Memorias de un sanitario

Memorias de un sanitario - Pedro Allende. Nadie sabía más que yo de mujeres pero no era suficiente, quería saber lo era realmente amar a una mujer.

Hola, soy Yo

Hoy no voy a contarte de las cosas que normalmente forman parte de mi cotidianidad… que de por si para muchos pueden parecer desagradables… Hoy voy a hablarte de algo fantástico pero verídico que me sucedió… algo que solo pudo sucederle a mí, a un sanitario localizado en el baño de mujeres de uno de los bares más ilustres de esta ciudad.

Pero primero te contare de mí, de donde vivo… Mi entorno es bastante agradable, el aseo es impecable… cada dos horas Paula entra y me asea con tanto fervor y dedicación que ha despertado en mí un sentimiento de cariño a través de los años. No sé que siente ella por mí, ni nuca lo sabré… pero que más da

El cuarto de baño es amplio, tiene forma rectangular. Ingresas por una puerta en madera de cedro bastante robusta y con una chapa que permite cerrarla desde adentro. A la izquierda encuentras a mi amigo el lavamanos y a la derecha después de un pequeño muro divisor estoy Yo… No hay una puerta que me impida la vista de lo que pasa enfrente y además hay un espejo gigante que me permite ver lo que sucede en las zonas del cuarto donde mis ojos no llegan. Hay una pequeña ventana en la parte posterior, por donde entra ventilación y un ambientador que da un aroma siempre agradable a nuestras visitantes. Hay un reloj de manecillas grande, que marca las horas que permanezco aquí. En la entrada hay un letrero que dice "Mujeres". Razón por la cual me siento afortunado… Ya que soy EL sanitario, mi masculinidad hace que disfrute a todas y cada una de las damitas que con frecuencia vienen a posarse en mi calido cojín.

Se preguntarán donde quedan mis ojos… Pues les digo que no tengo DOS, sino TRES… es una de las ventajas de ser un sanitario… tienes visión tripartita. Algo que no poseen muchos seres en este planeta.

Dos de mis ojos están sobre mi tanque de almacenamiento de agua. Los abro siempre que no miras… Otro lo tengo en el fondo de mi hoyo… Y aunque a algunos pueda parecerles asqueroso… a mi me parece muy normal… porque así nací y así soy… no sé lo que es tener solo dos ojos… ni quiero saberlo… no sé lo que es "caminar" desplazarme… no conozco el exterior, solo el interior… pero así es, es mi mundo y lo amo!!! Pero para ser sincero… si sé algunas cosas del mundo de los humanos… cosas que más adelante me atreveré a contarles.

Tipo 8PM el bar abre… empiezo a recibir muchachas hermosas, muy arregladas, observo como siguen y se observan al espejo mientras dan los últimos toques a su ajuar nocturno. Muchas culminan su maquillaje, otras acomodan su busto… y otras se ajustan sus vestidos muy ceñidos al cuerpo… se miran, hacen una mirada sexy al espejo y ensayan algunos movimientos que esperan atraigan la atención de los machos con los que algunas se escabullirán dentro de este cuarto pasadas las 11PM

De todas ellas hay dos que son visitantes habituales y de las cuales conozco muchas historias, ellas son Alejandra y Lorena… Para que vean de lo que se han perdido, por no ser un sanitario como Yo, procedo a describirlas

Alejandra es delgada… posee una piel canela adornada por un largo y negro cabello liso… ese cabello juega con sus hombros finos de princesa… hombros que todas las noches se exhiben desnudos gracias a las blusas pegadas color blanco que ella siempre usa… la perfecta vista de su espalda solo es interrumpida por los delicados hilos que sostienen su sujetador… un sujetador adornado con encajes y que siempre luce en colores pastel… Sus senos son grandes, redondos y se aplastan con una redondez infinita cuando yace acostada sobre la mesa de fondo en la cual muchos la han follado… justo aquí en este cuarto de baño.

Los pezones de Alejandra son el plato más exquisito, morenos y grandes… con unas puntas sobredimensionadas, que se hinchan al contacto con su amante y que lo apuntan amenazadoramente al momento del éxtasis. El rostro de Alejandra es de por sí hermoso… enigmático y provoca en quien la conquista la sensación de haber dominado al más inaccesible de los imperios… Sus labios son carnosos y devoran al amante que sepa llevarla a su punto más alto… sus historias son pocas… es una mujer muy selectiva y solamente la he visto follar con tres tipos en los últimos cinco años… todos sus novios, ya que un Te Amo escapa de sus labios cuando la llevan al cielo.

Lorena por otro lado, es sin duda una bomba… su piel blanca, sus senos perfectos… abultados, redondos y con unos pezones con tono rosado claro, logran disimular su tamaño a la vista, más no al tacto… Al tacto enervan la mente de quien tiene el placer de llegar hasta donde pocos han llegado… Su cabello teñido de un rojo único, contrasta con la hermosura de sus ojos… Sus labios finos y provocativos se asimilan al durazno más tierno que pueda probarse… Su clase incomparable.

