Mi chica quince 7

La relación entre Raquel e Ismael se recupera y mejora ostensiblemente. Surgen nuevos problemas, nuevas preguntas para Ismael sobre Raquel

MI CHICA QUINCE - 7

Estaba metido en la cama, tumbado de lado compadeciéndome de mi mismo…  había estado saliendo con Raquel, un mujer de ensueño… y esto había terminado así por mi culpa, por la cerdada que le había hecho… sinceramente pensaba que lo mejor para ella es que se mantuviera alejada de alguien como yo, alguien que ni estaba a su altura ni se la merecía. Toda la seguridad que sentía cuando estaba con ella, toda esa fuerza que me transmitía... todo eso desaparecía en su ausencia… seguía siendo el mismo, pero sentía como un vacio… y ahora ese vacio parecía un pozo sin fondo…

Sentí como se abría la puerta y pasos apresurados en dirección a mi habitación, se oía el fuerte taconeo de alguien andando a toda velocidad. Estaba seguro de que sería Marta que volvía echa un basilisco después de que Raquel le contara lo que paso entre los dos… algo que me daba igual… lo peor que me podía pasar era perder a Raquel y eso ya había sucedido con toda seguridad, además que la misma Marta me lo dijo el día anterior, que Raquel estaba pensando muy seriamente en cortar conmigo… así que, como si me quería matar, al fin y al cabo lo que sentía en esos momentos era que quería morirme, lo mismo incluso me hacia un favor.

Cuando sentí como se abría la puerta de mi habitación con brusquedad me encogí en la cama… estaba mirando a la pared, dando la espalda a quien entro… pensé que era un blanco fácil… mejor. Espere ansioso a que Marta me empezara a sacudir, o a que me montara el pollo padre y me llamara de todo por lo de Raquel… esperaba que me hiciera todo el daño posible por mi conducta… por haber sido un puto cerdo con Raquel, pero resulto increíble, sentí como alguien se tiraba encima mío abrazándome, como me besaban en la mejilla y como caían lagrimas sobre ella… oí sollozos ahogados junto a mi oído… mi maltrecho cuerpo se estremeció.

No era Marta… era Raquel… Raquel había venido a mi casa, estaba abrazándome, besándome… y estaba llorando… Fue todo un shock para mi, de no esperar volver a tener contacto con ella a tenerla allí abrazada a mi llorando… no entendía nada, pero una cosa si tenía clara… de repente y aunque os pueda parecer estúpido, en ese momento una sola cosa paso por mi cabeza, y debido a ello reaccione con muchísima brusquedad con Raquel… Pegue un salto, me reincorpore sujetando con fuerza a Raquel de los brazos, empujándola con fuerza lejos de mi…

- Ismael : Fuera de aquí… quítate ahora mismo… suéltame joder… fuera coñoooooooo…  (Le pegue un empujón usando todas mis escasísimas fuerzas)

- Raquel : Pero… (Sus ojos soltaron un nuevo torrente de lágrimas ante mi rechazo… un gemido escapo de sus labios llevándose las manos a la cara)

- Ismael : Pero tú estás loca o que… como se te ocurre hacer eso… ¿es que quieres ponerte mala tu también…? ¡Joder Raquel…!

Debido al esfuerzo empecé a toser de mala manera… me incline sobre mi mismo debido al dolor que me provocaban las toses en todo el cuerpo… No podía ni con mi alma… Lo peor fue que Raquel me callo encima como un torbellino mientras yo intentaba como podía decirla que se podía contagiar… se puso a abrazarme, besándome por todos lados… intente quitármela otra vez de encima mientras me ahogaba con las toses, pero no había forma, debido a mi estado en esos momento yo era mucho más débil que ella, con lo que solo me quedo el patalear y gritarla que se quitara que se iba a poner mala…

- Raquel : Me importa un bledo… quiero besarte… (Se dedico a ello con ansia)

Entonces en la puerta sonaron varios carraspeos… o algo así, porque se debían de estar partiendo de risa con la escena que estaban viendo… debía de ser algo surrealista, como buenamente pude mire hacia la puerta, encontrándome en ella a unas sonrientes Marta, María y Ana…

- Ismael : Dejad de reíros las tres de un puta vez y quitarme a esta de encima coño… que voy a terminar contagiandolaaaaaaaaaaaa…. Moveos joderrrrrrrrrrrrr…

Riéndose las tres lograron separar de mí a una sonriente y llorosa Raquel. Ni os digo el broncazo que intente meterla todo alterado entre toses y dolores… Fue superior a mí, todo lo que pensaba sobre romper, todo lo que suponía sobre que me había dejado, todo lo que le hice… todo eso desapareció de mi mente sustituido por el hecho de que podía contagiar a Raquel y la posibilidad de que por mi culpa se pusiese mala…

