Me convertí en lesbi ya casada

Me convertí en lesbi ya casada

Me llamo Vanesa tengo 32 años y estoy casada con Pablo desde hace un poco mas de tres años, un amigo del que era mi chico de toda la vida y con el que suponía me casaría, pero como el muy...... me dejo por una de mis mejores amigas, me decidí a casarme con él, por despecho y porque no había nadie mas a mano ni tenia ganas de esperar por otro.

Como suele pasar en estos casos, mi matrimonio era una farsa y nuestras relaciones iban sin fu ni fa, tampoco contribuyó mucho él, ya que era un poco muermo, incluso en la cama y encima de educación católica practicante, bueno de los que siguen yendo a misa los domingos y festivos, yo desde luego no le acompaño

Llevo casi dos años en el trabajo actual y de casualidad empecé a congeniar con Raquel en el comedor de la empresa durante los almuerzos, al coincidir a menudo en la zona fumadores lo que hizo que al final termináramos intimando poco a poco.

Ella es bastante bonita, con unos ojos preciosos, buena figura estilizada y buenas tetas enseñando frecuentemente escotes generosos, yo suelo ir normal y pocas veces provocativa por lo menos a mí así me lo parece, aunque para mi marido voy un poco provo para ir al curre, lo que voy a contaros me sucedió el año pasado.

En uno de nuestros almuerzos diarios allá por el mes de mayo Raquel me propuso que podíamos quedar con ella y su marido algún fin semana, me pareció buena idea ya que apenas salíamos ya con nuestra panda, y quedamos el sábado en su casa que iban a cenar con varios parejas de amigos, Ellos viven fuera Madrid en chalet de los padres de él, nosotros vivimos en Madrid en un piso alquilado.

Sin dificultad convencí a mi marido y fuimos a su casa. Los amigos resultaron ser muy simpáticos y consiguieron que enseguida nos integráramos con ellos. Después de cenar y con bastantes copas todos, Raquel me pregunto en la cocina que me parecía si jugábamos todos a la botella, un juego un poco erótico ya que veía el ambiente era muy adecuado, y tenia razón me llamo la atención que sus amigos eran un poco atrevidos en sus bromas y comentarios, continuando que ellos ya habían jugado otras veces, iba a proponerlo y si no queríamos jugar nosotros no pasaba nada, podíamos estar de mirones

Me fui a consultárselo a mi marido y decidimos jugar nosotros también, pero poniendo como limite nada de hacer cosas subidas de tono y nos iríamos si la cosa sé fuera de madre, tuve que aceptar de Raquel que por lo menos si nos quitaríamos alguna prenda pero sin desnudarnos.

El juego empezó por unos derroteros graciosos y se nos iba haciendo divertido con las ocurrencias de unos y otras, transcurrió el tiempo y las otras parejas se iban quitando prendas o dándose besos o caricias por encima de la ropa según lo que pidiese el que manejaba la botella en cada turno, esto ultimo era lo que hacíamos nosotros.

Al cabo de un buen rato ya estaba Raquel en tetas con total indiferencia y yo expectante a que mi marido dijera que nos fuéramos de inmediato, pero le veía que tenia los ojos clavados en esas tetas que no estaban nada mal y seguro que esperando que en la próxima tirada se quedase en tanga o que alguna de las otras amigas enseñaran las tetas, pero como seguía sin decir nada allí permanecíamos.

El juego siguió avanzando con mas copas, y ya estaban las tres chicas en tetas y dos de los chicos en boxer, nosotros, que ridículo, aparte de descalzos que descaro, estábamos; mi marido sin camisa solo con pantalón y yo en sujetador pero con mi faldita y según me anticipo él, era lo máximo a lo que llegaríamos, entonces Raquel propuso para seguir el juego y como posteriormente me dijo, para que pudiésemos quedarnos un rato mas, que las siguientes veces sé podría elegir, entre quitarse otra prenda, o meterse en la casa durante cinco minutos con quien le tocase tirar la botella y que pasera lo que quisieran ellos. Mi marido me miro asintiendo con la cabeza y nos quedamos a seguir el juego, seguro que tenia otras intenciones.

