Mi desvirgador
La sexualidad de Carlos un hombre misterioso solitario que se lo monta con su enamorado un joven que ya tiene novia.
Mi historia es un poco extraña debido a que en ella se mezclan el placer, el dolor, el miedo y el amor.
Soy un muchacho un poco tímido, regordete y solitario, mi nombre es Carlos y no he tenido una vida demasiado fácil, para empezar mi padre dejo a mi madre embarazada estando casada con otro hombre, la verdad es que ni Natalia ni Gloria son hijas del marido de mi madre, mi madre era una gran golfa que estaba en celo como una puta perra las 24 horas del dia los 365 dias del año, ya fuese con gitanos, viejos, no tenia preferencias ,ahora la pobre mujer ya es vieja y le cuesta mucho trabajo llegar a insignificantes orgasmos con la almohada.
Su vida sexual fue muy intensa, no como la mía que empezó apenas hace un par de años a la edad de 30 años, bueno si no tenemos en cuenta mis relaciones con las yeguas de Marta, que me iba a follar a escondidas cuando ya entraba la noche.
Pero bueno no voy hablar de las yeguitas de los chochos grandes y húmedos porque lo que de verdad me marcó y me cambió la vida fue la vuelta de Marcos después de un par de años de haberse mudado a otro pueblo, cuando vino a vivir a mi pueblo apenas era un chaval y sólo me despertaba un poco de simpatía, pero cuando regresó al cabo de unos años ya en edad de copular me quedé prendido de él.
Por esos tiempos él salía con una chica de por allí pero yo sabia que él no le hacia ni caso, le gustaban los hombres lo podía ver en sus ojos y en su porte.
Empecé a perseguirle por las esquinas, a todas horas y aprovechaba cuando ella se iba para entablar conversaciones triviales aunque por dentro ardía de deseo imaginando que me penetraba.
Ya no podía las noches me las pasaba pajeandome y metiéndome desde pepinos hasta zanahorias por el culo imaginándome que eran su verga, debía intentarlo, debía confesarle mi atracción y mi amor porque yo en el fondo lo amaba.
Una tarde que su novia se había ido con su amiga con la moto a dar una vuelta aproveché para bajar a la plaza- yo vivo justo delante- después de que se hubiera despedido de ellas para sincerarme con él.
Marcos, estoy profundamente enamorado de ti, ya se que tienes novia y que hay una gran diferencia de edad entre nosotros pero necesito que me penetres por favor, te apetece subir a mi casa y charlamos.
Carlos, he esperado este momento desde hace mucho tiempo hay alguien más en tu casa?
Los dos subimos cogidos de las manos y comiéndonos a besos mientras subíamos por las escaleras de mi casa, nos quitamos la ropa entrando en mi habitación y cuando vi su miembro me volví loco me bajé los taparrabos y me puse de rodillas encima de la cama y cuando sentí el calor de su churra me puse a gritar como un loco que me penetrara mas rápido y fuerte el me cogió la mano y me dijo te amo, me dolía una barbaridad pero quería sentirlo mas adentro, cuando acabó de penetrarme me pidió que se la chupará y yo lo hice como estabamos el chillaba de placer mientras yo veía la jodida de su novia esperandole en la plaza.
Fue mi primera vez con un hombre y fue la mejor, nunca mas he vuelto a mantener relaciones con Marcos, el se negó porque no aceptaba su homosexualidad, también he sabido que terminó con esa aunque ha tenido otras parejas después.
Vivo sin poder dormir, esperando que vuelva. Tardé mucho en volver a penetrar a la s yeguas de Marta pero ahora vuelvo a estar con ellas y debo decir que no esta tan mal aunque a veces sueño con Marcos y me estremezco.