Entre unas carcajeantés María y Ana sacaron a Raquel de mi habitación diciéndome que me calmara que ya se la llevaban lejos de mi… vi que a Raquel no le hacia la menor gracia eso de tener que irse de allí, pero por alguna razón se iba además de sin ganas y enfadada por ello con su hermana y su prima, con una sonrisa de oreja a oreja aunque tenía lagrimas en los ojos... al verla salir así pensé algo como… “Qué raro, ¿no?”. Mientras ellas se iban al salón Marta se quedaba conmigo llamándome de todo por el esfuerzo que estaba haciendo en mi estado… lo jodido fue cuando sacaron a Raquel de mi habitación y me pego el bajón… ¡¡¡¡Dios!!!, me dolía hasta el alma… con deciros que me quede dormido en medio de la bronca de Marta, creo que os podéis imaginar cómo termine con el esfuerzo por alejar de mi a Raquel…

Dormí poco, realmente poco, digamos que solo dormite durante unos cuarenta minutos más o menos… cuando volví a abrir los ojos estaba solo en la penumbra de mi habitación. Sentía murmullos de alguien hablando en el salón, dado que me dolía la garganta también y tenía la boca tan seca que parecía un estropajo, me levante con cuidado para irme a la cocina a tomar un poco de agua… Para pasar hacia la cocina debía de pasar junto al salón, que estaba con la puerta cerrada sin duda para no molestarme, al pasar junto a la puerta las voces se hicieron más nítidas…

- Raquel : No te preocupes que solo ha sido una tontería entre los dos…

- Marta : Mira Raquel, no he querido decir nada mientras estuvieran aquí tu hermana y tu prima, principalmente porque bastante tienes todavía con lo suyo e Ismael como para hablar algo que te pueda molestar delante de ella…

- Raquel : Gracias por ello… sabes que…

- Marta : No sé nada de nada Raquel, tú estabas pensando en romper, y por sus reacciones se que Ismael estaba pensando en que te había perdido y ya habíais roto los dos… ¿Qué coño es lo que ha pasado entre ambos Raquel?

- Raquel : Nada serio Marta, de verdad, me explico algo que no me gusto… y me lo dijo de un modo muy bestia… pero bueno, me he dado cuenta de que en cierto modo tiene razón en lo que me decía, por mucho que no me haya gustado…

- Marta : No me tomes por idiota hazme el favor… que pasa, que coño es lo que pasa entre los dos… Joder Raquel, que para que desecharas todo lo que estabas pensando sobre romper ha hecho falta que Ismael casi pillara una neumonía… ¿Qué narices ha pasado?

- Raquel : Mira Marta, no te enfades, pero eso es algo entre él y yo nada mas…

- Marta : Raquel guapa, estas empezando a enfadarme, por si se te ha olvidado el es mi mejor amigo… además te recuerdo que llevo meses ayudándote a cazarlo, porque se como es el y sé que tu estas de verdad pillada con el… hacéis una pareja genial y se ve que os queréis los dos… así que no me toques mas las narices y empieza a soltar por esa boquita… “Mona”

En ese momento fue cuando volvió mi maldita tos, tuve casi que salir corriendo de puntillas hacia la cocina, como pude aguante la tos hasta cerrar la puerta, después cogí un trapo de cocina y lo use para taparme la boca en lo posible y así amortiguar la tos para que no me escucharan… Después de eso bebí un poco agua templada del grifo para intentar que mi boca volviese a un estado normal… los labios incluso se me estaban empezando a cortar por la sequedad… Una vez me asegure de que volvía a estar más o menos bien, cogí un vaso de agua para llevármelo a la habitación y no tener que estar levantándome para mojarme los labios de vez en cuando.

Cuando llegue a la puerta del salón me detuve para ver si podía intentar seguir escuchando algo de lo que las dos hablaban… después de lo que había oído antes tenía claro que iba a tener una charlita con Marta que había estado demorando en demasía… Estaba claro que si no quería que me enfadase en serio con ella, iba a tener que darme ciertas explicaciones, y desde luego más le valía que fuesen buenas. Me volví a detener en el mismo sitio que antes para intentar seguir escuchando…

- Marta : Bufffff… es que no me puedo creer lo que me dices que hizo ese idiota… en qué coño pensaba para hacerte algo así…

- Raquel : Bueno… creo que en cierta forma es culpa mia que el este así…

- Marta : Si te refieres a que este ahora mismo hecho una mierda por la gripe o que casi se haya cogido una neumonía, desde luego que es absolutamente culpa tuya por dejarlo todos los días como lo debías de dejar… eso es impepinable… pero lo de asaltarte así… joder, es que es para darle de ostias por ser un hijo de puta…

- Raquel : Lo cierto es que me gusto que lo hiciera… yo…

- Marta : Pero qué coño que te gusto Raquel… abuso de ti joder… le conozco y por lo que me has contado se que solo lo hizo para que tu sintieras lo que él y que así te dieras cuenta en tu propia piel, es tan imbécil que no pensó en que era como una violación para ti… también se que no te dejo como tú a él y que lo disfrutaste, créeme que se como es capaz de hacer que te corras, se lo buen amante que es, recuerda que he sido su novia durante más de dos años… pero coño, es que…

