Melanie, la historia de una amistad íntima (5)

Un sonido peculiar la despertó, abrió los ojos y el blanco techo se materializaba ante su mirada, había estado soñando con pollitos fosforescentes pero la realidad la hizo olvidar el resto del sueño, el sonido tenía más sentido mientras su mente regresaba en sí, era el ruido de la puerta de su cuarto cerrándose.

-!...que baje a desayunar! - Decía la voz de su madre desde la cocina, Melanie se preguntaba a quién le gritaba, se incorporó un poco para ver que no hubiese manchado la almohada, pero su mascarilla seguía sobre su rostro, no sabía si se suponía que durmiera con ella o había que limpiarla antes de quedarse dormida, pero eso ya no era elección.

-Huugg - Un grito ahogado sonó y rápidamente vio la puerta de su cuarto cerrarse, había sido abierta silenciosamente, Melanie tardó unos segundos para recordar que se había dormido desnuda y que así seguía, se levantó y puso seguro a la puerta, luego prosiguió a buscar un camisón y un short que ponerse - Melanie ¿estás despierta? - preguntó la voz de su tío Roberto desde el otro lado.

-Sí tío - Melanie se preguntaba si no era demasiado obvio que estaba despierta si seguramente la había visto sentada desnuda sobre la cama.

-Tu madre dice que bajes a comer - Se escuchó un poco nervioso - ¡Ya se despertó! - Dijo y se escuchó alejarse del otro lado de la puerta, ni siquiera esperó respuesta.

Melanie se terminó de vestir con mucho cuidado para no manchar su camisón, por suerte este era de cuello amplio y no batalló mucho, salió y se dirigió al baño del primer piso, tocó antes de entrar y se lavó la cara hasta que su cara quedó limpia, no podía creer lo suave que estaba.

Melanie ya bajaba las escaleras, el olor a comida llegaba a su nariz y vió que sus tíos ya estaban en sillas a los lados de la mesa con unos platos llenos de hot cakes, su madre estaba frente a la estufa preparando un par más en dos sartenes.

-Meli, vamos a salir temprano, ven para que desayunes algo rico - La voz de su madre sonaba muy alegre a diferencia del día anterior, de hecho había una sonrisa amplia en su rostro.

-Hola mami, buen día tíos - Dijo mientras se paseaba de un lado a otro de la mesa y le plantaba suaves besos en las mejillas a sus tíos, uno a cada uno, era una costumbre que se había hecho desde pequeña, pero sólo con sus familiares, luego fué con su madre y también le dió uno en la mejilla - hot cakes, que rico - Dijo y se sentó en una silla, tras unos segundos de la mirada preocupada de su tío Roberto Melanie decidió hablarle para romper el hielo. - entonces qué dice tío ¿me veo bonita? - Melanie sonrió ampliamente, pero su tío puso una cara de susto que la chica tardó un poco en comprender - !La mascarilla tío¡ recuerde que ayer me hice una mascarilla - La chica había comprendido que seguramente su tío tendría la imagen de ella desnuda en su habitación, muy seguramente su madre le había enviado a despertarla, pero ninguno de los dos esperaría que ella hubiera dormido desnuda esa noche.

-Am, si, te ves preciosa - Dijo y Melanie no pudo evitar sonrojarse, sabía que se refería a su rostro, pero ese cumplido después de que la hayan contemplado desnuda sonaba muy alentador.

-¿quiere tocar? estoy suavecita - Melanie acercó su rostro y ahora su madre y su tío Fernando se veían desconcertados, su tío Roberto se inclinó sobre la mesa y le acarició un poco la quijada - Es que me hice una mascarilla anoche y me siento muy suavecita - Dijo y regresó a su lugar

-Ahh, para eso era el pepino - Dijo el tío Fernando como quien había pillado a alguien con las manos en la masa.

-Si tío - Dijo Melanie complacida de que todas las piezas encajaran.

-¿Te llevaste todo el pepino? - preguntó su madre desconcertada - No lo encontré en la mañana.

-Am, si, el tutorial en internet decía recién cortado y primero me tenía que bañar.

-Bueno, no olvides bajar lo que sobró si todavía está bueno - Dijo su madre despreocupada, seguía dándole vuelta a los hot cakes con una sonrisa en el rostro, en un momento los puso en un plato y se dirigió a ponerlos frente a su hija.

-Si mami - Dijo Melanie y empezó a preparar su alimento poniendo miel sobre ellos - Hoy va a haber festejo por halloween, la escuela va a dejar que usemos las instalaciones después de clases.

-Oh, no lo habías mencionado ¿no ocupas disfraz o algo? - a Melanie se le heló la sangre pero se veía en la necesidad de contestar.

-Si, de hecho, tomé prestado uno de los disfraces de las cajas de tu closet, planeo usarlo - En ese momento el tío Fernando que tomaba leche casi se ahoga y el tío Roberto abrió los ojos ampliamente.

-Te dije que no buscaras en mis cajas, son privadas, si me hubieras dicho con tiempo.

-No se me ocurrió, y recordé que una vez había visto un disfraz en esa caja y se me ocurrió probarmelo, me quedó bien, iba a preguntarte si me lo prestabas.

-¿Cuál es? - Preguntó su madre, su sonrisa había desaparecido por completo, en su lugar había una mueca de descontento.

