Me vistieron de putita y me enfiestaron

Como conocí el lugar en el que hicieron realidad mi fantasía.

Me vistieron de putita y me enfiestaron

Todo empezó en un día en que en un sitio de contactos, vi en la sección fantasías un aviso que decía: ‘’Decinos tu fantasía y la hacemos realidad’’ mandé un e-mail solo contándoles la fantasía solo por diversión y al otro día encontré la respuesta diciendo que me animara a realizarla. En ese momento pensé que era una locura, pero con el correr de los días estando en mi casa, hice lo que otras veces. Me puse unas medias de lycra, una cola-less y luego unas medias blancas con portaligas, y mirándome en el espejo imaginé como sería cumplir la fantasía, y me acordé que en el mail que me habían mandado, me decían que no tenga miedo y cumpla mis fantasías, por que el tiempo que se pierde en dudas no se recupera, y ahí mismo acordé una cita en la que cumplí mi fantasía que ahora les cuento.

Llegué hasta la dirección que me habían dado, era un edificio en el centro, respire hondo y toqué el timbre del portero eléctrico me identifiqué y al rato bajó una señora de unos 45 a 50 años que se identificó como Angela (era una señora grandota morocha con pelo enrulado), subimos al ascensor y me preguntó si ya había hecho algo parecido, le dije que no, y me contestó que era lo que ella prefería por que sabía bien que hacer para que no te la olvides.

Luego me dijo que cuando pase al departamento ya me iba a tratar como una nena, y ahí me preguntó cual iba a ser mi nuevo nombre, y le contesté que me llamase Micaela.

Angela me llevó hacia un vestidor y me sacó toda la ropa, me llevó al baño y me afeitó la cola y la ‘’conchita’’. Luego me llevó a la habitación me sentó frente a un espejo y me empezó a maquillar mientras yo iba viendo la transformación. Me maquillo perfecto con los labios bien rojos y hasta con en efecto en los ojos como de gata que me iba dando un aspecto de putita.

Cuando ya terminó la etapa de maquillaje, empezó a sacar del placard todo lo que en un momento me iba a poner.

(Previamente yo le había dicho que me encantaban las medias y portaligas y todas esas cosas.)

Primero me puso una peluca rubia, que terminó de darme el aspecto esperado junto a un corpiño relleno que daba buen aspecto de unos pechos firmes.

Luego dijo ¿a ver como esta la ‘’conchita’’? me agarró el pene lo manoseó un poco y me puso un profiláctico.

Luego me puso unas medias de lycra bien brillantes color piel tirando a oscuras.

Luego me colocó una tanga de encaje blanca con una abertura para no tener que sacársela, después unas medias blancas con ligas de encaje que enganchó a un portaligas espectacular blanco con mucho encaje.

Luego me puso unos tacos altos rojos y para terminar me puso un vestido tipo para fantasías que me dijo que era ‘’de la ratoncita Minnie’’ que era rosa y blanco a cuadritos que me llegaba apenas hasta la cola y dejaba al descubierto las ligas.

Bueno, ya estaba lista, y me puso frente a un espejo de cuerpo entero donde no podía ver lo que estaba viendo. Me veía como toda una putita esperando para la fiesta.

Luego me preguntó si ya estaba lista y le dije que sí. Ella me dijo bueno, voy a buscar a mis alumnas y venimos.

Al rato se abre la puerta de la habitación y aparece Angela vestida con un corsette negro con portaligas, medias negras y tacos altos. Me dice, Micaela te presento a Naty y a Belen, y aparecieron dos chicas de entre 25 y 30 años.

Naty era rubia y teñía puesto un portaligas rojo con medias también rojas mientras Belen era mas bien morocha y tenía puestas unas medias blancas con un portaligas también blanco y ambas tenían las tetas al aire.

Al rato Angela me ordenó que me ponga en cuatro patas arriba de la cama y que gateara y me viera en los espejos que había a los lados de la habitación.

Era una sensación indescriptible, ya que me veía ahí observada por tres mujeres y en los espejos me veía como se asomaba mi tanga justo por debajo del vestidito estando en cuatro patas y con tacos veía a una puta en celo esperando para ser enfiestada.

Se fueron acercando a la cama y empezaron a manosearme y a meter las manos por debajo del vestidito.

Luego Angela dijo: bueno vamos a darle a Micaela lo que está esperando.

Angela sacó de una caja tres arneses con unas prótesis de penes realísticos.

Naty y Belen se desabrocharon las ligas se ayudaron a colocar los arneses con los penes de unos 16x4 y se volvieron a abrochar las ligas.

En tanto que Angela hizo el mismo procedimiento pero su pene teñía unos 22x5.

Se pararon las tres juntas con las pijas bien firmes, mientras se las frotaban con las manos y me miraban.

Angela dijo: bueno, vamos a darle a la nena estas pijas para que se las coma bien.

Se sentaron las tres contra el respaldo de la cama con las piernas abiertas y quedaron las tres pijas bien firmes y hacían de cuenta que se las pajeaban y Angela dijo: chupanos bien la pija a las tres. Me acerqué en cuatro patas y me metí la pija de Angela en la boca, la empecé a mamar mientras las otras me acariciaban las medias, cosa que me encanta, hasta que se las chupe a las tres.

Ahí Angela dijo: bueno ya tenemos las pijas bien chupaditas, ahora vamos a enfiestarla.

Me ordenaron acostarme boca arriba con las piernas abiertas, abrieron el agujero de la tanguita y con una tijera le hicieron dos agujeros a las pantymedias uno a la altura del culo y otro a la altura de la ‘’conchita’’ mientras me decían: ¿querés comerte las pijas putita, querés que te las calcemos?

