María Jesús (12)

Mi cuello sintió esos besos, mis hombros, mi cuello, mis senos, mis labios, mis ojos, mis labios, mis senos, mis senos, mis senos…..ahhhhhhh hhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh

María Jesús XII

Mucho tiempo ha pasado ya desde el viaje de Daniel a Francia. Ha venido sólo para verme en ciertas ocasiones. Sin embargo, y pese a mi vida, me hace falta. Esa primera vez en que me dijo que me amaba, esa primera vez, luego de su retorno, en que sentí mi necesidad de el y el me entregó todo su ser. Pero seguía lejos. Lyon. Un punto distante del mapa de acuerdo a donde me encuentro. Lejos. Y tan cerca de su vez. Sentir su agitada respiración a través del teléfono, su voz. Leer sus correos, abrir sus cartas. Recibir y abrir sus regalos. Recibir flores con tarjetas llenas de ternura…..me hacen recordarlo siempre y enternecerme con el.

En María Jesús VII inicié mi relato con respecto a él. Ya Juan y los demás quedaron en la historia de mi vida…como quedan todos los recuerdos. Algunos gratos otros no. Mis idas y venidas a Santa María se hacían más lejanas…al menos para los juegos de naipes. Mis amigos seguían siéndolo, unos cuántos, pese a tener muchísimos conocidos….algunos de ellos con licencia para todo dentro de mi vida. Gabriela y yo nos convertimos en inseparables. Ella seguía "viendo" a Toledo. Yo dejé esos jueguitos para otros más reales.

Mi hija ya es profesional. Jorge, luego de graduarse, aceptó las condiciones de trabajo que su padre le imponía. Al final el beneficiado sería el y toda su familia. Ingresó a una de las empresas de Mufa haciéndose cargo de los sistemas de vigilancia y limpieza. Las oficinas están ahora más limpias que de costumbre…brillando…y se han implementado medidas nuevas de seguridad. Parece ser que intenta crear su propio servicio interno de seguridad para lo que tiene que tratar con miembros del Ministerio correspondiente. Eso lo está haciendo conocido en el medio. Según Mufa, en uno de nuestros habituales encuentros, tiene pasta para ser gerente….pero en su momento. No desea apresurar las cosas y prefiere que aprenda de todo en la empresa antes de darle más responsabilidades mayores. Mi hija abrió una Boutique en Miraflores con la ayuda de su suegro. Sin embargo no la administra. Solo la supervisa. Dejó al frente a una amiga de ella graduada en administración. Ella prefirió crear su empresa. Ahora se siente feliz con ambas.

Les contaré más de mi Daniel. Mío por derecho propio, por las leyes del tiempo, de la ternura y del amor.

La mañana estaba como todas….llena de vida para mí…llena de flores en mi jardín…llena de esperanzas. No así la capital, Lima, que solía estar como se convirtiera hace muchos años….gris. Así como su gobierno. Ese día fui al gimnasio como todos los martes. La entrenadora estaba como siempre. Radiante, bella y con ganas de saltar. Lo hicimos. Una hora después pasaba a la pileta del gimnasio a darme un chapuzón luego de la rutinaria ducha fría antes de pisar la pileta. Una vuelta, dos, tres…estaba deliciosa el agua y mi estilo perfecto.

"Maria Jesús", sonó en los parlantes, agradeceremos se acerque a recepción.

Era yo. Salí un momento dejando las caricias del agua. El teléfono estaba cerca de mi butaca. Levanté el fono.

"Hola. Creo que me estaban perifoneando. Soy María Jesús".

"Ah, si señora", dijo la empleada. "Es que hemos recibido unas flores y una nota para usted. Las tenemos acá en recepción."

"Flores? Tiene algún nombre visible", pregunté

"No señora. La tarjeta sólo dice su nombre".

"Ok, antes de salir paso por ahí, gracias".

Seguí con mi rutina de diez piscinas…ida y vuelta… Delicioso. Al salir la empleada me trajo un ramo de flores rojas exquisitamente adornadas…y la tarjeta. Ese fue un día que no olvidaré jamás

"Amor mió: Dejé que tu cuerpo retozara como un ángel. Llegué temprano a la capital. Estaré una semana preparando algunas cosas de las que comentaré luego. Estoy en mi Depa. Llámame.

Besos

D"

Mi cuerpo sintió un escalofrió delicioso. "Siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii", grité. La gente me veía con ojos raros. No me importaba nada en esos momentos.