Lógicamente él seguía encantado con la visión que le ofrecían las chicas, y después de varias tiradas y no pasar gran cosa, le toco girar la botella a Raquel, que estaba espectacular solo con tanga que resaltaba su figura muy bonita, la botella después de girar se quedo apuntándome a mí, yo estaba tan totalmente metida en el juego que me disponía a quitarme el sujetador cuando al mirar a mi marido observe como con su cara me indicaba que no me quitara nada más, así que me fui al interior de la casa con ella, no esperando que pasara nada.

Una vez dentro me cogió de la mano llevándome hacia el pasillo desde donde no podían vernos, para una vez allí decirme "cierra los ojos" y acercando su boca a la mía comenzó a besarme mientras me subía el sujetador por encima de las tetas y empezó a acariciarme los pezones, estuvo todo el tiempo así, yo sin saber que hacer ni resistirme aunque notaba que me estaba gustando y seguro que mojándome, cuando termino me dijo "eres preciosa y deseaba besar tus labios", me dijo "no te habrá molestado", la conteste "no claro que no es un juego". cuando volvimos hubo comentarios de que habéis hecho, lo habéis pasado bien eh, Raquel contestó "a ti te lo vamos a decir", mi marido después de dos rondas mas y ver que no se desnudaba ninguna chica mas al haber entrado en las dos ocasiones a casa, decidió que estaba ya bien y diciendo que estaba cansado nos debíamos ir y dejándolos en el punto mas emocionante del juego, nos fuimos después de despedirnos hasta la próxima, me quede con la duda de que hubiese decidido mi marido si me hubiese apuntado la botella girándola uno de los chicos

Esa noche y ya en nuestra casa, mi marido y yo follamos como hacia muchísimo tiempo no lo hacíamos y en nuestro momento de máximo descontrol le sonsaque que se quiso quedar mas tiempo para seguir viendo las tetas y si tenia suerte ver a alguna de las chicas sin tanga, me confeso que estaban buenísimas y le excitaron bastante, lógicamente quiso saber que hicimos las dos dentro y le dije que disimular un rato. Él me follaba pensando en las tetas que vio y yo le follaba recordando los besos y caricias de Raquel

El domingo me llamo Raquel para preguntarme que nos pareció y como le sentó a mi marido el jueguecito, se dio cuenta que estaba en la cama medio dormida y la dije que él se iba a misa de doce y no regresaba hasta eso de las dos todos los domingos, "eres una holgazana todavía en la cama" "pues si y ahora es cuando estoy mas a gusto toda para mi y puedo estirarme sin problemas", me pregunto si me había gustado lo que me hizo en principio no la conteste y prosiguió preguntándome si me había molestado o enojado con ella, la conteste que no estaba enfadada y que bueno no había besado nunca a una chica como ella me beso, ella no se contento y siguió "pero no me negaras que las caricias en tus pezones no te pusieron un poco digamos revoltosas"..

Me encontraba un poco incomoda y a la vez atrevida en la conversación quizás por la intimidad del teléfono, y sin darme cuenta me sincere al reconocerla que si que son uno de mis puntos débiles y enseguida me ponen a tono, "y que otros puntos tienes para conocerte mejor" insistió, "bueno pues el cuello, y la nuca, y la parte de abajo", por no decir mi rajita "te refieres al puntito o dentro de tu rajita", no dejaba el tema y me veía obligada a seguir con su tema "al puntito" la conteste, "o sea que te masturbas por ahí", salte contestando "yo no he dicho eso", "claro que no, pero si es una de tus zonas seguro que cuando lo haces te tocas el puntito, yo desde luego lo hago así".

Me dejo un poco cortada su franqueza sobre algo que nunca había hablado con nadie, y siguió hablando "no os importaría salir con nosotros de vez en cuando, ¿no?", "no hay motivos por lo que no lo hagamos" la dije, "es que después de iros quedamos en ir al cine el próximo sábado, cenaríamos o picaríamos por ahí y luego nos meteríamos a ver una de las pelis de los oscar", "vale" la conteste, "en la semana quedamos"