- Raquel : No Marta… me refiero que me gusto que me asaltara así… lo cierto es que cuando se abalanzo sobre mi me asuste, pero al ver lo que quería y la forma en que lo hacía, por cómo me sujeto y me intento inmovilizar para acariciarme se… estoy segura que era él quien se estaba haciendo daño solo para evitar hacérmelo a mí… Puede que te parezca una estúpida, pero eso me puso a cien, me puso chachondisima el verlo así por mi… no sé ni porque lo intente evitar o me puse así luego con él, incluso después de correrme estaba deseando que me follara, le deseaba como jamás he deseado a nadie… pese a todo… he pasado un fin de semana de mierda, solo quería correr otra vez a él para repetirlo… pero supongo que mi orgullo… es que no se joder…

- Marta : Raquel, de verdad que no te entiendo… me estás diciendo que te acaricia y alcanzas el orgasmo enseguida, que le deseas como nunca… pero le tienes en ese estado todo este tiempo… que este finde has estado deseando que volviera a pasar otra vez, que le has estado deseando… pero sin embargo el lunes me dijiste que querías romper… joder, de verdad que no te entiendo.

- Raquel : Ya lo sé Marta, no me entiendo ni yo misma… no se qué coño es lo que me pasa… estoy totalmente bloqueada con el… ¡Joder!, que todo esto es una mierda Marta…

- Marta : Pues te voy a decir una cosa en su favor Raquel, si esto se lo hubieses hecho a otro tío, ya te garantizo yo que a estas alturas tendrías mas cuernos que un ciervo… no todos serian capaces de casi coger una pulmonía por no engañarte… deberías meditar sobre ello… si continuas en este plan antes o después le perderás, pese a todo lo que aguanta por ti sigue siendo un hombre con sus necesidades, y creo que a estas alturas sabes de sobra que sexo no le ha faltado nunca. Si decide romper contigo en serio por esto… no podre hacer nada por evitarlo… te sugiero que lo pienses detenidamente antes de volver a las andadas… yo que tu, procuraría ir dándole algo ya mismo o ponerme en terapia para superar lo de tu prima, lo que sea… pero haz algo Raquel antes de que le pierdas… todo tiene un límite, y el también.

Tras esto que me pareció una finalización de la conversación me fui raudo a mi habitación, lo último que quería es que me pillaran allí de pie escuchándolas por casualidad…. En la cama empecé a pensar en todo lo que había oído, en primer lugar no iba a consentir que Raquel se sintiese culpable por nada, todo esto era culpa mia por no haber hablado antes con ella sobre los problemas que su comportamiento me creaban, y en segundo lugar, estaba claro que la charla que había estado demorando con Marta, no podía demorarla ya por mucho mas… en cuanto pudiera me iba a tener que explicar algunas cosas, como lo de llevar varios meses ayudándola a pillarme… con razón Raquel parecía sintonizar también conmigo…

Esto que oí era todo un problema, Raquel y yo nos llevábamos estupendamente, nos complementábamos muy bien excepto en intimar por aquello sucedido con su prima, pero ahora no tenía nada claro que todo esto de ser tan el uno para el otro no fuera falso por su parte, y que solo fingiera para coincidir conmigo en gustos asesorada por Marta… Sinceramente no lo creía, porque cuando hablábamos de nuestros mutuos gustos coincidentes, ella sabía perfectamente de lo que hablaba, muchas veces incluso, sabia de lo que hablaba mucho mejor que yo… pero la conversación entre ellas me acababa de poner en un brete, no podía evitar pese a todo tener algunas mínimas dudas al respecto, necesitaba hablar con Marta seriamente cuanto antes y a solas.

En una semana estuve otra vez en pie y completamente repuesto, además lo logre antes de que llegara mí hermano, sino la que me hubiese caído… En fin, la situación entre Raquel y yo volvió a la normalidad, tuve que ponerme de lo más serio con ella para poder disculparme por lo que hice… no quería ni oír hablar del tema, prácticamente podríamos decir que la forcé a escuchar mis disculpas y explicaciones… no sabéis lo duro que se me hizo esa conversación con ella por lo que le había hecho… cuando por fin termine de disculparme, de explicarme… tenía los ojos con lagrimas y estaba pasando una vergüenza por lo que le había hecho como nunca creo haber pasado. Según termine Raquel se tiro sobre mí empezando a besarme diciéndome que para que me perdonara tenía que esmerarme con ella…

Si se hubiese tratado de otra chica no me hubiese hecho falta más para lanzarme a por ella y empezar a meterla mano… si me corta pues nada, y si me deja pues a follar. Pero con Raquel… la quiero, y después de lo que sucedió no me atreví a lanzarme, me limite a devolverle los besos mientras estábamos tumbados en el sofá de mi salón tras mis disculpas… Un par de minutos después se aparto un poco de mi…

- Raquel : ¿Qué ocurre cielo?

- Ismael : Nada… no ocurre nada, ¿Por qué?, ¿he hecho algo mal?

- Raquel : (Se incorporo del todo, sentándose mientras me miraba fijamente) Ismael… me acabo de lanzar sobre ti y solo me estas besando… no has intentado acariciarme ni nada… ¿Qué pasa mi vida?

