Mi amiga Viviana
Mi historia con mi ex compañera de trabajo.
Mi amiga Viviana
Este relato es 100 % real, Ella, Viviana, 37 años, casada con dos hijos, yo en ese momento 32 años, casado, 4 años atrás fuimos compañeros de trabajo y existía una buena química entre nosotros, siempre la mire como mujer y a mi me parecía que ella también me miraba en forma distinta a un simple compañero de trabajo.
Solíamos escaparnos de la oficina para tomar un café y éramos íntimos, no solíamos rozar supuestamente si querer y no saludábamos con besos muy cerca de la boca, Viviana es una mujer sencillamente espectacular, rubia, de 1.70 de estatura, un cuerpo esbelto trabajado desde la adolescencia en el gym y un rostro de señora de clase, es una señora de clase y trabaja mas para mantenerse ocupada que por necesidad..
Luego de dejar de trabajar juntos, seguimos con nuestros cafés y almorzábamos de vez en cuando, ella siempre me gusto muchisimo y me daba la impresión, en nuestro inocentes encuentros, que yo le gustaba, pero jamas tuve el valor de acercarme lo suficiente.
Un día me llama al cel y me dice, nos encontramos en tal lugar para almorzar?, yo le digo ok, Nos encontramos en el restauran y en eso vino una chica a saludarla, ella me contó que era un ex compañera de colegio y que seguramente pensará, siendo ella casada, que yo era su lover, entonces le dije como se hace eso?, que cosa? dijo, ser tu lover?, ella río, luego de una conversación plagada de indirectas e insinuaciones, dije, me gustaría hacer el amor con vos, ella se sonrojo y me dijo, que cosas decís!!!.
La llame luego de una semana y le dije que la vi en la calle, que estaba preciosa y que casi choque con el carro por su culpa, ella se rió mucho y se notaba que le encanto el comentario y quedamos en que la busque de su oficina a las 16:00 para tomar un café. Algo me decía que ese seria el día.
La busco, sube a mi carro, estaba vestida con un falda amplia por arriba de las rodillas y una camisa pegadita, al sentarse en el carro se le subió la falda dejándome apreciar esas piernas firmes y bronceadas, le dije donde queres que vayamos?, ella me responde, no se, elegí vos donde quieras irte, seguro? Dije, si seguro. Entonces me dije es ahora o nunca, emprendí camino a un motel, tengo que señalar que tenemos mucha confianza el uno al otro, ella se dio cuenta donde yo iba, puesto que en esta ciudad los moteles están en una zona especifica, en el camino seguíamos hablando como si nada, pero los dos sabíamos en que estabamos.
Al entrar en el estacionamiento del cuarto del motel, me dice, no creo que esto esté bien, ambos somos casados y yo te aprecio mucho como amigo, no respondo, me bajo del carro y le abro su puerta, ella baja, (biennnn, dije dentro mío), la encamino hacia la puerta del cuarto y yo por detrás, imagínense como estaba, me iba a coger a la mujer que mas desee, hasta ese momento, abrí un poco la puerta y dio vuelta el rostro, seguramente para decirme que estabamos equivocados, no le di tiempo y la bese y me peque a ella, haciéndola sentir mi pija durisima a través de la ropa.
Entramos al cuarto y nos empezamos a besar dulcemente, me encantaba besarla, a la vez le metía la mano debajo de la falda y acariciaba ese culo tan deseado por tantos años, envuelto en una tanga de algodón, a partir de allí ya no hubo reclamos respecto al inconveniente de estar juntos.
Le saco la camisa y el sostén y me siento en la cama, ella sigue parada, se da vuelta para que yo le desprenda la falda y la saco despacio, aparece ante mi su hermoso culo, parecía una modelo de lencería. Ella muy segura de si, retrocede unos pasos y se da una vuelta, como posando para mi y me dice, te gusto?, creo que respondí ufgtsshhkk, no me salían las palabras, demasiado me gustaba, me levanto y me saco la ropa quedando en slip, me acerco a ella y la beso y le sobo todo el cuerpo, ella me agarra el paquete y me baja el slip, me encanto lo que me dijo, "Uuyyy, no te pensaba así", mi pija estaba grande, realmente grande.
No acostamos en la cama y le chupaba las tetas, de consistencias bastante aceptables para la edad y dos hijos, recorrí con mi lengua todo su cuerpo, la lamía en la parte interna de los muslos y le rozada con lengüetazos la concha, eróticamente depilada, o por lo menos eso me parecía a mi. Creo que le chupe la concha mas tiempo que a ninguna, a pesar de que no es que me guste mucho, en esa ocasión era diferente, era deliciosa.
Luego de un buen rato me dice, cógeme por favor, yo estaba en el cielo, me puse encima de ella (misionero), previa puesta de condón, le empiezo a meter despacito, muy despacio, quería sentirla milímetro a milímetro, totalmente adentro y sobre ella, para sentir el calor de toda su piel, la bombeo despacio, después fuerte y vario la intensidad, para mi esto era un desafío y la tenia que coger como nunca lo hice y como nunca a ella la cogieron.
La doy vuelta para que ella me cabalgue, al verla encima mío, tocar esas tetas, ver como mi pija entraba en su interior y el estar cumpliendo un sueño, sin querer me corrí, todo esto duro creo 10 minutos, pero mi pija jamas se bajo, la saco de encima y me cambio el condón y la cojo de a cuatro patas durisimamente, ya sentía algo en la cintura de bombear tan violentamente, la levanto y la pongo encima de una mesa que había en el cuarto de frente a mi y la cojo mucho, volvemos a la cama la pongo acostada boca abajo y yo encima cono si le hiciera un masaje, pero con la diferencia que mi pija entraba entre sus muslos juntos directos a la concha, creo que fue la posición que mas le gusto. Ya había pasado mucho tiempo y estaba seguro que ya disfruto bastante, así que volví a la posición que mas me gusta, misionero, y le confesé que desde que la conocí quise que ocurra esto, ella me dijo, yo también y lo imagine varias veces, pero nunca pense que serias tan bueno, besándola me corrí.
Estuvimos acostados en la cama fumado un cigarrillo, charlando y abrazados, luego fuimos a la ducha y nos enjabonamos mutuamente, había una química especial, ella salió de la ducha y se estaba peinando frente al espejo del baño, se veía hermosa y con el culo en pompa, lo que hizo que mi pija volviera a reaccionar, me acerque la abrace desde atrás y le metía entre la nalgas la pija. Ella se dio vuelta y me dijo te voy a dar algo que te mereces, se agacho y me empezó a chupar los huevos, el tronco y después toda adentro de ese bello rostro, la levante la puse frente al espejo y me la cogía desde atrás, ella me había pedido que no me ponga un condón, que me quería sentir, luego siguió la cogida en la cama hasta que me dijo que no podía mas, que le ardía, yo estaba lejos de terminar y ella me saca la pija y me la empieza a masturbar para que termine, entonces le dije, deja, no voy a terminar, la terminaremos en otra oportunidad, ella rió y me dijo estas loco, le dije, yo me ducho con agua fría y esto se baja, pero acordate que me debes una mas y tenes que cumplirla, claro, te lo aseguro me respondió.
Me duche, pense en lo tarde que era y en una excusa para mi esposa.
Esto fue hace un poco mas de un año, con Viviana seguimos siendo amantes y nos queremos mucho, como si fuésemos novios, pero cada uno con sus respectivas vidas.