-El negro gotico, el de las calcetas de murcielagos - Dijo y fingió no notar la sorpresa de sus tíos, sabía a que se debía, Melanie había visto disfraces de los videos de su madre y muchos de ellos eran reveladores o inapropiados debido al proposito que tenían - es el único que encontré completo y se ve adecuado a la ocación

-¿El de las cadenitas en la falda? - Preguntó su madre retóricamente - ¿No crees que es muy revelador?

-Mamá, soy más pequeña que tú, a mi esa falda me tapa suficiente y el escote, bueno, me cierra bien, no se me ve nada.

-Hmmm, pero no es que te tape lo suficiente, es hasta dónde está abierto

-Ayy, planeo usar blusa negra abajo, tampoco voy a andar con todo de fuera, y usaré short de licra bajo la falda.

-Si me mandas foto de como vas si lo puedes usar, pero ya no andes buscando en mis cosas.

-Ay mamá, recordé que lo había visto cuando era niña y me lo probé, planeaba preguntarte…

-Si, está bien, bueno, eso resuelve el tema del disfraz ¿estarán hasta muy noche en el evento?

-No ma, planeo regresarme temprano con los chicos

-¿los chicos? - preguntó su madre, su expresión cambió por completo, Melanie no supo leer esa expresión.

-Sí mamá, hice amigos - Melanie se sentía abochornada, era cierto que no le había comentado a su madre aquello

-Que bien hija, qué emoción - Dijo la madre y empezó a dar saltitos y dar grititos de alegría - ¿Cuando planeas traerlos?

-Mamá, es normal, son amigos y ya, no tengo porque presentartelos, no los vayas a asustar

-Meli, entiendela, tu madre te viene diciendo que hagas amigos desde la primaria - Dijo su tío Fernando que intentó incluirse en la conversación.

-Se habrían enterado antes si estuvieran por acá más seguido - Replicó Melanie y enguyó un trozo muy grande de hot cake

-Sabes que salimos mucho por el negocio de las fotografías - Comentó el tío Roberto, Melanie no sabía si eso era una tapadera para el negocio de los videos para adultos pero nunca lo cuestionó, se supone que hacen fotos artísticas de lugares y cobran por ello.

-Y no puedes venir con nosotros porque tienes que estudiar - Terminó su madre demasiado innecesario para el punto de vista de Melanie quien nunca mostró interés por acompañarlos - Pero qué emoción, el Martes llegaremos y nos quedaremos hasta el viernes, tienes que invitarlos, quiero conocerlos… espera ¿dijiste amigos? ¿hombres? - La cara de todos cambió y Melanie sabía a dónde iba todo aquello

-Sí mamá, son Adriana, Raúl y Gabriel, pero no son muy platicadores… Quizás Adriana sí, pero no quiero que los asustes con tus preguntas raras.

-Dame el gusto de conocerlos, vamos, los quiero conocer - Dijo su madre ilusionada, Melanie se limitó a mirar su plato y hacer un gesto de aprobación con la cabeza. - Qué bien, voy a comprar algo rico para hacer de cenar, diles que comerán con nosotros.

El resto del desayuno pasó normal, no parecía que sus tíos le hubieran comentado nada a su madre de los incidentes del día anterior o de la mañana, ella tampoco pretendía hacerlo, su madre se fué al poco tiempo con sus tíos, tenían que llegar a la ciudad contigua a tomar fotos de una catedral, Melanie se fue a arreglar para la escuela, se puso el uniforme y guardó el disfraz en su mochila junto a sus cuadernos, libros y algunos cosméticos para arreglarse un poco.

llegando a la escuela se topó a sus amigos quienes estaban emocionados por el evento de después de clases, hablaron poco pero cuando llegó el receso se reunieron los cuatro a platicar.

-Escuché que las chicas del otro grupo estaban planeando poner una mesa pícara cuando los maestros anduvieran distraídos - Comentaba a Adriana a los demás

-¿Pícara? - Preguntó Gabriel - Venderán besos como el año pasado - trató de adivinar con algo de ironía

-No, dicen que es algo más pervertido, pero no dijeron qué - prosiguió Adriana sin preocupaciones.

-Tal vez van a vender manoseos - Dijo Raúl tratando de sonar normal, pero Melanie sabía que estaba intrigado y emocionado

-¿No dijiste que ibas a cuidar a tu hermana hoy? - Preguntó Gabriel en voz alta

-¿cómo? - Preguntó Melanie, había escuchado de la hermana de Raúl muy poco

-Si, es que mi madre quiere que salga con ella a pedir dulces, pero ya hasta cree que ella quiere pedir dulces, también va a estar en el evento - Contestó Raúl

-¿Ella va a esta secundaria? - Preguntó Melanie quien se preguntaba por qué no la había visto antes

-Si, pero siempre se va con sus amigas a la salida, ya me dijo que se quedaría al evento, así que no hay problema… entonces ¿no saben de qué va lo del otro grupo? - rieron un poco mientras Adriana le comentaba algo a Gabriel en voz baja, un grupo de alumnos pasaron vestidos de calaveras y zombies

-¿Ya podemos irnos disfrazando? - Preguntó Melanie buscando más gente disfrazada

-Parece que sí, Ulises preguntó y le dijeron que sólo tendríamos una clase después del receso, así que creo que no le molestará al profe de historia. - Respondió Raúl

-Entonces ¿por qué no cambiarnos de una vez? - Preguntó emocionada Adriana

-Pues vamos - dijo Melanie entusiasmada por vestirse y lucir aquel disfraz

-Vamos a las aulas del primer piso del edificio A, hay una que no se usa y siempre está abierta - Los chicos miraron a Adrianda quien dió aquella idea, ella guiñaba con un ojo.

