Me enamoré de un hechicero 2

Capítulo - 1

Anteriormente.

Lentamente empiezo abrir los ojos y frente a mí se posa la imagen de un chico extremadamente guapo, incluso más que Alex (cabello negro, ojos azules, cuerpo muy bien formado, color mixto) tiene un aspecto algo tenebroso, va vestido con suéter y jean negro, lleva unos zapatos blancos y puedo notar un tatuaje subir desde su muñeca hasta que se pierde por la manga del suéter por lo que asumo sube más hasta el hombro.

‐¿Estas bien? ¿te hiciste daño?

-No, pero ¿cómo llegue aquí? y… ¿cómo es que no tengo ningún hueso roto?, por lo que recuerdo me atropello un camión.

-vaya eres más lindo de lo que creí, esas preguntas las resolverás muy pronto… por ahora maneja con cuidado. –me lanza un beso y se marcha.

Pero que… ¿quién es ese chico? y ¿cómo es que no estoy herido ni nada?, no me torturo más con preguntas solo tomo mi bici y vuelvo a la carretera.

Capítulo 1

Llego a la casa y al entrar solo puedo gritar “ya llegué mama, voy a mi habitación bajo en un momento”, al entrar en mi habitación, tiro la mochila en la cama, me quito la camisa y luego los pantalones.

Toda vía no logro comprender que fue lo que sucedió, como es que no tengo ni un solo rasguño, aquí estoy de pie frente al espejo y no veo una sola evidencia de que haya tenido un accidente solo veo lo delgado y pálido que estoy y mi pelo negro todo desordenado.

Al mirar fijamente en mis ojos cafés puedo notar que mi confusión se ha convertido en ira y celos, no puedo creer que Alex se haya ido con Antonio a la primera que este se le insinúa.

-sabía que tanta perfección no podía ser para mí. –me digo en voz baja mientras busco en todo este desorden que ponerme.

Termino poniéndome una pantaloneta azul rey y un suéter blanco con caritas de Mickey.

-¡camilo, se te va a enfriar el almuerzo!

Salgo de mi habitación y mientras bajo las escaleras recuerdo a aquel chico misterioso, ¿tendrá algo que ver con que no me pasará nada en el choque?

-disculpa por subir así, es que tenía que hacer algo en mi habitación. –le digo a mama mientras tomo asiento y me dispongo a almorzar.

PVO ALEX

Toda la mañana Antonio me ha estado coqueteando y la verdad es que no es paraba que fuese tan lanzado, pero supongo que mi hermano no se equivocó con su predicción. Antonio es un chico muy simpático la verdad, pero no tanto como camilo ese chico es… como resumirlo dependiendo a mis gustos… perfecto todo lo que pude apreciar de el en toda la mañana fue perfecto así de simple; pero no puedo desviarme de mi misión, por lo que fijarme en camilo no es opción o por lo menos no por ahora.

Voy en mi auto rumbo a la casa de Antonio, él está a mi lado muy emocionado, ¿Qué cómo lo sé?, pues él no lo disimula para nada y con toda razón está por obtener lo que estuvo provocando toda la mañana.

Parqueo el auto frente a su casa, pero la entrada de esta está a una cierta distancia por la cual llegaríamos empapados por la lluvia a la casa.

-¿por casualidad no traes algún paraguas o algo con lo que podamos taparnos? –pregunta este.

-creo que si déjame buscar. –me paso para el asiento de atrás y sin que él se dé cuenta. –esta lluvia quiero evitar, que un paraguas aparezca en mis manos. –sencillo.

-¿entonces si encontraste uno?

-si aquí esta, bajemos.

Al entran en la casa dejo el paraguas a un lado de la puerta y Antonio me ofrece de beber, le digo que con agua está bien y sale a buscarla; mientras yo le echó un vistazo a la casa que la verdad si es bonita y acogedora.

Antonio aparece detrás de mí y me entrega el vaso con agua, toma mi mano y me lleva a lo que yo creo es su habitación. Al entrar me quita el vaso de las manos y lo pone en una mesita, tiro mi mochila al suelo y el me empuja y me tira boca arriba en su cama.

-disfruta el show. –dice y me guiña el ojo.

