Masaje hipnótico (21)

MÁS PROPIEDADES E HISTORIAS.

Le cobraba con creces lo que el “ gordito ” me había estafado, me quedaba con mucho más de lo que me había sacado, le “ cagaba ” la vida con su empleada-novia-amante y tenía claro que aún no había terminado la venganza…

Con respecto a las propiedades que le sacaba, él en persona las entregaría a sus nuevos dueños, el chalet para la madre de mis hijos y la casa americana para mi hermana, después vendría la entrega de un C.D. con la esposa y el hermano “ dándose ” con todo y por último, la denuncia ante un Fiscal por Abuso y Estupro o cualquier otra “historia” que se me ocurriera .  ¡Te salió caro “gordito”!

Compré masas y facturas y me fui para la casa de mi hermano, llegué casi a las 18.00, me felicitaron por el auto, bromeamos un rato con mis sobrinas y un par de amigas que salían y luego, a solas, le dije a mi hermano que si necesitaba ayuda no dudara en pedirla, habida cuenta que yo no olvidaba que él y su familia me habían ayudado en su momento, me dijo que todo estaba bien, que no necesitaba nada pero ante una seña de su mujer no le creí…  Algunas cosas de determinados “ orgullostontos ” con todas las personas, algo que yo catalogaba de “pelotudeces crónicas” nunca podría llegar a entenderlos…

En un aparte, mi cuñada me comentó que no tenía trabajo y estaban mal de dinero por eso se encontraba decaído y depresivo.  Quedamos en que ella debería apuntalarlo y apoyarlo, por lo pronto yo les daría el dinero y trataría de buscarle algo para que trabajara en ello.  Pasé al baño y del efectivo que me quedaba aparté un importe de casi la mitad de un sueldo y se lo entregué a ella diciéndole que, si necesitaba más, me avisara.

Volvieron mis dos sobrinas y sus amigas y se invitaron para ir a la piscina cuando fuera el tiempo, yo encantado de la vida pero les dije que no tenían por qué esperar tanto para ir a visitarme, que podían reunirse allí cuando quisieran, luego nos abrazamos, mi cuñada me volvió a agradecer, le dije que se “ dejara de joder ” con los agradecimientos, que lo único que buscaba es que estuvieran bien y me fui contento mirando con disimulo las bellezas adolescentes que tenía ante mí, además pensando en algo que desde siempre tuve presente: Sobrinas o no sobrinas, portaban culos, tetas, ganas e inquietudes de mujeres.

CLARA.  EFECTIVO RÁPIDO.

El colgante vibraba un tanto inquieto, seguramente reclamando por su “ alimento ” y yo, totalmente iluso, que pensé que con Sara lo había “ empachado ” de orgasmos.

• ¡Con las nenas no!, -dije riéndome y acordándome del culo y el cuerpo de mis sobrinas y sus amigas-… Te vas a tener que conformar con Clara -le aclaré en voz alta y parecía un “ loco ” hablando solo en el auto-… Te doy de “ comer ” y de paso consigo dinero y me la saco de encima , -no vibró más y yo lo entendí, ya no cabían dudas, faltaba “ alimento ”-.

La llamé a la ex vecina indiscreta y le pregunté si estaba sola, me dijo que el marido había ido a una reunión en el Centro de Almaceneros y no regresaba hasta la medianoche…

• Fantástico, -le dije-. Te llamaba porque quería invitarte a ver un show de “odaliscas” .
• “ Disponé de mí…  ¡No sabés como me ponen las odaliscas!...  ¿A qué hora es? ”
• Te espero en treinta minutos en tal lugar, eso sí tendrás que traerme algún dinero importante para los gastos , ( ni loco quería aparecer en el viejo barrio con el auto y que vieran que iba con ella ),
• “ Ya estoy saliendo ”.

Cuando llegó me entregó el dinero, era más que importante y dijo que lo gastara como quisiera pero que ella necesitaba “ mimos ” y “ algo ” más, tal como era de esperarse, al utilizar la palabra “ Odalisca/s ”, las ganas de sexo hacían repentinamente su aparición desatándose.

