Mi amiga Daniela... o mejor dicho Daniel

Conocí a Daniela en una fiesta, desde que nos presentaron hicimos "click" de inmediato, teníamos los mismos gustos, un gran sentido del humor, etc., nos caímos tan bien que nos pasamos el celular para organizar otra salida… ya fuere a un antro o a tomar un café

Así, nuestra amistad se fue dando hasta convertirnos en confidentes… Daniela era una mujer súper atractiva de 28 años, era muy alta, blanca, con el cabello castaño rojizo, largo hasta la espalda y ondulado, una cara muy fina, ojos muy grandes color miel, medía 1.70, muy delgada, tenía unas piernas hasta el cielo… Dany era super deportista y eso se notaba en su cuerpo, un abdomen perfectamente bien marcado, un trasero grande y paradito y unos senos perfectos que luego me confesó eran producto del cirujano, pero bueno! Hoy en día es tan común y deseado por todas las mujeres, que no le presté mayor importancia.

Las dos éramos solteras, y nos encantaba salir a conocer hombres pero nunca pasaba de unos besos y nada más… la verdad yo también me considero atractiva, tengo 26 años soy delgada, mido 1.65, soy de tez apiñonada, cabello negro lacio y largo, ojos verdes, un trasero pequeño pero muy bien formado producto de todos mis años de ballet, piernas bien torneadas y unos senos medianos pero perfectamente paraditos y duros… por ello la verdad hombres nunca nos faltaron, pero como decíamos: aún no encontrábamos al adecuado.

Así, un viernes por la noche, como era costumbre nos pusimos de acuerdo con las amigas para ir de antro, pero ese día el auto de Dany se descompuso, por lo que le ofrecí pasar por ella a su casa y quedarse en la mía para no tener que andar sola en la madrugada una vez terminada la fiesta

Salimos como a las 3 de la mañana, no habíamos bebido mucho y menos yo porque tenía que conducir, por lo que comenzamos a platicar en el trayecto de nuestras experiencias sexuales y nuestras fantasías eróticas, así hasta que llegamos a la casa

Como vivo sola, le dije a Dany que si no le incomodaría dormir conmigo, mi cama es king size y no habría problema por el espacio, a lo que ella dijo que no tenía ningún inconveniente.

Nos desmaquillamos y nos pusimos el pijama, ella traía un capri a la cadera con un top pegadito blanco que dejaba a relucir sus pezones duritos, yo por mi parte solo traía un boxer con un top ya que era una noche bastante calurosa… la verdad nunca había sentido atracción por una mujer, pero esa noche la verdad Daniela se veía imponente, por lo que empecé a imaginar lo que sería besar esos senos perfectos y redondos… sentir su lengua en mi rajita

Una vez en la cama, le pregunté a Daniela si ella había tenido alguna relación lésbica a lo que ella me dijo: -No… pero creo que es momento de confesarte algo…- la veía muy nerviosa… no me imaginaba que tendría que decirme, sobre todo, porque añadio: -Puede que me corras de tu casa en este momento o que dejemos de ser amigas…- momento en el que me preocupé por que qué podría ser tan grave!...

Después de unos segundos Daniela me dijo simplemente: -Mariana… soy hombre.-

Me quedé petrificada… ¿Cómo era posible que esa mujer tan hermosa pudiera ser un hombre!?... le pregunté tontamente: ¿Cómo, si te ves como una mujer? A lo que ella me contestó, -bueno sí, por fuera me veo como una mujer pero aún conservo aquello que me define como tal… de hecho mi nombre real es Daniel.-

Me quedé un poco pasmada, pero finalmente le dije que eso para mi no cambiaba mi amistad con ella porque finalmente ella era mi amiga o amigo o como quisiera llamarle, y su condición no cambiaba nada el cariño que le tenía… sin embargo, nerviosamente le pregunté: ¿Me lo enseñarías? Por simple curiosidad claro…, a lo que ella me contestó: -Pues, me avergüenza un poco, pero lo mereces por haber tomado esto tan bien.-

Entonces, Daniela se bajó el capri, y dejó a la vista una tanguita blanca con un bultito imperceptible, ya que como me enseñó, todo su miembro se encontraba oculto en su entrepierna, poco a poco se bajó la tanga y dejó a la vista un miembro grueso, no muy largo, de modo que podía ocultarlo de manera perfecta y pasar como lo que era para mi… una mujer.