- Ismael : Es que no quiero que te sientas mal… después de lo que paso no quiero abusar… cuando tu…

No me dio tiempo a hablar más, me sello los labios con los suyos, una de sus manos cogió una de las mías, llevándola sobre su sexo por encima del pantalón… la dejo allí mientras notaba como se lo intentaba desabrochar ella misma… Apenas unos segundos después se levanto de encima mío, me cogió por las manos y tirando de mi me hizo levantarme. Una vez levantados me dio un beso en los labios y me dijo…

- Raquel : Vamos a tu cuarto…

- Ismael : Pero…

- Raquel : Estaremos mas cómodos en tu cama… venga, vamos… (Tiró de mí llevándome tras ella a mi habitación)

Tras entrar se empezó a desnudar a toda prisa mientras yo hacía lo mismo, lo cierto es que aunque yo suelo ser rapidísimo, solo me había quitado los pantalones cuando ella ya estaba completamente desnuda… después se abalanzo hacia mi diciéndome que le dejara a ella, que quería desnudarme ella… Me levanto la camiseta que llevaba, mientras me la subía, sus labios y su lengua empezaron a jugar con mi estomago, subiendo hacia mi pecho junto con mi camiseta… una vez llego a mi cuello tuve que terminar yo de quitármela porque Raquel estaba entretenida mordisqueándome y lamiéndome los pezones, mientras sus manos acariciaban mi estomago, mi pecho y mi espalda… Con todo esto os aseguro que estaba chachondisimo, al punto de que mi polla no pudo ser retenida por el bóxer y asomo por su cuenta por encima de la cintura, con la cabeza completamente congestionada.

Intente retirarla para besarla y comérmela yo también, pero no me lo permitió, vi como abandonaba mi pecho para bajarse a mi cintura, tiro con las dos manos de mis bóxer dejando mi polla libre de su prisión que quedo completamente erguida ante su cara… Note su duda, tenía la boca entre abierta a escasos centímetros de mi pene, note que no se decidía a metérsela en la boca… Mi deseo era metérsela en la boca y que me la mamara como fuese, pero me controle, fui a decirle que no hacía falta que lo hiciese… pero solo llega a decir… “Mi vida no hace falta q…”, al oírme fue como si una descarga la sacudiera… se metió mi polla de golpe en la boca y empezó a succionarla como si le fuese la vida en ello… no pude ni terminar de hablar debido a lo que estaba sintiendo…

Me tuve que agarrar donde pude, su succión me estaba haciendo estremecer de arriba abajo, era increíble como lo hacía, estaba claro que tenía mucha practica en estos menesteres. La sacaba, lamia el glande, lamia el tronco y volvía a introducírsela por entero en la boca iniciando de nuevo la succión. No es por tirarme flores, pero siempre he aguantado muchísimo en esto, y sin embargo con Raquel apenas aguante un minuto… y eso haciendo todo lo que pude por resistirme… me temblaron hasta las rodillas… me descargue por completo en su boca, no me dio tiempo de avisarla, el orgasmo me llego repentino y demoledor… Para mi sorpresa se lo trago por completo sin dejar escapar ni una sola gota de mi semen… además vi claramente como lo disfruto.

Tras esto la icé en mis brazos en cuanto me recuperé, tumbándola sobre la cama… me estire sobre ella, los dos completamente desnudos… empecé a lamerla los pechos mientras mis manos acariciaban sus muslos y su estomago… sus manos acariciaban mi cabeza mientras de sus labios escapaban leves gemiditos de placer. Cuando mis labios abandonaron sus pechos fueron sustituidos por mis manos, mientras mi lengua y mis labios iban dibujando una ruta de besos y caricias con destino final en su ombligo, que estuve lamiendo y acariciando durante un par de minutos, sus gemidos y jadeos aumentaron lentamente de volumen e intensidad…

Por fin llegue a su entrepierna, pero en lugar de centrarme en su sexo me entretuve en besarla la cara interna de sus muslos, jugando con mis labios sobre ellos… poco a poco fui bajando por ellos rumbo a su sexo que parecía palpitar deseoso de que llegase hasta el. Cuando por fin mis labios y lengua llegaron a su rajita me la encontré completamente encharcada, destilaba néctar sin parar… Raquel intentaba guiar mi cabeza con sus manos mientras jadeaba y gemía sin control… solo tuve que meter mi lengua un par de veces en su sexo, pasarla dando un lengüetazo todo a lo largo de su raja para que se corriera. Sentí como se tensaba, como sus glúteos se contraían, como su sexo empezaba a expulsar grandes cantidades de néctar que me apresure a beber… de repente el cuerpo de Raquel quedo laxo, toda su tensión desapareció acompañara de un ahogado grito que escapo de sus labios…

Seguí tranquilamente acariciándola tras su orgasmo, esperando, dándole tiempo a que se recuperara de su orgasmo. Cuando considere que ya estaba lista para otro combate empecé a lamerla lentamente otra vez el coñito, según noto que mi lengua empezaba a trabajar sus manos volvieron a acudir a mi cabeza… solo unos segundos después Raquel volvía a gemir y a jadear… Introduje un dedo en su encharcado coñito, moviéndolo suavemente en su interior, sus manos se engarfiaron en mi cabeza al sentirlo dentro… se tenso toda ella… note en sus manos como un leve intento de retirarme pero cedió enseguida, al introducir el segundo un profundo gemido escapo de sus labios, sus manos se movieron inquietas y sin control sobre mi cabeza… pronunciaba frases de forma ahogada… “mas, mas”… “por favor sigue…” “joderrrrrrr… ¿Qué me haces cariño…? ¿Qué me haces?”

