Me quede dormida y se aprovecharon de mi.

Al quedarme dormida en el autobús, un hombre aprovecho para saciar su hambre de sexo conmigo.

Trabajaba en una oficina como secretaria de abogados en un despacho jurídico,  aunque era un trabajo de medio tiempo, me deje ligar por uno de los abogados, que termino siendo mi novio, el tiene 27 años y yo 18, estaba en aquel lugar mas que nada para poder pagar algunas cosas de la universidad y no depender tanto de mis padres, pero a algunas personas no les pareció que una secretaria empezara  a salir con uno de los abogados del despacho y empezaron a inventarme muchos chismes, al principio no me afecto pero cuando esos chismes le llegaron a mi mama y ella creyó que su hija era una golfa me derrumbe pues nada de lo que decían a mis espaldas era cierto, entonces decidí salir de viaje, quería olvidarme un poco de todos, recordé que mi hermana mayor estaba haciendo labor social de medicina en algún pueblo enclavado en las montañas, podría ayudarle, aunque la idea no me entusiasmaba nada, al menos, estaría muy lejos y podría tener algo de tranquilidad en mi mente,  el trayecto  era sencillo pero agotador, 7 horas a bordo de un autobús para llegar a aquel pueblo, llegue sin contratiempos, visite y ayude a mi hermana mayor al mismo tiempo que me desconectaba de mi mundo.

El día de mi regreso, amaneció con un clima muy frio, demasiado nublado y con viento, yo no llevaba ropa para protegerme del frio pues aquel lugar casi siempre hace mucho calor, así que, le pedí a mi hermana algo de ropa para protegerme pero ella tampoco contaba con ropa para frio, tuve que aguantar ese clima con las únicas prendas que me quedaban para regresar, una falda que me llegaba arriba de la rodilla, para cubrir mis piernas me puse unos mallones negros de esos que con la presión luego se transparentan, una playera de color rojo que al menos me cubría los hombros y me deje el cabello suelto para que me protegiera el cuello del frio, me di cuenta inmediatamente que casi todas las personas comenzaban a mirarme, algunas con disimulo, otros con franco descaro, al verme en un espejo comprendí porque, me veía increíble con lo que me había puesto, aparte de que era la única que iba vestida de una manera así de llamativa, pues el grupo de médicos de mi hermana siempre iban con una bata o ropa blanca, y la gente de aquel pueblo, solía llevar pantalones de mezclilla los hombres con camisas de cuadros, o las mujeres faldas y vestidos muy largos que llegaban casi al piso, así que, yo era la única que desentonaba en aquel sitio y empecé a incomodarme, cuando llamaron para abordar el autobús, me despedí de mi hermana y fui de las primeras en subir para seguir evitando todas esas miradas, en el autobús no tendría que preocuparme de miradas incomodas, solamente viajaríamos 12 personas mas el conductor, 4 parejas, 3 hombres solos y yo.

Tome el autobús a las 10 de la mañana, pensando en llegar a la ciudad 5 de la tarde y poder llegar a casa antes de que fuera de noche para medio arreglar los asuntos que seguramente se me habrían acumulado durante mi semana de ausencia, no pensé en quedarme dormida, pero al ser 7 horas continuas de viaje, estar algo cansada  y pensaren todo lo que tendría que hacer al regresar  a casa empecé a sentir sueño hasta que me quede dormida.

Sentí en sueños como alguien masajeaba mi entrepierna, haciendo a un lado mi tanga y sobándome los labios de mi coño, moviendo sus dedos en círculos, o siguiendo las líneas de mis labios, paseando sus yemas en la entrada de mi coño, mientras una boca succionaba uno de mis pezones, lamiendo mi seno izquierdo mientras lo estrujaba con una mano,  empecé a abrir los ojos y vi que no era un sueño, un tipo estaba tocándome mientras yo me había quedado dormida, no se porque, pero ver a aquel tipo aprovechándose de mi , ver como me había subido la playera hacia arriba junto con mi sujetador para poder acceder a mis senos, y ver como tenia su brazo por debajo de mi falda, me dio mucho morbo y en vez de empezar a gritar, o a defenderme  o cualquier otra cosa que habría hecho alguna mujer en aquella situación, le deje que siguiera explorándome mientras yo le medio observaba y me seguía haciendo la dormida.

