Más allá de una mirada *2*

-¿Disculpa la mesa de la esquina estará ocupada por toda la tarde?

Si nunca se han quedado sin palabras ante una mirada, el día que les ocurra entenderán como quede… Sus ojos verdes se clavaron en mí y no dejaba de mirarla aún con los platos en la mano.

Más allá de una mirada 2.

-S..i  Si.. Esa mesa estará ocupada – Pienso nuevamente que dije - ¡Perdón! No ellos se van ahorita.

Ella solo me miraba un poco confundida y alzo su hermosa ceja

-¿Estará o no ocupada?

Yo solo la mirada se veía tan tierna viéndome, provoca besarla ahí mismo y me arriesgue, me acerque rápidamente iba a darle un beso ¡Que iba a perder!

-¡EMILYYY EMILYYY! Despierta mujer, tú nunca te das cuenta cuando te quedas dormida, atienda la mesa 3

Soñé con ella dios, y en la mejor parte vienen, me despiertan. Mejor suerte no puedo tener.

Sacudo un poco mi cabeza para despertarme, me amarro una cola y mira hacia la mesa 14 y allí la veo, tan linda con una falda rosada, una camisa blanca que le llega a los hombros, su cabello recogido, oh que perfecta se ve.

Mientras atiendo a mis otros clientes, no la pierdo de vista, está sumamente concentrada en el libro, a veces pienso que debería disimular un poco al verla, pero no me gusta dejar de verla aunque sea por unas horas, pero recordándolo bien no vi cuando llego por estar soñando con ella, debería dormir bien en las noches se está haciendo costumbre esto de dormirme.

Veo que alguien va a atenderla, una de mis compañeras y responde cortamente, epa epa, veo que un chamo se le acerca ¿Quién será el? Nunca lo había visto ni mucho menos acercársele

Ella la veo un poco desinteresada, eso me gusta, le responde con cortas palabras a él lo veo muy insistente, pero mi chica (Ojala fuera mi chica) Se levanta y busca a alguien hasta que  ¡Me ve a mi! ¡Ahora si no sueño! ¡Mierda mierda trabaja Emily! ¡Viene para acá! ¿y Ahora?

-Disculpa – awwww su voz es lo más bello que haya podido escuchar es tan suave- es que el joven de allá me está interrumpiéndome a ver si podrían hacer algo o voy a tener que retirarme.

-Dii..sculpe la molestia, yo misma me ocupare.

¿Más o menos que voy a hacer? Nose pero esta  es tu oportunidad de ganar puntos con tu chica.

-Ehh joven podría dejar de molestar a la señorita de allá.

-¿Quién me lo impide tu?

Es bastante falta de respeto el niño este vale.

-Puedo llamar al jefe por estar molestando a un cliente.

-Llámalo, a tu jefe no le debe importar si entre clientes se hablan.

-Por supuesto que no, pero cuando uno de ellos se quejan sí.

¡Mantenle la mirada Emily! ¡Que vea que eres ruda mira que tu chica te está viendo!

-Déjalo así, ya yo me voy.. No es la única chica de esta ciudad.

-Gracias por venir.

Me volteo y la veo viéndome, que bella se ve y yo que me pierdo en sus ojos.

-Ya está listo, disculpe la molestia.

-Oh gracias, me molesta que me interrumpan mientras leo.

¡Sonríe sonríe! ¡Te sonríe! Sus ojos brillan..

-De nada, para eso estamos – decido agarrar camino y seguir haciendo lo de antes-

-Hey espera, trabajas aquí y no te había visto.. ¿Nunca me has atendido no?

¡Oh yo sabía que nunca me había visto!

-No que recuerde, tal vez si y no recuerdo.

-No creo, yo siempre recuerdo bien una cara – dijo ya un poco fastidiada – Bueno seguiré leyendo un rato, gracias de nuevo.

Y ese día se fue, me dijo un lindo “chao y gracias” esa noche dormí feliz, se podrán imaginar, pasaron 3 días y todo normal yo la veía leer y leer , solo intercambiábamos pocas miradas pero que para mi eran encantadoras. Un día me pidió que la atendiera a mi no me quedo de otra.

-Este libro es hermoso – decía mientras mantenía su vista en el libro-

-¿Cómo se llama?

-El vino del estío.

-Ah yo muy poco leo.

-Deberias, es muy bueno algunas historias te llevan y teletransportan a lo desconocido, a otro mundo y es simplemente genial sentirse dentro de una historia, además leer es muy instructivo aprendes mucho.

-Oh, tendría que recomendarme algunos aparte con el trabajo poco tiempo me da de leer.

-En la noche es muy relajador solo que yo de noche no puedo por eso lo hago en la tarde.

-¿Por qué?

-Por asuntos personales.

-Entiendo, disculpe por entrometerme.

-No no para nada no hay problema.

-¡Hey y que va a pedir por fin!

-Cierto lo había olvidado,  solo tráeme un jugo de naranja.

-Ok ya se lo traigo.

Le lleve su jugo al rato y me alejo a seguir atendiendo y me detiene.