Los chicos la siguieron, primero al salón por sus mochilas y luego al edificio A subiendo las escaleras, al fondo un aula efectivamente estaba abierta, pero una chica estaba parada en la puerta, al acercarse vieron que era del otro grupo.

-¿Podemos usar el aula? - Preguntó Adriana quien era la más comunicativa de los cuatro.

-¿Para qué? - Preguntó la chica alta de cabello castaño

-Nos queremos disfrazar, y el aula está sola - Dijo Adriana y se asomó un poco - ¿Es lo que están planeando para el evento?

-Si, pero… bueno, usenlo, yo estaba esperando a Regina que traería unas mantas, pero creo que se va a tardar, iré a buscarla.

-¿Ustedes primero? - Preguntó Raúl dirigiéndose a las chicas, Adriana soltó una risita.

-vamos, no tienen nada que no hayamos visto - Dijo Adriana y tomó a Gabriel por el brazo pegandolo a su pecho y arrastrándolo dentro del aula.

-Vamos - Dijo Melanie divertida y entró también.

-iba a pedirle a Gabriel que me ayudara con mi disfraz, es complicado eso de ponerme vendas por todos lados - Dijo Raúl y sacaba de la mochila unas cuantas de ellas - Pero creo que se va a ocupar, vio que la pareja estaba revisando qué prenda era de cada quien

-No te apures, si se entretiene yo te ayudo - Dijo Melanie sacando su propio disfraz - pero primero me pongo el mio.

El salón estaba dividido en dos partes por un muro falso muy alto, Adriana se fué a asomar y dijo que estaba todo despejado, un grupo de sillas estaban puestas al final frente a unas mesas exageradamente altas, un grueso mantel las cubría hasta el piso, Melanie se preguntaba qué harían en ese lugar mientras se bajaba la falda y se desabrochaba la blusa, percibió las miradas de sus compañeros con el gusto acostumbrado, cuando se había quedado con el short de licra y el sujetador se detuvo a ver a Adriana que ahora captaba las miradas, ella no perdió tiempo y ya andaba únicamente en bragas, sus pezones cafés se meneaban juguetonamente mientras se ponía las calcetas negras, Raúl aún no empezaba a desvestirse, pero Gabriel ya andaba en boxers mientras se ponía una lúgubre camisa negra, Adriana había aprovechado que Gabriel estaba distraído para jugarle una broma.

-Ya lo ví, está despierto - Decía Adriana mientras bajaba los boxers de Gabriel de un tirón, el pene semi erecto del muchacho rebotó hacia enfrente ante la mirada de todos y el chico se apresuró a subir sus boxers de nuevo, no sin antes una caricia rápida de la mano de Adriana sobre el glande, un hilo de líquido viscoso transparente apenas visible se quedó pegado al dedo de la chica y terminaba en la parte superior de los boxers de Gabriel - Uyy, estás mojadito - Dijo Adriana mientras cortaba el hilo y saboreaba la punta de su dedo, Melanie empezó a reír divertida, cuando vió que tenía la atención que quería se desabrochó el brasier y dejó salir su par de atributos, esos pezones color piel saludaron con un par de rebotes causados por el movimiento. - Tranquilo, sabes que yo me encargo - Dijo Adriana volviendo a ver a Gabriel que parecía incómodo

-Después, si viene la chica de antes nos va a encontrar con las manos en la masa - Dijo Gabriel qué apresuró a subir su pantalón limitando la iniciativa de caricias de adriana sobre su boxer, empezaba a ponerse la capa de vampiro mientras Adriana ponía un gesto de molestia.

-Abrochamela - Dijo Adriana pero ante la sorpresa de Gabriel que se acercó para cerrarle el cierre del top que traía Adriana se había dirigido a donde estaba Melanie.

-Si claro - Dijo Melanie quien dejó de arreglar el conjunto que tenía para ponerse tras Adriana, no le molestaba la excusa para seguir semidesnuda mostrando sus atributos - ¿Esto no te aprieta? - Melanie se sorprendió de que aquel top negro ajustado no le reventara las tetas, las cuales sobresalían mucho por encima de la prenda, quizás sólo a un milímetro de mostrar de más esos pezones cafes.

-No, y se ven bonitas ¿no? dijo ella acomodándose un poco el busto, luego se puso una falda un tanto corta y agregó un par de decoraciones al disfraz, una diadema con orejas y una cola esponjosa de gato - Más te vale que de rato me des mi lechita porque te araño si no - Adriana dijo esto y hizo un ademán muy felino con las uñas, Melanie empezó a sentir un poco de envidia, después de lo del día anterior ella también quería un poco de “lechita” de sus amigos, quizás se conformaría contemplando su camisa “autografiada” regresando a casa esa noche. - ¿y tú que te vas a poner arriba?