Subí al auto y me dirigí a San Isidro. La mañana gris se tornó radiante. El sol que no aparecía nunca en esa temporada me acompañó durante todo mi recorrido.

Aparqué en la cochera y subí en el ascensor. Toqué el timbre. El rostro que vi estaba perfecto…..hermoso.

"Hola", dije sin dejar de mirarlo. Mi susurro salió sin fuerza. Mi sonrisa ocultaba mis deseos de arrojarme a sus brazos.

"Cómo está mi sirena?, dijo. "Espero no haberte sacado de tu rutina".

Me tomó de los brazos introduciéndome al departamento. Acercó su rostro al mío y me besó. La cabeza empezó a darme vueltas. Sentía que las nubes se convertían en manos enormes y nos jalaban con suavidad a ellas. La calidez de todo su cuerpo me envolvió. El beso duró toda una eternidad….. Cuando abrí los ojos Daniel me miraba. Vio los míos llenarse de lagrimas que no querían salir…besó cada uno de ellos. Secó mi humedad con sus labios…. Y recostó mi cabeza en su hombro abrazándome tiernamente.

"No se si sueño o no. Hace tanto tiempo he deseado que vinieras. Me has hecho falta en todo sentido. Ahora te veo y me siento sorprendida de mi misma. A qué hora llegaste?", preguntas, preguntas y más preguntas.

El resto de la mañana la pasamos conversando como adolescentes. Bajamos al Parque El Olivar, me tomó de la mano y el tiempo se detuvo….no sentía nada más que su voz….vi a un ave en el aire. Parecía detenida con sus alas extendidas…pero en pleno aire. Los pocos peatones detuvieron su andar para dejar pasar a mis sentimientos… Horas maravillosas, horas que llegaron muy dentro de mí.

"… así que ahora estoy acá, a tu lado, con una cara de felicidad que trasciende todo….", continuó

Sus ojos radiaban alegría, su voz me pareció el canto de los ángeles, su mano me transmitía paz, tranquilidad…me arropaba con calidez.

"… pero tengo un poco de hambre ahora. Deseas acompañarme?.....", preguntó

Yo seguía embobada con tanto encanto. Me sentía más viva. Más…….

"Mari?", inquirió. "Pasa algo".

"Eh?.....No, no…..sigue por favor…."

"Te pregunté si deseabas acompañarme a almorzar", sonrió.

"Claro que si! Estoy feliz de que estés acá. Iré donde desees ir."

Almorzamos comida peruana. Deseaba retomar un poco esos sabores. Cebiche, Chupe de camarones, arroz con mariscos, Pisco Sour como aperitivo, cerveza Cuzqueña como acompañamiento para el almuerzo….no postres….noooooo dulces. No le gustaba mucho y a mi me pareció encantador. Salimos del restaurante sin rumbo fijo. Solo caminar tomados de la mano. Sin otro sonido que aquel de su voz y mi corazón latiendo. Miraflores y sus malecones. Picaflores….ellos no necesitan sonidos…son hermosos y llenos de todo lo increíble de la vida.

"Te amo Mari", escuche…..como si se pudiera escuchar el aleteo del picaflor…."Te amo, te amo"…..repetía ese aleteo en mis oídos. Se llenó de dicha mi alma toda cuando el último "Te amo Mari" me dio de lleno en la cara y abrió mis ojos al máximo.

"Daniel, estoy en las nubes", atine a decir.

"No digas nada Mari, sólo escúchame. Te amo desde hace mucho, creo que desde aquel día en clases en que me acerque a ti y sentí tu cuerpo vibrar y llenarse tu rostro de color rosa hermoso. No dude de mi sentir ni un minuto y he respetado tu vida toda siempre. Se que eres la mujer que desearía cualquier hombre…sin embargo me siento dichoso de tenerte a mi lado en estos momentos….solo para mi. Quería decírtelo nuevamente, personalmente, quería que tus oídos supieran por mi lo que siento."

"Daniel, mi Daniel", dije. "Me siento como una joven con su primera declaración de amor. Llena de dicha….tanta que no se como responderte….Solo espero que mi rostro te diga lo que siento en estos momentos."

Me miró…. Y me besó en los labios. Por Dios, que beso! Nuevamente las nubes me envolvieron y me alzaron en sus brazos. Caminamos de vuelta al auto conversando. Ahora de nosotros…solo de nosotros.

