Mi angel, mi muchacho, mi hombre (la penetración)

Por fin Ángel me penetro, fuí de el, el fue mío, por cinco años vivimos noches de intensa pasión.

Desde el momento en que deje a Ángel, estuve pensando en el, en las noches soñaba con que me hacía el amor, en el día no dejaba de pensar en el, en su hermoso cuerpo y en su tremenda verga, así pasaron los cinco días.

El día de la cita, en la tarde me tomé un buen baño, me lave muy bien mis partes íntimas y decidí ir en su busca, pensando en como hacerle para convencer a Ángel para que me clave la verga. Desde que tuve su verga en mi boca soñaba con el momento de sentirla por mi culo, sentir la cabeza abrir mis pliegues, y que su deliciosa leche riegue mis intestinos. En esos días me hice una paja diaria pensando en mi niño.

Pasé por el sitio convenido y de repente lo miré, enfundado en ropa deportiva. Me sonrió con su sonrisa angelical y me saludo:.

-¿Que onda putito, creí que no vendrías?-

-Como crees que no vendría, primero dejo de vivir que dejar de venir a verte, estas bien chulo, ya no puedo vivir sin verte – le contesté.

  • ¿A poco de verdad, te gusto mucho?- me replicó

-Un chingo- le dije- ve sube al carro-

El chico subió al carro, y me dijo:

¿ A poco tienes otra vez ganas de tu ración de leche?, por que yo si tengo muchas ganas de que me la mames otra vez-

-No sólo de mamártela, sino que me la metas toda, ¡ hasta el tronco!-. ¿ has cogido alguna vez ?- le pregunte.

El niño se quedo serio, y me contesto:

-La verdad, no, sólo me la han mamado una vez, y contigo fue la segunda vez-

-Entonces eres un puñetero –le dije riéndome- si te animas a cogerme yo te voy enseñando- añadí, mientras le tomaba con la mano la verga sobre la tela.

-Si que eres terco, la primera vez que yo le meta la verga a alguien tiene que ser una mujer- me contestó-anda llévame a la calle donde vive Lupita y luego vamos al motel, para darte tu dosis de leche, tengo un chingo de ganas de que me la mames igual que el otro día.

Enfile a la calle de Lupita, pensando para mi ¨ este muñeco hoy es mío, me coge porque me coge ¨, mientras llegamos a casa de la novia, le metí la mano entre la ropa y le tome la verga, la que estaba ya en su máxima expresión, le dije anda dame un adelanto, y ni tardo ni perezoso, me detuve en una esquina oscura y me metí en la boca la cabeza de la verga, y le dí un besito y una chupada rápida.

¡ Ya deja ¡- me dijo mi niño – que no puedo bajarme con la verga parada.

Sonriendo le dije, en tono de broma -pues si quieres te la duermo, sacándote la lechita-

Ya en serio, retire mi boca, llegamos a la casa de la novia, y Ángel se bajo del carro, y se dirigió a un lugar rincón oscuro donde lo esperaba Lupita, ahí lo esperé pacientemente casi ¾ de hora, viendo como la pareja de novios se prodigaban toda clase de caricias. Yo pensaba para mí ¨ esta niña me lo va a dejar bien caliente, espero que no se corra de antes de tiempo ¨

Pasado ese tiempo, el chico regreso y pude apreciar que traía la verga bien parada, producto de las caricias subidas de tono que mi rival en amores le prodigaba.

-No mames putito, entre lupita y tu van a acabar conmigo, me van a dejar bien flaco- me dijo.

-Y todavía no has disfrutado de lo mejor; si me metes la verga, si te animas a cogerme entonces si que vas a saber lo que es bueno- le contesté.

Con una sonrisa pícara me dijo y tomándose la verga parada fuera de la ropa me dijo:

-Sigue, sigue, ya casi me convences que te clave este fierro de 20 cm, a ver si luego no sales con que la tengo muy grande y no te cabe, y hasta vas a llorar, cuando la tengas dentro- me contesto- acariciándose la verga, mientras que a mí se me hacía agua la boca.

-Puede que si lloré pero para que me metas hasta los huevos- le repliqué,

Emocionado y calentándome con el espectáculo de ver a Ángel con la verga parada, acariciándosela el mismo, ya con liquido preseminal en la punta, y pensando que si seguía por ese camino irremediablemente Ángel me metería la verga, extendí la mano y la tome, la sentí dura, caliente y palpitante, se la acaricie por todo el camino hasta el motel, subiéndole y bajándole la piel del miembro y pasando la yema de mis dedos por la cabezota, extendiéndole el liquido preseminal y de vez en cuando yo chupaba mis dedos, saboreando ese delicioso líquido que salía de la verga del muchacho, mientras tanto el chico permaneció callado con los ojos cerrados, disfrutando el momento; así llegamos al motel.

