Mi cuñada viviendo en mi casa
Primero la espiaba, hasta que paso lo que deseaba, ella es hermosa.
Mi cuñada viviendo en mi casa.
Empezó hace ya varios meses, era solo mirar a mi cuñada para excitarme, como un quinceañero, ella tiene 18, y mi esposa y yo 25, no es tanta la diferencia, ella es poseedora de una figura lujuriosamente perfecta, unos senos grandes y realmente firmes por el deporte y el karate, una cintura ejemplar, está de tomarla con una mano, y sus caderas vírgenes mas firmes aun, su colita paradita, firme como todo lo demás, unas piernas largas que realzan toda su figura de diosa, con su pelo largo, liso y castaño claro, es la combinación perfecta para la perdición de cualquier hombre. Pero eso era ya parte de mi rutina, verla algunos fines de semana al mes me bastaban para desearla solo con el pensamiento, pero, el diablo se puso de mi lado y ella para poder estudiar en la universidad debió viajar y quedarse a vivir en la casa de su hermana, obviamente mi casa también, hoy es septiembre y su llegada fue en marzo, ya al mes en la casa me comencé a desesperar, verla en pijama, en toalla, sentirla en la ducha eran cosas habituales las que desquitaba en la cama con mi esposa, luego me puse mas osado, escribo ahora desde mi computador y como tanta tecnología al alcance no se puede desperdiciar, compre una webcam sin que nadie lo supiera, fue todo un reto instalarla, utilice ingeniosamente los mismos conductos de los cables de la electricidad, con un simple alambrito, hasta llegar a su pieza, tardé como una semana, debía estar solo en casa, mi esposa trabaja y eso ayudó bastante, en otras circunstancias ni lo habría pensado. La posición fue indiscutidamente perfecta, casi en la esquina de la recamara, en uno de esos relojes cucú que no lo son y que se pueden comprar en cualquier importadora china, para evitar riesgos atornillé fuertemente el reloj a la muralla, si lo notaban diría que estaba así hace mucho, soy algo "maestro" así que no notarían nada, además para que sepan y aprendan al desarmar una webcam puede disminuirse el tamaño al mínimo y así acomodarla mejor, y así fue.
Comenzó el juego al otro día, mi esposa y yo somos maestros de escuela, para resumir, tres días a la semana quedamos en casa en la mañana mi cuñada y yo, dos días ella sale solo una hora y media después de mi esposa y yo hasta la tarde y un día salgo junto con ella, en fin, comienzo con mi turbio plan a observarla desde antes de que despierte, ella hace todos los días lo mismo, al sonar el reloj saca su mano y lo detiene, luego descubre su pecho con camisola, después con sus piernas se destapa entera, se queda ahí varios minutos rascando sus ojos y su cabeza, se quita su calzoncito y lo lanza a los pies de la cama, se sienta lentamente y se quita la camisola para volver a quedarse en la cama por unos minutos, desnuda, son sus pechos grandes y duritos que se afirman casi perfectamente en esa posición, su vaginita esta ahora menos velluda que al principio, casi peladita, me desespero cuando en algunas oportunidades ella se toca ardientemente, se masturba ingenuamente con sus deditos, pero parece no encontrar el clímax como yo al otro lado de la casa, la he visto jugar en su cama desnuda por ejemplo a tocar acostada sus pies, llevándolos hacia ella, hacia su rostro, entre cositas como esas, después de este espectáculo maravilloso se levanta se envuelve en una toalla para ir a la ducha, minutos que aprovecho para preparar desayuno como si con el ruido de la ducha despertara, pongo el agua, prendo alguna luz y voy a trabajar supuestamente a la biblioteca, como todo en mi computador esta mas que oculto, me hago el leso con algún archivo o tarea o documento de algo, por si ella se asoma, vuelve tranquilamente a su dormitorio, se termina de secar para maquillarse completamente desnuda, encremar su cuerpo, es hermoso, se pasea en la intimidad de su recamara desnuda completamente, prepara su ropa pero no se viste hasta el final, arregla sus libros y cuadernos de su escritorio, en fin, es lo mas hermoso que he visto jamas, se peina sentada hasta sus anillos y cadenas, toma entonces su sostén y se lo coloca seguido de la blusa o polera, después sus calcetines y frente al espejo como casi todos los días se vuelve a tocar su vagina, intentando masturbarse inocentemente, sin conseguirlo, esto es de pie, se coloca su calzoncito diminuto, siempre blancos y el resto de ropa, toma sus útiles y sale de su pieza, al minuto la siento llamarme para el desayuno, quejándose siempre por que olvido el agua en el hervidor....
Pero esto no concluyó ahí como creí que seria, aunque siempre la imagine en mis brazos, creí saber que nunca pasaría entonces no sufrir ni esperar nada, así había funcionado, ella confiaba mucho en mi, pues también somos amigos, comemos juntos por ahí si nos encontramos, voy por ella a clases si lo necesita, la llevo a su universidad, dinero, etc. y todo con buenos ojos, mi esposa jamas ha dudado de ello. En fin, llevando un par de meses en las mismas y sin decir ni demostrarle deseo alguno, una de esas mañanas de webcam creo que comenzó todo justo aquí, observándola yo en los últimos minutos de vestirse, como siempre a medio vestir se tocaba su hermosa vaginita, su culito estaba entrando en el juego, y frente al espejo, la vi colocarse rápidamente el resto de la ropa, y salir de la habitación, tiempo suficiente para desconectar evidencias, va donde estoy y pregunta mostrándome sus pechos claramente delineados, si la ropa que llevaba era la adecuada, si se veía bien, hasta que pregunto si sus pechos estaban bien o eran muy grandes y por eso se veía mal, me tomo por sorpresa, lo reconozco, y solo dije que sus pechos eran hermosos y que con su cuerpo estaban perfectos, son muy lindos dije y ella sonrió sonrojándose como yo, gracias dijo y se fue.
