Marixa y Mar

Mientras las dos le chupabamos la pija a Angel Diego nos levanto el vestido y comenzo a chuparnos el culo.

Marixa y Eva

Conocía a Eva desde hacía mucho tiempo, ella es una chica joven de 23 años, de pelo largo moreno, de pechos medianos y muy hermosa. Las dos tenemos pareja y siempre habíamos comentado en broma que a ella le gustaba mi compañero y a mi el suyo. Ella es casi más liberal que yo y siempre que puede saca el tema del sexo en sus conversaciones y aprovecha para hacerme comentarios en broma sobre hacer intercambio de parejas, sin embargo, yo no le hago mucho caso.

Hoy volvió a hacerme la misma proposición y por supuesto yo no me la he tome en serio, le he contestado que mi compañero no lo admitiría. Sin embargo ella ha insistido y me ha propuesto una solución: Podríamos quedar a cenar en mi casa o en la suya los cuatro y luego ya veríamos como evoluciona la situación, todo sin compromiso. A mí me pareció bien y la invité el fin de semana. Yo me habia vestido como le gustaba a Angel, un mini con medias negras y botas y una remerita muy sexy transparente. Cuando abrí la puerta el sábado, me quedé asombrada, Eva llevaba un vestido súper ajustado que marcaba su figura y hacía que sus pechos aparecieran aún más grandes y para rematarlo su escote era tan grande que casi podía verse su ombligo. Salude a Diego, su compañero, que llevaba un traje de chaqueta y que estaba realmente atractivo, y los hice pasar al salón, allí le presenté a Angel, mi compañero, pues él y Diego nunca habían coincidido y no se conocían.

Mi compañero no apartó la mirada de los pechos de va durante toda la cena y Diego no dejó de mirarme a mi, que aunque no llevaba un vestido tan ajustado como el de mi compañera, mi remerita dejaba entrever mis duros pezones. Durante la cena hablamos de todo, y al final terminamos hablando de sexo, la cosa subió tanto de tono que yo llegué a estar totalmente mojada, tanto que tuve que acariciarme por debajo de la mesa, cosa que creo que también hizo Eva. Terminada la cena yo me levanté para recoger la mesa pues necesitaba calmar mi calentura, pero mi sorpresa fue que Diego se ofreció para ayudarme. Al entrar en la cocina yo fui a dejar los platos en el fregadero y sentí como él se acercaba a mi espalda, me abrazaba y comenzaba a besarme el cuello y tocarme los pechos. En otra situación no lo hubiera permitido, pero me gustaba tanto y estaba tan caliente que le dejé hacer. Me apartó a un rincón de la cocina y allí nos besamos introduciendo nuestras lenguas en la boca. El me agarró por el pelo y haciendo fuerza me hizo ponerme de rodillas delante de él, con su otra mano bajó la cremallera de su pantalón y sacó su enorme pija que comenzó a pasar por mis labios con la intención, por supuesto, de que lo chupara. Yo nunca había hecho eso, aunque lo había visto hacer en las películas y no debía ser muy difícil. No tuvo que insistir mucho, abrí mi boca y la introduje entera, le hice la mejor de las mamadas que yo podía hacer y a él pareció gustarle porque al poco tiempo descargó su leche espesa en mi cara y boca.

Me levanté y limpie mi cara con una servilleta y salimos fuera de la cocina como si nada hubiera pasado. Al llegar al comedor me encontré con lo que menos me esperaba, Eva estaba de rodillas haciéndole una mamada a mi compañero Angel. Diego no pareció sorprendido, pero yo sí. Nos quedamos un instante contemplando la escena sin que ellos se percataran de nuestra presencia. Eva de rodillas lamía y recorría con su lengua la pija de Angel, mientras él agarraba su cabeza haciendo un movimiento como si estuviera penetrándola. Cuando reaccioné hice lo único que me pareció correcto, me arrodillé y comencé a chupar la pija de mi compañero compartiéndola con Eva. Ella al verme me besó, fue un beso húmedo por la cantidad de saliva que tenía en su boca después de chupar la pija de Angel. Diego se agachó a nuestras espaldas y nos levantó el vestido hasta la cintura a las dos. Eva no llevaba bombachita pero yo si, aunque eso no fue un impedimento puesto que mi tanguita negra fue quitada de inmediato con mi ayuda. Diego comenzó a chuparnos la concha y el culo a las dos, nunca había sentido nada igual, era la primera vez que sentía una lengua en mis partes más íntimas. Eva y yo chupábamos la pija de Angel al unísono y un reguero de saliva caía por su dura pija hasta sus huevos.

