Mateo y sus mujeres
Teniendo en casa a cuatro lascivas necesitadas y desatendidas mujeres Pagaba por tener sexo, hasta que me mostraron el camino correcto.................. En colaboración con Sandra1971, que fue quien me dio la idea y los datos iniciales.
Mi vida funcionaba como un reloj hasta este ultimo verano. Tengo 30 años y soy de un pueblo cercano a Mazarrón Murcia, apenas a 30 kilómetros y me dedico al cuidado de corderos en una de las muchas empresas de la zona, aunque la bucólica imagen del pastor, con el zurrón, el perro, la bota, el transistor, jornadas interminables y poco más ha desaparecido. Ahora somos empleados como en cualquier otra empresa, con horarios, turnos, calendarios y vacaciones, todo organizado para optimizar lo recursos.
Mi jornada normal era de lunes a viernes tres semanas y la cuarta, descansaba jueves y viernes para trabajar sábado y domingo, porque las corderos necesitan cuidados todos los días del año. Por lo general los días que libraba acudía a un local, donde nos conocemos todos y además de tomar unos tragos, después me iba con alguna de las chicas, que están allí para servir alguna copa y de paso animar a los clientes a tomar alguna más.
No era nada complicado, si podía porque estaba disponible, me inclinaba por una chica que se llama Luz, pero no tenia inconveniente en irme con ninguna de las otras, todas ellas muy limpias y sanas, pero a pesar de eso siempre empleaba condón, menos cuando Luz me hacia sexo oral, las demás hasta para eso exigían que lo llevara y no me molestaba nunca con ellas.
Me dieron una semana de vacaciones a principios de Julio, y las otras tres serian para finales de agosto, vivo solo pero comenté en casa de mis padres un día que fui a comer, que pasaría esa semana en la playa allí en Mazarrón yendo y viniendo, para las otras tres ya tenia mirado un hotel en Tenerife, me habían hablado muy bien tanto de la isla, como del hotel y de las zagalas que puedes encontrar allí, nada que ver con las chiquillas que encontré en Ibiza el verano anterior, que preferían un trago antes que un buen revolcón.
Mi hermana Flori tiene ahora 25 años, cinco menos que yo, y dijo que ella iba a estarse unos días en casa del tío Lucas, hermano de nuestro padre, ellos se irían unos días a Madrid porque se casaba una sobrina por parte de su mujer, y la prima Toñi le había comentado, que no le gustaría quedarse sola con lo que pasa a veces en las urbanizaciones, ellos viven en una un poco apartada, tienen piscina y mucho jardín, además de un pedazo de huerta que impide que nadie vea como se bañan, como esta en el paro, no tenia problemas para hacerle compañía unos días y quedamos que me pasaría.
Mi ultimo día de trabajo fue el viernes, pero hasta el lunes de la otra semana no regresaba, por lo que me esperaban nueve días de fiesta, la primera parada fue en casa a darme una buena ducha, de ahí fui a tiempo de encontrar a Luz libre y ya no la solté en toda la noche, hasta que salimos del local y nos fuimos a mi casa, muchas veces lo hacíamos, y así no había que pagar hotel que es donde acudía casi siempre con las demás, pero con ella era diferente, ya me tenia confianza y sabia que no le pasaría nada por estar en mi casa.
Por la mañana, la acompañe cerca de donde vive, después de dejarla recordé que Flori ya estaría en casa del tío Lucas, me dirigí hacia allá sin echar mucha cuenta en nada, al llegar tuve que tocar el timbre que oía como sonaba fuerte, detrás de la casa que es donde tienen la piscina, tardaron un poco en aparecer las dos, iban cubiertas con unas toallas y descalzas, la prima Toñi me beso en las mejillas y preguntó si había tomado algo o me apetecía desayunar, les mentí diciendo que había parado de camino y las seguí bordeando la casa hasta la piscina otra vez.
Por el camino iban dando saltitos las dos, y mis ojos no se apartaban de ese par de culos firmes, que con mucho gusto habría agarrado, pero eran de mi prima y hermana por lo que ni me lo planteé. Toñi preguntó si pensaba bañarme, asentí y sin más pregunto que a que esperaba para sacarme la ropa, entonces caí en la cuenta que no había traído bañador, cuando lo dije las dos se echaron a reír y dejaron caer las toallas al tiempo, debajo solo pude ver un par de cuerpos hermosos en pelota picada.
