Mamada a un tio maduro (2)

Le mordisquee ligeramente por encima de los slips y comprobé como se hinchaba aún mas.

Como ya os conté en el escrito anterior, le pedí el teléfono al tío que me encontré en el cine para llamarlo y a ver si podíamos repetir la experiencia.

La verdad es que ese mismo día y esa noche no paré de pensar en él y las ganas que tenía de repetir por lo que decidí llamarlo al día siguiente y comprobar al mismo tiempo si el teléfono que me había dado era el verdadero y si quería volverme a ver de nuevo.

Al día siguiente y con unos nervios increibles le llamé a la hora de comer. Por la voz supe que era el. Le dije que era yo y si se acordaba de mí, a lo que él me dijo que claro que sabía quien era yo y que quería volver a verme. Me dio las señas de su casa y quedamos en vernos esa misma tarde sobre las ocho.

Subí las escaleras y llamé a su puerta. Me abrió la puerta y con una sonrisa me dijo que entrara. Una vez que entré y cerró la puerta, me cogió por la cintura y nos estuvimos comiendo a besos un buen rato.

Al rato, me llevó de la mano hasta el salón y me dijo si quería algo de beber. Una vez que estuvimos los dos servidos empezamos a hablar de lo ocurrido el día anterior.

A los dos nos había encantado la situación del día anterior y la conversación fue subiendo de tono a la vez que yo empecé a besarle en la boca y desabrocharle los botones de su camisa y pantalón. El a su vez también empezó a desnudarme.

Yo ya estaba completamente desnudo y con la polla totalmente dura. Entonces, bajé mi cabeza hasta la altura de sus slips (que era lo único que todavía tenía puesto) y noté el contorno de su polla totalmente dura. Le mordisquee ligeramente por encima de los slips y comprobé como se hinchaba aún mas.

Yo no aguantaba más así que le bajé los slips y me encontré de nuevo con ese rabo duro y apunto de estallar. Esta vez lo hice con mas calma que el día anterior. Empecé a lamerle solamente el glande, hacía círculos con la lengua por todo su capullo y a la vez de vez en cuando introducía la lengua en su pequeña rajita. Mas tarde me introduje toda su polla en mi boca. Podía notar cada una de sus venas en mis labios, notar como su rabo palpitaba de placer, quería chuparle los cojones mordisquear esa increible polla , lamerla........

Me cogió de la cabeza con las dos manos y la fue levantado hasta que nuestras bocas se unieron de nuevo. A la vez que me levantaba, notaba como su polla embadurnada de mi saliba, de deslizaba por mi barbilla, pecho, hasta notar el palpitar de nuestras dos pollas contra nuestras tripas.

Me encantaría follarte me dijo mientras nuestros corazones se salían del pecho debido a la excitación.

Si el día anterior quería que me hubiese follado, en este momento lo deseaba. Quería y deseaba tenerlo dentro de mí.

A mí también me encantaría que me follases, le respondí yo.

En ese momento me convertí en su alumno más aventajado ya que empecé a obedecer todas las órdenes que me mandaba.

Me dijo que me pusiese a cuatro patas sobre el sofá que estaba en el salón. Noté como con las manos me empujaba un poco para que abriera las piernas un poco más y mi culo le quedara mas expuesto para hacer con el lo que quisiese. Aunque estaba de espaldas a el, giré la cabeza para poderle ver lo máximo posible e intuir las "maniobras" que me iba a hacer.

Ví como un gran chorro de saliba salió entre sus labios y acto seguido noté como su caliente y escurridizo líquido recorría la parte exterior del agujero de mi culo. En ese momento cerré los ojos de placer y le dejé que me manipulase totalmente.

Noté otro chorro mas de saliba y como un dedo se introducía poco a poco dentro de mí. Se notaba que era un experto ya que tengo el agujero bastante estrecho y no notaba más que placer.

Sentí como un segundo dedo se introducía dentro de mí. Notaba perfectamente como estiraba mis nalgas a la vez que un dedo de cada mano estaba dentro de mi culo, dilatándolo para lo que se avecinaba en breve.

Así estuvo un buen rato, notaba como mi culo estaba preparado...Hasta que en un momento dado paró se levantó y me dijo: espera un momento.

Pude ver como se iba hasta un mueble, abría un cajón y sacaba un pequeño bote. Era aceite para lubrificar.

Estaba cachondísimo: yo, a cuatro patas y con el culo excitadísimo y mi pareja lubrificándose con aceite su tiesa y dura polla.

Una vez que estuvo otra vez detrás de mí noté otras gotas en mi culo y acto seguido algo se iba haciendo paso dentro de mí. Notaba como su polla se estaba introduciendo poco a poco dentro de mí culo hasta llenarlo. Noté los pelos de su pubis en las nalgas: estaba totalmente dentro de mí. Gemí de placer. Estaba siendo follado, enculado, penetrado por un tío y una polla increíble , me sentía lleno , estaba....gozando.

Se quedó durante tres o cuatro segundos dentro de mí pero sin moverse. Al cabo de este tiempo empezó a moverse poco a poco. El movimiento de su cuerpo hacía que su polla se saliera (excepto el capullo) y volviera a entrar a cada sacudida. Me sentía en la gloria. Sentía su polla en cada embestida, sus manos que agarraban con fuera mis caderas , ayudaban a ese movimiento.

Sentía que mi jinete me cabalgaba. De vez en cuando me dama unos cachetes en el culo que haciendo que la situación fuese mas excitante. Su ritmo se aceleró. Estaba casi apunto.

Entre jadeos me preguntó que si quería que se corriese dentro de mí. Yo le respondí que sí, que quería sentir toda su leche dentro de mí.

Unos movimientos bruscos, unos gritos de placer .... y algo mas cliente se derramó dentro de mí. Esta vez su leche estaba dentro de mi culo. Por lo que sentí, la corrida fué espectacular y eso que el día anterior le vacié todo lo que pude.

Aunque estabamos agotados de placer le dije que se tumbara encima de mí pero sin sacarla. Así permanecimos en silencio pero jadeantes del esfuerzo unos minutos.

Estuvimos charlando y bebiendo un buen rato. Era un tío magísimo, interesante, culto, sexi, y como comprobaría esa noche,.... una máquina sexual, ya que hata que me despedí de el al día siguiente, se corrío dentro de mí otras dos veces (una en mi boca y otra en mi culo).

Ese día si que le vacié y cambio yo, me fui totalmente lleno....

Espero que disfruteis leyendo esta historia ya que cuando a mí me pasó si que disfruté.

También espero tener noticias vuestra. Me podeis escribir a: modoso.madrid@lycos.es