Cuando Diego nos hubo humedecido bien a las dos, agarró su pija y me la clavó hasta los huevos en mi cocha. Comenzó a bombearme con fuerza y yo creí morirme de gusto. No sé si por nuestra mamada o por la imagen de verme penetrada por otro hombre pero Angel no aguantó más y se corrió en nuestras caras llenándonos de su cálido esperma, nunca había visto a mi compañero soltar tanta leche. Después de su descarga, mi compañero se retiró a una silla para seguir observando la escena, mientras Eva se colocó delante de mí con sus piernas abiertas al máximo y con la intención, supongo, de que le comiera su preciosa concha. En esta situación y con un chonchita tan linda y limpia no pude evitar la tentación y me lancé a chuparla con ganas. Su sabor era estupendo y su olor embriagador, yo estaba en éxtasis, solo chupaba y chupaba mientras recibía embestidas de Diego con gran fuerza que me producían orgasmo tras orgasmo.

Mi compañero contemplaba la escena sentado esperando a que su pene se recuperara, cosa que ocurrió rápidamente. Cuando su pija estuvo bien dura se levantó y fue a por Eva que viéndolo le ofreció todo su culo colocándose a cuatro patas. Angel colocó la cabeza de su pija en la entrada del culo de Eva y despacio pero con fuerza comenzó a metérsela, se veía que Eva era toda una experta que lo había probado todo porque la pija entró sin ninguna dificultad en su trasero. Ella estaba frente a mi y a cada embestida de nuestros amigos aprovechábamos para besarnos. Diego sacó su pija de mi conchita e intentó meterla en mi ano, me hizo mucho daño y grité. El apartó su pija de mi trasero e hizo intención de volver a meterla en mi coño: - ¿Qué haces? - Pregunté yo - ¡Métemela en el culo!, ¡Vamos!, ¡Métela!.... El volvió a intentarlo y con gran dolor consiguió que fuera entrando centímetro a centímetro.

-Eso es sigue...ayyyy...empuja..¡¡¡Métela!!!..no te pares!!...¡¡¡cojeme!!..aaahhhh... Yo gritaba casi sin control. Mi compañero cojia sin dificultad a Eva que a veces me miraba y me sonreía con picardía. Eva se levantó y se acerco a mi, "ven, colócate boca arriba" me dijo. Yo la obedecí sacando la pija de Diego de mi culo dolorido. Ella se colocó encima mía formando un 69. En esta posición Diego me penetró por mi conchita mientras Eva lamía la pija de su compañero y mi concha cada vez que entraba y salía. Angel por su parte se la metió a Eva en su coñito mientras yo chupaba su pija y el la concha de mi amiga. - Cuando vayan a acabar avisenme no quiero que se pierda su lechita - dijo Eva a los dos hombres. Después de unos minutos de cojer, Angel estaba ya apunto y avisó a Eva:- Voy a Acabar...Eva...ya ¡date prisa..! - Ella se levantó y fue a la mesa, cogió un plato y lo acercó a la pija de Angel, él se corrió sobre el plato llenándolo con su espesa leche. A continuación Diego se acercó a su mujer y ella colocó el plato debajo de su pene que empezó a disparar grandes chorros de esperma sobre el plato mezclándose con el que había soltado mi compañero. Cuando acabó Eva colocó el plato en el suelo y me lo ofreció, lo entendí enseguida y me puse muy caliente. Me lance sobre el cómo una gatita con hambre y empecé a lamer el contenido del plato. Ella se unió a mí y entre las dos lamimos hasta la última gota de semen que había en el. Nuestras bocas y lenguas se juntaban en el plato entre un baño de esperma que mojaba nuestros labios y cara.

Que calentura por dios, los chicos nos miraban como nos besabamos apasionadamente, Eva acariciaba mis tetas y chupaba mis pezones mientras su dedo entraba y salia de mi concha que placer por dios, ellos ya estaban al palo nuevamente y se pajeaban mientas miraban la escena...

Eva me levanto y me llevo a la cama donde Angel estaba acostado con la pija dura nuevamente me hizo subir arriba de el y su pija me entro hasta los huevos mientras me metia su dedito en el culo. Eva mientras tanto le chupaba la pija a Diego y luego lo besaba en la boca y me dce ahora diego te la va a meter en el culo asi vas a tener dos pijas para vos solita....

Yo supe que era mi momento lo que tanto ansiaba por fin se concretaba, Diego subio a la cama y me metio la pija en el culo hasta los huevos que placer esas dos pijas que me cojian a la vez yo besaba en la boca a Angel y a Eva mientras Diego mordia mi espalda y pellizcaba mis pezones, Eva me besaba y me chupaba las tetas mientras Angel y Diego me cojian sin parar...ahora cambiamos Diego me empieza a cojer por la conchita y Angel me hace la cola y yo gimo y me retuerzo sin parar y gritando les digo cuando acaben quiero la leche de los dos en la boca de Eva y la mia.

Nos arrodillamos y se las chupamos por turnos Eva lame la pija de Angel como poseida y yo la de Diego ellos agarran nuestras cabeza y las juntas para q nos besemos y en cada sacada y entrada de lengua la pija de ellos toca nuestras bocas y de repente los dos explotan llenadonos de leche la boca que con Eva tragamos mientras nos besamos...