Como se abran dado cuenta, la cantidad de líneas de mis elogios concuerda con el orden de preferencia que tengo por cada una de ellas… Conozco sus historias, situaciones que ocurrieron aquí dentro de estas cuatro paredes, donde mis tres ojos fueron testigos de lo acontecido. Pero esta vez no hablare de lo que terceros hicieron con ellas… esta vez les contare lo que me impulso a compartir estas líneas con el mundo de los humanos… La sesión de sexo que tuve con una de ellas el día que el "Hada Sanitaria" se apareció en mi hasta entonces rutinario cuarto de baño.

Sanitario… tienes nombre (dijo el hada)

No, soy un sanitario… no tenemos un nombre (respondí)

Desde hoy serás Pedro…, Y solo por esta noche te concederé forma humana para que puedas conocer el mundo de los hombres y luego poder volver a ser lo que eres… (dijo el hada)

Pero ¿Por qué?, que tal me guste la vida de los hombres y después vuelva a ser lo que soy… Si bien es cierto soy feliz siendo un Sanitario… de pronto después de conocer el mundo de los hombres, me sea agradable y entonces ante la imposibilidad de volver, viviré desdichado para siempre dentro de este cuarto de baño, que hasta hoy ha sido mi hogar, mi mundo, mi felicidad. (argumenté)

De acuerdo, entonces iré a otro cuarto de baño, talvez allí encuentre un sanitario que desee tomar el riesgo (dijo el hada)

Espera, (dije) adelante, concededme el deseo

Bien… por tres horas serás un hombre, solo una condición… no podrás salir de este cuarto de baño… y en compensación a eso te daré el privilegio de deslumbrar a una mujer que entre a este lugar. Sentirá que eres todo para ella y te complacerá en todo lo que quieras… Recuerda, solo una mujer y tienes tres horas… (dijo el hada)

Y ahora… que se cumpla mi hechizo!

Me vi con forma humana, estaba allí desnudo, parado frente al espejo que fue mi "retrovisor por tanto tiempo", con dos ojos como todos ustedes, con una boca, con piel, piernas, brazos, cabeza… y algo entre las piernas… algo muy pequeño y poco rígido comparado a los que vi cuando penetraban a las mujeres que he visto durante tanto tiempo desfilar por este cuarto de baño.

Observo el reloj de la pared… marca la 1AM… a las 4AM no seré más humano… volveré a ser lo que Soy… un Sanitario, pero al menos conservare mi nombre… Pedro.

La puerta se abre… no me preocupo de mi desnudez… igual los sanitarios (con algunas excepciones) permanecemos desnudos todo el tiempo… era Alejandra… deslumbrada por mi presencia (como dijo el hada), se acerco y sin temor me dijo

Eres todo para mí… Mi Pedro

Me llamo por mi nombre humano, toco mi piel… era la primera vez que sentía el tacto de una piel humana… la primera vez que percibía el olor de la mujer que tantas veces había observado, que tantas veces había recibido en mi cuerpo de sanitario.

Entre mis piernas, lo que yo consideraba pequeño y blando… inmediatamente se convirtió en rígido y largo… Alejandra lo sintió cuando presione su pelvis aun cubierta por su falda negra y corta.

Todo ese mar de sensaciones, me llevo a desearla… con mi boca humana, probé sus labios, con mis manos humanas toque su cuerpo, con mis dos ojos humanos reconocí su hermosura. En cuestión de segundos la empuje contra el muro donde antes observaba parejas devorándose mutuamente… esta vez era Yo…, quien tenia el placer de sentir todas esas sensaciones humanas. La bese con pasión, con la desesperación acumulada de mil veces que la había observado sin poder tocarla, olerla, sentirla e incluso hacer que se percatará de que estaba allí.

Alcanzo a percibir el olor de su sexo… Alejandra gime al recibir en su cuello las caricias que le propino… La empujo contra el muro, con fuerza y ritmo… ante esto Alejandra instintivamente abre sus piernas para permitir que mi Pene se apriete contra su vientre. En segundos la tengo desnuda… mi piel contra su piel… mi pene rozando la humedad de su sexo…Yo sintiendo por primera vez lo que es la humedad, lo que es sentir, lo que es el placer humano en carne propia.

Métemela…(dice Alejandra)

Es mi primera vez… ella no lo sabe, pero es mi primera vez… tiempo para decírselo hay poco, el reloj marca ya la 1:30AM… más que hablar quiero sentir, quiero experimentar que se siente allí adentro, quiero sentir la sensación de ese agujero húmedo de Alejandra, que me invita a entrar y que se abre para mí.