Aproveche para preguntar "al final como termino el juego", en vez de contestarme me pregunto "y tu como te imaginas que acabo", "pues supongo que todos desnudos o no", la dije por decir algo "bueno casi casi, todos decidieron, según les iba tocando el turno meterse dentro los cinco minutos y ahí te puedes imaginar lo que quieras, solo acabamos desnudo mi marido y yo, no es la primera vez que nos ven así, no se si te dije que solemos practicar el nudismo " antes de despedirse me dijo "por cierto tienes unas tetas estupendas y me encanto tocarte y acariciarte los pezones", "y a mi también y las tuyas se ven estupendas", la conteste intentando cortar la comunicación pero todavía me soltó la ultima frase "pues lo repetiremos y podrás tocar las mías ¿vale?", la dije "me encantara", la conteste

Según termine de hablar me di cuenta de lo atrevida que me volvió la conversación al ofrecerme a que repitiera sus caricias en mis pezones y en sus tetas e instintivamente metí mis manos dentro del pantalón de pijama y note que de nuevo me había excitado y estaba mojada, como no uso braguitas para dormir empecé a tocarme y acariciarme masturbándome recordando toda nuestra conversación y alegrándome de haberla dado carrete para que siguiéramos, llegando a correrme mientras imaginaba que Raquel me estaba besando y tocando.

Durante la semana no deje de pensar en ella y ansiaba el momento del almuerzo para verla y estar con ella, con tan mala suerte que no pudimos almorzar a solas.

El sábado fuimos como quedamos al cine, se encargo de que nos pusiéramos todas las chicas juntas, ella junto a mi claro, y los chicos al otro lado, en cuanto empezó la película, sentí su mano sobre mi pierna buscando la raja de la falda que en cuanto la encontró deslizo su mano sobre mis piernas, la subió acariciándome hasta que llego al tanga, abrí mis piernas para favorecer sus caricias, se entretuvo un buen rato pasando sus dedos por encima y hundiéndolos por la rajita, yo que seguía sin decir ni una palabra notaba que ya estaba súper mojada al sentirme muy excitada con esa mano acariciándome y tocándome, no se contento con tocarme por encima del tanga y separándolo introdujo sus dedos en mi rajita, tocándome totalmente a su antojo, me tenia totalmente a su merced, llevaríamos mas de media hora de película y yo solo estaba pendiente de que no nos vieran y de disfrutar de lo que me estaba haciendo, me susurro que tenia muchos vellos que no la dejaba tocarme bien, la verdad me tocaba de maravilla.

Me tenia tan fuera de control que la acompañaba en sus caricias con movimientos de mis piernas abriéndose y cerrándose mientras mi mano derecha me pellizcaba el pezón por dentro de la blusa y del sujetador que termine por levantármelo para mayor facilidad, sin importarme si me veían, nunca me habían tocado de esa manera y menos una chica por lo que estaba súper excitada, me llevo a varios orgasmos y al finalizar acercándose a mi oído, me pidió que antes de irnos la diera el tanga que lo quería de recuerdo.

Cuando termine de correrme solo sirvió para que ella descansase de sus caricias ya que no quito la mano de entre mis piernas que yo tenia bien juntas saboreando aun lo que había disfrutado, al cabo de un buen rato empezó de nuevo a tocarme y de nuevo mis movimientos me ayudaban a gozar aun más sus toqueteos, llevándome a otros orgasmos que cuando los rememore en la cama por la noche hicieron que me corriera como una colegiala quinceañera.

Me quito la mano justo un poco antes de terminar la película, llevándosela a su cara diciéndome que la encantaba mi olor, para recordarme a continuación lo que la debía, según salíamos me fui a los servicios a quitarme el tanga que estaba empapadísimo y con disimulo se lo di ya en la calle

Tuve que decir que no me gusto la peli y que me quede dormida durante una buena parte

El domingo por la mañana, me desperté mas temprano de lo que es habitual en mi, deseando recibir su llamada mientras recordaba todo lo que me hizo en el cine y mi corrida nocturna que mi pantalón delataba al estar aun mojado y que tuve que hacerme al estar súper excitada solo de recordar todo. Tenia ganas que se fuese mi marido a su misa y esperar su llamada.

Me llamo un poco mas de las doce sabiendo que estaba ya sola, y me pregunto si lo pase bien en el cine, "sabes que así fue o no lo notaste", fue lo que la conteste, " bueno lo quería escuchar de tu boca", "eres muy atrevida nos podían haber visto", la reproche "no podía dejar pasar la ocasión de tenerte a mi lado a oscuras y con las ganas que tenia de tocarte viendo esa raja provocadora de tu falda no podía aguantarme, no me dirás que no te gusto ¿verdad? Y además la primera vez ¿no?".

