Mas que amigos 6

Capitulo 6 de la serie Mas Que Amigos

Estuve toda la noche esperando la respuesta, una respuesta que nunca llego, me dije a mi mismo lo idiota que era, que qué había hecho, asi estuve toda la noche hasta que sonó el despertador y sin dormir nada me preparé para ir a clases.

Intentaba no coincidir con Raúl, ya que si me encontraba con él se me caería la cara de vergüenza, pasaron los días y lo poco que coincidíamos intentaba no mirarle e irme rápidamente, hasta que un dia que me fui el me alcanzo al momento.

-Creo que tenemos que hablar-me dijo cogiéndome del hombro.

-¿De qué?

-Del motivo de por qué me huyes y te debo una explicación.

-No para nada, no bajaste porque no te van los tíos y yo por lo que me dijiste me hice ideas…

-Pero yo quería bajar-me interrumpió-pero me vino a la cabeza que tenías novio y-se cayo

Mis ojos se iluminaron, quería bajar, hubiera bajado si no estuviera con Miguel.

-Si es verdad eso-le dije-te espero esta noche.

Me di la vuelta y volví con los chicos pero Raúl sí que se fue.

Al salir de clases nos fuimos a comer y Miguel dio la buena noticia de que salíamos juntos, de que estaba ya preparado para contarlo, Esther y José nos felicitaron y yo me quería morir. Al rato me fui al cine con Miguel, estábamos ya dentro de la sala pero no había nadie por que entramos de los primeros para intentar decirle algo.

-¿Aprovechamos que no hay nadie?-me dijo miguel tocándome el paquete con una mano.

-Miguel, ¿creo que tengo que decirte algo?-dije parándole.

Miguel me miro un poco preocupado.

-¿Hice algo mal?, ¿algo que te molestara?

-No-hice una pausa pensando en cómo dejarle sin hacerle daño-llevamos muy poco pero creo.

-No por favor-me dijo interrumpiéndome-no me dejes, ahora que me he confesado con todos.

-Pero es que creo que es lo mejor.

Entonces salió de la sala y yo intente seguirle pero como estaba ya un poco lleno el cine no pude cogerle, “maldita sea” pensé para mí, le mande un wasap a Raúl para decirle de dejar lo de esta noche para otro momento. Lo que desde desde el primer momento que le vi lo tenía que aplazar, llamaba a Miguel una y otra vez pero salía el buzón de voz asi que me cogí un taxi y me fui a su casa, allí toque en su casa y me abrió una mujer, su madre.

-Hola, ¿Esta Migue?

-Sí, está en su habitación, ¿Quieres que le llame?

-No-le dije-lléveme con él, soy su compañero de clase y le voy a dejar unos apuntes.

-Ok, sígueme.

Me llevo a la habitación le toco la puerta y Miguel al verme puso una cara de rabia que casi no pudo ocultar.

-Gracias mamá, déjanos solos que vamos a estudiar.

-Ok, ¿te quieres quedar a cenar?-me pregunto la madre.

-No gracias.

La madre de Miguel se fue y nos dejó solos.

-¿Qué haces aquí?-me pregunto Miguel dándome la espalda.

-Vengo a aclarar las cosas entre nosotros.

-Creo que lo has dejado bien claro

Entonces tuvimos una buena charla para aclarar las cosas.

-Espero que lo entiendas, nos apresuramos en hacernos novios, ¿no crees?

-Bueno viéndolo así, creo que si-hizo una pausa-¿Entonces no hay otro?

-En lo poco que llevamos no te he engañado.

-Pero podemos seguir viéndonos.

-Claro podemos ser follamigos.

Nos reímos los dos.

-O Más que amigos-me dijo y siguieron las risas.

Ya solucionado lo nuestro me quede un rato más charlando hasta que vi la hora, me llamó a un taxi y me fui a casa.

Pasaron los días y terminamos los exámenes y comenzaban las vacaciones de Navidad, en estos días me encerraba en casa o en la biblioteca para estudiar y solo veía a los chicos, menos a Raúl, en la facultad a él intentaba esquivarle pues me moriría de vergüenza después del mal entendido o lo que hubiera sido la señal que me pidió, di y nunca recibí respuesta, seguíamos en contacto por wassap en el grupo donde estamos y a veces coincidíamos en el edificio pero como estábamos de exámenes no quedábamos ni nada pero hoy que terminamos el ultimo haríamos una fiesta en el piso de Esther y José, seria nuestra cena de navidad.

En la fiesta estarían varios compañeros de clases, unas primas de Esther, ella, José, Miguel, Raúl y yo, después de varios días sin casi vernos y después del mensaje nos volveríamos a ver. Miguel se quedaría en mi casa para no ir después solo a la suya ya que el nuevo piso de los chicos quedaba cerca de mi edificio.

