Memorias Energéticas 14

Año 2015

Desperté antes que Fer y fui directo a la cocina a hacer el desayuno, prendí la radio y al ritmo de la música preparé huevos revueltos con pan tostado, también puse mermelada y mantequilla. Jugo, té, café y leche. Abrí las cortinas y la luz que entró a iluminar el comedor me dio la maravillosa sensación de estar exactamente donde tenía que estar.

Cuando ya estaba todo listo me acerqué a la pieza sin poder evitar mirar a mi cuñada...estaba dormida boca arriba por lo que podía detallarla perfectamente.

Vi su mano, roja por los golpes de anoche y recordé lo que había ocurrido, una pena enorme me invadió por un momento. Continué observándola sin darme cuenta del tiempo que pasó

Me acerqué suavemente y sentándome a su lado comencé a acariciar su cabello, ella ni se inmutó

• Hola dormilona, ya es momento de levantarse - decía sin resultados

• Fer...despierta para que tomemos desayuno juntas - nada

Entonces me agaché y besé la comisura de sus labios, al hacerlo una pequeña sonrisa apareció

• ahora si estoy despierta - dijo sonriendo

• Ya decía que era extraño que no despertaras aún, vamos, levántate a desayunar conmigo

Tomamos desayuno y salimos a dar un paseo por un parque cercano. El silencio entre nosotras era tan cómodo como nuestras conversaciones

• ¿Sabes? - comenzó diciendo - Recuerdo las primeras veces que ibas a la casa con mi hermano. Yo trataba de esconderme en mi pieza para no verte o ir donde alguna amiga, pero de cierta manera, me gustaba que no funcionaran mis planes. No entendía que me pasaba y sabía que era algo completamente imposible

• Nunca noté nada extraño

• Claro, si la mayor parte del tiempo estaban juntos, yo creo que ni cuenta te dabas de que existía - respondió mirándome y sonriendo

• Hay cosas que todavía no entiendo Fer y créeme que hasta he pensado que estoy esquizofrénica, lo que nos ha pasado es increíble en todo sentido y...muchas veces me supera

• También pasé por algo parecido, pero como te dije en algún momento...Lucia me ayudó a aceptar y entender que hay mucho que no conocemos y tratar de entenderlo no vale la pena, solo hay que aceptarlo.

Conversamos hasta llegar al parque, buscamos un lugar tranquilo, con poca gente y nos recostamos en el pasto.

• Me gustas - dijo mirando al cielo Fer

Me gustas mucho y, no se como lograr que se pase

• Yo debería querer que se te pasara, pero te mentiría si lo dijera. Cuando pasó lo de...tu sabes, creí que moriría si algo te ocurriría y eso no está bien

• Fui una idiota al no darme cuenta

• No digas eso, no fue tu culpa bajo ninguna circunstancia. Agradezcamos que no fue peor

• Todavía siento asco - dijo sin dejar de ver el cielo - ¿puedo contarte algo?

• Claro que sí

• Lo único que pensaba antes de desmayarme era en ti, temí que no me encontraras y morir ahí. Pero el miedo fue por saber que no te podría ver de nuevo

No dije nada, solo tomé su mano y la apreté. Estás bien pequeña y estos días te cuidaré para que vuelvas a sonreír como tanto me gusta

No me di cuenta cuando me dormí, hasta que apareció Fer en mi sueño y sonriendo me dijo que tenia que despertar, se acercó y besó la comisura de mis labios para luego irse. Desperté y me ví abrazada y con mi cabeza en su pecho. No pude moverme por unos segundos

Tal vez sería bueno ir caminando, ¿no crees? - dije intentando sonar normal

Sí, se hace tarde

Nos pusimos de pie y comenzamos el camino al departamento. Al cabo de 10 minutos suena mi teléfono

• Amiga! Tanto tiempo, que ingrata te has vuelto - dice simulando trizteza Martina - pero tranquila, hoy podrás redimirte

• y ¿cómo sería eso? - respondí sonriendo

• Porque... ¡haremos una pequeña fiesta aprovechando que Rodrigo no está!

