Mallorca 3er dia, nueva pareja, club de socios
Nuevos vecinos de habitación, insinuación servida y fiesta privada donde salí bien atendida.
Hola soy Merche. Primero de todo quiero agradecer a los que me habeís mandado correos con vuestras opiniones , inquietudes e incluso fotos. Los que no hayan recibido respuesta un poco de paciencia, ya dije que los pienso contestar todos personalmente, y ahora sin mas dilación os sigo contando mi experencia
Mi novio se sentó al lado de Alex, expectante no sabia que se me podría ocurrir, me tumbe boca abajo y le pregunté a Diana si me podría dar crema en la espalda, ella me respondío que si, entonces me quite la paste de arriba del bikiny.Ella se quedo extrañada pero empezo a darme crema por la espalda, los mirones ya se habian acomodado a una distancia prudencial.
Yo, apoye mis codos sobre la toalla, levantando así mis senos para exponerlos y busque con la mirada a los cuatro viejetes. Alli estaban, dispuestos a ser complices de mi nueva travesura. Diana frotaba sus manos en mi espalda, no lo hacia mal, a mi me gustaba. Habia leido por ahï que a la meyoria de los hombres les gustaba ver a dos mujeres juntas, por mi parte lo unico que me gustaba en aquellos momentos era la provocación que podría llegar a causar en el ambiente. En apenas unos minutos acabó pasandome el bote de crema para que hiciera yo lo mismo, yo me senté tranquilamente y noté que ella se puso algo nerviosa y me dijo no te llamarán la atención. Con una carcajada le conteste que eso en aquella zona estaba permitido, no había ningun problema.
Claro que el problema no esta en hacer las cosas sino en como se hacen.
Me dispuse a darle crema, pero para acalorar el ambiente un poco me sente sobre ella, concretamente sobre sus muslos, ella levanto sus hombros, entonces desabroche su parte del bikiny superior liberando así sus pechos, su mirada se volvió hacia su marido esperando algún reproche que éste no hizo. Comenze con masaje en los hombros haciendo balancear sus pechos a la vez que los mios de vez en cuando estiraba mi cuerpo rozando mis pezones contra el suyo, me estaba calentando no por este contacto sino por las miradas que suscitaban nuestra postura, incluida la de Alex. Se lo comenté al oido a Diana, el bulto de Alex era bastante pronunciado, se adivinaba su ereción debajo de aquel bañador. Diana soltó una carcajada al ver como estaba su compañero. Yo me daba cuenta de que, con la colaboracion de ésta pareja podriamos dar un giro a nuestras vacaciones en la isla.
Desmonte a Diana como si de un caballo se tratase y se dió la vuelta para darse crema por sus pechos, yo hice lo mismo pero se le notaba que le estaba gustando la situación, lo hacía despacio, recreandose en sus pezones, cosa que a mi novio no pasaba desapercibida, esto iba a ser más facil de lo que parecía en principio.
Pasaron unos diez minutos y Alex sacó una pelota inflable su mochila. Quien viena a darse un baño, y levantandose se dirigio hacia el mar, acto seguido Diana hizo lo mismo, sus pechos iban balancandose de un lado para otro causado por su exagerado movimiento de caderas, yo aprovecha ese momento para cambiar impresiones con mi novio. Juan me dijo que para el estaba tremenda y que la mayoria de los hombres que habia alrededor no nos habian quitado ojo.
Nos levantamos y Juan se dió media vuelta haciendoles una pequeña seña a los mirones, avanzamos hacia Alex y Diana que ya estaban tirandose la pelota el uno al otro, suando vi que los cuatro mirones avanzaban por el egua igual que los tiburones, acechando a su presa.
-La ligas tu. Le dijo Alex a Diana, tirandole la pelota a Juan, este que no supo reacionar se llevo el primer restregon de Diana. Juan que se vió inundado por los pechos de Diana lanzo la pelotaque fué a caer a uno de los mirones, preguntando éste.-Podríamos jugar todos?.
Asi fue como un juego inocente, se convirtio en un juego de lo más perverso, lo unico que tenias que hacer es mantener la pelota para que Diana te restregara las tetas por todo el cuerpo, yo estaba tan caliente despues de diez minutos que estube a punto de quitarme la parte de abajo de mi bikiny para cocorrer esta locura, pero me aviso mi novio diciendome que nos quedaba una hora y que teniamos que irnos a secar. Habia quedado con Ramon, asi que nos excusamos y nos fuimos, cuando me puse la parte de arriba del bikiny me gire preguntandome quien estaba disfrutando más, si Diana, Alex o los otros cuatro mirones, nos habia salido un poco viciosilla nustra neva vecina.
