Mi amigo Rubén y yo

Rubén y Hugo son dos amigos que pasan una tarde juntos viendo una pelicula porno y ninguno de los dos se espera lo que va a pasar...

Mi amigo Rubén y Yo.

Eran ya casi las dos de la tarde y todavía no había tocado el timbre de salida del instituto. En cuanto sonó, dos minutos más tarde de lo normal, todos mis compañeros y yo, por supuesto, cogimos las mochilas y salimos corriendo del aula hacia nuestras casas. Habían empezado las vacaciones de verano. Mi mejor amigo se llama Rubén, es un chico muy majo, atlético, tiene buen cuerpo aunque no es nada del otro mundo, tiene el pelo rubio claro y le llega hasta los hombros, unos ojos muy bonitos de color verde. Yo me llamo Hugo y soy alto, y aunque no tengo muchos músculos se me notan algo los abdominales y aunque sea joven ya empiezo a tener pelo en el pecho aunque no mucho.

Me estaba esperando en la puerta de la clase mientras yo recogía los deberes de lengua y me decía que me diese más prisa, que sino iba a llegar la vuelta al instituto y aún seguiría recogiendo los libros.

* Ya voy, espérate un segundo- le dije.

* ¡Vamos tío! – me dijo ya un poco mosqueado.

Al salir del instituto fuimos derechos a su casa, ya que estaba de paso por la mía, y mientras hablábamos de lo que habla todo adolescente de 15 años: del partido de futbol de ayer, de las chicas que nos molan, de los últimos juegos de la play, las pelis guarras que nos habíamos bajado ayer…Cosas típicas en adolescentes.

El sexo era el tema preferido de Hugo, desde luego el chico no era virgen ni mucho menos, y yo tampoco. Ambos habíamos estado saliendo hace un tiempo con un par de chicas llamadas María y Andrea que eran amigas y con ellas había sido nuestra primera vez. Para mi, esa a sido la única vez que me e tirado a una tía pero Hugo llevaba una lista bastante larga.

* Rubén esta tarde no están mis padres, que tienen que ir a lo de la agencia de viajes ¿te apetece venirte y te machaco al Pro? – me dijo Rubén con una sonrisa en la boca.

Claro, pero cuando te gane no vale que empieces a llorar como una niña pequeña marica-* le dije con un tono chulesco. ¿En serio crees que vas a ganarme al Pro? ¿Qué te has fumado niñato? –* dijo mientras se reía efusivamente

No me había dado cuenta de que ya estábamos en la puerta de la casa de Rubén.

* ¿Entonces te veo esta tarde chavalin? – me preguntó

Le mire con cara de niño chulo y respondí

* Pues claro. ¿A las 6:30 te viene bien? -

Él asintió

* Pues a esa hora nos vemos. Hasta luego cabroncete. – le dije

  • Pásalo bien – Me contestó mientras habría la puerta del portal de su edificio para subir a su

casa.

Me había quedado dormido aquella tarde pero por suerte me desperté a las seis de la tarde.¡Qué suerte he tenido! Pensé mientras me vestía corriendo para no llegar tarde a casa de Rubén.

Salí de casa despidiéndome de mis padres y colocándome los cascos de mi MP3.

En cuanto estuve en la calle me puse a andar de una forma apresurada para no llegar tarde a casa de mi amigo, mientras escuchaba el último éxito de Black Eyed Peas.

Llegué a el portal y llama al tercero D y al oír a Rubén le dije que me abriese y entre para coger el ascensor.

Cuando llegó el ascensor Rubén estaba esperándome en la puerta de su casa y me dijo:

* Qué ¿Preparado? – Dijo mientras entraba y cerraba la puerta

Nos sentamos en el sofá donde estaban ya los mandos de la Play preparados para jugar al videojuego. Su casa era bastante grande, y es que los padres de mi amigo tenían pasta.

Cuando ya nos aburrimos de jugar, y por supuesto yo había ganado le dije que si cogíamos un rato el ordenador y él me contesto que sí.

* ¿Qué le apetece ver al jugador magnifico del Pro? – Dije mientras soltaba una risa de superioridad.

Vete a la mierda, carbón.* – Me dijo algo molesto la verdad. – ¿Quieres que te enseñe una peli que me descargue ayer? –** Me dijo guiñando un ojo.

* No me lo digas, porno ¿Verdad? – dije yo

* Bingo chaval. – Me contestó

Abrió lo carpeta de descargas y seleccionó una película que se llamaba "Landlady" que quiere decir dueña de una pensión o algo por el estilo.

El reproductor se abrió en el escritorio y empezó la película. Salía un tío pidiendo una habitación en un motel y poco después ya estaban follando en la habitación de aquel hombre. Poco a poco a Rubén se le empezó a notar un bulto de grandes dimensiones bajo unos pantalones vaqueros azules. Comenzó a tocarse poco a poco pensando que no me daría cuenta. Al ver que le estaba mirando mientras tenia la mano en el paquete me dijo:

– Tío, no se si voy a aguantar. Me esta empezando a doler la polla – me dijo ya apretándose el bulto bastante fuerte y sin pudor

* Pues hazte una paja, tío, que quieres que te diga – le dije de forma irónica, sin pensar que lo haría.

¿Lo dices en serio?* –** me dijo con los ojos abiertos como platos.

* Si te apetece…. – le dije. La verdad no me importaba que se pajease delante de mí.

