Me excite en el colectivo

Me excite en el colectivo

Hola antes que nada queria decirles que la experiencia que les contare a continuación es totalmente real y propia ,hace mucho que queria contarla y no me animaba , gracias a un ciberamigo al que le cuento mis cosas me anime ,yo le cuento mis experiencias y el las transforma en relato , espero que les guste. GraciasGUILLE.

Eran como las... mas de las 7 de la mañana, el despertador ya había sonado y yo como siempre remoloneaba un poquito en la cama intentando despertarme, tengo que prepararme para ir al colegio no me gusta tener que correr el colectivo así que ya tengo mis tiempos definidos en mi rutina y el remolonear estaba incluido.

Tengo 17 años estoy en el ultimo curso y no me cuesta estudiar aunque hoy estoy un poco preocupada por una materia donde no estoy muy segura pero no me preocupa mucho ya que los promedios me sobran para aprobarla.

Me levante y me vi en el espejo de la pared, lo primero que note es lo enmarañado de mi pelo y una vez mas también admire secretamente mi cuerpo, se que queda mal que yo lo diga pero tengo un cuerpo espectacular, muchos hombres en la calle me lo recuerdan y como me gusta, suelo vestirme bastante provocativa para alimentar mi ego simplemente.

Me dirigí al baño a tomar mi ducha matinal, hacia mucho calor me sentía un poco traspirada y me gustaba salir de casa bien bañadita y provocativa así que empecé una vez mas mi tarea de acicalarme y ponerme bien sexy.

Una vez en la bañera todavía un poco dormida siento caer el agua tibia en mi cuerpo y me di cuenta que lo enmarañado de mi pelo y lo traspirada que estaba, se debía a que mi cuerpo estaba algo excitado y talvez anoche algún sueño me haya perturbado, note como mis pechos (no muy grandes pero en perfecta armonía con el resto de mi cuerpo) acusaban las caricias del chorro de agua y me deje estar unos momentos disfrutando y tratando de recordar que fue lo que en mi sueño me había puesto así, no podía recordarlo pero de todas maneras acaricie mi cuerpo sintiendo mis dedos rozar mi piel deslizándolos desde mis pezones hasta mi conchita como jugando a comenzar una masturbación cosa que sabia no tenia tiempo para hacer, la puerta del baño había quedado un poquito abierta y no me gusta cerrar la cortina de la bañera, talvez inconscientemente o no, me gustaba sentir que por ahí alguien de mi familia entrara y me vea desnuda bañándome , no me importaba exhibirme delante de los hombres de la casa, es mas era algo que me gustaba hacer estando en la seguridad de mi casa, y por el simple hecho de dejar que vean mi cuerpo del cual estoy orgullosa.

Tuve que parar con los jueguitos de la ducha porque se estaba transformando en algo que en pocos momentos mas seria incontenible , así que intente despejar un poco mi mente pensando en la materia que me tenia preocupada y termine de ducharme y me dirigí a mi habitación.

Otra vez frente a espejo empecé a buscar que ponerme, que como toda mujer coqueta sabrá no es tan fácil porque mucho depende del estado de animo del momento y de la ropa que se disponga que siempre es poca.

Buscando encontré algo, una tanguita negra muy chiquita y con algo de transparencia me encantaba notar como se perdía en mi cola, después me puse la falda del cole y elegí una del año pasado que sabía que me quedaba lo suficientemente corta para no se escandalosa, el largo justo en relación a como me sentía, o sea muy corta , con muchas ganas de que vieran y admiraran, pensé en no ponerme corpiño pero sabía que mamá no me dejaría salir así, por eso busque los mas lindos que tenía con algo de trasparencia y que apenas llegaban a cubrirme los pezones, también elegí una falda del año pasado que sabia que era motivo para que en cualquier momento alguien el la calle admirara mis piernas y lo sensual que me quedaba mi faldita, me puse la camisa blanca reglamentaria del cole, no se si el reglamente tenia en cuenta la trasparencia ya que mi camisa era suficientemente trasparente como para que se notara mi muy sexy corpiño.

Tome las cosas del cole y baje a desayunar con mamá y mi hermanito ellos ya habían terminado, yo solo tome un poco de leche chocolatada con algunas galletas por estar un poco retrasada, me despedí de Mamá con un beso y también de mi hermanito ( con el cual tengo también algo que contarles mas adelante)

En la calle note de inmediato lo bien que me había vestido

-Adios Flor- el señor del puesto de diarios, lo dijo de una forma que si hubiera dicho "que perra que sos" hubiera sido lo mismo, me gusto y seguí muy segura de mi misma por lograr lo que me había propuesto, lo que a su vez mantenía mi estado de semiexcitacion.

