Mater amatísima II
Continua la historia con mamá
.......Después de aquello todo cambio. Yo seguía queriendo a mi madre. Pero nuestra relación nunca volvio a ser la misma. Al fin y al cabo me había hecho una paja con sus maternales manos y ¡ Que paja ¡
Ella intento distanciarse mas de mi. Prácticamente ni me hablaba y por las noches no se sentaba a mi lado en el sofá.
Yo por mi parte cada vez estaba mas cachondo y sabia que notaba mis miradas lujuriosas sobre su cuerpo. Si intentaba hablar con ella de lo sucedido me cortaba diciendo: nunca más , nunca más
Pero yo espere paciente mi oportunidad.
Los viernes solían ser buen día. Mis padre salían de cena con sus amigos y seguro que mamá con alguna copa de más estaría mas desinhibida.
Les espíe, pensando que tendrían sexo. Pero por lo que oí mi padre empezó a roncar a los pocos minutos. ¿ Como podía hacer eso ?. Yo con una hembra como mamá me la estaría follando toda lo noche.
Como a las 2 de la madrugado oí abrirse la puerta de su dormitorio. Me levante y fui al baño esperando que fuera mi madre, abrí muy despacio la puerta y.... bingo. Estaba sentada en el retrete. Parecía muy adormilada y creo que ni se percato de mi presencia.
Con mi aparato en la mano me acerque a ella y se la puse a la altura de la cara
Abrió los ojos como platos al percatarse de semejante polla ante sus narices
-Mamá me puedes volver a ayudar – Le dije
- Guarro, aparta- contesto empujandome
Se levanto , no antes sin limpiarse sus partes intimas, y apoyándose en el lavabo rompió a llorar.
No pude evitar tener remordimiento. Y acercándome por detrás la abrace y le dije: - Lo siento mamá, no volverá a suceder
Su llanto se hizo mas leve y poco a poco empezé asentir el leve vaiven de su culo en mi polla, que muy educadamente se levanto eniesta entre sus nalgas. Mis manos que hasta ese momento estaban en sus hombros bajaron hasta sus hermosos pechos que acaricie sin ningún pudor. Notaba lo ergido de sus pezones bajo mi palma y apretaba y acariciaba esas enormes tetazas sin compasión.
Empecé a oir la respiración entrecortada de mi madre, y aproveche para con una mano subir lentamente su camisón, colocando mi ariete entre sus muslos. Notaba la humedad de su coño y con un leve movimiento por parte de mi progenitora mi pene se coló en su cálida cueva sin ninguna dificultad.
Ya con el camisón bien subido, la cogi por sus generosas caderas con ambas manos y la empecé a dar candela.
-Plof, plof, plof, plof, sonaban los envites de mi polla en su encharcado coño. Sus tetazas bailaban al ritmo de sus suspiros, atrapadas todavía en el camisón, las veía a través del espejo que teníamos en frente y un olor infinito a sexo invadió todo el baño.
Al ser yo mas alto que ella la postura era incomoda, y se la saque diciendo
-No puedo mas, me duelen las piernas.
-Anda siéntate en la taza, dijo mi madre
Se despojo entonces de su camisón y se quedo en pelotas delante de mí
Era la primera vez que la veía así. Vaya tetas , vaya coño y todo para mi, pensé. Estuve a punto de eyacular ante la visión
-Estas preciosa ,dije
-Calla, que te voy a follar, me dijo, sentádose sobre mi a horcajadas
Y vaya si me folló. Me monto como una loca. Sus tetas ahora votaban sobre mi cara y me aferré a su culo, para evitar que mi polla saliera de su abrigo.
- Me voy a correr, me voy a correr mamá, dije
Mi madre cogió uno de sus pechos y me lo metió en la boca
Siguió votando como una loca sobre mi rabo, hasta que explote inundándole todo el chocho. Note como ella también se corria , pues temblaba como un flan mientras me mojaba los huevos con sus flujo.
Después de unos segundos de abrazo amante, se levanto muy digna de su montura. Mi semen le caía por los muslos, se limpio, cogió su camisón del suelo y sin decir una palabra salió del baño.
Después de aquello, me la volví a follar en numerosas ocasiones. Pero evitando siempre la presencia de padre. Aunque tenia su morbo era muy arriesgado. Cuando estábamos solos y aunque al principio se resistía luego se corria como una guarra debajo de su hijo. Me la follaba en su cuarto, en el mío , en la cocina, cualquier sitio era bueno.
Nunca logre que me la chupara, decía que era una guarrada, pero lo que si consegui es darla por el culo en mas de una ocasión y aunque no le gustaba mucho yo disturba una barbaridad reventandola el ojete.
Con el paso de los años me case y me fui de casa. Ahora nuestra relación es mas ocasional, aunque de vez en cuando todavía me la follo ( o me folla ella a mí, según se mire )
FIN