Juan estaba un poco alterado, cole llevabamos tres dias en la isla y habíamos vivido muchas experiencias diferentes, yo más que él , pero según me confesaba todo le estaba gustando, algunas cosas mas que otras. Le pregunte por si le habia dicho algo Ramon, donde ibamos, que planes tenia, pero no supo dareme explicaciones concretas, solo que ibamos a cenar fuera esa noche.
Me vestí como la primera noche ya le habia cosido los flecon y estaba como nuevo, bajamos a la puerta del hotel a la hora prevista y no esperamos mucho, apareció Ramón bien trajeado, subimos al vehiculo y nos pregunto:
- Que tal estais.
Juan respondió:-Bien, un poco tostado por el sol.
Yo, después de lo que había vivido con él por la mañana respondí:
-Preparada para todo lo que tenga que venir.
Ramon detuvo el vehiculo y dijo:-Primera parada.
Miré a la derecha y a la izquierda, no comprendía nada.Ramón se bajó del vehiculo abrió mi puerta y me invitó a bajar, me señaló con la mirada, era una peluqueria.Pasamos los tres, Ramón estuvo hablando sobre el tono de mi pelo, y me pidio consentimiento, habian elegido un tono cobrizo y un recogido para darme un estilo más estirado. Yo no me opuse incluso me apetecía cambiar un poco de imagen. Juan se acercó y me dijo que iban a estar en la terraza de la esquina tomando algo.
Más de una hora le llevo al peluquero dejarme como le pedimos. Cuando salí de la peluqueria yo me notaba diferente el aire acariciaba mi nuca desnuda dandome una sensacion de indefension y libertad, quizas por la situación en la que me encontraba metida. LLegue por fín a la terraza donde me estaban esperando, tome un refresco y subimos al coche, mi marido me dijo que estaba preciosa y Ramón continuo diciendo:-Aún falta lo mejor.
Me callé, no sabia que podria ser lo "mejor". Al cabo de dos minutos se paró el coche otra vez. Bajo esta vez mi novio y me invitó a salir del coche, Ramon me indico para que pasara, era una boutique, vestidos largos de noche, sombreros, bolsos y demás articulos de lujo asomaban a izquierda y derecha. Tres dependientas, a mi disposición tras la orden de Ramón hojeaban un libro a la vez que me miraban, se decidieron por un vestido blanco compuesto por un corpiño y una falda , el corpiño se abrochaba en la parte posterior de mi cuello y en la parte posterior de mi espalda, la falda que era corta iba provista de una tela semitransparente arropada por manton de manila blanco, con pedreria que bajaba hasta mis tobillos, para la parte superior se dispuso tambien de otro manton pues el corpiño no bajaba mucho mas de mis pechos, para los pies, unos zapatos blancos también, de tacón no muy exagerado, de ropa interior unas braguitas de encaje blancas tambien junto a un liguero y medias del mismo color.
Para mi marido, un traje gris oscuro, pues según Ramon, tampoco iba preparado para la ocasión. Mi novio lo tengo catalogado como estandar, todo le sienta bien, hay pocas ocasiones donde se tiene que arreglar la ropa.
En veinte minutos ya estabamos preparados para la proxima parada, que ya sabía que era ir a cenar. Entramos en un restaurnte bastante lujoso, no destacaba mucho mi presencia allí pues todos iban muy bien vestidos, seguramente era la otra Mallorca, la que no conociamos, la de la gente pudiente. Nos sentamos en la mesa que dispuso el camarero y nos dispusimos a cenar. Definitivamente no era sitio para dar un espectaculo. Cenamos tranquilamente hablando de unas cosas y otras, tres cuartos de hora y ya estabamos otra vez de ruta, no por mucho tiempo. Dejando la carretera principal nos dirigimos a la derecha por un camino asfaltado, al fondo unas luces adivinaban un caseron grande o algo parecido.
Ramon lo llamo "El club", era un club privado de socios al que el pertenecia y al cual cada socio podía llevar cuantos amigos quisiera.
