Mi 1ª vez y fue con un hombre (2 Ador ¿Su compr...

Tras llevar un tiempo teniendo relaciones con Ádor, un día me dice que tiene un compromiso....y me afecta a mi.

Mi 1ª vez y fue con un hombre (2) (Ador: ¿Su compromiso?)

Ádor tenía 62 años yo casi 19. Manteníamos relaciones sexuales esporádicas y contínuas. Él normalmente me hacía pajas, alguna vez me la chupaba y muy pocas me dejaba que se la metiese por el culo. Yo cada vez que nos veíamos se la mamaba y me daba por el culo. A mí me gustaba así, disfrutaba mucho y él también.

Un día en la caseta, tumbados en la cama, desnudos, empezó a acariciarme la polla y me dijo:

-Te quería decir una cosa.

-El que- le dije yo.

-Ehhh, es que no sé como decírtelo, bueno ahora luego te lo digo. Ahora disfruta un poco.

Se bajo entre mis piernas y empezó a chupármela, como me gustaba, aquel hombre, maduro, mucho mayor que yo, con mi polla en su boca. Me la puso durísima, luego se tumbó a mi lado, boca a bajo y me dijo:

-Me gustaría que me chuparas el culo.

-Claro, encantado, con lo que me gusta.

Bajé hasta que mi cara quedó a la altura de su culo, empecé a besárselo, con mis manos en sus nalgas se las separé y empecé a besarle el ano, luego a lamerlo, a chuparlo, me encantaba saborear bien su culo. Estuve así un buen rato, él estaba relajado.

-Ahora ponte encima y me la metes un poco.

No podía creérmelo, eso pasaba pocas veces, me puse sobre él, abrí sus nalgas y empecé a meterle mi polla por el culo, poco a poco, le iba cabalgando, él seguía tumbado, parecía que no notaba mi polla mucho, sería por el tamaño, pero yo si notaba como iba penetrando. Lo follé un rato y me corrí, la saqué enseguida, descargando parte del semen sobre su ano, su culo. Yo sabía que no le gustaba que la dejara dentro mucho rato cuando ya me había corrido. Me tumbé a su lado, me miró sonriendo y me dijo:

-Bájate un poco y límpiamelo bien.

Bajé de nuevo a su culo y empecé a chuparlo de nuevo, recogiendo mi semen con la lengua, saboreando aquella delicia de mezcla con su culo. Volví a su lado y me dijo:

-¿Que sabes que pasa? Que tengo un compromiso con un amigo, que le gustan las relaciones con otros hombres, yo he estado varias veces con él. Le conté la suerte que tuve de encontrarte, y lleva varios días insistiéndome, yo le dije que te tenía que preguntar, para ver que pensabas y al final me lo pidió como un favor personal y cogí el compromiso, le dije que sí.

-Pero que sí ¿a qué?

-A que pasarías un rato con él.

-Yo con él, para... tener sexo.

-Sí claro. Pero si no quieres ya veré como lo hago y se lo digo, aunque como le di mi palabra y me comprometí.

-Bueno no sé yo. Yo lo que tú digas haré. Si tu quieres que tenga sexo con él, pues bien. No quiero, pero si tu quieres que lo haga. Además si ya le has dicho que sí, no te voy a dejar mal a ti. Si es tu compromiso, pues eso, yo también soy tuyo, así que lo que me mandes haré. Si tú lo has acordado con él, yo no tengo nada que decir.

-Sí ¿de verdad quieres?

-Sí, sí, y aunque no quiera, si tu me dices que lo haga, yo lo hago por ti.

-Sí, qué pasa ¿qué mando un poco de ti?, Me lo dices de verdad.

-Sí, claro con lo que tengo que agradecerte por dejarme disfrutar de tu polla, puedes estar seguro de que no quiero perderla. Soy tuyo, todo tuyo en el sexo.

-Pues nada ya te avisaré y ahora, ¿me haces algo?

-Te hago todo lo que me pidas, lo que quieras.

Así que le hice lo que más le gusta, me metí su polla, su enorme polla en la boca y con lentitud le hice una buena mamada.

