Me encanta ser follada por viejos y mendigos

Hola mi nombre es Cristina desde que era una niña he tenido una obsesión por ser cogida por mayores.

Me Encanta Ser Follada Por Viejos Y mendigos

Hola mi nombre es Cristina desde que era una niña he tenido una obsesión por ser cogida por mayores ya que mi madre era una mujer de la vida alegre y le encantaba también así que se puede decir que viene de familia.

Bueno para empezar voy a describirme soy alta, de piel morena cabello negro ojos café tengo unos grandes pechos y un buen trasero, me gusta usar tangas y faldas diminutas que dejen poco a imaginación.

Mi relato empieza un fin de semana de agosto mes en el que hace mucho calor así que decidí salir mas ligera de ropa que como de costumbre y me dirigí a un parque que prácticamente nadie visita por lo que permanece callado y se puede tener sexo sin problemas, cunado llegue había un par de hombre entre los 40 y los 45 diría yo ya que están bien conservados, estos se quedaron mirándome y yo aproveche para mostrarles algo a si que deje caer mi cell y me agache a recogerlo mostrándoles mi culito para que se lo gozasen todito, luego me senté una de las bancas y ellos se acercaron y empezaron a hablar con migo uno de ellos se llamaba Juan y el otro Pedro el cual venia muy excitado ya que note su enorme bulto, estuvimos hablando un rato hasta que propusieron ir a un lugar mas cómodo así que fuimos al centro del parque donde empezaron a tocarme y a hacerme rico luego Juan su enorme pene y empezó a masturbarse luego hizo lo mis pedro pero este era un poco mas pequeño que el de Juan.

Después de masturbarse un rato Juan me pidió que se la chupara a lo que accedí alegre mientras Pedro empezó a meterme su pene por mi chocha y empezó a bombear dura a lo cual hice lo mismo a Juan se la chupaba mas y mas rápido, luego cambiaron de posición y estuvimos así un rato hasta que los dos me hicieron el sándwich Juan me daba por el culo y pedro por la chocha hasta que terminan los dos dándome una tonelada de orgasmos en el proceso.

Después de eso regrese a mi casa y en el camino pase por una calle llena de viciosos y me volví a calentar con solo pensar que todos ellos podían violarme si pasaba por ahí así que decidí entrar, muchos de ellos me vieron y como si no pasara nada siguieron en lo de ellos pero después llego un mendigo y me agarro el culo y me amenazaba con un cuchillo y digo si te venís con mego te mato puta lo cual me calentó y me puso a cien así que sin oponerme me deje guiar a un callejón abandonado y sin salida donde me dijo que quitara toda la ropa y lo hice luego saco su verga y me dijo chupala asquerosa y se la empecé a chupar mientras decía que había visto lo que hice en el parque y que estaba siguiendo.

Mientras se la chupaba se quito todos los trapos que tenia puestos olían un poco mal como el pero a mi calentura no le importaba nada me alejo de pene y me ordeno que me pusiera en cuatro y empezó a penetrarme el culo primero lo hacia suave pero después aumento el ritmo y empecé a gritar como loca de tanto placer lo hacia cada ves mas duro y de repente lo retiro y me voltio me tiro contra el suelo y empezó a penetrarme por la chocha yo ya estaba a punto de desfallecer cuando eyaculo dentro de mi se paro y pensé que se había terminado cuando abrí los ojos vi. Cuatro mas desnudo esperando su turno así que me entregue e hicieron con migo lo que quisieron incluso llegaron a penetrarme dos a le ves por el culo.

Como pude llegue a casa y dormí casi un día entero, cuando desperté tenia unas ganas enormes de volver a ese callejón a que me culearan de nuevo pero esa es otra historia.

Att: Cristina