Mi dia especial

La primera relacion entre una pareja de enamorados que no son libres. porque cada uno tiene su propia pareja.

Un día especial (4 Marzo )

Quedamos de vernos a las 8:20 a.m. un día antes.

Yo estaba casi seguro que no llegaría. Podía apostar en ello.

Llegue a las 8:10 al punto. Me senté a esperar, mi mente dudaba que llegará, mi corazón latía cada vez mas rápido, mientras el reloj avanzaba lento, muy lento.

Por fin se dio la hora pactada, no estaba, mi celular en la mano, yo estaba decidido a llamar, solo hay dos caminos, que llegue o que se excuse.

Le llame, mi corazón se detuvo, cuando ella me contesto, y me dijo: ya estoy pagando mi examen , otra vez volvió a latir, se quería salir de mi pecho.

La espera no me resulto incomoda, sabia que si llegaría, que solo faltaban unos minutos para tenerla, como tantas veces lo soñé, como tantas veces lo imagine.

8:28, a lo lejos una figura llamo mi atención, si era ella, camine a su encuentro, ella como siempre que andamos en la calle, mostraba su nerviosismo, aun así cuando me vio, se sonrió levemente, nos acercamos y nos dimos un "feo" beso.

Platicamos de algunas cosas del día anterior, ella traía mucho sueño, caminamos hacia un taxi, lo abordamos, esta vez no la dejaría escapar.

Cuando llegamos al sitio que yo había seleccionado días antes, sus manos estaban frías, entramos a ese lugar, es muy discreto, no tiene los lujos de una suite, pero tiene lo suficiente para cumplir muchos sueños.

Y uno estaba por cumplirse.

Cuando llegamos a la habitación, recorrimos las cortinas, su curiosidad pudo más y se asomo a ver que tan alto estaba.

Empezamos a besarnos, le toque las nalgas, cuando mi mano impaciente quiso conocer ese tesoro, su risa nerviosa volvió a aparecer, se quito y no me dejo tocarle.

Yo le decía que no estábamos en la calle, como antes, que estábamos en un lugar, donde nadie nos veía que se tranquilizara.

Cuando comencé a desvestirla, otra vez su risa, eso me gustaba, estaba el ambiente llenándose de pasión.

Le quite su chamarra rosa, la puse en el banco del tocador, ella protesto que se le arrugaría, cuando le quite la blusa negra, y el contraste su brasier con su piel blanca, se ve hermosa!! La abrace, nos dimos mas besos, volví a tocar sus nalgas, las apreté como tantas veces lo quise hacer en la calle.

Me hinque y le di un beso en su ombligo, ella estaba fría, le baje su pants negro.

La deje en sus calzoncitos blancos, de encaje, divinos, chiquitos, se veía espectacular,

Se sentó en la cama y le quite sus tenis.

Ella se metió a la cama, se cubrió con las cobijas, yo me hinque a orillas de la cama, le di en ese beso, mi admiración a su belleza física.

La abrace, nos volvimos a besar, baje por su vientre, necesitaba desvestirla toda, me urgía conocer ese tesoro. Cuando le di un beso en su pubis cubierto todavía por su panti, sus intestinos hicieron ruidos, tenía hambre mi amor, así que tuve que dejar la conquista del tesoro para mas tarde, baje por algo de comer, si ella me hubiera dicho antes que tenía hambre, hubiera llevado algunas cosas para comer con anticipación.

Cuando regrese al nido, mi amor estaba boca abajo, dormidita, le quite las cobijas y la admire, se ve tan rica, tan hermosa.

Le bese su espalda, sus nalgas, le desabroche el bra, ella se despertó, se tapo con las cobijas, hicimos una tregua, pero no se porque si todavía la guerra no había comenzado.

Cuando ella me daba de su hamburguesa, que sabia divino, y no es porque supiera bien, si no por el momento y por quien me la estaba convidando.

Sus manitas, me alimentaban.

Pasaron unos minutos, antes de terminar, me quite la ropa, me desvestí de la manera mas normal, que un ser humano lo hace, solo deje mis calzones puestos, me acosté a un lado de ella. Ella estaba por terminarse su hamburguesa, tomo manzanita verde, nos dimos besos…ahora si, ya no había nada que hacer, por fin nos perteneceríamos

Me levante de la cama y me quite los calzones, cuando ella por fin pudo vencer sus obstáculos y también se despojo de su última prenda, sus famosos calzones blancos.

