Marta me la chupó en mi cuarto
La primera vez que Marta me la chupo, sin poder hacer ruido en mi cuarto ya que nadie supo que estaba en mi cama.
Hola a todos
Este relato es la continuación que les prometí sobre la relación con mi amiga Marta.
Habían pasado ya dos semanas de la cogida que nos habíamos dado y muy a menudo recordaba a Marta aunque no me había atrevido a llamarla hasta que ella me llamo y me pidió que la ayudara a terminar un trabajo de la escuela. Quedamos que estaría en mi casa a las 5 de la tarde y yo me encontraba bastante nervioso por su llegada. Por fin dieron las 5:00 pm y Marta apareció, me saludo muy normal y la pase hasta mi cuarto ya que no había nadie en mi casa, estuvimos platicando un buen rato y me enseño el trabajo que tenia que hacer, fuimos a la papelería por unas copias y yo le pregunte si no quería tomar una cerveza a lo que ella acepto.
Estuvimos platicando un buen rato hasta que vi la hora y eran ya las 9:00 de la noche, un amigo me llamo para invitarme a su casa a tomar unos tragos y le pregunte a Marta si quería ir, ella me dijo que tenia que avisar, llamo a su casa y me dijo vamos, para esto ya estaban mis papas y mis hermanos en casa, les avise que regresaba mas tarde y nos fuimos a divertir un buen rato.
Estuvimos con mis amigos hasta las 2 de la mañana y Marta ya estaba un poco alegre ya que habíamos tomado algunas cervezas, me dijo que era hora de irse ya que tenia que ver a su novio al día siguiente por lo que salimos de la casa.
En ese momento yo tenia toda la intención de manosearla y cojermela pero no llevaba dinero para llevarla a un hotel, ella me pedía que la llevara a su casa pero como esta muy lejos le pedí que se quedara en mi casa.
Sin poner mucha resistencia me dijo que si y la metí hasta mi cuarto sin que nadie se diera cuenta ya que en mi casa estaban todos dormidos.
Ella llego, se quito los zapatos y se acostó en mi cama, yo me acosté junto a ella cerrando antes la puerta de mi cuarto y nos dispusimos a dormir a lo que de pronto la abrase y comenzamos a besarnos, la puse arriba de mi y manoseaba su hermoso culo, ella se quito la camisa y me pidió que le mordiera los pezones, todo esto lo hacíamos sin hacer ruido ya que los cuartos están bastante pegados.
Ella se dejaba tocar y yo tenia muchísimas ganas de penetrarla pero no me atreví ya que no tenia condones. Estuvimos calentándonos mucho tiempo, y se movía sobre mi verga como si me estuviera cogiendo, apretaba sus tetas y me saco la camisa. Yo le quite las medias y los calzones para masturbarla con mis dedos a lo que ella respondía con unos gemiditos muy sexis. La volví a acostar en la cama, mordí sus tetas, le bese el estomago, le bese todo el culo y en ocasiones metía un dedo en su culo a lo que a veces me retiraba la mano y me pedía que los metiera en su puchita.
Solo de verla sentí que me iba venir hasta que no pude mas, me pare junto a la cama y le dije que quería que me la mamara. Ella me miro sorprendida y me comenzó a besar el estomago.
Yo estaba acostumbrado a la forma de mamar de mi novia anterior, nunca me habían masturbado tan rico como lo hizo Marta esa noche.
Primero se sentó de espaldas a mi en la cama y me pidió que pusiera mi verga en su espalda, mientras yo estaba de pie la obedecí y se la pasaba por sus hombros, después por su oreja, hasta que se volteo y comenzó a morderla muy despacio, abría la boca, me mordía despacio y de pronto la metía hasta lo mas hondo que podía, era una sensación increíble ver su cara dirigida hacia mi con una mirada totalmente caliente tragándose mi verga mientras que con sus dos manos masajeaba lentamente mis huevos, a veces bajaba su boca hasta mis huevos y los chupaba muy rico.
De pronto tomo mi verga en su mano y comenzó a frotarla rápidamente, yo gemía de placer y le indique que mi leche ya venia a lo que ella acerco mas su boca y tuve un orgasmo increíble que nunca había experimentado ya que solo en una ocasión había logrado convencer a mi novia de venirme en su boca porque no le gustaba el semen, mientras Marta me decía que le encantaba y solo podía ver su cara llena de mi leche escurriéndole hasta las tetas.
Después me acosté y seguí masturbándola, le metía tres dedos y adentro de su puchita trataba de abrirlos a lo que ella respondía con mas gemidos, subía su cadera y movía las nalgas como si me la estuviera cogiendo hasta que gimió mas fuerte y me dijo que parara.
En ese momento me abrazo y me pidió la hora, eran ya las 5:30 de la mañana, era hora de irse, se paro se vistió, la acompañe a tomar un camión y me dijo que me llamaría en cuanto pudiera.
Esta fue la primera vez que Marta se trago mi verga, fue una sensación totalmente diferente a lo que yo conocia y solo de recordarlo mi verga tiene ganas de ser masturbada tan rico como en esas ocasiones.
No volví a ver Marta hasta unas semanas después en donde volvimos a tener relaciones, esa vez lleve condones y prometo contarles como fue la cogida que me regalo.
Prometo escribir muy pronto y espero les haya gustado
Saludos a todos