Me excitaba según seguía hablando, "claro que me gusto y si ha sido la primera vez, tanto me gusto que esta noche me he corrido solo en recordarlo" seguía excitándome y me atrevía a contarla todo "si tantas ganas tenias podías haber follado a tu marido" No me esperaba esa respuesta y la conteste "lo siento pero ese placer solo me lo has dado tu, con él es solo un mete saca y no disfruto nada" ella me apuntillo "pues no será la ultima vez que lo hagamos, estas dispuesta" sin pensar la dije "siempre y cuando quieras", "pues tengo una sorpresa para ti te mando una foto al móvil".

Cortamos la comunicación y al momento, recibí un mensaje con dos fotos, una foto suya desnuda solo con mi tanga para que viese lo bien que la sentaba, y otra sin tanga mostrándome su rajita totalmente depilada añadiendo un texto que decía "así no molesta para que me acaricien" cuando las vi me excite muchísimo mas me fui directa a la ducha y me recorte los vellos que decía la molestaban y la mande una foto con mi rajita recortada, bueno casi depilada ya que me pase rasurándome con la cuchilla, diciéndola "espero tengas fácil acceso la próxima vez", e inmediatamente me llamo y me dijo "ahora si que se ve preciosa y eres una provocadora, pero tengo que comprobar si también eres obediente", "ponme a prueba y lo sabrás" la conteste dentro de lo excitada que me tenia.

"Venga como estas en el cuarto de baño quiero te masturbes en la ducha" la pregunte "¿cómo en la ducha?", ya que no entendí a que se refería. Me contesto "mira te metes desnuda, como supongo estas ahora, en la ducha, gradúas el agua caliente que no te queme, y el chorro si puedes, te abres los labios con la mano izquierda dejando tu puntito para recibir el chorro del agua, que vas a dirigir hacia él con la otra mano y muévelo como mas te guste, cierra los ojos y piensa que te estoy acariciando por tu cuerpo desnudo, por tus tetas, tus pezones, tu rajita y te aseguro te correrás, disfrútalo pensando en mi. Cuando termines llámame y me lo cuentas". "Así lo haré" la conteste y me dispuse a ello.

Hice todo lo que me dijo y alcance no uno sino varios orgasmos maravillosos y sin necesidad de tocarme, fueron muy placenteros y me alegre muchísimo de descubrir esa nueva forma de alcanzar mi placer y siempre podría hacerlo aprovechando las duchas.

La llame y la dije como fue y lo que había disfrutado, "esta visto que eres una chica obediente y podré ordenarte mas cosas ¿verdad?", la conteste "lo que quieras cariño me tienes totalmente loca"

En la siguiente semana no desaprovecho oportunidad y empezó a ordenarme cosas provocadoras y sugerentes que a mí me excitaba y deseaba realizar para ella, me había colgado de ella. y así antes de coincidir a almorzar me llamaba y después de preguntarme como iba vestida me ordenaba que me desabrochase algún botón mas de la blusa o que me quitara el sujetador o que provocase a algún chico según estábamos sentadas al no cerrar las piernas y dejarlas entreabiertas. Me mandaba relatos eróticos y después de leerlos me llamaba para comprobar si me habían puesto cachonda, para en varias ocasiones ordenarme me masturbara y al no poder hacerlo en la mesa me tenia que ir a los servicios donde incluso desde el móvil me iba provocando y excitando mientras me tocaba.

Un día en el almuerzo se paso de la raya, ya que me ordeno la diera mi tanga, que me había ordenado me quitara en los servicios, pero según estábamos sentadas y había dos compañeros en otra mesa me ordeno que cuando dejara caer su paquete de tabaco al suelo me agachara y me abriera disimuladamente de piernas y claro deje que me vieran sin ropa interior.