La subo en la mesa del tocador, es amplia y cabemos… la sensación del frió mármol la hace estremecerse y jadear… igual a mí, ya que por primera vez siento que mi piel caliente se tibia con el frío de la mesa. El calor de nuestros cuerpos pronto pone calida la superficie, devolviéndonos al encanto de los besos y las caricias.

Mi pene se abre camino entre las piernas de Alejandra, roza su humedad, la cual me invita a entrar… a arrancarme mi virginidad humana. Alejandra me mira con sus oscuros ojos negros, yo le sostengo la mirada, justo en ese momento mi pene roza sus labios vaginales, la vagina de Alejandra se ensancha al paso de mi mástil de carne. Siento el calor de su vientre, sus flujos embadurnando la piel de mi pene, centímetro a centímetro entro en ella. Pierdo mi virginidad dentro de una princesa… las sensaciones son enormes e inexplicables… siento mucho más de lo que puede haber sentido cualquier humano… todo para mi es nuevo, me transporto a otra dimensión.

Con ritmo empiezo a moverme dentro de Alejandra, un ritmo natural marcado por las sensaciones que lo acompañan, jadeo y me convulsiono ante semejante placer. Ella parece sentir lo mismo, ya que se estremece y jadea conmigo. Siento en mi pecho la presión de dos puntos… levanto mi cuerpo y observo como los pezones de Alejandra se han puesto tan rígidos y morenos como nunca los había visto.

El reloj marca las 2AM pero Yo no me percato, embisto a Alejandra con fuerza, le propino placer por un tiempo indeterminado, sin detenerme… jadea, se empapa… se estremece en varias ocasiones diciendo

-llegue!!!

No comprendo lo que dice, sigo taladrando hasta que mi cuerpo me entrega una nueva sensación, siento como un volcán dentro de mí… específicamente en mi zona genital… siento algo que quiere salir y no puede… incremento la fuerza con que penetro a Alejandra, ya que a cada empujón aumenta mi sensación de placer. Alejandra me rasguña la espalda diciendo que nunca había sentido algo así

sigue así, sigue así, dale, dale, soy tuya Pedro… dame duro, sígueme dando

Yo tampoco nunca había sentido algo así… me estremezco, empujo con una frecuencia más alta, Alejandra empapa mi vientre con sus fluidos… de repente el mundo se detiene, siento que algo sale de mí…. Empiezo a sentir como mi pene bombea, se contorsiona y expulsa lo que quería salir de mí. Alejandra tuerce sus ojos del placer tan inmenso… siento más humedad que la habitual y me contorsiono en una sensación jamás vivida… es mi primer orgasmo. Sigo moviéndome a un ritmo más lento, Alejandra me abraza y me dice que me ama… No se lo que eso significa pero creo sentir lo mismo… Nos abrazamos por minutos eternos… Nuestros cuerpos se relajan poco a poco… siento como los pezones de Alejandra se relajan y no presionan más mi pecho. Siento mi pene relajarse y empequeñecerse nuevamente. Me retiro de dentro de mi amante… observo como mi semen resbala por la vagina de Alejandra, empapando su entrepierna. Ella me mira con ternura y me dice que quiere que sea yo quien noche a noche la lleve al lugar a donde la lleve hoy

Vuelvo a la realidad, miro el reloj, son las 3:50AM… me quedan solo 10 minutos antes de volver a convertirme en lo que soy, en un sanitario

No vale la pena gastar el preciado tiempo en dar explicaciones, la abrazo, la beso por todo su cuerpo para poder guardar en mi mente ese sabor y olor que nunca más tendré… quedan solo tres minutos… ella me dice que me ama de nuevo y Yo me desvanezco de mi forma humana

Alejandra se percata de su soledad, se levanta de la mesa de tocador y me busca con desesperación… nada, un cuarto de baño vacío… solo un espejo, un lavamanos y un sanitario donde siempre han estado… allí donde ella jamás pensará que yace su amor eterno

Se reincorpora, se viste, se arregla, se mira en el espejo… se sienta en mí, una gota de semen mezclado con los flujos vaginales que antes me embadurnaban, cae dentro de mi boca de sanitario… mi tercer ojo observa el sitio donde perdí mi virginidad, donde me embadurne de ella, donde deposite mi primera eyaculación… Lorena me da una lluvia dorada… una lluvia que ya no puedo sentir ni oler…Se pone en pie y sale del cuarto de baño

Al poco tiempo se abre la puerta de nuevo, es Lorena, la otra chica de la que les hable… ya no me parece tan atractiva como les comente anteriormente, en mi mente solo hay espacio ahora para mi Alejandra… la mujer que me enseño a ser hombre, la que me enseño a Amar… la que nunca tendré y la que estoy condenado a observar desde mi posición eterna, la del sanitario de este bar

Relato por:

Pedro Allende realizado para el ejercicio IX de Autores de todorelatos.com

Escríbanme sus comentarios a pedro.allende75@gmail.com

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