejara entrar y avisara a la policía, si había suerte y le detenían seguro que llevaría algo encima como para alejarle más tiempo inclusive. Al subirme encontré a Lili llorando en el sofá, aun medio ida, seguí mi hoja de ruta.

-YO: ahora no llores - grité con tono severo, alzó su mirada sin comprender.

-LILI: ¿por que no?

-YO: esto es culpa tuya, solo tuya, ese mierda se aprovechó de ti, y tú le dejaste.

-LILI: yo no quería esto.

-YO: pero se lo has permitido, eres tan culpable como él, o más, tú eres lista, tienes una nueva vida, mejor que la de muchos, ¿y te pones a drogarte con un imbécil dejándote que te folle y te venda al que le de la gana? ¿A cuantos te has tirado por que te lo dijo? - me miró sorprendida por mi aparente agudeza- ¿¡¡a cuantos!!?

-LILI: a 5, o 6 no lo sé, le debía plata a no se que hombre y saldé su cuenta, no me acuerdo…….- me dieron ganas de abofetearla.

-YO: si lo que quieres es volver a ser una puta barata que termina en la cárcel, llamo a Eleonor y que te devuelva a Brasil, en esta casa no quiero furcias estúpidas.

-LILI: no lo soy.

-YO: es lo que me acabas de demostrar.

-LILI: no es tu casa, es la de mi hermana…….- acusó viéndose contra la pared, volver a Brasil le atemorizaba.

-YO: esta puta casa es mía, ¿o te crees que si no se lo pido Eleonor no te mandará tan lejos como pueda?, está harta de tus niñerías….. - agachó la mirada rompiendo a llorar de nuevo, la tenia justo donde quería, al limite de la desesperación-…… no llores, no eres una cría asustada, ¿donde esta ese ciclón que llegó en ese avión? Esa mujer merecía la pena, tenía los modales de un perro silvestre pero tenia carácter, ahora solo tengo a una puta delante, un puta, borracha, drogada y llorona.

-LILI: ¡es lo que soy! - gritó fuerte - no tengo nada, nada salvo mi cuerpo - quería dar pena, dio con el tío equivocado.

-YO: eres tonta, no, peor, eres imbécil, por que eres lista, ibas a clases, tenias un buen trabajo, vives en un palacio con tu hermana que te ama con locura ¿y vas y lo quieres estropear todo por que te crees que no eres más que esto que tengo delante? ¿Por que empezar las clases?, ¿por que un trabajo? ¿Por que esforzarse para volver a esto?, no, no eres solo eso, y lo sabes mejor que yo, pero es mucho más fácil rendirse ¿verdad?, dejarse llevar, que los problemas y dificultadas se desvanezcan, por lo menos ten coraje y reconoce que solo te has rendido, no insultes a los demás queriendo vender este papel de víctima - me miraba fijamente con fuego en los ojos, tenia tanta razón que la rabia por dentro no la dejaba replicar.

-LILI: es mi puta vida, ¡yo decido!

-YO: eso te dije el 1º día que te pedí que bajaras del balcón, tú decides, si es esto, ahí tienes la puerta…… - señale hacia ella -…….. pero ya sabes a donde te conduce, seguro que con tu físico podrás engatusar a algún otro imbécil que te pague las drogas y la bebida unos cuantos años, o hasta que lo dejes seco y busques a otro, quizá ese cerdo siga aun en la acera tirado, puedes irte con él a su casa, si es que tiene una, se su puta, y deja que te venda en cuanto no tenga dinero, serás cara hasta que tengas unos cuantos años, y dejes de tener valor, si tienes suerte te dejaran en paz y tendrás que ganarte la vida limpiando el culo a señoras mayores o fregando el suelo de algún sitio, de nosotros no esperes nada, ya me ocuparé yo de que Eleonor no te busque, ha pasado 20 años sin ti, y no le has demostrado nada por lo que mereciera la pena volver a buscarte - el discurso me salía tan natural que se veía que lo tenia preparado.

-LILI: no quiero eso.

-YO: pues es lo que pasará, quizá no así, pero ese será el camino, la vida es más cruel e imaginativa que yo, eso lo sé, una mujer sola puede sufrir mucho dolor, eso lo sabes tú mejor que yo.

-LILI: pero siempre he estado sola, no conozco otra forma de vivir……….- por fin llegó donde quería.

-YO: ahora no estás sola, tienes a tu hermana, a mi, a Ana incluso, los del restaurante, todos quieren ayudarte y te ofrecemos oportunidades, pero eso parará si sigues así, la gente no quiere ayudar a quien no deja de defraudarles, tu hermana salió de ese mismo agujero al decirme que su marido la pegaba, daba vergüenza verla suplicar y defenderlo, hasta que decidió dejarme ayudarla, y mírala ahora.

-LILI: pero yo no tengo a nadie, no como ella, no te tengo a ti…….- sonreí al acercarme a ella.

-YO: ¿por que no?, estoy aquí, puedo ayudarte, solo has de dejarme - me agarró la mano dejando de llorar y clavándome su mirada con brillo olvidado.

Dejé que el olor de mi fuerte colonia la inundara para cerrar el circulo, había salido perfecto, demostración de fuerza física, determinación, seguridad, argumentación y convencimiento, yo era su salvación, su héroe particular, se levantó del sofá apoyándose en mi mano y me abrazó fuerte, al separarse me miró fijamente, con una mirada familiar, la misma que vi en los ojos de Eleonor al verse contra el espejo con el ojo morado de la última paliza de su ya ex marido.

-LILI: ayúdame - suplicó pasando sus manos por mi fuerte pecho y mordiéndose el labio.

Desde ese día fui su sombra, tardó 1 semana entera en limpiar su organismo, y tuve que desarmarla una vez al intentar agredirme viendo como tiraba medio gramo de cocaína al retrete, pasé 2 noches dormido junto a ella, con la puerta cerrada por fuera, la fase agresiva fue la más dura, la tenia que agarrar con firmeza y tenerla en la cama unas horas hasta que se le pasaba, sudaba y tiritaba a la vez, vomitó tanto que llamamos a un medido nos dio unos consejos adecuados, advirtiendo lo que la pasaba en realidad, eso no era un catarro, era una desintoxicación a lo bestia. Pasado ese mal trago, comencé a llevarla de ejercicio por las mañanas, la tenia que dar un sustituto adictivo y el ejercicio era uno ejemplar, la llevaba a clases y me quedaba hasta acompañarla al salir, luego hacíamos el tonto junto a Eleonor antes de acompañarla al trabajo, hablé con el gerente que se la folló medio drogada, y con uno de sus cuchillos de carne en la mano, trasteando con él en la encimera, le dije que si la volvía a tocar se lo hundiría en la pierna. Amenaza irreal esperaba, pero sabia actuar lo suficiente como para que pareciera cierta, me cuidaba mucho de llevarla y recogerla, los días de fiesta era su pareja. Eleonor no demostró importarla esa atención, me lo agradecía, Ana no tanto, se moría de celos, adelantó sus vacaciones a Granada con su familia solo por alejarse de Lili, a la que había cogido cierto asco, se comportaba muy rara en casa cuando estaban juntas y preferí que se alejara del aquella casa de locos.

El duro trabajo dio sus frutos, los análisis semanales en centros privados salían limpios, a los 3 meses Lili parecía una mujer diferente y nueva, había recuperado algo de peso que perdió devolviéndola un aspecto saludable. Progresivamente, la fui dejando ir y volver sola de trabajo, quedar con gente y salir sin mi, era jugársela pero tenia que aprender a moverse sola, yo no podía estar siempre a su lado, respondió perfectamente, incluso a la trampa que le puse, un actor al que contraté para “gastarla una broma”, según le dije, en realidad le pedí que se animara con ella y llegando un punto de 2 o 3 copas la ofreciera drogas, ella las rechazó con algo de dudas, pero salió de allí escopeteada llamándome al móvil para contármelo todo y que pasara a recogerla en cuanto pudiera, la saludé desde el otro lado de la calle aun con el móvil en la mano, le presenté al actor, al que saludó abochornada por haberle gritado. Sentí tanto orgullo en su propia mirada, que al abrazarnos un beso en la mejilla rozó nuestros labios por 1º vez, nos miramos fijamente al darnos cuenta los 2, alzó su cabeza para intentar besarme, y algo en mi interior quería dejarla, pero no estaba allí para eso, así que la separé con cariño, se sintió avergonzada.

-YO: no te sientas mal, pero no quiero confundirte, no quiero ni busco nada de ti, no necesito que me premies con caricias y besos, soy mayorcito para buscarme eso donde quiera, bien lo sabes, solo sigue así, demuéstrame a mi, a todos, y sobretodo a ti, que eres más que un trozo de carne, se fuerte por que quieres y te gusta serlo, no por complacer a los demás.

Mis palabras la tranquilizaron un poco, pero era inevitable, tal como preveía, Lili estaba deseándome, era guapo, corpulento y físicamente un toro bravo, sabia como tenia la polla de grande, me la había visto muchas veces la andar por casa desnudo, o tiesa de salir del agua de la piscina de follárme a alguna de las otras 2 habitantes de la casa, sabia como follaba, la pillé mirándonos desde el balcón alguna vez, así lo tenia calculado. Y lo importante, la había rescatado de un agujero profundo y le había dado una vida de verdad, si no se sentía atraída por mi de algún modo, debía de hacérmelo mirar por que algo fallaba, y no lo hacia, ella estaba enamorada de mi.

Los juegos con Eleonor, a la que acosaba ante la ausencia de Ana, pasaron a ser de dominio publico con ella, ronroneaba como una gatita la estar tumbada en la hamaca y vernos follar en la piscina, poca a poco se atrevía a más, ir en biquini por la casa, luego top less, y después tomar el sol desnuda, como Eleonor o Ana, y yo mismo. Sus artes de mujer no pasaron desapercibidas para mi, ni Eleonor, que me susurraba que cuando quisiera, la hiciera mía, Ana me dio su bendición, a regañadientes, antes de irse, era tan evidente su amor por mí que sabía que pasaría tarde o temprano, pero tenia una promesa que cumplir.

Sus juegos, falsamente inocentes, su forma de moverse y pegarse a mi, o las coincidencias en la ducha o follando con Eleonor y ella pasaba por allí, pasaron a ser burdas y soeces, se alió con Eleonor montándome pequeñas fiestas lesbianas solo para mi, con ellas 2 pasando de ser hermanas a amantes, supongo que fue idea de Eleonor, para seducirme y poder sobrellevar mejor mi apetito voraz de sexo. Los besos y caricias suaves pasaron a ser masturbaciones con dildos y consoladores enormes, ver como 2 hermanes se comían una a la otra y se bañaban en saliva era demencial, pero solo follaba con Eleonor, aunque estuviera a Lili delante masturbándose o la misma Eleonor la comiera el coño conmigo dándola por el culo, jamás la tocaba de forma sensual, tenia una promesa que cumplir. De ahí, ya las insinuaciones y provocaciones fueron directas, atacaba a mi hombría con duras palabras, me buscaba con sus manos y me pedía que la follara de una vez y que la traía loca, me recordaba a Lara, pero con pasión en sus peticiones, me la tenia que sacar de encima y de dentro, una vez me desperté con ella intentando meterse mi rabo empalmado de las mañanas, o comiéndome al polla junto a Eleonor, pero la apartaba enseguida y me desquitaba ferozmente con Eleonor, al final dejé ver a Lili que tenia una promesa que cumplir. Un día adormilado en el sofá echándome una siesta, solos en casa, sentí como Lili se me sentaba a horcajadas encima, totalmente desnudos los dos.

-YO: que haces, loca de las narices, déjame ya en paz……- la confianza era tal que nos tratábamos así.

-LILI: jamás había conocido a nadie como tú, un hombre de verdad que da su palabra y la cumple.

-YO: gracias - respondí aletargado.

-LILI: ningún hombre del mundo, después de todo lo que he hecho, seguiría aun sin tocarme, aunque hubieran dado su palabra - sonrío al verme torcer el gesto feliz, al fin había entendido mi postura.

-YO: es cierto, pero ¿has estado con todos? - reía al hacernos rememorar aquella 1º conversación.

-LILI: juraste por tu honor que no me tocarais……..

-YO: si - llevó su mano a la espalda.

-LILI: ………..que no me tocarías hasta que te amenazara con aquel cuchillo en el cuello para que lo hicieras, bien, aquí está - puso el cuchillo en mi cuello, dejó caer el peso de su cuerpo sobre mi pecho rozando con su nariz mi mentón.

-YO: ¿ya estás lista? - me miró con firmeza.

-LILI: quiero que me folles como el animal que se que eres, he visto como destrozas a mi pobre hermana, y quiero lo mismo, ya sabes, pero ahora te lo exijo, hazlo o te corto el puto cuello - su amenaza, otrora real, solo era una burla – bésame - ordenó.

Elevé mi cabeza lo justo para sentir el frío acero sobre mi yugular, ella se retiró un poco, jugando, volví a subir notando aun más presión, se volvió a retirar burlona, acaricié su espalda para apretarla fuerte contra mi para evitar retiradas, y apuré ante su mirada de lujuria, viendo como el filo del cuchillo hacia sangre en mi cuello, abrió los ojos asustada, pero así mismo la alcance los labios, el beso nació lento y torpe, ella miraba preocupada de reojo mi cuello que goteaba alguna gota roja, luego cerró los ojos al notar mi lengua metiéndose en ella, y repitió la acción agarrándome de una mejilla con una mano sin soltar el cuchillo con la otra. Me incorporé aun a riesgo de hacerme daño hasta quedar sentado, ella pasó sus piernas por mi cintura rodeándome con ellas quedando sentada sobre mi, aun con el acero palpando mi cuello, seguimos aquel festival de besos largos y pasionales, su lengua era experta y se acomodó rápido a mis ritmos fuertes y sobrios, notando como mi polla crecía descontrolada dando golpes de caballo en su trasero al querer ocupar el mismo espacio que su pelvis. Bajé mis labios por su cuello, solo al hacerlo se estremeció, que fácil resultó encontrar su zona erógena, lamí y chupé con tanta fuerza que la hice una marca que duró días, su cintura se movía aprobando ese gesto, casi me masturbaban con sus labios mayores montada, de cara hacia mi, en la barra ardiente que ya estaba tiesa como un cirio, bajé a su pezones para encontrarme 2 pechos firmes y apetecibles, eran mucho menos atractivos que los de su hermana, y menos grandes que los de Ana, pero eran naturales y estaban a mi alcance, cosa que ninguna de las otras 2, 4 visto de otro modo, podían decir. Me puse en pie haciendo gala de mi poderío físico con ella subida encima mía, al sentir mi glande apuntado y rozando su coño se erizó y soltó el cuchillo dejándolo caer al suelo, sonó de forma tan singular que miramos, se había clavado en el suelo a un palmo de mi pie, rió levemente mirándome a los ojos disculpándose.

-YO: tranquila, aquí la que va a ser clavada eres tú………- me besó con tal energía que me podrir haber arrancado la cabeza.

Me giré para dejarla caer sobre el reposa brazos del sofá, de espaldas a él, para quedar elevada, se abrió de piernas frotándose el coño después de haberse lamido los dedos, miraba riéndose, solté una carcajada enorme al darme cuenta, no había caído en que iba a follárme a una mujer que haba sido puta en Sudamérica sin protección, un mes en España pagando las deudas del cerdo, y sin estar seguro de nada, pero parte de su rehabilitación eran análisis continuos en centros privados y todos habían dado negativo, incluso venéreas, un milagro. Me arrodillé ante ella besando el interior de sus muslos, acariciando el largo de sus piernas torneadas, mientras ella miraba con ojos ardientes, llegando a su sexo, despedía un calor abrasador y un olor a hembra en celo, totalmente rasurado, los labios mayores eran de un tono oscuro, al rozarlos y abrirlos el tono rosado lo invadía todo, al notar el roce de mis labios en ella jadeó, riendo levemente, la delicadeza de mis caricias eran una novedad para ella, sentía que cada paso de mi lengua por su interior y cada beso tierno la excitaba un poco más, como si nunca nadie la hubiera tratado de forma tan dulce, mis dedos y mi lengua se movían al compás, su cintura respondía dando pequeños tirones queriéndose alejar de mi, cuando alcé la vista ella tenia tal cara de asombro y excitación que me sacó una carcajada.

-YO: nunca te lo habían comido antes, ¿verdad? - me agarró del pelo y me apretó contra su sexo.

-LILI: cállese y siga - sus caricias eran torpes y toscas pero no podía evitarlo, mi lengua experta la estaba penetrando y su clítoris se hinchó hasta casi reventar, si se lo habían comido antes, eran unos patanes.

Trabajaba su interior de forma animada, era un pequeño juego, ella gemía ya de forma continua al sentir cada lengüetazo, cada succión y cada tirón de los pliegues, sacudía una mano, o ambas, y arqueaba el cuello sobre su espalda, siempre con la boca abierta de par en par, enseñando una dentadura que se balanceaba y que estaba lejos de ser perfecta o cuidada, pero nada desagradable, se le escapaban sonrisas de asombro entre suspiros, movía su cadera de forma continua queriéndose alejar de mi pero yo la seguía sin parar, de estar apenas recostada sobre el sofá ya casi estaba sentada, conmigo chupándole la vida. Subió su cadera haciendo fuerza contra mi, apoyándose solo con la nuca en el sofá, se movía a gran velocidad en todas direcciones tratando de contener la oleadas de placer que la sacudían, al meterle el primer dedo soltó un sonoro grito de lujuria, al instante se tapó la boca queriendo ahogarlo, llevada por la pasión no se acordaba de que estabamos solos y a nadie la molestarían los gritos, aun así se tapaba la boca, la otra mano se posaba en mi cabeza, quería apartarme de ella pero temía que al sentir su palma parara, y estaba gozando demasiado como para arriesgarse, así que seguía ahogando sus gritos con la mano, salvo cuando le llegaba a poner tan a tono que se aferraba al borde del sofá con ambas y se le escapaban lamentos, rítmicos y seguidos, mis dedos iban aumentando dentro de ella, en numero y en ritmo, ya desatada y gritando rompió en un orgasmo seco, sin derramar una gota de su interior, moviendo las piernas de forma descontrolada.

Fui subiendo por su cuerpo tembloroso, agitado y a mi merced, me aceptó rodeándome con las piernas para ganar algo de descanso, mientras mi polla palpitaba a lo largo de su vientre, besé uno de sus senos con suavidad, pero me dirigía a su cuello, solo llegar allí se estremeció, me abrazó la cabeza, susurrando palabras calientes de las cuales las mitad no entendí, notar sus dedos desenredando mis cabellos me calentaba, Lili lamía y mordía mi oreja con suavidad, hablándome y rogándome que la diera sexo. Me agarró de la mandíbula y me besó con pasión, nuestras lenguas se cruzaron, su melena rubia teñida y rizada estaba pringada de sudor y su cuerpo igual, yo no estaba mejor, pero aun quería hacerla vibrar de deseo, quería parar de golpe y obligarla a chupármela un poco, que se asustara un poco al tener mi rabo entre las manos, me elevé un poco con risa picara, mientras ella acariciaba mi pecho, fui a alejarme de ella pero me tenia aprisionado con las piernas rodeándome y de un hábil gesto que me impresionó abrió las caderas y se metió media polla de golpe ella sola, no era nada raro que fuera tan fácil metérsela a una mujer con su pasado, pero desde luego para ella era la 1º vez con un falo así, su boca volvió a abrirse queriendo gritar sin emitir un solo sonido, con tal presión que se le hincharon las venas de la frente y casi se le salen los ojos de las cuencas, había entrado bastante, pero a partir de ahí lo tenia tan cerrado como cualquier otra mujer con la que hubiera estado. Aguantamos así un par de segundos, hasta que escupió el aire de sus pulmones para coger oxigeno de nuevo, sus piernas ya no hacían fuerza para retenerme pero me mantuve así, sonriendo, y manoseando uno de sus pezones.

-YO: te gusta duro por lo que veo……..- entoné como una provocación.

-LILI: es la verga más grande que sentí nunca………..que regalo…. me arde mi cuquita………..ay si………fóllame duro……… mi amor………..- habla entre suspiros amplios, la di lo que pedía.

Sin pensarlo mucho deslicé mis brazos por su espalda para elevarla por el aire, me senté en el reposa brazos y con ella aun empalada la dejé caer a plomo, la entró toda hasta la fondo obligándola a sollozar, pero era una mujer fuerte, habría sentido muchas pollas abriéndola y esa sensación no era diferente, solo intensa y profunda. Se movía inquieta sobre mi, abrazada a mi cuello, buscaba apoyos o comodidad pero no había nada a su alcance, ni yo la ayudaba lo más mínimo, sentía una presión deliciosa en el glande, iba cediendo ante mi ocupación, y si a ella se le ocurría moverse en cualquier forma sentía un latigazo en su interior, retomaba sus frases susurradas, acariciaba y arañaba mi espalda mientras clamaba por el tamaño descomunal de mi miembro, casi la sentía desvanecerse esos primeros minutos de control, mirando al techo con la garganta hinchada y tensa, casi parecía que mi polla la atravesaba entera y le iba a salir por la boca. Bajó la cabeza cuando se sintió holgada, moviendo ligeramente la pelvis en forma circular, no era ninguna novata y sabia como moverse, sin duda conocía trucos para volver loco a un hombre y hacer que se viniera pronto, me besó queriendo tenerme ocupado, mientras mis manos buscaban sus pechos, entraban en una mano pero no eran pequeños, y lamía sus pezones oscuros, tiesos y rodeados de una aureola diminuta. Besé su cuello para demostrarla que conmigo no seria tan sencillo, la vi retorcerse queriendo hacer fuerza contra mi boca, para negarme acceso pero era inevitable que se descuidará al notarme moverme dentro, solo con esos besos, chupetones y el leve roce de mi rabo entero dentro de ella, la provocó un 2º orgasmo mucho más húmedo y caliente, sentía un liquido tibio mojando mi pelvis, y se arqueó tanto la espalda que mordí uno de sus pezones hasta hacerla un poco de daño, cogió un cojín de forma fugaz y me abofeteó con él.

-LILI: ¡cucha tu madre! - se apoyó en la cabecera del sofá con una mano, la otra a mi nuca, mordiéndose el labio hasta casi hacerse sangre, se movió para sacarse la polla entera y volver a metérsela.

Bramaba en algo que no parecía ni castellano ni español, volvió a repetirlo una infinidad de veces hasta que ya no era un solo gesto, si no movimiento continuo, yo acompañaba sus gestos con un ligero vaivén de mis caderas, solo gozaba de sus artes, escasas pero buenas, a más de uno ya le hubiera sacado su semen cuando llevaba 10 minutos fundiéndose con mi verga, le agarraba una de las piernas para elevarla y así ayudarla a no sostener todo su peso sola, lo agradeció aumentando el ritmo un poco, su 3º corrida llegó y esta vez emanó como una fuente, se acarició el clítoris tan rápido que parecía un aspersor de jardín, me manchó hasta le pecho de su liquido, se apresuró a incorporarse, al retomar el aliento, y lamerme el cuello, el pecho, el vientre…. marcados de los músculos, fue bajando hasta tener mi polla entre sus manos, la sujetó con firmeza y asombro, besó la punta con el sabor de ella misma y succionó de forma estudiada cada rincón del glande, supongo que alguien le chivó el truco de no parar de mover las manos masturbando, o ya lo sabia y le fue de cine, de vez en cuando chupaba y lamía todo el tronco, pero siempre le dedicaba trabajo al glande, le metía apenas 1/3 dentro, no le entraba sin arcadas, y sin desencajarle la mandíbula, suficiente con la ayuda de sus manos, y del sexo previo, para correrme. Sin el menor atisbo de asco o repugnancia dejó que la llenara la boca de mi simiente húmeda y caliente, alzó la mirada al acabar, abriendo la boca de forma obvia dejando que viera mi leche en ella, clavándome sus ojos negros, cerró la boca y de un sonoro ”glup” se tragó todo, sin dejar de masturbar. La cogí de la barbilla para besarla, le gustó mi atrevimiento y mi nulo asco a mi propio semen, jugamos con nuestras lenguas, mientras una de mis manos se metía entre sus nalgas, rozando su ano, quería ver hasta donde llegaba, y metí mis dedos con simplicidad, soltó un leve gemido de placer, lamía y besaba la herida de mi cuello, mi sangre reseca había dejado de brotar pero una ligera cicatriz aun se veía. Desde luego no era su 1º experiencia anal, ni la 2º, ni la 134º, mis 4 dedos entraron en su culo con facilidad increíble, tenia las caderas algo anchas, típicas de la sudamericanas, como su hermana, su mirada se nubló al sentir mi polla creciendo entre sus muslos hasta golpearla en el coño, ya sabia que yo con 1 sola corrida no me contentaba, había visto follárme a Eleonor hasta 4 veces seguidas, pero sus experiencias serian distintas con otros hombres, a muchos con 1 les valdría, si acaso podían llegar al 2º con esfuerzo y mucho trabajo, no era mi caso, en 4 minutos ya estaba tieso como si no hubiera pasado nada.

La cogí de los tobillos al tumbarla boca arriba, la junté las piernas cogiéndolas como si fueran 2 piezas de carne colgadas, pero unidas por su pelvis, acaricié mi glande un poco hasta notar el agujero previo y hundir de golpe casi toda la verga entera, se estremeció de nuevo, ahora no gritó, solo gozó, eso cambiaría pronto, ya me había demostrado de lo que era capaz ella sola, sacarme una 1 corrida la 1º vez lo consideré un logro, pero se acabó el juego, y empezó la clase, dudé levemente si sacar a la bestia, pero decidí guardármela para luego, pese a sus mañas, Lili era muy frágil y sensible, era rozar su coño y hacerla temblar, apenas 20 minutos de sexo real, una comida de coño y ya se había corrido 3 veces, si sacaba a la bestia la hubiera desmayado en menos de media hora.

Así que solo fui metiendo y sacando el rabo de forma amplia y lenta, cada vez que entraba toda daba un saltito su cuerpo, se acariciaba los pechos notando como el ritmo aumentaba levemente cada pocos minutos, cuando ya había cierta velocidad sentí un orgasmo en ella, pero lo dejé pasar como si nada, estaba concentrado en disfrutar de aquella mujer que ahora estaba siendo llevaba al paraíso, se le doblaban las piernas y solo se mantenían rectas por estar colgadas de mi mano, el ritmo ya era fuerte y sonaban mis huevos golpeando en su trasero, sus gemidos volvieron a ser gritos que quería tapar con la mano pero al siguiente orgasmos rompió a chillar de forma loca, la solté las piernas bajando un poco la velocidad, se abrieron como las puertas de un castillo al recibir a su rey, estirada y abierta, me abalancé sobre su cuello, metí mi mano en su nuca entrelazado las falanges con su pelo, hasta que me aferré fuerte a su cabello, tirando levante de él, volví a aumentar el ritmo, sus manos en mi pecho querían hacer de parapeto, era inútil, la fuerza y vitalidad de mis penetraciones la hacían regodearse entre gemidos, gritos y susurros, para cuando se corrió de nuevo sus gemidos eran de clemencia, rogaba poner fin a tal demostración, sabia que andaba cerca de mi corrida, por cálculos temporales y por sensaciones, así que ahora si, la iba a dejar claro que no era ningún borracho folla putas, saqué a la bestia que ya se relamía a la espera de mi orden, fueron 10 minutos, creo, no los conté, bastante tenia con tener sujeta a Lili que se movía como pez fuera del agua, daba saltos y brincos, pataleaba de tal manera que pasé una de sus piernas por delante para juntarle las 2 en un lado y apretando contra su cintura, aceleré de nuevo hasta provocarla 2 orgasmos, casi al finalizar la saqué y apunté a su ano, del tirón entró media polla, gritó, del 2º intento entró toda, ya no gritó, se fue al mundo de fantasía al que había mandado a tantas, seguía allí por que se separaba las nalgas para tratar de obtener algo de control pero la bestia no tenia piedad, desató un infierno que cada vez que salía de ella tiraba de todo su cuerpo hasta que al correrme casi la tenia al borde del sofá, sentir mi semen cayendo a borbotones en su recto fue lo mejor que le había pasado en todo el día, y puede que en su vida, era el fin del mejor sexo que había tenido hasta ahora, le gustaba duro y había encontrado a un animal salvaje, con un rabo descomunal y que follaba como un dios. Me levanté con la polla manchada de semen y fluidos, su ano parecía un túnel de metro, y los espasmos involuntarios me sacaban una sonrisa burlona.

Sonó la puerta, y vi a Eleonor entrar, al verme de pie con la polla medio tiesa y brillando del sudor, con Lili tirada en el sofá sollozando, me dedicó una sonrisa fugaz, antes de abrirse el vestido por detrás y dejarme ver que iba en tanga, caminó con sensualidad hacia mí.

-ELEONOR: ya la hiciste tuya, ¿que tal se portó? - me acaricio el pecho sudoroso con uno de sus dedos.

-YO: para ser la 1º vez ella sola, nada mal.

-ELEONOR: ¿cuantas veces te sacó el semen?

-YO: 2, incluso al final le di un poco de mi bestia por el culo, mira que agujero - abrió los ojos sorprendida, llevándose a la boca el dedo manchado de mi sudor, chupándolo como si fuera la nata de una tarta.

-ELEONOR: ¿y quedó algo para mi?, me abrazó por el cuello con cara de niña triste.

-YO: para ti siempre habrá…….- bajé mi mano por su culo hasta meter mi pulgar entero en su ano, sonrió juguetona, pero al sentir el resto de dedos jugando en su coño me besó con pasión, poco le importaba que su hermana yaciera medio ida con mi semen cayendo de su ano, tiritando y mirándonos, perdida.

Me sentó a su lado en el sofá, y me dedicó una buena mamada, metiéndosela hasta la garganta, su habilidad no era comparable, me la puso tiesa tan deprisa que de la misma energía se subió a horcajadas sobre mi y se empaló toda de golpe, me dediqué a sus pezones enormes mientras me cabalgaba como una amazona, su forma de moverse era mucho más erótica y sensual, su larga cabellera a estas alturas, después de dejárselo crecer a mi gusto, me rozaba los huevos al echar la cabeza para atrás al sentir los orgasmos que la llenaban, me percaté rápido de que ella no era Lili, no tenia que andarme con miramientos, saqué a la bestia que apenas había podido catar a su presa anterior, y destrocé a Eleonor, no se cuanto tiempo, pasaron 2 horas hasta que los 2 terminamos exhaustos, me corrí otras 2 veces con Eleonor, y perdí el numero de Eleonor, que permanecía sentada en mi regazo, cruzada de piernas sacando pecho, dando pequeños besos a mi cuello mientras mirábamos como Lili aun jadeaba.

-ELEONOR: no sabes lo afortunada que me siento ahora mismo.

-YO: ¿por que ahora tengo otro coño que follárme?, ¿y que sea tu hermana?- solté con sorna - como sigáis así voy a terminar muerto antes de los 21 - los cumpliría en unas semanas.

-ELEONOR: por que eres mi hombre, y ahora también el de mi hermana, y yo te haría más feliz si mi dejaras - la miré con ojos curiosos.

-YO: ¿tu hombre?, yo soy de Ana - miró al cielo con desdén.

-ELEONOR: ay papi, ¿que no te cansas ya de esa mujercita?, me tienes a mi, y ahora a mi hermana, ¿que te da ella que no te pueda dar yo? …… - dejó pasar unos segundos - ……….y piensa en todo lo que te podría dar yo que ella no puede - me sorprendió el atrevimiento de Eleonor, estaba suelta últimamente, no tan maleable y mojigata desde que tenia sus escarceos con otros hombres.

-YO: la situación no ha cambiado, por ahora, soy de Ana y eso ya debería de quedar claro, es mi novia, y bastante hace al compartirme con vosotras, no le ha hecho ni pizca de gracia que me pidieras ayuda para enderezar a tu hermana, y menos que tenga que follármela.

-ELEONOR: es una cría, no sabe lo que quiere.

-YO: yo soy de la misma edad…..

-ELEONOR: y tampoco lo sabes, de lo contrario serias solo mío ……– me besó con fuerza -…… follaríamos día y noche, te regalaría todo lo que desearas, puedo comprarte lo que quieras, puedo darte el dinero que quieras, podemos perdernos por el mundo como mi hija, o comprarnos una isla y quedarnos allí para siempre, no tendrías que trabajar nunca, podríamos darle a tu familia tanto dinero que no tendrían que trabajar jamás, vivirían como reyes, todo eso te puedo ofrecer, y lo único que te pido es que yo sea tu mujer, hasta podrás follar con quien quieras, contrataré las mejores putas del mundo para que goces de ellas, pero júrame amor eterno, y te daré todo eso, todo eso y más - sus palabras eran tan confiadas y guiadas que el discurso preparado se notó a leguas.

Sin duda Eleonor llevaba mucho tiempo buscando un hombre que la llenara y después de meses de decepciones volvió al inicio, yo, yo era todo lo que quería, la desesperaba no tenerlo, y estar tan cerca de mi, Eleonor le había pagado el viaje anticipado y todo a Ana para tenerme solo para ella, y ahora quería que su hermana ocupara el lugar de ella, y ella el de Ana. La acaricié la cara con suavidad pero en silencio, ella esperaba ansiosa una respuesta, pensaba que estaría divagando en mi mente, dubitativo ante tal oferta, dinero, regalos, viajes, sexo y Eleonor, que de por si sola ya era un tesoro, podía perfectamente decirla que si, y desaparecer de la faz de la tierra, tendríamos tanto dinero que no podríamos gastarlo en 10 vidas, podía tener el final de cuento de hadas que todo hombre sueña en su interior, si, lo hombres también soñamos con una buena mujer, una vida placida y tranquila, sin preocupaciones, todo eso lo tenia a mi alcance, desnudo encima de mis piernas, solo tenia que decir un si, y ella lo esperaba, pero el tiempo pasaba y de mis labios no salía nada, su cara fue cambiando hasta que entre besos y tambaleos, entendió que no habría respuesta.

Podía decirla mil cosas para querer suavizarlo, pero yo amaba a Ana, y no a ella, había visto demasiadas películas, series y oído canciones, poemas e historias sobre el telón de los siglos, en las que el amor de verdad no se podía cambiar por nada, y lo que sentía por Ana era lo más parecido a la felicidad pura que conocía, además de que ella amaba al hombre que era, a una persona recta, fiel, honrada y determinada, si perdía eso para irme con ella, solo seria otro baboso en busca de su dinero. Una lágrima cayó por su mejilla, la recogí con dulzura, la besé con cariño, y la senté en el sofá a mi lado. Su rostro irradiaba, odio, furia y tristeza.

-ELEONOR: no es una oferta cualquiera, es única, no se volverá a repetir, ni podrás venir a reclamarla una vez la rechaces, no soy una boba que te esperará siempre, ha de ser aquí y ahora…….- hablaba como una mujer de negocios, las empresas y negocios de su marido la estaban endureciendo el carácter, pero era un farol.

-YO: no es una oferta, pequeña mía, quieres comprar algo, que no es que no esté a la venta, es que no se puede comprar - me sentía estúpido al decirlo - no soy algo que puedas comprar, Eleonor, ni soy un pelele al que puedas engatusar con oros y riquezas.

-ELEONOR: precisamente por eso te las ofrezco, por que no las quieres, eres el único que nunca ha venido a pedirme nada y cuando te he ofrecido algo lo has rechazado, ¿que tipo de hombre hace eso? Un buen hombre, tendrás 20 años pero eres mejor hombre de lo que muchos serán jamás, y no quiero perderlo por el coño de una niñata que…….- se cayó algo-………que no te merece - sonreí al notar su rabia, la cogí de la mano besando el dorso, arrodillado ante ella.

-YO: ¿y que seria de mi si abandonara todo eso, solo por que una mujer me ofrezca dinero?

-ELEONOR: no soy una cualquiera, soy yo, y no es dinero, te ofrezco el mundo.

-YO: el orden o la cuantía no cambia el resultado, me estaría vendiendo, no te amo, y el aprecio que te tengo se desvanece cada vez que continúas insinuando que yo seria capaz de abandonar la realidad, por fea que sea, ante una farsa bonita, no me educaron así.

-ELEONOR: pues te educaron para ser un imbécil, en este mundo no hay sitio para ser así - soltó con furia, asentí con sorna.

-YO: eso no te lo discuto, pero soy así, y cueste lo que me cueste, lo seguiré siendo…….- la volví a besar la mano, la apartó con brusquedad.

-ELEONOR: pues ojalá te vaya genial con esa niñata mal criada y tu mierda de vida - se levantó, me abofeteó con fuerza - eres un mierda y un desgraciado - fue a abofetearme por 2º vez, la paré la mano, sin fuerza ni rastro de ira, solo la miraba esperando que se le pasara el enfado - ella no te merece, no sabes lo que te está haciendo - la miré sonriendo, parecía una rabieta final, a la desesperada.

-YO: lo sé muy bien, me hace feliz, y mientras siga así, no la dejaré de amar.

Ana, Eleonor y Lili – Sombras antes de la noche.

Habían pasado 3 días desde que me tiré a Liliana, Lili, la hermana de Eleonor, 3 largos y tensos días con sus noches, la situación en casa era tan asfixiante que pasaba gran parte del tiempo fuera de ella, con cualquier excusa, Lili se pasó 1 día entero ida, recuperándose, casi se apartaba de mi camino o evitando una línea visual directa, no fuera a ser que me apeteciera sexo, apenas hablaba y siempre era con Eleonor y a solas. Eleonor por su parte, después de echar el resto y ofrecerme compartir su desorbitado patrimonio con ella, a cambio de dejar mi relación con Ana para ser suyo, y de rechazar dicha oferta, se mostró fría y distante, orgullosa e hiriente en su forma de expresarse, los únicos momentos de relax que tenia eran las llamadas de Ana, su dulce voz era un cálido abrazo entre tanta amargura, se la oía feliz y contenta, ajena a todo el remolino de ira que se cernía en casa, no le hizo ninguna gracia saber que me había tirado a Lili, pese a darme su permiso, no quería, solo la reconfortó saber que Lili aun estaba atontada de solo un par de polvos seguidos.

Echaba de menos a Ana, dios, no sabéis cuanto, ni siquiera las advertencias de mi madre sobre aquellas mujeres ni las palabras llenas de odio de Eleonor en la discusión que tuvimos, “no sabes lo que te está haciendo”, habían logrado turbar mínimamente mi amor ciego por ella, Eleonor parecía mucho más enfadada que sensata en el momento de gritarme esa frase, como para tomarla en serio. Saber que en una semana Ana volvería a estar en Madrid para celebrar mi 21 cumpleaños me llenó el corazón de alegría, hacia casi 2 meses que Eleonor le había pagado el viaje adelantado a casa, yo creía que fue Ana la que lo precipitó ante la imposibilidad de convivir con Lili, y quizá fuera cierto, pero ahora Eleonor me dejó ver claramente que ella fue la que lo impulsó para ver si ante la distancia yo flaqueaba y caía en sus brazos.

La apuesta le salió mal y lo pagamos todos, Ana estaba lejos de mi, y yo de ella, yo ahora no tenia sexo con nadie, Eleonor sentía desprecio por mi y Lili pánico, me tenia que poner los slip y un pantalón por encima si quería tener una conversación de 3 palabras con ella y siempre sin contacto físico, si lo hacia era como si al tocarla se empequeñeciera. Yo soy una persona social, abierta y con tendencia a la felicidad, y ese ambiente no me agradaba en absoluto, hasta ir a trabajar por las mañanas el fin de semana me despejó un poco la cabeza, tenia los músculos cansados de pasarme mañanas enteras corriendo o con la bici dando vueltas por los parques de Madrid, todo con tal de volver a esa casa lo más tarde posible, me tiraba horas hablando con un grupo de chicas deportistas que, como no, me había echado el ojo, las primeras veces eran coincidencias pero muchas veces las veía a lo lejos, en grupos, buscándome, los números de teléfono y papelitos con notas me llegaban a diario, directos al cajón, con el resto.

Llegó el lunes y al 5º día Lili salió a la piscina donde estaba tomándome un baño refrescante, se sentó en la hamaca bien lejos de mi y tapada de forma exagerada para el pleno verano en Madrid, pantalón corto de pijama, top ceñido sin sujetador, un blusa amplia y con un albornoz de ducha siempre cerca, esta vez sobre los hombros, sentía el calor abrasándola por dentro, su cara roja y el sudor en su frente la delataban, pero creo que tenia miedo a despertar mi apetito sexual, se arriesgaba a que a que la diera un golpe de calor.

-LILI: hola Raúl, ¿como andas? - desde que tuvimos sexo siempre me llamaba Raúl, en vez de apodos cariñosos como solía hacer.

-YO: pues aquí, tomando un baño, me he cocido sobre la bici esta mañana, que calor…- el clima y Lucia, una de las deportistas que tuvo un “ligero accidente” delante de mi, la ayudé y llevé en mis brazos varios kilómetros hasta un centro medico donde le curaron unos rasguños apenas visibles, en el trayecto sus duros pechos exhibidos entre la licra elástica y sus leggins ajustados, unidos a mi falta de sexo, me provocaron una fuerte erección que ella sintió, y disfrutó, golpeando en su trasero por el trayecto -…….¿y tú?

-LILI: ¿yo……… qué? - se cruzo de brazos defendiéndose de algo.

-YO: ¿que tu como andas?, mujer, que no te voy a hacer nada desde aquí, que estoy lejos - quería romper el hielo.

-LILI: pues bien podrías con tu ”cosota” …..- sonrió un poco relajándose, apenas fue un susurro pero lo oí -……bien, algo tensa, pero animada.

-YO: me alegro, llevas un par de días muy rara, siento si lo que pasó fue demasiado …..- chapoteaba sin el menor interés en salir del agua.

-LILI: no pasa nada, Raúl, es solo que……… me pillaste desprevenida.

-YO: ya me habías visto con Eleonor, no soy ningún blando, eso lo sabias.

-LILI: una cosa es verlo y otra sentirlo………..- dejó unos segundos de respeto, casi la podía ver sus pensamientos, recordando lo que debió de sentir al tenerme dentro, de lejos intuía como sus piernas cerradas se rozaban y su labio inferior era sujetado por sus dientes, como a tantas otras, después del susto inicial, tarde o temprano, volvían a por más -………pero ya estoy mejor, solo espero no decepcionarte……..la próxima vez - estaba claro, ya estaba lista para continuar.

-YO: no habrá otras veces……- ahora fui yo el que dejó unos segundos de cortesía, quería ver sus reacciones ante diferentes escenarios, con el paso del tiempo su rostro se iba haciendo agrio y triste -……hasta que tú te veas preparada - sonreí dejándola ver mi artimaña, su risa inundo su bello rostro.

-LILI: ¿entonces……..podremos seguir…….ya sabe…….?- me parecía estúpido su repentina vergüenza.

-YO: te partiré en dos siempre que gustes……..- saltó de la hamaca llena de alegría, dejando caer el albornoz al suelo, y corriendo de un movimiento hábil salto al agua, con el pantalón de pijama, la blusa amplia dejando ver un hombro y al caer el aire se la levantó dejándome ver su top rosa ceñido sin sujetador.

Emergió ante mi, a unos palmos de mi cara, el agua se esforzaba por bajarla la mata de pelo rubia de bote, abultada y rizada, mientras recorría su rostro, con una mano se apartó de la cara el liquido para ver mejor y localizarme, la blusa se infló hasta quedar como un nenúfar, una flor preciosa con su cara en medio nadando lentamente hasta mi, sus ojos negros como el carbón clavados en mi rostro, al alcanzarme se sacó la blusa y la tiró contra el muro que nos separaba de la caída de 10 pisos, me rodeó sensualmente con los brazos por la nuca, apretándome contra sus labios, la besé levemente, luego tiró de mi pelo con fuerza para besarme en los labios, de inicio besos cortos y dulces, elevada sobre mi sin tocar el suelo de azulejos con los pies, hasta que me llevó a una de las paredes de la piscina y allí su pasión fue creciendo, su lengua luchaba por abrirse paso en mi boca, acariciando con sus manos mis brazos y mi pecho, dejándome a mi su espalda y su trasero, tuvo que bajar una de sus manos entre risas para agarrar mi polla y ponerla mirando al cielo, de lo contrario no se podía acercar la suficiente para seguir besándome, era eso o penetrarse por el ombligo, fue cuando se dio cuenta.

-LILI: eres un cerdo ¿y tu bañador? - sonreí al besarla.

-YO: no lo sé, según he llegado de correr, me he quitado la ropa y me he metido aquí - me besó con energía, usando una mano en mi espalda como apoyo para elevarse, y la otra mano en mi nuca jugando con mi pelo húmedo - que tal si jugamos en igualdad de condiciones, desnúdate - la susurré al oído antes de mordisquear y chupar su cuello, tembló solo de notarlo.

Se giró con sensualidad, la rodeé fuertemente hasta sentir mi falo abrirse paso entre sus muslos y sobresalir por delante de ella, Lili movía la pelvis con un vaivén divino, mis manos buscaron la parte baja del top y fueron metiéndose por el separando la tela húmeda de su piel, para llegar a sus senos, no eran nada del otro mundo pero si tersos, jóvenes, estaban mojados y aprisionados por la tela del top empapada, casi se podía hacer un dibujo del calco de sus pezones en el top, me costó ante la fricción de la tela, pero llegué a ellos y los acaricie con dulzura, sin dejar de comerme su cuello, en un hábil gesto hice fuerza y del tirón salió la prenda de arriba, ahora mis manos fueron abajo, el pantalón de pijama era tan amplio y tenia la goma tan floja, aparte del agua, que mis dedos entraron sin oposición hasta su clítoris, donde empezaron un masaje lento y cordial, tan dentro llegaron mis dedos que acariciaba su ano con las yemas, su respiración se agitó, una mano fue a mi nuca para negarme alejar los labios de su cuello, la otra a uno de mis costados, apretaba mis costillas al ritmo de mis manos en su interior, la haba metido un dedo sin dificultad, el 1º igual y la masturbación llenó el agua de sus emanaciones, se corrió apenas unos minutos después, se alejó un poco para quitarse el pantalón, me lo tiró a la cara, al apartarlo la tenia de nuevo encima, me rodeó con las piernas y me besó con desenfreno, la giré un poco y cogiéndola del culo la alce hasta sacarla del agua y sentarla en el borde de la piscina, metí mi cabeza entre sus mulos y hundí mi lengua en su coño, me agarró del pelo como si fuera una cabeza cortada y me aferró a ella, lamiendo sus labios menores y chupando con suavidad su hinchado clítoris, mis dedos apretaban contra sus orificios de forma indiscriminada, 2 en el coño, 1 en el ano, de poco le servia tirar de mi pelo para alejarme, estaba dispuesto a que me arrancara la cabellera antes de dejar lo que estaba haciendo, el olor a humedad y hembra me llenaban las fosas nasales, y sus gemidos y movimientos tensos me la pusieron a reventar.

-LILI: ay si papi, que rico, como me lo come, siga, no pare……- clamaba mientras repetía estas palabras, no siempre en ese orden ni concordancia.

Estaba muy cachondo, 5 días sin sexo, la bestia en mi interior era peligrosa, la tuve que encerrar en una mazmorra para asegurarme de que no saliera, por ahora. Terminé mis labores de sexo oral cuando se corrió por 2º vez, se pellizcaba los pezones, y trataba de contener los gritos, pero sin duda Eleonor, en el piso de abajo, debía de estar oyéndonos hacia rato. Tiré de su cuerpo hasta tenerlo en vilo sobre mis brazos, reía feliz ante los giros en el agua, la sujetaba de los sobacos casi 1 metro por encima de mi, con sus pies rozando mi verga, la fui dejando resbalar contra mi cuerpo, dejando que su cabello, algo seco, acariciara mi rostro antes de besarnos y que ella notara mi polla rozarla desde los tobillos hasta la entrada de su cueva, me volvió a rodear con las piernas pero esta vez su mano agarró mi rabo y se lo metió con cuidado, solo la mitad, girando el cuello con los ojos cerrados saboreando el momento, me apretaba contra su pecho mientras lamía y chupaba uno de sus pezones, mis manos la acariciaban las nalgas como sujeción, los “¡¡OHHH!! ”, que soltaba al notar cada centímetro de mi poderosa tranca abriéndola eran deliciosos, apenas rozar pubis con pubis se elevó para repetir toda la operación, una y otra vez, logrando un ritmo lento pero continuo, esta vez no se iba a dejar impresionar de golpe y fue abriéndose las paredes interiores poco a poco, hasta que ya follábamos a gran velocidad, su fuerza en los muslos la hacia elevarse y bajar con alegría mientras que mis brazos la mantenían en la posición, el agua burbujeaba y se trasladaba a nuestro alrededor, formando unas pequeñas olas de pasión, los varios orgasmos que tuvo los acompañaba de tirones de mi pelo, besándonos alocadamente, para después seguir aguantando entre gemidos y suspiros según la velocidad que ponía.

Lo estaba disfrutando pero tenia un problema, incluso en ese estado, Lili no era suficiente, llevaba mucho trote acumulado y aunque Lili soportara 3 de mis corridas, algo improbable, no me iba a ser suficiente, solo me quedaba hacer participe a Eleonor, pero ella me tenia……..¿asco?, esos días, y solo por oírme follar no podría ser suficiente, hacia cábalas en mi mente mientras Lili subía y bajaba de mi sin descanso, de poco le sirvió que me corriera dentro de ella de forma sorpresiva para mi, aunque teniendo en cuenta mi letargo, tampoco era raro bien pensado, una serie de besos y caricias me volvieron a poner a tono, la idea en mi cabeza era clara, la giré bajándola de mi y la llevé al borde en dirección a la puerta abierta de la terraza, puse a Lli de cara a esa puerta penetrándola el coño por detrás, besando su cuello, su hombro y su espalda, aferrándome al borde de cemento y comenzado a follar como mejor sabia, el sonido y la fuerza eran mayores a cada paso, Lili se contenía a duras penas pero logré que gritara, y cada vez más, sus alaridos de pasión eran repetitivos y continuos. A golpe de cintura sacaba medio cuerpo de Lili del agua antes de volver a caer a plomo sobre mi verga llenándola, de vez en cuando descasaba haciendo giros totalmente empalada, mientras la susurraba al oído frases bien pensadas. ”que buen coño tienes” “que pedazo de hembra”, ”follas mejor que tu hermana”, ”ella no se mueve como tú”, ”eres la diosa de esta casa”……ella se reía y gozaba de mis palabras, la tenia convencida de que follaba mejor que Eleonor, cuando era una vil mentira, todo estaba planeado.

-YO: ¿quieres que te folle tu precioso culo? Llevo soñando con él varios días - besaba su cuello como refuerzo.

-LILI: si papi, hágame lo que quiera, ábrame mi culito - movía las caderas de forma amplia, deseaba follar tanto como yo.

-YO: grítalo, fuerte, haz que lo oiga toda la calle….. - dudó un poco, así que paré de moverme -…… hazlo…. - sus gritos llenaron la estancia, el piso y creo que hasta los del 2º piso lo oyeron, fue una salvajada hiriente de sexo, palabras groseras y halagos obscenos sobre mi y mi verga, volvía a follármela a un ritmo lento pero continuo -…. llama a tu hermana - dudaba de nuevo y de nuevo paré, entendió que si hacia la que pedía aumentaba el ritmo y si no, paraba.

-LILI: Eleonor, ven, te necesito…….- la susurraba al oído cada cosa que tenía que decir mientras la besaba el cuello -… Eleonor ven, por favor, este semental es demasiado….- aumenté el ritmo -….. por dios, venga, no aguanto más, ¡me esta matando!.....- la saqué de su coño y la metí en su ano con una facilidad inhumana - ¡¡ ahhhhh….por favor apúrese………….dios!!…………. ¡¡¡QUE VERGA!!!- golpeaba el césped con fuerza al sentir como no llegaba a bajar de las acometidas en su ano - ¡¡¡dios mío, me esta abriendo el culo, por dios, ayúdeme!!!.............¡¡¡¡ELEONOR!!!!!.

10 minutos se pasó gritando y como me obedecía solo podía seguir aumentando el ritmo, hasta que las suplicas de Lili ya no eran ordenadas, eran reales, clamaba un descanso que se le negaba, a cada orgasmo que le daba le propinaba un punto de velocidad temiendo que la bestia llegara a entrar en escena, fue cuando de la puerta salió Eleonor, mirándome vencida, apenas con un tanga acompañado de un pareo, un sujetador puesto y sus eternos tacones, al verla desaté a la bestia, sabiendo que estaba allí, mirando, y que me correría pronto, Lili salió despedida del agua, tuve que salirme y ponerme de rodillas detrás de ella, colocándose a 4 patas, para volver a follármela por el coño, el agujero de su ano era tan grande que la entraría un tren de golpe sin dificultad, Lili sollozaba entre lagrimas de placer y dolor, entre gozo y sufrimiento, clamando por que su hermana viniera, ni se había dado cuenta de que ya había venido, cerraba los ojos tan fuerte que parecía que no los volvería a abrir, al correrme sentí como el cuerpo de Lili acompasaba los espasmos de mi semen arqueando la espalda, abofeteé su trasero para salir de ella y dejarla allí, con el culo en pompa, clavada como una estatua, tosiendo el aire que lograba ingerir.

Me puse de pie, con la polla medio tiesa, y el cuerpo brillante del sudor y el agua, los músculos marcados de forma clara debido al ejercicio reciente, Eleonor me miraba con desdén, pero sus ojos eran para mi, y su rictus serio solo denotaba en sus labios mordisqueados que deseaba ser follada, me acerqué a ella con paso firme, al sentir mi cuerpo casi rozándola, y notar el calor que emanaba de mi alzó la vista con deseo, se le escapó un beso tierno y suave en mis labios, temblaba solo de mi sombra tapándola el sol.

-YO: veo que acudes a ayudar a tu hermana.

-ELEONOR: eres un desgraciado, la has hecho gritar para hacerme venir.

-YO: que bien me conoces, pero aun sabiéndolo, aquí estás……..- metí mi mano entre sus nalgas apretando su cuerpo contra mi, apartando el hilo del tanga, me agarró de la mejillas y me besó con pasión, mi polla rozaba en su vientre, pese a los tacones le sacaba 15 centímetros de altura, tiré del sujetador hasta sacárselo, sentir sus enormes y duros pezones clavándose me llevaron a meterle un dedo por el ano, suspiró negándose a disfrutar.

-ELEONOR: eres un mal nacido……….fóllame, cabrón, fóllame como si no hubiera un mañana.

-YO: eres una mujer muy complicada - sonreí al chupar de su cuello dado que había echado la cabeza haca atrás aferrándose a uno de mis brazos.

Se arrodilló sin decir nada, me la agarró y la chupó hasta ponerla tiesa de nuevo, tragando semen y fluidos de su hermana, la hice una coleta con la mano para llevar el ritmo, pero ella sabia muy bien que hacer, como lamer, y donde chupar, se metía mis huevos en la boca jugando con la lengua en ellos, sin parar nunca de masturbar, no vi como lo hizo pero al ponerse en pie ya ni llevaba el pareo ni el tanga, la acaricié los pechos apretándolos, llevándola a la hamácala resonando sus tacones en el suelo, la tumbé boca arriba y me metí entre sus piernas pegando las pelvis y dejando caer mi gruesa y larga polla desde su coño hasta por encima de su ombligo, era increíble que se la pudiera meter entera, me lamí los dedos y la froté el clítoris ligeramente, echándome para atrás iba hundiendo lentamente en su coño. Me sujetaba la cara para besarme cuando la lujuria le daba un respiro, la bestia había salido de su jaula y andaba suelta, lo pagó Eleonor con una media hora inicial donde se corrió 5 veces, cada una más intensa y fuerte que la anterior, trataba de cambiar la postura y ladearse, metí un dedo en su ano para usarlo de ancla y me desaté otros 20 minutos, la hamaca se movía dando saltos, el sonido de mis huevos golpeando sus muslos interiores era hipnótico y Eleonor puso los ojos en blanco al notar mis 5 minutos finales, por poco se desmaya al sentir mi semen caliente manchando su útero, pero era mucha hembra como para eso, se recuperó tan rápido como yo, y se puso a 4 patas, metiéndose 3 dedos en el ano, se preparó para mi verga, que sin pausa la introduje hasta el fondo, gritó tato como su hermana, agarrándose a los reposa brazos de la hamaca, la cogí de las tetas y tiré de ella hasta dejarla de rodillas pegada a mi pecho, tirando de sus pezones y penetrando lentamente su culo, era hacer el amor, no follar, eso la quería hacer creer, cuando se movió disfrutando de la calma, desaté a la bestia de nuevo, ella abría la boca y luego se mordía el labio, pero al llegar al orgasmo anal casi se desvanece, solo tenerla sujetada la mantuvo erguida, 40 minutos abriéndola el ano hasta que la solté, cayó rendida con la cara apoyada en la hamaca y el culo en popa siendo ultrajado por mi falo, planté los pies en el suelo, agarré sus amplias caderas y al correrme aceleré hasta un ritmo animal, la hamaca crujía ante cada envestida y Eleonor volvió en si de la impresión, levantó el torso que rebotó contra mi pecho y volver a estar a 4 patas, la di tan fuerte que me dolía el glande de percutir, pero sin dejar de hacerlo, entraba a matar, y la hamaca cedió, se partieron las 2 patas de delante, por suerte tenia a Eleonor cogida de la cadera, como una bisagra, y aguantaba su peso, pero ahora sin que ella se pudiera apoyarse en nada, avasallé aquel ano hasta venirme entre gritos y tirones eléctricos por la columna. Solté a Eleonor con cuidado, no se sostuvo en pie y cayó torpemente al suelo, al rebotar su culo contra la madera casi se desmaya de la impresión, se vio reflejada en el cristal de la puerta corredera, el agujero en su ano era del tamaño de una naranja.

Eleonor desvariaba en sus movimientos, quería levantarse pero solo lograba gatear, había perdido uno de sus tacones y no se como, trataba de volver a poner las patas de la hamaca en su sitio cuando se habían partido de cuajo, me di la vuelta para ver a Lili tumbada de lado, en poción fetal, mirándome y riendo, alargó su mano para que la ayudara a levantarse, lo hice y la levanté en mis brazos hasta tenerla cogida como a una princesa, me besó con ternura, la metí en casa y la subí a su habitación, me agarraba para que me quedara con ella, pero la di un fuerte besó que la relajó, bajé a ayudar a Eleonor, que seguía intentando unir las piezas de la hamaca, “ya me he cargado 2 de estas, voy a tener que poner una queja al fabricante” pensaba entre risas, Eleonor me miró abstraída, aun no se había podido levantar, la ayudé y la metí en brazos hasta sentarla en el sofá, se movía inquieta, le ardía o le dolía el culo y el coño, la di algo frío de beber que la recompuso, yo me metí media botella de agua entre pecho y espalda, pensaba que, si Eleonor era la mujer que mejor follaba que había tenido ensartada, y estaba así, después de follármela con 5 días de abstención, dejando también rota a su hermana, la ex puta, ¿como seria tirarse a una novata después de 1 semana?, la idea me erizó la piel. Una vez Eleonor respondía con seriedad a mis cuidados, me fui a la cama de Lili y me acosté con ella para dormir, estaba exhausto, me recibió encantada y se rodeó con unos de mis brazos, pese al terrible calor del verano me mantuve así un tiempo hasta quedarme dormido.

Los siguientes días fueron raros, incómodos pero al menos tenia sexo, Eleonor parecía un perro al que habían puesto en su lugar con una reprimenda, acudía a mi llamada sin rechistar y follábamos con pasión, pero sin interacción social, Lili tardó 1 día en ponerse en pie, en cuanto lo hizo volvimos a follar, fui cortés y cariñoso, pero esa mujer no estaba entrenada, se corría tantas veces y era tan hipersensible en su coño y su cuello que no duraba ni 2 corridas mías, daba igual como lo hiciera, tenia que ir a por Eleonor si quería seguir, no querían hacerlo juntas, siempre por separado, no puse objeciones y así me mantenía activo. Eran como el sol y la luna, tan opuestas que costaba creer que fueran hermanas, una toda clase y glamour, la otra pura pasión y desenfreno, orígenes muy diferentes, pero de ambas sacaba placer, y ellas de mí.

Era ya fin de semana, trabajé por la mañana y por la tarde acudí al piso de estudiantes, necesitaba relacionarme con gente de mi edad, y volver a ver a Teo y Alicia en la misma sala sin que hubiera una guerra me gustaba, habían roto en Navidades, sabia de escarceos leves entre ellos, rescoldos de una vieja llama, pero se había acabado y lo entendieron como un paso en sus vidas, no como algo hiriente y reprochable. Cenábamos, jugábamos e íbamos a alguna discoteca de noche, el domingo fuimos a la piscina después de comer y pasamos la tarde entre risas y bromas, Alicia seguía con su espectacular trasero y sus caderas de cine, Lara algo más descarada con sus enormes tetas, ya tenia una larga melena que la agraciaba el rostro y se vestía de forma sensual, se me insinúo un par de veces sabiendo que Ana no estaba, y lo mejor fue ver a la estudiante canaria, Naira, una belleza de escándalo, rubia que brillaba con el sol, con melena hasta los antebrazos y de ojos azul cielo, su acento era cerrado de las islas, su cuerpo era de modelo, tetas bien colocadas sin ayuda, los biquinis eran de cordones que no sujetaban ni elevaban, y aun así estaban erguidos, una cintura fina y una cadera prominente, hacia algo de yoga o tai-chi, así que estaba tonificada sin exageraciones, de esas mujeres que no entiendes como no están ganando millones en pasarelas, y están allí, tumbadas a tu lado comiéndote con los ojos como hace tú con ella. Ya, algo bebida la noche anterior, fue mi pareja de baile hasta que Lara se apoderó de mi apartando a cualquiera que osara acercarse, a estas alturas ya ni me molestaba atraer de esa manera, estando gordo y el primer año después de la operación, me enfadaba ser tan popular y lo superficial de la sociedad, ahora, desde el otro extremo de la sala, todo parecía diferente. Me mantuve sereno y no caí en las continuas tentaciones de muchas, tengo el dudoso poder de lograr que las camareras cachondas que suelen poner en los bares y se pasan la noche quitándose babosos de encima, me den su número, al igual que otras tantas borrachas y salidas, todo al cajón de mi casa.

Llegó el lunes y fui a buscar en coche a Ana al aeropuerto privado, Eleonor le había pagado la ida y la vuelta, y en camino hacia allí, recordé su advertencia sobre Ana, la oferta que me puso en la mesa y las palabras de alerta de mi madre, me sacudí la cabeza esperando a mi amada, eran cosas que ahora no tenían relevancia, estaba a punto de encontrarme con Ana, la vi salir por una de las puertas con otro grupo de gente, al verme soltó la maleta, las bolsas y salió corriendo hacia mi, estaba preciosa, un top blanco, una mini falda amarilla con algo de vuelo en el muslo y unos zapatos cómodos, acudí en su busca con un abrazo del cual se colgó en mi cuello dando vueltas como enamorados que éramos, me besó tanto, tan rápido y por tantas zonas que no podía acertar en sus labios, la tenia cogida por los sobacos con las piernas dobladas hacia atrás, en el aire.

-ANA: hola amor, ¿que tal?, ¿me has echado de menos? - por fin se estuvo quieta y la besé, admirando sus bellos ojos mezcla del marrón más dulce y el verde liviano.

-YO: peque, cada segundo, de cada minuto, de cada hora, de cada día de estas largas semanas, te quiero - sonrió de forma inocente, se aferró a mi cuello y me rodeó con las piernas sin importarla que se la viera medio culo por la mini falda.

-ANA: eres un bobo, eres mi bobo - me besó de nuevo, ahora con lengua, de cerca pude apreciar el tono de su piel, ella de por si ya tenia un color acaramelado, casi como la miel, pero las vacaciones en Granada y el sol de Andalucía le hacia cambiar de raza, estaba negra como una africana.

-YO: discúlpeme, me he confundido, yo venia a buscar a mi novia, Ana, no se si la conoce, ¿habla usted mi idioma? - bromeé haciéndola forzar una pose entre ofendida y graciosa.

-ANA: oye, que me vuelvo……- amenazó con sorna, la rodeé con mis brazos y la apreté tanto que la oí suspirar.

-YO: tú no te alejas de mi, anda, vamos a por tus cosas que si las llegas a dejar así tiradas en un aeropuerto publico ya no estarían - se bajó dándome otro tierno y suave beso, se dio la vuelta con un giro demencial que hizo que todo varón clavara los ojos en sus piernas con la esperanza de que el vuelo de la falda se levantara lo suficiente, la di un cachete fuerte en el culo para dejar claro al resto que esa “res” estaba marcada.

El viaje de vuelta fue como ir con radio Granada, Ana hablaba sin parar de su familia, de sus amigos y de las fiestas que montaron allí, de lo bien que se lo pasó y de lo que echaba de menos a su madre y a su abuela, se puso algo triste al recordar como se despidió de ellas, había entendido por fin la diferencia entre la universidad y un instituto, la familia pasa al 2º plano, una prueba de madurez que todos hemos de pasar, hasta que dejó de hablar, yo iba con el mute puesto pero al ver su cara sabia que algo me tenia que decir sobre su familia, y no sabia como empezar.

-YO: que te pasa, peque, ¿echas de menos a tu familia? - me miró agradecida por darle el pie.

-ANA: no es eso amor, es que………..verás, mi abuela ha estado todas las vacaciones buscándome “esposo”, dice que no puedo seguir siendo una solterona, con lo guapa y bonita que soy, y me ha estado buscando parejas, yo las rechazaba como podía, discutíamos un poco, pero un día volví algo borracha a casa, y me pilló con la guardia baja……….- se sonrojó.

-YO: ¿que la dijiste? - atendía claramente.

-ANA: pues que ya tenia novio, en Madrid, y que no quería que me buscara chicos, se puso tan pesada que al final……le he contado lo nuestro - me quedé blanco.

-YO: ¿y por que no me has avisado por teléfono? - mi tono sonó más rudo de lo que pretendía.

-ANA: no te enfades, fue sin querer, quería quitármela de encima y luego me daba pánico tu reacción - me agarró la mano de la palanca de cambios, me miraba como un cachorrillo que quiere ser adoptado, pedía perdón, no quería enfadarme, y la verdad, pensando unos segundos, no tenia motivo alguno para estar enfadado con ella.

-YO: no pasa nada peque, ¿que te dijo? - se alivió su mirada.

-ANA: pues imagínate, despertó a mi madre a gritos y se lo contó, me echaron una bronca enorme, parecían fuera de si, no me hacían caso y solo me decían que era una loca y que tú eras un degenerado, trataba de decirles que en realidad no somos primos, pero eso solo las enfurecía.

-YO: pobre niña mía, tú sola allí, tenías que haberme avisado y te hubiera apoyado, no tenías que pasar por eso sola.

-ANA: la verdad es que iba tan pedo que no me acuerdo de mucho…..- sonrió denotando una mentira piadosa - ….. pero eso fue hace una semana, no saben que hacer ni como proceder, querían llamar a tu madre pero las convencí de que nos dejaran hablar a nosotros antes, mi abuela dice que o cortamos o me cierra el grifo de la universidad, jajajjaja como si eso me importara ahora……..en fin, que no sé que hacer - ese silencio me dio que pensar.

-YO: pues nada, hablaré con mi madre y que ella se encargué, tiene mucha mano izquierda, quizá les haga entrar en razón, pero tienes que prepararte …..- me miró poniéndose seria - …es probable que no traguen, y te presionen, puede ser duro y difícil, y tienes que tener claro hasta donde quieres llegar.

-ANA: hasta le final, me da igual todo, ellas, la universidad, el dinero, solo te quiero a ti y no lo perderé por nada, ahora lo sé……….- sentía que había tenido una revelación en ese viaje.

Aparqué el coche en el garaje del edificio de la casa del ático, Ana permanecía inmóvil y triste, me miró con oscuridad en los ojos.

-YO: ¿y ahora que te pasa?

-ANA: no quiero vivir aquí - me pilló de sorpresa.

-YO: ¿aquí? Pero si fuiste tu la que……- me cortó con un beso rápido.

-ANA: lo sé, pero no me gusta, vayámonos, podemos volver al piso de estudiantes, ahora no está Teo con Alicia, y no pondrán reparos, por favor.

-YO: es una locura peque, estamos a un mes de que empiecen las clases, no podemos hacer otra mudanza y si tu familia nos corta le grifo no podremos pagar la habitación del piso - soltó un bufido de desesperación.

-ANA: vale, pero prométeme que en cuanto podamos nos iremos de aquí, o echa a esas 2 “sudacas”, no las soporto - su tono era de desprecio absoluto, no era habitual esa falta de respeto en ella, entendía el por que a Lili, al irse era un desastre de convivencia, pero con Eleonor siempre ese había llevado bien.

-YO: ¿que te pasa con ellas ahora?

-ANA: nada - no hacia falta ser lince para saber que esos “nada” en una mujer significan mucho, apagué el coche, me giré hacia ella, acariciando su cara con mi mano para hacerla que me mirara.

-YO: no pasa nada, dime que te ocurre, buscaremos una solución juntos, te quiero, y nada cambiará eso, solo se sincera conmigo, confía en mi - me miró deseando explicarme algo.

-ANA: nada……….. déjalo, son cosas mías.

-YO: por favor Ana, yo solo….- abrió la puerta del coche y salió bruscamente, tardé unos segundos en salir del coche.

El silencio se apoderó de ambos al subir por el ascensor y al llegar a casa a Ana se le agrió el carácter, y el rostro, saludó con corrección a Lili, que la pidió disculpas por el pasado y la prometió un mejor comportamiento ahora que yo le había ayudado. A Eleonor casi ni la miró cuando la abrazó, la tensión se cortaba en el ambiente, fuimos a nuestro cuarto y ayudé a colocar las cosas a Ana, explicando detenidamente mis andanzas con Eleonor y Lili, las caras que ponía eran de desprecio, la dije que si me lo pedía no volvería a tocarlas, en silencio sopesó la idea, pero en vez de eso me dijo que no la importaba, “una mentira de tanas”. Cenamos, dormimos y follamos gran parte de la noche, Ana lo tenia algo cerrado de no estar conmigo, pero aun así aguantó 3 polvos ella sola, los 2 primeros fueron hacer el amor, de forma lenta y sensual, el 3º ya fue por el culo y un poco brusco, pero a Ana le gustaba tanto como a mi.

Por la mañana repetimos otros 2 aprovechando mi empalme mañanero, se montó sobre mi y me cabalgó durante 2 horas, demostrando que no había perdido sus facultades en el sexo, al salir a beber algo dejando a Ana algo magullada, fui a la cocina donde estaba Lili, totalmente desnuda agachada sobre la encimera, no se cuanto llevaría allí, pero seguro que la situación y la pose no fue casual, me dio igual, acudí a su trasero y riendo la penetré por el coño desde atrás, empotrándola contra la nevera y follándomela de forma salvaje, la destrocé, saltaron por los aires todos los imanes y notas del frigorífico, y al correrme, Lili se hizo un bola timorata en el suelo. Me bebí lo que encontré y dándonos una ducha rápida nos fuimos a la piscina Ana y yo solos, a la pública no a la de casa, en plan parejita, disfrutando de un día solos, Ana era dulce, cariñosa y amable, lejos de esa casa, disfrutaba de nuevo de la compañía de mi novia, y en el agua la pasión casi me lleva a follármela delante de media piscina, ni a ella ni a mi nos hubiera importado si no nos hubiera interrumpido un grupo de niños de 9 años con una pelota perdida, por la tarde acudieron Alicia y las demás chicas a la llamada de Ana, quería hablar con ellas y volver a sus amistades, también acudieron Teo y Manu, junto a un par de chicos del grupo, algunos con sus novias, otros a la caza de las chicas libres. Reía y bromeaba con ellos, pero solo tenia ojos para Ana, estaba enamorado hasta el tuétano de esa muchacha, me pillaba mirándola y ponía alguna pose sexy y tonta, se acercaba a darme un beso y se alejaba jugando, al volver fuimos a cenar a casa de los estudiantes, Ana quería alejarse el mayor tiempo posible de esa casa, así se mantenía feliz, pero al volver a casa se ponía un escudo imaginario y era un ser frío, distante y hosco. No se apartaba de mi y en cuanto podía me llevaba al cuarto, me alejaba de las demás, podíamos estar follando o no, no quería que saliera de esas 4 paredes, le tenia un pánico irreal a alejarse de mi, temía algo, no decía el qué, quizá a perderme, quizá a que supiera algo, quizá a que sin ella a mi lado me pasara algo, no decía nada, pero se leía en sus ojos.

No me lo pidió, pero no hacia falta, no volví a tocar a Lili ni a Eleonor, eso la calmó, pero insistía en buscar la manera de irnos o que presionara para que Eleonor acelerara la cesión del piso a mi nombre, nos dijeron 6 meses y ya íbamos para 11, Eleonor me decía que los abogados le daban largas, alguna vez venían los 2 abogados por allí, notando el brillo de la lujuria en los ojos de la abogada clavados en mi, no era raro, iba en casa o desnudo o con unas bermudas, y su número hacia tiempo que estaba en el cajón con el resto. Aun así la cosa se demoraba y llegó mi cumpleaños.

Ana, Eleonor y Lili – La verdad oculta.

Por experiencias previas le tenia un miedo lógico a esa fecha, mis cumpleaños, los 18 los pasé en el hospital recuperándome de la operación, los 19 fueron cuando dejé a Irene, mi 1º novia, los 20 fueron cuando Ana me quiso regalar a Alicia y estallé de cólera rompiendo un armario y forzándonos a irnos del piso de estudiantes, al final para nada, con el ambiente tan caldeado no presagiaba nada bueno para los 21 años. La noche previa la pasamos con los amigos de fiesta, al día siguiente fuimos a comer a casa de mis padres y al volver a casa montamos una pequeña fiesta para celebrarlo, nada opulento pero si con bastante gente, durante todo ese día y el anterior Ana insistió en que no tuviéramos sexo, que me tenia una sorpresa para el día de mi cumpleaños. la miré con dudas, la última sorpresa en mi cumpleaños no fue muy bien, pero le concedí la petición, iba tan cargado y salido que solo con ver a Eleonor riéndose con las tetas botando me ponía como una moto, la fiesta pasaba y la gente iba abandonando la casa, los mayores primero y luego los que tenían pareja para quedarse los jóvenes y alocados, hasta altas horas de la mañana no se fueron todos, de las últimas Mara, la hermana de Alicia, que desde Navidades andaba muy preocupada de retomar nuestra vieja relación, pero se vio superada, casi como 3 leonas, Lili, Eleonor y sobre todo Ana, la echaron con palabras dulces y ojos en llamas. Yo observaba a carcajadas como ocurría todo, tenia unas ganas enormes de partir a Mara por la mitad, no estaba mal físicamente pero solo por ver su cara al sentirme dentro y oírla gritar daría todo mi dinero, esa mujer había pasado de mi, y de mi forma de ser estando gordo, como de la mierda, y ahora era una del montón que jadeaba por tenerme entre sus piernas. Al irse, Ana se sentó a mi lado frotándose y besándome con dulzura.

-ANA: ¿ya estas listo para mi regalo? - asentí con un beso cariñoso - súbeme a la habitación grande - no cuestioné, sabia que le gustaba sentirse como una princesa en mis brazos, así que la cogí entre ellos y la llevé a la habitación de Eleonor, había perdido de vista a las colombinas, últimamente me importaban poco.

Al llegar se bajó y como una azafata de TV abrió la puerta, de lejos vi en la cama a Lili y Eleonor comiéndose una a la otra, desnudas y brillando por un aceite corporal en que se habían bañado por completo, me acerqué un poco a la cama para ver mejor aquel espectáculo, sus cuerpos se movían al compás de una danza que sonaba de fondo en la cadena de música, ritmo hindú, se movían como serpientes enroscándose una en la otra, besándose, chupando y acariciando cada centímetro de piel, con las luces apagadas y solo unas velas aromáticas llenando el ambiente de una sensualidad asfixiante. Ana se abrazó a mi espalda, no necesitaba darme la vuelta para saber que estaba ya desnuda, sentí sus pechos erguidos en mi espalda y el roce de sus muslos en mis piernas, me besaba un hombro y el brazo mientras su cabello me hacia cosquillas, sus manos me rodearon hasta donde pudieron, me acariciaba el vientre y el pecho por dentro de la camiseta.

-YO: ¿este es tu regalo? - la miré algo decepcionado, al fin y al cavo solo era sexo con mujeres a las que ya me tiraba.

-ANA: si, ¿no te gusta? - sujetó mi polla a través de las bermudas, algo tiesa ante las miradas furtivas de Lili y Eleonor cuando me llamaban a la cama.

-YO: creía que estabas furiosa con ellas…..- lo solté sin importarme que estuvieran delante.

-ANA: hoy solo importas tú, y esta noche vas a tenernos a la 3 para ti solo - alzó las manos para quitarme la camiseta, de repente la idea no me pareció mal, casi un reto, Ana y Eleonor ya me costaban solas, incluir a una inexperta como Lili, podría tener su punto, y después de 2 días sin nada, tenia ganas y energías para las 3.

De un tirón me sacó las bermudas para dejarme desnudo con una polla a la que le faltaba poco para estar tiesa, Eleonor le estaba comiendo el coño a Lili haciéndola jadear como si fuera yo mismo el que la devoraba, Ana se colocó delante de mi tirando de mi cabeza, para besarla, sabían de cine sus labios, y su olor a coco me incendiaba, podría haberme quedado solo con ella, me daba igual, aun así, ella sacó el bote de aceite y me lo dio para que la embadurnara como a las otras, arranqué el tapón de plástico con el dosificador dejándolo abierto de todo, agarré de la cintura de Ana pegándola a mi y desde arriba fui dejando caer una cantidad enorme de aceite entre nuestros cuerpo, bañándonos la cara, el cabello, el pecho y dejándolo caer por el cuerpo, casi vacié un bote nuevo, una vez cubiertos las manos de ambos se afanaron en recorrer el cuerpo del otro, el tono de su piel, esa luz y el aceite la estaban embelleciendo a cada paso, mis manos jugaban entre sus piernas para lubricarla bien y ella masturbaba mi enorme falo para llenarlo del liquido, al igual que mi vientre marcado de músculos y mis enormes pectorales, la di la vuelta para pegarla a mi y hacerla sentir mi verga, dura ya, abriéndose paso entre sus muslos, movía la cadera suavemente mientras mis manos recorrían todo su torso y sus senos, acariciar su vientre la hizo gemir.

Al alzar la vista Lili rompía en un orgasmo de los suyos, tan sensible era que Eleonor se lo arrebató sin necesidad de malabarismos, se fundieron en un largo beso húmedo, para llevar sus ojos a Ana y a mi, gatearon adoctrinadas hasta nosotros, se tiraron al suelo, comenzaron a acariciar y besar las piernas de Ana, casi desde lo pies hasta su coño, allí mi polla sobresalía bastante, el glande y parte del tronco, acariciaron, besaron y chuparon la punta a la vez que presionaban y jugaban con el coño de Ana, que a su vez estaba recibiendo un masaje en los senos de mi parte, suspiraba entre jadeos al tirar de sus erguidos pezones y al sentir la lengua de Eleonor entre sus muslos, la levantaron una pierna y Eleonor se comía su coño mientras Lili luchaba por meterse parte de mi tranca en la boca, se iban intercambiado como si fuera una hidra de 2 cabezas, Ana gemía y se sonrojaba mientras que el placer que yo sentía era relativo, si, me gustaba, pero a mi sin una masturbación continua, podían estar chupándomela días sin correrme, como lo sabían pasaron a la acción, fueron subiendo, besando y lamiendo el cuerpo de Ana y el mío, Ana se dio la vuelta sacándose mi rabo de entre las piernas, y se pegó a mi cuerpo de nuevo, torciéndomela hacia un lado sin dejar de masturbar, besándonos con lengua y saboreando sus labios, Lili se puso a un lado besándome el brazo y Eleonor al otro acariciando mi espalda y mi pecho, indistintamente fui intercambiando besos con las 3, Eleonor sabia muy bien como besar, era paciente, daba varios besos largos, abriendo bien la boca y jugando con los labios, sin necesidad de babear con la lengua, Lili conocía como calentar, daba largos besos clientes y al acabar deba un lametón dejando la lengua como un gancho tirando de mi labio superior, Ana se sentiría aburrida así que se arrodilló para chuparme la polla como a mi me gustaba, cogió con ambas manos, lamiendo el glande y chupando con cuidado, masturbaba a buena velocidad, y eso ya me sacó los primeros jadeos, ahogados por los besos de las hermanas, que notaban mis manos hurgando en sus muslos, buscando el 1º orificio que encontraba y penetrándolos con las falanges. Pasados unos minutos Ana se elevó con la boca llena de semen, casi ni había notado mi corrida, era la 1º después de varios días y fue fácil para ellas, la compartió con los 3, nos besamos y compartimos ni simiente caliente, jugando con ella, Lili ya volvía a temblar de sentir mis dedos penetrándola el coño, era tan novata, tan delicada, que me daba pena, me cansé de preliminares, estaba ardiendo de sexo y los ojos y risas de esas 3 me estaban pidiendo guerra, abracé a la tras de golpe, elevándolas del suelo como si fueran niñas de colegio, rieron sorprendidas y sobrepasadas por mi fuerza bruta, me giré sobre el borde de la cama y me dejé caer con ellas tres encima, fue una delicia de tetas, aromas y risas, Ana quedó encima de mi aprisionándomela, besándome con descaro, Eleonor casi encima de ella, un poco de lado y Lili al otro lado totalmente.

-YO: quiero que sepáis, que no habrá piedad, voy a ir con todo y de aquí salgo con los pies por delante…….- las colombianas rieron, Ana me miró y sonrío sabiendo que la amenaza era lo más real que podía ser.

-ELEONOR: a ver si puedes con las 3, o nosotros podemos contigo…..- fue una apuesta, mientras sacaba mi polla dura de entre las piernas de Ana para chuparla, masturbando con una mano.

Mis manos fueron al trasero de Ana, jugando con su ano y forzando hasta llegar a su coño empapado, Lili aprovechó que Ana se incorporó para pasar una pierna por encima y ponerme su vagina en la cara, lamí con fiereza, se apartó solo de notar mis labios, pero volvió a bajar y se dejó hacer. Estaba tan concentrado como para sacarme un graduado en ingeniería biomecánica, Eleonor me dedicaba una mamada de escándalo masturbando con una mano haciendo resonar sus pulseras, y jugando con la otra en mis huevos, Ana se abría las nalgas para dejar que mis manos llegaran mejor para perforar su ano y su coño, y Lili se frotaba el clítoris cuando mi boca no lo estaba tapando, la que más gemía y la que 1º se corrió, estaba al punto de nieve y solo con no parar se correría infinitamente, así que no paré, provocando orgasmo tras orgasmo, comiéndome sus emanaciones como si fuera ambrosía. Noté como Eleonor dejaba de masturbar y chupar, lo agradecí, me estaba volviendo loco, pero apretó contra el coño de Ana y la penetré de golpe media polla, que al 2º esfuerzo entró toda, Ana se estremeció, pero al instante movió las caderas de forma circular dejando que me acoplara perfectamente, Eleonor se pegó como una lapa a su espalda, la acariciaba los pechos y la besaba el cuello, mientras acompañaba los giros de cintura de Ana, susurrándola cosas guarras suponía, Lili no sabia como ponerse, si a 4 patas o de rodillas, daba igual, se corría cada 3 o 4 minutos, pero soportaba encima como de un toro mecánico, admirar sus giros de cabeza y sus rizos rubios goteando sudor y aceite me aceleraban la lengua que ya parecía dormírseme en la boca.

Para cuando quise darme cuenta Ana me estaba cabalgando como la mejor de las amazonas, entraba y salía de mi por competo ayudada por los brazos de Eleonor, Ana, ya castigada por mis manos, rompió en un orgasmo animal que la obligó a levantarse y bañar mi cintura, pero se arrodilló de nuevo metiéndosela entera y volviendo a cabalgar aun con fuerza, notaba las uñas de Eleonor en mi vientre de frotarle el clítoris a Ana, que gemía abrumada. Alguien le soltó un azote a Lili cuando se volvió a correr al sentir mis dedos, ahora libres, en su ano, esta vez levantó una pierna y se corrió como una fuente en mi cara, casi me atraganto, cuando acabó se negó a seguir siendo ultrajaba y se agachó para besarme y lamer sus fluidos, dejándome sus senos al alcance totalmente erectos y con la piel roja de la excitación, Ana se volvió a correr pasados unos minutos y de la fuerza salió dispara hacia mi vientre, mi polla fue engullida por la boca de Eleonor, mientras Ana seguía con el ritmo en la cadera como si aun estuviera recibiéndome, agarré de la cintura a Lili, y la puse con el coño abierto de cara a Ana, que empezó a comérselo, acariciándola con sus dedos, yo a su vez giré el cuello y me comía su ano, rompió en 4 orgasmos seguidos que la hicieron desvanecerse, quedó de rodillas de nuevo con el coño en mi cara, siendo martirizado, pero ahora de cara a Ana que se puso igual, cara a cara, se besaron y se acariciaron como 2 quinceañeras. Sin saber como dio de si mi cuerpo, Eleonor se arrodilló detrás de Ana y se metió mi polla entera soltando un bufido animal, follándome con su rítmicos gestos de cadera, tan hábiles y rápidos que esta vez si note como mi semen salía disparado a sus paredes vaginales, hecho que a su vez la sacó un orgasmo leve a Eleonor, yo mordía y besaba las nalgas de Lili de rabia, me habían sacado ya 2 corridas y aun ni había empezado a follar yo.

Era mi regalo, e iba a disfrutarlo, ya habían tenido suficiente “dulzura” de mi parte, azoté el culo de Lili hasta que se pegó tanto a Ana que sus senos se apretaban, quedó a la altura de mi pecho, Ana en el de mi vientre y Eleonor aun empalada en mi cintura, rodeé a las 3 con mis brazos y agarré las caderas de Eleonor, con una fuerza enorme planté los pies y elevé a las 3 por el aire, a Lili unos centímetros apenas, pero ella hacia de tope para que no se vinieran las 3 encima de mi cara ante la pendiente que hacia mi cuerpo, las 3 sabían que la bestia había llegado, la solté, como cuando en la películas sueltan al animal para que sea libre un rato y se divierta, fui aumentando el ritmo de las penetraciones en Eleonor mientras las otras sonreían entre besos y caricias, todo se volvió silencio cuando Eleonor rompió en un orgasmos descomunal que no dejé pasar, aumenté de nuevo, y al notar su siguiente corrida se rieron, la bestia desatada se estaba cobrando a su 1º víctima, y Ana y Lili se miraban asombradas, Lili casi con pánico, al 3º orgasmo Eleonor se salió de mi cayendo de espaldas con las piernas abiertas y soltando chorros de su interior, sin dar tiempo a nada me erguí con las 2 chicas aun encima, tan fuerte que la inercia llevó a Ana a caer de espadas sobre Eleonor que a duras penas la logró recibir sin un golpe, y Lili cayó a 4 patas sobre ellas 2, conmigo de rodillas detrás de ella, la penetré el coño de tal forma que sentí como si la rompieran el himen otra vez, me aferré a sus senos y bombeaba con virulencia sacándola tantos orgasmos que no merecía la pena contarlos, se besaba con Ana, o se comía sus tetas mientras Eleonor acariciaba el coño de Ana, algo confundida aun, Lili no soportó ni 10 minutos, me la follé por el culo un rato, pero fue casi peor, al 1º orgasmo anal se desvaneció en la nada cayendo desmayada sobre Ana, la apartamos entre los 3 y la dejamos en una esquina de la cama, tiritando y con temblores.

-YO: una menos, ¿quien es la siguiente? - sonreí con autentica dedicación, Ana me miró con lujuria levantando un dedo a modo de orden.

Me eché para atrás un metro y tiré de los pies de Ana, la di la vuelta y la cuadré a 4 patas, Eleonor se colocó para que Ana pudiera comerla el coño, cosa que hizo encantada al sentir mi polla abriéndose en su útero, siendo Ana, me desaté ferozmente, de vez en cuando Ana se erguía ante al impresión para acariciarme retorciéndose pero sus orgasmos la tumbaban a la lona, para seguir comiéndose el coño de Eleonor que rezumaba fluidos, semen, sudor y aceite, sus orgasmos se hicieron rápidos, Ana sabia donde tocar y le penetraba el coño o el ano de forma alternativa o a la vez, sin dejar de lamer y chupar el clítoris enorme, creo que la localizó el punto G, y esto la llevó a una cadena de sensaciones que la revolcaba entre las sabanas gritando obscenidades, Ana hacia fuerza contra mi y su aguante sacó sus frutos, me dediqué en cuerpo y alma a meterle mi semilla lo más dentro posible a una velocidad infernal, antes de venirme la saqué 2 orgasmos antes de caer tumbada sobre la cama, riendo de pura congoja, se apartó y me dejé caer sobre el cuerpo de Eleonor, comiéndome sus preciosas tetas y sus pezones casi deformes y erguidos, no eran naturales, pero atraían mis labios, mi polla se encendió ante las caricias de Ana, y penetré a Eleonor, parecía entera, así que haciendo flexiones llamé al animal indómito y me centré en hacer pedir clemencia a Eleonor, nada fácil, metía y sacaba mi rabo por completo para medir distancias y luego ir aumentando el ritmo hasta sacarla improperios con cada golpe de cadera, se quería acariciar pero solo llegaba a taparse la boca con los puños al mordérselos, me besaba pero me mordía los labios de tensión, luego clavó las uñas en mi espalda haciéndome marcas y mordiendo mis hombros y mi pecho, trataba de que eso contuviera sus gimoteos pero tras media hora se derrumbó como un castillo de naipes, casi rendida, la conocía bien, si la dejaba así, en 20 minutos estaría de nuevo en pie, la saqué de su coño, use sus fluidos para meter varios dedos en su ano, y eso la sacó del trance, antes de recobrar el sentido la empalé por el culo hasta el fondo de su ser, soltó un alarido que hizo reír a Ana, que permanecía a mi lado acariciando y besándome cuando le dedicaba algo de tiempo, estaba centrado en matar a Eleonor, las penetraciones eran tan largas y profundas que notaba la piel del recto estirarse y contraerse con cada una, Eleonor se acariciaba el coño mientras otra mano la tapaba la boca, estaba roja y con las venas hinchadas y la boca abierta con aspecto de soltar un alarido horrible, pero sin decir nada, respiraba entre jadeos y mi verga era alabada, como si tuviera orejas para sentirse halagada, abriéndola bien de piernas y follándola con placer. Otros 20 minutos así bastaron, y menos mal, nos estabamos quedando si cama de los empujones que la daba, tras el 3º orgasmo anal pidió clemencia entre susurros y me corrí dándolo todo en un sprint final que la llenó de semen el culo, su cara al saber que había terminado fue el alivio absoluto, se echó a un lado respirando tan agotadamente que las gotas de sudor la recorrían el cuerpo a zancadas.

-ANA: creo que Eleonor ya ha sacado la bandera blanca, solo quedo yo, ¿aun te ves con fuerzas? - la abracé besándola con pasión, mi gesto era de confianza y suficiencia, una mera fachada, iba a por el 5º de la noche, Lili era fácil, Eleonor difícil y aun me quedaba Ana, la mujer que amaba y con la que más tiempo me había estado acostando, follaba peor que Eleonor, tenia menos aguante, pero aun así era temible.

Saqué fuerzas de donde no tenia, me dejé caer para que Ana se abalanzara sobre mi, me la chupó un rato hasta ponerla bien dura, la verdad, le costó un poco, pero una vez tiesa me obligó a sentarme en el borde de la cama, ella se puso en pie y dándome la espaldas se sentó sobre mi vientre, acariciando mi miembro para dirigirlo a la entrada de su coño, el cual penetré, y una vez dentro se dejó caer hasta sentirla toda dentro, con los pies en el suelo y la espalda arqueada, Ana comenzó un vaivén glorioso con sus caderas, un ritmo aprendido y bien aplicado, sus nalgas rebotaban contra mi y se movían en contra de la dirección que ella ponía, mi rabo aparecía y desaparecía entre sus muslos, agarré de sus pechos y tiré de ella hasta quedar tumbado boca arriba, con ella aun empalada, se apoyó en el borde de la cama con sus pies para ganar espacio, y los míos en el suelo de palanca, fueron generando un ritmo alto que la hacia gemir y sollozar, ni hacia falta que se apoyara en la cama con los brazos hacia atrás, mis manos en su cadera la sostenían y mi polla frenética la martirizaba como para no dejarla bajar, se corrió un par de veces pero la posición era muy incomoda, se salió y buscando algo de ángulo, se apretó mi glande contra su ano, costó un poco pero entró al fin, sentir su calor y la presión me mataron, tenia un dulce escozor en la punta del pene, pero era ahogado por un placer inconmensurable, Ana dominaba el ritmo de la penetración hasta bajar del todo, sus pies dejaron de apoyarse y por unos instantes se mantuvo solo con mi polla entera como mástil, dando coces con una pierna y respirando entre impresiones, como al meterse en una piscina de agua fría poco a poco, se fue clamando hasta caer a un lado, la abracé por detrás, sujetándole del vientre y de un pecho, comenzando un vaivén lento y pausado, lo agradecía con una sonrisa, pero sus uñas se marcaban en mi muslo, apretaba tanto al sentir la penetración que me dejó otra marca, cuando salía me daba palmadas en el mismo sitio, todo repetido hasta que las penetraciones se volvieron fluidas y Ana gritaba de lujuria y pasión, me costaba físicamente mantener un ritmo pero ni hacia falta, 30 minutos follándomela mal, la sacaron 3 orgasmos anales que la mataron por completo, reía nerviosa, soltando despacio un moño que había formado al apretar las sabanas, babeado de usarlo como mordedor, sentir mi semen dentro la reconfortó, se giró como pudo para besarme, con un brillo en los ojos especial.

Supongo que quería decirme algo, lo buen amante que era, lo semental que demostraba, lo fuerte y grande de mi polla o mil cosas, pero no los necesitaba, solo con verla sonreír y mirarme así, me bastaba, era feliz, me olvidaba del mundo a nuestro alrededor, de Eleonor aun con espasmos en el culo, de Lili perdida hecha un bola en una esquina, de la cama, del lujo de esa casa, de su familia y de la mía, de mis amigos, abandonaría todo por tenerla así, entre mis brazos, sonriendo y clavando sus bellos y extraños ojos en los míos para siempre, quiero pensar que en ella la sensación era similar. La apreté un pecho mientras la besaba con rabia.

-YO: gracias por el regalo - no pudo responderme con la educación típica de ella, estaba exhausta, al igual que yo.

Bajé a la cocina tambaleándome, me fallaban las piernas, sentía que se me iba a subir un gemelo en cualquier momento y no conseguí mantener una respiración normal, como era habitual, me tragué una botella de agua entera y parte de otra, podía oír a mi madre en mi cabeza diciéndome lo peligroso que era eso, y su eterna historia del rey, que después de una larga jordana de cacería, pidió que le trajeran agua fresca, y de tanta y tan rápido que bebió, murió allí mismo. Subí la otra botella, Ana bebió un poco, y se tapó, tenia escalofríos pese a estar a 30 grados, y la verdad, hasta yo me sentía raro, Eleonor también bebió, pero Lili permanecía quieta, casi se podía notar aun los tirones en los músculos de su pelvis. Me acosté al lado de Ana, abrazándola y quedando detrás de ella, como cuando empezó toda aquella locura, eran cerca de las 10 de la mañana y la fiesta había terminado a casi las 7, estaba agotado, Eleonor gateó torpemente para quedar a mi espalda, sentí sus pechos pegados a mi columna dándome un suave beso en el cuello, y así nos dormimos todos, debo reconocerlo, con una sonrisa enorme en mis labios, feliz de que por fin, en un cumpleaños, no hubiera pasado nada malo, y más que eso, por un ligero halo de esperanza en el futuro de la convivencia en esa casa, no era lógico que hicieran el amor así de bien juntas y luego no se soportaran, si yo debía ser su nexo, lo seria encantado.

Pasé mala noche, o madrugada, todo sea dicho, amagos de rampas en las piernas, el calor asfixiante, tener a Eleonor y Ana rodeándome y un estado de nervios que no me dejaban conciliar el sueño, me palpitaba el corazón tan rápido que solo el paso de los minutos fue calmándome hasta que mi mente dijo basta y me dormí, cada cierto tiempo me despertaba sudando y alterado, pero me volvía a dormir, no se cuanto tiempo pasó, serian cerca de las 3 o 4 de la tarde, en uno de los amagos de rampas me desperté y no vi a Eleonor, no le di importancia y seguí remoloneando una hora, Ana hacia lo mismo que yo, se movía levemente y soltaba un ronroneo de gatita, se levantó y fue al baño, su andar era tosco y torpe, evitando rozar los muslos, al volver se echó encima de mi pecho, acariciándome y besándome con ternura en el cuello, la mejilla y la boca, al mirar a mis pies allí seguía Lili, apenas se había movido. Tenia la polla dura de mis empalmes mañaneros, pero me dolía todo, tenia agujetas y Ana no se mostraba nada dispuesta, me fui al baño, me di una buena ducha y los típicos rituales de un hombre, como mear y dejar irse un pedo al finalizar, o al menos eso hago yo cuando estoy solo o hay confianza, Ana se había vuelto a quedar dormida, era como un ángel, desnuda apenas cubierta por una sabana fina de verano, boca abajo con una pierna encogida y todo el pelo a lo largo de la almohada como un abanico, me agaché para besarla en la mejilla mientras le hacia cosquillas en su espalda al aire, se movió haciéndose una bola para que la dejara en paz. Me puse las bermudas y bajé con dificultad, sentía en los muslos y en la cintura un presión constante, al ir a la cocina me encontré a Eleonor de pie de espaldas a mi, no me había oído llegar, totalmente desnuda, apoyada con la cintura en la encimera, tomando una taza que olía a café recién hecho, se rascó un gemelo levantando una pierna y pasándose las uñas cuidadas de los dedos, me sacó una sonrisa, aun sin nadie mirándola y siendo lo más burda que podía ser, destilaba sensualidad y clase en sus movimientos. Me acerqué apartándola el pelo hacia un lado y pegándome a su espalda, besándola el hombro y el cuello, ella sonreía al girar el rostro y llevar sus labios a mis mejillas, la abracé con fuerza rodeándola por la cintura y disfrutando del aroma de la taza, no bebo café pero su aroma siempre me ha gustado.

-YO: buenos días - le dio un sorbo a la taza.

-ELEONOR: buenas tardes ya, amor mío - quise rebatirla, no era su amor, o mejor dicho, yo no la amaba, pero pretendía hacer que todo volviera a un punto de paz y tranquilidad, así que guardé silencio.

-YO: ¿que tal has dormido? - desvié el tema.

-ELEONOR: como nunca, me siento renovada, creo que fue buena idea lo de esta mañana, ¿a ti te gustó? - se me escapó una carcajada.

-YO: apenas……- la ironía era clara, volví a besarla en el cuello, eso la provocó un escalofrío que la recorrió todo el cuerpo.-….me duele todo - rió nerviosa.

-ELEONOR: a mi igual, al despertarme no sentía nada de cintura para abajo, menos mal que se me pasó, eres un animal peligroso - se movía levemente, casi nada, pero se frotaba un poco.

-YO: por favor, quieta, me duele hasta la polla de tanto meterla dentro de vosotras.

-ELEONOR: no creo que pudiera complacerte, me arde el interior, he intentado ponerme algo de ropa interior pero me escuece, jajjaja no se que me pasa, pero es sentir tu cuerpo, tu calor, y me enciendo………..- se giró dejando la taza en la encimera, me agarró de la cara y me besó de forma lenta y pasional, sabia a café y lujuria, pero enseguida se apartó recordando algo -……..será mejor que nos vistamos, ¿podrías quedarte hasta que venga la abogada?.

-YO: claro, ¿a que viene? - la miré a los ojos con curiosidad.

-ELEONOR: ah……. es una sorpresa - sonrío con gentileza, antes de coger la taza y salir de allí con un silencio cómplice.

Supuse que seria algún regalo, no me había dado nada por mi cumpleaños el día anterior, no la pedí nada, de hecho la sugerí que ya me había dado suficiente y no necesitaba nada, pero no era de las mujeres que no tenían detalles, en el de Ana le regaló una pulsera de oro blanco de la que no quiso decir el precio, y hacia un año me regaló un coche de alta gama como si fuera una bolsa de pipas, además, que necesitara a la abogada me hacia pensar que por fin el papeleo de la casa ya había acabado y por fin me cedería legalmente ese ático de sueño de hadas, en el que podría vivir con Ana a solas para siempre. Soñando en esos pensamientos me preparé algo de comer, un batido energético que solía hacer antes de salir a hacer ejercicio, y restos de la fiesta de noche, canapés y algo de ensalada, mientras comía Ana apareció apenas cubierta por una bata de seda abierta, sin nada debajo, bebió algo y picó de mi ensalada un poco, nunca había sido de comer demasiado, solo nos mirábamos, sin compartir palabras, no hacían falta. Hacia tanto calor que al terminar de correr fuimos a darnos un chapuzón en la piscina y nos quedamos tumbados en el poco césped de la terraza, donde ya estaba Eleonor en una hamaca recién comprada después de haber roto la última hacia poco.

-YO: ¿y Lili?

-ANA: ahí estaba en la cama aun tirada, cuando me he levantado la he visto en el baño, pero se ha vuelto a acostar jajaja - su risa fue compartida por Eleonor, yo no le veía la gracia del todo.

-ELEONOR: esa muchacha tiene mucho que aprender.

-YO: pobrecilla, no es más que la 4º o 5º vez que me la tiro y ya ha sentido a la bestia matándola, alguna no ha durado tanto - mis palabras provocaron un silencio algo incomodo que duró un rato.

-ANA: Raúl, ¿por que no nos vamos ahora al piso de Alicia? iban a ver unas películas y nos invitaron anoche.

-YO: espera a que venga la abogada de Eleonor, y nos vamos - se le cambió la expresión de la cara como si la hubiera dicho que se había muerto su perro.

-ANA: ¡¡¿que?!!

-YO: Eleonor me ha pedido que me quede para hablar con ella, dice que es una sorpresa……- quise rebajar su miedo con un tono de broma, pero no le cambió el rostro.

-ELEONOR: no se preocupe Ana, lo tengo todo bien pensado - esa expresión sonó mucho más temible en los oídos de Ana que en los míos.

-YO: si quieres ve tú con Alicia y luego voy yo…….- Ana negó fuertemente con la cabeza, totalmente seria.

-ANA: ni de coña, yo me quedo contigo……….- Eleonor se levantó de la hamaca entrando en el piso.

-ELEONOR: no se apuren, mañana acabará todo…….- según se metió en casa Ana se pegó a mi y me besó, sus ojos brillaban a punto de echar lagrimas.

-ANA: amor, por lo que más quieras, no te quedes, vayámonos ahora.

-YO: ¿que te pasa?, ni que la abogada me fuera a matar……..

-ANA: no me gusta como Eleonor esta comportándose, quiero irme - la acaricié la cara con dulzura.

-YO: no pasa nada, seguro que es algún regalo sorpresa o algo.

-ANA: sorpresa si, pero que no nos guste…………. si quieres quedarte, de acuerdo, pero prométeme que no dejarás de amarme - giré el cuello sin comprender del todo la unión de los hechos, ¿que tenia que ver que viniera la abogada con que dejara de amar a Ana?

-YO: peque, solo hay una persona que puede hacer que deje de amarte, tú, si eres complementaste sincera y leal conmigo, no dejaré de amarte.

-ANA: es que me temo que no lo he sido…….- una lagrima cayó por su mejilla.

-YO: dímelo, sea lo que sea, aun estás a tiempo, por feo y horrible que sea, puedo soportarlo todo, todo menos que me mientas - mi vehemencia era clara, aun así Ana permanecía en silencio - ¿tienes algo que contarme?

-ANA: ……..no…………es solo que……. me da miedo que Eleonor te aparte de mi - mintió, yo lo sabia y ella sabia que lo sabia.

-YO: Eleonor no tiene poder para apartarte de mí, solo tú puedes evitarlo - nuestras miradas se cruzaron fuertemente, hasta que Ana la apartó mirando al suelo, se secó las lágrimas, besándome se levantó y se fue.

Tardé unos minutos en volver adentro, Eleonor ayudaba a Lili a bajar las escaleras, Lili al verme casi se cae por las escaleras, la llevó a la cocina y allí volvió en si un poco, luego nos vestimos seriamente, Eleonor y sus eternos vestidos ceñidos, Lili con vaqueros y camiseta blanca y Ana con unos shorts cortos amarillos y una blusa blanca, no dejaba de acariciar la gargantilla en su cuello, aquella que le regalé en su día y que dijo que era la muestra de nuestro amor. Yo con una camiseta de maga corta y las bermudas veraniegas hasta las rodillas me bastaba, para cuando llegó la abogada el ambiente en el salón era tenso, Lili estaba medio ausente, Ana miraba con odio a Eleonor y esta me miraba con una sonrisa que no denotaba nada, era fría e impenetrable, Eleonor la saludó cordialmente y la invitó a pasar y sentarse delante de nosotros en un sillón junto a una mesa rodeada de sofás donde nos colocamos los demás, iba arreglada, como abogada que era, con un traje de mujer, azul marino, con camiseta blanca algo escotada, chaqueta y una falda de vestir hasta la rodilla, con unos zapatos altos, fue sacando papeles hasta que haciéndole un gesto a Eleonor indicó que ya estaba todo.

-ELEONOR: bien, siento la intriga del momento, lo 1º es confirmar que por fin, soy la dueña y propietaria de todos los bienes de mi ex, el último el piso de Tokio, así como de sus cuentas bancarias, salvo una que no puedo tocar, de la cual se irá dando el dinero que a mi ex que le corresponde según el juez, todo es mío.

-YO: felicidades, os ha costado eh….- le guié un ojo a la abogada, que sonrió apenas un segundo, miré a Eleonor- ….. ahora podrás invitarme a unas copas……….. - la broma cayó en el silencio, todos parecían saber algo horrible que yo desconocía.

-ELEONOR: y para más que tengo, pero vamos por partes, y déjeme acabar… - su tono fue serio, el que la había oído jamás - lo 2º es que ahora que tengo todo, he decidió sobre a quien conceder mis bienes, casi todo irá para mi y mi hija, como os dije, mi intención era dar este ático a Raúl……….pero he cambiado de idea, ahora el piso es mío.

-ANA: ¡¡¿que?!! ¿¡¡¡Como eres tan zorra!!!? - Ana se puso en pie gritándola.

-ELEONOR: y no solo eso, si no que os voy a echar de aquí….- sonrió con seguridad, me miraba buscando algo, alguna reacción, algún gesto, pero solo obtenía atención.

-ANA: nos dijiste que nos darías el piso, me dijiste que si……-rectificó-…….que era nuestro.

-ELEONOR: digo muchas cosas mi niña, pero ahora tengo el control yo, y pienso tomar lo quiero - Ana me miró atónita.

-YO: me parece justo, en el fondo es tuyo y tienes el derecho a decidir, ¿cuando nos tenemos que ir? - mi reacción la sorprendió, le pidió a la abogada la carpeta con los papeles y me los dio.

-ELEONOR: no es una broma, mira, el piso está a mi nombre - cogí y pase las pagina lentamente leyendo atento partes importantes, miré el nombre del titular del piso, sonreí, lo cerré y se lo devolví.

-YO: están perfectos, y no los cuestiono, como digo, eres la dueña, ¿cuando nos tenemos que ir? - de nuevo suspiró de impotencia, esperaba una reacción en mí que no obtenía.

-ELEONOR: no quiero que os vayáis….. - fingí sorpresa, no era nada difícil adivinar que quería Eleonor, me quería a mi, y si tenia que chantajear con el piso, lo haría encantada.

-YO: entonces ¿por que haces esto?

-ELEONOR: por que te quiero, y deseo que seas mío.

-ANA: y una mierda “so´ guarra”, ¡¡RAUL ES MIO!! - sonó tan brusco que hasta me sacó una carcajada.

-YO: ya la has oído - me crucé de brazos.

-ELEONOR: sea listo Raúl, podrás quedarse a vivir aquí conmigo y con mi hermana, incluso Ana podrá venir y podrás tomarla cuanto quieras, pero has de cortar con ella, y ser mío, es lo único que pido, te daré todo lo que pidas, pero solo si dejas a Ana - mi granadina la miraba con furia, con la boca abierta y apunto de echarse encima de ella.

-YO: una oferta así solo un loco la rechazaría……- aludiendo a cierta película, Ana me miró consternada- ……pero la respuesta es la misma, Eleonor, no te amo, nunca lo haré y esto solo sirve para que el poco cariño que te tengo, se esfume, ahora mismo prefiero estar solo que contigo y tu dinero, si tengo que irme con Ana debajo de un puente, lo haré……… - Ana clavó sus ojos en mi con orgullo, y se cruzó de brazos ante Eleonor-…… bien, ¿cuando nos vamos? - me puse en pie para iniciar cuanto antes la salida de allí, Eleonor puso cara de disgusto, pero aun tenia un AS en la manga.

-ELEONOR: bien, no quería llegar a esto, pero suponía que no aceptarais por el amor que le procesas a esta……. niña, ¿la amas verdad? - el tono era obvio, guiaba la conversación.

-YO: con locura.

-ANA: y yo a él.

-ELEONOR: ¿y no hay nada que pudiera hacer que dejaras de amarla?

-YO: tú no, solo ella – agarré de la mano a Ana, ignorando a Eleonor - este es el momento, ¿tienes algo que decirme?, no podré hacer nada de aquí en adelante - Ana me miró sollozando, miró a Eleonor de reojo.

-ANA: nada.

-YO: Ana, ¡¡por favor!! - apreté su mano.

-ANA: te lo juro, no es nada………- esta vez fui yo quien soltó una lagrima.

-ELEONOR: ¿seguro?... - prosiguió con su estudiado dialogo mientras Ana lloraba mirándome a los ojos, sentía mi rabia y mi dolor, pero no sabia cuanto -……. por que tengo aquí en el portátil unos videos muy llamativos - Ana la perdonó la vida con la mirada.

Nos puso el portátil delante, me enseñó videos, videos de Ana, videos de Ana con otros hombres, teniendo sexo oral, y alguno con penetración, se notaban que eran videos a escondidas, mal grabados sin consentimiento, pero se veía a Ana, llorando mientras se dejaba follar por uno o por varios hombres distintos. Cuando terminaron los videos Ana rompió a llorar desconsolada, gritaba y chillaba, maldecía a Eleonor y se volvió hacia mí, admirando mi frío y serio rostro.

-ANA: no es lo que piensas amor, te lo juro, ella me obligó…….- señaló a Eleonor que admiraba la escena con gesto altivo.

-ELEONOR: yo no te obligué a nada cariño…….

-ANA: si, me ofreciste dinero, me dijiste que así pagaría mi universidad, que ayudaría a mi familia, que tendría dinero para cuidar de Raúl, me has dado mucho dinero por acostarme con esos hombres, dinero y promesas de este piso que ahora has incumplido - sus gritos entre sollozos penetraban hasta el oído interno.

-ELEONOR: yo solo te ofrecí el dinero, tú lo aceptaste…… - se giró hacia mi -….. ¿lo ve Raúl?, no te quiere, solo se aprovecha de ti, como lo hacia de mi, es una puta, cara, pero una puta, me ha costado mucho dinero pero te lo he demostrado - todas las de la sala me miraban en silencio, solo las lagrimas y sollozos de Ana rompían ese momento.

-YO: tenías que habérmelo dicho Ana, te lo dije, si me lo hubieras dicho le hubiéramos desplumado hasta el último euro, ¿por que no me lo has dicho?

-ANA: lo siento amor mío, se que hice mal, pero pensé que no te gustaría, que me rechazarais solo de decírtelo, no sabia como reaccionarias, tenia miedo y necesitaba el dinero, mi familia no es rica y la universidad es cara…….- se sentó a mi lado tirando de mi cara, me negaba a mirarla directamente.

-YO: eso me duele aun más, Ana, que no me conozcas lo suficiente como para no confiar en mi, yo me acuesto con varias mujeres por que tú me dejas, no me hubiera importado, o lo habría sabido llevar, pero tuviste que ser sincera conmigo, te lo dije antes y te lo dije cuando regresaste de Granada, pero no me has hecho caso………..- me levanté dirigiéndome a la puerta, Ana quedó sentada llorando sobre un gran cojín, Lili admiraba la escena sin llegar a comprender del todo lo que ocurría y Eleonor se me acercó como una serpiente.

-ELEONOR: ¿lo ve?, todo es mentira, ella no te quiere, no como tú a ella, pero yo si, mira de lo que soy capaz de hacer………..por ti - me giré con rostro feroz.

-YO: ¿por mí? ¡¡¿POR MI?!! Esto lo has hecho por ti…… - la señalé con ira, con tal energía que dio un paso atrás -…… ¡¡POR TI!! Me deseabas, solo tenias envidia de lo que Ana y yo teníamos, ya te dije que no era tuyo, que no lo podías tomar, y aun así nos has destrozado la vida, eres una arpía cruel que odio.

-ELEONOR: se que duele, mi amor ……- solté un bufido al oírla esas palabras, trató de agarrar mi rostro - …..pero con el tiempo se pasará, será solo un recuerdo del que nos reiremos en el futuro, si te place se puede quedar con nosotros, ¿verdad? - miro a Ana buscando ayuda.

-ANA: si……….lo que sea, me apartaré………. pero déjame permanecer a su lado - imploraba entre lagrimas.

-ELEONOR: claro que si, ¿que dice usted?

-YO: me da igual, me marcho de esta puta casa, quédatela, y quédate con la loca de tu hermana, y con Ana, con tu dinero y tu mísera vida llena de lujo.

-ANA: por favor Raúl, piénsalo, podemos seguir viviendo juntos y felices aquí, hazla caso……

-ELEONOR: no se irá, te ama, se quedará aquí………..- se pensó otra amenaza-………. y si no es por él será por ti, si se va, echaré a Ana de casa, y la demandaré hasta sacarla el último € que la di, y más aun, arruinaré a su familia si hace falta, me da igual todo, será mío de una forma o de otra, quédate y no la haré nada - me tensé como nunca, si no hubiera sido una mujer la hubiera pegado allí mismo, cerré el puño con energía y me calmé.

-YO: ¿estáis seguras de que queréis hacer esto?

-ELEONOR: SI - asintió con firmeza, miré a Ana.

-ANA: por favor, hazlo, me da igual, que gane, si puedo quedarme a tu lado……..

-YO: me duele mucho Ana, no que te hayas acostado con otros, si no tus mentiras, lo siento, no accederé a esto.

-ELEONOR: lo haré, no dudes de mi, si no eres mío la destrozaré la vida.

-ANA: Raúl te lo ruego, por mi familia……..- se arrodilló en el suelo.

-YO: no seré tuyo nunca Eleonor, pero no puedo dejar que la hagas daño, te lo advierto, si sigues adelante será peor para ti, sabes de lo que soy capaz.

-ELEONOR: lo sé, y aun así me arriesgaré.

-YO: última oportunidad, por favor, te lo pido desde el fondo de mi corazón, para esto.

-ELEONOR: ya esta hecho - agaché la cabeza rendido, rojo de rabia, dolor e ira, cerré ambos puños hasta hacerme daño en las palmas.

-YO: esta bien, pero recordar que todo esto, es culpa vuestra……- suspiré -……Isabel ……..- alcé una mano llamando, las 3 se miraron extrañadas, la abogada se puso en pie y se acercó a mi, la rodeé con el brazo y la di un beso pasional y grotesco, obligando a doblar la espalda, su falda corta de vestir la impedía los movimientos -…….. bien, empecemos, esta es Isabel, me la estoy tirando desde hace 4 meses.

-ANA: ¡¡¡serás cabrón!!!

-YO: cállate, tú te has tirado a todos los mierdas que Eleonor te ha puesto en la cara, y desde antes de las fechas de los videos de Eleonor - la verdad la cerró al boca.

-ELEONRO: bien, te tiras a mi abogada, nada raro, ¿y que? - sonreí con fuerza, mientras Isabel, la abogada, me acariciaba el pecho.

-YO: me ha estado informando de todos tus movimientos, Eleonor, de todos - se quedó blanca.

-ELEONOR: ¿de ……de todos? - caminó hacia atrás hasta sentarse.

-YO: de todos, de hecho, ¿te has molestado en leer la cesión del piso que me has dado firmada por ti?

-ELEONOR: no, yo solo lo firmé y…………..- sintió terror al comprenderlo, cogió la carpeta y se puso a leer en voz baja - …….El estado, por orden de Eleonor xxxxxx.xxxxxxxxx, en pleno uso de sus facultades le cede la propiedad del piso xxxxxxxxxx en la calle xxxxxxxxx desde el día xxxxxxx a …..- aumentó el tono de su lectura - ¡¡¡¡RAÚL XXXXXXX XXXXX!!!!! ¿¡¡pero como has podido?!!

-YO: el como no lo sé, eso fue cosa de aquí mi amiga - abracé ladeando a la abogada.

-ISABEL: en realidad es fácil …..- sacó una grabadora y al ponerla se oyó la voz de Eleonor dando el lacrimógeno discurso el día que Ana le pidió nuestro piso -…..entre esto, y el papeleo inicial que se inicio ese día, todo ha ido seguido, el estado no hace preguntas.

-ELEONOR: ¡pero te fui a ver, te pedí que cambiaras la propiedad a mi nombre……! - la interrumpió.

-ISABEL: si, además me pediste que habláramos a solas, en una habitación apartada y que nadie supiera nada……- el rostro de Eleonor era indescriptible -……te faltó firmar en blanco, que tonta.

-ELEONOR: ¡¡¡pero no puedes hacer eso, eres mi abogada!!!

-ISABEL: si, por lo tanto nadie se cuestionará nada, incluso lo dijiste delante de otro abogado del bufete la 1º vez, que me confirmará tus palabras, fue sencillo, estando ya advertida por Raúl solo te puse un papel delante y lo firmaste sin leer, a escondidas y sin testigos jajajajajaja - era tan despiadada en los juicios como en la vida real.

-ANA: pero eso es imposible - replicó ella por que a Eleonor no le salían las palabras - ¿como podías advertir a la abogada antes de que hiciera el cambio? - sus palabras hicieron retomar el hilo a Eleonor.

-ELEONOR: eso, no se lo dije a nadie hasta ahora, ¿como podías saberlo?

-YO: en eso tenéis razón, es imposible que lo supiera, nadie podría sospechar nada, ahora mismo estaría en tus manos………….nadie lo vio, ni siquiera yo……nadie…..salvo mi madre …..- me miraron como si estuviera loco - ….. mi buena señora madre en Navidades me advirtió, me dijo que se olía algo, deseché la idea, no podía entender que me la fuerais a jugar, pero mi madre nunca me había fallado, así que el día que volví de su casa, que follamos hasta el alba, bajé por la mañana mientras dormíais, fui a mi cuarto, recogí parte del equipo de espionaje que usé con el ex de Eleonor, y puse un par de cámaras y micros por la casa, nada ostentoso, solo por si acaso, si no había nada seria la confirmación de que mi madre se equivocaba, pero esta vez, para mi desgracia, no fue diferente - me acerqué al mueble de la entrada y saqué uno de los micros de debajo de un jarrón decorativo, enseñándoselo.

-ELEONOR: pero entonces……..lo sabes………..todo - se tapó la boca abstraída.

-YO: todo, desde tu llamada a la abogada hoy para montar el circo y tu plan maestro, no debiste traerla para hablar con ella, como has manipulado a Ana desde el día que puse micros para que cediera a tu dinero, supongo que desde antes de grabaras por como discutíais por que la pagaste para que empezáramos a acostarnos contigo, ya me olía que andabais aliadas, pero no sabia hasta donde, cada grabación me iba llenando de ira, si, lo tengo todo, hasta como llamaste para ofrecer 3 millones de € por Ana en nuestro viaje a Egipto, fingiendo ser un jeque, ¿que esperabas? ¿Que aceptara la oferta o que algún pobre desgraciado la secuestrara para vendértela y luego abandonarla?..... – Eleonor se echó a llorar mientras que Ana la miró asustada - ……he esperado pacientemente, no se si para saborear mejor este momento, o con la esperanza de que abandonarais esta locura, y de que Ana me revelara sus infidelidades, verla como se la follaban los tíos que traías cada noche de fiesta me partió el corazón ……..- empecé a llorar mirando a Ana - ……..pero ver como se vendía para que la follara el cerdo camello de Lili, ese tío que nos daba asco a todos, eso me mató - Ana rompió a llorar, seguro que recordando cada momento que sintió a ese cerdo follándosela medio drogado.

-ANA: yo………….

-YO: tú nada, ¿cuanto dinero la has sacado?, espero que traicionarme así, y sobretodo venderte de esa forma, te haya sido lucrativo, ¿como?, ¿como pudiste ceder ante el camello drogado de Lili?..............ahhhhhhhhhhh si, se me olvidaba, ¿Lili?, ¿o Carolina?........- la cara de Lili se sumó al horror de las demás -……….. si, Carolina xxxxxxx xxxxxx, natural de Colombia, y del barrio en que naciste Eleonor, la abogada me contó que tu hermana falleció de sobredosis a los 21, y que toda la historia de tu pobre hermana y el circo del aeropuerto, todo era un montaje para darme pena y forzarme a ayudarte, ¿Cuánto te costó el pariré del avión y la policía en el aeropuerto privado? ¿Quien es en realidad? ¿Una amiga de tu infancia o solo una puta que contrataste?

El silencio llenó la sala, los llantos de Ana se agotaron y Eleonor y Lili, (o Carolina), se quedaron blancas, mientras Isabel me besaba el cuello de forma lasciva ante los ojos de las demás. Isabel había sido sencilla, desde que destapé al ex de Eleonor me dio su numero, y pasé de ella hasta que vi el 1º vídeo de Eleonor chantajeando con dinero a Ana, entonces cogí su numero del cajón y la llamé para quedar un día en su despacho, no hizo falta más, según llegué me llevó a un archivo cerrado con llave y allí mismo me besó, con lujuria al ver mi rabo tieso, se lanzó a chuparlo, casi ni le entraba en la boca mi glande, la alcé y la pegué de cara a la pared, la levanté la falda lo justo para echar sus bragas a un lado y penetrarla el coño con fuerza, ella misma se tapó la boca para no gritar, sollozaba al sentir la fuerza de mis embestidas, y para asegurarme un control total, a los 20 minutos y después de 3 corridas suyas, saqué a la bestia que desató hasta levantarla por los aires con cada golpe de cadera, gritando sin reparo alguno, para cuando me corrí Isabel ya era mía, “avísame con cualquier cosa que haga Eleonor y volverás a sentirme entre tus piernas, haz lo que te diga y te follaré cuando quieras, intenta engañarme y me iré para jamás volver.”, asintió entre temblores, desde ese día me llamaba avisándome hasta del detalle más obvio y tonto, alguno se los inventaba o los repetía, solo para volver a follar conmigo, pero para tenerla contenta acudía encantado, más de una vez al ir a hacer ejercicio por las mañanas iba a su oficina, o me recogía en el coche para ir a su casa. Era una mujer rubia de pelo rizado y corto, apenas le llegaba a los hombros, con los ojos color marrón, de unos 34 años, buen tipo, con un trasero de calidad y tetas algo pequeñas, su forma de vestir con faldas y de traje siempre me excitó, pero una vez que era mía me desahogaba con ella, cada vez que iba a casa y tenia que actuar con Eleonor o Lili, hasta con Ana, trataba de llevarlo lo mejor que sabia esperando que todo pasara de largo, que fuera un arma que nunca querría usar, pero no me habían dejado, al final quisieron llegar hasta el final, y gracias a la advertencia de mi madre, ahora tenia el control.

-ELEONOR: es una vieja amiga de mi hermana, fue la que estuvo con ella………… hasta que murió, le debía sacarla de allí, al menos eso.

-YO: me alegro por vosotras, ahora, quiero que sepas que tengo montones de cintas de viendo y audios sobre nosotros, con pruebas para encarcelar a Lili, o como coño se llame, por consumo de drogas, a ti por estafa, ofrecer dinero por otra persona o suplantación de identidad a la seguridad social, elige o todo junto…….. - temblaba ante mis amenazas veladas -…… aparte de horas y horas de sexo salvaje conmigo y con otros hombres, que sin ser legalmente denunciable, destrozarán tu cara publica, incluso puede que tu ex quiera usar algo contra ti para recuperar ciertas propiedades………- Eleonor bajó los brazos derrotada, había jugado con fuego y se había quemado.

-ELEONOR: ¿Qué es lo quieres? - asumió que era dinero.

-YO: lo que yo quería era vivir feliz con Ana, y me daba igual donde, pero ahora no lo podré tener.

-ANA.: ¿por que no?, ahora la casa es tuya, podemos ser felices juntos, echarlas y será nuestra casa - planificaba alegre poniéndose de pie, viendo una rendija de esperanza, pero la eché una mirada que la fulminó, viendo como las lagrimas me llenaban los ojos.

-YO: ojalá pudiéramos, te he dado la oportunidad todo este tiempo…………. si me lo hubieras contado…………incluso ahora, antes de ver los videos, te hubiera perdonado, te amo tanto que me hubiera dado igual, pero no has podido ser sincera conmigo, preferiste mantener y vivir en la mentira hasta el final, antes que confiar en mi y ser sincera, ya no confío en ti, y tendré que aprender a dejar de quererte.

-ANA: Raúl, por favor, te quiero……….- la corté dejando de mirarla.

-YO: ahora lo que ordeno es que hagáis el equipaje, y os llevéis vuestras cosas cuanto antes, Eleonor puede llevarse a Li…a esa, consigo a cualquiera de sus casas, no quiero volver a verlas nunca, y si quieres seguir manteniendo tu posición, seguirás pagando los gastos de esta casa, comunidad, seguro de hogar y desperfectos, ninguna locura para ti, yo ya se cuidarme solo, no necesito tu asqueroso dinero así que no temas chantajes en adelante, a Ana la dejarás en paz, creo que te ha sacado suficiente dinero para pagarse los estudios donde quiera, y no tomarás represalia alguna sobre ella o seré yo quien te hunda la vida a ti. Si sigues estos pasos, no volverás a saber de mi, ni yo de ti, es lo mejor para ambos, si no lo haces despídete de todo ¿queda claro?

-ELEONOR: como el agua………….pero podríamos………

-YO: no, se acabó, búscate a otro imbécil que te folle - se levantó y se fue al piso de arriba, con Lili/Carolina detrás, que permaneció callada a riesgo de meter la pata y que la repatriaran.

-ANA: ¿y nosotros? - preguntó con miedo.

-YO: no hay un nosotros, lo dejamos aquí y ahora, preferiste el dinero a mi, así que coge todo ese dinero que con tanto esfuerzo te has ganado, y lárgate de mi vista, ni se te ocurra intentar ir al piso de estudiantes, no te quiero volver a ver en mi vida, seguro que con unos incentivos puedes volver a Granada y matricularte allí lo que te queda de estudios, supongo que eso agradará a tu familia ahora que ya lo saben y te lo exigieron, pero en el fondo, me da igual, haz lo que quieras, todo, menos ponerte en mi camino.

-ANA: perdóname, por el amor que tenemos – gateó llorando hasta quedar de rodillas cogiéndome de la mano.

-YO: quiero, no sabes cuanto, pero no puedo…….- acaricié su rostro con lágrimas cayendo por mis mejillas.

-ANA: pero yo te quiero………..- fue un lamento entre sollozos, más que un argumento.

-YO: y yo a ti, peque…………………adiós.

Raúl – Caída libre.

Estado de shock, es lo más parecido al estado en que me encontré los días siguientes al momento en que se descubrió todo, y como no, el día siguiente a mi cumpleaños, le estaba cogiendo asco a esa fecha, se descubrió, si, que Eleonor me iba a chantajear para que dejara a Ana con el ático, que Ana se había “prostituido” por grandes cantidades de dinero ofrecido por Eleonor, solo para demostrarme que Ana no me amaba, y que Lili no era la hermana de Eleonor, si no una amiga de su hermana fallecida, caída en desgracia por las drogas. Todo eso, sumado a que yo lo sabia desde casi el principio, desde que mi madre me advirtió, y por puro instinto la creí aun sin aceptar lo que me decía, puse cámaras y micros, lo vi todo, enterarme de que Eleonor le compró a Ana el derecho a follar conmigo desde el 1º día, de su treta con Lili para generarme una dependencia a mi que me obligara a ocuparme de ellas, de tomar a su abogada para poder esta bien informado de todos sus pasos……….Cada día, viviendo bajo el mismo techo de 3 mentirosas, manipuladoras y egoístas mujeres. Las “Hermanas” colombianas me importaban una mierda, la verdad, salvo sexo no me aportaban nada, pero Ana…..

Ana era otro tema, realmente la amaba, y solo por ella me mantuve en silencio, tenia las sartenes por el mango, habían estando jugando una partida de póker entre ellas sin darse cuenta de que yo tenia la mejor mano, y aun así aguardé, manteniendo una fachada tan falsa e hipócrita como las suyas, en el fondo de mi corazón esperaba un final diferente, que Ana se derrumbara, que me lo contara, que fuera sincera y me pidiera perdón, pero cada día que pasaba la mentira se hacia fuerte, y a mi me dolía, hasta el punto en el que cuando nos fuimos al piso de NY, planeé revelarlo todo, contárselo a Ana y ver la reacción, tenia tanto miedo a perderla que estaba dispuesto a descubrir su mentira solo para que supiera que la perdonaría, que me daban igual sus infidelidades, que la quería hasta el punto de ser el calzonazos que la seguiría hasta el fin del mundo. Pero la rabia y el orgullo me habían puesto un limite, el sonido de mi corazón al quebrarse viendo la 1º sesión de sexo con uno de los hombres maduros que Eleonor se traía a casa, y escuchar que no era la 1º vez que lo hacia, forzó una marca en mi mente por la que ella debía pasar, tenia que ser sincera y contármelo por propia voluntad, solo así podría volver a amarla sin reservas, pero no lo hizo, pese a mis intentos tenues u otros obvios. Cuando regresó de Granada y tardé unos segundos en salir del coche en el aparcamiento, lloraba, al igual que cuando se lo pedí en la piscina horas antes de la llegada de la abogada, y me quedé fuera llorando al ver su tozudez. Guardaba silencio y con el paso del tiempo se me hizo fácil no quererla, como el final de una pila en una linterna encendida, parpadeaba hasta que se apagó, con todo perdido sabiendo que Eleonor me iba a enseñar su traición en unos instantes, se negó a decírmelo, prefería vivir en su mentira unos segundos más que ser feliz conmigo con la verdad, y si esa era su decisión, yo no podría hacer nada, nada salvo intentar dejar de amarla.

No recuerdo bien del todo esos días, se que esa noche la pasé discutiendo, o más bien siendo increpado por Ana, que en vez de mostrarse avergonzada, era un volcán de rabia e ira, trataba de darle la vuelta a la situación de mil maneras, buscando algún argumento lógico, o no, por el que yo estaba equivocado, al principio buscaba mi perdón, al final, cuando mi pasotismo la enfadó, me echaba la culpa de todo a mi, que la obligaba a ser mi novia y aceptar que follara con otras, y que no lo había soportado, visto ahora, quizá tuviera razón, no lo sé, Lara, Alicia, Eleonor, Lili, todas las mujeres que iban detrás de mi…… y ella lo tenia que sobrellevar, pero cuando un hombre se fijó en ella, el profesor de la universidad, monté en cólera……..si, es posible que hubiera sido injusto con ella y que no fueran las bases de una relación normal y saludable, pero tenia 19 años, y era el amor de mi vida, un millar de sensaciones me nublaban, ella manipulaba para ponerlas a mis pies ¿como se atrevía a echármelo en cara?, no era del todo consciente de sus sentimientos, y puede que por el hecho de que me los ocultara, hubiéramos acabado así. De todas formas cuando la veía llorando y gritándome por la habitación, solo pensaba que era un berrinche, palabras vomitadas por la ira y la impotencia. Llegó a amenazarme, con no alejarse, con seguir cerca de mi y hacerme la vida imposible, manipularía, mentiría, no me dejaría vivir en paz, “si no eres mío no serás de nadie”, aseveró con frialdad, usaría a mi familia y a la suya, le daba igual todo, gritaba que me amaba tanto que no me dejaría nunca.

No se si me quería o era solo por arrebatarle algo que creía suyo, pero tuve que ponerme duro, sin alzar la voz ni ponerla una mano encima, mi tono se puso rudo y firme, la hice ver que no podía hacer otra cosa que hacerme caso, alejarse de mi, tenia videos de ella aceptando dinero por follar, aparte de ser un delito, nada me impedía, si me provocaba, subir los videos a Internet, y enseñárselo a todos sus amigos, amigas, la universidad, su familia….¿que opinarían sus parientes gitanos de aquello?, eso la derrumbó, soltó toda su rabia en un sollozo sin fin, comprendió que si quería, si me daba motivos, la destrozaría la vida, era una brillante estudiante, muy inteligente y con una gran carrera en lo que le diera la gana, pero un escándalo como ese la hundiría, mi interpretación fue colosal, se creyó que seria capaz de eso, y hasta puede que si Zeus aparecía, lo hiciera, pero no Raúl, no le haría eso, solo la dejaría pensar que si, desde ese momento Ana cambió su amor por odio, poco a poco, hasta que la apatía la envolvió.

Hay un dicho que circula a raíz de una serie, en el cual se dice “Las mujeres nunca se equivocan, incluso cuando se equivocan, llega un momento de la discusión en la que, sorprendentemente, vuelven a tener razón.”, más o menos es lo que pasó esos días, si Ana era un volcán, Eleonor no os podéis hacer una idea, un agujero negro que absorbía todo a su alrededor, su mirada oscura parecía arrebatar la energía del universo, mientras Lili era como una planta, siempre en 2º plano sin abrir la boca, al 3º día me largué de esa casa, me estaba consumiendo y hasta me veía yo como el culpable de todo, quizá lo era, pero sentía que estaban logrando minarme la moral, y mi férreo carácter no lo permitió.

-YO: cuanto tiempo necesitáis para sacar vuestras cosas de mi casa.

-ELEONOR: ¿ya tiene prisa por echáramos a la calle?

-YO: si, pobrecilla, lo mismo os veo durmiendo en un cajero con unos cartones…- tenia al menos otras 2 casas en Madrid, 7 por el mundo, y una cantidad de dinero que calculé ente 500 y 700 millones de €, sin contar propiedades, su ex marido fue muy hábil con los negocios, y yo la di todo eso.

-ELEONOR: ¿no se como puede hacernos esto?, yo creía que nos quería……

-YO: yo solo quiero a Ana……- me mordí el labio al recordar - ……..solo la quería a ella, siempre te lo dije, a ti solo te tenía aprecio, además follas bien - mi tono era de sarcasmo hiriente.

-ELEONOR: desgraciado - soltó una bofetada que me alcanzó de lleno en la cara.

-YO: si has terminado, quiero saber cuando os vais, me voy a ir unos días y no os quiero en mi casa al regresar - las palabras “mi casa” le sacaban humo por las orejas.

-ELEONOR: en 1 semana se llevarán todo, y no tendré que volver a verte nunca, de tu niña no se nada, no me habla.

-YO: bien, pues ojalá no volvamos a vernos, por tu bien, ya hablaré yo con Ana, y recuerda nuestro trato - me miró con desesperación.

-ELEONOR: no te entiendo, te ofrecí el mundo…..- solo obtuvo una sonrisa y silencio.

Estoy seguro de que cometí un error monumental, sin Ana de por medio solo tenia que irme con Eleonor, y vivir quemando su dinero el resto de mi vida, y aun me sobraría para 3 vidas más, el sueño de todos en realidad, vivir como un rey sin dar palo al agua, o ni siquiera eso, si detestaba a Eleonor no tenia que ir con ella, podría chantajearla de por vida, pero no me habían educado así, para lo bueno y para lo malo, tenia un estilo de vida, un carácter, un honor y un orgullo inamovibles, ”estúpidos ideales”, pensaba a menudo, mi padre tenia la culpa de eso, él y su educación clásica y férrea sobre la integridad y ser un buen hombre. Ahora no solo rechazaba una vida de lujo, si no que perdía a Ana por exactamente lo mismo, ¿los millones o el amor verdadero?, me las había apañado para que ahora perdiera a ambos por mi estúpido orgullo, y aun sabiendo que me arrepentiría, lo hice ¿y eso se supone que era ganar?

Por lo que sé, Eleonor y Lili se fueron un día sin despedirse, yo me fui al piso de la abogada unas semanas, me alojó encantada de tenerme entre sus piernas cada noche, pero tampoco recuerdo mucho de aquello, era una marioneta entre sus manos. Regresé al conocer la partida de Eleonor, vi las maletas y las cosas de Ana en la puerta del piso, siendo recogidas por uno de sus tíos de Granada, reconocí el coche abajo, aquel que con tanta ansia había estado esperando en la mudanza en mitad de la calle, ahora solo era la confirmación de nuestra ruptura, al verme su tío soltó las maletas y fue directo a por mi, me agarró de la pechera y me estampó contra uno de los armarios, si hubiera querido, creo que podría haberlo reducido, le sacaba media cabeza y al menos 15 kilos, pero solo me mantuve quieto, Ana apareció corriendo por las escaleras.

-ANA: no, por favor tío, déjale.

-TIO: este mierda te ha hecho daño, si estuviéramos en Granada la ley gitana de tu padre me daría derecho a hundir mi navaja en su vientre - su acento cerrado era evidente, tenia parte gitana, y la verdad, sus ojos me asustaron, parecía dispuesto a hacerlo.

-ANA: pero no estamos allí, por favor, suéltalo………...- no se muy bien si quería protegerme a mi de él, o a él de mi, si seguía azuzándome contra el armario no me quedaría quieto mientras me apuñalan, pero logró que me soltara, cogiera las maletas y saliera del piso amenazándome, por lo visto, si paso por Granada me puedo dar por muerto.

-YO: siento la molestia, creí que ya no habría nadie.

-ANA: por poco, me voy ya, mi abuela me ha dicho que puedo volver a casa, he logrado plaza en la universidad de Granada, por lo visto no hay tantas peticiones como aquí jejeje.

-YO: me alegro por ti, espero que se te de bien el cambio.

-ANA: yo también, no puedo permanecer en Madrid, no con mi familia sabiendo lo nuestro y ahora esto, es lo mejor para todos, ya me despedí de todos, Lara se queda en el piso de estudiantes.

-YO: ¿que es lo que tu familia sabe exactamente?

-ANA: que rompemos, sin más, por que no me he aclimatado bien aquí, y pese a que he tratado de no echarte la culpa de nada por nuestra ruptura, ya ves que no se lo han tomado muy bien, no saben nada más, y creo que no quieren saberlo.

-YO: y así será…… –sin decir nada mi amenaza quedó clara, “así será…..si cumples tu parte”, se separó acariciando la gargantilla que le regalé, aquella que juró ser muestra de nuestro amor, y trató de quitársela, la detuve.

-ANA: es tuyo.

-YO: es la muestra de nuestro amor, quiero pensar que fue real, te pertenece.

-ANA: si, fue real, es real, lo guardaré con cariño.

-YO: entonces esto es el adiós - la abracé con puro sentimiento, sintiendo su cuerpo, sus senos y su olor a coco por última vez, ella me correspondió.

-ANA: no tendría por que serlo…..- susurró en un último intento, me tembló el cuerpo entero, deseando no soltarla jamás.

-YO: lo es, mi pequeña, lo es - nos dimos un último beso, su boca y la mía se juntaron con una ternura horrible, antaño esos carnosos y tentadores labios ahora me sabían a dolor y despedida.

-ANA: adiós amor - sollozó antes de agacharse a coger su bolso, una mochila y se alejó por la puerta.

-YO: adiós peque…..- mascullé entre dientes al ver su figura desvanecerse por el pasillo por mis lágrimas.

Fue la última vez que la vi en persona, mantuvimos el contacto, al principio frío y por terceras personas, nuestras familias ya no eran tan cercanas, dejaron de venir en Navidades y salvo momentos importantes nada nos unía, luego algo más directo con las redes sociales, Ana siguió sus estudios, se sacó un doctorado en ciencias medicas, con algunas parejas eventuales, al par de años se fue de Erasmus por Europa, volvió con un novio Danés, por lo que presumía iba para genio de la medicina, pero dejó sus estudios, su país y su familia para venirse a España con ella, y por lo que sé, aun siguen juntos, desde luego, si fuera Danés, o de otro planeta, y me encontrara a una mujer como Ana y lo bien que hacia el amor, también hubiera abandonado todo para ir tras ella, ¿Por qué, si pensaba así, la dejé irse?. Obligué a Eleonor a borrar todo lo que tenía en contra de Ana, como parte del pacto, y yo hice lo mismo, aunque obviamente Ana no lo supo, no le dije a nadie nada, ni a mi familia, que me arroparon lo que pudieron.

Huía de mi madre, que durante un tiempo me culpó, o más bien se vanaglorió como solo una madre sabe hacerlo después de que el tiempo la de la razón, “ya te lo dije, esto no era buena idea”, después de la fase en que se echaba flores a si misma, llegó el interrogatorio, me conocía lo suficiente como para saber que si me fui con Ana por encima hasta de ella, fue por un fuerte amor, y que si cortaba con ella, era por algo igual de importante, como es lógico no se tragó lo de la aclimatación, aunque de cara a los demás lo aceptaba, sobretodo de cara a la familia de Ana, pero sabia que algo había de fondo, no me molesté en tratar de mentirla, era inútil, así que solo la dije la verdad. “La quería, la quiero y la querré siempre, pero me he sentido traicionado, hasta el punto en que no puedo perdonarla.”, una verdad a medias era mejor que una mentira elaborada, como os dije, mi padre me enseñó eso de mi madre hacia mucho, si ella me conocía, yo igual a ella. Llegado a ese punto, mi madre ya sabia que no sacaría más de mi, sabia que había pasado algo gordo, y sus teorías fueron evolucionando hasta que al final se convenció ella sola de que yo había empujado a Ana a engañarme, por duro que parezca oírselo decir a tu madre, tenia sentido, Ana de cara a todos era un sol de mujer, dulzura y cariño, mientras que a mi ya me había visto con muchas chicas y tenia cierta fama ganada a pulso, era fácil pensar que yo era un mujeriego y las mujeres siempre tienden a 1º pensar mal del hombre que de la mujer, así que yo, de algún modo, lo había provocado todo. La dejé pensar eso, incluso siendo recriminado con su mirada y sus palabras, a mis ojos era mejor que pensara eso, a saber la horrible verdad.

Pasé una semana solo en la casa, no me importa reconocerlo, llorando de rabia, de dolor y de amor, me descubría sentado en el sofá con el móvil en la mano y el número de Ana marcado, pasaba tiempo ausente, tan pronto era de mañana, como al alzar la vista era noche cerrada, dejé de hacer ejercicio y de salir de casa, la compra seguía puntual llegando cada 2 días, y Luz, la criada de Eleonor, fue sustituida por otra, Luz se fue con su señora y a mi me puso a una Rumana, rubia de ojos claros, de unos 30 años, no sabia hablar mucho el español y su nombre me sonaba impronunciable, así que al final acordamos que se llamaba “Dani”, una abreviatura de su nombre. No me molesté en ella, yo era un fantasma que vagaba por la casa, negando lo ocurrido, aquello no podía ser real, no podía estar pasando, incluso falté un par de días al trabajo, aludiendo un resfriado, pero en realidad estaba descompuesto por dentro, sentía un dolor agudo en la boca del estomago que subía hasta el pecho, apenas comía nada, y las pocas veces era cuando pasaba por casa de mi madre, obligado por ella, descuidé mi imagen, la barba era poblada y el pelo de mi pecho creció un poco. Al enterarse de la ruptura, sin detalles, Teo, Manu, Alicia o Lara acudieron a distraerme, Lara fue con intenciones claras de aprovechar la salida de Ana para ocupar su lugar en mi lecho, aun sentía algo por mi, pero al ver mi estado se le pasaron de golpe.

Mi madre, preocupada, llamó a Irene, mi 1º novia, por alguna razón seguían manteniendo una buena relación entre ellas al margen de mi, fue agradable volver a verla, y fue de las pocas que entendió por lo que estaba pasando, incluso Teo o Alicia, que habían cortado una larga relación hacia poco, no terminaban de comprenderme, aquello había sido amistoso y de mutuo acuerdo, lo mío fue un corte de raíz obligado por mi parte. Hasta Eli me llamó consternada, ni sabia como se enteró, pero nada me consolaba, o me hacia reaccionar, pasaba los días recordando a Ana, si, el sexo había sido genial, la 1º vez en Navidades, desvirgarla, la larga espera a su regreso, volver a tomarla, el fin de semana en el hotel de la sierra, el vestido negro, los corpiños elásticos, follárme su culo, ver como cada día mejoraba en el sexo, la inclusión de Lara, Eleonor, los aceites, sus labios, su larga melena y el olor a coco, si, todo aquello me pasaba por la cabeza, pero eran aquellos momentos dulces los que me hacían temblar de emoción, las primeras veces que dormimos juntos haciéndome el dormido mientras ella, inocente, se metía mi polla entre los muslos para buscar mi calor, los paseos por el parque, sus abrazos largos al encontrarnos después de mucho tiempo, su forma de agarrarse a mi brazo cuando tenia frío, como me comprendía casi sin mirarla, como llegó a conocerme mejor que yo mismo, y yo a ella. Todo para nada, ahora apenas eran recuerdos a los que me aferraba, todo eso me enfadaba, tenia ataques de ira, destrocé un sofá a puñetazos y patadas, hasta que me hice daño en una pierna.

Pasados unos días volvía a negar la situación, pero ahora realmente calculaba y pensaba, si llamaba a Ana podría volver con ella, estaba seguro, si le ofrecía volver y seguir donde lo dejamos, o puede que si Eleonor aun estuviera enamorada de mi le pudiera negociar unas condiciones para volver a sus brazos, pero todo eran elucubraciones en mi mente, nada reales o plausibles, lo había tirado todo por la borda, cuando comprendí el fracaso de mis acciones, que bien o mal intencionadas, me habían llevado a ese punto, simplemente me desvanecí, como un azucarillo en el café, caí en una depresión tan estúpida como real, nunca entendí a los que se deprimían, mi carácter, pese a malos tiempos, siempre era en contra de esa afección tan inútil, pero allí estaba, sentado delante de una TV apagada viendo mi reflejo, el de una persona deprimida y sola, era yo, comprendiendo que había perdido al amor de mi vida por mi vanidad. Mi padre insistió en que acudiera a un psicólogo, pero no me hacia falta, sabía perfectamente que me pasaba, había leído suficiente como para saber que estaba pasando por las fases de de una situación sin control, negación – ira – negociación - depresión, solo me quedaba el último paso, la aceptación, y no necesitaba a un charlatán que me cobrara 200€ la hora para saberlo.

1 mes desde que Ana se marchó, me di una ducha fría que reactivó mi cuerpo, me planté delante del espejo con la maquinilla de afeitar y me di un buen repaso a la barba, era larga y espesa, con restos de comida y sarpullidos que siempre me salen cuando me la dejo larga, herencia de mi querido padre, el after safe me hizo soltar un grito de escozor, me dejé el pelo del pecho, me gustó como quedaba, sin ser tupido me parecía atractivo. Me puse algo de ropa de deporte que me quedaba justa, había ganado volumen por la vida sedentaria que llevaba, y salí a correr, odio correr, incluso cuando lo hacia a diario llevado por la dopamina del cerebro, el simple hecho de dar vueltas corriendo sin un objetivo más allá que el de correr, siempre me pareció estúpido, pero era mejor que quedarme en casa lamentándome de mi mierda de vida, lo hice sin cronometro, sin aparato de música, ni pulsómetro, ni mirando una ruta en el PC, no me marqué metas, ni puse un tope estudiado, simplemente, corrí.

1º mi calle, la manzana, acudí a un parque cercano, lo atravesé, llegué al Manzanares, lo crucé, seguí corriendo hasta llegar a la casa de campo, no se como, debería de estar echando los pulmones por la boca de la inactividad, pero me sentía muy pesado y solo seguir corriendo parecía hacerme ligero, cada vez que mi cuerpo se resentía me forzaba un poco, sentía que si paraba me volvería a encerrar, la oscuridad me seguía y si paraba me alcanzaría, tenia que soltarlo todo y seguir corriendo. Lo hice 14 kilómetros, hasta llegar a las afueras de Madrid, temía acabar como el pobre Forrest Gump y dar vueltas por España con una legión de seguidores subnormales sin nada mejor que hacer, pero no, llegando a la zona militar de la carretera de Extremadura, mi cuerpo dijo basta, caí sobre una barandilla en un paso elevado de peatones y vomité varias veces, me ardía el pecho y mi estomago parecía de lava, me senté en el suelo tratando de no perder la consciencia, volví a vomitar, todo eran restos de pizza, hamburguesas y comida basura, todo de un color anaranjado de los ganchitos de queso en que se había basado mi dieta esos días, y me quedé así, tirado en el suelo al lado de un charco asqueroso de los restos de mi estomago, mirándolo atónito como si eso no fuera mío. Alcé la vista al ver como un coche militar se paraba a mi lado, y salían un par de hombres uniformados, al verme me atendieron amablemente, no lograba soltar palabra alguna, así que me metieron en el coche y me llevaron al interior de la casa del aire, ubicada por esa zona, me llevarían a la enfermería y me dejarían allí, lo imagino por que no lo recuerdo, me dormí, creo que me dieron algo, pasaron un par de horas hasta que me desperté en una camilla de la enfermería, estaba totalmente solo, oía de fondo algo de ruido y palabras entre susurros, al moverme tiré de un cable y una maquina empezó a pitar, el sonido era irritante, pero enseguida acudió una enfermera a apagarlo y ponerme la mano en el pecho.

-ENFERMERA: tranquilícese, no se mueva, aun esta muy débil.

-YO: ¿donde estoy?

-ENFERMERA: esta en la enfermería de la base de entrenamientos del ejército del aire, dígame, ¿como se llama?

YO: Raúl xxxxx xxxx

-ENFERMERA: y dígame a que día estamos - dudé, realmente no lo sabia, llevaba semanas sin mirar el calendario, sin darme tiempo a responder me abrió los párpados y me enfocó con una luz.

-YO: mediados de septiembre, no lo se exactamente, ¿que me ha pasado?

-ENFERMERA: los del puesto de guardia de la entrada te vieron en el suelo, vomitando y desorientado, te han traído aquí, has sufrido una deshidratación grave, te hemos puesto un suero y algo para estabilizarte, tenias el corazón a punto de reventar - me recosté ahora más tranquilo.

-YO: dios, lo siento, estaba……- tenia la boca seca y no me salían las palabras.

-ENFERMERA: ¿corriendo?

-YO: huyendo.

-ENFERMERA: ¿de que? si puede saberse

-YO: de mis propias decisiones….. – soltó una carcajada.

-ENFERMERA: eres demasiado joven como para tener decisiones de las que huir así - por fin pude enfocar los ojos, vi a una enfermera rechoncha, morena y con un par de tetas que resaltaban debajo de la bata, con gafas y la cara redonda, ocultaba su mirada en unas gafas de contacto, no debería de pasar de los 28 años.

-YO: pues así es, ¿tienes algo de agua? Estoy seco - cogió un vaso una jarra de una mesa al lado de la camilla, bebí tanto que hasta ella me quitó el vaso de la mano.

-ENFERMENRA: tranquilo, no te pases, no es bueno para tu estomago, ¿como te encuentras? - puso el dorso de una mano en mi frente, y luego me cogió de la muñeca mirando su reloj de pulsera.

-YO: bien, algo mareado y el estomago me ruge de hambre, pero mucho mejor, gracias.

-ENFERMERA: bien, eso es buena señal Raúl……….. - sonrió mirándome a los ojos, eran de un avellana muy tenue -……. y si no es indiscreción, ¿que hace que un joven como tu salga corriendo para terminar aquí, hasta le punto de desvanecerte?

-YO: lo único que hace correr a un hombre, mal de amores………- volvió a soltar una carcajada.

-ENFERMERA: no creo que ese problema te dure mucho - me acarició la pierna por encima de las sabanas antes de retirarse diciéndome que me quedara tumbado una hora, y quitándome un frasco de suero vacío.

Fue entonces cuando me di cuenta, levanté las sabanas y estaba con un bata de la enfermería, SOLO con la bata, sonreí al darme cuenta de que aquellas palabras de fondo y la carcajada de la enfermera tenían un nexo, ya me había visto desnudo y mi polla era demasiado reclamo, aquella enfermera se había mostrado demasiado gentil para ser un desconocido que ha ido a molestar a su trabajo, sonreí levemente, de nuevo me encontraba en la camilla de un hospital, y de nuevo una enfermera me había visto la polla y se mordía el labio cada vez que pasaba por mi lado para preguntarme como estaba, los giros que da la vida me habían devuelto a una situación familiar, desde la que poder renacer cual ave fénix, de golpe lo vi todo claro, como podía haber sido tan necio, no iba a dejar que mi vida se fuera al garete solo por que Ana me hubiera traicionado, fue ella la que decidió, me conocía lo suficiente como para saber que esto pasaría, así que en el fondo no me quería, o no lo suficiente, no merecía más tiempo de luto.

-ENFERMERA: bueno, ¿como vas Raúl? - su contoneo era inusual, poco profesional.

-YO: mucho mejor, gracias a ti preciosa, perdona mi falta de modales, no se como te llamas……- sonrió de forma agradable.

-ENFERMENRA: soy Alba, encantada - extendió su mano la cual apreté con dulzura, pero sin soltarla, dándome un enjuague a menta para el mal sabor de boca.

-YO: eres mi salvadora, Alba, muchas gracias - se sonrojó mientras hacia gárgaras con la garganta.

-ALBA: no es nada, pero has de tener cuidado, no puedes salir a correr así, sin agua y ese moretón en la pierna - lo tenia desde que partí una tabla del sofá a patadas, irrelevante ahora, ella tampoco hacia ademan de apartar la mano.

-YO: si tengo que hacerlo cada día para que me traigan a tus manos, lo haré encantado…..- su risa sonó sencilla y alegre, sentía el frescor a menta en mi boca al echarlo de nuevo en el vaso y secarme con una servilleta.

-ALBA: jajaja no seas bobo, te ha podio pasar algo.

-YO: pero no me ha pasado nada, además, así te he conocido, y te he dado algo de trabajo, ¿esto esta siempre tan animando? - miré alrededor, había otras 7 camas, todas vacías, y salvo alguna sombra tras las puertas del fondo, no había rastro de nadie más.

-ALBA: pues la verdad es que si, gracias a dios solo trato resacas y peleas de bar, y eso los fines de semana, entre semana esta así, estamos solos….- esa afirmación sin ser pedida, era clara, quería que lo supiera, y que me hubiera dado un enjuague era más claro aun, no quería besar con sabor a acetona en su acompañante.

-YO: pues una pena como se malgasta tu talento, eres una gran medico, yo ya estoy como un toro, mira - salté de la camilla y me puse en pie con la bata cubriéndome desde el pecho hasta las rodillas, y mi polla haciéndose notar entre los dobleces.

-ALBA: jajjaja anda, ten cuidado no te hagas daño.

-YO: me siento vivo, podría irme a correr hasta casa, ¿donde esta mi ropa? - sin ningún rubor bajé los brazos y dejé caer la bata al suelo, quedando desnudo ante ella, intentó taparse con una carpeta que tenia en la mano - no seas boba, alguien me ha tenido que quitar la ropa, ya me has visto desnudo, y eres mi medico.

-ALBA: bueno…ya…pero esto es otra cosa, tápate por dios que te vas a coger un resfriado, y de correr nada hasta que esté segura……- me acerqué a ella y la abracé con fuerza de la cintura, la pegué a mi cuerpo de forma que apartó la carpeta, sus senos se elevaron por mi pecho y su mirada se alzó para admirar mi cara - ……¿que…que haces?

-YO: ¿a ti que te parece?, si no me dejas salir a correr, en vez de un resfriado, te voy a coger a ti - bajé mis labios para besarla, no apartó la cara ni por un segundo y al sentir mi boca abrió la suya con gusto, sentir su lengua en la mía me hizo vibrar, soltó la carpeta que cayó al suelo junto a sus gafas y me acarició el pecho y los brazos.

-ALBA: esto no esta bien, no debería….- se calló al ver como mis manos desabrochaban su bata blanca y masajeaban sus senos por encima de una blusa gris, eran realmente grandes, al alzarlos y apretarlos sus labios se mordieron con fuerza.

-YO: te voy a hacer mía, aquí y ahora - la besé con furia, a lo que respondió con pasión, cerrando los ojos y acompasando su cuello con cada embestida en sus labios.

Fui bajando hasta meter mis manos por debajo de la blusa, se abrieron paso hasta su sujetador y acariciaron con suavidad, oyendo sus jadeos, mi polla estaba como una piedra, casi 1 mes sin follar, en secreto temía por lo que iba a ocurrir, me palpitaba en su falda, era larga hasta por debajo de la rodilla, al acariciar su vientre sentía la presión de la tela en su ombligo, sin duda la prenda era una o dos tallas más pequeñas que las que tenia que usar, le sobraban algunos quilos pero no era relevante para mi, era mi pistoletazo de salida. Se arrodilló besándome el cuello, el pecho y acariciando mi vientre marcado de músculos que vieron mejores tiempos, se quitó la bata blanca de medica y agarró mi polla entre las manos, no se sorprendió, sin duda ya la había sentido entre las manos, pero ahora estaba tiesa apuntándola, casi nerviosa le dio un 1º lametón al glande, tiró de la piel de mi polla hacia atrás para descubrirlo entero y ahora si chupar la punta, con más maestría de la que esperaba, fue engullendo mi rabo con ritmo, sus manos permanecían quietas, soportando el peso, dando pequeños lengüetazos al tronco y jugando con mi glande golpeándose la mejilla, sonaba contundente, como un martillo contra un yunque, luego volvía a chupar.

-YO: que bien la chupas Alba.

-ALBA: lo mismo dice mi marido - siguió chupando como si nada.

-YO: ¿estás casada?

-ALBA: claro, mi marido es militar de esta base…….- lamió mi glande mirándome a la cara -….. ¿quieres que pare? - continuó chupándomela, la noticia me pilló en frío, si se enteraba su marido me podían pegar un tiro allí mismo, y mi conciencia no estaba tranquila, pero ya estaba harto de ser un niño bueno, eso me había costado demasiado, y la verdad, me la estaban comiendo de cine.

-YO: continua - sonrió golosa, se hartó de comer polla cuanto quiso, pero sin masturbación, ni siquiera 1 mes después de follar a la abogada por última vez, me sacó un gemido.

La puse en pie, y la volví a besar, la cogí de la blusa y se la saqué por la cabeza, atacando sus senos con la boca, eran enormes, incluso sujetados por la copa de su ropa intima, rebosaban, se las saqué sin desabrocharle el sujetador quedándole por debajo de ellos, y chupé sus enormes pezones rosados con lujuria, mientras mis manos levantaban su falda hasta alcanzar sus bragas, tiré de ellas hasta dejárselas por los tobillos, la agarré del culo y la levanté para sentarla en la camilla, me eché sobre ella trabajándole la tetas mientras ella me aferraba la cabeza contra sus senos, una mano fue a su coño peludo, caliente y choreando, metí mis dedos en su vagina sin piedad, al sentirlo se estremeció, tiró de mi pelo, pero sonreía viciosa, la masturbé frotando su clítoris, haciendo que su cadera siguiera el ritmo de mi mano, gemía levemente mientras seguía comiendo de sus tetas, no daba para tanta carne, cuando 3 dedos la follaban, sentí que ya no aguantaba más, jugué con mi glande en su coño, notando como ella temblaba ante la idea de que mi verga enorme apuntando a su cueva la ensartara.

Sentir la punta abriéndose paso, la forzó a taparse la boca, y menos mal que lo hizo, noté como la iba abriendo las paredes vaginales y ella gritaba ahogada entre los dedos, casi sin poder contenerse, su mano apoyada en mi espalda clavó las uñas con fuerza, mordí ese brazo por que me hacia daño, de inmediato llevó la mano a mi pecho para pararme y luego se tapó la boca con ambas manos, se retorcía mirándome a los ojos con impresión. Yo reía al ver que solo le había metido media polla, pero me fue suficiente, agarrando de su cintura comencé a follarla de forma lenta y suave, sintiendo su calor y la presión en mi miembro cada vez se hacia menor y el ritmo aumentaba, los gritos ahogados pasaron a ser besos lascivos y palabras calientes, gemía de placer al sentirme dentro y cada vez entraba más, sus anchas caderas fueron abriéndose hasta tenerme casi entero dentro de ella por completo, a un ritmo frenético que la tenia en silencio, conteniendo la respiración sujetándose con ambas manos a mi cuello mientras la follaba de forma calmada, a mi Ana o Eleonor eso le parecería un insulto, pero a esa mujer le estaba derritiendo, se puso roja como un tomate y aguantó el aire en sus pulmones hasta que lo soltó con un bufido enorme, se corrió como creo que nunca había sentido, su rostro se dibujaba confuso y tenso, pero se arqueó de espaldas dejando que la oleada de sensaciones la llenara, descansé un poco, ella lo agradeció.

-ALBA: ¡¡¡madre mía!!! ¡¡¡Que bien follas!!! El imbécil de mi marido nunca me ha hecho correrme follándome - jadeaba como hablándose a si misma, jadeando sobre la camilla.

-YO: no te asustes, aun tengo más para ti, tengo la vasectomía hecha, así que cuando te llene el coño de mi semen, disfrútalo con gusto……….- me besó casi sin haber prestado atención, con lengua y de forma voraz.

La saqué de ella, la di la vuelta y la dejé echada sobre la camilla con el culo ofrecido, levanté la falda de nuevo y la penetré el coño desde atrás, soltó un alarido leve, cogió la almohada y se tapó la cara con ella, la agarré de la cintura y la follé a buena velocidad, sacándola varios orgasmos, se retorcía como una anguila al sentir su interior chorreando de sus emanaciones, mientras yo seguía bombeando hasta que 20 minutos después me corrí con una cantidad enorme de semen, el frenesí final la sacó 2 orgasmos seguidos que la hicieron gritar dándola igual quien oyera, sentía los latigazos de mi rabo llenándola, la saqué de ella y seguí corriéndome en su culo y su espalda, ella cayó a mis pies y logró chupar y meterse en la boca las últimas gotas de mi semen, lamiendo mi ya flácida polla hasta dejarla seca, estaba como hipnotizada, con los ojos cerrados y acariciando la parte interna de mis piernas.

-YO: ¿que haría tu marido si te viera así?

-ALBA: nos mataría, seguro, pero me da igual.

-YO: ¿a que hora sales?

-ALBA: puedo irme cuando quiera, solo estaba aquí por ti, duermo en los barracones pero mi marido esta fuera desde hace meses y vendrá en un mes - ahora comprendía su necesidad y lo sola que se debía de sentir.

-YO: ¿que te apetece si te invito a cenar?, tengo hambre, así me llevas a casa y allí terminamos esto - estaba famélico realmente, asintió encantada.

Alba – El ave fénix.

La ayudé a ponerse en pie y metiéndola mano por mil sitios nos dimos una ducha rápida y nos vestimos, cogió su coche y la llevé a un restaurante chino que conocía, cenamos y hablamos, nos conocimos un poco, pero ella no podía apartar de sus pensamientos mi polla, la acariciaba con un pie por debajo de la mesa, jugaba con cualquier elemento de la mesa o comía con una sensualidad hilarante, descubrí que el cerdo agridulce se puede comer de forma sexy. Fuimos dando un paseo hasta mi casa, (que raro sonaba “mi casa”), al ver el edificio Alba reía, subiendo en el ascensor se atrevió a hablar.

-ALBA: ¿vives aquí?

-YO: claro, ¿donde te voy a llevar si no? - no entendía su incredulidad.

-ALBA: pero esto es carísimo ……- su mirada me indignó, pero ciertamente mi forma de hablar y comportarme no eran las de un niño rico, no casaba con el lugar - …….¿vives con ….?

-YO: ahora vivo solo, he tenido una ruptura dolorosa hace un tiempo……...- al llegar arriba la dejé pasar por cortesía, abrí la puerta y encendí las luces, ver su cara fue un poema, admiraba asombrada, como si fuera una cría en una noria, al ver la piscina corrió hacia la terraza, se giró indicándomela - si, ya se que tenemos piscina, vivo aquí, ¿recuerdas?

-ALBA: pero……… ¿eres rico o algo así?

-YO: que va, solo he tenido algo de suerte con……una herencia - se me escapó una carcajada al decirlo, ella ni lo notó, salió disparada a mis brazos, a besarme con pasión.

Me estaba desnudando y antes de darme cuenta la tenia comiéndome la polla, la miré extrañado, “que facilidad para calentarla”, hasta que mi mente quiso darse cuenta, un ático en el centro de Madrid de 2 pisos con piscina en la terraza………..era un “abrepiernas”, yo podría ser el gordo de antaño que solo con la casa ya me follaría a la mitad de las mujeres que entraran allí, y no me había dado cuenta, puede sonar machista o retrogrado, pero comprendí que cualquier mujer que viera ese piso se abriría de piernas tan rápido como la velocidad del sonido, y si es conmigo desnudo, a la de la luz.

Se desnudó también, esta vez por completo, y me hizo una gran cubana con sus grandes tetas, cuando se cansó se puso en pie y agarrando de mi rabo como una correa me llevó a la piscina, aquel lugar tenia algo mágico, nos quedamos en la orilla conmigo masajeando sus ubres con tenacidad, con la polla tiesa de nuevo, se lanzó al agua, y yo la seguí, ya en el agua se pegó a mi cuerpo, sintiendo mi miembro aplastarse contra su vientre, y sus pechos húmedos fueron a mis labios, los chupé y mordí hasta sacarla un gemido de placer, sus manos acariciaban mi torso y mi vientre en busca de mi rabo, que alcanzó sin dificultades y masturbó levemente mientras echaba la cabeza hacia atrás, gimiendo al sentir mis dientes en sus rosados y erectos pezones, al dejarlo llevó sus labios a mi boca, besando con energía, casi me arranca un mechón de pelo de tan fuerte que tiraba, de un salto se acopló a mi cintura rodeándome con las piernas, la sujeté de las nalgas mientras daba vueltas por la piscina, danzábamos al son de una música imaginaria, besándonos con lengua, jugando a ver quien llegaba más lejos.

-ALBA: siempre he querido que me follaran en una piscina.

-YO: pues estas de suerte - agarró de mi cara para volver a besarme, se elevó usando mi cuerpo como ancla y con una mano dirigió mi polla a su coño, fue bajando lentamente hasta sentir como la volvía a abrir, esta vez fue rápido.

Fue bajando lentamente, aguantando el esfuerzo con una cara rígida y bañada en placer, le abrí bien las nalgas para que sintiera cada milímetro penetrándola, cuando casi llegando abajo di un golpe de cintura fuerte que hizo meterla toda dentro, se retorció como una gata salvaje, se abrió de piernas y arañó mi espalda allí donde tenia apoyadas sus manos, pero me volvió a besar y rodearme con sus extremidades.

-ALBA: eres un bestia, que pedazo de polla tienes, no se quien era pero si te dejó escapar es una imbécil - sus palabras, queriendo ser de animo, me llenaron la mente de recuerdos, en esa misma piscina me había follado a Ana tantas veces que había perdido la cuenta.

De forma brusca la llevé a una de las paredes y apoyándola contra ella, inicié el vaivén típico, con furia en los ojos, ella acompañaba cada embestida elevando su cuerpo hasta casi sacar la cintura del agua, al bajar sus pechos quedaban sumergidos, al salir empapados con ríos de agua surcándolos los lamía, fue aumentando el ritmo hasta que su enormes tetas cedían a la inercia y botaban ante mi, hacían un sonido muy peculiar al golpearse contra el torso y el agua a la vez, pero ella ya no se movía, los pocos giros de cadera que había empezado se acabaron cuando mi continuidad la mató, se puso roja otra vez y rompió a gritar con un orgasmo brutal, se echó para atrás tanto que casi se tumbó en el borde de la piscina, yo besaba su vientre y acariciaba su clítoris, aun bajo el agua, sin parar de perforar una y otra vez, sentía recobrar el sentido de mi vida con cada bufido de Alba, cada salpicadura que la bañaba su cuerpo me hacia retomar el control, para cuando se volvió a correr yo ya era dueño de nuevo de mi destino, agarré sus tetas y aumenté el ritmo hasta correrme 30 minutos después, ella gritaba y se movía inquieta al sentir cada orgasmo, se corrió hasta sentir un chorro que noté golpeándome en el vientre, su cara de incredulidad me llevó a pensar que también era la 1º vez que alguien la hacia correrse así, y al sentir mi semen goteando en el interior del útero, golpeó a su vez mi pecho con fuerza.

-ALBA: ¡dios santo, ¿es que tu no tienes fin?!

-YO: no lo sabes tú bien………. todavía…….

La sujeté por la cintura, y aun rodeándome con los pies, la saqué del agua, con una fuerza enorme que la sobrepasó, la dejé en el suelo cuando se hartó de besarme, se dio la vuelta y se pegó de cara a la puerta de cristal corredera entreabierta.

-ALBA: se que me dolerá, pero……… ¿que te parece follarte mi culo? - se abría de nalgas contoneándose.

-YO: ¿que me parece?....... - me fui a por ella empotrándola contra el cristal, sus tetas mojadas hacían marcas en el vidrio -……. que te voy ha hacer pedir piedad - la sobé por donde quise sin dejar de empujarla contra el cristal.

Cuando ya la tenia dura de nuevo ella se giró sorprendida ante mi recuperación, pero la empotré contra el cristal de nuevo, apunté a su ano con mis dedos y fui jugando con él hasta penetrarla con varios dedos, sin duda no era su 1º vez, pero eso no cambió que al sentir mis dedos se estremeciera de gozo. Al verla lista y sacando la cadera puse mi polla en su ano, parecía desorbitado que entrara, pero de un estoque el glande entró, ella coceó con fuerza y se mordió el puño, la tomé del pelo y tiré de él, forzando su ano poco a poco, sollozaba al verse impotente ante tamaño desafío, pero aguantó como una jabata hasta tener medio rabo dentro, se acariciaba el clítoris con lujuria, pero al dar el golpe de cintura final dio un salto y un grito a la vez, apoyada contra el férreo cristal blindado se fue deslizando hasta volver a posar los pies en el suelo y sentir toda mi verga abriéndola, fui gentil y la dejé así unos minutos, hasta que ella se movió, la presión era brutal, era como tenerla rodeada de 200 gomas elásticas, al sacarla se venció hacia mi, la tuve que sujetar para poder sacar media polla y sin piedad volver a meterla, tosió entre risas.

-ALBA: ¡¡OH DIOS…..QUE GUSTO……FOLLAME CABRÓN………….. ÁBREME EL CULO COMO MI MARIDO NO SE ATREVE!! - arañaba el cristal con las uñas.

No tardé en empezar a follarla a gran velocidad, sus movimientos acompasaban los míos hasta que el ruido de mi pelvis golpeando en sus nalgas parecía mezclarse el final de uno con el comienzo del otro, ella gimoteaba cosas lascivas, muchas relacionadas de la comparativa con su marido, mientras no sabia si acariciarse el clítoris o abrirse las nalgas, tan fuerte golpeaba que se puso de puntillas para recibir mejor mis acometidas, sujetándola de las caderas fui desatándome hasta oírla balbucear, tenia la boca abierta y soltaba aire por puro instinto, un hilo de baba la caía desde la boca hasta los senos, y solo repetía “auhhh……… sigue………. auhhhh”, eran como los sollozos de un bebé antes de romper a llorar, y con los golpes de mi cintura era como oír a una oveja, balaba más que hablar. Con el paso de los minutos se puso roja entera, no solo la cara, aguantó la respiración y con unas embestidas brutales la saqué lo que era seguro su 1º orgasmo anal, estalló con voces estrepitosas golpeando con la palma la pesada puerta de cristal, taconeando en el suelo aun de puntillas, usaba la puerta como apoyo para tratar de zafarse de mi, se lo impedí, la agarré de las tetas y tiré de ella hasta dejarla de pie en mitad de la terraza, en mitad de la nada, conmigo percutiendo sin descanso en su trasero, levantaba una pierna buscando algo de comodidad pero gimiendo de gusto, hasta que alzó ambas piernas, teniéndola agarrada de la tetas presionando su espalda contra mi pecho y con mi cintura de palanca fue sencillo segur follándome su culo con ella colgada del aire, dando patadas al vació, cuando volvió a suelo se echó hacia delante al romper en el 2º orgasmo anal, sollozaba aun cuando la sujeté de los brazos y tiré de ellos hacia atrás, como asas, con ella inclinada hacia delante saqué a la bestia, estaba desatado, la tenia medio esposada con las manos atrás usando sus brazos de riendas y follándome su culo, rojo de los golpes de mi vientre, la azoté con fuerza en las nalgas para que sintiera mi poder, pero no hacia falta, estaba con la cara congestionada, la boca abierta y llenando el suelo de saliva, mientras gimoteaba, al 3º orgasmo anal se desvaneció en mi brazos, la mantuve en pie aferrándome del vientre y del cuello, pegándola a mi pecho, me miraba abstraída girando la cabeza, mientras sus tetas y sus mejillas rebotaban aun al ritmo de mis penetraciones.

-ALBA: por favor…..para……….por....por favor…..no soporto más…..córrete….lléname en culo de tu leche - eran ruegos, no peticiones.

Tuvo suerte de mi falta de sexo, en otras ocasiones sus 20 minutos no me los hubieran quitado, pero ahora sentía mi polla ponerse tersa y mis huevos empequeñecerse, aun así la bestia se cobró su víctima, con un grito continuo sintió mi semen llenándola el culo, con sacudidas que podrían haberla hecho salir disparada si no la tengo sujeta, la besé en los labios casi inertes al sentir mi polla flaquear. No podía soltarla, se iría al suelo, así que la cogí en brazos, apenas hizo un esfuerzo para aferrarse a mi cuello, la llevé dentro y la acosté en la habitación del piso de abajo, me di una ducha leve y me tumbé a su lado, abrazando y anclándome a sus tetas. Dormí, dormí como nunca, como hacia mucho que no dormía, del tirón y sin preocupaciones ni sobresaltos en mitad de la noche sudando pensando en Ana y ver la cama vacía, como hacia casi 1 mes que no dormía.

Me despertó Alba moviéndose, se levantó torpe al día siguiente, la vi entrar en el baño y asearse, al volver se tumbó sobre la cama y se abrazó a mi pecho, la apreté contra mí hasta que su cara surgió de la maraña de pelo para besarme.

-ALBA: tengo que volver al trabajo, si no podrían sospechar y decirle algo a mi marido.

-YO: pues vete, no queremos que se entere - espeté burlón.

-ALBA: ¿nos….nos volveremos a ver? - fue una suplica, no una pregunta.

-YO: coge tú móvil y apunta mi número, llámame siempre que quieras verme, y yo haré lo mismo, nunca viene mal tener cerca de una medico - le brillaron los ojos al darme otro beso, esta vez más caliente y vibrante.

La solté un azote cuando se iba a vestir, tenia un empalme mañanero enorme, así que la tiré a la cama, dejándola de espaldas a ella, la abrí de piernas, bajé mi cabeza y me comí su coño peludo con brío, luego y me la follé así mismo, metiéndola de golpe, tan sencillo como un cuchillo caliente en mantequilla, a los 10 minutos se sujetó las tetas para que dejaran de golpearla la barbilla, a los 20 minutos se corrió otra vez, dejé de follarla y la puse a 4 patas hundiendo mi cara entre sus nalgas, chupando o lamiendo su coño y su ano, el cual penetré con un dedo, la volví a follar por el coño un rato provocando varios orgasmos y para cuando se iba a correr otra vez la penetré el culo, rasgó las sabanas con las uñas al sentir mi verga partiéndola, desaté a la bestia hasta que un cuarto de hora después me corrí en su culo sin dejar de azotarla una nalga dejando mi mano marcada.

-YO: para que me recuerdes mientras tu marido te mal folla - caí rendido a su lado, sudando, agitado y con una sonrisa enorme en el rostro.

-ALBA: dímelo y le dejo, dime que seré tuya así para siempre y le llamo ahora mismo……- la cogí el teléfono de las manos y la agarré del pelo con fuerza, que patética me pareció.

-YO: esto no va así, yo no soy de nadie, ya no, ahora soy libre, si quieres venir a follar perfecto pero no serás la única, serás una de tantas, no tendrás trato especial, estoy harto de preocuparme por todos, de ser el imbécil al que acuden y de resolver los problemas de los demás, si quieres dejar a tu marido hazlo, o no lo hagas, a mi me la suda, pero ten claro que tan pronto puedo querer follarte como me canse de ti y no me vuelvas a ver - asintió.

-ALBA: lo…………. lo siento, no pretendida……

-YO: ahora lárgate, si quieres follar llámame, pero no te daré más que sexo, tenlo presente y no vuelvas a mencionar el tema delante de mí, o se acabó.

Salí convencido de mis palabras de esa habitación, me despedí de Alba besándola desnudo en la puerta de casa donde Dani, la sirvienta rumana que Eleonor me había puesto al llevarse a Luz, estaba esperando para entrar, al verme desnudo se dio la vuelta, pero la cogí de la mano y la hice pasar, la llevé a la cocina y sin llegar a mirarme directamente la hablé.

-YO: hola Dani, se que no hemos empezado con buen pie, bien, verás, he pasado un momento jodido, pero ahora estoy bien, y tienes que saber varias cosas.

-DANI: yo no querer, no saber - la pobre nunca sabía conjugar bien los verbos y el nerviosismo de verme desnudo ante ella dificultaba sus expresiones, pero entendía bien si hablabas despacio.

-YO: 1º me vas a ver desnudo a diario, de echo es posible que me veas más tiempo desnudo que vestido, y hasta follando, así que acostúmbrate…. - guardo silencio -…. venga, mírame….- se giró lentamente, para no hablar bien el idioma parecía muy despierta, me miró de refilón, sus ojos fueron directos a mi polla, se tapó la boca con los ojos como platos.

-DANI: enorme……ohhhh.

-YO: si, eso me dicen, bien, 2º paso, vamos a follar, tarde o temprano tú y yo follaremos……..

-DANI: yo no….casada….- me señaló su anillo -…..no poder.

-YO: y la que se acaba de ir tiene un marido militar……. – abrió los ojos confundida -…… pasará, así que cuando quieras, me avisas, si por algún milagro no quieres, no pasa nada, tranquila tengo coños de sobra, no te perjudicará en nada, solo te advierto que casi ninguna mujer me ha visto la polla y no ha terminado atravesada por ella.

-DANI: estar bien - pareció conforme, mi tono era firme pero amable y sincero.

-YO: 3º, voy a estar follando a diario, con muchas y diferentes chicas, ten la boca cerrada de todo lo que aquí pasa, solo sonríe, se gentil y dales lo que te pidan, bebidas, comida o lo que sea, si alguna se pasa contigo, me lo dices y la mando a la puta calle.

-DANI: ¿a mi mandar puta calle? - se asuntó.

-YO: no…- suspiré de exasperación -…. a ellas, tú eres mi ama de llaves, así que si alguien te molesta me lo dices y la mando a paseo, a ellas, ellos o quien sea - asintió con felicidad incrédula.

-DANI: de acuerdo, ¿si?

-YO: bien, por último, si no vas a ser capaz de soportarlo, dilo ahora, y me busco a otra.

-DANI: no, no, señora de piso paga bien - el tono, pese a sus dificultades, fue demasiado obvio, Eleonor la había puesto allí, y si pagaba bien no seria solo por limpiar y cocinar.

-YO: yo soy el dueño del piso, ella solo te paga, y si me jodes te echo, pero si te portas bien seré bueno contigo - torció el gesto algo confusa.

-DANI: ¿si yo follar tú, bueno conmigo? - me sorprendió el gesto, como para aclararlo y no ofendida.

-YO: jajaja no, yo seré bueno si tú no me enfadas, follar o no depende de ti, a mí me da igual, eres guapa y tienes un buen polvo, pero solo cuando tú quieras, yo solo te advierto que es solo sexo, no busques más. ¿Todo claro?

-DANI: si - sonrío feliz y se giró a colocar unas bolsas, no sin repasar mi polla otra vez.

Dani era tan guapa que parecía mentirá que estuviera de chacha y no del brazo de algún futbolista o ricachón, rubia natural, ojos claros azules y un cuerpo bastante apetecible, muy tapada no disimulaba un trasero de 1º, delgada y fina como una modelo de cintura, supongo que a una mujer así en su país la llovería ofertas, así que me puse algo de ropa y la ayudé a limpiar mientras charlábamos, me di cuenta de lo desordenado y guarro que estaba todo, “¿como he podido vivir así?”, Dani y yo tardamos al menos 2 horas en dejar el salón y el cuarto de abajo limpios y arreglados, en ese tiempo mi afabilidad perdida, y recuperada, la encandiló. Descubrí que la habían traído a los 13 años a España, unos familiares lejanos, la habían puesto a robar por las calles hasta los 18, cuando ya podían juzgarla, entonces, viendo su belleza, la “vendieron” a un proxeneta que controlaba a las rumanas e hizo la calle hasta los 27 años, lloró un poco al contarme la 1º vez, era virgen y por ello pagaron una gran suma de dinero, por lo visto 3 hombres de negocios alemanes follaron con ella hasta que se hartaron, en la misma noche la desvirgaron, la estrenaron el ano, la hicieron chupar pollas y todo lo que se les ocurrió, cuando cogió cierta edad y ya no atraía tanto, tuvo un aborto de un cliente, la quisieron mandar de vuelta a Rumania, pero una redada de la policía la sacó de aquel mundo, y un cliente embobado de ella la ayudó a conseguir papeles como chacha de su casa, por lo visto a la mujer del susodicho no le pareció tan buena idea, aun así lograron mantenerla en la agencia de limpieza y había ido rebotando de un trabajo a otro hasta llegar a mi casa. Se había casado con un español, y tenía un crío de apenas 1 año, me enseñó fotos en el móvil y todo.

Se sintió feliz o aliviada, no se decir, de contarme toda su historia y ver que la escuchaba, a mi me encanta oír la vida de los demás, es increíble lo fascinante que puede ser la vida de una persona que en principio no tiene nada que aportar, al terminar nos salimos a la terraza a tomar unos refrescos y hablar con ella sobre su sueldo y las condiciones en que había quedado la casa. Eleonor la pagaba y le daba un extra para comprar comida para la casa, eso no era lo que la dije, yo podía pagarme mis cosas, pero ya que pagaba, le dije a Dani que se quedara con ese extra para ella y su crío, sonrío y me abrazó con fuerza, era casi duplicar su sueldo, y de nuevo me preguntó que si tenia que follar conmigo para que se lo diera, y de nuevo sonó como aclaración y no con pesar, siendo puta durante 9 años no creo que fuera un problema para ella, tentando de decirla que si, la aseguré que no, solo cuando ella quisiera, solo la pedía discreción, lealtad, que en la nevera no faltaran muchas cosas y que si alguna vez necesitaba ayuda en la casa, se quedara algunas horas, soy bueno, no tonto, aun así accedió encantada, eran unas peticiones mínimas, tal era su felicidad que me confirmó lo que me olí antes, Eleonor la daba otro extra por informarla de mi a través de SMS, sonreí al ser consciente, Eleonor aun quería jugármela o tenerme en el radar, pero ahora tenia ganada a su única baza, el extra que le daba por informar era una minucia comparado con el que le daba para el piso y que yo le acababa de regalar, y ahora ambos eran para ella, así que hicimos el pacto de que la informaría, si , lo que yo la dijera, por ahora que siguieran contándola lo mal y hundido que estaba, como me señaló que ya le había escrito. Luego la pregunté como una mujer de 30 años y viviendo en España desde los 13, hablaba tan mal el español, su respuesta fue contundente.

-DANI: mi familia solo enseñar frases que necesitar, siempre hablar en rumano, solo enseñar “Soy menor, suélteme”, ”chupar 15€, completo 30€”, ”si, cariño, que bien me follas” y ”por el culo son 50€” - nadie se había molestado en enseñarla nada, solo su marido, pero tampoco le molestaba aquello, me dejó sin palabras, cosa nada fácil, hasta viéndola, me parecía barato.

La dije que si quería un baño en la piscina, para mi desgracia no accedió, el calor aun reinante en esa época le había hecho abrirse un poco la camisa que llevaba y un buen par de tetas asomaban apretadas por el delantal, con una falda larga hasta los gemelos, verla mojada o semi desnuda me hubiera alegrado la mañana, pero aun no me tenia tanta confianza, me quité las bermudas y la camiseta sucia ante sus ojos, que admiraron mi cuerpo y mi rabo colgando, me metí en el agua y me quedé allí flotando.

Pensado en las palabras que le había dicho a Alba en un arrebato de ira, si, pero reales, durante casi 2 años había mantenido una relación con Ana, y luego con Lara, Eleonor y Lili, (o Carolina o como mierda se llamara), me había ocupado de ellas, había sido bueno, me había metido en líos y me usaban como tierra firme en sus turbulentas vidas, estaba cansado y agotado del peso que eso suponía, apenas me había follado 2 veces a Alba ¿y ya iba a dejar a su marido por mi?, supongo que yo solo seria la excusa final para convencerse, no creo que fuera feliz del todo, pero ahora me daba cuenta, eso, no es problema mío, si no suyo, no, no se volvería a repetir la historia, yo ya estaba exhausto de salir perdiendo por asumir los problemas de los demás, tenia 21 años, un enorme piso y un polla gigante, se acabó ir de responsable y de buen chico, ahora tocaba disfrutar, me iba a follar a todas las que quisiera, cuando quisiera y como quisiera, estuvieran casadas, con novio, solteras o en medio de una misa, ahora tocaba mirar por mi, la moral se derrumbaba.

Salí del agua como el viento, casi atropello a Dani por el salón, fui a la habitación de abajo donde hasta hace nada compartía con Ana una vida ficticia, y entré, la oscuridad llenaba todo, solo la luz del sol que entraba por la puerta y se reflejaba en el espejo del mueble dejaba ver dentro las figuras de la cama o el armario, avancé con frialdad hacia el mueble, quedaría genial haber andado en cámara lenta con pasos firmes y música de batería de fondo, pero la realidad es que me di en el meñique del pie derecho en una de mis zapatillas, solté un grito de dolor momentáneo, y cojeé hasta el mueble, levanté el pie y apreté el dedo con fuerza, pero había llegado a mi destino. Si iba a vivir la vida, necesitaba mujeres, y sabia donde buscar, abrí un cajón, y ante mi salieron decenas, casi un centenar de papelitos, con números de teléfono, notas y nombres, todos los que había estado guardando, más como respeto que como útiles en un futuro, pero ahora los tenia delante, y al mirarme vi mi rostro reflejado, con la luz del sol rebotando del espejo en mi mirada, dejándome ver una sonrisa malévola.

Raúl – Nacimiento de un cabrón.

¿Alguna vez habeis ido a un buffet libre?, supongo que si, o al menos sabréis lo que es, un montón de comida, de todo tipo y de muchos lugares, te coges tu plato vacío y te plantas delante de decenas de bandejas con la comida llamándote, ensaladas, arroces, pastas, mariscos, fritos, rebozados, carnes en salsa, pollo asado, sushi, churrasco argentino o wok oriental………..vas cogiendo un poco de cada cosa que te gusta hasta que te das cuenta de que tienes el plato lleno a rebosar, todo cubierto por un trozo de pizza. Si no os pasa, ya os digo que a mi si, y luego vas a tu mesa, y te sientas delante del plato sin saber por donde atacar, ni como meterle mano a aquello. Algo así me pasaba, estaba sentado en la cama, con un puñado de papelitos en cada mano, leyendo notas cariñosas, amables y alguna subida de tono, llevaba casi 1 hora intentando decidir quien seria la 1º a la que llamaría, mi jefa tenia un polvazo y sus aires superiores me invitaban a bajarla de la nube a pollazos, aunque la monitora del gim era un escándalo de mujer, puestos a pensar las del parque que me perseguían cuando salía a correr por allí eran las últimas que se habían ofrecido, pero la hija de Luz y sus aires caribeños aun eran recordados en mi mente, dios, que dolor de cabeza se me estaba poniendo, era plenamente consciente que cualquiera de ellas con una llamada y algo de mi encanto serian mías en breve tiempo, y puestos a disfrutar, sabia de cierto piso con 3 estudiantes, una a la que ya tenia medio entrenada de enormes tetas, otra que era mi “hermanita” con un trasero que ni J LO, y a una exuberante canaria cuyo papel andaba perdido en ese cajón desde Navidades, sin duda meterme en ese piso seria estimulante, más desde que Manu se fue de allí, y su habitación la ocupó Mara, la hermana de Alicia, cuyo papel había tenido en la mano hacia nada.

Mara, para abreviar, era un par de años mayor que su hermana, era arisca, seria y de difícil trato, por eso sus amistades, las de verdad, no eran muchas y pasaba más tiempo con los amigos de su hermana que con los suyos, una mujer fría y seca que nunca demostró el menor interés en mi, no por mi aspecto previo, sobretodo por mi afabilidad, mi sorna y mi capacidad infinita para hacer el ridículo solo por hacer la gracia, todo chocaba directamente con su forma de ser, pero todo eso había cambiado desde Navidades, desde que me vio con el traje de Eric arreglado, no solo me dio su papelito correspondiente, si no que había intensificado el número de veces que quedaba con nuestro grupo, me llamaba o me mandaba mensajes a menudo, no cadenas de mensajes ni bromas, si no preguntarme que tal estaba, como me iba todo, que iba ha hacer ese día, que si iba a la fiesta de su hermana………..Pasaba de ella como de la mierda por eso, pero físicamente era atractiva, sin tanta cadera como su hermana, si tenia un culo prieto y bien levantado, le gustaba presumir de él con leggins y vaqueros ajustados, mayormente para suplir las carencias en su pecho, si llegaba a una 80 era de milagro, picaduras de avispa, aun así su figura esbelta y su cuerpo fino había llenado mi mente en alguna ocasión, usaba tacones casi siempre para realzar su trasero, tenia cierto estilo y clase a la hora de vestir, morena con los ojos negros, el pelo corto por lo hombros pero siempre con peinados complejos y estilizados, de los años 30, guapa y con una cualidad que a muchos no gusta pero a mi me llama la atención, ojos enormes y salientes. Estaba harta de vivir aun con su madre y que su hermana pequeña ya se hubiera independizado, no encontraba un novio que la soportara más de 3 meses, aunque se decía que follaba como una loba, y viendo la habitación libre se fue a vivir al piso de estudiantes. Sin duda todo un reclamo, meterme en esa casa era un sueño, yo solo con 4 pedazo de mujeres, adolescentes todavía, a las que adiestrar, 3 desde 0.Pero había un problema, yo ya tenia casa, y me había costado un mundo tenerla, no renunciaría a ella para meterme allí, con 4 mujeres cada una con su carácter, su ego y sus sentimientos, no me sentía ni física, ni mentalmente capaz de dominar la situación, y en ese momento necesitaba desahogarme, llevaba 1 mes largo sin follar y Alba apenas me había saciado, tenia un apetito voraz de sexo, y solo conocía a una persona que me domara, cogí el móvil y la llamé.

-YO: hola preciosa, ¿como te va la vida?

-MERCHE/LEONA: pues no muy bien ahora mismo uffff uffffffff.

-YO: ¿que te ocurre?

-MERCHE: que he roto aguas, me voy para el hospital, adiós……..- me colgó.

Me quedé medio tonto con el teléfono pegado a la oreja y una sonrisa estúpida, llevaba 1 año y varios meses sin hablar con ella, desde que Ana y yo la pedimos ayuda para buscar piso, donde me presentó a su prometido hablando de planes de boda, ni una sola noticia de ella hasta ese momento, y ahora, cuando la necesitaba, mi leona estaba de parto con el cachorro de otro. Era mi plan A, no pasaba nada, ya tendría tiempo de retomarla cuando pasara un tiempo prudencial, hasta me alegré, no por que fuera madre si no por que dicen que cuando son madres a las mujeres les crecen las tetas, y Merche ya tenia un buen culo, con un buen par de tetas seria ideal, el pensamiento era cruel y poco apropiado, pero me convencí de que ese era mi nuevo yo, “que se joda, me buscare a otra”. La siguiente del ranking era Madamme, pero me negué en redondo, quería que Raúl fuera malo, no que Zeus regresara, y acostarme con Madamme sin ser Zeus seria perder todo el poder que tenia sobre ella, y bien me había servido con el ex de Eleonor. Descartada, ya tenia tachadas a las 4 mujeres que mejor follaban con las que había estado, Ana y Eleonor incluidas, a partir de ellas, el resto estaba lejos, y no por poco, Lara era la opción que me venia a la mente, pero a ella nunca la pude penetrar completamente y no estaba como para ir con remilgos, joder, me estaba costando más de lo esperado, así que me serené, “Pensar, razonar y analizar”, era lo que me había enseñado Eli……….de golpe caí, Eli era la respuesta, era casi poético, como si el universo me estuviera hablando a gritos y no lo hubiera oído hasta ahora, si había renacido con una enfermera, como mi 1º experiencia, que menos que seguir las pautas, y volver a los brazos de Eli. Llamé al móvil que tenia de ella “El móvil al que llama no corresponde a ningún usuario”.

-YO: ¡¡me cago en tu puta madre!! - grité tan fuerte que se asomó Dani, la sirvienta.

-DANI: ¿que ocurrir? - sobresaltada me miraba con restos de ropa sucia en las manos.

-YO: nada mujer, que por lo visto las mujeres me huyen hoy - me miró sin entenderme del todo.

-DANI: si tú querer, yo follar ahora - la miré sorprendido, la forma tan natural con la que lo decía parecía que se ofrecía a sacarme la basura y no a sexo. La miré dubitativo, más que nada por que parecía que los astros se habían aliado en mi contra, pero si la tomaba así, no seria diferente al resto y la había hecho una promesa de no tocarla ni pedirla nada hasta que ella quisiera.

-YO: no, ya te dije que tú decides, y no te ofendas, no creo que estés a la altura de lo que necesito - se encogió de hombros y se marchó como si nada.

Rebusqué en una vieja agenda el número fijo del gim de Eli, donde me había adiestrado en las artes del amor.

-RECEPCIONISTA: Hola, buenos días, aquí Eli sports 1, ¿en que puedo ayudarle? - me sorprendió no oír a Eli, cuando estaba allí siempre lo cogía ella y menos tenia para una recepcionista, sabia que desde mi marcha le habían ido bien las cosas, pero como con todas, había perdido contacto durante esos 2 años de noviazgo con Ana.

-YO: si, hola, buenos días, preguntaba por Eli - se hizo un silencio incomodo.

-RECPECIONIISTA: ¿quien?

-YO: Eli, Elisabeth vamos, la jefa - soltó una carcajada.

-RECEPCIONSTA: lo siento señor, la señorita Elisabeth no atiende al teléfono, es una señora muy ocupada como para andar contestando a cualquiera, dígame en que puedo ayudarle y le complaceré.

-YO: creo que no lo entiende, soy amigo suyo, y no la localizó.

-RECEPCIONISTA: puede concertar una cita si lo desea, dígame su nombre y ya le llamaremos cuando haya una hora disponible - pareció ni escucharme, mascando chicle sonoramente.

-YO: está bien, dígale que Raúl, su GRAN amigo, la anda buscando, dígaselo así y ella sabrá quien soy.

-RECPECIONISTA: bien, así se lo diré, pero le advierto que es una persona muy ocupada y no toleraremos que se gasten bromas - me colgó bruscamente.

Me tumbé en la cama y me eché a reír de impotencia, al rato acudí a la cocina totalmente desnudo con Dani terminando de recoger sus cosas para irse, sin disimulo me miró la polla y se despidió con un abrazo cálido y un beso en la mejilla, bebí algo pensando la locura de situación, Eli misma me había llamado desde ese móvil hacia 1 mes al enterare de mi ruptura, ¿y ahora estaba cortada la línea?, comí algo decente y puestos a esperar, decidí retomar mis rutinas de ejercicio, cogí la bici, me puse el móvil en una funda para ir escuchando música y salí a dar una vuelta, se me notaba enquistado, los músculos se desperezaban y sentía como me costaba seguir un ritmo de pedaleo, estaba en baja forma, el mes de inactividad me pasó factura, regresé a la hora y media a casa dándome un chapuzón en la piscina desnudo, cuando oí sonar el teléfono en el salón, como un rayo salté del agua y entré en el salón salpicando agua y con mi rabo dando vueltas, me costó sacar el móvil de entre la ropa de deporte, cuando por fin descolgué.

-YO: ¿si? - respondí respirando agitado.

-ELI: ¡¡¿que tal esta mi GRAN amigo?!!- gritó con alegría.

-YO: desesperado por verte, ¿que narices le pasa a tu móvil?

-ELI: nada, que como ahora soy famosa he tenido que cambiar de número - me quedé a cuadros.

-YO: ¿famosa de que?

-ELI: ¿no te acuerdas?, ya te lo dije la última vez que hablamos, hace 1 mes………

-YO: lo siento, hace 1 mes no estaba en mis cabales.

-ELI: ainsssss pues busca Eli sprots en Internet o “las mañanas con Eli”, y te enteras…..¿que tal tú?

-YO: mucho mejor, y recuperado, aunque ando algo atontado, me vendría bien quedar con una vieja amiga como tú para charlar.

-ELI: por supuesto, cuando quieras, ¿donde estás? que te paso a buscar con el coche – sonreí al ver su predisposición.

-YO: déjalo, ya voy yo con el mío, ¿donde?

-ELI: pues en el gim nuestro………..vamos en el que estuviste conmigo, ¿te vienes ya? Es que estoy liada pero luego tengo un rato.

-YO: si quieres……..

-ELI: claro tonto, vente pero si me ves ocupada espérate un rato que tengo trabajo aquí, ¡¡un beso y hasta ahora!!- sonó a autentica felicidad.

Me di una buena ducha, quitándome los pelos del pecho, no quería aparecer ante ella descuidado, me vestí con un pantalón de gimnasio ajustado pero sin slip, con la polla colgado y marcándose claramente al moverme, con una camiseta encima, tal como iba a su gim, para establecer una conexión directa con ella según me viera y recordara aquellos tiempos, Eli era quien me lo había enseñado todo, al menos las bases de las que fui aprendiendo por mi cuenta, si iba a por ella tenia que tener esos detalles en cuenta, aunque era un juego más que otra cosa, la iba ha hacer una demostración, estaba seguro de que solo con pedírselo nos acostaríamos sin que pusiera objeción alguna.

Hice algo de tiempo mirando lo que me dijo en Internet, resultaba que su cadena de gimnasios se había expandido, y no 2 o 3 en Madrid, si no por toda España, tenia centros nuevos en Barcelona, Bilbao, Sevilla, Valencia y algunas ciudades más, se había extendido como la pólvora y al ver la pagina web lo entendí, Eli llevó aquel ligero erotismo en sus clases para atraer clientes a un nuevo nivel, parecía un pagina erótica o porno, llena de hombres musculosos con el torso desnudo sudando y haciendo ejercicios, o de mujeres con un biquini encima, exuberantes y sensuales agitándose ante la cámara. Cuando busqué “Las mañanas de Eli”, me harté de reírme, le habían dado media hora en una televisión nacional por las mañanas, dentro de esos matinales de 4 o 5 horas donde se hablan de política, salud y sociedad, le dejaban dar una clase rápida con “sus métodos”, ella misma salía en directo acompañada de 2 o 3 monitores/as y de algún colaborador del programa que hacia el tonto, pero Eli aprovechaba para explicar lo sencillo y fructífero de su estilo de entrenarse. Todo muy creíble y bonito hasta que te dabas cuenta de que Eli hacia exactamente lo mismo que cuando la vi por 1º vez, si, las rutinas eran ejercicios, pero con el paso de los minutos se volvían eróticas y sensuales, Eli y su escote abierto o su trasero ceñido en ropa elástica de deporte eran consumidos por la cámara, y cuando no era ella, era uno de los monitores, un negro con una musculatura espectacular, hasta yo quedaría en evidencia delante de él, y como no, con la polla bien marcada en el pantalón corto, era grande y vistosa. Enmarcado en un programa de sociedad y salud, tenían picos de audiencia enormes en esos minutos, todos sabían lo que Eli hacia y a todos les parecía bien, y como tal, su popularidad había aumentado.

¿Que por que no me había enterado de nada de esto? muy fácil, ese matinal empieza a las 9 y Eli entraba a las 10 de la mañana, hora en la que siempre he estado dormido, follando o trabajando. Mientras me vestía, me llamó mi madre, por onceava vez me daba la charla sobre lo ocurrido con Ana tratando de sonsacarme, el tema de cortar con Ana así pasó a 2º plano en el momento en que la dije que me quedaba el ático, no a vivir si no en propiedad. Lo de Ana fue un interrogatorio, pero averiguar como, o por que, era el dueño del piso, fue peor, ni la SS, trataba de hacerla ver que ya me dio el coche, y ese piso era otro regalo, pero no colaba, tarde o temprano tendría que inventarme una excusa mejor o decirla la verdad, estaba empezando a elaborar teorías descabelladas y en ninguna salía bien parado, pero tenia otras cosas en la cabeza.

Cogí mi coche, el de lujo que me regaló Eleonor por Navidades, al ponerlo a mi nombre entonces, ya era mío aunque se fuera, total, tenia otros 7 coches iguales, o mejores, y no sabia conducir, no la importó ni la oí nombrarlo. Acudí al gim teniendo que aparcar lejos, casi en el parque por el que tuve mis revelaciones en su día, relamiendome ante lo que había visto, Eli no solo se conservaba genial para sus 38 años, si no que por la TV me pareció más guapa y exuberante. Había una cantidad de gente enorme agolpada cerca del gim, incluso prensa y luces de cámaras, me tuve que abrir paso hasta la entrada donde 2 gorilas impedían el acceso a la masa de gente, me presenté como Raúl, como me advirtió Eli en un SMS, y me dejaron pasar, subí a la sala donde había pasado 1 mes “entrenándome” con ella, no sin esfuerzo, había gente por la escalera y los pasillos, al llegar a la sala entré con cuidado, estaban haciendo un reportaje con Eli respondiendo amablemente a unos reporteros con un grupo de gente a su alrededor, haciendo fotos y con micros por todos lados, la sala estaba rodeada de conocidos de los clientes, que estaban dando una clase, ornamental más que real, dirigidas por el negro de la TV, que hacia ruido en vez de indicar.

Esperé calmado sonriendo al ver la atención que generaba Eli, aquella mujer que cuando acudí a ella estaba a punto de cerrar el gim por las deudas, ahora salía en la TV y era considerada la nueva gurú de la salud del país, con una docena de locales por todo la nación. En mitad de la entrevista, un reportero de la competencia de su programa, con algo o mucho de malicia, la dijo que por que no les hacia una demostración de una clase delante de todos, pero más que una petición fue una encerrona, ella no estaba lista, ni preparada, estaba pillada al no esperárselo y sonriendo mantenía la compostura, les indicaba que su compañero lo hacia muy bien, pero era mentira, y era obvio, era una pantomima para que se viera algo de movimiento detrás de ella en la grabación, y el reportero lo sabia, buscó sangre insistiendo con muy mala leche, tono hiriente y algo obstinado.

-PERIODISTA: ¿acaso la reina del gim es solo un cuerpo bonito que no sabe lo que hace? - el silencio llenó un segundo la sala, ni el periodista amigo de la cadena donde salía tenia replica a aquello y Eli mostraba tristeza en los ojos, sonreí, no sabéis cuanto, llevaba mucho, no se cuanto en realidad, sin hacer el ganso.

-YO: ¿que le parece si damos la clase juntos? - me adelante al resto de gente que esperaba ávida de carnaza social, al instante 4 reporteros se me echaron encima, pero solo miraba a Eli, que se volvió con asombro y algo de alivio, al reconocerme se puso roja y se echó a reír.

-PERIODISTA2: disculpe ¿y usted quien es?

-YO: soy un antiguo cliente de Eli, yo era un gordo asqueroso que no se tenia el menor aprecio, pero entonces entré aquí y salí siendo el hombre que soy ahora, y todo gracias a ella ……..- la señalé para dar mayor fuerza al momento, lo dicho no era del todo falso, ni del todo cierto, pero bastaba para ser creíble-….. si tengo que dar la clase con ella para que veáis como funciona, lo haré.

Para cuando terminé de hablar la mitad de las mujeres de la sala ya tenían clavada su mirada en el bulto de mis pantalones, para cuando el periodista enemigo asintió con ira al frustrarse su ataque, y plantarme delante del negro con la mano extendida pidiendo que Eli me acompañara, todas las miradas, hombres incluidos, se centraron en mi, Eli podría haberse vestido de camionero y hacer malabares, que daría igual, yo seria el centro de atención, asumí esa carga para que si ella fallaba, nadie se diera cuenta. Hice unos ligeros estiramientos en articulaciones mientras Eli se ponía a mi lado quitándose la chaqueta deportiva y quedando con un top ajustado y escotado, unos leggins negros que eran una 2º piel, y su eterna coleta, me abrazó dándome un beso en la mejilla.

-ELI: gracias - me susurró al oído, era tan evidente lo que había echo como que su audiencia la veía por el morbo y no por el ejercicio, pero de nuevo era una verdad incomoda tapada con una farsa cómoda, yo y mi marcada polla enorme en el pantalón eran la atracción.

Salté hacia atrás encarándome al resto de personas que hacían los ejercicios de forma lamentable, mandé al negro, (valga que es descriptivo y no denigrante), a poner la música que Eli usó cuando estaba yo, y ocupé su lugar, con Eli a mi lado, di fuertes palmadas y me encaré con varios chavales y mujeres para pedir que se activaran y que se lo tomaran en serio, ver a un tío de 1,94 y 92 kilos de músculos gritándote con rostro rudo pone serio a cualquiera. Cuando estuvimos en posición Eli reconoció la primeras notas, al igual que todos, habrían hecho esa rutina mil veces, hice la cuenta atrás y comenzamos, como montar en bici, al 2º compás todos clavaban los movimientos, el periodista amigo hizo su trabajo y fue arengando a los demás y los aplausos y gritos de ánimo fueron llenando la sala hasta casi tapar el sonido de la música, pero no hacia falta, Eli clavaba los tiempos y yo la seguía con seguridad, tenia su cuerpo y sus gesto clavados a fuego en la memoria, había devorado su cuerpo con los ojos durante un mes, con solo ver moverse un músculo en su pantorrilla ya sabia que tocaba a continuación, fue tan divertido que no me di cuenta de que había fallado en un par de gestos con los brazos, miré al periodista enemigo que se disponía a abrir la boca pero entonces me salí de la formación pidiendo disculpas, haciendo gestos claros como si hubiera sido la camiseta la que me limitaba los movimientos, me la quité pausadamente y de forma sensual, las palabras y silbidos de las mujeres se elevaron por encima de todo, un millar de flash de las cámaras saltaron a su vez, y hasta Eli me aplaudía con la boca abierta, veían un torso trabajado, la tableta marcada, los pectorales grandes y llamativos y unos brazos bien definidos, no era una maquina de músculos como el negro, venas hasta casi reventar y con las mollas sobresaliendo de forma antinatural, no, era más atractivo, definido y por los suspiros que me llegaban, sensual. Eli me volvió a abrazar.

-ELI: gracias de nuevo.

-YO: tú continúa y reza por que no vuelva a meter la pata, al próximo fallo tendré que quitarme los pantalones y no llevo nada debajo - mascullé con sorna.

-ELI: lo sé, trata de no fallar, aunque hace tanto tiempo que igual, deberías ir bajándotelos………..- su ironía me sacó una carcajada.

Clavamos el final de las rutinas y entre aplausos comenzó la de los bailes, Eli y yo lo hicimos de forma natural, bien agarrados y dando giros sin parar, los cambios de música empezaron y con ellos los cambios de pareja, sobra decir que las primeras veces 4 o 5 de las mujeres, de todas las edades entre 17 y 58 años, se pegaban por mi, pero se fue haciendo ameno, mi pecho desnudo y sudoroso las atraía como miel a los osos, me acariciaban y se frotaban con descaro sintiendo mi polla en reposo entre sus muslos o en su vientre o entre sus nalgas, yo bailaba y me reía sin parar, al finalizar Eli y yo terminamos la rutina juntos con un baile avanzado que solo unos pocos imitaron, aun los recordaba de mis últimos días con ella, giros, alzamientos de ella, posturas, todo acompañado de aplausos y jolgorio, al acabar le ofrecí mi mano a Eli como las parejas de baile profesional, la cogió encantada y nos dirigí delante el periodista enemigo que estaba rojo de ira a punto de estallar, hice un amplia reverencia con el torso, acabada la obra de teatro, con todos en pie, Eli me siguió con algo de reparo.

-REPORTERO: y aquí termina una de las famosas sesiones de Eli, esta vez dirigida por ella misma, dando una clase magistral de que el esfuerzo y la diversión, no tienen que ir separados - su forma de hablar era tan tediosa y rimbombante como tenia que ser, para cerrar el reportaje.

Eli comenzó un pasamos despidiéndose de la prensa y de los participantes de la clase, haciéndose fotos y firmando autógrafos, el negro le trajo una toalla, estaba empapada en sudor y brillaba bajo los focos, “preciosa”, pero descubrí que lo que dicen de que la TV engorda era cierto, la voluptuosidad que había visto en los videos no era real, Eli seguía escuálida, con un cuerpo apetecible pero cincelado a base del ejercicio, si dejaba de hacerlo o cogía algún kilo no era tan joven para que fuera terso y bien colocado. Un grupo de mujeres fueron a por mi, he hicieron lo mismo, fotos, besos y como no, papelitos y números de teléfono, no me dejaban ponerme la camiseta ni secarme el sudor, así que tenia la camiseta echa un trapo encima de un hombro mientras charlaba con ellas para hacer tiempo. Al final se fueron todos, la última una cría de 17 años roja de calor y excitación que no lograba quitarme de encima hasta que Eli apareció en escena, nos fundimos en un cariñoso abrazo y la cría entendió que no había sitio para ella allí y se fue. Estaba de pie con Eli casi colgando de mi cuello, hasta el punto de doblar las 2 piernas en el aire, su coleta colgaba haciéndome cosquillas en los brazos, para cuando nos separamos solo el negro estaba de fondo recogiendo la sala.

-ELI: ¡¡bueno ¿que pasa?!! , mírate estas hecho un “mazicorro” ….- me abrió los brazos para admirar mi torso -… casi ni te he reconocido.

