Mi amiga de la U tambien es zoo

Ery no espero que le repita y en el acto se levantó y nos fuimos a la habitación, Dinky tras nosotras nos seguía gimiendo como si adivinara el manjar que le íbamos a dar. Entramos a la habitación y sin decir palabra nos quitamos la ropa hasta quedar calatitas. Erika era las más emocionada y el perro más que ella porque traía tremenda verga fuera del capuchón.

Mi amiga de la U también es zoo...

Hola amis, nunca imagine que una fantasía de adolescente fuera tan común en la U y en chibolas de mi edad. Estudio en una universidad de Lima y por coincidencia le dicen el "Arca de Noe", yo pensé que era solo porque dicen que de ahí salen mas brutos que cuando ingresan, pero yo creo que debe ser porque a las chibolas nos gusta el sexo con animales, y en especial con el mejor amigo de las mujeres, nuestros perritos; qué amigos que son porque nos hacen gozar mejor que cualquier baboso que presume saber de sexo y mucho de las mujeres. Erika y yo somos amigas de la misma edad que nos conocimos en la U y por coincidencia, ambas somos bajitas y de 50 kilos más o menos. Un día que para mi iba a ser normal (sin sexo con mi perro) porque mi amiga Ery llegaría a mi casa para estudiar porque el fin de semana tendríamos un examen tranca en la U, y baya que tranca que tuvimos las dos.

Mi mamá y su hermano salen todos los días a esto de las 08:00 am y regresan a las 09:00 pm; es normal que yo esté aburrida en el depa, pero tengo tiempo para practicar todas mis fantasías sexuales con Dinky, mi marido secreto desde el día que lo compré. Ery llego al depa a esto de la 09:30 am, siendo verano y muy caluroso vestía un topsito muy ligero y pegado, y una mini jean sin pantys que dejaba al descubierto unas piernas blancas y muy bonitas. Yo por mi parte y por el calor, suelo estar más ligera de ropa que mi amiga. Mientras desayunábamos con Ery, conversábamos de cualquier trivialidad sin importancia. En tanto que Dinky entraba al comedor y poco desperezándose del sueño (duerme en mi habitación) y se metió bajo la mesa. Para mi esto suele ser normal, pero ese día fue distinto porque yo seguía conversando con Ery, pero después de unos veinte minutos, ella estaba con la cara roja y se quedaba en silencia cerrando los ojos de cada un rato. Cuando me di cuenta lo que le estaba pasando a mi amiga, metí la cabeza bajo la mesa y pude ver un espectáculo excitante. Ella con una mano se jalaba la tanga a un costado y Dinky entre sus piernas abiertas, le hacia una sopa de lengua que la hacia estremecerse de placer.

Ery se dio cuenta del ampay y me pidió disculpas, pero le dije que no tenga vergüenza porque era el secreto que le iba a contar. Pero como Dinky se adelanto a las cosas, le dije si podíamos ir a mi cuarto para tener mas comodidad. Ery no espero que le repita y en el acto se levantó y nos fuimos a la habitación, Dinky tras nosotras nos seguía gimiendo como si adivinara el manjar que le íbamos a dar. Entramos a la habitación y sin decir palabra nos quitamos la ropa hasta quedar calatitas. Erika era las más emocionada y el perro más que ella porque traía tremenda verga fuera del capuchón. Ery se sentó al filo de la cama y Dinky sin esperar llamada, metió la cabeza entre sus piernas y comenzó a lamer como si se tratara de un manjar. Erika se retorcía de placer levantando las piernas para que la lengua de Dinky llegara a lo más profunda de su cola. Yo sentada en el sillón, me tiraba una paja de quinceañera con tremendo escena erótica, pero cuando estaba a punto de venirme, Ery respiro profundo y de su garganta se escuchó un aaaaaayyyyyyyy, mamáaaaaaaaaa me estoy muriendo, aaaaaahhhhhhhhhhhh, ahhhhhhhhh, me vengoooooooo y cuando termino ese quejido, de su vagina le salio un pocotón de jugos transparentes como clara de huevo que el perro lamió hasta tragárselo todo, en tanto que mi amiguita poco a poco se fue recuperando hasta quedar sentada al filo de la cama. Cruzamos las miradas y ella me dijo: Melly lo tienes tan bien amaestrado que me hizo una sopa mejor que de película, ayúdame a probar su verga, quiero sentirlo en mi útero porque se le ve muy grande…….