• Siendo así, nos vamos un rato a un “ albergue ” y allí nos hacemos “ mimos ” y “ algo ” más, -le dije, además, le hice saber que cuando subiéramos al auto tenía un “ regalito ” para ella-. No sé si 23 cm te van a alcanzar pero podrías jugar un rato con tu boca para que te responda ,
• “ Ya, vamos ya, no lo puedo creer, lo quiero ya ” -y ni bien subimos al auto se abocó a la tarea de endurecer al “ regalito ”-.

“Mi amigo” hacía posible que yo respondiera rápido pero, habiendo conocido ya a cuerpos mejores necesitaba un “ trabajo extra ” para incentivar mi libido y Clara parecía estar haciéndolo bien, asimismo, al estar agachada en mi entrepierna, quedaba oculta a “ ojos ” que nunca faltan y eso me venía bien.

En otros tiempos, otrora “ normales ”, ni borracho le hubiese “ entrado ” a una mujer como Clara, en cambio ahora, mi “ Viagra-Demonio del Colgante ” no hacía distinciones y “ respondía ”, es más, creo que lo haría hasta cuando yo no quisiera…  De todos modos, Clara, con sus manos y boca lograban el cometido pero lo más excitante eran sus comentarios…

• “ ¿Todo esto es para mí?...  ¡Qué pedazo de verga!...  ¡Madre de Dios!...  No sé cómo voy a lograrlo…  ¡Es enorme!...  ¿Por qué no me dijiste antes que tenías esto para mí?, me vas a romper toda ”.

No bien entramos a la habitación quería desnudarme y le pedí que lo hiciera primero, no tardó nada y se arrojó sobre mí, rodamos en la cama y parecía querer devorarme a besos…

• “ Estoy muy mojada y lo quiero adentro por dónde quieras aunque  me da un poco de miedo, me vas a destrozar ”.
• Seguí con la boca y comelo todo , -no se hizo rogar y comenzó a tratar-.

Lo besaba, lo tocaba, lo lamía e intentaba introducirlo cada vez un poco más, luego de arcadas y saliva logró lo que ambos queríamos.  Así y todo, ni sus exclamaciones de ahogada ni sus movimientos me resultaban suficientes y le dije que seguramente su “ conchita ” estaba queriendo recibirme y uniendo la acción a la palabra se arrodilló a los costados de mis piernas y fructificó en su intento de penetrarse.

Cuando mi glande la tocó prosiguió con los comentarios sobre que “ no podría ” o que “ era grande ”, que “ quedaría toda abierta ”, que “el marido lo notaría” , todas “ñañas” pero a mí no me importaba.

Para mal, yo tocaba sus pechos flácidos de pezones magros y las ganas parecían esfumarse. ¡No me jodan! , no empiecen con la “historieta” que te cuentan que cuando estás “caliente” la metés en cualquier lado, algunos habrá, no lo dudo pero, para mí, no es lo mismo un pedazo de buena carne a un trozo de bofe…

Ella no notaba mis reticencias y seguía con sus intentos, entonces le pedí un orgasmo y terminó con contorsiones y contracciones, de inmediato hice que girara su cuerpo porque quería ver y tocar su cola.  De ese modo la cosa un poco cambió, sus intentos se mezclaron con gritos, exclamaciones, movimientos y orgasmos ayudados también por mis dedos que jugueteaban y se perdían como al descuido por su entrepierna.

Estaba desaforada y no verle la cara ni la flojedad de su vientre ni sus pechos “ de cuarta ” me hacía bien y comencé a colaborar con mis propios movimientos.

• La cola, Clara, la cola -le dije y no tardó en poner mi glande en su orificio posterior, lo llevaba con su mano haciendo una contorsión para con su cuerpo-.
• “ Toda, metela toda y no pares…  ¡¡Ayyy, por Dios, rompeme el culo que me encanta!! ” -me gritaba y me deslicé escuchando su grito que nos estremeció porque hasta ella se sorprendió-.
• “ Así, así, hasta el fondo, ¡Qué delicioso!, mirá como nuevo el culo para vos ”, -sus orgasmos y contracciones me ayudaban aunque sabía que no podría terminar así-.