-YO: gracias, unas pequeñas rutinas y mira, si es que donde hay buen material….

-ELI: claro, seguro que no tendrá nada que ver lo que aprendiste aquí, ¿no?- guiñó un ojo con celo, haciendo el gesto de que nos sentáramos en un par de sillas cercanas.

-YO: bueno, algo……- nos sentamos y acaricié su pierna cuando las cruzó de forma sensual - …. ¿y todo este follón?

-ELI: ya te dije que estaba liada, últimamente estoy rebotando de un sitio a otro, y no paro de trabajar - se puso de morros haciendo ver cierto hastío.

-YO: no me extraña, ya he mirado algo, ¿que te va de cine no?

-ELI: si, la verdad es que no me puedo quejar, he ido abriendo centros por todo el país, y luego lo de la TV, una locura, pero todo gracias a ti - me sacudió la rodilla con cariño.

-YO: ¿y yo que he hecho ahora?

-ELI: desde que la duquesa y la hija del alcalde venían a mis clases, se empezó a hablar de mi a muchos círculos, no daba abasto con las solicitudes, y al final tuve que expandirme, la duquesa se ha portado bien conmigo, no solo pagó el año entero de alquiler de aquí, si no que me ha estado apoyando como socia todo el tiempo.

-YO: ¿y lo de la TV?

-ELI: pufff, un locura, cuando fui a Barcelona a inaugurar un centro, una de las primeras chicas era la hija de un productor de TV, un día que su mujer no pudo llevar a la hija, fue él quien la trajo, y desde entonces no se perdió una sala de mis “clases”, hablamos y charlamos, se le ocurrió la idea de probar a ver como sentaba a la audiencia, claro está, me tuve que acostar con él para “impulsar el proyecto”, pero después de las audiencias ya no hacia falta, y así estoy, trabando y viajando como una esclava.

-YO: me alegro mucho por ti, y de verte……- ya era suficiente cháchara, yo estaba allí por sexo.

-ELI: ¡pues anda que yo a ti!, me has salvado de un buen apuro.

-YO: ¿te andan chinchando los de la competencia?

-ELI: no lo sabes bien, les he tenido que demandar y todo para que dejaran de seguirme, y ni aun así, me extraña que no hayas odio nada, me dedican horas en los programas rosas.

-YO: no veo mucho la TV la verdad, y menos esos programas.

-ELI: mejor para ti, pero esa es mi vida ahora, hasta me han ofrecido hacer una sesión de fotos y una portada de una de esas revistas eróticas, mi representante me ha dicho que me niegue, me haga la dura y la ofendida, así dentro de unos meses me ofrecerán mucho dinero.

-YO: no, si te veo en los Oscars en breve jajajaja - la cogí de la mano y la di un beso en ella, torneó los ojos de forma dulce.

-ELI: ya basta de mí, ¿y tú que tal, andas mejor? - se refería a mi ruptura.

-YO: pues si, la verdad, lo he pasado mal, pero ya pasó, o eso creo.

-ELI: ¿y que pasó?, si puedo preguntar, parecías feliz con ella…...- mi cara se entristeció.

-YO: pues que confié en ella ciegamente, y ella no lo hizo en mi, aparte de que pensando en como fue todo, aquello no tenia sentido, fuimos muy rápido y demasiado lejos para chicos tan jóvenes, la cosa se descontroló.

-ELI: vaya, lamento oír eso….. –su forma de decirlo denotaba que no era cierto, estaba encantada de tenerme allí - …. si puedo hacer algo para ayudarte, sabes que estoy aquí para lo que necesites - una lagrima resbalaba por mi mejilla, me la secó con un dedo alzando mi rostro, y me abrazó fuerte, quedándose así unos segundos.

Al separarnos lentamente me besó en la oreja, luego en la mejilla, y más tarde al quedar cara a cara, me besó en los labios con ternura, queriendo sanar mi pobre corazón con su cariño, se separó lentamente y abrió los ojos, me clavó su mirada tierna y yo no aguanté, y se me escapó una carcajada corta, Eli me miró confundida, pero luego abrió los ojos y la boca sorprendía, me sacudió una palmada en el hombro.

-ELI: ¡¡¡serás cabrón!!! Casi me la cuelas….. - rompí a reír grotescamente -…. que mamón, ha sido de manual y me la he tragado.

-YO: soy buen aprendiz eh….- esquivaba y resistía una lluvia de manotazos furiosos de Eli, que se había dado cuenta al fin.

Desde antes de salir de mi casa había seguido paso a paso sus consejos, 1º sorpréndela, no dejé que viniera ella a mi casa si no que fui yo a por ella, 2º analiza y estudia, la situación con el periodista me fue al pelo, 3º ayúdala en lo que necesite, se su héroe, había salvado la clase con soltura, y 4º, muéstrate sensible y sentimental, usar la baza de Ana me pareció creíble y en parte, era cierta. Todo pensado para que Eli se sintiera sorprendida, agradecida, complacida, en deuda y por último con un pájaro herido al que desear curar entre las manos.

-ELI: eres un mamón, ¿como te atreves ha hacerme eso a mi? ¿Acaso Ana era tan poco? - cesó su vendaval de golpes.

-YO: lo siento, pero trato de pasar página, solo quería divertirme un poco, ¿que te ha parecido?

-ELI: no ha estado mal…….- le restó importancia, pero nunca sabré hasta donde hubiéramos llegado sin que se diera cuenta si no se me hubiera escapado aquella carcajada.-…..pero del todo inútil, no hacia falta que usaras trucos para………- pasó su mano por mi muslo, peligrosamente cerca de la punta de mi rabo marcada bajo la tela.

-YO: ya lo suponía, pero no tendría gracia si fuera fácil.

Pasamos casi media hora charlando y esta vez si contándole todo lo que me pasó con Ana, Eleonor y las demás, necesitaba desahogarme con alguien y Eli era la única con quien podía hacerlo, luego entre risas ayudamos al negro a terminar de recoger todo, al contarle lo de la llamada a su recepcionista la tuve que parar para que no la despidiera por teléfono allí mismo, Eli tenia un carácter colérico cuando se ofuscaba, aun tenia en la retina la imagen de Carla, su amiga, o ex amiga, que trajo en mi aprendizaje y que castigó al intentar follar conmigo si su permiso, metiéndola un consolador descomunal por el ano y dejándola así bastante tiempo, provocándola un repentino efecto estatua, y que no volviéramos a verla. Después invité a cenar a Eli, bueno, se lo propuse, al final pagó ella, charlamos de vanidades y ella bebió alguna copa, y fue tedioso al ser interrumpidos constantemente por personas que la reconocían y la pedían autógrafos y fotos. Parecía muy interesada en mi vida sexual, la suya era simple, tenia un ritmo de vida que no la permitía estar mucho tiempo en un sitio, y cuando emergió el negocio dejó de dar clases “extra curriculares” de sexo para dejarlo en manos de sus monitores de confianza, salvo polvos con el negro cuando la lujuria la llenaba, o algún calentón repentino, no tenia relaciones.

Para cuando terminamos de cenar y dar un paseo hasta mi coche, ambos ya teníamos claro que íbamos a follar, ya en el camino a mi casa Eli acariciaba mi brazo con dulzura, sin dejar de mirarme con ojos llenos de fuego y mordisqueándose el dedo anular de la otra mano, esa dulce sensación de ansia en el coche, en silencio, dedicándonos miradas ardientes y sonrisas pícaras, sabiendo los 2 lo que iba a ocurrir, me tenia la polla a reventar, y sin slip sobresalía de forma grotesca, me la tenia que acomodar a cada instante para no darme con el volante, y ella se reía, no dejaba de reírse y de cruzarse de piernas de forma sensual, acomodándose de forma erótica el cinturón de seguridad. No cruzamos una sola palabra, ni siquiera cuando vio el bloque de lujo o ante el ascensor, parecía impresionada pero solo lo parecía, no lo demostró ni por un instante, simplemente se agarró de mi brazo y no dejaba de frotarlo, una vez dentro del ascensor se puso delante de mi, rodeándome con los brazos me sujetó la cabeza para darme un firme y refrescante beso.

-YO: te he echado de menos.

-ELI: mientes fatal.

-YO: ¿en que miento?

-ELI: no me echas de menos, quizá si, pero no estoy aquí por eso, me has traído para desquitarte…..- sonrió levemente, con algo parecido a la pena en los ojos.

-YO: te he traído por que te necesito.

-ELI: lo sé ….- me volvió a besar con dulzura, de forma sonora-…. y yo a ti.

Acarició mi pecho por encima de la camiseta tirando de mi nuca para besarla, le sacaba cabeza y media, se tenia que poner de puntillas pese a agacharme, la ayudé a elevarse apretando su espalda contra mi y elevándola por mi cuerpo, mientras nuestras lenguas tenían una pequeña batalla, girábamos nuestras cabezas y abría los labios a su ritmo, ella cerró los ojos desde el principio, yo empecé como con todas, mirándola, pero ella me enseñó casi todo y por ende, al rememorar sus besos cerré los ojos y disfruté de la pasión que se estaba iniciando, cuando sonó el “ding” del ascensor al llegar al ático ella dio un salto y se me subió encima, la sujeté de los muslos y entre risas y caricias avancé hasta la puerta, me costó un mundo abrir la puta puerta, tenia a una gata salvaje subida encima apoyada contra ella, al abrir casi se me cae al suelo, pero se agarró bien al cuello y posó suavemente los pies en el suelo, acarició mi rostro antes de darme un beso y darse la vuelta, esta vez si, su rostro reflejo cierto asombro.

-ELI: madre mía, ¿esta es la casa que le levantaste a esa ricachona?

-YO: no, esta es otra……….en realidad tengo 8 así por todo el mundo…..- la sorna era evidente.

-ELI: ¿tienes algo de beber?

-YO: tengo algún refresco en la nevera…….- de golpe me sentí estúpido al verla reírse.

-ELI: jajajaja no tonto, digo vino o champan……..- sonreí para disimular, tan centrado estaba en su cuerpo deslizándose por la entrada que no había prestado atención.

-YO: ya sabes que no bebo, hay algunas botellas encima de la nevera, Eleonor no se las llevó, no se que son.

Fuimos a la cocina y tuve que estirarme para alcanzarlas al ver como Eli daba saltos de forma graciosa sin alcanzarlas, bajé un par de botellas, tenían algo de polvo, y se las fui pasando, su cara de asombro fue tremenda.

-ELI: pero esto es un Rioja de 300€ y esto un blanco francés, esta de 700€ no baja……..- me las enseñó por si no me lo creía, asentí encogiéndome de hombros, se de vinos lo justo como para saber que eran buenos.

-YO: pues a ver si están malos ya, tiene pinta de llevar ahí mucho tiempo…..- soltó otra carcajada que me volvió a hacer sentir tan estúpido como antes.

-ELI: no, cielo, estos vinos cuanto más tiempo pasen mejor, anda, busca un sacacorchos que esto tiene que respirar.

Entre los cajones de la encimera encontré uno, se lo di y con ojos de aprendiz vi como hundía la punta y sacaba el corcho con una habilidad que me pareció increíble, la bajé un par de copas elegantes y nos fuimos al salón, nos sentamos en el sofá mientras dejamos la botella del Rioja abierta y el par de copas una a cada lado en la mesa, al sentarse Eli se clavó un trozo de madera saliente y dio un respingo.

-ELI: ¿que le pasa al sofá?

-YO: nada, que un día se me fue la cabeza y le rompí un par de tablas, tengo que cambiarlo…….- lo había pensado pero un sofá costaba bastante y la verdad es que lo usaba poco.

Hábilmente aprovechó la coyuntura para, quitándose la chaqueta de deporte quedando solo con un sujetador deportivo, sentarse pegada a mi, con el torso vencido sobre mi lado, pasé mi brazo por encima de su hombro, ella rozó con su mano en mi pecho y fue subiéndola por mi cuello y mi cara hasta que nos fundimos en un beso pasional, mientras ella frotaba su pecho contra mi costado, una mano jugaba con el cabello de mi nuca y la otra se apoyaba en el sofá para elevarse, yo acariciaba su espalda con una mano mientras la otra fue a su cintura, apretándola contra mi obligándola a doblar la espalda de forma sensual, estuvimos así unos minutos, probando nuestros labios y lenguas con un brillo especial en los ojos cuando parábamos a respirar, sirvió un par de copas, y pese a mis reticencias, probé la copa por su insistencia, ella pareció elevarse a los cielos al primer sorbo, lo saboreó con gusto y sonrío tapándose la boca con la mano, me volvió a insistir y ahora si, después de olerlo por encima y sentir un dulzor atractivo en la nariz, me mojé los labios. De pequeño mi madre dice que me pilló con 3 años sentado frente a la nevera bebiendo un brick de vino barato del que usaba mi padre en las comidas, desde entonces, y salvo algún botellón con los amigos donde solo bebía calimocho, (una bebida típica mezcla de cola, vino, un toque de algún licor de frutas, ya sea mora o manzana y con muchos hielos.), siempre bañado en mucha más cola que vino, no había tenido contacto con esa bebida. Al sentirlo en la boca de inmediato noté la diferencia entre el vino de brick y uno de alto nivel, era fresco, especiado y con un sabor a madera nada desagradable, aun así al beberlo encogí el rostro y sacudí la cabeza al tragarlo, no podía negar que tenia un buen sabor, tampoco que no me gustaba.

Fue mejor ir probándolo de los labios de Eli, que intercalaba besos con sorbos, a media botella ya tenia a Eli subida encima montándome con una amazona, se había soltado la coleta y una melena castaña caía hasta cubrirla lo pechos con dificultad, seguía con una copa en la mano bebiendo y frotando su pelvis contra mi polla tiesa a punto de romper la tela de mi pantalón, me quitó la camiseta y mientras llevaba su cadera de adelante a atrás friccionando con todo el largo de mi rabo, acariciaba mi pecho con la mano libre de la copa, yo acariciaba sus mulos desde la rodillas hasta los glúteos, aferrándome a su culo y acariciando de forma circular, aun recordaba que eso la ponía a 100, y cuando lo hacia se le ponía una sonrisa enorme, a la 3º vez se quitó el sujetador deportivo, tan prieto era que al sacarlo sus pechos rebotaron de forma deliciosa, cayeron unos centímetros, la edad podía más que el ejercicio, pero aun así era apetecible, se tumbó sobre mi pecho besándome y llevando una mano a mi entre pierna, iba acariciando mi polla con suavidad, apreté su culo con fuerza para elevar su torso y en vez de besar sus labios, besar sus senos, los pezones erectos como estalactitas de hielo, al lamerlos oí su gemido, el ritmo era lento pero era un ritmo de sexo, se frotaba contra mi mientras yo masajeaba su trasero y me comía sus tetas con dedicación militar, de alguna forma metió su mano por dentro del pantalón y estaba haciéndome una paja muy leve, solo pasaba sus dedos por la punta tirando de la piel hacia atrás, saboreando sus labios de nuevo. Pasados unos minutos se puso en pie y me dio la espalda para servirse otra copa, empecé a pensar que estaba bebiendo demasiado, tenia las mejillas coloradas y no sabia si era por mi o por el Rioja, dejé de pensar cuando de forma sensual y lenta se fue quitando los leggins o el pantalón elástico deportivo, lo fue enrollando y agachándose sin doblar las rodillas regalándome una visión espectacular de su trasero, y del tanga rojo fuego que separaba sus nalgas, me alcé pera besar y acariciar aquellas pierdas de mármol, abultadas y redondas, pero duras y firmes, no me resistí a darla un cachete fuerte dejando que mi mano quedara plasmada en su nalga derecha, pero la carne apenas se movió.

-ELI: dios, ten cuidado, eso duele - contorsionó su cuerpo para acariciar mi pelo mientras besaba y trataba de morder aquel culo, era como un perro intentando morder un balón de baloncesto, la piel era tan dura y firme que no se doblaba como para poder enganchar con los dientes.

-YO: eres preciosa - sonrió con ira.

-ELI: no necesitas adularme para calentarme, solo fóllame como mejor sepas - al oír eso me levanté y la rodeé con los brazos, agarrando sus tetas, masajeando con fuerza.

Seguí con mi cadera los giros que hacia Eli, mientras la besaba del cuello apartándola el pelo y continuaba trabajando con mis manos sus senos. Ella reía, gemía y bebía de la copa indistintamente, la aparté la copa de la mano y la dejé en la mesa, dándola vuelta para que quedara frente a mi.

-YO: ¿por que bebes tanto?

-ELI: no lo se.

-YO: no me engañas, todo tiene un motivo, si no, no pasaría, eso me enseñaste….- sonrío orgullosa, y me besó con lujuria, luego me abrazó, susurrándome al oído.

-ELI: por que ahora me vas a follar y aun tiemblo cada noche al acostarme recordando la última vez que me hiciste el amor, no puedo apartarte de mi mente, cada vez que me penetra alguien cierro los ojos y te imagino a ti, ya me pasaba antes, cuando dejaste el gim, incluso el negro y su buena polla no han logrado que te olvide, entonces soñaba con ese mes, ese mes en que fuiste mío y donde me enamoré de ti, y tonta de mi te deje ir, luego después de que aquella estudiante te diera la droga africana y en ese mismo gim me follaste hasta desvanecerme, y a la cubana también, pero cuando estuvimos con Madamme, en aquella cutre habitación de hotel, donde destrozaste a aquella chiquilla, y luego le abriste el culo a la Madamme hasta hacerla pedir auxilio, y aun así después exigiste que fuera tuya, y me partiste en dos como a una colegiala novata, hasta que sentí que nos fundíamos en uno solo, desde ese día me masturbó a diario pensando en ti, no quiero, se que es estúpido, has estado 2 años alejado de mi y aun así al saber que me habías llamado me dio un vuelco el corazón, al oír tu voz he sido más feliz que en mi vida…. – cambió el tono lascivamente, mordiendo el lóbulo de mi oreja -…. y al verte en el gim he mojado las bragas como una virgen.

Fue un discurso que tenia en la cabeza, habría pensado en él cientos de veces si era verdad aquello, en el momento en que me tuviera delante otra vez, no lo sabia, si, creía que teníamos cierto nivel de amistad, pero ella me lo había enseñado todo, era mi “maestra”, nunca pensé en que seria yo el dominante de la relación, que la tendría así, esperándome como si hubiera ido a la guerra y cogiera el papel de esposa devota, ansiando mi regreso.

-ELI: ¿no dices nada?

-YO: ¿que puedo decirte? - se separó lo justo para cogerme de la cara y sonreír de forma falsa.

-ELI: jajajajaja casi te la cuelo eh……..- reí por seguirle la broma.-……..te la he devuelto jajajjaja- si, tal vez quiso hacerlo así, la dejé pensar que me había pillado, y era cierto.

No tenia palabras, pero mientras su cara decía una cosa sus ojos decían otra, no soy tan tonto como para creer que una mujer como ella estaría mirando por la ventana día y noche por si iba a verla, pero sin duda había ocupado gran parte de sus pensamientos en esos 2 años, y de las primeras lecciones que me dio Eli fue que si vas a mentir en una relación añádele tanta verdad como sea posible, así será más creíble, y sin estar seguro del todo, sabia que ella estaba haciendo lo mismo, no estaba enamorada de mi, pero quizá me echaba de menos entre sus piernas.

Dejé las elucubraciones al sentir sus labios en mi cuello, y sus manos metiéndose por dentro del pantalón en mi trasero, haciendo fuerza y arrodillándose a la vez que lo bajaba, mi polla saltó como un resorte golpeando con fuerza uno de sus brazos, me la agarró con ambas manos estrujándola y tirando de la piel hacia atrás, si me faltaba algo por endurecer, un 1º lametón al glande me la puso de piedra, se le escapó una sonrisa mientras masturbaba despacio.

-ELI: dios mío, había olvidado lo grande que parece.

-YO: pero la chupabas bien - alzó la vista con orgullo y lujuria.

De un gesto constante y lento fue metiéndose la polla poco a poco en la boca, cuando se atragantaba paraba, pero no retrocedía, se acostumbraba y continuaba, le costó no vomitar pero ¾ de polla entraron en su gaznate, al salir tomó aire y un río de babas me bañaba el pene de arriba a abajo, con varios hilos haciendo de puente entre mi glande y su boca, roja y congestionada lamió y chupó hasta dejarla limpia de nuevo, trabajando el tronco y lamiendo los huevos con esmero, con una masturbación constante, me estaba matando, salvo Madamme no había otra que la chupara igual, cuando se dedicaba al glande su lengua era un pecado, y un truco con los dientes, pasarlos como si mordiera una fresa, incauto la dejé hacer durante 20 minutos, donde se esforzó en no aparentar un dolor en la mandíbula terrible, pero logró su premio, sujeté su cabeza y eyaculé fuertemente notando como los chorros golpeaban en su garganta y la hacían toser, pero sin separar sus labios fue dejando que la llenara la boca y aun vez terminado, chupar como un helado hasta sacarse mi polla de la boca, sacó la lengua mostrándome parte de mi semen, se relamió con obscenidad y se repaso los labios con los dedos riéndose, antes de tragárselo todo. La cogí de los brazos y tiré de ella para ponerla de pie, la besé con furia doblándole la espalda, saboreando los restos de mi leche con el olor a Rioja.

-YO: ¿como sabe la mezcla?

-ELI: es un sacrilegio estropear el vino así, pero tu semen esta bueno. ¿Hace cuanto que no te corres?, por que vaya cantidad, casi me ahogo, si lo se no ceno jajajaja - la carcajada fue de lo más natural en ambos.

-YO: pues esta mañana me ha ayudado una enfermera, y ayer por la tarde a decir verdad, pero antes de eso, casi mes y medio.

-ELI: sin sexo, pero alguna paja habrá caído……

-YO: pues la verdad, no lo se, puede que si, pero si pasó, no lo recuerdo - era cierto y no haría el esfuerzo en recordarlo, me parecía vergonzoso reconocerlo.

-ELI: pobre mío, el atasco que debes de tener, deja que te ayude - me agarró la polla de nuevo y con dos besos largos ya estaba empalmado de nuevo.

-YO: antes deja que iguale el marcador.

Me aparté y dejé que Eli se pusiera a 4 patas sobre el sofá, me arrodillé tras ella y planté una mano en cada nalga, separándolas todo lo posible, solo con eso gimió de gusto, al quitarle el tanga y meter mi lengua en su coño casi le da un patatús, con un dedo frotaba los labios mayores mientras mi lengua repasaba cada recóndito lugar de su coño, al localizar el clítoris estuve 5 minutos lamiéndolo y chupándolo, sacándola gemidos y oyendo como golpeaba el respaldo del sofá, de nada la sirvió cuando mis dedo la penetraron y buscaron su punto G, allí comenzó a mover su cuerpo al ritmo de mis dedos, retorciéndose como una serpiente sobre si misma, yo no dejaba de abrir y cerrar sus nalgas mientras mi boca hacia viguerías, las que ella me enseñó y otras que fui aprendiendo con otras mujeres, sus lamentos regalaban mis oídos, se dobló para agarrarme la cabeza por el pelo, y dando 3 fuertes gritos tembló del orgasmo provocado, pero me dio igual, seguí, como un minero, perforando su coño con 2 dedos y lamiéndola el clítoris, mientras mi otra mano dejó sus nalgas y con el pulgar fui acariciando su ano, de vez en cuando apretaba para ir haciendo sitio, ella volvía a gemir solamente pero no saltaba mi cabeza, no se si tenia miedo a que siguiera o que parara, pero así se sentiría mejor supongo. Al 4º intento mi pulgar entró en su ano provocándola un silencio roto por los suspiros, sin mucha dificultad el pulgar entró entero y salía, entraba con la misma facilidad que mis otras falanges en su vagina, ella hacia fuerza con la cadera hacia atrás hasta que llegaba un punto y se recostaba hacia delante, para volver a hacer fuerza, era delicioso y a los pocos minutos reventó dando coces en otro orgasmo que esta vez me bañó la cara, disfruté de ello y seguí un minuto lamiendo su interior.

-ELI: ¡¡ME CAGO EN TODO………….. JODER……………. SI……………..ASI SE COME UN COÑO……………. COMO DIOS MANDA!! - soltó un risa ahogada entre respiraciones jadeantes.

La di la vuelta para tumbarla boca arriba y meterme entre sus piernas quitándola del todo el tanga, cogí la botella de vino.

-YO: ahora quiero beber yo - vertí lo que quedaba de la botella sobre el cuerpo de Eli, su coño, su vientre marcado y sus pechos, ella trató con recogerlo con las manos con una cara de asombro enorme.

-ELI: ¿¡¡¡pero que haces loco!!!?

Ni la respondí, desde su coño y sus muslos fui lamiendo y chupando todo el vino, su cara de asombro se esfumó cuando fui subiendo por su cuerpo hasta sus tetas, el aroma era hipnótico, a sexo y buen vino, me aferró a sus pechos que degusté con brío, tirando con los dientes de unos pezones que parecían que iban a estallar, al llegar a su cuello me agarró de la cabeza y probó el vino de mis labios, la lengua de ella era fuego, apenas podía seguirla el ritmo y mi polla daba cabezazos contra su vientre, ella estaba pegajosa, apestaba al vino y a sudor, a mi semen y a sus fluidos.

-ELI: eres un bestia, acabas de tirar una botella de 300€ y has destrozado lo que quedaba de este sofá…. - hizo fuerza para sacarme de encima y ponerse en pie, la silueta de su cuerpo estaba marcada en el cojín, con el vino manchando todo alrededor -…. mira lo que has hecho…….- la abracé por detrás acercándome a su oído.

-YO: lo que te debe de preocupar es lo que te voy ha hacer arriba en la habitación, pienso follarte hasta caer agotado, y me va a dar igual que supliques, no pararé hasta estar saciado.

Sentí un escalofrío que la recorrió todo el cuerpo, la piel de su hombro se puso de gallina, ella sabia que era capaz, y ansiaba que así fuera, fue una amenaza poco potente dialécticamente, seguro que las hay mejores, pero mi padre me enseñó que una amenaza solo es tan fuerte como la capacidad que crean los demás que tienes para cumplirla, “te voy a pegar una hostia que te voy a mandar a Saturno” suena genial pero no es real, “te voy a romper la muñeca como me vuelvas a tocar” no es tan potente pero era tan real como que en 2º curso le partí la muñeca a un chico que estaba jugando a pasarse la mochila de Alicia entre varios gamberros de 3º curso, me costó que me echaran de las clases de yudo y un rapapolvo del colegio, pero desde ese día la amenaza fue tan efectiva que al final dejé de usarla, no hacia falta, ningún matón se me volvió a acercar nunca, ni a Alicia, y eso me ayudó a mi vida social al ser el “héroe” que defendía a los débiles. Me voy por ramas, bien, esta amenaza a Eli era del 2º caso, ella era consciente de que era capaz de cumplirla y eso la incendió.

-ELI: no podemos ir así a tu cama, vamos a dejar las sabanas para la basura ….- sonreí ante la idea de mi cabeza, ahora creo que ella me la implantó, pero en ese momento me dio igual.

La cogí de las piernas y me la puse al hombro como un saco de patatas, gritaba de euforia y reía hasta casi quedarse sin aire, fui a la puerta de la terraza y la abrí para dejar que el aire de la noche acariciara nuestra piel, al girarme ella vio la piscina, gritaba “no”, pero era uno de esos “no” que dicen “si” que ella me enseñó, corrí con cuidado de no resbalar y avisándola y poniéndola recta para que se preparara, salté al agua, a la zona profunda donde no nos haríamos daño, al emerger Eli se apartaba la espesa maraña de pelo de la cara pasándosela por toda su cabeza y quedando pegada a su nuca y espalda, reía mientras se limpiaba la nariz, su mirada era tenaz e inquisitiva, se frotaba el cuerpo quitándose la sensación de suciedad, yo solo me deleitaba de ver como se frotaba los pechos, al acabar con ella se me acercó y hizo lo mismo conmigo, sobretodo en mi hombro donde se había apoyado, yo buscaba su mirada mientras ella trabajaba, evitándome con una sonrisa clara.

-ELI: ¿a cuantas?

-YO: ¿que?

-ELI: ¿a cuantas te has tirado con el truco del piso y de la piscina? - sonreímos los 2 a la vez de la misma forma.

-YO: pues deja que recuerde, empecé con Yasmine, luego su madre, Eleonor, aunque el piso era suyo por entonces, después Ana, y ayer a la enfermera…………… ah bueno, y a la abogada de Eleonor, se pasó un día que estaba solo.

-ELI: pues no son tantas…….

-YO: ¿y que esperabas? ¿Un harén? – torció la cabeza apretando los labios, queriendo decir que algo parecido.

-ELI: no, bobo, pero creí que tendrías más oportunidades……..- me miró confusa.

-YO: ven, te ensañaré algo - salimos del agua, no puede contenerme a besarla y meterla mano al ver su cuerpo empapado goteando, tenia tal presión sanguínea que mi rabo miraba al cielo por pesado que fuera, llevé a Eli al piso de abajo y la enseñé el cajón con las decenas de papelitos y números.

-ELI: ¿y esto?

-YO: estas son las “oportunidades” que dices….. – me miró sobrepasada, cogiendo y leyendo algunos -…. no es que no tuviera oportunidades, es que amo a Ana…- me mordí la lengua por usar el presente - ……amaba a Ana, y la fui fiel mientras ella lo fue conmigo, y cuando lo fui fue con la abogada por interés, únicamente, podría haberme triado a decenas de chicas en este tiempo.

-ELI: ya veo…….hay algunas muy directas ….- me enseñó un papelito, era de Adriana, una compañera de trabajo “Cuando te canses de colocar hortalizas en el almacén puedes meter tu pepino en mi cámara cuando quieras” junto a su nº de móvil.

-YO: ya, esa me la dio el día que se metió en la cámara frigorífica a colocar los yogures junto a mí, el roce fue inevitable…. – suspiré - ….. ahora que estoy libre pienso pasármelo bien con este cajón.

-ELI: y si tienes el cajón ¿para que me llamas?

-YO: por que llevo 1 mes casi sin sexo, no quiero asustar a ninguna de esas novatas, y te lo creas o no, ahora que estás aquí, te he echado de menos.

-ELI: ya, pero piensas acostarte con ellas, ¿no? - la tristeza la descubrió, sus palabras de antes no eran tan vacías como pretendía mostrar.

-YO: Eli, te tengo un profundo respeto y te debo todo, pero en su día quise quedarme a tu lado y me echaste, por mi bien, si por entonces pensabas así, ahora es igual, nunca te negaré un sitio en mi cama y en mi corazón, pero ahora mismo no quiero ni estoy listo para tener una relación estable con nadie, y menos la que tú te mereces.

-ELI: ¿quien te ha dicho que quiero una relación estable? - sonrió desviando el tema con sabiduría.

-YO: si lo que buscas es sexo, por ahora tendrás todo el que quieras conmigo, esta casa es tuya, y podrás venir cuando quieras, pero ten claro que no serás la única, a la enfermera la he dicho lo mismo, y pienso decírselo a todas, voy a follar y voy a ser un cabrón, engreído y mujeriego, y a quien no le guste ahí esta la puerta….- me arriesgué a que cogiera esa dirección y se fuera pero más que decírselo a ella, era una reafirmaron en mi decisión.

-ELI: me parece bien, yo tampoco puedo tener una relación normal con tanto trabajo, así que si no te parece mal, me pasaré por aquí de vez en cuando - se contoneó hasta llegar a besarme el pecho.

-YO: perfecto, por que serás la 1º de mí lista y eres la que mejor folla que está disponible - me pegó en el pecho con fuerza.

-ELI: ¿como que “disponible”?

-YO: bueno, Madamme esta descartada, Ana y Eleonor ……- puse cara de circunstancias- ….., y mi Leona a estas alturas ya habrá dado a luz, así que hasta dentro de unos meses que se recupere, si - me volvió a pegar en el pecho, esta vez haciéndome algo de daño, pero ella también en la mano.

-ELI: que cabrón, eso no se dice - sacudió la mano

-YO: me da igual, bastante he soportado ya las mentiras y las falsedades de los demás, ahora voy a ser tan cruel y cabrón como la verdad, así que vamos arriba a follar ya ¿o tengo que llamar a 4 o 5 de estas? - señalé el cajón, me miró a los ojos algo confundida, mis palabras eran rudas pero se me notaba en la cara que no había estado del todo convencido, deseaba tener a Eli de nuevo y era la 2º vez que la indicaba la salida.

-ELI: como quieras, pero así no encontrarás a otra mujer como Ana……..- me acerqué a ella y la di tal beso que casi la parto en dos, la cogí del culo y me la subí encima con una facilidad pasmosa, me rodeó con las piernas hasta cruzarlas.

-YO: no quiero a otra como Ana, quiero follar sin parar y me da igual con quien.

-ELI: pues llévame arriba y hazme tuya.

Eli – Vuelta a las andadas.

El beso que me dio al invitarme a follarla fue erótico, se me había bajado algo el empalme, pero de sentir su lengua se puso dura tan fuerte que casi penetró su coño sin querer, las cosquillas la hicieron gemir y todo el trote de escaleras fue sentir como le abría los labios mayores cada escalón.

Entré en la habitación dando un patada a la puerta, encendí una luz palpando la pared con la mano mientras mi cara se perdía entre sus tetas, me senté en la cama y ella quedó a horcajadas sobre mi, me tumbé y ella se estiró sobre mi, contoneándose con mi polla aplastada por su vientre, haciendo una paja con el cuerpo, su cabello resbalaba por la cara quedándose pegado por la humedad, goteaban partes de su cuerpo sobre mi, la besaba con lujuria mientras mis manos pellizcaban sus pezones sacándolas suspiros de placer, se volvió a abrir de piernas y llevando su mano a mi polla la pajeó con fuerza hasta tenerla como una estaca, levantó una pierna para hacer sitio y se fue metiendo mi rabo lentamente, aguantando la respiración, poco a poco hasta que ya tenia medio miembro dentro y pudo plantar ambas rodillas en la cama.

-ELI: virgen santa vaya pedazo de…………cama - la solté un azote entre risas, su doble sentido fue ingenioso, y la cama era monstruosamente grande, casi un cuadrado de 3 metros de lado donde habíamos llegado a dormir Eleonor, Ana, Lili y yo a la vez sin problemas.

Se tumbó sobre mi pecho para hacer algo de fuerza mientras siseaba con la boca, sentía como a partir de 3/4 de penetración había resistencia, hasta allí llegaría el negro, pero a mi me quedaban unos cuantos centímetros aun, casi podía oír sus dientes rechinar, para el estoque final no la di margen y di un golpe de cadera que la hizo toser de la impresión, sacudiendo la mano como si la tuviera en llamas, “madre mía”, lo repetía una y otra vez, cuando no llevaba la mano a su boca para amagar morderse los nudillos. Sentía sus paredes ceder lentamente a mi invasión, el calor y la fuerza de su pelvis se iban destensando, le acariciaba la espalda pasando los dedos por todo su contorno, quería besarla pero su rostro no respondía a mis gestos, solo me miraba con los ojos en órbita, cuando se le pasó la impresión respiró por fin, al menos de forma natural.

-ELI: como echaba de menos esta sensación, de estar……….llena, de la piel tirante cediendo ante el ancho de tu polla……….es increíble.

-YO: aun me descubro pensando en aquella 1º vez tirado en el suelo de tu gim.

-ELI: has cambiado mucho desde entonces.

-YO: hoy te mostraré cuanto - se estremeció de nuevo.

Mis manos en su culo la separaron las nalgas, lo que la hizo gemir y elevarse de mi pecho para quedar de rodillas sobre mi totalmente empalada, se frotó o separó sus labios mayores, y con un arranque de rabia movió su cintura con un gesto fluido y constante, como una ola que la recorría el cuerpo, se agarraba el pelo como si se le fuera a caer, sin dejar de mover su cintura, no sacaba un milímetro de polla pero si disfrutaba de esos movimientos, se estaba acostumbrando aun cuando decidí dar un golpe de cintura leve, cada 10 segundos o así, algo que la hacia elevarse medio palmo y caer a plomo, al poco rato puso sus manos en mi pecho mordiéndose el labio y alzando sus caderas con un ritmo de penetración muy bueno, subía y bajaba un tiempo, para bajar y tomar aire mientras hacia sus giros, acompañados con mis manos en su culo, que no se separaron en ningún momento, apretando y separando como sabia que a ella le gustaba. Para cuando se me ocurrió empezar a follármela ella se corrió de nuevo, se apretó los senos por agarrarse a algo cuando las descargas de su cuerpo la invadieron, fue idóneo, planté lo pies con firmeza y haciendo fuerza la elevé un palmo de la cama, lo justo para que tuviera las rodillas en contacto con la cama pero no para hacer fuerza para alejarse, y allí, sin aviso previo y dejándome de tonterías, solté a la bestia, ella fue la que presenció su nacimiento en aquella habitación cutre de hotel, vio como salió de la nada cuando perforaba el ano de Madamme y fue la que la sosegó después, pero aquella era aun bestia indómita, un animal grotesco y sin miramientos, el paso del tiempo y mujeres me había dado para domesticarlo, educarlo y que fuera igual de animal, pero a mis órdenes. Sus gemidos fueron aumentando al ritmo de mis golpes de cadera, no terminaba de bajar de la anterior cuando llegaba otro, el sonido de mis genitales golpeando invadió todo y sus fluidos bajaban por mi verga, el sudor se mezcló con el agua de la piscina y ambos nos movíamos con fiereza, Eli daba el tipo mientras se volvía a correr una vez tras otra, a la 4º se corrió como una fuente saliendo de mi polla con un chorro que me manchó el pecho, pero al instante se la volvió a meter dentro, cayendo a mi pecho lamiendo sus fluidos y besándome apoyada en la cama con una mano a cada lado de mi cabeza, podía sentir su culo temblar como el mar rompiendo en olas en una playa, el viejo animal hubiera seguido así 2 o 3 horas, pero ahora no, tiré de la correa y paré lo justo para provocarla otro orgasmo.

Rodé sobre la cama para dejarla boca arriba y abriéndola de piernas la penetraba lentamente para sentir como le sacaba la energía con cada penetración, me eché sobre ella comiéndola la tetas y con la manos en posición de flexiones, retomé a la bestia, de las 4 primeras embestidas tuve que reacomodar el cuerpo para “perseguir” a Eli por las sabanas, después quedó varada al tenerla agarrada de las piernas manteniéndola bien abierta de rodillas, seguí perforando sin piedad, ella se frotaba el clítoris cuando el placer se lo permitía, se agarraba los pechos para que dejaran de moverse o se tapaba la cara con vergüenza para después golpear con ambas palmas de las manos en las sabanas y aferrarse a ellas con fuerza, con la cara roja y las venas del cuello por explotar con cada orgasmo nuevo, allí cedí a la lujuria y me desaté hasta correrme, sus patadas no evitaron que la llenara de leche su precioso coño totalmente depilado. Me lancé a sus pechos para dejarla claro que pese a sus suspiros de gusto aquello no había terminado, jugaba peinándome con los dedos en la cabeza, para cuando la tuve dura otra vez me tumbó boca arriba y se sentó en mi vientre dándome la espalda, elevó su cuerpo apoyándose en las piernas y una mano, con la mano libre se metió mi polla en el coño húmedo y caliente, se dejó caer hasta tenerla penetrada del todo y mover sus caderas lo que su cuerpo la permitía, ella me había dejado seco en el pasado y yo aun estaba fresco cuando empezó a flaquear, sujeté de su cintura y volví al ataque con la bestia, de los botes que daba trataba de hacer fuerza para mantenerse lo más arriba posible, pero cuando le fallaban las fuerzas por un orgasmo era casi peor, la follaba brutalmente, cuando no aguantó dejó caer el culo y levantó las piernas, se las sujeté con los brazos para mantenérselas juntas y estiradas mientras seguí follándomela a gritos, la decía barbaridades que ni me acuerdo, ella solo gemía y aguantaba la respiración con cada corrida, estabamos chorreando de sudor, brillando como muñecos de cera. Se volvió a correr como una fuente saliendo de mi y poniéndose en pie de la inercia manchando mi cuerpo y la cama, dando un rodeo por encima del colchón a pie, algo ida, me puse en pie y la empotré contra la cabeza de la cama, la pared no cedió por que en el empujón final tiré de ella con algo de consciencia, rebotó contra ella cuando caí sobre sus pechos, la penetré por el coño sin darla descanso levantándola una pierna, de pie los 2 sobre la cama cara a cara, al sentirme dentro soltó manotazos de rabia, la cogí de la muñecas y las sujeté contra la pared, bien separadas, como crucificada, embistiéndola con tal energía que sus tetas no permanecían quietas, me rodeó con las piernas y dejó de posarse en la cama, colgada del aire de las muñecas, del agarre de sus muslos y de mis perforaciones, su mirada era suplica, una suplica inocente y desmedida, no dijo nada, solo gemía y se dejaba follar como deseaba desde hacia 2 años, allí me desaté con un ritmo final endiablado bestia incluida, Eli se abalanzó sobre mi cuello mordiéndome el pecho y clavando las 10 uñas de sus manos en mis omóplatos, al sentir mi semen bañarla por dentro de nuevo rompió a llorar de gozo con un orgasmo que la hizo temblar y tiritar.

-ELI: ¿ya? - espetó entre jadeos, la pregunta era una petición, pero no, pese a mi celibato de 1 mes, o gracias a él, aun tenia ganas.

-YO: aun falta tu preciso culo, no me he olvidado de él - me miró con ojos atónitos, entre lujuria y miedo.

Se dejó caer tumbándose sobre mi, caímos a la cama, cogió mi mano y fue chupándome los dedos con desenfreno, el pulgar que la había penetrado antes recibió la mayor atención, como una polla pequeña, lo interpreté como lo que era, una aceptación al anal, tiré de su cuerpo hasta tener su culo en pompa sobre mi, y aquella mano se metió entre sus nalgas acariciando y luego penetrando su ano, tenia 3 dedos dentro la estaba follando con ellos, mi polla dura estaba siendo acariciada por sus manos pero al sentir aquello se giró sobre si misma, y dándome la espalda se metió mi miembro por el culo, de rodillas mirando a la pared donde hacia nada había sido masacrada, yo la separé las nalgas y de un estacazo la metí de golpe, gritó desesperada, dio un bote enorme pero tiré de ella para volverla a meter de golpe, entendió que no había otra y rebotó una decena de veces hasta que el dolor se le pasó, y el placer la inundó la mente, me estaba follando ella a mi cuando me quise dar cuenta, su trasero era azotado con fuerza, tenia una visión privilegiada de ella de rodillas de espaldas a mi haciendo desaparecer una barra de carne inmensa para volverla a hacerla aparecer de la nada, era casi inhumano, mi falo le entraba entera cuando por pura física le debería de llegar hasta el estomago, pero gritaba y se movía con destreza, parecía recuperada, pero solo lo parecía, a los 10 minutos dejó de moverse y se ponía en tensión, me fui de debajo de ella y la dejé a 4 patas, me puse tras ella y la volvía follar el ano a lo bestia, siendo yo ahora el que estaba notando el paso del tiempo, me fallaban las piernas y la cadera pero mantenía un ritmo animal, ella fue gateando hasta aferrarse a uno de los embellecedores de la cabeza de la cama, un saliente en forma de bellota, se agarró a él como el mástil de un barco en mitad de una tempestad, mientras que el huracán a su espalda la abría el culo a pollazos, las nalgas eran sujetas con las manos cuando no la azotaba y no paraba de percutir su culo hasta hacerlo parecer hecho de flan casero, cuando llegó el orgasmo anal gritó tan fuerte que en otro tiempo me hubiera asustado, pero ahora no, demostré mi nueva faceta de cabrón en ese momento y seguí follándola salvajemente hasta sacarla el 2º anal, en ese momento hizo tanta fuerza que rompió el embellecedor de madera y se quedó con él en la mano, su torso se desplomó sobre la cama y continué percutiendo en un culo inerte y rojo de los golpes, ella no decía nada, solo un hilo de sonido salido de su garganta denotaba consciencia, el ritmo de mis embestidas era lento y cansado, estaba por rendirme cuando la chispa de mi corrida llegó, apenas fueron un par de sacudidas y muy poco semen, pero me dio la sensación de que me había vaciado, justo lo que había buscado.

-YO: ya - afirmé antes de desplomarme sobre la cama, Eli tardó un par de minutos en dejar de tener el culo en pompa, se estiró hacia mi y me besó con las últimas fuerzas que le quedaban, con espasmos musculares, ambos, y con una sonrisa enrome, ambos.

Dormí, con aquel hedor a sexo brutal llenando la habitación y con una hembra de bandera suspirando en mi pecho, abrazada, y tan cansada como yo, la amenaza quedó cumplida. Al amanecer Eli me despertó horrorizada, eran las 9 y a las 10 tenia que estar en el plató para su matinal, por suerte no era lejos pero habíamos ido en mi coche y el suyo estaba en el gim, así que nos dimos una ducha rápida, no pude dejar de reírme al verla andar, escocida y separando los muslos, nos ducharnos uno en un baño diferente, y luego bajar a desayunar algo a toda prisa mal vistiéndonos, Dani llegó y se quedó blanca al ver el sofá, la dije que ni se molestara en limpiarlo ya que iría a la basura en breve, la di un beso en la mejilla para dejarle recoger la botella de vino y las marcas de agua que habíamos dejado por todo el piso, además de la habitación de arriba hecha totalmente una leonera.

Las risas y la tensión se mascaba en el coche, Eli no dejaba de mirar mi brazo, riéndose de la marca que había dejado el embellecedor al dormirme sobre él, en forma de bellota, llegamos con tiempo de sobra para que la dieran un golpe de maquillaje y algo de ropa sugerente, se cambió allí mismo delante de todos dejándose solo el tanga y me invitó a ver la sesión, más que nada para llevarla de vuelta con el coche. Vi como a duras penas mantuvo el tipo al dar la clase, mientras el resto del set hacia tiempo hasta terminar la clase de Eli, y como la presentadora del matinal, una MILF que provocaba infartos a los ancianos que veían el programa con escotes y vestidos ceñidos o medio transparentes, se fijaba en mi, no era raro, con las prisas iba con una camiseta ajustada marcando musculatura y un bañador tipo bermuda apretado sin nada debajo marcando mi miembro claramente, se acercó a interesante por mi, muy agradable, y el maquillaje la hacia relucir, con un vestido amarillo elástico, amplio escote con minifalda, no era necesario para saber que le gustaba lo que veía, su mirada y su sonrisa eran esclarecedoras, pero insistió en que la ayudara con una cinta de velcro que se ponen las presentadoras en el muslo para ponerse la petaca del micrófono, “me pica mucho”, decía, y me acompañó a una zona discreta entre roperos, movía su culo contoneándose con unos tacones de infarto, me arrodillé y, amablemente, se subió el vestido hasta dejarme ver su tanga para que no se notara en el vestido “para ayudar” dijo, la metí mano con el mayor descaro que estar rodeados de gente entre bastidores nos permitió, acaricié sus muslos y hasta la rocé el coño por encima de la prenda, cuando me puse en pie a su lado para tirar de la cinta de velcro lo más arriba posible, lo hice con tal fuerza que se elevó medio palmo en un tirón sin tocar el suelo, sonrió abriendo la boca de asombro, se aferró a mi hombro y pecho con astucia, sentí mi verga morcillona palpitando en su pierna desnuda, a través de mi bañador, su impresión fue igual a su descaro, llevó una mano a mi polla y la palpó clavándome un par de ojazos azules que quitaban el hipo, morena con un peinado precioso que despejaba una cara preciosa, fue cuando se presentó, aunque no hacia falta, llevaba 15 años en antena y tenia cierta fama de meter la pata, sus videos en Internet eran frecuentes, ya fuera por decir alguna burrada o por su sensual vestimenta, Mariluz, dejando caer su pelo sobre mi rostro, aun elevada medio palmo del suelo sujeta por mi, me dio dos besos al decirle mi nombre.

-MARILUZ: bueno, vaya pedazo de herramienta, ¿y que eres, le novio de Eli?

-YO: no - a una mujer experimentada la intriga era lo que mejor funcionaba, los monosílabos eran ideales, y cuanto menos palabras, y más atrevidas, mejor.

-MARILUZ: has venido con ella, ¿no?

-YO: si.

-MARULUZ: pero entonces…… ¿salís o algo?

-YO: no.

-MARILUZ: entiendo, no quieres hablar de ello……

-YO: no hay nada que hablar.

-MARILUZ: pues un placer conocerte, y gracias por tu ayuda - pasó un dedo con sensualidad por mi mentón.

-YO: el placer ha sido acariciarte los muslos.

-MARILUZ: jajaja que galán, un joven como tú no necesita ir halagando a viejas como yo.

-YO: no es un halago, me la has puesto dura - sonrío de forma falsa.

-MARILUZ: gracias por el cumplido….. - elevó sus pechos sobre mi, sacudiéndose el pelo hacia atrás con estilo echando la cabeza hacia atrás para reír, la rodeé por la cintura, haciendo que aun en tacones rozara de puntillas el suelo -….quizá podríamos quedar algún día para charlar.

.-YO: claro - sonrío y me buscó el móvil del bolsillo, tardando en sacarlo de forma clara para seguir palpando mi polla medio tiesa, apuntó su móvil, y lo volvió a meter con la misma cautela, solo entonces cogió su móvil de su sujetador y apuntó el mío.

-MARILUZ: espero que Eli no la moleste.

-YO: tranquila.

-MARILUZ: ¿No hablas mucho verdad? ¿Ni siquiera te importa si estoy casada? - sonreí al ver como la treta funcionaba, la apreté contra mi y le agarré una teta estrujándola.

-YO: si quieres te hago mía aquí mismo y ahora ….- su mirada escupía deseo, por que la mía destellaba seguridad -…. por que cuando te esté follando hasta tú te olvidaras de tu marido - la tenia a punto de caramelo, pidiendo que la besara en ese momento. “2 minutos y volvemos” se oyó gritar de fondo.

La solté y la vi caminar con cierta confusión hacia fuera, saliendo de entre los roperos donde nos encontrábamos.

-YO: eh - llamé su atención.

Se dio la vuelta el tiempo justo para verme caer sobre ella, la metí una mano en el coño levantándola del suelo y aprovechando que abrió la boca para meterle mi lengua hasta el esófago, sentí como mi mano se mojaba a través de la tela de su ropa intima, bajó hasta volver a posar los pies en el suelo lentamente, cuando nuestras lenguas aun se movían, la di un beso final que la devolvió el aliento, llevé mi mano a su nariz, cerró los ojos y olió su propia depravación con gusto, siguiendo la mano una vez que la alejé, abrió los ojos para quedar boquiabierta al ver mi rabo fuera del bañador rozándose con sus muslos.

-YO: esto para el camino, así tendremos algo que recordar hasta que te de lo que te mereces, mira bien esta polla por que te haré vibrar con ella, ahora sal a poner bien a Eli, y bájate la minifalda del vestido que ibas a salir enseñando el coño a media España - la di tal azote en una nalga desnuda por el tanga, que escupió un jadeo, asintiendo sin apartar la vista de mi miembro, tiré del vestido hasta bajárselo tanto que sus tetas casi se salen, las apreté y coloqué en su sitio de forma brusca, ella actuaba como si fuera un muñeca de trapo, y la di otro azote en el culo, esta vez sobre el vestido, antes de dejarla irse.

Ni siquiera la conocía, y en 5 minutos ya era mía, me estaba gustando ser un cabrón, Eli regresó al par de minutos, abrazándome encharcada en sudor.

-ELI: ¿que tal?, espero que no te hayan dicho nada por estar aquí.

-YO: tranquila, he estado charlando con Mariluz - me miró consternada.

-ELI: iba a decirte que tuvieras cuidado con ella, dicen que es una devoradora de yogurines, pero siendo tú, no se si advertirla a ella sobre ti.

-YO: tarde…. - le hice oler mi mano que aun desprendía olor a hembra en celo -…. a esa me la cepillo en menos de una semana, se ha librado ahora por que tengo que llevarte a casa.

-ELI: joder no das tiempo a nada, aun estoy dolorida de anoche y ya ………

-YO: no quiero ser grosero, pero ya te lo dije ayer, me voy a llevar a quien se ponga por delante - guardó silencio.

-ELI: bien, deja que me de una ducha rápida en el camerino y me acercas al gim, que tengo allí el coche…….- la agarré del cuello y la di un fuerte beso, ella se resistió al principio pero luego se dejó hacer.

-YO: ¿que te parece si nos damos esa ducha juntos? - la sujeté del trasero con firmeza.

-ELI: ¿aquí? - se mordió el labio mirando alrededor.

-YO: si tú quieres, esa zorra me la ha puesto dura.

-ELI: podrían oírnos.

-YO: te oirán gritar, de eso me encargaría yo, pero a mi me da igual, decide.

-ELI: eres insaciable - me besó acariciando mis mejillas.

-YO: ¿donde esta ese camerino?

Corrimos como el viento, pasamos el suyo y nos metimos en el más alejado, nos desnudamos a la velocidad de la luz y bajo la ducha la volví a follar 2 veces, la 1º por el coño, cara a cara, montada sobre mi y manteniendo una ligera discreción, sujeta a la barra de la ducha y besándonos sin parar, la 2º por en culo, la puse de espaldas a mi y la penetré con una habilidad pasmosa, eso no cambió que sus gritos llenaran los camerinos, cualquiera que estuviera en ellos nos oiría, y hasta en la zona del plató, pero cuando la bestia se corrió en su culo no pudo evitar gritar como una posesa. Al salir por la puerta, una de producción con los cascos en el cuello, rechoncha y con gafas, se me acercó mientras Eli se despedía de sus monitores.

-CHICA1: se os ha oído desde aquí, he oído todo

-YO: ¿y que?

-CHICA1: también te he visto con Mariluz.

-YO: ¿y que?

.CHICA1: podría hablar, pero si tú, quizá me……- la corté agarrándola de la mandíbula con fuerza.

-YO: a ti no te follaría ni aunque fuéramos la última pareja fértil de la tierra, ¡¡ballena!! - la grité tan fuerte que rompió a llorar, me sentí fatal al instante, viéndola salir escopeteada, pero tragué aire, y me convencí que era necesario para mi nuevo rol de cabrón engreído.

Eli tardaba en volver, Mariluz le estaba entrevistando sobre la clase improvisada del día anterior en su gim, por lo visto había tenido cierto impacto mediático, o se iban a ocupar de que así fuera, Eli lo hizo bien en el sentido de que asumió toda la responsabilidad ocultando mi identidad ya que Mariluz y la cámara se habían fijado en mi, Mariluz se quedó ausente unos segundos en directo al ver en la pantalla mi torso desnudo en la grabación. Al terminar nos fuimos en mi coche, el camino a su gim fue genial, le acariciaba la pierna siempre que no tenia que cambiar de marchas y ella me acariciaba el brazo, me obligó a aparcar algo lejos del gim, los de la prensa rosa conocían su coche y estaban alrededor de la calle parapetamos esperando verla aparecer. Nos dimos un beso largo y sensual.

-ELI: me tengo que ir - sonó triste.

-YO: me he alegrado mucho más de lo que pensaba al verte.

-ELI: seguro que si, pero no más que yo, sabes, podría pasarme por tu casa después del matinal, algunas veces, me pilla de paso a la vuelta.

-YO: como quieras, pero………..

-ELI: ya lo sé, “no seré la única” y puede que te pille machacando a alguna inocente mujercita - asentí con una sonrisa cómplice.

-YO: la dejaré a medias y te dedicaría toda la mañana….. - solté el cinturón de seguridad y metí mi mano entre sus mulos acariciando su coño caliente por encima de los leggins, se abrió de piernas para facilitar mi masaje y volví a besarla -…. eres mi preferida, no lo olvides.

Se tuvo que contener para no lanzarse encima mía, y yo para no follarla en mitad de la calle, nos despedimos con cierta amistad, y la vi alejarse hacia su coche poniéndose las gafas de sol, en cuanto alguno la reconoció saltaron sobre ella varias cámaras, coger su coche e irse, al volver a casa comí algo con la TV puesta, vi algún programa rosa y no tardaron en hablar de Eli, de la clase del día anterior y de sus palabras “en exclusiva” de hacia una hora, mostraron a Eli esquivando a los periodistas antes de coger el coche, masacrándola a preguntas sobre aquel joven tan guapo y quien era, ella solo dijo “no hay comentarios”, Dani se rió al reconocerme en la TV, y mi madre me llamó esa tarde gritando de emoción, era adicta a esos programas, durante un par de días se habló de mi hasta que alguna cantante de copla española le dio por desheredar a su hijo y se olvidó el tema.

Me dio igual, obtuve lo que quería, había saciado mi sed gracias a Eli, y ahora estaba listo para empezar lo que tenia en mente.

Raúl – De caza.

YO: que no, no insistas……..- desesperado ya me senté en la cocina -…..por que no, no quiero ni voy ha hacerlo…….- el teléfono móvil me pesaba una tonelada en la mano de tanto tiempo de la llamada -….¿y a mi que más me da?.......- bufé de desesperación dejando el móvil en la mesa y recostando mi cabeza sobe él-………..pero a ella le gusta y a mi no……….- Dani se partía el pecho de risa mientras terminaba de hacer la comida en la encimera……..- pues se lo preguntaré pero no se si ella tiene peso para pedirlo……vale pues en cuanto la vea se lo digo….…… adiós….si………….hasta luego………..va, un beso………….va……..adiós mama - por fin colgué.

Solté un suspiro que Dani reconoció como exasperación, se acercó a dejarme un plato de ensalada, riéndose aun.

-DANI: ¿otra vez madre?

-YO: si……….gracias por la comida….- descubrí en esos días que Dani tenia buena mano con la cocina, y aunque no la tuviera mi educación no me permitía que me hiciera la comida y me la sirviera sin agradecérselo, pese a se runa empleada.

-DANI: ¿otra vez querer que tú salir TV?

-YO: si, desde que me vio va por el barrio como la madre de un premio Nobel, presumiendo ante las amigas.

-DANI: ¿y ahora que querer?

-YO: pues le ha dado por decirme que le pida a Eli que sea uno de sus monitores y salga en antena con ella a diario.

-DANI: jajajaa ¿y tú no gusta?

-YO: pufff no , Eli me ha dicho que cobran muy mal por el programa y es mucho lío, prefiero apartarme de las cámaras lo más posible por ahora.

-DANI: ¿y que querer que tú preguntar?

-YO: que le pidiera entradas para acudir como publico al matinal de las mañanas, ¡yo que sé!, está como una cabra - Dani me rascó la cabeza con cariño.

Apenas había pasado una semana desde que volví en mi, desde que la enfermera me sacó de mi apatía y Eli me vació lo suficiente como para poder controlarme, y desde ese día a las 10:45 tenia a Eli llamando a la puerta de casa, venia cada día después de su clase en antena y como le pillaba camino al gim, subía a ducharse mejor allí que en el camerino, obviamente follábamos un par de veces en cada visita, estrenamos la piscina y cada dormitorio, Dani se sonrojó las primeras veces que nos vio desnudos o follando por la casa, o al bajar a beber algo y ver su cara consternada por oír gritar a Eli, la 1º vez acudió en su auxilio con una bolsa de hielo, me reí tanto que me dio hipo. Después de unas cuantas veces Dani comprendió lo que pasaba y su papel en esa casa, quería un ancla, alguien que me recordara por que estaba en esa casa, pero sin perderme, una persona de confianza, y Dani encajó a la perfección, era buena, amable, sonriente y algo inocente para haber sido puta tanto tiempo, pero me gustaba su presencia, y en tan poco tiempo la cogí cierto afecto.

-DANI: yo marchar ya - recogía sus cosas, después de hacer la comida se marchaba.

-YO: muchas gracias por todo.

-DANI: no querer molestar, yo no ver a señorita Eli hoy…….¿pasar algo?

-YO: si, resulta que le ha venido el periodo, y no anda con muchos ánimos para hacerme una visita.

-DANI: si triste yo follar - me reía ante sus ofrecimientos, los soltaba como si ofreciera caramelos.

-YO: no, gracias preciosa, tengo planes para no terminar el día solo, aun así, te lo agradezco, y el día que lo desees, ya sabes, no tienes más que pedírmelo - asintió con cariño.

-DANI: si - se acercó a darme un beso en la mejilla y se fue mientras comía, no quería tirarme a la Dani puta que se ofrecía sin más, si no a la Dani persona, y del afecto que la estaba cogiendo no sabía ni si, dado el caso, sería capaz.

Tan cierto era que tenia planes como que no sabia con quien, Eli me tenia muy contento así que había aplazado unos días mis objetivos, dios mío como se movía aquella mujer, pero le llegó la regla, se puso algo arisca y justo en ese fin de semana se iría de viaje al norte del país a inaugurar otro centro de los suyos y hacer promociones por la zona, así que estaría mínimo 1 semana sin ella, y eso no podía pasar, llegó el momento en que tenia que elegir a mi 1º víctima. La idea de contestar alguno de los mensajes o numerosas llamadas de Mariluz, la presentadora MILF, me tentó pero se puso tan pesada que dejé de contestarla solo para hacerla rabiar y acrecentar su deseo, por lo que me dijo Eli tenia un marido periodista de prestigio en Alemania, pero casi no se veían y Mariluz se follaba a cualquier jovenzuelo que le entrara por el ojo, y yo era su nuevo juguete, pero yo no era un novato que se ponía nervioso ante una foto de sus tetas enviada al móvil, por contundentes que fueran, la dejaría rebanarse los sesos para tenerla loca de pasión.

Así que imaginé quien seria la siguiente, en el trabajo Adriana y la jefa se pusieron muy contentas cuando les dije que corté con Ana, de hecho se quedaron una hora más de su turno para estar hablando conmigo, inventé, o las dejé ver, algo de dolor en mi rostro, aun me escocía pero Ana era una herida cerrada. El hecho de acostarme con compañeras de trabajo me podía poner en una situación delicada, así que descarté la idea por el momento y siempre podría hacerlo en el trabajo. ¿Llamar a Lara?, follaba bien y ya nos conocíamos pero la verdad, me atraían cosas nuevas y tenia planes para ese piso de estudiantes.

Así que después de comer, y una buena siesta, salí a correr por el parque, retomé algunas rutinas de ejercicios leves para volver a estar al 100%, y había quedado a esas horas con algunas de las mujeres del parque, aquellas que me acosaban cuando estaba con Ana, se alegraron mucho de mi regreso y todas muy interesadas en saber de mi ruptura con Ana, solo se lo dije a una y al día siguiente había 10 mujeres preguntando, todas corrían y estaban esperándome para que las marcara el ritmo, sin saber mucho, les hacia de monitor, aunque alguna sabia más que yo y fingía lo contrario. Eran de todo, desde una chica de 17 años hasta una adulta de 52 años, se formó como una especie de grupo de apoyo entre ellas donde yo era el único tío, algunas se cansaban de esperar y se iban a buscar a otro de los tíos buenos del parque, las guapas y exuberantes en su mayoría, pero parecían aves en busca de presa y poco que interesadas en el entrenamiento, eso si, tenia 8 o 9 fieles, entre ellas 2 muy apetecibles, 3 en realidad, la chica de 17 años tenia un polvazo, Lola, pero era menor y hasta su mayoría de edad no pensaba tocarla.

Estaban Lucia, una mujer de 33 años, madura y con 2 hijos, de 6 y 4 años, pero que se mantenía a base de ejercicio y yoga, rubia con pelo corto, lo justo para hacerse una coleta, de ojos negros y con muy buenas tetas, tenia el culo plano pero una cintura de avispa que le alegraba las caderas, de 1,72 de altura y piel curtida, seria y muy fuerte mentalmente, imponía respeto.

Jennifer, Jeni, una mujer de 24 años, morena con larga melena, se hacia 2 coletas hasta que bromeé un día de eso, al día siguiente una sola coleta hasta tocarse la espalda, ojos marrones y guapa, físicamente era la más atractiva de todas, bien proporcionada, no destacaba en nada exageradamente, tetas normales y trasero respingón, con las curvas justas, una chica normal pero hermosa y atractiva, 1,67 de altura, con un lunar en la mejilla muy coqueto y un tatuaje en la zona del omóplato del yin y el yang, era divertida y con la que tenia una conexión especial, quizá de la edad tan cercana a la mía, y el día que faltaba la echaba de menos.

Lola, la menor que os decía y que en realidad se llamaba Casandra, pero todas la llamaban lolita por su aspecto y su forma de ser, tanto que al final se quedó en Lola, era una muñequilla preciosa, rubia, pelo largísimo hasta la cintura, iba sin coleta, solo al correr se hacia un moño de forma graciosa con una cinta de pelo y un bolígrafo, de ojos azules y un cuerpo diminuto pero repleto de curvas que se desarrollaban, senos bien formados, enseñando gran parte del ombligo, con un piercing en él, y la espalda al aire, con los leggins bien bajos en la cintura y el culo prieto y firme que su edad le concedía, si pasaba del 1,57 era de milagro, con los pómulos llenos de pecas, una cabra loca en su forma de comportarse y actuar, una de esas crías que son buena gente pero que parece que no tenían padres que la educaran, hablaba de forma barriobajera, mascaba chicle sin parar, no sé, cosas como meterse la mano en el culo para sacarse el hilo del tanga mientras decía abiertamente que la picaba el culo, poco “refinada” por así decirlo, se comportaba como una adolescente rebelde, Lucia y las demás la tenían tiesa como una vela, al ser la joven hacían de madre, parecía que la estaban educando ellas con continuos rapapolvos, habían conseguido que dejara de montar líos, ya que a la mínima se ponía hecha una furia, que mostrara respeto y algo de educación.

Tenia más que claro cuando me dirigía al parque que esa tarde Lucia o Jeni vendrían conmigo a casa, Lola se me había insinuado ya varias veces de forma obvia y grosera, como colegial que era, le había rechazado de pleno pero al volver de mi ruptura la dije que me enseñara el DNI para saber su fecha de cumpleaños, sonrió encantada al ver como me puse una alarma en el calendario del móvil, no era en mucho tiempo. En cambio Lucia, como mucho, intentó la treta de lesionarse para ir en mis brazos, no se atrevía a pasar de eso, Jeni no parecía interesada en tener sexo, sino más bien compañía al correr, pero un día me dio su móvil en un papelito repleto de corazones.

Iba maquinando cuando llegué al parque, el grupo de mujeres estaba en la entrada de siempre, estirando o charlando, la mujer de 52 años me había visto en la TV como mi madre, y estaba loca de felicidad, me hice fotos con ella para calmarla, saludé a todas y como monitor que me habían erigido, fui haciendo unos ejercicios de estiramiento delante de ellas que iban siguiendo mi cuerpo con los ojos, sus miradas eran ya de confianza, pero no sutiles, desde que volví a mis rutinas me dio igual ir marcando polla en el pantalón sin nada debajo, o músculos con camisetas muy ceñidas, mi eterna barba de 3 días y mi espeso cabello negro, corto pero lo justo para poder agarrarlo, y mis profundos ojos marrón oscuros con una caída ensayada, eran mis armas, y ellas encantadas, cuando hacían los ejercicios mal las metía mano para corregirlas, las masajeaba las piernas, las cogía del vientre, directamente del culo o las tetas, algunas lo hacían mal adrede y otras por que sus físicos no daban de si, pero yo jugaba con todas, a Jeni casi nunca la corregía, estaba convencido de que sabia más que yo, era monitora o algo, pero alguna era todo lo contrario, se equivocaban mucho, demasiado para ser provocado, eran personas torpes, pero se iban haciendo con todos los ejercicios.

Cuando por fin estiramos comenzamos la marcha, un trote simple, a ritmo bajo, dar vueltas en grupo y así apoyarnos unos a otros y esas cosas, íbamos aumentando el ritmo cada vuelta hasta que a partir de la 4º o 5º llegaban los abandonos, no se forzaba a nadie, quien no podía seguir se hacia a un lado, para la sorpresa de todos, la señora de 52 años aguantaba más que muchas jóvenes, 2 de 40 años eran las primeras, luego una de 35, y allí si, la buena señora de 52 años cedía, pero mantenía un pique con Lola, la “benjamina”, que acababa de empezar en esto, aun sin fondo físico, pero hasta que no veía pararse a la cincuentona, no paraba. Al final quedábamos los 3 de siempre, Jeni, Lucia y yo, a Lucia correr se le daba bien, llevaba mucho tiempo haciéndolo, desde que tuvo a su 1º hijo, para conservar la figura, y a fe que lo lograba, aun así iba con la lengua fuera cuando Jeni y yo apretábamos el paso, pero esta vez decidí ir más despacio para poder hablar con las 2.

Si bien tenia el cajón lleno de aspirantes, no seria tan fácil como llamar y abrirlas de piernas, ni me gustaría que lo fuese, tenia ganas de cazar, y mi encontronazo con Mariluz, la presentadora MILF, me recordó lo excitante que es el cortejo, aunque me hubieran puesto delante a Jessica Biel, si se hubiera abierto de piernas a la 1º no me interesaba, ya me cuidaba yo de ir a por las que ofrecían un reto, y ahora estaba rodeado de 2, tenia que tener cuidado de no estropearlo, y comencé el casting sin que ellas lo supieran, hablando con ellas entre jadeos y respiraciones por estar corriendo.

-YO: ¿como vamos?

-JENI: bien.

-LUCIA: muy bien, a esas alturas otros días estoy fuera – “normal”, estaba ralentizando la marcha por ti, te necesitaba allí, te quería allí.

-YO: bien, me alegro, por que yo estoy con la lengua fuera - en parte falso, podía seguir, pero en parte cierto, aun no estaba en forma y ya íbamos por 40 minutos corriendo.

-JENI: ¿en serio? Ya te dije que no forzaras tanto después de parar - por esas cosas intuía sus conocimientos.

-YO: me da igual, si me ganan 2 mujeres tan guapas se va a reír de mí el resto del parque.

-JENI: ¿que pasa, que por ser monas no podemos ganarte?

-LUCIA: eso, te vamos a dar una paliza.

Ambas aumentaron el ritmo, predecibles como siempre, ahora solo tenia que hacer mi papel, aguanté un rato su ritmo, pero cuidadosamente fui dándolas metros, las oía reír y vitorear, cuando pasamos al lado del grupo de las que ya se habían rendido y las animaban reíamos, allí hice mi jugada, al ser alto tenia zancadas largas y apretando el paso las alcancé, no sin bastante esfuerzo, y las sobrepasé como un avión, me costó más de lo esperado, pero estaba donde quería, delante de ellas, con sus ojos clavados en mi, lejos del resto ya, entones cada ciertos pasos fui dando uno torpe, claramente, fui aminorando la marcha y antes de que me alcanzaran me apoyé en un árbol agachado y sujetándome la cabeza. De inmediato se pararon a mi lado, Jeni me sentó en el suelo y Lucia me puso la mano en la frente, como madre que era.

-JENI: ¿estás bien?

-LUCIA: tienes la frente ardiendo – “no te jode, me he marcado un sprint de la hostia a 30 grados”.

-YO: si, si, solo se me ha ido la cabeza un segundo.

-JENI: ya te he dicho que no fuerces, pero eres un cabezón.

-LUCIA: ¡¿no nos podías dejar ganar o que?, mira como estás!

-YO: no, tranquilas, estoy bien, pero por hoy se acabó, me rindo jajajaja - demostré algo más de control sobre mí.

-LUCIA: eso no importa bobalicón, toma, bebe agua - me dio de su botella colgada de la mochila donde tenia de todo, seria deportista pero era madre, tiritas, spray muscular, pañuelos, agua……

-YO: gracias preciosa - le di un trago corto - puffff me voy a casa, me encuentro algo mareado - hice ademán de levantarme para volver a sentarme de golpe - ufffffffffff,

-JENI: así no te puedes ir, no solo - contuve mi sonrisa.

-LUCIA: es verdad, yo te acompañaría a casa pero tengo que ir a por los niños al colegio - miró a Jeni.

-JENI: deja, ya le acompaño yo a casa- “¡BINGO!”, ya tenía ganadora.

-YO: no por dios, tendrás cosas que hacer, no te molestes, ya voy solo…...- me puse en pie con cierta dificultad apoyado en ellas.

-JENI: no es nada, no tengo nada que hacer y vives cerca, ¿no?- asentí.

-YO: si, pero………

-LUCIA: ni pero ni pera, te acompaña y punto - era madre, no había duda.

-YO: vaaaaale, de verdad como sois, si estoy bien…...- di un par de saltos y me eché algo de agua en la cabeza para despejarme antes de devolverle la botella. El agua mojó mi camiseta que se pegó a mi trabajado cuerpo, pillé a Lucia mirando mi torso mordiéndose el labio, pensé “lo siento, tienes críos, otro día será, sin saberlo me has servido a Jeni en bandeja”.

-JENI: vale, vuelve con las otras y dilas que se acabó por hoy….. - me miró -…. ¿por donde es tu casa?

-YO: pues mira, casualmente es por esa 1º salida – “casualmente mis cojones”, no me iba a arriesgar a hacerlo delante de otras o lejos de la salida a mi casa para que se ofreciera otra a llevarme.

Caminé apoyado en ella hasta la salida del parque, allí la solté un poco y me probé sabiendo perfectamente que estaba bien, insistí tenuemente otra vez en que se fuera, pero se negó alegando que Lucia le cortaría la cabeza habiéndome dejado ir solo, pero sus ojos contaban otra historia, me comía con ellos, la camiseta ceñida y mojada realzaba mi pecho o mi tableta, y mi polla rebotaba claramente bajo el pantalón. Charlamos un poco, guiando el tema, ya sabia que estaba soltera, o eso me lo dijo en cuanto regresé y se corrió la voz de que dejé a mi novia, andaba de forma lenta y pausada, apoyándome en papeleras o postes en cada semáforo, estabamos cerca de mi casa cuando se la indiqué, abrió los ojos como platos.

-JENI: ¿vives ahí?

-YO: claro ¿por que os extraña a todos? - no era la 1º que me lo decían.

-JENI: no lo sé, no pareces un niño pijo…..- se sonrojó al instante- ….. perdona no quería decir eso.

-YO: jajaja tranquila, si no me ofendes, no lo soy, solo tuve suerte y ahora vivo en el 10º, solo ahora que Ana me dejó - les había dicho que cortamos de mutuo acuerdo, pero a ella y Lucia, en privado, las quise diferenciar del resto y las dije que me dejó por otro, así me ganaba su confianza separándolas del resto haciéndolas sentir especiales y le sumaba el factor cotilla, querían saber como, por que y que motivos tendría Ana para dejar a un chico tan guapo y bien dotado como yo, y sobretodo, como poder evitar hacerlo ellas. El pájaro herido también podía funcionar en este caso.

-JENI: pues ya casi hemos llegado, si hasta tienes botones en la puerta.

-YO: ya ves, Jorge es un soso, solo saluda como un robot, verás, entra en el portal conmigo - sonreí cogiéndola de la mano.

-BOTONES: buenas tardes, Don Raúl - agachó la cabeza, mientras abría la puerta.

-YO: buenas tardes Jorge, ya te he dicho mil veces que no me llames así, ese es el futbolista, yo Raúl, a secas.

-BOTONES: lo siento señor, es la costumbre - sonrió con algo de falsedad.

-YO: mira, te presento a Jenifer, una amiga del parque en que salgo a correr.

-JENI: ho…..hola - estiró la mano, el botones se la cogió he hizo una suave reverencia.

-BOTONES: bienvenida al edificio, mi señora.

Entramos tronchándonos de risa, ella por el botones, pero yo por que ya la tenía dentro del edificio, en concreto delante del ascensor.

-YO: ¿lo ves?, pues así todos los putos días, si salgo a las 12:57 de casa “buenos días” y cuando vuelvo a las 13:05 “buenas tardes” y a partir de las 19:00, “buenas noches” - la imitación de la voz solo la hizo sonreír.

-JENI: por dios, pobre hombre, si parece que le hayan metido un palo de escoba por el culo jajajajajaja - reí con ella, lo suficiente para que llegara el ascensor.

-YO: jajaja anda pasa ….- la indiqué el interior del ascensor, su sonrisa se calmó y vi dudas - ….no vas a volver a salir según entras, ¿que va a pensar el botones?......- asintió y entró serenándose -…..anda dale al 10º piso - se giró hacia el panel buscándolo sin encontrarlo, “normal, no está”.

-JENI: no……no lo encuentro jajaa - me pegué a su trasero pasándole un brazo por el hombro.

-YO: ah coño, siempre se me olvida, pasa del 9º al ático - pulsé el botón del ático, se giró sorprendida.

-JENI: ¿vives arriba del todo?

-YO: eso quiere decir ático…...- respondí restándole importancia, pero la tenia con la boca abierta incluso antes de ver el piso -…. dios que ganas tengo de darme un chapuzón……….

-JENI: ¿¡¡¡¡Tienes jacuzzi!!!? - reí dando unos segundos de tensión.

-YO: si………. - estaba el de la habitación grande con baño de hidromasaje -……….. pero prefiero la piscina…………...- si fueran dibujos animados hubiera oído su mandíbula chocar contra el suelo.

-JENI: no es…..no es buena idea, que te metas en una piscina ahora.

-YO: ¿y eso?

-JENI: ¿y si te da otro mareo dentro? – “joder, se me ha pasado eso”, es difícil recordar tantas cosas cuando manipulas, pero visto de otro modo, ahora tenia un motivo para hacerla entrar en casa.

-YO: pues yo me lo voy a dar igual, si quieres pasa y me hechas un ojo.

-JENI: ya claro, y yo y mis 59 kilos te van a sacar del agua a ti jajajajaja - su gesto con las manos media el ancho de mi espalda.

-YO: tú misma, si pasado mañana aparezco en las necrológicas, ahogado en la piscina, te las tendrás que ver con Lucia………- “joder”, para improvisarlo me había salido genial.

-JENI: vale………- aceptó a regañadientes de mentira, tenia unas ganas locas de ver el piso por dentro.

Al llegar arriba, (ese ascensor tardaba un mundo en subir y bajar), pasó delante mía, pude notar las marcas se sudor en sus pantalones deportivos y la chaqueta que tenia puesta por encima de un top deportivo con el ligero escote empapado en su transpiración. Quedó parada ante la enorme puerta blanca, y le abrí como si fuera un sueño, la luz la entrecerró los ojos, para cuando se acostumbró al sol ya estaba dentó con la puerta cerrada.

-YO: anda pasa, es tu casa - fingía no mostrarla atención mientras dejaba las cosas en el mueble de la entrada y me descalzaba.

Estaba perpleja, admirando el amplio salón, andaba lentamente, con miedo a romper algo, la ofrecí algo de beber que aceptó ensimismada, “agua……..agua fría, por favor” susurró, se la traje, bebimos un trago largo ambos y la mostré la gran puerta corredera de cristal, menos mal que Dani le había dado un repaso por que si no las enormes tetas de Alba, la enfermera, seguirían allí marcadas, el reflejo del sol aun era fuerte, el agua brillaba con fulgor. Abrí la puerta y fui corriendo a saltar a la piscina, oyendo su voz riéndose de fondo, al salir estaba en el borde mirándome cruzada de brazos, sonriendo.

-YO: dios, que gustazo - nadaba en círculos.

-JENI: que bestia, ni siquiera llevas bañador.

-YO: ni que fuera una piscina publica - me acerqué a ella salpicando algo de agua, eso es inevitable cuando uno esta en el agua y otra persona está en la orilla.

-JENI: jajaja para, que me vas a calar.

-YO: perdona, llevas algo encima que se pueda estropear, ¿el móvil o la cartera? - se palpó entera.

-JENI: no, lo dejé todo en la entrada, pero me vas a resfriar jajajaja.

-YO: perdona, anda ayúdame a salir - hice casi todo el esfuerzo para salir y extendí mi mano, agarró y cuando la apreté, entendió mi idea.

-JENI: ¡¡NO!! - gritó cuando ya estaba volando por los aires entre risas, se zambulló en el agua ante mi tirón, lo fuerte que tenia que ser para echarla al agua pero lo delicado para que cayera de pie sin peligro.

-YO: ¿que, esta buena el agua?

-JENI: jajaja que cabrón, ¿y si no se nadar? – espetó al salir del agua y apartando las gotas de sus ojos.

-YO: te hubiera tenido que rescatar y hacerte el boca a boca, una idea que me atrae - sonrió sacándome la lengua y salpicándome agua.

-JENI: pues te jodes, por que si sé - se quitó las zapatillas de deporte encharcadas y me las tiró cerca de la cabeza sin peligro alguno, para sacarlas del agua, al igual que los calcetines o la chaqueta.

-YO: vale, perdona…….- sonó a disculpa falsa, lo que era, estaba jodidamente preciosa, más aun cuando se soltó la coleta del pelo y su cabello húmedo la caía por el rostro.

-JENI: no pasa nada, pero ahora tengo la ropa empapada.

-YO: ¿y que?

-JENI: que no me puedo ir de aquí con esta ropa ajustada empapada, que se me va a marcar todo el potorro, capullo - se rió para darle el tono de broma que era.

-YO: va, pues quítatela y déjala al sol.

-JENI: ya, y me quedo en pelotas delante tuya,………….y aun así, las zapatillas no se secan así - esa aclaración me dio la pista clave, si las zapatillas se secaran así, ¿estaba dispuesta a quedarse desnuda delante de mi?

-YO: tenemos una lavadora con secadora, pero no tengo ni puta idea de cómo funciona, eso lo sabe Dani, la sirvienta - mentira, sabia perfectamente como funcionaba, me había ocupado de enterarme de todo antes de dar la patada a Eleonor.

-JENI: ¿tienes sirvienta?

-YO: bueno, no exactamente, es una mujer que viene por las mañanas y recoge mis estropicios, buena gente.

-JENI: pues ya me dirás que hacemos.

-YO: podemos probar a intentar poner la lavadora.

-JENI: y dale, no me voy a quedar desnuda delante tuya.

-YO: aunque sean solo las zapatillas, pero veo un absurdo poner la lavadora solo para eso, teniendo albornoces……….- su cara se volvió a iluminar.

-JENI: a bueno, puedo ponerme uno mientras se seca todo….- parecía ilusionada con la idea.

-YO: de puta madre, así tomamos un rato el sol tomándonos algo.

Salí del agua de un tirón quedando ante ella con el pantalón y la camiseta envasando al vacío mi cuerpo, estiré de la zona de la pelvis para hacer que disimulaba, ella ofreció su mano para salir del agua, la cogí y la ayudé a subir, cuando estaba arriba tiró de mi con fuerza para echarme al agua, casi lo logra al pillarme desprevenido, pero la diferencia de peso y mis piernas aguantaron, de hecho una vez bien plantado, tiré del ella sacándola del agua de un salto, quedó de pie a medio metro de mi, sonriendo y secándose la cara con las manos, chorreando agua los 2 por todos lados, si ella estaba comiéndome con los ojos, yo a ellas más, el cuerpo femenino húmedo siempre me atontaba pero con prendas elásticas mojadas marcando sus pezones y su “potorro” como bien dijo, se me puso morcillona y lo vi en sus ojos. Entré a por un albornoz mientras ella se esforzaba por sacarse el agua de los recovecos de sus senos y entre pierna, escogí el más corto que encontré, parecía uno de niña pequeña, seria de Yasmine, la hija de Eleonor, de antes de dar el estirón supuse, al salir con él, lo cogió y me miró.

-JENI: ¿donde quieres que me ponga esto?

-YO: yo que se, el que he encontrado, esta ese y el mío, pero no se si te dará grima…- giró la cabeza “si no hay más remedio” se leyó en su rostro.

-JENI: te importa si……..- hizo un gesto claro con el dedo para que me diera la vuelta, accedí disculpándome, pero me conocía bien la casa, el reflejo en la puerta corredera era como un espejo.

Se quiso poner el albornoz normalmente pero era absurdo, le quedaba como una chaqueta larga y no cerraba del todo, de forma hábil, se puso el albornoz a modo de toalla, y con movimientos circenses se sacó el top, el pantalón y un tanga diminuto, no llevaba sujetador, no necesitaba para realzarlas pero el top hacia sus funciones, así que, mirando de reojo por si me daba la vuelta, ató las mangas del albornoz y se hizo una especie de vestido palabra de honor que le tapaba lo justo, desde la línea del escote hasta el comienzo de sus piernas, tiraba hacia abajo pero casi se le salían las tetas, aun así había visto a mujeres de fiesta con vestidos que cubrían menos. Así que con cierto estilo se agachó a coger las prendas, metió en tanga escondido entre lo pantalones y me avisó.

-JENI: ya está - sin darme la vuelta.

-YO: vaya, algún día las mujeres tendréis que enseñarnos a los tíos esos trucos - miró extrañada sin entender nada hasta que se vio reflejada en el cristal y me vio mirándola directamente en el rebote.

-JENI: ¡eres un mamón! - me sacudió en la espalda con una sonrisa dibujada.

-YO: y tú una acróbata rusa, que manera de desnudarse sin enseñar nada……….- abrió al boca con una indignación inexistente - …….una lastima……..- me volvió a sacudir y esta vez me pegó en el pecho con su ropa sucia.

-JENI: anda, vamos a ver como funciona esa lavadora - la vi andar enseñando el inicio de su culo por debajo, con clase.

Fuimos hacia la cocina, yo sabia como funcionaba la lavadora, pero busqué el manual de intrusiones, estuve bromeando con ella mientras se esforzaba por agacharse a leer el cuadro de mandos sin que se le viera nada, fuimos dando botones al azar, leyéndola las instrucciones, fui indicándola con palabras certeras, de hecho solo había que darle a 2 botones pero di mil vueltas para que fuera ella la que “descubriera” como funcionaba, cuando estabamos listos echamos el jabón, metió su ropa y fue a darle al botón.

-YO: espera, agonías, ya puestos meto la mía también - tiré del cuello de mi camiseta pero entre lo ceñida que era, que así salía fatal y que estaba mojada, era difícil, si hubiera querido de un tirón la sacaba pero la dejé “ahogarme” pidiendo auxilio entre carcajadas.

Sentí sus dedos en mi piel cuando cogió de la parte de abajo y fue ayudando a que saliera, cuando la saqué de mi cabeza aun tenia sus dedos en mi pecho y me hacia una radiografía del torso mordiéndose el labio, “es mía”, sujeté del borde de mis pantalones.

-YO: esto…podrías…..- la hice su mismo gesto para que se diera la vuelta.

-JENI: ¿que pasa?, ahora te va a dar vergüenza que te vea en calzoncillos - rió altiva.

-YO: me lo daría………. si los llevara - se sonrojó dándose la vuelta, avergonzada.

-JENI: pero como sales a correr así………..con eso……..al aire - me quité el pantalón y lo metí todo en la lavadora, cogí unas bermudas que había en un montón de ropa planchada la lado de la tabla donde Dani solía dejarme las cosas y me los puse.

-YO: ya claro, y que me hagan rozaduras con el sudor, así voy mejor…- una pequeña pausa cogiéndome el rabo, exhibiendo, para colocarlo bien antes de meterlo dentro de la ropa -….ya esta, puedes mirar - se giró con un gesto veloz y sensual, tanto ella como yo sabíamos que la puerta del armario de enfrente, negra y de cristal, le habían regalado mi reflejo desnudo, aunque ella no sabia que yo lo sabia.

-JENI: bien, pues en marcha - con alegría pulsó el botón y se quedó mirando por si aquello funcionaba mal, mi ropa y la suya con sus zapatillas.

-YO: pues tú me dirás que quieres tomar…..- abrí la nevera, de inmediato ella se puso entre el frescor que salía y yo.

-JENI: a ver que tienes…….- removió un par de cosas, sacó el cajón de congelados y dio palmas de felicidad al ver una caja de helados de nata - ¿puedo coger uno? - puso cara de cachorro.

-YO: lo que tú quieras, es tu casa - me sonrió y se abrazó de mi cuello, sentí el frío del helado en la espalda, al separarse se recolocó el escote del albornoz con cuidado mientras desprendía la envoltura y la tiraba a la basura.

Fui detrás de ella con un refresco de cola, intentaba quitarme ese vicio pero era el único que tenia, ese y el sexo salvaje, dudamos si sentarnos en las hamacas o en el césped, pensé que el césped seria adecuado por el sol que aun daba en esa zona, degustó el helado de nata con pasión, y yo disfrutaba al ver sus buenos lametones, imaginado lo que ya sabéis, reímos y charlamos, ella se aseguraba de forma constante que no se le viera nada, pero al cambiar de posición sus muslos evocaban la feminidad.

-YO: en la gloria estoy, tumbado en el césped, tomando el sol, con un refresco en la mano y con una bella mujer a mi lado - coño, si hasta rimaba.

-JENI: pufff vives como un rey, aunque……..

-YO: dime.

-JENI: te estoy poniendo perdido el albornoz con el césped y me voy a quemar jajaja, se que esta feo quejarme pero……

-YO: mira a ver en ese armario de la pared, a ver que encuentras - dije con cierto desdén.

Con habilidad se puso en pie sin enseñar nada, sujetándose el escote, no evitó que se le viera medio culo desde mi posición al andar, al abrir el armario encontró crema solar, unas cuantas gafas de sol y unas toallas enorme colgadas, junto a 2 albornoces de adulto.

-JENI: ¡que cabrón!, mira lo que hay aquí…..- miré confuso, al verlo me eché a reír, de verdad, no me acordaba de lo que había allí, eran cosas de la piscina, gafas de agua, cremas, manguitos, flotadores……etc, nunca había abierto ese armario, o no recordaba haberlo hecho.

-YO: hostias, jajajaja pues no lo sabia, perdona.

-JENI: ya, claro….- no me creyó, casi la única verdad, o no manipulación, que le había dicho y fue la que no se tragó, ironías.

-YO: pues trae la toalla y ponla debajo para no marcharse con el césped, y la crema y así no me quemo yo también.

-JENI: ¿puedo coger una de las gafas de sol?

-YO: todas tuyas - se giró mirándolas

-JENI: ¿cual cojo?, es que son todas de Armani y no quiero romper ninguna buena.

-YO: ¿de Armani?, ¿esos no hacen ropa?

-JENI: si tonto, pero también gafas, estas son de mujer todas, y de las caras, ¿cual cojo?

-YO: pues las que te de la gana…….. y quédatelas, yo no las necesito.

-JENI: ¿que dices? Si valen una pasta.

-YO: ¿y a mí que?, son de mujer, ¿me las voy a poner yo?

-JENI: no jajajaja pero no puedo……..

-YO: pues ya está, la que más te guste y te las quedas - me tumbé de nuevo restándole importancia y zanjando el tema, un buen regalo ayudaría, Eleonor se fue y me había dejado un dineral en complementos y botellas de vino por lo visto, ¿que habría por la casa de valor?

Jeni – Pieza de caza.

Jeni escogió unas gafas del armario tardando unos minutos, “mujeres”, se puso unas y saltó hasta el césped, estiró la toalla y se tumbó encima poniendo poses preguntando como la quedaban las gafas, dándose crema en los brazos, los hombros y las piernas, no se si era consciente pero la miraba todo el tiempo, como se frotaba los gemelos y el pecho, hasta se remangó un poco el albornoz para dejar que el sol la diera calor, me asombró poco que no cogiera uno de los albornoces grandes del armario y se cambiara, si ya estaba cómoda y confiada ¿para que andar hacia atrás?. Yo hice lo propio y remangué las perneras de las bermudas hasta sacar mis poderosos muslos a la luz, oía como Jeni se estiraba en el suelo y ronroneaba disfrutando de aquello.

-JENI: dios, podría vivir así.

-YO: jajja tú y cualquiera.

-JENI: ¿y tu novia te dejó teniendo todo esto, y a ti? - la pregunta no me pilló por sorpresa, estaba esperando que ella diera el paso, no iba a alargar aquello.

-YO: algo así, supongo que tendría sus motivos.

-JENI: pues no se me ocurren cuales.

-YO: ni a mi, pero cuanto antes pasara mejor, así puedo volver a ser libre.

-JENI: ¿y no tienes a ninguna detrás de ti? - el tono era de amistad, pero quería información.

-YO: a unas cuantas, detrás, delante y donde se quieran poner mientras me las tiro …………- soltó una carcajada ante mi burrada -……………ayuda tener la vasectomía hecha, puedo llenarlas sin que haya problemas………… – eso por si aun no lo sabia - …………….. por ahora estoy en una fase rara en que no busco nada serio……………- era arriesgarme a que se cerrara pero la dejé claro que yo no me iba a atar con nadie, ella incluida.

-JENI: ya imagino……- sin duda ahora pensaba en mi cuerpo y mi polla follándose a alguna, quizá a ella misma.

-YO: ando en una etapa algo confusa, así que no busco líos largos, solo sexo.

-JENI: como todos los tíos.

-YO: si, pero a diferencia de ellos, yo lo logro - el silencio llenó la terraza, ella se dio la vuelta y se quedó boca abajo, apoyada sobre las palmas de las manos cruzadas, mirándome a través de las gafas de sol.

-JENI: un poco creído te lo tienes.

-YO: si, pero no más que algunas con las que he estado, pero cuando es una mujer lo llaman auto confianza.

-JENI: dios, me estoy tostando la espalda - desvió el tema con brusquedad, pero me alegré, había entrado en una vía muerta.

-YO: déjame que te eche crema.

-JENI: si, por favor - me alcé para coger la crema y me arrastré hasta ella, la crema la reconocí, era la que Eleonor se metió en el coño la 1º vez que Ana me habló de incluirla en nuestros juegos, sonreí mientras me echaba en la mano un poco y la extendía por la parte alta de la espalda de Jeni.

-YO: te va a quedar horrible la marca del albornoz así.

-JENI: ya, y tu idea es que me lo quite ¿no? - esa mujer tenia tablas, y los escudos activados, planeé bajarlos de un ataque feroz.

-YO: mujer, ni que te fuera a violar…...- me enfadé ante su desconfianza, era real, pretendía tirármela, pero me ponía de los nervios su coraza, me separé y me tumbé boca abajo, con rostro serio.

-JENI: perdona…….no quería molestarte - sonó sincera, suspiré para jugar mis bazas.

-YO: no pasa nada Jeni, estoy muy raro desde lo de Ana…...- calmé mi tono a medida que hablaba - ….llevo 2 años sin entrarle a una chica que me gusta y estoy haciendo el ridículo.

-JENI: ¿te gusto? - sonrío mordiendo el anzuelo, sin saberlo.

-YO: pues claro que si, no estoy ciego, ¿sabes?….pero parezco un oso intentando coser, me pones nervioso y me quedo en blanco.

-JENI: no lo sabía, jajaja es encantador.

-YO: pero te echo crema y me sales con esas, soy un patán - sonaba jodidamente triste.

-JENI: jajaja no pasa nada, es solo que no sabia que te gustaba, perdona, anda, vuelve aquí, siéntate conmigo en la toalla que vas a manchar la ropa con el césped - daba palmadas al lado de su cuerpo en la toalla, por fin, había logrado que fuera ella la que dirigiera la seducción cuando era yo el que la pretendía.

-YO: no, déjalo, me duele la espalda y estoy cansado.

-JENI: anda tonto, ven, túmbate y te doy un masaje - sonaba como una madre con su hijo, por dentro me reía a carcajadas, pero por fuera rodé hasta la toalla y me tumbé boca abajo, cruzando las manos bajo mi cabeza como había hecho ella.

Solo que mi espalda era casi el triple que la suya y en esa posición se marcaban bien los brazos y los dorsales, extendió parte de la crema en mi espalda y la distribuyó con la mano, acariciando toda la piel que quiso, se deleitaba y sentía su respiración agitada, se arrodilló en mi trasero abriéndose de piernas para dejarme entre ellas, y con ambas manos abarcando espacio se dedicó a darme un buen masaje, sin duda sabia lo que hacia, y de paso me metía mano.

-JENI: ¿mejor?

-YO: como nuevo……puedo…….

-JENI: dime.

-YO: si quieres,….podría…………yo dártelo a ti………osea…….un masaje…….dios……- pareció más tonto de lo que pretendió ser.

-JENI: claro, bobo….. - se tumbó boca abajo y una vez así, tiró del albornoz hasta sacárselo del todo, cubriéndose solo el culo y con toda la espalda al aire - …..soy toda tuya - la sensualidad de su voz me indicó que iba bien.

-YO: dios, gracias.

-JENI: no pasa nada, tranquilo.

-YO: eres preciosa y muy hermosa - sonaba como un crío de 14 años en su 1º fiesta, quería aparentar eso, que ella se sintiera poderosa, que dirigía la situación ante un chaval al que sacaba 3 años, la di el volante del coche pero la realidad es que íbamos a donde yo quería.

Un poco de crema y planté mis enormes manos en su espalda, al sentir el contacto se estremeció, fui acariciando y pasando los dedos por toda la espalda marcando mentalmente los nudos de los músculos, allí donde Eli me enseñó a buscar, localizados fui apretando con los nudillos, masajeando con dedicación y destensando su cuerpo, gemía de gusto al notar como iba desenrollando su espalda, los “oh, si” se le escapaban mientras mis dedos se atrevían a más con cada pasada, rozando su cuello, sus senos o sus glúteos, los suspiros fueron envolviendo todo y mi polla reaccionaba a ello, se estaba poniendo dura y muy obvia, ¿por que no utilizarla?

-YO: pufff, tengo que parar….- me separé lo justo, ella se dio la vuelta y de nuevo con habilidad se tapó con el albornoz los pechos quedando sentada de lado hacia mi, sin llegar a cubrirse la espalda, sujetándola con los brazos pegados al cuerpo.

-JENI: ¿que te pa ………..- no terminó la frase, mi polla sobresalía de tal manera que se tapó la boca de la impresión.

-YO: lo siento, no se que me pasa, llevo mucho sin sexo - si, en concreto unas 17 horas desde que Eli me dejó seco el día anterior.

-JENI: tran…………tranquilo, es normal, a los hombres os pasa cuando no…….tenéis sexo.

-YO: dios, es que la echo tanto de menos, no se que hacer - “solo un pasito más, venga”, una mención a mis sentimientos la derretiría.

-JENI: yo estoy aquí, no te preocupes - me acarició la cara.

-YO: joder, me recuerdas tanto a ella - era verdad, era una versión más normalita de la bomba sexual exótica que era Ana, pero nada despreciable, nos miramos unos segundos y me lancé a sus labios y los besé una sola vez, la pilló desprevenida pero no se apartó - ….lo siento, no…..- ahora acudió ella a lo míos.

-JENI: no ocurre nada, tú solo déjame llevarte - volvió a besarme pero ahora con pasión, abrió la boca y sentí su lengua moverse, la seguí el ritmo y pude saborear la victoria trabajada, me había costado mucho, pero por fin la tenia.

Fue gateando mientras nos besamos hasta ponerse encima mía a 4 patas, pero eran solo 3, la otra mano sujetaba aun el albornoz en su pecho, la rodeé con las manos por la cintura sintiendo el tacto de su piel al tener toda la espalda descubierta. Los besos subían de nivel, las lenguas entraron en acción, abrimos la boca al máximo y jugábamos con pasión, su larga melena, aun húmeda, caía de su rostro al mío, sus labios carnosos bebían de los míos y se dejó caer aplastando el albornoz entre nuestros cuerpos, noté sus senos en mi pecho mientras que ella agarró mi cara para seguir besándonos, frotando uno de sus muslos contra mi polla, aun semi erecta. En ese momento supe que había hecho bien en llamar a Eli, si hubiera sido así mi regreso, en ese momento la habría abierto de piernas y ensartado violentamente, como me pedía el cuerpo a gritos, pero tuve la calma suficiente para fingir ser un bobo patoso una última vez.

-YO: Jeni, te deseo, quisiera……….- me tapó los labios con un dedo.

-JENI: shhhh - mandó silencio mientras sonreía, y llevaba su mano libre de sujetarse el albornoz a mi entre pierna, acariciando mi polla por encima del las bermudas, mordiéndose el labio antes de que sus ojos se abrieran al sentir como aun la tenia creciendo.

Cuando estuvo tiesa del todo no se resistió y metió la mano por dentro de la ropa para cogerla piel con piel, yo repasaba desde sus mulos hasta su nuca con las manos mientras no dejábamos de besarnos, al final tiré de la bermudas y me las dejé por los tobillos, ellas se abrió de piernas dejándola pasar entre nuestros cuerpos y me levanté para quedar sentado en el suelo con ella de rodillas sobre mi, ella seguía masturbándome con una mano y sujetándose el albornoz con la otra, mientras la besaba, una de mis manos se hizo sitio entre los cuerpos y fui apartando el albornoz hasta llegar a su coño, pegó su frente a la mía relamiéndose y clavando sus bellos ojos avellana en los míos, sintiendo junto a ella como acariciaba los labios mayores y con los dedos encontrando un clítoris hinchado, subió unos centímetros la cintura, suspirando al sentir uno de mis dedos penétrala, me besó con deseo antes de echar la cabeza hacia atrás, sin dejar de pajearme, sintiendo como hurgaba dentro de ella y frotaba con cuidado, pasamos así unos minutos, la besaba el cuello y el pecho por encima del albornoz que defendía su posición como un patriota. La oía gemir ante mis caricias cuando posó su mano en mi pecho y me empujó hasta dejarme tumbado, cayó sobre mi besándome, luego fue bajando dando pequeños besos en mi cuello, mi pecho y mi vientre marcado, allí lamió cada parte de la famosa tableta, logró morder el doblez de uno de los abdominales con lujuria, para llegar a mi polla tiesa, sonrío al agarrarla con ambas manos, y aun sobrara para otra.

-JENI: ¡dios mío!, ¿pero esto que es?, ¡vaya polla calzas! - se escupió en la mano para seguir masturbando.

-YO: ¿ahora te das cuenta?, lleváis meses mirándomela a través de la ropa o sintiéndola en cada ejercicio que os explico.

-JENI: ya, pero una cosa es eso y otra esta barbaridad ….- ni se molestó en negarlo -….. no te embales, si te vas a correr avísame, que yo no soporto el semen y bastante que no te pongo condón por lo de la vasectomía y eso….. - se quitó las gafas dejándolas en el suelo.

Lamió la punta con suavidad, mientras se le hacia la boca agua, como había hecho con el helado antes, ahora lamía, chupaba y degustó el sabor, sin llegar a metérselo en la boca, no es que fuera una experta, pero mantenía una masturbación constante, y eso me calentaba, lamió todo, desde el glande hasta los huevos, repasando cada parte del tronco, chupando la punta sin llegar a introducir en sus labios, me alcé cuando sus caricias eran repetitivas, de rodillas seguía masturbando con una mano mientras la besaba, me puse en pie y la cogí en brazos ante su sorpresa, la tumbé en la hamaca y la abrí bruscamente de piernas, se sonrojó un poco, pero tenia el coño precioso, brillaban algunas gotas de sudor y otras de excitación, rosado con amplios labios mayores, y un fina línea de bello publico bien cuidado, me saqué las bermudas del todo y de rodillas entre sus muslos, dejé caer mi polla sobre su vientre, sonó fuerte y hizo temblar su piel, ella casi parecía esconderse detrás del albornoz al mirar como mi polla casi la llegaba al ombligo, froté con el tronco su coño, separándola los labios mayores, de forma lenta y pausada, luego de un giro me agaché para seguir hurgando con mi dedo en su interior, se encogió al sentir de nuevo la sensación pero ahora eran 2 dedos los que la penetraban, respiraba agitada cuando metí mi boca entre sus piernas y chupé el clítoris que sobresalía, abrió y cerró piernas varias veces al sentir como succionaba y lamía con dedicación, tenia una meta clara, y fui a por ella, me follé su coñito con los dedos frotando el punto G como me habían enseñado y lamiendo sin parar, sorbiéndole la vida por aquel agujero, gemía continuamente y con la mano libre se sujetaba del cabello, la otra, incomprensiblemente, seguía sujetando el albornoz en su pecho, le estaba comiendo el coño mientras la hacia un dedo a la mujer que me la había chupado hacia unos minutos y la tía seguía con vergüenza de mostrarme sus tetas.

No se si se lo habrían comido ya alguna vez, pero pareció la 1º, se dejó hacer de forma torpe mientras se revolvía ansiosa, sentía las oleadas de sensaciones rompiendo entre sus piernas, acompasando sus caderas a mis dedos, clamando a dios hasta que me tapó con el albornoz la cabeza y apretó con fuerza llegando un orgasmo delicioso, chupé y lamí su interior unos segundos, al levantarme se volvió a tapar las tetas, me reía de lo hilarante de ese hecho.

-JENI: ¡dios, que gustazo!, que bien lo comes.

-YO: ¿te lo han hecho antes?

-JENI: no….bueno, si, pero no de esa forma, me…me he…………

-YO: te has corrido como una cerda, ¿y sabes que?, eres deliciosa - me tumbé sobre ella besándola, con alguna reticencia entró al juego y probó algo su propio interior.

Al levantarme de nuevo cogí del dichoso albornoz y tiré tan fuerte que salió despedido de sus manos para acabar a varios metros en el suelo, su gesto fue como si le hubieran quitado un escudo de misiles, me miró con pasión y lujuria, pero con rostro tenso y algo de cautela. Me abalancé sobre sus senos, eran del tamaño idóneo, ni grandes ni pequeños, con unos pezones duros y erectos, con aureolas enormes, los apreté para lamerlos, luego solté uno para chuparlo mientras el otro era acariciado por mi mano libre, la otra la bajé a su sexo frotándoselo de nuevo, sus gemidos eran audibles y se estaba poniendo roja, se aferraba al reposa brazos de la hamaca con una mano y a mi cabeza con la otra.

-YO: tranquila, te la voy a meter despacio.

-JENI: ah….si…….por favor…….me estas matando………- suspiraba entre jadeos de pasión.

De nuevo de rodillas entre sus muslos, cogí parte de sus emanaciones y me mojé la punta de la polla abriendo sus labios mayores con habilidad y apretando la punta la penetré con cierta facilidad, no era virgen ni una mojigata, pero su gesto cambió a mitad de miembro, allí se quiso incorporar abriendo la boca para luego cerrarla junto con los ojos, haciendo fuerza para mantener el grito en su garganta, la saqué un poco para darla un respiro, antes de volver a meterla lentamente, bufé al sentir que la metía casi toda dentro, repetí el proceso hasta que ya los bufidos eran de ella, con cada penetración soltaba uno y cogía aire al sacarla, poco a poco el rimo crecía y las embestidas eran fuertes, sus tetas agarradas y pellizcadas por ella misma luchaban por moverse ante la inercia, y su cara congestionada con los ojos cerrados parecía a punto de reventar, no necesitaba la bestia para estar matándola, Eli la había dejado saciada el día anterior. Raúl se encargaba de llevarla al paraíso y se volvió a correr, ahora como una fuente, gritando como si fuera la 1º vez, quizá lo fuera, acariciándose el coño sin dejar de sentir como la follaba, cuando se dio cuenta estaba bamboleándose de arriba abajo dando cabezazos contra el respaldo de la hamaca, sin dejar de golpearla con la cadera me agaché a besarla, casi ni podía sujetarme la cara entre el vendaval de sensaciones nuevas, no la metía toda pero si gran parte, para la 1º vez era suficiente, su 3º corrida fue muy fuerte, casi se sale de mi, miraba hacia abajo con cara de susto, yo estaba por correrme, me la saqué de su interior y tiré de ella para que mi polla llegara a sus tetas, masturbando mientras las acariciaba.

-YO: me voy a correr en tus tetas.

-JENI: .ummmm………no………por favor, que me da mucho asco - ella misma se acariciaba los senos.

-YO: venga, será divertido.

-JENI: para ti, pero a mi me da grima……. - metí una mano en su coño para que no perdiera calentura- ….ummmm…..para…………dios……….- se estremecía de placer.

Me corrí en su tetas, cuando sintió el calor abrió los ojos un poco pero mis dedos la tenia presa en la hamaca, eyaculé bastante golpeándola con el miembro en sus senos, manchándola todo el torso.

-YO: ¿ves?, no ha sido para tanto.

-JENI: eres un cabrón, mira como me has puesto - llevaba sus manos al pecho, riendo nerviosa, pero no tocaba.

-YO: venga pruébalo - cogí con un dedo unas gotas y las llevé a sus labios.

-JENI: aparta eso de mi - cerró los labios girando la cara.

-YO: no es tan malo.

-JENI: ya claro, como tú no te lo tienes que meter en la boca……… ¿por que no te lo comes? - sonreí ante su comentario.

Pase mi lengua desde su estomago hasta su cuello recogiendo gran parte de mi corrida, se quedó atónita y boquiabierta, lo que aproveché para hundir mi manchada lengua en su boca, quiso cerrarla pero era tarde, ya la estaba besando y tenia semen mío en su interior, con algo de asco me devolvió el beso, cuando notó la textura torció el gesto, pero el sabor no era malo, y la 3º vez que cruzamos lenguas me acarició la cara con suavidad.

-YO: ¿que tal?

-JENI: ……..bueno……..no me gusta……..pero no……….no es tan malo - la volví a besar cuando la mano libre volvió a su coño.

La penetraba con los dedos como sabia, frotando el punto G con las yemas y sin parar, se reactivó de nuevo, se abría de piernas para facilitar mis gestos y besaba sus tetas, chupaba mi semen para volver a besarla y dejarla mi semilla en los labios, al final saboreaba con pasión. La dejé el pecho “limpio” antes de que se volviera a correr, cogí sus emanaciones y me chupé los dedos delante de ella, cogí otra poco y los llevé a su boca, me miró con algo de rubor, ya no era besarme con restos si no probar su interior directamente, pero ante mi seguridad, chupó uno de los dedos, con los ojos abiertos, el 2º lo sujetó con las manos, el 3º cerró los ojos y lamió hasta dejarlo seco.

-YO: tú tampoco sabes mal, ¿cierto?

-JENI. jajaja no, nunca lo había probado, es algo……… amargo, pero no esta malo - sonrió golosa.

-YO: pobre mía, que de cosas te tengo que enseñar aun, ¿que más no has hecho con un hombre en la cama?

-JENI: hombre, no soy ninguna monja, bastantes cosas hago, menos por el culo hago de todo - se relamió con algo de orgullo herido.

-YO: ¿¡eres virgen anal!?

-JENI: si, ¿que pasa? - giró levemente el cuello ofendida.

-YO: nada, que va a ser un placer abrirte el culo.

-JENI: de eso ni hablar, si ya dicen que duele, con tu pedazo de polla me destrozas, no, no, no……- negaba con la cabeza rotundamente, yo sonreía y pensaba. ”y hasta hace nada te negabas a probar el semen”

-YO: tranquila, por hoy dejaremos de innovar.

-JENI: ¿por hoy? Das por sentado que vamos a volver ha hacerlo…..- quiso mostrar entereza en una situación en que no la tenia, a mi se me escapó el comentario de “por hoy”, aunque no era un secreto no tenia pensado sacar el tema aun, mi mano no dejaba de moverse en su coño.

-YO: claro que si, ahora mismo además, en cuanto se me ponga dura de nuevo …….- se mordía un dedo con la sonrisa dibujada en la cara -…….. si hablas de otros días, no se, si quieres, podrías venir después de correr y darte una ducha caliente……- aumenté el ritmo de mi mano en su interior-….conmigo.

-JENI: ya…….uf……..- suspiraba ante la velocidad de mis dedos-….. ¿y que seria...........tu zorra de las tardes?

-YO: que va, eres mucho más que eso, y lo sabes, te deseo - aguante la risa, “mi zorra de las tardes”, era justo lo que pretendía que fuera.

Se acabó el dialogo, volvía a tener la polla dura, me senté en la hamaca y tiré de su cuerpo hasta sentarla encima mía a horcajadas, la volví a penetrar y se aferró a mi espalda con ira, pero botando, metiéndose mi polla de golpe y saliendo con avidez, sus tetas saltaban ante mi, solo 1 en realidad, la otra era lamida, chupada o mordida por mi, ella no dejaba de gritar que la follara, y eso hacia, se corría alguna que otra vez, agarraba de su culo subiéndola alto cada vez, casi se metía y sacaba mi rabo entero, el sudor invadía todo y sus gemidos me volvían loco, para cuando me sentía volver a correrme, decidí darla un escarmiento final para asegurarme de que volvería, los últimos 5 minutos saqué a la bestia, era del todo innecesario pero me divertía la idea, 5 minutos a gran nivel, ni siquiera al máximo. Al sentir el cambio de ritmo se encogió de piernas y se pegó a mi pecho sollozando de gusto, se corrió 2 veces seguidas, la última como una fuente donde gritó arañándome el pecho con las uñas, de golpe paré en seco, ella seguía tiritando, pero continuaba la inercia.

-JENI: ¿que haces mamón?, ¡sigue! - pataleaba queriendo arrancar una moto imaginaria.

-YO: ¿que me dices?

-JENI: ¿de que?

-YO: ¿si vas a ser “mi zorra de las tardes”? - me miró sorprendida.

-JENI: cállate y sigue follándome….- movía la cadera sin que yo hiciera nada.

-YO: no, no hasta que lo digas.

-JENI: ¡¡no seré tu puta particular, ¿me oyes?!!

-YO: no eres una puta, eres mi amante, y te ofrezco seguir siéndolo.

-JENI: ya, ¿yo y cuantas?

-YO: las que me de la gana, esto no es una relación, ya te he dicho, no busco eso, esto es solo sexo, yo me follaré a quien quiera, y tú igual, pero necesito saberlo ahora.

-JENI: por favor, sigue…- sopló largamente, con fuerza -…¿y si me niego? - se mordía una uña de la mano derecha.

-YO: terminaré de follarte, te irás, y no volverás jamás, pero si te quedas……- lamí un pezón mientras la penetraba suavemente una sola vez - ….además, independientemente de que aceptes o no, esto no saldrá de aquí, no se lo diremos a nadie, ni siquiera a las del grupo del parque - ”es más fácil follarmelas si se creen las únicas”, pensé.

-JENI: no se lo diré, pero eres un cabrón - asentí.

-YO: si, y me encanta serlo, ¿que me dices? - dudó, pero comencé unos giros de cadera lentos y constantes, se mordía el labio.

-JENI: vale……- susurró.

-YO: perdona, no te he oído - golpe de cadera que la levantó medio palmo.

-JENI: que si……….ufffff………. acepto - otro golpe de cadera.

-YO: lo siento, es que ando algo sordo ¿que dices? - reía al subir la velocidad de mis caderas rápidamente.

-JENI: ¡¡que si, cabrón de mierda, fóllame, follaje así, ábreme el coño, seré tu zorra, tu zorra de las tardes, SIIIIIII, AHHHHHHHHHHHHH!! - la volvía a reventar con la bestia, agarrándola de las tetas con fuertes golpes de mi pelvis que la penetraban completamente, seguía gritando que seria mi zorra mientras se volvió a correr, y ya no aguanté más.

Mis bufidos la resonaban en la cabeza cuando descargué mi esperma fuertemente en su interior, quedamos abrazados sintiendo como mi polla perdía su poder dentro de ella, jadeaba apoyada en mis hombros, la acariciaba el cuerpo sudoroso, repasaba su tatuaje en el hombro con un dedo y me reía a carcajadas sin saber muy bien por que.

-JENI: esto no se hace………….. eres un animal……………..me cago en la puta………. ¡pero como follas!.

-YO: y aun no has visto nada, ese culo virgen tuyo será mío….. - negó fugazmente con la cabeza, alzándola para besarme - …..no era una pregunta - sonrió y observó mi pecho, sobrepasada.

-JENI: ¿qué…..que horas es?

-YO: pues son las 20:00.

-JENI: dios, que tarde, debería irme…….

-YO: ¿y te vas a ir sin ropa? - abrió los ojos chocando los labios, notando la boca seca.

-JENI: joder es verdad, ¿estará ya la lavadora?

-YO: ya debería de estar.

-JENI: joder, pero si la hemos puesto a las 6, ¿cuando llevamos………?

-YO: pues una hora larga, a ojo.

-JENI: ¡¡no jodas!!, si se me ha pasado volando.

-YO: gracias - soné burlón.

-JENI: cállate, y tráeme algo de agua, estoy seca - sonreí.

La cogí en brazos y salté a la piscina con gritos y risas, eso la despertó un poco, salpicó agua para alejarme pero la alcancé y la metí mano mientras nos besábamos con lujuria, al rato nos salimos del agua, sequé su cuerpo con dedicación, solo un milagro evitó otro polvo, ella reía y se frotaba, la azoté el trasero con fuerza para dar a entender que ya había terminado de secarla. La lavadora/secadora cumplió, y se vistió delante mía, sonreía como una colegiala al verme desnudo admirándola, se me acercó a darme un suave beso con lengua como despedida.

-JENI: entonces……. ¿nos vemos mañana?

-YO: iré a la misma hora a correr, después nos venimos aquí y seguimos donde lo dejamos - me dio otro beso corto alegre, acaricio mi pecho y se despidió.

Era una chica normal en todos los aspectos, hasta en el sexual, por como le entró mi polla había follado bastante, pero su forma de chuparla, su asco al semen o que su ano fuera virgen……..me relamía pensando en lo que me quedaba por enseñarla y disfrutar de ella, la miraba el culo, con sus nalgas rebotando bajo el pantalón deportivo cuando salía del piso.

Esto iba cogiendo forma, mi idea era simple pero difícil de ejecutar, así que tenia que andar con pies de plomo, al fin y al cabo, tener toda la semana cubierta de distintas mujeres con las que acostarse, no seria sencillo, esa era mi idea, un reto, por ahora entre semana ya tenia a Eli antes de comer y ahora a Jeni, que seria mi “zorra de las tardes”, quedaba mucho por hacer.

Mariluz – Jugando con la presentadora.

El boom de mi aparición en TV se pasó tan rápidamente como surgió, gracias a dios, las señoras por la calle dejaron de pararme y en el mercado podía hacer cola en la carnicería sin que me acosaran, eso si, a la pobre Eli no la dejaban en paz, habían inventado en los programas rosas que yo era un monitor suyo, que me había seducido y que ahora habíamos discutido y por eso se había marchado de la capital, pero la historia dejó de tener gancho y pasaron del tema, menos mal, los ataques de risa que me daban en casa eran brutales, Teo y Manu se reían de mi cuando quedaba con ellos. Para mi sorpresa, Teo andaba ya con una chica rondándole, era mono y divertido, no era raro, la chica en cuestión era de su oficina donde trabajaba de informático, estaba rehaciendo su vida amorosa, algo que Alicia no hacia, seguía estudiando en la universidad que acababa de empezar el curso, y de allí a su casa, salvo salir con su hermana y el resto de las chicas del piso, no se sabia de ella.

Yo estaba disfrutando de los primeros días con Jeni, la deportista del parque que hacia unos días me había tirado, y desde entonces se convirtió en mi “zorra de las tardes”, cada día iba al parque sobre las 5 y media, hacíamos algo de ejercicio, y luego me acompañaba a casa, allí pasábamos un par de horas follando con gusto, Jeni se acostumbró rápido a mi polla y mis ritmos, la bestia aparecía alguna vez, pero al 2º polvo quedaba aturdida, la estaba enseñando a chuparla bien, pese a que sus mandíbulas casi no daban de si, ya se metía el glande entero, antes solo lamía y chupaba la punta, aunque el ritmo de sus manos era constante y muy erótico, aun sentía asco al correrme y hacerlo en su cara o su piel, pero era la impresión, ahora lo cogía con los dedos y lo chupaba con lujuria, del anal nada por ahora, pero ya se dejaba acariciar por encima, cuando la follaba de forma animal podría hacerla lo que quisiera, se corría tanto que dejaba todo perdido, luego se iba sobre las 20 o 21 horas y la pobre Dani recogía todo por la mañana. Al resto de chicas del parque las dijimos que Jeni me había pedido ir a mi casa a ducharse, para que no hubiera malos rollos, pero Lucia no era tonta y era madre, se lo olió a la 1º, y cuando se lo dijo a Lola, la menor, la furia de sus ojos fue inmensa. Me dio igual, pensaba tirármelas a ellas también, solo tenia que esperar que Lola fuera mayor de edad y encontrar un momento en la vida de Lucia en que no tuviera que ocuparse de sus hijos, de su marido no hacia falta, la dejó por una de 20 años cuando se divorciaron hacia 2 años, eso si, dejándola una pensión bastante buena, tan buena como para no tener que trabajar, me partí el pecho de risa cuando me dijo que la de 20 años le dejó al mes de enterarse que casi todo su gran sueldo se iba en la pensión y no podía seguir pagándole los detalles.

Pero era jueves ya entrada la noche, Jeni se acababa de ir, y los viernes no hacia deporte ni en el fin de semana Jeni estaba disponible, quería quedar con los amigos y salir a reírme y divertirme al día siguiente desde bien pronto, así que tenia que planear mi siguiente víctima, y ya puestos a rellenar huecos en mi semana, mi objetivo, tenia que ser alguien para el fin de semana, entre semana ya tenia a Eli por la mañana, aunque ahora estuviera de viaje, y a Jeni por las tardes, pero el fin de semana estaba libre, demasiado. Miré entre los papeles del cajón, ¿quien podía ser? Si iba a salir de fiesta con los amigos necesitaba a una chica joven que no desentonara, y a su vez me espantara a las demás, sobretodo a Lara, que al verme tan recuperado insistía en que volviera entre sus pechos, me tentaban, pero era una apuesta segura, seria mi comodín cuando alguna de mi semana me fallara, así que fui haciendo una criba, demasiado mayores, indispuestas, ocupadas……….llamaba a algunas y aunque eran conversaciones subidas de tono no siempre es fácil encontrar a alguna libre, hasta que me encontré un papelito, era de Yasira, la hija de Luz, la ama de llaves de Eleonor, habíamos coincidido unas cuatas veces cuando venia con su madre a probar la piscina con el permiso de Eleonor, habíamos tenido nuestros cruces y su papel cayó en mis manos, la recordaba sensual, caribeña, con el tono color cacao en la piel, y su cuerpo en biquini frotándose con el mío en la piscina mientras jugábamos y yo la rechazaba con amabilidad, podría haber escogido a cualquier otra que no tuviera lazos con esa parte de mi vida, pero de pronto comprendí que seria el momento idóneo para demostrar una vez más mi nueva faceta de cabrón, y llevarse de fiesta a bailar a una colombiana nunca es mala idea.

-YO: hola, ¿Yasira?

-YASIRA: si……..

-YO: ah, buenas, soy Raúl,…..no se si……..¿me recuerdas?

-YASIRA jajajaja claro que si, ¿que tal?

-YO: nada, todo bien, solo llamaba para preguntar que tal todo, no quiero que lo que pasó con Eleonor os afectara a tu madre y a ti - me importaba un bledo en realidad, pero sonaba creíble.

-YASIRA: pues bien, muy bien en realidad, mi madre si que está enfadada contigo, pero nos ha venido de lujo, ahora la ha hecho interna y vivimos en un chalet de lujo, a las afueras, ganamos más dinero y vivimos mejor, aunque es un poco solitario.

-YO: ¿y eso?

-YASIRA: pues si, no sé, es que está algo apartado, y yo no tengo coche, aquí no hay nada con lo que divertirse y no me dejan traer a amigos – “de puta madre”, parecía que el universo se alineaba a mi favor.

-YO: pues una pena………..- dejé un tiempo y cambié el tono como si acabara de recordar algo -……….oye, no se si te gustaría, mañana por la noche unos amigos y yo salimos de fiesta a bailar y beber un poco, no se…… ¿te gustaría venirte? - se hizo un silencio sepulcral.

-YASIRA: no sé……quizá no sea adecuado…….pero me apetecería……..

-YO: pues vente, te paso a buscar cuando quieras con el coche, y te llevó de vuelta cuando quieras, sabes que no bebo, será divertido y así charlamos y retomamos amistades, me quedé con muchas ganas de conocerte mejor - podía notar su sonrisa a través de la línea telefónica.

-YASIRA: bien, ¿cuando puedes pasarte?…….sobre las 19 horas mi madre y Eleonor salen de casa, puedo dejarlas avisadas que saldré y me recoges a la puerta de la urbanización….. - me dio la dirección.- ….¿te parece?

-YO: perfecto, pues allí estaré.

-YASIRA: tengo que ir de alguna forma especial……….no quiero hacer el ridículo.

-YO: como si yo te tuviera que decir a ti como una mujer debe de salir de fiesta a bailar……….sorpréndeme.

-YASIRA: jajajajaja pues nos vemos mañana……….. y muchas gracias.

-YO: de nada mujer, espero con ansias verte mañana.

Al colgar sentí un hormigueo en el estomago, como cuando ves algo en la nevera que no es para ti, pero que es tan delicioso que deseas comértelo, más que por que fuera hermosa, que lo era salvo un mentón algo pronunciado, era un objeto prohibido, y eso me atraía. Yasira hablaba perfectamente el castellano, su madre la tuvo aquí y siempre había vivido en España, tenía 20 años y salvo algún acento, tenía una dicción perfecta, según recordaba un buen culo y tetas firmes sin exageraciones, pero sus pezones duros me habían hecho fijarme en ellos cuando sobresalían en nuestros juegos en la piscina.

Planeado ya el fin de semana, el problema era que era jueves de noche, y hasta, quizá la madrugada del sábado, no la tendría abierta de piernas, si es que lograba tal cosa, ¿un día y medio sin follar? De eso nada, estaba a punto de llamar a Lara cuando un mensaje me llegó, al leer el nombre sonreí, era de Mariluz, la presentadora MILF, por lo visto ser un cabrón tenia premio, estaba pesada esos días, y ahora ya le daba igual todo, abrí el mensaje multimedia, un vídeo de ella masturbándose, “¿cuando me vas a follar?, me lo prometiste, quiero que tu enorme polla me folle así”, metía un consolador bastante grande por su coño sin aparente dificultad, el universo me hablaba, yo obedecía.

Cené y me acosté pensando cual seria la mejor forma de abordar a Mariluz, tenia que ser por sorpresa, que la pillara desquiciada, como cuando la “ayudé” con la petaca del micro, aquella mujer era, o se creía, un tiburón blanco en busca de su presa, esas fotos y videos lo demostraban, lo suficientemente eróticos como para calentar a cualquiera pero sin llegar a verla nunca la cara, no era su 1º rodeo, lo hacia para que no pudiera usarlo en su contra al no reconocerla.

No recuerdo lo que se me ocurrió o lo que soñé esa noche, pero me levanté con una erección descomunal, solo una larga ducha fría me calmó los nervios, tenia tiempo, había madrugado, eran las 9 de la mañana, o al menos eso era madrugar para mi, desayuné un poco y me puse lo más casualmente guapo y juvenil que podía, un polo rojo ceñido y solo un bañador azul marino, que a 1º vista disimulaba mi verga, pero en cuando me movía se marcaba, cogí el coche y me fui al plató donde se emitía su programa, estaba muy cerca, apenas 15 minutos, su programa ya había empezado, puse la TV antes de salir asegurando que estaba allí, como no, con un vestido ajustado, azul cobalto, sin mucho escote pero con la tela pegada a su piel marcando sus senos de forma sensual. Embobado casi tenia la polla morcillona al llegar al aparcamiento, temí por la seguridad de todos cuando pasé por el puesto de seguridad simplemente diciendo que venia con Eli a dar la clase de gim, ni se molestaron en saber que Eli estaba de viaje y que haría su clase en conexión en directo desde su nuevo centro en el norte.

Me colé entre bastidores mirando como seguía el matinal hasta llegar las 10, y allí conectaron con Eli y todo pareció dejar de ser la TV por un segundo, gente hablando a gritos y moviéndose por el plató, unos de caterings, vestuario, sonido, era un caos, apenas divisaba a Mariluz entre el jaleo, charlaba con uno de los colaboradores mientras con gesto sensual se quitaba el micro del escote y lo dejaba caer por dentro del vestido hasta sacárselo por debajo de una falda ceñida que llegaba a sus muslos, sacó la petaca y lo dejó en la mesa mientras se dirigía hacia la zona despejada de camerinos, donde la aguardaba agazapado tras un armario, Eli ya me había indicado donde estaba su camerino, el más grande y apartado del resto, pasó a mi lado sin verme y cuando iba a entrar la sacudí en el trasero con la mano abierta, sentía vibrar mis dedos y ella dio un salto con los tacones enormes que casi la hacer caer hacia delante si no se agarra al marco de la puerta, un leve gemido quedó apagado por el ruido de la sala, se llevó la mano al culo frotándoselo por encima de la tela con brío y se giró con una mirada colérica cogiendo aire dispuesta a montar un pollo, con la otra mano en alto para golpear, pero al verme sonreír sacudiéndome la mano de dolor, tosió de frustración con una risa dibujada en los labios.

-MARILUZ: que animal eres, me has hecho daño…..- me miró esperando una disculpa que no llegó.-………. ¿que haces aquí? hoy no esta Eli…….

-YO: no es a por ella a por quien vengo - mi pose directa y poco charlatana me había funcionado la 1º vez.

-MARILUZ: ahhhh si…..- su tono era de orgullo herido, pero sin dejarse de frotar el culo -……. por que llevo una semana llamándote y no me haces caso…..

-YO: ahora estoy aquí.

-MARILUZ: eso ya lo veo, ¿que quieres? - se cruzó de brazos con gesto altivo.

-YO: a ti – sonrió sin fijar la vista en nada.

-MARILUZ: ya supongo, pero es posible que a mi ahora no me apetezcas……- quería dominar la situación, era sutil pero yo la vi venir, si ahora me dejaba camelar seria un juguete del que se aburriría en unos días, así que saqué el móvil y, con el volumen a tope, le enseñé su vídeo metiéndose un consolador por el coño, gimiendo de gusto, su sorpresa la llevó a andar hacia mi con rapidez y cogerme el móvil tirano de él hacia abajo, aun en mis manos, pegando su cuerpo al mío.

-YO: ahora.

-MARILUZ: aquí no puede ser, loco - sonreía al frotar sus manos en mi polla al estar pegadas al móvil.

-YO: ahora - acaricié su estomago subiendo hasta sentir uno de sus pechos entre mis manos.

-MERILUZ: no, quieto - pero solo se movió para retirar su larga cabellera haca atrás con un gesto erótico.

-YO: ahora – mi otro brazo rodeó su cintura pegándola a mi y haciéndola reposar sobre mi cuerpo con una sola pierna en el suelo, alzó la otra entre mis piernas lo que el ancho de la falda le permitía, echando la cabeza hacia atrás riéndose y frotando con una de sus manos mi pecho.

-MARILUZ: dios, como sois los jóvenes, sois puro fuego - acarició con un dedo mi mentón mirándome con ojos tiernos.

-YO: ¿ahora? - fue la 1º vez que lo pregunté, mi mano seguía apretando su pecho mientras la otra bajó a aferrarse de su espléndido trasero, apretándola contra mi, elevándola medio palmo, lo justo para que aun la punta de los dedos de uno de sus tacones rozara el suelo, era alta, con esos zapatos pasaría del 1,85 fácil.

-MARILUZ: si, ahora……- me sujetó la cabeza y me besó con pasión -…. pero date prisa, en 20 minutos tengo que salir en antena - metí mi mano de su trasero por dentro de la falda acariciando su tanga por encima.

-YO: me sobra tiempo para hacer que tiembles - rió fuerte creyendo que estaba bravuconeando, de joven inexperto, pero a su vez se sujetó de mi cuello y de un salto se me subió encima rodeándome con las piernas cruzándolas a mi espalda, me agarré a su culo como si me fuera la vida en ello.

Pesaba bastante, era una MILF, corpulenta y con curvas, voluptuosa, no bajaría de los 70 kilos, pero no tenia ni rastro de carne sobrante, al entrar en su camerino la aplasté contra una de las paredes mientras nos besábamos, ella tiraba de mi polo hasta sacármelo, al ver mi torso se mordió el labio mientras pasaba sus dedos por todo mi pectoral, yo a duras penas podía soltarla el culo, pero no estaba quieto, lamía su cuello, la hacia reír, tenia cosquillas, la dejé en el suelo y mis manos fueron a su cara, me pringué con el maquillaje excesivo que les ponen para salir en TV, aun así la besaba con lujuria, su lengua era lava, me quemaba en la boca, mis manos trataron de subir su falda, y hasta cierto punto lo logré, pero el vestido era tan ajustado y apretado que pasada sus caderas desistí de quitárselo entero, ya tenia acceso de su cintura hacia abajo, con un tanga diminuto, de color carne, la di la vuelta para dejarla apoyada en la pared y me agaché a besar su trasero, era enorme, caderas anchas y glúteos algo flácidos, me reía, ella se contorsionó para ver de que, tenia la marca de mi mano en el culo, roja en carne viva en la nalga derecha, se distinguían claramente la palma de mis 5 dedos, tiré del hilo del tanga hasta ponérselo a un lado y la encorvé la espalda para meter mi boca entre sus muslos, lamiendo un coño que chorreaba, lamía y chupaba de ella mientras arqueaba la espalda con su respiración, al levantarme me bajé el bañador, tenia la polla tan dura como por la mañana, y sin compasión alguna la penetré el coño por detrás, no me sorprendió nada que le entrara fácil y casi toda a la 1º, aunque su grito de sorpresa y lujuria si, lo habrían oído al otro lado de la puerta, seguro, tiré de los hombros de su vestido mientras su coño palpitaba sobre mi rabo, haciéndose sitio, saqué sus tetas por encima del ligero escote por que para mi regocijo no llevaba sujetador, y su tetas aun estaban tersas y juveniles, al tacto entendí que no solo eran operadas, si no que llevaban relleno, silicona, aun así las cogí con maestría notando sus pezones duros y rozándolos mientras comenzaba a follármela, era delicioso, el coño más amplio que había tenido nunca, a las pocas embestidas ya la penetraba todo lo que la poción permitía, daba un respingo cada vez que entraba y un suspiro cuando salía, terminando con un “ohhh, que gusto”.

Sus gemidos estaban alcanzando un ruido ensordecedor, pero tuve que llamar a la bestia allí mismo, esa pedazo de hembra me estaba volviendo loco, pegaba a la pared mientras cerraba los ojos, pero su cuerpo acompasaba mis penetraciones, la bestia se cebó 10 minutos en que su cuerpo temblaba ante mi continuidad, gemía y coceaba pero no se corría, la muy experta tenia aguante, así que tiré de ella para separarla de la pared, y con ella aun empalada me tumbé en el suelo con gran esfuerzo de tenerla en el aire, ella casi leyéndome la mente puso los tacones y sus 2 manos en el suelo y elevó su cuerpo un palmo, de espaldas a mi, tomé sus caderas y plantando bien los pies desaté mi ira contra su coño, se retorcía ante mi, sus piernas cedían por los tacones y bajaba el cuerpo solo para ser penetrada fuerte y profundamente, se cansó rápido y se puso en pie con mi ayuda, se dio la vuelta y midiendo distancias me puso entre sus piernas y se arrodilló metiéndose mi miembro hasta el fondo, su boca era un túnel al sentir de nuevo como la abría, cuando movió sus caderas sabia que estaba ante una diosa del sexo, su cintura era rápida y elegante, y sus gestos de haberlo practicado mucho, mientras me acariciaba el pecho o la tableta con las manos, subía y bajaba deleitándose, gritando, jadeando y gritando otra vez más alto, en un arranque de ira y diversión cogí del tanga mal colocado, y tiré con tanta fuerza que ella se ladeó hacia esa dirección, al 2º tirón se rompió, lo hice un gruño en la mano y me alcé para agarrarla de la nuca y vencerla hacia mi pecho, la metí el tanga hecho una bola en la boca, con una mano en su nuca y otra en la boca saqué a la bestia, sus gemidos en la nuez eran música a mis oídos, y sus ojos, con el rímel corrido sollozando, pidiendo piedad, sus espasmos me llamaban, sus caderas se derretían y cuando más fuerte estaba dándola gritó, bueno, lo intentó, abrió tanto los ojos que me asusté al no ver el iris color grisáceo en ellos, luego los vi bajar y me tranquilicé, su orgasmos había sido esplendoroso, sus emanaciones me habían llenado la pelvis y las sentía calientes resbalar por mi piel, pero yo seguía zumbándomela, sentía que estaba cerca de correrme, y fue una gran idea continuar, descubrí que era multiorgásmica, y según seguía embistiéndola ella seguía corriéndose, fue maravilloso soltarla la mano de la boca y agarrar sus tetas para que dejaran de moverse, y que ella misma mordiera el tanga para apaciguar los sonidos de sexo. Eyaculé azotándola el trasero como a una montura camino de la batalla, los golpes retumbaban por la piel de su culo y por el camerino, al sentir mi leche caliente ella se venció a mi pecho, respirando de forma agitada y sonriendo.

La agarré de la nuca tirando de su pelo, su cara era de sadismo, lujuria y felicidad, la saqué el tanga empapado de babas y la besé con lengua hasta cortarla la respiración., “3 minutos” se oyó a alguien que había tocado en la puerta, ella ni se inmutó, trataba de recuperar el aliento. Fui yo quien la puso en pie, la arreglé el vestido, cuando se fue a poner un tanga limpio la sujeté la mano y se la metí en su propio coño, cogiendo su corrida y la mía, luego se la llevé a la boca que chupó apasionada, la azoté el trasero un par de veces, pellizcándolo, entendió que iría sin bragas el resto del matinal, y salió de allí con gesto alegre y sin prestar atención a las miradas de los que estaban cerca de la puerta de su camerino, tuvieron que atrasar 2 minutos el regreso en directo para que los de maquillaje la adecentaran, y volvió en directo dando las gracias a Eli por su fantástica ayuda, no se si se refería a las clases o a mi, pero el final del matinal, hasta las 12, me lo pasé mandándola mensajes entre bastidores, Mariluz se mostraba distraída y poco centrada, metió la pata un par de veces, ahora comprendía sus videos de errores en Internet, se perdía por que me miraba a mi relamiéndose, rememorando el tremendo polvo que la había pegado, y me contestaba a los mensajes entre videos y reportajes.

-YO: ¿y si cuando acabes me invitas a comer?

-MARILUZ: no puedo, tengo que quedarme unas horas para preparar la semana que viene del programa.

-YO: una pena tengo libre hasta las 17 horas.

-MARILUZ: dios, no te quito de mi cabeza, siento como mojo mi entrepierna cuando te veo, y siento tu mirada acariciado mi cuerpo ummmmmmmmm – labia tenia, eso seguro.

-YO: tú misma, cuando acabe el programa me iré, tú decides sin vienes conmigo o no.

-MARILUZ: no me hagas eso, por favor, te deseo, quédate un rato………..- una serie de mensajes suplicándome llenaron mi móvil, pero no contesté a ninguno, y eso solo la puso nerviosa, me miraba deseando que acabara el programa.

Tan despistada que hablando de un incidente en la fallas de valencia, en vez de decir “una buena falla” soltó un “una buena polla”, fue leve, y corrigió al instante, pero mientras en directo se pasó por alto salvo la cara de enfado de algún regidor, esas cosas en Internet se cotizaban, seria carne de programas de zaping, pero a mi me entró una carcajada que me tuve que apartar para que no me oyeran, el resto del programa lo pasé respondiendo a los continuos mensajes de Yasira, queriendo confirmarme la ”cita”, parecía inquieta, sabia que quedar conmigo no seria del agrado de su madre y eso creo que la excitaba. Terminó el programa y di de margen 20 minutos, la veía corretear y hablar con mil personas, cuando la pillaba mirándome le hacia el gesto del reloj en la muñeca, sonreía y seguía intercambiando papeles con varios del equipo de producción, rozando el minuto 18 salió corriendo hasta mi y me cogió de la mano, riendo para meterme de nuevo en su camerino.

-MARILUZ: ya, podemos irnos….- lo dijo cerrando la puerta con el culo.

-YO: no me gusta esperar - tenia que seguir siendo brusco y escueto.

-MARILUZ: ya lo supongo, pero aquí estás, y te lo tendré que agradecer de algún modo - se contoneó hasta abrazarme y besarme con sed de sexo.

-YO: ¿nos vamos ya?

-MARILUZ: espérate, me tengo que dar una ducha y quitarme el maquillaje y el hedor a sexo, dios, creo que lo han notado todos, apesto a sudor y semen.

-YO: es tu problema, date prisa o me voy de verdad - ni de broma me iría, vaya descubrimiento acababa de hacer, esa mujer follaba casi tan bien como Madamme o Eleonor, o eso me pareció, y era la 1º vez que la tomaba, penetrarla era como a un oso de peluche, suave, tierno y cómodo.

-MARILUZ: bueno, ¿y si te duchas conmigo? - se abrió la escueta cremallera de la espalda del vestido mientras se frotaba por mi lado caminando hacia la ducha.

Al girarme se sacaba el vestido tirando de él con los pulgares rodeando su cuerpo, hasta sacarlo por los pies dejándolo caer, su cuerpo desnudo al darse la vuelta me gustó, sin duda hace 10 años, o 15, aquella mujer era la definición de la belleza antigua, exuberante y llena de curvas con la piel tersa, ahora sus tetas habían caído y se notaba que su turgencia era mano del hombre, cierta piel de naranja en las caderas o los muslos y el cuerpo algo fofo, con algo de piel sobrante en los ante brazos, aun así era una visión agradable, con el coño rasurado al 0. Me llamó con el dedo mientras con una patada me tiró el vestido a la cara con gran puntería, cuando la alcancé desnudo en la ducha se había quitado los tacones, y era 10 centímetros más baja, el maquillaje se perdía entre chorros mezclados con el agua tibia, y su espesa y larga melena perdía las formas onduladas ante la humedad, pero una mujer empapada era mucho para mi, la froté cada parte de su cuerpo, lamí de sus pechos, la besé mientras la penetraba de frente levantándola una pierna y la hice gritar mientras reventaba en su interior una y otra vez, la daba la vuelta follándola por detrás mientras mi mano la masturbaba con rapidez y sus gemidos alcanzaban la gloria, me arrodillé a comerla el coño mientas pasaba una pierna por encima de mi hombro, se agarraba a mi pelo como si fueran las crines de un caballo salvaje, al levantarme ella hizo lo propio y soltando una sonora carcajada al agarrar mi polla con ambas manos, la chupó con habilidad, una vez degustado el uno al otro, la volví a penetrar con fuerza, era tan fácil y tan placentero que la bestia se deleitaba, la follaba tan salvajemente que cuando se corrió solo me enteré por sus arañazos en la espalda, allí fui subiendo el ritmo hasta dar lo mejor de mi, todo, en unos 5 minutos finales en que sus multi orgasmos no cesaron y sus lamentos y gemidos tampoco, al correrme sentí un placer enorme, lamiendo y chupándole una de sus tetas, coronadas por pezones algo diminutos, no parecían acordes con su buen par de tetas, me di un agua rápida y me salí de la ducha para dejarla limpiarse a gusto, su mirada irradiaba deseo.

Me senté vistiéndome, a esperar, 10 minutos después de oír como se limpiaba el coño con tenacidad salió desnuda secándose el pelo con una toalla, me miró sonriendo y se sentó en mis piernas como si fuera papa noel, me besó con tensión mientras la metía mano por mil sitios.

-YO: tengo que avisarte, no te preocupes por que me haya corrido dentro de ti………

-MARILUZ: ni tú, tomo la pastilla.

-YO: ¿y eso?

-MARILUZ: el medico me lo recetó por que dice que ayuda a regular mi cuerpo, además, nunca se cuando me van a entrar ganas de divertirme.

-YO: pues nada entonces, mi vasectomía no viene al caso.

-MARILUZ: ¿y ahora que hacemos?

-YO: ponte algo encima y me invitas a comer, luego vamos a mi casa y seguimos hasta las 17 horas.

-MARILUZ: ¿y por que tan pronto? - me besó con dedicación.

-YO: por que he quedado con otra a la que tirarme - me abofeteó la cara, enfadada.

-MARILUZ: ¿como te atreves?

-YO: ¿que te pensabas?, ¿que vivo por ti?, follas bien pero no eres la única a la que me voy a tirar, si te parece mal dímelo ahora.

-MARILUZ: pues no me hace gracia, vete dejándolas……..- sonreí al meter mi mano entre sus mulos y acariciar su coño, se resistía pero luego se abrió de piernas.

-YO: no voy a dejar a nadie, ¿o yo te he pedido que dejes a tu marido? - me miró consternada.

-MARILUZ: creía que eso no te importaba……..- suspiraba al sentir mis dedos penetrándola.

-YO: y me importa una mierda, ya lo has visto, ni a mi y seguro que a todos los chavales que te has estado follando con tu marido lejos, tampoco…….. – me miró como si aquello fuera un secreto -…… así que no te hagas la pobre esposa afligida, eres una golfa en busca de sexo, como yo, y podemos seguir siendo eso, juntos o por separado.

-MARILUZ: no soy ninguna puta - me besó al sentir como la frotaba el clítoris.

-YO: no he dicho que lo seas, follaremos cuando queramos, pero ni yo soy tuyo, ni tú eres mía, no como para pedirnos nada.

-MARILUZ: no eres un joven novato y nervioso, no como los anteriores……- me acariciaba el pecho mientras lamía mis dedos bañados en los jugos de su coño.

-YO: no, no soy como ellos……..

Se vistió delante de mí, de nuevo se fue a poner unas bragas y la azoté negándoselo.

-MARILUZ: ¿y que quieres que me ponga? - sonreí al ver lo colorada que tenia la nalga de mis golpes.

-YO: lo menos posible y lo fácil de quitar.

Cogió una falda negra hasta las rodillas, vaporosa, un sujetador de encaje y una blusa amplia de flores con los hombros al aire, unos zapatos cómodos y se pintó los labios, si vierais una foto de ella en el programa y otra de ella sin el bote de pintura que la ponían encima no la reconoceríais, era guapa, pero tenia la piel curtida y envejecida, y eso no se ve en TV. Con unas gafas enormes de sol en su cara nos fuimos a mi coche, comimos en un buen restaurante, de esos caros pero que te ponen bien de comer, charlamos un poco de tonterías, mantenía cierta distancia emocional, si la dejaba acercarse intuía que caería en su trampa. Al contrario que con Eli, a ella casi nadie la reconocía, y era normal, sin el maquillaje nadie diría que era ella.

Cuando llegué a casa Dani estaba terminado de recoger lo que Jeni y yo armamos la tarde anterior, tampoco reconoció a Mariluz pese a que trabajaba con su programa de fondo, saludó cortésmente, Mariluz con cara de asco al oírla hablar, y se retiró a la cocina, Mariluz no tuvo tiempo ni de hablar cuando vio la piscina, la levanté la falda y me saqué la polla para penetraba contra el cristal de la terraza, horrorizada por la presencia de Dani no muy lejos, se retorcía al inicio pero mi miembro la estaba matando creciendo dentro de ella antes de que pudiera hacer nada, a los pocos minutos jadeaba y pedía más, vi a Dani mirar de reojo desde la puerta de la cocina, le quité la blusa a Mariluz y se la tiré a Dani que se escondió asustada ante mis carcajadas, le quité el sostén y en un hábil gesto la falda, ya estabamos los 2 desnudos cuando la cogí en brazos y me la llevé a la habitación de invitados de abajo, la tiré a la cama y metí mi lengua en su coño, rebosaba de fluidos y lamía con sabiduría, su clítoris era tremendo, enorme y sobresalía cada vez que lo chupaba, se cruzaba de piernas rodeando mi cabeza con las pantorrillas mientras se aferraba a mi cabello, luego la penetré de nuevo, “dios, que sensación tan libre, tan placentera”, echado sobre su cuerpo lamía y chupaba sus tetas mientras la follaba a gran velocidad, cuando me separaba acariciaba mi torso relamiéndose, se corrió tan fuerte que pingó las sabanas limpias, yo bombeaba sin parar hasta sacar a la bestia y correrme dentro de ella, aplastado sus tetas con la cara. Me tumbé boca arriba y ella se dedicó a chupármela hasta tenerla tiesa otra vez, veía con alegría como se estaba babeando sus dedos y abriéndose el culo ella sola, sin decirla nada ya estaba preparándose para que la follara por el culo, “¿donde has estado toda mi vida?”, pensé, se acuclilló y con un facilidad similar a su coño fue metiéndose mi rabo por el culo, le temblaban las piernas cuando la tuvo toda dentro y se dejó caer sobre mi besando lasciva, allí la bestia reapareció y sentía como la abría un túnel entre las nalgas, sus golpes en mi pecho solo me marcaban que iba bien, sus gritos y movimientos de cadera eran fuertes, pero se puso roja cuando el orgasmo anal la llegó, explotó, nunca mejor dicho, en una barbaridad de fluidos que me bañaron entero y gran parte de las sabanas, y siguió haciéndolo hasta que 10 minutos después me corrí en su culo con embestidas tan fuertes que notaba el dolor en su rostro.

La di otro azote brusco en el culo ante sus risas, brillaba de sudor y sus tetas rebotaban de la respiración, yo igual, sudando y asqueado lleno de fluidos, me la saqué de encima, lamía mi tableta como si fuera de verdad de chocolate, y me fui a la piscina, me tiré de cabeza y degusté el momento, solo unos minutos, los justos para oír algunos gritos en la casa, fui a ver que pasaba y estaba Mariluz tapándose con una sabana increpando a Dani, que se mantenía quieta de pie con las manos juntas por delante a la altura del vientre y la cabeza gacha, sonrojada.

-YO: ¿que pasa?

-DANI: sentir, señor, yo no querer……- la interrumpió.

-MARILUZ: tú no querer, tú no querer, tú ser lista….. – le hacia burla con el tono -…. aquí la mirona se ha metido a ver a quien te estabas follando, ¿verdad? - la acusaba con el dedo.

-DANI: ¡no!, yo solo querer limpiar sabanas, yo oír piscina y pensar que habitación vacía - alzó la cabeza un poco pero se la agachó Mariluz de golpe.

-MARILUZ: ¡una mierda!, me has reconocido y querías asegurarse para ir a venderlo a la TV, como odio a esta chusma…. - ahora me miraba a mi - …..vienen de fuera a robarnos el trabajo o sacarnos el dinero como sea….. - Dani estaba roja de ira o impotencia, casi la oía sollozar -….. mándala a la mierda, pero ya, y no la pagues un duro, esta no tendrá ni papeles ni nada…. – se giró hacia ella - ….eh, ¿a que si? has visto a la Mariluz de la TV y ha pensado que podrías sacar un dineral para tus 30 hijos, ¡¡¡sanguijuelas, que sois todos parásitos!!!! - Dani la miró asustada al fijarse bien y reconocerla en ese momento.

Me tomé unos segundos para pensar, “joder, que bien follaba aquella mujer”, pese al chapuzón aun olía a ella, estaba claro que la faltaba un cable si se ponía así con Dani, pero si follaba así, ¿que más daba?

-YO: lo siento, pero voy a tener que echarte…….. - Dani levantó la cabeza casi llorando, suplicándome con los ojos mientras Mariluz se regodeaba.

-DANI: por favor, no, yo solo querer limpiar habitación antes de ir…. – me miró temblándole la barbilla.

-YO: lo sé, y te creo…….. – de hecho le había pedido que siempre que pudiera dejara las habitaciones hechas -….. por eso, y con gran dolor, te pido que te vayas…………… vístete y márchate - Dani extrañada, casi podía verla pensar, ella iba vestida, la que iba desnuda era Mariluz, cuando lo entendió se giró a mirarla con la cara iluminada, viendo como Mariluz estaba blanca como la leche.

-MARILUZ: me………….me estas tomando el pelo, ¿no?

-YO: ya me has oído, nadie viene a mi casa a gritarle a mi gente, vístete y sal - la cara de Dani era un poema, solo superada por la de Mariluz.

-DANI: yo………señor……….no hacer falta………….yo…….- no sabia ni que decir.

-YO: tú cálmate…………. y ponte aquí a mi lado - obedeció agachando la cabeza con una sonrisa incontrolada en la cara.

-MARILUZ: ¿pero tú estás mal de la cabeza? ¡¡¡¡Si acabamos de estar follando, me has abierto el culo cabrón de mierda!!!- si no estaba seguro de lo que estaba haciendo, esas palabras me convencieron, en el fondo, quería ser un cabrón, pero era un carbón sincero y leal, le prometí a Dani que cuidaría de ella por encima de las “visitantes”, y eso estaba haciendo.

-YO: no veas como lamento esto, follas como si fueras algodón de azúcar, pero vístete y vete, no te lo repito - se recogió parte de la sabana con que se tapaba y se plantó delante de mi apuntándome con el dedo.

-MARILUZ: déjate de bromas pedazo de payaso, ¿te crees que puedes jugar con los mayores?, ¿que me puedes follar cuanto te plazca y luego sacarme de tu casa? No me tientes, te puedo destrozar la vida, mequetrefe, como te atreves a……..- siguió gritando cosas similares, cuando se cansó, su cara parecía que iba a estallar.

-YO: ¿ya?...... - asintió con firmeza.- ……..Dani, .su ropa…. – me miró buscando confianza, se la di, corrió y cogió su falda, su blusa y su sujetador, y me los dio -….. gracias.

Me acerqué a Mariluz y le arranqué la sabanas de las manos quedando desnuda, le di la sabana a Dani, que tenia la boca abierta y sonreía, le di su ropa a Mariluz y la agarré del brazo con dureza, iba gritando y pataleando mientras la dirigía a la puerta, me soltó un bofetón fuerte cuando abría y amenazó otra vez antes de que la diera un leve empujón que la hizo tropezar y caer al suelo del pasillo de los ascensores, me tiró un zapato que golpeó con la puerta al cerrarla.

Al girarme Dani se me echó encima llenándome de abrazos y besos en las mejillas, me daba las gracias y decía algunas palabras en rumano que no entendí, la dio igual que estuviera empapado de la piscina, y desnudo, reía al escuchar aun a Mariluz golpear la puerta y berrear.

-DANI: yo gracias, yo gracias, no poder decir suficiente…..- me sujetaba de las mejillas con lagrimas en los ojos.

-YO: no pasa nada, ya te lo dije, eres mi ama de llaves, confío en ti, ¿acaso no confiabas en mí? - la rodeé por la cintura con las manos.

-DANI: yo si, si, yo confiar mucho……...- mentía, una cosa es lo que yo la dijera, quizá por acostarme con ella podría suponer, y otra que realmente cumpliera mi palabra, y lo había hecho - ….tu no deber, señora Mariluz de TV, poderosa, puede hacer daño tú.

-YO: no te preocupes por ella, es cosa mía - su mirada era de adoración, por un instante se vio en la calle con marido sin trabajo y un hijo, perdiendo no solo el único sueldo de su casa, si no un gran sueldo que con los extras les daba para vivir bien, no hacia falta que lo dijera, se leía en sus ojazos azules.

-DANI: yo gracias, mucho, yo…..yo……..yo follar tú ahora ¿si? - me volvía a reír, esta vez no era un caramelo, me quería ofrecer un premio por mi bondad.

-YO: no, estás agradecida, y eso no es deseo.

-DANI: si, si, si, yo deseo mucho tú, tú follárme bien….. - se alzó para besarme en los labios, sabían bien, pero la forma de hacerlo era sin cariño ni afecto, solo físico.

-YO: no, para, no me deseas, ¿solo quieres dejar de estár en deuda conmigo? …. - asintió con algo de rubor -…. pues hazme un favor, mándale un mensaje a Eleonor, dila que hoy he quedado con una chica, que parezco más alegre, pero no le digas con quien.

-DANI: si, yo no decir Mariluz a nadie, yo jurar….- cruzó los dedos de una mano besándolos.

-YO: no, aunque eso tampoco, no se cuanto podrías sacar por vender esta historia a la prensa, pero piensa que cuando se acabe lo que te den, no tendrás más trabajo, nadie te contrata si vas hablando …. - me aseguré de que tuviera la boca cerrada, con lógica -…. aquí tienes un sueldo bueno y fijo, mientras te comportes.

-DANI: si, yo entender.

-YO: perfecto, mándale un mensaje y dila que esta noche salgo de fiesta con una chica, y dime lo que te responda - asintió con una sonrisa enorme y me volvió a besar en la mejilla, pero cerca de mis labios.

Se fue cogiendo el móvil para obedecer, no me hacia falta verla hacerlo, si no me había ganado ya su lealtad con el dinero de los extras, con aquella jugada maestra seria mía para siempre. Lo hice por cumplir mi palabra, claro que si, pero me había costado un coño delicioso, aproveché la jugada para tener a Dani a mis pies, además quería saber si Eleonor seguía interesada en mi vida y como reaccionaria. Eran cerca de las 15 horas, mi siesta rutinaria, esa vez tomaba un cariz diferente, tenia que estar descansado y sin sueño, planeaba una noche larga de fiesta, y tenia que trabajar por la mañana del sábado, quizá me tocaría ir sin dormir a colocar aquel dichoso almacén, seguía trabajando allí para tener mi propio dinero, incluso al no pagar casa ni caprichos de mujeres, estaba ahorrando algo, sumándole a los 40.000€ que aun tenia en el banco, dormí pensando en mi vida de prostitución, en Madamme, en Zeus, en aquellas mujeres y la Geisha, en aquella fiesta de ricachones donde destrocé el culo del pobre David por internar jugármela, no, por internar jugársela a Zeus, en el fin de semana con la supermodelo, dios, todo lo que hice para nada, ¿para nada?, no, había tenido 2 años, o año y medio, de felicidad con Ana, pura y sincera, había merecido la pena, y ahora pensaba que aun sabiendo como acabó, lo volvería a hacer todo, antes y después, cada minuto junto a ella fue un regalo y ahora lo sabia. Aun ese tipo de pensamientos llenaba mi mente cuando quería quedarme en blanco, solo la dulce voz de verbos sin conjugar de Dani despidiéndose me desveló, entre semana trabajaba pero el fin de semana no, no la volvería a ver hasta el lunes, me dijo que Eleonor la respondió un ”OK” sin más, sonreí y se fue.

Yasira – El cazador al que casi cazan.

Me sonó el móvil, malditas alarmas, cometí el error de poner una canción que me gustaba de tono, ahora la detestaba, pero me sentía renovado y con fuerzas, comencé un completo en el baño, evacuaciones menores y mayores, baño relajante y concienzudo, repaso corporal de pelos sueltos y arreglarme la barba de 3 días, tenia un bote de gel fijador efecto mojado que nunca había usado, gracias a los genes de mi abuela tenia el pelo espeso, fuerte, sedoso y con un ligero inicio de remolino en la zona del flequillo, siempre que no me lo dejara crecer más de 2 meses me quedaba de cine, si pasaba de allí se me empezaba a poner un cardado de abuela de pueblo mezclado con pelo afro hacia arriba. Higiene personal completa, oídos, pelo de la nariz, cepillarse los dientes, enjuague bucal, desodorante en abundancia y medio bote de colonia potente, me gusta la sensación de sentir como las mujeres me huelen y me preguntan por la colonia, al mirarme al espejo me sentía el ser más vanidoso de la tierra, me veía atractivo. Hora de vestirse, ¿silps ajustados? “Que le den, a pelo”, vaqueros ceñidos solamente, y colocando el paquete para marcar rabo como dios manda, para eso lo tenia, con un fuerte cinturón de cuero marrón, había sacado el traje de Eric, eso me hizo recordar a Paula y la “promesa” de trajes mejores, ahora no tenia tiempo para ir hasta allí, pero me seria útil, una camisa blanca sin meter por dentro del pantalón, si levantaba los brazos se veía parte de mi vientre trabajado y los músculos de la cadera definidos, sin corbata y con varios botones del pecho desabrochado, sin marcar más escote que las mujeres, eso lo detesto, cogí la chaqueta del traje y me la puse por encima, como un guante me la dejó Paula la última vez y así seguía, calcetines y una botas de montaña que se pusieron de moda, al verme en el espejo me enamoré a mi mismo, no sabia si aquello combinaba o no, pero yo me veía arrebatador, un poco más de colonia en la ropa, sobretodo en el cuello y el pecho, por donde solían llegarme la nariz de las mujeres, y por hacer la gracia me eché unas gotas en el paquete abultado, “por si acaso”, llaves en un bolsillo izquierdo del vaquero, cartera con dinero en efectivo en el bolsillo del culo y móvil bien cargado al bolsillo interior de la chaqueta, perfecto.

Cogí el coche apurado, eran casi las 18:15, y había quedado en recoger a Yasira a las 19, por suerte miré el camino en el PC y tenia claro como ir, era a las afueras en la zona norte, de camino llamé a Eli por el manos libres y la expliqué con detalle lo ocurrido con Mariluz, no quería que la afectara, Eli se reía explicándome que no pasaba nada, Mariluz estaba como una abeja reina a la que le habían quitado su enjambre, Eli la estaba quitando el protagonismo y ya trataba de echarla, pero la cadena se lo negaba ante las buenas audiencias, y si se atrevían, tenia ofertas mejores de otros 2 canales de TV, la saludé y me dijo que me echaba de menos, pero aun estaría unas semanas de viaje, de gira por España, la dije lo mismo, que la echaba de menos, pero ambos sabíamos que mentía en parte, así tendría el tiempo necesario para cumplir mi reto de la semana completa.

Yasira vivía en una urbanización de lujo, al llegar las carcajadas me desconcertaban de la conducción, era la misma donde las moles de Madamme me habían llevado cuando fui a su casa, pero era una pequeña ciudad en si misma, con parques, centro comercial, centros de golf y tenis, al llegar a la entrada y parar miré el reloj del coche, las 19 en punto, si había algo que me molestaba era llegar tarde cuando quedaba y solo me molestaba, incluso más, llegar antes y esperar solo, ser rigurosamente puntual me producía cierta satisfacción, al no ver a nadie salvo un puesto de guardia con un gordo con gorra mirándome mal, le mandé un mensaje a Yasira.

-YO: ya estoy, ¿donde andas?

-YASIRA: ya salgo.

-YO: ¿espero fuera o entro a buscarte?

-YASIRA: no sé, siento tardar……he tardado en convencer a mi madre de que me dejara salir.

-YO: coño, ni que fueras prisionera, sales de fiesta con amigos, no pasa nada.

-YASIRA: ya………. pero querían saber con quien - sonreí, sin duda Dani había cumplido su cometido.

-YO: ¿y que hago?, estoy en la entrada.

-YASIRA: deja que llame al puesto del guardia y te deje pasar, así te voy guiando hasta la casa.

Accedí ansioso, el guardia me hizo un gesto tras colgar un teléfono y entré, sus indicaciones eran precisas y rodeé la casa, cuando llegué allí convencido de que mi llegada la cortaría el aliento, bien arreglado y con el coche de lujo, al que se le cortó al respiración fue a mi, la vi correr lo que podía con unos zapatos negros de tacón enormes, una mini falda negra, que más que minifalda era un cinturón grande, elástica y ajustada al mililitro, con un top dorado, apenas la cubría piel del torso, brazos y hombros al aire al igual que toda de la espalda y los costados, dejando ver en algún gesto el nacimiento de sus senos, era una fina tela ceñida que la rodeaba el cuello y bajaba por sus senos con un amplio escote, la tela se abombaba un poco en su ombligo, y tapaba su vientre, una serie de finas tiras unían los lados de la tela de sus costados por la espalda, sin sujetador, con un colgante de bisutería que brillaba en su cuello, ya se lo había visto antes, seria un adorno personal, algunas pulseras que resonaban en su brazo al chocar unas con otras y unos ligeros pendientes, todo dorado, con un bolso de mano negro y dorado, al entrar en el coche su respiración era agitada, su tuvo que bajar la minifalda haciendo fuerza con la espalda en el asiento, por que al hacer el gesto de entrar la vi lo que sin duda era la parte del coño de un tanga negro, o al menos al agacharse para meter la cintura en el asiento no había ni rastro de marcas de bragas en su culo, cuando cerró la puerta y me miró apremiándome para salir disparados, me quedé mirándola como un idiota, su cara era preciosa, había relajado su marcada mandíbula con una línea de maquillaje en los pómulos que lo disimulan y con ahumado oscuro de sombra de ojos con purpurina dorada que resaltaba el blanco de sus ojos con el iris color miel, con un suave pintalabios rojo oscuro que no destacaba, esa era la idea supongo. El pelo era largo, la recordaba con el pelo enmarañado y rizado de antes, pero ahora estaba liso, liso y brillante, le tapaba parte de la cara del lado derecho como una cortina de agua oscura y preciosa, en la izquierda un par de horquillas, como no, doradas, en el pelo se lo sujetaban por detrás de la oreja, cayendo alegremente en su hombro, era tan largo que se rozaba las piernas con él.

-YASIRA: ¡¡venga, vámonos!! - reía mientras me sacudía en el hombro con el tintineo de las pulseras.

-YO: esto…….si, perdona….joder……..estás…….- buenísima iba a decir -………espectacular - sonrío complacida y torneando los ojos.

-YASIRA: muchas gracias, espero no haberme pasado, ¿estoy bien? - bufé conteniendo en mis labios la burrada que la iba a soltar.

-YO: perfecta - volvió a sonreír y con su mano aun en el hombro sacó pecho acercándose a mi para darme los 2 besos de rigor del saludo, riéndose un poco y pasándome sus dedos por la mejilla, yo no podía apartar la vista de su escote, se veían gran parte de sus senos desde ese ángulo.

-YASIRA: jajaja mira como te he puesto – trataba de levantar mis ojos para ver los suyos, mientras me limpiaba algo de su maquillaje en la cara, me daba igual cual o que, me habría enamorado de ella allí mismo, su tono de piel era oscuro, más que Eleonor o Yasmine, pero no negro, si no del color de la madera barnizada, pero mi mente estaba a otras cosas, “quizá en otra vida”, me pasaba los dedos por la cara limpiando los restos de su pintalabios, y puede apreciar como las fosas nasales se le ensanchaban y ronroneaba al oler mi colonia.

-YO: me alegro un montón de verte - una verdad distorsionada.

-YASIRA: y yo, aunque debo reconocer que esto es un poco raro, después de tanto tiempo…….

-YO: ya, pero ya que hablamos, y me decías que te aburrías, pues una noche de fiesta nunca va mal - sonreí con mí caída de ojos, se sonrojó un poco.

-YASIRA: pues si, estoy harta de esas 2, necesito despejarme, ¿me llevas? - la cogí de la mano y la besé con cortesía.

-YO: este será vuestro carruaje, yo vuestro caballero y vos, si así me lo concedéis, mi princesa - giró la cabeza halagada, se llevó una mano al pecho doblando la muñeca con gesto de realeza y sonrió torneando la vista, ante la broma que era más que eso.

-YASIRA: llevadme, Sir Raúl - tardamos unos segundos en separar nuestras manos.

Al arrancar se cruzó de piernas y se volvió a bajar la minifalda, lo iba a pasar mal esa noche, a nada que se moviera se le subía cruzando lo decente, pero yo, y todo el que mirara, se iba a deleitar con unos muslos firmes y si estaban atentos, de la visión de su ropa intima una y otra vez. Me fue indicando para salir de la urbanización, aquello era un puto laberinto, hasta creo que pasé por la casa de Madamme, una vez fuera me percaté de las cámaras, había en cada entrada y salida, y seguro que por dentro había otras que no vi, charlamos de camino de vuelta a Madrid, mi afabilidad y sus ganas de socializar eran buena combinación, Yasira odiaba vivir allí, no conocía a nadie, hablar con los vecinos casi era pecado, y sus pocas amigos se habían alejado de ella por que Eleonor se mostraba inflexible con el tema de meter en su casa a jóvenes, al parecer mi experiencia la tenia aun de los nervios, me estaba dando una mina de información sin pedírselo, no la prestaba mucha atención la verdad, cambiar de marchas era una delicia, rozaba con los dedos su pierna, ella no la apartaba, y el cinturón de seguridad la apretaba entre los pechos, se tenia que estar colocando la tela de la mini falda y el top de forma constante, con unas manos cuidadas, elegantes, con uñas largas y pintadas, para tapar su tanga y que no se le salieran las tetas por los lados del top, parecía que se iban a salir en cualquier momento, pero no lo hacían, me pilló comiéndola con los ojos varias veces mientras solo sonreía, por que ella hacia lo mismo, bajé una ventanilla un poco para airear el coche, entre mi colonia, su perfume a rosas y el ambientador de pino del coche, casi mareaba.

Habíamos quedado con mis amigos sobre las 20:00 en un bar donde servían cubos de botellines de cerveza helada y tapas para picar, era barato y nos conocían, además de tener una terraza enorme en la calle que cerraban sobre las 12 de la noche, y no estaba lejos de una zona de marcha, llegamos algo tarde, a las 20:15, aparqué dando un par de vueltas con bastante suerte, ¿un viernes a esas horas en el centro de Madrid?, “milagro”, quedó un poco retirado y Yasira se pegó a mi brazo cuando se lo ofrecí, aparte de por que me encanta la sensación de tener a una mujer agarrada de mi brazo, por que sus tacones eran de vértigo y un mal paso podía acabar con la fiesta antes de empezar, caminamos despacio pero firmes, sabia llevarlos. Acaparamos las miradas de alguno, y alguna, por la calle, y aun así, fuimos los primeros en llegar. Saludé al dueño del bar que bromeó conmigo haciendo tiempo, en cuanto un hueco de la terraza quedó libre nos coló dándole igual que muchos se quejaran ya que estaban esperando antes y que otros se fueran, pero no era tonto, sabia lo que significaba que alguien de mi grupo estuviera por allí, nos sirvió un 1º cubo, del que ella tomó una cerveza agradeciendo las palabras de cariño del dueño del bar, a mi me trajo lo de siempre, un par de colas y una tabla de fritos, calamares, croquetas, patatas y gambas, luego sacó una de boquerones y aceitunas gratis , y otra de patatas de bolsa, (reitero, no estaba loco, sabia lo que hacia), a los 5 minutos aparecieron Manu y Teo, les abracé con fuerza, y les presenté a Yasira, Manu se quedó mirándola tan bobo como yo antes, charlamos y con el paso de los minutos y las risas, iba llegando un goteo incesante de gente, un par de amigos del instituto, amigos de Manu, algunos con sus parejas, la nueva novia de Teo de su trabajo, bastante mona aunque no me llamó en absoluto, a mi entender bastante pero que Alicia, pero lo cierto era que no tenia ojos para otra que no fuera Yasira, trataba de que no quedara desplazada ante tanto desconocido pero al poco tiempo ya había charlado con casi todos y Manu, Teo y yo montamos nuestras discusiones entre bromas donde participaba ella con asiduidad, los cubos de botellines corrían y los paltos de comida. Se me estaba haciendo muy amena su compañía, disfrutaba su cuerpo, una visión preciosa, de su forma de arreglarse la minifalda o el escote, con clase, y era divertida, era muy fácil hablar con ella.

Llegado un momento en que casi no entrábamos en las mesas se pegó tanto a mi que me cogió un brazo y pasó el suyo por debajo, recostándose sobre mi, fingí no darme cuenta, pero fuimos avanzando, apoyó su cabeza en mi hombro, puse mi mano en su pierna, frotaba mi brazo con sus manos, yo la besaba en el pelo o la frente, o ella entrelazó nuestros dedos jugando con ellos, me estaba encendiendo aquel tonteo simple. Me mató que al estar tantos, alguno estaba de pie sin sillas, así que ni corta ni perezosa para dejar sitios, se puso en pie cuidando que no se la viera nada, y se sentó en mi regazo cruzándose de piernas de forma grotescamente sexual, la rodeé la cintura de inmediato con las manos y nos movimos con disimulo hasta que encontramos una posición cómoda para ambos, en concreto mi polla metida en la raja de su culo medio tiesa y ella recostada sobre mi pecho frotando de lado un seno contra mi, mis manos cogieron vida propia y una se dedicó a acariciar el muslo de arriba en su cruce de piernas desde la rodilla hasta la minifalda, y la otra que descansaba feliz en su cadera acariciado la piel de sus riñones, fue bajando hasta llegar a su culo, como no había queja de parte de nadie, no solo pasaba la mano por la tela tirante de la minifalda, si no que subía la apuesta, acariciaba, apretaba, agarraba y finalmente pellizcaba, eso la sacaba una sonrisa enorme con sus dientes blancos brillando, me miraba apartándose el pelo de la cara y me besaba en la mejilla con dulzura, yo respondía besándola el hombro, su cuello o peligrosamente cerca de su escote.

Sobre las 21:30 aparecieron las chicas del piso de estudiantes, había algunas amigas o compañeras de la universidad, lo que los tíos llamaríamos un rebaño de ovejas, eso teniendo en cuenta que nosotros seriamos los lobos, y no ellas, todas bien arregladas y vestidas de fiesta, ninguna merece ser diga de mención salvo las ya conocidas.

Lara había desechado del todo su vida de “manporrera” y estaba preciosa con una melena que ya le pasaba de los larga que cubría lo justo los defectos de su rostro, con un escote abrumador, se llevaba por delante a todas, su delantera no tenia rival, ahora lo usaba con sabiduría y atrevimiento, con un pantalón blanco ajustado y una blusa azul con un escote exagerado, pero sin tacones, no sabia caminar con ellos.

Alicia iba como siempre, no necesitaba casi nada para ir bonita, o eso parecía, con un vestido gris, vaporoso hasta las rodillas, acentuaba el vuelo de la falda pero sus increíbles caderas quedaban ocultas, con un ligero escote, sabia que era inútil competir en ese aspecto con Lara por allí, con una coleta muy agradable, apenas maquillada, con calzado cómodo y su eterna sonrisa que se le atragantó al ver a Teo con su nueva novia, pero se forzó a soportar aquello, 10 meses no habían sido tiempo suficiente para ella, sus ojos eran casi tan tristes como los de Lara al verme acompañado de Yasira.

Naira, la estudiante canaria, iba como siempre, le tenia un afecto enorme a la ropa amarilla chillona e iba con un vestido ajustado pero nada descocado, le tapaba desde lo hombros hasta por debajo de las rodillas, le quedaba de cine eso si, su cuerpo se lo permitía, con largas piernas y uno tacones medios, sin escote pero si amplios orificios en los brazos dejando ver su estilizado cuerpo, el pelo rubio suelto y para que no admitirlo, demasiado maquillaje.

Mara, la hermana de Alicia, llegó después, salió de trabajar tarde y tenia que irse a casa a arreglarse, tan presumida como cualquier mujer era incapaz de salir de fiesta sin arreglarse, así que acudió cerca de las 10:30 hecha un pincel, zapatos de plataforma con tacón, leggins negros pegados a sus torneadas piernas y culo prieto, lejos del nivel de su hermana, pero Mara aprovechaba su cuerpo, con una camiseta blanca, sin escote, no tenia demasiados pechos para lucirlo y con Lara allí seria hacer el ridículo, enseñando un hombro y su tatuaje de una flor en él, con un montón de pulseras y colgantes, peinada con pelo corto de forma elegante y trabajada, no recuerdo haberla visto sin arreglar, nunca.

Una vez reunidos todos éramos entre 12 y 17 personas, algunos acudían se tomaban algo y se iban, otros se quedaban, al final cuando llegábamos a media noche la cuenta del bar iba ya por 300€, entre tapas ya habíamos cenado y algunos ya mostraban síntomas de embriaguez de tanto botellín de cerveza seguido, al levantarnos e irnos despidiéndonos del dueño del bar hice un análisis de las mujeres del grupo, por diversión, y Yasira ganaba, arrasaba más bien, solo Naira, la canaria, le hacia sombra, sus ojos azul claros y pelo rubio eran muy llamativos, pero ese día iba muy recatada, Lara tenia solo tetas y Alicia iba demasiado………..normal, como para lucirse, iba guapa, pero siempre me daba la sensación de que podría exprimir su cuerpo, y no lo hacia, unos leggins ajustados como su hermana o unos jeans ceñidos y tendría a medio bar pagándola copas por bailar junto a ella y sus caderas, pero es que hoy hasta parecía querer disimilar su figura. Seguro que aquellas mujeres, o todas, dirán que Yasira destacaba por ir como una guarra, dejémoslo en que disentimos.

Yasira se frotó los brazos, era media noche de finales de septiembre, y pese a que el sol calentaba aun de día, de noche refrescaba, la ofrecí mi chaqueta con caballerosidad, se rodeó con ella inspirando la colonia, preguntándome cual era y diciendo que olía muy bien, sonreí. Caminamos unas manzanas entre gritos y risas, nos quedamos unos 10 para ir a bailar y beber a la zona de marcha, entramos en varios sitios que conocíamos, donde te invitaban a chupitos para que te quedaras allí, pero eran sitios en que se entraba sin pagar, algo cutres y con música poco dada a bailar, los hit del momento, eso si, Yasira se reía y charlaba con todos, no se alejaba de mi, pero Manu era gracioso y avispado, era fácil divertirse con él. Pasaron los minutos y las copas, la cosa se fue animando, Yasira era latina y cuando había algo mínimamente “bailable”, por poco que fuera, fluía como agua por la pista, algunas chicas la siguieron y no se movían mal, como siempre, los tíos se quedaban en la barra pidiendo copas, yo como no bebo, podía irme con ellas, y estar con 5 mujeres preciosas bailando tú solo es una gozada, Lara, como no, me pegaba a sus tetas y sus gestos eran atrevidos, mientras las demás hacían parejas entre ellas, Yasira le cayó bien a todas, menos a Lara claro, se frotaba y contoneaba con ellas como si fueran amigas de toda la vida, aunque encontró en la nueva novia de Teo una pareja fiable, las demás ya se conocían y ellas 2 eran las nuevas, una era la ex de Teo y la otra un rollo mío que iba detrás de mi, así que hacían migas al sentirse un poco apartadas por el resto.

Mi acompañante se mostró hábil y sensual en el baile, sus movimientos eran eróticos y atrayentes, quedabas hipnotizado viéndola mover las caderas, debía ser agotador estar bajándose la minifalda constantemente, el top ya la daba igual, se la veían partes de los senos ampliamente, pero nunca del todo, las chicas insistían en bailotear entre ellas mientras tiraban de sus acompañantes para llevarles a bailar, pero generalmente los tíos forman grupos para charlar y reír con una copa en la mano, me parece estúpido pudiendo ir a retozar con mujeres, así que cuando Yasira fue a por mi para llevarme con ellas, la seguí como una serpiente ante su encantador, al inicio hacia el tonto, bailaba de forma torpe, las imitaba sus gestos sensuales que en una mujer provocan erecciones pero en un tío quedan ridículos, me iba riendo y ellas me intercambian alegres por tener compañía masculina, Teo me siguió rápido, y antes de que su nueva novia se me acercara la agarró de la cintura y se la quedó para él solo. Lara se frotaba de forma grotesca acariciándome la polla con las manos por encima del vaquero, sus tetas apretujadas contra mi me alegraban la vista, pero era Alicia la que tenia mi atención, en parte por que siempre ha sido alegre al bailar, y otra por que al ver a Teo con su novia la tensaba, la distraje un poco entre risas y bromas con los bailes típicos y sencillos, pero entonces llegó el reggaeton, esa música para muchos maldita, pero que por alguna razón pone a las mujeres y hombres en modo sexo, por que “como se baila así”. (Y si inventan una música que se baila cortándose una mano, ¿lo haríamos “por que se baila así”?).

Yasira se sintió en su salsa y casi como en una película apareció entre la gente contoneándose lasciva, caminando directa a mi, el resto se apartaron sintiendo que se había acabado la tontería, Yasira se pegó a mi cuerpo y metió mi pierna izquierda entre las suyas, comenzando a mover la cintura, aferrada a mi cuello, mis manos se desliaron por su cintura y una de sus piernas, acompañaba con mi cadera sus gestos, aquello ya era otro nivel, era follar con ropa, su mirada despedía calentura y la mía deseo, alguna risa se nos escapaba, ella sentía mi polla en su pierna y yo su coño en la mía, la minifalda se subió y la dio igual, a mi no, 3 tíos detrás de ella la estaban señalando y frotándose el paquete por encima, así que mi mano bajó de su cintura a su trasero y tiré de la minifalda para bajársela y dejar la mano allí para evitar que se subiera, ella no se percató de que estaba siendo devorada con los ojos, o la daba igual, lo interpretó como una señal de calentura, no obstante estaba sosteniendo una prenda elástica apretando contra su culo, y a los gestos de su cadera se sumaron unos arqueos de espalda demenciales, descolgó uno de sus brazos de mi nuca dejándolo caer colgando y levantó una pierna para que fuera sujetada mejor, la tela de su minifalda no cedía por mi mano, si la soltaba se levantaría hasta dejarla el culo al aire, allí me desinhibí de las miradas y comentarios de los demás, eran evidentes pero aquella pantera me estaba poniendo malo, y ella lo sentía en su muslo, con un enorme bulto en los vaqueros que era tapado por la parte interior de su pierna alzada, sin dejar de mover la cintura y el pecho, con nuestras miradas fijas una en los ojos del otro y siendo conscientes de la subida de temperatura de ambos.

No se cuanto tiempo pasó así, varias canciones latinas, lo que puede ser desde 6 minutos a 15, luego ella bajó su pierna y golpeaba mi pelvis con su vientre, haciendo oleadas con su cuerpo, la sujetaba de la cintura acariciando sus caderas y su espalda por debajo del top con una mano, la otra seguía fija en el culo de su minifalda, al cambio de canción rompió a reír, era una canción pegadiza que reivindicaba de forma denigrante el movimiento del culo de la mujer, Yasira se giró rozándose con todo su cuerpo y dejando mi rabo entre sus nalgas, estiró las piernas los más posible arqueando la espalda agachándose, y sin decir nada su culo empezó a temblar, la descripción clara es que sin doblar las rodillas me estaba haciendo una paja con las nalgas, mi falo estaba ya duro como una piedra y había crecido hacia abajo apretada por los pantalones, me llegaba a medio muslo de la pierna izquierda, la agarraba de la cintura y el vientre mientras mi pecho y su espalda hacían un ángulo de 90º. Saludé a Manu que me hacia gestos claros de burla, pero no estaba para nadie, ni ver a Lara frotándose con la canaria me despistó, yo no estaba quieto, mi cadera ayudaba a su propósito, tenia 2 o 3 buitres al acecho esperando que me apartara de ella lo más mínimo para ir a “bailar con ella”, pero no hubo opción, ella se volvió sin separarse de mi, ahora mordiéndose el labio, mi mano fue a su trasero de nuevo pero esta vez no para sujetar, elevé su cuerpo lo justo para pegar su cara a la mía, ella me sujetó la cabeza relamiéndose, acercando sus labios a los míos, rozábamos nuestras narices cerrando los ojos, al 4º amago nos besamos, sentí en la lengua el sabor agrio de la cerveza, pero la cereza de sus labios era mayor, la disfruté un par de veces hasta abrir la boca y meter la lengua hasta enterrarla en ella, apartó el pelo del lado cubierto de su rostro y acariciaba mi barba mientras nos besábamos, sin dejar de mover nuestras cinturas, allí ya si que perdí la noción del tiempo, cambiando de posturas siguiendo su cadera, su culo, su pelvis frotados contra mi, su pecho casi saliéndose del top y viéndola las aureolas en algunos giros, eran negros y apetecibles, el sudor de su pecho resbalaba en su canalillo y el mío me hizo quitarme la chaqueta, al hacerlo se levantó la camisa mostrando el inicio de mi tableta, ella metió sus manos acariciando mi vientre mientras se mordía el labio, se agachó a besar mi ombligo y miró a un par de chicas que nos miraban ruborizadas, lamió mis abdominales a la vez que hizo un amplio círculo con la cadera sacando el culo de forma exageradamente sensual.

Al dejar la chaqueta mi polla era tan evidente que me la miraron todos, tíos incluidos, a Lara y Alicia fueron las únicas a las que no las sorprendió, pero no por ello dejaban de mirarla, Alicia lo hizo la 1º, pendiente de si a Teo le hacia reír su novia. La camarera, de escote abultado para llamar a más clientes, se mojó las manos al llenar demasiado una copa por que sus ojos eran para mi, me sentía poderoso y codiciado, Yasira fue alejándome de la pista hasta quedar atrapada en una pared, y allí nos deleitamos el uno con el otro, tenia la cara manchada de su carmín, brillantina por todo el rostro y el cuello de la camisa manchado de sus labios, probé su piel en la garganta, olía a rosas y sudor, acarició mi nuca pasando los dedos entre el cabello húmedo de mi transpiración, sin asco alguno al sentirlo, mis manos la repasaban entera, sus tetas y su culo se salvaron de un ataque directo, volvió a levantar una pierna que sujeté, amasé y pellizcaba en su muslo, mientras la otra se centraba en su trasero, era duro y firme, solo mi auto control, y el sexo con Mariluz esa mañana, evitó que la abriera de piernas y la follara allí mismo, me dolía la polla de estar retenida contra su voluntad, de ser acariciada por sus manos.

-YO: me vas a matar.

-YASIRA: me estas matando tú, madre mía, que verga, mi madre no mentía, las hacías chillar mientras las follabas, ¿verdad? - ella no me había visto ni tocado directamente la polla en el pasado, no como ahora, y su madre le habría contado como Ana y Eleonor eran atravesadas sin piedad, más de una vez delante de Luz, su madre.

-YO: las hacía venirse hasta desmayarlas - seguía son soltar mi polla.

-YASIRA: eso me han dicho ellas…….. – no fue consciente de lo que dijo, la calentura y el alcohol la tenían ida, al usar el plural no podía referirse solo a su madre.

-YO: ¿quien te lo ha dicho? - ataqué sin piedad, tenia que estar seguro, así que mi mano fue resbalando por sus muslos hasta llegar a su coño, la tela del tanga estaba empapada.

-YASIRA: mi madre………….dios………..mi madre y……y Eleonor……..dios - sentía mis dedos acariciándola con habilidad.

-YO: así que saben que estas conmigo ahora…….- frotaba hasta sentir como la tela cogía la forma de su coño.

-YASIRA: si……uf………se lo dije ………cuando me llamaste……me han pedido que viniera………dios….- me besó cerrando los ojos -………. y que te sedujera…….pero cuando fuéramos a follar, me fuera………….que te dejara a medias…………- sonreí.

Lo sospechaba, desde que la llamé sabia que podía pasar, y cuando tardó tanto en salir de su casa, y lo arreglada que iba, no había duda, Eleonor la había ayudado, su forma de vestir era la que a mi me gustaba, nadie se arregla de esa manera pasa salir con amigos si no cuando va de caza, y menos sola a escondidas en su casa sin que te vean y te pregunten, la facilidad con que había logrado meterla mano, pero la señal fue clara, lo supe cuando me habló de mi colonia al ponerla la chaqueta, ese detalle me gustaba y solo Eleonor y Ana lo sabían, se lo dije en una charla, podía ser una coincidencia pero no lo era, no cuando Eleonor no le preguntó a Dani con quien había quedado, ya sabia con quien, y ahora yo conocía su plan.

-YO: vaya, ¿Eleonor sigue molesta?

-YASIRA: si…………más que eso……….- jadeaba respirando al sentir mis dedos apartando su tanga y acariciando con las yemas su clítoris hinchado - ….se pasó 2 semanas gritando e insultándote……………uffffffffff…………luego hablaba con mi madre y planeaban cosas………..pero cuando les dije que me llamaste me obligaron……..yo solo quería divertirme una noche, pero………..Eleonor me ha llevado de compras y a la peluquería………..quería que estuviera preciosa ……….para ti.

Ya sabia lo que necesitaba saber, Eleonor me la había querido jugar otra vez, no se que ganaría con dejarme a medias, si era tan estúpida como para pensar que eso funcionaria, no me paré a pensar su lógica. Así que ahora tocaba disfrutar de su esfuerzo.

-YO: ¿y por que me lo cuentas ahora?

-YASIRA: por que te deseo, y por que me dan igual………son 2 viejas estúpidas que no me dejan vivir………..es verdad que no me dejan salir ni llevar a nadie a casa……..las odio………mi madre se deja llevar………..se reía cuando me decía Eleonor que me dejara meter mano hasta ponértela dura…………..para que luego te dejar así y me fuera……..¿que madre hace eso? - sus gemidos no tapaban cierta ira y pena en sus palabras.

-YO: entonces, ¿que hacemos? por que ya has cumplido tu misión, te deseo y quiero llevarte a casa y hacerte el amor hasta el amanecer, eres preciosa y ya lo eras sin tanta parafernalia - un toque de auto estima para animarla, pero no hacia falta, mis dedos entraban en su coño cuando ella movía sus caderas, no era virgen ni mucho menos y se movía de escándalo.

-YASIRA: hazlo…………… llévame a ese palacio…………..fóllame cuanto quieras, …………….querían que te sedujera pero te deseo también, desde que te vi la 1º vez, por eso acepté, y ahora no quiero parar - me besó con fuerza hundiendo su cadera en mi mano hasta sentir sus labios mayores en mis nudillos, saqué la mano de allí brillando de sus fluidos.

Los saboreé con gusto, estaba deliciosa, luego la agarré de la nuca y nos fundimos en un beso pasional, nuestras lenguas bailaban al ritmo de nuestros cuerpos, la coloqué el tanga y lo acaricié con delicadeza antes de bajarla la pierna y arreglarla la minifalda mientras le comía el cuello. Ella se puso roja al ver como medio bar la miraba situarse el top, los pezones se le marcaban duros bajo la tela dorada, el otro medio me miraba la polla palpitar en lo vaqueros, la cogí una mano y la hice un paso de baile girándola sobre su eje para quedar recostaba sobe mi brazo, y fundirnos en otro beso, si iban a mirar que se deleitaran, Lara echaba fuego por la nariz, la incorporé y me fui a por la chaqueta, nos despedimos, Alicia se fue en algún momento en que estaba con Yasira, no la vi, y Lara me suplicó que me quedara un rato, eran cerca de las 4 de la mañana y no tenia intención de aguantar allí, así que la cogí de la cintura pegando sus enormes tetas a mi y la susurré que pronto la llegaría la hora. Eso la ruborizó, lo suficiente para dejar que me marchara.

El camino fue eterno y caliente, la puse la chaqueta ante el frío de la noche, ella iba delante mía y yo andaba torpemente pegado a su culo, metiéndola mano a cada instante, las sonrisas eran vagas, era lujuria lo que sentíamos, al llegar al coche ella se recostó sobre la puerta y me apretó contra ella, metí mis manos por debajo del top hasta alcanzar sus senos y acariciarlos, tenia los pezones duros, y el fresco de la noche ayudaba a sentir su piel tersa y vibrante, otra mano hizo fuerza contra la cintura de la falda y se metió por dentro de sus nalgas tirando del tanga, sus suspiros eran todo lo que necesitaba, miré a la calle para saber si era lo suficientemente apartada y desierta para penetrarla allí mismo, pero había demasiada gente, aunque sus labios besándome el cuello y sus manos metidas por debajo de mi camiseta acariciando mi vientre hasta el pecho, indicaban que no la importaba mucho, subimos al coche y a duras penas podía apartar la vista de ella, se acariciaba y frotaba con lujuria, bien abierta de piernas se estaba frotando la vulva, por poco no tenemos un accidente en una rotonda, me centré en la calle, pero mi mano se deslizaba en su muslo, piel tersa y el brillo de sudor aun en ellos solo los hacían pecado con su tono de ébano.

Al llegar al aparcamiento se me echó encima besandome, se sentó encima y se contoneaba sin parar de lado sobre mi verga, hasta hizo sonar el claxon con su trasero, me costó salir del coche con ella acariciándome sin parar, en el ascensor fue igual, pegada a mi polla con una erección continua desde hacia un buen rato, pero ya la frotaba con ella, apenas me contenía acariciándola, si algún vecino hubiera llamado el ascensor al abrirse hubiera visto a Yasira de frente con mis manos en sus tetas agarrándolas desde atrás dando golpes de cintura en su culo con la minifalda subida enseñando el tanga, por suerte nadie llamó y entramos en casa abrazados y besándonos, su lengua era áspera y contundente, me quitó la chaqueta sin dejar de besarme y también desabrochó la camisa acariciando mi torso cuando ya estaba abierta, sus manos fueron a mi cinturón mientras lamía mi pecho, desabrochó sonoramente la tira de cuero y abrió la prenda vaquera para meter su mano y acariciar el tronco de mi falo aun dentro de los pantalones, sentí su mano buscando sitio hasta rodearme el miembro por completo acariciando levemente, como un animal de forma brusca agarré la minifalda y tiré de ella hacia arriba, tan fuerte que la levanté del suelo medio segundo cuando hizo tope con el top, volví a tirar y la minifalda se adherió a al top obligándola a estirar los brazos hacia arriba, le saqué ambas prendas por la cabeza, ver caer su pelo una vez fuera sobre sus senos me calentó demasiado, la separé el cabello y me doblé para lamer los 2 pezones más oscuros y grandes que había visto nunca, las aureolas eran del tamaño de galletas, y los pezones anchos y duros, no muy largos, como botones de mando a distancia, los lamí oyendo sus gemidos al contacto, los sostuve con las manos, al no llevar sujetador no cayeron pero mi duda era si subirían con uno puesto, estaban firmes, tersos, bien colocados y duros, sus manos acariciaron mi cabeza mientras los degustaba, una mano fue a su trasero, estaba como una piedra, lo azoté levemente para sentirlo temblar, sus nalgas abiertas por el hilo del tanga apenas se movieron, (sin duda las mujeres de piel oscura tienen culos más firmes de forma natural, esa es mi conclusión derivada de mi experiencia, o al menos Yasmine, Eleonor, Yasira, o incluso Pamela, la negra africana del instituto, tenían traseros antinaturales al tacto). La cogí de los costados y me la subí encima, me rodeó con las piernas mientras apretaba sus pechos en mi cara, los iba lamiendo y chupando como un bebé mientras la llevaba a la habitación de abajo.

-YASIRA: no, súbeme arriba, quiero hacerlo en la cama de Eleonor - sonreí asintiendo.

-YO: eres muy traviesa - giró la cabeza apartando todo su pelo en una dirección despejando su cara.

-YASIRA: estás a puerto de descubrir cuanto - me besó sintiendo su deseo.

Al llegar arriba y entrar en la habitación se bajó pasando un dedo desde mi barbilla hasta mis vaqueros, donde tiró de la prenda asomando la cabeza con picardía al balcón de mi entrepierna, mordiéndose el labio, acarició cuanto quiso de mi cuerpo, yo me aparté un segundo para bajar las luces, y poner algo de música erótica con el PC, volví a sus brazos deleitándome con la visión de su cuerpo desnudo contoneándose, solo con el tanga marcando su coño y unos tacones de infarto, una mano se me fue a uno de sus senos y la otra a su trasero, mi boca recorrió sus labios, su cuello y el pecho agarrado, mientras ella abría del todo la cremallera del vaquero, sujetando mi polla y tirando hasta sacarla gran parte por encima del pantalón, masturbaba levemente con ambas manos mientras se dejaba lamer cada rincón que me apeteciera, luego le tocó a ella y besó mi cuerpo hasta quedar de rodillas y bajarme los pantalones del todo, quedó maravillada ante el saltó que dio mi polla ante ella una vez libre del vaquero, la sujetó con ambas manos y tiró de la piel hacia atrás abriendo los ojos con cara de apetito, notaba en su mirada como llevaba deseando ese momento mucho tiempo, abrió la boca lo que pudo, y por gracia divina o coincidencia, su mandíbula marcada ayudó a que metiera media tranca en la boca de golpe, casi se atraganta pero su lengua se mostró hábil, al sacarla chupó el glande con dedicación mientras su manos le apartaban el pelo de la cara dejándoselo caer todo sobre un hombro.

No se si instruida por Eleonor o no, pero sus manos comenzaron a pajarear sin descanso, mientras su boca apenas podía engullir mi barra de carne, sus labios manchaban mi rabo de carmín, chupaba sin separarlos de mi glande y de vez en cuando lamía el tronco, yo solo la acariciaba el pelo, no necesitaba guía, esa mujer sabia lo que hacia, tendría 20 años pero la chupaba mejor que bastantes con las que había estado mayores que ella, al rato se levantó buscando mis labios, se los concedí con gusto, mientras una de sus manos seguía masturbando si parar, la otra mano se quitó las horquillas del pelo y lo dejó caer sobre su rostro, luego hizo uno de los gestos más eróticos que me parecen, con una mano cogió todo su pelo y lo hizo caer sobre un hombro haciendo un tirabuzón en su cabello, eso provocó un beso largo y húmedo, al finalizar tiró de mi labio inferior con los dientes, el sabor a cereza era cada vez menos, tenia el cuerpo entero manchado de sus labios y purpurina, se dirigió hacia la cama andando de forma lenta y amplia, dejándome ver como su trasero se movía y su culo rebotaba con el sonido de los tacones haciendo aparecer y desaparecer el fino hilo del tanga negro, con los pulgares fue bajándose el tanga y cuando llegó a la cama lo dejó caer al suelo, tuvo que tirar para separar la tela de su coño, estaba tan empapado que lo despegó, cayó sobre la cama gateando con el culo en pompa, acariciándose el coño con una mano, mientras su cuerpo seguía una inercia de sexo que yo aun no la estaba dando, “joder con la hija de la criada”, pensé con una amplia sonrisa.

Directo a por ella la agarré del culo y separé las nalgas acercando mi cara a sus muslos, olí su interior, era abrumador, a humedad y sudor, al 1º lametón se le erizó la piel, y al chupar su coño tiritó, su cinética era constante de adelante a atrás, la estaba follando con la lengua, mis manos amasaban sus nalgas dando alguna palmada, sonaba como golpear mármol, tenia unos labios mayores enormes y oscuros y al abrirlos el rosa lo invadía todo, localicé el clítoris asomándose, chupé y jugué con mi lengua cuando mis dedos la penetraron otra vez, sus gemidos subían de inmensidad y movió el culo como cuando bailábamos, sintiendo como sus posaderas se apretaban contra mi, una serie de lametones largos hasta su ano me dejaron claro que no le hacia ascos al anal, así que lo lamí igual, sin dejar de meter mis dedos en ella, la sentía derretirse, fue cuando me arrodillé detrás de ella y golpeé mi polla en su coño de abajo a arriba, al sentirlo se arqueó la espalda.

-YASIRA: fóllame, fóllame por favor, métemela de una vez.

Soy obediente cuando me gustan las órdenes, acaricié con el glande abriendo los labios mayores hasta que se encajó en el hueco idóneo, apreté para sentir como se abría y como ella contenía el aliento, dadas sus artes, no me extrañó meterla ¾ de rabo del tirón, con algo de dificultad pero se abría ante mi, tosía aire mientras gemía aguantando la sensación, pero sin dejar pasar un instante movió sus caderas con rapidez notando como su culo se contoneaba de forma sensual, imitando su gestos en la pista fue girando las caderas hasta sentir como la metía dentro de ella, fue ella la que se la metió, su respiración era lo único que denotaba que sentía el tamaño de mi verga, y me gustó su docilidad, la veía moverse de forma fluida, sus nalgas golpeaban en mi pelvis y usaba esa inercia para alejarse un poco y volver a por otro rebote, la sensación era de fuerza y presión, pero no paraba de moverse, sus gemidos se cortaban con algún grito pero me estaba haciendo bufar y disfrutar, acaricié se espalda rodeándola hasta agarrar sus senos y tirar de su cuerpo para ponerla de rodillas pegando su espalda a mi pecho, mientras seguía moviéndose sin parar, era un baile constante de placer, mientras la pellizcaba los pezones, otra mano se fue a su clítoris para frotarlo, fue cuando ella explotó con un orgasmo que para mi sorpresa solo la hizo girar rápido su trasero, “dios, que mujer”, me aferré a su cintura y decidí que ella estaba preparada para todo, saqué a la bestia, ni siquiera empecé normal para ir subiendo, la solté a ver que ocurría. Su cuerpo se puso rígido estirándose, unos minutos después cayó sobre la cama totalmente estirada boca abajo sacándose mi polla, me arrodillé en su piernas y metí mi rabo de nuevo separándola las preciosas nalgas, la bestia se desquitó provocándola varios orgasmos, ella empezaba a entender por que las hacia gritar, no era solo el tamaño si no la constancia, a los 15 minutos ella era la que gritaba, golpeaba la cama con fuerza mientras gemía y jadeaba.

-YASIRA: ¡¡¡córrete, lléname de tu semen, hazlo, se que te operaste, fóllame y metete tu leche hasta el fondo de mi ser!!!

Aceleré hasta dar lo mejor, el sonido de humedad siendo deslazada en su interior y de mi polla abriéndola era delicioso, cuando los brazos me empezaron a flaquear sentí el golpe eléctrico en la columna y descargué una barbaridad de semen, metí una estocada y la dejaba cabecear dentro de ella, un azote en el culo fue la señal de que había terminado, me tumbé a su lado, acariciándola la espalda, estaba tumbada mirándome con los ojos brillando y una sonrisa enorme.

-YO: eres una chica traviesa – repetí.

-YASIRA: ya te lo dije…..

-YO: follas de cine.

-YASIRA: ayuda que mi novio la tenga grande, aunque no como la tuya - bajé mi mano de su espalda a su ano jugando con el.

-YO: ¿tienes novio?- me importaba poco.

-YASIRA: si, bueno, algo así, nos acostamos, pero últimamente casi no nos vemos por culpa de mi madre, ¿por que? ¿te molesta?

-YO: para nada, es asunto tuyo, yo me conformo con tu cuerpo - empujé y la metí un dedo en el ano con algo de esfuerzo, su cuerpo se retorció un poco al sentirlo.

-YASIRA: no ha acabado, ¿verdad?

-YO: no.

Gateó hasta ponerse a 4 patas encima mía, besándome con lujuria mientras la follaba el culo con 1 dedo y luego 2, la otra mano masajeaba uno de sus pechos, su cintura se movía de nuevo, se abrió de piernas hasta meterse mi polla ya dura en su coño, vi como un escalofrío la recorría el cuerpo, no bajó del todo, pero no hacia falta para dejarla llena, y mis dedos en su ano la estaban matando.

-YASIRA: ¿me vas a follar por el culo? - sonreí ante su descaro.

-YO: si tú quieres, a algunas le da impresión que se la meta por detrás, pero me da que tú, traviesa mía,, no eres de esas……..- se encorvó para ponerme las tetas en la cara, con sus blancos dientes resaltando en un carcajada.

-YASIRA: no, no soy de esas, me encanta el sexo anal, así que deja de jugar y ábreme el culo.

-YO: ¿donde has estado toda mi vida? - azoté su trasero al sacar los dedos de su ano.

Adelantó la cadera y saqué la polla de su coño para hundirla en su ano, fue tan fácil que solo mis dedos no podían haberlo provocado, esa tía tenia el culo abierto desde hacia mucho, de nuevo pasada ¾ se paró, giró sus caderas una y otra vez hasta tenerla toda dentro de su ano, sus gemidos aumentaron de intensidad, se apoyó con ambas manos en mi pecho arañando y continuaba bailando, “¡que forma de moverse!”, como si no la estuviera empalando, allí la demostré mis talentos, planté los pies y cogí de sus glúteos hasta levantarla medio palmo, la bestia volvió al ruedo y desaté mi fuego interior, su cara cambió a un asombro y placer indescriptible, golpeaba con fuerza haciendo sonar mis huevos en su culo, e arañaba mi pecho con lujuria, luego se rindió sobre mi, haciéndose una bola siendo penetrada sin piedad, rodé dejándola tumbada boca arriba y conmigo de rodillas, seguí follándola el culo mientras con el pulgar la acariciaba el clítoris, era glorioso verla acariciarse las tetas, como estrujaba los pezones y tiraba de ellos con violencia, le iba el sexo duro, así que caí sobre su pecho comiéndola las tetas sin dejar de follarla el culo, mordía sus pezones provocándola orgasmos anales continuos que no eran nuevos para ella, la fuente que se convirtió su coño con cada venida fue genial, cuando la besaba parecía que quería agradecerme el placer que la daba con cada embestida, luego jadeaba cansada, estaba exhausta y sudando, pidiendo a gritos que terminara, pero la bestia era incansable, al menos 20 minutos hasta que sentí que me corría, la llené el culo de mi semen, al sentirlo se retorció de gusto sobre las sabanas poniendo el cuerpo tenso unos minutos y al sentir el intenso placer evaporarse se relajó de golpe. Ahora caí rendido sobre ella que me rodeaba con las piernas y los brazos, acariciándome de forma suave y tierna con las manos y los muslos.

-YASIRA: dios…………ahora sé por que está tan loca Eleonor, yo también perdería la cabeza si me follaran así.

-YO: que la jodan, tenía esto y más, trató de jugármela, aun trata de jugármela.

-YASIRA: es una retrasada, y se merece lo que la hiciste - tenia mis dudas de si en realidad Yasira se acostó conmigo por orden de Eleonor y todo era una cortina de humo de un plan mayor, pero o era actriz profesional o su tono de ira con ellas era real.

-YO: supongo, aunque ahora mismo no pienso con claridad, eres una fiera difícil de domar - rió contoneándose.

-YASIRA: jajaja pues tú no lo eres menos, ni mi novio en toda una noche me ha dado tanto placer.

-YO: ¿cuanto llevabas sin sexo?

-YASIRA: desde que nos mudamos, joder, como necesitaba esto, y contigo, ha sido increíble - me dio un suave beso.

-YO: y puede volver a serlo.

-YASIRA: ¡¿ahora?! No por dios, me duele todo, no podría……..

-YO: no ahora, sino otros días, podemos quedar para salir de fiesta el fin de semana, como el hoy, y luego venir aquí.

-YASIRA: jajaja seguro que a mi madre y a Eleonor les haría mucha gracia…….- la ironía era evidente.

-YO: yo me ocuparía de Eleonor, tu madre es otro tema.

-YASIRA: es una payasa servicial, no puede hacerme nada……….- odio que un hijo hable así de su madre, pero me daba lo que quería.

-YO: ¿y tu novio?

-YASIRA: a estas alturas ya se habrá buscado a otra disponible, como a ti, no le faltan pretendientes.

-YO: pobre, no sabe lo que se pierde………. ¿y ahora que haces? ¿Tendrías que volverte a casa o en que habíais quedado?

-YASIRA: pues tenia que dejarte e irme en un taxi, no tenia hora, pero ya es tan tarde que tendré el móvil lleno de llamadas - lamí una de sus tetas antes de bajarme a por el bolso, era fácil encontrarlo, estaba al final de la hilera de ropa tirada en el suelo.

Me senté con ella entre mis piernas y la vi leyéndome los mensajes de su madre y de Eleonor preguntado que tal estaba y como iba, los últimos insistentes, la contestó que le había costado más de lo pensado pero que ya íbamos a casa, y allí me dejaría a medias, nos reímos al enviarlo, la besaba con lujuria.

-YO: date una ducha y te llevo a casa.

-YASIRA: ¿te duchas conmigo? Me han dicho que eso te pone - suspiré al oler su cuerpo pegarse al mío.

-YO: ojalá, pero tengo que hacer algo, ¿la próxima vez?

-YASIRA: la próxima vez - me besó con detenimiento antes de levantarse y andar escocida al baño.

Me puse en el ordenador, paré la grabación de una de las camamas del dormitorio que aun tenia instaladas y que activé al poner la música, sonreía mientras con algo de habilidad fui copiando en un CD el vídeo de Yasira siendo follada por mi que acababa de ocurrir, preparé también uno de los videos que tenia de Eleonor siendo salvajemente follada por mi y uno más siendo penetrada por otro de los que se tiró en mi estancia allí, la pixelé la cara, no fue difícil, fueron videos cortos, y los subí a paginas porno de Internet, pegando las direcciones en el CD, junto a una nota en un sobre.

“Para Eleonor, ver sola. La próxima vez no envíes a una cría ha hacer el trabajo de una adulta.”

Pegado junto al vídeo, luego los links a los enlaces porno que había subido y un archivo de texto.

“No habrá más advertencias, la próxima vez no serán videos de 1 minuto, si no completos, y no te taparé la cara, ahora convencerás a Luz para que deje a su hija salir cuando le de la gana, me da igual si le enseñas o le dices a Luz que me he follado a su pequeña, es cosa tuya, pero me enteraré si le pasa algo a Yasira y te arruinaré la vida, por ahora esta afrenta solo te costará que me pagues la compra al completo.

Si vuelvo a saber de ti, de cualquier modo, le mando a tu ex todo lo que tengo.

Un saludo.”

Metí el CD en una caja, repasando mis palabras mentalmente, podía decirla que la afrenta le costaría subirla el sueldo a Dani directamente, pero eso la haría sospechar que la tenia en el bote, así que pagarme la compra seria más dinero para Dani de forma indirecta, yo me pagaba lo mío, pero Eleonor no lo sabía, a su vez me aseguraba tener a Yasira los fines de semana que saliera, tal como “bailaba” no tenia que buscar a otra. Cuando salió de la ducha repasé su cuerpo desnudo y fresco, me di una ducha rápida y cuando salí Yasira se estaba vistiendo, la quité el tanga de las manos y lo guardé, como recuerdo.

-YASIRA: y si vuelvo a casa sin bragas ¿que pensará mi madre?

-YO: ya te inventaras algo, pero así siempre tendrás un motivo por el que volver.

-YASIRA: ya tengo un motivo por el que volver - me agarró la polla.

-YO: bien, así serán 2 - la azote el culo, me encanta hacerlo.

Se vistió, bueno, si eso es vestirse, la minifalda que se le subía y el top que enseñaba casi todo, el camino de vuelta a la urbanización la fui metiendo mano y ella a mi, me puse los vaqueros sin cerrar y una camiseta, la mitad del camino fue haciéndome una felación que me hizo parar en un descampado y reclinar los asientos para volver a follarla, vestida y todo, sin tanga fue sencillo, la daba con la cabeza en el techo del coche, montada a horcajadas sobre mi, la reventé el coño a orgasmos, cuando me fui a correr se desmontó y descubrí que aparte de chuparla de cine se tragaba el semen sin miramientos. Eso retrasó nuestro camino 30 minutos, al llegar tardamos otros 10 en separarnos entre besos y caricias delante de su casa, o bien dicho de su finca, la acompañé hasta la entrada y dejándola claro que solo seria sexo y que me llamara cuando quisiera quedar para salir de fiesta, no puso reparos y me besó con sabor a despedida, entró con unos sonoros azotes en su culo que resonaron por toda la calle. Cuando entró dejé el sobre con el CD en el buzón, y me fui sonriendo a casa.

Dormí un par de horas antes de ir a trabajar, no se como me mantuve en pie, y menos cargar cajas, aun así me dio para tantear el terreno de las chicas de allí, pero estaba roto, volví a casa y me dormí hasta el atardecer, luego quedé en el piso de estudiantes con las chicas y algunos amigos, nos quedamos viendo un partido y luego jugando y riéndonos, Lara me miraba con odio del día anterior, me fui a casa solo cuando acabamos, (el domingo no pasó nada, si, de vez en cuando tenia esos días, y hasta los agradecía), el lunes desperté con Dani llamando a la puerta.

-YO: buenos días, preciosa, ¿que tal?

-DANI: yo feliz, mucho, ¿tú saber?

-YO: no, dime.

-DANI: gran señora mandar mensaje, ella subir extra de compra, casi doble, ¿dinero para mí? - lo dijo con tanta ilusión que me sonrojé.

-YO: si, claro, es tuyo……… - saltó a la cama dándome besos en la frente -……. ¿no decía nada más?