Dinky parecía entender lo que Ery dijo porque en el acto se prendió de su pierna y comenzó a culear como queriendo ensartarla por ahí. Ery me dijo que le ayudara y enseguida se tiro en la cama con las piernas abiertas, Dinky se metió entre sus piernas de Ery y comenzó la culeadera hasta que mi amiguita volvió a gemir de placer, ah, ah, ah, ah, ah, mas, mas, mas, mas, mas, así, así, así, asíiiiiiiiiiiiiiiii, no dejes que lo saque, así, asíiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii, qué rico, me vengo otra vez, me vengo ahhhhgggggggg……….. Y Dinky montado entre las piernas de Ery, aceleraba las movidas del sexo animal hasta que se vaceó dentro de la vagina de mi amiguita, cuando le saco la verga, pude ver otro pocotón de leche de perro con jugos transparentes de Ery que se chorrearon hasta el piso. Yo para no quedarme con las ganas, terminé con tres dedos en la vagina y desparramada en el sillón después de dos orgasmos que me hicieron estremecer.

Pasaron como cinco minutos para que Ery y yo nos recuperemos de tremenda sesión de sexo y sentadas al borde de la cama, miramos al perro desgraciado que placidamente descansaba en un rincón de la habitación. Ery me preguntó si tenia ganas de hacerlo, yo le dije que si pero al perro se le vuelve a parar como dos horas después. Después de una ducha reparadora, nos tiramos en la cama hasta quedarnos dormidas y pasado la 01:10 pm, nos despertamos con ganas de comer cualquier cosa. Juntas salimos a la pollería del chinito de la esquina y compramos medio pollo con bastante mostaza y después de comerlo entre los tres, volvimos a la cama, por su puesto que Dinky tras nosotras.

Estábamos relajadas las dos en la cama, pero noté que Ery estaba nerviosa porque se restregaba las piernas y no dejaba de mirar al perro. Le pregunté si quería hacerlo de nuevo, pero ella me dijo que esta vez me tocaba a mi, yo le dije que tengo a Dinky todo el día y que si quiere, podía repetirlo otra vez. Se puso de pie y en menos de un minito ya estaba peladita, sin nada encima y dispuesta a entregarse a nuestro macho cumplidor. Caminó hacia donde estaba el perro y se agacho para tocarle la entrepierna, Dinky se desperezó y levantando la pata le facilitó el manipuleo de su verga, Ery emocionada se agacho y en menos de dos minutos de mamada, tenia al perro a mil por hora y con mas de la mitad de la verga afuera del capuchón. Ella seguía mamando descontrolada y el perro quería ponerse de pie hasta que lo consiguió.

Ery se puso en la pose de perrita en celo y con la cola paradita estaba dispuesta a todo, Dinky no se hizo esperar y enseguida la montó por atrás y con fuerza animal intentaba culearla como sea. Después de varios intentos Ery comenzó a gemir de placer y Dinky culeaba cada vez mas fuerte haciéndole estremecer las nalgas de Ery para meterle hasta la bola. El espectáculo era muy excitante porque Ery estaba en cuatro con el perro encima de ella enterrado hasta los huevos. Se movían como dos animales hasta que ambos se vinieron en un orgasmo escandaloso, ella gemía de placer y el perro se quejaba como queriendo levantar la pata para agarrar la pose de la enganchada, pero cuando lo hizo, la verga se safó y los jugos de ambos chorrearon por la piernas de Ery hasta llegar al piso. Yo a la vez, al filo de la cama terminaba con otro orgasmo brutal con tres dedos metidos en mi conchita y con la otra mano, me frotaba el clítoris para venirme por completo.

Recuperadas las dos de nuestra sesión de estudios, nos bañamos y después de ello, Ery se despidió pidiéndome por favor que no comentara con nadie para volverlo a hacer en otras oportunidades porque para ella, el sexo zoo era una experiencia que pensó era solo fantasía morbosas y de ninguna manera realidad.

Espero les haya gustado, por favor si me escriben, que solo sea chibolas porque a los mañosotes, no les contestaré.

Con cariño, Melly.