Llegamos al departamento y Daniel se disculpó un momento. Lo había aceptado como pareja. Era increíble. Feliz es una palabra que no indica lo que sentí en esos momentos. Estaba llena de dicha. Encendí el televisor, lo apague al ver….las sonseras…que suelen pasar por ahí. Busque un CD y seleccioné a Mozart. Su música inundó el interior de la estancia. Baje el volumen un poco….solo para nuestras almas. Lo vi. Vestía traje azul oscuro perfectamente planchado. Camisa blanca, corbata de rayas azules. Perfecto a mi vista.

"Debo llevarte a casa amor,", dijo. "Te invito a casa de unos amigos y desearía los deslumbres con tu belleza".

"Noche de gala?, pregunté

"Algo así. Es la casa del embajador de Francia. Me invitó a una reunión esta noche. Además de que tengo que darle algunos recados de su familia".

Me tomó de la mano e hizo que me sentara en el sofá. Sacó de su traje unas llaves y me las dio.

"Me has hecho el hombre más feliz del mundo con tu respuesta amor. Sabías que mi ser todo lo intuía? Pues si. Sabía de tu amor por mi así como dejé en tu ser el mío. Mejor aún, no sólo deseo verte ahora sino que deseo tenerte a mi lado siempre." Mi corazón empezó a latir a ritmo acelerado. "Por el momento no me es posible definir como será nuestro futuro. Sin embargo me encantaría que a partir de ahora seas parte del mío…así como espero serlo del tuyo. Saque duplicado de las llaves de este departamento. Es nuestro a partir de ahora y tienes el derecho de hacer uso de él cuantas veces quieras. Yo regresaré a Lyon en una semana y arreglaré algunas cosas ahí antes de informarte lo que podríamos hacer. Sabes que no tengo a nadie ahora a mi lado…te haré feliz". Y tomándome de la cintura me besó.

Fuimos a casa a cambiarme. Me puse la ropa adecuada para esa reunión y salimos. La gente que acudió a la casa del embajador de Francia se veía muy alegre y era conversadora. Eso me gustó mucho por que yo soy lo mismo en muchos aspectos. Daniel entabló una larga conversación con el embajador mientras yo lo hacía con su esposa. Mi francés en esa época no era como el de ahora así que fue una increíblemente buena práctica para mí. A las 23:00 horas nos despedimos. Las bebidas estuvieron deliciosas así como aquellos bocadillos. Daniel me besó en el auto. Sonrió y me dijo:

"Gracias. Estuviste maravillosa. Encantaste a todo el mundo en la sala. Los ojos de los caballeros no paraban de verte…y menos aún los de sus acompañantes."

"No seas gracioso", dije. "No di motivos para que me miraran.

"No tienes que darles motivo. Tu sola belleza es motivo para que se despierten los ánimos ocultos de muchos.", respondió sonriendo y volviendo a besarme. "Eres maravillosa".

"Vamos a casa", dije.

"A la tuya?"

"Pues si. Pero es tuya a partir de ahora". Lo miré y lo besé. La noche se veía maravillosa el frío se escondía a nuestro paso.

Estacionó el vehículo al lado del mío. Antes de cerrar la puerta salió a la vereda y miró a todo lado. Seguro de que estaba todo bien ingresó y cerró el portón de la cochera. Las luces de los corredores ya se habían encendido, como todos los días a horas prefijadas, caminamos hacía la cocina.

"Deseas un té o algo para tomar?

"No gracias amor", dijo acercándose, Pero si desearía un beso tuyo." Me tomó de la cintura y me besó.

Sentía ese beso dentro de mi alma. Mi cuerpo ya no sentía frío, ….solo un dulce calor me envolvió de repente. Me dejé llevar nuevamente. Ese beso…..Ah. Sentí como me cuerpo se elevaba. Eran los brazos de Daniel que me alzaban subiendo las escaleras. El beso seguía abrigándome. Mis brazos rodearon su cuello. Los de él rodeaban mi espalda y los sentía en mis muslos.

