Mi Bóxer el Tigre

RELATOS DE TLAZOLTEOL

MATLACTIC UAN OME

Tigre mi fabuloso perro, las aventuras que tuvimos …..

Durante varios meses jugué con mi perro Nerón, cada vez que podíamos hacíamos el sexo, ¡¡pero que gran perro!! Ya no tenía que detener su verga para que no me metiera su bola, ya se había acostumbrado a no meter la bola, no se movía cuando estando yo en cuatro patas y me tenía conectado, sentía como se venia dentro de mi, y así tardábamos varios minutos gozando, todo estaba bien pero un día que me dan la noticia:

.- ¡¡¡nos vamos a cambiar de casa!!!! Dijo uno de mis hermanos.

.-¿cómo lo sabes?

.- Escuche a mi papá cuando le decía mi tía

Bueno pues, a cambiarnos, pensando en Nerón me dije: "Espero que donde vivamos podamos seguir jugando"

Por la noche nos informó mi papá a todos: nos cambiamos la semana entrante, empiecen a guardar todas sus cosas, cada quien es responsable de lo que guarde si se queda algo no regresaremos.

Llegó un camión por la mañana del domingo subieron todo y corrí por el Nerón y cuando trate de subirlo al camión mi papá no me dejo:

.-Ese perro se queda.

.-No papá, vamos a llevarlo.

.-No ya le dije a tu tía que se quede con él.

.-Pero papá si es nuestro me ayuda a cuidar la casa.

.-Pues ayudará pero ya se lo prometí a tu tía y se queda.

Ya no pude hacer nada, subí al camión y vi como el Nerón se quedaba y luchaba por seguirnos pero mi tía lo tenía bien sujeto con su collar y cadena, le dije adiós y hasta mi culo lloro.

Bueno es triste siempre alejarse un gran amante, llegamos y la casa era más grande, tenía un jardín en la parte delantera junto a la cochera, una sala enorme, comedor, cocina con una despensa muy grande, el estudio-despacho de mi papá y junto a la escalera un baño bastante amplio, en la parte de arriba estaba la habitación de mis padres con su baño privado y cada uno de nosotros su propia recamara pero el baño era para todos, todo estaba muy bien, en la parte trasera de la casa un jardín amplio y zona de lavado de ropa, pero faltaba algo que no podía soportar no teníamos a Nerón mi cachondo perro.

Después de varios días mi padre llego con un perro, un perro que maravilla, todos nos pusimos felices, yo más que todos, tanto que les dije déjenmelo yo le doy de comer y lo cuido para que crezca fuerte y hermoso, se extrañaron pero como a muchos no les gusta cuidar perros ellos que me gritan ¡¡¡si!!!! Te haces cargo, el perro era de raza Bóxer y nos pregunto mi papá, que como lo llamaríamos y decidimos que le llamaríamos Tigre.

Lo alimente, le cuide y lo trate con mucho cariño lo vi crecer y acostumbre a todos a verme, donde estuviera siempre junto el Tigre.

Un día mi padre ordeno que subiéramos al Tigre a la azotea porque estaba muy grande y los vecinos se molestaban cuando les ladraba, temiendo que fueran salvajes (los vecinos) y le hicieran algo malo al perro, pues lo subí a la azotea y le puse su casa junto al los tinacos, todos las noches subía a la azotea, como cuidador del perro tenia la obligación de alimentarlo, darle agua y limpiar el área donde se cagaba, me gustaba ver las estrellas acostado en la azotea junto a mi perro.

Súbele de comer al perro me dijo mi mamá, ya es muy noche y no ha comido, subí a la azotea y después de darle de comer y agua me puse a limpiar su lugar cuando vi que había algo debajo de los tinacos, me tuve que agachar y ponerme en cuatro patas para alcanzar el objeto, de pronto poco le importo la comida a mi Tigre cuando me vio en esa posición que se me monta tratando de encajarme, yo al sentirlo pensé: ya estas listo querido Tigre, y sin moverme demasiado me afloje el cinturón y me baje rápido el pantalón y calzón, ooohhh que delicia volver a sentir un verga tan rica en mi culo, no lograba ensartarme y lo trataba de guiar pero no se dejaba, no quería que le tocara su verga, trato de meterla y no pudo, se la veo y estaba toda fuera de su funda, gruesa, mucho mas gruesa que la de mi Nerón y su bola ¡que bárbaro! del tamaño de un puño enorme, se la quise agarrar y no se dejaba, en eso estaba cuando alcanzo a ver que asomaba la cabeza mi mamá por la escalera y empecé a juguetear con el perro.