-Me voy a poner esto - Contestó Melanie a Adriana sujetando el top negro - Y esto - Dijo y ahora sostuvo el conjunto gotico

-Espera ¿te vas a poner eso abajo? ¿Por qué no sólo lo de arriba? te verás sexy - Le comentó Adriana con voz juguetona

-Hmmmm, bueno - Contestó Melanie sin pensarselo mucho - Pero deja primero me tomo una foto con el top para mi madre, para que vea que sí lo usé.

Melanie se puso el top y luego se puso el conjunto de falda con top, se veía más aparatoso de lo que habría imaginado, luego se puso el resto del disfraz, las calcetas de murciélagos y las cadenas, se arregló un poco el cabello y luego se tomó unas fotos.

-¿Me ayudan antes? - Preguntó Raúl que aún no tenía su traje de momia

-Si, a ver ¿qué traes? - Preguntó Adriana, Raúl empezó a quitarse la camisa y el pantalón, llevaba unos boxers blancos con abertura en medio, de su mochila sacó una camisa blanca y se la puso, luego sacó unas vendas y se las proporcionó a sus amigos - Cierto, la momia - Confirmó Adriana viendo el equipo que llevaba - Nosotras te ayudamos - Dijo la chica emocionada, rápidamente desenvolvió una de las vendas y empezó a darle vueltas desde la cabeza

-Si - Confirmó Melanie quien tomaba otro rollo de vendas y empezaba desde uno de los pies, luego vió lo difícil que sería de abajo hacia arriba y desde esa vista privilegiada notó que no solo Gabriel tenía algo despierto, el boxer de Raúl se pronunciaba un poco hacia enfrente, la abertura del mismo hacía que desde el lado en el que estaba Melanie se viera una parte de aquel pene , un tirón en el lugar adecuado y saldría a asomarse por completo, Melanie se pensó si también le haría la misma broma, pero mejor desistió

-Esto es un desastre - Dijo Adriana contemplando su trabajo, había cubierto los ojos de más y ahora Raúl no podía ver, empezaba a desenvolverlo cuando la venda se cayó por completo - Ayudame Melanie.

Melanie se paró y empezó a envolver a Raúl de la cabeza, había quedado mejor, luego le dejó la mano en el cuello para ir desenvolviendo más el vendaje, Raúl hizo un movimiento de incomodidad, Melanie se percató que lo hacía cada vez que rozaba la nuca del muchacho, esto parecía poner más recto el boxer

-No te muevas - Dijo Melanie y lo sujetó de la nuca, pero como no queriendo le hizo una caricia como viendo hasta donde llegaba, en ese momento el pene de Raúl salió por la abertura haciéndola a un lado, intentó taparse pero Adriana fue más rápida a sorpresa de todos

-¿qué es esto? - Dijo Adriana quien ya le había sujetado el pene a Raúl, Gabriel ahora parecía molesto, Raúl no sabía qué hacer - Todos están felices el día de hoy - Dijo y masajeó el miembro del chico un par de veces, la segunda hizo que su glande se asomara un poco de dentro del prepucio, su dedo que en ese momento estaba en la punta se llenó de un poco de transparente líquido viscoso, en ese momento Adriana le quitó la mano de encima y Raúl pudo guardarse aquello dentro de su boxer con mucha facilidad, sólo que ahora su boxer apuntaba hacia arriba, Adriana contempló su dedo unos segundos y cuando Melanie pensó que lo iba a saborear, la chica embarró aquella sustancia en el mentón de Melanie quien al no esperarlo no opuso resistencia. - Bueno hay que seguir dándole vueltas - Dijo Adriana como si aquello no hubiera pasado y le quitó a Melanie quien estaba estupefacta el pedazo de venda que traía y continuaba envolviendo a Raúl

Melanie también quería sentir aquellas vergas, Adriana lo hacía con tal naturalidad que Melanie se planteó que era así de fácil, pero en su mente no se daban aquellas cosas. Melanie intentó seguir como si nada, ayudó a envolver uno de los brazos mientras Adriana envolvía el otro, cuando terminaron con el torso hubo una pausa en la que las dos chicas contemplaban el boxer que parecía tienda de campaña, la abertura no ayudaba porque se veía ese tallo grueso con el distintivo conducto bajo la piel hinchado por la excitación y un poco del escroto con la forma de sus testículos, a Melanie le empezaba a preocupar el humedecer su ropa interior.

-Hay que bajar eso o también se va a abrir paso entre las vendas - Sugirió Melanie

-¿Y si te lo quitas? - Preguntó Adriana y todos la vieron, se mordía un poco el labio inferior.

-No, se me vería todo - Replicó Raúl pero Adriana ya se había agachado y había tirado de los boxers hacia abajo, el miembro de Raúl dio unos saltitos y Melnaie reaccionó tomándolo de la base, Raúl se quedó petrificado, Gabriel estaba muy atento, Adriana contemplaba aquel miembro mientras Melanie lo sujetaba

-Perdón, es que casi le sacas un ojo a Adriana - Dijo Melanie quien movía el pene hacia arriba para que no tocara el rostro de Adriana quien sí estaba muy cerca, su textura era suave y estaba caliente, a Melanie le sorprendió lo fácil que se movía la piel debajo de sus dedos, era la primera vez que sujetaba una y no sólo la sentía en su cuerpo.