La fiesta comenzó cuando llegue con Miguel que paso por casa para dejar la ropa que se pondría mañana, sonaba La niña que llora  en tus fiestas de La Oreja De Van Gogh y estaba muy buena la fiesta comida, bebida y buena música. Como buena fiesta siempre había grupillos hablando Miguel se fue a charlar con unos compañeros de clases y yo me fui a la mesa  coger algo de comer y se me acerco Raúl que estaba charlando con Esther y una de sus primas.

-¿Qué tal?, hace días que no se te ve el pelo-me di poniéndose al lado mio.

-Bien-dije tajante y un poco enfadado recordando su no contestación a mi señal.

-Te veo enfadado-me dijo.

-Puede.

-A ver-me dijo poniéndome frente a él-si no baje fue por qué lo pensé bien y si hubiera bajado y hubiéramos hecho algo nos arrepentiríamos.

Sabía que tenía razón pero no quería aceptarlo, miraba a otro lado mientras comía y bebía haciendo como que no lo escuchaba.

-Te echo de menos-me dijo.

Le mire y vi que era sincero, entonces le abrace.

-Yo también.

La fiesta seguía, Raúl no paraba de beber ya que siempre se contenía por que le tocaba conducir pero en esta fiesta le quedaba tan cerca la casa que se pasó de copas y estaba borracho como una cuba , yo no me quedaba atrás pero al menos sabía dónde estaba y lo que hacía. Pasaron las horas y poco a poco la fiesta se iba acabando hasta que quedábamos los de siempre Raúl medio dormido en el sofá con un pedo bárbaro, Miguel durmiendo en el otro sofá y Esther, José y yo recogiendo un poco los restos de la fiesta.

-Va, déjalo, vete ya-me dijo Esther-nosotros terminamos.

-Si-dijo José quitándome el escobillón-vete y llévate a ese cerdo de aquí.

Miramos los tres a Raúl y estaba echando lo pota por enésima vez.

-Creo que si-dije ayudando a levantar a Raúl del sofá-voy a despertar a Miguel que se queda en mi casa.

-Déjalo aquí que ya está dormidito-dijo Esther.

Lo miré y lo vi dormidito que hasta me dio lastima despertarlo.

-Neta, tienes razón-le conteste.

Íbamos Raúl  y yo camino al edificio, lo llevaba casi cargando, joder lo que pesaba el jodío.

Ya casi estábamos subimos al ascensor.

-Donde tienes las llaves-le pregunte.

-Aquí-dijo señalando el bolsillo derecho del pantalón.

Metí la mano para sacarle la llave y note, al buscarlas el bulto de su polla, al sentirla pare un intante y antes de sacar la mano Raúl me la agarro por encima.

-¿Te gusta?-me dijo moviendo su mano encima de la mía y sentía que su polla crecía debajo del pantalón, nos estábamos mirando fijamente y el ascensor  llego al último piso y saque la mano rápidamente con las llaves.

-Estas borracho y no sabes lo que haces- Salí y lo cogí de la mano para dirigirnos a su casa.

Abrí la puerta  y entramos, casi se cae al suelo, lo fui a ayudar para llevarlo a su cuarto, ya dentro de la habitación él cerró la puerta  se acercó a mí.

-Por fin solos-y me beso.

-No, Raúl-dije separándome-estas borracho y no sabes lo que haces.

-No-me dijo cogiéndome de la cintura y acercándome a él-se perfectamente lo que hago y es esto.

Me quito la chaqueta que llevaba puesta y la camiseta, me besaba apasionadamente y nuestras lenguas luchaban dentro de nuestras bocas. Llego el momento tan esperado, el momento que soñé desde que lo vi por primera vez, ahora era yo quien le quite la chaqueta,  la camiseta y nos tumbamos en la cama, fui bajando por el cuello bajando por su pecho y llegue a sus abdominales, allí paré dándole besitos mientras le desabrochaba  los pantalones  se los baje y saque su polla. Iba a chuparla pero antes quería su consentimiento, quería que me lo pidiera y cuando subí para besarle se había quedado dormido, no me lo podía creer, yo con este calentón y ahí estaba el tirado en la cama y dormido.

-Nooo-dije tumbándome a su lado.

Le mire, que guapo se veía hasta durmiendo, le termine de desvestir y lo acomode en la cama, lo abrigue con las mantas y el nórdico y me iba a ir ¿Y por qué no me quedo con él?, tal vez cuando se despierte le apetezca, pensé, entonces me desnude y me metí en la cama con él, le bese en la boca y me dormí, a su lado deseando que al despertar  continuáramos lo que dejamos a la mitad.

CONTINUARÁ…

Espero os guste y perdonen la tardancia pero he tenido unas semanas moviditas. Y ya sabeis comentarios.