El dormitorio parecía lejano pero llegamos a él. Reposó mi cuerpo en el edredón de la cama. Abrí mis ojos y vi los suyos. Los sentí puro amor. Me puse de pie a su lado. Sus manos buscaron deslizarse entre mis brazos. Lo que siguió a partir de ese momento es parte de mi vida actual con él. Mi cuerpo reaccionó como lo sabe hacer. Poco a poco mi cuerpo se desnudo a su mente y para su placer… estaba feliz. La sensación que sentía en esos momentos no la había sentido jamás. Dios, realmente estaba enamorada! Era maravilloso! Sus ojos disfrutaron de la vista que se le presentaba…estiré mis brazos llamándolo a mi lado. Se acercó lentamente. Procedí a retirarle su ropa. Una a una esas prendas masculinas fueron dejándome ver el más maravilloso cuerpo jamás visto por alguien. Su cuerpo desnudo se acercó al mío… el solo contacto tuvo su deliciosa consecuencia. Nuestros cuerpos se sacudieron en un beso profundo, rodeado de caricias delicadas y fuertes. Me tomaba de la cabeza acariciando mi cuello y masajeándome la nuca con un dedo… mientras los besos se sucedían uno a otro… Mi espalda fue colocada en el mullido edredón, sentí su peso, ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh, y algo más que me producía exquisitos escalofríos……giré mi cuerpo para que sintiera mi peso. El giro trajo maravillas de regalo….ese miembro suyo se engolosinó con mi piel y la recorrió deleitándola.

El miembro era grande, de unos 21 cms, grueso, de unos 5 cms. de diámetro. Circuncidado como buen judío, mostraba su glande libre de toda sujeción. Veía como su rostro me transmitía su deseo, cómo sus manos, que sujetaban las mías, me decían: Ya!, te necesito amada mía!!!!. Veía como esos ojitos suyos irradiaban luz de alegría, dicha, pasión.... enorme deseo. Así que cerré mis ojos teniendo su rostro grabado en m mente, mi cuerpo se deslizó lentamente hacía abajo, buscando aquel miembro rico de mi amado. Sentí como éste tocó mi glúteo izquierdo, moví mi cadera para que encontrara mi agujerito ya a la expectativa.....Buscaba con pasión, derecha, un poco a la izquierda....ahí.....ahí estaba. Su glande ya lubricado por mis besos se posesionó de la cavidad externa de mi ano. Poco a poco sentí como ese miembro de pasión ingresaba dentro de mí.....Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh...... que emoción, que placer........ Sentí el glande ingresar todo y aferrarse en su posición. El resto de ese monumental pene latía vigorosamente como reclamando su derecho a ingresar. Mi cuerpo reaccionó. Moví mis glúteos para atrás introduciendo rápidamente todo ese pedazo de carne hasta comérmela toda. Me detuve. Presioné con mis músculos interiores...deseaba poder succionarlo....intente hacerlo con mi culito. Prensaba y soltaba, prensaba y soltaba...hasta que mi adorado reaccionó. El mete y saca fue increíble. Sentía como salía de mi interior para luego meterse hasta el fondo de mi vagina.... se abría paso despacio e ingresaba despacio. Se quedaba en la mitad haciendo algunos giros para luego ingresar y volver a girar. Salía. Entraba. Salía. Se metía unos centímetros deteniéndose para que el glande pudiera ser sentido por mi cuevita en su boca. Ese glande me alocaba. Lo sentía salir y entrar sólo a él....hasta que de pronto cambiaba y se metía hasta el fondo. Volvía a salir y a meterse.... ahhhhhhhhhhhhhhhhhhh que locura...... agggggggggghhhhhhhhhh.... me vine una, dos veces...... ohhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh........ Quería más y más.................. deliciosooooooooo ooooooooooooooooooooo....... entraba y salía con una velocidad increíble. Me sentí alocar cuando nuevamente quedó el glande, esa cabecita deliciosa, entre mis labios vaginales.......ese mete y saca de solo un centímetro me volvía loca....ohhhhhhhhhhhhhhhhh hhhhhhhhhhhhhhhhhhhh...... dame más!!!!!!!!!!!!!!!...... así, así........siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii...... Y luego hasta el fondo. Otro mete y saca que abría mis ojos como suplicando no termine nunca....... Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh..... Otro orgasmo......Ahhhhhhhhh hhhhhhhhhhhhhhhhh .... y sentí como ese miembro endiabladamente grande se hinchaba más y dejaba salir a borbotones sus exquisitos manjares.....Agggggggggggggg gggggggggggggggggggggg..........Siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii........ Me entregué a el con todas mis fuerzas. Eso era lo que recibía de mi adorado y eso era lo que mi cuerpo y alma toda le entregaba. Embriaguez de amor. Placer exquisito. Mi amor precioso......siiiii......mi Daniel.