Procure en todo momento que no pudiese alcanzar rápidamente el orgasmo, estuve variando la intensidad de mis juegos en su sexo para ello, logre evitar su orgasmo, teniéndola al borde del mismo durante un poco más de cuatro minutos hasta que no pude evitarlo más, al ver que era imposible mantenerla mas así, use mi lengua directamente y con suavidad sobre su clítoris… apenas diez segundos después de que entrar en contacto con él, se desencadeno un orgasmo brutal sobre Raquel… se tenso, se convulsionó, se agito, gimió, jadeo, grito de placer… para terminar quedando completamente rendida y jadeante. Salí de entre sus piernas, aprovechando ella para cerrarlas y ponerse un poco de lado, aproveche para situarme tras ella, abrazarla y darla besitos, se volvió a poner bocarriba abrazándose a mí y devolviéndome los besos con pasión.

Me situé sobre ella mientras nos besábamos, estábamos acariciándonos mutuamente cuando me situé entre sus piernas, seguíamos jugando, acariciándonos y besándonos. Mi polla estaba otra vez como un mástil, me empecé a colocar sobre ella, posicionándome para metérsela… tenía mi polla en su entrada, empecé a jugar pasándosela por su rajita pero sin metérsela… estaba besándola el cuello. Sentí su respiración agitada, sentí que había cambiado de ritmo en ella… abandone su cuello para besarla en los labios y mirarla… lo que vi me preocupo, estaba con los ojos cerrados, mordiéndose los labios, moví mi polla sobre su coñito, situándola en su entrada, empuje levemente, lo justo para empezar a abrirla… entonces vi la tensión en su cara, sentí como sus manos se engarfiaban sobre mi espalda, era la misma sensación que cuando le introduje el dedito mientras se lo comía… pero en esta ocasión me retire de ella… moviéndome de lateral sin dejar de besarla en los labios… no quería tensar mas la cuerda después del enorme avance que esto suponía para los dos.

- Raquel : ¿Qué…? ¿Por qué te retiras… es que no…?

- Ismael : Cariño, estoy deseando follarte hasta reventar… pero no así…  quiero que los dos disfrutemos y tu está claro que no lo estabas haciendo…

- Raquel : Pero…

- Ismael : (Puse un dedo sobre sus labios) Shhhhhh… te dije que te quiero y esperaría a que estuvieses preparada… y es lo que pienso hacer… Míranos cielo, de solo besarnos hemos pasado al sexo oral… solo un poco mas y lograremos que lo superes mi vida…

Raquel se abrazo a mí con fuerza, sentí en mi hombro como caían gotas de liquido, supuse que se trataría de lagrimas, separe su cabeza de allí, dejando su cara ante la mia… vi como efectivamente resbalaban lagrimas por sus mejillas, lagrimas que me apresure a recoger con mis labios mientras la besaba… Su cara se ilumino, me sonrió e incorporándose me empujo suavemente hasta que quede tumbado de espaldas sobre la cama, a mi pregunta de qué pensaba hacer, ella me dijo que me iba a chupar la polla hasta dejarme seco del todo… cuando la dije que no era necesario, me dijo que lo que no sería necesario mas es que me volviera a dar ninguna ducha fría, que pensaba dejarme exprimido del todo aunque se le desencajara la mandíbula por ello… En menos de seis minutos me corrí dos veces en su boca sin poder evitarlo, ciertamente Raquel me dejo exprimido y bien exprimido…

Tras mi última corrida íbamos a volver a empezar, por lo menos yo tenía pensado volver a comérmela viva cuando sentimos la puerta de la calle, era Andrés que regresaba de estar por ahí de marcha. Raquel y yo de mutuo acuerdo decidimos dejarlo por esa noche para no darle una serenata a mi hermano… Llevábamos casi quince minutos tumbados, tapaditos hasta la cabeza, abrazados, besándonos, jugueteando y hablando en susurros cuando desde la habitación de mi hermano llegaron unos escandalosos gritos de una mujer en pleno orgasmo… fue superior a nosotros, creo que nuestras carcajadas le cortaron hasta el orgasmo a la pobre chica… nosotros intentando no hacer ruido y ellos a gritos… en fin.