• ¿Estás loca? - Fer todavía no está completamente bien, no creo que quiera

• Pero si será algo pequeño, máximo 10 amigos, vamos, tienes que volver a tener vida social, ¿hace cuanto que no vemos a los chicos? - dice haciendo sonidos de perrito triste

• Martina quiere hacer una fiesta en el departamento, según ella con poca gente - digo mirando a Fer

• Súper, me parece una excelente idea - necesitamos distraernos - responde Fer rápidamente

• Ok par de fiesteras. Pero no más de 10 invitados Marti, y cada uno lleva lo suyo, no quiero preparar nada, ¿a qué hora llegarán?

• Les dije que a las 22:30 sería buena hora

• ¿Ya les dijiste? , eres terrible amiga, bueno, nos vemos entonces

Seguimos caminando muy entretenidas hasta llegar al departamento. Fer se fue a descansar un momento y yo me quedé ordenando un poco para la noche.

Año 2019

• Chicas! Se nos adelantaron! - Dice Martina dándome una mirada asesina y dudosa

• El agua está exquisita - respondo tratando de sonar normal

• Eso..no es...verdad! Casi me congelo por creerle

Todas ríen y comienzan a acomodar su cosas mientras Fer me propone una carrera. Ambas nadamos hacia el sector hondo y al llegar me dice simulando un bostezo

• Extrañaba tanto sentirte húmeda, ojalá hubieras acabado en mi boca una vez más

Solo al oír esas palabra volví a mojarme

• No entiendo, como después de no vernos por años sigo cayendo en este juego - dije tratando de parecer enojada - me voy a salir, debería estar con mi ESPOSO

• Auch, golpe bajo

Volví a mi cabaña con la cabeza echa un nudo y al llegar encuentro a Rodrigo y algunos de sus amigos bebiendo. Desde hace un tiempo, se ha vuelto muy bueno para tomar, no me gusta para nada, pero lo tolero, de todas maneras hablaré con el más tarde.

-Amor...mi mujer! Que preciosura tengo por esposa ¿no chicos?

Sus amigos solo sonríen y afirman viéndome pasar en bikini hacia mi habitación. Incómoda situación.

Entro directo a la ducha para tratar de calmarme un poco, me quito la parte de arriba y antes de quitar la se abajo escucho abrirse la puerta y siento el olor a trago

Rodrigo corre la cortina y mira fijamente mis pechos, solo lleva sus pantalón desabrochado y unos segundos después comienza a quitárselos

• Amor, sabes que no me gusta el olor a trago

• ¿quieres que me lave los dientes? - dice él con un tono algo burlesco

• No quiero hacerlo ahora, solo deja que termine y entras

• No tuvimos nuestra noche de bodas, así que ahora podríamos ponernos al día- responde sin hacerme caso, quitándose su ropa interior y entrando a la ducha. Trata de besarme, pero no se lo permito

• No quiero, ya te dije

• Solo un poquito - responde tocando mi entrepierna y notando enseguida la diferencia de mis fluidos con el agua

• Pero mira como te has puesto mi amor, ven, te va a gustar, ya se que tienes ganas

Me tomó por la cintura y besando mi cuello me llevó hasta sentir su miembro sobre mi vagina. Pero yo no podía pensar en él, no después de lo que había pasado. Bajó mi traje de baño y sin más metió dos dedos en mi centro húmedo, pero no por él.

Me quejé enseguida por la incomodidad, pero siguió sin ninguna idea de lo que hacía.

Ya harta del olor a alcohol y buscando una forma de que se fuera, tomé su miembro y comencé a masturbarlo. Sabía perfectamente como le gustaba asi que no tardó mucho en acabar, al hacerlo le pedí que saliera para terminar de bañarme.

Ya satisfecho se fue y yo quedé nuevamente en nada.

Hace meses que no estábamos bien como pareja, él cada semana llegaba bebido y el hombre tierno que alguna vez fue se estaba transformando en un ególatra vanidoso, muy bien catalogado en su trabajo y al cabo de un año lo habían ascendido, mencionándolo como la joven promesa de la medicina.