Mas que primas parecían hermanas, mirados fríamente cuando se intenta describir uno de los cuerpos, no se sabe bien a cual de las dos te refieres, una cabellera morena hasta media espalda, ojos negro azabache y enormes, un fino cuello que invitaba a ser besado y mordido, unos pechos redondos que parecían operados talla 95 al menos, coronados por oscuros y abultados pezones, aunque los de Toñi eran algo mayores, el vientre plano contrastaba con un culo firme y redondo, que pedía a gritos una palmada a modo de caricia, ambas iban totalmente depiladas y las piernas torneadas completaban un conjunto monumental de casi mi estatura, rondaban el 1.75.
Flori me dijo entonces, que como podía ver no había nadie que nos molestara, y para que ir a una playa nudista si teníamos un lugar para nosotros solos, sin que nadie nos estuviera mirando todo el rato, ella se sentía más cómoda así.
La prima Toñi es solo un año menor que yo, al mirarla a los ojos solo me sonrió, con un guiño bajo la mirada hacia mi paquete y preguntó.
Primo ¿Todo lo que hay ahí dentro es tuyo? Cuando te parezca ya te meterás en el agua, nosotras te esperamos ahí dentro, tenemos cosas que hacer.
Sin esperar respuesta por mi parte, se metieron en el agua y comenzaron a morrearse como pocas veces había hecho yo mismo, vi como mi hermana entornaba los ojos, mientras que sus manos se perdían bajo el agua, me pareció que muy cerca entre las dos, como me quede embobado mirándolas, al darse cuanta me echaron agua, mientras Flori me decía que me metiera, insistiendo en que era mejor dentro y calentitos todos, que fuera y haciendo de mirón.
No me lo pensé mucho, aunque no sabía por donde saldría todo eso, pero estaba claro que estaba haciendo realmente el tonto, esas dos mujeres con semejantes cuerpos no merecían tal desprecio y al parecer ellas pensaban lo mismo que yo. Me saque la camisa y comenzaron a reír desde el agua, mientras me jaleaban para que terminara pronto de desnudarme, cuando me baje los pantalones y apareció la polla más que tiesa, dejaron de reír las dos aunque no tengo nada del otro mundo, según Luz, un día que estábamos algo bebidos se empeño en medírmela, hacia unos 20 Cm de largo por 16 de perímetro en medio según ella, aunque no lo puedo asegurar porque la midió con una cinta de costurera, pero entre mis compañeros he visto algunas trancas que asustan de verdad.
Al entrar en el agua la note calentita, estábamos a principios de julio pero había hecho ya bastante calor durante todo el mes de junio, además estaba recalentado con aquel par de lobas que me esperaban dentro, Toñi no se corto y se me pego clavándome los pezones, mientras me agarraba la polla con la mano y decía.
Pues si que la tiene dura, no es tan solo grande y me parece que aquí hay suficiente para las dos si nos organizamos un poco.
No llegue a responder, los pezones de mi hermana estaban contra mi espalda y sus manos trataban de rodearme, para alcanzar la presa deseada, como no llegaba con las dos, se ladeó lo suficiente para poder agarrármela con una, y como si yo no estuviera dijo.
Tienes razón Toñi, creo que si habrá para las dos, pero tendremos que tomarlo con calma, no sea que lo agotemos demasiado pronto.
No me lo podía creer, vaya par de golfas me habían tocado en suerte. Mi propia hermana y mi primita, a las que siempre había llevado a las fiestas de los alrededores y estado al cuidado de que no se pasaran con ellas, ahora resultaba que eran unas calentonas de cuidado, pero pensé que ya que lo querían lo tendrían, y para que fuera con otro pues se las veía muy decididas, mejor conmigo que al menos sabíamos todos que no les perjudicaría en nada.
La cosa fue muy sencilla, simplemente me deje guiar y que fueran ellas las que hicieran conmigo lo que les apeteciera, Toñi no perdió la ocasión, ya que estaba enfrente, tiro de mi hasta quedar su espalda apoyada contra la pared de la piscina, se apuntó la polla que ya tenia en la mano y me abrazó la cintura con las piernas, le puse las manos en el culo y comencé a follarla, mientras subía y bajaba, apartó un poco la cara y note las duras tetas de mi hermana apoyadas en la espalda, comenzaron a morrearse mientras que la “niña” acariciaba mis pezones, que nunca había notado tan duros como esa mañana.