Pero lo hizo debajo de las cobijas, su pudor y su pena le impedían mostrarse desnuda totalmente.

Yo la veía absorto de su belleza, ella me decía que porque la miraba así, acaso podría yo mirarla de otra forma?

No, su cuerpo armonioso, sus tetas preciosas, grandes, con ropa se aprecian más chiquitas, pero ahora liberadas de tanta opresión, se ven espectaculares.

Que hermoso par de tetas, tienes mi cielo!!

Muy firmes, eso si también muy suaves.

Su cintura, estrecha, contrastan con lo ancho de sus caderas, podía dibujar una pera con ese cuerpo, sus piernas estupendas, si todo lo demás es extraordinario, que se podía esperar de sus bien y torneadas piernas, si vestidas se ven preciosas, ahora sin nada que les estorbara, increíbles.

Sobretodo haciendo un marco ideal a esos muslos de ensueño que tienes, y en medio de esas torres, un rincón mágico, húmedo, caliente, con un pubis con una pelambrera castaña clara, no son negros sus pelitos, no, son mas claritos, como toda ella.

Su sexo, apenas lo pude ver, todavía no pude acercarme mucho, no se porque su pudor no me dejo darle una bonita mamada, se lo merecía, su cuerpo era motivo de inspiración para eso y mas, pero solo me dejo darle unos besitos de lengüita.

Pero no descansare hasta que nuestras lenguas se conozcan, mi boca y tú sexo.

Amor me falto hacerte sentir eso.

Falto mas sexo oral, se que no te sentías cómoda por estar cerca de tus días, o alguna otra cosa, pero en la próxima vez, no te me escapas.

Creo que un buen 69 nos dejaría más que contentos y listos para la penetración.

Me puse encima de ella, mi verga ansiosa buscaba encontrar la puerta de entrada a su tesoro, pero solo hizo gritos de admiración, seguimos con nuestros besos, yo me dedique a tocar sus tetas, a besarlas, a acariciarlas, es que no sabia que le gustaba o no a mi chiquita, creo que en esta primera vez, no fue como ella esperaba, tal vez no cumplí con su sueño que me contara alguna vez, pero para las siguientes veces, tendremos que comunicarnos mas nuestros deseos, para saber cuando, como, por donde y con cuanta intensidad debe de ser, al fin de llegar a satisfacerla plenamente.

Me baje de su hermoso cuerpo de sirena, y no porque la cola le huela a pescado, si no por sus formas exquisitas.

Ella se subió, waooooo!!!

No esperaba que sucediera eso, me sorprendió gratamente, verla encima de mí, dándome besos, mezclando nuestras salivas, ella bajo me mordió las tetillas y cumplió su palabra, conoció a mi "amigo" y le dio una rica y nutritiva mamada!!

Waaooo, es una delicia verla comiéndose mi verga tiesa, sus labios se apoderaron de ella sin compasión, mamita, que rico me comes!!

Su pelo cubría su cara, cuando lo hice a un lado, su hermosa boca tenía casi toda mi verga dentro de ella, hubiera querido inmortalizar ese y otros muchos momentos más.

Cuando ella se canso de hacerlo se "trepo", se sentó en lo que momentos antes había puesto mas dura, pero no se penetro, se restregaba lentamente, sintiendo su dureza, y también su lubricación, que emanaba de su sexo ardiente.

Las luces apagadas, ella arriba de mí sentada sobre mi amigo, disfrutándolo, conociéndolo, su pelo enmarcaba la oscuridad y las luces se filtraban a través de el dándole un toque sublime, sus ojos cerrados, concentrada en la sensación de estar así.

Yo mamando sus tetas, succionándolas, acariciando con mis manos sus nalgas, ella inclinada dándome unos besos llenos de pasión.

Así estuvimos un rato, hasta que ella se canso, y se acostó en la cama, ya mi verga pedía ser introducida en su cueva, ya la quería conocer.

Me puse sobre de ella y mi mano guió a mi amigo, y por fin, después de tantas cosas el momento mas esperado había llegado, yo estaba ahí, dentro suyo, gozando el momento.

Penetrándola, despacio, abriendo camino, como si fuera la primera vez de ella, era un momento sublime estar así.

Mi cuerpo se movía lentamente, esperaba reacciones de ella, para seguir más fuerte, o más despacio, le preguntaba, ella no decía nada, solo apretaba los dientes, me sentía invadir su preciosa cueva, solo se dejaba hacer.