Llevaba meses sin un orgasmo y aunque trataba de tocarme por las noches, mi cabeza terminaba traicionándome y evitándome llegar al placer, y a Rodrigo no le importaba.

Nuestro matrimonio fue la solución que ambos encontramos para detener esto...o eso creiamos. Pésima idea tratar de arreglar todo casándonos, pero que más iba a hacer si teniamos todo planeado y la fuerza de la costumbre pudo más.

En la tarde teníamos planificado un paseo al cerro, nos preparamos y salimos para juntarnos con los demás. A mi marido a penas se le había quitado el olor a trago y sus hermanas lo notaron.

Cuando hago trekking me gusta hacerlo tranquila y todos lo saben, así que me puse mis audífonos y comencé a caminar adelante.

Año 2015

• Claro que lo pensé antes amiga, tranquila - escucho decir a Martina ante mi molestia por las 15 personas que ya habían llegado

• Quedamos en que sería algo pequeño y mira...- mostrando alrededor

-Lo siento amiga, no sabía que traerían acompañante

Pero la discusión termina enseguida cuando giro mi cara y veo a Fer coqueteando descaradamente con una chica

• Uf amiga...cambia tu cara o todos se darán cuenta

• No se de que hablas - digo tratando de pasar desapercibida

• Ya es grande...y tu estás con Rodrigo, tranquila. Deja que se divierta

Sí, lo se...entiendo lo que dice Marti, pero me hierbe la sangre de verla en esa pose coqueta que solo había visto hacia mi

La noche pasa tranquila entre risas y tragos, tomé algunos mistral ice y evito mirar mucho a Fer. Pero ya son casi las 4 am, estoy algo mareada y le pido a mi amiga que se encargue de terminar todo para poder descansar.

Llego a mi habitación y luego de cerrar con llave me quito la ropa y caigo en la cama, apenas me acomodo cierro los ojos para dormir, estoy agotadísima

FERNANDA

Ver a Cata luego de tantos años me alegró muchísimo y pasamos gran parte de la noche poniéndonos al día. Ella fue mi compañera de colegio y nos habíamos encontrado en España un mes que fue de vacaciones. Teníamos mucha química sexual y eso hacía que cada vez que nos veíamos la pasáramos muy bien.

• Me sorprende que estés aquí, ¿con quién vienes?

• Con Rosario, es una amiga de mi hermano y nos llevamos bien, hoy íbamos a salir a bailar, pero terminamos aquí...y lo agradezco ahora que te veo- dice ella sonriendo coqueta

• y tu bella,¿Qué tal va todo?¿y tu chica?

• Ya no estamos juntas, terminamos hace un tiempo y bueno han pasado muchas cosas, la mayoría increíbles - respondí mirando a Isa

• Bueno, tenemos tiempo. Rosario está entretenida así que acompáñame a buscar algo para tomar y me cuentas

Conversamos por horas, fue agradable hablar con alguien sobre todo lo que estaba viviendo y no ser juzgada o tomada por loca.

• Yo creo que deberían darse una oportunidad

• ¿y mi hermano? No puedo decirle que estoy enamorada de su novia, me odiaría

• No le digas, pero si realment es tan fuerte como me cuentas, deberian al menos intentarlo

• Tal vez tengas razón...me duele un poco la cabeza, ¿vamos a mi habitación? Quisiera recostarme un rato

• Encantada señorita vamos

Al pasar por la sala noté la mirada asesina de Isa y solo atiné a sonreirle. Tomé 2 mistral y nos fuimos a mi pieza.

Al llegar ambas nos acostamos y dormimos unos minutos. Cata me despertó para despedirse y yo me levanté para aprovechar de darme un baño de tina suponiendo que Isa aún seguiría en la fiesta.

Me di una exquisito baño de tina, necesitaba relajarme, traté de no pensar en nada, pero era difícil y lo que me dijo Cata quedó dándome vueltas.

¿Podríamos intentarlo?¿ funcionaría ?