Sin embargo, cual sería mi sorpresa que en lugar de asombrarme o que se yo, me empecé a mojar al imaginar esta fantasía… Ya no solo sería la imagen de Daniela metiendo su lengua en mi rajita, sino Daniela cogiéndome de la manera más deliciosa mientras yo le besaba esos senos perfectos

Creo que Dany se sintió un poco avergonzada, por lo que volvió a vestirse y me dijo, me dejas darte un abrazo? Te has portado fenomenal.- Por lo que me acerqué y le di un fuerte abrazo, luego poco a poco, acerqué mi cara a su mejilla y poco a poco me fui acercando a su boca, creo que Daniela se sorprendió un poco, pero no hizo nada por retirarse

Una vez que tenía la boca en la comisura de la suya, en un rápido movimiento, Dany se volteó y comenzó a besarme, metiendo toda su lengua en mi boca, mientras yo comenzaba a frotarle las caderas, y subiendo hacia sus senos… Daniela por su parte, mientras continuaba besándome de una manera desenfrenada, comenzó a subirme la blusa para sacármela, a lo que yo rápidamente subí los brazos para deshacerme del top, dejando a la luz mis senos desnudos

Daniela me empujó a la cama y comenzó a mamarme los pezones, dándome pequeñas mordidas y frotándomelos con una delicadeza y a la vez con una pasión desenfrenada, mientras yo sentía como un bulto frotaba ya mi entrepierna, cosa que me puso muchísimo más caliente….

Entonces, me enderecé un poco y le quité su blusita, dejándome en la cara aquellos senos perfectos que me imaginaba cada vez que la veía con sus tops ajustaditos, comencé a besarlos, a frotarlos y a lamerlos completitos… Daniela me quitó los boxers y se sorprendió al ver que bajo de ellos no había nada más que mi rajita completamente depilada… por lo que se recostó de lado y mientras me besaba profundamente, su dedo comenzó a rozar mi entrepierna… yo abrí las piernas de inmediato… pero para mi sorpresa Daniela me las cerró… cosa que me calentó más… esa sensación de querer sus dedos en mi rajita y ella sólo los pasaba rozando sobre ella, sobre mis labios vaginales, rosados y gorditos de tanta excitación

Estaba empapada… Daniela abrió poco a poco mi rajita y comenzó a pasar ligeramente su dedo índice entre mis labios vaginales, frotando un poco mi clítoris… me estaba excitando como nunca un hombre me había puesto… hasta que de pronto metió dos dedos en mi rajita y con el tercero seguía frotándome el clítoris y besándome, metiéndome la lengua al ritmo de sus dedos en mi rajita, bajando a mis senos y regresando a mi boca… me vine por primera vez

De inmediato y sin dejarme descansar un segundo, llevó su cabeza a mi conchita y como una experta comenzó a mamármela, metiendo toda su lengua en mi rajita y con su mano frotando frenéticamente mi clítoris, haciéndome gemir de placer

Nunca nadie me había hecho el sexo oral de una manera tan perfecta, Daniela movía en círculos su lengua dentro de mi, mientras sus dedos hinchaban más y más mi clítoris, luego la metía y la sacaba rápidamente mientras le daba pequeños golpecitos a mi clítoris que para esos momentos ya sentía que estallaba, las descargas eléctricas que provocaban sus dedos en mi clítoris eran insoportables, me retorcía de placer y gritaba como una loca, aaaaaaaah aaaaaaaaaaaaaah aaaaaaaaaaah…. Hasta venirme de nuevo, por lo que le dije que era mi turno.

Me puse sobre Daniela y bajé los Capris, topándome de nuevo con su tanga la cual quité rápidamente ya que su pene ya sobresalía por un costado, ya que al estar tan duro ya no había permanecido en su lugar habitual.