Me llamó un jueves, el viernes me recogería y me llevaría a la caseta, que me preparase bien.

Llegó el día, y en la caseta me dijo:

-Encima de la mesita te he dejado condones, no se que querrá hacerte o que le hagas. Si follais por el culo, con condón, te lo pones o se lo pones tú.

-No sé si sabré, nunca he puesto ninguno.

-Teníamos que haber probado, pero bueno, es muy fácil, con la polla dura, lo abres lo aguantas en la punta con una mano y con la otra lo vas bajando, lo desenrollas por el pene.

-Vale y si quiere una mamada.

-Para eso no hace falta el condón, se la haces sin nada.

Ádor se marchó, yo estaba algo nervioso por la situación y por lo que iba a hacer. A los diez minutos llegó un coche, salí a la puerta a recibirlo, era un hombre de unos 70 años, no muy alto y algo regordete. Que raro todo aquello.

-Hola me llamó Son- dijo.

-Hola

Entramos en la caseta nos tomamos algo y hablamos un rato, me preguntó como conocí a Ádor y como iba. Después hablamos de lo que le gustaría y me dijo que todo, mamadas y enculadas mutuas.

Nos fuimos a la habitación, nos desnudamos, el se sentó en la cama y me hizo un ademán para que me acercara, me fui hacia él, me quedé allí plantado, su cara estaba ante mi polla, empezó a mirarla, estaba encogida, pero al ver como se fijaba empecé a sentir una erección:

-Esto es todo lo que tienes, si a tu edad no tienes más ya no te va a crecer.

Yo intentaba ver la suya pero tenía la camisa por encima.

Empezó a meterse mi polla en la boca, mientras me la sujetaba con una mano, me la lamía, me la chupaba, me pasaba la lengua, la notaba algo rasposa, pero me gustaba mucho la mamada. Aquel abuelo chupándomela, me excitaba sólo la escena. Siguió así unos 5 minutos, me miraba y yo a él viendo como se metía mi polla en su boca, en 3 minutos más no pude aguantarme y me corrí. El dejaba caer el semen, no se lo tragaba, seguía chupando y dejando caer el semen entre la boca y mi polla.

Perdí la erección, el se recostó y me dijo que se la mamara, me arrodillé, él quitó la camisa de encima y vi su polla, estaba medio dura, era grande aunque no tanto como la de Ádor, no muy gruesa, bastante fina, parecía más grande por lo delgada que era y con una pequeña mata de pelo, algo disperso. Empecé chupándole los huevos, luego lamiéndola y finalmente me la fui introduciendo en la boca, así estuve un buen rato, hasta que tuvo una erección, le costó bastante, pero no paré de chuparla, ahora bien dura debía de medir unos 21cm. De pronto levantó las piernas, se me salió la polla de la boca y apareció ante mi su culo, su ano, era algo peludo, con el ano negro. Me dijo que ahora siguiera chupándole el culo, acerqué mi cara, alargué mi lengua, me costaba llegar, tenía algo de reparo, al final lo tenía que hacer, así que empecé a pasarle la lengua, a lamerlo, a darle fuertes besos, a llenarlo de saliva, cada vez me gustaba más chuparlo, él emitía unos ligeros gemidos, y me dijo que se la metiera. Yo acababa de correrme, y no la tenía dura, se lo dije y me contestó:

-Pues menéatela hasta que la tengas dura y mientras no dejes de chuparme el culo, me gusta, lo hace bien.

Así estuve un buen rato, no quería que le chupara más la polla, a mí me hubiese gustado más mamársela un poco, pero ahora no quería, sólo su culo. Mientras, yo me iba pajeando. Todo aquello me excitaba, pensar que le iba a encular también, así que al final conseguí una erección. Cogí un condón, me lo puse en la punta y lo extendí, para ser el primero me salió bien. Me levanté, el apoyó sus piernas sobre mis hombros, acerqué mi polla hacia su culo, presioné y empecé a penetrarlo. A mi polla no le costó nada entrar, entró directa y suave. Se notaba que aquel hombre había tenido muchísimas penetraciones anales, aunque me dijo:

-Tu polla es algo pequeña, no la noto mucho, eso es lo que tenéis los críos pollitas. Ádor te querrá para follarte y que se la chupes y poco más.