Me quedé más de 20 minutos allí hasta que decidí salirme, tomé una toalla y mientras me secaba salí a la pieza de Isa.

Noté enseguida que habia tomado porque no acostumbraba dormir con ropa, ya la había conocido lo suficiente como para saberlo.

Me acerqué y la moví muy suave para despertarla

• Hey...Isa, despierta, ponte el pijama

• Déjame así...tu anda con tu noviecita - decia entre dientez y aun con los ojos cerrados

• no tengo ninguna noviecita, ahora vamos, ayúdame y párate para poder ponerte el pijama o mañana andarás insoportable

• Tu te acostaste con ella, dime la verdad!

• No Isa, no me he acostado con ella y eso ¿que te importa?

• No me importa - dice levantándose con mala cara - me da igual

• ¿Si?, ¿estás segura?

• Completamente segura! - afirma mientras mira mis labios

• sonrío al notar esto y paso auavemente mi lengua sobre ellos

• no hagas eso

-¿Que cosa?

• eso que estas haciendo - dice imitando mi gesto

• es que se me habían secado...podrías ayudarne

Al decir esto me acerco y junto nuestros labios mientras de fondo suena zundada, Martina está muy old school

Enseguida las manos de Isa comienzan a tomar confianza y recorre mis hombros apretando un poco, mientras yo me concentro en la piel bajo su polera, es tan suave...

Sus besos siguen siendo un imán demasiado potente que no puedo detener, y llega un recuerdo nuevamente

"Estamos en un bosque basándonos y sonriendo por haber conseguido estar juntas otra vez"

Abro los ojos enseguida y veo que Isa también está con cara de sorpresa

• ¿Lo viste? - pregunta

• Lo sentí...

Nada más necesitamos para saber que el deseo se apoderaría de nosotros

Comencé a levantar su polera y dándole un beso en su mejilla la quité, ella hizo lo mismo con la toalla bajándola y dejando mis pechos al descubierto, quité su sostén y besé sus hombros, su piel me tenía enajenada, nos acostamos mientras ella se quitaba los pantalones, al verla creí que podría tener un orgasmo enorme solo con verla, parecía un sueño todo lo que estaba pasando

Comencé a besar su cuello mientras mis manos recorrian su cuerpo y a medida que escuchaba su respiración más agitada más bajaba con mis besos.

Quería hacerla mía completamente, quería sentime dentro de ella, parte de ella.

Al llegar al borde de su ropa interior me detuve a verl por unos segundo, sus ojos lujuriosos rogaban que siguiera y no los haría esperar

Bajé lentamente la ultima prenda y fuí besando cada centimetro con delicadeza, hasta llegar a su clítoris que me esperaba totalmente exitado

Con mi lengua comencé a rozarlo y luego a besarlo, sentir su sabor me descontrolaba...podía notar mi mentón húmedo lo que me hizo acercar mi mano y tocar un poco la entrada de su vagina y sientiendo su deseo comenzar a entrar muy lentamiente y sin dejar de hacer lo que estaba haciendo.

Isa comenzó entonces a genir subí mi otra mano para cubrir un poco su boca, pero no sirvió de mucho, ya que con cada empuje de mis dedos volvía a salir uno más fuerte

Continúe moviendo mi lengua cada vez un poco más rapido y profundo y mi mano también aumentando el ritmo, quería que explotara de placer, quería sentirla fluyendo en mi

Cuando su cuerpo comenzó a contorcionarse supe que ya estaba cerca continué hasta que sentí como de apretaban mis dedos dentro suyo, sus gemidos se convirtieron en cortos gritos y me elevanan a mil cada vez que los oía

• ¿Isa?, ¿Isa, estás bien?

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Muchas gracias por sus correos y comentario ! Me encanta leerlos, porfa sigan haciéndolo.   He estado volviendo al trabajo así que he tenido poco tiempo para escribir, pero me encanta esta historia asi3que seguiremos si p si.

Espero que esten muy muy bien cuidandose, desde Chile les mando un gran abrazo