A la semana estaba nuevamente con una pregunta del mismo estilo, por sus jeans, mi respuesta fue casi igual pero que prefería yo una faldita, era a mi gusto más sexy, y el problema ahora era el culito, y como un caballero respondí que era el culito más hermoso que conocía, que su figura era perfecta, y que me encantaba, pregunto ella después de un silencio si realmente un hombre podría fijarse en ella, entonces la tape en piropos y bellas frases, era lo que quería escuchar no creen, me preguntó si yo haría el amor con alguien como ella, por supuesto le dije, si todo esta bien planeado para que de ninguna manera tu hermana se entere, claro, y me lance en picada, es una proposición dije, no respondió, y comencé con algo de psicología barata hasta que me acerque y la bese, despacito y respondió tímidamente, nos besamos un largo rato aunque yo quería llevarla a la cama, pude tocarla enterita, sus pechos son realmente exquisitos, entre su blusa la sentí húmeda por la ducha y su conchita mas que húmeda, su culo es para los dioses, sus piernas divinas pero solo desabroche ropa, no saque nada, ella solo me basaba a si que solo la atendí en lo que quería, no la presionaré, pensaba, después de un rato paramos y le dije que mi esposa jamas se enteraría, así podríamos hacer de todo cuando ella quisiera, de todo insistí, que yo también lo quería, dijo que si, como es su hermana no quiere ser odiada, debía irse y nos detuvimos y nos arreglamos, ella me pregunto si de verdad me gustaba, si se repetiría y accedí a todas sus peticiones, top secret y sin presiones, a estas alturas el agua estaba fría para el desayuno, en fin se fue dejándome con un dulce beso de despedida....
A los dos días ya estabamos empezando nuevamente, esta vez al despertar bajó a buscarme, con su camisón y rápidamente busco si había alguien mas en casa, no dije mientras trabajaba en mi computador, se acerco y me beso, fue un beso tiernamente ardiente, se sentó de lado en mis piernas y besándonos pude meter mi mano desde sus tibios muslos hasta sus pechos que estaban ligeramente sudados, casi resbalosos al tacto, pero tan firmes como una naranja, a esto mi sexo estaba en las alturas, entonces mientras una mano estaba en su espalda afirmándola la derecha estaba ya bajando su tanguita, y la sensación de tocar esa casi desvellada conchita, estaba ardiente, estaba muy húmeda la toque toda, desde abajo hasta el ultimo vello arriba, despacito, humedecí mis dedos para tocar levemente su clítoris con la punta de mi mano, ella dejaba de besarme y solo me miraba a los ojos y miraba su sexo, mi mano, subamos dije, y en su recamara empezó todo de nuevo, esta vez quite su ropita despacito, y la mía, ella no dejaba de mirar mi pene, tome su mano y la lleve a el, lo toco todo, con movimientos suaves la tire a la cama para subir sobre ella, soy virgen dijo, y tengo algo de miedo, etc, no te preocupes dije caballerosamente, dime lo que sientes y si duele o quieres detenerte, aunque quería solo tomarla y darle hasta morir, es la gallina de los huevos de oro así que no puedo matarla, pensé, y comencé a besarla desde su boca hasta su cuello, después baje a sus pechos y uno por uno los bese los mordí los chupe los lamí, fue exquisito, su conchita mojaba mi estomago, podía sentirla palpitar de excitación.
Seguí despacio a su estomago y fue cuando ella comenzó a gemir suavemente dejo de solo abrazarme y empezó a acariciarme, la voltee para besar toda su espalda y su culito que están divinos, ella no dejaba de gemir y de decir así, así, eso me estaba por matar de calentura pero faltaba lo mejor, la volví y seguí besando sus piernas hasta sus pies, y volvía hasta su conchita sin tocarla hasta que me quede ahí, como alguna vez leí como es mejor hacer sexo oral, puse todos mis conocimientos y comencé con mi lengua entera desde abajo hacia arriba y le saqué un gritito de placer, mi lengua siguió haciendo de las suyas, letras, chupaditas, movimientos circulares, mi aliento en su clítoris, hasta que ella comenzó a gemir mas fuerte y dándole dándole gritó, si grito fuerte y me apretó la cabeza contra ella, contra su sexo y respirando rápido y fuerte dijo, creo que tuve un orgasmo, subí hasta su rostro, y la bese, ella me beso, pregunte si era su primer orgasmo, pues si respondió, como te dije era virgen, sigues siendo virgen respondí y fue increíble su rostro hermoso mirándome asustada y confundida, nos besamos, sin decir nada busque su vagina con mi pene y comencé lentamente a penetrarla, nos mirábamos fijamente, pude sentir su dolor al apretarme ella la espalda y arañar suavemente, entonces me detuve, no dijo ella, sigue, quiero estar contigo así, seguí, pero su dolor era evidente, sigue esto debe pasar no?, decía ella, hasta que entre todo y ella se retorció de dolor me quede ahí un rato y luego salí, aunque me quede con las ganas, fue lo que debía hacer, nos besamos y nos duchamos juntos, la he tocado toda, la he besado toda, y desde la semana que siguió hacemos el amor como buenos amantes, ella me complace en todo, todo, y yo a ella, desde entonces, casi dos meses, tenemos hora y media tres veces a la semana para amarnos, ya ella se cuida, pues la lleve al doctor, ella dice que es feliz así, yo estoy en lo mejor de mi matrimonio, le hago el amor a mi esposa como lo hago con mi amante, y mi esposa es feliz pues no sabe nada. Si tienen algo que decirme se los agradeceré a depep@latinmail.com adiós y gracias.