Cuando Raquel se durmió en mis brazos me puse a pensar, lo cierto es que estaba preocupado por su reacción, estaba dispuesta a follar conmigo pese a todo, estaba totalmente entregada a mí. No quería forzar la máquina, gracias al encontronazo que habíamos tenido habíamos avanzado muchísimo… el problema es que ahora, tras este avance me daba la impresión que el bloqueo de Raquel no solo venia por lo de su prima, debía de sucederle algo mas, y no sabía que podía ser, aunque no negare que tenía mis sospechas al respecto. No me importaba esperar lo que hiciera falta, y sinceramente, si no me importaba esperar es porque tenía claro cuánto me quería y todo lo que yo la quería a ella. Antes o después lo solucionaríamos… Lo cierto es que empezó un poco nerviosa por lo que íbamos a hacer, y termino completamente relajada y satisfecha de lo sucedido, sin duda un gran paso adelante.

Me había sorprendido su maestría en el sexo oral y por ahí iban mis sospechas, estaba claro que tenía mucha practica en el… había hecho conmigo lo que le había dado la gana, había bailado a su son cuando me chupaba la polla, esto me preocupaba un poco aunque no exactamente por la razón que seguramente estáis pensando. Veréis, Raquel no daba la sensación de ser tan experta, a ver si me explico, cuando hablabas con ella o la veías actuar te daba más la sensación de ser una chica de poco vuelo. No me mal interpretéis, como digo no me preocupaba lo que sin dudas pensáis, me daba igual si se había follado a diez o a cien, de uno en uno o de seis en seis… pero temía que de ser así, aparte de lo de su prima, también esto estuviera influyendo en ella haciéndola temer lo que sucediera si de ser así yo lo descubría… me parecía una estupidez, ya que yo estaba en esa misma situación, me había cepillado a todo lo que se me había puesto por delante y no se lo había ocultado...

Imbécil no soy, e hipócrita tampoco, así que se también como vosotros lo que pasa en esta sociedad, si un chico se lo hace con muchas es un machote pero si lo hace una chica con muchos, entonces es un putòn verbenero, por lo que sería normal que no quisiera que me enterara y menos que su chico se diese cuenta de ello en plena follada, mucho menos aun como en este caso, estando tan colgada conmigo como claramente lo estaba Raquel. El problema es que con la situación que teníamos ahora, tras lo sucedido, no me atrevía a hablar de ello en este preciso momento, podía joderla bien jodida si pegaba un resbalón con este tema… si era como yo sospechaba, que eso también influía en su miedo a acostarse conmigo, de entregarse por entero a mi por si se excedía y que yo me diese cuenta de que sabia latín, por cómo me lo tomaría al descubrirlo, todo esto aparte claro de sus problemas con lo sucedido con Ana. Si se lo decía y tenía miedo de reconocerlo… podía asustarla y hacerla reprimirse otra vez… y eso era lo último que necesitábamos, y si me equivocaba con esto... entonces apaga y vámonos según por donde se lo tomara… era una situación jodida de verdad.

Pensaba en Marta… en invertir su participación… pensaba hablar con ella y ser bastante duro además, aunque esa dureza ahora dependería de cómo reaccionara a mis peticiones. Pero si ella como sospechaba había ayudado a Raquel para que me pudiera conquistar, ahora me interesaba que me ayudara a mí a intentar averiguar todo lo posible sobre ella. A la mañana siguiente nos levantamos y estuvimos jugando un ratito en la cama, no la deje levantarse sin haberla comido antes el coño en condiciones… y ella no me dejo a mi sin haberme ordeñado antes… éramos tal para cual… más que en disfrutar pensábamos los dos en hacer disfrutar al otro.

Comento esta mañana porque paso algo que me hizo muchísima gracia… me levante para ducharme mientras ella me dijo que se ducharía cuando yo terminara, que le apetecía perrear un poquito (quedarse tumbada en la cama haciendo el vago nada mas). Abrí la puerta vestido únicamente con un pantalón corto y me tropecé con la chica que debió de llegar por la noche con Andrés, una rubita muy guapa y que por toda ropa solo llevaba un jersey largo de mi hermano… yo salude y me fue directo al servicio a ducharme.

Por lo que me entere después, la chica no se debió de dar cuenta de que Raquel estaba en la cama y cuando pase en dirección al servicio ella fue a pararse para mirarme el culo justo delante de nuestra puerta, haciendo por lo visto un gesto apreciativo de que le estaba gustando lo que veía. Raquel al minuto de suceder esto se metió en la ducha conmigo, donde volvimos otra vez a jugar un ratito, cuando después de ducharnos salimos a desayunar con mi hermano y la chica, Raquel llevaba una camiseta mia que era considerablemente más corta que la de la rubita y que hacía que esta quedara a la altura del betún al lado de Raquel… Me hizo gracia porque la notaba celosa a más no poder, estaba pegadita a mí, contra más pegadita estaba a mí, mas me miraba la rubia y más celosa se ponía Raquel que se pegaba un poquito más…

Vi en mi hermano una mirada admirativa sobre Raquel… algo totalmente comprensible por otra parte, Raquel estaba como para comérsela muy lentamente y disfrutarla a conciencia, era una sirena sobre la tierra. Viendo el percal, Andrés me hizo discretamente una seña, indicándome que me la llevara antes de que se liara a leches con su amiga… de hecho a Andrés tampoco le gusto en lo mas mínimo que su amiga me mirara tanto y de forma tan “descarada”, también eso me hizo gracia ya que normalmente hubiese sido al revés, mi chica la que estuviera admirando a mi hermano. La chica lo intentaba hacer disimuladamente, pero con todos pendientes de ella, aunque mi hermano y yo también de Raquel, en mi caso más de Raquel que de la chica… se la veía a la legua su interés. Con todo esto llegue a la conclusión de siempre, que el interés de la rubia por mi era principalmente debido a Raquel… lo de siempre, una chica como ella con un chico como yo… solo curiosidad por su parte.