Le pedí que se detuviera, que se arrodillara al borde de la cama y apoyara su cuerpo sobre ésta y allí, con su culo apuntándome entré hasta el fondo de sus entrañas, me moví y la dejé gritar y gritar y gritar hasta que se abandonó sobre la cama quedando laxa y tranquila.

• “ Me partiste el culo, llegaste hasta el estómago, sacala, por favor, no puedo más ”.

Que pidiera lo que quisiera, a mí me importaba poco lo que quisiera, yo quería, no ya que gozara sino que sufriera la penetración y sólo cuando sus ruegos me parecieron suficientes le llené los intestinos luego de una profunda estocada que la conmocionó.

• Tranquila Clarita, tranquila que recién hoy te has sentido “ cogida ” -le decía-.
• “ No te imaginás como te sentí, debo tener el culo como una flor, no me quedó estrella sin ver ” -contestaba-… No me puedo ni mover pero gocé como nunca , el drama va a ser cuando el boludo la meta y le quede “bailando” es lo mejor que me ha pasado” , -yo pensaba que, efectivamente, esa había sido la intención, que esta vez se sintiera fenomenal porque no volvería a “ sacrificarme ”, por lo menos, no con ella-.

A medida que me aflojaba su cuerpo desnudo me producía molestias y un cierto “ asquito ”, debe ser por eso que hay “ estómagos masculinos ” que se me hacen difíciles de comprender…  Ante esto le ordené que se bañara, que se vistiera y se sentara sobre la cama para esperar nuevas órdenes, cuando estuvo lista, me lancé.

En principio, sin dejar de recomendarme, no volvería a necesitar de mis servicios, olvidaría todo lo del dinero, no solicitaría más urgencias sexuales del marido y a partir del lunes comenzaría a liberarse sexualmente buscando y ofreciéndose a vecinos, empleados y conocidos, ya fuera gratuitamente o abonando por los “ servicios ”, sin que la opinión de nadie le importara.

Por un instante me vi tentado de hacerle olvidar la palabra “ odaliscas ” pero rápidamente pensé que hay posibilidades que no se deben dejar de lado y que nunca se sabe cuándo puede “ pintar ” una necesidad.  Terminé llevándola a una Remisería para que regresara a su casa y la cuenta de tres la escucharía en su cuarto.

Eran las 21.00 horas y yo ya tenía efectivo nuevamente.  Respecto del marido, al poco tiempo me enteré que estaba en un estado “ vegetativo ” producto de un accidente cerebro vascular y los asuntos comerciales dejaban bastante que desear, le comenté a la persona que me daba la noticia que eso debió haber sido el resultado de la crisis financiera que afectaba a gran parte de la población…

• “ Ojalá hubiera sido la crisis ”, -me dijo-… Fue Clara que se “desconchó”, salía, gastaba a lo loco, se “volteaba” al que se cuadrara, se armaron muchos “quilombos” y discusiones grandes por eso.  La gota que rebalsó el vaso fue porque el “cornudo” la encontró en un cuarto del negocio “chupándosela” a un empleado jovencito, el pibe salió “de raje”, él se puso a gritar como un marrano y de pronto se agarró la cabeza y cayó redondo en medio del local ”…

Me dijo también que tenía deudas y juicios de empleados y proveedores y ya no quise seguir escuchando porque como dice el dicho “ la gente es mala y comenta ” y uno no se puede dejar llevar por los chismes…  Si, si, efectivamente, de los mismos chismes que Clara se ocupó siempre de desparramar por todos lados, ¿no?

HISTORIAS DE CHICOS.  EL PODER DE LA HIPNOSIS.

Después de “ recolectar ” esos Pesos con Clara regresé a casa y me di cuenta que me gustaba llegar y encontrar todo ordenado y limpio, enseguida vino María a atenderme y me sirvió algo liviano de comer, yo la miraba moverse con gracia y alegría llenando de culo mediano y apetecible sus jean ajustados y las ganas se hicieron presentes de nuevo pero quise “ manejarlas ” distinto y me aplaqué.