Cuando mi prima comenzó a temblar, echando la cabeza atrás vi que pronto se correría, pero a mi me faltaba aún bastante para llegar, y por eso no deje de darle fuerte hasta que me dijo casi sin voz, que ya tenia suficiente. Paré dejándola clavada y la abrace algo más arriba de la cintura, apoyo su cabeza en mi hombro y se quedo quieta, aunque una serie de calambres la sacudían de vez en cuando, mientras mi hermana me iba besando las orejas, la nuca, la parte de espalda que quedaba fuera del agua, mientras restregaba su cuerpo con el mio como si fuera un gatito. Lejos de serenarme, eso hacia que cada vez me sintiera más cachondo.
Tal y como estaba abrazado a Toñi fui andando hasta la parte de la piscina menos profunda, hice un gesto a Flori que salió del agua, cuando senté a la prima en el borde de la piscina, ella la tomo de debajo de los brazos y la tenido sobre una toalla, colocándole otra como almohada y tapándola un poco con otra, entonces entró en el agua y sin decirme nada, se abrazó a mi cuello, rodeándome la cintura con las piernas, como había visto hacer a la prima. Me sentía raro, pero en cuanto comenzó a morrearse conmigo, se me quitaron todas las tonterías y sin dificultad le apunte el capullo.
Cuando la deje bajar sujeta por las nalgas, a medida que entraba en ella se apartó un poco, pude ver como los ojos se le abrieron como platos, al parecer si que tenia la polla más gorda de lo que esperaba, pues sin llegar a ser un lamento soltó un profundo suspiro que así me lo indicó, la deje unos instantes clavada al fondo, mientras ella recuperaba la respiración que se le había alterado bastante. Le fui dando despacio al principio y a medida que la notaba más cómoda iba acelerando un poco, pero solo en sacarla, para que entrara la dejaba caer por su peso y eso me ponía a mil, pues cada vez soltaba un profundo suspiro.
Llego también su hora y se retorcía a cada nuevo caderazo, pues ahora si que cogida por las caderas, la acompañaba arriba y abajo, de su boca salían sonidos que desconocía, lamentos suspiros jadeos, una mezcla de todo, pero al parecer no quería sucumbir como nuestra prima, pero no le quedo otra y por fin me dijo que la dejara respirar un poco, la deje al fondo como a la otra mientras que ella se apretaba fuertemente contra mi. Le iba acariciando los costados desde las nalgas hasta los laterales de los pechos que quedaban a mi alcance, al estar ella abrazada a mi cuello pero chafada contra mi cuerpo.
Cuando se apartó un poco, fue para decirme si podríamos continuar fuera del agua, me sorprendió pero la ayude a salir, caminó con paso vacilante hasta el césped que rodeaba la piscina, fuera de la zona de madera que la bordea, cuando salí yo, me dijo que me tendiera en una toalla que había dispuesto cerca de una sombrilla. Lo hice boca arriba con la cabeza a la sombra, y quedo la polla tiesa apuntando al cielo, como señalando un avión que pasaba a mucha altura, imagine que desde tan arriba nadie nos podía distinguir, me saco de esos pensamientos la lengua de mi hermana, que se había empezando a pasear por el capullo.
Me quede quieto, pero después me di cuenta que había clavado los dedos en el césped, me dolían las uñas y tenia tierra entremedias, no alcanzaba a entender que una criatura de apenas 25 años, tuviera esa maestría que solo había visto en Luz, pero claro ella era profesional, aparentemente le costó menos meterse la polla entera en la boca, que lo que le había costado entrar la primera vez por el coño, puede que estuviera acostumbrada a tales cosas y eso me quedo grabado, como algo pendiente a comentar cuando fuera el momento.
Tenia los ojos cerrados gozando el momento, y tratando de no correrme enseguida, pues en esta ocasión, al ser yo la “victima” estaba en sus manos, de súbito note un movimiento extraño, que hizo que el capullo chocara violentamente contra alguna parte de su garganta, provocando unos gorgoteos muy raros, abrí los ojos y solo pude distinguir la grupa de la prima, que estaba al parecer arrodillada detrás suyo, parecíamos un tren de tres vagones, por fin me corrí como no podía ser de otra forma, cuando trate de apartarla, lo impidió y se dedico a follarse la boca con más ímpetu.
Los chorros de leche se estrellaban contra su paladar, pero no notaba que resbalaran por mi polla, al parecer se lo estaba tragando todo. Cerré los ojos otra vez hasta que todo termino, al abrirlos estaban las dos a mi lado y sonriendo, entonces Toñi me pregunto.