Una vez en la habitación, mi muñeco se quito la sudadera, dejando ver su precioso torso, se acostó boca arriba, y bajándose toda la ropa a la rodilla, quedo con la palpitante verga apuntando al techo, su verga era hermosa, grande y brillante en la punta, como con vida propia, y parecía que me invitaba a metérmela en la boca. Sus enormes huevos reposaban en la cama.

-Anda putito, ven y chúpamela- dijo el chico- no ves que mi verga necesita de tu boca- insistió mientras detenía con su mano su su fierro erecto.

Me acerque a el mientras me despojaba de mi camisa, y me aflojaba el cinturón, me libere de mi pantalón, quede sólo en truza, y acerque mi boca a su hermoso pene.

Acerque la punta de mi nariz a la cabeza de su verga y aspire aquel delicioso aroma a sexo joven, a verga adolescente, a macho caliente, que me invitaba a mamar.

Le pase la nariz por la cabeza, luego descendí a todo lo largo del miembro, para regresar a la cabeza, suavemente pase la lengua por la cabeza del palo, luego delicadamente me la metí en la boca dándole un apretoncito con los labios, a lo que el chico respondió con un gemido de placer –ughhhhhhhhhhhhhhh, aaahhhhhhhhhhhh,- eso me halago pues le estaba dando placer a mi Ángel, a mi hombre, a mi macho.

El chico no aguanto la exitación y me tomo la cabeza con la mano empujando su verga hasta el fondo de mi garganta, luego el llevó el ritmo de la mamada empujando mi cabeza y luego sacándola, entre gemido y gemido de placer. -Aaaaahhhhhh, uuuugggghhhhh, aaaaaaahhhhhhhh, que rico, que sabroso, pinche puto que bien la mamas- decía el chico.

En la máxima exitación por la mamada, me atreví subir mis manos para tocarle los pectorales, y el abdomen duro, le pellizque las tetillas, y a el pareció gustarle. Me aflojo la cabeza lo que aprovecha para subir mi cabeza para besarle el pecho apasionadamente, le bese las tetillas, luego me acerque a su cuello, el cual bese, le acaricie las orejas, yo estaba desbordado de pasión por Ángel. Al chico pareció gustarle el momento, pues no me rechazo como la vez anterior, al contrario pareció agradarle mis caricias, yo era feliz disfrutando de ese juvenil cuerpo, aspirando su indescriptible aroma de macho joven, luego me acerque a sus oídos y le musite tiernamente a sus óidos:

–Ángel, mi niño, mi macho, méteme la verga, rómpeme el culo, te deseo tanto, por piedad, se bueno con tu putito, cógeme mi nene, por favor no aguanto más.- le conteste mientras me quitaba la truza.

  • ha que mi putito, nada mas por que estoy bien caliente, te la voy a meter, empínate para quitarte la calentura que traes- dijo mientras me acariciaba las nalgas.

¡ Empínate, para metértela! ¡-

Me dijo con su voz de macho, yo le conteste:

-Métemela de patas al hombro, quiero verte el rostro cuando me estés cogiendo-

-Como quieras- contestó

Me acomode en la cama, Ángel se coloco al borde de la cama, me levanto las pierna al hombro, y colocó su verga al centro de mi culo, pude sentir la redondez de la cabeza en la entrada de mi ano, sentí su tamaño, su calor y le dije ¡ ya métemela por favor!, pero el chico sólo me daba empujoncitos, y me la restregaba entre la raja sintiendo todo lo largo del pene, el niño se divertía con mi culo acrecentando mi deseo.

-¿ De veras que me deseas? , ¿ quieres que sea tu marido? , ¿ quieres que sea yo tu macho de planta ? ¿ que me darás a cambio ?-

-¡ Haré lo que quieras, seré tu puta privada, pero ya métemela por favor ¡

-ahí te va la verga, putito- me dijo

Después de decir esto, sentí como la cabeza de la deseada verga abría los pliegues de mi culo, Ángel había empujado ya su verga para adentro de mi culo, y la cabeza entraba lentamente, la sentí enorme, la sentí sensacional, era lo que había soñado, Angel me estaba poseyendo, ¡ por fin era de el, mi deseo convertido en realidad! ¡ por fin Ángel me hacía su mujer ¡, sentí un ligero dolor cuando me dejo ir la cabeza, pero también tremendo placer, el niño se detuve y me dijo:

-Que culito tan rico tienes, se siente apretadito ¿ te la meto despacio o te la dejo ir toda?-

Temblando de pasión, con la piel erizada de deseo, sólo acerté a decirle:

Como tu quieras pero ya mi rey, ¡ pero métemela ya !