-Yo creo que podemos sujetar a la bestia para que no cause problemas si no estuviera el boxer - Dijo Adriana y se levantó a ir por más vendas, Melanie no dejaba de sujetar el miembro erecto mientras Raúl se quedaba estático, la chica sentía la necesidad de hacer aquel movimiento que era clásico en la masturbación, sólo que no sabía cuándo sería pertinente, Adriana ya estaba de vuelta y sujetaba la venda - Manos a la obra, aunque ya hay una mano aquí - Dijo juguetonamente y Melanie soltó aquello ruborizándose.

Adriana empezó a unir esa parte de la venda a las demás y luego comenzó a darle vueltas a la pelvis de Raúl, cuando cubrió el pubis sujetó el pene y lo levantó apuntando al ombligo, luego siguió dando vueltas hasta que terminó de envolverle hasta los muslos como haciendo una fada.

-Se le nota todo - Dijo Gabriel que se había acercado un poco, era cierto, había un bulto que sobresalía hacia su ombligo, claramente algo fálico.

-No voy a salir así - Replicó Raúl sonrojado

-Vamos, te verás atractivo - Dijo Adriana guiñando un ojo

-Sal tú así si quieres, yo no - Contestó Raúl

-Yo soy una gatita, tu eres la momia

-Me refiero a que salgas tú sin bragas, a ver ¿verdad que no suena divertido? - Reprochó Raúl mientras se agachaba y sujetaba sus boxers, Melanie pensó que Adriana replicaría, pero en su lugar se agachó muy rápido y volvió a recuperar la compostura, antes de que entendiera que pasaba Adriana ondeaba algo en su mano como una bandera.

-Está bien, yo no las llevo si tu no las llevas - Adriana tendía sus bragas hacia Raúl y éste dudó un momento - Vamos, yo te doy las mías y tu dame las tuyas para saber que no haces trampa - urgió Adriana y sin saber bien qué hacía Raúl ya le había pasado sus boxers, Adriana puso sus bragas en la mano del chico y sonrió satisfecha - El primero que le pida su ropa al otro pierde, a ver quien es más valiente - Dijo la chica y metió los boxers en su mochila - Vamos, sigamoslo vendando.

Terminaron de envolver las piernas de Raúl, Gabriel parecía tratar de controlarse, se veía incómodo con aquello, al final el disfraz había quedado muy bien, el bulto había cedido un poco su tamaño y parecía un área normal, aunque si lo veías de lado podrías encontrarle un poco la forma de su miembro relajado, Raúl parecía satisfecho con lo poco que se notaba en ese estado y no desaprobechava la ocasión para mironear las piernas de Adriana, que aunque llevaba una falda muy corta, era más que suficiente para no mostrar de más.

-Ahora sólo faltas tú ¿no te quitaras la blusa que traes bajo el conjunto? - Preguntó Adriana a Melanie, ella desabrochó el escote y se sacó el top hacia arriba sin quitarse el conjunto, luego lo volvió a abrochar, Melanie se sentía un poco triste porque el top hacía que se viera más pronunciado su busto.

Al final los cuatro estaban listos y salieron del aula, la otra chica no había regresado con su amiga, Raúl caminaba un poco timido pero se fue acostumbrando, cuando llegaron al patio y hubo un grupo de alumnos ya disfrazados, superhéroes, vampiros, zombies y muchos disfraces femeninos sugestivos, Melanie no pudo evitar ver que Raúl se ponía incómodo por obvias razones, su disfraz volvía a abultarse, ahora que había cambiado dos veces de tamaño se había movido el vendaje y se notaba más, no había servido de mucho que apretaran para pegarlo a su cuerpo, su erección era evidente, Raúl se puso la mochila de frente para esconder aquello y Adriana pronunció una risita un tanto burlona

-Voy a ga-nar - Dijo ella dando saltitos frente a Raúl mientras Gabriel la tomaba de la mano - Avisame cuando quieras perder, digo, tu boxer de vuelta - Adriana lejos de sonar mala sonaba divertida y graciosa, Raúl hizo un gesto que Melanie no apreció bien por las vendas, pero parecía estar aceptando el reto.

Pasaron sentados platicando el resto del receso, cuando sonó la campana y regresaron al aula Raúl ya estaba tranquilo físicamente, en el aula hubo otro incidente causado probablemente por la compañera que se sentaba frente a Raúl, su disfraz de enfermera no le parecía muy provocativo a Melanie, pero seguro si a su compañero, Melanie no pudo evitar percatarse los cuchicheos y las miradas discretas de sus compañeras, lejos de parecer burlas se veían más bien intrigadas por aquel evidente predicamento masculino.

Cuando las clases terminaron esperaron a que el profe saliera, Adriana caminaba de aquí a allá platicando con sus compañeras sin mostrar el más mínimo problema, pero su falda le ayudaba, Raúl sin embargo seguía sentado con la mochila de frente, platicaba con Gabriel cuando de repente una chica de las que Melanie había visto ver picaramente al chico se acercó.