¿A merecido la pena quedarte aquí con nosotras?
Sin esperar respuesta, se paso por encima de mi y comenzó a morrearse con Flori, cuando les pareció se dieron la vuelta, una paca y la otra palla y comenzaron un 69 en el que me quede como observador de momento, por la posición estaba viendo como Flori le comía el coño a la prima, cuando me repuse un poco, Flori me hizo un guiño y vi como retiraba dos dedos del culo de la prima, probé por ver si era eso de lo que se trataba, me arrodille detrás del culo de Toñi y sin demasiados preámbulos, pues estaba ya mojada y dilatada, apunte el capullo a la entrada de ese culo que estaba pidiendo polla.
Apreté un poco y ella alargó las manos para separarse un poco los cachetes, pero sin sacar la cara de donde la tenia, cuando apreté un poco más, aparto las manos para ponerlas donde las tenia antes, entendí que me daba permiso para seguir, cuando entre un poco más los lengüetazos que mi hermana estaba dando en el coño de la prima, se alargaban un poco y se paseaban por la polla o los huevos, lo que encontrara en cada caso, cuando me corrí algo menos que la vez anterior, si que salió de todo rebosando y dejándole la cara perdida a mi hermana.
Se levantaron las dos y en la ducha que había junto a la piscina se dieron un buen baldeo, entonces dijo Toñi que lo mejor que podíamos hacer es un alto para comer un poco, eran ya cerca de las tres de la tarde. Y mientras comíamos “melón temprano” con jamón para reponer fuerzas, les pregunté si hacia mucho que mantenían ese tipo de relación y como era que nadie se había percatado nunca de sus inclinaciones, se echaron a reír las dos y fue Toñi quien me aclaro.
No se trata de una “inclinación” como tu dices, solo es que como los hombres de verdad por aquí escasean, nos apañamos como podemos porque los que hemos encontrado son unos flojos, y no es que no lo hayamos intentado, de que si no, esa maestría que tiene tu hermana con las mamadas, hacía ya tiempo que me proponía traerte con cualquier escusa, y comprobar si lo que decía de que tenias una polla extraordinaria era cierto.
El viaje de mis padres ha sido esa buena ocasión, además yo fui a la escuela con Luz cuando vivíamos en Cartagena, un día la encontré de casualidad y comentando las vueltas que da la vida confirmo que eras uno de sus mejores clientes, ya me dijo el aparato que gastabas y lo a gusto que se queda, cada vez que consigue quedarse contigo a pasar la noche, te cobra porque lo necesita, pero me juró, que si alguna vez se retira o la retiran, tratara si puede no perder el contacto contigo y que no era la única que opinaba lo mismo, es por eso que no siempre esta disponible para ti, ha de compartirte con las compañeras igual que las propinas.
Me quede algo sorprendido, no imaginaba que eso que me colgaba entre las piernas y que apenas le daba importancia casi todo el tiempo, fuera tan famoso en la comarca. Terminamos de comer y la tarde fue también muy animada, la pasamos en una cama de matrimonio que tenían en una habitación para invitados, cuando estaba algo cansado se dedicaban la una a la otra, o simplemente se ponían las dos a jugar conmigo, pero se comportaban como si fueran verdaderas profesionales, en una especie de descanso que hicimos ya cerca de la hora de cenar, les pregunté que tipo de precauciones tomaban, ya que en ningún momento habíamos empleado condón.
Les dije que con “las chicas” de los viernes empleaba condón, por mi parte no había riesgo, pero con todo les pregunté si ellas tomaban algún tipo de anticonceptivo, y que imaginaba que si estaban con alguno de esos tipos de vez en cuando, aunque solo fuera para cerciorarse que se trataba de tíos “flojos” también emplearían condón.
En este caso fue mi hermana, la que me aseguró que ambas tomaban “la píldora” y que cuando estaban con alguien siempre iban juntas y empleaban condón o no había nada que hacer, eso si que lo llevaban a rajatabla, conmigo no lo habían planteado siquiera, pues Luz les había dicho que solía ser yo quien insistía en emplear condón siempre con ellas.
Pase toda la semana con ellas, tan solo fuimos un par de veces a comer con mis padres, les llamábamos el día antes para avisarles, llegó el domingo y con ello la vuelta al trabajo otras tres semanas, no tendría que trabajar ninguno de los dos fines de semana que quedaban y al siguiente viernes a mediodía recibí una llamada que me dejo muy extrañado, era de Toñi.