• ¿María, ustedes ya cenaron? ,
• “ Sí señor, estamos acostumbrados a cenar temprano ”.
• Está bien, si no se acostaron decile a los chicos que vengan un rato que yo quiero conversar con ellos ,
• “ De acuerdo, ya les aviso señor ” -y salió corriendo a avisarles-.

Mientras esperaba llamé por teléfono a la madre de mis hijos, a mis hijos y a mi hermana, a todos les dije que era importante que vinieran a casa a almorzar en la mañana porque había una posibilidad para una propiedad y ellos tenían que estar si o si a las 12.00 horas.  Terminé de hablar y ya estaba la familia de Caseros, los cuatro frente a mí, allí le avisé a Luis que mañana tendría que hacer un asado porque venía gente de mi familia a comer y le di el dinero para comprar todo lo necesario, luego me dediqué a todos ellos.

Los vi a todos juntos parados allí y esa no era la idea…

• Chicos, la cosa no es así, cuando yo los llame para conversar eligen un lugar, toman asiento y conversamos, tienen que saber que una cosa es el respeto y el resguardo de determinadas normas de convivencia y otra muy distinta es la sumisión…  A mí no me sirve que se sometan como “ perritos falderos ”, yo quiero que me demuestren que confían en mí y pretendo confiar en ustedes ,
• “ Sí señor ”…

Me contestaron casi a coro pero sin moverse de sus lugares y me di cuenta que, de este modo, no podría resultar pues siempre tendrían miedos y temores “ educacionales ” que no les dejaban distinguir entre lo que era sumisión y lo que era respeto, lo cual los limitarían en su entrega. Tendría que ser a mi particular manera si quería que esto resultara satisfactorio y tuve una idea que no tardé en llevar a cabo.

• Vamos a hacerlo del siguiente modo: Luis, sentate en el medio del sofá grande, Josefina a la derecha y Raquel a la izquierda, María arrimá el sofá individual y sentate a mi lado , -así lo hicieron y la intriga no despojada de cierto temor se notaba en todos ellos-.

Sin mirarla y sabiéndola cargada de inquietud me dirigí a María y le dije que ahora conversaría tranquilo con este árabe y las dos “ odaliscas ” que tenía enfrente.  La respuesta de la madre fue inmediata.

• “ Sí señor ” -afirmó y me sonó distinto-.
• “ Ahora deciles que me presten atención y dejanos solos por un rato, yo después te llamo .  -Les dio las indicaciones pertinentes y salió del living-.

Iba a intentar algo que nunca había hecho pero me sentía seguro y con energías para lograrlo además, sabía que estaba “ apuntalado ” y no había notado ninguna vibración en contrario.  Estando sentado frente a ellos apoyé mi cuerpo en el respaldo, abrí mis brazos hasta dejar mis manos en cada punta del respaldo, logrando de este modo que mi pecho y el colgante quedaran perfectamente a la vista de ellos.

Les pedí con voz calma y lenta que no apartaran su vista de mí y que se entregaran para poder aclarar sus dudas y para que la confianza se hiciera presente.  “ Mi amigo ” brillaba con intensidad y ya no tuve necesidad de seguir hablando, los tres miraban sin ver, ya los tenía y a partir de ahora todo se haría más sencillo pero primero les hice adoptar la correspondiente normalidad.

Surgían ocurrencias nuevas y tener con quien plasmarlas ayudaba a que la rutina y el hastío no se instalaran.

• Escuchen con atención, a partir de este momento … -me acordé de María y la llamé, llegó, se sentó y se quedó callada-. Les decía que a partir de este momento continuarán normalmente con sus vidas y actividades pero no podrán negarse a cualquier cosa que les ordene hacer, no se sorprenderán y aceptarán todo lo que yo haga en esta casa y con quien yo quiera hacerlo, estarán siempre dispuestos y felices para cumplir con lo que yo les pida y mantendrán la discreción ignorando o eludiendo las preguntas de los de afuera.
• Por el tiempo que yo decida, así fueran años, mantendrán un comportamiento normal sin que nadie sospeche ni sepa lo que hacen ni lo que yo hago, me obedecerán sólo a mí o a quien yo disponga transitoriamente.  Repitan todo lo que les dije , -los cuatro lo hicieron sin obviar palabras y algo nuevo comenzaba-.

