Me encanta Dani. Cada día más.

Porque sí. Porque cada vez le quiero y deseo más.

Me encanta Dani. Cada día más Son tiempos difíciles, pero aún ahí hay espacio para sorprenderse. Justo antes de las navidades pensé que nuestra pequeña historia perecía y siempre en ese frágil momento, Dani se crece y hace que

nuestra

historia tenga sentido y recorrido. Por ejemplo este viaje; tras unas navidades de lo más divertidas y sentidas, Dani ha salido para una reunión que le tendrá un par de días fuera. Yo

estaba

deseando escribirle un relato. Es una fuente inagotable de inspiración sexual. Pero en estos tiempos unas horas lo

cambian todo y los últimos días han sido

devastadores

para mí. No he sido capaz de escribir nada, no tenía ánimo. Pero ahora, mientras están reunidos, no dejo de pensar lo que es tenerle conmigo. Es brutal recordar los días vividos. Imposible no volverme loca recordando el día de reyes. Apenas hace tres días. Llegar a casa después de mil vinos, cachonda, con él diciendo que al llegar a casa quería una pequeña fiesta particular. Unos vinos, unas fresas, chocolate y su gran polla

bien

dura. A punto para disfrutar. Brutal como me estuvo follando, encima de

,

acarándome

las tetas y metiéndomela bien dentro. Sentir cada embestida, cada

centímetro

de su polla entrando bien dura. Notar su aliento y calor mientras me agarraba las tetas fuertemente y me estaba follando más y más ...

Es

algo que no podré

fácilmente

olvidar. Y como siempre, lo mejor... las ganas de comerme su polla. Es

una polla

perfecta, como todo con él. Grande, gruesa y muy, muy dura. Jamás me gustó tanto comer

una polla

, pero la de Dani es absolutamente fascinante. Me encanta comérsela. Tanto meterla en mi boca antes de empezar e ir lamiéndola y poniéndola más y más dura dentro de mi boca. Notar como se iba poniendo más y más cachondo, y notar sus ganas de placer

como lo mejor. Sentir como me folla bien duro y que la saque justo en el momento que se va a correr y que la saque de dentro de mi coño para metérmela en la boca y poder sentir como se corre pasando por mi boca, mi garganta. Cliente, amargo, delicioso. Y seguir chupándosela después, hasta dejarla limpia. Todo dentro de mí. Sentir como todo su placer recorre mi garganta. Jamás pensé que dar placer podría ser tan

placentero

.

Vienen tiempos

convulsos

. Excitantes para él,

complicados

para mí. Solo espero que no dejemos desearnos así.

Continuará...