Mas tarde uno de los chicos se acerco a mí diciéndome "tienes una ropa interior transparente de lo más bonita que he visto nunca", le conteste de forma arisca "no sé que me hablas", lo pase fatal y cuando se lo conté a ella solo dijo "eres una chica muy obediente y sumisa y me perteneces o ¿no?", la dije que era totalmente suya, me replico "pues entonces no hay porque preocuparse", luego me propuso que al salir del trabajo me fuese con ella de compras

Fuimos a unos grandes almacenes a la sección de ropa y después de coger varias prendas según nos pillaba de paso a los probadores, pase yo primero y sin dar tiempo a nada, ella cerro la puerta soltó la ropa que se suponía iba a probarse, y aun cuando estaba yo mirando al espejo me cogió por detrás y acerco su boca a mi cuello separando mi pelo para empezar a chupar mientras sus manos recorrían mi cuerpo por encima de mi ropa, yo con mi mano izquierda recogí mi melena para que pudiese seguir y no la molestasen mis pelos, me puso a mil enseguida notándolo de inmediato, solo la decía "sigue así te quiero", por primera vez se lo decía estando juntas, bajo su mano por mi minifalda hasta las piernas para después subirlas sin dejar de acariciarme hasta llegar a mi pubis donde al no tener tanga se dedico a acariciarme mi rajita comprobando que estaba súper mojada, tenia sus dos manos en mi rajita acariciándome y tocándome por toda ella, quería que me tocase el puntito, lo deseaba, pero me dio la vuelta y me hizo sentarme en el banco del probador se inclino hacia mi y colocándose mis piernas sobre su hombro acerco su boca a mi rajita donde empezó a chupar y lamer me llevo a un orgasmo maravilloso que no quería que acabase nunca y por primera vez me lo comió, fue maravilloso.

Luego se bajo sus pantalones se quito el tanga y poniéndose en el banco me dijo "ahora quiero que me lo comas tu", la obedecí y me puse de rodillas y observe una rajita totalmente depilada con unos sugerentes labios que no ocultaban un puntito que me dispuse a chupar, con todas mis ganas para que ella alcanzase un orgasmo salvaje como así sucedió

Cuando salimos la susurre en el oído "eres maravillosa y me tienes tan loquita que sabes puedes hacer conmigo lo que quieras", me dio un beso en la mejilla diciéndome "me gustas mucho y vamos a ser muy, pero que muy buenas amantes", me dejo sin saber que decir pero era lo que estábamos siendo

Esa noche me la pase totalmente en vela, pensando por una parte hasta donde habíamos llegado sorprendida de haberme dejado comer y chupar mi rajita y también de hacérselo a otra mujer cosa que nunca había pensado podría pasarme, y por otra parte rememorando todo lo que hicimos en los probadores y como goce con ello. Ni que decir tiene que esos recuerdos me pusieron excitada y termine apagando mis ganas tocándome por dentro del pijama mientras mi marido roncaba a su aire.

Me encantaba mi nueva situación a pesar que a veces me venían síndromes de culpabilidad y consideraba que me estaba convirtiendo en una viciosa

Ya estábamos en el mes de junio cuando me propuso que fuésemos a su chalet a cenar con los amigos y a jugar a algo un poco atrevido en la piscina, la pregunte "¿no se molestara mi marido?" Contestándome "y eso a quien le importa, mientras tu y yo lo pasemos bien". Me dejo intrigada con lo que tendrían pensado pero con ganas de saber que tenia en mente, íbamos a ser las mismas cuatro parejas de las otras veces y me dispuse a utilizar todas mis artes para conseguir que mi marido no rechazase la invitación.

No pudimos ir al mediodía a comer con ellos y cuando llegamos por la tarde, ya estaban las tres chicas en tetas, mi marido supercontento con el panorama.

Después de saludarlos nos fuimos a cambiar, Raquel me acompaño y me hizo ir a su dormitorio a ponerme el bañador, aunque viendo lo que llevaban ellas en cuanto que me lo vio sacar de la bolsa, me dijo "no se te ocurrirá ponerte eso, ven te daré un bikini mío, pero solo las braguitas eh, quiero que luzcas tus tetas para mi, y bueno también para mi marido tiene derecho a vértelas, ya le he dicho lo apetecible que están", me hizo desnudar delante suya y me dio unas braguitas que menos mal no eran tipo tanga, si aparezco con tanga mi marido le da algo, aparecer en tetas ya le sorprendería.

Antes de ponérmelas me tumbo en su cama y quitándose su bikini tanga se echo sobre mí diciéndome "no puedo esperar más, necesito que me comas", puso su rajita sobre mi cara mientras su boca estaba en mi rajita nos comimos las dos y tuvimos unos orgasmos que no se como no nos escucharon, mientras mi marido desde el pasillo decía algo como que me esperaba fuera.