-Oye ¿te puedo hacer una preguntra? - La chica sonreía y veía de reojo a sus compañeras que parecían atentas

-Si, claro - Contestó Raúl y abrazó un tanto más fuerte la mochila, era la chica vestida de enfermera

-jajajaja, oye ¿la tienes dura o es parte del disfraz? - Las chicas rieron sorprendidas de que le hubiera preguntado eso - ven precioso - Dijo la enfermera y sujetando a Raúl de los hombros lo jaló hacia arriba, Melanie no sabía si Raúl se movía conscientemente o lo habían agarrado desprevenido, la mochila cayó a un lado y la momia yacía parada, en varios sentidos, su vendaje de la pelvis se había holgado un poco de tanto andarse moviendo durante el día y dejaba ver la piel al final de su pene que salía entre un par de vendas - Uy - Dijo la chica quien puso la mano y acarició el bulto - Esto si es tuyo, no dejes que se salga - Dijo y se alejó hacia la salida del aula, Raúl se quedó atónito que no vio que las amigas de la chica la siguieron y al pasar por un lado algunas de ellas rozaron con los dedos el abultamiento del chico, otras chicas se quedaron perplejas, entre ellas Adriana que tenía la boca abierta.

-Waaw, increíble - decía Raúl mientras escondía la punta de su miembro entre las vendas, no podía hacer mucho para disimular pero podía evitar que se asomara.

-Parece que tienes admiradoras - Dijo Melanie y todos rieron, las demás chicas que aún estaban en el salón miraban más indiscretamente, Raúl tenía mucha confianza en sí mismo y ya no se ocultaba tras la mochila, de hecho se paró junto al pupitre de Adriana quien se había sentado para guardar sus cosas, el abultamiento de Raúl se meneaba burlonamente sobre la mesa.

-Parece que yo voy a ganar - Dijo Raúl mientras Gabriel y Melanie se le unían, ya llevaban sus mochilas.

-Aquí te fue bien, pero ¿planeas quedarte en el aula todo el día? - Dijo Gabriel un poco disgustado pasandole a Raúl su mochila que había dejado tirada, él lo pensó un poco pero en lugar de abrazarla como hacía rato se la puso en la espalda.

-¿por qué no? - Dijo Raúl con una seguridad que a Melanie le pareció falsa, pero quería ver a donde llegaba todo aquello.

-Pues qué bien, me pedirás tu ropa tarde o temprano - Dijo adriana sin inmutarse, terminó de guardar sus cosas y tomó a Gabriel del brazo - Vamos amor, es hora de mi lechita - Dijo la chica en voz baja y se llevó a Gabriel del aula, Melanie y Raúl los vieron desaparecer y luego se vieron el uno al otro.

-¿En serio saldrás así? - Preguntó Melanie cuando Raúl descubrió que le andaba viendo el asunto.

-Si, ya no han de estar los maestros - Dijo un poco inseguro de aquello, Melanie no le dio crédito a su expresión, pero decidió que le mostraría a su amigo el maravilloso mundo de que lo morboseen. lo tomó de la mano y antes de que pudiera decir nada se lo llevó fuera del aula.

Al principio notaba a Raúl algo difícil de conducir, pero luego fue relajándose, Melanie lo fué paseando por los puestos de comidas y stickers de halloween. a veces cuando las encargadas de los puestos eran chicas se mostraban sorprendidas, un par de ellas preguntó si podían tocar a lo que Raúl cedió, el chico se andaba divirtiendo de lo lindo, Melanie se puso un poco celosa de que tuviera esa clase de atención que ella no lograría recibir.

-¿Se puede saber qué estás haciendo? - Una voz disgustada sonó detrás de ellos, una muchacha enojada vestida de vaquera se cruzaba de brazos y le mantenía la mirada a Raúl - Me estoy enterando por mis amigas que mi hermano anda de calenturiento por la escuela ¿sabes cuánta vergüenza siento? ¿Tienes una idea? - Hizo una pausa y bajó la mirada, su hermano la apuntaba y no precisamente con un dedo, el abultamiento de vendajes ya se había aflojado más de tanto caminar y manoseos que ahora ya no apuntaba más hacia arriba, sino hacia enfrente - ¿Es eso? ¿es tu? - La chica se puso roja como un tomate, se dio la vuelta y se marchó haciendo ruidos de gruñidos - ¡Más te vale que te guardes eso o te las verás conmigo! - Dijo mientras desaparecía entre las personas.

-Quizás ya deberías dejarlo así - Comenzó Melanie pero se acercó otra chica vestida de vampira y la interrumpió.

-No le hagas caso, que no te diga qué hacer - La chica descaradamente se dió la vuelta y le arrimó las nalgas para que el abultamiento quedará entre ellas, se movió sensualmente y se alejó hacia unas amigas suyas, entre risas Melanie escuchó que no creían que se hubiera atrevido, la cara de Raúl era de una satisfacción inmensa, luego vió a Melanie un poco enojada y se compuso un poco.

-Bueno, si, quizás se está saliendo un poco de control.

-Y de tu traje - Señaló Melanie y Raúl se ciñó los vendajes que ya andaban asomando de más por el reciente encuentro con ese sensual trasero. -Busquemos a Adriana y pidámosle tu ropa - Pero no hizo falta, en ese momento ella y Gabriel se acercaban, la chica se veía feliz.

-Chicos, necesito que nos ayuden, todos en la escuela están hablando de la momia tiesa y me dijeron que si la podía conseguir.

-¿Momia tiesa? - Preguntó Raúl indignado.

-¿Quienes quieren conseguirlo? - Preguntó Melanie desconcertada pensando que definitivamente ya se había metido en problemas.

-No es nada malo, creo - Dijo Adriana percibiendo las dudas de su amiga - Vengan.

