Mi angel, mi muchacho, mi macho (la felación)

Cuando lo mire por primera vez realmente creí que estaba ante un ángel, tal era su belleza varonil. Era un chico heterosexual. Por amor a una mujer, me dedicó varias noches de pasión.

MI ANGEL, MI MUCHACHO, MI MACHO (LA FELACION)

Cuando lo mire por primera vez realmente creí que estaba ante un ángel, tal era su belleza varonil. Era un chico heterosexual. Por amor a una mujer, me dedicó varias noches de pasión.

Al otro día en mi trabajo, no podía dejar de pensar en Ángel, disfrutando de antemano, el cuerpo del chico, pensando que por la noche tendría su verga en mi boca. Por la tarde, me di una vuelta por el malecón cercano a la hora convenida, en la primera vuelta no lo mire, por lo que decidí dar otra, de repente lo mire, con toda su belleza juvenil , vestido con pants, y sudadera, haciendo ejercicio en aparatos.

Me detuve y le hable-Ángel, Ángel, muchacho- el me escucho y se dirigió al carro- hola putito - me dijo - creí que no vendrías- yo le repliqué – como crees que no vendría, si no he podido dejar de pensar en ti, en el momento de tener tu verga en mi boca, para sacarte la deliciosa lechita; anda sube-le dije- el chico abordó el auto- guauuuu, que carrazo traes- me dijo- ¿ a que te dedicas y como te llamas?- me dedico a la venta de seguros y me llamo José Luis, para servirte- le conteste- anda acércate a mí-. El chico no se movió, yo le pregunté-me dejas tocarte el pito- no me contesto, yo me animé, y puse mis manos sobre su verga, el chico no se movió ni dijo, nada, por lo que me anime a acariciar su reata (verga) por sobre la tela del pants.

Por la suavidad de la tela, pude sentir su miembro semierecto de buen tamaño y sus grandes huevos sueltos, bamboleándose, por lo que empecé a sentir una erección, el chico retiro mi mano y me dijo, -ya sentiste lo que tendrás en la boca, ya deja, por que tengo un cigarro en la bolsa y lo vas a despedazar, anda llévame a la calle Montecristo para pasar por la casa de lupita, luego vamos al motel, pero te advierto nada de meterte la verga- okey,-le conteste, y enfile para donde el chico me decía, disimuladamente le rozaba la pierna con mi mano, al hacer los cambios de velocidad, de repente, note que Ángel, tenía ya la verga parada, y me dijo - ya ves lo que hiciste, ya se me paró la verga- quise tomarla en mis manos, pero me dijo- me rompes el cigarro- yo le conteste- te compro un paquete si quieres, pídeme lo que quieras- en ese llegamos a la dirección y me dijo emocionado- ¡para, para, allá está Lupita!, date una vuelta, mientras se me duerme la verga, no me puedo bajar así.

Hice lo que me pidió, luego regresamos donde Lupita, Ángel se bajo del carro-diciendo, -no me tardo- llegó donde estaba Lupita, yo los veía de lejos- la tomó de la mano, la abrazo y le dio un beso en los labios, en ese momento sentí un aguijonazo de celos, hubiera querido ser yo a quien abrazara y a quien le diera el beso de amor, ¡me estaba enamorando del chico!.

Espere más de media hora a que Ángel se agasajara con Lupita, pero más bien para mi que Lupita se agasajaba con mi Ángel, mi muchacho, mi hombre.

Después de la media hora, Ángel regreso al carro, y me dijo, -¡ vamos rápido, que estoy bien caliente, estoy tan caliente que chance y te meta la verga!- emocionado por esas palabras, arranque el carro, rumbo al motel, pero Ángel me dijo- comprame el cigarro, que me rompiste, el que traía en la bolsa- me detuve a comprar una caja de cigarros, y le pregunte- ¿ compro un condón?,¿ me vas a coger ? - Ángel riendo me contesto- no, hoy sólo me vas a mamar la verga, chance otro día si te la meta- ante esta promesa, arranque el carro rumbo al motel.