En cuanto aparecimos en el jardín tuve que aguantar algunos comentarios de mis tetas en plan bien, en fin gustaron a todos, bueno menos de mi marido que sin decir nada veía que me desaprobaba mi atrevimiento, pero haciendo caso a Raquel no le preste atención

Estuvimos bañándonos todos en la piscina y jugando con un balón, lo cual vino de maravilla para que todos y todas me sobaran las tetas y alguno el culo de forma mas que disimulada. Mi marido también se lo paso en grande por la forma en que reía y se zambullía en el agua.

Como me adelanto Raquel, después de cenar ya muy bebidos, su marido propuso jugar a un juego que lo llamo encuentros fugaces, consistía en situarse cuatro de nosotros dentro de la piscina en las esquinas y los otros cuatro se situaban en el centro a continuación se apagaban las luces durante un rato y cada uno del centro iba al de la esquina que quisiera y se quedaba allí el que primero llegase, haciendo lo que quisieran a los fijos cuanto antes llegasen mas tiempo tenían para ello, estos podían decir que es lo que no que querían que les hiciesen, después se encendían las luces volvían al centro y al apagarlas de nuevo, tenían que nadar a las esquinas.

Mi marido no puso objeción y echaron a suertes quienes iban a las esquinas y nos toco a nosotros y a otra pareja

Acercaron un farol a la piscina y apagaron todas las luces de la casa, habían puesto un programador para control automático del encendido y apagado.

La primera vez que se apago la luz, Raquel se apaño por estar mas cerca de mi esquina y así fue como llego ella a mí y como me podía imaginar y estaba deseando me hizo de todo, desde besarme hasta tocarme las tetas, la rajita incluso me bajo el tanga y estuvo un rato con su boca por mi rajita para continuar con sus dedos, con las ganas que tenia no la fue nada difícil llevarme enseguida a mas de un orgasmo mientras oía risas de los demás y si al principio temía que al encender la luz mi marido nos viese, luego dejo de preocuparme y me deje llevar en lo que me estaban haciendo.

Cuándo se encendió la luz se fueron nadando al centro y no me di cuenta de que habría pasado con mi marido, intentaba apreciar en su cara que podía detectar pero de nuevo se apago la luz, y ahora vino hacia mi uno de los chicos que resulto ser el marido de Raquel que me pregunto "¿tienes limitaciones?"

No entendí a que se refería pero enseguida reaccione y le dije "nada de follarme por ningún sitio" sin cortarse un pelo y mientras me besaba me bajo el tanga para decirme "como has tenido a Raquel seguro estarás mojadísima y vamos a ver como entra mi cosa por ahí", insistí que no estaba permitido follar "solo quiero ver como se mete en tu rajita mojada ¿vale?" y apoyándose en mi me la hinco dentro con total facilidad sin haberme dado tiempo a rechazarle, le dije "ya esta sácala ya", la saco y diciéndome "desde luego Raquel te ha dejado muy a punto, sabes que me apetece que te agaches a chuparmela que creo te debe gustar ya que no lo has prohibido" y empujándome de la cabeza me aproximo a su pene que me metí en la boca hasta que necesite salir a la superficie, como seguíamos a oscuras decidí cogersela y masturbarle para no chuparsela de nuevo, pero esta vez la luz me pareció se encendió antes y no dio tiempo a correrse, antes de irse me dijo "buena chica entiendo como la gustas a Raquel"

No hubo tiempo a mas ya que mi marido dijo que no seguía y salimos todos del agua, lo que sí vi es que esta vez le había tocado Raquel, por lo que aproveche un rato para irme corriendo con ella a que me contase que le había hecho, según lo que me dijo cuando se aproximo a él, se le echo encima besándolo sin que la rechazara, noto que su pene estaba flácido y después de restregarse contra él bajo su mano para cogerselo notando como si se hubiese corrido, se decidió a chuparsela para ponérselo a tono y casi consigue empinársela bien entre chupadas y la mano, pero la luz se encendió y no pudo seguir, lo peor es que antes que ella había estado otro de los chicos que al parecer no se corta un pelo y seguro que le trajino algo