-DANI: si, ella decir que yo no informo más, ella quitar extra pero con dinero de compra ser mucho más. ¿Si?

-YO: si, supongo………. pues no lo malgastes - sonreía al tenerla encima, tan feliz y ensimismada que no se había dado cuenta de que estaba desnudo con la polla tiesa de los empalmes mañaneros bajo las sabanas.

-DANI: yo encontrar esto en buzón - me dio un sobre, lo reconocí enseguida, era el que le había dejado a Eleonor

-YO: gracias, ahora si me dejas……- me miró agradecida y se fue sin percatarse de mi rabo tieso.

El sobre era el mismo pero tenia el CD dentro roto, y su nombre tachado, con una nota dentro.

“Eres un cabrón y un desgraciado, tú ganas, se acabó, le he dado más dinero al mes a la sirvienta, que sepas que me ha estado informando, pero ya está, borra esos videos de Internet, te lo pido como buena voluntad, adiós, que te vaya todo bien, mal nacido.”

Liz e Iziar – Las amigas de mi hermana.

La cosa iba bien, tenia la semana cubierta más o menos, había pasado un mes desde que comencé a cepillarme a Yasira, la hija de Luz, todos los viernes sábados y un domingo que se quedó en mi casa a dormir, se fue de fiesta conmigo y disfrutaba de su cuerpo tanto bailando en discotecas bien arreglada, como con el sexo, era una pantera insaciable, en poco tiempo ya aguantaba 3 polvos, y os juro que esa mujer adoraba el sexo anal, de las 3 corridas solo la 1º era en su coño, si llegaba, el resto era todo anal, el sábado que se quedó volvimos a salir de juerga ese día para volver a casa el domingo y no salir hasta el lunes, la dejaba durmiendo en casa mientras iba a trabajar, lo hacíamos al irme, al regresar, al acostarme o al levantarme, vaya ”fichaje” había hecho, pero solo era los fines de semana, entre semana tenia a Jeni por las tardes, de lunes a jueves venia a mi casa después de correr y disfrutaba de ella, enseñándola algunos trucos, aun se negaba al anal, pero ya le metía un par de dedos, se dejaba por que aprendía rápido y todo le gustaba. Además Eli regresó de su gira y la tenia todas las mañanas de lunes a viernes cuando venia a casa después de sus clases en antena, me dijo que Mariluz, la presentadora MILF, la presionaba para que le dijera quien era, con su calentura solo sabia mi nombre, mi numero y mi dirección, pero Eli la daba largas, así que presionaba al director de la cadena para que la echaran, hasta que el director de la cadena se cansó de sus reproches y la dijo que si no estaba a gusto que se fuera, Mariluz agachó la cabeza y la dejó en paz a ella y a mi, que aun me llegaban mensajes suyos amenazadores.

Entre medias de todo eso también habían caído un par más del cajón, nada destacable, una monitora del gim donde fui, una amiga del grupo que me pilló de fiesta sin Yasira, y en el trabajo una de los 2 cajeras, Adriana, durante ese turno no moví una caja pero si destrocé a la pobre, gritó tanto en el almacén donde nos metimos que retumbaba su voz como si la estuvieran matando, de igual forma me cogió pánico y se alejó de mi unos días. Aparte, la experiencia más decepcionante fue Lucia, la madre del grupo de deporte, quedó conmigo un domingo para que fuera a su casa por la tarde, ya que sus hijos estaban con los abuelos, y “me chantajeó” para que me la tirara como si hiciera falta, o si no, contaba lo mío con Jeni, como si a mi me importara mucho. Una vez en su casa me acosté con ella, pero fue horrible, no la chupaba, casi le daba asco tocármela, se asustó al vérmela empalmada y al verla desnuda sus buenas tetas se convirtieron en 2 colgajos no muy atractivos sin sostén, no le entró ni media polla y se cagó encima del esfuerzo al acabar, sobra decir que me fui de allí cabreado y no la volví a ver por el parque, la vergüenza la podía, aunque no le dije a nadie lo que pasó y la disculpé ante el resto. Por suerte me llamó Alba, la enfermera militar, y pasamos un par de horas entretenidas, quería irse calentita a casa antes de que su marido regresara.

Estaba buscando algún hueco que llenar, me estaba encantando esto de follar a todas horas con mujeres diferentes, y si pasaba más de 3 horas sin alguna cerca me entraba una sed incontrolable de sexo, sobretodo desde que el jueves se iba Jeni y no tenia a Yasira hasta el viernes de madrugada, o los propios sábados y domingos en que si no se quedaba Yasira me debatía en llamar a Lara, pero no, quería reservarme ese piso, una idea estúpida danzaba en mi cabeza y necesitaba a Lara ansiosa de mi. Buscando entre los papeles un viernes a las 12 de la mañana, con Eli retozando del placer que nos habíamos dado hacia unos minutos, me llamó mi hermana, no somos muy de hablar por teléfono, si nos llamamos es por que queremos o necesitamos algo, si teníamos que hablar quedábamos y punto, me pidió que si podían ir ese fin de semana a mi casa, aun hacia buen tiempo de día y todas las piscinas publicas habían cerrado ya hacia semanas, le dije que si encantado, me parecía una idea genial, y mejor aun cuando me dijo que llevaría a un par de amigas, a mi madre y mi padre no les hacía gracia el plan y sentían que mi hermana necesitaba un descanso, un escape de ellos, así que no vendrían.

Me abalancé riendo sobre Eli que aun estaba en mi cama, se abrió de piernas para recibirme en su interior y me rodeó con ellas mientras me la comía entera, su cuello, su pecho y su vientre eran lamidos y chupados, me deleitaba comiéndola los pezones a Eli, a punto de estallar en un orgasmo, cuando me fui a correr me apartó y se metió mi rabo hasta el esófago tal y como me enseñó que era capaz, vi su nuez y su garganta expandirse con mi miembro dentro y derramé mi semen en su boca, donde no quedó nada cuando tragó. No la volvería a ver hasta el lunes y no nos podíamos despedir de mejor manera, si había suerte pasaría el periodo ese fin de semana y para el lunes retomaríamos el tema. Esa noche salimos de fiesta de nuevo, Yasira y su forma de moverse me deleitaron en la pista de baile y al llegar a casa su pasión era tan grande como la mía, ni se como iba vestida, solo la recuerdo desnudada cabalgándome, y luego la montaba por el culo, era espectacular vernos en acción y cada día Yasira era más ardiente conmigo, creo que me agradecía, sin estar segura, que la había dado cierta libertad de su casa, y darla por el culo era lo más placentero que tenia a mi disposición, que no era poco, me dormí después de llenarla le culo de semen por 2 veces, y me desperté con ella comiéndomela, mis empalmes mañaneros eran deleitados por sus labios carnosos, al verme despierto se situó de rodillas sobre mi metiéndosela entera en el coño y hasta que no me vacié en su útero no dejó de moverse pese a los continuos orgasmos.

Nos dimos una ducha juntos en la que no me resistí en darla por el culo, pegándome a su espalda mientras el agua corría por nuestros cuerpos, la levantaba de la bañera con cada embestida pero lejos de sentirte abrumada disfrutaba como una condenada. Me fui a trabajar con una gran sonrisa en los labios, en el trabajo Adriana me huía, como hacia desde que me la tiré, pero la jefa me miraba con ojos de deseo, como siempre, era mona pero eran más las ganas de follarla para bajarla los humos de soberbia que tenia lo que me la fijó como objetivo, llegaba a ser cruel con algunas de las cajeras, casi todas la odiaban, y a mi me miraban mal por que ella se mostraba dócil y amable conmigo, apoyándose en mi hombro o dándome abrazos sin venir a cuento, ¿que culpa tenia yo de que me tratara mejor a mi?, pero seria en otro momento, hoy no tenia tiempo, acabó mi turno y fui corriendo a casa, el móvil me quemaba a llamadas de mi hermana, habíamos quedado en que llegarían a casa cuando saliera del trabajo, pero siempre ha sido muy impaciente. Al llegar las vi en la calle con un par de mochilas.

-HERMANA: joder tato, ya era hora - me golpeó en el pecho sin mucha fuerza.

-YO: joder, tata, vengo corriendo, ya sabias que vengo de currar.

-HERMANA: ya, pero hace calor y estamos aquí tiradas, anda ayúdanos, date prisa - lo que para mi hermana significaba, “coge todo lo que pese y déjame a mi esa bolsa pequeña”, me dio igual, así me hice el fuerza ante sus 2 amigas, cogiendo 3 mochilas y 2 maletas.

Subimos en el ascensor tan apretados que pude escudriñar y sentir la piel de todas. Mi hermana, como ya os dije alguna vez, es 4 años mayor que yo, morena de media melena, no era fea pero tampoco era guapa, estaba algo pasada de kilos, andaría por los 85, pero a su vez heredó el gen de altura de cierta rama de la familia, tengo 2 primos, uno de 1,98 y otro de 2,03, ambos mayores que mi hermana, ella media casi 1,86, por lo tanto sus kilos no se notaban tanto, y aun siendo mi hermana debo reconocer que tenia unas tetas bien puestas y grandes, casi una 100, que para mi deshonra fijaron mi mirada alguna vez en mi pubertad, por lo demás su aspecto es como las pinturas de las diosas griegas, donde las curvas eran predominantes y la piel tersa no existía, tenia sus fans, nunca le faltó novio o pretendiente, pese a que su forma de vestirse siempre era cómoda y no estilista. Ya os digo que con ella no pasó nada, nunca, no es que la quisiera y respetara tanto, es que la tenia cierto miedo, en el buen sentido, era una mujer ruda, de carácter hosco y muy dada a montar pollos por cualquier chorrada, mientras supieras llevara era simpática y graciosa, pero valía la pena no enfadarla. Respecto a sus amigas, eso era otro tema.

Como le pasaba a Mara, la hermana de Alicia, su férreo carácter le había negado una vida social amplia, y su grupo social se fue reduciendo a cada afrenta que ella creía digna de merecer desterrar a alguien, y una vez que lo hacia estabas muerto, no había forma de recuperar su afecto si sentía que la fallabas, lo cual la dejó con únicamente 2 amigas de confianza.

Una era Liz, amiga de toda la vida, y una de las primeras mujeres no familiares con la que tuve confianza, era española como su madre, pero su padre era de Indonesia, no recuerdo de donde exactamente, lo único importante es que tenia la piel morena y el pelo negro como la noche, como sus ojos, era divertida y afable, al menos más que mi hermana, crecimos juntos, era como otra hermana a la que si se la podía hablar, físicamente también estaba pasada de kilos, pero menos, unos 70, y corpulenta, 1.79 de altura, pero mucho más cerca del canon de belleza actual, pechos normales una 94, y eso si, una cadera descomunal, su trasero era aun incluso más grande que el de mi hermana, pero inexplicablemente era más atractivo, vestía igual que mi hermana, cómodas. Fue la 1º relación con una mujer que no era familia, aunque se comportara como tal, pero jugaba conmigo de críos, me rascaba la espalda, o aunque suene asqueroso, le encantaba reventarme los granos de los hombros, pero explica claramente el nivel de complicidad que teníamos. Ante la falta de novios o parejas en la pubertad de ambas se creó cierto rumor sobre si mi hermana y ella eran lesbianas y estaban juntas, pero al llegar a los 18 y salirles las tetas se terminaron los rumores y les cayeron los novios. Era muy mimosa y le gustaba jugar conmigo.

La otra amiga era Iziar, alias “la peque”, una amiga que hizo en Internet con el tema de juegos de rol que les encantaban, era la cosa más bobalicona y ñoña que me he cruzado nunca, se sonrojaba con nada y se escondía cuando yo hacia mis números desvergonzados, se reía como un cerdo y no se callaba nunca, con voz de pito, pero si aun seguía al lado de mi hermana significaba que era buena gente y de fiar, físicamente le venia el alias al pelo, era pelirroja con el pelo algo largo pero siempre la veía con coleta, solo 3 años mayor que yo, usaba gafas, las necesitaría pero la sensación era que las usaba para tapar la multitud de pecas en la cara, tenia los ojos azul oscuro, mezclado con gris, diría que era lo más atractivo que tenia, mentiría, pese a medir menos de 1,55 y tener brazos, piernas y cintura finas y delgadas, pesaba 76 kilos, ¿como puede ser? Por unas tetas y unas caderas antinaturales, de frente era como un 8, tenia una 120 de pecho al menos, aunque yo creo que lo superaba, le daría apuro cómprase sujetadores más grandes y eso hacia que sus tetas rebosaran de forma exagerada, cada una debía de pesarle al menos 3 kilos, era una versión comprimida de Lara, pero mientras que a ella sus tetas grandes y tersas seguían manteniéndose firmes sin sujetador, la sensación era que si le quitabas el sostén a Iziar caerían de forma inevitable, de caderas no iba mal tampoco, eran como si hubieran cogido a una chica normal bajita y le hubieran hinchado la cadera y el pecho hasta el punto de casi reventar. Pero a diferencia de las otras 2, Iziar si usaba su cuerpo, su forma de vestir era más femenina y sobretodo lucia siempre un escote animal.

Todas iban vestidas con ropas ligeras de verano al subir en el ascensor, obviamente mi miraba se fue a las tetas de Iziar que estaba pegada a mi de cara, roja como un tomate al no poder evitar que sus tetas quedaran en mi cintura, su coronilla a penas me llegaba al pecho, le sacaba más de 2 cabezas, por fin llegamos arriba, y mi hermana y Liz no entendían por que Iziar salió riéndose como un gorrino, yo si, al moverse para salir, sus tetas repasaron el contorno de mi rabo, chocando claramente contra él, entramos en el piso y quedaron de nuevo alucinadas, mi hermana ya no tanto, pero Liz y sobretodo Iziar, que no la había visto aun, recorrieron toda la casa exclamando, mi hermana era una versión furiosa de mi madre, y rápidamente me ordenó que las instalara, no quise empezar discutiendo que no era su criado, así que las acompañé a las habitaciones, la grande era la mía, pero al ver la cama enorme las 3 fueron a por ella saltando encima, les dio igual que estuviera desecha y oliera a sexo salvaje con Yasira, que se fue con unas amigas y no la volvería a ver hasta el viernes siguiente, las instalé en las 2 habitaciones de arriba y mi hermana se quedó en la de abajo de invitados, las escaleras no eran lo suyo, luego planearon la comida y hablamos de cómo lo haríamos todo, se quedarían todo el sábado y el domingo hasta la noche, comimos entre risas y me fui directo a la piscina, iba solo con el bañador bermuda, era mi casa y no iría incomodo con el slip debajo por la presencia de nadie, y bastante con que me tapaba, mi hermana se cambió y salió con un bañador de cuerpo entero, se lanzó al agua de cabeza, era muy buena nadadora, como yo, mi madre nos inscribió en cursos de natación y ella participó en salto de trampolín de 3 metros donde ganó algún premio provincial, era increíble como un cuerpo tan corpulento casi no salpicaba agua.

Liz e Iziar decidieron dejar pasar las 2 horas de rigor tumbabas en las hamacas, con sus biquinis ya puestos y pareos a juego, no me di cuenta cuando se cambiaron, bastante tenia con chinchar a mi hermana, que no tenia el menor problema en sobrepasarse a la hora de pegarme, sabia que muy mal se tenia que dar para hacerme daño, me reí como hacia mucho que no hacia, echaba de menos a mi hermana, quien lo diría, al salir fue cuando me percaté de sus cuerpos, a Liz ya la conocía, le había visto en biquini más que a nadie hasta la operación, y fue Iziar la que me llamó, en vez de ir con un traje de baño o algo más “aparatoso” para sujetarse las ubres, iba con un biquini que en otra seria normal, pero en ella quedaba ridículo, apenas le quedaba hilo para atárselo al cuello al tener que rodear todos su senos, y si pegaba el inicio de la tela a la piel de debajo de su seno la tela se acababa antes de llegar al pezón, así que como con los sujetadores, se cubría los pezones y luego tiraba pegándose los senos al torso hasta poder atarlo como fuera, esa visión me movió la polla, lo noté por que al ir solo con las bermudas el agua pegó la tela húmeda a mi piel envasándome al vacío, y no pasó desapercibido para ellas, cuando me tumbé en la hierba antes sus ojos, me comían el cuerpo, estaba bueno, que puedo decir, mi hermana se dio cuenta igual pero dejó pasar el tema tumbándose a mi lado, se soltó los tirantes del bañador para que la diera un poco el sol.

-YO: si queréis crema o lo que sea hay en el armario ese de la pared – sonreí al recordar a Jeni.

-LIZ: no, gracias estamos bien.

-IZIAR: a mi no me vendría mal, estoy muy blanca.

-HERMANA: pues póntela mujer, que no pasa nada, tu ……- me codeó-….. ve a por la crema.

-YO: a mi déjame en paz que estoy aquí muy a gusto

-HERMANA: ¡¡Raúl!!

-YO: vooooooy……….- me levanté a desgana mojándola la espalda con los restos del agua de mi cabeza, fui a por el bote y luego se lo di a Iziar, repasando sus tetas con los ojos, “que maravillas”, las palabras “mega estructuras” se pasaba por mi cabeza.

-IZIAR: gracias….por todo.

-YO: nada peque, si no os dejo venir mí hermane me corta los huevos – se rió roncando, era tan fácil sacarla una risa tonta……

-LIZ: pues ya que estas puedes echarme crema en la espalda a mi.

-YO: claro, aunque tú ya estas morena…….- otra broma estúpida al ser mulata, que me costó la 1º muerte por mirada de mi hermana.

-LIZ: jajaja no seas crío y échame - se giró sobre la hamaca dándome la espalda y sin rubor alguno se desató el biquini, no era raro, a lo largo de los veranos ya le había visto las tetas más de una vez, de hecho creo que fueron las primeras tetas que vi.

Extendí la crema en su espalda y la di un suave masaje que la relajó, Iziar hizo lo mismo y me pidió que la diera crema en la espalda, pero esta no desató el biquini, bastante le habría costado tenerlo atado, mi mano abierta casi la cubría toda la espalda, sus senos asomaban por debajo de sus brazos aplastados contra la hamaca, y su cabeza daba con la frente en el respaldo, sus pechos no la dejaban bajar, se los rocé con pericia, ambas se quitaron el pareo, y el culo de Liz le robó protagonismo a Iziar, al moverse temblaba como la gelatina pero se mantenía en su sitio, y no se si queriendo pero se metió la braga del biquini por el culo a modo de tanga, algo que ya no era habitual, aun así mi hermana me llamó para que me sentara en la hierba y la diera crema a ella también, su concepto de hermano pequeño era la de un sirviente, y le daba igual que fuera mi casa.

Me tumbé boca abajo para disimular una posible erección, ladeándomela del todo, mi hermana me dio algo de crema, pero apenas dos pasadas de mano en los hombros, al pasar las 2 horas nos metimos todos en el agua, jugamos con una pelota hinchada, yo era el peor de todos, tenia la vista clavada en otros 2 globos hinchados, los de Izar que al saltar se tenia que colocar el biquini de nuevo, nadamos y bromeamos, las di un buen repaso jugando a las ahogadillas, a mi hermana en el tanteador, a las otras 2 en el tanteador y un repaso a sus cuerpos también, me estaba poniendo tonto al rozar la polla con el culo de Liz, pero la confianza era demasiada, en cambio Iziar estaba roja, se diría que de las continuas ahogadillas al ser la más frágil, moverla me resultaba tan fácil como una pluma, era tan menuda que olvidaba sus enormes tetas, pero bajo el agua se las agarraba con firmeza, y como no decía nada lo seguía haciendo, a estas alturas ya planeaba como follárme a alguna de las 2, si es que no iba a por las 2, no eran ninguna maravilla dignas de revista, pero eran lo que tenia a mano, me daban mucho morbo, y mi hermana estaba descartada, hasta agradecí que se quedara en el piso de abajo, allí no se oiría los ruidos de sexo de la planta de arriba, me reía a carcajadas mientras me dejaba ahogar algunas veces, bajo el agua veía el culo de Liz y las tetas de Iziar, mis 2 objetivos, ¿o eran 3?, si, tenia cierta ventaja, ¿pero como hacerlo? Planeaba hasta que la falta de oxigeno me obligaba a subir, y atacar a alguna de mis 3 sirenas por la ofensa, una de las veces fui a por Liz, la saqué del agua por completo con la fuerza de los brazos y la hundí de golpe, metiendo mi polla en su culo, que para entonces ya marcaba cierta dureza, la sintió, vaya que si la sintió, su cuerpo quedó petrificado, la estaba rozando con el tronco todo su coño, lo sentía palpitar, cuando sacamos las cabezas del agua seguíamos igual, ella quieta sin que yo la sujetara o presionara contra mi, y con mi rabo frotándola por detrás, la jugada sin bañadores hubiera acabado conmigo penetrándola, los 2 los sabíamos, los 2 callamos, y ambos disfrutamos de aquello, ya era mía, lo sabia, si no era yo seria ella quien vendría a mi, se giró por sorpresa y me agarró la polla y los huevos apretando con fuerza hasta que me dobló del dolor.

-LIZ: aquí la pirata sabe manejarse ante un buen mástil - me susurró al soltarme y salir corriendo.

Por raro que parezca no era la 1º vez que hacia algo así, cuando me pasaba de la raya con ella de crío me daba patadas o puñetazos en las pelotas, pero esta vez fue diferente, no golpeó, si no que sujetó, palpó y notó mi verga medio empalmada. Mi hermana y ella se salieron del agua, se iban a duchar para salir de fiesta, Iziar se quedó en el agua conmigo, seguía roja como el principio y según me acercaba me apartaba la mirada, la tenia asustada, igual que Liz ya había sentido mi rabo rozándose y mis manos en sus senos, pero no había dicho nada.

-YO: que tal por aquí, ¿seguimos jugando tú y yo?

-IZIAR: no, no, jajajaja ¿yo sola?, me ganarais muy fácil. - me puse en pie en esa zona algo menos profunda, me erguí como Poseídón saliendo de las aguas, a escasos centímetros de su cara, ella estaba de pie y el agua le llegaba al cuello, al estirarme apenas me llegaba al ombligo, se le escapó un suspiro al ver mi torso, girando la cabeza, pero no la mirada.

-YO: venga podríamos divertirnos - su risa de cerdito se deslizaba por sus labios.

-IZIAR: jajaja que bobo, ya podrás con una chica tan pequeña como yo.

-YO: no serás alta, pero de pequeña nada - la levanté la vista con los dedos, me miró anonadada mordiéndose el labio, una mano casi me roza el pecho.

-IZIAR: que tonto, soy enana - la cogí de los costados, la saqué del agua con fuerza y la senté en el borde de las piscina de un movimiento veloz, del golpe sus tetas rebotaron no menos de 4 segundos y se quedó abierta de piernas, lugar donde me coloqué.

-YO: enana pero con las tetas más grandes y apetecibles que he visto nunca - grandes si, las de Ana, Eleonor o Lara estaban mejor colocadas, pero no tenían esa magnitud. Se sonrojó, que era mi propósito, sin poder cerrar las piernas por mi presencia, acariciándola la cintura con las manos.

-IZIAR: jijiji para, que me vas a poner colorada, además ya te has deleitado bastante con las ahogadillas, que me he dado cuenta como las sobabas – “joder, ni que fuera un secreto de estado”, que chica tan inocente.

-YO: lo siento, no he podido resistirme, espero que mi hermana no…….- sonrío de nuevo roncando.

-IZIAR: tranquilo, no tiene importancia, no hace falta que se entere - sonreí al saber que estaba tan entregada como para ocultárselo a mi hermana, me alcé hasta casi pegarme a ella, se echó atrás para ganar terreno y apoyó las manos a su espalda, pero eso solo me dejó sus tetas aun mejor puestas.

-YO: con estas dos no te faltarán pretendientes.

-IZIAR: pues no, la verdad, aunque ahora estoy sola - jajaja me reía a carcajadas, ella estaba tan en celo como yo, me estaba ofreciendo su cuerpo en bandeja de plata.

-YO: no te creo, con ese par de……...ojazos…. – casi la beso -…… y este par de melones…….. - le agarré una teta con descaro -….. los tienes que tener a tus pies a cientos, hasta yo estoy cachondo - casi le revienta la cabeza del calor que sentía.

-IZIAR: jajaja, para, nos puede ver tu hermana – se colocó el biquini en la teta ya que casi le se lo había quitado.

-YO: así que no te molesta que te este cogiendo una teta ¿si no que te vean? - tosió entre risas, casi se ahoga, se vio pillada.

-IZIAR: pues no, pero si tu hermana se entera me tira por la terraza - sus manos me apartaron de su pecho.

-YO: pues que no se entere - me lancé a besarla, su corto cuerpo no la dio para evitarlo y nos fundimos en un beso rápido y fugaz.

Estaba a punto de meterla la lengua cuando al agacharme a coger impulso mi hermana me gritó desde el balcón de habitación, ya había terminado y tenia la ducha libre, no pareció percatarse de lo que ocurría por que justo en ese momento estabamos algo separados, al meterse en la habitación mi hermana, Iziar reía entrecortada, me salí del agua pesando por encima de ella, arrasándola, dejándola mi polla marcada y dura en su cara, la cogí de las manos y tiré hasta ponerla en pie pegada a mi sintiendo mi polla entre sus tetas.

-YO: una pena, ya lo acabaremos más tarde - asintió entre risas, tardando un mundo en separarse de mi.

Al verla caminar podía oler su coño mojado, olía a hembra sexualmente dispuesta, era un polvo seguro, me fui a darme una ducha fría, iba a salir con ellas, mi madre me había obligado “tienes que cuidar de ellas”, me ponía de los nervios que durante toda mi vida mis padres me tuvieran por una especie de guardaespaldas de mi hermana, de mi hermana mayor para más cachondeo, ”pero como ella era mujer”, muchas veces tuve que ir a recogerla al metro o a su trabajo cuando salía tarde, y cuando había noticias de violadores no salía de casa sin mi, yo me quejaba de que igual que a ella le podía pasar algo, a mi también, “pero tú eres un hombre”, era la respuesta, así que me tenia que joder y acompañarlas de fiesta, bueno, eso era hasta esa tarde en la piscina, ahora estaba encantado, sobretodo por un conocimiento de tu familia que solo da el tiempo, mi hermana apenas aguantaba el alcohol, se pedía un par de copas, ni siquiera bien cargadas de bebidas fuertes, si no cócteles afrutados con sombrillas, y ya se mareaba, en cuanto cogía la cama se quedaba roca durante horas.

Cenamos y se arreglaron para salir, yo lo de siempre, vaqueros ajustados sin slips y camiseta, la chaqueta me daba calor así que solía dejarla hasta que llegara el frío de verdad. Mi hermana y Liz como siempre, algo pintadas, pero poco, mi hermana con un vestido negro y mallas, Liz con un vaquero holgado y una blusa blanca. Iziar fue la que salió con un escote grotescamente llamativo, y una minifalda azul cielo, a ella la minifalda la llegaba por las rodillas, sin ofender, parecía un puta de 20€ recién salida de una esquina, con botas de cuero altas y pintada como una puerta, no se le notaban las pecas siquiera.

Fuimos a un par de sitios que a mi hermana le gustaban y las invité a todas a unas copas, como pretendía mi hermana a la 2º ya estaba achispada, Iziar aguantaba mejor pero no bailaba mucho, bastante hacia con apartarse moscones de sus tetas, como solía pasar la morena de piel era la atrevida bailando conmigo, y esa vez Liz no fue diferente, incluso sus gestos eran más eróticos que cualquier otra vez, no le llegaba a la suela a Yasira, obviamente, pero no dejaba de pasarme su culo por la pelvis, hasta el punto de desear tomarlo allí mismo, al par de horas ya la tenia dura, y ella lo sabia y lo disfrutaba, Iziar trataba de despertar a mi hermana, pero estaba cansada y sentada en una esquina, Liz al verla resopló y se fue a ayudarla, yo me fui a por Iziar, la tuve que arrastrar a la pista de baile y casi obligarla a moverse, alguna copa la ayudó a dejar de ponerse roja y contonearse un poco, cuando estaba disfrutando de sus tetas frotándose contra mi verga Liz apareció, mi hermana pedía que nos fuéramos a casa, así que no quedaba otra pese a ser solo las 2 y media de la madrugada, la tuve que llevar agarrada del brazo al coche y luego subirla a casa, en la habitación las dejé desvestirla y ponerla el pijama dejándola acostada, y si no los estaba ya, se quedó frita profundamente, al verlo sonreía, no estaba bien hacerle eso a mi hermana, pero era un cabrón en busca de sexo, mi actitud era que todo valía.

Liz se fue a su cuarto y nos quedamos Iziar y yo solos tonteando en un sofá, sus ojos eran de cansancio pero se obligaba a seguir por mi, le acariciaba una pierna mientras la regalaba los oídos, y cuando pensé en dar el ataque final se durmió mientras la hablaba, fue frustrante, la desperté sacudiéndola la cara, pero se volvió a dormir incluso cuando la estaba agarrando de las tetas, la cogí en brazos y la subí a su cama, la desvestí yo mismo viendo sus tetas enormes sin nada, y la dejé el tanga que llevaba y una camiseta mía que llegaba por sus rodillas, “joder, me la han puesto dura y ahora me voy a la cama sin follar”, la única opción era Liz pero no sabia si ya dormía y no se me ocurría nada ingenioso para abordarla de golpe, tenia toda la sangre lejos de la cabeza, así que me fui a mi cuarto y me puse el ordenador un viendo de Ana, Eleonor y yo follando, de los que guardé, ¿para que usar porno y no recuerdos reales?

Liz – La mejor amiga de mi hermana.

No me di cuenta, la costumbre de vivir y dormir solo, o como queráis llamarlo, pero me estaba pajeando con la luz encendida, la puerta abierta y el ordenador a todo volumen, era agotador hacerme una paja, se diría que hasta había perdido destreza, tardaba un mundo sin sentir el calor de una hembra siendo penetrada, así que llevaba 10 minutos cascándomela, un reflejo de la pantalla del PC se movió, presté más atención a una zona oscura y el rebote de la luz me dejó ver a Liz mirándome escondida tras el marco de la puerta, a mis espaldas un poco de lado, lo justo para que pudiera ver mi polla erecta siendo masacrada, disimulé continuando, la situación era delicada, pero lejos de avergonzarme pensé en sacar provecho.

-YO: joder, así no hay manera, si no me tiro a una me puedo hacer viejo con esto……….- hablé alto para mi, pero lo escuchaba ella, cogí el móvil y amagué que llamaba, mientras me la seguía cascando mirando la pantalla, miraba a Liz, no a lo que ocurría en ella -……… si, hola princesa, ¿como te va?........si, es tarde, pero me preguntaba si podrías pasarte……venga no seas tonta, así nos divertimos…….pues vente y………que te jodan, no me vuelvas a llamar - simulé llamar a otra, y el mismo discurso sutilmente cambiado, así varias hasta que me levanté enfadado, siempre de espaldas, Liz no se había movido del sitio.

Con gesto felino me deslicé en ángulo muerto, me puse el bañador con la polla tiesa marcándose de forma exagerada y salí por la puerta en apenas unos segundos, Liz estaba en mitad del pasillo fingiendo estar despistada, con la respiración agitada de tener que dar un salto para alejarse de la puerta en el último segundo.

-YO: ah, hola Liz, ¿que tal?

-LIZ: bien, bien………aquí estirando las piernas…. ¿y……..y tú?

-YO: pues algo cabreado, no consigo……..- no podía ser tan directo- ……dormir.

-LIZ: jaja ya veo - me señaló el paquete fingiendo apartar la vista, yo no moví un músculo.

-YO: ya bueno, ese es el problema, me he puesto contento y no tengo con quien compartir la cama.

-LIZ: una pena…….- jugaba con los dedos descalzos en el suelo esperando una respuesta de mi parte, llevaba un camisón de seda blanco, escotado que le llegaba a los muslos, se le adivinaban los pezones tras la tela sin sujetador.

-YO: pues si, sois crueles.

-LIZ: ¿las mujeres?

-YO: no, vosotras, Iziar y tú, lleváis todo el día danzando por aquí en bañador y uno no es de piedra - me miró al paquete.

-LIZ: parte si……- sonrió con picardía-…..pero no es culpa nuestra, si no tuya, que tienes la cabeza muy sucia.

-YO: o tú el culo muy bonito ……- caminé hacia ella -……. así que esto es culpa tuya jajajaja

-LIZ: gracias - al llegar a ella la pillé desprevenida, de lado le agarré de una nalga con una mano, levantando la parte baja de delante de su camisón con mi erección, y me soltó un bofetón, pero no me apartó la mano ni se alejó de mi.

-YO: puede pegarme cuanto quieras, no quitaré la mano de ahí.

-LIZ: ¿estás loco? …….- me volvió a abofetear -……..suéltame, tu hermana está abajo.

-YO: dormida como un oso en invierno, ya la conoces cuando bebe, hasta mañana a la hora de comer no se levantará - la otra mano fue a su otra nalga, cara a cara, y pegué mi polla a su vientre levantándola el camisón por el ombligo con mi rabo.

-LIZ: suéltame Raúl, por favor - golpeaba mi pecho con los puños sin mucho esmero, lo leía en sus ojos, era un no que quería decir si.

-YO: ¿a la pirata ahora le da miedo el mástil?

-LIZ: eso era una broma, por favor, déjame, esto no está bien.

-YO: bien que te gustaba sentir mi rabo entre tus piernas esta tarde en la piscina, te recuerdo que seguías con ella en tus muslos después de que te soltara, o como te frotabas en la pista de baile, y ahí no te tenía sujeta, ¿ahora te pones puritana? - apartó la vista avergonzada ante esas verdades.

-LIZ: Raúl, te lo pido como amiga tuya, suéltame - la estaba masajeando culo haciendo que su cuerpo se elevara sobre mi y contra mi miembro.

-YO: está bien, te soltaré si me prometes algo - me miró sin fiarse, y bien que hacia.

-LIZ: ¿el que? - sonreí.

-YO: no te lo diré si no aceptas - me golpeó el pecho sin fuerza.

-LIZ: cabrón, eso no lo haré, suéltame o……o……..- la apreté tanto el culo que se puso de puntillas.

-YO: ¿o que? ¿llamarás a mi hermana? ….- alcé la voz -…….. hermana, aquí Liz te quiere decir algo - me tapó la boca con las manos.

-LIZ: ¡¿que haces?!

-YO: esta tan borracha que no se despertará, igual que Iziar, créeme, ya lo he intentado, pero si por algún milagro consigues despertarla ¿que la vas a decir?, ¿que su hermano pequeño te esta metiendo mano?, ¿o que me has pillado pajeándome y te has quedado mirando? - abrió los ojos como platos.

-LIZ: yo….no…lo siento……….solo……..- le apreté de nuevo el culo levantándola del suelo unos segundos, aproveché para meter mis dedos por dentro de sus bragas por las perneras.

-YO: me dan igual tus balbuceos, y que miraras, no me ofende en absoluto, guarda tus falsas disculpas, te has quedado mirando por el mismo motivo que has “zorreado” conmigo todo el día……. – agaché la cabeza hasta su oído - ….. por que quieres que te folle, lo deseas tanto como yo, o ya hubieras salido corriendo, solo te estoy agarrando el culo, no impido que te vayas.

-LIZ: no…….eso no es así………te conozco de hace mucho……….tus padres…..

-YO: eres una mujer y yo un hombre, estás cosas pasan, me la pones dura y se que tu coño rezuma ahora mismo, ¿o me equivoco?.... - sin soltarla una nalga metí mi imano por debajo del camisón en su coño -……..¿que me dices?, si esta seco te suelto y te vas, pero si esta húmedo duermes conmigo - fue una jugada maestra, si estaba mojado me daba la razón y si no lo estaba al sentir mis dedos se mojaría, o eso deseaba.

-LIZ: ¿solo dormir? - sonreí, “ha picado”.

-YO: vamos, que estas chorreando - apreté su coño por encima de las bragas sentido su humedad claramente.

-LIZ: está bien……..pero solo dormir - me señaló con el dedo.

-YO: solo dormir no, ¿te crees que soy tonto?, esta polla no se calma con dormir a tu lado, quizá unas caricias……..- asintió vencida.

-LIZ: unas caricias hasta que se te baje, pero nada de sexo, no tengo condones – “jajajaja dios, que fácil”, si ese era su impedimento solamente, yo podría tener preservativos y anular su argumento, pero no me hacían falta.

-YO: te cuento un secreto y así estamos a la par, yo se que te pongo cachonda…… – giró los ojos aceptando ese hecho - ……pues que sepas que tengo la vasectomía hecha, podría correrme dentro de ti cuanto quisiera y no te dejaría preñada.

-LIZ: imposible, tu hermana me lo habría dicho.

-YO: no lo sabe ni mi madre, ¿como lo va a saber ella? - conocía a mi madre y sabia de sus dones adivinatorios.

-LIZ: eso no cambia nada, no follaré contigo - el masaje en sus nalgas era sensual y su cuerpo se contoneaba, estaba cediendo.

-YO: como quieras, pero algo tendrás que hacer, yo no puedo estar así por tu culpa - negociábamos desde hacia rato, ahora era el momento clave, si la convencía de una paja podría avanzar desde allí.

-LIZ: puf……..no se………… ¿y si te la chupo? - tosí con risas, esa mujer no sabia negociar, pero yo si.

-YO: puede que se me pase, aunque no te aseguro nada…… - mis manos bajaron hasta levantarla el camisón y ahora le agarraba del culo piel con piel, salvo por unas bragas bastante grandes, negras y de seda - ….vamos a mi cuarto.

Entramos y cerré la puerta, se quedó mirando el vídeo del PC que aun seguía, con mi rabo en 1º plano entrando y saliendo del coño de Eleonor, quité el vídeo y puse a grabar mi cámara escondida sin que se diera cuenta. Ella se estremeció al sentirme pegado a su espalda.

-YO: que sepas que duermo desnudo, tú también deberías, hace mucho calor para este camisón.

-LIZ: no puedo…………. no, no llevo sostén - le acariciaba los muslos.

-YO: como si fuera la 1 º vez que te veo las tetas - sujeté del camisón y fui tirando de él hacia arriba, sus brazos hicieron algo de fuerza pero al tirar salió, y se dio la vuelta tapándose con las manos las tetas.

-LIZ: ¿y ahora que? - según terminó de hablar me bajé el bañador de golpe con mi polla saltando ante sus ojos, dura y apuntando al techo, instintivamente su cara de asombro fue acompañada por una mano que se tapó la boca, me lancé sobre ella agarrándola la teta libre y chupándole el pezón, oscuro y diminuto.

-YO: tus tetas saben genial.

-LIZ: gracias….digo, espera, eso no estaba en el acuerdo.

-YO: las caricias si.

-LIZ: caricias, no que me comas los pechos.

-YO: ¿y que es si no una caricia con mi lengua y mis labios? - su jadeo la cortó la respuesta, se soltó el otro pecho para agarrarme la cabeza y me aferré sus dos tetas con las manos mientras de rodillas lamía y succionaba sus pezones diminutos pero erectos.

-LIZ: por favor, no me hagas esto….- mordisqueaba un pezón cuando suspiró de gusto.

-YO: he dicho dormir desnudos, podría quitarte las bragas ahora mismo – mentira, eso no formaba parte de ningún trato, solo fue una sugerencia, pero coló.

-LIZ: no, no, vamos a la cama, pero déjame las bragas puestas, por favor - ¿acaso tenia poder para quitárselas o dejárselas puestas? Ahora parecía que si.

Se tumbó de espaldas a la cama y caí suavemente sobre ella sin dejar de comerme sus senos, amasándolos con las manos, se abrió de piernas para dejarme paso, sus respiraciones acompasaban mis movimientos, era delicioso verla cerrar los ojos y disfrutar de aquello, después de tantos años, mi polla cabeceaba en su vientre.

-YO: me pasaría el día comiéndotelas, pero me la tienes que chupar.

-LIZ: cierto - me sonrojé ante su increíble amansamiento.

Me tumbé en la cama con las piernas colgando y ella se arrodilló entre ellas, cogió con ambas manos mi tremenda 3º pierna, pajeó unos instantes, casi incrédula, cuando la iba a dar un toque besó mi glande, un par de veces, pajeaba bien, pero solo daba besitos en la punta.

-YO: ¿que haces?

-LIZ: pues comerte la polla, mira al otro……- se mostró ofendida.

-YO: ¿eso es lo que sabes hacer? - su ofensa se convirtió en vergüenza.

-LIZ: bueno…..yo es que…no…no he chupado muchas - me alcé acariciándola la cara.

-YO: normal, si lo haces así ninguno repite…….- me miraba como un cordero -……..anda déjame que te enseñe a comerte una buena polla de verdad.

-LIZ: vale - sonrió casi agradeciéndolo, era increíble, abuso de esa palabra, pero no me creía que estuviera pasando, no tan fácil.

Le fui dando instrucciones, sus manos jamás debían de parar, sus labios deben rodear el glande, no dejarlo pasar sin rozarlo, tenia que lamer bien cada parte, el tronco era importante, chupar los huevos era excitante……….me reía por que cada cosa era más atrevida y ella lo hacia sin pestañear, aprendiendo y memorizando, luego ayudándola por la nuca se fue metiendo mi rabo chupando y lamiendo cada parte hasta que metí media polla dentro, cuando vi su 1º arcada retrocedí un poco y la dejé así un minutos, casi se ahoga, al salir un río de babas llenaba todo, la indiqué como lamer y dejarlo seco, para seguir repitiéndolo una y otra vez hasta que la técnica parecía depura y me estaba matando, cuando me fui a correr la avisé, separó la cara y aumento el ritmo de las manos.

-YO: no, así no, tienes que hacerlo con la boca.

-LIZ: ya, y si te corres dentro……… ¿que? – más que una reprimenda, sonó a curiosidad, tenia parte de ambas.

-YO: así es como se hace, tú sigue …..- para mi sorpresa, con cara de disgusto, si, pero lo hizo -….. así muy bien, dios, aumenta el ritmo, sigue chupando el glande y no apartes …….dios…no apartes la boca, deja que uffffff……..deja que me corra en tu boca.

Obedeció asqueada, sintió con repugnancia en los ojos como mi semen la iba llenando la boca, la cantidad era enorme, casi 12 horas desde que se fue Eli.

-LIZ: arghhhhhh………...¿y……….y aforha? - mantenía la boca abierta y la cabeza hacia arriba, le cerré la boca con una mano.

-YO: ahora te lo tragas…. - negó con la cabeza -…… ¿como vas a chupar bien una polla si te da asco el semen?, tienes que demostrar que eres fuerte - me miró creyéndome, cerró los ojos y con esfuerzo tragó, 2 y 3 veces, hasta que paladeó con la boca abierta.

-LIZ: ya está, dios, que asco - sonreía

-YO: no es tan malo.

-LIZ: ya, si, pero esta caliente, lo noto bajar por mi pecho.

-YO: pues ya está, ya sabes comer rabo como tiene que ser, no era tan difícil ¿no?

-LIZ: pues no, ayuda practicar con alguien que sabe - ¡¡¡se estaba repasando del contorno de los labios algunas gotas de mi semen y luego se chupaba los dedos!!! Apenas me podía contener la risa.

-YO: pues para ser la 1º vez no esta nada mal.

-LIZ: no es la 1º vez que……

-YO: si, querida, es la 1º vez que comes una polla como dios manda - asintió dándome la razón, metiéndose un dedo con restos de semen en la boca y chupándolo.

-LIZ: bien, esto ya parece calmado ……- mi polla flácida era clara.-….. ¿me puedo ir ya? - ¡¡¡me estaba pidiendo permiso!!! Obviamente se lo negué.

-YO: que va, el trato era que dormirías conmigo.

-LIZ: pero ya se te ha pasado.

-YO: esta, puede haber otras durante la noche …….- puede no, las iba a haber -……. y te has comprometido a dormir conmigo y calmarme todas las veces que pase - otra mentira, eso no iba incluido, pero como la otra, no la negó.

-LIZ: vale, si te pasa otra vez te la chupo de nuevo - se levantó para ir a por su camisón.

-YO: ¿donde vas?

-LIZ: a ponerme…- me miró comprendiéndome -…….ah ya, desnudos, lo siento – “jajaja ¿En serio me está pidiendo disculpas?”

Gateó sobre la cama hasta tumbarse boca abajo yo me eché a su lado acariciándola la espalda.

-YO: ten cuidado, si vuelves a por el camisón te quito las bragas - sonreí dispuesto a todo, por ver hasta donde llegaba su sumisión.

-LIZ: si, si, tranquilo, no hace falta que me las quites si no quieres - si quería, ¡¿podía?!

-YO: vale, pero solo por que me la has chupado como una campeona - sonrió entendiéndolo como un halago, mi mano fue a su culo que apreté con fuerza provocándola un suspiro.

-LIZ: dios, no me creo lo que hemos hecho…… - “el que no se lo cree soy yo, bonita” -…… eres el hermano pequeño de mi mejor amiga, he crecido contigo, esto no está bien - mi mano amasaba su nalga con habilidad.

-YO: ya no soy ese gordo al que animabas, siempre me has tratado con cariño y te lo agradezco.

-LIZ: no es nada, nos hemos divertido mucho pero ahora es diferente, tú eres diferente.

-YO: por fuera, pero por dentro siempre te he deseado…. - una verdad a medias.-….. tu culo me ha dado para muchas pajas - apreté de nuevo pero ahora metí mi mano por dentro de las bragas sintiendo el potencial de su trasero piel con piel.

-LIZ: ¿en serio?

-YO: ya lo creo, si hasta me pillaste una vez entrando en mi cuarto, aquel día del padre.

-LIZ: ¿si?...... - hizo memoria - …….bueno te vi en la cama tapado.

-YO: pues estaba con el rabo en la mano dándome placer pensando en tu culo - otra mentira, si, me estaba pajeando, pero con unas fotos de la madre cachonda de un colega que nos dejó.

-LIZ: jajajaja que golfo, y yo sin darme cuenta - suspiraba disimuladamente, mi mano en su trasero estaba haciendo maravillas.

ÝO: pues ahora puedes remediar tantos años de deseos truncados.

-LIZ: ¿en serio me deseas?

-YO: ¿a cuantas te crees que voy enseñando a comer pollas? - la cuenta iba por 12, Jeni la última, pero eso Liz no lo sabia.

-LIZ: una pena que ya te hayas corrido…… - fue un pensamiento que se le escapó.

-YO: tranquila, ya la tengo dura otra vez - se giró viendo que efectivamente mi mano en su culo me la había puesto como una estaca.

-LIZ: ¡¡dios, ¿otra vez?!!

-YO: ya te dije que podía pasar.

-LIZ: normal, si no me quitas la mano del culo……- tenia razón.

-YO: pues a chuparla otra vez …. - asintió sin replique alguno gateando a mi cintura- …….pero esta vez tú sola, demuéstrame lo que has aprendido.

Vaya que si lo hizo, me hizo una mamada de escándalo, más de 20 minutos pajeando sin parar, lamiendo y chupando el glande, besando el tronco con dedicación, lo que ella no sabia es que si era mi 2º corrida y con una mamada, por buena que fuera, no bastaba.

-LIZ: me duele la mandíbula.

-YO: puffff, me estás matando, sigue un paco más, a ver si sale……- mentira, no estaba ni cerca.

-LIZ: dios, no puedo más, me duelen los brazos - se giró sin dejar de masturbarme mirándome a la cara.

-YO: ¿y yo que quieres que haga?, es culpa tuya.

-LIZ: ya lo sé…… - ya no me sorprendía que se lo creyera -…… pero no se que hacer.

-YO: hombre, algo se me ocurre pero no te gustará….. - alzó la vista inocentemente -…. quizá si…….no déjalo.

-LIZ: dilo, lo que sea, por favor.

-YO: no sé, si te como el coño quizá me cliente más……- el silencio paró hasta su mano.

-LIZ: no…………. me da vergüenza.

-YO: ¿por que?

-LIZ: nadie………nadie me lo ha………..comido …..- las carcajadas que solté la enfadaron -…. no tiene gracia, vale, no todos vamos por ahí follando.

-YO: vale, perdona, déjame que te enseñe, solo para probar…… - asintió soltándomela -….. venga arrodíllate y déjame el coño en la cara.

-LIZ: vale, pero apaga la luz - la miré con un enfado inexistente.

-YO: mira que te quito las bragas del todo eh……..- negó nerviosa.

-LIZ: no, no, vale, vale - rápidamente se puso en posición, “¡¡que muslos la virgen!!” , me sentía atrapado con ella sentada en mi pecho, la visión desde mi posición era espléndida, la veía todo el coño de las bragas totalmente empapadas, su vientre y sus pechos desde abajo y su cara de intriga.

Abrí un poco las bragas y las separé, el olor que salió me excitó aun más, hembra salida, al 1º beso se estremeció, cuando lamí jadeó y cuando chupé, golpeó la almohada con fuerza, tiré un poco más para tener el coño oscuro a mi alcance, rosado por dentro y con una leve mata de pelo mal cuidada, le separé los labios mayores y la comí el coño con dedicación, sus gemidos aumentaron rápidamente y al sentir mi lengua penetrándola se corrió a los minutos, pero la sujeté con fuerza las piernas y seguí lamiendo hasta llegar a su 2º orgasmo, me bañó, literalmente, la cara, su rostro era el de la sorpresa más placentera.

-YO: casi me ahogas.

-LIZ: lo………lo siento……….no me había pasado nunca…….no así…..

-YO: venga, que esto me esta gustando, date la vuelta.

Lo hizo quedando ahora mirando a mi rabo, la seguí comiendo el coño hasta que por propia voluntad se dejó caer para comerme la polla entre gritos leves de lujuria, apenas recordaba nada de cómo chuparla, solo se aferraba a ella como a un clavo ardiendo, sus caderas se movían al compás de mi lengua y cuando la metí los dedos rompió en varios orgasmos seguidos mientras le chupaba el clítoris.

-LIZ: dios………..para por favor…………. para, córrete de una vez y para…….

-YO: lo siento, esto no va así, tienes que lograrlo tú.

-LIZ: pero no puedo más, me voy a morir si sigues así - de rodillas subía y bajaba las caderas mientras seguía masturbando con una mano, con la cabeza echada hacia atrás disfrutando de mi pericia.

-YO: pues tú dirás, esto hay que acabarlo.

-LIZ: lo sé, pero no puedo más - pajeaba con fuerza nula.

-YO: pues como no follémos no se me ocurre nada.

-LIZ: no, ya te dije que no, lo que sea, todo menos follar.

-YO: que no es cosa mía Liz, es que no existe otra – jajajajajaja, creo que si me pudiera mirar en ese momento a la cara y mi sonrisa, se daría cuenta de lo que estaba pasando.

-LIZ: me da miedo, ¿y si me haces daño?

-YO: ¿eres virgen acaso?

-LIZ: no imbécil, he follado como la que más, pero es que tu polla es enorme.

-YO: me he tirado a mujeres mucho menos corpulentas que tú, se la he metido hasta la base y gozan como perras, prometo hacértelo con cuidado.

-LIZ: vale………. - asintió pasados unos segundos en que mis dedos no la daban opción, al sentir como los volvía a meter - …… pero deja que apague la luz – “y dale con la burra al trigo, ¿que más le daba?”, pues le iba a costar caro.

-YO: mira, estoy cansado de tus tonterías, si tienes el valor de llegar hasta aquí déjate de chiquilladas, ya eres una mujer, no una cría.

-LIZ: está bien………. yo…….yo no…………- la azoté el trasero.

-YO: ahora quítate las bragas - se giró negando con la cabeza.

-LIZ: no, ¡por favor!

-YO: no me enfades que va a ser peor, sabes que te lo mereces, te lo he advertido.

-LIZ: lo sé, pero por favor……………

-YO: ¿Como quieres que te folle con las bragas puestas? ¿O es que no quieres? – mi lengua regresó a su clítoris haciéndola temblar.

-LIZ: si, si quiero que me folles, pero es que me da cosa………- suplicaba con la mirada mientras decía que quería que me la follara.

-YO: no lo repetiré, o te las quitas tú o te las quito yo - asintió, de nuevo, rendida.

Se sentó bajándose las bragas de la cintura y luego se dejó caer hacia atrás estirando las piernas sacándose las bragas por los tobillos que estaban en alto, al hacerlo, por inercia, se abrió de piernas y me metí entre ellas fugazmente, lamiéndola las tetas, y con mi mano en su coño acariciándola con varios dedos, me rodeó con los brazos y me levantó la cabeza para besarme, era la 1º vez y pareció la 1000, nuestras lenguas formaron 1 sola y abría tanto la boca que podría meter un puño cerrado dentro.

-YO: vamos a ver si es verdad que has follado tanto - se aferró a mis hombros respirando profundamente.

La penetré de una sola estocada y le entró entera, solté un bufido animal de aprobación, de león en la batalla, ella arqueó la espalda y levantó el pecho hasta que la gravedad hicieron caer sus senos hacia su cara, retrocedí y volví a penetrarla varias veces de igual forma, no me sorprendía que le entrara toda y tan fácil, tenia unas caderas enormes, aunque sentía fuerte presión la cadencia iba aumentando y sus respiraciones agitadas la devolvieron al planeta, recuperó una posición normal en la espalda mientras las tetas botaban y rebotaban de mis embestidas, me acariciaba el pecho con una mano mientras se tapaba la cara con la otra, cerrando el puño y mordiéndolo acallando sus gritos. Bombeé incesantemente para provocarla varios orgasmos, en el último aceleré lo justo para estar a punto de llamar a la bestia y me corrí dentro de ella, sudando y victorioso, ella aun movía sus caderas de la inercia.

-YO: pues si que eres una buena pieza.

-LIZ: madre mía……….que polla………que forma de follar………me has partido en dos………- me agarró de la cabeza besándome con su lengua casi en mi campanilla.

-YO: eres una buena mujer – “y tu culo seria mío antes de una hora, seas virgen o no por allí”

-LIZ: dios, eres increíble……….. normal que tengas a todas detrás - la saqué de ella y me tumbé boca arriba en la cama con ella aun sintiendo tirones pélvicos.

-YO: pues solo van 2 – “y la bestia aun no ha aparecido”, mascullé.

-LIZ: ¿como que solo 2? - se limpiaba el sudor de la frente.

-YO: si, con algunas hago 3 o hasta 5 - su cara de horror fue graciosa.

-LIZ: ¡¡pero eso es imposible!!

-YO: dame unos minutos y lo verás – gateó con rapidez para besarme con pausa tumbándose a mi lado.

-LIZ: no, no, por favor, no más, no podría con otro, menos con 5 - vi la oportunidad.

-YO: pues va a pasar, al menos otra más, y eso como poco.

-LIZ: no, por dios, páralo, haz lo que sea.

-YO: no puedo hacer nada, es pensar en tu delicioso coño y mira - ante sus horrorizados ojos veía como mi rabo cogía dureza, de forma instintiva lo agarró queriendo parar su avance, pero lo que hizo fue aumentarlo.

-LIZ: no, no me hagas esto, me duele todo.

-YO: que espada eres, que esto es culpa tuya.

-LIZ: si, lo sé, pero no puedo más, ¿que hago?

-YO: no se, si es muy seguido me corro antes de que se ponga dura - de cabeza se fue a chupármela con fiereza, mientras mis dedos buscaban su entrepierna, llegó tarde.

-LIZ: nada, esto ya esta duro.

-YO: pues ya solo queda follar de nuevo - su cara de pánico era sexy, y sus ojos brillaban de pasión, la dejé caer boca abajo y la llamé con una palmada

Acudió gateando sin voluntad, pasó una pierna por encima mía y se penetró el coño con temblores, según la sentí dentro la levanté con la cadera y con los pies plantados solté mi ira, todo lo que Raúl daba, de la impresión casi sale volando, pero la tenia sujeta de las caderas y me la estaba follando a base de bien, su cara era entre dolor y placer, desesperación y esperanza, hacia fuerza al caer para ser ensartada del todo y gemía sin parar. Desatado la daba azotes en el culo, cuando más ritmo llevaba ella gritaba de pasión, le daba igual todo, por fin un hombre de verdad la estaba haciendo correrse sin parar, la estaban haciendo el amor como toda mujer desea ser tomada, a los 20 minutos estaba rendida sobre mi pecho jadeando sin control, seguía siendo perforada sin compasión, y no mostró ningún gesto negativo al acariciar y meter un dedo por su ano, así que me levanté y la puse a 4 patas, ensartándola de golpe en su coño haciéndola salir de su ensoñación, aferrándose a 20 uñas a las sabanas mientras hacia fuerza contra mis embestidas, trabajándola el ano con 2 y 3 dedos, cuando se corrió de nuevo la saqué de su coño, lamí su ano babeándolo bien, y apunté a su culo.

-LIZ: no……- me pareció escuchar antes de meter lentamente toda mi verga en su ano.

La sensación era de presión absoluta, de tornillos de submarino cediendo, un grito ahogado salió de su boca, hizo un nudo con una sabana y lo mordió, amordazando los gemidos que la provocaba que estuviera sacándola y metiéndola lentamente en su culo, al poco tiempo me la estaba follando a conciencia, y ella desatada se erigió pegando su espalda a mi pecho, la sujeté de las tetas manoseándolas mientras su culo retumbaba ante los golpes de mi vientre, giró la cabeza mirándome, pidiendo compasión y a la vez que continuara, fue cuando me sentí más poderoso, me estaba pidiendo que la abriera aun el ano con mi verga, la chica que hacia una hora larga me abofeteaba por agarrarla el culo.

La empujé para dejarla a 4 aptas y saqué a la bestia, eso la destrozó, sentía arrancarle la vida con cada penetración, y llegaron sus orgasmos anales, seguro que eran los primeros por como gritó, y como los disfrutó, yo ya algo agotado, daba azotes para marcar el ritmo y a los 10 minutos llené su culo de leche, dejándola dentro dar cabezazos para que sintiera como la manchaba. La cogí de las tetas para levantarla una vez más, estaba medio ida justo como la quería, tiré de ella hasta que quedó tumbada encima de mi, de espaldas, conmigo tumbado en la cama boca arriba, agarrado a su teta en una mano y a su coño en la otra, frotando levemente, cogí mi semen y sus fluidos mezclados con sudor, y los llevé a su boca, los lamió y chupó con gusto.

-LIZ: por favor, ya……..- la desesperación absoluta la atenazaba, cogía mezcla, de hecho de su ano goteante, y se lo fui dando como a una cría de teta, se lo comió, todo.

-YO: eres una buena pieza, te quiero en mi cama cuando me de la gana, ¿está claro? - asintió lamiendo con lascivia.

-LIZ: si, cuando quieras, pero por hoy ya, por favor - la acariciaba el clítoris con esmero, y sentía su escozor.

-YO: ¿entiendes que no serás la única?, que me follo a quien quiera, como a ti, que es solo sexo……..– asintió cogiéndome la mano y lamiendo mis dedos - …….y jura que no saldrá de aquí.

-LZI: si……. - ladeó la cabeza buscando mis labios -…… lo juro, no se lo diré a nadie - la metí un dedo en el coño y la provocó un escalofrío.

-YO: ni a mi hermana, como se lo digas me enteraré, ya sabes como se pone, te traeré aquí, y no parare por mucho que me supliques, ¿me entiendes? - asintió asustada.

-LIZ: a nadie, tu hermana menos, pero por favor saca tu dedo de mi coñito - metí 3, una anguila se moviera menos, pero la sujeté con fuerza.

-YO: tú no das órdenes, aquí mando yo, si quieres algo te lo tienes que ganar con sexo, y yo decidiré si es suficiente o no.

-LIZ: de……..de acuerdo - me gustaba esto, había olvidado lo que era tener a una esclava sexual, desde Lara no tenia a ninguna.

-YO: bien, por tu torpeza de hoy, que te he tenido que enseñar todo, vas a ir sin bragas siempre que esté aquí, en falda o minifalda, sin nada más, y sin bragas ni tanga, con las tetas al aire, aféitate esa mata un poco, y siempre que te llame vendrás a mi casa, ¿como lo harás?

-LIZ: en falda y sin nada debajo, ni nada más.

-YO: bien, eso te recordara que puedo follarte donde y cuando me de la gana, ¿verdad?

-LIZ: si, pero…….- metí mis 5 dedos en su coño y cerré el puño, casi le entraba -…….dios……..si….¡¡¡SI!!!.......donde y cuando quieras.

-YO: cuidare de ti, eso hacen los buenos señores con las damas que se lo merecen, ¿me crees? - asintió angustiada, pero estaba grabando todo aquello a fuego en su mente.

-LIZ: si, te creo….mi amo.- la solté un bofetón en la teta.

-YO: no soy tu amo, soy quien te folla, y mientras quieras seguirá siendo así, pero bajo mis condiciones ….- asintió con miedo ha hablar.- ……por que quieres que te folle ¿verdad?...... - asintió otra vez al sentir como sacaba unos dedos de su interior -…. ¿desde cuando? Y no me mientas.

-LIZ: desde…..desde que saliste del instituto, y te vi en la piscina con la polla marcada en el bañador, desde ese día quiero que me folles.

-YO: ¿has venido este fin de semana a que te folle?

-LIZ: no…..bueno…….no pensaba que con tu hermana pasaría….pero lo deseaba.

-YO: pues que te quede claro, bajo este techo mando yo, no mi hermana, aunque se lo haga pensar, eres mía ahora, vendrás cuando te llame, te montaré cuanto quiera, te dejaré días en la cama sin salir, siendo follada por mi o por quien me de la gana, y no dirás nada a nadie, lo disfrutarás como has disfrutado conmigo, ya me aseguraré yo de eso, y cuando estés en esta casa, ¿que harás?

-LIZ: vendré con falda, sin nada debajo, para que me folles en cualquier momento, me arreglaré el bello del coño, seré tuya.

-YO: muy bien, así me gusta …….- saqué mis dedos pringados de su coño y ella relajó el cuerpo, su boca lamió encantada hasta dejaremos limpios -…… muy buena chica, por ahora ponte las bragas mientras esté mi hermana, pero por ser tan descuidada mañana te vas a poner en top less a tomar el sol, y en tanga, quiero ver tu cuerpo desnudo durante todo el tiempo posible, invéntate lo que sea, pero hazlo, y si puedes convence a Iziar para que haga lo mismo

-LIZ: lo haré, pero con Iziar no puedo asegurar nada.

-YO: lo sé, pero haz lo que puedas, del resto lo haré yo, que sepas que mañana me voy a follar a Iziar, y necesito que entretengas a mi hermana en la terraza con la puerta cerrada, así no nos oirá.

-LIZ: no habrá problemas.

-YO: bien, vamos a dormir, te has ganado un descanso, pero en cuanto te despiertes verás mi polla tiesa, me gusta despertarme con una mamada, hazlo, pero si no me corro no se me baja, así que sabré si no lo has hecho al despertarme, y si me despiertas haciéndola retomaré justo donde lo hemos dejado - asintió agradecida y haciendo un esfuerzo por recordar mis palabras.

Se recostó sobre mi pecho con mi brazo rodeando su cuerpo y me dormí boca arriba con sus tetas pegadas a mi costado, acariciando su espalda, degustado mi nueva pieza de caza, tenia un morbo terrible al ser la amiga de toda la vida de mi hermana, de conocerla desde que tenia 7 años, y ahora era una marioneta en mis manos, fui muy brusco con ella, pero lo tenia que ser, la tenia que tener completamente a mi merced, 1 sola palabra a mi hermana y me cortaría la cabeza, esa idea me estaba pasando por la cabeza en sueños, quizá se le pasara el calentón y hablara, pero se disipó al despertarme, no me moví, pero sentía como me la estaba chupando, abrí un ojo para observar a 4 patas sobre mis piernas mamándomela tal y como la había enseñado, me contuve, tenia unas ganas locas de follarla otra vez, me había encantado la sensación, pero la dejé deleitarse y cumplir, al correrme se llenó la boca y se lo tragó sin decir nada, allí ya me ”desperté”, la cogí de la nuca y la tumbé encima mía, besándola con fuerza, mostrando mi entereza y que lo de anoche no era pasajero.

-YO: muy bien, eres una mujer obediente - le amasaba el culo con una mano.

-LIZ: ¿que hago ahora?

-YO: vete a tu cuarto antes de que alguna se despierte, y finge que esto no ha pasado, pero recuerda todo, eres mía, y tienes tus órdenes……… - le metí un dedo por el culo haciéndola gemir entre la depravación y el placer-……. ¿las recuerdas o te las tengo que volver a enseñar?

-LIZ: no, lo recuerdo todo, por favor déjame ir - tiré de su pelo echándola la cabeza hacia atrás y comiéndome una de sus tetas.

-YO: te los has ganado, con sexo, como debe de ser, así que vete - azoté su culo tan fuerte que al irse mi mano se intuía en su trasero.

Iziar – Destrozando a la “peque”.

Liz salió avergonzada de mi cuarto, pero mirándome con deseo, le había encantando tanto o más que a mi, se puso el camisón pero la quité las bragas y me las quedé de recuerdo, ya tenia 2, las puse junto al tanga de Yasira, me fui a trabajar con una gran sonrisa. Mi jefa seguía tentándome, se quedó en el almacén conmigo ayudándome a colocar cosas aunque no era necesario, acabamos tan rápido que me pasé hora y media ayudándola a hacer inventario, sujetando la escalera, y a ella, le metí mano tan descaradamente en el culo cada vez que subía o bajaba por los escalones que no podía ser obviado por ella, el pantalón verde fino le marcaba un trasero duro y bonito, pero era la camisa marrón semi transparente la que me gustaba, marcando por debajo un sujetador fucsia, la sobé un poco sin pasarme y la debí de dejar con un calentón de narices cuando bajaba la escalera y no aparte mis 2 manos de la escalera, pegando su culo a mi polla, fingía seguir contando mientras me frotaba contra ella, sonriendo un poco y acalorándose, pero mi turno terminó sin incidentes, al llegar a casa me eché un par de horas, todas seguían durmiendo, hasta Liz en su cuarto, la vi solo con el camisón y el culo en pompa sin bragas, estuve por ir a follármela, pero era tarde, y ya se oía a Iziar en la otra habitación. Después de dormir me di una ducha y bajé a comer algo, saludé a mi hermana en la terraza, Iziar estaba con ella, habían salido a tomar el sol cuando terminaron de comer, y Liz en la cocina, me pegué a su culo metiéndola mano por debajo del camisón, se había puesto unas bragas pero metí mi mano por dentro de ellas, Liz solo suspiraba y miraba a la puerta de la cocina, no se si deseaba que entrara alguien, o no, para detenerme.

-YO: no olvides tu parte, o lo pagaras……..- asintió aturdida.

Al salir a la terraza con el bañador mi hermana me miró con resaca, 2 copas, ni siquiera se terminó la 2º y aun le duraba el dolor de cabeza, me di chapuzón rápido y me quedé tumbado en la hamaca, desde mi posición me comía las enormes peras de Iziar, apenas tapadas por el biquini, “es que no da de si”, era demasiado a tapar, se metió en el agua sola y fui detrás de ella, para jugar, si, y volver a meterla mano bajo el agua, esta vez no solo en los senos, si no que la sujeté del coño acariciándoselo por encima de la tela, me miraba compungida y avergonzada, soltando risitas roncas, pero se abría de piernas para facilitar mi labor, se salió del agua tan caliente como yo, y se tumbó junto a Liz, que iba en top less, y con solo un tanga puesto, al verla Iziar se puso más colorada si era posible, y lo mejor de todo era que Liz le había sacado un copa a mi hermana, y esta, aparte de ponerse en top less igual, se había vuelto a quedar frita tostándose al sol, “que fácil me lo está poniendo”, miré a Liz que me guiñó el ojo, esa copa había sido una genialidad de su parte, no tardaría en agradecérselo, al ver las tetas de mi hermana me ruboricé, eran más pequeñas que las de Iziar, pero no mucho, y peor colocadas que las de Liz, pero tampoco tanto, la mezcla era la mejor de todas.

Iziar se quedó charlando con Liz mientras yo le hacia un gesto para hacerla entender que había llegado el momento, entré en casa y me quedé observándolas, no se que le dijo pero a la media hora Iziar se quitó la parte de arriba revisando si estaba mirando, pero detrás de una cortina el reflejo de la luz en el cristal me cubría, fue apoteósico, sus berzas cayeron bastante, pero no tanto como esperaba, tenia unas aureolas rosadas gigantescas y unos pezones enormes, se me puso dura solo de verlas, el bañador apenas me daba de si, y cuando Liz se puso a darla crema por todo el cuerpo casi salgo a follarlas a las 2 con mi hermana allí tirada medio achispada, no se si sabia que estaba mirando pero Liz la embadurnó entera, la dio la vuelta y le metió la braga del biquini a modo de tanga repasando sus piernas y su trasero, me asomé para que Liz me viera, pero no Iziar, la señalé que la hiciera entrar, no necesitaba más, y que ella se ocupara de que mi hermana no entrara en casa, aunque ya parecía hecho, al menos en 2 horas mi hermana no levantaría la cabeza, como mucho se giraría ante el sol. Liz la susurró algo al oído e Iziar pasó dentro, di un rodeo por la cocina donde se dirigía y cuando entró en ella salí por la otra puerta para cerrar la enorme cristalera insonorizada de la terraza, entré por la puerta de la cocina por la que acababa de pasar Iziar, que estaba en la nevera buscando algo y al verme se tapó a duras penas las tetas con las manos, pero su mirada fue a mi paquete, tan dura estaba que me separaba la goma de la cintura de la pelvis.

-IZIAR: ho….hola……solo buscaba…

-YO: ¿algo de beber?

-IZIAR: ¡si!, Liz….me……..me ha dicho que……..- me puse detrás de ella posando mi rabo en su espalda, “es tan bajita”

-YO: deja que te ayude……… - me estiré doblándome sobre ella - ………bonitas tetas, por cierto.

-IZIAR: ¿nos…nos has visto?, creía que dormías.

-YO: claro, ¿por que te crees que la tengo así? - cogí su mano y la llevé a mi polla, la agarró con sorpresa, pero no se soltó ni se tapó el seno libre, que con el frío de la nevera se estaba poniendo un pezón largo y duro.

-IZIAR: que guarro eres……. ¿nunca te cansas de ir metiéndome mano?

-YO: que loco que se cansaría, y más después de lo de anoche – aun tenía en mi retina la imagen de ella, solo con un tanga, en la cama de haberla acostado.

-IZIAR: eso…….¿quien…… me cambió……. de ropa?

-YO: ¿pues quien va a ser?, yo, te quedaste dormida cuando estaba a punto de saltar a tus labios.

-IZIAR: ¡pero estaba desnuda!, vamos …….solo me dejaste el………tanga – lo mejor era que seguía sin soltar mi polla.

-YO: y de milagro no te follé dormida, date por contenta, me pusiste muy cachondo ayer.

-IZIAR: que bruto, no te atreverías……no con tu hermana aquí - por fin me soltó la polla así que apreté contra la nevera buscando algo en el fondo, casi metiéndola las tetas en la nevera.

-YO: no me provoques mujer, no sabes de lo que soy capaz…… – se ruborizó por el frío o por mis palabras sinceras y contundentes.

-IZIAR: mira, yoghurt liquido, de fresa además, ¡¡¡mi preferido!!! ……- desvió el tema, lo solía hacer cuando la vergüenza la podía, cogió el bote y cerró la nevera, sacudiendo con gracia el yoghurt, sus tetas se bamboleaban de forma maravillosa, y yo no apartaba mis ojos de ellas mientras me colocaba la polla, me estaba doliendo-….. ¿Donde están los vasos?

-YO: ahí, en ese armario de arriba - lo miró como si fuera el Everest, caminó hacia él, no lo alcanzaba, ni dando saltos sujetándose las tetas para no golpearse la barbilla con ellas.

-IZIAR: jope, soy muy pequeña, no llego, ¿me ayudas? - asentí con una sonrisa frívola.

En vez de coger un vaso del armario, la agarré de las costillas para elevarla, pero en no hacia el armario, la llevé a la encimera en mitad de la cocina y la senté en ella, quedando así a mi altura, aunque aun media cabeza por debajo de mi.

-IZIAR: jajaja ¿que me haces?, solo quería un vaso - su risa era grotesca, pero hacia que sus senos se movieran, era brutalmente llamativo y excitante, podía sentir como aquella forma de levantarla por los aires y muestra de fuerza la sacó los colores en las mejillas, o quizá sentir mis manos en ella.

-YO: te estoy ayudando, yo seré tu recipiente - le quité el bote de la mano, su cara era de sorpresa y timidez, más cuando lo abrí echando la espalda hacia atrás y dejé caer unas gotas del líquido espeso en mi pecho, el frío me erizó la piel, y ella se puso roja.

-IZIAR: ¡¿que haces?! Vas a manchar todo - su risa de cerdo era casi de lastima.

-YO: ¡rápido, lame!, date prisa antes de que se caiga…….- esa tontería y ver como 2 gotas caía con velocidad la apresuraron, sonriendo aceptando la “broma”, me sujetó de la cintura pegándome a ella echándose el pelo hacia atrás con cierta sensualidad, pasó su lengua por mi vientre recogiendo esas gotas, tragó y fue subiendo haciendo lo mismo, lamiendo mi tableta y mi pecho, mientras le rozaba los muslos con las manos.

-IZIAR: jajajja esta rico – ya estaba cachonda, podía olerlo, pero sus manos repasaron todo mi torso trabajado y jugó con su cadera ladeando la cabeza admirando mi cuerpo, no necesita olfato para saberlo.

-YO: ¿quieres más? …..- asintió clavando su mirada en la puerta-…..tranquila, mi hermana esta roca y Liz esta con ella, no nos verán ni nos oirán - esas palabras la tranquilizaron.

Eché bastante cantidad en mi pecho, tanta que goteó rápidamente y ella trató de pararlo con sus manos, lamiendo como un perro, esta vez cerró los ojos y siguió lamiendo incluso cuando ya no quedaba nada, pasando sus dedos por mi piel.

-YO: sabes, a mí también me gusta la fresa - se contoneó sonriendo, pero fue la 1º vez que su risa no me provocaba desagrado, me había comprendido y le gustaba la idea.

Se juntó las enormes tetas, y derramé todo lo que había del yoghurt sobre ellas, un gemido se le escapó al sentir el frío espeso sobre sus senos y su cuello, las últimas gotas las dejé caer desde alto en su boca, sacó la lengua para recibirlas, tiré el bote al suelo y me lancé a comerme sus pechos descomunales bañados por encima con una gruesa capa de yoghurt liquido de fresa, sacó pecho como si la hiciera falta, lamí con placer y calma, repasé su piel lentamente, lamiendo zonas especificas con detenimiento y pausa, sus pezones erectos del frío y las caricias eras aun mayores que los de Eleonor, del tamaño de meñiques de bebe, los chupé hasta dejarlos rígidos, sus gemidos aumentaban y al subir por su cuello me detuve a lamer, desde sus pezones hasta su barbilla, de varios lengüetazos que tardaban unos 5 o 6 segundos, al terminar le agarré las tetas como pude, ni siquiera mis enormes manos de gigantón daban para, si quiera, sostenerlas, si sujetaba de un lado rebosaban en otro, un último lengüetazo lento desde su ombligo la hizo estirar el cuello hacia arriba al pasar por allí, el gancho de mi lengua al llegar a su barbilla la hizo soltar un suspiro de placer, cuando bajó la vista la besé con furia y me respondió con lujuria, aun sabia a fresa, su lengua se mostró hábil y mis manos igual en sus pezones.

-IZIAR: dios……….que gusto……………. fóllame, por fi - la di un manotazo en un teta mientras agarraba la otra chupando su pezón como un bebe hambriento.

Deslicé los nudos de la parte de abajo del biquini, y le arranqué de un tirón la prenda, mi mano se metió en su coño frotándolo, estaba chorreando, apenas hice esfuerzo y le estaba metiendo 3 dedos, jadeaba moviendo la cintura en círculos mientras sus tetas eran devoradas, tenia una mata de pelo brutal en el coño, la más grande y menos cuidada que había visto nunca, me dio grima comérselo así que me bajé el bañador, cuando vio la polla tiesa apuntando a su coño casi se desmaya de la impresión, pegué la pelvis y posé mi rabo en su vientre, casi se ahoga de la risa ronca, con los huesos de la cadera juntos mi rabo se metía entre sus tetas, le llegaba del coño al escote, me dio miedo hasta a mi, si lo hacía por dentro igual no es que la rozara la pared del útero, es que podía dañarla un pulmón o algo. El deseo ganó al miedo, como siempre, y apunté a su coño, temblaba de solo verlo, apreté y la punta entró fácil, deslizándose con suavidad, pasada la mitad se retorció de forma incontrolada, pero le seguía metiendo, agradecí que cuando iba por ¾ rocé la pared de su útero, levemente, lo agradecí por que al menos daba para follármela. La dejé dentro, sintiendo sus paredes vaginales palpitar cuando se expandían, su rostro era una bombilla de Navidad, roja, redonda y con los ojos brillando entre lagrimas de gozo y dicha.

Tenia claro que Iziar no había pasado la prueba, no me atraía como mujer lo suficiente como para ignorar ciertas cosas, así que me iba a desquitar con ella y no la volvería a tomar, pero la haría recordar ese día, saqué a la bestia y la follé salvajemente, midiendo siempre no pasarme y hacerla daño, sus gritos eran altos y fuertes, pero se aferraba a mis hombros siguiendo el rimo unos minutos, luego se dejó caer sobre la encimera, la altura me venia perfecta, algo alta y así no la metía entera, pero lo justo para poder estas montándola como a la mejor, la cogí de las tetas como lugares de apoyo y embestía sin parar mientras una oleada de orgasmos la hacia berrear y roncar como un camionero, la azotaba los senos al verlos botar incontrolados, las masas de carne eran independientes una de la otra y chocaban entre ellas en formas irregulares, tenia que sujetárselas para que no la dieran en la cara cada ida y venida, ella estaba aferrada a la encimera con miedo a entrar en órbita si se soltaba, en algunos casos lo creí cierto, la cogí de la cintura y la bajé de la encimera follándomela cogida en el aire, me rodeó con las piernas cortas lo que pudo y trataba de hacer fuerza para elevarse, mientras seguía, me comía sus tetas al no haber otra opción, eran tan grandes que las tenia en la cara quisiera o no, mis dedos fueron a su ano, si iba a ser una sola vez, seria completo.

-IZIAR: ¡no……….dios…….no…por el culo no…..soy virgen! - eso solo me dio deseos de hacerlo.

-YO: a partir de hoy, no lo podrás decir - se puso colorada, tenía todas las gamas del rojo en su rostro.

Cogiéndola como a una niña de 4 años, la dejé tumbada boca abajo sobre la encimera, con el culo y las piernas colgando sin llegar al suelo, por bastante distancia, le separé las nalgas con las manos y las piernas metiendo las mías como tope para que no las pudiera cerrar, y me comí su coño desde atrás, luego jugué con su ano, se retorcía al sentir mis dedos metiéndose en su culo, al principio estaba cerradísimo, pero mi lengua la estaba relajando, una mano suya fue a su culo y me agarró del pelo de la cabeza, me pegaba a su trasero, al 3º dedo me cansé, me puse detrás de ella haciendo presión para que mi cuerpo no la dejara moverse y mi rabo fue entrando en su ano, los golpes que dio en la encimera le debieron de hacer daño, unas palas de madera saltaron por los aires cuando braceó, pero se hizo un silencio abrumador hasta que le metí mi polla entera en el culo, Eli me lo enseñó con su amiga, “a las que no le entra en el coño, el culo es la mejor opción, es más profundo”, y allí estaba, azotándola el culo enrojecido mientras me la estaba follando como un oso tirándose a un conejo, estaba desatado de verdad, sus gritos de cólera se fueron apagando, sus “PARA, PARA”, ya no sonaban, y después del silencio llegaron los, “SIGUE, SIGUE”. La agarré de las tetas y la pegué a mi pecho, ella solo tocaba la encimera por la cintura, el resto del cuerpo suspendido en el aire botando ante mis acometidas, me separé de la encimera y la tenia en vilo solo agarrada de las tetas y de mi rabo en su culo, de un gesto acompasado la dejé caer a plomo y di una estocada con la cintura hacia arriba, del golpe gritó como si la hubiera atravesado con una espada, se mantuvo unos segundos flotando en el aire solo ensartada y luego se fue al suelo usando mi miembro como eje, a 4 patas, la cogí la cintura y la estiré las piernas, con su cuerpo haciendo una triángulo, y seguí machacándola el culo unos minutos hasta correrme, me dio igual que sus orgasmos anales la hubieran hecho desvanecerse, era un cuerpo inerte siendo ultrajado, pero me gustó que aun gimiera de placer, la cogí en brazos y la llevé a la puerta del cristal de la terraza, con cuidado de que mi hermana siguiera dormida golpeé llamando la atención de Liz, miró y entonces pegué a Iziar al cristal, sus tetas empotradas contra el vidrio, con las piernas abiertas casi en 180º sujetada en el aire por mis brazos y la volví a follar por el coño estrujándola contra el cristal, mirando a Liz a los ojos, estaba atónita frotándose la parte interior de los muslos, lo que buscaba.

Fue gracioso “despegar” a Iziar del cristal y ver la marca perfectamente de su cuerpo en la cristalera, incluyendo unas tetas del diámetro de balones de baloncesto. La llevé a su cuarto de arriba, allí la abrí de piernas y le continué follando cuando estaba totalmente ida, no se desmayó, pero no estaba allí realmente, solo se corría y jadeaba, su cuerpo estaba, su mente no, pero a mi me bastaba con eso, una hora después de abusar de su coño y de su ano cuanto me dio la gana me corrí en su coño, con la mano, que me entraba entera, rebañé un puñado de mi semen y sus fluidos, se lo hice lamer de mi pecho, tal como habíamos empezado, le comí las tetas un buen rato y me fui a dormir a mi cuarto, dejándola desnuda, sudada, ultrajada con unos agujeros del tamaño de mandarinas, sollozando entre respiraciones y espasmos musculares profundos.

Dormía totalmente desnudo, boca arriba y con la polla brillante al no tener una triste sabana encima, medio tiesa aun de sentirme colmado por lo que le había hecho a Iziar, antes me hubiera comportado con delicadeza y hubiera sido cuidadoso, pero ahora no, iba a reventar a quien se pusiera por delante, si aguantaban bien, si no, que pase la siguiente. Al transcurrir unas horas mi hermana apareció por la puerta y me vio durmiendo boca arriba con la polla medio tiesa aun.

-HERMANA: ¡joder Raúl, tápate hostias!.....- me sobresalté.-….. ¿y si te ven estas?.....- “demasiado tarde hermana, Liz es mía e Iziar no andará bien en un par de semanas”.

-YO: lo siento, ahora me tapo.

-HERMANA: Iziar y yo nos vamos ya, dice que se encuentra mal – “y yo se de que”, pero no abrirá la boca.

-YO: ¿solo vosotras? - me intrigó.

-HERMANA: si, Liz dice que prefiere quedarse otro día, no trabaja así que si quiere déjala por aquí unos días, ¿vale? - más que un favor parecía una orden -…… y trátala bien, no seas imbécil…..- “la voy a tratar como se merece”.

-YO: pues nada, un placer verte, mi casa es tu casa y la de tus amigas…….- bufó cansada.

-HEMRNA: no se si volveremos, a mi beber me ha sentado fatal e Iziar igual, dice que no quiere venir más………. – “jajajajajajaja” – ……pero Liz me ha dicho que va a venir a menudo, así que ten ojo de que no te pillé como ahora ni con ninguna de tus ligues……..- “jajajajajajjajajajaja”, no sabia que me hacia más gracia, si que Iziar no quisiera volver o que mi hermana me “obligara” a que Liz se pasara por allí a menudo.

-YO: una pena lo de Iziar, y tranquila, cuidaré de Liz.

Nos despedimos s y oí como se iban, silbé y apareció Liz por la puerta, totalmente desnuda, solo con un pareo atado a la cintura.

-LIZ: lo……………..lo siento…….no tengo faldas aquí, cuando pase por casa traeré todas.

-YO: ven siéntete conmigo, no pasa nada – sonrío y acudió a la cama corriendo con alegría tumbándose a mi lado, acariciándome el pecho con los dedos.

-LIZ: ¿que le has echo a Iziar? ¿Parecía asustada al irse? - se abrió de piernas, me cogió de la mano llevándomela a su coño húmedo.

-YO: lo mismo que te hice a ti, pero mucho menos, aunque a ella la estrené en culo - tosió de risa.

-LIZ: ¡pero si es virgen por detrás!

-YO: ya no……… - separaba sus labios mayores con los dedos -…… pero no me ha gustado, no le entraba toda por el coño y se ha desvanecido enseguida, no como tú …..– la besé en los labios con dulzura -……..tú eres mil veces mejor y ahora tengo mucho tiempo para disfrutar en una mujer de verdad - sonrió feliz.

-LIZ: soy tuya…….. - su mano fue a mi rabo, que a estas alturas ya estaba como una piedra, al sentirlo sonrió.- …….¿cuantas veces te la has……….?

-YO: 2 nada más, ¿por que?

-LIZ: quiero…- rectificó a tiempo -….me gustaría que me hicieras el amor como esta noche, me lo tengo que ganar, ¿como?..... - que joyas estaba encontrado en las chicas de piel morena, no solo recordaba mis palabras si no que quería ganárselo.

-YO: ya te lo has ganado, ¿que le has dicho a mi hermana para que la convenzas de que te quedes aquí?

-LIZ: tu hermana es un ogro, que si sabes llevar, no es más que un cordero…… – tenia razón -….. si sabes que decir, puedes tener lo que quieras, y yo quería estar aquí, a tu lado - me besó con lengua pajeándome con suavidad.

-YO: te quiero en esta casa día y noche, múdate si hace falta, vas a ser la residente de esta casa.

-LIZ: ¿residente?

-YO: follas bien, pero no eres la mejor, ni serás la única, tengo a mujeres haciendo cola y a unas cuantas que me tiro a diario, vienen y van, son como pasatiempos, pero tú no, tú eres mía, vivirás aquí y dormirás en la habitación que quieras, no trabajas ¿no? - negó con la cabeza.

-LIZ: mi madre gana dinero y no nos hace falta.

-YO: bien, pondrás parte para la compra, si te vas a quedar es lo justo, y ayudarás a Dani, mi sirvienta de las mañanas, con la casa, estás a sus ordenes como de las mías, menos en lo sexual, piensa que soy yo, y si la faltas al respeto me rendirás cuentas a mi.

-LIZ: así lo haré - que sencillez, sus ojos eran de completa adoración.

-YO: cuando esté con otra te quedarás en tu cuarto, y no saldrás a menos que te llame, ni montaras líos de celos, no soy tu novio ni tu amigo, soy quien te folla cuando quiere ……– accedió con la cabeza -……. si te portas bien será a menudo, las chicas con las que quedo no siempre están disponibles cuando yo lo deseo, TÚ SI.

-LIZ: ¿y lo de que folle con otros?

-YO: eso ya se verá, te avisaré si surge, pero tranquila, te dije que cuidaría de ti, no te obligaré a nada que no quieras hacer, si algo te molesta me lo dices y lo hablamos, no me debes obediencia ciega, escucharé tu opinión, eso si, quiero la verdad absoluta de ti, nada de mentirme, medias verdades o ocultarme algo.

-LIZ: seré sincera contigo, lo prometo.

-YO: bien, puede que por ahora te llame y juegues con otras chicas en tríos, nada más

LIZ: no hay problemas, soy bisexual - me sorprendió mucho, tanto que no pregunté por mi hermana.

-YO: genial, y si quieres dejar todo esto, o llegas a un punto en el que esto no te gusta, dímelo, y me busco a otra residente.

-LIZ: no por favor, déjame ser tu residente, seré buena, lo juro - se me subió encima besándome con pasión.

-YO: si aceptas todo esto, no habrá problemas, serás mi residente mientras te lo ganes.

-LIZ: lo acepto, pero quiero ganármelo, ahora - la azoté el trasero dándola el si que buscaba, la hizo vibrar, se relamió arqueando la espalda y cayó sobre mi cara metiéndome la lengua hasta el esófago.

Respondí como mejor sabia, apunté mi rabo a su coño y la ensarté de golpe certero, esta vez gritó todo lo que se guardó aquella mañana, sabiendo que ahora estabamos solos, sus gemidos al comenzar a follarla mientras me cabalgaba eran atronadores y me encantaban, podía ver y sentir como la abría los labios mayores con cada penetración y como sus tetas botaban ante mi siendo pellizcadas por ella misma con una mano, la otra estaba en mi pecho, apoyándose o arañando a ratos, cuando se corrió la cogí de las caderas y aumenté el ritmo al limite, sacándola otros 2 orgasmos que la debilitaron, se recuperó un poco al correrme, pero aprendió la lección, cogía lo que caía y se lo comía con devoción, mientras me la chupaba hasta ponérmela dura de nuevo, se cuadró a 4 patas.

-LIZ: fóllame por detrás, te lo suplico.

-YO: eres buena, te dejo que decidas, ¿coño o ano? - golpeó las sabanas al sentirse tan dominada que sus pensamientos dieron paso a sus deseos, tanto que dijo la verdad, lo que ansiaba.

-LIZ: ábreme el culo, por favor, lo imploro.

Me arrodillé tras ella y lamí su ano con suavidad, abriéndolo con un par de dedos, luego apunté con cuidado y con un giro de cadera hábil la penetré casi la mitad del tirón y sin retroceder fui apretando ante sus gritos y sus movimientos de cadera, hasta tenerla toda dentro, una sonora ventosidad se el escapó, me divertía, y saqué a la bestia, para que jugara 30 minutos percutiéndola el culo provocando orgasmos anales continuos, y que pidiera más me llenaba de orgullo, y no se porqué. Me corrí en su culo azotándola tan fuerte que me hice daño en la mano, pero tenia unas nalgas enormes, la piel morena estaba banca de los golpes, cayó rendida moviéndose de forma sensual y agotada por las sabanas, la cogí de un tobillo y tiré de ella hasta abrirla de piernas y meterme entre ellas, le comí las tetas hasta tenerla dura otra vez, después de los 2 de Iziar, el descanso de horas, y ahora iba a por el 3º con Liz, y me sentía en la gloria, la penetré tan fuerte que la saqué la cabeza por el borde de la cama, la sujeté de una pierna mientras la bestia se deleitaba con su coño, sus orgasmos bañaron las sabanas una y otra vez, hasta que sus ojos se pusieron en blanco, allí aceleré el ritmo y me corrí con golpes de cintura tales que del último resbaló por el borde de la cama y rodó por el suelo exhausta y riéndose de nervios, sudada, con el coño y el culo que goteaban semen, fluidos y despedían un olor deliciosamente atractivo.

-YO: vuelve a la cama, a partir de hoy dormirás conmigo siempre que no encuentre a alguna que cubra ese horario - se arrastró con los brazos temblando hasta la cama, la ayudé a subir y la tumbé boca arriba, esta vez fui yo quien me acosté sobre su pecho, lamiendo sus tetas mientras le acariciaba el cuerpo, ella me acariciaba el pelo de la cabeza, abrumada y perdida mientras sonreía.

-LIZ: rezo por que no encuentres a nadie - la oí entre susurros y palabras de sexo.

Estaba encantando, no os podéis imaginar lo feliz que era de tener a Liz de “residente”, término acuñado recientemente, pensaba en Lara cada vez que tenia ganas de un polvo y no tenia a ninguna cerca, pero eso se acabó con Liz, la conocía de toda la vida, me fiaba de ella y la tenia tan dominada que si la pedía que saltara del 10º piso lo haría, era lista y hasta cierto nivel, manipuladora si sabia llevar a mi hermana, pero no tanto como para no sucumbir a mis encantos, me iba a ser tremendamente útil y encima follaba como pocas, o al menos a muy pocas la 1º y la 2º vez las había follado 3 veces sin que huyeran, menos por el culo y menos aun con la bestia de por medio gran parte del tiempo, su cuerpo era robusto y con curvas, no era lo que se denominaría una tía buena, ¿pero a quien el importaba eso?, con el tema pareo y faldas totalmente desnuda parecía una mujer de una tribu perdida de la selva. Charlamos unas horas, se sonrojó al saber que las espiaba de crío a mi hermana y a ella, y que le había visto las tetas una docena de veces antes de aquel día, me daba igual, ella solo se reía y se mostraba complaciente acariciándome el pelo.

Se fue a duchar y la seguí para follarla por el culo en la ducha, pero me suplicó que la dejara descansar, así que me duche cuando se fue, hizo la cena, la manoseaba en la encimera, y también esperando al de la pizza ya que se nos había quemado la cena entre caricias, la cara que puso el chico al ver a Liz solo con el pareo pagándole fue un escándalo, cenamos y vimos una película, Liz me miraba desesperada, quería que la dejara en paz unas horas seguidas pero cuando terminó la película ya estaba chupándomela como toda una experta, nos dimos un chapuzón en la piscina desnudos y me la folle allí 2 veces, la última por el culo, su cuerpo empapado, con el pareo pegado a su piel trasparente y su pelo mojado brillando a la luz de la noche fueron demasiado, ya ni me salía semen, apenas unas gotas transparentes, estaba magullado, cansado y abrumado, ella mucho más que yo, pero mi maldito rabo seguía poniéndose duro cuando la tenia cerca, nos duchamos por separado, y por fin, con los cuerpos frescos y desnudos, nos dormimos, le expliqué que me encanta dormir de cuchara agarrado a la espalda de una mujer con mi polla entre las piernas, ella me dijo, servicial, que también le gustaba, pero que por los años de amistad, la dejara de follar por esa noche, ella no podía seguir, tuve que besarla y pegarme a ella con mi miembro rozando sus muslos, durmiéndome así.

Me levanté cuando sentía su culo pegándome en la pelvis, ni me había despertado y ya estaba follándome ella, “que barbaridad”, la 2º ronda ya participé y la 3º con la bestia la destrocé el culo para dejarla mansa y tranquila, se tragaba el semen de forma voraz, de mi rabo, de su coño o de su ano, había descubierto un manjar y le encantaba, cuando la pregunté por que siendo bisexual comía pollas tan mal, me dijo que era bisexual por que tenia mucho éxito con mujeres t no con hombres, aunque siempre era ella la que metía la cabeza entre las piernas, así que me susurró de forma lasciva que no tenia mucha idea de pollas, de follar con un hombre o de que la comieran a ella su vulva, pero comía coños como nadie, de nuevo no pregunté por mi hermana.

Bajamos a desayunar, ella solo con el pareo, ya era más que yo, Dani llegó y las presenté, como si una no estuviera prácticamente desnuda, y yo sin el prácticamente, Liz se tapaba algo hasta que la di un azoté en el culo y vio como Dani ni se inmutaba, entonces se relajó un poco. Las expliqué y hablamos de la funciones de Liz en casa, Dani pareció encantada de tener una ayudante, y no prestó atención a que estuviera desnuda, Liz, algo coartada, me pregunto si me la follaba también, era normal, Dani estaba muy buena, pero no, al saberlo Liz sonreía pícara, y me acarició el rabo, la puse contra la encimera y la masturbé el coño delante de Dani, a ella, su vida de prostituta y los 3 meses que llevaba conmigo la tenían curada de espanto, recogía parte de la cocina rodeándonos mientas Liz gritaba sin parar, me reí a carcajadas cuando recogió el bote de yoghurt liquido del suelo, Dani me pellizcó el culo al pasar a mi lado y yo rápido la agarré el suyo pegándola a mi cuerpo mientras Liz se movía cachonda ante mi mano, Dani se reía cuando la besaba el cuello, y no la dejaba irse aferrado a su culo, cogí de la nuca a Dani y a Liz y las hice besarse, unos picos graciosos hasta que le pedí a Dani algo más de “profesionalidad”, ya que había sido puta, me golpeó el pecho con dulzura al reírse, y exhalando una bocanada de aire entendiendo que no la dejaría irse si no colaboraba, sus ojos azules se tornearon y se soltó la coleta del pelo rubio platino contoneándose para que su cuerpo recordara aquella actitud olvidada, agarró la cara de Liz con sensualidad, que estaba morada de lujuria con mis dedos penetrándola, la lamió el cuello con lengüetazos largos y sensuales, tenia lengua de gata, enorme y larga, le abrió la boca a Liz con las manos y metió la lengua en ella con experta pasión, Liz cerró los ojos y se lo devolvió, sus mejillas se hinchaban al paso de sus lenguas revoloteando entre ellas, y una mano de Dani fue a un seno de Liz, lo acarició con maestría erótica, al separarse Liz la persiguió con los labios, y Dani la frenó con un pico sonoro, largo y sexy, Dani abrió los ojos y me miró, sonrió al verme con la boca abierta, y dio una palmada con las manos rompiendo en una carcajada, me pareció ver como aquella fugaz aparición de su yo del pasado se esfumó, pero me dejó claro que Dani era experta de 1º nivel, tenia a Liz aun con los ojos cerrados y buscando sus besos.

La solté cuando la bestia quiso follar el culo de Liz, hasta Dani se quedó mirando como el agujero de su culo se hacia enorme ante mi, y cuando me corrí, Dani se relamió al ver como Liz me dejaba la polla limpia y lamía sus dedos mojados en la mezcla de su ano.

Eran las 10 en punto, así que decidí darnos un respiro, quería estar bien para Eli, y así Liz seguía a Dani por la casa aprendiendo que cosas hacer, a las 10:47 llegó Eli, la recibí desnudo y con un dulce beso con legua nos saludamos, la desnudé en la misma puerta y la empotré contra la pared, penetrándola salvajemente, la hice ascender por la misma con cada envestida y al correrse me golpeaba los hombros entre gritos, vio como Dani pasaba y como Liz la miraba, pero estaba demasiado desinhibida para que le importara, la llevé al sofá y la follé por el coño hasya correrme, jadeaba atónita.

-ELI: ¡¡DIOS, lo necesitaba, como te echaba de menos!!……- me acariciaba el pecho con las manos -…….tú si que me has echado de menos, estás hecho un animal, ¿que te pasa? - sonreí.

-YO: Liz…… - la llamé, llegó corriendo y se puso de pie a nuestro lado, con la cabeza gacha -….. esto es lo que me pasa, acabo de descubrir que la mejor amiga de mi hermana, una mujer que conozco desde primaria, es adicta a que la folle - Eli sonrió sonoramente.

-ELI: encantada, soy Eli - extendió su mano mientras yo la comía las tetas.

-LIZ: encantada, soy………. la residente, yo cuidaré de él mientras no estéis ninguna por aquí.

-ELI: no lo dudo querida……no lo dudo…………...pues un placer, si nos dejas, seguimos a lo nuestro, tranquila, te lo dejaré manso como un perro adiestrado - la cogí de la cintura y me la subí al piso de arriba.

-YO: jajaja que educación…….

-ELI: pobre muchacha, ¿que la has hecho? , tenía la mirada perdida y sonreía sin parar.

-YO: nada, nada que no quiera, y no sabes como folla, llevo apenas 2 días y creo que ya van 10 veces - abrió los ojos incrédula.

-ELI: joder, a ver si no va a dejar para las demás - me pasó por el pecho las yemas de los dedos de una mano, la puse a 4 patas y la penetré por el culo sacándola alaridos de lujuria que estarían escuchando abajo sin ninguna duda, Eli gritaba mucho y de forma esperpéntica, pero disfrutaba de un anal como pocas, yo gozaba mientras me la follaba con bestia incluida.

-YO: tranquila, tengo para todas.

Jefa – En el trabajo.

Se dice que el hombre piensa en sexo cada 7 segundos, es mentira, o al menos para mí, será una media mal hecha, ni siquiera yo a estas alturas llegaba a eso, pero había creado un sucedáneo de esa frase, podía follar en menos de 7 segundos, y con más de 6 mujeres distintas, había creado un micro hábitat en mi casa, una especie de harén propio, y me encantaba, eso si, las latas de bebidas energéticas eran base de mi dieta, no podía ser de otra forma, todo conlleva un precio y el mío era una sensación constante de cansancio, pero a mi juicio era bajo coste, y cualquier hombre mataría por estar en mi situación.

Mi semana estaba casi completa del todo, llevaba 3 semanas con Liz viviendo en mi casa, y sin ser una mujer de bandera, se convirtió en una persona importante, era la unión que hacia aquello posible, Eli cubría mis mañanas desde la 10 y media hasta que se iba a la hora de comer, era la única a la que trataba con cierta diligencia, casi cariño, Jeni estaba aprendiendo rápido en nuestras clases de las tardes después de salir a correr, seguía negándose al anal pero me bastaba con el resto de su cuerpo, Yasira se ocupaba de mi las noches de los fines de semana, solo de recordarla bailar en la pista sobre mi se me ponía dura. También tenia a un par de chicas de repuesto, nada que merezca la pena relatar, la hija del panadero de la esquina, de mi edad, era fea como un cardo pero tenia un cuerpo de escándalo y olía a pan recién hecho, tuvo buena/mala suerte y la pillé cuando a Liz le llegó el periodo, o la vecina del 6º, una MILF de 50 años con un cuerpo de 30, solo hizo falta 3 viajes juntos en el ascensor para que ella pulsara el botón del STOP echándoseme encima y la diera un par de revolcones acabados en mi casa. Y cuando ninguna estaba disponible, cuando tenia ganas, Liz nunca me decía que no, se mostró tan servicial y tan frágil entre mis manos que la dije que podía ir vestida normal si quería, en vez de solo con las faldas que la dejaba llevar, se negó en redondo, la sensación de que me excitaba verla con minifaldas elásticas o las faldas del colegio recortadas, y de poder ser penetrada en cualquier momento, la tenían en una nube y no deseaba perderlo. Por lo tanto, di por concluido mi objetivo, había logrado una meta que me sacó de la apatía, lo agradecí celebrándolo con Alba, la enfermera que me devolvió a la vida, con su marido ya en casa, se escabulló para ser destrozada con gratitud.

Lo mejor es que, si no todas, la mayoría ya se conocían, se habían visto en las entradas y salidas de mi casa, o se quedaban charlando en el sofá entre ellas, más de una vez tenia a 3 o 4 en casa, y me tiraba a 1 mientras las otras comían, o a 2 a la vez mientras la otra dormía en otra habitación, ninguna se mostraba violenta por la situación ni me mencionó nada en ningún momento, todas entendieron que aquello era mi picadero, y allí mandaba yo, las había dejado claro que seria así, y a todas, que si no les gustaba la puerta estaba abierta para irse, ninguna se fue.

Liz fue una gran ayuda para todo, no solo en casa, donde ayudaba a Dani y se mostraba divertida y social, si no que en el sexo estaba a mi lado, cuando alguna chica desfallecía antes de tiempo ella me calmaba y cuando era yo el que me desvanecía de cansancio me demostró que no mentía cuando me dijo que era muy buena con las mujeres, comía coños mejor que yo, sabia donde tocar, lugares que hasta Eli no sabia, o no me dijo en mi “formación”. Cuando no la necesitaba se ocupaba de la casa o permanecía en su cuarto, tenia total libertad, pero cuando silbaba estaba siempre cerca para atenderme, me odio al decir que la trataba como a una esclava, no ya en lo sexual, eso tiene su morbo, si no en la rutina diaria, ponía lavadoras, planchaba, limpiaba la casa, la mandaba a por recados……..o simplemente en vez de bajar a la nevera la hacia traerme las cosas, pero no rechistaba nunca, y más que tomárselo como algo denigrante, creo que lo usaba para intentar provocarme erecciones, su forma de moverse era demasiado sensual como para ser espontánea, y a menudo lo conseguía, aunque tuviera a 2 en la cama exhaustas y rotas, y yo no estuviera mejor, era verla con una falda con vuelo meneándose y me iba a por ella.

Mi hermana, se enteró de lo de Iziar, ella misma se lo dijo, me cayó una bronca de época, me chillaba en el piso con Iziar al lado, maldiciéndome por que la había violado o algo así, pero cuando la puse la grabación de Iziar pidiendo que la follara se tuvo que tragar sus palabras, (si, seguía grabándolo todo con las cámaras que dejé puestas, a modo de precaución, esas grabaciones me habían salvado la vida más de 1 vez, y lo seguían haciendo, ¿por que parar?, me compré 3 PC baratos que tenían gran memoria de almacenamiento, solo para ir guardándolo todo, lo relevante, Liz me pegó enfadada por no decírselo, pero la enseñé las cintas y se calentó tanto que terminamos follando 4 veces seguidas.).Pero de forma increíble, ni mi hermana ni Iziar sabían ni sospechaban nada de Liz y de mi, Iziar no se acordaba de haberla empotrado contra es cristal con Liz mirándonos, estaba ida de placer, y Liz se las ingeniaba para quedar con mi hermana cuando estaba bien cubierto y así no levantar sospechas, era gracioso y excitante el juego que nos traíamos con ella, así que lo juzgábamos sin parar, siempre lejos de mi madre, queríamos jugar con fuego, no quemarnos, estaba seguro que en cuanto nos viera juntos durante 10 minutos lo sabría.

Un día estaba charlando con Liz y Dani, esperando a que Eli llegara de su programa, desayunando con ellas mientras nos reíamos y charlábamos, entre las 2 tenían la casa en perfecto estado y podían permitirse trabajar relajadas sin presiones, cuando mi felicidad, aquella que nublaba mi vista y me hacía ver todo con un extraño velo borroso, se puso en entredicho.

-YO: en serio, sin Liz seguiría follando a diario.

-DANI: tú claro, pero no ser….¿serrias?...... - trataba de empezar a conjugar los verbos y sus tiempos al hablar se extendían - ……….serias mucho menos feliz.

-LIZ: así es, ¿que seria de ti sin mí?

-YO: pues lo mismo hasta mejoraría mi vida, no te fastidia, aquí cuestionándome - me agaché besándola con fuerza, aquella camaradería entre ellas era refrescante, mantenía mi mente ágil y me reía muchísimo.

-LIZ: tú verás, pero tal como vienes de trabajar, que me haces correrme tanto que tengo que cambiar las sabanas, se diría que me tienes ganas.

-YO: eso es por que en el trabajo no tengo a nadie……….

-LIZ: lo ves, no acabaste tú “semana perfecta” jajajaja - caí de golpe.

-YO: tengo a Adriana……..- lancé a la desesperada.

-DANI: ¿Adriana?, no ser chica que tu fo….¿follarte?..... ¿y dejó trabajo? – mi silencio era un “si”, se rieron a carcajadas.

Era cierto, después de tirármela me huía, y a la semana dejó el trabajo, no se si fui yo o no, pero la cosa era que, en mi semana perfecta, había un momento en que realmente no estaba follando si quería, el trabajo, había levantado los brazos antes de cruzar la cinta del final de la meta, por suerte sabia que ese despiste no me costaría la victoria, era la hora, mi jefa iba a caer.

Maldecía por ser miércoles aun, hasta el sábado no la vería, tenia el móvil de la jefa, podía llamarla y hacer mi show en casa, pero eso “no valía”, tenia que ser en el trabajo y con ella, era un reto más, un último esfuerzo, esa apuesta conmigo mismo no era banal, no era ego, era un juego pero tenia un sentido para mi, un propósito, si podía completarlo significaría que estaba listo para lo que me aguardaba en el futuro, ya tenia clara la idea de lo que iba a hacer, pero para eso, para poder hacerlo necesitaba un empujón anímico y moral, y era llenar la semana. Así que me puse a pensar 1000 maneras de abordarla en el trabajo, eso era fácil, muy a menudo se pasaba por el almacén a “hacer inventario”, lo que hacia era devorarme con los ojos mientras sudaba colocando cajas con la camiseta trasparente de la humedad pegada a mi piel, y cuando cogía la escalera la metía mano para que no se cayera, saltaban chispas cuando la rozaba, me deseaba más que yo a ella, y no era fácil.

Mi jefa era una mujer de 29 años, rubia de pelo algo corto, le daba para hacerse coletas pequeñas, rubia de bote con raíces castañas, guapa sin destacar y con ojos negros, de 1,70 de altura, nunca la había visto desnuda, ni con otra ropa que la de trabajo, aunque me conocía bien su cuerpo, las ropas finas del uniforme ayudaban a ello, era estrecha y delgada, incluso sus brazos y sus piernas eran demasiado esqueléticos para mi, pero por lo que venia tenia buen culo bajo los pantalones verdes, prieto, alto, redondo y bien formado, se le marcaban las bragas, o el tanga, de forma clara, sus tetas no eran nada del otro mundo, una 90 como mucho, pero siempre usaba sujetadores llamativos de color rosa, rojo, amarillo, y se le translucían claramente bajo la camisa de encargada, con lo cual era inevitable mirarlo, repasando el contorno de las copas del sostén y perdiéndote entre sus senos cuando se movía para coger algo y se le veía el escote. No por faltar, pero de carácter, era una mala zorra, era de esas jefas que te sacaban de quicio, se cebaba cuando cometías un error, tenia a la mitad de la plantilla acojonada y a la otra con demasiado respeto como para cuestionarla, o si quiera bromear con ella. Solo yo y mi afabilidad la sacaban alguna sonrisa, era el único con el que hablaba de forma distendida, por que era el único que no la cagaba casi nunca, (cierto es que es difícil cagarla cargando y colocando cosas en un almacén, y lejos de las cajas registradoras y de los problemas de los cambios), así que a mis espaldas me llamaban el perro de la jefa, por que siempre que ella necesitaba algo, me lo pedía a mi, y el verbo es lo importante, “pedía”, al resto se lo ordenaba, y si no cumplían, me llamaba, me lo pedía y soltaba el látigo de su lengua contra los demás, halagándome por mi buen trabajo mientras ellas eran una panda de inútiles sin cerebro.

Me ponía en una situación delicada, pero nunca me he llevado mal con nadie, como sabéis soy muy social y me cuesta caer mal a la gente y que me caigan mal, y cuando pasa, simplemente me alejo de ellos, así que usaba mi influencia sobre ella para apaciguar sus sermones con bromas o momentos divertidos para rebajar la tensión, luego venia y me decía que la restaba autoridad ante el resto, pero nunca se mostró enfada conmigo, ni colérica como la llegué a ver con alguna novata, era suave, lo era en parte por que quería serlo, necesitaba un descanso de aquella fachada de maldad que se ponía, y en parte por que era inútil contra mi, cada vez que venia hecha una furia con 2 bromas ya le sacaba una sonrisa que la relajaba, hasta creo que me buscaba por eso, para calmarse, y alguna vez terminaba llorando de nervios y la tenia que consolar con abrazos, luego salía y la oía pegando gritos, ya no sabia que parte era la real y cual fachada, pero me daba igual, ahora era mi objetivo.

El viernes me deleité con Eli antes de que se fuera a la hora de comer, Liz me mantuvo ocupado de tarde y de noche Yasira me llevó a un sitio de marcha con sus amigas, un local latino en una zona de mala fama, sus amigas disfrutaron de mi compañía y yo aun más, alguna podría entrar en mi cajón, pero estaba centrado, le había pedido a Yasira que volviéramos pronto a casa esa noche, tenia que trabajar al día siguiente y no podía presentarme sin dormir, pero la noche es la noche y se nos hizo algo tarde, la “suerte” fue que una chica pasada de copas se me tiró al cuello, a Yasira no le hizo gracia, y al novio de la chica aun menos, comenzó una gresca en que me aseguré de que a Yasira no la pasaba nada, la protegí con mi cuerpo y me llevé un puñetazo en la espalda, me escoció, tuve ganas de girarme y apalear a quien hubiera sido, pero no podía pelearme y proteger a Yasira a la vez, así que la cogí del brazo y la saqué del infierno de borrachos, salidos y violentos que se convirtió el local, justo a tiempo para salir y que llegara la policía, sinos llegamos a quedar dentro nos tienen interrogando hasta el amanecer, alguna navaja había aparecido, tenia sangre en la camiseta, Yasira se asustó, pero me miré la piel y no tenia heridas, la revisé a ella y tampoco, seria de alguien que dejamos atrás a empujones, era poca cantidad pero la línea era recta y clara, de un filo de arma blanca, di gracias a dios y salimos de allí evitando broncas. Yasira me agradeció en casa protegerla, con un par de polvos en los que no me moví lo más mínimo, lo agradecí, tenía que estar fresco, y me dormí relativamente pronto, al levantarme le pedí a Liz que “cuidara” de Yasira, las quería a las 2 en casa a mi regreso, no sabia como iría con mi jefa y si no daba la talla volvería con ganas de saciarme, tenia tan poco tiempo para terminar mi trabajo, seducir a mi jefa y follarla, que seguramente aunque fuera bien volvería con ganas. Llegué al trabajo puntual, mi jefa ya estaba allí hacia rato y me saludó con frialdad, estaba abroncando a un chaval por alguna historia de las latas de refresco, esa mujer era incansable en sus reprimendas, cuando se cansó, y le dejó irse medio sollozando, se me acercó.

-YO: ¿ya estás liada? – la hablaba sin dejar de apilar los bandeja de tomates que había dejado el camión.

-JEFA: si es que no aprenden, estoy harta de tanto niñato, si no saben ni poner unos precios ¿que coño hacen aquí?

-YO: pues trabajar, como todos……..menos tú.- giró la cabeza medio ofendida.

-JEFA: perdona guapo, que yo trabajo como la que más.

-YO: pues yo no te veo amontonando cajas…..- puse 3 de un solo movimiento en su sitio.

-JEFA: no, si encima de todo lo mío me quieres ver cargando como una mula…..- sonreía secándose un sudor inexistente de la frente.

-YO: quizá si te vieran dando ejemplo y no echándoles la bronca, trabajarían mejor.

-JEFA: ¿a estos?, no se merecen ni que les mire a la cara, 2 han llagado tarde y una a su hora por que se ha quedado dormida borracha en la entrada, vestida de fiesta, que parecía una puta…….- se alejó vociferando -……. y el pescadero es un payaso, ni ha aparecido todavía, el único que merece la pena aquí eres tú, créeme lo que te digo - gritaba al pasillo para que la oyeran todos.

Me subía el ego un poco pero es que el nivel no era muy alto, cajeros de supermercado, tampoco era el MIT, había hasta algún deficiente mental que fregaba los pasillos, el estado les daba un pico de dinero por tenerlo, y según decía mi jefa era el único que cumplía su cometido sin errores, aunque fregar pasillos no es difícil. Me centré en lo mío y en 1 hora coloqué el almacén entero de todos las descargas de camiones, estaba empapado en sudor y jadeante, pero la 1º fase estaba acabada, ahora tenia 2 horas para seducirla y follarla, no perdería tiempo disimulando, me quité la camiseta dejando mi torso trabajado brillando de la transpiración, me coloqué la polla bien marcada y estuve 10 minutos moviendo la misma última caja de forma que cuando entró mi jefa pareciera que acababa de terminar, al verme se quedó pálida.

-YO: ¿que te pasa?

-JEFA: nada………….esto……… ¿ya has terminado? – disimuló.

-YO: esta es la última caja, hoy había poco – mentira, había lo mismo de siempre.

-JEFA: joder, estás……digo eres muy bueno…….pero…….¿y el uniforme? - me acerqué a ella secándome con la camiseta el pecho, ofreciéndola una visión libidinosa.

-YO: es que aquí hace mucho calor, me molestaba al moverme y me la he quitado, ¿me la pongo? – la pregunta era la prueba, su estricto código la obligaba a que lo hiciera.

-JEFA: no…..si ya has terminado…pues descansa unos minutos si quieres y ahora me ayudas………….con el inventario - se mordió el labio mirando mis pectorales a escasos centímetros de su cara.

La abracé levantándola medio metro del suelo agradeciéndoselo, ella sonrió, y al separase tenia la camiseta tan empapada de mi sudor que se le marcaba todo, como tenia calculado, la vi sonrojarse un poco antes de meterme en la cámara negativa, como algunos sabréis estos sitios tienen el almacén, luego una cámara positiva entre 2º y 6º grados para productos frescos, y la negativa, a -20º grados para congelados, es malísimo y me costó algún resfriado, pero me encantaba meterme en la negativa sudando, sentía las gotas recorrer mi cuerpo enfriándose y la piel endurecerse hasta parecer una película quebradiza, me pasaba allí minutos enteros, con el vapor de mi calor haciendo vaho en el frío, al salir la vi cogiendo unos papeles y me miró consternada.

-JEFA: no te puedes meter ahí sin camiseta, no es higiénico.

-YO: ¿y que más da con o sin camiseta? – me hacia el tonto.

-JEFA: pues por que no………el sudor y los pelos……- su mirada era a mi torso aunque trataba de alzarla.

-YO: mis manos y brazos no cubiertos por la camiseta sudan igual y si ves algún pelo en mi cuerpo, avísame - me abrí de brazos dejando que me radiografiara relamiéndose con una sonrisa picara.

-JEFA: ya veo, pero no lo vuelvas ha hacer, nos pueden meter un puro si te ven – asentí de forma falsa.

-YO: bueno, ¿y el inventario? – soltó una risa fugaz y alzó los papeles.

-JEFA: aquí esta todo, empezamos ya - casi era feliz de mi entusiasmo por contar cajas, paneles y bolsas.

Como siempre empezamos por abajo, lo grande y fácil de contar, yo movía cajas y ella contaba, de vez en cuando venia alguien a preguntarla pero había otro encargado de menos jerarquía fuera, mucho más amable que ella, así que nos solían dejar en paz, iba apuntándolo todo mientras yo hacia esfuerzos por mantener una caja volcada o levantada para que ella se agachara para contar mejor, yo me comía con los ojos sus escotes, y su culo prieto al moverse marcando un tanga claramente, su sujetador rosa hoy me parecía más llamativo que nunca, la vi las copas cuando se aplastó contra una columna, eran blancas rodeado de rosa, y al encorvarse para contar otra cosa, su tanga salió despedido de la cintura de su pantalón dejándome ver la parte de atrás rosada también, fue tan notorio que se puso en pie y con algo de disimulo se lo metió de nuevo en el culo, la gastaba bromas soeces mientras nos movíamos y la dejaba contar tranquila cuando señalaba con el bolígrafo lo que fuera que mirara. Le tocó el turno a las cosas de los estantes, menos grandes pero que se contaban fácil, y luego a la parte alta de los estantes, ella no llegaba bien pero yo de sobra, así que le iba bajado las cajas y ella contaba lo que había dentro, tan rápido iba que se adelantó y trató de bajar una caja ella sola y se volcó hasta casi caerle encima un montón de desodorantes, llegué justo a tiempo de poner la mano y evitar la caída pero del gesto quedé pegado a su espalda agarrándola del vientre por si tenia que doblarla para protegerla con el cuerpo, con mi rabo en su culo y mi pecho desnudo en su espalda, con los brazos estirados hacia arriba cogiendo la caja.

-YO: ten cuidado bonita, que te has podido hacer daño - no soltó palabra, ni se movió, casi creo que degustaba la sensación de estar rodeada de mis brazos y mi verga posada sobe sus nalgas.

Bajé la caja y lo contó dándose algo de prisa, la situación se repitió varias veces, creo que las provocaba, y cada vez mi llegada era más apurada, y mi golpe con la pelvis más violento, la salía un suspiro cada vez, hasta que a la última no me dio tiempo, tiró de 2 cajas y se volcaron, me dio tiempo a echarme encima de ella y sentir como paquetes de arroz de 1 kilo me caían en la espalda sobre nosotros, si crees que 1 duele imagina 37, no todas me alcanzaron pero aguanté agachado con ella escondida debajo de mi, hasta que cayó la última.

-JEFA: ¿estás bien?

-YO: como una rosa ……..– mentí, alguna me había hecho daño, pero era un tío fuerte y orgulloso - …..¿y tú?

-JEFA: no me ha dado ninguna, gracias – me besó en la mejilla y nos separamos un poco, su mano se poso en mi pecho levemente antes de apartarla.

-YO: pues nos acabas de enterrar en arroz - nos reímos al vernos rodeados, alguno había reventado al chocar y teníamos arroz por todos lados, me puse en pie y le ofrecí mi mano con gentileza para ayudarla a ella, se elevó repasando de cerca mi cuerpo y cuando estuvo en pie la cogí de las costillas y en un movimiento de arco la saqué de la montaña de paquetes posándola entre risas a salvo.

Las coloqué y conté a la vez para dejarlas en su sitio, al terminar sentí las manos de ella en la espalda.

-JEFA: mira como te he puesto……..- me giré inútilmente intentando ver mi espalda, aunque si vi en un costado una rojez en forma de paquete.

-YO: joder, no me veo, ¿está mal?

-JEFA: ¿no te duele?

-YO: que va……..- me escocía, pero solo si rozaba ciertas partes.

-JEFA: tienes la espalda llena de golpes……….lo siento – creo que fue la 1º vez que se lo oí decir.

-YO: no pasa nada, todos cometemos errores, venga, que queda la parte de arriba - la cogí de la mano y la besé para restarle importancia a mis golpes, en unas horas se irían las marcas de la piel.

Sonrió aliviada, y se mostró cauta con la escalera que usábamos para llegar a las zonas altas, era vieja, le faltaba el escalón de abajo y cojeaba de una pata, era un peligro publico en si misma, pero era lo que teníamos, ni siquiera yo llegaba a ver lo de arriba del todo así que ella, menuda y grácil, se subía mientras yo mantenía la estabilidad con los brazos, era divertido verla subir y bajar tantas veces, arriba las cosas pequeñas y más sueltas costaba contarlas así que me deleitaba con su trasero, al faltar el ultimo escalón siempre daba un salto al bajar y al subir, sus senos botaban lo suficiente para que, muy recatadamente, se tapara con los papeles para no dejarme verlos rebotar. Lo mejor eras las esquinas, había poco espacio por 2 columnas así que tenia que ponerme detrás de ella según subía, y para evitar que se moviera la escalera, sujetar con ambas manos, así que se frotaba la espalda contra mi mientras subía y bajaba, dando saltos, la divertía tanto como a mi, estaba acalorada y sudando la camiseta se le pegó hasta ser solo una segunda piel, se le marcaban los lunares y salvo el sujetador podría hacerlos una descripción de cada palmo de su torso, al estar abajo la veía por encima del hombro el amplio escote vibrando cuando escribía, yo me seguía haciendo el tonto y le pasaba los bazos por encima para indicarla cosas obvias, así la rodeaba con los brazos, ella giraba la cara mirando como si fuera retrasado, pero sus labios y la nariz se rozaban con mi mejilla o mi cuello, la devolvía la mirada quedando a escasos milímetros de su cara, mirándola a unos profundos ojos negros sin apartarla la mirada, y cuando me explicaba lo tontería que había preguntado dejaba caer mi cabeza en su hombro fingiendo sentirme avergonzado, pero la hacia reír y yo olía su cuerpo, el trabajo allí no olía a jardines, pero el cuerpo de una mujer bonita rara vez huele mal, y ella no era diferente. En las últimas veces movía algo la escalera con ella arriba para bromear, ella se aferraba gritando de nervios, fui a por todas, habíamos terminado y me quedaba como una hora hasta salir, volví a mover la escalera cuando terminó de contar.

-JEFA: para, Raúl, que me vas a matar.

-YO: no seas boba, no te vas a caer.

-JEFA: me puedo caer de la escalera.

-YO: podrías, pero no tocarías el suelo, te cogería antes de que te ocurriera nada.

-JEFA: no podrías conmigo si caigo desde esta altura - tenia algo de razón, sus pies encima de la escalera estaban a la altura de mi cabeza.

-YO: como a una pluma

-JEFA: exageras……….

-YO: ¿no me crees? salta……..- me miró incrédula.

-JEFA: ¿que dices chalao? – se puso colorada ante la idea.

-YO: ¿no te fías de mi o que?

-JEFA: claro que me fío, pero….- la corté.

-YO: pues salta, ¡¡venga!! - movía la escalera un poco haciendo que se agachara para aferrarse a la parte alta.

-JEFA: vale, para, para, por dios, jajajajjaa ……..- era una travesura y a toda mujer estricta le gusta hacer alguna de vez en cuando-…… pero cógeme por lo que más quieras.

-YO: no caerás, te agarraré como sea, pero no tocarás el suelo.

Contó hasta tres y cerrando los ojos con un ligero grito de vértigo se dejó caer de espaldas, medí perfectamente, una mano rodeó su cintura y la otra una de sus tetas, encorvé el cuerpo para recibir el impacto y su espalda se pegó a mi pecho, con las piernas dobladas y encogidas, bufé del esfuerzo pero la tenia sujeta y a salvo, de la caída, claro está. Reía sin parar cuando sin dejarla posar los pies andaba hacia atrás dándola con mi polla semi erecta en su trasero, al posarla en el suelo la doble la espalda hacia delante besándola la nuca como gesto de cariño, al ponernos rectos sonreíamos sin parar.

-YO: ¿ves?, como una pluma, tú confía en mí.

-JEFA: lo hago, si no, no me hubiera tirado jajaja estás muy fuerte - acaricia mi antebrazo en su vientre.

-YO: es que cargo mucho peso en el trabajo, mi jefa me explota - me golpeó la mano en su ombligo como replica aspirando abriendo la boca.

-JEFA: serás mentiroso…..- a todo esto mi mano seguía aferrada a su pecho, de la caída se le había salido la camiseta y la sostenía del sujetador directamente, rozando con las yemas la parte descubierta de su seno - ………anda suéltame.

-YO: no quiero……….- burlón de mí, parecía otra broma.

-JEFA: Raúl……..me estás agarrando una teta – su tono denotó que por ahora tenia que recular, era un aviso inocente, como si no me hubiera dado cuenta, no acusador.

-YO: joder, perdona……- solté de golpe mientras ella reía se gritaba para mirarme.

-JEFA: no pasa nada…….…así te compenso por lo del arroz jajajaja……..…- se colocó la camiseta con delicadeza -……..anda, ayúdame a pasar al ordenador todo eso.

La seguí improvisando, me la había puesto durísima tocarla así, y aunque no se note en este relato, su actitud tan cruel con los demás y tan dulce conmigo me calentaba, estaba resultando difícil, pero a estas alturas ya sabía que solo tenía que ser yo y esperar el momento adecuado. Nos sentamos en el cuarto de encargados donde solo ella tenia acceso, para hacer los pedidos y las incidencias, había un par de tomates pochos con los que jugaba a malabares mientras repasaba las cuentas del inventario con ella, me había sentado a su lado con la polla bien marcada y dura sobre mi pernera izquierda, recostándome hacia atrás para dejar que luciera, y la pillé mirando 3 o 4 veces, me repetía que me estuviera quieto con los tomates hasta que se hartó.

-JEFA: ¡raúl, para ya!

-YO: solo estoy jugando…….

-JEFA: pues para, no todo es jugar, deja los tomates en la mesa……….. y haz el favor de sacarte eso de los pantalones……- aluciné sin entenderla.

-YO: ¿que?

-JEFA: no me gusta que juguéis con la comida, es género que perdemos.

-YO: son tomates pochos que vamos a tirar……- aun no la entendía, pero se me daba bien seguir el rollo sin delatarme.

-JEFA: ya, y el pepino que te has metido en los pantalones para hacer la gracia, ¿que? - estaba enfadada realmente, y más cuando me eche a reír.

-YO: no es un pepino jefa…………

-JEFA: pues calabacín, o lo que sea, no puedes estropear producto de es forma………- rompí en carcajadas que la pusieron roja de furia.-….. ¿se puede saber que te hace tanta gracia?

-YO: ¿quieres la verdad? – me secaba las lagrimas de la mejilla.

-JEFA: claro……..- espetó seria.

-YO: no me he metido nada, lo que ves es mío - un leve gesto en la cabeza con una sonrisa ñoña falsa me indicó que no me creía.

-JEFA: ya………. – seseó la letra mirándomela con el descaro en su seguridad en la broma del bulto de mi pierna, me lo puso en bandeja, de un gesto hábil y rápido desabroché el pantalón sin llevar slips y me saqué la polla delante de ella, saltó orgullosa ante sus ojos, tiesa de los roces previos.

Su cara fue una mezcla de incredulidad, vergüenza y pánico, se levantó de la silla echándose atrás tapándose la boca con ambas manos, solo una inspiración de su parte y mis risas rompían el silencio, eso y mi mano meneándola ante sus ojos.

-JEFA: no…..no puede ser…….¿eso es tuyo? - lo señaló desde la lejanía.

-YO: no, me lo han prestado, no te jode………

-JEFA: haz………..el favor y métetela en los pantalones, por dios. Lo siento……….no creía que…… dios………- me reía mientras me la volvía a guardar.

-YO: ¿no creías……. que? - apreté la tuercas mientras me la colocaba igual de clara y evidente que antes.

-JEFA: joder, es que……..nada, déjalo, sigamos - asentí con risas, ella me miraba con odio por haberla dejado en ridículo, pero en su cabeza pasaba la imagen de mi polla, y la miraba de reojo.

Terminó de contar perdiéndose veces por prestar más atención a mi entrepierna que a sus números, estaba distraída y tensa, como me gusta tenerlas, al acabar se puso en pie, archivando las hojas y me puse en pie para dejarla pasar al armario donde las dejaba, no era un palacio, era estrecho y no me aparté demasiado así que su culo se rozó con mi polla de nuevo, se le cayó una hoja, le temblaban las manos, quiso agacharse pero se dio cuenta de que si lo hacia me dejaba el culo ofrecido, así que fui yo quien me agaché a por ella, se la di y la cogió sin apenas mirarme, me estaba rozando bastante cuando se giró de bruces.

-JEFA: tengo que saberlo, ¿estás………empalmado? - había caído.

-YO: un poco, pero no estaba del todo - su expresión era de curiosidad erótica.

-JEFA: ¿pero la tienes así siempre o………?

-YO: me la has puesto morcillona tú, con tus roces y tu pecho agarrado, soy un hombre y no puedo evitar que me excites.

-JEFA: pero solo estabamos jugando Raúl, no puedes ponerte así.

-YO: díselo a ella….. – me agarré la polla con desdén -….. ¿que hago? ¿no te miro tu precioso culo cuando te agachas o dejo de mirarte el sujetador llamativo bajo tu camisa?..... - se sonrojó - ….no pidas imposibles, bastante tienes con que no te haya saltando encima al estar con la camiseta empapada de sudor - se miró apreciando como la tenia pegada al cuerpo.

-JEFA: pues más te vale desahogarte antes de que alguien te vea en el trabajo, eso es mala imagen.

-YO: eso es fácil de decir, pero si se me pone como ahora contigo, o follo o no se me baja – mi franqueza siempre bien recibida, esta vez la ruborizó.

-JEFA: ese es tu problema…..- balbuceó cuando me vencí sobre su cuerpo.

-YO: tú lo has provocado, soluciónalo, “así me compensas por lo del arroz” – repetí sus palabras, ella clavó su mirada en mi cara esforzándose por apartarse de mi pero el armario se lo impedía y mi polla palpitaba en su vientre.

-JEFA: soy tu jefa……..- no dijo más, un suspiro la acalló cuando la besé el cuello.

-YO: si, me voy a follar a mi jefa - la cogí de la cintura y la senté en la mesa mientras nos besábamos con pasión.

Sus manos fueron a mi paquete sin duda alguna, acariciándolo con las manos, yo la besaba mientras la sujetaba la cara, metiendo mi lengua hasta ahogarla, se soltó la coleta y tiré de su pelo para echarla la cabeza haca atrás y lamer su cuello y el escote, con habilidad sacó mi miembro de los pantalones y al rozarlo quiso mirarlo, tiró de la piel hacia atrás y pajeó son suavidad, sus dedos no daban abasto, y su cara era de estupor, la rompí los botones de la camisa y la saqué por detrás aprovechando para quitarla el sujetador, unas tetas muy bien colocadas, aunque no grandes, aparecieron coronadas por pezones minúsculos, casi sin aureola, las acaricié levemente antes de chupar uno de ellas, mi polla ya estaba empalmada cuando se arrodilló a chupármela, más bien lamerla, no le entraba en la boca el glande, pero sabia moverse, pegó su boca a la base lamiendo los testículos mientras masturbaba con fuerza y me miraba a los ojos directamente, la devolví la jugada poniendo en pie y bajándola el pantalón, el tanga salió disparado y la abrí una pierna lamiendo su coño, una línea gruesa de cabello castaño no evitó que la metiera la lengua buscando el clítoris trabajándolo, gimió ahogadamente, cuando metí un dedo sentí su calor, me apartó y cerró la puerta con llave, me sentó en la silla y se abrió de piernas para sentarse encima de mi, de cara, apunté a su coño y la fui penetrando lentamente, su registro de caras pasó de la impresión al placer y luego a la exclamación más grande de lujuria cuando lamía sus senos mientras daba golpes ligeros de cadera, una vez gran parte dentro empezó a botar encima mía, gemía desaforadamente, apenas contenía sus gritos besándola y provoqué 2 orgasmos seguidos que la derritieron, la levanté y la puse a 4 patas sobre la silla, lamí su coño y la volví a penetrar del tirón, sus labios se abrían con fuerza y me aferré a sus caderas para bombearla sin compasión, era la hora de darla de su medicina, saqué a la bestia y la follé salvajemente sin hacer caso de sus palabras de clemencia y socorro, hasta que se acabaron y solo gemía de placer, se corrió tantas veces que la silla quedó pringada del fluido que bajaba por sus muslos, la azotaba divirtiéndome ante la visión de su espalda tensándose como la de un gato al que pillas por sorpresa, pero con cada embestida, daba golpes a la silla con las manos mientras pedía que no parara nunca, se desfondó cuando su interior empezó a emanar fluidos a chorros, allí aceleré y demostré parte de lo que era capaz, gritaba de forma continuada hasta quedarse sin aire, babeando, cuando me corrí sentí sus paredes vaginales contraerse de forma visceral, justo a la hora de finalizar mi turno, la cogí de las tetas y la pegué a mi espalda, besándola el lóbulo de la oreja.

-YO: a partir de hoy te voy a quitar la mala leche a golpe de sexo - asintió girando la cabeza para besarme.

-JEFA: yo……………….dios……………..yo…………..soy tu jefa………..- la pellizqué los pezones haciéndola retorcerse.

-YO: cierto, procura que pasemos más tiempo juntos, un aumento de sueldo no estará mal, esto solo ha sido un aperitivo - la azoté el culo y para asegurarme la hice un vídeo chupándome la polla, dejándola limpia, no vio el móvil, solo una verga imponente, algo flácida, llena de su emanaciones.

Me guardé su tanga en el bolsillo mientras me vestía, ella se recomponía pedazo a pedazo sobre la silla, me fui dejándola ida, preguntando donde estaba su tanga, cuando se diera cuenta y tuviera que volver al trabajo y a casa sin ellas se enfadaría mucho, me fui a mi casa con una sensación plena, de conquistador triunfal, subí corriendo al piso de arriba y me quedé deleitándome con el culo de Liz en pompa y con la cabeza metida entre las piernas de Yasira que se revolvía de placer sujetándola del pelo, tardaron unos minutos en percatarse de mi presencia, Liz me miró con la boca llena de babas y fluidos de Yasira, que aun movía la cadera de forma residual.

-LIZ: ¿que tal en el trabajo? – le tiré el tanga de mi jefa a la cara.

-YO: ya ha caído, ya tengo mi semana completa – lo cogió e inspiró de él la humedad que quedaba.

-LIZ: felicidades, ¿quieres que lo celebremos juntos? – me llamaba con el dedo índice.

-YO: no se si molestaría, parecíais muy entretenidas sin mi – ya me estaba desvistiendo.

-YASIRA: se bueno y ven a la cama con nosotras, Liz solo me estaba entreteniendo – las sonreí aunque solo Liz entendió mi agradecimiento más profundo.

-YO: dejad que me de una ducha, apesto a sudor y sexo – sus miradas parecieron indicar que no les importaría, pero a mi si.

Las dejé en la cama retozando una con la otra, “mis diosas de ébano”, me di una ducha fugaz pensado en ellas 2, Liz era más corpulenta, Yasira era mucho más estilizada y atractiva, pero ambas me la tenían ya dura al salir de la ducha, ni me molesté en secarme, me fui a la cama con ellas, Yasira se derretía abierta de piernas ante la lengua de Liz en sus senos, al verme se apartó levemente dejándome a Yasira totalmente ofrecida, me tumbé en la misma poción donde había estado ella y penetré lentamente el coño de Yasira, Liz se levantó para irse, Yasira era bastante mujer como para deleitarme con ella sola, y los 3 lo sabíamos, pero al girarse la agarré del brazo tirándola a la cama, entre risas la puse a 4 patas encima de Yasira, y mientras me la follaba, Liz la acariciaba y besaba por todas partes, los orgasmos de Yasira llegaron y al tercero cambié de agujero y fui al coño de Liz que al sentir mi verga abrirla de una estocada arqueó la espalda con una deliciosa desesperación, era maravilloso meterla así en una mujer y que no berreara de la impresión, si no que la disfrutara, la bestia salió al ruedo, Liz apenas se contenía con la lengua de Yasira, y cuando aumentaba el ritmo se cuadraba aferrándose a la mujer que tenia debajo compartiendo la carga que tenia detrás azotándola, sus corridas fueron aun más rápidas y me corrí en su coño descargando cierta ira retenida, mi jefa solo me dio para 1 polvo y me había reservado para nada. Liz cayó rendida a un lado y Yasira salió al rescate, me chupó el miembro hasta que estuvo duro, me tumbé boca arriba y ella se preparó el ano, metiéndose mi rabo de espaldas a mi, boca arriba, su gemidos al follarla por el culo eran diferentes, como un ronroneo de gata, le encantaba más que nada, y cuando Liz se puso entre sus piernas comiéndola el coño mientras la follaba el ano, se movió como nunca la había visto, golpeaba la cintura al bajar con tanta energía que me hacia daño, y se corrió de tal manera que Liz se atragantó con un chorro que salió disparado, pero continué hasta llenarla el culo de semen, Yasira se retiró del partido gateando fuera de si. Liz se me subió encima a 4 patas y frotó mi polla con su pelvis hasta que estuvo dura de nuevo, apuntó a su coño pero la mandé que se perforara el ano, sonrió gustosa, se empaló el culo con tanta facilidad como su coño, aunque su rostro era de dolor al principio, cuando empezaba a moverme lentamente se le iba pasando y disfrutaba gozando de como la abría, sus orgasmos anales eran descomunales y se retorcía de forma animal, le agarraba de los senos mientras los lamía pellizcándolos con los dientes, hasta vaciarme otra vez, jadeante y satisfecho.

Liz bajó a la cocina y subió tambaleante una botella de agua, me podría enamorar de ella si no dejaba de complacerme de esa manera, me bebí la botella entera, y me acosté a dormir, estaba cansado, y ellas dos se recostaron sobre mi pecho una a cada lado, acariciándonos en un festín erótico en el que cualquier hombre desearía quedar dormido. Al despertar Yasira ya no estaba, pero Liz permanecía a mi lado, me preparó algo de comer y pasamos el día en la piscina jugando y follando cuando me apretaba la polla, ella parecía tan cansada y exhausta como yo, pero era un castigo divino, mi rabo erecto tenia que ser colmado. La noche la pasamos tranquilos y al día siguiente acudí al trabajo como si nada, mi jefa estaba como siempre, echándole la bronca a una chica, la imagen se repitió, me saludó con seriedad, empecé mi trabajo y a mitad de turno se presentó ella para ayudarme, entre los 2 acabamos en nada.

-YO: que rápido.

-JEFA: mejor, así pasamos a otras cosas.

-YO: ¿inventario? – sonrió mientras se acercaba a mi y me agarraba el paquete por encima de la ropa.

-JEFA: vamos a dejar el inventario para otro día….. – me besó con pasión jugando con su lengua –…….. vamos a ver de que eres capaz, y que sepas que quiero mi tanga de vuelta…… – me agarró la mano y la metió en su pantalón hasta sentir su coño desnudo -…… no pienso llevar bragas hasta que me las devuelvas – apreté su coño con suavidad y suspiró acariciándome el pecho.

-YO: pues te vas a ahorrar un dineral en ropa interior.

Me arrastró a su despacho, cerró la puerta y me desnudó a empujones, al ver mi polla su coño casi goteaba, se arrodilló a comérmela con una pasión desenfrenada, se desnudó tan rápido como a mi y tan cierto era que no llevaba bragas como que me daba igual, la empotré contra el armario de espaldas y la penetré el coño por detrás, levantándola una pierna e incidiendo directamente en su punto G, follándola fuerte y sin miramientos, ella no dejaba de jadear y decir “vamos………..sigue……..doma a esta yegua salvaje……. tírate a tu jefa”, me reía ante aquella estupidez, pensaría que me calentaba o algo, pero no hacia falta, sus fluidos cayendo por mi verga eran suficientes, me daba órdenes sobre acariciarla un pecho o besarla terminando con un “a tu jefa” cada frase. Cuando la llené de semen se pasó 10 minutos temblando en una silla, mientras de rodillas le comía las tetas, cuando la tuve dura otra vez la penetré tal como estaba, sentada en la silla de piernas abiertas, eso la pilló por sorpresa, no esperaba una 2º tanda y eso la mató, se dejó de payasadas de jefa y solo gozó corriéndose a borbotones, me clavó las uñas en la espalda y se aferró a aquella sensación tan dulce y placentera, estaba mareada y aun así exigía que no parara, al ir a correrme la saqué de su coño y la puse a chuparla hasta que la llené la boca con palpitaciones en el glande, no mostró el menor atisbo de repugnancia y se tragó todo, dejándomela tan limpia que parecía que aquello no había pasado.

-JEFA: ¿me das mi tanga ahora?

-YO: jamás.

-JEFA: pues tendré que repetir esto contigo cada día hasta que te obligue a dármelas.

-YO: me parece justo, soportaré la dura carga lo mejor que pueda – tiré de su pelo hacia atrás besando con furia.

Me fui media hora antes de mi turno, no tenia nada que hacer allí, aquella mujer ya era mía, no se que tendría con aquel tanga pero no pensaba devolvérselo, y menos si era lo que la mantenía abierta de piernas, seria un juego o no, pero no iba a ser tan tonto de averiguarlo.

Viajando en el tiempo pasaron otras 2 semanas en las que ya si, contando mi jefa, follaba cada hora del día, o podía hacerlo, el lunes siguiente del estreno con la jefa me llamaron de la empresa y por recomendación, de mi jefa, me aumentaron el horario y el salario, me ascendieron a encargado de las mañanas en fines de semana, pero hacia lo mismo con alguna responsabilidad extra, eran solo un par de horas más y el doble de sueldo, en realidad solo trabajaba las mismas horas que antes, el resto lo pasaba encerrado en el despacho follándola sin parar. Tuve que dejar a Liz un poco de lado a lo largo de la semana por que ya no daba para más, aunque siempre tenia 1 o 2 horas con ella, se lo ganaba a pulso, su forma de tratar, seducir y dar placer a las mujeres era similar a la mía, incluso me consiguió un viejo sueño erótico de mi juventud, una amiga, bueno, ex amiga de mi hermana, el “zorrón” de la promoción de Liz que se pasó por la piedra a medio instituto, cura incluido según decían, y tenia la fama que se merecía, era amiga de mi hermana hasta que se intentó tirar al chico que le gustaba, allí la puso la cruz, para mi y mis amigos con 4-5 años menos era como un mito erótico del instituto, el sueño de nuestro despertar en la pubertad, me la trajo tan blandida que ella misma la desnudó en la puerta y me la llevó así para que me la follara sin más, tenia tal fama de guarra que fue de las pocas a las que me tiré con condón por miedo a coger algo, estaba tan demacrada y estropeada que fue horrible, los mitos han de quedar como mitos, si los conoces pierden su valor.

Lola – Sustitución.

En una de esas tardes, con Jeni después de correr, y en un intento más de empezar con el anal cuando la estaba penetrando muy animadamente, se puso furiosa y estalló gritando que estaba harta de todo, traté de calmarla pero fue imposible, aun no se que la pasó, se marchó dejándome allí tirado, me importo muy poco, Liz acudió al rescate y terminé con ella, jadeando y jugando con los dedos en mi vientre se estremecía de placer.

-LIZ: ¿que ha pasado?

-YO: creo que me he quedado sin mi “zorra de las tardes”.

-LIZ: una lastima……- la ironía en su sonrisa era evidente.

-YO: pues si, aunque teniéndote a ti no me preocupa……- suspiré cansado -……..lo mismo me viene bien, no tengo fuerzas.

-LIZ: eso dices, pero siempre vas a por otra……..- me besó en el pecho, mordisqueándome un pezón con una sonrisa caliente.

-YO: jajaja pues si, quizá pueda traerme por las tardes a la vecina de abajo, es muy mayor pero me encanta como grita cuando la follo por detrás.

-LIZ: ¿y la hija del panadero? – me estaba ayudando a decidir, que espectáculo.

-YO: esa solo merece la pena cuando sale de trabajar por las mañanas, cuando huele a pasteles y bollos.

Pasamos una media hora hablando de opciones, cuando mi móvil sonó, no era un mensaje ni ninguna llamada, el tono era diferente, lo cogí extrañado y al leer la pantalla esbocé una sonrisa, Liz me miró y quiso verlo. “CULMPE LOLA MAÑANA.”. Era la alarma que me puse cuando le cogí el DNI a la Benjamin del grupo de deporte, al día siguiente cumpliría los 18 años y ya podría ser mía, la sola idea de tenerla abierta de piernas por fin después de la espera me la puso dura, era un fruto prohibido que por fin probaría. Lola me tenia unas ganas locas, y ya sin Lucia para “educarla” estaba suelta como nunca, recuperando mis palabras (Lola, la menor, que en realidad se llamaba Casandra, pero todas la llamaban lolita por su aspecto y su forma de ser, tanto que al final se quedó en Lola, era una muñequilla preciosa, rubia, pelo largísimo hasta la cintura, iba sin coleta, solo al correr se hacia un moño de forma graciosa, con una cinta de pelo y un bolígrafo, de ojos azules y un cuerpo diminuto pero repleto de curvas que se desarrollaban, senos bien formados, enseñando gran parte del ombligo, con un piercing en él, y la espalda al aire, con los leggins bien bajos en la cintura y el culo prieto y firme que su edad le concedía, si pasaba del 1,57 era de milagro, con los pómulos llenos de pecas, una cabra loca en su forma de comportarse y actuar, una de esas crías que son buena gente pero que parece que no tenían padres que la educaran, hablaba de forma barriobajera, mascaba chicle sin parar, hacia cosas como meterse la mano en el culo para sacarse el hilo del tanga mientras decía abiertamente que la picaba el culo, poco refinada por así decirlo, se comportaba como una adolescente rebelde, Lucia y las demás la tenían tiesa como una vela, al ser la más joven todas hacían de madre, parecía que la estaban educando ellas con continuos rapapolvos, habían conseguido que dejara de montar líos, ya que a la mínima se ponía hecha una furia, y que mostrara respeto y algo de educación.)

Liz se percató de que ya había encontrado a mi objetivo, y se aprovechó para que la diera por el culo durante una hora, pero en mi mente solo estaba el cuerpo de Lola, sus curvas juveniles, y su actitud alocada me parecían apetecibles, al terminar con Liz la dije que se pusiera algo de ropa encima y me acompañara a un centro comercial, tenia que regalarla a Lola algo que la gustara por su cumpleaños y nada como una mujer similar para decidir, Liz no lo era, obviamente, era lista y de personalidad opuesta, pero conocía a las mujeres, al llegar la pedí que buscara a alguna dependienta “choni”, (término acuñado para definir a esa parte de la juventud de barrio bajo y sin muchas luces, adoradores de la musca electrónica, los coches tuneados, las drogas y las borracheras en polígonos), Liz localizó a varias, dependientas de ropa y zapatos es donde suelen encontrar trabajo, a ellas las pedí que escogieran la ropa que a ellas les gustaría que les regalaran, alguna siendo buena vendedora me quería colar ropa cara, pero Liz las frenaba los pies. Al final salí con un par de bolsas de ropa, unos zapatos y una caja de maquillaje completa, todo lo que una choni desearía, minifaldas, tops ajustados, leggins ceñidos, pantalones deportivos, hasta me permití el lujo de comprarla sujetadores y tangas a juego, aunque eso era con trampa.

Estaba tan entusiasmado que no solté a Liz en toda la noche, ayudó bastante que Eli volviera a estar de viaje, por la mañana no salimos de la piscina ni dejamos de follar, Liz parecía a punto de desmayarse cada vez, pero quería estar bien desahogado para Lola, estaba convencido de que su cuerpecito de niña no me llenaría, era el morbo lo que me llamaba y no otra cosa. A la hora de comer Dani y Liz se esmeraron en complacerme, Dani con uno de sus platos deliciosos y Liz comiéndome la polla por debajo de la mesa, Dani se quedaba mirando mientras sus mulos se frotaban, la veía en los ojos que Liz la ponía cachonda, la sumisión que mostraba conmigo la recordaría algo que la excitaba, no tardaría en caer en mi red. Dani me pidió que si podía llevar a su hijo a la piscina de casa y le dije que si sin pestañear, su hijo era una monada y muy gracioso, delante de él nos comportamos como gente normal, y su marido en paro se moría de celos al verme bromear con su esposa en biquini, un cuerpo de modelo pasando por una mala racha, no me lo creía, era tipo era un cuarentón con barriga cervecera, solo dios sabrá que hacia una preciosidad como Dani con él, “conseguir papeles” me dije, pero no era mi problema.

Dani seria otro día, descansé para llegar fresco y me vestí de forma normal, ni iría a hacer deporte, cogí las bolsas con todos los regalos y me dirigí al parque por la tarde, al verme vestido normal las mujeres se desanimaron un poco, pero Lola llegó justo a tiempo, al verme la solté un abrazo.

-YO: ¡felicidades preciosa!

-LOLA: joder tronco, muchas gracias, ¡ya tengo los 18! – noté sus incipientes pechos en mi vientre, iba como siempre, leggins bajos, tanga marcado, y sujetador deportivo enseñando el ombligo con el piercing, el pelo largo rubio cayéndole a la altura de la cintura.

-YO: ya te veo, ya puedes votar y beber alcohol……

-LOLA: yo paso de votar, eso es de “carcas”, además yo ya bebo cubatas desde hace años jajajaja menudos pedos me cojo jajajajaja – “viva el futuro del país” - oye, ¿que te pasa hoy?, ¿no corres con nosotras? - señaló mi vestimenta.

-YO: no, hoy estoy muy cansado, solo he venido a traerte esto - saqué las bolsas y se las di, su cara fue como la de la niña que era, en Navidad, se lanzó a mi cuello a besarme la mejilla colgada de mi rodeándome con sus brazos, su cabeza apenas me llegaba al pecho.

Se olvidó del resto de mujeres que echaron a correr detrás de Jeni, que me fusiló con la mirada, se fueron sin Lola, y nos sentamos en un banco a charlar y mostrarla lo que le había comprado, di en el clavo y le encantó todo, sonreía sin parar y se ponía en pie colocando las prendas encima del cuerpo para ver como la quedaban, incluso la ropa intima, al ver los sujetadores torció un poco el gesto, sonreí al saber por qué.

-LOLA: joder, te agradezco mucho to´ esto, me mola mazo, pero es que estos sujetadores son muy grandes……- los había comprado así a propósito.

-YO: ¿si?, será que tengo mal ojo.

-LOLA: no pasa nah, si tienes los tickets puedo ir a descambiar - rebuscaba en las bolsas, pero no los encontraría, estaban en mi casa.

-YO: pues si no están ahí estarán en mi casa.

-LOLA: ¿y ca´ hacemos? ¿me los traes mañana?

-YO: puff, no, por que se me olvidan seguro, si no vas a correr puedes pasarte ahora y los buscamos – torneó los ojos.

-LOLA: jo primoh, eres la hostia - lo interpreté como un si, por que no lo dijo.

Al ponerme en pie me abrazó colgándose de nuevo sobre mi, fuimos charlando el camino a mi casa, me dijo al tener 18 años ya sus “viejos” no podían decirla nada y tenia pensado hacerse un tatuaje tribal encima del culo, el conejito de play boy en un lado de la cintura y le piercing de la lengua, todo muy original (entiéndase la ironía), a mi ese tipo de tonterías no me gustan, sobretodo lo de la lengua, y se lo dije, pareció disgustada, pero le daba igual, su forma de hablar tan estrambótica no me despistaba de mis objetivos.

-LOLA: tienes el pelo mazo largo tú…….- ¿era una pregunta?

-YO: si, me lo tengo que cortar en breve.

-LOLA: mejor, estás más mono con el pelo corto, ¿sabes? Voy a ser peluquera, me encanta to´ ese tema, de peinar y eso - me contenía la risa, su forma de hablar era tan limitada que me podía, pero la verdad es que me enseñó fotos suyas en el móvil de peinados que se había hecho o a sus amigas/os, y eran muy bonitos, peluquera es otro oficio al que suelen acudir esta tribu urbana, y vi la oportunidad.

-YO: pues ya que eres tan buena, ¿por que no me lo cortas tú? - me miró ilusionada.

-LOLA: ¿me dejarías?, no tengo titulo ni nah……..

-YO: mientras no me cortes la cabeza – se riñó pegándome en el brazo con fuerza, para ella, a mí apenas me dolió.

-LOLA: pos claro que no, capullo, soy una profesional, en cuanto acabe el curso pienso meterme a hacer un curso de peluquera.

-YO: ¿esteticista mejor?

-LOLA: bueno, eso, en cuanto me libre de mis viejos me meto a currar donde la Yoli - supuse que seria una peluquera que conocía.

Llegamos a casa y el ritual de siempre, el edificio y el piso hablaron por mi, su cara y sus palabras soeces fueron igual que las de tantas otras, pero más atrevida, el “ala tronco, que peazo choza” solo era una forma diferente de decir lo que todas las que habían entrado pensaban. Busqué los tickets y se mostró tan amigable que la vi venir, la enseñé la casa menos la habitación de Liz, donde sin duda estaría encerrada.

-YO: pues aquí los tienes – le di los tickets.

-LOLA: muchas gracias, que sepas que esto me ha llegado a la patata – se golpeó el pecho con el puño cerrado.

-YO: no pasa nada, pero me da cosa que haya metido la pata con las tallas, deberías probártelo todo ahora para saber que te queda bien.

-LOLA: hostia….pues si, ¿ande me puedo cambiar? – la acompañé a la habitación de abajo y la dejé sola, corrí al piso de arriba y me mentí en la habitación con Liz, estaba con el PC ya preparado, con la cámara oculta de esa habitación puesta.

Me tumbé a su lado mirando como Lola 1º revisaba la habitación quedando asombrada, luego se fue desnudando y no pude evitar aun erección, “que belleza de cuerpo”, era lo que llaman una petite, joven, aun sin desarrollar del todo y con un tipín de escándalo, una bomba sexual que con 25 años podría hacer lo que quisiera con cualquier hombre, tenia que mejorar el lenguaje corporal y la posición del cuerpo, muy poco estilizada, pero extrañamente femenina. Liz se dedicó a chupármela mientras yo no apartaba la vista de la pantalla, se ponía las prendas y se las quitaba, todo le quedaba de cine, ceñido y ajustado, los sujetadores obviamente le quedaban grandes, naturalmente, aun estaba desarrollando los pechos, tendría una 85 y el compré una 95, fue una apuesta personal, algún día lo llenaría, estaba seguro, así que se probaba todo sin sostén, los llevaría de adorno por que sus senos estaban firmes y duros, cuando se probó los tangas y la vi el coño depilado casi me da algo, no se si era Lola, o la lengua de Liz, pero me estaba poniendo malo, descargué mi semen en su boca y se lo tragó como siempre, me serené un poco y me dejé solo un bañador con la polla medio tiesa notándose al moverme, salí al salón y la esperé con cautela, al salir se quedó mirándome y se mordió el labio al ver mi torso desnudo.

-YO: ¿que tal todo?

-LOLA: genial, me encanta, menos los sujetadores todo esta bien.

-YO: pues ya está, todo para ti, podemos ir a descambiarlos mañana, y así te traes las cosas para cortarme el pelo.

-LOLA: ¿mañana?

-YO: claro, así te acompaño y te compro algo más que te guste – sonrío lanzándose a mis brazos, era una cría aun, con unos cuantos regalos se abriría de piernas sin problemas.

-LOLA: eres un crack, que bien te portas conmigo.

-YO: solo quiero ser bueno como mi princesa – sonrió poniéndose colorada.

-LOLA: joder, es que nadie se porta así, ni mis padres.

-YO: te habrán preparado alguna fiesta o algo por tu cumpleaños, no hables así de ellos.

-LOLA: que va, son unos idiotas, me han regalado un móvil nuevo y nada más…….– “vaya con el nada más” era mucho en mis tiempos - ….y ni me han hecho fiesta ni nada, un puto pastel al comer y se creen que ya vale con eso.

-YO: pobre niña mía, eso no puede ser, ¿no lo celebras con amigas o el novio? - me había dado cuenta que no sabia si tenia pareja, y meterse en líos de faldas con chonis puede salirte mal.

-LOLA: si, el finde he quedao, pero solo con amigas, no tengo novio ni nah….

-YO: no me mientas, eres demasiado bonita para que ninguno se fije en ti.

-LOLA: si no es eso, es que mi ex es un mala pieza, y como le conocen todos mis colegas, pos no se atreven a entrarme.

YO: pues eso no queda así, ahora mismo te pones algo bonito y te saco a cenar - se iluminó su cara.

-LOLA: ¿en serio?

-YO: vamos, que no tengo todo el día - la di una palmada en el culo, para medir el nivel de confianza que teníamos, sonrío acariciándome el pecho con delicadeza, no me equivocaba, en la palmada sentí sus tersas nalgas moverse juveniles y juguetonas, mis manos eran casi como todo su trasero.

Se metió de nuevo en el cuarto, se duchó y salió vestida para romper corazones, con una falda ceñida hasta el muslo azul oscura, un top blanco ajustado con un escote increíble, como le quedaban grandes y solo tenia el deportivo que era muy llamativo, iba sin sujetador, no lo necesitaba, marcando pezones, y los zapatos altos sin llegar a ser exagerados, con una pinza se puso parte del pelo de la cara junto en la nuca, se giró sobre si misma para mostrarse y mi pantalón habló por mi, se ruborizó al notar moverse mi paquete, me acerqué directo a besarla, iba maquillada mucho, mucho más de lo que necesitaba, era guapa y unos potentes ojos azules que evitaban que miraras a cualquier otro sitio, aun así tenia sus pómulos marcados con colorete y una sobra de ojos exagerada. Se lo dije, aunque no era nadie para decirla como ponerse, estaba para follármela allí mismo, pero me puse algo decente y salimos a cenar a un restaurante, no fuimos a ningún sitio caro, como me demostró sus formas no eran nada cuidadas, pero si algo mejor que un restaurante de comida rápida a los que sin duda estaría acostumbrada, cenamos entre risas, y caminado por una calle tomando un helado, los tíos no podían apartar la vista de ella, me reía cuando les gritaba alguna burrada defensiva, “no tiene pelos en la lengua”, la llevé a su casa en mi coche de lujo heredado de Eleonor, al verlo mojó las bragas sobre el asiento de piel, estoy convencido, si hubiera querido podría habérmela tirado esa noche, y lo deseaba, pero la dejé con el calentón impresionada hasta el día siguiente, tampoco era buena idea quedarme mucho tiempo con aquel coche en la zona en la que vivía.

Al regresar a casa Liz pagó mi calentura, por la mañana al faltarme Eli y Liz estar aun recuperándose de la noche, me fui a la panadería y me zumbé a la hija del panadero en el trastero mientras su padre cuidaba de la tienda, es una sensación extrañamente rara acariciar el cuerpo de una mujer lleno de harina, rara y excitante, ¿que una mujer sepa a donuts es bueno o malo? A mi entender muy bueno. Por la tarde me pasé por casa de Lola a recogerla tal como quedamos, bajó con la bolsa de la ropa y una maleta con las cosas de peluquería. Me saludó con dos besos, con la cara menos maquillada que el día anterior, solo un pintalabios rosa chicle y un ahumado muy ligero en los párpados, sin tapar sus pecas en el rostro con medio quilo de polvos, estaba aun más bella que por la noche, el toque natural le favorecía, y al quedarme mirándola algo atontado sonrío de forma coqueta, eso solo me derritió las ganas de aguantarme, no era solo sexual, no es que me excitará, es que me gustaba, era preciosa hasta le punto de alejar mis ojos de su escote amplio o de sus muslos bajo la minifalda, en cuanto abrió la boca estropeó el momento, era como ver un cuadro precioso de Velázquez y que alguien lo rajara con un tenedor.

Acudimos al centro comercial, de la tienda Lola escogió otros sujetadores de su talla, y la invité a que cogiera algo más, le costó por que casi todo lo que la gustaba ya se lo había regalado y estaba en las bolsas, aun así escogió unas botas con tacones algo subidas de precio, pero su cara era de haberse enamorado de ellas, se aprovechó de mis intenciones.

-LOLA: por favor, por mi cumpleaños.

-YO: ya te di tu regalo ayer.

-LOLA: no me seas agarrao, solo esto - se inclinó con rostro de corderito sobre mi pecho.

-YO: te los compro si me haces un favor…….- asintió riendo, me acerqué a su oído apartándola la espesa cortina rubia – …..si me dejas entrar al probador contigo y te lo pruebas todo a ver como te queda - se puso roja como un tomate abriendo la boca incrédula.

-LOLA: eres un cerdo - su tono no era para nada de desagrado.

Me cogió de la mano y me metió a empujones en el probador, cerró la cortina entre risas, me senté en el taburete y me deleité con su contoneo, de desvestía con suavidad y se quedó en ropa interior, cubriéndose algo avergonzada, se desabrochó el sujetado viejo y se lo sacó tapándose con las manos los senos, se me puso como una piedra al oler su cuerpo jovial y ver de cerca su piel suave y tersa, sus senos ni se movieron al quitarse el sostén, y sus manos apenas cubrían sus senos, aunque mi mano lo haría sin problemas, me pareció la mujer más bella y frágil de la historia, me controlé como pude mientras si iba poniendo y quitando algunos sujetadores, al 3º ya le dio igual y no se tapaba, sus pezones rosados estaban apuntando al techo, con una aureola delicada, se giraba un poco para no ser tan groseramente descarada pero eso solo hizo que su culo en tanga me volviera loco, era la perfección, claro está que su fino y delicado cuerpo no tenia la exuberancia de Liz o Ana, pero con las nalgas bien colocadas, el culo redondo y la carne firme, no pude evitar estriar la mano y acariciarla una pierna con suavidad, me soltó un azote rápido en la mano.

-LOLA: quieto, aquí no. – lo interpreté como un “allí si”.

Se vistió con las botas de tacón recién compradas, una minifalda negra ceñida y un top de piel de leopardo ajustado por dentro de la falda, elástica y bien pegada a la piel, tanto como pasa saber que no llevaba sujetador, salió así vestida conmigo comiéndomela con los ojos, pagué sin mirar el precio, y fuimos tonteando a mi casa, si yo no apartaba la vista de su cuerpo, ella menos de mi rabo tieso, tenia un calentón como hacia mucho que no sentía. Al subir a casa mis manos luchaban por acariciar su cintura, aunque ella se mostraba poco dispuesta, casi parecía tener pánico a que perdiera el control, al entrar en casa dejó las bolsas y me pidió que subiera la maleta con sus cosas a donde me fuera a cortar el pelo, la subí al baño de mi habitación, el más grande, ella me siguió con problemas para subir los escalones con las botas.

-YO: bueno, ¿y que hago?

-LOLA: siéntate en esta silla…- ni así me llegaba a la altura de la cabeza - ……pufff, anda siéntate en ese taburete más pequeño, que no llego – lo hice, sonrío acariciándome el brazo, obedecí y se pegó a mi poniéndose entre mis piernas azuzando con los dedos mi cabello, tan largo que no me gustaba, se me expandía a lo afro y si fuera una anciana de Zamora.

-YO: ¿te ves capaz? – mientras ella estudiaba concienzudamente mi pelo yo hacia lo mismo con su cuerpo a escasos centímetros de mi, sentado en el taburete era tan alto como ella, apenas me sacaría medio palmo y tenia sus tetas rozando mi rostro, con sus cartucheras frotándose contra la parte interna de mis piernas.

-LOLA: tienes muy buen pelo, fuerte y espeso, aunque esta algo seco, seria mejor que te mojaras la cabeza para ayudarme.

-YO: me doy una ducha rápida, espera.

-LOLA: deja que me salga……- la corté poniéndome en pie y dejando mis abdominales en sus manos al quitarme la camseta.

-YO: déjate de tonterías, ya me has dejado verte a ti desnuda, ahora te toca a ti… – sonreí con gracia –…. ya somos adultos, ¿no? … - asintió algo aturdida -… así vas preparando tus cosas en la maleta.

Lola estaba acariciando mi pecho grabando en su cabeza aquella imagen, mordiéndose el labio repetidamente, se apartó un poco mientras me quitaba los pantalones y mi polla medio erecta salió en su esplendor, ella se giró sacando unas tijeras, botes, maquinilla y cremas, me miraba de reojo, asombrándose al vérmela, la pillé comiéndome con los ojos mientras me metía en la ducha y se sonrojó girándose de golpe, al salir desnudo y empapado me senté en la silla tal cual, al volverse se hizo la fuerte, mirándome el pelo, pero en cuanto se acercó su mirada fue a mi rabo que seguía a media hasta, volvió a meter sus dedos entre mis cabellos húmedos, sentir sus manos acariciándome de esa manera y ver en 1º plano como su respiración se agitaba un poco en el pecho, me sacaba una sonrisa larga, habló con un tono más agudo del habitual, según Eli eso significaba que se sentía atraída por mi, nada que no supiera ya.

-LOLA: pues así esta mucho mejor, puedo usar una mascarilla que te suavice mucho el pelo, y luego……- miró mi rabo palpitando en su muslo cuando se acercó un poco -…….y luego puedo cortarte un poco por aquí……- volvió a mirar mi rabo creciendo en el contorno de su pierna, como una serpiente enroscándose y subiendo por su muslo - ……….y si te peino hacia un lado……….- se mordió el labio cuando una vez que la tenia totalmente hinchada y la veía apoyada a lo largo de su pernera, desde algo por encima de sus rodillas hasta su cintura, ¡me media lo mismo que su fémur!, era una visión que hasta a mi me pareció obscena.

-YO: como tú veas, estoy en tus manos – me reía por que no había dicho nada de que estuviera desnudo y empapado de agua ante ella.

-LOLA: quizá si……- pasó una pierna por encima de la mía metiendo mi pierna izquierda entre las suyas con mi rabo apuntando directamente a su coño, metiéndose por debajo de la minifalda, sentí rozar su tanga con el glande -…….por aquí lo echo hacia atrás…. - fingía seguir atenta a mi cabello cuando frotaba levemente sus muslos apretando mi polla en ellos, la sujeté de la cintura pegándola la pelvis a mi pecho.

-YO: ¿y si dejamos mi pelo por ahora? - hundí mi cara en su senos, ella cerró los ojos echando la cabeza hacia atrás aferrándose a mi cabeza apretándome contra ella.

Mis manos repasaron su cintura hasta sus senos por encima de la ropa, apretándolos al llegar a ellos mientras besaba la parte descubierta del escote y su cuello, sabia a manzana, y su piel se erizaba al sentir mis dedos, los pezones se pusieron tan duros que sobresalían en la piel de leopardo del top, por donde pasaba mis dedos, al alzar la vista sus ojos azules me invadieron el alma, tenia los iris totalmente expandidos de la luz y, salvo Marina, no había visto unos ojos tan azules, me agarró el rostro con sus diminutas manos y me besó de forma inocente y cariñosa, cuando la cogí del culo y la amasé las nalgas sonrió con dulzura, volvió a besarme ahora con fuerza tirando del pelo de mi nuca, mi cara era 1/3 más grande que la suya, y mi lengua la llenó la boca casi ahogándola, pero se manejaba bien, sus labios sabían a fresa del pintalabios y chupó mi lengua como si fuera un pene, separándose un poco y jugando con su dedos en mis labios, se los lamía con ternura sin apartar mi mirada de sus increíbles ojos, eran 2 ventanas a un cielo despejado, bajó su cintura notando ahora si como presionaba su tanga húmedo en mi glande, y se sentó en mi pierna, mi polla erecta la levantaba la minifalda ceñida, bajó una mano para agarrarla del tronco y haciendo fuerza sacarla de allí, al tenerla a la vista y cogida con una mano casi le da algo, “oh dios mío”, exclamó, apenas rodeaba con sus dedos el ancho de mi verga, un escalofrío me erizó la piel al pensar en penetrar su cuerpecito de niña con aquel monstruo, supongo que a ella le pasó lo mismo, tuve que dar un golpe con la pierna en el suelo para sacarla de su estado de inopia, reaccionó agarrándola con la otra mano, le pasaba exactamente lo mismo, pero comenzó una masturbación lenta y placentera, la cogí de la nuca para besarla con desenfreno, apenas podía con mi lengua en su boca, y mis manos la acariciaban su cuerpo con fuerza, sus senos, su culo o el contorno de sus piernas entre las mías, la imagen era abrumadora, para hacerlos una idea, aunque seguro que exagero, era como ver a una adulta tratando de subir por una farola, fue como volver a tener a Iziar encima, pero mucho más guapa y atractiva, no tenia sus tremendas tetas pero si un cuerpo morboso, odio a los abusadores infantiles, que quedé claro, pero si alguna vez estuve cerca de comprender su fascinación por las menores, fue ese momento.

Los besos subieron los grados y sus manos bajaban y subían con un esfuerzo elevado, a ojo puedo decir que mi rabo mediría 4 de sus manos, estaba fascinado, se elevó “desmontando” mi pierna, para luego arrodillarse entre mis muslos, si estaba poco cachondo ya , ver mi rabo enorme al lado de su bello y pequeño rostro casi me hace correrme, mi polla era más larga que su cara, hizo vibrar sus labios soltando aire al tenerla tan cerca de la cara, sin dejar de masturbar con ambas manos, sonrió incrédula.

-LOLA: ¿pero que burrada es esta?

-YO: es una buena polla ¿verdad?

-LOLA: es la polla más grande que he visto nunca - como las actrices porno puso su codo en la base del tronco y pegó su brazo a lo largo de él, pasaba de largo su muñeca, su cara era de impresión absoluta.

-YO: joder, pareces una enana a su lado - sonrió medio ofendida, para a continuación lamer el glande con suavidad, mostró dotes de experta con la lengua y se pasó todo el pelo largo por encima de un hombro de forma sensual.

Daba pequeños lametones y trataba de meterse el glande pero apenas le entraba, bajaba a lamer el tronco y volvía a intentarlo, a la 3º o 4º vez logró meterse el capullo chupándolo como una bola de helado enorme, no le pasaba de allí, mi polla tras el glande se ensanchaba un poco, no hacia falta que forzara, sus manos hábiles y su lengua estaban haciéndolo bien, podría ser mejor, claro, pero el morbo era descomunal, como la diferencia entre mi rabo y sus manos, casi la oía crujirle la mandíbula cuando se la metía en la boca , no lo hacia mucho, debería de dolerle, se levantó ante mi, la levanté el top besándola en el vientre, se dio la vuelta dejándome su culo ofrecido inclinándose, al que mordí, le bajé la cremallera y ella se agachó bajándosela sin doblar las rodillas, un par de nalgas que ya me encantaban aparecieron separadas por un tanga rojo fuego, le saqué el top y me puse en pie detrás de ella, mi rabo la golpeaba en la espalda mientras mis manos abarcaban sus senos y la besaba en el cuello, temblaba al rozarla detrás de la oreja, aparte de todo el morbo, resulta que tenia punto débil y lo había encontrado, un fuerte olor a hembra necesitada de sexo llenó el baño, fui bajando mis manos hasta su cintura metiendo los dedos por debajo del tanga y tirando de él hasta sacárselo por los pies, me senté con su cuerpo echado hacia delante metiendo mi lengua entre sus nalgas, dándola ligeros azotes que la hacían suspirar, la cogí de la cintura y solo con los brazos la elevé por el aire hasta meter mi boca en su coño, pesaba tan poco que aguanté un minuto chupándola los labios mayores mojados por su excitación, si pasaba de los 50 kilos seria por poco, al dejarla de nuevo en el suelo se dio la vuelta llena de lujuria, resonando las botas en el suelo, lamió o besó mi vientre musculoso y mis pectorales trabajados antes de romper en un beso erótico en los labios, se abrió de piernas lo más que pudo pasándolas por encima de las mías, y apuntó mi rabo a su coño.

-YO: espera, aun no - asintió con cara de desearlo y temerlo.

Mojé mis dedos con la cantad de fluidos que salían de ella y metí un dedo masturbando con cuidado, gimió de placer, y como sospechaba lo tenia algo cerrado, no era virgen, pero no había follado tanto como se podía esperar, ni tenia grandes caderas, si intentaba de primeras con mi rabo la podría hacer daño o asustarla, y no iba a permitir que mi nuevo juguete se me escapara, fui acariciando con suavidad y haciendo sitio en ella, metiendo de forma escalonada un dedo tras otros, para mi sorpresa, aunque más bien era un deseo, su coño se abrió bastante, y ya con los dedos no podía hacer otra, la hice chupar mis falanges impregnadas de su pasión, los lamió demostrando que, si no era descomunal, sabia que hacer con un objeto cilíndrico en la boca, la abrí de piernas lo que pude y sentada sobre mi a horcajadas cara a cara apunté a su coño y apreté suavemente, su rostro al sentir como mi glande pedía paso fue de desesperación agónica, jamás se me olvidará, había hecho bien en trabajarla antes y entró con algo de presión, a partir de ahí pasé 15 minutos apretando para que fuera entrando dentro de ella, muy despacio y sin moverme demasiado cuando su rostro se compungía, la hacia subir un poco y seguía bajando, sentía como su cadera se expandía y sus paredes interiores palpitaban al dejar sitio para el invasor, la tenia agarrada de las caderas y por momentos la “enroscaba” en mi falo para hacerla bajar.

Mientras, en leves descansos, me comía sus pechos de forma estudiada, sentía su melena rozar mis muslos por detrás de ella cuando, de forma imposible, la penetré entera sin sentir la pared de su útero, me corrí nada más moverme, la presión y la sensación fue tan placentera que no pude evitarlo, ¿como era posible que le entrara toda a aquella muñequilla cuando a mujeres más corpulentas no le habían entrado?, me daba igual, estaba pasando, y aunque físicamente debería de estar rozándole el diafragma, la tenia totalmente empalada rozando pelvis con pelvis, Lola estaba entregada, le dio igual que me corriera y ni me oyó cuando le dije que no se preocupara al tener la vasectomía hecha, jadeaba aun sacudiendo una mano de la oleada de sensaciones.

Mi polla apenas se puso flácida dentro de ella y se mantuvo dura sin roce alguno, me levanté y la senté en un mueble que hacia de encimera, la sujeté de la cintura y comencé un vaivén lento y largo, su rostro se fue relajando de una tensión que la hacia rechinar los dientes, para cuando abrió la boca gimiendo de sentirse completa la estaba follando a buen ritmo, era suficiente para tenerme loco, era una diosa de bolsillo, hasta movía sus caderas hacia mi cuando la penetraba, a los pocos minutos comenzó a correrse sin parar, uno tras otro los orgasmos la hacían temblar y mis embestidas se hacían fáciles…… no, fáciles no, menos complicadas.

Noté como algo cedía y se ensanchó aun más, una especie de clic en su caderas, sentí tentación de sacar a la bestia pero no era necesario por ahora, estaba gritando loca de lujuria y pidiendo a voces que me corriera y la llenara de semen, hizo un montón de exclamaciones fuera de lugar y de mal gusto, algunas ni las entendí, estaba centrado en ver como era posible aquello, la sacaba entera y la metía de golpe cada vez, con un gesto de defensa corporal en ella, estaba entrando toda en la mujer más menuda que me había tirado nunca, la sujetaba del vientre y mi mano la cubría desde la cintura hasta los senos, casi palpaba mi polla dentro de ella a través de la piel, rememoré la sensación con Raquel en el hospital la 1º vez que fui consciente del tamaño de mi verga, al compararla con el cuerpo de ella y no el mío, o el de mis amantes, y me encantó disfrutar hasta sacarla en uno de sus orgasmos y eyacular sobre su vientre, bueno, eso pretendía, pero mi polla era tan grande que salpiqué desde los senos hasta la cara, lejos de asquearse lo cogió con los dedos y lo chupó desinhibida de toda razón.

-LOLA: ¡DIOS!………..- solo lo repetía una vez tras otra - …….¡que animal, que polla, que todo!……….- se tocaba el coño como si fuera lava y al rozarlo le ardiera.

-YO: no ha estado nada mal para ser la 1º vez - al sacarla vi algo de sangre, supongo que no tendría el himen totalmente roto, o que se había regenerado, había leído que eso pasaba.

-LOLA: por favor………no más…….no me puedo mover……….- sentí algo de lastima por ella, tenia una tiritera que la recorría todo el cuerpo.

Llamé a Liz por que apenas me dejaba tocarla, al verla por alguna razón se sintió aliviada pese a ir desnuda salvo por una minifalda con vuelo, Liz sonrió y la ayudó a bajar y darse una ducha caliente que la devolvió a la vida, por razones obvias esperé fuera, y salieron ambas, Lola desnuda y Liz con la falda empapada pegada a sus piernas Liz la cogía de la mano y la trataba como a un bebe, diciéndola que se sentara y estuviera tranquila.

-YO: ¿estás bien?

-LIZ: no habla, o al menos por ahora.

-YO: joder, ¡no me digas que me he pasado! - temía haberla perdido.

-LIZ: mírala a los ojos ….- lo hice y disfruté de una mirada llena de deseo -…. esta locamente enamorada, ya te lo digo yo.

-YO: pobre niña - la acaricié el rostro, le tembló la cara hasta sentir mi mano, cerró los ojos y recostó su mejilla en la palma de forma alegre.

-LIZ: déjala tranquila un rato para que se recupere.

Así lo hicimos, charlando suavemente mientras que Lola volvía en si, hasta que de forma natural volvió a hablar, se mostró aturdida pero encantada, la conversación en si no tiene interés, lo importante era ver como Liz la iba ganando poco a poco, fue como verme a mi en 3º persona, la dejó claro las bases de su relación conmigo, nada serio, solo sexo y sin celos, ella la enseñaría a follar conmigo y a disfrutar, Lola iba asintiendo mientras Liz la metía mano, cuando terminó la explicación Liz la estaba masturbando con una mano mientras le comía las tetas, Lola solo gemía mirándome desesperada por que la follara, “Liz es un tesoro”, me había hecho todo el trabajo y solo tenia que disfrutar de ellas, claro que al verlas así me lancé a por ellas como un animal, penetré a Lola según estaba, boca arriba con las piernas abiertas, esta vez entró del tirón y sentí como gritó hacia adentro, no tenia energías para hacerlo hacia afuera, me rodeó a duras penas con sus piernas cortas y la follé aumentando el ritmo sacándola tantos orgasmos que se desmayó, fue glorioso ver sus ojos azules perdiéndose en el más allá, susurrándome que no parara, Liz rompió a reír cuando lo vio y se puso a 4 patas para que continuara con su ano hasta reventar en una cantidad de semen no posible para el numero de veces que había practicado sexo. Bajamos a cenar hasta que Lola volvió en si, la ayudé a vestirse y la llevé a casa, entre caricias tenues.

-YO: me gustaría que cada día pasaras por casa tras ir a correr - asintió con una amplia sonrisa.

-LOLA: allí estaré, y gracias por el regalo - al decirlo en singular se refería a otra cosa que la ropa que llevaba en la mano.

-YO: de nada, el regalo eres tú, que sepas que me has puesto lo más caliente que recordaba - la acaricié la pierna con suavidad.

-LOLA: gracias……….- se sonrojó-……espero que mejore pronto - la cogí la mano y se la besé con caballerosidad.

-YO: lo harás - se incorporó para que la besara una última vez con lengua antes de que se bajara del coche, no me resistí a azotarla el culo cuando su minifalda se le subió al salir, si tuviera que jurarlo, diría que ahora tenia mejor culo todavía, más ancho, se giró arqueando la espalda regalándome la visión de su escote.

-LOLA: me he dejado las cosas en tu casa, a ver si mañana podemos hacer algo con tu pelo - sonreí al recordar que entre tanto no me lo había cortado.

Cerró la puerta y plantó un beso dulce en la ventanilla dejando sus labios marcados de gloss, lo llevé con orgullo unos cuanto días, y al volver a casa le di a Liz mi más “profundo” agradecimiento, me había conseguido a la joya de la corona, me importó aun menos perder a Jeni, ahora tenia algo mejor, una diminuta obra de arte, con pulirla un poco los modales seria perfecta, y a fe que lo hicimos con el paso de los días.

Lola – La bella y la bestia.

Cada día después del ejercicio Lola venia a casa, el 1º me cortó el pelo y me lo dejó para hacerme un póster, luego Liz y yo jugamos con ella, para finales de semana su coño era lo más delicioso que había tenido nunca, prieto, estrecho y jugoso, dejó de desmayarse y disfrutaba loca de pasión, era indescriptible hacerla el amor de forma lenta y suave, pero no me duraba ni 2 polvos, Liz tenia que acabar el trabajo, encantada de hacerlo.

No es posible plasmar en palabras el morbo que me daba Lola, era la que peor follaba de todas las que tenia, y aun así la que más dura me la ponía, era puro fuego. Su cuerpo el mejor de los perfumes, como dicen, vienen en frascos pequeños, cuando supo que había más chicas que Liz me llevé una bronca enorme de su parte, no le gustaba nada que tuviera tantas “amigas”, aunque lo aceptaba a regañadientes, pero era indomable, el día que se me ocurrió salir con sus amigas un fin de semana que Yasira no pudo, le soltó un puñetazo a una amiga suya por tontear conmigo, la tuve que separar y se quedó con un mechón de pelo en la mano, me obligó a llevarla a casa y allí follamos como salvajes, que una chica tan joven, y tan pequeña, tuviera tan mala hostia me encantaba, solo a Liz la dejaba acercarse a mi, dejé de lado a casi todas las chicas, pero por que quería hacerlo, y me quedé con Eli, Liz, Lola y mi jefa, Yasira encontró un novio y dejamos de vernos, por el momento aunque volvió entre mis piernas pasados unos años, la echaba de menos pero era insignificante para mi, como todas, tenia el cupo cubierto y todo el morbo que quisiera con Lola, que aparte de las tardes se ocupó de mi los fines de semana de fiesta, vestida siempre de forma provocativa y sensual.

Casi, y recalco el casi, Lola pasó a ser mi pareja, siempre que salía, o iba a algún sitio, me la llevaba a ella, cuando Lola estaba en clase por las mañanas, tenia a Eli, y cuando yo trabajaba, a mi jefa, que ya me dejaba metérsela por el culo, sumándole a que en cualquier momento Liz estaba por allí. Si Liz estaba recelosa por la atención que recibía Lola, no lo demostró, pero seria lo lógico, me estaba centrando demasiado en Lola, ayudándola a sacarse el instituto y refinar su carácter, se enfadaba mucho cuando me reía de su forma de hablar y Liz la ayudaba bastante, aun así era indómita y muy terca, me recordaba a mi en muchos aspectos.

Disfruté de aquello hasta Navidades, en vísperas a las fiestas salí de marcha con Lola, con un vestido de leopardo morado, elástico con la espalda al aire y unos tacones de infarto…… que solo la alzaban hasta mi cuello, fuimos a un sitio que la gustaba mucho, una macro discoteca de música thecno, bailamos, si es que a eso se le llama bailar y no saltar haciendo el memo, la quité la idea del piercing en la lengua aunque me costó pagarla el tatuaje en la base de la columna, un tribal que aunque no fuera original, al curarse la piel le quedaba de cine, lo exhibía con estilo, su larga melena y su cuerpo me parecía más desarrollado, eran la viva imagen de la perfección, en miniatura. Como siempre pasaba cuando me llevaba a las discotecas, se enfrentó a 4 chicas que me entraron cuando me dejaba solo, era como parar una pelea de gatas, la cogía en alto y me la llevaba a otro sitio mientras soltaba guantazos al aire e insultos y amenazas, luego se mostraba pasional conmigo, queriendo macar terreno. Bebía bastante y me dijo que había probado algunas drogas duras, y no tan duras, la dejé claro que conmigo ya no era una niña revoltosa, si no una mujer, y las mujeres de verdad no se meten mierda en el cuerpo, asintió, yo era lo único a lo que quería ser adicta, alguna copa de más y punto

Estabamos en mitad de la pista besándonos mientras la sobaba el culo descaradamente, cuando sentí que alguien me agarraba del hombro, al girarme un puñetazo me impactó de lleno en la cara haciendo tambalearme y casi caer al suelo.

-LOLA: ¡JAVI ¿Que haces?! – gritó tan alto que casi se rompe la voz.

-JAVI: ¡¿que haces tú? zorra de mierda!! - me recompuse del golpe, sentí el sabor de la sangre en la boca al mirar a mi agresor, me había roto el labio por algún lado.

-LOLA: ¡¡¡estate quieto ¿me oyes?!!!

-JAVI: ¡¡¡haré lo que me salga de los huevos, ¿como te atreves a venir aquí con este payaso?!!! - Lola se lanzó a por él, apenas podía sujetarla.

-LOLA: ¡¡VETE A LA MIERDA, IMBECIL!! Este sitio no es tuyo……..ni yo soy tuya tampoco ya - intuí que era su ex, “el mala pieza”.

-JAVI: ¡a mi no me jodas guarra, has venido a regodearte en mi puta cara y de mi no se ríe nadie, NADIE! - levantó la mano con gesto de pegarla, me interpuse con rapidez.

-YO: ¡basta ya!, no quiero problemas - me miró con sonrisa burlona, pero al menos apartó la vista de Lola, que estaba aun intentado agredirle aunque la tenia sujeta.

-JAVI: ¿y esta basura de donde la has sacado? - me dio una palmada más o menos fuerte en el pecho, mi intención inicial fue devolverle el puñetazo, pero estaba en desventaja, no solo era él, y un local donde le conocían por lo visto, si no que tenia a 2 colegas detrás apoyándole, y con tanto ruido no sabia si habría más.

-LOLA: ¡es mi novio, así que no te pases o te abro la cabeza, pichacorta! - clavé mi mirada en Lola, que agachó la cabeza, tenia la lengua más rápida que la cabeza, no éramos técnicamente novios, y meterse con su hombría no ayudaría en nada.

-JAVI: pues bien que gritabas cuando te abrí tu coñito virgen - se lamió la punta de los dedos, Lola casi le da con un zapato que se quitó y trataba de alcanzarle con el tacón.

-YO: ¡está bien!, nos vamos y os dejamos en paz – me preocupaban los ojos de Javi, estaban rojos y él muy nervioso, seguro que iba metido de alguna mierda de droga, pastillas de éxtasis me arriesgo a decir.

-JAVI: eso, nos vamos, claro que si, vamos fuera y te doy una paliza por cobarde - seguía golpeándome el pecho con fuerza siguiendo el ritmo de la música, al oír eso todo el mundo a nuestro alrededor se separó, “mal asunto”, si ya saben que pasara.

-LOLA: ¡NO!…….déjalo, ya nos vamos – si no estaba tenso ya, ver a Lola dejar su actitud bravucona y tirar de mi brazo para irnos, no me calmó.

-YO: eso es, nos vamos y………..- me agarró de la pechera con ambas manos.

-JAVI: no te vas a ningún sitio……- me empujó lo suficiente para llegar a Lola, la señaló con dedo mientras se acercaba “valientemente” a ella -……tú eres la peor de todas, se va a llevar una paliza por tu puta culpa –…… y la soltó un bofetón que la hizo caer al suelo, me puse rojo de rabia, me agaché a ayudarla, sus ojos vertían lagrimas y tenia la mejilla enrojecida, la puse en pie acariciándola con cariño, me di la vuelta protegiéndola, la actitud de los 3 pasó de hostil a expectante al verme la mirada.

-YO: como la vuelvas a tocar te parto el brazo – si recordáis como evalúo las amenazas entenderéis la profundidad de esta.

-JAVI: vaya ……– bromeaba con sus colegas -……… a la gallinita le han salido pelotas, venga vamos fuera - nos escoltaron entre los 3 que veía y un 4º que no había visto.

-YO: en cuanto puedas llama a la policía y a una ambulancia, diles que vengan ya - le susurré al oído a Lola que sacó el móvil y lo hizo sin que se dieran cuenta, gané asegurarme refuerzos si iba mal, solo tenia que ganar tiempo, pero ¿una llamada advirtiendo de pelea en Madrid a las 2 de la mañana? , podían tardar mucho, o directamente no venir.

Salimos y de inmediato se formó un corralito de gente a favor y en contra, me quité la cazadora y todo lo de valor y se lo di a Lola, de las formas que pude fui ganando tiempo, calentando y tratando vanamente de calmarle los nervios a Javi, pero estaba muy enfurecido, una vez en la calle busqué una parte cubierta de la calle por las cámaras de seguridad, “que al menos quede documentado”. Javi era el corpulento de los 3, algo más bajo que yo, 1,85 creo, tenia la parte de arriba del torso muy marcada de músculos, más que yo, no sabia si era asiduo al ejercicio o las inyecciones, iba rapado casi al 0 con un piercing encima de una ceja, su aspecto imponía bastante, era normal que fuera el líder de la manada, los otros 2 eran mucho menos corpulentos, más bajos y sin tanto músculo, para identificarlos, uno era escuálido y el otro tenia cara de cerdito, el 4º no parecía ser de su pandilla, de hecho se convirtió en el “organizador” de la pelea, pidiendo espacio al corralito y gritando unas normas leves, me tranquilicé al oír que no se podían usar armas bancas y solo seria 1 vs 1, si era así, tenia una oportunidad de salir de una pieza, Lola lloraba pidiendo clemencia a Javi, me dolió en el orgullo su poca confianza en mi, hasta que me temí que solamente conociera bien a Javi. Traté de ganar más tiempo.

-YO: mira, no tenemos por que pelear.

-JAVI: ¿ahora te rajas?, no, de aquí no sales sin que te muela a palos.

-YO: no tienes que demostrar nada, nos vamos y puedes seguir divirtiéndote toda la noche.

-JAVI: claro que me voy a divertir, pero 1º voy a partir la cara - puso pose de boxeó y soltó un par de puñetazos al aire bien lanzados y rápidos.

-LOLA: por favor Javi, para ya - lloraba desconsolada mientras una chica la sujetaba con cariño, debería de conocerla.

-JAVI: vamos, deja de hablar y vamos a ver de que estás hecho, payaso - caminó hacia mí con decisión.

Ya no era posible la diplomacia, de hecho desde que me pegó en el pecho en la discoteca sabia demasiado de la noche de Madrid como para entender que si re cruzas en el camino de un choni cabreado, estás jodido. Dancé a su alrededor alejándome lo más posible de él, mientras el ruido de silbidos y gritos de apoyo era ensordecedor, al pasar junto a sus colegas uno me dio un empujón que me acercó más de lo querido a Javi, que lanzó un gancho potente pero muy previsible, lo esquivé con velocidad y seguí danzando, rezando por que apareciera la policía de una vez, pero no había noticias, y él se movía bien, seguro que practicaba boxeo, me fue cerrando espacios hasta que me quedé arrinconado, era inevitable ya, así que divisé la cámara, me puse en posición para que pillara bien la imagen y me tensé para recibir el golpe, un solo puñetazo me golpeó en la mandíbula, se hizo el silencio cuando caí al suelo, ya tenia lo que quería, Javi había empezado, y a partir de ahí todo seria en defensa propia, intenté una última jugada y quedarme en el suelo sin moverme, quizá así el saldría victorioso y se acabaría esa locura, pero no coló, me cogió de la pechera y me puso en pie, lanzando un par de puñetazos más con la mano derecha, “es su mano buena”, los aguanté con furia, se enfadó por que no cedía y el 3º cogió más inercia al ir a golpear, bajé la cabeza en el momento justo haciendo una fuerza descomunal en mi cuello, y me golpeó con el puño cerrado en la coronilla, (muchos no lo saben, pero una vez de adulto, y quitando codos y rodillas, es la parte más dura del cuerpo), sentí como le crujía la mano, y el grito de dolor provocó un silencio en todos, planté bien los pies recuperando la postura, sentía un fuerte escozor en la coronilla, pero le había quitado su mejor arma, tenia la mano inútil, solté una patada sorpresa en su estomago empujándolo, di dos pasos para coger cinética y soltar una patada de tijera en su cara, cayó al suelo ante la fuerza, cuando dejó de rodar sangraba por el piercing de la ceja, hasta Lola guardó silencio sorprendida, Javi estaba en el suelo sangrando de una ceja y con la mano derecha inútil y dolorida.

-YO: ¡ya está!, ¿nos podemos ir? – inocente de mi.

-JAVI: ¡¡MALDITO CABRÓN, tú no sales de esta!!..... – se giró a sus amigos - …¡¡destrozar a ese imbécil!! – se miraron entre ellos dudando - ….¡AHORA! - todavía le temían más a él que a mi, un error.

Ambos acudieron a su llamada, le rodearon y se cuadraron delante de mi, bufé desesperado, la policía no llegaba y ahora eran 2, esquivé el puñetazo de uno pero una patada en el costado del otro me dobló de dolor, cuando fue a darme otra le cogí la pierna barriendo la otra y cayó al suelo, pero el otro percutió en mi cabeza con un puñetazo y rodé por el suelo, en parte por los golpes y en parte para ganar terreno para levantarme rápidamente y tener tiempo de pensar, al ponerme en pie Javi me rodeó con el brazo sano por detrás, le di un codazo al vientre y cogí la mano magullada con una llave, se la retorcí hasta hacerle rodar a los pies de Lola. Es muy bonito en las películas cuando varios se enfrentan al héroe, y esperan pacientemente su turno, en la vida real no pasa, los 2 colegas me saltaron encima y escuálido me pegó un rodillazo en el vientre mientras me quitaba a cerdito de encima, ese impacto me dejó sin aire un segundo, lo que les dio tiempo para agarrarme e inmovilizarme, les costaba por mi corpulencia pero eran 2, Javi se puso en pie tapándose la sangre del ojo, mientras mis parejas de baile me pegaban puñetazos en el estomago ante el abucheo del publico.

-LOLA: ¡¡¡basta ya!!! ¡¡¡LO VAIS A MATAR!!! - Lola lloraba de nuevo y casi babeaba agarrada al brazo de Javi.

-JAVI: ¡apártate zorra! – le soltó un manotazo con la mano del revés en la cara, me encendí como nunca.

-YO: ¡¡ven aquí cabrón, vamos a bailar tú y yo solos maricón de mierda, ¿o solo tienes huevos de pegar a una niña?!! – su mirada parecía terrorífica, pero otra vez me miraba a mi y se alejaba de Lola.

-JAVI: eres un pedazo de mierda, si no me hubiera hecho daño en la mano estarías pidiéndome perdón de rodillas – sonreí al ver que no entendió que eso no fue un accidente, se acercó, y estando agarrado me golpeó el estomago con la mano sana.

No dolió tanto como esperaba, así que me soltó otro en la cara, pero no tenia tanta fuerza y precisión como en la otra, del gestó golpeó de refilón al que me tenia sujeto de los brazos, de forma instintiva se tapó la cara soltándome un brazo, di un golpe seco con el puño cerrado fue a la cara de Javi, no fuerte pero si justo en su ceja, retrocedió un paso, a la vuelta del golpe cerré el brazo pegándole con el codo a la nariz de cerdito, saltó un río de sangre al romperle los huesos de la cara, antes de que cayera por el suelo me revolví sobre escuálido, le hice un barrido con la pierna al empujarle y cayó al suelo, allí un fuerte puñetazo a sus testículos le dejó doblado e inmóvil al lado de cerdito, que se trataba de colocar la nariz en su sitio. Al darme la vuelta Javi se abalanzó sobre mi con algo en la mano, por instinto, y algún suspiro de fondo, le di una patada con la planta del pie en el pecho para alejarlo varios metros, fue un empujón más que un impacto, allí vi la navaja en su mano, no era mucho más grande que un corta uñas, pero allí estaba, tenia la cara inyectada en odio y un ojo cerrado por el chorro de sangre que le caía en él del piercing, un abucheo y estupor sonó en la boca de todos, alguno gritaban “NO”, el 4º que hacia de juez se puso en medio, terminó rodando por el suelo del empujón de Javi.

-YO: venga valiente, ya me he librado de tus 2 amigos, ahora el que esta asustado eres tú, y como no soy ninguna niña a la que puedas pegar, me sacas la navaja, eres todo un hombre – alguna risa tensa saltó de fondo.

-JAVI: ¡te voy a rajar pedazo de mierda! - soltó una estocada muy mal enfocada, no veía bien, y me aparté con facilidad.

-YO: fallaste, estoy aquí …..– se giró buscando -….. ven a jugar.

Se repitió la jugaba varias veces, siempre lejos de hacerme daño, hasta alguno me animaba, me confié, “nunca subestimes”, me dijo mi profesor de Judo alguna vez, en una de sus lanzadas no me dio tiempo y se pegó a mi clavando el filo en mi cintura, fue una sensación extraña, no me dolió, así que con cierta seguridad en que no me había llegado en ningún sitio vital y ver de fondo sirenas de la policía me tenia tranquilo, le sujeté la muñeca y tiré sacándome el acero de la herida, me miró sonriendo, pese a que le tenia agarrado.

-YO: te dije que no la tocaras – lo dije en alto mirando a Lola, que tenia las manos en la cara asustada.

Estrujé su brazo hasta doblarle el cuerpo, apretando la mano contra la muñeca con el brazo totalmente estirado, además era la mano herida, sus alaridos de dolor fueron estrepitosos, soltó la navaja al sentir como su codo se tensaba de la presión ejercida, un rodillazo al estomago y una barrida con el pie lo tumbó, tirado en el suelo, roto de dolor, y ya vencido, fui rodeándole el brazo con las piernas, haciendo palanca con ellas sin importarme su gritos.

-YO: te dije que no la tocaras - giré su brazo hasta que sentí el “crack” de su codo rompiéndose.

Un “ohhhhh” mayor que cuando me clavó la navaja se oyó en toda la calle, alguno apartó la mirada al oír el crujido, le solté mientras se agarraba el brazo moviéndose como una anguila en el suelo, camine victorioso hasta Lola, pero a mitad de camino me fallaron las piernas, me miré en el costado y una mancha de sangre enorme crecía en mi camiseta, caí de rodillas apretándome la herida, Lola acudió enseguida pidiendo ayuda a gritos, todos llamaron a la policía, pero ya estaban cerca, gracias a dios la ambulancia fue la 1º en llegar, me atendieron a mi 1º al ver la sangre, y la policía acudió enseguida, detuvo a los 3 según las declaraciones de los testigos, que contaron la misma historia, llamaron a más ambulancias, uno tenia el tabique nasal fracturado, el otro apenas podía caminar del dolor en la entrepierna y Javi chillaba cuando le movían el brazo, con el codo dislocado, 4 dedos de la mano rotos y un corte feo en la zona del piercing.

Mi herida no fue nada más que llamativa, la limpiaron y cosieron con 5 puntos, mientras Lola y yo éramos interrogados, Javi y su amigos decían otra cosa, sobretodo que el cuchillo era mío y le había atacado, les señalé la cámara de seguridad que enfocaba toda la calle, era de la discoteca, y les pidieron ver las imágenes, por suerte estaba grabando y captó todo tal como pasó, cuando vieron que Javi sacó la navaja pidieron la cinta como prueba y los esposaron allí mismo, nos fuimos todos al hospital, pasamos la noche allí con la policía bien atenta, Javi tenia antecedentes y cerdito llevaba droga encima, el pobre escuálido solo lloraba pidiendo que no llamaran a su familia. No llamé a nadie para no asustar, no tenia nada grave, alguien sugirió una transfusión al ver mi camiseta manchada, y la tenían preparada por si la necesitaba, pero gracias a la llama de Lola me atendieron rápidamente. Lola lloraba a mi lado, y era yo quien la consolaba, estaba horrible con el rímel corrido pero sus ojos azules eran reconfortantes, le enyesaron el brazo a Javi y le situaron la nariz cerdito, el 3º estaba bien, así que cuando pudieron les leyeron sus derechos y se los llevaron, yo pasé el resto de la noche en observación, no solo era la herida de la cintura, tenia hematomas en el estomago, un ojo amoratado y un ligero corte en el labio.

-LOLA: lo siento mucho, no debí llevarte allí.

-YO: no pasa nada rubia, estoy bien.

-LOLA: no lo estás, casi te matan.

-YO: soy más duro de lo que parezco.

-LOLA: ya lo he visto, pero no tenia que haber pasado - se tumbó a mi lado en la camilla, del lado no herido, y la rodeé con mis brazos.

-YO: si tenía que pasar, prefiero que haya sido así, les va a caer un buen puro, tengo amigos abogados, y de los buenos.

-LOLA: que se pudran, Javi es un cabrón despiadado, se lo merece…… - se levantó y me besó con ternura -…. ¿le has roto el brazo? – preguntó, aunque lo había oído quebrarse como todos, la miré a los ojos secándole una lagrima con un dedo en la mejilla colorada donde la había pegado.

-YO: se lo había advertido.

-LOLA: lo sé, le dijiste que si me tocaba otra vez le partirías el brazo, y lo has hecho – sus ojos brillaban de emoción.

-YO: así es - se acurrucó contra mí apoyándose en el abdomen dolorido sacándome un siseo de dolor.

-LOLA: perdona …..– la besé en la frente para quitarle importancia -…. nadie……nadie había hecho algo así por mi…..nunca.

-YO: ahora eres mi pequeña, yo cuidaré de ti – suspiró mientras se adormecida acompasando su respiración a la mía y sintiendo mi latido fuerte tranquilizándola.

Me quedé adormilado abrazado a ella, sentía en mi estomago un profundo dolor, pero había algo más, algo que no reconocía, ¿que me pasaba?, estaba dejando a mujeres por ella, había algo que me era familiar en esa sensación, pero no atinaba a saber que, crecía en mi cabeza una idea irregular, algo que no había experimentado en mucho tiempo, casi me matan, me había jugado el tipo por esa cría que solo me tiraba desde hacia 1 mes, algo sentía, pero no lo sentía desde que vi a Ana reaparecer en mi vida, “joder, eso es amor………..mierda, la quiero”, apreté su cintura contra mi, oliéndola el cabello y oyendo su respiración, “¡Me he enamorado de Lola!”

Lola - La recuperación.

-LIZ: ¿te quieres estar quieto? – se desesperaba al intentar limpiarme la herida del costado.

-YO: joder, que escuece……

-ELI: así recordarás que no tienes que meterte en peleas – puso cara de madre mientras me quitaba la bolsa de guisantes congelados del ojo amoratado.

-YO: ¿y que debería de haber hecho?

-ELI: pues irte, corriendo si hace falta, no te hubieran pillado – tenia razón, era rápido y de gran zancada.

-LIZ: ya, y se deja allí a la niña corriendo detrás con los taconazos – se agachaba a soplar en la herida, es increíble como aguanté varios puñetazos directos a la cara de un semi profesional del boxeo sin dolor, y ahora un poco de Betadine en la herida me hacia revolverme, adrenalina supongo.

-ELI: pues si, la niña de las narices hace que casi lo maten.

-YO: no ha sido para tanto – me empujó en el pecho evitando que me levantara de la cama, llevaban 2 días sin dejarme levantarme, desde que salí del hospital.

-ELI: tú cállate y quédate aquí sin moverte o la que te va a zurrar soy yo – sonreí con ganas de darla un beso.

-LIZ: eso, que se te va a abrir la herida – me tapó la marca de la navaja suavemente con una gasa limpia y un poco de esparadrapo.

-YO: pobre de mí, vaya enfermeras más cabezotas me he buscado.

-LIZ: lo que te mereces, ¿como se te ocurre meterte en una gresca contra 3 tíos?

-YO: y yo que sé, se pusieron tontos……..

-ELI: ¿uno no iba puesto?

-LIZ: si, el tal Javi dio positivo en las muestras de sangre en “speed”, se la toman para aguantar toda la noche de fiesta.

-YO: se lo vi en los ojos, y su amigo llevaba pastillas encima.

-ELI: ¿y vas y te metes con ellos?

-YO: ¡que yo no me metí en nada!, fueron ellos al verme con Lola.

-ELI: ya, la niña de los cojones, está muy “subidita” - no le gustaba nada su presencia, puedo decir que el sentimiento era reciproco.

-YO: no digas eso, estaba muy asustada, yo solo quería protegerla………

-LIZ: ya, es lo que pasa cuando te gusta una mujer.

-ELI: aun no me creo que estés colado por ella - había contando que me atraía, tratando de que ellas me apartaran esa idea de la cabeza.

-YO: no estoy colado por ella – “no me lo creo ni yo”.

-LIZ: tenías que verle la cara cuando vinieron, estaba lleno de sangre, sucio y aun así la miraba con cara de bobo.

-ELI: ¿y ella esta enamorada también? - me enfadé golpeando la cama.

-YO: ¡que no estoy enamorado de nadie, joder! – guardaron silencio unos segundos, pero sabían tan bien como yo que me estaba engañando a mi mismo.

Me ayudaron a ir al baño, podía ir solo pero tenia un dolor espantoso al mover el vientre, los hematomas se estaban curando y pasando del morado más oscuro a un amarillento horrible, y dolían en cuanto hacia fuerza, pero necesitaba moverme, desde que volví a casa con Lola, y Liz me subió a mi habitación, no me habían dejado salir de allí, Lola se quedó el fin de semana cuidándome junto a Liz, pero ya era lunes y Lola regresó al instituto por la mañana, la cara de Eli al verme fue pavorosa, con un ojo aun hinchado, el vientre marcado de puñetazos y la raja en la piel del acero. Por miedo a saltarme los puntos primero, y luego cuando se cayeron a que se reabriera, de sexo ni hablar, en 3 días seguidos, iba con un calentón que ver media teta me la ponía dura, Liz se vistió normal para no provocarme, y dormía solo por el mismo motivo, avisé a mi familia de lo ocurrido y me vinieron a ver el domingo, la bronca, por no llamarlas de inmediato, fue casi peor que la pelea en si, y la pobre Lola aguantó el chaparrón que le cayó de parte de todas, solo mi padre la consolaba, la culpaban de lo ocurrido y yo la disculpaba, el único que me miró con orgullo fue mi padre, delante de mi madre y mi hermana no podía decirlo, pero se lo leía en el rostro, él me educó en esa forma de pensar, defender a una mujer aunque sea en tu perjuicio físico, no era el hecho de haber “vencido” en la pelea contra 3 incluyendo una navaja, era haber demostrado valor y hombría al enfrentarme sin temor a aquello y actuar como el consideraba que debía de hacer un hombre, por si llega a decir algo de eso en alto mi madre le cruza la cara.

Por suerte los días fueron un trasiego de amigos y conocidos, las chicas del piso de estudiantes, Teo, Manu, y algunas chicas más, hasta mi jefa se pasó al llamar para comunicar que estaba de baja durante una semana, lo que decretó el medico para recuperarme.

Me di una ducha repasando mentalmente la pelea, tratando de limpiar con cuidado las zonas magulladas, veía el rostro de Javi enfurecido, a cerdito estallándole la nariz del codazo, el grito de dolor de escuálido al golpearle los testículos, y sobretodo siseaba al recordar la sensación y el ruido del codo de Javi partiéndose, o lo que podría haber hecho para no recibir el tajo, que estúpido había sido, pero creo que Lola estaba a salvo, el padre de Teo se ocupó de todo, como sabréis era abogado de alto copete y estaba en deuda conmigo para siempre por el tema del ex de Eleonor, presentó cargos contra los 3, el más grave contra Javi por intento de asesinato, aparte de consumir drogas, a cerdito por agresión y posesión de drogas, a escuálido, que era menor aun, le cayeron cargos menores, pero su cara era la peor de todas en la rueda de reconocimiento a la que fui, sus padres se presentaron y me pidieron disculpas personalmente, las acepté con educación, y me dijeron que lo iban a mandar a un reformatorio en Alemania, ofreciéndose a ayudarme en lo que fuera necesario, le pedí la padre de Teo que fuera indulgente con él, solo era una oveja, que había aprendido a las malas lo que puede pasar si sigues a un mal pastor. Por lo que sé a día de hoy, Javi sigue en la cárcel y aun le quedan unos cuantos años, cerdito salió a los 2 años con la condicional y le volvieron a pillar trapicheando con drogas, me desentendí de saber de ellos, lo importante es que no volví a saber nada después del juicio.

Me puse un bañador para bajar a la cocina con Liz y Eli escoltándome, al llegar Dani estaba por allí, dejó lo que estuviera haciendo y pese a que ya me había visto antes, acudió a mis brazos, agarrándome la cara y dándome una ráfaga de besos en la mejilla.

-DANI: ¿tú estár bien? – sentir su cuerpo y sus brazos, rodeándola con los míos, me hizo sentir bien.

-YO: si, tranquila.

-DANI: tú asustar….me, no volver ha hacer – no sé si era a mi, o al sueldo, lo que temía perder.

Me sentía totalmente inútil sentado en la cocina mientras ellas me daban de comer y beber, no estaba tullido, pero no me dejaban hacer ningún esfuerzo, mañana tranquila en la terraza y luego a comer, siesta a solas, y al despertarme Lola estaba hablando con Liz en la puerta, me senté en la cama, me miraba como si me hubiera quedado paralítico, la llamé sin poder evitar la ilusión en mis ojos, acudió a mi arrodillándose en mi pierna con los ojos vidriosos.

-YO: ¿que te pasa rubia?

-LOLA: que me jode verte así - la alcé la mirada con ternura.

-YO: estoy bien, dame una semanita y ni se me notará - su rostro era angelical, la senté a mi lado abrazándola con cuidado.

-LOLA: no sabes cuanto lo siento.

-YO: tienes que dejar de repetirlo, no es culpa tuya - se frotaba los ojos sin creerme.

-LOLA: ¿entonces estás bien?

-YO: ahora que estás aquí, si – sonrió calmando su rostro.

-LOLA: que bobo eres – la abracé de nuevo besándola en la larga cabellera, olía genial, Liz me miró desde la puerta cruzándose de brazos, era evidente el cariño que la tenia, ni yo podía negarlo, suspiré preparándome para lo que venia.

-YO: he pensado una cosa - levantó sus ojazos para mirarme y me quedé perdido en ellos.

-LOLA: ¿el que?

-YO: me resulta muy duro que estés aquí, y no poder acariciarte, quizá deberías dejar de venir unos días, hasta que me recupere - la tristeza la invadió la cara.

-LOLA: pero yo quiero estar aquí contigo, cuidarte y darte mimos – me hacia cosquillas en un hombro.

-YO: lo sé rubia, pero necesito descansar.

-LOLA: ¿y Liz y las demás? ¿A ellas les has pedido lo mismo?

-YO: Liz y Eli cuidarán de mí, no te preocupes, del resto olvídate.