Hay otro punto de vista que les puse de manifiesto y era que, ante cualquier inquietud que se les presentara acudieran a mí para aclararla, lo mismo sucedería cuando tuvieran ganas de hacer lo que se les ocurriese, debían decírmelo primero a mí o solicitar mi autorización y seguí con lo que “ mi amigo ”, vibrando cada vez más fuerte, comenzaba a reclamar.

• Ahora los quiero desnudos a los cuatro y cada cual mi irá contando, sin reservarse nada, su despertar sexual y lo que sienten.  Uno habla y los demás, aunque parezcan prestar atención, no lo escucharán salvo que sea yo quien les dice algo .  -Sabía que no había posibilidades de mentiras ni ocultamientos y me dispuse a gozar de todo lo que podría escuchar y descubrir-.

Respecto a esto último, a través de todos estos años aprendí “ algo ” sobre la mente humana y el famoso tema de la hipnosis y, mal que pese o no, he llegado a determinados descubrimientos, no sé si buenos o malos pero, en definitiva, pude establecer que la mente humana es extremadamente débil y aunque algunos la rodeen de “ fortificaciones ” prefabricadas cuando alguien la penetra se vuelve permeable y cualquier “ fortaleza ” termina por derrumbarse.  Todo depende de quién tiene las riendas y de cómo las utiliza.

Esto me quedaba más claro ahora aun sabiendo que el “ Poder ” que se me había otorgado o el que se ejercía a través de mi persona no podía compararse ya que tenía demasiadas muestras de la imposibilidad de las personas para resistir al “ amigo ” del colgante pero, en “ el común ” si uno accede a ser hipnotizado no podrá resistir lo que el Hipnotizador, en tanto y en cuanto tenga buenos conocimientos, le mande hacer, salvo que ese alguien tuviese la mente entrenada para el efecto y entre nosotros, ¿Quién entrena la mente para resistirse a uno que hipnotiza?

Una de las cosas que se me ocurre pensar es cuanto gasto y pérdida de tiempo se evitaría si se aplicara en el ámbito de la Justicia pero no se puede porque el delincuente se negaría por consejo de sus Abogados amparándose en Leyes que siempre los protegen, creo que sirve como ejemplo decirles que, si yo hipnotizo a un asesino y me dice donde escondió el cuerpo o el arma homicida esa declaración no serviría, no tendría validez legal.

Sin embargo, se podrían resolver infinidad de casos por este método, por otro lado, el inocente sería verdaderamente inocente y el Estado se evitaría montones de juicios por falsas condenas e injusticias legales.  De una u otra manera, en éste y otros campos, se les “ cagaría ” el negocio a muchos y no conviene.

Decía que para el que accede no hay posibilidades de resistir, esto en tanto y en cuanto aquel que hipnotiza sepa cómo actuar, de todos modos, cuando no saben qué hacer te ponen excusas, una de las más comunes es el famoso “ bloqueo mental ”. ¡Bloqueo mental, las pelotas! , la realidad es que no saben cómo llegar y no obtienen resultados para mejor o peor, depende de la óptica, el caso es que nadie puede discutir porque no entienden.

Posiblemente con lo que yo opino voy a generar muchas controversias entre los que emplean este método y/o entre los “ pseudo-chantas ” que pululan, de última, no den “ bola ” todo puede ser producto de una imaginación torcida y poco competente.  Como sea, a modo de latiguillo, quizás para no asustar a los pacientes, utilizan un slogan remanido que reza: “ Ningún hipnotizado puede hacer o va a hacer lo que no quiere ” y eso se me antojó siempre como una falacia total o si se quiere, como una tremenda mentira.