Sentí como la tremenda verga del chico se deslizaba lentamente, milímetro a milímetro en mi hambriento culo, abriéndome mi intimidad, sentí su verga caliente, que me raspaba las paredes intestinales, podía ver su rostro extasiado de placer, del placer que mi culo le estaba proporcionando, el niño gemía de placer. Al fin sentí como sus huevos impedían que me entrara más carne de hombre. ¡ Tenía toda la verga de Ángel dentro de mí ¡ .

El chico jadeando de placer me dijo:

Ya putito, ya la tienes toda donde la quería, ahora mueve ese culo-

Le pedí que por un momento me permitiera disfrutar la sensación de tener todo el trozo de carne entre mí, sin hacer ningún movimiento disfrute del momento. El niño accedió y disfrute tener la salchicha de Ángel toda dentro de mí. Por fin era su mujer.

Luego el chico empezó un mete y saca cadencioso que hacía que me enloquezca de pasión, oía sus gemidos ahhhhhh. Ahhhhhhh. Uuuggghhhh….sentía como la piel de su verga rozaba la piel de mi culo, en ratos me la sacaba casi toda para luego metérmela de nuevo hasta la bolas lo que me llevaba al paraíso, mi rey, mi niño, mi Ángel, que rica verga tienes, que rico me coges…sigue, sigue aaaahhhhhhh……aaauughhhhhhh .

El niño gozaba como enano el momento, cubierto de sudor me decía:

-Que rico culito tienes putito, de lo que me había perdido…..ahhhhh…….aaauuugghhhhhh, no mames………. que rico palo estoy echando. -De quien este culito putito-, me decía entre gemidos de placer- sólo tuyo, mi macho, sólo tu serás mi marido aaahhhhhhh….Ángel, Ángel…Ángel, te quiero…….aaahhhhhh. Mientras seguía sacando y metiendo su verga de mi culo.

Luego el niño me saca la verga y me pone de cuatro patas, me meta de nuevo la verga hasta el tronco, yo me sentía en la nubes, de nuevo por varios minutos, estuvo cogiéndome, luego se recostó sobre mí, sin sacarme la verga; de nuevo empezó a cogerme; como aguantaba el condenado; sentí todo el calor de su cuerpo, todo su peso de hombre, pero lo que mas me gusto fue sentir su aliento en mi nuca, en un momento dado me beso y mordió las orejas, esa caricia aunado a que me empujo la verga lo más profundo que podía hicieron que yo estallara en un tremendo orgasmo, mientras sentía que el chico sufría espasmos lo que anunciaba su inminente venida. Me metió la verga a todo lo que podía y quedándose inmóvil, y con su verga en lo más profundo de mis entrañas, soltó chorros de leche, que yo inmóvil recibí sintiendo lo caliente de ellos en las paredes de mis intestinos, sentí rico al recibir la leche de mi amado en mí interior, sentía como que Ángel sería ya mío aunque lo tenía que compartir con Lupita.

Me saco la verga, y ya pasado el momento de pasión me dijo:

-No mames, putito que rico palo – dijo- yo le dije- para ser la primera vez estuviste fenomenal- ¿ de verdad, te gusto? – claro mi rey, lo disfrute mucho eres todo un macho eres todo un hombre, lo malo es que después de esta cogida, te deseo más.

El niño me dijo- te prometo que te seguiré cogiendo, y tu me seguirás mamando la verga, será nuestro secreto, pero yo seguiré con Lupita, por que la quiero mucho. Pero ¿ me ayudarás con una lana (dinero) ?

La que necesites mi amor y no importas que andes con la mujeres que quieras siempre y cuando me des mi ración de verga y leche, no soy celoso.

Luego lo lleve a casa del tío, al llegar a la casa, el tío estaba en la puerta, el me presento como un amigo.

Ángel fue mi amante de planta por cinco años, nos entendíamos de maravilla en la cama, entre mamada y metida de verga, me hizo feliz en ese tiempo, compartiendo su cuerpo y sus caricias con Lupita. Con mi ayuda económica se caso con Lupita, fui su padrino de bodas, regresó a Tamaulipas, donde ahora vive, pero cuando van de visita a Veracruz, siempre me visita para darme mi ración de leche en la boca y de verga en el culo como el dice. Lo quiero mucho y soy feliz sabiendo que el es feliz con Lupita. Me conformo con que me coja cuando viene de visita. Mi e-mail es: Jose59_luis@yahoo.com.mx

FIN.