* Gracias tío, eres un colega Hugo. – Me contestó

Entonces sin más se abrió la bragueta de el pantalón. Al notarse incomodo decidió quitarse el pantalón entero y se quedo en boxers. Unos boxers azules claros de marca Calvin Klein bastante ajustados en los que se notaba una buena herramienta ya dura por aquella película. Cuando se los bajó dejo a la vista una polla de 16 centímetros circuncidada y con un bastante bello en su base. Unos huevos colgantes y también llenos de pelo. Desde su ombligo se veía una hilera de pelitos negros hasta su polla. La verdad es que estaba muy bueno y eso que nunca me había fijado en un tío, y menos en mi colega.

Rubén al ver que le miraba la polla y se me empezaba a notar a mí también me dijo:

* ¿Qué miras marica? – dijo mientras se la meneaba de una forma lenta pero sin pausa.

* Yo nada tío conteste algo rojo por el susto que me había dado.

* Ya claro – dijo mientras su cara dibujaba una sonrisa picara.

Un pequeño gemido salía de la boca de aquel chico y le mire a la cara

* Tío, me voy a correr ya – me dijo

Pero sin esperarlo paró en seco.

–Aún no quiero correrme – Me miró – Hazte una paja conmigo tío, ya veras como te gusta–

Me dijo esto mientras llevaba su mano a mi paquete que parecía una carpa de circo de lo dura que estaba.

* Parece que tienes ganas ¿eh? –

  • La verdad es que sí – dije la verdad

Entonces me la agarre y me baje los pantalones hasta dejar a la vista unos calzoncillos que contenían una polla durísima de unos 15 centímetros. Me baje la goma de los calzoncillos y la saqué a la vista de mi amigo.

* Joder Hugo, y yo que pensaba que eres un pichacorta – me dijo él.

* Idiota – solté

Empecé a pajearme bajo la atenta mirada de mi colega Rubén. En la película que ya llevaba la mitad la tía le hacia una mamada súper excitante. Bastantes veces se oían algunos gemidos que se entremezclaban con los de los dos actores de la película y las de mi amigo.

  • Tío, mataría por una mamada ahora mismo – me dijo mi amigo.

Rubén estaba mirando hacia el techo con la boca abierta y no se por que, en serio no se por que, baje hasta la polla de mi amigo, él no se había dado cuenta de lo que estaba haciendo hasta que noto mi boca en su polla. Entonces él reaccionó y de un empujón me apartó.

* ¡Pero que coño haces, maricon! – dijo gritándome y con una cara de enfado que no había visto nunca

Lo…..siento tío, no se que me ha pasado….–* dije casi a punto de morirme de la vergüenza y con la cara roja. ¡Lo que te ha pasado es que eres un marica!–* dijo aún enfadado.

No sabía que me había pasado, nunca había hecho nada parecido con ningún tío, es mas nunca había pasado en un tío desnudo a si que se me ocurrió algo con lo que lo mismo podría perdonarme.

* Tío, ¿Qué puedo hacer para que me perdones? – le dije con miedo a que se me pusiese a gritar como las últimas respuestas que me había dado.

* Tío, siento haberme puesto así…es que nunca me había pasado nada parecido – me contestó

Me imagino Rubén, por favor perdóname.* –** dije mientras se me caía una lagrima de vergüenza.

* Claro que te perdono tío. En realidad eres tu quien debe perdonarme a mi – me dijo acercándose a mi para darme un abrazo.

Nos dimos un abrazo de amigos, claro, y después de esto quitamos la peli que seguía en la pantalla del ordenador .

  • Oye Hugo ¿Te puedo hacer una pregunta? – me dijo

Sabía perfectamente que iba a ser algo referido a la pequeña mamada que le había hecho.

* Claro, dime – contesté sabiendo lo que me esperaba

* ¿Soy…el primer chico al que se la comes? – me preguntó.

Acerté.

Pues….eres el primero, la verdad –* contesté ante su pregunta .**

Vale* – me dijo .**

Se me quedó mirando mientras yo me colocaba los boxers y el pantalón.

¿Te podría pedir un favor Hugo? –* me dijo ¿Qué quieres? – le conteste con un tono un poco borde. Bueno…no…no se como pedirte esto….pero…pero es que hace mucho que no lo hago y ya que tu….– me dijo con la voz temblorosa.

* Quieres que te la coma ¿Verdad? – dije convencido

Pues…la verdad es que si….pero si no quieres nada eh, no quiero obligarte* –** me miró con los ojos demostrando culpabilidad.

* Bueno, como quieras…– conteste ante su ruego.

Dicho esto me fui acercando a su cintura y baje los boxers azules clarito que se había subido después de la pequeña pelea que habíamos tenido. Bajé sus boxer y descubrí un nabo aún erecto por la película. En ese momento me metí su polla en la boca saboreando un sabor indescriptible qui ni me gustaba ni me dejaba de gustar. El chico echó la cabeza para atrás dando un pequeño gemido de placer y a agarrarme del pelo y a follarme por la boca mientras que cada vez iba más rápido y más rápido gritándome lo increíble que era y lo que le estaba gustando hasta que paro en seco y note como un chorro de lefa me llego a la garganta notando lo caliente que estaba. Un sabor amargo me invadía la boca.

* Tío ha sido genial – me dijo mientras me la sacaba de la boca.

Después de esto Rubén se vistió y seguimos pasando la tarde juntos y cada día nos sentimos mejor con nosotros mismos.

Continuará

Si te ha gustado la historia como si no escríbeme a mi mail y cuéntame que te ha parecido. Responderé a TODOS los mails que me lleguen. Gracias.