Yo creo que si se logra penetrar en la mente de alguien, uno ya está adentro y una vez allí todo depende solamente de la capacidad del que logró introducirse.  Esto no lo pienso ahora con un “ poquito ” más de conocimiento, lo pensé y razoné desde antes, desde hacía mucho tiempo atrás.  En ese entonces tendría dieciocho años, hace un “ paquete de años ” y trabajaba en una empresa que festejaba sus 50 aniversario, por ello se organizó una reunión-fiesta de empleados de todas las categorías, más socios y allegados, para amenizarla se contrató a un grupo de artistas, músicos y cantantes, entre ellos a un famoso hipnotizador, un hombre alto, morocho y de mirada profunda con ojos evidentemente maquillados.

Cuando le tocó actuar pidió silencio e invitó a subir al improvisado escenario a cinco personas entre las cuales iba el Gerente General, azuzado por su familia y el aplauso de los concurrentes.  El Directivo en cuestión gozaba de un respeto total, era correcto, serio, medido y había demostrado siempre una conducta intachable en todo lo suyo.  El Hipnotizador hizo conocer su “ latiguillo ”, “ Nadie hará lo que no quiera hacer ” y este señor, serio y medido “ quiso ” perder el respeto ganado en años, su trabajo, su relación familiar y además, convertirse en el bochornoso hazmerreír de todo el personal.

Allí arriba hizo de burro, relinchó, fue gallina aleteando y coqueteando con un gallo, despotricó contra los Directivos de la empresa, insultó a algunos empleados y la completó bajando sus pantalones y apuntando a los presentes con un largo calzoncillo celeste.  Yo lo apreciaba y desde allí pensé que no importa el individuo que seas ni los conceptos que manejes, cuando el otro se mete en tu mente, puede lograr que hagas lo que él quiere. ¡Ah! , el artista se fue muy aplaudido.

Ya que estamos de “ historias ”, una vez me contaron, no sé si es cierto, habría que remover archivos judiciales buscando este caso para ver si es cierto.  El tema fue por un controvertido caso de Divorcio vincular por el Fuero Civil y un caso de Abuso y Violación en el Fuero Penal.  Según dijeron, una joven mujer y muy bien puesta y de físico más que llamativo, se hizo atender por un Profesional que trabajaba con Hipnosis.

La mujer fue hipnotizada y al no aguantarse este Profesional la hizo desnudar y con la “calentura” desatada, la “ embocó ” por todos lados.  La señora se fue a la casa en apariencia feliz y contenta pero cuando se sacó la ropa junto al marido éste no pudo dejar de advertir que ella tenía evidentes marcas de besos tipo “ sopapa ” (“chupones” que le decimos) en pechos, glúteos y espalda, según parecía, el hipnotizador se dejó ganar por un morbo exacerbado y la “ marcó ”.

Gran “ quilombo ” en el matrimonio, pedido de Divorcio de parte del marido y denuncia de Abuso, Violación y otras yerbas contra el Profesional por parte de la mujer.  El Fuero Penal condenó al Profesional no haciendo caso del “ nadie hace lo que no quiere hacer ” pero el Fuero Civil le dio “ pelota ” al marido y decidió que la mujer pudo evitarlo y que si llegó a esa instancia fue porque quería. ¿Será cierto? ... ¿No será cierto? ...

Habría que averiguarlo.  Yo creo que no se puede lograr que un tipo ponga un huevo pero podría tenérselo haciendo fuerza durante todo el día para tratar de expulsarlo, quizás no se podría lograr que otro mate a un desconocido ( algunas películas decían que sí ) de una o porque si pero podrían llevarlo a que crea que esa persona asesinará alevosamente a su mujer e hijos y que él es el único que puede evitarlo dándole muerte antes.

Quizás no se pueda hacer volar a alguien como “ Superman ” pero… que pasaría si se le hace creer que él tiene unos poderes ocultos y debe demostrarlo usando de capa el mantel de la mesa de la cocina y podrá entonces bajar planeando y volando desde el balcón de su departamento del décimo piso para sorprender a su esposa cuando baja del taxi.  Falso…  Relativo…  Verdadero… ¿Quién lo puede saber?

Ejemplos respecto de lo anterior se pueden tener por miles pero como no me importaba mucho lo que los demás pensaban me dediqué a observar los encantadores cuerpos desnudos de “ mis Caseras ” que acomodaron sus ropas y volvieron a sentarse en los lugares ordenados cerrando sus piernas para no mostrar sus intimidades que, en el caso de las chicas solamente un corto y fino vellón rubio denunciaba.