La chica los llevó al aula donde se habían cambiado, un par de filas de alumnos se hacía hacia el salón, cada una a una puerta diferente, un par de chicos hacían de centinelas por si llegaba un profe.

-Miren, es lo que están haciendo los del otro grupo, van a enloquecer, es un puesto de mamadas - Adriana sonreía amplamente.

-¿cómo que un puesto de mamadas? - Preguntó Raúl, Melanie se percató que una fila era de hombres y otra de mujeres.

-Verán, dentro... no, mejor síganme - Dijo la chica y se metió en la fila de los hombres quienes se quejaron, pero una chica al final de la línea les hizo indicación con una mano de que estaba bien, Adriana les hizo una seña para que la acompañaran, la fila de las chicas no le quitaba la mirada a Raúl y su aún visible predicamento.

-Vamos - Dijo Gabriel un tanto serio, los chicos los siguieron, dentro por la puerta de la fila de los hombres había unas casillas cerradas.

-Verán, en esas casillas se encierran los chicos, las chicas por el otro lado se meten bajo la mesa, así nadie sabe quién le está, ya saben, ordeñando - Melanie vió como unas edecanes indicaban a un chico entrar a un cubículo - La fila de las chicas creció cuando supieron que la momia iba a andar por acá, vamos ayúdanos

-Pero… ¿qué? - Comenzó Raúl y una chica se acercó, era la misma que cuidaba el aula hacía rato, ahora estaba vestida de porrista, los pezones marcados bajo su blusa blanca demostraban que sólo llevaba aquello encima.

-La cosa sería sólo que me acompañaras de aquí a allá promocionando el puesto, les podemos pagar por ello si gustan - Dijo la chica contoneandose, Raúl no le quitaba los ojos de encima a esa transparencia - Vaaaamoos, hazlo por los chicos allá afuera, necesitan su desestresada, te podríamos dar una gratis al final si quieres - dijo la chica puso un dedo en la punta del miembro erecto de Raúl.

...

Melanie no sabía cómo había pasado, ahora se encontraba guiando chicos a sus cubículos mientras otra chica les daba indicaciones, debían quitarse los tenis porque las chicas de la fila afuera empezaban a ver cómo iban vestidos para “seleccionarlos” pero sin mucho éxito, les decían cómo sentarse y hasta donde bajarse los pantalones, Melanie se encontraba al final para decirles que podían tomar un descanso en los pupitres del fondo antes de irse, Melanie se preguntaba qué tan cansado debía ser recibir un oral para que tuvieran que descansar después de ello, se sorprendió mucho de que si había chicos que parecían exhaustos y cansados, o quizás más bien demasiado relajados.

-¿Cómo van de tu lado? - Adriana había salido de detrás de la cortina que separaba el salón - Me estoy tomando un descanso.

-Bien, hay mucho chico drenado de este lado - Melanie vio a los chicos reposar y se sorprendió de que todos ellos hayan sido masturbados recientemente, se veían muy normales para su impresión.

-De este lado las chicas se andan tomando fotos con la cara llena de semen, no las culpo, yo hice lo mismo aquel día del río - Adriana rió un poco y Melanie se percató de que no se había dado cuenta de ese dato - Esa foto no la subí - Continuó Adriana pensando que Melanie se preguntaba si la abría visto en su red social.

-¿por qué hacen eso? - Melanie estaba intrigada

-El recuerdo de su primera mamada, imagino, yo lo hice porque no me creía que lo hubiera hecho en público, no pensé que luego de eso fuéramos a ser novios, igual conservo la foto con cariño.

-¿A Gabriel no le molestan las cosas que pasan? ya sabes - Melanie estaba deseando saber cómo se sentía Gabriel con respecto a todo lo que sucedía entre sus intimidades

-Un poco, pero me da mi espacio y yo le doy el suyo, hace rato venimos pidiéndole de favor a las chicas que nos prestaran un cubículo, ya sabes, para hacerle su trabajito, le dije que si se le animaba el asunto podía usar un cubículo con una chica random, igual es parte del pago por ayudar ¿no?

-Woow, y ¿a ti? - Dijo Melanie pero no sabía cómo hacer la pregunta.

-Tomando en cuenta que le manosee el paquete a Raúl en frente de él lo veo justo, además le he estado mostrando el trasero sin querer a los chicos, le ayudará a sentir equilibradas las cosas, y aquí entre nosotras, nunca lo he visto dispuesto a terminar tan seguido, así que es posible que no me tome la palabra - Dijo Adriana guiñando un ojo. - Y ¿qué tal? ¿Es la primera vez que agarras uno?

-Si, es la primera vez que sujeto uno - Dijo Melanie intuyendo que se refería al pene de Raúl.

-No lo haces mal, siempre agárralos de la base y juega con la punta he sabido que no sienten nada entre esos dos puntos.

-¿en serio? - Melanie estaba sorprendida - ¿Todo el palo?

-Jajajaja, si, todo el palo que no sea el glande o la base, no sienten nada, es un detallito que debes saber cuando llegue mi cumpleaños.

-Cierto, el día en que perderás tu virginidad con Gabriel.

-Perderemos Meli, tú estarás ahí con Raúl ¿no? ¿eso sigue en pie? Gabriel parece esperarlo

-¿En serio? - Melanie estaba sorprendida cada vez más.

-Si, debiste ver cuánto semen le saqué el día que me vio haciendote un oral, deberían poner un puesto para las chicas para que también disfruten un poco.