Aquel tipo era uno de los campesinos del pueblo, era feo en realidad, o al menos era la clase de hombre que yo ni siquiera habría volteado a mirar jamás, tendría mas de 30 años a simple vista, pero empecé a excitarme al ver como ese hombre se daba el placer de tocar mi cuerpo, seguramente un cuerpo que ni en sus mejores sueños imagino en tener a su disposición, aquel hombre siguió deleitándose con mi cuerpo y no sabia que yo estaba despierta, su mano derecha seguía debajo de mi falda tocándome el coño, mientras el no se decidía si atender mi teta izquierda o derecha, lamia y magreaba la derecha y pasaba a la izquierda, dejando pequeños rastros de saliva encima de mis pechos, a mi me disgustaba mucho que mi novio me dejara saliva en mis tetas cuando me las chupaba, pero en ese momento, con ese extraño no me incomodaba en lo mas mínimo, al contrario, lo disfrutaba, seguía atendiéndome las tetas cuando sentí que la mano que tenia en su coño empezaba a forcejear con mi tanga, aquel tipo quería quitarme la tanga, pero la presión de estar sentada en el asiento lo dificultaba, así que poco a poco con su mano iba haciendo palanca entre el asiento y mis nalgas, mientras lo hacia, aprovechaba para poder magrearme un poco  la piel de mi culo, el seguía con su propósito, quise ayudarlo un poco, así que me moví hacia arriba como si estuviera soñando, funciono pues sentí como lograba deslizarme la tanga totalmente hasta quedar a la altura de mis piernas, y aunque seguían ahí, en mis piernas, ya no protegía nada de lo que se supone una tanga debía de proteger, deslizo mi tanga hasta mis pies,  con cuidado levanto uno, y luego otro para quitarme totalmente la tanga, y vi como la guardaba en una mochila que tenia en el piso de su asiento, ver que aquel tipo guardaba mi tanga como un trofeo personal me excito mucho , empecé a humedecerme y a sentir calor en mi coño.

Ahora que estaba sin tanga, el masajeaba toda la zona de mi coño a su antojo, sentía como su mano se humedecía con mi flujo, seguía haciéndome la dormida, no se si el sospechaba que en realidad estaba despierta o no, pero continuaba tocándome a su gusto, mientras yo le observaba, saco su mano empapada de mi coño y lo llevo a mis labios, con lo cual mi boca quedo también humedecida con mis propios flujos, note como sacaba su verga por la bragueta de su pantalón, una polla totalmente erecta, de tamaño parecida a la de mi novio, pero indudablemente mas gruesa y por alguna extraña razón, la veía con mas antojo que la de mi novio, agarro una de mis manos y la llevo a su polla, cerro mi puño alrededor de su polla  y empezó a mover mi mano de arriba hacia abajo, básicamente le estaba masturbando la polla a aquel tipo, con su mano, seguía moviendo mi mano de arriba hacia abajo una y otra vez mientras con  su otra mano le seguía dando un repaso a mi coño, en cierto momento sentí como aquella polla iba sacando un poco de lefa, embarrándome un poco la mano, estaba entre asqueada, excitada y mas cosas, deje que siguiera jugando conmigo mientras yo seguía fingiendo estar dormida, seguía  pajeandose con mi mano cuando sentí que estaba a punto de correrse, en ese instante se detuvo.