Al llegar al motel, ya en el cuarto, sentí deseos de acariciarlo, por lo me acerque a él, pero me dijo-nada de caricias, sólo me la mamas y nos vamos, pero antes pon una película, quiero ver una bien cachonda.-

Puse una película, donde un hombre le clavaba su enorme miembro, en el culo a una mujer morena, y los dos gemían de placer. Eso incremento mi calentura, le pedí que se acostara y rápido le baje el pants, lentamente le quite la sudadera, rozando su tórax juvenil, quedando a mi vista un espléndido cuerpo varonil, con una suculenta belleza juvenil, de hombre-niño o de niño-hombre, su torso con los músculos bien marcados, una tetillas rosaditas y paraditas, su tez de color claro, su vientre de lavadero, sus brazos fuertes y musculosos, era lampiño, sólo se le observaba un línea de ligero bello color castaño claro, que le recorría el vientre hasta perderse en su pubis, sus axilas contaban con vello, me acerque a el, casi hasta tocarlo con la nariz, y aspire su aroma de hombre, mezcla de sudor y de desodorante, el haber estado haciendo ejercicio, hizo que sudara, lo que le daba un aroma a macho, que me embriagaba, aspire profundamente, ese aroma hizo que mi verga se pusiera dura al máximo y que se intensificará mi deseo por el . El chico quedo en truza, ya con su verga a todo lo que daba, firme y dura como un pedazo de metal, quizá por el efecto de la película y por el momento. El niño se extendió en la cama bocarriba, aun con la truza puesta.

Temblando de deseo, me coloque entre su entrepierna, tome con la mano su verga por sobre la truza pudiendo sentir su rigidez, su tamaño y su calor; acerque mi labios y sobre la tela le bese el miembro, recorriendo con mis labios toda su extensión, mientras con las manos le acariciaba los músculos de la piernas duras y fuertes. El chico estaba absorto viendo la película, se podía sentir su verga palpitando sobre la tela.

El me dijo refiriéndose a la película- eso de meter la verga en el culo de alguien no se me hace correcto, no debe ser, y menos metérsela en el culo a un puto como tú-. Trate de besar sus pechos y sus tetillas, pero me detuvo y me dijo- ehhh, putito, sin besos, limítate a mamarme la verga, que en eso quedamos-. Su aroma a macho, me enloquecía, me perturbaba y ya no pude más lentamente le baje la truza, dejando ver ………..¡ una impresionante verga ¡ …………color sonrosado, de cerca de 20 cm. de largo, de casi 6 cm. de ancho, ligeramente curveada, y apuntando al techo, con unas venas bien resaltadas color azuloso, le baje completamente el prepucio, dejando ver una cabeza púrpura y brillante, mucho mas gruesa que el resto de la verga, pude apreciar el frenillo; al tacto, su piel era suavecita, lisita, tersa, su vello púbico era color castaño y ensortijado, similar a su cabello, no muy abundante. Su verga temblaba al sentir la caricia de mis manos, como si tuviera vida propia, con liquido preseminal en la punta, se sentía caliente, mucho más caliente que el resto de su cuerpo, lo que reflejaba la calentura del muchacho. El aroma a sexo masculino empezó a llegar a mis pulmones, disfrute mucho ese aroma delicioso.

Con las yema de los dedos, le acaricie el vibrante miembro masculino, se lo recorrí lentamente, milímetro a milímetro desde el ojo del pene, hasta la base del tronco, dando vueltas circulares a todo lo ancho a todo lo largo del miembro, no deje de un milímetro cuadrado sin acariciar, suavemente le rodee el borde del glande, jugué con el frenillo, baje a sus huevos, se los acaricie suavemente, los tuve entre mis manos, que quedaron llena de ellas, les di un ligero apretón, su tez era también tersa y suave. Luego cerré mis manos a lo ancho de su verga y le dí un ligero apretón lo que hizo que el chico diera un ligerito brinco, luego lentamente empecé a masturbarlo, subiendo y bajando la piel de su verga, después aumente el ritmo, el niño daba unos gemidos – ah, ah, ah ah ah, ah- señal que lo estaba disfrutando, su verga se hacía más grande a cada jalón que yo le daba.

El niño no aguanto más y me dijo- ¡ ah, ah, ah, ah, ah, ya puto, …………no mames, estoy bien caliente, ya métetela a la boca, ya chúpamela, ya sácame la leche !, levante el rostro y le miré a los hermosos ojos verdes, temblando de pasión le pregunte- ¿ mi amor, te gusta? – se siente bien chido- me dijo- pero no me veas a la cara, y no me digas mi amor- sentenció- su rostro expresaba la calentura que ya tenía- ¡ no me gusta que me veas, ¡ sólo mámamela, ya!- .

