Me excita provocar a mi papi
Mi nombre es Estefany y tengo 37 años de edad, vivo con mi Familia (Mi papa, Mi mama, mi Hermana y su hija), me considero una chica de mente abierta, me gusta vestir con ropa casual aunque si de vez en cuando con algo sexy (principalmente leggins, blusas con escote y uno que otro vestido) a la moda
Mi nombre es Estefany y tengo 37 años de edad, vivo con mi Familia (Mi papa, Mi mama, mi Hermana y su hija), me considero una chica de mente abierta, me gusta vestir con ropa casual aunque si de vez en cuando con algo sexy (principalmente leggins, blusas con escote y uno que otro vestido) a la moda pero con ropa que realce mi cuerpo, tanto la exterior como la íntima, disfruto mi sexualidad de manera moderada, actualmente estoy soltera y mas lo que ocurre actualmente mi vida sexual ha disminuido.
Esto que les voy a contar paso sin darme cuenta y me lleno de morbo y excitación, Todo era de lo más normal en mi vida hasta que hace casi un año descubrí que mi papa, me espiaba y más cuando usaba vestidos cortos, que principalmente usaba en casa, cuando hacia cosas como lavar y limpiar, posteriormente me di cuenta que también lo hacía cuando me bañaba o cambiaba de ropa, e incluso cuando llegaba a tomar una siesta, cuando usaba vestidos y me llegaba a sentar él no me quitaba la vista de las piernas, que algunas veces debido a lo corto de los mismos quedaban al descubierto la mayor parte de mis muslos y seguramente se me veían las pantys, en todo momento me se sentía observada por él que con mirada morbosa recorría mi cuerpo de pies a cabeza desnudándome con la mirada, actitud que me molestaba sobre manera, pero de momento no me animaba a reclamarle.
Tal situación me comenzó a excitar y me empecé a dar cuenta que en ocasiones mi ropa interior desaparecía o que incluso algunas prendas estaban manchadas y comencé a pensar que se masturbaba tanto con mis prendas íntimas recién usadas, como con mi ropa.
Lo anterior despertó en mí la curiosidad de saber si mi papa era quien en verdad se masturbaba con mis pantaletas sucias, así que un día (miércoles) que estábamos solos mi papa y yo, decidí poner en marcha un plan para saber si era mi padre quien tomaba mi ropa, así que cuando me bañe, deje la puerta un poco entre abierta a sabiendas que sería observada por mi padre, al desvestirme deje mi ropa sobre el cesto de la ropa sucia de tal manera que sabría de inmediato si mi papa las habría tomado o no.
Transcurrió todo el día y parte de la mañana siguiente recordé lo de los pantys y fui a constatarlo, para saber si las había tomado o no, cuando revisé el cesto mi ropa estaban por demás distinta a como las había dejado, pude comprobar que si las había tomado, pero no solo eso, estaban manchadas de semen por lo que sin duda se había masturbado con ellas frotándolas en su miembro.
La molestia que originalmente había sentido al saberme observada libidinosamente por mi padre desapareció, comencé a sentirme muy excitada pero una noche tuve sueños húmedos en los que aparecía mi padre besándome todo el cuerpo y cogiéndome en todas las formas imaginables, amanecí con las pantaletas totalmente mojadas y más caliente de cómo me había acostado con un deseo sexual irrefrenable.
Al levantarme antes de bañarme al primero que me encontré, tal vez esperando a que me metiera a bañar para observarme, fue a Papa, enseguida volvieron a mi mente las imágenes del sueño que había tenido donde el disfrutaba de mi cuerpo, inconscientemente mi caminar delante de él se tornó más sensual, sin premeditarlo me estaba prácticamente exhibiendo aun cuando llevaba puesto un pants aunque deportivo y algo ajustado pero ya con mis pantaletas tipo bikini bien mojadas, sentía como con su mirada me desnudaba para poder admirar mi cuerpo y eso me ponía más caliente.
más tarde me metí a bañar y pude constatar, por la sombra que se veía en movimiento por debajo de la puerta, que mi padre me estaba espiando como acostumbraba a hacerlo, animada por la excitación que en esos momentos dominaba mi cuerpo me fui despojando lentamente de la ropa con movimientos sexys y cachondos, al quedar completamente desnuda y me di tiempo para quedare así unos minutos teniendo plena conciencia de que mi Papa me estaba viendo, lo que me excitaba aún más.
