Mi desconocida (24)

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Mi desconocida 24

Entramos en la habitación del hotel en un completo silencio y mientras que Cristina se deshacía de su abrigo yo hice lo mismo y me senté en el sofá junto a la ventana en tanto veía que ella se dirige hacia el baño.

Esto es realmente genial. Tener a Cristina a mi lado es…no se, estupendo, pero lo de su padre… ¿Será verdad? Intentara separarnos….bueno si ella lo dice es porque es verdad. No tengo por que dudarlo, aunque la verdad es que me da igual el padre siempre y cuando ella este conmigo…siempre.

  • Ahora eres tú la seria. Me dice desde la puerta del baño.

  • ¿Qué? Doy vuelta la cabeza.

  • Ves….estas en otra parte.

  • Oh! Lo siento…solo pensaba estupideces.

  • No creo que sean estupideces si tienes esa cara.

  • No es nada Cristina…no te preocupes.

  • ¿Estas segura?

  • Si lo estoy… ¿Quieres que pida algo?

  • No me cambies el tema Marcela.

  • No lo hago…es una simple pregunta.

  • Si lo haces ¿Por qué no me quieres decir en que pensabas?

  • Porque no es importante.

  • Ya….

  • Entonces…. ¿café?

  • No. No quiero nada y menos café.

  • Pero Cristina

  • Me voy a recostar un rato.

La vi marcharse dejándome a mí más que confundida. Esta enojada…se molesto conmigo por ser tan esquiva con ella…Ahhhh! Pero es que de verdad no era importante. Solo pensaba en ella…y en su padre., pero nada más ¿Por qué tenia que molestarse? No me gusta, no me alegra nada que este brava conmigo, luego piensa cosas que no son y…mejor hablo con ella.

Me encamine hacia el cuarto y me la encontré sentada a un costado de la cama con las manos apoyadas en sus rodillas…quieta y en silencio ¿estará llorando? No, no creo, pero es mejor que me acerque a ella

Me dirigí hacia ella sigilosa y me senté a su lado sin decirle nada. Ella levanto la mirada y solo deposito su cabeza en mi hombro suspirando y mientras lo hacia yo incline la mía en la de ella.

  • ¿Sabes? Le dije.

  • ¿Qué?

  • Todo va a esta bien.

  • ¿Cómo puedes estar tan segura?

  • No lo se…yo solo se que estaremos bien.

  • ¿Y si no lo estamos? ¿Y si te aburres?

  • ¿Aburrirme? ¿De ti? Nunca. Eso no va a pasar.

  • Pero y si

  • Pero nada Cristina. Deja ya pensar cosas que no son ni van a ser….estamos juntas y voy a seguir queriendo estar contigo por mucho tiempo….mucho tiempo.

  • Pero mi padre va….

  • Tu papá me da igual.

Yo te quiero a ti no a el. Tu vas a vivir conmigo no el. Entiende de una vez que yo no te voy a dejar solo porque a tu padre no le guste la idea.

  • Pero Marcela es mi papá.

  • Lo se mi amor, pero no puedes deprimirte por el así. No me gusta

  • Ya veo que no ¿Estas enojada conmigo?

  • No… ¿Lo estas tu?

  • No.

  • Ya… ¿Aun quieres saber en que pensaba?

  • Si no quieres decirme no lo hagas…dijiste que no era importante.

  • Y no lo es para mí, pero lo es para ti ¿no?

  • Algo, pero no importa.

  • Pues si tienes que saberlo. Pensaba en ti.

  • ¿Y que pensabas de mi? ¿Qué soy débil?

  • No. Pensaba que es estupendo tenerte conmigo….

  • ¿De verdad?

  • Si, y en tu papá.

  • Te preocupa lo que haga ¿cierto?

  • ¿La verdad? No. Me da igual mientras tú estés conmigo todo esta bien.

  • Eso es bueno… ¿sabes?

  • Dime.

  • Te prometo no dejar que me aleje de ti. Pero de todas maneras tenemos que estar atentas.

  • Si, pero recuerda que las promesas no se hacen para incumplirse.

  • Lo recordare….siempre lo recordare.

  • Ok, entonces ahora cambia la cara de preocupación y comienza a juntar tus cosas para irnos.

  • Ya…..pero primero me daré un baño ¿si no te importa?

  • No me importa…mientras pediré algo al servicio para comer.

  • Esta bien.

Me aleje de su lado con una sensación de sobresalto que no me explico. Todo esta bien ahora y aun puedo presentir que no lo esta, pero es mejor que no piense mucho en ello sino me consumiré en mis propios pensamientos y ahora no puedo….no puedo. Debo ser fuerte por Cristina porque al parecer teme demasiado a lo que pueda hacer su padre y le afecta mucho lo que el piense….no quisiera perderla por su culpa. No deseo dejar de verla ni mucho menos ahora que se que me quiere, pero lo prometió y todo estará bien…debo creer en mis propias palabras

Me levante del sofá luego de pedir algo de comer al servicio y me dirigí pausadamente a el cuarto de baño….toque la puerta, pero Cristina no contesto…toque de nuevo y no respondió, entonces me precipite y sin mas entre en el cuarto y la vi….parada desnuda en la ducha sin realizar ningún movimiento, solo dejaba caer el agua caliente por su cuerpo como queriendo lograr que todo se fuera en el agua

Cerré la puerta con la mayor discreción que pude y me senté en el inodoro a observar a Cristina relajarse bajo el agua…aun no se percata de que estoy allí con ella…entonces la levanta sus manos y las desliza por sus hombros hasta llegar a su cuello y el vapor de su cuerpo con el del agua caliente se confunden y transforma en sombras los contornos de su desnudes ante mi y es excitante ver como sus manos recorren ahora su cabello…masajeándolo dejándome a la vista la perfecta redondez de sus pechos, la rigurosidad de sus pezones erectos…..

Estoy tentada en darle a conocer mi presencia en el cuarto, pero no. Deseo seguir mirando y sintiendo aquellas caricias sin lujuria que hacen que su desnudez se me haga aun más exquisita, aun más perfecta…mmm, que ganas de ser aquellos dedos ahora recorriendo la suavidad de sus costados…de sus caderas…escabulléndose al inicio de sus muslos firmes y entonces observo como aquellas manos subir rozando suavemente su vientre rozando apenas su pubis…sus labios se entreabren y presiento que esta disfrutando de aquella baño mas de lo que lo estoy haciendo yo al observarla acariciarse así y es entonces que la puesta se vidrio de corre y mirándome a los ojos me dice

  • ¿No piensas acompañarme?