Mi adorado tio

Lo vi casi desnudo por primera vez y quede impresionado.

Esto que les contare sucedió hace ya tiempo, cuando tenía catorce años. Es el caso que yo vivía con mis padres con cualquier muchacho de catorce años y la verdad no sabía que me gustaran las personas de mi mismo sexo ya que también me atraían las amiguitas que tenía en la secundaria donde estudiaba.

La cuestión es que por azares del destino mis padres tuvieron que irse a vivir a otra ciudad y decidieron para que no perdiera el ciclo escolar dejarme en casa de mis abuelos en donde recientemente se había cambiado un tío que había quedado viudo. Mi tío (hermano de mi padre) era un hombre algo alto como de 1. 80 metros, de ojos azules, pelo castaño claro y en aquél entonces tendría unos 36 años aproximadamente.

El caso es que ya en casa de mis abuelos me instalé en la misma habitación donde dormía mi tío quien sólo estaría en tanto encontrara un lugar para vivir ya que por su viudez vendió su casa y su hijo era ya mayor y por trabajo vivía en otra ciudad. Yo dormía en una cama y él en otra, la habitación tenía baño y era algo reducida.

Así las cosas a mi tío lo había visto alguna veces antes y siempre me había llamado la atención su altura y que tenía un cuerpo más o menos formado pero lo genial es que era a la vez bien parecido.

Al segundo día de llegado no olvidare que al verlo en ropa interior me impacto verlo casi sin ropa, es decir salir del baño con un biquini color azul y poder admirar su cuerpo algo musculoso y el bello que tenía en el pecho y que se convertía en una raya hasta desaparecer debajo de su ropa interior donde se le veía el bulto. Sin embargo como se dio cuenta como lo miraba interrumpí mi visión y trate de olvidar lo visto.

Paso como un mes y mi diversión era allegar de la escuela y tratar de estar en la habitación cuando sabía que salía del baño para verlo en ropa interior.

Una noche cuado hubo mucho frío nos ibamos a acostar y me dijo:

¡ porqué no duermes conmigo ya que la última noche te ví inquieto por el frío!

Yo sabiendo lo que él me gustaba accedí sin más ruegos así que el se quitó su ropa como de costumbre y se quedó solo en ropa interior, es decir sólo con su acostumbrado biquini, era la primera vez que sentía el roce de su cuerpo desnudo por lo que a fin que no viera que me encontraba con la polla a mil decidí voltearme y darle las espaldas.

Pasaron los minutos no pude conciliar el sueño pero como a la hora sentí como mi tío se daba la vuelta y de pronto me abrazó y me dijo despacio al oído:

¿tu tío te quiere mucho, tu me quieres a mi?

Yo gratamente sorprendido y completamente nervioso ya que nunca e había acostado con nadie y mucho menos con mitío le respondí:

Si tío te amo

El me djo:

Pues te voy a demostrar cuanto te quiero

Me dio vuelta y me dio un beso de lo más bello que haya sentido, me respiro en la oreja m acaricio y tomando mi mano la llevo hasta su polla al sentirla quede paralizado ya que nunca había tomado la polla de ningun hombre que no fuera la mía.

Yo instintivamente se la saqué y mi sorpresa fue encontrarme con una tranca impresionante para mi edad, le media aproximadamente 23 cm. Y no era muy gruesa como venosa, sus bolas eran grandes y peludas, por lo que él se sentó en el cabezal de la cama y me indico que se la comiera, yo de inmediato me introduje lo que pude de ese pedazo de carne que bien l agarraba con dos manos y aún le sobraba, después de mamarsela por unos diez minutos, suavemente me volteo y comenzó a comerse mi agujero, yo estaba en la gloria, por primera vez sentía su lengua querer entrar, minutos después saco una crema que tenía en el mueble junto a su cama y se lo puso en un dedo el cual introdujo en mi ano sintiendo ago de dolor por ser mi primera vez, mismo dedo que comenzo a sacar y meter y luego lo hizo con dos y por último con tres ya no doliéndome ya que habia dilatado mi ano.

Pasados unos minutos ví como le unto crema a su polla y me abrió bien las piernas ya que estaba en cuatro sobre la cama y sentí un dolor cuando introdujo la primera parte de su polla por lo que se detuvo y me dijo que si me dolía que él s aguantaba, yo sentía que aquella tranca me partiría, como le dije que siguiera metió otro poco y le dije que siguiera hasta que al fin logro introducirmela toda sintiendo prácticamente los pelos de su polla en mi culo y sus olas golpearme entre las piernas comenzando su ritmo y el dolor había desaparecido y todo era placer, él me decía al oído:

Te gusta mi verga nena, verdad que te gusta lo que te doy?

Yo le decía que sí con respiración cortada aya que mientras él me la metía yo me la jalaba, así estuvimos como quince minutos hasta que sentí que el terminaba dando una especie de quejido abrazándome y diciéndome lo mucho que me quería. Inmediatamente logre terminar lanzando mi leche a la cama, esa fue una experiencia inolvidable.

Descansamos y esa misma noche lo hicimos un par de veces, mi tío me dijo después que se había dado cuenta cuando lo miraba y que como no tenía mujer necesitaba de alguien pero por las enfermedades no quería tener problemas así que me dijo que si quería ser su mujercita todas las noches a lo que le dije que sí, que me encantaría ya que esa había sido mi ilusión.

Pasaron seis años en que sosteníamos relaciones constantes hasta que por un nuevo trabajo se fu a una parte lejana del país y desde ese entonces perdí a un gran amor y mi adorado tío con quien a veces logro cartearme.

Hoy el tiene aproximadamente 60 años y solamente hace dos años lo ví y fue la última vez que estuve con él.

Lo extraño mucho, si lees esto tío Federico, comunícate con tu sobrino para seguir lo que dejamos hace tiempo.