Yo no sabía que decir, estaba algo abrumado, sé que no tengo una gran polla, pero parecía que quería humillarme, igual eso le excitaba. No le di más importancia aunque me molestó un poco. Igual tenía razón, yo no le hacía disfrutar con mi pequeña polla, es normal.

Ahí estuve metiéndosela y me dijo que mientras se la fuese pajeando. Mi polla en su culo, mi mano en su polla. Me lo follé hasta que me corrí, que gusto, correrme metiéndola en un culo, aunque sea con condón. No sé que se notará si se corre dentro de mí con condón, a mí me gusta mucho cuando Ádor me folla sin plásticos, a pelo y se corre dentro de mi culo, sentir como descarga dentro, dejándome lleno de semen.

Se la saqué. Me quité el condón. Me hizo que le pusiera uno a él, que bonito deslizar un condón sobre una polla. Me dijo que me tumbara boca abajo, colocó un cojín en mi vientre, mi culo quedó algo levantado. Se llenó los dedos de saliva y me los empezó a meter de forma brusca, me dolía, pero no dije nada, no quería que se burlara de mí o se enfadara, aguanté. Se puso de rodillas encima de mí, notaba sus huevos apoyados en mis nalgas, se preparó y noté como su polla me iba penetrando, me iba abriendo el culo. Con Ádor ya lo había hecho muchas veces, así que ya no me dolía cuando me follaba. Al metérmela Son tampoco me dolía pero no me gustaba tanto como con Ádor, faltaba algo de complicidad entre mi culo y esa polla.

Me la fue metiendo poco a poco, hasta que me entró toda, me dijo:

-Mira, tu polla es pequeña, pero tu culo se lo traga todo bien. Por lo menos tienes algo que vale la pena.

Yo no contesté, seguía humillándome y ahora además mientras me follaba por el culo yo sentía como si estuviese abusando de mí.

Se movía metiendo y sacando su polla, a mí me gustaba, me gusta sentir una polla follándome el culo, me excitaba, jadeaba. Él seguía dentro, fuera, dentro, fuera, aguantaba un ritmo constante, parecía que iba a correrse y paraba un poco. Luego continuaba cabalgándome, encima de mí, como montado a caballo, se iba moviendo y metiendo su polla al trote.

Me dijo:

-Cuando esté a punto de correrme, la sacaré y me la chupas hasta que me corra en tu boca.

Ádor me dijo que se correría en el condón follándome, y no sabía que hacer. Se enfadaría Ádor si dejaba que se corriese en mi boca o sería al contrario, si no le dejaba a su amigo disfrutar. Además yo me había corrido en su boca. Así que al final no dije nada, ya se lo explicaría.

Siguió penetrándome, en un momento me apretó el culo, sacó su polla, se quitó el condón, yo me puse de rodillas y me la metí en la boca, succionaba, se la chupaba y enseguida se corrió, descargando gran cantidad de semen en mi boca. Yo intentaba no tragármelo, seguía chupándosela y dejaba caer algo de semen entre mis labios, pero tenía tanto que tuve que hacer un trago. No estaba tan dulce como el de Ádor, era algo ácido, como pasado, sería por la edad, pensé. Se le fue quedando flácida. Se tumbó un rato y yo junto a él. No dije nada

Se levantó y se vistió. Vi que se sacaba la cartera y con dinero en la mano me dijo:

-Ten 10 euros para ti y estos 30 son los que acordé en pagarle a Ádor.

Yo no podía creerlo, me dejó anonadado. Ádor me había, como decirlo, prostituido con su amigo. Intenté disimular y cogí el dinero

-Ahh, vale. Gracias.

-Bueno ya nos veremos otro día, ya hablaré con Ádor para quedar. Adiós.