En ese momento, el bajo mi cabeza hacia su polla, aquel tipo quería que le diese sexo oral, nunca me había agradado hacerlo, me sentía humillada y la única vez que se lo hice a mi novio no resulto nada bien pues casi vomite, pero en aquel momento, solo me deje llevar,  no se porque razón pero me gustaba que aquel campesino me usara como su puta, me bajo con cuidado, supongo que porque no quería “despertarme”, una vez que mi boca estuvo a la altura de su polla, me la empezó a restregar suavemente por toda la cara, me la pasaba por los ojos, por la nariz, por las mejillas, por mis labios cerrados, aun tenia un poco de lefa que le había salido con la pajeada que se había hecho con mi mano así que ahora sentía la cara húmeda de semen, con sus dedos empezó a abrir mi boca poco a poco, una vez que lo hizo, metió suavemente su polla dentro de mi boca, y empezó a moverse despacio, yo no quería que el se asustara si se daba cuenta de que me encontraba despierta y terminara todo, así que no moví para nada mi lengua, aunque tenia muchas ganar de empezar a chuparle el rabo a aquel tipo, tuve que aguantarme, el seguía  follandome por la boca, de manera suave, lo único que pude hacer fue cerrar un poco los labios para hacer presión sobre su polla, al parecer eso le gusto pues se movía mas y mas, mientras con su otra mano se pajeaba el solo, era tanto el placer que aquel tipo sentía que de nuevo empezó a soltar pequeñas gotas de esperma, ahora dentro de mi boca,  yo estaba calientísima por esta situación, saber que se estaba saciándose conmigo era excitante, y en mi mente, empezó a dominar un solo pensamiento, quería que aquel tipo me penetrara el coño, quería que me follara y terminara haciéndome suya definitivamente, incluso pensé en “despertar” para evitar que se corriera en mi boca para que me follara el coño, pero no fue necesario, cuando el sintió que estaba a punto de correrse en mi boca, se detuvo, saco su polla de mi boca y me recostó de nuevo en mi asiento.

En el camión había poca gente, al parecer nadie se había dado cuenta, o, por el contrario, ya sabían, pero preferían no decir nada, yo estaba muy excitada y quería que aquel hombre me penetrara con su verga tiesa que tenia, aunque, haciéndome la dormida, no se como lo lograría, o si intentaría follarme, pero viendo todo lo que ya había hecho, no dudaba que lo intentaría y así fue, vi como terminaba de desabrocharse todo el pantalón, bajándoselos hasta su rodilla y luego bajándose su trusa, luego me tomo suavemente de la cintura, me empezó a levantar poco a poco y de manera suave, no se como, pero empezó a girarme mientras pasaba de mi asiento a estar encima de el, al final, el quedo recostado en su asiento y yo quede de frente encima de el, estaba mas húmeda que nunca y sentía como mi coño mojaba una de las piernas de aquel hombre al quedar encima de el, a esta altura no creía que aquel hombre no supiera que en realidad solo fingía dormir, pero quise seguir el juego lo cual a el pareció encantarle y a mi también, termino de acomodarme para que su polla quedara debajo de los labios de mi coño, una vez ahí, empezó a masturbarse con los labios de mi coño, con toda la humedad que tenia, no le resultaba difícil a su polla deslizarse entre los labios de mi coño, lo hacia de manera suave, mientras yo terminaba recostada encima de el, en esa posición mis tetas quedaban aprisionadas contra su pecho, pero sus manos al parecer se habían cansado de mis tetas, pues ahora solo se dedicaba a darle una buena sobada a mis nalgas y toda la zona cercana a mi culo, seguía  masturbándose de esa manera, hasta que ya no pudo mas, una de sus manos bajo hacia la zona donde frotaba mi coño con su polla, sentí como agarraba su verga y la guiaba a la entrada de mi coño, el empezó a juguetear con mi coño, enterraba un poco la punta de su verga en mi coño y luego se salía, lo enterraba un poco mas y volvía a salir, paseaba la cabeza de su polla por fuera de mi coño, restregándola en mi entrepierna y volvía a enterrar un poco la punta para luego salir, yo moría porque terminara de penetrarme, y no tardo mucho en hacerlo, empezó lentamente a empalarme, centímetro a centímetro su polla iba entrando en mi ahora muy cálido y húmedo coño, a cada centímetro que el ganaba dentro de mi, sentía escalofríos de placer, tenia que aguantarme mis gemidos pues no quería romper la magia de que el creía, o fingía que creía que estaba dormida, siguió empujando su verga hasta que sentí como sus huevos me rozaban la entrepierna, por fin había enterrado toda su herramienta en mi coño, sentía como las paredes de mi coño se adaptan fácilmente a la forma de aquel intruso, como lo apretaba de manera perfecta, el se quedo dentro de mi inmóvil un rato, supongo que disfrutando esa misma sensación, yo estaba mas húmeda que nunca, empecé a empaparle su verga con mis jugos y el al sentir eso, comenzó a moverse.

