Manoseada con el primo de mi esposo......
Noche de provocación al primo de mi esposo, cada vez que podemos nos excitamos con miradas y manoseos que hasta el momento no pasan de ahí, pero se que pronto vamos a concluir algo que los dos queremos y nuestros cuerpos necesitan.
Quiero contarles que trabajo como secretaria y que en este gremio se da mucho la infidelidad, por lo que quienes no éramos infieles tratamos a las mujeres que sí lo son como unas putas, perras y quita maridos.
Yo perdí la virginidad a los 18 años con mi novio quien después se convirtió en mi esposo, es decir que no tuve una amplia experiencia sexual.
Pero después de unos cuantos años de matrimonio he querido vivir y conocer lo que no pude antes de casarme y comenzar a disfrutar del sexo.
Quiero decirles que durante varios años algunos compañeros de trabajo o de la universidad, ex compañeros de colegio y amigos me quisieron coger, porque a pesar de ser casada me ha gustado exhibirme y provocar bastante y se que aun despierto muchas miradas lujuriosas de hombres con deseo y de mujeres con envidia.
En esta ocasión voy a contar algo que paso en la última celebración de la navidad, decidimos reunirnos en la casa de un familiar de mi esposo, sabía que me iba a encontrar con un primo de mi esposo a quien llamare Fernando; así que me vestí bastante provocadora con una blusa semitransparente de espalda descubierta y un short bastante corto con botines de tacón muy alto; pues esta era una historia inconclusa la cual quería confirmar, en oportunidades anteriores los dos pasados de tragos nos hemos besado y manoseado con bastante pasión. En esta ocasión quería estar completamente consiente de todo así que no tome ni una sola copa pero las demás personas empezaron a beber bastante rápido incluido mi esposo, así que los tragos empezaron a hacer efecto. Después de un buen rato y de miradas que van y vienen empecé a bailar con Fernando quien me apretó bastante fuerte haciéndome sentir que al igual que yo anhelaba ese momento, me miro con ganas de besarme no era necesario decirlo las miradas lo decían por nosotros pero había bastante gente; seguimos bailando después de un par de canciones pude sentir su pene duro en mis nalgas cubiertas por mi short, afortunadamente no se había bajado su pantalón porque si no, quizá con la excitación que sentí, me hubiera follado, jugó con sus manos, mis pechos talla 36 copa b y acaricio mis carnosos muslos de mis piernas, metió la mano por el borde de mi short y descubrió con bastante sorpresa que no llevaba ropa interior, pero estoy segura de que esta sorpresa lo excito; todo esto delante de las personas que estaban con nosotros es decir que fue con mucha prudencia.
Me sentí una adolescente despertando sexualmente, mi cuerpo se calentó muchísimo, me estremecí, era algo diferente, no traté de evitarlo por el contrario solo lo provocaba más con mi mirada, con insinuaciones de besar, con caricias en el cuello, el hacía lo mismo ponía mis brazos sobre su cuello, me daba la vuelta para sentir mis nalgas sobre su pene ya erecto, hablaba a mi oído lo mucho que le gustaba y las ganas que tiene de estar conmigo, planeamos vernos en otro lado en privado para concluir algo que ya empezó y que nuestros cuerpos están pidiendo. Así que al día siguiente ya bien caliente y con la mente solo pensando en lo que había pasado e imaginando lo que nos quedó pendiente y las ganas de comerme a Fernando tuve que bajarme las ganas con mi marido y tener un muy buen polvo.
Y ahora comprendí que a muchas mujeres nos gusta tratar mal a otras mujeres por envidia al saber el gran goce de tener dos o más vergas, ahora yo ya era una puta, y me gustaba serlo.