Cuando nos fuimos no pude evitar comentárselo a Raquel para intentar calmarla con respecto a ello, estuvimos contándonos todo lo anterior, y cuando yo la dije mis conclusiones ella solo me dijo…

- Raquel : Ismael, cariño, de verdad que no se si enfadarme porque no te enteras de la misa a la media, o alegrarme de que si no te enteras es porque solo tienes ojos para mi, cielo, de verdad que me pones en un compromiso con ello.

Vale, eso me lo dejo muy claro, Raquel opinaba que yo le había gustado a la rubia y no por estar con ella precisamente, supuse que lo que me conto de cuando se giro para mirarme el culo es lo que la hizo llegar a esa conclusión, aunque parecía que ella iba mas allá, por sus palabras es como si considerara que la rubita había intentado tirarme el anzuelo con disimulo… pero joder, es que no note nada de eso, de verdad que no. Claro que lo cierto es que estaba más pendiente de Raquel que no de la rubia… decidí no entrar en ese tema, seguro que no sacaba nada bueno de ello.

Un par de días después hable a solas con Marta… Le plante en los morros todo lo que sabía de que había estado ayudando a Raquel conmigo, a ligarme… la pobre canto como un canario, más que nada porque puse la pinta mas chunga que fui capaz de poner sin reírme en su cara por como lo estaba pasando de mal. Aunque quizá no estéis de acuerdo conmigo, decidí que tampoco quería meterme mucho con ella ya que lo cierto es que le debía mucho, le debía nada más y nada menos que estar con Raquel… ¿os parece poco?

Por lo visto… y me dejo alucinando en colores… Raquel llevaba colgada conmigo desde antes del verano… habíamos coincidido en algún que otro sitio y le gusto lo que vio, pero no paso de ahí… ni se había enterado que estaba en su clase hasta el inicio del curso. Cuando empezó a salir con el hermano de Ana hizo muy buenas migas con Raquel… una de las veces que habían quedado, justo el primer día de clase, ella llego mucho antes, y como yo estaba con los amigos se quedo conmigo hasta que Raquel y las demás llegaron. Según me dijo Marta, Raquel la estuvo interrogando sobre mí, tras ver que nos despedíamos como amigos…

No diré más sobre nuestra conversación porque tampoco es plan, pero digamos que Raquel logro convencer a Marta para que le ayudara a echarme el guante, Marta vio que iba completamente en serio y que de verdad, por increíble que le pareciera, estaba colgada conmigo y decidió ayudarla a conocerme… Me dejo muy claro que al principio solo fue a conocerme, ya que yo me escabullía a la mínima y Raquel no sabía bien por donde entrarme, había hecho varios intentos de llamar mi atención pero no le había hecho el mas mínimo caso… con mi sistema de valores que ya os he contado, y como me comporto con el os podéis suponer lo frustrada que debía de estar Raquel conmigo, mas al no estar acostumbrada a que la ignoraran como lo hacía yo, ¿no?.

Todos los encontronazos, todos los movimientos que hicieron incluida aquella primera cena y el irnos solos los dos después por ahí, fueron cosa de Marta, que me conocía bien, sabia como debía de entrarme y en qué momento era más propenso a aceptar dejándome llevar… luego también estuvo de su parte la fortuna de cuando aquellos dos capullos e intervine… el que pidiera a Raquel ayuda… pero fuera de eso todo lo demás fue maquinado por Marta, incluso la conversación aquella sobre sexo que tuvimos en el coche delante de Raquel y Eva fue completamente apropósito para que Raquel se fuese dando cuenta de donde se metía si seguía adelante, y por lo que me dijo la encanto como me comporte de natural delante de ellas hablando con Marta… no tanto el que las ignorara como las ignore, según me dijo Marta riéndose a Raquel se puso de una mala leche avinagrada por ello… pero según parece sirvió para aumentar su interés todavía más…

Según Marta, lo que la decidió del todo para entrar a saco de celestina, fue ver que a mi ella también me gustaba, aunque tratara de evitarlo o no quisiera reconocerlo. Discretamente entonces le pregunte por mis sospechas, intente indagar sobre sus anteriores relaciones con chicos, Marta me dijo que sabía que Raquel había tenido tres o cuatro novios con los que no había terminado muy allá, o mejor dicho, mas allá que acá… Me miro preocupada por mi pregunta, yo la calme diciéndola que ya sabía que no era virgen, que sin duda se habría acostado con varios chicos teniendo en cuenta como se la debían de rifar… pero que preguntaba por si ella sabía si le había pasado algo con algún chico y eso estuviera potenciando lo que paso con Ana… Me miro, se quedo pensativa y me comento que ella también había pensado en eso porque tampoco le parecía normal que todo fuese solo por lo de Ana… pero que no había podido averiguar nada en ese sentido, me dijo que si lograba algo me lo diría inmediatamente, que confiara en ella, que quería que lo nuestro saliese bien.