-Adiós

Se marchó, yo me quedé desnudo en la cama, pensando en aquello y en lo que Ádor me había obligado a hacer. También accedí yo, pero no sabía que iba a cobrar, lo hice por que era su compromiso.

A los 15 minutos llegó Ádor.

-¿Qué tal como ha ido?

-Bueno bien. Aunque prefiero con mucha diferencia tu polla y que me folles tú.

-Me alegro, si no igual te vas con él. Ahora ya ha pasado, relájate.

-Ah, ten 40 euros que me ha dado para ti, por tener sexo yo con él.

-Eh?

-¿Has cobrado por que me follara?

-No, bueno...es para los gastos de luz de la caseta, para nosotros, para poder comprarnos algún juguete.

-¿Porqué no me dijiste nada?

-Pensaba que dirías que no lo harías por dinero.

-Pues seguramente no, pero... Yo lo hago porque es tu compromiso, si cobras o no es cosa tuya. Lo hago por ti, me da igual el dinero, pero me lo podrías haber dicho. Ya te dije que haré lo que tu me digas, no quiero perder el poder disfrutar con tu polla.

-Vale ahora me quedo tranquilo, si vuelve a pedírmelo te lo diré claro. Y mira esta vez le pedí 30 euros.

-Si los otros 10 me los daba a mi, pero son para ti, todo. Es todo para ti, como yo, todo para ti.

-Que bueno eres, que suerte tuve de cazarte.

-La suerte fue mia, que me vuelve loco tu enrome pollón.

-Bueno y cuéntame como te ha ido.

-No se si te vas a enfadar, me ha follado por el culo, con condón, pero al final se ha corrido en mi boca. No sé si tenía que haberle dejado.

-Sii, no te preocupes, no me enfado. Si ha querido correrse en la boca no pasa nada, yo lo que no quería es que te follara por el culo sin condón y se corriera dentro. Bueno tu boca ahora la limpiamos. ¿Dónde está tu condón?

-Ahí en la mesita.

Cogió el condón que tenía semen dentro, el mio, me dijo que me tumbara boca arriba y lo puso en mi boca, empezó a darle la vuelta y me iba cayendo mi propio semen del condón, me dijo que me lo pasara bien por dentro, como si fuese un enjuague. Lo hice, me pase el semen mezclado con saliva, así era más líquido, por toda la boca, entre los dientes, por la lengua. Luego me dijo que me lo tragara.

-Ves ya está tu boca limpia. Ahora coge unas toallitas y límpiate bien el culo.

Le conté todo como había pasado y le dije:

-Me ha como...humillado, con que si mi polla era pequeña y que no la notaba casi y eso.

-No te preocupes, ya ha pasado, aunque puede tener algo de razón.

-Sí, ¿en qué?

-Pues en lo del tamaño. Comparar tu polla y la mia, pues la mia da más placer, no ves que al ser más grande se nota y se siente más.

-Si pero..

-Nada. Mira así lo entenderás. Tú y yo, vale. Tú eres más pasivo, te gusta más que te la meta por el culo y chupármela a mí que soy más activo. Y a mí me gusta más que me la mames y follarte. Ahora imagínate que el pasivo soy yo y tú el activo. Con tu polla no disfrutaría tanto como tus haces ahora con la mía. Y si yo fuese pasivo mi polla que es más grande estaría desaprovechada. Si es una suerte que tu siendo pasivo puedas disfrutar de una polla bien grande, que te llene. Y si la tienes pequeña da igual, tu tienes más placer notando una buena polla dentro de tu culo, ¿o no?.

-Siii, viéndolo así tienes toda la razón. Con lo que me gusta chupártela menos mal que la tienes bien grande, es verdad que disfruto más. Y cuando me la metes por el culo... me corro sólo de pensarlo.

-Ves, pero no te lo tomes a mal. Es lo que tienes y con lo que tienes que disfrutar. Mira tu culo, también es pequeño y con un ano más grande ya te digo yo que no gozarías tanto de una enculada.

