Mamá Fue Pornostar I

Corría el verano de 2005, había viajado junto a mi madre Rocio al pueblo de mis abuelos para conocer mis raices. El pueblo era un pequeño pueblo extremeño, claro ejemplo de la España vaciada, en los años 70 contaba con unos 3000 habitantes, en la actualidad no llegaba a los 500, sus gentes se marcharon a las grandes capitales en busca de un futuro, que el pueblo no les podia ofrecer. No era la primera vez que lo visitaba, pero como si lo fuera, mi madre me llevó una vez cuando tenía 5 o 6 años.

Estábamos mi madre y yo en la casa donde se crió, era una casa antigua, típica de esos pueblos, con las fachadas encaladas, aunque esta estába descascarillada, fruto de los años que llevaba deshabitada y descuidada. Nos encontrábamos en el desván de la planta superior, viendo álbumes de fotos y diversos recuerdos, cuando de repente alguien llamó a la puerta...

-Hola... ¿Hay alguien ahi?...(La puerta volvió a sonar).

Mi madre bajó rápidamente a ver quién llamaba, yo me quedé revisando las viejas cajas de cartón, de repente me fijé en una caja que había dentro de un viejo baul. Estaba llena de polvo, soplé y pude ver las letras "Rosaura" escritas a rotulador rojo. Cuando abrí esa caja no podía dar crédito a lo que veían mis ojos, en ella se encontraban fotos de mi madre cuando era joven posando desnuda, además había dos calendarios, uno de 1979 y otro de 1980, donde salía también desnuda, como la típica modelo de calendario erótico. Pero esto no lo era todo, además allí había guardadas unas quince o veinte revistas, algunas eróticas donde volvía a salir posando desnuda y otras pornográficas, en las que salía follando y haciendo escenas de sexo esplícito.

-Eric... baja cariño...

-Voy mamá...

Tardé un poco en bajar a la calle para disimular la erección que acaba de tener, además que llevaba chandal y esta se notaba mucho mas.

-Mira Eric cariño, ella es Guadalupe, amiga y vecina de la infancia...

-Hola, encantado.

-Hola Eric... el placer es mio... jo que mayor estás ya... ¿Cuantos años tienes?

-Tengo 21.

-Yo tengo 44, igual que tu madre... nos criamos juntas... ¿Verdad Rocio?

-Cierto fuimos juntas a la escuela, y eramos inseparables.

-Oye Rocio... ¿Hasta cuando os vais a quedar?

-Pues mañana nos marchamos Guadalupe.

-Entonces esta noche teneis que veniros a cenar a mi casa...¿Qué me dices?

-Acepto encantada... gracias Guadalupe.

-Pues a las 9 os espero... La verdad es que llevaba sin verte desde la muerte de tu madre...¿Y tus hermanos? También hace mucho que no los veo...

-Pues de eso ya hace 10 años... y mis hermanos... tampoco se nada de ellas y ellos... cada uno en un sitio de España... y no tenemos mucho trato la verdad.

-Bueno lo importante es que tu estás aquí... lo dicho sobre las 9 o espero...

-Vale, chao...

Cenamos en casa de Guadalupe, se tiraron toda la velada hablando de cosas de su infacia. Cuando me metí a la cama no pude evitar echar un vistazo a las revistas de mi madre, que había escondido en una mochila para llevármelas a casa, y como es natural me hice una paja, viendo a mi madre follando en distintas posturas y situaciones. Al dia siguiente regresamos a Barcelona, las diez horas de coche se me hicieron interminables, estaba deseando llegar para ver esas revistas, nos turnábamos para conducir, mientras yo conducía mi madre dormia en el asiento del copiloto, yo me entretenía mirando su escote y sus piernas, por sus muslos, ya que llevaba unos baqueros muy cortitos. Tuve una enorme erección.

Llegamos de noche, mi madre se fue pronto a la cama porque estaba cansada del largo viaje, yo me fui a mi habitación para observar las revistas pornográficas donde mi madre era protagonista de algunas escenas. En los créditos pude observar que mi madre no era Rocio, sino "Rosaura Rose". Meti su nombre en el buscador y apareció incluso en la wikipedia, pero una vaga descripción, solo que era una modelo y actriz erótica española de finales de los años 70, la década de los 80 y que ya en los 90, también trabajó como actriz y stripper en una famosísima sala para adultos de aquí, de Barcelona.