-LOLA: ¿y por que ellas si se pueden quedar y yo no? – “por que a ti te quiero, y a ellas no”, quise decirla.

-YO: es mejor así, te llamaré cuando esté bien, no te preocupes.

-LOLA: bien………si quieres me iré, pero llámame, por favor - su suplica me punzó en el corazón.

-YO: claro que si, rubia – sonreí mientras la mentía.

Me besó suavemente y se fue sollozando, Liz la acompañó y la oí hablar abajo, cuando subió me encontró llorando, no podía evitar que me cayeran lagrimas, Liz se sentó a mi lado y me abrazó con ternura.

-LIZ: ¿la vas a dejar?

-YO: no era mía como para dejarla……

-LIZ: ¿y ya está?, ¿no la volverás a llamar?

-YO: es lo mejor para ella

-LIZ: ¿o para ti?

-YO: no soy bueno para una chica así, no ahora estando como estoy, necesita cuidados y un novio que la enderece, y yo no quiero ser ese hombre, no otra vez.

-LIZ: eres lo mejor que la ha pasado nunca, y no hablo de sexo.

-YO: es joven y guapa, encontrará a otro.

-LIZ: otro Javi, no otro como tú, aunque no quieras admitirlo no eres un desalmado, ningún tío se metería en una pela de navajas con las manos desnudas por un ligue de una noche, o por una entre tantas, y ella lo sabe igual que yo.

-YO: eso no fue así………..yo no quería………no pretendía……..- estaba sin palabras, me mostré débil ante Liz y me enfurecía por ello.

-LIZ: es inútil que lo niegues, la quieres.

-YO: pero no quiero quererla, soy el cabrón rompe corazones, no amo a nadie, soy libre, ¿me oyes? - mi tono era brusco.

-LIZ: si es así ¿por que la alejas? - “¡¡¡POR QUE NO QUIERO QUE ME HAGAN DAÑO!!!”, pensé lleno de furia, bufé rojo de ira, con el puño cerrado.

Liz se asustó un poco, pero me tranquilizó, colocando mi cabeza en su regazo mientras me atusaba el pelo, escudriñaba mi mente, que se rompía, estaba claro, pese a mis denodados esfuerzos no había superado aun lo de Ana, me había afectado mucho más profundo de lo que estaba dispuesto a admitir, ¿que estaba haciendo con mi vida?, construí un corazón de hielo y no dejaba entrar a nadie, negándome a sentir nada por alguien, y podía haber seguido así si aquella chiquilla no me hubiera derretido con su mirada y sus malas formas, era guapísima y daba mucho morbo en el sexo, nada que no tuviera o podría conseguir ¿pero por que era diferente para mi? Esa pregunta era la que me tenia perplejo, perdido. Lola era una choni, una tribu urbana con muy mala fama, en poco más de 1 mes con ella ya había tenido varias broncas y una pelea que terminó casi en desastre, era tosca, cabezota, poco refinada en su forma de ser y comportarse, hasta podía ser violenta para defender lo suyo………”claro………….es eso, es leal, fiel, fuerte…….es justo lo que Ana no fue”.

Mi mente se expandió dejando que todo el ruido que tenia fuera disipándose, lo veía claro, la quería por que reventaría la cabeza a alguna con un bate antes que traicionarme, eso me hizo esbozar una sonrisa, pero me presentaba un problema, ¿quería, o no, estar con Lola?, la quería, ya no podía negármelo más, pero podía dejar de quererla, si conseguía comprometerla, si se fijara en otro y me demostrara que no era tal su amor por mi, quizá dejara de quererla, si, lo supe como una verdad escondida en mi mente que ahora parecía clara. Me animé tanto que Liz notó mis besos en sus muslos, y mis dedos acariciando sus piernas, olía a hembra necesitada y eso me enervó, mi polla empezó a crecer incontrolable y Liz se arrodilló ante mi, halagada y excitada.

Succionaba con animo y jugaba con su lengua con astucia, me senté en la cama y se desnudó para seguir chupando con energía y haciéndome una cubana con sus oscuros pezones, continuaba lamiendo el glande y una explosión de semen la llenó la cara, se lo lamió con los dedos mientras lo degustaba y acarició más hasta tenerla dura otra vez, no tardó demasiado, me tumbó en la cama y se metió mi rabo por el coño, cabalgando con cuidado pero haciendo vibrar nuestros cuerpos, se empezó a correr, le acariciaba donde le llegaba y volví a descargar en su interior, sin dar tiempo a más me besaba y se puso a 4 patas, la penetré el culo mientras la azotaba y me divertía con sus orgasmos anales, de la rabia me dolía el estomago pero seguía para volver a correrme, caí roto de cansancio y dolor en la cama sudando, Liz lamió mi torso, con ojos de lujuria, besándonos con dulzura, comenzamos así mi “recuperación”, descansamos toda la noche y por la mañana me sosegó con una mamada deliciosa, al llegar Eli y verme con Liz se animó a revolcarse con nosotros, la verdad sea dicha, ellas disfrutaron más que yo, me sentí como un mero consolador para ellas, apenas me movía, y Liz hacia diabluras con su lengua en Eli, pero al menos empezaba a coger tono, fueron pasando los días y entre las 2 me devolvieron mi esplendor, apenas me dolía el cuerpo y no se notaba nada de los golpes.

Para el fin de semana llegó un aire del desierto del norte de Africa, o algo así, y en pleno diciembre estabamos a 25º grados, anunciaban la vuelta del frío y lluvias para el domingo de tarde, se me ocurrió montar un fin de semana con mis amigos en mi casa, tipo barbacoa y piscina, quería y necesitaba a mis amigos cerca, ellos me ayudarían con mis planes, comencé a llamar, 1º al trabajo y pedir esos días, mi jefa me los dio, luego Teo accedió si llevaba a su novia, Manu también vendría, sobretodo le pedí que trajera a Lucas, un amigo nuestro, Italiano, castaño de ojos verdes y un ligón de 1º, y ya puestos, las chicas del piso de estudiantes, para ellos mi casa eran unas micro vacaciones, y quien sabe, algún rollo podría caer. Yo mismo llamé a Alicia que habló con las demás y todas accedieron aunque ella, al saber que irían Teo y su novia, no quiso ir, pero era un buen plan y sabía que no faltaría si todos estaban allí. Lo hablé con Dani, que aceptó ir también sábado y domingo por las mañanas a recoger lo que, sin duda, seria un desfase de fiesta.

Dani me acompañó al mercado e hicimos algo de compra, sobretodo carne fresca para la barbacoa de la terraza que no había usado nunca, llamé a todos preguntando que querrían y que cosas comprarían ellos para traerlas, encima de la casa, no iba a ponerlo yo todo, Dani se quedó un rato más organizando la cocina y yo guardando todo lo valioso y frágil de la casa, éramos muy dados a romper cosas, preparé los cuartos para albergar al mayor número de personas que entraran, y eran muchas, el sofá que rompí, lo sustituí hacia unas semanas por un sofá cama muy barato que no pegaba con el resto del piso. A contar, en el dormitorio principal, la cama de 3x3 donde yo, y 2 o hasta 3 podrían dormir, los 2 dormitorios del otro lado del piso de arriba con una cama cada uno, una individual y la otra era de matrimonio donde 2 podían entrar, el dormitorio de abajo con una cama de matrimonio y los 3 sofás de abajo, 1 sofá cama y otro que no lo era pero tan amplio como para poder dormir sin problemas alguien no muy grande. Por último llamé a Lola que acudió encantada, casi sorprendida de mi llamada, acudiría a buscarla al salir del instituto el viernes y pasaría el fin de semana entero con nosotros, la pobre no sospechaba que mi intención era liarla con Lucas, el amigo italiano, para así demostrarme que no me quería y quitármela de la cabeza. Mandé a Liz a su casa le viernes por la mañana no sin antes un trío con Eli, y así tener vía libre y una cama más, se fueron y bajé a la cocina a ver a Dani que estaba radiante con algo menos de ropa debido al calor.

-DANI: ¿yo ir ya, yo venir mañana misma hora?

-YO: si, y te pido disculpas anticipadas.

-DANI: ¿por qué? tú ser bueno - me acarició la cara con una sonrisa que derretiría los casquetes polares.

-YO: te pediría perdón por las cosas que se me ocurren que podrían pasar, pero las disculpas las necesitaras por las que no se me ocurren y van a pasar - torció la cabeza, creo que sin entenderme del todo, pero comprendiendo que la casa iba ha ser una locura.

Cuando se fue, preparé un poco la casa para la fiesta, y se me ocurrió un cartel con esperanzas vanas, que coloqué en la puerta de cristal de la terraza

Las chicas del piso de estudiantes fueron las primeras en llegar después de comer, sobre las 17 horas, ataviadas como si fueran a una excursión, mochilas, maletas y bolsas, todas con ropas informales, Lara se me abrazó con fuerza, haciéndome sentir que se me cortaba el aire con sus senos, pero la solté al ver a Alicia entrando al última, detrás de Naira, la canaria, las saludé a todas pero hablé solo con ella.

-YO: ¡al final has venido!

-ALICIA: ya, que iba a hacer si no, ¿quedarme en casa? - puso cara mustia al soltar una mochila, la abracé dándola un solo beso en la mejilla, así me gusta diferenciar al resto de mujeres con las que me importan, a las que me dan igual 2 besos de cortesía, y las que me tiro directamente en la boca, pero a las “mejores” un solo beso y un abrazo, desde que ya no tenía tantas amigas, si no amantes, el circulo se había reducido en mi madre, mi hermana, Alicia y alguna otra novia de buenos amigos a las que dejaba en paz.

-YO: pues te he echado de menos, esta es tu casa….. - la rodeé con un brazo girándome al resto - ……cuando no esté yo, la que manda es mi hermanita, que os quede claro a todas - sonrieron pero entendieron el sentido de mi tono, Alicia era la más sensata que había conocido nunca, me fiaba de ella al 100%.

-ALICIA: y yo a ti también te he echado de menos, cielo, mi hermana viene luego cuando salga del trabajo - me mostró su sonrisa falsa, con los años aprendí a diferenciarlas, cuando sonreía de verdad lo hacia igual, pero las arrugas en los ojos solo aparecían cuando era sincera, ahora solo quería aparentar.

-YO: genial, pues si viene antes de que vuelva la abres.

-ALICIA: ¿pero es que te vas? - cuando cogí las llaves del coche me miró horrorizada.

-YO: claro, estaba esperando que llegara alguien, tengo que ir a por Lola, que se quedará con nosotros…. - Lara soltó un “puf” desaprobándolo, las pocas veces que Lola vio a mis amigos fueron momentos fríos y tensos, en mi grupo social Lola no estaba bien vista –……así que la casa es tuya, ya sabes como va el telefonillo, e id cogiendo sitio en las habitaciones, toca apretarse en ellas, no se cuantos vendrán al final.

Me fui a por Lola con el coche, al verla de pie con unos shorts cortos, un top abultado con el biquini ya puesto y una mochila me alegré, no sabia por qué, la recogí y la besé con la fogosidad que requería, no era una mujer normal, su fuego era mayor, con decir que cada vez que la recogía o la dejaba me besaba acariciándome la polla, no hace falta decir más. Al volver y subir ya habían llegado otras personas, Manu y el amigo suyo, Lucas, que aparte de ser alto, guapo y de cuerpo trabajado, tenia la carcajada más contagiosa del mundo, era cercano a lo “choni” de Lola, “la pareja perfecta para ella”. Mara, la hermana mayor de Alicia, salió a recibirme con los brazos extendidos y dando los 2 besos como los daba, casi sin rozar los labios y apartando bien la cara, era demasiado elegante y estilizada para dar un fuerte abrazo o un beso disonante, que diferente era a mí. Lola me preguntó que donde ponía sus cosas, arriba en mi cuarto, obviamente, aunque no sabía muy bien como íbamos a dormir, mi plan era otro. Para mi sorpresa estaban todos en el salón, sentados y quietecitos, hasta parecían gente seria y formal, Alicia había cogido las cosas que trajeron de comer y lo había organizado en la cocina, sobretodo la cantidad enorme de botellas de alcohol y latas de cervezas que trajeron, cogí el mando del equipo de música.

-YO: ¿que coño os pasa?... – me miraron atentos -…. no se su pone que esto es una…………….¡¡¡¡FIESTA!!!! - pulsé el botón del play subiendo la música hasta sentir el suelo temblar, tuve que gritar para que me oyeran. – ¡¡¡ESTÁIS EN VUESTRA PUTA CASA!!!

Desde ese momento la cosa se animó, empezaron a correr los cubatas, las latas de cerveza y la música, Lara sin tapujo alguno bajó de arriba con solo el biquini puesto, un conjunto de hilos con tan poca tela que no le daba para taparse los enormes pechos, al verla todos los tíos se quedaron mirándola atontados y todas las tías corrieron a las habitaciones a cambiarse, Lola caminó hasta mi y la di una copa de ron que le encantaba, bailó para mi quitándome la camiseta, pasando sus dedos por mi pecho y agachándose bastante poco para besarme tiernamente en la herida ya cerrada, Lola estaba en la habitaciones, lo agradecí o la hubiera saltado al cuello. Cuando el resto de chicas fueron saliendo, en biquinis de mil maneras, por alguna razón esperaba ver a Alicia con alguno de los que me enseñó aquella vez con Ana, pero salió con uno blanco tipo braga y sujetador antiguos, bonita, como siempre, sus caderas eran exuberantes, pero palidecía ante las tetas de Lara, o el cuerpo fino y esbelto de Naira, la canaria, con un biquini tan escueto como brillante amarillo. La peor parada fue Mara, no tenia ni las caderas de su hermana, ni las tetas de Lara, ni el todo de piel canario, solo un culo prieto y unas piernas bien torneadas ayudaban a disimilar que era la que menos pecho tenia de todas, incluyendo a Lola, que desde que la conocí hasta ahora le habían crecido notoriamente. Lola se quitó el top y los shorts delante de todos, dejando ver un biquini rojo tan llamativo como embellecedor, su cuerpo aniñado era perfecto, y me costó no besarla al ver su larga melena rubia caer por su cuerpo.

Los tíos por su parte, todos acudieron con el bañador puesto ya, como son pantalones cortos sirven, solo se quitaron la camiseta, las chicas quedaron alucinadas por mi torso, ninguno me hacia sombra, pero si se llevaron su dosis de miradas, ninguno salvo Lucas, estaba más moreno que yo, y Lola se fijó en su cuerpo, todas lo hicieron, siendo falsamente humilde, el tío estaba más bueno que yo. Todos bebieron bastante y jugamos a alguna chorrada, el calor empezaba a ser asfixiante, quité el aire acondicionado aludiendo al gasto de luz, y fui a la piscina, me siguieron varios chicos y cuando las chicas fueron a entrar me puse en la puerta, señalando el cartel, “si cuela…..”

-YO: lo siento señoritas, son las normas – ninguno pareció haber visto el cartel hasta ese momento, se giraron a leerlo.

-LOLA: ¿“SOLO TOP LESS”?, ¡tú estás quedao!

-MANU: jajaja que cabrón

-YO: queréis igualdad pero podéis comernos con los ojos mientras vamos sin nada arriba, eso no es justo, así que……- golpeaba el cartel con un dedo.

-LARA: jajajja que cerdo.

-ALICIA: no hagas bromas anda……..

-MARA: ni loca.

Todas se cerraron en banda, así que hice pasar a los chicos y cerré la puerta, saltamos al agua y gritábamos fuerte, divirtiéndonos y tentándolas, si ya estaban sudando dentro cuando las dejé, media hora más en aquel ático dándole el sol era un infierno, la 1º en caer fue Lara, entró y ante nuestros vítores se quitó la parte de arriba del biquini, dejando sus colosales senos y sus pezones al aire, no se si pensó que así me demostraría algo, aun sentía algo por mi, pero nos dio igual, era una broma, y tenia que seguir siéndolo, a los 30 segundos apareció Lola, sus ganas de marcar territorio se leían en su rostro, no iba a dejar que aquella pechugona la quitara lo suyo, dejando la parte de arriba encima de la otra de Lara, algún aplauso comedido de los demás al no conocerla mucho, pero la bajé el agua con honores, ya jugando entre todos, los sonidos de diversión hacían asomarse a Naira, pero estaba atento y le negaba hasta eso, Lara gritó y Naira cedió, salió directamente sin la parte de arriba dejándome ver sus bonitos senos por 1º vez, una 90 a ojo, y bien puestos, aunque sin el biquini cayeron un poco más de lo esperado, a los 20 minutos de juegos y roces “involuntarios”, Mara apareció tirando de la mano de Alicia, discutían, Mara era demasiado orgullosa como para que las demás se atrevieran y ella no, a pesar de ser la que menos tenia que ganar, logró sacarla a la terraza y allí se quitó la parte de arriba mientras las salpicábamos agua, le pasó lo contrario que a Naira, sin biquini mejoró, disimulaba bastante. Si, no tenia mucho pecho, pero tenia más que el que podía pensarse, y muy bien puesto, mirando con los pezones arriba y oscuros, apetecibles. Alicia se puso roja, “dios bendiga la presión de grupo y la desinhibición del alcohol”, todos jaleando y gritando, se lo soltó con vergüenza y lo dejó caer al suelo mostrando unos senos que ya conocía de vivir con ella y de aquel momento fugaz en mi cumpleaños, no por ello menos bonitos, además estaba centrado en pegar a Lola a Lucas, que se mostró encantado de que en los juegos siempre le tocara a ella con él hacer lo que fuera, Lola no tanto, pero se divertía. Terminamos todos en el agua bebiendo y charlando con miradas furtivas unos a otros.

Al salir a tomar el sol ellas, nosotros jugábamos a tirarnos al agua, todos menos yo, nadie podía tirarme al agua, entre Manu y su amigo se esforzaban pero siempre terminaban en el agua, al final fueron Alicia y Lola las me llevaron al agua, dejándome antes de poder hacerlas daño con algún gesto violento, sentí los pechos de Lola en mi espalda y los de Alicia en mi brazo al caer al agua conmigo, nos pasamos 1 hora jugando a ahogarnos, donde me divertí más que excitarme junto a Alicia, y con Lola queriendo meterse por medio todo el tiempo, pero había algo en la sonrisa de Alicia que me hacia querer hacerla reír todo el tiempo.

Pasado un rato apareció Teo con su novia, habían tardado, pero se sumaron pronto a la fiesta, Teo se animó mucho, y Alicia todo lo contrario cuando vio a su nueva novia en biquini algo avergonzada, supe que Teo había elegido a un clon de Alicia, mejor dicho, a una copia barata, era bonita y con buen cuerpo, normal al estilo de Alicia, con algo de cadera, pero sin nada de su encanto y de su naturalidad, era violento pero ya nos ocupábamos Manu y yo de que no faltaran risas. Al final la novia de Teo se quitó el biquini con un par de cubatas, nada a destacar, normal, simple, del montón. Pasamos la tarde entre el agua y el sol, luego hicimos una ensalada y unas hamburguesas para cenar, nos dimos unas duchas y nos vestimos para salir de fiesta unas horas, Lola se aburría un poco ante los lugares que íbamos, con lo que se llama “pachangueo”, buena música de cualquier época, nada de electrónica y flashes, esta vez Lola eligió un vestido negro vaporoso con la espalda al aire, sin sujetador, ya se encargaba Lucas de animarla, la cosa iba bien, Lucas parecía que había fijado su presa y Lola no se mostraba esquiva. Del resto todas iban más o menos arregladas, y me alegré un montón de ver a Alicia con unos jens ajustadísimos que me apartaron la vista de mis planes, los tíos de los bares se pegaban por estar con ella, no se si por fin se estaba recuperando de la ruptura o solo lo quería aparentar ante Teo y su nueva novia. Lara fue la que se aprovechó de la situación y se me pegaba bastante, con un escote rozando lo vulgar, mostrando como sus pechos chocaban entre si al bailar, la tuve que apartar un par de veces, no por otra cosa, si no por que Lola al verlo se estaba poniendo mala, se distraía de los encantos de Lucas.

Una vez en el piso me llevé a Naira, muy borracha, al sofá de abajo, Alicia y los demás me seguían entre gritos y susurros de haber bebido demasiado, Manu iba con una tajada enorme, Lucas le sostenía por el hombro, tampoco es que este fuera mucho mejor que él, eso ayudó a que según se sentaron en los sofás de abajo, Naira y Manu se quedaron fritos, vestidos y todo, Manu sentado en el sofá ancho con los pies estirados, y Naira en el sofá cama cuando lo extendí, “unos menos con los que discutir por las camas”. Lara y Mara, algo menos borrachas, se desnudaron quedando en tanga y saltaron al agua, me llamaban a voces, mientras yo indicaba que Lola y Lucas podían compartir mi cama y yo dormir en la individual, me esfumé para evitar replicas ante la llamada de las sirenas, se reían de su atrevimiento, retándome a meterme en al agua con ellas, me quedé con el slip solo ante el asombro de Mara y la sonrisa del conocimiento de Lara, zambulléndome con ellas, jugamos sensualmente, hasta que Mara se me acercó y sintió mi polla semi erecta sobre su piel en el muslo, se ruborizó tanto que salió del agua despavorida, Lara en cambio se enganchó a mi cuello y me besó, me pilló desprevenido, y no me pude contener cuando me dejó sus enormes tetas empapadas en las manos, lamí sus pezones recordando que era muy sensible en ellos y solo la aparición de Teo y su novia en la piscina evitó que la follara allí mismo, solo me la dejé encima para tapar mi erección. Mientras Teo y su chica se acariciaban en una hamaca, Lara me suplicaba al oído.

-LARA: por favor, déjame dormir contigo.

-YO: ¿no tienes cama?

-LARA: si, Naira y yo íbamos a compartir una de las camas de arriba, pero se ha quedado frita abajo y prefiero dormir contigo - su mirada era de petición sincera.

-YO: voy a dormir en la pequeña, si te quieres unir la cama es suficiente, pero solo dormir, tengo que descansar - sonrió mientras me abrazaba.

Tuve que decirle a Teo que estaba con la polla medio tiesa por culpa de las tetas de Lara para que se llevara a su novia borracha de allí, se habían quedado la habitación de invitados de abajo para ellos 2, se despidieron hasta el día siguiente, me enfadé de golpe al recordar que pillé a Teo en esa habitación en Navidades tirándose a otra cuando aun estaba con Alicia, casi se me había olvidado aquello. Lara se subió a mi habitación solo con las bragas mojadas en la mano, entró en la cama, se tumbó notando el efecto de la bebida en sus párpados, yo me quedé de pie mirándola, boca arriba, no podía dormir hacia abajo, no con esas 2 bellas monstruosidades en el pecho, ladeada hacia un lado de la cama, con un hueco para mi, ”solo dormir, recuerda”, cuando iba a meterme en la cama oí ruidos de voces susurrando al otro lado del piso de arriba, fui a salir desnudo como iba, pero me puse unos pantalones cortos, fui a una de las habitaciones y llamé, no contestaron, al abrir vi a Lola adormilada y Lucas susurrándola al oído, Lola llevaba un pijama de lana, les dejé por si aquello iba a más, pero yo seguía oyendo unas voces, fui a la otra habitación y llamé, abrió Mara con gesto cansado, de fondo vi a Alicia secándose unas lagrimas del rostro.

-MARA: ¿que quieres? - tono brusco.

-YO: nada, es solo que he oído voces y vengo a ver si necesitáis algo antes de irme a dormir – “¿por que narices la doy explicaciones? Es mi casa”.

-ALICIA: no gracias, estamos bien, dormiremos juntas y tenemos de todo - forzó su sonrisa falsa, sin arrugas n sus ojos.

-MARA: eso, lárgate.

-YO: ¿seguro?, por que no veo a Alicia bien.

-MARA: ¿y a ti que coño te importa? - me harté de su tono y la fundí la coraza que era su rostro con una mirada volcánica.

-ALICIA: no seas brusca, solo se preocupa, anda pasa - lo hice sin mostrar atención al gesto tedioso de Mara.

-YO: a ver hermanita ¿que te pasa?- la sacudí la rodilla con cariño al sentarme a su lado en la cama, por alguna razón Alicia lograba que fuera yo, mi yo real, Raúl, ni Zeus, ni el cabrón que quería ser, ni el manipulador adicto al sexo que Eli me enseñó, solo un amigo preocupado y cariñoso.

-MARA: pues nada, esta boba, que aun pasando tanto tiempo le duele ver a Teo con esa….- su tono era de incomprensión, cerró la puerta y se sentó a mi lado, abrazando a su hermana.

-YO: lo siento, debí de………- la verdad es que no sabia que decir.

-ALICIA: no es culpa tuya cielo, bastante has hecho ya dejándonos pasar aquí el fin de semana, soy yo que soy una tonta sensible – se secaba una lagrima con un pañuelo que ya había secado unas cuantas.

-MARA: claro que si, él ya ha rehecho su vida, mírale como te lo restriega.

-ALICIA: no lo hace a posta, por que hayamos cortado no vamos a dejar de vernos, pero me siento mal cuando le veo con otra.

-YO: es normal, fue mucho tiempo, pero debes de ser fuerte y tratar de seguir adelante, hoy te he visto animada, tenias a medio bar babeando en tu bonito trasero - tan cierto como que mi halago solo buscaba sacarla una sonrisa real.

-MARA: ya, si se lo he dicho yo, que se de una alegría, pero nada.

Pasaron las horas y continuamos charlando los 3, soltaba alguna broma tonta de las mías de vez en cuando para aliviar la tensión pero el tono siempre era el mismo, serio, lo que se decía importaba, descubrí a una Mara dulce y cariñosa con su hermana, y creo que ella en mi a un chico adulto y sensato, “no se puede juzgar un libro por la portada”, eso es solo una fachada, nos mostramos como teníamos que mostrarnos ante una Alicia que se derrumbaría si no teníamos cuidado, Mara se mostraba hiriente con Teo, yo le defendía por que era mi amigo, pero al recordar su infidelidad en la habitación que ahora ocupaba me costaba encontrar motivos. Teo fue un capullo desde que nos mudamos al piso de estudiantes y cuando todo parecía arreglado con mi marcha le puso los cuernos a Alicia, no le pilló por que yo me ocupé de que no se cruzaran en el piso en Navidades, le obligué a dejarla y enterré el tema por miedo ha hacerla daño.

-MARA: es que no puedes seguir así por un cabrón como Teo.

-YO: no es un cabrón, es solo que cuando bebe se pone tonto.

-ALICIA: si eso ya lo sé………

-MARA: es que te llevas unos berrinches que no te mereces.

-YO: lo dejaron de mutuo acuerdo y ya está, no hay que darle más vueltas.

-MARA: de mutuo acuerdo las narices, la dejó por……..- se calló mordiéndose el labio ante la mirada inquisitiva de su hermana pequeña, no me hacia falta más.

-YO: ¿lo…….lo sabéis?

-MARA: ¿que Teo se acostó con una zorra en Navidades? ¿O que tú te lo callaste?, si, lo sabemos…..- no se contenía al acusar, me sorprendió, no sabia que eran conscientes de aquello.

-ALICIA: ¡basta!, Raúl no hizo nada malo - la cara de Mara era de no creérselo.

-YO: ¿desde cuando?

-ALICIA: me lo contó todo Teo unas semanas después de cortar, se sentía culpable - me enfadé un poco por que Teo no me lo dijera, pero al menos tuvo los cojones para decirla la verdad.

-YO: joder, no quería hacerte daño……….

-ALICIA: lo sé, y te agradezco que hayas sido tan discreto, y que hayas cuidado de mí de esa forma.

-MARA: esté solo cuidó a su amigo, y al final tú eras la mala por que decía que le ponías ojitos cuando él va y se tira a otra - de nuevo el recuerdo de Alicia en el piso de estudiantes desnuda con su coño en mi boca me pasó por la mente, y creo que por la de Alicia.

-YO: eso ya no importa, decidieron no seguir, y ahora tiene que hacer su vida.

Seguimos charlando horas, Mara era un ataque de espada constante sobre mi y teo, y yo un escudo de amistad que paraba los golpes a duras penas, pero sentía que estaba ayudando, Alicia avanzaba en sus razonamientos, parecía convencida cuando vi el reloj del despertador, “joder, las 10 y media de la mañana”, me despedí cortésmente dejándolas bostezar mientras se acostaban, me fui a al cuarto, un susto al cruzarme con Dani, la abracé y la pedí disculpas de nuevo, me miraba sabiendo por qué, la casa estaba horrible, la terraza llena de ropa mojada y toallas, la cocina de sartenes y cacharros, en el salón 2 durmiendo con la mesa llena de cervezas y copas, y gente durmiendo en todas las habitaciones. Me acosté junto a Lara, y me aferré a las ubres de leche de Lara, al tumbarme desnudo, se abrió de piernas para dejarme meter mi polla entre sus muslos, como me gustaba, y dormí plácidamente.

El ruido de vida en la casa me despertó, había dormido apenas unas 6 horas, pero me sentía renovado, agradecí levantarme con las tetas de Lara en las manos, ella llevaría despierta un rato remoloneando, disfrutando del tacto de mis dedos, gozaba del roce de sus muslos con mi polla atrapada, eso lo aprendió de Ana, pero dándola un beso en el hombro la dejé en la cama, con los ojos hinchados y legañas enormes, en automático fui al baño a mear, oyendo como corría el agua de la ducha, al acabar de mear decidí darme una alegría y ducharme con Liz para follarla como hacia cada mañana, palpando más que viendo me metí en la ducha y acaricié su cuerpo, estaba rígida, hasta que me soltaron una bofetada, sacudí la cabeza enfocando y al ver a Naira tapándose las tetas y el coño con las manos, totalmente roja de vergüenza mirando mi empalme mañanero, me dio tal susto que me resbalé y caí a 4 patas con medio cuerpo fuera de la bañera.

-YO: ¡joder lo siento!, creía que eras……….- “idiota, Liz no esta”-……..Lola.

-NAIRA: Lara me dijo que podía usar la ducha - parecía culpable de algo en su voz, asustada, gateando me salí de la ducha.

-YO: si, si, continua, lo siento - cerré la puerta por fuera con la respiración aun agitada, Lara estaba tumbada en la cama mirándome, tapándose la boca sin cubrir una carcajada enorme.

-LARA: ¿que tal? - soltó burlona, reí con ella al rememorar el ridículo que había hecho.

-YO: ya podías haber avisado cabrona - me lancé a por ella jugando, inmovilizándola goteando el poco agua que me había rozado la piel, reíamos pero el juego era sensual, los 2 desnudos, le comía una teta como castigo hasta que salió Naira disparada cubriéndose por una toalla sin cerrar del todo, no me dejó ni disculparme antes de salir corriendo de la habitación.

Mientras me daba una ducha negándole el acceso a la vez a Lara, pensaba en como Naira habría entrado en el dormitorio conmigo dormido desnudo, y casi siempre boca arriba por mi rabo tieso, ¿si me habría visto cubierto por una sabana o totalmente desnudo?, dios, ¿estaría ya empalmado o la tendría entre las piernas de Lara? ¿Por que al mear no me dijo nada? y aun más, al meterme en la ducha con ella y acariciarla, joder, le había agarrado las tetas ya cuando me abofeteó, ¿hasta donde hubiera llegado? Al salir de la ducha me puse un bañador, y desde el balcón de mi habitación vi a Manu y su amigo tomarse unas cervezas tirados al sol, les saludé, comprobé que Naira estaba bien, había bajado junto a Lara y estaban charlando en un sofá de abajo, sin llegar a abrir la puerta vi a Mara aun dormida en su habitación, solo con unas bragas negras puestas, sin una mísera sabana encima, me quedé mirándola el cuerpo unos minutos, se la veía un pecho tal como estaba, no eran grandes pero su pezón era bonito y sus torneadas piernas me alegraron la vista, me forcé a bajar y dejarla así, saludé a Teo que salía con su novia de la cocina con unas cervezas de camino a la terraza, y al entrar vi a Dani terminando de recoger con Alicia echándola una mano.

-YO: Dani, ¿que haces aquí todavía?

-DANI: señoritos ser muy guarros - me señaló con el dedo sabiendo que sus palabras no me ofenderían.

-YO: ya te pedí disculpas, pero no tenias que quedarte.

-DANI: ya saber, pero yo cumplir mi parte, ser buena…. - se refería a nuestro pacto secreto, pero aun así era demasiado -……. si no ser por amiga yo no salir nunca - le dio un codazo amistoso a Alicia que terminaba de poner el lavavajillas.

-ALICIA: no ha sido nada, ¿que menos después de cómo dejamos la casa?, tenias que ver como estaba esta mañana - “ya lo vi al irme a dormir, como todos los que se habían despertado antes lo vieron, pero solo tú te has molestado en ayudar a Dani” pensé, por esas cosas era mi hermanita, era tan incapaz como yo de ver trabajar a alguien y no ayudar.

-YO: anda déjame a mí acabar, tomate algo con estos - la abracé fuerte y ella me correspondió, ambos pensábamos en esas horas que habíamos pasado charlando, y me dio un beso en la mejilla agradeciéndomelo.

-ALICIA: no, podrecillo, te has pasado la noche en vela conmigo…….

-DANI: ya, señor hacer mucho eso - Alicia me miró riendo.

-YO: no, esta vez no………- asintió con la cabeza sin creerme mientras recogía un cesto de ropa y salía de allí.

-ALICIA: bueno, pues eso, que muchas gracias….. - me dio otro abrazo poniéndose de puntillas sobre un solo pie con una de sus sonrisas, pero esta vez era real, el contorno de sus ojos se arrugó.

Se fue a empujones de la cocina y terminé de limpiarlo todo, mientras me preguntaba donde estaría Lola, era a la única que no había visto, así que al terminar y mandar a su casa a Dani con un cachete en el culo, subí a mi habitación, la de la cama grande donde habían pasado la noche Lola y Lucas juntos, entré en la habitación y vi a Lola medio desnuda secándose el pelo con una toalla, se sobresaltó, pero al ver que era yo se tranquilizó.

-YO: ¿como estás rubia?

-LOLA: con una resaca de la hostia………..

-YO: jajja si es que bebes demasiado para lo pequeña que eres.

-LOLA: puffff ya ves, menos mal que Lucas me acompañó, si no, no llego a casa.

-YO: parece que habéis congeniado……..- eso esperaba.

-LOLA: si, es muy majo y eso, pero no ha pasado nada……..- se apresuró a decir con miedo a que me ofendiera por ello, cuando era lo que buscaba..

-YO: no me tienes que dar explicaciones Lola, lo nuestro no es una relación estable, ya lo sabes.

-LOLA: eso crees tú, si pensara mal diría que me estas tratando de liar con Lucas……- no era una premio Nobel, pero tampoco era tan tonta como para no olérselo.

-YO: solo le ayudo, parece que le gustas……- mentí para cubrirme las espaldas.

-LOLA: ¿en serio?, ya decía yo que era muy cariñoso…….pero………¿a ti no te importa?

-YO: en absoluto rubia, eres libre para hacer lo que quieras, igual que yo con Liz y las otras – asqueó el gesto.

-LOLA: ya sabes que a mi no me mola nada que andes con otras.

-YO: pero así es, y por lo tanto yo no puedo juzgarte, ni enfadarme por que tú hagas lo mismo.

-LOLA: pero no quiero, a mi me chiflas tú……- se me abrazó con cariño, casi la respondo que la quería, sus ojos brillaban en un azul intenso, y mi polla reaccionó al contacto con su piel, tenia que irme de allí.

-YO: vamos a preparar la barbacoa, baja cuando estés lista.

Salí pitando, y preparé la carne junto a Mara, que se despertó al oír ruidos en la terraza, eran Teo y Manu intentando encender la barbacoa, hicimos un buen trabajo y nos hinchamos a carne en la terraza con una humareda enorme y el olor a fuego y grasa llenándolo todo, hicieron 2 ollas de 10 litros de bebidas como sangría, y se las terminaron, volvieron a reír y bromear, los biquinis a volar y quedar todas desnudas de cintura para arriba, Lucas volvió al acecho con Lola que tonteaba sin apartar la vista de mi, creo que buscaba alguna reacción que no encontraba y seguía tentando, al terminar la comida el único sobrio, yo, y la única que no estaba demasiado borracha, Alicia, recogimos y limpiamos por encima, con las risas de fondo Alicia se mostraba más coqueta que el día anterior, con un biquini sugerente, un simple medio culo negro que en su tremendo culo quedaba rozando el pecado, mis ojos se iban detrás de sus caderas, entró la novia de Teo a por unas cervezas y al verlas una al lado de la otra, como en un espejo, lo vi claro, Teo había salido perdiendo, y mucho, con el cambio, no solo por que tenia menos curvas y era menos atractiva, si no por que encima estaba demostrando ser un sosa redomada, totalmente fuera de lugar ante la batería de bromas absurdas y risas. Al irse, Alicia se apoyó en la encimera con el culo, cruzada de brazos, con la cara angustiada.

-YO: ¿que te pasa hermanita?

-ALICIA: ya lo sabes…….- señaló la terraza.

-YO: pobre mía, no puedes seguir así…- me fui a por ella abrazándola con ternura, ella lo necesitaba por que se apretó a mi con fuerza, sollozando.

-ALICIA: es que no se por qué me resulta tan duro……..

-YO: por que le querías, es difícil dejar de querer a alguien, te lo digo yo.

-ALICIA: ¿y por que él si puede? – me pilló, la respuesta era clara, por que el le dejó de querer hace mucho.

-YO: por que es tonto, solo así se entiende que esté con esa tabla de planchar sosa y aburrida, en vez de con un ángel como tú - quise ser dulce y amable, pero seguro que a ella se le pasó la misma respuesta que a mi.

-ALICIA: jajaja que bobo, no es tan mala – era tan dulce que hasta mentía para ensalzar a la nueva novia de su ex.

-YO: es una estirada que no te llega ni a la suela, y te lo digo no como amigo, si no como hombre - alzó su mirada con su sonrisa eterna, real.

-ALICIA: muchas gracias, no se que haría sin ti.

-YO: tener una vida mucho menos interesante, eso seguro - reímos los 2 a carcajadas mientras me separaba de ella.

-ALICIA: ¿pues sabes que?, voy a salir ahí fuera y voy a disfrutar del fin de semana – levantó el puño en señal de refuerzo a su comentario, riendo.

-YO: eso es, y encuentra a un príncipe azul, y que te merezca, aunque existen pocos con ese requisito – sonrió torciendo el gesto apoyándose de forma tierna contra el marco de la puerta.

-ALICIA: ¿quien sabe?, quizá no tenga que buscar lejos……- sus ojos me hicieron tener un escalofrío, “¿se refiere a mi?”

Lara y Lola – De lo viejo a lo nuevo.

Mientras no apartaba la mirada del cuerpo de Alicia saliendo de la cocina, contoneando aquella obra maestra de caderas anchas, culo opulento y piel tersa, al irse, sacudí la cabeza, “no”, ahora no tenia tiempo ni ganas, y menos con ella, estaba sensible y vulnerable, seria aprovecharme de ella, y se merecía mucho más que eso, además tenia mis propios problemas.

Lola seguía siendo cortejada, la luz de sol se fue apagando y los juegos de habilidad en que al perder tenias que beber o una prueba de atrevimiento, fueron sucediéndose, graciosos, estudiados o sensuales, las prendas fueron desapareciendo junto a la vergüenza, fui malvado, aunque no bebo generalmente, soporto el alcohol mejor que nadie por mi corpulencia, o por lo que sea, pero así es, tenia a todos medio borrachos y desnudos, y yo como una rosa, ponía las peores pruebas, lametones en el sobaco entre tíos, hacerlos cantar o tener que beber si no hacías tal gesto o decías x palabra, cuando la cosa cogió temperatura fui aun peor, besos entre todos, con lengua, eso me lo devolvieron y besé a todos los tíos de la partida, pero su tenacidad iba decayendo y mi ingenio aumentando, con Alicia fui bueno y hasta formamos equipo, pero con el resto de chicas fui cruel, a Naira la dejé desnuda directamente, sin prendas, tapándose el coño con las manos con una pequeña mata de bello rubio, para luego hacerla levantar las 2 manos cada vez que yo bebiera, o serian 2 chupitos más para ella, a Mara la hice darme un baile erótico sentado en una silla, solo con la parte de debajo del biquini puesta, se movía bastante bien y Lola echaba fuego por los ojos, pero a ella la tenia constantemente acosada por Lucas, besos y lametones de uno al otro por cada rincón, y luego que cada vez que Lucas bebiera le rascara detrás de la oreja a Lola, nadie salvo ella y yo sabíamos el por que, era por que eso la ponía cachonda, y sus mejillas se ponían coloradas. A la novia de Teo le tocó la peor parte, “por hacer sentirse mal a mi hermanita”, y a Lara la horrible, cada vez que cualquiera de las 2 bebiera, tenían que echarse nata en los pezones de la otra y lamerlos, la novia de Teo no quería pero accedió ante la insistencia de Teo, Lara me odiaba cuando se me ocurrió, pero después lo agradeció, sus hiper sensibles pezones y la forma dulce en que era lamidos la tenían con un calentón enorme.

Al final era un caos de reglas en que todos bebíamos cada vez, y a todos les tocaba hacer algo, fue tan divertido y excitante que al final no salimos de fiesta a bailar, se nos hizo muy tarde para prepáranos, casi las 3 de la mañana, así que hicimos un maratón de películas en el home cinema de arriba, Lara se dio un ducha, pero sabia que fue a darse un alivio, tenia los muslos brillando de placer, Naira se quedó frita, Mara y Alicia estaban canturreando canciones, Lola enfrascada entre los brazos de Lucas, casi a punto de ceder, todos fueron cayendo al sueño, alguno cenó antes de irse a la cama, fui organizando con cautela, Manu en el sofá cama de abajo, Teo y su novia en la de invitados, Alicia y Mara en la de matrimonio como la noche pasada, pero cambié los turnos, dormiría con Lara y Naira, que ya estaba dormida hacia rato en la cama grande, y dejaría la pequeña para Lucas y Lola, “logística” argumenté, pero en una cama tan estrecha no había sitio para la individualidad, lo había experimentado con Lara la noche anterior, bueno, “noche”, era de día cuando me acosté, Naira iba tan borracha que ni se molestó en ponerse unas bragas de nuevo, iba en pelotas y se había quedado frita mucho antes que todos, si sus senos empeoraban al aire, su culo mejoraba sin ropa, pero ahora estaba tumbada boca arriba sin nada encima, con el fino triángulo de bello cuidado apuntando a su coño, al verla así, una Lara medio pedo, la metió mano delante mía, para ver si me la ponía dura, Naira ni reaccionaba, pero mi polla si, Lara sonreía, y se desnudó del todo.

-LARA: eres un mamón, me has puesto muy cachonda con el jeugecito - se repasaba las aureolas de los pezones con los dedos.

-YO: te ha gustado - la dije mientras me bajaba el bañador sacando mi rabo medio tieso.

-LARA: me has vuelto loca – me besaba en el pecho arrodillada en la cama, conmigo de pie.

-YO: ese era el objetivo.

-LARA: ¿que te parece si acabas lo que has empezado? - me agarró del rabo masturbando con lentitud.

-YO: ten cuidado con lo que deseas, la última vez que te abrí de piernas te la metí por el culo hasta hacerte llorar.

-LARA: lo recuerdo muy bien, lo recuerdo cada noche al acostarme, y recordar que lloraba……si….de placer - se puso a 4 patas lamiendo mi glande con presteza.

Llevaba un buen sofocón y me pareció un buen momento para retomar mi relajación sexual con ella, quizá si sus gritos se oyeran por la casa, Lola se mostrara dispuesta con Lucas, si es que no lo estaba ya. Lara se aferró a mi miembro con miedo a que la frenara, no seria la 1º vez, pero su lengua era una maravilla, había mejorado, y sus manos recordaban que no tenia que parar nunca, me agachaba para sostener sus enormes ubres, y al rozarla los pezones suspiraba dejando de meterse el glande en la boca por unos instantes. La di la vuelta y me arrodillé en el suelo metiendo mi cara en su coño, estando a 4 patas gemía al sentir mi lengua juguetona, lo tenia tan abierto y mojado que parecía que ya me la había tirado, así que me alcé y embestí hasta metérsela casi toda, su gritó fue intenso al inicio, de sorpresa e impresión, se fue apagando lentamente cambiando la tonalidad por la del placer y la lujuria, con un par de azotes di comienzo a las penetraciones más lentas que pude, tenia que recordar hasta donde podía metérsela sin rozarla el útero, una vez localizado arremetí con todo sacándola alaridos continuos, su pelvis se abría recordando mi verga y disfrutaba entre jadeos y palabras soeces, de la última embestida antes de correrme se derritió en unos orgasmos brutales cayendo tumbada sobre la cama, riéndose de pasión, la puse boca arriba y abriéndola de piernas me metí entre ellas acostándome sobre su senos, amasándolas como podía, eran enormes y bien puestos, tersos y apetitosos, sus pezones eran atacados por mis labios y sus jadeos solo aumentaron, al tenerla dura otra vez la penetré de nuevo por su coño, arremetiendo fuerte hasta el punto necesario, y retirándome lentamente, acompasándolo a su exhalación, tantas veces que sus senos botaban entre ellos a ritmo de mis acometidas como su cuerpo, la cama y lo pechos de Naira totalmente KO, la estaba matando cuando le agarré las tetas y aceleré hasta llevarla a un carrusel de orgasmos que la hacia gritar alocada, para cuando me corrí en su interior el sudor le resbalaba entre los protuberantes pechos, y su mano buscaba el contenido de su coño para lamerlo entre sus dedos.

-LARA: ¡ohhhhh …………dios!………….eres mejor de lo que recordaba……….- sus dedos lamidos recorrían mis pectorales

-YO: soy mejor que cuando me fui.

-LARA: lo he notado……..dios………me has dejado muerta……..- sonreí al lamerle los pezones de nuevo.

-YO: ¿como que “te he dejado”? Esto aun no ha acabado, no te volverás a ir a dormir pensando en cuando te abrí el culo, si no en cuando te lo volví a abrir - su rostro palideció pero con una sonrisa.

-LARA: no, no, no, por favor, eso no……- pero era tarde, me apretó del cabello contras su senos, los juntaba para ayudarme a lamerlos mejor, bajaba por su vientre mientras ella seguía acariciando levantándose una teta para chupársela.

Mis dedos hurgaron en su coño hasta mojarse y bajaron a su ano, cerrado como perno de submarino, poco a poco, entre relajaciones y caricias se fue abriendo hasta meter mis dedos en ella, su alarido al meter 3 habría despertado a toda la casa si no estuviera la puerta medio cerrada, me aseguré de ello para que Lola oyera bien, aunque al mirar de refilón juraría haber visto sombras, me dio igual mientras levantaba a Lara de la cama y la empotraba de cara a la pared, me pegué a ella alzándola una pierna, dirigí mi rabo a su ano, tuve que hacer fuerza varias veces para meterla el glande, golpeó la pared llena de dolor, o eso creía, por que al momento siguiente embestí subiéndola por la pared alejándola del suelo, media polla dentro de golpe la enseñó que era el dolor de verdad, cerró los puños mientras se mordía uno y sus senos vibraban al resbalar a contra pelo en la pared, bajando su cuerpo siendo aun más penetrado, tocó con las yemas de los dedos de los pies el suelo, y mi verga estaba entera embutida en su culo, estaba roja y me pedía que se la sacara, pero estuve quieto dejando que su ano se expandiera, podía haber atacado en cualquier momento pero a mi entender fui diligente, sus sollozos fueron apagándose, y de vez en cuando la sacaba lentamente y la metía con tal fuerza que se volvía a elevar por la pared, con un solo grito cada vez, más alto y más agudo hasta que dejó de gritar y comenzó a gemir, a arañar la pared y babear pidiendo que no parara, la separé de su apoyo y la cogí de las tetas apretándola contra mi y contra el suelo plantándola los pies en la alfombra, arremetiendo con fuerza en su culo a tal velocidad que sus nalgas no dejaban de temblar entre choques de mi pelvis en su culo, estiró un brazo por encima de su hombro para acariciarme la nuca y la otra mano en su cabello tratando de aferrarse a algo firme, mi manos eran 2 tenazas bien sujetas a aquellas maravillas de la genética que eran sus tetas, aunque cuando sus orgasmos anales la hacían tambalearse la tenia que sujetar de la cintura, al 3º se desplomó en mis brazos y solo jadeaba buscando con las manos donde apoyarse, sin encontrar nada, al llenarla de semen el culo di unas fuertes embestidas lentas sintiendo como me derramaba en ella, que solo podía doblar la rodillas en el aire al sentir como mi leche caliente brotaba en su interior.

La dejé en la cama recostada y me tumbé entra las chicas, supongo que al sentir un cuerpo cálido a su lado Naira de forma instintiva y dormida se acurrucó en mi pecho, la rodeé con mi brazo para facilitarla el trabajo, y reposó su melena rubia sobre mi tórax, viéndola así, Naira era una versión más esbelta, alta y de más edad que Lola, con ojos azules y un acento canario muy característico, pero por alguna razón, aquella canaria desnuda y borracha abrazada a mi cuerpo no me ponía ni la mitad que Lola, si hubiera sido ella no se hubiera librado de un par de polvos, en cambió me quedé dormido.

Al despertar Lara estaba en la ducha y yo seguía tumbado boca arriba con Naira agarrada a mi, era increíble lo que la bebida lograba hacer con ella, dormía como la princesa de cuento, tenia su cabeza apoyada en mi hombro, un brazo rodeándome por el vientre y una pierna doblada y subida encima de mi, rozando con la rodilla mi polla empalmada de las mañanas, nada mal despertarse así, si no fuera por que el brazo que estaba usando como apoyo para la cabeza estaba dormido y con un tono azulado que me hacia sentir hormigas en los dedos, traté de sacar el brazo pero literalmente no me respondía, así que no había otra, acaricié su brazo llamándola, su reacción fue apretarse más contra mi, reí en silencio al sentirme un osito de peluche gigante, fui lo malo que quise y la acariciaba el cuerpo con astucia, acelerando su respiración, cogí su brazo y lo bajé a mi entrepierna y de forma casi natural al sentir mi polla la agarró como un bebe el dedo de su madre, pero no masturbas el dedo de tu madre, ella si lo hacia a mi verga que estaba tensa y apuntando al techo, se movió lentamente bostezando y dándome un beso en el pecho, miró hacia arriba clavando sus bellos ojos, de un azul apagado, en mi.

-YO: hola canaria, ¿te levantas así de agradecida todas las mañanas? – señalé abajo, cuando miró su mano se detuvo en seco.

-NAIRA: ¡mierda, perdona! – tragó saliva asustada, y aun despertándose.

-YO: no pasa nada, pero……… ¿y si me la sueltas? – lo hizo de inmediato como si yo hubiera dado la orden a su cerebro.

-NAIRA: ¡¡DIOS ¿No habremos.......?!! - se llevó la mano al coño.

-YO: no reina, si te hubiera follado no lo olvidarías - la besé en la frente y se apartó corriendo sentándose y apretándose las sienes.

-NAIRA: joder, que dolor de cabeza, no vuelvo a beber nunca - reí al sentir mi brazo inerte, golpeándolo contra el colchón para reactivar la circulación.

Naira se rodeó el cuerpo con una sabana algo avergonzada, no por qué, ya le había visto todo, se alejó de mi tapándose y sin apartar de reojo su mirada de mi polla en ristre, esta vez si, al ir a mear pregunté quien era y Lara respondió entre risas, me metí en la ducha con ella y nos acariciamos, la levanté en brazos a horcajadas y la penetré por el coño con virulencia, apoyándome en los asideros de la amplia ducha y besándonos como colegiales, sus gritos amortiguados por el sonido del agua fueron lo mejor de todo, sentir como la penetraba y ella disfrutaba, chupando el agua en sus grandes senos y sus duros pezones, conté 4 orgasmos antes de vaciarme en ella, y me fui dejándola allí, suspirando y cansada, tenia que volver a empezar a ducharse, me puse un bañador y me senté al PC.

Mi idea era ver el cuarto de Lola y Lucas, saber si había pasado algo, pero rebobinado en las cintas vi algo en la cámara del rellano de arriba, la que daba a las 3º habitaciones, eran 2 cuerpos moviéndose en la puerta de mi cuarto, y después 1, cuando desapareció y me vi entrar en el cuarto para acostarme, paré de rebobinar y dejé el play escuchando con los cascos, puse al mismo tiempo la grabación del interior con Lara y yo comenzando a retozar, avancé un poco hasta que oía a Lara gritar las primeras veces, fue cuando el 1º cuerpo fue caminando de puntillas a la puerta, hice zoom, pero la reconocí a la 1º, era Mara, la hermana de Alicia, resulta que la seria y regia señora había escuchado a Lara gozar, y fue a mirar por la rendija que había dejado, iba solo en bragas, veía su rostro sonreír y cubrirse tras la puerta, se comportaba como una cría hasta que Lara y yo comenzamos a follar en serio, sus risas cambiaron, y su pose también, es difícil mantenerla mientras tus muslos se frotan, al poco tiempo de vernos se metió la mano entre las piernas y se acariciaba por encima de la tela, al 2º polvo ya se metía la mano por dentro de las bragas y aunque no era muy buena calidad, podría aseverar que se metía un dedo en el coño, lo sacó de bruces al oír a su espalda movimiento, y la que acudió fue su hermana, Alicia, medio dormida y preguntando con los brazos que hacia a esas horas allí, Mara la pedía silencio con el gesto en los labios y la llamaba con una mano, la curiosidad de Alicia fue más que su cautela y se puso a mirar mientras yo ya enterraba mi polla en el culo de Lara, las 2 mirando como la abría el culo y oían sus gritos, cuchicheaban en bajo entre ellas, no oía nada por que no tenia micros en esa parte, solo la cámara enfocando como Mara daba un masaje en los hombros de Alicia, sin apartar sus ojos de mi, hasta dejar a Lara en la cama y acostarme, se fueron a su habitación entre risas y comentarios, me pareció leer en los labios de Mara “que mala bestia”, no me dio tiempo a más, Lara salió de la ducha y no quería que viera que tenia cámaras por la casa, así que cerré todo y me bajé con ella a desayunar junto a Dani, que estaba preparando sus famosas tortitas para todos, arremolinados entre risas y caras de resaca, olfateando el aroma que despedía la sartén.

-YO: que bien huele eso – abracé a Dani por detrás besándole la mejilla.

-DANI: tú no tocar, 1º amigos – me amenazó con la cuchara de madera.

-ALICIA: eso, ponte a la cola…..- me golpeó en el hombro con la mano.

Fuimos comiendo y llenando de risas la cocina, las miradas entre Lara y yo no eran muy diferentes a entre Mara y Alicia, pero solo yo me daba cuenta de todas, solo me faltaba una, Lola, no había bajado, y al recoger, tras un sonoro aplauso que recibió Dani encantada, Lucas pasó detrás mía.

-YO: hey, ¿que tal la noche? - con el tono que ponemos los tíos cuando sabemos que se está preguntando.

-LUCAS: puffff una fiera salvaje, mejor no preguntes……- sonrió apretándose el paquete y posando una mano en mi hombro, luego se fue a la terraza con los demás a disfrutar de lo que quedaba de mañana en la piscina, mientras Dani recogía para irse.

Aquello era un indicio claro de que algo había pasado, y por un instante me enfadé y me puse celoso, era estúpido, era lo que buscaba, si había pasado algo era la evidencia de que Lola no me quería y podría quitármela de la cabeza, ¿pero que había pasado?, si Lucas no soltaba prenda solo tenia la otra versión, fui a por Lola, estaba en el cuarto, aun acostada, con una sabana cubriendo todo el cuerpo, me senté a su lado y mi movimiento la despertó, alzó la mirada frotándose los ojos, y al enfocarme su rostro cambió a ira, saltó sobre mi lanzando puñetazos y manotazos violentos, me reía pero me estaba costando aguantar el tipo.

-LOLA: ¡eres un maldito cerdo asqueroso! – espetaba mientras sus brazos se cansaban y los golpes descendían en número y ferocidad.

-YO: ¿y ahora que he hecho?

-LOLA: ¿que has hecho?...... – soltó otro zarpazo –….. ¡¡¡me dejas aquí tirada con Lucas mientras te vas a follar a la tetona, ¿y te preguntas que has hecho?!!!

-YO: rubia, ya sabes que nosotros……..- soltó otra ráfaga de golpes abalanzándose sobre mi, haciéndome caer tumbado con ella de rodillas sobre mi.

-LOLA: ¡me da igual lo que seamos!, no me gusta esto, no quiero que te folles a otras - su tono bajaba en fuerza y aumentaba en sentimientos.

-YO: pero tú y Lucas……- me abofeteó la cara, hice fuerza para quitármela de encima y dejarla tumbada sobre la cama, crucificándola al colchón con mis brazos, aun así se revolvía y soltaba patadas, iba vestida con una camiseta ancha enseñando un hombro, sin sujetador y con un tanga negro aflorando al subírsele la camiseta.

-LOLA: ¿Lucas que?, es un tío cualquiera, como él me han entrao a cientos, los conozco bien, se ha pasao media noche metiéndome mano y le decía que parara, susurrándome guarradas al oírte haciéndolo, y cuando me ha agarrao una teta le he soltado un codazo en los huevos, ¿vale?, paso de él y de niñatos como Javi, te quiero a ti, me ¿oyes?, ¡¡¡TE QUIERO!!! - sollozaba al declararme su amor, respirando agitada, con la cara roja y el cuello a punto de reventar.

La aflojé las manos donde la tenia sujeta y se frotó las muñecas donde había apretado al inmovilizarla, me senté en el borde de la cama dolorido, magullado y con el cuerpo ardiendo por los golpes, pero con una sonrisa enorme y una horrible sensación de alivio al saber que no había pasado nada entre ellos. “Joder, ¿por que me pasa esto?”, Lola no había cedido, me quería, me lo acaba de gritar y dejar más que claro con su forma poco elegante y nada refinada, aunque yo no quiera, la amaba, quizá ahora más que antes. Mientras me debatía que hacer me rodeó con sus brazos por la espalda pegando sus senos a mi hombro y dejando caer su larga cabellera rubia sobre mi pecho, como un río dorado, mientras su rostro se pegaba a mi cuello.

-YO: esto no puede ser Lola………

-LOLA: ¿por que no?

-YO: soy un mujeriego, un cabrón y mala persona……- me abrazó con fuerza.

-LOLA: podrás tirarte a muchas y ser un mamonazo, pero no eres mal tío, créeme, de esos conozco muchos.

-YO: no me conoces, he hecho cosas malas, a muchas chicas……..

-LOLA: es cierto, no te conozco desde hace mucho, pero si tus amigos, llevo hablando con ellos todo el fin de semana, y solo hablan bien de ti, cabezón, testarudo y que no te tomas nada en serio, si eso es lo peor que tienes podría vivir con ello el resto de mi puta vida.

-YO: son mis amigos, ¿que te van a decir?

-LOLA: pude ser, pero es lo mismo que me has demostrado a mi desde que te conozco, y después de lo de Javi, se que mi lugar está contigo.

-YO: ya, conmigo, mi casa, mi coche…….- ataqué a la línea de flotación, a la desesperada, no sentía argumentos en contra.

-LOLA: me suda el coño todo esto….. – alzó un brazo señalándome la habitación, luego me agarró la cara y me la giró hacia la suya, clavando su frente a la mía y sus ojos azules brillando tanto como los míos –….. quema esta puta casa y tira el coche por un barranco, me da igual todo ya, solo te quiero a ti - una lagrima cayó por mi mejilla.

-YO: no sabes lo que dices…..- pero era yo el que no tenía palabras.

-LOLA: mándalo todo a la mierda, pero quédate conmigo.

-YO: dios, rubia………….. te quiero……….- lo solté sin pensar.

-LOLA: lo sé – sonrió levemente, pero me abalancé sobre ella asustándola, mirándola con rabia.

-YO: no, no lo sabes, no lo digo como un cumplido, ni para abrirte de piernas, no es algo que vaya diciendo a todas ni es una frase hecha, no quiero hacerlo……………. pero te amo - sus manos resbalaron por mis coloradas mejillas con las gotas saladas brotando de mis ojos, mirándome a los ojos aguantando el tipo.

-LOLA: lo sé…… – asintió con la cabeza a punto de echar a llorar, como yo -….. y yo a ti.

Me sentí como hacia mucho que no me sentía, libre, feliz, despejado y tranquilo, recostado sobre su pecho con ella jugando con los dedos en mi cabello, soportando mi peso con su diminuto cuerpo sin mostrar incomodidad alguna, viajé en el tiempo, me descubrí de rodillas abrazado al vientre de Ana en el ascensor el día de la mudanza, otra vez, esa misma sensación, de ser un ogro incontrolado, de ser un gigante destruyendo ciudades y al sentirla entre mis brazos, empequeñecer, ir menguando mi tamaño, rendido ante ella, hasta ser poco más que un cachorro en la palma de su mano, mi corazón latía fuerte y sereno. “Maldita sea”, pensé, era tarde, ya no quería soltarla y me flagelaba por haber querido quitármela de encima, que tarugo podía llegara a ser, y que miedo nos dan los cambios, aunque sean a mejor.

Si, Lola era una choni, no tenia aires elegantes y no era una dama, le faltaba clase y educación a raudales, pero me había enamorado de ella perdidamente pese a esos defectos, o precisamente por ellos, no lo sé, era tan diferente a Ana o Irene…………..pero ahora que era mía no perdería el tiempo, la besé en los labios con la sonrisa más real desde hacia casi un año, me vencí sobre ella, no se cuanto tiempo pasó, tenia mi oreja marcada en la piel de su pecho.

-YO: habrá que hacerlo oficial, ¿no?

-LOLA: ¿el que? – me arrodillé al lado de la cama, tirando de su mano hasta sentarla al borde de la misma.

-YO: Mí amada Casandra, también conocida como Lola o rubia, ¿aceptáis de buen grado ser la novia de este patán y tosco caballero? Juro cuidar de vos, amaros y respetaros, defender vuestro honor y por último, mi mayor presente, ante el universo entero juro que no tendré relación amorosa con cualquier otra persona o ser vivo – soltó una carcajada enorme que me llenó el corazón de alegría, tratando de controlar su pecho alborotado.

-LOLA: estás chalao, como un puta cabra, ¡¡¡pos claro que si, imbécil!!! – saltó sobre mi con tanta fuerza que apenas pude contener la caída, rodamos por el suelo entre caricias y besos, quedó tumbada sobre mi apoyando una rodilla en el suelo.

-YO: ahora te toca a ti……- la susurré después de un beso largo y tierno, solo con los labios, pero con toda mi alma.

-LOLA: jajajajaja a mi eso no me sale – la azoté el culo con energía, haciéndola abrir la boca.

-YO: sosa…..- mascullé, me soltó un puñetazo en el pecho que me hizo toser con una sonrisa.

-LOLA: está bien…….Mi amado Raúl……..también conocido como el trípode o el hombre de tres piernas jajajaja………….¿aceptáis con gusto ser el novio de esta alocada mujer?

-YO: había más………- se sonrojó.

-LOLA: joder……..¿como era?……..

-YO: juro……

-LOLA: juro cuidarte, quererte y respetarte, defenderte de cualquiera, y no acostarme con ningún otro tío – me miró pidiendo aprobación.

-YO: bueno……….más……… o menos……- me tiró del pelo con ira - …… ay, va, me vale – me soltó otra leve bofetada para después besarme con pasión.

-LOLA: estamos mal de la olla.

-YO: no lo dudes…….- la alcé con tanta facilidad que pareció no costarme, la puse en pie y me levanté, fui corriendo a por mi móvil.

Tardé unos minutos revisando la grabación y cerciorándome de que Lola había dicho la verdad sobre Lucas, algún rincón de mi cabeza quería que me hubiera mentido para seguir aquel frenesí de sexo descontrolado que era mi vida, un gesto de dolor y un bufido se me escaparon al ver su codazo golpeando en los testículos de Lucas, como a cualquier varón que lo mirara, eso me hizo amarla aun más y no sabia como. Regresé corriendo y la ataqué como un defensa de rugby, levantándola del suelo y entre risas dejarla tranquilamente en la cama, dándola el móvil y abrazándola por detrás.

-YO: toma, haznos una foto – sonreía sin entenderme, preparó el móvil y nos hizo varias hasta que 1 en la que se nos veía bien me gustó.

-LOLA: ¿y ahora?

-YO: selecciona en los mensajes enviar a varios, y marca a todas las mujeres de mi agenda.

-LOLA: ¿para que?

-YO: tú hazlo – lo hizo, y tardó bastante, más de 80 conté, quitando a familiares y otras no relevantes al caso.

-LOLA: ya está.

-YO: carga la foto …– lo hizo – …y ahora escribe “lo siento chicas, tengo novia, así que dejadme en paz” – se giró escribiéndolo en automático, con una habilidad única con los pulgares, besándome en los labios, llena de felicidad.

-LOLA: ya, ¿que hago?

-YO: ¿pues que vas ha hacer?, enviarlo……- su rostro casi irradiaba luz blanca.

-LOLA: pero que es multimedia, te va a costar un pastón – (cabe decir que en esa época no había todavía el boom de los smartphones, y los envíos de archivos multimedia costaban 2€ por mensaje, si eran 80…..)

-YO: dale, “enviar” – metí mi nariz detrás de su oreja, haciéndola cosquillas de las que encienden fuegos, “click” sonó.

-LOLA: tú estás tronao - se giró acariciándome el pecho con sus pequeñas manos que parecían aun más diminutas en mi cuerpo.

-YO: loco, y por ti ….– la levanté la cara con un dedo en su barbilla, cada vez que miraba a sus ojos azules me sentía renacer –…. entiende que esto para mi es importante, vengo de una relación larga y que terminó muy mal…….

-LOLA: ¿te crees que con Javi terminé a buenas?

-YO: entiendo, pero no me falles, no me rompas el corazón, no se de que seria capaz………. – mi tono era tenso y casi me temblaba la voz, me puso la mano en el corazón, notando como latía con fuerza y desbocado.

-LOLA: no lo haré, no te fallaré ….. - estiró un poco la espalda señalándome con el dedo -…pero tú tampoco lo hagas conmigo, parezco dura y sin sentimientos, pero también tengo miedo – la cogí de la mano en mi pecho, colocando mi otra mano en el suyo, en su corazón, sintiendo como los 2 palpitaban alterados, y como poco a poco se iban calmando, hasta casi acompasarse y parecer uno solo.

Al rato bajamos a la piscina a comer, ya andaban liados con la barbacoa de nuevo, quedaba mucha carne aun, en mitad de la comida oficialicé la relación entre Lola y yo, antes de que todas lo vieran en sus móviles, rompieron en aplausos, la única que no lo hizo fue Lara, la pobre había catado lo que ansiaba y que se le volvía a escapar, aunque me daba igual, estaba fijándome en que Alicia sonrió como siempre, pero esta vez, no tenia las arrugas en los ojos, me sentí mal por un segundo, no se que le pasaba por la cabeza pero sus ojos no mentían, verme con Lola no la hacia feliz, aun así me felicitó como todos. A Lola la hice pedirle disculpas a Lucas, y luego hablé con Lara a solas, con Lola a mi lado, mis explicaciones no la convencieron, pero no éramos pareja ni nada, por una noche loca no podía pedirme más que una explicación, muchas otras se iban a quedar sin mi y llevaba 3-4 meses tirándomelas, solo tendrían el mensaje como argumento.

Pasamos la tarde del domingo jugando, algo menos atrevidos y disfrutado del poco sol que se empezaba a nublar, yo estaba en el agua junto a Lola, besándonos, con el resto alrededor entrando y saliendo de la piscina, aquella ola de calor había acabado, tal como predijeron al llegar la tarde el cielo se volvió oscuro y a lo lejos los rayos llenaban el cielo de Madrid, la temperatura bajó bruscamente de los 23º grados, y cuando caían las primeras gotas todos salieron corriendo entre risas hacia dentro, todos menos Lola y yo, ella parecía inquieta pero sujetada entre mis brazos se sentía segura, oíamos de lejos los gritos del resto pidiendo que entráramos, pero yo daba vueltas lentas girando sobre mi mismo con Lola pegada a mi, acariciándonos, el agua empezó a caer con fuerza y una cortina de lluvia y viento azotaba la terraza, Lola fingía no estar asustada.

-LOLA: dios mio, como cae, vámonos – tiritaba casi, con el agua de la piscina salpicando al impactar las gotas de lluvia.

-YO: ¿por que?

-LOLA: nos vamos a mojar – solté una carcajada alzando la vista y dejando que la lluvia me cayera en el rostro.

-YO: solo es agua, y ya estamos en una piscina.

-LOLA: jajajaja pero no es lo mismo, ¿y si se desborda o me lleva el agua? – esperaba que fuera una broma y no una verdadera preocupación, seria difícil estar enamorado de alguien así.

-YO: yo te sujetaría - gritó de nervios al sonar un trueno, mientras reía acurrucándose en mí pecho protegiéndose del aire y del torrencial con mi cuerpo.

Estaba en la gloria, pocas veces me ha pasado pero si podéis experimentar la sensación de estar en un pantano, un lago, una piscina o incluso en el mar, mientras cae una tromba de agua, es algo mágico, tiene un componente que me hace sentir vivo, incluso cuando solo llueve y estoy en la calle, mientras el resto se esconde bajo paraguas, tejados y portales, siempre me ha gustado ponerme en mitad de la calle y sentir el aire entre mis brazos separados del cuerpo, la ropa temblar del viento, y el agua calarme hasta los huesos, me mezclaba con el mundo y formábamos uno solo. Me costó muchos resfriados y broncas de mi madre pero pocas cosas podían hacerme sentir mejor, y en este caso era tener a una preciosidad rubia de ojos azules mirándome, alzando la vista con pánico a su alrededor, pero una firme seguridad en que yo la protegería, en que ni un huracán lleno de tornados la separaría de mi.

-LOLA: siento como si fuéramos a echar a volar… - elevó la voz ante le ruido de la tormenta, la rodeé con mis brazos aun más fuerte, y ella se agarró a mi con tal energía que sentía sus uñas en mis costados, inspiré el olor de su pelo húmedo, cerrando los ojos.

-YO: yo estoy aquí……..

Lola – Reinicio.

Ya estaba hecho, no había vuelta atrás, Lola y yo éramos pareja, ese fin de semana fue una montaña rusa de sentimientos, llevaba casi 4 meses siendo el casanova más cerdo y detestable que podía ser, me lo estaba pasando bien, teniendo esclavas como Liz, amantes inexpertas como Jeni y autenticas lobas como Yasira o Eli, con un abanico amplio de mujeres, altas o bajas, delgadas o rechonchas, rubias, morenas o teñidas, iba a por todas y al menos las hacia probar mi fogosidad 1 vez, y si pasaban la prueba seguían hasta donde duraran. Si salía a comer, me tiraba a la camarera, si iba al cine, a la del puesto de palomitas, si iba a una discoteca, a la gogó más caliente, o si tenia que comprarme ropa, a la dependienta, me daba a igual, tenia tanta ira por dentro que me arriesgué con las amigas de mi hermana, y aun así no paraba, pese a estar agotado o poder contagiarme de cualquier enfermedad venérea. Solo os he relatado las relevantes, pero a cada sitio que iba, no miraba mujeres, si no próximas víctimas, y lo había mandado todo a tomar por culo por una choni agresiva, territorial y de ira fácil, por que irónicamente, me calmaba a mi.

Al terminar el fin de semana con mis amigos y despedirlos con aquella lluvia torrencial, me quedé con Lola todo lo que pude, y pese a que seria lo normal, no tuvimos sexo, fueron solo carantoñas y caricias, me perdía en sus ojos, azules y luminosos, se ruborizaba al verme mirarla de esa forma, nos habíamos sentado en el sofá rodeados de toallas al estar empapados por la piscina y el aguacero que nos cayó encima, se sentó en mi regazo rodeándola con mis brazos y una toalla, podría acariciarla y babear en su precioso y delicado cuerpo, pero no podía apartar los ojos de aquella mirada inquieta y viva, quería ver más allá de su rostro, mi mente ágil y escarmentada trataba de pensar mil maneras en que Lola fuera un engaño, algo irreal, quizá Eleonor, Ana, o hasta Jeni y Lucia tenían motivos para querer vengarse de mi, pero tenia la sensación de que si Lola fuera un artificio, me habían ganado esa partida, estaba tan perdidamente enamorado de ella que me hubiera dado igual que en ese mismo momento entraran todas con un equipo de cámaras detrás y un muñeco enorme de “inocente”. Había construido un muralla a mi alrededor y la mujer en mis brazos, una niña sin desarrollar del todo, con un 1,60 escaso de altura y menos de 55 kilos, la había derribado a mazazos, “no, no puede ser falso”, tendría mis argumentos para pensar así, lógicamente, a Lola la conocí antes del lío del piso, y aunque la hubieran pagado después, o era la mejor actriz de la historia o no era más que una cría que seguía las modas de una tribu urbana mal vista, no se puede disimular cierta carencia de palabras, agudeza mental o reacciones físicas, y si era capaz, cuando la dieran su 6º Oscar siempre podría presumir ante la gente que me tiré a aquella mujer.

La acompañé a su casa y nos despedimos con un largo y lento beso, la azoté en el trasero cuando se inclinaba sobre mi pecho para alcanzarme la cara con sus labios, y me respondió con un puñetazo en el vientre, justo donde aun me dolía, mi reacción la hizo palidecer solo un instante, para luego volver a besarme, riéndonos, se comportaba más como un mejor amigo que como mi novia, y aun así me la puso medio tiesa al mirarla el culo cuando se bajaba del coche, al regresar a casa corrí a coger el móvil, estaba sonando tirado en el suelo, lo había dejado en la mesita, y había vibrado tanto que estaba tirado allí.

-YO: ¿si?

-LIZ: ¡¡¡¿como que ya tienes novia pedazo de desgraciado?!!! – tuve que alejar el móvil de mi oreja de sus gritos.

-YO: ¿que te pasa?

-LIZ: ¡¡¡¿y encima lo preguntas?!!! ¡¡¿pero no ibas a cortar con ella?!!

-YO: iba……..pero que quieres que te diga, la amo.

-LIZ: ah, muy bonito, ¿y ahora que?, ¿vas a estar jugando con nosotras como si fuéramos peones?

-YO: en realidad no……….había pensado que…….ya que tengo una relación seria………..pues………- no encontraba un forma suave de decirlo -…….vamos. que te tienes que ir de mi casa - los gritos que pegó fueron tantos que a los 2 minutos decidí colgar, me volvió a llamar igual y la volví a colgar, a la 3º ya parecía más despejada.

-LIZ: mira, siento todo esto, me paso por allí y lo hablamos…..

-YO: si tú quieres………pero tráete una maleta, al irte te llevas tus cosas.

-LIZ: no seas cabrón, no me hagas esto.

-YO: mira, ha sido divertido y eso, pero ya sabias lo que había, mejor que ninguna, te agradezco todo lo que has hecho por mi, pero se acabó.

-LIZ: esto no va a quedar así…….no soy un pañuelo de usar y tirar – colgó con un tono amenazador.

Me pasé toda esa noche, y los siguientes 2 días, con conversaciones y mensajes similares, tirado en la cama con 40 de fiebre y escalofríos del domingo en la piscina, con un dolor de cabeza horrible y sudando sin parar, pero sonriendo cuando Lola venia y se quedaba cuidándome por las tardes, mi cuerpo la había protegido tanto que estaba como una rosa y yo era un harapo postrado en la cama, las únicas que no montaron en cólera, ni me amenazaron, ni lloraron, ni suplicaron, ni cualquier otra cosa, fueron Ana, que me llamó para felicitarme y hablar un poco del pasado, y Eli, con un escueto mensaje con una foto suya lanzándome un beso guiñando un ojo

“Mucha suerte con tu nuevo amor”

Fue la única foto recibida que Lola no me borró, el resto eran, de eróticas y sensuales, a obscenas y grotescas, todas con el fin de hacerme cambiar de idea, pero soy tan tonto que mandé los mensajes a todas sin pensar en las consecuencias, gracias a dios quité a Eleonor del lote, ni me imagino que podría hacerme si se entera, Eli me demostró que la única que entendió lo que necesitaba y comprendió mi forma de ser, fue ella, el resto no lo aceptó nunca, y se creían que tenían a un animal salvaje dominado, compartido pero enjaulado, y cuando el animal rugió y decidió irse, se echaron las manos a la cabeza. La peor fue Liz, que odio me tenia de golpe, al ser la más cercana no me la podía quitar de encima y amenazaba con ir a mi hermana, ¿pero que la iba a decir?, ¿“tu hermano pequeño me ha tenido 2-3 meses esclavizada sexualmente por que me encantaba como me follaba con su enorme polla”?, sin duda eso fue lo que hizo Iziar, y Liz sabía tan bien como yo que las cámaras que grabaron a Iziar, la tenían a ella grabada negándose a ponerse ropa normal, retozar en mi cama pidiendo sexo hasta que se lo daba, o teniendo festivales lesbios con las chicas que dejaba mientras yo salía de casa, estaba tan pillada que solo podía mirarme con odio.

Al 4º día me recuperé por fin del catarro que cogí, el 1º olor que notaba en mi nariz desde hacia días era el desayuno de Dani, me hizo bajar flotando por las escaleras, y abrazarla levantándola por los aires entre risas girando sin parar.

-DANI: tú para, estar malo, descansar y tomar leche caliente.

-YO: ya se me ha pasado, y estoy renovado, Dani, el amor lo cura todo – la dejé en el suelo besándola en el cuello.

-DANI: ya, yo vi mensaje en móvil, ¿tú y Lola novios?

-YO: si, así que por ahora te quedarás sin que te haga mía …….– sonrió ante aquella especie de broma entre nosotros, Dani me quería, y yo a ella, pero si no había pasado ya, es que no pasaría nunca, Dani estaba demasiado curtida en el sexo, y creo que me veía más como a un hijo que como a un hombre.

-DANI: oh, yo lamento, no poder dormir esta noche con marido por lastima – se colocó el dorso de la mano en la frente como una gran actriz dramática, riéndonos.

Lamenté no haberme aprovechado antes de sus ofrecimientos, pese a no ser reales, si no muestras de piedad o cariño, serian mejor que nada, la había visto en biquini cuando su marido y su hijo se pasaron por mi piscina, y era de lo más hermoso y bien colocado que había visto nunca, si teniendo un hijo estaba así, un escalofrío me entró al pensar en ella con 18 años virgen y joven, pero ahora no podía, era un hombre con pareja, y esa idea empezaba a revolotear en mi cabeza, mientras tenia orgasmos en la boca con el sabor de las tortitas con sirope.

Si, de nuevo con pareja, con Irene me fue genial hasta que llegó el sexo y se volvió una adicta hasta no querer nada más de mi, Ana había sido maravillosa, pero terminó en desastre, sin duda fuimos demasiado rápido y demasiado lejos en nuestros juegos, pero eran 2 cosas que no me podían volver a pasar, lo 1º por que ya había tenido bastante sexo con Lola y no se le había ido la cabeza, así que solo tenia que asegurarme que lo 2º no pasara, buscando ideas me senté con Dani para que me explicara su romance con su actual marido, sin duda la historia de cómo una puta se volvía una madre de familia con trabajo seria un ejemplo, me dijo que para ella fue mi importante ir despacio, notar como su marido no era un cerdo más que solo la abría de piernas, si no una persona que la quería y la respetaba, que la ayudaba con sus problemas y que se preocupaba por ella, poco a poco iban quedando más a menudo, luego unas vacaciones, y por último irse a vivir juntos.

Fue esclarecedor, no podía meter a Lola a vivir en mi casa, no de primeras, pasar demasiado tiempo juntos me llevó a experimentar con Ana, iría despacio, como en las series, cada capitulo un poco más, hasta que de forma natural fueran ocurriendo las cosas, un proceso lento y progresivo.

Me pase otra hora dándole vueltas, estaba sentado en el sofá de salón, mirando a las paredes, pensando en que solo me sentía, en que no tenia nada que hacer en todo el día mientras Lola estudiaba de mañana y se pasaba por las tardes, solo trabajaba los fines de semana por las mañanas y mi jefa se mostró muy enfadada al ver el mensaje de mi noviazgo, no me lo pondría fácil, pero aun así, tenia tanto tiempo libre y nadie con quien compartirlo. Fue cuando un velo, o un cortina nebulosa, se apartó de mis ojos, y vi mi casa como por 1º vez, enorme, con 2 plantas, 4 habitaciones, 3 baños 1 con hidromasaje y piscina propia, “¿Qué coño hago viviendo yo solo en esta casa?, tengo 21 años y ya vivo como un cuarentón divorciado”, se me pasó por la cabeza quemar la casa, como dijo Lola, seria gracioso explicárselo al seguro, luego entré en mis cabales, podría venderla, por ese piso al menos unos 50 millones de €, ¿pero donde viviría?, ¿volver a casa de mis padres? ¿A aquel cuchitril en comparación a mi palacio, a 15 kilómetros del centro de Madrid? Y una mierda, mejor seria comprarme un piso mucho más económico por el barrio de mis amigos, o ya puestos volver al piso de estudiantes, pero ya estaban las habitaciones ocupadas, y mi opción para entrar seria acostarme con Lara, y no creo que Lola lo aprobara……………….. Tenia la solución delante y no la veía, me golpeaba la cabeza tratando de zarandear las ideas, lo hacia desde pequeño, exteriorizar mis sentimientos me ayudaban a definirlos y hacerles frente, mi madre me regañaba a menudo por me decía que me iba a hacer daño, mi padre se reía y mi hermana me “ayudaba”, moviéndome como una maraca, jajajjaja dios, que recuerdos………………..”eso es, ¡¿como puedes haber sido tan imbécil?!”

Cuando llegó Lola le expliqué mi idea, el como quería llevar nuestra relación, ella vivía con sus padres y podía pasarse por mi casa todas las tardes, quedaríamos los fines de semana y esas cosas pero nada de agobios, la conciencié de que sus estudios era prioritarios, tenia que sacarse el graduado para que la admitieran en cualquier curso de peluquería, que es lo que quería hacer, la dije que si sacaba los estudios adelante yo mismo la pagaría el curso, se me abrazó llenándome de besos, pero la tranquilicé, “solo si apruebas todo”, ya tendría tiempo de bajarla de la nuve, ahora no me escuchaba.

Al terminar de hablar subimos a mi habitación y nos desnudamos lentamente hasta quedar tumbados en la cama, conmigo encima de ella besándola por el vientre, con ella jugando con mi pelo, pasamos un buen rato rozándonos, se abrió de piernas y la fui penetrando lentamente, se le había cerrado un poco de casi 2 semanas sin hacerla el amor, por que a ella ya no la follaba, era tierno y suave, y sus gritos solo eran de placer y gozo, pocas veces la hacia sufrir, o al menos queriendo hacerlo, su rostro cuando iba metiéndola cada vez más en su interior era de locura absoluta, y yo me contenía por no destrozarla, parecía tan frágil, tan diminuta, era brutal observar como su cadera se inflaba al dejar paso a mi rabo, era glorioso meterla entera en un cuerpo tan pequeño, sus muslos solo eran el doble de grandes que mi polla, y al iniciar el vaivén lento mientras la besaba sus bonitos senos de adolescente, sus gemidos me perdían en la lujuria. Si podría estar 40 minutos con la bestia, follando de esa manera podía estar horas, sus orgasmos eran casi tan pausados como mis golpes de cadera, la puse a 4 patas y cuando la fui a meter en su coño las carcajadas al ver las dimensiones fueron ofensivas, el ancho de mi verga era 1/3 del ancho de sus caderas, y aun así, de firmes estocadas le entraba, era un truco de magia delicioso, como volver a meter un corcho en una botella de vino, cuando la fuente de fluidos me mojó las piernas la sujeté de la cintura y fui aumentando el ritmo, el sonido de golpes en su culo era constante y sus gritos y palabras se mezclaban en lamentos de placer, a ese ritmo ya mi pene no aguantó y daba los espasmos previos a una corrida, ella lo sintió y se salió de mi, el agujero entre sus piernas era un espectáculo, girándose, me tumbó con rapidez y con sus pequeñas manos masturbó mi tronco mientras se metía el glande con trabajo, pero a estas alturas ella ya sabia que la parte que me volvía loco de ella, eran sus ojos, los tenia abiertos y mirándome, como gotas de cielo que no se apartaban de mi rostro mientras derramaba mi semen en su boca, el dulce placer que me provocaba su lasciva precocidad me dejaba planchado, ¿Cómo una niña podía ponérmela tan dura y a la vez dejarme roto con solo 1 polvo?, por aquel entonces ni me lo plantaba, solo disfrutaba de ello.

¿Que ocurre cuando una fuerza imparable choca contra un objeto inamovible?, ambos ceden, no había otra, mientras yo la ayudaba con los estudios y trataba de refinar sus modales, ella me arrastraba al mundo de la música electrónica y la fiesta sin descanso, a su vez yo me negaba a ponerme un piercing o hacerme un tatuaje, y ella a vestirse de forma menos llamativa y mostrando menos de sus muchos encantos femeninos, era una negociación constante, llena de vida y felicidad. El trabajo fue lo más duro, mi jefa trató de convencerme con armas de mujer para que hiciera una excepción con ella, cuando me negué apartando sus manos de mi entrepierna usó sus armas de jefa, amenazando con echarme si no la obedecía, por suerte mi jugada ya estaba planeada, la enseñé un bonito vídeo del móvil con ella comiéndome la polla la 1º vez que la hice mía, cuando la dije que me pasaría por la empresa a recoger mi despido dejándole aquello a los jefes se puso de todas las tonalidades de azul, fueron un par de semanas duras de trabajo, ya era tan brusca y cruel conmigo como con el resto, pero me daba igual.

Tenia tal cantidad de videos, grabaciones y fotos, de chantajes útiles, usados o posibles en un futuro, que pensé entre risas que si me quitaran aquello podrían destruirme la vida, “joder, es verdad”, inmediatamente hice copia de todo, varias de hecho, y las guardé en muchos sitios diferentes, una ligera angustia que tenia por miedo a represalias se calmó dentro de mi, ya solo tenia que bregar con alguna que otra ex amante que acudía a mi portal montando escándalos.

Llegaron las fiestas y preparé junto a Dani la noche de Navidad en mi casa, con mi familia, e invité a Lola, que pasaría todas las fiestas conmigo, no creía que sus padres no la dijeran nada o no les importara eso, pero así era, fui personalmente a presentarme a sus padres y comentarles mi idea, por si se quieran venir o algo, pero me encontré la familia tipo desestructurada, un padre que apestaba a cerveza, ni me miró a la cara cuando le saludé, con una voz ronca que apenas se entendía dando gritos por cualquier cosa. Su madre era la definición de un estado de nervios, delgada, con la cara demacrada llena de ojeras y fumando sin parar, con un temblor constante, su forma de hablar era como si se le hubiera quedado una “g” enganchada en la campanilla, si no consumía aun, había consumido drogas duras en el pasado, estaba seguro, solo unos ojos azules escondidos tras unos párpados cansados hacían ver que era su madre, y aun así eran tan tristes y apagados que no se podían comparar con los de su hija. El remate fue el hermano pequeño de Lola, un mico de 11 años que era un terremoto, se movía sin parar por la casa, golpeaba las cosas, tenia un camión de juguete con el que iba rayando las paredes y berreaba sin parar, trataba de jugar con él pero me miraba con asco, estaba claro que quería llamar la atención, no paraba de moverse y hablar, su madre le susurraba que se estuviera quieto, con la voz rota de haberse rendido. Luego mientras hablaba con su madre, ya que el padre ni se molestó en hablar conmigo, el crío pasaba por delante y pegaba con el camión en las piernas de Lola, haciendo un ruido molesto e hiriente con la boca, Lola le miraba apartándolo con suavidad con un gesto claro de que si no estuviera yo delante le haría algo peor que eso, me dieron unas ganas locas de soltarle un bofetón al crío, de los que me daba mi madre de niño cuando me ponía algo tonto, algo, no ya el bochorno que estaba protagonizando el hermanito, parecía que no le habían dado un tortazo en su vida.

(Pese a que la violencia con los niños es un tema delicado, una buena hostia pone recto a cualquiera, eso lo sabia de propias carnes, mi madre me daba bastante, pero nunca se propasó, digamos que me lo ganaba con trastadas, y mi padre me puso la mano encima 1 sola vez en toda mi vida, no se que estaba haciendo revoloteando a su alrededor, el no paraba de decirme que me estuviera quieto, que iba a tirar algo, pero yo le sacaba la lengua y seguía jugando a su alrededor, hasta que, como era normal, roce un mueble y una figura de porcelana se precipitó al suelo, del bofetón que me soltó caí al suelo, y la marca se quedó en mi mejilla más de 1 hora, mi madre se asustó y a mi pobre padre le caía un berrinche encima de órdago, pero me miraba, y yo con mis 9 años entendía que no fue por romper la porcelana, si no por que me lo advirtió tantas veces antes que estaba desafiándole para saber hasta que punto podía propasarme con él, y por los cielos que me quedó claro. Eso si, a un niño no se le educa a golpes, eso son reacciones físicas inevitables ante un crío revoltoso, para zanjar el tema en un momento de rabia, entiendo que a mi me han educado bien, y no por esos golpes, si no por que después de la bofetada, los broncas, los castigos y hasta las humillaciones publicas, con clama y tiempo, se sentaban conmigo y me explicaban por que habían hecho eso, que estaba haciendo mal y como debería de comportarme en esas situaciones, eso es, a mi entender, educar bien a un hijo.)

Lola estaba roja de vergüenza y el camino de vuelta se lo pasó sollozando, puedes pasarte una hora, o un día, o años con una persona y pensar que ya la conoces, “una choni estúpida, pastillera y borracha”, seguro que eso mismo has pensado de alguna o alguno que has visto por la calle, pero la realidad de cada uno es tan diferente que atreverse a juzgar sin conocer bien los hechos se vuelve una temeridad. Me alegré mucho de haberme cruzado en su vida, y por egocéntrico y déspota que suene, sabía que podía darla una mejor vida que aquella, pienso que no es justo juzgar que mi familia educa mejor o peor, pero que sea injusto no cambia que la imagen que me dieron, sabiendo que iría a verlos, fue de una dejadez y desatención absoluta, casi un milagro que Lola no fuera ya una drogadicta, alcohólica y ya embarazada, es duro decirlo así pero era la sensación que tenia, más aun cuando sentándome con ella ha hacer los deberes, descubrí que no era ni tonta ni vaga, simplemente nadie le había dedicado tiempo, si hasta era mejor que yo en matemáticas, y me juré que desde ese día yo seria lo que necesitara. Me pasé esa noche abrazado a ella, bajo las gruesas capas de mantas a casi finales de diciembre, calmándola y dándola cariño, reconfortándola y sintiendo como se iba quedando dormida sobre mi pecho.

Por fin llegó el día de Navidad, estaba tan ansioso y nervioso que me temblaba el cuerpo, Lola fue un gran apoyo esos días, la idea que tenía en mente era tan brusca que temí que Lola la rechazara, pero no solo lo aceptó si no que le pareció una idea genial, entre los 2 y Dani, que se pasó a ayudarme a preparar todo, teníamos mi casa casi lista, quería que lo estuviera antes de que llegara mi familia, en cuanto mi madre entrara por la puerta todos seriamos peones en sus manos, mandé a Dani a su casa 1 hora antes de su turno, la había invitado a cenar con nosotros ese día y que se trajera a su familia, pero se negó agradecida, imploré de rodillas a Lola que se pusiera uno de los vestidos menos llamativos que tenia, y me lo concedió con tantos nervios como yo, el vestido en si era rojo, casi gránate, de 1 sola pieza, desde los hombros hasta por debajo de las rodillas, algo ajustado pero elegante, con una medio luna en la espalda dejando ver el final de su espada y el tatuaje del tribal en sus riñones, había ido a una peluquería pero se había hecho ella sola un peinado precioso, alisándoselo todo sobre un hombro, caía como una catarata de oro liquido, con unas medias finas y unos zapatos a juego, se maquilló 3 veces, y cada vez usando menos cosas, me parecía absurdo, con la cara lavada estaba preciosa, las pecas de sus mejillas eran bonitas, pero se empeñaba en cubrírselas, al final con un pinta labios gránate, algo de colorete en las mejillas y una sombra menos grande de lo habitual en los ojos, salió y me desplome desmayado en el suelo, de broma, pero la visión lo merecía, me vestí en una cuarta parte del tiempo que usó ella, me miró con odio al verme con los vaqueros con slips, una simple camisa, y estar alucinante, con la cara lavada y mi estudiado despeinado, me senté con ella con miedo a tocarla por estropear su belleza.

-YO: tengo que pedirte disculpas anticipadas.

-LOLA: ¿por que?

-YO: es la 1º vez que vas a ver a mi familia, y no se como va a salir esto.

-LOLA: por favor Raúl, ya viste a mis viejos, no puede ser peor - bromeé girando la cabeza y abriendo los ojos dudando de verdad en sus palabras.

-YO: no se yo……..

-LOLA: jajajaja ni que me fueran a comer o algo, no me asustes, bastante “cagá” estoy ya - taconeaba con los pies en el suelo, yo hacia lo mismo, de nervios.

-YO: no es asustarte, pero mi familia no es muy normal que digamos, cuando estamos juntos tendemos a comportarnos de forma natural y desinhibida, mi padre es un alma libre chapado a la antigua, mi madre una obsesa del control y mi hermana un ogro…….

-LOLA: ¡no me jodas!, ¿pero os lleváis mal?

-YO: que va, nos queremos con locura y son la mejor familia que podría desear tener - Lola entrecerró los ojos sin entenderme.

-LOLA: no te sigo…… ¿entonces me tengo que asustar o no? – sonreí sin saberla que decir.

-YO: solo te advierto que pase lo que pase, y ocurra lo que ocurra, procura no tomarte nada demasiado en serio, presta atención al hablar con mi padre, no discutas con mi hermana y ni se te ocurra mentirle a mi madre, por lo demás se tú misma, y si los astros se alinean, antes de que cenemos ya serás de la familia – Lola reía tratando de asimilar todo aquello.

-LOLA: vale……- masculló –……..si es solo eso………- impresionada y abrumada, la besé la mano y bajamos a recibir a mi familia, antes de que abrieran la puerta me santigüe, necesitaba que aquello funcionara.

-HERMANA: ya estamos aquí tato, baja al coche a ayudar a mama.

-YO: hola, mira, ella es…….- la iba a presentar, mi hermana la miró de arriba abajo, solo con eso Lola agachó al cabeza.

-LOLA: ho….hola…

-HERMANA: buenas, la nueva amiga de mi hermano ¿no?, encantada, ahora baja a ayudar a mama, corre – me tiró del brazo y cerró la puerta tras de mi, con Lola pidiendo ayuda con la mirada antes de oír el golpe del portazo.

Bajé como el rayo y subí de golpe todas las bolsas y cosas del coche de mi padre, saludé con rapidez a mis progenitores, recordándoles que estaba Lola y que por dios no la asustaran, subí aun más rápido, “maldito ascensor”, entré sudando en casa, no escuchaba gritos ni cosas romperse, “buena señal”, dejé las cosas en la cocina, todo lo que había eran cosas para la cena, y aun quedaba toda la tarde por delante, mi hermana y Lola estaban en el salón, moviendo las mesas y sillas que habíamos colocado.

-YO: ¿que hacéis?

-HERMANA: que eres un inútil, lo has colocado mal y estamos arreglando esto – Lola me miró riéndose, ella misma las había colocado conmigo, pero no se lo diaria a mi hermana, cargaría yo la culpa de ese error, a Lola no se le caían los anillos por mover unos muebles, no era una flor delicada, y mostrarlo ante mi hermana era un punto para ella.

-YO: pues yo creía que así puestas………

-HERMANA: ¿y donde nos metemos si no has dejado sitio entre la mesa y el sofá ese? – gritaba sin mirarme.

-MADRE: bueno, ya vale, que se os oye desde el pasillo, no discutíais – llegaban mis padres jadeando del ritmo que les había puesto y que no habían podido seguir.

-YO: por fin, mirar, os presento a Casandra, mi novia – la rodeé con el brazo ante mis padres, a mi padre se le escapó una mirada de aprobación, sin duda la belleza de Lola era evidente para un varón.

-LOLA: Lola mejor, me gusta más ……– mi padre se acercó a ella y la cogió de la mano besándosela con elegancia.

-PADRE: es una pena, con un nombre tan bonito como tú……… en la mitología griega, Casandra significa "la que enreda a los hombres" era la hija de Hécuba y Príamo, los reyes de Troya. Casandra era sacerdotisa de Apolo, con quien pactó………………….- se alejó con ella de la mano contándole la historia de aquella mujer, pondría cara de incredulidad, pero mi padre era así, Lola parecía entusiasmada con la clase de historia griega.

-MADRE: ¿esta quien es? – me sobresaltó por detrás.

-YO: ah, si, pues mi novia, ya te lo he dicho.

-MADRE: ¿pero tu novia, novia…………u otra de tus ligues?

-YO: mi novia, voy en serio con ella…….- tenia miedo a preguntar -……….¿que te parece?

-MADRE: hombre……..es monísima, aunque es algo pequeña para ti.

-YO: eso ya lo veo yo……… ¿que ves………tú? – entendió mi frase, la observó, sonriendo con gracia a mi padre que aun le hablaba de la etimología de su nombre.

-MADRE: ya veremos………..- me besó en la mejilla y se alejó como una bruja antes de sus hechizos, pavoneándose al saberse con un don al que yo estaba recurriendo.

La tarde fue transcurriendo, como no, mi madre se metió en la cocina y nos tenia a todos preparando algo para la cena, yo trataba de no separarme mucho de Lola, pero no siempre era posible, mi madre la encargó preparar una ensalada bajo su más estricta supervisión, supongo que así podría estar a solas con ella para conocerla, y cuando me pasaba por allí mi madre no tardaba en sacarme a empujones, las oía hablar y reír, para bien o para mal mi madre se muestra como una persona encantadora y divertida, hace que te abras mientras te hace una análisis profundo, así que me senté junto a mi padre y charlé con él hasta que dejé de preocuparme, mi hermana andaba con el móvil liada, no entendía por que Liz no pasaba esa noche con nosotros, yo si. Para cuando empezó la cena las risas recorrían la mesa, como me solía pasar yo era el centro de todas las criticas de mi madre y mi hermana, de broma se metían conmigo para sacar unas sonrisas, mi padre seguía contándole historias a Lola cuando se le ocurría alguna de las cientos que tenia en la cabeza, y ella de forma natural se mostraba curiosa y encantada de escuchar, a mi hermana se la ganó aliándose contra mi en sus bromas, y mi madre seguía escudriñándola con la mirada, con su estudio. La cosa iba bien así que terminamos de recoger la mesa mientras los programas de TV entretenían al resto, mi madre y yo limpiábamos un poco la cocina.

-MADRE: bueno, ¿que tal estaba todo?

-YO: horrible, todo estaba malo…….- me dio una colleja.

-MADRE: mira que no vuelvo a prepararte una cena de Navidad.

-YO: ¿pues como va estar?, todo delicioso, como siempre.

-MADRE: ¿y tú como estás?

-YO: pues mejor, ya no me duele nada y la cicatriz del costado casi ni se nota - me levantó la camisa para verlo por si misma.

-MADRE: si es que…..vaya susto me diste.

-YO: no fue nada……..

-MADRE: ¿y fue por ella? – señaló con el dedo al salón, donde estaba Lola con mi padre y mi hermana.

-YO: si, aunque supongo que papá tiene cierta culpa también……

-MADRE: si, supongo……- recordaba el romance con el y las historias que me contaba de cómo la defendió de “los grises” en las manifestaciones contra la dictadura.

-YO: ¿y no tienes nada que decirme? – me armé de valor para preguntar, y el tono se entendió con facilidad.

-MADRE: la has preparado bien, se nota que a papá se lo ha metido en el bolsillo escuchando sus historias, y tu hermana aun no la ha gritado, pero a mi no me la cuelas……..- me daba pánico como sabía ciertas cosas.

-YO: no quería que fuera mal…..

-MADRE: da igual, a mi no se me escapa nada, se ha esforzado por mostrarse dulce y cariñosa, pero tiene genio y mucho carácter, yo no la enfadaría……..- desde luego no había perdido el olfato - ………es preciosa, no se puede negar, pero es tan diferente a Ana…..y a Irene…..- mi madre seguía más enamorada de Irene que yo.

-YO: ya, deja a Irene en paz, y a Ana, necesito saber si puedo fiarme de Lola.

-MADRE: no se que decirte, con una mujer tan temperamental, puede que si o que no, lo que sé es que si se ha esforzado tanto en caernos bien es que te quiere con locura.

-YO: o quiere aparentarlo……

-MADRE: tal vez….pero hay cosas que no se pueden fingir hijo mío…. – se acercó acariciando mi cara con su mano -…. te mira como a un Mesías que la ha arrancado del infierno, eso no es falso, pero la veo y no puedo evitar pensar que es una niña hosca y dura, su forma de hablar y de moverse, tan…….poco femenina, no sé, a mi no me gusta, tú mereces algo mejor.

-YO: ¿habla mi madre o tu instinto?

-MADRE: ¿acaso tu madre no puede querer algo mejor para ti que una niña barrio bajera?

-YO: claro que si, pero no me interesa que te parezca más o menos apropiada para mi, eso lo tengo que decidir yo, lo que necesito es saber si ves algo en ella, algo oscuro y retorcido, como viste en Eleonor y Ana – suspiró profundamente, mirándome a los ojos.

-MADRE: no se que puede pasar, ni veo el futuro, pero por lo que he visto…………… no, no veo maldad en ella - una especie de luz creció en mi interior rompiendo en un sonrisa imposible de borrar, me lancé a sus brazos y la levanté del suelo un palmo besándola en la mejilla con fuerza.

-YO: gracias, es lo que necesitaba saber.

-MADRE: pero ándate con ojo, y cuídala bien – seguía siendo una madre.

El postre que sacamos cerca de las 12 de la noche me supo a gloria, Lola me miraba sin comprender por que de golpe me brillaban los ojos al mirarla, me sujetaba de la mano y me la apretaba preguntándome por que sonreía, estaba feliz, completamente, y cuando pasó la media noche, empezamos a repartirnos los regalos, mi padre me dio un libro de la 2º guerra mundial, me encanta ese tema, mi madre ropa, “como no”, y mi hermanan unas cuantas películas en DVD, Lola unas zapatillas de deporte, a modo de guiño por como nos conocimos, y llegaron los míos.

Lola – Regalos.

A mi hermana le compré unas entradas para un musical de la Gran vía que llevaba 2 años queriendo ir a ver, a Lola un juego de pulseras, pendientes y colgante de oro blanco, me puso la cara perdida de carmín al ver los zafiros incrustados, eran brillantes y llamativos pero al lado de sus ojos eran meras piedras, me costaron un dineral pero ahora sabia que lo merecía, a mi madre la di unos pendientes cortos de los que la gustaban y un perfume, y allí empecé la obra de teatro.

-YO: bien, pues ya solo me quedan 2 regalos, el de papa y otro para los 3…. - señalé a mis familiares –….. pero me tenéis que jurar que los aceptareis.

-PADRE: hijo, no me gusta jurar algo sin sabe que es.

-YO: ¿os fiáis de mí?

-HERMANA: no – la risa denotó la ironía, aunque me conocía lo suficiente como para sujetarse bien a la silla.

-YO: venga, ¿que puede ser tan malo?

-MADRE: está bien, ¿pero no nos asustes? – el resto asintieron con la cabeza, Lola me apretó del brazo de tensión.

-YO: bien, pues allá vamos, 1º el de papá – metí la mano en mi bolsillo y saqué el objeto que le tiré y lo cogió con cierta habilidad, al abrir la mano vio las llaves de mi coche, el de alta gama que me regaló Eleonor.

-PADRE: no, hijo, es demasiado…….- amagó con devolvérmelas pero no las acepté.

-YO: es tuyo.

-PADRE: ya tengo coche.

-YO: una tartana de hace 10 años que no deja de ir al taller y consume más que un avión, no, es tuyo.

-PADRE: ¿y tú te quedas sin coche? No

-YO: tengo coche, Teo se ha comprado uno con su sueldo, y el que compramos de 2º mano al mudarnos ya no lo necesita – técnicamente todo era cierto, aunque no había hablado con Teo nada de que me quedara ese coche.

-MADRE: hijo, es un regalo que te hicieron a ti…..

-YO: por lo tanto es mío y quiero dárselo a mi padre, por hacerme el hombre que soy, se lo debo - bastó una pizca de sentimentalismo para que nos fundiéramos en un abrazo y aceptara a regañadientes, era un gran aficionado a los coches y la carretera, pero no a la velocidad, si no a disfrutar conduciendo y llevando a su familia de viajes a conocer ciudades, castillos e historias.

-HERMANA: a mi me parece genial, es mucho coche para un renacuajo - era su forma de mostrar su conformidad con el regalo.

-YO: bien, ya solo queda un regalo… – me agaché sobre la cara de Lola y la susurré que fuera a cogerlo, dándole un ligero beso en la mejilla, sonrió levantándose a por él, regresó con una carpeta de piel –… este es mi último regalo de hoy, he sido un adolescente estúpido, así que os pido disculpas por no regalarles esto desde un principio, sois mi familia, me habéis cuidado desde siempre y pese a todo lo malo y lo bueno habéis estado conmigo, me habéis hecho feliz y os debo tanto que no podré pagarlo nunca, aun así aceptar este regalo como anticipo, y sobretodo, gracias.

Expendí la carpeta ante mis padres, la abrieron, y como suele pasar, no entendían nada, en mi cabeza siempre se entienden estas cosas, pero la vida real es tan decepcionante.

-MADRE: no entiendo, ¿que es esto?

-PADRE: no se, parecen unos papeles, no veo bien, espera que me ponga las gafas de leer - solté una risa pegándome con la cabeza en la mesa, desesperación por romper el momento tan bonito.

-HERMANA: déjame que yo si leo bien………….- leía sin entender mucho pasando las hojas - ………parecen las escrituras de un piso.

-YO: de este piso en concreto.

-MADRE: ¿y para que me las das? ¿Quieres que las guarde? – la miraba atónito pensando que seria una broma, pero realmente no lo entendía.

-YO: ¿¡¡para que coño te iba a regalar que me guardes unos papeles?!!

-PADRE: bueno, cálmate, y dinos, ¿para que nos das esto? – me mordía la lengua por no saltar con alguna grosería.

-LOLA: Raúl no les da la carpeta, les da las escritoras de este piso, vamos, les regala esta casa - por una vez la simplicidad dialéctica de Lola fue útil y los ojos de mis familiares se abrieron a la vez, comprendiendo por fin el regalo y luego sobresaltados al entenderlo.

-MADRE: ¡¡¿pero que dices?!!

-HERMANA: ¿tú estás loco?

-PADRE: ¿nos das…..la casa?

-YO: así es, solo pido que me dejéis vivir con vosotros.

-MADRE: puedes vivir con nosotros siempre que quieras hijo, pero en nuestra casa, no aquí, esto es…….demasiado.

-PADRE: hijo, te lo agradecemos de corazón, y es muy bonito, pero es tú casa, no la nuestra.

-YO: no quiero esta casa, no sin vosotros, estoy solo todo el tiempo y os echo de menos.

-HERMANA: por mi prefecto…..

-MADRE: tú cállate….– le dijo de forma severa mientras se levantaba andando hacia mi – …Raúl, gracias pero no podemos aceptarlo.

-YO: ¿por que?

-PADRE: ya sabes que no somos así, nos gusta ganarnos nuestras cosas, un coche o una casa son cosas que has de aprender a apreciar, pagándolas y sufriendo para entender lo valiosas que son.

-YO: ¿Y no os lo habéis ganado ya? ¿Que más tenderíais que haber hecho? Papa lleva trabajando desde los 15 años, se ha roto la espalda trabajando toda su vida para darnos un futuro, para ir de piso en alquiler a otro, o pagando las hipotecas de un coche o vuestra casa, lleváis 17 años pagándola, aun nos quedan otros 12 años, y aun así es el hombre que más respeto y quiero del mundo. Mama se las ha ingeniando para criar a 2 hijos casi sin dinero y ha trabajado, incluso en 2 sitios a la vez, y pese a ello habéis educado como muy poca gente podría hacerlo, a mi y a mi hermana, que con 27 años ni siquiera se puede plantear irse a vivir con un chico por que no tendría dinero para ello por que ayuda en casa. Lleváis toda la vida sufriendo y peleando por tener un vida digna, y eso se acabó, ya está, habéis llegado a la meta, ya no tenéis que seguir peleando, os habéis ganado esto …– señalé la casa y las llaves del coche –…. esto y más, pero no lo tengo, si lo tuviera os lo daría, y si logro tenerlo os lo daré, me he pasado casi 2 años en esta casa y no la he podio llamar hogar, jugando a ser un adulto, sin darme cuenta que lo 1º que tendría que haber hecho es daros lo que os merecéis, esta casa, sin preguntas ni condiciones, es vuestra, solo tenéis que firmar esos papeles.

El discurso lo tenia medio pensado, era obvio que no lo aceptarían sin poner objeciones, aun así una lagrima caía por mi cara y algunas partes no fueron tan bonitas como quería, pero creo que eso le dio más emoción al mensaje, no podía entender como no se me había ocurrido antes, mi familia lo era todo y los había dejado tirados en aquel agujero de extrarradio mientras yo vivía la buena vida, se lo debía. No obstante el silencio llenó la casa, Lola trataba de que no se le corriera el rímel sollozando y a mi padre le temblaba la barbilla, mi madre lloraba abiertamente, aferrada a mi pecho.

-MADRE: no es justo para ti……….- me acariciaba con los dedos en la cara.

-YO: yo soy joven y fuerte, seguiré peleando hasta ganarme mi derecho disfrutar de la vida, vosotros ya lo habéis hecho, con creces, lleváis luchando por una vida mejor desde que nacimos, ahora esta es vuestra recompensa.

-PADRE: ¿y que hacemos con nuestra casa? Los del banco querrán seguir recibiendo el dinero de la hipoteca aunque no vivamos allí, o se quedarán la casa.

-MADRE: ¡que se la queden!, estoy más que harta de ellos, podemos venderla, por menos de lo que nos queda por pagar, y así nos libramos de ellos – mi madre ya pensaba en todo, “esto arranca”.

-HERMANA: ¿y que hacemos?

-PADRE: hombre, a mi me pilla más cerca del trabajo aquí.

-MADRE: y sin tener que pagar las malditas cuotas mensuales tendiéramos más dinero al mes.

-YO: ¿entonces…………? - miré uno por uno a mis familiares, asintiendo, mirando de reojo la casa.

-MADRE: ¡a la mierda todo, nos mudamos! – se secó las lagrimas y firmó los papales, mi padre me preguntó con la mirada si estaba seguro por última vez, antes de firmar.

No recordaba unas fiestas tan divertidas, nos pasamos hasta altas horas de la madrugada jugando a las cartas, riéndonos y bromeando, para aquel entonces Lola ya había bajado los escudos, era ella misma, y aun así parecía que nos conociéramos de toda la vida, lo astros se habían alineado, y yo estaba seguro de que había hecho lo correcto. A las 6 de la mañana, ya cansados y algo tocados por la bebida, fui con Lola a comprar unos churros con chocolate, bien abrigada aferrada a mi brazo, tal como me gusta, mientras nos despachaban en la tienda hablábamos.

-LOLA: no me creo lo que has hecho…….

-YO: es mejor que quemar la casa, supongo - sonrió recordando sus palabras.

-LOLA: estás cosas no ocurren, no eres un ricachón, y lo único de valor que tenías lo acabas de regalar como si nada – la acaricié la cara pasando los dedos entre la cortina dorada de su pelo y la besé sin importarme mancharme de su maquillaje.

-YO: lo más caro tal vez, no lo de más valor. lo más valioso es mi familia, y ahora tú formas parte de ella – arrugó el contorno de los labios, parecía que era lo más dulce y hermoso que le habían dicho nunca.

-LOLA: me cago en la puta, que suerte he tenio……..- se abalanzó sobre mi vientre abrazándome con tal fuerza que me hacia daño, la rodeé con los brazos.

-YO: la suerte la he tenido yo de encontrarte – parecía un cumplido simple pero si no es por ella seguiría en aquella casa, solo y con una vida vacía.

Al llegar a casa desayunamos y charlábamos de la logística, de cómo se harían las cosas, hacerlo durante las fiestas era lo lógico, mucho follón pero eran días libres, sentía un hormigueo en el estomago mientras debatíamos que habitación seria para cada uno, y mi madre ya planificaba cada detalle de todo, al terminar llevé a mi familia a su casa en mi coche, mi padre iba algo bebido, nunca borracho pero si tocaba control daría positivo, además así les dejaba ya el coche allí, cogí las llaves del viejo familiar de mi padre y me las vi negras para regresar con él, la dirección dura, los frenos gastados y sin muchos de los equipamientos modernos de ayuda en la conducción, mi padre me decía que si aprendías a conducir con un coche así, serías capaz de conducir cualquier cosa. Iba a casa con una sonrisa se oreja a oreja y con unas ganas locas de celebrarlo con Lola, pero al subir me la encontré tumbada en el sofá totalmente dormida, me quedé sentado a su lado observándola en silencio, la di un beso y ante su remoloneo la cogí en brazos sin dificultad alguna, la subí a la cama y al desnudé lentamente, al quitarla los zapatos soltó aun exclamación de gusto inconsciente, la puse su pijama gordo de lana, arrepintiéndome de no sentir su delicada piel durante la noche ni poder seguir mirándola medio desnuda, y me acosté a su lado, solo con un pantalón de pijama algo suelto y desgastado, abrazado a ella y durmiendo, con una sensación de paz absoluta.

Me despertaron los besos de Lola en el pecho, enfoqué la vista para ver su precioso rostro junto a mi cara, con su larga cabellera rubia cayendo por su hombro hasta mi pecho, y sus imponentes ojos azules que me dejaban sin aire, aunque es probable que tenerla de rodillas encima de mi vientre ayudara a ese efecto.

-YO: hola rubia……- la besé con ternura.

-LOLA: buenos días, caballero – mordisqueó mi mentón con fuerza.

-YO: no merezco tal titulo.

-LOLA: ¿Eso crees? ¿Cuantos tíos se hubieran aprovechado de mí anoche? No se de ninguno que me desnudara en la cama y en vez de follárme, me ponga el pijama y se duerma abrazado mi………a ninguno, salvo a ti.

-YO: ¿Y que iba ha hacerte? ¿Abrirte de piernas y metértela mientras duermes?

-LOLA: no serias el 1º que lo intenta…..- acariciaba mi pecho con su dedos.

-YO: mi pobre Lola………- giró la cabeza algo pensativa.

-LOLA: sabes, me cayó muy bien tu padre.

-YO: suele pasar, es un trozo de pan.

-LOLA: si, además me contó muchas historias, de mi nombre, Casandra, me gustó mucho esa historia.

-YO: ¿acaso no la sabias?, ¿no te has buscado en Internet o algo?

-LOLA: pues no, Lola siempre me pareció más molón, pero no sé……Casandra, tal como lo decía tu padre parecía precioso.

-YO: es precioso.

-LOLA: ¿y si me cambio el nombre?

-YO: ¿por cual?

-LOLA: amos, no cambiármelo, que si que dejo de llamarme Lola, Casandra es más profundo, no sé, quizá así me tomen en serio.

-YO: tú decides rubia, nunca supe por que te llamaban Lola.

-LOLA: pues porque soy pequeña, parezco una niña y eso, mi madre me lo decía y se me quedó, pero ya no me gusta.

-YO: pues entonces Casandra a partir de hoy……- sonrió halagada.

-LOLA: dilo otra vez

-YO: Casandra, Casandra, mi pequeña y bonita Casandra – lo repetía por que cada vez que lo decía me besaba.

-CASANDRA: me encanta como suena.

-YO: genial, por que yo también me voy a cambiar el nombre, ahora me llamaré…………Eladio – me abofeteó con fuerza.

-CASANDRA: no te burles, que te pego.

-YO: ¿quizá Walter? - me soltó otro bofetón, al 4º o 5º nombre estabamos ya enzarzados en una ficticia pelea en la cama.

Mi polla dura de las mañanas resalía en el pantalón de pijama suelto y al movernos la rozaba con ella, a su vez la risas y los giros la levantaron la parte de arriba del pijama dejando su ombligo al aire, la inmovilicé con algo de dificultad, besaba y jugaba con su ombligo mientras la sacaba carcajadas de cosquillas, hasta que poco a poco mis labios iban haciendo menos cosquillas y más caricias, las risas se iban apagando y una tensión sexual enorme apareció de la nada, me sujetaba la cabeza como si fuera un balón de baloncesto mientras subía por su cuerpo y caía tumbado sobre ella besándola con pasión, sus manos acariciaban mi torso mientras yo jugaba con mi lengua en su boca, era excitante ver la habilidad y sensualidad de esa mujer con un pijama de niña pequeña, tiré de la parte de arriba hasta sacársela, con un río de cabello rubio cayendo sobre su cuerpo, se lo aparté con cuidado y mientras algunas risas flojas afloraban en su rostro yo acariciaba sus senos mientras pellizcaba sus pezones, se retorcía de gusto cuando una de mis manos la cogía de la nuca acariciándola con el pulgar detrás de las orejas, y lamía un pezón tan duro que podría rayar un diamante, los 2 suspirábamos perdidos en la pasión, poniéndome de rodillas tiré, tanto del pantalón como del tanga que llevaba puesto, y la dejé desnuda ante mi, retrocedí para caer con mi boca en su coño, que brillaba con las primeras gotas de placer, me entraba su vagina entra en la boca, y mi lengua para ella era un micro pene que la hacia vibrar, cerraba las piernas sobre mi cabeza jadeando al sentir como chupaba y lamía su clítoris y tiró de mi pelo cuando varios dedos la estaban penetrando buscando su punto G, se movía ansiosa y me costaba mantenerla quieta, elevaba su cintura apoyada en la nuca y se dejaba caer a plomo, un 1º orgasmo la llegó y no descansé hasta sacarla el 2º, allí me fue imposible sujetarla y se encogió rebotando sobre la cama con espasmos leves, cuando iba a por ella me pateó en el pecho echándome hacia atrás y saltó sobre mi, besándome y probando su propia lujuria, sus manos en mi polla acariciaban por encima de la tela y de un empujón me dejó sentado en la cama, tirando de mi pijama, al ver mi rabo saltar tieso ante ella se relamió con lascivia, fue ascendiendo por mis muslos como una serpiente hasta lamer mis testículos con esmero, luego iba subiendo por mi polla repasando toda una línea recta desde la base hasta la punta con la lengua, sin dejar de mirarme fijamente, y una vez arriba sus manos empezaron a masturbar de forma rítmica, lamiendo y succionando el glande como la copa de un helado, el morbo podía ser aun mayor al pensar en la diferencia de tamaños, pero yo ya no veía a una niña, si no a una mujer que me estaba dando una mamada de campeonato, metiéndose el glande entero en la boca y jugando con él, no tragaba más, no podía sin romperse las mandíbulas, pero era suficiente.

Me tumbé en la cama suspirando al sentir su lengua, a los pocos minutos no pude reprimirme, la cogí de los brazos y me la senté a horcajadas encima, por poco no la empalo en el gesto, mi polla quedó aplastada por sus labios mayores, y mientras me besaba su cintura hacía que su pelvis acariciara todo el largo de mi verga, al 5º movimiento me hizo lamerla los dedos y se los llevó a coño. Se lo abrió lubricándolo, dirigiéndome a su entrada y fue apretando lentamente para que fuera entrando en ella, aquellos días la habían vuelto a abrir lo suficiente para que entrara fácilmente, pero a partir de la mitad su cara, a escasos centímetros de la mía, era un 90% placer y 10% sufrimiento, o quizá fuera al revés, pero le encantaba sufrir eso, sentir como la iba llenando, casi sacársela por la garganta, al final le di un golpe travieso de cadera que se la introdujo entera, con un leve gemido de bestia que salió de mi, ella permaneció inmóvil medio segundo, antes de volver a respirar.

-CASANDRA: oh dios………..fóllame…………fóllame por favor - arañaba con fuerza en mi pecho mientras no dejaba de repetirlo entre besos y lametones en la cara.

Ella misma estaba ya contoneándose sacándose parte mi erección y volviendo a metérsela de forma lenta, unos hilos de fluidos bajaban por mi polla mientras ella empezaba a cabalgarme a buen ritmo, la sujetaba de las caderas dando un leve empujón al final de cada estocada, y sus tetas jóvenes y tersas botaban ante mi, las lamía con gusto, apretándolas entre los dedos, era casi cómico verla querer llevar el ritmo, casi, por que pasado el tiempo estaba entrando y saliendo de ella por completo, disfrutando como un enano de sus orgasmos que no la hacían parar de subir y bajar, incluso se regodeaba con un gran movimiento de pelvis, totalmente ensartada girando la cadera con la espalda echada hacia atrás y los brazos colgando como 2 pesos muertos, me corrí dentro de ella de tal manera que sus paredes vaginales encogieron sintiendo el placer, cayó sobre mi pecho empapada en sudor y entre risas y besos me sentía el ser más afortunado de la tierra.

-YO: ¿que tal una ducha? – asintió.

-CASANDRA: juntos – atinó a susurrar entre jadeos, no podía quererla más.

Me puse en pie con ella aun ensartada por una polla flácida, trataba de rodearme con las piernas pero no le daban como para cruzarlas tras de mi, así que con su culo terso bien agarrado nos metí en la ducha dejando caer el agua tibia, ver su cabello rubio mojado y sus senos joviales húmedos ya me la pusieron dura de nuevo, la apoyé contra la pared de la ducha sintiendo su escalofrío al notar los azulejos gélidos a su espalda, como no poda rodearme con las piernas la cogí una mientras ella apoyaba la otra en el asidero de la ducha, y aferrada a mi nuca sus ojos brillaban azules de deseo, la estaba empalando antes de querer pensar hacerlo, dando golpes de cintura tan fuertes que sentía sus labios mayores besando la base de mi miembro, se quedaba en estado ingrávido unas décimas de segundo, y volvía a descender para recibir de nuevo a mi falo, una y otra vez, sus gritos al correrse me excitaban, sus golpes en mi pecho no me dolían y cuando la besaba me mordía el labio inferior haciéndome daño, clavando sus largas uñas en mi espalda mientras su cuerpo temblaba, sentía una fuente de liquido cálido caer por mis piernas y no era agua, la posición cansaba y la dejé en el suelo de la bañera, pero totalmente ida a mi merced, la apoyé contra la pared de cara a los azulejos y la penetré desde atrás teniendo que bajar la cintura para entrar en buen ángulo, le dio tales golpes a la pared que una repisa de jabones se precipitó al suelo, yo estaba desatado follándome por detrás el coño de una mujer a la que casi triplicaba el volumen, metiéndola una polla descomunal sin sentir nada más que un placer indescriptible al verla gozar tanto como yo. La bestia acudió sedienta de sexo, pero tanto la dio a ella, ser follada normalmente o por la bestia, le daba igual, eran tan titánico uno como lo otro, pero su cuerpo se debilitaba a los minutos y sus gemidos se apagaban en un mar de sensaciones que la hacían desvanecerse al sentir su coño palpitar en carne viva, al correrme la separé de la pared y la daba embestidas fuertes y profundas agarrado de sus tetas, el sonido en sus nalgas era el de golpear mármol, y al llenarla de leche, de nuevo, sus músculos vaginales se apretaron regalándome unos segundos de lujuria absoluta.

Al soltarla casi se va al suelo, aun así me pidió con desesperación que la dejara un rato a solas, hacia bien, si me quedaba allí no respondía de mi, me bajé a darme un chapuzón en la piscina y cuando bajó vestida solo con un tanga y mi camisa del día anterior simplemente atada en el ombligo, casi voy a por ella otra vez, pero tenia el poder de perderme en su mirada, desayunamos algo de los restos de la cena de anoche, sin palabras, solo mirándonos embobados, estaba con el pelo mojado sin volumen, la cara lavada y sin maquillaje, sin artificios ni turcos, y era la cosa más bonita que había visto nunca, la hice un par de fotos pese a que ella se negaba al decir que estaba horrible, pero todas las fotos eran preciosas, como ella.

-YO: ¿estás bien?, no pretendía haberme pasado en la ducha…..

-CASANDRA: no soy ninguna mojigata …….– me pegó un manotazo en la espalda –…. me gusta que me folles así – me azotó en el culo apretando mis nalgas por encima del slips que llevaba puestos.

-YO: pues esto no es nada, cuando te pille un buen día te vas a arrepentir.

-CASANDRA: estoy desando sentir como me abres el puto coño a lo animal – me mordió en la espalda, del dolor me giré cogiéndola en brazos, sentándola en la encimera y besándola con pasión, mientras sonreíamos y ella me acariciaba la cara con sus delicadas manos.

-YO: como no te estés quieta te lo demuestro aquí y ahora.

-CASANDRA: seguro que si, pero hemos quedado con tus padres para comer con ellos.

-YO: joder es verdad, vamos vístete – la bajé al suelo, azotando su culo mientras la doblaba la espalda con un beso enérgico.

Lo pasé mal conduciendo otra vez la tartana de mi padre, pero era un bajo precio por su felicidad, comimos en mi casa y Lola…….bueno, Casandra, se mostraba mucho más suelta y natural, algo que a mi hermana la encantó, seguimos hablando y planificando todo lo de los próximos días, y por la tarde fuimos a cenar a casa de sus padres, lo hicimos solo con su madre, su padre estaba tan borracho del día anterior que aun dormía, y el hermano pequeño me sacaba de quicio todo el rato, aun así al despedirnos les di las gracias y dejé allí a Casandra hasta unos días después en que nos veríamos de nuevo, “con calma, no te precipites”.

Los siguientes días fueron un carrusel de viajes, llamadas, y papeleos, resulta que vender una casa que ya has pagado al banco casi la mitad de la hipoteca es muy fácil, ya tenían comprador antes del cambio de año, y en cada viaje me llevaba algo a mi casa, “a su casa” me recordaba constantemente, y cada día hablaba con Casandra o quedábamos con amigos a charlar y reír, los míos desconfiaban tanto de Casandra por sus formas que tardaron en comprender que tras la fachada mal hablada y vestida a su manera, era un chica tan normal y divertida como ellos. A Casandra le resultó gratificánte ver que se podía pasar bien el rato sin estar bailando escuchando música a todo trapo y bebiendo hasta desfallecer, con juegos de mesa y partidas de cartas, aunque en los fines de semana su alma “fiestera” era irrefrenable y teníamos que salir a bailar a cualquier sitio. En fin de año y reyes no pasó nada a destacar, salvo un encontronazo en la fiesta de fin de año que fuimos a una mega - discoteca, entre Casandra y una de mis ex amigas, la aprendiz de zorra de Rocío, de mi época del instituto, nos cruzaron el la pista de baile y la aprendiz estaba tan borracha que mientras hablábamos se me lanzó al cuello con Casandra delante, por poco la desgracia la cabeza con un zapato de tacón.

La mudanza fue larga y constante, un día Teo y Manu nos ayudaron y parte de las chicas del piso de estudiantes, e hicimos un gran avance en todo, Alicia seguía triste, pero me sonreía de verdad, con arrugas en los ojos, casi veía orgullo en su mirada al ver lo que había hecho por mi familia, pero en cuanto Casandra apareció su rostro se giró tenso y se acabó marchando, me daba mucha pena verla así, no era mi intención hacerla daño.

Para después de reyes ya tenia a mi familia instalada y viviendo en mi casa, “su casa, joder”, el choche de la 1º vez que mi madre se cruzó con Dani fue épico, como un duelo de pistoleros del oeste, pero en vez de pistolas sprays de lejía, y en vez de cartucheras, trapos para limpiar, Dani llegó y, pese a estar avisada de todo, ver a mi madre limpiando la cocina la torció el gesto, las calmé a ambas, ya sabia que a mi madre, por mucha criada que la pusieras, seguiría limpiando y haciendo la casa, pero en un par de días se cuadraron las cosas y ambas parecían muy felices al tener menos trabajo que hacer, pero ser útiles, a ellas como al resto les hice ver que había llegado una nueva etapa a esa casa, una etapa diferente, en que la familia se volvió importante.

Casandra – La balsa que me llevó a tierra.

Se me presenta un dilema, una dicotomía más bien, por un lado podría estirar y alargar esta historia contando en detalle mi relación con Casandra, antes conocida como Lola, pero he empezado 6 veces a escribir esa historia y no me gusta, me da la sensación de volverme repetitivo, predecible y una sensación de perder magia o chispa. La verdad es que poco puedo decir de la relación con Casandra que se salga de lo habitual como para ser mentado, lo que es técnicamente la relación, fue de lo más normal, así que os describo por encima lo mundano.

Habíamos pasado las Navidades de forma muy jovial y ya tenia a mi familia viviendo conmigo en el ático de lujo, dividimos las habitaciones y quise quedarme con la habitación de invitados de abajo, al estar separada del resto Casandra y yo tendríamos nuestro espacio, pero las escaleras eran un sufrimiento para mis padres, así que no me quedó otra que dejarles la de abajo a ellos, y yo quedarme con la más grande de arriba, con la cama de 3x3, mi hermana se quedó con la otra habitación, al otro lado del piso de arriba, con baño, se quedó libre la 4º, pegada a la de mi hermana, y empezamos a vivir allí como la familia que recordaba que éramos, quité todas las cámaras y micros, no las necesitaba ni me interesaba nada que me pudieran ofrecer.

Era increíble lo mucho que echaba de menos a mi familia, y ellos se acostumbraron a la buena vida bastante bien, fue una gran decisión regalarles el piso, casi tan buena como ir despacio con Casandra, nos veíamos todas las tardes entre semana, después de su instituto, la ayudaba con los deberes y como la casa estaba vacía, ya que todos trabajaban o salían, quizá para dejarnos solos, teníamos nuestros momentos, y los fines de semana se quedaba con nosotros, íbamos a bailar, y hacer el ganso con los amigos. Poco a poco, la confianza en ella fue aumentando y en semana santa ella y yo nos fuimos ha hacer un viaje al norte del país, se lo regalé por su mejoría en las notas, no pasaba de 6 en nada, pero al menos aprobaba casi todas, en vez de suspenderlas todas.

Fue lo que supongo que era una relación normal de noviazgo, todo lo normal que podía ser con una cabra loca como yo y una mujer tan irascible como ella, yo me mostraba demasiado abierto con todo el mundo, incluyendo mujeres, y eso a ella no le gustaba del todo, de vez en cuando se enfadaba conmigo o montaba algún pollo de celos, era incapaz de verme hablando con alguna amiga o incluso camareras o recepcionistas y no agarrarme del brazo en señal de dominio, le daba igual que estuviéramos hablando Alicia y yo sobre Teo, apartados, venia y se pegaba a mi sin participar de la conversación ni nada, me resultaba gracioso y la vez excitante, la picaba tonteando con alguna solo para enfadarla, se volvía un volcán de pasión. El sexo era bueno a secas, siempre por el coño, no se dejaba por detrás, y no por que no me dejara intentarlo, pero era demasiado dolor, cuando lo intenté con el punta de mi enrome verga en vez de con los dedos, los cuales entraban bien, lloraba descontrolada, así que dejamos de intentarlo, no me importaba, su coño era tan prieto y cálido que era un escándalo tirársela, por delante, por detrás, en brazos o en una cama, en casa o fuera, era siempre morbo y siempre sensual, salvo los días de la regla, (oh dios, que días), era mejor no verla, se le ponía un dolor agudo en los ovarios que la tenían de un estado de nervios constante, me pedía que la abrazara y luego me apartaba a empujones por que le daba calor, luego me mandaba a por chocolate y al volver ya no lo quería, o el olor de mi colonia le daba arcadas.

El tiempo fue pasando y llegó el verano, usábamos bastante la piscina de casa pero los fin de semana íbamos todos a la publica, yo ya tenia el coche que compré con Teo, mucho más adecuado a mi edad que el coche de lujo que mi padre disfrutaba como un crío, se pasó 2 meses llevándonos a dar vueltas por las cercanías de Madrid solo para estar conduciendo aquella maravilla alemana. En las piscinas a las que íbamos éramos la atracción, no tanto por Casandra y yo con nuestros bellos y atractivos cuerpos, si no por que con mi familia es imposible pasar desapercibidos, y allí era yo quien se mostraba algo receloso con los chulos de playa que se abalanzaban sobre Casandra cuando la dejaba sola, o simplemente se alejaba un poco, por suerte tenia mucha más templanza que ella, y la mayoría de las veces era ella la que les dejaba a cuadros con su carácter y sus contestaciones. Terminó el instituto y se sacó el graduado ante el asombro de su propia madre, su padre no fue a la graduación, tal como prometí, la pagué el curso de peluquería, no era demasiado y se lo había ganado, salimos con los de su promoción de fiesta y aquella noche me regaló 4 polvos seguidos, acabó destrozada y no pudo caminar bien en 3 días, pero con una sonrisa enorme.

Nos fuimos a la playa con mis amigos 15 días y mi familia nos siguió los otros 15 días de ese mes, supongo que esos 15 días que pasamos sin la familia merecerían un capitulo a aparte, con Manu y Teo, las chicas del piso de estudiantes, las mañanas en la playa, las tardes jugando y bebiendo las noche de fiesta en los chiringuitos de la playa, bañarnos en el mar a las 6 de la mañana totalmente desnudos, como nos alejábamos del resto Casandra y yo, haciendo el amor rodeados de la oscura noche y el mar ondulante, de cómo salió del agua antes que yo y se llevó mi ropa, teniendo que regresar a pie desnudo al piso donde veraneábamos, supongo que esperaría que me avergonzara o algo, la verdad es que iba caminando tan tranquilo con las chicas haciéndome fotos o videos con los móviles, y alguna guiri borracha, o haciéndose pasar por guiri borracha, caía en mis brazos, al llegar a casa Casandra estaba en la puerta preparada con la cámara de fotos, al ver el tumulto que me seguía de adolescentes salidas dejó la cámara y salió con un mazo de amasar pan espantando a todas. Pero serian meras anécdotas que alargarían esto sin más.

Pasé miedo al acercarse la fecha de mi cumpleaños, desde los 17 no había tenido uno tranquilo, y con Casandra podría pasar de todo, pero no ocurrió nada, nada destacable, fiesta, tarta, familia y sexo animal con ella, ni antes, ni durante, ni pasadas 2 semanas estuve tranquilo, pero tenia 22 años y una relación formal y sólida con una belleza de mujer.

Llegamos ha hacer el año juntos y lo celebramos con una fiesta con amigos de todos, Casandra había hecho nuevas amistades menos problemáticas e hicieron migas rápido con los míos, no faltó la refriega de Casandra con alguna chica, no sé si era ella que era muy celosa, yo que era muy afable y guapo, o una mezcla de todo, pero me estaba cansando ya de tener que dejar la fiesta para llevármela a casa a tranquilizarla, y ya no era un volcán de pasión, si no de rabia, de sobre protección, me llamaba cada hora que estaba alejado de ella, me acompañaba al trabajo y se volvía conmigo, su curso iba bien y hasta podía descansar las horas que no estaba con ella, pero tenia que medir mis palabras, si decía que en el curro una me habían ayudado a colocar cajas era sometido a un interrogatorio pero que la SS, o si la decía que Lara o Alicia me habían llamado, la siguiente vez que quedábamos terminaban a gritos, aquella pasión y lealtad me estaban hartando, y lo peor es que no me callaba, se lo decía y ella me lo reprochaba, “lo que quieres es que te deje andar con zorras por ahí” me decía, pero ya era excesivo, cuando me llamaba mi madre o mi hermana exigía ponerse al teléfono para saber que eran ellas, y la tenia que entregar el móvil a menudo para que leyera los mensajes, y cualquier tontería tipo “a ver si nos vemos este finde” de alguna chica, aunque tuviera novio, desataba su ira.

La verdad, me estaba planteando dejarla incluso antes de querer reconocerlo, me odiaba por que ese no era el plan, ahora seria llevarla a casa y vivir juntos, pero si ya estaba así de histérica por separado, en el mismo techo no quería ni pensarlo. Buscaba excusas para alejarla e irme solo a los sitios para no discutir, pero era casi peor, mi hermana no se mordía la lengua y discutía con ella, el colmo llegó cuando me llamó Alicia.

-ALICIA: ¿hola Raúl, como va todo?

-YO: tirando.

-ALICIA: sigues a malas con ”tu churri” – bromeaba por que así me llamaba Casandra cariñosamente.

-YO: pues algo si, pero en fin…… ¿querías algo?

-ALICIA: pues si, pero me da cosa pedírtelo….

-YO: suéltalo hermanita.

-ALICIA: verás, ¿sabes que andamos intentado sacarnos el carnet de conducir las chicas no?

-YO: si, ¿como os va el práctico? - en alguna de las veces que me dejaba Casandra hablar con ellas me habían dicho que estaban hartas del transporte publico y se iba a sacar los carnets y comprarse un coche entre ellas, Alicia, Naira y Lara. Mara, su hermana mayor, ya tenia carnet y coche.

-ALICIA: genial, yo ya lo tengo y estas se lo sacaran en breve……la cosa es que..…andábamos practicando el teórico con las clases pero…… ¿recuerdas que te dije que Mara nos enseñaba en un descampado a conducir?

-YO: si, bueno, algo recuerdo.

-ALICIA: es que tengo el practico en 2 semanas y se le ha jodido el coche a mi hermana………- era como si su voz se endulzara acercándose a la petición.

-YO: ¡no jodas!, ¿y es grave?

-ALICIA: no, una chorrada, pero no lo tendrá hasta después de los exámenes y………….- le daba cosa pedirlo.

-YO: …….quieres que os deje el mío.

-ALICIA: ¡si!, lo siento, no quería ser tan directa, pero nos vendría muy bien, ¿te importa? Si no, las digo a estas que no y punto - lo sopesé mucho, seria hacerlas un favor y despejar mi cabeza un rato, pero seria irme con 3 mujeres a un descampado, Casandra querría ir, y necesitaba alejarme de ella.

-YO: a mi no me importa hermanita, ¿cuando podéis?

-ALICIA: jajaja muchas gracias Raúl, pues estabamos dando clases por las tardes ¿mañana te parece bien? O si no cuando puedas……..

-YO: mañana perfecto ¿os paso a recoger a las........ ?

-ALICIA: pues sobre las 5 de la tarde, y muchas gracias, sabia que no me fallarais - lanzó un beso sonoro por el teléfono.

-YO: ya, por eso has llamado, anda lista, mañana nos vemos - al colgar me sentí usado, no podía negarle nada, y lo sabia, pero no solía pedirme nada que no necesitara realmente.

Casandra salió de la ducha y al verme con el móvil ya se puso histérica, lo cogió y miró las llamadas preguntando hoscamente.

-CASANDRA: ¿con quien hablabas?

-YO: con Alicia y las chicas, necesitan que las haga un favor….- me arrepentí enseguida de esa elección de palabras.

-CASANDRA: ya…… ¿y que coño quieren?

-YO: se le has jodido el coche con el que practicaban para el carnet, y me han pedido que las ayude por las tardes, nada más.

-CASANDRA: pues que se busquen a otro pardillo, seguro que tienen a 50 a los que llamar.

-YO: no te pongas así, solo serán unas tardes, irnos a un sitio apartado y enseñarlas como va el coche – sentado la cogí de la cintura abriéndola el albornoz y besando su ombligo húmedo y fresco, estaba totalmente desnuda salvo por el albornoz.

-CASANDRA: un sitio apartado, ya……..no me gusta, dilas que no.

-YO: ¿que nos va a pasar? Ni que nos fueran a atracar o algo………- me sujetó del pelo cuando besaba entre sus senos.

-CASANDRA: no es por que os pase algo malo idiota, es que no quiero que estés con ellas a solas, por la tarde estoy en el curso y no puedo ir contigo.

-YO: tampoco es que te necesite allí para enseñarlas.

-CASANDRA: ¿así que te quieres ir a una zona apartada con 3 zorras y sin mi………? - me enfadé y la zarandeé de la cintura.

-YO: no las llames así, son amigas mías.

-CASANDRA: ya, amigas tuyas, con una te acostaste, con otra casi y a la otra le metiste mano en este baño - señaló el cuarto de donde había salido, y bajé la cabeza dándole la razón y arrepintiéndome de haberle contado todo, últimamente me arrepentía de muchas cosas.

-YO: lo de Lara era un juego, con Alicia no pasó nada, y por el amor de dios, ni siquiera sabia que era Naira…..- empezamos a subir el volumen de la voz.

-CASANDRA: pues no me gusta, no quiero que vayas y no irás - me amenazó con el dedo, pero lo apartó rápidamente conociéndome y siendo consciente del error que había cometido, para que hiciera algo solo necesitaba que alguien me dijera que no podía hacerlo por imperativo.

-YO: oye, déjate de celos, soy tu novio y te quiero, si hubiera querido podría haber estado con 60 mujeres.

-CASANDRA: pues a mi me pasa igual, tengo a tíos babeando por mi, así que cuidado con lo que haces.

-YO: no me entiendes, no es lo que vaya a hacer, es lo que estoy haciendo desde que estoy contigo, ¿por que no te fías de mí?

-CASANDRA: me fío de ti, es de esas lagartas de las que no me fío - rebajamos un poco el tono, me levanté abrazándola por detrás y besándola en el cuello.

-YO: solo hay una lagarta que me puede alejar de ti.

-CASANDRA: ¿quien?

-YO: tú ……– se giró azotándome en el pecho - …..eres la mujer más cabezota, celosa y territorial que he conocido, y te quiero con locura – la besé.

-CASANDRA: y yo a ti churri.

-YO: pues dame algo de aire, no puedo seguir siendo tu prisionero, no puedes impedirme que salga y haga cosas, ni puedes evitar que me relacione con otras mujeres, solo te queda confiar en mí.

Pareció convencida, aunque los rescoldos de fuego en su ojos no se apagaban, los cambié por ojos de lujuria al ir acariciando su cuerpo, sentándola a una mesa y quitándola el albornoz, sus senos ya totalmente desarrollados eran algo más grandes que mis manos, y destacaban en un cuerpo tan fino y pequeño, me comí sus pezones sintiendo su dedos jugando en mi cabello, sus manos acariciaron mi cara, y fueron bajando por mi cuello, mi pecho y mi abdomen, hasta llegar a mis pantalones y sacar mi rabo medio tieso, lo masturbaba mientras nos fundíamos en uno solo con un beso con lengua que me dejaba sin aliento, soltando uno de sus pechos y acariciando su nuca, detrás del oído, tal y como la excitaba, me susurraba cosas húmedas y calientes, pero siempre territoriales, “¿quien te la pone así de dura mejor que yo?” o cosas por el estilo, no la escuchaba, solo me perdía en su ojos azules.

Cuando ya estaba empalmado sus manos no podían con mi verga apunando a su entrepierna, rozaban la parte interior de sus muslos y le producía gemidos al meter mis dedos en su húmedo y cálido coño, pero ambos sabíamos que ya no había freno, sus suplicas por que acababa de salir de la ducha fueron fugaces, y se la introduje violentamente, sacándola un ronroneo, había aprendido a sentir placer al ser penetrada así, me aferré a sus caderas y desaté a una bestia comedida, la puerta estaba cerrada pero mi padre estaba abajo, me ocupaba de tapar su gemidos con mi boca y mi lengua mientras hacia temblar su cuerpo y la mesa, la apreté contra mi con una mano firme en su trasero sacándola la cintura y otra mano en su pecho al que me agachaba a mordisquear y lamer, mientras la follaba fuerte y con decisión, llegado un punto en el que las cosas menos pesadas de la mesa ya habían caído al suelo, ella misma estaba separada de la mesa, colgada de mi cuello y haciendo fuerza para subir y bajar sobe mi, acompañada de embestidas continuas de mi rabo partiéndola en 2, la tenia que coger de las piernas por que no me rodeaba con ellas, pero daba igual, el sexo era brutal y morboso, verla con sus ojos azules perdidos en el deseo y sintiendo cada uno de sus largos orgasmos en sus labios mientras la besaba, siempre me mordía el labio inferior al acabar un beso después de un orgasmo, tiraba de él hasta hacerme sangre. A esas alturas ya le metía y sacaba toda en cada vaivén, la llené de esperma a la media hora, se dejó caer en la cama y me chupó la polla como mejor podía, masturbando hasta ponérmela dura otra vez, lamiendo el glande y todo los fluidos, para ponerse de rodillas a horcajadas sobre mi y volver a penetrarla de forma grotesca, le amasaba las nalgas mientras se cuerpo se vencía para lamerla los senos, plantando los pies y follándomela tan fuerte que la tenia que sujetar con cada golpe de cintura para que no saliera disparada, el sonido era claro y alto, mis huevos rebotando en su culo, solo sus lamentos ahogados y sus giros de cadera en momentos de excitación daban descanso a mi cintura, sudábamos los 2 mientras acariciada su trasero, jugando con mis dedos en su ano y cuando volvieron sus orgasmos metiendo 1, 2 o hasta 3 dedos en su culo, le gustaba esa sensación de abrirla el culo con los dedos mientras era perforada por el coño. Al rato la puse a 4 patas y le volvía a embestir azotándola con fuerza, cada golpe la sacaba un suspiro de gusto y mordió una almohada para acallar la fricción de mi verga en el punto G, se desvaneció sin fuerzas antes de poder correrme así que los últimos minutos fueron como tirarse a una barbie, inerte y con una sonrisa fría y carente de vida, descargué mi semen por 2º vez y caí sobre la cama con ella encima, medio ida acariciando mi pecho con los dedos.

-CASANDRA: seguro que ni esa guarra de Lara te folla mejor que yo - la acaricié la larga cabellera rubia sonriendo, no la iba a mentir, solo le dejaría que pensara que si.

La verdad en que no, a Lara no le entraba toda, pero me duraba más, todas me duraban más con ese margen de tiempo, casi un año, y si pasábamos del 2º era de milagro, lo cierto es que el morbo y el amor habían desaparecido aunque por entonces no lo veía, o quería admitirlo, ya solo era sexo y respeto el uno por el otro, y el sexo no me llenaba ya, no habíamos evolucionado mucho, aunque esa era el plan, Ana evolucionó hasta perderse y no quería eso, pero si después de tanto tiempo Casandra no aguantaba más, nunca lo haría, y eso la restaba más puntos en la balanza de mi mente.

Pasó el día siguiente y dejé a Casandra en su curso, despidiéndonos con un fuerte y largo beso, con caricias en mi verga, siempre lo hacia, luego fui al piso de estudiantes y como aun era pronto me dejaron subir a esperar, la casa olía a rosas y estaba infinitamente mejor que cuando yo vivía allí, 4 mujeres juntas y sin hombres la tenían como una casa de muñecas.

-YO: vámonos que son casi las 5 de la tarde – grité al entrar, para bromear y para indicarlas que ya estaba por allí a todas, Naira salió de su cuarto ya vestida, como no, con un polo amarillo chillón y un pantalón vaquero ajustado que realzaba su trasero.

-NAIRA: perdona, es que hemos salido tarde de la uni y nos estabamos duchando - fui y la di mi famoso único beso en la mejilla y abrazo que distingue un saludo normal a una cualquiera, de las mujeres relevantes de mi vida, Naira no era la más cercana pero si la tenia cierto aprecio.

-YO: ¿entonces ya estáis?

-NAIRA: jajajaja que va, yo acabo de salir y aun me tengo que arreglar – la miré a sus ojos azules y su cabello rubio, misma descripción que Casandra pero ni de lejos tan guapa, aun así la halagué a mi manera.

-YO: arreglar……… que? si estás preciosa - se sonrojó con una leve sonrisa.

-NAIRA: pues una que si no sale con una crema en la cara se siente fea – supongo que es el precio a pagar por ir mona siempre, esa mujer ya era guapa sin nada en la cara, al darse la vuelta e irse la vi con los vaqueros ajustados un culo de infarto, y lo contoneaba andando de puntillas, lo que se conoce como llenar la ropa.

Al rato de oír puertas abrirse y cerrarse, secadores, risas y peticiones de maquillaje o ropa, apareció Lara por el salón donde estaba sentado, solo con unas bragas y secándose el pelo con una toalla, sin sujetador ni nada, aparté la vista con algo de trabajo de sus pechos enormes y turgentes.

-LARA: jajaja no me digas que ahora te da vergüenza mirarme semi desnuda - cayó sentada a mi lado con sus tetas rebotando unos segundos más tarde.

-YO: no es vergüenza Lara, es que tengo novia - se me acercó pegándome sus protuberancias al brazo, pasando sus dedos por mí pecho.

-LARA: ya, esa perra rabiosa, ¿que diría si te viera así conmigo? – de un salto se puso de rodillas sobre mi con sus muslos apoyados en mis piernas y con sus senos a la cara, al tener el torso lejos, de forma instintiva la sujeté del culo y la espalda al tirarse hacia atrás, la cabrona sabia que la cogería antes de que se hiciera daño.

-YO: decir no diría nada, te abriría la cabeza con una silla - sonrió al sentir mis manos en su cuerpo desnudo.

-LARA: no la dejarais…….- tenia razón, pero por el amor que le tenía a Casandra, no por defenderla a ella.

-YO: anda, bájate y ponte algo de ropa que ya salimos tarde.

-LARA: relájate, Alicia acaba de meterse en la ducha y aun tardará un buen rato en salir – sus manos fueron mi polla, acariciándola por encima de la tela, mi cuerpo me traicionó, no se si era la situación con Casandra, sentir sus manos y sus senos en mi o la imagen de Alicia duchándose que había proyectada en mi cabeza, una erección bastante grande empezaba, “joder, tenia que haberme puesto los slips y no solo los vaqueros”, me había vuelto un fan de los vaqueros ajustados y las camisas.

-YO: ya basta - espeté con cierta furia, agarrándola de las muñecas con fuerza y apartando sus manos.

Lara comprendió el tono y se apartó de mi no sin regalarme un visión de su cuerpo desnudo alejándose, pero me metió en un lío, ya estaba medio empalmado y no se me bajaba, Naira apareció 5 minutos más tarde con un capa de polvos y pintalabios rosa chicle, estaba algo mejorada pero seguía lejos de Casandra, sus ojos azules eran oscuros y su rubio era apagado, charlamos un rato de cómo iba todo hasta que apareció Lara, vestida con una minifalda de cuero negro ajustada y un top azul claro, ¡¡SIN SUJETADOR!!, Casandra tenia razón al menos en parte, Lara era un zorra que iba detrás de mi sin descanso, usando sus 2 mejores armas, sus enormes tetas apretadas por una prenda fina y elástica, y la gravedad seguía sin hacer efecto, perfectamente colocadas, se sentó enfrente y jugó conmigo como quiso, me la comía con los ojos mientras ella se movía, me pareció ver que debajo de la minifalda no llevaba nada cuando se cruzaba de piernas como cierta película famosa, pero me negué a seguir mirando, más que nada por evitar que mi erección aumentara, aunque creo que ya lo hacia.

El remate fue levantarme para ir al baño y echarme un poco de agua fría, que ayudó poco, pero ayudó, al volver salió Alicia en un pasillo oscuro, la pillé de espaldas y la di un pequeño susto, se volvió con su sonrisa enrome y sincera, me abrazó con fuerza, la rodeé con los brazos besándola en la mejilla, ella ya ponía la cara solo de ese lado, sabia de mi saludo especial, y para ella siempre el abrazo duraba algo más que el resto, su larga cabellera castaña estaba húmeda aun y olía a cerezas del champú, el problemas fue que el abrazo fue tan afectuoso que mi polla medio tiesa se notaría en su piel.

-YO: hola, hermanita, ¿lista ya?

-ALICIA: si……..claro, dame 5 minutos que me arreglo y nos vamos ya….- otra vez aquella tontería, si íbamos a conducir por un descampado, ¿que se tenían que arreglar? - oye, ya estas alegre eh…..- se sonrojó señalándome el bulto de la pierna.

-YO: ya, lo siento, es que Lara…..- rió sin hacer falta más.

-ALICIA: ya, me imagino…..- la seguía por el estrecho y oscuro pasillo hasta llegar al salón y verla vestida, casi rompo la bragueta y lo poco que me había ayudado el agua en la cara se desvaneció, iba con un corpiño negro sin tirantes, apretado en la cintura acrecentando aun más su poderosas caderas y unos leggins blancos que no daban más de si en su tremendo trasero, tan tenso que la parte donde se suele hundir entre las nalgas estaba tirante y se translucía un tanga negro muy fino, le debió de costar un mundo ponerse esos leggins por que apenas le subía da la cintura, hasta podía intuir el inicio de la línea de su trasero.

-YO: hostia puta…….- se me escapó.

-ALICIA: ¿que pasa?, ¿voy muy mal? - encima se giró para que la viera mejor, tuve que echar el culo hacia atrás para no evidenciarme, aunque creo que era inútil.

-YO: ¿mal? depende de para que…..si vas a cuidar ancianos, no, puedes matar a más de 1…. - rieron las 3 – ….¿lo que no se es por que os arregláis tanto? – quise saber por que, más que nada por si aquello era una encerrona como se temía Casandra, pocos hombres, o ninguno, se metería en un coche con esas 3 así vestidas y no haría nada.

-LARA: para ti – soltó un beso al aire.

-YO: esto………

-ALICIA: jajaja no la hagas caso, es que después hemos quedado para ir de cañas con unos chicos, ¿te importa dejarnos allí luego? – suspiré aliviado, aunque podría no ser cierto, tenia sentido.

-YO: ah…vale…..en ese caso dios se apiade de esos pobres locos, no seáis crueles con ellos, van a ir con un calentón todo el tiempo.

-LARA: ¿como tú? – susurró mientras se colocaba las tetas de forma sensual.

-ALICIA: jajaja que boba eres…. - se contorsionó tratando de poder respirar con semejante corpiño, y se giró a mi - ….. ¿entonces no dejas allí luego?

-YO: mis señoras, seré su carruaje esta noche… – hice una reverencia -…. pero antes de las 12 tienen que regresar o se romperá el hechizo - rompieron a reír.

-LARA: jajajaja yo a las 12 voy a tener un rabo en cada mano, a si que déjate de cuentos - rompieron reír más alto, yo incluido, no había perdido es punto de socarronería que me recordaba a mi.

Alicia se retiró y a los 3 minutos salió con una leve sombra de ojos y pintalabios rojo pasión, no necesitaba más para ser la bonita de las 3, bajaron por el ascensor y yo por las escaleras, no me sentía con poder como para meterme en esa cabina estrecha con 3 mujeres vestidas para ir de caza, y no arrasar con ellas, nos fuimos a una zona apartada que me indicaron, Alicia fue la 1º valiente, ya tenia el practico y había dado varias clases, era lista, pero por seguridad lo haríamos de 1 en 1 por si pasaba algo que fuera solo a los del coche, la que conduciría y yo. Alicia se repetía una serie de ordenes memorizadas y no la tuve que decir casi nada, ajustó el asiento, el cinturón, los espejos y repasó su cabeza en busca de más información apretando los pedales con el coche apagado, me hizo gracia que se llevaran las 3 unas zapatillas de tela fina y suela lisa para conducir y luego unos zapatos de tacón enormes para la fiesta, Alicia fue a arrancar y la sujeté la mano de la palanca de cambios.

-YO: ¡¡espera!! – se asustó pero no retiró la mano.

-ALICIA: ¿que pasa?

-YO: el freno de mano 1º, querida mía - abrió los ojos sorprendiéndose y riéndose.

-ALICIA: puf…lo siento……….estoy muy nerviosa, me pasó lo mismo con el profesor.

Solté su delicada mano, quitó el freno de mano, y arrancó sin problemas en 1º dando vueltas amplias y lentas, cogiendo confianza, la indiqué la forma mecanizada de cambiar de marchas y lo aplicó genial, a los pocos minutos ya conducía sin indicaciones dando vueltas, bajando y subiendo de marchas, sonreía sin parar sintiendo esa velocidad y poder que te da el conducir, esa subida de endorfinas, hasta que 20 minutos después paramos y la felicité, salimos del coche y corrió a abrazarme besándome en la mejilla, luego me limpió el carmín de la misma con un pañuelo, Alicia lo tenia dominado, así que le tocó a Lara que apartó de forma brusca a Naira, hizo el mismo repaso mental que Alicia, pero no ajustó el asiento, nos reímos cuando al ayudarla a colocarlo a la distancia correcta sus tetas tocaron el claxon, la alejé un poco mientras me reía al mirarla y ella se mordía el labio, la miré las tetas y tenia los pezones sobresaliendo ya bajo al tela.

-YO: nena, ¿ya estás cachonda?

-LARA: jajaja si, dios, es que con el roce del cinturón y el volante……- tenia razón, el cinturón de seguridad apenas podía rodearla entre los pechos así que lo tenia puestos por debajo y le rozaba en los pezones.

-YO: pues céntrate, que no me quiero estrellar.

Comenzó a conducir y de forma mucho más torpe, pase media hora dándola consejos que desobedecía hasta que consiguió conducir de forma calmada y continuada, sin giros bruscos ni frenazos, las marchas las dejaría para otro día y solo fue en 1º. El turno de Naira, que esta roja de vergüenza y aun no se había sentado al volante, tuve que enseñarla, al ser un coche nuevo, como se ajustaba el asiento y espejos, rozándome con ella, pero estaba aun más nerviosa ante la perspectiva de conducir que por mi, cuando ya estaba lista, la hice contar hasta 100 con los ojos cerrados, su respiraron se serenó y arranco sin problemas, me sorprendió gratamente su habilidad y dimos unas cuantas vueltas con ella tranquila y serena.

-YO: muy bien.

-NAIRA: gracias, es que mi padre de pequeña me dejaba aparcar el coche jajaja.

-YO: jajaj pues nada, ahora metemos 2º y……- se tensó de nuevo y frenó en seco.

-NAIRA: perdona….es que solo aparcaba, nunca he metido una marcha.

-YO: vale, tranquila, es muy sencillo, pisas/cambias/sueltas, es solo coger el ritmo …..- asintió horrorizada, empezó de nuevo y cuando le di la orden repitiéndole la secuencia, no se que hizo que al mover la palanca el coche crujió como aun patata frita pisada, dio 3 tirones fuertes y se caló.

-NAIRA: ¡dios, lo siento lo siento! ...- se pegaba cabezazos con el volante – …¿no me lo habré cargado?

-YO: no, tranquila, solo se ha calado, pero dime……..¿de que se rompió el coche de Mara? - se puso roja otra vez.

-NAIRA: fui…..fui yo…me puse nerviosa…….Mara insistía……y le rompí la caja de cambios…..

-YO: ¿¡muy bonito, y no me avisas!?

-NAIRA: lo siento, no quería decírtelo por si te negabas…..

-YO: ¡joder!, que me conoces, no tienes que engañarme así ….- agachó la cabeza avergonzada, me calmé unos segundos – ……mira…esas cosas me las dices antes y yo puedo actuar, si no me lo dices no puedo ayudarte y me jodes el coche también.

-NAIRA: lo sé…es que……Raúl, lo siento….- la besé en la frente para calmarla antes de que sollozara, “recuerda, esta frágil no seas brusco con ella.”

-YO: no pasa nada, déjame pensar…….- Naira se había frenado delante de las chicas, estaba muy nerviosa, Lara estaba de fondo con un aparato de música y el sonido del compás me dio una idea -…. esta bien, vamos a probar.

Salimos del coche y me metí en el sitio del piloto, eché el asiento atrás hasta el tope, me abrí de piernas y llamé a Naira.

-NAIRA: ¿que hago?

-YO: siéntate aquí …- la señalé entre mis piernas – ….vamos no tengo todo el día - accedió con reservas, era estrecho pero por suerte el techo era amplio y se sentó entre mis piernas, su fino cuerpo quedaba aun mal colocado así que haciendo una acrobacia ajusté el asiento, quedando pegado a su espalda con su prieto culo aplastando mi verga, ella la estaba sintiendo tan claramente como yo sus nalgas.

-NAIRA: no estoy muy cómoda…..

-YO: ya lo sé, pero es esto o que me jodas el coche, así que calla y escucha, pon tus pies sobre los míos.

-NAIRA: ¿como?

-YO: coño, que me pises los pies con los tuyos ….– lo hizo palpando con la planta de los pies - …coge el volante y las marchas, conduce y haz lo mismo que antes pero usa mis pies de pedales - asintió y arrancó, costó con el poco espacio pero con el traqueteo del camino nuestros cuerpos se fusionaron y yo ya veía por encima de uno de sus hombros y sentía mi polla crecer de nuevo en su culo, como ella, pero estabamos a otra cosa.

-NAIRA: vale, ¿y ahora?

-YO: ahora vamos a cambiar de marchas….. – se tensó, la sujeté del vientre respirando con ella –…… cálmate, lo haré yo, tú solo sigue mis movimientos.

La cogí una mano y la llevé a la palanca de cambios sujetándola en ella, conté hasta tres y lentamente cambié a 2º moviendo el pie y ella lo seguía, sintió como apretaba el cambio y soltaba, el coche trampeó, pero no se caló, más por la lentitud del movimiento que por otra cosa.

-NAIRA: ¡¡¡¡bien, voy en 2º!!!!

-YO: ¿ves?, no es difícil, pero ahora volvamos a 1º… - repetí el gesto un poco más rápido y lo siguió mal, apretaba los 2 pies a la vez, la agarré de los muslos -….. no, así ……– y usando mis manos la moví la piernas con el gesto –…. 123 123 123 123, ¿lo ves?, es solo ritmo, como música.

-NAIRA: vale, creo que lo tengo.

-YO: bien, volvamos a 2º - esta vez ella guiaba y yo la seguía en los gestos, pero metió 2º sin problemas.

La animé a 3º, luego a bajar y subir según la marcha, siempre seguida por mis pies, poco importaba que tuviera la polla tiesa metida entre sus nalgas, lo importante era que había quitado los pies y lo hacia ella sola, quería colocárme el paquete disimuladamente, pero no podía con ella encima, ya conducía bien, cambiaba de marchas y con seguridad, repitiendo “123” cada vez, podía dejar de guiarla y acariciar sus piernas y su vientre, sentir mi verga rozándose en su culo, inspirándola el pelo y riéndonos. Al terminar se sacó el cinturón y saltó a mi cuello abrazándome y besándome en la cara por mil sitios, con su cadera rozándome la polla, mi maldito instinto llevó mi mano a sus mulos, muy cerca de su trasero.

-NAIRA: ¡¡¡muchas gracias, eres un sol!!! jajajaja.

-YO: un placer.

-NAIRA: no me puedo creer que ya no tenga problemas con la palanca de cambios.

-YO: pues a ver que hago yo con la mía…..- mascullé.

-NAIRA: ¿que?

-YO: nada, cosas mías.

Se bajó tan alegre que se fue a abrazar a Alicia con felicidad extrema, Lara me pilló desprevenido, se sentó de golpe sobre mí, sintiendo mi polla presionada contra su minifalda de cuero.

-LARA: yo también quiero aprender así.

-YO: tú ya sabes, quítate de encima - se ajustó metiendo las piernas y cerrando la puerta, más bien se frotó contra mí.

-LARA: venga no seas malo, ya lo has hecho con ella, yo también quiero aprender las marchas.

-YO: ya se lo que tú quieres…..

-LARA: y veo que te gusta, o eso siento en mi culo – me tenia cansado, sin palabras, y algo cachondo la verdad.

-YO: no estoy de humor para jugar, anda bájate de encima – quise parecer rudo y firme, el tono que me la sacó de encima en su casa, pero simplemente no me salió, se giró dejándome sus tetas en la cara, acariciándome la cara con su espesa melena negra cayéndole por el rostro.

-LARA: por favor, solo unas vueltas y te dejo en paz ….- quería negarme pero dije que si con la cabeza, aunque sabia que su promesa era vacía, no me dejaría en paz -….. bien, deja que me ponga más cómoda – se sentó bien pero se elevó un poco levantándose la falda de cuero dejándome ya seguro que no llevaba nada debajo, sentándose sobre mi polla a punto de estallar.

-YO: ¿que haces?

-LARA: es que la falda no me da para mover bien las piernas, ¿te molesta?

-YO: en absoluto – “¡¿Qué estás haciendo?!”, estaba tonteando, ya no solo con Naira si no dándole cancha a la más peligrosa de todas, fue cuando percibí su olor, a vainilla, el que le había ordenado como juego cuando la tenia de esclava.

Más atenta a restregarse contra mi que a la carretera dimos unas vueltas, de los botes y movimientos me estaba poniendo malo y me descubría acariciando el inicio de sus senos, vibrando por el terreno irregular, me sacudía la cabeza negándome y colocando las manos lejos de ella, pero se movía mucho, tenia que sujetarla, pasados unos minutos que me parecieron horas terminamos y aun así la cadera de Lara jugaba traviesa sobre mi, con un esfuerzo titánico cogí de su falda y se la bajé colocándosela, sintiendo en mis dedos su piel y con un fuerte olor a hembra necesitada.

-YO: se acabó por hoy - abrí la puerta y sacó solo las piernas, de forma sensual y elegante las cruzó, mi maldito instinto otra vez llevó mis manos a sus caderas, me rodeó el cuello con sus brazos, venciéndose sobre mi cuerpo, riendo y apartándose el pelo con movimientos eróticos, sintiendo sus senos aprisionados contra mí.

-LARA: muchas gracias, profesor – se tumbó sobre mi buscando mis labios, pero sin saber como, pude girar la cara y me besó la mejilla.

-YO: por favor, lárgate de aquí - sonó a una orden férrea, aunque pareció una suplica, al levantarse se apoyó en el duro acompañante de mis piernas, apareció Alicia por la puerta de al lado.

-ALICIA: ¿todo bien? – disimulé agachándome a ajustar el asiento, una erección tan obvia que con su sonrisa denotaba ser consciente.

-YO: si, todo bien ………..¿tú no querrás……..- temía y deseaba a la vez sentir el mejor culo que había visto nunca embutido en unos leggins blancos dados de si, en mi polla.

-ALICIA: jajajaja no tranquilo, ya te he visto “sufrir” suficiente.

-YO: dios, hermanita, lo que se deja de hacer por amor – sonrió de forma agradable, comprendiendo que si no es por Casandra ya me hubiera follado a 2 de las 3.

-ALICIA: es el precio a pagar por el amor – se subió al lado del copiloto.

-YO: puffffff no se si compensa.

-ALICIA: tranquilo, lo hace.

-YO: ¿tengo pinta de sentir que compensa?

-ALICIA: jajajaja pobre hermanito, no se te puede culpar de ser hombre y que tu cosita se alegre, pero lo importante es lo que hace esto – me dio con un dedo en el corazón, quería ser agradable, animarme, y lo estaba empeorando, lo ultimo que necesitaba era una dosis de dulzura y cariño de ella.

-YO: pues mi patata esta cansada ya……- se me escapó por cambiar de tema.

-ALICIA: ya se que estáis a la gresca, pero no seguirías con ella si no la quisieras.

-YO: es que últimamente ya ni sé por que la quiero……

-ALICIA: jajaja, eso suele pasar, pero si no lo hicieras ya habrías saltado al cuello de alguna de estas 2 que están babeando por ti - de Lara lo sabia ¿pero Naira?

-YO: ¿las 2?

-ALICIA: si, solo las 2, a mi no me mires….- entendió mal mi pregunta.

-YO: no, es que me sorprende lo de Naira

-ALICIA: por favor, desde el fin de semana en tu casa esta como loca contigo, pero es muy tímida.

-YO: cualquiera lo diría con ese pedazo de culo encerrado con los vaqueros y el tanga dorado sobresaliendo.

-ALICIA: oye guapo….- sonrió reafirmando su cuerpo con un leve encorvamiento de espalda.

La conversación se cortó cuando aparecieron las otras 2, y se subieron al coche, ya era tarde y las llevé a la fiesta, me invitaron a ir con ellas, pero no podía, tenia que recoger a Casandra y necesitaba alejarme de ellas, cuanto más lejos mejor, tenia un calentón enorme, no es por que Lara hiciera lo que hiciera, o por que Naira fuera tímidamente atractiva, era por Alicia, me sentía cómodo hablando con ella, tranquilo, sin tener que estar alerta, lo que me pasaba con Casandra pero que hacia días, semanas, quizá meses que no sentía, me pegué en la cabeza sacando esas ideas de la cabeza, recogí a Casandra y la llevé a casa, sin decir nada.

La subí a nuestra habitación y la desnudé violentamente, ella lo entendió como un juego pero no lo era, ardía por dentro y necesitaba vaciarme, me desnudé entre sus piernas mientras se tumbaba boca arriba en la cama, ataqué su pezones y con rabia la penetré de golpe toda, su grito sonó por toda la casa, di gracias a dios que habían salido todos a cenar, y mientras la estrujaba entre mis manos la follaba sin piedad, estaba sediento y solo tenia un vaso de chupito, a la media hora se corrió tantas veces que salió de mi y continuó con una mamada para poder aguantar más, la llené la boca de semen y se lo tragó con lujuria, sus ojos azules parecían sorprendidos en todo momento. Apenas se me puso blanda y ya la estaba ensartando a 4 patas, tan fuerte que se puso de rodillas para alejarse de mi un poco, pero mi pelvis la golpeaba sin piedad y sus fluidos manchaban la sabana, la empujé a 4 patas de nuevo metiendo el pulgar en su ano, masacrándola lleno de ira y vicio, descargué en su coño con fuertes golpes de cadera, ella estaba agotada ya y aun así mi polla no bajaba, me la subí encima y la empotre contra una pared follándomela de cara, colgada del aire, la pobre ya no me devolvía los gestos o besos, era una mujer siendo humillada, sobrepasada sexualmente por mi, jadeaba y se corría sin parar, apenas sosteniéndose de piernas abiertas, siempre parecía a punto de desmayarse pero un orgasmo más la devolvía a la vida, sentía sus uñas hundidas en mi espalda y la levantaba por los aires perforándola hasta correrme de nuevo, me miraba como a un desconocido, pidiendo clemencia con sus bellos ojos mientras me acariciaba el rostro torpemente, empapada en sudor.

La solté sin delicadeza alguna, gateó hasta la cama medio ida, y al ver su ano se me nubló la mente, la subí como a una gata aturdida a la cama y metí mi cara entre sus nalgas, comiéndome todo lo que salía de su coño y usándolo en su ano, follándomela con la lengua, apunté mi rabo de nuevo tieso a su ano abierto con mis dedos y empujé fuerte hasta meterla el glande por el culo, sus nulas fuerzas no la dejaron ni quejarse, solo lloraba, la iba metiendo en su culo hasta sentir el roce de sus nalgas en mi cuerpo, ella quería golpear la cama pero no tenia fuerzas, solo lloraba y ni sus lastimosas quejas podía oír, estaba gozando del culo más estrecho que había tenido nunca, penetrando cada vez más rápido, a esas alturas a todas las mujeres que había dado por detrás ya gritaban de gusto, Casandra no, solo lloraba, veía mi polla salir llena de sangre y aun así continuaba, la azotaba el culo con cara de sádico y cada nalgada era un gemido ahogado de ella, desaté mi ira final sacando a la bestia dándola por el culo, ya no lloraba, ni gemía, ni nada, no estaba, se había ido y me la estaba follando igual o más duramente, al correrme casi me da un espasmo en la columna al sentir como la llenaba de leche hasta las entrañas, para justo después caerme rendido a su lado, estaba agotado, sudando y me dolían los músculos, pero había apagado el fuego de mi interior, la última imagen fueron los ojos de Casandra, aquellos pedazos de cielo azules me miraban, inertes, sin vida, abiertos y pestañeando por reflejo puro, leía algo en su mirada, era pánico, horror.

-YO: así folla una mujer de verdad - encima la herí en su orgullo, no sabia que me había pasado, pero lo necesitaba.

A la mañana siguiente me desperté, un fuerte olor me saco de mis sueños, Casandra estaba tumbada a mi lado, apenas se había movido, y lo peor, se había cagado encima, el agujero que le había hecho aun no estaba cerrado del todo, un hilo de sangre reseca caía de él, la cogí en brazos y la tumbé en la bañera con agua tibia y sales, dejándola calmada y adormecida aun, limpié la habitación y me di una ducha rápida en otro baño, me daba miedo entrar donde estaba ella, así que solo miraba de reojo, a las 2 horas oí movimientos, y salió Casandra tapada por 4 toallas y temblando, caminando de forma torpe y dolorida.

-YO: perdóname rubia – fui a abrazarla pero se apartó.

-CASDNRA: aparta pedazo de cabrón.

-YO: mira, lo siento, no se que me pasó……

-CASANDRA: ¡yo si lo sé!, te aprovechaste de mi, me dejaste ida y me abriste el culo hasta hacerme sangrar y cagarme encima, eso pasó.

-YO: lo sé, es que pasé mal día y necesitaba un desahogo…..

-CASANDRA: ¡pues te vas a correr, ¿pero como se te ocurre hacerme esto?! – me golpeó en el pecho.

-YO: está bien, perdóname……- la iba a abrazar y puso su mano en mi pecho.

-CASANDRA: no me toques, me das asco, no me toques.

-YO: vale, estás dolorida y magullada, me pasé, no volverá a pasar.

-CASANDRA: me da igual que me hicieras daño…….- suspiró agobiada-……..lo que más me duele es lo que dijiste, “así follan las de verdad”, ¿acaso yo no lo soy?

-YO: no es eso, fue una tontería.

-CASANDRA: ¿entonces que coño es?, ¿es que necesitas más? ¿tengo que dejar que me folles mientras me metes una puta motosierra por el culo? - gritaba demasiado alto.

-YO: no es sexo, eso nunca me ha importado.

-CASANDRA; nunca, hasta ahora…….

-YO: no, ni antes, ni ahora – mentía y lo estaba viendo claro de golpe.

-CASANDRA: ¿o quizá es que ayer te zumbaste a esas zorras y te quedaste con ganas de más? ¿Es eso? …..- se acercó a mi acariciándome de forma lasciva - ….¿y necesitas a la puta de turno para terminar el día?- la aparté de mi.

-YO: ¡basta ya!, no es nada de eso – iba a decirla que eso era estúpido puesto que Lara follaba mejor que ella, pero me daba que eso no la calmaría.

-CASANDRA: ¿entonces que es?, dímelo ……- sollozaba mientras me pegaba en el pecho- ….¡¡dímelo!! ¡¡¡¡DÍMELO!!!!

-YO: ¡¡¡QUE YA NO TE QUIERO!!! – me obligó a gritárselo, pero por sus ojos ya lo sabían.

-CASANDRA: ¡¡¡eres como todos, un cerdo, me has usado hasta que te has cansado!!!

-YO: no es así, te he querido, y amado, pero estoy harto ya……

-CASANDRA: ¿de mi?

-YO: ¡¡no!!, estoy cansado de sacarte de líos, de tus celos, de tu forma de tratar a los demás, de no poder salir de casa sin darte parte y si hablo con alguien tener que darte explicaciones de que se ha dicho y con quien…estoy harto rubia, harto de no tener una novia, si no un perro guardián.

-CASANDRA: yo también estoy cansada …….- se sentó a mi lado, llorando-….no puedo dejar de pensar en ti y en lo guapo, divertido, amable y buena persona que eres, y en que cualquier mujer lo ve como yo, y que cualquiera quisiera tenerte y apartarte de mi.

-YO: te lo he dicho mil veces, yo solo te quiero a ti…..

-CASANDRA: ya no, por lo visto.

-YO: nadie me ha apartado de ti.

-CASANDRA: alguien si….alguien te ha alejado de mí.

-YO: nadie, ¿quien?

-CASANDRA: yo – rompió a llorar y la abracé con fuerza.

-YO: no rubia, eres algo cabezota y brusca, pero nada más.

-CASANDRA: pero ya no me quieres, lo has dicho.

-YO: ha sido un calentón, no quería decirlo.

-CASANDRA: pero lo has dicho, ¿acaso es mentira? – me miró con sus preciosos ojos azules bañados en lagrimas y me obligué a no mentirla, se merecía eso.

-YO: no es que ya no te quiera rubia, pero algo ha cambiado, yo no me siento como antes a tu lado.

-CASANDRA: a mi…..a mi me pasa igual…..pero has sido tan bueno conmigo……

-YO: no he sido bueno……..- me cogió de la cara.

-CASANDRA: si lo has sido, te has portado bien, me has ayudado con los estudios y ahora con el curso, me has aceptado en tu familia y me has hecho feliz, solo espero haber sido lo mismo para ti - la cogí de la mano y la besé en los labios con un agrio sabor.

-YO: has sido mucho más que eso para mí, me rescataste, estaba perdido en medio del mar y fuiste una balsa - sonrió un poco, secándose la cara con la manga de una toalla.

-CASANDRA: pero ya estás en tierra – tardó en responder pero no pudo ser más precisa

-YO: no se ni donde estoy rubia, pero se que es un lugar mejor que el de antes de conocerte.

-CASANDRA: ¿y ahora que hacemos?

-YO: pues no tengo ni idea…..podríamos seguir unas semanas, a ver que tal…..lo mismo remontamos – era ingenuidad falsa, ya sabía que esto se terminaba.

-CASANDRA: esto no lo levanta ni el Extasis, churri, se acabó.

-YO: ¿estás segura?, yo no quiero dejarlo así……

-CASANDRA: nadie quiere, pero pasa………te…te devolveré el dinero del curso………no se como………. pero….- la besé con un poco de dulzura.

-YO: es tuyo, te lo ganaste, por favor, aprovechado, tienes talento, busca un buen chico y aléjate de tu familia.

-CASANDRA: no es mala idea, pero no puedo aceptarlo………..es mucho dinero.

-YO: se me ocurre que puedes pagármelo de una forma……..puedes pasarte por aquí cuando quieras, las puertas estarán abiertas para ti siempre, y así les haces tus peinados a mi madre y mi hermana cuando seas una experta, con la de veces que se tiñen o cambian de look, me voy a ahorrar más de lo que pagué por el curso.

-CASANDRA: jajajajjaa está bien, hecho – me besó con ternura y quedamos abrazados un buen rato, charlando del anal y de lo mucho que la dolió.

Pasaron 3 dais en los que Casandra se recuperó físicamente, antes de comentarle a mi familia que cortábamos, mi madre disimuló muy mal una sonrisa, había llegado a cogerla cariño pero no la quería de nuera, nos despedimos como amigos, y la acompañé a su casa, quise ir a montarle un pollo al padre, para que se tomara más en serio a sus hijos y moviera un poco el culo, pero seria inútil, nos besamos por última vez en su portal, fue el más dulce y cariñoso de los besos que nos dimos esos días, ni siquiera cuando hicimos el amor en forma de despedida, gozando de algo que sabes que se termina. Regresé a casa y me senté en el sofá, mirando la TV junto a mi padre, con mi madre poniendo por las nubes a Casandra y a la vez diciéndome que había hecho bien, murmuraba cosas de fondo, fue mi padre el que me dio una palmada en la espalda y me sacó de la ensoñación en que estaba.

-PADRE: ¿como estás hijo?

-YO: bien…..demasiado bien de hecho, no ha sido nada violento como con Ana, pero me siento….. bien, es raro ¿no?, tendría que estar echo polvo - mi padre sonrió rascándose la barba que se dejaba algunas veces.

-PADRE: ¿te acuerdas de aquel viaje de críos que hicimos a Galicia?

-YO: si claro, nos pasamos 1 semana dando vueltas por pueblos perdidos y visitando monasterios.

-PADRE: si, fue divertido, y al final cuando nos volvíamos llorabas por que no querías volverte.

-YO: jajaja si, me lo estaba pasando pipa en aquel caserón con la granja.

-PADRE: te pasaste todo el viaje de vuelta enfadado y tu hermana igual, no entendíais por que nos volvíamos tan pronto.

-YO: pues ahora que lo dices, si, teníamos más días libres.

-PADRE: si, los teníamos……….pero no sabíais que Mama y yo estabamos muy cansados y hartos de aquello, necesitábamos descansar un par de días para tener vacaciones de verdad.

-YO: que jodios……….¿pero a que viene ahora?

-PADRE: me pasé todo el viaje de vuelta pensando en lo bien que me lo había pasado contigo, corriendo y jugando con los animales, comiendo en tascas perdidas, pero con una ganas locas de que aquello terminara….nos lo habíamos pasado bien pero volvíamos a casa y yo me sentía bien a pesar de que habíamos dejado aquello atrás, mientras tú llorabas y pataleabas por que nos volvíamos.

-YO: ¿y que me quieres decir con esto? – sonreía de nuevo, atusándose el pelo de la barbilla.

-PADRE: nada hijo, son tonterías de un viejo cansado, recuerdos felices de un padre..…- suspiró algo cansado -……Mamá, ¿donde tienes las maquinillas de afeitar? - se levantó apoyando en mi hombro y se fue detrás de mi madre, se llamaban así desde que tengo memoria, aunque eran marido y mujer, se llamaban mama y papa entre ellos.

Me quedé sentado pensando en que a mi padre se le había ido la cabeza, te solía pasar cuando hablabas con él, usaba demasiadas metáforas y rebuscados argumentos para que fueras tú el que descubrieras que quería decir, en vez de decírtelo abiertamente. Me tiré no menos de una hora buscándole sentido a sus palabras, ¿a que venia recuperar aquellas vacaciones?, hasta que me di cuenta, no eran las vacaciones, era la reacción nuestra al terminarlas, mientras yo deseaba que no terminara nunca, y al hacerlo estaba hecho polvo, él estaba bien, por que en el fondo, aunque estaba disfrutando, deseaba que terminaran, era mi caso, y el de Casandra, si se había terminado pero no quería que pasara, estaría mal, echo polvo como con Ana, pero ambos estabamos bien pese a cortar, por que en el fondo, ambos deseábamos que, por bonito que fuera, aquello terminara.

Raúl – Nuevo trabajo, viejas amigas.

Bueno, ¿y ahora que?, supongo que os lo estaréis preguntado, después de haber cortado con Casandra, más o menos de forma tranquila y consensuada, se presentaba ante mi de nuevo un mundo lleno de posibilidades, pero yo me preguntaba lo mismo, “¿y ahora, qué?”, no tenia ni la más remota idea de que narices hacer con mi vida, habían pasado unas 2 semanas desde la ruptura, era un robot, de casa al trabajo y del trabajo a casa, salía a correr o en bicicleta de vez en cuando para despejarme y mantenerme en forma, sin rumbo ni objetivo, solo parecía descansar.

La 1º idea que se me pasó por la cabeza era mandar un mensaje como cuando oficialicé con Casandra nuestro noviazgo, pero con una foto de mi rabo y un mensaje “estoy libre”, me parecía gracioso y sin duda unas cuantas acudirían a tener sexo, pero sentía que eso era retroceder al pasado, volver a perderme en el mar del que Casandra, para bien o para mal, me había sacado, descartado. La 2º idea fue estar soltero y sin sexo un tiempo, un periodo de luto o para aclarar mis ideas, pero fue casi tan mala decisión como la 1º, y más con las habituales clases de conducir por las tardes con mis 3 amigas, Alicia ya se había sacado el carnet, pero aun así nos acompaña, y menos mal, era una barrera psicológica, con ella allí no me atrevía a atacar a las otras 2, Lara se mostró aun más ansiosa al saber que había roto con Casandra, y a Naira aun me la tenia que meter entre las piernas para enseñarla a cambiar de marchas, ya lo hacia sola, pero “así me siento más segura”, me decía mientras apretaba su trasero contra mi polla, así que descartado también. La 3º idea fue consecuencia de la 2º, no aguantaba ni un minuto más sin follar, con un dolor de huevos enorme, y tenia erecciones imponentes viendo anuncios de colonias o cosas así, me masturbaba a diario 2 o 3 veces pero dios sabe que no era lo mismo, así que se me ocurrió que podría llamar a Eli, o a mi Leona y desfogarme con ellas, estarían encantadas. Pensé que así podría ir tirando.

El día que me decidí a llamarlas, casi escrito por un ser macabro, me llamaron del trabajo, al parecer iban a cerrar el supermercado y me mandaban a la calle, la noticia me sentó como una patada en los huevos, era un trabajo genial, pocas horas los fines de semana y buen sueldo, pero la crisis empezaba a asomar su feo rostro, me pase 1 semana de papeleos, no me jodia la vida, con el piso pagado y el sueldo del resto de mi casa vivíamos más que bien, ahorrábamos y mi sueldo era entero para mi, que salvo pagarme gasolina y el móvil, me sobraba dinero todos los meses, y de los 40.000€ que aun tenia en el banco de Madamme, había ahorrado otros 10.000€, y más que podía haber sido si no hubiera pagado las vacaciones con Casandra, además me daban un finiquito bastante amplio y el paro máximo al llevar 3 años trabajando allí.

Económicamente no era un problema, pero no me podía permitir estar en casa tirado todo el día mientras los demás trabajan, aunque tuviera mi propio dinero, mi orgullo no me dejaba, así que hice lo que todo el mundo estaba haciendo últimamente, buscar trabajo. Como os decía la crisis empezaba y se notaba, apenas llamaban para entrevistas, y todo era comercial, ventas telefónicas o a puerta fría, siempre a comisión, sin sueldo base, aquello me parecía un atropello así que decía directamente que no, pero había pasado un mes desde mi despido y a mi hermana, pese a ser consciente de todo, se le empezaba a agriar el carácter, y su cara al verme tirado en casa cuando se iba y volvía de trabajar era para echarse a temblar. La idea de volver con Madamme para que, aunque fuera ficticio, me diera un empleo, se me pasaba por la cabeza a diario, pero el problema era el mismo que siempre, seria rescatar a Zeus, y me daba demasiado respeto, incluso creo que la pobre Casandra soportó una fuga suya el día antes de romper, aquellas 4 veces seguidas rompiéndola el culo sin prestar atención a sus suplicas y lloros, aquel no era yo.

Estaba algo hastiado de pasar todo el día en casa y mi padre me dijo que, sin estar agobiados por el dinero, podría intentar meterme en algún trabajo de los que salían, de ventas a comisión, oído en sus labios y con su rotunda voz, no me pareció mala idea, la verdad era que en casi todas las entrevistas me habían cogido, aunque fuéramos muchos o solo 1, mi labia y desparpajo les gustaba, era yo el que los rechazaba. La siguiente llamada de un trabajo del mismo corte no les colgué al preguntar si era a comisión y me dijeron que si, concerté la entrevista y fui más o menos arreglado, no quería parecer ni muy serio ni muy descuidado, me puse 2 slips de calzoncillos para contener cualquier erección, que por esas alturas un abrazo me la ponía como una piedra, un pantalón de vestir, una camiseta y una camisa a juego, según mi madre ya que yo de eso no entiendo, y un abrigo por encima, empezaba a hacer frío. No quería tampoco destacar, más de una entrevistadora se me había insinuado claramente y no quiera conseguir un trabajo a golpe de sexo, me parecía denigrante.

Acudí a la zona financiera de Madrid, la famosa Castellana, casi a la altura del estadio Bernabeu, a las 8:55 de la mañana, como me gustaba llegaría puntual, era un bloque alto de 10 pisos con oficinas, pregunté al portero y me indicó que la empresa que buscaba estaba en la 7º planta, me presenté a la recepcionista entregándole el curriculum y rellenado otro personalizado que me dieron, sentándome en un descansillo en el que había varias sillas y un sillón donde había más gente, rellené el formulario y lo entregué, pese a llegar en punto cuando me habían citado, habían dado la misma hora a por lo menos otras 20 personas, algunas ya esperaban de pie y yo le di mi asiento a una señora algo mayor, casi con edad de jubilarse. Me serené y contemplé la escena, de fondo se veía un largo pasillo y gente sentada a los lados, en habitaciones con mesas y teléfonos, llamando o charlando entre si, detrás de la recepcionista, bastante mona todo sea dicho, había 3 habitaciones pequeñas y de ellas salían y entraban según les fueran llamando, había 3 entrevistadores, un hombre muy apuesto de traje e impecablemente arreglado, una mujer baja y algo feúcha, también bien vestida y por último una 3º mujer, al verla maldecía mi suerte, era una mujer con la piel blanca como la nieve, morena de pelo con un largo peinado ondulado, de al menos 1,85 con tacones negros altos, vestía de forma seria, de oficina pero muy sensual, con una falda ajustada por debajo de las rodillas que estilizaban sus cartucheras y una camisa abierta enseñando un ligero escote, con un chaleco de vestir por encima cerrado a modo de corsé que le realzaban un par de tetas muy bonitas, con el cuerpo fino y delgado, pero con curvas donde tenia que tenerlas, no me dio tiempo a fijarme más por que llamó a otro aspirante para entrevistarlo, comencé a rezar por que no me tocara ella, con el calentón que iba parecería un retrasado delante de ella, y si no me pillaba con la polla tiesa seria un milagro. Los 3 iban saliendo y cogiendo el formulario del siguiente cuando terminaban con el anterior, sin orden, el 1º del montón, trataba de hacer memoria y cuadrar cuanto tardaba cada uno, pero estaba demasiado tenso, y hasta empezaba a sudar. “Raúl” escuché de fondo, al mirar me encontré con el hombre de pie y mi formulario en la mano, con la mujer atractiva cogiendo el siguiente formulario.

-YO: si….soy yo.

-HOMBRE: pasa conmigo………..- suspiré aliviado cerrando el puño con alegría contenida, metiéndome en el cuarto que aquel hombre me señalaba -…. por favor, toma asiento - me dijo mientras cerraba la puerta y rodeaba una mesa para sentarse enfrente mía.

-YO: buenos días.

-HOMBRE: buenos días….soy Luis …– extendió su mano y se la apreté con fuerza en el saludo – …bien, vamos a empezar la entrevista…Raúl …– leyó en el formulario – 1º te explico como funcionamos aquí y luego me cuentas un poco de tu experiencia laboral.

-YO: de acuerdo.

-LUIS: perfecto, te comento, somos una empresa de seguros, nos dedicamos a todo tipo de pólizas, ya sean a particulares o empresas, ya sabes como funcionan supongo, ahora mismo mucha gente esta necesitada de cubrirse las espaldas y necesitamos aprovecharnos de ello, necesitamos comerciales que hagan ventas, somos un grupo joven y relativamente nuevos por lo que tenemos que ser más agresivos, algunos no lo soportan, ¿tú como te ves?

-YO: depende de cómo se trabaje.

-LUIS: tenemos muchas formas, hay gente que solo llama por teléfono, otros que salen a la calle, o gente que hace las 2 cosas, eso como veamos que cada uno rinde mejor, como te digo, aquí buscamos beneficios, somos un poco tiburones y quien no nos siga el ritmo se va fuera, no tenemos horarios, como te decía, gente que viene 4 horas y con llamar se hace el mínimo y otros que se tiran todo el día pateando las calles y no llegan, ya depende de ti como vendas, tenemos nuestros balances y nuestros mínimos, si no llegas se te agrace el esfuerzo pero no nos compensa ni a nosotros ni a ti estar aquí, si llegas te mantienes y empiezas a cobrar un tanto % de lo que vendas, dependiendo de que tipo de seguro y cuanto paga el cliente, recibes más o menos.

-YO: ¿y todo es a comisión?

-LUIS: si, aunque ya te digo que no aceptamos menos de x ventas, por ejemplo, 1 a día, sea de lo que sea, eso son como mínimo 400€ si es de los seguros más bajos, con eso podemos tirar, si no llegas a eso es que no merece la pena, a ti el transporte y a nosotros el gasto. ¿Estás de acuerdo? – aquí es donde solía salir corriendo en las otras entrevistas, pero ya puestos.

-YO: si, no hay problema, aunque no se como se me dará esto de vender.

-LUIS: ¿no lo has echo antes?

-YO: no.

-LUIS: bien, vamos a ver tu experiencia laboral …– leía el formulario, aunque no había mucho que leer –… veo que estudios tienes el graduado, ¿solo eso o estas estudiando en la universidad?

-YO: no, solo eso, después me puse a trabajar.

-LUIS: lo decía por que tenemos varios chicos que vienen solo de tarde y estudian por la mañana, pero bueno, no tiene importancia, aquí lo que importa es……- le corté.

-YO: …beneficios – sonrió al mirarme.

-LUIS: exacto, bien, después has estado en….- tragó saliba al leer el nombre de la empresa ficticia de Madamme, aunque fuera ficticia era experiencia laboral - ….Now Services.

-YO: si, un mes largo nada más – no sabía si que hubiera reconocido aquello era bueno o malo.

-LUIS: y luego…….- pasó del tema de puntillas.

-YO: …un supermercado, los fines de semana.

-LUIS: ¿y leo que llegaste a encarado por las mañanas?

-YO: si, lo mío me costó – en concreto tirarme y chantajear a mi jefa.

-LUIS: ¿y por que lo dejaste?

-YO: la empresa cerró, no sé que pasó pero lo cerraron todo y nos echaron.

-LUIS: ¿y ya está, nada más?

-YO: pues no.

-LUIS: es poca experiencia la verdad, pero como te digo esto no tiene nada que ver con la edad o la experiencia, necesito saber que vendes, ¿tú crees que podrías?

-YO: ponme a prueba – torció la cabeza sorprendido y agradado.

-LUIS muy bien, véndeme algo – se cruzó de brazos desafiándome.

Seria muy largo e intrascendente poner como se lo vendí, pero se lo vendí, mejor dicho, me vendí bien, le hacia reír y seguir mis razonamientos, el me ponía las típicas trabas, “no tengo dinero ahora”, ”no necesito eso”, ”estoy ocupado”, toda las iba saltando o esquivando, a los 5 minutos me pidió que parara por que no me callaba.

-LUIS: está bien, está bien, ya vale, veo que tienes madera.

-YO: no sé si es madera, solo soy muy afable, y se guiar conversaciones, supongo que eso es bueno.

-LUIS: pues más te vale, aquí cuesta mucho arrancar, así que por mí, empiezas ya.

-YO: ¿me escogen?

-LUIS: tengo que hablarlo con mis compañeras, estamos buscando un numero determinado y gente muy especifica, ellas también tendrán sus opciones, pero esta tarde te llamo y te digo si o no, pero por mi, si - me extendió su mano y se la aferré con fuerza.

-YO: gracias.

Me despedí con un sabor a victoria en los labios, no era raro dejar buena impresión pero si que casi me asegurara que me cogían, llegué a casa eufórico y justo después de comer me llamo Luis, diciéndome que me aceptaban y que empezaba un curso al día siguiente, todas las mañanas de 1 semana tenia que pasarme por allí y estudiarme los seguros que vendíamos antes de ponerme a vender, de la alegría llamé a Eli para tirármela y desahogarme, pero estaba de viaje, así que sin pensarlo llamé a mi leona.

-YO: ven a mi casa hoy a las 17 horas.

-LEONA: si mi león - oír como casi se corre al decirlo, ilusionada por mi voz, me la puso dura hasta que llegó una par de horas más tarde

Mi casa era un desierto por las tardes, mi padre volvía a la hora de cenar, mi madre salía con las amigas y mi hermana salía de trabajar tarde y se iba con Liz a cenar, muchas noches ni se pasaba por casa hasta el día siguiente, al oír la puerta casi me desnudo para recibirla, pero lo mismo venia con su crío, tendría un año y medio casi, desde que la llamé y estaba dando a luz la había llamado un par de veces para saber como iba todo, pero Casandra no me dejaba verla, por suerte al verla estaba sola, de pie en la puerta con un brillo en los ojos especial.

-YO: hola preciosa.

-LEONA: hola.

-YO: pasa por favor - la acompañé a sofá y nos sentamos en él, ella parecía asustada.

-LEONA: ¿que tal…...todo?

-YO: pues muy bien, estoy muy contento, sobretodo de tenerte aquí – la acaricié la rodilla y la apartó con suavidad.

-LEONA: yo también……te…..te he echado de menos.

-YO: y yo a ti…. – tampoco iba a mentirla diciéndola que no –…. ¿te ocurre algo?

-LEONA: es que…….es que hace mucho que no…..me siento rara, estoy casada y ahora tengo un crío.

-YO: ¿y que tal con el niño?

-LEONA: pues genial, es un sol y nos tiene embobados en casa - yo ni la escuchaba me importaba una mierda el crío, sus ojos de color miel me hechizaban.

-YO: ¿entonces……..todo bien en casa?

-LEONA: pues si, mi marido es un buen hombre, cuida del niño ahora - su mirada era de cierto pesar.

-YO: mira, no he pensado antes de llamar, quizá……..

-LEONA: ¡no!…….te……..te necesito.

-YO: ¿estás segura?

-LEONA: si, mi marido es cariñoso y atento, pero no es como tú, no es mi león, y desde que di a luz…no……..no me llena, se esfuerza pero no me corro con él - ahora era ella la que llevaba su mano a mi pierna.

-YO: ¿le serías infiel?

-LEONA: no es infidelidad, yo me entregué a ti antes, como tu leona…– acariciaba ya mi verga a punto de estallar bajo el pantalón – …¿sigo siendo tu leona? …– se incorporó sobre mí lamiéndome el cuello, con timidez, yo estaba perdido ya, iba a reventar a mi ex profesora.

-YO: siempre lo serás - alzó la mirada casi bendecida por los dioses, sacándose la blusa del hombro mostrándomelo, apartando la cinta del sujetador, dejándome ver su piel suave e impoluta, sin la antigua marca de mis dientes en ella.

-LEONA: muérdeme ….– se pegó a mi cuerpo acariciándome con pasión mientras yo hundía mi cabeza en su cuello, besándola y lamido con cuidado mientras ella me sujetaba la cabeza – …muérdeme – suplicó entre suspiros.

Abrí la boca metiéndome su hombro casi entero, chupándola mientras sentía su cuerpo temblar ante el amago, casi se elevaba para notar mis dientes, pero los apartaba, era cruel, estaba sediento de sexo pero no debía de olvidar mi rol en aquella situación, yo mandaba y decidía.

-YO: no voy a morderte – suplicó con la mirada.

-LEONA: ¿por qué? – la sujeté de la cadera y de un tirón me la senté encima a horcajadas.

-YO: por que no te lo has ganado – la azoté en el culo tan fuerte que se me durmió la mano, en cambió ella gimió de gusto.

-LEONA: es cierto, mi león, llevo mucho sin merecérmelo, deja que te compense.

Comenzó a quitarse la blusa y luego el sujetador, dejando ante mi un par de tetas deliciosas, las acaricié y amasé con las manos, algo caídas por sus 38 años ya, pero atractivas.

-YO: ¿están más grandes?

-LEONA: si mi león, dar a luz me trajo este regalo – disfrutaba de ello, antes eran normales pero ahora eran algo más abombadas y sensuales.

-YO: están duras.

-LEONA: es que aun estoy lactando, están llenas de leche por que hemos empezado a darle el biberón al niño, me duelen un poco.

Ni pedí permiso, lamí sus pezones chupándoselos con fuerza y apretándolos como un pellejo de vino, sus suspiros aparecieron junto a su leche materna, brotaba un fino hilo de uno de sus pezones y chupé de él, era delicioso, agrio pero con una textura tierna, al poco de empezar gemía de gusto y sentí en la otra mano caer unas gotas, su otro pezón estaba goteando totalmente erecto, los ataqué con más fuerza aun y tragué todo lo que pude, me apretaba contra ella con sus manos mientras se retorcía entre el placer y el dolor que se desvanecía, al terminar sentía sus senos en las manos más blandos pero igual de bonitos, nos besamos con lascivia, limpiaba la leche de mis labios con su lengua y terminaba tirando de mis labios con sus dientes, pero no como Casandra, era mucho más dulce y sensual.

-YO: ¿mejor?

-LEONA: mucho mejor, gracias mi león, déjame que te saque yo tu leche.

Resbaló su cuerpo hasta caer de rodillas al suelo, me puse en pie bajándome el pantalón y mi polla saltó endiablada ante su cara, al verla se mordió el labio, se escupió en las manos y se aferró a ella con ambas, masturbando velozmente mientras daba pequeños lametones a la punta.

-LEONA: ¡dios santo!, no la recordaba tan grande – la cogí de la nuca, quitándola la coleta del pelo y tirando de él.

-YO: no hables, chupa.

Sonrió ante aquella frase, me costaba recordar como tenia que tratarla, pero le gustó, se metió el glande entero en la boca chupándolo lentamente, casi me corro en ese momento, tenia tal atasco que me tenia que concentrar en otra cosa para no hacer el ridículo delante de ella, sus labios recorrieron todo el ancho y largo de mi rabo, de forma lenta y lujuriosa, casi deleitándose con los ojos cerrados de cada bocado, jugando con su lengua en la punta y haciéndome suspirar cada vez que pasaba sus blancos dientes por mi glande, tenia que pararla o descargaría en ella demasiado rápido, la cogí de la nuca y la senté en el sofá mal recostada, le saqué la falda larga que llevaba con tanta fuerza que sus bragas fueron detrás, al sacarlas se abrió de piernas con el coño húmedo y un línea gruesa de cabello bien cuidado, me arrodillé entre sus piernas besándola la cara interna de los muslos, lamiendo las gotas de sus fluidos que habían caído por allí, hundiendo mi boca en su coño, succionando y chupando, pasando la lengua por cada rincón haciéndola gemir de gusto, centrándome en un hinchado clítoris mientras metía 2 dedos buscando su punto G, tenia claro que si yo estaba falto de sexo ella también, se retorció sobre el sofá aferrada a un cojín mientras la metía la lengua por todos los lugares que podía, tuve que meterla 4 dedos en el coño para generar fricción, lo tenia muy abierto, así que me incorporé y apuntando a su coño la susurré.

-YO: aquí esta tu león.

La empalé tan fuerte que se movió el sofá entero, su gritó fue un aullido que la levantó del respaldo para abrazarme hincando sus uñas en mi, volvía a sacarla y meterla lentamente y a la 5º entrada se corrió tan fuerte que temblaba entre mis brazos.

-LEONA: ¡ohhh dios siiiiiii!

No me contuve esta vez y la follé salvajemente, al minuto me corrí dentro de ella mientras me gritaba que la diera más duro, provocándole otro animal orgasmo al sentir mi leche llenándola, de poco nos sirvió a ambos, a mi ni se me bajó la erección, caí sobre sus pechos y al poco de estar besándolos la estaba percutiendo otra vez, el sofá dejo de moverse al toparse con un escalón así que dejé de perseguirla de rodillas, se estaba corriendo una vez tras otra mientras yo la daba golpes de cadera que la levantaban medio palmo del sofá, lamía sus pezones tiesos mientras aun salía leche de ellos, aferrado a sus senos como un bebé, ella tiraba de mi pelo con una mano mientras me hacia largos arañazos en la espalda, gimiendo poseída, con espasmos leves al correrse, la bestia entró sin pedir permiso, me puse en pie con ella rodeándome con las piernas colgada del aire en mi cuello, aferrándome a sus enormes nalgas, besándonos con pasión, mientras seguía subiéndola y bajándola hasta sentir su bello rozándome, un manantial de fluidos goteaba en el suelo, mi 2º corrida me tensó y ella la vio venir, descabalgó y se arrodilló chupándomela con fuerza descargándome en su boca, me la dejó limpia y tiesa de nuevo, tragándose todo, por esas alturas Casandra ya estaría desvanecida, pero ella se puso a 4 patas sobre el sofá abriéndose de nalgas.

-LEONA: dame por detrás mi león - la azoté de nuevo, fue un halago en forma de gesto, al ponerme detrás su culo era una maravilla, opulento y desbordante, pero bien formado, apenas se la veía la vagina por sus nalgas.

-YO: yo decido por donde.

La embestí por el coño sujetándola por los hombros para llegar profundamente, sus alaridos al sentir la fricción eran rítmicos, encorvaba la espalda haciendo fuerza contra mi, se sujetó al reposa brazos del sofá por tener algo firme a lo que sujetarse mientras la bestia la estaba matando, la azotaba cada vez que se corría, ralentizado las embestidas, para continuar cuando podía respirar de nuevo, el sudor caía de mi cara en su espalda mientras ella pedía más, había olvidado que aquella no era una mujer normal, era una hembra sedienta. Metí un dedo en su culo de forma repentina, se tensó al momento.

-LEONA: ten cuidado mi león, mi ano no ha sido abierto desde la última vez que nos vimos.

-YO: ¿y tu marido?

-LEONA: jajajajaja mi marido apenas aguanta media hora con mi coño, esta más que feliz de su mujer, mi culo es solo tuyo.

-YO: buena leona – embestía lo más fuerte que podía mientras apretaba con la mano en el hombro en que antaño una marca morada ensangrentada cubría su piel.

Fui trabajándome su culo con los dedos abriéndolo casi de 0, sin dejar de follarla el coño y hacerla correrse, se iba dilatando antes sus lamentos ahogados por un placer descomunal, al sentirlo listo saqué mi polla de ella, lamiendo su ano para tenerlo bien lubricado, y apretando el glande con fuerza, ella tensaba los músculos mientras gritaba de dolor, estiraba los dedos de los pies mientras golpeaba con ellos en el sillón.

-LEONA: ¡¡¡¡no pares, por dios, no pares, NO PARES!!!

Era casi orgullo lo que sentía al metérsela violentamente por el culo, su esfínter se relajó un poco al sentir media polla dentro, pero palpitaba sobre mi verga, iba apretando según notaba menos presión y su cara era de dolor, pero seguía diciendo que se la metiera, casi se desencaja la mandíbula para morder el reposa brazos, mientras unas lagrimas caían por su cara, la estocada final la puso de rodillas pegando su espalda a mi pecho, la agarré las tetas para mantenerla así, mientras bajaba la cadera y volvía a subir oyendo como su respiración se entrecortaba, besándola en la zona a morder, su contoneaba lentamente, dolorida, pero a los poco minutos ya estaba cabalgándola, con el sonido de mi vientre pegando en su culo, ella se apartaba las nalgas, y yo la sujetaba de los senos, pellizcándolos, al saltarla cayó de bruces y se salió de mi tirándose al suelo, gateando aturdida, el agujero en su tremendo culo era colosal, me fui detrás de ella, casi quería huir de mi, pero de cuclillas detrás de ella la volví a meter del tirón en su culo, sacando a la bestia y martirizándola, me pasé así media hora, abriéndola el culo hasta que un orgasmos anal la hizo reventar en una explosión de sensaciones, se encogía y estiraba según las corrientes eléctricas la recorrían el cuerpo, sollozando, la di la vuelta poniéndola boca arriba y abriéndola de piernas, metiéndosela por el culo de cara, me rodeó con los muslos de forma instintiva poniendo sus manos en mi pecho a modo de freno, pero era inútil, estaba vencida y yo aun tenia ganas de más, la follé sacándola varios orgasmos anales leves, hasta que fui yo el que se corrió enérgicamente en su culo, al sentirlo sus suspiros eran casi nulos, su mirada estaba perdida, pero no en el infinito, si no en mi, me acariciaba la cara y los brazos de forma torpe, mientras termina de vaciarme en ella.

-LEONA: ¡oh dios………..oh dios! - lo repetía entre respiraciones, cogió fuerza y aire para decir otra cosa - …….¿ya mi león?, ¿ya me lo he ganado? – la besé lentamente mientras me recomponía.

-YO: no ha estado mal, pero esto me lo da una cualquiera, y tú eres mi leona.

-LEONA: follame otra vez, soy tuya, hazme el amor hasta que me lo merezca – me suplicaba que continuara.

La cogí en brazos y la llevé a mi cuarto, cualquier familiar podía vernos allí al regresar, arreglé un poco el salón y me la subí en brazos, estaba casi agotada pero me lamía el cuello lentamente, poniéndomela dura otra vez, la tumbé en la cama boca abajo, totalmente estirada y me eché sobre ella metiéndosela por el coño, haciendo flexiones sobre ella mientras la penetraba bruscamente hasta que la bestia aparecía de nuevo, ella lloraba pidiendo más, sus orgasmos era casi inadvertidos, tenia el cuerpo rojo y el culo marcado de mi mano y la seguía follando, estiba algo cansado, lentamente fui bajando el ritmo hasta llenarla el coño de semen, veía como un hilo de baba caía de su rostro por las sabanas. Ahora si se lo estaba ganando, me recosté sobre ella apartándola el cabello del hombro.

-LEONA: ¿ahora si?

-YO: es un comienzo – hinqué mis dientes en su hombro mordiendo con fuerza, se retorció, no se si de placer o de dolor, o de ambos, la mordí tan fuerte que salió sangre.

-LEONA: ¡oh mi león, soy tuya! – jadeaba mientras mi polla volvía a crecer en su coño, la puse a 4 patas pero se venció de brazos dejándome el culo ofrecido, la saqué de su coño y la metí por el culo con facilidad.

Azotándola pasa saber que estaba consciente por sus gemidos, deleitándome de como hacia desaparecer mi barra de carne en ella, creo que se desmayó pero los orgasmos la devolvían a la consciencia, estaba inerte, solo jadeaba y la levanté con los brazos para pellizcarla las tetas, el remate final de 5 minutos con la bestia, que ya pedía clemencia, me dio para saborear el más absoluto desgaste. Estaba agarrotado y magullado, pero me dio para un sprint final glorioso haciéndola botar los senos y al correrme volver a morderla ferozmente, esa sensación la resucitaba, sentir mis dientes la ponían en un estado casi hipnótico. Caí rendido a su lado, se arrastró hasta mi y dándome un beso cansado, se quedó dormida, casi me duermo con ella, habían sido 5 polvos en menos de 3 horas, pero no podía dejarla dormir, si mis padres se presentaban tendría que dar explicaciones, la cogí en brazos y la metí en la ducha, el agua fría la despertó más que mis llamadas, y una vez despierta se abalanzó sobre mi besándome, me metió en la ducha con ella y me obligó a follarla el coño mientras repasaba mi cuerpo con sus manos, fue genial pegarla a la pared de la ducha y abrirla de piernas en el aire metiéndosela mientras no dejaba de mordisquearla el hombro, sus reacciones eran de lo más entretenidas, luego de espaldas la abrí el culo gozando de cómo se corría y pegaba a la pared y al llenarle de semen la mordí de nuevo, más fuerte que nuca, oí como mi mandíbula cedía y todo.

-YO: eres mi leona, ahora si.

-LEONA: soy tuya, mi león, ahora siempre – se giró para besarme tirando de mi labio con los dientes.

La dejé sola para que terminara de ducharse, se acariciaba la marca ennegrecida del hombro, con orgullo, mientras se sujetaba a la pared de la ducha, estaba débil, se vistió torpemente y cuando lo hizo se sentó en mi regazo besándome con pasión.

-LEONA: ¿y ahora que mi león?

-YO: dios, no lo sé, mi vida es un desastre pero ahora se que te quiero a mi lado - sonrió halagada.

-LEONA: mi león quizá quiera pasarse por mi casa cada tarde, mi marido se lleva a mi hijo con sus padres y yo estoy sola en casa - me besó con lengua, casi ahogándome.

-YO: quizá, eso lo decido yo – mordía en su hombro que se había dejado descubierto, sus gemidos eran obscenos.