El chico quedó en silencio, viendo la televisión, donde la mujer de la película, le propinaba tremenda mamada a su macho, con toda la verga dentro de su boca, aproveche el momento y como mujercita enamorada me acerque a su cara el y le dije – ¡ Angelito, déjame darte un beso, déjame acariciarte, te deseo tanto ¡, acerque mi rostro al suyo, mis labios a sus labios y le dí un beso, sólo rozándoselo, el me dijo- ¡ ya estuvo bien, no me beses, y ya mámamela! - , y tomó mi cabeza con una de sus manos, y con la otra agarro su verga y de un golpe me la metió hasta el tronco en la boca.

De repente mi boca queda invadida de semejante garrote, apenas me cabía, mis labios se extendieron al máximo, el objeto de mi deseo, estaba ya hasta adentro de mi boca; el chico me presionaba la cabeza, metiéndomela hasta el fondo de mi garganta, exitado gritaba-¡ anda cabrón, anda puto!, ¿ no eso querías? , ¿ no querías mamármela?, ¡ ya la tienes donde querías!, ¡ así que chúpamela!, ¡ nomás no me muerdas ¡ y yo obediente chupe desesperadamente, mientras el gemía diciendo así,….as텅.as텅..ah,….ah……ah….uh….uuuuh, que rico la mamas………uhhhh.. El aroma y el sabor de su verga era delicioso, sabía a mezcla de orín y sudor, a sexo de hombre, a hombre joven, a adolescente caliente, yo chupaba, extasiado a todo lo que daba.

De repente sentí arcadas, el dejo de presionarme, entonces le tome la verga con mi manos y le pase la lengua por todo el glande, le lamí la cabeza, como si fuera un helado, le pase la lengua por todo el borde del glande, me detuve en su frenillo, masajeándolo con la punta de la lengua, yo era feliz, teniendo en mi boca semejante verga de tan hermoso muchacho, en ese momento no me hubiera cambiado por nadie. Ángel, gemía de placer, de repente metí toda la cabeza en mi boca y le di unos chupadas, apretandola suavemente con mis labios. El chico respondió a esta caricia con unos gemidos-ah…ah…uh….uhhhhh, que rico, sigue, sigue, sigue, sigueeeeeeeeeeeeee, que rico. De repente deje de chupar, levante la mirada, su bello rostro, estaba extasiado de placer, sus ojos casi en blanco, me dijo, con voz entrecortada -, no, no , no, , sigue chupándome la verga, no me veas a la cara - como avergonzado de tanto placer- y sin decir nada, tomo mi cabeza con sus manos y de nuevo la dirigió a su verga, con suavidad me la volvió a meter a la boca, diciendo- anda, puto, chupa, ------que lo haces bien rico, ¡ no mames, que rico se siente! - y yo obediente seguí chupando mi juguetito, mi objeto sexual, sentía rico, con la vergota de Angelito en la boca, sentía su calor, la tersura de su piel, lo delicioso de su aroma.

Ahora me dedique a recorrer con la lengua milímetro a milímetro toda la extensión del miembro varonil, hasta llegar a lo huevos, me los metí uno a uno en la boca, los chupe ávidamente, les dí mordiscos; les pase la lengua, los llene de saliva, el chico seguía extasiado de placer, sólo se escuchaba el ruido de mis chupadas, y los gemidos de placer de Ángel.

Luego volví a la cabeza de la verga, le di unos chupetones, le pase la lengua, me lo metí hasta el fondo de la garganta. Hasta el momento Ángel solo se dejaba hacer; de repente el chico empezó pausadamente a cogerme por la boca, el empezó a llevar el ritmo de la mamada, luego aceleró el ritmo, metiéndome y sacándome la verga, yo aprovechaba la metida para chupar ávidamente. Luego me saco la verga, y se dedico a restregármela en la cara, me la paso por los ojos, por las mejillas, por la nariz, me la sobo por toda la cara, dejándome su líquido preseminal embarrado en el rostro, yo deseaba que ese momento fuera eterno Así estuvo un rato, luego, me la volvió a meter en la boca, y violentamente siguió cogiéndome por la boca.