Llevábamos mas de tres meses y medio ya de relación… el sexo oral entre nosotros era casi diario… Raquel se derretía por sentirme en su sexo y por según ella, tomar su ración diaria de lechecita caliente… Cada vez avanzaba mas con ella, no fóllabamos pero si jugaba con mis dedos o mi boca en todos sus orificios, incluso había logrado usar un pequeño canutillo de plástico a modo de pene improvisado… por un momento pareció que iba a resistirse pero debido a mi trabajo fue incapaz de ello… si al principio era sentir mi polla en su rajita y se tensaba como un acordeón… ahora le encantaba que se la pasara, que le restregara la puntita, que la punteara… Podía haberla penetrado en cualquier momento, pero el haber llegado a todo esto era debido a la confianza que tenía en mi y que poco a poco me había ido ganando, hacer una estupidez de ese estilo y que no saliese bien por acelerarme solo hubiese significado joderla bien jodida… calculaba que en cuestión de un mes o así estaríamos follando… últimamente de hecho, notaba cierta lucha en ella, entre el deseo de enterrarse mi polla hasta el mango ella misma cuando la sentía en su entrada y sus reservas a ello… no quería joderla de ningún modo, así que por eso iba con pies de plomo.

Un viernes estábamos en su casa preparándonos para cenar cuando María según poníamos la mesa hizo un comentario a su hermana la mar de inocente… La dijo que menuda putada lo de la fiestecita de marras del día siguiente… que menuda jodienda con lo aburridas que eran, que al menos yo estaría con ella como en las dos anteriores y no sería tan mala la cosa… Se quedo ahí el comentario, hice como que no me había dado cuenta de ello, vi como Raquel respiraba al no verme reaccionar.

A mí me había dicho que el sábado tenía un trabajo y no podíamos quedar, no me extraño porque no era la primera vez que pasaba, y también sabía que esto era relativamente normal, igual que en festivos o domingos, y más ella, que procuraba coger todos los que podía en esos días para perder las menos clases posibles… También debo de decir que ni por un instante pensé que me estuviese engañando, estaba demasiado colgada conmigo como para pensar en eso, aunque me los podía estar poniendo pese a todo, pero creedme que si vieseis a Raquel conmigo también lo descartaríais. Pensé en dejarlo correr por el momento y buscar una ocasión para poder hablarlo tranquilamente con ella, para ver qué pasaba… pero una cosa es lo que planeas y otra con lo que te encuentras.

Estábamos comiendo entre risas cuando Ana me pregunto qué me parecían las fiestas esas a las que tenía que ir su prima… Decir que Raquel se puso pálida al oír la pregunta es un eufemismo… claro que peor fue cuando escucho mi contestación… en esos momentos ya no me quedo otra que darme por enterado, así que… intente salir como pude intentando no armar ningún alboroto y que nadie se diese cuenta de nada… pero mandando un claro aviso a Raquel de que teníamos que hablar… que esa noche nos quedábamos en casa los dos.

- Ismael : Jajajajaja, Ana mira que tienes mala ostia preguntándome eso delante de Raquel, creo que vamos a terminar hablando toda la noche los dos sobre esto, y mira que estoy seguro que tú lo de esas fiestas lo sabes muchísimo mejor que yo…

- Ana : Jajajajaja, si a las dos cosas, jajajajaja… lo cierto es que me ha tocado ir a más de una… y son un coñazo de aúpa como ya habrás podido ver… Jajajajaja…

Ana, María y Alex se descojonaban y se pinchaban unos a otros con las fiestas esas entre las sonrisas y complicidad de Marta… yo sonreía como uno más, procurando no entrar en comentarios sobre algo de lo que no tenía ni la menor idea… Cuando Raquel me escucho se encogió y me miro con cara asustada… yo estaba sonriendo hacia los demás, pero mis ojos solo miraban fijamente a Raquel y os aseguro que ellos en ese momento no acompañaban mi sonrisa en lo mas mínimo.

Raquel era consciente más que de sobra de que no estaba divirtiéndome después de escuchar a su prima. Por cómo me estaba mirando Raquel, me estaba empezando a imaginar por donde pensaba que me estaba tomando el que no me hubiese dicho nada sobre las fiestas. También estaba seguro por cómo se movía de nerviosa, que debía de estar pensando sobre la cantidad de explicaciones que iba a tener que darme en cuanto quedáramos solos, y que tras lo que me había oído decir más mi cara en esos momentos, más le valía que las explicaciones fuesen muy, muy buenas...

Continuara