-LEONA: como gustes - la agarré una de sus tetas mejoradas, torciéndola el gesto.

-YO: y más te vale dejar de darle el pecho a tu hijo, estas preciosidades llenas de leche son mías a partir de ahora.

-LEONA: son tuyas, como yo - se bajó la blusa dejándome un seno descubierto, no me resistí la lamerlo y chuparlo.

La di un fuerte azote al morderla de nuevo, se terminó de vestir sin dejar de ser sobada y acariciada, se marchó con el tiempo justo, a los 5 minutos apareció mi madre, diciéndome que se había cruzado con mi ex profesora en la calle, no dije nada para no darla pistas.

Ya tenia con quien desahogarme, pese a mostrar firmeza con ella, tenia toda la intención de ir cada tarde a follármela a su casa, ¡que mujer!, con todas mis amantes y novias ninguna soportaría 6 polvos en 3 horas, contando el de la ducha, cierto era que a partir del 3º ella solo recibía, no hacia esfuerzo alguno, pero se mantenía consciente al menos. Dormí como un lirón y me desperté renovado y con ganas de comerme el mundo.

Leona y Lara – La horma de mi zapato.

Acudí al curso y estaba Luis, me presentó a otros 7 compañeros que iban a dar el curso conmigo, me sorprendió ser tan pocos, ya que por lo menos vi a 30 personas el día anterior, y comenzó a hablarnos de los seguros, tomando notas de todo, teníamos un par de descansos donde nos conocimos los nuevos, éramos solo 2 tíos por 5 mujeres, al parecer ellas venden más, y de las 5, 4 estaban muy buenas, ya sabia por que vendían más, aparte la que no estaba buena tenia al menos una 100 de pecho, con un ligero escote tendría a cualquier tío firmando un papel sin prestar atención.

Como son muchas hago un ejercicio sencillo, símiles famosos y uso sus nombres.

Tenia a una versión de Cameron Diaz con el pelo corto y buen trasero, una Penélope Cruz con gafas y casi de mi edad, Jessica Alba con un marcado acento peruano y la piel más oscurecida, una Kate Perry de ojos verdes y alta, sin tacones estaría por el 1,80, y la tetona que era casi un calco de Pamela Anderson, pero a la actual, no a la de los vigilantes, un grupo bastante atractivo en que si no te fijabas bien hasta la tetona no desentonaba, el hombre era también agraciado, se daba un aire a Hugh Jackman, aunque con canas y mayor, destilaba sobriedad y respeto. Ya por concluir, y por si no tenéis una idea mental de mi, el actor que más se parece a mi, aunque no es tan conocido es Joe Manganiello, menos marcado muscularmente pero la gente que me conoce y ha visto cierta serie vampiresa me lo ha dicho bastante.

Charlábamos un rato, y todos bastante amigables y abiertos, del mismo perfil diría yo, creo que notaron en mi mirada como me relamía de pensar en tirármelas a todas, incluso a Pamela, tendría unos 43 años y eran evidentes ciertas operaciones, por lo poco que la saqué, era la mujer florero de algún ricachón hasta que se hartó de ella y se buscó una más joven, ahora buscaba trabajo por 1º vez en su vida. Penélope era algo más tímida y casi no habló pero tenia una sonrisa encantadora, Cameron era mucho más jovial, me sacaría 4 años y no paraba de reírse apoyándose en el brazo de los demás ante cualquier chorrada, fue Kate la que me tenía desconcertado, mientras que hablaba y conversaba de forma fluida su rostro era impasible, casi no mostraba emociones, me estaba costando sacar conclusiones de ella, por que sus ojos verdes brillaban profundamente. Quise tomar algo con ellos al terminar el curso pero no accedieron, así que se fueron a casa cada uno por su lado, yo ya había avisado en casa que después del curso me no pasaría por casa e iría un rato de paseo, no era mentira, iba a pasear a casa de Merche, mi leona.

Al llegar me abrió la puerta con una bata demasiado corta, pasé entre caricias y al cerrar la puerta se abrió la bata mostrado su cuerpo desnudo, era increíble que una mujer de 38 años y con un parto hacia un año y medio tuviera ese cuerpazo, afloraba cierta piel de naranja en sus caderas y sus pechos caían ligeramente, pero era una visión muy agradable, me acerqué a ella acariciando con los dedos la zona de su hombro totalmente morada, al rozarla siseó de dolor.

-YO: ¿te duele?

-LEONA: un poco.

-YO: es que me volviste loco ayer.

-LEONA: lo sñe - me acarició el pecho.

-YO: ¿que te ha dicho tu marido al verla?

-LEONA: no la ha visto, hace meses que no me toca o me mira desnuda – pasé la mano por sus hombros dejando caer la bata al suelo.

-YO: pues no sabe lo que se pierde.

-LEONA: ni lo sabrá jamás, nadie me folla como tú – me cogió de la cara besándome dulcemente.

Pues no iba a perder el tiempo, mis manos se perdieron por su cuerpo, acariciándola con suavidad, una entre sus piernas, parecía nerviosa, como la 1º vez, cuando metí mis dedos en su interior ya estaba chorreando, lo llevé a su boca y chupó como si fuera un rabo delicioso, me desnudé y me senté en el sofá, a mi llamada, y no antes, se movió, sentándose de rodillas sobre mi, a mi orden apretó sus senos contra mi cara, los chupaba comiéndome sus pezones duros y la leche materna que salía de ellos, gemía sin hacer nada que no la ordenara, la acariciarla las tetas, estaban casi más duras que el día anterior.

-YO: están muy duras y sale mucha leche.

-LEONA: es que hoy no he usado el sacaleche, la he guardado para ti.

Que delicia de mujer, mamé de ellos no menos de 1 hora, dejándola seca y gimiendo de gusto, tenia los pezones sensibles y enrojecidos, y mi polla ya daba cabezazos, me masturbaba con las manos hacia tiempo, cuando dejé sus senos nos besamos, sus labios eran fuego y su lengua el diablo, me llenaba la boca con sus gestos, lentamente acariciaba la entrada a su cueva con mi rabo y cuando ella no podía más la penetré lentamente sacándole gemidos de agonía, al tenerla totalmente empalada hizo una serie de giros de cadera que fueron una maravilla, me vencía sobre ella sujetándola de su grandes nalgas, besándola el cuello, la subía y bajaba la cadera rápidamente, estaba jadeando antes de darse cuenta, era un espectáculo verla rebotar abajo del todo, cogí yo el mando con la bestia, sin delicadeza, plantando los pies y reventándola en 20 minutos que la hicieron correrse 4 veces antes de que le llenara de semen, la mordía en el hombro sintiendo el escalofrío que la recorría el cuerpo. Al instante se arrodilló comiéndomela de forma rápida y con fuerza, cuando la tuve tiesa se sentó sobe mi dándome la espalda, la penetré el coño mientras se recostaba sobre mi abierta de piernas, la cogí por los muslos y casi como a una rana, la estuve follando una hora hasta que el sudor y el cansancio me hicieron descargar sobre ella, al soltarla empezó a gatear contoneándose, fui tras ella metiendo mi cara entre sus nalgas, preparando su ano para justo después metérsela por el culo, chilló tanto que se tapó la boca para no alertar a los vecinos, aunque dentro del piso era audible hasta el “chapoteo” de su coño y los golpes de mis testículos en su piel. Aferrado a sus caderas la abrí el culo violentamente, azotándola fuerte y provocándola orgasmos anales que la hacía dar golpes al suelo con llantos ahogados, desatados los 2 la levantaba el cuerpo por los senos amasándolos y penetrándola sin descanso, hinqué los dientes de nuevo en ella sintiendo como me vaciaba con fuertes espasmos.

Pasó un rato hasta que alguno reaccionó, ella se incorporó con una sonrisa enorme y besándome, se tumbó boca arriba en el suelo y me metió entre sus piernas, a base de caricias logró una erección que buscaba, la metí por el coño follándola salvajemente, aquella mujer no tenia fin, estuve 1 hora dándola tan salvajemente que me dolía la cadera, pero estaba gozando como hacia mucho que no disfrutaba, intercalando minutos de frenesí con algunos de cadencia lenta que la hacían retorcerse de placer entre orgasmos, me rodeaba con las piernas haciendo fuerza en el movimiento para llenarla, sus senos rebotaban al compás de mis acometidas y al correrme tembló al explotar en un orgasmo que me bañó la pelvis, se salió de mi de la inercia y me corrí en su vientre manchándola todo el torso, se pasó varios minutos recogiendo la mezcla de sudor, semen y fluidos de su cuerpo y chupándose el dedo, o dándomelo a mi para lamérselo, me rendí a su cuerpo, ella misma me ofreció su cuello y mordí en el como si fuera un vampiro, los suspiros al hacerlo eran indescriptibles, sentía un placer depravado en ese gesto.

-YO: ¿cuando viene tu marido?

-LEONA: no lo se, ¿que hora es?

-YO: pues casi las 18 horas.

-LEAONA: ¡dios!, tan tarde, debe estar al caer.

-YO: joder, pues me largo.

Me vestí velozmente, con ella retozando por el suelo ronroneando, casi parecía que quería que la pillaran por que tiraba de mi ropa al ponérmela, se reía cuando la levanté del suelo y la hice por el aire, metiendo el dedo corazón en su coño y luego al dejarla en el suelo hacérselo lamer.

-LEONA: esta muy rico.

-YO: tú si que estas rica ………– la doblé la espalda de un fuerte besó agarrándola del culo y jugando con sus nalgas, tenia que decirla algo antes de irme, no era una amante normal –…. mañana te voy a follar solo por el culo.

-LEONA: como desees – sonrió gustándole la idea.

De un fuerte azote me fui casi corriendo, me pareció ver a su marido con el cochecito del bebé a lo lejos, pero no me iba a parar a hablar con él, me alejé con el coche pensando en que bien o mal estaba haciendo a esa pareja, hasta que me di cuenta que no era asunto mío, si no de ella, si quería jugar, jugaríamos, ¡por todos los dioses, como follaba!, que aguanté y que lujuria. Lo que me esperaba no era mejor, acudí tarde a la cita con las chicas del apartamento para enseñarlas a conducir, Alicia ya se había ido y Naira iba a salir, la pillé saliendo en tanga y sujetador del baño, pero por 1º vez no se sonrojó ni se tapó, era estúpido, ya la haba visto y dormido con ella desnuda, me besó peligrosamente cerca de los labios, venciéndose sobre mi pecho, lamentando perderse la clase, y se alejó a vestirse. Entré de golpe en la habitación de Lara, estaba totalmente desnuda secándose con una toalla, al verme se asustó pero se recompuso jugando su bazas, sus enormes tetas, pero no hacia falta, iba más caliente que ella, mi sesión con la leona había sido buena ¿pero solo 3 polvos?, necesitaba más, y Lara me lo leyó en la cara.

-LARA: hoy no habrá clases, ¿no?- cerré la puerta tras de mi.

-YO: de conducir, no.

Asalté su cuerpo, me recibió de brazos abiertos, besándonos, la tumbé en la cama agarrando sus enormes tetas y lamiéndola los pezones, a los 3 minutos ya estaba con el coño mojado, y yo con el rabo fuera, me rodeó con las piernas y la penetré demasiado, rozando su útero, medí bien y ahora si comencé a follarla, su cara era de estar en el cielo, de nuevo me tenia follándola hundiendo mi monstruosidad en ella mientras mis manos y mi lengua la atacaban las tetas, a la media hora gritaba tanto que esperaba que Naira se hubiera ido, me daba vergüenza ajena como chillaba, pero ver sus enormes y bien puestos senos vibrando como un flan me volvían loco, la besaba para acallarla, pero si lo hacia la dejaba sin aire, la levanté pegándola la espalda a una pared y continuaba penetrando con cuidado de no pasarme, ella golpeaba la pared absorbiendo mi energía, sus orgasmos se perdieron en mi cabeza, a partir de 6 dejé de contar, solo con trabajarla un poco los pezones se volvía loca. Me corrí llenado de semen su interior, era increíble que aun me quedara después de los 2 días que llevaba, pero casi un mes y medio sin follar me tenían bien cargado, la dejé sobre la cama pero resbaló quedando “rezando” sobre ella, me arrodillé detrás de su cuerpo, amasando aquellas preciosidades que tenia por pechos, mi polla reaccionó y se puso dura metiéndose entre sus muslos, metí mis dedos en su coño y la acaricié el ano, jugando con él, sus suspiros se aceleraron, quería negarse pero lo deseaba, ella misma me lo dijo el fin de semana con Lola, apunté a su ano y le penetré de 3 fuertes estocadas, se aferró aun más fuerte a las sabanas con cada una, le daba palmadas en los pezones mientras no los pellizcaba, estaba roja y compungida pero ya me la estaba follando, levantándola las rodillas del suelo con cada arremetida, un volcán en erupción salió de su coño con el orgasmo anal, y gritó tan fuerte que alertó a alguien, la puerta se abrió de golpe y aluciné al ver a Mara, con los ojos en abiertos mirando como Lara chillaba al meter mi rabo en ella, no sabia que estaba en casa, o quizá ya se había hecho tarde, pero me daba igual, no iba a parar, ahora mis ojos estaban clavados en Mara, con la mano en el pomo sin saber que decir, Lara chillaba, parecía pedir auxilio y otras gozar, así que Mara se quedó allí, parada, mirando, y yo me fijaba en ella, eso me puso más bestia y me puse en pie, cogiéndola de las piernas a Lara, y tumbándome en la cama boca arriba, con ella sentada encima mía, como si fuera un juguete, follándola el culo dejando un 1º plano de mi falo enorme apareciendo y desapareciendo en Lara.

Sentía por momentos que Mara iba a cerrar la puerta, y en otras que se uniría a nosotros, pero no hacia nada, solo miraba, le regalé un orgasmo anal de Lara, que se quedó inmóvil respirando con dificultad, y al correrme salí de ella y Lara por instinto muscular buscó mi polla para tragársela, tenia los ojos cerrados y creo que no había visto a Mara, pero le dejó ver como me la chupaba, fue cuando me percaté de que Mara iba en bragas y una camiseta vieja encima que apenas le tapaba el vientre, por lo que sus pezones duros destacaban sin sujetador bajo la tela, y con una mano firme en el pomo, estaba acariciándose con la otra en el ombligo, cerca de la línea elástica de la prenda intima, frotándose los muslos entre si, Lara sacó mi semen y se lo tragó como bien enseñada que estaba.

La dejé acostada en la cama por que Mara había reaccionado y se había ido, Lara estaba agotada y jadeando, pero aferrada a mi, con miedo a que me fuera, me costó soltarme de ella, tenia curiosidad por Mara, ¿que estaría haciendo?, ya era la 2º vez que sabia que me había visto follar, contando la del fin de semana antes de empezar con Casandra, o si había alguien más en la casa. Fui buscando y preguntando, me puse los slip por tener algo de decoro, y me encontré a Mara en la cocina, de espaldas apoyada en la encimera, parecía temblar tomando un vaso de agua.

-YO: hey, ¿que pasa?

-MARA: ah hola…..- sonrío sin mirarme.

-YO: no te he saludado, te pregunto…… ¿que te pasa?

-MARA: ¿a mi? nada jajaja - me acerqué a ella por detrás hasta que se estremeció al sentir mi presencia a escaso espacio de ella.

-YO: nada no, no te hagas la boba, has estado mirando un buen rato.

-MARA: no seas payaso, solo he mirado por que oía gritos, pero nada más.

-YO: te has quedado mirando hasta el final……..- mis manos pasaron por sus muslos desnudos, los apartó con una mano sin darse la vuelta aun - …….y te ha gustado.

-MARA: no, para, no he visto nada – me pegué a su espalda dejando que mi polla descansara entre sus nalgas.

-YO: ya, como el fin de semana aquel, al menos hoy has tenido mejor plano - se giró sorprendida.

-MARA: yo…no….ósea….no vimos nada – me pegué tanto a ella que mi polla se rozaba con su vientre y la parte alta de sus bragas, doblando la espalda contra la encimera.

YO: ¿vimos?, ¿quien más estaba contigo?, ¿no me digas que Alicia también miró? - me hacia el tonto para tenerla descolocada, ya sabia por las grabaciones que habían mirado.

-MARA: no……ella no vio nada…….ni yo….vamos que…….- le aparté el poco pelo medio largo que tenia en el cuello besándoselo, estaba nerviosa y confusa, me reía por que nunca la había viso así, era un mujer fría y seria.

-YO: la próxima vez te aviso con tiempo para que lo veas todo – me alejé de ella, dejándola aturdida y descentrada, con el vaso de agua vibrando en la mano, ya tenia sexo suficiente por hoy, y a Mara la quería destrozar cuando cayera, que ahora sabia que seria pronto.

Al marcharme me fui a casa y comí algo por 1º vez en todo día que no era producido por el sexo, me di un chapuzón en la piscina climatizada y me acosté agotado y feliz.

Los días se sucedieron igual, por la mañana curso, iba a comer al piso de mi leona para follarla un par de horas, me pasaba la 1º de ellas comiéndome sus senos lactantes, luego acudía a las clases de conducir con las universitarias, la mitad de los días no había clase y me follaba a Lara degustando sus majestuosos pechos, Naira o Mara estaban en casa, si no las dos, y escuchaban gemir y gritar a Lara, pero ninguna se atrevía a mirar, le dejaba el coche a Alicia para que fuera cogiendo practica, y no tenerla en casa mientras ocurría, aunque sabia lo que pasaba, al acabar me iba a casa a descansar. El fin de semana lo pasé en casa descansando, y cogiendo fuerzas.

Llegó el lunes y ya habíamos pasado el curso, lo tenia todo más o menos memorizado, y si no, tenia los apuntes, un galimatías que solo entendía yo, Luis nos hizo un examen y todos salvo Pamela aprobaron, aun así la firmaron el contrato, entendí que no hacia falta que ella vendiera, con estar presente con otro vendedor ya tendría a todos los varones más pendiente de sus senos que de la explicación, y tenia un tono de voz agradable.

-LUIS: bien, ahora que vamos a empezar os dividiremos, vais a hacer de todo un poco con algunos de mis compañeros, y depende de cómo os vean os pondremos con teléfonos, en la calle o ambas cosas, bien os presento a los 3 superiores que os vamos a coordinar, yo llevo la centralita de teléfonos, aquí mi amiga de ira fácil ….–– señaló a la hermosa joven de piel blanca -…. se llama Alexis, lleva los mixtos, y mi bella compañera….. – señaló a la feúcha –….. es Encarnación, lleva toda la venta en la calle y a puerta fría.

Nos saludaron y nos comentaron como funcionaria todo, obviamente le presté más atención a Alexis, pasé de tenerla pánico a fijarla como objetivo, es lo que hacia descargarme a diario con mi leona y Lara. Alexis se movía de forma elegante y con clase, tendría unos 28 años, estaba de pie hablando de como harían las cosas con ella, su cuerpo era fino y delgado, podría rodear sus piernas y brazos con las manos, unos tacones altos la estilizaban la figura, con una falda ajustada negra por debajo de la rodilla y una camisa con chaqueta de vestir por encima, su ondulado y largo pelo, morena pero con reflejos rojizos, le agraciaba una cara algo rígida en los rasgos secos y con unos pómulos altos y sobresalientes, sus ojos parecían negros pero tenían una luz avellana muy bonita, y apenas iba maquillada, con ese tono de piel tan blanco se notaria mucho, solo unos labios rojos brillantes destacaban, pero la embellecían, una ligera sombra de ojos y algo de colorete para realzar los pómulos, tenia lo que se llama una cintura de avispa, para luego salir disparadas unas amplias caderas y un pecho turgente, estaba tan perdido en su figura que debió percatarse y dejó la explicación.

-ALEXIS: oye, ¿te pasa algo?

-YO: no, nada, es que es mucha información.

-ALEXIS: ya, pues ponte las pilas …. – chasqueó los dedos –… por que como no me rindas ahí fuera te mando a la puta calle.

-LUIS: bueno, cálmate mujer, solo se ha despistado.

-ALEXIS: no me gusta, es un novato, un crío que se cree que lo sabe todo – todos se miraron incrédulos, pero yo ya sabia que aquella mujer era una depredadora, la había visto dar voces entre los pasillos esos días.

-LUIS: ya lo veremos, esta aquí por que yo lo elegí, así que deja el tema y continua – Alexis suspiró exasperada, tenia ganas de decir más pero Luis puso un tono seco y debía de ser superior a ella en el escalafón, así que prosiguió su presentación.

Al acabar nos dividieron y yo me quedé junto a Pamela y Penélope, con Luis en las llamadas, nos dieron un argumentario, un listado y nos pusimos a ello, Encarnación planeaba una ruta con Hugh y Kate, mientras coordinaba todo con un grupo mayor de Alexis, que estaba con Jessica y Cameron. Los de Encarnación elegían una calle y se la pateaban, a puerta fría, pisos, edificios, locales….etc, mientras que los de Alexis hacían llamadas hasta tener suficientes visitas a una zona y se iban allí a vender cara a cara, de inmediato con el paso de los días me di cuenta que el mejor grupo era el de Alexis, algo así como la elite. Podías pasarte 7 horas llamando por teléfono y no conseguida nada, o ir a puerta fría por las casas y los locales y no lograr nada, como me pasaba a mi, aunque sin presiones por ser nuevos y nos dejaban de lado para que aprendiéramos, pero me jodia no empezar a vender, pero al llegar al grupo de Alexis nos pasaron a un habitación “vip”, donde al entrar parecía un club de modelos, no había una sola persona fea o mal arreglada, estaban tirados, de risas, charlando de cosas mundanas, de forma desenfadada, estaban 2 o 3 horas llamando a posibles clientes a visitar y cuando tenían varios en x zona, iban en parejas a esa zona, si tenían suerte hacían 1 o 2 ventas y ya habían cumplido el día, ni regresaban a la oficina y a las 12 de la mañana ya dejaban de trabajar, tenia claro que eran los mejores, los que más vendían, y por lo tanto, a los que dejaban trabajar a su manera.

Me desahogaba con mi leona y Lara de las tremendas broncas que me caían de Alexis, me tenia enviciado, y que no llevara ninguna venta por teléfono o pateando calles la mosqueaban, pero me mandó con otro hombre a un zona a la que tenían vistas, y al volver trajimos 3 ventas, el compañero llevaba la voz cantante en 2 de ellas pero la 3º me la hice yo solo, le debió decir algo bueno de mi a Alexis por que al día siguiente me puso con ella, “ven guapo y bien vestido, o no vengas” me dijo, acudí con el traje de Eric, que me quedaba de cine, hasta al verme sonrió complacida. Yo era una mera mascota a su lado, acompañándola mientras se contoneaba por la oficina y llamaba por teléfono, yo cogía las notas que ella me indicaba. Me deleitaba con mis compañeras, y sobretodo con Alexis, hoy iba especialmente provocativa, con un vestido rosa chicle muy ajustado y un sujetador prieto con un escote bastante elegante, mostrando lo justo de unos senos que rebotaban sobresaliendo al caminar, con la falda acabando por la mitad de sus muslos, con una chaqueta de vestir por encima.

-ALEXIS: bien, ya tengo bastantes en la zona oeste, podemos ir allí y echar la mañana, quiero ver como te mueves.

-YO: por mi perfecto.

-ALEXIS: ¿tienes coche?, por que pagarnos un taxi ida y vuelta no es rentable y con estos taconazos no puedo andar mucho – se agachó mostrándome sus senos ampliamente, cruzándose de piernas sensualmente, acariciándose los tobillos con las manos, se apartó el pelo para dejarme buena vista, sonreía al darme cuenta de que me estaba “vendiendo algo”, y esas eran sus armas, caí “inocentemente”, siendo consciente de lo que estaba haciendo.

-YO: si…… te llevo yo…..sin problemas – le añadí una pausa para parecer más hechizado de lo que estaba, se incorporó dando un bote para que sus senos tardaran en reajustarse, sonriendo de una forma agradable y dulce, falsa, “ahora ya se la cara que pone cuando logra algo que quiere”.

-ALEXIS: bien, pues en camino – reía al caminar conmigo detrás, lo mismo se pensaba que me tenía en sus manos.

Fui a por mi coche dejándola en la esquina del trabajo, con esos tacones tampoco podía caminar demasiado, y no sin que al menos 4 coches la pitaran y alguno le soltara alguna guarrada, pero no se podía quejar, estabamos a 15 grados e iba enseñando más pechuga en un pavo. Al sentarse finamente en el coche me percaté del tanga en su vestido, tan ajustado que se marcaba, y me esforcé por centrarme en la carretera y no en sus senos vibrando del movimiento del coche, o el roce de mis dedos en su pierna al cambiar de marcha. Al llegar al 1º sitio iba derecho al piso.

-ALEXIS: ¿donde vas? 1º vamos a desayunar algo, ¿no? – su tono no era una pregunta, ya se encaminaba a una cafetería, “me tengo que hacer de su grupo como sea”, pensé, no solo trabajaban cuando o como querían, si no que encima se iban a desayunar en vez de trabajar.

Alexis era increíblemente sutil, apartarse el pelo cuidadosamente, al pedir agacharse a escoger un bollo, algo dubitativa ante el dependiente, un cruce de piernas lento para el camarero, o al ir a pagar sujetarme el brazo con delicadeza diciendo un “no, pago yo” con los ojos torneados poniendo morritos. Eran detalles sutiles que para el ojo no entrenado pasaban como gestos normales, pero no lo eran, al dependiente le sacó ir a la cocina y traerla un bollo recién hecho, al camarero le sacó que no cobró más que lo mío, borrando lo que ella había tomado, y yo fingí de nuevo caer a sus pies pagando la cuenta. Al salir me empecé a reír de todo, ella me entendía, se pasó todo el desayuno estudiándome con los ojos, y ya intuía, o eso parecía, que yo no era como los demás.

-ALEXIS: bien, vamos al 1º sitio, era en ese piso, ¿no? – señaló al bloque de enfrente.

-YO: si, un señor mayor, parecía interesado en un seguro de vida – tiraba de notas, aunque los había memorizado.

-ALEXIS: perfecto, déjame hablar a mi, tú solo asiente y sígueme el rollo – se paró enfrente del portal, se metió la manos en el sujetador colocándose las tetas más rebosantes, tiró del vestido para aumentar el escote y se remangó la parte de abajo hasta ser casi una minifalda.

-YO: jajajaja ¿en serio? – me miró con desdén.

-ALEXIS: esto va así novato, beneficios y ventas, y lo que más vende es el sexo – se me puso delante y me quitó la corbata, me abrió varios botones de la camisa dejando ver el nacimiento de mi trabajado pecho y me atusó el pelo un poco.

-YO: ¿y que voy a hacer yo? – sonreía dejándola hacer.

-ALEXIS: quien sabe, lo mismo está la mujer y podemos venderla algo, o el señor es gay, da igual, la cuestión es……

-YO: ….vender, ya me ha quedado claro – me cogió de la cara con una mano apretando mis carrillos, como una bisabuela a su nieto.

-ALEXIS: mira al novato como aprende…. – con tono de burla –…. ahora cierra la boca y déjame a mí – llamó al timbre.

Sobra decir que al abrir la puerta casi se le cae la mandíbula postiza al hombre, de un solo vistazo ya le tenia en el bote, se presentó educadamente y se identificó como la persona que le había llamado, logró que nos dejara entrar y se ofreciera a servirla algo de beber, a ella, a mi ni me preguntó, Alexis se sentó agradeciéndoselo cordialmente y se cruzó de piernas ajustándose aun más el vestido, yo estaba de pie a su lado y le iba dando papeles según se los pedía, el hombre empezó atento a lo que le decían, pero Alexis le desviaba la mirada, no puedo culparle, aun así no estaba seguro de contratarlo, al ser algo mayor le salía caro, Alexis argumentó con lógica, yo ya veía la venta perdida cuando el señor se puso en pie quejándose de que todos le cobraban mucho por ser mayor pese a tener buena salud, fue cuando Alexis le enseñó el mismo papel de antes, se sentó a mirarlo y ella se puso en pie, a su lado agachándose y señalándole el papel, pero apartándose el cabello para dejarle una 1º línea de sus tetas, al rato se sentó en el brazo del sillón del caballero, rozándole con el muslo en un brazo, la pasaba el brazo por detrás de la espalda acariciándole suavemente mientras hacia bromas sobre lo fuerte y sano que era, y le explicaba los increíbles beneficios del seguro, a los 5 minutos el hombre ya había firmado una póliza de seguro de vida bastante caro al mes, y que solo cubría fallecimiento natural, no accidentes, se pasaría al menos 10 años pagando si todo iba bien, y si le atropellaba un coche, no verían un duro sus familiares y lo que hubiera pagado estaría perdido.

Me sentí mal al salir de allí, “así son las ventas”, me decía Alexis, repitió la operación con otros 4 hombres en vistas, con sus mujeres delante incluso, con más o menos coqueteo debido al interés real o no del cliente, y todos firmaron en menos de 30 minutos, incluso una mujer convenció a su marido para que firmara, con tal de sacarle a esa señora de encima, no podía competir con un albornoz largo y rulos.

-ALEXIS: ves, así se trabaja, con esto ya hemos compensado tu mierda de inicio, pero no puedo hacerte el trabajo siempre – me dijo al dejar la casa del último señor que había firmado, le vendió un seguro contra incendios ¡para la piscina de su jardín!

-YO: cuando me dejes alguna libre.

-ALEXIS: ah, ¿te crees listo?

-YO: no tengo tu escote pero creo que si – sonrió sin llegar a ofenderse.

-ALEXIS: muy bien, veamos que sabes hacer.

Me acompañó al siguiente piso, se colocó el vestido todo lo recatada que pudo y cerró la chaqueta, para colmo al abrir la puerta un hombre de 35 años apreció, seguí los pasos de Alexis y nos invitó a pasar para explicarle el seguro, creo que era de coche, le expliqué todo de forma sencilla y ágil, el señor lo entendió por que me hacia preguntas en caso de que ocurriera x cosa, y se lo rebatía, pero el nuestro era más caro que el que pagaba al incluirle un servicio más, cuando estaba a punto de echarme la venta abajo ataqué su virilidad con un argumento, más o menos le llamé gallina y poco hombre, con palabras dulces y de seda, explicando que ese servicio era tan vital que merecía la pena, hasta salía barato, no se como pero funcionó, firmó encantado, y al salir le di la mano con firmeza, asegurándole que un hombre cuida así de su familia.

-ALEXIS: vaya, no esta nada mal, no había pensado nunca que llamar nenaza a un tío iba a conseguir que firmara.

-YO: por que no eres hombre – reconocerlo chicos, si os dicen que no tenéis huevos para hacer algo, lo que más deseáis es hacerlo para cerrar bocas.

-ALEXIS: muy bien, creo que por hoy ya hemos terminado.

-YO: pero si aun son las 12:30 nos quedan gente en la lista…..- sonrió, regresó su mirada de “corderito”, se me acercó contoneándose, sujetándose de la solapa de mí traje.

-ALEXIS: no me voy a pasar más tiempo con estos tacones dando vueltas por ahí con un novato como tú, llevamos 6 ventas en 7 visitas, estoy cansada y dolorida, ¿no querrás hacerme sufrir? llévame a casa – de nuevo usaba sus senos rozándose contra mi pecho, se había vencido sobre mi levantando una pierna de forma erótica para mostrarme cuanto le dolían los pies y de paso frotarse contra mi, alzando la mirada como un cachorro.

Era muy buena, mi cabeza me pedía a gritos obedecerla, cogerla en brazos y llevarla a su casa en brazos si hacia falta, deseaba cuidarla, ansiaba protegerla con mi vida, y todas esas estupideces que se nos pasan por la cabeza a los tíos cuando una mujer agraciada se muestra así con nosotros, pero yo no era una venta, pensé que seria un buen momento como cualquier otro para plantarle cara.

-YO: déjate de juegos, no estoy aquí para tus tonterías de zorra presuntuosa, vengo a trabajar – casi se cae de bruces al suelo al escucharlo, se apartó de mi ofendida.

-ALEXIS: oye, a mi no me hables así.

-YO: pues céntrate y ponte a andar, nos quedan 3 casas – me importaban una mierda las casas, y las ventas, como ella decía eran suficientes para cubrir no el día, si no la semana, pero la iba a dejar claro que sus juegos no servían de nada contra mi.

-ALEXIS: no voy a ir, así que nos vamos al coche, ahora - se cruzó de brazos reafirmándose.

-YO: como quieras, el coche es mío y tengo las llaves, me voy a esas casas, si quieres ven, si no, quédate ahí bien quitecita – antes de poder oír su respuesta eché a andar, la escuchaba de fondo casi gritar, pero yo me reía.

No me siguió, y de las 3 casas hice 1 venta, y en una de ellas, si hubiera estado a mi lado hubiera caído otra, el tío era un baboso impresentable que con solo verla hubiera firmado su propia defunción sin enterarse, al volver la vi apoyada en mi coche sentada sobe el capó, cruzada de brazos y moviendo el pie de forma ansiosa.

-ALEXIS: ¡maldito cabrón, ¿ya estás contento? estoy congelada! - estabamos a unos 14 grados e iba muy ligera de ropa.

-YO: haberte vestido más – me reía al ver la furia en sus ojos.

-ALEXIS: ¿pero tú de que vas chaval?, voy hablaré con Luis para que te eche.

-YO: perfecto, dile de paso que he vendido otra póliza más………sin ti – abrió los ojos y me arrancó la carpeta de la mano.

-ALEXIS: no jodas, ¿que has hecho? - leía atentamente el documento.

-YO: pues magia – me senté a su lado apoyado en el coche.

-ALEXIS: vaya, por lo visto no eres tan inútil – se levantó analizando la póliza.

-YO: bonito culo – se giró con rabia, pero me vio pasando el contorno del dedo por la figura, en forma de corazón, marcada de su culo en el coche, que se desvanecía en el metal.

-ALEXIS: eres un guarro.

-YO: y tú una fresca, pero vendes bien, y por lo visto yo también.

-ALEXIS: un par de pólizas tú solo no te hace buen vendedor.

-YO: dame tiempo, o si no, habla con Luis para que me eche, sin duda le gustará oír como me dejaste solo y te negaste a seguir trabajando.

-ALEXIS: jajaja no te creerá.

-YO: a mi no, pero seguro que si hablamos con los clientes y les preguntamos si estabas le dirán que no, es difícil no recordarte – fue a hablar pero se vio pillada.

-ALEXIS: Luis no les molestará con esta chorrada…….

-YO: ya viste como me defendió el 1º día, le caigo bien, y soy convincente – cerró la carpeta de golpe y se cruzó de brazos, no sin antes apartarse el pelo detrás de la oreja, pensativa.

-ALEXIS: está bien, no le diré nada …– caminó hacia mi señalándome con el dedo –…. pero no me vuelvas ha dejar tirada.

-YO: hecho, si tú dejas de usar tus artimañas conmigo, tus escotes y encantos tendrán locos a estos palurdos, pero yo no soy así, ¿estamos? – extendí mi mano para dársela, me miró fingiendo sorpresa, pero ahora ya tenia conformación de que me había dado cuenta de todo.

-ALEXIS: hecho, aunque no puedo decirte que no se me escapen, los llevo dentro ya – sentí su delicada mano apretando la mía con muy poca fuerza.

-YO: podré sobrevivir – sonrió, y por 1º vez creo que fue sincera, me parecía que me había ganado su respeto, o al menos que no me despreciara.

-ALEXIS: ¿nos vamos ya?, estoy helada…… – me quité la chaqueta y se la puse por encima, su mirada dibujaba una hilaridad –…….. ¿quien usa sus artimañas ahora? – aspiró el olor de mi colonia, con una mueca alegre en el rostro, si yo la tenia calada, ella a mi más, mi 1º intento de acercamiento lo había visto venir.

-YO: solo soy educado, anda, sube al coche – disimulé.

Nos fuimos directos a su casa, al preguntarla por como había ido a trabajar me dijo que tenia un amigo que la acercaba a diario y la pasaba a recoger, al insinuar si era su novio dijo que no, que solo eran amigos y ella no tenia pareja, pero fue un toma y daca, la conversación aparentaba ser cordial pero indagábamos en la vida del otro. Entendí que su amigo era un imbécil que había caído en sus redes y le tenia de esclavo, me hizo gracia por que vivía a 4 calles de mi casa, se despidió con 2 besos sacando pecho acercándose peligrosamente, al instante se lo bajó con la mano disculpándose.

-ALEXIS: es que me sale solo – retrocedió sin alejarse del todo.

-YO: no pasa nada, mientras no me la juegues nos llevaremos bien – sonrió devolviéndome la chaqueta.

-ALEXIS: pues nos vemos mañana…..- jugaba con las llaves en la mano, pensativa, luego me miró a los ojos tratando de leerme la mente - ……….le voy a pedir a Luis que te asigne a mi grupo – sonreí por dentro, le había ganado la 1º batalla.

-YO: pues será un placer – al apartarse, instintivamente observó mi pierna, y el bulto disimulado, seria reflejo pero me miró la polla.

-ALEXIS: hasta mañana - su cara mostró algo parecido a una chispa, y se bajó regalándome una visión de su trasero, de calidad.

Me fui directo a celebrarlo con mi leona, descargando la ira acumulada en su coño, su boca y su ano, más de 3 horas me tuvo follándola hasta que me cansé, me dolía la mandíbula de tanto morderla y hasta el hombro tenia mala pinta, con un color verde amarillento, me fui directo a casa a descansar, pasando de Lara, y de las niñas de ese piso, había encontrado a horma de mi zapato, Alexis era un tiburón, y yo era otro, y ahora los 2 lo sabíamos.

Penélope – Crisálida.

Lo que podría ser un problema, y de hecho lo es para mucha gente desde que empezó la crisis, quedarte sin un trabajo estable en mitad de una “recesión económica”, se había vuelto algo de lo más divertido, se que puede resultar cruel para esas personas pero tampoco voy a disculparme por que me fueran bien las cosas, llevaba casi 2 meses trabajando en la venta de seguros, un empleo de tantos como salían de ese estilo, pero gracias a mi atractivo físico, y algo de mis desvergüenza, estaba ganándome algo de dinero extra para mis gastos y seguir ahorrando. Como os dije, la situación económica en mi casa era holgada, mi padre trabajaba, mi hermana también y mi madre se había montado una pequeña guardería clandestina y las ricachonas del bloque le dejaban a sus hijos cuando no sabían que hacer con ellos, era gracioso oírla hablar diciendo que desde que dejaban a los niños con ella se portaban mejor en casa, y más entretenido era verla meterlos en vereda, era como verme a mi mismo con 5 o 6 años siendo regañado una y otra vez, verla sentada observado como hacían los deberes y hasta los usaba para limpiar la casa si se portaban mal, “pobres críos”. Así que por esa parte, sin gastos del piso y habiendo vendido el coche antiguo de mi padre, todos ganaban lo suficiente para vivir sin agobios ni despilfarros, y ahorraban de su dinero.

Por mi parte, entre lo que me quedaba de Madamme y lo que ahorré del supermercado tenia 50.000€ para cualquier emergencia, lo ganado ese mes de trabajo me bastó para cubrir mis gastos, no era ideal pero así trabajaba en algo y no tenia que tirar de mis ahorros. Eso, de por si, ya seria bueno, pero lo mejor es que me lo pasaba bien en el trabajo, Alexis, la jefa de ventas mixtas, como prometió, habló con Luis, el jefe de ventas telefónicas y me enteré que supervisor de esa sucursal, para asignarme a su departamento, pero a Luis no le gustaba que los novatos no trabajaran en todas los departamentos, supongo que tenia sentido querer que aprendiéramos de todo antes de asignarnos algo en concreto, así que esos meses me pasaba 2 o 3 días en teléfonos, luego en la calle y otros días en mixto, rotando con mis compañeros. Hugh, el otro varón de mi “promoción”, era un desastre en ventas telefónicas, pero siempre que era en persona, en mixtos o calle, se lucia, imponía un respeto solo con su presencia y su voz grave, Cameron y Pamela demostraron que por teléfono eran muy buenas, sobretodo la voz dulce y acaramelada de Pamela, quien lo diría cuando lo que mejor tenia era un escote y presencia increíbles para sus casi 50 años, mientras Cameron desprendía una alegría natural que te enamoraba oír por teléfono. A Kate le pasó lo mismo que a mi, Alexis la pidió para su departamento, aunque hacia ventas donde la pusieras, sus ojos verdes arrasaban en las ventas mixtas. A la pobre Jessica la echaron a las 2 semanas, hizo 1 sola venta y no la perdonaron pese a que se rumoreaba que le había tirado los trastos a Luis, desesperación supongo. Penélope estaba en la cuerda floja, hacia 1 venta al día, pero muchas veces eran de bajo nivel y estaba por tener un par de días malos y que la echaran.

Yo no hacia tantas ventas por teléfono, hice algunas, pero no se me daba bien, necesitaba tener a la persona delante para leer por donde tirar, en la calle con Encarnación me iba mejor, incluso alguna venta mía se la pasé a Penélope para que al menos tuviera 1, era parte de mi plan de tirármelas a todas, no os confundáis, mi Leona y Lara me tenían feliz, pero no podía evitar desear a otras, y ya había perdido la oportunidad con Jessica. Penélope era tan tímida que le costaba hablar con gente desconocida, pero me caía bien, así que la ayudaba con la esperanza de que se sintiera en deuda, aparte por que así mi número de ventas en calle era inferior a las mixtas, y así me pusieran con Alexis, mi objetivo real. Daba igual con quien fuera yo en las ventas mixtas, todos eran igual, trabajan a su manera, sin la frialdad de un teléfono o el “abc” de la venta desde 0 a puerta fría, ninguno vendía como Alexis, supongo que por eso era la jefa, pero todos eran muy hábiles, usando psicología, sexo o argumentos, cada uno tenia su manera o improvisaban, y me gustaba aprender un poco de todos ellos, pero siempre era muy liberal, muy anárquico, sin prisas y más como colegas que como trabajo, y me atraía mucho es forma de trabajar desenfadada.

Respecto a mi vida sexual no tenia queja, más tarde o más temprano acudía a comer a casa de mi leona, y follábamos con cada idea depravada que se me ocurría, siempre sacándola mi ración de leche lactante de sus pechos, fue un ritual delicioso, volví a ciertas paginas web en busca de ideas, algunas me parecían demasiado denigrantes pero cuando me quedaba sin recursos, recurría a ellas y mi leona se mostraba encantada, daba igual cuanto la menospreciara, si la mordía el hombro, ya endurecido de tanto hincar los dientes, podía pedirla lo que fuera, su pobre marido cada día me importaba menos, era un cornudo y un payaso para mi, tener a semejante hembra y no disfrutarla era casi un pecado. Una de las pruebas fue que se grabara con una de mis cámaras haciéndolo con su marido, para después imitarle pero siendo yo quien la follaba, la comparación era tan desigual que la humillación a su marido la puso aun más caliente.

Después de dejar a mi leona medio ida, acudía al piso de estudiantes con las chicas, me sentía cómodo allí con ellas, seguía dándolas clases de conducir que ya no necesitaban a Lara y Naira, pero me gustaba, Alicia también se venia, pero últimamente salía con un grupo de chicos de la universidad, y me dijo que andaba detrás de un chico bastante mono, me alegré mucho por ella, aunque en el fondo tenia un sentimiento de sobre protección o recelo, ¿pero quien era yo para negarle seguir con su vida?, así que la di mis bendiciones, aunque no me las pidió ni yo tenia potestad para dárselas. Si estaba despejada la casa, Lara y yo nos dábamos a lo bestia, me tenia que contener cuando la metía por su coño, para no rozarla la pared del útero, pero en ese mes ya tenia su culo más que dominado, y gozábamos de largas sesiones anales, seguía gritando como un cochinillo pero ni rastro del dolor de antes, o si lo había lo gozaba, además “inventé” una nueva posición con ella a 4 patas metiéndosela por el culo, pero le cogía los brazos como riendas de un carro, teniéndola en vilo, con su enormes senos colgando lo justo para que se movieran pero rozando con los pezones en la cama, lo que la volvía loca y la hacia correrse sin parar. Por motivos obvios, cuando estaba Alicia no hacia nada, pero si estaba Mara me incendiaba con la pobre Lara para que el sonido de sexo, sus gritos y los míos se le metieran en la cabeza.

Esas Navidades pasaron tranquilas, nada a destacar, y fue Lara la que me mantenía cubierto, mi Leona estaba con su marido y su hijo, y la verdad, me estaba cansando de estar a escondidas con ella, si, tenia cierta dosis de riesgo y aventura, pero ni el sexo animal y brutal que manteníamos valía para compensar tener que vernos a escondidas cada vez. Por lo tanto, acortaba las visitas a su casa hasta ser casi nulas, y me pasaba gran parte de aquellas fiestas en la casa de estudiantes, salvo las fiestas que se celebraban en mi ático, o mejor dicho, el de mis padres. Fue pasadas las festividades cuando empecé a maquinar como llevarme al huerto a media oficina, como me suele pasar, si no tengo un objetivo me aburro, me siento perdido, necesitaba un estimulo y el mío era que cayeran todas las chicas del trabajo, Jessica ya no estaba, pero aun quedaban Cameron, Penelope, Kate y hasta me daba morbo Pamela pese a su piel arrugada y estirada de la cirugía, más que por ella sola, era por ganarle la partida a Hugh que iba detrás de ella según decían, y como no, la guinda del pastel, Alexis, una vendedora implacable, cruel y déspota. Ya os conté que en nuestro 1º flirteo tuve que descubrir mis cartas para que ella dejara de mangonearme y me tomara en serio, fue una buena jugada por que no muchos hombres la hablarían con esa dureza y franqueza, pero me dejaba sin opciones claras, que ella fuera una depredadora era obvio para cualquiera que la viera 5 minutos seguidos, pero ahora ella sabia que yo también lo era, o al menos, lo suficientemente fuerte como para no solo no caer en sus juegos, si no tirárselos a la cara.

Pero dejaría a Alexis para el final, seria el último partido de una liga muy larga, el 1º objetivo debía de ser la chica más fácil, a mi entender era Cameron, era la candidez y la dulzura en persona, tan alegre como inocente, sin duda era la mejor opción, si no fuera por que tenia novio, era muy guapa y con esa personalidad no era raro, así que fui a por la 2º de la lista, Penélope, era muy tímida, y eso la hacia vulnerable y a la vez de difícil acceso, le costaba soltarse pero conmigo tenia un buen rollo natural, se sentía agradecida por las ventas que le cedía, y era de los pocos de la oficina con los que hablaba, además, era muy posible que la echaran en cuanto decayera lo más mínimo en las ventas, tenia que darme prisa, tuve que esperar para que en una de las rotaciones me tocara algo con ella, en la calle con Encarnación, nos dividían en parejas y te pateabas una calle, hice pareja con ella, y nos metíamos en los locales o las casa a vender, yo llevaba la voz cantante, gracias a su presencia mi corpulencia no asustaba tanto a una señora que abriera la puerta sola en casa, intentaba, más que vender, meterla en la conversación, pero era monosilábica. Apenas participaba Penélope, vendí unas cuantas y al tener un número de ventas decente, y aun quedarnos unas horas para el punto de regreso, la invité a un café para charlar y resguardarnos del frío.

-YO: vas muy elegante hoy……..- se lo dije con sinceridad, un traje de vestir azul marino con zapatos altos, pantalón campana y chaqueta a juego, con una blusa blanca ligeramente escotada, con una coleta de carácter serio en su espesa melena oscura, y con unas enormes gafas que le daban un aire agradable al rostro, con unos profundos ojos negros.

-PENELOPE: gracias….- lo dijo al levantar la vista de la mesa donde se había sentado, estaba algo abrumada - ….tú.. ….tú también…..- pura cortesía, ni se había fijado en mí.

-YO: no te sulfures mujer, ya remontarás…….- la acaricié el codo apoyado en la mesa, algo que le sacó una sonrisa leve.

-PENELOPE: es que no se que me pasa, me lo se todo, recuerdo las técnicas y que cosas decir, pero llega el momento y …y me bloqueo.

-YO: son nervios, le pasa a mucha gente.

-PENELOPE: ya lo sé, si en el colegio me pasaba igual, en los orales no daba una, pero no me lo puedo permitir aquí.

-YO: es cuestión de soltarse, tratarles como amigos desde la 1º vez.

-PENELOPE: ya, es fácil para ti, pero a mi me cuesta mucho……

-YO: ¿y por que crees que es fácil para mí?

-PENELOPE: por que eres listo, seguro, impones, no sé……eres tan abierto, yo no pudo ser así.

-YO: ¿crees que no eres lista o segura? – torció el gesto.

-PENELOPE: no…..bueno si, soy lista….

-YO: y muy guapa – aseveré, ella esbozó otra sonrisa.

-PENELOPE: ya, pero no como tú, al hablar se te ve tan tranquilo y tan concentrado, conectas con la gente, y yo no tengo eso.

-YO: eso es por que soy un desvergonzado.

-PENELOPE: ya te veo, y no sabes como te envidio.

-YO: no me tienes que envidiar nada, sacarías más ventas que yo si te mostraras así de abierta, como ahora, con los clientes.

-PENELOPE: pero no es lo mismo, a ti te conozco.

-YO: no habremos pasado ni 1 día juntos desde que empezamos, y ya me tiras piropos y todo – sonrió de forma leve tapándose los labios con la mano a medio cerrar, jugando con la otra mano en una taza de café.

-PENELOPE: no bromees, esto es serio para mí, necesito el dinero.

-YO: no pasa nada, mientras despegas te puedo pasar un par más de ventas, hoy son 4, con eso tiras toda la semana.

-PENELOPE: pero son tuyas……

-YO: nuestras, hemos ido juntos y en la última me has ayudado con el tema del seguro de casa que no me lo sabia – era verdad.

-PENELOPE: pero tú has hablado con los clientes mientras yo asentía como un loro amaestrado, no es justo para ti.

-YO: son tuyas y así se las voy a pasar a Encarnación, yo ya tengo para cubrir el mes – su mirada era una mezcla de decepción y gratitud, quería seguir negándose, pero realmente necesitaba el dinero.

-PENELOPE: muchas gracias, de verdad que te las devuelvo en cuanto…….puf……no se ni cuando – me cogió de la mano con delicadeza, la acaricié con los dedos.

-YO: no te preocupes, que sería de un caballero si no ayudara a una dama en apuros.

-PENELOPE: jajaja que bobo, pero no puedo aceptarlas sin más, eso es caridad…. ¿y si me enseñas?

-YO: ¿a vender?

-PENELOPE: claro, se te da bien, puedes enseñarme trucos… – puso la espalda recta, atenta –… dime, ¿que puedo hacer para mejorar?

-YO: no te puedo enseñar a vender con trucos, como dices ya te los sabes, y los seguros los conoces mejor que yo, ya lo has demostrado, no es eso lo que necesitas.

-PENELOPE: ¿y que necesito según tú? – vi la 1º oportunidad de “meterla mano”.

-YO: tienes que hacer el tonto, y en público.

-PENELOPE: ¿qué?

-YO: así de fácil, te sabes los trucos y las pólizas, lo que te impide vender es tener vergüenza, si dejas de tenerla la información fluirá por tu cabeza y no te quedarás pasmada.

-PENELOPE: ¿pero como, alguna técnica de relajación o……?

-YO: pufffffff no me jodas, eso es de gurús baratos y vende libros de auto ayuda, hacer el tonto, sin más, gastar una broma a alguien, tensar la cuerda, dar vergüenza ajena y que no te importe.

-PENELOPE: ¿eso crees?

-YO: claro que si, venga, empezamos ahora, elige a alguien - señalé el local.

-PENELOPE: ¿pero aquí y ahora? - se agachó hablando en voz baja.

-YO: ¿por qué no?, es un buen sitio.

-PENELOPE: ¿y para que voy a elegir?

-YO: tú señala a alguien – se ponía amarilla mirando a su alrededor.

-PENELOPE: no sé……¿a ese anciano de ahí? – lo señaló con disimulo, un hombre mayor sentado solo.

-YO: está bien……déjame pensar que podemos hacerle…….- lo tenia claro, pero tenia que parecer natural - ….ya se, sígueme el rollo y no te rajes, ¿vale? – sonrió bebiendo del café caliente, escondiéndose tras la taza.

-PENELOPE: ¿pero que le vas ha hacer?

-YO: yo no, los 2, ven, dame la mano …..– me puse en pie y me la dio temblando, la puse en pie, nos “disfracé” yo algo más desenfadado abriendo la camisa y sacándola por fuera de los vaqueros, por inercia la abrí la chaqueta a ella y le quité la coleta azuzándola el pelo, se dejaba hacer, estaba tan nerviosa que la podría desnudar y me hubiera dejado –… bien, ahora nos acercamos y nos sentamos, finge que somos novios, cógeme la mano y habla raro, como mascando chicle – no la di tiempo a decir nada, la cogí la mano y tiré de ella andando con zancadas amplias y chulescas.

La di un azote en el culo antes de dejarla pasar y sentarse enfrente del señor, para luego sentarme a su lado negándola el paso, la cogí de la mano pasándola por detrás de su cabeza con los dedos entrelazados.

-YO: ¿hey, que pasa abuelo? – mi tono era el justo de……payaso tontaina.

-SEÑOR: ¿disculpe?, ¿nos conocemos de algo? – nos miraba perplejo, Penélope tenia la cara seria, escondiéndose tras el flequillo, pero seguía el papel.

-YO: pues no sé, churri, ¿nos suena su cara? – la azucé con el brazo para que hablara.

-PENELOPE: pu……pues no se…..su geta no me hace……- sonrió al oírse hablar.

-YO: ya ha oído abuelo, no nos suena de nada su cara, ¿me entiende?

-SEÑOR: no os entiendo, ¿queréis algo?

-YO: pues algo si queremos, pero nos da palo pedirlo sin más, no se, queremos conocerle antes y eso….

-SEÑOR: perdonada, pero estoy muy ocupado, y no tengo tiempo para tonterías.

-YO: puffff muy ocupado dice el vejestorio…..- reía mientras le daba un beso en la mejilla a Penélope.

-SEÑOR: un poco de respeto chaval.

-YO: cierra la boca viejo, que cuando te diga lo que se nos ha ocurrido te vas a cagar……

-PENELOPE: eso……..que no te enteras………. yayo – firmó la frase con un gesto con la mano libre.

-YO: pos eso, escucha, a mi nena y a mi nos molan los jueguecitos y tal.

-SEÑOR: ¿y a mi que más me da?

-YO: pos a eso voy, mira al ansioso, es que nos ha dado por lo del…..ya sabe…..probar cosas nuevas y eso, y nos molaria mucho que nos ayudara.

-SEÑOR: no te entiendo……

-PENELOPE: joe con el tronco, no se pispa….- esta vez fue ella la que, roja de vergüenza, me besó la mejilla casi golpeándome con los labios

-YO: si es…ajuste el sonotone, que no se entera, a mi nena le mola eso de ………los tríos y tal…….- Penélope cerró la mano de golpe apretándome la mía, totalmente asustada, manteniendo la fachada - ………y yo por mi nena mato, ¿entiendes?, si ella quiere polla se la doy, y si quiere droga se la doy, por que la quiero, y si le molan estas cosas…..pues se las doy – daba un golpe sobre la mesa más fuerte que el anterior con cada cosa que decía, llamando la atención de todos en el bar.

-SEÑOR: calmante, no hace falta que des golpes, me parece muy bien que la quieras, pero esto no tiene nada que ver conmigo – la cara del señor era un poema.

-YO: pos si que tiene que ver, a mi no me mola que ningún chorbo se meta en mi cama con la Juani …– moví a Penélope para señalar que me refería a ella –… pero si meto a otra en mi cama esta me corta las pelotas….así que hemos pensao que un abuelete seria buena idea, para que no nos pongamos celosos, te hemos visto y nos has molao, así que….. ¿que me dices? – casi se le cae la dentadura postiza al suelo al pobre señor, y sentía las uñas de Penélope clavadas en mi mano.

-SEÑOR: ¿pero tú estás mal de la cabeza? – se encolerizó por que se daba cuenta de las risas de fondo de los demás clientes.

-YO: pero tranqui yayo, a ver si te va a dar algo, ¿que es lo que te molesta?

-SEÑOR: mira…..- suspiró profundamente - ….voy a ser educado y no mandaros a la mierda como os merecéis, a mí no me van esas cosas, gracias por la oferta pero buscar a otro, eso se hace en privado.

-YO: ¿¡¡pero no va y dice que no!!? …- miraba a Penélope, mezcla de actuación, mezcla para que metiera baza, pero estaba demasiado congestionada aguantando no reírse – ….¿pero tú has visto a mi Jeni?, mírala que cara…– le cogía de los carrillos –… y que labios…. – la besé en ellos dejándola blanca – …y por dios, ¡mira que tetas tiene!... – se las agarré con tanto descaro que hasta a mi me dio apuro - ….¿es que la pasa algo a mi jeni? ¿No es buena para ti? – me puse en pie encolerizado.

-SEÑOR: no, por dios, no me mal interpretes, es muy guapa, pero yo no……- se puso en pie dejando el dinero en la mesa mientras las risas del local eran unánimes.

-YO: pero no te vayas tronco, que te lo pido de rodillas…. – me arrodillé, según se iba le perseguía – ….¡¡¡por favor, no me rompas el corazón tío!!! – salió casi corriendo de allí.

Al ponerme en pie alguno hasta seguía grabando con el móvil, yo me estaba tronchando de risa mientras Penélope se tapaba la cara totalmente abochornada, la cogí de la mano, me miró odiándome sin dejar de reírse, la tranquilicé con la mirada y la puse en pie mosteándonos a todo el bar como al finalizar una obra de teatro.

-YO: disculpen si les hemos incomodado, mi nombre es Javier y ella es Lucia, somos actores del teatro Apolo, a la vuelta de la esquina, esto ha sido una mera muestra de lo que podrán disfrutar desde la próxima semana en la nueva obra de teatro que estrenaremos, “Así no se vende”, muchas gracias por su apoyo, y por favor, recuerden, el teatro es vida – tiré de su mano para hacer la típica reverencia.

Mientras todos rompían en aplausos y risas, pagué los cafés y salimos de allí doblados de risa, a mi me dolía la tripa de reírme y a Penélope apenas se la entendía al hablar, nos sentamos en un parque resguardados del aire frío hasta tranquilizarnos.

-YO: ahí dios mío….no puedo…….no puedo más……- me costaba respirar y todo.

-PENELOPE:¡¡¡¿pero que has hecho pedazo de animal?!!!

-YO: el tonto, lo que mejor se me da………..dios……….no puedo……- lagrimas caían por mis mejillas.

-PENELOPE: ¡¡¿pero como se te ocurre?, pobre hombre, lo que habrá pensado de mi!! – se tapaba la cara doblándose sobre las rodillas.

-YO: ¿y que más da? – me quería poner serio, pero apenas podía.

-PENELOPE: te has pasado, yo creía…….

-YO: ¿que te creías?, ¿que con pedirle la hora a un señor sin reloj bastaría?, no, tenia que tirar el muro de un solo golpe, ¿que importa que piense de ti? No te conoce, seguramente no volverás a verle en tu vida, ni sabe quien eres.

-PENELOPE: pero está mal.

-YO: ¿el qué?, ¿reírnos un rato, bromear?, ¿le hemos hecho algo malo? Ahora se irá pensando que casi se monta un trío contigo, jajajaja – me empezó a pegar, sin hacerme daño, en un brazo.

-PENELOPE: eso, encima metiéndome mano.

-YO: era para el papel …– “si, claro” -… mira, da igual como o lo que hagas, no puedes vivir, y menos vender, si te pasas todo el rato pensando en que opinarán de ti, eso da igual, engaña, miente, omite, usa tu cuerpo y tu mente para vender, se cruel, dulce, amistosa o sobria, invéntate personajes, lo que sea con tal de vender, y si no vendes, te largas y a por otro.

-PENELOPE: pero eso no está bien.

-YO: ya, nadie dijo que seria fácil ni honrado, pero no puedes vivir de encontrarte mágicamente a un tío que justo necesite lo que tú vendes, eso no pasa nunca, has de convencerles de que lo desean, aunque sea mentira.

-PENELOPE: nunca lo había visto así.

-YO: puede que ahí esté el problema, eres una niña buena, tímida e introvertida, y eso no te va a servir de nada para vender ,,,,– la cogí de la pierna acariciadora con suavidad –,,, y perdóname si soy brusco, no pretendía ofenderte, ni hacerte pasar un mal rato – me sujetó la mano en su pierna con delicadeza, levantando la mirada, asimilando lo ocurrido.

-PENELOPE: lo sé, no pasa nada, y muchas gracias por todo.

-YO: anda, ven aquí y dame un abrazo – me lancé a su brazos sin apenas darla tiempo de abrirlos, y nos fundimos en un cálido y duradero juego de manos antes de separarme.

Nos reunimos en el punto de vuelta y al volver a la oficina ya tenia el número de Penélope en el móvil, durante unos días la dejé tranquila, esperando ver su reacción, me llamaba y me mandaba mensajes pidiendo consejos y se los daba, en una semana subió como la espuma, siempre que me veía corría a darme un abrazo para decirme lo bien que le había ido, y como no, paraba de decir como la había ayudado, Alexis pensó que podría seguir ayudándola en los mixtos y nos puso juntos al día siguiente para ir a un zona donde había 3 entrevistas, al salir de trabajar insistí en acompañarla a casa con el coche para hablar del día siguiente.

-YO: pues mañana va a ser duro, son solo 3 visitas, tenemos que volver al menos con 1 si no queremos que Alexis nos mate.

-PENELOPE: pufff, ya ves, estoy temblando y todo, no se me dan nada bien las mixtas.

-YO.: ahora vendes mejor.

-PENELOPE: gracias a ti, pero en las mixtas nunca me han dejado hablar.

-YO: es mejor, tú calla y aprende de los buenos, pero va siendo hora de que juegues con los mayores.

-PENELOPE: me alegra mucho de ir contigo.

-YO: y yo contigo – pensaba que nos alegrábamos de formas diferentes, mientras le acariciaba el rostro con el dorso de la mano, cada día aumentaba el roce para ver hasta donde me dejaba.

-PENELOPE: ¿y como lo hacemos mañana?

-YO: ¿son pocas visitas, te paso a recoger a las 10:00?

-PENELOPE: perfecto.

-YO: bien, vamos allí, y nos estudiamos con calma cada caso antes de entrar, una vez dentro pues toca improvisar, no sabes por donde te van a salir, ni quien es el que manda, así que necesito varias cosas.

-PENELOPE: dime.

-YO: la 1º es que estés atenta, y que no te quedes bloqueada, no me puedes dejar tirado, así que no te duermas.

-PENELOPE: hecho

-YO: lo 2º es que abras bien los ojos, y reacciones, si tenemos críos dando por culo, juega con ellos y alejados de la discusión, si tenemos a una pareja, siéntete a mi lado, si esta sola rodeamos para despistar……trucos.

-PENELOPE: bien, esos me los sé.

-YO: y lo último, y más incomodo.

-PENELOPE: no me asustes – la sonreí apretándola en el muslo.

-YO: a ver, puede pasar de todo, y ser cualquier tipo de persona, así que tenemos que acudir elegantes y arreglados.

-PENELOPE: ya lo sé.

-YO: no………….tenemos que impactar, dejarles sin aliento y aturdirles para que sean manejables, mañana necesito que vayas rompedora, que enseñes carne o que insinúes descaradamente – se tensó un poco.

-PENELOPE: ya les he visto cuando salen, pero no se si…….

-YO: mira, no quiero ser borde, pero si mañana la cagamos nos vamos al hoyo, necesito saber que estás conmigo.

-PENELOPE: está bien….haré lo que pueda.

-YO: así me gusta, no te resultará difícil, eres preciosa y estás muy buena – lo dije sin mirarla.

-PENELOPE: gracias….

-YO: no es un halago ….– ahora si la miré –…. si aciertas vas a tener a cualquier tío más pendiente de tus curvas que de lo que firma, y necesitamos eso, si notas que te comen con los ojos regala algo que puedan admirar, no te pases, no eres un puta, solo insinúa, juega, roza, muestra………..¿entiendes?

-PENELOPE: vale, ok.

Al llegar a su casa la di un fuerte abrazo pasando mi mano por toda su espalda, casi llegando a su culo, luego la acaricié el rostro mirándola a la cara a escasos milímetros.

-YO: confío en ti, no me falles.

-PENELOPE: no lo haré - asintió con la cabeza, y la di un beso en la frente, sintiendo un suspiro de decepción en ella, había cerrado los ojos y elevado sus labios, pero la haría sufrir un poco, ya era mía.

Me fui directo a casa de mi leona, ese día necesitaba purgarme, me sentía victorioso, con un arrebato animal, me follé el culo de mi leona sin parar 2 horas largas, hasta ella se rindió a mi ferocidad, me fui a casa a dormir, al levantarme me puse bien arreglado con el traje de Eric, eso me recordó que tendría que pasarme por su taller, su 2º me tenia unos trajes nuevos guardados, pero iba arrebatador, fui a buscar a mi acompañante y la encontré puntual, con un abrigo largo de vestir, solo dejando ver unos zapatos de tacón rojos, y un peinado muy bonito con una diadema brillante, algo maquillada, con sombra de ojos y un pintalabios rojo fuego, con sus gafas grandes, estaba preciosa.

-YO: hola guapa, ¿como estás?

-PENELOPE: puff helada – tiritaba mientras ponía las manos cerca de la calefacción del coche.

-YO: perdona, ¿llevas mucho esperando?

-PENELOPE: no, que va, si acabo de bajar.

-YO: ¿entonces? – sonrió alegre.

-PENELOPE: es que no llevo mucha ropa – casi se me sale la polla del pantalón, me serené por que iba conduciendo.

-YO: tampoco es ir desnuda.

-PENELOPE: es que no tenía nada tan…….. sugerente, y le he cogido la ropa a mi hermana pequeña, y me queda un poco justa.

-YO: está bien….– aparqué por que no quería tener un accidente –… enséñamelo – se puso roja mientras se quitaba el cinturón de seguridad.

-PENELOPE: pero no te rías.

-YO: solo quiero ver como te queda – “como si reírme fuera lo peor que te puedo hacer”

Asintió desabrochando el abrigo, se puso medio en pie y se abrió la prenda, me tuve que colocar el paquete disimuladamente, era un vestido rojo pasión, al menos 2 tallas menos que la suya, los tirantes nacían en su nuca en un nudo y caían por su pecho en 2 tiras cubriéndola los senos, mientras seguían bajando cruzándose en su vientre terminado en una falda con algo de vuelo por encima de sus mulos, se quitó el abrigo dándome la espalda y mostrándome toda su columna vertebral al aire, sin sujetador por que quedaría horrible y por que era tan ajustado que de por si ya se le mantenían bien colocadas, casi aplastadas, pero con el punto rebosante justo.

-PENELOPE: ¿que tal me queda?

-YO: perfecta, no existe varón que no se quede mirándote pasmado.

-PENELOPE: ¿no me queda algo apretado de pecho? – se las estaba recolocando por que de moverse se salían por el escote, bien apretadas una contra la otra, aproveché descaradamente para meter mis manos en sus tetas ajustando mejor, soltándolas antes de que se quejara.

-YO: que va, no se salen pero no puedes dejar de mirar por si acaso, bien jugado… – suspiré unos segundos mirándola allí, encorvada, de pie en el coche con ese minúsculo vestido pegado a su cuerpo - … anda, tápate que si no, no me centro – sonrío cubriéndose, para luego vencerse sobre mi dándome un beso en la mejilla.

Me la iba a follar ese mismo día, no tenia dudas, pero lo 1º eran las ventas, nos quedamos en el coche repasando notas, la primera visita era una venta tirada, una pareja ansiosa por un seguro de hogar, la dije que en este caso se tapara hasta saber si estaba la mujer, eso podría tirarnos la venta abajo por celos, estaban los 2 así que se sentó a mi lado, y me fue ayudando con los temas más técnicos explicando todo con calma y sencillez, la mujer se ofreció a ponernos algo de beber, fui a ayudarla para ver la cocina y venderle que el seguro le cubría tal cosa o la otra, alguna broma simple para hacerla reír y un ligero contando en el brazo para generar confianza, al regresar no se percató de que su marido tenia clavada la mirada en el incipiente muslo que se abría entre las dobleces del abrigo de Penélope, para mi gusto demasiado poco enseñaba, pero lo justo para que un varón mirara. Entre los 2 se lo vendimos sin problemas y al salir saltó de alegría sobre mí, dándome un ligero abrazo.

-PENELOPE: ¡¡¡bien, la 1º!!!- chocamos las manos.

-YO: muy bien, ¿ves como no es difícil?

-PENELOPE: ya, pero te los has ganado enseguida.

-YO: a la mujer, el marido hasta que no te ha visto a pierna no cedía.

-PENELOPE: ya……me he dado cuenta como me miraba y me he abierto un poco el abrigo, ¿se ha notado?

-YO: un poco, pero la venta ha caído, eso se merece un desayuno – sonrió al sentir mis manos en su cintura al caminar.

Fuimos a tomar algo caliente para seguir, ella no se quitaba el abrigo, y aun así muchos hombres se quedaban mirándola, iba hermosa, sencilla pero elegante, charlamos de la 2º visita, esta no me daba buena espina, una señora mayor, de las que quedan para hablar, no para comprar, acudimos siendo lo más amables y tiernos posibles, sonriendo y escuchando anécdotas un buen rato, pero pasada media hora yo ya sabia que aquello no iba ningún lado, le tiré un par de bromas subidas de tono que la hicieron reír, pero no había manera.

Nos fuimos algo decepcionados, y estudiamos la 3º visita, eran un pack de seguros de coche, por lo visto un padre quería renovar todo, por que su hijo se había sacado el carnet y querían asegurarle, nos paramos en frente de la casa y le abrí el abrigo, metiéndola mano, levantando las tetas y subiéndola aun más el vestido, ella reía, pero no se quejaba.

-PENELOPE: para por dios, que me vas a dejar en pelotas.

-YO: cierra la boca y escucha, aunque esté la mujer, tienes que exhibir, son seguros de coche, la competencia es brutal y no podemos perder la oportunidad, son padre e hijo mínimo, tienes que dejarles con la boca abierta, si ves la oportunidad ponte entre ellos, apártate el pelo a menudo del escote, y crúzate de piernas con gestos amplios, eso siempre atrae, coquetea apretándoles del brazo para indicar que te diriges a uno en particular, o acaríciales la espalda para que se inclinen a ver los folletos, sobretodo céntrate en el hijo, el convencerá a su padre, y no des precios exactos sin que te los pidan, “somos ligeramente más caros pero compensa proteger a la familia”, cosas así , ¿vale? – asintió riendo nerviosa.

-PENELOPE: ¿y si está la mujer?

-YO: ella es cosa mía – llamé el timbre.

Nos abrió el marido, un cuarentón que peinaba canas, al vernos nos presenté y nos dijo que pasáramos, Penélope se lució al entrar, dejó caer el abrigo por su espalda y se lo dio para que lo colgara, con una amplia sonrisa sacando pecho, ya se la comía con los ojos al verla caminar por el pasillo, nos invitó a sentarnos en el sofá mientras él se sentaba enfrente nuestra, llamó a su hijo y salió la mujer de la cocina con un bebé en brazos, Penélope se ruborizó al observar como la miraba, cuando bajó el hijo casi se tropieza al sentarse al lado de su padre, un adolescente con granos en la cara y pasado de kilos. Se reunieron todos y ante la frialdad de la situación rompí el hielo con un alegato a la seguridad vial, Penélope se metía entre medias con algún apunte bien metido, pero yo hablaba sin parar, era inútil, o al menos no productivo, tenerlos a todos allí, pese a que el adolescente le dedicaba miradas furtivas a Penélope, con la mujer allí no se perderían detalles obvios como que éramos más caros, así que pasados unos minutos de improvisación pura le pedí con la mano en el hombro a la mujer si tenia un vaso de agua, sonrió con el bebé en brazos, y se levantó a acompañándome a la cocina, al menos ya le daba vía libre a Penélope que empezaba a hablar antes de irme, extendí la conversación en la cocina un poco, viendo como la madre dejaba al crío en una cuna, apenas tendría 1 año, y la mujer era bastante mona, unos 37 años y rubia de pelo corto, se notaba que se había arreglado esperando visita, con un blusa de flores estampados apuntando unos senos grandes y una falda negra larga con vuelo hasta los gemelos, con un figura atractiva pero no exuberante.

-YO: ¿y el crío es suyo?

-MADRE: pues si, ¿de quien va a ser?

-YO: no, perdone, es que es tan pequeño que no pensaba que fuera suyo.

-MADRE: ¿por que soy muy mayor para tener hijos?

-YO: no, discúlpeme, por que esta usted muy bien como para haber tenido ya a 2 hijos, y uno hace tan poco – sonrió halagada, a mi no me interesaba, pero solo tenia que alejarla del salón.

-MADRE: muchas gracias, la verdad es que si, me he recuperado muy rápido con algo de ejercicio, aunque he perdido mi figura….

-YO: no la creo, está usted estupenda, si eso es cierto antes tenia que ser una autentica rompe corazones.

-MADRE jajja que va …– entrecerró los ojos leyendo mi belleza, con el paso de las mujeres en mi vida ya leía en sus rostros cuando me miraban, cuando me veían o cuando me observaban, parece lo mismo pero no lo es-…. aunque te has confundido.

-YO: ¿en que?

-MADRE: este renacuajo es mío y de mi marido, pero el de fuera es de su ex mujer, no es mío.

-YO: perdóneme.

-MADRE: no pasa nada - acarició mi brazo levemente.

-YO: no, tenia que haberme dado cuenta, es usted demando joven como para tener un hijo de esa edad – su sonrisa no se le borraba, como si nadie la dijera ya cosas bonitas.

-MADRE: ¿volvemos al salón?

-YO: puff……verá……… es que a mi estas cosas de los coches me suenan a chino, no se mucho de eso…..- me recosté sobre la encimera cruzando los brazos marcando bíceps.

-MADRE: ya……ni a mi…..es cosa de estos 2 …– se acercó a susurrarme –…es que el hijo es un poco cabra loca y no queremos que se meta en líos.

-YO: ya, la entiendo, por eso mejor les dejamos a ellos hablar que saben más del tema, mi compañera iba para mecánico, pero con esto de la crisis……

-MADRE: ¿mecánica? si parece tan…..

-YO: que cosas…….a mi hasta me dicen que es lesbiana – pura mentira, pero así eliminaba el factor celos de la ecuación.

-MADRE: que desperdicio…………vamos, que a mi haga lo que quiera…..

-YO: ya, si eso la digo yo, pero en fin, como saben más de estas cosas les dejamos a solas y charlamos aquí amigablemente, dígame, ¿como va con el crío? – decir eso a una madre es ganar mínimo 1 hora de charla.

Fue así, casi 1 hora hablando de cambiar pañales, noches si dormir, del parto, de la vida en casa……hasta me dejó coger a su hijo y ayudarla a cambiar pañales, riendo mientras jugábamos a rozarnos, pero el tema se agotaba, así que la puse la mano en la espalda y la pedí que me acompañara al baño ya que necesitaba ir, salimos al salón y dejó al bebe en un cesto para niños la lado de su padre, sonreí disimuladamente a Penélope, que hábilmente se había encajonado entre padre e hijo y les estaba explicando punto por punto todo, el padre seguía la conversación, no le gustaba nada que fuéramos tan caros, pero el hijo estaba babeando sobre las tetas de ella. Subí detrás del culo contoneándose de la madre, me parecía que en los roces de cambiar pañales estaba sacando el culo para notar mi verga, y aquel vaivén en su caderas denotaba cierta predisposición, por lo que había averiguado, desde que nació el crío su marido no la tocaba y yo era joven y apuesto, lanzándola piropos, algunos más picantes de lo aconsejable. Me acompañó a la puerta del baño, y entré con prisa, para no dejarla apartarse al encender la luz y rozarme con ella, sus senos, presumí que sensibles como los de mi leona por la lactancia, con mi pecho, y mi verga levantando el vuelo de la falda, la sacaron un suspiro leve, ella se quedó en la puerta pero yo no la cerré, tenia claro que en cuanto saliéramos de allí bajaríamos y Penélope aun estaba lejos de ganarse al padre por lo que había escuchado, necesitaba tiempo y se lo iba a dar.

Oriné con la puerta abierta y ella mirando de reojo en el rebote de un cristal, estaba nerviosa pero la curiosidad y el peligro la atraían, al terminar me aseguré sin mirarla de que me viera la polla en el rebote del espejo, y luego al lavarme las manos salpiqué agua en mi camisa.

-YO: mierda….

-MADRE: ¿pasa algo? – entró deseando ver más de lo que vio.

-YO: nada, que me he mojado la camisa al lavarme.

-MADRE: ah, bueno, eso no es nada, se pone en el radiador y listo.

-YO: ains…lo que no sepa una madre……- de inmediato me quité la chaqueta y desabrochaba mi camisa mostrando mi torso trabajado a su alcance, ahora babeaba la madre ante mí, y al quitarme la camisa se la di –…. ¿hay algún cuarto discreto donde poder meterme?, no quisiera que su marido pensara mal al verme así.

-MADRE: si, claro, al fondo una….una habitación azul, es un gimnasio que tenia….tengo……- lo decía nerviosa mientras ponía la camisa junto a un radiador pegado al suelo, agachada, la cogí de la cintura y pasé mi polla claramente en su culo al rodearla para salir, y me fui a buscar la habitación, dejándola pensar, escuchaba de fondo a Penélope vendiéndole el seguro al padre, seguía lejos de convencerle por el precio.

La madre salió y me vio dando vueltas por el pasillo, ese acercó cogiéndome del brazo y me metió en un cuarto apartado y muy silencioso, fue a cerrar para irse pero comencé a hablar.

-YO: vaya, es un gimnasio muy completo.

-MADRE: si…..bueno....me gusta…aunque ahora ¿quien tiene tiempo?

-YO: se nota que hace ejercicio, está usted muy bien.

-MADRE: jajaja gracias……

-YO: ¿y esto como funciona? – señalé una maquina que realmente desconocía.

-MADRE: eso es….bueno, para fortalecer el vientre.

-YO: ¿y como va? – se mordió el labio temerosa, pero entró, y disimuladamente echó el pestillo.

-MADRE: es un poco lío, va así – se sentó aferrándose a unos asideros haciendo un par de giros.

-YO: jajaja que fácil.

-MADRE: ya, bueno, esa es la idea, para no aburrirte.

-YO: ¿y su marido también hace ejercicio?

-MADRE: puf….que va, es un vago – se puso en pie y ocupé su lugar, empezando el ejercicio, sin parar seguía charlando dejándola que viera mis músculos trabajar.

-YO: ¿ni siquiera viene a mirarla?

-MADRE: no…..se queda abajo….y no……

-YO: yo me pasaría horas mirándola – empezaba el partido.

-MADRE: jajaja ya…….ahí toda sudada y oliendo mal…. – se giró apartando la vista de mi.

-YO: si, seguro que con ropa ajustada y elástica pegada a su piel, con poses sugerentes en estos aparatos….jajajaja – subía la temperatura pero se podía decir que era broma.

-MADRE: pues si……. y no has visto la peor – se acercó a una maquina que parecía más un potro de tortura que otra cosa.

-YO: ¿y esa como va?

-MADRE: pues te metes entre estas barras haciendo palanca con las piernas y usas la tabla para doblar el cuerpo…

-YO: no lo pillo.

-MADRE: jajaja ya es que es difícil de explicar….

-YO: pues enséñemelo.

-MADRE: que va, ¿así vestida? que vergüenza, y con la falda me resbalo.

-YO: venga, yo la sujeto.

Sonrió acalorada, se le pensó medio segundo pero se metió entre las barras, levantándose ligeramente la falda para apoyar los gemelos en la 1º barra, y la 2º en la parte delantera de sus muslos, apoyando su pecho en la tabla, me puse detrás agarrándola de la cintura con fuerza y agachó el torso haciendo fuerza contra el vacío, al bajar la tabla, la barra de los muslos sobresalía y le obligaba a sacar el culo, tenia razón, aquello era obsceno.

-MADRE: ¿ves?, y así vas haciendo repeticiones y endureces las piernas – subía y bajaba ofreciéndose.

-YO: parece que no le cuesta nada….

-MADRE: la repetición, no es tan fácil al principio.

-YO: a ver…..- me pegué a ella por la espalda, plantado mi verga semi erecta en su culo, y rodeando su vientre con las manos, se tensó de golpe pero no dijo nada cuando apreté mi cuerpo haciendo el mismo ejercicio que ella a la vez.

La cosa no podía ser más sensual, me la estaba “follando” con ropa puesta, sacaba el culo entre risas y al volver era yo quien sacaba la cintura para hundir mi rabo en su trasero, las risas eran leves y como ella no paraba yo no lo hacia, mis manos en su vientre no estaban quietas, subían y bajaban, repasando desde cerca de sus senos hasta sus mulos, y ella seguía sin decir nada, suspiraba entre risas, mi polla, ya a punto de reventar, era tan evidente que ella se ajustó sobre mi cintura para metérmela entre sus nalgas y así no generar molestia, pasaron unos 15 minutos así, en los que estuve tentado de penetrarla, no pondría pegas, seria tan fácil como levantarla la falda y bajarla las bragas, no se molestaría en objetar, ya era demasiado tarde para hacerse la estrecha, me estaba pajeando usando su culo.

-YO: uf…….así da gusto hacer ejercicio….

-MADRE: si - se retorció sobre si misma gozando aquel juego.

-YO: me duele todo, sobretodo aquí…– sujeté en sus muslos muy cerca del nacimiento de sus piernas –…. ¿lo nota?

-MADRE: oh si….como para no notarlo – jadeó con un suave movimiento de caderas.

-YO: bueno, creo que mi camisa ya estará – me separé lentamente.

-MADRE: ¡¿ya?!.....bueno si, supongo……- salió del aparato roja, caliente y sudando, intentado despegarse de la piel la blusa floreada, la marca de su cuerpo en sudor sobre la plancha me convencieron de sus 2 senos bien redondos.

-YO: es una pena, que me tenga que ir…….- me sequé el pecho con una toalla que había por allí -……me ha caído usted muy bien.

-MADRE: y tú a mi……¿sabes?…..también andamos pensando en……un seguro de hogar - sonreí, le importaba poco eso, quería que volviera.

-YO: genial, se me dan mucho mejor que los coches y podría hablar con usted directamente ya que se ve que manda en casa.

-MADRE: ¡si! ...– ilusionada –… claro que si.

-YO: pero será difícil que vuelva si no firmamos lo de hoy – mentí poniendo cara de pena.

-MADRE: bueno, aunque no se haga este, podríamos hablar del otro.

-YO: ya, pero a mis jefes no les gusta que molestemos mucho a los posibles clientes, si no sale preferimos no insistir, en cambio si hacemos uno, nos dejan volver para ver si están interesados en más.

-MADRE: una lastima……aunque….puedo hablar con mi marido.

-YO: no quiero importunarles…..

-MADRE: no es molestia, es un pesado con eso de que sale más caro, bastante que ha pagado con el carnet de conducir de su hijo, 3 veces suspendió…..nada, hablo con él y listo - se acercó posando su mano en mi pecho, relamiéndose.

-YO: es usted increíble, si fuera así de amable le debería una, no se ni como se lo agradecería….- sus ojos echaban chispas, ella si se imaginaba como.

Fuimos al baño y ella misma insistió en ponerme la camisa, se pasó 3 minutos metiéndome mano en el torso trabajado, y balanceando su cuerpo frotando la cadera contra mi polla. Al bajar la madre se sentó al lado del padre y le comenzó a susurrar cosas al oído, tuve miedo por un segundo, pero al final el padre la decía que era demasiado caro, Penélope me miraba sin entender que había pasado, pero mientras la madre se camelaba al padre, ella tenia al adolescente en la mano, rozándole los pechos en el brazo al girarse para hablar con él.

A los 20 minutos salimos de la casa con 3 seguros, de coche, los 2 de carnet de padre e hijo, y con la posibilidad de hablar del seguro de hogar “si volvíamos a visitarles”, según la madre. Al salir Penélope saltó a mis brazos y me besó la mejilla manchándome de carmín.

-PENELOPE: ¡no se que has hecho, pero la mujer ha claudicado!, el padre no cedía.

-YO: vender hija mía, vender – mis manos se posaron en su culo de forma instintiva, se sonrojó.

-PENOLOPE: verás cuando volvamos, ¡se van a enterar!

-YO: te has portado como una autentica depredadora, estoy orgulloso de ti, te besaría aquí mismo – ladeó la cabeza con suavidad, mojándose los labios.

-PENELOPE: muchas gracias, no podría haberlo hecho sin ti… – fue ella la que de puntillas buscó mis labios, la dejé recrearse en un tímido y largo beso, una sonrisa leve la apartó la cabeza al sentir mi polla dura en su piel, por debajo del vestido sobre su pierna.

-YO: era una forma de hablar……

-PENELOPE: pues parece que te ha gustado - rascó con las uñas en mi pecho la solapa del traje.

-YO: eso no lo niego, ¿pero por que lo dices?

-PENELOPE: detalles…..la forma de besar, que no te hayas apartado, que tengas las manos en mi culo…….. o por eso que está palpitando en mi pierna, esas pequeñas cosas……- subí mis manos a su cadera, fingiendo algo de vergüenza.

-YO: perdona, es que estás preciosa.

-PENELOPE: no pasa nada, te lo debo – me sujetó la cara y volvió a besarme con lentitud y cariño, esta vez mi lengua se abrió paso entre sus labios.

-YO: aun quedan unas horas, podemos ir a algún sitio más tranquilo a descansar, necesito despejarme.

-PENELOPE: claro – limpió con sus dedos las manchas rojizas en mis labios, y cuando la solté se aferró a mi brazo, aquella inesperada madre me había dejado caliente y con ganas de sexo, y Penélope era mi presa.

A subir al coche felicité sobradamente a Penélope, pasándome en el contacto físico sin que ella se quejara, acariciando con descaro su pierna, me indicó que su casa estaba vacía, así que no hacia falta más, infringí algunas leyes de trafico para llegar a su casa, en el mismo portal, me pegué a su trasero, metiéndola mano sin dejarla ni entrar en el ascensor hasta saber que llevaba tanga, subimos a su casa, parecía un piso alquilado por varias estudiantes, eso me hizo gracia, dejamos un reguero de ropa tras nosotros, al llegar a su cuarto yo ya estaba en calzoncillos y la tenia delante contoneándose con aquel vestido demencial.

-PENELOPE: eres muy bueno conmigo.

-YO: no, no lo soy….

-PENELOPE: ¿por que lo dices?

-YO: por que llevo unas semanas detrás de ti, quizá me haya pasado contigo.

-PENELOPE: ¿te gusto?

-YO: claro que si, ¡mírate!, eres una belleza – me paré en seco para que la inercia la pusiera frente a mi, rodeándola con mis brazos.

-PENELOPE: pero somos compañeros….

-YO: somos hombre y mujer, y yo te deseo…- la besé sin más preámbulos, y me devolvió el beso, con ternura y cariño.

-PENELOPE: no podemos salir juntos….

-YO: ¿y si solo te hago el amor? – asintió mordiéndose un dedo de forma sensual.

La besé metiéndola la lengua muy dentro, dobló la espalda acariciándome la cara con su dedos fríos, me la subí encima abriéndola de piernas y sujetándola por el culo, me senté en la cama con ella encima a horcajadas, metí mis manos por debajo del vestido sintiendo el tacto de la piel de sus nalgas. Solo con rozar el nudo del vestido enn su nuca se deshizo y sus senos salieron disparados, unas aureolas oscuras y duras aparecieron en los pezones, los ataqué con mis labios provocándola gemidos dulces, me saqué el rabo ante ella, contuvo el aliento unos segundos, se lo devolví al meter mis dedos por dentro del tanga, acariciando su clítoris hinchado, empezaba a humedecerse mucho, me quitó los slips, cogió mi rabo y descendió para chupármela, no daba a basto con tanta barra de carne, apenas se metía le glande y poco más, pero sus manos se movían bien, y usó sus senos de buen tamaño para una cubana ensayada, saltó sobre mi apunto de empalarse sola.

-PENELOPE: llevo deseando esto desde que te vi.

-YO: pues no lo demores más – aparté el hilo del tanga a tirones y ella apuntó mi glande a su coño.

Embestí con fuerza metiéndola media polla de golpe, sentí la punta de su pelo en mis rodillas al doblarse por la espalda, después se recostó sobre mi pecho cuando caí al tumbarme, besando mi pecho, mientras seguía percutiendo en su coño, a los pocos minutos ya me cabalgaba violentamente mientras se la metía toda del tirón, tenia buenas caderas. Quien lo diría, que bien follaba para ser tan tímida, o quizá fuera el morbo, entre el vestido aun puesto en su cintura, las gafas enormes con aire a estudiante y la forma en que se quitó la diadema del pelo…..me tenía ardiendo. Me aferraba a sus curvas, mientras acariciada su trasero con las manos, empezó a correrse sin parar, multiorgásmica, casi se desmaya en menos de media hora, pero se mantenía al sentir mis dedos pellizcando los pezones, era colosal verla rebotar sorbe mi, y sus tetas chocar entre ellas, se fue a quitar las gafas por que la molestaban con el sudor, pero se lo negué, y enrabiado solté a la bestia los últimos minutos, haciéndola tener un solo orgasmo durante 3 minutos, me manchó las piernas de sus fluidos, cuando me corrí dentro de ella, comiéndome sus senos, sentí una explosión de sensaciones agradables y placenteras.

-YO: un buen día, si señor……….

-PENELOPE: ¡madre mía!……….que pedazo de polla………y como te mueves…….- permanecía apoyada sobre mi pecho, transpirando y aun con calambres entre sus muslos, la aparté el pelo por detrás de una oreja dejando su espalda al aire y recreándome con los dedos por su columna.

-YO: eres magnifica – sonrió de forma deliciosa, justo antes de besarme.

Nos vestimos entre carantoñas, apestaba a sexo y a hembra, la dejé en su casa, y entregué las ventas a Alexis que sonrió, creo que se me notaba en el rostro el placer de tener a Penélope ensartada, o al menos ella era capaz de verlo, me fui a por Lara de cabeza, y me desahogué como dios manda unas 2 horas, un polvo rápido no me calmaba, Lara y sus senos enormes si, al acabar me quedé dormido en su cama, con ella jadeando retozando a mi lado, sus senos me volvían loco y durante toda la noche tuve arranques de pasión, me la follaba una vez y la dejaba tranquila, pero se me ponía dura al sentir sus senos pegados a mi, y volvía a por ella, a partir de la 3º vez dejé de contar.

Por la mañana me pasé por casa a darme una ducha rápida, y e ir al trabajo, Alexis nos felicitó en persona a Penélope y a mi, sobretodo a ella, según mi informe había sido crucial para las ventas, al salir mi nueva pieza de caza se me abrazó susurrándome cosas muy subidas de tono, pegando sus senos a mi pecho y rozando conscientemente un muslo en mi entrepierna.

-PENELOPE: no vemos pronto – me dijo con voz acaramelada antes de besar y lamer mi oreja, se alejó contoneando el trasero en unos pantalones de vestir, sonreí al verla guiñarme un ojo antes de perderla de vista, pensé, “la 1º”.

Cameron – Su secreto.

Me encantaba mi vida, para que negarlo, era frenética y algo alocada, pero era vivir de verdad, dormía poco y casi siempre fuera de casa de mis padres, solo los fines de semana descansaba por el día, de noche me iba de fiesta retomando mi amistad con Teo y Manu, algo olvidadas.

Teo se mostraba muy feliz con su novia de la oficina, muchas veces me preguntaba por que no le abofeteaba y le llamaba estúpido por dejar a Alicia por esa mujer tan sosa y deprimente, si, sabia que habían cortado por que le puso los cuernos, pero no entendía el por qué, Alicia era 1000 veces mejor mujer que cualquiera, y lo seguía pensando por aquel entonces, y es importante recalcar que mi percepción de las mujeres era bastante….ligera, era un vividor, y todas lo sabían, pero aun así caían en mis brazos, no eran mujeres para mi, eran objetivos, metas, y pocas se me escapaban, por lo tanto mi opinión del genero opuesto no era la más agradable. A Manu no le hacia tanta gracia verme, conmigo cerca pocas mujeres mostraban interés por él, era ingenioso y divertido, pero creo que se encontraba en mi misma situación de antes de la operación, pese a que Manu podía ser un buen partido para muchas mujeres, todas iban a por mi pese a saber que, probablemente me las tiraría una vez y no volvería a verlas, le entendía y me compadecía, ¿pero que podía hacer? No podía pasarme el día en la casa de estudiantes con las chicas, me gustaba y me sentía cómodo, incluso a ellas les gustaba tener a un hombre por allí, pero con el paso de los días me empezaba a parecer raro que mi circulo social fueran solo mujeres, y Lara empezaba a comportarse como una novia celosa, la dejaba claro que no éramos novios, reñíamos, discutíamos y me iba cuando me daba cuenta de que no tenia por que seguir escuchándola, a los pocos días me llamaba pidiéndome disculpas, yo accedía sonriendo, casi detestando su personalidad tan débil y dependiente, estaba perdidamente enamorada de mi, aunque lo negaba.

Eso en mi vida personal, en mi trabajo era la comidilla de la oficina, habían pasado 2 meses desde que Penélope y yo empezamos a tener sexo, pese a tener una relación similar con ella que con Lara, Penélope era mucho más fuerte mentalmente, sabia lo que había y le bastaba, así que siempre que trabajábamos nos escabullíamos a follar, si terminábamos una ronda a pie pronto, o si salíamos a ventas mixtas juntos, Alexis nos puso por que hacíamos buena pareja y vendíamos bien. Otras veces simplemente al salir de trabajar la llevaba a su casa y me invitaba a subir, nos metíamos en su habitación y nos desnudábamos sobre la cama, acariciándonos lentamente y besándonos con pasión, no era la mejor del mundo chupando pollas, pero no me importaba, cuando la metía en su cálido agujero me cabalgaba como la mejor amazona, sus compañeras de piso ya no se cortaban al hacer comentarios cuando nos cruzábamos, la oían gritar y pedir más hasta que pasada 1 hora desfallecía de tantos orgasmos, aprecié que me equivoqué, no era multiorgásmica, solo los tenia muy seguidos, y eran largos, así que unos se mezclaban con otros y eso la dejaba mansa y adormecida, no me duraba ni 2 polvos seguidos, pero me encantaba retocar con ella en la cama, Penélope eran una mezcla de chica normal y mujer exuberante, oscilaba como un péndulo entre ambas, pero no era ninguna de las dos cosas, y eso me gustaba.

Digo que Penélope era una versión más férrea que Lara por que era cierto, cuando la dije que no tenia que tomar pastillas puesto que tenia la vasectomía hecha o cuando la dije que me acostaba con otras, sus reacciones fueran las de una mujer adulta y sexualmente abierta, un ejemplo fue un día en que me llevó a su casa y me folló cuanto quiso, lo digo a si por que no me dejaba ponerme encima, ella se arrodillaba encima mía y me montaba como a su caballo, el sexo con ella había sido bueno pero e no me hacia esforzarme, dominaba la situación hasta caer rendida y después ya no tenia gracia continuar, el problema fue que ese día desfalleció dejándome a medias del 2º polvo. Así que salí de la habitación dejándola adormilada, con una erección descomunal sin saber que hacer, la compañera de piso con la que me crucé en el salón si, era mona y algo regordeta, pero dentro de lo pasable para no llamarla gorda, iba en pantalón de pijama y una camiseta vieja enseñando un hombro, con pelo castaño recogido en una coleta, al verme allí de pie desnudo con la enorme polla mirando al techo, a la que miró asombrada, me fui a por ella, estaba tan ensimismada que no abrió la boca, la cogí en brazos y la tumbé en el sofá desnudándola, solo se reía y sujetó mi rabo con ambas manos para dar crédito a lo que veía, la abrí de piernas y la comí un coño peludo y húmedo para prepararla, metiendo consecutivamente un dedo más para ser 4 los que la masturbaban, gimiendo la sentir mis labios comiéndola unas tetas caídas y feas, al aferrarme a sus senos como asideros y penetrarla empezó a dar gritos superada a todos los niveles, desatando mi furia en ella, estuvo 20 minutos gimiendo sin parar, sin saber que hacer con las manos, si agarrarse el pelo, taparse la cara, acariciarse los senos o cuando me puse serio, aferrarse al sofá para capear el temporal. Sus lamentos placenteros despertaron a Penélope, que salió de su cuarto y vio la escena sin llegar a creérsela, la miraba fijamente a los ojos detrás de esas enormes gafas que le daban un toque sensual, mientras me follaba a su amiga sin prestarla atención. Lara hubiera montado en cólera, estaba seguro, pero ella sonrío, aceptando el hecho, y se acercó a jugar, amasando las tetas de su amiga mientras le besaba, acallando por momentos los gemidos de placer, se corrió como parecía que nadie había logrado hacerla sentir, queriendo salirse de mi pero la tenia tan bien sujeta que no pudo, bañando todo con sus fluidos, mientras Penélope le puso el coño en la cara y se lo hacia comer. En una serie que me hizo sudar dejé “rota” a la compañera de piso en menos de 10 minutos, la dejamos allí, magullada y temblando cuando Penélope se subió encima mía de rodillas mientras estaba sentado en el sofá, metiéndose mi verga y besándome con lujuria, susurrándome al oído lo bien que follaba y como había dejado a su compañera, allí tirada a nuestro lado, mis manos no sabían si ir a sus senos abundantes, a sus caderas amplias o a su culo redondo y bien formado, me cabalgó como la gustaba hasta que me derramé dentro de ella lamiendo sus senos provocando otra serie de orgasmos que estiré con las yemas de mis dedos. Desde ese día su compañera de piso nos acompañaba a menudo en nuestras fiestas, algo que agradecí por que con Penélope sola, empezaba a aburrirme.

Como es normal, los rumores por la oficina corrieron como la pólvora, y muchas de aquellas mujeres guapas y sensuales se esforzaron por venderse a mi, a las que me hicieron gracia, me excitaron o las que consideré dignas, me las tiré, eran solteras, con pareja, prometidas o casadas, hasta una viuda, pero ninguna merece ni ser contada, relaciones esporádicas de sexo bueno o malo, pero que no me aportaban nada, si quisiera sexo sin más, con Lara y mi leona iba más que servido, pero a mi leona casi ni la veía, Lara era un juguete y como os decía Penélope ya me cansaba, por lo tanto si no era sexo lo que buscaba, ¿que era?, estaba claro, la caza, el reto, algo que supusiera una hazaña, meterme con 2 mujeres en el baño y tener sexo hasta dejarla desmayadas no suponía más para mi que comer 2 platos de pasta en vez de 1.Por lo tanto, inconscientemente, empecé a pensar cual seria mi reto en aquella “champions” imaginaria de mi cabeza, la final seria Alexis, lo tenia claro como el agua, pero para llegar allí tenia que pasar rondas.

Alguno puede pensar que volvía a ser un cabrón con las mujeres, y seguro que en parte tienen razón, pero había un cambio que a mi entender era diferente, no me negaba al amor como cuando rompí con Ana, estaba esperando, y solo me divertía mientras tanto.

Penélope ya había caído, la 1º, no era la más sencilla, pero si la menos complicada, un chica de mi edad, estudiante, y con un complejo de inferioridad y poca auto estima, con ayudarla a tener auto confianza se había abierto como una palomita en el microondas, tenia que decidir quien seria la siguiente, Cameron era la elección obvia de nuevo, pero seguía con pareja, un novio que sabia que tenia que estár atento, la llevaba al trabajo y la iba a buscar, llamándola a todas horas, no era obsesivo, era cauto, su chica era cándida e inocente, alegre, amistosa y muy dada al contacto físico sin venir a cuento, agarrando del brazo, pasándote la mano por la espalda, abrazando, besando, o dando masajes en los hombros, una chica tan pizpireta que rozaba la estupidez, tenia la sensación de que si la decía que mi polla concedía deseos la frotaría un buen rato antes de entender lo que pasaba. Con lo cual era normal que su novio no la dejara sola, y era un tipo grande, casi como yo, una versión de mí, pero con el pelo corto y tomando anabolizantes, pese a tener unos brazos el doble de grandes que los míos, intuía que no tenía tanta fuerza como parecía aparentar, pero no iba a jugármela a averiguarlo.

La siguiente en la lista seria Pamela, si, era mayor y no es que deslumbrara, pero sabia moverse, era sensual y elegante, casi me recordaba a Eleonor, pero una versión castiza, rubia de ojos claros, con la piel morena de haber pasado mucho tiempo en playas y aparatos de rayos uva, una mujer florero que se había quedado sin nadie a la que agraciar con su presencia, Hugh, el otro varón de mi curso, iba detrás de ella, llevaba meses, y si por entonces no tenían nada, es que no lo tendrían, pero me bastó para saber que no seria fácil, Hugh era apuesto y destilaba una serenidad atractiva, pero ningún truco le funcionó, ella era demasiado avispada, se dejaba camelar hasta cierto punto, pero siempre le daba largas. La otra opción era Kate, pero era un misterio de mujer, mientras que con todas tenia mejor o peor relación, con ella no había, éramos 2 compañeros y casi extraños, era educada y hablaba lo justo para que, con su ojos verdes y escotes agradables, no pasara desapercibida, sus gestos eran de mujer mucho más adulta, me sacaría un par de años solamente, y su cara era una pared, casi congelada, con una sonrisa estudiada que no sabia leer, no diferenciaba si se reía de verdad o fingía, me tenia desconcertado, y eso, como no, me atraía, pero todo intento de acercamiento había sido en vano, además Alexis la tenia mucho afecto, casi como a una discípula, vendía muy bien, y si yo era la novedad para las mujeres, Kate lo era para los hombres, por lo que se decía ya había dejado en ridículo a 4 de los que le habían entrado.

Por lo tanto mis opciones eran pegarme con el novio de una, luchar por ganarle la carrera a Huhg con una madura experta, una mujer casi impenetrable en todos los sentidos y mi jefa, una despiadada depredadora de los negocios a la que la tenia más miedo que respeto, había echado a 10 personas de su equipo, algunos que llevaban años, por que vendieron menos que yo en un mes, y luego me decía a mi que como bajara el ritmo me iba detrás con ellos. Eso no seria problema, mis ventas caían solas, en teléfono seguía siendo de los peores, alguna hacia, en la calle con Encarnación era bueno, pero en las mixtas de Alexis me lucia junto a Penélope, hacíamos muy buena pareja, y después de enseñarla unos trucos, comprarse algo de ropa más sugerente, y entender el rol en la venta, hacíamos suficientes seguros, incluso me guardaba algunas para meses flojos, como la de la madre de la última visita antes de follárme a Penélope por 1º vez, teníamos una “conversación” pendiente del un seguro de hogar.

Así que como no sabia que hacer, dejé que el destino o el universo hablara, me solía pasar, siempre he sido algo indeciso cuando tengo muchas opciones en igualdad de condiciones, en una tienda de golosinas, al elegir el sabor de un helado o al comprar ropa, así que aprendí de mi padre, si lo recordáis en la mudanza del piso con Ana, el se quedaba a solas, mirando al horizonte, deleitándose con algo que no estaba allí, si no en su cabeza, dejando pasar el tiempo, y eso hice, me dediqué a esperar, a cruzarme de brazos y que la oportunidad llegara a mi, mi conclusión era que si yo forzaba las cosas podía salir mal parado de muchas formas. Esperé, “conformándome” con Lara y Penélope, a mi leona la dejé de lado, en parte por que no se me ocurría que más hacerla, bueno, técnicamente no es cierto, se me ocurrían muchas cosas, pero todas acabarían con su matrimonio, y pese a que juraría que eso no le importaba cuando me pasaba mínimo 3 horas acostándome con ella y mordiendo aquel hombro curtido, no quería hacerla eso.

Aguardé a ese momento en el que el mundo te habla, y solo tienes que estar atento, y ese momento llegó, me tocaba ronda en la calle con el grupo de Encarnación, esta vez me acompañó Cameron, y usé mi encanto para hacer pareja con ella, no iba a forzar nada, pero tampoco me iba a alejar, se alegró excediéndose, como siempre, se abrazó sacando la lengua al resto, seguramente sabia que yo vendía y conmigo no tendría problemas para hacer el mínimo, iba arreglada, con un peinado liso en su media melena rubia que se estaba dejando, maquillaje excesivo, con mucho colorete y una sombra de ojos grande, eso la resaltaba unos ojos azules mezclados con miel, con uno de esos piercing que odio en un lado de la nariz, no de aro si no como un lunar, vestía con unos vaqueros gordos que llenaba bien con un culo respingón, botines que la estilizaban y debajo de un largo abrigo marrón un top interior blanco debajo de una blusa rosa, ni trasparente ni opaca, cómoda pero atractiva, para patearse las calles no necesitaba más para deslumbrar.

Vender con ella era una delicia, a puerta fría es muy difícil, no solo tienes que vender, si no que te enfrentas a gente que hasta hacia 2 minutos no se planteaba cambiar de seguro, así que normalmente no tienen tiempo ni ganas de escucharte, has de ser rápido y caer bien, y si a mi se me daba bien, ella era increíble, lo mejor es que, o era tan buena que parecía natural, o era natural, y una chica tan agradable a la vista y de carácter se ganaba a cualquiera, era la antítesis de Penélope, abierta, extrovertida y dulce. Así que tragándome mi orgullo, la dejaba llevar la voz cantante, se metía a empresarios en el bolsillo en minutos, o a hombres en sus casas, a familias enteras, y cuando su encanto natural no bastaba, entraba yo. Empezamos a las frías 8:30 de la mañana y antes de las 12:45 ya teníamos 9 ventas confirmadas y 3 más a la espera de detalles, decidimos ir a por un último intento a una tienda. Cuando se ganó al propietario y yo le comía a oreja, la entró una llamada, disculpándose con educación exquisita, apoyándose en el brazo del autónomo y luego en mi hombro, se alejó para contestar y luego la perdí de vista, la venta se fue al traste en cuanto ella se fue, por muy bueno que fuera yo no podía competir con intuir el contorno del top blanco bajo la blusa translúcida, me despedí con serenidad hasta la próxima vez y me fui buscándola, la vi en la calle con el móvil en la mano.

-CAMERON: si cari……..pero me hace ilusión…….ya lo sé, pero es que ya tengo las entradas……..pues eso me lo tienes que decir antes cari, llevo meses preparándolo todo, tengo el hotel y los trajes, ahora no me puedes decir que no…..bueno pues lo hablamos luego en casa, pero que sepas que no me gusta nada que me hagas esto – colgó y por 1º vez desde que la vi, al mirarme no sonrió alegre, suspiró tensa unos segundos y de golpe volvió a ser ella.

-YO: ¿que ha pasado? me has dejado tirado…….

-CAMERON: si, lo siento… – puso carita de lastima cogiéndome del antebrazo –… cosas de mi chico.

-YO: ay el amor……….

-CAMERON: jajaja que no haríamos eh…. - se dio un leve golpe en la frente con la palma de la mano – ….¿y la venta?

-YO: se ha ido a la mierda, te quería a ti, no al seguro – soltó una de sus sonoras carcajadas golpeándome en el pecho.

-CAMERON: ¡de verdad como eres!, es que no puedo contigo….- ni había pretendido que fuera una broma, pero ella era así.

-YO: ¿que te parece si nos metemos en algún sitio a descansar y calentarnos un poco?

-CAMERON: pues te lo agradecería…. – se frotó las manos, era finales de febrero y aun no pasábamos de los 14 grados a medio día.

Nos metimos en una super hiper mega conocida cadena de cafeterías, aprendí que a las magdalenas, bizcochos y trozos de tarta ahora los llaman brownies, muffins y cupcakes, y que te pueden clavar 6€ por un café de leche de soja y no reírse en tu cara, ella se reía cuando estás apreciaciones, u otras parecidas, las comentaba con el que nos atendía, y como tardan 2 años en darte el jodido café, te mandan a sentarte pidiendo un nombre para llamarte después, le susurré unas palabras al dependiente que no se creía, y nos fuimos a sentar, charlamos un poco sobre tonterías, quería saber que nombre le había dado, pero me hacia de rogar hasta que llegó el instante.

-DEPENDENTE: señor …..– se dirigía a mi pero le ignoraba – …..señor su pedido…..- suspiró al entender que no me daría la vuelta, sujetó un pequeño micro y carraspeó levemente – ….El pedido del señor “esto es un timo” esta listo, por favor, “esto es un timo” pase a recogerlo – rompí a carcajadas con Cameron que se estaba poniendo roja de reírse, acudí a recogerlo con la mirada airada de los dependientes, aunque alguno se reía por dentro, y le di su café a ella, seguramente habrían escupido en él o algo, pero con tanta mierda aromática no se notaria.

Como yo no bebo café me pedí un batido de chocolate de una nevera que tenían y me deleité viéndola comerse un trozo de pastel, al acabar se limpió gustosa, pero pese a charlar andaba en una discusión colérica con su novio por mensajes, su rostro se agriaba y vi el atisbo de una oportunidad.

-YO: ¿que te pasa hoy?

-CAMERON: nada, que estoy intentado hacer una cosa con mi chico y no quiere.

-YO: que peligro tienes…..¿que querrás hacer que un hombre no quiera hacer contigo? - sonrió halagada.

-CAMERON: no es nada guarro jajajaja, pero me parece que se me ha chafado el plan……- languideció unos segundos.

-YO: pues por el bien de todos mejora ese ánimo, eres demasiado bonita para no regalarnos tu sonrisa – torneó los ojos con cara de princesa enamorada, agarrándome me la mano y acariciando con su pulgar.

-CAMERON: jo, muchas gracias, eres muy mono – (TRADUCIÓN: si una mujer le dice a otra que un chico es mono, quiere decir que le parece atractivo, si una mujer te dice eres mono, quiere decir que te agradece los esfuerzos, pero no hay nada que hacer.)

-YO: y si puedo preguntar, ¿que es lo que no quiere hacer?

-CAMERON: jajajaa nada, un fin de semana que nos íbamos a pasar juntos en un sitio…..- la miré sorprendido.

-YO: ¿que tu novio no quiere irse contigo….– señalé su cuerpo con galantería mostrándola la evidencia de que era preciosa –…. un fin de semana por ahí? ¿Es gay?

-CAMERON: jajaja no es eso, es que…….no es solo irnos……íbamos a haber una cosa especial y no le parece bien.

-YO: como no me digas más……

-CAMERON: es que me da un poco de vergüenza………

-YO: ¿a ti?

-CAMERON: jajaja si, es que verás……siempre que se lo digo a alguien, me miran raro….no me gusta airearlo por que la gente se piensa cosas raras, y no me toman en serio.

-YO: seré una tumba – me puse la mano en el pecho.

-CAMERON: es que….- se agachó haca mi, hice lo mismo temiéndome que dijera alguna de las cosas que se me estaban pasando por la cabeza, ninguna la dejaba en buen lugar - ….me gusta….vamos……que me atrae el mundo…….del anime – lo soltó quitándose un peso de encima, entre susurros y me miró esperando alguna respuesta que habría visto cientos de veces, pero no la encontró.

-YO: ¿y que?, ¿a mi también? – sonrío sorprendida.

-CAMERON: ¿eres otaku? – la miré perplejo, y se decepcionó.

-YO: ¿otuque?......

-CAMERON: jajajaja, otaku, es una fiebre por todo el tema japonés, anime, manga, juegos…….todo un poco.

-YO: buenos, eso no es raro, también de pequeño veía series.

-CAMERON: ¿cuales?

-YO: pues a mi hermana le gustaba poner la de las chicas estas de instituto que luchaban transformándose con alguna cosa de la luna……..

-CAMERON: slailor moon – esbozó una sonrisa que no entendí.

-YO: si, esa, la de oliver y benji…….marco, heidi, con chicho terremoto me reía mucho, y luego ya llegó la locura con los pokemon ….– me esforzaba por hacer memoria, cada cosa que decía la iluminaba el rostro –… me pillé hasta los juegos portátiles y todo – volvió aquella sonrisa extraña.

-CAMERON: ¿tienes todos los juegos?

-YO: no, que va, se que luego han sacado muchas ediciones pero yo me quedé en la 2º, a partir de ahí lo dejé un poco.

-CAMERON: pues hiciste bien, a partir de ahí lo han ido enrevesado y es una mierda…. ¿y que más? – puso los codos en la mesa apoyando su bonito rostro en sus puños cerrados, mirándome encantada.

-YO: bueno, luego estaban los digimon pero no duré mucho viéndola y dejé de ver esas cosas, mi vida cambió un poco después de aquello – justo en la operación, mi vida friki sufrió un vuelco.

-CAMERON: ¿y de anime has visto algo?

-YO: pues si, mucho hentai……- soltó una carcajada enorme.

-CAMERON: ¿en serio? – se ruborizó.

-YO: hombre, algo…pero no, de anime nada, salvo……un amigo me recomendó una serie…..¿como se llamaba…….? - “joder, cerebro, no me falles”.

-CAMERON: ¿de que iba?

-YO: era de unos cuadernos donde escribías un nombre y……..

-CAMERON: death note, muy buena – lo dijo como si fuera un respuesta por tiempos en un programa de la TV.

-YO: esa, me gustó bastante aunque el final me pareció que bajo el nivel – me la jugué por que para mi era así, si le gustaba a ella podía meter la pata, pero si acertaba y le parecía igual a ella, me anotaba un punto.

-CAMERON: si………es que al final se desviaron y alargaron un poco todo – suspiré disimuladamente.

Nos pasamos 1 hora hablando de aquello, de series de la infancia, de anécdotas, recreándome en las primeras ediciones de pokemon que eran las que me sabia, y de mil hostias que no vienen al caso, lo que importaba es que había encontrado un sitio por donde llegar a ella.

-YO: bueno, ¿y que es eso que tienes planeado con tu chico?

-CAMERON: jajajaja es que en una semana es la convención de manga y animación, es en Barcelona y me he pasado meses invirtiendo tiempo y dinero para ir, tengo unos trajes para mi y para él, muy logrados y hasta la habitación de un hotel, me he esforzado mucho por que quiero ir y pasármelo bien, pero a mi chico no le gusta todo esto.

-YO: ¿por que no?

-CAMERON: pues no lo sé, vamos que a él le gusta el fútbol y se paga sus entradas de mi dinero y no le digo nada…- 1º palo a su pareja que la escuchaba.

-YO: pero si te has molestado y esforzado tanto, debería de aceptarlo, aunque solo sea por complacerte – torció el cuello levemente, le gustaba lo que oía.

-CAMERON: ¡¡a que si!! Pero nada, luego hablaré con él, pero me da que me quedo sin ir, el me llevaba en coche y dice que tiene planes en Madrid, y que no va.

-YO: ¿y por que no vas tú sola, con alguna amiga?

-CAMERON: por que ir sola es un aburrimiento, mis amigas van todas con su pareja, y ninguna sale de Madrid, yo quería que él viniera, pero se niega, dice que no va hacer el ridículo disfrazándose.

-YO: a ver, es que si le vas a poner de magikarp aleteando en el suelo, mientras estás gritando “salpicadura” yo me lo pensaba – se descruzó de piernas riéndose nerviosa.

-CAMERON: tú y todos, jajajajaa pero no, son cosplay de personajes, disfraces muy trabajados para ser casi copias en la vida real, pero no lo entiende y se enfada.

-YO: pues que le den por saco, si no te entiende que le den y vete tú.

-CAMERON: no me voy a ir sola……

-YO: coño, pues busca a otro amigo.

-CAMERON: es que los trajes son a medida para él, no le valen a cualquiera.

-YO: a alguien conocerás de su talla – “yo, por ejemplo”.

-CAMERON: pues no se, tendría que pensármelo.

La comía la cabeza hasta casi convencerla, y luego la dejé pensar unos días, para que el agobio y la angustia la turbaran la mente, 3 días después, al verme en la oficina me pidió que comiéramos juntos, no tendría problemas, Penélope y yo teníamos un par de visitas y me la follaría hasta la hora de comer, así que cuando dejé a Penélope, y a su compañera, dobladas en la cama, me di una ducha rápida y fui a recogerla al trabajo, llevándola a comer e invitándola como un caballero, o como un cazador dejando cebo.

-CAMERON: muchas gracias por venir.

-YO: a ti por invitarme, ¿como van tus planes?

-CAMERON: mal, mi chico se niega y no cede.

-YO: ¿entonces no vas?

-CAMERON: no………..bueno……..podría ir….pero……

-YO: habla, que pareces tartamuda.

-CAMERON: es que no voy a ir sola, pero quiero ir, y le he dicho que o se viene él o me acompaña otra persona, pero que yo me voy.

-YO: pues muy bien por ti, me alegro.

-CAMERON: claro, pero ahora necesito a alguien para ir, y que me lleve, por que me ha dicho que si no va, no me va a llevar en coche, encima tendría que valerle el traje…..- aguantaba la sonrisa de victoria para no delatarme.

-YO: pues busca, alguno habrá.

-CAMERON: ya lo he encontrado……tú – se sonrojó al poner cara de súplica.

-YO: ¿yo? – fingí sorpresa.

-CAMERON: si, aunque si no quieres no, pero es perfecto, te gusta un poco ese mundo, tienes coche, confío en ti y eres casi como mi chico, aunque tienes algo más de espalda…..

-YO: y menos brazos, si me ve contigo me cruza la cara – me cogió la mano con dulzura.

-CAMERON: si se molesta que venga él, aunque a estas alturas casi prefiero que no venga él y vengas tú.

-YO: no se, me parece un poco raro.

-CAMERON: te lo pido como amiga desesperada, he pensado en alguien más pero nadie puede, eres el único…….si no vienes tú..…no podré ir – “me lo está vendiendo”, sin opciones, usando la lastima para convencerme de algo que yo quería hacer, pero no debía parecerlo.

-YO: mira, no me importa hacerte el favor, pero…….- ella ya taconeaba ansiosa - …….que sepas que me parece muy raro, no conozco a nadie salvo a ti.

-CAMERON: tranquilo, yo cuidaré de ti……- aferrada a mi mano sobre la mesa, con su cara nítida y preciosa rogándome con los ojos, susurrando “por fi” como una cría.

-YO: está bien, pero con mis condiciones…..- asintió gloriosa de su supuesto logro - …….yo te voy a recoger a tu casa, yo pago gasolina, yo cuidare de ti, no te separarás de mí, y te dejo en tu casa sana y salva, solo lo haré si aceptas estas condiciones – explotó de alegría poniéndose en pie.

-CAMERON: ¡¡¡si, si quiero acepto!!!! – rodeó la mesa dando brincos y me puse en pie para recibir su cálido y emotivo abrazo, dándome besos en la mejilla por mil sitios, la gente empezó a aplaudir, entendiendo que le había pedido la mano o algo así.

-YO: jajajaj calma pequeña, ni que te hubiera pedido matrimonio – sonrió al cogerme de la cara.

-CAMERON: ahora mismo te diría que si y todo jajaja – volvió a dar brincos colgada de mi cuello.

Mientras rodeaba su cuerpo con mis manos, la ligera minifalda con vuelo que llevaba se levantaba de los saltos enseñando medio culo con las bragas incluidas, todo varón de ese lado del restaurante se deleitó con aquel gesto, quise taparla con la mano pero no quería jugármela a perder lo ganado por meterla mano en el culo, y a ella no le importaba nada enseñar, tan alegre era que mostrar la ropa interior no era una incomodidad para ella. Al salir la llevé a su casa y me insistió a subir, me creí con suerte, pero solo quería probarme los trajes, me quedaban bien aunque tensos en la espalda y holgados en los brazos, no reconocí de que eran, tenia la vista perdida en ella, era un vaso a rebosar de felicidad, acariciándome y cogiéndome medidas, con una tormenta de abrazos, incluso en uno de ellos mi mano se fue por instinto a su culo, pero apenas fue un roce y o no se dio cuenta, o no le dio importancia, total, ya mis manos habían repasado toda su cintura y sus costados muy cerca de sus senos, algo pequeños para mi gusto, Lara era una vara de medir cruel y todas salían perdiendo con ella. La dije que me mostrara sus disfraces, intentado verla cambiarse de ropa como había hecho conmigo, me dejó en slips sin mostrar atención aparente a mi rabo marcado, estaba tan ilusionada que no se dio cuenta, pero con un contoneo suave me dijo que solo allí podría verla disfrazada, “así te chantajea para que no te rajes” pensé con una sonrisa fría y taimada.

Me fui a apagar mi calentón con Lara, por aquel entonces su coño se había cerrado, solo me la follaba por el culo, así no tenia que contenerme en el sexo, y a ella le encantaba el anal, ya por lo menos no parecía un gorrino abierto en canal cuando la bestia la dejaba un agujero del tamaño de una naranja en el culo, y sus enorme tetas con sus deliciosos pezones hipersensibles la dejaban a mi merced, había comprado un juegue sexual, un correa corta de metal con una pinzas pequeñas en cada extremo, se las ponía en los pezones duros y al soltarla los senos el propio peso de ellos hacia que quedara la cadena tensa, tirando constantemente de sus pezones juntándole los senos, así lograba follármela 4 veces seguidas sin que se desmayara, al acabar se lo quitaba y me pasaba horas, literalmente, lamiendo y jugando con sus pezones doloridos y sus tetas, me encantaba llenarlas de nata, chocolate, batidos o lo que encontrara y lamer despacio, con calma, de forma desesperadamente tenue. Al salir me encontré con Alicia y su novio, o algo así, aun no se habían decidido.

-ALICIA: por fin habéis acabado eh….- me senté junto a ella para alejarme de aquellas tentaciones en forma de pechos de diosa.

-YO: puffffff esa niña va acabar conmigo.

-ALICIA: mira, te presento a Lorenzo, es……. un amigo…..- me pareció escuchar un punzada directa al corazón de Lorenzo al oír “amigo”.

-LORENZO: encantado – me dio la mano con fuerza, como me gustaba, al verle entendí que a Alicia le atrajera, era rubio con un peinado alegre, medio largo, dejando caer cataratas doradas a los lados de la cara, bien parecido y con los ojos verdes, casi 1,86 calculé a ojo, fornido y esbelto, cualquier mujer se quedaría mirándolo.

-YO: Raúl, un placer….. – le devolví el saludo sin soltarle la mano con energía -……. más te vale cuidar de mi hermanita, como te pases lo más mínimo con ella te jodo la vida – Alicia soltó una gran risa para evidenciar la broma, pero Lorenzo y yo nos miramos como los hombres sabemos, él tragó saliva, estaba dejándole claro al soltarle la mano que era una amenaza muy poco velada.

-ALICIA: no seas brusco, es un chico muy agradable.

-LORENZO: eso espero…..- rodeó a Alicia por encima del hombro con un brazo, eso me enervó un poco, aunque no tenia por qué - ……..pero no te preocupes, cuidaré bien de ella.

-YO: me traes algo de agua de la cocina Lorenzo, estoy sediento….- asintió entendiendo el por qué, una morena de senos enormes medio ida en la cama del cuarto del que había salido.

-LORENZO: no me extraña…..- Alicia le dio una palmada cariñosa al irse.

-YO: oye, me alegro un montón de que por fin hayas encontrado a alguien – mentí, no lo sabía, pero mentía.

-ALICIA: no es nadie, solo un amigo….- la miré para dejar claro que eso no colaba.

-YO: ¿y me presentas como si fuera tu padre a todos tus amigos?, si quieres le doy mi bendición y tu mano….. – me pegó fuerte, sabiendo que no me hacia daño - …….tendré que acertar que mi pequeña ha crecido y dejar que hagas tú vida con él, lejos de mi…..- el tono de broma y dramático la hizo sonreír.

-ALICIA: cállate y no hagas el bobo.….– me abrazó con lentitud y cariño –…. has sido un gran hermanito, y te necesito en mi vida – la rodeé con mi enorme cuerpo en comparación con ella, abrazarla me producía una sensación de calidez extraña, la alejé al ver salir a Lorenzo de la cocina con él vaso en la mano.

-YO: parece buen chico, pero si pasa cualquier cosa, avísame y lo destrozo - la susurré al oído, ella asintió agradecida.

-LORENZO: toma.

-YO: muchas gracias ….– me bebí el vaso de un trago –…. bueno, que sepáis que el fin de semana me voy a Barcelona con una amiga.

-ALICIA: como no…..

-YO: pues eso, no os portéis mal sin mi.

-ALICIA: si nos portamos mal es precisamente por que estás tú….- me sacó la lengua con gesto feliz “dios, si no fuera ella…..”, pensaba mientras veía como Lorenzo estaba fuera de sitio ante aquella complicidad entre nosotros hermanos.

Cameron – En la convención de cómics.

Llegó el vienes e hice ronda, 1º con Penélope y su compañera de piso después de unas ventas mixtas, antes de comer, luego fui a casa de mi leona a dejarme bien vacío, si no pasaba nada con Cameron al menos no estaría desesperado, y luego por cumplir con Lara, creía que iba vacío de casa de mi leona pero al verla salir de la ducha para ir a recoger un par de mis cosas, no me detuve y la destrocé en la ducha, mi capacidad de recuperación y de aguante me sorprendía a diario. Acudí fresco y relajado con una mochila nada más, un neceser, ropa intima y un poco de ropa, no tenia intención de ir vestido mucho tiempo, al llegar y verla despedirse de su novio me tensé, el chico tenia una cara que daba pánico, ella trataba de relajarlo con caricias y besos, por suerte intuía algo así y fui con cierta ropa al encuentro que me disimulaba cuerpo y parecía más un yonqui que otra cosa, me bajé y saludé cordialmente, dejé que aquel mostrenco hiciera su ritual, un apretón de manos tan fuerte que me crujió la mano, algunas miradas y palabras contundentes, me dejé amedrentar, no estaba allí para ganarle el duelo de gallitos, si no para follárme a su novia, y si pensaba que yo era un mierda asustado de él, se quedaría tranquilo y no daría problemas.

Cargamos un par de cajas y una maleta enorme en mi coche, llenando el maletero y los asientos de atrás, todo de ella, mi mochila apenas ocupaba, Cameron iba con una falda larga, zapatos planos y un suéter, cómoda más que bonita, pero aun así se le notaban las curvas, así puestos arranqué mientras ella se despedía de su chico, ni su afabilidad le relajó el rostro, “haces bien en no confiar, pero esto es culpa tuya, dejar a esta preciosidad sola te va costar llevar unos cuernos como tus brazos” pensé. Al salir de Madrid paramos en una gasolinera, jugamos a ver quien pagaba, pero solo por rozarme con ella, iba a pagar yo, y así me cambié un poco el aspecto, quedándome en camiseta ajustada y pantalón corto, marcando polla, teníamos casi 5 horas de viaje por delante y yo seria su única distracción.

El camino se me hizo corto, incluso parando cada 2 horas para estirar las piernas y comer algo en un pueblo de Zaragoza que mi padre me recomendó, nos pusimos tan cebados que caminamos un rato por la calle para bajar los estómagos hinchados, en eso mi padre no fallaba, se conocía España y los mejores sitios de cocina como su propia mano por sus años de camionero, y emprendimos la marcha otra vez, hubiera durado apenas 2 horas más, pero fuimos por carreteras sin peajes, y todo aquel que haya ido por Cataluña sabe lo que eso significa, muchos rodeos, hasta que llegamos al hotel de 3 estrellas, casi a las 21 horas de la noche, ninguna maravilla pero muy cerca de la convección, al entrar en la habitaron me sorprendí de ver solo 1 cama de matrimonio.

-YO: no te asustes, pero yo solo veo una cama.

-CAMERON: jajaja claro bobo, si la reservé para mi chico y para mi.

-YO: ya, pero yo no soy tu chico – deseaba dormir en la misma cama que ella, pero tenia que hacerme el recto.

-CAMERON: estas habitaciones están resembradas desde hace semanas, llamé para cambiarlas pero ya están a tope y no podían.

-YO: pues entonces ese sofá de ahí parece muy cómodo, y estoy cansado, así que tú me dirás el plan de mañana por que me voy a dormir.

-CAMERON: no, tonto, duerme en la cama, has estado conduciendo y te vendrá bien.

-YO: ¿y vas a dormir tú en el sofá? ni hablar….

-CAMERON: no, dormimos los 2 en la cama – lo dijo con un tono burlesco, como explicándoselo a un crío pequeño.

-YO: no, eso es casi peor.

-CAMERON: oye, ni que tuviera lepra o algo - puso los brazos en cruz riéndose.

-YO: no es eso, es que si dormimos juntos………quizá no te contengas – la frase era lapidaria, pero con el tono de burla que le di su risa se oyó por todo el hotel.

-CAMERON: ya, claro, ahora el ligón de la oficina me tiene miedo……

-YO: ¿ligón?

-CAMERON: claro, no soy sorda ni ciega, todas hablan de ti, pero tranquilo, podemos dormir juntos sin que tus encantos me nublen el juicio – “eso crees”

-YO: en serio, yo…..- se pegó a mí quitándome las bolsas de las manos y con alegría empujándome a la cama.

-CAMERON: tú descansa, yo me voy a dar una ducha – se agachó sobre su maleta para sacar unas cuantas cosas, regalándome su culo marcado bajo la falda.

Se fue a duchar y me reprimí, no me podía meter en la ducha de golpe con ella, pero lo deseaba, imaginar su estilizado cuerpo mojado por el agua me la puso dura, tan ensoñado estaba con la imagen, y tan cansado del viaje, que me quedé dormido así, el chirrido de la puerta de la ducha me despertó un poco, entrecerrando los ojos vi su sombra caminar por la habitación, se quedó pegada a los pies de la cama, la escuché mascullar algo, seguramente de mi polla dura sin slips marcada bajo un pantalón corto, daba ligeros toques en la cama diciendo mi nombre, pero no reaccioné, ni cuando amagó con pegarme en la cara, así que se retiró abriéndose la toalla del cuerpo, abrí un ojo para verla de espaldas a mi secándose con la toalla, pasándola por sus piernas encorvándose, mirando de reojo por si yo la miraba, pero yo no la miraba a ella si no al espejo del otro lado de la habitación, sin darse cuenta para darme la espalda a mi me estaba mostrando todo su frente desnudo, sus tetas me sorprendieron, parecían más grandes sin sujetador, y un vientre liso y trabajado, con un pubis cubierto por un línea delgada de bello rubio, cuando se agachó para secarse el pelo vi su culo desnudo, con unas portentosas caderas, se dobló buscando unas bragas en la maleta y se las puso de forma sensual, y luego una camiseta vieja por encima, untándose algún tipo de crema corporal, y acostándose a mi lado, cerré los ojos para no delatarme y creo que se quedó mirándome unos minutos, yo me contenía la risa, ella más de 1 hora de ritual para acostarse y yo caí desplomado, dormía vestido y todo.

Al hacer el gesto de recostarse movió la cama y me “desperté”, la di las buenas noches, pellizcándola la cintura y me fui al baño a masturbarme con aquella imagen en mi mente de su cuerpo desnudo, me di una ducha rápida y salí solo con unos slips, para tumbarme a su lado, ya estaba dormida y se me ocurrió tarde cambiarme cerca de la cama para regalarle mi cuerpo desnudo a ella si quería mirar, pero el cansancio me podía y me dormí tan fácilmente como antes.

Me despertó la incomodidad de mi verga dura encerrada en los slips, mis empalmes mañaneros me preocupaban, estando con mujeres o solo, daba igual, cada vez que me despertaba la tenia como una estaca, miré el reloj acostumbrándome a la luz del día que se colaba por una ventana, eran las 7:15 de la mañana, había dormido casi 9 horas seguidas, del tirón y sin desvelos, algo que hacia mucho que no me pasaba, esta vez mi empalme tenia sentido, la colcha nos tapaba a ambos, y ella aun dormía, estaba tumbada de lado dándome la espalda y yo pegado a su cuerpo con mi pecho en su espalda y mi polla en sus bragas, con uno de mis brazos rodeándola metido por dentro de su camiseta, sentía en el dorso de la mano uno de sus pechos, “joder, no paro ni dormido”.

Sonreí al sentir el dulce olor a fresco de su pelo con mi nariz a unos 10 centímetros de su nuca, el otro brazo se había metido por dentro de la almohada debajo de su cabeza, donde ella la reposaba, me encantaba despertarme así, pero esta vez aquella mujer no era mi amante, por el momento, eso no evitó que no me moviera un ápice para retirarme. Mis dedos acariciaban con suavidad a piel de su vientre, si estaba dormida, o no, solo lo sabia ella, pero comenzó a ronronear, a gimotear y moverse lentamente, sacando el culo aprisionando mi rabo en su trasero, suspiraba mientras mis dedos recorrían desde la goma de sus bragas en el bajo vientre a su escote, sin coger ni agarrar nada, solo pasándolos de arriba a abajo, comenzó a hablar entre susurros, decía el nombre de su novio entre otras palabras, y al poco tiempo su trasero se frotaba lentamente contra mi, eso me hizo valiente y subí mi mano a uno de sus senos, siempre con suavidad , las yemas de los dedos recorrieron sus aureolas y noté sus pezones duros como diamantes, ella respondió abriéndose de piernas, así que mi mano bajó haciendo círculos hasta su entrepierna, palpado ligeramente por encima la tela húmeda de sus bragas, un gesto de su mano me sorprendió así que volví a su ombligo disimuladamente, pero no se sobresaltó, y su mano fue a su espalda, a buscar a “su chico”, pero se encontró con “mi chico”, lo palpó con torpeza y lo acarició de forma inconsciente, siguiendo el largo hasta que, supongo que consciente o no, le sorprendió que fuera tan grande. Se tensó, si estaba despierta por su tamaño, y si no lo estaba por comprender que aquel no era el miembro de su chico, cerré los ojos y seguí “durmiendo” sin moverme, ella lentamente salió de la cama, oía su respiración agitada, así que me giré sobre le hueco que había dejado remoloneando, y diciendo el nombre de Ana en sueños, “no, no te vayas Ana, quédate un poco más”, aquello era casi irrisorio, como cuando un crío finge estar malo para no ir al colegio, se notaba a la legua el ardid, pero ella se lo tragó, o quiso hacerlo, un suspiro de alivio se escuchó y luego un largo silencio, ¿estaría comprobando sus pezones duros, su cuerpo caliente, notando la humedad entre sus muslos, o pensaría en lo que haba palpado levemente?, no lo sabia y eso me encantaba, luego escuché como se iba a la ducha, y tardó bastante, de nuevo las dudas, ¿agua fría para serenare o agua cálida entre sus piernas?, hice mi jugada y me quité la colcha, quedando boca arriba durmiendo, me saqué la punta del miembro por la pernera del slip, y así cuando salió debió de mirar un buen rato, la escuchaba vestirse pero no me atrevía a mirar, y cuando no sabia que pasaba sentí un salto sobre mi pecho, la fuerza de su cuerpo cayendo en mi estomago, arrodillada y gritando.

-CAMERON: ¡¡¡vamos dormilón, estamos en Barcelona!!! - sobresaltado de verdad por el golpe fingí despertarme asustado, y mis manos fueron a sus piernas, palpando unos vaqueros negros ceñidos, con una blusa blanca en la parte de arriba y sin maquillar.

-YO: ¡¡dios……joder…..¿no sabes que es peligros despertar así a la gente?!!

-CAMERON: pobre flor delicada…….- pasó sus dedos por mi pecho - ….¡¡vamos!! es temprano y tenemos buffet libre abajo para desayunar, luego quiero ir a pasear y ver la ciudad, hasta las 5 no empieza la convención, tenemos tiempo de comer por ahí y ……..- de golpe frenó su lengua, debió de pensar que yo no era su novio y no podía decirme que hacer - …..oh…bueno, si tú quieres….- me alcé sobre mis brazos quedando muy cera de sus senos, y mis manos ascendieron hasta sus caderas, dejando unos segundos en que nuestros ojos se fundieran y ella dudara de que iba a pasar.

-YO: es tú vida, tuú viaje, tus planes, mandas tú y mi deber es obedecerte, para eso estoy aquí, así que vamos a donde tú me digas – sonrió tapándose la boca con sus delicadas manos, y se agachó a llenarme de besos la cara, tantos que alguno fue a parar a mis labios, pero estaba radiante de felicidad y no le dio importancia, saltó de mi saltando por la habitación y gritando.

Aquella mujer era completamente inconsciente del efecto que tenia en la gente, de lo que hacia y de las consecuencias, se comportaba como una niña de 8 años, así que el plan era fácil, darla todo lo que quería hasta que no aguantara más y llevaba por la felicidad cayera en mis brazos. Me fui a darme una ducha helada, y ni así se me bajó el empalme, por suerte tenia en la cabeza mucho con lo que poder masturbarme, pero no se cuanto soportaría por ella aquella situación, me vestí con la poca ropa decente que llevaba, y salimos al buffet, comimos como demonios, y luego nos fuimos de paseo por Barcelona y sus alrededores, la diagonal y la sagrada familia, esa eterna obra de arte en obras, fotos, risas y mucha diversión pese a que el frío de la época y el mar cercano hacían una temperatura poco agradable para ir por la calle, con ligeras lluvias cortas. Hacia todo lo que me pedía, incluso nos colé en algún sitio para que ella lo viera, la metía mano de forma disimulada en un curso exprés de saber hasta donde podía llegar, pero ella solo reía e ignoraba mis manos en su culo al caminar, metidas en el bolsillo trasero de sus jeans negros, o mi brazo sobre su hombro cogiéndola de la mano, parecíamos la pareja perfecta, ella no se cortaba más que yo, abrazándome de forma constante, metiendo sus manos por dentro de mi chupa de cuero en busca de calor, o al caminar, y sentir mis dedos en su culo, meter su mano entre el cinturón de mis vaqueros y el propio pantalón, manoseando mi torso. Ella estaba en una nube de felicidad y alegría, y no iba a dejar que bajara de allí, parándonos a ver a los muchos artistas callejeros, bailando y cantando con ellos, ninguno teníamos vergüenza pero mientras yo era consciente de que estabamos haciendo el tonto, ella no, para ella era normal ese estado de desinhibición.

Comimos donde quiso y la llevé en brazos al coche cuando dijo que estaba muy llena como para caminar, no dejaba de reírse mientras le tenia entre mis manos, regresamos al hotel con tiempo de sobra, nos dimos otro par de duchas y ella se metió en el baño a cambiarse con una de las cajas, a mi me dio la ropa arreglada de su novio, el disfraz era simple, y cuando me lo puse me recordaba a un explotador novato, trataba de averiguar quien coño era, me sonaba pero no sabia de que…..hasta que la vi salir del baño, pos anunciación artística, me palpitaba el corazón y al verla me senté entre risas y excitación, era Misty, la personaje femenina de pokemon, ahora encajaba todo, y si no era Ash, mi pinta solo podía de ser la de Brock, el amigo que le tiraba los trastos a toda mujer en la serie, “encajo en el perfil”, con un pantalón marrón, camiseta naranja y chaleco verde, mochila con una esterilla de acampar incluida, pero mientras que mi personaje estaba logrado, el suyo era un calco, la imagen real y viva del personaje, durante esos días me había empapado un poco el tema y había visto cosas similares, pero mientras que muchas veces no eran imitaciones, y si más bien, versiones eróticas o porno del personaje, ella era el personaje, con unos shorts vaqueros con tirantes rojos, una camiseta amarilla ceñida pero sin escote, enseñando gran parte de su ombligo, en zapatillas y con el pelo recogido, suponía, debajo de una peluca de color naranja con una coleta sobresaliendo por un lado de su cabeza, aplaudí por no parecer tonto ahí parado.

-CAMERON: ¿qué, te gusta?

-YO: estás increíble, no es que te parezcas, eres ella – sonrío halagada con un gesto dulce guiñando el ojo doblando una pierna.

-CAMERON: y tú no estás mal, das el pego, pero te falta maquillaje…– tenia razón, ella había hecho maravillas y había logrado un efecto amplio en los ojos tal como salen en el anime – ….ven, siéntate – fue a por su neceser y regresó arrodillándose en la cama a mi lado.

Se pasó 10 minutos mirando una foto que traía y a mi, para luego empezar a dibujar rasgos y ponerme el pelo de forma idéntica con gomina, la dejaba hacer admirándola, la decisión, la seguridad y las ganas de hacer bien las cosas, le brillaban los ojos, “me voy a follar a Misty, ¿quien lo diría?”, pensaba con una sonrisa que ella me quitaba para no estropear lo que hacia. Al acabar solo pude hacerla una reverencia, mi cara en el espero era muy parecida, aunque mis ojos se abrían, los de Brock no.

-YO: tienes un talento nato para esto, míranos…- nos puse enfrente del espejo.

-CAMERON: ¡¡¡¡¡dios……va a ser la monda!!!! – suspiró entre saltos agarrada a mi brazo.

-YO: oye, ¿y Ash?

-CAMERON: mis amigos van a ir hoy de los demás, Ash y enfermera, la policía y el profesor y la otra pareja serán el team rocket…..- repasaba mentalmente todo - ….bien, hemos quedado allí en media hora, ¿vamos? – sonreía a punto de explotar en una orgía de colorines, extendí mi brazo.

-YO: quien puede negarse a acompañar a una chica tan guapa como tú – puse un tono idéntico al de la serie cuando intentaba ligar, se rió muchísimo, pero corrigiéndome la voz un poco.

Fuimos caminando a la convención, estaba muy cerca, al salir las miradas se clavaban en nosotros y es cierto que sentía ese hormigueo extraño de sentirme avergonzado, pero se me pasó rápido, a medida que nos acercábamos íbamos encontrando a gente disfraza en igual dirección, saludándonos como amigos de toda la vida, y esa sensación de bochorno desapareció al llegar a la convención, una serie de naves industriales repletas de gente vestida normal, con ropa normal pero con dibujos o símbolos, algunos disfraces mal hechos, otros bien hechos y otros que me dejaban atónito, autenticas replicas de personajes muy elaborados, y por otro lado gente haciendo el ridículo, tíos vestidos de mujeres con poca ropa o cosas así, pero pese a todo ese caos ninguna mala cara, ni sátiras ni reproches, todos eran uno y estaban allí para compartir esa afición.

Encontramos a los amigos de Cameron, ataviados cada uno con su personaje, muy trabajados pero al vernos se quedaron perplejos, éramos clones, presentándonos y entrando a la convención. Una locura de tenderetes, promociones, publicistas, juegos, y mil maneras de pasar el tiempo, al entrar había un muro donde hacerse fotos y fuimos una gran atracción, nos recomendaron presentarnos al concurso de disfraces y pasamos a recorrer aquella nave de arriba a abajo, cada ciertos pasos un grupo nos paraban a hablar, hacernos fotos y videos, nosotros poníamos poses y hacíamos el tonto, fue divertido, mucho más de lo que me esperaba, acudimos a la 2º nave, más temática de vídeo juegos, allí nos apuntamos a un torneo pokemon, yo, que me creía bueno, me echaron a la 2º ronda y la 1º la pasé de milagro, en cambio los amigos de Cameron pasaron varias rondas y la propia Cameron llegó a semifinales, acudió triste a mis brazos y la consolé con cariño al caer eliminado, pero sonreía de nuevo cuando vio otra cosa que hacer, me había convertido en una mula, cargado de bolsas y recuerdos. Pasaron las horas y llegamos a la 3º nave, más purista, repleta del tema anime, con cosas no tan conocidas, pero los hombres y adolescentes se comían a Cameron, con la excusa de fotos y felicitarla la agobiaban mucho, incluso había otras Misty, como había visto en Internet, mucho más sugerentes y sensuales, que atraían a todos los varones. A mi tampoco me faltaban admiradoras, les tiraba los tratos de broma como haría mi personaje y puse colorada a más de una, pero siempre aparecía Cameron tirándome de la oreja y alejándome de la jauría de lobas que me acechaban, el disfraz no disimulaba mi atractivo del todo. Acudimos al concurso de disfraces, la mayoría salía se mostraba y se iba, de forma sosa, como fuimos de los últimos me dio tiempo a preparar una escena, Cameron casi se desmaya de la idea, al salir montamos una pelea pokemon con peluches, que al final terminamos tirándonos a la cara como armas arrojadizas entre el publico y nosotros, la risas y los aplausos eran altos, pero quedamos 4º, y no injustamente, había un par de disfraces épicos sobre robots y caballeros con armadura, que montaron no una escena, si no recreaciones de partes de series y películas, con dialogos, voces y luces, me quedé alucinado al ver un Iroman que volaba, con arneses, luces en el pecho y manos con destellos.

Nos fuimos a cenar en una zona entre risas repasando fotos y momentos, yo me entretenía con una de sus amigas, la que iba de enfermera, con un escote mucho más grande que en la serie, con sus senos generosos sobresaliendo, bromeaba bastante con ella, nos caímos bien, pero mi atención era para Cameron, estaba agotada con el rostro cansado y rendida de caminar y moverse, pero con una sonrisa imborrable, dimos un largo paseo de vuelta separándonos del resto, y ya puestos, moví ficha.

-YO: bueno…¿que tal?

-CAMERON: dios……no me lo creo….me lo he pasado de cine, esto es una locura, me encanta – lo decía agarrada a mi brazo, buscaba calor por la noche fría y su poca ropa.

-YO: me alegro, has estado increíble….

-CAMERON: tú no has estado mal.

-YO: ¿has visto como se han quedado mirándote todos? Lo has clavado.

-CAMERON: ¿si?, yo esperaba más competencia.

-YO: había alguna, he visto a una Misty que parecía la versión porno – sonrió alegre.

-CAMERON: ya, pero esas son unas guarras, yo creo que las contratan y las visten como putas para tener a los hombres contentos, o quien sabe, solo zorras en busca de llamar la atención.

-YO: pues lo han logrado, tenían a todos babeando detrás.

-CAMERON: pero eso no es imitar, como tú o yo, ellas van a lo que van….

-YO: pues que se jodan, yo me voy a casa con la más guapa, divertida y concienzuda de las Misty – se paró a abrazarme besándome en la mejilla.

-CAMERON: jo, eres un cielo…….ojalá…- rectificó -…me alegro mucho de que estés conmigo – mis manos en su cadera no eran ninguna incomodidad.

-YO: soy un afortunado de estar a tú lado….cualquier hombre lo seria….

-CAMERON: hay uno que no piensa así….- un atisbo de tristeza pasó por sus ojos azulados.

-YO: pues no sabe lo que se pierde – la besé en la frente pegándola a mi cuerpo.

El resto del camino fue en silencio, subimos a la habitación y ella cayó redonda en la cama boca abajo, suspirando de cansancio, yo fui a darme una ducha rápida y me tumbé en la cama a su lado solo con la toalla anudada en mi cintura, boca arriba, mirándonos a los ojos, me reí jocosamente.

-CAMERON: no me mires así, ¿de que te ríes?

-YO: es que….¿me pregunto cuantos han soñado con estar es esta situación?………estoy en la cama con Misty, jajajajaja – me pegó en el hombro bromeando.

-CAMERON: ya, ¿seguro que soñabas con eso no? Jajajaja – la cogí la mano con la que me pegaba y un chispazo salto en su mirada.

-YO: pues si, pero seria una locura….- la besé la mano con delicadeza, su sonrisa torció a confusión,

-CAMERON: si….estaría mal….- se tensó cuando me puse de lado pegado a ella, acariciando su espalda.

-YO: ¿y por que no puedo quitar la idea de mi cabeza? .- sonrió colorada.

-CAMERON: ¿que idea?

-YO: tú…..yo……tu disfraz…esta cama…..¿tengo que decir más? – se tapó la cara contra la cama, por fin se había dado cuenta, era tan inocente que solo cuando mi mano bajó a su trasero reaccionó.

-CAMERON: para…….no está bien, tengo novio…..- alzó su mirada a mi, con un color vivo en las mejillas, pero sin hacer nada por apartar mi mano de su culo, fue más para convencerse a si misma que a mi.

-YO: ¿y donde esta él? Podría estar aquí contigo si quisiera, pero prefiere quedarse allí y dejarte ir con un desconocido….

-CAMERON: pero sigue siendo mi novio – la cogí de la cintura soltando su trasero.

-YO: y yo el hombre que está aquí contigo…..- tiré de su cuerpo recostándome de nuevo, haciendo que su torso se pusiera encima mío dejando su cara a milímetros de la mía, con una mano en mi pecho como única barrera.

-CAMERON: te agradezco mucho lo de hoy……- la corté antes de que dijera el pero.

-YO: pues dame un besito para agradecérmelo – señalé inocentemente la mejilla, se sonrojó un poco.

-CAMERON: está bien – accedió y me besó donde señalé, un beso corto y rápido.

-YO: ¿eso es un beso?, si lo sé no vengo….- miró ofendida.

Volvió a dar el beso con más decisión pero giré la cara y nos fundimos en un corto y mucho más divertido beso, ella se separó casi de inmediato, casi, pero lo suficiente como para ser obvio que le había gustado.

-CAMERON: jo….eres malo…..¿y si mi enfado contigo?

-YO: no me perdonaría nunca no haberlo hecho, si me cuesta una eternidad en el infierno lo asumiré con gusto, besas muy bien – tiré aun más de su cuerpo y me la puse encima usándome de colchón a mí.

-CAMERON: para….por favor….- lo dijo pero se mordía el labio, sin duda de sentir mi verga creciendo en sus muslos, acariciando mi mandíbula con los dedos, clavando sus ojos en los míos, con su mano en mi pecho cediendo al peso.

-YO: no puedo – mis manos fueron a su culo y lo amasaron con habilidad, elevando su cuerpo sobre mí y besaba su cuello.

-CAMERON: no….um….si se entera…..- ya era mía.

-YO: yo no se lo voy a decir, ¿y tú?

-CAMERON: no, me mataría.

-YO: pues no hay nadie que se lo diga…….- se abrió de piernas cuando mis manos la obligaron.

De golpe me besó de nuevo, de forma inocente pero larga, sonrió al gustarle y volvió ha hacerlo hasta que su lengua se abrió paso, era como volver al instituto, besaba como una niña, pero su cuerpo se estremecía como una experta, elevé mi cuerpo para acariciarla y ella de rodillas jugaba con mi nuca mientras besaba con calidez, dio un par de besos cortos para separarse un poco, de forma sensual se sacó los tirantes rojos, mis manos en su cadera acariciaron subiendo y metiéndose en sus senos por debajo de la camiseta, mientras lamía su cuello, estaba arrodillada sobre mi pierna derecha, y en la izquierda mi polla sobresalía por la hendidura de la toalla, sus manos hicieron un repaso de mi pecho y mi vientre, seguí subiendo mis manos hasta sacarla la camiseta, unos bonitos y bien puestos senos aparecieron por fin cuando se quitó el sostén, una 90 de pecho calculé, con unas aureolas grandes y unos pezones cortos pero duros y redondos, mis dedos la trabajaron el pecho, junto a mi lengua, ella echaba la cabeza hacia atrás pegándome a sus tetas, mientras una mano abría la toalla, mi polla saltó viva y cabeceando ante ella, cuando fijó su mirada una sonrisa de sorpresa se le dibujó.

-CAMEORN: ¡¡¡madre mía…….es enorme!!!- la cogió con una mano ladeándola, como muchas, incrédula.

-YO: es toda tuya – susurré en el instante que dejé de chuparle y mordisquear sus pezones, mostró un gesto general de cansancio, pero no físico, se rindió, su mente dijo que ansiaba ser follada por aquella polla descomunal y accedió.

Masturbó con brío, y una de mis manos libre bajó por su espalda e hizo fuerza para meterse por dentro del short vaquero, abriéndose paso por sus bragas entre las nalgas, suspiró de placer al notar mis dedos llegando a su ano, jugando con él sin quejarse, “Misty no es virgen anal”, pensé mientras no me sacaba un pecho de la boca, la otra mano abrió el cierre de sus pantalones, buscando su coño, al sentir los dedos suspiró y se tensó, mientras le acariciaba sus 2 agujeros con una mano en cada uno y lamía sus pechos, ella se aferraba a mi cabello con una mano y la otra seguía masturbando, sentía su coño húmedo y ardiendo, se retorcía de placer.

-YO: ¿te puedo llamar Misty?

-CAMERON: llámame como quieras…..- hundió su lengua en mi boca, con tal ferocidad que me dobló el cuello -…..pero fóllame ya.

Me puse en pie con ella encima y la tiré a la cama, se puso a 4 patas mientras le sacaba los shorts y las bragas a la vez, no se las quité, se las dejé por las rodillas y abriéndola las nalgas con las manos pegué mi rostro a su culo, lamiendo su coño y chupando su clítoris, pasando la lengua por su ano y follándola con los dedos y la lengua para tenerla lista, tuvo su 1º orgasmo que la hizo gritar de forma dulce y cariñosa, incluso en el sexo era así, con un último lametón la dejé lubricada y me arrodillé detrás de ella apuntando a su coño, sujetándola de los hombros y dando una estocada brutal, sollozó un par de veces, pero la mayoría del tiempo permaneció aguantando el aliento soportando un huracán, no fui despacio ni la di tiempo, la estaba follando con la bestia en menos de 10 minutos y sus orgasmos caían uno tras otro, la azotaba el culo repitiendo lo bien que follaba, lo buena que estaba y lo zorra que era, terminado siempre con un Misty, eso solo la excitaba más y cuando pudo reaccionar hacia fuerza contra mis arremetidas, su buen trasero aceptó que le metiera el dedo pulgar en el ano mientras la metía casi toda en ella. Un orgasmo fluido la recorrió el cuerpo, salió disparada cayendo tumbada en la cama frotándose le clítoris desesperada, no la iba a dar descanso, me tumbé de lado tras ella y prepararé su ano, sus sonrojadas mejillas eran fuego, y cuando metí mi glande en su ano casi se desmaya, en este caso fui más tranquilo, metiéndola lentamente, ella se retorcía poniendo la mano en mi pecho, queriendo llevar el ritmo, pero una vez que tenia ¾ en su culo empecé el vaivén lento y largo, ella permanecía con la boca abierta tirando de la colcha de la cama, quería abrirse de piernas para facilitar la penetración pero los pantalones no la dejaban, así que soportó como pudo hasta que su ano se dilató lo suficiente, ya se la metía toda y rebotaba perdida en los orgasmos anales, a la media hora de varias posturas dándola por el culo cedió y su cuerpo era una muñeca articulada, la puse de espaldas a la cama abriéndola de piernas al sacarle lo pantalones y follándola por el coño de nuevo, se corrió tantas veces que la colcha quedó inservible, pero no desfallecía. Reventé en un sprit final al correrme que la elevó por el aire agarrada a mi cuello usando mis muslos como palanca, me vacié con gran cantidad sintiendo temblores en nuestras pelvis, no sabia si eran míos o suyos, caí sobre su cuerpo, y la besaba los senos mientras el sudor lo impregnaba todo, ella jadeaba tragando aire en cantidades industriales, con la voz queda y sonriendo abrumada.

-CAMEORN: madre…..dios….no …..puf………- no sabia que decir o no encontraba palabras, pero sus ojos se abrieron al sentir mi verga creciendo de nuevo en su interior.

-YO: esto no ha acabado, Misty….

Me puse en pie con ella ensartada y la estampé contra la pared, agarrándola del culo, me rodeó con las piernas y se dejaba follar, no podía hacer otra cosa, pero tampoco deseaba otra cosa, pedía más sorprendida de si misma, daba pequeños giros de cadera para ayudar a los saltos sobre mi cuerpo, metiéndola toda y sacándola, con un ruido de chapoteo muy característico, la bestia regresó y la provoco varios orgasmos sin fluidos, no tenia más, lo justo para tener su coño húmedo, cuando me cansé la dejé en el suelo, temblaba, la di la vuelta y la penetré el coño por detrás, nos movimos a uno de los muebles donde ella se apoyó, mientras yo la hacia vibrar tanto y tan fuerte que el mueble estaba dando golpes de martillo contra la pared, suerte que sus gritos de sexo alocado tapaban aquel ruido, así nadie entraría a molestar para saber que pasaba, ya se oía y quedaba claro. La bestia se cebó con ella, 1 hora así, hasta que cayó al suelo en un orgasmo que la tuvo un par minutos temblando en el suelo, la subí a la cama y la metí por el culo con ella de lado, no paré pese a su suplicas ahogadas, la llenaba de semen el culo cuando no aguanté más, rompiendo en un placer indescriptible, besando su espalda arqueada de placer y húmeda de transpiración, acariciando su clítoris sin que ella hiciera más que respirar para calmar su corazón desbocado.

-YO: ¿en la oficina sonaba mejor o peor de lo que ha sido? – suspiró entre risas de nervios, tenia una mano levantada en el aire buscando algo, con espasmos en los dedos.

-CAMERON: yo……..no……….mejor……..dios……..mucho….mejor – se rindió en la cama con sonoras risas.

-YO: jajajaja, tú también follas mejor de lo que pensaba….menudo aguante tienes…- 2 veces bestia incluida la 1º vez, era un logro.

-CAMERON: yo…….yo……se hacerlo mejor……pero…….té……..y tu……..dios…..- se sentía avergonzada de haberse visto superada.

-YO: tranquila, tenemos tiempo para que me lo demuestres….- mi mano recorría su espalda hasta terminar agarrando y azotando sus nalgas de forma intermitente, pasó un buen rato hasta que pudo respirar de forma natural, y alzó su mirada de lujuria apagada.

-CAMEORN: eres una mala bestia, te has corrido dentro y no tengo pastillas….- bajé mi cabeza para besarla con lengua.

-YO: no te preocupes, tengo la vasectomía hecha, puedo follarte cuanto quiera y llenarte de leche caliente sin que te preocupes…. – soltó aire aliviada –…… veo que el anal no es un problema para ti - metía un dedo en su culo, abierto y chorreando semen.

-CAMERON: jajaja no, mi novio me lo pidió hace mucho, pero no como esto, él la tiene más fina y mucho menos larga, casi no me duele, pero tu…dios…….casi me muero.

-YO: así que te follo mejor que tu novio…..- mis dedos hacia maravillas en su trasero y se estaba acalorando de nuevo.

-CAMEORN: si……..- cerró los ojos reconociéndolo – ………….y no por poco, no lo he hecho con nadie como tú, y menos que la tenga así de grande.

-YO: ni lo harás….no ahí nadie como yo…..así que aprovecha el tiempo – soltó un gemido leve al sentir mis dedos ir de su ano a su coño.

-CAMERON: no puedo, para, no tengo fuerzas……- suplicó tiritando.

-YO: ¿y si nos damos un baño tranquilo? – asintió subiendo por mi pecho para besarme.

La cogí en brazos y preparé la bañera medio llena con sales y gel, me metí en el agua y me tumbé sobre la fría loza con ella en brazos, tumbada sobre mi, mi polla entre sus mulos ya estaba dura de nuevo, y no me cansé de acariciarla hasta que me pidió que la follara otra vez, sin moverme la hundí en su coño y acariciando su clítoris con una mano fue subiendo y bajando de mi temblando, agonizando de placer, cuando no pudo más, fui yo el que desató a la bestia y la dejé destrozada en media hora animal, la bañera quedó casi vacía de agua, como yo al correrme dentro de ella de nuevo, me di un agua para salir de allí y esperarla en la cama desnudo, tardó 2 horas en salir de allí. Había cambiado la colcha y al darla un poco de luz ya no era Misty, era Cameron, sin la peluca y el maquillaje, totalmente desnuda y andando con torpeza, gateó por la cama para quedar recostada sobre mi pecho, besándonos con lentitud y pasión, pese aquello eran casi las 3 de la mañana, y estabamos muy cansados, nos quedamos dormidos hasta que una llamada del hotel avisándonos de que se terminaba el turno de desayunos nos despertó, mi empalme mañanero fue apagado en la ducha con ella, follándola por detrás, dejándola unos minutos de descanso, las risas y los juegos nos acompañaron toda la mañana, desayunando se sentó en mis piernas y comimos como enamorados, acariciándonos y besándonos, dándonos de comer el uno al otro. Que yo recuerde teníamos planes aquella mañana, no se cuales, volvimos a la habitación y estuvimos follando de mil maneras, con descansos largos, pero varias veces, no logré que me la chupara, por lo visto le daba asco, pero su ano sustituía bien aquello, era muy buena, o al menos aguantaba bien y se recuperaba mejor, no era mi leona pero eran las primeras veces y ya aguantaba 3 polvos seguidos. Sus ojos azules brillando de pasión y su sonrisa risueña no se borraron en todo el día, a la hora de comer nos obligamos a salir de la habitación e ir ingerir algo a un restaurante cercano donde habíamos quedado con sus amigos, la situación se normalizó un poco y nos lo pasamos bien solo con los recuerdos del día anterior y las esperanzas de ese día, la amiga pechugona seguía siendo muy maja y agradable, pero sus ojos negros pasaron a verme con ganas de sexo, ya lo leía en las mujeres, sin duda Cameron le habría dicho algo. Nos separamos al disfrazarnos, ellas irían de las chicas de Sailor moon, y nosotros de caballeros del zodiaco, por lo tanto nos vestimos por separado.

Me gustó muchísimo como me quedaba la armadura, de cartón pintada de dorado, pero era una sensación poderosa, potente, y mi corpulencia me hacia algo digno de las historias de caballeros de la época medieval, quedamos en un punto de la convención, al llegar no las encontramos, solo había un tumulto de gente y una tormenta de flashes de cámaras, al ver que era lo que llamaba la atención vimos a “nuestras” chicas posando con decenas de nerds salidos babeando y disimulando erecciones, las 4 mujeres vestidas con uniformes sensuales de colegialas japonesas, con minifaldas muy cortas, en este caso la sensualidad y la recreación iban de la mano, con unos tacones de vértigo, zapatos o botas altas, algo de escote decorado con lazos y pelucas o extensiones largas en el cabello. Tardaron casi una hora en quitarse a los chicos de encima, pero pasamos un buen rato, yo en concreto, con las chicas del resto de la convención que estaban impresionadas por las armaduras, alguna me tiraba los trastos, luego estuvimos paseando juntos un rato pero era desesperante la cantidad de veces que las paraban a ellas, así que nos separamos y pasamos un par de horas sin verlas, yo me separé del grupo de chicos por alguna historia y mientras esperaba alguien me atacó por detrás, al darme la vuelta era Cameron, la seguí sin darme cuenta de que me metía en un vestuario y se abalanzó a besarme, nos besamos con lujuria y la metía mano por debajo de la minifalda, la bajé a bragas, masturbando hasta tenerla lista, se corrió en mi mano, me ayudó a quitarme la coraza de la zona de la pelvis y la di la vuelta, la penetré con fuerza por su vagina sobre dilatada, sacándola gritos que poco a poco se convirtieron en gemidos, los pechos eran amasados por debajo del uniforme, se corrió 7 veces y la bestia se derramó en ella, la imagen era colosal, un caballero del zodiaco follándose de forma animal a una sailor moon hasta dejarla ida y chorreando semen.

-CAMERON: dios……no aguantaba más, lo necesitaba.

-YO: no estabas falta de atención.

-CAMERON: esos cerdos llevaban 4 horas metiéndome mano, iba cachonda perdida – me besó y luego se metió en un aseo para limpiarse.

-YO: ¿te han puesto caliente esa panda de salidos?

-CAMERON: si, bueno, ellos no, pero al meterme mano…..no se…..me siento usada………..como contigo………. y eso me puso a 100 – al salir buscando su prenda intima me la arrancó de la mano, se las puso de nuevo con una mancha enorme en la zona de su coño.

-YO: eres una caja de sorpresas – la abracé agarrado su trasero con firmeza.

-CAMERON: y tengo una preparada para cuando volvamos al hotel….- me besó metiendo su lengua hasta mi campanilla, casi me ahoga mientras me volvía a anudar la corza en mi cintura.

-YO: ¿cual es? – sonrió relamiéndose.

-CAMERON: ya lo averiguarás… – se alejó levantando su minifalda para regalarme la visión de su trasero alejándose, para dedicarme un beso desde la distancia -…..tengo que seguir con mis fans.

Al verla irse no pude evitar pensar que se había convertido en una de esas zorras en busca de atención, ¿pero a mi que más me daba?, yo me quedé un rato pensativo, no sabia cual era la sorpresa, pero al oír entrar a alguien me escondí, no se por que, un montón de gente entró de golpe, risas y murmullos, asomé la cabeza y vi a 8 tíos rodeando a una sola mujer, vestida con poco más que un biquini a modo de armadura, con las tetas a punto de salírsele de lo apretado del sostén, “¡Es Xena!”, una amazona reparte manporros de las series de la TV, ni siquiera es anime pero que más daba. No estaba allí en contra de su voluntad, se arrodilló, empezó a sacar pollas y comérselas, por lo visto esto aquí no es raro, seria otra en busca de atención y ya tenia a su club de fans masturbándose esperando su turno, 3 Stroopers de la guerra de las galaxias, Benji y Oliver y otros que no reconocí. Se pasó un buen rato, alguno se corrió largándose, pero la desnudaron, era agraciada y con buenas tetas, y entre los 5 que aun no se habían corrido empezaron a follarla por turnos, según iban llenando de semen se iban, le chupaba la polla a uno mientras masturbaba a otro y un 3º la follaba con virulencia, pero al final todos se corrieron, ella también, y varias veces, la dejaron en el suelo y se fueron, yo aproveché que estaba en el suelo, medio ida, para salir. La dejé así, en el suelo, con las bragas tiradas a un lado, me fui y al alejarme vi como un grupo vestidos de guerreros de algún juego de promoción entraban allí, “verás que sorpresa”, después un chico con la foto de Xena iba preguntando por ella, le dije que me pareció verla en donde realmente la había visto, incluso pregunté preocupado a uno de los de la promoción que reconocí, me enteré de que se la follaron todos, por el culo también, unos 14, la encontró aquel chico, su pareja, 4 horas después dando tumbos desorientada y sin la parte de arriba del biquini. ¿Qué por que no me la follé yo también?, tengo la vasectomía hecha, pero no por ello no puedo coger ETS, y si se follaba a 8, y luego a 14, con su pareja allí, vete a saber que tendría.

Estabamos ya cansados y algo aburridos, el última día no es tan activo y la mitad estaban recogiendo ya, regresamos algo más temprano, al llegar al hotel se plantó Cameron y me dijo que esperara 10 minutos y subiera, ansioso ante lo desconocido subí como el coyote en busca del correcaminos, llamé a la puerta y Cameron me dijo que pasara, seguía disfrazada, sentada en la cama cruzada de piernas de forma sensual, según me acercaba a ella se abrió de piernas dejándome ver que no llevaba bragas y me arrodillé entre sus muslos, besándola.

-YO: ¿la sorpresa? – me parecía decepcionante, aunque para que negarlo, ya la tenia dura.

-CAMERON: no, te has portado muy bien conmigo y quiero agradecértelo de verdad.

-YO: ya me has hecho muy feliz……- la besé con ternura.

-CAMERON: pues entonces no te digo que es…..- se cruzó de brazos.

-YO: está bien, dímela – sonrió orgullosa.

-CAMERON: verás, no he podido evitar hablar de ti a mis amigas…

-YO: ya me he dado cuenta de como me miraban.

-CAMERON: y, si te parece bien, he pensado que podríamos divertirnos., tú…….yo….. y Amy – al decir el nombre se abrió al puerta del baño y apreció su amiga pechugona, disfraza del personaje aun, con un uniforme idéntico pero mini falda azul más claro que la de Cameron, a juego con los botas altas, las de Cameron eran rojas, con el pelo negro recogido y unas gafas grandes sin cristal, con un generoso escote no muy fiel al anime pero que le daban un aire espectacular.

-YO: me parece perfecto – sonrieron las 2 mujeres y Cameron extendió el brazo para llamar a su amiga.

-CAMERON: ven aquí…….. Amy – la llamó como a un perro, por el nombre del personaje ya que no se llamaba así, acudió con la cabeza gacha y sin atreverse a hacer nada.

-YO: pobrecilla, parece asustada.

-CAMERON: debe estarlo, por lo que le he dicho…ven aquí preciosa, ven a la cama – se arrodilló sobre la cama y fue Cameron la que la acercó su cuerpo, agarrándola la cara, besándola lenta y sonoramente.

Mis manos recorrían los muslos de Cameron mientras se dedicaba a besar y destensar a su amiga, que me miraba de refilón, con los ojos torneados mientras Cameron la comía el cuello, se dejaba sobar las tetas por las manos de Cameron, yo metí mis dedos en el coño abierto y lubricado de Cameron, que jadeó levemente sin soltar a su presa, los ojos de Amy se abrieron al sentir mi mano hurgando bajo su minifalda, la muy descarada iba en tanga, un golpe de viento y hubiera sido la comidilla de la convención, pero me ayudó a meter mi otra mano entre sus piernas, notando una humedad y calentura enormes, con algo de bello. Unos cuantos minutos y ya estaba masturbando a las dos con mis dedos entrando en ellas, Cameron la cogió la cara roja, dejó de besarla, y me la ofreció como un presente, la cogí de la nuca con fuerza y cuando suspiró del dolor metí mi lengua en ella, la acción la pilló desprevenida y tardó un poco en acompasar su labios a los míos, cuando lo hizo descubrí una lengua hábil, me puse en pie y metí mis manos por sus traseros cogiéndolas con fuerza y levantándolas por el aire apoyadas en mi, entre risas y jadeos, eran fuerte y podía mantenerlas en el aire cogidas del coño por detrás de su culo, con sus 4 tetas en mi cara bajo la tela de los uniformes, las dejé ir descendiendo sobre mi armadura, y al contactar con el suelo empezaron a desvestirme entre las dos, con dificultades, mis dedos seguían hurgando en ellas, al sacarme la parte de arriba mi torso desnudo bañado en sudor sacó un suspiro a Amy, pasó su mano lentamente por todo el pecho y el vientre, la parte de abajo cayó al suelo y mi verga apareció en todo su esplendor, dura ya, al verla Amy quiso retroceder y se llevó la mano a la boca abierta.

-AMY: ¡¡¿pero que bestialidad es esa?!!

-CAMERON: ya te lo dije…..

-AMY: ¡¡¡pero si es que es enorme!!! – vio como Cameron cogía mi polla mientras me besaba, masturbando lentamente.

-CAMERON: ¿quieres que te la chupe? – sonreí al comprender por que estaba Amy allí.

-AMY: no se si me va entrar en la boca – solté a Cameron y mis 2 manos rodearon el coño de Amy, una penetrando por detrás y la otra frotando con rapidez su clítoris, se mojó tanto que sus mejillas se pusieran rojas y en 4 minutos explotó en un orgasmo que la dejó mareada, una vez que encuentras el punto G es relativamente sencillo.

-YO: tu turno – asintió avergonzada, arrodillándose.

Cogió mi polla apartando las manos de Cameron, que permanecía de pie abrazada a mi, besándome, Amy masturbó un par de veces y lamió el glande, aun mascullando sobre su tamaño, poco a poco iba metiéndose la punta en la boca chupando y dejando que los labios recocieran la piel a la contra, le estaba cogiendo la medida y recorrió el tronco con su lengua, y cada vez metía algo más de miembro en su garganta.

-YO: me encanta la sorpresa – susurre al oído de Cameron.

-CAMERON: pero no te olvides de mi – la besé con dulzura.

Metí un brazo entre sus piernas y de un tirón la abrí subiéndola por el aire, dio un grito de susto cuando casi se da con el techo, la tenia sentada sobre mi cara, con sus muslos rodeando mi cabeza y su coño en mi cara, se apoyó en el techo pero no hacia falta, la tenia bien sujeta de las caderas y mi lengua se abría paso en su interior provocando gemidos entre la sorpresa y el placer, no pesaría ni 58 kilos y podía tenerla así, mientras su amiga me estaba haciendo la mejor mamada que recordaba desde Madamme, tenia arcadas pero seguía tragando, llenándomela de babas y dejándola limpia en un ciclo sin fin. Cameron se corrió en mi cara aferrada a mi cabello y al techo con las manos, casi se me cae de los espasmos, la bajé colorada y con ganas de más, se fue a la cama y gateó enseñando el culo como una gata en celo, metiéndose un dedo por el coño aliviando su tensión, aquella imagen y el buen hacer de Amy, me descargaron dentro de su boca, una mujer que la chupaba así se lo tragaba, y lo hizo, no dejó ni una gota, la puse en pie y la doble la espalda de un beso enérgico de agradecimiento, sonreía al volver a sentir mis manos en su coño, y la empujé tan fuerte que cayó de bruces en la cama despatarrada, antes de que pudiera recomponerse metí mis manos por su minifalda tirando del tanga, se lo saqué y la abrí de piernas, cogí la cabeza de Cameron y la obligué a comerse el coño de su amiga, pese a que le daba reparos lo hizo, le abrió los labios mayores y succionaba donde una mujer sabe que debe hacerlo, Amy gemía perdida, acariciándose los senos, yo me fui detrás de Cameron que estaba a 4 patas y la metí entera de golpe en su coño abierto, gritó de dolor pero continuó lamiendo cada centímetro de la intimidad de Amy, mientras la follaba por detrás, azotándola el culo y agachándome sobre su cuerpo, luego me puse en pie y la penetraba desde arriba, incidiendo directamente en su punto G, cada acometida la hacia más valiente en su hacer en Amy, y cuando la llegaron los orgasmos la metía 3 dedos por el coño. Dejé a Cameron y metí mi cara entre las rollizas piernas de Amy, el cambio en el tono de los gemidos de Amy se notó, y pese a ser mujer Cameron no sabia ciertos trucos, yo si, Amy explotó en un orgasmo como una fuente, gritó asustada, avergonzada, seria la 1º vez que se corría de esa forma, y por su cara estaba seguro.

Mi polla estaba dando golpes en mi pecho, pedía esconderse en aquella mujer, Amy ya tenia su agujero listo, apunté a su coño y la fui penetrando con cuidado, toda la gama de gestos faciales pasaron por el rostro de Amy, al final su cara era la misma que cuando te metes en el agua fría y llegas la zona pélvica, a 3/4 de polla noté la pared del útero, maldiciendo, retrocedí para no hacerla daño, me movía lentamente por que sentía una presión brutal de las paredes interiores, palpitaban al separase cada vez más, Cameron puso su coño en la cara de Amy que llevada por la lujuria se lo comió como podía entre jadeos, cuando me aferré a su caderas no tenia fuerzas para otra cosa que soportar mis embestidas, era difícil no pasarme, pero Amy gemía asolada por una corriente de sensaciones que nunca había experimentado, de nada la sirvió querer cerrarse con cada orgasmo, Cameron se quitó el sujetador hábilmente, se dejó el uniforme, sus pezones duros marcados bajo la tela eran preciosos, sus caricias en vano a Amy me llevaron a la locura, terminando de correrme en el coño dilatado de Amy.

Caí a la cama algo cansado, pero Cameron quería más, se puso a 4 patas encima mía y me besó masturbando hasta que mi polla reaccionó, se dio la vuelta y preparó su ano, para luego meterse mi rabo lentamente, gimoteando, la rodeé con mis brazos por el vientre y planté los pies, desatando a la bestia, sus gritos se escucharían por todo el pasillo, 20 minutos sin parar acelerando hasta que sus orgasmos anales la hicieron desvanecer en mis manos, salían chorros de su coño, como si fuera una pistola de agua, que caían en el suelo, la solté dejándola a un lado con espasmos musculares largos y amplios, Amy aun se estaba recuperando cuando caí sobre ella, del calentón rompí el uniforme por el escote de varios tirones fuertes, sacando un par de tetas de nivel de su encierro, sus pezones oscuros y duros fueron lamidos y chupados, metí mis dedos en su ano tanteando pero se tensó tanto que ella no permitiría que se la metiera, y no tenia tiempo para doblegarla, así que nos puse en pie y en mitad de la habitación se la metí por el coño desde atrás, aferrado a sus tetas pellizcando los pezones, así su trasero no me dejaría meterla entera, y a la vez incidía en su punto G, el sonido de mi pelvis en su trasero era rítmico e hipnótico, sus gemidos a compás se perdieron con los orgasmos que bajaban por sus muslos, y le dediqué unos minutos de bestia dejándola medio ida, al soltarla se fue al suelo aturdida, pero se agarró a mi polla y la chupó otra vez hasta sacarme la ración que deseaba, de nuevo no dejó ni una gota, esta vez no es que saliera mucho, y se sentó en el suelo, sin saber muy bien donde estaba.

Ese no seria mi último polvo, no con ella, así que regresé a la cama y reactivé a Cameron, no se como volvió en si, y me rodeó con todas sus extremidades, con la espalda en el colchón, la saqué el uniforme a lo bestia, lamí sus senos mientras empezaba a follarla por el coño de nuevo, suspiraba y gemía vagamente, aferrada a las barras de la cabecera de madera de la cama, mi cintura estaba en automático y no se cuanto pasó hasta que logré vaciarme del todo, ya no tenia más, ni podía, Cameron tampoco, había aguantado ese último polvo sin sentir nada creo, solo por orgullo, Amy se arrastró a la cama y nos quedamos dormidos una hora larga.

Se nos echó el tiempo encima, me despedí cortésmente de Amy, que se fue sin que oyera una sola palabra de su labios, caminando con torpeza, recogimos la habitación y tuve que conducir parte de la noche para regresar a Madrid, dejándola en su casa con un beso largo y sensual, acordando que siempre que tuviera un plan similar contara conmigo, su novio bajó a ayudarnos a subir las cosas, Cameron se reía al mirarle, pero como siempre se reía él no entendía por que, después me fui a casa y dormí lo que pude, quedaban pocas horas para ir al trabajo, soñaba cosas felices y estaba en una nube de sexo y autodeterminación, me sentía listo para un reto mayor, solo tenia que decidir cual.

Pobre de mi, no sabia lo que se me venia encima.

Pamela – Caza mayor.

Después de 2 semanas desde aquel fin de semana con Cameron en la convención ya estaba planeando mi nueva presa, la relación con Cameron era idéntica a antes de que ocurriera todo, como si ese fin de semana nunca hubiera pasado, algo que su novio seguramente agradecería, pero a mi no me servia, eso no evitaba que aun rememorara aquellos disfraces y el sexo, pero eso ya era cuestión del pasado, en mi futuro me encontraba de nuevo con el mismo problema, ¿a por quien iba?, Pamela, Kate y Alexis eran las candidatas, pero mi jefa Alexis era el final del camino, no mostraba interés más que por las ventas, estaba a un nivel inalcanzable aun, y encima con Kate bajo las faldas, la había adoptado por no decir otra cosa, y era una versión más joven y voluptuosa, añadiéndole un rostro frío como el hielo y unos ojos verdes totalmente inexpresivos, por lo tanto solo me quedaba Pamela como opción, parecía un presa más sencilla, pero solo lo parecía.

Pamela era una MILF de 1º nivel, rondaría los 50 años pero a golpe de operaciones, gim y cremas, tenia el aspecto de una de 30, solo si te acercabas mucho y te fijabas bien notabas la firmeza endeble de la piel, rubia de bote para disimular las canas, con peinados elaborados en una larga melena que caía por su espalda y se contoneaba junto al movimiento estudiado de sus caderas, con ojos oscuros como 2 aceitunas negras, y un cuerpo agradable a la vista, siempre vestida con trajes o conjuntos de 2 piezas ajustados, con faldas que llegaban a sus rodillas y generosos escotes dejando ver sus senos operados, perfectamente colocados de forma imposible para una mujer de su edad. Por si fuera poco su aspecto, su forma de moverse y hablar eran tan trabajadas y elegantes que parecían naturales, la forma de cruzarse de piernas, de encorvar la espalda sacando pecho, de caminar con los tacones o de mover las manos, acompañada de una voz aterciopelada y agradable. Sin duda el ricachón que se hartó de ella por una más joven tuvo la tentación de hacerlo mucho antes, pero ella se había ganado con sus artes al menos unos 10 años más. De carácter era afable y muy agradable, en ese punto en que las mujeres dejan de hablar y son escuchadas, que tienen replica sagaz para cualquier comentario. Hugh, el compañero de oficina de una edad similar, se la había estado trabajando durante meses, pero ella no cedía, jugaba con él más bien, pese a toda la serenidad y el respeto que imponía, era una marioneta cuando ella quería, y los roces terminaban cuando ella decidía, le tenia de chofer, pagándole comidas y cenas, me preguntaba como un tipo como él no se daba cuenta de que le estaban usando, y yo si. Eso me hacia pensarme mucho como atacar a aun mujer así, compartíamos poco tiempo, ella era de la mejores en venta telefónica y yo no, por lo tanto no hablábamos demasiado, por suerte, o por lógica, Luis, le jefe de todos, me puso varios días en venta telefónica para ver si mejoraba un poco, ni se me daba bien ni me interesaba mejorar, lo mío era la calle, y más las mixtas con Penélope, aun así iba preguntando fingiendo interesarme, y por fin Hugh se fue un día a ventas a la calle y me pude sentar a su lado, podría haberla abordado mucho antes pero una hembra así me vería a la legua, como le pasó a Hugh. Le hacia preguntas todo el tiempo, bromeando y siguiendo sus consejos, y pasadas unas horas ya charlábamos sin más.

-YO: eres increíble, les vendes lo que sea……- la dije tras colgar una de sus ventas.

-PAMELA: jajaja muchas gracias cielo – se lo decía a todos, así nos tenía embobados.

-YO: yo es que no puedo, esta mierda se me da fatal.

-PAMELA: no es cierto, vendes muy bien.

-YO: a la cara, pero por teléfono soy un inútil.

-PAMELA: si piensas eso nunca vas a cambiarlo, tienes que pensar que tienes a la persona delante.

-YO: ya, pero no la veo la cara, sus gestos, no se si voy bien o voy mal – todo cierto, tenia claro que cuanto más verdad dijera, menos sospecharía.

-PAMELA: pero oyes su voz, la tonalidad, los sonidos, los silencios, es diferente, pero se trata de lo mismo.

-YO: pues no atino, no tengo tu dulce y acaramelada voz jajajaja

-PAMELA: jajaja no es solo la voz, tienes que guiarlos, saber que quieren, o que desean, y ofrecérselo – sonreía, sin duda era lo que había hecho durante toda su vida, no era raro que se le diera bien.

-YO: pues yo, si no los tengo delante, no se leerlo, y Luis se enfada conmigo, no quiero que me eche….- un poco de lastima, posó su mano por mi hombro.

-PAMELA: no seas tonto, no te van a echar, eres bueno, quizá solo te pongan en la calle, hay muchos que ni pasan por teléfonos.

-YO: quien sabe, no quiero jugármela, tengo que mejorar como sea……- la acaricié la mano en mi hombro, sonriéndola de forma falsa.

-PAMELA: pues para eso estás aquí, no te preocupes, yo te ayudo – bueno, ya tenia predisposición a ayudarme.

-YO: no, muchas gracias pero estás trabajando, y no tienes que perder tiempo conmigo.

-PAMELA: no es problema……- la corté.

-YO: si lo es, mientras me llevas de la manita no llamas y no vendes, no voy a permitir eso – tono brusco, lo justo para hacerla pensar otra solución.

-PAMELA: pero entonces no mejorarás, hazme caso, yo te puedo ayudar – sus ojos eran sinceros, clavé los míos en ellos, dejando unos segundos como si me lo pensara.

-YO: está bien, pero no aquí, en el trabajo no, no voy a perjudicarte – ya se había ofrecido a ayudarme, y si no era en el trabajo, o retiraba su ofrecimiento o tenia que aceptar hacerlo en otro sitio.

-PAMELA: como quieras, no sé…tú tenias coche ¿no? – me costó no reírme, Hugh hoy no estaba, “necesita chofer”.

-YO: si, ¿por qué? – sus ojos brillaron en una sonrisa muy leve.

-PAMELA: verás, Hugh me suele acompañar a casa…… – “te lleva, mejor dicho”, pensaba mientras su mano acariciaba mi espalda abandonando mi hombro y se apartó el pelo de la cara con un amplio gesto elegante con la cabeza – …….pero hoy no está, si quieres puedes acompañarme y así hablamos…..- ningún hombre hetero se negaría ante su ofrecimiento, sin querer ella se pensaba que me estaba manipulando para tenerme de chofer, solo tenia que manejarme desde allí.

-YO: claro, no…no me importaría en absoluto….- agaché la cabeza sin mirarla directamente, con un tono de lelo para fingir ruborizarme, rió repasando con su mano mi brazo y seguir bajando.

-PAMELA: claro que si, verás como en nada vendes muy bien por teléfono……- una amplia sonrisa terminó con su mano en mi pierna y una ligera sacudida.

Volvió a su trabajo con una postura señorial y erótica, sabían que aun la miraba, el trabajo continuaba, pero yo estaba más pendiente de cómo camelarme a esa mujer, por ahora pensaba que me tenia en su mano, era mejor eso a que pensara que iba a por ella sin más, que fuera ella quien me sedujera a mi. No sabia si las rumores de mi le habían llegado, es difícil saber si partes como ligón de la oficina o como un adolescente inocente, eso seria crucial, y como no había turnos propiamente dichos, trabajamos hasta cuando ella quiso, yo hice 1 mísera venta y ella 12, cosas baratas, seguros de carnet o cosas de ese estilo, pero muchas más, a la hora de comer se puso en pie y me indicó que ella se iba ya, recogí presto a acompañarla, pareciendo nervioso, se puso un abrigo largo cubriendo su estilizado cuerpo, con un vestido rojo ceñido a su piel, como siempre, amplio escote y que le llegaba hasta las rodillas con unos zapatos a juego con tacones, la acompañé como un caballero abriéndola la puerta y metió su brazo entre los míos, para apoyarse al caminar, lo hacia de forma grácil y con clase, se subió al coche con más glamour del que merecía mi carruaje, y comenzamos a charlar, lo primero agradecerle su esfuerzo, luego sobre trabajo, solo trabajo, me hacia el tonto preguntando obviedades de forma errónea para que me corrigiera, alargando la charla todo lo posible, me iba indicando hacia donde y terminamos a las afueras en una zona residencial con chalets, al preguntar me dijo que en el divorcio de su ex se quedó con una de las casas, y llegamos a su domicilio.

-YO: ¿hemos llegado?

-PAMELA: si, es aquí, muchas gracias por acercarme….- se quitó el cinturón de forma sexy, no sabia que se podía hacer, pero si, ella lograba que cualquier gesto, por mundano que pareciera, fuera sensual.

-YO: a ti por los consejos, pero me veo igual….

-PAMELA: eso es por que no te centras en la voz.

-YO: ya, pero no puedo practicar si no llamo, y cuando llamo me quedo en blanco.

-PAMELA: pues practica conmigo – se cruzó de brazos y piernas dándome pie.

-YO: no, no serviría, te tengo delante y te veo, eso se hacerlo, lo que necesito es vender sin mirar – estaba hilando muy fino para que me invitara a su casa y no pareciera que lo provocaba yo.

-PAMELA: pues cierra lo ojos

-YO: no, miraría.

-PAMELA: ¿no eres capaz de cerrar lo ojos?

-YO: no, no ante una belleza como tú….. – el silencio y su mirada confusa me hicieron sentir especialmente orgulloso de mi jugada maestra, obviamente decir eso implicaba que iba detrás de ella, justo lo que no quería que pensara, pero a su vez era una evasiva socarrona y juvenil del problema de la llamadas, dependería de su reacción saber como me veía, si era el ligón de la oficina optaría por la 1º, pero si me veía como un cachorro asustado seria la 2º.

-PAMELA: no hagas el tonto, esos juegos te servirán con las niñas jóvenes, pero yo estoy escarmentada…..si no quieres, o te sientes incomodo con que te ayude, dímelo, pero no busques excusas si te avergüenzas – analicé la respuesta, sabia de mis escarceos con el resto de chicas, pero ella se creía por encima, y lo más importante, creía que yo tenia que pensar igual, por lo tanto asoció que mi negativa era por que su ayuda me hacia sentirme mal, ergo me veía como un cazador ve a un león, los dos acechaban, pero ella me superaba.

-YO: lo siento, es que este tema me esta machacando, no se como mejorar y si no lo hago temo por mi puesto…..- mostrar debilidad ante ella era mi mejor baza.

-PAMELA: Alexis dice maravillas de ti, a tus espaldas para que no te relajes, claro, y Encarnación está contenta…..

-YO: pero Luis es el jefe, y lleva los teléfonos – suspiraba agitado y angustiado falsamente.

-PAMELA: no te pongas así…– plantó sus manos en mi brazo y mi espalda acariciando con suavidad –… no es el fin del mundo.

-YO: para mi si, ¿vale? – sollozaba un poco, pegando demasiado fuerte al volante para sobresaltarla.

-PAMELA: está bien, cálmate, te entiendo, yo también lo estoy pasando mal, pero no te enfades – me serené un poco.

-YO: tienes razón, anda……. sal……….y descansa yo………...yo me voy a casa y….y no se……- hacia que el cuerpo me temblara.

-PAMELA: no, tú no te puedes ir así, estás de los nervios……nada, pasa a casa y te tranquilizas un poco, ¿vale? – la mire con una falsa lagrima cayendo por mi mejilla, pensando lo buen actor que tenia que ser.

-YO: no, no quiero molestarte más……- se inclinó para acariciarme el pelo con cariño.

-PAMELA: no pasa nada, así me haces compañía un rato, ¿vale?, me aburro en esa casa tan sola jajaja, pasa y tomamos algo caliente para templar los nervios….- me sentía pletórico, pero tenia que disimular.

-YO: yo no…si tú quieres…pero no quiero……- me cogió la cara con una mano, alzándola con ternura.

-PAMELA: ya te he dicho que no pasa nada mi pequeñín, jajaja anda entremos.

Ese “mi pequeñín” era lo que buscaba, que me viera como un alma descarriada que necesita de sus cuidados, al bajar del coche me abrazó como haría una madre, y entramos juntos con ella acariciándome como a un perro traído de la perrera, mis ojos avistaron una cámara en la calle apuntando a la entrada de un chalet adosado al que nos dirigíamos, entramos en su salón y me sentó en el sofá principal, ofreciendo traer algo para beber, trajo una tila para mis falsas manos nerviosas, y charlamos un rato, trataba de distraerme y yo la seguía el rollo, la taza tintineaba en mi mano y eso me dio una idea, dolorosa pero podía funcionar, al beber la tila caliente di un sorbo largo, abrasándome los labios teniendo una excusa para dejar caer un hilo hirviendo en mi camisa, el calor penetró hasta mi pecho y dejé la taza en una mesa entre maldiciones.

-YO: ¡¡dios, joder, que torpe!!….- me separaba la camisa del pecho por que de verdad dolía.

-PAMELA: ainssss, si es que estás muy tenso, ¿mira como te has puesto?

-YO: soy un manazas…..- siseaba de dolor, ella dejó su taza también.

-PAMELA: ¿estás bien?

-YO: puf no sé, quema…- se puso en pie correteando con los tacones resonando en toda a casa y regresó con un paño húmedo.

-PAMELA: a ver, deja que mire……- se sentó arrodillada a mi lado.

-YO: no, déjalo, si casi no me duele…..- mi cara, real, era de que si dolía.

-PAMELA: ¡¡¿quieres estarte quieto y dejar que eche un vistazo?!! – la dejé abrir la camisa por mi pecho y al ver la piel enrojecida sopló.

-YO: ¿que tal está?

-PAMELA: ufff, esta muy rojo, prepárate…– pasó el paño con delicadez por la zona, sentí como mil agujas clavándose en mi piel, cogió mi brazo y me hizo rodearla con él para tener mejor posición y pasar el paño con cuidado entre mis quejidos.

-YO: joder con la tila…..- di un golpe en un cojín cuando dejó el paño apretado contra mi pecho con su mano.

-PAMELA: como te pones, son solo unos rasguños….

-YO: no es eso……es que el día que llevo es horrible, no vendo, te hago perder el tiempo y ahora estoy aquí, contigo nada menos, haciendo el ridículo……

-PAMELA: ¿y que pasa conmigo? – puso su puño cerrado en su sien apoyando la cabeza, intrigada a medias, lo sabia pero quería oírlo.

-YO: pues eso, tú….tan….guapa….y eso….- sonrió complacida, pero era orgullo lo que veía.

-PAMELA: muchas gracias, ¿no sabia que te parecía atractiva? – mentía, pensaba que lo era, y mucho, pero oírlo de un joven como yo, suele gustar más.

-YO: ¿estás loca?, eres la tía más buena de la oficina…….- mentí, pero se lo creía sin que yo lo dijera.

-PAMELA: jajajaja no seas grosero….pero me halagas, pensaba que con todas esa jovencitas no te habrías fijado en mi.

-YO: esas son solo crías tontas, niñas….me divierto, pero con una mujer como usted….puf…..no sabría ni que hacer – era justo lo que quería oír.

-PAMELA: bueno, según dicen……..si que sabes tratar a una dama, y por favor, no me llames de usted….- movió un poco el paño pasándolo por debajo de la zona afectada.

-YO: ¿eso dicen?

-PAMELA: más de una, y no solo eso….también comentan otras cosas….- “empieza a jugar conmigo”, tenia que cortarla.

-YO: ya, sobre mi polla, seguro……- tosió sorprendida.

-PAMELA: jaja bueno……si….según dicen……

-YO: son unas bocazas, pero así se sienten mejor.

-PAMELA: ¿por qué?

-YO: por que si comparten y exageran las cosas se sienten menos avergonzadas, a la mitad no las pude ni penetrar del todo….- volvió a toser entre risas.

-PAMELA: ¡¡niño!! porbrecillas…..

-YO: pobrecillo yo, a ver que hago con todo el tema tieso y una chica llorando por que le duele de lo grande que es…..- los ojos de Pamela se abrían como 2 huevos duros totalmente sorprendida de la rudeza que desprendía -….. así que ellas lo comparten, hablan y exageran, y así llevan mejor el tema, supongo.

-PAMELA: pero es que depende de……como la tengas……puedes hacer daño a una mujer….

-YO: a una mujer de verdad, como tu por ejemplo, no, a ellas si, por que ven una polla grande y se vuelven locas, pero luego no pueden con ella – ahí me la jugué, pero ella estaba intrigada.

-PAMELA: jajja ¿yo? ¿Y que podría hacer yo mejor que ellas?

-YO: una mujer como tú se debe saber unos cuantos trucos – su mano subía y bajaba en mi pecho y sus ojos negros brillaban con fulgor, desvió la mirada ruborizada.

-PAMELA: alguno me se…- se gustaba -…….pero eso no te incumbe.

-YO: pues por eso estoy molesto, si tenía alguna oportunidad algún día, la he perdido.

-PAMELA: un poco de tila no cambia la opinión que tengo de ti, es más, hoy he conocido a un chaval honesto y agradable – apartaba el paño casi seco soplando en mi pecho, abriendo un botón más para ver que tenia debajo.

-YO: no bromees conmigo, no soy ningún bebé, te lo agradezco todo, pero no tengo nada que hacer contigo.

-PAMELA: ¿y por que no? ….– se le escapó, pero siguió hablando –…. eres guapo, alto, fuerte, atractivo, y un buen chico.

-YO: pero no me deseas.

-PAMELA: soy demasiado mayor para andarme con esos juegos de desear o no, si quiero algo voy y lo tomo – según lo dijo apreté su cuerpo contra el mío y la besé, no se lo esperaba y al apartarse me soltó un bofetón, con clase y estilo, pero un bofetón.

-YO: yo…lo siento……..- se sonrojó un poco.

-PAMELA: no has debido hacerlo.

-YO: es que como has dicho…..eso…pensé…en tomar lo que quería…- fue a hablar pero entendió el mensaje confuso que me había dado.

-PAMELA: hablaba de mí, no pretendía que te confundieras…- se sintió culpable cuando entre la tila hirviendo y su bofetón, mi labio se hinchaba.

-YO: disculpa, pero…….no he podido evitarlo…..eres hermosa….- sonrió fingiendo estar abrumada, pero disfrutaba de una sensación de coqueteo que le gustaba.

-PAMELA: anda, truhán, deja que vaya a por un poco de hielo….- se fue rascándose la cabeza, y apagando un sofocón dándose aire con la mano, “la duda empieza a nacer en su mente”, al regresar me dio un poco de hielo y me lo puse en el labio de mala manera, obligándola a cogerlo ella y pasarlo por mi boca.

-YO: no se que hubiera sido de mi hoy sin ti.

-PAMELA: eso es cierto, pero como sigas conmigo vas a terminar en el hospital – la broma no suavizó lo erótico de tenerla muy pegada a mi, pasando un hielo delicadamente sobre mi labio.

-YO: lo mismo tengo que ir llamando a la ambulancia jejeje – sonrió soplando sobre mi labio, y poniendo mala cara.

-PAMELA: que burra soy, tu labio parece una fresa.

-YO: así vamos a juego, los tuyos saben a fresa – un suspiró exasperado pasó por su cara.

-PAMELA: ¿es que no paras nunca?

-YO: normalmente no.

-PAMLEA: pues deja de decir esas cosas, yo no necesito a tontos que me vayan besando el culo.

-YO: ¿como Hugh?

-PAMELA: exacto…..- no quería decirlo pero ya estaba dicho -….es majo y agradable pero como él puedo tener a quien quiera.

-YO: entonces morirás sola.

-PAMELA: puede ser, quizá lo merezca, pero no voy a perder el tiempo, y tú eres demasiado joven, no sabrías que hacer conmigo, ¿recuerdas?

-YO: podría intentarlo al menos….- mi mano buscó su trasero, me azotó la mano y me señaló con el dedo.

-PAMELA: quieto, o te suelto otro guantazo.

-YO: ¿merecería la pena?

-PAMELA: ¿el que te pegue?

-YO: no se…..si por un beso es una bofetada, estaría dispuesto a pagar el precio….- su cara era de cansancio, no podía más con aquel juego.

-PAMELA: pero yo no, al final me dolería la mano……

-YO: eso solo me incita a volver a besarte.

-PAMELA: déjalo ya.

-YO: pues deberías de apartar tu mano de mi pierna si quieres que deje de acosarte – miró hacia abajo y vio su mano apoyada en mi muslo, muy cerca de la punta de mi polla marcada totalmente dura, la apartó rápido.

-PAMELA: lo……lo siento ….– pero ya era tarde, no miraba otra cosa que aquel bulto -……¡¡dios!!, si que es grande.

-YO: ya te lo dije, ¿quieres verla? – el ofrecimiento la pilló mal ubicada, lo justo para no negarse, así que me la saqué tan rápido que solo le dio tiempo a tartamudear un “no”, al verla se llevó las manos a la boca, trataba de apartar la vista pero no podía, una sonrisa apenas audible la delataba

-PAMELA: ¡¡¡madre mía!!!

-YO: pues esta erección es culpa tuya.

-PAMELA: no, yo no pretendía……- se paró a pensar- …..¿y por que es culpa mía? – “Mierda”, era la 1º que al decirla eso, no asentía atolondrada y lo admitía, me preguntaba y tardé unos segundos en responder, en los que no dejé de balancear mi miembro ante ella, que no apartaba los ojos.

-YO: me metes en tu casa donde “te aburres tan sola”, me frotas el pecho media hora, me mojas los labios con un hielo, y me dices que tome lo que quiero mientras tienes tu mano en mi entrepierna…….no se…..algo de culpa tendrás…..- esta vez si asintió con la cabeza.

-PAMELA: pero yo no quiera esto…..te, te tienes que ir…..- se puso en pie apartando la mirada.

-YO: ¿y a donde pretendes que me vaya con esto así?

-PAMELA: ¿y a mi que me importa?, es cosa tuya….

-YO: y tuya, ahora no me puedes dejar así.

-PAMELA: pues vete al baño y pélatela un rato, renacuajo.

-YO: ¿y con que me motivo?

-PAMELA: ¡¡no, si encima pretenderás que te ayude!!

-YO: no estaría mal - se volvió airada levantando la mano sin saber donde pegar, por que solo miraba mi polla.

-PAMELA: serás……¡¡¡cerdo!!!

-YO: mira, no te estoy obligando a nada, quieres que me vaya pero entiende que no me voy a ir con esto así, así que para irme tiene que bajar y esta no baja si no descarga.

-PAMELA: pues no tengo nada con lo que puedas aliviarte.

-YO: estás té, no sé, quizá unos besos……- estaba colorada.

-PAMELA: ¡¡¡¿pero tú te crees que yo soy idiota?!!! ¡¡Largo de mi casa o llamo a la policía!!

-YO: adelante, me encantará ver como se lo explicas…..- dudó unos segundos -….seguro que las cintas de la cámara de fuera se ve como me has metido en tu casa.

-PAMELA: si, pero no para acostarme contigo…- la imagen de la escena en su cabeza se complicaba - ….¡¡¡dios!!!…..- se sentó sobrepasada tapándose la cara.

-YO: yo también me metería en un lío si aparece la policía, tendríamos que dar explicaciones y si se enteran en el trabajo nos pueden echar a ambos, ¿todo por unos besos y caricias?, ¿no es más sencillo que me ayudes y me marche? – abrió los dedos mirándome entre ellos a la cara por 1º vez desde que mi rabo estaba fuera.

-PAMELA: ¿una paja y te vas? – aguanté la risa.

-YO: lo juro, además desde que me hice la vasectomía duro muy poco – mentira y encima la idea de follar a pelo se colaba en su cabeza.

-PAMELA: vale…….pero nada raro…..y como se lo digas a alguien……

-YO: ¿me has visto hablar de alguna mujer con la que me haya acostado?, son ellas las que hablan.

Suspiró profundamente, y se giró hacia mi, se puso como antes, arrodillada sobre mi costado, y cerrando los ojos comenzó a besarme la cara, lejos de mis labios, se fue acercando y con suavidad me abría la boca con su lengua, muy hábil, pero mientras ella se atrevía a más yo me pajeaba menos, ella lo notó y me miró con odio, pero mordiéndose el labio, agarró mi polla con una mano y comenzó una masturbación violenta y rápida, sus anillos me hacían daño y la cogí la mano para que lo hiciera con suavidad, mientras nos besábamos de nuevo, la posición no era buena así que se levantó el vestido hasta medio muslo para pasar una pierna por encima de la mía y sentarse en mi rodilla, para seguir con su trabajo, ahora con 2 manos, se pasó 10 minutos seguidos, sin lograr nada.

-PAMELA: dios…se me cansan los brazos….¿no decías que durabas poco?

-YO: claro, media hora como mucho…..- abrió los ojos dejando de meneármela.

-PAMELA: ¡¡¿media hora? no voy a estar media hora!!

-YO: es que si solo me masturbas, ……..no se, enseña algo de carne - me pegó en la mano que iba a su pecho.

-PAMELA: no, ni hablar.

-YO: pues sigue con la paja, pero ve a por algo de crema, a la última la salieron callos en las manos – su atusó el pelo para tratar de despertar de aquella situación.

-PAMELA: dios….esto es una pesadilla….- lo decía, lo pensaría, pero su cuerpo no, en mi pierna sentía un calor creciente y húmedo entre sus muslos.

Se lo pensó mejor, y se bajó la cremallera trasera del vestido, sacando los hombros y dejándolo caer a su cintura, mostrándome 2 tetas descomunalmente bien puestas, con un sujetador negro de encaje, y continuó masturbando, sus senos apretados uno contra el otro y bien elevados temblaban como flanes con cada gesto, y a los 10 minutos se cansó de nuevo.

-PAMELA: ¡se acabó! - se puso en pie, temía que se rajara, pero al contrario, se fue bajando el vestido para dejarme el culo en la cara, con un tanga negro fino, el cirujano también había metido mano allí, ¡¡¡y que mano!!!

-YO: estás buenísima – se lo dije mientras mis manos amasaban aquella belleza obra del hombre.

-PAMELA: cállate – se giró sin apartar mis manos de ella.

Al arrodillarse entre mis piernas cogió mi polla con ambas manos y sin pensárselo se metió el glande en la boca, suspiré para hacerla creer que eso funcionaba, si, me excitaba, pero estaba muy lejos de correrme, la noche anterior me la había pasado durmiendo en casa de mi leona por que su marido se fue con el niño a casa de sus padres. No me sorprendió su gran habilidad para comérmela, incluso siendo grande, media barra entraba y salía de su garganta, pero sus manos permanecían quietas, así que era placentero pero nada eficaz. Estuvo 20 minutos chupándola de formas casi indecorosas y nada, pero ya no había restos de rencor en su mirada, estaba decidida y dedicada, se quitó el sostén dejando al aire sus maravillas de la cirugía plástica, no bajaron un ápice de una posición de quinceañera, y me hizo una cubana deliciosa, apartando la barbilla por que le daba con la punta en la garganta, pasados otros 10 minutos se desesperó.

-PAMELA: mira…..esto no avanza……yo no puedo hacer más….- si podía, y lo tenia escrito en su mirada, la cogí del la cintura y de un tirón me la senté a horcajadas encima mía.

-YO: algo se nos ocurrirá….- me besó a disgusto, mis manos en sus tetas no podían contenerlas, eran enormes y antinaturales, casi como las de Lara, pero las de mi juguete eran naturales, y las que tenía en la mano no casaban con aquella mujer.

-PAMELA: vamos a tener que follar, ¿verdad? – acarició mi rostro besándome repetidas veces.

-YO: lo dices como si fuera un suplicio, y lo estás deseando – sus pezones erectos y pellizcados no mentían.

-PAMELA: pero que sea rápido.

-YO: tengo que prepararte bien o te dolerá – asintió ruborizada.

Mis manos repasaron sus senos y ella movía su cadera friccionando con mi polla, estaba jadeando y gimiendo de placer y se sentía avergonzada por no poder evitarlo, mi boca se centró en un pecho mientras la mano libre bajó a su coño, el tanga estaba goteando y al meter los dedos se deslizaron con facilidad hasta el interior de su cueva, al sentir mis dedos apretó las uñas en mi espalda, metía el dedo corazón en ella mientras con la palma de la mano frotaba su clítoris, luego otro dedo y al 3º ya estaba lista, aparté el elástico tanga y mi polla se abrió paso en ella, lentamente la bajé de las caderas sintiendo como se abría, allí hacia mucho que no entraba nadie, y cada pocos centímetros ella subía para relajarse y volvía a bajar, pasada la mitad se la notaba mareada.

-PAMELA: ¡¡¡DIOS SANTO, PERO QUE PEDAZO DE POLLA, NO ME ENTRA!!! – la besaba el cuello para llegar a su oído.

-YO: ¿no me digas que eres más frígida que esas niñatas? – una fugaz ira de competitividad surgió de la nada.

-PAMELA: pero es que es enorme…..dios….¿ya esta toda? – sonreía al tirar de su pelo y clavar los ojos en los suyos, di un golpe de cadera tan fuerte que nos elevamos medio palmo del sofá y al caer entró toda, un gritó ahogado en mi hombro salió de su boca.

-YO: ahora si - repasaba su amplio trasero abriéndola las nalgas para que entrara toda, ella estaba roja y sollozando, con las piernas inquietas.

No se como se armó de valor, cuando se fue relajando, plantó las manos al respaldo del sofá, una a cada lado de mi cabeza, con un movimiento largo de oleaje sacó mi polla entera y se la enterró lentamente, suspiraba entre temblores pero se obligaba a seguir, una y otra vez hasta que la cadencia era de un movimiento continuado, la ayudaba con las manos pero poco más, había momentos en que ella no aguantaba más y dejaba de subir y bajar para besarme con lengua, girando la cadera con elegancia, susurrando palabras groseras sobre lo cabrón que era, la verga que tenia y de que me enseñaba como follaba una mujer de verdad, ya estaba cabalgando de nuevo antes de darse cuenta, se retorcía entre mis manos y estaba gozando como hacia mucho que no hacia. Noté unos espasmos leves en sus paredes interiores, se iba a correr, y la iba a dejar mansa, me aferré a su trasero con fuerza y mi cadera arrancó de 0 a 100 en poco tiempo, su cara de sorpresa casi me frena, pero sus arañazos en mi pecho y como se revolvía el pelo con movimientos de cabeza eróticos me indicaban que iba bien, al par de minutos se corrió como una fuente, se puso en pie frotándose el clítoris como un solo de guitarra sensual, para justo después volver a caer y empalarse.

-PAMELA: ¡¡¡¡¡OHHHHH SIIIIIIII FOLLAME, FOLLAME ASI, CABRÓN DE MIERDA!!!!

Me gusta ser obediente, la bestia apareció de la nada y estuve 15 minutos destrozándola entre gemidos, gritos y corridas, le daba azotes en el culo tan fuertes que se me adormecía la mano y sus tetas eran devoradas, al notar que me iba a correr me puse en pie con ella rodeándome con las piernas, la levantaba sobre mi cuerpo dejándola caer y ella gritaba que más fuerte y más rápido, me mojó todo el vientre con una sacudida de sus fluidos, y exploté con toda mi energía dentro de su coño, ella misma me decía que la diera mi leche caliente, así que fui bajando paulatinamente el ritmo hasta que mi polla flaqueó. Al dejarla en el suelo sus tacones resonaron y me besó con tanta alegría que se le había olvidado por que habíamos empezado.

-PAMELA: oh…….madre mia…….que manera de follar….- repasaba mi pecho con sus manos y lamía en la zona roja de la tila derramada.

-YO: sabia que tú no eras una mojigata, follas mejor que ninguna – otra de mis mentiras.

-PAMELA: y no me has visto esforzándome….me has cogido por sorpresa….no me volverá a pasar.

-YO: ¿volver? – mis manos no se apartaron de su culo.

-PAMELA: ohh si…..tú no te escapas, vamos a gozar mucho juntos.

-YO: ¿entonces no me voy, ni llamas a la policía? – sonrió cogiendo mi polla.

-PAMELA: ¿para que?, ya tengo porra, y claro que te vas, pero a mi cuarto……

La seguí metiéndola mano, la textura de sus senos era tan perfecta que no parecía que estuvieran retocadas, me pegué a su culo mientras la magreaba el borde de su cama con la polla ya dura, al verla sonrió feliz, se abrió de piernas dejando que mi polla la penetrara el coño desde atrás, aferrado a su pecho la estuve follando un rato, apretando su espalda contra mi tórax, manoseando sus senos y tirando de sus pezones duros, hasta sacarla los orgasmos que pretendía, cayó sobre la cama a 4 patas y me comí su coño totalmente afeitado, con un clítoris enorme, lamí su ano y jugué con él hasta tenerlo abierto, estaba aun más cerrado que su coño, me costó metérsela toda, pero a fe que entró, entre lloros y suplicas, nada me paraba, la metía y sacaba tan fuerte que su culo operado no dejaba de vibrar, el orgasmo anal fue increíble, rodó por el colchón poseída, frotándose entre los muslos sin parar saliendo fluidos a borbotones de su interior, me lancé a lamer su coño sin dejarla respiro, otro orgasmo la hizo tirar de mi pelo tanto como para besarla los labios de la cara, y la metí en su madriguera del tirón, me rodeaba con sus brazos y piernas siguiendo el ritmo de mi cuerpo, con un ligero suspiro ahogado con cada embestida, la cama temblaba y crujía cuando la bestia apareció de nuevo, se le pusieron los ojos en blanco y ya solo gemía, parecía una cuenta atrás y cuando el gemido era más agudo eclosionaba en otro orgasmo que la volvía loca y difícil de mantener quieta, estaba por venirme, así que la saqué de ella y me arrodillé poniendo mi verga entre sus senos, apretándolos con una cubana que recibió toda mi leche, manchando sus senos su garganta y su cara, pero lamía mi glande tragando la mayor parte, cogiendo mi rabo como un ente extraño, desorientada y sin saber que hacer, unos minutos de relajación y besos tiernos nos devolvieron a la serenidad.