¿Este fin de semana te toca trabajar? Es por si quieres pasarlo con nosotras, si puedes y te decides habrá una sorpresa que seguro te gustara mucho.
Cuando trate de enterarme de que se trataba, solo me dijo que seguro que disfrutaría mucho si podía ir. Sabía que mi padre y su hermano, el tío Lucas tenían que ir a “Alhama de Murcia” por un tema de tierras, que se tenía que tratar en domingo y que pasarían el fin de semana fuera, pero no sabia que se fueran con las mujeres, y le pregunté cuando quería que fuera.
El sábado, sobre las diez más o menos, ¡A! recoge a Flori y tráela también, ya que te pilla de paso.
Eso me pareció razonable y simplemente me fui a casa al terminar la jornada, no pasé a ver a Luz pues se me avecinaba un fin de semana movido como poco, aunque nunca imaginé lo que seria en realidad.
Llegamos a su casa a eso de las diez cuando el sol ya calentaba un poco, parece que Flori la había llamado antes de salir, pues nos esperaba en la puerta, al llegar me beso como si me fuera a la guerra, fuimos hacia la piscina y sin más nos desnudamos los tres, antes de entrar en la piscina llego la primera sorpresa, cuando apareció la tía Eduarda en pelotas también, he de reconocer que para sus casi cincuenta años esta muy bien, pero me sorprendió verla allí y así, la imaginaba con el tío Lucas. Como me vio algo cortado, soltó una frase muy ingeniosa, que nos arrancó risas a todos.
Vaya, si se hiela la piscina ya se con que podríamos romper el hielo, porque además de grande y dura, por lo rojo que tienes el capullo, la tienes que tener ardiendo.
Las chicas se liaron en un morreo acompañado de un magreo que hizo que se me cayera la baba. Sin darle demasiada importancia a nuestra desnudez, me dijo si podía ponerle un poco de crema, ya podía ver por mi mismo que ellas estaban ocupadas. Me ofreció un bote y se tendió en una de las hamacas bocabajo, me acerque y comencé a extenderle la crema, empecé por la nuca pues ella misma retiro la gran mata de pelo que tiene, seguí por la espalda y cuando llegaba cerca de las chafadas tetas que sobresalían por los lados no trataba de esquivarlas.
Cuando mi mano iba pasando por esas zonas, ella se estremecía pero callaba y cuando llegue a los “cachetes” del culo tampoco los esquive, al ver que separaba las piernas, mientras le aplicaba crema por todo lo que se ofrecía a mi vista, pensaba que era más caliente que las chicas, claro que existía una explicación, el tío Lucas es unos quince años mayor que ella, imagino que eso a según que edades no tiene importancia, pero ahora ya seguro que si, en lugar de darse la vuelta se levanto de la hamaca.
Sin opción para reaccionar me agarro la polla, que no entiende de vergüenzas y estaba como un rabo de toro. Sin soltarme se pegó a mi y pude notar sus tetas, que a pesar de estar algo caídas, creo que por el tamaño, pues gasta al menos una talla 105, se aplastaron contra mi que las notaba calientes y con los grandes pezones duros como los de las jóvenes, como si quisieran traspasar mi piel, me brindo su hermoso cuello, que después de la primera impresión no dude en besar. Sin soltarme me dijo que nos dejáramos de tonterías y entramos en la casa.
Me llevo a su habitación, bajó una foto que había sobre la mesilla de noche e hizo que me tendiera encima de la cama, yo estaba como en una nube, notaba sus calientes labios como se iban paseando a lo largo de la polla, ahora besaba luego lamia y por fin cuando llego al capullo, se lo metió en la boca, pero a diferencia de las chicas, ella solo retiraba el pellejo y dejaba el capullo sobre la lengua, no intentó tragarla en ningún momento.
Me estaba desesperando, ella si que me haría terminar pronto si seguía así mucho más rato, pero sin decirle nada, se arrodillo ofreciéndome una vista de su grupa, girando la cabeza me preguntó si necesitaba alguna indicación, o podría seguir yo solito ahora que ya estaba listo del todo. No me hice de rogar y arrodillándome detrás suyo, me asegure de apuntar bien y le metí la polla de un solo viaje, soltó un profundo suspiro y cuando me paré para que se acomodara un poco, fue ella la que comenzó un vaivén infernal, no sabia cuanto rato aguantaría ella ese ritmo, pero para evitar que me hiciera terminar antes que ella, alargue una de las manos hasta que encontré su pepitilla y la fui acariciando.