Pasamos dentro, era un salón bastante amplio, casi cuadrado, con una barra enfrente a la izquierda una pequeña pista de baile, y a la derecha lo que parecian reservados tipo sofa rinconeras, nos aproximamos a la barra, a la parte izquierda quedando la pista de baile a mi espalda, la luz era tenúe, no muy fuerte lo suficiente para vernos las caras, se mezclaba con una luz azul que provenia de la pista de baile, esto prococaba que mi atuendo blanco resaltara con mas fuerza.Ramón fue saludando mientras avanzabamos a unos y a otros con la mano.
Aunque había mayoria de hombres yo no era la unica mujer, cosa que me tranquilizó en cierta medida, eran muchos para una sola hembra.
Pedimos unas copas, yo elegi una crema de ron , me apetecia en ese momento algo suave, después de varios tragos se abrió una puerta al lado de la barra y un señor nos indico que pasaramos, pasamos los tres y le preguntó a Ramon:-Ésta es la señorita?.
Ramón le respondió:-Si, muy golfa y exquisita, ya la he probado. Levantandome la mano derecha me hizo girar sobre mi misma para deleite de aquel señor. Indicandoles la puerta quedó a solas conmigo, se acerco a mi oido y me dijo:
- Ya me puso Ramón al corriente, pero quiero verlo por mi mismo, levantate la falda quiero ver que llevas debajo.
Ya veia lo que iba a pasar, pero no, el señor me bajó las bragas y me las quito llevandoselas al bolsillo, a continuacion me metio dos dedos en mi coño y los movió, cuando me iba a correr paró de repente y me idico la salida. Me habia dejado a punto, yo fuí al encuentro de mi novio, estaba un poco cabreada y se lo conté. Mientras comprobaba con la mano por encima de mi falda que no llevaba bragas, Juan me respondió:
-Tranquila cariño.
Y me comentó lo que estaba pasando allí. Había prevista una timba y yo era el premio pero antes tenia que haber una puja para optar a las cuatro plazas de la partida de poker. No lo podia creer, era un premio como si de un juguete se tratara. Me tomé un par de copas de un trago.
Se habrió la purta de aquel club y mi novio se puso nervioso. Dos parejas entraron en ese momento , mi marido habia reconocido a Carlos su jefe, acompañado de su señora Clara que habia estado firteando con el toda la mañana. No tardo en reconocernos y después de hablar con el camarero, que supongo le puso al tanto de la situación, se acerco a saludar:
-Hombre Juan!!. Como tu por aquí, yo sabía que te iba la juerga, pero no imaginaba que a tu pareja también.
Me cogió por la cintura y me saco a bailar a la pista que estaba detras de mi a no mas de dos metros. Percibi que habia parejas que iban abandonando la sala, aun asi todavia quedabamos unas cuarenta personas allí.
Las caricias de Carlos sobre mi cintura estaban haciendo efecto en mí, por un lado era el jefe de mi novio, por el otro estaba caliente de verdad.
Me solté un instante para quitarme el manton que cubria mi espalda y el que cubría mi falda semitransparente, se los dí a mi novio que sujetaba la copa con una mano. Volví a los brazos de Carlos que me acogió con una caricia sobre mi espalda casi desnuda, Carlos iba bajando sus manos para tocarme el culo, descaradamente recogia mi falda haciendola subir cada vez más, pude apreciar que el borde de la pista se iba llenando de espectadores desconocidos para mí, clavaban los ojos en mi trasero que estaba siendo masajeado y expuesto con mi consentimiento. Carlos cedio su sitio a otro desconocido que apreto mis nalgas fuertemente para introducir sus dedos en mi entrepierna y comprobar que estaba tremendamente humeda y asi fueron pasando uno a uno como si estuvieran comprobando el buen estado del genero que iban a comprar. Yo veía que algunos de los que bailaban conmigo se acercaban a la barra para entregar un sobre al camarero, supuse que habia empezado la puja por los asientos de la esperada partida de poker, que por cierto era a una mano.
Tres minutos y todo acabó, ya estaba la mesa dispuesta con cuatro sillas, una de mi novio por derecho propio y las otras tres por las cifras más altas que hubiesen salido en los sobres.