-PAMELA: gracias………lo necesitaba.

-YO: un placer.

-PAMELA: no, en serio…….necesitaba un buen polvo, pero esto es demasiado…….me has quitado todas las penas - se abrazó a mi pecho cuando me acosté a su lado.

-YO: será un honor quitártelas siempre que quieras – nos besamos de forma lasciva.

-PAMELA: pobres niñas, con un hombre como tú, jajaja – seguía pensando que era superior, Penélope follaba mil veces mejor que ella, llevaba 4 meses triándomela, no era justo, pero Pamela solo había demostrado algo de movimientos de caderas, poco más.

-YO: no son rival para una mujer como tú, podría estar toda la noche follándote…

-PAMELA: quizá no te quede otra.

Efectivamente, me quedé toda la tarde y la noche en su casa, parecía que quería recuperar el tiempo perdido en un solo día y yo era su herramienta, cuando llegó el amanecer me demostró todo lo que sabia, y si, movía las caderas con gracia y no la chupaba nada mal, pero había catado mujeres mucho más atrevidas y expertas en el sexo, fue una decepción, pero al menos, me quitaba una más de la lista.

Raúl – Malas noticias.

Tenia muchos frentes abiertos, todo sea dicho, entre el trabajo, alguna visita a mi leona, las chicas del piso, Penélope, y ahora Pamela, casi no pasaba por casa, apenas dormía, descansaba los fines de semana con mi familia, me equilibraba estar con ellos esos días, no solo físicamente si no que mentalmente me tenían centrado y con la cabeza bien amueblada, por eso cuando Dani, la sirvienta rumana de las mañanas, me dijo que necesitaba hablar conmigo, estuve pensando mucho sobre qué, el problema es que ahora con mi trabajo no coincidíamos nunca, así que la invité a ella y su familia a venir un sábado a comer a casa, a mi madre le pareció una idea genial, habían hecho migas muy bien Dani y ella, en parte por que se llevaba un pellizco de los beneficios de mi madre con los críos que cuidaba de las vecinas ricachonas. Por un día Dani fue la señora y mi madre la criada, no la dejó ni ayudar a poner o quitar la mesa, y eso que Dani lo intentó, en la sobremesa aproveché que mi padre charlaba con su marido con el crío entre los brazos, me llevé a Dani a la terraza, iba preciosa, con un vestido de flores holgado de cintura para abajo, un ligero escote y lo más arreglada que la había visto nunca, sin excentricidades que no necesitaba, con unos zapatos elegantes de vestir, no tacones de vértigo pero si la estilizaban, con un recogido sencillo en el pelo rubio dejando caer un mechón en su flequillo, y sus ojos azulados tan despiertos.

-YO: ¿que tal todo?

-DANI: muy bien……yo estoy agradecida a ti – ya conjugaba, pero tardaba en hablar y no siempre tenia concordancia.

-YO: no se merecen, te has portado bien con mi familia y conmigo.

-DANI: y tu familia conmigo también, ser buenos y no tratarme como dueños, si no como familia.

-YO: si, nunca hemos sido muy señoritos…..

-DANI: madre ser increíble, me quita trabajo, y ahora esto de hoy, yo muy feliz – casi sollozaba y me abrazó dejándome sentir su cuerpo pegado al mío y un olor afrutado que me agradó, le devolví el abrazo levantándola un poco del suelo.

-YO: ¿entonces todo va bien? – la pedí que se sentara en la hamaca mientras yo arrastraba una silla de plástico para sentarme frente a ella.

-DANI: yo si, marido no trabaja, no encuentra de lo suyo, pero lo que yo ganar aquí nos va bien, y el cuida de nuestro hijo.

-YO: ¿se portará bien contigo…? - no me gustaba como la miraba.

-DANI: si, si, el bueno, se enfada conmigo por que dice que yo soy muy servicial con ustedes.

-YO: espero que no se moleste.

-DANI: no pasa nada, él no sabe……. nuestro acuerdo, nadie sabe.

-YO: ¿y por eso me quieres hablar conmigo, por nuestro acuerdo? – era una de las ideas que se me habían pasado por la mente.

-DANI: si, yo ser feliz aquí y ganar dinero suficiente………yo solo quiero decirte que gran señora mandar mensaje, y ofrecerme mucho dinero por volver a decir cosas de ti – cerré los ojos, Eleonor volvía a la carga, desde que Dani me dijo que teníamos que hablar lo presentía.

-YO: ¿y por que me lo dices y no has cogido el dinero? – me cogió de la mano casi echándose a llorar.

-DANI: yo estar contenta aquí, se han portado bien conmigo y mi familia, no ser normal en mi vida, y yo querer agradecer, aunque venir bien dinero, pero ser más importante familia…………. – casi me echó a llorar yo, aquella extranjera con 1 solo sueldo dando de comer a 3 bocas rechazaba una oferta de dinero por sentirse en deuda, no solo conmigo, si no con mi familia - …………en estos meses yo sentirme querida y respetada, madre ser apoyo, padre ser cariñoso y amable, hermana defenderme de señoras en ascensor muchas veces.

-YO: te lo agradezco de corazón Dani, esto significa mucho para mí.

-DANI: yo sentir mal, recibir mensaje hace semanas, y no decir nada, no quería pero necesita pensar – cuando se ponía nerviosa costaba seguirla hablando, la besé la mano para tranquilizarla.

-YO: no pasa nada, es normal, primero has mirado por tu familia, no te puedo culpar por ello, pero ahora estás aquí y me lo has dicho, ¿que es lo que quería?

-DANI: ella pedir que yo informara de vida otra vez, ella decía que enterarse de despido y de que señorita Lola….o Casandra, se fue.

-YO: ¿y que la has respondido?

-DANI: yo decir que si, pero para no levantar sospecha, si digo que pienso, quizá, no se crea si después – “tiene sentido”.

-YO: ¿y le has informado de algo?

-DANI: si…– dijo triste –… pero yo solo confirmar que tú trabajo perdiste y Casandra no volver, pero eso ya me dijo ella, yo solo lo afirmé.

-YO: joder, esta loca no me va a dejar nunca…- pensé unos segundos -……bien, por ahora infórmala de todo…… - pensé mejor - ……menos de la guardería de mi madre………… – negó rápidamente para que supiera que no había dicho nada de eso, tenia sentido, si se llevaba un pico no querría quedarse sin ese dinero -…… si hay algo que dudes me llamas y te digo si se lo cuentas o no, por ahora no tengo nada que ocultar de ella, o no que sepas tú, así que tranquila, coge el dinero y gástalo bien.

-DANI: ¿tú no enfadado? – parecía casi sorprendida.

-YO: no me ha hecho gracia que no me lo dijeras desde el primer día, pero lo que cuenta es que me lo has dicho – me puse en pie besándola en la frente.

-DANI: tú ser muy bueno, yo ser tonta – se levantó y me abrazó sollozando, la calmé rodeándola con las manos y tranquilizándola, pasando mis manos por su espalda.

Quería serenarla antes de volver dentro para que no se la notaran las lagrimas, así que como ella no se separaba, yo tampoco, estaba rodeando mi cuello secándose con mi camiseta, y con el roce mis dedos notaban su espalda y el sujetador bajo el vestido, al bajar el inicio de sus bragas, con sus senos aplastados contra mi, moviéndose con cada respiración entre cortada y sus muslos apretados contra los míos, con mi verga palpitando en uno de ellos, una cosa es lo que mi mente quisiera y otra a lo que mi polla reacciona, así que notaba como se me empezaba a poner dura, quise apartarme de ella pero me tenia tan firmemente agarrado que me daba cosa separarme bruscamente, así que pensaba en cosas poco eróticas, incluso parecía que bailábamos, no se cuanto pasó, a mi me parecieron días, pero seguramente fueron 10 minutos de tenerla entre mis brazos, gimoteando, hasta que por fin se separó de mi, ya más tranquila, la sujetaba de la cintura mientras la decía alguna broma para ver su bella sonrisa, y se retocaba los párpados para evitar que se le corriera el maquillaje.

-DANI: ¿estoy bien? – me preguntó pensando en su aspecto.

-YO: eres preciosa – fue lo que me salió, sonrió un poco alejándose del todo y di gracias a dios, un par de minutos más y me la cepillo delante de su marido, no me resistí y la acaricié la cara con una mano mientras le secaba un resto de lagrima de su mejilla.

Entramos y charlamos un largo rato entre todos, tomando un café y compartiendo bromas y anécdotas, mi padre se ofreció a darle trabajo al marida en la empresa en que él trabajaba, mi padre no era el dueño pero si llevaba tanto tiempo allí que era muy respetado, el marido dijo un ”si, muchas gracias”, muy semejante al “ya le llamaremos” de las empresas en las entrevistas. Al acabar y despedirse la di otro fuerte abrazo para que Dani se fuera tranquila. Recogí el salón por orden de mi madre y me fui de cabeza al piso de estudiantes, sin llamar ni nada, iba encendido por ese abrazo tan emotivo de Dani, me abrieron para subir, me daba igual que fuera fin de semana, iba a destrozar a Lara, pero al subir, y saludar sin mirar, fui a su cuarto y lo encontré vacío, busqué a otro ser vivo y me encontré a Naira sentada en el sofá del salón viendo una película de dibujos enterrada bajo 3 mantas.

-YO: hey canaria, ¿como te va?

-NAIRA: pues aquí, de fiesta, ¿no lo ves? – la ironía no era su fuerte.

-YO: ¿y Lara? - me miró con cierto desdén.

-NAIRA: no está, ha salido con Alicia, andan detrás de un chico que le gusta a Alicia…….Lorenzo o algo así.

-YO: ya, algo me dijo….- ya me lo había presentado, y su sola mención me daba repelús, un chico majo, agradable, apuesto y bien parecido, “un capullo”, pensaba cada vez que lo veía agarrándola.

-NAIRA: así que hoy te quedas sin fiesta……- repito, la ironía no era lo suyo –……..además, ¿que haces aquí un fin de semana?

-YO: joder, ¿no puedo venir a ver a mis amigas?

-NAIRA: no, vamos, que nunca vienes si no está Lara, como andáis…….liados.

-YO: bueno, que tengamos nuestras cosas no significa que no pueda venir a verte a ti, por ejemplo.

-NAIRA: ¿has venido a verme a mí? – me miró conociendo la respuesta.

-YO: está bien, tienes razón, pero también eres mi amiga, y he estado dando clases de conducir gratis – la broma la relajó el rostro.

-NAIRA: es verdad, lo siento…es que estoy en esos días…- era obvio, sus amigas de caza en fin de semana y ella sola en casa sentada en el sofá con el pijama y mantas, viendo películas de niños y con una tableta de chocolate a la mitad en la mesa.

-YO: pobrecilla, ¿y te has quedado sola?

-NAIRA: si, Mara andaba por aquí pero ha salido de fiesta con unos amigos que han venido de Ibiza, tenias que haberla visto, iba rompedora …….– Mara no tenia pecho pero sabia vestirse para dejar boquiabierto a quien fuera –…… y mírame a mi, aquí echa un asco ……..– la miré girando la cara, no se lo podía negar, despeinada, con la cara lavaba y ojeras, con una mueca de dolor constante, me dio tanta lastima que se me bajó el empalme de golpe.

-YO: ¿y puedo hacer algo por ti? – sopló agarrándose el vientre mirándome pidiendo auxilio.

-NARIA: no, bueno……….no puedes hacer que no me duela…..- en eso tenia razón, pero no iba a dejarla allí como una cría de oso pillada en una trampa.

-YO: no puedo hacer que no te duela, pero puedo estar contigo – me senté a su lado en el sofá, su cara era confusa.

-NAIRA: ¿y que vas ha hacer, estar ahí sentado?

-YO: eso mismo, y lo que necesites, me lo dices – sonrió levemente.

-NAIRA: no puedo pedirte eso……

-YO: una suerte que no lo hayas hecho.

-NAIRA: es sábado, y tendrás planes……….si venias a por Lara…….

-YO: eres mi amiga, y ya he sido demasiado descortés contigo……¿que peli es? – sonrió entendido que me importaba una mierda la película, si no que daba por concluida la discusión, me iba a quedar con ella.

-NARIA: eres un imbécil……- me dio un ligero puñetazo en el hombro - …….es la 2º de la china esa que se hace pasar por hombre……

-YO: ¿no jodas?, ¿hicieron una 2º?

-NAIRA: si hijo mío……y es mala como el demonio…..- se acurrucó en el sofá doliéndose y tapándose con las mantas.

Trataba de no molestar mucho y solo hacerla reír un poco, distraerla, traerla bebidas calientes, alguna pastilla que me mandó a buscar, y tuve que bajar a por más chocolate, como no sabia cual le gustaba le compré 1 tableta de todas las que encontré, casi se le salen los ojos al ver tanta chocolatina, y me abrazó dejándome ver por fin como iba vestida saliendo de debajo de la montaña de mantas, lo menos erótico del mundo, un pijama usado de lana gorda, manga y perneras largas, estas metidas por dentro de doblez de los calcetines y con una camiseta interna, disimilando por completo todas sus curvas, solo de verla me daba calor, ella era canaria, el final del invierno de Madrid la mataba, pero yo era una estufa, emanaba calor, así que se quedó abrazada a mi unos segundos.

-NAIRA: dios que calentito estás – me frotó con las manos.

-YO: ya, es uno de mis dones.

-NAIRA: jo, además hueles genial – inspiró profundamente mi ropa.

-YO: gracias, al final me vas a sonrojar……

-NAIRA: que bobo, no en serio, huele muy bien.

-YO: es el desodorante, de esos que dicen que atraen a las mujeres en los anuncios.

-NAIRA: jajajaj ya, como si a ti te hiciera falta – se soltó y de inmediato se hundió en la torre de mantas, me senté a su lado, como me suele gustar, con un brazo apoyado en el respaldo.

-YO: pues no me va mal con el desodorante…..

-NAIRA: no es el desodorante, capullo, eres tú.

-YO: jajaja ya lo se, soy irresistible – me encanta decir las cosas como si fueran una ironía para hacer la gracia, pero que, en realidad, son ciertas.

-NAIRA: pues si tonto, podrías estar por ahí con cualquiera colgada del brazo y te pasas la tarde del sábado aquí cuidando de mi, no es justo ¿que mujer se resiste a eso? – lo decía en broma pero no había nada de mentira en lo que decía, y aunque no lo había buscado, era un detallazo.

-YO: oye, pues nada, si quieres me voy y que te den……- amagué con levantarme pero me cogió de la mano y me tiró al sofá de nuevo, pasándose mi brazo por encima de los hombros

-NAIRA: ni de coña te vas, tú cierra la boca y abrázame.

Se pegó ocupando el hueco bajo mi brazo en el respaldo y descansado su cuerpo sobre mi costado, con la cabeza en mi hombro/pecho, la rodeé con los brazos frotándole la espalda con una mano, buscaba calor, por que al minuto nos tapó a ambos con las mantas, ella parecía contenta con esa sensación de calidez y seguridad, pero yo me estaba asando, comenzaba a sudar y ella no tenia intención de moverse, había encontrado un estado de comodidad y no podía quitársela, así que aguanté viendo un programa de TV sobre los jóvenes de ahora y sus relaciones, un bodrio que ella puso, yo estaba sudando como un pollo, mientras ella le gritaba a la TV por cualquier tontería, yo le daba la razón y la seguía la corriente.

-YO: ¿y por que ves esta mierda si no te gusta?

-NAIRA: por que así me desahogo, son unos niñatos y las tías son retrasadas.

-YO: ¿no estarás celosa por que esas encuentran novio y tú no?

-NAIRA: para tener de novio a un yonqui que me trata mal prefiero estar sola.

-YO: joder, ahora que lo dices, no tienes novio ni nada, y no te he visto con nadie…..

-NAIRA: ¿y que?

-YO: no se, me parece raro, eres guapa y estás buena……- lo entendió como un halago aunque para mi era una mera observación.

-NAIRA: jajaja gracias, pero es que no encuentro a………. nadie especial.

-YO: es que eso de alguien especial es muy difícil, mírame a mí, Ana era el amor de mi vida, después Casandra, y ahora estoy solo otra vez.

-NAIRA: no estás solo, estás con Lara….- se separó un poco cambiando la postura.

-YO: no estoy con Lara, solo follamos – me miró torneando los ojos, confusa.

-NAIRA: es lo mismo.

-YO: no lo es, Lara no es mi novia, ni jamás lo será, es inmadura, dependiente y una mujer débil.

-NAIRA: ¿y por que te acuestas con ella?

-YO: por que tiene unas tetas magnificas – me volvió a pegar.

-NAIRA: ¡oye! que es mi amiga, no te pases.

-YO: es la verdad.

-NAIRA: ¿y si se lo digo?

-YO: ¿te crees que no lo sabe ya? quizá aspire a que algún día me enamore de ella perdidamente, pero eso no pasará.

-NAIRA: entonces estas jugando con ella.

-YO: no, los 2 sabemos lo que hay, nunca le he dado pie a más, y si podemos divertirnos, no veo el problema.

-NAIRA: entonces, ¿solo tenéis sexo?

-YO: exacto.

-NAIRA: ¿y si ella se acuesta con otro?

-YO: bravo por ella, ya ves lo que me ha importado que haya salido de caza con Alicia.

-NAIRA: ¿y tú…….te acuestas con otras?

-YO: unas cuantas……- “¿por que mentir?”

-NAIRA: ¡que cabrón!…….¿con cuantas?

-YO: pues ahora mismo con Lara y un par de chicas de la oficina.

-NAIRA: ¿solo?

-YO: ¿y cuantas esperabas?

-NAIRA: es que Alicia me ha contado cosas, de cuando Ana te dejó…- lo decía de puntillas temiendo abrir alguna herida.

-YO: bueno, estuve jodido un tiempo y se me fue la olla, iba detrás de cualquiera, pero gracias a dios se me pasó con Casandra.

-NAIRA: ¿y con cuantas llegaste a acostarte a la vez?

-YO: pues……puf….a ver……estaba Jeni, Eli, Yasira, mi ex jefa del super…….

-NAIRA: ¿te tirabas a tu jefa?

-YO: si…..además de la hija del panadero, la vecina de abajo, la de la tienda de ropa……ah y las amigas de mi hermana……..alguna más que no recuerdo…….. y Casandra al empezar – me miraba atónita.

-NAIRA: pero que bestia, ¿como podías…..?

-YO: pues tenía un calendario, horarios y tal, aunque siempre caía alguna otra y me descuadraba todo……- reía sonoramente.

-NAIRA: no, idiota, digo…..ya sabes….con todas esas mujeres…

-YO: pues con cansancio y mucha bebida energética, de 2 en 2 o incluso 3……..

-NAIRA: ¿pero se conocían?

-YO: algunas, si.

-NAIRA: ¿y no les importaba?

-YO: pues si y no, a Jeni le terminó por hastiar, alguna no quería saber nada de lo que hacía con las demás, mientras tuvieran su rato conmigo, y a otras les encantaban los tríos.

La conversación duró horas, se retorcía y volvíamos al principio, me sentía muy cómodo y parecía que así la entretenía, luego hice la cena, la preparé uno de mis platos estrella, la tortilla francesa con queso rayado, y al oler el queso casi vomita, me la comí yo, mientas le preparaba una ensalada con frutos secos y una manzanilla para calmarla el dolor, (Gracias Internet), le sentaron bastante bien por lo que nos acurrucamos de nuevo en el sofá, yo ya me quité la cazadora, y después de oler mi camiseta sudada también me la quité, secándome con una toalla, no le importó lo más mínimo apoyarse en mi torso desnudo.

-NAIRA: muchas gracias por todo, eres un sol.

-YO: ojalá pudiera hacer más, ¿te duele?

-NAIRA: ahora un poco menos, pero no se va, nunca se va, odio ser mujer……

-YO: no esta tan mal, sois bellas, oléis bien, nos tenéis embobados durante horas y lo mejor de todo, tenéis tetas….- rió alegre.

-NAIRA: ya, pero cada mes tenemos que desangrarnos, y este dolor……..¡¡¡además meais de pie!!! – ante eso ningún hombre tiene respuesta, y si la tenéis, por favor, decídmela.

-YO: lo siento….

-NAIRA: dios es que es tan molesto…..

-YO: ¿pero donde te duele…..por dentro?

-NAIRA: si…..no…..no lo se…puffffff ¿me haces un favor?

-YO: claro, dime….

-NAIRA: en el cuarto de baño de mi habitación hay una manta eléctrica, ¿me la traes?

-YO: ¿una manta eléctrica?

-NAIRA: si, dicen que si aplicas calor en el abdomen se calma – sorprendido por esa revelación me fui a por ella, la enchufé cerca y se la di, ella se la puso por debajo del pijama directamente sobre la piel.

-YO: ¿mejor? – sonreía feliz.

-NAIRA: no……esta mierda no hace nada…..- me senté ofuscado y cansado, arrepintiéndome de haberme quedado - ………lo siento, no es culpa tuya.

-YO: es que no se que más hacer.

-NAIRA: ni yo……esto es un suplicio…..- se doblaba sobre si misma - …..¡¡¡¡Dios, que asco!!!! - empezó a pegar un cojín con demasiado fuerza.

-YO: para, para, que te vas ha hacer daño – aparté el cojín y me miró con autentico odio, luego se rindió sobre el sillón, sollozando de mentira, pero sentía que no estaba lejos de echarse a llorar de verdad.

-NAIRA: joder….no lo aguanto…….

-YO: ¿y que hago?…no se….¿te doy un masaje o algo? – como un resorte se incorporó con cara de niña pequeña pidiéndole dinero a su padre.

-NAIRA: ¿me darías un masaje?

-YO: si te ayuda.

-NAIRA: peor no me a irá……

-YO: pues tú dirás.

Sonrió odiándome menos en su mirada, con la habitual elegancia de una dama se desabrochó el sujetador y se lo sacó por debajo del pijama, soltando un bufido de placer y libertad que me hubiera costado sacar a alguna follándola, se dio la vuelta sujetándose el pelo y me senté a su espalda comenzando un suave masaje relajante encima de la tela, pese a que todo parecía llevar una connotación sexual, ella tenia el periodo y desde el principio sabía que no tendría sexo con ella, así que fui meramente un masajista en busca del bienestar, sin repasar las zonas erógenas, solo destensaba y colocaba sus músculos, sus gemidos de gusto se hacían claros, y como me enseñó Eli la zona del sujetador fue la más trabajada, al final metí el puño en la corva del final de su espalda y apreté lentamente escuchando sus lamentos hasta que crujió, soltando un alarido de inconmensurable gozo.

-NAIRA: oh, dios………que gustazo.

-YO: ¿mejor? – temía preguntar.

-NAIRA: pufff mucho mejor.

-YO: ¿ya no te duele?

-NAIRA: no, si que me duele, pero al menos un masaje que me llevo, ¡vaya manos tienes!, deberías ser masajista.

-YO: no podría contenerme con clientas tan guapas como tú – se dio la vuelta, doblando la espalda y regalándome una sonrisa que nunca le había visto.

-NAIRA: como sigas así al final te hago venir cada mes – seguía retorciéndose por la espalda.

-YO: ¿te ocurre algo?

-NAIRA: no, es que noto el lado izquierdo algo adormecido, será la postura.

-YO: ¡a ver si te he jodido algo!, siéntate de lado – obedeció, palpaba pero no notaba ni veía nada donde ella me decía.

-NAIRA: no, es más abajo…..- como no veía nada fui a subirla el pijama, pero se giró algo avergonzada.

-YO: ¿que te pasa? ni que no te hubieras quedado dormida borracha desnuda en mi cama……- se puso roja.

-NAIRA: eso fue la bebida……

-YO: no pasa nada, no voy a ver nada que no haya visto ya.

Cedió girándose para darme la espalda de nuevo, soltando la parte baja del pijama, levanté con cuidado hasta ponérselo en la nuca, dejando su bonita espalda al desnudo, palpé con las yemas de los dedos hasta que en un zona noté un bulto, fui dando ligeros masajes por la zona notando como se disipaba aquel punto, lentamente el masaje fue haciendo efecto y la dejé como nueva, bajándole el pijama.

-NAIRA: pufff ahora si que estoy en la gloria.

-YO: te sigue doliendo, ¿no? – no me la iba ha hacer ilusiones a esas alturas, todo lo que había intentado resultó, no solo inútil, si no exasperaste.

-NAIRA: si, pero menos ….– se giró de nuevo y me dio un abrazo con los morritos puestos – ….eres increíble.

-YO: lo sé – me palmeó en la espalda por seguir bromeado.

-NAIRA: ¿es que no te tomas nada en serio?

-YO: no, es más divertido así – sonreía al separarse de mí.

-NAIRA: no, en serio, te agradezco mucho esto, lo necesitaba, ningún amigo hace esto.

-YO: es que en realidad quiero acostarme contigo, y así gano puntos…….- abrió la boca falsamente ofendida y empezó a pegarme con el cojín en la cabeza.

-NAIRA: ¡eres de lo que no hay, ¿no puedes dejar de gastar bromas?! – esquivaba “cojinazos” riéndome por que, de nuevo, siendo una broma técnicamente era la verdad.

-YO: deja de pegarme, que te vas ha hacer daño - esperó a que bajara la guardia para darme un último golpe en la cara.

-NAIRA: así aprenderás…- se volvió a doblar sobre si misma escondiéndose de una posible represalia entre las mantas, riéndose, hasta que el gesto de dolor reapareció.

-YO: ¿ves?, ya se te ha pasado por pegarme…– puso morritos de niña buena -… no me mires así, ni que tuvieras lava ahí dentro……

-NAIRA: pues lo parece - espetó furiosa.

-YO: ¿y si combinamos todo?

-NAIRA: no entiendo…..- me senté en el esquinazo del sofá, abriéndome de piernas.

-YO: ven aquí, siéntate como cuando conducimos…. – me miraba de forma extraña –…. vamos.

-NAIRA: obedeció pegando su culo a mi entrepierna y la apreté del pecho para que se recostarla sobre mi torso desnudo.

-YO: bien, ponte la mierda esa eléctrica.

Obedeció y luego nos tapamos con las mantas, la rodeé con los brazos por el vientre pegando la manta eléctrica, haciendo fuerza y soltando de forma rítmica, parecía que la calmaba, de pronto recordé la película que habíamos visto en que un mago se frotaba las manos con fuerza y al aplicarlas en la zona herida, sanaba, me pareció gracioso, así que saqué mis manos de la montaña de mantas y las frotaba delante de su cara con energía.

-NARIA: ¿que haces?

-YO: curarte

-NAIRA: jajaja para, eso no funciona.

-YO: tú deja que cojan temperatura.

Sonreíamos, mientras ella se movía junto a mi respiración, más de 3 minutos frotándolas hasta que las sentía apunto de echar arder, metí mis manos debajo de la manta eléctrica por dentro del pijama, piel con piel, sintiendo el calor y su húmeda carne llena de sudor.

-NAIRA: no, por dios, que asco, estoy toda sudada – se tapaba la cara avergonzada, era irrisorio que, teniendo mi polla creciendo en su trasero, habiéndola metido mano desnudos en una ducha o haber dormido una noche completamente desnuda en mi cama mientras a 1 metro Lara era destrozada a polvos, se avergonzara de eso.

-YO: tranquila, no eres la 1º mujer a la que hago sudar entre mis manos – no era broma, ni puse tono de broma, aun así, sus labios dibujaron una sonrisa muda.

Al sentir como la palmas de mi manos quemaban suspiró aliviada y fui dando pequeños apretones en la zona del vientre bajo, metiendo los dedos por dentro de la parte inferior del pijama, me aferraba con fuerza unos segundos y soltaba, como antes, pero directamente sobre la piel, al sentir la presión aguantaba la respiración junto a ella, y al aliviar las manos soltábamos el aire a la vez, una y otra fue sucediéndose el mismo gesto, la susurraba cosas bonitas al oído, o directamente le daba un beso en la mejilla, mientras que por mi pecho resbalan gotas de sudor. Mis manos estaban ardiendo, entre las mantas, ella, y la manta eléctrica, era el interior de un horno, pero a fuerza del masaje le había hecho cerrar los ojos y suspirar aliviada cada una de las veces, con sus manos agarradas a mis rodillas apretando y soltando conmigo, y mi polla a punto de estallar en su espalda, debía de ser tan consciente como yo de esa fricción pero no dijo nada, solo estaba recostada sobre mi cuerpo, con los ojos cerrados y haciendo fuerza para mantener ese vaivén, casi se podría decir que me estaba masturbando usando su cuerpo. Me pasé hora y media así, me estaba gustando darla placer sin necesidad de sexo, sintiendo ahora la gotas de sudor cayendo por su vientre, entre mis dedos, el tacto de su ombligo y casi juraría que al meter los dedos por debajo del pijama sentía sus bragas húmedas.

-NAIRA: para ya, debes estar cansado.

-YO: conozco maneras peores de estar cansado – rió halagada, metiendo sus manos junto a las mías, entrelazando los dedos, siguiendo el ritmo un par de minutos más.

-NAIRA: no, en serio, me encuentro mucho mejor.

-YO: como quieras….- saqué las manos al aire y al verlas se echó a reír, yo me quedé asustado, parecían las manos de un viejo, totalmente arrugadas y deformes, como si hubiera pasado 1 día entero en el agua.

-NAIRA: dios, jajajajaja ¿que te he hecho?

-YO: me has quitado la juventud de las manos, ¡¡¡devuélvemela!!! – la hice unas ligeras cosquillas con la nariz en el cuello.

-NAIRA: pobre mío, míralas – sujetó mis manos húmedas aun.

-YO: no es nada, boba, ¿tú como estás? – se giró y pude sentir por fin mi polla despegarse de mi muslo, libre al fin de la presión que ejercía su cuerpo, se sentó de lado sobre mis piernas y me volvió a abrazar con mucha fuerza.

-NAIRA: mucho mejor, de verdad, casi no me duele.

-YO: ¿casi? – el tono era de agotamiento desesperado, se separó lo justo para seguir abrazado a ella y estar cara a cara, deleitándome con su sonrisa.

-NAIRA: no se me irá hasta que pasen los días, pero te lo agradezco un montón …..– se quedó mirándome a los ojos, jugando en mi pelo con los dedos ya que tenia las muñecas apoyadas en mis hombros, mientras yo la mantenía erguida con una mano en su espalda y la otra acariciándola en una de sus piernas, desde la rodilla hasta su cintura recorriendo todo su contorno, sentada en mi regazo………… y de golpe, me besó, fue corto, alegre, inocente y rápido, pero al instante le cambió la cara –……. perdona……dios, lo siento…..- se quiso quitar de encima mía, pero la sujeté como pude ya que, momentáneamente, no tenia manos.

-YO: tranquila canaria, no pasa nada.

-NAIRA: no, si pasa, te he besado, ¡dios!, Lara me va a matar.

-YO: ya te he dicho que no te preocupes por ella, … ¿por que lo has hecho? – conocía la respuesta, pero iba a jugar un poco.

-NAIRA: ¡¡¡¡no lo se……..se…….se me ha escapado…estás aquí, conmigo………me estas cuidando…..en calor…….tus manos…..dios,,,,,,,que vergüenza!!!! – se tapaba la cara de nuevo con las manos.

-YO: no tienes que avergonzarte…..besas muy bien.

-NAIRA: no…calla….esto no ha pasado, ¿vale?......- era una pregunta y una orden a la vez.

-YO: como quieras, no diré nada a nadie…..no le diré a nadie que eres preciosa, que eres una buena chica, que tienes unos labios carnosos y apetecibles, o que besas como lo deben de hacer las damas, lo suficientemente corto para no ser una más, pero lo justo para enamorar – me reía al decirlo por que se estaba poniendo roja a más no poder, sin saber que cara poner, si halagada, ofendida o simplemente confusa.

-NAIRA: eso…no digas nada - atinó a decir ruborizada.

-YO: nadie lo sabrá, pero una persona ya lo sabe.

-NAIRA: ¿quien?

-YO: yo - se le escapó un suspiro de quinceañera mordiéndose el labio, si no estuviera con el periodo ya estaría abierta de piernas, con el sonido de tragaperras de bar al dar el premio.

-NAIRA: no me digas esas cosas…..

-YO: ¿por que no? Son ciertas.

-NAIRA: pues por que no está bien.

-YO: ¿que es lo que no está bien?

-NAIRA: tú y yo…..Lara……..es muy confuso….y tú no eres de fiar – “no es tonta”

-YO: en absoluto – hacia bien en no fiarse, llevaba un rato elevando las piernas para que lentamente se venciera sobre mí.

-NAIRA: usas a las mujeres.

-YO: no más de lo que me usan ellas a mi – estaba resultando, su cara cada vez estaba más cerca, una de sus manos dejó mi nuca para hacer fuerza contra mi pecho.

-NAIRA: seria otra de tu lista, no me quieres, eso lo se.

-YO: no estoy enamorado de ti, y tú no lo estás de mi, pero deseo besarte de nuevo, ¿y tú? – jugó con uno de sus dedos en mi mentón, venciéndose al fin sobre mi pecho con su cadera aprisionando mi rabo.

-NAIRA: no lo se…..¿me harás daño?

-YO: solo si me pides más de lo que pueda darte, ya sabes que no soy como los demás, tengo a 60 ahí fuera esperándome, y no voy atarme a nadie, pero ahora estoy aquí, a tu lado, sabiendo que no podré acostarme contigo, rogándote por un simple beso – se derritió como un hielo en verano, rascó con las uñas mi incipiente barba, cerró los ojos justo antes de volver a besarme, esta vez de forma lenta, sonora, con ternura y sensualidad.

-NAIRA: ¿por que los malos nos gustan tanto? – sonrió antes de volver a besarme, unas cuantas veces.

Mientras seguía acariciándola, al 4º beso nuestras lenguas hicieron contacto y la provocaron una sonrisa nerviosa, pero me sujetó la cabeza para elevarse un poco y besarme desde arriba, me gustó la sensación de tener el cuello estirado mientras le metía mi lengua para jugar en su boca, pasamos unos minutos así, besándonos de forma caliente, mi mano en su espalda fue a su nuca, y la de la pierna a su culo, amasando con delicadeza, ella quiso parar, fue descendido su calentura dando pequeños besos cortos, y tan lentos que sentía como sus labios se despegaban de los míos, hasta que se separó abriendo los ojos con un brillo especial, mordiéndose el labio, mirándonos sabiendo que los 2 deseábamos algo que no podía pasar, recorriendo con las yemas de sus dedos mi pecho.

-NAIRA: mira como estás……- creía que se refería a mi brutal erección, pero señalaba mi pecho, brillaba de sudor con gotas haciendo carreras ayudadas por la gravedad.

-YO: jajja necesito una ducha……..de agua fría a ser posible – por si no lo había visto me agarré el paquete.

-NAIRA: jajaja y eso solo con unos besos……

-YO: claro que tener tu culo pegado a mi rabo una hora larga mientras te metía mano no ha ayudado nada – soltó una carcajada nerviosa.

-NAIRA: pues donde quieras, están todos los baños libres.

-YO: ¿que hora es? lo mismo me compensa irme a casa…… – se lanzó a abrazarme.

-NAIRA: no……… por favor…… quédate……..duerme conmigo – “por lo visto hoy el tema va de abrazos”, la rodeé con delicadeza metiéndola mano con cierto disimulo en la cintura y un muslo.

-YO: ¿estás segura? ¿que pensarán las demás?

-NARIA: me da igual, te has portado genial, te necesito a mi lado esta noche.

-YO: está bien, pero deja que me de una ducha…. – la cogí de la barbilla con el índice y el pulgar -…. besas demasiado bien como para poder dormir a tu lado tal como estoy – sonrió bajando la vista, sonrojada al sentir mis dedos pasar por sus labios.

Me estaba enamorando de su sonrisa, se puso en pie y yo tras ella, con la barrera bajada, un pantalón holgado y sin slip, iba a por Lara así que iba en modo “abre fácil”, soltó una carcajada al verme la tienda de campaña, la perseguí entre risas y luego me metí en la ducha de un cuarto, literalmente me di un agua fría, ni encendí el calentador del agua, me pasé 5 minutos tiritando bajo el agua hasta que mi polla me concedió un respiro y se bajó, me puse de nuevo el pantalón y al salir oí la puerta de la calle abrirse, no se me ocurrió esconderme, pero tampoco me hubiera dado tiempo, Mara apareció junto a un tío que la metía mano por mil sitios, Mara reía como solo hacia cuando iba borracha, entraron haciendo ruido, golpeándose con un mueble de la entrada y mandándose callar el uno al otro, serian como las 4 de la mañana, y al pasar a mi lado les saludé, ni me habían visto, al mirarme a Mara se le pasó la “borrachera” de golpe.

-YO: muy buenas noches, ¿Qué, a terminar la fiesta?

-MARA: si………este es………ju….ju….- o no se acordaba o no le salía.

-RUBÉN: soy Rubén……- me dio la mano, estaba tan borracho que no acertó a la 1º.

-MARA: eso……Rubén, lo iba a decir ahora mismo….- se tambaleaba por que su amigo no la sujetaba tan fuerte como antes y los tacones eran de vértigo, era la mujer a la que perores zapatos había visto llevar, y por peores me refiero a dolorosos e incómodos, de por si ya casi rondaba el 1,80, pues alguna vez llegaba a superarme en altura debido a unos taconazos brutales con plataforma.

-YO: pues nada, que os lo paséis bien, y usar protección….- Rubén se puso azul.

-MARA: ¡y a ti que coño te importa!……..no eres nadie ¿sabes?........así que me voy a llevar a este hombre a mi cama y me lo voy a tirar, te guste o no……..- tentado estaba de echar al tío y dejarla dormir la mona, pero era su vida, y estaba muy rara desde que me vio follando con Lara, ahora la veía y parecía que quería devolvérmela.

-YO: pues que lo disfrutares…….- Rubén se la llevaba a la fuerza por que seguía recriminándome algo, no se el que.

Al quitarla el abrigo supe que Mara era el premio del día, aparte de los tacones iba con un pantalón largo de cuero negro ajustado que le hacían las piernas más evocadoras del mundo, con el culo respingón redondeado, coronado por un tanga bien marcado bajo la tela, la parte de arriba era un top banco con toda la espalda al aire, y como siempre bien peinada y arreglada aunque se apreciaba que había salido mejor de lo que había vuelto, se metieron en el cuarto y no volví a ver a Rubén en mi puta vida.

Me fui a la habitación de Naira, y al entrar vi como Naira estaba cambiándose el pijama por un camisón de satén, el pijama estaba empapado en sudor mío y suyo, como se había quitado el sujetador estaba en bragas, amarillas para variar, se puso el camisón largo y se tumbó haciéndose una bola en la cama.

-NAIRA: ¿que esperas, una invitación? ven a la cama – era una cama de 1.80, individual así que no es que hubiera mucho sitio, me tumbé a su lado y me tapó con 2 sabanas, una manta y una colcha nórdica, para terminar abrazándose a mi pecho.

-YO: pufff vaya noche me vas a dar.

-NAIRA: es que tengo frío.

-YO: ni que estuviéramos en el polo norte….

-NAIRA: ya sabes, soy de canarias y este tiempo a mi me sienta fatal……….no se…..además recuerdo que tú dormías desnudo…..- sentía su pelo hacerme cosquillas en la barbilla.

-YO: déjame el pantalón puesto, lo hago por ti, si no, no respondo.

Nos quedamos abrazados el uno al otro, ella se acurrucaba, y de vez en cuando se levantaba para darme un cariñoso beso en los labios, pero a mi el calor me estaba sofocando, saqué un pie por debajo de las mantas para sentir algo de frescor, la otra estaba aprisionada entre las piernas de ella. Fue cuando empezaron a oírse los sonidos, primero eran solo risas y comentarios inaudibles, Naira me miraba fijamente sonriendo pidiéndome silencio con los dedos en la boca, pronto reconocí los sonidos típicos de sexo, Mara dormía en la habitación contigua, y pese a ser muros gruesos el ruido era inconfundible, y la cama empezó a rebotar contra la pared, con gemidos y risas, casi todos parecían de Rubén, a Mara no se la escuchaba, y yo no aguantaba más, con Naira sobre mi y su cuerpo cálido y sensual, escuchando como Mara follaba, me sentí como debió sentirse Lara cuando Ana y yo estabamos viviendo allí, excitado y ansioso, pero solo tenia a una mujer con la regla a mano, mi polla estaba tiesa y las manos de Naira acariciándome no me ayudaba, al moverse y sentir mi verga dura se alzó sobre la cama para volver a besarnos, y mis manos recorrieron todo su cuerpo, sintiendo como ella se excitaba pese al dolor de la menstruación y como yo no podía más con su lengua ahogando mis suspiros.

-NAIRA: deja que te compense – una de sus manos bajó a mi polla, la acarició por encima de la tela.

-YO: ten cuidado, no quiero hacerte daño.

-NAIRA: me duele la tripa, pero una paja se hacerla – me besó con tal fervor que ni sentí como me apartó el pantalón y se aferró a mi polla.

Aquella sonrisa, casi venenosa que me tenia loco, aparecía cuando dejaba de besarme, su mano era hábil y masturbaba con tenacidad, con cierto asombro en los ojos al sentir todo el largo de mi verga en sus dedos, por mi parte le había quitado el camisón y la acariciaba las tetas con delicadeza con una mano mientras la otra iba a sus nalgas, fue un vaivén maravilloso, con su mano subiendo y bajando lentamente por mi polla, a los 10 minutos los ruidos de la habitación de al lado se apagaron y por 1º vez escuché a Mara, parecía enfadada y cabreada, Naira y yo nos reíamos escuchando mientras no dejábamos de acariciarnos, estuve tentado de meter mis dedos en su entrepierna pero me contuve, la lentitud y la sensualidad de su mano me estaban matando, y llevar un calentón de más de 7 horas ayudaba. Escuchamos una bronca de Mara, o eso parecía, no se entendían las palabras pero si el tono, estaba ofuscada, le gritaba y al poco tiempo sonaron un par de portazos por el pasillo, permanecíamos en silencio, pero no quietos. Nuestras lenguas se fundían y sus senos coronados por unos pezones rectos y duros, eran masajeados sin piedad, mientras que mi polla ya daba cabezazos, al sentirlo cogió su camisón y me tapó la polla con él, mientras seguía masturbando, me corrí de forma tan placentera en su mano que cerré los ojos deleitándome de la sensación, con ella lamiendo mi cuello, dando un par más de pasadas con su mano en mi rabo, di gracias a dios por esa idea, me limpié con el camisón sin manchar nada más que su mano, dándome un último beso largo y sensual se levantó para ir la baño a lavarse. Cuando regresó se quedó dormida casi instantáneamente, yo me fui a echarme agua fría, y con algo de sed, y curiosidad, me dirigía a la cocina, al pasar escuché unos sollozos, bebí algo de agua y al volver afiné la vista, era Mara sentada en un sillón del salón, encendí una lampara y la vi llorando con una servilleta en la mano, y el rímel corrido.

-YO: ¿que te pasa preciosa? ¿Rubén te ha hecho algo? – bufó secándose las lagrimas.

-MARA: ojalá……el muy imbécil iba tan borracho que ni se le ha puesto dura…….. – rompí a reírme aunque se me pasó al mirarla a la cara.

-YO: no me creo que con una mujer como tú no se le levante…..

-MARA: ni yo……¿sabes, te puedes creer que me he pasado 20 minutos comiéndole la polla y ni así……? - iba tan borracha que me lo dijo tal cual, “ahora se por que solo se le escuchaba a él”.

-YO: vaya, no sabes cuanto lo siento…….- me reía por dentro tanto que se notaba por fuera.

-MARA: no finjas compasión…..eres un imbécil.

-YO: ¿y yo que culpa tengo?

-MARA: por que vienes aquí y te follas a Lara y nos pones cachondas a todas y……y…..y luego salgo y pasa esto……..

-YO: pues elige mejor chica, ni que tuvieras que emborrachar a un tío para meterlo en tu cama.

-MARA: ya ¿y que hago?, ¿me voy a un bar, elijo a dedo. y le digo que se venga a casa? – lo dijo tan convencida de que eso no serviría, que solté una carcajada enorme, si me viene una Olivia Wilde de ojos negros y arreglada, como era ella, no hacia falta ni que me lo dijera, con señalarme donde ir, iría.

-YO: de cada 10 tíos a los que hagas eso, 9 se irán detrás de ti.

-MARA: pues no, eso no va así, te invitan, bebes, los conocéis…….pero hoy……¡¡¡¡joder!!!

-YO: tú misma…..- no me interesaba el tema y me iba a levantar para volver con Naira.

-MARA: de verdad que no lo entiendo ….– me senté otra vez –… como puedo estar comiéndosela y que se le baje, ¿tan horrible soy?

-YO: eres guapa, no digas tonterías.

-MARA: ya, pero no tengo tetas……

-YO: ¿y si tuvieras tetas el hubiera bebido menos y se le hubiera levantado?

-MARA: si…..no…no lo se…..- se venció sobre mi abrazándome, “joder, vaya día llevo”.

La serené dulcemente, tanto que se quedó frita sobre mi pecho, la movía y no reaccionaba y apareció Naira con los ojos inyectados en sangre.

-NARIA: ¿que coño haces?

-YO: aquí, tu vecina, que su chico ha tenido un gatillazo.

-NAIRA: ¿y pretendes relevarle? – estaba enfadada, entendía la confusión, y me parecía graciosa.

-YO: jajajajaja no, estaba consolándola, y va tan bebida que se ha quedado frita.

-NAIRA: ah…….vale…….pues habrá que meterla en la cama, ya te ayudo, no es la 1º vez.

-YO: ¿le pasa a menudo?

-NAIRA: desde que te tiras a Lara está rarísima, sale hasta tarde y viene con un chico diferente cada fin de semana – me incorporé con Mara en brazos, aferrándose a mi cuello de forma inconsciente, mientras Naira me abría camino, la dejé en la cama.

-YO: ya está.

-NAIRA: no, idiota, ayúdame a desnudarla.

-YO: ¿seguro?

-NAIRA: no te pongas modoso ahora, no puedo yo sola y no la podemos dejar así, esos pantalones la van a cortar la circulación.

Disfruté demasiado de ver a Naira solo con una bragas desnudar a Mara mientras yo la tenia sujeta, volví a ver los senos que engañaban de Mara, casi no le abultaban pero estar estaban en su sitio, y al quitarla el pantalón de cuero mi polla se frotó con sus nalgas duras y firmes, dejándola solo con un minúsculo tanga, me quedé mirándola más de lo debido tumbada casi desnuda en la cama, de inmediato cogió la postura de medio lado sacando el culo, siempre que la había visto dormir era así, Naira me dio una colleja y la tapó, mandándome al salón a esperar mientras la despeinaba y la desmaquillaba. Estaba tan tranquilo guardando en mi memoria el cuerpo de Mara cuando entraron de la calle Alicia y Lara, tan borrachas como los últimos visitantes, al verme se sentaron a mi lado en el sofá, Alicia con una falda elástica hasta las rodillas y una blusa negra atrevida, Lara con un vestido negro muy elegante con un escote descomunal sin sujetador.

-LARA: ¿que haces aquí? – apestaba a bebida y a porros.

-YO.: he venido a buscarte, pero no estabas.

-LARA: ya, hemos salido un rato.

-YO: ya veo, ¿ya estás drogándote otra vez?

-LARA: si, ¿algún problema?

-YO: ya sabes que no me gusta.

-LARA: me importa una mierda, tú no eres mi novio ni nada, solo vienes a follarme – agarró mi rabo que no estaba aun relajado del todo y se puso duro de nuevo.

-YO: es cierto, pero no deberías……- se alzó a besarme y pese al mal sabor de boca la devolví el beso con lengua, acariciándola, no podéis culparme, no sin ver a esa mujer y sus tetas aplastadas contra ti.

-ALICIA: vale, ya veo que sobro……

-YO: ¿y tu enamorado?

-ALICIA: es un patán, tontea con nosotras pero luego nada, es el que le da porros a esta, y me mete mano como un bebé ….– suspiró al soltar un hipo que apestaba a ron con limón -…. y yo estoy muy cansada, me voy a la cama – me besó en la mejilla y se fue, clavé mi mirada en su trasero mientras se alejaba, aquella falda se ceñía tanto que podía verse el temblar de las nalgas a través de la tela, “Lorenzo es retrasado”.

-LARA: vamos a mi cuarto……- pasó sus dedos por mi pecho.

La cogí de los muslos levantándola sobre mi cuerpo, me rodeó con las piernas mientras se agarraba de mi cuello, besándonos, la llevé a su cuarto y la tumbé boca arriba, sacándola el vestido de los hombros lamiendo su senos poniéndoselos duros, ya gemía antes de terminar de quitárselo y descubrir que tampoco llevaba bragas.

-YO: ¿sales así?

-LARA: no, se las he regalado a ese chico, Lorenzo, me las ha pedido a cambio de porros.

-YO: niña traviesa……

Hundí mi cabeza entre sus senos lamiendo y chupando cada recoveco, amasando con las manos sus enormes pechos, a diferencia entre los suyos, naturales, y los de Pamela, operados, es como la diferencia ente una paella recién hecha y una recalentada, si, ambos están ricos, pero recién hecho es un pecado. Me detuve, suspiré profundamente y me alejé ante sus quejas, pero iba demasiado pedo como para levantarse a ir a por mi, regresé al cuarto de Naira, estaba sentada hecha una bola en la cama, me miró con rabia.

-NAIRA: ya tienes lo que querías, ¿no?

-YO: no, solo he acostado a Lara, aunque sus tetas son increíbles, dios….es verlas y me vuelvo loco.

-NAIRA: ¿y por que no lo haces conmigo? – que fuera tan directa me confundió.

-YO: estás con la regla, no podemos…..

-NAIRA: no, ya…….hoy……pero otros días…..

-YO: ya hemos hecho algo, pero no se si podríamos, eres una buena chica, y no me gustaría estropear la amistad que tenemos.

-NAIRA: ¿no soy suficiente mujer? ¿Es eso?

-YO: no es eso, ……muchas se sienten abrumadas y no es justo para ti, estás dolorida y confusa, seria aprovecharme de ti.

-NAIRA: no soy un niña, se lo que quiero.

-YO: está bien, cuando estés mejor, y si quieres, podemos intentarlo – se le iluminó la cara.

-NAIRA: ¿en serio? – se puso en pie abrazándome.

-YO: si, créeme que no me cuesta nada, es más, seria un placer, pero comprende que yo no busco una pareja estable, si buscas eso no lo encontraras en mi.

-NAIRA: tal vez……con el tiempo…..- la separé cogiéndola de la cara con ternura.

-YO: no, no quiero engañarte ni que te hagas falsas esperanzas como Lara, te tengo cariño y aprecio, eres lista y no quiero hacerte eso, no te quiero de esa forma – puso cara de niña decepcionada.

-NAIRA: pero tú me gustas.

No la dije nada más, no hacia falta, no tenia que ser brusco con ella, nos acostamos de nuevo y ahora si logré dormir unas cuantas horas del tirón, al despertarme tenia a Naira subida encima mía, dormida y con una cara preciosa, la besé en la frente cariñosamente, apartándola el pelo de la cara, pensando en lo dulce e inocente que era, “quizá en otra vida”, pensaba eso a menudo de las mujeres de mi vida, algunas no merecían la pena, pero otras………..Quizá si no me hubieran roto el corazón antes podría haber llegado a amarla, pero no lo hacia.

No podía dormir más, así que me pasé horas acariciándola, pero más que por algo sensual, era una manera de centrarme, como si fuera una mascota, y mi cabeza empezó a volar, con tanto abrazo, sentimientos, menstruaciones y líos, no me había parado a razonar en algo claro y evidente.

“No tenemos relación alguna, ni conocidos o allegados comunes, ¿como coño sabe Eleonor que me echaron del trabajo, o ni siquiera quien era Casandra?, cortamos relaciones antes de que ocurriera todo aquello”.

Raúl – El regreso de la mujer de Rojo.

Llevaba un sábado muy ajetreado, desde el abrazo a Dani mi polla había pensado más que yo, pero ahora estaba relajado y con la cabeza despejada, Eleonor, había vuelto, y se había arriesgado a volver a pagar a Dani para informarse de mi, no era raro, ya me esperaba de todo de ella, incluso después de mostrarle el vídeo de Yasira, la hija de su fiel sirvienta siendo follada de forma bestial tras reconocer que la habían enviado como arma, y amenazarla con un vídeo de ella misma en Internet mal editado.Pero lo que me estaba quitando el sueño era como se había enterado de mi ruptura con Casandra, y de mi despido, eran cosas que no había ocultado pero tampoco la había divulgado, tenia que investigar, así que con cuidado aparté a Naira, con la que había dormido y tenido una experiencia muy bonita, y me fui al cuarto de Lara, aun dormida desnuda y con el olor a sexo frustrado llenándolo mis fosas nasales, me puse en su PC a mirar por que había cerrado el supermercado donde trabajé, ya lo sabia, una empresa extranjera les había cortado el suministro de mercancías baratas y no podían mantenerse, quise profundizar, fui tirando del hilo, en artículos y enlaces, era un galimatías de empresas, una detrás de otra, hasta que por fin di con una, el nombre me sonaba, era una de las empresas del ex marido de Eleonor, no podía ser una coincidencia, Eleonor había participado, de algún modo, en mi despido, y de paso con el de toda la empresa, no fue una locura financiera, si no que por lo visto encima habían ganado dinero con aquella operación, pero así sabia como se había enterado de mi despido, lo provocó ella.

Estaba dispuesta a seguir jodiéndome la vida, podía haber sido una casualidad con tantas empresas de por medio, ¿pero que justo fuera la mía y luego pagara a Dani por saber como había reaccionado yo?, sin duda lo hizo conscientemente, ya tenia despejada una duda, ¿pero como averiguó lo de Casandra? Me fui al salón a llamarla.

-YO: hola rubia, ¿como te va todo?

-CASANDRA: pues de puta madre, el curso me va genial.

-YO: me alegro un montón.

-CASANDRA: ¿y tú que tal?

-YO: pues algo mosqueado.

-CASANDRA: ¿y eso?

-YO: verás, no he ido por ahí pregonando nuestra ruptura y alguien a quien no me hace gracia que lo sepa se ha enterado, ¿sabes algo?

-CASANDRA: bueno……yo se lo he dicho a mi familia y eso, pero nada más…….aunque…….

-YO: ¿aunque…… que?

-CASANDRA: un pavo…….se me acercó hace unos meses, me dijo que estaba investigando unas cosas para anuncios y que me tenía que hacer unas preguntas.

-YO: ¿y que te preguntó?

-CASANDRA: chorradas, como una encuesta, mi nombre, mis gustos, mi opinión y una pregunta era si estaba soltera o no y al decirle que lo dejamos, insistió en saber como y por que…..fue raro.

-YO: ¿y no me avisaste?

-CASANDRA: ¿y yo que sabia?, me paran en la calle muchas veces……… ¿he metio la pata? – me frotaba las sienes sobrepasado.

-YO: no, solo has sido una chica normal, por 1 vez…….muchas gracias, nos vemos.

-CASANDRA: vale….pero si eso, avísame……por si te puedo ayudar.

Al colgar me dolía la cabeza, no solo me había despedido, junto a toda una cadena de supermercados, si no que tenia a gente preguntando a mi ex, ¿quienes serian?, fui preguntando a las chicas del piso según se despertaban, y a todas les habían hecho “esa encuesta”, el tipo se había presentado de formas diferentes, como entrevistador de radio, de una ONG, o para entrar en un concurso, pero las preguntas eran las mismas y la descripción que dieron, aunque vaga, parecía el mismo tipo, ninguna se dio cuenta de nada, fue a lo largo de casi año y medio, desde que le envié el CD y la amenaza a través de Yasira, la hija de su sirvienta. Me puse a llamar a las chicas con las que había estado durante ese tiempo, a todas les habían hecho la entrevista, a todas sumándole a gente sin más que conocía, amigos, compañeros de trabajo o conocidos, incluso mi madre, mi hermana y Dani, a todos con los que contacté, algunos no me cogieron el teléfono, pero con los que hablé si, a todos menos a Liz, que dijo no saber nada, quedé con ella esa misma tarde, no me tragaba que ella se hubiera escapado, era demasiado importante y una fuente de información, se pasó 4 meses en mi casa siendo mi particular esclava, la conocía desde niño y seguía siendo la mejor amiga de mi hermana, sabia muchas cosas y no me aguantaba desde que la dejé, aun así, accedió a quedar en una cafetería muy conocida, al acudir la invité a un café y nos pusimos a charlar.

-YO: ¿y como te va todo?

-LIZ: pues bien, aunque no gracias a ti.

-YO: ¿todavía me guardas rencor?

-LIZ: ¿como no te lo voy a guardar?, me usaste como a un pañuelo y luego me tiraste.

-YO: sabias lo que había, no era nada serio.

-LIZ: ¿te follas a la mejor amiga de tu hermana y pretendes que no sea serio?

-YO: para mi no lo era…..

-LIZ: ¡pues para mi si!, me importabas, y me dejaste a un lado por una mocosa retrasada.

-YO: pues te pido disculpas, lo estaba pasando mal y no sabia muy bien lo que hacia.

-LIZ: eso ya da igual, guarda tus disculpas.

-YO: no puedes ser así de rencorosa, no vas a vivir.

-LIZ: oh, si que voy a vivir, y de hecho he quedado con una amiga nueva, y por ahí viene…..te va a encantar….- no me giré por que ya lo intuía.

-YO: no me creo que te hayas vendido…..

-LIZ: mira, no se si os conocéis, esta es Eleonor……….- al alzar la mirada la vi, sonriente, dándole dos besos de saludo a Liz, con un vestido rojo ajustado de arriba abajo, muy elegante y con clase, eso no lo había perdido.

-ELEONOR: hola Raúl, cuanto tiempo…… – se sentaron y extendió su mano, se la cogí saludándola con la educación que el enfado que tenia me permitía.

-YO: no el suficiente.

-LIZ: no seas mal educado, es mi nueva amiga……- su tono de sorna era irritante.

-ELEONOR: si, nos hemos llegado a conocer muuuuy bien, me ha contado muchas cosas de ti, de tu vida y de lo que has estado haciendo….- el suyo era peor, más cálido y pausado, degustándolo.

-YO: ya imagino…..¿como os conocisteis?

-LIZ: después de que me echaras de tu casa se presentó un señor muy amable, haciendo una encuesta, estaba tan furiosa, le conté tantas cosas que me presentó a su amiga, Eleonor, y desde entonces hemos quedado a menudo……….para charlar.

-ELEONOR: si, mucho, sobretodo de ti…….

-YO: ¿que quieres, Eleonor?

-ELEONOR: oh, no se trata de lo que yo quiera, si no de lo que nosotras queremos, nos hiciste daño Raúl, mucho, y eso no se cura.

-YO: puedo entender a Eleonor…. – miraba a Liz obviando a aquella colombiana rabiosa - …. es una perturbada mental obsesionada conmigo, ¿pero tú, Liz?, nos conocemos desde pequeños, por favor.

-LIZ: eso no te pareció mal cuando me hiciste tu esclava y me follaste cuanto quisiste.

-ELEONOR: no te preocupes querida, Raúl lo hace con todas, nos usa como quiere, nos da lo que deseamos y luego nos lo quita.

-YO: estás loca.

-ELEONOR: es posible, pero si lo estoy es por tu culpa, yo te quería……aun te quiero, y estoy dispuesta a dejar que vuelvas a mi lado – el tono de burla desapareció.

-LIZ: espera, ¿Qué…..que ha pasado con lo de jugar……y…y divertirnos?

-ELEONOR: deja hablar a los adultos querida – Liz casi se cae al suelo al ver como había sido usada.

-YO: jajajajaja, ¿en serio pensabas que Eleonor era tu amiga?

-ELEONOR: no soy su amiga, ni nada, solo he tomado lo que quería de ella, y lo mío me ha costado, ha sido la única que ha querido…….colaborar.

-YO: ¿y para que?, ¿de que te ha servido?, me has echado del trabajo y andas con un imbécil preguntado por mi vida, ¿para que?

-ELEONOR: para nada, como te decía estoy dispuesta a perdonártelo todo….. – me cogió de la mano –….. eres joven y algo alocado, solo quería que vieras de lo que soy capaz por ti, por que te quiero – suspiré profundamente mirándola a los ojos color avellana.

-YO: no me quieres Eleonor, tienes un problema mental.

-ELEONOR: eso dicen los abogados de mi ex, pero conmigo la empresa va mejor que antes, les dejó hacer a los que saben, y me dejan a mi aire…. – posó su mano en mi muslo -…. vuelve conmigo Raúl, podemos ser felices – sonreí cogiéndola de la mano en mi pierna, besando en sus dedos con ternura y clavando los ojos en su bello rostro.

-YO: no voy a estar contigo, nunca.

-ELEONOR: si lo estarás, por las buenas……….o por las malas, apenas has visto nada de lo que te puedo llegar ha hacer.

-YO: no seas tan valiente, recuerda que tengo muchas cosas contra ti – sonrió de forma que no me gustó nada.

-ELEONOR: ¿seguro?, Liz ha sido muy útil, y mi hombre se encargó de borrar todo cuando visitó a tu hermana junto a Liz - me dejó helado.

-LIZ: pero yo no sabia….¡¡eres una zorra!!- sollozaba.

-ELEONOR: querías lo mismo que yo, darle aun lección, ahora ya lo sabe.

-YO: no has podido borrarlo todo.

-ELEONOR: yo no, pero Liz si, ha pasado mucho tiempo en tu cuarto, mientras tú te divertías con la profesora y con las niñas del piso ese de zorras, ha sido muy eficiente, y ahora que ya tengo todo, decidí atraerte.

-YO: por eso avisaste a Dani, sabias que no me vendería, y que me llevaría hasta ti.

-ELEONOR: que listo eres, lo que sabía es que no me fallarais, no se como pero te ganas a todas, me sorprendería que no te la hayas follado ya….. – “al menos desconoce ciertas cosas” - …… así que estamos a 0, estoy dispuesta a olvidar todo esto, pero tienes que volver conmigo, solo conmigo.

-YO: ¿y si no?

-ELEONOR: te haré la vida imposible, ¿te crees que despedirte pagando 122 millones de € es mucho? Tengo preparadas mil maneras de hacer de tu vida un infierno, si quiero puedo hacer que te den una paliza aquí mismo, con un simple gesto.

Mientras Liz y ella, conversaban sobre su nueva “relación”, pensaba profundamente, por lo visto había perdido lo que tenia en los PC, pero no habían dicho nada de las copias secretas, las que hice cuando estaba con Casandra, no se lo dije a nadie, tenia 5 CD, cada uno con copias de todo, escondidas en diferente sitios, incluso le di una al padre de Teo, el abogado que hundió al ex de Eleonor, por si me pasaba algo, mucho CSI.

Claro, podía decírselo a Eleonor en ese mismo momento, pero tocaba pensar, recordáis “analiza todos los escenarios, y actúa en base al peor de ellos”. Eleonor podía saber de los CD, o no, si sabia de ellos sin duda ya las tendría en su poder, si no, no se hubiera atrevido a plantarme cara, y si no lo sabia, al decírselo seria cuestión de tiempo que fuera a por ellos, tenia dinero casi infinito, recursos y por lo visto una fijación obsesiva, no descansaría, me iba a guardar ese AS hasta saber si contaba con las copias o no. Por otro lado, si no supiera de ellas, aunque hiciera pública su depravación, perdería mi única jugada, y ella seguiría contando con mucho dinero para seguir jodiéndome, y tenía esos “planes” ocultos contra mí, que yo no conocía.

La jugada era única, así que tenia que seguirla el juego para ganar tiempo y saber si contaba con las copias, y si las tenía, descubrir sus planes hasta contar con alguna ventaja que ella no hubiera previsto, y ya puestos, un pequeño truco para saber si su amenaza física era real.

-YO: está bien, tú lo has querido, no voy a volver contigo, desata tu ira…. – me levanté para irme, peor lo hice de forma muy brusca, 2 tíos de la barra, sudamericanos con aspecto feroz, y un 3º sentado escondido 4 mesas más allá, se pusieron tensos, sonreí levemente, los había descubierto, pero ahora sabia que era una amenaza real – ….¿encimas traes perros?

-ELEONOR: jajaja no te preocupes por ellos, son solo mi escolta, soy una mujer valiosa.

-LIZ: Eleonor por favor, solo era un juego….

-ELEONOR: quizá para ti, niña, pero para mi no…… – la miró con los ojos llenos de desprecio -…. Raúl, no tienes opciones, serás mío, pero puedes ahorrarle mucho sufrimiento a tu familia y a tus amigos, no obtengo placer de hacerles daño, pero si me obligas, les destrozaré la vida a todos, a todos los que te importan.

-YO: no te tengo miedo – asintió desalentada por mi decisión sacando una tarjeta del bolso y dándomela.

-ELEONOR: como quieras, cuando te canses, llámame – la cogí, quizá necesitara contactar con ella.

-YO: y tú…… - señalé a Liz –…… cuídate de la ira de mi hermana, no la voy a decir nada, pero como se entere te matará, y como le pase algo a mi familia por tu culpa………- me callé por no tener que cumplir mi amenaza, ella se echó a llorar comprendiendo el alcance de su metedura de pata.

Me fui de allí memorizando las caras de los escoltas, había 2 armarios en la barra, seguramente colombianos y de malas pulgas, pero el 3º era diferente, español, tenia pinta de investigador privado, y sus rasgos se parecían a la descripción que me dieron las chicas, pasé frente a él, sonreía cruzado de piernas, sorbiendo un café con una tranquilidad perturbadora, saqué el móvil fingiendo coger una llamada y le hice una foto, por lo ocurrido el no se había delatado aun, y era mejor que pensara que no le conocía.

Corrí para llegar a casa, el 1º CD estaba escondido en un aire acondicionado, pero no estaba, me maldije, corrí hasta el coche, donde tenia otro CD, al entrar y mirar, lo encontré, pero al salir un calambre en el pecho me tiró al suelo, vi unos cables en mi torso, los seguí con los ojos hasta ver una pistola táser sostenida por una figura en la penumbra, antes de desmayarme en una 2º descarga, al volver en mi el CD ya no estaba, me habían limpiado bien, pero eso me cercioró que sabían de los CD, malo, y no sabia como se enteraron, pero tampoco tenían todos, bueno, pero no sabia cuantos.

Pensé en denunciar, ¿pero a quien y de que? no había visto al agresor, aunque suponía quien era, y solo me había desaparecido un CD que no podía salir a la luz aun. Llamé desde una cabina, para saber del 3º, al padre de Teo, abogado de nivel, que me confirmó que aun tenia el suyo que le di por si las moscas, eso me tranquilizó, pero una leve conversación me dejó claro que Eleonor había jugado sus bazas y aquel CD seria para la propia seguridad de él y su familia, así que no contaba con su ayuda. El 4º lo tenia escondido en el trabajo, cuando fui el lunes tampoco estaba, “¿en serio? Han entrado aquí a robarme un CD y nadie se dio cuenta”, me dio miedo ir a por el 5º, si me estaban siguiendo en cuanto lo cogiera me lo quitarían como el del coche, era demencial y me estaba volviendo paranoico, pero tenia que saberlo, y si me seguían a mi no podían seguir al resto, así que mandé a Teo a por el CD, confiaba ciegamente en él, y si ya le protegía su padre, no había motivos para seguirle, o eso esperaba, a saber cuantos secuaces tenia Eleonor, podía permitirse un ejercito. El CD estaba escondido en el parque al que íbamos de pequeños, en una rendija oculta tras un muro, Teo lo encontró pero le dije que se lo guardara y no se lo dijera a nadie.

Ahora sabia que tenia 2 CD a buen recaudo, aunque solo contaba con 1, que me seguían para vigilarme, nos les importaba dejarme tieso con un táser, no sabían cuantos CD más tenia, y que Eleonor atacaría pronto, me había negado a ser su perro y eso me iba a traer consecuencias, pero no sabia hasta que punto.

Contarle a mi familia parte de lo que pasó con Eleonor, para que se prepararan, fue de las cosas más duras que he hecho en mi vida, mi madre de golpe se vio con una enorme pieza del puzzle que le faltaba sobre la ruptura con Ana, e hiló como un detective de novela negra, mi hermana solo gritaba y despotricaba sobre lo estúpido e imbécil que había sido, me ponía furioso y quise decirla que su mejor amiga me había vendido, pero seria una estupidez, Liz era la que más sabia de todo aquel lío, no necesitaba alejarla, si no tenerla cerca, aunque llevaba días sin verla. Mi padre se mantuvo callado, preguntado cosas muy concretas para asegurarse de entender el problema, y Dani, que ya formaba parte de mi familia, solo lloraba de lo estúpida que había sido. Estuvimos pensando durante días qué hacer, entre todos, pero no se nos ocurría nada, y Eleonor parecía no mover ficha, así que me relajé un poco, pero no mucho.

Soy horrible para las fechas y rememorar letras de canciones, pero los rostros se me quedan fácil, en cuanto veo a una persona 2 o 3 veces ya la reconozco, y pasada una semana reconocí a 6 tíos distintos siguiéndome, por turnos y relevándose, tácticas que mi afición a la 2º guerra mundial me habían enseñado, al hombre misterioso del café no lo vi, pero sentía su presencia cerca, quizá fueran alucinaciones, pero casi juraría que sabia que le había reconocido en el café y no se la quería jugar. Con el paso de los días ya tenia fotos de todos, (dios bendiga los móviles con cámara), lejanas y de reflejos en escaparates o ventanas, pero me valían para enseñarlas a mis familiares y amigos y que me fueran confirmando que a ellos también les seguían los mismos, si había más eran demasiado buenos como para cazarlos.

Kate – La 1º amenaza.

Como no ocurría nada, me centré en el trabajo, la tensión me iba a matar, mis ventas bajaban y la sensación de que me miraban era constante, solo una cosa me distraía, Kate, era la siguiente de mi lista, (si, mi cerebro, pese a la saturación, o debido a ella, quería seguir con aquello, y quizá no lo hubiera echo si de golpe, Kate no se hubiera mostrado raramente abierta conmigo).

Lo 1º que pensé es que era una treta o un truco, obviamente, pero pensaba eso de todos desde la reaparición de Eleonor, de esa chica del ascensor, de ese tío de la cola de la tienda o de aquella abuela en el supermercado, todo el que me mostraba algo de interés pasaba a ser un enemigo, no lo soportaba, necesitaba desahogarme con alguien y ella fue la que puso su hombro. Debido a mis malas ventas Alexis me puso con ella en las mixtas, para centrarme un poco, y entre ella y yo, más ella, hicimos el récord del año en ventas en una semana, no era de extrañar, ella era pecado, normalmente iba vestida de negro con traje de oficina, que pese a disimular sus curvas la hacían llamativa, pero al ir de ventas mixtas siempre acudía con vestidos exuberantes y provocativos de cuero negro, era una versión mejorada de Penélope, más pecho y cadera, mejor culo, alta, con el pelo largo y ondulado, y unos ojos verdes maravillosos, y en esos días, su férreo rostro y la gélida cara se esfumaron, o eso me pareció, apenas tenia sexo con nadie, por miedo a…. por miedo, así que su compañía me resultaba agradable.

Volviendo un día de hacer buenas ventas en coche se puso a hablar con un tono de voz roncó y seco, no casaba con un cuerpo tan femenino, y hoy iba reluciente con un vestido rojo largo, vaporoso y con un balanceó que hipnotizaba.

-KATE: estás muy callado.

-YO: ya, es que tengo muchas cosas en la cabeza.

-KATE: ya lo he visto, me he tenido que trabajar las ventas casi yo sola…..

-YO: lo siento……y te agradezco el esfuerzo.

-KATE: no pasa nada, pero Alexis está como una fiera contigo, no sabe por que has bajado tu nivel.

-YO: pues que la jodan, no siempre se tiene lo que se quiere……- suspiraba buscando en los retrovisores a mis acompañantes del día.

-KATE: tranquillo, no lo pagues conmigo.

-YO: es que no estoy bien, ¿vale?, y no necesito charlas bobas – suspiró por no contestarme mal.

-KATE: joder como te pones, mira que me habían dicho que eras un cielo con las chicas de la oficina.

-YO: que las den por el culo, que aprendan a tener la boca cerrada – pretendía ser una indirecta, estaba muy ofuscado, necesitaba silencio.

-KATE: ¿me pregunto…..cual crees que folla mejor? – casi me salgo del carril con su pregunta, era una mujer directa, pero nunca había tocado ese tema.

-YO: ¿a que coño viene eso?

-KATE: tú sabrás, eres el que se la ha tirado a todas…..

-YO: ¿algún problema?

-KATE: no…ninguno, pero es una curiosidad.

-YO: ¿y para que quieres saberlo?

-KATE: pues para cosas mías….- sonó muy raro.

-YO: ¿necesitas una que folle bien para un amigo o un ligue?

-KATE: jajajaja no………seria para mí – una sonrisa extraña se dibujaba en su cara.

-YO: ¿eres lesbiana?

-KATE: algo así…..

-YO: bisex…- me cortó.

-KATE: nada de eso, me va el sexo duro.

-YO: como a todas……

-KATE: no es eso….¿sabes lo que es el sado? – no me creía aquella conversación.

-YO: claro…….¿te va ese rollo?

-KATE: ohhhh si, me encanta – su forma de cruzar las piernas casi le cuesta la vida a una anciana que cruzaba por la calle.

-YO: con lo mojigata que pareces…..

-KATE: ya, es solo fachada, con los años he aprendido a disimular.

-YO: ni que tuvieras 40 años.

-KATE: 28 para ser exactos, pero empecé muy joven….a los 15 años – lo decía sin pestañear.

-YO: ¿a tener sexo o con el sado?

-KATE: ambos, a mi profesor de historia se la ponía dura tontear con sus jóvenes e inocentes colegialas, y me metió en ese mundillo – aquella conversación, aparte de distraerme, me estaba calentando, parecía tan sencillo hablar con ella de algo tan intimo.

-YO: ¿y que haces?, ¿ama o esclava?

-KATE: al principio era esclava de aquel depravado, me tuvo hasta los 19 siendo su puta, pero cometió el error de presentarme a personas y enseñarme sitios, aprendí mucho y rápido, soy ama, esclava o lo que tenga que ser.

-YO: pues que desperdicio, eres una preciosidad y no necesitas de esa basura para tener al tío que quieras.

-KATE: gracias, pero no es que lo necesite, es que me gusta, no se explicarlo, ser usada por un extraño o dominar a alguien que confía a ciegas en ti, tiene algo que atrae – eso no se lo iba a negar, el mejor sexo que tenia normalmente era con esclavas, como las colombianas en su día, Madamme, o Lara.

-YO: algo si tiene…- me miró sorprendida.

-KATE: lo has practicado, ¿verdad?, se te nota.

-YO: no, bueno, no a ese nivel, relaciones en las que domino si, las hago alguna maldad, pero no estrictamente sado.

-KATE: ¿a que te sientes genial?

-YO: un poco, pero nunca he probado ser el esclavo, sospecho que no me gustaría.

-KATE: si no los has probado…..

-YO: no soporto que me digan que debo o no debo hacer, se decidir por mi solo.

-KATE: mucha gente lo ve raro y cuando lo prueba le encanta…..

-YO: ¡que no!, joder – sonó tan brusco que gimió de broma.

-KATE: tranquilo, que me vas a poner cachonda – me sacó una sonrisa natural.

-YO: para líos de esos estoy yo……

-KATE: pues por lo que dicen no te cuesta mucho tener a la mujer que quieras, una me dijo que la hiciste sangrar por el culo…..

-YO: Gladis, de contabilidad, ella me dijo que la diera más fuerte…..- soltó una carcajada enorme.

-KATE: jajaja es que eres una bestia, normalmente cuando pasan estas cosas las chicas suelen exagerar y notas cuando mienten o chismorrean, pero cuando hablan de tu polla se ve que de verdad les brillan los ojos, debes de tener un trabuco enorme

-YO: no esta mal….

-KATE: ya – la falsa modestia no sirvió para nada, así que desvié el tema.

-YO: ¿y por que buscas a una que folle bien?

-KATE: nah….que me he cansado de mi juguete y quiero uno nuevo.

-YO: y que juguete ha perdido tu favor, ¿hombre o mujer?

-KATE: mujer…si la conoces y todo……- temblé de pensar de golpe en Eleonor.

-YO: ¿qui……quien? – me oscilaba la voz.

-KATE: te lo digo si prometes no divulgarlo.

-YO: hecho.

-KATE: es Alexis…….- paré el coche en doble fila, entre la risa y la incredulidad.

-YO: ¡¡¿¿que??!!

-KATE: jajaja ¿que pasa? Alexis es mi puta desde hace 2 años.

-YO: ¡no me lo creo!, pero si es la jefa y un demonio de mujer, jamás se sometería de esa forma.

-KATE: pasa a menudo, mujeres atractivas, con éxito y con su carácter, se sienten en una vitrina sin que nadie se atreva a tocarlas, y se someten con facilidad ante cualquier muestra de fuerza, ¿como crees que entré a trabajar aquí?, la obligué a contratarme para tenerla bien vigilada.

-YO: me dejas de piedra, ¿y que la haces?

-KATE: lo que se me ocurre.

-YO: no, no me lo creo.

-KATE: ¿quieres pruebas?, vamos a la oficina, y fíjate en su falda, no lleva ropa interior por que se lo he ordenado.

-YO: puff, con un tanga pequeño tampoco se notaria, y aunque no las llevara no significaría nada.

-KATE: umm un incrédulo, está bien……… ¿y si hago que te la chupe?

-YO: eso si seria una prueba.

-KATE: jajaja esto parece divertido, ummmmmm vale, dime una palabra, cualquiera, algo que puedas meter en una frase pero que no se diga muchas veces – pensé unos segundos, viéndola venir.

-YO: dubitativo.

-KATE: jajaja eres listo…..bien, la diré que a todo el que le diga esa palabra se la tiene que comer con pasión hasta que te corras y que se lo trague – me parecía divertido, pero mi mente ya trabajaba a varios niveles, un plan estaba en marcha.

-YO: no, eso es muy fácil……dila que cuadro oiga esa palabra tiene que obedecer a la persona ciegamente, como si fueras tú, hasta hacer que se corra – sonrió sorprendida.

-KATE: eres un cabrón muy listo…

-YO: si nos ponemos a ello, con una mamada no me vale, me la follo allí mismo – se mordió el labio imaginándoselo, acariciándose el escote con sus dedos.

-KATE: hecho – suspiraba nervioso.

-YO: ¿y que más la haces?

-KATE: ahhhhhh eso queda entre nosotras….- se elevó sobre mi oído, susurrando -….si quieres saberlo puedo invitarte algún día, pero son cosas muy……muy sucias – lamió mi oreja con lentitud, aquella era una manipuladora de tomo y lomo, no era raro su nivel de ventas.

-YO: ohhhhh que mala eres – no me había dicho nada pero ya se me pasaba por la cabeza chuparle una bota por ver a Alexis humillada.

-KATE: no sabes cuanto…

-YO: ¿y te has cansado de ella?, pero si es una belleza de mujer, una pin up de escándalo.

-KATE: ya, pero cuando pasa tanto tiempo te repites, no sabes que hacer, quizá me lo piense si entras a jugar con nosotras, pero si no, voy a buscar a otra.

-YO: ¿y que harías con Alexis?

-KATE: dejarla libre, ella misma se buscará otro amo a quien adorar.

-YO: pues déjame que la destroce primero.

-KATE: toda tuya, pero nada de por el culo, esta castigada – accedí sin entenderla.

Aquella preciosidad de mujer no solo era directa y una depravada de cuidado, si no que me había servido a la que creía más difícil de la oficina en bandeja, todavía no me lo creía, Alexis era un témpano de hielo duro y cruel, no la había visto mostrar debilidad en ningún momento como para entrarla, ¿y me tenia que creer que era una esclava sexual?, eso tenia que verlo.

Volvimos a la oficina y según llegamos le entregamos las ventas, conversamos y hasta nos echó un bronca por perder una de ellas, Kate hizo un gesto, leve y casi imperceptible, pero al momento Alexis me sacó de la sala y cerró, yo me distraje unos minutos con los compañeros, y al abrirse la puerta apareció Kate con una enorme sonrisa, se acercó a mi y me susurró un “toda tuya”, con un ligero beso en la mejilla. Pasaron un par de horas en las que dejé comerse la cabeza a Alexis, y sopesaba cuanto de trampa, o no, podía haber en aquello, pero la posibilidad de humillar a Alexis me podía mucho más, llamé a puerta y me miró sobresaltada, al verme relajó la vista y me dejó pasar entre susurros obviándome.

-ALEXIS: ¿que quieres? Estoy muy ocupada.

-YO: verás, querría disculparme por mis malas ventas.

-ALEXIS: no quiero tus disculpas, quiero ventas.

-YO: solo quiero hablar contigo un momento, no seas brusca.

-ALEXIS: está bien, pasa – al hacerlo cerré la puerta, con el pestillo con agilidad.

-YO: ¿puedo sentarme?

-ALEXIS: si, ¿por que no?, ya puestos a perder el tiempo….,.- se cruzó de brazos, mientras me sentaba, apretando sus buenas tetas debajo de un chaleco negro ajustado que hacia las veces de corsé, en un ligero escote en pico.

-YO: mira, se que la estoy cagando, y trato de mejorar, pero tengo muchas cosas en que pensar, solo pido tiempo.

-ALEXIS: ya te lo dijimos el 1º día, nos da igual todo, menos las ventas, y si no rindes nos da igual, te vas a la puta calle, así que o mejoras o fuera, tengo mucho trabajo y estoy esperando a alguien – “¿a mi?”

-YO: es que no es fácil ….– cogí aire – …. me siento…..dubitativo – un aire gélido cruzó la estancia, ella se tensó en la misma postura y me miraba con los ojos bien abiertos.

-ALEXIS: ¿que….que has dicho?

-YO: lo que has oído, dubitativo – se puso en pie, pegado los brazos a su cuerpo, apretando y soltando los puños, su mirada era de incredulidad pero a la vez de aceptación.

-ALEXIS: ¿y…...y que desea mi señor? – rompí en una carcajada, se puso roja y agachó la cabeza.

-YO: lo primero sinceridad, si me mientes lo sabré…– asintió con la cabeza –… dime, ¿desde cuando conoces a Kate?

-ALEXIS: hará más de un año y medio – alguien mentía, o Kate que me dijo 2 años, o ella.

-YO: ¿la metiste a trabajar a posta?

-ALEXIS: si, ella me……….. me lo ordenó.

-YO: ¿eres la puta esclava de esa mujer?

-ALEXIS: s……..si…….si.- tartamudeaba.

-YO: ¿y que te ha dicho que hagas?

-ALEXIS: alguien me diría esa palabra y ……..y tenia que ser la esclava de esa persona hasta que haga que se corra……- temblaba de la idea - …….pero aquí no por favor, en la oficina……- no podía dejarla suplicar, no sabia mucho del sado pero la esclava no opinaba.

-YO: cierra la puta boca zorra – alzó la mirada ruborizada, entendiendo que yo no seria Kate, pero tampoco la daría cuartel.

-ALEXIS: si, mi señor, ¿que desea que haga?

-YO: levantaste la falda, quiero ver si llevas bragas.

-ALEXIS: no llevo – me acerqué a ella tirándola del pelo.

-YO: he dicho que quiero verlo, no que me lo digas, zorra estúpida, como vuelvas a hablar sin mi permiso se lo diré a Kate y ella sabrá como hacerte daño – se retorció mirándome con algo parecido al placer en la cara.

Bajó sus manos a la ajustada falda azul marino por las rodillas, fue doblándola hasta tenerla en la cintura, pude deleitarme con la visión de su coño depilado, sin ropa interior, pasé mis dedos por encima de su vulva, húmeda y caliente.

-YO: ¿estás cachonda?, respóndeme cuando te pregunte.

-ALEXIS: mucho, mi señor.

-YO: que es lo que más te gusta del sexo.

-ALEXIS: comerle el coño a mi ama – eso seria aprendido, así que lo dejé estar, lo que le gastaba era la humillación.

-YO: ¿y lo que menos?

-ALEXIS: el sexo……anal - se estremeció al sentir otro tirón del pelo –…… tengo el culo muy fino y me duele mucho.

-YO: me han dicho que estás castigada y no puedo follarte por el culo, ¿por qué?

-ALEXIS: mi ama me dijo que te pusiera en mixtas con ella, y por turnos no pude, así que……me castigó….- “¿por que quería Kate estar en el turno conmigo?”

-YO: ¿Cómo te castigó? …..– se agachó dándome con el culo en la cadera, hice hueco y vi un consolador ancho metido por el culo – …..jjaajjaa vaya castigo, si no se nota cuando caminas, ¿te duele?

-ALEXIS: si, cada vez que me muevo, y cuando me siento me mareo….. – lo cogí sacándoselo con cuidado, ella gemía –….. no, no por favor, es mi castigo, no puedo sacármelo.

-YO: te lo estoy sacando yo, puta imbécil, ¿eres mía hasta que me corra recuerdas? ……– al sacarlo me pareció un consolador no muy algo, pero tan ancho como una lata de cola, lo volví a dejar en su sitio entre suspiros de dolor –…. bien, guarra, vamos a empezar, desnúdate del todo, déjate los tacones.

Obedeció al instante, verla desnudarse fue glorioso, tampoco llevaba sujetador, aunque eso parecía más obra de dios que de Kate, sus buenas tetas se sostenían firmes en su sitio, y toda su piel era de un blanco nuclear, solo unos rosados pezones duros y grandes resaltaban, me senté en la silla y con una palmada la llamé a mi regazo, se sentó con cuidado, para no mover mucho lo que tenia metido detrás, mis manos fueron a sus senos, acariciándolos con cuidado, la sensación de su piel era ligeramente áspera, y sus pezones eran delicados, lamí uno de ellos con esmero para oírla suspirar, entonces mi mano bajó a su coño mojado, se abrió de piernas y masturbé frotando por encima un buen rato, cuando mis dedos se abrían paso dentro de ella sus gemidos era ahogados por la humillación, pero estaba disfrutando, encontré su punto G y daba pequeños saltos con las piernas para que cada vez que retumbara su ano se resintiera, no duró ni 3 minutos y se corrió tapándose la boca con las manos por no alertar a la oficina entera.

-YO: ¿te ha gustado?

-ALEXIS: ¡si!, ¿follamos ya? – lo suplicaba.

-YO: no, hoy no – sus ojos casi se le salen.

-ALEXIS: pero…..- la silencié con un largo beso con lengua.

-YO: eres mía, puta, hasta que hagas que me corra, recuérdalo bien, y no se lo digas a nadie, Kate incluida, dila que te folle fuerte y que la tengo enorme, pero que no me gustó.

-ALEXIS: no puedo mentirla, es mi ama.

-YO: ¿que te ha dicho que hagas conmigo?

-ALEXIS: soy tuya hasta que te corras.

-YO: entones no la mientes, la estás obedeciendo….– asintió confusa, así que agarré el consolador de su ano y le hice salir y entrar tan fuerte que gritó un poco –….. se una buena esclava y hazme caso, Kate está pensando en dejarte de lado por otra.

-ALEXIS: no, mi ama nunca me haría eso.

-YO: no me creas, compruebo, dila lo que te he dicho, y en menos de 1 mes serás agua pasada, y no puedes hacer nada para evitarlo, si la ama decide, tú obedeces.

-ALEXIS: ¿y que será de mi? – casi lloraba, su subconsciente ya veía venir el palo de Kate, yo solo se lo había confirmado.

-YO: yo cuidare de ti, ya has visto que se como hay que tratar a una golfa como tú – se me abrazó con ternura, casi con admiración, yo sonreía al ver que mi plan funcionaba.

-ALEXIS: haré lo que me digas, y nunca te cuestionaré, podrás hacerme lo que desees y te complaceré lo mejor que pueda, y si no puedo, buscaré a quien pueda, ¿puedo ser tu puta?

-YO: solo si te lo ganas, y el primer paso es que confirmes mis palabras, así sabrás que no te miento como ella…. - sobé su cuerpo unos segundos - ….anda, vístete, y sigue siendo quien eres de cara a todos, incluso de mi, incluso delante de Kate sigue el papel, pero cuando estemos solos serás solo mía – asintió con felicidad extrema en la cara, la di un fuerte azote en el culo que ruborizó sus mejillas.

Se vistió y al abrir la puerta gritó algo sobre las ventas, pero me guiñó un ojo, ya era mía, al salir de allí analicé mi jugada, si, podría habérmela follado y así quedar saldada la cuenta, ¿pero que ganaría yo con eso? ¿un polvo? los tenia donde quisiera, yo no era un hombre normal al que el sexo le cegara, aunque al entrar en la habitación estaba decidido a follarla y ver hasta donde llegaba aquel juego, pero había dicho que Kate la castigada por que no la obedeció al ponerme junto a ella antes, ¿por que querría hacer pareja conmigo? Eso tenia que resolverlo, además, ¿tener a tu jefa dominada y a tu merced? Eso era poder, y pensaba quitárselo a una Kate de la que no me fiaba, una mujer así, tan manipuladora y fría, podría estar jugándomela y ni me daría cuenta, había sido demasiado fácil que me diera tanta información y tan deprisa que ya me quisiera en sus juegos, como había aprendido, jugaría a lo que ellas quisieran, pero siempre con la mejor mano. Al salir me crucé con Kate, que me miró sorprendida

-KATE: ¿tan rápido?

-YO: es que folla bien.

-KATE: ya lo se.

-YO: aun así no me ha gustado, creo que voy a pasar de vuestros juegos……..

-KATE: una lastima……..tendré que buscarme a otra.

-YO: te recomiendo a Cameron o a Pamela, son las que mejor follan de todas – sonrió agradecida.

-KATE: Cameron tiene novio, puedo manejarlo, ¿pero esa vieja?

-YO: oh si….además es muy fácil doblegarlas.

Mentira, le costaría un mundo averiguar el fetiche de Cameron con el anime y Pamela era la mujer más orgullosa y dura de pelar que había conocido, no lograría nada, o al menos se tiraría 2 semanas estudiándolas, “tiempo, necesito tiempo, y ver venir los golpes”, Kate podía ser una aficionada al sado sin más, o una enviada por Eleonor, no lo sabia, pero aunque os parezca rocambolesco, desde que Eleonor regresó, hacia esto con todo el mundo, no me fiaba de nadie, y Kate no era diferente.

-YO: muy ocurrente lo del consolador en el culo, ¿por que la castigaste?

-KATE: ah…..nada….no me ayudó con un chico al que me quiero camelar……- la muy zorra usaba mi mismo truco, las verdades a medias son más útiles de lo que parece, y son más fáciles de creer, fuera de Eleonor o no, iba a por mi y no me pillaría descuidado, además, alguien le se llevó el CD de la oficina, y no sabia quien.

Nos despedimos con cariño, su forma de besar en las mejillas era excitante, posando los labios con clama y dejándolos unos segundos, lo justo para sentir sus prominentes pechos en tu cuerpo, y se alejó contoneando aquel culo de cine encerrado en un vestido de licra.

Raúl – Bombardeo.

Pasaron un par de días desde que Kate me habia dejado jugar con su esclava, Alexis, una mujer tan despiadada de cara a los demás como sumisa en el sexo, aun me encontraba analizando opciones y estudiando como proceder cuando recibí una llamada el fin de semana, estando en mi casa, era Eleonor.

-ELEONOR: hola amor mío.

-YO: hola jodida chiflada.

-ELEONOR: ¿estás ya sito para venir a mi lado?

-YO: no………..no lo haré.

-ELEONOR: una lastima papacito……llaman a la puerta – colgó sin más y a los pocos segundos sonó el timbre, bajé volando pero mi madre abrió la puerta, 2 policías y un señor trajeado se presentaron.

-TRAJEADO: hola, buenos días, mi nombre es Julio xxxxx y soy abogado fiscal, vengo a entregarle una citación a doña XXXXXX.

-MAMA: si, soy yo, ¿que ocurre?

-JULIO: ha sido usted denunciada por montar una empresa ilegal de cuidado de niños sin licencia y fraude a hacienda – mi madre no supo responder.

-YO: ¿que ocurre? – solté al llegar

-JULIO: ohhhhh es usted don Raúl xxxxxxx

-YO: si.

-JULIO: bien, le comunico que también ha sido denunciado.

-YO: ¡¿yo?! ¿Por que?

-JULIO: por asalto y violación de una mujer, chicos, las esposas – los policías entraron al bulto y yo ni me lo creía.

-MAMA: ¡¡hijo!!

-YO: ¡¡¡esto es una farsa ¿a quien se supone que he violado?!!! – los policías me leían los derechos de fondo.

-JULIO: ya se lo comunicaran en el juzgado, por favor, no se resista – me esposaron con fuerza, mi corpulencia les incomodaba, pero no me resistí.

-MAMA: ¡¡¡ay dios, mi hijo, ¿donde se lo llevan?!!!

-JULIO: vamos a la comisaria del centro, allí le tomaran declaración, y pasará a disposición judicial.

-YO: mama, tú tranquila, llama a Teo y a su padre, y busca otro abogado, el que sea pero no confíes ciegamente en el padre de Teo, ¿me has oído? – sollozaba ante mi, me rompía el corazón ver a mi madre así, observando como sacan a su hijo a rastras del piso, pero asentía atendiendo a todo.

No recuerdo que más grité, pero me llevaron esposado, la mirada de los policías era de asco, me sentí mal, pero no por mi, si no por mi madre, ninguna madre debería pasar por algo así, y menos cuando es falso, me pasé 2 horas de calabozo a sesión de fotos y manicura, “ya tengo ficha policial”, y en el calabozo estaba con otros 4 tíos, el celador se ocupó de que supieran por que estaba allí, “es un puto violador………..supuestamente”, gritó, corté por lo sano, me miraban demasiado mal, les tenia casi encima a empujones y le solté un codazo al más grande en la nariz, rompiéndosela, me sacaron de la celda para ponerme en otra enfrente, todos habían visto lo que pasó, y sus miradas y su forma de apartarse me aliviaron, “esa batalla ya la he ganado, nadie se meterá conmigo”.

Dormí, si es que se puede decir eso, hasta que por la mañana me presentaron ante el juez, resumidamente me acusaron del asalto y la violación de Jeni, la deportista que se enfadó conmigo en mi época loca, fue una de las que no me cogió el teléfono al llamarla, “Liz no fue la única en caer, estúpido”, me decía. Se presentó Jeni con su familia, y un par de abogados con trajes muy caros como para poder permitírselos, vestida con unos pantalones rojos y camiseta negra, montando una escena lacrimógena sobre como la había forzado repetidamente, mi familia de fondo le gritaba hasta ser sacados de la sala por los guardias. Mis abogados eran el padre de Teo y uno de un seguro que teníamos contratado, el padre de Teo era bueno, pero no me podía fiar de él si estaba pingado por Eleonor y el CD, necesitaba a alguien que supiera de leyes para frenarle si me metía en un lío, se comportó alegando con solvencia, pero se veía atado de pies y manos, notaba la mirada acusadora del juez, “ya estabas condenado antes de salir de casa”, la salvación llegó del este, Dani arrastrando a Liz de la mano, al abrir la puerta aun se oía a mi hermana gritar, ambas declararon que vivieron y compartieron mi techo cuando ella decía ser violada, y que fueron relaciones de mutuo consentimiento, su palabra contra la nuestra, pero eran 3 vs 1, Jeni empezó a contradecirse para justificar que ellas no vieran nada, el Juez se llenó de ira al notar la falsedad de sus palabras. Jeni no era actriz, y terminó derrumbándose, el padre de Teo me sacó de allí ese mismo día. A Jeni por presentar una denuncia falsa le cayó una multa descomunal, sus abogados al llamar a “alguien” la tranquilizaron diciéndola que no se preocupara, que ya estaba pagada, pero unas 100 horas de trabajos sociales no se las quitaron.

Al salir mi madre me dio tal abrazo que casi me parte en dos, y yo se lo di a Dani, fue ella la que buscó a Liz, que se había pasado desde la cita en el café huyéndonos, y la llevó de los pelos al juzgado, al llegar a casa empezamos a planear la defensa de mi madre, a ella no le iba la cárcel en juego, si no una multa gorda, tuve que tirar de mi dinero ahorrado, casi 60.000€, para zanjar el tema unas semanas después, estaba con ficha policial, y sin un duro, pero había soportado el 1º golpe de Eleonor, ¿cuantos quedaban por venir? ¿A por quien iría ahora? ¿Y cuanta gente de mi vida estaba involucrada?

Esas preguntas me estaban matando, solo una persona me las podía responder, Eleonor, así que la mandé un mensaje usando la tarjeta que me dio y quedamos, fue en un despacho de sus abogados, donde ella se sentiría segura, me hicieron pasar a una sala donde estaban los 2 guardaespaldas sudamericanos, el hombre misterioso y Eleonor, como sospechaba al entrar me cachearon y me pasaron un detector de micros o algo así suponía, Eleonor no era tan lista pero me conocía, y mis viejos trucos con un boli espía no servirían, acudí de buena fe, solo para hablar y con un sobre con fotos, no podría hacer otra cosa, los ojos de los 2 escoltas y su aspecto eran de auténticos matones peligrosos.

-ELEONOR: por favor, siéntate, ¿quieres algo de tomar?

-YO: no gracias.

-ELEONOR: me he alegrado mucho de tu llamada….. – su sonrisa cándida y su rostro feliz lo dejaban claro, con una melena ostentosa y un vestido blanco ceñido y serio, resaltando un escote abrumador.

-YO: necesitaba hablar contigo.

-ELEONOR: ¿eso significa que te has pensado mejor mi…..oferta? – se reía como si aquello fuera un juego.

-YO: no, sigo en mis cabales y no volveré jamás a tu lado.

-ELEONOR: entonces no se que haces aquí, no tenemos más que hablar.

-YO: yo creo que si…ha sido una jugada muy sucia lo de la violación, donde quiera que vaya, esa denuncia, aunque se sepa que es falsa, me seguirá de por vida.

-ELEONOR: ohhh venga, fue solo el calentamiento, esa niña se derrumbaría en cuanto el padre de Teo se le cruzara delante, es un gran abogado, deberías confiar mucho en él – “eso es lo que quieres, por que le tienes amedrentado, solo el CD le salva.”, pero yo no estaba allí para charlar, estaba para sacar información, y muy sutilmente me había dejado claro que no sabia que ya había hablado con el padre de Teo sobre ese tema, que yo ya sabia que no podía confiar en el del todo, y que conocía a Teo y su padre, la 1º debilidad que había mostrado y ni había empezado mi juego.

-YO: tal vez, pero lo de mi madre…..eso te va a costar caro.

-ELEONOR: tengo dinero……. y solo hice lo mejor para este país, hacienda somos todos…..- tenia unas ganas de levantarme a matarla que no os podéis imaginar, pero con las 2 moles de piel morena y tatuajes por el cuello flanqueándome………seria un suicidio.

-YO: mira, esto no es un juego, es mi vida y la de mi familia, no puedes hacerme esto por que no te ame.

-ELEONOR: si puedo, y lo seguiré haciendo hasta que tenga lo que quiero – dio un fuerte golpe en la mesa.

-YO: pues no lo tendrás, y solo lograrás que yo me enfade.

-ELEONOR: jajajaja ¿crees que un mocoso como tú supone algún problema para mi?

-YO: un mocoso del que estas perdidamente enamorada…

-ELEONOR: ¡¡no juegues con mis palabras!!... - se enfadaba con facilidad, “la ira hace tonta a la gente” –… no sabes a quien tengo en el bolsillo, y cada persona a tu lado puede estar a mis órdenes.

-YO: no hace falta que lo jures, tengo localizados a todos – era mentira, pero mi voz lo hizo creíble, su mirada se volvió confusa, miró al hombre misterioso, que le negó con la cabeza.

-ELEONOR: no puedes descubrir a todos, son demasiados, en tu vida, en el trabajo y hasta en…..- la interrumpió el hombre misterioso, poniéndole la mano en el brazo, la había provocado hasta empezar a soltar información sin parar.

-YO: veo que al menos tienes a un perro listo …– clavé mi mirada en él, era un hombre mayor, de unos 40 años, pero aparentaba mucho más, vestido de traje sin corbata, con la cara curtida y alguna marca de golpes y cicatrices en el rostro, arrugas incipientes y el cabello oscuro salvo por unas canas mal disimuladas, con unos ojos negros y profundos, infundia miedo y ni me había dirigido la palabra, pero no se lo iba a demostrar – …..¿quien es este payaso?

-ELEONOR: es Carlos, y ten mucho cuidado con él…….- la mirada llena de ira de Eleonor se apagó al sentir los dedos de “Carlos” aferrados a su muñeca, Eleonor había picado de nuevo, el orgullo y la ira la cegaban.

-YO: Carlos ummm……..- con un gesto de leve enfado soltó a Eleonor y se giró hacia mi, con un movimiento estudiado sin duda, para meter miedo en el cuerpo -……..no eres tan estúpido como para darla tu verdadero nombre, pero tu enfado me dice que si indago un poco terminaré sabiendo quien eres – esbozó una sonrisa de sorpresa.

-CARLOS: veo que no eres un chico normal, no estás tan asustado como deberías – su voz era más ronca y aguda de lo que podía haber esperado, desde luego imponía en todos los aspectos, sus ojos ahora se clavaron en mí, y los míos en los suyos.

-YO: no soy ningún chico, soy un hombre al que estás jodiendo la vida por orden de una chiflada.

-CARLOS: un chiflada rica, paga bien – Eleonor se ofendió por el comentario pero no tuvo arrestos para reprochárselo, la tensión se mascaba en el ambiente, entre él y yo había algo más que miradas, y los 2 perros a mi lado lo notaron, tensándose.

-YO: pues espero que lo disfrutes pronto, si sigues ayudando a esta loca, no se como o cuando, pero os haré caer a todos - miré a los 3 caballeros de la sala, Carlos se rió.

-CARLOS: estos 2 armarios no son de los míos…. – algo que ya sospechaba – ….mi gente es más refinada – torció el gesto al ver mi sonrisa.

-YO: si que son muy refinados, ¿a cuantos tienes siguiéndome? – era un órdago, él lo sabia, pero que yo supiera que me seguían era lo normal.

-CARLOS: 1, a 10, o puede que 50, no lo se – su respuesta era nerviosa.

-YO: yo diría que 6 ……– al meter mi mano en la cazadora para sacar la fotos los 2 bichos de mi lado me agarraron, pero al sacar el sobre se relajaron, tiré el sobre a Carlos, que lo abrió y al ver las fotos de los 6 hombres que me seguían por turnos sonrió fingiendo desdén, pero estaba molesto –…. espero que no fueran caros Eleonor, o que no fueran los mejores Carlos…..- los 2 me miraron con la misma cara de odio.

-ELEONOR: ¿los ha encontrado a todos? – Carlos se pensó la respuesta.

-CARLOS: no, solo a los que puse de cebo – “jajajajajjaa no te lo crees ni tú”.

-YO: dime Carlos, ¿fue uno de tus chicos o fuiste tú? – me rasqué en el pecho, justo donde las pequeñas heridas de la pistola táser se curaban y donde solo el asaltante sabría de que hablaba al tocarme.

-CARLOS: no se de que me hablas…….- una risa mal disimulada me dejó claro que fue él, y él quería que lo supiera.

-YO: de un pequeño incidente que tuve en el aparcamiento de mi coche, alguien me atacó con una táser.

-CARLOS: cuanto lo lamento…..últimamente disparan a mucha gente con esas armas, se han puesto de moda.

-YO: no he dicho que me disparan…….- sonrió disimulando su metida de pata, esas pistolas se pueden usar aplicándolas directamente o disparando desde unos metros, Carlos borró su sonrisa, sin decir nada asintiendo y reconociendo que le había pillado, “no me subestimará más”.

.CARLOS: disparar, atacar…….da igual.

-YO: yo me lamentaría más por el que lo hizo, cuando tenga la oportunidad………..que la tendré……..pienso metérsela por el culo y apretar el gatillo – Carlos se puso recto, por 1º vez me tomaba en serio y no como a un crío al que tenia que chinchar.

-CARLOS: alguien me ha dicho que sueles cumplir tus amenazas, ten en cuenta que los demás también pueden hacerlo, y si alguien, pongamos ese asaltante misterioso, se viera amenazado, podría tomar represalias – del ego y la tensión de la sala parecía a punto de romperse las paredes, una calor asfixiante reinaba todo.

-YO: supongo que es normal, solo el tiempo dirá quien es la bota y quien la hormiga.

-ELEONOR: ¡basta de peleas de gallitos!, Raúl, cede o lo vas a pasar muy mal.

-YO: más te vale cerrar la puta boca y dejarme tranquilo, tenías algunos CD, pero no todos, y no sabéis cuantos tengo ni donde están – se le bajó el arranque de golpe.

-ELEONOR: ¿te crees que esos CD te van a salvar de mi?, los encontraré, y aunque los saques a la luz seguiré, no pararé, jamás escaparas de mi, solo puedes ser mío – se puso en pie.

-YO: tu marido……- me cortó llena de furia.

-ELEONOR: mi ex marido, y ya da igual, tengo recursos que el nunca tuvo, y gano millones, nadie se acuerda ya de ese desgraciado, así que metete esto en la cabeza, jugaré, haré lo que quiera, y si no eres mío por las buenas, será por las malas, y no hablo de denuncias falsas, si no que solucionar esto como se hace en Colombia …..– una risa ansiosa se le escapó a uno de mis 2 “nuevos amigos”, no hacia falta que dijera como, cada semana salían noticias de gente secuestrada, o asesinada en Colombia, y esos 2 tipos parecían de esas personas que se encargaban de los trapos sucios -…. …….así que lárgate, ya me has enfadado suficiente por hoy……. – con un gesto con la mano me cogieron por los brazos y me sacaron de allí a rastras - ………y toma esto, para que sepas a quien pones en peligro, me tiró un maletín a la cara, Carlos se puso en pie queriendo detenerla, pero estaba encolerizada, y uno de sus matones me dio un soberano puñetazo que me hizo hincar la rodilla, era algo más bajo que yo, pero con el pecho hinchado como un gallo de corral.

Salí asustado, con el corazón a mil, un sudor frío recorriéndome la espalda y el lado izquierdo de la cara ardiendo y entumecido, no había logrado muchas cosas pero si alguna, 1º Eleonor estaba cegada, no era el cerebro de todo, solo la que ponía el dinero, era irascible y fácil de provocar. 2º el que manejaba los hilos es Carlos, alguna especie de investigador privado o encargado de todo, era a quien había que temer, era listo, experimentado y mi actuación le había demostrado que yo no era un simple capricho de Eleonor, si no que tenía sesera y sabia manipular, encima, al descubrir a sus colaboradores le había enfadado, mucho más de lo que dejó ver. Lo 3º era que los 2 osos pardos disfrazados de trajes caros no eran más que matones muy peligrosos de Colombia. Lo 4º era que los CD, ofrecían algo de protección pero no bastaría para frenarla, solo para que siguiéramos jugando, Eleonor había descubierto que con dinero podría enterrarme bajo una tonelada de papel y tirarme 10 años de juicios. Y lo 5º y más importante, era que dentro del maletín había un informe detallado de todas y cada una de las personas de mi vida, familia directa, indirecta, amigos, compañeros, colegas y amantes, todas por las que estaría dispuesto a dar mi vida, casi me habían leído la mente, muchas otras personas de mi vida no estaban, pero justamente eran las que no me importaban en absoluto.

Era mucha información, me sentía mareado y un párpado me temblaba, necesitaba leer todo aquello, ver que era, de quien, y sobretodo si había algo que poder aprovechar, así que me fui al único sitio que conocía con gente lista, capaz de asimilar tanta información y de la que confiaba ciegamente, al piso de estudiantes, al abrirme la puerta Naira se asustó al verme el lado de la cara hinchado, y me hizo pasar, no quería fingir pero me encontraba mal, no solo por el golpe si no por que todo empezaba a acumularse en mi cabeza, no veía salida, en tropel fueron saliendo todas de sus cuartos, menos Mara, la hermana de Alicia, que estaba trabajando, me sentaron en el sofá, y Lara se acurrucó a mi lado echándome la cabeza hacia atrás, me estaba sangrando la nariz y no me había dado cuenta, Alicia apareció con una bolsa de guisantes congelados y me la puso en la cara.

Alicia iba con un suéter azul largo y unos vaqueros, Naira con un pantalón blanco ajustado y un top amarillo chillón, Lara con unos pantalones viejos grises y una camiseta sin mangas roja mostrando gran parte de sus senos por los lados, cada una preciosa y bella a su manera.

-ALICIA: ¡¿pero que te ha pasado?! – no creo que fuera la 1º que me lo preguntó, pero si la 1º a la que pude prestar atención.

-YO: nada, cosas mías.

-LARA: no habrás vuelto a meterte en una pelea por una chica, ¿no?

-YO: no……..o si….algo parecido, aunque no hubo pelea, solo me zurraron.

-NAIRA: pobrecillo, ¿como estás? - lo dijo sentándose en mi regazo, relevando a Alicia con la bolsa de guisantes en mi cara, la mirada de Lara se volvió turbia pero se tranquilizó, yo no estaba para chicas.

-YO: hecho una mierda…..esa mujer……- el ruido de la puerta de un cuarto sonó, y al mirar vi a Lorenzo saliendo del cuarto de Alicia.

-LORENZO: ¿que ha pasado?

-ALICIA: aquí el amigo, seguro que por alguna mujer…..

-LORENZO: últimamente no ganas para disgustos….

-NAIRA: ¡déjale!, no está para bromas.

-LORENZO: lo siento…..quizá pueda ayudar….

-YO: no, gracias – mi tono subía decibelios.

-ALICIA: tranquilo Raúl, solo quiere echarte una mano.

-YO: pues no la necesito.

-ALICIA: ¿pero por que?

-YO: ¡¡¡por que no me fío de él!!!- solté malhumorado, el silencio pasó a ser incomodo.

-LORENZO: quizá sea mejor que me marche…..- Alicia giró la cabeza, o eso creo, susurrándole disculpas al oído, pero si algo me hizo daño ese día fue ver como se despedían con un largo y tierno beso en los labios, cerró la puerta y regresó enfadada.

-ALICIA: te has pasado 3 pueblos con él.

-YO: lo siento, no quería ser brusco, pero necesito vuestra ayuda, y solo me fío de vosotras……por favor.

-ALICIA: vale…..- asintió pasándose la mano por la frente apartándose su larga melena caoba -……¿es por esa mujer no?...... ¿Eleonor?

-YO: si……me esta volviendo loco, no se como quitármela de encima.

-NAIRA: ¿y que necesitas que hagamos?

-YO: lo 1º es que os podéis meter en un lío, si no lo estáis ya, por mi culpa, no quiero pedir esto, pero no tengo otra.

-LARA: no seas tonto, te ayudaremos.

-YO: lo 2º es que me lo estoy jugando, esa zorra tiene a gente muy cercana a mí en la mano, y alguna de vosotras podría ser un topo.

-ALICIA: ¿me estás tomando el pelo?

-YO: lo sé, os conozco desde hace mucho, más a ti Alicia, pero ya no se que pensar, Jeni no era mala persona y a Liz la conocía desde los 8 años, y un así………- estaba hablando desde el corazón, a la desesperada, si había un topo no se descubriría, pero ahora mismo necesitaba confiar en ellas.

-ALICIA: pues no confíes en nosotras, no hagas ni digas nada que te comprometa, dinos que hacer, y ayudaremos, pero no sabremos nada – “joder, tiene sentido”, Alicia era estupenda y lista, todo lo que yo no estaba siendo, “maldito Lorenzo”.

-YO: está bien……por ahora coged ese maletín, y a leer, os vais a meter en mi vida de lleno – Alicia lo cogió y lo abrió en la mesa del salón, empezó a sacar los informes, y Lara acudió a ayudarla, mientras Naira me cuidaba sentada en mi regazo, rodeándome con sus delicados brazos, dándome una sensación de cariño y seguridad que necesitaba.

-NAIRA: ahora yo cuido de ti jajajaja

-YO: eres un sol, todas lo sois, no se que haría sin vosotras.

-LARA: pues leer para empezar, esto son todo informes de tu familia, y esos de ahí son de tus amigos, joder, si están los nuestros y todo.

-ALICIA: a ver, déjame ver esos.

Se pasaron 1 hora leyendo, con Naira cuidándome, hasta que pude pensar por mi mismo un poco, y nos pusimos a ayudarlas, eran amplios archivos con información de sus vidas, fotos, descripciones, perfiles y detallados análisis psicológicos, analizando puntos fuertes y débiles, Lara se enfadó al leer que ella era fácil de manipular, Naira menos al leer que era poco menos que una monja, y Alicia se puso colorada al ver que le habían estado sacando fotos no hacia mucho, con un análisis especial sobre su relación con Teo, que también tenia su informe, como Manu, y algún amigo más, mi familia y la mitad de mis compañeros de trabajo, ya fueran del super o de los seguros, si había topos entre aquellos papeles era como buscar una aguja en un pajar, eran demasiados y podría ser cualquiera. Descansamos un rato, cenamos y Mara regresó del trabajo, bien arreglada como siempre, con unos jeans ceñidos, un polo blanco y unos imponentes zapatos con plataforma, se fue a su cuarto a dormir cansada, nosotros seguimos estudiando aquellos papeles, pero ya no era lectura, empezaban a hacerme preguntas, sobre la gente, que hacia o como me llevaba con ellos, pero no sacaba nada en claro que no hubiera pensado ya yo solo, me dolía la cabeza y a las 2 de la mañana les pedí que lo fueran dejando, aunque seguían leyendo, más por curiosidades que por sacar algo, tenia a Lara encima sobándome y yo a ella, amasar sus enormes tetas me producía un efecto placebo, me serenaban.

-ALICIA: es increíble toda la información que tienen de cada uno, esto son semanas o meses de trabajo.

-NAIRA: esa loca está loca de verdad – estaba con el PC portátil, buscando información de Eleonor.

-YO: que esté loca da igual, el problema es que tiene mucho dinero.

-NAIRA: mucho……y ahora más que nunca, según los portales de economía sus empresas de importación y exportación van como un tiro, a triplicado los ingresos.

-YO: ¿en serio? ¿Con la crisis?

-NAIRA: si, aquí dice que nadie se lo explica, y la acusan de fraude, pero poco más.

-ALICIA: ¿y el resto de empresas?

-NAIRA: no mucho, siguen igual más o menos – saqué mi lengua de boca de Lara.

-YO: ¿y por que solo las de exportación?

-ALICIA: ¿quien sabe?, quizá tenga contactos y saque buen precio.

-YO: su marido tenía buenos contactos, ¿pero ella?, era una mujer florero.

-NAIRA: ¿y aquella hermana suya?

-YO: Lili…o Carolina……si, pero ella era aun drogadicta que salió de la cárcel……- de golpe lo vi, se me notó en la cara.

-ALICIA: esa cara me gusta……- esa mujer me conocía como nadie.

-YO: ¡que zorra!, ya se como gana los beneficios.

-LARA: ¿como? – la miré acariciándola los senos con cuidado, sonrojada al notar sus pezones duros siendo trabajados.

-NAIRA: ¡no!, no nos lo digas, así si alguien es un topo no lo sabrá – me quité a Lara de encima y me fui a abrazarla, en parte por su ocurrencia, estaba a punto de decirlo, y en parte para celebrar el hallazgo, la levanté por el aire entre risas y al caer la besé con dulzura, Lara gimió de fondo, cogiendo unos ficheros para seguir leyendo.

-YO: no me lo creo, tengo que asegurarme, pero todo encaja…..

-ALICIA: pues hazlo.

-LARA: jooooder…….- la miré extrañado, estaba leyendo un informe sobra mis tíos y primos.

-YO: ¿que pasa? – quería saber si había encontrado algo.

-LARA: ¿todos sois así de altos en tu familia? – me relajé un poco.

-YO: si, no se, alguna rama de gigantes supongo.

-ALICIA: ¿por que lo dices?

-LARA: mira la ficha de sus tíos, ninguno baja del 1,85 ¡¡¿y sus primos?!!........- Alicia se hizo con el informe.

-ALICA: la leche…..una prima de 1,88, y luego los 2 primos de 1,97, la virgen……y el otro de ¡¡¡2,03!!!

-YO: jajajaja si, Felipe.

-NAIRA: será jugador de baloncesto, ¿no?

-YO: ¿por que seas alto tienes que jugar al baloncesto? – mi tono lo captó Alicia al vuelo.

-ALICIA: ¿en que equipo juega?

-YO: es un amateur de la 3º división – las risas relajaron un poco el ambiente.

-LARA: ¿y el otro?

-ALICIA: Alberto, aquí dice que sirvió en el ejército y luego se hizo guardia civil, pero………..oh mierda, lo siento…

-LARA: ¿el que? ……– cogió ansiosa el informe- “Oficial condecorado en las fuerzas de tierra, se retiró e ingresó en la guardia civil sirviendo con honor y distinción hasta que en un tiroteo sufrió heridas mortales y falleció 2 días después en el hospital”………oh joder…….lo lamento mucho.

-YO: no pasa nada, pasó hace ya 10 años, casi no me acuerdo de él – las 3 me miraron sin entender por que no estaba apenado, Naira me volvió a abrazar.

-NAIRA: vaya vida más dura.

-YO: no lo sabéis vosotras bien…..- era cierto, su vida no era de color de rosas - …..…¡¡¡¡joder!!!! – otro golpe en mi cabeza.

-ALICIA: ¡dios!, deja de darnos esos sustos…..

-LARA: ¿que pasa ahora? – Naira me tapó la boca con sus dedos.

-NAIRA: ¡¿quieres dejar de preguntar?¡Fisgona!

-LARA: no nos puede dejar así – le metía mano en el culo a Naira de pura felicidad, y después me fui a por Lara.

-YO: sois geniales.

-NAIRA: pero si no hemos hecho nada.

-YO: habéis hecho mucho más que ayudarme, me habéis dado la solución - solté los senos de Lara y me acercaba a una Alicia que se ponía en pie.

-ALICIA: a mi no me metas mano, guarro, que tengo novio – se abrió de brazos y la di tal abrazo que la levanté del suelo haciéndola girar por el aire, la dejé en el suelo, los 4 reíamos pero solo yo sabia por que.

-YO: lo siento chicas, me tengo que ir…. – recogía a toda prisa los informes – ….de verdad que no sabéis cuanto me habéis ayudado, y por favor, tened cuidado, cualquiera que se os acerque podría ser una trampa.

-ALICIA: Lorenzo no es una trampa – me giré localizando, estaba tan acelerado que no la tenia ubicada.

-YO: no lo se, quizá si, quizá no, ten mucho ojo, no me gusta.

-LARA: ya sabemos por que no te gusta……- habló bajo pero lo suficiente, estaba convencida de que entre Alicia y yo había algo.

-NAIRA: déjate de tonterías…. – la sacudió un manotazo en el hombro y luego me cogió de la cara, clavando sus azulados y grises ojos en lo míos -…..vete y machaca a esa cerda.

Sin duda Eleonor me dio ese maletín pensando que me asustaría, y si no fuera por ciertos detalles, lo estaba, con todo aquello podían hacer mucho daño, pero había cometido un error garrafal, Carlos quiso pararla, pero fue tarde, cuantas cosas hubieran sido diferentes de no darme ese maletín.

Me fui de aquella casa con la cara algo enrojecida y una leve excitación, pero no era sexual, hasta ahora me sentía enfadado, ofuscado, vendido, estaba a merced de Eleonor y solo podía recibir golpe tras golpe, me sentía como si fuera perdiendo por goleada un partido que no sabia ni que se estaba jugando, pero esas 3 mujeres lo cambiaron todo, incluso Lara con sus incisivas preguntas, que me llegaron a ha hacer sospechar de ella, pero ahora tenia un plan…………o parte de un plan……o al menos una idea decente sobre como actuar, me sentía como Miguel ángel la 1º vez que vio el bloque de mármol que más tarde seria su David, tenia algo en la cabeza, un idea borrosa y abstracta, pero allí estaba, era menos que nada.

Retomando a Miguel ángel, cuentan una historia sobre un encargo que le hicieron para escupir una imagen de Moisés, se dice que cuando terminó la obra, se acercó, asombrado por la perfección y el detalle de su escultura, golpeó suavemente la rodilla de la figura y le dijo “Habla”, estaba tan maravillado con su obra que pareciera que Moisés se pudiera echar a andar en cualquier momento, pues yo necesitaba algo así, convertir aquel borrador ensuciado en mi mente en una obra maestra, solo así podría quitarme a Eleonor de encima para siempre.

Kate - Los ojos verdes.

YO: Como es la vida, te puedes pasar toda tu existencia pensando que sabes quien eres, de donde vienes y a donde vas, que tu pasado y tu futuro están conectados por tu “yo” del ahora, que sigues un camino marcado por tus decisiones, y que todo ello te hará mejor o peor persona, por que hay algún tipo de justicia o poder superior que te guiará, que sabrá recompensar tus acciones para darte una vida mejor, o castigarte.

-NIÑO: señor……¿nos devuelve la pelota? – sonreía al mirar a aquel mocoso de unos 9 años mirándome asustado.

-YO: claro, toma - dejé caer el balón al suelo rodando hacia sus pies, el niño cogió la pelota y salió corriendo con otros críos persiguiéndole, “juega niño, disfruta, ahora que puedes, que desconoces lo cruel y siniestro que es el mundo”.

En aquellos dais me descubriría teniendo pensamientos demasiado lúgubres y tristes para un chico de 23 años recién cumplidos, atractivo, guapo y con una polla colosal, pero allí estaba, pensando, sentado en un parque, solo, mirando a unos críos juguetear entre ellos, o a unas palomas buscar restos de migas por el suelo, o a un grupo de madres sentadas riendo y vociferando sobre sus cosas, pensado en lo felices que eran en su ignorancia, y allí estaba yo, con el cálido abrazo del sol apagándose en el cielo, esperando algo, o a alguien, no lo sabia, mi vida era confusa, y difícil de describir. Me dolía el cuerpo, tenia varias contusiones o golpes, algunos curados, otros en proceso y varios recientes, con los nudillos amoratados, vestido como un mendigo, casi irreconocible, con el pelo largo y abultado, sucio, una barba espesa y con un pesar en el corazón mayor que el que nunca había sentido, me dolía el alma pero me frotaba el hombro medio dislocado. Habían pasado más de 6 meses desde que salí del piso de aquellas estudiantes, animado con una sensación de encontrar un camino, una vía de escape o algo parecido a una solución.

¿Cómo había pasado de aquello a mi situación actual?, es una buena pregunta, yo mismo me la hacia a cada segundo esperando en aquel parque, lo repasaba en mi cabeza una y otra vez, esa serie de acontecimientos hilados, que uno tras otro, me tenían sumido en un caos total. “¿Cuál fue el 1º? Ya no lo recuerdo…..”., hice memoria, había salido de aquel piso con un par de ideas, si, pero solo eran eso, ideas, algo que no me atrevía a contar a nadie, pero que necesitaba encajar, Eleonor era una perturbada, pero una loca con recursos y matones es más peligrosa de lo que parece, sus matones no eran problema, solo eran perros obedientes, pero Carlos, aquel hombre me erizaba la piel, y después de aquella reunión éramos enemigos, y ahora sabia que tenia que tener cuidado conmigo. Contaba con todas las desventajas del mundo, ¿que podía hacer yo? Pues lo que me habían enseñado ha hacer….. “Pensar, razonar y Analizar”, si, eran las palabras de Eli, las que me enseñó, pero no fue ella la que me hizo actuar así, solo me reafirmó en un camino marcado por mis padres.

La 1º respuesta era evidente, los contenedores de importunación y exportación de Eleonor, que la hacían ganar dinero a espuertas, llevaban dentro algo que los hacían mucho más caros que antes, la 2º era más enrevesada, los matones no estaban allí para protegerla, si no para vigilarla, era valiosa, para alguien que estaba haciendo que los contenedores fueran tan lucrativos, y si quería que lo sugieran siendo, ¿cual es la formula colombiana de conseguir que la gente colabore?, lo dijo Eleonor en la reunión, el secuestro y tener rehenes.

La historia era tan clara en mi cabeza ahora, ¿por que no lo fue entonces?, Lili, o Carolina, había vuelto a drogarse, por eso no sabia nada de ella ni había regresado junto con su hermana, había recaído tanto que algún pez gordo del mundo de la droga se enteró de quien era, y se la llevó, chantajeando así a Eleonor, la dueña de una multinacional que importa y exporta miles de toneladas de material entre Europa y Sudamérica, no costaría mucho asustarla para hacer que dentro de los contenedores fueran kilos de droga, posiblemente cocaína, prometiéndola una parte de los beneficios para cerrarla la boca, así triplicaba las ganancias, pero a su vez era prisionera, no se podía negar por que tenían a Lili, y se aseguraban poniéndola a los 2 perros. La jugada era genial, un narcotraficante podría ingresar mucho material en aquellos barcos mercantiles, protegidos por el nombre de una gran empresa y seguramente con media aduana en los bolsillos o amenazados, y así blanqueaban el dinero con las ganancias de Eleonor, casi era para aplaudir.

Esto representaba un par de puntos a dirimir, el 1º era que eso hacia mi situación más peligrosa, con narcos colombianos de por medio, y la 2º era que Eleonor estaba en un situación delicada de la que podría aprovecharme algún día, pero sin duda, defenderían su inversión, Eleonor se había convertido en una gallina de huevos de oro. Para cuando llegué a mi casa del piso de estudiantes ya tenia todo esto más o menos claro, respecto la 2º idea que tuve, era la que me tenia en aquel parque, 6 meses después, esperando, pero ya llegaremos a eso.

Conociendo ahora el alcance del problema, no involucraría a mi familia en ningún aspecto, ni a nadie, si pasaba algo todo recaería sobre mi, y sabiendo eso, mi fabrica de ideas encendió maquinas. Obviamente, pese a que tenia sentido la teoría sobre Eleonor, no lo podía demostrar, ni siquiera saber si era cierto, solo era una teoría convincente, lo 1º era asegurarse de todo. Miré en el PC, vacío de todas mis grabaciones, los tatuajes que recordaba, en el cuello y las manos de aquellos perros, tardé casi una hora pero los encontré, típicos de matones y asesinos de los cárteles de Colombia, quizá fuera solo una coincidencia y fueran 2 renegados en busca de un trabajo digno, así que busqué al único hombre que conocía el mundo de las drogas, Adrián, un colega, el típico bala perdida de la fiesta, las drogas y la velocidad, el que me ayudó a comprarme mi 1º coche y tuvo al cerdo del amante de Lili, que además se tiró a mi dulce Ana, unas horas entretenido. Se sorprendió de mi llamada y más aun cuando al quedar le dije que me llevara donde hubiera drogas.

Durante un par de días jugué al despiste, no volví a ver a ninguno de los 6 secuaces de Carlos, a los que identifiqué, y no vi a ninguno parecido o similar, o no reconocí a ninguno más, o eran fantasmas o habían dejado de seguirme, de todas formas actuaba como si siempre tuviera ojos encima, maniobras de huida e identificación de seguimiento, dar una vuelta entera a una manzana es lo más útil, nadie lo hace accidentalmente, y si lo hacen es por que te siguen.

Me pasé 3 semanas de fiesta en fiesta, casi todos los días, y con algunos líos, Adrián, y su vida, era un frenesí difícil de mantener, pero me hacia amigos, colegas, preguntaba, incidía, de forma sutil hasta que un día de fiesta en un local latino Adrián se separó de mi unos instantes, y un par de camellos sudamericanos se me echaron encima, lo estaba esperando, todos los que Adrián me había presentado eran españoles o de origen árabe, y no había obtenido demasiado.

-CAMELLO1: oye, tú eres Raúl, ¿no?

-YO: si, soy amigo de Adrián, ¿por que? – decir que era amigo suyo te abría puertas, y te sacaba de líos, más de los que os podéis imaginar.

-CAMELLO2: por nada brother, solo que nos han dicho que andas preguntando por ciertas cosas, y venimos a ver si podemos ayudarte – “¿o a interrogarme?”

-CAMELLO1: ¿por que andas tan preguntón con lo de la cocaína?

-YO: es solo curiosidad, Adrián se mete y quiero saber que es de calidad.

-CAMELLO1: lo nuestro es siempre de calidad.

-YO: lo sé, no hay más que verle cuando se pone, pero hoy en día se oye cada cosa en la TV sobre como la cortan y la mezclan con químicos……

-CAMELLO2: eso son los que no tiene buen material, nosotros si, ¿quieres probarla? – se sacó una bolsita del tamaño de una canica.

-YO: no….muchas gracias, pero me sienta fatal, solo vengo a cuidar de ese loco de Adrián.

-CAMELLO1: ¡venga hombre! solo un poco…..- ambos se me echaron encima, sus miradas eran tensas, y comprendí que si me negaba una sola vez más seria sospechoso……de lo que fuera.

-YO: está bien, un poco, pero recordar que os he avisado…. – el de la bolsa sacó una navaja y pinchó en la bolsita hasta sacar un pizca de aquello, me lo puso en la nariz e inhale, me ardió la nariz y de inmediato un calor exagerado me subió por todo el cuerpo – ¡¡¡¡WWOWWWWWWW!!!

-CAMELLO2: ¡si señor!, amigo mío, así se hace – me dio la mano.

-CAMELLO1: es buena ¿verdad?

-YO: ¡joder, si que lo es!, me siento a punto de echar a correr.

-CAMELLO2: pues si quieres más, llámanos, toma nuestro numero…. – me dieron una tarjeta –… y disfruta un poco por que esto va para largo – se alejaron sonriendo, supongo que creyendo haber logrado un nuevo cliente.

Me pasé 3 horas de fiesta bailando sin parar, no había consumido nunca, tenia un subidón retozando con varias chicas, que al frotarse contra mi verga clamaban sexo, desinhibidas por la bebida y las drogas, me pasó cada noche que salía, no me decidía por ninguna, pero ese día cedí, todas me parecían iguales, se parecían a Yasira, la cabeza me daba vueltas, así que cogí a 2 por la cintura y me las llevé a un cuarto trasero, ya tenia a una de rodillas chupándome la polla como podía mientras me besaba con la otra, magreando senos firmes y unos pezones negros y duros, la cocaína me puso a 100 y le rajé el vestido a la que tenia en pie, medio borracha, la puse cara a la pared y la penetré tan fuerte por detrás que sentí como se rompía algo dentro de ella, no me paró, la embestía de forma brutal y sus lloros pasaron a ser gemidos, la bestia salió sin permiso, agarrándola del pelo como unas riendas, y haciendo vibrar con cada estocada hasta que se corrió, me fui a por la otra que estaba de rodillas, masturbándose con lo vaqueros abiertos, se los saqué como tiras de cera, me la subí encima y la follaba con su cuerpo en el aire, dando saltos que la hacían estremecerse, me llamaron “papito” mil veces mientras las intercambiaba, cada orgasmo era un toque de relevo, y cuando me corrí las 2 se agacharon a chupármela llenado sus bocas de semen.

Cuando se me bajó el subidón me fui de allí con Adrián, que estaba hecho un harapo, casi ni se tenia en pie, conduje evitando las zonas de controles y le dejé en su casa, me fui a la mía y no pegué ojo en toda la noche, mirando al techo sin poder cerrar los ojos, cuando al día siguiente acudí al trabajo se me notaba la mala noche, Penélope estaba muy melosa, hacia mucho que no iba por su casa, pero la presencia de Kate la apartaba, seguía con una especie de acoso y derribo hacia mi persona, intentaba meterme en sus juegos con Alexis.

-KATE: ¿mala noche?

-YO: pues no lo sé, meterse coca y follarse a 2 desconocidas a pelo en un cuartucho sucio, ¿es bueno o malo? – se reía por que sabia que yo nunca mentía en esas cosas, pero a mi me preocupaba, si esas chicas hacían eso a menudo……. me las tiré sin condón ni precaución alguna.

-KATE: depende de lo que entiendas por divertirse, no seré yo quien te juzgue.

-YO: estoy muy cansado ¿quieres algo?

-KATE: lo mismo de siempre……que vengas a jugar conmigo algún día.

-YO: ya me follé a tu puta y no me sirvió de mucho.

-KATE: eso dices, y ella, pero creo que la dejaste una grata impresión, le brillan los ojos cuando me dice que la follabas – “asombroso”, por que no me la había tirado, solo la masturbé hasta correrse.

-YO: es normal, lo logro con todas – “atento, se huele algo”

-KATE: de todas formas, si no te gustó ella, quizá yo si…..- se me pegaba tanto que sus senos se elevaban sobre mi en el escote del traje de oficina que llevaba, con aquellas esmeraldas, que tenia por ojos, clavados en mi.

-YO: ya te dije que no seré el esclavo de nadie.

-KATE: supongo que no puedo evitarlo, me pones cachonda, podría ser tu esclava…… si me lo pides – la imagen de ella a 4 patas desnuda y con una correa al cuelo me atraía.

-YO: no sabría que hacerte, eres una profesional y yo un novato – sonreía acariciando mi pecho con sus manos.

-KATE: yo te podría enseñar a ser mi amo.

-YO: y terminaría embrujado por tus encantos, lamiendo la suela de tus botas, no gracias….

-KATE: ¿tan irresistible soy? – su pelvis se apretaba contra el bulto creciente de mi pantalón.

-YO: si, eres de largo la mujer más sensual y excitante que he conocido – mentí, estaría en el top 3, pero era la más descarada.

-KATE: jajaja mentirosillo, pero es un halago, ¿y si te prometo que seré una niña buena? – puso cara de colegiala, era increíble la facilidad con la que cambiaba la expresión de su cara, la metí mano en el culo frotándoselo con fuerza.

-YO: tú no podrías ser buena ni aunque quisieras, y no quieres – suspiró cuando solté su nalga y la sentí rebotar en la yema de mis dedos.

-KATE: eres mucho más listo de lo que pareces.

-YO: es un don – sin disimulo frotó mi verga por encima de la tela con una de sus manos.

-KATE: no es el único.

-YO: ese está reservado para las chicas que me quiero follar, y tú no eres una de ellas – mentira de nuevo, la abriría de piernas allí mismo si no sospechara de ella, “pero sospechas de todas”, me dije.

-KATE: pues lo que siento es que se te pone dura.

-YO: mi rabo actúa por su cuenta, pero yo decido donde meterlo, así que apártate – la agarré de la mano y la separé bruscamente, tanto que casi tropieza, eso, lejos de asustarla, la excitó, sus mejillas se pusieron rojas.

-KATE: ¡dios!, como me pone que te resistas tanto.

-YO: pues vas a acabar cachonda pérdida.

-KATE: yo follo mejor que esa frígida de Alexis, y sin el sado, te lo puedo asegurar.

-YO: te creo.

-KATE: ¿y por que no quieres? – no tenia respuesta, creíble al menos, todo mi ser deseaba acostarse con aquella “rara avis”.

-YO: por que eres una mujer peligrosa, y ya tengo suficiente con una en mi vida – estudié su rostro, esperando alguna reacción, la que fuera, confusa, graciosa, enfadada o algo que me dijera si sabia de lo que hablaba, pero no hubo nada, durante unos segundos su rostro se heló como antaño.

-KATE: dicen que el sexo con las mujeres peligrosas es el mejor de todos – “rehuye del tema, claro, no te lo va a decir, no puede, se delataría”, su rostro era una fachada, la que ponía para que no se sepa nada, estudiada al detalle.

-YO: y también que son las que te meten en más líos…..- asintió mordiéndose el labio- …..tengo unos CDs…..- me giré cogiendo unos de la mesa, de nuevo estudiaba su mirada, esta vez se heló tarde, un atisbo de duda pasó por sus ojos -…….de técnicas de ventas que me han dejado, ¿quieres echarles un ojo?

-KATE: no, jajaja gracias..…tengo a estas …..– se apretó los pechos -… son todo lo que necesito – se giró contoneando su cadera con descaró, pretendía confundirme, usando su cuerpo de cebo, para que no recordara ese ínstente de duda, pero podía deleitarme con sus andares y saber que la mención de los CD la puso tensa, “o lo sabe o directamente fue ella quien se llevó el CD de la oficina”.

Puede parecer que soy un superdotado del engaño y la manipulación, que siempre voy un paso por delante de todos, pero llevaba 2 meses haciéndolo sin parar, a todos, solo que Kate tiene cierta relevancia, y el morbo de esa mujer se merece ser relatado, pero esto mismo hacia a diario con muchos de mis conocidos, buscando pistas, leyendo caras, intuyendo en sus palabras, poniendo trampas teniendo cuidado en lo que decía y luego en lo que no decía. De momento tenia mis sospechas, no había descubierto a nadie ni tenia nada seguro, pero Kate y Lara eran mis mejores opciones, Kate era evidente, pero Lara se había mostrado demasiado interesada en saber de mis planes, y cuando acudía a su lecho siempre me preguntaba, más allá de eso nada me hacia sospechar de ella, era una mujer normal embobada conmigo, algo curiosa, si, pero la historia despertaba la curiosidad de cualquiera, no era culpable de ser normal, aparte de que me parecía una mujer demasiado débil de carácter como para soportar esa presión. Lara no tenia ningún motivo para jugármela, mientras no tuviera pareja acudiría entre sus preciosos y opulentos senos siempre que pudiera, ¿entonces quien?, me estaba volviendo loco pero tenia las cosas claras, y Eleonor no movía ficha, me daba tiempo, o la reunión la dejó a ella y a Carlos tan desconcertados que pospusieron sus planes.

Durante el siguiente mes aquel par de camellos latinos fueron una gran fuente de información, acudíamos a ellos cada fin de semana, y nos invitaban a fiestas, nos presentaban a otra gente, y se les soltaba la lengua, me hablaban de otra gente por encima y de que el precio de la cocaína había bajado un poco por que estaban metiendo mucho material últimamente, hábilmente les hice ver que era un ser muy social, y me ofrecí a ser camello para ganar algo de dinero extra, y de paso subir en los escalafones, aquel par de idiotas eran camellos que intimidaban pero solo eran el 1º escalón, me presentaron a uno y a otro, probando cada vez más cocaína para no levantar sospechas, llegando a pincharme, mi escala de valores y moralidad se habían ido a la mierda, pero no por las drogas, si no por que mi objetivo era claro, Eleonor, y haría lo que fuera por lograrlo. Cuando entré en el gremio, Adrián me hacia de camello a cambio de algún gramo, yo no conocía a nadie que consumiera y él si, fue algo turbio y raro, muchas noches no las recuerdo con nitidez, recuerdo fiestas, drogas, chicas y dinero, entendí la atracción de ese estilo de vida, pero no me gustaba, solo lo fingía. Mis ventas, o las de Adrián, eran buenas y pronto me propusieron conocer a alguien mayor en la escala, Juan, alguien que al verlo fue fácil pensar que debería de tener miedo, rodeado de escoltas y una actitud serenamente perturbadora, fue donde cometí el 1º error, estaba ya muy cansado y me preocupaba engancharme a la cocaína, así que me apresuré y pregunté demasiado pronto por la procedencia y si alguien había oído hablar de una tal Eleonor, tendría que haber esperado. Me pasé 2 días en un sótano siendo apaleado por unos tipos, insistiendo en como sabía ese nombre y quien más lo sabia, me daban descansos y se me ocurrió una historia creíble que fui soltando según me lo sonsacaban, al 3º día me soltaron echándome de la venta de cocaína y una amenaza clara de que si volvían a verme, o saber de mi, desaparecería.

Me reía al regresar a casa, dolorido con el estomago lleno de golpes y la cara de heridas, pero al menos ya tenia una cosa clara, Eleonor estaba en el ajo, no se hubieran enfadado tanto si no, Adrián sufrió el mismo castigo, y eso me molestó bastante, le había usado y el pobre se llevó más de lo que merecía, pero de nuevo me pareció bien pagar ese precio, todo me valia.

Un par de semanas de baja me dejaron como nuevo, la primera de las heridas, la segundo del mono, durante un día entero no me levanté de la cama sudando y tiritando, mi madre tenia miedo a preguntar, se estaban asustando de mi forma de actuar. Al volver al trabajo Kate seguía a lo suyo, se preocupó de que Alexis no me echara, mi trabajo era un desastre. Pasó lo que me temía, un día me llevó a un cuarto apartado y se me echó encima, besándome con pasión, era la primera mujer que tocaba en varios días y me costó recomponerme.

-YO: quieta.

-KATE: pues deja de besarme.

-YO: por favor, no estoy en condiciones.

-KATE: ¿me suplicas?, eso es nuevo.

-YO: lo estoy pasando mal, y no encestó más líos.

-KATE: pues deja que te relaje – “que hábil es”, me había desabrochando el pantalón y masturbaba mi polla piel con piel, quitándome la chaqueta de donde se me cayeron unos bolígrafos, y una pluma que usaba a menudo.

-YO: puffffff para……te lo pido por favor – sonrió sin gustarme un pelo, de golpe me cogió de los huevos y los retorció.

-KATE: tú no pides nada, aquí mando yo – “mierda, he bajado la guardia, me he mostrado débil y ella lo huele”

-YO: suéltame.

-KATE: tú no das ordenes – daba pequeños tirones que no llegaban a doler, pero eran incómodos.

-YO: no voy a ser tu esclavo.

-KATE: yo lo eres, mantienes este trabajo por que YO se lo órdeno a Alexis, eres mío.

-YO: te lo agradezco pero……- apretó un testículo haciéndome retorcerme, sujetándola de los hombros.

-KATE: no quiero tus agradecimientos, quiero que seas mi putita – clavé mis ojos en sus esmeraldas, le brillaban de un color vivo.

-YO: puedes arrancarme los huevos si quieres, o echarme, no ocurrirá – me miró lasciva, noté como se preparaba para estrujar mi escroto de nuevo, fui lo rápido que pude y la di un fuerte empujón, salió disparada rebotando contra una pared de cemento a un par de metros, se sorprendió, pero luego gimió como una gata en celo.

-KATE: a ti no podré doblegarte ¿verdad? – sonreía mientras se abría la chaqueta del traje, y de un tirón se rompió la camisa mostrando sus voluptuosos senos encerrados en un corsé de cuero negro, luego se fue acercando levantándose una falda ceñida que le llegaba por las rodillas hasta mostrarme un tanga rojo, se me tiró encima de tal forma que o la cogía o se haría daño, al cogerla giró su cuerpo y quedó tumbada boca arriba en la mesa conmigo encerrado entre sus piernas.

-YO: ¿que haces?

-KATE: vas a follárme, aquí y ahora.

-YO: no pasará – traté de escaparme pero estaba aprisionado por sus piernas.

-KATE: ¡¡¡¡¡SOCORRO!!!! – me asusté de su cara, gélida, y luego se fue angustiando sin ningún motivo, “Quiere un escándalo”

-YO: para, nadie se creerá que te estoy violando…..- se dio un puñetazo ella sola, la cogí de las manos, y cualquiera que entrara solo pensaría una cosa.

-KATA: fóllame o seguiré gritando hasta que alguien venga.

-YO: pues grita tú sola, yo me voy – mi fuerza era suficiente como para levantar ambos cuerpos, ella no se soltaba, la estampé contra una pared para que el golpe me liberara, pero solo gimió de nuevo.

-KATE: oh, si……me gusta fuerte.

-YO: ¿quieres bajarte o te tengo que bajar yo?

-KATE: adelante, mientras lo haces gritaré, alguien entrará y nos verá así, ¿que pensarán? – “me tiene pillado”, un hilo de sangre le caía de los labios, que tenían una sonrisa malévola.

-YO: puedo taparte la boca.

-KATE: ummmmm me pones a 100, pero te daría igual, en cuanto me soltaras gritaría, y cuando entren diré que me has intentado violar, todos saben que hemos entrado aquí juntos, y te verán salir, hasta puedo hacer que Alexis te acuse también – “mierda”.

-YO: no voy a ser tu esclavo.

-KATE: me da igual, seré tu puta, te haré el hombre más feliz del mundo, podrás azotarme, violarme y tenerme atada días, castigarme por lo de hoy o lo que quieras, pero fóllame o empiezo a gritar de nuevo – la cogí del cuello apretando lo justo, eso lo había visto en algún sitio, torneó los ojos

-YO: eres una mala zorra, y te voy a enseñar a comportarte – estaba vendido, tendría que follármela y jugar con ella, pero, a la vez que mi polla se endurecía, mi cabeza regresaba.

-KATE: oh si……por favor, he sido muy mala, ¡pégame! – la solté un bofetón sonoro que la dejó sorprendida gratamente.

-YO: te pegaré cuando me salga de los cojones - la solté otro de revés, se relamió la sangre como una vampiresa salida.

-KATE: como gustes.

-YO: esto funciona como yo diga, o me largo y puedes hacer lo que quieras, jamas seré tuyo, ¿de acuerdo? – asintió orgullosa.

-KATE: si, seré una buena puta para ti – la besé lentamente, ella no se movía, la tuve que ordenar que me devolviera el beso, usando su lengua.

-YO: más te vale, estos juegos no me gustan, ¿por que fingirías que te he violado?

-KATE: por que así podré tenerte entre mis muslos, abriéndome el coño a tu antojo, mi señor, follándome cuando quieras, o dejándome sin sexo durante días, volviéndome loca de celos follando delante de mi o ayudarte haciendo tuya a cualquier mujer, servirte en todo y complaceré tus más oscuros deseos y perversiones – “desde luego, sabe vender”

-YO: eso me lo da cualquier zorra de mierda.

-KATE: ¿y que deseas de mi?, solo pídemelo y lo haré realidad

-YO: obediencia ciega.

-KATE: la tienes.

-YO: eso no se dice, se demuestra.

-KATE: ¿que quieres que haga?

-YO: deja a Alexis, hoy mismo, dila que te has cansado de ella, que es un mala esclava y que no merece tu tiempo.

-KATE: pero mi señor, ¿no te gustara estar con las 2?

-YO: obediencia ciega – asintió de nuevo.

-KATE: lo haré………..en cuanto salgamos de aquí – tenia la esperanza de que con aquel juego pudiera quitármela de encima, pero era demasiado lista, “no queda otra”, me convencía que era un mal necesaria, pero en el fondo deseaba tomar brutalmente a esa mujer..

-YO: bájate ….– obedeció al instante, me senté con ella de la mano –…. baila para mí – sonreía sorprendida, quizá pensaría que seria más difícil.

Comenzó a contonearse, susurrando una leve canción con un tono erótico en la voz, frotándose todo el cuerpo con las manos, la aterraje hacia mi y se frotaba contra mi cuerpo, mirándome a los ojos mientras seguía canturreando, mi polla ya estaba por reventar.

-YO: sigue bailando y desnúdate.

Se separó lentamente y con unos movimientos muy ágiles se sacó la chaqueta, y la camisa, su torso era pecado, estilizado por el corsé y con unos senos que rebosaban inquietos, se giró poniendo su culo a mi alcance abriendo la cremallera de la falda y se la bajó sin doblar las rodillas, regalando la visión de un trasero inmejorable, solo el de Alicia me pareció mejor, embutido entre sus nalgas un tanga de encaje rojo, se sentó en mi regazo para levantar las piernas y sacarse la falda del todo, se pasó unos minutos frotando su culo contra mi mientras se desabrochaba el corsé antes de quitárselo, se levantó y se bajó el tanga que se había quedado pegado en su coño debido a la humedad que sentía, estaba ruborizada y excitada, “enviada o no, le gusta”.

-KATE: ¿y ahora, mi señor? – lo decía mientras hacia girar su prenda intima con un dedo.

-YO: métete el tanga en la boca, y con ese celo de la mesa cierra esos labios de guarra que tienes, no quiero oírte gemir mientras te corres…… – abrió la boca y se metió el tanga entero, luego el celo y se puso varias tiras –…. vamos a comprobar que no se oiga, túmbate en la mesa y ábrete de piernas……. – lo hizo lentamente, provocándome, mostrándome un coño depilado y rosado, con grandes labios mayores –…..ahora tócate, mastúrbate, métete tantos dedos como puedas y haz que te corras, no te cortes en gritar, necesito saber si se te oye incluso en el más alto éxtasis.

Se frotó el clítoris con cuidado separando sus labios menores y comenzó una masturbación intrépida, rápida y profunda, se metía varios dedos dentro pero no dejaba de frotar el clítoris, me puse en pie y me metía entre sus piernas, sus ojos verdes se perdían en un placer enorme que sentía, cuando pudo me miró con lujuria, casi con soberbia, la di otro bofetón que la dejó estupefacta.

-YO: eres una puta inútil, ¡¡no sabes ni como tocarte!!.... – aquellas palabras la dejaron confusa, la 1º vez que la vi así –….. te voy a comer este coño tan feo que tienes y te voy a enseñar como se hace, si sabes, acaricia tus tetas sin parar, ¿o lo tendré que hacer yo también? – gimió de gusto, amasándoselos con los pezones totalmente duros, pellizcándolos con virulencia.

Metí mi lengua en ella saboreando su delicado coño, acariciando y chupando su clítoris, se estremecía, cuando mis dedos hurgaron en ella buscando el punto G, su espalda se retorció, a los 5 minutos se movía poseída, y una serie de espasmos terminaron en un orgasmo que hizo gotear un liquido transparente de su interior, lanzó alaridos terribles por que no me detenía y eran apenas audibles por la mordaza, no descansé hasta que el 2º orgasmo llegó y ella se derritió cayendo al suelo, mientras observaba incrédula.

-YO: quítate la mordaza y quédate donde estás, no te vistas, no hables y si entra alguien haz lo que sea para que no hable, ahora vengo – al sacarse la mordaza respiraba bocanadas enormes, con una sonrisa nueva, al regresar llevaba a Alexis arrastrada del brazo, al ver a Kate con la cara interna de sus muslos brillando, se paralizó.

-KATE: ¡¿que hace ella aquí?!, creía que……- la solté otro bofetón, pero no era para ella, si no para Alexis, que se quedó blanca al ver a su ama en esa tesitura..

-YO: díselo, ¡ahora!, o me voy.

-ALEXIS: que………que ocurre …….mi señora.

-KATE: ahora no, cuando terminemos – la cogí del cuello levantándola del suelo medio palmo para dejarla sentada en la mesa.

-YO: ahora, delante de ella, quiero ver su cara cuando se lo digas – sonrió con una cara ya más reconocible, se puso en pie y se acercó a Alexis.

-KATE: de rodillas……– Alexis cayó al suelo –…. lame mis pies, puta….. – le hizo unos zapatos de saliva –…. mírame pero no te levantes ……– lo hizo casi a punto de explotar de excitación – ……eres una esclava de mierda, y me he cansado de ti, ya no te quiero.

-ALEXIS: pero…….- le soltó una brutal patada al estomago.

-KATE: no hay peros, desde ahora dejo de ser tu ama – Alexis tirada en el suelo, doblada de dolor, la miraba echándose a llorar, sin comprender nada, pero debió de recordar mis palabras de nuestro 1ºencuentro sexual, me miró a mí, pidiendo clemencia.

-YO: a mi no me mires.

-KATE: ya está, esta no nos molestará más – me acerqué a Kate por detrás sobando su coño.

-YO: échate boca abajo sobre la mesa, y ve preparando tus 2 agujeros, voy a follarte por todos los sitios que pueda, ah, ponte la mordaza – un azote intenso en su culo la puso en movimiento, me agaché a ayudar a Alexis, la arreglé la ropa, y sequé sus lágrimas, sacándola de allí, consolándola.

-ALEXIS: ha….ha pasado…..me lo dijiste.

-YO: es cierto.

-ALEXIS: pero…… me prometiste que yo seria tu puta.

-YO: y lo serás.

-ALEXIS: ¿pero Kate…..? – advirtiendo que nadie de la oficina miraba agarré su trasero besándola con lengua, “que bien besa”.

-YO: voy a ocuparme de esa desagraciada, cuando acabe con ella no la volveremos a ver, te lo juro, ¿confías en mí? – asintió abriendo los ojos después de saborear mis labios.

-ALEXIS: pero es mi ama……o, o lo era…… es muy fuerte.

-YO: ya ha caído y aun no lo sabe, te repito, ¿confías en mí?

-ALEXIS: s…..si……si ¿…mi señor? – su mirada era la más dulce y tierna que os podáis imaginar.

-YO: no soy tu dueño, no soy como ella, yo no te cojo o te dejo como un pañuelo, llámame como quieras, pero cuidaré de ti mientras tú lo desees, seré rudo, fuerte e inflexible, pero si te comportas bien, jamás te abandonaré.

-ALEXIS: soy tuya….. – me besó sin mirar a su alrededor –….. destroza a esa zorra, te lo pido como tu fiel sierva que seré desde el día de hoy.

-YO: eso no se dice, se demuestra – “la misma frase”

-ALEXIS: ¿que quieres que haga?

-YO: echa a Kate, di que se apropiaba de las ventas de los demás usando su cuerpo, yo se lo diré a Luis por separado, para que se lo crea – un ligero gesto de duda desapareció de su cara, Kate vendía bien, pero ya no era su ama.

-ALEXIS: dalo por hecho – mi mano palpó su culo, bajo una falda de tela, notando el consolador en su ano.

-YO: sácate eso de ahí, ese culo es ahora mío, y lo quiero solo para mí – asintió ruborizada al sentir como se movía por el roce de mis manos.

Salió despedida y acalorada, al entrar en el cuarto y cerrar la puerta Kate estaba tal como le había dicho, con la mordaza, recostada sobre la mesa con el culo ofrecido, metiéndose varios dedos en coño y ano, me acerqué lentamente, cogí el celo y até sus muñecas a la espalda, su vagina emanaba fluidos cuando me saqué la polla dura y jugaba con el glande en sus labios mayores, hice fuerza y fui penetrando lentamente, sin parar ni retroceder para impulso, como estaba amordazada no se decir cuanto le dolió o gustó, pero le entró toda y la dejé dentro un minuto, sintiendo como estaba palpitando por dentro, me fijé en un tatuaje en unos de sus hombros, eran unas esposas y una fusta entrelazadas, me agarré a sus caderas y desaté a la bestia, después de semanas sin follar la iba a destrozar como hacia mucho que no hacia con una mujer, rebotaba contra su trasero deleitándome con el oleaje de su piel, vibrando y gozando entre murmullos acallados, a los 10 minutos empezó a correrse otra vez, sin parar, cada 2 o 3 minutos llegaba otra tempestad y ella gritaba ahogadamente, a la media hora reventé corriéndome dentro de ella, me arrodillé lambiendo su ano ligeramente abierto, le temblaban las piernas cuando mi tranca, dura otra vez, apuntó a su culo, costó un mundo abrírselo, su cuerpo se calentó a punto de hervir su sangre, con la piel roja y congestionada. Fue animal, como poco a poco me abría paso en su trasero, pero no pro ir con cuidado, si no pro que se la estaba metiendo a marchas forzadas, viendo aquella belleza de mujer amordazada, atada por la espalda las muñecas y su precioso culo siendo masacrado una y otra vez. Cuando su ano se relajó un poco la bestia reapareció, fueron los 40 minutos seguidos más bestias que recordaba desde que doblegué a Madamme, y al correrme una serie de orgasmos anales de Kate la hicieron levantar las piernas del suelo quedando colgada de la mesa y mi verga. Me senté en una silla sudando y viendo como Kate se deshacía como un azucarillo, al caer al suelo me miraba sobrepasada, pero aun había algo en su mirada que no me gustaba, la cogí de la cara arrancándola la mordaza, le saqué el tanga lleno de babas, y la besaba con dulzura.

-YO: es lo que querías ¿no?

-KATE: si……..- jadeaba cogiendo aires- ………. follas como un dios.

-YO: vamos a ver como la chupas….. – se giró para que la desatara –….. no, una zorra de tu nivel tiene que hacerlo de forma especial.

La cogí de un brazo para ponerla en pie, luego de la cintura a mano cambiada y de un tirón la giré en el aire, quedando con mi cabeza entre sus muslos y con mi verga endureciéndose en sus labios, la engulló entre risas, mientras yo sobria lo que salía de su interior, aguanté 20 minutos todo su peso, luego me senté en la misma posición pero apoyado por los respaldos, me la estaba chupando casi atragantándose con la única inercia de su cuello y la fuerza de mis brazos subiendo y bajándola, con las manos atadas en la espalda, no podría hacer otra cosa, se pasó otros 20 minutos jugando con su lengua y su boca, sin sus manos podría haber estado 1 hora, pero ya estaba cansado de la postura, la hice rotar y me la puse encima a horcajadas, penetrando su coño hasta el fondo, con sus senos rebotando, lamí sus pezones y usaba sus pechos como asideros para sujetarla mientras daba golpes de cadera, uno tras otro, sus gemidos se le escapaban, se mordía los labios para evitarlo, pero cuando llegaron sus orgasmos tuve que dejar sus senos para acallarla a besos, agarrando su culo y levantando su cadera para que fuera mi cintura la que entraba y salía con una velocidad enorme, incluso metiendo algún dedo en su ano, soltó un grito al correrse de nuevo y la abofeteé provocando otro orgasmo, era increíble, le salía sangre de los labios y tenia todo el lado derecho de la cara rojo, pero sus ojos brillaban de placer, me enervé sacando a la bestia, pero tenia mi jugada preparada, cogí de sus tobillos, levantándola de la silla, con ella a horcajadas seguía arrodillada en el aire por mis manos en sus pies, haciendo equilibro sobre mi pecho al no poder agarrarse, y doblando las piernas tanto que apenas podía con su peso, eso provocaba largas y profundas perpetraciones, a la décima su cuerpo se venció hacia atrás, babeaba del vendaval de sensaciones que sufría, y cayó violentamente sobre la mesa de espaldas, se tuvo que hacer daño en los brazos, pero si acaso la excitó más, me rodeó con las piernas al sentir apoyo en su espalda y hacia fuera para que siguiera, la bestia se salió del mapa como casi no recordaba, y sus orgasmos seguidos lo corroboraban, tiraba de sus pezones hasta casi arrancarlos, o la azotaba en el culo con tanta fuerza que me dolía la mano, todo aquello la hacia volverse loca y cuando no pude continuar me salí de ella, rodeando la mesa, y se la metí en la boca, follándola un minuto más, descargando en su garganta, se atragantó tosiendo y echando saliva y semen, se pasó unos minutos dejándomela bien limpia y tragando lo que la postura le permitía.

-YO: es verdad que follas bien.

-KATE: madre mía…………..que animal…….otros me han excitado con humillaciones mayores, pero nadie me ha hecho correrme así……… tantas veces.

-YO: me suele pasar – la levanté de la mesa sentándome en la silla con ella en mi regazo, con cara de no haber roto un plato, sacando pecho con las manos aun atadas a su espalda.

-KATE: ¿he sido una buena puta?

-YO: la mejor – suspiró lamentándose.

-KATE: es una pena, follas mejor de lo que me imaginaba.

-YO: ¿el qué es una pena?

-KATE: quiero que sepas que no es nada personal, ojalá pudiera cambiarlo, pero tengo que ponerme a gritar.

-YO: ¿por qué?, te he follado.

-KATE: y muuuy bien, pero es lo que necesitaba, piénsalo, estoy atada, con tu semen por todo mi cuerpo, y marcas de golpes, es inmejorable.

-YO: ¿y por que querrías joderme? – sonrió besándome con ternura.

-KATE: Eleonor te manda recuerdos – cogió aire y estuvo a punto de gritar, pero la tapé la boca.

-YO: no me jodas, ¿trabajas para ella? …– asintió con la cabeza – ….antes de que grites, ¿puedo preguntarte algo? - volvió a asentir, solté su boca.

-KATE: no puedes evitarlo.

-YO: ya supongo, ¿pero por que la ayudas?

-KATE: no la ayudo, ni la conozco, un hombre buscaba a una mujer con ciertas….aptitudes, y nos presentaron, fue unos meses antes de entrar aquí – supuse que ese hombre seria Carlos, además de confirmar que Alexis me dijo la verdad respecto a las fechas, Kate me hablló de 1 año antes de entrar a trabajar allí, para que no sospechara.

-YO: ¿y que se supone que querían que hicieras?

-KATE: debía de trabajar aquí hasta que me dieran permiso de entrarte, y eso fue hace 3 meses, tenía que lograr que te acostaras conmigo, o con Alexis, y luego montar un escándalo.

-YO: ¿y no sabes nada más?

-KATE: no, no me dijeron nada, ni pregunté, me van a pagar mucho dinero, y me he divertido – se contoneaba encima mía y me pasaba su nariz por la cara, pero estaba convencida de lo que iba a hacer.

-YO: y que vas ha hacer, ¿gritar y decir que te violado?

-KATE: no lo hagas más difícil.

-YO: ¿como podría? ………- me miraba extrañándole mucho esa conversación, yo tendría que estar de los nervios - …..¿me haces un favor antes de ponerte a chillar?

-KATE: claro, te lo has ganado…….- sonreí locuaz.

-YO: ¿me acercas esa pluma del suelo?..... – se giró buscándola, con una habilidad espectacular, estando atada por la espalda, se puso en pie, midió, y se agachó a cogerla, dio una vuelta para dármela y se volvió a sentar en mis piernas.

-KATE: ¿puedo hacerte una pregunta yo?

-YO: claro.

-KATE: estoy a punto de meterte en un lío bien gordo, y estás ahí sentado, tranquilo, no me quitas de encima, ni me desatas, o me das la ropa, no te vistes, ni sales corriendo…….. ¿y me pides una pluma?

-YO: es que es una pluma especial.

-KATE: ¿que tiene de especial?

-YO: que en realidad no es una pluma, es una grabadora, activada para más señas, desde que entramos en este cuarto – sus ojos verdes se abrieron tanto que se podían haber salido de sus cavidades.

-KATE: ¿qu….. que…..? - la activé rebobinado y puse alguna parte de aquel rato, no importaba cual – cerró los ojos.

-YO: adelante, puedes gritar si quieres…….– al abrir los ojos algo parecido al odio, y mezclado con diversión, palpitaba en ellos, pero dejé pasar más de 1 minuto, para dejarla claro que no podía abrir la boca, cada 10 segundos me miraba diciendo “ya vale, ¿no?”, pero aguardaba en silencio - ………¿o te dejo el móvil y llamamos a la policía?

-KATE: mira……yo no pretendía…….me contrataron….

-YO: no es culpa tuya, ya lo se.

-KATE: ¿entonces….?

-YO: tú sabrás, puedes salir de esta pesadilla si no aceptas el dinero y dejas el trabajo.

-KATE: perdería mucho dinero, ….y si jugamos…..- dios sabe que me encantaría jugar hasta el final de los tiempos con una mujer así, pero la corte.

-YO: no, nada de juegos, Alexis te echará en unos días, acátalo sin problemas, arréglatelas para dejar el trabajo de Eleonor, no tienes opción, si me la intentas jugar de cualquier manera esto saldrá a la luz …..- la di un toquecito con la pluma en una teta - ……. y no será una humillación de las que te gustan.

-KATE: muy pocos me la han jugado así……

-YO: acéptalo.

-KATE: está bien, ¿y si me desatas? – puso cara de niña buena, la solté.

Se vistió sin ponerse el tanga, hecho una pelota húmeda, sonreía sin parar, yo me arreglé y al salir se acercó a darme un largo beso.

-KATE: toma, esto es un regalo – metió aquella bola roja de ropa intima en mi bolsillo, acariciando mi rabo con astucia, dándome un último beso, mirándome a los ojos.

-YO: gracias, preferiría que me informaras de cualquier cosa referente a Eleonor.

-KATE: así lo haré, y si quieres, podemos quedar algún día y repetir esto, me ha gustado mucho.

-YO: ya veremos…….

Al salir de esa oficina yo iba con una gran sonrisa, otro balazo esquivado, una 2º denuncia por violación después del pariré de Jeni y el juez me condenaría sin mirarme. Con una sensación de victoria abandoné el trabajo para ir a la casa de estudiantes y pasar la tarde con Lara y sus 2 grandes amigas, disfrutando de ella cuanto quería. Pasaron un par de semanas, Kate dejó el trabajo y Alexis volvía a ser una jefa implacable, le daría un tiempo para tenerla ansiosa, recibí un mensaje de Eleonor, un tarjeta dibujada, con solo una carita sonriendo y un guiño, con el ojo color verde.

Raúl – Desde el infierno.

Seguía sin entender como, después de hacer añicos el intento de Kate, estaba en aquel parque hecho un asco, ya había asegurado que Eleonor tenía líos de coca y una de sus trampas había fallado, lo de Kate había sido muy evidente, pero lo que llegó no lo fue.

Pasaron días en los que estaba entrenando a Alexis, mi nueva esclava, aunque si soy sincero fue la primera de verdad, entre ella y Eleonor en su día, o Madamme, había un abismo de diferencia, con ella sentí como nunca el poder total sobre una persona, en todos los aspectos. De forma lenta y pausada la iba pidiendo y ordenando cosas, a todo decía que si sin rechistar, cosas como ir vestida de determinada manera, o acudir a un lugar y estar horas sin hacer nada, era un poco cabrón, lo justo de no pasarme y lo suficiente como para humillarla.

Un día estaba trabajando y me llamó Naira, muy asustada, me pidió que acudiera al piso, que Alicia estaba muy mal, y fui volando dejando una venta a la mitad y a Penélope con la palabra en la boca, al llegar Alicia estaba de los nervios, llorando y siendo consolada por Naira, apenas se la entendía.

-YO: ¡¿que ha pasado?!

-NAIRA: no lo se, he salido y al volver estaba así – me senté delante suya cogiéndola de la mano, Alicia estaba llorando a mares.

-YO: oye, hermanita, tranquila, ya estoy aquí, ¿que ha pasado? – me miró tratando de serenarse, pero no podía.

-ALICIA: yo………Lara………dios………..no se que ha pasado……sniffffff – estaba temblando, el tono de voz era como un silbido fuerte y penetrante.

-NAIRA: venga, tranquilízate, tienes que contárnoslo.

-YO: Naira, hazle una tila – fue a la cocina.

-ALICIA: ¡por favor……….ayúdala!

-YO: ¿a quien? ¿A Lara?.... – asintió –…. ¿que la ha pasado?

-ALICIA: ¡¡¡no lo se…….estabamos………..estabamos paseando…….y ……..y……Lorenzo no estaba…....y una furgoneta…….se paró, no se quienes eran………… dios………..no se donde está!!!.

-YO: Alicia, cálmate, y dime exactamente que ha pasado – un sudor frío me comenzó a caer por la nuca, aun así la cogí de la mano, se aferró tan fuerte que me hendía las uñas en la piel.

-ALICIA: íbamos ella y yo por la calle,……….y se pararon a nuestro lado…..nos asaltaron…..a mi me pegaron…. – se alzó la espesa cabellera caoba revuelta, mostrando que tenia un lado de la cara más rojo que el resto - …..y a ella se…se la llevaron.......

-YO: ¿nadie os ayudó?

-ALICIA: fue muy rápido, casi no pudimos gritar…….Lara tiene problemas……..y …..y no se si…..¡¡¡dios!!! - me abrazó desconsolada.

-YO: ¿pero habéis llamado ya a la policía?

-ALICIA: ¡¡no!! me dijeron que no llamáramos a nadie, la matarían………dijeron que solo hablara contigo , ¿por qué? ………Lara se ha vuelto a drogar……y se ha metido en algún lío….¿tú sabes algo?

-YO: no, ¿pero tan grave es?, parece estar bien.

-ALICIA: si, pero……..pero………Lorenzo le pasa mucha mierda, y ella toma, pero no puede pagarlo, ¿y si….y si tienen a Lorenzo también? ¿Y si por no pagar se los han llevado? No me contesta al móvil, ¡¿que hago?! – Naira apreció con la tila, tintineaba en sus manos, se las cogí y la obligué a dar un par de sorbos.

-YO: ¿donde vive Lorenzo?

-ALICIA: no….no lo se, el siempre viene aquí.

-NAIRA: ¿quien ha podido ser? – esa pregunta ya la tenia en la cabeza, igual que su respuesta, “Eleonor”, pero ir a por ella seria justo lo lógico, llamarla y caer en su juego, Lorenzo era mejor opción.

-YO: ¿donde suele salir?, ¿que hace?

-ALICIA: alguna vez ha hablado de un bar, cerca del Calderón, pero no se si estará allí, ¡no me coge el teléfono!

-YO: dame la dirección – Alicia me la dio, y las dejé allí, llamando a Manu, para que se quedara con ellas, Alicia estaba de los nervios pero Naira estaba demasiado tranquila, le dije a Manu que las echara un ojo, y nada de decírselo a nadie.

Me fui directo a ese bar, al entrar no le vi, era lo único que tenia, esperé en una esquina, comiéndome la cabeza, al par de horas apareció Lorenzo, colgado de su brazo tenia a una rubia de escándalo, con la que se mostraba muy cariñoso, Alicia y él salían y se acostaban, “no tiene sentido, ¿le está poniendo los cuernos?”. Lorenzo sacó un fajo de billetes enorme presumiendo de que le habían pagado por un trabajo, y lo comprendí, esperé otra hora a que saliera de allí, le seguí con cuidado, ya era oscuro, y los asalté en un callejón, la chica cayó al suelo asustada por los tacones, y estampé a Lorenzo contra un coche, le di la vuelta cogiéndole de la pechera, cuando enfocó, y me vio, se cagó encima.

-LORENZO: ¡¡¡oh mierda!!! – no era mucho más alto que él, y estaba en buena forma física, si hubiera hecho frente hubiera sido complicado doblegarlo, pero algo en mi mirada le debió de asustar hasta convertirlo en un crío acojonado.

-YO: ¡¿donde está?!

-LORENZO: oye tío, ……lo…...lo siento………- le di un puñetazo que le partí el labio.

-YO: ¡¡¿dónde!!?

-LORENZO: no……no lo se…me pagaron…….tenia que ganarme a Alicia, y….y meter en líos a Lara, de drogas…..- otro puñetazo a la boca del estomago, la chica no seria su pareja, por que en vez de acudir en su auxilio salió disparada sin mirar atrás ni avisar a nadie.

-YO: ¡¡¿por que?!!

-LORENZO: ¡no lo se!, te digo la verdad, me pasaban drogas y yo se las daba, nunca pagaba, y tiene una deuda con mala gente, me pagaron ayer y me dijeron que cortara relaciones – trató de zafarse pero no podía.

-YO: ¡¡¿quien te pasaba la droga, QUIEN?!!........- el tío se estaba meando encima, la marca húmeda se hacia grande a cada segundo en sus pantalones, cuando un latigazo en mi espalda me tiró al suelo, “¡no, otra vez!”, sentía el táser azotándome con una 2º descarga, no se ni como me levanté e intenté darme la vuelta, una 3º descarga me hizo desmayarme.

Me desperté en una habitación sucia y oscura, apenas iluminada, atado a una silla de madera vieja y que crujia, me costó un buen rato centrarme, delante de mí había un catre, y reconocí a Lara, tumbada y desnuda, atada de manos juntas y pies separados, llorando con el rímel corrido y un golpe en la mejilla, traté de moverme pero no podía.

-YO: Lara, tranquila, estoy aquí, ¿como estás?

-LARA: …….por favor…..Raúl……. sácame de aquí.

-YO: lo haré, te lo juro, ¿como estás?.

-LARA: bien……por ahora…..pero……me tienen aquí desde hace un día….me …me han dicho que debo dinero.

-YO: ya, nuestro amigo Lorenzo tiene la culpa.

-LARA: ¡pero yo no sabia nada!, el me dijo…..Raúl, dicen……..que me van a violar, que me van usar de puta hasta que pague la deuda, por favor…….¡sácame de aquí!

-YO: tranquila, eso no va a pasar….yo estoy aquí…..no dejaré que te pase nada – una pesada puerta de metal crujió, y un par de hombres ocultos tras pasamontañas entraron, detrás de ellos, Carlos apareció, y junto a él, Eleonor, la mirada que lancé fue tal que Eleonor se atragantó, quedándose agarrada al pomo de la puerta sin atreverse a entrar del todo.

-CARLOS: vaya, vaya, mira a quien tenemos aquí.

-YO: ¡que coño estáis haciendo!, esto es secuestro, como la toquéis un pelo……- me soltó un revés directo a la mandíbula, que me hizo tambalearme en la silla.

-ELEONOR: por favor, la violencia no es necesaria, le quiero entero.

-YO: ¡para esto!, Eleonor, aun estás a tiempo – se hinchó su bello pecho de aire y valor, entró cogiendo una silla para sentarse a mi lado, con elegancia y clase, levantándome la cara con los dedos en mi mentón, viendo el golpe que me había dado Carlos.

-ELEONOR: el único que lo puede parar eres tú, te lo dije, esto no me produce placer, pero serás mío.

-YO: ¡¡PUTA CHIFLADA!! – uno de los encapuchados me golpeó en el vientre.

-CARLOS: ¡¡basta!! Estás llegando muy lejos, Eleonor, no podemos seguir con esta locura.

-ELEONOR: lo haremos, aunque me arruine, aunque lo pierda todo, incluida Carolina.

-CARLOS: ellos la matarán, y a ti como se enteren……de todo – se hizo el silencio, guardé esa frase a salvo.

-YO: ¿que hago aquí?

-ELEONOR: aprender una lección, me has obligado a actuar precipitadamente al ir a por Lorenzo, tenias que llamarme, pero bastará.

-YO: de acuerdo, pero a ella dejadla en paz, soltada y dadle algo de ropa.

-ELEONOR: ella es la lección Raúl, pero puedes salvarla, ven a mi lado, para siempre, y la dejo libre, aquí y ahora – suspiraba casi llorando, mirando a Lara tan asustada que solo temblaba y gimoteaba, “se acabó, me tiene”.

-YO: está bien, tú ganas, seré tuyo……- me quemaban en los labios esas palabras - ……..pero suéltala.

-ELEONOR: ¿estás seguro?

-YO: si, lo haré, pero dejadla en paz – sonrió orgullosa, se puso en pie.

-ELEONOR: ¿ves?, no ha sido tan difícil.

-YO: desátala.

-ELEONOR: oh…..no, verás, les he prometido a estos 2 que van a abusar de ella cuanto quieran como pago por las drogas.

-YO: te he dado mi palabra, si no cumples la tuya no cumpliré la mía.

-ELEONOR: querido, no ibas a cumplirla de ninguna manera, eso lo sé, aun me destetas y buscarías la manera de jugármela, solo quiero que aprendas la lección, no tienes opción alguna, ya no…– se giró hacia Carlos - ….vámonos….. – ahora miro a los 2 encapuchados - ……chicos, disfrutad de ella, por lo que sé, le encanta el anal y sus pezones son muy delicados, que él vea todo, cuando acabéis soltados a los 2.

-YO: Eleonor……- se apoyó en la puerta al salir, y me miró - …….si haces esto se acabó, iré a por ti.

-ELEONOR: buena suerte – se fue, con Carlos detrás.

-YO: escuchadme chicos ….- al cerrarse la puerta me dirigí a los encapuchados, con el tono de voz más serio y taimado que pude -……no se quien sois, ni que pintáis en todo esto, yo pagaré su deuda, tengo algo de dinero, pero no la toquéis…… – parecían no escucharme y uno ya se estaba desabrochando el pantalón –…… ¡¡EHHHH!! – ambos se giraron – …….al que la toque, le castro – se echaron a reír.

Ignorando mi amenaza susurraron entre ellos, al parecer a alguno le daba vergüenza hacerlo delante del otro, así que se lo jugaron a suertes, el que ganó se bajó los pantalones, una buena herramienta de unos 18 cm ya dura, pero me fijé en el tono de piel, morena, sudamericano, árabe quizá.

Lara se retraía alejándose lo que podía, y el otro hombre salió del cuarto, yo no paraba de moverme, quería insultar pero no serviría de nada, el tío se echó sobre Lara, ella pedía clemencia, pero no había nada que hacer, maniatada y abierta de piernas, “como la puse yo la 1º vez con Ana”, el tipo buscaba su cara para besarla, ella le huía, le soltó un bofetón que la dejó tranquila, ella negociaba, decía que si se la chupaba y punto, pero el tío fue acariciando su cuerpo, ella se resistía pero cuando le agarró las tetas y acarició sus pezones se mordió el labio, “no puede evitarlo”, bien lo sabia yo, se sonrojaba cerrando los ojos, no quería gozar pero lo estaba haciendo, el tipo metió una mano en su coño y sonrió sonoramente al sacar los dedos mojados, se arrodilló entre sus piernas y de una fuerte estocada la penetró, él gritó de placer, ella de vergüenza, y yo de rabia, seguía moviéndome sobre la silla, no estaba anclada al suelo, pero yo estaba bien atado al respaldo, a los asideros y a las patas de la silla, hacia fuerza, la silla crujía, pero no cedía.

Entre gritos de humillación y suplica, aquel tipo ya se follaba a Lara delante mía, ella aguantaba la respiración pero el tío no soltaba sus pezones, se le escapaban ligeros gemidos de placer entre los de lastima, incluso me parecía que se estaba abriendo de piernas para facilitar todo, pero no podía verlo, no podía actuar, no podía hacer nada, Me asusté cuando el tipo sacó un cuchillo, pero solo cortó las cuerdas de los pies, y la dio la vuelta, la obligó a ponerse a 4 patas, ella pataleaba hasta que el cuchillo se acercó a uno se sus ojos, admitió la derrota, y el tipo se la metió por el ano, al rato dejó de amenazarla por que ella, queriendo o no, rebotaba disfrutando de aquel placer que yo le había enseñado, entre gimoteos susurraba que la follara más fuerte, y que tenia una polla pequeña, no se si para excitarlo o para enfadarlo, sin duda su rabo era menor al mío, pero nada desagradable en longitud y grosor. El tipo no duró ni 10 minutos y se corrió en su culo, exhalando aire se le escapó alguna palabra latina de sexo, pero sin quitarse el pasamontañas era difícil saberlo, la decía que tenia un culo genial y unas tetas preciosas, se puso en pie y me miraba, reía al ver mi rostro enfurecido, con Lara llorando desconsolada por la violación, o por haberla disfrutado.

-ENCAPUCHADO1: ¿te gustó? – apenas se le entendía.

-YO: ……….- susurraba.

-ENCAPUCHADO1: ¿que has dicho? – se acercaba.

-YO: ………

-ENCAPUCHADO1: te estoy hablando – se agachó a mi altura.

Eché la cabeza hacia atrás orgulloso, él se reía, no entendió que era para coger impulso, lancé mi cabeza contra su cara, golpeé en su nariz, crujió, cayó hacia atrás tropezando, desorientado, me volví una bestia, no se de donde hice tanta fuerza, me sentía estallar, las rodillas me chirriaron y se me cortaba la circulación de los brazos por la tensión, las venas del cuello me palpitaban y un grito atronador creció del fondo de mi alma vomitándolo con tal fuerza que me pitaban los oídos……………. la silla cedió, una de las patas que me tenia atado se astilló, dejando la pierna parcialmente libre, el tipo se sujetaba la nariz y se quería poner en pie con los pantalones bajados, me balanceé lo justo como para que cuando se puso en pie hice palanca con la pierna libre y me estrellé contra él, los 2 caímos al suelo, la silla volvió a ceder, caí encima de él de espaldas, y mi otra pierna quedó libre, me puse en pie pero el respaldo medio desmenuzado seguía reteniendo mis brazos, el ruido hizo entrar al 2º tipo de fuera, al ver la escena desde la entrada se sorprendió, me lancé al bulto contra la puerta, que se cerró de golpe sobre su pecho, aplastándole contra el marco, donde se golpeó en la cabeza, de espaldas dejé que el rebote abriera la puerta y empujé de nuevo, lo hice un par de veces hasta que hombre al otro lado del metal dejó de quejarse por cada golpe. El 1º tipo se puso en pie quitándose la prenda de la cara, no le reconocí, tenia la nariz rota y sangrando sin parar, trató de caminar pero los pantalones se lo impedían, como una bola de demolición caí sobre él con todo mi peso, del golpe contra la pared soltó el cuchillo que aun tenia en la mano, solté rodillazos y patadas sin parar, aguantando su cuerpo aplastado contra la pared con el pecho, no sabia ni donde daba ni si tenia que parar, estaba cegado de rabia, el tipo se mantenía en pie, y hasta que no le hice caer no paré, vi el cuchillo en el suelo, me tumbé de espaldas hasta agarrarlo con una mano y poder desatarme los brazos, lo 1º fue coger las cuerdas y atar a los 2 tíos con nudos marineros de un campamento de verano que hice. Lara aun lloraba, la calmé, al tocarla me huía, pero teníamos que darnos prisa, miré con cuidado por la puerta, era un pasillo largo, vacío, con unas escaleras al fondo que subían a la calle, había una mesa con mis cosas y las de Lara, no habían tocado ni cogido nada, ni los móviles ni las carteras, desaté a Lara, vistiéndola con cuidado, se puso en pie apoyada en la pared, mirando con odio a aquellos tipos, el que la había violado estaba volviendo en si, me puse de cuclillas a su lado.

-YO: ¿te gusta? – mostraba su cuchillo en mi mano.

-ENCAPUCHADO1: oye….tío…….. lo siento…son cosas de este mundo……..por favor………….no………me pagaron.

-YO: todo el mundo me dice lo mismo, “me pagaron”, pero que yo sepa os lo advertí – el tío se cerró de piernas, recordando mi amenaza de golpe.

-ENCAPUCHADO1: vamos brother, no me haga eso….tenga compasión……somos hombres…….- una mancha de orina crecía en el suelo a su alrededor, me veía llorando de rabia jugando con el cuchillo en mis dedos, la imagen debía de ser aterradora.

-YO: yo soy un hombre, tú eres escoria – temblaba y miró a Lara.

-ENCAPUCHADO1: mira niña, te………. te pido disculpas…… por favor…….tengo familia.

-YO: ¿tienes hijos?

-ENCAPUCHADO1: ¡si, tengo 2! – albergó una esperanza de que eso me calmaría.

-YO: mejor……….. por que ya no podrás tener más – le abrí de piernas y clavé con fuerza el cuchillo en su bolsa escrortal.

No me creo que Zeus no tuviera nada que ver con aquello, fue brutal, asqueroso, inhumano, pero lo estaba haciendo, sus gritos llenaron la sala, despertaron al otro tipo, que de frente lo vio, suplicaba, y la mancha de orina se volvió roja, Lara sonrió, y yo les susurré algo al oído cuando dejaron de gritar. La cogí en brazos y la saqué de allí.

Ella estaba avergonzada, asustada y mil cosas más, no podía caminar, al llegar a la calle estabamos en el barrio latino de Madrid, llamé a la policía, acudieron varios efectivos y una ambulancia, estuve tentado de callarme sobre los 2 tipos a mi espalda, dejar que se pudrieran, pero estaba harto de luchar solo, era hora de involucrar a la policía, atendieron a Lara y sacaron pruebas de todo, incluso para el ADN, Alicia y Naira aparecieron, junto a Manu y Teo, mi familia llegó después, nos pasamos la noche en el hospital, la policía me tomó declaración y debido a mis antecedentes su tono se volvió brusco, Lara me exculpó de todo, y advertida por mi, nos callamos sobre Eleonor dando una versión creíble y consensuada de todo, incluso de cómo ese cuchillo terminó clavado en los testículos de aquel hombre. Lara me preguntó por que guardar silencio, “esa zorra es mía” la dije.

Me hicieron identificar a los agresores, Lara no podría hasta varias semanas después, cuando el nuevo castrati me miró asentí con la cabeza, él hizo lo mismo como su compañero, aquello era un mensaje, para todo aquel que se aliara con Eleonor, y él se ocuparía de divulgarlo, “te corto los huevos pero te dejo vivo, dile a todos que se alejen de mi y de mi gente, o no seré tan bueno con ellos.” Fue lo que les susurré.

Lo sé, estáis alucinando, con un “venga ya” en la cabeza, pensando que desvarío y que estas cosas no pasan, no soy un super agente ni nada parecido, solo era un tío muy cabreado, y que había visto muchas películas. Estando aun en el hospital recibí la llamada de Eleonor.

-ELEONOR: lo has empeorado todo.

-YO: tú empezaste.

-ELEONOR: me has comprometido, esos hombres podrían identificarme.

-YO: ojalá lo hagan – “mentira, te quiero para mi”, pero con su poder y apenas un par de testigos asustados, seria como empotrarse contra un muro de mármol

-ELEONOR: no lo harán, y si se atreven no llegaran al juicio, no sabes donde te estás metiendo.

-YO: me has metido tú, te has vuelto loca………se acabó todo……¿querías guerra?, pues aquí la tienes, no comencé esto……. pero lo terminaré – colgué bruscamente.

Fue unas horas más tarde cuando el corazón dejó de latirme a toda prisa, y pude pararme a pensar, de todo lo ocurrido lo primero nítido que me llegó a la cabeza, “¿como sabían que fui a por Lorenzo?, esperaba que la llamara, eso era lo lógico, hasta ella me lo dijo, nadie sabia que iba a por Lorenzo………¿nadie?”, cogí a Manu, Naira y Alicia y los arrastré hasta las escaleras de emergencia.

-ALICIA: ¿que haces?

-YO: ¡quien fue!

-NAIRA: ¿de que hablas?

-YO: ¡¿quien les avisó?!

-MANU: tío, tranquilizante – di un puñetazo a la pared entre ellos y un extintor cercano se tambaleó.

-YO: ¡sabían que iba a por Lorenzo, ¿como? Solo lo sabíais vosotros 3!

-ALICIA: quizá le siguieran.

-YO: no tendría sentido, ya le habían dicho que se apartara.

-NAIRA: o quizá te siguieran a ti – eso tenia sentido, pero llevaba meses sin reconocer a nadie.

-YO: no, llevan meses sin seguirme……..- me dolía la cabeza, estaba furioso -……..los móviles……. sacarlos.

-MANU: mira tío, esto es una locura, estás alucinando, descansemos y mañana…….- otro puñetazo a la pared.

-YO: ¿para que podáis borrar los mensajes o las llamadas?, los movibles fuera, ¡AHORA! - el de Manu estaba limpio, al ver el de Alicia casi me muero, 10 llamadas a la misma hora al numero de Lorenzo.

ALICIA: ¡claro que le llamé, estuve llamando desde que se llevaron a Lara, pero no me cogía el teléfono! mira, todas son de 0:00 segundos, no me contestó – lloraba, estaba tan ofuscado que no me di cuenta.

-YO: vale, Naira tu móvil…….- se apartó.

-NAIRA: yo…….es que está sin batería y……- “no puede ser”, no me lo creía.

-YO: no…no, no, no……..dame el puto móvil – se lo arranqué de la mano, y al ver los mensajes enviados lo vi, el mismo numero que me dio Eleonor en su tarjeta, mensajes y llamadas desde hacia 7 meses, incluyendo un aviso minutos después de que saliera de su casa, “va a por Lorenzo”.

-NAIRA: por favor…....puedo explicarlo………yo…..- la cogí de cuello, casi se lo parto, la empujé contra la pared y al levanté medio palmo del suelo, Manu quería detenerme pero no podía, solo Alicia al interponerse evitó que hiciera una locura.

-YO: ¡¡¡¡¿has visto lo que has hecho?!!!! - me puse a darle puñetazos a la pared de granito hasta que me sangraron los nudillos.

-NAIRA: ¡¡¡y tú!! …..– logró toser - …..te pasas el día entrando y saliendo de mi casa, follándote a Lara delante mía, delante de todas, te pasas un día cuidándome y luego desapareces, ¡¡me dijiste que lo intentaremos y me dejaste de lado!! – “esa es Eleonor”, le había comido la cabeza como a Liz.

-ALICIA: ¡¡pero no te das cuenta de que está loca!!!

-NAIRA: ¡ahora si! - lloraba -……pero empezó antes, ella me dijo que podría estar contigo, que me enseñaría, pero que tenia que ayudarla.

-MANU: ¡dios, ¿que la has dicho?!

-NAIRA: todo……- tono fuerte- ……..todo - tono leve.

-YO: felicidades Naira, has logrado que violen a Lara, nos has engañado a todos – sentí la tensión de los músculos de mi mano al soltarla el cuello del todo.

Me fui de allí, no soportaba más, quería evadirme, pensé en drogarme otra vez, al menos así los problemas se evadían, y hasta en el suicidio, así Eleonor dejaría a todos en paz, y así pasaron varias semanas en que no hice movimiento alguno, era un zombi, de casa al trabajo y viceversa, Alexis lo interpretó como un juego, le gustaba que la ignorara, mi familia nunca me había visto así, pero lo peor estaba por llegar.

A la 3º semana de aquel incidente, y cerca de mi cumpleaños sin darme cuenta, regresaba a casa por el camino de siempre, que pasaba por la calle del piso de estudiantes, vi sirenas, no me gustó, aparqué y me fui andando, un cordón policial cortaba la calle, y un foco apuntaba al 4º piso, al ático, a una de las terrazas donde estaba Alicia, ¡por fuera de la barandilla!, no pudieron pararme, entré en el edificio al galope, al llegar al 3º piso estaban Naira y Mara, abrazadas, llorando.

-YO: ¡¿que ha pasado?! – Mara me abrazó rompiendo a llorar.

-MARA: Lara………….Lara……..se……se ha cortado las venas, estaba en la bañera, Alicia ha entrado, ¡dios!…….los médicos están con ella, pero Alicia…….ha salido al balcón, no sabemos que hacer.

-YO: ¡¡¡sacarla de ahí!!!

-NAIRA: no dejan, dice que si alguien se acerca, saltará – la miré con odio, era la 1º vez que habla con ella desde el hospital, pero se transformó en lastima, los ojos de Naira eran tan tristes que no haca falta cargarla con más peso.

-YO: tienen que dejarme hablar con ella – un policía me escuchaba.

-POLICIA1: no pueden pasar, es una situación delicada.

-YO: yo puedo convencerla.

-POLICIA1: ¿eres su novio?

-YO: no……...si………..da igual, déjeme entrar – me debió de ver convencido, habló por la radio.

-POLICIA1: aquí 2-15, ¿como va ahí arriba?

-VOZRADIO: aquí 16, no hay avances, la chica no deja acercarse a nadie, y los bomberos aun tardarán 10 minutos en poner el inflable – el policía me miró.

-POLICIA1: os mando a un chico, quizá gane tiempo, corto – me cogió del hombro y me hizo pasar, Mara me volvió a abrazar.

-MARA: por favor, sácala de ahí…….te lo ruego como hermana…….por favor, ¡no dejes que caiga!

Subí como el rayo, me cachearon y se me acercó una especie de negociador, me dijo varias cosas que ni recuerdo, creo que eran consejos, y me fui acercando despacio al balcón, las luces y los sonidos eran atronadores, al asomarme la vi aferrada de espaldas al balcón, con un destello del foco de abajo deslumbrándola.

-YO: hola hermanita - se giró y se sorprendió al verme, tenía la cara demacrada y llena de lágrimas, vestida con un camisón largo gris.

-ALICIA: ¡¿que haces aquí?!

-YO: suelo pasarme, ¿que haces tú ahí?

-ALICIA: voy a saltar.

-YO: una lastima…..que desperdicio.

-ALICIA: ¡¡¡¡¡no hagas broma de esto Raúl!!!……- suspiro desesperada- …¿Qué………..que sabes de Lara?

-YO: los médicos están con ella, no se más, estoy aquí por ti.

-ALICIA: sabes…..iba a disculparme con ella….cuando he entrado en el baño.

-YO: si, ¿por qué?

-ALICIA: seguro que se siente muy mal, pobrecilla…..yo…solo quería disculparme…por todo….es culpa mía.

-YO: no es culpa tuya, nada de lo que pasó es culpa tuya.

-ALICIA: Lara está viendo a una psiquiatra, le dice que tiene que ser fuerte y no sentirse una víctima, ¿pero como voy a poder sobrellevarlo yo?, fui tan tonta de pensar que un chico como Lorenzo se interesaba por mi………..no vi como jugaba con nosotras, es culpa mía, yo le metí en nuestras vidas………. al ver la sangre lo he comprendido, es un camino fácil, sencillo, un instante y se acabó.

-YO: no digas tonterías, eso es de cobardes, y tú no lo eres.

-ALICIA: pues soy una cobarde.

-YO: no lo eres, solo estás confundida, entra y lo hablamos – di un paso hacia ella.

-ALICIA: no, ¿por que debería?, nadie me quiere, me usan, soy una estúpida.

-YO: claro que te quieren, yo estoy aquí, a tu lado, te hermana esta ahí fuera muerta de miedo, preocupada por ti, tu familia, la mía, nuestros amigos, ¡no nos hagas esto!

-ALICIA: somos personas, y tenemos sentimientos – “no me escucha, me oye pero no me escucha”

-YO: si te sientes mal, te pido disculpas, fui yo, todo esto es por mí, cúlpame, ódiame, pero no lo hagas, yo traté de alejarla, pero…….pero no pude, por favor hermanita, dame la mano y entra aquí – otro corto paso, “uno más y es mía”.

-ALICIA: no es culpa tuya, es mía, “tendencia a idealizar a los hombres de su vida”, lo decía el informe……- me miró con la más absoluta desesperanza –…… adiós.

Cogió impulso, reaccioné como un rayo y de una zancada salté sobre ella cuando empezaba a caer, la cogí de un brazo y un alboroto general sonó por la calle, ella colgaba del 4º piso solo sujetada por mis manos en su muñeca izquierda, tuve que soltar una para agarrarme a la barandilla y no vencerme con ella, Alicia no hacia fuerza ninguna, no podía sujetarla, serian unos 65 kilos a pulso con un solo brazo, se me resbalaba con una mano solo, y ella no hacia nada por sujetarse a mi.

-YO: ¡¡¡ALICIA, POR DIOS, SUJÉTATE!!!

Tuve que soltarme para agarrarla con dos manos o caería, sabia que mi cuerpo se vencería pero no la soltaría, me vencí como un péndulo, alguien me cogió de las piernas evitando que cayéramos usando mi cuerpo como polea, tenia medio cuerpo fuera con la cintura haciendo equilibrio sobre la barandilla, y soportando todo su peso en vilo, no se cuanto pasó, unos segundos o 4 horas, me dolía el hombro del tirón inicial y del peso, “no la voy a soltar”.

-ALICIA: ¡SUÉLTAME, O CAEREMOS LOS 2!

-YO: ¡PUES CAEREMOS, NO VOY A ASOLTARTE! – cada palabra iba acompañada de soplidos de esfuerzo, sentía la sangre en mi cabeza y un hormigueo en los brazos, pero antes los perdería que dejarla caer.

Alguien apareció en el balcón del 3º piso, un bombero, y la cogió de la cintura, balanceamos a la vez y a la 4º vi como entraban por la terraza, entre 3 policías que me sujetaban lograron volver a meterme en el balcón, con sonidos de aplausos y gritos de animo, pero yo lloraba, no sabría decir por que, lloraba, allí tirado, con los 3 policías retomando el aliento en el suelo conmigo, gente felicitándome, “¿por qué? ¿por qué me felicitan? esto es culpa mía, todo es culpa mía”. Naira entró y se me echó encima, llorando junto a mi, la abracé pese a odiarla.

-NAIRA: la has salvado, lo hemos visto, esta en shock, Mara está con ella, pero está bien, ¡la has salvado!.

-YO: ¿y Lara? - se echó a llorar de nuevo.

-NAIRA: Lara ha perdido mucha sangre……- me abrazó desconsolada- …….…ha muerto.

No recuerdo un cumpleaños más triste, y eso que los he tenido jodidos, no hubo fiesta, ni tarta, ni regalos, ni felicitaciones, nada, solo un funeral en Granada al que no pude asistir, no podría mirar a su familia a la cara, Ana estaría allí, todo el mundo me acusaba con la mirada, o eso creía. Pedí la baja y no salí de mi cuarto en 2 semanas, en el agujero más oscuro que os podáis imaginar, mi madre me iba contando cosas, Alicia estaba en un centro psiquiátrico recuperándose, Mara insistía en verme para darme las gracias, pero no la dejaba, Naira se mudó y no volvimos a verla. Sumido en todo aquello alguien me llamó, me dijo que tenía que hablar conmigo, que ya era hora, que quedábamos en un parque cercano a una hora determinada.

Y aquí estoy, esperando, dolorido, magullado, con el hombro casi dislocado o eso creo pro que me negué a que un medico me viera, y con aspecto de vagabundo, allí a lo lejos veo una figura, me resulta familiar, es alta, y camina hacia mi, se sienta a mi lado, y miro tratando de adivinar quien es, le reconozco, pero me cuesta.

-DESCONOCIDO1: ¿que?, ¿un mal día?

-YO: un mal año…….

-DESCONOCIDO1: siento todo lo ocurrido, no he podido recibir tus mensajes antes.

-YO: ya, supongo que estás muy ocupado.

-DESCONOCO1: mi trabajo es así, pero ahora puedo ayudarte.

-YO: te necesito.

-DESCONOCIDO1: no fue buena idea hablar con Felipe, has podido poner en peligro todo, pero aquí podemos hablar.

-YO: no se a quien recurrir, tú eres mi única esperanza de acabar con esto.

-DESCONOCIDO1: tú mensaje era muy detallado, pero es una locura, abandona.

-YO: no se como, y aunque lo supiera, no quiero, ya no.

-DESCONOCIDO1: mi gente y yo tenemos algo en mente, la información es cierta, pero no será rápido ni fácil.

-YO: lo que sea.

-DESCONOCIDO1: no puedo pedirte que hagas esto, no estás preparado, pero no tendremos una oportunidad así en 10 años.

-YO: una suerte que no me lo hayas pedido, y sea yo el que se ofreció.

-DESCONOCIDO1: es peligroso y necesitas dinero, mientras no tengamos algo sólido que dar a mi jefes no moverán un solo dedo.

-YO: estoy listo.

-DESCONOCIDO1: más te vale, por que va a ser muy duro, si todo va bien no nos veremos hasta que esto acabe, y cuando me veas sabrás que estará todo preparado, pero antes de eso…………. estás solo, o lo parecerá, cuidaré de ti como pueda, pero nunca en acciones directas.

-YO: me las apañaré – se puso en pie.

-DESCONOCIDO1: pues buena suerte – se alejó caminando, yo estaba hecho polvo y era por mi culpa, pero no me compadecería ni un minuto más.

Si creía que hasta ahora lo estaba pasando mal, se cernían nubes aun más oscuras, Raúl ya no daba de si, estaba físicamente hecho un desastre, y mentalmente era aun peor, no comía, no hablaba y casi no dormía, trataba de recordar cada instante al lado de Lara, la última vez que fue mía, la última vez que la besé, las últimas palabras que me dirigió o la última vez que la vi, estaba atormentado y desecho. Si tenia que hacerlo, Raúl ya no era suficiente, tendría que ir con todo, y eso solo significaba una cosa, cogí mi móvil, y marqué un número al que nunca quise volver a llamar, al 3º tono se descolgó.

-YO: hola……- suspiré profundamente y me cambió la mirada -…………soy Zeus.

Lorenzo – La mejor defensa.

Lara no era mi mujer, ni mi prometida, no era mi novia, y si mi apuráis ni siquiera me parecía una mujer digna de mi amor, era una amiga a la que me follaba y disfrutaba de sus enormes y bien puestas tetas, puede sonar frío, cruel y desalmado, pero era la verdad, no sentía demasiado aprecio por ella, no era una persona importante en mi vida, y si se iba lejos tendría a 30 como ella, incluso si hubiera muerto de cualquier otra manera no lloraría, todo esto es cierto aunque me cueste decirlo, todo el pesar y el dolor que sufría no era por haberla perdido, si no por que fue a consecuencia de mis actos, buenos o malos, interesados o fortuitos, Lara estaba muerta y yo tenia la culpa en mayor o menor parte.

Me sentía muy culpable, pero tenía claro que no era el mayor responsable, ni tampoco el único, y les iba a hacer pagar por todo, por la violación y la muerte de Lara, por Alicia que se recuperaba de su intento de suicidio, por Mara, su hermana que lo vio en directo, por haber vuelto a Naira en mi contra, por atacar a mis amigos y a mi familia, yo podría soportarlo todo, cualquier ataque a mi persona, estaba preparado, aceptaría ese juego, pero no a ellos, no volviera a cometer el mismo error, no pondría en peligro a nadie más salvo a mi mismo, tenia que acabar con todo, y si era peleando y muriendo, lo haría, terminaría de la forma que fuera, pero terminaría. Esa era mi determinación, claro está, eso solo seria si llegaba el caso, tenia planes para zanjarlo todo sin llegar a esos extremos.

Regresaba a mi casa desde el parque, donde había tenido una reunión que llegó demasiado tarde, con un desconocido para vosotros, y casi para mi, llevaba 10 años sin ver a esa persona y estaba muy cambiada, él me ayudaría, pero solo al final, cuando llegara el momento, hasta entonces estaba solo, o quizá no, había llamado a Madamme, necesitaba ayuda y discreción, nadie mejor que ella, quizá podría habérmelas apañado sin ella, pero Raúl estaba sobrepasado, con toda su fortaleza mental, ya no podía aguantar más, y le necesitaba a él.

Al llegar a casa busqué una mochila, una que llevaba casi 4 años sin ver, una mochila que en su día use para “asaltar y violar” a una modelo, fue el ultimo trabajo de Zeus, mi alter ego en la prostitución de lujo, un tipo peligroso, tenia mi astucia, mi cuerpo, mi intuición, pero carecía de bondad, de clemencia y de dudas, era una apisonadora que aplastaba todo a su paso, y era justo lo que necesitaba. Zeus estaba dentro de mi, durante todo ese tiempo había sentido que, de vez en cuando, hacia algo impropio de mi, lo achacaba a alguna parte oscura de mi carácter, de esa parte de la que no hablas a tus amigos y familia, pero aquella mochila era una representación del lugar donde le había enterrado hacia tanto tiempo, al abrirla salió algo de polvo, y allí estaban, la cinta americana, cuerdas, esposas, pasamontañas……todo el kit que usé en su última aparición.

-ZEUS: “te lo advertí, dije que me necesitarías”

-YO: “nunca negué tu regreso, pero cuando esto acabe, volverás a este agujero” – estaba hablando conmigo mismo y me parecía normal.

Me senté en el mismo escritorio en el que me había sentado esas 2 semanas desde la muerte de Lara, ¿o quizá fueron 3?, en ese escritorio en el que no había sacado nada en claro, cogí papel y lápiz sin darme cuenta, y comencé a escribir, una lista, siempre funciono igual, necesito objetivos, si no, me pierdo, necesito saber a por quien voy, y en que orden.

1º Lorenzo

2º Carlos

3º Eleonor

Una lista corta, si, pero ya era algo, ya sabia a por quien ir, como y cuando era un misterio, pero lo primero era alejarme de todo, y de todos, me tendieran vigilado o no, sospechaba que no les merecía la pena seguirme con tanto espía a mi alrededor. Por el bien de los que eran leales y por alejarme de los que no lo eran tenia que irme, hice las maletas y me despedí de mi familia, quisieron convencerme pero ya no era Raúl, no del todo, los besé con cariño y me despedí, acudí a Alexis, mi jefa, o ex jefa ya que me despidieron sin remedio por mi situación, al verme en su portal con las maletas me abrazó entusiasmada.

-ALEXIS: ¿mi amo se muda conmigo?

-YO: así es, y no se lo digas a nadie, si lo haces me voy, ahora coge mis cosas y súbelas – sabia donde vivía, un 3º sin ascensor, Alexis no pasaría de los 60 kilos y subió 3 maletas y una mochila como pudo, vestida de oficina y con tacones.

Al entrar en su casa esperaba una especie de sala roja, con cadenas, fustas, látigos y trajes de cuero, pero me encontré un piso normal, de 1 habitación, acomodado debido a su éxito en ventas, con amplio salón, acogedor y femenino, inspeccioné cada rincón de la casa con ella detrás de mi, como un perro sigue a su amo, obligándola a que me enseñara el piso, al llegar a su dormitorio abrí una armario y encontré lo que temía, consoladores, esposas, cadenas, látigos, fustas, pinzas y un traje negro de cuero de cuerpo entero.

-ALEXIS: son mis cosas…..tus cosas ahora, para castigarme y humillarme, como más te guste.

-ZEUS: eso tendrás que ganártelo, no pienso tocarte, me das asco, cuando sepa que eres una puta de verdad puede que me lo piense – no hacia falta que me mirara para saber que estaba excitada, aquella rudeza la encendía como nunca entendí, pero Zeus si.

-ALEXIS: por supuesto, se hará lo que tú digas.

-ZEUS: bien, por que como me desobedezcas una sola vez, me engañes, o simplemente omitas cualquier información, no te abandonare, no, estaré contigo hasta el día de tu muerte, te tendré de sirvienta y jamás volverás a follar ni a poder tocarte, no te pegaré ni te humillaré, te trataré con respeto y con dulzura, no serás de nadie más, ¿te gustaría eso?

-ALEXIS: no, no lo soportaría, seré buena esclava ….- se arrodilló –…. lo juró, y te demostraré que soy merecedora de tus castigos y humillaciones.

-ZEUS: bien, empieza ahora, vete a comprarme un móvil de tarjeta, y de paso compra una cama de perro - se puso en pie y se fue, volvió a la hora con el móvil y la cama de perro, no más grande que un flotador.

-ALEXIS: ¿algo más?

-ZEUS: voy a vivir aquí, tú eres mi perra, esta casa es mía y todo lo que hay en ella, solo tengo una cama y es donde dormiré yo, tú dormirás desnuda en esa cama de perro, en el suelo del dormitorio, por si decido hacerte mía, pero eso te lo tendrás que ganar también, me harás la comida y me darás de comer, si yo no te lo mando no comerás ni beberás, vendré con mujeres a las que me follaré, las servirás a ellas como a mi, no comprarás nada ni harás nada sin mi permiso, si cumples tendrás un lugar en mi cama, te usaré tanto y tantas veces como me de la gana, follarás con extrañas y extraños, serás la puta de quien yo te diga, si eres muy buena puede que te deje dormir conmigo, pero si no te follaré y volverás a tu cama en el suelo, de ahora en adelante no existe la palabra “no” …..– no sabia que más decir, ella estaba de pie, con la cabeza gacha, ruborizada y frotando sus muslos bajo la falda del traje, podía oler la humedad de su entrepierna –….. ahora desnúdate, en esta casa jamás irás vestida, solo tacones altos de aguja, dolorosos, y si no tienes compra tantos como para no repetir pareja en un mes, vas a pagarme todo lo que quiera, tengo pensado tener mi propio dinero pronto, pero no te compraré nada, tú pagarás todo.

Asintió desnudándose como si yo no estuviera allí, dejando su fino cuerpo y su piel blanca a mi merced, era espectacular, con el traje era una pin up de escándalo, sin la ropa sus curvas resaltaban, una cintura diminuta, con unos senos y caderas proporcionados, pezones grandes y rosados, sin bello en su monte de venus, al verla así tuve una erección incontrolada, me desnudé delante de ella, al ver mi polla soltó una sonrisa leve, la agarré por el cuello poniéndola de puntillas.

-ZEUS: no te rías perra, te la voy a meter por el culo tantas veces que vas a suplicar que pare, pero no lo haré, seguiré, durante horas ….– sus ojos se tornearon de placer, se derretía entre mis dedos solo de imaginárselo –…. pero eso ya llegará, ahora estoy hecho una mierda, báñame, aféitame y cuando termines mastúrbame hasta dejarme vacío, varias veces, no te cortes, pero solo usa las manos.

Me cogió de la mano y me llevó al baño, llenó la bañera y echó sales, me tumbé en ella y ella cogió de mi neceser la cuchilla de afeitar, por razones que no vienen al caso usaba una navaja de barbero, se metió en la bañera conmigo sentándose sobre mis piernas, y frotó con una esponja todo mi cuerpo, el agua se puso sucia, no se ni cuanto llevaría sin bañarme bien, fue muy concienzuda con mi cabello descuidado, me dejó limpio frotándome entre las piernas y mi polla dura fue trabajada con delicadeza, luego cogió la espuma y me la extendió por la barba casi de 2 meses, la cuchilla afilada fue pasando por mi garganta con cuidado, luego mis mejillas y más tarde la barbilla y el bigote, yo la miraba anonadado, ella estaba sonriendo, disfrutando de ser una criada, tenia la piel de un tono parecido al talco, con unos ojos negros bañados en avellana, un pelo largo y ondulado, morena con reflejos caoba, casi rojo, su bello rostro era rígido en las facciones de la mandíbula debido a su delgadez, no comprendía como esa mujer estaba allí siendo humillada y no ganando millones en una revista. Apuró el afeitado bastante pero no hizo ni una sola herida, echó el after save y me escoció un poco, pidió disculpas dándome un agradable beso en la mejilla, ya había terminado la higiene, sin preguntar bajó sus manos a mi miembro tieso entre sus piernas, y masturbó como si fuera una holandesa haciendo mantequilla, sus delicadas manos no cerraban del todo el contorno de mi verga y cuando ponía las dos juntas desde la base aun sobraba para otra mano de las suyas. Nno hablamos ni dijimos nada, solo el ruido del agua, se pasó media hora con gestos de cansancio claros, pero sin parar, hasta que la falta de sexo me hizo explotar, una risa de alivió cruzó su mirada, pero no dejó de mover las manos sacando otra erección, y casi llegando a la extenuación, una 2º corrida, solo entonces la aparté, me salí del agua y ella me secó cada centímetro de piel, con cuidado en las zonas amoratadas o dañadas que aun tenia, pasó la navaja por mi espalda y piernas, me había descuidado tanto que me empezaba a crecer pelo por todos los lugares de mi cuerpo, al intentar afeitarme la pelvis la imagen de mi hurgando en los huevos de aquel violador con el cuchillo me tensó, le quité la navaja y lo hice yo mismo, se quedó de pie goteando a mi lado, sabia que si la secaba yo me la follaría y eso aun estaba lejos de mi cabeza, la ordené que se secara y recordara mis normas.

Al salir me puse un pantalón solamente, ella salió limpia sin maquillaje y solo con unos tacones altos, y el pelo húmedo pegado al cuerpo, una obra de arte del renacimiento, la belleza más pura siendo humillada. Hizo una cena ligera, la senté en mi regazo y me dio de comer, cuando yo terminé, le dejé las sobras y comía sin manos bajo la orden de Zeus, cuando terminó limpió todo, y la hice andar a 4 patas hasta su cama en el suelo, se acurrucó sin ninguna muestra de pudor, y yo me acosté en la cama, estaba muy cansado y tenia que aclarar mis ideas. Por la mañana mismo ritual, me bañó masturbándome, luego ella se vistió delante de mí, y se fue a trabajar, a ser la cruel jefa sin alma que todos conocían.