-Disculpa si te fastidio mucho como estas trabajando pero si quieres luego puedo llevarte a la biblioteca y te recomiendo algunos libros.

-Ah bueno no hay problema, por mi encantada, sería el fin de semana que es mi turno.

-Ayyy pero este sábado no puedo, tengo una cita -Ouuch, me puse triste por dentro, pero claro muchos deben invitarla a salir – Pero el domingo al medio día si puedo.

-Entonces no hay mas que hablar, nos vemos allá en la entrada.

-Pero espera… de nuevo jajajaja – Awww su risa que bella - ¿Tu nombre cual es?

-Ah, cierto Emily mucho gusto y el tuyo?

-Nicolle – Dijo mientras me sonrió – Nose porque, pero me pareces muy agradable.

-Jajaja gracias, bueno me tengo que ir.

-Dale Emily, cuídate nos vemos.

¿Gracias? ¿Gracias? Ah dios Emily, ella te dice y no pudiste decir, ah tú también me pareces agradable o simpática no, sino gracias.

Llego el domingo en la mañana, me desperté y al fin era el día para ver a la chica bonita y me pare, me bañe y todo listo para verla pero aun faltaba dos horas… No importa me fui a la biblioteca prefiero ser puntual además veo por allí que me interesa para leer.

Ente los pasillos de la biblioteca veo libros de todo, hasta de cultura y cocina como de historia e infantiles… Vi un libro que de chiquita me gusto mucho el Principito, sin duda muy bello… Me propuse a comprarlo cuando una voz ya conocida me detiene.

-Con que el principito eh?

-¡ME ASUSTASTE!

-Jajaja lo siento Emily.

-No te preocupes Nicolle, si claro el principito de mis favoritos.

-Pero me dijiste que no te gustaba leer.

-No, yo te fue que no podía leer por tiempo y porque trabajo mucho, además este cuento siempre me lo leía mi madre en las noches.

• De mi infancia me acuerdo de Los tres cochinitos y Caperucita Roja.

-Oye si esos son buenos.

Y así pasamos muchas horas hablando de libros y resulta que conocí mucho de ella.. Vive con su Tía, su mamá murió hace 3 años y aun le dolía y por eso lee, porque la libera y la mantiene cerca de ella ya que a su mama le gustaba mucho leer… Y su papá se desapareció hace muchos años y tampoco ha necesitado nada de él.

• Algún día tendrías que visitar mi casa y veas la gran biblioteca que tengo por mi mamá.

-Jajaja por mí encantada,  solo que el trabajo me ocupa mucho tiempo.

• y ¿No estudias? ¿Alguna carrera?

-Sí, bueno yo estudie Fotografía pero eso aquí no da mucho entonces tengo que buscar trabajo para sobrevivir jajaja por así decirlo.

-Ah entonces sabes de fotografía me deberías enseñar.

• Si señorita fotografía y pintura… Me gusta pintar y muy bien.

-Entonces me tienes que hacer un cuadro también.

• Jajaja caramba te voy a empezar a cobrar.

• Yo te pago entonces.

• No mentira, a ti no te cobraría.

-¿Por qué no?

• Porque me caes muy bien. – Le dije guiñando el ojo- Pero tranquila algún dia saldré a otro país y lo hare seré de las mejores fotógrafas o pintoras, pienso que cuando a uno le apasiona algo lo logra y siempre creo en mis sueños.

-Y que sueños tienes cuéntame.

• Ir a trabajar y vivir a Inglaterra.

• Ohhh me llevas entonces.

-Jajaja por mi encantada.

Y así paso mi día con ella en la biblioteca, y mis domingos se convirtieron en nuestros confidentes, siempre nos encontrábamos allí, hablábamos, leíamos algunos libros y de momentos intercambiamos miradas y sonreíamos… 2 meses y medio paso así y cada vez me siento más cerca de ella, la invite a mi casa un domingo le enseñe de mis fotografías y le gustaron, le pareció muy profesional…

-Estas fotos son maravillosas.

-¿Quién las toma pues?

-Jajaja no no, no te agrandes que después caerás.

• Mientras te gusten a ti bien.

-En serio que si, son muy buenas para tenerlas en una gaveta escondidas, la gente el mundo debe verlas..

-Pronto y poco a poco.. El mundo lo dirá.

-Jajaja a veces hay que ayudar un poco a ese mundo no?

-No tengo apuro, disfruto el ahora.

Y así era disfrutaba cada momento con ella, pero me gustaría poder verla más seguido… Ya no va por las tardes a leer a la cafetería, siempre la veo un poco más flaca y me dice echando broma que está haciendo dieta… Un domingo no apareció no estuvo allí, me preocupo, la llame a su celular no contesto y me pareció raro… Paso una semana que no supe nada de ella, la llamaba y no contestaba… Un día en la cafetería entro un señor muy elegantemente vestido, le pregunto algo a una de mis compañeras y voltearon a mí y ella me señalo, enseguida el señor se dirigió a mí.

¿Usted es Emily Sáenz?

Lo siento por tardar tanto, digamos que mi imaginación estaba muyyyy corta, y bueno aquí está la continuación espero les guste y pronto la siguiente parte.