Comienza hacer un pequeño baile sensual de caderas mientras poco a poco se va quitando el suéter. Yo por mi parte he empezado a sobarme el pene por encima de los pantalones cuando Antonio me da un latigazo en las manos con el suéter.

-solo yo puedo tocarte. –continua con su baile.

Se da la vuelta y comienza a mover su culo de una manera que hace que el no tocarme sea una tortura, poco a poco se va bajando los pantalones y para mi sorpresa lleva puesto un suspensorio que hace ver su culo aún más provocativo por lo que inconscientemente llevo mis manos a mi pene otra vez y tz otro latigazo, pero esta vez con su pantalón, con su dedo me hace señal de que no lo haga.

Se monta en la cama en forma de perrito y al llegar a mi boca me da un beso un poco salvaje, con su culo comienza a sobar mi pene por en sima de mi pantalón “de verdad que me está haciendo sufrir con este jueguito”, termina el beso y procede a quitarme el suéter, baja hasta mis pezones y comienza a devorarlos, de mi boca solo salen gemidos ahogados por mi puño que comienzo a morderlos para no hacer ruido.

Con sus manos me desabrocha el pantalón y mientras va bajando dándome besos por mis pectorales al mismo tiempo va bajándome los pantalones, termina de quitarme los pantalones y acerca su cara a mi pene que ya quiere salir de su encierro, comienza a dar lametones por sobre el bóxer, ya estaba llegando a mi limite y de verdad que se iba a enterar lo que es un macho de verdad; lentamente fue bajando mi bóxer, cuando sobrepaso mi pene este salió de un brinco, Antonio termino de quitármelo y comenzó a devorar mi pene “ufff que bien lo chupa” yo ya no pude controlarme más y le agarre de la cabeza y comienzo a cogerme de manera descontrolada la bica de Antonio este intenta apartar su cabeza pero no lo dejo, ya a estas alturas mis gemidos ya suenan por toda la habitación.

Le doy un respiro pero no por mucho, lo tomo y lo pongo en cuatro sobre la cama, este al sentir mi lengua en su agujero arquea un más la espalda levantando todo lo que puede su culo yo le de devoro el culo como un depredador a su presa; los gemidos de Antonio me estaban poniendo aún más arrecho porque me incorpore y comencé a pasar la punta de mi pene sobre su agujero este solo gritaba que lo penetrara y le rompiera el culo, no me hice esperar y de una sola se la metí hasta la mitad este pego un grito que sin duda los vecinos debieron de oír, pero aun así pedía más por lo que termine de metérsela entera y comencé a embestirlo salvajemente.

Antonio, gemía tan fuerte que para mí eso era todo lo que necesitaba para seguir dándole aún más fuerte “esto es lo que querías zorrita, que te partiera en dos”, “como me como el pene tu culo putito”, eran unas de las frases que le gritaba estaba llegando al clímax y mis embestidas ya se estaban pareciendo a las de un taladro cuando comienzo a soltar toda la corrida en su culo “uff que rico preñarte”.

Al terminar me cuesto a su lado y él se acuesta sobre mi pecho y comienza a besarme un poco más suave que la primera vez pro aun ay un toque de erotismo en ese beso.

-calma que esto apenas está comenzando. –le digo y le doy una nalgada.

PVO CAMILO

Por fin he terminado de arreglar todo el desorden que tenía en mi habitación, ya son casi las 6 de la tarde me acuesto un rato en mi cama y reviso mis redes sociales cuando Antonio escribe en el grupo preguntando si estamos, Belinda y yo respondemos que sí.

[ chicos acabo de estar con el mejor empotrador del mundo ] *Antonio

[ a ver Antonio con quien te revolcaste ahora ] *Belinda

[ con nada más ni nada menos que con… ] *Antonio

[ habla ya ] *camilo

[ con Alex] *Antonio

Sentí una pequeña punzada en mi corazón, no podía creer que Antonio cayera así de fácil; apague mi celular, tome mi chaqueta, mis zapatos y Salí a toda velocidad de la casa, necesito tomar aire y pensar bien como tratar con Alex después de enterarme de lo que hizo con Antonio.

Me detengo en un parque que está a 4 cuadras de mi casa me siento en un banco y de mis ojos comienzan a salir las primeras lágrimas, cuando siento que alguien me toca el hombre y toma asiento a mi lado en la banca.

CONTINUARA………