.-Ya deja de jugar y bájate. Ordenó mi mamá

.- Si ahora voy, me falta barrer.

.-Bueno, pero no tardes.

Que barrer ni que nada lo que pasa es que tenía las nalgas al aire y el Tigre con toda la verga de fuera, baje y mi mamá me reclamo que porque había tardado tanto, le dije que extrañaba jugar con mi perro y al subir su comida empecé a jugar con él y se me paso el tiempo, después le comente que bajáramos al perro porque se sentía muy solo y le hacia daño, me comento que le comentaría a mi papá.

Mi papá dijo que bajáramos al perro, que felicidad ahora tendría más oportunidad de estar con él, en la noche lo baje y también su casa, lo coloque en el patio de atrás, bueno entonces en la primera oportunidad te voy a enseñar a cogerme vas a ver, le dije a mi Tigre.

Llegué de la escuela y grite ya llegué, nadie contesto fui a la cocina y estaba un recado para mi: salí con mis amigas no se a que hora llegó, come y haces tu tarea. Mi mamá había salido, mi papá estaba trabajando, mis hermanos estaba en la escuela y salen tarde conclusión el Tigre, me olvide de comer y me prepare para llamar al Tigre, subí a mi habitación me cambie y me puse un short y playera, bajé y le abrí la puerta que daba al patio trasero dejándola abierta para que entrara el Tigre, me coloque en cuatro patas en medio de la sala, con el culo al aire, lo que pensé se realizaba, escuche que el Tigre entraba y yo cerré los ojos poniendo mi cabeza en el suelo, sentí su aliento en mi culo y de pronto se monta sobre mi poniendo sus patas en mi cintura jalando con gran fuerza y sentí inmediatamente como me penetraba, ¡como estaba calientito y rico!, dejó de moverse y me acorde de su súper bola, rápido con mi mano agarro su base de la verga, (siempre he tenido miedo de que me metan la bola) agarro y no siento su bola solo sus testículos, no puede ser me dije y yo que te iba a enseñar a cogerme y tu lograste lo que tanto temía, me metiste toda tu verga con todo y tu bolota, bueno ya que, pues a gozar la bola, al moverme un poco que se baja el Tigre quedando abotonado, que bárbaro que fuerte estas me jalas completamente ya mero me arrastras por toda la sala.

Estaba gozando mi primera vez con mi súper perro, aflojaba y jalaba el culo y sentía precioso, de pronto escuche la puerta de la calle que se abría, en la madre alguien va a entrar y yo bien pegado con mi perro y en medio de la sala ni donde esconderme, empecé a escuchar voces de señoras, era mi madre con varias de sus amigas y me encontrarían en esa posición tan placentera para nosotros (mi Tigre y yo), pero no mucho para ellas y menos para mi mamá.

Con todo el dolor de mi culo que tomo fuertemente la base de la verga de mi perro y que la jalo con fuerza, oh que dolor ya me imagino el agujerote que dejo su bolota, con todo y dolor corro al perro para el patio y corro al baño que estaba bajo la escalera y me siento apretando mi boca para que no gritar del dolor del culo, tocan a la puerta del baño y me dice mi mamá:

.-quien está?????

.-Yo, le contenté como pude.

.- ¿vas a tardar mucho???

.- sí (no se cuanto tiempo iba a estar aguantando el dolor)

.- ¿porque?

.- es que estoy estreñido y me duele mucho cuando hago del baño (si es cierto me dolía mucho, pero mucho)

.- Bueno tárdate lo que quieras, vamos a subir a mi recamara

.- está bien gracias.