En un par de ocasiones, de tanto ímpetu que le daba a los meneos me salí, pero tardaba poco en enchufársela otra vez, cuando comenzó a jadear y mover la cabeza en todas direcciones, la espalda se arqueaba y me decía MAS………MAAAAAAAAAAAS………….. DAMEEEEEEEE……….. MAAAAAAAAAASSSS. Le di otros cuatro o cinco caderazos, y se troncho sobre la cama mientras le daba otros cuatro o cinco más, le temblaba todo el cuerpo y lo estaba gozando de verdad, pasé un dedo por la espalda intentando recoger restos de crema, pero solo logre engrasarlo un poco y con el comencé a jugar con su culo, a pesar de que aún estaba ella con sus temblores, pero quizás por eso no me dijo nada.
Apunte el capullo en ese culo tan calentito y apreté un poco. Entro sin demasiada dificultad y seguí empujando, fui entrando despacito pero sin pararme más que cuando daba un respingo, después supe que se trataba del orgasmo anterior que aún no había terminado del todo, cuando por fin me corrí en ese culo que me apretaba como si fuera recién estrenado, ella temblaba como una hoja de parra y no dejaba de jadear, le estaba dando los últimos caderazos, el final de cada uno lo acompañaba un chorro de leche, solté tal cantidad que hasta yo me sorprendí, me quede quieto al fondo esperando que bajara la erección para retirarme, pero me dijo en un susurro que no me apartara aún de ella.
Pasaron unos minutos hasta que noté que se movía, me parecía sorprendente que quisiera más después de lo que habíamos estado haciendo, pero al parecer estaba muy necesitada y trate por todos los medios de intentar animar un poco la situación, con la polla medio fofa, aun le pude dar otros cuatro o cinco empellones, que al parecer fueron suficientes para reanimar ese reciente orgasmo que había tenido, pues temblaba otra vez con mayor intensidad si es que eso era posible, entonces si que se derrumbo saliendo por entero de mi y quedando sobre la cama como una muñeca rota.
La deje allí y fui al baño, donde me di una ducha rápida, más que nada para sacarme los restos que me colgaban de la polla, entonces salí a la piscina y pude ver a mi hermana con la prima, que estaban la mar de animadas, pero al verme pararon y se arrimaron a mi a preguntarme como había ido la sorpresa. Les dije que la había dejado satisfecha de momento en su habitación, pero que me podrían haber avisado de lo que pensaban hacer y habría estado preparado.
Eran casi las doce y me ofrecieron tomar una cerveza con alguna tapa, me pareció bien y cuando estaba sentado con las chicas, apareció la tía Eduarda que con cara de satisfacción me dio las gracias. Se sentó con nosotros y mientras tomaba algo comentó como para ponerme al día.
Hace tiempo que tu tío no me da lo que necesito, a Toñi tampoco le ha salido bien ninguno de los intentos, para encontrar a un hombre que fuera capaz de llenarla del todo. Cuando me lo comento hace un tiempo, no se exactamente como pero terminamos en la cama, fue nuestra primera vez pero desde ese día, hemos aprendido mucho la una de la otra.
Después fue tu hermana, la que hablando con Toñi supo lo bien que lo pasábamos y desde entonces, tratamos de apañarnos entre las tres, cuando pensaron en ti porque Toñi, encontró a Luz de forma casual y hablaron de todo un poco, que ibas con frecuencia al sitio donde trabaja y además comento la polla que gastabas, nos decidimos a intentarlo, fue por eso que nos fuimos a la boda de mi sobrina y pasamos toda la semana fuera, para que tuvierais la oportunidad de estar juntos y ver que tal resultaba el asunto.
Me quede muy sorprendido, aunque en realidad no sé de que me extrañaba, había encontrado una mina con esas tres mujeres, que estaban dispuestas a estar conmigo de forma incondicional, además si en algún momento no llegaba, entre ellas se podían arreglar sin meter a nadie más por medio.
Cuando terminamos de tomar las cervezas, yo me encontraba ya en condiciones de darles un poco más de marcha, pero cuando comencé a sobarle las tetas a Toñi, dijo mi hermana que tenia una idea, como las tres me la habían chupado, me vendarían los ojos para ver si era capaz de adivinar de cual se trataba, acepte y le di la vuelta a la silla donde estaba sentado, antes de que me vendaran los ojos vi como echaban al suelo, una colchoneta de las que se pone encima de las tumbonas.