Mi novio tomó su posicion y el camarero fué nombrado para que ocupasen su sitio. En cuarta posición para mi sorpresa entro Carlos para mi sorpresa, nunca creí que le pudiera gustar tanto. Empezo la partida y mi novio ni jugó, no porque no quisira sino porque no sabía ni como empezar. Se levantaron tres de la mesa, dos desconocidos y mi novio, la partida habia finalizado, como ganador y esperando su trofeo, Carlos, que esperaba sentado . Dispusieron una escalera con tres peldaños par que me subiera a la mesa y empezara a bailar. Yo lo hize despacio, sabia lo que se esperaba de mi, desabroche mi corpiño de la nuca y de atras para liberar mis pechos dejandolos a la vista de Carlos y todos los alli presentes, despues segui con mi falda bajandola suavemente hasta que llego a mis pies, luego me tumbe enla mesa pra recibir lo que tanto habia esperado esa noche. Carlos se puso depie y y comence a acercarme poniendo a su disposición mi coño para que fuera penetrado el agarro mis piernas con fuerza y lo hizo despacio, pude notar como entraba dentro de mí centimetro a centimetro hasta notar sus huevos pegados a mi culo. Entonces divise a Juan, Clara se estaba ocupando de él, aprecie como su polla tiesa desaparecia dentro de la boca de Clara, pero no eran ellos solos, casi todas las mujeres que allí se hallaban daban cuenta de un caballero o dos, los reservados que habia, se fueron llenando poco a poco con todos los que estaban mirando al borde de la pista, una orgia incontrolada de deseo. Yo por mi parte seguía disfrutando de aquel maravilloso instrumento que tenia dentro de mi, definitivamente, este hombre sabía lo que hacía, un acompañamiento aritmico de entradas y salidas me llevaban a lo mas alto de mis orgasmos, teniendo que gritar como una bestia para así desahogar mi interior.Se empezo a inflar, sabia que duraria poco por lagran excitación de Carlos, asi que la saque de dentro y me la introduje en la boca empezado a chupar como loca queria saborear ese manjar y lo queria ya. No tuvo escape, ni remedio, lo hizo dentro de mi boca y yo recogi lo que se me escapaba por la coyuntura de mis labios con la lengua para posteriormente tragarlo todo, asegurandome de que me habían visto hacerlo.
Intenté jugar mi mejor baza, sabía que el empleo de mi novio y mi reputacion estaban en juego, tenía que asegurarme de que Carlos estaba completamente safisfecho.
A continuación Carlos me incorporo pidiendome que fuera al servicio a arreglame un poco, mientras él se dirigió a la barra a tomar una copa. Yo me dirigí al servicio y en camino pude ver a Juan, se dirigia a la barra para hacer compania a su jefe que alli le esperaba. Me arregle despacio componiendo cada parte de mi cuerpo, concienzudamente para que me vieran explendida cuando saliera de alli.
Creo que lo conseguí, cuando me aproxime a ellos mi novio exclamo:
-Te veo preciosa Merche. A lo que Carlos replicó:- Si, verdaderamente vos sos esquisita.
Ramón llegó oportunamente para sacarme de aquel apuro, pues no sabía que decir en aquel momento:-Os llevo al hotel?. Es que yo mañana salgo para Ibiza,
Nosotro dijimos que si, nos despedimos de Carlos y salimos para la puerta. Ramón nos comentó que habia cerrado un trato y que se tenia que desplazar a Ibiza para comenzar los preparativos de una nueva obra, que posiblemente no nos veriamos más en esas vacaciones. Cuando llegamos al hotel nos despedimos de Ramon, nos deseo una buena estancia y me dio un deso cortito en los labios.
Mi novio entonces me contó que Carlos su jefe le habia dicho que cuando regresaramos de las vacaciones fuera a hablar con el que tenia una sorpresa. También me comento que habia anulado con los mirones lo de la playa nudista porque con la hora que llevabamos no ibamos a estar al cien por cien al dia siguiente.
Subimos a la habitación, y Juan me desnudo muy lentamente con las luces encendidas, hicimos el amor pasionadamente, a mi me duraba la calentura todavia. Todo era perfecto.
Como estamos en carnavales y estoy muy ocupada organizando nuestras escapadas,
he rogado a mi marido que siga narrando el cuarto día en Mallorca .
Así pués del cuarto ´dia solo os dejaré el título que es
4ª dia en un bar de alemanes
Quiero seguir recibiendo mensajes, me encanta la gente que comenta mis experiencias. Me vuelve loca!!!
Un beso a todos...Merche