Yo me vestí y acudí a los juzgados, iba a por mi 1º víctima, Lorenzo, no sabia absolutamente nada de él y Alicia no estaba disponible para sacarla información, el móvil que dio a Alicia estaba apagado desde aquel día y algo me decía que no volvería a ese bar donde a la salida le asalté, le puse una denuncia, solo tenia alguna foto y su nombre, me sorprendí cuando una semana después la llevaron a tramite, le habían encontrado, resultaba que Lorenzo fue tan estúpido de dar su verdadero nombre y no había tantos tan guapos como él, le denuncié por trafico de drogas, las que le había estado dando a Lara, no tenia nada más en su contra, legalmente al menos, engañar a Alicia no era un delito pero era por lo que le iba a castigar. De nuevo un abogado muy bien trajeado le libró de todo, no me extrañaba, de hecho contaba con ello, y al salir del juicio nos cruzamos.

-ZEUS: hola Lorenzo – al verme retrocedió escondiéndose detrás de un guardia jurado.

-LORENZO: tío….déjame………..no me pegues……..no lo sabia…..solo me pagaron…..

-ZEUS: tranquilo, como te voy a pegar aquí delante de todos, Lorenzo xxxxxx xxxxxxxxx, que vive en la calle xxxxx numero x, estos juicios eran inútiles, ya lo sabia, pero la acusación tiene derecho a la información del acusado……- me acerqué un poco para susurrarle -……. ahora se donde vives – sus ojos verdes y preciosos se abrieron de par en par, el abogado empezó a berrear sobre amenazas pero Lorenzo se fue tan asustado como debería de estarlo.

Me fui a su casa sin dar tiempo a nada, esperando fuera con el coche, Lorenzo llegó unas horas más tarde, entró y a la hora salió con 2 maletas, sin duda mi presencia en el juicio le había asustado y usaría el dinero de Eleonor para huir de mi, pobre, si yo hubiera esperado a vengarme un par de días le hubiera perdido, me bajé siguiéndole a cierta distancia, llegó a su coche en una zona apartada y cuando metió las maletas le di un golpe en la nuca que lo dejó KO, le metí en mi coche y llamé a Madamme.

-ZEUS: hola, soy yo.

-MADAMME: ¿que necesitas?

-ZEUS: tengo un joven muy atractivo, ¿lo tienes preparado?

-MADAMME: te llamo en una hora y te digo donde llevarlo - así lo hizo, al llegar sus 2 moles rusas de guardaespaldas le bajaron del coche, aun estaba KO.

-ZEUS: ¿que te parece?

-MADAMME: es guapo, y rubio, sin duda ganaremos dinero con él.

-ZEUS: no creo que colabore, así que atarlo bien… – Madamme sonrió, cuanto echaba de menos a aquella mujer, una casi cincuentona con un cuerpo voluptuoso y con tantas curvas como un puerto de montaña, me parecía que había cogido algún kilo de más desde la última vez, pero eso solo la mejoraba la figura, la besé con fuerza, y sus labios ansiosos me devolvieron el beso – ….quiero verlo.

Me llevó a una nave apartada y solitaria, detrás de Lorenzo y sus secuaces, nos separamos y me metió con ella en una habitación apartada, me presentó a varios hombres a los que saludé educadamente, y por una pantalla vi como desnudaban a Lorenzo y le ponían en un potro con el culo ofrecido, atado de pies y manos. Madamme hizo un subasta, al verlo tan guapo pujaron como locos, al que ganó casi se le salía la polla del pantalón de imaginárselo, otra caballero muy desalentado por no poder ganar me habló, le dije que si no le importaba ir después del ganador, él también podría jugar………….si pagaba, aceptó encantado.

Lorenzo volvió en si, gritando, tiritando de miedo, al verse atado y desnudo, pasados unos minutos la puerta se abrió, Lorenzo quería girarse a ver quien era pero no podía ver, el ganador de la puja era un hombre grande y gordo, se acercó en silencio por detrás y acarició el cuerpo de aquel joven con mimo, Lorenzo lloraba impotente, el hombre se puso a besarle la espalda y metió sus manos entre sus piernas, Lorenzo se removía pero estaba muy bien sujeto, el señor le agarró la polla y le masturbó, a la vez se sacó un verga de buen tamaño, unos 20 centímetros, tiesa y apuntando a su ano, donde llevó sus dedos, le acarició hasta que se lo abrió, y sin hacer caso de las suplicas y lamentos del joven empezó a meterle su verga por el culo, el hombre jadeaba y bramaba como una cabra en celo, haciendo fuerza en aquel agujero cerrado, Lorenzo gimoteaba como un bebé, pero cuando se la metió entera cayó en un estado de nervios en que se puso a rezar, el hombre ya se lo follaba cuando se le acabaron las plegarias, y a los 10 minutos se corrió dentro de su culo, con Lorenzo babeando sin poder emitir sonidos, al sacársela un hilo de semen y sangre brotaba del culo de Lorenzo, el hombre se vistió, y regresó a la sala, felicitándonos, “siempre es un placer estrenar un ano virgen”, y se fue pagando lo que debía, el 2º hombre entró detrás y no perdió el tiempo, del espectáculo tenia ya la tranca dura, inferior en tamaño y grosor a la de su predecesor, se echó encima de Lorenzo que empezó a llorar de nuevo, por que se le subió encima y le follaba como un chihuahua a un rotbailler, Lorenzo era más corpulento y el 2º caballero se movía cual conejo, a los 5 minutos le llenó de semen, pagó su parte y se fue tan feliz como el anterior.

-MADAMME: ¿te agrada?

-ZEUS: es lo que se merece.

-MADAMME: si quieres podemos acabar ya.

-ZEUS: ¿hay algo más?

-MADAMME: tenemos algo especial, tengo a unos hombres que pagarán mucho por esta cinta…. – me señaló un portátil grabándolo todo – …..pero si le metemos un giro a la trama – chasqueó los dedos y una de las moles salió de la habitación.

La mole entró en el cuarto donde Lorenzo permanecía inquieto, tiró de una palanca y el potro donde estaba apoyado cayó medio metro, dejando a Lorenzo a 4 patas, salió por otra puerta y regresó como un pastor alemán enorme, el olor a sexo de la habitación le tenia olfateando con curiosidad.

-MADAMME: tú decides.

-ZEUS: eres una buena devota de tu dios…… – la metí mano besando para casi partirla la espalda – …..adelante.

Sonrió al alejarse y golpeó una pared, de inmediato la mole acercó al perro a Lorenzo, este recelaba de miedo, el muy estúpido creía que le iba a atacar, cuando el perro metió su lengua en el culo casi me caigo al suelo de risa por el chillido que soltó, el perro se pasó 10 minutos lamiendo y con una polla rosada sobresaliendo entre sus patas, la mole le azuzó y el perro de un salto se montó encima de Lorenzo, a la 4º embestida acertó con el agujero, y se lo estuvo follando salvajemente un buen rato, Lorenzo era un mar de lagrimas y desesperación, hasta que el perro se corrió en su interior y se le hinchó la famosa bola, entonces Lorenzo entró en shock, y se desmayó, el perro desmontó quedando enganchados unos minutos, lamiéndose entre los cuartos traseros, feliz.

-MADAMME: magnifico, con lo ganado y lo que pueda sacar por la cinta tendrás mucho dinero para empezar.

-ZEUS: no soy ambicioso, dale el dinero a quien debas, a mi solamente un porcentaje justo.

-MADAMME: hecho………… debo decirte que tu regreso a levantado mucho revuelo……tu fugaz aparición hace 3 años fue muy sonada, y que desaparecieras así ha generado mucha expectación, tengo algunos trabajos que podrían serte muy lucrativos, si lo deseas.

-ZEUS: ve avisándome, a este numero, es nuevo – se lo di.

-MADAMME: está bien……..¿y que hacemos con…….tu amigo?.

-ZEUS: es tuyo, se iba de viaje, durante unas semanas nadie preguntara por él, saca todo el dinero que puedas, que no disfrute nunca, nada de mujeres, y cuando acabes suéltalo, asegúrate de que no sabe nada antes de hacerlo.

-MADAMME: por un chico tan guapo, muchos clientes varones pagaran por él…….- se me acercó insinuándose – …….¿y si celebramos el reencuentro?, no sabes cuanto deseo que mi dios me parta el culo.

-ZEUS: si sigues así no me va a quedar más remedio, pero por ahora no, tengo cosas que hacer.

En realidad no tenia nada que hacer, y follar con Madamme era una brutalidad que atraía, pero tenia que salir de allí, cuando me alejé lo suficiente me puse a vomitar, aquello había sido, de lejos, lo más asqueroso y sórdido que había visto en mi vida, Zeus sonreía, pero a Raúl se le revolvieron las tripas, me recompuse convenciéndome a mi mismo que aquello se lo tenia merecido, y me fui a mi casa, la de Alexis.

Al entrar estaba desnuda sentada en el suelo de la entrada, al verme gateó hasta mi feliz, la acaricie como si fuera un perro, y me siguió hasta el bañó, me di una ducha y me enjuagué la boca, el ritual de esos días se repitió, hizo la cena, me dio de comer y luego saboreó las sobras sin las manos, tendría hambre, no le había dado permiso para comer desde que la dejé irse a trabajar, pero no dijo nada, había pasado casi un mes viviendo juntos y estaba exageradamente delgada, se le notaban las cotillas y perdió la belleza natural.

-ZEUS: estás siendo una buena esclava, ¿tienes hambre?

-ALEXIS: mucha, mi señor.

-ZEUS: te has ganado tu 1º privilegio, no me gusta que estés tan delgada, a partir de ahora podrás comer cuanto quieras, pero no te pases, no quiero a un saco de huesos pero tampoco una vaca burra – asintió con ilusión en los ojos, no se si era por que tenia hambre o por que se había ganado un premio.

-ALEXIS: me alegro de complacerte.

-ZEUS: seguiremos igual, solo que cuando termines de darme de comer podrás cenar tú – la cogí de la barbilla y la besé, era delicioso, lo hacia muy a menudo, creo que era la mujer que mejor me había besado hasta ese momento, no se si era por la situación o por cualquier otro motivo, pero sus besos eran sinceros, pasionales, entregados al 100%.

Nos acostamos, yo en la cama y ella en el suelo, hecha una bola en aquel diminuto colchón de perro, era pequeño, sucio e incomodo pero al tumbarse en él se mecía como en una nube de algodón. Fue un completo acierto ir a vivir con ella, nadie me buscaría allí, ella se ocupaba de todo para que no me faltara nada y no mostrarme mucho en público, y la clase de……..devoción que me mostraba era inquebrantable, ni todo el oro del mundo ni las mentiras de Eleonor harían que ea mujer perdiera a su amo.

A la mañana siguiente mi cuenta del banco creció de casi 0 a 15:000€ gracias a Madamme, “si eso es un % justo ¿cuanto habrá ganado en total?”. Me sentía con el valor suficiente como para afrontar mi vida, y sin pensar llamé antes de ir, y me aceptaron con gusto, al llegar al piso de estudiantes Mara me abrió la puerta y se echó a mis brazos, era la 1º vez que me veía desde……..desde aquel día, una lluvia de besos y abrazos en alguien muy poco dado a darlos era extraño, pero reconfortante, Mara había estado intentando contactar conmigo desde que casi caigo por la ventana junto a su hermana, pero no la había dejado, sentía que no me merecía su agradecimiento.

-MARA: muchas gracias, no sabes cuanto te debo.

-YO: fue mi culpa, no hubiera pasado nada si….- me besó en la cara de nuevo.

-MARA: no digas estupideces – me hizo pasar, la casa parecía igual pero el ambiente era distinto.

-YO: ¿que tal os va todo?

-MARA: estamos algo ahogadas por el alquiler, ahora estamos Alicia y yo solas y ella aun se esta recuperando, aunque ya tengo estudiantes haciendo cola por las habitaciones, pero no quiero meter mucha prisa…….ya sabes…por Alicia –me daba miedo…….no, miedo no………pánico preguntar.

-YO: ¿Como…..? - me cogió de la mano secándose una lagrima creciente.

-MARA: bien……bien…los médicos dicen que fue un shock momentáneo, la ver a Lara en la bañera, la han hecho pruebas y parece recuperada, de hecho mañana o pasado la traen a casa.

-YO: eso es bueno, ¿no?

-MARA: si, la hemos estado visitando cuando podíamos, poco, pero parecía mucho más entera que al principio.

-YO: me alegro mucho por ella.

-MARA: ¿por que no vienes cuando venga y así la ves? – la cara que puse debió de ser un poema.

-YO: no…….no creo que sea buena idea…..¿y si…la recuerdo……algo?

-MARA: es parte de su tratamiento, enfrentarse a situaciones de estrés y superarlas, ¡¡ven, por favor!! – su mano acarició mi mejilla, el contacto humano me recordó mejores días, aquellos que quería alejar pero que anhelaba.

-YO: si es por ella, vendré, pero pregúntala 1º, no quiero asustarla.

-MARA: de hecho fue ella quien me dijo que quería hablar contigo, pero no te localizaba.

-YO: ¿que….que quiere de mí? – me temía lo peor, podía soportarlo todo, incluso que no quisiera volver a verme por que me culpara, yo mismo me sentía así, y si con no volver a verla, o hablar con ella, la ayudaría a poder llevar una vida normal, lo pagaría con gusto, pero lo que no podría soportar era que me odiara por haber evitado su suicidio.

-MARA: no lo sé, pero quiere verte – me temblaban las manos, y me las cogió besándolas con sus carnosos labios, y una sonrisa que derretiría los polos.

-YO: ¿y si me odia por que no la dejé…….? – Mara se acercó a mí rodeándome con sus brazos.

-MARA: eso es absurdo, te quiere con locura, siempre has sido bueno y fiel con ella, la salvaste la vida, te está agradecida, como yo – un ligero beso, más lento y suave que los anteriores rozó mi cara, y se quedó a escasos centímetros de mis labios, puso morritos al ver como unas lagrimas caían por mi rostro.

-YO: estoy hecho polvo……..no se que hacer….- era cierto, Raúl estaba molido, era Zeus quien llevaba las riendas.

-MARA: ¿que sabes de………lo tuyo?

-YO: tengo algo en marcha, pero va para largo, por ahora quiero alejarme de todo, para que no os hagan daño – no me había dado cuenta pero tenia a Mara casi encima.

-MARA: es una estupidez, si te alejas, ¿como vas a protegernos?

-YO: no os puedo proteger, ya lo has visto.

-MARA: le arrancaste los huevos al tipo que violó a Lara y te lanzaste por una ventana por Alicia, eso es protegernos, se que estás frustrado, yo también lo estaba, pero se pasa, solo tienes que lograr encontrar un punto de paz.

-YO: pues no se como…..- me besó en los labios, de forma tan lenta y pausada que podría haberla esquivado, pero no quise.

-MARA: ¿y si te ayudo?

-YO: no…….no quiero hacerte daño.

-MARA: no lo harás, solo quiero agradecerte lo que hiciste.

-YO: ya lo has hecho, esto no es necesario – volvió a besarme, esta vez fue más largo.

-MARA: le salvaste la vida a mi hermana, todo lo que haga no es suficiente – mi cabeza se nubló con el 3º beso, al sentir su lengua jugando con la mía casi rompo el pantalón, Alexis y Madamme me tenían encendido pero no follaba con ninguna.

-YO: todas con las que me acuesto terminan mal, no puedo dejar que te pase eso, soy veneno – se me montó encima acariciando mi pecho.

-MARA: suerte que sea una víbora – su besos cayeron y mis manos fueron a su prieto y bien formado trasero, embutido en unos leggins grises.

Me sujetaba la cara con fuerza mientras me besaba con furia, sus manos en mis pectorales no paraban quietas y las mías en su culo menos, era duro y firme, se sacó un suéter blanco que llevaba, mostrándome sus tetas, sin sujetador, no lo necesitaba, las tenia pequeñas y muy bien puestas, sus pezones oscuros y diminutos estaban duros, y los lamí con gusto, dando pequeños pellizcos con los dientes, sonreía al verme tan lujurioso en sus senos, siendo sin duda la peor parte de ella. Al alzar la mirada sus grandes ojos oscuros brillaban de pasión, su corto cabello peinado hacia un lado de su cabeza la hacia preciosa, giraba su cadera frotando mi polla a punto de reventar, gateó sobre mi pasando al sofá, con su culo ceñido bien marcado bajo la prenda elástica, lo sobé con calma, había soñado muchas veces con meter mano a aquel trasero siempre resaltando con faldas ajustadas o pantalones apretados, no era como el de Alicia pero es que aquel era insuperable, en cambio el de Mara era compacto y redondeado, fui tirando de los leggins hasta sacárselos, ni siquiera un tanga minúsculo, ya estaba completamente desnuda ante mi.

-YO: ¿y tu ropa interior?

-MARA: me la quité al saber que venias.

-YO: ¿por que me haces esto?

-MARA: por que quiero que vuelvas a ser tú, por que necesitas olvidar a Lara, entender que no fue tu culpa, y sobretodo, por que deseo que me folles como lo hacías con ella…. – se giró sobre si misma abriéndose de piernas, un coño delgado y estilizado por una línea de bello en forma de flecha apareció –…. tenias razón, te vi, varias veces, montándola como a una yegua, y llevo deseando que me hagas el amor desde entonces.

Metí mi cara en aquel coño prieto, cerró los muslos sobre mi cabeza y me agarró del cabello, al sentir mi lengua y mis labios repasando cada rincón de su interior se retorció sobre si misma, gimiendo de gusto, un dedo tras otro la fue abriendo, encontré su clítoris inflado y lo lamía mientas hurgaba en su punto G, Mara se movía inquieta y tras unos ligeros espasmos se le cortó la respiración y baño mis dedos con sus fluidos, casi poseída se puso en pie y me arrancó la ropa, al ver mi polla casi le da algo, la cogió con ambas manos masturbando incrédula, mientras yo la acariciaba por mil sitios, besándonos con descaro, no le daba asco probar su propio interior de mis labios. Fue haciendo un camino de besos desde mi boca hasta mi vientre, pasando sus dedos entre las hendiduras de mis músculos, menos marcados de lo que solían estar, se arrodilló ante mi verga, insultantemente grande, y la besó con tanta delicadeza como a un niño, aparte de los ojos saltones tenia la boca más grande que había visto en una mujer hermosa, y le bastó un par de intentos para meterse media en la garganta, luego retrocedía sacándosela como al chupar un helado, y al retirase daba una ligero lametón, lo hizo tantas veces que las babas colgaban de mi verga y su barbilla, casi no masturbaba pero sus labios hacían maravillas y cuando se cansaba repasaba todo el tronco de mi rabo con la lengua.

-MARA: ¿es verdad que tienes la vasectomía hecha?

-YO: si.

-MARA: mejor, quiero que te corras dentro de mí.

De un empujón me sentó en el sofá, y luego cayó de rodillas a horcajadas sobre mi, nos besamos fugazmente, elevó su cadera y apuntó mi miembro a su cueva, al sentir el glande abriéndose paso cerró los ojos mordiéndose el labio obscenamente, dio un pequeño respingo y continuó bajando, a ¾ de paró por que le llegó un orgasmo animal que la hizo gritar de forma aguda, sentía una presión enorme en el rabo, sus paredes vaginales iban cediendo mientras palpitaban, y cuando se repuso siguió bajando hasta tenerla totalmente empalada, fue una sensación gloriosa, arqueó la espalda mostrando unos pezones durísimos y más salidos que antes, los lamí y casi se vuelve a correr, con mis manos en su trasero bien agarradas.

-MARA: ¡dios santo!…………noto como me abre………es....enorme……..¡dios!.

-YO: si te hago daño dímelo – me soltó un bofetón.

-MARA: no soy ninguna pánfila, fóllame como lo harías con ella, destrózame y hazme gritar.

.ZEUS: como gustes.

Elevé su cadera con las manos y mi cintura soltó a la bestia, al 1º minuto se volvió a correr, puso la misma cara y la posición de las manos que cuando le tiraba agua desde la piscina, la tuve que sujetar más fuerte para que no se levantara demasiado y así hacer chocar mis huevos en su culo, a los 5 minutos estaba roja y sulfurando pero aguantaba, e incluso notaba como movía las caderas a mi son, a los 10 minutos era ella quien llevaba el ritmo, ¡y que ritmo!, sin duda follaba de cine, se convirtió en una pelea de gallos en la que yo subía la apuesta y ella la igualaba con el tiempo, los orgasmos eran tiempos muertos y a los 35 minutos exploté una cantidad de semen descomunal que tenia acumulada, cada latigazo en su húmedo agujero fue más placentero que el anterior y cuando terminé se venció sobre mi pecho llena de sudor y pacer.

-YO: ¿estás bien? – me besó con rostro hilarante

-MARA: como en mi vida……..dios……..esto si es follar…..- me volvió a besar con lengua – …….vamos a mi cama.

Me puse en pie con ella aun montada, se reía mientras hurgaba en su coño con una mano por detrás de su trasero, al llegar a su cama la recosté con cuidado cayendo sobre ella, mi polla ya estaba dura dentro de su cuerpo, me rodeó con las piernas y comenzó un vaivén legendario, usaba el agarre de su pies en mis riñones como apoyo para elevar la cintura y girarla a una gran velocidad, era la 1º vez que lo veía, la seguía el ritmo profundizando largamente, lamiendo su torso y aquel par de tetas de niña de 15 años, pero follaba como una experta, solo gente como Madamme, Eli, Geisha, Eleonor o Ana se movían igual o mejor, presentando batalla a la bestia, pero ellas eran más mayores y expertas, o las había estado follando durante meses, o eran putas de alto nivel, o todo a la vez.

Mara estaba pasando sus manos por mi pecho, gimiendo de placer y mordiendo las sabanas con cada orgasmo que le llegaba recorriendo su espina dorsal, la bestia apareció de nuevo queriendo rendir a aquella amazona haciendo flexiones, dejó de moverse por la intensidad de la fricción y terminó abriéndose de piernas y saliendo de mi en un orgasmo brutal que la hacia salir un chorro de su coño sin parar mientras se frotaba, sin darla descanso volví a follarla salvajemente desde atrás en forma de cuchara hasta derramarme por 2º vez en un frenesí final en que se le pusieron los ojos en blanco, caí sobre ella besándola en el cuello, bañados en sudor y sexo.

-YO: no lo haces nada mal.

-MARA: y aun no has probado mi culito, dicen que es demencial – sentía sus uñas clavadas en mi muslo donde se había agarrado.

-YO: te puedo hacer daño.

-MARA: esa es la idea……………… ábremelo como se lo hiciste a ella……….. madre mia, es normal que Lara estuviera loca por ti.

Nos puse en pie y la estampé de cara a la pared, usé los jugos de su coño para mojar su ano pero no era virgen ni mucho menos por allí, entraron 2 dedos con facilidad y al final 4, cuando la empalé con mi rabo le entró casi entero del tirón, soltó un lamento real que se apagó en un gemido de sexo, me apoyé en la pared y la bestia se ocupó de darla por el culo tan fuerte que su cuerpo rebotaba contra el tabique, gemía de placer y se abría las nalgas con las manos, no era el mejor culo que había tenido, pero se movía al compás de mis embestidas, cuando llegó su 1º orgasmo anal saltó contra la pared dando golpes, seguía percutiendo mientras la oía pedirme que no parara, bajé mis manos entre sus piernas y con fuerza se las abrí como a una gimnasta, casi 180º mientras seguía metiéndosela entera colgada del aire, el 2º orgasmo anal la debilitó tanto que se dobló de piernas y la tumbé en la cama estirada, sin dejar de follarla por detrás, tenia que corregir la postura constantemente para seguir su cuerpo, que se arrastraba como un gusano por las sabanas, y al llenarla el culo de mi leche caliente un 3º orgasmo anal la hizo tiritar, caí rendido a la cama, “¡que mujer!”, Mara follaba como una gata salvaje, incluso allí tumbaba levantaba el culo para que percutiera más dentro de su ser, mucho mejor de lo que esperaba o hubiera soñado, pero allí estaba, temblando a mi lado, brillando de la transpiración y jadeando casi ausente, como todas.

-YO: gracias.

-MARA: a ti…………por todo…….cuando quieras seré tuya.

-YO: no se si Alicia lo soportará.

-MARA: no tiene por que enterase - se arrastró hasta mi pecho, besándome con su lengua, cortando sus palabras para poder coger aire.

-YO: no voy a mentirla, ella se merece mucho más – soltó un bufido de desesperación.

-MARA: te agradezco todo lo que has hecho, pero…..¿por que ella?

-YO: ¿por que ella……. que?

-MARA: no seas tonto………..se os ve a la legua, estás enamorado de Alicia – la miré confuso.

-YO: no estoy enamorado de ella, es mi hermanita.

-MARA: engáñate a ti mismo, pero cuando estáis juntos se nota, tenéis química, conectáis, se que la quieres.

-YO: no la quiero……bueno, si……pero no de esa forma, si quisiera podría habérmela tirado ya……..

-MARA: ya…aquel cumpleaños con Ana, ya me lo contó, que casualidad que te tires a Lara, y a Ana, “el amor de tu vida”, sin importarte nada, pero con Alicia te entren remordimientos……

-YO: precisamente, eso demuestra que no la quiero.

-MARA: precisamente, eso demuestra que la quieres, desde siempre…….y ella a ti……

-YO: no me ama, no digas bobadas, estaba con Teo.

-MARA: con el que cortó por tu culpa, Teo no es tonto y vio lo mismo que todos.

-YO: pero si luego se lío con Lorenzo….

-MARA: por que tú estabas muy ocupado jugando a ser un don juan y no la prestaste atención – me dio con los nudillos en la frente.

-YO: no lo sabia……no……...quizá sean imaginaciones vuestras….- me soltó un bofetón ligero.

-MARA: ¿es que te lo tengo que deletrear?, soy su hermana ¿te crees que no me dice estas cosas?, ¡¡¡te quiere pedazo de idiota!!! – me quedé sin palabras, tardé un rato en reunir unas cuantas.

-YO: pero………es Alicia, yo no la veo así……- otro bufido largo mientras se incorporaba de la cama, le costó trabajo pero parecía que el esfuerzo lo hacia en encontrar las palabras adecuadas.

-MARA: me contaron lo que pasó en aquel balcón, te soltaste de la barandilla antes que dejarla caer, muchos dicen falsamente que se jugarían su vida por una persona, pensando que hay posibilidades de salir vivo, pero tú no te jugaste la vida Raúl, no podías ganar, habías perdido, caíais y estabas dispuesto a caer con ella, sabias que ibas a morir, pero no soltaste su mano……

-YO: todo pasó muy deprisa, yo……..- me puso uno de sus delicados dedos en los labios.

-MARA: ahora piensa esto, ¿por cuantas personas que no sean de tu familia estarías dispuesto a morir?.... – se puso en pie y se fue al baño trastabillada y aturdida, mi silencio fue como una respuesta para ella – ….. solo quería saber que tiene ella de especial, puedes tener a la mujer que quieras, ¿por que ella? - se metió en el baño.

“¿Será verdad?”, aquello podía ser de todo, un juego de Mara al lograr lo que quería, o quería confundirme para que me fijara en ella y no en su hermana, o hasta podía ser Eleonor con otro de sus macabros intentos de volverme loco, pero lo que más me aterraba, era que fuera cierto.

Alicia – Karma.

Un par de días después Mara me llamó, habían montado un pequeña fiesta para recibir a Alicia, regresaba del psiquiátrico, no pude decidir por mi mismo acudir o no, lancé una moneda al aire, cara era ir a la fiesta y cruz no ir, al lanzarla salió cruz, metí la moneda en mi bolsillo y me vestí para acudir a la fiesta.

Se oía cierto bullicio, y al subir había bastante gente, todos sonriendo y bebiendo, pero con una tensión en el ambiente muy clara, que al llegar aumentó, si yo me creía culpable muchos de los presentes opinaban igual. Mara me recibió con los brazos abiertos, preciosa y bien arreglada con un vestido ceñido de flores, al ver a Alicia de pie, charlando tan alegre con una amiga suya, con una falda interminable y una camiseta de manga larga blanca, me sentí aliviado, sonreía tan feliz como si aquello no hubiera pasado, no se que esperaba ver, ¿una mujer demacrada con camisón blanco largo y la piel pálida con ojeras?, quizá, pero no, allí estaba Alicia, tan normal. Ni me acerqué a ella, me senté en una esquina y me dediqué a mirar a todos, casi como castigo, obligándome a ser juzgado por todas aquellas personas. Pasadas 2 horas fue la propia Alicia la que se me acercó, de refilón la veía aunque fingía no hacerlo, mis manos temblaban de pavor, ella se paró a unos metros y cogió aire.

-ALICIA: bueno, ¿que pasa, no me vas a saludar? – se abrió de brazos ante mi, me puse en pie a punto de echar a llorar.

-YO: hola hermanita – al sentir su cuerpo perdí 1 tonelada de peso.

-ALICIA: venga, charlemos un rato – se sentó a mi lado, y un ligero murmullo se escuchó de fondo, estaba tan nervioso que solo se me ocurrió hacer el payaso.

-YO: habrán cerrado los balcones, ¿no? – soltó una carcajada tan grande que me alivió el alma, allí estaba ella, con su risa real, con arrugas en las mejillas.

-ALICIA: ¡eres tonto!, solo a ti se te ocurre……- se secó las lágrimas para no mancharse de rímel - ………por favor, júrame que nunca cambiarás.

-YO: te juro que nunca maduraré, eso te lo garantizo.

-ALICIA: eso espero, eres la persona más increíble que he conocido nunca, y no quiero que esto cambie nada.

-YO: ¿como ha sido todo con los loqueros? – sonrió de forma tan agradable que me dejó de temblar el cuerpo.

-ALICIA: menos mal, alguien pregunta, aquí todos hacen como que no ocurrió, parecen palabras tabú……….bien, estoy………bien, supongo, ¿y tú?

-YO: tengo mucho miedo a………a cualquier cosa, se que te hice daño y no quiero que vuelva a pasar.

-ALICIA: tú no tuviste la culpa.

-YO: tú no la tuviste – la cogí de la mano, reuniendo todo mi valor.

-ALICIA: ya lo sé………ahora lo sé…….me han estado ayudando mucho…..ahora lo veo todo con claridad, se quienes son los culpables, y no están en esta casa – sus palabras hicieron que mis ojos dejaran de amagar lagrimas.

-YO: ¿que coño se te pasó por la cabeza?

-ALICIA: no lo sé, estaba bien, entré al baño……..- cogió aire - ……y la vi allí, a Lara, su cara, la sangre……..mientras llamaba a la ambulancia pensaba en lo desesperada que estaría, y que en parte era mi culpa, ahora se que no, pero entonces lo pensaba…..miré al balcón, y lo vi fácil, sencillo, seria saltar y dejar todo atrás.

-YO: fuiste una cobarde – se me escapó de rabia al recordarlo.

-ALICIA: lo fui……pero gracias a dios estuviste allí – se acariciaba la muñeca a la que me aferré dispuesto a todo.

-YO: la próxima vez, cuando estés así, me llamas, sea la hora que sea, el día que sea.

-ALICIA: gracias, se que cuidaras de mi, aunque me duela – se remangó la camiseta y me mostró su muñeca, con la marca de mi mano donde la agarré todo el tiempo, con un morado que ya se desvanecía, le acaricié con los dedos.

-YO: lo siento.

-ALICIA: no lo hagas, es un recordatorio, quiero tatuarme una mano en esa zona para saber siempre que la mire lo estúpida que fui, te agradezco que te ofrezcas por si me vuelve a pasar, pero no habrá próxima vez, te lo prometo.

-YO: más te vale, como me vuelvas a hacer esto yo mismo te tiro por la ventana – fue uno de esos momentos en que de golpe, el puto universo se vuelve en tu contra, la música se paró y todo el mundo se calló escuchando mis palabras, el silencio fue largo, brutal y tenso, Alicia me miró sonrojada, y yo no pude más que echarme a reír, nos dimos un abrazo en el que si fuera un vídeo juego seria vida extra para ambos, al separarnos la di un solo beso en la mejilla.

-ALICIA: ¿como va tu cruzada?

-YO: prefiero no decir nada.

-ALICIA: ya se que denunciaste a Lorenzo, ese cabrón se libró, y por lo que sé, se ha esfumado, agradezco que lo intentaras, pero me jode mucho que saliera indemne de todo esto.

-YO: el Karma dice que recibirá su castigo.

-ALICIA: me gustaría tenerlo delante, ya sabes, no se que le haría, quizá una locura, siento que me va a pesar el corazón el resto de mi vida, y eso me enfurece – sus ojos vidriosos regresaron, la besé en la frente y me acerqué a su oído.

-YO: suelta ese peso………ya le he castigado – al alejarme me miró entre el asombro y el orgullo.

-ALICIA: ¿que le has hecho?

-YO: no quieres saberlo, es demasiado……- me cogió de la cara, su rostro era ira concentrada.

-ALICIA: necesito saberlo, necesito entender por qué, necesito comprender, y sobretodo necesito saber que fue castigado, el psicólogo dice que me olvide, que lo supere, pero no puedo.

-YO: tienes mi palabra.

-ALICIA: lo siento……se que tu palabra va a misa, pero necesito verlo – su cara era de autentica urgencia.

-YO: no es agradable.

-ALICIA: eso espero…. – su tono era firme y seco – ….espero que ese cerdo arda en el infierno toda la eternidad con una estaca candente metida por el culo – eso me sacó una sonrisa leve, sopesé ideas.

-YO: si es lo que quieres, puedo lograr ponerlo delante de ti – me miró como si Papa Noel hubiera entrado por la chimenea.

-ALICIA: por favor, lo necesito – suspiré profundamente, “no puedo negarla nada”.

-YO: dame un par de días, te llamaré cuando lo tenga listo, pero prométeme una cosa, que lo que veas o escuches no cambiará tu opinión de mi.

-ALICIA: no podría.

-YO: escúchame, tengo un lado oscuro en mi vida, y para ganar esta guerra tengo que recurrir a esa parte, no es algo que quiera que veas.

-ALICIA: todos tenemos un lado oscuro, no te preocupes, si estás a mi lado no temeré nada, confío en ti – eso me recordó otra cosa.

-YO: no deberías, soy un cáncer……..me………me acosté con tu hermana el otro día – sulfuró con los labios.

-ALICIA: joder, ¿es que no puedes parar?

-YO: estaba sensible, perdido y necesitaba afecto, creo que ella lo sabía.

-ALICIA: claro que lo sabia, lleva mucho tiempo detrás de ti…………en fin, no puedo culparte, si te encuentras así es por mi culpa.

-YO: si estoy así es por tomar malas decisiones, una tras otra, afectando a la vida de los demás, y eso se acabó.

-ALICIA: pero no cambies, me lo has prometido – sonrío al pasar su mano por mi cara.

-YO: no se si cuando esto acabe podré ser el mismo, o si quedará algo de mi.

-ALICIA: por favor, inténtalo, no podría perder a una persona que bromea cuando estoy a punto de saltar por un balcón – nos fundimos en el abrazo más largo hasta la fecha.

Al salir de la fiesta llamé a Madamme y la pedí que organizara todo, me dio 1 día para traer a Lorenzo de vuelta a Madrid, por lo visto se lo había llevado de gira por medio país, me dio lugar y hora, me llevé a Alicia, que iba de negro, de arriba abajo con una blusa amplia y unos pantalones ligeros, casi de funeral, y al aparcar fuera hablamos un momento.

-YO: mira, esto se va a poner muy raro, no te asustes, mientras estés al lado de Zeus no te pasara nada.

-ALICIA: ¿Zeus?

-YO: soy yo, mi nombre de guerra, es un papel, tú sígueme la corriente y no te metas en su camino, en serio, no puedo mostrar flaqueza ahí dentro.

-ALICIA: de acuerdo… ¿y yo? ¿No necesitaría un nombre?

-YO: pues no es mala idea, elige……

-ALICIA: supongo que si tú eres Zeus, tiene sentido que yo sea Hera, ¿no? – dude un instante, Madamme se podría sentir ofendida, pero la relación con ella era de amo y esclavo, me obedecía, no era mi esposa.

-YO: de acuerdo, muéstrate firme y con carácter, se orgullosa y déspota, no te dejes amedrentar por nada, mantén la compostura y déjame hablar a mi, recuerda, son papeles, pero son importantes – asintió.

-ALICIA: vamos.

Entramos en un piso medio abandonado, una de las moles estaba abajo, al verme nos dejó pasar, subimos a uno de las habitaciones donde Madamme estaba esperando, solté la mano de Alicia y me besé con Madamme de forma obscena.

-ZEUS: ¿le tienes?

-MADAMME: aquí está, mi dios, tal como ordenaste.

-ZEUS: bien, ella es Hera, quiere hacerle unas preguntas – Madamme se acercó a ella y la dio un par de besos.

-MADAMME: un placer conocerte preciosa, tengo todo listo.

-HERA: estoy impaciente.

-MADAMME: como no sabia como actuar podemos hacerlo de 2 maneras, el chico está detrás de esa puerta, podéis entrar directamente y hablar con él, os aseguro que será a solas.

-ZEUS: imposible, si nos ve puede reconocernos y luego meternos en líos, habría que matarlo.

-MADAMME: por eso he pensado otra manera, en este ordenador se ve una cámara que he instalado dentro ….– lo encendió y se vio a Lorenzo sentado medio desnudo con la cara llena de golpes, un gesto entre la apatía y la desesperación –….. uno de mis chicos entrará y se pondrá un pinganillo, a través de él y el ordenador podéis hablar directamente con él sin descubrir quienes sois.

-HERA: excelente, no me dijiste que era tan buena sirviente – me sorprendió su actuación, Madamme la miró tan sorprendida como yo.

-MADAMME: es un placer servir – metí mi mano bajo su vestido palpando sus bragas, gimió un segundo.

-ZEUS: como siga así no me va a quedar otra que destrozarla – al oír esa palabra cerró los ojos y supongo que rememoró sentir mi verga partiéndola en 2, mi mano se humedeció al instante.

-MADAMME: por favor…….delante de su mujer no…- apreté su coño sacándola un suspiró, la agarré por el cuello estampándola contra la pared.

-ZEUS: delante de ella o en mitad de un estadio de fútbol lleno, será donde y cuando yo digo, ¿o se te ha olvidado? – abrió los ojos rindiéndose con la mirada.

-MADAMME: lo siento, no quería ofender.

-ZEUS: si necesitas que te lo recuerde dímelo, ahora mismo – apreté su cuello casi asfixiándola, Hera permanecía inmóvil asustada.

-MADAMME: no por favor…me ahogo……. – tosía cogiendo aire - ………no……no hace falta…..mi señor……- solté pasados unos segundos

-ZEUS: no estropees tu buen trabajo con más tonterías, ¿ha quedado claro?

-MADAMME: si…….cofffff cofffff…..perdóneme.

-HERA: perdonada estás, pero no vuelvas a desafiar a mi esposo………vamos, tenemos prisa – se acercó cogiéndome de la mano para tranquilizarme.

Madamme tardó un minuto en recuperarse, y a través del ordenador un hilo de voz leve comunicó a una de las moles que custodiaban a Lorenzo que se sentara enfrente, así lo hizo, y Madamme nos cedió el portátil.

-ZEUS: ¿quien eres? – la mole lo repitió palabra por palabra, con un marcado acento de Europa del este.

-LORENZO: yo………..por favor…….déjenme irme…….

-ZEUS: ¿que quien eres?

-LORENZO: soy…….soy Lorenzo…….

-ZEUS: ¿por qué estás aquí?

-LORENZO: me….me secuestraron……no se quien……quizá un amigo de una chica a la que me tiré…….o quizá no….no lo se…por favor, dejen que me vaya, no se lo diré a nadie.

-ZEUS: estás aquí por que eres un cerdo materialista que abusó de la confianza de muchas mujeres, y esta es tu redención.

-LORENZO: lo se….me porte mal…….con muchas chicas…….pero…….pero……..esto es demasiado…….no lo soporto más……quiero irme a casa – lloraba.

-ZEUS: eso depende de ti, te voy ha hacer unas preguntas muy concretas, y necesito la verdad, toda la verdad, si me la dices puede que en unos días te dejemos libre, pero si nos mientes, lo sabremos, y no volverás nunca a tu hogar, seguirás aquí siendo usado día tras día hasta que mueras, ¿lo has entendido?

-LERENZO: si……lo que sea……os diré lo que sea….- me aparté del ordenador y se lo dejé a Hera, la susurré algún consejo para no descubrirse.

-HERA: ¿por que le haces eso a las mujeres?

-LORENZO: por diversión……. por que me pagan…..por que puedo…..

-HERA: ¿eres consciente del dolor que puedes llegar a causar?

-LORENZO: si…..no……no lo se….en el fondo no me importaban…….- lloraba por que decía la verdad pero eran palabras inculpatorias.

-HERA: ¿como empezaste?

-LORENZO: en el colegio, con 15 años, las chicas caían a mis pies……..mis compañeros me retaban y yo me liaba con todas, a cambio de cosas…….. pero al crecer pedía dinero y favores.

-HERA: ¿a cuantas has destrozado?

-LORENZO: a decenas………. puede que a un centenar.

-HERA: ¿sientes algo por ellas?

-LORENZO: nada, para mi no son más que niñas tontas….con sonreír y susurrarlas al oído se enamoran……..son tan estúpidas….- seguía llorando por decir la verdad.

-HERA: me has contado como empezaste, ¿cual fue la última? – “muy hábil hermanita”

-LORENZO: me….me contrataron para ligarme a una chica……nada especial…..fue fácil, había roto con su novio hacia casi un año, y estaba muy sola, lo difícil fue meter a una de sus amigas en la líos de drogas, luego la secuestraron….pero yo no sabia nada de lo que pasó después, solo me pagaron por mi trabajo, incluso me acosté con una compañera de piso, me pagaron un extra – eso era nuevo.

-HERA: ¿como se llamaba esa compañera de piso?

-LORENZO: Nuria…….Nara……..algo así………era canaria…me pagaron para dejarme seducir por ella, la muy idiota se lo creyó, me dijeron que lo necesitaban, que tenían que convencerla de que podía ganarse a cualquier hombre.

-HERA: ¿por que?

-LORENZO: no….no me lo dijeron…..pero había un tipo……….un amigo de las chicas, creo que todo giraba en torno a él, creo que querían liar a Naira con aquel chico, o al menos que ella lo creyera posible……- cogió aire - …………¿es por eso que estoy aquí?, era mucho dinero……

-HERA: no, soy el padre de una de las chicas a las que destrozaste – sonaba creíble en la voz de aquella mole.

-LORENZO: mire…………le pido disculpas…….se que no está bien pero así me gano la vida…me la ganaba…le juro que no lo volveré a hacer…..pero por favor……… máteme, suélteme o máteme,…..se lo suplico, pero no me haga volver a ……- lloraba desconsolado, recordado los 3 días de ser violado por hombres que sin duda pagarían mucho por un joven tan atractivo - …….¡¡¡¡no me haga eso por favor!!!!!

-HERA: eres un ser despreciable, y no mereces otra cosa que esto, me lo voy a pensar – Alicia lloraba, pero podía ver en su rostro como se quitaba peso de encima como había hecho yo.

-ZEUS: ¿es todo lo que necesitabas saber?

-HERA: es un miserable, y ya no merece más mí tiempo.

-MADAMME: siento interrumpir, aquí esta la copia de……su castigo – me entregó un CD.

-ZEUS: esto es para ti, amor mío, un regalo que incluye la ira desatada de Zeus sobre esa escoria – lo cogió asintiendo con seguridad.

-HERA: muchas gracias, realmente necesitaba esto – hubo un momento en que nos miramos, y casi creí que me besaría, entraría dentro de su papel, pero no ocurrió.

-ZEUS: ya es suficiente, es todo tuyo Madamme, y recuerda las instrucciones, que cuando se vaya no tenga nada con lo que pueda hacernos daño………pero no hace falta que sepa que no morirá, no hasta el último momento – besé a Madamme con lengua magreando sus buenas tetas por encima de vestido.

-MADAMME: así se hará….. – se giró hacia Alicia con una reverencia –….. mi señora.

-HERA: un placer conocerte, sigue así y puede que dentro de poco te recompensemos, ¿nos vamos, querido? – me cogió del brazo. Salimos de allí y bajamos al coche, en silencio, hasta que no estuvimos bien lejos no habló.

-ALICIA: ha sido raro

-YO: te lo dije, por favor, no preguntes, no puedo decirte nada sin comprometerte, y no quiero mentirte.

-ALICIA: está bien, lo comprendo……….pero……..Lorenzo ……estaba en muy mal estado…….y las cosas que has dicho….no quiero que muera, le odio……. pero me siento mal.

-YO: no le pasará nada, le soltarán en unos días, cagado de miedo y asustado, con algunos rasguños.

-ALICIA: creía que si le tenía delante lo mataría, pero………. al verle así……..

-YO: olvídate de él, es historia, ¿tú como estás?

-ALICIA: bien………sorprendentemente bien…….creo que he logrado lo que necesitaba.

-YO: me alegro, un montón, de verdad.

-ALICIA: ¿que se supone que hay aquí? - movió el CD.

-YO: le pedí una copia del castigo que esta recibiendo…..es duro y escabroso, pero creo que te merecías tenerlo, tú decides si ves lo que hay – lo miró como pudiendo leer su contenido.

-ALICIA: no lo necesito, ya tengo lo que buscaba – fue a romperlo.

-YO: no, por favor, no lo veas, pero tu hermana me ha dicho que quiere verlo – torneó los ojos curiosa.

-ALICIA: ¿que pasa, ahora sois unos tortolitos? - me hizo cosquillas en el vientre.

-YO: no……no se…..es raro, nunca se habría fijado en mi………pero no veas como fo…….- me corté, era su hermana.

-ALICIA: si…..ya me ha dicho más de uno de sus ex que es una tigresa en la cama.

-YO: si te incomoda o te parece mal, dímelo y se acabó.

-ALICIA: no, tranquilo, estoy bien….- me cogió la mano del cambio de marchas y sonrió alegre, luego miró por la ventana -…..ahora estoy bien.

Pasaron 4 días cuando Madamme me llamó, tal como tenia planeado, iban a soltar a Lorenzo pero aun aguardaba una última sorpresa, acudí al sitio donde habían estado abusando de él la 1º vez, al verlo casi sentía lastima, tenia el agujero del culo tan grande que le entraría una mandarina con facilidad, le estaban dando una ducha con una manguera atado al potro con el culo ofrecido.

-MADAMME: está todo dispuesto, no hay cámaras y no quedará constancia de nada, aunque te ruego que me dejes mirar.

-ZEUS: te has portado bien, puedes mirar, pero no haremos nada.

-MADAMME: gracias………hemos pedido un favor y sus últimos análisis son negativos, no tiene nada, aun así he preparado condones.

-ZEUS: lo usaré, empecemos – Madamme dio un chasquido y las moles salieron de la habitación poniéndole un antifaz a Lorenzo.

Entré en la sala, notando el frío del lugar y los gimoteos de Lorenzo, estaba rendido, se había cansado de pedir ayuda o clemencia, y estaba resignado a aquello, Madamme entró detrás de mi, y desconectó cámaras, cerrando las puertas por dentro, estabamos solos, me desnudé, dejando mi gran polla flácida al aire, mirando el culo de Lorenzo, me asqueaba la idea pero Zeus estaba dispuesto, miré a Madamme que estaba sentada cruzada de piernas, al verme supo que necesitaría su ayuda, se abrió de piernas remangándose el vestido hasta dejarme ver su tanga, lo puso a un lado y acarició su coño húmedo ante mi, se sacó un hombro del vestido y uno de sus senos apareció, estuvo varios minutos hasta que mi polla reaccionó, poco a poco se puso dura y cuando lo estuvo me puse el condón que me había dado, me lancé con los ojos cerrados, agarrando de la cintura de Lorenzo y embestí con mi rabo en su trasero, del grito que pegó asustó a Madamme que estaba perdida en sus caricias, se la había metido entera del tirón, y sin pensar que estaba haciendo saqué a la bestia, que se pasó 20 minutos follándolo entre lloros y quejas, daba igual quien o que animal se lo hubiera follado, mi polla era la más grande que había entrado allí, y se notaba, babeaba de nuevo volviendo a pedir clemencia, su voz me turbaba, así que miré a Madamme que estaba mirando lujuriosa, con un consolador enorme desapareciendo en su coño, eso me animó y estuve casi 30 minutos destrozándole el culo a Lorenzo como jamás hubiera pensado que podía hacerlo con un hombre, cuando descargué mi semen Lorenzo gemía, pero no solo de dolor, creo que empezó a gustarle, me dio igual, tuve una 2º erección y me pasé 1 hora más empotrándolo con Madamme ayudándome a mantenerme erecto, estaba a 4 patas sobre la silla abriéndose el culo con aquel consolador. Lorenzo seguía con aquel ruido entre el lamento y la pasión, y hacia el final jadeaba pidiendo más, me corrí dentro de su ano por 2º vez y le dejé allí, con un agujero en el culo del tamaño de una manzana, sudando, y lo mejor y más inesperado de todo, sabiendo que había disfrutado siendo sodomizado. Madamme se arregló como pudo, varios orgasmos la tenían mareada, y salimos al pasillo.

-ZEUS: ya está, suéltalo, no creo que de problemas, pero tenlo vigilado.

-MADAMME: siento haberme propasado, pero ha sido demencial…..ese chico lleva llorando una semana por que abusaban de él, y en 2 polvos le has dejado deseando más, ¡¡le has vuelto gay!!! jajajaja

-ZEUS: me da igual, solo me importaba una cosa, y ya está cumplida.

-MADAMME: como ordenasteis, me aseguraré de todo – la abracé sintiendo sus pechos en mi cuerpo y la agarré del cabello tirando de él, besándola con fuerza.

-ZEUS: te has portado, mañana iremos a tu piso, y me vas a ir enseñando que cosas te gustan que te haga, de BDSM – abrió los ojos ilusionada.

-MADAMME: será un placer – azoté su enorme culo pellizcándolo, no sabia como proceder con Alexis, llegado a este punto, necesitaba ideas y ella era la más indicada.

Al salir de allí no recuerdo cuando volví a ser Raúl, me daba miedo que ocurriría o que reacción tendría ante lo acontecido. Mientras, Zeus sonreía al conducir, “Ya he terminado con Lorenzo, a por el siguiente de la lista, Carlos.”

Raúl – Terapia.

-YO: hola, me llamo Raúl…..y tengo 24 años.

-TODOS: hola Raúl.

-YO: estoy aquí por que soy adicto.

-TODOS: nosotros no te juzgamos, compartimos tu pesar y te aceptamos para ayudarte a cambiar.

-YO: he hecho muchas cosas mal en estos últimos tiempos, he bebido, me he drogado y he hecho daño a mucha gente, sobretodo mujeres.

-MONITOR: cuéntanos, cual es tu adicción.

-YO: soy adicto al sexo.

-MONITOR: muy bien, dinos más…….

-YO: no se ni por donde empezar……..esto me parece una perdida de tiempo…….

-MONITOR: llevas acudiendo a este grupo de apoyo más de 1 mes y hoy es la 1º vez que te has decidido ha hablar, a abrirte a nosotros, ¿por que?

-YO: por una chica……………

-MONITOR: es un comienzo, pero a mi me interesa como has llegado a decidir que necesitas ayuda.

-YO: es una historia un poco larga.

-MONITOR: estamos aquí para ayudarte, así que me sentaré junto a los demás, y explícanos con detalle tu problema – eso hizo.

-YO: bien…….no creo que mi vida previa sea de mucho interés, soy joven, apuesto y…….tengo ciertos dones, que hacen que las mujeres tiemblen a mi paso, obviamente me he aprovechado de ello, y no creo que esté mal, lo importante es lo que me viene ocurriendo desde hace año y medio, una zorra loca con la que me acosté esta empeñada en destrozarme la vida, o la de mis seres queridos, si no vuelvo a su lado.

-MONITOR: no es necesario faltar al respeto a nadie.

-YO: a ella si, se que no me cree, pero es el diablo en persona, o peor, ella tiene más dinero, estuve intentando solucionar el problema de forma astuta y sibilina, pero ella me negó esa opción, provocó una desgracia y solo un milagro evitó una mayor, aunque sabiendo lo que ocurrió después, casi hubiera preferido que así fuera.

-MONITOR: ¿que ocurrió?

-YO: hace algo más de un año las acciones de esa mujer provocaron que una amiga mía se suicidara y la mujer que siempre consideré una hermana, aunque no lo es, intentara arrojarse por un balcón, pude evitarlo, pero desde entonces estoy dando tumbos, sabia que mi yo natural no podía con aquello y recurrí a una parte muy oscura de mi ser, para poder sobrellevarlo, y es por eso que he terminado aquí.

-MONITOR: ¿es ese momento en el que empezaste a sentir que te perdías?

-YO: no, aunque supongo que lo es, no me sentía perdido, si no más bien que por 1º vez estaba contraatacando, y no solo soportando los golpes, vengué de alguna manera la afrenta de un pobre muchacho que se vio involucrado sin saberlo, y después de eso todo se precipitó.

-MONITOR: ¿como?

-YO: bueno, para evitar daños mayores me alejé de mi familia y amigos todo lo que pude, me fui a vivir con una mujer a la que tenia totalmente dominada, lo hice todo para desaparecer del radar de esa mujer tan malvada, logré evadir su persecución y pude centrarme en ir a por una 2º víctima después de ese muchacho inocente. En todo momento tuve sexo con varias mujeres, no puedo evitarlo, y ya un simple polvo no me dice nada, tengo que llevarlo más allá, tenia a una esclava con la que vivía pero no sabia que hacer con ella, así que me busqué a una mujer experimentada que me fue enseñando en su casa a diario, formas nuevas y retorcidas de hacer “disfrutar” a una mujer que la excite la humillación, por las mañanas acudía a sus brazos en busca de consuelo o sabiduría, y tenia de ambos, aun se me pone dura al recordar cuando retomé mi relación con ella, ya me había acostado con ella antes, pero al volver a follarla sentí que el mundo se detenía por nosotros, pasé 3 días en su cuarto en los que la penetré de mil formas y la hice desmayarse varias veces, y no es una mujer a la que eso le pase a menudo, yo estaba fuera de mi y esa parte oscura de mi ser tomó el control tantas veces que cogió el timón del barco y yo era un mero pasajero.

-MONITOR: ¿3 días?

-YO: así es, cuando terminamos, regresé al piso con mi sirviente, y me pase 2 semanas adiestrándola como me habían mostrado, fue denigrante, cadenas, castigos, quemaduras y golpes, vejaciones privadas y publicas, cosas que nunca pensé que podían excitar a nadie, pero aun así aquella mujer con la que vivía se mostraba feliz y satisfecha, cuando me quedaba sin trucos volvía con mi maestra y regresaba con ideas nuevas, más sórdidas y macabras que las anteriores, aumentando el nivel de sodomía hasta que mi esclava era tan dócil como un cachorro.

-MONITOR: ¿te sentiste mal?

-YO: no, eso era lo mejor, podía hacerle cualquier cosa y ella me complacería, aun no habíamos tenido sexo directamente pasados 2 meses y estaba tan enloquecida por lo que la hacia que se corría solo de pensar en el momento en que la tomara, a mi me parecía atractivo y poderoso.

-MONITOR: ¿ahora lo ves de forma diferente?

-YO: tal vez, no puedo negar que me parezca algo que, en momentos determinados, fuera demasiado escatológico, pero si he de ser sincero creo que volvería ha hacerlo.

-MONITOR: relátanos alguna sesión antes de tomar a aquella mujer.

-YO: pufffff, un día me levanté y la vi tumbada en el suelo, en la cama de perro en que la hacia dormir, parecía un ángel allí desnuda solo con los tacones, silbé y se despertó acudiendo a mi a 4 patas, la puse una cadena al cuello y sin más salí a la calle a correr, con ella detrás de mí, desnuda siguiéndome corriendo como podía con esos zapatos, eran las 6 de la mañana, hora a la que había decidido volver a hacer ejercicio, no había mucha gente por la calle pero no podían evitar verla, la hice correr, tumbarse, restregarse en el suelo de un parque cercano, mear al aire libre y al volver a casa dejarla así durante 1 día entero sin ducharse, se cagó encima pero aun así la dejé como unas 3 horas sin poder limpiarse.

-MONITOR: ¿eso te producía placer?

-YO: no, era a ella a la que le gustaba la humillación, yo solo la complacía.

-MONITOR: ¿y cuando la tomaste?

-YO: fue unas semanas después.

-MONITOR: somos todo oídos.

-YO: …….como quieras……..había alcanzado tal nivel de degradación que mi maestra se interesó en conocer a una mujer que hubiera aguantado tanto en tan poco tiempo, obviamente me negué, no quería perderla ante mi maestra, así que me dijo que poco más me podía enseñar, al llegar a casa estaba como siempre, tirada en el suelo, desnuda y acudiendo a mi como un perro acude a su amo, la acaricié con cariño y me senté en el sofá con ella entre mis piernas, sus ojos eran los mas brillantes que nunca vi, estaba entregada a mi, así que la cogí de la cabeza y la dije que me la chupara, que ya era hora de jugar con su cuerpo y de hacerla mía, se ofreció a todo, y cuando digo todo, es todo, no era la 1º vez que la veía , ni siquiera que la tenia agarrada, pero fue la 1º vez en que sus labios besaron mi miembro, la até de manos con una esposas a la espalda y se dedicó durante media hora a comérmela la polla como poca gente ha logrado hacerlo, se metía tanta cantidad en la garganta que las arcadas eran frecuentes, y aun así continuaba. La dejé descansar roja y con unos puentes de saliva entre sus carnosos labios y mi verga, luego la hice caminar de rodillas y nos metí en la bañera que siempre tenia lista para un baño y mi higiene personal de la que ella se ocupaba, me tumbé con ella encima montada sobre mi, pero por 1º vez acaricié su cuerpo con deseo sexual, ella lo notó y se le erizó la piel, mi enorme tranca sobresalía entre sus muslos y se frotaba contra su clítoris, mis manos recorrían su vulva y uno de sus senos era pellizcado mientras besaba su cuello apartando una espesa mata de cabello caoba con la nariz, luego nos besamos……..no os podéis hacer una idea de cómo besaba esa mujer, entregada y planamente rendida, cuando sintió mi polla entrando en ella gimió tan fuerte como cuando la ataba, pero suspira de gozo al sentir como la abría por dentro, me costó más de 10 minutos de juegos y preliminares pero al fin la tuve en su interior por completo, me pasé 2 horas follándola lentamente, se corrió una docena de veces y se desmayó una, pero cuando acabé con ella me besó como nunca nadie lo ha hecho, estaba en mi poder y seria mía para siempre.

Un silencio incomodo y alguna pose recolocándose el paquete medio duro o frotándose los muslos aparecían ante mi, “mi público se ha excitado”.

-MONITOR: ejem………muy explícito……..¿que pasó después?

-YO: una bola de nieve, que se hizo cada día más grande, desde ese día dormía conmigo y la follaba durante horas, cuando me cansé de su coño la abrí su precioso culo como a una bestia salvaje, le dolía tanto que no gozaba con aquel dolor como las demás, gozaba de la humillación del dolor. Un día la estuve abriendo el ano con mi verga 12 horas casi seguidas, no pudo caminar bien en 1 semana y tardó otra en sentarse sin sentir el escozor en su trasero, la usé como quise, se la daba a amigos míos para que la usaran, la vendía, se tiró 2 semanas siendo la puta personal de unos “amigos” colombianos míos, y cuando no pude sacar de ella nada, se la di a mi maestra en aquellas artes, casi 3 meses después era a puta del sado más cotizada del país, se deja hacer de todo, perdió el trabajo donde la conocí, pero ahora gana el doble que antes, y siempre que la llamo acude sin pensarlo.

-MONITOR: ¿crees que es culpa tuya que haya terminado así de mal?

-YO: eso habrá que preguntárselo a ella, no creo que “mal” sea el adjetivo que ella usaría, creo que de alguna forma la ayudé a liberarse y ser ella misma tal como se sentía, no como la veían los demás.

-MONITOR: ella perdió el trabajo, pero….¿y tú, como te ganas la vida?

-YO: me hice gígolo, de nuevo, ya lo fui antes, pero ahora me gano la vida así.

-MONITOR: un gran reclamo para un adicto al sexo.

-YO: obviamente, lo he disfrutado, y he ganado mucho dinero.

-MONITOR: ¿cuanto?

-YO: en lo que va de año….. casi un millón de € - un silencio con una sonrisa de fondo fue suficiente como para hacer reaccionar al monitor.

-MONITOR: ¿tanto?

-YO: es que soy muy bueno, ya tenia cierta fama previa, así que mi comienzo fue fulgurante, en 2 semanas ya me había ventilado a 10 clientas distintas y ninguna pagó menos de 10.000€, y os garantizo que ninguna ha reclamado ni un solo céntimo. Luego empezaron los trabajos especiales, más enfocados a la elite, me he tirado a supermodelos, presentadoras, y damas de alta cuna, pero eso son solo chorradas, la mitad de lo que he ganado.

-MONITOR: cuéntanos una…..

-YO: os contaré una que fue rara, una señora me contrató para toda una noche, eso de por si son casi 15.000€, lo raro fue que se mostró muy tímida, quiso que fuera con las luces apagadas, y que no pudiera tocarla, para que no fuera reconocida, decía que era demasiado conocida como para poder arriesgarse, así que negociando llegamos a un acuerdo, 25.000€ por una sola noche bajo sus condiciones, entré en el lugar acordado y notaba una presencia en una sala en la que no se veía nada, desnudo tal como pedía la clienta, y me di con una cama, al tumbarme en ella sentí un cuerpo moviéndose, jugó conmigo, y me chupó la polla durante largo tiempo, luego se montó encima mía y me cabalgó como una amazona, sus gemidos eran tapados, creo que llevaba una mordaza para no delatarse con su voz, y follamos un buen rato cuando empezamos a corrernos, luego cambiamos posturas y yo me puse encima, como el misionero pero más animal, me costó domar a aquella hembra, pero para mi 3º polvo su ano fue brutalmente asediado, cuando llené su culo de semen descasamos unas horas y retomamos otra serie de posturas, muy coartados al no poder tocarnos, se repitió el ciclo hasta que se acabó el tiempo.

-MONITOR: no esta mal, 25.000€ en una sola noche.

YO: lo peor es que sé, aunque no estoy seguro, que aquella mujer era la misma que me empujó a esa vida.

MONITOR: “la mitad de lo que he ganado” has dicho, eso quiere decir………¿que hiciste para ganar la otra mitad te pagaron?

-YO: 1 solo trabajo.

-MONITOR: ¡¡¿te pagaron 500.000€ por 1 trabajo?!!.....quizá tenga que replantear mi vida jajajajaja – una sonora risa global rompió el hielo.

-YO: si – una sonrisa al recodarlo me hizo tener un escalofrío.

-MONITOR: ¿te importaría decirnos como fue?

YO: fue no hace ni 2 meses, mi…...contacto, me dijo que estaban preparando una fiesta de alto copete, en las que os aseguro que hay más perversión que la que podáis imaginar, un antiguo conocido que me………debía un favor, montó una velada de escándalo para sus huéspedes en la fiesta, normalmente son complementarias, orgías o montajes de sexo para distraer, pero aquella velada era especial, mi nombre ya era muy conocido y mi trabuco descomunal casi se vendía solo, mucho se hablaba de mi, y de si estaría a la altura de otro gígolo legendario, un tal Carlinhos del que ya había oído hablar, que había dejado el negocio hacia casi una década ante la falta de estímulos, se decía de él que era el amante perfecto, y a alguien se le ocurrió enfrentarnos. Fue el acontecimiento clandestino del año, más de 100 personas anónimas pero con un capital enorme compraron entradas y se montó una apuesta sobre quien era mejor amante, si él o yo, como no había mejor manera de saberlo se trajo desde Rusia a un par de gemelas exactamente iguales, prostitutas de lujo, y quien hiciera desmayarse antes a la suya, ganaría.

-MONITOR: eso es una aberración.

-YO: seguro……pero eso no evitó que en las apuestas se movieran cerca de los 10 millones de €.

-MONITOR: es una salvajada que te paguen esa cantidad por ganar una apuesta…..

-YO: oh……pero yo no gané……verán, la fiesta se dispuso, nos presentaron a la rusas, unas preciosidades, 2 gotas de agua, altas, rubias, de ojos azules, cuerpos perfectos y naturales, de unos 25 años, en realidad me las presentaron a mi, Carlinhos se hizo de rogar, apareció a última hora, al verle sentí respeto, un brasileño de 1,85 de altura, fornido y fuerte, con la piel color de ébano, aún sin quitarse la camiseta se le marcaban los músculos claramente, las imágenes que tenia de él eran antiguas, tenia rastas, pero ahora se había cortado el pelo, peinaba canas y su rostro estaba más serio y arrugado, por lo que me dijeron estaría rondando los 40 años, pero si no fuera por esas raíces grises del pelo no parecería tener ni 28. Al presentarnos y vernos frente a frente se me escapó una reverencia, se rió y charlamos unos minutos. Al salir al ruedo que nos tenían preparados la rusas calentaron el ambiente con un baile sensual coordinado y se desnudaron quedando tumbadas cada una en una cama diferente, al entrar nosotros parecíamos gladiadores romanos, en una zona del techo acristalada podías ver las figuras de la gente saltando, riendo, chillando y bebiendo, no se podía reconocer a nadie pero allí estaban, así que nos desnudamos, al ver su cuerpo supe que seria el mayor reto al que jamás me había enfrentado, era pura roca, esculpido a la perfección, su polla era algo más corta que la mía, no mucho, pero si más gruesa, tampoco demasiado, al verme mirándole volvió a sonreír, y debió de pensar algo parecido de mi, había recuperado mi mejor tono físico, y pese a no estar tan marcado como él, mi corpulencia natural me hacia más temible, acudimos cada uno con nuestra doncella, y cuando sonó una sirena empezó la carrera, yo hice mi especialidad, un comida de coño que la hizo temblar entre gritos y palabras incomprensibles, al principio se reía de forma exagerada, sobreactuado pero al encontrar su punto G su cadera acompasaba mis dedos y mi lengua. Escuché un gemido ronco, al mirar Carlinhos ya tenia la mano pringada de fluidos, con una masturbación y besando los senos de su compañera ya había logrado el 1º orgasmo, al ver mover su mano de nuevo en su interior comprendí su habilidad, tarde unos minutos más hasta que la mía claudicó en su 1º orgasmo, para cuando se rehizo, Carlinhos ya estaba de pie con la chica comiéndole la polla a duras penas, no le entraba en la boca, aproveché la coyuntura del coño expandido y húmedo de mi chica, la penetré tan violentamente que la 4º embestida se corrió, me pasé 30 minutos follándola sacándola tantos orgasmos que no se estaba quieta, al mirar al otro lado Carlinhos ya estaba montando a su yegua de forma fluida, era como ver el mar, una oleada constante haciendo perderse su rabo entre los muslos de aquella rusa con los ojos en blanco, perdida en un orgasmo continuo. Aquellas rusas demostraron más aguante que ninguna que hubiera conocido, cuando me corrí por 2º vez usando todo mi potencial pensé que había ganado, estaba inmóvil y estirada, pero solo fue un calambre, un espasmo en todo su cuerpo, regresó de entre los muertos para ponerse a 4 patas abrirse el culo con los dedos para que se la metiera por el ano, Carlinhos estaba sudando, como los 4, pero en él no era habitual, se le leía en la cara, estaba tenso, esforzándose y destrozando a su chica por el coño. Cuando llegaron los orgasmos anales de la mía, fui un tren de mercancías, arrasé con todo abriéndola el culo y llenándola de semen 2 veces, creo que Carlinhos aun estaba por la 3º de su venidas, y a él le costaba recuperarse, las putas rusas seguían jadeando, gimiendo y siendo usadas, pero sin desmayarse, dejé de darla por el culo y me la subí encima follándola por el coño colgada de mi cuello, dando una vuelta al ruedo para que todos vieran como después de casi 2 horas de sexo seguía tan fuerte como al principio, Carlinhos me siguió, creo que para no quedarse atrás y para coger aire, suspiraba agotado, estampé a mi chica a un cristal para que las sombras escondidas tras él vieran como percutía en aquella rusa de 1º mano, los ojos azules de mi acompañante al sentir como la gravedad actuaba en su contra se pusieron blancos y durante 10 minutos se corrió una vez tras otra hasta que casi la tenia a punto, pero entonces escuché de fondo un jadeo incesante, al girarnos para volver a la cama Carlinhos tenia agarrada a su rusa por detrás incidiendo directamente en su punto G, con una velocidad que yo nunca había visto en nadie, mantenía más de 2 minutos, y luego descansaba o lo hacia cuando a la rusa le salía tal cantidad de chorros de su interior que no era posible continuar, se pasaba 1 minutos frotando su glande en los labios mayores de ella chapoteando para embestir y seguir de nuevo. Yo traté de hacer algo, pero fue tarde, cuando la rusa de aquel mulato brasileño se desmayó unos segundos, un ruido de golpes en los cristales y una bocina indicaron que había acabado el reto, él había ganado, dejamos a las rusas en sus camas donde según creo fueron atendidas por médicos, deshidratadas y con los músculos agarrotados, pero sonriendo como nunca, al acabar le dieron su premio en metálico y me dio la mano, casi con alegría de tener a un rival de mi altura.

-MONITOR: si tú ganaste medio millón perdiendo, ¿cuanto gano él?

-YO: un cuarto de millón nada más.

-MONITOR: pero si perdiste, ¿como vas a ganar el doble?

-YO: muy sencillo, como os dije, estaba casi seguro de que la mujer de las luces apagadas era la mujer que me está amargando la vida, logró averiguar donde trabajaba y me contrató para que al menos, la follara unas veces más, pero todo eso se me ocurrió después de acostarme con ella, no durante ni antes, solo dios sabe que la hubiera hecho de sospecharlo……….pero luego supe lo de la fiesta, y si esa mujer ya sabia donde trabajaba, sin duda estaría en el publico, usé mis contactos para saber que apostó a mi favor, y mucho dinero, casi 1 millón de €, así que usé a una amiga bien relacionada para apostar en mi contra, y perdí, si, y no se si hubiera podio ganar, pero no me esforcé del todo en hacerlo, no di la vuelta al ruedo por lucirme, sabia que así no podría desmayarla, me llevaría una miseria por ser el perdedor de la apuesta, apenas 10.000€, pero gané apostando todo mi dinero, casi 200.000 € que me había ganado en estos meses, en mi contra, ganancias que gracias a mi loca acosadora quintupliqué en el millón de € que tenia…… – un aire seco llenaba la estancia y una joven de ojos alegres me miraba excita, la devolví la mirada con un guiño, no era la 1º que me miraba así, pero aquella muchacha tenia algo especial.

-MONITOR: ¿tenias?, ¿acaso has perdido ese dinero?

-YO: gastado mejor dicho……..y si, casi todo.

-MONITOR: ¿en que?

-YO: drogas.

-MONITOR: bueno, desde luego tienes un problema grande, hablas de ello con demasiada facilidad, y parece más ficción que realidad, pero si algo es cierto, necesitas ayuda.

-YO: por eso estoy aquí, necesito volver a ser yo, y no ese ser oscuro y peligroso.

-MONITOR: y en todo este tiempo, ¿no has sido nunca tú mismo?

-YO: ohhh si, he logrado salvar parte de mi refugiándome en los brazos de una mujer, la hermana de la chica que casi se suicida, se puede decir que es la única mujer con la que mi yo real se ha acostado, quedamos y hacemos el amor a menudo.

-MONITOR: pero eso es más de lo mismo.

-YO: no, al resto las follo, a ella la hago el amor, es diferente, me ayuda, me consuela y me mantiene firme.

-MONITOR: ¿y como empezaste con ella?

-YO: fue antes de todo esto, salvé a su hermana, y me lo agradeció profundamente, creía que solo seria una vez, me pilló con la guardia baja, pero cuando la enseñé un CD con cierta información se abalanzó sobre mi, y estuvimos gozando el uno del otro durante horas, dios, es la mujer no “profesional” que mejor he visto moverse en una cama.

-MONITOR: ¿es una relación puramente física?

-YO: no, el sexo es genial pero quedarme en su cama abrazado a ella durante horas me serena, me saca de las sombras y me acerca a la luz, lo justo para no perderme. Además la ayudo en su casa.

-MONITOR: ¿con que cosas?

-YO: por ejemplo, después del intento de suicidio, buscaban compañeros de piso para pagar la casa, pero era peligroso, podían meter a gente que trabaja para mi acosadora, así que estuve en las entrevistas, hablándoles de cómo protegí en su momento a mis chicas, de cómo le corté los huevos a un hombre por violar a mi amiga, y de cómo castigué al que engañó a mi hermanita, 5 de ellos reconocieron abiertamente ser cómplices de la susodicha mujer al enseñarles el CD anteriormente mencionado, y otros 3 sudaron tanto que no hizo falta que lo dijeran, chicos o chicas, daba igual, al final usé mi arma secreta………….a mi madre, esa mujer lee a la gente mejor que cualquier loquero, no se ofenda monitor, y dio el visto bueno a cierta gente, se metieron a vivir una pareja y una chica, me he asegurado de que no sean peligrosos.

-MONITOR: ¿entonces estás saliendo con esa mujer, la hermana de la que quiso suicidarse?

-YO: no, nada de eso, no somos pareja, ni novios, ni nada, simplemente nos necesitamos.

-MONITOR: bueno, pareja o no, es una suerte que esa mujer te haya ayudado a venir aquí.

-YO: no estoy aquí por ella.

-MONITOR: al principio has dicho que estabas aquí por una mujer, supuse que era ella……..

-YO: pues está equivocado, si, estoy aquí por una mujer, pero no es ella………no se quien es, es esa mujer que me devuelva a la vida, que no pueda vivir sin ella y con la que anhelo estar cada segundo que paso lejos de ella, esa mujer que me centre, que me haga sentir especial y que me aleje de todo el horror y la oscuridad de este mundo, allí donde esté, quiero encontrarla y compartir cada día de mi vida con ella, para hacerla feliz, amarla y quererla, para que se sienta una princesa, y que me ame tanto como yo pueda amarla a ella.………- casi al unísono todas las mujeres de la sala suspiraron -…………...estoy cansado y tengo la boca seca, creo que por hoy ya es suficiente……- un sonoro aplauso redondo inundó la sala.

Un reguero de personas acudieron a mi al acabar la sesión, mostrando mucho interés y apoyo, una de la últimas en acercarse fue la joven a la que le había guiñado un ojo, se me acercó nerviosa.

-YO: hola…….Teresa.

-TERESA: ¿cómo…….. sabes mi nombre? - sonreí y rocé la chapa que la identificaba en su solapa.

-YO: magia – se sonrojó un poco.

-TERESA: jajaja encantada, me ha gustado mucho lo abierto que has sido.

-YO: gracias, necesitaba soltarlo.

-TERESA: yo he pasado por lo mismo………soy adicta a la marihuana……mis padres son muy severos y no pararon hasta verme aquí, se que parece una chorrada pero compartir tu carga ayuda a llevarla.

-YO: la verdad, ya lo he dicho, estas cosas me parecen una estupidez, pero ahora me siento mucho mejor……….sienta bien hablar con alguien, es una pena que tenga que acudir aquí ante desconocidos, y no pueda hacerlo en mi vida privada.

-TERESA: ¿no tienes a nadie con quien compartir tus preocupaciones? pareces muy solicitado según has dicho.

-YO: ya, pero son solo sexo, quieren de mi lo que les puedo dar, pero no se preocupan por mi, no puedo hablar con ellas ……pues como estoy hablando ahora contigo, y eso me frustra……y vuelvo entre sus piernas como un loco.

-TERESA: es una pena oír eso…………..no se………….quizá si pudieras hablar con alguien cuando te sientas así……no recaerías.

-YO: eso seria maravilloso, pero nadie se ofrece……..

-TERESA: pues yo misma…..que no se diga, ten mi número, y llámame cada vez que vayas a caer, a la hora que sea, hablamos o si necesitas despejarte podemos quedar a tomar algo.

-YO: te lo agradezco de corazón, pero no quiero importunarte….- se acercó metiendo su teléfono escrito en un trozo de papel en un bolsillo de mi camisa.

-TERESA: necesitamos apoyarnos, ya lo has oído, cuando eso, me llamas – pegó su mano a mi pecho sobre el papel doblado.

Al despedirnos me fijé en ella, era una mujer menuda, de unos 1,65, morena de pelo largo, con aspecto lúgubre, vestida de negro y con una falda larga con chaqueta por encima, aparentaba más de edad que la que tenia, unos 26 años, agradable de cara escondida tras unas gafas grandes, era difícil adivinar su figura, pero parecía bien formada. No tardé ni 3 días en llamarla desesperado, quedamos en un parque al que acudió en menos de 10 minutos, me vio sentado en el suelo apoyado en una fuente temblando, se arrodilló a mi lado.

-TERESA: ¿que te pasa?

-YO: no he podido…….he querido…….hablar con una chica, solo hablar……..y ………y he terminado acostándome con ella…..¡¿por que…..dios………por que no puedo evitarlo?! – lloraba a lagrima viva.

-TERESA: está bien, no pasa nada, una ligera recaída, pero no puedes quedarte aquí.

-YO: no aléjate……no quiero hacerte daño……a todas las hago daño.

-TERESA: no seas bobo……vamos a mi casa, vivo cerca.

-YO: no……y si….

-TERESA: tranquilo, se tener la piernas cerradas…….vamos.

Me ayudó a levantarme, más como apoyo moral que otra cosa, le sacaba 2 cabezas y casi 40 kilos, me arrastró a su casa, me dio una tila y se sentó a mi lado, calmándome.

-TERESA: ¿tan mal ha ido?

-YO: yo no quería, la chica me sonrió, hablamos, y cuando me quise dar cuenta ya estaba de rodillas chupándomela………de rabia…….la……..la he destrozado……la he dejado en su cama con espasmos y tiritando…….tengo que parar.

-TERESA: para eso estoy aquí, para ayudarte y tranquilizarte, aquí estás a salvo.

-YO: ¿vives sola? Por favor dime que hay alguien más, así me controlo…….

-TERESA: jajajaa no eres tan irresistible como te crees, no, vivo sola, mis padres viven juntos en otro piso y vienen a verme, pero mi madre está de viaje mucho y mi padre…..bueno, a mi padre casi nunca está últimamente, así que estamos solos

-YO: muchas gracias……..pero tengo que irme……- me puse en pie, me sentó haciendo toda la fuerza que pudo.

-TERESA: tú no te vas a ningún lado, tienes que descansar y tranquilizarte……..pasar unas horas sin tu adición, eso te ayudara.

-YO: no puedo, vaya donde vaya tengo a chicas dispuestas a ser folladas.

-TERESA: pues aquí, no, quédate a dormir conmigo esta noche, mañana te recuperarás.

-YO: no…..no lo entiendes…….caerás tú……

-TERESA: jajaja por favor……..hazme caso – asentí al sentir su mano en mi espalda.

Cuidó de mi hasta altas horas de la madrugada, charlamos sobre su vida y la mía, lo mucho que echaba de menos a mi familia y ella a la suya, por motivos diferentes ambos les teníamos apartados, me lo demostró cuando habló con su padre por teléfono, tan enfadada por que cancelaba de nuevo una cita para comer juntos al día siguiente, me preparó un catre en el sofá y se acostó en su cama, al día siguiente ya parecía recuperado, desayunamos y la invité a comer para que no perdiera la reserva y así agradecérselo, nos despedimos. Pasadas unas semanas, quedábamos a diario, insistió en que conociera a su familia, pero solo logró presentarme a su madre, que se pasó con su hija una semana, su padre estaba siempre muy ocupado.

Cris – Otra madre.

Teresa era bastante agraciada, la verdad, quitando tanta ropa se le adivinaba un bello cuerpo, era morena y con el pelo liso por los hombros, cara fina y gentil, con una nariz puntiaguda que le daba un aire agradable a la cara, delgada y con aspecto de haber pasado mejores días, pero aun así tenia un cuerpo bonito, sin apenas cintura pero con rasgos femeninos claros en pecho y cadera, casi siempre en vaqueros y top sueltos, con zapatillas cómodas, que disimulaban que en realidad estaba muy buena. Todo sin duda heredado de su madre, Cris, que era más esbelta y alta, con un cuerpo que nada tenia que envidiar a su hija, una versión madura de ella con más cadera por el parto, la madre se había teñido de un rubio brillante que dejaba claro el bote en unas raíces negras, similares en físico, pero la madre lo lucia mejor con vestidos, trajes elegantes y siendo generosa en escotes y enseñando piernas con zapatos que la dignificaban. Hice de chofer de ambas esa semana, fui a buscarla al aeropuerto, las dejé en casa y luego las llevé a cenar por que su el marido y padre volvió a anular los planes, después llevaba a Teresa al trabajo o a las reuniones, y cuando no, acompañaba a la madre a algún evento con amigas o a comprar ropa a un centro comercial, una de esas veces regresábamos a su domicilio de un día de compras, me hizo entrar con ella en los probadores para decirme como le quedaba una falda de tubo que me la puso dura, se debió de dar cuanta y me pidió que saliera, cogí de la mano a una de las dependientas y en poco tiempo me la estuve follando a base de bien en un trastero, cuando salí vi a Cris buscándome y cuando me localizó vio a la dependienta salir confusa y sonriendo detrás de mi, no dijo nada hasta regresar al coche, siempre se sentaba detrás pese a ir solos.

-CRIS: eres un sol, no se como puedo agradecerte todo esto.

-YO: no hace falta, su hija se ha portado bien conmigo, y así me distraigo.

-CRIS: espero que no te enfades con ella….me ha contado tu problema.

-YO: no es ninguna molestia, me gusta hablar de ello.

-CRIS: la verdad, no se cuando se inventaron eso de los adictos al sexo, antes simplemente te llamaban guarro jajajaja

-YO: tiene razón…….la verdad es que no creo mucho en eso, pero me ayuda a alcanzar mi objetivos.

-CRIS: yo no creo que tengas un problema, eres un joven guapo y apuesto, es normal que las mujeres se te rifen.

-YO: por favor, me va a sonrojar, una mujer tan exquisita como usted sacaría los colores a cualquiera – sonrío halagada juntándose las piernas de forma elegante.

-CRIS: muchas gracias cielo, es una suerte que mi hija haya encontrado a un hombre como tú….

-YO: la suerte es mía por encontrarla a ella, pero siento decirla que no somos pareja ni nada.

-CRIS: ya lo sé, si no lo de la dependienta me hubiera puesto furiosa……- “está jugando” - ……… ¿y por que no?

-YO: no es por falta de ganas, se lo aseguro, creo que tiene miedo de hacerme recaer o algo.

-CRIS: vaya tontería, si fuera yo hace tiempo que estarías en mi cama – sonrió evidenciando la broma.

-YO: si fuera por mí, hace tiempo que estaría en tu cama – no había broma alguna, y sus ojos se tornearon de nuevo halagada, acariciando sus piernas por encima de la falda del caro traje que llevaba.

-CRIS: no hagas el bobo, estoy casada.

-YO: de un marido que la ignora, a usted y a su hija, no me diga que viaja tanto por placer, huye de él y de sus ausencias – se enfadó un poco.

-CRIS: aunque así fuera, no es asunto tuyo.

-YO: le pido disculpas, pero la verdad duele.

-CRIS: pues si…..pero tenemos que llevarlo lo mejor que podamos.

-YO: no se ponga triste, le afea su preciosa cara, y no le hace justicia.

-CRIS: jajaja que bribón eres, anda, calla y conduce.

El resto del camino fue en silencio, cruzando miradas por el espejo retrovisor, se había quitado la chaqueta del traje y una camisa floreada presentaba un botón menos cerrado, enseñando canalillo, incluso juraría que se había remangado la falda por encima de las rodillas. Al llegar a su casa aparqué y subí sus bolsas, me invitó a pasar para tomar algo por las molestias y charlamos un rato en el sofá, yo apenas toqué un vino blanco frío que sacó, ella se bebió media botella, y se mostraba cariñosa agarrando del brazo o de la pierna, sus ojos se escapaban al bulto de mi entrepierna y bromeaba con el calor que le entraba, por el vino, claro.

-CRIS: no veas como sube esto……

-YO: está acalorada, quizá debería quitarse ropa jajajajaja

-CRS: ya te gustaría………pero no, soy una señora casada, no puedo ir en pelotas delante de los ligues de mi niña.

-YO: no seria en pelotas, si no en sujetador, es como el biquini.

-CRIS: es que…..- me susurro algo bebida -…….no llevo sujetador shhhhh.

-YO: no la creo, si no lo llevara no las tendría tan bien puestas.

-CRIS: ¿que te crees que soy, una vieja arrugada?

-YO: no, pero……..- me cogió de las manos dejando la copa en la mesa y me plantó mis palmas en ellas, sintiendo sus senos firmes sin sujetador.

-CRIS: ¿Qué, a que no llevo?

-YO: no……está claro, aunque podría ser muy fino……debo asegurarme – le fui desabrochando la camisa floreada ante su sonrisa sórdida, cogió la copa y la apuró justo cuando la abrí del todo dejándome sus 2 buenas tetas a mi vista, algo castigadas por el edad pero muy bonitas, coronadas por unos pezones grandes y oscuros, erectos.

-CRIS: ¿ves?………soy una mujer de palabra.

-YO: ¡y que mujer!…….- mis manos acariciaron sus senos, y ella ni se inmutó, sacó pecho incluso.

-CRIS: ¿te gustan?

-YO: me encantan – lamí uno de sus pezones y ella me agarró la cabeza con suavidad.

-CRIS: esto no está bien…- se agachó a dejar la copa -…..mi hija…- se abrió la camisa floreada -…..mi marido…- entrelazó sus dedos con mi cabello en la nuca pegándome a ella - …ohhhhh sigue……..- una de mis manos se metió entre sus piernas subiendo por debajo de su falda para descubrir que tampoco llevaba bragas, una leve mata de pelo reinaba la zona, y se abrió para facilitar mis caricias en sus labios mayores.

-YO: ¿hace cuanto que no se la follan, mi señora?

-CRIS: hace 4 años que no me toca mi marido – suspiró agitada relamiéndose cuando mis dedos hurgaron el ella.

-YO: eso no es lo que le he preguntado, me enfadaría si esto fuera solo un luego para usted y no me dejara acabar por que está casada.

-CRIS: eres muy perspicaz………. me tiro a mi agente de viajes desde hace 5 años, y siempre encuentro algún chico dispuesto a hacerme feliz en los hoteles, ¿eres tú ese chico hoy?

-YO: lo soy.

Me puse en pie y me desnudé, mi polla dura saltó en su cara y del susto se cayó al suelo del sofá, de forma torpe agarró mi tiesa estaca, y masturbó sin creerse aquello, luego sonrió y lamió mi glande con astucia, se soltó el ligero recogido de su cabello, intercalando lamidas con frotar mi polla por sus pechos, la puse de pie, bajándola la falda, tenia algo de celulitis pero estaba para follarla a lo bestia, la abracé subiéndola a mi, rodeándome con brazos y piernas, mi rabo apuntó a su coño chorreando, podía sentir el calor que emanaba de su pelvis, de una estocada se la metí entera, las que han sido madres nunca me han dado problemas a la hora de ser folladas, gimió poseída con cada vaivén y lamía sus pezones tirando con los dientes de ellos, antes de que tocara el suelo reventó en un orgasmo histriónico, cayó al suelo de nuevo, ahora chupando mi polla llena de fluidos suyos, luego gateó hasta la cama, me arrodillé tras ella y se le metí hasta las entrañas por su agraciado coño, la azoté y agarré sus senos para coger inercia y sacar a la bestia destrozándola media hora hasta que se desvaneció en una nube de placer y sudor, ni se dio cuenta de que usé el móvil, luego empecé a trabajarla el culo, parecía virgen, pero no se quejó cuando metía un dedo tras otro y al final, mi polla se abrió camino haciéndola gritar de dolor, pero con cada lenta embestida rebajaba el dolor, y un gemido ahogado de lujuria crecía, pasados 20 minutos eyaculé en su ano y trabajé su cuerpo hasta tenerla dura de nuevo, follándola por el culo tan fuerte que los orgasmos anales resonaban por todo el piso, la tenia a 20 uñas sobre la cama gritando a pleno pulmón que le estaba partiendo, que la dolía y que no parara nunca, embestía tan fuerte que la cabeza de la cama rebotaba contra la pared al ritmo de las acometidas, la bestia terminó de sacarla de rueda y 3 orgasmos anales seguidos la retorcieron como un hierro candente en el fuego, recibió mi semen en su culo como una bendición y nos tumbamos en la cama jadeando, se deslizó por la cama para besarme, era la 1º vez que lo hacia, ya la había follado 3 veces, por el culo incluido, y ahora nos besábamos, recorrí su perfil con mis dedos.

-YO: dios…….estoy agotado……..vaya pedazo de mujer.

-CRIS: gracias…tú….tú no has estado mal………dios…….me duele el culo jajajaja……..no me lo habían abierto desde hacia mucho…….

-YO: un desperdicio, follas como una diosa – mentira.

-CRIS: una pena que alguien no sepa apreciarlo……..

-YO: tú marido es un capullo, perdóname que te diga.

-CRIS: es un buen hombre………pero descuida mucho a su familia, antes me molestaba, pero ahora ya……. mi hija tiene su vida hecha y yo viajo para perderle de vista.

-YO: pues divórciese, así podríamos estar juntos jajajajja – era una broma pero le metía la idea en la cabeza.

-CRIS: jajaja no te creas, lo he pensado, estoy harta de él y de sus desplantes, pero ponerme a buscar ahora un hombre……..se me hace agotador.

-YO: tal y como follas, yo mismo me pasaría el resto de mi vida haciéndote feliz – me miró atenta, casi como si oírlo en palabras de otro le diera fuerza a la idea.

-CRIS: ¿en serio te conformarais con una mujer como yo? A tu edad y con esa pedazo de……..

-YO: no seria conformarse, seria aspirar – me la monté encima y la convencí como mejor sabia, con sexo, la estuve montando otro par de horas y al final gritaba poseída que iba a dejar a su marido, mientras me cabalgaba con sus senos botando al son de mis caderas.

Me pasé 3 semanas siendo su sombra, anuló sus viajes y casi empezamos a salir como pareja, salíamos al cine, a ver teatro y cenar, su hija se enfada, pero al ver a su madre feliz y a mi distraído se pensó que aquello estaba bien, pobre, nos sospechaba que me follaba a su madre unas 5 veces al día.

Un día quedé con Alicia y Mara, en un parque bullicioso y de forma casi clandestina, al acudir Mara me recibió con un largo y sonoro beso en los labios con lengua, estaba preciosa con un ligero vestido largo blanco, hasta los tobillos, parecía un ángel recién caído del cielo, y si Alicia no hubiera estado allí esperando la hubiera llevado a su casa a recuperar el tiempo perdido, Alicia se levantó a abrazarme con cariño, al verla toda la ira y la oscuridad de mi ser se disipaba, era la viva imagen de la sencillez, una blusa anaranjada sin escote y una falda elástica negra hasta las rodillas, sin maquillaje ni un peinado cuidado, como su hermana que parecía que venia de la peluquería, y aun así le robaba la mirada a cualquier hombre con una simple coleta y una sonrisa digna del mejor de los poemas. Nos sentamos a charlar.

-MARA: ¿como te va?

-YO: bien……llevo un año con esta mierda……..pero bien, en la recta final.

-ALICIA: ¿como te va con la mujer?

-YO: ya es mía, el otro día la acompañé al juzgado, va a presentar la demanda de divorcio.

-ALICIA: te habrá costado mucho…….- sonrió algo triste, sin arrugas en el contorno de sus bellos ojos pardos.

-YO: me ha hecho sudar, pero no me importa en absoluto, ya tengo lo que quería de ella.

-MARA: ¿y la hija?

-YO: mucho más recatada que su puta madre, nunca mejor dicho, esta convencida de que me está ayudando con mi “problema”, pero ya preveía esto, es un coste por acercarme sin levantar sospechas.

-ALICIA: ¿en el grupo de apoyo dijiste lo que comentamos?

-YO: si, palabra por palabra, las medias verdades siempre funcionan bien, aunque la haga recordar todo lo que dije, es inútil o ya lo saben.

-MARA: pues llegó la hora.

-YO: no estoy nada seguro de esto…….

-ALICIA: lo hemos hablado mil veces, es la mejor manera.

-YO: es ponerte en peligro a ti y a tu hermana, de nuevo, no………no quiero, dadme un par de semanas más, encontraré la manera.

-ALICIA: llevamos así 2 meses, no hay otra manera.

-MARA: queremos hacerlo…….sabemos el riesgo que trae, y lo aceptamos.

-YO: pero yo no……así que hasta que no esté seguro no haréis nada………por favor.

-ALICIA: no se si puedo seguir manteniendo la farsa, creo que el psicólogo empieza a olerse algo, ya no se ofrece tanto como antes……

-YO: no sabemos si se llegó a ofrecer nunca, quizá sean desvaríos tuyos.

-ALICIA: por favor Raúl, llevo 4 años de carrera, se más de psicología que algunos de esos papanatas que me han puesto, y este es diferente, trabaja para ella, me esta tanteando, están desesperados por que no dan contigo, has cortado lazos con todos, nadie sabe donde vives, tu familia es inexpugnable y solo saben que nos vienes a ver a nosotras, somos su única opción de llegar a ti, y lo saben, pero si sigo dando largas no me creerá cuando de el paso.

-YO: una vez que quite a Carlos del medio tengo a Eleonor pillada, pero hasta entonces es muy arriesgado, ella está rabiosa y cegada, no se lo verá venir, pero él si.

-MARA: pues hazlo rápido, a mi también me andan tentando, o eso creo, tengo a un chaval que está buenísimo detrás de mi…….

-YO: eso no significa nada, eres preciosa – me acarició la cara con sus delicados dedos.

-MARA: gracias amor, pero una ya se huele estas cosas.

-YO: queda con mi madre, y preséntaselo, ella no falla.

-ALICIA: tú céntrate en que Zeus no se salga del plan, Hera no fallará – la rotundidad de su frase resonó en mi cabeza.

-YO: no se como agradecer esto………podríais caer en sus manos y venderme, seguro que sacaríais mucho dinero……..- se miraron y se leyeron la mente como hermanas que eran, Mara cogió algo de su bolso sin sacarlo.

-ALICIA: queremos ayudarte, pero no hacemos esto por ti…….. o no al menos totalmente.

-MARA: lo hacemos por lo que le pasó a Alicia, por Lara……..y por Ángel……

-YO: ¿quien es Ángel? - Mara extendió su mano y me dio algo que no reconocí de primeras.

-ALICIA: Ángel……..- una ligera lagrima calmada por su hermana recorría su mejilla - ……..Ángel es el nombre que le iba a poner……- entonces miré lo que tenia en la mano, “¡un test de embarazo!”.

-YO: ¿dios……………….Lara estaba………embarazada?

-MARA: si, nos lo dijo unos días antes de………..estaba muy asustada……. entre nosotras la convencimos de que era algo bueno, o eso creíamos, pero ella estaba muy deprimida – cerré mi puño sobre el test de embarazo positivo que tenia en la mano, una gota salada cayó de mis ojos al dorso de la mano, Alicia me cogió de la mano, estaba a punto de partir el test por la mitad de la rabia que tenia.

-ALICIA: aunque fuera una violación, ella pensó en tenerlo……pero luego se le echó todo encima……….murió por que no pudimos ayudarla, murió por que tenia una vida creciendo dentro de ella y no supimos como tratarla…..Raúl, no hay dinero que pague el odio que le tenemos a esa mujer, vamos a hundirla en la miseria, vamos a hacer que se arrepienta el resto de su vida, y no pararé hasta verla tan desesperada como Lara se debió de sentir, como yo me sentí al subirme a ese balcón…….pero te necesitamos………yo te necesito………. para acabar esto de una maldita vez.

-YO: lo haré..........os juro que esto terminará pronto…..pero no pienso precipitarme, no se perderán más vidas, no en mi guardia – Alicia, llorando, soltó una carcajada leve, cogió mi cara que estaría roja, compungida y congestionada.

-ALICIA: lo sé, no hace falta que te pongas tan melodramático – me hizo sonreír, “¿como logra calmarme de esta manera?”

Los tres nos fundimos en un abrazo lleno de una mezcla tan dispar de sentimientos que no sabría reconocerlos, Mara se unió pero era un anexo, Alicia me había tocado la fibra, cosa nada, nada, nada fácil. Les devolví el test, con el plástico rajado de la presión de mi mano, y me despedí recomponiendo mi postura, si alguna vez pensé que todo aquello no merecía la pena, o si alguna vez dudé de mi venganza, ahora estaba más seguro que nunca.

Regresé a casa de Alexis, donde aun vivía con ella, era cierto que estaba totalmente a mi merced y que ya follaba con ella, con todas las vejaciones que dije en el grupo de apoyo, incluyendo que ahora era una de las “empleadas” de Madamme, pero seguía siendo mi esclava personal. Era ideal para desaparecer, de cara a todo el mundo era cruel, no ayudaría a nadie, ni siquiera tenia un informe en el famoso maletín que me dio Eleonor, yo había dejado el trabajo casi 1 mes antes de irme a vivir con ella, nadie me buscaría allí, ella y sus cuentas me hacían virtualmente imposible de seguir o rastrear, eso como poco, luego follar con ella era aun experiencia nueva cada día, besaba de escándalo, y literalmente Zeus la hacia de todo, probó hasta la lluvia dorada o cagarme encima de ella, era insaciable a la hora de humillar y ella a la hora de ser humillada, ¿por que deshacerse de una mujer así de útil? De hecho hasta me traía a casa de vez en cuando a alguna aprendiz de sado o clientas sumisas, y follaba con 2, 3, 4 o hasta un día con 5 mujeres en la cama conmigo, hasta el propio Zeus se vio sobrepasado. Ese día al regresar no fue diferente.

Al llegar a casa estaba desnuda en el suelo, se alegró de verme, llevaba unos días sin verla y casi saltaba por el suelo de felicidad, la casa parecía la de de un torturador, llena de cadenas, ganchos y potros, la até como Madamme me enseñó, con unas lazadas estudiadas, manos a la espalda con cuerdas sobre las piernas doblándoselas y apretándolas con una mordaza en la boca y un consolador metido por el culo al que si tirabas de las cuerdas se introducía más en su ano, una vez inmovilizada la colgué con un gancho y una polea la suspendía en el aire a medio metro del suelo, colgada boca abajo, gimiendo y llorando al sentir como el peso de la cuerdas hacia que su ano se llenara de plástico y su cuerpo de excitación.

-ZEUS: dios, eres la piñata más bonita del mundo, debería darte de palos hasta saber si tienes caramelos dentro………pero siempre eres tan complaciente, te vas a quedar así un par de horas hasta que me den ganas de follar.

-ALEXIS: ummmmmm.

Me hice la cena, vi un partido de fútbol con ella balanceándose a un lado de la TV, trataba de alzar las piernas para que las cuerdas no hicieran tanta presión pero el cansancio la vencía y eso la generaba una fricción continua en su ano, su culo se resentía, le dolía, eso la humillaba, y por lo tanto, la excitaba más, creo que tuvo 2 orgasmos anales y el suelo se llenó de fluidos que goteaban entre sus muslos. Seguramente si entrara la policía por la puerta eso seria ilegal, pero allí estaba ella, mirándome con la piel blanca y las mejillas sonrosadas, excitada y feliz de ser ultrajada de esa forma. Al pasar el tiempo me acerqué a ella, su rostro era la desesperación absoluta, me arrodillé a su lado y metí mi cara entre sus piernas, lamiendo su empapado coño, al sentirlo se retorció sobre sus ataduras y cuando mi lengua la penetró y mis dedos rozaron su punto G se corrió 3 veces seguidas quedando medio ida, volvió en si al sentir mi verga entrando y saliendo de su coño, ella no paraba de moverse pero no podía hacer nada, solo dejarse hacer, y más allá del placer o dolor que la pudiera hacer sentir, era esa sensación de impotencia absoluta la que la hacia gozar de alguna forma que nunca terminé de comprender, pero si de usar. Estuve 20 minutos desatado hasta llenarla de semen, sus corridas fueron tantas que cuando la bajé resbaló con sus propios jugos, la desaté con cuidado, acariciando las marcas del cordaje en su cuerpo, y su trasero amoratado, lleno de azotes y marcas de fustas, mías o de los clientes de Madamme, la hice limpiar todo y acudir a mi cama cuando terminara, lo hizo como siempre, sin rechistar y dándome las gracias, todavía no se por que, me las daba constantemente, yo ya estaba acostado desnudo cuando ella apreció totalmente desnuda ante mi, recién duchada como me gustaba que fuera a mi cama.

-ALEXIS: ¿como desea mi señor que duerma hoy?

-ZEUS: te has portado bien, ¿como has estado durmiendo en mi ausencia?

-ALEXIS: como me ordenasteis, desnuda en la cama del suelo – la imagen de ella durmiendo así con su cama acolchada vacía a menos de 1 metro me hacia sonreír, seria demencial y una locura para cualquiera, menos para ella.

-ZEUS: buena chica, ven aquí - gateó por la cama a mis brazos y me pasé 1 hora besándola, siento repetirme pero aquella mujer no besaba, entregaba su alma con los labios.

Me quedé dormido sin darme cuenta, con su cuerpo fresco pegado al mío, serian las 4 de la mañana cuando mi móvil sonó, era el número de mi madre, la tenia expresamente prohibido llamarme, salvo emergencia.

-YO: ¿que pasa?

-MAMA: ven a casa, ya.

No hacia falta más, me vestí como el rayo y salí disparado con el coche a ese maldito ático, no había dejado a mi madre ni explicarse, así que mil ideas pasaban por mi cabeza, la sola idea de que les pasara algo me daban ganas homicidas, no recuerdo haber cogido el ascensor pero me encantaba ya en el 10º piso llamando a la puerta jadeando, al entrar y ver a mi madre en bata y despeinada me tranquilicé un poco, la di un beso, “¿cuanto hace que no la veo, 3 meses?, quizá más, ¿en mis 24 cumpleaños hicimos algo?”

-YO: ¿que ocurre? – se giró dejándome ver a Dany con su hijo sentados en el sofá, el crío jugaba con una consola portátil, abrazado por su madre con una cara en la que se veía que había estado llorando, con un taza de algo humeante delante de ella.

-MADRE: se han presentado aquí hace 2 horas, estaba muy nerviosa así que la he tranquilizado un poco, pero pedía hablar contigo.

-YO: ¿te ha dicho algo?

-MADRE: nada…….pero solo una cosa pone así a una madre……..su hijo – nos acercamos lentamente , al verme Dany sonrió como si hubiera visto a su salvador, mi madre con su natural sabiduría se llevó a su hijo a la cocina con la promesa de algún dulce, era mayor como para saber que pasaba algo pero no lo suficiente como para negarse a tal ofrecimiento, así que me senté al lado de Dany y esta me cogió de la mano, ansiosa, besándola y poniéndose de rodillas ante mi.

-YO: para, no hace falta que te pongas así, ¿que ocurre? – la ayudé a levantarse, pero ella se resistía.

-DANY: por favor……….yo necesito ayuda……tú…..tú ser bueno conmigo, yo quiero a tu familia……..pero yo no poder con esto.

-YO: cálmate, respira hondo y dime ¿que te pasa?

-DANY: yo……..yo trabajar y cuidar de familia, como tú me dijiste, ellos buenos…..pero en mi casa las cosas no van bien……..mi marido dejó trabajo que le consiguió padre tuyo, hace meses, bebe mucho y tiene dinero, no se de donde lo saca……..él…..él va de putas…..yo se….pero por mi niño me hago tonta….

-YO: ¿no te habrá puesto la mano encima?

-DANY: no……..no……… aún……él enfada mucho cuando bebe…….grita y me da miedo……… y asunta a mi hijo…..pero no pega.

-YO: eso es solo el 1º paso, no tardará……

-DANY: eso a mi da igual……no seria primero que me pega……..pero ahora dice que quiere divorcio………que soy mala mujer y él no feliz…..y que ……….- comenzaba a llorar – …..y que……..pedir custodia de hijo………..me quiere quitar a mi pequeño.

-YO: eso es absurdo, la mayoría de veces la madre se queda la custodia, eres una buena madre con un sueldo, y él un borracho sin trabajo.

-DANY: ya….pero él tener abogado caro………y ……..y decir que usar mi pasado…..cuando fui puta, tengo antecedentes……..que yo ser mal ejemplo………hoy volver loco, decir que mañana irse con niño……yo ….yo no sabia donde ir……yo no quiero estar en casa con él………dice que un día se lo llevará y no volver a verlo…..yo no permito, yo hago locura……….yo no dejo que eso pase……por favor…ayuda……- volvía a vencer su cuerpo para besar mis manos, estaba totalmente devastada, no me hacia falta más, un abogado caro y dinero que salía de ningún sitio, Eleonor había vuelto.

-YO: no te van a quitar a tu hijo, eso tarda mucho en tramitarse, y si no quieres no vuelvas a casa, por ahora puedes quedarte a vivir aquí, tenemos la habitación de invitados libre y la mía, puedes trabajar de interna.

-DANY: ya………yo pensar….si…….pero yo no poder……..gran señora hace meses dejó de pagar gastos de piso, incluido mi sueldo……

-YO: ¡¿que?! ¿Por que no me has dicho nada?

-DANY: yo no quiero molestar, además madre tuya me paga buen sueldo, pero gano menos y no puedo pagar.

-YO: no vas a pagar nada, tendrás tu sueldo y donde vivir, por ahora es lo único que puedo ofrecerte, aquí no te pasará nada malo –se lanzó a mis brazos, llena de algo parecido a la felicidad, pero que parecía más bien alivio.

-DANY: yo……..yo estar agradecida de por vida…..yo no saber como agradecer yo……- la cerré los labios con un dedo, se iba a volver a ofrecer a algo que no necesitaba.

-YO: tú cuida de tu hijo y de mi familia, llámame si pasa cualquier cosa o me necesitas, yo me encargo de tu marido.

Les instalamos en el cuarto de invitados, y allí se durmieron sintiéndose a salvo, yo me quedé unos minutos charlando con mi madre.

-YO: ¿por que no me dijiste que dejaron de pagar las cosas?

-MADRE: por que no era importante, ganamos suficiente dinero como para poder pagar las cosas, incluida a Dany, y no supondrá ningún problema que viva aquí, nos sobran 2 habitaciones desde que te fuiste.

-YO: siento todo este jaleo.

-MADRE: no te preocupes, ¿como estás?

-YO: no lo se, puede que bien…..

-MADRE: te echamos de menos.

-YO: y yo a vosotros, pero no os puedo poner en peligro, solo con venir aquí lo hago……..- de golpe caí en por que estaba allí, “me han hecho salir de mi escondite”.

Mi familia estaba de acuerdo, incluso ya tenían pensado tenerla de interna antes, en 2 días llevamos sus cosas, y estaba viviendo con mi familia, por algún motivo me sentía mejor con ella en el ático, y eso aceleró mis planes, el 1º por la ola de odio creciente, había estado un año trabajando en la sombra, y casi había olvidado por que lo hacia, ahora lo tenia claro. Lo 2º era por que Eleonor estaba muy desesperada, no me encontraban y su única forma de hacerme salir era haciendo daño a los que me importaban, si eso le hacia a mi asistenta, ¿que le haría a Alicia o Mara?, ¿o a mi familia?, me habían hecho salir de mi agujero, los encuentros con Alicia eran fortuitos y sin avisar, en sitios distintos y de forma aleatoria, no podían saber donde aparecería, pero ahora si, en cuanto amenazaron a Dany sabían que acudiría a mi, así que lo 1º fue llevar mi coche al taller de un amigo de Adrián, mi amigo bala perdida, allí despedazaban coches robados y los vendían por piezas, encontraron 3 micros y un localizador GPS, todo nuevo y recién puesto, yo apenas había estado en el ático un par de días y lo habían aprovechado bien, fui listo y no pasé por ningún sitio destacado hasta que tenia el coche limpio, los dejé en el coche para que pareciera que aun no lo sabia, quedándome en casa de mis padres hasta saber como proceder, pero me habían cabreado, y lo peor, eso enfadaría a Zeus.

Deshacerme del marido de Dany fue lo más sencillo del mundo, se pasó 2 semanas llamándola y acudiendo a la entrada de nuestra casa reclamando que volviera a casa, la mitad de las veces borracho, 3 veces llamamos a la policía dando parte, a la 3º semana cumplió su amenaza y presentó la demanda de divorcio y la petición de custodia, mi madre la acompañó en todo momento, dejamos que avanzaran los tramites, los antecedentes de Dany eran muchos por prostitución pero todos eran antiguos, en cambio lo cargos más recientes eran de él por escándalo publico y amenazas durante esos días, no tuve más que seguirle una semana y ver donde frecuentaba a las putas, 3 días seguidos acudió a la misma, llevándola al mismo descampado cutre y se la tiraba un buen rato, (jamás entenderé que acudiera a putas teniendo la mujer que tenia), Adrián se ocupó de que a esa puta no le faltaran un par de gramos de cocaína, la chica la aceptó sin preguntar al ser gratis, y el 4º día que la fue a ver esperé a que se pararan en mitad de un descampado y comenzaran a follar, llamé a la policía anónimamente diciendo que la estaba pegando, acudieron y pillaron al marido con el dinero en la mano, la polla fuera y esnifando la coca del cuerpo de la puta, no solo le detuvieron por contratar a una puta y consumo de drogas, si no, que le generó unos cargos que cualquier abogado decente aprovecharía para evitar que la custodia de su hijo fuera suya. Para cuando llegaron las Navidades Dany ya era parte de la familia y su hijo también, con la custodia totalmente suya, y el padre solo podía verle cada 2 fines de semana, bajo supervisión, y eso para cuando saliera de la cárcel, ya que se pasó 4 meses allí, la puta no había tomado tanta y la cantidad era superior a la necesaria para pasar de una multa a cargos penales, el abogado caro se esfumó al menor problema, no les interesaba aquel hombre, solo hacerme salir, pero no les había servido de nada, tenia en una bolsa lo que habían metido en mi coche, que revisaba a diario para ver si me ponían algo más.

Decidí actuar, pasadas las fiestas monté un numero de circo, sin duda con el GPS me estarían siguiendo de lejos, así que lo rompí, al par de horas cerca de los micros “llamé” por teléfono quedando en un parque, en determinado sitio, a determinada hora, haciendo hincapié en que me encontraría con alguien que había traicionado a Eleonor, ya solo podían acudir a la “cita” o me perderían de nuevo, dejé los micros en el lugar acordado metidos en la bolsa y me alejé unos 250 metros desde una línea de árboles que me cubrió, a la hora de la cita no se presentó nadie, y pasada 1 hora un coche aparcó cerca, y salieron 3 hombres y Carlos, uno de los hombres pasó reconociendo la zona un par de veces, Carlos se cansó y se acercó, vio la bolsa, y al abrirla encontró las micros, soltó una sonrisa leve, se volvieron a meter en el coche y se fueron, les seguí con la vieja motocicleta que me compré junto al coche, como me olía se fueron a la urbanización donde vivía Eleonor, y pasadas unas horas salió un coche en el que solo estaba Carlos, le seguí con cautela, y averigüé que estaba viviendo en un hotel de 2 estrellas no muy lejos de la urbanización, incluso la habitación donde estaba, desde ese día estudié cada uno de sus pasos durante el tiempo suficiente como para aprenderme sus rutinas y cepillarme a una de las limpiadoras para hacerme con una de las llaves maestras.

Lo tenia todo preparado así que solo tenia que esperar noticias de Cris, por fin le pidió el divorcio de su marido, entonces y solo entonces me follé a Teresa, la hija de Cris, no tiene nada relevante como por fin la abrí de piernas, follaba peor que su madre, con eso digo todo, lo importante es que ocurrió, y obtuve documentos gráficos de todo. Cuando lo tuve entré en la habitación de Carlos unas horas antes de que apareciera, y me senté a esperarle, tenia una mesa llena de papeles sobre mi, y una pared con fotos y líneas interconectando mi vida con ellas, cuando entró estaba tan ensimismado que no me vio, solo al dejar sus cosas se paró de espaldas a mi, y de golpe se giró apuntándome con la puta pistola táser, al verme su rostro palideció, pero lo ocultó bien.

-CARLOS: ¿como coño has dado conmigo?

-ZEUS: no eres el único que sabe seguir a alguien …– le tiré el GPS roto a los pies – …..Carlos.

-CARLOS: sabía que no funcionaria, pero esa loca está desesperada por dar contigo.

-ZEUS: tranquilo, a ella ya le llegará su hora, pero te ha llegado la tuya, Carlos.

-CARLOS: no estás en posición de amenazarme.

-ZEUS: ¿eso crees, Carlos?.

-CARLOS: has sido un estúpido al venir aquí, puedo dejarte KO y entregarte a ella.

-ZEUS: no me cabe duda, pero no lo harás…….Carlos.

-CARLOS: ¿y eso por qué?

-ZEUS: varios motivos, el principal es que cuando salga de aquí no podrás tenerte en pie, el 2º por que vas a dejar de trabajar para Eleonor, por lo tanto ya dejaré de interesarte, y el 3º por que aunque te creas en ventaja, no lo estás ……– mi tranquilidad le hizo dudar, y más cuando me puse una porra acolchada de medio metro en el regazo, prestada de Alexis – …….Carlos.

-CARLOS: ¿por que repites mi nombre?

-ZEUS: es solo para usarlo mientras tenga valor……..Ignacio – su cara se puso blanca y se acercó a medio metro de mi ofuscado.

-CARLOS: ¿¡¡como sabes mi nombre!!?

-ZEUS: muy fácil, igual que se me tus apellidos, xxxxxx xxxxxxxx, que naciste en Zamora y a los 17 te metiste en el ejercito, serviste durante 10 años y luego te metiste a vigilante privado y guardaespaldas en una gran agencia, pero te echaron por excederte en tus procedimientos, así que te metiste a investigador privado en solitario y llevas así desde entonces – Ignacio, alias Carlos, bufaba por la nariz al verse descubierto.

-CARLOS: ¡¡¡¿COMOS SABES TODO ESO? !!! – estaba furioso y más al ponerme en pie de golpe, con la porra en la mano.

-ZEUS: es fácil saber de alguien cuando te pasas meses siguiéndole.

-CARLOS: me has sorprendido, tengo que reconocerlo, pero sigues sin tener nada contra mí.

-ZEUS: ahora se quien eres y podría denunciarte, por lo de Lara.

-CARLOS: buena suerte.

-ZEUS: supongo que te librarías, pero imagino que en tu trabajo sacarte a la luz de esa manera es lo peor que puede pasarte, y tu familia……si se enteran……

-CARLOS: no eres más que un niñato que se las da de listo, puedo pisarte como a una hormiga – apuntó a mi pecho con la táser.

-ZEUS: tu mujer te ha pedido el divorcio ya, ¿no? – su mirada, gélida hasta el momento, se desmoronó por un segundo.

-CARLOS: ¿como.......?

-ZEUS: ¿Cris, correcto?, ¿y que tal la pequeña Teresa? – por si aun no os habéis dado cuenta, eran su mujer y su hija.

-CARLOS: ¡¡¡COMO LAS TOQUES UN SOLO PELO TE MATO!!!

-ZEUS: tarde……me duele la polla de follármelas – disparó el táser contra mi pecho, lleno de furia en sus ojos, doblé la rodilla al caer el suelo.

-CARLOS: ¡¡¡¡PUTO MENTIROSO, COMO TE ATREVES, JAMÁS SE FIJARIAN EN UN MIERDA COMO TÚ!!!!

-YO: está………está………..está todo ahí……- señalé a duras penas un sobre en la cama, soltó otra 2º descarga que me tumbó al suelo para asegurarse de que no me moviera, y cogió el sobre, farfullando un “no” tras otro, sabía que las mujeres caían a mis pies, al ver las imágenes de su mujer comiéndome la polla y siendo follada de 30 formas diferentes rompió a llorar, al ver las de su hija la desolación invadió su alma, podía verlo tan claro que sonreía.

-CARLOS: ¡¡¡¡¡¡MALDITO CERDO, ¿QUE LE HAS HECHO A MI FAMILIA?!!!!! – se giró con toda su ira en el rostro, apuntando de nuevo al suelo donde yo estaba, o donde me había dejado, pero ya no estaba allí, al girarse para buscarme la porra cayó sobre su brazo, del golpe soltó la pistola, y las fotos, sus ojos llenos de lagrimas no le permitieron ver como un 2º golpe circular impactó en el lateral de su rodilla, haciéndole doblar la pierna con un crujido.

-ZEUS: deja de gritar ahora mismo o te parto la mandíbula de un solo golpe – rodó por el suelo de dolor.

-CARLOS: ¡¡como narices estás de pie!! – intentó coger la pistola de nuevo pero de una patada la mandé lejos, cuando alzó la mirada me quité un chaleco interior de plástico hecho a mano, como había leído en Internet, con tela aislante no sentí nada de las descargas, solo actúe como si hubieran sido reales para ganar el factor sorpresa.

-ZEUS: ¿cuantas veces creías que te seria útil esa pistola? – le di 2 patadas en el estomago que le dejaron sin aire, y le busqué cualquier otra tipo de arma oculta, no llevaba nada.

-CARLOS: ¡te voy a matar……..te juro que te voy a matar!

-ZEUS: ten mucho cuidado con tus amenazas, ¿viste el vídeo de lo que el pasó a Lorenzo? – su mirada descompuesta se horrorizó aun más, me ocupé de hacerles llegar una copia.

-CARLOS: ¡¡no……..por dios……dime que no las has hecho eso!!

-ZEUS: no………..aún…………… pero podría hacerlo.

-CARLOS: oye…….cof…………..para antes de meterte en un lío mayor…….yo solo hacia lo que ella me pedía…….

-ZEUS: incluyendo dejar que violen a un chiquilla, hasta dejarla embarazada y destrozar tanto su vida que se suicide – al oírlo todo supe que no lo sabia.

-CARLOS: yo……..no………- le di otro golpe en la pierna maltrecha.

-ZEUS: tú, si, estuviste allí, sabias lo que iba a pasar, participaste y te fuiste, sabiendo que la iban a violar delante de mi, yo al menos me he follado a tus chicas con su consentimiento, podría habérmelas llevado como hice con Lorenzo, habrían sido las putas de medio país antes de que las localizaras, y aún puedo hacer que ocurra, un par de semanas y ya ni se acordarán de quienes son, chuparan pollas y coños, serán sodomizadas de mil formas y solo conocerán esa vida.

-CARLOS: no, no la hagas te lo ruego……- lloraba -……mi mujer es una furcia que se acuesta con su agente de viajes, eso como poco, ya lo sé, no me importa, pero mi niña no, mi hija no tiene culpa de nada.

-ZEUS: ¡¡¡¡LARA TAMPOCO LA TENIA!!!! – perdí el número de patadas que le di, incluso le pisé la cabeza un par de veces, sangraba por varios sitios.

-CARLOS: vale……- escupió sangre -…. ¿que….quieres?

-ZEUS: veo que captas como va a ir esto, bien, lo 1º ya te lo he dicho, deja de trabajar para Eleonor, miéntela o dila la verdad, me da igual, pero déjala o vendo a tu mujer, y por si alguna vez se te ocurre cualquier venganza podría vender a tu hija, ten claro que no importa cuento pase, estaré atento, quiero zanjar esto aquí y ahora contigo, no quiero involucrar a Teresa si no es necesario, pero……..no….me pongas…….a prueba.

-CARLOS: de acuerdo…..si prometes dejar a mi familia en paz yo dejaré en paz a la tuya.

-ZEUS: no voy a prometerte una mierda, obedecerás lo que yo diga o las castigaré a ellas, como vuelva a saber de ti las encontraré, créeme que están deseando volver a tenerme entre sus piernas, acudirán ellas a mí incluso, tu niña apenas a probado pero tu mujer…oh dios…..como folla……no sabes lo que te pierdes.

-CARLOS: ¡cerdo!

-ZEUS: a lo que me has obligado, no hay promesa, o lo haces o me las llevo.

-CARLOS: lo haré – estaba furioso, pero entendía que no tenia opciones.

-ZEUS: eso es lo 1º, ahora quiero saber todo, y cuando digo todo, es todo, en la vida de Eleonor.

Es innecesario alargarlo, me contó todo, donde vivía, como, con quien, que cartel se llevó a Lili, la amiga de Eleonor, y como trastornaban la droga, los planes y trampas que me habían puesto y de las que me había librado o las que estaban en marcha.

-ZEUS: falta una cosa.

-CARLOS: te lo he dicho todo……..

-ZEUS: no, ¿que es lo que no saben los del cartel sobre Eleonor?

-CARLOS: no se de que me hablas – cogí el móvil y marque el numero de Teresa delante suya.

-ZEUS: hola preciosa, ¿te gustaría quedar? – Carlos se arrastró por el suelo, le pisé la cara.

-CARLOS: para, déjala.

-ZEUS: si, verás, tengo un rato libre, y me gustaría llevarte a un sitio apartado, ya sabes, para estar solos un rato……..- Carlos/Ignacio sudaba del esfuerzo, sabia que un lugar apartado seria ideal para secuestrarla.

-CARLOS: para, te lo diré…..

-ZEUS: claro, déjame un minuto amor…… – tapé el móvil con una mano -…… dímelo, cuando me tenias atado a la silla le dijiste a Eleonor que como se enteraran de todo matarían Lili y a Eleonor……. ¿que es lo que teméis que sepan?

-CARLOS: Eleonor…….gasta mucho dinero……los socios le controlan las cuentas, pero sigue pagando a mucha gente bajo mano…………. recorta los ingresos de la entrada de cocaína…………… les devuelve un 5% menos de dinero limpio de lo que debería.

-ZEUS: ¿esa loca le esta robando a un cártel de cocaína colombiano?

-CARLOS: si……..si se enteran……matarán a Lili, y puede que a ella también, o peor, que vayan a por su hija.

-ZEUS: ¡¡¿Yasmine?!! – joder, me había olvidado de ella, lo último que supe es que estaba de viaje por el mundo con su novio.

-CARLOS: si……tienen a un hombre siguiendo sus pasos, por si a Eleonor se le va la lengua.

-ZEUS: esto ya es lo que buscaba……- deje de pisarle la cara mientras “colgaba” la llamada falsa - ……. ahora te recomiendo que huyas, por que pienso usarlo en su contra, y cuando aparezca el cártel no querrás estar cerca.

-CARLOS: no seas loco…….matarán a todos.

-ZEUS: pasará lo que tenga que pasar……..huye y llévate a tus chicas.

-CARLOS: ¿ya está?

-ZEUS: si, recuerda lo que tienes que hacer, o la destrozo la vida a tu hija.

-CARLOS: tranquilo, no me cruzaré en tu camino – me giré para marchame, limpiando la habitación para que no quedara rastro de mi allí, la de la limpieza que me follaba había despejado las habitaciones cercanas y cortado las cámaras, no quedaría constancia de mi presencia.…….fue cuando vi la pistola táser en el suelo, Zeus sonrió.

-ZEUS: sabes……..en realidad falta una cosa por hacer….- debió de mirar donde estaba fijando mis ojos, y al verla recordaría mi amenaza.

-CARLOS: no………no te atreverás, te he dado todo……vete y……- temblaba, seguramente por las hemorragias internas.

-ZEUS: te dije lo que pasaría….. si no cumplo mis amenazas, podrías pensar erróneamente que la de tu hija es falsa, ¿que persona seria si no cumpliera mi palabra?

-CARLOS: ¡una compasiva! – al girarme mi mirada ardía como el mismo infierno.

-ZEUS: yo no tengo compasión.

Raúl – Remordimientos

-YO: ¡¡NO, PARA!! – me levanté sobresaltado en la cama empapado en sudor, respirando tan fuerte que podía oír mis bronquios, me costó ubicarme al despertar tan rápido, no sabia ni donde estaba, ni que hora era o tan siquiera el día, la oscuridad era casi absoluta mientras mis ojos se acostumbraban a la luz tenue que se colaba por una rendija de una ventana, una mano que no era mía surgió de entre las sabanas y acarició mi pecho para ayudarse a elevarse al resto del cuerpo, y los grandes ojos de Mara aparecieron en la penumbra, con sus labios besando mi hombro y un mechón de pelo cediendo al movimiento en su rostro..

-MARA: ¿estás bien? - me tranquilicé por unos segundos cogiendo aire a bocanadas.

-YO: es una buena pregunta - se alzó sobre mi cuerpo, dejando caer la sabana que le cubría sus escuetos pechos y liberando un pezón ante mis ojos.

-MARA: ¿otra pesadilla?

-YO: si, no puedo evitarlo, no recuerdo la última vez que soñé, no te digo ya tener pesadillas, desde que era un crío supongo.

-MARA: ¿sobre lo mismo?....- mis apagados ojos dieron una respuesta afirmativa - …tienes que pasar pagina, llevas así 3 meses – acarició mi cara con una de sus manos.

-YO: no……no se como…….desde aquello no puedo dejar de pensar en lo que pasó, en lo que el hice…..- me cortó las palabras con sus labios, “dios, sus caricias, que bien me hacen sentir”, el tacto humano y dulce de una mujer hermosa que no quería de mi nada, salvo cariño.

-MARA: ese cabrón se lo merecía, lo sabes mejor que yo.

-YO: tal vez….¿pero…….por que me siento tan mal?, cumplí mi amenaza, ¿pero por qué?, ya me había dado lo que necesitaba, no tenia por que hacerlo……….y aun así………- las imágenes de Carlos sollozando como un bebé de teta, arrodillado desnudo con el táser metido por el culo, implorando el perdón que no se merecía, Mara lo sabia, Alicia lo sabia, yo lo sabia, pero ninguno le hubiera hecho eso, fue Zeus el que apretó el gatillo, el que volcó la corriente eléctrica dentro de su ano, el que se reía mientras Carlos se retorcía por el suelo, y el que se cayó al suelo ahogado en carcajadas cuando Carlos se orinó y cagó encima, fue Zeus el que sin piedad alguna volvió a descargar una 2º vez, ya no había risas, Carlos vomitó un par de veces antes de desmayarse, Zeus permanecía allí, de pie, mirando desde arriba, con gesto hosco y con desprecio, yo era un espectador más.

-MARA: no pienses en ello, pasó, después él cumplió su palabra, entendió que más le valía, si le hiciste eso a él, pensará en las burradas que le podrías hacer a su hija o a su mujer, por eso se la llevó fuera del pais.

-YO: yo no…. - sonó brusco - ……fue Zeus, yo …………yo no pude pararlo……..no se si quise, pero aunque hubiera sido así………..no sé si podría haberlo parado……

-MARA: mejor…..Zeus está cumpliendo todo lo que necesitamos.

-YO: no lo entiendes estúpida……..no es por que él haga, es por lo que yo le dejo hacer…….¿y si……y si no le controlo…….y si toma el control y yo no puedo frenarle? ¿Y si me pasa contigo? ¿O con Alicia?, ¿y si os hago daño y no puedo parar? ¿y si nunca vuelvo a ser yo? – pese a haberla insultado sus ojos grandes y oscuros mostraban compasión ante lo que veía, a mi, llorando, intentando aparentar que no caían lagrimas por mi cara.

-MARA: se que no lo harías, confío en ti……….confiamos en ti.

-YO: pues no deberíais……..soy…….peligroso.

-MARA: es lo que necesitamos que seas………que él sea tan peligroso que la gente se aparte de su camino.…….

Dejé de hablar, era inútil, había tenido esa misma charla 20 veces, no comprendía el pavor que me daba, empezaba a cuestionarme si Zeus era un personaje que me creía o una parte oscura que vivía en mi, y últimamente, salvo los pequeños descansos en los brazos de Mara, en que podía ser yo y ella era mi isla en medio del océano, el resto del tiempo era Zeus, de forma constate, y no por que lo necesitara, si no por que así era más fácil. Alexis me tenia tan endiosado que si la pedía que se tirara por el balcón lo haría antes de que terminará la frase, Madamme casi lo mismo, pero manteníamos las apariencias, me daba trabajos que me hacían ganar mucho dinero y me la follaba en su casa tan fuerte y tan bestia que la hacia sangrar de vez en cuando, lo hacia con todas las clientas, viejas, jóvenes, altas, bajas guapas, feas, gordas o hermosas, a todas las follaba igual, tenia no menos de 30 clientas adictas a mi que requerían mis servicios varias veces a la semana, incluso empecé a follárme tíos, solo de oídas pagaban el triple por mi, me metía coca de nuevo cada vez que iba a por un hombre. Todo ello era Zeus, siendo yo mismo, con un tío ni se me levantaba, pero él arrasaba, y le dejaba hacer.

Eleonor había perdido el norte sin Carlos, apenas 3 meses sin él e intentó no menos de 10 chapuzas de trampas, todas abortadas, la peor de todas fue entregar fotos de Cameron, la otaku de mi época en ventas de seguros, y mías de nuestra escapada romántica a la feria del anime en Barcelona, al novio de la susodicha, pero no tenían nada de lo que ocurrió en la habitación, solo de lo que pasaba fuera, nada raro y la cosa no fue a más. Pero Eleonor se mantenía tranquila, principalmente por que se creía que tenía a Alicia en el bote, después de que Carlos se…….”apartara”, a regaña dientes di permiso a Alicia para “caer” en la trampa del psicólogo que supuestamente la tentaba, yo tenia mis dudas pero a la 3º sesión le habló de una señora que podría ayudarla, le presentó a Eleonor, y Hera entró en acción, se convirtió en un personaje, le vendió tan bien su amargura y su rencor hacia los culpables de su intento de suicidio y el de Lara, que Eleonor no dudó en atraerla, la pagó de golpe la matricula de todo lo que le quedaba de carrera, le compró un coche y le dio todo lo que pidió para hundir a los culpables, siempre que el acusado de tal cosa fuera yo. No se muy bien como Hera la convenció de que, para sus ojos, yo era el máximo culpable de todo, y no la misma Eleonor, me quedaba anonadado al oírla hablar, Alicia era lista, pero aquella forma de desenvolverse era digna de una genio criminal. Yo tenia un miedo atroz a que la descubrieran y aquellos perros de presa colombianos la hicieran desaparecer, no podría soportado, eran algunas de mis pesadillas, que Alicia sufriera daño, me veía entrando en casa de Eleonor con un bidón de gasolina que le haría tragar y la prendería fuego, pero por suerte, o por inteligencia, Hera se mostró tan convincente y audaz que ya tenia todo listo antes de lo que pensaba, guiando a Eleonor sin saberlo, dejé pasar un tiempo para tener las cosas claras y no cometer errores.

Mara se levantó de la cama y se fue al baño, su cuerpo desnudo, apenas iluminado, con un tanga minúsculo adornando su trasero, me distrajo unos segundos, “¡que mujer!”, un poco más de pecho y dejaría en ridículo a más de una top model, y follando a todavía más actrices porno, si las primeras veces con ella ya me demostró su talento, con el pasar del año y medio que estabamos haciéndolo me tenia tan acostumbrado a pelear el dominio de cada polvo que tirarme a Alexis era aburrido, incluso a Madamme, que tenia sus viejos turcos pero su físico ya no era le de antaño. Esa misma noche habíamos estado unas 3 horas montándonos el uno al otro, me sacó 4 corridas ella sola, y 2 de ellas por el culo, aunque ella no se privó de su ración de flujos, cada vez que nos desatábamos teníamos que cambiar las sabanas y el olor a hembra complacida era tan fuerte que no se iba de la habitación.

Algo ofuscado me fui a la cocina a beber algo fresco, la casa permanecía en silencio, los nuevos compañeros de piso no se metían en mis asuntos, aunque no pudieron evitar comentarnos el tema, Mara y yo no éramos demasiado silenciosos. No tenia sueño, o temía dormir y soñar, repetir aquella escena una y otra vez en mi cabeza, y verme reflejado en un espejo y ver esa cara que vi en un espejo en la habitación de Carlos/Ignacio……de un ser inhumano, sin sentimientos ni nada que se le parezca, así que me quedé en el salón sentado, mirando el vaso de agua en mis manos, Mara salió de su cuarto igual que se fue al baño, el fresco de la noche le ponía los pezones enormes y duros, quizá algún camisón o alguna de mis camisetas por encima la evitarían un resfriado, pero creo que se sentía más mujer ante mi solo con un tanga, y se sentó a mi lado en el sofá, encogida de piernas, la rodeaba con mis brazos mientras olía su pelo. Creo que era consciente de lo bien que me hacia sentir su cuerpo y sus carantoñas, pero nunca sabrá cuanto necesitaba aquello, ella era lo único que había entre el abismo más oscuro y yo, entre tener la esperanza de volver a ser yo con una vida normal o abandonarme y convertirme en Zeus para siempre, la apretaba entre mis brazos tan fuerte que la hacia gemir de la presión.

-MARA: discúlpame, se que me pongo muy pesada con el tema – alzó sus grandes ojos, el blanco nuclear de su mirada resaltaba más sus oscuros iris.

-YO: no tienes que disculparte de nada……..soy yo el que te ha faltado al respeto, te pido mil perdones – sonrió y me dio un corto y fugaz beso en los labios, no fue nada, una miseria, pero me hizo cerrar los ojos.

-MARA: no importa…….te están pasando muchas cosas……y a menudo creo que sé por lo que estás pasando…….pero no lo se…..ni como te sientes tú…..ni ahora Alicia…….quiero ayudar, pero no se como.

-YO: ya lo haces, y no sabes cuanto…….no se que hubiera sido de mi sin ti…….- halagada una leve sonrisa apareció, pero luego agachó la cabeza, le cogí del mentón con los dedos alzándola de nuevo – ¿tú…estás bien?

-MARA: si, no es nada.

-YO: sabes que puedes decirme lo que sea.

-MARA: lo se……es que quiero hacerte una pregunta, pero ya se la respuesta.

-YO: tú pregúntame.

-MARA: no seas brusco conmigo……..- la azucé con un brazo de forma cariñosa - ……..¿me amas? – la pregunta me pilló frío como un témpano de hielo.

-YO: pues……no se…….claro que te…… te necesito.

-MARA: eso ya lo se, me refiero a algo más, llevamos un año y medio jugando, y yo me planteó cosas, ¿a donde vamos? ¿Vamos por libre o somos una pareja extraña?

-YO: pues no lo se, se que estar a tu lado me hace sentir bien, pero yo no estoy ahora mismo para relaciones serias, soy un cáncer, infecto todo lo que toco, no quiero hacerte daño.

-MARA: lo se, pero me lo estoy haciendo yo misma, te quiero y me tendrás para lo que quieras, pero yo no puedo seguir así, necesito algo más, creo que me merezco algo más.

-YO: no puedo decirte nada que no sepas, solo se que te necesito a mi lado, me centras.

-MARA: no puedo cargar con esa responsabilidad más tiempo, no puedo ser tu ancla al mundo real, no así.

-YO: ¿puedo hacer algo para que no me alejes de tus brazos?

-MARA: decirme que me amas…….pero ya te dije que sabia la respuesta……se que no me amas, quizá me tengas aprecio, me quieras de alguna forma, o quizá simplemente me estés usando, pero no me amas, no como a Alicia…..- cerré los ojos echando la cabeza hacia atrás -…….lo se…………lo se…..no quieres hablar de ello.

-YO: no es que no quiera, es que no es verdad, me molesta que uses la vara de medir del amor siempre con tu hermana, cuando estoy en tu cama y no en la suya – sonrió de nuevo, con una risa apagada.

-MARA: estás en mi cama por que a ella no podrías hacerle esto…………….pero ahora soy yo quien le pone fin, siento que sea de esta forma, pero yo tengo mi orgullo y tengo que seguir con mi vida.

-YO: si es lo que deseas……..no me opondré…..- me acariciaba la cara con sus manos tratando de consolarme, pero no había nada que consolar, me costara decirlo en alto o no, era cierto, la estaba usando como único vinculo con mi vida anterior, y eso era demasiada carga para una mujer con la que solo te acuestas, ella se merecía algo mejor que lo que yo podía ofrecerla.

No se cuanto pasó, una hora quizá, abrazados el uno al otro, ella se durmió, la cogí en brazos y la llevé a la cama, acaricié sus largas y torneadas piernas por última vez, y la tapé antes de vestirme e irme con un “gracias” susurrado al aire. Fui al único sitio donde aún me sentía yo mismo, al ático, por que allí estaba mi familia, era muy tarde, así que entré y me acosté en uno de los sofás grandes de abajo, me despertó el peso de una de mis zapatillas cayendo sobre mi, del sobresalto casi me caigo del sofá, mi hermana se reía delante de mi.

-HERMANA: ¿que haces aquí, enano?

-YO: descansar, hasta que has aparecido.

-HERMANA: deja de quejarte mierdecilla, voy a desayunar algo antes de irme a trabajar, Dany está en la cocina haciendo de las suyas, ¿vienes? – no me dio tiempo a responder y se fue, estaba algo pesado y aturdido, por suerte no me había quitado los vaqueros y mi erección mañanera no había sido tan escandalosa, me aseé en un baño y acudí a la cocina, que olía a tortitas y zumo de naranja.

-YO: buenas…..- al oír mi voz Dany se giró a la velocidad de la luz, sonriendo con la cara de agradecimiento más completa de la historia.

-DANY: ¡¡ hola señor……¿tú desayunas? !! – irradiaba felicidad, no podía negarme.

-YO: anda, pone un par de esas obras de arte en forma de tortitas – sonrió aún más al sentir que me complacía, me las puso y de paso me dio un abrazo largo y pausado, susurrándome al oído lo agradecida que se sentía, desde que el juez le dio la custodia de su hijo, cada vez que me veía era igual.

-HERMANA: no le abrumes, que ha tenido mala noche por lo visto…..- me dio un pescozón en la cabeza.

-YO: podrías ser más cariñosa con tu hermano, ¿no crees?

-HERMANA: ya quisieras enano, si te vas a quedar ayuda a recoger la cocina, vago – se metía media tortita en la boca mientras se bebía un vaso de zumo a la velocidad del rayo, le gustaba apurar el tiempo, y al terminar de desayunar salió volando a su trabajo.

-DANY: señora siempre igual, nunca sale con tiempo.

-YO: deja de limpiar un momento y siéntate aquí conmigo, anda – obedeció alisándose el regazo del delantal, y se sentó en mis piernas de lado, poniéndome su pecho a la altura de mi cara, sentía sus dedos acariciando mi rostro con restos de harina.

-DANY: ¿tú bien? – me cogió de la mano y la besó, pasando el dorso por su mejilla.

-YO: puf…..no se que decirte……..estoy a un paso de lograr algo importante en mi vida y……..me siento solo.

-DANY: tú no solo…..tienes a buena familia………y amigos.

-YO: tanto me da, están lejos de mí – me dio otro abrazo largo y sentido, con morritos en los labios consolándome como si fuera su hijo.

-DANY: tú eres fuerte, salir adelante, siempre salir adelante.

-YO: ¿y tú peque?

-DANY: bien, el levanta en un rato y yo llevar a colegio, él es chico listo, saca buenas notas, y al vivir aquí feliz con piscina y familia que trata bien….yo……yo ser feliz y él también, gracias a ti.

-YO: solo ayudé un poco, ¿sabes algo de tu marido?

-DANY: el sale de prisión en 2 meses, pero yo pedir orden de alejamiento, no se acercará a mi hijo sin permiso.

-YO: mejor, ya sabes que nos tienes para lo que necesites – acaricié su cara para evitar que rompiera a llorar, entre la gratitud y lo mal que lo debió de pasar. Mi padre entró por la puerta y aunque no hacíamos nada, nos apartamos el uno del otro.

-PADRE: ¡¡¡carajo, mira quien ha aparecido!!! ….– me dio un par de palmadas rudas en la espalda –…. ¿como te va hijo?

-YO: pues intentando sobrevivir a esa jungla que es la vida, padre – soltó una carcajada dándome otro golpe.

-PADRE: ya te dije que cuando crecieras la vida es una mierda, solo manténte firme.

-YO: eso intento.

-PADRE: no lo intentes…….hazlo.

-YO: ¿como os va por aquí?

-PADRE: bien hijo, te echamos de menos, tu madre se preocupa mucho.

-YO: ¿y tú no? – sonó a broma, él sonrío mientras se servia un café.

-PADRE: me preocupo lo que debe de preocuparse un padre por su hijo, pero es más la confianza que tengo en ti que el miedo a que te pase algo – “ahí está, ni 4 frases y ya me está dando lecciones”.

-YO: ni yo confío en mi, ¿por que tú si? – mi madre apareció de la nada, con su eterna bata de dormir y el pelo hecho un desastre de la almohada, casi como si hubiera estado escuchando y entrara en escena.

-MADRE: por que te hemos criado nosotros….- me abrazó, dándome un beso en la mejilla –…. me alegro de verte, ¿como estás?

-YO: mejor, ahora que os he visto.

-MADRE: pues podrías venir más, ¿estás comiendo bien?, ¿te veo muy delgado? – me apretaba el brazo, su mano no abarcaba el contorno de mis músculos, pero era mi madre, supongo que son cosas de rigor.

-YO: estoy igual que siempre, no te preocupes por mí.

-MADRE: soy tu madre pedazo de zoquete, claro que me preocupo…. – mi padre se reía detrás de la taza de café – ….¿quieres algo de comer, has desayunado?

-YO: si, ya he saboreado las delicias de Dany…..

-MADRE: ¿así que a eso has venido, eh bribón? – Dany se sonrojaba de risa y yo no podía dejar de sonreír, “dios, como les echo de menos”

Ayudé a recoger la cocina, de paso mi madre me mandó a por pan y al volver a ayudarlas a limpiar las partes altas de la casa, solo querían que hiciera tiempo para obligarme a quedarme a comer, eso no cambió que limpié el techo, los armarios y la piscina, pero pese al trabajo, me sentía normal, y eso era bueno, lo que había ido a buscar. El sonido de mi móvil me sacó de mi retiro momentáneo de la locura que era mi vida, era Alicia.

-YO: hola hermanita, ¿como lo llevas?

-ALICIA: bien…oye……necesitamos hablar……a solas – entendí de primeras.

-YO: pues ando en casa de mis padres, ven….y tráete el biquini – esperaba que entendiera mi idea.

-ALICIA: perfecto, voy en una hora.

Teníamos un celo excesivo desde que ella estaba infiltrada, al hablar, comunicarnos o interacciones de cualquier forma, ya que como parte de pago en su confianza, Eleonor pidió que instalaran micros y cámaras en casi todos los aspectos de la vida de Alicia, manteníamos una fachada de cordialidad y amistad, al invitarla a la piscina solo me aseguraba de que dejaba toda la ropa lejos de la conversación, y ver el cuerpo de Alicia en bañador nunca estaba de más. Cuando llegó se pasó un buen rato hablado con mi madre, su forma de hablar y comportarse era tan ”cuasiperfecta” que solo podía entenderse si actuaba como si la escucharan, luego me fui a la piscina, terminaba el otoño y ya había que climatizarla, desde el agua pude ver como Alicia se desnudaba quedando en un precioso biquini negro, mi polla no pudo hacer otra cosa que ponerse dura cuando se agachó a bajarse los pantalones y me dejó su trasero en pompa delante, era JLO, la Kardashian, Rihana, Shakira………era todas y ninguna, con su propio sello de tía buena, pero unas caderas y unas nalgas que empezarían guerras, su no mucha estatura la hacia más agraciada incluso, y su pechos, sin ser exagerados pero si firmes, eran la guinda, su cara rozando lo angelical, con su sonrisa amplia y su larga cabellera hasta la cintura color castaño con reflejos rojizos, por alguna razón de la genética, en verano se le clareaba el pelo hasta casi ser rubia, y en invierno se le oscurecía, si te pasabas 4 meses sin verla lo que parecía era que se había teñido.

Dejó las prendas bien lejos, y dio un salto torpe y dulce al agua, al emerger su rostro atrajo mi mirada, con toda su larga melena mojada pegada a su piel, me salpicó agua al verme embobado, y dio un par de brazadas para aclimatarse al agua, antes de que me acercara, mantuve las distancias disimulando mi erección.

-YO: ¿como te va?

-ALICIA: ¿yo? ¡¡¿Como estas tú?!!…mi hermana ya me ha dicho que te ha dado la patada……

-YO: no ha sido una patada……es lo mejor para ella.

-ALICIA: lo siento mucho, se que la querías.

-YO: precisamente por eso me ha dejado……si es que alguna vez salimos…….dice que no la quiero……

-ALICIA: es una tontería, se lo he dicho, pero no hay manera.

-YO: es mejor así………

-ALICIA: para ella…..pero ¿y tú?

-YO: pues aquí me ves, refugiado con mi familia.

-ALICIA: tu madre es un sol, me trata genial.

-YO: siempre le has caído bien, pensaba que enderezarías a Teo jajaja

-ALICIA: ya….pues vaya chasco – se río tan fuerte que un ligero moco salió de su nariz, discretamente se lo apartó como si no hubiera ocurrido.

-YO: ¿y nuestra amiga común? – se acercó chapoteando, tan cerca que me dio miedo que notara mi polla dura bajo el bañador.

-ALICIA: está muy mal de la cabeza, en serio, tengo que estar frenándola casi a diario, desde que no está Carlos sus planes son chorradas, y lo peor es que no se da cuenta, el otro día decía que iba a denunciar tu desaparición, a ver si así te encontraba.

-YO: no te pongas en peligro, nunca, ¿vale?

-ALICIA: tranquilo….- sonrió de forma malévola-….Hera es muy convincente, me está gustando esto de la doble personalidad.

-YO: pues ten cuidado, por que yo no lo estoy llevando tan bien.

-ALICIA: ya me han dicho……¿sigues con las pesadillas?

-YO: Mara es un poco bocazas…….

-ALICIA: no la culpes, esta preocupada, y yo, casi no te veo y lo que ella me dice no me gusta.

-YO: ni a mi, pero no puedo evitarlo.

-ALICIA: no te voy a decir que Carlos se lo merecía.

-YO: tú también no……

-ALICIA: escúchame, si no es por él, ¿por que es?, ¿tienes miedo de lo que Zeus sea capaz de hacer?

-YO: no…..si…..no es él…….el problema es que yo debería de tener el control, y ya no sé si lo tengo.

-ALICIA: entiendo……..pero no tienes zonas en blanco, ni fallos de memoria, ¿no?

-YO: no……pero llevo casi 2 años siendo Zeus, gran parte del tiempo, ¿quien soy?, ¿un cruel y despreciable cabrón al que no hay que joder o un chico normal con ganas de venganza?

-ALICIA: desde luego un chico normal no eres……- su sorna no me calmó.

-YO: eso no es una respuesta.

-ALICIA: ¿que quieres que te diga?, no se lo que pasa por tu cabeza, solo tú sabes hasta que punto le permites las cosas.

-YO: ¿y si no se las permito, pero las hace igualmente?

-ALICIA: el hecho en si de que te lo cuestiones es prueba de que tienes el control, si él dominara no tendrías remordimientos.

-YO: cuando soy él no los tengo.

-ALICIA: pero cuando eres tú, si, eso te hace humano, sensible y responsable, todo que no es él…...– se acercó sin darme cuenta a darme un abrazo, y si notó mi polla dura aplastada contra su vientre no dijo nada –…. recuérdalo bien por que se nos presenta una recta final jodida.

-YO: ¿no has venido solo a verme?, que decepción…….- sonrió levemente.

-ALICIA: Eleonor se vuelve descuidada, y lo sabe, así que la tengo casi convencida de que fiche a un sustituto de Carlos, el problema es que no se fía de mi del todo, quiere pruebas de mi……”lealtad”.

-YO: ¿quiere que me hagas algo?………….me da igual el que…….hazlo……gánate su confianza – torció el gesto levemente.

-ALICIA: es que……quiere que me líe contigo – me quedé paralizado.

-YO: no………..no, eso no…….- abrió la boca medio ofendida.

-ALICIA: joder, ni que fuera un rinoceronte…….- una risa relajó mi tensión.

-YO: no es eso tonta……….¿pero…………por que?

-ALICIA: no me lo ha dejado claro, pero conociéndola ya un poco, me huelo a que intentará algo como con Ana, darte un pedazo de cielo y luego arrebatártelo delatándome, y diciendo que todo fue una farsa y que solo ella te quiere de verdad.

-YO: no es muy original…….

-ALICIA: ya te he dicho que anda un poco perdida…..puedo negarme, claro, pero si quiero seguir ganándome su confianza no queda otra.

-YO: no puedo obligarte a esto……

-ALICIA: no me has obligado a nada, estoy donde estoy por que quiero.

-YO: ya, pero una cosa es infiltrarte y otra……..liarnos……….no quiero que sea así.

-ALICIA: ¿acaso quieres que sea de alguna otra forma? – su pregunta delató mi metida de pata, “¿de donde ha salido eso?”

-YO: no…..quiero decir….que no quiero que la venganza sea así – abrió los ojos creyéndose mi tangente, o al menos queriendo hacer ver que se lo creía.

-ALICIA: ah…..pues no veo otra solución, además quiere que sea en casa, para que puedo oírlo bien con los micros, la he dicho que la cámara del cuarto la puedo tapar, por vergüenza y eso, pero no se cuantas puso sin que yo lo sepa, quizá allá más y si nos ve fingiendo puede repercutirme.

-YO: joder Alicia……….eres mi hermanita…….no puedo hacer esto.

-ALICIA: no soy tu hermanita, soy Hera, y tú Zeus, somos personajes.

-YO: eso si que no, no pienso meter a Zeus en esto, ¿y si se le va la olla? No puedo permitir que te haga daño o peor……- se quedó pensando en que podía ser peor que hacerla daño, ¿lo que le hice a Carlos? “no, lo peor es que te destroce como a tantas otras y termines siendo otro insulso juéguete roto”.

-ALICIA: lo veas como lo veas…..solo hay una forma…..además, noto que la idea no te desagrada…..- era demasiado evidente para que mi miembro no se hubiera delatado ya.

-YO: apártate….no es lo que piensas…….- me salí de la piscina avergonzado, y me tapé con una toalla al sentarme en una hamaca, ella me siguió.

-ALICIA: perdóname…….solo quería animarte…. – cogió una toalla y de pie dejó caer todo su cabello hacia un lado de su cabeza, se secaba la larga melena con suavidad, para luego enrollarse la toalla alrededor del cuerpo y sentarse frente a mi en las hamacas.

-YO: no estoy para juegos Alicia, tengo los nervios a flor de piel, me siento solo y estoy asustado.

-ALICIA: ¿de que?

-YO: de todo, de mi, de lo que Zeus pueda hacer, de que Eleonor le haga daño a mi familia o a mis amigos, de que no pueda terminar esto…….y lo que menos necesito es que ahora, precisamente tú, vengas a mis brazos – se me cristalizaban los ojos y ella guardó silencio unos segundos, sin palabras ante ver a semejante armario sollozando como un niño. No se que se le pasaría por la cabeza, supongo que quería decir algo reconfortante, pero no atinaba a decir nada con sentido, así que soltó lo 1º que se le ocurrió.

-ALICIA: ¿por que “precisamente” yo? si fuera mi hermana, o cualquier otra, lo harías con los ojos cerrados.

-YO: por que eres mí…..- su bufido cortó mis palabras.

-ALICIA: tu hermnita, ya lo sé… ¿no te cansas de repetirlo?, ¿a quien quieres convencer diciéndolo tantas veces, a mi o a ti? …..– no estaba en mi mejor momento, pero dejarme sin palabras no era fácil –….. dame razones reales, no excusas.

-YO: eres la ex de mi mejor amigo…….- lo 1º que salió del cubo de basura en que había convertido ella mi cabeza.

-ALICIA: si es una cuestión de orgullo estúpido, no lo entiendo.

-YO: no es orgullo, es respeto hacia Teo.

-ALICIA: nunca hablamos de lo que pasó en tu cumpleaños, con Ana, ya sabes……..- “¿el día en que acudiste desnuda y te abriste de piernas en mi cara después de chupármela y que provocó mi salida del piso terminando en los brazos de Eleonor?, si, lo recuerdo vagamente”, era irónico conmigo mismo.

-YO: no hizo falta……

-ALICIA: ¿por que me rechazaste? ¿Tan desagradable te resulto? – no sabía leer su cara, ¿lo preguntaba realmente o era una broma?

-YO: no seas tonta, eres preciosa.

-ALICIA: no te entiendo, te has pasado por la piedra a medio instituto, a casi todas tus amigas, compañeras de trabajo y conocidas, hasta a mi hermana, pero llegó yo y montas en cólera.

-YO: sabes, me recuerdas a Mara hablando…..- sonreímos muy poco.

-ALICIA: si que es un poco bocazas……….pero la pregunta sigue siendo valida, ¿que tengo yo de especial para que me trates de forma diferente a todas?

-YO: nada……….- bajó la vista ante una respuesta tan protocolaria -……..todo.

-ALICIA: ¿nada y todo?, pues si que te explicas……

-YO: no se que decir ….. – si lo sabia, Zeus chillaba desde mi interior, “díselo, dile que es la mujer más maravillosa que has conocido nunca, dile que es lista, guapa, divertida, dulce, cariñosa, fuerte y capaz, dile que te has pasado años envidiando a Teo en silencio por tener a alguien como ella en su vida, anhelando cada segundo de tu vida que rompieran para que por fin pudierais estar juntos, dile que hasta en tu época más turbia ha sido un faro en tu vida, y que no la tratas como a las demás por que la amas, dile que la amas como no has amado a nadie ¡¡¡díselo, cobarde!!!” - …me da pánico.

-ALICIA: ¿pánico de que? – me veía llorar, no me atrevía a mirarla.

-YO: al verte en aquel balcón lo supe, no se como una parte de mi lo descubrió, como ver una estatua en mitad de mi cuarto que siempre había estado allí, pero nunca había visto…………….no…..no me lancé para salvarte……..o por que te quiera…….me solté por que no soy capaz de imaginar mi vida en un mundo en el que no estés………- hice acopio de todo el valor que tenia y giré mi cara hacia ella, estaba atenta.

-ALICIA: sabes……- una leve risa le cortó las lágrimas que estaban a punto de brotar de sus preciosos ojos, de un eléctrico ámbar -…… fui yo quien le dijo a Marina en el instituto que te diera una oportunidad.

-YO: ¿de verdad?

-ALICIA: si….siempre tan bueno, tan leal, tan divertido, tan integro, me daba pena que nadie se diera cuenta, que nadie viera más allá de tu físico, y me alegré mucho cuando regresaste cambiado, no por que cambiaras, si no por que así todas dejarían de pensar en tu físico y verían lo buena persona que eres.

-YO: pues para lo que me ha servido…..he pasado de cama en cama tanto tiempo que no se ha cuantas mujeres he hecho daño.

-ALICIA: no puedo culpar a un hombre por comportarse como un hombre, supongo que tenías mucho tiempo que recuperar, pero pese a todo has seguido siendo un buen hombre.

-YO: muchas que conoces no dirían lo mismo.

-ALICIA: muchas que conozco estaban contigo por cosas ajenas a ti – no hacia falta que dijera que sin mi polla no hubiera conocido a tantas mujeres, ni se molestaban en saber de mí.

-YO: ¿y tú si?, hasta que no cambié…….

-ALICIA: hasta que la relación con Teo no estaba tan deteriorada, no me fijé en nadie, pero allí estabas tú……..siempre has estado ahí……… te dejaste los cuernos para lograr esa casa, Eleonor me ha dicho como, y cuando viste lo que pasaba entre Teo y yo, te fuiste sin más, para que pudiéremos intentar reconciliarnos, ya era tarde, todos lo sabíamos, pero aun así lo hiciste, te alejaste tanto que terminaste en las garras de Eleonor, perdiendo a Ana, y generando todo este lío, por Teo, por mi ………– miraba a la pared -………. y luego con Lorenzo.

-YO: tendría que haberle arrancado la cabeza según le vi……

-ALICIA: pero no lo hiciste, no te gustaba, se te leía en la cara, pero te callabas, por que me hacia feliz, aunque fuera una farsa me hacia feliz, y tú lo sabias, ¿que tipo de gente hace eso? ¿Alejarse de las personas que ama por que así las hace felices?......... – me lo decía a mi, pero se lo preguntaba a si misma, descubriéndolo a la vez que lo decía –……..tienes razón, ha sido una mala idea, la diré que no te fías de mi, ni de nadie, o buscaré otra manera.

-YO: ¿por que cambias de opinión? – se puso en pie, y me agarró la cara como si me fuera a besar.

-ALICIA: por 1º vez te veo Raúl, se lo que has cuidado de mi sin que yo lo supiera, lo has sacrificado todo por mi………ahora es cosa mía.

Se vistió y se fue, sin más, me dejó allí sentado, con un empalme de narices y llorando por que, aunque lo deseaba con todo mi ser, no quería que Eleonor dictara cuando o donde debía nacer el amor con Alicia, pero……… ¿acaso había declarado mi amor a Alicia? ¿ella lo había entendido así? ¿la amaba? no lo sabia, aquello fue lo más intenso y confuso que pasó en toda mi vida, algo importante había pasado, algo drástico y universal había cambiado, lo sentía, pero no podría señalar el qué, habíamos hablado pero lo importante era lo que no se había dicho.

Dany – La última batalla de un dios.

No se cuanto pasó, quizá 10 minutos, me recompuse intentado encajar las piezas en mi cabeza, me puse en pie para ver como mi erección seguía allí, mi polla siempre iba por libre, entré en casa y llamé a mi madre, mi padre, o alguien, nadie respondió, así que decidí darme una ducha de agua fría en el cuarto de abajo, la necesitaba, y si no me serbia para calmarme, una buena paja bastaría, ni encendí la luz del cuarto, entré a ciegas al cuarto de baño y me di una ducha de agua fría de casi 20 minutos, después entendí que mi empalme no iba a bajar, así que salí y me senté en el inodoro, empezando a masturbarme, era el único momento en que entendía el cansancio de mis amantes, era costoso y tedioso masajear aquella enorme barra de carne que era mi miembro, incluso habiendo vuelto ha hacer ejercicio se me cansaban los brazos y se me entumecían los músculos. Cerré los ojos para repasar en mi mente cualquier polvo que hubiera echado antes, Mara me serviría, era lo más reciente, su forma de moverse, sus caderas alocadas y su cuerpo temblando al resistir un orgasmo tras otro, sus pequeños pechos moviéndose como flanes con cada arremetida de mi cuerpo sobre el suyo y sus enormes ojos negros abiertos de par en par al sentir como la abría por dentro, el sudor le llegaba a acumularse tanto en su cuello que las gotas resbalaban por su pecho, y su forma de aferrarse a mi cabeza, pasando sus dedos por mi cabello empapado de transpiración, cuando lamía su cuerpo me volvía loco. Tan distraído estaba que solo el sonido de la puerta me sacó de mi ensoñación, apareció Dany tapada con una toalla por delante, sin cerrar por detrás, al verme abrió la boca sorprendía, más que por mi miembro, que ya había visto muchas veces, era por verme allí, yo me quedé paralizado sin saber si soltarme el rabo o no.

-DANY: esto……...yo siento…..yo….- se giró 3 veces para irse y regresaba, nerviosa, no se daba cuenta que al girarse me dejaba toda su espada y culo al aire, para mi deleite.

-YO: no pasa nada……..no es la 1º vez que……me pillas – no solo pajeándome, si no que he llegado a verla recoger la ropa sucia del cuarto conmigo follándome a más de una sobre la cama.

-DANY: yo……..si…..esto……perdón…yo venia…..cepillo…. - a la 5º vuelta entró, cogió el cepillo del pelo de un armario y se volvió a ir, contoneando su deslumbrante culo antes de cerrar la puerta.

No pude evitarlo y seguí masturbándome ferozmente, pero ahora con la imagen de Dany, de su cuerpo mojado, de su piel tersa en la espalda, con gotas de agua cayendo de su melena rubia pegada a su nuca, de los ojos azules que se habían abierto al verme, rememoraba sus famosos abrazos largos y sentidos, por alguna razón eso me ayudó a descargarme antes, salió tanto semen disparado que apenas pude controlar que cayera en la bañera, jadeando me di otra ducha y así limpié las manchas de todo mi esperma. Salí tapándome solo con una toalla anudada a la cintura, al hacerlo Dany estaba sentada en la cama, al otro lado del baño dándome la espalda, ahora con la toalla anudada alrededor del cuerpo, y poniéndose unas bragas de forma acrobática, como solo saben las mujeres hacer, cerrando un cajón al oírme.

-YO: siento esto…..necesito desahogarme.

-DANY: tú no disculpas, es tu casa, yo invitada – giró su cara para mirare sonriendo tan feliz, como si no acabara de pillarme con más 30 centímetros de miembro erecto en la mano, machacándomela en su cuarto de baño.

-YO: tú no eres una invitada, ahora esta es tu casa también, así que lamento esto, he llamado al salir de la piscina y no contestó nadie, perdóname.

-DANY: yo perdono, padre ir a trabajo y madre salir con amigas, yo……….darme baño – se puso roja al ponerse en pie y decirlo, recolocando la toalla en el escote.

-YO: ¿y por que no te bañas en tu cuarto de baño propio? – le señalé el lugar del que acababa de salir, más como curiosidad que acusándola.

-DANY: ya……..yo…….es que……..me gusta darme baño en bañera grande…arriba…..- “el jacuzzi”, no se por que el hecho de que tenga espuma y burbujas volvía locas a las mujeres, yo nunca le encontré el gusto teniendo una piscina abajo -……..pero señora madre dar permiso………yo no quiero ofender…..- parecía asustada.

-YO: tranquila, ¿espero que te hayas quedado relajada?

-DANY: oh si….ser muy bueno, yo siempre dar baño relajante ahora, tener tiempo mientras hijo está en colegio y todos se van.

-YO: pues te dejo de molestar, que tendrás que vestirte…..- me iba a ir cuando su mano cogió mi brazo, al mirarla me leía el rostro.

-DANY: ¿tú.....bien? – a pesar de que había pasado tiempo, se me seguía leyendo en la cara la conversación con Alicia.

-YO: pues no mucho…..la verdad – puso cara triste, y cogió mi mano con las 2 suyas besando el dorso y frotando su mejilla contra ella, como una gata ronroneando.

-DANY: pobre hombre mío………..tú hablar conmigo si quieres, ¿si? – una frase condescendiente, pero pareció realmente interesada en consolarme.

-YO: no quiero aburrirte con mis problemas – sonrió ofendida, y trató de hacerme sentar en la cama con todas sus fuerzas, era alta pero no pesaría más de 58 kilos, no la doblaba el peso por unos 20 kilos y le sacaba media cabeza, si no hubiera querido no me hubiera podido obligar, pero tenia su encanto verla esforzarse, así que me dejé ir y me senté en la cama, ella hizo lo mismo a mi lado, sin soltar mi mano, la tenia aferrada como si quisiera quedársela.

-DANY: tú cuenta……hombres que pagaban por mi decían que yo escucho bien.

-YO: no sabias hablar nuestro idioma, si no llegas a escuchar….- me dio una palmada en el hombro, sin soltar mi mano con la otra.

-DANY: tú habla.

No mintió, pasé media hora contándola lo justo para aliviar mi carga pero no lo suficiente como para poner en peligro mis planes, sería Dany pero no confiaba en ella, no confiaba en nadie, solté mi lengua y ella respondía con agilidad y cariño, cuando me di cuenta estaba tumbado sobre la cama con las piernas apoyadas en el suelo, mirando al techo con las manos entrelazadas detrás de mi cabeza marcando brazos, y ella recostada a mi lado, de lado sujetándose la toalla para que no se le salieran los senos, me estaba acariciando el torso con la mano libre, repasando la tableta y el pecho hinchado. No se desde que momento empezó pero me gustaba la sensación, no pasaba los dedos con delicadeza, sino que palpaba con energía, haciendo sonar la piel al frotar la palma de su mano con mi cuerpo, ni siquiera me había dado cuenta de que llevaba un rato mordiéndose el labio inferior, tenia las marcas de sus dientes en su boca, y los ojos le brillaban como nunca antes se los había visto.

-DANY: ¿así que tú sentir solo?

-YO: pues………es un buen resumen.

-DANY: ya, yo tener tu familia y cuidar de mi, pero también sentir sola, sin marido ahora………- mi polla empezaba a reaccionar, al darse cuenta de que aquella hembra buscaba sexo desesperadamente, quise irme, levantarme y largarme tan rápido que no me pondría ropa, saldría a la calle con la toalla, con tal de alejarme de ella, pero en cambio….

-YO: ¿tu marido……..hace cuanto que no…..? - sonrió al verme entrar en su juego.

-DANY: puf…..él 3 meses en cárcel, 1 más en juicios, y antes de venir vivir aquí, él pasar otros 4 meses sin llegar a terminar nada…….

-YO: ¿terminar?

-DANY: si…él……bueno……empezar muchas veces…..caricias…y yo dispuesta, chupo polla y eso…..pero cuando empezamos a follar………marido muy rápido – había cambiado su entonación, las palabras “chupar polla” o “follar” las decía con un marcado acento rumano, que en vez de estropearlo, me la puso tan dura que se me levantaba la toalla.

-YO: ¿no hacia que te corrieras?

-DANY: no, marido al principio muy fogoso, pero desde tener niño no logra llenarme – sin demasiado disimulo serpenteó por la cama hasta pegar su cuerpo al mío, sus caricias en mi cuerpo eran más evidentes y su mano bajaba cada vez más hacia el inicio de la toalla.

-YO: ¿desde cuando no te corres? – “¿que estás haciendo?”, me decía a mi mismo.

-DANY: yo…..bueno, con él desde antes de niño….. – eso eran al menos 9 años – …….pero yo correrme a diario, tengo consolador, yo hábil…..

-YO: ¿por eso vas al jacuzzi?

-DANY: si……..- se sonrojó mientras su mano ya hacia maratones desde la tela de la toalla hasta mi cuello, estiraba los dedos para acariciar mi barba de 3 días.

-YO: ¿tan cachonda estás?

-DANY: si……como gata en celo…..yo……..yo incluso tentar a padre……- se puso roja de vergüenza, o de excitación, o de amabas cosas – ……él trata bien, dulce y con cariño, pero él buen hombre, quiere a tu madre – si tuviera un sombrero me lo quitaría ante mi padre, rechazar a semejante hembra era un ejercicio de superación, ni yo me estaba resistiendo, o quizá mi padre tenia más miedo de lo que le hiciera mi madre si se enteraba que deseo de acostarse con Dany, esta última idea me encajaba más, y me hacia sonreír.

-YO: ¿me enseñas tu juguete? – rodó por la cama y sacó a su amigo del cajón, al mostrármelo era una polla de buen tamaño, azulada y con la base plana con forma de testículos, al menos de 20 centímetros y un grosor como un vaso de cubata, con estrías en forma de venas.

-DANY: yo hundir en mi cada día en bañera, hasta hacerme delirar…..necesito hombre que calme mi fuego…. – cogí aquel dildo de buen tamaño, ella pasó su pierna izquierda por encima de la mía quedando montada sobre mis piernas, lo hizo de forma lenta y sensual, dejando ver en la abierta toalla su ombligo y unas bragas blancas, con mi polla apunto de deshacer el nudo de la toalla entre sus muslos, acariciando mi vientre con ambas manos -……. ¿ser tú ese hombre?

-ZEUS: lo soy – sonrió aliviada, al instante avanzó medio metro sobre mi cuerpo y mi polla quedó aplastada por su cuerpo, se retorció para lamer mi estomago, pasándose todo el pelo a un lado de la cabeza, y fue subiendo por mi piel, repasando con su lengua los pliegues de mis músculos, hasta llegar a mi boca, nos fundimos en un largo beso con lengua, y desplazó a Alexis como la mujer que mejor besaba de mi ranking, no es que besara bien, es que no había forma humana de superarla, la forma tan dulce y casi inocente de mover la lengua entrelazándola con la mía, era tan estudiada que apenas parecía que se moviera como un ente ajeno a mi ser.

De inmediato mis manos fueron a sus muslos frescos al aire, y ella correspondió zigzagueando con la pelvis, liberando o apretando mi miembro atenazado entre nuestros cuerpos y las toallas, abría y cerraba su boca al besar tan desesperadamente despacio que me faltaba el aire, se alzó pasados unos minutos en los que casi me ahoga con sus besos, contoneándose sin parar, siendo totalmente consciente de que mi miembro se rozaba con cada gesto, bailó para mi, despacio, hasta que sus manos deshicieron el nudo en su pecho y dejó caer la toalla, mostrándome sus senos, la edad, 1 hijo, y el uso, las hacían algo caídas, pero eran bonitas, a ojo una 95, con unas grandes y redondas aureolas rosadas coronados por pezones duros, 10 años atrás hubieran sido los pechos perfectos, y pensar que cualquiera con 20€ había disfrutado de ellos.

-ZEUS: déjame que pruebe esas tetas, puta – era feo, denigrante, hosco y de mal gusto, pero Zeus sabia moverse por que pese a ello, gimió de gusto, y se abalanzó sobre la cama para dejar sus pechos en mi boca, los agarré firmemente masajeándolos con virulencia y lamiendo entre ellos, chupando alternativamente cada pezón hasta estirarlos lo más posible y luego mordisquearlos, haciéndola suspirar.

Cuando estaba casi dolorida volvió a besarme entregada, para ir bajando, haciendo el camino inverso con sus labios por mi cuerpo, y tener que ponerse de rodillas en el suelo, usando la toalla para apoyar las rodillas como buena ex profesional, quedando entre mis piernas, abrió la toalla que resistió estoicamente anudada, y mi polla saltó liberada por fin, fuerte, arrogante y decidida, al verla al lado de su preciosa cara, la miré perdido de lujuria.

-ZEUS: chupa de una vez, guarra.

-DANY: ser enorme….- me levanté cogiéndola del pelo de la nuca.

-ZEUS: mira zorra estúpida….. – me puse el consolador de goma al lado de mi polla y al verla soltó un bufido ahogado, le sacaba al menos 10 centímetros y lo peor era el grosor, de diámetro aquel juguete era como mucho una lata de refresco, pero mi polla era como una botella de litro –…. esto no es un juego, no te voy a hacer el amor hasta que te corras dulcemente, te va a follar un hombre de verdad y te vas a correr tantas veces que vas a implorar perdón, así que empieza a chupar para hacer menos dura el par de horas que voy a montarte como en tu vida te ha follado nadie.

Dany gimió al coger mi rabo con ambas manos, y sin que la soltara de la nuca, se relamió antes de meterse mi glande del tirón en la boca, la oía suspirar mientras repasaba con su labios mi verga, me tranquilicé un poco, fue repitiendo la acción tantas veces, y en cada una metía un poco más de carne en su garganta, lo mejor era que sus manos no dejaban de masturbar, sin duda aprendido de la calle, así la gente se corría antes, se pasó un buen rato lamiendo y chupándomela la polla como muy pocas antes, Madamme era insuperable en ese punto, pero ella no lo hacia mal, y cuando se ponía a jugar con mis huevos su forma lenta y calmada de acariciar mi polla era tan escalofriante que me hacia perder la cabeza.

-ZEUS: dios, vas ha hacer que me corra, para – lo hizo entre la excitación y el miedo.

Me puse en pie y ella me dio la espalda, la abracé con pasión, con una mano pellizcando uno de sus pezones y la otra rozando por encima de las bragas bancas su caliente coño, blancas en su inicio, ahora eran medio transparentes por la cantidad de flujos que estaba soltando aquella mujer, la tiré sobre la cama y la arranqué las bragas a fuertes estirones, al abrirse de piernas se acariciaba el clítoris inflado, estaba completamente rasurada y me vencí sobre ella lamiendo y besando el interior de sus muslos, a notar el contacto de mis labios en su interior soltó una palabra en rumano, aquello olía a hembra necesitada, separé los labios mayores para encontrarme la piel rosada y dulce, lamí cada rincón de aquella maravilla y chupé su clítoris hasta hacerla gemir como si ya la estuviera follando, mis dedos hurgaron en su interior sin oposición y me pasé 5 minutos follándola con ellos, ella se retorcida ante la cantidad de sensaciones viejas que recordaba de golpe y algunas nuevas. Cuando encontré su punto G lo estimulé como me habían enseñado, y como había desarrollado yo mismo, subí para lamer sus tetas mientras mi mano se volvía loca en su interior, y el chapoteo era lo único que se oía cuando ella mantenía la respiración con miedo a estallar, pero no aguantó más, se quiso mover pero no la dejé y rompió en un orgasmos como creo que nadie había logrado con ella, se convirtió en una culebra electrificada y se frotó el clítoris con tanta energía que los chorros de flujos se entrecortaban.

-DANY: ¡¡¡¡OH……….DIOS………OHHHHHHH!!!! – sus lamentos se parecían más a una liberación que a excitación, se recompuso cogiendo aire y me atacó de rodillas sobre la cama besándonos con furia mientras amasaba sus nalgas.

Me dejé caer sobre ella y maniobró con agilidad para rodearme con sus piernas, mi peso la aplastaba pero no dejaba de besarme mientras buscaba a tientas mi miembro, no tardó en encontrarlo y dirigirlo a la entrada de su vagina, al sentir mi glande abriéndola y entrando en ella tuvo que coger aire con la boca y mi polla entró hasta la mitad sin dificultades, sin duda el calentamiento en el jacuzzi con el dildo que andaba por la cama ayudó en ese caso, pero a partir de la mitad los 2 notamos como se resistía a entrar más carne en ella, así que retrocedía y volvía a acometer lentamente, mientras la mantenía bien abierta de piernas, sus palabras se mezclaban entre ahogos, suspiros, exclamaciones e idiomas, pero al final se la metí entera y eso la hizo temblar, se aferró a mi espalda con miedo de echar a volar si me soltaba. Por cortesía me mantuve quieto unos minutos, su cuerpo parecía metido en un congelador, tiritaba con los pezones duros rozando mi cuerpo, mientras la besaba el cuello, cuando dejó de apretar las uñas contra mi espalda me volví malvado, la sacaba casi toda y la metía entera de fuertes acometidas que provocaban lamentos sonoros en ella, cerraba los ojos a cada embestida como si la estuviera quitando la vida con cada una de ellas, y cuando el movimiento era constante su cuerpo habló por ella, sus caderas hacían giros para ayudar a que entrara en ella y sus labios buscaban los míos, al correrse de nuevo simplemente se mordió el labio tan fuerte que casi se hace sangre, echando la cabeza hacia atrás, para seguir aumentando la velocidad de su cadera, al poco tiempo éramos 2 fieras enfrentadas, follando de forma grotesca y sucia, rodábamos por la cama, se me ponía encima y mantenía un ritmo frenético hasta que el cansancio o un orgasmo la doblaba de placer, entonces la tomaba como me parecía oportuno, y a la media hora la llené de leche entre gestos tan amplios que la cama ya no solo se movía, si no que crujía.

Sudando sobre ella, que apenas podía coger aire, lamí sus senos, tumbada boca arriba se le separaban demasiado, no eran estéticamente bonitos, así que me senté en el borde de la cama con ella de rodillas sobre mi, no pasó ni 3 minutos cuando ya me estaba cabalgando de nuevo, ahora sus senos botaban de forma alegre y sus gritos en rumano me volvían más feroz, la bestia aparecía y desaparecería cuando ella permitía su aparición, y mis dedos llegaron a jugar en su ano sin la menor muestra de dolor, una serie de orgasmos que la doblaron la espalda provocaron tal corrida que sentía como si se me hubieran meado encima, me puse en pie por instinto con ella aun montada y la golpeé con la espalda en una pared sin dejar de follarla de forma animal hasta que mi 2º corrida la elevó por los aires, cada penetración la hacia subir por la pared, ni se sujetaba a mi con su manos, si no que las apoyaba contra el tabique a la altura de los riñones, para evitar hacerse daño cada vez que se la metía hasta el fondo. Así colgada y con mi polla en su interior, dudando de si quedarse dura o desfallecer, me besó de nuevo, su lengua seguía sabiendo a inocencia y timidez, pese a saber que no tenía nada de aquello. Había descubierto que tenia en mi casa a una mujer que follaba tan bien con Mara, o mejor al tener más aguante, y besaba mejor que Alexis, todo en una, sin la repelente y cansina necesidad de sentirse humillada de forma constante de una, y con mejores tetas que la otra.

-DANY: tú folla……tú fóllame…….- sonreía sin saber donde poner sus manos.

-ZEUS: claro que si, pero ahora voy a abrirte ese culito tan bonito que tienes – de oírlo abrió la boca entre la duda por lo que la podía hacer con mi enorme verga y la curiosidad de sentirlo.

-DANY: tú cuidado……mi culo hace mucho que nadie abre.

Me giré con ella en brazos y la dejé caer sobre la cama, gateó poniendo su culo en pompa y hurgado en su coño con una mano para luego lubricar el culo, antes de que me acercara ya se estaba metiendo 2 dedos por el ano, azoté su trasero varias veces haciéndola gemir, y separé sus nalgas para meter mi boca allí, sorbí los flujos y los escupí en su ano a la vez que mi lengua se hacia sitio, luego mis dedos y al fin la apreté mi glande tan fuerte que Dany se echaba hacia delante, roja y congestionada sintió como mi polla entraba con gran esfuerzo en su ano, golpeaba la cama con ira balbuceando en su idioma, y como un resorte al metérsela toda, se elevó como si alguien invisible la sujetara en el aire, fui yo quien la cogió de las tetas y tirando de sus pezones, saqué a la bestia que se la folló por el culo tan rápido que no hubo paso del dolor al placer, solo placer al oír como resonaba su piel al ser espoleada por mi pelvis.

La llevé las manos a la espalda al caer, para usarlas de riendas, y el mismo infierno se desató a su espalda, la polla se me salía y tardaba 3 o 4 embestidas en darme cuenta, el agujero de su ano se expandió tanto que se la volvía a meter sin dificultad, y cuando gritaba hasta quedarse sin aire un orgasmo anal la sacó de mi, me dio miedo incluso, como si le hubiera dado un ataque epiléptico o algo, se movió como una autentica enferma sobre la cama, pero solo era algo que nunca había sentido, cuando se le pasó y pude domarla, nos tumbamos de lado y la penetré el culo en forma de cuchara, abriéndola una pierna y acariciando su vulva con la mano libre, durante media hora tuvo otros 3 episodios iguales y al correrme por 3º vez creo que se desmayó del sprin final, por que durante 10 minutos no se movió ni parecía respirar, yo estaba sacado de rueda, tumbado boca arriba empapado en sudor y con la polla doblada, casi en forma de hombre exhausto, como lo era yo.

No me gustó, a Raúl quiero decir, fue aprovecharme de ella, la follé, no la hice el amor, fue animal, grotesco y dominante, todo lo que a Zeus le gustaba, pero a mi no……..ya no. Se me pasó la idea de que Eleonor la hubiera animado a ello o que Dany se había convertido en un riesgo añadido, pero su mirada me borró aquellos pensamientos, “es mía, como tantas otras”.

-YO: ¿estás bien? – atiné a decir cuando el corazón dejó de intentar salirme por el pecho.

-DANY: yo……….yo……..si………dios……..yo ….nunca…….nunca llegar así……yo………jajajaja……..follas muy bien.

-YO: eso me dicen – se giró rodando por la cama para quedar mirándome, sus ojos eran de un azul cristalino, brillaban de algo parecido a la devoción, y jadeaba.

-DANY: tú…….tú hombre, saber como tratar a una mujer….y tu polla ser increíble.

-YO: ya……- estaba harto de oír eso, por raro que suene.

-DANY: dios……..yo ser tu mujer, ¿si? Yo cuidar de ti y tu follar todo lo que quiera, ¿si? – me acariciaba el cuerpo y me daba cortos besos en el costado, ilusionada.

-YO: ya sabes que no puedo………- casi se echa a llorar.

-DANY: ¿yo no buena?.......yo poder mejorar, tú da tiempo y follar mejor.

-YO: no es por eso, no soy bueno para ti, ya sabes mi situación, es mejor que busques a otro hombre, uno bueno y decente.

-DANY: tú ser ese hombre.

-YO: no lo soy.

-DANY: muchas mujeres van detrás, para no ser buen hombre.

-YO: solo quieren esta polla y que las folle, como tú, aunque no quieran reconocerlo – casi llora, pero de golpe dejó de ser la puta que había retomado, y volvió a ser ella misma.

-DANY: tú razón, yo estúpida……- la acaricié rostro con dulzura.

-YO: no tienes culpa de nada, yo he caído.

-DANY: pero yo no marido, y tú soltero, ¡¡no ser malo!!..... – fue a la desesperada – ….¿tú puedes seguir en cama mía mientras no pareja? – esa petición no se la iba a negar después de lo que me había demostrado en la cama.

-YO: claro que si, mi amante del este – y sonrió de nuevo, besándome.

-DANY: yo cansada y sucia…..necesito ducha antes de ir a colegio de hijo.

-YO: ¿y si nos duchamos juntos y te acompaño? – me besó tan fuerte que me adormeció la boca.

Nos metimos en la ducha juntos, el agua tibia rodeó su cuerpo y mi polla saltó al encuentro de su coño, pasé unos 15 minutos follándola de cara, para luego metérsela por el culo y tomarla desde atrás, cuando me corrí ella ya se mantenía en pie con dificultad por que le fallaban las piernas de tantos orgasmos seguidos, me fui del baño cuando se estaba secando por que si no la destrozaría otra vez, inútil, al salir y tratar de vestirse no pude retenerme, cuando se estaba poniendo un vestido de flores le subí a falda bajándole las bragas a medio muslo y me la follé por el culo contra la pared, quiso resistirse pero estaba en una nube, como yo, menos mal que empezamos a prepararnos con tiempo, cuando me corrí en su culo se desnudó y me montó sobre la cama hasta obtener mi semen en su coño otra vez, pasó una hora y media hasta que los 2 estuvimos saciados, duchados y vestidos, me escocía la polla y a ella al caminar se la notaba que estaba más abierta que nunca.

Pese a que no estaba lejos el colegio, fuimos en coche para no ser tan evidentes, al llegar las madres de otros críos me comían con los ojos, alguna ya me la había follado al ser del barrio, pero Dany casi me exhibía como un trofeo, se le notaba en la cara que estaba feliz y bien follada, su hijo alucinó al verme allí con el coche, y presumió con sus amigos, de hecho les invité a tomar algo, y jugué con él crío en casa hasta que mi madre llegó y le obligó ha hacer los deberes. Ya puestos me quedé a cenar y dormir, el sofá de abajo era suficiente pese a que Dany ofreció dormir con su hijo para darme su cama, no entendió por que no accedía hasta que a las 2 de la mañana me colé en su cuarto, al sentir mi cuerpo se volvió y me besó sorprendida y halagada.

-DANY: familia en casa, tú loco.

-YO: loco por follarte.

No se dijo más, me pasé 3 horas haciéndola sentir todo lo mujer que era, todo lo que ella sabia que era, y todo lo que su estúpido marido jamás la hizo sentir que era, tenia que morder la almohada para no alertar a nadie de la casa y cuando no podía más me mordía a mi con cada orgasmo, a altas horas de la mañana volví a mi sofá a descansar lo que pude, con el cuerpo lleno de marcas de arañazos y dientes, pero satisfecho. Mi madre se sorprendió de que Dany tardara tanto en despertarse esa mañana, y sin muchas dificultades les convencí de que me quedaría unas semanas por allí.

El ritual se repitió durante 1 mes entero, cuando mi familia desaprecia por las tardes nos volvíamos literalmente locos, follando por toda la casa, piscina incluida, recuerdo especialmente tumbarme boca arriba en el jacuzzi con ella tumbada de espaldas sobre mi y estar una hora dejando que ella me follara a mi con mi rabo atravesando su ano, de forma lenta y lasciva. Luego recogíamos a su hijo y por las noches me deslizaba a su cuarto metiéndome entre sus sabanas y sus piernas, mi madre se olía algo, pero no dijo nada, creo que prefería callarse y tenerme por allí. No era fácil mantenernos en silencio de noche, por que como prometió con el paso de los días me demostró que follaba mejor que nadie con quien hubiera estado, incluyendo a gente como Eli, Eleonor o Ana, era una versión de Madamme con 20 años menos, y eso no lo perdería mientras las cosas estuvieran en calma, fue demasiado poco, pero mereció la pena.

Raúl – Ascenso al cielo.

Alguna vez habéis ido a comer a algún sitio, a un restaurante o a casa de un familiar o amigo, y os ha puesto de comer algo que aborreces, o que lleva algún condimento que detestas, y te pasas días, semanas o meses, incluso años negándote a probar eso por que no te gusta, aunque ni siquiera lo has probado, hasta que llega ese día en que ves esa comida en la mesa y por algún motivo lo ves apetitoso, tienes una ganas locas de probarlo, sabiendo que no te gusta, y con un miedo atroz a que realmente te guste su sabor y te recuerden el resto de tu vida lo tonto que fuiste al no probarlo antes, así que pese a desearlo con todas tus fuerzas, te pasas los días negándote a cómelo, solo por orgullo, ¿si?, ¿no?, supongo que si, y si no, es aplicable a alguna actividad que pensabas que no te gustaba y una vez ves a tus amigos hacerlo, deseas empezar a practicarla pero te niegas haciéndote el duro. Pues os pido, empezad a leer esta parte con esa sensación en la cabeza, elevada al infinito y multiplicada por Pi.

La sensación de normalidad que me daba Dany y volver a casa de mis padres, ese mes largo, fue refrescante, en todos los aspectos, de hecho me acosté con Alexis y Madamme a modo de despedida, momentánea creía, mientras tuviera a Dany no necesitaba a ninguna mujer más, su forma de follar y un apetito tan insaciable como el mío eran un regalo, y así me mantendría centrado mientras las cosas se mantuvieran en calma, pero se mantuvieron poco tiempo así, pasado ese tiempo.

Alicia contactó conmigo, me citó a una fiesta a la que Eleonor fue invitada pero no iría, en un hotel de 5 estrellas, con una llamada bien estudiada me tentó como si Eleonor hubiera estado dictándola, pero en un encuentro concertado me dijo que tenia algo preparado, yo solo tenia que seguirle la corriente a Hera, simplemente me pidió que acudiera elegante. No hizo falta más para que llamara a Paula, mi sastre pechugona preferida, había ido a visitarla alguna vez, siempre dejándola con la miel en los labios a cambio de trajes, ya tenia 6 de 1º calidad, pero fui a por el 7º, cuando me midió de nuevo, desnudo, para coger las medidas, irradiaba fuego, al acabar la desnudé y me la tiré a lo bestia, no tuvo nada digno de mención, una treinteañera salida tetuda, siendo adiestrada a base de sexo, incluso le estrené el culo haciéndola sangrar, pero a los 4 días me dio el traje más bonito que había visto nunca, a medida, tipo 007 con pajarita y todo, me quedaba espectacular, no pude si no volver a destrozarla sobre la mesa de mediciones y dejarla ida tras 2 horas de sexo salvaje.

La fiesta de Eleonor me recordó mucho a la que hice con Eli en mis inicios, mi madre casi se muere al verme arreglado y perfumado con aquel traje, y acudí a la entrada del hotel cerca de las 21:00, quedé allí por separado con Alicia, la invitación estaba a su nombre así que yo no podía entrar, era el +1 de Alicia. Por gracioso que fuera, a mi alrededor se juntaron una serie de chicos bien arreglados, y de vez en cuando venia una gran dama y elegía a uno para llevarlo a la fiesta, supongo que serian ”acompañantes”, 4 de ellas, 2 muy agraciadas, quisieron “contratarme”, pero yo esperaba a mi particular dama, que se hizo de rogar, pero como suele pasar en estos casos, la espera mereció la pena, cada milésima de segundo de aquellos 40 minutos que esperé fueron pagados con gusto.

Alicia apareció, y un “ohhh” se oyó a la entrada del hotel, incluso algunos fotógrafos que perseguían a famosillos de poca monta se dieron la vuelta para capturar la belleza de aquella desconocida, a su espalda casi adiviné el coche que le había comprado Eleonor siendo conducido por Mara, que se esfumó por la calle, ¿pero para que seguirla con la mirada?, Alicia estaba allí, de pie, algo abrumada por el peso de las miradas, de la atención de los hombres y de envidia de las mujeres, se la leía en la cara una sonrisa falsa, sin aquellas arrugas que tanto me divertían, al verme casi sintió alivio de ver una cara conocida, y acudió andando hacia mi, como si se deslizara por la alfombra de la entrada.

No es justo decir que Alicia era la mujer más hermosa del mundo, ni tan siquiera puedo decir que fuera la más bella que conocía, pero aquella noche lo era, su larga melena castaña había sido planchada y peinada para que cayera por el lado derecho de su cabeza, como una cascada de chocolate fundido, con un efecto mojado impecable, todo el cabello caía por delante de su hombro derecho, pero sin llegar a taparla ese lado de su cara por completo, con una filigrana de horquilla sujetando el pelo del lado izquierdo, para mi gusto demando maquillada, un ahumado de ojos de un gris muy ligero, con colorete en las mejillas que resaltaban más unos pómulos que en realidad no eran tan exagerados, y un rojo brillante en los labios que destacaba en exceso con el blanco de los polvos en su piel, un pendiente largo en forma de péndulo en la oreja libre de cabello, supuse que en la oreja oculta llevaría otro igual, parecían diamantes, o brillaban como tales, y al caminar deslumbraban con el flash de las cámaras, un brazalete plateado en forma de espiral en su brazo izquierdo, y un bolso banco en la mano derecha a juego con los zapatos, de tacón de aguja con unos ribetes plateados, y con el vestido.

El vestido merece mención aparte, el día que vi a Ana en el fin de semana romántico, con el vestido negro de las 3 V, tan ceñido, ajustado, enseñando tanto y tan provocativo, pensé que nunca jamás vería en persona a una mujer más preciosa con una prenda similar, y pasé los años pensado que así seria, creyendo que moriría en lo cierto, salvo alguna despampanante modelo, o presentadora, retocada en las revistas, sabia que nadie podría superar a Ana, pero me equivoqué, me equivoqué de pleno.

Alicia iba con un vestido blanco de una pieza con 1 único hombro, nacía en el hombro izquierdo en un nudo alegre y por delante bajaba como la ladera de una montaña recién nevada, cubriendo su cuerpo, era ceñido y ajustado hasta las rodillas, elástico pero sin dar de si en su pecho, no llevaba sujetador, pero era demasiado joven y no tenia tantos senos como para que eso la desmereciera. Su cadera ya era otro tema, allí la prenda daba de si lo justo como para poder hacer un calco de su figura voluptuosa, su trasero era una visión poderosa y avasalladora, con la tela en el espacio entre las piernas totalmente tensa. A partir de su medio muslo el vestido se ampliaba en un vuelo elegante, con una abertura en su pierna izquierda, enseñándola desde algo por encima de la rodilla, con unas medias algo oscuras que embellecían con el contraste, y por la derecha caía con pliegues vaporosos y semi transparentes hasta cubrir el zapato. Al caminar, con la mano libre del bolso, remangaba el vuelo para no manchar el vestido del suelo, y el muslo aparecía lo suficiente como para llamar la atención pero lo justo como para no ser vulgar, solo cuando ya la tenia encima me percaté en un ligero cordón plateado alrededor de su cintura, y que bajo la cortina de cabello sedoso del brazo derecho, había una manga elástica unida a la parte alta del vestido en el costado, que le cubría como una 2º piel desde el hombro descubierto hasta los dedos, terminando en un pico en el dorso de la mano con un hilo en forma de anillo sujetando la prenda en su dedo corazón. La tela era de un blanco nuclear que reflejaba la luz, deslumbraba, era tela, no plástico, y hacia que costara mirarla fijamente, pero allí la tenia, delante de mí, sonriendo, expectante de mis palabras, y no podía dejar de mirarla, se me quemarían las retinas antes de hacerlo.

-ALICIA: dios………debo de estar ridícula para dejarte sin palabras – sonrió sin arrugas, deseaba que dijera algo para sentirse normal.

-YO: yo…….- no fue una palabra, ni siquiera creo que dijera esas letras, sonó como un eructo.

-ALICIA: jajajaja pobre de mi, cuan desdichada soy, pues mi acompañante de esta noche ha perdido el habla.

-YO: tú…..- mi voz apenas fue algo más audible que mi “genial” 1º intervención.

-ALICIA: ¿Raúl?, dime algo – me agarró de uno de mis brazos suplicando que volviera en mi, algún otro acompañante empezó a venderse sin perder tiempo, y eso me hizo perder de vista sus ojos, si, sus ojos, obviamente me percaté de todo lo relatado, pero a mi, una mujer preciosa y bien arreglada, no me quita el habla, creo que eso ha quedado demostrado, eran sus preciosos ojos del color ámbar más brillante del mundo, los que me tenían atontado, y no era por su belleza, si no por que leí en ellos algo, algo que no había visto nunca……..no en ella.

Recuperé la capacidad del habla mientras 4 tipos se afanaban por quitarme a mi chica, mientras ella se disculpaba de forma cortés, la miré y sonreí…….

-YO: él…….- esta vez sonrió de nuevo, y las arrugas aparecieron, ya estaba allí y ella lo sabia.

-ALICIA: ….nosotros….

-YO: ….vosotros…...

-ALICIA: ……y ellos.

Se hizo en silencio incomodo, el mundo se detuvo por unos instantes y solo ella y yo sonreíamos al entender por qué, nos miraban como a locos.

-ALICIA: ¡¡¡no me creo que aun lo recuerdes!!!

-YO: fue como te conocí, seria de imbécil no acordarme.

-ALICIA: por dios, ¿que tendría, 11 años?

-YO: eso creo……..

-ALICIA: jajaja me ayudaste a pasar el trimestre en lenguaje.

-YO: y aquí estás, a punto de sacarte la carrera y yo sin trabajo – me apretó la mano aferrada a mi brazo y reímos los 2 como críos.

-ALICIA: menos mal……pensé que te había dado algo – se tapaba la boca al reírse con la mano rascándose con el dorso de los dedos las parte baja de la nariz, siempre lo hacia cuando no podía contener la risa por que decía que la hacia una dentadura horrible.

-YO: ya se me ha pasado, aunque a ese de ahí aún le dura – grité para que el tipo que tenia Alicia detrás babeando me oyera, ella se giró y al verle le saludó con una carcajada, fue cuando me di cuenta de por qué todos los hombres a su espalda no la quitaban ojo, el vestido por detrás la hacia la tentación hecha mujer, no solo por como se le marcaba la cintura, la cadera y su trasero, que seria suficiente, el vestido era un hilo de tela que iba de hombro a hombro, para luego caer por su costado y unirse a la parte delantera, pero toda la espalda al aire, de costado a costado, dejando entrever el nacimiento de sus senos en el torso y cerrándose en una curva peligrosa en el abismo del inicio de sus nalgas, debido a sus amplias caderas la prenda no caía sutilmente, como hubiera deseado el diseñador, si no que estaba tensa, haciendo puente entre ambas nalgas, si se agachaba lo suficiente se le vería la raja del trasero, al girarse me pilló mirándola el culo, tan embobado como los demás.

-ALICIA: oye…- sacudí la cabeza torpemente.

-YO: si, es verdad, la lluvia en Sevilla es una maravilla……..- volvió a sonreír al conocer mi capacidad para hacer el ridículo y aparentar que no es así.

-ALICIA: entonces estoy feísima, ¿no?

-YO: horrible, yo que tú me volvería a casa y vendría en chándal.

-ALICIA: tarde, vas a tener que cargar con este sapo toda la noche, así que vamos dentro de una vez…. – me cogió del brazo y empezamos a caminar, susurrándome al oído –…..por que me estoy congelando el culo aquí fuera.

Entramos al hotel, y nos paseamos un rato como los 2 buenos amigos que éramos, riéndonos de la gente y buscando donde ponernos. Cconstaté 2 cosas, que ya sabia o sospechaba, pero que reafirmé, la 1º es que yo tenia al mirlo blanco de la velada, nunca mejor dicho, Alicia era la más bella de la fiesta, la 2º cosa fue cuando Alicia insistió en hacerme pasar por un lateral apartado, y me pidió que cerrara los ojos, al momento unas manos delicadas pasaron por mi espalda y me taparon los ojos, oyendo un “¿quien soy?” de fondo, por la altura, y el tamaño de su pecho en mi espalda, más su endulzada voz, solo podía ser una persona.

-YO: ¿que tal Eli?

-ELI: joder….le quitas la gracia a todo……..- me soltó y me giré para admirar a la belleza del trabajo de gimnasio.

-YO: ¿como estás preciosa? – me dio un abrazo sentido y largo, besándome en la mejilla sin miedo a que se le estropeara el maquillaje, al separarse la vi con un vestido largo azul claro, mucho más recatado que nunca, sin escote ni mostrando sus encantos.

-ELI: pues bien, ya sabes, la fama y todo eso, pero siempre tendré tiempo para viejos amigos – guiñó un ojo, pero no a mi, si no a Alicia.

-ALICIA: si, muchas gracias por todo – las líneas de su vestido y aquella forma de dejar impresionado a cualquier hombre tenían a firma de Eli y de su modista.

-ELI: un placer ….– bajó la cabeza como una sirvienta y me miró a mi mientras cogía de la mano a Alicia y le hacia dar un par de vueltas sobre si misma –….. ¿que, te gusta como la he dejado? – Alicia dejó de moverse pero el vuelo de su vestido no, lo que el dio un aire a Marilyn Monroe exquisito.

-YO: está preciosa……………aunque demasiado maquillaje para mi gusto, no lo necesita – Eli sonrió y miró a Alicia que puso cara de condescendencia.

-ELI: te lo dije.

-ALICIA: pero es una fiesta de gente rica, no quería desentonar.

-ELI: tal como vas ibas a destacar si o si….. – se sonrojó un poco mientras Eli la mostraba como una vendedora de tele tienda –…..bueno chicos, me alegro de ver que estáis bien, pero tengo trabajo.

-YO: estas fiestas nunca son lo que parecen, ¿no? – sonrío y Alicia con ella, sin arrugas, no comprendió de que hablábamos.

-ELI: jajaja, nunca tendré mejor alumno.

-YO: ni habrá mejor maestra – se mordió el labio y dejó de hacerlo al instante, se despidió con cortesía de Alicia y luego me volvió a abrazar, me susurró algo que me hizo mirarla atónito, solo la curiosidad de Alicia era más confusa al no poder oírlo.

-ELI: adiós chicos……….- se despidió lanzando un beso con los dedos.

Se alejó tan veloz que apenas puede despedirme como se merecía, casi al instante Alicia se me acercó, dejando pasar unos segundos en los que yo miraba al horizonte.

-ALICIA: ¿que te ha dicho? – la miré esperanzado.

-YO: nada……… nada que no supiera ya….. – sonrió sin comprenderme -….. ¿bailamos? – extendí mi brazo y nos fuimos a la pista de baile.

La música era horrible, una mezcla del chill out con techno, tediosa y aburrida, pasamos por la cabina del DJ y le hice una petición de la que se quedó boquiabierto, tuve que repetírsela 4 veces, es normal, no es una canción muy conocida en España. Y en este punto tengo que reconocer una debilidad, me encantan las películas americanas de musicales y bailes, esas donde un grupo de gente se une para formar un grupo, cantan y bailan para ganar un torneo que justamente solucionará sus problemas económicos, si, lo sé, sin simples y predecibles, pero tienen algo que me atrae, y una de esas cosas son canciones como “This Girl - Laza Morgan”, mi petición, tardó unos minutos en encontrarla, y cuando lo hizo hasta los más ancianos agradecieron el cambio. Arrastré a mi acompañante que se temía cualquier burrada que le hubiera pedido, me cuadré como todo un bailarín clásico, con la espalda recta, un brazo en alto estirado y el otro en su cintura, ella correspondió cogiéndome la mano alzada y poniendo la otra en mi hombro, se veía tan ilusionada que no debió de notar como me temblaban las manos.

La música sonó, (y os pido encarecidamente que leáis este párrafo con la canción de fondo a ser posible, quizá así captéis la intensidad del momento que viví), empezamos a movernos como si fuera un valls, Alicia sabia inglés de sobra, yo solo lo entendía a medias pero me sabia la canción de memoria, y lo que decía, ella sonreía con las bellas arrugas en sus ojos al ir descubriendo mi petición, yo pretendía mantenerme serio, sin lograrlo, mirándola a los ojos mientras dábamos vueltas por la sala, casi parecía que todo el mundo se había apartado para dejarnos paso, cada giro y cada vuelta era más atrevido y rápido, ella con sus zapatos de tacón apenas podía mantenerse si no la tenia sujeta, sonreía y yo con ella, en un giro la alejé, dando vueltas sobre si misma, a un par de metros y casi imbuidos por el espíritu de esas películas ella reaccionó con una pose sensual y frágil, acudí a su espalda para seguir danzando con ella siguiendo mis pasos, rodeándola con mis brazos, y para cuando acabó la música ya estabamos cara a cara de nuevo, con cada nota final nuestros labios se acercaban, cada vez más, hasta que la canción terminó y la gente rompió a aplaudir haciendo desaparecer aquella fugaz tentación a escasos centímetros de besarnos, eso no cambió que siguiéramos pegados el uno al otro unos segundos más.

-ALICIA: es una bella canción.

-YO: lo es – carraspeé al oír de nuevo la mierda de música programada, y seguimos danzando unos minutos mientras hablábamos.

-ALICIA: bailas mejor de lo que recordaba.

-YO: gracias……..tú no has estado mal – golpeó mí pecho sonriendo.

-ALICIA: gracias – me conocía lo suficiente como para saber que si no era políticamente correcto es por que prefería bromear a decir que bailaba como un ángel, no se a cuantas mujeres conocéis en vuestra vida pero si bailáis con una, bailar no perrear, y al hacerla un giro dejándola sola, sin ensayar ni hablarlo, hace un gesto de baile llamándote, no la dejéis escapar nunca.

-YO: supongo que esta fiesta es algo más que una fiesta – la guiñe un ojo para que supiera de que hablaba, pero no hacia falta.

-ALICIA: no te preocupes, Eleonor no nos escucha, aunque quisiera no podría llevar ningún micro sin que se me notara – en eso tenia razón, el vestido no dejaba nada a la imaginación.

-YO: ¿que hacemos aquí entonces?

-ALICIA: seguramente tenga ojos mirándonos ahora mismo, desde que la dije que liarnos tú y yo es complicado, está muy irascible, pero la tengo controlada, y si cree que lo estoy intentando se calmará.

-YO: una puesta en escena muy elaborada, felicidades.

-ALICIA: gracias, Hera es una zorra muy lista – su lacónica sonrisa no desvío mi mirada del gesto tenue con el dorso del dedo índice apartándose el cabello del rostro.

-YO: ¿y que puedo hacer para ayudar en tu causa?

-ALICIA: no creo que puedas hacer nada más útil que este baile………- cogió aire dejando de bailar un segundo - …….aunque si te soy sincera, no estoy aquí por Eleonor, no del todo.

-YO: menos mal, ¿la barra libre quizá....?.

-ALICIA: esto es serio………- volvió a coger aire.

-YO: está bien.

-ALICIA: quiero dejar de ser tu hermanita.

-YO: nunca, me niego.

-ALICIA: tú escúchame……se que hay problemas y un millón de inconvenientes, pero no puedo dejar de sentir una punzada en el corazón cada vez que te veo en los brazos de otra mujer.

-YO: no te preocupes por mi, se cuidarme solo.

-ALICIA: no me preocupo por ti………me preocupo por mi, por que tengo miedo, no a que te hagan daño, si no todo lo contrario…….a que encuentres a alguien otra vez….

-YO: ya hablé de esto contigo Alicia, no voy a permitir que Eleonor estropeé nuestra amistad.

-ALICIA: ya no hay amistad Raúl…….y no es por ella, si no por nosotros, o al menos por mi.

-YO: no puedes hacerme esto, tú no.

-ALICIA: lo sé, y no es justo, pero aquí estoy, con un vestido ridículo, en una estúpida fiesta, pintada como una puerta…..y es por ti….por que solo así puedo tener la intimidad suficiente como para hablar contigo sin esa bruja escuchando – sus ojos cristalizaban.

-YO: pues te agradezco en el alma el esfuerzo, pero la respuesta es la misma, ella no dictará lo que pasa en mi vida, aunque sea una farsa.

-ALICIA: ni yo quiero eso, ¿pero por que tiene que ser por que ella lo diga, y no por que nosotros queremos?, por que yo……quiero…….¿y tú? – salvo en el balcón, fue la vez en toda mi vida que la vi más débil, frágil y asustada.

-YO: no……..esto no pasaría si ella no lo hubiera pedido – le tembló la barbilla, fue lo último en que me fijé antes de dejarla en la pista de baile e irme a la barra a pedir vodka a palo seco.

No me atrevía a mirar atrás, estaba a punto de echar a llorar, ni siquiera me gustaba el vodka, tenia el vaso en la mano y me temblaba, no compendia por que hacia lo que hacia, ni por que no hacia lo que no hacia, era una mezcla de orgullo y estupidez, lo sabia y aun así me seguía negando, cuando el camarero se fue a ir le cogí la botella de la mano, y mi furia reflejada en el rostro hizo que no la reclamara, al girarme a mi lado había una mujer, de unos 26 años, metida en un traje negro escotado en pico y con una 100 de pecho.

-ZEUS: hola preciosa, ¿como te llamas? …– Támara me dijo –…. ¿quieres compartir unas copas?, necesito buena compañía.

-TAMARA: por que no….. – se dijo a si misma en vez de a mi, repasando mi aspecto impecable, cogí una copa sin permiso de la barra y arrastré a una esquina a mi nueva amiga, la di 2 copas y ya la tenia sobándome el cuerpo con sus senos, Zeus batió un récord y en 10 minutos ya me estaba llevando de la mano a las habitaciones, en los ascensores apareció Alicia con el rímel corrido de lagrimas grises.

-ALICIA: ¡por favor, no hagas esto!

-ZEUS: voy a follárme a esta guarra, déjame.

-ALICIA: no lo hagas, por favor, te lo pido como…….

-ZEUS: ¡¡¿como que? seguro que quieres que me vaya contigo ¿no? Para “convencer” a Eleonor!!

-ALICIA: ¿tan horrible seria para ti? – sollozaba ante mi, esa imagen me puso furioso.

-ZEUS: ¡¡¡¡cállate puta estúpida, ¿solo sabes joderme la vida?, lárgate de aquí antes de que te parta la cara!!!! – la levanté la mano, y si Támara no me mete en el ascensor no se que hubiera pasado.

Ni pensé en lo que hacia, Zeus tenia el timón, como tanto me temía se había hecho dueño de mi cuerpo y le metía la lengua hasta la campanilla a aquella mujer en el ascensor, no se creía lo que palpaba entre mis piernas, no le importó que le sacara las tetas y se las lamiera echando el vodka por encima, al llegar a su habitación la desnudé tan rápido que apenas vi el tanga negro que llevaba, y se tumbó boca arriba abriéndose de piernas y acariciando su coño lleno de pelo cuidado, ella tenia la botella en la mano y seguía bebiendo, me bajé los pantalones con la polla aún medio dura e incluso así hizo que Támara escupiera el trago ruso que tenia en la boca. Allí estaba Zeus, de pie, con la polla fuera y una hermosa mujer desnuda con grandes tetas, las piernas abiertas, y el dato más importante de todos………..estaba quieto.

-TAMARA: vamos, ven a la cama y chupa las tetas de tu mami – la bebida ya le pasaba factura.

-ZEUS: si….ahora mismo voy – pero allí seguía, de pie, inmóvil.

-TAMARA: jajaja ¿tienes miedo de que no seas suficiente hombre para estas? – se amasó lo pechos que colgaban enormes y tersos.

-ZEUS: no, te destrozaría, como a todas………- “¿por que cojones uso el condicional?”

-TAMARA: anda, deja que te anime – se abalanzó al suelo a coger mi polla, pero la cogí de las manos.

-ZEUS: para – sonrío y lo volvió a intentar.

-TAMARA: se usar las manos.

-ZEUS: PARA - se alejó un poco.

-TAMARA: oye, me estas poniendo nerviosa…….- y más se asustó.

-YO: ¡¡¡¡¡¡¡¡¡PARA!!!!!!!!!!!

-TAMARA: pero si no te estoy tocando – titubeó al hablar, no entendía que no hablaba con ella.

Me vestí y salí disparado de allí, gritándome insultos a mi mismo, bajé al salón de la fiesta, desesperado, buscando a Alicia, no la encontraba, Eli me llamó a lo lejos, la cogí de los brazos levantándola del suelo.

-YO: ¿dónde está?

-ELI: ¿que pasa?, Alicia estaba llorando y echa polvo.

-YO: soy un puto retrasado mental, eso es lo que pasa, ¿dónde está? – gemía de dolor al sentir la fuerza de mis manos.

-ELI: no se donde está………… ha dicho que subía al ático……… a coger un poco de aire.

Antes de que terminara las palabras “subir al ático” se me abrieron los ojos de miedo, antes de que terminara la frase y tocara el suelo con los pies ya estaba corriendo hacia los ascensores, “NO POR DIOS……….AL ÁTICO NO”, pulsé todos los botones, la gente me miraba asustada, pero no tanto como yo, esperé 3 segundos y fui por las escaleras, “no tienes tiempo, no esperes, corre…………VUELA”, el hotel tenia 19 plantas y el ático, no recuerdo haber pasado las 19 plantas, solo el último tramo de escaleras que daba al ático, y lo recuerdo por que había una mole colombiana medio escondida en el rellano, no me vio venir, pasé a su lado a tal velocidad que al darle un empujón su cabeza chocó contra la pared y quedó inconsciente en el suelo, abrí la puerta con un pánico que solo recordaba haber tenido la mañana de mi operación, temiéndome que Alicia estuviera en el borde del ático, o peor………que ya no estuviera en el borde del ático.

Del golpe de la puerta al abrirse Alicia se giró sentada en mitad de unos ventiladores industriales, asustada del sonido, al verla llorando, acariciándose el tatuaje de una mano en la muñeca de la que la sostuve, como me prometio que se haría, pero lejos de los bordes, fue como si el Dios, Jesús, todas las vírgenes y santos, Alá, Yahveh, Buda, Brahmá, Visnú, Shivá o la Trimurti, la madre tierra, el sol, los planetas, el Olimpo entero y todos los dioses y profetas que ha habido, hay, y habrá jamás, me tocaran con su divinidad, caí de rodillas en su regazo, me acarició el pelo al entender el horror que había pasado aquellos instantes.