Naty se arrodilló y me dijo: ‘’chupame bien esta pija putita, mientras te preparan la colita’’. Mientras me comía la pija de Naty, Belen me introdujo un dedo con aceite en el culo y lo movió un rato mientras se pasaba aceite por la pija. Se colocó detrás de mí y me dijo: ¿Querés la pija en el culo? ¿La querés? Y me puso la cabeza y la sacaba mientras decía ¿la querés toda putita? ¿La querés toda adentro putita? ¿La deseas la pija? Cuando sentí que de a poco me la fue metiendo hasta que sentí que los huevos de la pija de goma chocaban contra mis medibachas.

Mientras me bombeaba el culo decía: ‘’Oh, que bien se siente mi pija en el culo de la putita’’y la otra decía ‘’si, seguime chupando bien la pija putita, mientras te comes por por el culo la otra pija.

Yo las escuchaba hablar y me volvía loca. No podía creer lo que me estaba sucediendo, era toda una puta con pijas por todos lados.

Para colmo se acercó Angela y dijo: ¿No les parece que a la putita le hace falta otra pija? Se acostó debajo mío boca arriba y me calzó su pija en el otro agujero que le habían hecho a las pantymedias, mientras decían:¡¡que bien se come las tres pijas a la vez!! ¿Te gusta comerte todas las pijas juntas por la boquita, la colita y la ‘’conchita’’!!?

Era espectacular, teñía tres pijas adentro a la vez, y sentía que las pijas que tenía en el culo y la ‘’conchita’’chocaban entre si, mientras la pija que teñía metida en la ‘’conchita’’me rozaba la pija y me volvía loca y me seguían diciendo: Que bien se come las tres pijas la puta ¿Te gusta como te cojemos putita? ¿Te gusta como te enfiestamos? Mientras yo seguía delirando en cuatro patas comiéndome las pijas.

Después de un rato Belen me la sacó del culo y dijo: ahora la vas a limpiar con la boquita. Se la empecé a lamer y a chupar mientras Naty me la empezó a meter en el culo mientras que Belen me decía: Si, chupame bien toda la pija que ensuciaste puerquita. Limpiala bien mientras te hacemos la colita y la ‘’conchita’’.

Otra vez teñía todas las pijas adentro y seguía gozando como una putita mientras me miraba al espejo y ni yo misma podía creer lo que veía. Me veía en cuatro patas comiendome tres pijas, una por la boca y por debajo del vestidito, una por el culo y otra por la ‘’conchita’’.

Mientras ellas seguían con su particular lenguaje: que bueno es dársela por todos lados, como goza la bien puta.

Después de un rato Angela que me estaba dando por la ‘’conchita’’dijo: me falta hacerle a mi bien el orto la muy putita. Sacaron todas sus pijas de mí y Angela que tenía la pija mas grande se acostó boca arriba con la pija bien firme y derechita y me dijo: sentate dándome la espalda arriba de esta pija. Me acerqué arriba clavándomela en el orto de a poco mientras Naty y Belem me sostenían.

De a poco comencé a subir y bajar mientras sentía como toda la pija de Angela se me iba metiendo cada vez mas, hasta que sentí los huevos de la pija ya hacían tope contra mis medias. Era impresionante estar cabalgando esa hermosa pija.

Como si fuera poco estar cabalgando esa pija, Belen y Naty acercaron un espejo frente a mí para que pudiera verme, me levantaron el vestidito y no podía creer lo que veía. Las ligas que salían de abajo del vestidito sobre mis piernas envueltas en lycra y en el medio de estas ver la sensacional pija que me estaban clavando desde abajo.

Con la pija en el culo me acosté encima de Angela y Belen que me la había sacado del culo antes se arrodilló a la altura de mi cara y dijo: Limpia bien esta pija que tuviste en el culo, chanchita, y me la puso en la boca. Al rato vino Naty y dijo: te estás comiendo una pija por la boca y otra por el culo. Te falta otra pija en la conchita. ¿Querés que te la ensarte bien en la conchita? Y yo con la pija en la boca traté de decirle que sí, y dije ‘’MMMH, MMMH. Se arrodilló me abrió las piernas y me y me introdujo la pija en la ‘’conchita’’.

Otra vez gozaba como una puta mientras decían: Como le gusta a la turra comerse todas las pijas a la vez. Que bien se ve con su vestidito las medias y los tacos mientras se come toda las pijas. Yo seguía gozando con la pija en el orto y la otra por la ‘’conchita’’sintiendo como las pijas chocaban entre si.

Yo ya no sabía cual era la posición en que estábamos. Lo único que sabia es que estaba en el medio de un enjambre de medias que se rozaban entre si, portaligas y pijas, y acabé en el profiláctico que estaba lleno.

Luego sacaron todas sus pijas de mi, se sentaron y se las limpié con la boca.

Se desabrocharon sus arneses y dejaron ya sus pijas de lado. Se sentaron contra el respaldo y Angela ordenó que les limpie sus conchitas. Chupanos bien las conchitas mojaditas que nos dejaste, y mientras les chupaba la concha Belen dijo: además de comerse las pijas, también le gusta comerse las conchitas a la muy putita.

Terminé de limpiarles las conchas, y entre las tres me sacaron el vestidito las medias y me llevaron al baño. Nos metimos todas en la ducha y Angela dijo: saquenlé el profiláctico y denle a la nena sus propios juguitos de su ‘’conchita’’y lo derramaron sobre mi cara. Nos duchamos me vestí y nos despedimos hasta la próxima.

Yo ya había quedado satisfecha de tantas pijas en la boca, la ’’conchita’’ mojadita y además con la colita hinchadita y llena de lechita.