-Sí, si tienes toda la razón. No se porque he pensado que era una humillación. Yo lo que quiero es tu polla todos los días, en mi boca y en mi culo, y me gusta porque la tienes enorme, es verdad. Y ahora la necesito para quitarme la sensación de la boca y el culo de que aún tengo la polla de Son.

-Claro, aquí la tienes.

Estaba de pie, junto a la cama y empezó a desnudarse, yo no podía apartar la mirada de su paquete. Cuando se quedó totalmente en pelotas, no hacía más que mirarle la polla, flácida y tan apetecible, se me hacía la boca agua de pensar en chuparla.

Se tumbó en la cama yo me fui hasta su polla y empece a restregármela por la cara, la cabeza, los ojos, las mejillas, la nariz, pasaba el glande por mi nariz absorviendo el aroma de aquella polla. Empecé besándola y me la metí en la boca, así encogida me cabía toda. Se la chupaba, estaba aún flácida así que no se aguantaba sola, no me la sacaba del todo, chupaba y succionaba. Le dije:

-La necesito así en la boca pero también en el culo, pero hoy necesito que te corras en mi boca por favor.

-Sii, lo que quieras, te follo un poquito y acabo en tu boca.

Se la estuve chupando, notando como le iba creciendo, como tenía una buena erección y se le ponía durísima, a esas alturas ya no me cabía toda, ya se aguantaba sola, pero yo se la agarré con una mano para ir pajeándole al ritmo de la mamada. Que exquisitez.

Se la llene de saliva, chorreando. Me la saque y me puse a cuatro patas, me puse un poco de saliva en el culo y el se puso detrás de mí. Empezó a pasar la punta por mi ano, rozándomelo, yo no podía más, la quería dentro:

-Por favor métemela, métemala ya, la necesito dentro, necesito que me folles el culo ya. Por favor.

-Si ahora, pero si te propongo otro día pasar un rato con un amigo aceptarás.

-Claro, claro, lo que quieras tú haré, pero por favor folláme, follame ya. La necesito, la necesito más que nunca, dentro de mi culo, necesito notarla dentro de mi, hazme tuyo. Ya por favor, yo haré todo lo que me pidas, pero dame por el culo.

-Ahora mismo te pego un polvazo para que disfrutes como loco, que estás muy salido. Y te tomo la palabra.

-Siiii, tomame la palabra y tómame a mí. Méteme tu pollón por el culo, por favooooorrr.

Empezó a penetrarme, yo tenía que suspirar, pero que gusto notar esa polla abriéndose camino por mi culo, que placer. Al notar su polla follarme el culo y que él mientras me acariciaba las nalgas, tuve una erección, aunque no tenía ya fuerzas para correrme.

Que bien me follaba Ádor, lo hacía a un ritmo pausado, disfrutando él y haciéndome disrutar muchísimo, me lo hacía con dulzura. Y es que Ádor me hacía el amor por el culo.

Me estuvo follando así unos 20 minutos, y aun se me hizo corto, la sacó y se puso de pie sobre la cama, yo me acomodé, me puse de rodillas con la cabeza a la altura de su pene y empecé a metérmelo en la boca, se la chupaba al mismo ritmo al que él me estuvo follando, yo le miré, el me mantuvo la mirada. Ahí comprendí que él estaba en una posición de dominio, en aquel momento me di cuenta que estaba totalmente sometido a él, era sumiso. No hay nada de más sometimiento que tener la polla de un hombre en la boca y buscar darle el máximo placer. Así me sentí. Cerré los ojos y me concentré en hacerle una buena mamada, se lo merecía y sobretodo se lo merecía aquella polla. Se la chupé hasta sentir como se corría, me tragaba todo el semen, no quería que me quedara nada de sabor de Son. Se tumbó y yo continué con la polla en la boca, se le encogía pero aún soltaba algo de semen, lo quería todo.

Me dijo si me apetecía que pasáramos la noche y no pude negarme. Nos tumbamos de lado, él detrás de mí, con una mano en mi cadera y parte de mi nalga, y notando su polla bien apretada en mi culo. Así nos dormimos.