Me montan en una Moto
Un viaje en moto Puede ser una experiencia placentera, todo depende de las intenciones que llevemos.
Me
montan
en una moto
Hola, por si no han leído los anteriores relatos me llamo Ana y quiero contarles lo que me pasó con un vecino que conozco, hace ya un tiempo que tuvimos algo entre los dos pero aquello se nos estaba escapando de las manos y dado que soy casada, el también y que se nos estaba complicando demasiado tuvimos que alejarnos los dos un poco.
A el le gustan las motos y a mi la verdad es que también, hace unos días nos encontramos de nuevo en el garaje donde tenemos los coches y el ademas tiene una plaza para una moto, cuando yo estaba bajando del coche en esos momentos llegó el, como tiene la plaza justo al lado de la mía me tuve que apartar un poco para que aparcase, se había comprado una nueva moto, ¡¡era una pasada!! una 1250RS negra, los que entiendan algo ya saben de que marca hablo, me quede de piedra al verla ya que es un modelo que a mi me gusta mucho.
+ Hola vecinoooo, cuanto tiempo, veo que tienes juguete nuevo eh
- Si, me la acaban de dar y es una puta maravilla
+ Oye tienes que darme una vuelta
- A ti cuando quieras y en la moto también jajajajaj
+ buscare un hueco una mañana de estas
Los días fueron pasando y un día me dio por pensar en el y decidí escribirle, desde que le vi se me habían venido recuerdos muy agradables a la cabeza y eso me tenia algo alteradilla, le escribí un kik que es como nos solemos comunicar y le dije que el viernes por la mañana estaría libre puesto que mi marido trabaja.
Al rato me contesta que el también lo tenia libre pero que me tiene que cobrar la gasolina de alguna forma, y termino con un
“ya sabes mis gustos”
, aquello me hizo recordar muchas cosas y me puse tan cachonda que al acabar la conversación tuve que irme a la habitación a hacerme un dedo de los buenos, así que quedamos para ese día en el garaje tempranito.
Allí nos presentamos los dos, el venia informal con unos pantalones vaqueros negros, una camiseta, encima una chaqueta de moto con sus guantes y su casco, a mi el casco, la chaqueta y los guantes me los dejo una amiga y debajo iba en falda, se que es una imprudencia pero me daba a mi que el viaje no iba a ser normal.
Subimos a la moto y nos dirigimos hacia la sierra, la experiencia me estaba encantando pero el ir con el me estaba removiendo sentimientos y lo que es peor, me estaba poniendo muy perra, hicimos una parada arriba en un restaurante a tomar algo y nos dispusimos a dar una vuelta andando por el bosque, como hacia calor me dijo que me quitara la chaqueta pero no lo hice, solo me bajé la cremallera hasta casi el ombligo y el vio que debajo no llevaba absolutamente nada,
“veo que recuerdas mis gustos eh zorra”
.
Mis tetas quedaron en gran parte a la vista, la chaqueta al estar abierta solo tapaba los pezones y cuando se ahuecaba ni eso, el cogió y llevo una de sus manos y me las acaricio por dentro de la chaqueta cogiendo el pezón y tirando de el, se me pusieron duros como autenticas piedras y note que ya estaba chorreando, aparto la chaqueta de tal manera que las tetas salieron fuera y no hice nada para impedirlo, seguimos andando y charlando como si nada con las tetas al aire.
De vez en cuando me tiraba de los pezones y me besaba metiéndome la lengua hasta la campanilla, en una de esas me apoyo contra un árbol y me empezó a comer las tetas mordiéndome el pezón, me las succionaba hasta casi hacerme daño, como si quisiera sacar leche de ellas, yo ya estaba cachonda perdida y solo pensaba en que a mi marido le iban a crecer otro poco los cuernos, no podía evitarlo, ¿ademas a quien pretendía engañar? si lo venia a buscando.
Como ya había decidido que de allí iba a salir follada le cogí del pelo y le fui empujando hacia abajo hasta quedarse de rodillas delante de mi, con la otra mano me subí la falda y le mostré que debajo de ella tampoco llevaba nada:
+ Mira como huele, ¡¡es por ti cabron!!, lo tienes cachondo perdido así que no pierdas el tiempo y come el desayuno que te traje hoy
El vio que en la parte alta de mis muslos ya estaba mojada, cayendo unos hilos de flujo que salían de mi coño como si de una fuente se tratase, el empezó a pasar la lengua recogiéndolos y lamiéndome los muslos hasta que llego a mi raja, la que quedo abierta apoyando una de las piernas en un tronco que había al lado y con los dedos de la mano que sujetaba la falda me abrí el coño para que lo viese bien mojado y babosito.