A María le dije que se sentara encima de mí, alabé su hermosura y expresé que apreciaba que estuviera toda “ peladita ” para darme gusto, a su vez, ella quería que supiera que ya sabía que no es de “ putas ” y que su cola me esperaba.  Me sonreí pasando una mano por toda su redondez y le dije que primero quería escuchar a los chicos.

• Luis, comenzá vos ,
• “ Yo no sé mucho señor sólo que con el Juan que era un compañero de la escuela, nos íbamos al monte a cazar y hablábamos de mis hermanas y de otra chica del pueblo que nos gustaba y se nos ponía dura, primero nos tocábamos solos y otro día él a mí y yo a él ”.
• ¿Estaban en el último grado? ,
• “ No señor, nos faltaban dos años porque allá se termina de más grande ”, -lo imaginaba porque los chicos trabajan en los cultivos y pierden días, meses o años de clase sin que nadie se “ caliente ” demasiado por esto-.
• Seguí ,
• “ Nos hacíamos terminar y enseguida seguíamos con ganas.  Un día me dijo que él sabía hacer algo mejor, me pidió que se la chupara, me enseñó a no rasparlo con los dientes y a tragarla lo más adentro que podía, después que terminó y me tomé la leche de él, me la chupó a mí y otro día lo hicimos los dos a la vez ”, estando invertidos uno arriba del otro.
• ¿Te gustaba?
• “ Y, sí, al principio era medio amarga la leche pero después era rica, igual que su pedacito duro que cuando estaba adentro me hacía sentir muy bien…  Un día me dijo que el Lucio que era un peón que ayudaba en la escuela le había enseñado como se “cogía” y él me enseñaba y me “cogía” y me decía que gritara ”.
• ¿Vos, qué hacías?
• “ La primera vez me dolió y cuando entró de golpe grité bastante, tampoco me gustó mucho y después me empezó a gustar pero el primer día el Juan no quiso que lo “cogiera” decía que estaba dolorido porque el Lucio al enseñarle le hacía doler con el “coso” más grande pero otro día lo “cogí” y decía que le gustaba más porque mi “coso” era más chiquito y no le dolía”.
• “Otro día me dijo que fuésemos a nuestro escondite porque el Lucio iba a venir para mostrarme como lo hacía con él y fuimos, lo esperamos pero no vino entonces yo me fui a mi casa y el Juan lo fue a buscar al Lucio a la escuela porque vivía al lado en un cuartito chiquito, para preguntarle porque no había venido y el Lucio lo “cogió” muy fuerte y lo hizo gritar, en ese momento apareció el papá de Juan que lo había ido a buscar porque Juan tardaba mucho y lo mató al Lucio de un montón de tiros y fue preso.  Después, al poco tiempo, no lo vi más al Juan porque se mudó con la madre ”.
• “ Como a la semana mi papá me empezó a llevar a una casa del pueblo para que fuera con mujeres y que no me hiciera “maricón” y para que no mirara a mis hermanas.  Íbamos con mujeres cada quince o veinte días pero mi mamá no tenía que enterarse ”.

¡Pobre Luis! , no pudo terminar bien su aprendizaje de puto, se quedó con un pie adentro y otro afuera del “armario” y para colmo la ignorancia de su padre lo obligaba a asumir una masculinidad forzada en base a putas de pueblo además, no estaba mal el “ pendejo ” y si yo hubiese estado un “ poquitito ” así de desviado ( para que la estupidez no se retobe ) o hubiese dudado de mi condición heterosexual, “ le entraba ”, a todo esto las tres mujeres miraban y escuchaban sin ver ni escuchar, algo que, en definitiva, era lo que pretendía.

• Ustedes tóquense, gocen todo lo que puedan y tengan orgasmos sin moverse de sus lugares , quería verlas y ver sus reacciones ante los orgasmos.

Continuará…

Por favor, si les gusta, valoren y comenten…

Gracias. GUILLEOS1**