En la parada del autobús sentí varias mirandas y no falto el que se pasara diciendo cosas que me incomodaron un poco, un chico se me había plantado a mi lado intentando iniciar una conversación. Por fin llegó el autobús y pude safar, o mejor dicho meterme en algo que no esperaba, estaba totamente repleto de pasajeros mas que lo normal y me dije otro viaje a los empujones, como pude saque el boleto y me puse cerca de una señora que estaba justo delante mía dándome la espalda. Los choferes Argentinos no se destacan por sus buenas costumbres al conducir y muchas veces creen que llevan ganado, pues así una vez mas me tocaba viajar.

Detrás mío había dos chicos de mi mismo colegio a los que no concia, sabía que eran de mi colegio por el uniforme solamente. Con el traqueteo del autobús en algún momento sentí que uno de ellos se apoyaba sobre mi y con el dorso de su manos rozaba mi cola, supuse que en semejante amontonamiento podía ser que no fuera intencional , así que no dije nada pero a cada acelerada o frenada volvía asentir esa mano con insistencia en mi cola, me imaginé que había algo mas que descuido pero no podía hacer nada, así que deje que pasara y por otro lado no me disgustaba del todo teniendo en cuenta mi estado cada vez mas receptiva a todo lo que se refiera a caricias me estaba gustando el jueguito, la gente se fue reacomodando en el ómnibus y los chicos salieron de su posición, no sin un poco de pena por mi parte, me dije bueno eso fue todo, pero nada mas lejos de la realidad, el que ocupó su lugar era un hombre mas grande, si bien no lo vi, pude notar que tendría como 40 años, apenas el autobús se movió sentí como me cayó encima, yo tuve que sostenerme de la señora que estaba adelante mío, los chicos habían colaborado en un jueguito que me resulto interesante, pero este hombre seria diferente, de a penas de un roce casual con el dorso de una mano que estimuló un poco mis neuronas a sentir el calor del pene de un hombre apoyada en una de mis nalgas, se me cruzaban las sensaciones de miedo, placer estaba un tanto desconcertada tenia un hombre pegado a mi cola y sentía como con cada empujón crecía su pene y mas miedo, y mas sabroso lo sentía mas confusión en mi cabeza pero no me movía de mi sitio, y otra vez y otra vez mas, y cada vez mas descarada, pasando de un lado al otro y hundiéndose en el medio exquisita sensación, hasta un punto que el apoyo fue total y los movimientos empezaron a ser verticales a penas centímetros pero se sentía maravilloso yo muerta de miedo pero no quería que se detuviera mi "casi excitación" se había trasformado en un fuego que me recorría todo el cuerpo y en un temor a que alguien viera lo que estaba pasando, en un momento cedió un poco en su presión pero fue solo para acercar su mano a mi cola, sentir sus dedos recorrer mis piernas en dirección a mi cola mientras levantaba mi faldita fue algo que me electrizo, quede dura de miedo pero rogando que no se detuviera que llegara a mi cola que la agarrara que me apretara que sintiera mi calentura que disfrutara tocándome como yo disfrutaba sintiendo su manos aferrarse a mi cola, en ese momento hasta disfrutaba también del miedo que se mezclaba con mi calentura

Recorrió mi cola a su gusto y llego a tomar mi tanguita esa que yo me había puesto para sentirme sexy y tirando de ella hacia arriba me la metió entre las piernas, con tal fuerza que mis labios vaginales también cedieron y disfrute de sentirla rozándome, pero fue el momento en que el miedo pudo mas que mi calentura y todavía muy turbada y con la certeza de querer quedarme allí y seguir disfrutando no se como hice para dar un paso y dirigirme a la puerta trasera del autobús para bajarme, con la secreta esperanza de que me siguiera de que intentara terminar lo que había empezado, pero baje y nadie me siguió, no se que hubiera hecho si se bajaba conmigo pero hasta el día de hoy le estoy agradecida por el momento que me hizo pasar, caminaba hacia la escuela todavía con mi tanguita metida dentro mío y así se quedaría todo el día hasta que llegara a casa, donde con el recuerdo que había rondado todo el día en mi cabeza, y todavía la sensación de esos dedos en mi cola, y el calorcito de esa pija dura y calentita no pude mas que terminar masturbándome y esperando que alguna vez ese hombre me vuelva a encontrar en el autobús.

Les dejo mi mail , a ver que piensan: mis_relatos2004@hotmail.com