En algunos momentos mi pasión estaba a límite. Le agarre con fuerza de los cabellos, y le penetre, fuerte, profundo, con mucha intensidad, ella gimió, pero no sabia si porque le gustaba o porque le hacía daño, pare y cambie la intensidad.

Se lo saque todo, subí sus piernas en mis hombros, se veían hermosas así, la volví a penetrar, un poco mas despacio, mi verga le llegaba hasta el fondo, sentía lo mojada que estaba y lo fácil que se incrustaba,

Le pregunte si podía terminar dentro de ella, me dijo que no, que no sabía y no quería sufrir, optamos por ponerme un condón.

Antes de hacerlo la volví a penetrar desde atrás, ella abrió la pierna y se lo comió todo, mis dedos hurgaban su sexo, estaba completamente mojada, toque su clítoris, lo toque un poco, ahora si se lo saque para ponerme el condón.

Ella se negó a ponérmelo, cuando estábamos discutiendo ese asunto, ya se la había sacado totalmente, y quise ponérselo cerca para que me diera otra mamada, pero antes lo restregué en una de sus tetas, y le deje un rastro de sangre, señal creo yo, que si estaba por empezar su periodo.

Entonces lo abandone y me puse el condón, la volví a penetrar, ella se quejo del dolor que le ocasione, trate de no hacerle daño, la cambie de posición ella, se quedo dormida, la volví a besar, su cuerpo de diosa, estaba ahí, esperando para ser penetrado.

La puse de lado, ahora sin alzar la pierna, la vista era grandiosa, su culito cafecito, y su sexo se unen y mi verga salía y entraba despacio, con el condón puesto.

Me tarde otro poco así.

Cuando se lo saque para subirme otra vez, el condón se quedo atrapado en esas nalgas,

Lo quite y le alce un pierna, la penetre así, ella se dio cuenta que no había condón.

Me reclamo, le pedí que me dejara terminar, ella no quería, tenía miedo a sufrir, pero al fin accedió y me dejo seguir sin condón.

Ella sabe que no puede haber riesgo alguno, sus días del periodo menstrual están por

Empezar, así que el riesgo es mínimo.

Ahora si, la penetre otra vez, despacio, lento, y la bese, nuestras bocas se querían comer, empecé a moverme un poco mas rápido, esperando su reacción, un vez más le pregunte si así o mas rápido, o mas fuerte, o mas intenso, no, no me contestaba, ella todavía no sabe que ella es la que manda, la que dice cuanto….

Seguí moviéndome un poco mas rápido, sus caderas acompasaban los movimientos de las mías, pero no decía nada.

Estaba en una encrucijada, no sabía si le estaba haciendo daño, o si estaba gozando el momento, me entro la desesperación, mis huevos ya me dolían, necesitaba eyacular, ya habían pasado muchos minutos, y muchos meter y sacar.

Empecé a cambiar el ritmo, ella seguía acompañando, pero no decía nada, que rico se siente, que rico se mueve, empezamos a sudar, seguíamos besándonos, muestra respiración se agitaba a cada momento, seguí por unos minutos mas, mi cadera ya me dolía, ella no me daba señales de terminar, solo seguía acompañadome, me abrazo por las nalgas, me mordió mi hombro izquierdo, sentí que mi sangre se agolpaba en mi verga, y le deposite mi vida en esa cueva, termine dentro de ella, como siempre lo había imaginado.

Nuestras bocas se unieron en un beso de amor, por fin era suyo, por fin éramos uno!!

Le di un beso en la frente, mi respiración era más que difícil, le toque su cabello, me abrace a ella en el momento que le daba mi vida.

Cuando nos separamos, nos quedamos llenos de sopor, ella se quedo muda, no dijo nada, ahora quisiera saber que pensaba ella en esos momentos.

La di mi brazo, ella se acostó encima de el, su pierna se subió a la mía, su sexo palpitante se restregó en mi muslo. La sentía.

Nos quedamos rendidos, por minutos no se que paso, solo me perdí en una oscuridad, según yo estaba despierto, según ella, hasta roncaba!

Pasaron lo minutos y el tiempo cruel volvía a aparecer, pero ahora no importaba nada, todavía permanecimos jugando un rato, yo quería volver a coger, ella tenia prisa por regresar a su mundo.