Lo siguiente que noté, es como unos dedos comenzaban a tocarme la polla, en instantes la tenia otra vez tiesa y dura como la pata de una mesa, la punta de una lengua comenzó a pasearse por el capullo, que había quedado al descubierto al tirar del pellejo para abajo, no lo hacia mal pero me resultaba extraño, aunque imagine que fuera la que fuera, trataría de disimular para que no lo adivinara enseguida, tarde poco en abandonar esos pensamientos y dedicarme solo a gozar de lo que me estaba haciendo.
Cuando pensé que pronto me correría si seguía así, se apartó de mi y noté como se sentaba de espaldas a mi, clavándosela hasta el fondo de una sola vez, instintivamente alargue las manos para sujetarla por las tetas, por el tamaño estaba claro que se trataba de tía Eduarda, que apoyo sus manos en mis rodillas y así tenia un gran control en su sube y baja, me fui tensando por momentos pues eran muy enérgicos los movimientos, pronto me correría pero no me importaba, ellas ya se apañarían si me quedaba “sin pilas”.
Cuando comenzó a jadear, note una gran diferencia con lo oído un rato antes en su habitación, y cuando se arqueo hacia atrás en medio de un escandaloso orgasmo, apoyo su cabeza en mi cara, pero el cabello era muy corto, en ese momento me quede helado. No reaccione y simplemente deje que siguiera la fiesta, ya no había nada que hacer pues las cartas estaban echadas y solo se trataba de jugar con ellas, antes de que ella terminara con el suyo, comencé yo con el mio, mientras que le retorcía los pezones le iba soltando lechadas, no fueron tan abundantes como la vez anterior, pero con algo de rabia por el engaño.
Cuando termine no la solté y tal como estaba recostada contra mi pecho, fue bajando la erección, hasta quedar fofa del todo, pero seguía dentro suyo y no pensaba ser yo quien diera el siguiente paso, entonces oí como la prima Toñi pregunto desde algún punto enfrente mio, pero lo suficientemente apartada para que supiera que no era ella, si ya sabia de quien se trataba, callé y espere hasta que muy despacio se levanto saliendo de mi, se dio la vuelta y se sentó esta vez de cara a mi, mientras me besaba tiernamente, retiro la venda de los ojos y pude comprobar que ciertamente era mi madre.
Un par de lagrimas brotaron de mis ojos, no comprendía como había llegado a eso, pero lo cierto es que había pasado, estaba pasando y no me molestaba en absoluto, solo quería saber ¿porque? Me abrazo muy fuerte, la explicación llego en forma de confesión sin haberse levantado de encima mio, las otras tres se acercaron con cara de expectación mientras mi madre decía.
No estés triste por esto, bueno un poco si, si quieres compadecerte de mi, tu padre ya hace tiempo que le cuesta darme sexo, no es como cuando me preño de ti antes de cumplir yo los dieciocho, pero desde entonces hasta aquí el camino ha sido largo, hace ya tiempo que él se va junto con su hermano el tío Lucas, a una casa donde Lola, una mujer que había estado empleada en el local que frecuentas, y que recibe a antiguos parroquianos, al parecer para ellos el sexo a esta edad, ya no es cosa de “señoras” solo de putas.
Desde hace varios años, cuando lo hablé un día con Eduarda, nos empezamos a apañar las dos solas, sin meter a ningún hombre en nuestra cama, después fue cuando llegaron las niñas y ahora estas tu, si quieres ser nuestro macho seria estupendo, pero si te sientes molesto por ser quienes somos, dilo y te dejaremos tranquilo, pero has de tener una cosa muy clara, o todas o ninguna, porque ha sido un trabajo de equipo llegar hasta este momento y situación, tu decides.
La abracé dándole un beso en los labios, cargado de ternura y lujuria a partes iguales, las otras tres se sumaron al abrazo y cuando nos separamos comenzaron a tratarme como si fuera un “Maharajá” y ellas mi harén, todo eran atenciones para que me encontrara cómodo entre ellas. Poco después comimos y mientras lo hacíamos, dejaron claro que era yo quien elegiría la compañía que quisiera tener, algo a lo que me opuse de plano diciéndoles, que ellas decidieran en cada caso cual estaría conmigo, y que si en algún momento me apetecía alguna en particular, ya se lo haría saber.