Me metí en una web de sitios pornográficos, y puse su nombre en el buscador de dicha web, enseguida aparecieron unos 40 videos en la categoria de vintage. Comencé a ver unos cuantos. La verdad es que mi madre estaba muy buena, pero es que de jovencita estaba tremenda, era muy alta, melena morena larga, a la altura de la mitad de su espalda, ojos negros, muy morenita también de piel, tetas grandes y el chochito cubierto de una gran cantidad de vello negro, ahora no ha cambiado mucho solo que está algo mas rellenita y que tiene el pelo un poquito mas corto, con una melena por encima de los hombros. La verdad es que ella es todo lo contrario a mi, ya que yo soy rubio, con los ojos azules, y la piel muy clara también, supongo que heredé los genes de mi padre, quien jamás supe quien fue, mi madre me crió sola y nunca me dijo mucho, solo que mi padre nos abandonó cuando yo era muy pequeño.

Comencé a pasar los distintos videos, vi uno muy excitánte donde mi madre compartía una escena lésbica con una rubia descomunal, después mi atención se fijó en un video mucho mas fuerte, ya que salía embarazada, por el tripón que tenía, estaría de unos 7 meses, y hacía un trio con doble penetración incluida, con dos negros de pollas descomunales.

La escena era de lo mas pintoresca, resulta que mi madre estaba sentada en un sofá, y se ve que era su cumpleaños, y dos negros corpulentos llegaban con una tarta. La escena no tenía diálogos, solo música de jazz y soul de fondo. De buenas a primeras los dos negros se quedaron en pelotas mostrando dos enormes estacas de ébano. Mojaban sus negras pollas en la nata de la tarta y se las daban a chupar a mi madre, quien se desnudó y dejó a la vista un precioso cuerpo a pesar de su embarazo tan avanzado. Mientras uno la comia su chochito peludo, ella se tragaba la polla del otro que casi no le entraba en la boca, después cambiaron, finalmente los negros empezaron a follarsela, primero a cuatro patas, luego ella cabalgando, también con ella tumbada boca arriba, eso sí, los negros no se apoyaban en su enorme tripita para no lastimarla. La verdad que me sorprendía la flexibilidad de mi madre y las posturas tan complicadas que hacia. Las embestidas eran brutales y mi madre tenía cara de disfrutar de lo lindo con esos enormes rabos, no se como no llegaban al útero donde yo me encontraba alojado. De repente uno de los negros se la metió en el culo, solo se escuchaba la músiquita de jazz de fondo, pero la expresión del rostro de mi madre me dice que eso la estaba doliendo un poco, ahora estaba recibiendo una doble penetración anal, vaginal brutal. Los negros intercambiaron sus posiciones, hasta que ambos se corrieron en el interior de los agujeritos de mi madre. Después comenzaron a salir enormes chorros de lefa de su interior, mamá lamió los lamparones que habían manchado la tapiceria de cuadros rojos y marrones del sofá. Yo tenía mi polla en mi mano, me latía como si fuera a reventar, notaba la humedad del liquido preseminal en mi glande, el tiempo se habia detenido y no tenía ni idea del tiempo que llevaba sentado frente al ordenador, cuando de repente...

-Eric... ¿Qué haces todavia levando?... ¡Son las tres de la madrugada!

-Mamá... estoy... estoy... viendo unas pelis... ¿Y tu para que te has levantado?...

-Me he levantado para ir al baño y he visto luz por debajo de la puerta...

-La verdad... es que... ya me iba a meter a la cama...

Disimulé como pude, pero ella vio las revistas encima de la mesa del ordenador, las cogió, las miró y sonrió.

-¿De donde las has sacado Eric?... ¿De la casa del pueblo?...

-Si mamá... lo siento... siento mucho estar masturbandome viendo tus videos...

-No pasa nada cielo... el porno es precisamente para eso... La verdad es que este dia tenía que llegar... llevo toda la vida pensando que decirte... y ahora que ha llegado no se como explicartelo...

-No hace falta que me expliques nada, mamá...

-Si... si hace falta... y además yo quiero hacerlo...

-Que no... de verdad que no es necesario...

-¡Pero yo quiero hacerlo!... ¿Me dejas?...

-Vale...te dejo... pero antes dejame a mi follarte como te follaban todos esos hombres...

-¿De verdad  lo dices en serio?...

-Muy en serio mami... estás muy buena... siempre me he fijado en ti... incluso me he masturbado muchas veces pensando en ti... Además nunca he follado con una pornostar... mamá dejame follarte... te lo suplico...

-Está bien hijo... si tanta ilusión te hace... aunque te advierto que ya he perdido facultades... y además el sexo en la vida real no es como el porno nos hace imaginar...

-Da igual... fuiste actriz y stripper... ¡Hazme un striptease!...