-Será la primera vez de los cuatro, es emocionante - Melanie se estaba humedeciendo, hablar de ello, un grupo de chicos encerrados junto a ellas teniendo placer, todo la empezaba a prender.

-Bueno, iré por Gabriel, ya se está acabando esto, voy a ser buena novia y le diré que aproveche para cobrar su beneficio. - Adriana se levantó y cruzó la cortina, el aula se iba vaciando cuando entró Raúl, ya no llevaba su traje de momia.

-Hola ¿cómo te fue allá promocionando? - Melanie se percató que bajo la mezclilla del pantalón aún tenía el abultamiento.

-Bien, tuvimos una vista muy interesante de tu amiga cuando andábamos bajo la escalera promocionandonos con unos chicos de primero, no lleva bragas, le vimos hasta lo que no - Contestó la otra chica que también se había cambiado y ya no iba de porrista, pero seguía con la misma blusa transparente, aunque ahora un bra rosa se observaba debajo - Bueno, es todo tuyo, dale el tour. - La chica los dejó solos, Melanie entendió que Raúl iba por su beneficio.

-Escoge un cubículo ...vamos no muerden, ese está sólo - Melanie le indicó al chico cómo sentarse y hasta donde tenía que bajarse el pantalón, pero en lugar de salirse se quedó detrás de él, vió cómo ocultó su parte inferior bajo las mantas y se acomodaba bajándose el pantalón fuera de la vista, luego Raúl se sorprendió cuando Melanie se acercó y puso su mano en la nuca del chico.

-¿No te habías salido? - Raúl se puso inmovil mientras Melanie empezaba a masajear su cuello

-Es un servicio especial por haber ayudado tanto, además, debes estar por reventar, todo el día con esa erección - Melanie no sabía porque lo estaba haciendo, quizás todo el estrés sexual de ese día, su amigo estaba muy callado mientras ella con la otra mano se desabrochaba el escote y bajaba la parte superior de su disfraz, estaba a espaldas de el chico, planeaba sorprenderlo, pero en eso vió que la manta se movió, alguna chica había entrado y ya se encontraba entre sus piernas, la manta se movía hacia arriba y hacia abajo, una cabeza seguramente, Raúl empezaba a gemir silenciosamente mientras Melanie seguía masajeando. - Shhhh, calla, sólo disfrútalo.

Melanie se puso a un lado del chico, quien en ese momento dirigió la mirada hacia esas tetas, la luz no era mucha en el cubículo hecho con tela negra, principalmente para evitar que se reconocieran si se asomaban a través de la manta, Melanie tomó la mano de su amigo y la puso sobre su busto mientras con la otra mano seguía acariciandole la nuca, Raúl masajeaba aquel pezón redondito, Melanie quería masajearse ella misma entre las piernas, pero este era momento para Raúl, debieron ser dos minutos, el chico se puso estático y empezó a temblar, Melanie acarició un poco más suave y lo miró a los ojos mientras su expresión de placer la prendía más, la chica bajo la manta hizo un ruidito y se retiró, Melaanie retiró la mano de su amigo de su pecho y sonrió

-¿todo salió bien? - Dijo entre risitas mientras se acomodaba el disfraz para salir - Tomate tu tiempo, eres de la última ronda, ya vamos a cerrar, puedes descansar aquí mientras yo me voy a cambiar, dejó al chico extasiado sobre la silla y fue por su mochila, le dió un poco de curiosidad y cruzó la cortina que separaba el área de los hombres y el de las mujeres, del otro lado una chica bajita se andaba tomando selfies con la cara llena del ...semen de su hermano.

Melanie no lo podía creer, analizó el lugar pero no había otra chica cerca de ese cubículo, su cara estaba llena de sustancia blanquecina y ella sonreía y hacía poses frente a su teléfono, se otro de los cubículos salió otra chica y Melanie se ocultó para escucharlas.

-Wooow, estás llenisima, al mio no le salió tanta - Le decía la chica a la hermana de Raúl, tenía sólo dos tristes líneas blancas sobre la frente.

-shhhh, no hables en voz alta, sólo falta Gloria, está en el cubículo de allá, ahora que salga nos tomamos la foto las tres.

-Woow, es mucha leche ¿tendrá más? - Dijo la chica llamada Gloria saliendo del último cubículo, tenía más chorros sobre su mejilla que la segunda, pero muchos menos que la hermana de Raúl.

-No creo que pueda terminar otra vez ¿o si? dijo la chica y vio que efectivamente observaba la entrada al cubículo de su amigo.

Las tres chicas se acomodaban para una foto grupal llenas de la cara de material masculino, las otras dos le lamían la cara a la hermana de Raúl en un par de esas fotos, Melanie decidió irse cuando vio a la chica saboreando ese material insestuoso.

Esa noche los chicos hablaron de lo divertido que había sido ese día, Melanie se enteró que seguramente era Gabriel el chico del último cubículo que si había alcanzado a llegar a cobrar su beneficio de una de las amigas de la hermana de Raúl, al final ni Adriana ni Raúl habían perdido su reto, Melanie estuvo más seria que de costumbre, decidió guardarse esa información para ella misma, ni Raúl ni su hermana tenía que saber que la suerte y el anonimato les había jugado una situación extraña, sería su secreto.