Nos echamos a hacer la siesta, me costó dormirme pues esperaba que en cualquier momento apareciera alguna de ellas, aunque prefería que no, pues ya había echado dos polvos por la mañana y suponía que el día no terminaba ahí. Me dormí al menos hora y media y cuando me levanté estaban las cuatro en la piscina, vistas así en pelotas sobre las tumbonas, se me hacia difícil escoger a una, reconozco que mi madre gana mucho estando desnuda, que tiene las tetas grandes es evidente, pero nunca imagine que tuviera un cuerpo tan bien formado y es que hacia mucho tiempo que no íbamos a la playa juntos.
Durante ese fin de semana, tuve más sexo que el que nadie haya podido desear, pero lo estaba pasando muy bien, no vi en ningún momento nada que me molestara, se comportaban como fieras cuando estaban conmigo, tratando de hacer el máximo esfuerzo ellas, para evitar que me cansara en exceso, todo parecía un sueño del que temía despertar, al tiempo que lo deseaba antes de que llegara a ser una pesadilla, no entendía como había podido estar pasando eso entre ellas, sin que nadie se diera cuenta, pero me preocupaba lo que sucedería en un futuro.
Llego el domingo por la tarde y me fui a mi casa, dejando en la suya a mama y a Flori, el lunes fui al trabajo pero no me podía quitar de la cabeza lo vivido estos últimos días. El martes al llegar a casa encontré un recado en el contestador, era de mi madre para que pasara a cenar el miércoles en casa, no imaginaba de que se trataría, pero no era inusual que me invitaran a cenar entre semana, al llegar mi padre puso dos vinos y mientras las mujeres estaban en la cocina terminando la cena me dijo.
Bueno Mateo, te ha caído una buena encima, tu madre y tu tía han estado estos días dando la porcata porque al oírtelo decir a ti, quieren que vayamos a Tenerife todos, ni a mi hermano ni a mi nos apetece lo más mínimo, cascarnos cuatro horas de avión, para estar en una isla donde las playas son peores que las que tenemos aquí al lado, pero están empeñadas en ir y esta noche, tu madre tratara de convencerte para poder irse contigo, aunque salgas por las noches a bailar o lo que sea, con las zagalas o solo, pero al menos las podrás llevar con un coche que pagaremos nosotros, a ver algunos sitios que dicen que son muy bonitos de la isla.
Durante la cena se hablo del viaje a Tenerife y acepté que fuéramos los cinco juntos, solo había el problema de la reserva del hotel, pero dije que al día siguiente trataría de solucionarlo.
Esa misma noche, al llegar a casa llame al hotel y les conté la situación, de una reserva simple para una persona, pasaríamos a ser cinco, la única solución que me ofrecieron a esas alturas de temporada, resultó ser la mejor para nosotros, ya que al ser cinco personas y todas parientes, me ofrecieron una suite con dos dormitorios y un salón común donde podían poner una cama auxiliar, salía mas barato que tres habitaciones, dos dobles y una más simple o doble también, acepté encantado y quedo todo solucionado.
Ni que decir tiene que durante las tres semanas de vacaciones, además de visitar todos los puntos de interés de la isla, me arte de follar con las cuatro, que se turnaban para dormir en la cama supletoria, yo siempre dormía en una de las grandes con la que tocara en cada caso, cuando regresamos fue cuando comenzaron para mi los problemas, por llamarlos de alguna forma.
Encontré a Luz una tarde muy cerca de mi casa, era su día libre y subimos a “charlar” un rato, lo primero que me dijo fue si ya no pensaba ir más a verla, pues desde que comenzó el verano no había aparecido por el local, cuando le recordé la conversación que había mantenido sobre mi, con su excompañera de escuela Toñi y cayo en la cuenta que era mi prima, se hecho a reír diciéndome que ahora ya le cuadraba todo y me contó.
Lola me dijo hace unos días, comentando como le iban las cosas ahora que estaba medio retirada, que tanto tu padre como Lucas tu tío, clientes habituales desde hace un tiempo, estaban más tranquilos y la visitaban más frecuentemente, al parecer sus mujeres habían entrado en razón y ya no los molestaban con la historia de siempre, ya no insistían en tener sexo con ellos.
Dicho esto, continuo con una petición a la que no me pude negar.
¿Podre venir a verte alguno de los días que libre, cuando tú me digas o estarás muy ocupado? Entiendo que si las tienes que atender a las dos, o quizás a las cuatro iras un poco apretado, pero no te pido más que me dediques algo de tu atención de vez en cuando, solo para mantener la alegría que me has estado dando todo este tiempo.
Tan solo le sonreí afirmando, mientras se metía la polla en la boca.