Mi compañera Cris

Mi compañera de trabajo Cristina. Hola buenas, me llamo Carlos tengo 33 años y estoy casado con dos niños. Lo que voy a contar en gran parte es verdad, el hecho básicamente si lo es, el como sucedió inventaré un poco. Todo esto empezó, como todas estas cosas empiezan, con bromas y las típicas tonterías entre compañeros de trabajo y sin darnos cuenta todo esto se empezó a liar hasta que terminamos por liarnos. Y es de algo que no me arrepiento, para nada porque descubrí a una persona y no caía nada bien a mis de mas compañeros, pero cuando la conocí mas profundamente me demostró que es casi una diosa en la cama y lo que necesitaba era alguien como yo que desease el sexo como ella lo deseaba. Todo empezó como comenté al principio con las tonterías del trabajo, todas estas tonterías las aproveché para acercarme mas a ella (no fue fácil, es una persona de semblante muy serio y un temperamento muy variable), físicamente lo que mas llama la atención y lo que verdaderamente me llamó a mi la atención fueron sus pechos, grandes y muy bien pues a pesar de sus dos embarazos, por lo demás es mas bien poco agraciada, tiene media melena mal peinada, gafas que no la quedan mal del todo, cejas muy pobladas y cuando la miro a la cara y me da por pensar en que cantidad de pelo debe tener en la entre pierna. Bueno después de esta seudo descripción de mi ahora amante voy a contar como empezó todo. Comida de navidad con la empresa, como yo ya había tonteado con ella y sabia que los de mas no les hacia mucha gracia sentarse con ella , me hice el tonto y me senté a su lado en la mesa. Durante la cena pues lo típico, dijimos muchas tonterías nos reímos mucho (todos menos ella) yo de vez en cuando la pinchaba para ver si se animaba, pero solo bebía y echaba miradas de pocos amigos, aunque lo de beber no me importaba porque tarde o temprano el alcohol haría su efecto en ella. Casi cuando no nos lo esperábamos nadie de la mesa empezó a charlar normalmente y sin malos gestos como en ella es normal, en la mesa nos mirábamos extrañados de su actitudud. La gente de la mesa no la deba mucha bola y yo por ejemplo por lo que me convenía intentaba animarla mas aún. Cuando terminó la cena y nos levantamos para tomar una copita en mismo restaurante yo salí un a la calle para respirar un poco de aire fresco, porque con el vino que tomé para mi era suficiente y acalorarme.

A los diez segundos de estar yo en la calle y sin dar me tiempo a encenderme un cigarro salio Cris a buscarme para invitarme a tomar una copa dentro. Y sin terminar de decir esto cojio el cigarro que tenia recién encendido y me lo quito de las manos, otra sorpresa para mi, porque nunca la había visto fumar y cuando cogido el cigarro la pregunte que como era eso de fumar ella...... y contesto..... que estas fechas y estos eventos son para hacer cosas que normalmente no haces.... le dio tres caladas profundas tosió en una de ellas y me ofreció el cigarro para que lo terminara yo. No dude y lo acepte sin pensar y al meterme el cigarro en la boca noté que estaba muy húmedo.... la pregunté que si no tenia frío, porque salio en mangas de camisa y con una camisa muy escotada. Ella se miró y me contestó que con lo que había bebido en la cena estaba muy acalorada y que por ahora no sentía frío, aunque yo la noté que los pezones de los pechos estaban empezando a ponerse erectos y daba sensación de estar muy duros. Creo que a todo esto ella se dio cuenta que no podía mantener mi mirada en su cara y se desviaba a sus pechos, pero ella lo único que hizo fue cruzarse de brazos y apretarse aun mas los pechos..... Después de todo esto regresamos dentro y lo dicho me invito a una cepita, mientras tanto se fue pasando el tiempo hablando cada uno con unos y otros compañeros. Yo cuando podía y la encontraba la buscaba con la mirada y en varias ocasiones se encontraron nuestras miradas y a mi la vista de sus pechos me agradaba en demasía. Cuando empezamos a despedirnos ella se acercó a mi y me pregunto que iba hacer, si retirarnos cada uno a casa y irnos a tomar a algún otro bar, yo en principio hice un gesto de indiferencia, a la espera de saber que quería hacer ella y sin esperar mucho ella, contesto que si alguien la acompañaba ella seguí de juerga ya que para una vez que podía ser sin la obligación de tener que recoger a los hijos, ya que se quedaron con su marido. Entonces nos apuntamos dos chicas mas y un chico mas aparte de yo mismo.

Cuando llegamos al nuevo bar enseguida pedimos una copa Cris y yo mientras espirábamos a los demás. En ese tiempo que estuvimos solos que fue un cuarto de hora y  corta ni perezosa, me pregunto directamente y sin cortarse nada... que me iban parecido sus pechos ya que notó desde que salimos a la calle que no los quitaba ojo y que aun seguía sin hacerlo.... me quedé un poco cortado, pero conseguí contestarla diciendo..... que me perdonase por mirarla tan descarada mente, pero que cuando estábamos en la calle noté como empezaron a ponerse duros sus pezones y desde ese instante me fue imposible retirar la mirada de sus pechos...... Cris me contesto que no pasaba nada y que no se sentía molesta por ello.... que la gustaba que yo en particular me fijase en ella y en ese preciso momento ella metió una de sus manos en su escote desabrochó un botón y ahuecando la camisa para así poder ver un poco sus pechos. Todo esto lo hizo mirándome y guiándome un ojo, viendo como mis ojos se dirigían a su hermoso escote, hecho una sonrisa y levantándose del taburete pasó por mi lado restregándome los pechos en mi hombro y se dirigió a los aseos. Ya solo con esas insinuaciones empezaba a estar bastante excitado. La perseguí con la mirada mientras ella se dio la vuelta para sonreírme y sacarme la lengua de forma picarona.