Durante la ducha me estuve exhibiendo de forma descarada ante la lujuriosa mirada de mi padre, me tarde el doble del tiempo que usualmente empleo en bañarme, no quedó nada que no le mostrara, mi vagina, mi trasero, mis pechos
A partir de ese día no podía dejar de exhibirme y dejarlo ver mis piernas y pantaletas, me excitaba sobre manera saberme deseada por él, se empezó a ser cotidiano el que saliera de mi cuarto con solo una blusa y en pantys o con vestidos cortos fingiendo que era una situación casual y supuestamente que ignoraba su presencia, comencé a moverme de manera más sexy y sensual contoneando mi cuerpo en forma provocativa y sin tratar siquiera de disimular, lo que seguramente él disfrutaba ya que enseguida se le notaba el abultamiento bajo de su pantalón y sentía como me devoraba con su mirada lo que me ponía aún más cachonda de lo que de por si estaba.
Pero la excitación que me producía exhibirme no quedó ahí, un día se me ocurrió en hacer lo posible por cacharlo cuando él se estuviera masturbando con mis pantaletas, así que lo estuve cazando cuando lo hacía, una vez que estaba lavando ropa y tenía puesto en vestido corto cada vez que subía yo a tender mi ropa el salía o pasaba por el patio, dirigiéndose a su cuarto el cual tiene una ventana por la cual podía espiarlo, logré mi propósito al poder ver como mi padre se frotaba mis pantys contra su verga y no solo eso también las olía y las llenaba de su esperma.
A partir de ese día comencé a dejar diariamente mi ropa sobre la cesta de la ropa sucia para incitarlo a tomarla, y comencé a masturbarme oliendo mis pantys llenas de su semen, él lo hacía diariamente dejando muchas de mis pantys llenas de su leche, lo primero que hacía era tomar mis pantaletas y extenderlas para mirarlas, después las llevó a su nariz oliéndolas principalmente la zona donde antes estuvo mi conchita, acto seguido se las llevaba a su verga la cual siempre estaba en total erección, la podía ver enorme y gruesa, está bien dotado para su edad, el tamaño de sus testículos es sorprendente, y su verga gruesa y muy dura, con un glande grande y brilloso.
De inmediato me empecé a sentir excitada y caliente, empapando mis pantys en segundos, Mi padre sostenía mi panty con una mano aspirando el aroma de mi sexo, lamiéndolas, mientras con la otra se masturbaba su delicioso pene, instintivamente yo comencé a masturbarme también frotando mi clítoris, enseguida mi papa envolvió mi panty y la puso alrededor de su hermosa verga frotándola con vigor.
Aquella excitante escena se prolongó por varios minutos hasta que empezaron a brotar chorros de blanca leche en abundante cantidad que vertía sobre mis pantys y se limpiaba con ellas, para después salir y dejar mi ropa sucia manchada sobre el cesto, de inmediato me apresuré a esconderme con mis pantys totalmente empapadas, por lo que enseguida tuve la necesidad de masturbarme imaginando la ricura de polla que tiene mi papi.
Mi Papa se masturbaba con mi ropa interior varias veces a la semana y cada día me excitaba más despertando en mí el deseo irrefrenable de podérselo besar, lamer y mamar hasta que eyacule en mi boca y no se diga del anhelo de tener su verga dentro de mi vagina y sentir toda esa leche llenando mi conchita, sentir sus manos y su boca recorriendo todo mi cuerpo.
Incluso cuando me masturbo cierro los ojos y me imagino que es Mi Papi quien me está follando, asimismo imagino que le chupo la verga lo que me hace tener orgasmos más placenteros.
Esto se ha convertido en algo cotidiano, pero no por ello menos cachondo sino cada vez más agradable, pero con más sensualidad y exhibicionismo de mi parte para excitarlo y casi una invitación a realizar el incesto entre nosotros, cada día mis exhibiciones con mi Padre son más descaradas y de su parte ya no intenta disimular el bulto de su excitación cuando me está viendo las piernas y las pantaletas.
Estoy segura de que es cuestión de tiempo para que yo y mi Papa consumemos el incesto.