Giré mi silla de la mesa de estudio y me puse mirando hacia mi madre, que puso un compact disc en mi cadena, puso una canción acorde para hacer un striptease, lentamente comenzó a desnudarse, solo llevaba puesto un pijamita fino de verano, era de seda y de un rosa muy clarito, los pantaloncitos eran muy cortitos, un poco por debajo de las ingles, y la camisetita era de hombreras. Lentamente al ritmo de la música terminó de quitarselo, debajo no llevaba nada, mi madre no se ponia ropa interior debajo del pijama para dormir. Ante mi apareció un cuerpo precioso, con dos preciosas tetas, grandes, de talla 100, muy bien colocadas en su sitio, eso era lógico pues las tenía operadas, supongo que de su época de actriz, dentro tenía dos preciosos pezones grandes y oscuros, y su chochito estaba depilado por completo, además se notaban las marcas del sujetador y del tanguita blancas, en su cuerpo completamente morenito por el bronceado, era preciosa.

Se acercó gateando hasta la silla donde estaba sentado, y bajó el pantalón de mi pijama y mis calzoncillos, ante ella apareció una enorme verga totalmente empinada, con el glande de color rojo y lleno de liquido preseminal, adornada por enormes vellos rubios y dos grandes cojones también de color rojizo.

-Vaya... veo que calzas bien hijo... hace mucho que no te la veia... solo que deberías depilarte... es mejor... las chicas lo agradecerán cuando te la chupen...

Diciendo esto acercó su lengua a mi glande y comenzó a lamerlo, hacía circulitos, con sus mamos acariciaba mis huevos, mas tarde acercó toda su boca hasta mi polla, la abrió por completo y se la tragó entera, subía y bajaba chupandomela hacia arriba y hacia abajo, la agarré del pelo y acompañaba con mis manos sus movimientos apretando de la cabeza hacia abajo, para que mi rabo llegara hasta su campanilla y asi me hacía una buena garganta profunda, a lo que de vez en cuando le costaba alguna que otra arcada, mientras ella seguía acariciando mis huevos.  Sus movimientos cada vez eran mas rápidos y notaba que me iba a correr, la avisé, pero sin embargo ella a diferencia de todas las chicas que me la habían mamado no retiró su boca de mi polla, comencé a descargar, noté como mi corrida llegó hasta lo mas profundo se su garganta, se quedó un rato con la polla dentro de la boca, notaba como me latía y me vibraba, cuando finalmente la sacó seguía completamente dura, abrió la boca, me miró a los ojos y me enseñó toda mi corrida la tenía en la lengua, jugaba con ella, hacía gargaras y finalmente se la tragó.

-¿Qué ta ha parecido hijo?

-Joder... que mamada, me ha encantado... se ve que no has perdido práctica...

-Me alegro mucho... no he perdido práctica no... una cosa es que ya no trabaje y otra muy distinta que no tenga sexo... además esto no se olvida y con el paso del tiempo se hace mejor... (Dijo riendose)

-Vamos a la cama mamá... ahora soy yo quien te quiere comer el coño... y después follarte...

Se tumbó en mi cama boca arriba, la besé en los labios, estuvimos un buen rato besándonos, besé su cuello, volví a besar sus labios, entremezclamos nuestras lenguas girándolas como un tornillo, acariciaba su cabello, y ella acariciaba mis hombros, fui bajando hasta sus pechos, los sobé y amasé, estaban muy duros, no había estado con muchas chicas que los tuvieran operados, la sensación era muy buena, comencé a lamer sus pezones, primero el de una teta, luego el de la otra, volví a besarla mientras acerqué mi dedo corazón a su rajita, estaba húmeda, comencé a acariciar su clítoris y mientras lo hacía volví a besar y chupar esas preciosas tetas. Comencé a bajar con mi lengua hacia abajo, lamí su vientre, su ombliguito, y continué hacia abajo, llegué a su monte de venus y lo besé, empecé a notar el olor de su sexo y continué bajando, lamí sus muslos por su cara interna, ella estaba  muy excitada, su respiración era honda, su vientre se movía hacia arriba y hacia abajo y gemía. Acerqué mi lengua a la entrada de su rajita y comencé a besarla, con mi lengua comencé a chupar su clítoris hacia todas las direcciones, la giraba de izquierda a derecha, y de arriba a abajo, notaba los fluidos que salían de su interior, después introduje la lengua en su vagina, y comencé a follarla con la lengua, noté como mi madre cada vez gemía mas y mas fuerte, empezó a agarrame del pelo y se empezó a correr. Bebí todos sus jugos, y seguí con mi cunilingus, la levanté sus piernas y la eché hacia atrás, dejando a mi alcance su culito, y también se lo comencé a lamer, ella estaba en extasis, y yo estaba como loco oliendo ese culo y ese coño, que no olían precisamente a rosas, olían a lo que tenían que oler, a culo y a coño, a mujer, a sexo.