Pase buen rato y sentía húmedo mi culo, tome papel para limpiarme y al verlo me asuste pues estaba lleno de sangre, bueno después de tantas cogidas fue el Tigre el que verdaderamente me rompió mi caliente culo. Limpiándome bien por fin salí, apenas pude caminar y salí a ver al Tigre, que al verme fue a encontradme todo animado me hacia fiestas y yo me reía de lo que habíamos pasado.

Paso un buen tiempo para que ya me sintiera con ganas de Tigre nuevamente, no necesite ir al doctor aunque mi mamá me preguntaba que como seguía con mi estreñimiento, le decía que mejor y es que me lavaba dos veces al día el culo para que volviera a su normalidad.

Salió de vacaciones mi papá e invito a mi madre a salir a alguna playa dijo que si y se fueron una semana junto al mar, nos dejaron solos a mis hermanos y a mi, mi abuela nos invito a su casa el fin de semana, yo alegue que no podía porque tenía que ayudar a un compañero con sus estudios y mi abuela se llevó a todos dejándome a mi solo en casa. Para no correr riesgos me espere pacientemente hasta las 2 de la mañana.

En punto de las dos de la mañana baje muy tranquilo, no se escuchaba ningún ruido en la calle ni con los vecinos, no prendí ninguna luz estaba ahora todo desnudo no había ropa que me estorbara, sin decir palabra abrí la puerta del patio trasero y el Tigre inmediatamente entro, cerré la puerta y pasamos a la sala, sin decirle nada me puse en cuatro patas y sentí como se subía el calor de su cuerpo en mi cuerpo totalmente desnudo era algo indescriptible cuando se empezó a mover rítmicamente empecé a sentir como me penetraba, de un golpe maestro estaba dentro de mi, sin lastimarme sin golpearme con su verga limpiamente me la metió hasta el fondo ahora no me importo que me abotonara sin embargo con mi mano comprobé que su súper bola esta dentro y así era estaba todo felizmente adentro, ahora no me moví nada para sentir su peso sobre mi, que delicia sentía como pulsaba su verga dentro de mi, lo caliente y húmedo, una verdadera delicia.

Después de un rato por fin se bajo, desprendiéndose de mi ahora no sentí ningún dolor aunque su verga estaba bastante gruesa todavía, me quede acostado boca arriba y él empezó a lamerme mi cuerpo, me voltee y levantando un poco el culo me lo limpio con su lengua, volví nuevamente a voltearme ahora boca arriba y empezó a lamer mi verga así se mantuvo un rato y se recostó a mi lado poniendo su cabeza en mi vientre.

Estaba durmiendo cuando sentí como lamía mis testículos, pero no era su objetivo el quería lamerme el culo porque metía cada vez mas su cabeza bajo mis piernas, lo comprendí y me puse a cuatro patas con mi culo levantado para que lo lamiera a sus anchas, pero sólo basto dos lengüetazos para que se subiera nuevamente.

Se notaba que sabía que era su perra porque jalándome de la cintura en solo un movimiento me penetro nuevamente, esta vez no se quedo quieto siguió embistiendo con furia que hasta me encajo las uñas en mi piel, no quería soltarme y yo feliz, de pronto salta para un lado y avanza jalando con fuerza y yo apreté el culo lo mas que pude y ahí quedamos como el macho con su hembra completamente abotonados, él firmemente en el piso y yo moviéndome para sentir dentro su poderosa verga con su súper bola, a él le gusto y se mantenía firme en lo que yo hacia el vaivén, que delicia en pequeños periodos me detenía y volvía al vaivén, no se cuanto tiempo estuvimos pegados pero ahora si sentí como su verga se volvía flácida y poco a poco se fue saliendo de mi caliente culo.

Lo abracé y lo recosté junto a mi quedándonos dormidos hasta bien tarde, amaneció y me levante a bañar dejándolo aún dormido, ahora no me dolía el culo al contrario lo sentía como agradecido.

Fue maravilloso ese fin de semana, el domingo llegaron mis hermanos y mis padres, yo estaba enfermo de la garganta, (toda la noche encuerado y cogiendo no note el frío que hacia) es que dormí con la ventana abierta les comente.

Bueno el Tigre estaba muy joven me duraría para muchos años, lástima que las vacaciones de mi padre son cada año y mi novia quiere que nos casemos, bueno luego les cuento lo que me paso.