Casi dos horas estuvo mi cuerpo reaccionando a los embates de mi adorado sin sentir esos líquidos de aroma perfecta. Mi cuerpo estaba laxo......increíblemente laxo..... Una paz y tranquilidad increíbles inundaron mi alma. Me sentí feliz....muy feliz.... totalmente satisfecha..... Como nunca en mi vida satisfecha...... Los nombres de aquellos que me hicieran vibrar en su momento pasaron por mi mente...... e iban desapareciendo entre nubes.......Oscar......Juan...........Efraín (pese a todo, mi esposo), Antonio.......Ohhhh que delicia no había punto de comparación pese a que en sus momentos cada uno de ellos había sido para mi alguien especial..... Ahora sólo quedaba agradecimiento, recuerdos, recuerdos.....que se envolvían en nubes y se diluían en un nombre......Daniel....... Sentí como esas manos acariciaban mi cuerpo, como sus dedos jugueteaban con mis piernas como sus labios endulzaban mis pezones mordisqueándolos..... Como otra mano acariciaba mi rostro....abrí los ojos y vi la carita más hermosa que pueda alguien ver jamás......esa sonrisa maravillosa que me embriagó siempre....y ese halo de luz que rodeaba su faz.......Sus labios encontraron los míos. Nos besamos. Sentí su boca como abrazaba mis labios dándome ese calor que nunca había sentido en ellos. Nada de lengua. Solo un beso maravilloso que duró, horas?....... Sus manos seguían acariciándome toda. Mi cuerpo ya no era mió. Era suyo. Se entregó totalmente a esas caricias. Sentí sus brazos rodearme, sentí su cuerpo encima del mío. Ese miembro enorme junto a mi vagina.....jugaba vibrando. Que calor! Mi cuerpo ardía de deseos nuevamente. Sus labios no dejaban de saciar mi sed de placer.... Ahhhhhhhhhhhh.......................me vine nuevamente........sólo con sus besos......que delicia..... Cómo hace eso?..... Mi cuerpo reaccionaba, se movía de un lado a otro dándole a mi amado Daniel todo lo que pudiera salir de mi, mi orgasmo total, mi placer todo era de él en esos momentos. Ohhhhhhhhhhhh. Esos brazos presionaban mi cuerpo y lo hicieron girar para colocarse mi Dan debajo de mi. Me miró a la cara. Me besaba la nariz, me miraba....me besaba los ojos, me miraba. Besaba nuevamente mis labios y jugaba, ahora si, con su lengua.....uniéndola a la mía...... Su enorme muñeco hacía lo suyo por abajo. Crecía. Crecía. Mi cuerpo reaccionó. Me arrodillé encima de él buscando al mismo tiempo que me metiera todo ese precioso pedazo dentro de mí. Me movía buscando. Mis caderas se movían. Levanté una rodilla un poco y lo encontré cerca....sentí ese glande enorme.... lo metí a poquitos dentro de mi......sólo el glande...... ahhhhhhhhhh hhhhhhhhhhh que ricura............no aguante mucho hasta que me senté encima sin reparos. Todo. Hasta el fondo. Ahhhhhhhhhhhhhhhhhh...... Presioné y presioné con mis músculos vaginales hasta sentir que lo tenía todo adentro y gozando.......Cabalgué. Cabalgué de arriba a abajo, De arriba a abajo...... mete y saca, mete y saca....... asiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii.....................me sentía el mejor jinete del mundo. Mis ojos estaban cerrados....gozando... gozando.....Los abrí......Daniel me miraba.... su carita de gozo me transmitía un placer enorme..... "Mari", me dijo, y seguí moviéndome sin parar. Mi cuerpo se estiró completamente al sentir otro orgasmo..... AGGGGGGGGGGGGGGGGHHHHH HHHHHHHHOOOOOOOOOO...... pero era totalmente diferente............. me electrizaba ese enorme pene que tenía adentro.......... convulsioné mientras salía de mi boca otro ahhhhhhhhhhhhhhhhhhh riccoooooo ooooooooooooooooooooo ooooooo o.......... ......aghgggg ggggggggggg ggg ggggggggggggggghhgggggggggggggggg....... Convulsionaba pero sentía como un lejano mete y saca, un lejano mete y saca.......ya no era mi cadera en movimiento sino la de mi adorado Daniel que subía y bajaba la suya.........mete y saca....mete y saca..... el jinete de pronto se tornó en potrilla y el potro en jinete....... Siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii......sentí su peso al girarme y echarse encima de mi...... Sentí como se arrodillaba encima como lo hiciera yo.......sentí como ese pene hermoso se metía muy dentro de mi presionándome todo mi interior. Cabalgaba. Cabalgaba él ahora. Yo tomé con mis manos las cobijas de la cama y sólo atiné a presionarlas muy fuertemente. Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh, gemía, ohhhhhhhhhhhhhhhhhhh.......... Mete y saca, mete y saca....no había fin para ese mete y saca que me estaba trastornando. Otro orgasmo mío......no se cuántos, ya no los cuento amor mío......pero son para ti......Ahhhhhhhhh.....y otro mas........ Siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii...... que placer tan enorme....... Sentía esas manos de Dan como acariciaban mis senos. Los amasaban con amor, con pasión, con ternura, con deseos enormes de hacerme suya una y mil veces............ Mis hombros, mi cuello, mi rostro........ ohhhhhhhhhhhhhhhhhhh......... que rico papito siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii iiiiiiiiigguuuuuuuuuuuuuuu eeeeeeeeeeeeee.......... Ahhhhhhhh hhhhhhh....Otro orgasmo. Sentí como Daniel tensaba su cuerpo. Cómo éste se pegaba al mío. Cómo sus manos me preparaban para lo que vendría después. Para lo que me iba a dar.......... Siiiiiii amoroooooo.....siiiiiiiiii........ Cabalgaba rápidamente. Subía y bajaba su cadera con soltura y metía y sacaba de mí ese enorme y preciado pene....... ahhhhhh....... Mete y saca, otro mete y saca dentro de sus subidas y bajadas...... Cabalgaba....... Hasta que de repente sentí como algo salía de él y me llenaba toda. Mis entrañas se inundaron nuevamente de ese líquido caliente. De ese néctar que sólo él puede darme. AhhhhhhhhhSSSS SSSSSSSSIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIII..........Seguía saliendo y saliendo mientras que mí cuerpo reaccionaba dándole los suyos... Se sucedían los segundos, los minutos....nuestros cuerpos reaccionaban y se volvían uno....... me relajé totalmente y sentí como mi cuerpo descansaba..... Ya no estaba ahí....flotaba...estaba en las nubes..... Veía al mundo en su belleza total. Sonreía llena de dicha y agradecimiento..... La luz volvió a mis ojos... El peso de mi Daniel volvió a mi cuerpo. Este reposaba con sus codos en la cama para no recaer totalmente encima de mí. Me miraba. Besó mis labios. Besó mis ojos. Lo abracé. Lo amé. Totalmente entregada a el. Lo amé a partir de ahí muchísimo más. Fueron cuatro, cinco horas? Me parecieron más, muchas más.