Me tumbé boca a arriba y la dije que me cabalgara, se sentó encima de mi polla y con su mano derecha acercó la punta de mi rabo a la entrada de su vajina, se fue sentando muy despacio, hasta que se la introdujo entera, y comenzó a cabalgarme muy despacio, mientras lo hacía yo chupaba sus tetas, las lamía como cuando era un bebé y me alimentaba, después ella se echó hacia delante y volvimos a besarnos  mezclando nuestras lenguas y nuestra saliva, sin sacarsela se dió un giro de 180 grados y me cabalgó dándome la espalda, yo la daba algún que otro cachete en el culo, gimió como lo hacía en las películas, después de un buen rato en esa postura se levantó, se la volvió a meter en la boca y me hizo una rica cubana. Me preguntó que si me corría y la dije que no que todavía aguantaba.

La dije que se diera la vuelta y se pusiera a cuatro patas, la imagen era alucinante, con la vista de ese precioso culo, y un tatuaje que tenía en la zona baja de la espalda, era un dibujo tribal. Se la metí por detrás y la di con fuerza, me agarraba a sus caderas, cada vez que mi envite era hacia dentro ella pegaba un respingo y gemía con fuerza, el ruido de sus gemidos se mezclaba con los mios y con el sonido de mis huevos golpeando en su culo. Se la saqué y comencé a lamer su rajita por detrás, mi lengua iba desde su chochito, hasta su ano y me entretenía en su perineo, segui lamiendo su ojete hasta que me situé detrás y acerqué la punta de mi polla a su agujerito.

-¿Qué haces...?

-Mamá te quiero dar por el culo... como todos esos actores... yo nunca he follado por el culo con ninguna chica...

-Está bien... pero eso no es el coño... lleva un proceso... hay que estimularlo primero con la lengua y los dedos... además hay que lubricarlo un poco...

En ese momento mi madre se marchó a su habitación a por un botecito de lubricante para su culito, yo me quedé tumbado en la cama meneándomela. Regresó, se puso de rodillas en la cama, se untó un poco de lubricante en su dedo índice y se lo metió en el culo.

-En mis inicios el único lubricante era la saliva... y no veas como dolía... ven aquí anda...

Me acerqué a ella, me dió un poco de lubricante en mis deditos y se los metí, primero uno, estuve un buen rato así, hasta que le entró otro segundo dedo, los metí y jugué con ellos, hacía circulos, y también los metía y los sacaba. Cuando mi madre estaba lista, agarró mi polla, la chupó y meneó de arriba hacia abajo, después me apiicó un poco de lubricante en el glande y se puso a cuatro patas. Acerqué mi rojizo glande a la entrada de su culito y se la fui metiendo muy despacio. Cuando había entrado del todo comencé con un suave mete saca, hasta que fui ganando velocidad. Después de un buen rato así, mi madre me ordenó que cambiara al chochito para mojarmela con sus fluidos, lo tenía chorreando ya que se había corrido unas cuantas veces mas.

Después de un rato la ordené que se diera la vuelta y se pusiera boca arriba, coloqué la almohada debajo de su espalda para así elevar su culo y se la clavé en el ojete, en esta postura la follada era mas profunda, nuestras respiraciones se entrecortaban, de nuevo acerqué mi boca a la suya, y nuestras lenguas volvieron a encontrarse. De nuevo la saqué del culo y se la metí en el coño, estaba empapada y mi polla entraba con facilidad, fui aumentando el ritmo de mis embestidas, mi madre comenzó a arañar mis hombros y a apretar mis gluteos con sus talones, se estaba volviendo a correr, y yo estaba también a punto de caramelo.

-Ahh... si... no pares Eric hijo... me corro otra vez...

-Si mami... yo también... yo también me voy a correr...

-Si cariño... eso es... correte... correte mi vida...

-Si mamá... que gusto joder... ¿donde quieres que te lo eche?... ¿dentro o fuera?...

-Donde tu quieras mi vida... si quieres echaló dentro... no te preocupes amor... tomo la pildora... ahhh.. ahhhh...

-Oh siii... que gusto joder... me corro... me corrooooo...

En ese instante me corrí, nuestros orgasmos coincidieron, jamás había sentido tanto placer, me quedé un buen rato dentro de ella, mientras volvíamos a besarnos, cuando se la saqué una cantidad enorme de la mezcla de sus fluidos y mi leche salieron del interior de su vagina, haciendo una enorme mancha en las sábanas de mi cama, se levantó de la cama se encendió un cigarro, volvió a sentarse en la cama, le dió dos caladas al cigarro y dijo...

-Está bien Eric hijo... presta mucha atención... te voy a contar como empezó todo.

CONTINUARÁ..........