Después de un buen rato de estarme cogiendo por la boca, el chico me dijo- ah,,ah,,,ah,uh,,,uh,,,,,que rico, que bien lo haces……pinche puto, ahhhhhhhh……que rico la mamas ah, ah……chupa puto, chupa, que ya pronto me vengooooo,- yo seguí chupando, y chupando, hasta que sentí que el cuerpo de mi hombre se convulsionaba, y diciendo uh…uh…uh…..Lupita…..uh…..lupita, ah…ah….uh…..uh….. ahh , vengooooooooooooo, ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh- evidentemente pensaba en su novia, que hacía el amor con ella, pero eso no me importó,……..-rápidamente me tomó la cabeza con sus manos, para meterme la verga hasta la garganta, me aventó potentes chorros de abundante leche juvenil, caliente y espesa que fueron a parar a mi estomago, así se quedo cerca de un minuto hasta que la última gota de semen salió de su pene, luego saco su verga semifláccida de mi boca y me dijo-anda puto, chúpamela, hasta que me quites toda la leche- yo obediente con la lengua le limpie la cabeza de la verga, su leche era rica, su sabor era delicioso, sabor saladito.

A todo esto, estaba yo en máxima fase de exitación solamente de pensar que tenía yo ese hermoso pene en mi boca, de tener ese precioso cuerpo para mi, de saberme lleno de su deliciosa leche , de pensar en la hermosura de ángel, no pude más y gritando – ángellllllllllllll, ángelllllllllllllllll, oh,…oh……….uh, uh, uh , uhhhhhhhhhhhhhhhhhhh……angelllll…uhhhhhhhhhhhhhhh, me masturbe a todo lo daba, disparando mi semen al suelo, todavía con la cabeza de la verga del chico en mi boca.

Pasado el momento, arrodillado a sus pies, como gatita sumisa, tome de nuevo con la mano su verga semiflacida y la acaricie tiernamente, como agradeciendo la leche que me había regalado- el chico me dijo- no mames, putito, que rica mamada me diste, la sentí más rica que con la mujer que me la mamo antes, tienes que ser mi mamador oficial, y puede que algún día te la meta en el culo-.

Emocionado por esas palabras, le conteste – nada me haría más feliz, que fueras mi macho, que me cojieras, que me rompas el culo, que me la metas hasta los huevos, pero si no quieres, me conformo con sólo mamarte la verga- y diciendo esto me volví a meter su miembro a la boca para darle una leves chupaditas.

El chico me dijo- ya es tarde, y tengo que irme, con la toalla húmeda límpiame la verga- humedecí una toalla, y amorosamente como madre a su bebé, le limpie la verga con cuidado, le limpie el vientre, quitándole, restos de semen que lo salpicaron.

Luego le subí la trusa acomodando su verga con cuidado adentro, le ayude a ponerse la sudadera y el pants, antes de salir del cuarto a manera de despedida le di un apretón a su verga, el me dijo- ya deja, ¿cuando nos volvemos a ver, para que me la vuelvas a

mamar ?- . Acordamos vernos en cinco días en el mismo lugar del malecón.

Llegamos cerca de la casa del tío, le di mil pesos para el regalo de Lupita, que bien que se lo había ganado el chico. Nos despedimos; al bajar del auto, le volví a apretar la verga, el chico sólo río y me dijo – que puto eres, no completas- yo le conteste – nunca completaré de ti, eres un muchacho muy lindo, y con una verga sensacional – nos vemos- dijo y corrió a una casa cercana, yo me quede hasta que entro a ella, todavía saboreando el rico sabor de su verga y de su leche en mi boca, todavía con al sensación sentir su tamaño en mi boca. Esa noche no me lavaría los dientes, para sentir la sensación de dormirme con la verga de Ángel en la boca.

Arranque el carro, deseando que los cinco días pasaran rápidamente para poder volver a mamar esa suculenta verga, y por que no, a lo mejor lo convenzo, para que me la meta hasta el tronco, para tener adentro de mis entrañas la verga de Ángel, mi muchacho, mi macho.

¿Quieres saber si me cogió o no ? , no te pierdas la tercera parte.

Continuará