Se movía despacio dentro de mi, arriba y abajo, arriba y abajo, su verga se deslizaba dentro de mi interior con una facilidad asombrosa, con mi novio nunca había sido tan placentero, el decía que tenia el coño muy estrecho y que eso lo volvía loco de placer, pero a mi me resultaba a veces doloroso, pero en este momento, estaba muy bien lubricada, tan lubricada, que aquella polla extraña y gruesa se movía con soltura asombrosa, el roce de su verga con las paredes de mi coño me empezaba a volver loca de placer, entonces sentí como el camión empezaba a vibrar, estábamos pasando por una sección donde el camino no era de asfalto, si no de tierra, ese movimiento mas las embestidas que me daba aquel hombre lograron que por fin tuviera orgasmos, tuve 4 orgasmos seguidos, algo que mi novio nunca había logrado, fueron tan intensos que tuve que usar toda mi voluntad para no empezar a gemir como perra en celo, empecé a tener orgasmos muy fuertes, sentía como las paredes de mi coño apretaban aun mas la polla de mi agresor con cada orgasmo, el al sentir aquella presión,  acelero sus embestidas mientras sentía como estaba a punto de correrse dentro de mi, yo no tomaba pastillas, pues a mi novio siempre le exigía condón, yo a veces se los compraba, pero, al estar lejos una semana de mi novio, en un lugar extraño, lo que menos pensé era en follar, quise resistirme un poco para que aquel hombre no se corriera dentro de mi, pero sus movimientos mas el movimiento del camión lograron arrancarme de nuevo sendos orgasmos, con lo cual la preocupación de que terminara llenándome de semen aquel tipo fue remplazada por la preocupación de no empezar a gemir como loca,  solo quería seguir sintiendo placer, solo quería mas orgasmos, orgasmos que mi novio casi nunca lograba hacerme sentir, me embestía hasta que sentí como aquella polla inundo mi coño con 4 disparos de lefa tibia y espesa, aquel hombre dejo su polla dentro de mi mientras iba perdiendo dureza y tamaño, yo me encontraba toda sudorosa y ya sin sentir nada de frio, una vez que su polla volvió totalmente a su estado de reposo, la saco de mi interior con su mano y empecé a sentir como me empezaba a salir su leche de mi coño junto con mis jugos y terminaban empapando la entrepierna del hombre, con cuidado de nuevo, me devolvió a mi asiento, vi como sacaba mi tanga de su mochila y con ella se limpiaba los restos de semen y los restos de mis jugos, se subió de nuevo el pantalón, luego intento acomodar mi sujetador y mi playera, me acomodo la falda, pero no me limpio el coño, que sentía como aun salían restos de su semen que iba a terminar dando un recorrido por el interior de mis piernas mientras se secaba poco a poco.

Una vez que termino de acomodarme, se levanto y fui a su lugar, yo por mi parte, al recordar todo lo que había pasado, saber que aquel hombre me había usado como su juguete sexual, totalmente a sus deseos y sentir como su semen seco iba dejando mis piernas todas pringosas hicieron que me excitara de nuevo, así que empecé a masturbarme, no tarde mucho en alcanzar de nuevo orgasmos, solo que esta vez no me reprimí y empecé a gemir como una verdadera perra, ahora si los pocos pasajeros me miraron, pero no me importo, había tenido tanto placer en tan poco tiempo que estaba totalmente satisfecha, y entonces, volví a quedar dormida en mi lugar, cuando desperté, estábamos por llegar a la estación, solo que, tenia la falda subida hasta arriba, tenia una teta por fuera y tenia algo de semen fresco escurriendo por mi coño,  recordé que mi violador me había dejado bien acomodada la ropa, ¿Me habría vuelto a follar dormida y esta vez no me entere? O  ¿Algún otro pasajero sacio sus ganas de sexo conmigo?