-ALICIA: tranquilo, ya te dije que……

-YO: TE QUIERO ……– la interrumpí, brusco, jadeando, asfixiado y con el corazón en la boca, pero me sentía desfallecer y tenia que decírselo, necesitaba que lo supiera – ….TE QUIERO ….. – no podía decir otra cosa, no me llegaba oxigeno al cerebro, y estaba mareado, pero no podía parar de decirlo –……TE QUIERO…..TE QUIERO, TE QUIERO Y TE QUIERO……..– hundí mi cara en la falda de su vestido, no tenia valor ni fuerzas para mirarla a la cara, por lo que le acaba de hacer y por lo que ella podría contestar.

-ALICIA: pero….

-YO: me da igual, TODO – seguía cogiendo aire a bocanadas, ahogado, sobrepasado y derrotado a sus pies, rendido.

-ALICIA: ¿y la chica?

-YO: la tenia desnuda en la cama y no podía pensar en nadie más que en ti, que la den….a ella……. a todas……..a Eleonor………. a Hera………a Zeus…………. que se pudran en el infierno………. TE QUIERO – cada vez que lo decía lo veía más claro, sonaba mejor y el mundo era menos oscuro a mi alrededor.

-ALICIA: Raúl……….yo……– quiso alzarme la cabeza con sus delicadas manos.

-YO: pero me da igual………….TE QUIERO – no tenía la capacidad de establecer una conversación racional, solo un tornado de cosas en mi cabeza.

-ALICIA: y yo a ti……..yo también te quiero - me levanté al oírselo decir, haciendo acopio de todo lo que daba mi cuerpo de si, no razonaba con claridad, un millar de ideas pasaban por mi cabeza y no tenia forma de decirlas todas a la vez, pero si no las decía me quemaban por dentro.

-YO: no…….no me entiendes……… - no lograba enfocarla de lo mareado que me encontraba –……….no te quiero…..no, esa no es………no es la palabra…….no te quiero……..no eres mi hermanita, nunca lo fuiste……era yo…….tenia miedo……..así te tenia cerca…..pero no me arriesgaba………no……….no te quiero……….te amo, te amo con locura………..desde el 1º día que te vi y me repasaba las lecciones de lenguaje el día antes de enseñarte, desde ese día te amo…………te amo como nunca ame a nadie……… ni a Lola, ni a Ana…….las quise, las respeté y fui lo mejor que pude con ellas…….pero no las amaba….no como a ti………..mataría por ti……….creo que he matado ya……al que te vigilaba……..espero que fuera de Eleonor……….le he estampado la cabeza contra la pared……- señalé a la puerta por la que en cualquier momento un colombiano de un cártel de la droga, con la cabeza herida, podría salir -…....dios….¿iré a la cárcel?.........me da igual………..he subido por las escalares…….corriendo……. 19 pisos, creo…..no sé….no los he contado…….me daban igual, los pisos, los vigilantes,………los haría volar como una bola de bolos a los bolos………para llegar hasta ti………te amo…………toda……….eres increíble……..eres guapa…….¿donde estás? – me di la vuelta, vi el reflejo de su vestido, no podía enfocarla a ella - ….ahí…- señalé -……¡oh si!….guapa……..pero lista……no solo estás buena…..que también…….vamos que tienes un polvazo……..pero no es eso……te amo……pero por que eres buena….dulce……..y por que te frotas la nariz cuando ríes…….. por que te agachas doblando las rodillas para coger algo y no enseñando el culo como las demás zorras………te amo………por que para estornudar tienes que mirar a una luz fijamente…… por como trenzas tu pelo con los dedos cuando hablas por teléfono………..por que pones los brazos en jarra cuando te enfadas………te amo……por todo……….por como te sientas sobre una pierna……por como juegas con la pajita de una bebida cuando vas a beber…… ……...por como te recoges el pelo en un moño con la mano cuando tienes calor……………por eso y por más……..tengo…...tengo miles de cosas……..pero no me acuerdo de muchas…….te amo…………..que bien suena ¿no?.........te quiero, te amo Alicia, y ahora lo se………..no se por que no quería……….dios, y las arrugas de tus ojos cuando sonríes de verdad, y no de mentira……..son maravillosas………toda tú lo eres……..te amo……….- me faltó el aire, me dio flato, caí a suelo dolorido y boca arriba mirando el cielo estrellado ante mi, y una luna creciente de fondo, se veía precioso por que además lo veía borroso, como en un sueño.

-ALICIA: ¡¡¡Raúl!!! - oía su voz de fondo, como si estuviera metida en una concha marina, repetía mi nombre, sentí un dolor agudo en el pecho, pero eran sus manos apoyadas en mi, lo intuí, no lo sentí, por que apareció en el encuadre de mi visión, con la luna de fondo y su cabeza delante, parecía que la luna era su corona.

-YO: mi reina…..- sonreí de forma absurda, notaba sus dedos deshaciendo el nudo de mi pajarita y desabrochando los 3 primeros botones de la camisa.

-ALICIA: ¡¡RAÚL!! - de golpe se me pasó el efecto y escuché su voz, fuerte, aguda y con cierto susto, cogiendo aire a quintales.

-YO: ¿si, dígame? – me cogió de la cabeza, palpando mi yugular con sus dedos.

-AICIA: ¡¿estás bien?! Por todos los cielos, tienes el pulso a punto de reventar.

-YO: me da igual………moriré feliz, te amo y nada cambiará eso – la vi bien el rostro por 1º vez desde que acudí al ático, su sonrisa y sus arrugas estaban allí, esperándome.

-ALICIA: ¡¿estás mal de la cabeza?! – lo debía de parecer, despatarrado en el suelo y con el pecho hinchándose y desinflándose a un ritmo antinatural, sentía las gotas de sudor recorrer los huecos de mi cabello.

-YO: si……o eso me dicen a menudo.

-ALICIA: jajaja madre mía……pobre de mi….….amo a un loco…… – “me ama” fue lo único que escuché, oírlo fue como si estuviera a punto de morir en un juego y tomara una pócima que me hacia recuperar toda mi salud, sus manos cogieron mi cara y acariciaron mi rostro durante unos segundos –…. sin duda ha sido la declaración de amor más atropellada, imprevisible y espontanea de la historia – me puse de rodillas, recobrando el aliento y a ella la puse de pie, quería hablar pero me ardían los pulmones, trataba de alzar un brazo para coger su mano, pero no podía, se me cansaba el brazo y tenia que apoyarme en mis muslos para no caer de nuevo al suelo.

-YO: llevo demasiado tiempo negándome, tomando las decisiones que guían mi vida por donde no quiero ir, se acabó, esto es todo lo que hay……. – abrí los brazos mostrándome –…..no tengo más, sin artimañas, ni artificios, incluso si ahora mismo estás del lado de Eleonor y todo esto es una patraña, te ofrezco todo lo que soy, cuanto tengo y cuanto tendré, junto a la promesa……no…..la amenaza de pasar el resto de mi vida tratando de hacerte feliz a cada instante.

-ALICIA: ¿amenazas mucho? - sonrió y me aupó ante ella, de pie cogiéndome del rostro con un cariño desconocido para mi, rodeándola con mi cuerpo y mirando desde arriba sus tiernos ojos ilusionados y sus arrugas en los ojos, ella sabia la respuesta, me lo había oído decir demasiadas veces, pero quería oírla.

-YO: solo cuando se que soy capaz de cumplirlas.

Nos besamos, y de nada vale relatar los escasos segundos previos que tardamos en cerrar los ojos y juntar nuestros labios, no creo que el mejor poeta o escritor de la historia fuera capaz de describir con exactitud lo que sentí, por ello no voy a intentar hacerlo yo, solo se que cuando se puso de puntillas y terminó ese 1º beso supe que no querría besar a nadie más en toda mi vida, “es ella”, se repetía en mi cabeza cuando un 2º beso, más largo y tierno, provocó que una corriente eléctrica recorriera mi cuerpo, acabando en un chispazo en mis labios que sentí cuando los suyos se despegaban de los míos lentamente, me quedé unos segundos con los ojos cerrados saboreando, no sabia si su beso o la situación, me podrían haber pegado el tiro allí mismo y moriría feliz, ella se acurrucó en mi pecho con mis brazos rodeándola, puso su barbilla en mi cuello mirando al cielo, pese a los tacones le sacaba una cabeza, y al abrir los ojos y mirar hacia abajo vi la imagen más perfecta de la belleza, una chica normal con el rímel gris totalmente estropeado y el carmín manchando fuera de sus labios por aquel par de besos, y no cambiaría esa visión por nada del mundo.

Su sonrisa se me pegó y me agaché para cogerla de las piernas y alzarla 1 metro en el aire dando vueltas, se apoyó en mis hombros por no caerse y reía, reía sin parar dando vueltas, la veía volar con la noche estrellada de fondo y di gracias al universo por poner a esa mujer a mi lado. Pasaron unos segundos hasta que la dejé bajar, le aparté el pelo de la cara con una mano pasándoselo por detrás de la oreja, y acariciando su mejilla la volví a besar, una y otra vez, eran besos cortos, suaves, y dulces, pero me daban la vida, luego nos apretujamos uno contra el otro siguiendo el sonido de una música que no se oía más que en nuestras cabezas, con su oído pegado a mi pecho, escuchando como mi corazón estaba desbocado, podía oler su pelo, le daba besos en la cabeza apretándola contra mi.

-YO: llevo esperando esto toda mi vida.

-ALICIA: ¿y por que no lo has hecho antes?

-YO: por que te quiero demasiado como para arriesgarme, no quería que me dijeras que no, por que entonces seria real, nunca estaríamos juntos, y eso me dolería tanto que no podría vivir, pero ahora estás aquí, en mis brazos, y nada importa, te quiero………..te amo, ¿te lo he dicho ya? – una risa nasal se le escapó.

-ALICIA: con esta unas……20 veces creo, entre te “quieros” y te “amos” – la apreté tan fuerte que gimió de dolor, no la dejaría escapar, jamás.

-YO: esas son por las veces que no me atreví a decírtelo, por las que fui un cobarde cuando todo mi ser sabia lo que tenia que decir, y no dije, por todo lo que debí hacer, y no hice, es el pasado, y me duele no haber sido sincero contigo.

-ALICIA: oh, si, a menudo el pasado duele……..pero tal y como yo lo veo, puedes llorar por tu pasado, o aprender del pasado……….- y me dio un capón en la frente.

-YO: eres increíble – no se vosotros, de nuevo, pero si conocéis a alguna mujer que os alivie el alma con citas del rey león, cogedla y no la soltéis nunca, y eso pensaba hacer

-ALICIA: tú, tú eres increíble, y no dudes que te quiero y te amo de igual forma, pero soy incapaz de tener una crisis nerviosa y a la vez declarar mi amor……- escuchar su sonrisa era tan grato como sentirla entre mis brazos, le acariciaba la espalda, repasando toda su columna vertebral con los dedos -…….¿tú estás bien? - se alejó medio palmo acariciándome el pecho con sus manos, casi ni recordaba que hacia unos minutos estaba en el suelo medio muerto.

-YO: mejor que nunca…….- rocé su rostro con el dorso de mis dedos -………aunque puede que mañana tenga agujetas – su risa era impecable, no podía dejar de intentar hacerla sonreír.

Casi ni escrito por guión, se escuchó un lanzamiento al aire y la explosión de un cohete de fuegos artificiales llenó el cielo de luces blancas, ella se sorprendía y con curiosidad me cogió de la mano y me arrastró hasta uno de los laterales por donde empezaron las decenas de luces en la noche, de la fiesta de abajo salía un castillo de fuegos artificiales, rompió en un millar de colores y formas con un ruido atronador, y mientras ella señalaba y miraba atónita aquello, yo solo podía admirar a Alicia, desde su mano cogida de la mía hasta su cuerpo y su cara reflejados por las luces, fueron 10 minutos en los que me sentí, literalmente, el ser más afortunado, del universo y de todas los tiempos. Se frotó los brazos ligeramente, era noche cerrada y su vestido no era el que más abrigaba, así que me quité mi chaqueta y se la pase por los hombros, al hacerlo giró su rostro agradeciéndolo y la rodeé por detrás con mis brazos poniendo mis manos en su vientre, apoyando mi cabeza en su hombro, y ella dejando caer sus manos sobre mis antebrazos, además, aunque no era nada romántico, mi polla se pegó a su trasero y fue incluso mejor de lo que hubiera imaginado.

-YO: deberíamos irnos……

-ALICIA: jo…….un poco más, hasta que terminen los fuegos artificiales.

-YO: no queremos estar aquí cuando el gorila despierte – asintió triste por tener que dejar el ático, no menos que yo, me hubiera quedado allí, para siempre, con ella.

Echamos a caminar cogidos de la mano, bajamos por las escaleras y allí en el suelo seguía aquel hombre, boca arriba con un hilo de sangre saliendo de su cabeza.

-ALICIA: ¡¡¡madre mía, era verdad!!!! jajaja……no te sulfures, es de Eleonor, le he visto varias veces – eso no sabia si me calmaba o me preocupaba más.

-YO: vamos, antes de que se levanté.

-ALICIA: ains…..dios….es que para ti es muy fácil….- al caminar se retorcía sobre si misma.

-YO: que te pasa, ¿estás bien? – sonrió.

-ALICIA: pues no, no veas como duelen estos zapatos……- y se agarró mi brazo sacándoselos como la dama mejor educada de la corte, al salir de ellos quedó media cabeza más abajo que antes, y se agachó doblando las piernas para coger los zapatos con los dedos y dar un par de pasos – ¡¡¡OHHHHHH JODER…..QUE GUSTO!!! - me miró sin entender por que la miraba tan embobado, se acababa de agachar como me la había dicho que me gustaba de ella.

Caminamos por el pasillo hasta llegar a los ascensores, cogidos de la mano, con ella caminado descalza, tan natural, tan real……tan perfecta, de vez en cuando subía las manos juntas y la besaba los dedos, bajamos y al pasar de refilón por la fiesta Eli nos saludó, cuando la vio con mi chaqueta y de la mano alzó una copa, a modo de brindis imaginario, la di las gracias mientras nos íbamos.

-ALICIA: ¿que es lo que te dijo antes? ¿Lo que te susurró?

-YO: que me dejara de jilipolleces, que tú y yo nos queríamos de verdad.

-ALICIA: “nada que no supieras”…..- se paró al llegar a la calle, iba a dejar los zapatos en el suelo para ponérselos, pero no la di opción, la cogí en brazos como a una princesa y entre risas y alguna carantoña la llevé así hasta mi coche, no fue una gran hazaña, había aparcado cerca, nos subimos al coche y acaricié la parte de su pierna descubierta por el vestido.

-YO: ¿y ahora.........que?

-ALICIA: ¿que sueles hacer con las demás chicas cuando logras su amor? – cierto retintín en su voz me sacó una carcajada.

-YO: ya sabes lo que hago.

-ALICIA: podríamos hacer lo mismo…. – no era un pregunta, ni una negación, ni una afirmación, fue una idea al aire.

-YO: no.

-ALICIA: ¿por qué?

-YO: por que tú no eres como las demás….. – podría, si, llevarla a su casa, acostarme con ella y cumplir todos mis deseos carnales, pero eso no seria diferente a lo que haría con cualquier otra – ….te llevo a casa, es tarde….- por algún motivo eso la hizo sonreír, quizá, no era lo que esperaba pero entendió mis motivos, y que ella realmente era especial para mi.

Todo el camino jugamos con nuestras manos y en cada semáforo me quedaba maravillado mirándola, al llegar a su casa ninguno salió del coche.

-ALICIA: ¿entonces se acabó?, ¿yo a mi casa y tú a la tuya?

-YO: déjame ir despacio, no quiero cometer ninguno de los miles de errores que cometí con Irene, Ana, Lola o cualquier otra mujer, tú te mereces más, seré mejor, por ti – se alzó sobre mi acariciando mi cara, y besándome, para luego limpiar las mancha de carmín de mis labios.

-ALICIA: sube, aunque solo durmamos, pero sube, por favor – con sus ojos a escasos centímetros de mi cara, “no puedo negarle nada, nunca pude”.

-YO solo dormir – sentencié.

Subimos sin hacer mucho ruido, y al entrar fuimos derechos a su cuarto, sabíamos que había micros así que teníamos que ir con calma, nos dimos una serie de cortos besos, y me vencí de espaldas a la cama con ella encima, se había quitado mi chaqueta y estaba tan sexy que volvería loco a cualquier hombre, sentía su cuerpo aprisionando el mío, y sin poder contenerme, mi lengua entró en su boca, fue la primera vez que sentí su lengua jugar con la mía, sonrió nerviosa, no menos que yo, fue tan raro como divertido, y volvimos a fundirnos en un beso largo y húmedo, no se como mis manos bajaron por su desnuda espalda hasta agarrar su trasero, me sentí avergonzado al verla sonreír sorprendida, pero no había forma humana de dejar de apretar aquellas obras de arte, las sentía firmes y tersas, incluso por encima de la tela del vestido, tan grandes que mis manos no podía abarcar sus nalgas, y al sentir mis habilidosos dedos dejó de besarme para cerrar los ojos y morderse el labio.

-ALICIA: ¿seguro que solo quieres dormir? – en aquel momento ni yo mismo lo sabia.

-YO: si no sales de encima de mí, no podré averiguarlo – sus brillantes ojos se tornearon dulces, y me dio un último beso, tenue y delicado, mientas se estiraba sobre mi cuerpo como una gata.

Se levantó sobre mi y se dirigió al baño, yo estaba en la cama mirando como se desvestía, como soltaba el nudo de su hombro y el vestido caía hasta la cintura, la tenia de espaldas así que no vi sus senos, aunque no seria la 1º vez que los vería, pero cuando empezó a meter los dedos pulgares por la cintura haciendo círculos por su cuerpo para ir bajándose el vestido por la cadera, mi polla se puso tan dura que me dolía atrapada en el slip, cuando se lo sacó y apareció un tanga negro, no de hilo o de zorra si no que casi parecen bragas pero no lo son, dudé, mucho, si sacarme el rabo y masturbarme para calmar mi fuego, abrió el grifo de la ducha y se dio un baño rápido, la perdí de vista antes de que se quitara el tanga y las medias. Cuando salió me llegaba el olor a fresco y a crema hidratante, tapando su cuerpo con una toalla, sin cerrar a su espalda, y otra enrollada en la cabeza para secarse el pelo, era demasiado largo como para ponerse con un secador, tardaría horas, al cruzarnos la besé tan fuerte que la doblé la espalda y me di la ducha de agua fría más larga del mundo, 30 minutos sin poner el agua caliente, ni tibia, me jacto yo ahora de la moda del reto de cubos del agua, aquello debió rozar la hipotermia, pero al final mi polla bajó. Al salir iba solo con el slip, no tenia más, buscaba mi camiseta interior, la que se pone bajo la camisa, pero no la encontraba, ella se quedó sentada en la cama mirándome con ojos golosos, nadie puede culparla por ello, y menos yo, que al verla con mi camiseta interior puesta, que le quedaba grande, tapándole un pantalón corto negro gastado del uso, y dejando caer toda su melena en un lado secándosela con la toalla, casi se me vuelve a poner dura, con la cara lavada, el pelo húmedo de la ducha mojando la zona de su seno derecho en la camiseta………estaba para comérsela, pero creo que incluso vestida de porqueriza del siglo XIV lograba ser hermosa para mi.

-YO: no se si voy a durar mucho en esa cama contigo, no quedándome quieto.

-ALICIA: tú decides, pero por favor, ven y acuéstate conmigo – extendió su mano y se la cogí, me tumbé en la cama y ella se recostó sobre mi, tapándonos con las sabanas.

-YO: dios……no se cuantas veces habré soñado con esto.

-ALICIA: no menos que yo desde que Teo y yo cortamos – “mierda, Teo”.

-YO: tengo que llamarle y quedar, hablaré con él mañana mismo, tengo que decirle esto – “a él, a Dany, y a muchas más”

-ALICIA: no soy suya, ya no, cuando me puso los cuernos perdió el derecho a…….- la abracé fuerte.

-YO: merece saberlo – no objetó de nuevo, y se pasó media hora jugando con sus dedos en mi pecho y besándome el cuello de forma intermitente.

Se durmió, gracias al cielo, un par de besos más en mi cuello y no podría pararme ni un ejercito, era una presa en un río, intentando soportar una riada, pero por primera vez fui capaz de controlarme, de no dejarme guiar por mis instintos ni mi entrenamiento, todo decía que tenia que tomar a aquella mujer en ese momento, todo menos yo. Se giró inconsciente pasado un rato, y me pasó un brazo por encima suyo, quedando en cuchara rodeándola con mi cuerpo, por un instante nos vi a Ana y a mi en esa misma posición, y pese al riesgo, la cama no era tan grande como para alejarme, ni mi polla tan pequeña, ni su culo tan escueto, sentía el roce y me mataba, trataba de no ponerme empalmado, lo logré, en especial por que me pasé la 1 hora más nervioso que cualquier otra cosa, como el perro que se pasa horas persiguiendo su juguete y cuando lo tiene, no sabe que hacer con él. Luego otras 2 horas pasando mis dedos entre sus cabellos, se había peinado a conciencia hasta no dejar ni rastro del efecto mojado de la laca de su peinado de la fiesta, y era suave, largo y delicado, en esas 2 horas no hubo problemas, ni conflictos, nada, mi mente estaba en blanco, casi contando cada uno de sus cabellos, incluso la oía ronronear al bajar mis dedos entrelazándose con su pelo. No aguanté más y me fui de su cama, tenía un pánico terrible a que no pudiera frenarme y me acosté en el sofá de salón, no seria capaz de dormir en su cama, estaba demasiado tenso y me temblaban las manos de solo tocarla, una vez en el salón pude conciliar el sueño.

Alicia – El escudo de Aquiles.

Serian las 11 de la mañana del sábado, el dia posterior a la fiesta en que me declaré a Alicia a punto de tener un ataque cardiaco, me despertó mi polla dura aplastada contra el respaldo del sofá, no podían verme así, así que fui al baño, ese día hubo suerte y al mear se me bajó la inflamación, así que me volví al sofá con la sabana que me había llevado y estuve remoloneando unos minutos, imaginando el resto de mi vida junto a Alicia, por raro que le pueda parecer a una mujer que lea esto, me imagina la boda con Alicia, vestida de blanco caminado hacia mi, que permanecía en pie y temblando ante su belleza, y los nervios apoderándose de mi. Que los hombres generalmente no expresemos o nos parezca ridículo comentarlo, no quiere decir que esas cosas no se nos pasen por la cabeza.

La pareja que vivía allí me saludaron antes de salir a hacer unas compras, pasó media hora hasta que escuché ruidos de fondo y una puerta abrirse.

-ALICIA: ¿Raúl? – preguntaba al vacío.

-YO: aquí, en el sofá – yo, Raúl, el hombre de las 3 piernas y que contaba a sus amantes por cientos, me puse nervioso al escuchar su voz, falló mi tono al hablar, me coloqué sobre el sofá de forma sexy, o eso pretendía, y me vibraba la garganta, sintiendo ese hormigueo que te sube del estomago a la cara cuando estás agitado.

Escuchaba las inconfundibles pisadas descalzas de ella acercándose, se puso en pie a mi lado, frotándose los ojos, aun adormecida, con mi camiseta interior metida por dentro de los pantalones cortos por el lado derecho de su cadera, y los pezones marcados bajo la tela blanca, haciendo gestos de que abriera la sabana, lo hice y se tumbó sobre mi costado, con los ojos cerrados queriendo seguir durmiendo, quedando adherida a mí como un solo ser, la rodeé con un brazo la cabeza para que se apoyara, notando su espesa melena haciéndome cosquillas, y cerré la sabana.

-ALICIA: que calentito estás – me besó en la mejilla con ternura, mientras se apretujaba indolente contra mí.

-YO: eso me dicen – sonrió y me dio otro beso en la barbilla, que terminó con un mordisqueo dulce en mi mentón.

-ALICIA: ¿por que no te has quedado en la cama?

-YO: porque no soy de piedra, no podría mantenerme sereno contigo al lado.

-ALICIA: pues haberte aprovechado…..- su mano en mi pecho frotaba con delicadeza.

-YO: de ti, nunca.

-ALICIA: oye, que soy una mujer….también necesito mimos.

-YO: y los tendrás, los mejores, pero no voy a estropear esto, dame tiempo.

-ALICIA: está bien…….pero solo por que te quiero….y te amo, y te quiero………..por que arrugas la nariz cuando te pica……..y por que estornudas muy fuerte…………y te amo, por que te rascas la barba como si fueras un perro ……….. por que al bostezar abres tanto la boca que podría meter una manzana entera dentro……y te amo por que……..- la besé, no podía ser de otra forma, “es perfecta”

-YO: vale……vale…lo pillo…..– sonreímos juntos –… te ha costado pensar algunas ¿eh?

-ALICIA: no, esas eran de broma, aunque son ciertas…….. pero podría haber dicho que me enseñaste las conjugaciones de los verbos de niña, le partiste la muñeca a un chico por que me quitó el almuerzo en el recreo, o por que nos presentaste a Teo y a mi, por como has sido un buen amigo estos años para ambos, pese a que me querías, como cuidaste de mí cuando Teo me falló, por como conseguiste un piso tan bueno para que estudiara cerca de la Universidad, por como te fuiste para que pudiera arreglar lo de Teo o las clases de conducir que me diste, supongo que seria ridículo obviar que me salvaste la vida, o que castigaste a quien casi hace que la pierda, o por que me hayas hecho pasar la noche más inolvidable de mi vida, o por que pese a que me deseas, quieres que esto sea especial…….pero no…..apenas en pensado en ello…- otro beso largo, esta vez se hizo el silencio, no hacia falta decir nada.

Durante una media hora jugamos a acariciarnos y besarnos con la ternura más dulce posible, descubrí que le gustaba frotar su nariz con la mía al terminar cada beso largo, como su firma propia y particular, o que mientras su lengua se movía contra la mía, pasaba sus dedos por detrás de mi oreja entrelazándolos con mis cabellos algo ondulados.

-ALICIA: ¿y ahora que va a pasar?, con Eleonor……- me miró tan de cerca que podía ver la líneas del iris de sus ojos ámbar, era necesario susurrar muy bajo para que no se oyera nada en los micros.

-YO: no lo sé, solo tengo una cosa clara, contigo no necesito a Zeus, le dejé en aquella habitación con esa chica…….

-ALICIA: pero le necesitamos, ¿no?

-YO: Zeus es un nombre, se puede seguir usando, pero nada más, no hace falta para terminar lo que empezamos.

-ALICIA: ¿entonces vamos a ir a por Eleonor?

-YO: si, tal y como estaba planeado, pero vamos a dejar que se regocije al ver como ha logrado “hacerme caer” a tus pies.

-ALICIA: ¿entonces……somos novios? – la pregunta sonó estúpida, pero más estúpido era que no habíamos hablado de eso.

-YO: yo lo daba por descontado…….vamos……….si tú me concedes ese honor.

-ALICIA: novios, tú y yo……jajajaja – un beso largo, y solo de labios, me hizo ver las estrellas.

El flash de una cámara me sorprendió, al recuperar la capacidad de ver unos segundos más tarde vi a Mara con una cámara de fotos digital en las manos.

-MARA: ¡¡¡por fin, os ha costado!!! – sonreía ampliamente, era raro, hacia 2 meses y pico habíamos “cortado” si es que alguna vez tuvimos algo que no fue solo sexo, pero allí estaba, mirando como su hermana se ponía roja de vergüenza.

-YO: no seas brusca……- me sacó la lengua guiñándome un ojo, doblando una pierna de un salto alegre, eso me ayudó a ver como iba vestida, por decir algo, con un top rosa ajustado sin sujetador enseñando gran parte de su ombligo y cintura, y en bragas de color rosa a juego.

-MARA: ¡¿¿os lo dije o no os lo dije??!

-ALICIA: para, que vas a estropear el momento – aproveché para seguir montando el numero para los oídos de Eleonor, y bien alto mi voz retumbó en el salón.

-YO: que Alicia y yo estemos saliendo no tiene nada que ver contigo, ¡la amo con locura! – Alicia me entendió, Mara no, le costaba recordar los micros.

-ALICIA: y yo a él, le quiero mucho – pese a que lo decíamos para regalar los oídos de Eleonor, oírlo en alto nos sacó una sonrisa a ambos.

-MARA: como la trucha al trucho….- salió disparada por que Alicia se levantó y fue a por ella, jugando como hermanas pequeñas, cualquiera que las viera retozando, la una contra la otra, en un sillón amplio, con ropas ligeras de cama, se pensaría que liarse con las 2 a la vez era una buena idea, pero no, se había acabado esa parte de mi vida, sentía que no podía necesitar, ni querer, nada más, Alicia se convirtió en todo.

Me levanté, cogí a mi flamante novia por la cintura y de un tirón la elevé por el aire pataleando entre risas, con su hermana debajo, protegida tras un cojín mullido, y al dejar a Alicia en el suelo la hice unas cosquillas débiles que la doblaron posando su culo en mi polla, era como cuando se rompe una pieza de plástico y la vuelves a poner en su sitio, pese a saber que son entes distintos, al juntarlos parecía que formara un todo homogéneo, la besé en el cuello cuando se rehizo y por 1º vez en mi vida le di un cachete al culo perfecto, sonó fuerte, duro y su piel se movió lo justo como para temblar y volver a su sitio al instante.

-YO: anda, date una ducha, que necesito mí ropa para irme – se giró y me dio tal beso de tornillo que me dejó sin aire.

-ALICIA: vale……..- se quedó pensativa un segundo, como si le faltara algo por decir - …….tenemos que pensar en apelativos cariñosos -….. y frotó su nariz contra la mía con una amplia sonrisa y llena de arrugas en los ojos, antes de perderse por el pasillo dando botes, no se podía apartar la vista de su culo contoneándose, luego miré a Mara que estaba en el sillón, mirándome con picardía.

-YO: ¿que? – soltó el cojín y se puso en pie colocándose el top ya que la “gresca” le había sacado un pezón del escote, siempre se colocaba las prendas con el índice y el pulgar como pinzas, de forma elegante, y estaba tremendamente sensual así “vestida”.

-MARA: nada…..que os veo felices – sonrió con un gesto cálido y la abracé pasando mis brazos por su cintura, ella me correspondió y de un tirón la hice volar por los aires dando un par de vueltas, era más alta que su hermana pero pesaba menos, era más espigada, apenas tenia senos y mucho menos trasero.

-YO: gracias.

-MARA: no he hecho nada, era evidente para todo el mundo, menos para vosotros 2 – al dejarla en el suelo aún estabamos pegados y estaba a distancia de beso, incluso en sus ojos pude ver que lo quería, pero ni yo, ni mi polla, reaccionaron pese a tenerla encima, con su cintura pegada a la mía, y sabiendo como follaba.

-YO: aún así, gracias – la solté la cadera por donde la tenia agarrada - …….cuñada, suena bien……- sonrió, perdiéndose ese momento de sensualidad.

-MARA: ¿cuñado?, dios….cada vez elige peor esta chica…. - se puso seria - …..ten en cuenta …– alzó la mano señalándome con el dedo –…. que como la hagas dañó de cualquier forma, te corto lo que tú y yo sabemos.

-YO: si la hago daño, te la entregaré yo mismo.

Me di una ducha después de Alicia, y dándole tantos besos que perdí la cuenta, me vestí para irme, de camino a casa llamé a Teo para quedar por la tarde, me fui al ático para cambiarme, ir con smoking por Madrid es raro, y le di la noticia a mi familia, incluida a Dany, que aunque triste, creo que sacó de mi lo que buscaba, habíamos follado tanto que tendría tiempo de encontrar a un hombre antes de que le volvieran las ganas, por lo tanto me felicitó como una más, hasta a mi madre le gustó, no dijo lo de “pues Irene me gustaba más”, como había dicho de todas mis relaciones de las que fue consciente. Comí tranquilo y me fui a recoger a Teo, dimos un largo paseo por el parque del Oeste de Madrid.

-YO: te he echado de menos estos meses.

-TEO: y yo a ti, se que andas con problemas y sabes que si me necesitas estaré ahí.

-YO: lo sé, eres mi mejor amigo, siempre lo has sido, y pese a nuestras diferencias, te respeto.

-TEO: y yo a ti.

-YO: espero que recuerdes esas palabras…….- suspiré -……..por que tengo que decirte algo, y no creo que te guste.

-TEO: dime – me paré en seco delante de él.

-YO: Alicia y yo estamos saliendo – su cara se torció un leve instante antes de que me asestara un terrible puñetazo en la mandíbula, luego se me tiró encima y rodamos por una ladera unos cuantos metros entre tirones y empujones, hasta que logré sujetarlo de los brazos recibí un severo castigo, nada importante, pero si dolía.

-TEO: ¡¡¡ERES UN CABRÓN, AL FINAL TIENES LO QUE QUERIAS!!! – trataba de soltarse pero yo era más fuerte.

-YO: oye, lo siento……se que es raro, pero ha pasado…..- su rostro estaba rojo de ira.

-TEO: ¡¡¡claro que ha pasado!!! ¡¡¡Desde que nos mudamos a esa mierda de piso, te la has estado metiendo en el bolsillo!!!!

-YO: me fui….no quise interferir, esto ha pasado ahora…….- de golpe hizo un giro y quedó encima de mí con una mano libre, apunto de volver a golpearme.

-TEO: ¿cuando?, ¿desde cuando?

-YO: anoche, salimos de fiesta y………pasó….- su rabia parecía que menguaba - ….Teo, la quiero – fue la vez en mi vida que mi voz sonó más sincera.

-TEO: ¡¡¡claro que la quieres, imbécil, es perfecta!!! – me soltó dando un empujón a mi cuerpo que rodó antes de ponerme de rodillas, los 2 jadeábamos y un par de personas nos miraban desde los caminos de tierra, mientras nosotros nos observábamos.

-YO: lo es – al mirarme arrancó unas briznas de hierba del césped que me tiró.

-TEO: lo es……¿sabes?, no hay día que no me arrepienta de lo estúpido que fui al engañarla y perderla…………aunque quiera culparte……fui yo….no supe cuidarla……no me lo creo.

-YO: yo tampoco me lo creo, parecíais muy felices…….

-TEO: lo éramos, pero llevábamos saliendo desde que teníamos 15 años, nos desgastamos demasiado, fue bonito, pero terminó………..por mi culpa…. – se levantó y me tendió la mano –….. me alegro…….me alegro de que seas tú – le cogí la mano para ayudarme a levantarme y le abracé.

-YO: yo también me alegro de que sea yo…….- me dio un puñetazo leve en el hombro.

-TEO: ¿de verdad la quieres?

-YO: más que a nada, en toda mi vida – bufó respirando con trabajo.

-TEO: cuídala, cuídala bien, como yo no supe hacer…………- suspiró profundamente - ………..te perdono, si me invitas a unas cañas – un inicio de sonrisa de dibujó en ambos.

-YO: solo si van con tapa…….- echamos a caminar dándonos golpes el uno al otro.

-TEO: tío, te he dado una tunda…….que lo sepas.

-YO: ya he visto……eres más rápido de lo que pensaba……

Cosas de hombres, cuando volví al piso junto a Alicia y me vio las magulladuras, se puso histérica con Teo, pero la calmé, por alguna razón que no comprendo, una mujer no entiende que 2 tíos se peguen y terminen de cañas, dios sabrá por que, aún así, no desperdicié sus caricias y carantoñas cuidándome, me la puse en encima de rodillas a horcajadas acariciando sus piernas, mientras ella limpiaba los retos de hierba y tierra de las heridas y ponía hielo en un paño en mi mandíbula dolorida.

Las siguientes 2 noches descubrí que no solo si que podía dormir junto a Alicia sin volverme loco de pasión, que podía estar pegado a ella con mi rabo tieso en su culo y no tomarla salvajemente, solo dormir y jugar, no solo eso, si no que con ella, las pesadillas cesaron, como magia, dejé de pensar en lo que había hecho y solo podía imaginarme el futuro más esperanzador que jamás hubiera soñado, junto a ella.

Tratar de convencer a Alexis de que se había temiendo lo nuestro fue mil veces peor que lo de Teo, ¿como le dices a una persona totalmente sumisa, que la dejas tirada?, al inicio traté de ser delicado, pero ella lo entendía como un juego, fui brusco, y eso la excitó, así que la dejé así, pensando que era otra humillación más y que volvería a sus muslos tarde o temprano, no compendia que no tenia a Zeus delante, si no a mi, tampoco puedo culparla por ello.

Madamme fue otro tema, había demostrado ser demasiado útil como para cortar relaciones, así que, decisión consensuada con Alicia, simplemente la dejé aparcada a un lado como la última vez que me fui, nunca sabia si podría volver a necesitar favores oscuros o dinero rápido, y ella tenia de ambos, en los casi 2 años que fui Zeus en mi regreso había conseguido ganar 5 millones y pico de €, de los cuales me quedaba el pico, los 5 millones habían volado en cocaína.

Durante los 2 meses posteriores fui feliz, de forma plena, completa y simple, Alicia y yo estabamos empezando a ir en serio, saliendo a cenar, a pasear y cogidos de la mano besándonos en cada momento, y en la cama jugábamos, no hubo sexo, pero si todo lo que os podáis imaginar, caricias, besos, carantoñas y largas sesiones tumbados de lado, cara a cara, sin hablar, solo rozándonos, yo al final terminaba siempre con mi mano metida en su trasero dentro de sus pantaloncitos cortos de pijama o de su ropa interior, era como un planeta con su propio centro de gravedad que me atraía sin cesar. Estabamos siendo, en definitiva, la pareja ideal que Eleonor pretendía que fuéramos, haciendo una farsa de la realidad que éramos en verdad pareja, mientras ella creía que Alicia solo interpretaba un papel. Eso la convenció para que por fin la hiciera caso, y contratara al suplente de Carlos, para ”protegerse”, habíamos llegado al final del camino, se acercaba el momento de la jugaba maestra, y eso me daba una sensación de miedo y esperanza a la vez, era el todo o nada.

Por motivos obvios dejé pasar mi 25 cumpleaños, nada bueno me solía pasar cerca de esas fechas, incluso Alicia me quiso regalar nuestra primera vez juntos, pero le bajó la regla y se aplazó, era de lo poco que me quedaba por sufrir en mis cumpleaños, así que pasadas otro par de semanas preparé la cita perfecta. Todo un día para Alicia, nos levantamos por la mañana de un sábado, y fuimos a un SPA donde nos hicieron de todo, yo me sentí ridículo y estúpido, pero ella disfruta cada baño de termas, cada masaje y cada cambio de temperatura, al salir de allí toda ella brillaba de felicidad y cremas, con un vestido azul con un vuelo alegre hasta las rodillas, ceñido en su cintura haciéndola exuberante, y un ligero escote agradable. Luego la llevé a un muy buen restaurante italiano donde comimos, dando un largo paseo de regreso a casa, charlando y riendo. El remate estaba listo, sin que lo supiera, cogimos el coche y la llevé a Teruel, 3 horas de camino, ella no sabia nada en concreto, se dejó llevar, así que dimos un paseo por la ciudad y terminamos en la iglesia de San Pedro, cuando vio allí enterrados los cuerpos de los famosos amantes de Teruel se sorprendió, verla sonreír de ilusión iluminaba su rostro, y estaba preciosa con su pelo cayendo por su espalda, solo con una pinza recogiéndole el flequillo en un peinado simple y elegante.

-ALICIA: ¡¿pero fueron reales?! Yo creía que solo eran una leyenda – me dijo al salir de la iglesia y sentarnos en un puente cercano a la luz anaranjada del atardecer, con el cielo lleno de pequeñas nubes, la abracé por detrás sentados y besándola en el cuello.

-YO: eran una leyenda.

-ALICIA: ¿y cual era su historia?, solo he escuchado lo de “los amantes de Teruel, tonto ella y tonto él” – sonreí por que anhelaba esa pregunta, me sabia la historia pero me lo había estudiado como nada en mi vida.

-YO: ocurrió en el siglo XIII, sus nombres eran Isabel de Segura y Diego de Marcilla, él era un 2º hijo de una familia humilde, por lo que no tenia casi nada y tampoco podría heredar, y ella la única hija de una de las familias más ricas y poderosas de la cuidad, se amaban con locura desde pequeños, pero el padre de ella jamás admitiría a un hombre así para casar a su hija, así que el padre le dio 5 años de plazo para lograr hacerse rico y poderoso, y así ser digno de la mano de su hija. El joven prometio amor eterno y pidió paciencia a su amada, se alistó en los ejércitos cristianos que luchaban contras los musulmanes. El padre de la joven insistió en casar a su hija pero esta rechazaba todos los ofrecimientos de grandes señores, esperaba a su amado, y esperó durante los 5 años, pero nada se supo del joven que fue a la guerra, así que al final accedió a casarse con un gran noble de la cuidad. La misma noche de bodas, el joven volvió de la guerra, rico y poderoso, y al enterarse de la boda, se coló en la habitación de los recién casados, y despertó a su amada, encamada con su flamante marido, le pidió que, por el amor que tenían, le diera un único primer y último beso, ella se negó por no deshonrar a su marido y el joven sintió tanta tristeza, que murió en su regazo, Al día siguiente le hicieron la misa antes de enterrarlo, y la joven acudió a despedirse, al verlo allí tumbado, consciente de su amargura, se agachó y como reza la tradición, "le dio en muerte el beso que le había negado en vida", para caer muerta justo después sobre su verdadero amor. Decidieron enterrarlos juntos, permanecieron en la leyenda popular hasta que en 1555 en unas obras encontraron los cuerpos de 2 amantes enterrados juntos, y en 1619 hallaron unos documentos oficiales fechados en esa época, dando veracidad a la historia, desde entonces descansan en esta iglesia……… – suspiré, me había salido mejor de lo que esperaba, casi no se había notado como me fallaba la voz y me temblaba el cuerpo de nervios.

-ALICIA: es una historia algo triste.

-YO: lo es, pero es un recordatorio constante de que cuando conoces a la persona que amas, no la debes dejar escapar nunca.

-ALICIA: ¿y como la conocías?

-YO: mi padre nos trajo de pasada cuando tenia 13 años, le encantaba llevarnos por medio país, relatado la historia de cada lugar que visitábamos.

-ALICIA: ¿y por que me has traído? – se dio la vuelta acariciándome la cara, notando como me brillaban los ojos.

-YO: por que yo hubiera muerto igual, puede que no así, puede que Zeus me dominara y puede que te alejara de mi, pero moriría sin ti, te quiero Alicia, y no sabes cuanto, te quiero tanto que no puedo imaginar mi vida sin ti.

-ALICIA: ya lo demostraste en aquel balcón.

-YO: y lo volvería ha hacer, una y otra vez, te amo, y se que no querré a nadie más en mi vida – me puse en pie y ella conmigo, nos besamos como los 2 enamorados que éramos.

-ALICIA: yo también te quiero, y no se que pasaría en mi vida si tú no estuvieras, pero no quiero averiguarlo – sonrió, al ver mi cara encenderse como una bombilla.

-YO: eso espero, por que si no, voy ha hacer el mayor ridículo de la historia….. – cogí la cámara de fotos que había llevado, y con las que nos habíamos hecho una serie de fotos de rigor y felicidad, salí disparado y volví con un vagabundo gordo y algo mal oliente, le di la cámara y 10€ a cambio de que grabara la escena, caminé hacia Alicia, la cogí de la mano y me arrodillé con una sola pierna ante ella.

-ALICIA: ¡¡no!! – se tapó la boca con la mano libre, poniéndose como un tomate.

-YO: yo, Raúl, en esta sagrada tierra bañada por la historia de los enamorados, juro solemnemente mi amor más absoluto e incondicional hacia ti, pasaré el resto de mi vida haciéndote feliz, por ello te pido, Alicia, ¿quieres casarte conmigo? – saqué una caja que llevaba en la chaqueta, y al abrirlo apareció un pedrusco de anillo de compromiso, de plata de ley en forma de dos delfines entrelazados, adornados con brillantes que eran los ojos de los animales que más le gustaban, al verlo se le abrió la boca tanto que casi se le desencaja la mandíbula.

-ALICIA: pero…yo……apenas llevamos unos meses saliendo…….- sollozando se puso la mano libre en el pecho tratando de controlar su respiración.

-YO: te conozco desde los 11 años, y tengo el resto de mi vida para seguir conociéndote, sé que no quiero volver a besar otros labios que no sean los tuyos, que no quiero acariciar el cuerpo de nadie que no seas tú, y que quiero pasar el resto de mi vida a tu lado.

-ALICIA: pero….dios….somos muy jóvenes para casarnos……. - una lágrima caía por su mejilla, no sabia si estaba ilusionada, aterrada o se meaba encima, era difícil leer su expresión corporal.

-YO: me da igual cuando, podemos casarnos ahora mismo, dentro de 1 semana, de 2 meses, de 1 año, de 10 o de 50, por ti esperaría a que el mismísimo infierno se congelase, pero no pienso dejarte escapar, como Diego de Marcilla, he encontrado a la mujer de mi vida, lo sé en lo más profundo de mi ser, pero no cometeré su error, no me iré y dejaré que otro se gane tu corazón.

-ALICIA: yo…….esto…..- no atinaba a decir 2 palabras conexas.

-YO: por favor….di algo……..se empieza a arremolinar la gente….- soltó aire en algo que pareció una carcajada, miró alrededor, no se había dado cuenta de que hasta nos hacían fotos los turistas –….. así que, dime ¿te casas con este pobre desdichado? – doblaba las rodillas de nervios, y se tapaba la cara, la veía los ojos, me miraba queriendo matarme, “te has precipitado, idiota”, pensaba, sintiéndome totalmente vulnerable.

-ALICIA: ¡¡¡¡¡¡SI…………SI QUIERO!!!!! – la gente rompió a aplaudir a nuestro alrededor, y un suspiró de alivio hizo que mi corazón bajara de mi garganta a su lugar.

Estiró los dedos para que le pusiera el anillo, le temblaban así que tuve que sujetárselos, pero a mi no me temblaban menos, a la 4º entró, como un guante, le di las gracias mentales a Mara por decirme su talla de anillo, al verlo en su dedo anular casi le da un patatús, y me elevé sobre ella abrazándola. Estallamos en el mejor beso de mi vida, así de claro, así de sencillo, así de hermoso. Ella lloraba de felicidad, y yo de dicha, como era costumbre la rodeé con las manos levantándola por los aires dando vueltas, y al caer el mejor beso de mi vida se repitió una y otra vez, hasta que la gente dejó de jalearnos y se dispersó, cuando la adrenalina dejó de hacer vibrar mis cuerdas vocales pude hablar.

-YO: debes de pensar que estoy loco.

-ALICIA: como una cabra…..- sonrío mientras acaricia mi rostro con sus manos y me miraba totalmente abrumada - …..y por eso te quiero tanto…… – sentí su cuerpo pegado al mío y un millar de emociones diferentes tirando de mi en todas direcciones -…….te voy a matar – la abracé con más fuerza.

-YO: pues devuélveme el anillo antes de matarme – se separó mientras lo miraba, sin creérselo, apartándose las lagrimas de sus mejillas con los dedos.

-ALICA: ¡¡NO, es mío!!

-YO: como yo.

-ALICIA: no tengo anillo para ti…… – cayó de golpe, ni yo me lo había planteado –….. mira….. – salió corriendo a un bar de enfrente con una maquina de bolas de regalos con chicles y juguetes para los críos, sacó varias bolas hasta que regresó con un anillo rosa cuyo diamante enorme era de caramelo, y se arrodilló ante mi.

-YO: no es necesario.

-ALICIA: calla……..yo, Alicia, te declaro mi amor eterno, y con este anillo te pido que te cases conmigo, ¿aceptas?

-YO: umm no se…….- me dio un golpe en la pierna mientras reía -……..está bien, si insistes……será un honor casarme contigo.

Al alzarse la besé tantas veces que se nos hizo tarde, y nos hicimos una serie de fotos para recordar aquello, vagabundo incluido, que había hecho un trabajo casi profesional, regresamos a Madrid entre la incredulidad del hecho y el inicio de la planificación de la boda. Alicia veía una y otra vez la grabación de la pedida de su mano, hasta que la cámara se apagó sin batería. Solo Mara sabia algo de aquello, y solo le pedí la talla del anillo, aunque no había que tener una licenciatura para comprenderlo, aun así, al llegar y enseñarle el anillo las 2 saltaron como locas, la chica de la pareja y la otra del piso se unieron, y cogiendo la mano de Alicia, empezaron a saltar en círculos como un único ser, el chico de la pareja me felicitó levemente, y luego Mara se me echó encima llorando de emoción.

Idéntica escena en casa de mi padres con mi madre, mi hermana y Dany saltando, y mi padre dándome tal golpe de satisfacción en el hombro que casi me saca el brazo del sitio, más que por la elección de Alicia, era por como Alicia contaba a gritos como me había declarado, no creo que un padre nunca mirara con más orgullo a un hijo, mi madre me besó un número desproporcionado de veces, y mi hermana no se lo creía, literalmente, se pasó 3 horas esperando a que de golpe dijéramos que era una broma.

Cenamos todos en familia en el ático, con la familia de Alicia y Mara incluidos, la cámara se cargó y con un cable la pusimos en la pantalla de plasma de 50 pulgadas, donde las chicas repetían la escena tantas veces que dejó de tener el impacto que se suponía debía tener, pero seguían como niñas de colegio, fue un día insuperable, o eso creía,

Alicia se miraba el dedo anillado con los ojos perdidos en los brillantes, fueron los 25.000€ mejor invertidos de mi vida, y la fiesta se alargó durante gran parte de la noche, bailamos juntos tanto tiempo que no recuerdo cuanto transcurrió, y cada vez que ella decía algo del anillo, yo le daba un lametón al caramelo del mío, ya casi no quedaba caramelo.

-ALICIA: esto es una locura, ¿Eleonor?

-YO: la llegará su final, pronto.

-ALICIA: si se entera…..

-YO: ya lo sabe, si ha escuchado los gritos en el piso de Mara…..- Alicia estaba tan absorta que no se acordaba de que su piso parecía la central de la CIA - …… espero que Hera maneje la situación con astucia.

-ALICIA: lo hará, pero esa mujer es imprevisible.

-YO: no tanto como se cree.

-ALICIA: aún no me lo creo…… te quiero, pero ha sido demasiado deprisa, menos mal que me has dicho que no tiene que ser ahora mismo, tenemos mucho camino por delante.

-YO: ¿que tal un primer paso? – saqué una reserva de hotel para esa noche y se la di, al leerla se relamió con suficiencia.

-ALICIA: es un gran paso, ¿estás seguro?

-YO: no quiero volver a “dar pasos” junto a nadie más, salvo contigo, y no creo que encuentre mejor momento para darlo – nos dimos un beso largo y con lengua que me puso a mil.

-ALICIA: pues démoslo.

Salimos de allí de la mano, despidiéndonos, la mirada de Dany y Mara era idéntica, felicidad apenada, supongo que pensaban que una vez consumado, no habría vuelta a atrás, las pobres no sabían que eso ya ocurrió, con el 1º beso en el ático del hotel ya sabia que seria solo suyo por siempre. Conduje cual abuelo, y llegamos al hotel, la habitación era casi un calco de la que usé para desvirgar a Ana, y Alicia al verla sonrió, ya había estado en alguna así, Teo se ocupó de ello, pero ahora solo tenia ojos para mi, y yo para ella. Puse música lenta y melosa, Alicia, poseída por el espíritu de Ana, se lanzó a la fondue de chocolate, me trajo recuerdos agradables, de cuando sentía que podía pasar el resto de mi vida junto a mi falsa prima, pero ahora era mejor, empezaba de 0 con una mujer incluso más increíble, y pudiendo evitar mil errores, pese a que sabia todo eso, al verla de pie contoneándose como una niña buena en la habitación, me temblaba la voz.

-YO: eres……eres preciosa – casi rompo a llorar de felicidad y nervios.

-ALICIA: tú no estas mal…..- lo dijo al llevarse un dedo de chocolate a los labios y chuparlo.

-YO: yo……..- estaba tan ansioso que no me salían las palabras, ella sonrió al notarlo y caminó hacia mí con calma hasta empujarme contra la cama y caí sentado, me dio a probar su dedo y no pude apartar los ojos de su mirada cuando lamí aquel chocolate.

-ALICIA: tranquilo, esta vez, deja que sea la chica quien lleve la manija – me cogió el rostro y se agachó a besarme, de pie entre mis piernas, me daba largos y húmedos besos que me fueron calmando los nervios, pero aceleraban mi corazón, su melena castaña y aquellos reflejos rojizos me hacían cosquillas al caer sobre mi cara, cuando nuestros labios se separaron en el último de ellos, sentí su nariz frotar la mía, vi su sonrisa, aquellas arrugas y mis manos subieron por sus piernas debajo del vestido.

Alicia, con una elegancia antinatural para una joven de 23 años, cogió el vuelo de su vestido y se lo sacó por la cabeza con un solo gesto, al sacárselo su mata de pelo se movió como una bandera al aire, se soltó la pinza del pelo que le hacia un recogido ligero, y ante mi, entre mis brazos, tenia a aquella hermosa mujer, de pechos firmes y pezones rosados y duros, no se cuando se había quitado el sujetador, ni se por que los llevaba, eran perfectas, más grandes o más pequeñas, mejor o peor colocadas ¿que más daba?, para mi eran perfectas. Me cogió del cabello y me apretó contra su vientre, besé cada milímetro de piel con cuidado, y fui subiendo a sus senos, al sentir mis labios sobre sus pezones soltó un gemido leve y mi lengua jugó con uno de ellos con desesperación, hasta ponerlo tan saliente y tirante que parecía salirse de su piel, mis manos subieron a su trasero, descubriendo que iba en tanga, amasando aquellas maravillas de la naturaleza que eran sus nalgas, ya había tenido la oportunidad de manosear y acariciar cada parte de su cuerpo, pero ahora la perspectiva del sexo la hacia más apetecible.

Bajó sus manos y me quitó la camiseta, luego empujó para tumbarme en la cama, gateó sobre mi cuerpo con lentitud desesperante, hasta sentir sus labios en los míos, sus manos recorrieron mi pecho y mi vientre de forma pausada y mi polla pedía a gritos salir de mi entrepierna, sentía sus muslos rozándose contra los míos y su cabello volvía a hacerme cosquillas en el rostro, hasta que se pasó la mano por la nuca recogiendo todo su pelo hacia un solo lado, fue cuando vi la pasión y la lujuria en sus ojos, frenadas por una sensación de amor puro, al besarla el cuello sentí como se estremecía, y una de sus manos bajó a mi bragueta, sobando la monstruosidad que allí aguardaba por encima de los vaqueros, con cierta habilidad desabrochó mi pantalón y con algo de mi ayuda me bajó los slips hasta los muslos y mi rabo saltó vivo y con ganas de pelea, al notar sus dedos en ella casi me da algo, y las risas nerviosas se contagiaban del uno al otro, se alzó de rodillas para ver y sentir con sus dos manos mi miembro, lo admiró unos segundos deleitándose y pensativa, no era la 1º vez que lo sentía, me había pasado gran parte de esos 2 meses largos, dejándome sentir en su culo, su cintura o incluso sus manos habían estado largos periodos de tiempo sobándome por encima de los slip, pero no como en ese momento..

-ALCIA: madre mía, es que es tan grande que me da miedo.

-YO: puedo prepararte, para que te sea más fácil – sabía hacerlo aunque estaba tan perdido ante ella ese día, que no sabría si lo recordaría.

-ALICIA: no……quiero que sea como una primera vez para los 2.

Se puso a un lado y me dejó quitarla el tanga con caricias, se avergonzó al verme mirando su coño, era el más bonito que había visto nunca, con un triángulo de bello muy coto y cuidado, fui dando besos desde sus rodillas hasta la cara interna de sus muslos, y pese a sus jadeos y movimientos, pasé de largo su monte de venus y subí por todo su cuerpo besándola a la vez que me desnudaba completamente, me atrapó entre sus piernas y quedé sobre ella, besándola con ternura, mi falo recaía imponente sobre su estomago, y ella me cogía de la cara como solía hacer siempre para besarme con pasión, pasados unos minutos de caricias me miró y asintió con seguridad.

-ALICIA: vale, hazlo, pero con cuidado.

-YO: así lo haré, pero si……puede dolerte, dime que pare en cualquier momento y pararé, pídeme que me salga y lo haré – me dio un corto y suave beso, asintió de nuevo.

Apunté a su coño con mi verga, y por un instante deseé que fuera más pequeña, para no hacerla daño, pasé el tronco un par de veces para lubricarlo de sus flujos abundantes y al localizar su entrada apreté con suavidad, mi glande entró con cierta dificultad, ella gimió con dulzura al sentir como me deslizaba dentro de ella, sabia que había estado “entrenando” con el consolador enorme que le había visto cuando vivíamos juntos, pero yo era más ancho.

-ALCIIA: para – espetó entre un ligero gemido, me detuve en seco con media barra dentro de ella, y una presión descomunal en mi polla, apenas podía contener el gesto de congestión en mi rostro, sentía sus dedos en mi cara apretando con fuerza, y Alicia estaba con los ojos cerrados retorciéndose sobre la cama.

-YO: con calma, no te precipites….- pero no se si se lo decía a ella o a mi, pasó un buen rato hasta que Alicia pudo abrir los ojos y me miró entre excitada y asustada.

-ALICIA: sigue, pero muy despacio, por favor – era una suplica.

Fui tan lentamente que apenas notaba la fricción del movimiento, entraba tan despacio en ella que solo sus paredes interiores palpitando hacían evidente el avance, Alicia sollozó un par de veces y gritó al aire maldiciones, pero no me mando parar, y apreté en un golpe final en que la dejé boquiabierta con los ojos en blanco bien abiertos, la tenia dentro, toda, sus caderas enormes eran un buen augurio. La vi como su hubiera recibido una descarga de un carro de paradas de un hospital, se elevó de la cama con un espasmo que la dejó caer pausadamente, y permaneció con la espalda encorvada unos segundos, mordiéndose el labio pero más que por placer, para aguantar el dolor.

-YO: ya está………- sonrió levemente.

-ALICIA: como si fuera poco……….noto……..noto como se me ensancha…..todo…..- me besó para tranquilizarme, tendría que tener tal cara de susto que fue ella la que me serenó.

-YO: tú deja que se acople, con cuidado, hasta que notes que no te tira la piel - obedeció y solo movía sus manos raspando mi incipiente barba, y sus labios contra los míos, con delicadeza, permanecí inmóvil unos minutos, hasta que ella suspiró varias veces seguidas.

-ALICIA: creo…creo que ya……- se sonrojó un poco.

-YO: bien, voy a empezar a sacarla lentamente, y luego la meteré de nuevo, con cuidado, iré aumentado poco a poco, así que prepárate – rió mientras decía que si con la cabeza, tan asustada como yo, me agarró rodeándome con sus brazos por el cuello, aferrándose con temor a lo que llegaba.

Cumplí mi palabra y al irla sacando oía su respiración agitada, lentamente fui metiéndola de nuevo y ella mantenía la respiración hasta sentirla dentro, allí soltaba el aire, muy tranquilamente fui aumentando la velocidad, si es que a eso se le podía llamar velocidad, y ella respondía bien, con su rutina de respiraciones, para cuando entraba y salía de ella sin mucha dificultad, jadeaba de placer y suspiraba de gozo, no menos que yo, que la notaba temblar, se dejó caer sobre la cama, habiendo pasado lo peor, y me besaba con una sonrisa eterna llena de arrugas en los ojos, en ciertos momentos aumentaba el ritmo un poco y ella se mordía el labio derritiéndose entre mis brazos, pero luego bajaba para dejarla respirar, me sorprendió que cuando bajaba el ritmo ella acompasaba mis gestos con su cadera, provocando penetraciones más largas y sensuales, a la 5º o 6º vez que aceleré, su cuerpo vibró, sus ojos se cerraron y su mano se fue a su clítoris frotándolo de forma acelerada, su orgasmo manchó las sabanas y mi cuerpo, gimió entre palabras inaudibles mientras se retorcía bajo mi cuerpo, cuando pudo volver a respirar sus manos la taparon la cara, estaba roja y riendo de excitación y vergüenza, luego se apartó el pelo enmarañado de su cara mirándome sonrojada.

-ALICIA: dios mío…….perdóname…..- la besé.

-YO: ¿perdonarte que?

-ALICIA: no lo sé…..nunca me había pasado esto…….no así…..

Los besos reactivaron mis movimientos, y perdí la noción del tiempo, estuve acelerando y frenando tantas veces, sintiendo como cada vez era más fácil y placentero, como ella seguía acompasando con facilidad mis gestos y mirándonos a los ojos sin pestañear, no solo era sexo, si no que estabamos unidos por un vinculo invisible por el cual nos declarábamos nuestro más sincero afecto y cariño a través de nuestros cuerpos. Las sensaciones iban más lejos de la que obtuve con cualquier otra mujer, Alicia no besaba ni se movía mejor o peor que nadie, simplemente estaba fuera de cualquier comparación, era perfecta en todas y cada una de sus acciones, y si no lo eran, me lo parecía. Los gestos fueron volviéndose más ágiles y rápidos, el calor era agobiante y la sensación dentro de ella se volvía fuerte y potente, me corrí dentro de ella y de la intensidad del instante apenas pude avisar, al sentir como me derramaba en ella, un halo de satisfacción la llenó la mirada, obnubilada y jadeante, caí sudando sobre ella y me abrazó mientras me besaba y me acariciaba.

Al girarme vi un reloj, apenas había estado 20 minutos dentro de ella, una miseria para mi, más aun cuando me di cuenta, no había follado con ella, la había hecho el amor, de forma lenta, cariñosa, con ternura y mimo. Suspiraba a su lado, y la veía sonreír encogiéndose sobre si misma, entre dulce y tímida, acaricié el contorno de su piel.

-ALICIA: ha sido……….raro………bonito……..tierno…..bueno.

-YO: lo siento, he…..he sido demasiado rápido…20 minutos no es nada….….pero………..no se…tampoco he sido tan……… contundente….- se apartó el pelo de la cara con un gesto sensual.

-ALICIA: te vi con Lara, y Mara me ha hablado mucho de ti, quizá no sea igual con todas, quizá conmigo sea diferente.

-YO: supongo, te quiero demasiado como para tener sexo salvaje…….

-ALICIA: puede ser, estamos empezando, ahora todo es bonito y de colores…….- se recostó sobre mí - ….quizá más adelante……..te quejas por 20 minutos, cuando eso es mucho tiempo, al menos para mi, yo no soy ninguna loca del sexo ni estoy acostumbrada a eso, o a más.

-YO: mientras tanto….podemos repetir……- una carcajada sonora se le escapó cuando vio mi polla mirando al techo otra vez.

-ALICIA: jajaja ya me dijo Mara……..

Pasó una de sus piernas por encima mía y quedó montada sobre mi, de un gesto hábil se metió mi falo en su dilatado interior y a 4 patas empezó a bombear con cuidado, mis manos fueron a su trasero, ¡y que maravilla!, sentir su piel tersa y dura vibrando con su movimiento pélvico, sus senos moviéndose al son de su cadera, desde luego sabia cual era su punto fuerte y lo manejaba de cine, sus caderas se movían mejor que una bailarina del vientre y su forma de contonearse era delirante, apenas podía mantener la cabeza quieta como para besarme y se alzaba de rodillas de vez en cuando retumbando contra mi al caer a plomo y girar su cadera en amplios gestos demenciales, pese a una 2º y 3º corridas de ella, menos impulsivas que la inicial, continuó como un oleaje constante rompiendo en mi cintura, y me enamoré aún más de ella cuando me cogió de las manos entrelazado los dedos y me usó como apoyo para subir y bajar engullendo mi miembro entero cada vez con el sonido de nuestros cuerpos chocando, como cuando Eli me desvirgó, hasta que el 4º orgasmo le arqueó la espalda hacia atrás y se frotó el clítoris tan rápido que me bañó el vientre de sus fluidos, no pude contenerme, agarré ese culo como pude al no poder abarcarlo y mi cintura se volvió loca, planté lo pies, y bestia o no, no pude darle ritmo mejor y más rápido, ella soltó unos alaridos de sorpresa y se agachó para poder aguantar aquel vendaval entre sus muslos.

No pude parar hasta que me corrí por 2º vez dentro de ella, que estaba deslumbrante, con el brillo del sudor recorriéndole el cuerpo y una mirada lasciva impropia de ella, pero que cuando se le pasó la retahíla de orgasmos y espasmos, volvió a ser ella, torneando los ojos y cayendo fundida sobre mi pecho.

-YO: Alicia…. ¿estás bien? – tenia pánico por haberme pasado, pero una serie de risas naturales salieron de sus labios y me miró alzando la cabeza con ternura.

-ALICIA: ohhhh si………muy bien…….jajajaja vaya bestia parda estás hecha…….- me besó con lengua, pese a estar cansada y rendida, me dejaba sin aliento.

-YO: si quieres podemos dejarlo ya…….- se alzó contoneando su trasero, dejándome claro que aquello no había terminado.

-ALICIA: podemos, pero se de algo que te gustará, a todos con los que he estado les volvía locos, y se como me miras cuando crees que no te veo, fóllame desde atrás – la imagen de ella a 4 patas me la puso dura de nuevo y ella lo sintió en sus piernas.

-YO: ¿pero, por detrás…….?

-ALICIA: dejemos eso para más adelante…….por el momento….…….- su sonrisa era tan encantadora.

Se salió de mi y gateó a 4 patas sobre la cama, me puse en pie y verla así, desde atrás, con sus amplias caderas y su culo me pompa………. casi me mata, sin duda el mejor culo estructuralmente hablando, perfecto, no sobraba ni faltaba nada, me arrodille tras ella y se la metí de una estocada tan firme en su interior que la alzó y la sujeté de los senos, pellizcándolos mientras ella gemía al sentirse algo más que una mujer amada, sino deseada.

El inicio fue pausado y acompasado por ambos, pero cuando sentía el rebote de sus nalgas me atrevía a arremeter con furia, y cada golpe la hacia gemir más alto y más sensual, así que, esta vez, si la estaba follando, no haciendo el amor, de forma brutal, y aun así ella seguía girando su cadera a mi ritmo, haciendo que la penetración fuera profunda, me volví loco acariciando uno de sus senos y mi otra mano bajó a su clítoris, sonrió alegre por la idea y me dejó frotárselo con habilidad mientras cerraba los ojos y se dejaba arrollar por el tren de mercancías que tenia detrás, cuando empezó a correrse una vez tras otra se venció a 4 patas y sujetándola de las caderas, sin duda la bestia apareció, tenia que hacerlo, ante semejante espectáculo que era lo que tenia delante de mi, viendo como mi enorme verga desaparecía por completo, en unas caderas tan poderosas que hacían ver mi polla no tan escandalosamente enorme, hundiéndose en no solo la mujer perfecta o el amor de mi vida, si no en el trasero más deseable que se pueda imaginar, grande, voluptuoso, desbordante y bien colocado. No recuerdo un mejor sexo la 1º vez con nadie, fue erótico, sensual, romántico y visceral, todo en uno, y reconozco que más de 3 azotes en su culo fueron pocos, era de gelatina y se movía sin descanso ante mis acometidas, otro orgasmo animal la sacudió el cuerpo, salió despedida rodando por la cama y serpenteado entre lamentos y gemidos, frotándose poseída la entrepierna, hasta que se calmó, la cogí de la cadera y de un tirón me la monté encima de pie, me rodeó con las piernas y brazos mientras se la metía hasta el fondo y la apoyaba con cuidado la espalda en una pared, al dejarla caer se encorvó intentando alzarse sobre mi cuerpo, me besó dejándome sin poder respirar, cada golpe de cadera la elevaba sobre la pared y al caer sonaba el chapoteo de nuestros sexos, sujeté de uno de sus senos mientras la estaba matando con cada acometida y después de varios orgasmos, casi se desvanece en otro final de escándalo, en el que me corrí dentro de ella por 3º vez, casi a la vez que ella relampagueaba sobre mi cuerpo.

Al dejarla con extremo cuidado sobre la cama rodó varias veces hasta calmarse, y pude acostarme a su lado para poder coger aire, llevaba demasiado sin sexo, y supongo que ella más, cuando recobró el sentido, o la cordura, se puso a mi lado, sonriendo con aquellas arrugas deliciosas, mordiéndose la uña del dedo pulgar, juguetona.

-ALICIA: ha sido increíble……..eres incluso mejor de lo que había esperado.

-YO: tú eres mejor que en mis sueños.

.-ALICIA: jajaja ahora sé por que Eleonor está tan loca.

-YO: ella no solo estaba así por el sexo.

-ALICIA: lo sé, estaba así por que sabia como hacías el amor, y además veía como Ana tenia tu amor y el sexo, es para volverse loca, ahora yo tengo tu amor y no se me da mal hacerlo contigo…..

-YO: y es la 1º vez.

-ALICIA: no se si podré mantener este ritmo, por que madre mía……..

-YO: oye, 3 veces tú sola la 1º vez no esta nada mal, no muchas pueden decirlo.

-ALCIIA: ¿ah si, cuales? – quise hacer memoria, mientras ella jugaba con sus dedos en mi pecho.

-YO: ninguna que esté a tu altura - más romántico que decirla que al menos 4, y una de ellas, su hermana.

Pasamos una hora de cháchara mientras cogíamos aire, me bebí 2 botellas de agua del tirón y ella se dio una ducha, después yo, y nos metimos en la piscina de 2x2 de la habitación, desnudos y jugando, tanto jugamos que nos excitamos demasiado y tenia a Alicia encima masturbándome mientras me besaba, y yo acariciando su pubis con tenacidad.

-ALICIA: nunca lo he hecho en el agua.

-YO: ¿quieres probar?

-ALICIA: tú lo has hecho mucho, ¿no? Con la del ático ya me imagino.

-YO: pues si, pero nunca con tan grata compañía.

Se mordió el labio mientras se dejó flotar para rodearme con las piernas, la cogí del culo, me tenia tan cautivado que era mejor que cogerla de cualquier otra parte, y la apoyé contra una pared de la piscina mientras mi polla era dirigida por ella, entró limpiamente hasta el fondo y al hacerlo siempre arqueaba la espalda mordiéndose el labio, al menos la 1º vez, luego me besaba con lujuria al sentir como la metía ferozmente pese a la resistencia del agua, y para cuando me rozaba con la nariz con cada beso largo, tenia un orgasmo dulce y cariñoso, sentí sus muslos apretarse contra mi y un jadeo constante la llevó al cielo, para hacerla volver al verter mi semen por 4º vez dentro de ella, sabia de sobra de mi vasectomía, así que solo se gustaba.

-ALICIA: ¡dios!, espero que tus padres salgan de casa a menudo, me ha encantado esto…….el agua fría y tu semilla caliente dentro de mi - la lamí los senos mojados con habilidad.

-YO: yo también, no me creo lo bien que te mueves, eres mejor que tu hermana – era verdad a medias, Mara era inmejorable en sus movimientos, lograba que te volvieras loco, pero con un gran esfuerzo, Alicia lo conseguía de forma natural, era poderosa, avasalladora, lo que podía permitirse con su cuerpo.

-ALICIA: ¿ah si?….pues pienso decírselo, verás que capón te da.

-YO: que no se enfade por que mi prometida sea mejor que ella.

-ALICIA: tu prometida……dios……casi se me había olvidado……- miró su dedo y allí estaban los delfines con gotas de agua recorriendo su contorno y los brillantes haciendo lo que mejor hacen, brillar.

-YO: pues que no se te olvide, por que se acerca la hora de la verdad y necesito que estés a salvo.

-ALICIA: no me apartaré de ti, ella es peligrosa, tienes que tenerme a su lado, para controlarla.

-YO: para lo que tengo pensado Hera ya no es necesaria, no puedes arriesgarte, acepté que asumieras el riego solo para que la tuvieras vigilada y metieras al sustituto, ya está hecho, ahora déjame a mi solo.

-ALICIA: ¿yo no puedo arriesgarme pero tú si puedes meterte a ciegas?, necesitas a alguien dentro, y yo soy la mejor baza, soy la única baza.

-YO: lo sé, pero……..si te pasara algo…….

-ALICIA: ahora estamos juntos…. – se señaló el dedo –…. esto no es solo una joya, significa que ahora estamos unidos para lo bueno y para lo malo…… - me hizo besarla en el pequeño tatuaje de su muñeca, el de la mano donde la sujeté para no dejarla caer -……..no dejarás que me pase nada, lo sé.

-YO: podemos hacerlo…..juntos – su besó me derritió, y no hubo más conversación, salimos y nos secamos dándonos otra ducha, en la que no pude evitar tomarla desde atrás, los 2 de pie en la ducha, besándonos bajo el agua tibia, y repasando todo su cuerpo con mis manos mientras la hacia el amor de nuevo, como al principio, lentamente y deleitándonos, más de una hora entrando y saliendo de ella, repasando cada recoveco de su piel.

Nos fuimos a la cama y nos quedamos dormidos unas 7 horas seguidas, estabamos muy cansados del largo día y de aquella 1º vez que fueron 5 y que se convirtió en la mejor noche de mi vida, si, lo digo mucho, pero era por que lo sentía así, cada almuerzo, cada paseo, cada mirada, cada conversación, cada caricia, cada roce, cada beso, cada movimiento, cada penetración y cada orgasmo junto a ella, todo se convertía en lo mejor que me había pasado nunca.

Nos despertamos los 3, Alicia, yo y mi erección mañanera.

-ALICIA: es desquiciante, ¿esto no se te cansa nunca?

-YO: algunas lo ven como algo positivo.

-ALICIA: pues nada……

Tan desnudos como nos acostamos se abalanzó sobre mi verga con ambas manos y pillándome por sorpresa, se puso a lamer mi polla, y chupar el glande con muchas más habilidades de las que le había presupuesto, me deleitó con sus labios succionando mi falo, no le entraba en la boca, y repasaba con su lengua todo el tronco de aquella barra candente, la cogí de la cintura y me la puse a 4 patas de forma invertida, en un 69 demencial, sus caderas casi me cubrían la cabeza entera, y al sentir mi lengua y mis dedos en su coño dejó de chuparla para gemir, cuando localicé su punto G creo que se corrió al instante, nunca antes se lo habrían buscado y acariciado, jugué con mi lengua chupando su clítoris, era de lejos el más grande que había lamido nunca. Al correrse por 2º vez gateó hacia mis pies, y se metió mi rabo hasta el fondo dándome la espada, dejándome su culo a mi disposición, follándome al ritmo que ella deseaba, se elevaba poderosa y caía con fuerza, su cadera se movía en amplios círculos y su larga cabellera castaña se movía alegre a su compás, no creo que ningún batería de un grupo despreciara el trabajo que hice con sus nalgas, cuando se corrió por 3º vez, ahora por la penetración, tenia la piel de sus nalgas roja y compungida, pero en vez de darse la vuelta, se dejó caer hacia atrás, pegando su espalda a mi pecho y abriéndose de piernas como una rana, dejándome que ahora yo la sujetara de las caderas para metérsela tan dentro que casi podía notar como rozaba la pared de su útero, pero no la hacia por mucho que insistiera, así que me desataba y un fluido constante emanó de ella hasta que me vacié, en un sprint final que la hizo tener otro orgasmo animal, a esas alturas habíamos descubierto juntos que tenia de 2 clases, el normal y el que le impedía seguir moviéndose hasta recuperar el aire, y este fue de los segundos, por suerte había terminado y mi miembro decaía, se giró para quedar tumbada sobre mi y llenarme de besos, tantos que perdí la cuenta y el oxigeno de la cabeza.

-ALICIA: eres un animal………eres una bestia……..eres una bestia salvaje jajajajaja, eres mi bestia – me sonrió tan dulcemente que aquella estupidez me gustó.

-YO: ¿una bestia?, queda un poco feo…….

-ALICIA: si, y solo tú y yo sabremos por que.

-YO: entonces tú eres mí princesa, si yo soy tu bestia, tú eres mi bella.

-ALICIA: lo seré el resto de mi vida…………soy……….feliz – su rictus cambió a serio, pero emocionado, sin que hubiera palabras para describir lo contenta que estaba, parecía tan llena de dicha, como si pensara que nunca volvería a ser feliz, y de golpe descubriera que si podía.

-YO: no más que yo, me completas Alicia, de una forma que nunca pensé que podría sentir – pasé su melena por detrás de su oreja, recorriendo todo el largo de su cabello hasta acariciar su espalda.

-ALICIA: dime que jamás me dejarás, que no me fallarás ni me decepcionarás…….

-YO: jamás, solo si tú me lo pides.

-ALICIA: ni aunque yo te lo pida, no me alejes, pase lo que pase, quédate conmigo – Alicia estaba en el punto de echar a llorar, la cogí de la barbilla para que me mirara a los ojos.

-YO: aunque muriera y fuera al mismísimo infierno, lucharía contra los ejércitos del diablo, le arrancaría el tridente de la manos para clavárselo en el pecho con tal de volver a tu lado, encontraría la manera de volver, por perdido que estuviese, podría tardar días, semanas o años, pero si me esperas, te encontraré, te lo prometo, hasta podría ser una amenaza, no voy a fallarte – ese detalle final la hizo sonreír, relajando sus pensamientos.

-ALICIA: ¿te lo acabas de inventar o es de una película? - sonrío alegre, se le había pasado aquel momento de debilidad.

-YO: de varias en realidad………son una gran fuerte de inspiración…….- la besé –………pero eso no lo hace menos cierto, solo un estúpido te dejaría, ¿soy un estúpido?

-ALICIA: eres muchas cosas, un loco desvergonzado que actúa y habla antes de pensar……..pero no…….no eres un estúpido.

Quedamos abrazados una eternidad, o eso me pareció, Alicia era fuerte y lista, pero tenía tal pavor a que yo la fallara, como hizo Teo, o Lorenzo, que entendí aquel fugaz momento de dudas, pero yo no seria ellos, llegaría hasta el final con ella, fuera cual fuera.

Sonó la campana para dejar la habitación, duchas separadas por seguridad de no recaer y nos vestimos para volver a casa, la dejé en la suya comentando los planes a seguir para tenerlos bien claros, y regresé a mi casa convencido. Había encontrado mi escudo de Aquiles, hasta ese momento había sobrevivido, me había escondido y logré vengarme en parte, para proteger a mi familia o a mis amigos, pero era por mi propia vanidad, mi orgullo y mi arrogancia. Ahora, por fin, tenia algo por lo que merecía la pena pelear, y morir, algo a lo que aspirar más allá que yo mismo, la promesa de una vida junto a Alicia era todo lo que un hombre pudiera desear, había llegado la hora de luchar por ello, y ponerle fin a todo, de un modo, u otro.

Alicia – El principio del final.

¿Como acabar esta historia?, es una pregunta que os lanzo pero que llevo pensando desde el momento en que escribí el inicio de todo esto, ha sido un largo camino, y os agradezco de corazón a los que habéis llegado hasta aquí, siguiendo la serie desde el principio leyendo todo, por que me habéis dado vuestra confianza en mayor o menor medida, y pese a mis errores o fallos, pese a las incongruencias que haya podido plasmar o meteduras de pata en la historia, pese a no compartir o entender mi forma de escribir y relatar alguna parte, tan real como ficticia, de mi vida, ahora empezáis a leer este montón de palabras que pretenden ser un digno final a algo que, bueno o malo, eso ya lo decidiréis vosotros, me ha reportado una gran satisfacción. Así que con este ánimo aquí me encuentro, teniendo que elegir como empezar una terminación, por que no nos olvidemos, esto es una historia, y todas las historias tienen un principio, un desarrollo, y un final.

Teniendo que elegir un punto por el que iniciar, y siendo yo quien elige, me permitiré el lujo de comenzar en una cama junto a Alicia, tumbado con solo un pantalón largo de pijama como prenda, mirando al techo, y con Alicia tumbada a mi lado cogiéndome de la mano, vestida solo con mi camiseta y una finas bragas negras de encaje, con su cabeza apoyada en mi brazo, que la hacia de almohada, y jugueteando con sus dedos en los míos, mirándonos sin decir nada durante bastante tiempo, con nuestros cuerpos cansados y frescos después de haber estado un par de horas haciendo el amor y dándonos una ducha para dormir, aún sentía su larga melena castaña húmeda en mi piel, y de vez en cuando nos dábamos un par de besos. Alicia y yo nos habíamos divertido bastante durante esos 3 meses desde que me había declarado y éramos prometidos, pero ese día había sido desaforado. Alicia llegó de salir con unas amigas y se me abalanzó encima, apenas pude desnudarla y ya me estaba montando, y que forma de cabalgarme, me pase 1 hora tratando de calmar su fuego, y cuando se le pasaba había encendido el mío, otra hora más vaciándonos el uno en el otro, me había dejado jadeando, y no era fácil, para volver a ser la chica dulce e inocente que me rozaba la nariz con la suya cuando me daba largos besos.

-ALICIA: me encanta sentir como me llenas.

-YO: ya lo veo, ¿que te ha pasado hoy?, venias echando chispas……

-ALICIA: nada, las estúpidas de mis amigas, que se han pasado horas hablando, y me han puesto cachonda.

-YO: umm me gustaría saber de que hablabais, tenéis un peligro…….

-ALICIA: ¿de verdad quieres saberlo?

-YO: claro.

-ALICIA: de bebés…….- sonrió sonrojada.

-YO: ¿y eso te ha puesto cachonda?

-ALICIA: si, estaban cotorreando, y se me ha debido de encender el reloj biológico o algo, de golpe quería que me llenaran y sentir esa sensación, no se, me he imaginado por 1 segundo con un bombo enorme acariciándome la barriga, y luego con un hijo en brazos, jajajaja necesitaba a mi bestia.

-YO: jajaja tendré que comprar un par de revistas de ropa de bebé, para cuando te quiera encendida.

-ALICIA: no es broma, toda mujer sueña con tener hijos.

-YO: ¿quieres tenerlos ahora?

-ALICIA: ¡¡¡¿ahora? ni loca!!!

-YO: mejor, por que ya sabes que yo no puedo engendrar.

-ALICIA: ¿por que te hiciste la vasectomía? – me pilló desprevenido.

-YO: pues……- “por que me lo dijo Eli” - ……para poder gozar con las mujeres sin condones ni sustos de retoños no deseados.

-ALICIA: ¿y ahora? estamos prometidos, si quisiéramos tener un hijo, no podríamos.

-YO: pero no quieres, lo acabas de decir.

-ALICIA: esa no es la cuestión…..– era de una de esas veces en que un hombre no comprende que le quiere decir una mujer –…… si quisiéramos no podemos, y tendríamos que esperar.

-YO: pero no queremos por ahora, mejor asegurarnos, ¿no?

-ALICIA: si, pero hay otras formas de asegurarnos, y que no tengamos que esperar una operación si decidimos hacerlo.

-YO: ¿que quieres que haga? – mi padre me enseñó que preguntar eso a tu mujer te ahorra muchos disgustos.

-ALICIA: quiero que vayas al medico y revises que todo está bien,

-YO: de acuerdo, pediré cita – y con esa simpleza se calmó dándome un beso corto y se durmió en mi pecho, “gracias papá”

Estuve pensando largo y tendido sobre sus palabras, hasta que me di cuenta de que, realmente, ya no necesitaba esa protección, y por alguna razón me sentí menos hombre de golpe, así que me dormí convencido. Al ir al medico y decirme que si no me operaba pronto, podría ser irreversible, no lo dudamos, ya nos estabamos imaginado una vida juntos, y ahora los hijos entraban en ese futuro, supongo que fue mi forma de madurar, de entender que la fase de adolescente en mi vida había terminado, tenia 25 años y estaba prometido con la mujer más especial que había conocido, mi despertar sexual fue bonito, divertido, y estimulante, pero ahora Alicia era quien me hacia feliz, y no necesitaba nada de todo aquello, así que programamos la operación para unas semanas después.

Durante ese tiempo, Alicia terminó su carrera y cumplió los 24 años, aprovechando mi……condición mientras durara, en ambas ocasiones tuvimos celebraciones dignas de ser relatadas, ¿pero que podría decir?, era insuperable, increíble y una gozada, Alicia se fue acostumbrando al tamaño de mi miembro desde que empezamos a acostarnos, y con el paso de las semanas apenas sentía dolor, solo placer, disfrutábamos tanto el uno del otro que teníamos que buscar momentos a solas, en el ático o en su piso, para no despertar envidias, era una autentica salvajada como nos movíamos y como Alicia evolucionó, mientras que Ana tardó más de un año en ser una amante de alto nivel, Alicia en menos de 2 meses ya fue tan buena o mejor que ella, como os dije, mientras las demás lograban ser mejores o peores con escuerzo y trabajo, ella lo era de forma natural, y aunque suene egocéntrico, yo la elevé a su máximo potencial, descubrió que no solo se podía hacer el amor, si no tener sexo salvaje y animal, gozar de forma lasciva y visceral, la secuencia podía empezar de mil formas y acabar de otras mil, pero ponerme detrás y destrozarla, ya fuera a 4 patas, pegando mi pecho con su espalda, o de pie, era un espectáculo por el que pagarían muchos, y aunque no era lo normal, el sexo oral pasó a ser parte de su repertorio, logrando que perdiera un poco el pudor al sentir el semen en su piel, o en su boca.

Lo mejor de todo era que eso no cambió en nada su forma de ser, se mantuvo como siempre, lista, divertida, inteligente y dulce, incluso me agradó descubrir que no tenia ni pizca de celos, Alicia conocía a muchas de mis amantes, ya que seguía manteniendo relación con algunas, y quedaba con ellas, o con Dany al ir al ático, que se mostraba tan alegre como inocente.

Alicia, jamás se preocupó por ese tema. Pero si soy 100% sincero, Alicia tenia motivos para estar celosa por su hermana, Alicia confiaba ciegamente en mi, y yo en ella, por eso se lo comenté, y pese a que me había tirado a su hermana, ella se reía restándole importancia, le dije que Mara y yo nos llevábamos muy bien, nos veíamos a diario con una relación alegre y extrovertida, y que incluso jugábamos a pelearnos con demasiada cercanía de nuestros cuerpos, creo que partes de mí aún deseaban a Mara, pero es normal, era preciosa, y casi siempre la veía ligera de ropa en su piso, con top ajustados sin sujetador y en bragas o en tanga. enseñando sus largas y torneadas piernas, pero eran juegos, que de vez en cuando subían de temperatura al sentir mi verga en su trasero, el roce de sus mulos contra mi o sus manos en mi torso, creo que Mara también sentía algo parecido, juegos a fin de cuentas, sin duda en otra época, o con Ana, en alguna de esas peleas, abriría de piernas a Mara y me la follaría salvajemente, son pensamientos impuros que todo hombre tiene y quien diga que no, miente, el cambio fue que no deseaba a Mara como antaño, ni la amaba, eran carantoñas subidas de tono que se quedaban en eso, esa parte de mi vida terminó con Alicia, que simplemente habló con Mara para que fuera un poco más recatada por casa.

Supongo que no se puede madurar de golpe, y que aquello con Mara eran los rescoldos de mi viejo yo, apagándose, en el fondo somos humanos, imperfectos, y pese al amor que procesaba por mi prometida, mi cabeza funcionaba a esa escala, buscando piezas de caza de forma constante, no se puede convertir a un león salvaje de la selva en un gato domestico, no de la noche a la mañana. Por suerte se acercaba la fecha de mi operación, “otra más”, para devolverme mi capacidad de tener hijos, y sentar la cabeza a golpe de bisturí. Alicia no se separó de mi ni un instante y se quedó a dormir la noche previa en el hospital conmigo, en la cama recostada a mi lado, cuando nos avisaron nos dimos unas duchas rápidas para estar listos, y debido a la tardanza regresamos a la cama, acariciándonos.

-YO: creo que soy la persona de mi edad que más tiempo ha pasado en hospitales y médicos.

-ALICIA: hombre, están los chicos con cáncer y esas cosas, pero desde luego tienes un don.

-YO: entre las jaquecas, las pruebas previas, la operación del tumor, la recuperación, revisiones, peleas, la puñalada……..tengo que tener un mal de ojo.

-ALICIA: y no te olvides de lo que nos trae aquí hoy……

-YO: claro…..la vasectomía……….si, pero eso fue por que quise.

-ALICIA: ¿tuviste miedo cuando te la hiciste?

-YO: pues un poco, creo que nunca entenderéis las mujeres lo que es saber que te van a cortar en los huevos.

-ALICIA: ya, pobrecillos…….un día te llevo a ver a mi ginecólogo…. – sonreímos los 2 –…. ¿y ahora, tienes miedo?

-YO: contigo a mi lado nunca tengo miedo – bufó cansada.

-ALICIA: deja de decir esas cosas, me ruborizas………nadie habla así ya.

-YO: pues deberían, la gente vive con demasiado miedo a decir la verdad de lo que sienten, yo mismo he vivido así durante demasiado tiempo.

-ALICIA: la gente no está preparada para saber la verdad, todo el mundo dice que quiere saberla pero actuamos como hipócritas, por que si fuéramos completamente sinceros nos asustaríamos unos de otros, la realidad es que la gente teme la verdad.

-YO: solo por que creen que les hará daño, pero la verdad nunca hace daño, no es ni buena ni mala, es la verdad, y si estás dispuesto a afrontarla puedes lograr cosas maravillosas.

-ALICIA: ¿como que?

-YO: como a ti, hubiera vivido una vida llena de sexo, lujos y comodidad si hubiera decidido rendirme a Eleonor, pero la verdad es que no la amaba, me ha hecho mucho daño, demasiado, pero si no fuera por esa verdad ahora no estaría prometido con una mujer increíble, que me ama tanto como yo la amo a ella, y que esta tan segura de lo nuestro que me tiene aquí tumbado.

-ALICIA: podríamos anularlo…..

-YO: ya escuchaste al medico, si lo sigo atrasando puede volverse irreversible…….no podría tener hijos de forma natural.

-ALICIA: ya, ¿pero lo haces por que quieres o por mi? No quiero que te arrepientas más adelante.

-YO: lo hago por que algún día quiero pasarme horas acariciándote la barriga hinchada y enorme, con una vida naciendo dentro de ti, obra de nuestro amor, siendo consciente de que la semilla la puse yo, y no un cirujano con guantes de látex y una jeringuilla muy larga en una sala esterilizada – torneó los ojos con ternura y me besó.

-ALICIA: no vas a querer verme fea, gorda, cansada, dolorida, llena de ojeras y cambios de humor……..

-YO: y el dolor de espalda, no te olvides……si, si quiero, y lo sufriré como mejor pueda, por que incluso así, seguirías siendo preciosa.

-ALICIA: ya veremos, en un futuro muy, muy lejano………

-YO: además te crecerán los pechos, eso siempre es bueno – se rió al golpear mi vientre y hacerse daño con el anillo de compromiso que no se había quitado desde hacia 3 meses, desde que le pedí matrimonio en Teruel y desde que empezamos a acostarnos juntos.

-ALICIA: eres un degenerado…..no bromearás tanto cuando sea tu hijo al que amamante, y no a ti.

-YO: le envidiaré, seguro, pero……casi me lo puedo llegar a imaginar, estar tumbado en una cama, contigo delante de rodillas recostada en un sofá, con nuestro bebé en brazos, uno de tus pechos fuera con él tomando su alimento de tu cuerpo, y veo tu cara llena de maternidad orgullosa, de una bondad delicada, y casi puedo sentir la satisfacción y la felicidad que eso me produciría – no me había dado cuenta, pero Alicia ahora había alzado su cabeza y me miraba a escasos centímetros de mi cara, supongo que imaginándose la escena tal como yo la veía en mi cabeza, y me besó, de la forma tan dulce y suave que solo ella sabia, con un sonoro ruido al separar nuestros labios, y que lograba que cerrara los ojos y me transportaba a la entrada del paraíso.

-ALICIA: no puedo contigo…….eres demasiado soñador.

-YO: por eso soñamos, para saber que debemos alcanzar, si no soñáramos seriamos unos infelices que vagan sin rumbo, soñamos para aspirar a una vida mejor – un largo silencio con ella recostada sobre mí bastó para tranquilizarme, hasta que unos golpecitos en la puerta me sacaron de mis pensamientos.

-ENFERMERA1: disculpen, ya estamos listos.

-ALICIA: vale, gracias – se puso en pie algo confusa, creo que se haba adormecido, y recogió sus cosas para acompañarme, un celador soltó lo frenos de mi cama y me llevó a la zona de cirugías, donde me despedí de mi prometida.

-YO: te quiero, bella – se dobló sobre mí dándome 3 o 4 besos rápidos.

-ALICIA: yo a ti más, bestia.

-YO: por cierto, guarda esto…….- me quite mi anillo de compromiso, el de plástico que era un rubí de caramelo del que no quedaba nada salvo la base, al verlo en mi dedo siempre se reía, y me decía que tirara aquello, que me compraría uno decente, pero me negaba, me había acostumbrado a llevarlo.

-ALICIA: tranquilo – se lo puso en su dedo pulgar, el único en el que no le quedaba suelto, y me metieron por un largo pasillo, aún podía verla al girar hacia un pabellón.

-YO: diles que es volver a conectar un par de tuberías, y que si me cortan algo que no deban, que lo pongan en un tarro, que me lo llevo a casa – la grité desde lejos, pese a que podría haber unos 20 metros de distancia su sonrisa y sus arrugas eran inconfundibles.

Antes de que la anestesia me hiciera efecto pude ver como una enfermera sonreía sonrojada al verme la polla colgando, para cuando desperté ya estaba de nuevo en una sala de cuidados intensivos, no estuve ni 5 horas y me subieron a planta, allí seguía Alicia, y se pasaron a verme muchos amigos y familiares, mi madre aún se mostraba resentida por que decía que casi la dejaba sin nietos de mi parte, yo creo que se enfadó más por que había logrado ocultarle durante casi 7 años algo tan importante. Incluso recibí una cesta de parte de Eleonor, con productos de 1º calidad, no se que pretendía significar, pero el jamón 5 jotas estaba delicioso. Cuando salí del hospital con todo correcto y en su sitio, las palabras del doctor antes de salir me resonaban en la cabeza “ahora ten cuidado, espera un par de días para que todo encaje, pero después puedes dejar embarazada a tu chica, como cualquier otro varón”.

Pasaron los 2 días y tomé a Alicia con 3 condones y ella se tomó la pastilla del día después, por si acaso, fue diferente, no solo por el látex, aquello importaba, tenia la responsabilidad y eso me gustaba, pero en mi idílica vida había un problema, Eleonor, pese a que se mantenía alejada gracias a que Hera sabia manejarla, no cesaba en su empeño, se había puesto furiosa cuando fue consciente de la petición de mano, pero de nuevo Hera la condujo diciéndola que no habría mejor forma de hacerme daño que mi prometida me dejara, y que nos diera tiempo para cimentar nuestra relación, para cuando llegara la boda, me dejaría plantado en el altar, entonces estaría tan destrozado que acudiría a los brazos de Eleonor implorando su perdón, si jugaban bien sus cartas, claro. La idea le pareció a Eleonor tremendamente original y cruel, por lo tanto le encantó, y se ofreció a pagar hasta la boda con tal de que fuera lo antes posible. Alicia y yo nos reíamos en la piscina del ático cuando me lo dijo, fue divertido hasta que leí en sus ojos cierta tristeza.

-YO: ¿que te pasa, mi bella?

-ALICIA: nada…..es solo que………te admiro…..

-YO: ¿por qué?

-ALICIA: llevo 6 meses siendo Hera, y empiezo a hartarme de esto, de la doble vida, del cansancio mental que conlleva, estoy agotada, quiero acabar con esto, cuanto antes mejor, para poder estar juntos sin oír sus amenazadores pasos.

-YO: ya esta cerca, lo tengo medio preparado, pero hay que esperar el momento idóneo, o no saldrá perfecto.

-ALICIA: podemos hacerlo en cualquier momento, y nos libraremos de Eleonor.

-YO: no, si lo hacemos ahora la meteremos en un buen lío, pero perderíamos todas nuestras bazas, y ella es demasiado rica y poderosa, podría librarse y empezaríamos de 0 otra vez, sin contar que jodemos al cártel, eso es ponernos en peligro, tenemos que acabar con todo, de una sola vez, para evitar cualquier problema, tenemos que cerrarlo todo para que después no nos afecte y podamos ir por la calle sin mirar hacia atrás.

-ALICIA: lo sé, pero estoy harta de esto, no se como lo soportaste todo este tiempo.

-YO: fue duro, pero desde hace un tiempo lo llevo mejor.

-ALICIA: ¿desde que dejaste de ser Zeus?

-YO: desde que estoy contigo.

-ALICIA: pasó a la vez.

-YO: pero dejar de ser Zeus no me hizo feliz, tú si – se sonrojó al sentir como la rodeaba con los brazos en el agua, y como la besaba.

Aquello me dejó intranquilo, no quería que Alicia sufriera lo más mínimo pero sabia que no podría acelerar los pasos, todo tenia que encajar a la perfección o correríamos serio peligro, por eso había preferido seguir esperando hasta tener luz verde.

Después de volver a ser un hombre completo, tuvimos que dejar de ser tan fogosos, por precaución usábamos condones y de vez en cuando se nos iba de las manos y no había tiempo para el látex, tenia pastillas de después por si acaso, pero disfrutábamos el uno del otro de formas increíbles y siempre terminábamos abrazados durante horas, era feliz, y creo que Alicia también, pero cada vez que regresaba de ver a Eleonor, su gesto se torcía cada vez más, Eleonor se impacientaba, rondaría los 45 años y no tenia tiempo que perder. Pero por fin, ya casi habiendo olvidado mi plan, llegó el día, aquello que, en parte, planeé hacia 3 años, el plan fugaz que me llegó a la cabeza cuando llevé el maletín con todos aquellos expedientes al piso de estudiantes, con Lara viva, aquel plan que había tardado 3 años en armar, pero había llegado el día.

Volvía a casa del 1º trabajo decente que logré, irrelevante, y cuando subí a mi casa a darme una ducha antes de ir a ver a Alicia, mi madre me vio y se acercó a saludarme.

-MADRE: hola, ¿como vas?

-YO: bien….algo cansado.

-MADRE: ¿y Alicia?

-YO: pues bien, siempre que no…….

-MADRE: cuídala eh, que es un tesoro de mujer.

-YO: eso hago – me pasó sus dedos por la cara antes de marcharse.

-MADRE: por cierto, tienes una carta para ti en la mesa de la entrada.

Esas palabras no me tensaron, lo que me puso nervioso fue ver la carta, un sobre blanco, sin sello ni remitente, solo con mi nombre, al abrirlo había un trozo de papel, sin más, con algo escrito, era la señal, suspiré profundamente y me di la ducha, corrí al piso de estudiantes, al entrar vi a Alicia en el salón, sentada junto a su hermana, las saludé con cortesía y miré a los ojos a Alicia, cabeceando en dirección a la terraza, asintió y dándome un precioso beso, salió delante de mi, acudí a su espalda, estaba apoyada en la terraza, con un top rosa enseñando un hombro y un pantalón largo oscuro y vaporoso, al sentirme detrás de ella se encorvó con ternura y la abracé con fuerza, no estabamos allí por casualidad, era el único sitio de la casa donde sabíamos que no había micros.

-YO: hueles genial – inspiré su cabello, con olor a manzana de su champú.

-ALCIA: miedo me das…….cuando empiezas con un halago…….

-YO: me conoces demasiado bien – pasé la cabeza por encima de uno de sus hombros y besé su mejilla.

-ALICIA: ¿por que me has sacado a la terraza?

-YO: es la hora – le mostré el papel, al verlo se quedó sin aire y se te tapó la boca con ambas manos, luego lo cogió y lo examinó, como si allí se revelara la verdad universal, pero solo había 2 letras en color verde, “OK”.

-ALICIA: ¿ya?

-YO: así es.

-ALICIA: dios…..llevo tanto esperando esto……que me da miedo – se giró sobre la barandilla y me cogió la cara, dándome 2 besos rápidos.

-YO: no tengas miedo, saldrá bien.

-ALICIA: ¿y que tengo que hacer?

-YO: nada, tú no estarás.

-ALICIA: ya lo hemos hablado, me necesitas allí.

-YO: una cosa es Eleonor, y otra los del cártel, no pienso ponerte delante de esa gente.

-ALICIA: pues no pienso dejar que tú si.

-YO: no estaré solo, solo tengo que hacer mi papel.

-ALICIA: tu papel se caerá como un castillo de naipes si no estoy yo con Eleonor, la conozco.

-YO: estoy dispuesto a correr el riesgo de que falle el plan, no de que te ocurra algo.

-ALICIA: ese riego no lo decides tú solo, conmigo hay más posibilidades de que funcione, te guste o no, no voy dejar que mi prometido se meta a jugar con cartas marcadas – sus besos no me dejaban razonar, creo que lo sabia.

-YO: ¿y que tipo de persona seria si dejo que te suceda algo malo?

-ALICIA: no me pasará nada, funcionará – se me abalanzó encima, abrazándome tan fuerte que sentía sus dedos clavados pese a mi camiseta y cazadora.

-YO: harás lo que yo diga, cuando yo lo diga.

-ALICIA: lo haré.

-YO: eres lista, te sabes adaptar, pero ten en cuenta que hay partes del plan que no sabes, así que sígueme la corriente, aunque no entiendas por que, y si te digo que hagas algo, lo haces, sin dudar.

-ALICIA: tranquilo, confío en ti.

Nos pasamos una hora en la terraza tratando de aclarar cada punto al detalle, luego regresamos dentro, disimulando aunque en los grandes ojos de Mara leía que se olía algo, pese a ello no preguntó, y dejó que cenáramos en paz, nos acostamos y Alicia me miraba entre ilusionada y con el mayor pánico en sus ojos que vi hasta entonces, con ella tumbada sobre mi pecho acariciándonos lentamente.

-ALICIA: te preocupas mucho por mí, pero, ¿que hay de ti?

-YO: si alguien ha de sufrir daño, seré yo, puedo soportarlo.

-ALICIA: pero yo no, ¿y se te ocurre algo?

-YO: está dispuesto, en cualquier caso.

-ALICIA: ah, muy bien, ¿y yo, que hago si te pasa algo?

-YO: cuidaré de que no te falte nada – estaba confusa, no me entendía, “pobre”.

-ALICIA: me da igual que falte todo, me refiero a que pasa con lo nuestro, ¡¡¡¡por dios no me abandones!!!

-YO: te hice una promesa en aquella habitación de hotel, la pienso cumplir.

-ALICIA: ¿cuándo…..cuándo será?

-YO: mañana, cuanto antes mejor.

-ALICIA: es posible que no te vuelva a ver hasta que termine.

-YO: es posible.

-ALICIA: ¿así que esta será nuestra última noche?

-YO: no, si dios quiere, tal vez.

-ALICIA: pues deberíamos aprovecharlo.

Era tan dulce que cuando me besó no supe reaccionar, fue ella la que metió sus manos por mi vientre, debajo de mi camiseta y acarició mi pecho mientras aumentaba el ritmo y la duración de sus manos, pocas cosas me excitaban más últimamente que sentir su nariz rozándose con la mía al terminar cada uno de sus largos besos, su lengua era cariñosa, y jugaba con la mía al ritmo de la música fuerte que poníamos cada vez que lo hacíamos en su casa.

Me quitó la camisa y besó mi pecho, mientras bajaba por mi vientre con sus labios y yo le sacaba la blusa por la cabeza, de forma magistral logró bajarme el pantalón y quitarse el suyo sin bajarse de la cama, y dio un par de besos a mi glande mientras acariciaba con sus manos mi polla creciente, cuando la tuvo tan dura que podría partir el mármol, gateó hasta volver a besarme en los labios, frotaba su pelvis contra mi, mientras me masturbaba con una mano, yo acariciaba sus senos al aire, con delicadeza, se elevó para dejarme lamérselos, le volvía loca sentir mis labios en sus pezones, estaba a punto de dejar que me dominara la pasión pero bajé mi mano a su clítoris, inflado y húmedo, al notar mis dedos se le escapó una sonrisa picara, y entonces la agarré del muslo y de un fuerte gesto la di la vuelta quedando encima de ella, se sorprendió cuando besaba su cuello, fui bajando por su cuerpo, y cuando llegué a su húmedo coño se tapaba la cara, pese a todo aquel tiempo haciéndola el amor, se ruborizaba cuando la miraba su entrepierna, pero ahora le encantaba, se había vuelto adicta a que la practicara sexo oral, y yo encantado de hacerlo.

Se abrió de piernas y me rodeó la cabeza con los muslos, al sentir mi besos en sus labios mayores tembló de placer, poco a poco fui lamiéndola con pausa y habilidad, con una mano se agarraba a una de las almohadas en su cabeza y con la otra me tiraba del pelo de la cabeza cuando se sentía excitada, de algunos orgasmos me había llegado a arrancar mechones de pelo, pero nunca me decía que no, chupaba su clítoris mientras mis dedos empezaban a introducirse en ella, poco o nada importaba meter 2 o 3 , la tenia tan abierta que solo al encontrar su punto G abría y cerraba las piernas con pasión, era entonces cuando mis dedos la volvían una loba, aullando de placer, y empezaban los orgasmos, uno tras otro, cada pocos minutos hasta que llegaba el grande, en el que lamía y chupaba las emanaciones de mi prometida, que se revolvía medio loca en la cama, entonces me subí encima suya y la penetré con tanta fuerza que el grito debió de oírse por encima de la música puesta, me agarró del cuello medio ida y comencé a bombear como la bestia que era, como la bestia que ella me convertía, sus senos botaban al ritmo de mis embestidas, su sonrisa y sus jadeos se mezclaban con gestos de autentica lujuria, y cuando otro orgasmo casi la parte en 2 me clavó sus uñas en la espalda, dejando marcas de arañazos nuevas sobre las viejas, era su forma de poder seguir tras un orgasmos animal. No dejaba de penetrarla aunque no paraba de mover las piernas, cuando me cansaba bajaba el ritmo y la besaba, o lamía uno de sus pechos, para luego regresar con más fiereza hasta sacarla el 2º orgasmo animal, esta vez se me escapó y salió de mi frotándose acelerada y congestionada, mi estaca tiesa cabezada goteando de sus fluidos, cuando dejó de temblar me sonrió agitada.

Alicia posó sus piernas en mis hombros, tal como estaba de rodillas la penetré con cuidado, y me aferré a su descomunal cadera para arremeter con ira, se corrió un par de veces más, de forma leve, cuando derramé mi semilla dentro de ella, caí sudando sobre su cuerpo, besándola, y acariciándola con lascivia.

-YO: dios……..eres increíble…….me matas……

-ALICIA: tú si que me matas……joder…..me corro como una cerda jajajaja

-YO: ¡¡¡mi semen!!!, joder, no he usado condón…..- me costaba acordarme que ahora era fértil.

-ALICIA: tranquilo, mañana tomo la pastilla, sigue……¿o es que te has cansado? – aquel comentario era lo que necesitaba, la tumbé boca abajo y me puse encima de ella, metiéndosela por su estrecho agujero en esa posición, totalmente estirada.

Parecía que sacaba el culo, pero no lo hacia, era su forma natural, la di un masaje leve en su trasero y agarré sus nalgas separándolas para metérsela a lo largo de la separación entre ellas, Alicia jadeaba con la cara ahogada en el colchón y sus manos aferradas a las sabanas, en unos minutos ya la tenia dura y se le metí de una estocada firme, cuando empecé ella estaba dentro de la cama, cuando acabé de correrme por 2º vez tenia medio cuerpo fuera con una mano apoyada en el suelo, desde esa posición daban igual sus orgasmos animales, no se podía mover por mi peso y aguantaba autenticas barbaridades, estábamos bañados en sudor, y yo tumbado encima suya a su espalda, con mi rabo soltando semen otra vez en su interior.

-ALICIA: ¡¡¡madre mía……..me estás matando…….¿como puedes ser tan bestia?!!!

-YO: no haberme provocado…….

-ALICIA: jajaja, es que me gusta que te pongas así, me vuelves loca.

-YO: y tú a mi, te quiero, te amo y……… te deseo.

-ALICIA: lo sé…. – se giró quedando de cara hacia mi –….. y yo a ti, por eso quiero regalarte algo - me besó de forma tenue con los ojos llenos de lujuria y mordiéndose el labio nerviosa.

-YO: tú eres el regalo.

-ALICIA: ¿entonces no quieres hacerlo conmigo por detrás? – aquello me hizo sentir un escalofrío.

-YO: ¿por el ano?

-ALICIA: claro, tengo ganas de probarlo contigo, antes no le había cogido el gusto, pero contigo quizá…….

-YO: no puedo decir que no desee hacerlo contigo, tienes el mejor culo del mundo, pero…….si no te gusta.

-ALICIA: no es que no me guste, es que no he sentido nada que mereciera la pena, solo Teo ha entrado por ahí y sin faltarle, no tiene tu herramienta.

-YO: ¿estás segura? – me miró ilusionada.

-ALICIA: si – rozó su nariz con la mía antes de darme un largo beso húmedo, nos mirábamos entre risas de excitación.

De un salto abrí un cajón y saqué un aceite corporal que solíamos usar, ante su sonrisa, me unté la polla de arriba abajo con más cantidad de la necesaria, y luego puse su culo ofrecido, con las piernas juntas a un lado y ella retorcida para quedar mirando hacia arriba, di un masaje a su trasero, lo suficiente como para que se me pusiera como una estaca, si solo manosearlo me volvía loco, ¿imagináis lo que seria llenar de aceite corporal el culo de JLO o la Khardasian?, demencial.

Con cuidado fui dando caricias a su ano, ella sonreía al sentir mis dedos, pero no mostraba resentimiento, o angustia, si no que parecía curiosa, fui masajeando con cuidado con las palmas de mis manos y apretando por momentos en su ano con las yemas de los dedos, a la 4º mi dedo corazón entró y Alicia suspiró, luego fui metiéndolo más adentro y cuando estaba haciendo sitio metí el 2º, luego el 3º, y con ellos entraba y salía sin dificultad ninguna, fue el culo que más sencillo tenia listo, salvo una respiración agitada ella no mostraba nada especial. Eché más aceite y apunté con mi miembro a su entrada trasera, soltó un gemido ahogado cuando entró mi glande con bastante facilidad, se mordió el labio al sentir medio rabo dentro, apoyándose en el colchón notando que empezaba a costarla soportar mi verga haciéndose sitio, y cerró los ojos al gritar cuando, con de un golpe final de cintura, se la metí entera, hasta puso una mano en mi pecho para pedirme que parara, arqueando la espalda.

Era normal, con un culo como el suyo un falo normal no servia, pero mi hombría era de todo menos normal. Jadeó impresionada y sobrepasada al sentir un par de movimientos lentos, una mano se perdió entre sus muslos frotándose el clítoris, agarré sus caderas y el vaivén se hizo incesante, la piel alrededor de su ano se dilataba, salía y entraba de ella según yo lo hacia, y su mano en mi pecho se fue a su boca para acallar los alaridos de mezcla de dolor y placer, incluso la veía sollozar, tiritando, pero susurraba que la diera más fuerte. Mi polla me dolía de la presión pero pasados unos minutos tenia tan grande el agujero que se la metía y sacaba toda del tirón, y allí me desboqué, me vencí sobre ella y la bestia arrasó todo, fueron 30 minutos sin parar, Alicia sobrevivía a una oleada de sensaciones nuevas e intensas, sin saber como ponerse o como moverse, y a los 10 minutos gimió tan rítmicamente que sentí en la piel de mi rabo como se cerraba sobre mi, un par de espasmos en su cadera terminaron en una eclosión antológica de su cuerpo agitándose de formas inhumanas, casi se parte la espalda para lograr besarme, jadeando y diciendo autenticas obscenidades impropias de ella, cuando me llamó retrasado por parar, volví a empezar con una velocidad de la que la bestia solo era capaz, logrando que los orgasmos anales de Alicia no sirvieran para calmarme, en uno de ellos lanzó un zarpazo a mi pecho y me dejó la marca de sus uñas desde mi cuello hasta el inicio de la tableta, y sus gritos tapaban la música a todo volumen. Fue una locura, hasta que me corrí en su interior, de golpes tan fuertes que temblaba entera, caí a su lado y me miraba perpleja, con espasmos en la cintura, lentos y largos, no temía haberme pasado, era Alicia, podía con todo y eso me demostró pasados 10 minutos, cuando pudo hablar.

-ALICIA: ohhhhhh dios……..esto si es………….joder….me duele el culo jajajajaja – la acaricié su trasero con delicadeza, palpando el agujero que no se había cerrado.

-YO: lamento el dolor, pero por mi vida, eres una diosa, vaya culo, me he vuelto loco.

-ALICIA: yo lo he visto………..puf……..- se sacudió la melena para apartar los mechones húmedos de sudor de su preciosa cara, haciéndose un moño en la cabeza para coger aire.

-YO: ¿te ha gustado?

-ALICIA: ¡¡me ha encantado!! – de un saltó se me puso encima, besándome abstraída.

-YO: jajaja para……

-ALICIA: por el amor de dios, ¡¡¡y eres solo mío!!! soy una mujer afortunada.

-YO: no menos que yo.

-ALICIA: ha sido espectacular……..- me miraba provocativa, como si acabara de descubrir las Américas -……… quiero repetir – la miré asustado.

-YO: no jodas….estoy muerto – su contoneo en las caderas mentía, mi polla reaccionaba.

-ALCIA: por favor, solo una vez más……- su cara de niña buena, sus ojos ámbar eléctricos y sus morritos hacían que me desvaneciera como un azucarillo en un café, me puso un pecho en la boca y se lo chupé, “si antes no podía negarle nada, ahora menos”.

Nos puse en pie y de un empujón la estampé contra la pared, de cara a mi, al atacarla me rodeó con una sola pierna mientras la besaba del cuello, cuando ya la tenia dura la di la vuelta con fuerza, apunté a su ano y de 3 fuertes empujones la ensarté, de los gritos que pegaba podía asustar a quien la oyera, pero empujaba contra mi para sentir mi falo dentro de ella, entrelazamos los dedos al apoyar las manos en la pared y nuestras cinturas jugaron a perseguirse, fue peor/mejor que la 1º vez, por que ahora su trasero retumbaba con vida propia, y al acometer cada vez ella se derretía, cuando la bestia apareció bajé mis manos a su cadera, la saqué la cintura arqueándola la espalda, y así agarrada la destrocé como mejor sabia, 4 orgasmos anales la doblaron, pero se recuperaba con facilidad, al terminar el 4º, se giró embravecida, besándome con la mayor fuerza que la sentí jamás, y de un salto se me montó de cara, buscó mi polla con la mano y se la hundió en el coño.

-ALICIA: ¡¡¡¡¡follaje, lléname de tu leche amor mío, hazme ver las estrellas!!!!

La apoyé contra la pared y se aferró con los pies entrelazados en mis riñones, cada embestida lenta la dejaba totalmente empalada, y cuando bajaba ella giraba sus caderas con alegría, una y otra vez hasta que del rebote volvía a subir y bajar, soltando un lamento de placer con cada penetración, su pelo botaba como lo hacia ella y sus caras eran la descripción de la lujuria, las venas de su cuello se hinchaban al gritar y sentir los orgasmos animales que la dejaban ida. Por 1º vez desde que empezamos la derroté, la dejé rota y vencida en el sprint final al correrme, se mostró débil y frágil, pero de un modo dulce y sensual, que me certificó que amaba a esa mujer por encima de todas y de todo, con sus brazos sin fuerza moviéndose al son de esas últimas acometidas, conmigo chupándole un pezón guiado por su mano en mi nuca, mientras mi polla daba los cabezazos finales soltando esperma dentro de ella. Permanecimos así, unos minutos, con ella vencida sobre mi pecho y yo sujetándola en el aire a pulso por que ella no podía ni sujetarse.

-ALICIA: ¡bestia!……….eres una bestia………me…..me has hecho pedazos……he sentido que moría………que moría y que no estaba aquí……sentía tu cuerpo, tu calor, y tu miembro dentro de mi, haciéndome delirar….pero me elevaba sobre nosotros,…por un instante me ha dado todo igual, solo deseaba perderme entre tus brazos, ser uno solo.

-YO: me vuelves loco Alicia, y si no…….. si no me pongo freno puedo hacerte daño.

-ALICIA: ha sido maravilloso……..no seas tan duro contigo…….estoy bien, como nunca en toda mi vida …..- sus manos cogieron algo de firmeza al acariciar mi rostro, y sonreír con aquellas arrugas perfectas - …… por favor, llévame a la cama, no tengo fuerzas.

Así lo hice, con cuidado, Alicia tenia un temblor constante en la zona de la ingle, se encogió en una bola haciendo que me tumbara a su lado, rodeándola con mis brazos, se sentía vulnerable y a la vez protegida, nos pasamos media hora abrazados sin decir nada, recobrando el aliento, ella se volvió pasado ese tiempo y me dio una serie de cortos besos tan dulces que parecía una chiquilla inocente, quizá lo era, pero follaba como la mejor de las diosas.

-ALICIA: no ha estado mal…..- sonreímos mientras seguíamos dándonos cortos besos.

-YO: no…….desde luego…..si ha de ser el último de mi vida, no concibo uno mejor – se puso de morritos.

-ALICIA: no digas eso, ni en broma – le tembló la voz solo de imaginárselo.

-YO: mi bella princesa……tenemos que ser realistas, pueden pasar demasiadas cosas, y aunque quiera, no tengo control sobre todo, tenemos que ser fuertes, y afrontar lo que venga.

-ALICIA: puedo afrontar todo, pero contigo a mi lado, recuerda tu promesa.

-YO: lo hago, pero tienes que prometerme tú algo………

-ALICIA: no……..no quiero saberlo – era demasiado lista para saber que teníamos que hablar de ello, pero nunca quería hacerlo.

-YO: escúchame, si nos pasara algo a alguno, tenemos que hablarlo.

-ALICIA: no, no quiero, eres mi Alpa y mi Omega, no quiero saber que será de mi sin ti.

-YO: ni yo sin ti, pero no puede pasar otra vez lo del balcón…. – me miró asustada, la cogí la muñeca donde estaba la mano tatuada, y di un beso suave –….. no se que haría sin ti, me volvería loco, o aún más loco, pero si me pasa a mi tienes que ser fuerte, ¿me oyes?, tienes que ser fuerte y seguir luchando en esta mierda de mundo, por que puedo soportarlo todo, menos que tú seas infeliz.

-ALICIA: ¿por que dices eso?, yo tampoco podría soportarlo…..– lloraba levemente –…. te amo y si te pasara algo no podría volver a ser feliz.

-YO: pues deberás serlo, por mi, por que desde que te conocí solo he pretendido hacerte feliz, y todo lo que he hecho y voy ha hacer es por ese motivo, así que debes prometer que seguirás con tu vida, pase lo que pase, que serás feliz y así honrarás mi muerte – un llanto inconsolable surgió de la nada.

-ALICIA: ¡¡¡¡¡¡NO!!!!!!!……- un hilo de saliva unía sus labios - …..no quiero vivir sin ti.

-YO: ni yo sin ti mi princesa, pero si ha de ocurrir, vive, vive por los 2 – estaba llorando, de verla sufrir por algo que probablemente no ocurriera, si todo salía bien, todo esto no seria más que un recuerdo lejano, pero y si……..

-ALICIA: por ti……..por ti……viviría mi vida y seguiría con ella….pero te tendría siempre en mi corazón………no amaré a nadie como te amo a ti, y no pasará un día sin que estés en mis pensamientos.

-YO: buena chica – sus labios sabían salados cuando la besé.

-ALICIA: ¿y tú? ¿que harías si me pasara algo?

-YO: ¿yo?........- pasé su melena por encima de su hombro con delicadeza, y alzó su mirada para que mis ojos, brillantes y serenos se clavaran en los suyos, llenos de lágrimas - ……..los mataría…….los mataría a todos.

Quedamos abrazados, y nos dormimos en un mar de sensaciones, soñé con aquel plan, con lo bien y lo mal que podía salir, con todo, de golpe me entró miedo, no por mi, si no por que todo aquello se basaba en que yo cumpliera, en que mi historia fuera real, en que todo lo que me había pasado podría quedar en el olvido, así que me levanté de madrugada, dejando a Alicia dormir, la di un beso en la frente mientras la arropaba, “que preciosa es”, y me fui con el ordenador portátil al salón sobre las 5 de la mañana.

No sabia muy bien que estaba haciendo, mis dedos se movían pero yo no daba las órdenes, cuando me quise dar cuenta eran las 11 de la mañana y el bullicio de la cuidad se colaba por el balcón del que casi caemos Alicia y yo, los sonidos de una casa despertándose en sábado, con ruidos en las habitaciones, “parece un día normal, como cualquier otro, pero no lo es”, cerré el portátil.(A partir de este punto todo se basa en recreaciones, suposiciones, entrevistas y declaraciones.)

Regresé a la habitación de Alicia, dormía, con una especie de sonrisa dibujada en sus labios, me di una larga ducha, después fui a la cocina a desayunar algo, saludando y despidiendo al resto de los del piso, y se me ocurrió al ver un bloque de post it en la encimera.

Alicia se despertó, y nada más hacerlo encontró un nota en su despertador, “Buenos días mi bella princesa”, se levantó con una sonrisa boba por el detalle, y fue al baño a despertarse echándose agua en la cara, al alzar la vista vio una 2º nota y comprendió que habría más, “Mira al frente, ¿no es lo más hermoso que has visto nunca?”, al hacerlo solo vio un espejo, y su propio reflejo en él, torneó los ojos y abrió el armario del baño para coger algo, pero lo volvió a cerrar sin hacerlo. Al correr las cortinas para darse un baño vio la 3º nota, “Me encantaría estar aquí contigo, pero ya sabes lo que me pasa cuando veo tu cuerpo bañado en agua tibia, mejor relájate sin mi.”, cumplió dándose una larga ducha de agua caliente y descubriendo que tenia agujetas de la noche anterior, al salir sonrió al ver un montoncito de ropa limpia en un taburete, al entrar no estaba allí, con una nota encima, “Siento si no pega, no tengo ni idea de moda, pero da igual lo que te pongas, eres preciosa igualmente”, suspiró nerviosa, y sonreía sin poder evitarlo, se secó con cuidado y se puso aquellas prendas, unas bragas negras a juego con un sujetador, un pantalón negro de gruesa lana que le realzaba el trasero, una camiseta interior y un suéter blanco, salió a la habitación, inquieta, expectante, vio otra nota en la puerta, “ponte las zapatillas, que vas a coger un resfriado”, se miró los pies, como solía pasar iba solo con los calcetines, salió al pasillo, y soltó una carcajada al ver un montón de notas en el suelo con flechas siguiendo el camino hasta la cocina, en la nevera había una nota, “No desayunes”, dudó un instante, pero abrió la nevera y fue a coger la botella del agua, y allí había otra nota, “Vale, un poco de agua nunca viene mal, pero cuando puedas, sal a la terraza”, impresionada por como la conocía, dio un trago largo, y fue a la puerta de la terraza, allí había una última nota, “Espero que te haya gustado, medio árbol dio su vida por esto. Ah, coge tu cazadora, fuera hace fresco”, con una flecha apuntando a la izquierda donde estaba su cazadora. Al salir vio como Raúl estaba de pie, cuadrado detrás de una mesa y unas sillas, con su altura imponente y sus profundos ojos azabache, sin pretenderlo marcaba su torso y brazos bajo la camiseta, su pelo negro con una barba cuidada de 3 días, pero podría ser un ogro deforme, estaba enamorada de aquella persona. Raúl estaba debajo de una sombrilla y con un desayuno completo ya preparado, se acercó emocionada y vio como Raúl galantemente apartaba la silla para ayudarla a sentarse, cuando vio el desayuno ante ella, con todo lo que le gustaba, no supo por donde empezar, cogió una flor fresca que adornaba la mesa y la inspiró profundamente oliendo su característico aroma, cerrando los ojos y sintiendo como si paseara por un parque lleno de rosas, al abrir los ojos Raúl se había sentado delante de ella.

-ALICIA: normalmente se abusa de decir ciertas palabras, pero tengo que decir que eres el hombre más increíble que he conocido jamás – se abrigó por que una brisa helada dominaba la terraza, no se creía que Raúl estuviera con solo un pantalón largo y una camiseta de manga larga remangada hasta los codos.

-YO: solo son unas notas y un poco de imaginación – me sentí orgulloso de ver como había recogido todas y cada una de las notas y las llevaba en orden en la mano.

-ALICIA: nadie hace esto, y cuando digo nadie, es nadie, esto solo pasa en películas o series, ¿como se te ocurren estás cosas?

-YO: por que tú me inspiras.

-ALICIA: yo solo soy una chica normal, ¿como puedo ser tu musa?

-YO: no lo sé, y creo que ese es el motivo por el que te quiero tanto.

-ALICIA: estás loco, definitivamente.

-YO: sin duda, pero te quiero tanto que me he ahorrado la nota en el inodoro con un “Buenas deposiciones”….. – al enseñársela escrita en mi mano sus carcajadas la hicieron recostarse sobre el respaldo de la silla tapándose la boca con ambas manos, las mangas de la cazadora le cubrían casi hasta los dedos –….. anda, come que se va a enfriar.

Alicia atacó todo a la vez, tenia una cucharada de fresas con nata en la mano mientras bebía zumo de naranja recién exprimido, colado y con una sola cucharilla de azúcar, con un mordisco de tostada con mermelada de melocotón en la boca, me quedé perplejo mirándola, “Quizá la amo por que come como una modelo que ha dejado de serlo”, de vez en cuando Alicia dejaba de engullir para mirarme y sonreír avergonzada, pero en menos de 10 minutos no quedó nada en la mesa, nada salvo la rosa, que cogió de nuevo y la olisqueó unos minutos, limpiándose con unas servilletas como la dama educada que es.

-ALICIA: es fresca, has tenido que ir a cómprala antes de que me despertara.

-YO: así es.

-ALICIA: ¿a que hora te has levantado para preparar todo esto?

-YO: en realidad creo que no dormí demasiado, a las 5 me levanté.

-ALICIA: pobre bestia mía – se puso en pie y acudió a sentarse de lado en mi regazo, me besó con dulzura, sabia a nata, a fresas y el zumo de naranja volvía sus labios deliciosamente pegajosos.

-YO: creo que ha merecido la pena.

-ALICIA: desde luego…. – pasó la rosa desde mi frente hasta el mentón -…. ¿por que te has levantado tan pronto? – me costó responder, tenia su culo encima de mi verga, y sus brazos apoyados en mis hombros, con la rosa en sus dedos y su cabello cayendo sobre mi rostro, con su maldita adorable nariz rozando la mía, sin pensar mi manos rodearon su cintura con cariño.

-YO: tenia que trabajar en algo – busqué en mi bolsillo y le di un pen drive.

-ALICIA: ¿que es esto?

-YO: nada, es solo una idea, prométeme que no mirarás que tiene dentro, solo puedes mirar si me pasa algo – puso sus morritos otra vez.

-ALICIA: lo juro, pero por dios, haz que no tenga que mirar nunca lo que contiene esto – se venció sobre mi pecho besándome con pasión, sentía su lengua dominando a la mía y una de sus manos acariciar desde mi pecho, subiendo por mi cuello, hasta mezclar sus dedos en el cabello de mi nuca.

-YO: te amo, Alicia, y pase lo que pase hoy quiero que lo sepas.

-ALICIA: no tengo la menor duda, solo espero que sepas que yo te amo de igual forma – un abrazo largo y sentido duró unos 10 minutos, casi la parto en dos con mis brazos, no quería separarme de ella, quise cancelarlo todo, mandarlo a la mierda y fugarme con mi prometida, hasta que entendí que estabamos en la terraza por que Eleonor tenia micros por toda la casa, incluso cámaras de vídeo, que no descansaría ni cejaría en su empeño, “tengo que acabar con ella”.

-YO: bien, después de comer queda con Eleonor, que te lleve tu hermana para no dejar el coche allí, si hay suerte habrá visto lo de la terraza con alguna cámara, dila que ya tenemos fecha de boda, o lo que sea, valdrá como excusa para que paséis la tarde entera en su casa, quedar solas, que la sirvienta y Yasmine no estén – “pobrecilla, tan inocente y tan vital para lo que iba a pasar, Zeus fue muy cruel con ella” - pero asegúrate que Eleonor no salga, incluso quédate a cenar y vete lo más tarde posible, pero si no aparecemos, vete, vete y no vuelvas la vista atrás, no me busques ni hagas ninguna tontería, vete al ático, llévate a Mara y a tu familia si hace falta, es un piso de lujo con puertas reforzadas, no se atreverán a ir a por vosotras allí, llamar a la policía, al número que te di, cuéntales todo, y habla con el padre de Teo, quizá nos ayude, Teo tiene un CD mío, pídeselo, contiene pruebas contra Eleonor.

-ALICIA: ¿y tú?

-YO: si no he aparecido mañana es que no lo haré, podría estar incomunicado o muerto, da igual, el plan no ha funcionado, y yo estoy perdido, NO ME BUSQUES, y menos tú sola, si no es con el ejercito detrás de ti ni se te ocurra hacer nada, si puedo me escabulliré y me pondré en contacto con vosotros, pero manténte segura en todo momento.

-ALICIA: pero funcionará, ¿no?

-YO: eso espero amor mío, eso espero – pegamos nuestras frentes.

-ALICIA: ¿y si aparecéis?

-YO: es que han mordido el anzuelo, mientras eso ocurra podemos manejar la situación, intentaré entrar yo solo 1º, montaremos el número como teníamos pensado, si no, entraremos todos, tú asústate…..

-ALICIA: eso será fácil…..- me dio un corto beso.

-YO: tienes que actuar bien, asústate, no sabes lo que ocurre, pero recuerda lo que se supone que debe ocurrir, sígueme el rollo, y no hables más de la cuenta.

-ALICIA: lo sé bien.

-YO: si tenemos suerte, mañana todo será una pesadilla en el pasado, y podremos llevar la vida que quiero junto a ti.

-ALICIA: no deseo otra cosa.

Uno tras otro los besos fueron apagándose uno con otro, mis manos se metieron por dentro de su blusa acariciando la piel de su vientre y su cintura, antes de que la cosa fuera a más se fue a vestir de nuevo, ”no se de nada de moda”, mientras yo recogía todo, me vestí y al verla para salir sentí un pánico aterrador, me cogió de la mano y casi me arrastró al salir del piso, caminamos hasta el ático donde pasamos la mañana charlando y gastando bromas, en distintos momentos fui “despidiéndome” de mi hermana, mi padre y mi madre, hasta de Dany y su hijo, no se lo dije para no hacerlos sufrir, pero entendieron que era un momento importante, podría describir las conversaciones, pero son demasiado personales, solo os diré que cuando salí de aquel piso con Alicia de la mano, mi madre se despidió de mi con un “hasta luego”, con el mayor pavor en sus ojos desde el día de mi operación, sus habilidades la hicieron saber que pasaba algo, algo gordo, pero no el qué. Acompañé a mi prometida hasta una cafetería donde la esperaba su hermana, para iniciar todo, por unos instantes me aparté con Mara.

-YO: oye, necesito que……- me puso su dedo índice en mis labios, me temblaba la voz y no sabía ni que iba a decirla.

-MARA: tranquilo, lo sé.

-YO: cuídala bien por mí, ¿vale? – me abrazó y la rodeé con los brazos con fuerza.

-MARA: yo me ocuparé de ella, no te preocupes, preocúpate por ti.

Nos separamos pasados unos minutos en que no me atrevía a soltarla, por que tenia miedo, miedo a despedirme de Alicia sabiendo que, por mínima que fuera, había una posibilidad de no volver a verla, la vi allí, de pie, con unos vaqueros negros ajustados, una camiseta blanca y la cazadora marrón por encima, en zapatillas y con coleta, tan simple y tan preciosa, cuando se acercó a mi nos cogimos de las manos y Alicia comenzó a llorar, fuerte y segura en su rostro pero caían sus lagrimas.

-YO: no llores mi princesa.

-ALICIA: no quiero hacerlo, pero no puedo evitarlo.

-YO: no dejes que esta sea la última cara que vea de ti, regálame tu sonrisa – giró la cara a un lado con desdén, y me miró sonriendo con su preciosa sonrisa, pero sin arrugas.

-ALICIA: ¿te vale?

-YO: no, esa no es la sonrisa que quiero.

Me separé bruscamente, cogí una silla de la cafetería y la subí encima de ella, arrodillándome a sus pies con su mano cogida.

-ALICIA: ¡¡¿que haces?!!

-YO: ¿no es verdad ángel de amor, que en esta apartada cafetería, más pura la bombilla brilla, y se respira peor? – una carcajada general la hizo ponerse roja y su dulce sonrisa, con sus bellas arrugas, apareció, me puse en pie y la abracé aún subida a la silla, alzando la cabeza para mirarla.

-ALICIA: ¿es que ni hoy vas a dejar de hacer el tonto?

-YO: ¿por ver esa sonrisa?, nunca, por esa si que merece la pena morir – le tembló la barbilla a punto de echarse a llorar, acariciaba mi pelo.

-ALICIA: vuelve a mi, haz lo que sea necesario, ¿me oyes?, derriba a quien tengas que derribar y tarda lo que tengas que tardar, pero regresa a mi.

-YO: lo juro – la bajé de la silla cogiéndola de la cintura y la dejé descender sorbe mi, hasta llegar a besarnos con ternura.

-ALICIA: adiós amor mío.

-YO: nunca digas adiós, di hasta mañana, adiós es tan…….definitivo…..hasta mañana es…….esperanzador - la solté y me fui, llorando como un crío, manteniéndome fuerte aparentemente.

Alicia debió de ver como me iba por la puerta y caminaba por la calle hasta perderme, se debió de girar a abrazar a su hermana y se sobresaltó al oír un portazo de la puerta de la cafetería, se dio la vuelta y me vio mirándola.

-ALICIA: ¿Raúl?

-YO: ¡¡¡que coño, ya que puede ser el último beso!!!! - me abalancé sobre ella, reía avergonzada cuando la subí a horcajadas sobre mi y la tumbé en una mesa metiéndola la lengua hasta la campanilla, tirando lo que había encima de la mesa, con mi mamo en su trasero agarrándolo como si fuera mi salvavidas en un naufragio, ella me rodeó con las piernas y cerró los ojos saboreando aquel bocado de pasión, devolviéndome las gestos de mis labios con los suyos, me pasé al menos 2 minutos ahogándome en sus brazos, hasta que paulatinamente los besos fueron decreciendo y al final rozó su nariz con la mía, me miraba atónita y feliz.

-ALICIA: esto si es un buen beso jajajaja – no se creía que hubiera regresado a por ella.

-YO: un muy buen beso…………te amo – la ayudé a ponerse en pie, Mara estaba de pie roja de vergüenza al ver como todos nos miraban.

-ALICIA: yo te amo más – la acaricié la mejilla antes de irme.

-YO: eso es imposible.

Ahora si me fui, y agradecí mi osadía de regresar, el sabor de esa 2º despedida era mil veces mejor que el de la 1º.

Raúl – Comienza el espectáculo.

Empezó la fase final de mi plan, el 1º paso fue ir al local latino del par de camellos colombianos con los que había trabajado y hecho amistad, además me habían logrado la cocaína necesaria, al verme se mostraron muy felices.

-YO: hola chicos, ¿como estáis?

-CAMELLO1: bien, tío……se te echaba de menos, eres nuestro mejor cliente.

-CAMELLO2: claro que si bro, nadie más compra paquetes de 1 kilo de coca cada vez, ¿quieres más? En breve vamos a tener una nueva remesa.

-YO: no gracias, pero si necesito un favor.

-CAMELLO1: lo que sea, dinos.

-YO: veréis, necesito contactar con vuestro jefe – se pusieron serios.

-CAMELLO2: no, tío, eso seria horrible, desde que preguntaste lo que no debías……….no es buena idea.

-YO: lo sé, pero tengo que hablar con el que manda.

-CAMELLO1: está bien, pero es bajo tu responsabilidad, nosotros no sabemos nada, ¿oíste?

-YO: solo necesito donde encontrarle, del resto no os preocupéis.

Con algo de ayuda, dinero, sobretodo la cantidad desmesura de coca que les había comprado, y dejar que jugaran con Alexis en su día, me dijeron donde encontrar al tío que me tuvo 2 días recibiendo palos en una silla por precipitarme al preguntar por Eleonor, estaba en un viejo almacén a las afueras, entré convencido, con las manos en alto y despacio, a los 2 minutos 3 tíos armados salieron a mi encuentro, logré convencerles de que no me dispararan y que me presentaba para comprar mucha cocaína, así que me llevaron ante su líder después de cachearme, que al verme me reconoció a la 1º, un hombre colombiano de unos 40 años, bajito y orondo, pero que inspiraba miedo, Juan podemos llamarle, “Empieza el show”, pensé, respirando profundamente.

-JUAN: hombre….miren quien se presentó……..- estaba sentado en una mesa, con montones de billetes siendo contados por 3 mujeres desnudas, un par de kilos de cocaína en unos maletines y con más de 10 hombres alrededor, algunos con escopetas y ametralladoras.

-YO: hola……..siento la intrusión.

-JUAN: no, no lo sientes, aún no, pero eso se puede arreglar, te dije que no quería volver a verte, ya te libraste una vez, ¡¿y tienes los cojones de venir aquí?!, estás muerto chico.

-YO: no vengo a morir, vengo a que me paguéis un dineral – se puso serio.

-JUAN: ¿y por que demonios iba a pagarte nada?

-YO: información, muy buena, pero solo a cambio de mucha pasta.

-JUAN: puedo hacer que mis amigos te saquen todo lo que sepas a golpes, o quizá cortándote una pierna, o las 2, ¿por que iba a pagar?

-YO: por que la información tiene fecha de caducidad, pasado un plazo de 3 horas, la información no tendrá valor por que ya seria tarde y os habrían robado ….– un farol como un castillo –…. la última vez os pasasteis 2 días dándome de palos, puedo durar 3 horas.

-JUAN: ¿y si te pego un tiro aquí mismo?

-YO: perderías la información igual – la serenidad de mi voz no era mucha más que la que sentía en general, pero lo suficiente como para cambiarle el gesto de la cara.

-JUAN: ¿y que puedes saber tú que valga jugarte la vida?

-YO: nada que te importe, solo se la diré a tu jefe – la tensión se palpaba, nadie le hablaba así.

-JUAN: yo soy el jefe, aquí mando yo.

-YO: aquí, pero según tengo entendido tu jefe, el de Colombia, está de visita…..- a Juan se le abrieron los ojos como platos.

-JUAN: ¡¡¡¿como coño sabes tú eso?!!!!

-YO: por lo mismo que se que os están robando, pero solo se lo diré a él, en persona, y por una cuantiosa suma de dinero.

-JUAN: es imposible, dímelo a mí y ya veremos.

-YO: tú mismo, quizá él descubra que os han estado robando bajo tus narices y no te has enterado de nada, lo mismo ya sabe de mi aquí y que no hiciste nada pese a que te dije que os robaban…………o puedes presentarme ante él y quedar como el héroe, quizá una jugosa recompensa por tus leales servicios, y solo por dejarme hablar con él unos minutos, ¿que puedes perder?

-JUAN: tú dímelo, y ya se lo diré yo.

-YO: tiene que ser ante él.

-JUAN: eso diría un chivato…….. ¿por que ante él? – cogió una pistola de la mesa.

-YO: verá, en el robo hay altas esferas de su….organización, y no estoy tan loco como para decir lo que sé y que alguno que esté involucrado me pegué un “tiro accidental” antes de que le llegue a los oídos del jefe, en cambio, si es delante suya, nadie moverá un dedo y estaré a salvo.

-JUAN: aquí todos son de fiar, habla o muere – aguanté la mirada unos segundos, “dios, protégeme”.

-YO: eso diría un chivato……..- se puso en pie y me apuntó con el arma, con las fosas nasales abriéndose de furia, le temblaba la mano.

-JUAN: ¡¡¡osas acusarme!!!

-YO: no, sin duda un hombre leal como usted, al saber de esta información, debe comunicársela a su jefe, si no, corre el riesgo de que algún otro…. – señalé alrededor a sus hombres expectantes –…. quiera ganarse favores hablando de aquel chico que mataste con información de que os estaban robando, seguro que a tu jefe le encantaría preguntarte en persona por que lo hiciste – “que cuele, por dios, que cuele”, casi rezaba mirando el cañón del arma, y no al hombre que la sujetaba detrás, que miró a su alrededor, a sus hombres.

-JUAN: si te llevo ante él, y no tienes nada, a mi me quitará mi puesto, si no me corta una mano, pero a ti te matará, lo sabes, ¿no? – “a colado, no tenia opción, si me mata se auto inculparía”.

-YO: me apetece más ganar dinero y vivir para gastarlo, que morir.

A un gesto bajó el arma y 3 tipos me cachearon otra vez, me desnudaron y me pasaron varios detectores, rompieron mi móvil desechable, no llevaba nada, limpio como estaba, me vestí y me metieron en una habitación oscura un par de horas, pensaba que tanto podían estar montando la reunión, que decidiendo donde enterrarme, pero si algo sabia era que la codicia es útil, no solo Juan deseando lucirse ante su jefe, si no que me había dado un motivo para estar allí, no tenia esperanzas de llevarme un solo €, pero me daba una excusa creíble para jugarme la vida. Pasado ese tiempo 2 hombres entraron y me pusieron una capucha, por lo que entendí me metieron en la parte de atrás de una furgoneta y dimos vueltas un buen rato, hasta que terminé saliendo en mitad de la Gran vía de Madrid, uno de los hombres me cogió del brazo y me arrastró hasta una cafetería, me sentó en la terraza en una mesa vacía, y se cuadró a mi lado, a los pocos minutos un coche de lujo aparcó enfrente y de él bajaron 3 moles y un tipo, de unos 50 años, viejo y achaparrado, con un traje azul marino y un sombrero elegante, caminó hasta la terraza, y se sentó a mi mesa, con las moles distribuyéndose de forma militar, el hombre se quitó el sombrero con cuidado y lo dejó sobre la mesa, una camarera se acercó y le pidió un café, solo y doble, me señaló por si quería algo, dije que no, y la chica se fue tan alegre, tan inconsciente de lo que ocurría.

El hombre se pasó 3 minutos mirándome, tratando de leer mi alma, tenía los ojos negros y una mirada penetrante, y asustaba, mucho, la parsimonia con que se movía, se le notaban arrugas de su edad, con manchas del sol en sus mejillas y un cansancio constante en su expresión corporal, por motivos obvios su nombre es confidencial, Bill valdrá.

-BILL: está bien………me han dicho que tienes algo para mí, chico.

-YO: tengo algo para el jefe.

-BILL: le tienes delante.

-YO: ¿como se que no es una farsa?

-BILL: no lo sabes, y como sigas perdiendo el tiempo te ahogo en el riachuelo ese que llamáis manzanares.

-YO: compréndame, se algo muy importante sobre dinero y drogas que han estado robando a su cártel, con gente peligrosa de por medio – la camarera regresó y le puso su café, dio un sorbo y se asqueó.

-BILL: mira chico, no te he traído aquí por el café, vaya basura……..es un sitio público y tranquilo donde podemos hablar sin miedo a que pase nada, nadie te tocará un pelo si estás conmigo, pero no me faltes al respeto, habla o te hago callar para siempre.

-YO: como quiera……¿conoce usted a una señora llamada Eleonor? – se puso rígido, incluso debajo de la fachada de serenidad que quiso trasmitir.

-BILL: ya me han dicho que has preguntado por ella un par de veces, pero hay cosas que es mejor que no sepas, por tu bien.

-YO: para mi desgracia eso ya pasó, ahora solo trato de encontrar una salida.

-BILL: ¿y cual es?

-YO: necesito su ayuda para quitarme de encima a Eleonor – dio otro sorbo al café.

-BILL: ¿así que eres tú?……..ese joven por el que pierde la cabeza y por el que hace tonterías.

-YO: el mismo.

-BILL: podría entregarte a ella, y asegurarme su fidelidad.

-YO: no creo que su fidelidad esté en duda, no con Liliana en su poder y con su hija bien vigilada – abrió los ojos.

-BILL: sabes demasiadas cosas…….

-YO: para usted soy una hormiga, soy consciente, pero se moverme, no soy estúpido y ato cabos, esa mujer lleva casi 3 años amargándome la vida, estoy harto y alguien tiene que pararle los pies.

-BILL: ¿y por que iba a hacer tal cosa?, esa mujer me ha convertido en un hombre muy rico.

-YO: quizá por que si sigue por ese camino, tarde o temprano meterá la pata, y perderá su valor para usted, o cante al oído de las autoridades si se ve en peligro.

-BILL: sabe lo que pasará si lo hace.

-YO: ¿usted la ha visto? Podría tener al hombre que quisiera y está embobada con un chico que podría ser su hijo, no está mentalmente sana.

-BILL: aún así, tengo todo bien atado para que no me salpique, no tengo por que ayudarte, y me has engañado para hacerme perder el tiempo, no hay ningún robo, y esto te va a costar caro.

-YO: no le he mentido, cierto es que mis intenciones eran hablar con usted, pero si que le están robando.

-BILL: ¿quien?

-YO: Eleonor, por supuesto.

-BILL: eso es absurdo, esa mujer casi tiene más dinero que yo.

-YO: tiene empresas, dinero ficticio y todo muy vigilado, entre su ex y sus socios, no puede permitirse que sepan que se gasta 1 millón de € en contratar a una puta que me tienda un trampa, o en pagar más de 5 millones en pleitos con abogados contra mi, eso dañaría su imagen, en cambio, dinero negro que pasa por sus manos, ¿se imagina usted de donde podría sacar algo así?, eso si puede manejarlo, da pequeños bocados para que no se note mucho, un poco de dinero por aquí, algún kilo de coca por allí, y con ello financia su pequeña venganza contra mi.

-BILL: es imposible, me hubiera dado cuenta de que falta dinero.

-YO: no si falsifica las cuentas, sí usa dinero de sus empresas para cubrir lo que se lleva, a nadie le importará que transportar mercancía en un barco cueste 20 millones si los beneficios son de 300, he echado cuentas y si en vez de declarar 300, declara 295 y esos 5 se los cambia por lo que se lleva…..

-BILL: es una buena teoría, solo eso, pero aunque fuera cierta, no me roba, termina dándome mi dinero.

-YO: no creo que a alguien como usted ese hecho no le parezca un agravio, pero eso no es lo peor, se queda cocaína, que luego revende a sus amigos ricos, y como usted no sabe nada, no se lleva un solo € de todo ese negocio de su propia cocaína.

  • BILL: no hay pruebas de nada de eso – lo de la cocaína le había enfadado, se le notaba.

-YO: sabe que no solo sus hombres protegen a Eleonor, se ha cuidado mucho de tener siempre a alguien cerca que no fuera de su círculo, ¿por que cree que haría eso, si no es para actuar a sus espaldas?

  • BILL: eso es solo una corazonada…..necesito algo más.

-YO: no tengo acceso a las cuentas ni al dinero, obviamente, ¿costaría mucho descubrirlo?, no lo sé, en cambio se donde tiene la cocaína que se guarda para sacar dinero – otro sorbo de café, del asco que sintió en el paladar, lo apartó.

  • BILL: ¿como pueden llamar a esto café?.......... - me escudriñaba con su mirada, yo esperaba que, si no me creía, al menos hubiera creado una duda razonable, con eso me valía -…….. está bien, 1 oportunidad, llévame a la droga y no solo salvas el pellejo, si no que te quitaré a Eleonor de encima, para siempre, y te pagaré lo suficiente como para tenerte con la boca cerrada, pero ten en cuenta que si me jodes, de cualquier forma, te mato, a ti y a toda tu familia.

-YO: le llevaré a la droga, después usted decide - chasqueó los dedos y una mole me cogió del hombro, Luis dejó un billete de 20€ en la mesa por un café de 2€ que casi le hace vomitar, me subí en su coche, en la parte de atrás con él.

  • BILL: bien…..¿a dónde vamos?

-YO: a la casa de Eleonor, claro, en la urbanización de lujo.

El camino fue raro de cojones, Bill hablaba con naturalidad y me hacia charlar con él, como si fuéramos amigos, queriendo saber lo que me había hecho pasar Eleonor, soltó un bufido de tristeza al oír como Lara se suicidó, parecía realmente apenado, aquella conversación me certificó que Bill, ni Juan, tenían trato directo con Eleonor, no sabían de mi más que lo justo y necesario, eso era un punto a mi favor, desconocían que no tenían a un crío desesperado delante, si no a un hombre con un plan, debía de contener mi sonrisa por que hasta ese momento todo había ido rodado, pero si llegaban a descubrirme, me cortarían la cabeza sin parpadear. Fue extraño, como si el gorila de delante no me estuviera apuntando con una pistola disimuladamente durante todo el trayecto, el propio pistolero llamó por teléfono al llegar a la entrada del residencial de lujo, supuse que a alguno de los gorilas que tenia Eleonor de escolta, para que nos abrieran, y al aparcar fuera se hizo un corto silencio.

-YO: debería entrar antes yo solo.

  • BILL: chico, me has caído bien, los hay que tener muy grandes para jugarte la vida así, seria una pena tener que cortarte en rodajas.

-YO: ella aun no sabe que esta usted aquí, ¿verdad?

  • BILL: no.

-YO: solo pretendo soltarla la lengua, que se sienta segura y hacer que esto pase sin daños colaterales, puede haber alguien del servicio, o alguna amiga, y no quiero que se asusten ni se conviertan en testigos no deseados que le vean – fue lo más sensato que se me ocurrió.

  • BILL: mis chicos se ocuparán de eso……

-YO: no lo dudo, pero mejor que no se tengan que ensuciar las manos, hay demasiadas cámaras y gente muy poderosa por esta zona, 10 minutos, se lo ruego.

  • BILL: tienes 5, y entraré, como no aparezca la cocaína, darán igual las cámaras y los ricachones, no saldrás de esa casa con vida.

-YO: me parece justo, concédame cierto margen ahí dentro, pero si la encontramos, me quita a Eleonor de encima, me da mi dinero y me deja en paz para siempre – extendí mi mano como señal de cerrar el trato.

  • BILL: así sea….– me estrechó la mano con fuerza, miró su reloj – ….5 minutos.

Salí disparado para no perder ni uno solo de esos valiosos segundos, me puse en la puerta, aguanté la respiración unos instantes antes de llamar, la casa era enorme y tuve que insistir para que los de dentro se apresuraran, fue cuando lo escuché, el golpe tras golpe en el suelo de unos tacones, con un ritmo que me era familiar, y unas risas de fondo, puse mi mejor sonrisa de vendedor, y al abrir la puerta vi a Eleonor sonriendo sin reconocerme de inicio, iba espectacular, para que negarlo, con un vestido elegante, como siempre, negro azulado y ceñido, realzando sus curvas sensuales, y un amplio escote en forma de U, mostrando el inicio de las copas de su sujetador, la falda tan apretada sobre sus piernas que no podría dar pasos largos, por la rodilla subía un obertura en una de sus piernas pero no es que le diera mucha amplitud, su rostro era agradable, y la espesa melena negra bien cuidada le daba un aspecto muy atractivo, con maquillaje corrector más que embellecedor. Al verme se le borró la sonrisa de golpe, se le abrieron sus bellos ojos y casi tropieza al dar un paso atrás.

-ELEONOR: ¡¡tú!! – intentó cerrar la puerta pero mi pie se lo impidió, al 2º intento de cerrarla, di un empujón que la hizo caer redonda al suelo, soltando un grito de pánico.

-YO: ¡yo, si!

-ELEONOR: ¡¡¡ES ÉL!!! ¡¡¡¡¡TORO, RÁPIDO, ES ÉL, PÁRALO!!!!! – gritaba tratando de levantarse, pero el vestido se lo impedía, quedó con el culo ofrecido, si hubiera sido Zeus la habría desgarrado el vestido y ya la estaría partiendo en 2, pero yo la dejé gatear hasta una puerta, alzó la mirada mirando a las moles que se asomaron – ¡¡¡¡¡¡¡¿Y USTEDES QUE MIRAN?, PÁRENLO!!!!!!!

-YO: ven aquí maldita zorra…..- la sujeté de la cintura, y la di la vuelta, poniéndola en pie, su rostro era el del miedo más absoluto, y cuando la agarré del cuello levantándola medio palmo del suelo tosía y lloraba a la vez, mirando de reojo a sus moles que no lograban apartarla de mi.

-ELEONOR: …cof…por favor…cof……cof ….no……cof…- susurraba con el hilo de aire que dejaba pasar en su garganta, de golpe un tren de mercancías me arrolló, caímos todos al suelo, y una sombra me inmovilizó, aunque me resistía era inútil, las moles saltaron a la vez, eran 3 contra 1, me reía a carcajadas de ver a Eleonor de rodillas tragando aire desesperada entre ruidos chirriantes que le salían por la boca.

-YO: ¡¡¡¡maldita loca, juro que te abriré en canal y te ahorcaré con tus entrañas!!!! – “tengo que parecer desesperado”.

-MOLE1: cierra la boca – me dio un puñetazo que me dejó entumecida la parte derecha del rostro.

-ELEONOR: ¡¡¡NO!!!......... quietos…… ya no puede hacerme daño… – se puso en pie con la ayuda de la 2º mole, sujetándose el cuello y colocándose el vestido –… ponedlo en pie – así lo hicieron, la mole que aun me sujetaba y un 3º tipo al que no había visto hasta ahora.

-YO: ¿quien es este payaso? – Eleonor sonrió.

-ELEONOR: es Toro, una versión mejorada y más joven de Carlos.

Era su sustituto, pero mientras que Carlos destilaba un serenidad inquiétente con la mirada, aquel tipo solo era una maquina de músculos, español, de unos 30 años, cabeza rapada casi al 0, le miraba desde arriba, mediría menos de 1,80 y aun así era incapaz de sacármelo de encima, me doblaba en volumen y no es que le sobrara peso.

-TORO: deja de moverte o te parto el brazo chaval – me lo retorció hasta que algo crujió levemente, allí cedí.

-ELEONOR: esperad aquí…. – se fue y a los 2 minutos apareció –…. que pase, sentarlo en el sillón – me arrastraron entre 2 mientras Eleonor se volvía a poner tan preciosa como antes retocándose el maquillaje, la había hecho llorar y se le había corrido el rímel, pero al sentarse delante mía no puede evitar ver su innata elegancia al cruzarse de piernas, y su belleza sudamericana, casi me olvido de la perra insensible y desquiciada que era.

-YO: por más perros que contrates no te librarás de mi ira.

-ELEONOR: ¿que haces aquí?, llevo casi 2 años buscándote como una loca y ahora apareces en mi casa como si nada, ¿por qué?

-YO: me he hartado de jugar, quiero recuperar mi vida.

-ELEONOR: no entiendo esa decisión, no tienes nada para regresar, has abandonado a tu familia y amigos para que no te encontrara.

-YO: ¿y si pretendo dejar esta vida? ¿Volver a ser una persona normal?

-ELEONOR: ¿por qué?, ¿acaso tienes algo por lo que merezca la pena volver? – “ha picado”.

-YO: nada que te incumba, puesto que no te puedo matar, por ahora bastará como advertencia, pero no me pongas a prueba, tarde o temprano estos memos bajarán la guardia y por fin me tendrás entre tus brazos, pero será estrangulándote con mis propias manos – la tranquilidad perversa de mi tono de voz la hizo erizarse su piel tostada, pero mantuvo la pose incorruptible.

-ELEONOR: yo también estoy cansada Raúl, cansada de estos juegos, de intentar hacer que me ames……desde que volviste con mi hija aquella tarde y me devolviste la ilusión de vivir, desde que me tomaste por 1º vez y me quitaste a mi ex marido d encima, nadie había cuidado así de mi, os acogí cuando no teníais donde ir con la esperanza de que con el tiempo me llegaras a amar como yo te quería, pero nunca me viste de esa forma.

-YO: prueba con una cena y un paseo por el parque, ¡¡¡¡no con un puta del sado tendiéndome una trampa para denunciarme o hacer que violen a Lara hasta volverla loca y que se suicidara!!!!!

-ELEONOR: ya lo hice, lo intenté, fui buena, dulce y cariñosa, te acogí en mi casa, a ti y a Ana, quise hacerte feliz, y que me poseyeras tanto como desearas, pero no atendiste a razones, seguías enamorado de esa gitana estúpida que no te merecía, yo solo te lo mostré, te ofrecí el mundo, y pese a ello, me diste la espalda.

-YO: lo sé….. y por ello, te pido perdón – su cara se retorció, de todo lo que esperaba oírme decir, eso fue lo último que esperaba escuchar.

-ELEONOR: ¿co…..como?

-YO: si, ahora lo veo, era joven, entusiasta y demasiado abierto, no entendía lo que pasaba Eleonor, yo solo quería vivir alocadamente, disfrutar de la vida, follárme a todo lo que tenia delante, y te hice daño, no lo sabia, fui minando tu personalidad y te has convertido en esto, pero es culpa mía – una lagrima caía por su mejilla.

-ELEONOR: ya es tarde para falsas disculpas Raúl, demasiado tarde……..lo que siento no olvida con un “perdón”.

-YO: soy consciente, no me disculpo para que tú te sientas mejor, si no por que creo que las mereces, las cosas no van a cambiar, ya lo sé, pero al menos quiero que lo sepas – me miró atónita, descolocada, sin saber que responder, incluso vi en sus ojos duda, o algo similar, pero se le pasaron de golpe.

-ELEONOR: has cambiado, realmente has cambiado Raúl, has cambiado de forma que solo una mujer puede hacer cambiar a un hombre……..no te habrás vuelto a enamorar, ¿verdad? – su tono burlón era evidente, supongo que se creería un genio del engaño con su AS en la manga.

-YO: pues si……así es……amo a una mujer maravillosa a la que tú, con todos tus millones y tus pechos operados, le llegas a la altura de los pies – quise parecer incisivo en mi comentario, Eleonor solo sonrió feliz.

-ELEONOR: sabes…..tenia pensado guardar esto para más adelante, para cuando fuera mejor, pero puestos a que te encuentras aquí, enardecido por tu nuevo amor, creo que ha llegado la hora de hacerte ver que nadie te quiere como yo – y de un golpe con el pie hizo resonar su tacón en el suelo, a los pocos segundos Alicia apareció tras una puerta del salón.

-YO: ¡¡¡NO!!!! – grité fingiendo horror y sorpresa, “guarda esa sonrisa Alicia”, no podía borrarse del rostro una mueca extraña, entre intentar parecer serena y una risa dibujada en sus labios, supongo que de verme vivo, “ojalá no estuvieras aquí, mi bella princesa”.

-ELEONOR: si, querido…..tu nuevo amor, esa mujer tan maravillosa, ha estado de mi lado desde el principio.

-HERA: hola querido prometido mío – el tono era mejorable pero su rictus mejoró.

-YO: ¡¡¡¡no, tú no………mi amor, dime que es mentira!!!!

-HERA: ¡¡¡no lo es, ¿como podría amar a un hombre como tú?!!! ¡¡¡¡que trata así a las mujeres, que hizo que violaran a Lara por su orgullo y que casi hace que me mate!!! ¡¡¡¡¡te odio, te odio con todo mi ser y me das asco!!!! – fue cogiendo confianza y hasta gesticulaba ampliamente.

-ELEONOR: así es ….– se puso en pie y la rodeó con los brazos como si fuera su hija –…. otra pobre alma descarriada por tu culpa Raúl, por que nadie te ama, salvo yo, nadie te entiende y te comprende como lo hago yo.

-YO: no…pero yo…la amo……- caí de rodillas en la alfombra.

-ELEONOR: ya lo vi en la petición de mano de ese vídeo en Teruel jajajaja, y esta mañana con ese desayuno poniendo fecha a la boda, según me ha dicho Alicia, o en esas sesiones de sexo salvaje que tenéis que me ponen tan cachonda, las he visto y escuchado todas, enternecedor, esta pobre desdichada estaba dispuesta a casarse contigo solo para dejarte plantado allí, jajajaja una pena, ahora jamás veré tu cara al sonar la marcha nupcial y en vez de aparecer ella, apareciera yo, justo en ese momento sabrías que fui yo todo el tiempo jajajaja, estábamos planeando dónde y cuando hacerla, incluso íbamos a cenar juntas las 2 solas para recrearnos, he mandado a Luz y su hija fuera para que nos molestaran, pero ahora, contigo, será mejor.

-YO: ¡¡¡¡¡basta!!!!! ….– del tono hasta las moles se tensaron, pero había cubierto el sonido de la puerta abriéndose, los 5 minutos terminaron –…. ¡¡¡¿dime donde tienes la droga?!!!...... – “habla alto, que te oigan en toda la casa” – …..¡¡¡¡DÍMELO!!!! – Eleonor se puso blanca al oírme, y se cayó al suelo cuando vio aparecer de la nada a Bill con 5 de sus hombres, que eran 7 con las 2 moles de allí, Toro se tensó.

-ELEONOR: ¡¡¡¿a que esperas?, haz algo Toro estúpido!!! – ella miraba desbordada de pánico.

-TORO: ¿y que quiere que haga? – a un chasquido de Bill señalándole una de las moles sacó un arma y le apuntó a la cabeza, le puso de rodillas y le inmovilizó.

  • BILL: ¿acaso vas a alzar la mano contra mi, Eleonor? – se acercó a ella, la ayudó a ponerse en pie y la dio 2 besos protocolarios que no cambiaron el gesto asustado de Eleonor, la cogió de la mano y la besó en ella con dulzura, haciendo que se sentara en el sillón y él a su lado, con gesto cansado y perturbador.

-ELEONOR: no…..esto….yo solo…..no le he reconocido.

  • BILL: bien…..ha sido solo una confusión chicos, pero por si acaso no dejes de apuntar a ese “Toro” a la cabeza y si se mueve decora el salón con sus sesos, aquí os encanta colgar cabezas de toros en las paredes, ¿no? – una carcajada ahogada y forzada salió de sus hombres.

-ELEONOR: ¿que haces aquí?, creía que solo venias de visita…….

  • BILL: ¿acaso me estás echando de tu casa?

-ELEONOR: no…...no ni mucho menos, solo me ha sorprendido – “a este paso Eleonor se va a cubrir de mierda sin mi ayuda”

  • BILL: ¿por que tiemblas? aquí todos somos amigos…..¿verdad? nos llevamos bien y ganamos dinero sin necesidad de andar peleándonos unos con otros, tú transportas mi droga en los barcos mercantes y te llevas un pellizco de mi dinero antes de devolverlo en los barcos, para inflar tus ganancias, a cambio yo no mato a esa medio hermana medio puta, que tengo en mi poder y dejo a tu hija campar a sus anchas., ese era el trato, ¿verdad?

-ELEONOR: así es….y….y he cumplido, todo.

  • BILL: verás, ha llegado a mis oídos que andas haciendo cosas muy extrañas a la hora de devolver mi dinero……- Eleonor guardó silencio, no aparentó estar tan sorprendida y aterrada como de verdad lo estaba.

-ELEONOR: le doy todo su dinero, no me quedo con nada……lo juro.

  • BILL: ¿pero trapicheas para gastar mi dinero en vez del tuyo? – la pasaba los dedos por el hombro con clama.

-ELEONOR: no…..bueno….si…pero son cosas del contable……dice que así las cuentas cuadran mejor, pero no le he quitado un solo €.

  • BILL: es mi dinero, no tendrías que hacer turcos complejos, solo devolvérmelo – la agarró de la nuca con fuerza hasta hacerla sacar el pecho, magullada,

-ELEONOR: lo….lo siento……le pido mil perdones, lo cambiaré, no volveré a hacerlo – la soltó con una leve sonrisa.

  • BILL: te creo………te creo…….pero verás, cuando he entrado he escuchado aquí a este joven preguntar que donde estaba la droga, y no he podio evitar preguntarme, ¿que droga?

-ELEONOR: no lo sé…….se lo juro……es él….el chico del que le hablé.

  • BILL: ya lo se querida…. – puso su mano en la pierna de Eleonor, acariciándola como un viejo verde – ….ha venido a mi en busca de ayuda, por que al parecer eres una mujer muy traviesa, y si sigues siéndolo puedes terminar metiéndote en un lío, y si es así, estropeas mi negocio, entiendes que eso no puede pasar, ¿verdad?

-ELEONOR: así es, lo comprendo…….pero…….no se fíe de él, es un manipulador…..un falso y un mentiroso.

  • BILL: eso espero…….por que además te ha acusado de quedarte con parte de mi droga…….nada menos que para venderla a tus amigos ricos sin mi permiso, sacando dinero que me corresponde – Eleonor se puso azul, no sabia por donde empezar a hablar.

-ELEONOR: no, no, no, no, no, eso es mentira, jamas haría eso…….

-YO: ¿como jamás jugarías con su dinero? – me miró llena de rabia.

-ELEONOR: no le haga caso, es un perturbado……..dirá cualquier mentira con tal de salirse con la suya, créame.

  • BILL: pues me encuentro en un dilema, yo me marcho mañana de vuelta a Colombia, a las autoridades de aquí les encantaría pillar a un pez gordo como yo y no les daré ese gusto, así que vamos a saber que pasa, aquí y ahora.

-YO: Eleonor, si alguna vez me quisiste, díselo…….dile donde guardas la droga en casa, o nos matarán.

-ELEONOR: se lo repito, no se que de que droga me habla, aquí no hay droga, lo juro por…..- un hilo de voz la interrumpió.

-HERA: Eleonor…….por favor…….díselo……- fue como si hubiera aparecido de la nada, Bill la miró por 1º vez percatándose de su existencia, “se fuerte, aguanta mi princesa”.

  • BILL: ¡¿pero que tenemos aquí?! – se puso en pie dejado de sobar las piernas de Eleonor, y estiró las manos en dirección a Alicia, que se mostró frágil y asustada, sin mirar a la cara.

-HERA: ho….hola.

  • BILL: no tengas miendo pequeña, una muchacha tan linda como tú no debería estar aquí, pero ya que estás, no temas, yo te protejo, habla con libertad.

-HERA: no….yo……es que…….- supongo que el miedo real le ayudó a fingir el miedo falso.

  • BILL: habla, mi niña, habla o sufrirás, y no hay mayor dolor para un hombre de verdad que ver sufrir a una niña tan bonita.

-HERA: es que……..me dijo que……pero yo no sabia nada….no sabia que la vendía….. – la soltó de las manos y se alejó un par de pasos.

  • BILL: un hombre de verdad nunca pega a una dama – giró la cabeza con un fugaz gesto y una de las moles le asestó a Alicia un guantazo de revés que la hizo caer el suelo, al apartar su pelo un hilo de sangre nacía en sus labios.

-HERA: ¡¡¡¡no por dios……….no me peguen……les juro que no sabia nada!!!! – retrocedía en el suelo alejándose con miedo, se le escapó una mirada fugaz hacia mi, la única que lo vio fue Eleonor, que empezó a entender lo que de verdad ocurría.

  • BILL: habla, o te dejare tan dañada que ningún hombre te volverá a tocar – yo estaba lleno de rabia, por que esas bofetadas y golpes eran para mi, “Alicia no tendría que estar aquí, ¿como me dejé convencer?”.

-HERA: en el armario………..en el 2º piso, la habitación del fondo………….en el techo, hay, hay un falso techo……

-ELEONOR: ¡¡¡¡MALDITA ZORRA EMBUSTERA, AHÍ NO HAY NADA, NI SIQUIERA DUERME NADIE ALLI!!!! – la mole que golpeó a Alicia paró a Eleonor que se lanzaba a por mi prometida.

-BILL: quieta, si no hay nada no tienes por que ponerte así.

-ELEONOR: ¡no lo entiende!, esta zorra es su prometida, esta mintiendo para acusarme falsamente – Bill echó una ojeada a las moles que habían sido los guardaespaldas de Eleonor.

-MOLE1: señor, si, están prometidos, pero todo empezó cuando Eleonor la contrató para seducirlo, acaba de reconocer que pretendían dejarle plantado en el altar – Eleonor casi se quedó sin sangre en el cuerpo, tapándose la boca, “ahora lo entiendes, ¿verdad?”.

-MOLE2: así es señor, lleva meses infiltrada por orden de Eleonor, la ha pagado la universidad y un coche nuevo, llevan toda la tarde hablando de como planear la falsa boda.

  • BILL: así que no tiene por que mentir en su favor……

-MOLE1: no, señor.

-YO: por favor, pese a su traición, esta chica es inocente, dejadla que se vaya……- “ya has cumplido tu papel, ahora huye, huye mi vida.”

  • BILL: de aquí no se va nadie hasta que sepa que cárajo esta ocurriendo.

-YO: al menos deje que la atienda………

  • BILL: no seré yo quien separe a unos prometidos…..- ni mostró interés en por que corrí a auxiliar a Alicia, que estaba en el suelo con el dorso de la mano en la cara enrojecida, saboreando su propia sangre -…..vamos a ver ese condenado armario – se adelantaron quedando solo 2 hombres con el Toro encañonado.

-YO: ¿estás bien? – apenas era un susurro.

-ALICIA: si….tranquilo…me alegro de verte….- la puse en pie.

-YO: no tendría que haberte dejado hacer esto, esos golpes eran para mí.

-ALICIA: no seria tan convincente de tus labios que de los míos, y lo sabes.

  • BILL: venga, subir – su voz resonaba con fuerza.

Seguimos a todos y entramos en la habitación, como decía Eleonor estaba casi vacía, solo una cama con un colchón sin funda, totalmente despejada, una mole sujetaba por detrás a Eleonor, aprovechando para rozarse con su culo en la verga, mientras Bill esperaba expectante, el resto buscaba en el armario, era casi irrisorio, no entraban todos a la vez, pero al final un ruido de balda cediendo apareció, y uno tras otro fueron sacando kilos de cocaína dejándolos sobre la cama, Eleonor se puso a llorar, berreaba algo pero no se la entendía bien, cuando acabaron la cama estaba repleta de paquetes de un 1 kilo de cocaína, los contaron he hicieron el cálculo.

-MOLE2: señor, aquí hay por lo menos 5 millones en cocaína.

  • BILL: ¿es nuestra?

-MOLE 1: si, mire…. – le enseñó la esquina de uno de ellos, una marca apenas visible –… es la marca que les ponemos en Colombia al empaquetar según las fechas, esta droga es nuestra, van desde hace 2 años hasta hace 2 meses, pero es nuestra.

-ELEONOR: ¡¡¡¡¡eso no es mío, lo juro……me……me lo ha puesto él!!!!!!- Bill me miró, me había separado lo suficiente de Alicia como para no levantar sospechas.

-YO: ¿acaso estás insinuando que he comprando 5 millones de € de su cocaína y en vez de venderlo, o metérmelos, lo he ido escondiendo en tu armario? – a alguna de las moles se le escapó una carcajada leve, por que a Bill no le hizo gracia la sorna con que lo dije, pero mentir diciendo la verdad es una debilidad que tenia, bien lo sabéis, y muy fácil de creer.

-BILL: eso no tiene ningún sentido……¡¡¿de donde ha podido salir tanta droga, SI NO ME LA ESTÁS ROBANDO?!! – la moles se dispersaron al oírle gritar acusando con uno de los paquetes en la cara de Eleonor.

-ELEONOR: ¡¡¡no, por dios…..escúcheme,……es un montaje…todo…..lo tenían planeado……la droga, su prometida, usted………¿no lo ve?!!!

-BILL: menos mal que me has hecho ganar mucho dinero, estás tan loca que es un milagro que no hayas terminado en un sanatorio.

-YO: ¿lo ve?, se lo dije……

-BILL: tú cierra la boca, aquí me huele mal, voy a librarme de ella, y vas a venir conmigo a ver como la hago desaparecer.

-YO: no es necesario, yo ya……si me da el dinero cojo a la puta de mi prometida y me largo…….- me cerraron el paso entre 2.

-BILL: no, muchacho, tú te vienes conmigo, la chica también, y el toro de abajo, voy a dar un escarmiento y todos tenéis que ver lo que pasa si ese me jode.

-YO: eso déjelo para sus subordinados, seguro que todos desean ver eso, pero a mi prometida como que no…….- era a la desesperada, quería sacar al menos a Alicia de allí, pero no me iban a dejar.

-BILL: mira, no es mala idea, llamaré a todos para que lo vean, pero tú vas a ver como descuartizo a esta zorra lentamente, y a su hija, y da por muerta a la puta que tengo bajo llave, ¡¡¡¡que cárajo, que vengan todos!!!

-ELEONOR: ¡¡¡¡¡¡¡¡no,….tenga misericordia, mi hijita no……no sabe nada!!!!!! – sentí lastima, real, por ella, pero Bill no.

Nos hicieron salir discretamente a todos, y entre una furgoneta y varios coches nos llevaron de paseo por Madrid, desde la urbanización de lujo rodeando toda la cuidad hasta llegar a la estación de trenes de mercancías, donde cargaban y descargaban los contenedores industriales que llegaban de los puertos donde atracaban los barcos. En un coche de lujo, medio limusina que tenia Eleonor, íbamos Bill, 2 moles armadas, Eleonor, Alicia y yo, más el conductor, fue desgarrador escuchar a Eleonor implorar por la vida de su hija, ofreció todo, vender sus empresas, su patrimonio, darle hasta el último céntimo de su basto imperio, pero Bill se reía apartándola una y otra vez, Eleonor intentó a la desesperada usar su cuerpo de mujer, acariciando la polla de Bill sobre el pantalón, este la dejaba creer que avanzaba en alguna dirección para apartarla, a la 4º vez la soltó un bofetón.

-BILL: estamos a punto de llegar puta, y tenemos un par de horas hasta que vengan todos, tranquila te van a dar todo el sexo que necesites, es un desperdicio matarte sin saber como follas jajajajjjaa quizá si te portas bien le perdone la vida a tu querida hija.

-ELEONOR: si…….por dios….si, lo que sea, le montaré como una amazona a usted, y a sus hombres, a todos, háganme lo que quieran, pero no a mi hija, ¡¡¡¡¡no la maten, por Jesucristo se lo pido!!! – sus lagrimas no parecían conmover a Bill, que sacó el móvil y marcó un numero.

-BILL: si……¿tienes a la chica?............no, no la mates……..ven a la estación de trenes mercantiles con ella………a las 23:00 te quiero aquí………perfecto, además necesito de tus servicios especiales……….6……..lo tendrás, y te pagaré por tus buenos servicios….. – al colgar sonrió a Eleonor mientras la acariciaba el rostro – …..ya viene tu hija, la tenia bien vigilada por si esto pasaba, y Lili también estará, va a ser una bonita reunión familiar.

Raúl – La divina tragedia.

Llegamos a la estación y entramos sin dificultad, sin duda el de las aduanas estaba comprando o amedrentado, esperamos una hora en los coches y luego pasamos a un hangar, en cada puerta y salida había un hombre armado, y dentro se empezaba a arremolinar la gente, nos pusieron a todos de rodillas en el suelo, a todos menos a Eleonor, a la que 2 moles iban desnudando, dejándola solo con los tacones, no había perdido un ápice de su encanto, era rebosante y preciosa, con sus tetas operadas y aquellos pezones tan largos, Bill se sentó en una silla mientras sus hombres jugaban con Eleonor, sobándola de formas agresivas y poco eróticas, pero ya tenia a 4 tíos metiéndola mano, no solo no se resistía si no que con un gesto en su cara de indiferencia, besaba, se ofrecía y acariciaba a sus “agresores”, se pasó media hora chupando pollas como recordaba que sabia hacerlo, y cuando terminó de tragarse el semen de al menos 12 hombres Bill la hizo sentarse en su regazo, se había sacado una polla arrugada y vieja pero con el culo de Eleonor en su piel se le puso tan dura que parecía imposible, se la metió por el coño haciéndola gemir, mientras todos se reían a carcajadas, veían como Eleonor daba una clase magistral de giros de cadera y sexo, Alicia la miraba sorprendida.

-ALICIA: ojalá llegué yo así a su edad……- de la risa que me dio la mole que nos vigilaba me dio un toque en la nuca.

Bill se corrió al cuarto de hora, sudando y jadeando entre vítores, Eleonor se pasó por la pierda a otros 4 hombres, se peleaban por follar con aquella mujer que parecía no tener fondo, no le decía que no a nadie ni a nada, hasta 2 de los hombres de la metieron por el culo y Eleonor no pudo evitar excitarse y correrse como una cerda, lo peor fue cuando llegó Lili, la que se hizo pasar por su hermana, estaba demacrada, ausente, con tantos agujeros en los brazos de las drogas que apenas se tenia en pie, llevados por la pasión la desnudaron también y hubo ronda extra de violaciones, aunque ni siquiera se resintió, solo babeaba tumbada en el suelo, incluso abrazaba y besaba al que la tomaba en ese momento. Alicia se puso a llorar y fue cuando casi echo por tierra todos los planes, uno de los hombres, que esperaba turno, se fijo en Alicia, se acercó a ella y comenzó a sobarla.

-YO: tú, ¿no tienes suficiente con esas de ahí? – ni me hizo caso, Alicia apartaba el rostro evitando sus labios dejando manosear sus senos con repugnancia, la puso en pie y descubrió su trasero perfecto, lo agarraba gustándose, no pude evitarlo, salté y tumbé a ese desgraciado, hicieron falta 4 moles para separarnos, las carcajadas eran sonoras, pero le había partido un diente a ese cerdo, me dio 3 puñetazos en el estomago aprovechando que estaba sujeto.

-BILL: ya basta……..por el momento hemos acabado – lo dijo abrochándose el pantalón después de haberse follado el culo del cuerpo inerte de Lili y con Eleonor siendo asediada por el coño y el culo a la vez, chupándole la polla a otro mientras pajeaba a un 4º, “4 tíos no pueden con ella, y yo la destrozaba”

Al escuchar que se había terminado la fiesta un suspiro de lamento se escuchó por todo el hangar, Lili cayó al suelo incapaz de mantenerse de rodillas, mientras que el Toro seguía perplejo, sin mover un músculo, Alicia me miraba con una mezcla de ternura y llamándome estúpido con sus ojos, apenas podía coger aire cuando me soltaron a su lado.

-ALICIA: no deberías haberlo hecho…..podría haber soportado sus manos unos minutos más.

-YO: pero yo no…..- me recompuse al oír como por una puerta entraba un hombre con Yasmine del brazo, la hija de Eleonor, que gritaba furiosa.

Al ver a su madre desnuda terminando de recibir el semen de 2 hombres en la cara, sus alaridos se apagaron, llamaba a su madre entre lagrimas, y si antes lo habían lamentado, ahora al ver a la hija de Eleonor se repitieron las quejas, iba espectacular, con un vaquero ajustado marcando sus piernas y con el tiro tan bajo que quedaba por debajo de la cintura, enseñando gran parte de su ombligo con una camiseta corta y escotada, si alguna vez hubo un trasero que compitió con Alicia, fue el suyo, pero cuando la tiraron a mis pies no pude más que sentir lastima.

-YASMINE: ¿que pasa aquí?, me han secuestrado, ese animal, y me ha traído aquí a 200km por hora, ¿para que? ¿para ver como violan a mi madre?

-BILL: querida, aquí no ha habido violación alguna, tu madre es una puta que a disfrutado de las vergas de mis hombres como una loca.

-ELEONOR: hija……- lloraba mientras trataba de taparse los senos y el coño chorreando de semen y fluidos, ignorando que tenía semilla de varón por todo el cuerpo.

-YO: calma, confía en mí – la susurre al levantarla.

-BILL: llegas puntual basurero, me gusta – saludó al hombre que había traído a Yasmine, era alto, rondaría los 2 metros con un porte imponente, pasaba los 30 años de largo, con un aspecto intimidante, ropa negra y una cazadora de cuero que le daban un aire agradable, incluso atractivo con el pelo corto y unos oscuros ojos negros, pero con una frialdad gélida en la mirada.

-BASURERO: un placer, ¿estos son los 6? - nos señaló.

-BILL: así es, necesito que desaparezcan para siempre.

-BASURERO: ¿tenéis lo que pedí? – Bill señaló un contenedor que había a uno de los lados.

-BILL: ahí tienes lo tuyo, 6 barriles grandes, un hacha y sosa cáustica.

-BASURERO: perfecto, da gusto trabajar con ustedes – se dieron la mano afectuosamente.

-YO: ¿como….como que 6?

  • BILL: jajajajaja claro, sois 6, aquí el amigo se ocupa de hacer desaparecer personas, le contraté hace 2 años para seguir a la furcia de la hija de Eleonor, el mismo se ofreció a cambio de un sueldo razonable, y tenia buenas referencias, ha hecho desaparecer a mucha gente.

-ELEONOR: pero nos prometiste que si……- recibió un golpe con la culata de una arma en la frente.

-BILL: no prometí nada puta estúpida, no voy a dejar testigos, he ganado lo suficiente como para asegurarme morir de viejo.

-YO: ¡¡¡¡pero le he ayudado, me debe dinero!!!! – solté desesperado.

  • BILL: es cierto, que no se diga ….– se volvió hacia el basurero –….. a ese métele 200€ en el bolsillo antes de matarlo – el basurero sonrió.

-BASURERO: como usted mande.

  • BILL: lo siento chico, y más por tu preciosa prometida, pero no puedo dejar que la policía me pise los talones, desde que entraste a ver a Juan estabas muerto…… - saludó a su mano derecha que andaba aun recuperándose de la tremenda follada que le había pegado a Lili -…. pero te agradezco tu ayuda, de verdad – la mirada de rabia que le eché solo valió para hacerle reír.

-BASURERO: que los metan en el contenedor, ya me ocupo yo de todo – así lo hicieron.

Nos metieron a todos en el contenedor, uno a uno, había una bombilla encendida dentro, al ver los barriles y los sacos de sosa cáustica el temor creció, no tanto como cuando el basurero cogió un hacha que había en la pared apoyada, quitándole la etiqueta de recién comprada, de fondo oíamos a Bill gritar ebrio de victoria y poder a sus hombres, había por lo menos 60 personas allí, todo su cártel había acudido a ver la justicia que se impartía a los que osaban meterse en sus asuntos. Yasmine se abrazaba a su madre destrozada de dolor, y yo abracé a mi prometida besándola con cariño, también lloraba, pero me devolvía cada beso.

-YO: no pasa nada mi amor, todo acabará pronto, te amo.

-ELEONOR: ¡eres un puto retrasado mental!…..- logró tener fuerzas para hablar mientras su hija la ponía el vestido - …..¡¡¡¡¡¡Ahora vamos a morir todos por tu maldito orgullo!!!!

-YASMINE: ¿que ocurre aquí mama? ¿por que vamos a morir? – no se si era la confusión o la negación a la muerte lo que la hacia hacer tan estúpida pregunta.

-ELEONOR: ¡¡¡no podías dejarlo estar, no, tenias que meter al cártel, ¿de verdad creías que te iban a dejar irte tan feliz?, eres un puto desgraciado!!!- me atacó por la espalda golpeando sin piedad, la detuve con los brazos estampándola contra una pared del contenedor.

-YO: NO, fuiste tú, te lo advertí miles de veces, esto no terminaría bien, no te amo ni te quiero, te odio, te odio tanto que te mataría yo mismo, has sido una bruja cruel, has hecho daño a tanta gente que no eres consciente del horror que has provocado.

-ELEONOR: esto no es culpa mía, si no fuera por esa puta estúpida no estaríamos aquí – señaló a Alicia, que trataba de hacerme soltar a Eleonor.

-YO: todavía no lo has entendido, ¿verdad? gracias a ella no estamos todos muertos ya – dejó de forcejear y me miró a los ojos.

-ELEONOR: ¡¡¡¿de que hablas?, nos van a matar ahora mismo!!! ¡¡¡A mi hija!!!!

-YO: eres más cerrada de lo que pensaba …– la solté - ….esto, donde estamos ahora, lo que se supone que nos va a pasar es lo que hubiera pasado, es lo que Zeus tenía planeado, hemos hecho lo que él tenia pensado hacer y aquí estamos, a punto de morir, como bien dices.

-ELEONOR: pues felicidades, tu Zeus nos ha ayudado mucho – abracé a Alicia y la besé, con la tenue luz haciendo brillar sus ojos, rozó su nariz con la mía y la rodeé la cintura con mis manos.

-YO: Zeus no esta aquí, Zeus murió Eleonor, en aquella habitación de hotel, en aquella fiesta, cuando subiendo las escaleras de 3 en 3 comprendí que amaba a Alicia, de una forma que nunca entenderás, como nunca amé a nadie, Zeus murió y con él su plan, Alicia me salvó de eso, y ahora nos ha salvado a todos en consecuencia, si no es por ella……Alicia me hizo ver más allá, cambié el guión, y es por ello que deberías de besarla los pies, acaba de salvarnos la vida a todos.

-ELEONOR: no te entiendo.

-ALICIA: nunca lo hiciste – me besó de nuevo.

-BASURERO: shhhhhhhhh agachados y taparos los oídos, rápido…– sacó una radio de su bolsillo, la encendió –…. aquí lobo solitario, aquí lobo solitario, ¿me reciben?

-VOZRADIO: aquí martillo, lobo solitario, a la espera y en posición.

-BASURERO: aquí lobo solitario, el gallinero esta lleno, ¡me cago en dios, el gallinero esta rebosando!, eviten el contenedor azul al noreste de la nave, todos los civiles a salvo, luz verde martillo, repito, luz verde – todos le miraron, menos Alicia y yo, que nos fundimos en un abrazo dulce, en un beso largo y tenue.

Al 1º golpe de una puerta le siguieron gritos de “alto policía, manos arriba”, dio igual, casi al instante empezaron los disparos, el basurero sacó una pistola de sus riñones y la amartilló, nos mandó al fondo del contenedor tras los barriles, el Toro se puso en pie y le cogió una pistola en el tobillo al basurero, montando guardia los 2 juntos en la puerta, yo me tumbé sobre Alicia protegiéndola con el cuerpo, mientras las demás lloraban y se tapaba los oídos. El sonido era atroz, aterrador y resonaba hasta hacerte daño en el tímpano, los gritos, los disparos y los alaridos de dolor, cuando el basurero abrió levemente la puerta del contenedor, se coló más ruido.

-BASURERO: joder, ese cerdo se ha apostado con la escopeta detrás de una columna, y esta masacrando a los GEOS…. – se giró hacia nosotros – …..¡¡¡taparos los oídos!!!.... – apuntó, respiró profundamente 2 veces y la 3º vez, 4 tiros rápidos resonaron de forma infernal por las paredes metálicas gruesas del contenedor, cuando pude volver a escuchar veía al basurero agachado pegando un tiro tras otro –…… ¡¡¡¡¡su puta madre, le he metido 2 tiros y sigue disparando el hijo de puta!!!!!!

-TORO: ¡¡¡mira!!! – el basurero afinó a vista.

-BASURERO: ¡¡¡¡¡y una mierda!!! …- cogió la radio – ….a todas las unidades, el rey huye por la puerta sur, repito Bill huye por la puerta sur……..- antes de poder terminar de decirlo una explosión iluminó todo, y el suelo tembló, casi sentía como el caparazón de metal que nos protegía se tambaleaba.

-TORO: ¡¡¡¡su puta madre, ¿que animal ha tirado una granada?!!!!

-BASURERO: joder viene alguien….- se apostó tras la puerta, y al entrar aquel hombre, desesperado por encontrar refugio, el basurero apuntó a su pecho y le pegó 2 tiros en la espalda y otro en la cabeza, cayendo encima de él -…¡¡¡¡hostia puta!!! ¡¡¡¡CIERRA TORO, CIERRA!!!!! – el golpe de las balas en la parte exterior del contenedor ya no eran aleatorias, si no concentradas.

Cerró por dentro y quedamos casi a oscuras, los ruidos de fuera duraron al menos 10 minutos, que parecieron siglos, en los que juraría que la 3º guerra mundial habían empezado, Toro y el basurero se apostaron de rodillas de cara a la puerta, apuntándola con sus armas, dispuestos a abatir a cualquiera que la abriera, pero poco a poco los de fuera se fueron rindiendo, quedado sin munición o muriendo, pasados 20 minutos, en los que no se oyó nada, la radio del basurero volvió a sonar.

-VOZRADIO: aquí martillo, todo despejado, situación controlada.

-BASURERO: aquí lobo solitario, todos a salvo, Toro y yo ilesos, asegurar bien la zona, que ningún moribundo me toque los cojones al salir con los civiles.

-VOZRADIO: recibido lobo solitario, aquí martillo, buen trabajo Alberto, muy buen trabajo – suspiró profundamente un par de veces riéndose junto al Toro, luego se giró hacia nosotros.

-ALBERTO: ¿todos bien?, ya podemos salir….- Eleonor temblaba pero se puso en pie.

-ELEONOR: ¿Al….Alberto? – le miraba queriendo desentrañar aquel misterio.

-ALBERTO: Alberto, si señora, el primo muerto hace 12 años de Raúl ….– casi se desvanecía al caer al suelo de rodillas –…. y aquí mi compañero Agustín, alias “el Toro”, miembros de la unidad encubierta de la guardia civil.

-ELEONOR: pe….. pero yo………y Lili…….

-TORO: lo siento mucho señoras, no pude hacer nada para evitar que las tomaran, si me descubría estabamos todos muertos – ayudé a Alicia a ponerse en pie, estaba llorando, pero riéndose.

-YO: ¿está bien mi princesa? ¿Por que lloras?

-ALICIA: por que ha funcionado………¡dios no me lo creo!……ha salido perfecto……- me rodeó la nuca con su brazos y se puso de puntillas besándome con alegría.

-YO: perfecto……..perfecto no, tú tendrías que haberte ido cuando les diste la droga, no tendieras que estar aquí.

-ELEONOR: tú……tú lo planeaste todo……..- me señalaba mientras su hija la abrazaba, supongo que vio la imagen al completo de mi plan, del plan de Zeus, que en realidad era sacar dinero, matar a Yasmine delante de Eleonor y luego a ella, usando el cártel de forma cruel, pero por intervención de un ángel, Alicia, no caí en ese error, fue ella la que logró que Zeus desapareciera y pudiera ver que tenia razón, que tenia que ir más allá, y usar a mi primo no como defensa, si no como ataque, que en todo momento debía de parecer un chico normal e inofensivo tratando de librarse de Eleonor, para que Bill tuviera siempre el control, y así no sospechara de la operación.

-YO: si……así es……me ha costado 2 años de mi vida, pero si……no tendrías que haberme dado aquel maletín, pero por fin ha acabado.

-ALBERTO: lamento hacer esto pero doña Eleonor xxxxxx xxxxxxxxx, queda usted detenida por estafa, fraude, contrabando de drogas, asociación ilícita y ya puestos, acoso a mi primo – la puso en pie mientras la leía sus derechos, la fue a esposar pero le dije que no delante de su hija, no hacia falta, y que llamara a las asistencias, el estado de Lili era casi vegetal.

Al salir de allí tuvieron que hacer fuera entre los 2 para abrir la puerta, un cuerpo no dejaba abrir, Alicia pegó su rostro a mi pecho, el olor era repugnante, una mezcla de fuegos artificiales y sudor, había por lo menos 10 hombres en el suelo, muertos, y otros 3 siendo atendidos por médicos, había otros cuerpos colgando de una barandilla superior o en las puertas y salidas, dejé de contar pasados los 21 cadáveres………5 hombres, uniformados con ropa táctica, y uno de ellos con pinta de líder, se acercaron a saludar.

-ALBERTO: hola señor – estrecharon las manos con firmeza.

-LIDER: hola Alberto, ¿que tal todos?

-TORO: perfectos señor, aunque esta mujer necesita atención medica inmediata, la han traído en este estado y no sabemos como está – sostenía a pulso a Lili, de un gesto 2 hombres que los acompañaban cogieron a Lili y se la llevaron.

-LIDER: ha sido impecable, ni en mis mejores sueños.

-ALBERTO: ¿bajas señor?

-LIDER: aun estamos recibiendo información, tenemos a un fugado en persecución, pero de los nuestros tenemos 5 heridos y solo uno de gravedad, sin bajas por ahora.

-TORO: ¿y el rey?

-LIDER: casi se escapa, gracias al aviso de Alberto pudimos hacerle una emboscada, pero no dejaron de disparar, tuvimos que abatirlos a todos, Bill, Juan y media docena de sus altos cargos, una lastima, hubiera sido un juicio digno de ver, pero al menos no queda nadie para tomar represalias, al resto les tenemos arrestados o aquí tirados, todo un cártel de un solo golpe, le felicito, le felicito enormemente.

-ALBERTO: gracias señor, pero no es justo, la idea no fue mía, no del todo, mi primo ha sido vital para el transcurrir de la operación – al señalarme se me acercó y me cuadré como pude.

-LIDER: ah si, el chico, has salvado muchas vidas hoy, no solo las de mis hombres, si no la de miles de personas que se meten esa mierda, nos has ahorrado 10 años de planificación y trabajo, sin ti jamás se habría podido efectuar de esta forma, y en nombre de los cuerpos de seguridad del estado, le doy las gracias, este país está en deuda contigo…. – cuando se cuadró no supe que hacer, solo asentí como un idiota.

-YO: bueno, los del cártel me iban a pagar, no quisiera parecer codicioso pero……- Alicia me golpeó en el pecho, Alberto se echó a reír y el Líder tardó medio segundo en darse cuenta de la broma.

-ALBERTO: discúlpele señor, creo que de algún disparo se le ha quedado la cabeza un poco tocada.

Se separaron unos instantes, yo solo podía abrazar a Alicia, sentir como su corazón aún se desbocaba en mi pecho y como sus labios temblaban menos con cada beso, dimos un paseo hasta que encontré el cuerpo sin vida del que la metió mano, le di un par de patadas hasta que ella me apartó de allí, luego vimos al que la pegó en casa de Eleonor siendo atendido de un par de balazos.

-YO: ese cabrón merece morir – mi cuerpo se movía solo en su dirección, pero Alicia me sujetaba.

-ALICIA: vámonos……vámonos a casa…..- me cogió de la mano y pasó el dorso de su otra mano por mi mejilla, la besé en los dedos.

-YO: no sabes cuanto tiempo llevo deseando oír eso.

Echamos a andar hacia la salida, nos cruzamos con Alberto y Toro, que llevaban a Eleonor y a su hija a un lugar apartado, al pasar a su lado Eleonor me miró rendida, estaba agotada, humillada y superada por la situación, no debí mirarla, no debí sonreír y no debí hacerle aquella carantoña a Alicia………..pasamos de largo y cuando estabamos a punto de salir un silencio tranquilo se volvió tenso.

-TORO: ¡¡¡NO!!! – al girarme vi a Eleonor tirarse al suelo, fue tan rápida, cogió un arma tirada en medio de la nada, una pistola, cuando el Toro fue a echarse encima ya me estaba encañonado, antes siquiera de darme la vuelta completamente Alberto desenfundó su arma y estaba apuntando a la cabeza a Eleonor.

-ALBERTO: ¡¡¡baje el arma, baje el arma ahora mismo!!!

-YASMINE: ¡¡¡mamá, basta!!!!- lloraba sujetada por Toro.

-ELEONOR: no, esto no termina así, tú me amarás…..si…….o no serás de nadie….mío o de nadie……

-ALBERTO: ¡¡¡baja el arma, AHORA, te juro por dios que lo haré delante de tu hija, como aprietes ese gatillo te vuelo la cabeza, ¿me oyes?!!! – era tarde, Eleonor no estaba, no había una persona bajo el caparazón de su cuerpo, solo un par de ojos que me miraban y unas manos temblorosas que sujetaban el arma en mi dirección.

-YO: ya basta Eleonor, ya basta………….déjalo….lo has perdido todo, tu posición, tu dinero, y cuando se sepa que has hecho hasta tu hija te repudiará, no merece la pena.

-ELEONOR: no, no, no…..mío o de nadie….mío o de nadie……- lo repitió abstraída de todo.

-YO: hazlo… – di un paso hacia ella –… hazlo, me da igual Eleonor, estoy harto, cansado……… hazlo, me da igual…..hazlo por que me iré por esa puerta con Alicia y seré feliz,, no volveremos a vernos…..…no seguiré viviendo bajo tu yugo, se acabó………….ya no puedes hacerme daño – Eleonor era un mar de lagrimas y nervios.

-ELEONOR: si…….si que puedo………… solo tengo que apuntar a tu corazón – y desvió el arma hacia Alicia.

No hubo tiempo, no pensé, todo fue fugaz, pasó tan deprisa, antes de que disparara el arma cubrí el cuerpo de Alicia con el mío, antes de sentir la punzada que me atravesó la espalda escuché el disparo del arma de Alberto y el grito de horror de Yasmine al ver la cabeza de su madre hecha pedazos, el cuerpo de Eleonor cayó al suelo al instante, y el tiempo se ralentizó. Alicia alzó su mirada y me vio sonreír, no se por que, pero lo hacia, miré a sus ojos y vi paz, pero cuando sus labios se movieron no escuché nada, y cuando me sujetó al vencerme sobre ella sin fuerzas la vi romper a llorar, casi ni había tocado el suelo y 2 hombres me estaban examinando, Alicia me abrazó pero la apartaron, “¿por que tiene las manos manchadas de sangre?”, Alberto cogió a Alicia para dejar trabajar a lo médicos, me dieron la vuelta, fue cuando recuperé el oído.

-MEDICO1: joder, entrada lateral, no hay salida.

-MEDICO2: ¿la columna?

-MEDICO1: ha entrado por el lado derecho, intacta, pero la bala esta dentro – me levantaron la camiseta y me oscultaron.

-MEDICO2: joder, le ha perforado el plumón, ¡¡¡¡ambulancia ya, necesita operación, avisar a urgencias de que vamos!!!

-MEDICO1: ¡¡¡mierda, cae el ritmo cardiaco, ¿le ha dado en el corazón?!!! – me subieron en camilla entre 4, ya estabamos en marcha, Alicia corría tras ellos con Alberto tratando de alcanzarla.

Al meterme en la ambulancia me faltaba el aire, y sentía la espalda muy mojada, pero no estaba sudando, no hubo tiempo de nada, así que Alicia se subió detrás, con Alberto conduciendo la ambulancia, y los 3 médicos atendiéndome a la vez, me pusieron la mascarilla de oxigeno y me taponaron la herida, cogieron una vía y me inyectaron algo, no se que era pero hacia que dejara de dolerme la espalda, pero no era dolor, era incomodidad, alcé una mano y Alicia apareció para cogerla, la vi llorar, llorar desconsolada, frotando su mejilla con mi mano.

-ALICIA: ¡¡¡¡¡¡¡¡aguanta por dios………aguanta……..ya llegamos, tú solo aguanta!!!!!!

-YO: ¿por que lloras, mi bella princesa?

-ALICIA: por ti imbécil, por ti……..

-YO: recuerda tu promesa……- algo salió de mi garganta y me saltó por la boca.

-ALICIA: ¡¡¡no, no……..haced algo!!!... – le gritaba a los médicos - … ¡¡¡¡tú solo aguanta, unos minutos y estaremos en el hospital, allí te curarán maldito imbécil, ¿por que te has puesto en medio?!!!!

-YO: por lo mismo que salté a aquel balcón………..o……..o ……o por lo mismo que subí esos 19 pisos……- me costaba hablar, ”¿por que?”

-ALICIA: ¡¡¡¡¡¡¡respira, no dejes de respirar y quédate conmigo……..por favor no te mueras!!!!!! – al decir esas palabras una sonrisa débil nació en mi cara.

-YO: haré lo que pueda – al reírme escupía sangre, lo veía en la mascarilla, y un giro brusco de la ambulancia hizo que todo se moviera, Alicia cayó sobe mi pecho mientras los médicos no sabían que más hacer, no podían hacer nada hasta llegar al hospital.

-ALICIA: recuerda tu promesa, la que me hiciste la noche en que nos prometimos, recuérdala y cúmplela, ¡¡¡¡¡¡te lo exijo!!! – estaba llena de lagrimas, descompuesta y pese a estar así era preciosa, me quité a mascarilla como pude, y me limpie la sangre de la boca, se alzó para besarme.

-YO: pienso cumplirla – la visión de su rostro a escasos milímetros del mío fue agradable, “es una inmejorable última imagen para llevarme de este mundo”.

-ABERTO: ¡¡¡¡¡AGUANTA JODER, YA ESTAMOS AGUANTA!!!!! – pitaba el claxon y gritaba por la ventana pidiendo ayuda.

Veía a Alicia encima de mi, me besaba y me acariciaba dándome fuerzas, pero ya no las tenia, no me respondía el brazo cuando quería acariciar su mejilla, ni el pecho cuando ordenaba que se llenara de aire, dejé de sentir su mano en mi pecho, dejé de sentir sus cabellos rozando mi rostro, dejé de sentir el peso de su cuerpo en mi brazo, dejé de sentir sus lagrimas caer en mi piel, dejé de sentir su nariz rozando la mía, dejé de sentir sus labios en los míos, dejé de sentir………

Epílogo.

“Hola, mi nombre es Raúl, y esto que escribo es para el futuro, para el que lo lea entienda que ocurre y que está pasando.

1º He decidido reunir toda mi vida en estos documentos, mis diarios, agendas y anotaciones, todo cuanto he ido recopilando a lo largo de mi vida está aquí, lo he reunido todo, y en el caso de que me ocurriera algo, deseo que quede constancia de mi vida, no creo que sea mejor o peor que la de nadie, pero es mía y quiero pensar que a alguien le puede interesar conocer como y por que decidí hacer lo que hice.

2º Debido a mis propios errores mucha gente ha sufrido, por ello pido perdón y me dispongo a terminar con ello el día de la fecha indicada, pido disculpas anticipadas a toda mi familia por no contarles nada de ello, solo quise protegerlos, y cumplir con el deber del hombre que me enseñasteis a ser.

Papá, te doy las gracias por creer en mi siempre, y confiar en que aprendiera de ti todo lo posible, lo he intentado y no creo que ningún hijo jamás haya podido tener mejor padre.

Hermana, odio como no paras de chincharme y mandarme hacer cosas, pero no concibo un mundo en el que no desearía tener a una mujer tan fuerte y capaz como tú en mi familia, cuida de todos, se que puedes.

Mama, lamento este nuevo engaño, se que no te gusta que te oculte cosas, pero no me habrías dejado hacerlo, y necesitaba hacerlo, solo espero que no sufras por mi, no tienes motivo, elegí mi camino y no me arrepiento.

3º Creía que esto era venganza, o castigo, quizá así naciera, pero eso murió junto a Zeus, con él he hecho atrocidades de las que no me siento ni mínimamente orgulloso, pero ahora mi vida es Alicia, y ella es la única que importa.

4º No soy nadie para decirles como vivir su vida, pero permítanme que con mis 25 años les diga algo, he vivido más que lo que haya podido vivir nadie, he tenido amores, desengaños, momentos de locura y de lucidez, he hecho daño a gente que quería y he sido infiel, me he aprovechado de mujeres, he manipulado y mentido……. y todo ello no me ha hecho ni más feliz, ni mejor hombre, solo me ha traído desdicha y sufrimiento, por suerte, Alicia apareció en mi vida, y ella me ha sacado del horror y la tortura de una vida larga y tediosa que no merecía la pena vivir, por mis propios miedos y prejuicios siento que he perdido el tiempo, hasta que reuní el valor de decirla que la amaba, de jugarme la felicidad a cara o cruz con el universo, y ganar. Por ello, os insto a dejar de ser los falsos hipócritas y farsantes que somos, por que en el fondo, no merece la pena, así que os pido, por vuestro bien, caminad, dejas atrás los miedos y los prejuicios, dejad de juzgar y de actuar como os han enseñado ha hacer, vivir un vida real, os aseguro que por corta que sea, valdrá mil veces más que una larga vida llena de falsedades.

5º Alicia, no cambiaría un solo segundo a tu lado, por la eternidad sin ti.”

Así empieza el relato de su vida, escrito por él mismo, el trabajo que le tuvo en vela la mañana previa a aquella fatídica noche, lo que había en el pen drive que le entregó a Alicia, todo lo que habéis leído es una recreación aproximada de sus diarios, de su agenda, de los videos y fotos, de conversaciones con sus amantes y de sus amigos o familia, testigos o conocidos, en definitiva, es su vida lo mejor que he sido capaz de recomponer, ¿Qué quien soy yo? mi nombre es…………………….en realidad mi nombre no tiene relevancia, bastará con decir que soy la hermana de Raúl.

Creo que lo 1º que querréis leer es que ocurrió con mi hermano, no seré cruel y os lo diré, llegaron al hospital, si, y le metieron en la mesa de operaciones agonizando, la bala le perforó el pulmón derecho y le rozó un ventrículo del corazón, los médicos lograron extraerle la bala y parar la hemorragia interna, para entonces había perdido demasiada sangre, mientras le ponían unidades de sangre, los médicos le realizaron el RCP y hasta le dieron 4 descargas con el carro de paradas, mi hermano estuvo clínicamente muerto 4 minutos, justo cuando habían dejado de luchar y anotaban la hora del fallecimiento la odiosa pantalla del ritmo cardiaco pitó, y mi hermano regresó de la muerte, todavía hoy los médicos no se explican como lo hizo, pero se pasaron 3 horas evitando que volviera a ocurrir, fue cuando Alicia y Alberto nos avisaron, fuimos al hospital como si los 4 jinetes del Apocalipsis nos persiguieran, al llegar tardaron demasiado en darnos noticias, yo tuve un ataque de ansiedad y mi madre estaba destrozada en los brazos de mi padre que se mantenía todo lo fuerte que podía, Alberto trataba de contener a Alicia, que no dejaba de llorar y llamar a mi hermano a gritos, su voz resonaba por los pasillos y se la escuchaba por todo el hospital, creo que trataba de ser un faro en la oscuridad para que Raúl la escuchara y supiera el camino a casa.

Por la mañana un grupo de médicos, que apestaban a sudor con gesto agotado, salieron a decirnos que mi hermano estaba fuera de peligro, pero en coma, se lo habían tenido que inducir para evitar daños cerebrales por la falta de sangre y oxigeno, conectado a maquinas que le mantenían vivo. Supongo que es algo que todas las familias agradecen oír, y por eso lo dicen, pero los médicos nos dijeron que jamás habían visto a un hombre luchar por vivir de esa manera, mi hermano tendría que estar muerto, nos lo dijeron así de francos, pero no se rindió, no me extraña, nunca lo ha hecho en toda su vida.

Pasadas 3 semanas los médicos decidieron intentar despertarlo al encontrarse mejor de las heridas, pero como se temían mi hermano no despertó, había demasiados daños, pero el corazón no deja de latir, y desde entonces esta en una cama de hospital, hace ya 2 años. Con el tiempo le quitaron la ventilación asistida y respiraba solo, pero siguió sin despertarse, vamos a visitarle a diario, mi padre, mi madre y yo, Alicia tampoco falla nunca, nos vemos a menudo e insistimos en que se venga a vivir con nosotros dada su situación.

Hemos tenido problemas, más de una vez hemos llegado a la habitación y una enfermera estaba montada encima de mi hermano, o realizándole sexo oral, hemos tenido que exigir solo enfermeros y celadores varones, por lo visto los atributos de mi hermano siguen despertando la pasión de las mujeres, incluso a menudo muchas de sus amantes van a verle, Alexis es tan pesada que hemos tenido que dejarla ser casi su guardaespaldas, la da igual pasarse días enteros velando a mi hermano cuando no estamos, realizando los ejercicios físicos para que su cuerpo no se atrofie o dándole cremas para evitar llagas de la inmovilidad, casi agradecemos sus esfuerzos, pero ella no lo hace por nosotros, “es mi amo y tengo que cuidar de él”, dice a menudo, hasta Alicia se ha acostumbrado a ella.

Nuestra situación familiar es triste pero holgada, al mes de estar en el hospital un hombre muy bien trajeado se presentó a la familia, Luis, resultó ser el director de sucursal de los seguros en los que trabajó Raúl, había contratado, por su cuenta y si decir nada a nadie, hacia 3 años un seguro para él, con condiciones muy amplias en caso de muerte o daños físicos, tremendamente caro, pero a la aseguradora le pareció perfecto que un chico de 23 años joven y sano firmara por casi 20.000€ al año, me imagino su cara al ver que ahora tenían que pagar 100 millones a su familia, y a Alicia, incluida más tarde en los beneficiarios, “cuidaré de que no te falte nada”, decía Alicia cuando se enteró.

Alicia nos contó por encima todo lo ocurrido, al menos de lo que fue consciente, y de ahí he ido indagando apra poder reconstruir todo lo ocurrido, y lo que no he podido averiguar lo he deducido o deducido, soy su hermana y nadie le conocía como yo. Pero todo este material que os he mostrado no llegó a mi hasta que Raúl cumplió los 27 años hace unos meses, lo celebramos en el hospital con él, y al recoger e irnos Alicia decidió quedarse, como hacia habitualmente, cogiéndole la mano a Raúl, antes de irme se me acercó y me dio un pen drive, cuando la pregunté que era me dijo que un regalo de Raúl, la vi tan triste al dármelo que la dije que viniera a casa esa noche, pero se negó en redondo.

-ALICIA: me lo prometió, me lo juró, dijo que pasara lo que pasara y tardara lo que tardara, volvería a mis brazos, no puedo irme, si me voy no sabrá regresar – sus lagrimas eran dulces.

-HERMANA: está bien, pero al menos deja que me lleve al crío, no es bueno que pase aquí la noche, y así descansas.

-ALICIA: si….será mejor – se puso en pie y cogió al bebé del carrito, acunándolo con suavidad mientras le daba un beso en la frente y me lo daba.

-HERMANA: dios, que grande está ya, ¡¡¡y cuanto pesa para tener un año y unos meses!!!

-ALICIA: si, por lo visto no solo tiene el nombre de su padre, si no sus genes.

-HERMANA: pues quédate y duerme, ya me ocupo yo del pequeñín, ya sabes que a Mamá le encanta cuidarle.

-ALICIA: os lo agradezco ….– jugó con sus dedos en la mejilla del bebé dormido, para luego darle un beso y rozarle la nariz con la suya -…. ¡hasta mañana Raúl, mi principito!

Aun hoy no sabe decirnos por que esa mañana no se tomó la pastilla, abrió el armario y lo cerró sin tomársela, puedo especular e inventar, pero la cuestión es que no lo hizo y se quedó embarazada, la ayudamos tanto como ella nos deja, durante la gestación y desde el parto, nunca entendí por que se reía cuando amamantaba a su hijo sentada en un sillón con Raúl tumbado en la cama del hospital, hasta que leí sus palabras la mañana de la operación para deshacer a vasectomía.

Alicia se volvió a sentar junto a mi hermano, cogiéndole de la mano, decía que algunas veces sentía como le apretaba la mano, ella jura que es cuando su hijo llora, pero los médicos dicen que son espasmos musculares, y que no hay esperanzas, “pobres locos”, les decía mirando el su rostro a Raúl, casi aprecia estar peleando mentalmente con algo o alguien, los médicos no conocieron a mi hermano, si hay alguna posibilidad, por dura y difícil que sea, encontrará la forma de regresar con Alicia.

Fin.