Esa noche no tuvo ganas de hacer el amor conmigo y solo me dijo "no saldremos mas con ellos", le conteste "serás tu, porque yo no sé porque no" "porque son unos degenerados" le replique, "¿ah sí?, quien los chicos o las chicas, porque si te hacen cosas las chicas perfecto eh", muy enojado me contesto "no hay mas que hablar "

El domingo llamo Raquel confirmándome que a mi marido la primera vez le toco uno de los chicos que le hace a todo y según su chica la contó, según se acerco a él y no poner limitaciones, le beso en la boca para al mismo tiempo bajarle el bañador y después de pajearle con su mano y ponérsela dura sin rechistar nada, le hizo darse la vuelta, a lo cual no puso objeción y cogiendole desde atrás empezó a masturbarle en esa postura mientras restregaba su bañador en su culo mi marido movía sus glúteos al vaivén de los movimientos que le hacían como si le estuvieran follando terminando corriéndose. Al parecer tuvo que gustarle porque solo hizo gemir y no de dolor precisamente ya que ni se la metieron.

Ahora entendía porque no quería salir mas con ellos. Raquel me pregunto que me había parecido lo que le paso, la dije "me ha puesto cachonda y como tu dijiste a quien le importa" "como de cachonda estas" me pregunto "mucho" insistió "como de mucho compruébalo" entendiendo lo que quería la dije "espera que meta unos dedos en mi rajita y te lo diga,.. hum esta súper mojada y estoy restregándome el puntito", " sigue así piensa en lo que te hice en la piscina y en el pene de mi marido dentro de ti, te gusto" "si claro que me gusto" ella prosiguió "entonces porque no le dejaste que te follara", "no lo sé por el juego, estoy cachondisima", "pues quiero te metas los dedos en tu boca que te oiga chupar tus jugos" me metí los dedos e hice que escuchara como los chupaba, estaba con unas ganas enormes de que me mandara cosas y la dije "que mas quiere mi ama que haga" "sigue acariciándote hasta que te diga, y esta tarde quiero que vengas a mi casa sola para montárnoslo con mi marido ¿vale?" me tenia súper excitada y fuera de control y la dije "si iré, a que hora me queréis follar los dos, que delicia te deseo, estoy reteniendo para no correrme todavía " ella seguía provocándome y diciéndome que me presentase en su casa provocadora y sin ropa interior, a todo la decía que si, tuve un orgasmo maravilloso que mientras reposaba de el, ella me recordaba que me esperaban por la tarde

Como estábamos enfadados y por tanto ni nos hablábamos, deje a mi marido en el salón viendo la tele y me fui a casa de Raquel, llevaba una camiseta blanca de tirantas y una mini de impresión, la mas cortita que tenia y que ya no me atrevía ni a ponerme. En la esquina antes de su calle me quite el tanga y cuando llame a la puerta Raquel me cogió de la mano hacia dentro y según me besaba sus manos tocaban mis pezones como ella sabia, poniéndome ya tan cachonda que se me olvido los reparos de ir a verles, que en algún que otro momento del día aparecieron. Lo pase de maravilla y no recuerdo ningún día en mi vida que hubiese disfrutado tanto del sexo como me hicieron gozar. Me hicieron descubrir muchísimas formas de gozar que nunca había hecho.

Nunca comentamos lo que paso ese día y mi marido cambio su actitud con respecto a mí al apenas hacer ningún acercamiento.

Mi matrimonio siguió su declive total, al que puso su puntilla el mes de agosto, estuvimos solos en el apartamento de la playa de mis suegros y nuestra falta de comunicación y las pocas ganas que yo tenia de tenerle encima, hicieron que apenas tuviésemos nada en común y sintiendo una total frialdad. Me pase todo el mes echando de menos a Raquel y disfrutando de sus llamadas que deseaba a cualquier hora y sobretodo si me ponía cachonda con sus conversación y ordenes, gracias a ella disfrute de los únicos orgasmos maravillosos y que necesitaba a todas luces aunque fueran masturbándome.

Terminamos separándonos a finales de septiembre y hasta que me mude a un apartamento de alquiler, atendiendo a su invitación, estuve con ella y su marido viviendo en el chalet, pasando unos meses deliciosos siendo su dócil y obediente sumisa.

Actualmente vivo sola aunque de vez en cuando quedo con ellos para pasármelo bien, aunque tengo una nueva amiga que ha conseguido enamorarme.