Memorias Energéticas 22

La ansiedad me estaba volviendo loca, traté de quitarla escuchando música,  bañándome en la piscina y caminando, pero nada de lo que hacía estaba funcionando.

Veía el sobre y volvía a sentir, tal como al principio, las fuertes clavadas en el pecho. Después de todas estas horas ni siquiera había sido capaz de leer la hoja que guardaba el cuidadosamente preparado sobre.

• Dios! ¿Cómo es posible que sigas haciéndome esto? - me preguntaba enojada -  crees que sencillamente puedes irte y volver las veces que te plazca y dejarme así ?

Pero no importaba cuanto discutiera, nada cambiaba. El día estaba muy caluroso y aunque podría quedarme allí,  algo me hacía querer salir, por lo que tomé mi bolso y me dirigí al pueblo más cercano. Conduje apenas 30 minutos y me detuve frente a un pequeño parque donde apenas unas  cinco personas caminaban.

Pensaba en nuestros paseos, pensaba en Rodrigo también, ¿cómo habría sido nuestra vida si nada de esto hubiese pasado? ¿Ya tendriamos hijos? O ¿cómo hubiese sido estar juntas de una vez por todas? La vida parecía esmerarse en separarnos una y otra vez, en algún momento me comentaste que cada uno elegía a que venia a la tierra antes de nacer, y ahora me pregunto ¿acaso vinimos solo a esquivarnos una y otra vez? ¿Vinimos solo a conocernos y alejarnos? Porque para mi no tiene ningún sentido.

A las 19:00 horas y luego de mucho caminar, pensar y conversar con lo mas profundo de mi ser , decidí que esa noche nada me impediría disfrutar, asi que tomé mi celular y le escribí a aquella chica, luego fuí a la botillería más cercana, en un acto más bien desesperado y bastante estúpido, compré dos botellas de tequila, tres de vodka y 1 de whisky. También con completa irresponsabilidad compré tres mojitos que tomé mientras iba a la camioneta. Sí, una parte de mi estaba completamente agotada y no aguantaba más toda esta locura.

Me dispuse a viajar nuevamente a la casa ya algo mareada por no haber comido nada y gracias a los mojitos que según yo, me dejarían tranquila y quitarían su imagen de mi cabeza.

En casa

• ¿Qué haces tú aquí? - se apresura a decir Romi con un tono serio

• Con un hola bastaba - responde la chica sonriendo sarcástica

• Disculpa Ro, ¿podrías explicarme quien es? - dice Martina viendo a ambas chicas fulminándose con la mirada

• Disculpa! Soy Eli, una "amiga" de Isabel - dice estirando la mano

• ¿amiga? ¿Cómo que amiga? - reprocha rapidamente Romina

• Bueno, si no lo fuera, entonces porqué me habló?,  y a todo esto, ¿donde está?

• No está aquí- se apuró a decir Martina

Sin embargo justo en ese momento se oyó el sonido del motor y la puerta cerrarse.

-Buena suerte la mía - dijo enseguida Eli sonriendo

Al llegar Isa se percató de que sus 2 amigas ya estaban en casa

• Hola! Amigas lindas! ¿Qué hacen aquí?...Hola! - dice saludando a Eli con un beso en la mejilla bastante cerca de sus labios - que bueno que pudiste venir!

• ¿Estuviste bebiendo Isa? - preguntó  Martina luego de ver las botellas que traía

• No me juzgues por favor,  fue un día durísimo,  solo fue un traguito y ya, ¿quieren uno ustedes? Vamos entren adelante

Luego de un rato conversando, Isa preguntó que harian y Romina le comentó que se quedarían para poder conversar algunas cosas al otro día, aunque en realidad solo era para cuidarla.

Ok ok, pero primero lo primero, necesito una ducha urgente y tambie hablar con esta mujer - dijo apuntando a Eli - Acompáñame y te cuento

Romina salto enseguida tratando de evitarlo, pero nada sacó,  y ambas se fueron a la pieza donde dormía Isa.

Al entrar a la habitación Eli sonríe casi victoriosa y se acerca hasta quedar junto a Isa

• Me encanta que me hayas llamado

• Si...(responde sonriendo nerviosa) no sabia que las chicas vendrían

• No importa, eso lo hace más interesante ¿no?

• Sí,  claro. Me voy a bañar, ¿me esperas?

• Tranquila, aquí estaré- responde ya tirada sobre la cama

Rápidamente se desnudó y entro a la ducha. El agua estaba perfecta y aunque seguía bastante mareada, estaba disfrutando el momento.

• ¿Te puedo acompañar bonita? - dice Eli abriendo la puerta -  necesito refrescarme un poco

• Pero...pero...- por más que intentara hilar las ideas, no lograba armar una sola frase

• tomaré eso como sí - dijo entonces y solo se abalanzó a besar mis húmedos labios...

Hola! Primero que todo, gracias por sus mensajitos y correos me encanta. Gracias Sole por continuar leyendo 😊 me encanta.leerlar tambien, asi que sigan comentando.

A los hombres que leen y me mandan correos, no lo hagan porfa, me cargan y se van derechito al spam.

Se viene muy pronto el otro cap