No tardó mucho en regresar y siguió insinuándose, dándome muchos abrazos haciendo que sus pechos se tocaran con  cualquier parte de mi cuerpo. Yo no aguantaba mas y cada vez que ella me hacia eso yo me pegaba mas aun, pero tomé la decisión de seguir con este juego hasta que ella quisiera algo mas y me lo pidiese de una u otra forma. En esto llegaron nuestros compañeros y el nivel de insinuación bajó un poco, pero cuando podíamos hacíamos por tocarnos. En tres ocasiones y con el tumulto de la gente ella aprovechó para tocarme en la entre pierna con la mano y apretándola contra mí. Yo estaba como que muy caliente, pero seguía en mis trece con no ser yo quien propusiera irnos a culminar el juego de las insinuaciones en un gran polvazo.

Cuando ya casi me venció el deseo de proponerla que nos fuésemos y delante de los compañeros decidí coger mi abrigo y salir a la calle a tranquilizarme y pensar que tengo familia. Trascurrido 3 o 4 minutos, mi compañera apareció por detrás y sin darme opción me cogio del brazo y me dijo que nos fuéramos a un piso de su propiedad en el que no vivía nadie ahora, ya que sus últimos inquilinos se fueron hace poco mas de un mes. En esto que cuando empezamos a andar hacia el coche, la pregunté ¿para que? y soltando una gran carcajada, me respondió al iodo "para follarnos, gozar lo máximo y recuperar la pasión perdida con nuestras respectivas parejas" al terminar de decirme esto aprovechó que estábamos en una calle poco transitada en besarme el cuello mientras se restregaba contra mi y me metía mano. Tengo que reconocer que dejé de pensar en mi familia y decidí dedicarme a mi compañera. Cris siguió abrazada a mi y una de sus manos la introdujo en mis pantalones y agarrandome el miembro empezó a decirme lo duro que lo tenía y lo que iba hacerlo gozar y el placer que tenia intención de inflingirle. Yo, aparte de estar muy cachondo no podía imaginar lo que iba hacer conmigo Doña Cristina, por lo que la conocia, pensaba que era mas bien de las que se comportan como si fueran una estatua. Me refiero a que se tumban y esperan a que se la metan se corran y hasta la próxima, pero con lo que me iba haciendo de camino al coche cambio mi forma de pensar y me podía esperar cualquier cosa.

En principio lo que mas me gustaba de lo que estaba pasando es la sensaciones que había perdido en mi relación. Me refiero a la pasión y el deseo descontrolado. Estas sensaciones me ponían tanto o mas cachondo que el meterme mano y el restregar sus tetas contra mi. Al llegar al coche nos montamos y nos dirigimos hacia su casa.  En el coche Cristina se desbrochó un par de botones de la camisa cogió mi mano y la introdujo en su escoto y dentro del sujetador, aunque aprisionadas contra el sujetador noté como sus pezones ya estaban bastante duros. Ella me dijo que si ahora ya los tiene duros esperaba que yo consiguiese ponérselos aún mas duros cuando lleguemos a su casa. Al terminar de decir esto secó mi mano y se la llevó a su entrepierna y apretando contra si misma, solo me dijo que de ahí tenia que conseguir hacerla chorrear sus jugos vaginales. Yo conteste diciendo que no se si conseguiría hacer eso, pero que por ganas no serían que deseaba hacerla correr entre sus piernas torrentes y hasta cascadas de sus jugos de los cuales no me importaría saciar mi sed. Cris llevo su mano hasta mi miembro lo apretujó por encima de los pantalones y al instante desabrochó mis pantalones e introdujo su mano para agarrar directamente de mi erecto miembro.

En un par de minutos llagamos hasta su casa y nos bajamos del coche. Yo me abroche y salí, ella no se paró ni a abrocharse los botones de la camisa. Al entrar en el portal nos dimos un gran beso, donde nuestras lenguas mezclaban saliva apasionadamente. Llamas el ascensor y subimos hasta la ultima planta. Cris abrió la puerta, entramos los dos y cuando la cerró, nos miramos intensamente y volvimos a besarnos agarrados de las manos y apretándonos fuertemente. Llegamos hasta el salón dándonos besos y mordisqueándonos la boca, cuando estábamos frente al sofá nos dejamos de besar, nos separamos un poco y empezamos a desnudarnos. Cada uno nos quitamos nuestra ropa, despacio y sin dejar de mirarnos de forma lasciva y llana de deseo, un deseo que no sentía desde hace mucho tiempo. Cris se quedó con su ropa interior puesta, era unas prendas intimas muy sugerentes. Era de color verde oliva muy fina y suave, dejaba ver todo lo que había debajo de ella. Las aureolas de sus pechos son grandes, proporcional al tamaño de sus pechos, los pezones ya estaban intentando destacar de sobre manera y se clavaban en el sujetador. Las bragas eran del mismo color y transparente como el sujetador, las bragas la cubrían sus nalgas por la mitad y dejaba ver por delante unos pelos recortados sobre la rajo de su coño. Cris se fijaba en el bulto de mi entre pierna, ese día llevaba unos bóxer. Ella tomó la iniciativa y empezó a bajar hasta colocarse de rodillas. Me miró y sin mas agarró mi polla y de repente desapareció dentro de su boca, solo dejó fuera los huevos. Mi cara tenía que ser de sorpresa y satisfacción al ver a mi compañera tragar mi polla de esa forma. Yo la cogí de la cabeza y aunque no hacia falta la empujaba contra mi, ella no protestaba solo engullía mi polla multitud de veces. Me miraba y me encantaba la forma de mirarme...