Que gustazoooo como come el condenado, que lengua, que guarro, me lo estuvo comiendo un buen rato, yo ya no era dueña de mi misma, incluso me di cuenta que pasó cerca un matrimonio de nuestra edad que se nos quedo mirando y no le dije nada para que no parase de comerme el coño, que espectáculo dimos, hasta que me corrí como una cerda dejándole la cara llena de jugos, el intento levantarse pero no le deje, le mantuve la cara cerca del coño hasta que empezó a salir un chorro calentito de el, me estaba meando en su cara.
Yo nunca había echo eso en mi vida pero perdí tanto los papeles por la corrida y por el saber que me estaban viendo que no lo pude evitar, el tampoco lo había hecho nunca porque la cara de sorpresa cuando impacto el chorro a la altura de su boca era todo un poema.
+ abre la boca cabrón que este es el postre que te traía, saborealo bien.
El abría la boca y la tenia llena, que placer me daba ver así a un tío desde arriba y meandole en la cara, nunca había hecho aquello pero la imagen era salvaje, cuando ya no me salia
mas
se subió y el muy cabrón me empezó a comer la boca pasándome todo el meado que tenia dentro de ella, yo no lo había probado pero estaba tan cerda que lo acepte y termine tragándolo, los desayunos si se comparten
saben
mejor.
Ahora el que me cogió del pelo era el y al empujar hacia abajo ya sabia cual iba a ser mi trabajo, ¡¡bueno mi placer!!, porque me encanta comérsela, me la clavo de una sola estocada hasta la garganta y me empezó a follar la boca contra el árbol, me caían las babas, me daban arcadas, pero estaba disfrutando como una
autentica
puta.
Mientras estaba abierta de piernas con la mano que quedaba libre me estaba metiendo los dedos hasta el fondo, lo tenia tan abierto que yo creo que me cabía
una
mano entera dentro.
Cuando ya la tenia dura y los huevos a punto de reventar me dio la vuelta y me apoyó en el tronco donde había tenido apoyado el pie y sin miramientos me metió toda la pija por el chocho, no le costo nada de como lo tenia, me estuvo follando como si no hubiese un mañana, yo a esas alturas ya llevaba dos o tres corridas, así que el rabo estaba tan lubricado como el coño y yo estaba tan puta que me salio de la boca un
“dame por el culo cabrón, lléname las tripas hasta el estomago”
y sin pensarlo dos veces sentí toda la estocada en el culo.
Sentí como se me abría el ojete, como se estiraba hasta casi romperlo y esa mezcla de dolor, ardor y placer que no podía soportarlo.
La imagen tenia que ser de película XXX, yo apoyada en el tronco, abierta de piernas, la falda levantada hasta la cintura, con las tetas colgando y balanceándose, el tío detrás de mi dándome por el culo y yo mientras tocándome el chocho. Al final no pude aguantar y me corrí a chorros, tanto que mire y vi el chorro literalmente como si me estuviese meando de nuevo.
Y en esos momento empece a notar como me entra un liquido caliente en el culo, como me llena entera, ufffff que placer que te llenen el culo de leche, lastima que a mi marido le dé asco eso y muchas otras cosas claro.
Cuando me la saco del culo me agaché y se la empece a lamer para dejársela limpia, el sabor a leche mezclado con el sabor ácido de mi culo era todo un placer, según estoy limpiándosela el cabrón empieza a mearse también, cayéndome todo por las tetas,
“yo también te he traído el desayuno zorra”,
¡era lo justo!, así que me lo tuve que tragar todo igual que el lo hizo antes.
Nos limpiamos un poco la cara pero lo que no me dejo es limpiarme ni el chocho ni el culo, mire a ver si veía a nuestros mirones pero ya no los vi, supongo que estarían follando como cerdos después del show que les dimos.
Cuando llegamos a la moto para volver aun quiso descargar los huevos de nuevo y como negarme yo a eso, tuve que dejarle mi coño para que descargase de nuevo, lo hicimos yo apoyada contra la moto y el culo en pompa.
Cuando llegamos al garaje al bajarme de la moto deje un charco de leche en el asiento, al ir todo el camino con el chocho y el culo abierto yo ya iba notando como se iba saliendo de los dos sitios, pero como la moto es nueva me daba pena ensuciarla, así que al bajarme lo que hice fue pasar la lengua por el charco que había dejado y dejársela bien limpia, cosa que compartimos los dos con una buen morreo de despedida.
Creo que como el aire puro del campo es tan saludable volveré a pedirle que me acerque a respirar un poco alguna mañana mas, todo sea por una vida saludable
Un besito a todos.
Ana.