Luego un sueño reparador nos envolvió. Dulces sueños amor. Hasta mañana. Me quedé en sus brazos sintiendo su corazón latir. Su fragancia inundó mis pulmones deliciosamente…..fuimos juntos al altar de los sueños… volamos por mundos lejanos…nos hicimos uno con el universo.

El despertar fue maravilloso. Lo hice mucho antes que mi Dan. Quise hacerlo. Quería verlo, tratar de leer sus sueños, gozar son el… Su rostro me decía lo mucho que valía espiritualmente.

Me levanté calmadamente y bajé a preparar un desayuno delicioso. Me esmeré en ello. Cuando llegué al dormitorio Daniel me estaba esperando en la cama, despierto. Me miró dulcemente.

Gracias amor, dijo. Realmente tengo algo de hambre…. Pero de ti…y riendo me jaló suavemente haciendo que en el trayecto dejara el carrito con el desayuno.

Sus labios no me dejaron decir nada. Sus caricias empezaron a marearme… mi cuerpo no sabía lo que estaba sucediendo. Sentí sus manos en mis senos, sus labios succionarlos uno a uno mientras yo suspiraba de tanto placer. Mi cuello sintió esos besos, mis hombros, mi cuello, mis senos, mis labios, mis ojos, mis labios, mis senos, mis senos, mis senos…..ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh……… Lo abracé fuertemente deseando que no dejara de besarme así. Bajó sus caricias hasta llegar a mi vientre, se detuvo ahí… Me dejó un momento mientras recogía de la bandeja del desayuno unos higos que le había puesto. Tomó uno de ellos y lo colocó en mi vientre. Sentí el frío de la fruta, pero la excitación del momento. Sus labios nuevamente encontraron mi vientre besándolo. Su lengua se acercó presta al higo maduro e inició un jugueteo con su lengua. La fruta giraba de un lado a otro. Su lengua la empujaba al mismo tiempo que saboreaba el néctar que dejaba eb su trayecto. De pronto la ruta varió. Ya no empujaba hacia arriba sino que empezó un recorrido distinto hacia abajo. La fruta llego al monte de Venus y cayó hacia un lado de mis piernas. Daniel me miraba mientras jugaba. El higo travieso subía y bajaba deseando ubicar el sitio más adecuado para su reposo. Su lengua juguetona besaba mis muslos al mismo tiempo que procedía a introducirse furtivamente en mi vagina. Lo hizo una, dos, tres veces antes de que mi cuerpo reaccionara al sentir esa lengua tocar mi clítoris…. Abrí las piernas despacio. El higo casi se cae a la cama pero la rapidez de Daniel para atraparlo fue asombrosa. Lo hizo rápida pero suavemente para que no se rompa. Ya en su boca lo volteo tomándolo por el pedacito de rama que lo acompañaba. Acercó su cara a mi vagina buscando meterme ese higo. Suavemente encontró la forma correcta. Sentía como ese higo se metía dentro de mí. "Ahhhhhhh". Estaba delicioso. De pronto lo empujo todo….."Ohhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh"…… El higo desapareció en mi interior para deleite de ambos. Daniel Acomodó su cuerpo dejándome ver ese miembro exquisito. Lo tome en las manos y lo metí en mi boca. Chupé con un placer enorme sintiendo como mi amado buscaba con su lengua el higo escondido. Lo encontró y empezó a girarlo dentro de m텅"Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhgggggggggggg"