De inmediato lo tomé en mis manos y me percaté de que era bastante grueso, por lo que seguro sería una cogida deliciosa… lo metí en mi boca poco a poco, era mi turno de calentarla y hacerla rogarme que se lo mamara… así su pene pasó de rosar mis labios, hasta llegar al fondo, lo saqué rápidamente para que rogara por que le diera placer… Daniela me decía: -Mámamelo, mámamelo ya por favooor…-

Luego comencé a hacer círculos con la punta de mi lengua en su cabecita, mientras Daniela gemía de placer, lo lamí de la cabeza hasta sus huevos que estaban inflamados y a punto de reventar, poco a poco bajé hasta ellos para metérmelos en la boca y luego para pasar mi lengua en esa zona que va entre los huevos y el ano, Daniela estallaba de placer….

Luego me la metí toda en la boca, subiendo y bajando, mamándosela deliciosamente hasta que Daniela me dijo: Espera, no quiero venirme…-, y de inmediato me volteó, me puso las piernas sobre sus hombros y poco a poco me la fue metiendo en mi rajita

En cuanto sentí la cabecita de su pene en mi rajita le supliqué que me le metiera toda, pero Daniela me dijo: -no, poco a poco, para que te calientes más-, así primero metió la cabecita y me la dejó unos minutos nada más, girándola un poco para calentarme, yo ya le rogaba que me la metiera, por lo que siguió a la mitad, yo jadeaba de placer, sentir que te penetran poco a poco cuando ya la quieres toda es entre desesperante y excitante, hasta que de pronto me la metió toda, y comenzó a meterla y sacarla, mientras con su mano me frotaba los senos y alternaba a mi clítoris, era una cogida deliciosa… Daniela se veía hermosa, con su piel blanca como mármol, pero sus mejillas rosadas por el placer, sus senos perfectos en mis piernas y con su maravilloso pene en mi concha, penetrándome hasta el fondo, mientras sus dedos hacían maravillas con mi clítoris, sentía como apretaba su pene cada que me embestía, cómo llegaba hasta el tope, mientras mis manos acariciaban ese trasero perfecto, redondo y parado

Luego de un rato, me puso en cuatro y me penetró en una embestida rápida… Sentía sus senos en mi espalda, golpeándome con cada cogida, y sus manos acariciaban los míos desde atrás, y alternaban a mi clítoris y a mi ano… comenzó a meterme un dedo poco a poco, y yo comencé a soltarme, gemía y gritaba de placer, le decía: Así Daniela, así… cógeme, métemela toda hasta dentro, y mientras sentía toda su rica verga hasta el fondo, a la vez dos dedos me estaban penetrando el ano, profundamente y al ritmo de la penetración de mi rajita

Creía que me iba a morir, nunca había sentido tanto placer, nunca había dejado que me cogieran por detrás y ahora me estaban penetrando por ambos lados… me vine de nuevo

Así que Daniela se acercó a mi oído y me dijo… te gustaría que te la metiera en tu hoyito precioso?... le dije: Por favor, pero con cuidado Dany, nunca me han penetrado por atrás… le dí el lubricante y le dije: por favor ponte bastante para que no me duela… a lo que ella me contestó, no te preocupes, es la sensación más placentera… luego te daré la oportunidad de que tu me cojas a mi.

Me levantó de las caderas y de nuevo sentí unos dedos que se iban colando poco a poco por mi ano para aflojarlo, y de pronto comencé a sentirla, su pene se abría paso entre mis nalguitas, hasta que llegó al fondo, yo emití un profundo gemido

Dani comenzó a meterlo y sacarlo suavemente, y por entre mis piernas me metió dos dedos en mi rajita, eso me calentó muchísimo, y comenzé a gritarle que me la metiera más, a lo que Dany obedeció inmediatamente, entraba y salía, sentía lo apretado que tenía ese pene delicioso en mi ano, y a la vez esos dedos que hacían maravillas en mi rajita, hasta que no pude más y por enésima ocasión me vine… por lo que Daniela me dijo: -Ahora es mi turno- y se vino por completo dentro de mi, sentí el calor de su leche en mi trasero y solo sentía como ella se retorcía ante tremenda venida entre gemidos incesantes de placer.

Después de eso, nos besamos y nos quedamos dormidas desnudas

Por la mañana, acordamos que volveríamos a tener otro encuentro tan delicioso como ese, pero acordamos pasar por una sex-shop antes de llevarla a su casa, porque ella me lo prometió: "…luego te daré la oportunidad de que tu me cojas a mi."