Chupé con fuerza. El higo se movía de un lado a otro cumpliendo con su objetivo de volverme loca por mi amado. De pronto Daniel encontró el pequeño ramito de la deliciosa fruta y jaló de el….sacándola totalmente. "Ufffffffffffffffffffffffffffff"….. Volvió a ponerla en mi vientre para luego llevarla hacia abajo, hacia mi boca. Deje de chupar cuando Dan recorrió mi cuerpo con la fruta. Llegó a mi cara y acercó el higo a mis labios. Vi sus ojos. Mordí un pedazo y lo saboree. Daniel hizo lo mismo con el resto de la fruta. Me besó. Dulcemente. Bajó a mi cuello, a mis senos, mientras que mis manos acariciaban sus glúteos. Bajo a mi vientre a mi pubis y…… volvimos a un 69 espectacular. Cada orgasmo que mi cuerpo le otorgaba era una exclamación de placer, una expresión más de mi cuerpo lleno de dicha. Uno, dos… seguían y seguían llenándome de felicidad. Daniel, luego de muchísimos minutos, giró su cuerpo para echarse encima de mi. Nuevamente sus labios se unieron a los míos, su lengua se unía a la mía, su pecho a mis senos, su vientre al mío, su pene ingresó a mi vagina. Qué placer tan enorme al verle su carita de gozo. Giró al occidente, giro al oriente, un norte, un sur, desvíos a uno y otro lado. El goce fue infinito…… Mis jugos salían y salían mientras que mi Dan se complacía en ello, viéndome y oyéndome gemir. Dan, Dan, mi Dan…. Una hora duró ese embate, esos placeres sin fin. Mi amado giró mi cuerpo levantando mi cadera….mi culito estaba a su merced. Sus labios y caricias me abrazaron nuevamente. Poco a poco mi ya dilatado culito estaba listo para ser abordado. Daniel puso el glande en la boca de mi ano y procedió a meteeeeeeeeeeeeeeeeeeerrrrlooooooagggggggggggggg… "que delicia amor, que delicia"…… Uno, dos, tres centímetros….luego llegó hasta el fondo… Mi culito reaccionó con placer. "Dannnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnn"….. Todo ese miembro se envolvió de mi. Lo presioné deseando sentirlo más y más.

Daniel empezó a moverse, su cuerpo parecía un motor. Mete y saca. Mete y saca. Mete y saca. Mete y saca. Mete y saca. Las nubes me envolvieron nuevamente. Que riquísimo!!!! Mis senos reposaron en sus manos mientras ese enorme miembro me hacía gozar a plenitud. Pasaban los minutos y Dan no daba indicios de venirse. Yo la había hecho no se cuantas veces. Mi cuerpo se relajó y Dan sintió mi calma. Me echó en la cama mientras sus besos buscaban los míos. Minutos después nuevamente me jalaba, ahora de las piernas, para llevarme al borde de la cama. Mis piernas tocaron el cielo mientras el, arrodillado en la alfombra, chupaba mi clítoris, se deleitaba con mi vagina, introducía su lengua dentro de mi. Que perfección!...... Mi cuerpo volvió a nacer ese día. Estaba dándole un orgasmo delicioso cuando se puso de pie y metió totalmente su pija dentro de mí. "Ahhhhhhhh, Daniel", grite. "Daniel……." Otro mete y saca. Mete y saca. Mete y saca. Mete y saca. Mete y saca. De pronto sucedió lo increíble. Sus labios besaron los míos mientras sentía como mi vagina recibía sus líquidos. Parecía un grifo realmente no tenía cuando acabar. Empezó a rebalsar ese líquido seminal. Mi cuerpo todo se sacudía una y otra vez. Daniel me abrazaba tanto como yo a el. Sucedió tan lentamente todo que parecía un film en cámara lenta. Delicioso. Mi cuerpo se relajó todo y mi alma empezó un viaje a un universo no explorado por mí. El cuerpo de Daniel dejó de pesar, sólo sentí su calor y vi un halo que lo envolvía…. Y que luego me envolvió a mí.

"Te amo Maria Jesús", escuché en lontananza. "Te amo con toda mi alma".

Regresé a mi para ver los ojos mas hermosos que pudiera verse jamás. Lo vi…..vi a mi Dan….y lloré…lloré de alegría, de felicidad, Lloré por todo lo que hube de haber pasado antes de encontrar a este maravilloso ser. Ya no teníamos edad para nada más que para amarnos. Mucho. Y lo haría. Lo haría con toda mi alma, como me dijera él.

Daniel besó mis labios llorosos.

"Te ves hermosa amor. Esas lágrimas embellecen tu rostro. Pero, porqué las lagrimas?"

"No ves mi felicidad? Soy enormemente feliz!"

"Entonces las acepto." Y, poniendo mi cabeza en sus hombros me retuvo una eternidad.

Ya era mediodía cuando decidimos levantarnos a desayunar. Los higos ya no tenían la temperatura adecuada así que tuvimos que buscar otros abajo en la cocina. Cloti estaba terminando el almuerzo cuando vio a Daniel a mi lado bajar por las escaleras. Estábamos en bata.

Cloti, te presento al Sr. Daniel. Es dueño de mi corazón, mi alma, mi cuerpo y de todo lo que tengo…ahora dueño también de esta casa….

"La felicito señora, y a usted señor. Gusto en conocerlo", dijo. "Les sirvo el almuerzo?"

"Pues creo que te aceptaremos Cloti", dijo Daniel tomándome de la mano y llevándome a la mesa.

Almorzamos con calma con un buen vino Merlot. Daniel y yo nos enfrascamos en una conversación larga que nos permitió saber de nosotros mientras no nos habíamos visto. Como siempre no dejé nada sin contarle, así como el tampoco lo hizo. Supo todo de mí. De Juan, Efraín, Gaby, Jorge, mi hija, Mufa, el matrimonio y todo lo demás que fuera parte mía.

Cloti me pidió permiso para irse temprano por lo que no estuvo presente durante esa charla nuestra. Cuando se despidió me dijo:

"Prefiero dejarlos solos señora. Va a ser su esposo?", preguntó.

"Por ahora es el hombre más especial que he tenido Cloti. Lo amo profundamente. Me ha pedido que sea su novia y he aceptado. El futuro es parte de nuestro amor. Gracias por entender estos momentos. Se que no tienes nada que hacer afuera pero nos dejas para que nos sintamos cómodos."

"Cómo debo tratarlo señora? Como su esposo o como su novio?"

"No se como tratarás tu a uno o a otro Cloti, dije riéndome. Pero el es el dueño de casa a partir de ahora…al igual que yo. Se que lograrás estimarlo. Cuídate.

Daniel, Daniel fue una semana maravillosa…y sabía que era el inicio de lo maravilloso que resultaría mi vida a partir de esos momentos.

Dos días después despertamos tarde luego de una hermosa noche de amor. Daniel estaba hablando por teléfono con un amigo suyo.

"Amor, acabo de concluir la creación de una empresa acá en Lima. Desearías ayudarme en ello?", preguntó acercándome.

"De qué se trata amor", dije.

Y empezó a explicarme al respecto de la nueva empresa…..dos horas después ya era la gerente general de la empresa recién formada. Con las debidas indicaciones y un poco de astucia, conocimiento y decisiones adecuadas la empresa se tornó en rentable al poco tiempo. Tuve que contratar a varios asesores externos para poder adecuarme a las necesidades propias y mejorar lo niveles de asesorías en muchos casos. Me fue muy bien en ello. Luego contraté a Marieta. Profesional como yo, dulce, amiga y mucho más…con el conocimiento y aprobación total de Daniel.